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• Andrea Fabiana Blaschi

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Curso: Magia de los cristales, las piedras y los metales – Institutos en la Web

8 - Activación esotérica Todos los elementos de uso mágico personal requieren una preparación, los cristales no escapan a ello.

- Limpieza y armonización Si bien todos los cristales y gemas han sido limpiados (higienizados) luego que llegaron a nuestro poder, para utilizarlos con fines mágicos hay que realizar operaciones adicionales. Estas dependerán de las costumbres y creencias del operador mágico. Algunos los consagrarán a alguna entidad de su preferencia; otros, a un trabajo específico y otros, simplemente para su uso personal. Una de las formas más comunes es por medio de los 4 elementos.

- Por los cuatro elementos Los cristales, como ya vimos con anterioridad, se pueden “limpiar” con cualquiera de los elementos de forma individual pero para lograr un equilibrio mayor es conveniente (si se quieren utilizar en rituales mágicos, por ejemplo) realizarlo con todos: tierra, aire, fuego y agua. Aunque también puede darse que se quiera reservar un cristal para utilizarlo cuando se invoca a un elemento específico, como su representante y símbolo. En ese caso, hay que limpiarlos y programarlos con el elemento correspondiente para potenciarlo. Generalmente se usan cuarzos, por lo que no suelen tener inconvenientes con ninguno de los elementos. Las advertencias son para cuando se usan otras gemas que pueden presentar problemas con alguno de ellos.

Para limpiarlo con cada elemento (de forma individual) se recomienda:

- Tierra: Colocar en un recipiente, cuya medida dependerá del tamaño del cristal, tierra recién recogida (sin abono, fertilizante ni acidificada) e introducir la gema o cristal en ella, cuidando que la tierra la tape en su totalidad.

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Al hacerlo se piensa (o se dice una oración alusiva) que la tierra limpiará y cargará luego al mismo con sus potencialidades; si se lo consagrará específicamente a dicho elemento, tenerlo previsto en el momento de hacerlo. Dejarlo enterrado durante 1 hora aproximadamente. Hay que tener cuidado con las piedras que se exfolian fácilmente o las que no puedan sumergirse luego en agua. En el caso que sea una piedra de las mencionadas anteriormente, se las colocará encima de la superficie de la tierra. Por razones obvias, las que se exfolian, o no se pueden lavar luego, no son buenas representantes exclusivas de este elemento.

- Aire: Para consagrar por aire, hay que preparar un sahumerio acorde. En este caso sería bueno que fuera de “hojas”, como el laurel, salvia, romero, etc. El procedimiento es el de pasarlo por sobre el humo. Si se trata de un cristal exclusivo para operaciones que requieran el auxilio del aire (pensamientos, rapidez mental, etc.), es conveniente colocarlo en un recipiente perforado que permita el paso del humo y lo contenga un poco. Para esto son especiales los de boca ancha, que permita colocar sobre él otro elemento que contenga el cristal. Un ejemplo práctico sería colocar un colador tapado pero no sellado, es decir que concentre el aire pero que tenga un espacio para salir. La idea es que el humo lo rodee pero no lo ahogue.

También están los que tienen tapa perforada, por lo que se puede dar vuelta y colocar el cristal encima de la tapa invertida.

Se lo consagra de la misma forma que el anterior (pensamiento o una oración específica) y se lo deja 1 hora expuesto al humo. Si el sahumerio se apaga antes, se lo deja igual (no se prende otro) y se espera que el humo del contenedor se disperse. Al sacarlo se lo sopla levemente, especialmente si es específico para este elemento.

No presenta contraindicaciones salvo que esté muy cerca del sahumerio y se queme. Hay que dejar en claro que el cristal solo se expone al humo del sahumerio, dado que el carboncito ya debe estar al rojo vivo para evitar despedir humo de carbón.

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- Fuego: La consagración por fuego puede tener dos versiones, una la exposición al sol como máximo exponente del calor; la otra, la realizada en un ritual. Pero si lo consagramos en nuestra mesa ritual, lo que debemos hacer es exponer el cristal al fuego de una vela, salvo que se logre que un rayo de sol ingrese por la ventana sobre la mesa e ilumine directamente la gema (todo puede ser). Si no logramos “embocar” justo el rayo de sol, vamos a utilizar una vela encendida. Previamente nos proveeremos de unas pinzas, que no sean conductoras de calor o lo sean al mínimo, que nos permitan sostener el cristal para pasarlo por el fuego, atravesándolo varias veces mientras se lo consagra por medio de la oración y/o el pensamiento. Sabemos que este elemento no es el que “más paciencia” tiene por lo que unas veces que lo pasemos sobre el fuego bastan.

Tener cuidado con los cristales que “no se llevan bien” con el calor, por lo que no servirían como “exclusivos” de este elemento

- Agua: Para consagrar por agua necesitamos un recipiente lo suficientemente hondo como para introducir el cristal, o cristales, y que el agua lo tape totalmente. Este deberá llenarse con agua fresca. Se toma el cristal y se lo sumerge en el agua mientras se piensa (o se dice una oración) que ese líquido elemento se llevará todas las impurezas. Se lo deja sumergido durante una hora y luego se lo retira y se lo deja secar antes de guardar. Si quedara exclusivo para trabajar con dicho elemento se lo puede dejar sumergido en el agua hasta que se requiera utilizarlo en algún ritual.

Aquí hay que prestar atención con la lista de cristales que no pueden sumergirse en agua debido a su composición química. A pesar que también se puede solo salpicarlos con agua, sin sumergir, sería ilógico utilizar un cristal-agua que no pueda sumergirse en el elemento que representa.

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Para el caso en que se quiera utilizar una gema para todos los elementos, se colocan en la mesa todos los elementos en sus contenedores respectivos y se va pasando el cristal por cada uno de ellos: se deje apoyado sobre la tierra 10 minutos, luego se lo pasa por el aire del sahumerio, por el fuego de la vela y, por último, se lo salpica con agua. En caso de haberse ensuciado con la tierra se lo sumerge y se lo saca enseguida. Luego se lo deja secar directamente al sol o al natural, siempre que no sea proclive a la oxidación, para lo cual hay que recurrir a las clases anteriores sobre su composición química y forma de limpieza. Por otra parte, si se desea consagrar, además, el cristal para alguna entidad, se arma nuestra mesa ritual y se coloca la imagen de la misma, procediéndose a ritualizar la acción mediante el pensamiento o la oración específica. Los cristales deben ser guardados con las mismas condiciones de respeto y limpieza que los demás objetos mágicos. Hay cajas que son muy útiles para guardar los cristales, especialmente cuando son chicos y se los quiere mantener separados, ya sea por color, composición, clase, etc. y no se posee mucho lugar Muchas veces son los que se venden para guardar comida, multiuso o las que se usan como organizadores. Lo importante es que tengan divisiones y que solo se use para los elementos mágicos.

Cajas organizadoras de doble piso y cierre hermético (Colección personal)

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- Activación Básicamente, con el paso anterior, nuestros cristales estarán limpios y armonizados, pero si queremos podemos activarlos con energía extra. Esta será la del Sol y la Luna como representantes mágicos por excelencia.

- Por la luna y el sol La activación por medio de estos dos astros se debería realizar 1 vez al mes y consiste en exponer nuestros cristales, durante toda la noche, a la acción de los rayos de la Luna (comienzo de la Luna Llena) y dejarlos para que al día siguiente reciban los rayos del Sol desde el amanecer. Lo que en total llevaría 24 horas. Dicho así parece muy sencillo, pero hay que esperar que no esté nublado y que se puedan hacer ambas acciones a la vez. También hay que tomar algunas precauciones por hechos que puedan exceder nuestras acciones, por ejemplo, pájaros que “pasen” justo por allí o insectos que “curioseen” encima (sin contar caracoles y demás parientes) y terminen ensuciando o contaminando, lo que tanto trabajo nos llevó limpiar. Si bien parecen más complicaciones que posibles servicios, siempre hay una forma y la tenemos que encontrar, nada debe detener el trabajo del mago y mucho menos, los imprevistos que, valga la contradicción, podemos prevenir. Para evitar esos problemas es conveniente proveerse de una caja de cristal (sería lo ideal), vidrio o acrílico, que sean totalmente transparentes (y sin señales, tallados y/o grabados externos) para colocar nuestros cristales adentro a efectos de protegerlos del medio ambiente (y de sus habitantes) y, al mismo tiempo, permitir que los rayos astrales atraviesen el material transparente. Un caso extremo de “fanatismo” mágico sería conseguir una caja transparente del color de cada piedra y así lograr que no solo pasen los rayos, sino que también sea potenciada por su mismo color. Pero con transparente basta y sobra. No siempre las exageraciones conducen al mayor éxito. Muchas veces nos detenemos en el detalle y perdemos un poco la focalización en la esencia.

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Como ya vimos la forma de exponerlos a la energía de ambos astros consecutivamente, a continuación los analizaremos de forma individual. - Por la luna: La energía lunar no es tan fuerte como la solar, por lo que hay que dejarla actuar más tiempo. Favorable para las cargas emocionales e intuitivas, es ideal para cristales asociados como el cuarzo, la amatista, el topacio amarillo, etc. Por otra parte, hay piedras de carácter lunar que se verán muy beneficiadas si son expuestas a la luz de la luna en fase creciente o en luna llena. Estas piedras son el cuarzo blanco, la selenita, la amatista, la esmeralda, las perlas y la piedra de Luna. Piedra de luna

Estas gemas, salvo el cuarzo blanco, no se llevan muy bien con demasiada exposición al sol Respecto a la relación de las perlas con la luna y su influencia en la carga emocional, hay una tradición extendida sobre su uso en los vestidos de novia: se desaconsejan debido a que estas simbolizan las lágrimas y se dice que serán lágrimas que se derramarán durante el matrimonio.

Esta creencia se basa en que las perlas son consideradas las lágrimas del mar (por la forma en que se forman, creando dolor) y representan las propias lágrimas de la novia, por lo que llevarlas durante la boda atrae la desdicha hacia el matrimonio. Yo no soy supersticiosa, incluso las he usado muchísimo, pero recuerdo haberle dicho a alguien que no colocara perlas en su vestido de 15 años por su simbolismo en ocasiones tan especiales. No me hizo caso: la niña en cuestión se la pasó llorando toda la fiesta por problemas que surgieron en la misma. En fin, casualidad o no… le pasó!

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- Por el sol: La energía solar es muy fuerte y se potencia según la estación, por lo que no resulta extraño que se la relacione con la energía física y la fuente de vida.

Piedra del Sol

Las piedras relacionadas con esta energía, tanto física como mágica, son la piedra del sol, el ojo de tigre, el cuarzo cristal de roca, el rubí, etc., cuya exposición al sol las potencia.

- Programación Una vez limpios, armonizados y activados, se procede a la programación efectiva de los cristales para darles la intención de uso: la “tarea” a desarrollar. Los cristales programados ayudan a aumentar la capacidad psíquico-física. Eso no significa que poseerán poderes mágicos ni que actuarán por sí mismos. Esa programación servirá para reforzar nuestra propia capacidad y voluntad para conseguir los fines perseguidos. Se puede realizar la programación de una forma rápida y sencilla o por medio de un elaborado ritual. Todo dependerá del tiempo disponible para hacerlo. La forma rápida es sostener el cristal en una de nuestras manos mientras pensamos en la tarea para la cual lo necesitamos. Al pensar en ella, deberemos visualizarla ya cumplida, a efectos de transmitirlo al cristal. De más está decir que dicho cristal (como todos los objetos rituales personales) no debe ser tocado por otras personas, por lo que debe ser colocado en lugares especiales. Podemos programar todos los cristales que queramos, claro que recordando para qué fue programado. Generalmente, cuando se los guarda, se coloca un papel con el objetivo, ya sea para recordarlo o para que la programación continúe aunque no se lo use de forma rápida.

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- Ritual simple Otra forma consiste en elaborar un ritual en nuestra mesa de trabajo. La simpleza o mayor elaboración dependerá de quien lo realiza. Este ritual es solo indicativo: nada supera a la creatividad personal. - Materiales: 2 velas de altar largas (1 blanca y 1 negra, ó 2 blancas) 1 vela (corta) astral o zodiacal correspondiente al ritualista 1 incensario con el sahumerio correspondiente (de hojas) 1 recipiente con tierra 1 vela roja (corta) 1 vaso con agua 1 pinza para sostener el cristal 1 pincel pequeño o brochita 1 paño absorbente tipo ballerina (de uso exclusivo para rituales) Cristal/es para armonizar y programar al mismo tiempo - Realización: 1.

Preparar sobre la mesa ritual todos los materiales, dejando afuera la caja de los cristales para programar (si es que se van a hacer varios a la vez)

2.

Ubicar cada vela en su lugar, comenzando por las de altar y luego la personal (o astral). En caso de querer colocar una entidad u objeto de fe, el mismo se ubicará en el medio de las dos velas de altar.

3.

Colocar en la superficie libre de trabajo, en la parte baja, el recipiente con tierra y el pincel; a la izquierda, el sahumador con el carbón al rojo vivo; arriba, la vela roja (con la pinza al lado), el vaso de agua a la derecha y el paño absorbente en la esquina inferior izquierda. (Ver diagrama)

4.

Proceder a encender las velas de altar y astral de la forma acostumbrada; luego colocar las hojas del sahumerio encima del carbón y encender la vela roja.

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5.

Luego se toma una de las piedras y se la coloca en el medio de los 4 elementos mientras nos concentramos en el trabajo a realizar con ella.

Ya está todo en orden para comenzar el ritual 6.

Tomando nuevamente la piedra, se procede a enterrarla en el recipiente correspondiente (si es factible, sino se la apoya sobre la superficie) mientras se mentaliza el accionar de la tierra sobre la misma, purificando el cristal e invocando al elemento, diciendo: “Yo te invoco, elemento tierra para que purifiques este objeto de uso mágico” Lo dejamos un par de minutos y lo sacamos, limpiando con el pincel la tierra excedente sobre el mismo recipiente.

7.

Una vez pincelado, lo tomamos con la pinza, para pasarlo por encima del sahumerio, mientras se invoca (ídem anterior) al elemento aire. Lo pasamos varias veces y por último, lo soplamos.

8.

Repetimos la operación, pero esta vez pasando el cristal (tomado con la pinza) sobre la vela invocando al elemento fuego. Lo pasamos varias veces cuidando de atravesar con él la llama (pero sin dejarlo encima)

9.

Por último, sumergimos la piedra en el vaso de agua mientras invocamos al elemento agua. Lo dejamos un par de minutos y lo dejamos secar de forma natural sobre un paño absorbente limpio. Si se trata de cristales que no pueden sumergirse en agua, solo los salpicaremos con unas gotas mientras se realiza la invocación.

10. Procedemos de igual manera con todas las demás piedras, dejándolas sobre el paño a medida que se va terminando con cada una de ellas

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11. Una vez purificadas todas las gemas, si pretendemos que cada una desarrolle una tarea específica, las tomaremos (una por una) entre las manos y las cargaremos, mentalmente, con la intención correspondiente. Ejemplo: protección, armonización, etc. 12. Al terminar el trabajo se guardan adecuadamente las piedras y se cierra la mesa de la forma acostumbrada en los demás rituales (apagado de velas, eliminación de los restos, etc.)

Esta mesa ha sido armada para el hemisferio sur, por lo tanto colocamos el fuego al Norte, la tierra al Sur, el agua al este y el aire al oeste. Al realizarlo cerramos el círculo mágico de carga de la piedra, como las agujas del reloj (forma explicada profusamente en la clase Nº 24 de armado de Círculo mágico)

9 - Aplicaciones mágicas Las aplicaciones mágicas de los cristales se pueden presentar en varias áreas y éstas varían de acuerdo a la utilidad que deben prestar. Una de las formas es armonizando lugares específicos; otra, personas a través de amuletos o talismanes personales; y, también, formando parte de objetos de uso mágico o accesorios para rituales. Por tal razón, las dividiremos para su mejor comprensión

- En lugares Su ubicación en determinados lugares puede crear ambientes armónicos, obteniendo así una agradable sensación de bienestar. Pueden ser colocados en habitaciones de estar, o de descanso, pero también en oficinas como parte del “decorado”, aunque con la programación adecuada. En estos espacios cumplen la función de armonizar, proteger o equilibrar desfasajes de elementos.

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- Armonización energética El uso pasivo de cristales sirve para energizar positivamente cualquier habitación, incluyendo baños y cocinas. Cuando se quiere utilizar los cristales para armonizar lugares, hay que tener en cuenta varios factores. Uno de ellos, es conocer la parte del cristal donde se centra su energía (a efectos de dirigirla correctamente); el otro, la forma en que se los puede acomodar para crear campos energéticos adecuados a las necesidades. Para esta función pueden usarse tanto cristales de cuarzo, como rodajas de ágata (incluso colgadas en la pared) drusas o geodas, los que se situarán encima de repisas, escritorios, muebles, colgantes (de pared), etc. Rodaja de ágata (colección personal)

- Puntos energéticos: Los puntos energéticos de los cristales dependen en gran medida de su forma. Generalmente, para esta función, su usan los de tipo alargado o con alguno de sus componentes en punta. En este caso, la energía de esos cristales se centra en su extremo, por lo que si logramos focalizarla, o dirigirla, podremos elaborar campos energéticos vibracionales dentro del ambiente. La punta de los cristales (en caso de tenerla) deberá ser dirigida hacia el centro de la habitación y según la cantidad de cristales que dispongamos será la forma en que los ubicaremos. La idea es colocar los cristales de tal forma que si trazáramos líneas imaginarias se conectarían entre sí. El esquema dependerá de la función o tamaño del espacio a cubrir.

También pueden utilizarse cristales que no sean alargados, pero su forma determinará su centro energético: pirámides en la cúspide; redondas en su centro, etc.

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- Diagramas energéticos: Si se posee un solo cristal, se colocará con la punta hacia arriba en el centro de la habitación, por ejemplo, sobre una mesa; éste hará las veces de catalizador, equilibrando el entorno con su carga energética.

También se pueden colocar varios cristales pequeños juntos, mezclando cuarzo con otras piedras si se quiere, dentro de un recipiente. Esto provocaría que los cristales se potencien entre sí. Otra opción, para el centro de la habitación, es colocar las distintas piedras sumergidas (si su composición química lo permite) en un bol con agua. El agua se cambia cuando se pone turbia o se evapora; en otros casos se le coloca una tapa como protección (especialmente en las estaciones donde proliferan los mosquitos).

Colección personal

Periódicamente se le puede agregar otra piedra, o monedas, como si fuera una fuente de los deseos. Cuando se tienen varios cristales similares se pueden armar diagramas, disponiendo las piezas de tal forma, que produzcan campos energéticos al potenciarse entre sí. Estos se pueden armar en un mismo lugar, por ejemplo en una mesa, o ser distribuidos en toda la habitación armando una figura geométrica.

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Curso: Magia de los cristales, las piedras y los metales – Institutos en la Web Ejemplos: En una habitación grande (de las típicas cuadradas o rectangulares) se puede colocar, en cada ángulo formado por la paredes, un cristal de cuarzo cuya punta se dirija hacia el centro de la misma. Esto formaría un cuadrado que “encerraría” la energía dentro del lugar. Otras figuras que se pueden armar para armonizar una estancia son un triángulo o una estrella. Si se decide disponer los cristales en forma de estrella sería bueno colocar una turmalina en el centro a efectos de que circule la energía entre los cristales. Las puntas se enfrentan cuando están suficientemente separadas, pero en lugares chicos (mesa, escritorio, etc.) la punta va hacia arriba. Para habitaciones muy grandes conviene usar maclas de cristales (cuarzos, turmalinas, amatistas) situándolos en ángulos opuestos y apuntando con la punta hacia el centro. En lugares donde circula mucha gente se pueden usar cristales redondos o esféricos (como la bola de cristal) que permiten la libre circulación. También se pueden colgar en las paredes enfrentándose. Hay muchas variantes. La creatividad aumentará las posibilidades

En este diagrama se pueden observar marcados algunas posibilidades (obviamente que los cristales no están a escala sino no se vería nada)

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En este se aprovecha la curvatura para colocar una esfera en el centro. Las piedras negras están colocadas en la entrada

Colocados adecuadamente favorecen la meditación, la percepción y la concentración. Al armonizar el lugar contribuyen a la armonización de la persona que está allí o de las que circulan por el lugar.

- Protección De la misma forma que armonizan, hay algunos cristales que son “expertos” en protección, tal es el caso de la turmalina negra. Si buscamos una forma especial de protección sería la de la pirámide. - Piedras negras: Las piedras negras, debido a su color, tienen la función de absorber cualquier energía transmutándolas. Suelen tener propiedades equilibrantes, siendo la turmalina negra la estrella. Absorben, limpian, transmutan y protegen.

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Turmalinas, ónix, obsidiana, azabache, todas se convierten en ayudantes en la lucha contra la “mala onda” protegiendo tanto a quien la usa como al lugar donde está situada, actuando como escudo. Las piedras negras no son para todos, especialmente para aquellos que consideran al color negro como de “mala suerte” o negativo. Como son absorbentes y protectoras es bueno colocarlas fuera de la casa, para que las “capturen” y transmuten antes de que entren las malas energías al lugar. Se pueden ubicar en la entrada

- Pirámides: Las pirámides son energizantes y protectoras. Como ya vimos en la clase anterior, las medidas deben estar en escala. Muchas veces aparecen pirámides de cuarzo cuyas medidas no lo están y solo son buenos pisapapeles. Un modelo especial para protección es la de espejos, dado que refleja las intenciones de quienes ingresan en el lugar, es decir que “se llevan lo que traen” Las llamadas de cristal (cuarzo transparente o cristal de roca) también son protectoras. Cada pirámide de un determinado material tiene sus mismas propiedades aumentadas, es decir que la forma piramidal potencia las virtudes del material en que están hechas. Por lo tanto, las pirámides pueden estar elaboradas con cualquier cristal cuya función sea la de proteger (azabache, citrino, jaspe, ojo de tigre, etc.) a lo que se agrega la potenciación de la forma. Pirámide de ágata Colección personal

- Equilibrio de los elementos y potenciación El tema de los elementos y del equilibrio que debe primar entre ellos ha sido la preocupación de muchas culturas. Pero si bien algunas de estas fuerzas son inamovibles en cualquiera de ellas, como el fuego, el agua y la tierra, otras varían en cantidad y sentido de acuerdo a las tradiciones y costumbres del lugar que se analiza. El sistema hindú de medicina natural y holística, conocido con el nombre de Ayurveda, reconoce 5 elementos: éter, aire, fuego, tierra y agua. Por su parte, la medicina oriental china y el Feng Shui refieren a 5 elementos pero variando dos, que se intercambian por madera y metal. Para la Magia y sus disciplinas, éstos se reducen a los 4 tradicionales: aire, fuego, agua y tierra.

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- Ayurveda: El nombre de este arte de curar ancestral hindú se traduce como “ciencia de la vida”. Reconoce a la mente y al cuerpo como una unidad y por lo tanto, único y diferenciado de los demás. Se basa en la creencia de que “nada es bueno para todo el mundo y que algo siempre es bueno para alguien”. Considera que cada persona reacciona al mundo de manera diferente, por lo que trata de comprender a los individuos a través de la observación de su esencia y su conexión con las leyes intrínsecas de la naturaleza. Para realizar la evaluación, recurre a los 5 elementos: éter, aire, fuego, tierra y agua, donde cada uno de ellos gobierna una parte del cuerpo y de la psique. Para ampliar la información de la incidencia individual de cada uno de ellos ver el texto “Ayurveda, la ciencia de la vida, los cinco elementos” (Lectura opcional Nº 15 )

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Luego los distintos elementos se combinan y, según su unión, dan lugar a tres grupos bien definidos (Doshas) que son los siguientes: ⇒ Vata, producto de la unión de Éter y Aire ⇒ Pitta, de Fuego y Agua ⇒ Kapha, de Agua y Tierra Cada grupo, por su parte, presenta características especiales (estructura corporal, mental, emocional, etc.) y, cuando se desequilibran, pueden traer problemas de salud o de relación. La base en Ayurveda es el conocimiento y comprensión de estos grupos pues, a partir de ese análisis, es posible saber las distintas tendencias a enfermedades, permitiendo escoger lo que es más adecuado para restablecer un desequilibrio. De acuerdo a la naturaleza del desequilibrio, se evalúan los pasos a seguir para restablecerlo mediante una variedad de modalidades que incluyen hierbas, dieta, colores, aromas, sonidos, recomendaciones de estilo de vida, meditación y yoga. Es decir, todo lo necesario para equilibrar los elementos faltantes o controlar los excesos. Por ejemplo, para equilibrar a Pitta (Fuego y Agua) se recomienda: Mantenerse fresco, evitando el calor, el vapor y la humedad en exceso. Evitar el exceso de aceites, picantes, alimentos fritos, cafeína, sal, alcohol y carnes rojas, incrementando el consumo de frutas y verduras frescas. Expresar los sentimientos de forma más calma. Es mucho más fácil mantenerse calmado y enfocado cuando se come una dieta que apoye Pitta.

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Curso: Magia de los cristales, las piedras y los metales – Institutos en la Web - Cultura china: Los Cinco Elementos Chinos lo engloban todo: la naturaleza de las cosas y de las personas, su energía y su comportamiento. Para esta cultura, los 5 elementos son: el agua, la madera, el fuego, la tierra y el metal.

Para los chinos son la manifestación de los movimientos de la energía, ya sea en los seres humanos como en los lugares. La energía se expande, se contrae, se mueve hacia arriba y hacia abajo o se mantiene estable y cada uno de los elementos representa un movimiento. ⇒ Medicina tradicional china: Según la Medicina Tradicional China, los seres humanos estamos constituidos por los cinco elementos, los que se manifiestan en innumerables formas y combinaciones. El profesor Walter Domínguez, profesor de terapias orientales y distinguido como “Maestro en medicina china” por la Asociación de Acupuntura China en Argentina, explica los 5 elementos de la siguiente forma: “Es la fisiopatología de la Medicina Tradicional China, de gran aporte para diagnosticar y tratar el movimiento energético de los órganos y vísceras. Las 5 emociones primarias del hombre. Basándose en la teoría de los 5 elementos, los médicos antiguos estudiaron profundamente los tejidos y órganos del cuerpo, sus fenómenos fisiológicos y patológicos y los aspectos de la naturaleza ligados con la vida humana, catalogando por analogía las cosas con los cinco elementos, de acuerdo con sus distintas características, funciones y formas. Explicaron así las complejas relaciones entre los tejidos y órganos del cuerpo en lo referente a sus funciones fisiológicas y cambios patológicos, como también las relaciones del cuerpo con su ambiente externo. Estas relaciones se registran con detalle en el So Wen, en “Las manifestaciones correspondientes de Yin y Yang” y en “Las verdades inscriptas en el cofre áureo.” 250

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Se deduce, con este método de los cinco elementos, que ya no son básicamente la madera, el fuego, la tierra, el metal y el agua en sí; son también las distintas propiedades de las cosas resumidas en forma abstracta. Por ejemplo, la madera (el árbol) quiere crecer libremente y es suave; por eso lo que tenga estos atributos es considerado como “madera”. El fuego se caracteriza por el calor y la tendencia a ascender, lo que tenga estas propiedades es considerado “fuego”. Dos características de la tierra son la fecundidad y el cambio; lo que tiene semejantes propiedades es considerado como “tierra”. El metal se caracteriza por la pureza y firmeza, lo que tiene esta característica es considerado como “metal”. El agua, por el frío, la lubricidad y la tendencia a descender, lo que tiene semejantes características es considerado como “agua”. Según lo arriba expuesto, los cinco elementos, en la medicina tradicional china, son en realidad una síntesis de las cinco propiedades distintas de las cosas.” Cada elemento interactúa con otro, lo crea, lo debilita o lo controla, en un ciclo permanente de modificaciones, tal como vemos en “Feng Shui. Los cinco elementos” (Lectura opcional Nº 16) Ciclo creativo: La madera alimenta al fuego El fuego produce tierra La tierra crea el metal El metal contiene agua El agua nutre la madera Ciclo de debilitamiento: El fuego agota la madera La madera debilita el agua El agua agota al metal El metal debilita la tierra La tierra agota al fuego Ciclo de control El fuego derrite al metal, El metal corta la madera, La madera debilita a la tierra, La Tierra estanca al agua, El agua apaga el fuego. Y así siguen completando el ciclo de la vida.

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⇒ Feng Shui: Si buscamos una definición de esta técnica encontraremos (palabras más o palabras menos) lo siguiente: “El feng shui (literalmente viento y agua) es un antiguo sistema filosófico chino de origen taoísta basado en la ocupación consciente y armónica del espacio, con el fin de lograr de éste una influencia positiva sobre las personas que lo ocupan”. Para el Feng Shui, cada elemento representa un movimiento, una energía en acción, un color, un material que lo resume y que colaborará en la energía reinante en el hogar, armonizando los desequilibrios que se puedan encontrar en él por un predominio excesivo de alguno de ellos.

Cada elemento presenta una cualidad pero también un defecto, que se hará visible cuando actúa en exceso en algún lugar, dado que actúa sobre las distintas emociones de acuerdo a como estén distribuidos en el entorno. Así, la madera contribuye a la creatividad pero retrasa la maduración de las cosas, su conclusión; el fuego favorece la actividad del lugar pero puede acentuar la agresividad o nerviosismo cuando está en exceso. Por su parte, la tierra acentúa la seguridad pero puede estancar los proyectos. El metal favorece la concentración y el análisis pero su exceso puede determinar rigidez de conceptos o frialdad al expresarlos. Por último, el agua acompaña al reposo y a la fluidez de palabra pero también, su exceso puede generar inestabilidad emocional. Para ampliar los conceptos de cada uno de ellos recurrir a la Lectura opcional Nº 16 (“Feng Shui. Los cinco elementos”)

De allí que procura equilibrarlos, para que quien habite allí encuentre la armonía. Por ejemplo, para controlar el fuego (iluminación muy fuerte) lo apagamos con el agua (fuentes de agua que corra) o lo agotamos con tierra (adornos de cerámica o terracota), pero si lo queremos potenciar recurrimos a la madera (plantas, por ejemplo). Obviamente que cada lugar debe ser estudiado en su totalidad, con los conocimientos específicos sobre el tema. 252

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- Magia: En la magia se ha seguido la teoría occidental de los 4 elementos. Según el pitagórico Alcmeon, estos elementos se determinan a partir de cuatro estados de la materia (frio, caliente, húmedo y seco) que debían combinarse de cierta manera armónica para poder manifestarse materialmente. Cada una de las disciplinas que componen la Magia hace mención en sus principios de los 4 elementos, teniéndolos en cuenta para la explicación teórica de sus enunciados y símbolos, como parte de la representación de los fenómenos naturales encuadrados en la ciencia madre reconocida con el nombre de Magia. Para la Alquimia, los 4 elementos son los diferentes estados básicos de la materia. Es decir, que corresponden a los estados generales y apariencias de la materia, que no difiere mucho (en realidad nada) de los estados de la materia que estudian la Física y la Química (por razones obvias, no olvidemos que es la ciencia derivada de la Alquimia). Comparativamente serían: Tierra =

sólido

Agua

=

líquido

Aire

=

gaseoso

Fuego =

plasma

A modo de dato complementario, a los 4 estados tradicionales se agregaría el Condensado de Bose-Einstein, que daría lugar al 5ª elemento, agregado en muchas técnicas, que llaman “espacio” y otros “éter”. Para seguir un mismo criterio, vamos a tener en cuenta los 4 elementos tradicionales. En Astrología se asocian los elementos a las características de la personalidad de cada cuadrante, luego los signos se agrupan en terceto en cada uno de ellos. Así hay signos de Fuego (Aries, Leo y Sagitario), de Tierra (Tauro, Virgo y Capricornio), de Aire (Géminis, Libra y Acuario) y de Agua (Cáncer, Escorpio y Piscis), que van siguiendo un ritmo intercalado de fuego, tierra, aire y agua en la consecución de su regencia, siendo el 1º cardinal, el segundo fijo y el tercero mutable.

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Curso: Magia de los cristales, las piedras y los metales – Institutos en la Web En Tarot están presentes en los cuatro palos de los arcanos menores y en el simbolismo de los mayores; en la hechicería, en la búsqueda de la síntesis de las cuatro esencias elementales a través del trabajo con los habitantes de los Reinos Intermedios, como le llaman a las moradas de los espíritus de los elementos (Salamandras, Gnomos, Silfides y Ondinas), también llamada “Magia de los duendes”. Además, se encuentran en la mesa ritual a través de los instrumentos y accesorios mágicos que los representan. Tal como vimos en la Clase 19 del primer nivel, de una u otra manera, cada elemento actúa sobre el otro, transformándolo: el fuego consume al agua, pero a su vez el agua lo apaga; el aire aviva el fuego, pero este consume algunos gases que lo componen; el agua moja la tierra, pero esta también la absorbe, etc. Cada uno de ellos actúa sobre el otro para lograr sus beneficios pero también para controlar sus defectos. Ahora la pregunta sería ¿dónde se encuentra la Magia? (además de la clasificación) En darnos cuenta qué actitudes de algún elemento son favorables para nosotros y cuáles no, entonces buscaríamos el apoyo de otro elemento para vencer aquello que nos perjudica. Vamos a lo práctico: Cuando una persona tiene un “ataque de furia” (fuego) qué se suele hacer o recomendar? Un baño de agua fría para que se calme! (“El agua apaga el fuego”) y, a la inversa, cuando una persona está “sumergida” en sus vaivenes emocionales (agua), la técnica consiste en “sacudirla” con energía (fuego) para que reaccione y no se “ahogue” en su problemática (“El fuego consume al agua”). Si la persona está embebida en problemas de tipo material, sean personales o laborales, qué se suele decir?: Salí a tomar un poco de aire, así te despejas! (“El aire ventila la tierra”); pero cuando alguien está disperso, siempre haciendo planes pero sin ponerlos nunca en práctica, qué le decimos?: Bajate de las alturas, poné los pies sobre la tierra! (La tierra desvía al aire) Y así infinidad de ejemplos. Estamos tan acostumbrados a buscar “lo difícil” que no vemos la magia cotidiana ni que las tengamos frente a nuestras narices! Entonces, si queremos lograr que estos elementos nos ayuden en un ritual, primero debemos equilibrarlos en nosotros mismos, así evitaríamos que nos quememos cuando estemos manipulando una vela, estornudemos con un sahumerio, nos ensuciemos las manos o se nos caiga el agua en la mesa!.

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Una vez establecidas las virtudes y defectos que otorgan los 5 elementos en distintas culturas, procederemos a ubicarlos en los distintos espacios físicos: viviendas, lugares de trabajo, etc. a efectos de reconocerlos y equilibrarlos, o potenciarlos, de ser necesario - Predominio de los elementos en los lugares: Antes de establecer los predominios individuales hay que ubicar qué tipo de energía predomina en el lugar: Yin o Yang y para ello distinguiremos a los elementos como tales: Fuego = yang / caliente Tierra = yin / fría y seca (si se toman los 5 elementos la tierra suele considerarse neutra) Aire = yang /caliente y seco Agua = yin / fría y húmeda Una casa o ambiente con exceso de alguna de estas energías (y por ende deficiencia de las otras) reúnen al menos tres de las siguientes condiciones, según los entendidos en el tema publican en la red: Ambientes con exceso Yin (falta de aire y fuego)

Aunque el ambiente sea más lujoso, su impacto visual es Yin

⇒ ⇒ ⇒ ⇒ ⇒ ⇒ ⇒ ⇒ ⇒

escasa ventilación e iluminación deficiente; acumulación de objetos pequeños en lugares estrechos; deterioro de la pintura, predominio de colores pálidos y desgastados; humedad en las paredes o pérdidas de agua en griferías; ambientación en colores oscuros (gris, negro, marrón oscuro) o fríos (azul, blanco, metal); no hay plantas; temperatura ambiental fría; silencio absoluto; olor a encierro o a humedad. 255

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Ambientes con exceso de Yang (falta de tierra y agua)

⇒ luz solar o artificial muy intensa; ⇒ calor excesivo; ⇒ los colores de la ambientación son brillantes e intensos (rojo, naranja, verde flúo, amarillo); ⇒ ruidos estridentes durante varias horas; ⇒ corrientes de aire entre puertas y ventanas; ⇒ plantas en exceso; ⇒ formas triangulares o muebles de contornos agresivos; ⇒ olor intenso de desodorantes ambientales. En una vivienda, si bien no es una “ley” inamovible, los elementos Fuego y Aire (ambos Yang) dominan los problemas de temperatura, ventilación y de electricidad (incluyendo el electromagnetismo); mientras que los elementos Tierra y Agua (ambos Yin) influyen en los problemas de estructura, humedad y cañerías

- Equilibrio de defectos energéticos: Una vez detectados los desequilibrios, de acuerdo a las características antes mencionadas, se puede proceder al equilibrio de varias maneras. Una de ellas es compensar las deficiencias cambiando adornos, colores, etc., tal como recomienda el Feng Shui en múltiples lecturas al respecto, que se encuentra en cualquier parte de la red con las correspondientes indicaciones. Otra, la que compete al curso, sería aplicar distintos cristales de acuerdo con las propiedades que hemos visto en clases anteriores. Para ello recurriremos a la clasificación de las simpatías de los cristales con los elementos:

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Tierra: todas las piedras verdes o marrones Fuego: piedras con tonos rojos y naranja Aire: piedras con tonalidades amarillas Agua: todas las piedras azules y turquesas

O las específicas mencionadas en las páginas 210/211 de la Clase Nº 4, siempre recordando que ante un exceso de un elemento hay que equilibrar con una piedra (o varias) del elemento contrario que lo controla. Obviamente que no hay que exagerar sino el desequilibrio se realiza a la inversa. Todo suma, pero si se exagera… multiplica! Por ejemplo, en un lugar donde haya exceso de energía del Fuego, esta puede ser controlada con una aguamarina. Cuando el exceso es a la inversa (exceso de elemento Agua), un rubí la puede compensar. Obviamente que no es muy común colocar piedras de rubí o aguamarinas de adorno compensatorio, para eso está la lista de piedras acordes y del color adecuado. El agua representa las emociones: una tubería rota en la casa, una inundación en un baño, una gotera, son emociones desbordadas. Pero las piedras y gemas no son la panacea universal, su uso no reemplaza que se llame a un service para arreglar los desperfectos: un rubí no va a arreglar un caño, pero si puede manejar algunos desarreglos emocionales que carguen el lugar. El rojo activa, remueve, energiza. También es muy importante saber que equilibrar los excesos o defectos energéticos no se relacionan únicamente con el Feng Shui, sino que influye a su vez la relación que existe entre las fuerzas, los elementos y el telurismo del lugar donde se construyó la vivienda. Y por tanto es algo que puede ir mucho más allá. El equilibrio de los elementos puede ayudar pero, cuando las cosas superan la media, hay que recurrir a estudios más profundos

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- En personas Las gemas también actúan por contacto, ya sea sosteniéndolas en las manos o en contacto con la piel, ya sea por colocación directa en terapias (algunas de cuyas técnicas vimos anteriormente) o simplemente por exhibición directa sobre el cuerpo: se las suele llevar como colgantes, pulseras, anillos, etc. Muchas veces se las luce como apoyo para aumentar la autoestima, para adornar un diseño o para afirmar un status social, mediante el uso de joyas muy valiosas económicamente, como el caso de las piedras preciosas (costumbre ancestral pero no por eso menos tenida en cuenta en la actualidad). Las prácticas médicas de muchas culturas antiguas incluían el lucir talismanes y amuletos alrededor del cuello. Las piedras eran seleccionadas cuidadosamente para que aportasen la anhelada curación. Pero hay otro sector que les da una función específica y las puede llevar tanto a la vista como escondidas en el interior de la ropa, son las llamadas gemas de protección o de “buena suerte” Este último grupo ya les otorga una misión, por lo que debe programarlas para tal fin o, por lo menos, conocer la tarea a realizar, aunque no conozca a la perfección la teorización al respecto, tal es el caso de los amuletos. Para el uso de talismanes ya se debe conocer las bases de aplicación y para los cristales personales, poseer la programación correspondiente a su tarea e incluir la individualización personal.

- Amuletos y talismanes En la práctica de la magia, los minerales y las gemas cobraron gran importancia y eran indispensables para preparar talismanes y amuletos. Su función resultaba potenciada si se grababa en ellos señales, figuras o escritos propiciatorios. Así comenzaron a aparecer metales grabados con figuras geométricas de variado simbolismo y piedras con fórmulas religiosas o mágicas como "Abracadabra", que aparece a partir del siglo I d.C., o el nombre secreto "IAO" (Jahveh) que se encuentran en numerosos objetos de culto.

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Estos amuletos y talismanes han estado presentes en la mayoría de las religiones y forman parte de numerosas leyendas que se han ido potenciando a través de los años. - Amuletos: Desde tiempos remotos el ser humano siempre ha buscado elementos en la naturaleza con propiedades de defensa o de atracción. Entre ellos podemos encontrar a los amuletos. Los amuletos son objetos que se llevan encima, con la convicción que mantendrá a su poseedor alejado de algo que pueda ser perjudicial para él. Debido a esto habrá gran variedad de acuerdo a su función: protección, potenciación, buena suerte, conseguir algo, etc. Se los encuentra en todas las culturas, muchas veces como “apoyo” a su magia. Entre los amuletos que han pervivido en la historia podemos encontrar los de la cultura egipcia. Los egipcios eran grandes realizadores de amuletos, especialmente para los muertos, su preocupación primaria. Entre ellos podemos encontrar, además del ankh (uno de los más conocidos junto con el Ojo de Horus), el amuleto del corazón, el escarabajo y el ureus, siempre asociados a las atributos de los dioses, cuyas virtudes eran transmitidas a los amuletos.

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Amuleto del corazón: Al corazón se lo consideraba el receptáculo de las “buenas acciones”. Su peso formaba parte del ritual funerario (visto en el primer nivel dentro de la magia egipcia), donde se lo colocaba en la balanza, equilibrándose con la pluma de la verdad. Se confeccionaba este amuleto para colocarlo en el lugar donde se hallaba el corazón del difunto, con el fin de reemplazar el corazón real que fuera retirado durante el proceso de momificación. Se lo acompañaba con otro amuleto, el del escarabajo. Como amuleto representa la integridad y protege de los engaños y la mezquindad, además de las emociones extremas que pueden nublar el buen juicio. Los amuletos-corazón suelen realizarse en cornalina, jaspe rojo, cerámica vitreada roja o pasta de color. Tanto la cornalina como el jaspe rojo simbolizan el dinamismo, el coraje necesario para enfrentarse a los enemigos invisibles. También se lo puede confeccionar en un papiro, con las formas redondeadas y sujeto sobre madera, pintando con un plumín y tinta, dorada o plateada, su forma. Luego habría que quemar el plumín con el que se lo pintó (superstición de los usos y costumbres). Se lo puede colgar en una pared o llevarlo encima.

Escarabajo Uno de los más conocidos amuletos egipcios es el del escarabajo. Dicho amuleto simbolizaba el poder invisible de la creación y renovación eterna, la regeneración y transformación del cuerpo a la nueva vida. Era colocado en el lugar del corazón del difunto, como un recordatorio de la vida venidera. Estas propiedades simbólicas le fueron otorgadas por los egipcios luego de una constante observación, en la que se dieron cuenta de que estos insectos cavaban profundos agujeros en la tierra donde depositaban las bolas de estiércol que transportaban y que, pasado un tiempo, de esos agujeros salían nuevos escarabajos. Entonces, considerando que los escarabajos originales habían vuelto a nacer, les otorgaron el “don de la inmortalidad”, dada su creencia de que “la representación de un objeto poseía las mismas cualidades del propio objeto”.

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Los escarabajos se confeccionaban de distintas materiales; sin embargo, la mayor parte de los hallados en las tumbas de Egipto son de barro o esteatita. Originalmente se hallaban recubiertos de esmaltes de color verde y azul. Los escarabajos de metal son más escasos, aunque se han encontrado varios de oro, plata y bronce. En la mayoría de los casos el cuerpo del insecto es de piedra y sólo las alas de metal. Algunos fueron labrados en piedras preciosas o semipreciosas: berilo, cuarzo blanco, hematita, amatista, serpentina, lapislázuli y turquesa. En la actualidad se los fabrica en cualquier gema y muchas veces se los asocia a la gema del signo astrológico, como parte del ingreso a la globalización de las creencias y costumbres.

Ureus El uraeus, o ureus, es una representación de la diosa Uadyet. Su imagen constituyó el emblema protector preferente de muchos faraones, quienes eran los únicos que podían portarlo como atributo distintivo de la realeza. Tenía forma de cobra y solía figurar junto a la diosa buitre Nejbet, en el tocado del faraón. Representaba la protección de quien la porta y la destrucción de quien lo ataca. Decían que de la boca de la serpiente partían llamas que destruían al enemigo. A veces aparecía como amuleto en enterramientos que no eran de la realeza representando la protección que esta le brindaba al muerto. Se la puede tallar en metal o realizar en cualquier gema. Con el paso del tiempo se han expandido los beneficios de los amuletos y multiplicado sus variedades, mezclándose los culturales de antiquísima data con los populares que, posiblemente, nadie sepa dónde se originaron, aunque podamos tratar de clasificar algunos.

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Los amuletos pueden ser naturales o artificiales:

Los naturales se refieren a plantas, animales o minerales. En esta categoría podemos encontrar plantas de la suerte (como el trébol de 4 hojas), de protección (como la ruda); partes de animales (como las plumas de caburé o la pata de conejo), diversos metales y piedras (muy asociados con el signo astrológico) y los cristales o gemas específicos para determinadas situaciones (turmalina, piedra imán). Los artificiales se refieren a aquellos que son fabricados por el hombre siguiendo indicaciones específicas, según el simbolismo cultural o los usos y costumbres del lugar. Cada elemento utilizado en un amuleto tiene una correspondencia con alguna virtud del objeto del que proviene, siempre funciona por asociación. Estos elementos se basan en las leyes del pensamiento mágico: a) Ley de Semejanza: "Lo semejante produce lo semejante y los efectos semejan a sus causas". b) Ley de Contacto o Contagio: "Las cosas que una vez estuvieron en contacto se actúan recíprocamente a distancia aún después de haber sido cortado todo contacto físico". Algunos amuletos se basan en la primera y muchos en la segunda, o en ambos; otros, simplemente, por asociación de observación: cinta roja para la envidia (el rojo atrae primero las miradas por lo tanto “esquivará” la dirigida a la persona).

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A la pata de conejo se la suele asociar a la buena suerte. Su fecundidad proverbial contribuyó a considerarle animal de buen augurio, siendo relacionado, también, con la prosperidad y la riqueza. Consecuentemente con esa creencia, tener junto a sí cualquier parte del conejo equivalía a participar de su naturaleza. Claro, aunque el único que no tenía buena suerte era el pobre conejo, el que era perseguido no solo por su carne, sino también por sus partes! Las piedras, por su parte, son unos elementos valiosos como amuletos, ya que tienen propiedades energéticas, vibraciones magnéticas y campos energéticos, en algunos casos, que transmiten armonía e invitan a mejorar la suerte o alejar las malas intenciones, actuando como protección, como la cornalina (considerada gema sagrada por los egipcios o mesopotámicos, entre otros) o la rodocrosita, para atraer el amor, entre muchísimas gemas más.

Entre los amuletos, varios perviven en el tiempo sin variaciones (como la mano de Figa o la herradura). Muchos son la moda del momento (como el Manekineto, el gato de la suerte japonés para atraer clientes y dinero o el “atrapador de sueños”, versionados según gustos); mientras que otros quedaron olvidados en el tiempo (como el Ekeko, al que se le prendía un cigarrillo como ofrenda).

- Talismanes: Luego, con la “especialización” (por llamarla de alguna manera) de la Magia, la rama cabalística se encarga de “esoterizar” los amuletos derivándolos en talismanes y pantáculos (ya analizados en la clase Nº 21 del 1º nivel y en la 1ª de Magia Gráfica)) Eso no quita que otras culturas hayan usado grandes cristales que funcionaban como talismanes del pueblo y estaban colocados en la frente, o el ojo, de algún dios o diosa. Esos cristales y las representaciones divinas eran los guardianes de ese pueblo.

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Numerosas leyendas relatan que muchos de esos cristales fueron robados y vendidos y, por una cuestión de karma, trajeron desgracias a quienes lo usaban. Un caso muy nombrado es el diamante Hope. Cuentan las leyendas que… “El diamante fue extraído del río Kistna y colocado en la frente de la diosa hindú Sita, esposa del dios Rama. Después fue tallado por un dios del sol que le dio la forma original de triangulo. Un sacerdote hindú, al verlo en un templo, se encaprichó del diamante y lo robó. Cuando lo descubrieron torturaron al sacerdote hasta matarlo. El diamante llevaba una maldición: que la desgracia y la muerte se produciría no sólo a los que poseyeran la joya, sino también a aquellos que la tocaran”. En su derrotero por el mundo, el diamante pasó por muchas manos. La lista de sus poseedores y de las desgracias que le ocurrieron a quienes lo lucieron (parece que si estaba guardado en una caja no hacía nada), van desde Luis XIV, pasando por María Antonieta y Jorge IV de Inglaterra, hasta llegar a la familia Hope (que le dio su nombre) y sus descendientes, quienes tampoco escaparon a la maldición. Luego viajó por los mares siendo vendido a numerosas personas que corrieron las más disímiles desgracias, hasta que, tratando de cortar la maldición, fue donado al Museo Nacional de Historia del Instituto Smithsonian, de Washington, quien lo exhibe ante el asombro de sus numerosos visitantes. Se dice que el diamante corazón de la película Titanic se basó en el Hope.

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Los talismanes más comunes son, en general, la representación astrológica (a través de signos y símbolos) grabada o cincelada en una piedra acorde. En ella se graban los atributos estelares, teniendo en cuenta el día y la hora favorables al planeta regente que se quiere invocar. Si bien cumplen algunas funciones adjudicadas a los amuletos, también se los utiliza como compensador de las debilidades energéticas del portador. Establecer una relación de correspondencia entre el microcosmos (el hombre) y el macrocosmos (universo) permitía poner al servicio del hombre la potencia de los planetas, las estrellas y los cometas. Tal como vimos con anterioridad en otras clases, los talismanes basan su poder en el simbolismo de los elementos que lo componen y en las palabras escritas en él, pero siempre estarán asociados a la Astrología, o al esoterismo en general, en sus componentes. Cada gema está asociada a un signo, tiene un planeta regente, simpatiza con un elemento acorde y sigue el lineamiento de sus correspondencias simbólicas para aumentar su efectividad, a la que se agregará la consagración o programación correspondiente. Una vez determinado el metal, o la piedra elegida para su confección, se establece con qué será grabado, para lo cual nos será útil revisar los grados de dureza de los cristales para optar así por aquella que sea más dura y lo pueda rayar más fácilmente (si es que lo queremos realizar nosotros mismos). En la actualidad se pueden encontrar infinidad de objetos ya grabados que, si están en armonía con lo que buscamos, los podemos utilizar pero siempre teniendo en cuenta los días y horas armónicas para consagrarlos adecuadamente.

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- Cristales personales Los cristales personales (ya mencionados en la clase anterior) también pueden servir como amuletos o talismanes. Podemos potenciarlos tomándolos en nuestras manos para darles la orden para su trabajo: protección, etc. También podemos tener distintos cristales de acuerdo a las necesidades personales del momento. Por ejemplo, podemos tener un colgante de turmalina negra para utilizar cuando se va a lugares con mucha gente o nos vamos a encontrar con personas que no son de nuestra confianza.

También se puede llevar un cuarzo en la cartera o el bolsillo (claro, depende del tamaño, no siempre tiene por qué ser muy grande). Pero, aunque parezca una redundancia a esta altura del curso, siempre hay que tener en cuenta que cada vez que regresamos debemos limpiarlos y tenerlos preparados para el próximo uso. Si están programados, mejor. Muchas veces hay imprevistos y hay que salir. Como dice el refrán: “Hombre precavido vale por dos”

- Piedras mágicas por excelencia A medida que se avanza sobre la investigación sobre gemas, piedras y cristales, se van encontrando muchas diferencias de conceptos entre los distintos autores y también entre las experiencias de los usuarios. Las opiniones sobre las virtudes intrínsecas de cada una de ellas pueden ser variables; sin embargo, hay algunas en donde siempre coinciden: una es el cuarzo transparente, o cristal de roca, y la otra es la amatista, siendo consideradas ambas como piedras fundamentales, que no deberían faltar en la colección de cualquier interesado en el tema debido a sus propiedades. Pero hay otras que son consideradas imprescindibles en el cofre del mago o, por lo menos, en su entorno. Ellas son: el ámbar, la piedra imán, la piedra de la Luna, la turmalina negra y la piedra Boji.

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- El misticismo del ámbar Si bien, como vimos anteriormente, el ámbar no es un cristal (es un mineraloide orgánico cristalizado: resina fósil vegetal), esta gema ha estado presente en muchas culturas debido a su extraordinaria composición. La mística o la idealización del ámbar, pueden tener alguna que otra variante de una cultura a otra, pero también posee coincidencias asombrosas. Es una de las “piedras” consideradas mágicas, que ha sido conocida y utilizada por sacerdotes y chamanes desde tiempos remotos, quizás debido a sus propiedades eléctricas naturales. Los griegos fueron los primeros en registrar la información sobre estas propiedades del ámbar, al que llamaban “elektron”, (término del que deriva la palabra “electrón”). Esta gema está considerada la sustancia más antigua usada por los seres humanos para la fabricación de joyería y amuletos de todo tipo. Debido a la presencia de insectos y pequeños animales en su interior (de extraordinaria conservación) se la consideraba como “piedra dadora de vida” y, según su color, era usada para protección, energización de tipo sexual y muchos más temas relacionados con la vida. Los collares de cuentas de ámbar son considerados el mejor protector contra la magia “negativa” y de gran atracción del amor y la amistad sincera hacia quien lo lleva puesto. También se confeccionan amuletos de ámbar para temas que tengan que ver con la vida y su generación. A una piedra de ámbar se le graban distintas figuras para potenciarlos. Por ejemplo, para aumentar la fertilidad y la capacidad de concepción de las mujeres se le esculpe una representación de la imagen de un conejo, por ejemplo; mientras que para los hombres (para potenciar la virilidad y combatir la impotencia) se le graban imágenes de leones, dragones, etc. Obviamente, estos animales están asociados directamente con la fertilidad, por lo que potenciarían las virtudes de la gema. Los usos mágicos del ámbar son muchos y tienen que ver no solo con la protección sino también con el éxito en múltiples temas: negocios, dinero, amor, poder, etc. No debe limpiarse con sal ni exponerse al sol de forma directa.

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Un gran trozo de ámbar colocado en el altar aumenta el poder mágico del conjuro, se trate de lo que se trate. Actúa estimulando el intelecto, favoreciendo un estado mental positivo y disolviendo posibles oposiciones, de acuerdo con sus propiedades protectoras y generadoras de éxito. Debido a esto, se considera la adquisición de esta gema como una gran inversión mágica, formando parte de las piedras imprescindibles para la llamada “magia con piedras”.

Importante: Debido al precio alto de una piedra de ámbar, hay que tener cuidado con las imitaciones. Se suelen presentar como ámbar a piezas hechas de plástico, vidrio o resinas sin fosilizar. Para comprobar si es una imitación podemos recurrir a sus propiedades eléctricas y realizar la siguiente prueba: - Cortar trocitos de papel pequeños y dejarlos sobre una superficie. - Frotar la pieza de ámbar en una prenda de lana. - Luego colocar la gema frotada encima de los papelitos pero sin tocarlos. Si es auténtico ámbar, atraerá a los papelitos, los que se pegarán como si se tratase de un imán.

- Piedra imán La piedra imán es un mineral oscuro que tiene la propiedad de atraer el hierro y otros elementos que puedan ser magnetizados; debido a ello, es asociada con la “atracción” de la buena suerte. Los antiguos atribuían a la piedra imán un poder misterioso, considerándola como el medio más seguro para transformar a su poseedor en un centro potencial de atracción magnética. Esta atracción funcionaba para temas tan dispares como el amor, la riqueza y la dicha en sus variadas formas, incluyendo su popularidad entre los hombres para reforzar su virilidad. 268

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En muchos círculos se la considera como amuleto orgánico, procedente de las raíces de la tierra y llevando en sí misma la carga magnética natural, por lo que debe ser alimentada para que crezca y así aumentar su potencia.

Según su forma se la suele dividir en “macho” y “hembra”, siendo clasificada como macho la que tiene aristas agudas y como hembra, la redondeada. El problema es que, según la tendencia de quien escribe, variará la adjudicación de las mismas por sexo Algunos consideran que el hombre debe tener una piedra hembra y la mujer una macho y otros a la inversa. Debido a esto, considero que cada uno puede tener la que lo “atraiga” más. Se la puede conservar en cualquier recipiente, dependiendo de las posibilidades de cada uno (en cuanto a la privacidad de exposición que se tenga); el mismo puede ser de barro, cristal, madera o metal y se la puede guardar con otros cristales o también, si es posible, con otra piedra imán del genero contrario. Se dice que tener una piedra imán macho y una hembra, en el mismo estuche, es favorable para encontrar el amor o fortalecer el existente. Antes de comenzar a utilizarla se la debe limpiar (teniendo en cuenta las posibilidades que permite su conformación) y programar (como cualquier otra piedra de uso mágico). Hay muchas formas de limpieza y preparación: entre estas encontramos el uso de preparados líquidos especiales, donde se la sumerge; otra forma es enterrándola por unos días, para que vuelva a sus raíces, o haciendo un ritual con oraciones específicas (Ver Lectura adjunta Nº 17 - Oraciones para dinero y fortuna con la piedra imán).

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Personalmente no recomiendo el tipo de limpieza con agua por tratarse de un mineral ferromagnético de la 4º categoría (Óxidos, según la clasificación química de Strunz). La magnetita (mineral de la piedra imán) puede formar una capa de color amarillo-marrón óxido si se lava o se mantiene en una zona húmeda. Si se lava, debería secarse inmediatamente para evitar la oxidación. Además, por la misma razón, se debe tener cuidado de guardarlas en lugares secos. En caso de producirse el óxido, este se puede quitar fácilmente empapando la magnetita con un disolvente de óxido.

Piedra imán con ofrendas (Colección personal)

Considero más adecuada la limpieza por humo, es menos perjudicial. Luego de ello se la “despierta” mediante tres soplidos y se la coloca en el lugar donde la vamos a guardar (como si fuera su casa) y en la que la “alimentaremos” espolvoreando sobre ella viruta o limaduras de hierro; también se le suele “regalar” pequeños objetos de oro, monedas, elementos de metal (herraduras, etc.) Eso dependerá de cada uno. También, algunos poseedores de esta piedra, como la consideran “un ser vivo que se alimenta” que requiere atención y cuidado, suelen colocarle un nombre distintivo.

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Los usos mágicos de esta piedra son variados. Esta herramienta mágica ha sido usada en toda una serie de tradiciones ocultistas por su gran potencia y poder que sirve tanto para potenciar el magnetismo personal como para incrementar los ingresos económicos o atraer el amor. El sistema más simple consiste en escribir un deseo en un papel, encender una vela y leer en voz alta a la piedra lo que necesitamos. Luego colocamos encima del papel la piedra imán, le agregamos unas limaduras de hierro (o monedas) y la carga dará comienzo. Cuando se consume la vela sacamos el papel y lo guardamos, cerrando la caja de la piedra, si así corresponde, para guardarla. Por tratarse de una roca oscura, debería guardarse en la oscuridad, de allí que se la tapa (además para que no entre en contacto con la humedad) Para otras aplicaciones simples de la magnetita, se puede recurrir al archivo denominado “La piedra imán y sus virtudes” (Lectura opcional Nº 18), allí hay algunos ejemplos sencillos (aunque no están desarrollados ampliamente)

- Piedra de la luna Esta piedra es un mineral de la familia de los feldespatos, considerada semipreciosa y de muchas aplicaciones, especialmente como amuletos femeninos. Su nombre lo debe a su color blanco reluciente que se asemeja al brillo de la Luna. Cuando se la corta se produce un fenómeno de adularescencia que se origina en su interior, produciendo una especie de juego de luces que se vuelven azulados según como se la mueva.

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Se dice que en los países árabes, las mujeres cosen a menudo piedra luna en sus prendas de vestir, porque es considerada un símbolo de fertilidad. Al ser asociada con la Luna, su uso la vincula con sus virtudes. De allí que es apta para el control de las emociones, para desarrollar la intuición, promover fenómenos de percepción extrasensorial (como la telepatía y la clarividencia) y atraer la fertilidad y el amor. Rectora de los sueños, también se la pude colocar debajo de la almohada, tanto para descansar como para tratar de provocar sueños proféticos.

También se la llama la “piedra del espíritu”, otorgándole numerosos beneficios de tipo espiritual y curativo (algunas veces extralimitados) a quien la usa, algunos de los cuales se pueden ver en el texto “Piedra de Luna: la piedra del espíritu” (Lectura opcional Nº 19) Se la suele usar como colgante, anillo o en otras partes del cuerpo, de acuerdo a lo que se busca o se trata de experimentar. Por ejemplo: sobre la frente, para meditar y buscar algún tipo de experiencia espiritual; sobre el corazón, para experiencias emocionales, etc. En el texto “Piedra de la Luna: significados y propiedades” (Lectura opcional Nº 20), además de las “innumerables” aplicaciones y virtudes se pueden encontrar algunos pequeños rituales caseros, pero ojo con dormir con la piedra en la boca! (por razones obvias). Su uso mágico se rige por las fases lunares, representando a la Luna en todas ellas y potenciándose o restringiéndose de acuerdo con ellas. Tal co9mo mencionamos con anterioridad, los rituales tendrán que ver con temas lunares: controlar las emociones y sus desbordes, temas amorosos que requieren de intuición para resolverlos, fertilidad o problemas de embarazo, etc. La limpieza de esta gema no presenta problemas con el agua, pero para secarla, por ser una piedra lunar no debería recurrirse a los rayos de Sol. Si no se la quiere limpiar con agua se la puede dejar sobre cuarzos, esto no solo la limpiará sino que, además, la energizará. Luego completar con su exposición nocturna a la luz de la Luna.

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Importante: La piedra de Luna puede confundirse con otras, en algunos casos por error al adquirirla o clasificarla el vendedor y en otros por fraude, ya que debido a su costo suelen ser reemplazadas por piedras sintéticas. Esta piedra es una gema blanca, con reflejos azulados, que puede confundirse con la labradorita blanca, que se comercializa como Piedra Luna Arcoiris (Rainbow Moonstone) pero que está compuesta por otros elementos: también se la suele confundir con el cuarzo lechoso opaloide. Colgante de labradorita blanca

Según dicen los expertos mineralogistas, en la actualidad se ofrecen dos tipos de falsificaciones de esta gema.

La primera es del tipo sintético, mediante la utilización de un material conocido con el nombre de opalite u opalina (es el mismo material que también se vende como ópalo falso). La segunda falsificación se refiere a la llamada Piedra de Luna rosa, que se fabrica tiñendo la otra de color rosa.

Para reconocerla entre las imitaciones, hay que prestar atención a varias cosas. Si el precio es económico hay que desconfiar, hay mucha demanda de estas piedras y poca oferta. El color (con sus reflejos azules), la claridad y su transparencia son casi determinativos de su originalidad: la profundidad del color aumenta a medida que se la mueve y su precio encarece a medida que la transparencia aumenta.

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- Turmalina negra La turmalina, en su color negro, es una de las más famosas piedras de las llamadas “protectoras”. Se la considera, por tal razón, una piedra mágica por excelencia, capaz de eliminar o transmutar las energías negativas al mismo tiempo que ayuda al crecimiento espiritual, dado que actúa no solo en lo externo sino también colabora para transmutar la negatividad interna. Sus propiedades, tanto piroeléctricas como piezoeléctricas, hacen que pueda atraer objetos ligeros al calentarse y que sea casi inatacable por los ácidos. Por lo tanto, no extraña su asociación con la protección y defensa de quien la usa, actuando como un escudo y generando un campo de energía protectora a su alrededor. Se la utiliza en accesorios de todo tipo (colgantes, pulseras, etc.) y también se lo puede llevar en otros lugares (bolsillo, cartera), aunque lo ideal es que estén a la vista. Debido a sus estrías, cuanto menos pulida esté mejor funcionará. Especialmente recomendada para usar en lugares donde hay mucha gente, e infaltable si se concurre a reuniones de esotéricos no muy conocidos o poco confiables. Si bien su principal función es la de neutralizar y proteger de energías nocivas a quien la usa, es muy útil para descargar tensiones (colocándola en la parte tensionada) y es excelente para colocar en algunos espacios (acompañada de cuarzos transparentes) para ayudar a limpiarlos y descargarlos. También sirve como “cable a tierra” para personas volátiles y suele inferir, a quien la usa, la facultad de ver la realidad por encima de los artilugios, como asimismo reconocer la verdadera cara de las personas.

Sus estrías actúan como canales y se las puede utilizar para conectar otros cristales entre sí permitiendo la libre circulación energética entre ellos (tal como vimos en la diagramación de cristales en las habitaciones)

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Respecto a su mantenimiento, hay muchas formas de limpiarla. Algunas personas recomiendan colocarla al sol, pero al ser una piedra negra se lleva mejor “con la oscuridad”; otros, con la energía lunar, pero ya vimos que está asociada con Saturno o Plutón con sus virtudes defensivas. Buscando un término medio, se la puede limpiar colocándola en un vaso con agua y cubriéndola con sal. Se la deja un día, se la enjuaga con agua limpia (tratando de no tocar la sal con las manos) y se la seca bien. Por tratarse de una piedra asociada con el elemento Tierra, también se la puede enterrar por unos días (en un recipiente sin plantas), luego enjuagarla y secarla con un paño limpio. Otro método viable es colocarla en una drusa o geoda de cuarzo o, en caso de no tenerla, colocarla en un recipiente rodeada de varios cristales de cuarzo, especialmente del transparente. A pesar de ser una piedra que funciona por sí misma, luego de la limpieza se la puede programar y personalizar para su uso individual.

Importante: Cuando la turmalina negra se rompe (obviamente sin que haya sido por caída o por golpe) se considera que “ha cumplido su tarea” por lo que debería ser devuelta a la tierra.

- Piedra Boji La piedra Boji suele llamarse también Moqui, aunque para algunos son las mismas piedras solo que con distinto nombre; otros consideran que son rocas diferentes, aunque con propiedades similares. Ambas son consideradas “piedras de poder”, compuestas de un duro caparazón de óxido de hierro, pero albergando en su interior un “corazón arenoso”. Su apariencia es metálica y fría al tacto, son pesadas y densas. Las verdaderas son difíciles de conseguir.

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Quienes abogan por la diferenciación las reconocen de la siguiente manera:

- Los bojis son una pirita esférica que se forma secundariamente en el barro de un fondo marino, que luego se meteoriza en la superficie terrestre razón por la cual lleva una capa de limonita.

- La piedra moqui es una concreción redonda de tonos marrones formada por arenisca cementada con hematite y goethita. Los pueblos indígenas, oriundos de la zona donde se encontraba esta piedra, como consideraban que estos minerales procedían del espacio y que habían llegado a la tierra en un pasado remoto, les atribuían poderes de carácter mágico y sanador. Los chamanes las han considerado siempre como fuente de conocimiento e inducción a la producción de fenómenos paranormales. De allí que las utilizaban para múltiples cuestiones: ⇒ en sus rituales para facilitar la entrada en contacto con los espíritus animales del individuo y también de los antepasados muertos; ⇒ para conectarse tanto con las energías del universo como con las de la madre tierra, ⇒ obtener guía, equilibrar las energías o enfrentar el miedo a la muerte ⇒ facilitar la meditación, los viajes astrales, etc. Estas piedras son consideradas poseedoras de una gran energía, lo que no sería extraño debido a su composición. Esta energía se manifiesta de dos maneras: por su forma y por la acumulación producto de su evolución temporal. De acuerdo a su forma, las que son más suaves y poseen forma redondeada son consideradas “femeninas”; las que se presentan más ásperas y con alguna saliente, o formas puntiagudas, son catalogadas como “masculinas”. Esta diferenciación no solo se tiene en cuenta para su uso sino también para su limpieza y carga. Se las suele utilizar por parejas, una femenina y otra masculina. Para energizarse basta con sostener una piedra en cada mano durante 10 minutos aproximadamente. También se las puede colocar sobre la zona dolorida.

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Curso: Magia de los cristales, las piedras y los metales – Institutos en la Web Poseer y usar una de cada una colabora para equilibrar ambos tipos de energías dentro del cuerpo, alineando los chakras y los cuerpos sutiles. Las femeninas (además de para aliviar tensiones) se utilizan para meditar, para potenciar el desarrollo psíquico y la intuición; las masculinas, por su parte, actúan favoreciendo la fuerza de voluntad, la fortaleza y la confianza en sí mismo. Otras propiedades de esta piedra tienen que ver con la protección, tanto a nivel espiritual como físico, y la estabilización emocional. Suelen ser muy útiles como “cable a tierra”, para tener los pies asentados y poder ver las cosas desde una visión más práctica, ayudando a regresar a la realidad luego de realizar algún trabajo de tipo espiritual. Se las puede lavar con agua, pero solo en ocasiones especiales (y sin abusar) en que las piedras se ensucien “físicamente”. Si esto sucede, puede lavarse con bicarbonato sódico y un cepillo de dientes secándolas bien de inmediato. Generalmente no lo necesita, por lo que hay que evitar empaparlas en agua y la exposición a la humedad pudiendo deteriorarse rápidamente si se la expone en un lugar de condiciones climáticas de fuertes lluvias y humedad constante.

No hay que olvidar que su estructura externa está formada por un óxido de hierro, con los consecuentes problemas que se provocan por su exposición al agua en todos los estados de su ciclo. Hay personas que les realizan una capa de protección de aceite de oliva. Para una limpieza energética, se utilizarán sahumerios pero manteniendo una distancia y evitando colocarlos encima, o muy cerca, a efectos de evitar que se adhiera algún residuo a la misma. Cargarlas una o dos veces a la semana, exponiendo las de energía femenina a la luz de la Luna y las de energía masculina a los rayos del Sol. También se puede cargar con Reiki, adentro de una pirámide o encima de una drusa o geoda Para guardarlas, es conveniente hacerlo en un lugar que no tenga humedad, un envase hermético y de forma separada de las demás piedras y gemas, evitando que estén en contacto por mucho tiempo.

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- Objetos mágicos Dentro de los objetos mágicos, hay algunos que se distinguen por sobre los demás, no solo por su utilidad sino también por su mención en muchas leyendas, cuentos y películas temáticas.

La vara atlante de Merlín o el bastón que usó Moisés para abrir el mar Rojo; la bola de cristal asociada a la “videncia” en muchos cuentos infantiles y no tanto; los espejos mágicos, inmortalizados en el cuento de Blancanieves; y el anillo atlante, un anillo de poder que encuentra un paralelismo en la trilogía de “El señor de los anillos” merecen especial atención. Para el profano, no se trataría más que de cuentos de fantasía, pero aquellos que han investigado en la historia del hombre, sus creencias y evoluciones, se han dado cuenta que, de una forma u otra, han estado presente en la mayoría de las civilizaciones, aunque estas no hubieran estado en contacto o se desarrollaran separadas por inmensos océanos. De allí que, para justificar su presencia en tan dispares lugares, se haya recurrido a ubicar a muchos de ellos como originados en la Atlántida, la civilización perdida, y la responsable (según las leyendas) de la mayor evolución de alguna de ellas, apoyada en sus míticas migraciones; aunque luego veremos que esos mismos objetos (aunque de distinto material pero mismo uso) aparecen en tribus que ni siquiera se acercan a las mencionadas en las migraciones antedichas. Casualidad o causalidad? Nunca se sabrá! (salvo que inventen la máquina del tiempo… o ya estará inventada? Todo puede ser!) Lo que para algunos es producto de la fantasía, para otros será parte de la historia del hombre, y nosotros veremos qué uso le podemos dar a estos objetos que han pervivido a través de los tiempos y las costumbres.

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- Vara atlante. Fabricación y usos

“Y tú, levanta tu vara y extiende tu mano sobre el mar y divídelo; y los hijos de Israel pasarán por en medio del mar, sobre tierra seca” Éxodo 14:16

Dicen que el cayado de Moisés y la vara de Merlín poseían un cristal en la punta (algunos lo asocian con un cuarzo, otros con un diamante) por donde dirigían el rayo de poder. Los cayados siempre simbolizan la conducción, ya sea de ganado por los pastores o de “almas” por los religiosos (simbolizado por el báculo). Luego estos han evolucionado y fueron transformándose en los cetros de los reyes o los bastones de mando para los primeros mandatarios de los países; sin olvidar la varita mágica de magos, hechiceros y brujos. Unos más adornados, otros menos, pero todos con el mismo principio, dirigir la energía hacia el objetivo mediante una férrea voluntad. La vara o el bastón atlante no escapan a estas normas. Cuentan que los atlantes también los usaban para conseguir aquello que querían dirigiéndola a los cristales que guardaban todo el conocimiento del mundo. La vara tradicional ha sido siempre sencilla, una vara de madera de árbol, en la actualidad se la ofrece de formas variadas y decoraciones varias, los bastones atlantes han sido incorporados como directores de cromoterapia

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Estas derivaciones y rebusques poco tiene que ver con aumentar su poder sino que se trata de un gusto personal, aunque no siempre la mayor elaboración garantiza más el éxito. No hay que olvidar que la vara actúa como canalizadora y directora del pensamiento y de la voluntad en acción del operador, si este no la acciona, la vara no deja de ser un objeto decorativo. La idea del uso actual es tratar de concentrar las energías universales en la misma para luego utilizarla en procesos de sanación, armonización, abundancia, concreción de proyectos, etc. Su principio de funcionamiento se basa en que el pensamiento activa el mecanismo y lo hace pasar, de irradiar energía pasivamente a crear un rayo de energía activa en pos de un objetivo.

- Fabricación: En el mercado hay numerosos modelos; en la actualidad se consiguen varas o bastones atlantes de cualquier material (cristales, metales, etc.) con incrustaciones para todos los gustos, pero también se pueden fabricar.

Un método sencillo de fabricación sería el siguiente (Extraído de El poder del cristal, de Michael G. Smith) Materiales: 1 tubo de cobre de 30 cm. 1 capucha de cobre para uno de los lados 1 tira de cuero de 3 cm. de ancho y de un metro de largo 1 punta de cuarzo que entre en el tubo Pegamento instantáneo que pegue tanto cristal como cuero Preparación: 1. Colocar la capucha sobre uno de los extremos del tubo, con unas gotas de pegamento en el interior para que permanezca adherida al mismo. 2. Hacer 4 ranuras en el tubo de unos 6 cm. de largo cada una. 3. Separar las ranuras un poco e introducir el cristal. Fijarlo con pegamento transparente. También se puede rodear con un poco de cuero el cuarzo en la zona que estará en contacto con el tubo para proteger el cristal. 4. Una vez fijado el capuchón y la piedra, enrollar la tira de cuero en forma de espiral alrededor del tubo, añadiéndole unas gotas de pegamento en cada vuelta.

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5. Por último, recortar los extremos sobrantes de cuero alrededor de la capucha de cobre y del cristal.

Otras formas de preparación incluyen colocar cristales de cuarzo en ambas puntas, cristales pequeños dentro del tubo o incrustar 7 cuarzos pequeños con los colores de los chakras en la parte externa del tubo. Personalmente me inclino por reemplazar el tubo de cobre con una vara de madera, a la que se atará unos alambres de cobre que servirán para sostener fijo el cristal a la misma. Allí estaría presente el simbolismo del fuego en la madera (bastos) conectado al cristal a través del metal. Si bien el tubo de cobre actuaría como acumulador, la vara de madera se asemeja más al uso mágico por excelencia de los 4 elementos.

Estas solo son modelos que pueden realizarse estéticamente más agradables

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El uso (en el tema que nos ocupa) es idéntico a lo que se realiza con la varita mágica: ⇒ Tomarla firmemente en una mano. ⇒ Visualizar el objetivo ya logrado. ⇒ Vehiculizar la energía mental dirigiéndola hacia la mano, a través del canal del brazo, pasando a la varita y saliendo por el cristal. ⇒ Dirigir la energía hacia el infinito mientras que se dice: Así sea y así será! ⇒ También se puede usar una con doble punta, así una emisión iría para el cielo y otra para la tierra (completando eso de: “Como es arriba es abajo”). ⇒ En caso de tener un objetivo físico específico presencial, la emisión será directa al objeto o persona Antes de usarla deberá ser limpiada por medio del método elegido (generalmente a través de humo de incienso) y cargada luego con nuestra energía y propósito de uso (como cualquier objeto mágico). Guardarla separada de los otros cristales, envuelta en un papel o paño adecuado al caso, del color que más nos agrade y fuera de la vista de los curiosos.

- Bola de cristal

La bola de cristal es una piedra o gema que ha sido tallada con forma de bola, es decir que todos los cristales de forma esférica serían “bolas de cristal”. En esto no hay magia ni nada especial. 282

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Lo especial es lo que se pretende realizar con esos cristales esféricos y aquí aparece la técnica llamada “Adivinación por medio de una bola de cristal”. En realidad el nombre de la técnica es Cristalomancia o Cromniomancia (aunque algunos colocan este nombre a la adivinación mediante las capas de la cebolla) La Cristalomancia trata de la interpretación de los símbolos, reflejos o figuras que se verían dentro de un elemento translúcido, siendo el medio más utilizado la bola de cristal y los espejos “mágicos”, en la búsqueda de descubrir algún hecho, ya sea pasado, presente o futuro que escapa al conocimiento consciente. En el transcurso de la historia se han recurrido a infinidad de métodos tratando de “adivinar” las cosas ignoradas. Cualquier objeto (o fenómeno) puede indicar datos adivinatorios para la persona que los "sabe leer", ya sea por costumbre o porque cotejó datos y comprobó que a una acción corresponde una reacción, y así compilando y registrando los resultados permite a otro individuo probar "suerte" con su método. La psique humana está compuesta por una parte racional y otra intuitiva o "mágica", ninguna persona es totalmente racional o intuitiva porque, de ser así, cualquiera de las dos opciones esconde una patología. En todo siempre debe estar presente la dualidad o el complemento. En el momento en que la parte racional del ser humano investiga, y no aparta las cosas por prejuicio, siempre se logra un aprendizaje aunque sea de las cosas más "insólitas". También, cuando se logra liberar a la mente intuitiva, se llegan a conocer muchos aspectos de esas cosas que la mente racional no puede comprender en tu totalidad. Lo ideal sería equilibrar ambas funciones. Lograr ese raro equilibrio es la meta de todo aquel que quiere llegar, aunque sea, a tomar un fruto del “Árbol del Conocimiento”. La bola de cristal es solo un instrumento que vehiculizará la mente de quien la use. La bola (círculo) es energía en movimiento y corresponde al lector saber “frenar” ese movimiento e interpretarlo. Hay personas que prefieren copas o bolas con líquido en su interior que se muevan, pero solo son distintos sistemas para un mismo fin.

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Otros usuarios prefieren situar dentro del cristal, un sinfín de espíritus o seres elementales. Estos serían los habitantes que moran en el corazón de las piedras y los responsables de asistir en la interpretación de los mensajes a quien los lee.

Igualmente, cualquier método que se elija, siempre se tratará de aprender el “arte” de su lectura y su posterior interpretación. No todos los métodos funcionan para todas las personas. La bola de cristal no es un televisor, que se lo prende y aparecen imágenes de acuerdo a la emisión de los canales correspondientes. Para usarla hay que lograr controlar la mente consciente y así quitar el censor (preconsciente) que evita que el inconsciente actúe liberando las cosas que se captan por su medio. Se requiere una concentración en el objeto dejando vagar la mente en su interior. Es proyectar adentro de la esfera lo que se percibe adentro de la mente. Es mirar hacia fuera lo que no se puede mirar hacia adentro. Hay personas que no necesitan la bola de cristal para hacerlo, simplemente las imágenes le aparecen en su mente (algunas de forma directa y otras de forma simbólica, requiriendo interpretación), pero ya dijimos que los fenómenos paranormales no aparecen en todos de la misma manera, lo ideal es encontrar la forma personal y luego activarla, o no! Luego en la práctica se ve al maestro. Creer que se compra una bola de cristal y se transforma en la pantalla de una pc es demasiado. No hay que olvidar que para que funcione este elemento tecnológico también necesita programas específicos. Puede haber muchas instrucciones y recomendaciones de uso de este instrumento “mágico” pero encontrar la forma y el sistema propio no tiene precio, para lo demás está Mastercard! (perdón, me tenté!, jaja)

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El material de la esfera depende de quien la use. En la antigüedad se utilizaba el berilo, por su transparencia, pero luego fue siendo reemplazado por el cuarzo hialino o cristal de roca. La bola tradicional es la que mayor transparencia posee, siendo el cuarzo transparente su mejor opción. Pero no hay que confundirla con vidrio (salvo que contenga agua en su interior), estos objetos son compactos o macizos.

Es muy difícil (por no decir imposible) conseguir un cuarzo totalmente transparente; suelen tener inclusiones o vetas de algún tipo, las que muchas veces ayudan a la concentración y a “ver” figuras. Muchas veces se recurre a otro tipo de cuarzo como el cuarzo amatista. También se usan las totalmente negras (de obsidiana).

Bola de amatista

Bola de obsidiana

Hay otras que se venden como “bola de cristal” pero son totalmente opacas y no pasan de ser hermosos pisapapeles o cristales con otras funciones, tales como limpiar ambientes u otras piedras.

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Hay profesionales que les dan a estas una función de adivinación específica, según su composición química, pero están asociadas a otros temas que escapan a la percepción extrasensorial como tal. Hay algunos ejemplos en la Lectura opcional Nº 21 (La bola de cristal, una “ventana” a otros planos de conciencia) En cuanto a su limpieza, la misma va de acuerdo con el cristal (composición química) que la conforma y su resistencia a los productos recomendados (agua o sal), con las variantes inherentes a las realizadas con los demás instrumentos mágicos. En la lectura opcional mencionada anteriormente (Lectura opcional Nº 21 - La bola de cristal, una “ventana” a otros planos de conciencia) hay variada información sobre la limpieza de la misma, instrucciones de uso y forma de trabajo, pero hay que recordar que nada reemplaza a la propia experiencia en el sistema de provocación de fenomenología o a la forma de consagración de los instrumentos. En el tema de la forma de uso, la misma es similar a la de cualquier mancia. Se requiere estar en un lugar tranquilo, con iluminación baja (en este caso para evitar reflejos molestos en el cristal) y lejos de ruidos o personas molestas, dado que la concentración es primordial, pero eso no quita que luego la práctica indique otra cosa. La fenomenología paranormal aparece en determinados estados de ánimo y dependerá de conocerlos la forma que se adopte. Luego se analizarán las observaciones realizadas y se las interpretará de acuerdo a cómo se hubieran presentado: de forma directa cuando son imágenes claras o buscando interpretación cuando aparecen símbolos u objetos determinados, mediante la codificación personal: cada forma o color que el operador observa debe tomarse con un significado único y específico. Posteriormente se buscará asociar estos mensajes con hechos posibles, ya sean del pasado, del presente o la posibilidad del preanuncio de un hecho futuro. Como dato anexo se adjunta la Lectura opcional Nº 22 (La bola de cristal: significados) donde se encuentra un listado con diversas posibilidades de interpretación simbólica, de acuerdo con la observación de posibles imágenes. Una esfera de cristal de cuarzo se suele rodear o acompañar de piedras de la Luna para potenciar la lectura. Todo contribuye cuando se busca un resultado, hasta colocar un objeto de fe (pero sin exagerar y llenar todo el espacio).

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La forma de guardado este objeto de uso mágico dependerá del espacio disponible, pero se recomienda proteger el cristal con un paño y guardarlo bien en una caja. Dejarla en exhibición no potenciará su uso y puede ser objeto de alguna “carga energética externa” por la mirada de los curiosos o los incrédulos de siempre. Importante: No hay que confundir las bolas de cristal con los equipos de efluvioscopía o las bolas de plasma que muchas veces ofrecen en el mercado como “adivinatorias”.

Colección personal

Una bola de plasma es generalmente una esfera de cristal transparente, llena de una mezcla de varios gases a baja presión, y conducida por corriente alterna de alta frecuencia y alto voltaje, generada por un transformador de alta tensión o una bobina de Tesla en miniatura. Un orbe más pequeño en su centro sirve como un electrodo. Emite "serpientes de luz ultravioleta" (en realidad, gas ionizado) que se extienden desde el electrodo interior hasta las paredes de la esfera de cristal, dando una apariencia similar a múltiples y constantes relámpagos coloreados. Cuando se coloca un dedo o una mano cerca del cristal, el campo eléctrico de alta frecuencia se altera causando un rayo de mayor grosor dentro de la esfera en dirección al punto de contacto. (Fuente: Wikipedia)

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- Espejos mágicos: La tradición de la obsidiana

Los espejos son superficies de cristal que están cubiertas en su cara posterior por una capa de mercurio o por una plancha de metal, en la que se reflejan la luz y las imágenes de los objetos que hay delante. Para el Feng Shui es fundamental que los espejos colocados en las casas reflejen algo agradable, como una vista atractiva, un jarrón con flores naturales, una planta saludable, un bonito cuadro o un paisaje, lo que dejará entrar en la casa la energía vibrante de un jardín o de algún elemento positivo. El espejo es considerado una “puerta” a otra dimensión, al mundo astral; de ahí proviene la tradición europea de dar la vuelta o tapar los espejos cuando ha fallecido alguien recientemente, para evitar su regreso o para que no les robara su alma. Los pueblos antiguos pensaban que el alma humana radicaba en la sombra o en la imagen reflejada en el agua o en un espejo; quizás sea por eso se dice que los vampiros no se reflejan en los espejos, pues no tienen alma.

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Quizás también esa creencia sea el origen de la superstición de los años de “mala suerte” cuando se quiebra un espejo o las experiencias “cuasi aterradoras” de mirarse en él con una vela o repetir tres veces el nombre de alguna entidad maléfica para que aparezca o que se vea en él reflejada si nos peinamos a las 12 de la noche delante del espejo. Algunos sostienen que el espejo “dice la verdad” porque tan solo refleja lo que ve, lo que le presenta quien se mira en él, devolviendo la cara que tenemos al mirarnos, quizás hasta el estado de ánimo del momento; pero no hay que olvidar que la imagen está invertida. El misterio y el simbolismo del espejo se basan, posiblemente, en su poder de reflejar una imagen que parece cercana, pero, a la vez, lejana; invertida en realidad. Por su parte, cuando los animales se reflejan en el espejo suelen buscar detrás “al otro animal” No se reconocen como su reflejo. A veces hasta esquivan la mirada. Para ellos, es “otro”. Muchas veces nosotros tampoco nos reconocemos en él… Para pensar! Los espejos tienen en la magia una doble función, la de poder usarlos mánticamente pero también, como parte del entrenamiento del mago. El uso del espejo en las artes adivinatorias forma parte de la Cristalomancia (tal como vimos en la bola de cristal) buscando imágenes dentro del mismo y también de la Catofomancia o Catoptromancia, que intenta interpretar mensajes por medio de los rayos de la Luna reflejados en un espejo (que también puede ser un espejo de agua de una laguna, por ejemplo).

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Su relación con el agua y la Luna asocia al espejo directamente con dicho astro, dado que cumple, en menor escala, la misma acción que realiza la Luna: reflejar la luz de otro, el Sol, mientras que el espejo refleja al individuo y su interioridad (simbolizado también por el Sol) En el aspecto mágico, los espejos forman parte del entrenamiento del aprendiz de mago y, por qué no, del mago también. Papus sostiene, en su libro “Tratado elemental de Magia práctica” que el desarrollo de la voluntad (indispensable en cualquier persona que vaya detrás de un objetivo) puede potenciarse mediante la realización de diversos ejercicios fisiológicos o psíquicos, que colaboran adiestrando los órganos de expresión del hombre: la mirada, la palabra, el gesto y la marcha o acción general. En el tema que nos ocupa, los espejos mágicos sirven particularmente para la educación de la mirada (el centro magnético por excelencia) dado que son considerados objetos de condensación de la luz astral. Por virtud del adiestramiento progresivo es como la persona puede habituarse a la visión en el espejo. Pero Papus también advierte sobre determinadas situaciones que pondrán a prueba la voluntad del mago en el momento de fijar la vista en el mismo: “Cuando se mira fijamente durante algunos instantes a la parte céntrica del espejo, se siente un picor característico en los ojos, viéndose a veces obligada la persona a cerrarlos momentáneamente, lo que, como es de presumir, destruye las ventajas conseguidas. La necesidad de parpadear reconoce por causa la acción puramente refleja del ser impulsivo, y es indispensable que la voluntad la combata, lo que se consigue al cabo de pocos días, dedicando en cada uno a tal ejercicio veinte minutos como máximum. En el instante en que se experimente el característico escozor de los ojos, hay que poner la voluntad en tensión para impedir que los párpados se cierren, y procediendo así, pronto se ven dominadas tales resistencias. Obtenido este primer resultado, se llegará a ver, por de pronto, que la superficie del espejo toma un color que difiere del que tenga en circunstancias ordinarias. Efluvios rojos y después azulados, semejantes a los efluvios eléctricos, aparecen, y entonces es cuando las formas pueden mostrarse”. La educación de la mirada, en cuanto a su fijeza, beneficia los procedimientos magnéticos de fascinación.

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En ésta, los ojos del fascinado actúan como los espejos y reciben las impulsiones fluídicas emanadas de los ojos del fascinador. Tal como suele ocurrir con la mirada de las serpientes con su presa. Para Piobb, los espejos mágicos poseen una correspondencia planetaria muy definida. Los discos y espejos negros son espejos de Saturno, se les utiliza para provocar la videncia con sujetos del sexo masculino; Los vasos y recipientes llenos de agua son espejos de la Luna y se utilizan con sujetos del sexo femenino; y los hemisferios y bolas de cristal son espejos del Sol y se utilizan sin sujeto para la visión personal.

Mención aparte merecen los espejos negros: Los espejos negros -confeccionados con obsidiana- quizás sean uno de los elementos más relacionados con la Magia. Un aspecto relevante de la obsidiana proviene del México antiguo, es su uso en el arte de la adivinación. Con ella se fabricaban espejos de superficie pulida y se empleaban con ese fin, estaba asociada a Tezcatlipoca "Espejo Humeante", era llamada compañera de la verdad, también recibía el nombre de Itztliteotl - Obsidiana Divina. Los romanos también solían utilizar espejos de obsidiana para ver la sombra, la representación oscura del objeto, aquello que no se ve a simple vista.

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La obsidiana está considerada como un potente espejo del alma, que ayuda a revelar lo que realmente se refleja en las almas de los demás. Su oscuridad contribuye a permitir ingresar en nuestra zona oscura o desconocida; el color negro absorben los rayos visuales y nos permite “mirar” desde los ojos internos, ya sea obteniendo información nuestra oculta o provocando algún tipo de fenómeno que nos introduzca en el mundo oculto de otro.

En la Lectura opcional Nº 23 (Espejo mágico para descubrir secretos y revelar el futuro) hay más información sobre las creencias y los posibles orígenes de los espejos, los distintos tipos, usos y practicas antiguas y actuales. La forma de limpieza dependerá del material en que ha sido hecho. Lo más importante es mantener limpia y sin marcas la parte espejada. Por supuesto que hay que tener los mismos cuidados que con los demás instrumentos. Su uso es similar al de la bola de cristal: permitirse observar, sin racionalizar, esperando la manifestación de alguna fenomenología paranormal que nos ayude a develar hechos especiales, ya sean del pasado, del presente o del futuro.

- Anillo atlante

Colección personal

El anillo atlante es uno de los productos más comercializados desde hace años. Para algunos es un poderoso talismán, para otros un amuleto y para muchos un negocio impresionante.

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Curso: Magia de los cristales, las piedras y los metales – Institutos en la Web Su origen ha sido situado en las pirámides de Egipto, como un regalo de los atlantes que llevaron su sabiduría a esa cultura. Las leyendas cuentan numerosas historias sobre él y sus facultades, llegando a ser definido, por quienes se encargan de la distribución y comercialización de sus copias como “un milagro de la física micro-vibratoria, donde las ondas de forma son agentes invisibles” Aunque se dice que el original, encontrado en la tumba egipcia, era de un material llamado gres, los anillos que se comercializan son de metal.

El gres es una pasta cerámica, formada por arcillas, materiales desgrasantes, como el sílice, y fundentes, como el feldespato, siendo sus principales características la dureza y su baja absorción de agua una vez cocida. Por lo tanto, el metal en que se fabrican las réplicas es tema de discusiones desde los orígenes. Mientras algunos fabricantes dicen que “debe ser en plata, porque conduce el calor y la electricidad mejor que ningún otro metal”. Otros fabricantes aducen que deben ser de oro y plata (u oro blanco y oro amarillo) porque “La combinación de los metales Oro y Plata, en la confección del Anillo Atlante, permite conservar un equilibrio ideal frente a situaciones importantes, porque la plata representa lo femenino, el Yin, la calma y el oro representa el dinamismo, el Yang, la actividad”. Luego, para jerarquizar más, han otorgado al oro blanco las propiedades de la Luna (incluso los ofrecen como argollas de casamiento). Otra variante ha sido confeccionar cada una de las líneas del frente, en tres metales diferentes: cobre, oro y plata, incrustando luego cuatro pequeños diamantes en los orificios. Esto da la pauta que solo se trata de un adorno o un amuleto, dado que al cerrar los orificios varía también su función. Estos cambios no han sido respaldados con explicaciones, por lo que solo es a nivel informativo de los cambios de presentación.

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Por último (por el momento) también se encuentran anillos atlantes donde han reemplazado el tallado de las pirámides por incrustaciones de las mismas figuras, pero hechas de alguna gema o piedra. En el caso de la imagen, amatista. Lo cierto es que, debido a las múltiples variantes de que ha sido objeto el diseño original (y con esto NO doy por cierto su origen atlante ni mucho menos, solo hablo de los primeros modelos que ingresaron al mercado como tales), solo nos podemos situar en las figuras grabadas, coincidentes en casi todos, como poseedoras de energía de formas

- Simbología y función: Este anillo se caracteriza por tener talladas 3 líneas frontales, 6 pirámides, 2 triángulos isósceles, 4 orificios y un grabado interno, teniendo cada una de estas figuras una función específica, la que recae en las ondas de forma y su variada emisión de energía de acuerdo con estas. Tres líneas frontales: Forman una rejilla cuya función es la de absorber las energías. Seis figuras en forma de pirámide a ambos lados de la rejilla: Son las encargadas de captar, acumular, potenciar y emitir energía cósmica. Dos triángulos isósceles a ambos lados de cada fila de pirámides: Su función es depurar las energías, transmutándolas en positivas y haciéndolas fluir hacia el interior por medio de los orificios de los vértices. Cuatro orificios enfrentados formando una cruz: Se ocupan de hacer fluir la energía, los de los vértices de los triángulos (positivas) hacia adentro y los otros dos, expulsando las negativas hacia afuera. Línea de ondas infinitas en el interior del anillo Grafica el movimiento de la energía en su interior. Están conectadas a los 4 orificios. La función final del anillo es la generación de campos energéticos sobre los meridianos de los dedos dirigiéndolos hacia el organismo y el campo bioplasmático.

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- Propiedades: Según sus cultores, el anillo atlante produce una energía circulante de protección y armonización, equilibrando la energía y neutralizando los excesos, favoreciendo, a su vez, la actividad cerebral. Protección: Se lo considera como un catalizador de las energías cósmicas, protegiendo contra influencias negativas o maleficios de cualquier naturaleza, pero también contra accidentes Armonización o “cura” Se le adjudica la facultad de restablecer funciones que se encuentran perturbadas, influyendo sobre los dolores causados por éstas, llegando (en algunos casos) a suprimirlos. Actúa a nivel circulatorio. Intuición Se lo asocia con el despertar de los niveles profundos de la mente, fomentando la producción de fenomenología paranormal en quien lo usa, especialmente aumentando la intuición y la comunicación telepática (decían que la forma de comunicación de los atlantes era telepática)

- Recomendaciones y forma de uso: El uso de este anillo ayuda a transformar las energías biomagnéticas y a proteger a su usuario de toda agresión de tipo vibratoria pero tiene algunos requisitos de uso para aprovechar mejor sus virtudes ⇒ El anillo es personal, no debe ser prestado a otros individuos, aunque sean familiares. ⇒ Debe cargarse al sol periódicamente, preferiblemente al mediodía, dentro de un recipiente de cristal o transparente. ⇒ Usarlo especialmente en ocasiones importantes de negocios, viajes, contactos personales, etc. ⇒ Debido a su agudización de fenomenología parapsicológica, si perturba el sueño se recomienda usarlo solo de día. Si no afecta, usarlo para dormir en la mano izquierda como protección de posibles ataques psíquicos nocturnos. ⇒ Si no se quiere quedar expuesto a preguntas curiosas sobre él, se puede llevar en un bolsillo o bolsita en contacto con la piel ⇒ Usarlo en un dedo de la mano derecha para resolver problemas y en la izquierda para recibir beneficios La utilización del anillo en la mano derecha será para problemas físicos y en la mano izquierda emocional.

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Curso: Magia de los cristales, las piedras y los metales – Institutos en la Web - Como amuleto: El uso de este anillo como amuleto conlleva otras cuestiones, como ser el dedo específico para cada objetivo. De allí que se recomienda tener otros de distinta medida para cada uno. Pero NO deben usarse varios a la vez. Dedos recomendados: Meñique, para atraer la prosperidad Anular, para la salud Medio, amor Índice: inteligencia Pulgar, sabiduría

- Limpieza y mantenimiento: Siempre la forma de limpieza dependerá del material del mismo, generalmente metal (aunque hay numerosas variaciones que habrá que tener en cuenta). Se recomienda realizar una desmagnetización del anillo cada 4 o 6 meses. Dependiendo su estado visual, hay veces que hay que hacerlo antes. Procedimiento: Colocarlo en sal marina seca durante tres días en un recipiente de cristal. Luego sacarlo y limpiarlo, secándolo muy bien. Para activarlo, es recomendable hacerlo dentro de una pirámide u otro instrumento de activación (como drusas o geodas) y luego proceder a personalizarlo y programarlo (si así lo decidimos), mediante el ritual que elijamos para la ocasión Luego, cuando no lo usemos, debemos guardarlos en una caja especial o bolsita individual, sin estar en contacto con otros objetos o piedras si no queremos estar limpiándolos a cada rato. - Uso mágico: El anillo puede usarse tanto en las manos, como apoyado en algún lugar. También como energizante en la mesa ritual (aunque, en ese caso, lo mejor es tenerlo en el dedo). Cumple la función de talismán, por lo que lo usaremos en la mano y el dedo que consideremos es el adecuado. La intuición lo marcará. El anillo siempre ha sido la ligazón a algo o alguien, pero también la voluntad del mago apoyada en la vara de poder. Su forma circular habla también del círculo mágico personal de protección.

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Además, se puede construir en cobre una versión plana del anillo y colocarla en la pared sur del ambiente que se quiere armonizar, como un biogenerador plano. Las medidas acordes están en el gráfico siguiente:

Aunque algunas no se ven bien, con paciencia se puede comprender siguiendo las proporciones de las otras partes. Nada es fácil en la magia, hay veces que hay que esforzarse más que otras. También se pueden encontrar pulseras, colgantes y muchos artículos más, pero habría que probar, por otra parte, no se deberían usar todos juntos. No siempre lo exagerado es beneficioso (si es que funcionan)

Fin de la quinta clase 297