Comentario Critico Sobre La Pelicula Philadelphia

COMENTARIO CRITICO SOBRE LA PELICULA PHILADELPHIA PRESENTADO POR: ANDRES BLANCO SAMUEL MEZA PROFESORA: GLENIS DURAN

Views 160 Downloads 11 File size 39KB

Report DMCA / Copyright

DOWNLOAD FILE

Recommend stories

Citation preview

COMENTARIO CRITICO SOBRE LA PELICULA PHILADELPHIA

PRESENTADO POR:

ANDRES BLANCO SAMUEL MEZA

PROFESORA: GLENIS DURAN

GRUPO 31

UNIVERSIDAD DEL MADGALENA FACULTAD DE CIENCIAS EMPRESARIALES Y ECONOMICAS SANTA MARTA, MAGDALENA 2019

Philadelphia es una representación de la realidad desde el punto de vista del creador de la cinta, recoge los problemas sociales de la actualidad exponiéndolos al público no sólo para su mero conocimiento, sino, como en este caso, para reflexionar sobre ellos, mirarnos en el espejo de nuestra conciencia y ver cómo actuamos ante lo inquietante. Del cual abrió caminos hacia una sociedad más tolerante y sobre todo fue una clase magistral en súper masa sobre sida. Nace de una historia verídica en la cual se basa, pero no es real eso es algo que hay que enfatizar porque muchos creen que Andrew Beckett existió. Existió un caso similar de abogado contra su bufete, pero todo el entorno que rodea al protagonista es ficción, aunque hoy en día ser amigo-gay es algo muy normal en los 90 aún no era así y mucho menos la aceptación del sida dentro de las familias como se muestra en la película, en aquellos años era sinónimo de exilio familiar, social y laboral. Si bien Philadelphia es una película de muchísima importancia para el entendimiento no solo del sida sino de aceptación a los gays, creo personalmente que abrió caminos hacia la tolerancia y el respeto hacia cualquier condición sexual y social. Fue un gran manual de los contagios de la enfermedad y eso hizo que la masa ignorante saliera de las salas de cine con un poco de respiro y tener una aptitud más conciliadora hacia los portadores. En la película se pueden observar sin tapujos los prejuicios y el rechazo de la gente hacia las personas infectadas por el VIH, especialmente hacia las homosexuales. Se refleja claramente la poca simpatía de la que gozaban los homosexuales entre la mayor parte de la sociedad del momento, y el hecho de que la infección VIH se extendiera de forma más rápida y patente entre ellos, contribuyó a marginar aún más a estos dos colectivos. La evolución de la enfermedad y su tratamiento se muestran bastante fielmente de acuerdo a la realidad del SIDA en ese momento. Sin embargo tanto realismo, y esto es un criterio muy personal, esta maquillado de una forma muy sutil por el cuento de hadas que acompaña al enfermo, esa actitud positiva de bandera frente al marido enfermo por una infidelidad, la familia y ese baile de disfraces, la parte opera de María Callas, el funeral fiesta final, todas parte de ideas preconcebidas por los heteros de ese entonces porque en los 90s cuando decías en casa que eras gay te echaban a la calle o te ibas de psicólogo, no era tan sencillo y la mayoría de abogados gays estaban casados con hijos y se paseaban al final de las tardes por los pasillos de las metrópolis, esa parte si se ve reflejada en la película porque fue así como se contagió Beckett. La película resalta la Ignorancia, lo poco que la gente conoce de la enfermedad, el ejemplo más claro es la escena en la que Hank acude al abogado; además (por supuesto) de los prejuicios y la discriminación. Es muy buena para ser la primera producción estadounidense en tratar este tema y tiene unos diálogos brillantes e inteligentes en los juzgados. Esta es una de esas películas que conmueven. La historia es apasionante, una lucha constante por conseguir ser libre. Se llega a tener un nivel muy alto de tensión por la desesperación que vive el protagonista ante un mundo homofóbico , en el que la libertad no tiene espacio. En cierta forma es una crítica al país de la libertad, donde no se reconoce la libertad a ser libre, por el simple hecho de vestir diferente, creer en cosas diferentes o, simplemente, tener una condición sexual diferente. El principal problema que presenta la película a analizar, es la falta imparcialidad, característica que deben tener quienes ejercen y participan de la justicia; jueces, abogados, jurado y testigos. Los prejuicios personales no pueden influir en las decisiones de estas personas en razón de un

asunto dudoso. La mayor complicación en esta materia, es que los actores del sistema judicial son personas, con bagajes culturales y pensamientos propios, de los que muchas veces es difícil deshacerse. Es por esta razón que el sistema no es seguro, pero de todas formas es necesario buscar el más alto nivel de imparcialidad posible, para que las decisiones sean efectivamente apegadas al Derecho, y no a recelos personales. Esto nos enfrenta a una realidad respecto a la justicia que a veces no nos gusta ver: existe parcialidad, los operadores del sistema son personas, y como tales, tienen prejuicios. El Derecho está influenciado, además, por una serie de concepciones, filosóficas, históricas, incluso religiosas, y también políticas, por lo que no es absolutamente neutro. Es por esto que es tan difícil alcanzar la total imparcialidad. Sin embargo, esa es la meta y la guía que debe primar en el desarrollo de la justicia, tanto a nivel de legislación como a nivel práctico. Es por esto que es de crucial importancia que exista normativa que permita resguardar cierto nivel de imparcialidad (el más alto posible), así como normas de carácter ético, como nuestro Código de Ética Profesional, y cursos sobre ética profesional, que permitan enseñar la forma de abordar casos complejos desde el punto de vista moral, y den directrices para solucionarlos de la mejor forma posible. Porque, al fin y al cabo, la justicia debe ser para todos, y para todos igual, o al menos ese es el ideal que se espera alcanzar.