Ciencia Ficcion: una historia del género a través de sus mejores películas

CIENCIA-FICCIÓN 1 Moreno, Horacio Ciencia ficción : una historia del género a través de sus mejores películas . - 1a

Views 30 Downloads 0 File size 20MB

Report DMCA / Copyright

DOWNLOAD FILE

Recommend stories

Citation preview

CIENCIA-FICCIÓN

1

Moreno, Horacio Ciencia ficción : una historia del género a través de sus mejores películas . - 1a ed. - Buenos Aires : IMAGINE, 2010. 400 p. + DVD : il. ; 28x20 cm. ISBN 978-987-1482-28-3 1. Historia de la Ciencia Ficción. I. Título CDD 791.446 15

CIENCIA-FICCIÓN una historia del género a través de sus mejores películas Texto original de Horacio Moreno 1ª edición: mayo 2010 © 2010, Imagine Entertainment S.A. Av. Callao 660 - Ciudad Autónoma de Buenos Aires Tel: 4812-8119. E-mail: [email protected] © 2010, Horacio Moreno

2

CIENCIA-FICCIÓN

Todas las fotografías e imágenes utilizadas en la presente obra provienen de colecciones privadas y bibliotecas de imágenes, y han sido utilizadas con el único fin de promocionar y reseñar películas, libros, actores, directores y demás artículos que ilustran, con un estricto objetivo periodístico. No han sido reproducidas con fines publicitarios, ni para crear la apariencia de alguna publicación o producto licenciado por sus respectivos propietarios. Reservados todos los derechos. Queda rigurosamente prohibida, sin autorización escrita de los titulares del copyright, bajo las sanciones establecidas por las leyes, la reproducción total o parcial de esta obra por cualquier medio o procedimiento, comprendidos la reprografía y el tratamiento informático. Ciencia-Ficción - una historia del género a través de sus mejores películas® es una publicación de Imagine Entertainment S.A., Av. Callao 660, Capital Federal. 4812-8119. E-mail: [email protected]. Web: www.cinecf.com.ar. Derechos reservados. ISBN: 978-987-148228-3. Director: Oscar Domingo Perticaro. Editor responsable: Rabeno Saragusti. Arte y diseño integral: Samizdat Ediciones (Horacio Moreno, Claudia Franco). Distribuidor en Capital: Vaccaro Sánchez y Cía. S.A. Distribuidor en interior: Distribuidora Bertrán S.A. Taller impresor: Gráfica Morello S.A.

horacio moreno

CIENCIA-FICCIÓN

IMAGINE ENTERTAINMENT

3

CIENCIA-FICCIÓN

4

A la izquierda, imágenes de The Thing from Another World, un film arquetípico de la ciencia-ficción de los años ‘50.

A MODO DE

INTRODUCCIÓN

La primera intención de este libro es ofrecer un atisbo de los títulos más importantes que forman parte de ese universo que denominamos «cine de ciencia-ficción», deteniéndonos particularmente en aquellos trabajos que definen una época y en los que el diálogo con el ambiente que les dio condiciones de posibilidad ofrece una riqueza más amplia, permitiendo reforzar el concepto que indica que el género es una especie de realismo hipotético –ampliaremos en el siguiente capítulo el tema de las definiciones de la ciencia-ficción–, cuyo punto de partida es el contexto que comparten tanto el autor (director, guionista) como el receptor (público) de una determinada película. En nuestra opinión, sólo la comprensión de ese ambiente común permite acceder a las claves menos evidentes de un trabajo de ciencia-ficción, a la vez que enriquece la tarea de interpretarlo y valorarlo como un todo. Dicho lo anterior, cabe aclarar que las definiciones no deben funcionar como un criterio restrictivo y absoluto, porque esa metodología implicaría encerrarse en una construcción ontológica que poco tiene que ver con, en este caso, la realidad del objeto de estudio, es decir, el cine de ciencia-ficción. Potencialmente, una herramienta importante para poder describir el segmento es todo aquello que se ha escrito sobre la algunos estudiosos han utilizado a la literatura como una especie de antagonista a partir del cual, por oposición, se puede determinar qué es y qué no es cine de ciencia-ficción. Según el especialista John Baxter, citado por Vivian Sobchack en su libro Screening Space: The American Science Fiction Film1, entre literatura 1 Sobchack, Vivian.- Screening Space: The American Science Fiction Film.- New Brunswick: Rutgers University Press, 1987. Pág. 20 y ss.

CIENCIA-FICCIÓN

literatura del género, más si se tiene en cuenta que

5

A la izquierda, cuatro imágenes de Destination Moon, incluyendo una con la presencia de Robert Heinlein en el set de rodaje.

y cine de género hay un «contacto tangencial, una genuina coincidencia de punto de vista extremadamente poco común.» De acuerdo con este estudioso, los fundamentos del cine de CF están en la superstición, el terror y el miedo a la ciencia, mientras que la literatura expresa la perspectiva optimista respecto de estos tópicos. Sobre la frase que define uno de los aspectos del género («hay cosas que él hombre no debe conocer»), Baxter construye una teoría llamada a devenir en paradigma porque «expresa el miedo que todos los hombres tienen a lo inexplicable y lo desconocido, un temor que la ciencia-ficción rechaza pero que está firmemente imbricado en el cine de ciencia-ficción.» Si uno profundiza un poco más entre el enorme caudal de producciones del género, muy rápidamente puede inferir que ni todas las obras literarias de CF son a favor de la ciencia, ni todo el cine del género se expresa en contra de la misma. Basta con citar a dos de las películas seminales de la CF cinematográfica, Destination Moon (Destino la Luna, 1950) y The Thing from Another World (La cosa, 1951), que parecen describir los límites del género –y, gracias a ello, captaron en su época la atención de los críticos– y revelan, de

6

literatura como en el celuloide. Como veremos en el

CIENCIA-FICCIÓN

paso, la dualidad de opiniones presentes tanto en la desarrollo de este libro, el mejor cine de CF se desarrollará manteniendo esa actitud bipolar hacia ítems tales como la ciencia, la lógica y el orden, y la aplicación de la tecnología, en la literatura y en el cine, serán bastante diferentes. Otro de los mitos que circulan habitualmente en el medio, señala que el cine de ciencia-ficción no puede ser ni tan profundo, ni tan estimulante a nivel intelec-

tual como la literatura del género, todo ello debido, en primera instancia, a que el medio fílmico es incapaz de lidiar con «ideas» de una manera tan efectiva

Arriba y a la izquierda, afiche promocional y otras dos escenas de la sensacional The Thing from Another World.

como la que ofrece la literatura. Este precepto podría avalarse con la proliferación de películas mediocres o directamente deleznables dentro del cine de CF, y se refuerza a partir de la consideración de que, mientras la literatura tiene como destinatarios a los adultos, el cine –ese tipo de cine– está particularmente interesado en una audiencia de chicos y adolescentes. Para refutar la afirmación anterior basta con citar, meramente a modo de ejemplo y sin pretensiones totalizadoras, otros dos productos de calidad: The Day the Earth Stood Still (El día que paralizaron la Tierra, 1951) y la que se considera la película que llevó al cine de CF a su madurez, 2001: A Space Odyssey (2001, Odisea del espacio, 1968). Ambas películas, de notable calidad y trascendencia más allá del momento en que fueron realizadas y estrenadas, resultan a simple vista incluso superiores, como producto artístico e intelectual, que mucha de la literatura de ciencia-ficción que ha circulado y circula hoy en día. En las páginas que siguen iremos delineando esta especie de historia del género cinematográfico matizada, realizando un somero recorrido por la precursora Mary los viajes extraordinarios y la instalación del «sueño del progreso» como paradigma. También describiremos someramente los aportes fundamentales de Julio Verne y H. G. Wells, verdaderos «padres fundadores» del género. Ya en la sección específicamente cinematográfica hablaremos de las primeras películas que pueden considerarse como de ciencia-ficción, como por ejemplo Le voyage dans la Lune, el Frankenstein de

CIENCIA-FICCIÓN

Shelley y su obra clásica Frankenstein, por los utopistas,

7

Edison, la primera versión de Dr. Jekyll and Mr. Hyde, el serial Homunculus y productos mucho más refinados como Aelita o la revolucionaria –para su época– Metropolis. A continuación exploraremos el cine de los años ’30 y la instalación de la paradigmática figura del «científico loco». Veremos cómo los acontecimientos de la década del ’40 contribuyeron a la eclosión de la «época dorada» del cine de ciencia-ficción en los ’50, y cómo el género, en los años de la Segunda Guerra Mundial, se vería representando en seriales y dibujos animados de calidad diversa. Como este libro no pretende ser una historia exclusivamente de cine de CF anglosajón, tampoco dejaremos de lado el desarrollo de interesantes propuestas de otros lugares del mundo, como los monstruos gigantes japoneses de los ’50. En definitiva, las páginas siguientes pretenden ser simplemente una guía, una especie de hoja de ruta dentro de un universo fílmico enorme, cuya descripción absoluta excede los límites de este trabajo y que, a nuestro entender, es una tarea redundante en nuestros días, donde Internet se ha transformado en la enciclopedia por antonomasia de la Humanidad.

DEFINIENDO LA CIENCIA-FICCIÓN

8

CIENCIA FICCIÓN

A medida que vayamos avanzando en el desarrollo de este texto, iremos descubriendo diferentes posturas respecto del cine de ciencia-ficción y de qué constituye y qué no el corpus de ese género en particular. Ya hemos visto en las líneas anteriores que algunos críticos consideran que existe una muy leve interacción entre el cine y la literatura de ciencia-ficción –algo con lo que no acordamos–, e incluso podremos observar, a través de sendos ejemplos, cómo otros estudiosos han equiparado, en una única etiqueta genérica, tanto a las películas de CF como a las de terror –y no

En esta página y en la anterior, afiche promocional y diferentes fotogramas de The Day the Earth Stood Still, otro clásico de los ‘50.

hablamos aquí exclusivamente de la escuela francesa

en la antigüedad; segundo, quienes se acercan a la

y su concepto de fantastique, que también campea en

iglesia donde se encuentra guardada la «esencia del

España–. Es cierto que existen películas que pueden

Anticristo», sufren un sueño recurrente, en el que les

ser consideradas en ambos géneros, pero nuestra in-

llega lo que parece ser un mensaje del futuro, enviado

tención es demostrar que, en la mayoría de los casos,

como imágenes mediante taquiones (partículas suba-

el horror nace de hechos naturales y plausibles, que

tómicas que teóricamente pueden viajar en el tiempo).

no guardan relación alguna con lo sobrenatural que

Con todos estos detalles, Carpenter, que también es

es característico del terror más puro. Por ejemplo, una

el autor del guión, utiliza una estructura de película

película como Prince of Darkness (El príncipe de las

de terror clásica para exponer una serie de planteos

tinieblas, 1987), de John Carpenter, es, en un primer

propios de la ciencia-ficción.

momento, una película de terror con todos los condi-

Dicho lo anterior, cabe otra aclaración fundamental:

mentos clásicos, en la que se enfrentan el Bien y el Mal

el ámbito de las definiciones siempre es un terreno

en una batalla épica por el destino del hombre. Pero a

peligroso, y mucho más si el objeto que se intenta

medida que avanza la trama, el espectador descubre

delimitar es un producto de los tiempos que corren,

que la tesis del film sostiene que, en realidad, lo que

con una historia «real» que comienza con la Revolu-

conocemos genéricamente como el Diablo no habita

ción Industrial y que sigue desarrollándose en nuestros

en un ámbito sobrenatural, como el Infierno, sino en

días. La definición que plantearemos no pretende

la misma base de la Creación, en las partículas suba-

limitar o actuar de manera excluyente, sino explicar un

tómicas que estudia la física cuántica. Y desde allí, el

procedimiento, un modo a través del cual los autores

particular Anticristo que confronta a los protagonistas,

(de textos, de películas, de historietas o de lo que sea)

tiene el objetivo de «convocar» a su padre desde un

expresan sus ideas, llevándolas más allá de lo aparente

universo paralelo, el universo espejo del nuestro y

o de lo que puede considerarse como «realista».

que compone la antimateria. Obviamente, el grupo

Ahora bien, es posible abordar este género nuevo de diferentes maneras y con herramientas diversas. Por ejemplo, Jorge Luis Borges, en el prólogo de La inven-

aparentemente logra la victoria para el lado del Bien,

ción de Morel2, hace algunos aportes muy interesantes

no lo hace a partir de la fe –que le flaquea bastante

para delimitar el género. En primer término, Borges

a la hora de la verdad– sino a través de la destrucción

discute con Ortega y Gasset su desdén por las novelas

mecánica del portal abierto entre este universo y su

de peripecias o aventuras. El español plantea que «es

«antiuniverso».

muy difícil que hoy quepa inventar una aventura ca-

Más allá de este elemento central del planteo del film,

paz de interesar a nuestra sensibilidad superior», a lo

Carpenter introduce otros condimentos: primero, Jesús

que Borges responde con algunos señalamientos muy

aparentemente habría sido parte de una raza extraterrestre enfrentada con el Mal, al que habrían vencido

2 En: Bioy Casares, Adolfo.- La invención de Morel.- Buenos Aires: Emecé, 1953. Pág. 11 y ss.

CIENCIA-FICCIÓN

de científicos que asiste a estos acontecimientos no entiende mucho lo que pasa, e incluso el sacerdote que

9

específicos: uno «es el intrínseco rigor de la novela de peripecias. La novela característica, ‘psicológica’, propende a ser informe. Los rusos y los discípulos de los rusos han demostrado hasta el hastío que nada es imposible: suicidas por felicidad, asesinos por benevolencia, personas que se adoran hasta el punto de separarse para siempre, delatores por fervor o por humildad [...] Esa libertad plena acaba por equivaler al pleno desorden.» Otro punto es que «la novela ‘psicológica’ quiere ser también novela ‘realista’: prefiere que olvidemos su carácter de artificio verbal y hace de toda vana precisión (o de toda lánguida vaguedad) un nuevo toque verosímil [...] La novela de aventuras [...] no se propone como una transcripción de la realidad: es un objeto artificial que no sufre ninguna parte injustificada.» Finalmente, Borges resume su premisa diciendo: «Las ficciones de índole policial –otro género típico de este siglo que no puede inventar argumentos– refieren hechos misteriosos que luego justifica e ilustra un hecho razonable [...] ABC despliega una odisea de prodigios que no parecen admitir otra clave que la alucinación o que el símbolo, y plenamente los descifra mediante un sólo postulado fantástico pero no sobreaun rarísimas las obras de imaginación razonada. Los

CIENCIA-FICCIÓN

natural.» Y remata: «En español, son infrecuentes y

10

clásicos ejercieron la alegoría, las exageraciones de la sátira y, alguna vez, la mera incoherencia verbal [...] La invención de Morel traslada a nuestras tierras y a nuestro idioma un género nuevo.» (Las negritas son nuestras). En sus propios términos, Borges define a la ciencia-ficción como la literatura de la imaginación razonada, y le concede un rasgo fundamental respecto de los postulados que definen al género.

En la página anterior, diferentes imágenes de 2001, A Space Odyssey. A la derecha, una fotografía del inigualable Jorge Luis Borges.

Una de las mejores analogías para definir a la cien-

que intenta reproducir las reglas del mundo real. Es a

cia-ficción la ofreció el filósofo ítalo-argentino Pablo

partir de esto que podemos establecer una distinción

Capanna, en su ya clásico ensayo El sentido de la

radical entre lo fantástico y la ciencia-ficción ya que,

ciencia ficción, donde compara al género con el mito

en esta última, la ruptura con la realidad no existe

platónico, otorgándole un proceso de creación y

como contrapunto entre dos órdenes diferentes de

función similares: «El mito platónico es una creación

la misma dentro de lo narrado, no hay una irrupción

conciente y deliberada del espíritu, que mantiene

sobrenatural o inexplicable a partir de la lógica. En la

un control sobre esa creación y no se deja arrastrar

ciencia-ficción lo narrado parte de una extrapolación

por las imágenes mismas [...] Ante el descubrimiento

o una proyección de acontecimientos conocidos o po-

de las limitaciones del alma humana, la cual como

sibles en el presente del que participa el creador de la

el prisionero de la caverna sólo puede ver imágenes

propuesta, en tanto imbricado en un proceso social.

y no realidades, la creación de imágenes bellas que

La dialéctica no se da entre dos órdenes diferentes

permitan suplir las limitaciones será obra de evasión

dentro de la narración (uno natural, compartido por

hacia la verdad... »3

lectores/espectadores y autores; el otro sobrenatural,

Así como Borges hablaba de imaginación razonada,

que irrumpe y destruye esa concordia para incluir ele-

Capanna le da a la ciencia-ficción la estatura de mito

mentos que motoricen la ficción en un determinado

platónico, es decir, una historia con intención pedagó-

sentido), es una convención previa mediante la cual

gica, creada para permitir la comprensión de fenóme-

el autor se compromete –implícitamente– a respetar

nos plausibles aunque no evidentes a primera vista.

las normas comunes de coherencia y razonabilidad

Puede resultar útil, a esta altura, hacer una diferen-

que subyacen como paradigma de la sociedad a la que pertenece. Es la construcción ficcional, basada en estas convenciones previas –que, obviamente, se

americanos (Caracas: Monte Ávila, 1978), Ana María

modifican con el pasar del tiempo, como veremos en

Barrenechea reformula el esquema de clasificación de

las distintas épocas del cine de CF que estudiaremos a

la literatura fantástica realizada por Tzvetan Todorov y

continuación– la que resalta la caracterización propia

señala que la misma « …quedaría definida como la que

de la ciencia-ficción, sea el que sea el medio artístico

presenta en forma de problemas hechos anormales,

en el que se desarrolle. De esta manera, el devenir de

a-naturales o irreales, en contraste con hechos reales,

lo narrado y las acciones de los personajes no están

normales o naturales… » El centro de interés y la carac-

en contradicción con la lógica realista, no hay hechos

terística diferenciadora de la literatura fantástica –y de

que contravengan el orden de las posibilidades lógicas,

lo fantástico en general– estaría en esa transgresión al

empíricas o técnicas, es decir, el orden natural.

orden establecido y no por la representación ficcional

Para dar un ejemplo: mientras que en Harry Potter

3 Capanna, Pablo.- El sentido de la ciencia ficción.- Buenos Aires: Columba, 1966. Pág. 236.

and the Chamber of Secrets (Harry Potter y la cámara secreta, 2002) vemos un auto que vuela por influjo de

CIENCIA-FICCIÓN

ciación entre lo fantástico y lo que específicamente es ciencia-ficción. En su ya clásico Textos hispano-

11

A la izquierda, cuatro fotogramas de Blade Runner, uno de los films más importantes de la historia del género en celuloide.

la magia, en Blade Runner (1982) asistimos a la presentación de vehículos que ejecutan idéntica proeza, aunque evidentemente los medios son tecnológicos y plenamente justificados a partir del contexto que presenta la historia. La operatoria utilizada en las obras de ciencia-ficción es la del realismo en sentido amplio, más un plus constituido por la disciplina de la imaginación reglada, el poder de la imaginación que trasciende a la mera representación de la realidad compartida por el emisor y los receptores del mensaje. La base fundante de todo proceso es la enunciación –explícita o no– de una hipótesis, estableciendo una dialéctica exterior al texto, un entrecruzamiento de contextos: por un lado, el propio del creador y de quienes reciben su obra; por el otro, el contexto ficcional en el que se desarrolla la acción de lo narrado. Lo que está en la narración, no existe en la realidad pero podría existir. Ahora bien, los procedimientos utilizados para construir el relato son los mismos que utiliza el realismo: la puesta en escena esmerada, descriptiva y meticulosa –particularmente en las obras de calidad–; la acción de los personajes movida por la vitalidad de las pulsiones humanas; el desarrollo de las relaciones interindividua-

12

de lo popular así sea a través de individuos aislados

CIENCIA-FICCIÓN

les, grupales o sociales. Es decir, brevemente, el devenir con los que el lector/espectador pueda identificarse, sea a través de una historia y unos caracteres que el común de la gente pueda considerar como propios y familiares. Esta técnica, más la aplicación de una hipótesis plausible, hacen de la ciencia-ficción un género popular, no en el sentido de masivo –que en muchos casos lo es–, porque lo masivo es un problema industrial y lo popular es lo que se identifica con el sentir de

un pueblo (con sus temores, esperanzas, frustraciones, tribulaciones, etc.). El filtro entre lo popular y lo masivo lo establece el tiempo y las reconstrucciones históricas posteriores de los elementos que el pueblo incorporó

En esta página, afiche promocional y dos fotogramas de Invasion of the Body Snatchers, en su versión de 1956.

a su acervo cultural nacional. Veamos dos ejemplos de lo expuesto, uno cinematográfico y el otro del campo de la historieta, que grafican el sentir de dos pueblos diferentes en una época casi contemporánea. En Invasion of the Body Snatchers (La invasión de los usurpadores de cuerpos, 1956), un pequeño pueblo es invadido por unas extrañas vainas alienígenas, que son capaces de duplicar personas, las que en el proceso pierden su capacidad de sentir. El film, uno de los exponentes más acabados del cine de ciencia-ficción de los ’50 y sobre el cual volveremos oportunamente, es considerado como una metáfora del miedo del norteamericano medio frente al avance del comunismo en los albores de la Guerra Fría, y de la indiferencia generalizada de la sociedad frente a esa terrible amenaza. El segundo ejemplo es mucho más cercano: en El Eternauta (Héctor Germán Oesterheld y Francisco Solano López, 1957-1959) es Buenos Aires la ciudad invadida por extraterrestres, quienes en un primer golpe y a través de la «nevada mortal», eliminan a casi toda la población, mientras que el núcleo de personajes que reflejan la composición social de la Argentina de ese tiempo. Con el devenir de la historia, el lector descubre que la invasión tiene varias capas de enemigos, y que quienes los lideran, los Ellos, permanecen invisibles. Además de la excelente contextualización, geográfica y de época –de hecho, la obra puede ser leída como una metáfora de los inicios de la resistencia peronista, después del golpe militar de 1955–,

CIENCIA-FICCIÓN

de la resistencia es encarnado por un conglomerado

13

En esta página y en la siguiente, diferentes cuadros de El Eternauta, la obra maestra de la ciencia-ficción argentina que refleja los miedos de los ‘50.

El Eternauta presenta a otros seres sin sentimientos, los hombres-robot, que en este caso no son los títeres del comunismo sino de un imperialismo mucho más cercano para los argentinos: el norteamericano. Con estos dos ejemplos queda claramente reflejado el sentir de dos pueblos distintos en una misma época, con la invasión alienígena como tema fundamental, pero con perpetradores totalmente disímiles pese a sus procedimientos casi idénticos. En las páginas que siguen haremos otras lecturas políticas del género, justamente por esa característica que lo define que es el diálogo con el contexto de su época. Por lo que hemos venido delineando, entonces, en nuestra opinión la ciencia-ficción puede ser definida como un realismo hipotético, totalmente alejado de lo puramente fantástico. Y la riqueza conceptual encerrada en el rótulo –cuya función, insistimos, es la de enmarcar y no limitar el corpus de obras a considerar– nos permite una enorme diversidad de abordajes, y a la vez, nos impide lograr una ecuación absolutamente exacta, una fórmula matemática que establezca qué es cine de ciencia-ficción y qué no lo es de una manera tajante y definitiva, ya que las zonas grises siempre existen y, en numerosas ocasiones, son

14

teresantes. Con esto queda claro que las páginas que

CIENCIA-FICCIÓN

el espacio en el que proliferan las propuestas más insiguen responden únicamente a la consideración del autor de estas líneas, cuya única intención es ofrecer una historia del género tanto a través de sus películas más representativas como a partir de un marco teórico, que siempre puede enriquecerse.

LOS PRECURSORES

EN LA LITERATURA Y EN EL CINE

Como cualquier otro género que se precie de tal, la ciencia-ficción tiene su propia pretensión histórica, lo que ha llevado a diferentes estudiosos a intentar identificar elementos asimilables al género en los más diversos materiales literarios, desde la Epopeya de Gilgamesh, pasando por los mitos platónicos y hasta llegar a la Vera historia, de Luciano de Samosata, sin dejar de lado la Utopía de Tomás Moro, de 1516, o el relato «Somnium», publicado por Johannes Kepler en 1623. No es la intención de este trabajo detenerse en esas obras o en la discusión de sus méritos como para ser incluidas o excluidas del canon del género, aunque sí expresar que, por definición, la ciencia-ficción es un género relacionado con la intrusión de la ciencia y la tecnología en el mundo cotidiano del hombre, por lo que resulta más apropiado hablar de CF a partir de la Revolución Industrial y no antes. Lo cierto es que el término science fiction, que fue traducido al castellano, incorrectamente, como cienciaficción, comenzó a utilizarse con asiduidad a partir de 1926, cuando Hugo Gernsback lo incorporó en la tapa de su Amazing Stories, una revista pulp que marcó el inicio del desarrollo de la literatura del género en los Estados Unidos y que, de alguna manera, indujo a la relectura, en clave genérica, de muchísimos trabajos War of the Worlds, de H. G. Wells. John Clute, uno de los autores de la prestigiosa The Encyclopedia of Science Fiction, la principal fuente de referencia del género antes del advenimiento de Internet a nivel masivo, define como proto ciencia-ficción o ciencia-ficción primitiva a toda la que se desarrolló entre 1818 –año de publicación de Frankenstein o el moderno prometeo, de Mary Shelley– y 1938, año en

CIENCIA-FICCIÓN

publicados con anterioridad, como por ejemplo, The

15

que John W. Campbell, Jr. inicia su actividad como editor de la revista Astounding Science Fiction, vehículo de los principales autores y obras de la denominada Edad de Oro del género. Frankenstein está enmarcado en la tradición de la novela gótica y explora temas tales como la moral científica, la creación o la destrucción de la vida, y la audacia de la Humanidad en su relación con Dios, estableciendo uno de los hitos más destacados dentro del cine de ciencia-ficción, como sería el del «científico loco» o, por lo menos, temporalmente fuera de sus cabales. La historia en torno a la génesis de la novela señala que, en el verano de 1816, el hemisferio norte soportó un largo y frío invierno volcánico, producto de la erupción del Tambora. Ese año, Percy Bysshe Shelley y su mujer, Mary Wollstonecraft, hicieron una visita a Lord Byron en la Villa Diodati, en Suiza. En una de las habituales veladas literarias, y después de leer un libro de relatos fantásticos alemanes, Byron retó a sus invitados y a su médico personal, John Polidori, a componer una historia de terror. De los cuatro, sólo Polidori completó una historia, la controvertida «El vampiro» (cuya autoría algunos atribuyen al propio

16

de una pesadilla inducida por las conversaciones entre

CIENCIA-FICCIÓN

Lord Byron), pero Mary Shelley concebiría –a partir Polidori y su marido sobre las nuevas investigaciones en torno a la posibilidad de revivir cuerpos inertes con electricidad– lo que sería luego el capítulo cuatro de su obra más famosa. La novela narra la historia de Víctor Frankenstein, un joven estudiante de medicina suizo obsesionado por conocer los secretos más oscuros de la ciencia. En su afán por desentrañar el misterio del alma humana,

En esta página y en la anterior, Cuatro diferentes ilustraciones relacionadas con la Epopeya de Gilgamesh, el mítico héroe sumerio.

entonces vengarse, y así ejecuta los asesinatos del

de diferentes cadáveres, y el experimento se com-

mejor amigo de Frankenstein, Clerval, y más tarde de

pleta cuando el joven infunde la chispa de la vida a

Elizabeth, la prometida del científico, la noche de la

su criatura, utilizando la electricidad. Poco después,

boda de la pareja.

Frankenstein comprende el horror que ha creado y

Decidido a terminar con su pecado, Frankenstein

rechaza, espantado, el resultado de su experimento,

persigue a la criatura hasta los confines del mundo,

huyendo de su laboratorio. Al regresar al lugar, el

y muere en un barco que lo recoge en los hielos del

monstruo ha desaparecido, y el médico suizo respira

Ártico. Poco después de su fallecimiento, el navío es

aliviado, en la creencia de que todo ha terminado.

abordado por el monstruo, quien termina su triste his-

Tras escapar de su cautiverio involuntario, el monstruo

toria, para iluminación del capitán de la embarcación,

comienza a experimentar el rechazo de la Humanidad,

asegurándole que ya no cometerá más crímenes y que

y se despierta en él un odio inconmensurable y una

sólo es necesaria una inmolación más: la suya.

sed de venganza igualmente enorme.

Escrita en los albores de la Revolución Industrial, un

Después de un período de convalecencia por el exceso

período de cambios dramáticos para el mundo, la

de trabajo e impresionado por la muerte violenta de

novela puede leerse como una alegoría de la perver-

su hermano William, Víctor regresa a Ginebra con su

sión que el avance científico y tecnológico pueden

familia y su prometida. Pero en su hogar descubre que

acarrearle al ser humano, y el desafío a la Naturaleza

detrás del crimen de su hermano está la furia de su pro-

que constituye el monstruo creado por Frankenstein

pia criatura, y su culpa se incrementa cuando permite

es un símbolo más que evidente de la condena al inci-

que una amiga de la familia sea acusada del asesinato y

piente capitalismo industrial, que no respeta en modo

ejecutada en la horca. Deprimido, Frankenstein decide

alguno a la dignidad humana. Es más, la rebelión de

viajar a la montaña, pero allí encuentra a su monstruo

la criatura contra su creador es fácilmente asimilable

una vez más. La criatura le relata cómo aprendió a

a la idea de castigo divino por un mal uso de la tecno-

hablar y de qué manera se le hizo patente el rechazo

logía, un tema caro y ampliamente desarrollado por

de los humanos, producto de su aspecto grotesco. El

varias películas de ciencia-ficción de todos los tiempos,

atormentado ser sólo desea una cosa, algo que úni-

desde las primeras adaptaciones de Frankenstein hasta

camente su creador puede darle: una compañera. El

ejemplos más contemporáneos como Blade Runner

discurso y las razones son tan elocuentes, que Víctor

(1982) o Jurassic Park (1993).

accede al pedido.

La primera versión cinematográfica de este clásico

El protagonista construye un nuevo laboratorio en

literario de la que se tienen noticias se estrenó en 1910,

una isla de Escocia y comienza a trabajar, pero sus

en pleno período silente. El film fue producido por los

remordimientos son tan fuertes que, al final, decide

estudios de Thomas Alva Edison, y escrito y dirigido por

destruir su nueva creación antes de llegar a darle

J. Searle Dawley. En la trama, Frankenstein crea a su

vida. El monstruo, que lo ha estado vigilando, jura

monstruo, mediante medios químicos, en un recipien-

CIENCIA-FICCIÓN

Frankenstein construye un cuerpo a partir de «partes»

17

te, y también queda horrorizado por su creación, a la que repudia. El monstruo, resentido, decide atacar a su creador la noche de su boda, pero enfrentado con el verdadero amor, el atroz esperpento se desvanece en el aire. En 1915 llega al cine una nueva adaptación intitulada Life Without Soul, dirigida por Joseph W. Smiley y protagonizada por William A. Cohill como el doctor William Frawley, un Frankenstein contemporáneo que crea a un hombre sin alma, interpretado –con gran aceptación crítica– por Percy Standing, quien apenas luce maquillaje para su papel. Hacia el final se revela que, en realidad, la película ha sido sólo el sueño de un joven que se ha quedado dormido mientras leía el trabajo original de Mary Shelley. En 1921 se presenta una versión europea de la novela, la italiana Il mostro di Frankenstein, una película a la que se considera perdida en la actualidad y de la que se tienen muy pocos datos.

CIENCIA-FICCIÓN

18

En la página anterior, Hugo Gernsback junto a una portada de Amazing Stories y la edición original de Frankenstein. A la derecha, retrato de Mary Shelley.

FRANKENSTEIN

EN LA UNIVERSAL

Ya en el período sonoro del cine, en 1931, la Universal presenta su versión de la novela de Shelley con dirección de James Whale y el rol de la criatura a cargo de Boris Karloff. La cinta en realidad está basada en una obra de teatro de Peggy Webbling, que a su vez está inspirada en el trabajo original de 1818, y sigue la historia de Henry Frankenstein (Colin Clive), un joven y ambicioso científico que, con la ayuda de su asistente Fritz (Dwight Frye), rearma un cuerpo humano, utilizando partes de otros cadáveres, con la intención de insuflarle vida a través de complejos aparatos eléctricos que ha ido perfeccionando en pos de su obsesión. Elizabeth (Mae Clarke), la prometida del científico, está muy preocupada por las acciones de su novio, por lo que decide, acompañada por su amigo Víctor Moritz (John Boles), ir a ver al doctor Waldman (Edward Van Sloan) para pedirle su asistencia en pos de apartar a Henry de su preocupante tarea. La chica regresa al laboratorio justo en el momento culminante del experimento, cuando la criatura queda expuesta a los rayos condensados por el instrumental creado por Frankenstein y muestra los primeros signos vitales. A partir de un error de Fritz, quien ha incluido el cerebro de un criminal como parte del monstruo, el ser sólo conoce sentimientos de odio y asesinato. Pero ra no parece tener una inclinación malevolente. Sin embargo, cuando Fritz lo atosiga con una antorcha, su reacción es interpretada por Frankenstein y por el doctor Waldman como un intento de ataque, por lo que deciden encerrarlo, encadenado, en una celda. Convencidos de que la criatura no está lista para ser presentada en sociedad, y que probablemente nunca lo esté, la dejan encerrada y a merced del sadismo

CIENCIA-FICCIÓN

pese a su aspecto grotesco, en un principio la criatu-

19

En esta página y en la siguiente, afiche promocional y diferentes escenas de la adaptación cinematográfica de Frankenstein de 1931.

de Fritz. Mientras abandonan el lugar, escuchan un terrible grito y, tras regresar al calabozo, encuentran que el monstruo ha estrangulado a Fritz, con lo que los dos científicos deciden que deben terminar con él definitivamente y preparan una droga para cumplir su cometido. La criatura intenta escapar y casi ultima a los dos hombres antes de caer rendida por efecto de la sustancia que le inyectan. Henry parte entonces para preparar su boda, en tanto que el doctor Waldman se queda examinando al monstruo inconsciente, antes de comenzar su disección. Pero la criatura despierta repentinamente y estrangula a Waldman, para después huir del castillo. Poco después, el monstruo se encuentra con la hija pequeña de un granjero llamada María, con quien comienza a jugar. Su cerebro defectuoso le impide entender que la niña no puede flotar, por lo que la arroja en medio del lago, donde María finalmente se ahoga. Tomando conciencia de su terrible error, la criatura se aleja arrepentida, en una de las escenas más controvertidas del film en la época de su estreno. Finalmente, cuando Frankenstein está a punto de desposar a Elizabeth, se entera de que el doctor Waldman ha sido asesinado, y poco después escucha

20

criatura está en la casa. La muchacha está desmayada y

CIENCIA-FICCIÓN

un grito de su prometida que lo convence de que la el monstruo ha huido, pero Frankenstein, al frente de un grupo de campesinos de la zona, inicia una furiosa búsqueda de la criatura. Separado del grupo, Víctor es capturado por el monstruo, quien lo lleva a un molino abandonado con la intención de tirarlo desde el techo. La suerte hace que Frankenstein evite la fatal caída al quedar enganchado de una de las aspas del molino, y sus gritos atraen a los campesinos, que lo rescatan y

llevan a su hogar, mientras otros se quedan a quemar el molino y acabar con la criatura. El éxito de la película transformaría al monstruo de Frankenstein en uno de los principales protagonistas del ciclo de terror de la Universal, y así, en sucesión, el estudio estrenó Bride of Frankenstein (1935), Son of Frankenstein (1939), The Ghost of Frankenstein (1942), Frankenstein Meets the Wolf Man (1943), House of Frankenstein (1944), House of Dracula (1945) y finalmente, la humorística Abbott and Costello Meet Frankenstein (1948), todas ellas con mayor o menor participación de la criatura imaginada por Mary Shelley. Los elementos propios de la ciencia-ficción se fueron desvaneciendo con el correr de la saga, y el horror primigenio a la ciencia utilizada sin ética y sin sentido daría paso a un terror mucho más prosaico, en el que el monstruo es un ser casi descerebrado cuya única función es emitir sonidos guturales y estrangular rivales. En capítulos posteriores veremos cómo el mito de la criatura de Frankenstein fue retomado en diferentes épocas, logrando en algunos casos propuestas de enorme calidad, identificación con el cine de cienciaficción y significado, como es el caso de Frankenstein Unbound (Frankenstein perdido en el tiempo, 1990), inteligentes realizados en torno a la criatura.

CIENCIA-FICCIÓN

de Roger Corman, por citar uno de los trabajos más

21

En esta página y en la siguiente, retrato de Edgar Allan Poe junto al afiche promocional y tres imágenes de The Masque of the Red Death.

EDGAR ALLAN POE

Y LA CIENCIA FICCIÓN

Pese a que se lo conoce como un autor de relatos macabros o incluso como el padre del policial-enigma, Edgar Allan Poe es otro de los precursores de la ciencia-ficción literaria a partir de un puñado de trabajos cuyas consignas pueden incluirse dentro del género. En sus cuentos y narraciones, la fascinación que sentía por la ciencia de su tiempo es más que evidente, y sus propuestas influyeron, sin lugar a dudas, en dos de los nombres más importantes de la historia del género: Julio Verne y H. G. Wells. El ejemplo más obvio de aproximación de Poe a la ciencia-ficción es el relato «The Unparalleled Adventures of One Hans Pfaall», una de las historias seudo verídicas –género en el que incursionó asiduamente Borges– más conocidas de este autor. El escrito fue editado por primera vez en 1835, en el Southern Literary Messenger, donde se lo presentaba como una historia verídica, aunque pocos lectores fueron engañados por esa puesta en escena. El artículo sostenía que un hombre llamado Hans Pfaall, que viajaba en un globo, había dejado caer una nota sobre la gente a su paso en la que narraba su fantástico viaje a la Luna. Otro trabajo relacionado con este tópico es «Mellonta Tauta», que sigue la peripecia de otro viaje en globo,

22

y no hacia el espacio. Y a diferencia de la mayoría de

CIENCIA-FICCIÓN

aunque en esta ocasión, el periplo es hacia el futuro las utopías de la época, el mundo del futuro no es un Paraíso sino todo lo contrario. The Narrative of A. Gordon Pym es otra historia de Poe, en este caso inconclusa, que contiene numerosos elementos asimilables a la ciencia-ficción. El texto relata un viaje marítimo a los confines de la Antártida, en el que se describe, con lenguaje científico y de manera harto detallada, a una civilización perdida, un tema

que posteriormente se vio en trabajos como The Land That Time Forgot (1924), de Edgar Rice Burroughs o The Lost World, de Arthur Conan Doyle. Otras historias de Poe también guardan relación con algunos temas clásicos de la ciencia-ficción como el del mundo posapocalíptico, que puede inferirse, por ejemplo, en «The Mask of the Red Death», que presenta una plaga que destruye a la Humanidad; o el tópico de la destrucción de la Tierra por un choque planetario, como es el caso de «The Conversation of Eiros and Charmion», que retrata la destrucción de la Tierra por el paso de un cometa, tema que luego será descripto con suerte desigual por algunos clásicos del cine de CF de los ’50, como When Worlds Collide. Lo mismo puede aplicarse a otras historias, cuyo hilo conductor está relacionado con pseudociencias que, en vida del autor, tenían una validez científica similar a la que nosotros otorgamos a la matemática o la física. Nos referimos, por ejemplo, al mesmerismo o la astrología. Como esta relación del autor norteamericano con la ciencia-ficción no ha sido demasiado estudiada ni profundizada –salvo honrosas excepciones–, el cine no ha ofrecido adaptaciones de este tipo de material, o al menos, no en el sentido en que algunos relatos pueden ser leídos. Por ejemplo, en los años ’60, Vincent Price de una serie de adaptaciones del trabajo de Poe, que incluyen propuestas basadas en relatos asimilables al género. En 1964, Corman y Price presentaron The Masque of the Red Death, una película que si bien habla de una plaga global que acaba con la Humanidad, se centra en realidad en la depravación y la fatuidad de los habitantes del castillo del príncipe Prospero, y en cómo la muerte generalizada no puede ser burlada por

CIENCIA-FICCIÓN

y el director Roger Corman encararon la realización

23

A la izquierda, tres diferentes momentos de «The Facts in the Case of M. Valdemar», uno de los episodios de Tales of Terror.

los muros de una fortaleza ni por los pactos satánicos de los hombres. Tres años antes, el mismo dúo presentó Tales of Terror, uno de cuyos segmentos es «The Facts in the Case of M. Valdemar». Esta historia sigue el devenir de la agonía del señor Valdemar, quien decide emplear a un hipnotizador, el señor Carmichael, para soliviantar sus dolores postreros. Pero el mesmerizador tiene sus propias ideas y mantiene a Valdemar en una especie de limbo entre la vida y la muerte, pese a los pedidos desesperados del hombre para que lo deje finalmente morir. A medida que van pasando los meses, el cuerpo de Valdemar se va pudriendo, pero no puede morir definitivamente. Mientras tanto, el hipnotizador intenta forzar a la esposa del moribundo, Helene, a que se case con él, y cuando la mujer se niega, Carmichael la ataca. Es entonces que el cuerpo descompuesto de Valdemar se levanta de su lecho de muerte y ultima al hipnotizador, logrando en un mismo acto salvar a su amada y liberarse del limbo en el que estaba sumido. En los dos casos citados, pese a que la obra original de Poe tiene que ver con la ciencia-ficción –o, por lo menos, con elementos asimilables al género–, las adaptaciones ponen el acento en los aspectos terro-

24

sobrenatural. Pese a todo, no dejan de ser propuestas

CIENCIA-FICCIÓN

ríficos de los relatos, en los más relacionados con lo más que interesantes y que se han transformado en verdaderos films de culto.

A la izquierda, retratos de Jules Verne y H. G. Wells, junto a una ilustración referida a De la Tierra a la Luna.

LA FE DE NUESTROS

PADRES

Sin desmerecer a los precursores que hemos señalado en los capítulos anteriores, no cabe ninguna duda que Jules Verne y Herbert George Wells son los verdaderos padres fundadores de la moderna ciencia-ficción, tanto literaria como cinematográfica –en este último caso, por el aporte de «ideas» que sus escritos le hicieron al cine, como iremos viendo a medida que avancemos–. Como afirma el argentino Carlos Scolari, «La verdadera conformación del género llegará a finales del siglo XIX con los scientific romances de Herbert George Wells y Jules Verne. En un primer momento las obras de estos dos autores no fueron consideradas [como] pertenecientes a un género específico, ya que formaban parte del universo de la Gran Literatura. Las mejores obras de H. G. Wells, por ejemplo, fueron publicadas entre 1895 y 1907 […] y es en la obra de estos dos maestros donde el género adquiere una autonomía que lo lleva a ocupar el espacio delimitado por la innovación científico-tecnológica y el elemento fantástico.»4 Existe algunos autores que han descripto un cierto antagonismo entre estos dos escritores, que en parte existe y que incluso ha quedado documentado, indicando que mientras Verne es un auténtico poeta de la tecnología –interesado en la descripción detallista de los artilugios mecánicos que hacen posibles sus ficdesarrollo futuro–, Wells prefiere describir el impacto social que tiene esa tecnología. De allí que, en la crítica anglosajona, se sostiene que Verne es algo así como el iniciador de la «ciencia-ficción dura», aquella basada en las ciencia exactas y responsable de la Época Dorada del género en los años ’50; en tanto que Wells es el 4 Scolari, Carlos.- No pasarán: las invasiones alienígenas desde H. G. Wells a S. Spielberg.- Madrid: Páginas de Espuma, 2005. Pág. 19.

CIENCIA-FICCIÓN

ciones, y sin superar casi nunca la plausibilidad de su

25

En esta página y en la siguiente, otra imagen de Verne junto a sendas ilustraciones de sus novelas Viaje al centro de la Tierra y 20.000 leguas de viaje submarino.

«padre» de la variante soft de la ciencia-ficción, con preocupaciones más cercanas a las de las ciencias sociales y cuyo desarrollo se inicia en los ’60, adquiriendo un gran lustre una década más tarde. Aquí vale la pena señalar que el descubrimiento de la importancia que tiene el observador en la experimentación científica, y el reemplazo de la casuística directa por la ley de las probabilidades, ha dejado como resultado un cambio importante en la concepción de qué es ciencia y qué no lo es en sentido estricto. La antinomia entre Verne y Wells es un poco artificial, teniendo en cuenta la catadura psicológica de algunos de los personajes del primero o la impronta darwinista que tiñe la obra del segundo. La influencia del autor inglés será fundamental en el desarrollo de la CF norteamericana, y una clara muestra es la tapa de la revista Amazing Stories, de Hugo Gernsback incluida en la página 18 de este libro, cuya ilustración hace referencia a La guerra de los mundos, una de las novelas más importantes de Wells y, sin lugar a dudas, hito fundamental de uno de los temas más caros a la CF, y en particular a la de la CF cinematográfica de los años ’50 en los Estados Unidos: la invasión extraterrestre. Siguiendo el texto de Scolari, «Resulta claro que

26

aparatos y los instrumentos técnicos’ y las novelas de

CIENCIA-FICCIÓN

reducir la ciencia ficción de Verne a una poesía de ‘los Wells a una mera reflexión sociológica condimentada con artefactos tecnológicos, forzando de esta manera la contraposición entre los dos autores, sólo puede llevar a ocultar una buena parte de la obra de estos grandes maestros de la literatura de fines del siglo XIX. Cada uno a su manera, contaron un mundo donde la tecnología era sinónimo de progreso y el conocimiento científico aparecía como la nueva religión laica, Verne

lo hizo llevando a sus personajes a los confines de la Tierra (y de la Luna); Wells, enfrentándolos con invasores provenientes de las fronteras del espacio.»5 Profundicemos, entonces, un poco en los aportes de ambos autores a los temas más relevantes de la CF, tanto en la literatura como en el cine. Verne nació en 1828 y llegó a ver los primeros pasos del siglo XX, ya que su deceso se produjo en marzo de 1905. El francés es uno de los pioneros del género a partir de trabajos muy reconocidos como Viaje al centro de la Tierra (1864), De la Tierra a la Luna (1865), 20.000 leguas de viaje submarino (1869-70) y su secuela, La isla misteriosa (1875), entre otras publicaciones. Verne escribió sobre ingenios voladores, naves espaciales y submarinos antes de que tales prodigios de la tecnología humana fueran una realidad. Sus inicios en la carrera literaria no fueron fáciles, debiendo enfrentar las objeciones paternas, pero esa situación mejoró cuando conoce a Pierre-Jules Hetzel, uno de los editores más importantes de la Francia del siglo XIX, quien contaba en su catálogo con nombres como Víctor Hugo, George Sand y otros de similar relieve. Hetzel fue fundamental para mejorar los escritos de Verne, y en 1863 inician una relación profesional a partir del interés del editor en Cinco semanas en «demasiado científica» y que fue mejorada bajo la batuta de Hetzel. En 1864, Verne publica un admirable estudio sobre la obra de Edgar Allan Poe, quien resultó ser una de sus grandes influencias literarias, al punto que escribió una secuela de «The Narrative of Arthur Gordon Pym of Nantucket». Ese mismo año, además, Hetzel da a conocer Viaje al centro de la Tierra, a la que 5 Scolari, Carlos.- op. cit., Pág. 22.

CIENCIA-FICCIÓN

globo, una historia rechazada por otros editores por

27

seguirán otras de las más famosas novelas de Verne relacionadas de algún modo con la ciencia-ficción y ya citadas en este texto. Después de las muertes de Hetzel y de su madre, ambas acontecidas en 1887, Verne comenzó a escribir historias mucho más oscuras. Un año más tarde, el autor ingresó en el mundo de la política como concejal de Amiens, cargo en el que permaneció durante 15 años, y en 1905, enfermo de diabetes, fallece en su casa. En 1863, Verne había escrito París en el siglo XX, una novela plena de artilugios tecnológicos pero de tono pesimista, que Hetzel consideró como dañina para la carrera del escritor, sugiriéndole esperar unos 20 años antes de publicarla. Así, el manuscrito permaneció a salvo hasta que fue descubierto por el bisnieto de Verne en 1989, concretándose la publicación recién en 1993. Amén de las innumerables predicciones que incluyen los trabajos de este autor, su impronta es ideal para la adaptación cinematográfica, y fue Georges Méliès uno de los primeros realizadores en abrevar en esa fuente. Pero también, a lo largo de las décadas del ’20, del ’30 y del ’40, numerosas de sus novelas fueron llevadas a la pantalla grande en producciones de origen europeo y norteamericano, aunque indudablemente los films

28

mediados de los ’50 y finales de los ’60. A medida que

CIENCIA-FICCIÓN

más conocidos surgieron en los Estados Unidos entre avancemos en este estudio, iremos reseñando cada una de esas películas y otras en las que la esencia del trabajo verniano está presente, pese a no ser adaptaciones directas de su obra. El otro «padre fundador» de la moderna ciencia-ficción, Herbert George Wells, nació en 1866 y falleció en 1946. Wells fue conocido por su militancia socialista –en la versión light de la Sociedad Fabiana– y simpati-

En esta página y en la anterior, H. G. Wells en el set de Things to Come, junto a ilustraciones y afiches de sus trabajos de CF más significativos.

zaba con las ideas pacifistas, pese a lo cual apoyó de-

«The New Accelerator» inspiró un episodio clásico de

cididamente los esfuerzos ingleses durante la Primera

la serie Viaje a las estrellas (Star Trek, 1966-69)–.

Guerra Mundial, una vez que ésta se desencadenó.

Además de las novelas citadas, Wells incursionó con

Las principales novelas del inglés relacionadas con la

tino en el género utópico. La primera de estas pro-

CF se publicaron a fines del siglo XIX y principios del

puestas fue A Modern Utopia (1905), en la que dos

XX, momento en que sus intereses viraron hacia otros

viajeros terminan en un mundo con historia alterna-

rumbos y otro tipo de trabajos escritos.

tiva, seguida por In the Days of the Comet (1906) y la conocida The Shape of Things to Come, de 1933, que en 1936 fue adaptada a la pantalla grande por Alexander

como su aporte más futurístico, con señalamien-

Korda. Wells también predijo el ascenso del fascismo

tos respecto de un posible año 2000 que incluyen

en Europa a través de trabajos como The Autocracy of

aciertos como la expansión de las urbes gracias a la

Mr. Parham (1930), que al final se revela como un mero

popularización de autos y trenes, la relajación de

sueño del protagonista, o The Holy Terror (1939).

las normas morales a partir de una mayor libertad

Sus novelas llegarán también al cine en un sinnú-

sexual de hombres y mujeres, la derrota del milita-

mero de adaptaciones que iremos repasando, y su

rismo alemán y hasta la conformación de la Unión

impronta resuena todavía en la cultura popular

Europea, y otros.

contemporánea, sirviendo de inspiración a trabajos

Entre las principales scientific romances de Wells, que

tan notables como la novela The Time Ships (Las

instalaron temas fundamentales de la ciencia-ficción

naves del tiempo), de Stephen Baxter, una especie

de todos los tiempos, se pueden citar a La máquina

de secuela no autorizada de los eventos narrados en

del tiempo, La isla del Dr. Moreau, El hombre invi-

La máquina del tiempo; o la maravillosa The Space

sible, La guerra de los mundos, When the Sleeper

Machine (La máquina espacial), de Christopher Priest,

Wakes y Los primeros hombres en la Luna, a las que

una obra en la además de la obra de Wells ya citada

pueden sumarse docenas de novelas cortas y cuentos

también resuenan algunos de los temas de La guerra

también asimilables al género –por ejemplo, su relato

de los mundos.

CIENCIA-FICCIÓN

El primer gran éxito de Wells en el rubro no-ficción fue Anticipations, de 1901, obra que es considerada

29

LA PREHISTORIA DEL

CINE DE CF

La historia del cine tal y como lo conocemos hoy en día comienza a partir de diciembre de 1895, cuando los hermanos Louis y Auguste Lumière realizan su famosa proyección en París, y fueron los propios hermanos quienes, de alguna manera, inauguran la veta del cine relacionado con la ciencia-ficción a través de un cortometraje, de un minuto de duración, intitulado Charcuterie mécanique (1895), una propuesta que predice las fábricas automatizadas al convertir, con una única máquina, a un animal vivo en una serie de productos derivados. Se trata de toda una rareza en la filmografía de los Lumière e inspiró a un buen número de imitaciones, inglesas y norteamericanas, que agregaron nuevos elementos a la propuesta original. Dos años después, en 1897, Georges Méliès hace su primera incursión en la CF con el estreno de Chirurgien americain, otro corto que sigue la peripecia de un singular cirujano, precursor del barón Frankenstein cinematográfico, quien transplanta con éxito diferentes partes del cuerpo de un mendigo, hasta convertirlo en una persona completamente diferente. Ese mismo año asoma otro tema típico de la ciencia ficción, el de los robots, también a través de otro trabajo de Méliès, Gugusse et l’automate. Los autómatas

30

en el siglo XIX, y su origen puede rastrearse incluso en

CIENCIA-FICCIÓN

u hombres mecánicos fueron una verdadera obsesión algunos escritos relacionados con la alquimia o mitos clásicos como el del golem hebreo. Las imitaciones de estos ingenios mecánicos eran habituales en el vodevil de la época, y el film se refiere a una de ellas, en la que un payaso profesional debe lidiar con un autómata, generando una serie de situaciones cómicas. Esta cinta fue la primera que Méliès produjo en su nuevo estudio en Montreuil-sous-Bois.

En la página anterior, Georges Méliès junto a una imagen de Charcuterie mécanique. A la derecha, cuatro fotogramas de La Lune à un mètre.

En diciembre de 1897, el inglés George A. Smith presenta Making Sausages, cuya historia sigue a cuatro hombres que, mediante una máquina prodigiosa, generan salchichas a partir de perros y gatos vivos. Este tema de la «máquina fantástica» tendrá numerosas variaciones posteriores, finalizando con Dog Factory, una producción de los estudios Edison de 1904. Siguiendo con estos pequeños films que demuestran claramente la influencia de la ciencia y de las novedades tecnológicas en el desarrollo del género en el celuloide, también en 1897 se produce el estreno de otro film de Méliès, Les rayons Roentgen, que satiriza sobre los rayos, invisibles y penetrantes, recientemente descubiertos por W. A. Roentgen. La película fue realizada tres meses después de X-Rays, una producción británica de George A. Smith de tema similar, y presenta a un paciente que desea experimentar en su cuerpo los rayos X. El médico a cargo –interpretado por el propio Méliès– sienta a su cliente frente a un aparato y entonces aparece a la vista el esqueleto del hombre, que decide abandonar su cuerpo, provocando que el resto de los tejidos caigan al suelo. Manipulando su máquina, el galeno logra revertir el proceso, pero el paciente se niega a pagar el tratamiento y eso genera una pelea entre ambos, que termina con la explosión esparcidos por todo el laboratorio. Todo un prodigio, que incluye la utilización de algunos de los primeros efectos especiales de la historia del cine (de los cuales Méliès fue un gran precursor). Ya en 1898, nuevamente Méliès presenta La Lune à un mètre, que erróneamente es considerada como la primera película en incluir un viaje espacial en la historia del cine. El equívoco nace del título que se le

CIENCIA-FICCIÓN

del ingenio mecánico y los restos del médico/inventor

31

En esta página, imágenes de Les rayons Roentgen y de una producción de Ferdinand Zecca. En la página siguiente, fotograma de A la conquête de l’air y un retrato de Edwin S. Porter.

puso al film en los Estados Unidos, A Trip to the Moon («Viaje a la Luna»), pero el metraje muestra una de las típicas fantasías de Méliès, en la que un anciano astrónomo tiene una visión en la que su observatorio es visitado por una Luna animada, que cambia de forma para engañarlo. La confusión nace a partir de la apropiación del corto en los Estados Unidos por parte del productor Sigmund Lubin, en 1899, unos nueve meses después de que la película fuera realizada en Francia, y el cambio de título no responde únicamente a cuestiones de taquilla o de atractivo para el público: Lubin pirateó una copia de la versión francesa y la registró en los Estados Unidos a su nombre, agregándole, en años sucesivos, más metraje al trabajo del realizador francés, llegando de los 3 minutos originales a casi 20 en su versión de 1902. Como el film está desaparecido, nadie ha sido capaz de comprobar los agregados que se publicitaron en su momento o el origen de los mismos, pero queda claro que Lubin fue un precursor en un arte que años después estaría en los cimientos mismos de Hollywood: la piratería. En 1899, Méliès se convierte en pionero de otro de los temas más caros a la CF cinematográfica: el de los insectos gigantes. En Un bon lit se presenta la escena

32

mir. El protagonista despierta de repente cuando es

CIENCIA-FICCIÓN

en la que un pasajero de un hotel se dispone a doratacado por un insecto monstruoso, al que destruye. Dispuesto a retomar su reposo, el hombre debe volver a luchar cuando es abordado por otros tres insectos igualmente gigantes, a los que derrota utilizando el fuego de su lámpara de noche, causando una enorme explosión. Tras verificar la efectividad de su tarea, el protagonista vuelve a la cama, dispuesto a volver a dormirse. El tema de los insectos nocturnos era típico

de la época de estreno del film y la propuesta es una

de carne de perro.

elaborada remake de un proyecto anterior de Méliès,

También en 1901 se estrena An Over-Incubated Baby,

Une nuit terrible (1896).

un cortometraje de origen británico que lidia con

En 1899 también se produce el estreno de The X-Ray

el tema de la aplicación de las incubadoras –en ese

Mirror, una producción de la American Mutoscope and

entonces, limitadas a usos de la industria avícola– a

Biograph Co., de dos minutos de duración, cuya reseña

los seres humanos. La escena muestra un laboratorio

presenta a una joven que, en el proceso de probarse un

repleto de implementos químicos y una máquina que

sombrero frente a un espejo, se ve a sí misma como una

se presenta como una incubadora capaz de hacer cre-

bailarina de ballet. Queda claro que el espejo parece

cer a un bebé dos años en dos minutos. Mientras un

proyectar una imagen del futuro y que los productores

asistente del inventor está limpiando el laboratorio,

tenían poca idea de las verdaderas propiedades de los

entra una mujer con un bebé y, tras acordar el precio,

rayos descubiertos por W. A. Roentgen.

el muchacho introduce al bebé en la máquina. La ma-

Un año después, la misma productora presenta la pri-

dre se marcha y, mientras el ayudante cuida el proceso,

mera película norteamericana que incluye a un insecto

algo sale mal y el aparato termina fuera de control.

de grandes proporciones. A Jersey Skeeter presenta la

Cuando el inventor de la máquina regresa y junto con

historia de un granjero que se enfrenta con un mos-

su asistente abren la incubadora, se muestran horrori-

quito gigante, que finalmente se lo lleva volando por

zados con el resultado del experimento, ya que el bebé

el aire. En 1901, Ferdinand Zecca, el ingenioso director

se ha transformado en un anciano decrépito.

de la mayoría de los films de la productora Pathé de

El año 1902 señala el estreno de uno de los hitos más conocidos del cine de CF: Le voyage dans la Lune, de

CF con A la conquête de l’air, un brevísimo corto que

Georges Méliès. Este film, de 21 minutos de duración,

muestra a un inventor montado sobre una especie

está considerado como la primera épica de ciencia-

de «cigarro volador», impulsado por pedales y con

ficción en celuloide de la historia y es la cumbre de

una rueda de timón como volante, que atraviesa el

todas las propuestas relacionadas presentadas hasta

cielo de París. La propuesta sorprendió a la audiencia

ese momento. Méliès, quien ya era conocido por su

francesa de la época, que aparentemente creyó que

creación de películas con trucos y fantasías varias, se

ese artilugio volador a pedal era un invento digno del

convierte con este proyecto en el padre de todo un

siglo apenas comenzado. El film fue copiado por Edwin

género cinematográfico, presentando la que a larga

S. Porter en los Estados Unidos, en 1902, y estrenado

será su gran obra, nunca superada ni por él mismo y

con el título The Twentieth Century Tramp.

capaz de producir impacto incluso entre las audiencias

Porter, además, fue el director de otro «homenaje

contemporáneas.

forzado» al cine francés producido en 1901 por la

Para escribir el guión de su historia, Méliès se inspiró

Edison y titulado Fun in a Butcher Shop, propuesta

en el trabajo de los «padres fundadores» del género,

que vuelve a presentar a las controvertidas salchichas

Jules Verne y H. G. Wells, particularmente en sus no-

CIENCIA-FICCIÓN

la época, ejecuta una breve excursión por el cine de

33

En esta página y en la siguiente, tres imágenes de la obra cumbre de Georges Méliès: Le voyage dans la Lune.

velas De la Tierra a Luna y Los primeros hombres en la Luna, respectivamente. De esta manera, los selenitas creados por Wells y descriptos como crustáceos habitantes de la Luna, toman una nueva dimensión a partir del vestuario imaginado por Méliès para su cinta. Por su parte, Verne lo proveyó con la idea de utilizar un cañón de enormes proporciones para impulsar la nave terrestre hacia el satélite, un concepto que el propio Wells volvió a usar en su nueva incursión espacial de 1936, Things to Come (Lo que vendrá). No satisfecho con escribir, diseñar y construir esta propuesta, Méliès también tomó a su cargo el papel principal en la misma, interpretando al profesor Barbenfouillis, cuyo plan para explorar la Luna es aprobado por un grupo de sus colegas científicos. Así llegan las escenas de presentación del cañón capaz de impulsar la nave espacial, el ingreso del grupo de exploradores a la misma, el vuelo por el espacio y el aterrizaje en uno de los ojos de la propia Luna. Los expedicionarios salen de la nave y observan la forma de la Tierra desde la Luna, y en ese momento se desata una tormenta de nieve, por lo que el grupo desciende por un cráter, en busca de refugio, alcanzando en el proceso el interior del satélite. Mientras exploran un terreno poblado por

34

selenitas, quienes deciden llevarlos ante su rey. Los

CIENCIA-FICCIÓN

hongos gigantes, los hombres son capturados por los terrestres logran escapar, y en la batalla descubren que los selenitas explotan cuando son golpeados. Finalmente, los hombres encuentran su nave y regresan a la Tierra, atravesando el cielo y posándose sobre el mar. Después de ver las maravillas de la vida oceánica, son rescatados por un barco, que los lleva de regreso a París. La ciudad los aclama y los héroes tienen su desfile triunfal, que culmina con la condecoración otorgada

CIENCIA-FICCIÓN

35

A la izquierda, otros cuatro fotogramas referidos a diferentes momentos de la clásica Le voyage dans la Lune.

por el propio alcalde. Le voyage dans la Lune es un film fundamental en la historia del cine de ciencia-ficción, y refleja de manera exacta el interés de la sociedad de la época por los temas relacionados con lo científico-tecnológico, y la influencia de las obras de Verne y de Wells en el desarrollo de dicho interés en el gran público. Si bien la anécdota puede resultar hoy día algo ingenua, no deja de ser todo un prodigio, un acabado ejemplo de la imaginación que este tipo de cine no dejará de aportar al público de allí en más, incluso cuando los resultados son desastrosos u olvidables. Ya en 1903, el británico Cecil P. Hepworth produce la primera película cuyo tema gira en torno de la vida microscópica –y ya veremos más adelante la interesante relación que existe entre los descubrimientos científicos referidos a los microorganismos y el desarrollo del subgénero de la invasión dentro de la ciencia-ficción, de acuerdo con los trabajos de Carlos Scolari y de Laura Otis6–, intitulada The Unclean World. En la trama, un caballero con inclinaciones científicas descubre que su sándwich de queso no sabe del todo bien y decide ponerlo bajo el microscopio para descubrir la razón. Así, a través de diferentes acercamientos de la cámara,

36

criaturas, grotescas y muy realistas. Estos microbios,

CIENCIA-FICCIÓN

el espectador descubre a una singular variedad de que por primera vez tenían protagonismo en el cine, son sin lugar a dudas una de las principales influencias del film Love Microbe, una propuesta norteamericana estrenada en 1907 en la que un científico descubre el virus del amor e inocula a quien quiere con él, como si fuera un Cupido moderno. 6 Otis, Laura.- Membranes: Metaphors of Invasion in 19th Century Literature, Science and Politics.- Baltimore: John Hopkins University Press, 1999.

En esta página, cuatro imágenes de Voyage à travers l’impossible, otra de las cumbres del cine de Georges Méliès.

En 1904, Méliès intenta repetir la fórmula de su exitosa Le voyage dans la Lune con otra película épica que relate un inolvidable viaje de exploración que, en este caso, tiene como destino final la superficie del sol. Se trata de Voyage à travers l’impossible, un film que alcanzó, en su versión definitiva, una extensión de 30 minutos –todo un récord para la época–, cuando se le adosaron tres escenas adicionales gracias al éxito y popularidad alcanzados por la propuesta. En esta oportunidad, el director francés interpreta al ingeniero Mabouloff, quien propone a un grupo de sabios del Instituto de Geografía Incoherente realizar un viaje exploratorio como nunca antes se ha realizado, para el cual debe diseñarse un vehículo que combina un tren, un automóvil, un avión y un submarino. El viaje comienza con un tramo a Suiza, donde más tarde los protagonistas se accidentan a bordo del automóvil, cuando éste alcanza los 800 kilómetros por hora. Tras una breve hospitalización, los científicos emprenden una nueva etapa, alcanzando la superficie del sol, y aunque su nave está averiada, Mabouloff se las ingenia para escapar del intenso calor a bordo del submarino, vehículo que los llevará al fondo del mar. Cuando falla este ingenio también, los protagonistas son impulsados por una explosión a la superficie del mar, de donde finales agregadas por Méliès, el ingeniero construye un gigantesco magneto que, montado en una torre del Instituto, recupera los diferentes vehículos desastrados en la expedición. A partir de estos dos films de Méliès, el viaje espacial comenzó a transformarse en uno de los temas por antonomasia del género aunque, veremos más adelante, ese hito no basta para definirlo totalmente, ni siquiera

CIENCIA-FICCIÓN

son rescatados por un grupo de marinos. En las escenas

37

En esta página y en la siguiente, diversos fotogramas de El hotel eléctrico, propuesta de CF del catalán Segundo de Chomón.

en la pantalla grande. Un año después del estreno de la segunda gran épica de Méliès, se produce la aparición de El hotel eléctrico, una creación del catalán Segundo de Chomón de 8 minutos de duración. Chomón es considerado el padre de la animación española, y pese a que este trabajo se emparenta con otras propuestas en las que los objetos inanimados adquieren vida súbitamente, en este caso existe una explicación racional para el prodigio, lo que aleja al film de la fantasía para insertarlo de lleno en el espectro de la ciencia-ficción. En este hotel del futuro, los pasajeros sólo necesitan apretar un botón para obtener cualquier cosa que deseen. Y todo funciona de maravillas para el protagonista hasta que los tableros de control de los ingenios se arruinan y se comienzan a dar toda una serie de experiencias cómicas que inevitablemente llevan a la conclusión de que el «progreso» exige un precio a cambio, uno que todos estamos obligados a pagar. También en 1905 se produce la aparición de la primera adaptación al celuloide de un clásico de Jules Verne. Twenty Thousand Leagues Under the Sea es un corto de 18 minutos de duración y oscuros orígenes, ya que se estrenó en Gran Bretaña a través de la compañía

38

la norteamericana Biograph. La historia introduce al

CIENCIA-FICCIÓN

francesa Gaumont, pese a haber sido producida por capitán Sam Whaler quien, mientras se encuentra pescando, descubre a un extraordinario monstruo marino. El capitán le cuenta su historia a un naturalista quien, tras confirmar las palabras del marino, decide montar una expedición para dar caza a la criatura. Cuando avistan nuevamente al monstruo, se descubre que se trata en realidad de un submarino, que hunde la nave expedicionaria pero rescata a sus tres tripulantes.

Dentro del submarino, los tres conocen al dueño del ingenio, quien los enrola para una fantástica aventura en el fondo del mar. Luchan y matan a un extraño pez y más tarde conocen el refugio secreto del submarino, donde deberán enfrentar nuevos y desconocidos secretos del mar. Más tarde, intentarán escapar de su misterioso anfitrión, y tras algunos fracasos lo lograrán, aunque no antes de pasar por un estadio de muerte y resurrección por gracia del dios Neptuno. Pese a que la película incluye momentos totalmente fantásticos, es una versión mucho más fiel al texto de Verne que la encarada en 1907 por el propio Méliès. Los primeros escarceos con el tema del viaje temporal se producen en 1906, con el estreno de How to Make Time Fly, un corto de 5 minutos del inglés Robert W. Paul. De acuerdo con las teorías de la época, una fotografía era capaz de capturar un momento temporal e inmortalizarlo. Con el advenimiento del cine, la posibilidad de grabar espacios temporales mayores y reproducirlos en el futuro se hizo también realidad, con la ventaja adicional de que esos momentos podían estirarse o reducirse a voluntad, simplemente cambiando la velocidad del proyector. En este caso, la historia muestra a una niña que remueve el péndulo del reloj de su abuelo, lo que genera el descontrol de los eventos de la escena se acomoden a la velocidad de las mismas. Poco a poco, el poder del reloj acelera el tiempo más allá de la casa, creando un tráfico vehicular de velocidad aterradora. Aunque el truco es sencillo y el film parece más un ejercicio que otra cosa, su premisa establece las bases de efectos como los que se verán, en 1960, en la clásica versión de The Time Machine, firmada por George Pal.

CIENCIA-FICCIÓN

las agujas del aparato que, a su vez, motivan que todos

39

También en 1906 se estrena The «?» Motorist, también de Paul, que gira en torno a un singular viaje espacial. En el inicio, el film presenta a una pareja paseando en auto. Cuando un policía los detiene por excederse en la velocidad, ambos inician un raid cada vez más rápido, que termina impulsándolos al espacio. Allí orbitan alrededor del sol y hasta aterrizan en los anillos de Saturno, donde después de dar un par de vueltas, regresan a la Tierra. En estos primeros años del siglo XX, los poderes de la electricidad eran aún un misterio para la gran mayoría de la gente y ofrecían una rica fuente de inspiración para los noveles creadores de ficciones cinematográficas. Uno de los ejemplos más interesantes se presenta en 1907, con el explícito título de Liquid Electricity, un producto nacido de la imaginación de J. Stuart Blackton, un creativo historietista y co-fundador de la Vitagraph Company de Nueva York. En la película se presenta a un químico trabajando en su laboratorio de electricidad –que predice de algún modo el que vemos en el Frankenstein de 1931–, donde logra destilar una especie de fluido eléctrico, con el que posteriormente se rocía. Instantáneamente, sus movimientos se aceleran, alcanzando una velocidad

40

Cuando los efectos terminan, el científico decide llevar

CIENCIA-FICCIÓN

que lo transforma en un mero borrón de movimiento. su creación más allá de los límites de su laboratorio, rociando a un grupo de holgazanes trabajadores, que inmediatamente terminan un camino a gran velocidad. Más tarde, una niña a punto de ahogarse es rescatada por un grupo de nadadores súper veloces, y los ejemplos se suceden a lo largo de los 8 minutos que dura la propuesta. El éxito alcanzado por la película llevó a la realización de una secuela en 1908, intitulada

En esta página y en la anterior, una escena de Deux cent milles lieues sous les mers, junto a dos imágenes de The «?» Motorist y un retrato de Robert W. Paul.

Galvanic Fluid.

acabar con el suave doctor Jekyll, a quien odia inten-

También en 1907, Méliès presenta otros de sus films

samente.

más reconocidos: Le tunnel sous La Manche, una

Este mismo año aparece, en los Estados Unidos, la pri-

verdadera profecía que muchos años después Europa

mera versión cinematográfica basada en la novela de

transformó en realidad. Los protagonistas de la cinta

H. G. Wells The Invisible Man (El hombre invisible) con

son el presidente francés y el rey inglés, quienes tras

el nombre de The Invisible Fluid. Un científico de gran

una amena velada sueñan con las posibilidades de un

erudición crea un misterioso fluido que carga en un

túnel que una a ambos países. Finalmente, los sueños

atomizador. Cuando rocía un objeto, éste desaparece

de los dos gobernantes se funden en un único éxito,

por un período de 10 minutos. El inventor le envía el

que permite el viaje de un tren por debajo del Canal

producto a su hermano, hombre de negocios él, con

de la Mancha, pero el suceso es de corta duración, ya

la intención de comercializarlo, pero el receptor, algo

que la obra se derrumba y la inundación acaba con

incrédulo, decide rociarse a sí mismo con el fluido y

muchas vidas. Los dos hombres despiertan por la im-

desaparece, ante el asombro del mensajero encargado

presión y cuando, a la mañana siguiente, se presenta

de entregarle el envío. El chico lee entonces la nota

un ingeniero con los planos para construir el túnel,

que acompaña al paquete y se da cuenta de las posi-

ambos deciden despedirlo y cancelar el proyecto. El

bilidades del invento. Sigue a una chica con un perro

tema del túnel reapareció en el cine de género en los

y rocía al animal, con lo que la muchacha continúa

años ’30, con la alemana Der Tunnel (1933), de Kurt

su paseo llevando una cadena vacía. La operación se

Bernhardt; y con la remake inglesa de ese film, The

repite en numerosas oportunidades, y a medida que

Tunnel (1935), firmada por Maurice Elvey.

los invisibles recuperan su visibilidad, comienzan a

Ya en 1908, aparece la primera versión de Dr. Jekyll

perseguir al chico, quien nuevamente los enfrenta con

and Mr. Hyde, basada en el clásico de Robert Louis

su atomizador, hasta que es capturado por un policía,

Stevenson. La novela era tan popular y había sido

que lo sorprende por la espalda. Ya en el tribunal, el

adaptada al teatro en tantas ocasiones, que la com-

joven se las ingenia para rociarse a sí mismo y lograr

pañía Selig Polyscope decidió utilizar una de esas

escapar. Ese mismo año, la compañía francesa Pathé estrena

protagonista se enamora de Alice, la hija del vicario

un trabajo de 11 minutos intitulado en Estados Unidos

local, pero lamentablemente es adicto a una droga de

The Monkey Man, uno de los primeros intentos cine-

su propia factura que saca a relucir, casi instantánea-

matográficos en torno al transplante de cerebros, que

mente, su naturaleza diabólica. Así, el doctor ataca a

en este caso involucra a un hombre y a un simio, con

Alice y cuando el padre de la chica intenta intervenir,

resultados más que nada graciosos.

lo asesina con su fuerza sobrenatural. Los ataques se

También en 1908, pero en Gran Bretaña, se presenta

suceden hasta que, en una última transformación, el

The Professor’s Anti-Gravitational Fluid, un film que

señor Hyde decide envenenarse, para de esa manera

toma la idea de la cavorita de H. G. Wells, que en este

CIENCIA-FICCIÓN

adaptaciones teatrales como base para su film. El

41

caso es una especie de polvo cuya aplicación genera una serie de consecuencias inesperadas. En todos los casos que hemos reseñado hasta el momento, algunas de las ideas más populares de la ciencia-ficción aparecen bosquejadas, muchas veces para difundir mensajes que tienen que ver con la ética de la ciencia o, las más, simplemente para provocar la risa de los espectadores. Pese a que se trata de simples bosquejos, quedan fielmente reflejadas las preocupaciones sociales respecto del avance científico y de sus posibilidades, algo que paulatinamente se hará mucho más evidente, sobre todo a medida que nos vayamos acercando al período de la Gran Guerra europea y a la aparición de otro concepto fundamental en el género: el de la invasión. Siguiendo con el relato de los cortometrajes estrenados en 1908, la próxima mención es para Voyage à la planète Jupiter, film firmado por Segundo de Chomón para la Pathé y concebido como competencia del exitoso trabajo de Méliès relacionado con el viaje a la Luna. En este caso, la trama gira en torno de un rey cuya ambición es extender su soberanía al espacio, con lo que llega a Júpiter, descubriendo allí que el planeta tiene su propio soberano, al que le disgustan las ambiciones de su par terrestre. Al final, el viaje se

CIENCIA-FICCIÓN

42

revela como un sueño del monarca. El último film de 1908 que nos interesa destacar es When the Man in the Moon Seeks a Wife, una producción británica que introduce la figura de un alienígena empeñado en conseguirse una esposa terrestre. Ya ubicados temporalmente en 1909, Walter R. Booth estrena The Airship Destroyer, una propuesta de CF con todas las letras que relata un ataque aéreo sobre Gran Bretaña y el empeño de un joven inventor tanto

En la página anterior, retrato de J. Stuart Blackton y dos escenas de Liquid Electricity. A la derecha, tres fotogramas de Le tunnel sous La Manche y uno de Der Tunnel (1933).

por conquistar el corazón de la familia de su amada como por construir un método de defensa efectivo del suelo patrio. En la tercera parte del film, el joven inventa lo que puede considerarse el primer misil tierra-aire del cine, una especie de torpedo controlado a distancia vía electricidad, que puede ser dirigido contra un objetivo aéreo en movimiento. La calidad de la propuesta fue tan avanzada que sería reestrenada seis años después, en 1915, cuando Inglaterra sufría los ataques de los zeppelines alemanes. La invasión de Inglaterra por parte de alguna potencia del continente europeo, era una preocupación central de la sociedad de la isla –de hecho, se mencionaba como posibles agresores a Francia, Alemania y hasta Rusia–. Uno de los films más destacados sobre el tema fue England Invaded, una especie de espectáculo multimedia que incluía metraje cinematográfico, recitados, canciones y escenas teatrales. Otro film relacionado con el tema de la invasión, estrenado en el período, fue The Invaders, otra producción inglesa que relata una solapada irrupción de soldados extranjeros en Gran Bretaña, que es conjurada por el coraje de una heroína y la intervención del Ejército Territorial. Ese mismo año, y retomando el tema de la electricidad, formations, una sátira en torno de una figura de la época, el Dr. Walford Bodie, quien sostenía que era capaz de curar cualquier enfermedad con sus aparatos eléctricos. En la trama, cuyo sentido es la comedia, una serie de objetos metálicos adquieren diferentes formas y hasta el rostro de algunos protagonistas, generando una serie de escenas divertidas. En 1909, además, se presenta L’homme invisible, otra

CIENCIA-FICCIÓN

se estrena también en el Reino Unido Electric Trans-

43

En esta página y en la siguiente, imágenes de la versión de 1908 de Dr. Jekyll and Mr. Hyde, de The Invisible Fluid y de Voyage à la planète Jupiter, junto a tres escenas de The Airship Destroyer.

película basada en la popular novela de Wells cuya trama gira en torno a un joven empeñado en reproducir el experimento narrado por el escritor inglés en su libro. También por ese entonces se presenta una nueva obra de Méliès, Hydrothérapie fantastique, en la cual una máquina prodigiosa es capaz de tratar la obesidad, aunque con un método algo extremo… Casi al mismo tiempo, se ofrece en Inglaterra una producción francesa titulada localmente Life in the Next Century, cuya consigna es mostrar un posible futuro de la Humanidad, ubicado temporalmente en 2010. El nudo de su trama muestra todas las comodidades que ha conseguido el hombre común a partir de la automatización masiva y refleja, a diferencia de la mayoría de las propuestas de la época, una mirada positiva sobre el Progreso tecnológico. De 1909 también nos interesa destacar The Rubber Man, primera producción norteamericana en presentar la figura de un autómata bien en la tradición de la ciencia-ficción, ya que la historia gira en torno a un robot fuera de control, que aterroriza a la sociedad hasta que finalmente es reducido en virtud de un desperfecto eléctrico. Este film es el primero en plantear la posibilidad de una creación de este tipo como posible

44

Además de la aparición del Frankenstein producido

CIENCIA-FICCIÓN

enemigo de la Humanidad. por Edison, 1910 señala el estreno de otros films igualmente señeros para el género. El primero que nos interesa destacar es The Aerial Submarine, otra cinta de Walter R. Booth que involucra la utilización de un ingenio bélico de tecnología de avanzada, que puede tanto volar como desplazarse bajo el agua, y que sirve a los oscuros propósitos de una reina pirata. Otro film interesante por su apego histórico de este período es

The Comet, un corto de 11 minutos que toma como protagonista principal al cometa Halley, cuerpo celeste que aterrorizó a los habitantes de la Tierra de 1910 con la posibilidad de un choque que, finalmente, no se produjo. En la trama, el cometa destruye la Tierra y los pocos seres humanos que logran sobrevivir lo hacen escondiéndose en profundas cuevas naturales. En el final, la película ofrece una panorámica de la superficie del planeta devastada. Otro tema que vuelve una y otra vez al cine de la época es el planteado por Robert Louis Stevenson en su clásica novela. The Duality of Man es una producción inglesa que sigue esos lineamientos, con todos los ingredientes clásicos, incluyendo la auto inmolación del protagonista. El tópico también es reflejado en la cinematografía danesa de 1910 a través de Den Skaebnesv Angre Opfindelse, considerada por la crítica como una de las mejores adaptaciones a la pantalla grande del momento, aunque en el final la criatura no se suicida sino que despierta de un sueño pesadillesco. La electricidad como núcleo de una historia tampoco está ausente en el final de la primera década del siglo XX, y Walter Booth fue el encargado de presentarla en su film The Electric Vitaliser, que muestra a un excéntrico científico que descubre que la electricidad riencias con un pececito que es la mascota de su hija. Las cosas se complican cuando el inventor comienza a revivir también objetos inanimados, dando vida a estatuas y figuras del museo de cera cercano, hasta llegar a una resolución donde todo, aparentemente, vuelve a la normalidad… Nuestro recorrido por las producciones de 1910 se completa con A Trip to Mars, un film producido por la

CIENCIA-FICCIÓN

es capaz de revivir cuerpos muertos, e inicia sus expe-

45

En esta página y en la siguiente, fotogramas de Electric Transformations, de L’homme invisible, de Hydrothérapie fantastique y de Den Skaebnesv Angre Opfindelse.

compañía Edison y que utiliza como mecanismo para viajar por el aire y el espacio, la combinación de dos polvos químicos que juntos logran repeler la gravedad –nuevamente la idea de Wells–. Después de volar alrededor del mundo, el científico protagonista llega al planeta Marte, que resulta ser una tierra de gigantes, que lo maltratan bastante y tras un casi milagroso retorno a su laboratorio, el hombre decide destruir su invención, aunque con trágicas consecuencias. De 1911 nos importan dos producciones de temas ya transitados. La primera es The Aerial Anarchists, un nuevo trabajo de Booth relacionado con el dominio del aire, que en la oportunidad tiene como villanos de turno a unos anarquistas, quienes construyen un avión con el objetivo de bombardear Londres. Como se puede apreciar, además de los adelantos tecnológicos, en este film se filtran otras preocupaciones más prosaicas de la sociedad de la época, como era el ascenso de los anarquistas y la difusión de sus métodos de lucha violentos, algo que no será ajeno ni siquiera a la sociedad argentina del Centenario. La segunda película a citar es una producción francesa que en Estados Unidos se intituló One Hundred Years After y predice la vida en Nueva York un siglo después.

46

genia para visitar el próximo siglo y el ascenso social

CIENCIA-FICCIÓN

Los núcleos temáticos incluyen la invención de la criode la mujer hasta establecerse como el «sexo fuerte» de la sociedad del futuro, donde son los hombres quienes no pueden votar ni acceder a cargos políticos de relieve. Asimismo, hay una mención a la liberalización de las costumbres sexuales y una especie de vuelta a la normalidad en el final del metraje. Ya ubicados en 1912, Georges Méliès presenta una de sus últimas y más largas películas, A la conquête

du Pôle, cuya trama gira nuevamente alrededor de

como los «Norteños», cuyo jefe tiene un nombre de

un viaje expedicionario emprendido por científicos

indubitable ascendencia alemana, una heroína y un

y utilizando un artefacto volador. El aerobús se es-

valiente grupo de soldados ingleses que son capaces,

trella en el Ártico, donde encuentran a un gigante, y

una vez más, de evitar la invasión de su patria.

posteriormente los expedicionarios logran regresar al

Pero además de los obvios temas bélicos, en 1914 se

punto de origen. No es lo mejor de Méliès, quien ya

estrena la primera versión de Der Golem, cuya historia

demuestra verse sobrepasado por los adelantos, en lo

muestra a unos obreros que descubren, en el siglo XX,

que a efectos especiales se refiere, alcanzados por el

una enorme estatua en las ruinas de una sinagoga. La

cine de la época.

figura pasa a manos de un anticuario, quien la anima

Un año después, en 1913, se produce el estreno de

y la utiliza como su sirviente, hasta que la criatura se

una nueva versión de Dr. Jekyll and Mr. Hyde, de 30

rebela y emprende una matanza hasta arribar a su

minutos de duración, producida por Carl Laemle –el

trágico final. Paul Waggener, el protagonista y co-

fundador de Universal–, y protagonizada por King

guionista de la historia, no estuvo satisfecho con los

Baggott. La línea argumental es similar a la expuesta

resultados, y decidió rehacer su propuesta en 1920,

en otras adaptaciones, a excepción del clímax, donde

como veremos más adelante. Queda claro para cual-

Hyde muere por una sobredosis del antídoto para su

quier espectador que esa última versión aporta una

mal.

serie de escenas que se transformarían en íconos de

El año 1914 aportó varias novedades. En primer tér-

la serie dedicada a Frankenstein en la Universal, y de

mino, se presentan dos interesantes producción que

hecho, el film de 1914 puede verse como una especie

giran en torno al tópico de la invasión de Inglaterra,

de secuela de lo que Waggener expondría en 1920.

England’s Menace y If England Were Invaded. El pri-

Otro hecho singular de 1914 es la aparición de un primer serial con elementos de ciencia-ficción en su trama. Se trata de The Exploits of Elaine, un producto

trama muestra cómo se logra desbaratar una invasión

nacido al calor del éxito obtenido por la actriz Pearl

de un enemigo anónimo gracias al valeroso aporte de

White con otro serial anterior, The Perils of Pauline. La

una heroína. La segunda cinta está basada en un libro

trama presenta a Elaine Dodge, una atlética heroína

clásico sobre el tema de la invasión, publicado con el

determinada a encontrar al asesino de su padre, un

título de The Invasion of 1910, y con ese nombre co-

villano apodado «La Garra» (Sheldon Lewis). La chica

menzó a producirse, aunque con la llegada de la fecha

cuenta con la ayuda de uno de los más famosos detec-

y la falta de una invasión verdadera, se decidió cambiar

tives científicos, Craig Kennedy (Arnold Daly), quien

el título de la propuesta, que pasó a ser The Invasion

parece poseer una batería inagotable de artilugios

of England. El título definitivo se impuso después del

tecnológicos que salvan a Elaine de sus predicamen-

inicio de la Gran Guerra, y su trama incluye una vez más

tos. Aunque se la considera como una de las primeras

a un ignoto enemigo, al que se nombra genéricamente

producciones en las que la mujer tiene un rol positivo

CIENCIA-FICCIÓN

mer film fue estrenado en junio de 1914, un par de meses antes de que comenzara la Gran Guerra, y su

47

A la izquierda, dos imágenes y un afiche promocional de la versión de 1914 de Der Golem, uno de los grandes hitos del primer cine alemán.

en la pantalla, la historia refleja, sin embargo, que la heroína no deja de meterse en problemas para ser rescatada, una y otra vez, por su tecnológico compañero. La última mención de este año corresponde a The Magic Glass, un film que presenta a un profesor que inventa un fluido que, esparcido sobre sus anteojos, le permite ver a través de objetos sólidos (la clásica visión de rayos X). Así, el científico se dedica a espiar las actividades de su familia, pero es descubierto por su hijo, que aplica el mismo líquido a sus anteojos y a los de su madre. La mujer, con el prodigio, descubre a su marido besando a la sirvienta, lo que genera un altercado entre todos los miembros de la familia. Ya ubicados en el año 1915, los seriales con elementos relacionados con la CF parecen multiplicarse. En primer término citaremos a The Black Box, una propuesta de 11 capítulos de unos 25 minutos de duración cada uno, que tiene como protagonista a otro investigador munido de fantástica tecnología. Entre los aparatos presentados en la trama se pueden citar uno que sirve para leer la mente, un traje que hace invisible a quien lo utiliza y más cosas por el estilo. Otro serial de la época fue Lady Baffles and Detective Duck, de 11

48

nizado por un detective tecnológico dedicado a sacar

CIENCIA-FICCIÓN

capítulos también, y proyecto nuevamente protagode problemas a su ocasional compañera de andanzas. Los increíbles inventos presentados incluyen desde una especie de circuito cerrado de televisión hasta un gas lacrimógeno. A estos dos nuevos seriales se sumaron las continuaciones de las aventuras de Elaine Dodge: The New Exploits of Elaine (10 capítulos) y The Romance of Elaine (12 capítulos). En la primera, se presentan una

En esta página, dos imágenes del serial The Exploits of Elaine, junto a un retrato de su protagonista, la actriz Pearl White.

especie de computadora, un detector de mentiras y varios aparatos de comunicaciones inalámbricas. Y la trama, en la oportunidad, muestra a la heroína a merced de un nuevo villano llamado Wu Fang. El segundo serial incluye a un misterioso doctor X, quien pretende apropiarse de los planos de un prodigioso torpedo diseñado por el aparentemente desaparecido Craig Kennedy. La intención del villano es minar toda la costa Este de los Estados Unidos, y Elaine contará con el aporte de un nuevo protector y la reaparición de Kennedy, que se produce en el último episodio, para desbaratar los planes del maléfico doctor. En 1915 se produce, además, el estreno del primer largometraje inspirado en el clásico literario de Mary Shelley. Nos referimos a Life Without Soul, un film de 70 minutos de duración, rodado en locaciones naturales de Florida, Georgia, Arizona, Nueva York y el océano Atlántico. En la historia, Frankenstein se convierte en el doctor William Frawley, y el monstruo en «la Creación». Percy Darrell Standing, el actor inglés encargado de dar vida al ser artificial, utilizó muy poco maquillaje adicional, pero fue muy reconocido por su interpretación. Pese a sus buenos aportes, la película falló en aspectos tales como la distribución y el estreno, lo que llevó a que fuera relanzada en 1916, con una Por esa fecha se lanza también un largometraje intitulado The Flying Torpedo, producido nada menos que por D. W. Griffith y que retoma el tema de los misiles tierra-aire planteado en 1909 por el británico Walter Booth en su film The Airship Destroyer. En la trama, un escritor de buena posición ayuda, financieramente, a un amigo inventor para crear un torpedo volador controlado por radio. El inventor es vigilado

CIENCIA-FICCIÓN

impronta algo diferente.

49

En esta página, afiche y fotograma de otro serial: The Black Box. En la página siguiente, escenas de The Romance of Elaine, de The Flying Torpedo, de Life Without Soul y de The Intrigue.

por agentes enemigos y, en cuanto perfecciona su creación, es atacado, siendo despojado de su trabajo. El novelista, con la ayuda de su ayudante sueca, aplica sus propias técnicas detectivescas para seguir el rastro de los espías. La chica será la encargada de advertir a las autoridades cuando su patrón es atrapado por el enemigo, con lo que salva la vida del novelista. En ese momento, los asiáticos atacan a los Estados Unidos e invaden la costa Oeste del país. Así se comienza la producción masiva del torpedo volador, y un verdadero enjambre de estos ingenios obliga a los invasores a retroceder a sus barcos. Siempre en 1916, el siguiente proyecto que nos interesa destacar es The Hand of Peril, propuesta del francés radicado en los Estados Unidos Maurice Tourneur quien, junto con Griffith, fue uno de los directores más originales del Hollywood de los años ’20. La trama gira en torno a un detective tecnológico –un tema ya bastante explorado por el cine de la época–, que posee todo tipo de artilugios incluyendo un aparato de rayos X que hace las paredes transparentes, como si fueran un espejo de un sólo sentido. Ese mismo año también vio la aparición de uno de los seriales más renombrados del género, Homunculus,

50

el transcurso de la Primera Guerra Mundial, llegando

CIENCIA-FICCIÓN

que fue ampliamente popular en Alemania durante incluso a influir en la moda del período. Olaf Foenss, un actor de origen danés, es el encargado de personificar a un hombre artificial perfecto que, cuando descubre que carece de alma y es incapaz de sentir amor, decide vengarse contra toda la Humanidad, instigando revoluciones y convirtiéndose en un tirano. En el final de la trama, un relámpago destruye al protagonista. El serial ofrece seis diferentes partes, de entre 60 y 75

minutos de duración, y en 1920 se estrenó una versión condensada de 275 minutos, dividida en tres partes. En 1916 se estrena también The Intrigue, una historia que sigue a un joven inventor norteamericano que ha creado un arma tipo rayo láser, que es capaz de electrocutar a la gente. Cuando el gobierno de su país muestra escaso interés por su artefacto, el ambicioso inventor intenta tentar a los traficantes de armas de Europa, generando un enfrentamiento entre dos países rivales por la posesión del invento. A continuación se produce el estreno de una nueva versión de Twenty Thousand Leagues Under the Sea, basada en una serie de cuadros presentados en la novela original de Jules Verne que da nombre a la cinta, y en otros sacados de la trama de La isla misteriosa, secuela de la anterior. Nemo intenta, con su magnífico submarino, destruir los barcos de guerra de todas las naciones del mundo, y después de hundir un navío de los Estados Unidos, recoge a algunos sobrevivientes para instruirlos en los secretos de la vida en el fondo del mar. Cuando todos desembarcan en una misteriosa isla, los náufragos conocen a la hija de Nemo, que es secuestrada por un grupo de árabes y posteriormente rescatada por su padre y los prodigiosos poderes del Nautilus. Entre de una cámara capaz de ejecutar tomas submarinas, tecnología que permaneció vigente hasta fines de los años ‘20. Finalmente, nuestro recorrido por las producciones de 1916 se completa con un proyecto escandinavo: Verdens Undergang. La premisa del film es el fin del mundo, que acaecerá por el choque de un cometa contra la Tierra. Esto provoca un levantamiento de los más

CIENCIA-FICCIÓN

sus principales innovaciones está la de la invención

51

pobres contra las clases acomodadas, cansados de sus excesos y de su negativa a que accedan, incluso ante la perspectiva del fin, a todo aquello que les ha faltado siempre. El protagonista fue el mismo del gran éxito germano del momento, el danés Olaf Foenss. El año 1917 inaugura su participación en la ciencia-ficción cinematográfica con Himmelskibet, una película que probablemente sea la primera en enfocarse en el tema del viaje espacial de manera realista y, sin dudas, la única de ese estilo realizada en Dinamarca. La historia sigue al personaje del profesor Planetarios, quien viaja a Marte en compañía de su hijo. En el planeta rojo encuentran a un pueblo pacífico y vegetariano, y la hija del Sumo Sacerdote marciano acuerda regresar a la Tierra con los viajeros. Una vez desembarcados, su mensaje de paz tiene una gran acogida, excepción hecha del villano de turno, quien finalmente muere fulminado por un rayo. Es interesante señalar que se trata de una apelación a la paz realizada en el tercer año de la sangrienta Primera Guerra Mundial, por lo que no fue estrenada sino hasta 1918. La siguiente película danesa dedicada a la ciencia-ficción será Reptilicus, un clásico del cine de monstruos gigantes, estrenado en 1962.

52

Mystery Ship, un trabajo de 18 capítulos protagoni-

CIENCIA-FICCIÓN

El serial de este año que nos interesa señalar es The zado por el popular dúo conformado por Ben Wilson y Neva Gerber, y co-dirigido por el hermano de John Ford, Francis O’Fearna. El serial sigue las aventuras de la pareja protagónica, desde su hostil primer contacto hasta el momento en que se ponen de novios, transformando en el proceso al prometido de la protagonista en el villano de la trama, quien roba un mapa del tesoro al padre de la chica e intenta asesinarla.

En la página anterior, imágenes del exitoso serial germano Homunculus. A la derecha, fotogramas de los films nórdicos Himmelskibet y Verdens Undergang.

Un misterioso extraño –que luego se revela como el padre de la protagonista– es el encargado de salvar a la pareja de múltiples peligros, utilizando una nave plateada cargada de maravillas científicas tales como una especie de rayo láser y otro de energía eléctrica, que es capaz de paralizar a sus contrincantes. Ya ubicados temporalmente en 1918, se produce la aparición de Alraune, película que muestra cómo un científico crea a una mujer de incomparable belleza tras inseminar artificialmente a una prostituta con el semen de un hombre recientemente ejecutado en la horca. La chica se convierte en villana cuando descurecuperar una fórmula robada, cuyas propiedades

persona de su creador. En la misma época se estrenó

hacen invisible a la gente. En este caso, tanto el héroe

otra versión de la historia con idéntico título, dirigida

como el villano de turno están provistos con diversos

por Mihaly Kertesz –más tarde conocido como Michael

aparatos tecnológicos, que les permiten un singular

Curtiz, el director de Casablanca (1942)–, en la que la

enfrentamiento.

concepción de la muchacha se produce por la cópula

También en 1919 se produce la aparición de Die Spin-

de una prostituta con una raíz de mandrágora.

nen, una historia de aventuras a la Indiana Jones, que

En ese tiempo se estrena también Victory and Peace,

originalmente fuera diseñada para presentar cuatro

un film épico financiado por el Ministerio de Informa-

diferentes partes, de las que sólo se realizaron dos. Su

ción inglés, que describe una posible invasión germana

director, Fritz Lang, sigue la peripecia de un aventure-

de la isla. Con un gran presupuesto y mucha ambición,

ro norteamericano llamado Kay Hoog (Carl de Vogt),

la cinta demoró muchísimo en su realización, con lo

quien debe enfrentarse con Lio-Sha (Ressel Orla) y su

que, cuando estuvo terminada, la guerra ya había

banda de «Arañas» –a las que hace referencia el títu-

finalizado, inutilizando su intención propagandística

lo–, cuya base está en territorio inca. El enfrentamiento

y causando que nunca fuera exhibida en público.

entre ambos lados, además del rescate de la típica

Ya en el final de este recorrido por los primeros films

damisela en peligro, tiene por objeto apoderarse de un

con elementos de ciencia-ficción, llegamos al año 1919.

fabuloso diamante, cuya posesión asegura el dominio

El primer título que nos interesa de esta época es un

del mundo. Las «Arañas» presentan una guarida plena

serial, The Carter Case, que marca la resurrección del

de artefactos tecnológicos y de vigilancia, en un dise-

detective científico Craig Kennedy y lo pone en una

ño marcadamente futurista que, de alguna manera,

trama en la que un investigador químico es asesina-

anticipa los escenarios presentados por Lang en otras

do y su hija debe luchar –junto al detective– para

de sus propuestas relacionadas con el género.

CIENCIA-FICCIÓN

bre el secreto de su origen, y decide vengarse en la

53

EVOLUCIÓN EL CINE DE CF EN LOS AÑOS ‘20

Con la llegada de una nueva década del siglo se produce un fenómeno que no volvería a repetirse sino hasta muchos años después. En este punto, la ciencia-ficción cinematográfica, europea y norteamericana, emprende dos caminos distintos, y mientras los realizadores del Viejo Continente abrazan el género para explorar sus posibilidades, en Estados Unidos se da preponderancia a la mera aventura con matices tecnológicos, tal como vimos en los diferentes seriales que hemos reseñado hasta el momento. En Alemania, directores como Paul Wegener, Henrik Galeen y hasta el propio Fritz Lang, ponen el acento en los elementos más fantásticos y de características predictivas de la ciencia-ficción. En Rusia, ya convertida en la Unión Soviética, artesanos como Jakov Protazanov y Lev Kuleshov transforman las aventuras ligeras en films con un fuerte contenido social e ideológico. Finalmente, en Francia, René Clair y Jean Renoir, entre otros, seguirán apostando por el experimentalismo a la hora de abordar temáticas de género. Las visiones europeas son, por definición, mucho más oscuras, y si como hemos afirmado en capítulos anteriores, la ciencia-ficción es una especie de «realismo hipotético», la debacle de la posguerra europea no es ajena a la impronta del cine de este

54

lineales sobre el tema. Lo cierto es que las preocupa-

CIENCIA-FICCIÓN

tipo en el período, pese a que no haya casi menciones ciones sociales están muy presentes en el cine de los ’20, aportándole un rasgo distintivo y único. En los Estados Unidos se asiste a un fenómeno diferente. El país, militante del aislacionismo casi hasta la finalización de la Gran Guerra –recién ingresa en el conflicto en 1917–, atraviesa un período de florecimiento económico que la Gran Depresión de los ’30 pondría en entredicho. La ciencia-ficción cinematográfica, vol-

En la página anterior, retrato de Fritz Lang junto al afiche y dos escenas de Dr. Jekyll and Mr. Hyde (1920). A la derecha, otra imagen del citado film junto a dos fotogramas de Der Lanuskopft.

cada hacia el género aventurero, se destaca a través de los seriales, estableciendo las bases de lo que será la época dorada de los mismos, una década después. Asimismo, se produce otro fenómeno significativo: el cine se mimetiza profundamente con la literatura, y los seriales y las propuestas de aventura tecnológica tienen su correlato en las revistas pulp y, particularmente, en los lineamientos imaginados para la ciencia-ficción por Hugo Gernsback en su revista Amazing Stories, camino que seguirán numerosas publicaciones, hasta establecer los años ’50 como la época dorada de la literatura de esta impronta (curiosamente, la década citada también dará lugar a la aparición de un conjunto de películas de CF muy logradas, aunque sus bases contextuales serán bastante diferentes). La llegada del sonido al cine, que se produce a finales de los años ’20 y que se establece definitivamente en los ’30, tendrá un efecto negativo respecto del posterior desarrollo de la ciencia-ficción cinematográfica europea por la imposición del modelo norteamericano a escala mundial. De esa manera, y con escasas excepciones, el género se convierte en una especie de «patio trasero» de los realizadores radicados en Hollywood que, irónicamente, abandonarán la ciencia-ficción en los ’30, utilizando únicamente algunos de sus elemencinematográficos. La primera propuesta de 1920 que nos interesa destacar es una nueva versión de Dr. Jekyll and Mr. Hyde, producida por Famous Players Lasky –futura Paramount– y protagonizada por John Barrymore, lo que le da cierto aire mainstream a la cinta. Es, sin lugar a dudas, la más famosa de las adaptaciones del trabajo de Stevenson en el período silente del cine, y

CIENCIA-FICCIÓN

tos más destacados para dar vida a nuevos géneros

55

En esta página y en la siguiente, imágenes de la versión de 1920 de Der Golem, una impresionante obra maestra de Paul Wegener, que anticipa los motivos y la estética del expresionismo alemán.

la transformación de Barrymore en el señor Hyde, sin maquillaje y frente a las cámaras, le trajo una miríada de aclamatorias críticas al actor en los Estados Unidos. El guión combina elementos de la novela original con los de la adaptación teatral escrita por Richard Mansfield. Antes de que Lon Chaney se estableciera como el indiscutido rostro del terror, Barrymore interpretó docenas de personajes bizarros, tanto en el teatro como en el cine. La nueva Dr. Jekyll and Mr. Hyde transcurre en el Londres victoriano y su guión introduce elementos a la historia que se transformarán en lugares comunes de las producciones clásicas posteriores, como por ejemplo la presentación de dos actrices protagonistas, que en este caso interpretan Martha Mansfield y Nita Naldi. En esta versión también aparece un amoral mentor de Jekyll, elemento tomado del trabajo de Oscar Wilde El retrato de Dorian Gray. Pocas semanas después de este estreno, la Pioneer Films presenta su propia versión de la obra de Stevenson, con la única intención de beneficiarse con el éxito alcanzado por la producción de Adolph Zukor. El productor de Pioneer era Louis B. Mayer –futuro zar de la industria– y su historia estaba ambientada

56

posibles acciones legales de la productora del film de

CIENCIA-FICCIÓN

en la Nueva York contemporánea, tanto para evitar Barrymore como para abaratar el ítem referido al vestuario. La cinta fue protagonizada por Sheldon Lewis, actor reconocido por sus protagónicos en diferentes seriales de la época, y el resultado fue tan patético que el film pronto pasó al olvido y ninguno de los involucrados lo rescataría jamás. El director sacó su nombre de los créditos y Louis B. Mayer desconoció haber participado en el fiasco. Curiosamente, Sheldon

Lewis repitió su doble papel de Jekyll y Hyde en un corto sonoro de 1929. En noviembre de 1920, dos de los principales representantes del expresionismo alemán, F. W. Murnau (director) y Karl Freund (director de fotografía) serán los responsables de una nueva adaptación germana de la obra, titulada Der Januskopf, a la que nos referiremos más extensamente en el capítulo dedicado al expresionismo alemán. Ese año, además, se estrena una producción francesa llamada L’empire du diamant, cuya trama sigue la peripecia de dos científicos responsables de haber inventado un procedimiento para generar diamantes artificiales. Como el prodigio lleva a la baja el precio internacional de las gemas, los inventores son declarados criminales y perseguidos por Francia por un detective, su hermana y el novio de la chica. El director y guionista, Léonce Perret, ha sido señalado por la crítica como un precursor en el negocio cinematográfico, con capacidades técnicas que lo ubican incluso un escalón por encima de D. W. Griffith. La preeminencia del cine norteamericano a nivel mundial, y la vanguardia surgida de Alemania, han llevado a que el trabajo de este director haya sido subestimado durante mucho tiempo y que permanezca como un desconocido para También en 1920, Paul Wegener estrena Der Golem: wie er in die Welt kam, la mejor de las películas basadas en la antigua leyenda hebrea del ser artificial. Como ya hemos indicado, Wegener hizo una primera incursión en el tema en 1914, y tres años después, el actor realiza una especie de secuela de su película, a la que tituló Der Golem und die Tänzerin y que cuenta la historia, en tono de comedia, de un hombre que

CIENCIA-FICCIÓN

el gran público.

57

En esta página, dos imágenes y una tarjeta de lobby de A Blind Bargain, film que presenta una nueva actuación dual de Lon Chaney. En la página siguiente, dos escenas de Dr. Mabuse, der Spieler.

después de ver Der Golem en el cine decide disfrazarse como la criatura y asustar a una bailarina en su departamento. El film utiliza fragmentos de la versión original y es, probablemente, la primera secuela o intento de saga de la CF cinematográfica. Tanto la versión de 1914 como la de 1917 se encuentran perdidas, y sus argumentos se han reconstruido a partir de noticias periodísticas. La tercera visita de Wegener –esta vez en compañía de Carl Boese– al mito del monstruo de arcilla se daría en 1920, con el estreno que nos ocupa en estas líneas, única de las tres versiones que puede verse en la actualidad. El film se plantea como una precuela de la película original y traslada su acción a la Praga del siglo XVI, donde el rabino Benjamin Yehuda Loew modela una estatua de arcilla del Golem y le da vida utilizando un amuleto y la palabra mágica «Aehmet», pronunciada por un demonio, para defender a los suyos de la expulsión ordenada por el emperador Rodolfo II. La criatura derrota a los perseguidores de los judíos pero el ayudante del rabino, Famulus, envía al Golem tras los pasos de un joven llamado Florian, quien pretende seducir al amor secreto del villano, Miriam, hija del rabino. El Golem destruye todo a su paso hasta que

58

secuestra a Miriam, hasta que una niña le arrebata el

CIENCIA-FICCIÓN

finalmente asesina a Florian, pero decide ir más allá y amuleto que rodea su cuello y lo transforma nuevamente en una estatua sin vida. Esta tercera visita de Wegener al mito es realmente asombrosa y de una calidad muy superior a sus dos anteriores intentos, sobre todo gracias a la creación de escenarios más elaborados, en exteriores, y personajes afines, lo que le da más credibilidad a la historia. Entre los miembros del equipo técnico figuraba Karl Freund

como cameraman, personaje que luego dirigió algunos

haber y maestro de las interpretaciones dobles, y en este caso la trama narra la historia de un científico (Chaney) que se embarca en la experimentación con

tas. La película fue un éxito en todo el mundo y puso

glándulas animales, con la esperanza de desarrollar

a la industria cinematográfica alemana al tope de las

un compuesto rejuvenecedor. Uno de sus peores ex-

preferencias a la hora de adaptar leyendas o fantasías

perimentos se transforma en una criatura jorobada y

macabras a la pantalla grande. En los Estados Unidos

simiesca, interpretada también por Chaney, y en ese

fue presentada tres años después del debut alemán,

momento ingresa a la historia un ex-soldado quien, a

y permaneció en las marquesinas durante 10 meses

cambio de una operación que necesita su madre, acep-

seguidos en la ciudad de Nueva York. Una anécdota

ta convertirse en sujeto de los macabros experimentos

grafica el suceso y repercusión del film: diez años des-

del profesor. Finalmente, la deforme criatura logra

pués, cuando Wegener paseaba por las calles del barrio

salvar al soldado y al resto de los experimentos fallidos

judío de Amsterdam, la gente se reunía y murmuraba

encerrados en el laboratorio, quienes toman revancha

entre sí a su paso, señalándolo. Cuando el actor se

en el científico, lo asesinan y destrozan el lugar.

volvió para interrogar a alguno de ellos respecto de

También en 1922 se presenta La cité foudroyée, que

tal conducta, la gente se apartó y comenzó a gritar:

sigue la peripecia de un científico loco cuyo objetivo

«¡El Golem! ¡El Golem!»

es dominar al mundo a través del uso de un arma de

El producto generó otra secuela estrenada en 1920,

rayos de su invención. Las escenas más espectaculares

en vena cómica, producida en Austria e intitulada Der

se dan cuando el demente creador apunta su rayo

Dorfsgolem, en la que la criatura es revivida por un

sobre París, y destruye la torre Eiffel.

granjero para ser utilizada como mano de obra barata

Ese mismo año se estrena otra cumbre del cine de

para las labores del campo.

Fritz Lang: Dr. Mabuse, der Spieler, una predicción

En la senda de las remakes, en 1921 se estrena A Messa-

mucho más exacta de las futuras condiciones del mun-

ge from Mars, nueva versión de la propuesta británica

do que la propuesta por George Orwell en su clásico

presentada en 1913. La historia gira en derredor de

literario 1984. En un principio, la cinta de Lang fue

un marciano que es enviado a la Tierra por el Dios de

tomada como un retrato realista de los sucesos de su

Marte para castigar a los terrícolas. Y antes de que

tiempo, con la corrupción y la inflación desbocadas

pueda regresar a su propio planeta, el protagonista

en Alemania. Los levantamientos sociales habían sido

debe cambiar a un egoísta de antología y transfor-

liquidados de cuajo con los brutales asesinatos de Rosa

marlo en un hombre de bien y desinteresado, algo

Luxemburgo y Karl Liebknecht en 1919, en tanto que

que finalmente logra.

las prácticas delictivas de políticos y empresarios pa-

Un año más tarde, Lon Chaney protagoniza A Blind

recían no tener límites. El propio director declaró que

Bargain. En ese momento, Chaney era un veterano

el film contaba con un prólogo, no estrenado, en el

de la pantalla grande, con casi 200 películas en su

que se presentaban en collage tanto el levantamiento

CIENCIA-FICCIÓN

de los clásicos de terror más relevantes de la Universal en los años ‘30 y trabajó con otros notables expresionis-

59

En esta página y en la siguiente, diferentes escenas y un afiche promocional de una de las cumbres cinematográficas de Fritz Lang: Dr. Mabuse, der Spieler.

socialista como la violenta represión de los grupos de derecha, apañada por el Estado. Como afirma el refrán, no hay nada nuevo bajo el sol… En Dr. Mabuse, der Spieler, el protagonista es un siniestro mesmerista y psiquiatra que se aprovecha de sus capacidades para amasar una inmensa fortuna y un poder afín. Su procedimiento consiste en frecuentar y cultivar la amistad de hombres poderosos, jugar a las cartas con ellos, y utilizar sus poderes hipnóticos para aprovecharse de todas las maneras posibles. Sin embargo, Mabuse debe enfrentarse al metódico detective Wrenk, cuya mente no es tan fácil de dominar. Mabuse se ha convertido, con el correr de los años, en una producción fundacional del tema de las mentes criminales maestras y refleja de alguna manera las inquietudes políticas del director, aunque resulta algo exagerado afirmar que se trate de un claro cuestionamiento del nazismo que, en 1922, fecha de estreno de la primera película dedicada al personaje, era apenas un movimiento insignificante en la vida de la república de Weimar. Mabuse es un personaje desapegado, capaz de dejar de lado sus sentimientos. En la película declara: «No existe amor, sólo hay deseo. Nada es interesante salvo jugar con las personas y su

60

no duda en reemplazarla. Es justamente esta caracte-

CIENCIA-FICCIÓN

destino», y cuando su novia en la ficción es apresada, rística de desafección propia del poderoso, como la de su capacidad de ocultarse tras las bambalinas, la que fue creciendo en posteriores entregas dedicadas al personaje. El terror que provoca Mabuse es muy humano y muy cercano, y ese es uno de sus principales rasgos que, además, dan espacio para la aparición de «monstruos» muy diferentes en el género fantástico en general, algunas décadas después. La serie Mabuse

es una parábola sobre el poder en las sombras, pero también es una mirada al Mal en su estado puro. Maldad que Lang sentía como una expresión latente de la época, algo graficado con el subtítulo de su primera entrega: Ein Bild der Zeit («Una visión de este tiempo»). El recorrido por 1923 se abre con uno de los films más representativos de la ciencia-ficción francesa de la época. Nos referimos a Paris qui dort, de René Clair, cuya trama sigue la peripecia de un científico demente que pone a todo París a dormir con un rayo invisible de su invención. Unas pocas personas no son afectadas por encontrarse fuera del alcance del rayo, sea volando en avión o en el tope de la torre Eiffel, y estos personajes vagan por las calles de la ciudad, descubren que el tiempo se ha detenido y que sus conciudadanos permanecen como congelados, lo que desencadena una serie de situaciones graciosas. La comedia se incrementa cuando los parisinos comienzan a reaccionar pero no de manera inmediata, sino paulatinamente, en cámara lenta. Ese mismo año se estrena Radio Mania, el primer intento norteamericano de cine en 3D, que requería que el público utilizase anteojos especiales y que se reveló como un rotundo fracaso. El héroe de la película sueña el planeta Marte. Los habitantes de ese planeta son presentados con lo que luego sería un clásico de los alienígenas: unas enormes cabezas, que revelan, supuestamente, un inmenso desarrollo cerebral. Cuando el intrépido inventor despierta y descubre que todo ha sido un sueño, se deprime y decide abandonar sus investigaciones radiales, pero su hija se las arregla para alegrarlo mediante la ventajosa venta de algunos de

CIENCIA-FICCIÓN

con el establecimiento de una radio bidireccional con

61

En esta página, dos escenas de la novedosa Paris qui dort. En la página siguiente, afiche promocional y cuatro imágenes de Aelita, una de las grandes producciones soviéticas de ciencia-ficción silente.

sus otros inventos. Otro proyecto que nos interesa destacar de 1923 es The Unknown Purple, cuya trama sigue la historia de un científico que es engañado por su esposa y por su amante, y acusado de un crimen para que la mujer pueda divorciarse de él mientras permanece tras las rejas. Cuando es liberado, el hombre utiliza un aparato que genera un halo color púrpura, que lo hace invisible, y que el científico utiliza para emboscar a las dos mujeres. El film está colorizado en las partes en las que el halo está presente, y ofrece otros clichés de la primera ciencia-ficción cinematográfica, como por ejemplo, el laboratorio secreto del inventor. En 1924 se produce la aparición de uno de los films soviéticos de ciencia-ficción más influyentes de la historia del género. Nos referimos, obviamente, a Aelita, un proyecto cuyos diseños futuristas tendrían una influencia fundamental sobre todos los ilustradores y diseñadores relacionados con la ciencia-ficción posterior, tanto en el cine como en otros medios, con una impronta que incluso se puede detectar en las historias de Flash Gordon de mediados de los ’30, de las que nos ocuparemos más adelante. Asimismo, la belleza de la actriz protagonista (Yulia Solntseva), llevó a que centenares de bebas nacidas en esa época llevaran su

CIENCIA-FICCIÓN

62

nombre como homenaje. La historia, de decidida vena cómica o paródica, sigue la peripecia de un inventor –quien dispara sobre su esposa–, un soldado revolucionario y el detective a cargo de investigar el asesinato, que viajan juntos a Marte. Los dos primeros escapan al planeta rojo porque están disconformes con sus vidas diarias, y una vez en el reino de Aelita, comienzan a propiciar la revolución proletaria, con el apoyo de la propia reina de los marcianos,

quien funciona como una especie de recordatorio de cómo la revolución puede frustrarse, lo que algunos críticos han interpretado como un cuestionamiento del film a los manejos del propio Lenin respecto de la Revolución Rusa. Los personajes que son cuestionados como tediosos por los protagonistas son justamente aquellos que representan los valores más cercanos al comunismo y, en esencia, la crítica va dirigida no tanto contra la revolución en sí, sino contra las medidas económicas, de corte capitalista mixto, tomadas por el gobierno de Lenin para la reconstrucción de Rusia después de 1917. Se ha sostenido, además, que el personaje de la reina Aelita apoya la revolución con el único objetivo de mantenerse en la cima del poder. En el final de la cinta, se descubre que todo ha sido un sueño y que las cosas continúan siendo del mismo modo en la Tierra. Aelita fue promovida de manera amplia, con la intención de competir con los populares westerns de la época, que campeaban en el cine soviético después de que el país saliera de una guerra civil, una guerra defensiva y una hambruna generalizada. Aunque la crítica especializada la recibió con frialdad, la película fue adoptada de inmediato por el público, e incluso el escritor norteamericano Frederik Pohl, una de las calificado como una de las mejores películas de CF del período silente. Siempre en 1924, se produce también el estreno de The Last Man on Earth, una cinta en la que la premisa es la desaparición, por una rara epidemia, de todos los hombres del mundo mayores de 14 años, a excepción de uno, el protagonista, que vive recluido en el bosque después de que su novia le rechazara su propuesta de

CIENCIA-FICCIÓN

grandes firmas del género en su época dorada, la ha

63

matrimonio. Así, las mujeres se hacen con el control del mundo, retratadas de la manera en que los hombres de la época veían a las mujeres. Una mujer criminal, que busca refugio en el bosque, descubre al hombre sobreviviente y decide llevarlo a Washington. Allí, dos senadoras se enfrentan en una pelea de boxeo, cuyo premio es el protagonista. Asustado, el hombre se refugia en los brazos de su antigua novia, quien finalmente lo acepta, y entre ambos dan vida a unos gemelos que comparten la inmunidad del sobreviviente a la epidemia, con lo que la Humanidad gana una nueva oportunidad y se reestablece el statu quo. Otro film de este año que nos interesa reseñar es The Story Without a Name. Allí, un científico inventa un rayo ultravioleta capaz de ser transmitido por ondas de radio, causando una destrucción masiva. El inventor es secuestrado por los villanos de turno y, tras una serie de peripecias y la aparición de la muchacha en peligro de siempre, la Marina norteamericana salva el día. En 1925 es el momento de otra rescatable producción soviética, Luch Smerti, un film de Lev Kuleshov, especialista en westerns silentes cuya obra refleja una inventiva comparable a la de otros realizadores rusos del período más renombrados, como Sergei Eisens-

64

un rayo mortal para destruir una fábrica de helio y

CIENCIA-FICCIÓN

tein. El protagonista de la historia necesita utilizar hacer triunfar a la revolución, mientras que un grupo de reaccionarios internacionales quieren el mismo artefacto para utilizarlo en beneficio propio. Ese mismo año se presenta Madrid en el año 2000, película de Manuel Noriega que presenta a la capital española en el distante futuro, convertida en un puerto gracias a la transformación del río Manzanares en una especie de canal de Suez. La cinta ofrece algunas

En la página anterior, afiche promocional y un fotograma de Luch Smerti, junto a un retrato de Lev Kuleshov. En esta página, escena y afiche promocional de The Monster.

escenas espectaculares, con barcos de envergadura

cuando se enamora totalmente de Maria, una trabaja-

atravesando la ciudad y el Palacio Real. Asimismo, la

dora de las clases bajas de la ciudad. La chica intenta

propuesta marcó el debut en la pantalla grande de

evitar una revuelta contra el sistema con la ayuda de

Roberto Rey, un actor cuya imagen se popularizará

Freder, esperando lograr una mediación que permita

algunos años después como protagonista de las cintas

armonizar las necesidades de todos los habitantes.

habladas en castellano rodadas por la Paramount en

Aquí entra en escena Rotwang, un científico loco que

Francia y en Hollywood.

ha sido contratado por el gobernante de la ciudad,

Otro film que nos interesa de 1925 es The Monster,

quien captura a Maria y genera un duplicado robótico

trabajo protagonizado por Lon Chaney en el rol de

de la chica con el objetivo de que se ponga a la cabe-

otro científico desequilibrado cuya meta es transferir

za de los trabajadores rebeldes y los lleve al fracaso

un alma femenina al cuerpo de un hombre, lo que

de sus reivindicaciones. El científico y el gobernante

requiere una gran cantidad de cuerpos mutilados.

pierden el control del robot y la mayor parte de la

Finalmente, el recorrido por este año se cierra con

ciudad termina destruida cuando se decide la inunda-

otra cumbre de origen germano, firmada por Robert

ción de los subterráneos donde viven los rebeldes. Los

Wiene: Orlacs Haende. El film sigue la historia de un

trabajadores queman al robot, el científico se vuelve

pianista llamado Orlac –un excelente Conrad Veidt–,

definitivamente demente y el gobernante accede a

quien pierde ambas manos en un accidente y al que le

las demandas de los rebeldes. Metropolis es un clásico de la ciencia-ficción e insosla-

a un asesino ejecutado, con consecuencias inima-

yable como representativa del expresionismo y de la

ginables. Aunque sólo hay ecos del expresionismo

obra de Fritz Lang. Sus escenarios, cuenta la leyenda,

alemán, el film se ve enriquecido por el trabajo de

fueron imaginados por el director cuando realizó una

su protagonista, carcomido por la angustia de portar

visita a Nueva York en 1924, y fueron necesarios 18

una manos extrañas que lo obligan a actos de extrema

meses para realizar el rodaje completo del film, uti-

crueldad.

lizando en el proceso nada menos que a 750 actores

En 1926 hace su aparición una de las películas más

secundarios y unos 30.000 extras, lo que llevó a que

importantes e influyentes de la ciencia-ficción del

su productora, la famosa UFA alemana, entrara en

período silente: Metropolis, de Fritz Lang. En una

crisis cuando la película demostró no ser efectiva en

sociedad futura, ubicada alrededor del año 2000, los

las taquillas. Se dice que en la historia de Frederson

trabajadores habitan bajo tierra mientras proveen de

y la madre del protagonista, Freder, existe un hilo

confort y comodidades a los miembros de la elite, que

argumental oculto que hace referencia al inicio del

viven en sendos rascacielos, rodeados de esplendor.

romance entre Lang y Thea von Harbou –guionista de

El gobernante de la ciudad, John Frederson, tiene un

Metropolis–, quien previamente era pareja del actor

hijo llamado Freder, que comienza a cuestionarse la

Rudolf Klein-Rogge.

falta de humanidad del sistema que rige en Metrópolis

Las interpretaciones son, ante todo, correctas y mo-

CIENCIA-FICCIÓN

son transplantadas otras extremidades pertenecientes

65

dernas, a excepción de Gustav Froehlich, actor que dio vida a Freder, quien pasa gran parte del metraje haciendo contorsiones faciales, como si fuera un mimo más que un actor de cine silente. Brigitte Helm, la actriz encargada de interpretar a Maria y a su doble robótico, sufrió serias heridas en el rodaje, primero en la escena en que cae del techo de la catedral y más tarde cuando el robot es prendido fuego por los trabajadores de la ciudad. En 1927 se estrena la última película realizada por Jean Renoir con su propia productora: Sur un air de Charleston, un corto de 25 minutos de duración cuya trama gira en torno a un científico que viaja en una nave a la Tierra del año 2028. Encuentra allí un paisaje posapocalíptico y desierto –producto de una guerra generalizada que ha acabado con casi toda la Humanidad–, de donde aparece una mujer con la que únicamente puede comunicarse mediante el baile. Así, el protagonista ejecuta el ritual erótico del Charleston y ambos se enamoran, lo que resulta en que regrese en su nave en compañía de la mujer. Un año más tarde, se produce el estreno de una nueva versión de Alraune, que en opinión de la crítica es la mejor de las cinco que se realizaron. La historia

66

un ahorcado y artificialmente insemina con él a una

CIENCIA-FICCIÓN

presenta a un científico que recolecta el semen de prostituta. El producto del experimento es una hermosa muchacha –que da nombre al film–, interpretada por Brigitte Helm, y que aunque se muestra algo fría y distante, vive en una constante tensión erótica e incestuosa con su «padre». Cuando Alraune descubre que su horroroso origen le impide tener un alma y ser capaz de amar, decide vengarse del científico responsable de la atrocidad.

En la página anterior, imágenes de Orlacs Haende y una vista panorámica de Metropolis. A la derecha, otra imagen del film cumbre de Fritz Lang y un retrato de Thea von Harbou, la guionista del film.

Otro film de 1928 es Ransom, cuya historia sigue la peripecia del inventor de un gas nervioso que es perseguido por un villano de origen oriental, del que debe ser rescatado por sendos agentes gubernamentales. En la misma época se estrena Spione, otra de las grandes obras maestras de Fritz Lang. La historia sigue a un misterioso personaje llamado Haghi, quien utiliza un banco de su propiedad como encubrimiento para su organización de espías internacionales, de las que se destacan Sonja y Kitty, por lo menos hasta que la primera se enamora de Tremaine, una especie de antecesor de James Bond. El film ofrece todo tipo de situaciones y hasta un cuartel general subterráneo y de diseño futurista, en tanto que el personaje principal, Haghi, es un ser desapasionado, una verdadera «computadora humana» incluso más peligrosa que otro de los grandes villanos de Lang, Mabuse. Siguiendo con la obra del realizador alemán, un año más tarde se produce la aparición de Die frau im Mond, film realizado con el mismo equipo técnico de Metropolis. En la trama, un pequeño grupo que incluye una mujer, dos hombres que la cortejan, un científico y un cazador de fortunas norteamericano de pocos escrúpulos, recibe financiamiento para construir un cohete para viajar a la Luna y extraer el la historia es bastante predecible, lo cierto es que se trata del primer viaje espacial cinematográfico en sentido moderno, y entre los consejeros científicos de Lang para este film se contaron nombres como Willy Ley –quien luego huiría a los Estados Unidos y al que los aficionados pueden recordar de las columnas con su firma incluidas en la revista Más Allá, en los años ‘50– y Hermann Oberth, quien más tarde trabajó con

CIENCIA-FICCIÓN

oro que supuestamente hay en el satélite. Aunque

67

los nazis y que luego aportó en la película Destination Moon (1950), de George Pal. También en 1929 se estrena High Treason, un film británico que pretendió inscribirse en la vena monumental de Metropolis pero sin lograrlo. La historia está ambientada en 1940 y presenta a la ciudad de Londres como una verdadera jungla de cemento, en la que los rascacielos sirven de pistas de aterrizaje para innumerables aviones. Entre otros prodigios, se menciona un túnel que une al Reino Unido con el resto de la Europa Unida, mientras que la televisión ha reemplazado a los periódicos como fuente de información. La trama combina elementos algo confusos, en los que la Europa Unida pelea una guerra a muerte con la América Unida, mientras una especie de Liga de la Paz, con millones de adherentes, intenta detener la conflagración antes de que ésta destruya al mundo. La solución ofrecida, más allá de los «buenos sentimientos» de los que se habla en la película, consiste en detener la guerra a través del asesinato del líder de uno de los bloques. El último film de la década que nos interesa señalar es The Mysterious Island, la primera de las cinco adaptaciones de la novela de Verne que funciona como secuela de 20.000 leguas de viaje submarino. Pese a

68

trama: el personaje central ya no es el capitán Nemo

CIENCIA-FICCIÓN

la referencia, el film cambia bastantes elementos de la sino el misterioso conde Dakkar, y sus aventuras se sitúan en un país ficticio llamado Hetvia. Como científico gobernante del lugar, el conde pretende probar la existencia de una raza de criaturas semihumanas que habitan en el fondo del océano y así es que construye su submarino. Pero mientras está en plena exploración, pierde el gobierno de su país.

En esta página, afiche promocional y dos imágenes de Die frau im Mond, precursora de los films de viajes espaciales. A la derecha, un fotograma de High Treason, película británica que buscó emular a Metropolis.

LOS SERIALES DE LA

DÉCADA DEL ‘20

Como veremos en un capítulo posterior, el esplendor de los seriales cinematográficos se dará en los años ’30, perdurando en décadas posteriores, y ofreciendo algunas de las sagas de ciencia-ficción más importantes de la rica historia del género en el celuloide. Sin embargo, durante los años ’20 existe una buena cantidad de seriales relacionados que nos interesa rescatar en este apartado. El primer serial de nuestro recorrido, estrenado en 1920, es The Branded Four, un proyecto de 15 capítulos que presenta a las cuatro hijas de un científico, quienes son marcadas por el hombre con un signo invisible a los ojos hasta que las cuatro sean mayores y puedan entonces heredar su inmensa fortuna en oro. El villano es el abogado de la familia, mientras que las muchachas piden la ayuda de Alphabet Drake para descubrir el oro antes de que el letrado pueda quedarse con él. En el décimo episodio de la serie, el villano, con la ayuda de otro científico, perfecciona un rayo destructivo capaz de acabar con la Humanidad, pero Drake se las ingenia para averiar el aparato y evitar la catástrofe. En el clímax, además de la muerte del villano, el héroe se casa con una de la muchachas, Marion, proveyendo el necesario final feliz a la historia. Ese mismo año se presenta también The Flaming Disk, coln, un gigantesco actor descubierto por D. W. Griffith que fue, además, el primer Tarzán del celuloide. En la trama, un científico inventa una serie de lentes de cristal capaces de concentrar los rayos solares en un fino haz que puede vaporizar el acero. Un agente secreto (Lincoln) es asignado para proteger al profesor y a su invento, pero una banda de villanos, liderada por un personaje llamado Stanton, roban los lentes y

CIENCIA-FICCIÓN

un serial de 18 capítulos protagonizado por Elmo Lin-

69

A la izquierda, una imagen y un afiche promocional del film de Tarzán protagonizado por el gigantesco Elmo Lincoln. A la derecha, una escena y un afiche promocional del serial The Sky Ranger.

las usa para robar bancos e incluso para amenazar con destruir toda una ciudad. Una de las vueltas de tuerca de la trama presenta al hermano del agente influenciado por los malvados a través de la hipnosis, lo que lo transforma en una ayuda inestimable para cumplir sus viciosos objetivos. En el final, el joven se recupera y une sus fuerzas con su hermano agente, para derrotar definitivamente a Stanton y su banda. Otro serial destacable fue The Invisible Ray, un producto con 15 capítulos cuya historia presenta a un científico que descubre una extraña sustancia que emite una radiación nociva para los seres humanos. El hombre guarda muestras en pequeños recipientes de plomo y le manda una a su amigo, el profesor Stone, y ata otra en torno al cuello de su hija. Cuando el hombre desaparece, la chica pasa a ser criada en un orfanato con el nombre de Mystery, y más tarde, conoce al profesor Stone y se enamora de su hijo. Los dos son perseguidos por una banda de villanos que se hace llamar los «Creadores del Crimen», quienes pretenden hacerse con la sustancia para construir una arma capaz de destruir al mundo. La pareja es protegida y ayudada por una enigmática figura llamada Deaux, que más tarde revela ser el propio padre de Mystery.

70

una propuesta de 15 capítulos cuya trama combina

CIENCIA-FICCIÓN

En 1920 también se estrena The Screaming Shadow, el tema del rejuvenecimiento con los experimentos médicos al modo de La isla del Dr. Moreau, la novela de H. G. Wells. La historia presenta a John Rand, un científico que presencia en África una serie de rituales que incluyen glándulas de mono y que, aparentemente, rejuvenecen a la gente. El hombre decide iniciar una línea de investigación en esa dirección, pero descubre que otro científico, el barón Velska, está haciendo otro

tanto pero utilizando humanos como conejillos de In-

una serie de puertas accionadas vía control remoto

dia. Rand, con la ayuda de la periodista Mary Landers,

que, en definitiva, son las que permiten atrapar a los

decide desenmascarar los crueles experimentos del

malvados de la trama.

barón, pero deberá sortear la oposición del financista

Recién en 1925 vería su estreno otro serial a destacar

de Velska y de una sacerdotisa de un exótico culto.

en este capítulo. Se trata de The Power God, un pro-

Ya en 1921 llega el estreno de The Sky Ranger, un

yecto de 15 capítulos que presenta la historia de un

serial de 15 capítulos que sigue el enfrentamiento en-

científico que ha inventado un motor atómico. Cuando

tre dos inventores. Santro, un científico demente a la

el hombre es eliminado por una banda de villanos, su

Mabuse y con poderes hipnóticos, construye un avión

hija es la única conocedora del secreto, pero padece

silencioso que es capaz de volar alrededor del mundo

de amnesia. Junto a su novio, la chica evitará varios

en cuestión de horas. Por su parte, el profesor Elliot

atentados contra su vida y, eventualmente y a través

monta una especie de rayo láser que tiene la capaci-

de un golpe en su cabeza, recuperará sus recuerdos

dad tanto de enviar señales a Marte como de destruir

respecto del ingenio atómico, lo que le permitirá pa-

objetos voladores, no importa cuán lejos de la Tierra

tentarlo a su nombre.

se encuentren. Santro decide destruir el rayo de Elliot

En 1926 aparece Officer 444, un serial de 10 entregas cuya trama gira en torno de un científico que le reve-

derribar a su fantástico avión, pero su hija se une a la

la a una enfermera la fórmula de un nuevo gas que

hija de su rival y a su novio para frustrar esos planes, y

puede utilizarse para el bien o para el mal. El hombre

en el último capítulo, el aeroplano de Santro termina

le pide a la mujer que se contacte con su hijo, un po-

siendo destruido.

licía neoyorquino cuyo número de placa es el 444 del

Un año más tarde aparece en el cine otro serial de

título. Y, obviamente, hay un villano involucrado y con

relieve, The Radio King, que a lo largo de 10 entregas

ganas de quedarse con el invento ajeno, aunque no lo

sigue una trama que presenta la posibilidad de reali-

logre. Ese mismo año se estrena The Scarlet Streak, un

zar comunicaciones instantáneas, con cualquier lugar

producto de 10 capítulos que sigue la historia de un in-

del planeta, a través de una especie de súper radio –y

ventor que, en conjunto con su hija, crea un rayo láser.

esto tan sólo dos meses antes de que se hicieran las

El invento es promovido por un periodista, pero tanto

primeras pruebas de radio en los Estados Unidos–. Los

el aparato como sus dos creadores son secuestrados

inventores del aparato presentan el ingenio como una

por el villano de turno, lo que induce al periodista a

posibilidad de que las bases del ejército de los Estados

transformarse en una especie de súper detective cuya

Unidos en todo el mundo tengan comunicación instan-

misión es recuperar a los inventores y a su invento.

tánea entre ellas, pero un grupo de villanos pretende

Ya ubicados en 1927, llega a la pantalla grande Blake

apoderarse del invento para utilizarlo para sus propios

of Scotland Yard, un serial de 12 capítulos que presenta

objetivos. En el enfrentamiento se presentan, además,

a Angus Blake, un agente de Scotland Yard retirado

otra serie de artilugios maravillosos, como por ejemplo

que recibe el pedido de ayuda de Lady Blanton, ya que

CIENCIA-FICCIÓN

porque es el único ingenio que tiene la posibilidad de

71

A la izquierda, afiche promocional y una escena del serial Blake of Scotland Yard, que destila una singular ideología, seguidos de una imagen de Officer 444.

un criminal apodado Spider, pretende robarle la fórmula para producir oro por medios químicos que fue inventada por el padre de la mujer. El serial muestra el enfrentamiento entre Blake y Spider en un castillo desierto, y el agente inglés es rescatado en varias oportunidades por una misteriosa dama vestida de blanco. Los críticos sostienen que este serial funciona como una especie de metáfora referida a la nobleza inglesa y a la ayuda que pueden esperar los miembros de esa clase no sólo de las autoridades policiales sino también de sus símbolos más etéreos que, en este caso, no sería otro que el de la Justicia.

LA CF DE LOS AÑOS ‘30

LA DECONSTRUCCIÓN DEL GÉNERO EN TEMAS

La década de los ’30 trajo importantes cambios dentro del universo de la ciencia-ficción, tanto literaria como cinematográfica. Pero mientras en la primera se comenzaba a superar la inocencia de las propuestas de Gernsback y la noción de «romance científico», en la segunda no se asiste a un proceso similar sino más bien a una deconstrucción del género, con el objetivo de incorporar algunos de sus elementos más reconocibles –y efectivos entre el público– en otro tipo de historias, que no siempre fueron identificadas como pertenecientes a la ciencia-ficción fílmica.

72

desarrollo del género en la pantalla grande siguió

CIENCIA-FICCIÓN

Como hemos señalado en un capítulo anterior, el caminos diferentes en Europa y en los Estados Unidos, y mientras en el Viejo Continente se presentaron en los ’30 algunas propuestas cuya intención fue la de seguir la senda de especulación profética sobre el futuro en la línea de Metropolis, en el continente americano el camino fue bastante distinto y las películas más importantes que se pueden citar, sin ser específicamente de ciencia-ficción, incluyen en sus tramas algunos

A la izquierda, una imagen de La fin du monde. Abajo, afiche promocional y un fotograma de Just Imagine, un musical con elementos de ciencia-ficción que propone un mundo a 50 años en el futuro.

elementos creados en ese universo cinematográfico, a los cuales el cine del género posterior volvería una y otra vez, pese a que en los ’30 fueran presentados dentro del cine de terror. Esta característica fue el reflejo del éxito obtenido con los productos terroríficos de la Universal –iniciado con el Dracula, de Tod Browning–, que dominaron los primeros años de la década y que llevaron también a la creación de proyectos con particularidades parecidas, como el King Kong producido por RKO en 1933. Este cine también reflejó la atomización de la ciencia-ficción en una serie de «elementos» de género, que se hicieron comunes y hasta triviales en el período. El punto culminante de la tendencia llegó hacia mediados de la década, cuando Hollywood decide relegar el desarrollo de la ciencia-ficción al mundo de bajo presupuesto de los seriales, donde numerosos criminales, científicos megalómanos y figuras afines, buscaban la manera de dominar el mundo –y hasta la galaxia, en algunos casos– utilizando una serie de aparatos bizarros y planes enrevesados ad hoc. Pocas joyas surgirán de ese entorno, aunque algunas conserven su brillo incluso en nuestros días, y fueran determinantes a la hora del desarrollo del género en décadas posteriores. capítulo es La fin du monde (1930), firmada por Abel Gance, director francés que ganó gran prestigio a partir del estreno de su film dedicado a Napoleón en 1926. En la propuesta que nos ocupa, Gance utiliza como inspiración un texto de su compatriota astrónomo Camille Flammarion para contar la historia de la llegada de un cometa y su colisión con la Tierra, causando de esa manera el fin del mundo y generando la oposición

CIENCIA-FICCIÓN

La primera película que nos interesa señalar en este

73

En esta página, afiche promocional y tres fotogramas de Dr. Jekyll and Mr. Hyde. En la página siguiente, afiche promocional y una imagen de F.P.1 antwortet Nicht, seguidos de dos escenas de Island of Lost Souls.

de dos personajes: un religioso místico y un científico. Aunque el primero predica el establecimiento de un nuevo orden –con obvias reminiscencias fascistas–, a medida que se acerca el final lo que proliferan son las orgías y la catástrofes naturales. Ese mismo año, Fox estrena Just Imagine (Fantasías de 1980) un musical en vena futurista en el que un hombre es golpeado por un rayo en 1930 y se despierta en el mundo de 1980, donde encuentra una serie de clichés de la ciencia-ficción posterior como puertas automáticas, comida en forma de píldoras y hasta teléfonos con video. La historia, sin embargo, deriva hacia el melodrama, alejándose del género una vez que se han introducido sus «elementos» ambientales. Ubicados ya en 1932, se produce el estreno de una nueva versión de Dr. Jekyll and Mr. Hyde (El hombre y el monstruo), en esta oportunidad protagonizada por Fredric March. Realizada antes de la imposición del Production Code, esta cinta es la versión más fiel a la obra de Robert Louis Stevenson, y queda claramente reflejado en la trama que Hyde es mucho más que el gemelo malvado de Jekyll. El monstruo expresa únicamente la liberación de los deseos ocultos del buen doctor, con lo que el planteo general

74

de naturaleza y civilización. El núcleo central de casi

CIENCIA-FICCIÓN

es menos maniqueo y más relacionado con las ideas todas las adaptaciones de esta novela, es la escena de la transformación de Jekyll en Hyde, que el director Rouben Mamoulian maneja de modo más que original en esta versión presentando, desde el punto de vista del protagonista, las reacciones del personaje frente a las respuestas que recibe de quienes se mueven en su entorno, sean de su misma clase social, estudiantes o meros servidores. La interpretación de March le valdría

la estatuilla dorada de la Academia. Ese mismo año se presenta F.P.1 antwortet Nicht, un film basado en una novela firmada por Robert Siodmak. La F.P.1 del título es una gigantesca plataforma que funciona en medio del Atlántico, como una especie de aeropuerto intermedio para reabastecer a los aviones que viajan entre los Estados Unidos y Europa, y la trama sigue la aventura de un as del vuelo, que compite en el negocio de la aeronavegación. La propuesta de la película está basada en el proyecto de un ingeniero alemán, A. B. Henninger, considerado con seriedad tanto a un lado como al otro del océano. Para el film, producido por la UFA alemana, se construyó una costosa plataforma en la isla de Oie, y el éxito llevó a que se realizara una versión en inglés protagonizada por Conrad Veidt. Otro trabajo de 1932 que nos interesa destacar es Island of Lost Souls (La isla de las almas perdidas), una estupenda adaptación de la novela de H. G. Wells La isla del Dr. Moreau cuyo guión fue realizado, en coautoría, por Philip Wylie, un exitoso escritor de ciencia-ficción que ese mismo año publicó When Worlds Collide, novela que fue llevada a la pantalla grande casi dos décadas después. La trama presenta al doctor Moreau, un enloquecido en seres humanos, a través de una serie de complejas y dolorosas operaciones. A la isla llega un náufrago, a quien Moreau pretende emparejar con una mujerpantera, mientras que la prometida del héroe será la encargada de acudir en su rescate. Todos los habitantes de la isla están sometidos a un rígido sistema de reglas, diseñado para evitar la bestialización de sus híbridos habitantes, pero una serie de circunstancias

CIENCIA-FICCIÓN

científico isleño cuyo objetivo es convertir animales

75

llevan a que uno de los experimentos, un hombremono, se rebele contra su «padre» después de probar sangre y, en un climático final, conduzca a Moreau dentro de la «casa del dolor», para someterlo a una mortificante cirugía. Siempre en 1932, se estrena otro film a destacar: The Mask of Fu Manchu (La máscara de Fu Manchú). Después del éxito obtenido con el Frankenstein firmado por James Whale un año antes, Boris Karloff es «prestado» por Universal a MGM para dar vida al protagonista de uno de los mejores films de Fu Manchú. En la trama, el maléfico doctor compite con un explorador para descubrir la tumba de Ghengis Kahn y obtener allí una cimitarra y una máscara doradas, propiedad del famoso guerrero y elementos que le permitirán convertirse en el líder de Asia, en una rebelión diseñada para exterminar al hombre blanco de la faz de la Tierra. En el enfrentamiento entre ambos personajes, asoman toda una serie de aparatos asimilables a la ciencia-ficción. Pasando al año 1933, se da a conocer en ese momento el film Deluge (El diluvio), una ambiciosa propuesta que da cuenta de la destrucción de Nueva York por la combinación de un terremoto y un tsunami, seguidos por un extraño eclipse solar. Una vez acontecida la

CIENCIA-FICCIÓN

76

catástrofe, la trama deriva a un tono aventurero con héroe, villano y damisela en apuros incluidos. Ese mismo año se produce el estreno de otra gran adaptación del trabajo de Wells. Nos referimos a The Invisible Man (El hombre invisible), película protagonizada por Claude Rains en el rol de un científico que paulatinamente va volviéndose loco, producto de la invisibilidad adquirida a través de un suero de su invención que bebe a modo de prueba. El protagonista

En la página anterior, un afiche promocional y dos imágenes de The Mask of Fu Manchu. A izquierda y derecha, fotograma y afiche promocional de Deluge, film catástrofe de 1933.

ocasión, el director aseguró que su trabajo era una

sionado de la vida corriente, que juega con la policía

denuncia contra Hitler y sus secuaces, pese a que, en

y experimenta todos los actos malevolentes posibles,

su momento, Lang fue invitado por el propio Goebbels

amparado en su peculiaridad.

para convertirse en el más prestigioso realizador de

Otra cinta de este año es Men Must Fight (Madres del

la Alemania nazi.

mundo), propuesta ambientada en 1940 en la que el

También en 1933 se produce la aparición de otro pro-

clímax se produce cuando la ciudad de Nueva York

yecto de origen germano, Der Tunnel (El túnel), uno

es sometida a un ataque aéreo y el edificio Empire

de los grandes films de ciencia-ficción de la época. La

State es destruido hasta los cimientos, en medio del

historia sigue la peripecia de un ingeniero empeñado

desarrollo de la Segunda Guerra Mundial. El film,

en la construcción de un túnel transoceánico, que

obviamente, responde a los acontecimientos que se

una Europa con los Estados Unidos. Su antagonista

iban desarrollando en Europa –pese a que el enemigo

es un especulador de las finanzas, quien produce una

descripto en la trama es una Confederación de Estados

explosión en la obra, seguida de una impresionante

Euroasiáticos–, aunque con un marcado sentido paci-

inundación en la que mueren cientos de trabajadores.

fista, lo que en definitiva decretaría su fracaso tanto

En el final, el túnel es completado y el villano, derro-

en las taquillas como entre los críticos (en esa época,

tado, se suicida.

el pacifismo era asimilado a la posición, para muchos

Como hito final de este año, cabe mencionar a otra

interesada y falsa, de los bolcheviques gobernantes

producción alemana: Ein Unischtbarer geht durch die

en la Unión Soviética).

Stadt, cuya trama gira en torno a un personaje que

En 1933 aparece también Das Testament des Dr. Mabu-

encuentra un extraño aparato en el asiento trasero de

se (El testamento del Dr. Mabuse), primera secuela del

su taxi. Una vez activado, el ingenio hace invisible a su

clásico de Fritz Lang de 1922. En la trama, el diabólico

usuario, lo que le permite hacerse rico en las carreras y

doctor controla el bajo mundo criminal desde su celda

conseguirse una novia acorde con su nueva situación.

en el asilo donde fue encerrado al final de la primera

Su mejor amigo le arrebata el aparato y roba un ban-

película, y antes de morir transfiere su personalidad

co, y después de una persecución y varias situaciones

al director de la institución. Previo enfrentamiento

típicas de los seriales de aventura, el protagonista

con la justicia, en el final el personaje termina tam-

descubre que todo no ha sido más que un sueño.

bién recluido en la celda de Mabuse, perdiendo,

En este punto, es necesario otorgar un párrafo aparte

figurativamente, la cabeza en el proceso. El film fue

para una producción de este mismo año cuya per-

prohibido por Goebbels, pese a que el guión también

tenencia al mundo de la ciencia-ficción es, cuando

estaba firmado por Thea von Harbou, esposa de Lang

menos, difuso. Nos referimos a la película que salvó

y simpatizante del nacionalsocialismo gobernante,

momentáneamente a la RKO de la bancarrota, King

y realmente generó impacto cuando fue estrenado,

Kong, cuya trama es bastante singular. Un exitoso

una década después, en su versión francesa. En esa

realizador cinematográfico llamado Carl Denham está

CIENCIA-FICCIÓN

se convierte así en una especie de espectador desapa-

77

dispuesto a todo para terminar su último film en las exóticas locaciones de una isla que no aparece en los mapas. De acuerdo con la leyenda, los habitantes del lugar rinden culto a un monstruoso gorila llamado Kong, y cuando Denham arriba al lugar, en compañía de su amigo Jack Driscoll y de la protagonista de su proyecto, la desconocida Ann Darrow, los nativos deciden secuestrar a la muchacha y ofrecerla como sacrificio a su dios viviente. Cuando Denham, Driscoll y parte de la tripulación del barco que los ha transportado a la isla parten a rescatar a la chica, descubren una especie de «mundo perdido» habitado por dinosaurios y otras criaturas gigantescas, a tono con el tamaño de Kong. El resto, es historia conocida. Lo cierto es que King Kong se inserta en un par de tradiciones bastante extendidas en Hollywood: por un lado, la de los films aventureros con entorno selvático, que en muchos casos se rodaban a modo de cuasi documentales; por el otro, en el universo de las películas dedicadas al descubrimiento de «mundos perdidos» dentro de nuestro propio mundo, una tradición tan antigua como los viajes a parajes desconocidos, que fue languideciendo a medida que el mundo se transformó, más y más, en una aldea global, carente de cualquier

78

mar que King Kong es un film de ciencia-ficción, cuya

CIENCIA-FICCIÓN

tipo de misterio. De esta manera, no es arriesgado afirhipótesis de base está en la existencia de un recóndito paraje donde la evolución histórica ha ingresado en una pausa, permitiendo que criaturas extintas millones de años antes, puedan convivir y desarrollarse en un entorno completamente aislado. Si en The Lost World (1925), el paraje desconocido eran las profundidades del Amazonas, en este caso se trata de una isla misteriosa e inexplorada, cuya existencia en los años ’30 no

En la página anterior, un fotograma y un afiche de Das Testament des Dr. Mabuse, más una escena de Ein Unischtbarer geht durch die Stadt. A la derecha, imagen y afiche promocional de King Kong.

podía ser ni negada, ni confirmada, aunque sí hipotéticamente imaginada. Con ese criterio, consideramos que King Kong debe ser incluida en una historia de la ciencia-ficción cinematográfica, donde obviamente es una de sus cimas más logradas. Ya ubicados en 1934 se produce la aparición de otro film germano del género. Gold completa el trío de grandes propuestas de este tipo –junto a las citadas F.P.1 y Der Tunnel– y de ese origen, y su guión presenta una versión científica del sueño de los alquimistas: un reactor atómico que es capaz de convertir el plomo en oro. Los científicos responsables deciden entregar su invento, pero a poco de demostrar la veracidad de sus dichos, optan por destruir su laboratorio y dedicar sus vidas a metas más productivas. Cuando los Aliados vieron la película, tras la finalización de la Segunda Guerra Mundial, quedaron tan impresionados por el diseño del reactor que hicieron que un grupo de físicos nucleares lo revisaran, para determinar si ese aparato de ficción contenía información de utilidad relacionada con los reactores que, supuestamente, los alemanes habrían desarrollado durante el conflicto bélico. Harry Piel presenta, también en el transcurso de este mismo año, Der Herr der Welt, su cuarta y última cinta dedicada a la ciencia-ficción. La trama gira en torno a cito de robots, además de presentar otros artilugios típicos, como una especie de rayo mortal. La resolución es también la típica para este tipo de proyectos. Ya ubicados en 1935, hace su aparición el film Gibel sensatsii, adaptación de origen soviético del clásico R.U.R., de Karel Capek. Un inventor crea todo tipo de robots, capaces de realizar las tareas que la gente habitualmente ejecuta en su vida cotidiana. Sus máquinas

CIENCIA-FICCIÓN

un científico demente, quien crea un invencible ejér-

79

son poderosas y altamente eficientes, pero carecen de sentimientos, y todo marcha bien hasta que estalla un conflicto entre los trabajadores y los dueños de la fábrica, para determinar quién decide el uso y la dirección del progreso tecnológico. Ese mismo año se estrena Le Golem (El monstruo de barro), una vuelta de tuerca sobre la historia presentada por el cine alemán en dos oportunidades anteriores. Otro film de 1935 que es interesante rescatar es Kosmicheskyii reys, la primera película soviética relacionada con el viaje espacial desde el estreno de Aelita en 1924. En la trama, un científico construye contra la opinión oficial una nave espacial, con la que viaja en compañía de su asistente femenina a la Luna. El film ofrece algunas escenas impresionantes, rodadas contra escenarios gigantescos, que reducen a las personas al tamaño de hormigas, y su subtexto político es más que evidente. Este mismo año, Hollywood presenta la remake de Orlacs Haende, a la que intitula Mad Love. La trama es algo diferente y presenta a un científico obsesionado con la idea de poseer a la esposa de Orlac. El científico loco no es el típico de los films de los años ’30, y el transplante de manos, necesario una vez más por un

80

médica. Los ayudantes del médico son profesionales,

CIENCIA-FICCIÓN

accidente, es visto como un triunfo de la tecnología muy diferentes de los bizarros epígonos presentados en otras producciones inspiradas en Frankenstein. Asimismo, el papel desempeñado por Peter Lorre como demencial científico desbordado por un amor no correspondido, será uno de los mejores en la carrera del actor y, sin lugar a dudas, uno de los hitos del cine fantástico. Ubicados ya en 1936, se presenta Ghost Patrol, otra

En la página anterior, afiche promocional y dos fotogramas de Mad Love, la genial remake de Orlacs Haende. A la derecha, un fotograma y un afiche de The Invisible Ray, film protagonizado por Boris Karloff y Bela Lugosi.

muestra de cómo los elementos propios de la ciencia-

donde se destacan la pomposidad de sus gobernantes y

ficción «contaminaron» las tramas de otros géneros,

la falta de imaginación de la población en general. En

en este caso, el western. La propuesta sigue la historia

este ambiente, un escultor propone a un gobernante

de un súper rayo, que es capaz de detener el funcio-

volver a sendas menos estériles para la Humanidad,

namiento de cualquier motor a combustión interna.

y en el final, el hijo y la hija de cada uno de ellos son

Un par de villanos roban el artefacto y lo utilizan

enviados en una nave hacia el espacio, con la esperan-

para derribar aviones del correo norteamericano, en

za de que ambos sean capaces de crear una sociedad

tanto que un agente del gobierno será el encargado

mejor que la que dejan atrás. El film, en definitiva, es

de detener el proceso y llevar a los responsables ante

una muestra cabal de las especulaciones filosóficas

la justicia.

del socialista fabiano que era Wells, y aunque fue un

Ese mismo año se estrena The Invisible Ray (El rayo

fracaso comercial en el momento de su estreno, Things

invisible), film protagonizado por Boris Karloff en el rol

to Come aún hoy es considerada un hito insoslayable

de un científico desequilibrado que aprende a capturar

de la historia del cine de ciencia-ficción.

«rayos de luz del pasado» y viaja a África en busca del

En 1937 hace su aparición un proyecto de origen che-

radium X, que ha localizado allí. Cuando encuentra

co intitulado Bilá nemoc. Su protagonista principal y

la sustancia en cuestión, el científico la manipula y

director, Hugo Haas, se convertiría más tarde en una

resulta contaminado, con lo que posteriormente todo

figura de las producciones clase B de Hollywood, arri-

lo que toca muere. Bela Lugosi también participa en

bando a los Estados Unidos con esta película bajo el

la cinta, en un papel bastante sosegado para lo que

brazo, antes de que los nazis invadieran su país natal.

le era habitual, interpretando a un colega que des-

Adaptada de una obra de Karel Capek, la cinta sigue

cubre un antídoto para el mal de Karloff, aunque su

una línea argumental muy parecida a los hechos acaecidos en la Alemania de la época, con el advenimiento de un dictador de gran poder que entra en conflicto

La gran joya de mediados de los ’30 se estrena tam-

con el idealista protagonista, el Dr. Galen, quien ha

bién en 1936. Nos referimos a la grandiosa Things to

descubierto una cura para la lepra que está diezman-

Come (Lo que vendrá), basada en una novela de H. G.

do a la población –y que funciona como metáfora de

Wells, con el propio escritor supervisando el guión de

la propagación del fascismo–. En su resolución, que

la cinta y cuya historia comienza en 1940, cuando se

el autor de la obra original repudió en su momento,

desata la Segunda Guerra Mundial. De allí la trama

el asistente de Galen salva a la Humanidad pero sólo

pasa directamente a 1970, en un mundo desolado en

después de la muerte del dictador.

el que se encuentra la ciudad de Everytown bajo un

Otro film que nos interesa, estrenado ese mismo año,

cruel régimen, que es transformado a través de un «gas

es Midnight Menace, una de las tantas películas ingle-

de la paz». En 2036, la ciudad se ha convertido en una

sas realizadas con anterioridad al comienzo de la Se-

poderosa y pacífica urbe, cercana al ideal de Utopía y

gunda Guerra Mundial que imaginaba el bombardeo

CIENCIA-FICCIÓN

logro llega después de que el científico haya perdido totalmente la cabeza.

81

En esta página y en la siguiente, un afiche promocional y tres diferentes escenas de la majestuosa Things to Come, seguidos, abajo, de la imagen de Jean Rogers como Dale Arden en Flash Gordon (1936).

de la isla como una de las premisas fundamentales de tal conflicto. En la ocasión, los protagonistas son un historietista y su tía, quienes se empeñan en impedir que un dictador de una república de la Europa Central lance, por sorpresa, una flota de bombarderos a control remoto sobre Gran Bretaña, mientras públicamente se declara partidario del desarme mundial. Nuestro recorrido por los films del género de los ’30 se completa con la reseña de dos producciones estrenadas en 1939. La primera de ellas es The Return of Doctor X (El regreso del Dr. X), un film en el que Humphrey Bogart –cuya carrera todavía estaba relegada a roles secundarios en películas de segunda línea– luce un singular peinado, con mechón blanco incluido, y ejerce de monstruo de turno, que en este caso es un hombre devuelto a la vida gracias a una inyección de sangre muy particular. En una variación de los planteos de la perenne Frankenstein, el Dr. Maurice Xavier comienza una desenfrenada búsqueda de sangre para saciar su sed, hasta que el rastro de cadáveres conduce a un tenaz periodista a las puertas de su laboratorio. Aunque la trama no tiene casi relación alguna, Warner, el estudio productor, promocionó la cinta como una secuela del éxito de terror Doctor X, estrenado en 1932.

82

completa nuestro periplo es S.O.S. Tidal Wave, un

CIENCIA-FICCIÓN

El segundo producto de finales de la década que film en cuyo final una enorme ola, combinada con un terremoto, engulle literalmente a la ciudad de Nueva York, en un modo similar al expuesto en su predecesora Deluge (1933). Pero más allá de los efectos utilizados en la ficticia devastación de la ciudad, la película es más que interesante por sus planteos en torno a la televisión, una herramienta particularmente poderosa en manos de gente inescrupulosa. El guión

está basado en una historia de James Webb, un autor que se convirtió en libretista regular de los westerns de Roy Rogers y que, en 1962, ganó el Oscar a Mejor Guionista por su labor en How the West Was Won (La conquista del Oeste).

LA EDAD DORADA DE

LOS SERIALES

Los seriales fueron parte integral del universo cinematográfico casi desde los inicios de la industria, y en un capítulo anterior hemos descripto un puñado de ellos, estrenados en los años ’20, que están insertos dentro de la historia del género en celuloide. Generalmente, este tipo de productos han sido ignorados en la mayoría de las historias del cine de ciencia-ficción, más que nada por considerarlos productos de segunda categoría, orientados a una audiencia juvenil y en general poco seria. Pero los seriales fueron fundamentales, en lo financiero y en lo creativo, para el desarrollo de Hollywood. Tomando sus temas e inspiración de fuentes culturales poco reconocidas, como las revistas pulp o las historietas, tuvieron la cualidad de poder explorar tópicos que los productores más «distinguidos» consideraban o bien demasiado limítrofes, o bien muy riesgosos para ser abordados en sus proyectos cinematográficos. tas líneas, hubo un gran interés por films de terror o fantásticos, impulsado más que nada por los grandes éxitos de la Universal de la época, pero la ciencia-ficción, que era degustada popularmente en las revistas especializadas y baratas, fue casi totalmente ignorada por la pantalla grande hasta que seriales como The Phantom Empire (El imperio fantasma, 1935) y Flash Gordon (La invasión de Mongo, 1936), la presentaron

CIENCIA-FICCIÓN

En la década del ’30, que es la que nos ocupa en es-

83

A la izquierda, afiche promocional y una imagen de Larry «Buster» Crabbe en su rol protagónico en Flash Gordon (1936), uno de los principales seriales de los años ‘30.

ante una enorme audiencia. El especialista Roy Kinnard afirma que: «Aunque los productos en episodios eran influidos por las películas, en muchos casos eran los verdaderos innovadores, y esto fue particularmente cierto en el caso del cine de ciencia-ficción, por lo menos hasta los ’50. Cada tema o cliché propio del género, que sería explotado por Hollywood con posterioridad a 1950 –extraterrestres, viajes espaciales, robots, armas de rayos, viaje en el tiempo, etc.– fueron presentados inicialmente por los seriales de décadas anteriores.»7 Pese a que en el desarrollo de este trabajo hemos visto que muchos de esos temas están presentes en innumerables producciones previas, desde cortometrajes de los primeros tiempos del cine, hasta películas contemporáneas a la época dorada de los seriales, resulta bastante significativo que este tipo de productos compartan más de una característica con el que fuera el vehículo por antonomasia de la mejor ciencia-ficción literaria. En ambos casos, fueron manifestaciones culturales de amplia inserción popular, bajo costo industrial y generalizado rechazo por parte de quienes, supuestamente, se erigieron como padrinos de la «verdadera» cultura de cada época. Así y todo, los seriales fueron parte integral del negocio del cine a lo

CIENCIA-FICCIÓN

84

largo de más de cuatro décadas, desde 1913 hasta 1956, fecha que señala su desaparición definitiva. Hacia mediados de los años ’20, este tipo de propuestas episódicas comenzaron a perder popularidad, producto de una mayor sofisticación de la audiencia urbana, en ese momento expuesta a una de las primeras manifestaciones de los medios masivos: la radio. 7 Kinnard, Roy.- Science Fiction Serials: A Critical Filmography of the 31 Hard SF Cliffhangers.- Jefferson: McFarland & Company, 1998. Pág. 3.

A la izquierda y abajo, fotografía promocional de lobby y dos imágenes del serial The Vanishing Shadow.

Con la llegada del sonido al cine, los seriales hubieran pasado a mejor vida si no fuera por los esfuerzos de un personaje: Henry MacRae. «MacRae, un productor y director de la Universal Pictures de Carl Laemmle desde la época silente, supervisaba la división de cortometrajes de la empresa y, en 1930, dirigió el serial de 12 capítulos The Indians Are Coming, una propuesta western estándar que, sin embargo, fue el primer serial de calidad de la época sonora. The Indians Are Coming se convirtió en un éxito de taquilla, y casi con ese único título a cuestas, MacRae revitalizó el serial y popularizó el formato entre un nuevo tipo de público, mayoritariamente juvenil. Aunque los adultos en general ignoraban los seriales, MacRae dio nueva vida a los productos en episodios, y sería el responsable de incrementar aún más su popularidad cuando produjo el enormemente exitoso Flash Gordon para la Universal en 1936.»8 Los seriales nunca fueron presentados en las mejores salas cinematográficas, y en general eran relegados a cines de barrio o de zonas rurales poco pobladas, con la excepción de productos tales como la citada Flash Gordon, o los dos seriales de Superman producidos por Columbia, que basaban su popularidad en el consumo de las historietas en las que estaban basados, lo que De acuerdo con Kinnard, existen 231 seriales conocidos, la mayoría de los cuales fueron producidos por tres estudios: Republic, Universal y Columbia, mientras que los realizadores independientes fueron forzados a salir del mercado en 1937, por la presión competitiva de los estudios mencionados. El resto de las majors consideraban a los seriales como proyectos menores 8 Kinnard, Roy.- op. cit. Pág. 4.

CIENCIA-FICCIÓN

aseguraba un interés previo al estreno del serial.

85

En esta página y en la siguiente, afiche promocional y cuatro fotogramas de The Lost City, el primer serial explícitamente inspirado en las revistas pulp de los años ‘20 y ‘30.

y por debajo de los estándares de sus respectivas compañías. Pero los films episódicos demostraron ser de vital importancia para la industria previa a 1945, con costos de producción bajísimos –entre 100.000 y 150.000 dólares por todos los episodios de una serie determinada– y un esquema de rodaje más veloz que el de las películas. En los hechos, su efecto entre los aficionados implicaba que pagaban entre 12 y 15 veces el valor de una entrada de cine para ver lo que, en definitiva, era una única película de 5 ó 6 horas de duración. La fórmula, efectiva en los inicios y capaz de atrapar a una audiencia fiel, comenzó a trabajar contra sí misma hacia mediados de los ’40, cuando el público comenzó a alejarse de los seriales y a reemplazarlos con una propuesta similar pero gratuita: la televisión. Así, Universal dejó de producir seriales en 1946 –una década antes que sus competidoras Republic y Columbia–, reestrenando sus antiguos éxitos con el fin de explotar un mercado que percibía, correctamente, en vías de extinción. Muchos de los seriales incluían aparatos o artilugios propios de la ciencia-ficción en uno o dos de sus episodios, que eran utilizados como efectivos «ganchos»

86

apenas una realidad experimental no accesible para

CIENCIA-FICCIÓN

para la audiencia. La televisión, que en la época era el ciudadano común, era uno de los elementos de CF más habituales en las tramas de los seriales, pero lo cierto es que sólo 31 de estas películas en episodios de ese universo de más de 200 pueden ser consideradas como estrictamente de ciencia-ficción, es decir, con una trama, temas y conceptos concretamente relacionados con el género y no con meras inclusiones de parafernalia futurista. Esos son los productos que nos

interesa ir estudiando y destacando en nuestro recorrido histórico, sobre todo en las décadas de los ’30 y los ’40, donde alcanzaron su mayor potencial y, de alguna manera, cubrieron el déficit de films del género propiamente dichos, fertilizando la imaginación del público y preparándola para el advenimiento de la edad de oro del cine de CF en los años ’50. Nuestro recorrido se inicia con la aparición, en 1934, de The Vanishing Shadow, un serial producido por Universal cuya trama gira en torno de un joven y genial científico, hijo de un editor periodístico, quien se enfrenta a un grupo de políticos corruptos que han enjuiciado a su padre y le han causado la muerte. El muchacho inventa un ingenio que lo hace invisible, y busca la ayuda de otro experto para perfeccionarlo mediante el uso de la electricidad. Después de acordar esta colaboración, el muchacho rescata a una joven periodista de las garras de la muerte, sólo para descubrir que la chica es hija de su peor enemigo. Ella le explica, sin embargo, que se opone a los planes y los métodos de su progenitor, y que trabaja como periodista casi en la clandestinidad. A partir de allí se suceden una serie de hechos que ponen al joven científico en una constante lucha contra sus enemigos y en la que aparecen otros artilugios tales como un Un año más tarde se produce el estreno de The Lost City, un serial independiente, de 12 capítulos, cuya trama es la siguiente: el mundo entero está sufriendo una serie de perturbaciones atmosféricas y Bruce Gordon, un intrépido «ingeniero eléctrico», inventa un artilugio magnético que rastrea la fuente de tales fenómenos en una inexplorada región de África central. Gordon decide viajar al lugar en compañía de su amigo

CIENCIA-FICCIÓN

rayo destructivo y un robot.

87

Jerry y dos asociados, Colton y Reynolds. Llegado a África, el ingeniero conoce a un inescrupuloso traficante llamado Butterfield, y con su detector magnético descubre que la fuente de las perturbaciones climáticas está situada en la llamada «Montaña Magnética», dentro de la cual se encuentra la «ciudad perdida» del título, una metrópolis altamente tecnológica gobernada por Zolok, un cuasi demente maestro de la ciencia. El hombre es el responsable de los cambios climáticos, y su intención es la de conquistar al mundo, pero los prodigios tecnológicos de Zolok son, en realidad, creación del Dr. Manyus, quien permanece cautivo en la ciudad y debe trabajar para el proyecto del tirano global porque su hija, la hermosa Natcha, permanece también prisionera. La expedición de Gordon es atraída dentro de la ciudad con un engaño, y allí descubren que Zolok cuenta con un ejército de enormes africanos lobotomizados y artificialmente aumentados de tamaño. Gordon es obligado a trabajar para Zolok, a fin de evitar transformarse en uno de sus experimentos científicos, en tanto que Colton y Reynolds huyen de la ciudad con el Dr. Manyus, a quien pretenden hacer trabajar para ellos, al tiempo que traicionan al ingeniero protagonista.

88

diferentes criaturas, humanos transformados y tramas

CIENCIA-FICCIÓN

A partir de ese momento se prodigan en la pantalla de traiciones cruzadas que, obviamente, culminan con el triunfo del héroe –que, de paso, se lleva a la chica a su casa– y la auto inmolación de Zolok en un último e insano esfuerzo por destruir al mundo entero. The Lost City es el primer serial explícitamente inspirado en las revistas pulp de ciencia-ficción de los años ’30, y cuenta entre los miembros de su equipo técnico con algunos colaboradores de lujo, como Kenneth

En la página anterior y en esta página, afiche promocional y diferentes escenas de The Phantom Empire, un bizarro serial que combinaba elementos de la ciencia-ficción con el western musical y de clase B.

Strickfaden, el responsable de proveer los aparatos

es gobernada por la cruel reina Tika, y más tarde, los

eléctricos que aparecen en la historia, aporte que ya

leales compañeros del héroe también son capturados.

había realizado también en 1931, en el Frankenstein

El protagonista se las arregla para escapar y logra

de James Whale, y que volvería a repetir en otras

emitir su programa de radio, aunque deberá luchar en

producciones de terror de los ’30 y los ’40. Asimismo,

reiteradas oportunidades con Tika y sus vasallos, hasta

The Lost City es relevante desde el punto de vista

que la monarca es derrocada por uno de sus propios

histórico por tratarse de una de las primeras películas

hombres. En el final, Autry y sus compañeros escapan

de ciencia-ficción sonoras de éxito, y el serial fue asi-

una vez más de Murania, justo antes de que un des-

mismo adaptado al formato novela el mismo año de

tructivo rayo desintegre la ciudad y a sus habitantes.

su estreno, mientras que la trama fue convertida en

Una vez en la superficie, el sheriff local descubre que

historieta en la década siguiente.

Beetson es el autor del crimen del que se acusa a Autry,

También en 1935 hace su aparición en la pantalla

y el héroe queda limpio de todo cargo en su contra.

grande The Phantom Empire, otro serial de 12 capítulos

The Phantom Empire es una mezcla bizarra de ciencia-

producido por la Mascot, con un presupuesto más que

ficción, western musical y clichés del western de clase B

importante. La trama sigue la historia de un grupo de

pero, sin embargo, logró una gran popularidad entre el público y hay quienes afirman que a partir de esta

un valioso depósito de radium, ubicado debajo del

aceptación se construiría el éxito alcanzado por Flash

Radio Ranch, instalación regenteada por el famoso

Gordon –de cuya trilogía hablaremos en un capítulo

protagonista de westerns musicales Gene Autry. El

aparte– un año después.

protagonista está obligado a emitir un programa de

En 1936, el estudio Republic Pictures estrena un serial

radio diario para mantenerse en control del lugar, y

de 12 capítulos intitulado Undersea Kingdom. Una

Beetson idea un plan que involucre a la estrella en un

periodista gráfica, Diana Compton, y un teniente de

tenebroso asesinato. Autry logra huir de sus captores,

la Marina llamado Crash Corrigan, se enteran por el

con el objetivo de probar su inocencia, y cuenta con la

profesor Norton que la serie de terremotos que están

lealtad y la ayuda de los hijos del hombre al que dicen

asolando a la Tierra tienen su origen en el reino de

que ha asesinado, quienes además tienen un club de

Atlantis, sumergido en el fondo del océano. A bordo

fans cuyo nombre –los Thunder Riders– está inspirado

del futurista cohete-submarino del científico, los hé-

en un grupo de jinetes enmascarados que aparecen

roes, más el hijo del profesor y tres tripulantes, viajan

periódicamente por la zona. En su momento, tanto

hacia Atlantis. Los marinos, temerosos de sumergirse

Autry como Beetson descubrirán que esos misteriosos

en el aparato, intentan sabotear la expedición, pero

personajes son, en realidad, los habitantes de Murania,

el teniente Corrigan logra contener la situación. Así, a

una civilización que habita a más de 7.000 metros por

unos tres mil metros por debajo del mar, los intrépidos

debajo del Radio Ranch.

exploradores llegan al reino perdido de Atlantis, que

Autry termina prisionero en la ciudad subterránea, que

está protegido del océano circundante con un enorme

CIENCIA-FICCIÓN

ladrones, liderados por el profesor Beetson, que busca

89

domo transparente. Descubren a poco de llegar que el lugar está inmerso en una eterna guerra civil entre dos facciones políticas: la del benevolente rey Sharad y la del tirano Unga Kahn. Cuando los aventureros son atrapados por los servidores del segundo, uno de los marinos entra en pánico e intenta escapar, pero es abatido por un rayo mortal, disparado por unos robots guerreros. Corrigan y el hijo del profesor Norton logran eludir a sus captores, pero el científico y la periodista son atrapados y llevados en presencia del tirano. El avanzado cuartel general de Unga Kahn está ubicado en una torre de metal, que en realidad es una especie de cohete-submarino con el que el dictador piensa ganar la superficie del mar y conquistar todo el planeta. Así, Unga Kahn hipnotiza al profesor Norton y lo pone a trabajar en los motores que necesita para impulsar su torre. Mientras tanto, Corrigan es capturado por las fuerzas del rey Sharad, quien cree que el hombre es un agente de su enemigo mortal, por lo que lo sentencia a combatir en la arena. Corrigan logra vencer en la contienda, pero se niega a ultimar a su rival, y cuando el rey es secuestrado por dos hombres de Unga Kahn, Corrigan los persigue y consigue liberar al monarca. Agradecido,

90

El profesor Norton sigue construyendo los motores

CIENCIA-FICCIÓN

Sharad lo nombra comandante de sus fuerzas. requeridos, mientras Corrigan combate en numerosas oportunidades con las fuerzas del tirano, salvándose a duras penas en más de una ocasión. Finalmente, el héroe logra acceder a la torre de metal del enemigo, y se las arregla para rescatar a sus compañeros y cortar la dependencia hipnótica del profesor Norton. Sin embargo, el científico ha completado su trabajo para Unga Kahn, quien enciende los motores y atraviesa con

En esta página y en la anterior, afiche promocional y cuatro imágenes de Undersea Kingdom, un serial de Republic Pictures concebido para competir con el Flash Gordon de Universal.

su torre el domo del reino submarino, inundándolo y ahogando a sus habitantes. Corrigan y sus compañeros logran huir con su propio cohete-submarino y el protagonista se infiltra nuevamente en la torre de metal de su enemigo, al tiempo que avisa por radio a la Marina del peligro que supone el artefacto, para luego escapar poco antes de que los barcos norteamericanos destruyan por completo la nave del malvado Unga Kahn. Conscientes de que Universal trabajaba en su primer serial de Flash Gordon, los ejecutivos de Republic Pictures decidieron utilizar la misma historieta como inspiración para crear su Undersea Kingdom, que fue realizado en sólo 25 días, a un costo de 99.000 dólares y obtuvo un enorme éxito gracias a la maestría de sus realizadores. Particularmente, las miniaturas y los efectos especiales son más logrados que los del producto de Universal, que sería estrenado un mes después, insumiendo un presupuesto tres veces superior al del serial de Republic. Los famosos robots Volkite –tal era su nombre– fueron creaciones memorables de este serial y versiones mejoradas del autómata presentado en The Phantom Empire, al punto que, algún tiempo después y con un diseño todavía mejor, se transformaron en un ícono del estudio, que los utilizó para Ya ubicados en 1938, se produce el estreno de un nuevo serial del género que nos interesa destacar, The Fighting Devil Dogs, también producido por Republic. La trama está ambientada en 1938, en medio de las hostilidades entre China y Japón. En un lugar cercano a Shanghai, los tenientes norteamericanos Tom Grayson y Frank Corby llevan al pelotón bajo su mando a un fuerte remoto, donde descubren a todos sus ocupantes

CIENCIA-FICCIÓN

presentar sus nuevos seriales todas las semanas.

91

muertos de manera misteriosa, sin evidencias de violencia alguna. Mientras realizan su investigación, una especie de torpedo eléctrico –en términos modernos, un misil– golpea al fuerte y mata a todos los soldados, a excepción de los dos oficiales. El teniente Grayson es enviado de regreso a los Estados Unidos, para responder en la investigación oficial de lo sucedido, y el hombre expone que sus hombres murieron víctimas de un arma extremadamente avanzada. Finalmente se descubre que un súper criminal, apodado el «Relámpago», está detrás del incidente, y Grayson y Corby son asignados para desvelar el caso. Un grupo de científicos, incluyendo al padre del teniente Grayson, se une a los dos oficiales, en un esfuerzo por capturar al perpetrador y descubrir sus logros tecnológicos. Pero antes de que puedan ponerse en marcha, el laboratorio donde trabajan es destruido y sus ocupantes asesinados, incluyendo al padre del protagonista. Después de examinar algunos fragmentos del arma que ha matado a los investigadores, Grayson y Corby descubren que el metal utilizado es una rara aleación fabricada por la Atlas Steel Company. Los hombres parten hacia la fábrica, pero el Relámpago se les

92

evidencias. Y en el viaje hacia la acería, los oficiales

CIENCIA-FICCIÓN

adelanta y ordena a sus hombres destruir todas las son atacados por otros secuaces del villano, que resultan muertos por sus propias armas. Una vez en la compañía, los oficiales son una vez más atacados, y Corby está a punto de morir pero es salvado en el último instante por su compañero. Mientras la pelea continúa y los protagonistas siguen salvando el pellejo en varias oportunidades, finalmente los secuaces del Relámpago huyen y los tenientes logran recuperar el

En esta página y en la anterior, afiche promocional y tres fotogramas del exitoso serial The Fighting Devil Dogs, un hito que introdujo numerosos artilugios de ciencia-ficción en su trama.

casco de uno de los misteriosos torpedos, que llevan

llamado nirvano comienza a perder y pone a Buck y a

a un laboratorio propio, comandado por el doctor

su ayudante en un estado de animación suspendida.

Warfield, para investigarlo. En el camino son atacados

Descubiertos y revividos 500 años en el futuro por un

una vez más, pero logran surgir victoriosos. Uno de los

grupo de soldados, los dos protagonistas descubren

hombres del villano, llamado Jacobs, es capturado e

que el mundo entero ha sido conquistado por un

interrogado con un suero de la verdad, pero antes de

súper científico llamado Killer Kane. Transportados a

que pueda revelar información alguna, es asesinado

la Hidden City, los hombres conocen allí al brillante

con otro artilugio eléctrico del Relámpago.

doctor Huer y a su hermosa asistente, Wilma Deering,

La investigación avanza de lucha en lucha, que inclu-

de quienes descubrirán más tarde que son rebeldes

yen persecuciones en auto, abordajes de barcos, peleas

opuestos a los designios de Kane. Así, Buck y Buddy

bajo el mar y nuevos rescates al borde de la muerte.

aceptan el convite de combatir junto a ellos en contra

Finalmente, después de numerosas aventuras, en las

de la tiranía.

que también aparece la chica en peligro de rigor, los

El Dr. Huer ha inventado naves espaciales, cinturones

dos tenientes descubren que Warfield es el Relámpa-

antigravedad, armas de rayos y otros ingenios similares

go, y logran acabar con él.

para proveer a la defensa de la Hidden City, pero es

Este serial fue uno de los más exitosos de Republic e

necesaria más ayuda si quieren triunfar en su rebelión.

introdujo elementos del género, como el torpedo aé-

De esta manera, Buck, Buddy y Wilma viajan a Satur-

reo accionado por control remoto y el súper avión del

no, para enrolar a sus habitantes en la pelea pero,

villano, que fue reutilizado tras ser presentado en otro

cuando están llegando al planeta, son atacados por

serial del estudio, Dick Tracy (1937). El enmascarado

una de las naves de Kane. Los tres se salvan a duras

Relámpago bien puede tomarse como un antecesor

penas, alcanzando la superficie del planeta con sus

de Darth Vader, y cuenta con un asistente, jorobado

cinturones antigravedad, pero son perseguidos por

y resentido, que recuerda a algunos de los típicos per-

el capitán Lasca y sus hombres. Después de una lucha

sonajes de las sagas de terror de la Universal.

desesperada, Buck y sus acompañantes son reducidos,

Un año después del estreno de The Fighting Devil

pero ambos grupos son a su vez atrapados por los saturninos, quienes deciden llevarlos en presencia de su Consejo de Sabios. Las cosas se complican porque

escrita por Philip Nowlan en 1929 (que estaba inspira-

Lasca convence al Consejo de que su jefe, Kane, es

da, además, en su propia novela, Armageddon 2419

un gobernante misericordioso y justo, en tanto que

A.D.) y dibujada por Dick Calkins.

los rebeldes son gente cruel. Ante la trampa, Buck,

Un enorme dirigible, piloteado por Buck Rogers y su

Buddy y Wilma huyen de Saturno utilizando una

joven asistente Buddy Wade, es atrapado por una

nave de Lasca, y regresan a la Tierra. Mientras tanto,

tormenta polar y se estrella en una alejada región

el príncipe Tallen de Saturno arriba para celebrar su

del Ártico. Un contenedor de un gas experimental

acuerdo con Kane, pero Buck y sus amigos actúan y

CIENCIA-FICCIÓN

Dogs, Universal presenta en la pantalla grande su serial Buck Rogers, basado en la historieta homónima

93

En esta página y en la siguiente, un afiche promocional y cinco diferentes escenas de Buck Rogers, serial producido por Universal con el objetivo de emular el éxito de la saga de Flash Gordon.

eventualmente convencen al príncipe de Saturno de plegarse a la rebelión contra el tirano. Después de algunos nuevos enfrentamientos con las fuerzas de Kane, Buck lleva a Tallen a Saturno, para que exponga las nuevas circunstancias frente al Consejo de Sabios. Antes de lograr su propósito son sometidos por los soldados de Lasca, quienes mediante un casco transforman al príncipe en un hombre-robot –y he aquí una influencia poco conocida de la trama de El Eternauta–, quien expone la versión de Lasca frente al Consejo. Después de nuevos escapes y enfrentamientos, Buck libera a Tallen del dominio de los hombres de Kane, y el príncipe rectifica la situación. Pero Lasca no descansa, y mediante ardides varios incita a la revuelta a los Zuggs, una especie de primitivos habitantes de Saturno. Buck deberá ingeniárselas una vez más para acudir al rescate y desbaratar los planes del ingenioso capitán de Kane. De regreso a la Tierra, Buck y Wilma son atacados por las fuerzas del líder villano y atrapados. El protagonista es convertido en un hombre-robot y la chica encerrada, y será el turno de Buddy de transformarse en héroe y rescatar a sus amigos. En la nave que los lleva de regreso a Hidden City, sin embargo, viaja un espía, que más

94

Kane y abre las compuertas para que puedan destruir

CIENCIA-FICCIÓN

tarde da la localización exacta del lugar a las fuerzas de la ciudad oculta. Buck descubre al espía y lo reduce, al tiempo que logra cerrar las puertas antes de que ingrese el grueso de las tropas enemigas. Buck vuela una vez más a Saturno, a buscar ayuda para sus amigos, pero descubre que el príncipe Tallen está prisionero de Lasca, quien ordena al planeta que se rinda a los designios de Killer Kane. Después de una nueva huída prodigiosa, Buck rescata al príncipe

y juntos capturan a Lasca y a sus soldados. Así, una poderosa flota de Saturno viaja a la Tierra en ayuda de los rebeldes, quienes de esta manera logran derrotar definitivamente a Kane. Promocionado por sus superiores, Buck encuentra entonces el tiempo para consolidar su romance con Wilma. La intención inicial de Universal con Buck Rogers fue la de emular el gran éxito obtenido con las dos primeras entregas de Flash Gordon, y para ese objetivo el estudio hizo una importante inversión de dinero, que se nota tanto en lo detallado de los decorados como en los ingentes esfuerzos que se realizaron para que ambos seriales tuvieran el menor nivel de similitudes posible, pese a que el protagonista principal siempre fue Larry «Buster» Crabbe (en este caso, con su cabello castaño original). En un principio, la serie fue planeada en 13 episodios, y el número 7 de la saga era, en esencia, una especie de recopilación de todo lo sucedido hasta ese momento, más la inclusión de un diálogo entre el Dr. Huer y el mariscal Kragg referido a lo providencial de la llegada de Buck Rogers. Estos 22 minutos eran, sin lugar a dudas, una especie de trampa muy obvia para los seguidores de la saga, con lo que Universal decidió no estrenar nunca en los cines este «episodio fantasma» Otra curiosidad interesante indica que, al principio de cada episodio, cuando se hacía un resumen de lo ocurrido en el capítulo anterior, se utilizaba un texto que iba desapareciendo en el infinito, una modalidad que George Lucas utilizaría en los títulos de apertura de toda su saga de Star Wars, una de sus marcas distintivas que demuestra que no hay nada nuevo bajo el sol. Universal preparó, además, una versión en largome-

CIENCIA-FICCIÓN

de Buck Rogers.

95

En esta página, otros tres fotogramas de Buck Rogers, con Larry «Buster» Crabbe como protagonista. En la página siguiente, afiche promocional e imágenes de The Phantom Creeps, con Bela Lugosi.

traje del serial de Buck Rogers –como era de uso para los seriales exitosos– a la que tituló Planet Outlaws. La película fue adquirida posteriormente, junto con otros materiales similares del estudio, por el dueño de un cine de Nueva York llamado Sherman Krellberg, quien le hizo algunas adiciones y la reestrenó, con gran éxito, a fines de los ’40 y principios de los ’50. El último serial de ciencia-ficción de los dorados años ’30 del formato que nos interesa reseñar es The Phantom Creeps, una propuesta de 12 entregas también producida y estrenada por Universal en 1939. Uno de los hitos destacables del serial es la presencia de Bela Lugosi en el rol central, en una interpretación impecable, pese al pronunciado declive de su carrera en esos años. El doctor Alex Zorka, un científico que se revelerá demente con el devenir de la historia, lleva a cabo una serie de bizarros experimentos en su laboratorio secreto, asistido –como es costumbre– por un ayudante jorobado llamado Monk. Entre las principales creaciones de Zorka están un cinturón que hace invisible a quien lo use, un gigantesco robot de dos metros y medio de altura, y unas arañas mecánicas que, al explotar, inducen a un estado de animación

96

poder científico de Zorka es un extraño fragmento de

CIENCIA-FICCIÓN

suspendida a quienes resulten expuestos. El secreto del meteorito recuperado en África, cuya capacidad energética es prácticamente infinita. En la trama aparece el capitán Bob West, de la inteligencia militar, quien es asignado para investigar las actividades del doctor Zorka. Paralelamente, un grupo de espías liderado por un extravagante personaje llamado Jarvis, opera bajo la fachada de un instituto educativo con el objetivo de descubrir también los secretos del científico. Pero las

cosas se enredan aún más cuando una bella periodista, llamada Jean Drew, también se interesa en Zorka y sus descubrimientos. Un antiguo asistente del científico, el doctor Mallory, lo acusa de traición, y Bob West y su asistente, Jim Daly, intentan interrogar al genio inventor, quien los elude simulando su propia muerte en un accidente automovilístico. Para evitar la identificación de su cadáver, Zorka utiliza una de sus arañas mecánicas para hacer caer el avión en el que viajan West, su ayudante, la mujer del científico y Jean Drew. Y aunque logra su objetivo, los militares y la periodista sobreviven. Zorka continúa haciendo ingentes esfuerzos para evitar que sus secretos salgan a la luz, y las peleas se suceden, hasta que el Dr. Mallory construye un instrumento que lleva a los dos hombres de inteligencia militar en presencia del fragmento de meteorito. Y aunque la energía de la piedra causa un tremendo accidente mientras la transportan, los hombres logran salvarse una vez más y mantener la posesión del meteorito en cuestión. El grupo de espías captura al ayudante de West, a la periodista y al Dr. Mallory, y se hacen con el fragmento de meteorito. El militar logra rescatar a Jean, pero los espías huyen con su nueva posesión y el Dr. Mallory. de Zorka, pero éste se las arregla para infiltrarse y recuperar su fuente de energía. Mientras tanto, Mallory logra enviar un mensaje de radio a West, quien acude en su ayuda y logra rescatarlo, aunque los hombres serán perseguidos por los furiosos espías, quienes creen que ellos tienen el fragmento de meteorito. Los enfrentamientos y los cambios de manos del preciado elemento se suceden, como también las sospechas

CIENCIA-FICCIÓN

El científico es obligado a experimentar con la piedra

97

En esta página y en la siguiente, afiche promocional y diferentes fotogramas de Flash Gordon, el primer serial de Universal dedicado al héroe creado por Alex Raymond.

entre los involucrados. West y Mallory finalmente caen en la cuenta de que Zorka está vivo y vuelven a rastrearlo, y en el nuevo laboratorio del científico demente, el agente gubernamental debe enfrentar el enorme robot de Zorka, del que es salvado providencialmente por su ayudante y la periodista. Finalmente, tras varias aventuras típicas del serial, los espías internacionales son reducidos por West, pero Zorka recupera su meteorito. Intoxicado por el poder de la piedra, el científico planea entonces apoderarse del mundo, un plan que finalmente desbarata Bob West y que termina con la inmolación de Zorka y la desaparición del peligroso fragmento de meteorito. The Phantom Creeps no es uno de los mejores seriales de la época pero, como hemos dicho, recupera en parte la figura de Bela Lugosi. Sus principales defectos radican en que abusa de la utilización de metraje excedente de otras series y películas para completar su trama, al tiempo que gran parte del elenco, incluyendo al héroe de turno, Bob West, son verdaderos fiascos frente a la envergadura actoral desplegada por Lugosi.

CIENCIA-FICCIÓN

98

FLASH GORDON CONTRA

LA GRAN DEPRESIÓN

Los seriales, como hemos visto, fueron parte importante del desarrollo de la ciencia-ficción cinematográfica, pero también cumplieron una función social fundamental, relacionada con el entretenimiento a bajo costo en una época –sea en plena Gran Depresión o pocos años después de que pasaran los peores efectos de la misma– en la que la realidad no era precisamente amigable con quienes menos tenían. Para muchísimos norteamericanos, el entretenimiento era un escape necesario: cine, radio, historietas, revistas pulp, etc.,

eran los medios elegidos por la gente para verse transportada a otros entornos, en los que era posible olvidar, al menos por un rato, el terror de la indigencia cercana. Lo fantástico era, por definición, un terreno fértil para este tipo de historias, y de esa manera, escritores, productores, directores y actores tomaron la responsabilidad de adaptar para la pantalla grande el inmensamente popular Flash Gordon, protagonista de la historieta de Alex Raymond. Las primeras cuatro tiras dominicales del héroe, publicadas en 1934, fueron la base casi exacta del primer episodio del serial estrenado en 1936, e incluso, los responsables del serial dentro de Universal hicieron algo extraordinario con el material: sus personajes en celuloide eran personas bien reales, casi vecinos de quienes consumían sus aventuras, logrando de esa manera que, en plena Depresión, los seriales se transformaran en un rotundo éxito y ayudarán –no en una medida menor– a las economías de los estudios dedicados a producirlos. En la obra historietística original, Flash era un graduado universitario de Yale, un gran atleta y miembro de un sector social del que muy pocos norteamericanos de la época eran parte. Los guionistas del serial lo convirtieron en un hombre común, logrando uno de los mayores aciertos. El Flash del serial nunca sugiere que en los capítulos introductorios luce saco y corbata, inmediatamente se transforma en un personaje querible para la mayoría del público. En ese sentido, la elección de Larry «Buster» Crabbe para el rol protagónico, fue también ideal. Pese a todo y a los cambios introducidos por los guionistas de la Universal en la historia, los principales elementos del personaje de Alex Raymond se

CIENCIA-FICCIÓN

sea más inteligente que quienes lo rodean, y aunque

99

mantuvieron en el serial. La concepción del creador del personaje de los reinos de Mongo combina elementos del antiguo Egipto, de Grecia y de Roma, a los que suma futuristas ciudades aéreas, espectaculares diseños interiores y un vestuario que sugiere un gran poder personal e institucional en cada uno de los miembros de cada clase gobernante. Muchas de estas características están presentes en el serial, y la mezcla de emociones fuertes con un paisaje fantástico, son a la vez intrigantes y excitantes para los eventuales espectadores. La Gran Depresión puso en tela de juicio –y, de hecho, disminuyó– muchas de las cualidades del estilo de vida norteamericano, pero no pudo aniquilar la idea romántica y el deseo de la gente común por ese ideal. El Mongo de la historieta y del serial es, en esencia, un lugar romántico, un espacio idealizado de privilegio y comodidad, habitado no sólo por hombres grandiosos sino también por hermosas y cautivantes mujeres, a las que la Tierra opone su propia representante, bien norteamericana: la hermosa Dale Arden. Mongo es un territorio tan acostumbrado a la tecnología y a la belleza humana que todos sus habitantes son libres de cultivar sus propios intereses, siempre ubicados más

100

el alquiler o la necesidad de comprar nuevos zapatos,

CIENCIA-FICCIÓN

allá de la lucha cotidiana por conseguir el dinero para el tipo de problemas con los que debían lidiar los norteamericanos de los años ‘30. En definitiva, Mongo es un espacio cerrado, una realidad más allá de la realidad de esa sociedad, poblada por sendos arquetipos del Bien y del Mal. Y nadie tan «malo» como el emperador Ming, quintaesencia del enemigo universal. No se ha podido determinar, más allá de toda duda, si fue el propio Raymond o el omnipresente empre-

En esta página y en la anterior, otro fiche promocional y nuevas escenas de Flash Gordon, un serial paradigmático cuya propuesta fue como una especie de bálsamo para la sociedad norteamericana de la Depresión.

sario de medios William Randolph Hearst quien dio

la Democracia –o, por lo menos, esa Democracia que

al emperador Ming sus características «orientales»,

los sumergía en la miseria– era un sistema perimido.

haciéndose eco de los prejuicios racistas respecto del

Muchos otros pensaban que era posible que otros

«peligro amarillo», que venían cultivándose en los

sistemas les permitieran salir de las profundidades de

Estados Unidos desde el siglo anterior, con la inmi-

la Gran Depresión, y algunos incluso se preguntaban si

gración china que ayudó a construir los ferrocarriles

Mussolini o Hitler no estarían acertados con sus medi-

norteamericanos.

das y sus pensamientos, mientras otros, más cultivados,

El actor encargado de darle vida al personaje en el

apostaban por la Tecnocracia.

celuloide fue Charles Middleton, un intérprete de

De acuerdo con lo expresado por Leonard J. Kohl ,

formación shakespeareana, muy dotado a la hora

1933 fue el peor año de la Depresión, y fue también

de dar vida a un malvado autoritario y cruel. No

el momento en que circularon numerosas teorías

es arriesgado pensar que, para la audiencia de los

–que no incluían el uso de la violencia revolucionaria

tiempos de la Depresión, Ming no era únicamente

en su recetario y por eso encontraron cierto eco– res-

el vil emperador de Mongo sino también una cabal

pecto de cómo debía desenvolverse el gobierno ante

representación de los peores arquetipos del momento,

la crisis. Una de esas teorías fue bautizada como la

como los jefes, los especuladores, los banqueros, los

«Tecnocracia» e imaginada, entre otros, por un eco-

abogados, los prestamistas y hasta los cobradores, que

nomista llamado Howard Smith, quien sostenía «que

en el imaginario social eran responsables directos de

los Estados Unidos experimentaban el pasaje de una

las frustraciones y las miserias cotidianas de millones de

nación agraria, en la que los principales beneficios

norteamericanos. Ming no fue sólo el malvado –y para

devenían de la actividad de las granjas, a una nación

más, extraterrestre– de turno, sino más bien la repre-

industrial y de servicios. Los seguidores de la Tecnocra-

sentación esencial de las peores lacras de los Estados

cia sostenían que, con el paso del tiempo, aparecerían

Unidos de los años ’30. El personaje fue el paradigma

máquinas diseñadas para reemplazar a la gente en el

del arrogante y de los elementos más intimidantes de

trabajo agrario y en otros tipos de tareas igualmente

la Depresión que, al estar en la pantalla, adquirían una

físicas. Para lograr una eficiencia máxima, el gobierno

dimensión diferente, ya que se podía lidiar con él de

debía actuar de una manera científica o tecnológica,

una manera distinta a la de la realidad: Ming recibía

a través de tareas concebidas y ejecutadas sobre bases

golpes y lecciones de parte de Flash, y el público podía,

científicas. Antes que una sociedad democrática, los

de esa manera, hacer una catarsis y dar rienda suelta,

fundadores de Technocracy, Inc. argüían que la socie-

por un rato, a sus frustraciones más profundas contra

dad debía ser una organización burocrática, en la que

un sistema de gobierno, de ética y económico que

los técnicos debían usar su saber científico e industrial

de cuajo al «sueño americano». Muchos norteamericanos de ese tiempo creían que

9 Kohl, Leonard J.- «Cartoons and Technocracy: Disney’s The Mad Doctor and Fleischer’s Dancing on the Moon».- En: Science Fiction America: essays on SF cinema.- editado por David J. Hogan.- Jefferson: McFarland & Company, 2006. Págs. 24-39.

CIENCIA-FICCIÓN

parecía haberles fallado por completo, exterminando

9

101

para mantener todo funcionando de manera adecuada y tranquila.»10 Según los seguidores de esta teoría, la Depresión era el resultado natural de una sobreabundancia de bienes –alimentos, vestimenta, etc.– producidos tecnológicamente, y el desempleo era consecuencia del desplazamiento de trabajadores por parte de las máquinas. En apariencias, el problema era el sistema de precios de la época, donde los bienes les costaban por igual a los productores y a los consumidores, algo que había que cambiar para salir adelante. Siempre siguiendo a Kohl, «La idea de una sociedad en manos de los técnicos era radical en 1933. Hoy en día, por supuesto, algunos de los conceptos de la Tecnocracia no suenan tan extremos. La manera en que la ciencia y la tecnología se han convertido en parte de la vida cotidiana habría asustado –y reivindicado– a los tecnócratas más consecuentes. […] Computadoras personales, teléfonos celulares, monitores de TV en los bancos, imágenes por ultrasonido de bebés nonatos, líneas de montaje robóticas en las fábricas. La gente de 1933 podría haber exclamado ‘¡Parece salido de Buck Rogers!’»11 En los capítulos iniciales de Flash Gordon, Ming parece

102

que la ciencia será capaz de conquistar todo, incluso

CIENCIA-FICCIÓN

hacerse eco de estas teorías sociales y le dice a Zarkov las emociones humanas. Como Zarkov, Ming es también un científico, o por lo menos, un gobernante que entiende el potencial destructivo que tiene el poner a la ciencia a su servicio, para satisfacer sus necesidades más oscuras. En este sentido, Ming representa el uso equívoco de la ciencia –el tema del «científico 10 Kohl, Leonard J.- Op. cit. Pág. 25. 11 Kohl, Leonard J.- Op. cit. Pág. 25.

En esta página y en la anterior, seis nuevos fotogramas de Flash Gordon, la segunda mejor taquilla de 1936 de la Universal, el estudio productor del fenómeno, que también ofrecería dos nuevas aventuras en entregas.

demente», que es recurrente en la ciencia-ficción cinematográfica–, mientras que Zarkov es su opuesto filosófico: un hombre que vive la ciencia desde una posición positiva y, ante todo, ética. Con el correr del serial, Zarkov se transformará en un personaje mucho más benigno y comprometido que lo que, en principio, los lectores de la historieta y los espectadores del serial podrían haber concebido inicialmente. Universal también se mostró bastante consecuente con la historieta en lo que a la apariencia de sus personajes se refiere, aunque una de las diferencias más claras es la participación de la actriz Jean Rogers como Dale Arden, una inocente rubiecita que se opone a la distinguida y sofisticada –de cabello castaño, para más datos– Dale imaginada por Raymond. Probablemente, los guionistas supusieron que una muchacha rubia podía parecer más exótica al emperador Ming, un poco en la línea de la «mujer dorada» que representaba Fay Wray –como Ann Darrow– en la isla Skull, en la versión de King Kong original. La rubia Dale es un prototipo de todo lo «americano»: un aspecto sexy pero a la vez virtuoso, valiente y absolutamente leal. Ming reconoce esas características en la chica, y aunque la desea para su harén, odia esas particularidades en igual o mayor medida, lo que profundiza su identificación con el Mal sabía perfectamente por qué Ming odia a Dale y todo lo que representa, y su agresión es comparable con la que los espectadores mismos sentían que sufrían de parte de los poderosos de turno. Asimismo, si bien el público tomaba los rasgos pseudo-asiáticos de Ming a partir de un desembozado prejuicio –como representación de todo lo malo y del antes citado «peligro amarillo»– , también le daba la entidad propia de un

CIENCIA-FICCIÓN

que acecha a la sociedad norteamericana. El público

103

«otro», un enemigo del estilo de vida norteamericano cuyas características esenciales trascienden las fronteras de la raza. Ming era exótico, pero también una criatura con un poder considerable, escudado en miles de vasallos y con la capacidad de decidir sobre la vida o la muerte de los demás. No es extraño, entonces, que la figura del villano fuera automáticamente identificada con la de otros predadores, mucho más prosaicos, que acechaban a la sociedad de la época de la Depresión, como los banqueros o los oficiales que ejecutaban las hipotecas en las granjas de todo el país. Flash Gordon contó con un presupuesto de 350.000 dólares, lo que lo transformó en uno de los seriales más caros de la historia del género, sobre todo si tenemos en cuenta que los productos de Republic Pictures, por ejemplo, ni siquiera alcanzaban la mitad de ese monto para su producción. Si bien el productor Henry MacRae fue duramente cuestionado por el alto costo del serial y posteriormente degradado al cargo de productor asociado en proyectos posteriores, hay que tener en cuenta que Universal era, a diferencia de sus competidores, un gran estudio de la época, que decidía y adjudicaba presupuestos decentes tanto a sus películas de terror, como a los musicales, los dramas

104

de un serial eran diferentes a los de las películas y, por

CIENCIA-FICCIÓN

y los westerns. Así y todo, los tiempos de producción ejemplo, los efectos especiales debían ser pergeñados y ejecutados en vivo, sin demasiado tiempo para nuevas tomas o para trabajarlos en el laboratorio fotográfico, como era costumbre. Sin embargo, más allá de las limitaciones presupuestarias y de la escasez de tiempo, Flash Gordon fue un éxito sin atenuantes para el estudio, y pese a que utilizó decorados descartados de producciones de terror como

En esta página y en la anterior, afiche promocional y tres imágenes más de Flash Gordon, el serial que contribuyó con su mensaje a la reconstrucción de la sociedad norteamericana en medio de la Gran Depresión.

The Mummy (La momia, 1932), Dracula’s Daughter (La

la pérdida de algunas de sus mejores características, pese a que la inclusión de un nuevo compañero del héroe, cuyo desempeño aportaba un tono de comedia

cohete hayan sido extraídas del film Just Imagine, el

a la historia, logró cierta repercusión en la audiencia.

serial de la Universal resultó ser extremadamente fiel

Lo mejor de este serial está, sin lugar a dudas, en sus

respecto de la historieta de origen.

efectos especiales.

Según declaró Buster Crabbe tiempo después, el serial

La liberación de los Hombres de Arcilla tiene una par-

fue una verdadera apuesta del estudio, aunque más

ticular significación en cuanto a paralelismos con la

tarde hiciera una pequeña fortuna con el producto. De

sociedad norteamericana de la época de la Depresión.

hecho, siempre según el actor, el serial fue la segunda

Victimizados a distancia por un poder que no compren-

mejor recaudación del estudio en 1936, sólo superada

den, los Hombres de Arcilla son esclavos de un sistema

por el musical Three Smart Girls (Los tres diablillos).

de gobierno corrupto, y su liberación se produce sólo

Pese a lo señalado, la taquilla de Flash Gordon no fue

gracias a la intervención de la magia, algo que no era

suficiente para salvar a Universal de sus problemas

aplicable a los norteamericanos de ese entonces y sólo

económicos, que la pusieron –como a otros estudios

el New Deal y el avance del conflicto bélico en Europa

en el mismo período– al borde de la bancarrota. Para

–con el concomitante rearme de Estados Unidos– lo-

fines de 1935, la compañía mostraba pérdidas por

grarían la recuperación económica del país, aunque

casi 500.000 dólares, lo que llevó a su fundador, Carl

después de varios años de sufrimiento.

Laemmle, a incorporar a dos socios capitalistas, prove-

Los magros números obtenidos por Flash Gordon’s

nientes de otras actividades ajenas al cine.

Trip to Mars no fueron un impedimento a la hora

En esa época se produce, además, la prohibición de

de imaginar una nueva secuela. En 1939, Universal

proyectar películas de terror en Gran Bretaña, lo que

estrenó el serial de Buck Rogers –al que nos hemos

llevó a Universal a suspender el rodaje de esa benefi-

referido anteriormente–, que fue considerado como

ciosa rama de su actividad, concentrándose entonces

una mala copia del Flash Gordon original, y ese mismo

en la realización de comedias familiares y musicales.

año se propuso la realización del tercer y último serial

Este hecho, empero, no impidió que hacia 1937 o 1938

del valiente defensor de la Tierra, que fue intitulado

se pensara en rodar una nueva aventura serial de Flash,

Flash Gordon Conquers the Universe y estrenado en

que en este caso pondría el foco en la figura de Azura,

1940. Pese a utilizar cantidad de metraje del primer

la reina hechicera de Marte. En este caso, el guión ya

serial del héroe y del film alemán Die weiße Hölle

no era tan fiel a la historia en cuadritos de Raymond,

vom Piz Palü (1929), la propuesta tiene el aspecto de

y Flash Gordon’s Trip to Mars contó con un presu-

una producción mayor, por lo que muchos amantes

puesto de apenas 175.000 dólares, pese a presentar

de la historieta de Alex Raymond lo consideran el

más capítulos para su desarrollo. El producto no pudo

mejor de los tres seriales del héroe. Adicionalmente,

repetir el éxito de su antecesor, sobre todo a partir de

la actriz Carol Hughes toma el lugar de Jean Rogers

CIENCIA-FICCIÓN

hija de Drácula, 1936) o Bride of Frankenstein (La novia de Frankenstein, 1935); o que las escenas del vuelo del

105

En esta página y en la siguiente, otras escenas de Flash Gordon, incluyendo algunas con sus principales protagonistas: el propio héroe, la blonda y bella Dale Arden y el implacable Ming.

como la hermosa Dale Arden, y su aspecto era mucho más acorde con la muchacha originalmente dibujada por Raymond. En esa época, la capacidad de ilustrador del historietista estaba en su apogeo, participando como dibujante en revistas de primer nivel en todo el país. Su principal preocupación en Flash Gordon era darle un tono sofisticado y urbano que, pese a conferirle un valor espectacular como obra de arte, estaba a gran distancia, filosóficamente hablando, de la realidad de la sociedad norteamericana de 1940, en la que la mayoría de la población no tenía acceso ni siquiera a los servicios básicos de agua corriente o telefonía. Lo urbano, o las ventajas de lo urbano, no formaban parte del vocabulario de la mayor parte de sus compatriotas. Lo que sí campeaba en la sociedad era el concepto del «aislacionismo», ya que muchos norteamericanos, desilusionados con la participación de su país en la Gran Guerra, renegaban de volver a involucrarse en un conflicto que consideraban esencialmente europeo. Y pese a su popularidad, el presidente Roosevelt era acusado de intervencionista por sus actitudes a favor de los Aliados. La industria de Hollywood de ese período seguía siendo dominada, en gran medida,

106

público mayoritariamente bogaba por no intervenir

CIENCIA-FICCIÓN

por progresistas neoyorquinos quienes, pese a que el en la guerra, estaban decididos a propagandizar el concepto contrario. En Flash Gordon Conquers the Universe, Ming está de regreso en Mongo y trae consigo una nueva amenaza mortal para la Tierra. Sus tropas –cuyos uniformes recuerdan en más de un sentido a los soldados nazis de la época– esparcen desde el espacio un «polvo mortal», que causa la aparición de una mancha roja en la nuca de los infec-

tados y su muerte casi inmediata, lo que provoca un pánico desmedido en todo el planeta. Zarkov reúne una vez más a Flash y a Dale para desbaratar el ataque de Ming que, adicionalmente, es selectivo con sus blancos, asesinando únicamente a la gente más inteligente y perdonando a aquellos que pueden ser convertidos en esclavos sin mente ni voluntad. Ming ya no sólo es un emperador sino todo un dictador hecho y derecho, y Flash sabe, más allá de toda duda, que debe ser detenido. Pese a que los norteamericanos eran reacios a involucrarse en la guerra, su participación a través de la fabricación de armamentos para los Aliados hacía que esa intervención sólo fuera una cuestión de tiempo. Tanto la historieta de Raymond en 1940 como el tercer serial del héroe producido por la Universal, simplemente cumplían con preparar a la audiencia para las responsabilidades y los horrores del conflicto que indudablemente estaba en el horizonte de los Estados Unidos. Ninguna remake o imitación logró alcanzar la popularidad o el poder de la trilogía original de Flash Gordon, y la constante repetición de sus aventuras, en programas dobles en salas de barrio y, más tarde, en la televisión, fueron el origen de generaciones de aficionados, que verían incrementado su número cuanhogareño, como el VHS o el más reciente DVD. Las circunstancias y características de la Gran Depresión llevaron a muchos adultos a considerar que la caída económica era, en gran medida, de responsabilidad propia. Los años ’20 le habían dado a los norteamericanos un nivel de prosperidad que nunca antes había existido, y repentinamente todo ese buen vivir, por factores económicos no demasiado sencillos de com-

CIENCIA-FICCIÓN

do se popularizaron los medios de entretenimiento

107

En esta página y en la siguiente, imágenes de Flash Gordon’s Trip to Mars, el segundo serial producido por Universal en el que sus protagonistas debían enfrentar nuevos peligros y desafíos del archienemigo de la Tierra: Ming.

prender para la media, desapareció de los Estados Unidos, sumiendo en la desesperación a millones de personas. Gente que nunca había conocido el hambre o que nunca había dejado de satisfacer sus necesidades básicas repentinamente se encontró sin trabajo o sin objetivos vitales. Para los jóvenes de todo el país, Flash Gordon fue la muestra cabal de que el «sueño americano» era todavía asequible, y tanto las historietas como los seriales le explicaron a toda una generación que los problemas que se abatían sobre la Tierra –o, más específicamente, sobre los Estados Unidos– no eran culpa suya, que más allá de la desesperanza o la frustración, había que seguir adelante y reconquistar lo perdido. Flash y sus compañeros, mediante el ejemplo, demostraban que los grandes problemas pueden superarse con determinación y cooperación, y para muchos chicos y adultos de mente abierta, sus historias fueron la medicina perfecta, en una sociedad que parecía herida de muerte y sin chances de recuperación. Así, una vez más la ciencia-ficción fue capaz de reflejar no sólo la realidad social de la época, sino también la posibilidad de reconstruir la utopía perdida.

CIENCIA-FICCIÓN

108

LOS SERIALES DE FLASH

EN DETALLE

El primer serial de Flash Gordon, también intitulado Rocketship, se estrenó en 1936 y presentó 13 entregas, más un episodio recopilatorio nunca estrenado en cines. En la trama, un misterioso planeta se acerca a la Tierra, en un aparente curso de colisión y con unas primeras y nefastas consecuencias para nuestro planeta, causadas por las fuerzas gravitacionales del cuerpo celeste visitante. Violentas tormentas y catástrofes comienzan a asolar el mundo y Flash Gordon, un joven atleta, viaja a bordo de un avión, en un intento

desesperado por encontrarse con su padre antes del fin del mundo. Entre los pasajeros, además, se encuentra una hermosa joven llamada Dale Arden. Forzados por las condiciones climáticas, Flash, Dale y otros abandonan el avión poco antes de que sea destruido por un meteorito, y ambos protagonistas arriban a un lugar en el que se puede ver un moderno cohete. De la espesura surge un hombre armado, quien se presenta como el profesor Zarkov y le pide a Flash que lo ayude a tripular su nave espacial y alcanzar el planeta que está destruyendo la Tierra. Allí comienzan las aventuras de los tres héroes, quienes en un principio son apresados por el emperador de Mongo –tal el nombre del planeta–, quien decide que Zarkov sea obligado a colaborar en sus laboratorios, que Flash se bata en la arena y que Dale se convierta en su consorte. Flash también cautiva a Aura, la hija de Ming, y cuando vence a sus contrincantes en la lucha, es ayudado por la chica a escapar de las manos del tirano. Allí se inicia un periplo en el que Flash visita diferentes regiones de Mongo, conoce a sus pueblos y gobernantes, rescata y pierde a Dale, y finalmente, gracias a las amistades que va construyendo, logra la derrota total de Ming, evita la destrucción de la Tierra y se queda con la chica de turno. personaje de Alex Raymond, con el título de Flash Gordon en Marte (Flash Gordon’s Trip to Mars) y siguiendo las aventuras del héroe a lo largo de 15 entregas episódicas. Regresando a la Tierra desde Mongo, Flash, Dale y Zarkov descubren una serie de desastres climatológicos que azotan a todo el planeta y que son causados por un poderoso rayo proveniente del espacio. Zarkov

CIENCIA-FICCIÓN

Ya en el año 1938, se presenta el segundo serial del

109

calcula que la procedencia del ataque es, una vez más, el planeta Mongo y, junto con sus habituales compañeros, se embarca nuevamente con ese destino. En la nave descubren que un periodista, llamado «Happy» Hapgood, viaja de polizón, y deciden aceptarlo como uno más del grupo. Cuando se acercan, Zarkov descubre que el verdadero origen del rayo que ataca a la Tierra está en el planeta Marte, y hacia allí cambia el rumbo, pero su cohete es derribado. Los héroes se esconden en una cueva antes de la llegada de los soldados de Ming –ahora aliado de la monarca del planeta rojo, la reina hechicera Azura–, pero son apresados por los Hombres de Arcilla, una especie de enanos deformes, de facciones casi «derretidas», que les explican que soportan una maldición de Azura y que la única manera de superarla es destruyendo dos zafiros mágicos, uno en poder de la gente del bosque y el otro en manos de la propia reina. Los Hombres de Arcilla retienen a Dale y a «Happy» para asegurarse la colaboración de Flash, y el héroe deberá superar nuevas pruebas y viajes para prevalecer. Azura, además, es traicionada por Ming, quien pretende erigirse en monarca de Marte, aunque Flash una vez más frustra sus ambiciones, mientras el príncipe Barin –a quien encuentran también en Marte– se queda en el lugar,

CIENCIA-FICCIÓN

110

como gobernante de la gente del bosque. El último serial de la saga, Flash Gordon conquista el universo (Flash Gordon Conquers the Universe), se estrena en 1940, con una historia que se desarrolla a lo largo de 12 episodios. Ming, ahora dictador del planeta Mongo, envía una nave a la Tierra con la orden de esparcir, desde el espacio, un «polvo mortal» que provoca la muerte casi instantánea de quienes resultan infectados. Zarkov sospecha de la participación de

En esta página y en la anterior, afiche promocional y diferentes fotogramas de Flash Gordon conquista el universo, el último de los seriales dedicados el héroe de Alex Raymond.

Ming y, nuevamente con la compañía de Flash y Dale, se embarca con rumbo a Mongo. Allí, los protagonistas encuentran a viejos amigos y nuevos aliados, además de enfrentar novedosos peligros, artefactos y tecnologías creadas por el malvado dictador. Hay rescates, luchas en la arena y en el hielo, robots asesinos, complots y un largo etcétera, hasta que finalmente Flash y sus compañeros derrotan por tercera vez consecutiva a Ming y, en apariencias, lo destruyen para siempre. La decadencia de los seriales y la poca repercusión obtenida por la Universal con sus dos últimas propuestas relacionadas con Flash Gordon, marcarían el fin de la saga que, sin embargo, proyectaría su influencia mucho más allá de su propia época.

LANGUIDECIENDO...

LA CF EN LOS ‘40

Del mismo modo en que ocurriera en la década anterior, la ciencia-ficción toma caminos divergentes en la literatura y en el cine. Mientras en el primer caso se asiste al desarrollo de los cimientos de un género maduro, que eclosionaría definitivamente en los ’50, dando origen a una época dorada de la ciencia-ficción literaria, que fue fundamental para el desarrollo posterior del género12, en el ámbito del cine de los años ‘40, la ciencia-ficción prácticamente desaparece. Si bien es habían sido presentados en varias películas y seriales de décadas anteriores, todavía faltaba un desarrollo que los cohesionara como «temas» reconocibles de manera independiente, y estableciera a un grupo de 12 Curiosamente, la ciencia-ficción cinematográfica también hizo eclosión en los ’50, aunque el fenómeno tuvo muy poco que ver con la literatura del género y su desarrollo, y respondió mucho más a las preocupaciones sociales del momento y a la idoneidad del género como conducto para canalizar esas angustias..

CIENCIA-FICCIÓN

cierto que numerosos elementos propios del género ya

111

películas como pertenecientes, más allá de toda duda, a la ciencia-ficción. Los seriales siguen desarrollándose en este período, con la particularidad de que se incrementa la presencia de héroes nacidos en otros medios, como la historieta y la radio, que aportan sus habilidades al esfuerzo del país para enfrentar los peligros de la Segunda Guerra Mundial que despuntan en los ’40 –Estados Unidos ingresó al conflicto en 1941, después del ataque japonés a Pearl Harbor–. Pese a lo expresado, el conflicto bélico no fue central en la ciencia-ficción en celuloide de la época –como sí lo serían sus consecuencias, en la década inmediatamente posterior–, pese a que algún film tuvo como premisa, también, el aporte al esfuerzo de guerra. Otra de las características del género en su aporte fílmico en los ’40 tiene que ver con el desarrollo de otro género, el terror, que en la década que nos ocupa comienza su periplo descendente. Desde los años ’30, el terror fílmico incluyó, en muchas de sus propuestas, elementos propios de la ciencia-ficción –el ciclo inaugurado por Frankenstein, de James Whale, es el más representativo de esta afirmación–, pero la menor repercusión en el público de estos productos ya

112

ese género, e incluso a parodiarlo a través de comedias

CIENCIA-FICCIÓN

adocenados, llevó a los estudios a abandonar de a poco como las protagonizadas por el dúo cómico de Abbott y Costello. También se da el caso de algunas películas en las que la creación de vida artificial ya no pasa por el arquetipo típico de revivir carne muerta, y se traslada al tema de los robots, mientras que un serial, por su parte, The Purple Monster Strikes (1945), aborda los temas de la posesión e invasión extraterrestres de la Tierra, que se convertirían en tópicos centrales de la

En esta página y en la anterior, afiches promocionales y diferentes imágenes de los films Dr. Cyclops y The Invisible Man Returns, ambos estrenados a comienzos de los años ‘40, inaugurando la CF de la década.

ciencia-ficción cinematográfica de los ’50.

anteriormente que con la historia original de H. G.

La paranoia y el miedo serán, en definitiva, los senti-

Wells. En tono de comedia, John Barrymore interpreta

mientos sociales que permitirían el desarrollo y enri-

a un científico demente que transforma a una mode-

quecimiento más allá de lo evidente en las propuestas

lo en una mujer intermitentemente invisible, lo que

de ciencia-ficción en la pantalla grande de los años

atrae el interés de un grupo de espías extranjeros con,

’50, una angustia que se alimentó con las explosiones

lógicamente, aviesas intenciones.

atómicas en Hiroshima y Nagasaki, con la propagan-

Ya ubicados en 1941, se produce la aparición de Croisières sidérales, una típica historia de amor en la

desde 1947 y de manera cada vez más frecuente de

que la pareja protagónica decide realizar un viaje en

allí en más, de naves extraterrestres en los cielos de

cohete por el espacio. El hombre finalmente no puede

todo el mundo.

tomar parte de la exploración, y cuando la mujer regre-

El film de ciencia-ficción que inaugura la presencia

sa, después de un viaje de sólo dos semanas, descubre

del género en los ’40 es El doctor Cíclope (Dr. Cyclops,

que han transcurrido 25 años en la Tierra. Así, deciden

1940), en cuya trama un científico, afincado en las

que él realice un periplo idéntico, mientras ella espera,

profundidades de la selva peruana, lleva a cabo una

para lograr que, una vez más, ambos tengan la misma

serie de experimentos ilegales, que consisten en re-

edad cronológica.

ducir seres humanos a un quinto de su tamaño. Al

Ese mismo año se estrena, además, Más allá de la

lugar arriban tres exploradores, que obviamente son

tumba (The Devil Commands), film en el que Boris

miniaturizados y deben desde ese momento enfrentar

Karloff compone a un científico que, sobrepasado por

una serie de nuevos y desconocidos terrores, como por

el dolor, construye una máquina capaz de registrar los

ejemplo un gato, un pollo y hasta unas gotas de lluvia.

impulsos del cerebro, con la que graba los de su esposa

Ya veremos que el tema será explotado nuevamente

agonizante. Cuando la mujer finalmente fallece, el

en cintas posteriores del género, de fines de los años

científico intenta con desesperación contactarse con

’50, como la estupenda El increíble hombre menguante

ella y comienza a trabajar con un espiritualista, cau-

(The Incredible Shrinking Man, 1957). También en 1940,

sando estragos y caos a su alrededor. El sentimiento de

se produce la aparición de Vuelve el hombre invisible

tristeza que traspasa a toda la película, la convierte en

(The Invisible Man Returns), que presenta a Vincent

un producto inusual dentro de este tipo de propuestas

Price en su primer rol protagónico como un hombre

de género.

común y citadino, que utiliza el suero de la invisibi-

Otro film de 1941 que nos interesa reseñar es Tains-

lidad para limpiar su nombre de las sospechas de un

tvennyy ostrov, versión soviética del clásico de Verne

crimen que no cometió. Al mismo tiempo y siempre

La isla misteriosa que, a diferencia de sus predecesoras

en el año que nos ocupa, se estrena La mujer invisible

norteamericanas, se mantiene en extremo fiel al texto

(The Invisible Woman), cinta cuya trama tiene mucho

del autor francés, concentrándose en el complejo di-

más que ver con lo expuesto en la película reseñada

seño del Nautilus y ofreciendo unos eficientes efectos

CIENCIA-FICCIÓN

da referida al «peligro rojo» y con los avistamientos,

113

especiales. Particularmente, es sorprendente que un producto de tal calidad haya podido estrenarse durante la guerra –por ejemplo, los alemanes cancelaron toda la producción de cine de ciencia-ficción durante la duración del conflicto, a excepción de un corto intitulado Weltraumschiff 1 startet…, rodado en 1937 pero estrenado recién tres años más tarde–. En opinión de varios críticos especializados, la versión soviética del clásico de Verne es la mejor de la historia del cine. Finalmente, el recorrido por el año 1941 se clausura con el estreno de una nueva versión de Dr. Jekyll and Mr. Hyde, titulada en nuestro país El hombre y la bestia y considerada como la mejor película firmada por Victor Fleming, el mismo director de otros dos clásicos insoslayables fuera del género como El mago de Oz (The Wizard of Oz) y Lo que el viento se llevó (Gone with the Wind), ambos de 1939. La trama es bien conocida, pero en este caso luce un poco más aligerada y en línea con las producciones del Hollywood de la época. Se sostiene, además, que después de su último reestreno en 1958, en un festival de la MGM, la película fue presentada en la televisión, doblada, pero al pasar a los formatos de cine hogareño, perdió parte de su metraje y de sus diálogos, lo que indica que esa copia podría haberse hecho de los negativos originales y no

CIENCIA-FICCIÓN

114

de la versión estrenada en los cines que, en apariencias, estaría definitivamente perdida. Ubicados ya en 1942, se produce la aparición de ¡Qué viene el ogro! (The Boogie Man Will Get You), una cinta en la que Boris Karloff nuevamente encarna a un científico, en este caso obsesionado con la creación de un súper hombre, como contribución al esfuerzo de guerra del país. A su lado se encuentra Peter Lorre, quien interpreta al jefe de policía y alcalde local, y

En esta página y en la anterior, afiches promocionales y varios fotogramas de The Invisible Woman y de la versión de 1941 de Dr. Jekyll and Mr. Hyde, protagonizada por Spencer Tracy y dirigida por Victor Fleming.

entre ambos deberán enfrentar la amenaza de un fascista (Frank Pugelia), quien irrumpe en el laboratorio declarando ser una bomba humana y con la intención de robar la fórmula del súper hombre inventada por el científico. En la línea de los fenómenos invisibles, en este caso relacionados con la guerra mundial en curso, se estrena también en 1942 El espía invisible (The Invisible Agent), en la que el hijo del creador original del suero de la invisibilidad se ofrece como voluntario del lado de los Aliados para actuar como espía. En connivencia con la muchacha de turno, el joven descubrirá secretos de alemanes y japoneses, y deberá enfrentar a un astuto oficial nipón –magistralmente interpretado por Peter Lorre–, que inventa una creativa trampa para atrapar al espía invisible. Ya en 1944, se produce la aparición de una nueva secuela de esta saga llamada La venganza del hombre invisible (The Invisible Man’s Revenge), en la que el patriótico espía de la propuesta anterior se convierte en un personaje atribulado que busca vengarse de los hombres que le tendieron una trampa en una de sus misiones. Si bien la trama no aporta demasiado, los efectos especiales son realmente asombrosos para la época. Lady and the Monster), primera versión del clásico de la CF literaria El cerebro de Donovan, de Curt Siodmak. Un científico, asistido por una pareja de ayudantes enamorados entre sí, remueve el cerebro de un millonario criminal y lo mantiene con vida. El cerebro se vuelve cada vez más poderoso y, con la ayuda del científico, planea una feroz venganza sobre los responsables de su muerte, utilizando al joven asistente del

CIENCIA-FICCIÓN

Este mismo año se estrena La dama y el monstruo (The

115

profesor como ejecutor de su voluntad y asesino. Un año después, en 1945, se produce el estreno de Strange Holiday, también conocida como The Day After Tomorrow, una fábula política realizada en 1942, cuando la propuesta de un Estados Unidos convertido en un estado fascista y policial era mucho más plausible y relevante respecto de la realidad histórica. Claude Rains interpreta a un hombre de negocios que, a su regreso de un largo viaje de cacería, descubre que la constitución del país ha sido derogada, reemplazada por un estado policial que ejerce un férreo control sobre una población apática y sumisa. Tendremos que escalar temporalmente hasta 1948 para encontrar otro film, medianamente destacable y relacionado con el género. Se trata de Abbott y Costello contra los fantasmas (Abbott and Costello Meet Frankenstein), que no aparece en estas páginas tanto por su aporte a la ciencia-ficción cinematográfica sino más bien como representativo de la posición paródica que la industria de los años ’40 adopta frente a los clichés y los temas popularizados tanto por ese género como por el terror en celuloide. La serie de películas que relacionaban a los dos comediantes con otros personajes creados en los ’30 por la Universal, se

116

caso nos limitaremos sólo a reseñar esta película como

CIENCIA-FICCIÓN

extendería hasta mediados de los ’50, pero en nuestro paradigma de lo afirmado. En la trama, un reanimado conde Drácula (Bela Lugosi, en su única repetición de su rol más significativo desde la aparición del film firmado por Todd Browning en 1931) necesita un nuevo cerebro para el también revivido monstruo de Frankenstein, y obviamente Costello es el donante elegido, lo que genera una serie de persecuciones y confusiones que hacen a la esencia de esta comedia

En la página anterior, imágenes de The Invisible Agent y de The Invisible Man’s Revenge, junto a un afiche promocional de The Lady and the Monster. A la derecha, un fotograma de la citada The Lady and the Monster.

juvenil.

reseñaremos es Krakatit, la destrucción del mundo

En 1948, también, se produce el estreno de un film

(Krakatit), película checoslovaca que adapta una histo-

británico del género que vale la pena rescatar. El

ria escrita por Karel Capek. En el libreto, un científico

terror del mañana (Counterblast, también conocida

llamado Prokop, descubre un nuevo explosivo al que

como The Devil’s Plot) ofrece una historia que con-

bautiza «krakatit» y que resulta ser un equivalente

trasta claramente con el patrioterismo vigente en el

–aunque más controlable– del poder atómico, con lo

cine norteamericano de época cercana a la Segunda

que se podría poner fin a la amenaza nuclear en todo el mundo. La intención de la propuesta está claramente ligada a la reflexión respecto de aberraciones como

escapar de un campo de concentración, asesina a un

las sucedidas en Hiroshima y Nagasaki, poniendo par-

médico australiano con el objetivo de continuar con

ticular énfasis en que los inventos o descubrimientos,

sus experimentos en guerra bacteriológica. La idea

con cierto tinte demencial, se potencian cuando los po-

es introducir un suero mortal en Gran Bretaña, pero

líticos o los hombres de negocios se interesan en ellos

el científico se enamora de su joven asistente y final-

para lucrar, lo que lleva también a pensar en por qué

mente su plan será desbaratado por la intervención de

los hombres de ciencia son empujados, inicialmente, en

otro de sus ayudantes de laboratorio. Curiosamente,

una u otra dirección en la investigación. La pregunta

cuando el producto fue finalmente estrenado en

es muy interesante para la época y, obviamente, es un

los Estados Unidos, en 1953, fue considerado como

antecedente valioso de lo que, en períodos próximos

demasiado violento y perturbador, en especial por la

y dentro de la ciencia-ficción fílmica, se convertiría en

plausibilidad de lo expuesto en su trama.

tema central y casi excluyente.

Siguiendo con los productos británicos de 1948, en ese

En 1949, como indicamos anteriormente, se produce el

mismo año se presenta Dick Barton - Special Agent,

estreno de la primera secuela de las aventuras de Dick

adaptación a la pantalla grande de un famoso serial

Barton, intitulada, en este caso y con nula originalidad,

de radio de Edward A. Mason, uno de los autores

Dick Barton Strikes Back. En la oportunidad, el súper

más reconocidos de ese medio. La historia presenta

agente inglés debe enfrentar a un dúo de criminales

al villano de turno con el plan de poner a Inglaterra

internacionales, quienes poseen un artefacto atómico

de rodillas a través de sendas bombas bacteriológicas,

capaz de devastar ciudades enteras. Este mismo año,

en tanto que el agente Barton intenta desbaratar la

y cerrando nuestro recorrido por las propuestas cine-

jugada, todo ello concebido en un tono bien próximo

matográficas del género en los ’40, se presenta en

a las aventuras historietísticas de la época. La impronta

la pantalla grande The Perfect Woman, otro film de

de Barton, como personaje del celuloide, fue tan im-

origen británico que, en tono de comedia, ofrece la

portante que se realizarían dos secuelas de este film,

historia de una muchacha (la hermosa Patricia Roc),

de las que hablaremos más adelante.

sobrina de un científico que aduce haber inventado

Finalmente, la última cinta del género de 1948 que

un robot tan perfecto que no puede distinguirse de

CIENCIA-FICCIÓN

Guerra Mundial. El héroe y el villano del film coinciden en un único personaje, un científico alemán, que tras

117

En esta página, escenas de las películas británicas Counterblast y Dick Barton - Special Agent. En la página siguiente, imágenes de los seriales Mysterious Dr. Satan, King of the Mounties y Adventures of Captain Marvel.

un ser humano. La chica simula ser la creación de su tío –que en realidad existe– frente a un joven que se ha enamorado perdidamente de ella. Como se puede apreciar en estas breves líneas, la ciencia-ficción de los años ’40 no fue ni abundante ni demasiado original, aportando apenas unos pocos proyectos de cierto relieve. Nuevamente, serán los seriales de la década los encargados de ofrecer mejores argumentos y tópicos que, en definitiva, se transformarán en el núcleo duro de las propuestas que harían de la ciencia-ficción en celuloide un género plenamente establecido a partir de los años ’50.

¡ES UN PÁJARO, ES UN AVIÓN!

LOS SERIALES EN LOS ‘40

Además del ya citado Flash Gordon conquista el universo (Flash Gordon Conquers the Universe), la década que nos ocupa se inicia con la aparición de El misterioso doctor Satán (Mysterious Dr. Satan), serial de 15 entregas de la especializada Republic Pictures que sigue la historia del personaje que da nombre a la propuesta. El doctor Satán es un brillante genio del mal, responsable de la creación de un poderoso robot que le permite alcanzar sus maléficos objetivos. Para incrementar aún más las capacidades de su creación,

118

ventada por Thomas Scott, pero el atraco es impedido

CIENCIA-FICCIÓN

Satán decide robar una célula de control remoto inpor la intervención de un héroe enmascarado que se da a conocer simplemente como Copperhead –en realidad, el hombre tras la máscara es el personaje de Bob Wayne, quien busca limpiar el nombre de su padre muerto de un delito que no cometió–. En este punto ingresa la muchacha de rigor en la historia, como la hija de Scott, Lois, quien es amenazada por una bomba del doctor mientras navega en un yate

controlado remotamente por la célula inventada por su padre. Obviamente, Copperhead interviene una vez más y rescata a la chica antes de que explote la bomba de Satán, que hundirá la nave, con la célula de control remoto incluida. De allí en más, como en todos los seriales, se suceden un conjunto de persecuciones, rescates imposibles y el debut de nuevos y sorprendentes artilugios científicos, hasta que en el final, el doctor Satán es asesinado por su propio robot, en la línea de moralina clásica del cine de la época. Un año más tarde, en 1941, se estrena un serial de 12 capítulos, también producido por Republic e intitulado Aventuras del Capitán Maravillas (Adventures of Captain Marvel). Cuando este estudio anunció la imposibilidad de adquirir los derechos de Superman para realizar un serial, la empresa Fawcett Publications, propietaria del copyright del Captain Marvel, le ofrece la posibilidad al estudio de adaptar ese personaje a la pantalla grande, a cambio de publicidad en sus films. El resultado fue el primer serial tomado de una historieta que no fuera una tira diaria, que sigue además la historia del héroe en su enfrentamiento con una mente criminal llamada el «Escorpión», quien intenta construir una máquina capaz de transformar la materia a partir de unos antiquísimos cristales rescatados por

sus integrantes de la misma recibe, como regalo, un amuleto que le da la posibilidad de transformarse en un súper hombre simplemente pronunciando el vocablo «Shazam», que reúne las mejores características de una serie de seres de la mitología griega. En el enfrentamiento final, el heroico Capitán logra derrotar a su enemigo y salvar a la Humanidad de otro

CIENCIA-FICCIÓN

una expedición científica y con la obvia intención de dominar el mundo. En la citada expedición, uno de

119

En esta página y en la siguiente, afiche promocional y diferentes imágenes de Batman, serial estrenado en 1943 que supuso un nuevo paso de la historieta a la pantalla grande para los súperheroes de la época.

aspirante a tirano global. En 1942, Columbia presenta un serial de 15 capítulos llamado El Capitán Medianoche (Captain Midnight), un producto adaptado de la radio que es poco más que propaganda en tiempos de guerra. La trama sigue la historia del héroe –ataviado como un antiguo piloto de avión– en su lucha contra un traidor, que ha raptado a un científico en un intento por apoderarse del poderoso radar que ha inventado. Este mismo año, Republic estrena El rey de la policía montada (King of the Mounties), una propuesta en 12 entregas e inspirada en un trabajo de 1940, el patriotero serial King of the Royal Mounted, cuyo fracaso en las taquillas se debió, principalmente, a que sus villanos eran poco identificables con agentes alemanes –que lo eran–, ya que en ese momento los Estados Unidos todavía no le habían declarado formalmente la guerra al Eje y había que ser cuidadosos. En el caso que nos ocupa, el héroe enfrenta ahora sí a un grupo de agentes alemanes, japoneses e italianos que preparan la invasión de Canadá mediante el bombardeo del país con un avión indetectable. Así, el inventor de un radar capaz de ubicar el fantástico aparato del Eje, es asesinado, y el héroe queda entonces a cargo del artefacto y con la misión de rescatar a la

CIENCIA-FICCIÓN

120

hija del creador del mismo, que ha sido secuestrada por los agentes enemigos. Ya ubicados en 1943, se produce el estreno de otro serial de Columbia, esta vez protagonizado por un famoso héroe de historieta. Batman es una propuesta de 15 capítulos, que sigue la historia del millonario Bruce Wayne y de su joven compañero, Dick Grayson quienes, ataviados como Batman y Robin, combaten criminales y agentes del Eje que intentan sabotear el

esfuerzo norteamericano de guerra. El Dr. Daka es el villano de turno, un espía japonés que, desde una especie de «casa de los horrores» y museo de crímenes de guerra, maneja una serie de complots destinados a sabotear el aporte del país del Norte al conflicto bélico. Además, Daka es capaz de transformar en zombis a las personas mediante el uso de un aparato de control mental, y utilizarlas para ejecutar sus planes, además de poseer un destructivo rayo alimentado con radium –mineral del que pretende apoderarse en los Estados Unidos–, arma definitiva del Eje para vencer a los Aliados en la guerra en curso. En el enfrentamiento final, el villano morirá en su huída, atacado por los cocodrilos de su «casa de los horrores», en tanto que los héroes rescatarán a sus amigos y protegerán, celosamente, sus verdaderas identidades… El serial, basado en la historieta creada por Bill Finger y Bob Kane para Detective Comics en 1939, se transformó en un sorpresivo éxito para la compañía productora, que repetiría la experiencia con ambos enmascarados en 1949, como destacaremos oportunamente. Un año después, llega a la pantalla grande otro superhéroe clásico. Capitán América, el vencedor (Captain America) es un nuevo serial de Republic Pictures, desplegado a lo largo de 15 capítulos, y se trata tanto del historieta, como también del trabajo final que realizó para la compañía el energético director John English. En la trama, el héroe debe enfrentar a un cruel villano llamado Scarab (Lionel Atwill), quien posee una máquina infernal conocida como el «vibrador dinámico», con la que pretende destruir a los Estados Unidos en beneficio del Eje. Dick Purcell, quien le dio una brillante interpretación atlética al personaje central del

CIENCIA-FICCIÓN

último de su tipo de tiempos de guerra basado en una

121

serial, falleció poco tiempo después de completado el rodaje del mismo. También en 1944 se presenta El misterio del Ártico (The Great Alaskan Mystery), un serial de Universal en 13 entregas, que repite el ambiente patriótico y está acorde con los tiempos de guerra que enfrentaban los Estados Unidos. La historia sigue a un científico que va en busca de una mina en Alaska, capaz de proporcionarle el mineral necesario para alimentar un arma de rayos de su invención. El hombre, como es de rutina en los seriales, es acompañado por su hermosa hija y por el héroe de turno –y futuro yerno–, y los expedicionarios son atacados por un grupo de simpatizantes del Eje, apenas arribados al más boreal de los territorios norteamericanos. Ya ubicados temporalmente en 1945, se produce el estreno de El pirata fantasma (Manhunt of Mystery Island), otra vez con producción de Republic y 15 capítulos de desarrollo. El profesor Forrest, inventor de un poderoso transmisor atómico, desaparece en misteriosas circunstancias, y su hija Claire emprende su búsqueda con la ayuda del criminólogo Lance Reardon, quien con sus conocimientos del tema determina que el abducido científico podría estar en una misterio-

122

hombres que descienden del capitán Mephisto, un

CIENCIA-FICCIÓN

sa isla del Pacífico. El lugar es propiedad de cuatro tiránico pirata que gobernó en la isla dos siglos atrás. La pareja protagónica no está segura de quién retiene al profesor desaparecido, pero lo que sí es cierto es que uno de ellos se convierte en la viva imagen del pirata a través de un artefacto al que se denomina la «silla transformadora». El final es paradigmático: en el último momento, los héroes desbaratan el plan del villano y regresan al continente con el padre de

En la página anterior, afiche promocional y dos fotogramas del serial del Capitán América. En esta página, afiche promocional, una imagen de El pirata fantasma y un retrato de la hermosa Linda Stirling.

la chica sano y salvo. El tema de la transformación molecular, que es la premisa de ciencia-ficción básica detrás de la trama de El pirata fantasma, no volverá a tratarse en la pantalla grande hasta el estreno de La mosca de la cabeza blanca (The Fly) en 1958, y aunque el mecanismo por el cual actúa la misteriosa silla no se revela por completo, en un segmento del serial, el villano habla de la posibilidad de manejar a voluntad las células del cuerpo humano a nivel molecular. Otro rasgo sobresaliente de la propuesta es la presencia protagónica de la bellísima Linda Stirling, quien había protagonizado en 1944 otro serial de gran suceso de Republic, intitulado La mujer tigre (The Tiger Woman). Se dice que Stirling era el equivalente de Elizabeth Taylor en el universo de los seriales, y que su carrera no despegó hacia el estrellato de primer nivel por la excesiva exposición de su imagen en westerns y otros proyectos de clase B. Siempre en 1945, Columbia presenta otro serial, The Monster and the Ape, diseñado en el formato estándar de 15 entregas semanales. En esencia, la trama presenta las típicas figuras del género: un inventor, su hermosa hija y el héroe de turno, en este caso, un joven representante de la industria. El profesor Arnold ha inventado un robot al que llama «el hombre metalógeKen Morgan, el representante de la compañía que ha financiado el desarrollo del autómata. El villano de turno es otro científico, Ernst, cuya intención es construir un ejército de robots para una potencia extranjera. El ingenio en cuestión funciona gracias a un «disco de metalógeno», un extraño mineral que se convierte en el desideratum general de toda la historia y, como ocurre en los seriales, cuando el villano está a punto

CIENCIA-FICCIÓN

no», que le es sustraído cuando parte al encuentro con

123

de lograr sus objetivos, todo se desbarata, resultando en este caso en la muerte de Ernst y en la destrucción definitiva del robot de marras, al caer ambos por un precipicio. Otra de las propuestas disparatadas de este film es la presencia de Thor, un gorila amaestrado que justifica parte del nombre de la serie y que cumple las órdenes del profesor Ernst, enfrentando en varias ocasiones a los héroes de turno. Si bien The Monster and the Ape no está basado en una historieta de la época, la trama bien podría haber tenido ese origen por lo bizarro de sus planteos. Columbia comenzó la producción del serial a finales de 1937, en la línea de sus propuestas menos serias y más humorísticas que la de sus dos principales rivales en el segmento, Republic y Universal, una tendencia que se profundiza –para disgusto de los aficionados al serial de la época– al punto de que este producto será el último con algún valor consistente de entretenimiento, antes de que los seriales realizados por el estudio derivaran directamente en el absurdo y la incoherencia. Finalmente, un párrafo aparte merece la apariencia del autómata protagonista, que permanece como uno de los más convincentes presentados en el fantástico universo de los seriales cinematográficos.

124

producto del género intitulado The Purple Monster

CIENCIA-FICCIÓN

Todavía en 1945, Republic ofrece a sus seguidores otro Strikes, concebido para desgranarse en 15 entregas y precursor en la instalación de la idea de la invasión marciana encubierta en la pantalla grande. Mientras investiga la caída de un gran meteorito, el reconocido astrónomo Cyrus Layton descubre que, en realidad, se trata de una nave espacial, con un único tripulante proveniente de Marte y que se hace llamar «el monstruo púrpura». De vuelta en el observatorio del científico,

En la página anterior, afiches promocionales y dos escenas de The Monster and the Ape, un formidable pastiche de Columbia. En esta página, a la derecha, afiche promocional de The Purple Monster Strikes.

el marciano revela sus intenciones de conquistar la

puedan robarlo. Los sicarios intentan entonces secues-

Tierra y, ante las protestas de Layton, lo asesina con

trar al científico, para obligarlo a construir un ingenio

un gas venenoso. Poco después, tras un maravilloso

similar, pero son detenidos por Duncan Richards, un

procedimiento que lo hace incorpóreo, el marciano se

dotado detective y amigo de Chambers.

apodera del cadáver de Layton, para poder trabajar

Más tarde, sin embargo, el «Fantasma» logra secues-

secretamente en su plan de conquista. La idea es cons-

trar al científico y lo obliga a utilizar un collar de

truir una nave espacial mucho más grande y, de esa

esclavo, un aparato de control mental cuya remoción

forma, traer a nuevos marcianos a la Tierra para efec-

incorrecta implica la muerte de quien lo usa. Richards

tivizar la invasión. Poco a poco, la sobrina de Layton

se entera de la desaparición de su amigo por boca de

y el joven abogado de la institución científica donde

Diana Farnsworth, secretaria del profesor, y cuando

trabaja, descubren la verdad de lo que está ocurriendo,

rastrea a sus captores hasta el depósito donde se guar-

mientras el marciano va apoderándose de todos los

da una réplica del invento de Chambers, descubre a

artefactos científicos necesarios para llevar a cabo su

su mesmerizado amigo y a un grupo de secuaces del

plan. En el último instante, cuando el invasor ya ha

«Fantasma» intentando robar el aparato. Richards si-

partido con su nave rumbo al planeta rojo, el abogado

gue a los criminales hasta su guarida, donde Chambers

logra destruirlo utilizando un arma de electricidad.

se las ha ingeniado para construir una trampa que le

Casi sin proponérselo, el guión de The Purple Monster

permita acabar con el villano en jefe. Pero Richards es

Strikes estableció una línea argumental que seguirán

quien casi cae en la trampa, lo que lleva a Chambers

otros productos posteriores de Republic, y sentó las

a ofrecer su vida para salvar la de su amigo. Con el

bases para unos de los temas clave de la ciencia-ficción

científico muerto, el «Fantasma» planea construir

cinematográfica de los años ’50.

un ciclotrodo aún más poderoso, y a partir de allí se suceden una serie de enfrentamientos típicos de cualquier serial, en los que los héroes de turno siempre

duración. En la trama, el brillante profesor Chambers,

están a punto de sucumbir y se salvan apenas, hasta

quien trabaja para el gobierno de los Estados Unidos,

arribar a un climático final en el que se descubre la

ha creado un aparato futurista al que ha bautizado «ci-

identidad del «Fantasma» y el aparato que ha ideado

clotrodo», que tiene la capacidad de anular cualquier

para el mal pasa a estar en custodia de las autoridades

tipo de energía eléctrica que se encuentre en el rango

gubernamentales que, aparentemente, en esta época

de los rayos que emite. Para su desgracia, uno de los

todavía eran de fiar…

confidentes del invento es, en realidad, el «Fantasma

Aunque técnicamente impecable y con la extravagante

Rojo» del título, un maléfico criminal que oculta su

vestimenta del villano como uno de sus mejores ha-

identidad detrás de una máscara que simula una cala-

llazgos –el «Fantasma» es una especie de antecesor

vera. Chambers es atacado por un grupo de secuaces

de Killing, el antihéroe vengativo de la historieta y la

del villano, pero logra destruir su invento antes de que

fotonovela de los años ‘60–, The Crimson Ghost sin

CIENCIA-FICCIÓN

Ya en 1946, el mismo estudio ofrece a los aficionados un nuevo serial, The Crimson Ghost, con 12 capítulos de

125

embargo ofrece algunas muestras del agotamiento del serial y, particularmente, el de las propuestas presentadas por Republic a partir de mediados de los años ’40. Un año después, Columbia ofrece otro delirante serial de ciencia-ficción al que titula Brick Bradford. La historia, desarrollada en 15 entregas, presenta a Brick Bradford, un héroe al que un oficial del gobierno norteamericano le confía la guarda del «rayo interceptor», un poderoso sistema defensivo contra misiles inventado por el británico Dr. Tymak. El villano de turno, llamado Laydron, planea hacerse con el ingenio y descubre el encargo de Bradford espiando a su grupo de amigos. Un extraño mineral llamado «lunarium», que sólo puede encontrarse en la Luna y es vital para el funcionamiento del rayo, es obtenido por el Dr. Tymak mediante sendos viajes al satélite de la Tierra, que el científico realiza a través de otra de sus invenciones, la «puerta de cristal». Pero Tymak es capturado por los selenitas mientras se encuentra en la Luna y Bradford debe emprender su propio viaje a través de la «puerta» para rescatarlo. En el terreno, el agente descubre que existe una facción de rebeldes lunarianos a los que apoya y, tras conseguir derrocar

126

De regreso a la Tierra, Laydron intenta varias veces

CIENCIA-FICCIÓN

al gobierno lunar, obtiene la liberación de Tymak. secuestrar al inventor inglés, pero sus planes son frustrados una y otra vez por Bradford. Tymak determina que para continuar con sus investigaciones necesita conseguir una fórmula secreta que se ha perdido 200 años atrás, y entonces Bradford debe utilizar otro de los inventos del científico para retroceder en el tiempo, donde tras luchar con salvajes y piratas, recupera la fórmula y regresa. Finalmente, Bradford también se

En esta página y en la anterior, otro afiche promocional y tres imágenes de The Purple Monster Strikes, serial que anticipa la idea de la invasión marciana, más un fotograma de The Crimson Ghost.

las arregla para derrotar definitivamente a Laydron y a sus secuaces. El serial estaba basado en la tira cómica diaria llamada The Brick Bradford, que comenzó a aparecer en 1933 y extendió sus aventuras hasta 1957, fecha en que falleció su dibujante original. En un principio, Bradford era una especie de soldado de fortuna, pero con el tiempo los elementos de ciencia-ficción comenzaron a filtrarse en sus historias, aunque no las dominaron por completo. A partir de allí, algunos especialistas consideran que esta tira fue precursora de la más robusta Flash Gordon, de Alex Raymond. Obviamente, con estos antecedentes, el serial de Brick Bradford podría haber aspirado a convertirse en un hito similar al del producto producido por Universal en los ‘30, pero tuvo la mala fortuna de ser adaptado en Columbia, con lo que tanto el guión como los efectos especiales presentados no estuvieron a la altura del desafío. Siguiendo con este recorrido, en 1948, el principal responsable de los seriales baratos de Columbia, Sam Katzman, decidió llevar al estudio los derechos de la historieta creada por Jerome Siegel y Joe Schuster una década atrás: Superman. En la trama, Jor-El, un científico del distante planeta Kryptón, predice que un desastre natural inminente destruirá su mundo científica. Tal como había vaticinado, el desastre se produce y el condenado científico apenas logra poner a su hijo en un cohete y lanzarlo rumbo a la Tierra antes de que todo desaparezca en el cielo. El chico es encontrado por los Kent, una pareja de granjeros que lo cría como si fuera su propio hijo, dándole el nombre de Clark. Al madurar, Clark descubre que tiene poderes supra humanos, y más tarde comienza

CIENCIA-FICCIÓN

natal, pero sus avisos son desestimados por la sociedad

127

a trabajar como periodista en el Daily Planet de Metrópolis. En esta aventura, el villano de turno es la «Mujer Araña», quien obliga a un brillante científico a construir un «rayo reductor» con el que planea subyugar a Metrópolis si sus demandas no son atendidas. Con la ayuda de sus colegas Lois Lane y Jimmy Olsen, Clark rastrea la guarida de la «Mujer Araña», pero ésta posee un fragmento de kryptonita, que es mortal para Superman. Aunque el héroe casi perece en su primer encuentro, logra solucionar el tema blindando su traje con plomo, y va de regreso al escondite de la villana, quien mantiene secuestrados a sus dos amigos. Tras el duro enfrentamiento que se da en el lugar, la villana es desintegrada por su propia creación y Lois y Jimmy –quienes siguen sin conocer el secreto de Clark– son rescatados por Superman. Pese a los recortes presupuestarios y los efectos especiales poco creíbles, el serial se convirtió en el producto más taquillero de la historia del género, incluso para asombro de sus responsables. Tal era la impronta de Superman en la cultura popular de la época, y el personaje, además de la historieta original, ya había sido adaptado a la radio, al dibujo animado –en una maravillosa serie realizada por los hermanos Fleischer

128

previo y abortado, en Republic Pictures, y la llegada a

CIENCIA-FICCIÓN

entre 1941 y 1943– y también tuvo un proyecto de serial, la pantalla grande estuvo principalmente ligada a la baja de las ventas de las historietas del personaje en la economía de la posguerra. Columbia siguió por la senda superheroica un año más tarde, con la presentación del serial Batman y Robin (Batman and Robin), una propuesta desarrollada a lo largo de 15 episodios. Una máquina de control remoto diseñada por el gobierno es robada, y Batman y Robin

En la página anterior, afiche promocional y dos diferentes escenas de Brick Bradford. A la derecha, un fotograma de la adaptación de Superman, que se convirtió en el serial más taquillero de la historia del cine.

son asignados al caso por el comisionado de policía

que asesina al profesor Drake y que casi tiene éxito,

Gordon. El aparato fue inventado por el brillante pro-

también, en la eliminación del profesor Millard, am-

fesor Hammil, quien por su invalidez está confinado a

bos miembros prominentes de Science Associates. Los

una silla de ruedas y cuenta como única asistencia con

crímenes de Vulcan comienzan a ser investigados por

su ayudante Carter. Un criminal enmascarado, cuyo

Glenda Thomas, una fotógrafa de revistas, después de

nombre es Wizard, ha instalado la máquina en una

encontrarse con otros dos miembros de la organización

caverna secreta, e instruye a un grupo de sicarios para

científica, Burt Winslow, director de publicidad, y Jeff

que roben varios diamantes, gemas que funcionan

King. Éste último, después de repeler un ataque de

como combustible del invento. A partir de allí se desa-

los secuaces de Vulcan, se dirige a una cueva secreta

rrollan una serie de enfrentamientos, aparecen nuevos

donde se oculta el profesor Millard, quien le entrega al

y poderosos inventos codiciados por el villano para

joven su último invento: un traje de vuelo propulsado

sus maléficos planes, y los héroes salvan la ropa por

con motores jet. King decide entonces llamarse a sí

poco en numerosas ocasiones. En el final, incluso, una

mismo «Rocket Man» y utilizar la creación de Millard

curiosa fotógrafa intenta develar la identidad secreta

para oponerse a los planes de Vulcan de dominar la

de Batman, pero el héroe tiene un truco preparado

asociación de científicos y conquistar el mundo. Des-

que le permite protegerse de la molesta curiosidad

pués de varios enfrentamientos entre el héroe y los se-

femenina. El escaso presupuesto, el guión poco sagaz

cuaces de Vulcan, el profesor Millard inventa un nuevo

y una dirección carente de toda imaginación, hicieron

ingenio, el «decimator», que es capaz de desintegrar la

que Batman y Robin se convirtiera en una propuesta

roca sólida. El poderoso aparato es robado por el Dr.

pobre desde todo punto de vista, incluso inferior al del

Vulcan, quien planea plantarlo en el fondo del océano

otro serial dedicado al encapotado de Ciudad Gótica,

Atlántico y generar de tal manera una catástrofe de

que fuera estrenado en 1943.

enorme magnitud, capaz de destruir completamente

Nuestro recorrido por los seriales de ciencia-ficción

a la ciudad de Nueva York, a menos que la urbe se

de los años ’40 se cierra con otro título producido por

avenga a pagarle mil millones de dólares. Con la ayuda

Republic: El rey de los hombres cohetes (King of the

de sofisticado equipo de detección, el «Rocket Man» localiza el aparato robado y el escondite de Vulcan, y cuando el villano ya ha comenzado con su ataque-

intentaron aprovechar de manera cada vez más fre-

catástrofe sobre Nueva York, el héroe entra en escena

cuente la popularidad de la ciencia-ficción como base

y termina salvando el día y a la ciudad.

para sus propuestas en entregas, aunque la rigidez de

Pese a que la decadencia del serial también comenzaba

sus esquemas creativos no ayudó para nada al estable-

a notarse en el estudio por antonomasia del género,

cimiento de un resurgir de los films en capítulos. En ese

Republic siempre ofreció algo más que sus rivales en

entorno se inserta El rey de los hombres cohetes, cuyo

ese mercado y el producto que nos ocupa en estas

libreto presenta al Dr. Vulcan, un maléfico científico

líneas no fue la excepción a esa regla. Teniendo en

CIENCIA-FICCIÓN

Rocket Men). A finales de la década, con el serial en franca decadencia, tanto Columbia como Republic

129

En esta página y en la siguiente, tres imágenes del citado serial de Superman, junto a otras tres escenas de Batman y Robin, fallida continuación del film en entregas estrenado por Columbia en 1943.

cuenta las sumas astronómicas que pedían los editores de historietas para vender los derechos de sus personajes a la industria cinematográfica, Republic decidió crear su propio héroe, en la línea de los justicieros enmascarados, reforzando su propuesta con buenos efectos especiales y un sólido guión. La destrucción de Nueva York está tomada de metraje exhibido en el film El diluvio (Deluge, 1933) y son particularmente destacables las escenas de vuelo del personaje central, que fueron realizadas con todo esmero, logrando de esta manera una gran credibilidad. Finalmente, el personaje central de esta historia fue nuevamente utilizado por el estudio en proyectos posteriores como Guerra entre planetas (Radar Men from the Moon, 1952), donde asume el nombre de Commando Cody; Zombies of the Stratosphere (1952), en la que simplemente es llamado Larry Martin; y en la serie de 12 cortos de Commando Cody, Sky Marshall of the Universe, que la compañía estrenó en cines y en televisión a partir de 1953. Obviamente, es justo suponer que, además, el personaje inspiró la historieta The Rocketeer, de Dave Stevens, cuyas aventuras sirvieron también de base para la película homónima de Disney estrenada en 1991.

CIENCIA-FICCIÓN

130

LA ÉPOCA DORADA

LA CF EN LOS ‘50

La década de los ’50 será la época del despegue definitivo de la ciencia-ficción cinematográfica, y por más que algunos estudiosos sostengan que el género en la pantalla grande alcanzaría su madurez con el estreno de 2001, una odisea del espacio (2001: A Space Odyssey, 1968), de Stanley Kubrick, en nuestra humilde opinión productos mucho menos altisonantes y esteticistas de los años ’50 aportaron mayores contenidos y de-

sarrollo al género, estableciéndolo como fiel reflejo de los paradigmas de una determinada época y un determinado lugar. Nunca más «realismo hipotético» que en los Estados Unidos del período que nos ocupa en este capítulo. En los ’50, la ansiedad, la paranoia y la complacencia marcharon una junto a otra, y en los albores de la carrera espacial –y el redescubrimiento de la idea de «frontera»–, el hombre también dio vía libre a fuerzas capaces de acabar con toda vida en el planeta. El mundo, que según la creencia popular, recientemente se había salvado para la democracia, se encuentra en esta época una vez más dividido en dos bloques antagónicos e irreconciliables, representados por los países de la Cortina de Hierro y el Occidente liderado por los Estados Unidos, respectivamente. Como consecuencia de esa guerra de baja escala, el miedo se instala como uno de los sentimientos más arraigados en ambas sociedades, algo que la ciencia-ficción norteamericana en celuloide reflejará en algunos casos con una maestría pocas veces repetida en la historia del cine. Es interesante destacar a esta altura el cambio operado en todo el universo del cine y, de paso, relacionar ese cambio con las nuevas preferencias de la audiencia y el porqué de las mismas. Mientras los nista y ensimismado en sus propios problemas, los géneros más significativos fueron aquellos empeñados en reflejar de diversas maneras las obsesiones de la sociedad norteamericana fronteras hacia adentro. Pero cuando, como consecuencia de la Segunda Guerra Mundial, el Imperio Británico queda totalmente extenuado y los Estados Unidos deben reemplazarlo como imperialismo predominante de Occidente, el cine

CIENCIA-FICCIÓN

Estados Unidos fueron un país mayormente aislacio-

131

En esta página y en la siguiente, afiche promocional y diferentes imágenes de El rey de los hombres cohetes, que introdujo a un héroe original creado por Republic, que luego protagonizó otros seriales del estudio.

acompaña esa transformación, amplía sus fronteras y la obsesión popular dejan de ser la vida fácil y rica de los ’20, la Gran Depresión de los ’30, los gángsters o las contradicciones del «sueño americano», para dar paso a preocupaciones más relacionadas con lo externo, con la «invasión», el desastre de magnitud planetaria o sus consecuencias más localizadas. Estas ansiedades fueron exploradas por el cine de ciencia-ficción en una multitud de variantes en la década que nos ocupa, con respuestas muchas veces diametralmente opuestas, y aunque no se puede hablar de un gran número de obras maestras, sí es cierto que por sus planteos y su relación con la sociedad, esos films resultan atractivos incluso en nuestros días y ofrecen una riqueza interpretativa de enorme relevancia, tanto, que hizo de la ciencia-ficción un género más cerca del mainstream que del habitual entretenimiento que ofrecían los seriales en las dos décadas inmediatamente anteriores. La oferta para los espectadores de la época incluyó films relacionados con la inminente conquista del espacio; invasiones extraterrestres de todo tipo y en muchos casos, veladas al punto de resultar imperceptibles; monstruos de diferentes cataduras, tamaños y

132

directamente con el uso irresponsable del hombre –y,

CIENCIA-FICCIÓN

procedencias, que en muchos casos se relacionaban particularmente, de los científicos– del nuevo poder atómico; y un abundante etcétera. Veremos cómo la concepción de la ciencia, benévola cuando con sus avances permitió prevalecer en la Segunda Guerra Mundial, se irá tornando en algo más oscuro, poniendo a sus seguidores y profesionales en el rol de seres fríos e inescrupulosos –tal como se concebían previamente a los científicos alemanes que, sin embargo, fueron

aprovechados tanto por norteamericanos como rusos para aventajar a su adversario–, capaces de casi cualquier cosa y responsables de los diversos escenarios de catástrofe que se cernían sobre el mundo. Fuera de los Estados Unidos, algunos países como Gran Bretaña, Japón, Italia o México que, con el tiempo, se transformaron en importantes productores de cine del género, abordarán los mismos hechos de una manera diferenciada. Un claro ejemplo de lo expresado es Godzilla, el rey de los monstruos (Gojira, 1954), el film japonés que inaugura el kaigu eiga –es decir, las películas de monstruos descomunales que azotan a una determinada región o combaten entre ellos– cuyo planteo de base guarda similitudes con sus pares norteamericanas –enormes criaturas surgidas al calor de la contaminación atómica– pero que, con un examen más detenido, revela preocupaciones muy distintas y muy representativas de su sociedad de origen. En un sentido parecido pueden analizarse algunos de los primeros films procedentes de Europa del Este, que aparecen despojados de la paranoia que campeaba en producciones similares de Occidente. Hacia finales de la década, las propuestas del género sufren una merma a partir de la banalización de la paranoia inicial y de un lógico aplacamiento de la esa manera, la ciencia-ficción cinematográfica pierde terreno y los monstruos del celuloide comienzan a relacionarse más con el terror fílmico. De hecho, se puede establecer con una cierta precisión que es a partir del éxito de La maldición de Frankenstein (The Curse of Frankenstein, 1957), de la británica Hammer y como parte de un resurgir de los grandes clásicos de terror de la Universal de los años ’30, que el detrimento

CIENCIA-FICCIÓN

ansiedad por el presente y el futuro inmediato. De

133

del cine de ciencia-ficción a favor del terror se hace más evidente. Pero pese a todo, los años ’50 fueron eficaces a la hora de establecer a la ciencia-ficción cinematográfica como un género reconocible para el espectador, y es a partir de allí que el corpus de películas enroladas en la definición deja de ser algo inusual en las pantallas grandes de todo el mundo. Es también significativo que la literatura anglosajona del género alcance, en este mismo período de tiempo, su madurez y establezca a su vez una época dorada en su desarrollo, aunque cabe mencionar que lo hizo desde una visión diametralmente opuesta, en la que reina el optimismo en el progreso científico. Para comprender este doble fenómeno de una misma manifestación de la cultura de masas, es necesario profundizar un poco más en la realidad histórica del período, particularmente en la de los Estados Unidos.

LA DICOTOMÍA

DE LOS AÑOS ‘50

La idea –nostálgica en esencia– más comúnmente extendida es que la década de los ’50 en los Estados Unidos, o más precisamente, el período anterior al asesinato de John Fitzgerald Kennedy en noviembre de

134

ciedad ordenada, políticos benevolentes y confiables, y

CIENCIA-FICCIÓN

1963, fue una época absolutamente idílica, con una soun aura de protección hacia el ciudadano que cumplía con sus obligaciones y quería prosperar en paz. Incluso el Superman de la televisión se alzaba en defensa de «la verdad, la justicia y el modelo americano». Pero ese camino, aparentemente alfombrado con rosas, se termina en cuanto se profundiza un poco más sobre las realidades que subyacen en el período. Por dar un ejemplo, Richard Nixon, vicepresidente de

En la página anterior, afiche promocional y dos fotogramas de Godzilla, el film inaugural del kaigu eiga. En esta página, un afiche promocional y una imagen de La maldición de Frankenstein, cinta que señala el resurgir del terror en celuloide.

Dwight Einsenhower entre 1952 y 1960, construyó su ascendente carrera política utilizando la calumnia y la acusación de comunistas para con sus oponentes políticos, describiendo en 1950 a su rival por una banca en el senado, la diputada Helen Gahagan Douglas, como la «señora rosada», refiriéndose no sólo al color del guardarropas de la mujer sino también a sus supuestas simpatías con el comunismo (algo que refleja magníficamente en su trama la película Watchmen - los vigilantes, que pone en boca de uno de sus personajes esta particular táctica de Nixon para forzar sus cinco períodos como Presidente de un Estados Unidos alternativo). El electorado norteamericano elige a Nixon porque el personaje les ratifica lo que otros en la sociedad ya le estaban contando: que el mal estaba muy cerca, su nombre era Rusia y tenía misiles atómicos capaces de terminar con el «sueño americano». Las agresivas acciones del Comité del Senado de Actividades Antiamericanas sobre el espectro político de Hollywood y su supuesta infiltración comunista, comenzaron en 1947, asustando de muerte a los miembros de la colonia artística. Los grandes estudios, dedicados a fabricar entretenimiento con el objetivo de conseguir beneficios económicos, vivieron como una pesadilla la acusación, y no tuvieron reacción alguna acusadas por sus simpatías políticas, relegándolas de hecho al olvido y a la prohibición de conseguir trabajo en la industria del cine del país. Una pocas figuras, como Humphrey Bogart, pudieron resistir con éxito las presiones de los políticos gracias a su popularidad, pero incluso ese actor fue obligado a retractarse públicamente de sus críticas para con la tarea y los métodos del Comité. Y hubo, además, otras

CIENCIA-FICCIÓN

cuando grandes estrellas de la época comenzaron a ser

135

estrellas que por ideología colaboraron activamente y denunciaron a sus antiguos compañeros de trabajo por sus inclinaciones políticas equívocas. Los ejecutivos de los estudios, maestros en el arte de la supervivencia, supieron de inmediato qué debían hacer, y a partir de ese momento el cine tomó un cariz totalmente contrario a cualquier propuesta que simplemente tuviera un ligero tufillo a «rojo», llegando a producir delirios como El milagro de Marte (Red Planet Mars, 1952), en el que Dios habla desde el planeta rojo para denunciar a los bolcheviques. Los problemas con los soviéticos, y con el antiguo aliado Stalin, comenzaron inmediatamente después de terminada la Segunda Guerra Mundial, cuando el líder comunista advirtió la disparidad del esfuerzo empeñado por ambos países para lograr ganar la guerra: para cuando Alemania capituló, los soviéticos habían perdido cerca de 20 millones de soldados en los campos de combate europeos, amén de otros tantos civiles, en tanto que las bajas norteamericanas ascendieron, incluyendo el escenario del Pacífico, a unos 400.000 hombres, en su mayoría militares. A Stalin particularmente le molestaba el hecho de que los Estados Unidos salieron muy fortalecidos de la contienda. Con vastos

136

dores capacitados como para sostener un desarrollo

CIENCIA-FICCIÓN

recursos naturales y, en ese momento, con trabajaindustrial sofisticado, la economía norteamericana comenzó a crecer a niveles nunca antes vistos, y con el fin de la guerra, esos mismos trabajadores comenzaron a gastar su dinero, generando una reconversión industrial que llevó de fabricar aviones, tanques y otros insumos de guerra, a elaborar automóviles, artículos para el hogar, muebles y otros bienes de consumo. Si la economía de los Estados Unidos era robusta en

En la página anterior, afiche promocional y dos escenas de la ridícula El milagro de Marte. En esta página, a la derecha, afiche promocional y una imagen de La cosa, uno de los grandes films del género de 1951.

1945, en 1950 ya tenía dimensiones de coloso a escala mundial, en franca contradicción con las realidades que vivían los pueblos de Inglaterra y del continente europeo en general, donde el racionamiento continuó incluso hasta más allá de 1950. Algo similar ocurría tras la Cortina de Hierro, con toda una generación de hombres jóvenes desaparecida, y una total devastación de la industria y la infraestructura. Todos estos hechos, sumados a la realidad de que los Estados Unidos tenían la bomba atómica y los rusos no, llevaron a Stalin no sólo al resentimiento sino también a tomar medidas para equiparar la balanza del poder mundial, iniciando una era de espionaje y compra de voluntades que, eventualmente, llevaron a que la Unión Soviética poseyera su propia bomba atómica en 1949, inaugurando de esa manera una época de paranoia y sordos enfrentamientos en todos los terrenos excepto en el de la guerra a escala total, que se reflejaría en el cine de los años ‘50 y establecería una sólida base para el desarrollo de la ciencia-ficción en celuloide, como intérprete por antonomasia de esos temores. Estos hechos, sucintamente resumidos en los párrafos anteriores, permiten comprender el establecimiento de la mera propaganda como un tema fundamental en la sociedad norteamericana, lo que más paranoicos. La esencia de una propaganda efectiva es doble: primero, debe contener suficientes trazos de verdad como para ser tomada en serio, reduciendo situaciones complejas a sencillos slogans que apelan al miedo y a la xenofobia. El segundo aspecto es la demonización del enemigo, su conversión en un «otro» con el que es imposible llegar a acuerdo alguno. Esa «otredad» será reflejada de manera básica y efectiva

CIENCIA-FICCIÓN

permitió el florecimiento de la ciencia-ficción de rasgos

137

por un puñado de invasores extraterrestres que serán las estrellas de la mejor ciencia-ficción de los ’50. Es sumamente interesante analizar de qué manera la propaganda lleva a los sujetos a abandonar cualquier interés personal o familiar en pos de un objetivo superior, que es el interés del Estado. Se trata del concepto del «bien mayor», que implica en sí mismo el auto sacrificio con tal de preservar los intereses que representa el Estado, los cuales deben sobrevivir a cómo dé lugar. Los héroes del cine de ciencia-ficción –por lo menos, en una de sus vertientes más ricas– deberán ser hombres «sacrificados», capaces de olvidarse de sí mismos y de sus intereses para defender a la Patria del peligro extranjero o alienígena. Un buen ejemplo de lo afirmado hasta aquí es la confrontación entre los científicos y los militares respecto del tratamiento que debe darse a la criatura extraterrestre en La cosa (The Thing, 1951), uno de los grandes films del género que inauguran la década. En los capítulos siguientes también nos ocuparemos de cómo se estableció la figura del extraterrestre en el imaginario popular de la época, otro fenómeno que contribuyó a transformar a las producciones de ciencia-ficción en el centro mismo de la propaganda anticomunista de los años ’50.

CIENCIA-FICCIÓN

138

LAS PELÍCULAS

DE CF EN LOS ‘50

Es curioso que el primer film de relieve de la década que nos ocupa fuera Destino la Luna (Destination Moon, 1950), cuya trama tiene mucho más que ver con el sentido positivo de la ciencia y la épica de la conquista del espacio, conceptos propios de la literatura de ciencia-ficción de la época y alejados de lo que serían los grandes temas de la vertiente fílmica

En la página anterior, un afiche promocional y tres fotogramas de la inaugural Destino la Luna. En esta página, a la derecha, un afiche promocional y una escena de la independiente The Flying Saucer.

del género. Pese a ello, las preocupaciones de la Guerra Fría están presentes en el argumento de la película, con el planteo de la importancia estratégica de la Luna y la obligación de los Estados Unidos de establecerse allí primero, antes de que lo hiciera una potencia extranjera. Una de las cosas más sobresalientes de Destino la Luna es también su posición fundante en lo que será característico del género en los ’50, como reemplazante del terror cinematográfico a la hora de lidiar con el miedo y la paranoia, pese a que sus responsables prefirieron una estética alejada del expresionismo y sus manejos de luces y sombras, decantándose por una aproximación cuasi documental. Su principal preocupación a la hora de presentar el film fue la de alejarlo de los típicos space-opera, cuya impronta habían instalado los seriales tipo Flash Gordon, un hecho que parte del propio guión de la película, escrito conjuntamente por Robert A. Heinlein –uno de los principales representantes de la ciencia-ficción literaria de la época– y Rip Van Ronkel, que se realizó consultando a físicos, astrónomos y técnicos antes de iniciar el rodaje, y contratando a un pintor dedicado a los espacios astronómicos –Chesley Bonestell– y a un diseñador los cráteres de la Luna que presenta la cinta. Por otra parte, la información científica fue aportada por un experto alemán en cohetería, Hermann Oberth, quien junto con Willy Ley habían aportado un conocimiento similar a la filmación de Die Frau im Mond (1929), de Fritz Lang. La trama en sí gira en torno del primer viaje tripulado a la Luna, concentrada en ofrecer ante todo una pro-

CIENCIA-FICCIÓN

–Ernest Fegte– para dar mayor realismo al paisaje y a

139

puesta realista antes que dramática, con predicciones que, con el tiempo, se comprobaron como muy acertadas. Finalmente, y pese a un azaroso viaje, el cohete aluniza, pero se ha consumido demasiado combustible en la maniobra y los tripulantes no tienen posibilidad de regresar a la Tierra. La tribulación lleva a que uno de los expedicionarios decida sacrificarse a sí mismo para que los demás puedan volver, pero el ingenio científico permite que esa muerte pueda evitarse, y todos los miembros de la tripulación regresan exitosamente de su periplo lunar. Uno de los grandes temores de la producción respecto del tono documental de la propuesta, era que fracasara en la taquilla, algo que finalmente no sucedió y convirtió a Destino la Luna en un enorme paso adelante dentro de la historia del cine de ciencia-ficción, permitiéndole incluso ganar el Oscar para sus originales efectos especiales. Ese mismo año se produce el estreno, en Gran Bretaña, de Dick Barton at Bay, un film producido por la ascendente Hammer que será el último de la serie dedicada al agente especial por el fallecimiento de su protagonista en un accidente automovilístico. En el guión, Barton se enfrenta nuevamente con un grupo

140

Reino Unido con un rayo mortal, y la propuesta incluye

CIENCIA-FICCIÓN

de espías internacionales que pretenden destruir al al inventor y su hija en problemas, de rigor en este tipo de películas. Los visitantes extraterrestres y sus fabulosos vehículos han tenido, entre otros conceptos fantásticos, una larga tradición dentro de la literatura de ciencia-ficción, e hicieron un primer desembarco en el universo del celuloide a través de los films en capítulos. Veremos, en el apartado dedicado a los seriales de los ’50, que

En la página anterior, afiche promocional y dos diferentes escenas de Cohete a Marte. A la derecha, una imagen retratando a Gort, el imponente robot que protege al protagonista de El día que paralizaron la Tierra.

la figura del «plato volador» se introduce en el cine

mundo en esa época.

justamente a través de un producto en entregas, Atom

En la citada The Flying Saucer, un agente secreto

Man versus Superman (1950), y que será la película The

–interpretado por el propio Mikel Conrad– rastrea

Flying Saucer (1950), una producción independiente

un plato volador hasta Alaska y descubre que ha sido

de Mikel Conrad, la que hará lo propio en el ámbito

construido por un científico, quien tiene la intención

de los largometrajes, aunque en ambos casos los in-

de vender su invento a los norteamericanos. Ambos

genios volantes serán de fabricación local antes que

personajes son capturados por los rusos, mientras el

un derivado de la tecnología extraterrestre. Antes de

ayudante del científico se roba el plato volador, con

1950, el concepto de «plato volador» no existía en las

tal mala suerte que el artefacto explota en pleno vue-

películas del género sencillamente porque dicha idea

lo, en virtud de una bomba instalada por su creador

se establece en la cultura de masas a partir del 25 de

para evitar este tipo de eventualidades. En el final,

junio de 1947. El término fue acuñado por un periodis-

el inventor entrega el secreto de su fabulosa nave al

ta, llamado Bill Bequette, para referirse a la experien-

gobierno de los Estados Unidos…

cia de un piloto comercial con un objeto volador no

Siempre en 1950, se presenta Cohete a Marte (Rockets-

identificado. La historia, primera del tópico publicada

hip X-M), film dirigido por Kurt Neumann, un alemán

después de la Segunda Guerra Mundial, adquirió una

establecido en Hollywood desde 1925 y cuyo trabajo

enorme difusión nacional y se imprimió a fuego en el

más conocido es La mosca de la cabeza blanca (The Fly,

imaginario de la gente de la época, pese a que en un

1958). La historia sigue también a la primera nave tri-

primer momento, la convicción generalizada era que

pulada con destino a la Luna, pero un error en el vuelo

se trataba de naves experimentales de los militares

lleva a los protagonistas a Marte. Los expedicionarios

norteamericanos.

descubren allí los restos abandonados de lo que consideran una especie extraterrestre de gran desarrollo tecnológico, desaparecida como víctima del holocausto

pia, comenzó como hemos dicho en los años ’50, y fue

atómico, idea que servirá de base a varias películas

también consecuencia de la amalgama de una serie

posteriores. Poco después, la tripulación humana es

de ideas que estaban presentes en otros medios de

atacada por un grupo de marcianos, barbarizados y

comunicación, especialmente los gráficos. Los ovnis,

ciegos, y sólo dos de los hombres logran refugiarse en

y el concepto de que se trataba de naves interplane-

el cohete y escapar. En una singular vuelta de tuerca en

tarias tripuladas por alienígenas, fueron rápidamente

el final de la cinta, la nave terrestre se estrella contra el

asimilados por el cine del género, pese a que muchos

planeta y los dos sobrevivientes de la odisea marciana

especialistas han teorizado que los numerosos avis-

fallecen en el acto. Aunque carece de la estética semi

tamientos que se produjeron con posterioridad al

documental de Destino la Luna, la película ofrece una

fin de la guerra, fueron un reflejo de las ansiedades

memorable poética pulp y una brillante escenografía

y las tensiones internacionales que campeaban en el

del paisaje marciano, que la hacen un producto mucho

CIENCIA-FICCIÓN

La transformación de la ciencia-ficción en un género cinematográfico específico, con una iconografía pro-

141

En esta página, una nueva imagen y un afiche promocional de El día que paralizaron la Tierra. En la página siguiente, otro fotograma de ese mismo film, junto a un afiche promocional y dos imágenes de Conquistando a Marte.

más memorable que el producido por George Pal. En 1951 se produce también el estreno de El panadero del emperador (Císaruv pekar), una cinta de origen checoslovaco que en esencia muestra que existen dos tipos de historias del golem. En una, una criatura de arcilla se erige en defensa de alguien con poderes espirituales; en la otra, existe una enorme fuerza de energía natural, de difícil control e impredecibles consecuencias, cuyo uso depende de consideraciones éticas y políticas. La historia del film que nos ocupa abreva en la segunda variante, en vena cómica, y funciona como una parábola de los peligros del poder atómico. La historia está ambientada en el año 1610, en Praga, donde el emperador Rudolf II gasta inmensas cantidades de dinero para financiar los laboratorios de una serie de charlatanes, en un intento por convertir el barro en oro o conseguir la construcción de un golem de acuerdo con la tradición popular. Un panadero, que es muy parecido físicamente al gobernante, descubre el procedimiento para fabricar al golem, decidiendo tomar el lugar de Rudolf y poner a la criatura a fabricar pan para toda la nación. La propuesta fue muy exitosa y alcanzó una gran popularidad en la época de su estreno.

142

películas de ciencia-ficción más importantes y significa-

CIENCIA-FICCIÓN

También en 1951 llega a la pantalla grande una de las tivas de la historia del género en celuloide: El día que paralizaron la Tierra (The Day the Earth Stood Still). El film hace un planteo bastante diferente de los que serían habituales en el cine de la década, apelando a un humanismo básico para contar la historia de una visita extraterrestre no invasiva pero con una misión imperativa en favor de la paz (o la pacificación). Una federación planetaria de extraterrestres, que

desaprueba las pruebas atómicas que se realizan en la Tierra, envía a Klaatu y a su robot defensor Gort a nuestro planeta, para advertir a los dirigentes de las potencias nucleares que deben desistir en el uso del poder atómico con fines destructivos o serán puestos en cuarentena desde el espacio hasta su exterminación total. El dúo aterriza en el corazón de Washington, en un plato volador –cuyo costo de construcción alcanzó los 100.000 dólares– y Klaatu es herido por un nervioso soldado de los que los rodean, lo que desencadena la inmediata y violenta reacción de Gort, antes de que su amo pueda intervenir y detenerlo. Los humanos deciden asistir al visitante, y mientras está internado, Klaatu ofrece una demostración definitiva de sus poderes paralizando literalmente toda la actividad tecnológica en la Tierra. Además, el alienígena conoce a una joven madre, quien le asegura que los seres humanos son mucho más que lo que representan sus dirigentes. De esta manera, Klaatu decidirá mediante la observación directa si detiene el ultimátum que pende sobre el planeta, incluso si esa acción le cuesta la vida… El día que paralizaron la Tierra presenta a un tipo de extraterrestre diferente, cuya intención no es la de anunciar una invasión o esconder las aviesas inprincipio convencido de la necesidad de esterilizar a la Tierra, descubrirá que existe el bien en los humanos comunes y que la preservación de esos valores valen su propia existencia y una nueva oportunidad para los atribulados habitantes del planeta. La calidad de la película y la vigencia de su mensaje la han transformado en un clásico de todos los tiempos, con una propuesta que no ha perdido un ápice de

CIENCIA-FICCIÓN

tenciones de futuros conquistadores. Klaatu, en un

143

En esta página y en la siguiente, afiche promocional y diferentes escenas de la original El hombre del planeta X, que establece un ícono de la imagen extraterrestre y aporta una sensacional vuelta de tuerca final.

validez pese al transcurso de los años –influyendo, incluso, a posteriores producciones cinematográficas y erigiéndose en ícono de la cultura popular– y cuya visión es prácticamente obligatoria para todo aficionado al cine de ciencia-ficción. Ese mismo año se estrena también Los últimos cinco (Five), que sigue la historia de los cinco sobrevivientes de un holocausto nuclear refugiados en una mansión aislada del mundo. El guión se centra, ante todo, en la reconstrucción de la humanidad antes que en el recuento de la destrucción provocada por el poder atómico. Una de las mujeres sobrevivientes muere pronto en la trama, por exposición a la radiación, y dos de los hombres sobrevivientes pelean entre sí para conquistar a la otra mujer del grupo, quien está embarazada. Finalmente, uno de los rivales mata a su oponente y lleva a la chica a la ciudad, en busca de su desaparecido marido, pero esto lo expone también al veneno nuclear y resulta muerto. Cuando el bebé de la mujer también muere, ella decide regresar a la mansión, a unirse con su único ocupante e iniciar la reconstrucción del mundo. A continuación se estrena, siempre en 1951, Conquistando a Marte (Flight to Mars), un film concebido para

144

Cohete a Marte, y producido con un bajo presupuesto

CIENCIA-FICCIÓN

aprovechar el éxito alcanzado por Destino la Luna y por Monogram. La trama está llena de clichés y sigue, a grandes rasgos, la lucha de una expedición de humanos al planeta rojo, con el objetivo de prevenir una invasión marciana. Pese a que los extraterrestres son meros humanoides con trajes espaciales, lo mejor de la película son sus efectos especiales. El mismo año hace su aparición Lost Continent, una cinta que combina, por primera vez en los Estados

Unidos, dos temas tan disímiles como los cohetes y los dinosaurios. La trama presenta una nave terrestre, impulsada por energía atómica, que desaparece misteriosamente en el Pacífico Sur. Como el cohete tiene un aparato secreto en su interior, un grupo de expedicionarios es enviado a rescatarlo, pero el avión en el que viajan se estrella en una misteriosa isla del sector. Allí descubren vastas reservas de uranio, que generan las fuerzas radioactivas que han hecho que cohete y avión se estrellaran, y han dado las condiciones de posibilidad a una exótica fauna, constituida principalmente por enormes dinosaurios. Otro de los hitos de 1951 fue El hombre del planeta X (The Man from Planet X). Los visitantes extraterrestres no eran una idea nueva en el terreno de la cienciaficción literaria, e incluso el trabajo de grandes ilustradores trasladó el tópico a la cultura más generalizada, construyendo de paso un arquetipo de extraterrestre –gris, de miembros desproporcionadamente largos, gran cabeza y ojos saltones– que permanece más o menos intacto incluso hasta nuestros días. Edgar G. Ulmer, director de El hombre del planeta X, rodó la cinta en tan sólo seis días, echando mano de la imaginería pulp que era norma en la época. La historia presenta una trama bastante clásica, en la que un malvado de una muchacha, a lo que se agrega la llegada de un alienígena, que pide ayuda a los terrestres para su congelado mundo natal. La genialidad de la película radica en la manera en que su director mezcla estas líneas argumentales, y produce un particular impacto cuando los terrestres no sólo se niegan a ayudar al visitante del espacio sino que además lo atacan salvajemente, condenando a la extinción a su mundo natal.

CIENCIA-FICCIÓN

científico y un honrado periodista pelean por el interés

145

Este mismo año, el estudio británico Ealing estrena El hombre del traje blanco (The Man in the White Suit), uno de los pocos films ingleses que abordan con seriedad el tema de las relaciones industriales y los descubrimientos científicos. Un inventor, interpretado por Alec Guinness, crea una vestimenta elastizada y práctica, que es desechada de manera poco gentil por los industriales textiles. En la trama, en la que el desesperado científico intenta explicar las bondades de su descubrimiento, quedan al descubierto no sólo el tema del conservadurismo de la industria sino también el de las relaciones laborales que existen en torno a un determinado desarrollo, y las consecuencias secundarias que un cambio de modelo puede traer consigo. En 1951 se produce asimismo el estreno del primer largometraje dedicado al Hombre de Acero de la DC Comics, intitulado Superman and the Mole Men, una película concebida para promocionar la serie televisiva dedicada al superhéroe contemporánea al estreno. Clark Kent y Lois Lane son enviados a investigar un curioso accidente petrolero, y en la pesquisa descubren a los luminosos hombres-topo, quienes salen a la superficie en virtud de las profundas perforaciones petroleras. Los habitantes del pueblo de Silsby, donde

146

curiosos invasores subterráneos por su carácter de

CIENCIA-FICCIÓN

transcurre toda la acción, toman las armas contra los «extraños», hasta que Superman puede poner las cosas en orden y permitir que todos vivan en armonía. Con una historia pobre, actuaciones poco logradas e inexistentes efectos, el film es poco más que una curiosidad histórica. Este mismo año se produce la aparición de otra de las grandes cumbres del cine de ciencia-ficción de los ’50 –y, justo es decirlo, de todos los tiempos–: La cosa

En la página anterior, afiche promocional y dos fotogramas de la floja Superman and the Mole Men. En esta página, Una imagen de La cosa, uno de los films más relevantes de la ciencia-ficción de los años ‘50.

(The Thing), un film basado en un relato de John W.

ser necesita sangre para reproducirse, lo que desata

Campbell, Jr. publicado en 1938. Campbell, posterior-

una lucha a muerte entre los humanos aislados en la

mente, se convirtió en uno de los grandes nombres

base polar y el visitante del espacio.

detrás del éxito del género en su vertiente literaria en

La película fue adaptada, de manera bastante libre,

los años ’50, a partir de su labor como director de la

por Charles Lederer –con reescrituras no acreditadas

revista Astounding, desde la que lanzaría las carreras

de Howard Hawks y Ben Hecht– a partir del cuento

de escritores tan importantes como Isaac Asimov o

«Who Goes There?». Existe una controversia menor

Robert Heinlein.

en torno a quién dirigió efectivamente la película, si

En la trama, un grupo de la Fuerza Aérea de los Es-

fue Hawks, otorgándole el crédito a Christian Nyby,

tados Unidos es enviado a una base en el Polo Norte

o si fue Nyby, recibiendo precisas instrucciones del

por requerimiento del doctor Carrington, el jefe de

anterior, quien además participó como guionista y productor del film. La realidad de la participación de Hawks en casi todos los aspectos de la producción y la

una historia. Muy pronto, los militares se informan

realización, amén de la calidad del producto en sí, deja

de lo que parece ser el arribo de una nave extrate-

poco espacio para la disputa. De hecho, se asegura que

rrestre y deciden realizar una expedición al lugar de

Hawks le permitió a Nyby –quien había editado varias

la caída, donde descubren un disco volante enterrado

de sus películas– figurar como director y hasta ejercer

en el hielo. Decididos a recuperarlo, accidentalmente

la tarea, pero siempre bajo una estrecha vigilancia.

lo destruyen con cargas térmicas, pero encuentran,

Otro hecho curioso, y particularmente revelador de

cerca del lugar, al piloto de la nave, también conge-

las verdaderas relaciones existentes en los ’50 entre

lado.

la literatura y el cine de ciencia-ficción, fue la reper-

El grupo traslada al extraterrestre en un bloque de

cusión de la película entre los críticos y escritores de

hielo rumbo a la base, donde la comunicación con el

la época. A contramano de la excelente acogida que

continente se ha hecho casi imposible. Los científicos

tuvo el film en el público general, los especialistas del

quieren descongelar al visitante lo antes posible, pero

género lo denostaron con dureza, planteando su poco

el jefe militar, el capitán Hendry, decide esperar has-

apego a la forma original del alienígena, habiéndolo

ta tener instrucciones precisas de sus superiores. Por

transformado en un mero «monstruo»; y su actitud

accidente, el bloque de hielo queda bajo una manta

negativa en general hacia la ciencia. El hecho de que

térmica, lo que genera el descongelamiento involun-

los protagonistas describieran al extraterrestre como

tario de la criatura alienígena. El monstruo escapa y

una «zanahoria pensante» fue ampliamente utilizado

es atacado por los perros del lugar, que le arrancan

para ejemplificar la escasa sofisticación de Hawks y

un brazo, y la extremidad dará algunas pistas sobre

Nyby respecto de la ciencia, y se acusó a la película de

la alimentación de la criatura y, sobre todo, respecto

ser la responsable de introducir la figura del «mons-

de su naturaleza vegetal. También se descubre que el

truo» en el cine de ciencia-ficción, un paradigma que

CIENCIA-FICCIÓN

los científicos asentados en el lugar. Junto a ellos se embarca Scotty, un inquieto periodista en busca de

147

se extendería rápidamente, reemplazando al estilo cuasi documental expuesto en Destino la Luna, que era admirado por los especialistas del género, probablemente aterrados ante la idea de que la ciencia-ficción se transformara en mainstream y se alejara de su impronta de cenáculo, de género sólo para iniciados. Lo cierto es que la película se hace eco de varios sentimientos presentes en la sociedad norteamericana de la época, lo que le permite destacar sus elementos de terror. Por ejemplo, la trama muestra el escepticismo respecto de la ciencia y de los científicos después de Hiroshima, porque mucha gente consideraba que los investigadores se metían en cosas que era mejor dejar tranquilas, como la energía atómica. Y se puede ver que, en el final, son los militares y los científicos sensibles, humanos, quienes logran derrotar a la criatura. El guión, como hemos dicho anteriormente, cambia la naturaleza fundamental del extraterrestre de la historia de Campbell, y la «cosa» de Lederer es un humanoide con una estructura celular similar a la de los vegetales, que además necesita sangre para sobrevivir. Es esa particular estructura la que la hace inmune a las balas. En la historia original, el alienígena es una forma de vida capaz de asumir las características físicas y mentales de cualquiera (esta trama fue la desarro-

CIENCIA-FICCIÓN

148

llada en la versión de 1982 de la novellette, firmada por John Carpenter). Aparentemente, el encargado del maquillaje del monstruo hizo varias pruebas: habría elaborado sendas propuestas, se las habría puesto a James Arness –el actor encargado de interpretar a la «cosa»–, y juntos habrían salido a dar vueltas por las calles de Los Angeles. Cuando una mujer gritó al ver a la criatura que manejaba el auto, el maquillador supo que tenía la

En la página anterior, otras tres escenas de La cosa, de Howard Hawks y Christian Nyby. En esta página, a la derecha, afiche promocional y y dos fotogramas de la impactante Cuando los mundos chocan.

máscara ideal para el monstruo. Otra curiosidad marca que la última línea del film, «Watch the skies», fue de hecho el primer título que Spielberg pensaba darle a su film Close Encounters of the Third Kind (Encuentros cercanos del tercer tipo, 1977), e incluso se dice que se planificó una secuela de ese éxito, que nuevamente utilizó como título tentativo la frase en cuestión y cuya trama iba a presentar a un grupo de extraterrestres malvados, aterrorizando a una familia de granjeros. Esa supuesta secuela, finalmente, se transformó en E.T. the Extra-Terrestrial (E.T.: el extraterrestre, 1982). La vigilia de los cielos se convirtió, en los hechos, en el puntapié inicial del tinte paranoico –reflejo del temor social inducido por la propaganda gubernamental– que transformó al género en cine con mayúsculas, con un destacado lugar en la historia del medio. Sólo por eso, La cosa merece considerarse como una de las mejores películas de la historia del cine de cienciaficción. Siguiendo con nuestro recorrido por los estrenos de 1951, el siguiente ítem a considerar es el film Unknown World, cuya trama sigue la historia de un científico que busca desesperadamente la manera de evitar la devastación nuclear. Apoyado económicamente por máquina para perforar la corteza terrestre y, eventualmente, utilizar el centro del planeta como una especie de refugio atómico invulnerable. Los exploradores llegan a una enorme caverna que puede servir para sus propósitos, pero una erupción volcánica los obliga a regresar a la superficie. Siempre en este mismo año, se presenta en la pantalla grande otro de los hitos de la ciencia-ficción de la

CIENCIA-FICCIÓN

un millonario, un equipo de investigadores utiliza una

149

década: Cuando los mundos chocan (When Worlds Collide). Producida por George Pal, el planteo central de la película está basado en la novela homónima de Edwin Balmer y Philip Wylie –que Cecil B. DeMille consideró adaptar en 1934–, que esboza la hipótesis de un choque entre la Tierra y una estrella llamada Bellus. Un grupo de astrónomos descubre la inminente catástrofe, pero sus investigaciones son desestimadas por el resto de la comunidad científica. Los hombres entonces consiguen financiamiento privado para su plan de supervivencia, que consiste en construir una nave capaz de transportar un buen número de colonos, y otros enseres terrestres, a la superficie de Zyra, un planeta similar al nuestro que gira en torno a Bellus. Cuando las autoridades caen en la cuenta de que las predicciones iniciales han sido acertadas, ya no hay tiempo para nada, y los científicos eligen cuidadosamente a aquellos destinados a sobrevivir y dar una segunda oportunidad al género humano. Pese a toda la planificación, las cosas se complicarán ante la inminencia del desastre y el lógico pánico de los condenados. Antes de finalizar esta lista de películas destacadas de 1951, vale la pena citar como parte de la historia

150

extraño caso del hombre y la bestia es una efectiva

CIENCIA-FICCIÓN

cinematográfica del género a una cinta argentina. El remake de la clásica historia de Robert Louis Stevenson referida a Jekyll y Hyde, dirigida, producida y co-escrita por Mario Soffici, que también la co-protagoniza junto a Olga Zubarry. Entre los aspectos a destacar en esta propuesta está la ruptura con el maniqueísmo esquemático de la historia original y la caracterización de Hyde, que parece más un vampiro moderno que un pariente típico del hombre-lobo.

En la página anterior, un afiche promocional y una imagen de La mano agresora, junto a una escena de 3.000 A.D. En esta página, a la derecha, afiche promocional de lobby y un fotograma de Invasión U.S.A.

El recorrido de los films de este segundo año de la década se cierra con La mano agresora (The Whip Hand), una singular cinta dirigida por otro de los directores estrechamente ligados al desarrollo del género en la gran pantalla: William Cameron Menzies. El film está basado en The Man He Found, una cinta del propio Menzies, jamás estrenada, cuyo nudo argumental giraba en torno al descubrimiento de Hitler viviendo en Minnesota y planeando una vez más apoderarse del mundo. Howard Hughes, en ese entonces presidente y dueño de RKO, decidió dar una vuelta de tuerca a la historia, utilizando gran parte de lo ya rodado. En vez de plantear a Hitler revivido como enemigo de turno, Hughes elige a los comunistas, quienes trabajan en equipo con un biólogo alemán y utilizan un pequeño poblado norteamericano como campo de pruebas para una eventual guerra bacteriológica. Gracias al destacado trabajo de Menzies, que supo combinar el metraje ya realizado con las nuevas tomas especialmente realizadas, el film es esencialmente atmosférico y se transformó en una de las propuestas anticomunistas más populares de la época. Ya en 1952 se produce el estreno de 3.000 A.D. (Captive Women), una película nacida al calor del éxito obtenido por los productores de El hombre del planeta guerra nuclear, los seres humanos sobrevivientes se han dividido en tres diferentes grupos, que se atacan mutuamente en la ruinas de Manhattan. Uno de los bandos, los mutantes, han sufrido severas deformidades por la radiación, y suelen secuestrar mujeres del grupo de «normales», con fines reproductivos. Ambos grupos, sin embargo, están en guerra con el tercero, al que directamente consideran demoníaco y que

CIENCIA-FICCIÓN

X. En la trama, en una Nueva York devastada por la

151

derrotaran cuando unan fuerzas... Otra curiosidad estrenada en los albores de 1952 fue Día de los inocentes año 2000 (1 April 2000), una película encargada por las autoridades austríacas a modo de gentil reclamo para las fuerzas de ocupación Aliadas. La trama es muy sencilla, y pretende mostrar una armoniosa sociedad, que espera ansiosa el 1º de abril del año 2000, momento en que las tropas Aliadas darán finalmente su independencia a Austria. La propuesta fue exhibida en unos pocos festivales europeos y latinoamericanos antes de perderse en el olvido, y es quizá destacable por la presencia de Curt Jurgens antes de convertirse en una estrella internacional. El mismo año se estrena también Invasión U.S.A. (Invasion U.S.A.), un film claramente influenciado por Los últimos cinco (Five, 1951), de Arch Oboler, que pivotea además sobre el miedo al comunismo presente en la sociedad de la época. En la trama, un poderoso mesmerizador hipnotiza a todos los presentes en un bar de Nueva York, haciéndoles creer que la Guerra Fría ha terminado con un ataque atómico masivo de los soviéticos. Numerosos miembros del grupo sufren horribles muertes, incluso colgándose desde el techo de varios rascacielos, antes de descubrir el

152

sobre la guerra contra los comunistas que, sin lugar a

CIENCIA-FICCIÓN

engaño y, con cierta reluctancia, seguir discutiendo dudas, deberá librarse en un futuro cercano. Si bien se trata de un film menor, que utiliza mucho metraje de descarte de documentales de la Segunda Guerra Mundial y de películas militares de entrenamiento, su mensaje inequívoco es representativo de los temores más extendidos del momento. Siempre en 1952, nuestro recorrido nos lleva a destacar a Vitaminas para el amor (Monkey Business), la segun-

En la página anterior, afiche promocional y dos imágenes de la destacada Vitaminas para el amor. A la derecha, un afiche promocional y un fotograma de la polémica y transgresora Enemigos de la humanidad.

da y última película relacionada con la ciencia-ficción

la mayoría de las cuales incluyen un claro mensaje

dirigida por Howard Hawks que, en tono de comedia,

anticomunista, se hicieron habituales en los Estados

toca el tema del rejuvenecimiento y algo más. El sólido

Unidos en los años ’50, y varias películas del género

matrimonio interpretado por Cary Grant y Ginger Ro-

del período se hicieron eco de tal mensaje, aunque

gers vuelve a sus años adolescentes después de ingerir

en el caso del film que nos ocupa el tópico es tan

un elixir descubierto por el hombre y consumido por

extremo que atenta contra la calidad y/o visibilidad

ambos por equivocación. La idea más interesante de

de la propuesta.

la cinta es que el elixir simplemente es un catalizador

Como hito final de 1952 no queremos dejar de citar

destinado a liberar las fuerzas que subyacen apenas

a Enemigos de la humanidad (The Atomic City), una

debajo de la superficie de la vida civilizada. Otra pre-

cinta que refleja en gran medida uno de los temores

sencia destacada en el elenco es la de Marilyn Monroe,

más generalizados de la década que nos ocupa. Des-

como la secretaria del científico que compone Grant,

pués de 1945, casi todos los norteamericanos vivían

quien quiere llevársela a vivir con él.

en verdaderas «ciudades atómicas», ya que si uno

A continuación es válido destacar otro estreno de este

habitaba en las cercanías de un gran centro urbano,

año y ya citado anteriormente. Nos referimos a El

seguramente estaba incluido como objetivo de los

milagro de Marte (Red Planet Mars). Un matrimonio

misiles de los soviéticos. Esta información, difundida

de científicos logra captar transmisiones de televisión

a través de la propaganda gubernamental, era a la

desde Marte, en las que se describe al planeta rojo

vez relativizada con medidas tendientes a evitar que

como un lugar utópico, gobernado por una bondadosa

la desesperación y el pánico dispararan las cifras de

autoridad suprema. En la Tierra, tales noticias son mal

suicidios o los desbordes sociales. Obviamente, Wa-

recibidas tanto por Occidente como por los soviéticos, y

shington sabía perfectamente que no había ningún

es así que en Rusia un grupo de campesinos derroca al

tipo de protección posible contra un ataque nuclear

comunismo y lo reemplaza por una monarquía religio-

masivo a una ciudad, y por eso auspició la realización de films que sostuvieran exactamente lo contrario y banalizaran el peligro, en propuestas en las que uno

los ha generado para hacer caer al capitalismo, pero

podía ver a una familia tipo norteamericana refugia-

mientras discute con el científico norteamericano,

da en el sótano, mientras caían las bombas atómicas

llega un nuevo mensaje del planeta rojo, indicando

rusas, y afirmando además que en dos o tres horas

que su autoridad suprema es el mismísimo Dios. Esto

todos podrían emerger del improvisado refugio e

provoca la enloquecida reacción del nazi, que con sus

iniciar la reconstrucción de la vida tal y como la cono-

acciones se inmola junto con los demás científicos,

cían. Enemigos de la humanidad, en alguna medida,

y en el epílogo del film, en la Tierra se impone un

comparte algunas de las mentiras difundidas por el

nuevo orden mundial, acorde con los principios de la

gobierno, pero también aporta otros matices que las

autoridad suprema de Marte. Las cruzadas religiosas,

desafían y abordan el tópico atómico con una llamati-

CIENCIA-FICCIÓN

sa. Por su parte, un antiguo científico nazi señala que los mensajes marcianos son falsos, porque él mismo

153

En esta página, afiche promocional y una imagen de Abbott y Costello en Venus, una de las cintas más flojas del dúo. En la página siguiente, dos fotogramas y un afiche promocional de El monstruo del mar, primer stop motion de Ray Harryhausen.

va honestidad. En el inicio del film, el hijo de la pareja protagónica –ambos científicos atómicos que trabajan en Los Alamos–, excitado por la llegada de un nuevo televisor a la casa, declara que, «si llega a grande», ya sabe qué profesión elegir, en una confesión que puede pasar desapercibida en un primer momento, pero que pone a la cinta decididamente en la vereda opuesta a la de las falacias edulcoradas del gobierno. La acción dramática del guión se dispara cuando el chico es secuestrado por un par de agentes comunistas y comienza a desvelarse la premisa central de la propuesta: si es moralmente reprochable poner en riesgo la vida de millones de norteamericanos por la vida de un sólo niño. La misión del FBI, en el film, no es rescatar al chico sino detener a los agentes comunistas, lo que de hecho es una de las confesiones más duras realizadas en una película producida en Hollywood en los ’50. Además, el padre del muchacho, que es presentado como un ciudadano intachable desde cualquier punto de vista, no dudará a la hora de elegir la vida de su hijo como prioridad, lo que también era polémico en el ambiente del período. Obviamente, la trama llega a un final feliz, pero no por eso la propuesta deja de ser inquietante y plantear temas frente a los cuales podría

154

época, tironeado por el bombardeo propagandístico

CIENCIA-FICCIÓN

tener que definirse cualquier norteamericano de la y el respeto de sus propios valores y sentimientos. No es tampoco arriesgado señalar que en esta dicotomía está la semilla que transformaría al «sueño americano» –irreal desde el vamos, pero presente en el imaginario social de ese país– en la pesadilla distópica que será reflejada por el cine de décadas posteriores. Pasando ya a 1953, se produce la presentación de Abbott y Costello en Venus (Abbott and Costello Go

to Mars), que en vena cómica presenta un singular viaje espacial y un no menos extraño «contacto extraterrestre». El dúo aborda por casualidad un cohete que debe dirigirse a Marte pero que finalmente se estrella en Venus. Allí descubren que el planeta está habitado por hermosas mujeres, cuya soberana es la reina Alura, quien finalmente elige a Costello como consorte. Las cosas, como es de esperar, se complican, y el dúo debe huir hacia la Tierra. Lamentablemente, pese a previas incursiones en el terror con buenos resultados, esta es una de las peores películas de Abbott y Costello. Este año se estrena asimismo Alerta en el sud (Alérte au sud), una cinta diseñada para glorificar al ejército francés, un año antes de que estallara el inicio de la lucha por la independencia de Argelia –en la que ese ejército no descollará precisamente por su bonhomía–. Un científico demente, llamado Nagel, establece una planta atómica en el Sahara, desde donde pretende dirigir un ataque con un rayo mortal a todo el mundo. El agente gubernamental Jean Pasquier y su jefe localizan la base secreta, y con ayuda del ejército la destruyen, matando en el proceso al alienado científico. Nuestro siguiente mojón es El monstruo del mar (The Beast from 20,000 Fathoms), la primera película de «monstruos gigantes» de la década que nos ocupa y en producciones posteriores de este tipo. Basada en un cuento corto de Ray Bradbury, la cinta fue también el primer proyecto de stop motion realizado por el legendario Ray Harryhausen, y su trama describe el despertar de un dinosaurio en el Ártico, como consecuencia de una prueba nuclear realizada en el lugar. Descongelada, la bestia emprende una migración hacia su hogar ancestral, ubicado donde se erige la ciudad

CIENCIA-FICCIÓN

responsable de establecer los tópicos que serán clichés

155

En esta página y en la siguiente, afiche promocional y diferentes escenas de la extravagante 20.000 leguas de viaje a la Luna, en la que unas singulares mujeres-gato extraterretres intentan conquistar al mundo mediante el uso de la telepatía.

de Nueva York. Después de varios enfrentamientos y destrucciones ad hoc, la criatura es cercada en un parque y destruida. De acuerdo con información fidedigna, la película costó algo menos de 200.000 dólares, y reportó 5 millones de la misma moneda en las boleterías, lo que explica definitivamente el porqué del establecimiento de un arquetipo de propuesta de ciencia-ficción para futuras producciones. Otro film de este año que nos interesa destacar es 20.000 leguas de viaje a la Luna, también conocida en nuestro país como Mujeres gato de la Luna (Cat Women of the Moon). La historia presenta a un grupo de pilotos norteamericanos que aterrizan en la Luna, dirigidos a un determinado lugar por uno de ellos, que se encuentra bajo el dominio mental de la líder de las mujeres-gato, quienes habitan las cuevas que se encuentran en el límite entre los lados claro y oscuro del satélite. Después de enfrentar y matar a dos enormes arañas, los expedicionarios arriban a una ciudad parecida a las polis griegas, donde enfrentan a las mencionadas mujeres-gato y, tras derrotarlas en su intento por dominarlos telepáticamente a todos y conquistar la Tierra, regresan en su nave al planeta natal.

156

bólico (Donovan’s Brain, 1953), que es la versión más

CIENCIA-FICCIÓN

El siguiente film que nos interesa es Experimento diacercana a la novela original que lo inspira, firmada por Curt Siodmak. Un neurocirujano intenta salvar la vida de un millonario llamado Donovan, pero fracasa. Viendo la oportunidad de aportar un significativo avance a la ciencia, el médico remueve el cerebro del hombre y lo mantiene con vida en su laboratorio. Pero el experimento sale mal y el cerebro comienza a desarrollar poderes extraordinarios, tomando control

de la mente del científico y obligándolo a cometer actos aberrantes. También en 1953 se presenta en la pantalla grande otro de los hitos de la invasión extraterrestre, Los invasores de Marte (Invaders from Mars), de William Cameron Menzies. Se trata de una de las películas más inusuales de los ’50 y en su trama, un niño se despierta por el sonido de un plato volador. Su padre decide investigar el extraño ruido y desaparece, regresando tiempo después pero como un hombre completamente diferente. La madre del chico parece también distinta, y el niño descubre sendos aparatos de radio escondidos en las nucas de sus progenitores. Busca entonces la ayuda de una psicóloga y de un astrónomo, y entre todos descubren que los tripulantes del plato volador son unos seres verdes, capitaneados por una cabeza llena de tentáculos y marciana, que es capaz de controlar a sus esclavos terráqueos telepáticamente. El chico y la psicóloga son atrapados por los invasores, pero más tarde los rescata un coronel de la milicia y la nave espacial es volada con explosivos. La versión estrenada en los Estados Unidos ofrece una escena adicional, en la que el chico se despierta como de una pesadilla... sólo para escuchar el sonido del plato volador una vez más. Toda la propuesta es presentada a través de mundo infantil y, evidentemente, el mensaje también involucra el tema de la invasión comunista soterrada, muy propio de esos tiempos. Originalmente, la película fue diseñada para ser vista en 3D, pero la idea fue descartada apenas comenzó el rodaje. Pese a su bajo presupuesto, fue la primera invasión alienígena del cine en ser rodada en colores. Otro film que nos interesa destacar en este año es

CIENCIA-FICCIÓN

los ojos de un niño, lo que remarca el aislamiento del

157

Llegaron de otro mundo (It Came from Outer Space), de Jack Arnold y basada en una historia original de Ray Bradbury. En la trama, una nave extraterrestre se estrella en la Tierra y el fenómeno casualmente es observado por John Putnam, un astrónomo local. Tras investigar lo que supone es el choque de un meteorito, el protagonista descubre que se trata de un grupo de alienígenas. Cuando intenta divulgar su historia, nadie le cree: es que los extraterrestres son invisibles y han comenzado a reemplazar a varios de los habitantes locales por dobles exactos, que utilizan para reparar la malograda nave espacial. La única manera de reconocer a los dobles es cuando se encuentran sin la compañía de otros seres humanos, ya que adoptan una postura que los hace similares a los zombis. El trabajo de reparación es lento, y eventualmente los extraterrestres necesitan más cantidad de ayudantes humanos, por lo que los dobles proliferan y llaman la atención del resto de los humanos de la zona. Furiosos, intentan destruir a los dobles, pero Putnam los detiene después de descubrir que los visitantes no tienen malas intenciones. Cuando terminan el arreglo de la nave, los alienígenas liberan a los humanos reemplazados, embarcan a sus dobles y abandonan la Tierra.

158

vicisitudes que atravesaba la sociedad norteamericana

CIENCIA-FICCIÓN

Es muy interesante señalar que, pese a la época y las en ese momento, la cinta propone un mensaje humanista, donde la diferencia no implica inmediatamente el exterminio del otro, lo que la distingue de otras propuestas del período. Siguiendo con las películas de 1953, a continuación nos interesa señalar a El terror atómico (The Magnetic Monster), un film de bajísimo presupuesto –que de hecho utiliza metraje de un film de los años ’30

En la página anterior, afiches promocionales y sendos fotogramas de Experimento diabólico y Los invasores de Marte. En esta página, un afiche promocional y una imagen de Llegaron de otro mundo, película basada en una historia de Ray Bradbury.

para sus escenas finales– cuya premisa gira en torno

enamoran, y él deja de atender a los comandos de su

al descubrimiento de un isótopo radiactivo capaz de

creador, al punto de eventualmente asesinarlo. En la

absorber energía y duplicar su tamaño cada doce ho-

conclusión, el jefe de la chica la rescata de las manos

ras, convirtiendo esa energía en materia. Un pueblo

del zombi enamorado. Una curiosidad de esta cinta

de la región se ve amenazado por el fenómeno, y lo

es que se invierten, en alguna medida, los roles de

resuelve provocándole una sobrecarga en la ingesta

Frankenstein, y mientras el monstruo en un atractivo y

de energía, a través de un shock eléctrico de 900 mil

seductor joven, el verdadero monstruo es el científico

voltios. El terror atómico, de acuerdo con la opinión

que lo resucita.

de varios especialistas, es la mejor película en la que

Otro film de 1953 a destacar es El fantasma del espacio

Curt Siodmak participó como director.

(Phantom from Space), producida y dirigida por W. Lee

Otro título de 1953 a destacar es El terror de la to-

Wilder, hermano del famoso director y guionista de

rre (The Maze), de William Cameron Menzies. En la

Hollywood, Billy. Un extraterrestre invisible se estrella

historia, Gerald MacTeam está comprometido con

en la Tierra a bordo de su plato volador, cerca de la

Kitty Murray, a quien no deja ni a sol ni a sombra su

ubicación de un gran observatorio astronómico nor-

tía. El hombre debe regresar a su hogar ancestral en

teamericano. Las intenciones del visitante se develan

Escocia y desaparece misteriosamente, lo que lleva a

rápidamente cuando comienza a asesinar humanos,

que su prometida y su tía viajen al antiguo castillo de

lo que alerta tanto a un policía como a dos científicos,

la familia MacTeam y hagan sorprendentes descubri-

quienes logran descubrir al invasor porque, para poder

mientos. Aunque no puede catalogarse como un film

respirar, debe utilizar un casco con aire de su propio

totalmente de ciencia-ficción, la presencia de Menzies

mundo. Así, los científicos logran aislar al visitante

y algunos aspectos de la propuesta, lo enrolan dentro

en el observatorio, hacerlo visible con luz infrarroja y

de la historia del género.

finalmente ultimarlo.

Este mismo año se estrena en México El monstruo re-

Ese mismo año se produce la aparición de Project

sucitado, primera película de ciencia-ficción «médica»

Moonbase, un film realizado a partir de diferentes

de relieve de la filmografía de ese país, que está leve-

partes del piloto de una serie televisiva de la época y que contó con la participación de Robert A. Heinlein en el guión, como lo hiciera en Destino la Luna (1950).

quien le encargan investigar a un peculiar personaje,

Lamentablemente, la historia contiene todas las cosas

el doctor Ling. El científico, demente, es un especia-

que aquella película intentó evitar, incluyendo espías

lista en cirugía plástica y se enamora perdidamente

espaciales, destrucciones varias, un matrimonio vía

de la reportera. Ante el rechazo de la muchacha, Ling

satélite y un largo etcétera de clichés y absurdos, que

resucita a un suicida, a quien le transplanta también

ni siquiera se salvan por la presencia de algunos de los

un cerebro, para utilizarlo como instrumento de la

típicos guiños de la narrativa de Heinlein.

muerte de Nora, pero la criatura y la periodista se

Otro proyecto de 1953 que nos interesa es Monstruos

CIENCIA-FICCIÓN

mente inspirada en el clásico Frankenstein. La trama sigue la historia de una aburrida periodista, Nora, a

159

de Marte (Robot Monster), una película calificada como de poca calidad que presenta la historia de un grupo de seis supervivientes humanos, después de que la Tierra haya sido arrasada por una raza de robots, los Ro-Mans, mediante el uso de un rayo calórico. Los humanos son inmunes a los efectos del arma por cortesía de un suero milagroso, y es entonces que deben enfrentar la presencia de un único robot empeñado en darles caza. Cuando se acerca el clímax –y la virtual desaparición de la raza humana–, todo resulta ser un sueño de un chico obsesionado con el tema del espacio. La película es extraordinaria por la cantidad de clichés que incluye y por el intento de suicidio de su director, Phil Tucker, después de una pelea con los productores. Este año también hace su aparición el film soviético Serebristaya pyl, que en su momento fue calificado por el periodismo estadounidense como mera «propaganda roja». En la trama, un científico norteamericano inventa un polvo radiactivo y busca entonces conejillos de Indias humanos para probar sus cualidades, práctica bastante común en los Estados Unidos, donde se han utilizado soldados voluntarios y hasta prisioneros de guerra para tales «menudencias». Dos competitivos

160

y un ex-científico nazi, también buscan la manera de

CIENCIA-FICCIÓN

hombres de negocios, además de un ambicioso general apoderarse del invento, y en el final, el científico es asesinado por hombres contratados por uno de los industriales. Obviamente, las interpretaciones soviéticas de los norteamericanos son bastante esquemáticas, un criterio que puede aplicarse también a las representaciones de los «comunistas» en la mayoría de las producciones del Hollywood de la época. Otro film de 1953 a destacar es Spaceways, una pro-

En la página anterior, afiche promocional y dos escenas de El fantasma del espacio. En esta página, a la derecha, afiche promocional y dos fotogramas de Project Moonbase, film que contó con la colaboración de Robert Heinlein en el guión.

ducción británica dirigida por el legendario Terence Fisher, el realizador más paradigmático del horror de la Hammer Films. La trama presenta a un científico norteamericano que, mientras trabaja en la construcción de un cohete inglés, es engañado por su esposa, quien mantiene una relación sentimental con un colega del hombre que a la vez es un espía ruso. Repentinamente, ambos desaparecen, y los investigadores acusan al científico de haberlos enviado al espacio profundo, perpetrando de esa manera el «crimen perfecto». Para probar su inocencia, el científico se embarca junto con su propia amante en otro cohete, para viajar al satélite donde se cree que pueden estar los cuerpos de su esposa y su amante. Las autoridades, tardíamente, descubren que la pareja desaparecida se ha escondido en la Tierra, y el inspector a cargo no duda en afirmar que el científico y su amante ahora podrán vivir felizmente y lejos del mundanal ruido… Pese a los esfuerzos de Fisher, que dirige con precisión e inventiva, el pobre guión atenta contra la calidad de la propuesta final. Siempre dentro de nuestro recorrido por las películas del género estrenadas en 1953, nos interesa detenernos en la reseña de The Twonky, film de Arch Oboler basado en la historia homónima de Henry Kuttner, quien sigue a un profesor de filosofía que le obsequia a su esposa un aparato de televisión, pese a que él mismo odia al medio. Mucho más en este caso, en que el aparato, el Twonky, es un robot decidido a cambiarle la vida, proporcionándole comodidades pero, a la vez, intentando cercenar su libre albedrío. Como resulta evidente, en el clímax de la cinta, el profesor logra destruir al Twonky y retomar su anterior vida.

CIENCIA-FICCIÓN

la publicó con el seudónimo de Lewis Padget. La trama

161

Para el final de nuestro periplo de este año hemos dejado a La guerra de los mundos (The War of the Worlds), uno de los hitos fundamentales del cine de ciencia-ficción de todos los tiempos, producido por George Pal y dirigido con mano maestra por Byron Haskin. En la trama de La guerra de los mundos, la historia ambientada por Wells en 1898 es actualizada a los años ’50, mientras que la acción se desarrolla en el sur de California en vez de en el Londres original. El doctor Clayton Forrester, un veterano científico que participó en el Proyecto Manhattan, se encuentra en viaje de pesca cerca del pueblo de Linda Rosa en el momento en que un enorme meteorito cae en los alrededores. En el lugar, el científico conoce a Sylvia Van Buren y a su tío, el pastor Matthew Collins. Todos los lugareños están excitados con el acontecimiento, pero el meteorito muestra rastros de radioactividad y está muy caliente como para examinarlo de cerca, por lo que Forrester decide permanecer en la zona, hasta que se enfríe. Los acontecimientos se precipitan cuando del interior del meteorito surge una especie de periscopio que, literalmente, convierte en cenizas a tres hombres ubicados en el lugar. Más tarde, Forrester y el comi-

162

mientras surgen informes respecto de la llegada de

CIENCIA-FICCIÓN

sario también son atacados, pero logran sobrevivir, y más meteoritos, los marines rodean el cráter original. Entonces surgen por completo tres máquinas de guerra marcianas, y cuando el pastor Collins se aproxima en son de paz, es asesinado sin que medie advertencia alguna. Los militares atacan pero las naves marcianas están protegidas por una especie de escudo de fuerza impenetrable, y repelen a los soldados con su rayo calórico. Después de asistir azorados a la derrota de los

En la página anterior, un afiche promocional y dos imágenes de Spaceways, cinta dirigida por el legendario Terence Fisher. En esta página, a la derecha, afiche promocional y dos escenas de The Twonky.

marines, Forrester y Sylvia se esconden en una granja abandonada, y allí tienen un nuevo encuentro con los invasores, que los examinan a través de un ojo electrónico. Gracias a los esfuerzos del científico, ambos logran escapar con parte del dispositivo óptico marciano y con una muestra de sangre de un alienígena. La pareja finalmente se reúne con los colegas de Forrester en Los Angeles. Los científicos buscan la clave para derrotar a los invasores, y pese a los valiosos aportes del protagonista, todo parece ser inútil, por lo que los militares deciden utilizar una bomba atómica para neutralizar la amenaza. La bomba fracasa y en la evacuación de la ciudad, Forrester y Sylvia son separados por la turba enloquecida que procura huir. El científico busca a la chica por todos lados, presenciando el caos y la destrucción que siembran los marcianos, y finalmente la encuentra refugiada en una iglesia. Cuando una nave parece acercarse para acabar con ellos, con sorpresa son testigos de la caída del artefacto marciano, que se estrella sin control. Con cautela, Forrester se acerca a la nave, que ha abierto sus puertas, y descubre a un marciano arrastrándose hacia el exterior, donde agoniza brevemente y muere. El científico descubre entonces que los poderosísimos invasores han sido derrotados por los microorganismos ante los cuales los marcianos carecen de defensas. Con la excepción de Invasión de discos voladores (Earth versus the Flying Saucers, 1956), La guerra de los mundos es la única película de ciencia-ficción norteamericana que representa una invasión extraterrestre masiva, lo que sin duda le otorga una mayor resonancia social a la propuesta, reflejando en gran medida las actitudes y los temores de la sociedad

CIENCIA-FICCIÓN

que comparten la vida en la Tierra con el hombre, y

163

norteamericana de los ’50, además de plantear que el hombre debería tomar seriamente en cuenta la posibilidad de que existan otras formas de vida en lugares no tan lejanos del espacio, y adecuar sus respuestas ante esa realidad. Ya ubicados en 1954, se produce el estreno de El chico atómico (The Atomic Kid), film significativo porque demuestra la poca comprensión del verdadero peligro que entrañaba –y entraña– la exposición a la radiación, pese al generalizado temor a la «bomba» de la época. En la trama, un muchacho interpretado por el popular Mickey Rooney sobrevive a una prueba atómica y, una vez que es internado para descontaminarlo, un compañero intenta sacar rédito de la situación, involucrándose con espías extranjeros. Obviamente, el protagonista saldrá bien librado de la trampa de su amigo, y hasta se casa con su enfermera del hospital. Este mismo año, en un intento por reflotar la saga de criaturas que le valiera grandes beneficios en los ’30 y parte de los ’40, la Universal presenta El monstruo de la Laguna Negra (The Creature from the Black Lagoon), película dirigida por el inigualable Jack Arnold que alcanzó una enorme popularidad y ha trascendido la época de su estreno. Mitad hombre, mitad anfibio, el

164

sería la criatura principal de Tiburón (Jaws) en 1975,

CIENCIA-FICCIÓN

monstruo protagonista es tan aterrorizante como lo película que tiene más de una similitud con la propuesta dirigida por Arnold. Cuando el productor William Alland estaba participando en una cena celebración en México, en ocasión del rodaje de El ciudadano (Citizen Kane), en 1941, escuchó de boca del director mexicano Gabriel Figueroa el mito de la existencia de una raza de seres mitad pez, mitad hombres, que habitarían en el río Amazonas. Alland decidió darle

En la página anterior, afiche promocional y dos imágenes de la destacada La guerra de los mundos. A la derecha, un afiche promocional y un fotograma de El monstruo de la Laguna Negra, de Jack Arnold.

forma a la historia en un guión al que tituló The Sea

parte del emplazamiento en el que Maia encontró los

Monster diez años después, e inspirado en la historia

primeros restos puede haber caído al río y encontrarse

de La bella y la bestia. En diciembre de 1952, Maurice

debajo del agua. Lucas les cuenta que ese tributario

Zimm expandió ese tratamiento inicial del tema, en

en particular desemboca en un ojo de agua conocido

tanto que Harry Essex y Arthur Ross lo reescribieron

como la Laguna Negra, una especie de paraíso del

como The Black Lagoon. Después del éxito alcanzado

que nadie ha podido volver. Los científicos deciden

por House of Wax –otro film rodado en 3D– en 1953,

arriesgarse, sin percatarse que la criatura anfibia res-

Jack Arnold fue contratado para dirigir la película en

ponsable de la masacre en el campamento del Dr. Maia

ese mismo formato tridimensional.

los está observando desde el agua. Habiendo visto a la

En la trama, una expedición arqueológica en el Ama-

hermosa Kay, el monstruo comienza a seguir al barco

zonas descubre evidencia fosilizada de una criatura

en su periplo hacia la laguna. Una vez que la expedi-

que se encontraría entre los animales terrestres y

ción llega al lugar, Reed y Williams deciden sumergirse

los acuáticos. El jefe de la expedición, el doctor Carl

en las aguas para rescatar posibles fósiles del fondo.

Maia decide entonces visitar a su amigo, el doctor

Tras el regreso de los dos hombres, Kay va a darse un

David Reed, un ictiólogo que trabaja en un instituto

chapuzón y es atacada por la criatura desde abajo del

especializado en biología marina. Reed convence al

agua, pero el monstruo queda momentáneamente

auspiciante financiero del lugar, Mark Williams, para

atrapado por una de las redes del barco y aunque logra

realizar un viaje de estudio al Amazonas, en busca

escapar, deja una de sus uñas en las sogas, revelando

de más restos fósiles. Así, el grupo se embarca en un

a los científicos su existencia. Los siguientes encuentros entre la criatura y los científicos acaban con la vida de dos de los tripulantes de

Dr. Reed, el Dr. Maia y Williams, además de la novia

Lucas, pero luego los hombres son capaces de captu-

de Reed, Kay Lawrence y de otro científico llamado

rar al monstruo y encerrarlo en una jaula dentro del

Thompson. Cuando llegan al antiguo campamento de

barco. La criatura escapa durante la noche y ataca al

Maia descubren que todo el grupo de investigación

Dr. Thompson, quien lo está custodiando. Kay golpea

ha sido misteriosamente asesinado, mientras su jefe

a la bestia con una linterna y evita de esa manera

estaba gestionando una nueva expedición. Lucas su-

que acabe con la vida de Thompson. A continua-

giere que el culpable de la masacre puede haber sido

ción, David decide que deben volver a la civilización,

un jaguar, pero el resto del grupo no está de acuerdo.

pero cuando el barco pretende abandonar el lago

A esta altura, nadie, ni siquiera el público, está muy

descubren que la entrada al río está bloqueada por

seguro de qué ha sucedido en realidad.

troncos, aparentemente colocados en el lugar por el

Con el campamento original reducido a la nada,

monstruo. Mientras varios de los expedicionarios in-

Williams está listo para desechar la expedición, pero

tentan despejar la salida, Williams es muerto a golpes

Reed sugiere que quizá, miles de años en el pasado,

por la criatura, a la que enfrenta a mano limpia bajo

CIENCIA-FICCIÓN

vapor llamado Rita, que capitanea un rudo veterano llamado Lucas. La expedición está compuesta por el

165

En esta página, otras dos imágenes de El monstruo de la Laguna Negra. En la página siguiente, cuatro diferentes fotogramas de Devil Girl from Mars, una revisión británica de los temas de El día que paralizaron la Tierra.

el agua. El monstruo entonces rapta a Kay y la lleva a su guarida. Reed, Lucas y el Dr. Maia emprenden la persecución para rescatar a la chica y, una vez en la cueva que sirve de refugio a la criatura, rescatan a Kay después de acribillar a balazos a su raptor. El monstruo cae al agua y, presumiblemente muerto, se hunde en lo más profundo de la laguna. La siguiente cinta que nos interesa es Devil Girl from Mars, una revisión de origen británico de los planteos de El día que paralizaron la Tierra. Nyah es una extraterrestre llegada de Marte que, junto con su robot Chani, rodea a Londres con un escudo invisible y demanda a las autoridades un grupo de hombres sanos, que serán transportados a su planeta origen con fines reproductivos. El héroe de la historia, eventualmente, logrará penetrar las defensas de la extraterrestre y autoinmolarse en defensa de la Humanidad. Con estos planteos algo bizarros, el film adquirió el estatus «de culto» en los Estados Unidos. Otro estreno de 1954 es Gog, el monstruo de 5 manos (Gog), una cinta realizada en colores y pasible de ser mirada en 3D. La trama presenta a Gog y Magog como dos robots no humanoides que son comandados por una creíble computadora llamada NOVAC, en un

166

primera estación espacial humana. Al lugar arriba

CIENCIA-FICCIÓN

laboratorio de Nuevo México donde se construye la un investigador cuya misión es resolver unas acusaciones de sabotaje, pero descubre además una serie de asesinatos complejos, que complican aún más la situación. Con el devenir de la trama, el investigador descubre que la computadora está siendo controlada desde un avión que vuela a gran altura, y que ha sido reprogramada para sabotear su misión principal, con la ayuda de los dos robots.

Nuestro siguiente punto de interés es el film Asesinos del espacio (Killers from Space). La historia sigue al doctor Doug Paul Martin, un científico que sobrevive al choque de un avión y es secuestrado por extraterrestres de Astron Delta, quienes le lavan el cerebro en una cueva y lo envían, como su representante, de regreso entre los suyos. Su esposa y su ayudante notan las extrañas actitudes de Martin, quien parece estar volcado al espionaje, y aunque se lo interroga utilizando el «suero de la verdad» (pentotal sódico), su explicación es tan extraña e increíble que nadie la toma cabalmente en serio. En el final, el científico recuperado se dirige al escondite de sus antiguos amos y lidera la destrucción del mismo con una bomba atómica. Este año se presenta también Monster from the Ocean Floor, la primera producción de Roger Corman, que ya lleva su sello indisimulable. En la historia, una muchacha, que pasa unas vacaciones en México, ve a un monstruo –una especie de ameba u octópodo con un solo ojo– en el mar. Cuando intenta transmitir su hallazgo a un biólogo marino, no logra convencerlo, por lo que decide sumergirse ella misma y encontrar a la criatura. Obviamente, en un instante se convierte en «damisela en peligro», que deberá ser rescatada por el biólogo, quien con un minisubmarino acaba ser devorada. Realizada con apenas 12.000 dólares de presupuesto, Corman consiguió varios de los artefactos submarinos involucrados a cambio de publicidad encubierta en el film, inaugurando toda una manera de hacer películas. A continuación y siempre en 1954, nos interesa analizar Caravana a las estrellas (Riders to the Stars), una cinta que se emparenta con el tipo de realizaciones cuasi

CIENCIA-FICCIÓN

con el monstruo en cuestión y la salva justo antes de

167

En esta página, afiche promocional y una escena de Gog, el monstruo de 5 manos, donde los seres humanos enfrentan la amenaza de dos robots. En la página siguiente, afiche promocional y diferentes imágenes de Asesinos del espacio.

documentales típicas de las propuestas del género de George Pal. En esta ocasión, un científico está obsesionado con la idea de capturar un meteorito y descubrir por qué éstos no arden al estar sometidos a los rayos cósmicos, fuera de la atmósfera terrestre. Según su teoría, cualquier cohete que abandone dicha atmósfera está condenado a ser destruido, y eventualmente construirá un ingenio de características superiores para lograr la conquista del espacio. La lentitud y hasta incoherencia de la trama la convierten en apenas una curiosidad –por su adhesión a un determinado estilo– dentro de la historia del cine de ciencia-ficción. Otro título de este año es Stranger from Venus, otra pretendida remake británica, de bajo presupuesto, de El día que paralizaron la Tierra, que incluye en el reparto a la misma actriz protagonista de esa cinta, Patricia Neal. Cuando una mujer choca con su automóvil, es abordada por un extraño que le asegura que es un visitante de Venus. La pareja se enamora, y entonces el hombre le revela que ha sido enviado a la Tierra porque los habitantes de Venus están preocupados por el mal uso que se hace, en el planeta Tierra, de la energía atómica. El novio de la chica busca ayuda

168

derrotado, abandona la acción. Por su parte, el venusi-

CIENCIA-FICCIÓN

para capturar al invasor y someterlo, pero cuando es no decide enviar a la flota de su planeta de regreso, perdonando a la Tierra, y permanece en el planeta pese a los nocivos efectos de nuestra atmósfera. En el climático final, el visitante muere y se desvanece frente a los ojos de su enamorada. A continuación, un título a destacar de la producción de 1954 es Target Earth. Un grupo de robots venusinos atacan la ciudad de Chicago, devastándola por

completo ante los ojos de una atribulada joven. Con los sobrevivientes, la muchacha forma un comité de defensa, y un científico del grupo descubre el «talón de Aquiles» de los ingenios invasores, a los que pretende derrotar con ultrasonido, desbaratando sus armaduras. Lamentablemente, en el proceso de acabar con los invasores mecánicos, el científico también se destruye a sí mismo y al resto de los sobrevivientes, a excepción de la protagonista y su pareja, que tendrán el claro objetivo de repoblar al planeta… Continuando con nuestro recorrido de los estrenos de 1954, la siguiente película a reseñar es El mundo en peligro (Them!), otro de los grandes hitos del género en los ’50, rodado en un estilo semi documental por Gordon Douglas. La gente de Warner, el estudio productor, estaba tan confiada en el éxito de la película, que el estreno se manejó con una gran confidencialidad, sin dejar trascender casi información ni hacer las habituales campañas de difusión a través de afiches promocionales. En la trama, un niño es encontrado, perdido en medio del desierto, y en estado de gran perturbación, por dos policías camineros. Cerca del lugar, los oficiales encuentran una casa rodante destrozada y una única y desconcertante huella en el suelo. En ese momento, escuchan una especie de llanto desconsolael pueblo, uno de los policías escucha nuevamente el llanto, pero tampoco logra identificar de dónde viene. Allí comienza a intervenir un agente del FBI, que con su investigación finalmente descubre que las pruebas atómicas realizadas en lo profundo del desierto han permitido una extraña mutación, cuyo resultado es una colonia de hormigas gigantes. Es entonces que se decide exterminarlas con un poderoso insecticida,

CIENCIA-FICCIÓN

do, cuya procedencia no pueden ubicar. De regreso en

169

pero la reina de las hormigas logra escapar y poner nuevos huevos en la zona de desagüe de Los Angeles. Las nuevas criaturas que nacen de ese desove, son quemadas vivas dentro de las cloacas, antes de que puedan producir mayores daños en la ciudad. Aunque algunos críticos han señalado la posibilidad de enrolar a El mundo en peligro en la línea de los films de ciencia-ficción con mensaje paranoico respecto de la invasión comunista –poniendo a las hormigas en el rol de «agentes rojos» que son tenazmente combatidos por un funcionario gubernamental–, se trata de un argumento un poco forzado y la cinta está claramente más enfocada en reflejar las consecuencias de la manipulación nuclear de la naturaleza, antes que cualquier otra cosa. Con todo y sin profundizar demasiado en la polémica de su mensaje subliminal, El mundo en peligro se convirtió en una de las películas más taquilleras de la Warner de 1954, generando como herencia todo un subgénero dentro de la ciencia-ficción cinematográfica de los ’50, habitado por insectos de descomunales proporciones que iremos reseñando en el devenir de este capítulo. Otro título de este año que nos interesa destacar es Tobor the Great, cuya trama gira en torno a un

170

particularidad de sentir emociones como los humanos,

CIENCIA-FICCIÓN

inventor que construye un robot, Tobor, que tiene la además de ser capaz de recibir impulsos telepáticos. Un pequeño genio científico de 11 años de edad, y el nieto del inventor del robot, entablan una relación cercana con el ingenio. Un grupo de agentes comunistas secuestran al chico y al inventor, pero gracias a un transmisor oculto, el hombre se comunica con Tobor y el robot parte al rescate de sus amigos. El clímax de la historia es par-

En la página anterior, diferentes imágenes de las películas Caravana a las estrellas, Stranger from Venus y Target Earth. En esta página, un afiche promocional y una escena de El mundo en peligro, film inaugural del subgénero de los «insectos gigantes».

ticularmente brutal para un producto que, a priori,

donde los dinosaurios todavía existen. Los animales

parece destinado a un público infantil, y en ese final

en cuestión son marionetas electrónicas, filmadas con

el inventor decide destruir a su creación, enviándola

técnicas de stop-motion, anticipando de esta manera a

al espacio profundo.

las desarrolladas años después por el especialista Ray

Nuestro periplo por las producciones de 1954 se cierra

Harryhausen. El film fue adquirido por el productor

con 20.000 leguas de viaje submarino (20,000 Leagues

norteamericano William Clayton, quien le agregó

Under the Sea), una nueva versión del clásico de Julio

una escena adicional en la que los chicos descubren

Verne producida por los estudios Disney, que presenta-

una cueva que les permite emerger de su aventura

ron una de las mejores películas de acción de su histo-

en el Central Park de Nueva York. Esta composición

ria. Su director fue Richard Fleischer que, irónicamente,

fue estrenada en 1966, con el título Journey to the

era el hijo de uno de los principales competidores de

Beginning of Time.

Disney en el segmento de los dibujos animados en los

También en 1955, los estudios Paramount estrenan La

años ‘30, el siempre interesante Max Fleischer. A bordo

conquista del espacio (Conquest of Space), que vuelve

de su submarino Nautilus, el capitán Nemo se dedica

a reunir en idénticas tareas al director y el productor de

a hundir barcos de guerra de todas las naciones de la

La guerra de los mundos (Byron Haskin y George Pal, respectivamente). Considerada como una secuela de Destino la Luna, la película está basada en el libro The

que impulsan el accionar de Nemo tienen un segundo

Mars Project, de Werner von Braun, el genio detrás de

plano en la propuesta que, esencialmente, es un film

los cohetes nazis de la Segunda Guerra Mundial que,

de aventuras. La cinta obtendría dos premios Oscar,

con su conversión en «científico norteamericano»,

por sus Efectos Especiales y su Dirección de Arte, y fue

obtuvo una pátina de legitimidad para su trabajo,

además la primera en ser distribuida por Buena Vista,

originalmente enfocado hacia la construcción de armas

la subsidiaria creada por Disney específicamente para

de destrucción masiva.

esos menesteres de la industria.

Volviendo a la película, cuando Paramount vio el pri-

Ya ubicados temporalmente en 1955, el primer film a

mer guión, objetó que los costos de producción eran

considerar es una producción checoslovaca intitulada

excesivos y como resultado, se decidió realizar todo a

Viaje a la prehistoria (Cesta do praveku). Karel Zeman,

una escala mucho menor, en detrimento del resultado

su director, es uno de los más genuinos herederos de

final. Pal, en un principio, quería reflejar en la pantalla

Georges Méliès, con composiciones que combinan ac-

la exploración de Venus, Marte y Júpiter, pero el re-

tores en vivo, marionetas, modelos a escala de enorme

corte del estudio lo dejó meramente con un planeta,

precisión y decorados de gran belleza. El film que nos

Marte, y una insípida relación padre-hijo como motor

ocupa es un claro ejemplo de lo expuesto. La trama

de la acción. Pese a todo, las reconstrucciones aéreas

sigue a cuatro chicos que emprenden un viaje a través

de la superficie marciana son muy acertadas, incluso

de un río subterráneo, que los lleva a una tierra oculta

para los cánones actuales.

CIENCIA-FICCIÓN

Tierra, en un intento por poner fin a los conflictos bélicos de manera definitiva. Pero las cuestiones filosóficas

171

En el futuro cercano, una enorme estación espacial orbita en torno a la Tierra, donde se construye una no menos gigantesca nave espacial. En el último instante, se le ordena al vehículo dirigirse a Marte, pero su capitán, advirtiendo que el viaje es un intento por encontrar a Dios, considera que se trata de una blasfemia e intenta evitar el descenso de la nave en la superficie del planeta rojo, mientras que su hijo pugna por lo contrario. La cinta se transformó en un desastre económico mayúsculo para Paramount, finalizando de esta manera la incómoda relación entre el estudio y George Pal, amén de poner punto final al tipo de films dedicados a la exploración «realista» del espacio, un subgénero que sería revivido, a fines de los años ’60, a través del éxito obtenido por 2001, una odisea del espacio (2001, A Space Odyssey), de Stanley Kubrick. Otro proyecto que señalaremos en estas líneas y estrenado asimismo en 1955, es La fiera del mar (It Came from Beneath the Sea), que fue el primero de los varios films que realizó el productor Charles H. Schneer con efectos especiales aportados por Ray Harryhausen, quien contó en esta oportunidad con un presupuesto muy acotado, por lo que su pulpo gigante tendría sólo

172

funcionó bien, con una historia que sigue a un pulpo

CIENCIA-FICCIÓN

seis tentáculos... Pese a la curiosidad, la propuesta descomunal que surge del mar, enfurecido después de haber sido contaminado con radiación atómica, y ataca a un barco al que hunde. Cuando la criatura se dirige hacia San Francisco, un grupo formado por un capitán de submarino y dos científicos intenta detener el ataque colocando bombas en todo el acceso a la bahía de la ciudad. El plan sólo logra que la criatura se trepe al puente Golden Gate, del que es desalojado

En la página anterior, afiche promocional y una imagen de 20.000 leguas de viaje submarino, junto a un fotograma de Tobor the Great. En esta página, a la derecha, afiche promocional y una impactante escena de La fiera del mar.

electrificando su estructura, pero entonces la bestia ataca la ciudad en sí, hasta que es obligada a regresar al agua con sendos lanzallamas. Allí, finalmente, el capitán del submarino logrará acabar con él utilizando un torpedo atómico. A continuación nos interesa incluir en esta historia del género a El beso mortal (Kiss Me Deadly), una película dirigida por Robert Aldrich que toma como base una novela homónima de 1952, escrita por Mickey Spillane para su personaje Mike Hammer, lo que en un primer momento puede hacer pensar en una inclusión errónea del título en estas páginas. En la trama original, el motor de la acción era la búsqueda de unos narcóticos robados, pero Aldrich y su guionista, A. I. Bezzerides, alteran significativamente la propuesta, convirtiendo el objeto robado en una caja con material radiactivo, que en el final de la película es abierta por una de las protagonistas femeninas, provocando una devastadora explosión. Aunque el detective Mike Hammer es un típico personaje del film noir, la trama de este film lo emparenta con la ciencia-ficción y con uno de los temas capitales en el período: la falta de esperanza una vez que el poder atómico es desencadenado. El beso mortal es una pequeña obra maestra que vale la pena ver. titulado Los platillos voladores, que combina elementos icónicos del género que nos ocupa con la comedia musical. En la trama, el protagonista pretende con su última invención –un automóvil impulsado por una turbina– participar y ganar una carrera, para conseguir el dinero suficiente para casarse. Un accidente lleva a la pareja protagónica a un pueblito, donde son tomados por marcianos. A partir de allí viven

CIENCIA-FICCIÓN

Nuestra siguiente parada de 1955 es un film mexicano

173

una serie de aventuras y malentendidos, y cuando finalmente abandonan el pueblito, los protagonistas se encuentran con verdaderos visitantes del planeta rojo y desaparecen. En 1953, la televisión británica –a través de la BBC–, presenta una serie televisiva de seis episodios titulada The Quatermass Experiment. El programa presentaba al profesor Bernard Quatermass (Reginald Tate), un especialista en viajes espaciales del Reino Unido que, junto con sus colaboradores, esperan el regreso de la primera misión espacial que han lanzado desde la isla. Cuando la nave aterriza de manera no muy ortodoxa, Quatermass descubre que de los tres tripulantes originales sólo ha sobrevivido uno, Victor Carroon (Duncan Lamont), quien además está gravemente enfermo. Dentro de la nave, Quatermass observa que los efectos personales de los otros dos astronautas están intactos y en su lugar y, al revisar los instrumentos, verifica que la nave no ha sido abierta en el transcurso del vuelo. Después de una serie de investigaciones, el equipo deduce que Carroon parece haber absorbido la conciencia de los otros dos astronautas, en tanto se va convirtiendo en una especie organismo vegetal de origen extraterrestre. Cuando el enfermo es secuestrado por

174

la información que ha recopilado en su experiencia

CIENCIA-FICCIÓN

un grupo de agentes extranjeros, que desean obtener espacial, se desencadena la tragedia. La policía busca a Carroon por toda la ciudad de Londres, mientras Quatermass descubre en su laboratorio que la criatura es capaz de acabar con la vida en la Tierra si acaso logra liberar sus esporas al aire. Finalmente, la policía logra cercar al monstruo en la abadía de Westminster y allí Quatermass libra su más dura batalla, convenciendo a las conciencias de los astronautas abducidos de la

En la página anterior, un afiche promocional y dos imágenes de Pánico mortal, junto a otra de su continuación, Vasallos del mal. En esta página, a la derecha, afiche promocional y un fotograma de El regreso del monstruo.

necesidad de destruir a la criatura antes de que desencadene el fin de la Humanidad. La serie resultó ser un gran éxito de audiencia, alcanzando casi tres millones y medio de espectadores en su primer episodio y trepando a más de cinco en la sexta entrega. Un éxito de proporciones si se tiene en cuenta que, un año antes, el periódico The Times había estimado que la audiencia británica total alcanzaba los 4 millones de espectadores, y que el promedio de la BBC, por programa, era apenas superior a los dos millones de personas. Dos años después de su primera emisión, la serie sería transformada en una película a la que se tituló Pánico mortal (The Quatermass Xperiment), con Val Guest como director y co-guionista, y el actor norteamericano Brian Donlevy en el papel principal. El escritor original del programa, Nigel Kneale, no se mostró conforme con los resultados de la producción de la Hammer y se quejó amargamente de las cualidades actorales del elegido para interpretar a Quatermass. También en 1955, la BBC decidió realizar una continuación de las aventuras de Quatermass a la que sencillamente tituló Quatermass II. Su trama presenta una vez más al científico experto en viajes espaciales investigando una extraña lluvia de meteoritos. Quateralienígena que afecta a altos estratos del gobierno, y cuando algunos de los colegas más cercanos del profesor caen bajo la influencia extraterrestre, el protagonista decide utilizar un prototipo de cohete propio para viajar al espacio y evitar una vez más la tragedia que pesa sobre todos los seres humanos. Si bien se la considera menor respecto de la primera saga, Quatermass II ha sido señalada como una de las

CIENCIA-FICCIÓN

mass finalmente descubre una monstruosa infiltración

175

más visibles influencias de La invasión de los usurpadores de cuerpos (Invasion of the Body Snatchers, 1956) y rescatada como alegoría de los efectos adversos de la industrialización indiscriminada y de la corrupción gubernamental en relación con los grandes negocios de la época. Cuando se estrenó la segunda saga de la serie, el Reino Unido asistía también al lanzamiento de la cadena ITV, la primera de carácter enteramente comercial de la isla que, además, marcaba el fin del monopolio de la BBC en el medio televisivo británico. El canal estatal necesitaba una nueva programación que le permitiera competir y así, Nigel Kneale fue contratado para escribir una secuela de las aventuras de su científico experto en cohetería, que nuevamente se desarrollarían a lo largo de seis episodios consecutivos. Con un presupuesto mayor –exactamente el doble que su predecesora–, la serie contó con más tomas en exteriores, rodadas en película de 35 mm., que muestran muchos de los lugares donde efectivamente se encuentran las criaturas alienígenas y los campos en los que ha caído la lluvia de meteoritos invasores. Reginald Tate, el protagonista de la primera saga, falleció un mes antes de iniciar el rodaje, y fue reemplazado por el actor John Robinson, un experimentado

CIENCIA-FICCIÓN

176

intérprete con una larga carrera en cine y televisión desde los años ’30. La serie obtuvo buena críticas de la prensa, despertando una vez más la curiosidad de los televidentes, y se afirma que su argumento es una de las principales influencias de la serie televisiva de los ’90 The X-Files. De hecho, el propio Nigel Kneale fue invitado a escribir un episodio de ese programa, pero finalmente declinó la oferta.

En la página anterior y a la derecha, afiche promocional y diferentes momentos de Tarántula, una magnífica propuesta dirigida por Jack Arnold y nacida a partir del éxito obtenido por El mundo en peligro.

De idéntica manera que su predecesora, los derechos

bio prehistórico lejos de su hogar amazónico, bajo

cinematográficos de Quatermass II fueron adquiridos

la atenta mirada de un grupo de científicos en una

por la Hammer, que lanzó la película en 1957 –estrena-

instalación especial ubicada, una vez más, en Florida.

da en Argentina con el título Vasallos del mal– nue-

Después de que un incendio daña considerablemen-

vamente con Val Guest como director y Brian Donlevy

te las branquias del monstruo, uno de los científicos

como protagonista, aunque en este caso, el propio

decide operarlo y activar los pulmones latentes que

Kneale se encargó de escribir la adaptación de su

posee. Después de algunos intentos por aclimatar a

guión. Asimismo, Kneale realizó una novelización de

la criatura para permitirle convivir con los humanos,

su trabajo que fue publicada durante quince días del

los planes del científico se ven afectados cuando uno

mes de diciembre de 1955 en las páginas del periódico

de sus colegas se insinúa románticamente a su esposa,

Daily Express, aunque el final de ese trabajo es algo

desatando una violenta confrontación, que dejará al

más apresurado porque el diario perdió interés en la

monstruo en muy malas condiciones y librado a su

serie ante la indiferencia de sus lectores.

suerte. Abandonado en un territorio que desconoce,

El éxito de El monstruo de la Laguna Negra produjo

el anfibio decide dirigirse al mar, supuestamente para

la inevitable secuela, El regreso del monstruo (Re-

suicidarse, ya que ahora carece de las branquias que

venge of the Creature, 1955), y la criatura, a pesar

le permitían respirar bajo el agua.

de haber sido virtualmente «cocida a balazos» en el

Como en la primera entrega de la saga, El monstruo

film anterior, sigue viviendo en su Laguna Negra muy

vengador incluye segmentos filmados en 3 D, aunque

tranquilamente. Dos oceanógrafos (John Bromfield y

su nudo argumental la ubique mucho más cerca del

Robert B. Williams) capturan al monstruo y lo trasladan

melodrama pasional que del terror y la ciencia-ficción

a un oceanario de Florida, donde le enseñan algunas

cinematográficos en los que había visto la luz. Un film

palabras en inglés. Pero la criatura no es feliz en su

que, en definitiva, sobrevive más como curiosidad his-

cautiverio y finalmente vuelve a sus orígenes salvajes,

tórica y como testimonio de la caída del género que

emprendiendo una serie de asesinatos y nuevamente

hizo grande a la Universal.

raptando a la aullante heroína de turno. El regreso

Otro film de 1955 que incluiremos en este recorrido es Tarántula (Tarantula). La citada compañía Universal,

original que su antecesora, aunque todavía goza del

entusiasmada con el éxito obtenido por El mundo

reconocimiento de los aficionados y presenta una vez

en peligro, decide realizar su propia película de

más a Jack Arnold tras las cámaras.

«insectos gigantes» –aunque las arañas no sean, en

La última película relacionada con este particular

esencia, insectos propiamente dichos–, y Jack Arnold

monstruo es El monstruo vengador (The Creature

fue puesto a cargo del proyecto y tomaría el guión de

Walks Among Us, 1956). No sólo es la tercera en

un episodio del Science Fiction Theater titulado «No

estrenarse sino que también ocupa el último puesto

Food for Thought», que planteaba la invención de

en cuanto a su interés. La historia presenta al anfi-

un nutriente artificial que incapacitaba a sus víctimas

CIENCIA-FICCIÓN

del monstruo es un esfuerzo menor y mucho menos

177

En esta página y en la siguiente, afiche promocional y diferentes fotogramas de Más allá de la Tierra, film que sigue la aventura de un grupo de científicos nucleares enfrentados a una solapada invasión a nuestro planeta.

para alimentarse de manera natural, para desarrollar una historia completamente nueva. El film comienza cuando un hombre, con horribles deformidades, aparece muerto en los alrededores de un pequeño poblado en medio del desierto. El comisario del lugar (Nestor Paiva) identifica a la víctima como Eric Jacobs, un asistente de laboratorio del profesor Deemer (Leo G. Carroll, reconocido años después como el jefe de los agentes de CIPOL), un científico que vive y trabaja a algunos kilómetros de distancia. El comisario, en vista de las deformidades del occiso, decide llamar al médico local, Matt Hastings (John Agar), para que revise el cuerpo, y el doctor concluye que el hombre presenta todas las características de la acromegalia, un desorden glandular que afecta el crecimiento, algo que es imposible de desarrollar en tan poco tiempo teniendo en cuenta que Jacobs lucía perfectamente normal tres meses antes. Comisario y médico se dirigen entonces al laboratorio del profesor Deemer, y el policía convalida la explicación que le da el científico, en contra de las sospechas de Hastings. Así, el profesor continúa con sus experimentos, inoculando con un compuesto a una serie de animales que desarrollan un increíble

178

zado el tamaño de un gato pequeño. Un buen día, el

CIENCIA-FICCIÓN

crecimiento, incluyendo una tarántula, que ha alcanprofesor es atacado por su otro asistente –cuyas manos presentan una deformación similar a la de Jacobs–, que le inyecta el suero antes de caer muerto. Durante la lucha entre ambos hombres se desata un incendio en el laboratorio, que libera a la enorme tarántula antes de consumir todo el edificio. Unas semanas después arriba al lugar la nueva asistente del profesor Deemer, Stephanie «Steve» Clayton

(Mara Corday), y cuando el doctor Hastings la lleva hasta la casa del científico, el investigador le comenta que está desarrollando un nutriente radioactivo que, en el momento en que esté finalmente perfeccionado, podrá alimentar a la población mundial entera. Le confiesa también que Eric Jacobs cometió el error de probar el compuesto en sí mismo, lo que le causó la enfermedad que finalmente lo llevó a la muerte. El doctor y la asistente comienzan un romance, ignorantes de que en el desierto la tarántula sigue creciendo día a día. Muy pronto, ganado y personas comienzan a desaparecer, y los únicos vestigios que quedan en cada escena criminal son los esqueletos descarnados y un extraño charco de lo que parece ser veneno de algún tipo. El profesor Deemer también comienza a mutar como producto de la inyección que ha recibido y Hastings se entera que uno de los sujetos de las pruebas del científico ha sido una tarántula, que presuntamente había sido destruida por el fuego desatado en el laboratorio. Allí es donde descubre que el veneno hallado en el desierto pertenece a una araña. Una que ha crecido más allá de lo imaginable: la criatura ya tiene el tamaño de una casa y se mueve a lo largo de todo el paisaje, matando todo lo que encuentra a su paso. la casa de Deemer y asesina al científico, mientras que el comisario y la patrulla de caminos son incapaces de detener la amenaza con sus armas de fuego. Después de un fallido intento de detenerla utilizando dinamita, entran en acción un grupo de aviones liderados por un joven oficial –interpretado por un prácticamente irreconocible Clint Eastwood–, que tras disparar sus misiles contra la tarántula y fallar, rocían a la criatura con

CIENCIA-FICCIÓN

Hastings logra rescatar a Steve cuando la araña ataca

179

En esta página, afiche promocional y una escena de El ataque de los monstruos, un típico producto de la factoría Corman. En la página siguiente, afiche promocional y fotogramas de El fin del mundo, otro film firmado por Roger Corman.

toneladas de napalm, que demuestra ser efectivo para abatir la amenaza que se cierne sobre el pueblo. Gracias a un estupendo guión, actuaciones adecuadas de todo el elenco y la poética del desierto propia de Jack Arnold, Tarántula es una película que todavía puede disfrutarse hoy en día. También en 1955 se produce el estreno de Más allá de la Tierra (This Island Earth), una película que, en un escenario de ciencia-ficción, presenta una nueva figura de científico demente y alerta contra los peligros de la energía atómica, uno de los principales terrores de una época en la que tanto norteamericanos como soviéticos se la pasaban realizando pruebas con sendas bombas de hidrógeno y siempre al borde de la conflagración definitiva. En la película, el científico nuclear Cal Meacham (Rex Reason) es invitado a un laboratorio secreto para colaborar en un proyecto supuestamente orientado a la paz mundial. Allí, entre otros especialistas, se encuentra una antigua novia suya, Ruth Adams (Faith Domergue), y juntos muy pronto conocen al propietario del laboratorio, el Dr. Exeter (Jeff Morrow). Poco a poco, los científicos descubren que en realidad trabajan para una raza extraterrestre, los habitantes

180

enemigos del planeta Zahgon. Exeter mismo resulta

CIENCIA-FICCIÓN

de Metaluna, enzarzada en una feroz lucha con sus ser un alienígena y el objetivo final de los seres de Metaluna es encontrar un nuevo planeta que reemplace su exhausto y devastado hogar. El film se encarga de mostrar, de manera descarnada, las consecuencias del uso indiscriminado de la energía atómica, enfocando uno de los terrores más clásicos de los ’50 y advirtiendo sobre lo endeble que es la línea que separa a la Humanidad del desastre definitivo.

Ubicados temporalmente un año después, en 1956, el prolífico Roger Corman presenta El ataque de los monstruos (Attack of the Crab Monsters), otro film que explora las relaciones entre la energía atómica y las mutaciones. En la trama de la película, un grupo de científicos arriba a una remota isla del Pacífico para investigar lo sucedido con otro grupo anterior, enviado al lugar para estudiar los efectos de unas recientes pruebas con bombas de hidrógeno realizadas en la isla. Los primeros investigadores han desaparecido sin dejar rastro, aunque la isla está prácticamente desierta, sin animales a la vista salvo por unos pocos cangrejos. A su llegada, la nueva expedición es golpeada por la muerte de uno de los marinos que los acompaña, quien cae al mar y vuelve a la superficie sin su cabeza. Más tarde, el avión que los ha traído a la isla explota antes de poder despegar, dejándolos aislados y a su suerte. Liderados por Dale Drewer (Richard Garland) y el doctor Karl Weigand (Leslie E. Bradley), los científicos descubren las anotaciones realizadas por el grupo desaparecido, aunque sin hallar en ellas precisiones sobre lo que ha sucedido, excepto por unas enigmáticas citas respecto de extrañas criaturas y fenómenos que ocurren en el lugar. Cuando anochece, todos comienzan a escuchar las voces de los investigadores desaparecidos, que padel mismo modo que surgen evidencias de que hay algo vivo en la isla. Finalmente, el grupo es atraído hacia unas cavernas donde se ocultan unos gigantescos e insidiosos cangrejos, que han desarrollado la capacidad de comunicarse telepáticamente, al tiempo que parecen tener todos los conocimientos del grupo de científicos desaparecidos, además de la capacidad de emitir un rayo radioactivo a voluntad, que utilizan

CIENCIA-FICCIÓN

recen llamarlos. La radio es destruida misteriosamente,

181

para destruir la isla palmo a palmo. Uno tras otro, los miembros de la expedición son asesinados y sus mentes absorbidas por los cangrejos mutantes. Hacia el final, los tres últimos sobrevivientes, Drewer, el ingeniero Hank Chapman (Russell Johnson) y la científica Martha Hunter (Pamela Duncan), huyen de un único cangrejo gigante en lo que queda de la fatídica isla… El ataque de los monstruos es una típica producción de Corman, realizada con mínimo presupuesto pero capaz de mantener la tensión y entretener más allá de sus limitaciones, y que además tiene el mérito de unir la línea de las criaturas radioactivas gigantes con el tema del dominio telepático, propio hasta ese momento de las cintas con invasores del espacio exterior. El siguiente film de este año a destacar es La bestia de 1.000.000 de ojos (The Beast with a Million Eyes), una nueva historia de invasión extraterrestre en la que una fuerza alienígena se posesiona de las mentes de diferentes animales y de la de un granjero de escasas luces. Las intenciones del visitante quedan claras cuando los seres humanos son atacados por bandadas de pájaros asesinos, deben enfrentar jaurías de perros salvajes y hasta intentar controlar estampidas vacunas, pero finalmente es derrotado por una inteligente familia,

182

grande para el invasor. Aunque la idea no es nueva

CIENCIA-FICCIÓN

cuyo mutuo amor constituye un desafío demasiado y se enrola de alguna manera en el paradigma de la ciencia-ficción cinematográfica de los ’50, el film no carece de atractivos, sobre todo si se tiene en cuenta el singular proceso de producción de la propuesta. De acuerdo con Bert Gordon, uno de los productores asociados con AIP (American International Pictures, un estudio especializado en películas de clase B e importaciones de Inglaterra, particularmente de la Hammer),

En la página anterior, un afiche de La bestia de 1.000.000 de ojos junto a imágenes de Invasión de discos voladores. En esta página, un afiche promocional y otra imagen de Invasión de discos voladores, film claramente inspirado en La guerra de los mundos.

James Nicholson, co-fundador de esa compañía, vendía

talento y que sufrieron percances de todo tipo, sobre

proyectos de películas que ni siquiera estaban boce-

todo financieros. Pese a todo, la figura de Ed Wood

tadas, y en el caso de la cinta que nos ocupa, lo único

no puede faltar en una historia cinematográfica del

que existía era un póster con una extraña criatura con

género, y más adelante abordaremos la reseña de su

múltiples ojos, pero no había guión ni ninguna otra

film más conocido: Plan 9 del espacio sideral (Plan 9

cosa para empezar. Con sólo 23.000 dólares se filmó

from Outer Space).

en el desierto, pero en la primera exhibición la gente

Siempre en 1956, Roger Corman presenta otra de sus

salió perpleja ya que no había monstruo alguno y el

típicas incursiones en el género, intitulada El fin del

mejor efecto especial estaba hecho con un percolador

mundo (The Day the World Ended), que puede ser considerada como la primera película de ciencia-ficción

paraba rayos mortales. La proeza fue que, así y todo,

del maestro de los bajos presupuestos. En esencia, el

el film funcionó en las boleterías.

film es una nueva versión de Los últimos cinco (Five,

Otro proyecto que nos interesa rescatar es La novia

1951), y en el argumento, un variopinto grupo de so-

del monstruo (Bride of the Monster), del excéntrico

brevivientes de un holocausto nuclear huye hacia las

Ed Wood. En la trama, Bela Lugosi interpreta al Dr.

montañas, en busca de refugio. Una vez en el lugar,

Eric Vornoff quien, con la ayuda de Lobo (Tor John-

deben luchar contra las criaturas salvajes de la zona,

son), trabaja en la construcción de un rayo atómico

mutadas por la radiación, al tiempo que combaten a

en un pantano, cuyo objetivo final es la creación de

uno de los propios miembros de la partida, que sufre

una raza de seres superiores al humano. Las víctimas

una afección similar a la de la fauna silvestre. La mano

invariablemente mueren, con la excepción de una,

maestra de Corman se puede detectar a partir del

que se transforma es un monstruoso ser tentacular.

manejo serio de los personajes y de una identifica-

La periodista Janet Lawton (Loretta King), personaje

ción del curso de la trama con el mito del Jardín del

pergeñado a imagen y semejanza de la audaz Lois

Edén, con protagonistas que interpretan, de manera

Lane, investiga las extrañas desapariciones de per-

claramente alegórica, las secuencias más reconocibles

sonas y finalmente da con la marisma que sirve de

de los pasajes de la Biblia relacionados con el Paraíso

guarida al Dr. Vornoff. Obviamente, la chica es cap-

perdido por el hombre.

turada por los villanos y en el final, después de que la

Las invasiones extraterrestres toman un nuevo ímpetu

heroína ha rociado al científico con su rayo, Vornoff

en 1956 gracias al estreno de Invasión de discos vola-

se transforma en un monstruo con poderes atómicos,

dores (Earth versus the Flying Saucers). En el libreto,

que finalmente explota y se desvanece en una nube

los seres de un planeta agonizante se presentan en

de humo. En resumen, se trata de una de las típicas

la Tierra y, aunque sus intenciones iniciales no son

películas bizarras de Wood, pobres de argumento, en

hostiles, obviamente son recibidos a balazos, por lo

ocasiones interpretadas por actores amateurs cuya

que le declaran la guerra al planeta. Así, una enorme

presencia en el metraje responde a factores ajenos a su

flota de platos voladores aterriza y el destino de la hu-

CIENCIA-FICCIÓN

de café, que simulaba ser una nave espacial que dis-

183

manidad parece determinado, hasta que el Dr. Russell Marvin (Hugh Marlowe) descubre que los invasores son sensibles a los sonidos de alta frecuencia, con lo que logra la destrucción de la enorme flota alienígena. El film es particularmente interesante por los excelentes efectos stop motion ideados por Ray Harryhausen, que hacen que las naves alienígenas se vean realmente convincentes y sus choques con edificios públicos norteamericanos sean espectaculares. El guión, claramente influido por La guerra de los mundos (1953), es un tanto inocente en su desarrollo y allí radica la incapacidad de esta película para alcanzar la grandeza de su ilustre predecesora. En 1956 también llega a las pantallas otro gran ejemplo de ciencia-ficción y terror psicológico, y del enfrentamiento de la humanidad –occidental, obviamente– contra insidiosas fuerzas oscuras. Se trata de El planeta desconocido (Forbidden Planet), considerada la primera película de ciencia-ficción de gran presupuesto de la MGM, que unía lo mejor de los efectos especiales de la época con un argumento basado en la obra La tempestad, de William Shakespeare. Con la capacidad de viajar a velocidades superiores a la de la luz, la Humanidad del año 2200 se encuentra

184

Una nave terrícola, al mando del comandante John

CIENCIA-FICCIÓN

empeñada en la exploración del espacio profundo. J. Adams (Leslie Nielsen), se dirige a la distante estrella Altair-4, en busca de sobrevivientes de la misión de otra nave espacial. Cuando entran en contacto radial con la superficie del único planeta habitable, los hombres de la nave se anotician que hay un solo sobreviviente, el Dr. Edward Morbius (Walter Pidgeon), quien les indica que no necesita ayuda y los advierte sobre los peligros que podrían enfrentar si deciden

En la página anterior, afiche promocional y dos diferentes fotogramas de El planeta desconocido. En esta página, a la derecha, afiche promocional y una impactante escena de El hombre indestructible, con Lon Chaney, Jr.

interferir con sus investigaciones. Finalmente, Adams decide aterrizar, descubriendo un planeta con un extraño cielo verde y atmósfera adecuada para la vida humana. Inmediatamente, un robot llamado Robby conduce a tres de los oficiales de la nave a casa del doctor, quien los invita a almorzar. El robot ha sido creado por el científico para hacerse cargo de todos los quehaceres, e incluye directivas de programación que le impiden dañar a los seres humanos. Morbius les explica que el resto de los tripulantes han sido barridos del planeta, que sólo él y su esposa han sobrevivido por su amor al planeta. Aunque su esposa ha fallecido pocos meses atrás, sobrevive su hija, Altaira (Anne Francis), quien jamás ha visto a otros seres humanos excepto a sus progenitores. Adams le informa al científico que permanecerán diez días en el planeta, en espera de órdenes de la Tierra, a lo que el científico replica que existe la posibilidad de que sean atacados por la misteriosa fuerza del lugar. Luego de algunas situaciones divertidas, durante la noche una fuerza invisible ingresa en la nave y destruye valioso equipo mientras la tripulación duerme. Al día siguiente, mientras esperan por Morbius, Adams queda subyugado por Altaira, besándola, pero es atacado por el tigre mascota de la chica, al que debe actitud del animal. Más tarde, Adams y un miembro de su equipo siguen a Morbius a una red de galerías subterráneas que son los restos de una avanzada civilización conocida como los Krels. Una de las máquinas de estos seres le ha permitido a Morbius incrementar su inteligencia. Mientras tanto, la nave sufre otro ataque sorpresa y un hombre resulta muerto, pese a las defensas montadas

CIENCIA-FICCIÓN

desintegrar. Ninguno de los dos se explica la extraña

185

alrededor. Adams le informa al doctor que los Planetas Unidos se harán cargo de allí en más de su investigación, en el momento en que se entera del ataque y parte rumbo a la nave. El primer sospechoso es Robby, pero tiene una sólida coartada, y a continuación, el comandante comienza a sospechar de Morbius. Esa noche, los hombres detectan a la criatura y la atacan con avanzadas armas, que les permiten visualizarla pero no impedir que mate a varios hombres antes de ceder. A partir de ese momento, el secreto de los Krel comenzará a desvelarse, como así también la fuente de los misteriosos ataques… Nuestro periplo por los estrenos de 1956 continúa con El hombre indestructible (The Indestructible Man), un producto adocenado de la típica mezcla de terror y ciencia-ficción de los ’50. En el devenir de su historia, Lon Chaney, Jr. interpreta a un asesino que es vuelto a la vida, utilizando la electricidad, por el profesor Bradshaw (Robert Shayne). El criminal resucitado inicia una recorrida de muerte, ultimando a varios de sus antiguos asociados que lo han traicionado y, más tarde, volviéndose incluso en contra de su propio creador. Inmune a las balas, el monstruo ha quedado mudo en el proceso de reanimación y se refugia en el sistema

186

favoritas para los proyectos de clase B–, donde final-

CIENCIA-FICCIÓN

de desagüe de Los Angeles –una de las locaciones mente será rodeado y acabado por las autoridades. La película es una remake no oficial de Los muertos que caminan (The Walking Dead), cinta estrenada en 1936 y dirigida por Michael Curtiz. El aporte definitivo de la paranoia cinematográfica de los ’50 será La invasión de los usurpadores de cuerpos (Invasion of the Body Snatchers, 1956), un clásico de la ciencia-ficción y el terror psicológico dirigido por

En esta página y en la anterior, afiche promocional y varias imágenes de La invasión de los usurpadores de cuerpos, una de las películas cumbre de la cienciaficción paranoica de los años ‘50 y paradigma de la historia del género.

Don Siegel, que puede también disfrutarse como una aventura de suspenso perfectamente estructurada. Originalmente basada en la novela The Body Snatchers, de Jack Finney, publicada en tres partes en la Colliers Magazine a fines de 1954 y luego extendida a su versión definitiva en 1955, la película presenta a Miles Bennel (Kevin McCarthy), el joven doctor de una pequeña comunidad californiana llamada Santa Mira. El médico recibe el anuncio de algunos de sus pacientes respecto de que sus seres amados no se comportan como es habitual y que, de hecho, ya no parecen ser los mismos. Su apariencia es idéntica pero son seres fríos, emocionalmente distantes y por momentos se asemejan a perfectos desconocidos. Bennel decide investigar, pese a lo absurdo de los informes, y finalmente descubre una horrible verdad: Santa Mira está siendo invadida por seres provenientes del espacio, que reemplazan, uno por uno y con réplicas perfectas, a todos los habitantes del pueblo. La técnica del reemplazo es sencilla: simplemente se deposita una extraña vaina junto al ser humano que se desea reemplazar mientras éste duerme, y a la mañana siguiente, ya no hay rastros del cuerpo del hombre o la mujer elegidos, que han sido reemplazados por una especie de caricatura sin sentimientos que, como Bennel y unos pocos compañeros se ven impotentes para detener la invasión, incapaces de transmitir esta verdad a las autoridades, sobre todo cuando, aparentemente, en Santa Mira hay ya más alienígenas que terrestres y sus alegatos bien pueden ser catalogados de paranoicos. La invasión de los usurpadores de cuerpos va construyendo la tensión de manera lenta pero constante, despertando un terror desesperado

CIENCIA-FICCIÓN

la vida vegetal, sólo pretende propagarse.

187

en el espectador que debe enfrentar, al igual que los protagonistas, no a una horripilante criatura con instintos asesinos sino a una auténtica plaga que se propaga silenciosamente y ataca donde menos se la espera, instalando una desconfianza enceguecida que no permite saber a ciencia cierta quién es o no humano. La conclusión desesperada y amarga que Don Siegel dio a su película fue suavizada por el estudio, Allied Artists, que agregó un par de secuencias en las que mostraban que la ayuda para los habitantes de Santa Mira –y para los terrestres en general– ya estaba en camino. Además, el estudio obligó a Siegel a incorporar algunos diálogos humorísticos –escritos, aunque sin que le fueran acreditados, por Sam Peckinpah–, para cortar de alguna manera la opresiva tensión de la trama. Algo que, en definitiva, no resulta demasiado efectivo para el ambiente de amarga derrota que transpira toda la película. Aunque habitualmente se ha interpretado a La invasión de los usurpadores de cuerpos como una metáfora de la infiltración comunista en la sociedad norteamericana de los ’50, las características de su director permiten una segunda lectura, a partir de

188

breza espiritual de las poblaciones suburbanas de los

CIENCIA-FICCIÓN

la cual en realidad se describe la decadencia y la poEstados Unidos de esa época. El propio director estaba convencido de que los estudios de Hollywood estaban poseídos por seres similares a las vainas vegetales de su historia, y eso está claramente reflejado en su «oscura» versión original que, desde 1979, puede verse sin el prólogo y el epílogo que el estudio le obligó a rodar en su momento. Otro film de 1956 que deseamos rescatar es It Conque-

En la página anterior, un afiche promocional y dos diferentes momentos de It Conquered the World, otra interesante propuesta de Roger Corman. A la derecha, un fotograma de la interesante El monstruo de la montaña hueca.

de la montaña hueca o The Beast of the Hollow Moun-

En la trama, el doctor Tom Anderson (Lee Van Cleef)

tain, una co-producción norteamericana y mexicana

es un idealista que conduce a un habitante de Venus

en la que un vaquero de los Estados Unidos llamado

hacia la Tierra, con la secreta esperanza de que el régi-

Jimmy Ryan (Guy Madison), que vive en México, es-

men venusino hará de nuestro planeta un lugar mejor

cucha de la existencia de un monstruoso lagarto que

para vivir. De mala manera, el científico descubre que

habita en la zona montañosa cercana. Obviamente, el

las intenciones del invasor son muy distintas y que su

héroe decide investigar las habladurías y encuentra a

propósito es transformar a los seres humanos en una

una bestia prehistórica que es todo un desafío. Lo más

especie de esclavos zombis –a través del ataque de

interesante del film son sus efectos especiales, creados

una especie de murciélagos– que sigan sus designios.

por su co-director y co-productor Edward Nassour, que

Entre los amigos de Anderson se encuentra Paul Nelson

le permiten una muestra detallada de los movimientos

(Peter Graves), quien logra convencer a su colega de las

del lagarto gigante cuando está en escena. Aunque

malas intenciones de los venusinos y de la necedad de

Nassour declaró que se trataba de un sistema elec-

ayudarlos. La esposa de Anderson, Claire (Beverly Gar-

trónico de su invención, posteriormente se descubrió

land), toma la decisión de ir armada a la cueva donde

que utilizaba una técnica denominada «reemplazo de

se esconde el director de la invasión extraterrestre, y

animación», en la que se utilizan diferentes modelos

los dos hombres van en su ayuda. Pese al argumento

de una misma criatura, lo que permite el cambio de los

menor, la película está muy bien actuada y dirigida,

detalles de la misma de cuadro en cuadro, cuando se

lo que le ha permitido mantenerse como un producto

realiza la filmación. De esta manera, el monstruo del

asequible a los espectadores contemporáneos.

film es mucho más convincente que la historia en la

Ese mismo año se presenta también Bajo el signo de

que se encuentra inmerso, algo no demasiado extraño

Ishtar (The Mole People), en la que un antropólogo

en los films de esta época.

llamado Roger Bentley (John Agar) lidera una expedi-

Este mismo año se produce el estreno de la primera

ción al Medio Oriente para buscar a una tribu perdida

versión de 1984, el clásico escrito por George Orwell.

de sumerios, que vivían bajo tierra y eran servidos por

En 1954, Nigel Kneale, el creador de las aventuras de

unos esclavos, que son los que dan el título original al

Quatermass, adaptó la novela original para una pelí-

film. Obviamente, los exploradores logran su cometi-

cula de la BBC, en la que Peter Cushing interpretaba

do, pero la tribu perdida tiene una serie de desagra-

al protagonista Winston Smith. El telefilm causó furor

dables costumbres y, en algunos casos, le es imposible

entre los televidentes, sobre todo a partir de su serio

exponerse a la luz del sol. El grupo es capturado, pasa

abordaje del material literario y su adecuada adapta-

algunas dificultades y finalmente logra escapar, lide-

ción al medio catódico. Ya en 1956, Michael Anderson

rando, de paso, una rebelión de esclavos, a quienes

será el director elegido para llevar la historia de Orwell

ayudan a sacudirse el yugo milenario.

a la pantalla grande, y aunque su propuesta es mucho

Otro producto de 1956 que nos interesa es El monstruo

más cautelosa e incluso inferior que la británica, logra

CIENCIA-FICCIÓN

red the World, creación del polifacético Roger Corman.

189

En esta página, afiche promocional y una imagen de 1984, en su versión light de 1956. En la página siguiente, dos diferentes escenas de Not of This Earth, junto al afiche promocional y una escena de Plan 9 del espacio sideral.

su cometido a la hora de impresionar al público de la época. El proyecto presentó, además, dos finales alternativos, que se utilizaron en los estrenos británico y norteamericano de la película, respectivamente. En el primero, Smith (Edmond O’Brien) desafía al Hermano Mayor y muere en el intento, en tanto que la segunda conclusión muestra al personaje y a su amante, Julia (Jan Sterling), siendo sometidos a un lavado de cerebro para posteriormente partir, cada uno por su lado y por su libre voluntad. Otra característica de la obra de Orwell que se pierde es la del surgimiento de un estado totalmente autoritario –de hecho, la novela es una clara sátira del estalinismo–, que es reemplazada por el desarrollo de un romance prohibido y la existencia de un cierto espíritu de rebelión básico en los seres humanos. En el detalle de la trama, Smith es un empleado del Ministerio de la Verdad que se rehúsa a aceptar el estado totalitario en el que vive, donde todos los ciudadanos son observados, día y noche. Así, Smith decide crear su propio estado con Julia, sólo para ser traicionado por el general O’Connor (Michael Redgrave), otro miembro del partido gobernante. Roger Corman presenta también en 1956 la que es su

190

Earth, un elegante thriller que anticipa la mayoría de

CIENCIA-FICCIÓN

mejor película del género en los años ‘50, Not of This los temas que el director exploraría en la siguiente década, en sus famosas adaptaciones del trabajo de Edgar Allan Poe, en compañía de Vincent Price. Paul Johnson (Paul Birch) es un pulcro extraterrestre que se dedica a recolectar sangre humana –dejando como rastro un tendal de cuerpos completamente «secos»– para embarcarla rumbo a su hogar, el planeta Davana. Sin embargo, se trata de un villano muy particular, frágil

al punto de morir en un accidente de auto, pese a poseer poderes más allá de la comprensión humana. De hecho, el alienígena es claramente el representante de un planeta agonizante, que busca desesperadamente una manera de sobrevivir a expensas de los terrestres. La principal característica de la propuesta pasa entonces por su diferenciación respecto de otros productos de bajo presupuesto de la época, evitando cuidadosamente las asociaciones político-sociales más evidentes, y presentando un tipo de pesadilla en la que no todo es blanco o negro, sino que se exhiben muchos matices de gris. Este año ve la luz también Plan 9 del espacio sideral (Plan 9 from Outer Space), la más famosa de las películas de Ed Wood por ser considerada la peor de la historia del cine. Su esquema principal presenta una exótica invasión extraterrestre en la que los visitantes espaciales reviven muertos para utilizarlos como ejército zombi conquistador, en una clara alusión al temor de la época respecto de que la anunciada invasión comunista se realizaría con ayuda de elementos de la propia sociedad. El problema de la cinta es que, si bien ese miedo existía y era un campo fértil para aprovechar con propuestas cinematográficas, carece por completo de un guión, de personajes con los que hace agua por todos los costados posibles. Queda claro entonces que, para poder traducir a la pantalla un elemento que existe en la realidad y que está presente en la vida cotidiana, incluso en una propuesta de tipo fantástica, es necesario contar con una historia, con un relato que le dé coherencia y estructura, lo que no era precisamente el fuerte de Wood. Otro film que nos interesa destacar en este recorrido

CIENCIA-FICCIÓN

identificarse y de dirección, con lo que el artefacto

191

En esta página, afiche promocional y una escena de Satellite in the Sky, producción británica con buenos efectos especiales. En la página siguiente, una imagen de El cerebro atómico, junto a un fotograma y un afiche de la singular Los colmillos del lobo.

de los estrenos de 1956 es Satellite in the Sky, una producción británica cuya historia presenta a un cohete que es enviado al espacio profundo, donde debe detonar una bomba experimental de tritonium. El comandante de la nave, Michael Haydon (Kieron Moore), viaja acompañado por el creador del ingenio explosivo, el profesor Merrity (Donald Wolfit), quien paulatinamente comienza a evidenciar una creciente demencia. Cuando la bomba queda atorada en el cohete, la tripulación lucha con todas sus fuerzas para lanzarla al espacio antes de que Merrity la haga detonar y les provoque la muerte a todos. Obviamente, en el final el objetivo se cumple, y el único que muere a consecuencia del artefacto es el propio creador del mismo. Lo más interesante de la cinta son sus efectos especiales relacionados con el paisaje espacial. La siguiente película que vamos a reseñar es también una producción inglesa. El cerebro atómico (Timeslip, también conocida como The Atomic Man) está basada en la novela The Isotope Man, de Charles Eric Maine. Rescatado del Támesis, pero con una bala en la espalda, un individuo llamado Jarvis (Peter Arne), muere durante unos segundos mientras es sometido a una cirugía. Un periodista norteamericano, Mike Delaney

192

respuestas son bastante enigmáticas, sino que tiene

CIENCIA-FICCIÓN

(Gene Nelson), lo entrevista y descubre no sólo que sus una enorme parecido con el doctor Stephen Rayner (también interpretado por Arne), un especialista en energía atómica que se encuentra perfectamente bien y trabajando en su laboratorio. A partir de ese momento, la premisa de la novela (la posibilidad de un hombre que vive siete segundos y medio en el futuro) se descarta por completo y entra en escena una nueva línea argumental en la que, en realidad, Rayner es un

espía, lo que concluye con el típico desenmascaramiento y castigo al culpable de tal felonía… Siguiendo con nuestro recorrido, en 1956 se estrena la singular Los colmillos del lobo (The Werewolf), un típico proyecto del productor Sam Katzman que, sin embargo, tiene un gran interés como ejemplo del desarrollo de la ciencia-ficción en los ’50 y su relación con el terror cinematográfico, que en la primera parte de la década permanecería como un género en hibernación, para luego ir paulatinamente reemplazando a la ciencia-ficción en las preferencias de los espectadores, un hecho que se ratifica poco tiempo después a partir del inusitado éxito que cosecharán las remakes de la Hammer basadas en los exitosos films de terror de Universal estrenados en los años ‘30. Veremos en próximos capítulos cómo incluso Roger Corman, un prolífico director y productor de films de ciencia-ficción en los ’50, cambia sus intereses a partir del fenomenal éxito conseguido por La caída de la casa Usher (The House of Usher) en 1960. La cinta que nos ocupa intenta combinar ambos géneros y estilos en un único proyecto. Así, los científicos que rescatan al futuro hombre-lobo de entre los restos de su automóvil accidentado, le inyectan un suero que están desarrollando para curar los estragos de la es transformar al protagonista en un feroz licántropo, que se dedica a las tareas habituales de este tipo de criaturas. Nada original, excepto por el mestizaje de géneros, que se ve reforzado por el estilo de dirección y la escenografía elegidos por Fred F. Sears, que son de indubitable pertenencia al gótico. Otro film de 1956 a reseñar es Mundo sin fin (World Without End), una producción de Allied Artists que en

CIENCIA-FICCIÓN

radiación, aunque en definitiva lo único que logran

193

esencia es una reescritura de la novela La máquina del tiempo, de H. G. Wells, que será llevada oficialmente a la pantalla grande en 1960, con Rod Taylor como protagonista. En la trama, cuatro astronautas liderados por John Borden (Hugh Marlowe) aterrizan en la Tierra en el año 2508, y descubren horrorizados que el planeta ha sido devastado por una conflagración nuclear. Mutantes y arañas gigantescas dominan la superficie, en tanto que los diezmados sobrevivientes humanos habitan en las profundidades, en una red de túneles interconectados donde cultivan enormes jardines hidropónicos que les proveen de alimento y oxígeno. Los humanos del futuro no parecen demasiado brillantes, visten túnicas y togas de colores claros y llevan una existencia pacífica, ya que las armas están prohibidas y eligen a su gobernante de manera democrática. Sin embargo, los hombres del futuro son impotentes y los mutantes de la superficie se han convertido en un peligro cada vez más amenazante, hasta que los astronautas inspiran la resistencia de estos patéticos futurianos y juntos comienzan a combatir a los mutantes y las arañas munidos con sendos bazukas de fabricación casera, lo que les permite recuperar la superficie del planeta e iniciar una nueva

194

El título que cierra nuestro periplo de 1956 es un

CIENCIA-FICCIÓN

vida a la luz del sol. producto de la Hammer Films titulado La incógnita X (X The Unknown), un representante sobresaliente del tipo de ciencia-ficción realista que caracteriza al género en Gran Bretaña en esta época. Con escasos elementos góticos, la historia gira en torno a un descubrimiento que realizan unos soldados en medio de un ejercicio de entrenamiento de rutina. Se trata de una criatura primordial, aparentemente hecha de

En la página anterior, un afiche promocional y dos fotogramas de la interesante Mundo sin fin. En esta página, a la derecha, una escena de La incógnita X, ejemplo de la ciencia-ficción realista, de origen británico, propia de la década de los ‘50.

barro y cuya antigüedad se remonta a la época en

capitalizar el planteo de la muy superior El increíble

que la corteza terrestre se enfrió, permitiendo de esa

hombre menguante, de Jack Arnold (de la que habla-

manera el surgimiento de un tipo distinto de vida en

mos más adelante).

la superficie. La criatura, además, se ha adaptado para

El teniente coronel Glenn Manning (Glenn Langan)

alimentarse de radiación, y los cuerpos humanos le son

queda atrapado en medio de una prueba de explosión

particularmente caros.

atómica y, como consecuencia de su exposición a la

El Dr. Adam Royston (Dean Jagger) es el científico

radiación, se convierte en un gigante de casi 20 metros

norteamericano que logra convencer a las autoridades

de altura. Después de someterse a un confinamiento

de que está ocurriendo algo grave, y encabeza la expe-

voluntario, el gigante enloquece ante su inédita situa-

dición que desciende a la abisal guarida de la criatura

ción, escapa y se dedica a sembrar la destrucción de

–que hace eventuales incursiones en la superficie para

personas y construcciones diversas. El Dr. Paul Linstrom

conseguir su alimento–, descubriendo en el proceso la

(William Hudson) lo persigue, pertrechado con una

manera de acabar con ella. Existe en el film un inte-

enorme hipodérmica, y en el clímax de la propuesta,

resante planteo secundario, que sería explorado con

que recuerda sin ambages al de King Kong (1933), el

mayor dedicación en la ya citada Quatermass II, que

gigante perece después de caer de las alturas de un

se enfoca en el enfrentamiento entre los estamentos

edificio, no sin antes dejar a salvo a su prometida, Carol

científico y militar, y también en el verdadero sentido

Forrest (Cathy Downs). Un año después, se estrenaría una secuela intitulada War of the Colossal Beast.

contraste interesante con la ciencia-ficción norteame-

Otro film de 1957 a distinguir es una producción fran-

ricana del período es la presentación del científico

cesa llamada Un amour de poche, que no es otra cosa

protagonista, que expone en su discurso profundos

que una versión, en tono de comedia, de la ya citada El

valores humanistas, en contraposición con la figura

increíble hombre menguante. En la trama, el profesor

clásica del genio obsesionado con el descubrimiento

Jerome (Jean Marais) es un biólogo cuya fórmula N734

de las verdades últimas del universo. Jimmy Sangster

es capaz de encoger la materia. Su celosa prometida,

fue el encargado del guión, y posteriormente será

Edith (Geneviève Page), sospecha que el científico

el encargado de la radical reinterpretación del mito

mantiene un amorío con su asistente de laboratorio,

de Frankenstein realizada por Terence Fisher para la

Monette (Agnès Laurent), lo cual es cierto, por lo que

Hammer en sus cintas La maldición de Frankenstein

Monette decide ingerir la fórmula y queda transfor-

(The Curse of Frankenstein, 1957) y La revancha de

mada en una pequeña mujercita de 16 centímetros de

Frankenstein (The Revenge of Frankenstein, 1958).

alto, que puede viajar cómodamente en el bolsillo de

Ya ubicados temporalmente en 1957, nuestro recorrido

su amante. Sin embargo, Edith descubre la estratage-

se inaugura con El gigante invencible (The Amazing

ma, secuestra a la pequeña Monette y se embarca en

Colossal Man), una película que es considerada como

un crucero hacia los Estados Unidos, perseguida por

la mejor de su director, Bert I. Gordon, y que trata de

el profesor Jerome en una lancha. Accidentalmente,

CIENCIA-FICCIÓN

que debe tener la ciencia para la humanidad. Otro

195

Edith deja caer a Monette en el mar, y el contacto con el agua salada restaura a la chica a su tamaño normal, siendo inmediatamente rescatada del océano por el atribulado profesor. Siguiendo con los films del género estrenados este año, nuestra siguiente parada es El principio del fin (The Beginning of the End), otra cinta firmada por Bert I. Gordon que utiliza un argumento similar de otro film de Arnold, en este caso, El mundo en peligro. La historia sigue la aparición de un grupo de grillos gigantescos, creados por error en una granja experimental de Illinois, y cuya principal característica es su afición por la carne, humana de preferencia. Una periodista llamada Audrey Aimes (Peggie Castle) y un científico, el doctor Ed Wainwright (Peter Graves), son los héroes de turno de la película, que deciden enfrentar la amenaza cuando el enjambre de hambrientos grillos decide atacar Chicago. Finalmente, el científico propone emitir el llamado de apareamiento de los insectos desde uno de los grandes lagos cercanos a la ciudad, y con ese sistema logra que los devoradores gigantes se ahoguen sin más trámite. La película fue una de las últimas en ser estrenadas como parte del estudio Republic Pictures, famoso por sus seriales, pero

196

de AB-PT, una compañía de corta vida formada por la

CIENCIA-FICCIÓN

en realidad fue la primera en realizarse con producción cadena de televisión ABC-TV y la cadena de salas de exhibición cinematográfica de Paramount. Siempre en 1957, el Viejo Continente ofrece una de las variantes más innovadoras en la combinación de terror y ciencia-ficción cinematográficos: La maldición de Frankenstein. Haciendo un poco de historia, en noviembre de 1934 William Hinds, comediante y hombre de negocios, registra su propio sello cinematográfico:

En la página anterior, afiche promocional y dos diferentes imágenes de El gigante invencible. En esta página, a la derecha, afiche promocional y una escena de Un amour de poche, versión paródica de El increíble hombre menguante.

Hammer Productions Ltd., una compañía cuyo nombre derivaba del nombre artístico de Hinds, Will Hammer. Enrique Carreras, que había nacido en España, se muda a Inglaterra y abre dos salas que pasaban dos películas diferentes y tenían capacidad para 2.000 personas. El lugar se llamaba Blue Halls y muy pronto se convirtió en una cadena de exhibición, y a finales los años ‘20, Carreras forma Exclusive Films, empresa dedicada a la distribución de películas en la isla. Carreras y Hinds se conocen y forman una compañía en 1932, asegurándose de esta manera los derechos de distribución de varias películas de la British Lion. También deciden fundar otra empresa dedicada a producir películas para Exclusive, y ese estudio se llama Hammer Films. Su primer trabajo fue The Public Life of Henry IX, seguido por The Mystery of the Marie Celeste, ambas estrenados en 1935, y en las siguientes dos décadas, la Hammer existió para crear una miríada de films clase B. La mayoría eran películas de crímenes y dramas de muy baja calidad, pero que proveyeron una confortable existencia a Carreras y a Hinds. El estudio se convirtió en una empresa familiar cuando los hijos de Carreras (James) y Hinds (Anthony), se unieron a la compañía. No duraron mucho en sus funciones, ya que comenzó la guerra y ambos fueron llamados James Carreras, Michael, se une también al estudio. En un principio, los estudios Hammer se encontraban desmembrados en varias casas de campo, y mientras filmaban The Lady Craves Excitement en 1950, en Oakley Court, el estudio se interesó en adquirir la casa lindante, Down Place, como lugar permanente para las instalaciones. Los dueños de la casa en cuestión eran George Davis y su esposa, que estuvieron de acuerdo

CIENCIA-FICCIÓN

para combatir; pero regresaron en 1946, y el hijo de

197

en vender su residencia siempre y cuando pudieran quedarse en ella. Aunque no estuvieron involucrados en ningún film, George sirvió como «clapper boy» en varias películas. En 1950, Exclusive tuvo un golpe de suerte al establecer la distribución de derechos con importantes compañías norteamericanas. Una adquisición clave fue Robert Lippert Productions ya que esto le permitió a la Hammer obtener los derechos para usar estrellas norteamericanas, decadentes pero reconocidas, en producciones británicas, haciendo sus películas más accesibles al mercado norteamericano. Un alimento básico de la Hammer fueron los seriales de la BBC, y el estudio se aseguró los derechos de varias de estas producciones y las convirtió en películas. Después de la compra de la serie de Dick Barton de la emisora de televisión estatal británica, encontraron otra serie llamada The Quatermass Experiment y, con alguna negociación, el producto se convirtió en propiedad del estudio y se comenzó el rodaje de la cinta del mismo nombre. El film se convirtió en un éxito, lo que provocó que el estudio buscara conseguir otras «propiedades» de este tipo que pudieran ser explotadas, ya que el tema del «monstruo» había funcionado muy bien en la saga de Quatermass. Se decidieron por

198

dominio público, y también teniendo en mente que

CIENCIA-FICCIÓN

el Frankenstein de Mary Shelley, un libro que era de el film homónimo de 1931, realizado por la Universal, era visto por muchos como un clásico. Tan pronto como la Universal se enteró de la remake de la Hammer, los notificaron que, si copiaban cualquier parte de la película que no estuviera en la novela de Mary Shelley, incluyendo el maquillaje, los iban a demandar. Por supuesto que se hizo un nuevo guión y se diseñó un nuevo maquillaje y aunque el resultado

En la página anterior, afiche promocional y dos fotogramas de El principio del fin. En la página anterior, tres diferentes imágenes de La maldición de Frankenstein, la película de la Hammer que, de manera sincrética, combina terror y ciencia-ficción.

no era muy fiel a la historia original, la versión Hammer presentó más elementos impactantes que la original. Esto también se aplica al duro maquillaje que llevaba la expresiva cara de Christopher Lee. Así y todo, funcionó, y la audiencia se sorprendió por esta nueva versión de una historia tan familiar, aunque con los críticos sucedió todo lo contrario y, de hecho, la mayoría se pronunció en contra del film, calificándolo como «horrendo y desagradable». Esto sólo sirvió para avivar el fuego. Más allá de las imágenes en sí, dos actores comenzaron a brillar: Peter Cushing, que personificó al frío, desapasionado y amoral barón Frankenstein, y lo convirtió en un antihéroe; y Christopher Lee, que hizo su propia creación del monstruo, cavándole una fosa al de Boris Karloff. Para ese momento, la empresa familiar se expandía a los estudios Bray, que rápidamente se convirtieron en cualquier cosa que fuera necesaria, desde poblados europeos, hasta casas inglesas modernas o aldeas españolas. Fue en esos momentos en que se tomó la decisión de utilizar al mismo elenco y trabajadores, y hacer los films consecutivamente, para abaratar costos, un estilo de filmación que se puede percibir en Drácula, príncipe de las tinieblas (Dracula, Prince of Darkness) y Rasputín, el monje maldito (Rasputin, muchos miembros del mismo elenco y técnicos, y El reptil (The Reptile) y La maldición de los zombies (Plague of the Zombies) siguieron la misma estrategia de producción. Para que la audiencia no se diera cuenta de las similitudes, las películas eran exhibidas en funciones dobles intercambiadas. Hacia el año 1950, cuando la compañía se transformó en co-productora con el norteamericano Robert

CIENCIA-FICCIÓN

the Mad Monk). Ambos trabajos fueron rodados con

199

Lippert, sus presupuestos se incrementaron considerablemente, permitiendo nuevas audacias. El primer film de esta unión fue Cebo humano (The Last Page, 1952), y contaba con la dirección de un futuro cultor del género del terror: Terence Fisher. Luego llega el turno de El triángulo de la muerte (Four-Sided Triangle, 1953), que fue la primera aventura orientada hacia la ciencia-ficción de la Hammer, en la que se establece la idea de duplicar a una mujer mediante una máquina creada para tal fin. Se trataba de la adaptación de un popular cuento de ciencia-ficción escrito por William F. Temple y publicado en el número de noviembre de 1939 de Amazing Stories. A éste le siguieron un sinfín de films modestos, dedicados a la ciencia-ficción, hasta el año 1955, cuando realizan su primera gran película: The Quatermass Xperiment, y mientras avanzaba la producción de Quatermass II, la Hammer comenzó a buscar un nuevo socio en los Estados Unidos que les permitiera un presupuesto adecuado para un nuevo producto de terror y que además se hiciera cargo de la distribución americana del mismo. Finalmente, la compañía se contactó con Associated Artists Pictures (AAP), cuyo presidente era Eliot Hyman, quien tenía en sus manos el guión

200

por dos jóvenes realizadores norteamericanos, Max

CIENCIA-FICCIÓN

de una nueva adaptación de Frankenstein, escrita J. Rosenberg y Milton Subotsky. Como AAP no estaba preparada para producir la película que pretendían los guionistas, Hyman envió el guión a su contacto en la Hammer. Anthony Hinds dudaba respecto de la efectividad del proyecto, sobre todo teniendo en mente el agotamiento producido por la Universal con sus clásicos alrededor de la figura del monstruo, además de los problemas de derechos concomitantes. Pese a

En la página anterior, un afiche promocional y dos nuevas escenas de La maldición de Frankenstein, con Peter Cushing y Christopher Lee. A la derecha, un afiche de lobby de La revancha de Frankenstein, secuela del film anterior.

todo, se decidió seguir adelante con el proyecto, que

Frankenstein), nuevamente con Peter Cushing y Teren-

fue manejado por Tony Hinds, quien tenía la idea de

ce Fisher en el equipo creativo, pero sin la presencia de

realizar una producción barata y en blanco y negro,

Christopher Lee. En la película, el barón Frankenstein

con un esquema de rodaje de sólo tres semanas. Para

evade la guillotina con la ayuda de un enano (Oscar

evitar las similitudes del original con los trabajos de

Quitak) y se establece como médico en Alemania, con

la Universal, se le encomendó a Jimmy Sangster una

el nombre de Dr. Stein. Otro médico, llamado Hans Kle-

reescritura, con un resultado tan impresionante que

ve (Francis Matthews), descubre el engaño y comienza

la Hammer decidió realizar una película de mayor

a chantajear al barón, obligándolo a tomarlo como su

costo y en colores.

ayudante y juntos continuar la obra del científico, en

Pese a que la censura británica cuestionó la crudeza

este caso, destinada a proveer al enano con un nuevo

de algunas imágenes incluidas en el guión, la Hammer

cuerpo: el de Karl (Michael Gwynn).

siguió adelante y eligió a Terence Fisher para ponerse

La Hammer inaugura, a través de sus primeras pro-

tras las cámaras, además de asegurarse a Peter Cushing

ducciones dedicadas a Frankenstein, una nueva forma

y a Christopher Lee para los papeles principales. Con-

de conjugar el terror con la ciencia-ficción, lo que le

tando con tan sólo un presupuesto de 65.000 libras,

permite al primer género, relegado en las preferencias

y los actores y el equipo apenas habiendo terminado

del público durante los ’50, volver a transformarse en

su película anterior, se comenzó a rodar La maldición

central en la década siguiente, clausurando de alguna

de Frankenstein (The Curse of Frankenstein, 1957). El

manera la etapa más prolífica de la historia del cine

uso del color permitió que el proyecto alcanzara un

de ciencia-ficción. A continuación nos interesa detenernos en otra película de Bert I. Gordon, también presentada en 1957.

bien roja en la pantalla. La película se transformó en

Nos referimos a Cautivos del monstruo (The Cyclops).

un enorme éxito en Gran Bretaña, y luego también en

Susan Winter (Gloria Talbott), con la ayuda de Russ

Estados Unidos, donde inspiraría a realizadores locales

Bradford (James Craig), montan una expedición hacia

del calibre de Roger Corman.

las montañas de México con la intención de rescatar

En la trama, el barón Frankenstein ya no es meramente

al prometido de la chica, Bruce Barton (Duncan Par-

un científico insano, típico de las primeras produccio-

kin). Después de algunas penurias, los exploradores

nes que conjugaban el terror con la ciencia-ficción,

llegan a un valle que, afectado por la radiación, se

sino más bien una cabal representación de lo suprahu-

ha convertido en el hogar de criaturas gigantescas y

mano, un personaje sin sentimientos ni apegos, capaz

de un humano de casi 10 metros de altura, con parte

de cualquier cosa por lograr su objetivo pero sin los

del rostro deformado y un único y terrible ojo, que

excesos típicos de este tipo de caracteres. El éxito llevó

revela pésimas intenciones para con los visitantes.

a la Hammer a producir, un año más tarde, una secuela

La expedición finalmente logra escapar del valle, y

titulada La revancha de Frankenstein (The Revenge of

Susan descubre horrorizada que el maligno cíclope

CIENCIA-FICCIÓN

grado gore que nunca antes se había visto en el cine, con permanentes muestras de una sangre que lucía

201

En esta página, afiche promocional y una imagen de Cautivos del monstruo. En la página siguiente, dos fotogramas y un afiche promocional de El monstruo alado, otro film de insectos gigantes en la impronta de El mundo en peligro.

no es otro que su prometido, responsable también de haber convertido en gigantes a un buen número de los animales del lugar. Otra propuesta de este año que sigue la tendencia de las criaturas de gran envergadura es El monstruo alado (The Deadly Mantis), que también abreva en la línea inaugurada por El mundo en peligro. Cuando una serie de extraños ataques devastan sendas bases militares en el Ártico, el coronel norteamericano Joe Parkman (Craig Stevens) prepara una expedición para descubrir el origen de los mismos. Así se encuentra con una enorme mantis, que durante eones estuvo congelada en un iceberg, y sus esfuerzos por neutralizarla sólo logran que la criatura se dirija hacia el sur, en busca de regiones más cálidas y plenas de alimento –obviamente, los seres humanos– anidando primero en Washington y siendo finalmente destruida en Manhattan, gracias al aporte de un paleontólogo. A continuación, nuestro recorrido nos lleva a La bestia electrónica (Escapement, o también The Electronic Monster), un proyecto basado en la novela del mismo nombre de Charles Eric Maine, que es además la primera película del género en sugerir la posibilidad de que una máquina creada por el hombre transforme

202

tópico que será explorado con mayor sofisticación

CIENCIA-FICCIÓN

eventualmente en monstruos a las personas comunes, en películas como Cuerpos invadidos (Videodrome, 1983). En la trama, un detective de seguros llamado Jeff Keenan (Rod Cameron) es enviado a Europa a investigar la extraña muerte de una estrella de cine. Su pesquisa lo lleva a una clínica en la que los pacientes son hipnotizados y obligados a soñar, y esos sueños son convertidos en pesadillas de alto contenido sexual y fantasías de asesinato por un científico de impronta

nazi, el doctor Paul Zakon (Peter Illing), gracias a un ingenio electrónico de su invención, que también proyecta esas obsesiones una vez más en los pacientes y los obliga a actuar en consecuencia. A continuación, en 1957 se estrena El vampiro atómico (Fiend Without a Face), una cinta de origen inglés de bajo presupuesto y en la línea de The Quatermass Xperiment, es decir, específicamente diseñada para tener éxito en los Estados Unidos. Su principal interés reside en su original abordaje del tópico expuesto en El planeta desconocido, un año antes, y la trama sigue al profesor R. E. Walgate (Kynaston Reeves), un inventor que diseña una máquina capaz de transformar los pensamientos en energía, pero que accidentalmente proyecta sus disgustos en amenazadoras entidades físicas con forma de cerebros flotantes. El mayor Cummings (Marshall Thompson) es el encargado de investigar una serie de extrañas muertes, en un desarrollo bastante previsible de la historia que, pese a todo, presenta una resolución inusualmente gráfica para los cánones de la época. Como hito siguiente de este mismo año nos interesa destacar La garra gigante (The Giant Claw), un film rodado en tan sólo dos semanas que, en la consideración de algunos críticos, es la mejor película de monstruos bestia protagonista es un estrambótico pájaro gigante, con propiedades radiactivas que le permiten mantenerse invisible para el radar –en realidad, posee un escudo antimateria que lo hace también invulnerable–. En el final de la historia, el científico que enfrenta la amenaza es capaz de idear un arma que desactiva el escudo y permite el exterminio del «pajarón», quien se hunde en el mar dejando sólo una garra expuesta

CIENCIA-FICCIÓN

inintencionalmente graciosa de toda la década. La

203

En esta página, afiche promocional y una escena de El vampiro atómico, producción británica de bajo presupuesto. En la página siguiente, diferentes imágenes y un afiche promocional de la bizarra e inintencionalmente graciosa La garra gigante.

a la vista... Con efectos especiales atroces, diseñados por el legendario productor de clase B Sam Katzman en un laboratorio mexicano, La garra gigante es una de las cúspides del ridículo que se alcanzarían a través de la sobreexplotación temática de los monstruos gigantescos en los ’50. Como ya lo hemos mencionado brevemente en párrafos anteriores, una de las películas más destacadas de 1957 fue El increíble hombre menguante (The Incredible Shrinking Man). Richard Matheson fue uno de los más prolíficos creativos en el campo de la ciencia-ficción y el horror de los años ’50, y su adaptación para el cine de su novela homónima, dirigida por Jack Arnold, es uno de los ejemplos más acabados de su talento. El film, protagonizado por Grant Williams en el rol principal, presenta a un hombre llamado Scott Carey que, mientras toma sol en el yate de su hermano, es rodeado por una misteriosa nube oscura. Poco después, Carey se da cuenta de que está adelgazando y perdiendo tamaño, hecho al que su médico de cabecera da poca importancia. El hombre pierde una pulgada con cada día que transcurre, y al tiempo se descubre que ha desarrollado una extraña dolencia provocada como

204

su «reducción» lo lleva a tener el tamaño de un niño,

CIENCIA-FICCIÓN

efecto secundario de un nuevo insecticida. Cuando Carey se convierte en una atracción internacional, pero el fenómeno parece no sólo haberlo afectado físicamente sino también psicológicamente, transformándolo en un tirano enfrentado con el mundo en general y con su esperanzada mujer en particular. Un medicamento especialmente desarrollado detiene el proceso de reducción por un tiempo y Carey –incapaz de afrontar su situación en su casa– se une a un gru-

po de enanos, donde en principio es aceptado por su apariencia. Pero poco tiempo después, su dolencia se pone en marcha una vez más y Carey se reduce de tal manera que debe volver a su hogar y vivir en una casa de muñecas especialmente acondicionada para él por su esposa, enfrentando cosas cotidianas como si fueran grandes amenazas: cuando el gato de la casa lo ataca, la mujer presume que ha sido asesinado. Sin embargo, el hombre ha alcanzado tal grado de miniaturización que hasta una simple araña de jardín se convierte en una terrible amenaza para su vida y decide vivir escondido en el sótano de la residencia. Hacia el final de la película, Carey no es más grande que un átomo y teme que su siguiente reducción efectivamente acabe con su vida. Finalmente, el hombre descubre que existe otro mundo más allá de la mínima partícula de materia descubierta por el hombre, en el cual todavía puede existir por la gracia divina… Evitando cuidadosamente la fórmula habitual de los films de la época, El increíble hombre menguante es un producto que explora el costado psicológico de la situación, además de exponer los evidentes problemas físicos de la misma, con interesantes dilemas como el que pone al protagonista en posición de ser más el hijo de su esposa que su hombre, hecho a partir interpretarse más como un alivio para su desgraciada situación, que como una forma de avalar el adulterio, algo que estaba estrictamente prohibido en los códigos del Hollywood de la época. La acertada dirección de Jack Arnold, sumada a una serie de efectos especiales verdaderamente asombrosos para el momento, hacen que la situación y la angustia que la misma genera en Carey, sean totalmente realistas y se hagan carne en

CIENCIA-FICCIÓN

del cual su romance con una hermosa enana puede

205

los espectadores. El agudo guión de Matheson permite también, bajo la apariencia de una película en la que un hombre se va convirtiendo paulatinamente en una monstruosidad o, por lo menos, en una rareza, abordar los aspectos interiores y hasta teológicos imbricados en este fantástico argumento, logrando un resultado brillante que permite considerar a El increíble hombre menguante como una de las películas más inteligentes y acabadas del ciclo de las mutaciones radioactivas, capaz incluso de superar el muchas veces infranqueable muro del paso del tiempo. Para continuar con nuestro periplo por los estrenos del género ocurridos en 1957, debemos citar a Invasion of the Saucermen, un film cuya intención cómica es clara desde el vamos, lo que señala que el ciclo de las invasiones extraterrestres en la ciencia-ficción cinematográfica de los ’50 estaba llegando a su fin. En la trama, una pareja de adolescentes, ocupada en los flirteos propios de la edad en el bosque, accidentalmente arrolla con el auto a una criatura. El monstruo pierde una mano, pero ésta vuelve a la vida, le crece un extraño ojo y comienza a perseguir a los protagonistas. Mientras tanto, el borracho local intenta guardar el cuerpo de la criatura atropellada en una heladera, pero es atacado por otros alienígenas, que

CIENCIA-FICCIÓN

206

lo asesinan inyectándole una sobredosis de alcohol a través de agujas que salen de sus dedos… La principal intención del film es la de satirizar tanto el tema de las relaciones entre padres e hijos en los ’50, como el tópico de la invasión de otro planeta, aunque en ambos casos esa intención se queda a mitad de camino. En el final, los adolescentes protagonistas utilizan sus faros sobre los invasores y éstos se evaporan.

En esta página y en la anterior, tres fotogramas significativos y un afiche promocional de la espectacular El increíble hombre menguante, una de las cumbres cinematográficas de Jack Arnold, además de una de las mejores adaptaciones de la obra de Richard Matheson.

Otro producto de este año que nos interesa relevar

uno de ellos, el doctor Hubbell Eliot (John Emery) es

es El niño invisible (The Invisible Boy). Tras el éxito

alcanzado por una bola de electricidad, que toma el

obtenido por El planeta desconocido, el productor Ni-

control de su cuerpo. Una de las secuencias particu-

cholas Nayfack renunció a MGM y estableció su propia

larmente interesantes de la propuesta es cuando los

compañía, Pan Productions, convenciendo al guionista

militares intentan atacar al robot con una bomba

de aquel film, Cyril Hume, a realizar un libreto a partir

de hidrógeno, y la criatura simplemente absorbe la

del cuento «The Invisible Boy», de Edmund Cooper,

enorme cantidad de energía, sin sufrir daños y hacién-

que además incluyera al robot Robby en las acciones.

dose todavía más grande. Finalmente, el doctor Leslie

El resultado fue una película que no es para nada una

Gaskell (Jeff Morrow), colega de Eliot, descubre cómo producir un cortocircuito en el aparato alienígena, con lo que Kronos succiona su propia energía y finalmente

panorama de las películas del género en la época, ya

desaparece. Los efectos especiales son muy buenos y

que funciona desde el punto de vista de un niño de

la fotografía muy lograda, lo que en conjunto le da

diez años que se hace amigo del singular robot. Tim-

la apariencia de ser un film mucho más caro que los

mie Merrinoe (Richard Eyer) es el hijo de un experto

meros 160.000 dólares que costó.

en computadoras, el doctor Tom Merrinoe (Philip

Siguiendo el recorrido es el turno de detenernos en

Abbott). El chico se transforma en un genio gracias

Monstruos de piedra (The Monolith Monsters), una

a una súper computadora creada por su padre, que

cinta algo subestimada y basada en una historia de

reconstruye a Robby para dominarlo y utilizarlo como

Jack Arnold y Robert M. Fresco, que utiliza como

instrumento para conquistar el mundo. El guión pone

locación principal uno de los escenarios favoritos del

en paralelo las relaciones entre Timmie y Robby con

gran director de la ciencia-ficción fílmica de los ’50: un

sus respectivos progenitores, ambos megalomaníacos,

pequeño pueblo ubicado en una zona desértica. Dave

y cómo la rebelión de los hijos permitirá arribar a

Miller (Grant Williams) es un geólogo que descubre

un final feliz en el que las amenazas son finalmente

un extraño meteorito negro que se estrella en las

conjuradas.

cercanías de San Angelo, regando los alrededores con

Otra producción de 1957 que incluye a un robot en

pequeños fragmentos. Estas piezas absorben el silicio

su trama es Kronos, del director Kurt Neumann. El

de cualquier cosa, transformándola inmediatamente

título es el nombre de un enorme ingenio mecánico

en piedra al contacto, y cuando se ven expuestos a la

que llega a la Tierra con la intención de robar toda la

lluvia de una tormenta, los pedazos de piedra comien-

energía que le sea posible. Kronos arriba a una playa

zan a crecer de manera exponencial, hasta derrum-

de California y comienza a desplazarse hacia el inte-

barse, convertirse en cientos de nuevos fragmentos y

rior, succionando energía a su paso. Dos científicos

reiniciar el ciclo. Poco a poco, los monolitos amenazan

estudian el fenómeno, que primero parece ser la caída

con destruir el pueblo, y los protagonistas deberán

de un meteorito en el mar, y la alarma cunde cuando

ingeniárselas para detener una amenaza capaz de

CIENCIA-FICCIÓN

continuación de El planeta desconocido, pero que en sí es toda una muestra de originalidad dentro del

207

terminar con toda la vida en la Tierra. Si bien se trata de una película de clase B, es sin lugar a dudas uno de los productos más originales de la época. El siguiente film que nos interesa, también estrenado en 1957, es El monstruo que retó al mundo (The Monster That Challenged the World), otro excelente producto del género pergeñado con un bajísimo presupuesto. Un terremoto en el océano libera varios huevos de un caracol prehistórico, que cuando incuban, dan como resultado a unas enormes criaturas que recuerdan a las orugas, y que más tarde atacan una base naval y succionan todos los líquidos de sus víctimas. Eventualmente, el comandante John Twillinger (Tim Holt, estrella de los westerns clase B en plena decadencia), descubre que los monstruos se están infiltrando en el sistema de drenaje de California y comenzando a aterrorizar a la población, por lo que deberá encontrar la manera de detener esta singular amenaza prehistórica. Otra película de este año a destacar es La noche del fin del mundo (The Night the World Exploded), en la que un sismólogo llamado David Conway (William Leslie) inventa un aparato que es capaz de predecir los cambios en la corteza terrestre. Después de predecir un terremoto, Conway, su colega Ellis Morton (Tristram

208

thryn Grant), descubren que hay un fallo en núcleo

CIENCIA-FICCIÓN

Coffin) y la asistente de ambos Laura Hutchinson (Kadel planeta, que induce a un crecimiento exponencial de los terremotos en la superficie. El grupo descubre entonces el E-112, un nuevo elemento presente en las piedras negras del centro de la Tierra. Cuando las piedras son sumergidas, son neutralizadas, pero expuestas al aire, absorben nitrógeno y estallan, causando los terremotos. La situación es preocupante porque, según las estimaciones de los científicos, el fenómeno causará

En la página anterior, afiche promocional y una imagen de Invasion of the Saucermen, junto a otra de El niño invisible. En esta página, a la derecha, dos escenas y un afiche de la siempre subestimada Monstruos de piedra.

el fin del mundo en algo menos de un mes... En 1957, asimismo, se produce el estreno de La bestia de otro planeta (20 Million Miles to Earth), un film que cuenta con los efectos especiales stop motion del legendario Ray Harryhausen. En la trama, la primera misión espacial a Venus se estrella cerca de la costa italiana, y el único sobreviviente del vuelo es el coronel Robert Calder (William Hopper), un astronauta cuya única preocupación es no perder un contenedor que aloja una muestra de vida venusina en su interior. Un niño de la zona descubre el envase a la deriva, lo abre y libera a una extraña criatura que un zoólogo local, el doctor Leonardo (Frank Puglia), encierra en una jaula. Un día después, la criatura ha crecido de manera extraordinaria y logra escapar de su aprisionamiento, matando en el proceso a un perro y a un granjero, pero es recapturada y encerrada en un laboratorio, para observar su crecimiento. El doctor Leonardo bautiza al monstruo como un Ymir, el padre, según la mitología nórdica, de todos los monstruos. Finalmente, después de algunos experimentos fallidos, la criatura logra escapar una vez más, sembrando el pánico en Roma, ciudad en la que derrota a mano limpia a un elefante y enfrenta al ejército en el Coliseo, donde finalmente encuentra la muerte. The 27th Day, la muestra más acabada del mensaje anticomunista en el cine de ciencia-ficción de los años ’50. En la historia, un alienígena (Arnold Moss) les entrega a cinco diferentes personas, en cinco países distintos, una caja de cápsulas que son capaces de destruir toda la vida en un continente, ya que su propio planeta está en el proceso de desaparecer y su pueblo quiere convertir a la Tierra en su nuevo hogar.

CIENCIA-FICCIÓN

La última película de 1957 que nos interesa reseñar es

209

La ética de su propia raza le impide destruir la vida inteligente, pero como la raza humana parece estar ansiosa por autodestruirse ha decidido ofrecerle los medios para hacerlo de una manera digna. Cuando son liberadas, las cápsulas son mortíferas, pero se vuelven inertes después de 27 días o por la muerte de alguno de los elegidos, ya que responden únicamente al mandato telepático de sus dueños. Eve Wingate (Valerie French) decide arrojar su caja al mar, Su Tan (Marie Tsien) decide suicidarse y sus cápsulas se transforman en polvo, y Jonathan Clark (Gene Barry) y el profesor Klaus Bechner (George Voskovec) se mantienen en silencio, después de que el extraterrestre ha anunciado al mundo la existencia de estos cinco «guardianes» de la vida o la muerte en la Tierra. Por su parte, Ivan Godofsky (Azemat Janti) es convocado por el líder soviético, el general interpretado por Stefan Schnabel, quien le exige que le entregue las cápsulas para destruir al enemigo occidental. Justo en el momento en que Godofsky está por liberar sus cápsulas, es abatido por un celoso guardia soviético, con lo que sus mortales compañeras se convierten también en polvo. De esta manera, cuando el general soviético decide declarar la guerra nuclear, Clark y Bechner, junto a Eve

210

«enemigos de la paz y la libertad» mueren. Además,

CIENCIA-FICCIÓN

Wingate, liberan las cápsulas que quedan y todos los los extraterrestres son invitados a la Tierra para crear una nueva sociedad basada en la paz y el amor, Clark y Wingate se enamoran y los rusos, desde el punto de vista de los norteamericanos, reciben lo que se merecían. Ante este tipo de planteos, bien merece preguntarse quién juzga –o puede arrogarse el derecho de juzgar– qué pueblos son o no enemigos de la paz y la libertad, sobre todo si tenemos en cuenta que sin

En la página anterior, afiche promocional y un fotograma de El monstruo que retó al mundo, junto a otro de La noche del fin del mundo. En esta página, dos imágenes y un afiche de La bestia de otro planeta, con efectos especiales de Ray Harryhausen.

libertad es muy difícil tener paz, como no sea la de los cementerios o la de los conquistadores. Más allá de la digresión, llegado el anteúltimo año de la rica década que nos ocupa en este capítulo, nuestro recorrido se inaugura con el análisis de Attack of the 50 Feet Woman. En el libreto, un gigantesco y humanoide alienígena aterriza en una zona desértica de la Tierra y secuestra a una mujer llamada Nancy Fowler Archer (Allison Hayes), que maneja por el lugar. Accidentalmente, el extraterrestre altera la genética de la muchacha, que comienza a crecer sin medida, ante la consternación de todos los médicos que se ven impotentes de ayudarla. Su estado mental se ve alterado con su crecimiento, y cuando descubre a su marido con otra mujer, los asesina a mano (gigante) limpia. Finalmente, el comisario local (George Douglas) logra abatir a la gigantesca y celosa amenaza. Los efectos especiales son particularmente pobres, aunque se destaca la secuencia en la que aparece en escena la monstruosa mano de la protagonista. Uno de los grandes hitos de este año fue sin dudas La mancha voraz (The Blob), película que marca el primer protagónico de Steve McQueen en la pantalla grande. La trama presenta la llegada de un pequeño meteorito, en las cercanías de un típico pueblo nortelugares apartados para concretar algún tipo de contacto físico. Steve Andrews (McQueen) y Jane Martin (Aneta Corsaut) presencian la caída del cuerpo celeste y deciden investigar, pero antes de acercarse al lugar, un anciano ermitaño (Olin Howland) descubre dentro del meteorito una sustancia gelatinosa, que investiga con una rama pero que, sorpresivamente, se pega a la mano, rodeándola dolorosamente. Desesperado, el

CIENCIA-FICCIÓN

americano de la época, con sus adolescentes buscando

211

anciano se cruza frente al auto de Steve, y los chicos deciden llevarlo a casa del doctor Hallen (Stephen Chase). El médico no sabe qué pensar de la gelatina que parece ir consumiendo al eremita, y aquí se comienzan a dar una serie de equívocos que previenen la intervención de las autoridades, que se creen víctimas de una típica broma juvenil. La cuestión es que la implacable gelatina va devorando al anciano, al médico y a su enfermera y, desencadenada, se convierte en una amenaza para todo el pueblo. En un momento, Steve y Jane quedan atrapados en un restaurante, rodeados por la letal sustancia alienígena, y casi casualmente descubren que la criatura no es muy aficionada al frío, con lo que logran entrever la manera de derrotarla definitivamente (de hecho, en la última escena de la película se ve a un avión militar lanzando una caja, con la gelatina, en uno de los polos). Otro producto de 1958 que nos interesa reseñar es The Brain Eaters, una película basada en la novela de Robert Heinlein Amos de títeres (The Puppet Masters, 1951). En esa obra, los invasores eran simbiontes con forma de gelatina protoplasmática, habitantes de Titán, una de las lunas de Saturno. Estas criaturas se adhieren a la nuca de los humanos para poder contro-

212

director y el guionista sustituyeron a los invasores por

CIENCIA-FICCIÓN

lar, de esa manera, sus pensamientos. En la película, el los habitantes del centro de la Tierra, y en el transcurso de la sustitución de los personajes, la paranoia de la posesión y la conversión en seres totalmente alienígenas son temas dejados de lado y reemplazados por otro mucho más clásico, como es el de la invasión. De esta manera, un material de primera calidad resulta desaprovechado y el film no logra alcanzar la altura de otros grandes proyectos de la década.

En la página anterior, un afiche promocional y una escena de The 27th Day, un ejemplar ejercicio maniqueo de la década, junto a una imagen de Attack of the 50 Feet Woman. A la derecha, otro fotograma de esa misma cinta.

capturada y puesta en exhibición. Aparentemente

teresa el estreno de El cerebro del planeta Arous (Brain

muerta, sin embargo, la música de rock que sale del

from Planet Arous), film en el que el científico Steve

garaje de unos adolescentes la revive una vez más, y la

March (John Agar) es poseído por un súper cerebro

criatura se lanza a una nueva matanza por la ciudad...

volador llamado Gor, que arriba a la Tierra desde otro

Aunque es un producto muy menor, vale la pena citar-

planeta. A través del cuerpo de su víctima, Gor, que es

lo por su relación temática con el clásico film de Jack

un reconocido criminal en Arous, comienza a dominar

Arnold y con el «peligro atómico», un poco pasado de

el mundo, ordenando la destrucción de cualquier país

moda a esa altura de la década.

que se niegue a su control. Otro cerebro volador, lla-

En 1958 se produce la aparición, también, de La ba-

mado Vol, toma posesión del perro del científico y le

rrera de fuego (The Flame Barrier), que es una cinta

explica a Sally Fallon (Joyce Meadows), futura esposa

que dialoga con la realidad del momento de manera

del poseso, la manera de terminar con Gor: atacán-

ejemplar. Después del exitoso lanzamiento de un

dolo cuando debe abandonar momentáneamente el

satélite por parte de la Unión Soviética en 1957, hubo

cuerpo de March para re-energizarse, lo que la chica

una considerable agitación pública respecto del tema

finalmente logra.

y en respuesta a ese miedo, este film presenta a Dave

Otro proyecto de 1958 a destacar es Cerebro diabólico

Hollister (Arthur Franz), un científico que descubre un

(The Colossus of New York), que de alguna manera

satélite perdido en el Yucatán y que está cubierto por

retoma el tópico más que clásico a esta altura expuesto

un extraño protoplasma que, al ser investigado, emite

en la novela Frankenstein y en sus innumerables adap-

un calor mortífero. La masa informe sigue creciendo,

taciones al celuloide. El doctor William Spensser (Otto

emitiendo un enorme calor capaz de separar la carne

Kruger) implanta el cerebro de su hijo recientemente

del hueso, hasta que dos aventureros, contratados por

fallecido en un trágico accidente, Jerry (Ross Martin),

la esposa del científico –que obviamente ha desapa-

en el cuerpo de un monstruo mecánico de su invención.

recido en la investigación–, son capaces de detener la

Al principio, la bondadosa personalidad de Jerry do-

nueva amenaza.

mina al monstruo, pero poco a poco va cambiando y,

Los experimentos monstruosos tendrían, siempre en

eventualmente, decide romper su aislamiento y atacar

1958, un correlato fílmico que se convertiría en clásico:

al resto de la humanidad con los poderosos rayos que

La mosca de la cabeza blanca (The Fly), película dirigida

emite desde sus ojos. Finalmente, será el hijo de Jerry

por Kurt Neumann y protagonizada, entre otros, por

quien logre dominar a la criatura y destruirla.

un joven Vincent Price. El film comienza cuando se

Para continuar con el recorrido nos interesa citar a

descubre a Helene Delambre (Patricia Owens) en una

Earth vs. the Spider, una remake poco afortunada de

fábrica, parada frente a una enorme prensa neumática

Tarántula en la que una araña gigante, producto de

que ha aplastado la cabeza y el brazo de su marido

la radiación nuclear, se dedica a devorar a cuanto hu-

André (David Hedison). Acusada de asesinato, la mujer

mano se le ponga al alcance, hasta que es finalmente

se niega a hablar con nadie, ni siquiera con el hermano

CIENCIA-FICCIÓN

Siguiendo con nuestros destacados de este año, nos in-

213

En esta página, afiche promocional y una imagen de La mancha voraz. En la página siguiente, sendas escenas de los films The Brain Eaters, El cerebro del planeta Arous, Cerebro diabólico y Earth vs. the Spider.

de su difunto esposo, François (Price) que, sin embargo, nota el espanto que le provoca a la mujer una mosca que vuela en el cuarto en el que ambos se encuentran. François tampoco puede ignorar la historia de su sobrino Philippe (Charle Herbert), quien le explica que esa mosca tiene la cabeza y una pata de color blanco. Cuando François le dice a Helene que ha capturado al singular insecto, la mujer se relaja lo suficiente como para contarle su historia: aparentemente, André, científico aficionado, había estado trabajando en el concepto de la transmisión de la materia, asegurando que podía desintegrar cualquier cosa y volverla a integrar en cualquier lado. Después de algunos experimentos exitosos, André intentó transmitirse a sí mismo, pero cuando ingresó a la cámara de teletransportación, una mosca hizo lo propio… Los resultados no se ven inmediatamente, pero el científico insiste, de allí en más, en llevar tapados su cabeza y uno de sus brazos. Cuando su esposa lo destapa abruptamente, descubre –junto con el público– que el hombre posee ahora una cabeza de mosca. La explicación no tarda en aparecer: aparentemente, los átomos desintegrados del científico y de la mosca se mezclaron en la teletransportación, y André ha sido

214

Convencido de que su máquina es más un invento

CIENCIA-FICCIÓN

incapaz de solucionar el problema hasta ese momento. infernal que algo provechoso para la humanidad, el hombre con cabeza de mosca decide destruir su máquina y quemar los papeles de su investigación, al tiempo que le pide a su esposa que termine con su miseria aplastándolo con la prensa neumática. Ni François ni el inspector Charas (Herbert Marshall) creen una palabra de la historia… hasta que salen al jardín y descubren una mosca con la cabeza y el brazo de

André que, atrapada en la tela de una araña, les pide ayuda desesperadamente. Más allá de haber sido ampliamente superada por la remake realizada en 1986 por David Cronenberg, La mosca de la cabeza blanca –obra adaptada de la novela homónima de George Langelaan– fue una de las pocas películas de ciencia-ficción y terror de gran presupuesto de la década, presentando algunos momentos interesantes y uno de los efectos especiales más recordados de la historia del cine: una Patricia Owens gritando, vista a través de los supuestos ojos facetados de la mosca. En el transcurso del año que nos ocupa se produce la aparición de otra interesante propuesta del género. Nos referimos a From the Earth to the Moon, una película dirigida por Byron Haskin y meticulosa adaptación de la novela de Julio Verne en la que Joseph Cotten interpreta a un minucioso constructor y financista, al modo de los industriales de De la Tierra a la Luna (1950), empeñado en la fabricación del primer cohete para viajar al satélite de nuestro planeta. Aunque supuestamente la acción está ambientada en la época victoriana, ese condimento es poco explotado en imágenes y quizá lo más interesante de la propuesta es la presencia del propio Verne como personaje de Como siguiente eslabón de este recorrido citaremos a Me casé con un monstruo (I Married a Monster from Outer Space, 1958), un proyecto que pese a su título se inscribe a pleno en la corriente ligada con la paranoia por el comunismo propia de los ’50. A punto de casarse, Bill Farrell (Tom Tyron) es abducido por extraterrestres, quienes lo colocan en una máquina que «mapea» su mente al modo alienígena. Los extraterrestres, que

CIENCIA-FICCIÓN

la historia, interpretado por Carl Esmond.

215

En esta página, tres diferentes escenas de la impactante La mosca de la cabeza blanca, con Vincent Price en uno de los roles principales. En la página siguiente, dos imágenes y un afiche promocional de la arquetípica producción anticomunista de los ‘50 Me casé con un monstruo.

son numerosos y pueden tomar la forma humana, han viajado a nuestro planeta porque el suyo está en franca decadencia y necesitan mujeres para poder sobrevivir como raza. Marge Bradley (Gloria Talbott) finalmente se casa con su prometido, pero pronto comienza a sospechar del extraño comportamiento de su nuevo marido. Esa actitud fuerza que Farrell finalmente se quiebre, le confiese su amor por ella y le cuente toda la historia de su abducción. Cuando Marge busca la ayuda de las autoridades, descubre con horror que las mismas han sido copadas por los extraterrestres, por lo que decide dirigirse a un hospital cercano y reclutar en su causa contra los invasores a todos los padres inminentes que se encuentran en el lugar. El grupo finalmente se las ingenia para descubrir la nave espacial de los extraterrestres y libera a los rehenes que retienen. Pese a que es muy claro que la intención principal del argumento es la de prevenir a los norteamericanos respecto del «peligro rojo» y la infiltración social, son los temas relacionados con la sexualidad los que hacen de esta película algo diferente y perturbador. El director, Gene Fowler, Jr., fue ayudante de Fritz Lang, y la influencia del gran maestro del expresionismo es bastante clara en toda la cinta. Un

216

protagonista, Tom Tyron, quien brevemente pasó a

CIENCIA-FICCIÓN

dato anecdótico interesante pasa por la carrera del las filas del cine mainstream pero que, al no avanzar en su carrera frente a las cámaras, se convirtió en un exitoso novelista. Otro hito a destacar en nuestro recorrido es It! The Terror from Beyond Space. El film, temporalmente ubicado en un supuesto futuro 1973, presenta a una misión de rescate enviada para recuperar una nave que aparentemente ha sufrido algún tipo de desper-

fecto. El único sobreviviente resulta ser el coronel Ed Carruthers (Marshall Thompson), quien es acusado de haber masacrado a los miembros de su tripulación. Carruthers sostiene en su defensa que el responsable es un monstruo marciano y para demostrarlo se ofrece como voluntario en una segunda misión al plantea rojo. Después de un tiempo, los miembros de la nueva tripulación comienzan a aparecer asesinados y aunque todo parece señalar al atribulado coronel, muy pronto se descubre que el responsable es un monstruo que, para sobrevivir, absorbe los fluidos vitales de los seres humanos. Parece no haber forma de detener a la criatura y los sobrevivientes deberán empeñarse por evitar que semejante horror acabe con todos ellos. Para el aficionado, el argumento general puede resultar similar al de Alien (1979), el film de Ridley Scott que en realidad funciona como remake de esta producción de 1958. It! The Terror from Beyond Space posee todos los elementos propios de un clásico del terror y la ciencia-ficción de finales de los ‘50: una situación de la que no se puede escapar –un espacio cerrado, conocido como «situación castillo» en el relato gótico–, una criatura imparable en su sed de sangre y un grupo que lucha por la supervivencia. Y si bien es cierto que abusa de la puesta en escena de la criatura –algo propio de sostiene gracias a las adecuadas interpretaciones de su reducido elenco y a una trama que resulta efectiva a partir de su minimalismo. El film permite comprobar una vez más que el terror cinematográfico encuentra en los elementos de la ciencia-ficción una nueva manera de revitalizar sus temas, presentando horrores novedosos o simplemente trasladando la acción a escenarios más exóticos que las viejas mansiones de uso.

CIENCIA-FICCIÓN

las producciones clase B de la época–, la película se

217

La vertiente psicológica que se apropia del paradigma paranoico de la Guerra Fría, parece ser, en definitiva, el rasgo más significativo de estas producciones. A continuación en nuestro recorrido nos interesa destacar Queen of Outer Space, una cinta cuya trama gira en torno a tres astronautas que protagonizan el primer vuelo tripulado a Venus. Cuando llegan al planeta, los expedicionarios encuentran que está habitado únicamente por mujeres sucintamente vestidas. Inmediatamente, los astronautas son encarcelados por la reina de la sociedad venusina (Laurie Mitchell), que odia a los hombres. Además, la soberana comienza a sospechar que los visitantes son espías interplanetarios y decide entonces destruir la Tierra. Así, los protagonistas, con la ayuda de algunas venusinas (entre las que se encuentra la enamoradiza Zsa Zsa Gabor), deberán imaginar la manera de derrocar a la reina y salvar a nuestro planeta. La cinta fue realizada a partir de «pedazos» de otras producciones anteriores y, por ejemplo, las armas de rayos, los trajes y hasta parte del paisaje selvático provienen de El planeta desconocido (1956); la mayoría de los efectos especiales son de Mundo sin fin (1956) y el decorado principal de la nave espacial terrestre es de Conquistando a Marte (1951).

218

espacio (The Space Children), una película dirigida por

CIENCIA-FICCIÓN

También en 1958 se produce el estreno de Hijos del Jack Arnold. La historia sigue el devenir de la extraña invasión de una entidad pacifista y, como sucede habitualmente en las cintas de Arnold, el paisaje desolado es uno de los principales protagonistas. Una criatura con el aspecto de un cerebro brillante arriba a una playa desierta mediante la teletransportación. El cerebro domina a los hijos de los técnicos y los científicos de una base de cohetes cercana, y los obliga a sabotear

En la página anterior, tres fotogramas y un afiche de It! The Terror from Beyond Space, film cuya trama es precursora de Alien (1979). A la derecha, una escena de Queen of Outer Space, donde tres astronautas descubren una civilización femenina en Venus.

el próximo lanzamiento de una nave terrestre, cuyo

cir, del futuro). El descubrimiento lleva al arqueólogo

objetivo es hacer detonar una bomba de hidrógeno

Robert Hedges (Ward Costello) al laboratorio isleño de

en el espacio. El tono pacifista de la propuesta es casi

Erling, quien le revela que los objetos del siglo XX que

completamente ajeno a la ideología dominante en el

son puestos dentro de la máquina del tiempo parecen

cine del género de los ’50, más que nada porque los

ser cambiados por análogos futuros, sin duda con la

estudios consideraban que películas de este tipo no

intervención de algún tipo de vida inteligente. Final-

funcionaban en las taquillas.

mente hace su aparición una especie de enfermera, horriblemente desfigurada (Salome Jens), quien está

cio (Space Master X-7), cuya trama, evidentemente

en busca de hombres para llevar consigo al futuro y,

inspirada en Pánico mortal (1955), pone en escena a

de esa manera, salvar lo que queda de la raza humana.

dos agentes gubernamentales que deben investigar

La enfermera hipnotiza a Victor y cuando está a punto

una nave recién llegada del espacio y cubierta por un

de trasladarlo en el tiempo, es ultimada por Hedges,

extraño hongo. Cuando esta materia vegetal entra en

quien además descubre que la presencia de la mujer

contacto con la sangre, crece de manera exponencial y

está contaminando con radioactividad el presente.

arrasa con todo lo que encuentra a su paso, asesinando

A continuación nos interesa detenernos en una

al científico a cargo de la investigación, el doctor Char-

producción británica de este año. Se trata de The

les Pommer (Paul Frees), y tomando el control de su

Trollenberg Terror, una cinta cuya trama fue adap-

prometida, Laura Greeling (Lyn Thomas). La muchacha

tada por el guionista estrella de la Hammer, Jimmy

se convierte en una entidad antisocial y descontrolada,

Sangster, a partir de un exitoso serial televisivo. El

hasta que uno de los agentes del gobierno descubre

profesor Crevett (Warren Mitchell), quien vive en el

un antídoto, que le permite volver a su ser original.

pueblo suizo de Trollenberg, descubre una extraña

Una de las particularidades de la propuesta es que fue

nube que, a la larga, se revela como el camuflaje de

el vehículo para la primera aparición en solitario de

unas espantosas criaturas extraterrestres, cuyo ma-

Moe Howard –interpretando a un taxista–, uno de los

yor placer parece ser el de decapitar seres humanos.

famosos Tres Chiflados.

Preocupado, Crevett comenta el tema con un asesor

Siguiendo con los estrenos de 1958, nos interesa de-

científico de las Naciones Unidas que visita el lugar,

tenernos ahora en Terror from the Year 5,000, una

Alan Brooks (Forrest Tucker), y poco después la nube

cinta que lidia con el tema del viaje en el tiempo. El

desciende de las montañas y cubre por completo el

profesor Howard Erling (Frederic Downs), con el aporte

pueblo, provocando que muchos de los residentes

del financista Victor (John Stratton), construye un pro-

huyan. Crevett, Brooks y Anne Pilgrim (Janet Munro),

totipo de máquina del tiempo cuyo objetivo es el de

una chica con capacidades extrasensoriales que puede

conseguir objetos del pasado. Entre lo «recuperado»,

comunicarse con los alienígenas, deciden quedarse y

se encuentra una estatuilla cuya lectura de antigüedad

presentar batalla. Los invasores, cíclopes con una serie

señala que proviene del año 5200 de nuestra era (es de-

de tentáculos mecánicos de aspecto tenebroso, son

CIENCIA-FICCIÓN

Otro film de este año a reseñar es X-7, rey del espa-

219

eventualmente derrotados de una manera casi ridícula, bombardeados por la RAF. Pese a todo, el principal mérito de esta producción radica en haber anticipado un tema que, de manera más sombría y compleja, será desarrollado en Una tumba en la eternidad (Quatermass and the Pit, 1967). Otro proyecto a destacar de 1958 es Vynález zházy, película checoslovaca que combina diversos temas imaginados por Julio Verne a través de una combinación de actores en vivo, animaciones, marionetas y espejos pintados. A fines del siglo XIX, el profesor Roch (Arnost Navrátil) y su asistente Simon Hart (Lubor Tokos) desarrollan un explosivo capaz de reemplazar al aporte energético del petróleo y el carbón combinados. En la trama aparecen un poderoso villano llamado Artigas (Miroslav Holub), quien desea apoderarse de la sustancia; un submarino al estilo del Nautilus; una isla desierta, de origen volcánico, que sirve de escondite a una ciudad pirata; un lago escondido con un sofisticado laboratorio en la costa; un cañón capaz de disparar cohetes espaciales; y otras maravillas nacidas de la pluma del autor francés. En 1958 se estrena también War of the Colossal Beast, una típica producción del inefable Bert I. Gordon, que

220

Una serie de extraños robos a camiones de transpor-

CIENCIA-FICCIÓN

funciona como secuela de El gigante invencible (1957). te de alimentos le dan la pauta a las autoridades gubernamentales de que el gigante de la película antes citada no ha muerto. Finalmente, la criatura es descubierta en México, horriblemente desfigurada y totalmente fuera de sus cabales, y las autoridades deciden su captura. Una vez realizada la maniobra, el gigante es trasladado a los Estados Unidos, más precisamente a Los Angeles, pero se las arregla para escapar

En la página anterior, un afiche promocional y una imagen de Hijos del espacio, junto a otras dos de The Trollenberg Terror y Vynález zházy. A la derecha, dos escenas y un afiche de War of the Colossal Beast, secuela de El gigante invencible.

y desatar su ira destructiva sobre la ciudad, hasta que finalmente decide destruirse a sí mismo, después de hablar con su hermana, agarrando los cables de unas torres de alta tensión. El último film de nuestro recorrido de este año es una producción de Roger Corman, War of the Satellites – que en el mercado del video argentino fue presentada como Guerra de satélites–, imaginada y desarrollada alrededor del lanzamiento del primer Sputnik ruso. Así, la cinta fue rodada en tan sólo 8 días, y estrenada apenas dos meses después del evento espacial. En la trama, las Naciones Unidas intentan lanzar una misión tripulada al espacio, y para evitarlo, una fuerza desconocida y alienígena rodea al planeta con una impenetrable barrera, advirtiendo a los terrícolas que si no desisten de su proyecto, el mundo será destruido. Cuando el científico a cargo, el doctor Pol van Ponder (Richard Devon), muere en un accidente de tránsito, los extraterrestres lo reviven para que ayude a prevenir el despegue del cohete terrestre. Sin embargo, la nave parte igual, y cuando van Ponder intenta estrellarla contra la barrera de contención alienígena, es reducido por el resto de la tripulación. El mensaje de la cinta es bastante obvio, y adhiere en líneas generales a los planteos paranoicos del primer lustro de la década, comunistas. Como hemos podido comprobar a partir de este periplo a través de los títulos más significativos de los años ’50, la que se considera como la época dorada de la ciencia-ficción cinematográfica tuvo una duración bastante breve, magníficamente representada por un puñado de películas, pero en franca decadencia a finales del período, con un reemplazo de paradigma

CIENCIA-FICCIÓN

relacionados con las supuestas maquinaciones de los

221

y muchos proyectos adocenados y de escasa originalidad. Expresado lo anterior, es preciso citar algunos de los estrenos más significativos del último año de los ’50, para dar cierre a este capítulo. La primera película que nos interesa es El monstruo submarino (Behemoth, the Sea Monster), una producción británica que sigue los lineamientos generales de las películas con criaturas gigantescas estrenadas en la época. En este caso, el vuelco permanente de materiales radiactivos en el océano, despierta a la vida a un dinosaurio prehistórico, que ahora tiene la capacidad de dispensar choques eléctricos y rayos radiactivos. Obviamente enfurecido, el monstruo ataca una gran ciudad –en este caso, Londres–, y para complicar las cosas, pese a que es posible reducir a la criatura con armas convencionales, los militares deben primero llevarlo a algún lugar aislado, ya que su muerte puede diseminar material radiactivo por toda la ciudad. La solución llegará de la mano de un científico norteamericano, que reduce a la bestia utilizando un torpedo modificado. El director de esta cinta, Eugène Lourié, es recordado por El monstruo del mar (1953), un film que junto con El mundo en peligro (1954), inauguró el ciclo de las criaturas descomunales dentro de la ciencia-ficción en celuloide de los ’50,

CIENCIA-FICCIÓN

222

subgénero que explotarían con maestría los japoneses, como veremos más adelante en este libro. El siguiente hito de 1959 que queremos destacar es The Brain That Wouldn’t Die, film evidentemente inspirado en Experimento diabólico (1953) cuya intención es mezclar el terror con la ciencia-ficción, como era ya habitual en los últimos años de la década. En la trama, el doctor Bill Cortner (Jason Evers) realiza una serie de experimentos quirúrgicos ilegales en seres

En la página anterior, afiche promocional y un fotograma de El monstruo submarino, junto a otro de The Brain That Wouldn’t Die. En esta página, una imagen de Caltiki, il mostro immortale y un afiche promocional de El hombre fantasma.

humanos, pese a las advertencias en contrario de su padre. Cuando su prometida, Jan Compton (Virginia Leith), resulta decapitada en un accidente automovilístico, el científico se las arregla para mantener su cabeza y su cerebro con vida, en tanto busca un nuevo cuerpo para su amada. Así se pone en contacto con Doris Powell (Adele Lamont), una hermosa modelo con la cara desfigurada, y cuando está a punto de realizar el transplante, Jan, cansada de su existencia incorpórea, se las arregla para convocar a uno de los experimentos fallidos de Cortner, quien asesina a su creador, prende fuego al laboratorio y huye con la modelo en brazos. Por esta época, el cine italiano comenzó a desarrollar una serie de producciones relacionadas con todo tipo de géneros populares, y la ciencia-ficción no fue ajena al fenómeno de la mano de Riccardo Freda, un realizador en quien vale la pena detenerse un momento. Freda nació en febrero de 1909 en Alejandría, Egipto, de padres de origen napolitano. En un primer momento se dedicó a la escultura, luego trabajó como crítico de arte en un periódico y más tarde comenzó su carrera cinematográfica, en 1937, empezando como guionista y supervisor de producción, y debutando como director en 1942 con Don Cesare di Bazan. Freda, les resistentes al neorrealismo italiano que floreció y prevaleció en la posguerra italiana, y se dedicó a realizar películas de corte histórico y espectacular con singular maestría. En 1956, gracias a su film I Vampiri, el director se convirtió en uno de los fundadores del gótico italiano, el primer cine horrorífico con sello de la Península. En sus palabras: «Yo creo en un tipo de terror sutil,

CIENCIA-FICCIÓN

junto con Vittorio Cottafavi, fue uno de los principa-

223

psicológico. Vampiros o monstruos, no, por favor, son vulgares, ridículos. Mi teoría es que el auténtico terror puede venir de lo más simple o cotidiano. El monstruo más aterrador es el vecino que degüella a su esposa.» En otra oportunidad, declaró: «Todos somos potencialmente monstruos. Es la educación o nuestros propios miedos los que evitan dejar en libertad nuestra naturaleza... Por ello hacer películas sobre esta clase de monstruos (no sobre marcianos o animales gigantes) me parece más interesante que pactar con Frankenstein... » Su incursión fundacional, como hemos señalado, se da con I Vampiri, que firma con uno de sus seudónimos anglosajones, Robert Hampton. El film presenta a Giselle du Grand (Gianna Maria Canale) como una antigua y malsana «vampira» que, como la legendaria condesa Báthory, es capaz de mantener su apariencia juvenil gracias a la ingesta regular de un suero elaborado a partir de sangre de vírgenes. Cuando la edad comienza a notarse una vez más en su cuerpo, la mujer le demanda al inventor del suero mejores resultados, con lo que empiezan las desapariciones de jóvenes doncellas del lugar. El plan, sin embargo, será desbaratado por un intrépido periodista. En la versión original del film

224

tífico encargado de suministrar sangre a la vampira

CIENCIA-FICCIÓN

existía una escena en la que se explicaba que el cienera en realidad un hombre artificial, una especie de criatura de Frankenstein, con lo que la película se insertaba plenamente en la ciencia-ficción. Sin embargo, en su edición definitiva, I Vampiri sitúa al terror en un ambiente cotidiano, donde lo más terrorífico son sus decorados, que sirven de fondo a los personajes, y su argumento se moviliza a partir de investigaciones que poca relación guardan con lo fantástico.

En esta página y en la anterior, tres diferentes escenas y un afiche promocional de Orgía de terror, en la que dos científicos inventan un ingenio que permite a los humanos atravesar la materia sólida, aunque con trágicas consecuencias.

La película fue un fracaso total en Italia y no contri-

más y podría traer consigo la destrucción de toda la

buyó en manera alguna a la formación comercial del

humanidad...

gótico, pero sí tuvo la virtud de marcar los rumbos

Aunque la película fue inicialmente dirigida por Freda

estéticos que más tarde el propio Freda, Mario Bava

(nuevamente firmando como Robert Hampton), el en-

o Antonio Margheriti llevarían más allá.

cargado de concluirla fue Mario Bava, quien comenzó

La segunda incursión fantástica de Freda llega con

trabajando como director de fotografía y especialista

Caltiki, il mostro immortale (1959). El film presenta una

en efectos especiales para luego responsabilizarse

expedición arqueológica a las ruinas mayas de Tikal,

–aunque sin ser acreditado– de todo el producto.

donde los exploradores comienzan a desaparecer a

Pese a que muchas veces se la ha relacionado con La

medida que investigan. Paso a paso descubren que en

mancha voraz, el film reconoce sus raíces en Pánico

las ruinas existe un alto nivel de radiación, y un buzo

mortal, de Val Guest, un producto de la Hammer que

encuentra, en el lago sagrado de la ciudad, restos de

lidiaba con una temática similar y era sumamente po-

seres humanos junto a un tesoro escondido. En una

pular en Italia. Pese a ello, los realizadores de Caltiki, il

segunda inmersión, el hombre es atacado por algo que

mostro immortale abordaron el tema desde una óptica

le quema la mayor parte del cuerpo, y de repente, una

diferente, obviando el tema de la exploración espacial

masa informe surge del lago y ataca a Max Gunther

–vedada para países como Italia en esa época– y rela-

(Gerard Herter), uno de los protagonistas, tomándole

cionando a la criatura que da nombre al proyecto con

uno de sus brazos. El hombre se salva a duras penas

temas arqueológicos y legendarios, mucho más caros

gracias a la intervención del doctor John Fielding (John

al paladar de la audiencia de la Península, logrando

Merivale), el líder de la expedición, que destruye a la

resultados para destacar: una obra maestra imprescin-

criatura en casi su totalidad. Lo que se recupera del

dible en la historia del cine fantástico. Otro film de 1959 a tomar en cuenta es El hombre

ya que resulta ser parte de una criatura unicelular

fantasma (The Cosmic Man), que se enrola en la línea

de 20 millones de años de antigüedad, y aunque el

de películas de la época relacionadas con el temor a

fragmento parece inerte, reacciona a la radioactividad

la guerra nuclear. Un objeto volador no identifica-

y crece de manera alarmante. Gunther va enloque-

do, una especie de globo flotante que se avista en

ciendo paulatinamente, a medida que su cuerpo se

California, es investigado por la Fuerza Aérea con la

deteriora, y huye de su convalecencia, iniciando una

ayuda del científico Karl Sorenson (Bruce Bennett).

matanza indiscriminada. En tanto, el doctor Fielding

Aparentemente diseñada para un único tripulante,

logra relacionar las leyendas en torno a la diosa Cal-

la nave parece impenetrable, pero al poco tiempo,

tiki, la huída de los mayas de Tikal en el año 607 y el

un ser casi invisible (John Carradine) visita la ciudad

paso de un cometa por las proximidades de la Tierra

cercana al emplazamiento del aparato, mientras que

en esa época, algo que complica aún más las cosas ya

un hombre de apariencia extraña se hospeda en la

que el mismo cuerpo celeste está acercándose una vez

hostería regenteada por Kathy Grant (Angela Gree-

CIENCIA-FICCIÓN

brazo de Gunther asombra a la comunidad científica,

225

En esta página, afiche promocional y una imagen de Invasores invisibles, cinta precursora de La noche de los muertos vivos (1968). En la página siguiente, escena y afiche de Viaje al centro de la Tierra, junto a una imagen y un afiche de Die nackte und der Satan.

ne), que sirve de cuartel general a los investigadores terrícolas. Las opiniones entre los humanos están divididas, y mientras el científico piensa que el visitante es un ser benevolente, con un mensaje de amor, los militares sostienen que puede ser una amenaza o, eventualmente, una ventaja tecnológica para el país que lo aproveche. Obviamente, ambas partes actuarán en consecuencia, aunque la resolución de la propuesta es de un optimismo casi inocente. Siguiendo con el recorrido, en este mismo año se estrena también Orgía de terror (4D Man), en la que dos hermanos, los científicos Scott (Robert Lansing) y Tony Nelson (James Congdon), desarrollan un amplificador que permite a los seres humanos ingresar en la cuarta dimensión y traspasar la materia sólida. Scott experimenta con su creación en sí mismo y descubre que, cada vez que pasa a la cuarta dimensión, envejece de manera acelerada. Para poner freno a su dolencia comienza a asesinar gente, absorbiendo su energía vital y rejuveneciendo en el proceso. Tony, conciente de lo que está haciendo su hermano, intentará detenerlo con la ayuda de la prometida del hombre, Linda Davis (Lee Meriwether). La chica convence a Scott de detener temporalmente su proceder y, en ese mismo

226

Otro film que nos interesa destacar es Die Herrin der

CIENCIA-FICCIÓN

momento, lo asesina de un disparo. Welt, una co-producción europea (Italia, Francia y Alemania) en dos partes dirigida por William Dieterle, en lo que fue su última película antes de retirarse y la única relacionada, de su extensa filmografía, con el género que nos ocupa. Dieterle, como Fritz Lang, abandonó su Alemania natal en los años ’30, logrando una extensa carrera en Hollywood, para regresar a su patria en sus últimos años productivos. En la trama,

el profesor Johansson (Gino Cervi) ha realizado un espectacular descubrimiento: un gigantesco pulso magnético que es capaz de drenar toda la electricidad de un continente entero. Cuando los militares están ya considerando las aplicaciones de una tal tecnología, el profesor es secuestrado por un grupo de mercenarios, y su hija Karin (Martha Hyer) debe lidiar con todo tipo de personajes, al modo de los seriales, en su intento por rescatar a su atribulado padre, objetivo que obviamente logra. Nuestro recorrido continúa con el estreno de Invasores invisibles (Invisible Invaders), película considerada como uno de los principales antecedentes cinematográficos de La noche de los muertos vivos (Night of the Living Dead, 1968), la obra maestra de George A. Romero. Un grupo de extraterrestres, contactados por el científico Adam Penner (Philip Tonge), le cuentan que habitan en la Luna desde hace más de 20.000 años, indetectables por su invisibilidad. Los selenitas han decidido aniquilar a la humanidad a menos que todas las naciones de la Tierra se rindan incondicionalmente y de inmediato. Refugiados en un laboratorio, Penner, su hija Phyllis (Jean Byron) y un mayor del ejército llamado Bruce Jay (John Agar), intentan encontrar la manera de derrotar a los invasores, mientras son vivos, animados por los propios alienígenas. Finalmente, el mayor descubre una particular frecuencia de sonido que logra alejar a los extraterrestres de los cuerpos muertos, y con tal tecnología puede detener la invasión de la Tierra. También en 1959 se produce la aparición de Viaje al centro de la Tierra (Journey to the Center of the Earth), rodada bajo el título original de la novela de Verne y

CIENCIA-FICCIÓN

atacados desde el exterior por un grupo de muertos

227

En esta página y en la siguiente, diferentes imágenes y un afiche promocional de La hora final, una película amarga y desesperanzada, que lidia con el tema del exterminio de la humanidad por culpa de una guerra nuclear a nivel global, y que inclye un elenco de grandes estrellas.

pensada para aprovechar el éxito obtenido por Disney, en 1954, con 20.000 leguas de viaje submarino. El profesor Oliver Lindenbrook tiene una extraña teoría respecto de la existencia de todo un nuevo mundo en el centro de la Tierra. Su hipótesis parece confirmarse a través de un particular descubrimiento, y es entonces que decide liderar una expedición, que partirá desde un volcán en Islandia. El intrépido grupo descubre que las ideas de Lindenbrook se quedan cortas, y en el nuevo mundo se topan con todo tipo de peligros y criaturas, logrando finalmente escapar de las entrañas de la Tierra después de encontrar las ruinas de la perdida civilización de la Atlántida. Otro hito destacable es una cinta de origen alemán: Die nackte und der Satan, propuesta en cuya historia el profesor Abel (Michel Simon) inventa un suero mediante el cual logra que la cabeza de un perro muerto permanezca con vida. Un científico demente, el doctor Ood (Horst Frank), ejecuta un transplante cardíaco en el cuerpo de Abel, y más tarde le corta la cabeza, manteniéndola con vida con el suero inventado por el científico, y conectándola a una serie de cables y aparatos, mientras Abel le ruega que lo deje morir. Además, Ood transplanta la cabeza de

228

veces de su ayudante, en el cuerpo de una hermosa

CIENCIA-FICCIÓN

una enfermera jorobada (Karin Kernke), que hace las desnudista (Christiane Maybach), logrando de esa manera su «mujer perfecta». Durante el desarrollo de la trama se van dando situaciones cada vez más bizarras, hasta que el insano Ood finalmente prende fuego a su laboratorio, y la cabeza de Abel logra el ansiado descanso definitivo… El cine de origen soviético ofrece un film del género para este periplo de 1959, intitulado Nebo zovyot,

conocido también en los Estados Unidos como The Sky Calls. Celebrando el lanzamiento de sus Sputniks en 1953 y 1957, además de la construcción de su cohete para enviar a la Luna, esta película es la primera en más de dos décadas en el cine ruso en plantear el tema del viaje espacial. La trama sigue una particular carrera espacial, en la que dos cohetes, uno con rumbo a la Luna y otro destinado a viajar a Marte, realizan una escala en una gigantesca estación espacial con laboratorios, jardines y todo tipo de lujos. Una particularidad de este Þlm ruso es que el metraje de los maravillosos escenarios espaciales que presentaba fue más tarde virtualmente canibalizado por sendos productores norteamericanos, que lo utilizaron como injerto en producciones mucho menos ambiciosas. Durante el transcurso de este mismo año, se produce asimismo el estreno de La hora Þnal (On the Beach), una propuesta con estándares mainstream que es considerada como la más importante de los años ’50 en lo que hace a la difusión del mensaje contrario a la guerra global termonuclear. En el año 1964, la guerra atómica ha exterminado virtualmente a todos los habitantes del hemisferio norte, y sólo un submarino norteamericano sobrevive en las aguas cercanas a Australia, lugar en el que la vida «normal» comienza eventualmente asolará también la región. El capitán de la nave, Lionel Towers (Gregory Peck), se niega a creer en la muerte de su esposa e hijos en el holocausto, pero sin embargo establece una ambigua relación con una hermosa mujer llamada Moira Davidson (Ava Gardner). Lo que resta de la humanidad, representada por algunos de los personajes del Þlm, debe afrontar terribles decisiones, que llegan incluso a la posibilidad

CIENCIA-FICCIÓN

también a desvanecerse, ya que la radiación avanza y

229

de ingerir píldoras mortales antes de que se produzca el Þn de los tiempos. Cuando se calcula que falta apenas un mes para el holocausto deÞnitivo en el sur, los tripulantes reciben lo que parece ser un mensaje emitido desde los Estados Unidos, y el submarino emprende el viaje hacia la costa de California, con la esperanza de encontrar sobrevivientes. Una vez en tierra, comprenden que el viaje ha sido en vano, en pos de una esperanza que ya no es factible, y tras una amarga reßexión del capitán, se preparan para esperar lo que, a esa altura, es inevitable… Vincent Price, quien ya aportara al género en 1958 a través de su rol secundario en La mosca de la cabeza blanca, repite la experiencia en 1959, con un rol más destacado en El monstruo de los mil ojos (The Return of the Fly), una película dirigida por Edward L. Bernds tras el repentino fallecimiento del director y productor original, Kurt Neumann, acaecido a poco de estrenarse la primera cinta. Aquí Price repite su papel de François Delambre, hermano del malogrado cientíÞco de La mosca de la cabeza blanca, una docena de años después. Philippe (Brett Halsey), el sobrino de Price en la Þcción, acaba de dar sepultura a su madre, después de ser testigo de su paulatino deterioro tras

230

a su marido a la muerte. El joven convence a su tío

CIENCIA-FICCIÓN

haber presenciado el espantoso experimento que llevó para que le cuente qué fue lo que realmente sucedió, y a partir de allí decide perfeccionar la creación paterna, para evitar que todo el dolor y el sacriÞcio de sus progenitores haya sido en vano. Philippe decide contratar como ayudante a un cientíÞco amigo, Alan Hinds (David Frankham), que guarda en su pasado un oscuro secreto y que se acerca al experimento con sus propias expectativas. Alan desea robar la creación de

En la página anterior, dos fotogramas y un afiche de El monstruo de los mil ojos, la continuación de La mosca de la cabeza blanca (1958). A la derecha, una escena de The World, the Flesh and the Devil, film en el que el fin del mundo es matizado con la tensión racial.

los Delambre, pero primero debe disponer de un de-

de la trampa subterránea, descubre con horror que la

tective, que lo busca para arrestarlo por un crimen, y

humanidad parece haberse destruido en un holocausto

más tarde también de Philippe que, aunque desconoce

atómico. El hombre viaja a Nueva York, comprueba

la verdad sobre las intenciones de su antiguo amigo,

que la ciudad está completamente desierta y mientras

sospecha que algo se trae. Así dada la situación, Phili-

se las va ingeniando para sobrevivir, eventualmente

ppe repite el experimento de su padre con las mismas

se encuentra con la cándida Sarah Crandall, otra

desastrosas consecuencias, y el humano con cabeza de

sobreviviente. Decididos a ayudarse mutuamente, se

mosca resultante –más espantoso que el de la primera

hacen amigos hasta que llega Benson Thacker, otro

película– decide utilizar todas sus habilidades para

solitario personaje que se las ha arreglado para viajar

vengarse de Alan y también de lo que le ha ocurrido,

en un pequeño bote hasta el puerto de la ciudad. A

en tanto que François, con la ayuda del detective,

partir de ese momento, las tensiones comienzan a

intentará atrapar a la criatura con vida y también a la

aßorar en el grupo, particularmente por el creciente

mosca con cabeza humana, para intentar volver todo

enfrentamiento racial entre los dos hombres, ya que

a la normalidad.

Thacker no puede concebir la aÞnidad entre el negro

Filmada en blanco y negro, con un presupuesto aco-

y la inocente muchachita blanca. En este punto Þnal,

tado y poco tiempo disponible, El monstruo de los

ambos hombres, riße en mano, se buscan con inten-

mil ojos es inferior a su precuela, aunque contiene

ciones asesinas, hasta que Burton lee una frase de la

pasajes en su trama que todavía son capaces de captar

Biblia en el ediÞcio de las Naciones Unidas y decide

la atención de los aÞcionados, además de otra gran

deponer su actitud. En el Þnal, los tres sobrevivientes

performance de Price en un papel que, si bien no es

parecen haber superado sus diferencias y decidido

el principal, le da lugar para el lucimiento.

enfrentar el futuro unidos, constituyendo un clímax atípico para una producción de los años ’50, sobre todo por el apenas velado mensaje que da por tierra

por la novela The Purple Cloud, de M. P. Shiel, que

con dos de las tradiciones más caras de la década: la

ofrece una sórdida mirada sobre un Estados Unidos

pureza racial y la monogamia.

devastado por la guerra nuclear, en la que resuena la

La última película estrenada en 1959 que nos interesa

inßuencia de Los últimos cinco (1951), matizada con el

en nuestro recorrido es la franco-italiana Los ojos sin

tema de las relaciones interraciales. Así, los tres sobre-

cara (Les yeux sans visage), una propuesta altamente

vivientes protagonistas son un hombre negro llamado

controvertida, que suscitó innumerables críticas en

Ralph Burton (Harry Belafonte), una chica inocente,

Gran Bretaña, incluyendo una polémica mayor en el

Sarah Crandall (Inger Stevens), y el bizarro aventurero

Festival de Cine de Edimburgo, donde fue original-

Benson Thacker (Mel Ferrer). Burton es un minero

mente estrenada en las Islas. La trama, en esencia,

que ha permanecido durante varios días enterrado

presenta una situación típica de las Þcciones pulp: el

por un derrumbe. Cuando Þnalmente logra escapar

brillante doctor Génessier (Pierre Brasseur), respon-

CIENCIA-FICCIÓN

Otro hito en este recorrido lo constituye el Þlm The World, the Flesh and the Devil, una cinta inspirada

231

sable del accidente que desÞguró a su hija Christiane (Edith Scob), comienza un sangriento devenir en el que «roba» el rostro de diferentes jóvenes, con el objetivo de transplantarlo en el de su hija. Obviamente, todos los experimentos fracasan y las víctimas fallecen, y en el Þnal, los perros que el cientíÞco tiene para llevar a cabo su trabajo, lo atacan, destrozándole la cara, mientras una ya demente Christiane, todavía sin rostro, se pierde en la oscuridad… Aunque se trata del segundo largometraje del director Georges Franju, un militante del surrealismo, la cinta fue la primera de su autoría en estrenarse en Gran Bretaña y los Estados Unidos, causando una enorme impresión. En 1936, antes de embarcarse en una exitosa carrera como realizador de cortos, Franju había fundado la Cinemateca Francesa con Henri Langlois, y fue claramente inßuido por los preceptos intelectuales de su compañero del alma Luis Buñuel y por el ambiente de la Nueva Ola francesa, imperante en ese momento. El cine de ciencia-Þcción de los años ’50 estableció los más Þrmes paradigmas del género en el celuloide, y el periplo que hemos trazado no tiene la pretensión de ser completo ni excluyente. Simplemente es una base

232

generales, que sirvan para acotar más especíÞcamente

CIENCIA-FICCIÓN

a partir de la cual podemos sacar algunas conclusiones el canon de los Þlms pasibles de ser incluidos en la historia de la ciencia-Þcción. Sin embargo, antes de establecer esos puntos comunes, queremos presentar otros dos hechos fundamentales para el género que ocurrieron durante el transcurso de los ’50: por un lado, la decadencia y desaparición de los seriales, que fueron una importante fuente de inspiración para el desarrollo de la ciencia-Þcción en el celuloide a partir

En la página anterior, un afiche promocional y una nueva imagen de The World, the Flesh and the Devil, junto a un afiche de Los ojos sin cara. A la derecha, una escena de Los ojos sin cara, una interesante propuesta de signo surrealista.

de los años ‘30, y que cumplieron un rol similar al de las revistas pulp respecto del auge y consolidación de la literatura del género en la cultura popular, primero anglosajona y posteriormente –aunque en algunos casos, casi en paralelo–, de todo el mundo; por el otro, la popularización y proliferación de las películas japonesas dedicadas a la ciencia-Þcción, particularmente las kaiju eiga o películas de monstruos gigantes.

EL OCASO DE

LOS SERIALES

El advenimiento de la televisión como un nuevo medio capaz de proporcionar entretenimiento se produjo en los Estados Unidos en el transcurso de los años ’50. La competencia de la pantalla catódica fue tal que muy pronto los estudios registraron una baja en la venta de entradas de cine, lo que mermó sus ingresos, y encararon entonces un proceso de renovación tecnológica que les permitiera competir con éxito con el nuevo formato, como la inclusión del color como norma y el desarrollo de diferentes formatos de «pantalla ancha», ambos avances imposibles de replicar en la televisión de la época. Este cambio de paradigma, evidentemente, hizo impacto sobre los seriales cinematográÞcos, que eran realizados con presupuestos exiguos –lo que impedía premisas muy básicas, que ya estaban superadas en una sociedad que había atravesado con relativo éxito una sangrienta conßagración mundial y enfrentaba nuevos desafíos, como la «inÞltración comunista» o el advenimiento de generaciones mucho más cínicas y poco apegadas al ideal norteamericano; y la aparición de las series de TV, que en muchos casos contaban con la presencia de estrellas de la pantalla grande y que

CIENCIA-FICCIÓN

la incorporación de las nuevas tecnologías del cine–;

233

eran un tipo de consumo mucho más barato para las veladas vespertinas de la familia. De esta manera, a lo largo de los ’50 los seriales, fundamentales un par de décadas atrás, fueron languideciendo hasta su total extinción, y en este capítulo les ofrecemos un recorrido por los títulos crepusculares de la modalidad, relacionados con el género que nos ocupa en estas páginas. En 1950, Republic, uno de los estudios especialistas en las películas en entregas, estrena The Invisible Monster, un serial en 12 capítulos cuya trama presenta a un súper villano, apodado «El Fantasma Maestro» (the Phantom Ruler, interpretado por el actor Stanley Price), empeñado en la conquista del mundo. Para conseguir una fuerza de ataque, el personaje enrola a una serie de extranjeros, todos ellos expertos en algún área técnica, y los chantajea para ponerlos a su servicio. El Fantasma utiliza una capa con capucha negra, que ha sido tratada con un producto químico especial y con la que logra hacerse invisible una vez que se ubica bajo el inßujo de un rayo de luz, también especial, que sus secuaces proyectan desde el techo de un camión. Después de que el Fantasma ejecuta un brillante robo bancario, las autoridades ponen a

234

quien, con la eÞciente asistencia de Carol Richards

CIENCIA-FICCIÓN

cargo de la investigación a Lane Carson (Richard Webb) (Aline Towne), inicia la persecución del criminal. Tras una serie de delitos, los sicarios del Fantasma intentan robar un camión con productos químicos, que el villano necesita para mantener su invisibilidad, pero Carson se las ingenia para impedirlo. Poco después, el Fantasma se entera de que los químicos están almacenados en un depósito con custodia, y esboza un ingenioso plan para acceder al producto sin generar

En la página anterior, afiche promocional de Atom Man vs. Superman, junto a una imagen y una foto de lobby de The Invisible Monster. En esta página, a la derecha, tres fotogramas de Atom Man vs. Superman, el segundo serial del Hombre de Acero.

sospechas. Carson, enterado de la desesperación del villano por obtener el contenido de los tambores de sustancias químicas, manda a analizarlas, descubriendo sus increíbles propiedades. Finalmente, el villano considera que sus ayudantes forzados se han transformado en un peligro para su seguridad, y decide asesinarlos. Así, electriÞca el piso de su guarida secreta, pero Carson logra detenerlo a tiempo, y en el combate que se desarrolla a continuación entre los dos enemigos mortales, el Fantasma comete un error y termina él mismo electrocutado en su propia trampa. La trama de The Invisible Monster resulta un poco ingenua, incluso para la época de su estreno, sobre todo si tenemos en cuenta las acciones que el villano de turno lleva a cabo para su planiÞcada conquista del mundo y lo absurdo de su Þnal. También en 1950, Columbia decide presentar un segundo serial dedicado al Hombre de Acero, Atom Man vs. Superman, que desarrolla su particular historia a lo largo de 15 entregas episódicas. Un criminal enmascarado, conocido como el «Atom Man» del título, instaura un reino de terror en Metrópolis, amenazando incluso con destruir toda la ciudad. Los periodistas del Daily Planet Clark Kent (también Alyn), Lois Lane (Noel Neill) y Jimmy Olsen (Tommy Bond), son asignados para cubrir la historia. Mientras tanto, el genio criminal Lex Luthor (Lyle Talbot) sale de prisión y declara que es un hombre reformado, pero pronto se descubre que Luthor y el «Atom Man» son una misma persona. En tanto mantiene la apariencia de ser un ciudadano modelo, Luthor no pone freno a sus tendencias criminales, y adquiere entonces una

CIENCIA-FICCIÓN

conocido como Superman e interpretado por Kirk

235

estación de televisión, para utilizarla como base secreta, a través de la cual ejecuta una serie de delitos de los que se hace responsable al «Atom Man». Luthor inventa, además, una kryptonita sintética, con la cual pone fuera de combate a Superman, y el héroe es encerrado en una especie de dimensión vacía, fuera de la realidad, por medio de otro ingenioso artefacto creado por Luthor. Incapaz de actuar en la realidad, el héroe se las ingenia para operar el teletipo del Daily Planet, y de esa manera se comunica con Lois y Jimmy, asegurándoles que pronto estará de regreso, algo que concreta poco después, escapando de su prisión inmaterial. Luthor intenta entonces destruir Metrópolis con otra de sus máquinas infernales, el «vibrador sónico», y para evitar ser alcanzado, abandona la Tierra a bordo de una nave espacial, en la que lleva a Lois como rehén. Superman debe emplearse a fondo para evitar la destrucción del mundo, pero así y todo es capaz de seguir a Luthor por el espacio, derrotarlo y regresar a la Tierra con Lois, mientras el villano vuelve una vez más tras las rejas. Secuela del exitoso serial presentado por Columbia en 1948, Atom Man vs. Superman es un producto con un evidente mejor presupuesto, aunque su historia

236

similares, incluso con la presentación de un villano

CIENCIA-FICCIÓN

sea tan adocenada como la de otros varios proyectos enmascarado que, poco a poco y pese a ser parte integral del título, pierde relevancia cuando se descubre que detrás del antifaz se encuentra Lex Luthor –quien debuta de esta manera en el celuloide–. Pese a todo, los seriales del Hombre de Acero protagonizados por Kirk Alyn fueron muy exitosos en su momento, y considerados por la audiencia como parte de los más logrados en el propósito de adaptar una historieta a

En esta página y en la anterior, dos diferentes imágenes, una foto de lobby y un afiche promocional de El hombre de Marte, tercera incursión de Republic en el tema de la invasión marciana, imbuida de la paranoia propia de los ‘50.

la pantalla grande.

defensa, intentando forzar al gobierno a una rendición

Ya ubicados en 1951, Republic estrena El hombre

incondicional. Helen Hall (Lois Collier), la hermosa asis-

de Marte (Flying Disc Man from Mars), un producto

tente de Fowler, es secuestrada por Mota y trasladada

dividido en 12 entregas consecutivas. En la trama, el

como rehén a la base secreta del marciano, pero Fowler

aviador Kent Fowler (Walter Reed) es convocado por

descubre la ubicación del refugio y logra rescatar a la

el Dr. Bryant (James Craven), un respetable miembro

muchacha. Mientras combate con los sicarios de Mota,

de la comunidad cientíÞca, para investigar la aparición

una bomba atómica cae en la lava del volcán y genera

de un OVNI, que ha sobrevolado la planta de aviones

una inesperada erupción. Fowler y Helen abordan la

experimentales que el cientíÞco regentea. Fowler

nave del marciano y huyen a toda prisa, mientras la

Þnalmente derriba a la misteriosa nave, y cuando

furia de la naturaleza acaba con Mota y Bryant, y sus

Bryant investiga el lugar de la caída, descubre a un

planes de dominación mundial.

sobreviviente, un cientíÞco marciano llamado Mota

El hombre de Marte es la tercera de las invasiones

(Gregory Gaye), quien le explica al terráqueo que su

marcianas imaginadas por los guionistas de seriales de

pueblo es tecnológicamente avanzado y que él está

Republic, y el intencionado acento europeo del inglés

dispuesto a recompensarlo si le ayuda en su propósito

que habla Mota muy pronto permite inferir que el

de conquistar la Tierra. En este punto, el público se

producto está menos enfocado en la invasión aliení-

entera de que Bryant ha colaborado secretamente con

gena que en la realidad de la Guerra Fría y la paranoia

los nazis durante la Segunda Guerra Mundial, por lo

de la sociedad de la época, que fuera brillantemente

que su aceptación de la propuesta criminal deja de

expuesta en productos cinematográÞcos de ese mismo

ser sorpresiva. De esta manera, la existencia de Mota

año, como la genial La cosa, aunque la trama del serial

permanece desconocida para Fowler.

en ningún momento alcanza la potencia de ese tipo

El marciano establece su base secreta de operaciones

de propuestas contemporáneas.

en el cráter de un volcán inactivo, y utiliza una nave

Siguiendo con nuestro periplo, este mismo año aparece en los cines otro serial de Columbia, intitulado La

le provean de los materiales necesarios para llevar ade-

isla misteriosa (Mysterious Island), que desarrolla su

lante su conquista. Además, cuenta con la asistencia

propuesta a lo largo de 15 episodios. En marzo de 1865,

de dos secuaces, Drake (Harry Lauter) y Ryan (Richard

casi en la conclusión de la Guerra Civil Norteamericana,

Irving), contratados para la tarea por Bryant.

el capitán Cyrus Harding (Richard Crane), prisionero

Después de una serie de robos, Fowler comienza a

de los confederados, escapa de prisión en un globo

desconÞar del cientíÞco terrestre y, eventualmente,

con el corresponsal de guerra Gideon Spilett (Hugh

conÞrma sus sospechas. Desesperados por haber sido

Prosser), el marinero Jack Pencroft (Marshall Reed),

descubiertos, Mota y Bryant comienzan una serie de

el hijo adoptivo del marino, Bert Brown (Ralph Hod-

ataques destructivos, lanzando pequeñas bombas

ges) y el sirviente del capitán, Neb (Bernie Hamilton).

atómicas sobre puentes, fábricas e instalaciones de

Durante cinco días, el globo viaja a la deriva, hasta

CIENCIA-FICCIÓN

en forma de semidisco para perpetrar los atracos que

237

En esta página, afiche promocional y una imagen del singular serial La isla misteriosa. En la página siguiente, tres diferentes escenas de Captain Video, el primer y único serial cinematográfico inspirado en una serie de televisión, estrenada en 1949 por la cadena Dumont.

comenzar a caer en una isla aparentemente desierta. Harding, quien ha saltado del globo en un intento de aminorar el peso y salvar a sus compañeros, es rescatado de ahogarse en el mar por una extraña Þgura, que se desvanece con él. Una muchacha alienígena llamada Rulu (Karen Randle) y otros dos hombres del planeta Mercurio, aterrizan en su nave sobre la isla, provocando el derrumbe de la cueva donde se ocultan los náufragos del globo. Rulu y sus compañeros establecen una base en la isla, mientras que Harding, inconciente, es trasladado al refugio del capitán Nemo (Leonard Penn). Ayrton (Terry Frost), un antiguo náufrago que ha involucionado al salvajismo, ataca con ferocidad a Bert, quien es rescatado por sus amigos, y posteriormente, todo el grupo es atacado por otros salvajes locales, hasta que logran escapar de la caverna que los ha aprisionado. Mientras tanto, Rulu y sus hombres siguen buscando un misterioso metal, que es el objetivo de su viaje a la Tierra. Los náufragos descubren a Harding inconsciente en un claro de la jungla, pero antes de que puedan rescatarlo, es atrapado por otra banda de lugareños. El grupo se divide, y mientras unos van en busca de armas y municiones en los restos del estragado globo,

238

quien eventualmente rescatan. Un nuevo encuentro

CIENCIA-FICCIÓN

otros dos siguen a los secuestradores de Harding, a con Ayrton lo revela como un traidor, y tras una serie de aventuras con los salvajes, con idas y vueltas, los náufragos terminan en una cueva donde se ubica la base de Nemo. Allí entran en escena los piratas que dejaron a Ayrton varado en la isla, comandados por el capitán Shard (Gene Roth), quien tras capturar al náufrago salvaje, se las ingenian para también atrapar a los antiguos tripulantes del globo. Mientras se

desarrolla una pelea entre los dos grupos, Bert vuelve a ver a la misteriosa Þgura que rescatara a Harding del océano, pero es capturado por Rulu. El grupo, entretanto, huye de una explosión perpetrada por los piratas, internándose en lo profundo de la cueva. A partir de ese momento empiezan una serie de enfrentamientos, que incluyen a los piratas, los salvajes, los náufragos y los alienígenas, y que resultan en capturas de personajes de uno y otro bando, y las consecuentes huidas desesperadas. Finalmente, los náufragos acuerdan una alianza con los extraterrestres para combatir a los piratas y rescatar al desaparecido Bert. Pero las cosas se complican y vuelven a ßorecer las traiciones cruzadas, con lo que los piratas y los náufragos deciden enfrentar juntos a los extraterrestres, que ahora cuentan con la ayuda de los salvajes locales. La lucha se complica y Þnalmente el capitán Nemo revela su presencia, ayudando a los terrícolas e informándoles que Rulu está en busca de un poderoso explosivo, capaz de destruir el mundo entero. Después de varios enfrentamientos y rescates al borde de la muerte, Harding y los suyos derrotan a Rulu, quien sin embargo se las ingenia para activar un poderoso explosivo antes de huir. Al explotar, la bomba acaba con la isla misteriosa, mientras el grupo de náufragos Obviamente, el serial tiene poco que ver, salvo en detalles, con la novela homónima de Julio Verne en la que supuestamente está inspirado. Cautivados con el éxito que estaba teniendo la ciencia-Þcción, tanto literaria como cinematográÞca, en ese momento, los guionistas del estudio decidieron incluir la presencia de los invasores de Mercurio en la trama, perpetrando una auténtica rareza sincrética, que combina nume-

CIENCIA-FICCIÓN

es rescatado por un barco que pasa cerca del lugar.

239

En esta página y en la siguiente, diferentes imágenes y afiches promocionales de Guerra entre planetas, un serial concebido por Republic para establecer entre el público a su personaje original Comando Cody, que no alcanzó el relieve que podría haber tenido.

rosos géneros y fuentes, y que permanece como hito interesante en el desarrollo de la ciencia-Þcción en la pantalla grande. Siempre en 1951 y también con producción de Columbia, llegó al cine el serial Captain Video, que desarrolla su propuesta a lo largo de 15 capítulos. Un genio cientíÞco, que ha desarrollado innumerables armas de neto corte futurista en beneÞcio de la humanidad, es conocido como el capitán Video (Judd Holdren), quien junto a sus «Video Rangers» –entre los que se encuentra su ayudante, Gallagher (Don C. Harvey)–, está comprometido a defender al mundo de amenazas, tanto terrestres como extraterrestres. En su cuartel general secreto, en las montañas, Video ha creado diferentes artefactos tecnológicos que le permiten cumplir con su misión de manera óptima. Después de capturar a una banda de criminales que eran capaces de desvanecerse en el aire, Video y su ayudante son informados de la existencia de extraños impulsos electrónicos y magnéticos, que están afectando al clima. El grupo decide entonces visitar al Dr. Tobor (George Eldredge), para encontrar una explicación al fenómeno, sin sospechar que el cientíÞco, secretamente, está aliado con Vultura (Gene Roth), un dictador extrate-

240

escapando de la Tierra en un cohete, pero Video y sus

CIENCIA-FICCIÓN

rrestre. Tobor intenta mantener su alianza en secreto, comandos descubren la maniobra y deciden seguirlo en su propia nave. Ya en el planeta natal de Vultura, la nave de Video y compañía es descubierta por el dictador y por Tobor, quienes intentan interceptarla cambiando el curso de dos cometas para que choquen con ella. Los héroes logran escapar y, de paso, descubren la traición del cientíÞco terrestre, y a partir de allí, Vultura intenta destruir al paladín terrestre con una

infinidad de aparatos, incluyendo un ejército de hombres metálicos. Sin embargo, el capitán Video y sus hombres logran conjurar todos los peligros, acabando finalmente con los dos villanos. Una de las características de relieve de Captain Video es que fue el primer y único serial cinematográfico basado en una serie de televisión, que fuera presentada en 1949 a través de la cadena Dumont, y que, en muchos sentidos, es superior al producto en celuloide. En 1952, Republic estrena otra propuesta en entregas, Guerra entre planetas (Radar Men from the Moon), también conocida localmente como Comando Cody, el intrépido, cuya trama se desarrolla a lo largo de 12 capítulos. Una serie de misteriosas explosiones atómicas devasta los principales centros industriales e instalaciones militares de los Estados Unidos. Un brillante científico conocido como Comando Cody (George Wallace) es puesto a cargo de la investigación del hecho, asistido por sus ayudantes Joan Gilbert (Aline Towne) y Ted Richards (William Bakewell). Utilizando tecnología de punta, como un traje volador a reacción y una nave espacial capaz de viajar a otros planetas, los héroes intentan descubrir al responsable de los ataques. Después de determinar que las explosiones han sido tium, que obviamente sólo puede obtenerse en el satélite natural de la Tierra, Cody y sus amigos viajan a la Luna, descubriendo una civilización oculta. Los selenitas son gobernados por el malvado Retik (Roy Barcroft), quien le informa a Cody que su gente está muriendo en virtud de la tenue atmósfera del satélite, lo que lo obliga a intentar conquistar la Tierra para salvar a su pueblo. Retik trata de matar a Cody con un

CIENCIA-FICCIÓN

ocasionadas por un extraño elemento llamado luna-

241

arma de rayos, pero después de un forcejeo, el héroe logra escapar y regresa a la Tierra con sus ayudantes. Sin embargo, el tirano lunar envía a uno de sus sicarios, Krog (Peter Brocco), hacia nuestro planeta, con la misión de enrolar criminales locales para acabar con Cody. Así, los héroes deberán enfrentarse con los delincuentes en varias contiendas, que frustran una y otra vez la planeada invasión de Retik. El dictador selenita viaja entonces él mismo a la Tierra, pero Cody se las ingenia para derrotarlo y, eventualmente, provocar su muerte. Aunque no guarda relación alguna con el serial El rey de los hombres cohetes, estrenado también por Republic en 1949, Guerra entre planetas sigue una premisa similar y es un intento por establecer a su personaje original Comando Cody entre la audiencia. La propuesta no es totalmente deleznable, pero tampoco todo lo buena que podría haber sido, más si se tiene en cuenta la calidad de la ciencia-ficción cinematográfica que se estrenaba en ese momento y la consecuente evolución del género hacia su mayoría de edad. El mismo estudio, y también en 1952, presenta Zombies of the Stratosphere, otro serial de ciencia-ficción, con 12 capítulos de extensión. En la trama, Larry Martin

242

bernamental de defensa, detecta un extraño cohete

CIENCIA-FICCIÓN

(Judd Holdren), miembro de una organización gujusto en el momento en que desciende sobre la Tierra. Decide entonces usar su traje volador jet y viaja al sitio del aterrizaje, donde descubre a dos marcianos, Marex (Lane Bradford) y Narab (Leonard Nimoy), quienes son la vanguardia de una inminente invasión. Con la ayuda de Roth (John Crawford) y Shane (Ray Boyle), dos criminales locales, los marcianos planean construir una bomba de hidrógeno, para sacar a la Tierra de

En esta página y en la anterior, afiche promocional y tres fotogramas de Zombies of the Stratosphere, el último serial estrenado por Republic que incluía en su trama a un «hombre cohete» y a sendos invasores del planeta Marte.

renombre con el paso del tiempo por la presencia de

en un espacio más cercano al sol, lo que les permitirá

Leonard Nimoy en el rol de uno de los marcianos.

recuperar la atmósfera y el clima. Los invasores y sus

Nimoy contaba con 21 años en ese momento, y ha de-

seguidores terrestres intentan conseguir una serie de

clarado en una entrevista televisiva que no le preocu-

instrumentos y componentes científicos, vitales para su

pó demasiado el tipo de material, ya que su decisión

maquinación, pero son derrotados una y otra vez por

pasaba únicamente por hacerse con el sueldo de ese

Larry, quien cuenta con la ayuda de dos asistentes, Bob

trabajo (500 dólares), un dinero muy necesario para

Wilson (Wilson Wood) y Sue Davis (Aline Towne).

el joven actor en ese entonces.

La base secreta de los marcianos se encuentra en una

En comparación con las películas que se estrenaban

cueva, accesible únicamente a través de una puerta

en esa época, como La cosa o El día que paralizaron la

submarina, y mientras Larry y Bob rastrean un uranio

Tierra, este y los demás seriales de los ’50 iban muy a

que ha sido robado por los visitantes, descubren la

la zaga, y era evidente, incluso entre el público infantil

guarida y casi resultan muertos en la pelea que se

al que apuntaban las producciones en entregas, que

desata entre ellos y los alienígenas, quienes tienen

nadie iba a pagar por un tipo de historia y un tipo

la capacidad de permanecer bajo el agua mucho más

de propuesta a la que podía accederse, de manera

tiempo que los humanos.

gratuita, a través de la ya pujante televisión.

Finalmente, los marcianos preparan un mecanismo de

Siguiendo con este recorrido, en 1953 Columbia ofrece

relojería que hará estallar la bomba H que han logrado

un nuevo producto en capítulos relacionado con el

construir, y luego escapan en su cohete, pero después

género que nos ocupa, The Lost Planet, que se de-

de un enfrentamiento con armas de rayos con Larry,

sarrolla a lo largo de 15 entregas semanales. Dentro

la nave queda averiada y se estrella, acabando con

de un volcán inactivo, el genio de la electrónica Ernst

todos sus tripulantes excepto Narab, quien le revela al

Grood (Michael Fox) y su seguidor Jarva (Jack George)

héroe la localización exacta de la bomba, justo antes

han construido un súper laboratorio, desde el cual el

de morir. En una carrera contra el tiempo, Larry vuela

Dr. Grood es capaz de controlar al planeta Ergro. El

a la cueva de los invasores, accede por la entrada sub-

profesor Edmund Dorn (Forrest Taylor), quien es man-

marina y salva el día, desarmando el artefacto atómico

tenido prisionero en el planeta de marras, es explotado

segundos antes de que estalle.

por Grood por su enorme conocimiento científico. El

Zombies of the Stratosphere fue el tercer y último

periodista Rex Barrow (Judd Holdren) y su fotógrafo

serial de Republic protagonizado por un «hombre-

Tim Johnson (Ted Thorpe) son enviados a investigar

cohete», además de ser el tercer y último que lidia

cuando una cosmonave del Dr. Grood se estrella en

con una invasión proveniente de Marte. En la trama

el Mt. Vulcan, pero el villano observa, a través de un

también aparecen los robots que eran distintivos de los

ingenio de radar, la llegada de los reporteros y los

seriales de este estudio, y pese a su historia maniquea

toma prisioneros. Grood obliga a Rex y a Tim, junto con

y sus actores promedio, esta propuesta alcanzó cierto

Ella (Vivian Mason), la hija del profesor Dorn, a subir a

CIENCIA-FICCIÓN

su órbita y de esa manera hacer lugar a su mundo

243

su nave espacial, y los envía con rumbo a Ergro. En el planeta, Dorn, desconociendo que su hija viaja en el cohete, lo saca de curso, apuntándolo hacia un volcán en actividad. Sin embargo, el profesor advierte que la nave está tripulada justo a tiempo como para rectificar su curso y permitir que aterrice sin problemas. Rex, Tim y Ella son entonces capturados por Reckov (Gene Roth), el ayudante de Grood, quien los hipnotiza con unos extraños aparatos de control mental, que van en la cabeza. Así, los tres personajes son enviados a extraer cosmonium, un metal precioso, pero Rex finalmente logra resistir el control del aparato y escapa, yendo en busca del profesor Dorn a su laboratorio. Mientras tanto, en la Tierra, Grood mira el encuentro de Rex con Dorn a través de otro singular artilugio, y decide volar a Ergro, con la intención de asesinar a Ella, a modo de castigo para Dorn, por conspirar en su contra. Avisado de las negras intenciones del villano, Rex lleva a Ella a una cueva, para protegerla, pero Grood los ataca con un ingenio y lo hace desaparecer. Ambos personajes reaparecen cuando Dorn ejecuta un contraataque, pero el científico queda desarmado. Rex y Ella dejan la cueva y encuentran a Tim en la mina de cosmonium, pero los tres son capturados por hombres

244

Rex un nuevo aparato, una pequeña caja conteniendo

CIENCIA-FICCIÓN

robot al servicio de Grood. Dorn entonces le revela a dornita, un poderoso metal que, combinado con el cosmonium, produce un rayo de invisibilidad. El grupo decide hacer a Rex invisible para que pueda regresar a la Tierra en el cohete de Grood. El periodista se esconde en la nave, pero tras arribar a la Tierra, el villano lo descubre después de que Rex, accidentalmente, pierde la caja con la dornita y se hace nuevamente visible. Grood ordena que sea desintegrado, pero el

En la página anterior, un nuevo afiche promocional y una imagen de lobby de Zombies of the Stratosphere, junto a un fotograma de The Lost Planet. A la derecha, tres imágenes de The Lost Planet, el último serial de CF estrenado por Columbia.

protagonista logra encontrar antes la caja y volverse invisible una vez más. En la redacción del diario donde trabaja Rex, el editor Ned Hilton (Pierre Watkin) se muestra renuente a creer la historia de su periodista, y cuando las autoridades también se niegan a ayudarlo, Rex entiende que debe volver solo a Ergro. El heroico periodista es recapturado por Grood, quien utiliza una máquina de control del subconsciente sobre él y decide asesinarlo. El hombre, sin embargo, se salva una vez más, y en lugar de insistir, Grood decide utilizarlo para descubrir los secretos de Dorn, enviándolo de regreso a Ergro. El profesor le muestra al periodista un avión nuclear secreto, y entre ambos deben intentar ganar al robot #9 (Lee Roberts) para su causa. Ella y Tim, hipnotizados y bajo control mental, tienen la orden de asesinar a los dos hombres, pero Grood impide que el intento prospere, para no perder los conocimientos y la creatividad de Dorn. Rex y el robot #9 escapan en el avión atómico, pero son seguidos de cerca por Grood, quien los rastrea con otro aparato, y ordena a Dorn que apunte un arma sobre el avión. Una falla en un sistema del ingenio volador salva a sus dos tripulantes de una muerte segura, y ambos logran llegar a la Tierra. El robot, cuyo verdadero nombre es Wesley Bren, se contacta con su empleador, fabricación de novedades tecnológicas, y le cuenta de la cantidad de artefactos que ha visto en Ergro, con lo que Wolper decide que otro empleado, Hopper (John L. Cason), preste su ayuda a Bren. Los dos hombres se encuentran con Rex en el volcán que sirve de base a Grood e intentan capturarlo, pero fallan. Rex entonces se comunica por radio con Dorn y le cuenta que Bren y Hopper han sido atrapados por el

CIENCIA-FICCIÓN

Ken Wolper (Leonard Penn), un hombre dedicado a la

245

villano. Usando sus instrumentos, Dorn logra que los dos hombres tengan una chance, y tras una serie de percances, finalmente ambos y Rex aterrizan sanos y salvos en Ergro. En la Tierra, mientras tanto, Wolper ha enviado a otro hombre, Darl (Nick Stuart) a buscar a Bren y Hopper, pero Grood lo captura y realiza una alianza con Wolper. El villano y Darl vuelan a Ergro, Bren traiciona a Rex y se une a Grood. Rex y Dorn son entonces encerrados en una cabina de rayos hipnóticos y parecen desaparecer, pero en realizad son transformados en invisibles por Alden (Frederic Berest), un asistente de Dorn. Darl, Bren, Hopper, Ella y Tim son encarcelados por Grood, pero Rex, que permanece invisible, los rescata. Mientras intentan desactivar el cañón cósmico con el que el villano pretende doblegar al universo entero, Ella y Tim son vueltos a capturar, y utilizando a la chica como rehén, Grood obliga a Alden a volver visibles a su jefe y al periodista. Una vez más, el villano intenta asesinar a los héroes, que son milagrosamente rescatados en el último momento. Así sigue la historia, con nuevos cambios de bando, salvatajes al borde del abismo y demás, hasta arribar al final en el que Grood y Reckov son enviados al espacio, Ergro liberado y la Tierra salvada de la amenaza.

246

a su jefe en su periplo hacia el infinito, pero antes se

CIENCIA-FICCIÓN

Jarva, el ayudante de Grood, decide también unirse las ingenia para destruir el laboratorio del volcán, con todos los inventos del villano dentro. Con un estilo y contenido similares a Captain Video, este serial es uno de los más inverosímiles dentro del género, además de ser uno de los peores de la historia del cine en entregas. Su obvia intención fue la de capitalizar la enorme popularidad con que contaban los programas televisivos de ciencia-ficción, algo que

En la página anterior, otro afiche promocional y dos nuevas escenas del singular The Lost Planet. En esta página, a la derecha, dos imágenes de Panther Girl of the Kongo, el serial que clausura este tipo de productos en la pantalla grande.

finalmente no lograría pese a su cuidada producción de estudio. El último serial relacionado con la ciencia-ficción que incluiremos en este capítulo es Panther Girl of the Kongo, un producto realizado por Republic y estrenado en 1955, con una duración de 12 entregas consecutivas. El doctor Morgan (Arthur Space), un químico brillante que trabaja en África, ha descubierto unas substancias que transforman a los cangrejos en monstruos gigantescos. Con la ayuda de sus secuaces Cass (John Daheim) y Rand (Holly Bane), Morgan utiliza a sus monstruos para espantar a los pobladores locales y de esa manera controlar la mina de diamantes que ha descubierto en la zona. A los sicarios del científico se opone la heroica Jean Evans (Phyllis Coates), también conocida como la «Mujer Pantera» del título. En sus aventuras, la chica cuenta con la ayuda de Larry Sanders (Myron Healey), un gran cazador. Ambos desconocen la participación de Morgan en la intriga, y mientras trabaja en un documental sobre la vida en la jungla, Jean se topa con una de las monstruosidades del villano. Morgan intenta apoderarse de la película, para evitar una investigación de las autoridades, y entonces, con la ayuda de nativos renegados, Cass y Rand atacan a Larry y roban el film, destruyendo la evidencia El científico controla a cierto número de nativos, haciéndolos adictos a una droga. Sabiendo que Jean y Larry están alertas, Morgan decide liberar a una de sus criaturas, pero uno de los nativos es herido en el proceso. Cass y Rand deciden enviar al hombre al campamento de Jean, para que sea atendido, con la intención de emboscar a la muchacha. Tras examinar las heridas del hombre, Larry decide preparar una

CIENCIA-FICCIÓN

de las actividades non sanctas de Morgan.

247

partida para cazar a la bestia responsable, mientras que Jean sale a buscarla a lomos de un elefante. Cass, Rand y dos de sus nativos adictos atacan a Jean, y la chica deja a su elefante y huye corriendo por la jungla, saltando luego desde un precipicio hacia el lago. Los nativos, seguidos por Cass y Rand, la persiguen, pero ella logra eludirlos nadando bajo el agua. Cuando finalmente decide alcanzar la costa, la muchacha es atrapada por otros nativos fieles a Morgan, quienes la atan a un árbol y luego atraen a un enorme gorila con sus tambores. En ese momento llega Larry, quien dispara al simio pero es dejado inconsciente por un golpe de la bestia. El gorila vuelve a centrarse en su ataque a Jean, pero Larry despierta y vuelve a dispararle, esta vez hasta matarlo. Temeroso de que se produzca un levantamiento entre los nativos por el miedo a los monstruos sueltos en la selva, Larry va al aislado complejo de investigación de Morgan, a avisarle al científico del peligro inminente. El hombre miente a Larry, ocultando sus verdaderas intenciones, pero en ese momento llegan Cass y Rand, y Larry les apunta, ordenándoles arrojar sus armas. Morgan niega conocerlos, y el cazador le dice que va a llevarlos ante las autoridades, para que los inte-

248

mientras atan a sus secuaces, pero poco después, Cass

CIENCIA-FICCIÓN

rroguen. Morgan simula ayudar a Larry, y colabora y Rand se liberan y en la lucha que sigue, Morgan cae al suelo, desmayado por un golpe. Después de que Larry es puesto fuera de combate, Morgan «revive» y ordena a sus secuaces que escapen. Cuando Larry se recupera, Morgan le dice que ha espantado a los hombres con un arma, y después de que el cazador se va de su laboratorio, ordena el regreso de Cass y Rand. En el momento en que Jean y Larry van en busca

En esta página y en la anterior, tres nuevos fotogramas y otro afiche promocional de Panther Girl of the Kongo, donde se puede apreciar la belleza de Phyllis Coates, quien debe lidiar con varias criaturas, incluyendo cangrejos gigantes.

del oficial Harris (James Logan) para que investigue

Kongo es un producto bastante bueno, con excelentes

qué está ocurriendo en la jungla, Cass y Rand les

interpretaciones de su pareja protagonista –ambos

tienden una trampa en una zona plagada de arenas

figuras habituales en los westerns de clase B– y buen

movedizas. Larry queda atrapado, mientras que Jean

acompañamiento de los secundarios. La rubia Coates,

y Harris luchan contra un grupo de nativos que les

quien interpretó a Lois Lane en Superman and the

arrojan flechas. Jean finalmente logra rescatar a Larry,

Mole Men (1951) y también en la primera temporada

en tanto que el policía repele sus atacantes rifle en

de Adventures of Superman, en televisión, luce incluso

mano. Harris se lleva a un herido para interrogarlo, y

más joven en este serial que en los trabajos citados, y

es acompañado por Larry.

pese a sus 28 años de edad, luce realmente bien con

Cass y Rand conducen a las bestias de Morgan cerca

su traje selvático de minifalda, un duplicado exacto

de un poblado, con la intención de generar un le-

del utilizado por Francis Gifford en La hija de la selva (Jungle Girl), otro serial de Republic estrenado en 1941,

lugareño. Los hombres comienzan a perder su fe y a

del cual se utilizaron algunas escenas por razones de

creer que, de alguna manera, Jean es la responsable

economía. Finalmente, otra característica singular de

por los actos de los monstruos, ya que ha fallado en

este film en episodios es su postura no racista respecto

su intención de matarlos. Para lograr nuevamente su

de los nativos africanos, algo que no era habitual en

lealtad y obediencia, Jean acepta entrar a una jaula

el medio, y los muestra como seres humanos dignos

y combatir con un león armada sólo con un cuchillo.

y maduros. Esta actitud, sumada a las sólidas inter-

Tras un duro enfrentamiento, la chica sale airosa de la

pretaciones del elenco podrían haber marcado un

prueba, ante la mirada atónita de los nativos.

renacimiento del género episódico en Republic, pero

Las aventuras se suceden, mientras Morgan continúa

el producto pasó casi desapercibido para el público,

manejando los hilos desde las sombras. Las autoridades

cada vez más preocupado por el peligro comunista y

descreen de las afirmaciones de la pareja protagónica

la creciente paranoia social fronteras hacia adentro

hasta que ambos logran nuevas filmaciones de las

de los Estados Unidos.

criaturas, con lo que ganan la atención de comisio-

Sin estruendo y con sus épocas de gloria ubicadas dos

nado Stanton (Ramsay Hill). En el final de la historia,

décadas atrás, el serial desaparece definitivamente de

Larry y Jean logran descubrir los manejos de Morgan,

la pantalla grande, aunque su impronta y su imaginería

después de acabar con sus dos cómplices en la mina

ayudaron a sostener la ciencia-ficción cinematográfica

de diamantes, y deciden enfrentarlo, hasta que un

en épocas de escasez, como los años ’40, o forjaron un

gas venenoso de su invención acaba con el ambicioso

escenario más allá de lo cotidiano en los atribulados

científico.

años ’30. El cine de ciencia-ficción le debe mucho al

Considerando que se trata de uno de los últimos se-

serial del género, pese a lo cual no suele reconocérselo

riales de Republic (el último, estrenado también en

como parte integral de su rica historia.

1955, fue King of the Carnival), Panther Girl of the

CIENCIA-FICCIÓN

vantamiento de los nativos, y una de ellas mata a un

249

En esta página y en la siguiente, tres imágenes y un afiche promocional de Godzilla, rey de los monstruos, film de Ishirô Honda que inaugura el kaiju eiga, el subgénero de los monstruos gigantes nacido en Japón que se popularizó muy rápidamente en todo el mundo.

FIEBRE AMARILLA

LOS KAIJU EIGA

Otro de los hitos fundamentales del desarrollo del cine de ciencia-ficción en los años ’50, fue la aparición de los kaiju eiga. Kaiju es una palabra japonesa que significa «bestia extraña», aunque a menudo se la utiliza como sinónimo de «monstruo». El kaiju eiga es una película con monstruos, y existen otras categorías relacionadas, como el kaijin, que se refiere a criaturas humanoides; y el daikaiju, que se relaciona con los monstruos gigantes. Específicamente, el término kaiju se utiliza para referirse a lo que en Japón se conoce como entretenimiento tokusatsu. El tokusatsu está íntimamente ligado a las películas o telefilms que habitualmente presentan superhéroes y una gran variedad de efectos especiales. Este tipo de entretenimiento, frecuentemente, incluye géneros tales como la ciencia-ficción, la fantasía o el terror, pero el tokusatsu más conocido es el de las películas de monstruos, como las de Godzilla o criaturas semejantes. Sus orígenes pueden rastrearse en el primer teatro kabuki, pero su forma contemporánea comenzó a delinearse recién en los años ’50, a partir del nacimiento del citado Godzilla, uno de los monstruos más famosos de la historia del cine. Obviamente, nuestro recorrido por los hitos del género en esta década estaría incompleto sin reseñar este rico y original

CIENCIA-FICCIÓN

250

aporte japonés. La primera película de nuestro recorrido es Godzilla, rey de los monstruos (Gojira), estrenada en 1954. La criatura protagonista, junto con King Kong y el monstruo de Frankenstein, es uno de los monstruos más famosos y populares de la historia del cine, participando en más de 15 películas y lanzando al estrellato a un género que sería dominado por el dúo formado por el director Ishirô Honda y el especialista en efec-

tos especiales Eiji Tsuburaya, ambos en los estudios Toho. A diferencia de sus contrapartes occidentales, los monstruos japoneses suelen ser interpretados por actores vestidos en trajes de goma –en la cinta que nos ocupa, el encargado fue el productor Tomoyuki Tanaka–, que destruyen ciudades construidas a escala y que habitualmente viven su clímax en Tokio, localidad que debe ostentar el récord mundial de los ataques de monstruos gigantes. Godzilla es una criatura inspirada en el tiranosaurio que lucha con King Kong en el film de 1933, que vuelve a la vida tras la prueba de una bomba atómica. Cuando un barco de pesca japonés es atacado cerca de la isla de Odo, dos botes de rescate son enviados en su ayuda, pero resultan también destruidos, con unos pocos sobrevivientes. En la isla, un anciano aldeano reniega por su escasa pesca y culpa a «Gojira», recordando que en otros tiempos se sacrificaban jóvenes doncellas para pacificar al gigantesco monstruo marino. Los sobrevivientes de los naufragios llegan a la costa, y más tarde arriba un helicóptero con escépticos periodistas a bordo. Los nativos deciden ejecutar una ceremonia para apaciguar a la criatura, pero no funciona, y esa misma noche, mientras todos duermen, se desata una tormenta y «Gojira» llega con ella, desparramando Al día siguiente, los testigos del ataque llegan a Tokio, y el doctor Kyohei Yamane (Takashi Shimura) sugiere que debería enviarse un grupo a investigar en la isla. Al llegar, Yamane encuentra enormes huellas radioactivas, y cuando se da la alarma de un nuevo ataque, los aldeanos corren a las montañas, con la intención de enfrentar a la amenaza. Tras una breve escaramuza, los hombres deciden escapar, mientras que el monstruo

CIENCIA-FICCIÓN

destrucción a diestra y siniestra.

251

En esta página y en la siguiente, diferentes imágenes y otro afiche promocional de Godzilla, rey de los monstruos, el film que creó el paradigma del subgénero: criaturas que son las verdaderas protagonistas y personajes humanos que sirven de decorado para su destrucción.

regresa al océano. El doctor Yamane vuelve a Tokio para presentar su pesquisa y concluye que «Gojira» ha sido creado por una explosión atómica. Algunos pretenden ocultar el hecho, para evitar la condena y el temor internacionales, pero otros prefieren que la verdad salga a la luz. Finalmente, el origen de «Gojira» es revelado a la población. Se envían entonces una serie de naves con cargas de profundidad, con la intención de destruir a la criatura, pero el ataque fracasa y el monstruo aparece nuevamente, causando pánico en todo Japón. El gobierno le solicita a Yamane una manera para acabar con la amenaza, pero el científico pretende conservar a «Gojira» con vida y estudiarlo. Emiko (Momoko Kôchi), la hija de Yamane, decide romper su compromiso con un colega de su padre, el doctor Daisuke Serizawa (Akihiko Hirata), porque está enamorada de Hideto Ogata (Akira Takarada), un salvaje capitán de barco. Pero antes de poder concretar su decisión, Serizawa le comenta sobre un descubrimiento accidental, capaz de acabar con la vida en el mar mediante la sustracción del oxígeno del mismo. El hombre hace una pequeña demostración en su laboratorio y la chica queda comprometida a

252

compromiso. Esa noche, «Gojira» llega a la bahía de

CIENCIA-FICCIÓN

no revelar el secreto, sin poder romper tampoco su Tokio y va sobre la ciudad, y pese a que su ataque es rápido, siembra una enorme destrucción. A la mañana siguiente, el Ejército construye una línea de enormes torres eléctricas a lo largo de la costa de Tokio, capaz de descargar 50.000 voltios sobre la criatura, si ésta decide aparecer de nuevo. Los civiles son evacuados y llevados a refugios contra bombas. Por la noche, «Gojira» vuelve a atacar y pasa sin dificultar a través

CIENCIA-FICCIÓN

253

de las defensas eléctricas, derritiendo los cables con una especie de «aliento atómico» que sale de sus fauces. Un grupo de tanques de guerra abre fuego sobre el monstruo, pero sin resultado, y la ciudad queda de nuevo a su merced. Después de destruir casi por completo la capital japonesa, la criatura es atacada por la Fuerza Aérea, sin resultar herida, hasta que decide refugiarse otra vez en el mar. Tokio está en ruinas y los hospitales desbordados de víctimas, incluyendo algunas con quemaduras por radiación. Emiko es testigo de la devastación y le cuenta a Ogata sobre la máquina secreta de Serizawa. La chica cree que entre ambos pueden persuadirlo para que la utilice para detener a «Gojira», pero el científico se niega, lo que desencadena la reacción violenta del marino. Más tarde, mientras Emiko trata una herida menor de Ogata, Serizawa se disculpa pero sigue negándose a utilizar su arma sobre el monstruo. Sin embargo, cuando un noticiero muestra la devastación en toda su extensión, el científico accede a utilizar su invento, alegando que debe usarse sólo una vez y ser luego destruido definitivamente, por el bien de la humanidad. Serizawa quema entonces los documentos de su investigación, y Emiko llora desconsoladamente, porque sabe que el hombre está destruyendo el traba-

CIENCIA-FICCIÓN

254

jo de toda su vida con tal de detener a «Gojira». La Marina lleva a Ogata y a Serizawa a instalar el aparato del inventor en la bahía de Tokio. Los hombres bucean y encuentran a «Gojira» descansando. Ogata regresa a la superficie cuando Serizawa activa su ingenio, y en el momento en que el científico ve que el monstruo finalmente muere, corta también su propia línea de oxígeno, asegurando con su sacrificio que su invento no podrá ser utilizado para dañar a

En esta página y en la anterior, afiche promocional y tres fotogramas de Gojira no gyakushû, la segunda entrega de las películas que tienen al famoso monstruo japonés como protagonista y la primera con una pelea entre bestias gigantes.

la humanidad. Un «Gojira» moribundo emerge a la

chequea que su compañero esté a salvo, y mientras

superficie, ofrece un último rugido y se hunde hacia

están hablando, los hombres escuchan una serie de

el fondo del mar, desintegrándose.

extraños sonidos, que en definitiva son provocados

Aunque el monstruo ha desaparecido, los rostros de la

por dos monstruos peleando entre sí. Tsukioka reco-

gente permanecen sombríos: nadie sabe si la caída de

noce inmediatamente a uno de ellos como Gojira, y

«Gojira» es el fin o el principio de una era apocalíptica.

en ese mismo instante, las dos criaturas caen por un

La muerte del monstruo se ha conseguido a un terrible

acantilado hacia lo profundo del mar.

costo, y el doctor Yamane cree que si la humanidad

Tsukioka y Kobayashi informan a las autoridades de

continúa desarrollando armas de destrucción masiva,

Osaka y descubren que el monstruo contra el que

«Gojira» puede regresar.

se enfrentaba Gojira se llama Anguirus. Un grupo

Muchos de los aspectos presentados por este film se

de científicos, junto a los dos pilotos, investigan los

transformaron en paradigma para el género en el

orígenes de la criatura en un libro escrito por un

Japón, como el hecho de que los monstruos sean ca-

profesor polaco. Así descubren que Gojira y Anguirus

paces de escupir fuego u otras sustancias, que no haya

vivieron de manera contemporánea hace millones de

prácticamente un subtexto amoroso o romántico entre

años atrás, y la segunda criatura realmente odia a la

los protagonistas y que la bestia en sí sea la verdadera

primera, lo que explica la furiosa batalla entre ellos

protagonista, en tanto que los seres humanos tienen

que presenciaron los pilotos.

la obligación de morir en sus manos. La violencia es

El doctor Kyohei Yamane (Takashi Shimura), quien ya

impersonal, de mucha crueldad y masiva, pero las cria-

ha tenido contacto con Gojira en 1954, se presenta en

turas no suelen comerse a la gente, lo que le aporta

la reunión y muestra una película de la primera criatura

al género un toque aún más poderoso.

atacando Tokio. Yamane sostiene que es imposible

La segunda aparición del monstruo más famoso del

matar a este Gojira, y que el inventor del aparato que

cine japonés se produce en 1955, a través del título

permitió acabar con el primero, el doctor Daisuke Se-

Gojira no gyakushû, que en los Estados Unidos fue

rizawa, murió y quemó toda su investigación. Yamane

conocida como Gigantis, the Fire Monster. La nue-

sugiere que los militares utilicen bengalas para llevar al monstruo lejos de la costa, pero la criatura se enfurece cuando ve las luces, ya que ha sido una bomba

franquicia que se extiende hasta nuestros días. En la

de hidrógeno, con toda su luminosidad, la que lo ha

trama, los pilotos Shoichi Tsukioka (Hiroshi Koizumi)

despertado y mutado en lo que es ahora.

y Koji Kobayashi (Minoru Chiaki) trabajan rastreando

Poco después, Gojira aparece en la costa de Osaka.

cardúmenes de atunes para una compañía de Osaka.

Se envían aviones para lanzar nuevas bengalas, que

El avión de Kobayashi falla y el piloto se ve forzado

logran que el monstruo se aleje. Mientras se desarrolla

a aterrizar cerca de la isla de Iwato, un mero grupo

esa acción, al otro lado del país un camión transporta

de rocas deshabitadas de origen volcánico. Tsukioka

a un grupo de criminales peligrosos. Todos los delin-

CIENCIA-FICCIÓN

va producción de los estudios Toho es una secuela del film inaugural del kaiju eiga, y dio origen a una

255

cuentes, utilizando el lenguaje corporal, deciden que ese viaje puede ser una gran oportunidad para escapar de prisión, y tras poner fuera de combate a un par de guardias, saltan por la puerta trasera del camión y huyen. Algunos utilizan un camión de combustible para darse a la fuga, pero se estrellan contra un edificio industrial y se desata un fuego masivo. Esas llamas atraen a Gojira a la costa una vez más, y unos minutos después, Anguirus nada hacia la playa y ataca a su enemigo mortal. Los dos monstruos pelean con intensidad, destrozando la ciudad, incluso la fábrica para la que trabajan Tsukioka y Kobayashi. Gojira logra morder la nuca de Anguirus y lo arroja a un foso cerca del castillo de Osaka. Enciende entonces su aliento atómico y quema a su enemigo hasta matarlo. Tsukioka y Kobayashi son transferidos a la planta de Hokkaido. Durante una fiesta de la empresa, ambos son notificados de que Gojira ha destruido uno de los barcos de pesca. Los militares, y Tsukioka, emprenden una intensa búsqueda de la criatura, hasta que el piloto civil la descubre nadando cerca de una isla congelada. Tsukioka notifica a su empresa y Kobayashi aborda su aeroplano para reemplazar a su amigo en la tarea de vigilancia. El piloto lleva su avión cerca del

256

océano antes de que lleguen las fuerzas militares. Tsu-

CIENCIA-FICCIÓN

monstruo, para distraerlo y evitar que se pierda en el kioka, que ahora está a bordo de un avión de combate junto a un compañero de la universidad, lanza bombas sobre Gojira, pero sin éxito. Kobayashi intenta acosar al monstruo, pero es atacado y derribado contra una montaña. Aunque apenado por la muerte de su compañero, Tsukioka indica a los militares que disparen sobre la montaña donde está Gojira, para provocar una avalancha y enterrarlo, lo que finalmente logran.

En esta página y en la anterior, un afiche promocional y cuatro diferentes imágenes de Rodan, otro famoso kaiju eiga de los años ‘50, en este caso protagonizado por dos reptiles alados que se dedican a cazar hombres y destruir ciudades.

A continuación en nuestro periplo y ya en 1956, se produce el estreno de Rodan (Sora no daikaijû Radon), cinta en la que se presenta una nueva criatura japonesa. En las profundidades de la tierra, un grupo de mineros es atacado por un enjambre de insectos prehistóricos, los meganulon, que escapan hacia la superficie después de un terrible terremoto. Estos insectos sirven a su vez de alimento para un par de enormes reptiles voladores llamados Rodan, pero una vez que se acaban, los monstruos comienzan a cazar seres humanos, destruyendo una ciudad en el proceso y aterrorizando al mundo entero. Los militares japoneses localizan a las criaturas acechando en una cueva y les lanzan una nutrida andanada de misiles, que desencadenan una erupción volcánica. Las criaturas intentan escapar, pero una de ellas sucumbe al poder de la naturaleza y cae a tierra. El otro monstruo volador, negándose a separarse de su pareja, se sumerge en la lava hirviente, lo que libra a los hombres de estos poderosos y enormes enemigos. El siguiente hito en este recorrido por el kaiju eiga es Daikaijû Baran, un film estrenado en 1958, que fue conocido en los Estados Unidos como Varan the Unbelievable y contó con la dirección a cargo del maestro del subgénero Ishiro Honda. Originalmente, la película los responsables de ese país se arrepintieron a último momento. Con casi todo el material filmado, el estudio Toho decidió rodar algunas escenas adicionales y lanzar la cinta en las salas de exhibición japonesas, como una manera de minimizar las pérdidas. En la trama, Baran supuestamente es un demonio que vive en el curso superior del río Kitakami. Un grupo expedicionario llega a la zona para capturar a una

CIENCIA-FICCIÓN

fue producida para la televisión norteamericana, pero

257

especie de mariposa de Siberia que, curiosamente, ha aparecido en Japón, pero todos resultan muertos inmediatamente después de escuchar el eco de un rugido. Tiempo después, un segundo grupo es enviado a investigar y descubre a Baran, que ha destruido toda la aldea cercana al río una vez que fue perturbado. Los militares se acercan al lugar y acosan a Baran envenenando el lago donde se esconde, para después incendiar el bosque circundante. Totalmente enfurecido por la destrucción de su hogar, la criatura levanta vuelo y se dirige a Tokio, ciudad a la que ataca. Los militares japoneses entonces logran engañar a la bestia y la hacen ingerir varias bombas, que van estallando de manera consecutiva, debilitando al monstruo. Cuando Baran intenta retirarse hacia el mar, la última bomba estalla y lo destruye totalmente. Con este último título finalizamos nuestro recorrido por los principales films de monstruos japoneses de los ’50, y en un próximo capítulo destacaremos otras películas de ciencia-ficción aunque no específicamente de monstruos gigantes realizadas en ese país y en ese período de tiempo. Sin embargo, los kaiju eiga no se agotan en la década que estamos estudiando, y su devenir, con intermitencia, llega hasta nuestros días.

258

fundamentales del subgénero, es necesario adentrar-

CIENCIA-FICCIÓN

Para completar el recorrido sin dejar de lado a títulos nos en los años ’60, durante los cuales Japón mostrará un desarrollo de su ciencia-ficción autóctona, y más precisamente, de sus películas de monstruos, totalmente ajeno al periplo seguido por la ciencia-ficción cinematográfica en Occidente. Hecha la aclaración, en 1961 se produce el estreno de otro film fundamental en el kaiju eiga: Mothra, la indestructible (Mosura). Producida por Toho, dirigida

En esta página y en la anterior, tres afiches promocionales y tres escenas de Daikaijû Baran, otro film protagonizado por un monstruo gigante que desata su ira sobre los atribulados habitantes del Japón de la posguerra.

por el inefable Ishiro Honda y con efectos especiales de Eiji Tsuburaya, esta cinta marca el debut como guionista de Shinichi Sekizawa, quien se transformaría, en el transcurso de la década, en uno de los más relevantes libretistas del kaiju eiga. Una expedición a una isla que ha sufrido los efectos de la radiación pone a la civilización en contacto con una cultura primitiva. Cuando un entusiasta e inescrupuloso empresario intenta explotar a los nativos, una antigua deidad sale en su defensa. En aguas de la isla Infante, presumiblemente deshabitada por tratarse de uno de los lugares donde se realizaron pruebas atómicas, un barco se ve atrapado por un furibundo tifón, que lo hace naufragar. Una partida de rescate encuentra a cuatro marinos con vida y, extrañamente, sin mostrar síntomas de haber sido afectados por la radiación, algo que ellos atribuyen al jugo que les dieron los nativos de la isla. Un tenaz periodista llamado Senichiro Fukuda (Frankie Sakai), junto al fotógrafo Michi Hanamura (Kyôko Kagawa), se infiltran en el hospital para examinar a los sobrevivientes. Los responsables de las pruebas atómicas organizan, junto a Japón, una expedición científica a la isla en cuestión, liderada por un empresario llamado Clark Nelson (Jerry Ito) y con la participación del espey antropólogo Shin’ichi Chûjô (Horoshi Koizumi) y el propio reportero Fukuda. Chûjô ha estudiado las diversas culturas de las islas del área, y está seguro que uno de los jeroglíficos clave, una estrella radiante en forma de cruz, puede traducirse como «Mosura». El grupo descubre una vasta jungla mutante en la isla, una cautelosa tribu de nativos y dos pequeñas mujeres de tan sólo 30 cm. de alto (Emi y Yûmi Ito), a las que

CIENCIA-FICCIÓN

cialista en radiación Harada (Ken Uehara), el lingüista

259

Fukuda bautiza como las shobijin (pequeñas bellezas), que quieren que su isla ya no sufra nuevas calamidades atómicas. Con la promesa de transmitir el mensaje, el grupo expedicionario regresa a la civilización y da a conocer sus descubrimientos. Nelson, sin embargo, regresa a la isla con un grupo de sicarios y secuestra a las muchachas, matando en el proceso a varios nativos que intentan salvarlas. Mientras el hombre se enriquece con un espectáculo con las shobijin en Tokio, tanto las mujeres como los nativos rezan a Mosura, un huevo gigante, para que los ayude. Fukuda, Hanamura y Chûjô se comunican con las pequeñas mediante la telepatía, y ellas les expresan su convicción de que Mosura se presentará para ayudarlas, aunque lamentan que mucha gente buena resultará herida. El periódico de Fukuda acusa a Nelson de retener a las shobijin contra sus deseos, pero el empresario niega los cargos e inicia un juicio contra el diario. En la isla, mientras tanto, el huevo se rompe y revela una enorme oruga, que comienza a nadar por el océano rumbo a Tokio. En su camino, el insecto en desarrollo destruye un crucero y sobrevive a un ataque con napalm, mientras que el país que originalmente hizo las pruebas atómicas, y al que pertenece Nelson, sigue

260

las shobijin, negando, además, que exista conexión

CIENCIA-FICCIÓN

defendiendo los derechos del empresario respecto de alguna entre las diminutas mujeres y el monstruo que está comenzado a asolar Japón. Mosura finalmente llega a la costa, imperturbable ante la lluvia de proyectiles que le arrojan los militares, hasta que se construye un capullo en las ruinas de un edificio. La gente se pone contra Nelson y las autoridades entonces le ordenan que libere a las shobijin. El empresario escapa a su país, donde Mosura,

En esta página y en la anterior, dos fotogramas y un afiche promocional de Mothra, la indestructible, junto a una escena de Mosura tai Gojira. A diferencia de otros monstruos, Mothra es una criatura esencialmente benigna.

metamorfoseada en mariposa, lo persigue. La policía

fotógrafa Junko Nakanishi (Yuriko Hoshi) son testigos

busca persistentemente al hombre, mientras Mosura

de un naufragio provocado por un huracán. Poco

destruye la ciudad, hasta que Nelson cae abatido en

después, un huevo enorme es descubierto en la costa,

un tiroteo con las fuerzas del orden. Las shobijin, en

y los habitantes de la zona lo rescatan para que los

consecuencia, son entregadas al cuidado de Chûjô,

científicos puedan estudiarlo.

quien idea una forma para llevar a Mosura de vuelta

Mientras Sakai y Junko intentan preguntar al profesor

a su hogar.

Miura (Hiroshi Koizumi) sobre el huevo, un empresario

Mothra, la indestructible es el primer kaiju eiga que

llamado Kumayama (Yoshifumi Tajima) desaloja a

se diferencia del arquetipo establecido por Gojira en

los científicos y explica que ha adquirido el huevo de

1954, dejando de lado los elementos más terroríficos

parte de los aldeanos. En lugar de dejar que los cien-

del paradigma y optando por un tono mucho menos

tíficos investiguen, Kumayama construye un complejo

oscuro y opresivo. Incluso, cuando se ven las escenas

turístico para enriquecerse. Sakai, Junko y el profesor

de destrucción, éstas tienen un cierto aire de fantasía,

Miura se enojan y sostienen que el empresario no tie-

alejado del realismo casi documental de otros films del

ne derecho alguno sobre el huevo, pero sus reclamos

subgénero. Mosura, la criatura en sí, tiene también

son en vano. Mientras los tres discuten el tema en el

una cierta personalidad, que la hace ser fiel y noble en

hotel, descubren a Kumayama entrando al lugar. Sakai

su tarea de guardar a las shobijin. En el final, contra-

sospecha que puede haber alguien más trabajando

riamente a lo que pasa en casi todos los demás kaiju

con el inescrupuloso hombre, y decide investigar.

eiga, la criatura sobrevive y se retira pacíficamente a

Kumayama ingresa en la habitación de Jiro Torahata

su hábitat, quedando en buenos términos con Japón.

(Kenji Sahara), el presidente de la empresa en la que

El verdadero enemigo de la historia es el codicioso

trabaja, y mientras ambos discuten un negocio multimillonario, las dos pequeñas shobijin de la primera

concebida y estrenada en el inicio de lo que luego fue

película –interpretadas por las mismas actrices– los

conocido como el «milagro económico de Japón», que

interrumpen y les explican que provienen de la isla

trajo la liberación de la actividad económica por parte

Infante y que el huevo en cuestión pertenece a su

del Estado. Al poner a un capitalista como el principal

dios, Mosura. Los dos hombres ignoran a las chiquillas

villano de la película, la trama tiene una clara posición

e intentan capturarlas.

ideológica respecto de la cada vez más vertiginosa

Las shobijin escapan y se encuentran con Sakai, Junko

inclinación hacia Occidente del Japón de su época.

y Miura fuera del hotel. Las chicas les ruegan que las

El éxito de la criatura llevó a que los estudios Toho

ayuden a llevar el huevo de vuelta a su isla, y los tres

decidieran cruzarla con su monstruo más famoso.

prometen intentarlo por todos los medios posibles. Las

Así, en 1964, se presentó en Japón Mosura tai Gojira,

shobijin les explican que si el huevo no regresa a su

otra propuesta dirigida por Honda en cuya trama un

lugar de origen, la larva que surja del mismo podría

periodista llamado Ichiro Sakai (Akira Takarada) y su

causar la destrucción de toda la zona mientras busca

CIENCIA-FICCIÓN

empresario Nelson, y es preciso señalar que la cinta fue

261

comida. Sakai intenta escribir una nota sobre el tema, pero su esfuerzo es en vano. Las pequeñas pronto deciden regresar y, pese a que no han podido cumplir con su misión, igualmente les agradecen a sus tres amigos por el esfuerzo y la amabilidad. Tiempo después, mientras los tres se encuentran midiendo los índices de radioactividad en una zona industrial, súbitamente emerge Gojira de la playa de Kurada, donde ha quedado varado después de una tormenta, enterrado en el barro. El monstruo ataca entonces Nagoya. El editor del diario donde trabaja Sakai cree que los militares no pueden hacer nada contra Gojira, y discute el tema con Sakai y Junko. Jiro (Yû Fujiki), otro reportero que adora comer huevos, sugiere que Mosura debe ser capaz de derrotar a Gojira, pero Sakai y Junko creen que las shobijin no estarán muy predispuestas a ayudarlos, ya que las pruebas atómicas han destrozado su isla y ellos no han sido capaces de devolverles el huevo. Sin embargo, ambos se embarcan rumbo a la isla, en compañía del profesor Miura. Allí son capturados por los nativos y llevados en presencia del jefe de la tribu, pero cuando hacen su petición

262

Las shobijin se ponen a cantar y todos se dirigen hacia

CIENCIA-FICCIÓN

reciben una respuesta negativa, tal y como esperaban. ellas. Sakai y su grupo les piden la ayuda de Mosura, pero las pequeñas también se niegan. Junko entonces les dice que no todos los habitantes de Japón pueden ser castigados por lo que ha ocurrido en la isla. Gojira está destruyendo todo y matando a todos, y negarse a prestar ayuda está mal. Sakai agrega que todos son seres humanos y que están conectados entre sí. Se escucha entonces el chillido de Mosura y la shobijin

En esta página y en la siguiente, tres nuevas imágenes y dos afiches promocionales de Mosura tai Gojira, el film que produjo el cruce entre las dos criaturas más famosas de los estudios Toho, sin que ninguna de ellas perdiera sus características esenciales.

urgen a todos a que las sigan. Ellas convencen a la criatura para que ayude al Japón y a la gente que vive allí, pero el monstruo alado no tiene las fuerzas suficientes: incluso si derrota a Gojira, no le quedará energía para regresar a su amada isla. Al día siguiente, Kumayama ingresa a la habitación de Torahata y le exige que le devuelva el dinero que le ha prestado. Los dos hombres se enfrentan, y Torahata es derrotado y puesto fuera de combate, con lo que Kumayama se apodera del dinero de la caja fuerte del hombre. Torahata se despierta de la golpiza y ve a Gojira aproximándose al hotel. Agarra una pistola y mata a Kumayama, pero resulta él mismo muerto cuando el monstruo destruye el lugar. Gojira camina entonces hacia el huevo e intenta destruirlo hasta que aparece Mosura. Las dos criaturas luchan entre sí, y el ser alado parece tener la ventaja, pero Gojira se las ingenia para rociar la cara de Mosura con su rayo atómico, hiriéndola de muerte. Finalmente, la mariposa muere cubriendo con su ala el huevo y Gojira se retira. Las shobijin le explican a Sakai y los suyos que el huevo puede madurar ese mismo día, y comienzan a cantar. Mientras tanto, los militares intentan electrocutar a Gojira, pero fracasan, y el monstruo derrite los tanques Las shobijin continúan cantando hasta que el huevo madura, dando a luz dos larvas de Mosura. Las criaturas siguen a Gojira hasta la isla Iwa y utilizan la seda con que tejen su capullo para atrapar a su adversario, enviándolo luego mar adentro. Las larvas y las shobijin celebran su victoria y regresan a su hogar. La última criatura japonesa que nos interesa reseñar en este capítulo es Gamera, quien hizo su presentación

CIENCIA-FICCIÓN

de guerra enviados en su contra con su rayo atómico.

263

En esta página y en la siguiente, diferentes fotogramas y un afiche promocional de Daikaijû Gamera, primer film protagonizado por la tortuga prehistórica que los estudios Daiei concibieron para competir con el popular monstruo creado por los estudios Toho en los ‘50.

en público en 1965, a través del film Daikaijû Gamera. El monstruo es una criatura similar al popular Gojira, creada especialmente por los estudios Daiei para competir con su exitoso rival de Toho. Su película presentación comienza con Gamera despertando después de la detonación accidental de una bomba atómica, resultado de un intercambio entre aviones norteamericanos y soviéticos. En muy poco tiempo, la criatura comienza su raid destructivo, que se inaugura con el hundimiento de un buque japonés de investigación para luego dirigirse directamente al corazón del Japón. En un intento por detener esta especie de tortuga gigante, la bestia es sedada con un agente congelante en un precipicio, y se colocan poderosos explosivos en la base del mismo. La detonación pone al monstruo de espaldas y todo parece indicar que se ha logrado el objetivo de derrotar a Gamera. Nada más lejos de la realidad: en ese momento, el monstruo devela su habilidad de volar y lo hace en dirección a Tokio, ciudad que, como en tantas otras oportunidades, resulta casi totalmente destruida. Los militares intentan atraer al monstruo a una isla utilizando fuego, que Gamera devora, y matarlo, pero la criatura se distrae con la erupción de un volcán y el intento fracasa. Gamera

264

nuevo plan para derrotar a su imbatible enemigo. En

CIENCIA-FICCIÓN

comienza a comer lava y los humanos pergeñan un este caso, la idea es llevar al monstruo hacia un cohete y lanzarlo con destino a Marte. El ardid funciona y de esa manera, la Tierra se salva de las ansias destructivas de Gamera. Después de su exitoso debut, Gamera se transformó en el protagonista de numerosas cintas en las que enfrenta diferentes peligros, siempre en auxilio de los humanos que atacó en su primer film. Así, en 1966 se

CIENCIA-FICCIÓN

265

estrena Daikaijû kettô: Gamera tai Barugon, cuya trama gira en torno a una expedición que recupera un ópalo gigante que, en realidad, es un huevo del que nace Barugon, un monstruoso y demoníaco perro, con una lengua mortífera y la capacidad de proyectar un rayo congelante. Como es de rigor, la criatura siembra la destrucción por todo Japón hasta que la providencial asistencia de Gamera libra al país oriental de la amenaza. Un año más tarde se presenta Daikaijû kûchûsen: Gamera tai Gyaosu, film en el que la tortuga gigante debe enfrentarse con Gyaosu, una misteriosa criatura con forma de murciélago que emerge a la superficie de la Tierra después de la erupción de un volcán. Como ocurre en la primera entrega de la serie, un muchacho establece una relación emocional con Gamera, y ambos trabajan en conjunto, con la ayuda de los científicos del mundo, para poner fin a la destrucción sembrada por Gyaosu. En 1970, la criatura de Daiei vuelve a las andadas con Gamera tai Daimaju Jaiga, cuya historia presenta el ataque de una enorme criatura llamada Jaiga mientras se desarrolla la Feria Mundial en Japón. Gamera es nuevamente convocado para eliminar la amenaza,

266

dentro del cuerpo, por lo que un grupo de científicos

CIENCIA-FICCIÓN

pero el monstruo le inyecta a su propio descendiente debe descubrir la manera de librar al paladín de la humanidad del parásito que puede acabar con él. Para cerrar este recorrido por algunos de los títulos que tienen a Gamera como protagonista, en 1971 se estrena Gamera tai Shinkai kaijû Jigura. Una base lunar es destruida por una nave espacial con un racimo de bolas en la punta. Tiempo después, en el Mundo Marino, los delfines comienzan a morir sin explicación alguna,

En esta página y en la anterior, afiche promocional y cinco fotogramas de Uchûjin Tôkyô ni arawaru, el primer esfuerzo serio de la cienciaficción japonesa que abandonó el arquetipo de los monstruos gigantes o kaiju eiga.

y es entonces que nos enteramos de la existencia de una invasión extraterrestre en curso. Los alienígenas secuestran a dos hombres y dos chicos, y utilizan a una especie de tiburón gigante para sembrar el terror, al tiempo que provocan terremotos en todo el mundo. Los dos niños se las arreglan para escapar de los invasores y ayudan en el proceso a sus incapacitados padres a hacer lo propio. Una invasora, que tiene la capacidad de inducir un estado de coma en los humanos, los persigue por el Mundo Marino sin demasiado éxito. Finalmente, Gamera emerge una vez como defensor de la Tierra y derrota a la criatura que los invasores han desencadenado sobre el planeta.

CIENCIA-FICCIÓN 267

LA OTRA CF JAPONESA

EN LOS AÑOS ‘50

El desarrollo de la ciencia-ficción cinematográfica japonesa no se limitó en esta época únicamente a los films de monstruos gigantes. Así, en 1956, se produce el estreno de Uchûjin Tôkyô ni arawaru, conocida en los Estados Unidos como The Mysterious Satellite. Producida por el estudio Daiei, fue la primera película japonesa del género en ser estrenada en colores, además de constituir el primer esfuerzo serio fuera del kaiju eiga. En su trama, una pequeña nave viaja hacia una enorme estación espacial, que rota silenciosamente. Dentro de la misma, un grupo de extraterrestres, cuyo aspecto recuerda al de las estrellas de mar, discuten respecto de la mejor manera de advertir a los seres humanos sobre un desastre inminente y devastador, concluyendo que el Dr. Kamura (Bontarô Miake) –un japonés– es la mejor elección para coronar con éxito la empresa. Mientras tanto, algunos platos voladores son avistados sobre el cielo de Tokio, dejando en la confusión y el desconcierto a los científicos de todo el planeta. Un periodista intenta obtener unas declaraciones del Dr. Kamura respecto del tema, pero el hombre responde que no hay suficiente evidencia como para formular, siquiera, una hipótesis que explique el fenómeno. En un observatorio, el profesor

268

un objeto que, en apariencias, está desprendiendo

CIENCIA-FICCIÓN

Toro Isobe (Shozo Nanbu) detecta en su telescopio objetos de menor envergadura. Isobe comparte sus descubrimientos con Kamura y con un físico, el doctor Matsuda (Isao Yamagata), quien cree que podrían fotografiar el evento desde un cohete especial. Las imágenes que consiguen, sin embargo, no son claras, por lo que deducen que el objeto en cuestión emite una enorme energía. Al mismo tiempo, los extraterrestres han fracasado en su intento de comunicarse con

En esta página y en la anterior, dos afiches promocionales, una ilustración y dos imágenes de Los bárbaros invaden la Tierra, otra de las producciones más famosas de la ciencia-ficción cinematográfica japonesa.

los humanos y comienzan a aparecer en lagos y ríos, asustando de muerte a los pescadores y marinos locales. Uno de los visitantes consigue una fotografía de Hikari Aozora (Toyomi Karita), una famosa muchacha de la farándula, y se decide adoptar su forma con el fin de facilitar el contacto. En la estación espacial, uno de los líderes alienígenas se ofrece como voluntario para la misión y, de manera reluctante, muta hasta adoptar la forma humana. En la Tierra, Toru (Keizo Kawasaki), el hijo de Isobe, descubre a la alienígena metamorfoseada flotando en el agua. Después del rescate, ella exhibe algunas características supra humanas, como la de dar saltos enormes, de varios metros de altura, o materializarse en diferentes lugares, sin necesidad de caminar hasta ellos. Muy pronto, la chica interrumpe el trabajo del doctor Matsuda referido a un artefacto nuclear, explicándole que ella comprende las complejas ecuaciones que el científico ha estado elaborando y que el resultado sólo puede conducir al desastre. Además, la muchacha le explica que ella no es humana en realidad. Poco después, mientras un grupo de científicos investiga sus asombrosas capacidades, la alienígena camuflada aparece en su forma natural y revela su verdadera identidad, explicando que proviene de ubicado al otro lado del Sol. Asimismo, la mujer revela su misión, que consiste en advertir a la humanidad sobre la inminente colisión con un planeta errante, al que la prensa rápidamente bautiza como «Planeta R». Los científicos presentan el caso al Congreso Mundial, pero son rechazados por los políticos, hasta que muestran, de manera fehaciente e irrebatible, el planeta que los amenaza y la aceleración que está adquiriendo, vía

CIENCIA-FICCIÓN

Paira, un mundo en la misma órbita de la Tierra pero

269

telescopio, con lo que el Congreso Mundial decide el lanzamiento de misiles nucleares, que explotan contra la superficie del planeta sin producir consecuencias apreciables en el rumbo de colisión. Al mismo tiempo, un grupo de espías secuestra a Matsuda e intenta robar las ecuaciones para el artefacto nuclear que la extraterrestre ha señalado como muy peligroso. El científico resiste valientemente las presiones, con lo que es atado a una silla en un edificio abandonado y librado a su suerte. Al tiempo que la atmósfera terrestre se recalienta por la aproximación del planeta R, los habitantes de Paira se presentan una vez más, para averiguar por qué la amenaza no ha sido aún conjurada. Enterados de la situación, los visitantes localizan a Matsuda y le entregan una fórmula mejorada para su artefacto. Así, poco después los científicos observan el lanzamiento del arma desde la estación espacial alienígena, que destruye totalmente al planeta R, enfriando de inmediato la atmósfera y repeliendo la amenaza. En el final, los extraterrestres camuflados vuelven a su forma original, con su misión cumplida. Un año después se produce el estreno de Los bárbaros invaden la Tierra (Chikyû Bôeigun, conocida en los

270

por los emblemáticos estudios Toho que contó con la

CIENCIA-FICCIÓN

Estados Unidos como The Mysterians), cinta producida participación de sus dos principales estrellas creativas del género: Ishirô Honda y Eiji Tsuburaya, además de presentar grandes adelantos en lo referido a su tipo de pantalla y su sonido (comparables con los adelantos en la Meca del cine). Un grupo de merodeadores, que provienen del destruido planeta Mysteroid y poseen una tecnología muy avanzada, exige un territorio en la superficie de

En la página anterior, un afiche promocional y dos escenas de Gekkô kamen, película basada en las aventuras televisivas del héroe del mismo nombre. En esta página, un afiche promocional y una escena de Bijo to Ekitainingen.

nuestro planeta, además del derecho de casarse con mujeres terrestres. Después de demostrar sus habilidades destructivas con la ayuda de un robot gigante llamado Moguera, la humanidad debe decidir si capitula o resiste a los visitantes. Como parece característico en nuestra especie, los terráqueos deciden enfrentar la amenaza. Los invasores poseen enormes bases con forma de domo, que pueden viajar hacia la Tierra y disparar rayos mortales, capaces de derretir el mejor acero humano de tanques y otras armas como si fuera plástico. Milagrosamente, los terráqueos desarrollan en poco tiempo una serie de cohetes armados con sus propios rayos destructivos, que son capaces de acabar con los domos invasores, con lo que la batalla se decide a favor de nuestro planeta. Siguiendo con el recorrido, en 1958 la televisión japonesa lanza al mercado un superhéroe llamado Gekkô kamen (algo así como «máscara de luz lunar») que tendría tanto programas de TV como películas, y hasta un animé. Creado por el guionista Kôhan Kawauchi, los japoneses lo consideran como una respuesta autóctona al Llanero Solitario y a Batman. Si bien el primer superhéroe del celuloide en Japón fue Súper Gigante –de quien hablaremos más adelante y que fue modelo para otros más conocidos en Occidente, estándar para este tipo de personajes y se transformó en un enorme éxito entre los niños. La televisión era un medio relativamente nuevo en esa época, por lo que se hizo costumbre que muchos chicos vieran las aventuras catódicas de su héroe en casa de amigos que tenían receptor, lo que generó una enorme comunidad y una industria afín alrededor, con todo tipo de merchandising a disposición de los ávidos fanáticos.

CIENCIA-FICCIÓN

como Ultraman–, Gekkô kamen fue quien estableció el

271

Durante el transcurso de 1958 se emitió la primera serie, en blanco y negro, con las aventuras de Gekkô kamen, producidas por una agencia de publicidad llamada Senkosha, y emitidas al aire por la cadena KRTV entre febrero de ese año y julio de 1959, con un total de 130 episodios. En coincidencia con la emisión de la serie, Toei produjo películas protagonizadas por el personaje, en lo que fue su primer contacto con este tipo de héroes. Las cintas, en esencia, eran adaptaciones de los arcos temáticos presentados en la televisión, y la primera se tituló sencillamente Gekkô kamen (conocida en los Estados Unidos como The Man in the Moonlight Mask). Ese mismo año, también se presentaron otros dos films del personaje intitulados respectivamente Gekkô kamen - zekkai no Shitô y Gekkô kamen - Satan no tsume. Siempre en 1958, se presenta en los cines japoneses Bijo to Ekitainingen, también conocida internacionalmente como The H-Man. Producida por los estudios Toho, la cinta contó con la participación de las estrellas creativas detrás de Gojira –entre tantas otras–, los ya citados Honda, Tsuburaya y el productor Tomoyuki Tanaka. La película es considerada como parte de una «trilogía mutante», que se completa con Gasu ningen dai ichi-

272

trama de Bijo to Ekitainingen, cuando un negocio de

CIENCIA-FICCIÓN

go y Denso Ningen, ambas estrenadas en 1960. En la narcóticos fracasa y un sospechoso desaparece misteriosamente, dejando sólo sus ropas atrás, la policía de Tokio interroga a su esposa y revisa el club nocturno donde trabaja la mujer. La desaparición deja confundidas a las autoridades, hasta que un joven científico se presenta e informa que las pruebas con la bomba de hidrógeno en el Pacífico han tenido consecuencias inesperadas, como lo evidencia la aparición de un

En esta página y en la anterior, dos nuevos afiches y varios fotogramas de Bijo to Ekitainingen, film distribuido en por Columbia que advierte sobre las consecuencias del uso indiscriminado de la energía atómica.

«barco fantasma» en el puerto de Tokio. Según el investigador, otro efecto del estallido nuclear ha sido el surgimiento de un nuevo tipo de criaturas radiactivas, los «hombres H», que se deslizan como si fueran barro, casi sin consistencia material, y tienen la capacidad de disolver todo aquello que tocan. Esta película, junto con Gasu ningen dai ichigo y Matango (1963), fue de las contadas propuestas que Honda y Tsuburaya hicieron dentro de la ciencia-ficción prescindiendo de los monstruos gigantes. De hecho, en esta historia se incluyen mafiosos, cantantes de clubes nocturnos y criaturas radiactivas, que viven en el sistema de cloacas de Tokio y que son el resultado de la experimentación indiscriminada con la energía atómica, un tema que sí está presente en el kaiju eiga. El film fue estrenado en los Estados Unidos por Columbia Pictures en 1959, consiguiendo un éxito relativo pero poniendo de manifiesto claramente que las preocupaciones reflejadas por la variante nipona del género tenían más que ver con el peligro atómico que con cualquier otra idea paradigmática de la época en el país del Norte, a saber, la invasión ideológica soterrada y la Guerra Fría en general. Siguiendo con el periplo de films japoneses de los ’50, en 1959 se estrena Yûsei ôji, conocida en los Estados

por el veterano Masaru Igami y producida por Nippon Gendai y Senkosha para ser emitida por NTV a partir de noviembre de 1958, logrando un total de 49 episodios divididos en dos arcos temáticos. El estudio Toei produjo entonces dos películas, en las que modificó algunas de las características del personaje principal. En Yûsei ôji, presentada en mayo de 1959, un grupo

CIENCIA-FICCIÓN

Unidos como The Prince of Space. Su origen también estuvo ligado al desarrollo de la televisión, fue escrita

273

de extraterrestres, que parecen gallinas gigantes, siguen el liderazgo de Phantom, el villano de turno, con el objetivo de invadir la Tierra. Sin embargo, un extraño héroe, que da nombre a la película, aparece de la nada y derrota a los invasores. Aunque las armas alienígenas no pueden herir al personaje, el villano decide continuar con su plan, lo que genera una y mil vueltas de tuerca en la trama, al modo de los viejos seriales norteamericanos. La segunda cinta, Yûsei ôji kyôfu no uchûsen, fue estrenada una semana después, y ambos films fueron compilados en un único telefilm para el mercado norteamericano, que fue intitulado justamente The Prince of Space. La versión televisiva del personaje era muy parecida a Súper Gigante –de hecho, el personaje fue concebido para aprovechar el éxito alcanzado por éste–, pero en las películas no sólo hay una clara diferencia en el uniforme del héroe sino que además su único súper poder es la invulnerabilidad de su traje, por lo que debe usar armas adicionales y volar con la ayuda de una pequeña nave espacial. También en 1959 se presentó en las pantallas niponas Guerra entre planetas (Uchû daisensô, conocida también en los Estados Unidos como Battle in Outer

274

Tierra, producida por los estudios Toho y distribuida

CIENCIA-FICCIÓN

Space), que es una secuela de Los bárbaros invaden la un año más tarde en todo el mundo por Columbia Pictures. El libreto fue escrito por Shinichi Sekizawa, y fue llevado a la pantalla por los especialistas del kaiju eiga del estudio, a quienes nos hemos referido anteriormente en numerosas oportunidades. Después de una serie de desafortunados y devastadores incidentes en Japón, Italia y Panamá, el Centro de Investigación Espacial de las Naciones Unidas descubre

En la página anterior, un afiche promocional y dos escenas de Yûsei ôji, otra película basada en una serie de TV. En esta página, un afiche promocional y dos imágenes de Guerra entre planetas, film concebido como secuela de Los bárbaros invaden la Tierra.

que una raza de agresivos extraterrestres, conocidos como los natal, están operando desde una base secreta en la Luna, con el objetivo de conquistar la Tierra. Las Naciones Unidas deciden enviar un contraataque de magnitud, que logra causar severos daños sobre las instalaciones alienígenas en el satélite. Mientras tanto, en la Tierra, las naciones de todo el mundo se preparan para librar una batalla final y definitiva, que decidirá el destino de toda la humanidad. Nueva York, San Francisco y, obviamente, Tokio, se ven envueltas en una conflagración de enormes dimensiones, en la que nadie está a salvo, pero la determinación y el coraje de los terrestres finalmente decidirán el enfrentamiento a su favor. En 1960, Columbia Pictures estrenó la cinta en los Estados Unidos, como título principal de una presentación doble completada con Doce a la Luna (Twelve to the Moon), un space opera de bajo presupuesto de David Bradley. La crítica recibió la cinta nipona con benevolencia, destacando particularmente la originalidad de los efectos especiales presentados. El último producto que nos interesa reseñar en este apartado es un serial en 11 entregas llamado Sûpâ jaiantsu (o también Kotetsu no kyojin), que no es otra cosa que la presentación en sociedad de Súper Giganun grupo de terroristas internacionales, que amenazan con acabar con Japón mediante un ataque nuclear. La propuesta fue producida por Shintoho Company, una filial de los estudios Toho, y se convirtió en un éxito a escala mundial, adoptando diferentes nombres en diferentes países –«Starman» en Estados Unidos, «Spaceman» en Francia, etc.–. Si bien Ôgon Batto, presentado en 1930 por Takeo

CIENCIA-FICCIÓN

te, quien en la oportunidad debe salvar al mundo de

275

En esta página y en la siguiente, un nuevo afiche promocional y otra escena de Guerra entre planetas junto a una imagen y un afiche de Sûpâ jaiantsu, el primer superhéroe en llegar al celuloide en Japón, que sirvió de modelo para otros personajes de la misma naturaleza posteriores.

Nagamatsu, fue el primer superhéroe moderno de Japón, que luego tendría mangas y animés variados, Súper Gigante fue el primero en llegar al celuloide, y el molde a partir del cual se realizarían otras historias de este tipo en Japón. Súper Gigante es una criatura humanoide creada a partir del acero más duro por el Consejo de la Paz del planeta Esmeralda. El personaje ha sido concebido para destruir al Mal allí donde lo encuentre y restaurar la paz en el universo, y para cumplir su misión cuenta con una armadura que lo hace casi indestructible, con la que además puede volar, detectar radiación, hablar en cualquier idioma, y más. Adicionalmente, Súper Gigante puede transformarse en un humano común y corriente, y moverse libremente entre ellos. Cuando es enviado a la Tierra a detener a las fuerzas del Mal, se disfraza como un japonés de traje y sombrero, con una apariencia casi de detective de la serie negra, pero utiliza su apelativo de Súper Gigante como nombre. Su identidad secreta no lo es tanto, ya que trabaja con las autoridades japonesas, prestando su ayuda siempre que es necesario, y mantiene sus poderes incluso cuando está camuflado como un civil. Otra de sus características es su labor con los niños, a quienes aleja de los peligros, ya que representan el futuro de la Tierra. Cuando

CIENCIA-FICCIÓN

276

termina con una misión, el héroe vuela de regreso a su planeta natal. Como se puede apreciar en este recorrido por los aportes japoneses a la ciencia-ficción de los años ’50, sus preocupaciones están obviamente enfocadas al tema de la energía atómica y de sus catastróficas consecuencias, lo que no es extraño en una sociedad que debió soportar la destrucción de dos de sus ciudades por esa vía. Los temas y el desarrollo de las historias

pueden resultar algo ingenuos, pero queda claramente expresado el optimismo de la sociedad por el futuro y el aporte que la ciencia y el desarrollo tecnológico pueden hacer al mismo, una característica que, no es arriesgado especular, transformó al Japón en la potencia tecnológica que aún es en nuestros días.

LA CIENCIA-FICCIÓN CONSOLIDADA COMO GÉNERO

A lo largo de los diferentes capítulos de este libro hemos visto cómo la ciencia-ficción apareció en la historia del cine y se fue consolidando, obteniendo su versión más refinada y definitiva a través de las películas estrenadas en la década de los ’50, momento en el que se estableció como género absolutamente diferenciado. En el primer capítulo, ofrecimos una primera definición de la ciencia-ficción, aplicable tanto a la literatura como al cine del género, y a partir de allí reseñamos las principales cintas que a nuestro entender forman parte de la prehistoria de la ciencia-ficción en el celuloide, poniendo especialmente el acento en los trabajos de Méliès, quien a partir de su fascinación por los «efectos especiales», dio el puntapié inicial para el desarrollo de una mirada albores del siglo XX, la Primera Guerra Mundial –y la predicción de su desarrollo–, sumada a la fobia de los colonialismos europeos y su «reacción» frente a la «invasión» de los habitantes de sus colonias, comenzaron a ser parte de las temáticas más características del género, de la misma manera en que los primeros seriales –precursores de las series de televisión, que deberían ser objeto de un libro aparte– abrevaron en

CIENCIA-FICCIÓN

que relacionaba lo fantástico con la ciencia. En los

277

temas que universalizaron en la época, utilizando los artilugios tecnológicos más o menos creíbles como las armas capaces de cautivar a la audiencia en la eterna lucha entre héroes y villanos. En los años ’20 se produce la primera evolución de la ciencia-ficción, que comienza a tomar características propias, y el desarrollo del género, en Europa y en los Estados Unidos, toma caminos bien diferenciados en los que mientras los realizadores del Viejo Continente utilizan las convenciones para explorar sus posibilidades –más que nada, a partir de la obra de los «padres fundadores» de la versión moderna del género, Jules Verne y H. G. Wells, o de propuestas similares–; en los Estados Unidos se opta por una vertiente más aventurera, en la línea de los primeros seriales y de la literatura pulp, en la que lo importante son los matices tecnológicos de la propuesta y no su trama adocenada. Las películas europeas de esa década son más oscuras, pergeñadas en el marco de la debacle de la primera posguerra, en tanto que los Estados Unidos, fieles a su política aislacionista que los llevó a participar en la Gran Guerra recién a partir de 1917, se centran más en el reflejo de su propia sociedad, en plena expansión económica antes de que el modelo fuera puesto en

278

produce también otro fenómeno significativo en los

CIENCIA-FICCIÓN

entredicho por la Gran Depresión de los años ’30. Se Estados Unidos: el cine se mimetiza con la literatura de la época y es correlato de la principal fuente de entretenimiento masivo del período, es decir, las citadas revistas pulp. Finalmente, a finales de esta década se produce la aparición del sonido en el cine, lo que tendrá un efecto negativo sobre el desarrollo de las propuestas de origen europeo por la imposición, a escala mundial,

En esta página y en la anterior, un retrato de Georges Méliès junto a tres fotogramas de su clásico Le voyage dans la Lune, película considerada como una de las primeras propuestas de ciencia-ficción de la historia del cine.

del modelo norteamericano. Con escasas excepciones,

los seriales de Flash Gordon, que tuvieron una impor-

el género se transforma en una especie de campo de

tante función social: la de proveer entretenimiento

experimentación de muchos realizadores europeos

pasatista a bajo costo en una época signada por las

radicados en Hollywood, que abandonarán la cien-

desigualdades y la crisis económica. La gran decisión

cia-ficción en los años ’30 en pos de propuestas más

del estudio Universal, responsable de la producción

comerciales, pero que utilizarán en ese momento

de los seriales del héroe, fue la de convertir al prota-

algunos de los rasgos fundamentales del género

gonista en una persona común y corriente, diferente

recién desarrollado, para dar vida a nuevos géneros

del personaje presentado en las historietas de Alex

cinematográficos y propuestas individuales. Uno de los

Raymond que le sirvieron de inspiración. Otro de los grandes aciertos pasó por las características del villano, el emperador Ming, que desde sus rasgos orientales

una las películas fundamentales de la ciencia-ficción

representaba a una de las fobias más relevantes de

de todos los tiempos.

la sociedad norteamericana de la época –el peligro

Los años ’30 traerán más cambios significativos dentro

amarillo–, al tiempo que daba carnadura a los peores

del universo de la ciencia-ficción, tanto literaria como

arquetipos del período como eran los jefes, los espe-

cinematográfica, y mientras la primera comenzaba

culadores, los banqueros y todos aquellos relacionados

a superar la «inocencia» de los planteamientos de

con la usura y el despojamiento de los perdedores del

Hugo Gernsback en la precursora Amazing Stories, la

sistema. Esos personajes, en el imaginario social, eran

segunda se sumerge en una especie de deconstrucción

los responsables directos de las frustraciones y las

del género, que tiene por objeto incorporar algunos

miserias cotidianas de millones de norteamericanos, y

de sus elementos más reconocibles en otro tipo de

su afinidad con el emperador de Mongo les permitió

propuestas, particularmente en las pertenecientes al

a quienes disfrutaban de las aventuras semanales de

cine de terror, que tomará en esa época un impulso

Flash lidiar de una manera diferente con su opresiva

avasallador de la mano del desarrollo de los primeros

realidad: en la pantalla, Ming era el que recibía gol-

clásicos de la Universal. Hacia mediados de los ’30, la

pes y lecciones de parte del hombre común, haciendo

tendencia llegó a su punto culminante a partir de la

experimentar a la audiencia un proceso de catarsis y

decisión de Hollywood de relegar el desarrollo de la

de descompresión.

ciencia-ficción al segmento del bajo presupuesto de los

Asimismo, y como comentario final de lo que hemos

seriales, en los que científicos, súper mentes criminales

desarrollado más extensamente en otro capítulo de

y megalómanos de toda laya buscan la manera de do-

este libro, el serial se hará eco de algunas de las teorías

minar o proteger al mundo utilizando infinitas series

más radicales que circularon en la época, como fue la

de aparatos bizarros. En semejante parafernalia, sin

de reemplazar a la democracia por la tecnocracia, es

embargo, surgirán algunas propuestas cuya impronta

decir, el gobierno de una burocracia científico-técnica

llega incluso hasta nuestros días, como es el caso de

que permitiera el funcionamiento adecuado y prolijo

CIENCIA-FICCIÓN

grandes hitos de la década fue Metrópolis (1926), cuya impronta permanecerá intacta y será reconocida como

279

de toda la sociedad. El lento languidecer de la ciencia-ficción en los años ’30 se profundiza en la década siguiente. En tanto la rama literaria y masiva del género asiste a un proceso de maduración que hará eclosión en los años ’50, dando origen a la época dorada del género en letras de molde, en su vertiente cinematográfica prácticamente desaparece. Si bien es verificable que muchos elementos y propuestas propias están presentes en varias películas, no existe un desarrollo que permita unificar esos temas y transformarlos en un género independiente, dentro del cual los films fueran reconocibles más allá de toda duda. Los seriales seguirán siendo el campo de experimentación y desarrollo de la ciencia-ficción, y la presencia de héroes nacidos en otros medios masivos se multiplica en sus tramas, sobre todo para enfrentar los peligros de la Segunda Guerra Mundial. El agotamiento de las propuestas terroríficas nacidas en los ’30 abonarán el terreno para un nuevo viraje: a finales de los ’40, los estudios elegirán la parodia para despedirse del terror. Y a mediados de la década, un serial intitulado The Purple Monster Strikes será el encargado de presentar los temas de la posesión e invasión extraterrestres, que se trans-

280

ficción cinematográfica, alimentando la paranoia y

CIENCIA-FICCIÓN

formarán en los ’50 en tópicos centrales de la cienciael miedo de la sociedad de esa época, que se verían alimentados a partir de las explosiones atómicas que fueron el corolario sangriento de la Segunda Guerra Mundial, la propaganda referida al «peligro rojo» y los avistamientos de objetos voladores no identificados, documentados desde 1947 y cada vez más frecuentes a partir de ese momento. Llegamos de esta manera a los años ’50, que será la

En la página anterior, afiche promocional y dos escenas de Aelita. En esta página, a la derecha, afiche promocional y y dos imágenes de Metrópolis, film de Fritz Lang que se transformó en un ícono de la primera cienciaficción cinematográfica.

década del despegue y diferenciación definitivos de la ciencia-ficción cinematográfica. Pese a que muchos especialistas señalen a 2001, una odisea del espacio (1968) como el momento de madurez definitiva del género, productos menos altisonantes y esteticistas de la década que nos ocupa aportaron mucho más desarrollo y contenido al género que la película de Kubrick. Como «realismo hipotético» que sostenemos que es la ciencia-ficción, en los años ’50 el género refleja con exactitud los sentimientos de la sociedad norteamericana de la posguerra, lo que sumado a la fenomenal maquinaria propagandística que es Hollywood, se transformaron en las fobias de gran parte del mundo y determinaron las respuestas de la otra parte del mismo. Es interesante destacar a esta altura el cambio operado en todo el universo del cine y, de paso, relacionar ese cambio con las nuevas preferencias de la audiencia y el porqué de las mismas. Mientras los Estados Unidos fueron un país mayormente aislacionista y ensimismado, los géneros más significativos fueron aquellos empeñados en reflejar de diversas maneras las obsesiones de la sociedad norteamericana fronteras hacia adentro. Pero cuando, como consecuencia de la Segunda Guerra Mundial, el Imperio Británico queda reemplazarlo como imperialismo predominante de Occidente, el cine acompaña esa transformación, amplía sus fronteras y la obsesión popular deja de ser la vida fácil y rica de los ’20, la Gran Depresión de los ’30, los gángsters o las contradicciones del «sueño americano», para dar paso a preocupaciones más relacionadas con lo externo, con la «invasión», el desastre de magnitud planetaria o sus consecuencias más localizadas.

CIENCIA-FICCIÓN

totalmente extenuado y los Estados Unidos deben

281

Para finales de los ’50, el género en su versión cinematográfica sufre una merma, más que nada a partir de la banalización de la paranoia y el surgimiento de nuevas inquietudes sociales. Cuando pierde terreno y los monstruos fílmicos comienzan a asimilarse una vez más con el terror, se produce un nuevo apogeo de ese género en la pantalla grande, en una versión sincrética e híbrida en la que descollarán las remakes de los clásicos de la Universal realizados por la británica Hammer Films a partir del estreno de La maldición de Frankenstein (1957). Como cierre de nuestro trabajo, es interesante ampliar un poco la definición con la que abrimos el mismo, y analizar esta relación con el cine de terror, desmontando de alguna manera el facilismo de alguna crítica europea que incluye a todo este tipo de películas en lo que se denomina fantastique. Si bien puede decirse que el cine de ciencia-ficción asimiló todos los temas de la fantasía tradicional, de manera tal que los marcianos, venusinos u otros visitantes extraplanetarios evolucionaron a partir del modelo del vampiro, en tanto que los robots están claramente prefigurados por los zombis o criaturas como el Golem. En ese mismo sentido, no es arriesgado afirmar que la casa

282

nave o satélite solitario en el espacio, poblado además

CIENCIA-FICCIÓN

embrujada, aislada y lúgubre del gótico devino en por malignas presencias extraterrestres en lugar de fantasmas. Superficialmente, la ciencia-ficción parece de alguna manera ser un derivado del cine de terror, sobre todo si la película en sí incluye los suficientes elementos tecnologizados que demanda el terror moderno, con una audiencia cada vez más pragmática y materialista. Sin embargo, la principal diferencia entre ambos géneros reside en el énfasis, en la esfera de la

En esta página y en la anterior, afiche promocional y cuatro fotogramas de Flash Gordon, el primer serial dedicado al héroe de historieta creado por Alex Raymond, fundamental en el imaginario norteamericano de los años ‘30.

experiencia humana que decide explorar. La película

predestinación no existe dentro del cine de ciencia-fic-

de terror se centra en primer término en el individuo

ción, el peligro no deviene de la propia naturaleza del

en conflicto con la sociedad o con alguna extensión

hombre sino de lo que es capaz de hacer o lo que pue-

de sí mismo; por su parte, el film de ciencia-ficción

den hacer con él. El Mal está separado de la naturaleza

trabaja con la sociedad y sus instituciones, en conflicto

interior del hombre, y el animal, cuando aparece, no

entre ellas o con algún tipo de «otro» extraterrestre.

es la representación de la oscuridad interior. Cuando

Las criaturas y monstruos de cierto tipo de ciencia-fic-

un monstruo destruye una ciudad, los seres humanos

ción están en la Tierra casi por accidente, han caído

no sienten una responsabilidad particular y ética por la

del espacio para destruir o invadir el planeta, o son el

aparición de esa criatura, que existe no como una re-

producto no deseado de la amenaza atómica. En las

presentación de la culpa individual o social sino como

películas de terror, los monstruos no son accesorios,

una entidad totalmente separada, que se define a sí

son una realidad inevitable, producto de los pactos

misma por lo que es capaz de hacer. Como la criatura

demoníacos o extensiones de la naturaleza animal

de la ciencia-ficción es tan impersonal, se relaciona más

del hombre. Ya que el film de terror pone el énfasis

con los hombres en general que con el hombre como

en el conflicto ético individual, el monstruo debe ser

ser ontológico. El miedo que causa el género tiene que

un antagonista personal y equivalente, capaz de ser

ver con el costado racional de nuestra naturaleza, pero

contraparte en el enfrentamiento entre dos aspectos

es un miedo que nunca alcanza la dimensión del que

del alma humana. En la ciencia-ficción, las criaturas son

es capaz de provocar el cine de terror: se encuentra

menos personalizadas y, en general, no tienen rasgos

diluido en la racionalidad. Un ejemplo de lo dicho es La

distintivos más allá de lo aparente, de su presencia

invasión de los usurpadores de cuerpos (1956), en cuya

física. No son depositarios de ningún conflicto moral

trama se expresan deseos opuestos: por un lado, el de

y, una vez pasada la impresión que causa su primera

superar nuestra naturaleza animal, nuestro «cerebro

aparición, nos importa mucho más lo que hacen. La

de reptil»; por el otro y en simultáneo, la necesidad de

criatura, en la ciencia-ficción, nunca abandona su

mantener algunas de las capacidades propias de esa

carácter de «cosa».

naturaleza, como la de amar o sentir empatía por los demás. Los miedos, en el cine de ciencia-ficción, son

bre desde la gracia divina, su expulsión del Edén y su

mucho más difusos y complejos, y lo que se siente es

dependencia del poder de redención que hay, por

ansiedad antes que puro miedo. En definitiva, mientras

ejemplo, en el amor. El terror siempre funciona y apa-

el terror evoca al miedo, la ciencia-ficción está más

rece en un mundo en el que nada cambia, en el que sus

relacionada con el interés.

valores son constantes y que está predestinado a ser

Yendo un poco más allá, las películas de monstruos de

el escenario en el que el hombre lucha contra el Mal,

los años ’50 –y de principios de los ’60 también– tienen

un mundo que acepta la inevitabilidad de ese Mal y

menos que ver con el terror y la ciencia que con la pre-

la capacidad del hombre de rendirse a él. Ese tipo de

servación del orden. No hay salvación posible para una

CIENCIA-FICCIÓN

El cine de terror está interesado en la caída del hom-

283

turba desorganizada, como la que suele hacer justicia por mano propia en las películas de terror, y frente a una criatura de la ciencia-ficción, se exige ante todo el trabajo en equipo, la cooperación y la organización para su derrota definitiva. Monstruos e invasiones extraterrestres, en el cine de ciencia-ficción de calidad, van estrechamente unidos al «héroe colectivo» capaz de enfrentarlos y, finalmente, someterlos. Es muy interesante y, probablemente material para otro libro, señalar que la máxima invención atribuida a la obra cumbre de la ciencia-ficción argentina, El Eternauta, es justamente la del «héroe colectivo», al que se ubica en las antípodas del «héroe individual» que es propio de la historieta norteamericana. No obstante, es necesario señalar que la inspiración principal de Héctor Oesterheld no fueron las historietas sino justamente la literatura y el cine de la etapa clásica de la ciencia-ficción anglosajona, en los que las instituciones organizadas de la sociedad –científicos, militares, políticos, etc.– son siempre las encargadas de dar respuesta a la amenaza, sea esta un monstruo producto de la manipulación nuclear, sea un malévolo invasor de otro mundo. La originalidad de Oesterheld reside tanto en la composición del «héroe colectivo» nacio-

284

por el peronismo, como a la capacidad de convertir en

CIENCIA-FICCIÓN

nal, asimilable a la «armonía de clases» preconizada metáfora la realidad social de su época, en este caso, la de mediados de los ’50 en adelante. Volviendo al tema principal, el último rasgo que adquirió el cine de ciencia-ficción en esta década, que nos interesa poner de relieve para completar la definición del género aportada en las primeras páginas de este trabajo, tiene que ver con las relaciones que existen entre la magia, la ciencia y la religión.

En la página anterior, afiche promocional y dos imágenes de Flash Gordon conquista el universo. En esta página, tres escenas de The Purple Monster Strikes, serial de los ‘40 que anticipó el tema de la invasión extraterrestre.

Como ya hemos visto, existen dos campos muy diferenciados entre los teóricos del cine del género que, cada uno con su propio bagaje, han contribuido a sembrar confusión a la hora de ofrecer una definición ajustada. El primer grupo sostiene que el cine de ciencia-ficción es opuesto y totalmente separado del cine de terror, estableciendo que aquellas películas que incluyen elementos relacionados con la superstición, el misticismo o la religión, que no son comprobables empíricamente, forman parte del canon terrorífico o fantástico. En la vertiente «purista», la ciencia-ficción es una especie de neorrealismo profético o, como preferimos nosotros, un «realismo hipotético». El segundo campo teórico sostiene que la cienciaficción es el reemplazo moderno del cine de terror o fantástico, creciendo a partir de éste y sustituyéndolo. Así, lo mágico y lo milagroso se transforman en hechos explicables desde la experiencia. Esta es la posición base de los adherentes al concepto de fantastique. Después de nuestro periplo, no es arriesgado sostener que ambas concepciones son demasiados reduccionistas, por omitir o incluir demasiado, y no exploran las relaciones que siempre han existido en la sociedad entre sus expresiones artísticas y la magia, la religión y la ciencia. En todas las películas a priori distintas proporciones de estos tres elementos, pero es prácticamente imposible –y absurdo– calcular el porcentaje de cada uno de ellos: lo relevante es evaluar su función dentro del film. La magia, la religión y la ciencia están relacionadas entre sí dentro de la sociedad, y cumplen funciones diferentes, diseñadas para satisfacer distintas necesidades del colectivo. Según la teoría antropológica de Bronislaw Malinowski,

CIENCIA-FICCIÓN

clasificables como de terror o ciencia-ficción, existen

285

la magia, como la ciencia, son sistemas de creencias esencialmente optimistas, que asumen que el hombre es capaz de modificar su entorno y construir su propio destino. La magia, como la ciencia, también depende de un proceso y tiene como resultado un producto. Lo que distingue a la magia de la ciencia, aplicable a lo que distingue a una cinta fantástica de una de ciencia-ficción, es cuánto sabemos, como espectadores, tanto del proceso como del producto, cuánto sabemos sobre la causa y su efecto. Cuando el proceso implica esencialmente que el espectador «tenga fe» en el proceso y lo acepte incluso sin saber realmente cuál es o cómo funciona, estamos frente a un producto mágico y no científico. La magia es, ante todo, un término que nace de nuestra falta de conocimiento respecto de algo que, sin embargo, funciona. Lo que distingue entonces a la superstición o la magia de la realidad científica, lo que diferencia los films fantásticos o de terror de los de ciencia-ficción, es la cantidad de «fe» que el público necesita tener para comprender lo que se está narrando. Por su parte, lo que diferencia a la magia de la religión es que la segunda no pretende afectar al hombre o la naturaleza de manera pragmática, simplemente celebra lo que es. En ese sentido, la

286

concibe como posible controlar el destino o la mayor

CIENCIA-FICCIÓN

religión es un sistema de creencias pesimista, que no parte del entorno, y debe colocar la fe no ya como parte inherente a un proceso, sino para aspirar a la benevolencia de una entidad superior, capaz de ofrecer recompensas o repartir castigos sin lógica aparente y sin ser el resultado del proceso. Los rituales de la magia solicitan la fe en el proceso mismo, el ritual religioso reniega del proceso y establece que lo importante es únicamente esa fe. Así, la función cultural de la reli-

En la página anterior, cuatro imágenes del clásico de la paranoia de los ‘50 La cosa, junto a una escena de El día que paralizaron la Tierra. En esta página, tres fotogramas de otro clásico de la fobia al «peligro rojo»: La invasión de los usurpadores de cuerpos.

gión es el opuesto de la función cultural de la magia. A partir del convencimiento del hombre respecto de su capacidad de controlar su entorno y su destino como especie dominante a nivel biológico, la función cultural de la ciencia se hace evidente: transformar en experiencia empírica ese optimismo del hombre. Magia, religión y ciencia tienen una profunda unión entre sí en el cuerpo social, esencialmente en su intento por describir y confrontar con lo desconocido de una manera capaz de satisfacer la necesidad de seguridad y control del hombre. En tanto que los tres modos de acción afectan al hombre en sociedad, están siempre interactuando, cooperando o enfrentándose entre sí, para convertirse en el modo dominante. Y como los tres modos lidian con lo desconocido, cuando uno de ellos fracasa, entra en escena otro. Esto explica por qué incluso hoy en día, en un mundo complejo e híper tecnologizado, la magia y la religión todavía ocupan

CIENCIA-FICCIÓN 287

En esta página, otra imagen y un afiche promocional de La invasión de los usurpadores de cuerpos, film de Don Siegel que relata la apropiación silenciosa e inmisericorde de los habitantes de Santa Mira por parte de una raza extraterrestre, de aparente origen vegetal.

un lugar de importancia. Si la ciencia-ficción se relaciona particularmente con la ciencia, no es con la ciencia como algo abstracto, y en las películas del género, esa ciencia siempre está relacionada con la sociedad, y sus aspectos, negativos o positivos, siempre se delinean contra su efecto social. De esta manera, la ciencia está obligada a interactuar con otros constructos sociales, instituciones, modos de acción y, particularmente, con la magia y la religión. Los elementos mágicos y religiosos de los films de terror están presentes en las películas de ciencia-ficción, de la misma manera en que la ciencia está presente en las cintas de terror. La definición de la ciencia-ficción como un «realismo hipotético» no es incorrecta pero sí quizás inadecuada. Su énfasis en la ciencia, en el empirismo y la tecnología y su relación con el hombre, son correctas pero ignoran un factor de gran importancia, que es el que permite incluir en el canon al grupo de películas habitualmente rechazadas por los puristas, un canon que contemple los productos híbridos de una manera más benigna y funcional, como parte de un espectro que va desde lo más perfectamente definido hasta aquello que posee sólo algunas características relacionadas con la cienciaficción. El cine del género es aquel que pone el énfasis

288

método empírico, interactuando en un contexto social

CIENCIA-FICCIÓN

en la ciencia real, especulativa o extrapolativa, y en el que, pese a todo, presenta características relacionadas con la magia y la religión, en un intento por reconciliar al hombre con lo desconocido. La ciencia-ficción de los años ‘50 estableció un procedimiento acorde con la definición anterior que, de allí en más, será una especie de marca de origen, común a todas las propuestas que, con los años, poblaron las pantallas cinematográficas de todo el mundo.