Cuidados Con Pacientes Con Vih

CUIDADOS CON PACIENTES CON VIH – SIDA. EL CUIDADO DE UN ENFERMO DE VIH/SIDA La persona que cuida de un enfermo que padec

Views 142 Downloads 0 File size 47KB

Report DMCA / Copyright

DOWNLOAD FILE

Recommend stories

Citation preview

CUIDADOS CON PACIENTES CON VIH – SIDA. EL CUIDADO DE UN ENFERMO DE VIH/SIDA La persona que cuida de un enfermo que padece de VIH/SIDA puede ser un familiar o, si el enfermo vive solo, un vecino, pariente o amigo. No es fácil cuidar a un enfermo de VIH/SIDA, y quien cultive, prepare, cocine o sirva alimentos al enfermo necesita apoyo. Es una tarea que entraña satisfacer las necesidades del enfermo y mantener un equilibrio entre esas necesidades y las de otros miembros de la familia. Prodigar demasiada ayuda puede traducirse en una protección excesiva y en la pérdida de la dignidad, independencia y autor respeto del enfermo, mientras que una ayuda demasiado limitada tal vez no ofrezca el apoyo que asegura que el enfermo come adecuadamente y tiene las energías suficientes para resistir a la infección. RECOMENDACIONES PARA LAS PERSONAS QUE CUIDAN A LOS ENFERMOS DE VIH - SIDA - Dedique tiempo a asistir al enfermo de VIH/SIDA. Hable con él de los alimentos que necesita para mantener su peso corporal y engordar y manejar su enfermedad. Logre conocer qué alimentos le gustan o no le gustan. Hágale participar en la planificación de sus comidas. - Vigile el peso corporal del enfermo. En lo posible, pese al enfermo con regularidad y lleve un registro de su peso. Esté atento al observar que el enfermo adelgaza improvisamente, y en tal caso tome las medidas pertinentes. - Compruebe cuáles son los medicamentos que está tomando el enfermo. Lea las indicaciones para averiguar cuándo tiene que tomarlos, qué alimentos tiene que evitar y los posibles efectos secundarios. - Sea alentador y amable. Si el enfermo desea comer los alimentos que prefiere en cualquier momento del día, procúreselos. Puede de pronto dejar de gustarle un alimento, rechazar lo que se le ha preparado y desear un alimento diferente. No se trata de caprichos. Estos cambios de preferencias repentinos son una consecuencia de la enfermedad. - Manténgase firme acerca de la importancia de comer y estimule al enfermo a comer frecuentemente, pero no le fuerce. Ofrecerle demasiado alimento a la vez puede provocarle rechazo. - Si la persona está demasiado enferma para levantarse de la cama, asegúrese de que tenga de beber y un refrigerio al alcance de la mano. - Manténgase vigilante. Eche una ojeada por la casa para ver si está limpia, que no haya carencias de higiene y que haya suficientes alimentos.

- Si el enfermo vive solo, usted puede invitarlo a comer con su familia. Anime a otras personas de la comunidad a que visiten al enfermo, y propóngales salir en conjunto. Las personas que se encargan del cuidado del enfermo tienen sus propias preocupaciones y problemas, sus temores por el futuro, por sus familias y por su propia salud. Es importante que se ocupen de sí mismos, descansen lo suficiente y tengan la debida información y apoyo para desempeñar su difícil tarea. Nunca se insistirá bastante en los mensajes fundamentales que se dan a continuación. - El VIH/SIDA no se propaga a través de los alimentos o el agua. - El VIH/SIDA no se propaga tocando a otra persona, abrazándola, dándole la mano o tocándola normalmente. No es necesario evitar el contacto corporal con una persona que padece de VIH/SIDA. RIESGO OCUPACIONAL Los trabajadores del sector sanitario, como las enfermeras, corren el riesgo de infectarse si se pinchan con una aguja que contenga sangre infectada o se salpican con sangre infectada en los ojos, nariz, boca o en un corte o herida abierta. En algunos casos ha contraído la infección una persona que vivía con alguien infectado con VIH o que cuidaba de alguien con sida. Estas infecciones podrían haber sido causadas al compartir una hoja de afeitar, cuando la sangre de la persona infectada ha entrado en contacto con un corte o herida, o cuando se ha estado expuesto a la sangre de la persona infectada de alguna otra manera. Si usted está cuidando de una persona infectada con VIH, siga cuidadosamente los pasos que se describen más adelante para protegerse de la infección. CÓMO NO SE PROPAGA EL VIH El VIH no se propaga a través del aire, alimentos, agua, insectos, animales, platos, cuchillos, tenedores, cucharas, asientos de inodoros, o cualquier otra cosa además de la sangre, semen, fluido vaginal o leche materna. El VIH no se contrae de las heces, fluido nasal, saliva, sudor, lágrimas, orina o vómito, a menos que tengan sangre mezclada en ellos. Usted puede ayudar a las personas con VIH a comer, vestirse e incluso bañarse sin contraer la infección, siempre que usted siga los pasos descritos a continuación en la sección “Cómo protegerse” de este folleto. Sí se puede adquirir otros gérmenes a partir del contacto con muchas de las sustancias enumeradas anteriormente, así que utilice su sentido común.

PRECAUCIONES DURANTE EL ACTO DE ATENCIÓN DE LAS PERSONAS CON VIH/SIDA. Desde una perspectiva de salud ocupacional y bioseguridad, las medidas que se enuncian en este capítulo, no difieren bajo ninguna circunstancia de las precauciones comunes que deben tomarse durante la atención de una persona que se presuma VIH negativa, que acuda a recibir atención odontológica o de cualquier otra especialidad médica. Las precauciones están dirigidas a los trabajadores de la salud, dentro de los cuales se contemplan: médicos, odontólogos, enfermeros, higienistas y asistentes dentales, equipos de emergencia, empleados administrativos, personal de limpieza, estudiantes, guardias de seguridad y personal voluntario. Las medidas cautelares de protección, se agrupan en dos conjuntos a saber: A. MATERIALES INFECCIOSOS: a.1. Tejidos y fluidos corporales. a.2. Material y equipo médico utilizado en un paciente infectado. a.3. Superficies y ambientes contaminados. B. RUTAS DE TRANSMISIÓN: b.1 Contacto directo; como entre la piel y la mucosa del paciente con infección. b.2 Contacto indirecto; como el contacto mucosa-superficie contaminada. b.3 Contacto por aerosoles y fluidos en suspensión; como por inhalación de gotitas de un paciente con infección, esta vía no está restringida a la vía respiratoria. b.4 Transmisión aérea, como por ejemplo por aire contaminado. b.5 Transmisión por equipo médico. MEDIDAS SANITARIAS PREVENTIVAS, OBLIGATORIAS PARA EL PERSONAL DE SALUD 1. Utilizar barreras protectoras para evitar el contacto con sangre y otros fluidos humanos contaminados. 2. Emplear instrumental y procedimientos apropiados. 3. Aplicar procedimientos de descontaminación previos al transporte de instrumentos y equipos a las áreas de esterilización. 4. Mantener el esquema de inmunizaciones al día.

5. Normas de higiene personal, Salud Ocupacional y Saneamiento Básico, aplicadas de forma estricta. BARRERAS PROTECTORAS PARA EL PERSONAL DE SALUD 1. Guantes de látex, nitrilo o guantes sin látex para personas alérgicas. En este punto el personal puede contemplar, según el caso por tratar, el uso de doble guante. 2. Protectores oculares (anteojos neutros de seguridad, visores, máscaras de protección facial). 3. Mascarilla (cubre bocas). 4. Ropa de trabajo (gabachas, ropa quirúrgica, bata), desechables o de tela. 5. Aislamiento del espacio en el que se va a realizar un procedimiento clínico, por medio de la utilización de campos quirúrgicos. 6. Aplicación de cobertores para las mangueras, accesorios, piezas de mano, taladros, piezas de mano de foto curado, unidades ultrasónicas y la propia unidad dental. 7. Protectores para manijas, agarraderas y todos los accesorios que se van a utilizar. 8. Aislamiento del campo operatorio mediante dique de goma. Esta medida es opcional dependiendo el procedimiento que deba realizar. Se sugiere para los procedimientos relacionados con operatoria dental y endodoncia. 9. Succión de alto poder, con unidades que garanticen la bioseguridad del ambiente de trabajo.