• Author / Uploaded
• Camilo Andrés Turriago

Citation preview

LA OFENSIVA EMPRESARIAL Industriales, políticos y violencia en los años 40 en Colombia

Colección CES Serie Conflicto, violencia y sociedad

LA OFENSIVA EMPRESARIAL Industriales, políticos y violencia en los años 40 en Colombia Eduardo Sáenz Rovner

Grupo de Investigación Conflicto Social y Violencia Centro de Estudios Sociales - CES Facultad de Ciencias Humanas Universidad Nacional de Colombia Grupo TM S.A. Bogotá, 2007

Catalogación en la publicación Universidad Nacional de Colombia Sáenz Rovner, Eduardo, 1955 La ofensiva empresarial : industriales, políticos y violencia en los años 40 en Colombia / Eduardo Sáenz Rovner. – 2a.ed. – Bogotá : Universidad Nacional de Colombia. Facultad de Ciencias Humanas. Centro de Estudios Sociales (CES), 2007 289 p. , y cuadernillo de fotos– (Colección CES. Serie Conflictos, violencia y sociedad) ISBN: 978-958-8063-56-0 1. Política industrial – Historia – Colombia 2. Desarrollo industrial – Colombia 3. Colombia – política económica - 1940 CDD-21 338.9861 / 2007

-"
0'&/4*7"
&.13&4"3*"-


*OEVTUSJBMFT
QPMÓUJDPT
Z
WJPMFODJB
FO
MPT
B×PT

FO
$PMPNCJB Primera edición: julio de 1992 Primera reimpresión: febrero de 1993 Segunda edición: abril de 2007 © Eduardo Sáenz Rovner © Universidad Nacional de Colombia Facultad de Ciencias Humanas, Centro de Estudios Sociales - CES ISBN: 978-958-8063-56-0

2007 Bogotá D.C., Colombia

Universidad Nacional de Colombia Facultad de Ciencias Humanas Centro de Estudios Sociales Francisco Ortega DIRECTOR Astrid Verónica Bermúdez COORDINADORA EDITORIAL REALIZACIÓN GRÁFICA María Cristina Rueda Traslaviña Wilson Martínez Montoya [email protected] REVISIÓN DE TEXTOS PARA ESTA EDICIÓN Ailin Martínez y Rodrigo Pertuz Molina IMPRESIÓN GRUPO TM S.A.

A mi madre A la memoria de mi padre

Contenido Reconocimientos 11 Prólogo 13 Capítulo I Introducción

17

Capítulo II Los verdaderos dueños de la industria

39

Capítulo III Industriales, prensa e ideología

71

Capítulo IV De ciertos caballeros: los lobbyists profesionales

107

Capítulo V Industriales y comerciantes: Echavarría vs. Aristizábal

123

Capítulo VI La lucha por el proteccionismo en el Congreso

135

Capítulo VII Gaitán y los industriales

145

Capítulo VIII El “Bogotazo”

165

Capítulo IX La metamorfosis de Su Excelencia

191

Capítulo X La dictadura y el maravilloso mundo de los negocios 209 Epílogo 217

|8|

Apéndice 1 Miembros de la Junta Directiva de la ANDI, Oficina Central - Medellín, 1944-1950

219

Apéndice 2 Miembros de la Junta Directiva de la ANDI, Oficina de Bogotá, 1944-1950

225

Apéndice 3 Miembros de la Junta Directiva de la ANDI, Oficina de Cali, 1945-1950

231

Apéndice 4 Miembros de la Junta Directiva de la ANDI, Oficina de Barranquilla, 1945-1950

235

Apéndice 5 Miembros de la Junta Directiva de la ANDI, Oficina de Manizales, 1950

239

Apéndice 6 Miembros del Comité Nacional de Cafeteros de Colombia, 1935-1951

241

Apéndice 7 Miembros del Comité de Cafeteros de Antioquia, 1935-1951

251

Apéndice 8 Comité Departamental de Cafeteros de Cundinamarca, 1935-1951

255

Apéndice 9 Comité Departamental de Cafeteros del Valle del Cauca, 1935-1951

259

Apéndice 10 Comité Departamental de Cafeteros de Caldas, 1935-1951

263

Bibliografía 267

|9|

Tablas Tabla 2.1. Tabla 2.2. Tabla 2.3 Tabla 2.4 Tabla 2.5 Tabla 2.6 Tabla 2.7 Tabla 2.8 Tabla 2.9 Tabla 2.10 Tabla 2.11 Tabla 2.12 Tabla 2.13 Tabla 2.14 Tabla 2.15

| 10 |

Colombia - Producción industrial por regiones Colombia - Producción industrial por sector Colombia - Capital social pagado Producción industrial en Antioquia Antioquia - Capital social pagado Ganancias industriales en Antioquia Producción industrial en Cundinamarca Cundinamarca - Capital social pagado Cundinamarca - Gerentes y directores de las empresas industriales-1949 Valle del Cauca - Producción industrial Valle del Cauca - Capital social pagado Atlántico - Producción industrial Atlántico - Capital social pagado Caldas - Producción industrial Caldas - Capital social pagado

55 56 57 58 59 60 61 62 63 64 65 66 67 68 69

Reconocimientos Este libro es una versión revisada de mi tesis de Ph.D. en la Universidad de Brandeis. Agradezco los valiosos comentarios del profesor John Womack Jr. (Universidad de Harvard), quien dirigió los estudios del autor, y del profesor Morton Keller (Universidad de Brandeis), quien actuó como jurado de tesis. También agradezco las sugerencias de los profesores Charles Bergquist (Universidad de Washington), quien además tuvo la amabilidad de escribir el prólogo para esta obra, y David Bushnell (Universidad de la Florida). Anne Hornsby y Luis Carlos Barriga hicieron correcciones de estilo a las versiones en inglés y castellano, respectivamente. Mis reconocimientos también a las personas en el archivo y la biblioteca de la ANDI (Medellín); en los archivos de Fenalco, de la Presidencia de la República, del Ministerio de Relaciones Exteriores (Bogotá); National Archives (Washington, D.C.); y a Juan Gonzalo Restrepo, por permitirme consultar los papeles personales de su padre, Gonzalo Restrepo Jaramillo. Al personal de las siguientes bibliotecas: Biblioteca Goldfarb de la Universidad de Brandeis. Bibliotecas Baker, Lamont y Widener de la Universidad de Harvard. Biblioteca Dewey del Massachusetts Institute of Technology. Biblioteca Pública de Boston. Biblioteca Luis Ángel Arango, en Bogotá. Biblioteca Nacional, en Bogotá. Biblioteca de la Universidad de los Andes, en Bogotá. Biblioteca de la Universidad Nacional, en Bogotá. Biblioteca del Centro Cultural Jorge Eliécer Gaitán, en Bogotá. Archivo Fotográfico diario El Espectador, en Bogotá. El autor, por supuesto, es el único responsable por los contenidos e interpretaciones presentes en este libro. Bogotá, 1992 | 11 |

| 12 |

Prólogo Este libro, escrito por el joven historiador colombiano Eduardo Sáenz Rovner, cumple dos funciones muy importantes. Toma como punto focal una era fundamental de la historia nacional y mundial, los años 1945-1950, cuando los procesos interrelacionados de la reestructuración capitalista, la represión del sindicalismo de izquierda y el surgimiento de la Guerra Fría se combinaron para crear el orden de la posguerra que apenas comienza a desentrañarse del todo en nuestra época. Y construye sus análisis sobre la base de una variedad de fuentes archivísticas hasta ahora casi inexploradas, en especial los archivos de la nueva fuerza institucional más importante de la vida económica y política colombiana, la Asociación Nacional de Industriales (ANDI), fundada en 1944. El resultado es una interpretación sugerente y muy original de los temas centrales de este período, sobre todo la génesis y los significados de la violencia, el conflicto que convulsionó la sociedad colombiana durante más de una década después del asesinato del dirigente liberal Jorge Eliécer Gaitán en 1948, y que ha influido sobre prácticamente todos los aspectos de la vida nacional en los decenios siguientes. Por lo general, la violencia que brotó en la era de la posguerra en Colombia ha sido analizada en términos nacionales. Sáenz Rovner muestra, sin embargo, que fue un hecho netamente colombiano ligado a procesos hemisféricos e internacionales más amplios. El más importante de éstos fue una reestructuración básica del capitalismo mundial, a fin de acomodar los cambios propiciados por el decenio de depresión económica mundial que siguió a 1930, y por el estallido y el desenlace de la guerra mundial, que convirtieron a Estados Unidos en la principal potencia económica y militar del mundo. Uno de estos cambios fue el crecimiento y diversificación del sector industrial en muchas de las naciones más grandes y desarrolladas de América Latina, como Colombia. La dimensión social de este proceso fue el surgimiento de poderosos intereses industriales en estas naciones. Estos intereses no podían contemplar un retorno a la sencilla división internacional del trabajo vigente antes de 1930, según la cual países como Colombia dependían predominantemente de la exportación Prólogo

| 13 |

de productos primarios agrícolas y minerales y compraban, a cambio, la mayor parte de sus bienes manufacturados en los centros industrializados del sistema mundial sobre todo en Estados Unidos y Europa occidental. Sáenz Rovner muestra con detalles abundantes y persuasivos cómo esa división internacional del trabajo clásicamente liberal anterior a 1930 no podía ser recreada en Colombia, pese al hecho de que tanto allí como en Estados Unidos había grupos poderosos a los cuales les hubiera gustado hacerlo. Demuestra cómo los industriales colombianos, sobre todo las empresas textileras de Medellín, estaban muy conscientes de sus intereses como sector de una clase capitalista tradicionalmente dominada por los caficultores y por las empresas comerciales de exportación-importación. Señala cómo, después de fundada la ANDI, actuaron decididamente en un frente amplio para proteger y expandir aquellos intereses. Pagaron a periodistas, intelectuales y políticos para persuadir a la opinión pública de las bondades de la industria nacional. Concebían la legislación nacional y las políticas comerciales como instrumentos diseñados para apuntalar su posición como productores oligopólicos en un mercado nacional protegido y altamente lucrativo. Sin embargo, según demuestra Sáenz Rovner, su búsqueda de aliados políticos leales fue lo que las mayores y más alarmantes implicaciones tuvo. Fueron abandonando los sectores principales (y moderados) de los partidos Liberal y Conservador, los cuales tendían a reflejar los intereses de los caficultores y los exportadores-importadores. Dominaban tanto el Congreso colombiano como los gabinetes bipartidistas del presidente conservador Mariano Ospina Pérez, elegido en 1946. Los dirigentes de la ANDI también se opusieron firmemente a la facción del Partido Liberal dirigida por Gaitán, pues la atención que este último prestaba al bienestar de los consumidores colombianos y a los intereses agrícolas amenazaba su proyecto proteccionista. Finalmente, adhirieron a la política de los elementos más reaccionarios del Partido Conservador, dirigido por Laureano Gómez. En 1950, dicha facción, que controlaba el ejecutivo, asumió poderes dictatoriales y se empeñó en un esfuerzo concertado para eliminar tanto la resistencia liberal como la influencia izquierdista (sobre todo comunista) de la vida colombiana. Después de abolir la legislatura, gobernó por decreto. En este contexto, el gobierno nacional estatuyó las medidas proteccionistas tan ávidamente buscadas por la ANDI desde el final de la guerra mundial. El mérito de esta historia revisionista yace en la abundancia de evidencia documental con que Sáenz Rovner sustenta su tesis. La documentación de los intereses de grupos económicos poderosos es algo inusual en la historiografía colombiana, sobre todo en lo que respecta al período contemporáneo. El autor explora no sólo los voluminosos y reveladores archivos de la ANDI, sino también los de otro gremio de formación reciente, la Federación Nacional de Comerciantes | 14 |

LA OFENSIVA EMPRESARIAL

(Fenalco), cuyos intereses con frecuencia se oponían a aquellos de la ANDI. Complementa estas fuentes con información reveladora del Archivo de la Presidencia de la República, el Archivo del Ministerio de Relaciones Exteriores y los Archivos Nacionales de Estados Unidos. El estudio resultante difiere notoriamente de las historias polémicas y someras, sustentadas en una lectura selectiva de fuentes secundarias limitadas, que suelen ser corrientes en los análisis sobre este período. Tampoco se trata de un comentario teórico sobre la época, diseñado más para avanzar un proyecto político e ideológico que para tratar de desentrañar las realidades del momento. Sáenz Rovner utiliza información de ambos tipos de trabajo para reforzar su evidencia archivística y, en especial, para subrayar la intención revisionista de su disertación. Sin embargo, el meollo de su tesis proviene de evidencia extraída directamente, como decimos en inglés, “de la boca del caballo”. De hecho, el grueso de la historia de Sáenz Rovner es relatado por los protagonistas mismos. En ningún momento es tan clara esta diferencia como en el trato que el autor da al muy pregonado tema del surgimiento de una burguesía nacional, que gran parte de la historiografía liberal e izquierdista rastrea a los gobiernos liberales del período 1930-1945. Sáenz Rovner analiza y rebate esa posición. Argumenta, por el contrario, que cuando emerge una fuerza que parece y actúa efectivamente como una burguesía nacional —los industriales de la ANDI del período de la posguerra—, esa fuerza está dispuesta a sacrificar, no sólo los intereses económicos de los consumidores y trabajadores nacionales y sus grandes y pequeños rivales dentro de la clase capitalista, sino también las instituciones políticas democráticas limitadas de las cuales disfrutaban los colombianos a comienzos de la era de la posguerra. Según la interpretación del autor, los industriales no causan directamente la violencia, pero se aprovechan de ella en formas que ningún investigador anterior ha señalado con tanta precisión. Siempre presente en toda esta cuestión está el tema de la relación de los capitalistas colombianos, especialmente los industriales, con los intereses norteamericanos en la era de la posguerra. La información contenida en este libro, en gran parte extraída de los Archivos Nacionales de Estados Unidos, revela que, además de proteger su propio mercado nacional de textiles, la burguesía industrial colombiana (a semejanza de sus contrapartes en el importante sector cafetero y sus compatriotas en el sector comercial) no tuvo mayores problemas en acomodar sus intereses a los designios estadounidenses durante los años de la posguerra. Todos estos grupos capitalistas estaban unidos en torno de Estados Unidos, y respaldaban su política global de aplastar sindicatos laborales fuertes dirigidos por izquierdistas. Todos apoyaban la política de reprimir y eliminar la influencia comunista. A los colombianos se les permitió preservar y proteger su mercado nacional limitado de textiles porque, según parece, promovieron Prólogo

| 15 |

vigorosamente la inversión extranjera en todos los demás sectores. Al comienzo, los inversionistas norteamericanos y su gobierno se interesaban en la explotación de minerales, sobre todo petróleo. No obstante, muy pronto las corporaciones multinacionales de Estados Unidos ampliaron sus inversiones hasta incluir una amplia gama de empresas manufactureras. Como sucede con los estudios históricos revisionistas altamente originales, este libro exhibe algunos excesos y debilidades. Los lectores encontrarán que algunos aspectos del trabajo son más convincentes que otros. Por ejemplo, las fuentes utilizadas por el autor no esclarecen muy bien la relación entre los industriales y los intereses cafeteros, y es posible que la distinción entre unos y otros se haya exagerado. Además, la relación entre la política de los intereses económicos de élite y lo que podría llamarse “la política de la política”, la dinámica del peculiar sistema político bipartidista colombiano que desempeña un papel tan preponderante en la génesis de la violencia, no es muy clara en el análisis, tanto en términos conceptuales como en la narrativa de los sucesos según se van desenvolviendo. Sin embargo, esto no constituye realmente una crítica, pues se trata de un problema que ha preocupado y atormentado los esfuerzos de todos los estudiosos de la economía política moderna de Colombia. Sáenz Rovner ha añadido un caudal de nueva información y análisis convincente al rompecabezas central de los estudios colombianos modernos. Como todos los trabajos históricos buenos, los puntos fuertes —y debilidades— de este estudio giran en torno de sus fuentes, que privilegian una percepción y acción económica de élite, y sólo reflejan oblicuamente las dimensiones ideológicas, políticas y sociales más generales del cambio histórico. Pero es la fuerza de estas mismas fuentes, y la perspicacia con que Sáenz Rovner ha escogido, definido y analizado su tema, lo que hacen de este libro una contribución tan valiosa. Con esta obra, Sáenz Rovner ha abierto líneas completamente nuevas de investigación e interpretación de una coyuntura crucial en la historia colombiana del siglo XX. Charles Bergquist

Profesor Universidad de Washington

| 16 |

LA OFENSIVA EMPRESARIAL

&DStWXOR, ,QWURGXFFLyQ 1DGLHSXHGHDILUPDUTXHORVJUHPLRV>GHHPSUHVDULRV@DFW~DQFRQ RSRUWXQLVPRFRQLQWUDQVLJHQFLDRFRQGHELOLGDGVDFULILFDQGRHQDUDVGH VXFRQYHQLHQFLDLQPHGLDWDORTXHVHKDFRQVLGHUDGRMXVWRREHQpILFRSDUD HOSDtV(OVHFWRUSULYDGRVLHPSUHKDVLGRFRQVFLHQWHGHTXHUHSUHVHQWD VRODPHQWHXQDSDUWHUHVSHWDEOHGHODQDFLRQDOLGDG\GHTXHODYLGDGHO SDtVQRJLUDHQWRUQRVX\R$WRGRORODUJRGHODKLVWRULDHOVHFWRUSULYDGR KDGHPRVWUDGRHMHPSODUPHQWHVXDFDWDPLHQWRDODVDXWRULGDGHVOHJDO\ OHJtWLPDPHQWHFRQVWLWXLGDV\VXYROXQWDGGHFRQYLYHQFLDFRQORVGHPiV JUXSRVGHOD1DFLyQVLQSUHWHQGHUDERJDUVHSULYLOHJLRDOJXQR )DELR(FKHYHUUL&RUUHD 3UHVLGHQWHGHOD$VRFLDFLyQ1DFLRQDOGH,QGXVWULDOHV$1',  

3DUD OD GpFDGD GH ORV DxRV FXDUHQWD VH KDEtD FRQVROLGDGR XQD EXUJXHVtD LQGXVWULDOHQ&RORPELD(VWHJUXSRHUDEDVWDQWHSRGHURVRHQ0HGHOOtQ\HUD WDPELpQLPSRUWDQWHHQ%RJRWi%DUUDQTXLOOD&DOL\0DQL]DOHV'HVSXpVGHOD 6HJXQGD*XHUUD0XQGLDOHVWDEXUJXHVtDLQGXVWULDOOXFKySDUDORJUDUHOGRPLQLR VREUHHO(VWDGRFRORPELDQR(VWDOXFKDVHGLRDWUDYpVGHOD$VRFLDFLyQ1DFLRQDO GH,QGXVWULDOHV$1', IXQGDGDHQ0HGHOOtQDILQDOHVGH /D$1',HUDPDQHMDGDSRUORVLQGXVWULDOHVPiVLPSRUWDQWHVGH0HGHOOtQ eVWRVKDEtDQLQYHUWLGREXHQDSDUWHGHVXVFDSLWDOHVHQRWUDVFLXGDGHVGHOSDtV (OORVWDPELpQWRPDURQODLQLFLDWLYDGHDEULURWUDVFXDWURRILFLQDVUHJLRQDOHVGHOD DVRFLDFLyQHQWUH\/RVSULQFLSDOHVLQGXVWULDOHVDQWLRTXHxRVTXLHQHV WHQtDQODPD\RULQIOXHQFLDHQOD$1',SHUWHQHFtDQDGRVFODQHVIDPLOLDUHVORV (FKDYDUUtD\ORV0RUD  -HIPV,JOL]LYYP*VYYLH3HPUK\Z[YPH+LSVZ[PLTWVZKLSWYV[LJJPVUPZTVHSVZKLSHHWLY[\YH

)VNV[m0U[LYTLKPV,KP[VYLZ

W __

/DPD\RUtDOLEHUDOHQODVFiPDUDVGHO&RQJUHVRVHKDEtDRSXHVWRYLJRURVDPHQWH GHVGHDODDSUREDFLyQGHXQDQXHYDWDULIDTXHIDYRUHFHUtDORVLQWHUHVHVGH ORVLQGXVWULDOHV'HVSXpVGHTXHHOSUHVLGHQWH0DULDQR2VSLQD3pUH]FHUUDVHHO &RQJUHVRHQQRYLHPEUHGHVHJREHUQySRUPHGLRGHGHFUHWRVGHOSRGHU HMHFXWLYR(VWRIDFLOLWyODLPSOHPHQWDFLyQGHXQDVHULHGHPHGLGDVDOWDPHQWH SURWHFFLRQLVWDVDODLQGXVWULDFRORPELDQDGXUDQWHORV~OWLPRVPHVHVGHOJRELHUQR GH2VSLQD3pUH] 3DUDORVLQGXVWULDOHVKDEtDQORJUDGRFRQWURODUYDULRVRUJDQLVPRVRILFLDOHV TXHHUDQFODYHVHQODIRUPXODFLyQGHODSROtWLFDHFRQyPLFD6LQHPEDUJRORVLQ GXVWULDOHVQRIXHURQFDSDFHVGHORJUDUXQFRPSOHWRFRQWUROGHO(VWDGRFRORPELDQR QLGHHOLPLQDUODLQIOXHQFLDGHORVFDIHWHURV0iVELHQORVLQGXVWULDOHVVXUJLHURQGH XQSDSHOVHFXQGDULR\VXERUGLQDGRDFRQYHUWLUVHHQFRQWHQGLHQWHVULYDOHVGLUHFWRV GHORVFDIHWHURV/DFULVLVSROtWLFDGHHVDpSRFDQRSRGUtDHQWHQGHUVHVLQHVWXGLDU ORVFRQIOLFWRVHQWUHODEXUJXHVtDLQGXVWULDO\RWURVJUXSRVGHHPSUHVDULRV

C /DPD\RUSDUWHGHODOLWHUDWXUDVREUHHOGHVDUUROORHFRQyPLFRGH&RORPELD GXUDQWHODVGpFDGDVGHORVDxRV\GHOVLJOR;;DUJXPHQWDTXHHO(VWDGR QDFLRQDOSURPRYLyHOGHVDUUROORLQGXVWULDOHQHVDpSRFD/DVDGPLQLVWUDFLRQHV OLEHUDOHVGH(QULTXH2OD\D+HUUHUD GH$OIRQVR/ySH]3XPDUHMR  \GH(GXDUGR6DQWRV VRQFDOLILFDGDVSRU PXFKRVKLVWRULDGRUHVFRPRUHSUHVHQWDQWHVGHXQDQDFLHQWHEXUJXHVtDLQGXVWULDO \FRPRDJHQWHVGHXQSURFHVRGHPRGHUQL]DFLyQHQXQDQDFLyQVXSXHVWDPHQWH IHXGDOTXHKDEtDVLGRJREHUQDGDVLQLQWHUUXSFLRQHVSRUHO3DUWLGR&RQVHUYDGRU GHVGHODGpFDGDGHORVDxRVHQHOVLJOR;,; 'HQWUR GH HVWD OtQHD GH DUJXPHQWDFLyQ SDUD -HV~V $QWRQLR %HMDUDQR HO IOXMRGHGyODUHV\ODSUROLIHUDFLyQGHREUDVS~EOLFDVHQODGpFDGDGHORVDxRV VHJXLGRVSRUODFULVLVGHGHELOLWDURQODKHJHPRQtDHFRQyPLFD\SROtWLFDGH ODFODVHWHUUDWHQLHQWHFRQYLUWLHQGRDO(VWDGRSRUWDQWRHQXQ´LQVWUXPHQWRµ GHORVPDQXIDFWXUHURVTXLHQHVHVWDEDQWUDWDQGRGHLPSOHPHQWDUXQ´SUR\HFWR GHLQGXVWULDOL]DFLyQµ3DUD-RVp(VFRUFLDODEXUJXHVtDLQGXVWULDOGHHVHSHUtRGR HUD VRFLDOPHQWH SURJUHVLVWD $GHPiV HUD HO VHFWRU ´PiV O~FLGRµ GH OD FODVH GRPLQDQWH/RVLQGXVWULDOHVVHJ~Q(VFRUFLDHVWDEDQHPSHxDGRVHQORJUDUOD UHYROXFLyQGHPRFUiWLFREXUJXHVDDWUDYpVGHO3DUWLGR/LEHUDO6HJ~Q*HUDUGR

 1LZ‚Z(U[VUPV)LQHYHUV¸3H,JVUVTxH¹LU1HPTL1HYHTPSSVPSSHYK)LH\SHJHS+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKVHIYPS 5( ! 3H PUJHWHJPKHK KLS LQtYJP[V WHYH JVU[YVSHY WVY Zx ZVSV SH ZP[\HJP}U LU LS mYLH WL[YVSLYH KL )HYYHUJHILYTLQH`Z\KLWLUKLUJPHKLSHZJVTWH|xHZL_[YHUQLYHZZLW\LKLUV[HYLUSVZZPN\PLU[LZ WHYmNYHMVZL_[YHJ[HKVZKL\UPUMVYTLTPSP[HYKLSHtWVJH! ¸*VUZPKLYVPUKPZWLUZHISLX\LLS4PUPZ[LYPVKL.\LYYHOHNVZPJ[VKVSVX\LLZ[tHZ\HSJHUJL WHYH[LULYSHZ[YVWHZKL)HYYHUJHILYTLQHLU,S*LU[YV`*HZHILLUSHZTLQVYLZJVUKPJPVULZ WVZPISLZ ZPU X\L ZLH ULJLZHYPV WHYH SH N\HYUPJP}U [LULY X\L ]P]PY JVTV LZ[mU HJ[\HSTLU[L KLWLUKPLUKVKLSHZJVTWH|xHZWL[YVSLYHZ ¸,ULSTVTLU[VX\LtZ[HZZ\ZWLUKPLYHUZ\HWV`VWVYJ\HSX\PLYYHa}USHZ[YVWHZX\LKHYxHULU \UHZP[\HJP}UKLZLZWLYHKH

(O´%RJRWD]Rµ

__

7DPELpQ ORV WUDEDMDGRUHV SRUWXDULRV GHO UtR 0DJGDOHQD UHFRUGDURQ FyPR HOORVKDEtDQVLGRGHUURWDGRVUHFLHQWHPHQWHHQXQDGXUDOXFKDTXHHOSUHVLGHQWH /OHUDV&DPDUJRWRPyFDVLFRPRXQDVXQWRSHUVRQDOSRUWDQWRQRGXGDURQHQ TXHHOGHVWLQROHVHVWDEDEULQGDQGRXQDVHJXQGDRSRUWXQLGDGHQ/D'RUDGDORV UHEHOGHVOLEHUDURQXQRVSUHVRVGHODFiUFHOORFDOVDTXHDURQYDULRVQHJRFLRV\ PDQWXYLHURQODFLXGDGEDMRWRWDOFRQWUROSRUXQDVHPDQDKDVWDTXHWURSDVOOHJDGDV GH0DQL]DOHV\OHDOHVDOJRELHUQRUHSULPLHURQHOOHYDQWDPLHQWR (Q3XHUWR%HUUtRXQEDWDOOyQGHVROGDGRVGHPRVWUyYLROHQWDPHQWHDORV UHEHOGHVTXHHVWRV~OWLPRVWHQGUtDQTXHSRVSRQHUVXVDVSLUDFLRQHVUHYROXFLRQDULDV XQDYH]PiVTXL]iGHILQLWLYDPHQWH $XQTXHORVSDWURQHVGHODVUHYXHOWDVVRQVLPLODUHVpVWDVYDULDURQHQLQWHQVLGDG \GXUDFLyQ(Q&DOL+XPEHUWR-RUGiQ-LPpQH]SHUVRQHURPXQLFLSDOHQFDEH]y XQDMXQWDUHYROXFLRQDULDTXHORQRPEUyJREHUQDGRUGHOGHSDUWDPHQWR/RV UHEHOGHVFDOHxRVRFXSDURQYDULDVHVWDFLRQHVGHUDGLR\GHVWUX\HURQXQDGHHOODV $GHPiVVDTXHDURQYDULDVIHUUHWHUtDV\GLHURQVXVWDQFLDOHVUD]RQHVSDUDLQTXLHWDUD LPSRUWDQWHVKRPEUHVGHQHJRFLRVGHODFLXGDG\DTXHORVSULQFLSDOHVFRPHUFLDQWHV IXHURQVHULDPHQWHDIHFWDGRVFXDQGRVXVDOPDFHQHVIXHURQDVDOWDGRV(QWUHpVWRV VHHQFRQWUDED´-02FDPSR\&tDµSURSLHGDGGHXQDPX\SUyVSHUDIDPLOLDGH HPSUHVDULRV/RVLQGXVWULDOHVORFDOHVREVHUYDURQKRUURUL]DGRVFyPRDOJXQRVGH VXVIXQFLRQDULRVTXHRFXSDEDQSRVLFLRQHVFODYHVHQHOJRELHUQRUHJLRQDOIXHURQ UHWDGRVSHUVRQDOPHQWHSRUORVUHYROWRVRV 







 



¸(\UX\LLS,Z[HKV4H`VYKPVOHJLJLYJHKLKVZTLZLZSHVYKLUKLZ\TPUPZ[YHY]LOxJ\SVZHSHZ [YLZHNY\WHJPVULZLZSVJPLY[VX\LOHZ[HLZ[LTVTLU[VZ}SVKPZWVULKLWHY[LKLS4PUPZ[LYPV KL.\LYYHKL\UJHTP}UX\LW\LKLSSL]HYJVUZPNVLSJVTHUKHU[LKLSHN\HYUPJP}U;VKVZSVZ KLTmZ]LOxJ\SVZPUKPZWLUZHISLZWHYHSH]PNPSHUJPHKLSHZ[YLZaVUHZ[HU[VWHYHLSTV]PTPLU[V [LYYLZ[YLJVYUVWHYHLSJY\JLJVUZ[HU[LKLSYxVSLZVUZ\TPUPZ[YHKVZWVYSHZJVTWH|xHZ ¸,ZWYLJPZV[LULYLUJ\LU[HX\LLSLQtYJP[VJVUSVZTLKPVZJVUX\LHJ[\HSTLU[LJ\LU[HLU SHYLNP}ULZ[mPTWVZPIPSP[HKVWHYHPTWLKPYLSZHIV[HQL`HX\LtZ[LW\LKL[LULYJHYHJ[LYxZ[PJHZ [tJUPJHZX\LSVZZVSKHKVZUVW\LKLUPTWLKPY`HSTPZTV[PLTWVX\LSHYLNP}ULZKLTHZPHKV L_[LUZHWHYHWVKLYJVU[YVSHYSHKLÄUP[P]HTLU[L¹¸0UMVYTL¹KLSNLULYHS1\SPV3VUKV|VZ\IQLML KLS,Z[HKV4H`VY.LULYHS (79 1VZt=PJLU[L(YHUaHa\HWYLZPKLU[L9LW‚ISPJH4PUN\LYYHHIYPS (791VZt=PJLU[L (YHUaHa\HWYLZPKLU[L9LW‚ISPJH4PUNVIPLYUVHIYPS (79.LYHYKV(YPHZ4LQxHH WYLZPKLU[L9LW‚ISPJHTPUPZ[YV.VIPLYUVHIYPS (791VZt=PJLU[L(YHUaHa\HWYLZPKLU[L 9LW‚ISPJH4PUNVIPLYUVHIYPS (79 9HIHZHVWJP[WW:VIYLSVZKPZ[\YIPVZLUV[YVZS\NHYLZKLSHZYPILYHZKLS4HNKHSLUH ]LmZL1VHX\xU*HUV:LYYHUVHWYLZPKLU[L9LW‚ISPJHHIYPS (79+LSH=LNHH4HYPHUV 6ZWPUH7tYLaHIYPS (79+LSH=LNHH4HYPHUV6ZWPUH7tYLaHIYPS  (79 ÔZJHY*VSTLUHYLZ+PLNV.HYJtZ.PYHSKV`3\PZ(SMVUZV+LSNHKVHWYLZPKLU[L9LW‚ISPJHHIYPS  (79 ÔZJHY*VSTLUHYLZH4HYPHUV6ZWPUH7tYLaHIYPS (79:mUJOLaVWJP[W ÔZJHY *VSTLUHYLZ H 4HYPHUV 6ZWPUH 7tYLa HIYPS   (79 +PLNV .HYJtZ .PYHSKV H 4HYPHUV6ZWPUH7tYLaHIYPS (79

__

/$2)(16,9$(035(6$5,$/

(Q&DOLIXHURQGLQDPLWDGRVORVULHOHVGHOIHUURFDUULOTXHXQHHOHMHFDIHWHUR GH&DOGDVFRQHOSXHUWRGH%XHQDYHQWXUDVREUHHORFpDQR3DFtILFR\DOJXQRV WUHQHVIXHURQGHVFDUULODGRVHVWDYtDGHFRPXQLFDFLyQHUDIXQGDPHQWDOSDUDOD H[SRUWDFLyQGHEXHQDSDUWHGHOFDIpFRORPELDQR 3RUDOJ~QWLHPSRDOPHQRVXQDGRFHQDGHSXHEORV\FLXGDGHVHQHO9DOOHGHO &DXFDSHUPDQHFLHURQHQPDQRVGHODVMXQWDVUHYROXFLRQDULDV(Q&DLFHGRQLD SRUHMHPSORORVOLEHUDOHVVHDSUHVXUDURQDYHQJDUDOOtGHUFDtGRHQ%RJRWi\ DVHVLQDURQDORVVLHWHPLHPEURVGHOGLUHFWRULRFRQVHUYDGRUORFDO`I\YU+)YV^UH>PSSHYK)LH\SHJQ\UPV  5( !>PSSHYK)LH\SHJHS+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKVQ\UPV  5( !4PSSZH+HUPLSZZLW[PLTIYL  5( !  7H\S +HUPLSZH+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKVVJ[\IYL 5( !->:LJYL[HY`VM +LMLUZLH+YLPLY`+HUPLSZLULYV  5( ! /LYUmU1HYHTPSSV6JHTWV+LSHPSSHYK)LH\SHJH+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKVHIYPS 5( ! KLHIYPS HIYPS  9HNSHUKH+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKV5(9.  =tHZLWVYLQLTWSV! KLHIYPSHIYPSTH`V 

__

/$2)(16,9$(035(6$5,$/

8QJUXSRJUDQGHGHSDUODPHQWDULRV\SROtWLFRVFRQVHUYDGRUHVTXLHQHVUH FKD]DEDQODSUHVHQFLDGHPLQLVWURVOLEHUDOHVHQHOQXHYRJDELQHWHSUHVLGHQFLDO IXHLQYLWDGRD0HGHOOtQDGLVFXWLUHVWDPDWHULD$XQTXHHQS~EOLFRPXFKRV DSR\DVHQIRUPDOPHQWHD2VSLQD3pUH]HQSULYDGRHOLPSRUWDQWHJUXSRGHUHFKLVWD DFRUGyDUPDUVH\FUHDUJUXSRVSDUDPLOLWDUHV3DUDILQDQFLDUHVRVHVFXDGURQHV DUPDGRVORVSROtWLFRVFRQVHUYDGRUHVUHFLELHURQHQWRGRHOSDtVGRQDFLRQHVGH JHQWHVDGLQHUDGDV (QXQDUHXQLyQUHDOL]DGDHQ3HUHLUD\VLJXLHQGRODVLQVWUXFFLRQHVGH/DXUHDQR *yPH] ORV FRQVHUYDGRUHV SURYHQLHQWHV GHO RFFLGHQWH GHO SDtV FRQIRUPDURQ HO´EORTXHRFFLGHQWDOµ(QHVRVGtDVPXFKRVGHUHFKLVWDVFRQWHPSODEDQ³\ DQKHODEDQ³ODSRVLELOLGDGGHXQDJXHUUDFLYLO\SRUORPHQRVHVSHUDEDQTXH *yPH]SUHVLGLHUDpO´JRELHUQRGHRFFLGHQWHµHQFDVRGHTXH2VSLQDGLPLWLHVHR IXHVHDVHVLQDGR·· 'HKHFKRHO3UHVLGHQWHHUDSUHVLRQDGRSDUDTXHUHQXQFLDVHDVXFDUJR/DV SUHVLRQHVSURYHQtDQWDQWRGHODIDFFLyQGH*yPH]FRPRGHORVJDLWDQLVWDVPiV UDGLFDOHV(VWRV~OWLPRVWDPELpQVHHVWDEDQRUJDQL]DQGRHQ&DOLHLPSRUWDEDQ DUPDVGH(FXDGRU\9HQH]XHOD'HVGHDQWHVGHO´%RJRWD]Rµ\DH[LVWtDXQIXHUWH PRYLPLHQWRUHYROXFLRQDULRTXHVHDXWRGHQRPLQDED´7HUFHUD)XHU]DµDSDUHQWH PHQWHVLQHODSR\RGH*DLWiQ &RQHODSR\RGHXQDIDFFLyQGHO3DUWLGR&RQVHUYDGRU\HOVRSRUWHGHORVOLEHUDOHV UHSUHVHQWDGRVSRU'DUtR(FKDQGtDHOQXHYRPLQLVWURGH*RELHUQR2VSLQD3pUH]IXH FDSD]GHVREUHYLYLUDODFULVLV$GHPiVORVJDLWDQLVWDV\ODXUHDQLVWDVSDUHFtDQHVWDU WDQ³RPiV³LQWHUHVDGRVHQOXFKDUHQWUHHOORVTXHHQDWDFDUDODQXHYDFRDOLFLyQ JXEHUQDPHQWDO(OJXDUGDHVSDOGDVGHFRQILDQ]DGH*yPH]´XQWLSRFRUSXOHQWRHQ TXLHQ>*yPH]@JUDQGHPHQWHFRQILDEDVXVHJXULGDGSHUVRQDOµIXHDVHVLQDGRSRUXQ JUXSRGHJDLWDQLVWDVTXLHQHVWDPELpQSUHWHQGtDQDVHVLQDUDOMHIHFRQVHUYDGRU7DO \FRPRLQIRUPyDVXJRELHUQRXQGLSORPiWLFRQRUWHDPHULFDQRGHODpSRFD ´>HO@VHQWLPLHQWRSRSXODUHQFRQWUDGH/DXUHDQRHVWDQIXHUWHTXHpOQLVHDWUHYH DPRVWUDUVXFDUDHQS~EOLFRODPXHUWH>GHVXJXDUGDHVSDOGDV@KDKHFKRWHPEODU WDQWRORVQHUYLRVGH*yPH]TXHpOKDUHVXHOWRHVFDSDUGH&RORPELDLQPHGLDWD PHQWHµ8QDYH]TXHHODQWHVIRJRVRFRQVSLUDGRUDKRUDDVXVWDGR\WHPHURVRSRU VXYLGDDEDQGRQDUDV~ELWDPHQWHHOSDtVVXPRYLPLHQWRTXHGyDFpIDOR  ¸,U[YL]PZ[HJVU1VZt4HYxH=PSSHYYLHS¹Q\SPV LU(SHWLVWJP[  =VS=000WW

 :LTHUHTH`V W:LTHUHTH`V  WW  >PSSHYK)LH\SHJHS+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKVTH`V 5( !  9HNSHUKHS+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKVTH`V 5( !  .LYIJYPJOH4PSSZ>VVK^HYK+HUPLSZQ\UPV 5( !->!9HNSHUKHS

+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKVQ\UPV 5( !  .LYILYPJOH,ZW`+HUPLSZ`4PSSZTH`V 5( !->:LTHUHTH`V

  WW (O´%RJRWD]Rµ

__

*yPH]HUDODFODVHGHSROtWLFRFDSD]GHFDXVDU\DJUDYDUODVGLYLVLRQHVHQWUH ODVYDULDVIDFFLRQHVGHODpOLWH7DQSURQWRVHIXHKXEROXJDUSDUDXQDPD\RU FRQFLOLDFLyQDOVHQRGHODFODVHGRPLQDQWH'HVSXpVGHWRGRWDQWRORVJUDQGHV FRPHUFLDQWHVFRPRORVLQGXVWULDOHVKDEtDQVLGRDFUHPHQWHDWDFDGRVSRUOtGHUHV FRPXQLVWDV\OLEHUDOHVGHL]TXLHUGDHQXQPX\DJLWDGRFRQJUHVRGHOD&7&HQ &DOLHQGLFLHPEUHGHODxRDQWHULRU (QWUHORVYRFHURVGHODpOLWHTXHEXVFDEDQVXXQLGDGSDUDGHIHQGHUVHGHOD DPHQD]DGHFODVHHVWDEDHOPLVPR´&DOLEiQµPSSHYK)LH\SHJHS+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKVZLW[PLTIYL 5(9. !     +LWHY[TLU[VM:[H[L¸4LTVYHUK\TVM*VU]LYZH[PVU:\IQLJ[!7YLWHYH[PVUVM:\WWVY[PUN+H[HMVY

*VSVTIPHU3VHU(WWSPJH[PVUZ¹HNVZ[V >PSSHYK)LH\SHJHS+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKV ZLW[PLTIYL 5(9. ! >PSSHYK)LH\SHJHS+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKV ZLW[PLTIYL   5(9. ! ¸*VUMLYLUJPHKLSKLZLW[PLTIYLKL  ZVIYLJVTWH|xHZWL[YVSLYHZ¹ZLW[PLTIYL (49,.LVYNL4HYZOHSSHPSSHYK)LH\SHJH,K\HYKVA\SL[H ÍUNLSZLW[PLTIYL (49,+LWHY[TLU[VM:[H[L¸4LTVYHUK\TVM*VU]LYZH[PVU^P[O .VUaHSV9LZ[YLWV1HYHTPSSV¹ZLW[PLTIYL 5(9. ! +LWHY[TLU[ VM:[H[L¸4LTVYmUK\TVM*VU]LYZH[PVU+PZJ\ZZPVUVM*VSVTIPHU9L]LU\L7YVISLTZHUK[OLPY ZVS\[PVU¹5(9. ! .VUaHSV9LZ[YLWV1HYHTPSSVH,K\HYKVA\SL[HÍUNLS ZLW[PLTIYL (49,.VUaHSV9LZ[YLWV1HYHTPSSVH,K\HYKVA\SL[HÍUNLSZLW[PLTIYL   (49,  +LWHY[TLU[VM:[H[L¸4LTVYHUK\TVM*VU]LYZH[PVU:\IQLJ[!*VSVTIPHU;YHKL(NYLLTLU[=PV SH[PVUHUK*VSVTIPHU(JJLZZPVU[V.(;;¹VJ[\IYL 5(9. ! /DPHWDPRUIRVLVGH6X([FHOHQFLD

__

SDUDSRGHUREWHQHUSUpVWDPRV\FRPSUDUELHQHVGHFDSLWDOSURYHQLHQWHVGHORV (VWDGRV8QLGRV /RVFRORPELDQRVVHJXUDPHQWHWXYLHURQHQFXHQWDTXHORV(VWDGRV8QLGRV HUDQYLUWXDOPHQWHORV~QLFRVFRPSUDGRUHVGHVXFDIpFXDQGRODIXHUWHSUHVLyQGHO 'HSDUWDPHQWRGH(VWDGRREOLJyDOJRELHUQRFRORPELDQRDUHSURJUDPDUHOSDJR DORVLQYHUVLRQLVWDVSULYDGRVQRUWHDPHULFDQRVDTXLHQHVVHOHVGHEtDQORVLQWHUH VHVFDXVDGRVSRUORVERQRVGHSDUWDPHQWDOHV\PXQLFLSDOHVYHQFLGRV$GHPiV VHDSUHVXUDURQDQHJRFLDUHOSDJRGHORTXHVHGHEtDDOJRELHUQRGHORV(VWDGRV 8QLGRVGHVGHFRPLHQ]RVGHORVDxRVFXDUHQWDFRPRUHVXOWDGRGHOSURJUDPDGH SUpVWDPRV´/HQG/HDVHµ &XDQGRDOJXQDHPSUHVDQRUWHDPHULFDQDVHYHtDHQYXHOWDHQXQFRQIOLFWRHQ &RORPELDHOJRELHUQRGHORV(VWDGRV8QLGRVSUHVLRQDEDDOD&DQFLOOHUtDFRORP ELDQD$VtRFXUULyFXDQGRODPXQLFLSDOLGDGGH&DOLDPHQD]yFRQH[SURSLDUDOD FRPSDxtDGHHOHFWULFLGDGORFDOTXHSHUWHQHFtDDODPXOWLQDFLRQDO(OHFWULF%RQG DQG6KDUH(PLOLR7RURHPEDMDGRUSOHQLSRWHQFLDULRHQORV(VWDGRV8QLGRVIXH LQIRUPDGRTXHDPHQRVTXHODFRPSDxtDUHFLELHVHXQDFRPSHQVDFLyQHFRQyPLFD VDWLVIDFWRULDHOJRELHUQRQRUWHDPHULFDQRGHWHQGUtDODDSUREDFLyQGHXQSUpVWDPR GHVWLQDGRDOSUR\HFWRGHODKLGURHOpFWULFDGH$QFKLFD\i$GHPiVGHODVLPSOH SUHVLyQODVPXOWLQDFLRQDOHVFRQWDEDQFRQORVEXHQRVRILFLRVGHDERJDGRVFR ORPELDQRVPX\LQIOX\HQWHVFRPR'DUtR(FKDQGtD£\HOPLVPR=XOHWDÉQJHO PLQLVWURGH5HODFLRQHV([WHULRUHVTXLHQHVRIUHFLHURQVXFRQFHSWROHJDODOD (OHFWULF%RQGDQG6KDUH /DVQHJRFLDFLRQHVVREUHHODUDQFHOHQWUHORVFRORPELDQRVSURVHJXtDQ/OHUDV 5HVWUHSRTXLHQ\DQRWUDEDMDEDSDUDOD$1',VHKDEtDFRQYHUWLGRHQHOPiV QRWRULRGHIHQVRUGHORVLQWHUHVHVGHORVFDIHWHURV(QHO&RQJUHVRHQFDEH]DEDHO

 =tHZL,K\HYKVA\SL[HÍUNLSH.VUaHSV9LZ[YLWV1HYHTPSSVKPJPLTIYL  (49,  PSSHYK;OVYWH 1VZt*HTHJOV3VYLUaHUHQ\SPV (49,1VZt4HYxH)LYUHSH.VUaHSV9LZ[YLWV1HYHTPSSV Q\SPV (49,.VUaHSV9LZ[YLWV1HYHTPSSVHTPUPZ[YVKL9LSHJPVULZ,_[LYPVYLZHNVZ[V  (49,4PUPZ[YVKL9LSHJPVULZ,_[LYPVYLZH.VUaHSV9LZ[YLWV1HYHTPSSVZLW[PLTIYL V (49,.VUaHSV9LZ[YLWVHTPUPZ[YVKL9LSHJPVULZ,_[LYPVYLZZLW[PLTIYL  (49,+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKVH*VSVTIPHU,TIHZZ`PU>HZOPUN[VUVJ[\IYL (49, 4PUPZ[YVKL9LSHJPVULZ,_[LYPVYLZH.VUaHSV9LZ[YLWV1HYHTPSSVUV]PLTIYL (49, ¸(PKL4LTVPYL¹KPJPLTIYL (49,,K\HYKVA\SL[HÍUNLSHTPUPZ[YVKL9LSHJPVULZ ,_[LYPVYLZHIYPS (49,  ,TPSPV;VYVH3\PZÍUNLS(YHUNVMLIYLYV  (79 __

/$2)(16,9$(035(6$5,$/

&RPLWp&RQJUHVLRQDOELSDUWLGLVWDTXHGLVFXWtDGLUHFWDPHQWHFRQ2VSLQD3pUH] ORVDVXQWRVHFRQyPLFRV$XQTXHORVFDIHWHURVGHQLQJXQDPDQHUDHVWDEDQGH DFXHUGRFRQORVLPSXHVWRVGHJLURWDO\FRPRVHYLRDQWHULRUPHQWH ORVDFHSWDURQ DUHJDxDGLHQWHVDFDPELRGHODGHYDOXDFLyQGHOSHVRHQHOFRQUHVSHFWR DOGyODU\GHPD\RUHVFUpGLWRVJXEHUQDPHQWDOHVDWUDYpVGHOD&DMDGH&UpGLWR $JUDULR3RU~OWLPR2VSLQD3pUH]OHYDQWyHOHVWDGRGHVLWLRHOGHGLFLHPEUHGH \HO&RQJUHVRSURFHGLyDFRQILUPDUODVPHGLGDVHFRQyPLFDVGHHPHUJHQFLD WRPDGDVGHVSXpVGHO´%RJRWD]Rµ (OJRELHUQRVHHVWDEDSUHSDUDQGRSDUDDVLVWLUDOD&RQIHUHQFLDGHO*$77HQ $QQHF\\OD$1',VXSHUYLVDEDORVSUHSDUDWLYRVSRUPHGLRGH%HUQDOPLQLVWUR GH+DFLHQGDPSSHYK)LH\SHJHS+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKVZLW[PLTIYLV 5(9. ! 

>PSSHYK)LH\SHJH+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKVVJ[\IYL 5(9. ! >PSSHYK)LH\SHJH+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKVVJ[\IYL 5(9. ! >PSSHYK)LH\SHJH+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKVUV]PLTIYL 5(9. ! 1VZt.\[PtYYLa.}TLaH(5+04LKLSSxU)HYYHUX\PSSH`*HSPUV]PLTIYL  (5+0(+(9 +H]PK4*SHYJRHS+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKVKPJPLTIYL 5(9. ! PSSHYK)LH\SHJHS+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKVUV]PLTIYL   5(9. !  1VZt4HKLYV7HYxZH/LYUmU1HYHTPSSV6JHTWVUV]PLTIYL  (5+0)4/LYUmU 1HYHTPSSV 6JHTWV H 1VZt 4HKLYV 7HYxZ KPJPLTIYL    (5+0 )4(5+0(J[H  VJ[\IYL  W"(J[H MLIYLYVV W __

/$2)(16,9$(035(6$5,$/

&RPRHQWRQFHVHO&RQJUHVRHVWDEDFHUUDGRORVPLHPEURVGHODQXHYDRILFLQD QRGHSHQGtDQGHOUHVXOWDGRGHORVGHEDWHVSDUODPHQWDULRVSDUDLPSOHPHQWDUXQD SROtWLFDSURWHFFLRQLVWDDOVHFWRUPDQXIDFWXUHUR'HLJXDOPDQHUDORVLQGXVWULDOHV VHVHQWtDQPX\WUDQTXLORVDOSRGHUSURSRQHUORVQLYHOHVGHSURWHFFLyQGHVHDGRV VLQWHPHUSRUODLQWHUIHUHQFLDGHORVSROtWLFRVOLEHUDOHVRGHORVPLHPEURVGHRWURV JUHPLRVHPSUHVDULDOHV(OJRELHUQRFRQWUDWyD&KDUOHV*RRVHQVXQH[SHUWREHOJD SDUDDVHVRUDUDODQXHYDRILFLQDHQFDUJDGDGHUHIRUPDUORVDUDQFHOHV8QDYH]HQ HOSDtV*RRVHQVYLDMyGHLQPHGLDWRD0HGHOOtQSDUDHVFXFKDUODVSHWLFLRQHVGH ORVLQGXVWULDOHV'HUHJUHVRD%RJRWiFRQWLQXyVXWUDEDMRVLHPSUHHQSHUPDQHQWH FRQWDFWRFRQORVKRPEUHVGHOD$1', /DSUXHEDGHTXHOD$1',WHQtDSUiFWLFDPHQWHXQFRQWUROFRPSOHWRGHODUHIRUPD DUDQFHODULDHVTXHFXDQGR-DUDPLOOR2FDPSRVXJLULyTXHVHLQYLWDVHDORVUHSUH VHQWDQWHVGH)HQDOFRSDUDGLVFXWLUODVQXHYDVWDULIDVRDOPHQRVSDUDPDQWHQHUORV LQIRUPDGRVVREUHODVPLVPDVORVLQGXVWULDOHVVHRSXVLHURQURWXQGDPHQWH\HOPLQLVWUR GH+DFLHQGDQRWXYRPiVUHPHGLRTXHGHVHFKDUPRPHQWiQHDPHQWHODLGHD &XDQGRVHSUHVHQWDEDDOJ~QFRQIOLFWRGHLQWHUHVHVORVJUDQGHVLQGXVWULDOHV TXHGRPLQDEDQOD$1',VDOtDQDGHODQWHFRQVXVSURSyVLWRV3RUHMHPSORFXDQGR XQJUXSRGHIDEULFDQWHVGHFDPLVDVGXHxRVGHHPSUHVDVGHWDPDxRPHGLDQR DOJXQRVGHHOORVLQPLJUDQWHV OHSURSXVLHURQD-DUDPLOOR2FDPSRTXHDSR\DVHVXV LQGXVWULDVUHEDMDQGRORVDUDQFHOHVDODVWHODVLPSRUWDGDVHOPLQLVWUROHVUHVSRQGLy TXHHOJRELHUQRSUHIHUtDSURWHJHUODSURGXFFLyQGHODVWH[WLOHUDVQDFLRQDOHV 'HVSXpVGHXQDYLVLWDDORV(VWDGRV8QLGRV-DUDPLOOR2FDPSRVHTXHMyDQWH ORVGLUHFWLYRVGHOD$1',GHTXHODVPDQXIDFWXUDVFRORPELDQDVHUDQPiVFRVWRVDV TXHODVQRUWHDPHULFDQDVORTXHQRVHMXVWLILFDEDVREUHWRGRWHQLHQGRHQFXHQWD TXHORVFRVWRVGHSURGXFFLyQHUDQPXFKRPiVEDMRVHQ&RORPELD$GHPiVLQVLVWLy HQUHXQLUDORVFRPHUFLDQWHV\DORVLQGXVWULDOHVSDUDTXHGLVFXWLHVHQODUHIRUPD DUDQFHODULDHQXQGHEDWHS~EOLFRHQ&DOL  ,UYPX\L *HIHSSLYV ,ZJV]HY H 1VZt .\[PtYYLa .}TLa MLIYLYV   (5+0 )4 ,UYPX\L

 





*HIHSSLYV,ZJV]HYH(5+04LKLSSxU)HYYHUX\PSSH*HSP4HUPaHSLZ)\JHYHTHUNHMLIYLYV  (5+0)4(SMVUZV=HSKLYYHTHH(5+04LKLSSxUMLIYLYV (5+04PUPZ[LYPVKL /HJPLUKH,UHKLSHU[LJP[HKVJVTV(5+04/ (5+0(J[HTHYaV W"(J[HHIYPS W(SMVUZV=HSKLYYHTHH 1VZt.\[PtYYLa.}TLaHIYPS (5+0(+(9 ,S3PILYHSTHYaVV 1VZt.\[PtYYLa.}TLaH0NUHJPV4LZH:HSHaHYTHYaVV  (5+0(+(9-LUHSJVKL*\UKPUHTHYJHH4HYPHUV6ZWPUH7tYLaTHYaV (791VZt .\[xtYYLa.}TLaH0NUHJPV4LZH:HSHaHYTHYaV (5+0(+(9(5+0(J[H THYaV W ,UYPX\L*HIHSSLYV,ZJV]HYH1VZt.\[PtYYLa.}TLaMLIYLYV (5+0)4,U[YL]PZ[H JVU/LYUmU1HYHTPSSV6JHTWV)VNV[mHNVZ[VKL  ,K\HYKV*\tSSHYH1VZt.\[PtYYLa.}TLaHIYPS (5+0)4/LYUmU1HYHTPSSV6JHTWV H1VZt.\[PtYYLa.}TLaHIYPS (5+04/

/DGLFWDGXUD\HOPDUDYLOORVRPXQGRGHORVQHJRFLRV

__

*XWLpUUH]*yPH]LJQRUyODREVHUYDFLyQGHOPLQLVWURVREUHHODOWRSUHFLRGH ODVPDQXIDFWXUDVQDFLRQDOHVSHURIXHHQIiWLFRHQUHFKD]DUODSURSXHVWDGHGLV FXWLUVREUHODVWDULIDVFRQRWURVJUHPLRV\PHQRVHQS~EOLFR$OPLVPRWLHPSR OD$1',XUJLyD2VSLQD3pUH]DTXHDSUREDVHODUHIRUPDDUDQFHODULDWDQSURQWR FRPRIXHUDSRVLEOH$QWHODSUHVLyQGHORVLQGXVWULDOHV-DUDPLOOR2FDPSRIXH LPSRWHQWHSDUDVHJXLULQVLVWLHQGRHQVXSURSXHVWDGHGHEDWH\QROHTXHGyPiV DOWHUQDWLYDTXHWHQHUUHXQLRQHVVHSDUDGDVGHFDUiFWHUEiVLFDPHQWHLQIRUPDWLYR FRQGLIHUHQWHVJUXSRVGHHPSUHVDULRVHQ%RJRWi 3RUILQHOGHMXOLRGH2VSLQD3pUH]\VXVPLQLVWURVILUPDURQXQGHFUHWR TXH DXPHQWDED FRQVLGHUDEOHPHQWH ODV WDVDV DUDQFHODULDV D ODV PDQXIDFWXUDV H[WUDQMHUDV3RUHMHPSORODLPSRUWDFLyQGHWHODVGHDOJRGyQIXHJUDYDGDFRQ XQDWDULIDGHFDVLORVSDxRVGHODQDTXHDQWLJXDPHQWHWHQtDQXQDUDQFHO GHPHQRVGHOREWXYLHURQXQDWDULIDGHFDVL -DUDPLOOR2FDPSRQRWXYRRWUDRSFLyQTXHMXVWLILFDUDQWHODRSLQLyQS~EOLFD ODVQXHYDVPHGLGDVDGYLUWLHQGRTXHORVFRQVXPLGRUHVVHUtDQSURWHJLGRVSRUHO JRELHUQRPHGLDQWHHOFRQJHODPLHQWRGHORVSUHFLRVDOSRUPD\RUGHODVPDQXIDF WXUDVQDFLRQDOHV/DSURWHFFLyQDOFRQVXPLGRURIUHFLGDSRUHOJRELHUQRQRSDVy GHVHUVyORUHWyULFD\DTXHORVLQGXVWULDOHVVDEtDQGHVGHDQWHVVREUHHOSRVLEOH FRQWUROGHSUHFLRV\SURFHGLHURQDDXPHQWDUORVDQWHVGHTXHHOJRELHUQRWRPDVH DOJXQDPHGLGDDOUHVSHFWR /DUHIRUPDDUDQFHODULDIXHDWDFDGDGXUDPHQWHSRUORVOLEHUDOHVTXLHQHVDOH JDURQTXHORVLQWHUHVHVGHFRPHUFLDQWHVDJULFXOWRUHV\FRQVXPLGRUHVKDEtDQVLGR WRWDOPHQWHLJQRUDGRV7DPELpQOD6RFLHGDGGH$JULFXOWRUHVGH&RORPELDSURWHVWy HQpUJLFDPHQWHSRUORVDOWRVQLYHOHVGHSURWHFFLyQRWRUJDGRVDORVLQGXVWULDOHV (O7LHPSRRSLQy´(OFRQVXPLGRUSDJD(VFLHUWRFRPRHOSD\DVRGHOFLUFRHV VLHPSUHHOTXHUHFLEHODVERIHWDGDVµ(O6LJORGH*yPH]UHVSRQGLyDUJXPHQWDQGR TXHODUHIRUPDKDEtDVLGRFXLGDGRVDPHQWHHVWXGLDGD\VDWLVIDFtD´ODVQHFHVLGDGHV LQPHGLDWDVGHOSDtVGHVXVLQGXVWULDV\GHVXVWUDEDMDGRUHVµ 0ROHVWR-DUDPLOOR2FDPSRWXYRTXHGHIHQGHUODSRVLFLyQGHOJRELHUQR\ORV LQWHUHVHVGHORVJUDQGHVLQGXVWULDOHV \GHFODUyDODSUHQVDTXH

 1VZt.\[PtYYLa.}TLaH/LYUmU1HYHTPSSV6JHTWVHIYPS (5+04/(5+0(J[H

 HIYPS WW"(J[HTH`V WW (5+0(J[HQ\UPV WW :LTHUHQ\SPV WW ,S;PLTWVQ\SPV  ,UYPX\L*HIHSSLYV,ZJV]HYH(5+04LKLSSxU)HYYHUX\PSSH*HSP4HUPaHSLZ`)\JHYHTHUNHQ\SPV  (5+0)4,S;PLTWVQ\SPV   :LTHUHQ\SPV W,S;PLTWVQ\SPV   ,S;PLTWVQ\SPV   *P[HKVZWVY:LTHUHQ\SPV W    

__

/$2)(16,9$(035(6$5,$/

&RPRPLQLVWURGH+DFLHQGDQRWHPRTXHPHGLJDQTXHHVWR\GHIHQGLHQGRDODV LQGXVWULDVDQWLRTXHxDV&XDQGRODVGHILHQGRHVWR\WUDWDQGRGHGHIHQGHUD REUHURVGHGHIHQGHUWRGDODH[SORWDFLyQGHPDWHULDSULPD\WRGRHOWUDEDMRDJUtFROD TXHVHGHULYDGHODIDHQDLQGXVWULDOWRGRHOPHFDQLVPRGHWUDQVSRUWH\WRGRHO PHFDQLVPRFRPHUFLDOTXHSURYLHQHGHODWDUHDLQGXVWULDOHVWR\GHIHQGLHQGRDO WUDEDMRFRORPELDQR

(OJRELHUQRSXGRSURPXOJDUHLPSOHPHQWDUODUHIRUPDDUDQFHODULDFXDQGR &RORPELD\ORV(VWDGRV8QLGRVDFRUGDURQUHSXGLDUHO7UDWDGR&RPHUFLDOGH HOFXDOLPSHGtDTXH&RORPELDJUDYDVHFRQWDULIDVDOWDVODVLPSRUWDFLRQHV GHPDQXIDFWXUDVQRUWHDPHULFDQDV$GHPiVORVGRVSDtVHVGHFLGLHURQQHJRFLDU XQQXHYRFRQYHQLRTXHEiVLFDPHQWHHVWLPXODUtD\SURWHJHUtDODLQYHUVLyQGH FDSLWDOHVQRUWHDPHULFDQRVHQ&RORPELD /RVLQGXVWULDOHVFRORPELDQRVFRQYHQtDQHQTXHKXELHVHLQYHUVLyQH[WUDQMHUDHQ HOSDtVPLHQWUDVpVWDQRUHSUHVHQWDVHFRPSHWHQFLD>SDUDHOORV@\HVWLPXODVHODHQWUDGD GHELHQHVGHFDSLWDO\GHGLYLVDV6LQHPEDUJRORVPLVPRVLQGXVWULDOHVWDPELpQ WHPtDQTXHODVPXOWLQDFLRQDOHVQRUWHDPHULFDQDVDSURYHFKDVHQODVQXHYDVUHODFLR QHVFRPHUFLDOHVSDUDLQYDGLUHOPHUFDGRFRORPELDQRFRQPDQXIDFWXUDVPiVEDUDWDV KDFLpQGRODVSDVDUFRPRLPSRUWDFLRQHVGHFDSLWDO&DEDOOHUR(VFRYDUSRUHMHPSOR HVWDEDFRQYHQFLGRGHTXHORV(VWDGRV8QLGRVHVWDEDQSDJDQGRSUHFLRVPiVDOWRVSRU ORVSURGXFWRVSULPDULRVHQHOPHUFDGRLQWHUQDFLRQDOSDUDDKRQGDUODGLYLVLyQLQWHUQD FLRQDOGHOWUDEDMR\GHHVWDIRUPDHYLWDUODLQGXVWULDOL]DFLyQGHOD$PpULFD/DWLQD (OJRELHUQRFRORPELDQRIXHPX\UHFHSWLYRDODSUHRFXSDFLyQGHORVLQGXV WULDOHVVREUHHOGXPSLQJGHPDQXIDFWXUDVH[WUDQMHUDV\H[SLGLyXQDUHVROXFLyQ SDUDFRQWURODUODHQWUDGD GHELHQHVGHFRQVXPRUHJLVWUDGRVFRPRVXSXHVWDV

 :LTHUHQ\SPV W   .LYILYPJO H 4PSSZ >VVK^HYK ` 9HUKHSS Q\UPV     5( 9.  !  

+LWHY[TLU[VM:[H[L¸4LTVYHUK\TVM*VU]LYZH[PVU¹Q\SPV  5(9. !  +LSLJVSVTIPH(UULJ`H7YLL_[LYPVYLZQ\SPV  (5+0(49,7YLL_[LYPVYLZH LTIHQHKHKL*VSVTIPHLU>HZOPUN[VUQ\SPV  (49,,_[LYPVYLZH,TJVSVTIPHHNVZ[V   (49,+LHU(JOLZVUH/HYY`:;Y\THUHNVZ[V  5(9. !(3  ,K\HYKVA\SL[HÍUNLSH+LHU(JOLZVUVJ[\IYL  (791VZt*HTHJOV3VYLUaHUHH ZLJYL[HYPVLJVU}TPJVKLSH7YLZPKLUJPHVJ[\IYL  (791VZt*HTHJOV3VYLUaHUHH ZLJYL[HYPVLJVU}TPJVKLSH7YLZPKLUJPHVJ[\IYL   (79,S;PLTWVZLW[PLTIYL   ,U[YL]PZ[HJVU/LYUmU1HYHTPSSV6JHTWV)VNV[mHNVZ[V   1HPTL7VZHKHÍUNLSH(5+0)VNV[mUV]PLTIYL (5+0)4,UYPX\L*HIHSSLYV,ZJV]HY H(5+04LKLSSxU)HYYHUX\PSSH*HSPTHYaV  (5+0)41VZt.\[PtYYLa.}TLaH (5+0)VNV[mTHYaV  (5+0)4  (5+0(J[HQ\SPV   W"(J[HUV]PLTIYL  WW"(J[HUV]PLTIYL   W,UYPX\L*HIHSSLYV,ZJV]HYH1VZt.\[PtYYLa.}TLaVJ[\IYL  (5+0 )41VZt.\[PtYYLa.}TLaH(5+0)VNV[mUV]PLTIYL  (5+0)4  ,UYPX\L*HIHSSLYV,ZJV]HYH(5+04LKLSSxU)HYYHUX\PSSH`*HSPUV]PLTIYL  (5+0)4 /DGLFWDGXUD\HOPDUDYLOORVRPXQGRGHORVQHJRFLRV

__

LPSRUWDFLRQHVGHFDSLWDO(QFXDQWRDORVWHPRUHVGH&DEDOOHUR(VFRYDUVREUH ORTXHpOFUHtDHUDXQSODQQRUWHDPHULFDQRSDUDPDQWHQHUDOD$PpULFD/DWLQD SRUIXHUDGHOPXQGRLQGXVWULDOL]DGRHUDFLHUWRTXHORV(VWDGRV8QLGRVHVWDEDQ LQWHUHVDGRVHQDVHJXUDUIXHQWHVGHPDWHULDVSULPDVEDUDWDV\PHUFDGRVTXHLQXQGDU FRQVXVPDQXIDFWXUDV3HURORTXH&DEDOOHUR(VFRYDUSDUHFtDGHVFRQRFHUHQVX DUJXPHQWDFLyQHUDTXHHOJRELHUQRQRUWHDPHULFDQRHVWDEDWDPELpQJUDQGHPHQWH LQWHUHVDGRHQFUHDUFRQGLFLRQHVIDYRUDEOHVSDUDODLQYHUVLyQGHFDSLWDOHVSULYDGRV GHORV(VWDGRV8QLGRVHQHOH[WHULRU7DO\FRPR+DUROG)/LQGHUVXEVHFUHWDULR GH(VWDGRSDUD$VXQWRV(FRQyPLFRVGHFODUDUtDGRVDxRVGHVSXpV /RV(VWDGRV8QLGRVHPHUJLHURQGHVSXpVGHODJXHUUDFRQXQDPDTXLQDULDLQGXVWULDO PX\HQVDQFKDGD\HQWUHODVSULQFLSDOHVQDFLRQHVGHOPXQGRHVOD~QLFDFRQXQ H[FHGHQWHGHFDSLWDOHVSULYDGRVGLVSRQLEOHVSDUDH[SRUWDU(VWLPXODUODLQYHUVLyQ GHHVWHFDSLWDOHUDXQDVXQWRGHLPSRUWDQFLDSDUDQXHVWUDHFRQRPtDGRPpVWLFD \SDUDHOGHVDUUROORHFRQyPLFR\ODSURVSHULGDGPXQGLDO

'HDKtTXHODLPSOHPHQWDFLyQGHQXHYRVWUDWDGRVTXH´SURWHMDQDOLQYHUVLRQLVWD HQFRQWUDGHORVSHOLJURVQRFRPHUFLDOHVHQORVQHJRFLRVFRQHOH[WUDQMHURµHQ YDULRVSDtVHVHQHOPXQGRLQFOX\HQGR&RORPELDVHFRQYLUWLyHQSDUWHGHOD SROtWLFDRILFLDOGHOJRELHUQRQRUWHDPHULFDQR 'HQWURGHHVWHFRQWH[WRHOHPEDMDGRU%HDXODFOHVXJLULyDO'HSDUWDPHQWR GH(VWDGRTXHVHOHGHEtDUHFRUGDUDOJRELHUQRFRORPELDQRTXHORVSUpVWDPRV QRUWHDPHULFDQRVHVWDUtDQVXMHWRVDODFRQVROLGDFLyQGHFRQGLFLRQHVIDYRUDEOHV DODLQYHUVLyQH[WUDQMHUDHQ&RORPELD'HWRGDVIRUPDV%HDXODFQRQHFHVLWDED  ,S;PLTWVQ\SPV   PSSHYK)LH\SHJTH`V 5(9. ! >PSSHYK)LH\SHJHS+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKV5(9. !  >PSSHYK)LH\SHJHS+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKVHNVZ[V 5(9. !  >PSSHYK)LH\SHJHS+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKVZLW[PLTIYL 5(9. !   __

/$2)(16,9$(035(6$5,$/

LUWDQOHMRVFRQVXVDPHQD]DV\DTXHHOPLVPRJRELHUQRFRORPELDQRHVWDEDPX\ LQWHUHVDGRHQDWUDHUFDSLWDOHVH[WUDQMHURV,QFOXVLYHVHFRQWUDWyDXQDILUPDGH SXEOLFLGDGQRUWHDPHULFDQDSDUDPHMRUDUODLPDJHQGHOSDtVHQHOH[WHULRU\´SDUD GHVDUUROODUXQLQWHUpVPiVYLYRHQ&RORPELDFRPRXQSDtVTXHRIUHFHRSRUWXQLGDGHV DWUDFWLYDVGHLQYHUVLyQSDUDORVKRPEUHVGHQHJRFLRVGHORV(VWDGRV8QLGRVµ -DUDPLOOR2FDPSR\=XOHWDÉQJHOHOQXHYRHPEDMDGRUDQWHHOJRELHUQRGH :DVKLQJWRQ HUDQFRQVFLHQWHVGHTXHORTXHHO'HSDUWDPHQWRGH(VWDGRHVSHUDED GH&RORPELDHUDODDFHSWDFLyQGHODLQYHUVLyQSULYDGDFRPRODSULQFLSDOIRUPD GH´D\XGDµQRUWHDPHULFDQD6DEtDQWDPELpQTXHORVQRUWHDPHULFDQRVTXHUtDQ WHQHUODFRPSOHWDVHJXULGDGGHTXHVXVSURSLHGDGHVQRVHUtDQH[SURSLDGDVVLQ XQDFRPSHQVDFLyQVDWLVIDFWRULDXQDVXQWRHVSHFLDOPHQWHLPSRUWDQWHSDUDODV ILUPDVSHWUROHUDV \TXHVXVFRPSDxtDVQRWHQGUtDQQLQJ~QSUREOHPDHQUHPLWLU ODVJDQDQFLDVGHODVVXEVLGLDULDVDORVDFFLRQLVWDVHQORV(VWDGRV8QLGRV(O PLVPR-DUDPLOOR2FDPSROHFRPXQLFyDOHPEDMDGRU%HDXODFTXH´&RORPELD HVWDEDGHFLGLGDDPRYHUVHWDQUiSLGRFRPRSXGLHVHHQODGLUHFFLyQGHPHMRUDUODV FRQGLFLRQHVSDUDHOFDSLWDOH[WUDQMHURµ(OPLQLVWURHQWRQFHVYLDMyD:DVKLQJWRQ SDUDUHDILUPDUODSRVLFLyQGHOJRELHUQRFRORPELDQR\GLVFXWLUORVWpUPLQRVGHXQ QXHYRWUDWDGRFRPHUFLDOFRQORVIXQFLRQDULRVGHO'HSDUWDPHQWRGH(VWDGR 3DUDHQWRQFHV\FRPR\DVHDQRWyOD$1',HUDHOJUHPLRHPSUHVDULDOFRQ PD\RULQIOXHQFLDVREUHODSROtWLFDFRPHUFLDOGH&RORPELDHQJHQHUDO\HQODVQHJR FLDFLRQHVFRQORV(VWDGRV8QLGRVHQSDUWLFXODU'HOPLVPRPRGRHO'HSDUWDPHQWR GH(VWDGRUHFLEtDXQDIXHUWHSUHVLyQWDQWRGHODVFRUSRUDFLRQHVQRUWHDPHULFDQDV FRQLQWHUHVHVUHDOHVRSRWHQFLDOHVHQ&RORPELDFRPRGHSDUWHGHO&RQVHMRSDUDHO &RPHUFLR1DFLRQDO\([WUDQMHUR7KH1DWLRQDODQG)RUHLJQ7UDGH&RXQFLO  (OGHDEULOGHIXHILUPDGRHOQXHYRWUDWDGRGH$PLVWDG\&RPHUFLR HQWUH&RORPELD\ORV(VWDGRV8QLGRV/RVQRUWHDPHULFDQRVREWXYLHURQFRQFHVLR QHVHQFOiXVXODVTXHSURWHJtDQDODVPXOWLQDFLRQDOHVGHXQVXSXHVWRSHOLJURGH H[SURSLDFLyQ\TXHIDFLOLWDEDQODUHPLVLyQGHVXVXWLOLGDGHVFRQODFRODERUDFLyQ GHOD2ILFLQDGH&RQWUROGH&DPELRVHQ%RJRWi$FDPELR&RORPELDSXGR PDQWHQHUHOFRQWUROVREUHORVPHUFDGRVGRPpVWLFRVHQODVOtQHDVWUDGLFLRQDOHV GHSURGXFFLyQGHOVHFWRUGHODVPDQXIDFWXUDV´OLYLDQDVµ\UHFLELyJDUDQWtDVGHO 'HSDUWDPHQWRGH(VWDGRGHVRVWHQHUORVSUHFLRV\ODFXRWDGHOFDIpFRORPELDQR  =tHZL¸7\ISPJ9LSH[PVUZ7YVNYHTWYLWHYLKMVY[OL9LW\ISPJVM*VSVTIPHI`/PSSHUK2UV^SV[VU

0UJ¹Q\UPV  (79  +\KSL`.:PUNLYHS+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKVHNVZ[V   5(9. !  

,K\HYKVA\SL[HÍUNLSHTPUPZ[YVKL9LSHJPVULZ,_[LYPVYLZVJ[\IYL  (49,   >PSSHYK)LH\SHJHS+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKVUV]PLTIYL  5(9. !   7YLL_[LYPVYLZH/LYUmU1HYHTPSSV6JHTWVTHYaV (49,,UYPX\L*HIHSSLYV,ZJV]HY

H(5+04LKLSSxU)HYYHUX\PSSH*HSP)\JHYHTHUNH4HUPaHSLZHIYPS (5+0)4  ,K\HYKVA\SL[HÍUNLSH.VUaHSV9LZ[YLWV1HYHTPSSVVJ[\IYL (79 /DGLFWDGXUD\HOPDUDYLOORVRPXQGRGHORVQHJRFLRV

__

HQHOPHUFDGRQRUWHDPHULFDQR(VWREHQHILFLDEDWDQWRDORVLQGXVWULDOHVFRPR DORVFDIHWHURVFRORPELDQRV\DTXHXQRV\RWURVQHFHVLWDEDQODVGLYLVDVSURYH QLHQWHVGHOFDIp /DXUHDQR*yPH]HOQXHYRSUHVLGHQWHWXYRXQJLURSROtWLFRGHJUDGRV GHVGHORVGtDVGHVXIHUR]\DJUHVLYDRSRVLFLyQDORVQRUWHDPHULFDQRVHQODGpFDGD GHORVDxRV\FRPLHQ]RVGHORVDxRV&RPRSUHVLGHQWHpOHUDFRQVFLHQWH GHTXHGHVSXpVGHOD6HJXQGD*XHUUD0XQGLDOORV(VWDGRV8QLGRVVHKDEtDQ FRQYHUWLGRGHOHMRVHQODSULQFLSDOIXHQWHGHFDSLWDO\WHFQRORJtDSDUD&RORPELD \HUDHOPHUFDGRSDUDFDVLWRGDVVXVH[SRUWDFLRQHVDJUtFRODV\PLQHUDV0iVTXH QDGLHHODQWLJXR´QDFLRQDOLVWDµD\XGyDFUHDUODVFRQGLFLRQHVSDUDDWUDHUODV LQYHUVLRQHVGHODVPXOWLQDFLRQDOHVQRUWHDPHULFDQDV(VDVFRQGLFLRQHVIXHURQ PiVDOOiGHXQVLPSOHWUDWDGRFRPHUFLDO\GHFRPSURPLVRVGLSORPiWLFRVHQWUH ORVGRVSDtVHV7DPELpQLQFOXtDQODFRQWLQXDFLyQGHXQDSROtWLFDGHUHSUHVLyQ ODERUDO³LQFOXVLYHDWUDYpVGHPHGLRVPLOLWDUHV³LQLFLDGDDELHUWDPHQWHSRUHO SUHVLGHQWHOLEHUDO$OEHUWR/OHUDV&DPDUJRHQVXFRUWRSHUtRGRGHJRELHUQR&RPR \DKHPRVYLVWRH[LVWtDXQFRQVHQVRHQWUHORVFRQVHUYDGRUHV\ODPD\RUtDGHORV OLEHUDOHVSDUDGHVWUXLUFXDOTXLHUWLSRGHPRYLPLHQWRVLQGLFDOLQGHSHQGLHQWH\SRU ORWDQWRPLQLPL]DUHOQ~PHURGHKXHOJDV\FRQIOLFWRVODERUDOHVSXGLHQGRUHGXFLU DVtORVVDODULRVUHDOHV\ORVGHUHFKRVDGTXLULGRVSRUODFODVHREUHUD(VWDSROtWLFD FRLQFLGtDFRQXQDHVWUDWHJLDJOREDOGHO'HSDUWDPHQWRGH(VWDGRGHORV(VWDGRV 8QLGRVSDUDFRQWURODUHOVLQGLFDOLVPRODWLQRDPHULFDQREDMRODHVWULFWDWXWHODGH OD\DGRPHVWLFDGD\SDWURQDOLVWDVLQGLFDOQRUWHDPHULFDQD$)/ /RVLQGXVWULDOHVFRORPELDQRVDFWXDURQEUHYHPHQWHFRPR´EXUJXHVtDQDFLR QDOµPLHQWUDVOXFKDURQSRUPDQWHQHUHOFRQWUROGHOPHUFDGRGRPpVWLFRSDUD VXVPDQXIDFWXUDV8QDYH]ORJUDGDHVWDPHWDOHGLHURQODELHQYHQLGDDOFDSLWDO QRUWHDPHULFDQRDFRQGLFLyQGHTXHpVWHQRFRPSLWLHVHFRQHOORV3XHVELHQSDUD FRPLHQ]RVGHODGpFDGDGHORVDxRV\EDMRODGLFWDGXUDGH/DXUHDQR*yPH] FRQPHUFDGRVFDXWLYRVXQPRYLPLHQWRODERUDOSHUVHJXLGR\IUDJPHQWDGRDGHPiV GHODVHYHUDUHSUHVLyQPLOLWDU\SROLFLDOHQWRGRHOSDtV\DQRVyOR0HGHOOtQSRGtD VHUFRQVLGHUDGRFRPRHO´SDUDtVRFDSLWDOLVWDµWDQHOHJDQWHPHQWHLGHDOL]DGRSRUOD UHYLVWD/LIH'HKHFKR&RORPELDHQWHUDVHKDEtDFRQYHUWLGRHQXQLGtOLFRMDUGtQ GHOHGpQSDUDODVJDQDQFLDVGHORVFDSLWDOLVWDVWDQWRQDWLYRVFRPRH[WUDQMHURV  +LWHY[TLU[VM:[H[L¸7VSPJ`:[H[LTLU[¹TH`V 5(9. !,K\HYKV

A\SL[HÍUNLSH7YLL_[LYPVYLZ4PU/HJPLUKH-LKLJHMtQ\UPV (49,¸0UMVYTLKLS LTIHQHKVYKL*VSVTIPHLU>HZOPUN[VU¹HNVZ[V (794PUPZ[LYPVKL9LSHJPVULZ,_[LYPVYLZ +LWHY[HTLU[VKL(Z\U[VZ,JVU}TPJVZ`*VUZ\SHYLZ:LJJP}UKL*VTLYJPV,_[LYPVY¸;YH[HKV KLHTPZ[HKJVTLYJPV`UH]LNHJP}ULU[YLSH9LW‚ISPJHKL*VSVTIPH`SVZ,Z[HKVZPSSHYK)LH\SHJH+LWHY[HTLU[VKL,Z[HKVLULYV 5(9. ! __

/$2)(16,9$(035(6$5,$/

Epílogo Para 1950 la burguesía industrial colombiana había consolidado su matrimonio político con la facción más militante, ideológica e inflexible en el Partido Conservador, aquella de Laureano Gómez. Aunque Gómez tenía una vieja rivalidad con los Estados Unidos, los norteamericanos entendieron que él no sólo era un militante anticomunista sino que también le daría la bienvenida al capital extranjero. Gómez apoyó inclusive el envío de tropas colombianas a la Guerra de Corea para combatir a las fuerzas comunistas. A cambio obtuvo apoyo político de los Estados Unidos en el campo internacional, y armamento norteamericano para combatir y reprimir a la oposición en su país. Durante su presidencia, Gómez desató una campaña de terror. La Violencia, una guerra civil que empezó como una confrontación entre conservadores y liberales, se agudizó. Incluso los líderes más importantes del Partido Liberal fueron perseguidos por el gobierno: dos de ellos, López Pumarejo y Lleras Restrepo, tuvieron que abandonar el país en 1952 después de que sus hogares fuesen atacados por hordas armadas y con la complicidad del gobierno. Ya que Gómez no gozaba de buena salud, había sido remplazado en sus funciones presidenciales por Roberto Urdaneta Arbeláez. Sin embargo, Gómez mantenía su influencia en las decisiones importantes del ejecutivo. Los intentos de Gómez de perpetuar a su camarilla en el poder y de implementar un Estado corporatista siguiendo los modelos de Portugal y España alinearon a muchos en Colombia, incluyendo a miembros del Partido Conservador. La débil alianza entre Gómez y Ospina Pérez se rompió y este último apoyó el golpe de estado de junio de 1953. Gustavo Rojas Pinilla, comandante de las Fuerzas Armadas y viejo amigo de Ospina Pérez, fue encargado de tomar las riendas del poder. Para 1953, la violencia se había transformado en lucha de clases y bandolerismo en las zonas rurales. Rojas Pinilla ofreció la amnistía a las bandas armadas de | 217 |

campesinos. Éstos habían sido inicialmente apoyados por el Partido Liberal que rápidamente había perdido el control sobre estos grupos. Un buen número de rebeldes, especialmente en los Llanos Orientales, aceptó la oferta del gobierno. Una vez desmovilizados, varios de sus líderes fueron asesinados. Rojas Pinilla también reprimió la oposición en las ciudades e inclusive declaró fuera de la ley al Partido Comunista. Sin embargo, varios grupos guerrilleros en el campo continuaron su resistencia contra el gobierno, convirtiéndose en los orígenes de las guerrillas rurales que han dominado durante años buena parte del territorio nacional. Desde 1955 Lleras Camargo y Gómez sostuvieron negociaciones en España donde acordaron regresar a un régimen civil y bipartidista. Entonces, cuando Rojas Pinilla estaba listo para ordenar una intervención oficial contra las empresas industriales más grandes, la ANDI respondió apoyando un paro patronal contra el gobierno. Las acciones de los empresarios y la oposición política existente contribuyeron al derrocamiento de Rojas Pinilla en mayo de 1957. Una Junta Militar bajo la influencia de políticos de ambos partidos gobernó a Colombia entre 1957 y 1958. Una nueva era de gobiernos bipartidistas, conocida como el Frente Nacional, comenzó en el país: los liberales y los conservadores se pusieron de acuerdo en alternar la Presidencia de la República cada cuatro años, y dividir milimétricamente entre ellos todas las posiciones oficiales, por elección o por nombramiento. Los acuerdos entre los dos partidos fueron consolidados a finales de la década de los 50 y comienzos de los 60. Estos acuerdos reflejaban también una tregua muy importante entre los miembros de la burguesía colombiana, quienes se habían dado cuenta de que la violencia podía convertirse en un nuevo “Colombianazo”, y que éste no sería tan espontáneo ni tan corto como aquel de abril de 1948. La clase dominante no sólo aprendió de sus errores de la década de los 40, sino también que para comienzos de los 60 la Revolución Cubana ofrecía un nuevo modelo de desarrollo a través de América Latina. Pero lo que atemorizaba aún más a la burguesía colombiana sobre la Revolución Cubana, era el ejemplo de una nueva forma de vida que podría traer más igualdad y humanidad a su nación, un fin al sistema de privilegios e injusticias que los empresarios habían construido y querían preservar a cualquier costo.

| 218 |

LA OFENSIVA EMPRESARIAL

%LEOLRJUDItD ,      

$5&+,926 $UFKLYRGH*RQ]DOR5HVWUHSR-DUDPLOOR0HGHOOtQ $UFKLYRGHOD$VRFLDFLyQ1DFLRQDOGH,QGXVWULDOHV$1',0HGHOOtQ $UFKLYRGHOD)HGHUDFLyQ1DFLRQDOGH&RPHUFLDQWHV)HQDOFR%RJRWi $UFKLYRGHO0LQLVWHULRGH5HODFLRQHV([WHULRUHV%RJRWi $UFKLYRGHOD3UHVLGHQFLDGHOD5HS~EOLFD%RJRWi 1DWLRQDO$UFKLYHV:DVKLQJWRQ'&

,,

'2&80(17262),&,$/(6

&RORPELD %DQFRGHOD5HS~EOLFD´'LVFXUVRSURJUDPDSURQXQFLDGRSRUHO([FHOHQWtVLPR VHxRUGRFWRU(QULTXH2OD\D+HUUHUDDOWRPDUSRVHVLyQGHOD3UHVLGHQFLD GHOD5HS~EOLFDDQWHHO&RQJUHVRGH&RORPELDHOGtDGHDJRVWRGH µ6XSOHPHQWRGHOD5HYLVWDGHO%DQFRGHOD5HS~EOLFD1RDJRVWR GH  BBBB   ´$QQXDO5HSRUWµ  BBBB   /DSURGXFFLyQ\ODVHFRQRPtDVVHFFLRQDOHVHQ&RORPELD%RJRWi,PSUHQWDGHO %DQFRGHOD5HS~EOLFD &RPLWpGH'HVDUUROOR(FRQyPLFR,QIRUPHILQDOVHSWLHPEUHDJRVWR  %RJRWi,PSUHQWDGHO%DQFRGHOD5HS~EOLFD &RQWUDORUtD*HQHUDOGHOD5HS~EOLFD3ULPHU&HQVR,QGXVWULDOGH&RORPELD 5HVXPHQJHQHUDO%RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDO BBBB   3ULPHUFHQVRLQGXVWULDOGH&RORPELD$QWLRTXLD$WOiQWLFR%ROtYDU\ %R\DFi%RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDO BBBB   3ULPHUFHQVRLQGXVWULDOGH&RORPELD'HSDUWDPHQWRGH&DOGDV%RJRWi ,PSUHQWD1DFLRQDO %LEOLRJUDItD

__

BBBB   3ULPHUFHQVRLQGXVWULDOGH&RORPELD'HSDUWDPHQWRGH&XQGLQDPDUFD %RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDO BBBB   3ULPHUFHQVRLQGXVWULDOGH&RORPELD'HSDUWDPHQWRGHO9DOOHGHO&DXFD %RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDO BBBB   $QXDULRGHFRPHUFLRH[WHULRU&RORPELD%RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDO  BBBB   $QXDULRGHFRPHUFLRH[WHULRU&RORPELD%RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDO  'HSDUWDPHQWR$GPLQLVWUDWLYR1DFLRQDOGH(VWDGtVWLFD&HQVRGHSREODFLyQ  GH5HVXPHQ%RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDO BBBB   &HQVRGHSREODFLyQGH$QWLRTXLD%RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDO BBBB   ´&RORPELD(VWUXFWXUDHFRQyPLFDµ5HYLVWD'$1(1R SS 0LQLVWHULRGHOD(FRQRPtD1DFLRQDO3ODQTXLQTXHQDOGHIRPHQWRDJUtFROD%RJRWi ,PSUHQWD1DFLRQDO BBBB   ´3ROtWLFDHFRQyPLFDGHSRVWJXHUUDµ&RPHUFLRH,QGXVWULDV1RRFWXEUH GH 0LQLVWHULRGH)RPHQWR0HPRULDGHOPLQLVWURGH)RPHQWRDO&RQJUHVR1DFLRQDO %RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDO 0LQLVWHULRGH*RELHUQR&HQVRJHQHUDOGHOD5HS~EOLFDGH&RORPELD%RJRWi,P SUHQWD1DFLRQDO BBBB   0HPRULDGHOVHxRUPLQLVWURGH*RELHUQRGRFWRU$EVDOyQ)HUQiQGH]GH6RWRDO &RQJUHVR1DFLRQDOGH%RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDO BBBB   0HPRULDGHOVHxRUPLQLVWURGH*RELHUQRGRFWRU5REHUWR8UGDQHWD$UEHOiH] DO&RQJUHVRGH%RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDO BBBB   ,QIRUPHGHORVMHIHVGHVHFFLyQDOPLQLVWURGH*RELHUQRSDUDODPHPRULDGH %RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDO BBBB   0HPRULDGHOPLQLVWURGH*RELHUQRDO&RQJUHVRGH%RJRWi,PSUHQWD 1DFLRQDO BBBB   &DUWDGHOVHxRU(GXDUGR6DQWRVDORVVHxRUHVPLQLVWURVGHOGHVSDFKRHMHFXWLYR 5HVSXHVWDGHOVHxRUPLQLVWURGH*RELHUQR%RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDO 0LQLVWURGH*XHUUD0HPRULDGH*XHUUD%RJRWi,PSUHQWDGHO0LQLVWHULR GH*XHUUD BBBB   0HPRULDGH*XHUUD%RJRWi,PSUHQWDGHO0LQLVWHULRGH*XHUUD  0LQLVWHULRGH+DFLHQGD\&UpGLWR3~EOLFR5HJODPHQWRVJHQHUDOHVGHDGXDQDV H[SHGLGRVSRUHO0LQLVWHULRGH+DFLHQGD\&UpGLWR3~EOLFRSDUDODDSOLFDFLyQ GH OD OH\  GH  RUJiQLFD GHO UDPR %RJRWi ,PSUHQWD 1DFLRQDO 

__

/$2)(16,9$(035(6$5,$/

BBBB   0HPRULDTXHSUHVHQWDHOPLQLVWURGH+DFLHQGD\&UpGLWR3~EOLFRDO&RQJUHVR 1DFLRQDOHQODVVHVLRQHVRUGLQDULDVGH%RJRWi/LEUHUtD1XHYD&DVD (GLWRULDO BBBB   'HFUHWRV GH FDUiFWHU H[WUDRUGLQDULR GLFWDGRV SRU HO (MHFXWLYR 1DFLRQDO HQ GHVDUUROORGHODVIDFXOWDGHVHFRQyPLFDVFRQIHULGDVSRUODVOH\HV\GH %RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDO BBBB   (VWHEDQ -DUDPLOOR  0HPRULD GH +DFLHQGD  %RJRWi ,PSUHQWD 1DFLRQDO BBBB   (VWHEDQ-DUDPLOOR 0HPRULDGH+DFLHQGD%RJRWi(GLWRULDO0LQHUYD  BBBB   (VWHEDQ -DUDPLOOR  0HPRULD GH +DFLHQGD  %RJRWi ,PSUHQWD 1DFLRQDO BBBB   *RQ]DOR5HVWUHSR*XWLpUUH] 0HPRULDGH+DFLHQGD%RJRWi (GLWRULDO1XHYD%RJRWi BBBB   +pFWRU -RVp 9DUJDV  0HPRULD GH +DFLHQGD  %RJRWi /LWRJUDItD &RORPELDQD BBBB   &DUORV/OHUDV5HVWUHSR 0HPRULDGH+DFLHQGD%RJRWi,PSUHQWD 1DFLRQDO  &DUORV/OHUDV5HVWUHSR 0HPRULDGH+DFLHQGD%RJRWi,PSUHQWD 1DFLRQDO BBBB &DUORV/OHUDV5HVWUHSR 0HPRULDGH+DFLHQGD%RJRWi,PSUHQWD GHO%DQFRGHOD5HS~EOLFDWRPRV BBBB $OIRQVR$UD~MR 0HPRULDGH+DFLHQGD%RJRWi,PSUHQWDGHO%DQFR GHOD5HS~EOLFD BBBB &DUORV6DQ]GH6DQWDPDUtD 0HPRULDGH+DFLHQGD%RJRWi,PSUHQWD GHO%DQFRGHOD5HS~EOLFD BBBB )UDQFLVFRGH3DXOD3pUH] 0HPRULDGH+DFLHQGD%RJRWi,PSUHQWD GHO%DQFRGHOD5HS~EOLFDWRPRV BBBB 3UR\HFWRVGHOH\SUHVHQWDGRVDO&RQJUHVRGHSRUHOPLQLVWURGH+DFLHQGD \&UpGLWR3~EOLFRGRFWRU)UDQFLVFRGH33pUH]%RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDO  BBBB )UDQFLVFRGH3DXOD3pUH] 0HPRULDGH+DFLHQGD%RJRWi,P SUHQWDGHO%DQFRGHOD5HS~EOLFD BBBB /LTXLGDFLyQGHOSUHVXSXHVWRQDFLRQDOGHUHQWDV\/H\GHDSURSLDFLRQHVSDUD HODxRILVFDOGHORGHHQHURDOGHGLFLHPEUHGH%RJRWi,PSUHQWD 1DFLRQDO BBBB 3UR\HFWRGH/H\RUJiQLFDGHOSUHVXSXHVWR\VXH[SRVLFLyQGHPRWLYRVSUHVHQWDGD DO&RQJUHVRGHSRUHOPLQLVWURGH+DFLHQGD\&UpGLWR3~EOLFRGRFWRU-RVp 0DUtD%HUQDO%RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDO

%LEOLRJUDItD

__

BBBB /LTXLGDFLyQGHOSUHVXSXHVWRQDFLRQDOGHUHQWDV\/H\GHDSURSLDFLRQHVSDUD HODxRILVFDOGHRGHHQHURDGHGLFLHPEUHGH%RJRWi,PSUHQWD 1DFLRQDO BBBB +HUQiQ-DUDPLOOR2FDPSR 0HPRULDGH+DFLHQGD%RJRWi,P SUHQWDGHO%DQFRGHOD5HS~EOLFD BBBB $QWRQLRÉOYDUH]5HVWUHSR 0HPRULD%RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDO  0LQLVWHULRGH5HODFLRQHV([WHULRUHV0HPRULD%RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDO  3UHVLGHQFLDGHOD5HS~EOLFD$OIRQVR/ySH]3XPDUHMR /DSROtWLFDLQWHUQDFLRQDO %RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDO BBBB $OIRQVR/ySH]3XPDUHMR /DSROtWLFDRILFLDO0HQVDMHVFDUWDV\GLVFXUVRV GHOSUHVLGHQWH/ySH]%RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDOWRPR BBBB $OEHUWR /OHUDV &DPDUJR  8Q DxR GH JRELHUQR  %RJRWi ,PSUHQWD1DFLRQDO BBBB 0DULDQR 2VSLQD 3pUH]  /D SROtWLFD GH 8QLyQ 1DFLRQDO (O SURJUDPD %RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDO BBBB 0DULDQR 2VSLQD 3pUH]  &RORPELD \ VX (MpUFLWR %RJRWi ,PSUHQWD 1DFLRQDO BBBB 0DULDQR2VSLQD3pUH] (OJRELHUQRGH8QLyQ1DFLRQDO%RJRWi,PSUHQWD 1DFLRQDO BBBB   0DULDQR2VSLQD3pUH] /DRSRVLFLyQ\HOJRELHUQRGHOGHDEULOGH DOGHDEULOGH%RJRWi,PSUHQWD1DFLRQDO BBBB   0DULDQR 2VSLQD 3pUH]  /D QXHYD HFRQRPtD FRORPELDQD /ODPDPLHQWR DOWUDEDMR\DODFRQFRUGLDQDFLRQDOHV%RJRWi2ILFLQDGH,QIRUPDFLyQ\ 3UHQVDGHOD3UHVLGHQFLDGHOD5HS~EOLFD¢" BBBB   /DXUHDQR*yPH]  8QDxRGHJRELHUQR%RJRWi,PSUHQWD 1DFLRQDO (VWDGRV8QLGRV 8QLWHG6WDWHV&RQJUHVV7KH6WDWXWHVDW/DUJHRIWKH8QLWHG6WDWHVRI$PHULFDWK &RQJUHVV9RO;/,;:DVKLQJWRQ'&86*RYHUQPHQW 3ULQWLQJ2IILFH BBBB 7KH%RJRWi&RQIHUHQFH$6XPPDU\RIWKH3UREOHPVDQG$FFRPSOLVKPHQWVRI WKH1LQWK,QWHUQDWLRQDO&RQIHUHQFHRI$PHULFDQ6WDWHV:DVKLQJWRQ'& 86*RYHUQPHQW3ULQWLQJ2IILFH 8QLWHG6WDWHV'HSDUWPHQWRI&RPPHUFH,QYHVWPHQWLQ&RORPELD:DVKLQJWRQ '&86*RYHUQPHQW3ULQWLQJ2IILFH

__

/$2)(16,9$(035(6$5,$/

8QLWHG 6WDWHV 'HSDUWPHQW RI WKH $UP\ $UHD +DQGERRN IRU &RORPELD :DVKLQJWRQ'&86*RYHUQPHQW3ULQWLQJ2IILFH BBBB $UHD +DQGERRN IRU &RORPELD :DVKLQJWRQ '& 86 *RYHUQPHQW 3ULQWLQJ2IILFH 8QLWHG6WDWHV6HQDWH&RPPLWWHHRQWKH-XGLFLDU\´&RPPXQLVW7KUHDWWRWKH 8QLWHG6WDWHV7KURXJKWKH&DULEEHDQ+HDULQJVEHIRUHWKH6XEFRPPLWWHH WR,QYHVWLJDWHWKH$GPLQLVWUDWLRQRIWKH,QWHUQDO6HFXULW\$FWDQGRWKHU ,QWHUQDO6HFXULW\/DZVRIWKH&RPPLWWHHRQWKH-XGLFLDU\µWK&RQJUHVV $JRVWR BBBB ´QG6HVVLRQRQ7UHDWLHVRI)ULHQGVKLS&RPPHUFHDQG1DYLJDWLRQEHWZHHQ WKH8QLWHG6WDWHVDQG&RORPELD,VUDHO(WKLRSLD,WDO\'HQPDUNDQG *UHHFHµWK&RQJUHVV0D\R:DVKLQJWRQ'&86*RYHUQ PHQW3ULQWLQJ2IILFH ,,, /,%526