30 poemas guatemaltecos

GERARDO GUINEA DIEZ* I. LA LLUVIA Es la lluvia, la hormiga que asciende lenta en la hoja intemporal; es la hoja, la llu

Views 103 Downloads 8 File size 253KB

Report DMCA / Copyright

DOWNLOAD FILE

Recommend stories

Citation preview

GERARDO GUINEA DIEZ*

I. LA LLUVIA Es la lluvia, la hormiga que asciende lenta en la hoja intemporal; es la hoja, la lluvia que moja el negro paraguas; es el paraguas, la sombra donde crece el delgado tallo; es el tallo, el fulminante verde que amanece en mis ojos; son mis ojos, los creadores de la página; es la página, el epitafio de las letras; es la letra, el caos de mi nombre.

II. QUE TE DOY ¿Qué te doy de mi cuerpo?, prestado a otros cuerpos,a otras vidas. ¿Qué puedo darte de estas frases?, préstamo de otras. ¿Cómo te doy del sueño y color de otras manos, mis flores? ¿Cómo te doy mis brasas para no arderte? ¿Cómo recoges mi polvo? ¿Cómo darte mi viento, si la humedad coronó su tiempo? ¿Cómo te doy mi almohada, si ya no hay madrugada? ¿Como te doy la nada? ¿Acaso tú,heredera del silencio puedes darme otro cuerpo?

Francisco Morales Santos* RESPLANDORES Al remover la tierra, se abre un paréntesis y en él afloran trozos de antigua alfarería: vasijas, vasos,

incensarios, platos; aparecen piedras talladas y redondas que han de rodar por más siglos; figurillas de jade de collares; cuchillos de obsidiana con la sed apagada para siempre; se levantan estelas que nuevamente empiezan la tarea de relatar hazañas de caballeros tigres, y en nombre de sus antiguos dueños hablan pitos y flautas zoomorfos; toman forma: un canal de riego, una terraza, un altar ceremonial. Al remover la tierra afloran calaveras y huesos: unos muestran floridas inscripciones, otros, el más reciente ayer. TU NOMBRE, PATRIA Una gota de miel que se desliza en dirección al pecho, en las primeras horas del día, iluminada con ganas por el sol; gota tibia y espesa de poder curativo insospechado. Gota inquieta, florida, permanente, auténtica, fiel y memoriosa. Gota en el aire y en los labios gota es tu nombre, Guatemala. LA MAGIA DE LA DANZA Para encontrar el pasado, sólo dos agujeros ocultos debajo de las cejas le bastan al presente. El bailador, entonces, se libra del acecho

de su propio mundo: mundo hecho de costumbres que empañan su mirada, mundo dado en raciones de tortillas con chile y de frijoles, mundo de días y noches medidos con la misma vara. Y detrás de la máscara se vuelve Luzbel, o Fierabrás, o Tecún, o un par de Francia…, o Pedro Avilantaro. EL PAPEL DEBIDO Cuando oigo entonar a Joan Baez una de sus hoy viejas canciones de protesta —"Brothers in arms"— pienso que aun cuando hayan sido gestos frágiles de hermandad humana, endebles como un puente de bambú o de lepa, han ayudado a exorcisar eclipses, una vez en Viet Nam, otra en Sudáfrica, otra en Nicaragua… PEQUEÑO POEMA CONTRA LOS CULPABLES DE QUE LAS COSAS SIGAN COMO HASTA HOY Con lo que odio las aguas quietas, sólo a la espera de que algún cristiano se lance de cabeza para deglutirlo sin dejar, siquiera, la huella de un círculo concéntrico, (un odio semejante al que le tengo al arma que se hace la mansa en una funda). Con lo que odio las aguas quietas, digo,

me exaspera la gente sosegada: la que arrulla que te arrulla el sueño de que el tiempo pasado fue mejor; la que no dice, ¡ejem!, esta boca es mía, este país es mío; la gente que joroba por quitarnos el aire con sus quejas de hipocondría pura y que hoy, como siempre, se la encuentra sembrando una rosa y cortando un clavel. ORGULLOSA OPONENTE DE LA MUERTE Frida Kahlo se retrató a sí misma: plenilunar, estoica, reconstruida. Creó su atmósfera propia, su antimuerte, su territorio libre. Creó sus reglas de juego para apostar por la vida. Y para no obviar detalles posó de cara a la muerte bajo una luz cenital. Cuánto temple en el gesto, cuánto enigma, cuánto fuego rodeándole las manos, los ojos y la boca, cuánta palpitación votiva. La suya es una saga en la que el sufrimiento se vuelve un contrafuerte. SABIDURIA ANTIGUA a Mario Payeras De seguro que si las aves fueran el corazón del universo, nunca habría pasado inadvertida su lección de elevarse

con espíritu fuerte bajo los temporales, pues los pájaros saben que no hay invierno que dure cien años y que, al pasar la tormenta, la primera semilla que brota es el sol. MARIO MATUTE*

I. EL DIA Nuevamente el día al pie de la ventana, con sus hebras de sol, sus nubes altas. Otra vez las nostalgias oscilando colgadas de las interrogantes infinitas. Aún no llegan los caminos, el manantial se retarda en su escondite, las manos no lo alcanzan todavía. El día está así, sentado a la diestra de los sueños carcomidos; algunos nimbos peregrinos rodean la inmensa soledad y callan como plumones de ángeles enfermos. Habría que transcurrir por el silencio, con sonámbulos sigilos, pasar por debajo de este día - o de cualquiera devolverle el saludo a la muerte que espera con paciencia que vadeemos el torrente de ignominia para alcanzar su ribera y besarnos la frente; hay que devolverle el saludo y decirle que aguarde con su calendario abierto, que ahora hay un día de sol en la ventana y aún no ha caído la última gota del tiempo que repleta la esperanza. II. A MITAD DE LA LUZ A mitad de la luz me detengo, un signo de interrogación en cada flanco; suspenso en la angustia que busca inútilmente la palabra,

el motivo ,la razón, la semilla original y el bocado de eternidad en que un dios desconocido nos tragará , borracho o rencoroso, envidiando la soledad de nuestra ruta o con piedad por nuestras alegrías... Aquí, de pie frente al vacío, a mitad de la luz y con una interrogante en cada flaco , la espera se escure por túneles futuros que desembocan nesesariamente en el pasado. Los vocablos se preludian en su tesitura finita e inperfecta; al repasar los mútiples registros se quema el tacto en su impotencia absurda y no se alcanza la palabra ausente. ¡Ah! si tornaran los viejos ademanes, y pudiésemos entrar sin permiso en los ensueños; volver a beber con mis querubes recién resucitados, el agua de las horas verdaderas a mitad de la sombra en tus pestañas. III. ESPERANZA El tren volará a las doce, a las once, a las diez, a las nueve... el nombre del propio terrorista, con su investidura atómica en el pecho, andará descalzo por los siglos equilibrando en el filo infinito de la perpetua muerte nuclear. Dios vomitara infernales insultos y el tren volará a las doce, a las once, a las diez, a las nueve... el cero cóncavo y absurdo lo envolverá todo en el abrazo sin fondo de la nada, ¿y ese niño que sonríe dialogando con la luz? Y la muchacha que guarda siete lunas de espera palpitante en el vientre que se curva

hacia el futuro?; y los adolencentes que escondieron su beso en el murmullo de la fuente?; y el olor de los huertos encendidos; la vitalidad incontenible que hierve en la entraña de la selva?; la ciudad ajustando sus relojes al movimiendo incesante de la vida; las ruedas del trabajo colectivo que transforman el esfuerzo en bienestar y en alimento. Con permiso, sombríos augurios , que el insulto a lo humano se haga añicos; que de par en par se abran los vientos; allá en el horizonte , donde el esperma primordial crea el mañana despunta la esperanza del futuro. El tren en el que viaja toda la especie volará a las doce, a las once, a las diez... alado de razón ,ciencia y justicia, burlará la soberbia y la ingnominia y se alzará hasta la paz en un viaje solar sin retroceso. PAOLO GUINEA* CUANDO EL DIA DA PERMISO... El apego a las sombras casi diminutas lo dejó imaginando rayos desposeídos de gritos. Un consenso universal e impreciso se presentó sin espera alguna. Tarde o temprano se tendrá que arrodillar a las costumbres más celestes y dudosas, ¿Cuántos lamentos no manipularemos después de nuestro desencuentro con lo inexacto? Su entrada no sorprendió la labor los gestos, al agrado de la ternura, al susurro de las conciencias.

Ahí entró, con un aura repleta de niños, se descorazonó a tres cuadras, y volvió a invertir la ira en los pasos parsimoniosos. Intacto quedaría como surco inconcebido el deterioro de los augurios, que sí no más frescos que las penumbras, se esconderán asechantes Y sobresalientes al miedo y las derrotas. La espera carcomió el ridículo de los siglos, ya nadie se quejaba, ni se comía, ni se lloraba. La presencia de lo intacto, no dejó más rastros en su desesperada búsqueda, tanto como si se amara con la palabra y no con precisión de saber como araña, que tejerlas va más allá de las risas que los árboles provocan, al diseminarles un par de malogradas lágrimas de angustia. Nadie apresuró la imagen, ahí se congregó la vida, los espíritus, y sus escenas infinitas e irrepetibles fueron el objetivo para no despertar nunca, así los truenos y volcanes no dieran crédito a lo más imprecindible para todos los objetos, sí, carcomerse hasta no dejar de ilustrar, con la armonía de sus irregulares formas los momentos desvividos y saturados de impase seudofetal. Sucumbieron las voces, cuando éste dio fe

a todos los presentes, de que las cosas ahí permanecerían por más de diez muertes eternas, sólo los zánganos remontarían el vuelo, todos ya envueltos en la sabiduría del olor de las mujeres caminantes, permanecerían con las manos abiertas, en espera de nuevos encantos. Ya sólo con la energía de las miradas todos mudarán la decencia de la noche a sus espaldas, para que después de un largo y directo trazo, el día los conduzca a más escenas irrepetibles, como las de hoy en el desacierto del indebido apareamiento del norte con el sur y sus más sagradas dolencias.

Destino El destino abrió los ojos, invadió el espacio y azotó la puerta. Se empapó el día de suerte arrullada. Una línea se figuró por fuera del futuro, y lo rodeó de alientos. Se deshojó su historia, dejando autores doblados sobre el escritorio. Hoy el destino me planchó la idea, me dobló la esperanza y me colgó en ropajes añejos. Hoy el destino no me dejó otro camino que el horóscopo.

Viento El viento iluminó el vacío y estremeció al tiempo, levantó una nube e invadió el espacio. Aromatizó el día y prosiguió su camino de antaño recuerdo. Se fue preñando formas y arrastrando voces y en el ulterior de su inútil vagancia, nos dejó otra vez un invisible quebranto de delicias. GISELA LOPEZ* I.COMO ALGUNOS HUMANOS. Sin percatarse de la llegada de la noche, los topos continuaron apretando los ojos y hablando pestes sobre la luz del día. II.LUNA. Allí está el huevo blanco. Todos agurdan.¿Será de bronto-pajaro? ¿Será de dino-fante? Pasan dos... treinta siglos. Seguimos esperando. III.PRINCIPIO SIDERAL. El dragón no tenía ninguna fórmula compleja, ni maquinaria intrincada en su caverna: para producir fuego le bastaba con abrir la boca. MARIO PAYERAS* ZONA REINA No recordamos ya cómo éramos al principio porque con cada día parte un cadáver nuestro a pudrirse en el tiempo. Nuestros mejores esbozos de humanidad futura resultaron apenas artificios de pólvora que ardieron bajo la lluvia de la primera noche,

porque aquí la realidad todavía está en guerra con los pájaros e ignora por lo tanto la cristalización de la decrepitud y los tardíos laberintos en que suele extraviarse su mudanza. Y agreguemos: nunca como estas mañanas estuvimos tan exentos de los envejecimientos del espíritu ni nuestros pensamientos se parecieron tanto a nuestros actos. SIERRA DE CHAMA Hemos llegado a un mundo olvidado por los aviones y los pájaros. Durante varios meses nuestra pequeña tropa arrastró por la selva su aparatosa impedimenta: tres mástiles de navío, trapecios de volatín y una carpa en harapos, dos elefantes viejos, una ballena con la cola maltratada por la ingratitud de la materia y demás artefactos que generan júbilo. Quienes sobrevivimos al último diluvio hemos aprendido a orientarnos por los recuerdos, porque del sol hace ya muchos meses que no se tiene noticia, y para ver a Orión describiendo en el cielo sus piruetas de aeroplano melancólico es necesario esperar la vejez del verano. Sin embargo, nunca un puñado de bolcheviques con lombrices había estado tan cerca de tumbar la ley endurecida que gobierna la hechura de toda mercancía. Dos cosas más aprendimos en la lluvia: cualquier sed tiene derecho cuando menos a una naranja grande y toda tristeza a una mañana de circo, para que la vida sea, alguna vez, como una flor o una canción. DE LA VIDA ENVIDIABLE DE FELICIANO ARGUETA

Ya ves que aquella despedida de México, provisional como todos los plazos del corazón, no pudo sobrevivir a su propia promesa. Y hoy que es marzo, compañero, y que ya no te encuentras bajo este viejo cielo donde los pájaros son desmemoriados, me llena la certeza de que mientras no nos vimos averiguaste más sobre la semejanza que en los días de la escuela llegamos a vislumbrar entre la realidad y las marquetas tempranas que dejaba en las esquinas el carruaje del hielo. Así supe que en los años de la guerra te asediaron a menudo las papalotas de la infancia; que a tí también te desvelaron las estrellas en las noches de la sierra (esa desordenada fiesta de bengalas de difícil sentido), y que entre tantos paisajes como viste había dos o tres que para tí llegarían a ser insustituibles. Supe que después de todo te sorprendió que el amor fuera eso tan disperso, que puede a veces consistir en el rito desolado de recoger para alguien que ni siquiera conocemos las caracolas de Guanabo, en las interferencias de una marimba lejana en la noche de Bruselas o en la muchacha de la blusa azul que un domingo de Berlín nos reveló con sus modales los infinitos riesgos del olvido. Hoy sé que así tratabas de explicarme que el mundo es demasiado grande para nuestra nostalgia. Y esa desamparada aventura terrestre íbamos a contárnosla aunque fuera después de aquellos largos almanaques de ausencia, como tú mismo decías.

Yo te esperé muchas veces en un café de Praga desde el que pueden seguirse las costumbres de las gaviotas de noviembre, mientras tú quizás andabas, en horarios distintos, por el remoto cielo de Valparaíso, pensando que en efecto la realidad es translúcida pero que es atravesable en un solo sentido porque no tiene caminos de regreso. Y qué bueno hubiera sido encontrarnos algún día para entregarnos cuentas de lo andado, para mirarnos a los ojos por lo menos una vez más en la vida, y arrancarnos (¿quién sabe?) los flores que entretanto nos hubieran crecido para el otro en el propio corazón. Pero tú sabías que no vale la pena tratar de ser felices a la vieja manera. Por eso es explicable que en tu cartera se encontraran simples objetos de hombre que no le teme al olvido (y desde aquella hora la muerte no es para mí esa patria feroz que nos aflige tanto con su ternura solitaria), y que un 14 de abril te olvidaras de las citas y de las fechas humanas y te marcharas conforme hacia el largo domingo sin barriletes ni pájaros, la región que en los mapas más antiguos que existen solía representarse con una ballena triste.   CHILABASUN Hay un lugar nublado en las montañas del norte al que los hombres llaman Chilabasún. Es una zona frecuentada por pájaros migratorios, y quienes siempre tienen hambre han aprendido a cazarlos [en los atardeceres,

atrayendo con fuego las bandadas hacia las barreras de carrizo donde se estrellan aturdidas, pues los pájaros siempre llegan del este y confunden con el sol la nube iluminada. Nosotros somos comunistas y se nos hace fácil el proyecto de repartir los bienes materiales, porque no tenemos nada; pero no repartirmos de la misma manera el amor nuevo de nuestro corazón, pues no somos todavía como esos inolvidables compañeros de la sierra que siempre han ignorado el sentido y la teoría de la propiedad terrestre.   LA ESTRATEGIA Y LA FLOR DEL TAMBORILLO Quien piense dirigir una guerra en la selva, tiene que aprender de la flor del tamborillo. Ningún general asedia al adversario con tanta maestría, como esta flor amarilla. Todos los años toma febrero por asalto, instaura la floración total de la primavera y se retira sin ruido por las rutas de marzo. EL PENSAMIENTO ES UN PAJARO EXTRAÑO El pensamiento es un pájaro extraño que se alimenta de sus propios yerros. Toda filosofía guarda algo de los sofismas frente a los cuales se erige como verdad. De residuos de teoría construimos el martillo para demoler lo viejo.

OTTO-RAUL GONZALEZ*

I. SUEÑO RACIONADO Sueño racionado es igual a la luna mutilada

los que estamos al margen no tenemos el menor derecho al manjar de los sueños y menos a mover un dedo para mezclar la realidad y el sueño. Y seguimos existiendo subsistiendo sobreviviendo aunque nos sean ajenos el pan el sueño la alegría la salud y la limpieza excepto el aguardiente. Y esto sucede en muchos mapas de la cicatrizada geografía de la tierra en donde hay viejos países y jóvenes naciones con el sueño racíonado y la luna mutilada. II.PATRIA EXPATRIADA El país de la luna mutilada a diario se desangra a diario expira el trompo del terror gira que gira y es su giro una sombra atormentada. En toda la ciudad ensangrentada un aire denso y fosco se respira el territorio es una inmensa pira donde arde todo lo que no es espada. En el aire rural la nube espesa de los odios encógese y estira porque la patria misma está expatriada. el cielo está nublado de tristeza porque es triste mirar si es que se mira el muñón de la luna mutilada. III.MUERTA PRIMAVERA Todo país con luna mutilada es un país de muerta primavera con tasas de mortalidad muy altas de niños por lombrices o por hambre y de adultos por balas y torturas un país en donde crecen ortigas y alimañas. Un país con luna mutilada es un país de vergüenzas de corrupción y de cinismo en donde la dignidad está en la cárcel el patriotismo bajo tierra y el decoro en el exilio.

En un país con luna mutilada son "felices" los cerdos y las ratas las suripantas de los farones y las hienas llenas del establecimiento. En un país con luna mutilada los perros ladran larga inútilmente al sonámbulo hueso de la luna. IV.VENTA DE LA ESPERANZA País donde hay campesinos sin tierra que para subsistir se vean precisados a vender su esperanza país con niños desnutridos país con desempleo y telarañas salarios de hambre y atole con el dedo país de corrupción y bandidaje de fraudes maquinados y aquí devuelvo todo país en donde se persiguen las ideas como persiguen a las zorras los ingleses país en donde se tortura a los patriotas país en donde la libertad tenga cadenas es un país que tiene la luna mutilada. EDWIN CIFUENTES*

VERSION POETICA DE ALMA CIENFUEGOS Si pudieras hablarme me dirías no necesitamos versos ni poemas ni Poesía necesitamos amor transformado en trabajo en comida en solidaridad en pertrechos de guerra necesitamos la comprensión del hombre para sentirnos hombres entre humanos ¿No ves, padre, que mientras yo gozaba de todo loque me daba tu amor

millones de pequeños como yo morían ignorados o arrastraban su niñez desvalida frente a las bayonetas? Pero no puedes hablar y sin embargo me dices todo eso porque tu voz fue una voz frutecida germinó con semilla de amor en las casas sin rosas y sin pisos en los ranchos donde la miseria se resiste sólo con la esperanza por eso tu palabra se quedó encendida en la humildes legumbres diarias de los ranchos en la promesa verde de la milpa y en el pederal flamígero del guerrillero y por eso tu palabra seguíra escuchándose aunque tu voz ya esté decapitada en tu garganta quieta porque esa quietud te llegó encarnizada después de una niñez atónita sintiendo las injusticias a tu pueblo después de una adolescencia atribulada tratando de componer el mundo en plena juventud en plena lucha después de muchas horas de borrar con el arma en la mano la afrenta inmemorial hecha a tu pueblo.

JOSE LUIS VILLATORO* POEMA Ayer pasó Dios por mi puerta -y me miró a los ojos (nunca lo había visto de aquel modo inquisitivo) Hizo que repitiera el nombre que llevo entre los labios -Era tu nombre amor -Vida -y se puso alegre -y me tocó la frente con sus dedos nudosos CASA DONDE VIVO en todos los cielos te encuentro -y en el agua te veo en los caminos y en la lluvia -en la hoja que cae y en el vapor que se levanta -en la nube que se va deshilando sobre la montaña -en la hierba -en la corteza de algún árbol todo lo que dije antes lo dije por ti -y lo que diré desde ahora lo diré por ti verte de nuevo no es reencontrarte -es cerrar el círculo de angustia para romperlo en todos los pedazos -tu nombre es todo lo que miro y todo lo que siento si pudiera tocarte como en la última distancia -palparía mi propia piel mis palabras y mis ideas y si volviera al lugar donde te conocí -llegaría a la casa donde vivo y a la tierra donde he de quedarme EXORCISMO En los ojos llevas un pez muerto -un pez nocturno-

y un pájaro disecado. Ha de ser por miedo -el miedo a la libertad de expresión que padecen los analfabetos. Pero ayer te exorcisaron y te dieron permiso para otros menesteres -gracias señores buhoneros de la verdadasí que ahora llevas con entera libertad tu pez y tu pájaro entre los ojos -ya eres salvo. LA PALABRA IMPOSIBLE Cuando uno muere -pueden morir dos o máspienso que la última imposible palabra queda prendida entre los dientes. Al cabo de los días se descompone y se licúa -la palabray discurriendo por la tierra se convierte en savia y luego en hoja p flor Y eso es lo que me gusta: hoja o flor. EL ENCANTO DE LA CLASE MEDIA La clase media se para en la esquina con sus pancartas fetiches y pudores. Propongo que le subamos el voltaje a los ojos de los cuervos -cada uno queme su efigie en el altar familiar del día lunes-. La clase media tiene blancos los ojos y sólo mira desde el ojo de la llave -sus trapos limpios,

lavados en casa, y sus zapatos brillantes son sus melancólicas señales. No veo que se escape de tan amaestrada -para ella inventaron los perritos pequineses, la inflación y la paternidad responsable. CUANDO VENGAS Entras. Te sientas. Cruzas las piernas. Y los ojos se me caen como moneditas falsas, tintineando. La próxima vez que vengas me quedaré en la puerta, estático, viendo el sol que se desliza por la calle, mientras tú te sientas, cruzas las piernas y lanzas tus dardos a vibrar sobre mis ojos. VOLVER Volveré a mi tierra. Volveré. Pondré mi frente entre sus manos. El calor del surco entrará en mis ojos hasta el alma. No rehusaré su calle ni su puerta. No rogaré que me ame, porque su corazón me ha esperado por años y nieblas. Siempreviva No soy su hijo pródigo ni tengo de qué arrepentirme. Es mi pueblo y yo soy su estambre, su recuerdo que regresa, su pequeña hoja voladora, su mata de salvia en la calleja. Pondré junto a sus sienes un árbol de canciones he de vivir para este acatamiento que venero en la distancia.

Sistema político Guatemala tiene un sistema de gobierno republicano, democrático y representativo. El Presidente y Vicepresidente, denominados en las candidaturas como binomios, son electos directamente por medio del voto universal y están limitados a un período improrrogable de cuatro años. El vicepresidente puede ser candidato para presidente después de pasar cuatro años fuera de su cargo. El poder legislativo lo ejerce el Congreso de la Republica (unicameral), compuesto por 158 diputados electos directamente mediante sufragio universal y secreto, por el sistema de distritos electorales y lista nacional, para un período de cuatro años, pudiendo ser reelectos. Cada departamento del país constituye un distrito electoral. El municipio de Guatemala forma el distrito central, y los otros municipios del departamento de Guatemala constituyen el distrito de Guatemala. Por cada distrito electoral deberá elegirse como mínimo un diputado. La ley establece el número de diputados que correspondan a cada distrito en proporción a la población. Un número equivalente al 25% de diputados distritales será electo directamente como diputados por lista nacional. La administración de justicia es ejercida por la Corte de Constitucionalidad y la Corte Suprema de Justicia. Asimismo, participa en el sistema de justicia el Ministerio Público.