Renato de Fusco

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RESUMEN RENATO DE FUSCO I EL ECLECTICISMO HISTORICISTA Con esta expresión se indica una fase de la historia de la arquitectura del siglo XIX en la que coexisten estilos diversos, haciendo referencia todos ellos a diferentes periodos históricos anteriores; así, el neoclásico, el neogótico, el neo renacimiento, el neobarroco, etc. o retornos a la arquitectura del mundo antiguo, medieval, renacentista. Considerándolas indicativas de un estilo unitario en su conjunto y incluir en ellas otros fenómenos como el del nacimiento del urbanismo moderno y otros acontecimientos. Considerando toda la producción de este periodo refleja causas y exigencias comunes a todo el mundo occidental industrializado; que, a pesar de las poéticas diversas, los hechos y personajes deferentes y disparidad de las obras el significado de fondo de todo esto sucesos es sustancialmente histórico - ecléctico, en la acepción fenomenológica y temporal de la expresión y no en la puramente formal y estilística. Las condiciones histórico - sociales La arquitectura y la urbanística moderna nacen del encuentro de una serie de factores de entre los mas típicos de la cultura del siglo XIX. Los factores causantes son: el liberalismo, el positivismo, la industrialización, la revolución tecnológica, el socialismo utópico, el marxismo, etc. El liberalismo, nacido con la ideología de la democracia, igualitarias y humanitarias de la revolución francesa, se afianzo como traducción política, social y económica del individualismo. Desde el punto de vista económico, el punto de apoyo era el principio de la propiedad privada, donde toda actividad de intercambio debía ser llevada sin ningún tipo de interferencia, siguiendo las leyes del beneficio individual y del juego de la oferta y la demanda. Por su parte, gracias al positivismo, para el que solo el conocimiento experimental de los hecho es fructífero, y al creciente progreso de las ciencias naturales, se produjo un notable desarrollo tecnológico con la invención de nuevas maquinas y así sustituir la mano de obra artesanal, revolucionando radicalmente los tradicionales procesos de producción. Es así como al liberalismo se asocia al industrialismo. Ya que el costo de las nuevas maquinas era elevado para los artesanos, que exigían enormes capital inicial, esto unido a la nueva organización productiva y el comercio rápido llevaba a la búsqueda de una rápida recuperación del capital invertida los llevo al capitalismo. Del conjunto de estos fenómenos lleva al postulado económico por el cual todo es licito, útil y bueno con tal de que se venda. La clase que hizo suya la ideología del capitalismo industrial fue la burguesía, que se comprometió totalmente en la industria y en el comercio y así se transformo en la sociedad dominante del siglo XIX. Esta clase tenia la particularidad que cualquiera que fuera capaz de adquirir eficacia, riqueza y poder, podía formar parte de ella. La otra protagonista de la revolución industrial es la clase proletaria. Donde el movimiento obrero se organiza siguiendo los principios marxistas. El cual plantea que el obrero

produce un valor en exceso respecto a su remuneración, plusvalía que es absorbida por el capitalismo en su propio y exclusivo beneficio. de este inevitable enfrentamiento deriva la lucha de clases. Donde se dieron las primeras condiciones que dirigieron el nacimiento de la arquitectura y de la urbanística moderna es el caso de Inglaterra, que fue la primera nación en vivir la experiencia de la civilización industrial. La primera manifestaciones de este cambio cultural y antropológico se verifica paralelamente a la acción conjunta y relacionada de la revolución demográfica a y de la revolución industrial. Desde la segunda mitad del siglo XVIII hasta 1830, periodo en el que se desarrolla la revolución industrial, la población inglesa paso de 6,5 millones a 14 millones de habitantes. Al incremento demográfico se asocia una distribución diferente de los habitantes sobre el territorio, vinculada a la utilización en el campo de nuevas tecnologías. La mas importantes de ellas fue la máquina de vapor de Watt patentada en 1769. La cual incidió casi directamente en tres de los sectores productivos mas fuertes de Inglaterra: el minero, el siderúrgico y el textil. Se establece así la lógica del trabajo industrial, aumentar la producción, reducir los precios para producir más en un tiempo cada vez menor. Esto exigió la renovación del total de las redes de comunicación del país. Creando nuevas carreteras, canales y acelerar el transporte sobre ruedas, hasta que con la aparición de la locomotora en 1829 tuvo nacimiento el ferrocarril. Las ciudades cresen exponencial mente, los motivos por los cuales trajeron a la ciudad a la gente del campo era del orden económico (mayor salario y con motos más regulares) técnico (una vida mas higiénica y mayor asistencia) y recreativo (donde la ciudad ofrecía mas puntos de encuentro y de diversión que el campo). Pero estas ventajas fueron acompañadas de una gran contrapartida, la ciudad no resiste el empuje de tanta gente. Para obtener partido de estas condiciones precarias surge una categoría de empresarios que ven el negocio en esto y forman los slums y de los actuales suburbios proletarios. Los elevados índices de hacinamiento, la falta de servicios higiénicos las dificultades de aprovisionamiento de agua y sobre todo las relativas al saneamiento de las aguas negras fueron todas ellas causas que llevaron a repetidas epidemias de pestes. A esto se le suma la falta de una ordenanza que restriega la ubicación de las fabricas creando consecuencias nocivas para las zonas habitadas adyacentes, para el tráfico y la contaminación del agua y el aire. La ciudad Coketow, del carbón, del humo y de las maquinas marca un punto de referencia. Del diagnostico y de la terapia de esta ciudad malsana nace, por obra de técnicos, legisladores, administradores, reformadores y utopistas, la urbanística moderna. La urbanística moderna puede considerarse generada, por tres aspectos diversos: uno legislativo-reformista, otro especifico de los utopistas del siglo XIX y un tercero que refleja la actitud de los primeros marxistas. Para compensar los desequilibrios producidos por la revolución industrial, en el campo edificatorio y urbanístico, siguiendo las vías de las reformas legislativas, se presentan las siguientes fases: en la primera se efectúa una encuesta precisa sobre las condiciones higiénico-sanitarias y residenciales del patrimonio edificado existente, en segundo lugar se dictan algunas leyes sobre salud pública, la tercera referida a las leyes relativas a

expropiación de bienes privados declarados de utilidad pública, instrumento considerado como básico para futuras reformas urbanísticas. Un segundo enfoque es el de los utopista. Para garantizar a todo el mundo una condición de vida mejor, era crucial la superación del conflicto entre el derecho privado y el público, y dado que la propiedad privada era la pieza clave del capitalismo, los primeros radicales lanzaron propuestas solo viables en una organización económico-social diferente a sus tiempos y, por tanto, fueron denominados utopistas. Pero tuvieron el merito de anticipar varias reformas y de indicar que los desastres urbanísticos serian irresolubles sin la transformación económica adecuada. Supieron captas la escala y el tipo de intervención que tenían mayor necesidad. El tercer enfoque político, económico y social de los problemas de la ciudad industrial es el de los primeros marxistas. (reforzar de la pag 25) La arquitectura de la ingeniería La revolución industrial, el progreso tecnológico, la producción y el comercio acrecentado y acelerado de los bienes de consumo, tuvieron una inciden directa en el campo de la construcción. Donde surgen dos grandes categorías de producción: la tradicional (aplicadas con nuevas técnicas) y los completamente nuevos (utilizadas por que respondían a nuevas exigencias o porque eran viables gracias a esas nuevas tecnologías). Donde coexistencia lo nuevo y lo viejo como emblema de una técnica común y la convivencia de tipologías antiguas y modernas, de tendencias orientadas a la recuperación del pasado y de otras puramente futuristas. Por estas dos divisiones se considera a la realidad tecnológica de la arquitectura desde finales del XVIII y todo XIX como un fenómeno enmarcado en el cuadro del eclecticismo histórico ¿Qué es realmente la arquitectura de la ingeniería? Es la manifestación mas significativa en el campo de la construcción de la cultura del siglo XIX y, puesto que no es un fenómeno meramente técnico, marca el paso más claro entre el pasado y el presenta de la historia de la arquitectura, sin el cual es impensable el nacimiento del Movimiento Moderno. Este aspecto refleja en forma evidente los significados y las funciones de la sociedad de su tiempo y proponiendo una espacialidad interna, propia e inédita, la obra de los ingenieros del XIX es arquitectura. Y como tal arquitectura no es inmune a las características invariables del eclecticismo historicista. Cabe aclarar que esto es así cuando estas actividades alcanzan una síntesis coherente, conservando lo especifico de la arquitectura, que es la conformación espacial de determinadas instancias de la sociedad. La arquitectura de la ingeniería tiene tres grandes grupos de aplicación: el de los puentes de hierro, Las grandes cubiertas de hierro y cristal y los pisos de edificios con esqueleto metálico. Estos dos últimos son los más cercanos a la arquitectura, y se pueden clasificar como dos categorías distintas, por su significado y valor diferente.

Es decir, mientras que la utilización de la construcción de esqueleto es una invención meramente técnica y demuestra que estamos más en presencia de un principio constructivo, en cambio las cubiertas de hierro y cristal no es un esquema definido de una vez y para siempre, sino una conformación variable, que sin perder su aspecto técnico y científico, representan la expresión mas típica de la arquitectura de la ingeniería del siglo XIX, se aplican a una tipología edificatoria amplia y variada, por ejemplo, los invernaderos los mercados cubiertos, grandes almacenes, estaciones ferroviarias, en las instalaciones para las exposiciones universales, etc. Las grandes exposiciones como el Palacio de Cristal de Joseph Paxton en el 1851 en londres; La Galerie des Machines, de Dutert y Contamin; y la Torre Eiffel ambas realizadas en la exposición de Paris de 1889. En estos ejemplos particulares y en otros tantos mas se pueden ver que aun teniendo en común el esquema constructivo de la estructura en hierro y cristal, presentan una gama muy amplia de implicaciones diferentes. Las galerías publicas resuelven un problema urbanístico, el de unir diversos puntos del centro urbano con recorridos peatonales cubiertos. Los invernaderos botánicos, además de satisfacer su propia función, sirvieron como el campo mas dúctil para la experimentación de las nuevas estructuras. Con las estaciones ferroviarias se crea un tipo de construcción completamente nuevo, mientras que las instalaciones para las exposiciones universales, los mercados cubiertos y los grandes almacenes promotores también de tipologías inéditas, representan toda la gama del comercio, el internacional, el mercado al por mayor y al por menor. A diferencia del principio constructivo del edificio de pisos con esqueleto metálico, que nace y permanece como un sistema sin significado, disponible para todos los usos, el sector de las grandes cubiertas en hiero y cristal produce tantas formalizaciones como campos a los que se aplica; indudablemente resuelve algunas funciones, pero estas se van haciendo más especificas; además, a las propias razones funcionales se asocian otras de tipo representativo, comunicativo y también simbólico. Se podría decir que en este campo encuentra la arquitectura de la ingeniería su lenguaje nuevo y especifico. Pero el hecho verdaderamente nuevo de esta arquitectura radica en haber dado origen a una espacialidad interna totalmente inédita. Cuando la formalizaciones del estos espacios internos se limitan a la cubrición y a la estructura interior, manteniendo inalterado, en términos estilísticos tradicionales, su cerramiento externo, nos encontramos ante manifestaciones meramente técnicas , una convivencia inevitable entre ingeniería y arquitectura ecléctica. Cuando, por el contrario, la formalización estructural interna se pone de manifiesto francamente también al exterior, ya no es licito habar de arquitectura e ingeniería sino simplemente de arquitectura que ha hecho propia algunas modalidades de la ciencia y de la técnica de las construcciones, superando así la dificultad y el dualismo presente todavía en la crítica y en el debate arquitectónico. Para poner en términos más correctos la relación entre arquitectura e ingeniería, se da el hecho de que a fines del siglo XVIII ha habido un desdoblamiento de la figura del constructor que no volverá a recomponerse: el binomio arquitecto e ingeniero como inevitable consecuencia de la división del trabajo, de la especialización, de la organización didáctica, etc., provocado todo por la moderna civilización industrial.

Las poéticas del eclecticismo historicista Como fundamento de los principales revivals arquitectónicos, desarrollados en la segunda mitad del siglo XVIII y durante todo el siglo siguiente, se encuentra la historiografía y la teorización, originada de varias formas, de algunos estilos del arte del pasado. Tendencias historicistas: el neoclasicismo y el neogótico. El neorromántico se estudia como una fusión de las otras dos. El neoclasicismo, en los siglos XVIII y XVX, es la primera encarnación arquitectónica y artística del iluminismo. Se afirma como reacción al barroco, relectura critica de la tratadística antigua. El tema más debatido se refiere a la componente ideológica de este movimiento. El neoclasicismo en sus varias fases no siempre tiene la misma interpretación y asume a veces aspectos notablemente contradictorios. Estas oscilaciones ideológicas se pueden dividir en varios periodos: 1. (1715-40) En el que aparece los valores culturales iluministas. 2. (1740-80) Caracterizado por una consolidación basada en aspectos filosóficos, arqueológicos y académicos. 3. (1780-1805) Definido por la expresión revolucionaria con una referencia evidente a la llamada arquitectura del iluminismo. 4. (1805-14) Coincide con el estilo imperio que instrumenta políticamente el fusto neoclásico. 5. (1814-48) Que coincide cultural y políticamente con la restauración. 6. (1848-1910) Periodo del neoclasicismo de los estados nacionales burgueses. 7. (1920-40) Marca la fase más reciente e ideológica mas retrograda del neoclasicismo, al ser adoptado para todas las manifestaciones oficiales y antimodernas tanto en Estados Unidos como Rusia, como en Italia y Alemania. Encontramos que el neoclasicismo, entendido como estilo-código lingüístico de la arquitectura, no tiene una ideología propia, sino que se revela como un lenguaje disponible para todas las instancias de la sociedad. Desde el siglo XVIII hasta los países contemporáneos que de algún modo exigían un arte de estado oficial. Aunque se reconoce motivaciones e intenciones diversas, se puede destacar el componente ideológico del neoclasicismo por tener en cuenta los aspectos morfológicos, racionales, didácticos y operativos. Son bastante diferentes a los que podemos encontrar en neogótico, donde los valores morfológicos y sintácticos son menos relevantes que los significados y las motivaciones ideológicas.