Consejos Desde El Frente

1 La misión de Editorial Vida es proporcionar los recursos necesarios a fin de alcanzar a las personas para Jesucristo

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La misión de Editorial Vida es proporcionar los recursos necesarios a fin de alcanzar a las personas para Jesucristo y ayudarlas a crecer en su fe. CONSEJOS DESDE EL FRENTE Edición en español publicada por Editorial Vida -2008 Miami, Florida © 2008 p or Luc as Le ys

Edición: Carlos Peña Diseño interior y de cubierta: Matías Deluca RESERVADOS TODOS LOS DERECHOS. A MENOS QUE SE INDIQUE LO

CONTRARIO, EL TEXTO BÍBLICO SE TOMÓ DE LA SANTA BIBLIA NUEVA VERSIÓN

INTERNACIONAL. © 1999 POR SOCIEDAD BÍBLICA INTERNACIONAL. ISBN 978- 0-8297- 5291-5 CATEGORÍA: Ministerio cristiano / Juventud IMPRESO EN ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA

PRINTED IN THE UNITED STATES OF AMERICA

08 09 10 11 O 6 5 4 3 2 1

INTRODUCCIÓN La clave secreta: sigue aprendiendo por Lucas Leys ...............................................................13

CAPÍTULO DOS Define los innegociables del ministerio juvenil por Jeffrey De León........................................................23

CAPÍTULO TRES Ama a tus jóvenes aun cuando no lo «sientas» por Jay Arisso .................................................................31

CAPÍTULO CUATRO Coloca en equilibrio todos los aspectos de tu vida por Russ Cline ................................................................35 CAPÍTULO CINCO Misión ineludible: aprende a trabajar en equipo por Paolo Lacota ............................................................41

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CAPÍTULO UNO Dale un chispazo a tu creatividad por Howard Andruejol .................................................17

CAPÍTULO SEIS Ten clara tu misión y publicítala con trompetas por Lucas Leys ...............................................................47

CAPÍTULO SIETE Mantén el equilibrio entre cuestionar y obedecer por Ricardo Brown ........................................................55

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CAPÍTULO OCHO Confronta los conflictos por Germán Ortiz ..........................................................59 CAPÍTULO NUEVE Aprende a leer la cultura por Félix Ortiz ................................................................63 CAPÍTULO DIEZ Tu pareja tiene todo que ver con tus resultados por Annette Gulick ........................................................69

CAPÍTULO ONCE Como vives y lo que dices es el mejor ejemplo por Junior Zapata...........................................................75

CAPÍTULO DOCE Siempre considera la oportunidad de los medios por Camilo García..........................................................81

CAPÍTULO TRECE Saca provecho de las misiones por Cameron Graham ...................................................87

CAPÍTULO CATORCE Especial para mujeres (y hombres que quieren entenderlas mejor) por Gloria Vázquez .......................................................93

CAPÍTULO QUINCE Nunca descuides a tu familia por Lisa Brown.............................................................101 CAPÍTULO DIECISÉIS No olvides a los jóvenes en riesgo por Joel Van Dyke ........................................................109

CAPÍTULO DIECIOCHO Usa el humor y crea diversión por Eliezer Ronda ........................................................123 CAPÍTULO DIECINUEVE Persevera y delega por Aarón Arnold ........................................................129

BANCO DE RECURSOS .........................................135

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CAPÍTULO DIECISIETE Redime las críticas por Esteban Obando ....................................................117

13 L o s b u e n os l í d e re s no s on personas que ti enen todas las respuestas sino buenos instrumentos que se es f u e r z a n p o r re s p on d e r adecuadamente.

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ay una clave secreta que siempre se repite en los líderes eficaces, un denominador común que salta a la luz en la vida de quienes dejan una marca positiva con su liderazgo. Se trata de una virtud que muchos pierden de vista al pretender los resultados de quienes se destacan por encima de los demás a largo plazo. Es nada más y nada menos que permanecer aprendiendo y nunca saciarnos de investigar, buscar repuestas, seguir los mejores consejos de quienes han caminado delante de nosotros y crecer: esto es sin dudas una clave para alcanzar nuestro máximo potencial. Por eso es bueno que tengas este libro en tus manos. Quienes crean que ya saben todo acerca del ministerio juvenil porque tienen un grupo aparentemente exitoso a su cargo están tomando una decisión inconciente que sin duda los perjudicará. Los «sabelotodos» nunca son las personas favoritas de nadie, y más cuando se trata de líderes. Los buenos líderes no son personas que tienen todas las respuestas sino buenos instrumentos que se esfuerzan por responder adecuadamente. Hay una diferencia. Hoy vivimos en un tiempo de la historia donde la vorágine de cambios es tan acelerada que es imposible mantenerse actualizado sin tomar una decisión consciente de que debemos hacerlo. Por eso creo que es clave para ser un líder eficaz mantenerse al día y actualizado, sin dejar de estudiar, aprender, buscar y crecer. Lo que ayer nos sirvió puede fracasar mañana. Por otra parte, lo que también a muchos les sucede es que quieren ser efectivos sin esforzarse. En un tiempo de atajos es una tendencia normal o usual, pero no por ser así es el camino aconsejable. Hace unos años

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se me acercó un joven que sin pestañar me dijo que quería que orara por él para transferirle la «unción del escritor». Cuando escuché eso, lo miré confundido, así que me explicó: «Sé que has escrito más de quince libros que se venden por todo el continente, así que no tengo a nadie cerca mejor como para que me trasfiera esa unción». Instantáneamente me dio ganas de «imponerle… pero mis pies». ¿Qué unción del escritor?, pensé. Es verdad, he tenido el privilegio de escribir algunos libros, pero todo es por regalo de Dios. Para hacerlo, he tenido que leer muchísimos más libros que los que he podido escribir, estudiar cosas que no me gustaban, investigar por largas horas y pasar varias noches sin dormir para lograr los resultados que ahora mucha gente puede leer. De hecho, mientras escribo esto, es bien de madrugada y me gustaría estar durmiendo en mi cama con mi novia… Sí, con la que estoy casado hace ya varios años. Bueno, volviendo al tema, decía que muchos quieren atajos, que sus resultados tengan éxito sin dedicarse a aprender los secretos de fondo que producen eso que tanto desean. Hace tiempo un viejo poeta escribió: «Lo que el árbol tiene de florido, vive de lo que tiene sepultado»; y esa es una muy buena imagen de lo que quiero comunicarte en este primer capítulo. De modo que si deseas ser la clase de líder que alcanza su potencial, debes hacer un compromiso por seguir aprendiendo: mirar con cuidado la experiencia de otros que te precedieron y no hacer las cosas por costumbre o según tu propia experiencia sino investigar y evaluar distintas opciones a la hora de tomar decisiones. Y nunca conformarte.

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CONSEJOS DESDE EL FRENTE Por favor, imagínate ahora en una guerra como la que parecieran tener algunos ministerios. Allí tienes que avanzar pero no sabes dónde se esconde el enemigo. De repente, llega un soldado corriendo por las barracas y trae consigo algo enrollado. Después de recuperar el aire, te muestra lo que tiene. Es un mapa donde otros soldados y hasta generales que han pasado por ese sitio en el que te encuentras han dejado varias anotaciones de adónde encontrar al enemigo y cómo esquivarlo ¡Sensacional!, ¿verdad? Bueno, pues algo así es este libro. Diecinueve veteranos del ministerio juvenil te compartirán consejos que inician de sus experiencias positivas… y de las otras. Consejos desde el frente de batalla que tienen el propósito de ayudarte a esquivar problemas y dificultades. Si le prestas correcta atención a esto que te enseñaremos, los podrás evitar. A mí me hubiera ayudado muchísimo contar con un manual de consejos como este. Muchos errores que he cometido en el ministerio no han sido por mala intención o por poca capacidad sino por ignorancia o falta de modelos visibles. Así que adelante con la lectura de este ejemplar que está en tus manos. Presta atención a lo que dice y lo que no dice, pero que aparece escondido entre líneas. Finalmente, es nuestra oración que puedas ser mucho mejor líder que nosotros, pues esta generación lo necesita.

17 Aprovecha el conocimiento, las ideas, l as l ocuras de los demás lí deres , de los jóvenes, d e o t ro s a d u l t o s p a r a formul ar u na nu eva propu es ta creativa.

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on solo siete notas. Cada instrumento ejecuta las mismas siete. Sin embargo, la combinación armoniosa de las mismas, las pequeñas variaciones en acordes, escalas y tonalidades dan rienda suelta a la imaginación. Tan solamente con siete notas es posible componer una cantidad inimaginable de melodías, de canciones; una hermosa expresión de la creatividad musical. Confieso que no tengo la mente de un músico (nunca he escrito una canción, y con dificultad interpreto las que ya existen); quizá por eso los admiro más. Los músicos me inspiran, me desafían, me retan a ser creativo, a encontrar lo nuevo, a usar lo existente para llegar a lo no conocido, a disfrutar el proceso, a fallar en el intento, a no conformarme y a ser original. El ministerio juvenil es un campo como el de la música: demanda creatividad. Cada programa, cada lección, cada proyecto quiere empujar mis límites para encontrar una idea creativa. Tan solo una, una buena idea más y sobreviviré el momento (hasta que llegue el desafío de la siguiente semana). Quiero ser creativo. ¡Tengo que serlo! Para muchos de nosotros pensar en ser creativos puede volverse más un dolor de cabeza que una bendición. La presión que existe (de hecho, en este instante me siento así porque necesito la creatividad suficiente para escribir) tal vez nos lleva inevitablemente al desánimo y la derrota. «¿Creativo yo? No, eso es para genios, para otros, no para mí». A través de los años como líder juvenil he aprendido a ser creativo (en una forma creativa). He llegado al convencimiento de que todos (me incluyo, te incluyo) tenemos la capacidad de ser exitosamente creativos. Es

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posible disfrutar el proceso; es factible encontrar esa idea «wow». Está a nuestro alcance. Es parte de nuestra naturaleza (de hecho, de la naturaleza de Dios, que nos creó a su imagen). Lo que hace falta es un leve cambio de paradigmas que nos facilite el camino hacia las ideas creativas. Ahora bien, quiero sugerirte siete postulados que desafiarán tu manera de pensar y estimularán tus ideas para encontrar la próxima idea genial que necesitas en el ministerio juvenil. La creatividad es pensar en algo que nadie se le ha ocurrido hasta ahora. ¿Por qué nos parece que algunas personas son genios increíbles o fuera de esta galaxia? Bueno, porque tienen ideas que a nosotros no se nos habían ocurrido (y porque parece que les resulta muy sencillo encontrarlas). Con un poco de esfuerzo, de tiempo para pensar estoy seguro que encontraremos ideas para enseñar esa lección, para realizar aquella actividad que a nadie más se le había ocurrido (y que esperamos funcionen). En otras palabras, creatividad es llegar a algo nuevo a partir de lo que ya existe. Si solo hay una forma de hacer las cosas, seguro que es la equivocada. Para obligarme a encontrar esa idea creativa (que a nadie se le había ocurrido), tengo que torturar mi conformismo y no dejarme en paz hasta que encuentre otra forma de hacer las cosas (aunque la forma actual dé buenos resultados). Por otra parte, la rutina, lo metódico, lo repetitivo puede matar tu creatividad. Si has estado dirigiendo las actividades de grupo de la misma forma por un buen tiempo, tendrás que pensar en al menos diez maneras distintas en que aquello pudiera hacerse (está bien… quizás no

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fue prudente pedirte diez… ¿entonces qué tal veinte?) ¡Claro que existe otra manera, y no me rendiré hasta que la encuentre! Dos o más cabezas piensan mejor que una. El ministerio siempre es un trabajo en equipo, y pensar en cómo desarrollarlo es proyecto de muchos. En este sentido, aprovecha el conocimiento, las ideas, las locuras de los demás líderes, de los jóvenes, de otros adultos para formular una nueva propuesta creativa (ya sea para dar una clase, para organizar un evento, etc.) Invita a otros a que se unan contigo para llegar a más ideas. Lanza las preguntas («¿Qué harían ustedes para…?», «¿Cómo podría ser diferente la manera de…?») y prepárate para escuchar y tomar notas. Déjalos hablar, incluso cuando parezca que dicen meras tonterías (una «estupidez» puede despertar el genio que hay en ti). El que anda entre gente creativa, algo se le pega. Así que procura pasar tiempo con personas que respetes por su habilidad para encontrar nuevas ideas. Personalmente, intento reunirme de vez en cuando con amigos que trabajan en ese campo. Algunos trabajan en publicidad, diseño gráfico, otros son escritores, comediantes (no profesionales sino con el don de contar chistes) y por supuesto, algunos son líderes juveniles. Aparte de eso, busco lecturas que puedan desafiar mis ideas. Me gusta leer libros de autores que escriben con un estilo diferente (Tom Peters es uno de mis favoritos). Entonces, si pasas tiempo con gente creativa, ellos serán una buena influencia para ti. Conoce, compara y adapta. Cuando veas una idea creativa fuera de tu ministerio juvenil (incluso en otros campos no relacionados con la iglesia), trata de saber por qué es una buena idea. Si logras descubrir esa esen-

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cia, podrás pensar en algo similar para tu grupo juvenil. Ahora bien, no te sugiero pensar en algo idéntico, porque tus jóvenes son únicos; pero que los conozcas te ayudará para saber cómo esta nueva idea, con ciertas modificaciones, podría generar el resultado esperado. Además, no se trata siempre de ser creativos sino de lograr el propósito. Por eso, si pensaste que con encontrar una nueva idea creativa y aplicar un par de consejos ya puedes ser un buen líder juvenil, es el momento de pedirte que dejes este libro para después y leas El ministerio juvenil efectivo de Lucas Leys. El ministerio no se trata de ti (y menos de tus ideas geniales) sino de los jóvenes (de llevarlos a la madurez). Es posible ser un genio creativo y no lograr que nuestros chicos sean edificados. Más bien, puesto que queremos que lleguen a ser todo lo que Dios desea que lleguen a ser, busquemos las mejores ideas, estrategias, alternativas, proyectos, actividades, certámenes, lecciones que logren este propósito. Piensa primero en objetivos y luego en creatividad. Esta última puede ser espontánea, pero generalmente funciona mejor cuando es planificada. Es más, tengo la impresión que después de leer los principios anteriores, este último se caerá por su propio peso. Entonces, así como harías un mejor trabajo en una disciplina deportiva si tomas el tiempo para entrenar y prepararte físicamente, lograrás mejores resultados en el campo de la creatividad si dedicas tiempo para pensar. Por lo menos yo, cada vez que debo predicar u organizar un certamen, me beneficio mucho de tener un cuaderno donde pueda consultar y tomar anotaciones, y de leer una y otra vez las ideas que van surgiendo (trato de hacer esto durante varios días). Finalmente, cuando

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llega el momento preciso, tengo un buen panorama del rumbo que debo tomar, además de un generoso cúmulo de ideas «peligrosas».

Nos agradaría recibir noticias suyas. Por favor, envíe sus comentarios sobre este libro a la dirección que aparece a continuación. Muchas gracias.

Editorial Vida 8410 NW 53rd Terrace, Suite 103 Miami, FL 33166 www.editorialvida.com