Economia de America Latina

ECONOMIA DE AMERICA LATINA: Las economías de Latinoamérica marcan una notoria diversidad en lo que se refiere a las pol

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ECONOMIA DE AMERICA LATINA:

Las economías de Latinoamérica marcan una notoria diversidad en lo que se refiere a las políticas económicas existentes, siendo una región diversa en lo referente a lo político y económico, y así mismo inestable, por el continuo cambio de enfoque en lo que se refiere a políticas monetarias en los países de la región, lo cual ha generado constantes conflictos internos como externos con distintos desenlaces en la historia Latinoamericana. En la actualidad, podemos reconocer 3 tipos de sistemas económicos en Latinoamérica, que si bien pueden mantener contenidos generales y mantener espectros de simbiosis, sus economías siguen una línea predeterminada, en esto reconocemos los netamente capitalistas, economías abiertas, los cuales se basan en el modelo del libre mercado, países como Chile, México, Colombia, Panamá y en menor medida Perú, que siguen los modelos económicos de Estados Unidos y Europa. Por otro lado existen los países que si bien, sostienen una estructura de apertura al mundo, son claramente proteccionistas, modelos más enfocados a la Economía social de mercado o de economías mixtas en diferentes magnitudes, el caso de Argentina, Uruguay, Brasil, Ecuador, Bolivia, Paraguay, Costa Rica, finalmente existen aquellos países que sostienen economías cerradas, o con muy poca relación de libre mercado, manteniendo relaciones económicas con países exclusivos de sus bloques, con clara tendencia al modelo económico marxista, el caso de Cuba y en menor medida Venezuela y Nicaragua que a pesar de sostener modelos económicos semi-cerrados, mantienen relaciones comerciales con las potencias del capitalismo Estados Unidos y Europa.

Las economías de mayor tamaño en Latinoamérica basado en el PIB PPA (poder paridad adquisitivo) están encabezadas por Brasil con 2.393.954 millones de dólares, seguido por México con 1.743.474 millones, Argentina con 756.226 millones y Colombia con 500.576 millones de dólares, mientras que las economías más desarrolladas en términos de PIB per cápita PPA, el líder es Chile con (19.474US$), seguido por Argentina con (18.709US$) y Uruguay con (16.728US$), mientras que los países con mejor IDH según la PNUD ONU en su último informe de índice de desarrollo humano son Chile (0,819), Argentina (0,811) y Uruguay (0,792). El 1 de julio del 2013, el Banco Mundial catalogó a las economías de Chile y Uruguay como economías de ingresos altos, siendo la primera vez en la historia de América Latina donde países de la región comparten ese estatus, el Banco Mundial agrupa a los países en base al PIB per Cápita.

Principales Industrias en américa latina Las características generales de la composición industrial y productiva de las economías exportadoras de latinoamérica son, la extracción de recursos naturales, mayoritariamente las industrias mineras y petrolíferas, manufactura y agrícola. Los países en donde la industria agrícola es el principal son Brasil (20%) siendo el mayor productor mundial de naranja y café verde, Argentina (27%) y Paraguay (55%), mientras que en Uruguay es el ganadero con un (19%) seguido del agrícola con (16%), el único país latinoamericano en donde el sector manufacturero es la principal industria, es en México con un (37%) seguido del petroleo, con respecto a la industria petrolífera esta es la principal en Venezuela con (63%) de sus exportaciones, Ecuador (46%), Colombia (40%) y Bolivia con sus exportación de gas de petróleo con un (37%), los países en donde la industria minera es la principal son Chile (51%) siendo el mayor productor mundial de cobre, litio y yodo, y Perú (58%). En el caso de Panamá y Costa Rica, éstos basan sus economías netamente en el área servicios. Según el Banco Mundial la economía de Latinoamérica a precios de mercado (Paridad de poder adquisitivo), llega a ser la 3.ª más grande y potente a nivel mundial con 6,06 billones de dólares. Está basada mayoritariamente en una economía secundaria y/o terciaria. En los últimos años se han producido grandes avances a nivel político, económico y social, produciendo un desarrollo acelerado en prácticamente todos sus países. La región tiene acceso a créditos menor en comparación con otras regiones (30%), sin embargo, tiene un sistema financiero estable, con bancos relativamente pequeños, pero bien saneados. La economías latinoamericanas de mayor crecimiento al 2012 fueron Panamá con un crecimiento del 10.5%, Perú, Colombia, Chile, Venezuela y Bolivia entre 6,9% a 4,0%. La crisis económica de Estados Unidos y Europa recién golpeó a Latinoamérica a finales de 2008, pues ha habido una disminución del comercio mundial y una disminución de los flujos de capital. La región se contrajo 1.9% en 2009, y

registrará un alza de 4.9% en 2010, siendo una de las regiones de mayor crecimiento en el mundo. Además, varios organismos multilaterales invertirían cerca de $90 000 millones entre 2009 y 2010. Así, el Banco Mundial invertiría $35 600 millones; el BID, $29 500 millones; la Corporación Andina de Fomento, $20 000 millones, el Banco Centroamericano de Integración Económica, $4 200 millones; y el Banco de Desarrollo del Caribe, $500 millones. Los organismos multilaterales financiarán proyectos de infraestructura, programas sociales y créditos comerciales, además de apuntalar la liquidez de los bancos, entre otros usos.

Integración económica:

El mayor acuerdo o bloque comercial de la región es el UNASUR conformado por el Mercosur y el CAN, se intenta la integración económica a nivel continental a través de la Aladi y el SELA. México forma parte del TLCAN con los Estados Unidos y Canadá. Por su parte, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y República Dominicana tienen vigente un tratado de libre comercio con los Estados Unidos (DR-CAFTA), y otros tratados con Canadá y México a través del CARICOM. También Bolivia, Cuba, Nicaragua y Venezuela tienen su propio bloque, llamado en este caso la Alternativa Bolivariana para América Latina y el Caribe. En América del Sur existe un bloque predominante, el Mercosur, integrado por Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay, y Venezuela con Bolivia, Chile, Colombia, Perú, Guyana y Suriname como miembros asociados. En el sur del continente, Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú conforman la Comunidad Andina de Naciones, de la que los países vecinos son miembros asociados y recientemente Chile, Colombia, México yPerú conformaron la Alianza del Pacífico que creara un área de integración profunda entre los países integrantes que buscará conquistar el mercado de asiático. Fuera del ámbito continental, Argentina, Brasil y México son los únicos países de la región que forman parte del Grupo de los 20 (países industrializados y

emergentes); mientras que Chile, México y Perú forman parte de la APEC (Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico). Finalmente, Chile y México son los únicos que forman parte de la OCDE.

Inversión en Latinoamérica

La recepción de inversión extranjera directa (IED) en Latinoamérica marcó una tendencia al alza sobre todo a partir del año 2000. En 2012 la IED entrante según el organismo económico CEPAL fue de 173,361 Millones de dólares,57 58 un verdadero récord, considerando que la inversión extranjera directa entrante entre el año 2000 y el 2006 sumaron tan solo 68,183 Millones de dólares. Las mayores economías receptoras y exportadoras de inversiones continúan siendo lideradas por Brasil seguido por México y Chile, aunque la tendencia es a la desaceleración en las economías de Brasil y México, mostrando una variación negativa de su ingreso de inversiones de hasta un -34,9%, por el contrario Chile muestra una acelerada y creciente captación de inversiones registrando una variación positiva de 32,2% el 2012, situándose como la segunda economía latinoamericana en captación de inversión el 2012, y en la primera economía con más inversiones relativas como porción del PIB y per cápita. Además, la creciente llegada de inversiones foráneas a Latinoamérica no solo se ha capitalizado en las 3 mayores economías receptoras de inversiones Brasil, México, Chile, países como Colombia han logrado a su vez cifras históricas en lo que se refiere a captación de inversiones, por otro lado esta Perú, el cual ha sido el país que más aumento su porcentaje de inversiones, registrando un aumento del 49% con respecto al 2011

Indicadores económicos en Latinoamérica

PIB (PPA) (en US$ millones)

País

PIB (PPA) 201269

PIB (PPA) 201369

% Inflación 201370

Argentina

746.927

776.284

9.660

Bolivia

54.361

56.841

4.688

Brasil

2.365.875

2.492.181

4.937

Chile

319.409

345.765

1.500

Colombia

499.950

528.978

2.843

Costa Rica

58.599

61.934

5.000

Ecuador

134.734

142.160

4.320

El Salvador

45.980

47.525

2.899

Guatemala

78.419

82.009

4.076

Haití

13.132

14.172

5.917

Honduras

37.670

39.531

6.672

México

1.757.580

1.842.558

3.470

Nicaragua

19.894

20.966

8.271

Panamá

55.797

60.758

5.500

Paraguay

40.685

45.762

5.000

Perú

325.434

348.899

2.518

República Dominicana

98.739

104.559

4.750

Uruguay

53.546

56.431

7.613

Venezuela

402.050

420.688

28.850

PIB (PPA) Per cápita País

PIB (PPA) 201271

PIB (PPA) 201371

Argentina

18,205.093

18,800.001

Bolivia

5,016.938

5,236.267

Brasil

12,038.463

12,584.020

Chile

18,354.081

19,455.508

Colombia

10,728.985

11,218.782

Costa Rica

12,558.566

13,128.452

Ecuador

8,841.498

9,190.937

El Salvador

7,734.192

7,939.337

Guatemala

5,191.661

5,296.868

Haití

1,292.119

1,373.862

Honduras

4,593.495

4,721.871

México

15,300.314

15,881.259

Nicaragua

3,336.419

3,459.282

Panamá

15,265.915

16,329.389

Paraguay

6,108.079

6,735.726

Perú

10,679.199

11,274.556

República Dominicana

9,645.233

10,032.645

Uruguay

15,839.538

16,634.565

Venezuela

13,241.771

13,583.95

AMERICA LATINA Y SU AVANCE HACIA LA GLOBALIZACION

4.

Una vez analizadas, aunque de forma sintética, las más relevantes repercusiones del proceso globalizador, trataremos en los próximos apartados de aproximar la inserción de América Latina en la economía globalizada. Es necesario tener en cuenta que en este ámbito, como en otros muchos, existen grandes diferencias entre unos países latinoamericanos y otros, pero por problemas de espacio solo podremos ofrecer una visión de conjunto. 12 La década de los ochenta supuso para América Latina un periodo "perdido": en términos de crecimiento económico, la región presentaba, a finales de este periodo un PIB per cápita menor que en 1980. Los desequilibrios económicos se hacen generales: la inflación llega a los tres y cuatro dígitos, el déficit fiscal se sitúa en el 10% del PIB en la segunda mitad de los ochenta y el desempleo alcanza un promedio anual del 10’5%. En cuanto a su relación con el exterior y su inserción en la economía mundial, la deuda externa alcanzaba límites nunca conocidos (en 1987 supone el 66% del PNB agregado) y la participación en el comercio mundial se redujo a poco más del 3% frente al 6% que presentaba, aproximadamente, al comienzo de la década. En términos sociales, el deterioro se dejaba notar en el descenso de los salarios reales y en el aumento de los niveles de pobreza, superiores en 1990 a los alcanzados a comienzos de los setenta.

Ante la situación de extrema gravedad en la que se encontraba inmersos los distintos países latinoamericanos en los ochenta, se empezaron a aplicar políticas

económicas ortodoxas. A nivel interno éstas se tradujeron en la puesta en marcha de profundas reformas estructurales que afectan principalmente al papel del Estado, y que fueron acompañadas de un mayor rigor en las políticas monetarias practicadas (disciplina que venía siendo exigida por diversos organismos financieros internacionales, fundamentalmente el FMI). A nivel externo, las políticas ortodoxas o neoliberales conllevaron la adopción de medidas encaminadas a la eliminación de las barreras frente al exterior, tanto en materia de comercio como de inversiones.

A raíz de estas medidas, la situación comienza a mejorar en la década de los noventa reduciéndose considerablemente los desequilibrios macroeconómicos: el déficit fiscal se reduce a mejor del 2% a mediados de al década, el crecimiento de los precios al consumidor cae hasta un 12% para la región en su conjunto y se produce una reactivación de al economía en general. De esta forma, los países de la región se embarcaron en un proceso de liberalización económica interna y externa sin precedentes que marcaría el inicio de su inserción en la economía globalizada.

a) En el marco de la citada estrategia de apertura frente al exterior, la liberalización del comercio por parte de los países latinoamericanos no se lleva a cabo hasta los años noventa debido fundamentalmente a la estrategia de crecimiento mirando hacia dentro o de industrialización mediante sustitución de importaciones que en los años setenta siguieron la mayoría de los países de la región. Sin embargo, en esta década se adoptan una serie de medidas en materia de política comercial orientadas al

desmantelamiento progresivo de las barreras al comercio. Como consecuencia de ello, se registra en América Latina una reducción general de los aranceles y la práctica eliminación de las restricciones cuantitativas y las medidas administrativas que frenaban las importaciones. Así, los promedios arancelarios de la región se redujeron desde el 44% de mediados de los ochenta hasta el 13% una década más tarde.

Cuadro nº 1 13 Exportaciones e importaciones en América Latina17 (millones de dólares) 1990 2000 2003 PAIS Exportación Importación Exportación Importación Expo

1990 2000 2003 PAIS Exportación Importación Exportación Importación Exportación Importación Argentina 12.354’0 3.726’0 26.341’0 23.889’1 29.375’4 13.083’4 Bolivia 830’8 775’6 1.246’1 1.610’2 1.573’3 1.502’9 Brasil 31.408’0 20.661’0 55.085’6 55.783’6 73.084’1 48.282’7 Chile 8.372’7 7.089’2 19.210’2 17.091’4 21.046’0 18.030’8 Colombia 7.079’0 5.108’0 13.722’2 11.089’6 13.692’7 13.257’8 Ecuador 2.724’0 1.715’0 5.137’2 3.742’6 6.196’6 6.268’0 México 40.711’0 41.592’0 166.454’8 174.457’8 164.922’2 170.545’8 Paraguay 2.096’2 1.734’8 2.225’8 2.904’0 2.260’5 2.520’7 Perú 3.322’0 2.923’0 6.954’9 7.365’9 8.985’6 8.254’5

Uruguay 1.692’9 1.266’9 2.383’8 3.311’1 2.273’3 2.091’5 Venezuela 17.623’0 6.917’0 33529’0 16.865’0 26.861’0 10.341’0 TOTAL 128.213’6 93.508’5 332.290’6 318.110’3 350.270’7 294.179’1 Fuente: CEPAL, Anuario Estadístico de América Latina y Caribe, 2004.

Este esfuerzo hace que América Latina experimente en la década de los noventa una de las tasas más elevadas de crecimiento del valor de su comercio. De acuerdo con los datos de la CEPAL, entre 1991 y 1999, la tasa promedio del PIB regional fue del 3’2%, mientras que el valor de las exportaciones aumentó en más de un 10% (tasa solo superada por China y unos cuantos países de Asia oriental) y las importaciones crecieron casi en un 12%. De esta forma, y como podemos observar en el cuadro 1, en toda la década las exportaciones crecieron un 159% mientras que las importaciones se incrementan en un 214’6%. Es cierto que los primeros años de la presente década suponen un retroceso en algunos países y un estancamiento en otros, pero en 2003 los valores se recuperan y los flujos comerciales continúan creciendo.

A pesar del buen comportamiento de la región, su participación en el comercio mundial continúa siendo reducida, del 5,2% en las exportaciones mundiales y del 6,2% en las importaciones (porcentajes que son la mitad de la participación que tenía la región en el comercio mundial a finales de la década de los cuarenta).

Por otra parte, es necesario señalar que los datos promedio de la región esconden grandes disparidades. En este caso, las exportaciones de México y Brasil suponen el

56% de las exportaciones totales en 1990, participación que aumenta al 67% en 2003. De ahí que la cifra del aumento de la exportación latinoamericana sería considerablemente más baja si no tuviéramos en cuenta a estos países, los que mejor desempeño tuvieron en este periodo. Además de los ya señalados también cabe destacar la evolución de Argentina y Chile. En cuanto a las importaciones, éstas se encuentran aún más concentradas: en 1990 el 66% de las importaciones totales eran absorbidas por México y Brasil, porcentaje que se sitúa en torno al 74% en 2003.

b) Por lo que se refiere al avance de la globalización financiera en América Latina, cabe destacar el importante incremento en el volumen de los flujos privados 17 Cuando aludimos a América Latina hacemos referencia a los países que pertenecen a la Asociación Latinoamericana de Integración ALADI, no teniendo en consideración por tanto otros países de la región como los del Mercado Común Centroamericano o los países del Caribe. 14 hacia los países de la región en los años noventa. La tasa de crecimiento anual de los flujos de inversión directa extranjera durante esta década ha sido de casi un 17% anual pasando de 15’9 a 66’0 mil millones de dólares y superando con creces las tasas de crecimiento de los intercambios regionales y, por supuesto de la producción.

Esta significativa expansión de la inversión directa extranjera hacia los países latinoamericanos se puede atribuir tanto a factores internos como externos. Entre los factores internos, se sitúa la liberalización de los movimientos de capital, llevada a cabo de forma paralela a la apertura comercial. También contribuyeron en gran medida las

extensas reformas adoptadas por los gobiernos de la región en materia de eliminación de déficit presupuestarios y políticas monetarias más estrictas, entre otras, que consiguieron su propósito de estimular el regreso del capital privado. Por otra parte, el proceso de privatización de empresas públicas convocó a operadores internacionales, y muchos lo señalan como un elemento fundamental a la hora de explicar la IDE de los años noventa en la región.

Entre los factores externos cabe hacer referencia a la liberalización financiera en países desarrollados y países en desarrollo, la creciente integración de los mercados financieros y la también creciente diversificación internacional de los inversores, factores que estimularon el flujo de capitales hacia los denominados mercados emergentes entre los que se encuentra normalmente la región latinoamericana.

Cuadro nº 2 Entradas netas de IED por países (millones de dólares) PAIS 1990-1995* 1996-2000* 2001 2002 2003 2004 Argentina 3.457’2 11.561’1 2.166’1 1.093’0 1.020’4 1.800’0 Bolivia 136’5 780’2 705’8 676’6 166’8 137’0 Brasil 2.229’3 24.823’6 22.457’4 16.590’2 10.143’5 18.165’6 Chile 1.498’7 5.667’0 4.199’8 2.549’9 4.385’4 7.602’8 Colombia 843’3 3.081’1 2.524’9 2.114’5 1.746’2 2.352’0 Ecuador 327’8 692’4 1.329’8 1.275’3 1.554’7 1.200’0 México 6.112’8 12.873’1 27.634’7 15.129’1 11.372’7 16.601’9 Paraguay 99’3 188’0 84’2 9’3 90’8 80’0 Perú 1.093’6 2.000’8 1.144’3 2.155’8 1.377’3 1.392’5

Uruguay 137’5 187’2 271’0 174’6 274’6 230’0 Venezuela 861’0 4.192’2 683’0

782’0 2.659’0 1.144’0 TOTAL 15.936’0 66.046’7 63.201 42.550’3 34.791’4 50.705’8 * promedio anual Fuente: CEPAL “La inversión extranjera en América Latina y Caribe”, varios años

Sin embargo, y como puede observarse en el cuadro anterior, el comportamiento de los flujos de capital hacia América Latina en las últimas dos décadas ha sido muy variable. Así, a la salida neta de capitales sufrida en la década de los ochenta le sigue al espectacular crecimiento de la inversión en la década de los noventa, especialmente entre 1996 y 2000, para después volver a caer a principios del milenio. El año 2001 marca un punto de inflexión en la tendencia ascendente de la IDE en América Latina y en el 2003 ya se había registrado una caída de un 47’3% en relación con el promedio de 15 la segunda mitad de los noventa. Los datos de 2004 muestran una clara recuperación, pero aún no se alcanzan las cifras conseguidas en la década anterior. Por último, cabe señalar que, al igual que sucedía en el caso de la inserción en el comercio internacional, cuando nos referimos a tendencias generales éstas esconden grandes diferencias ya que los resultados distan de ser homogéneos. Así, en la segunda mitad de la década de los noventa, tan solo tres países: Argentina, Brasil y México, absorbían el 74’5% de la IDE con destino América Latina, porcentaje que en el 2004 se mantiene en un nivel similar: el 72’1%.

c) Finalmente, y en materia de globalización tecnológica, caben pocas dudas acerca del relevante papel que desempeñan las tecnologías de la información y la comunicación (TICS) en el proceso de globalización, al que ya hemos aludido. De ahí que el desafío que deben afrontar los países latinoamericanos en su proceso de transición hacia la sociedad de la información y el conocimiento gire en torno a su capacidad para una difusión rápida y eficaz de las TICs en sus economías.

Para contrastar la situación de la región en materia de difusión y expansión de las tecnologías de la información se pueden utilizar varios indicadores, desde líneas telefónicas a ordenadores personales o usuarios de internet.

Según datos de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), la región latinoamericana pasó de tener 64 teléfonos por cada 1000 habitantes en 1990 a 120 en 1999, aunque existen importantes diferencias intrarregionales: entre los países mejor situados y más cercanos al promedio de la OCDE que se sitúa en 660 líneas telefónicas por cada 1000 habitantes se encuentran Uruguay, con un ratio de 270 líneas telefónicas, Costa Rica, con un ratio de 204 y Argentina con un ratio de 201. En el otro extremo se sitúan Haití que no llega a diez líneas por cada 1000 habitantes, o Nicaragua con un 2’98% y Honduras con un 4’42% (Gascó, 200118)

También la demanda de ordenadores personales ha aumentado en los últimos años debido a la disminución de sus precios y el crecimiento económico de la región. Y

con ella, se ha producido un importante crecimiento de la demanda de servicios tales como el acceso a internet, que según datos de la UIT, aumentó con mayor rapidez que en ninguna otra región, multiplicándose el número de usuarios de la red por catorce veces en tan solo una década, desde finales de los ochenta y finales de los noventa.

A pesar de estos datos, la brecha entre América Latina y los países de la OCDE continúa siendo muy elevada, y si la comparamos con otras regiones, destaca el buen comportamiento de los tigres asiáticos como Taiwan o Corea, que superan a toda la región latinoamericana.

5. UNA VALORACIÓN DEL IMPACTO DE LA GLOBALIZACIÓN EN AMERICA LATINA

18 Mila Gascó“América Latina ante la nueva economía” Revista Interforum, 2001) 16 El objeto de este epígrafe es recoger aquellos ámbitos en los que, en nuestra opinión, el proceso de inserción en la economía globalizada llevado a cabo por la región latinoamericana, ha tenido repercusiones más marcadas.

A) INSERCION EN LOS MERCADOS INTERNACIONALES

• Inserción en el comercio internacional

Ya hemos tenido ocasión de comprobar el esfuerzo de la región latinoamericana en materia de liberalización comercial y de inserción en los mercados internacionales, lo

cual ha facilitado entre otras cuestiones, la transferencia de tecnología, el aumento de la competencia y ha contribuido de forma significativa a las mejoras experimentadas en los términos de crecimiento. Sin embargo, la inserción de los países latinoamericanos, su papel en el comercio internacional e incluso la contribución del comercio al crecimiento adolecen de importantes deficiencias. En primer lugar, es cierto que, como resultado de su estrategia liberalizadora, en la región se registra un aumento en la cuota de exportaciones e importaciones en relación al PIB, esto es, la tasa de apertura latinoamericana experimenta una sensible mejoría. Así, la proporción de exportaciones en el PIB que pasa del 12% a principios de la década al 19% al final de la misma. Sin embargo, aún mayor es el aumento registrado por las importaciones que pasan del 10 al 20% del PIB19. La diferencia entre el rendimiento de las exportaciones y de las importaciones ha resultado en déficit comerciales crecientes, que junto con los desembolsos por pagos de la deuda y sus intereses, empeoraron los saldos de la balanza por cuenta corriente. Así, el déficit de la cuenta corriente empeoró gradualmente desde los año 80 pasando de un 0’18% del PIB en 1990 a un 3’2% en 1999 aunque se alcanzaron valores mas altos en 1998 (un 4’5%) en gran medida por el impacto de las crisis financieras. En segundo lugar, el aumento de las importaciones por encima de las exportaciones se debe en gran medida a la composición sectorial de estas últimas, excesivamente concentradas en productos primarios. Este tipo de bienes sigue la tendencia de perder importancia en los mercados internacionales y se enfrenta en

muchos casos a la competencia, frecuentemente subsidiada de los países industriales (Guerra – Borges, 2002)20, de ahí las dificultades de la mayoría de los países latinoamericanos para aumentar sus exportaciones a un ritmo similar al de sus importaciones. Esta situación puede verse alterada gracias a los cambios observados en la composición sectorial de las exportaciones, que registra una tendencia hacia una mayor participación de las manufacturas en las exportaciones latinoamericanas y la correspondiente reducción en la cuota de los productos básicos no procesados. Así, los productos primarios representan más del 66’9% del valor de las exportaciones en 1990 19 También aquí se observan diferencias entre países, por ejemplo, Brasil mostró escasa variación en la cuota de exportaciones mientras que la cuota de importaciones aumento, más del doble pasando de 4% al 10%. En el otro extremo, la cuota mexicana de exportaciones en el PIB aumentó del 15 al 32% mientras la cuota de importaciones subió de un 17% a más del 33%. 20 Alfredo Guerra – Borges “Globalización e integración latinoamericana”. Siglo XXI e Instituto de investigaciones Económicas. 2002 17 y se sitúan en un 44’33% en 2003. Al mismo tiempo, aumenta la participación de los productos manufacturados que pasan del 33’% al 55’7% del total. Sin embargo, las diferencias entre unos países y otros son, también en este campo, muy acentuadas. Como podemos observar en el cuadro 3, destaca, por ejemplo, el comportamiento de las exportaciones mexicanas en las que las manufacturas suponen un 81’4% o la evolución las exportaciones de manufacturas brasileñas que representan algo más de la mitad de sus exportaciones totales. En el otro extremo se sitúan países

como Ecuador, Venezuela o Paraguay cuyas exportaciones continúan muy concentradas en productos primarios, situándose la exportación de manufacturas en torno al 12% del total.

E) LAS DESIGUALDADES Y LA POBREZA América Latina ha realizado importantes progresos en el ámbito social: la brecha del Índice de Desarrollo Humano se ha reducido en un 20% entre 1975 y 1997, lo cual refleja una mejora sustancial de los indicadores sociales. Según datos de la CEPAL, la esperanza de vida ha aumentado de 69 años en 1990 a 71’9 en 2004, el porcentaje de población analfabeta ha disminuido de un 14’9% aun 9’5% en ese mismo periodo y la tasa neta de matrícula en educación primaria se sitúa cada vez más cercana al 100%. Sin embargo, a pesar de los citados avances, la pobreza sigue afectando a un gran porcentaje de la población latinoamericana. Como podemos observar en el siguiente cuadro, la población por debajo de la línea de la pobreza experimenta un importante aumento en la década de los ochenta, considerada como la década perdida, y

pasa de 136 a 200 millones de personas. La tendencia sin embargo se invierte durante la década de los noventa, periodo caracterizado por una reducción prácticamente generalizada de los niveles de pobreza en la región, aunque los buenos resultados iniciales se fueron desvaneciendo paulatinamente hasta llegar en algunos países a revertirse hacia el final del periodo. Así, en 1997 muchos países de América Latina sufrieron importantes retrocesos en materia de pobreza mientras en el resto los índices permanecían estancados. Estancamiento que se prolonga durante los primeros años de la década actual y que solo parece remontar en 2004, registrándose nuevos avances en la materia en la mayoría de los países.