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"AÑO DEL DIÁLOGO Y LA RECONCILIACIÓN NACIONAL" Las parábolas de Jesús, son aquellas breves narraciones dichas por Jesús

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"AÑO DEL DIÁLOGO Y LA RECONCILIACIÓN NACIONAL"

Las parábolas de Jesús, son aquellas breves narraciones dichas por Jesús de Nazaret que encierran una educación moral y religiosa, revelando una verdad espiritual de forma comparativa. No son fábulas, pues en estas no intervienen personajes animales con características humanas, ni alegorías, pues se basan en hechos u observaciones creíbles, teniendo la mayoría de estos elementos de la vida cotidiana. Las parábolas se encuentran contenidas en los evangelios canónicos, aunque también se pueden encontrar en los evangelios, como el de Tomás y de Santiago, libros considerados apócrifos.

LAS PARÁBOLAS I.E.

: Andrés Avelino Cáceres

ALUMNA

: María Alejandra Ramos Escobar

CURSO

: Religión

PROFESORA

: Dionilda Baca Miro

GRADO

: 2°

SECCIÓN

: “B”

La finalidad de las parábolas de Jesús es enseñar cómo debe actuar una persona para entrar al Reino de los Cielos y, en su mayoría, revelan también sus misterios. En ocasiones Jesús usó las parábolas como armas dialécticas contra líderes religiosos y sociales, como por ejemplo la Parábola del fariseo y el publicano. Jesús dice que enseña usando parábolas para que comprendan su mensaje sólo aquellos que han aceptado a Dios en su corazón y para que los que tienen "endurecidos sus corazones" y han "cerrado sus ojos" no puedan entender. Por lo tanto comprender el mensaje de

TUMBES – PERÚ 2018 INTRODUCCIÓN

Jesús significaría ser un verdadero discípulo suyo.

ÍNDICE

La oveja perdida………………………………………….Lucas 15, 37

LA OVEJA PERDIDA

El sembrador……………………………………………..Mateo 13:1-9 La semilla de mostaza…………………………………Mateo 13:31-32 El hijo pródigo…………………………………………Lucas 15:11-32 La moneda perdida……………………………………..Lucas 15, 8-10 El trigo y la cizaña……………………………………Mateo 13, 24-30 El buen samaritano…………………………………….Lucas 10:29-37 El tesoro escondido………………………………………Mateo 13: 44 La levadura……………………………………………Mateo 13:33-35 La red………………………………………………….Mateo 13:47-50 El siervo malvado…………………………………......Mateo 18:21-35 El rico insensato……………………………………….Lucas 12:13-21 Parábola de los talentos………………………….......Mateo: 25: 14-30

Se acercaban a Jesús todos los publicanos y pecadores para oírle, y los fariseos y los escribas murmuraban, diciendo: Este a los pecadores recibe, y con ellos come. Entonces él les refirió esta parábola, diciendo: ¿Qué hombre de vosotros, teniendo cien ovejas, si pierde una de ellas, no deja las noventa y nueve en el desierto, y va tras la que se perdió, hasta encontrarla? Y cuando la encuentra, la pone sobre sus hombros gozosos; y al llegar a casa, reúne a sus amigos y vecinos, diciéndoles: Gozaos conmigo, porque he encontrado mi oveja que se había perdido. Os digo que así habrá más gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente, que por noventa y nueve justos que no necesitan de arrepentimiento MENSAJE: Lucas 15, 3-7

Este pasaje del Evangelio también nos enseña que el buen cristiano debe ayudar a los pecadores a rectificar su vida y alegrarse cuando lo logren. Por eso Jesús pone en evidencia a estos fariseos y escribas, porque critican a Jesús por tratar con los pecadores para convertirlos. Cristo nos enseña aquí a no juzgar la vida de los demás. Es más provechoso acercarse al pecador y darle buen ejemplo que perder miserablemente el tiempo criticándole. Imitemos a Cristo también en esta faceta de carácter apostólico, y lancémonos a acercar a Cristo a aquellas personas que más lo necesitan.

LA PARÁBOLA DEL SEMBRADOR

Y mientras sembraba, parte de la semilla cayó junto al camino; y vinieron las aves y la comieron. Parte cayó en pedregales, donde no había mucha tierra; y brotó pronto, porque no tenía profundidad de tierra; pero salido el sol, se quemó; y porque no tenía raíz, se secó. Y parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron, y la ahogaron. Pero parte cayó en buena tierra, y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a treinta por uno.  El que tiene oídos para oír, oiga. MENSAJE: La semilla sembrada en este pasaje es la Palabra de Cristo. El mismo nos explica el significado de la parábola. No tenemos que quedarnos sólo con el significado, tenemos que bajarlo a la propia vida. Hay que ver cuántas veces recibimos la semilla y ha dado su fruto. Para esto es esta parábola. Cristo nos da la oportunidad de ver cómo estamos correspondiendo a su llamado, cómo lo hacemos parte de nuestra propia vida.

Aquel día salió Jesús de la casa y se sentó junto al mar.

Si queremos que la semilla dé el fruto más abundante hay que poner en práctica todos los consejos que Cristo mismo nos ha dado. 

Y se le juntó mucha gente; y entrando él en la barca, se sentó, y toda la gente estaba en la playa. Y les habló muchas cosas por parábolas, diciendo: He aquí, el sembrador salió a sembrar.  Mateo 13:1-9

LA SEMILLA DE MOSTAZA  Mateo 13:1-9

Otra parábola les refirió, diciendo: El reino de los cielos es semejante al grano de mostaza, que un hombre tomó y sembró en su campo; el cual a la verdad es la más pequeña de todas las semillas; pero cuando ha crecido, es la mayor de las hortalizas, y se hace árbol, de tal manera que vienen las aves del cielo y hacen nidos en sus ramas. MENSAJE: En esta parábola Jesús nos enseña, nos hace ver la grandeza de lo pequeño, es decir, Jesús a través de esta parábola, una vez más nos enseña ir más allá de las apariencias, si no dejáramos llevar por las apariencias, nadie optaría por la potencialidad de un grano de mostaza, porque, porque algo tan pequeño, quien optaría por él. Sin embargo, al paso del tiempo, esa pequeña semilla va creciendo y creciendo, ¿Hasta qué?, hasta convertirse en un árbol que puede alcanzar la altura perfecta, es decir, lo pequeño puede ser algo grande en Dios.

EL HIJO PRÓDIGO

 Mateo 13:31-32

También dijo: Un hombre tenía dos hijos; y el menor de ellos dijo a su padre: Padre, dame la parte de los bienes que me corresponde; y les repartió los bienes. No muchos días después, juntándolo todo el hijo menor, se fue lejos a una provincia apartada; y allí desperdició sus bienes viviendo perdidamente. Y cuando todo lo hubo malgastado, vino una gran hambre en aquella provincia, y comenzó a faltarle. Y fue y se arrimó a uno de los ciudadanos de aquella tierra, el cual le envió a su hacienda para que apacentase cerdos. Y deseaba llenar su vientre de las algarrobas que comían los cerdos, pero nadie le daba. Y volviendo en sí, dijo: !! Cuántos jornaleros en casa de mi padre  Lucas 15:11-32 tienen abundancia de pan, y yo aquí perezco de hambre!

Me levantaré e iré a mi padre, y le diré: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti.

Pero cuando vino este tu hijo, que ha consumido tus bienes con rameras, has hecho matar para él el becerro gordo.

Ya no soy digno de ser llamado tu hijo; hazme como a uno de tus jornaleros.

Él entonces le dijo: Hijo, tú siempre estás conmigo, y todas mis cosas son tuyas.

Y levantándose, vino a su padre. Y cuando aún estaba lejos, lo vio su padre, y fue movido a misericordia, y corrió, y se echó sobre su cuello, y le besó.

Mas era necesario hacer fiesta y regocijarnos, porque este tu hermano era muerto, y ha revivido; se había perdido, y es hallado.

Y el hijo le dijo: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti, y ya no soy digno de ser llamado tu hijo. Pero el padre dijo a sus siervos: Sacad el mejor vestido, y vestidle; y poned un anillo en su mano, y calzado en sus pies. Y traed el becerro gordo y matadlo, y comamos y hagamos fiesta; porque este mi hijo muerto era, y ha revivido; se había perdido, y es hallado. Y comenzaron a regocijarse.

MENSAJE: En esta parábola Jesús nos revela de modo singular el rostro amoroso y misericordioso del Padre. También nos comunica de forma muy sencilla y cercana un mensaje fundamental: Dios es Padre y nos ama tanto que nos busca y nos perdona cualquier cosa siempre y cuando estemos dispuestos a volver a Él. Su amor y su misericordia no conocen límites. El único límite se lo podemos poner nosotros, si es que nos negamos a recibirlo.

Y su hijo mayor estaba en el campo; y cuando vino, y llegó cerca de la casa, oyó la música y las danzas; y llamando a uno de los criados, le preguntó qué era aquello. Él le dijo: Tu hermano ha venido; y tu padre ha hecho matar el becerro gordo, por haberle recibido bueno y sano. Entonces se enojó, y no quería entrar. Salió por tanto su padre, y le rogaba que entrase. Mas él, respondiendo, dijo al padre: He aquí, tantos años te sirvo, no habiéndote desobedecido jamás, y nunca me has dado ni un cabrito Lucas 15:11-32 para gozarme con mis amigos.

LA MONEDA PERDIDA Lucas 15:11-32

Son el arrepentimiento y el deseo de salvación los principales motores que nos impulsan a  buscar a Dios, a buscar que nos perdone y que nos acepte en su Reino, cosa que para Él será motivo de gozo, festejo y celebración, porque ello implicaría que uno de sus hijos está volviendo a su padre, que se está salvando, que está retomando el camino correcto, y nada vale más para él que eso.

PARÁBOLA DEL TRIGO Y LA CIZAÑA ¿O qué mujer que tiene diez dracmas, si pierde una dracma, no enciende la lámpara, y barre la casa, y busca con diligencia hasta encontrarla? Y cuando la encuentra, reúne a sus amigas y vecinas, diciendo: Gozaos conmigo, porque he encontrado la dracma que había perdido. Así os digo que hay gozo delante de los ángeles de Dios por un pecador que se arrepiente. MENSAJE: Esta Parábola de la moneda perdida hace referencia a lo importante e indispensable que somos cada una de las personas ante Dios, pues nadie es indiferente a él. La mujer poseedora de las diez dracmas vendría a ser Dios, y cada dracma uno de nosotros. Si Dios pierde a alguno de nosotros, por algún tiempo, por una acción errada, por un mal obrar, porque nos alejamos de Él, el Señor no parará hasta sembrar la necesidad en nuestros seres, para que volvamos a él. Es decir, nos encuentre después de buscarnos con diligencia.  Lucas 15, 8-10

Les refirió otra parábola, diciendo: El reino de los cielos es semejante a un hombre que sembró buena semilla en su campo; pero mientras dormían los hombres, vino su enemigo y sembró cizaña entre el trigo, y se fue. Y cuando salió la hierba y dio fruto, entonces apareció también la cizaña.  Mateo 13, 24-30

Vinieron entonces los siervos del padre de familia y le dijeron: Señor, ¿no sembraste buena semilla en tu campo? ¿De dónde, pues, tiene cizaña? Él les dijo: Un enemigo ha hecho esto. Y los siervos le dijeron: ¿Quieres, pues, que vayamos y la arranquemos? Él les dijo: No, no sea que al arrancar la cizaña, arranquéis también con ella el trigo. Dejad crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la siega; y al tiempo de la siega yo diré a los segadores: Recoged primero la cizaña, y atadla en manojos para quemarla; pero recoged el trigo en mi granero.

En esto se presentó un experto en la ley y, para poner a prueba a Jesús, le hizo esta pregunta:

MENSAJE:

—Maestro, ¿qué tengo que hacer para heredar la vida eterna?

la parábola de la cizaña indica que hay entre el pueblo de Dios falsos profetas y falsos creyentes que viven se alimentan y crecen junto con los verdaderos creyentes a estos es necesario dejarlos crecer con el grupo de los verdaderos creyentes no sea que sacando a estos falsos (cizaña) se vayan con ellos los que realmente son Cristianos (trigo) pero llegara el día de la siega (cuando sea el arrebatamiento de la iglesia) donde el mismo Jesus dirá que recojan primero la cizaña (los falsos) y atenla en manojos para quemarla (esto quiere decir que estos falsos irán al infierno).

Jesús replicó: — ¿Qué está escrito en la ley? ¿Cómo la interpretas tú? Como respuesta el hombre citó: —“Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con todo tu ser, con todas tus fuerzas y con toda tu mente”, y: “Ama a tu prójimo como a ti mismo”. —Bien contestado —le dijo Jesús—. Haz eso y vivirás. Pero él quería justificarse, así que le preguntó a Jesús:

EL BUEN SAMARITANO  Mateo 13, 24-30

— ¿Y quién es mi prójimo? Jesús respondió:

 Lucas 10:29-37

—Bajaba un hombre de Jerusalén a Jericó, y cayó en manos de unos ladrones. Le quitaron la ropa, lo golpearon y se fueron, dejándolo medio muerto.  Resulta que viajaba por el mismo camino un sacerdote quien, al verlo, se desvió y siguió de largo.  Así también llegó a aquel lugar un levita y, al verlo, se desvió y siguió de largo. 

EL TESORO ESCONDIDO

Pero un samaritano que iba de viaje llegó a donde estaba el hombre y, viéndolo, se compadeció de él. Se acercó, le curó las heridas con vino y aceite, y se las vendó. Luego lo montó sobre su propia cabalgadura, lo llevó a un alojamiento y lo cuidó.  Al día siguiente, sacó dos monedas de plata y se las dio al dueño del alojamiento. “Cuídemelo —le dijo—, y lo que gaste usted de más, se lo pagaré cuando yo vuelva”. ¿Cuál de estos tres piensas que demostró ser el prójimo del que cayó en manos de los ladrones? —El que se compadeció de él —contestó el experto en la ley. —Anda entonces y haz tú lo mismo —concluyó Jesús. MENSAJE: Amar al prójimo no es muy fácil, porque requiere donarse a los demás, y ese donarse cuesta, porque no a todos los tratamos o queremos de la misma manera. Por ello tenemos que lograr amar a todos por igual, sin ninguna distinción. Quererlos a todos, sin preferir a nadie. Es difícil más no imposible. Dios nos ha dado el ejemplo al vivir su propia doctrina: "no hay amor más grande que el que da la vida por sus amigos", pero Él no la dio solo por sus amigos, sino también por sus enemigos, y muchos santos han hecho lo mismo.  Lucas 10:29-37

Además, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo, el cual un hombre halla, y lo esconde de nuevo; y gozoso por ello va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo. MENSAJE: La interpretación de esta parábola es que cuando oímos el mensaje del reino, deberíamos estar tan llenos de alegría o de gozo a tal punto de que quisiéramos dejar todo lo demás a fin de obtener la salvación. Es decir, somos capaces de renunciar a nuestras riquezas mundanas para adquirir las riquezas eternas que representa el reino de los cielos.

PARÁBOLA DE LA LEVADURA  Mateo 13: 44

Otra parábola les dijo: El reino de los cielos es semejante a la levadura que tomó una mujer, y escondió en tres medidas de harina, hasta que todo fue leudado. MENSAJE: Significa que la vida de cualquier ser humano al contacto con el Reino de Los Cielos, su vida aumenta, se agranda, crece, se llena de todo lo bueno.  Cuando la Gracia (El Reino de los Cielos) toca a alguien, el ser humano se transforma en un ser superior al que antes era, con más conocimiento, bondad, virtudes, etc.

LA RED

 Mateo 13:33-35

Asimismo el reino de los cielos es semejante a una red, que echada en el mar, recoge de toda clase de peces; y una vez llena, la sacan a la orilla; y sentados, recogen lo bueno en cestas, y lo malo echan fuera. Así será al fin del siglo: saldrán los ángeles, y apartarán a los malos de entre los justos, y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes. MENSAJE: En esta parábola Jesús habla que el reino de los cielos es semejante aquella actividad de echar la red en el mar para pescar, y una vez que se llena, la saca y se acerca a la orilla del mar, y sentado comienza a recoger los buenos peces, y los malos los echa fuera de la cesta.

Jesús nos dice que la red está lanzada a todos los peces, no hay acepción de personas, a todos se nos llama por igual al arrepentimiento y ser servidores de Cristo por medio de la proclamación del evangelio, pero al final, el juez de los justos e injustos, dará retribución conforme a la palabra que cada uno ha escuchado mientras tenga vida terrenal. Los buenos peces son los  Mateo 13:47-50 justos, que viven conforme al evangelio de Cristo, y los malos peces son los que rechazan el evangelio.

EL SIERVO MALVADO

A éste, como no pudo pagar, ordenó su señor venderle, y a su mujer e hijos, y todo lo que tenía, para que se le pagase la deuda. Entonces aquel siervo, postrado, le suplicaba, diciendo: Señor, ten paciencia conmigo, y yo te lo pagaré todo.  Mateo 18:21-35 El señor de aquel siervo, movido a misericordia, le soltó y le perdonó la deuda.

Pero saliendo aquel siervo, halló a uno de sus consiervos, que le debía cien denarios; y asiendo de él, le ahogaba, diciendo: Págame lo que me debes. Entonces su consiervo, postrándose a sus pies, le rogaba diciendo: Ten paciencia conmigo, y yo te lo pagaré todo. Más él no quiso, sino fue y le echó en la cárcel, hasta que pagase la deuda. Viendo sus consiervos lo que pasaba, se entristecieron mucho, y fueron y refirieron a su señor todo lo que había pasado.

Entonces se le acercó Pedro y le dijo: Señor, ¿cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque contra mí? ¿Hasta siete?

Entonces, llamándole su señor, le dijo: Siervo malvado, toda aquella deuda te perdoné, porque me rogaste.

Jesús le dijo: No te digo hasta siete, sino aun hasta setenta veces siete.

¿No debías tú también tener misericordia de tu consiervo, como yo tuve misericordia de ti?

Por lo cual el reino de los cielos es semejante a un rey que quiso hacer cuentas con sus siervos.

Entonces su señor, enojado, les entregó a los verdugos, hasta que pagase todo lo que le debía.

Y comenzando a hacer cuentas, le fue presentado uno que le debía diez mil talentos.

Así también mi Padre celestial hará con vosotros si no perdonáis de todo corazón cada uno a su hermano sus ofensas.

sobre vosotros como juez o partidor? Y les dijo: Mirad, y guardaos de toda avaricia; porque la vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee. MENSAJE:

 Mateo 18:21-35

Esta parábola trata acerca del perdón. En nuestro caminar como cristianos, Dios prueba nuestros corazones con respecto al perdón, y puede que este tema sea espinoso, porque siempre en la falta de perdón hay resentimiento cuando somos ofendidos. Dios quiere que perdonemos aquellas personas que nos ofenden y nos han hecho algún daño, pues así como Dios en su inmensa misericordia nos perdonó, y fuimos restaurados en nuestra comunión con Dios, también quiere que perdonemos a nuestros hermanos, pues el perdón restaura las relaciones, cuando realmente es de corazón. 

EL RICO INSENSATO

Le dijo uno de la multitud: Maestro, di a mi hermano que parta conmigo la herencia. Más él le dijo: Hombre, ¿quién me ha puesto

También les refirió una parábola, diciendo: La heredad de un hombre rico había producido mucho. Y él pensaba dentro de sí, diciendo: ¿Qué haré, porque no tengo dónde guardar mis frutos? Y dijo: Esto haré: derribaré mis graneros, y los edificaré mayores, y allí guardaré todos mis frutos y mis bienes;  y diré a mi alma: Alma, muchos bienes tienes guardados para muchos años; repósate, come, bebe, regocíjate. Pero Dios le dijo: Necio, esta noche vienen a pedirte tu alma; y lo que has provisto, ¿de quién será? Así es el que hace para sí tesoro, y no es rico para con Dios. MENSAJE: El decir que la verdadera bendición de Dios es la abundancia de los bienes materiales, está lejos de las enseñanzas de Jesús cuando estuvo aquí en la tierra en forma corporal, Él nos hizo varios llamados de advertencia sobre el tema, muy a pesar que con el pasar del tiempo, esta enseñanza se ha tergiversado con tanta fuerza que ha afectado sustancialmente la vida de muchos cristianos al estar confundidos o momentáneamente se desvían de lo que realmente significa la verdadera riqueza.

Y su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor. 

PARÁBOLA DE LOS TALENTOS

Llegando también el que había recibido dos talentos, dijo: Señor, dos talentos me entregaste; aquí tienes, he ganado otros dos talentos sobre  Mateo: 25: 14-30 ellos.  Su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor.  Pero llegando también el que había recibido un talento, dijo: Señor, te conocía que eres hombre duro, que siegas donde no sembraste y recoges donde no esparciste; por lo cual tuve miedo, y fui y escondí tu talento en la tierra; aquí tienes lo que es tuyo.  Respondiendo su señor, le dijo: Siervo malo y negligente, sabías que siego donde no sembré, y que recojo donde no esparcí. 

Porque el reino de los cielos es como un hombre que yéndose lejos, llamó a sus siervos y les entregó sus bienes. 

Por tanto, debías haber dado mi dinero a los banqueros, y al venir yo, hubiera recibido lo que es mío con los intereses. 

A uno dio cinco talentos, y a otro dos, y a otro uno, a cada uno conforme a su capacidad; y luego se fue lejos. 

Quitadle, pues, el talento, y dadlo al que tiene diez talentos. 

Y el que había recibido cinco talentos fue y negoció con ellos, y ganó otros cinco talentos. Asimismo el que había recibido dos, ganó también otros dos. Pero el que había recibido uno fue y cavó en la tierra, y escondió el dinero de su señor. Después de mucho tiempo vino el señor de aquellos siervos, y arregló cuentas con ellos.  Y llegando el que había recibido cinco talentos, trajo otros cinco talentos, diciendo: Señor, cinco talentos me entregaste; aquí tienes, he ganado otros cinco talentos sobre ellos. 

Porque al que tiene, le será dado, y tendrá más; y al que no tiene, aun lo que tiene le será quitado. Y al siervo inútil echadle en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes. MENSAJE: Ella tiene el propósito de alertar, vigilar y de llamar a no dormirnos como siervos de Cristo en nuestras responsabilidades, pues Él vendrá algún día por sus hijos, y no quiere que hagamos cosas diferentes a las que debemos hacer como discípulos; haciendo la voluntad de Dios y unidos a Cristo en el poder del Espíritu Santo

 Mateo: 25: 14-30