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• Sebastian Cubillos

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Arthur Conan Doyle El cuento titulado, “El tratado naval” escrito por Arthur Conan Doyle relata la historia de la investigación de un crimen perpetrado en la ciudad de Londres, Reino Unido. Dicho crimen consistió en el robo de documentos confidenciales a Percy Phelps, quien trabajaba para el denominado Foreign Office (Ministerio de Relaciones Exteriores Británico), en consecuencia de esto se inició la investigación por parte de los detectives, Sherlock Holmes y su compañero Watson , con el fin de esclarecer los hechos.

Phelps se encontraba en su oficina y con él, el documento que contenía el tratado que horas antes había sido entregado por su tío, el ministro del exterior, Lord Holdhurst, quien se lo encargo con especial importancia. Debido a la carga laboral del día Phelps solicito un café a la mujer del ordenanza pero esta demoró más de lo normal, así que decidió bajar a ver qué ocurría, dejando el documento sobre su mesa, al llegar a vestíbulo se encontró con el hombre dormido en su lugar de trabajo. Luego de despertarlo ocurre un hecho que llamo de inmediato la atención de los dos sujetos, ya que las campanillas que se utilizaban para comunicarse desde los pisos de arriba comenzaron a sonar sin razón aparente lo cual generó pánico en Phelps quien corrió rápidamente a su despacho en donde ya no se encontraban los documentos, habían sido hurtados. Una vez efectuado el robo y en medio del desespero Percy sale junto al ordenanza a recorrer la ciudad en busca del responsable, lo que el desconocía es que Jhosep Harrison, el hermano de su prometida, había llegado hasta su despacho momentos antes y al no encontrarlo toco la campanilla para anunciar su llegada. Justo en ese instante, Harrison observa el tratado que se encuentra encima del escritorio, lo toma, sale del lugar y lo esconde posteriormente en su habitación.

Como consecuencia de la perdida de tan importante documento el señor Percy Phelps recae en una crisis nerviosa con cuadros intensos de fiebre y es trasladado a la ciudad de Wooking en donde se hospeda en la habitación de su cuñado, Jhosep Harrison, bajo el cuidado de su prometida. Tras varios intentos infructuosos por dar con el responsable, el hombre decide escribir una carta a un viejo compañero de escuela, el detective Watson, en ella expone su situación y extiende su invitación al reconocido detective Sherlock Holmes, para que juntos le ayuden a dar con el autor del crimen.

Los detectives acuden al llamado de Percy y deciden colaborar en el ya mencionado caso, Holmes realiza una especie de interrogatorio con el fin de encontrar posibles pistas que lo puedan conducir al ladrón del tratado pero estas son en parte infructuosas y no arrojan un claro resultado, mientras tanto el honor de Phelps se pone en entredicho y las acusaciones no se hacen esperar. Las primeras acusaciones cayeron sobre la esposa del ordenanza quien tuvo actitudes sospechosas que hicieron dudar a los investigadores, a tal punto que el caso fue llevado a Scotland Yard, en donde la mujer se defendió de las acusaciones.

A la par del desarrollo de la investigación, la salud de Percy Phelps, mejora, a tal punto que decide pasar una noche sin ayuda de la enfermera que hasta entonces lo cuidaba, en el transcurso de la noche oye ruidos extraños fuera de su ventana, por lo cual decide asomarse y es allí donde observa un hombre suspendido en el borde de la ventana que al notar su presencia, huye, dejando ver en su huida lo que parecía ser un cuchillo. Impactado por este suceso, Percy decide al día siguiente hablar con Holmes y Watson para relatarles lo acontecido, esto les da nuevas pistas sobre el responsable.

Holmes idea una estrategia para recuperar el tratado, ordena a la señorita Harrison quedarse dentro la habitación de Phelps durante todo el transcurso del día y que al caer la noche, apague las luces, cierre la ventanas y ponga seguro a las puertas, a su vez decide enviar al detective Watson y al el señor Percy a la ciudad de Londres para que continúen con la investigación desde allí. Tras esta serie de órdenes, Sherlock Holmes decide quedarse en Wooking y esperar resguardado en el exterior de la casa hasta el anochecer a la expectativa de la llegada del misterioso hombre del cuchillo que irrumpió la tranquilidad el día anterior. No paso mucho tiempo hasta que el hombre arribó a la casa e ingreso por la ventana, y prosiguió a buscar los documentos que se hallaban allí, dicho hombre era Jhosep Harrison, en su intento de escape fue detenido por Holmes quien tras una serie de forcejeos logra hacerse con los documentos pero no evitar la huida de Harrison. Finalmente Holmes llega a Londres a la hora acordada el día a encontrarse con el detective Watson y Phelps, en donde hace entrega de los documentos, revela el nombre del responsable y da fin a la larga investigación.