Religion El Ajayu

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EL AJAYU

EL AJAYU CONCEPTO DEL SER HUMANO Convencidos que el ser humano fue creado de carne y hueso, pero también que tienen un espíritu al cual se le ha denominado como ajayu (fuerza vital, aliento que da sentido a la vida del ser humano).El ajayu (espíritu) es lo que nos genera vida y hace estar en armonía con dios; es lo que impulsa a recibir pero también a dar. Por tanto, si se pierde esa fuerza vital, se podría llegar incluso a la muerte. Las personas tenemos tres niveles de energía: primera energía “espíritu”, segunda energía “coraje “y tercera energía “animo” Hoy en día, vemos que no se da demasiada importancia a esta vivencia espiritual; es más, para muchos puede llegar a ser muy antaño y que no sirve para nuestra generación. Todo lo solucionan con médicos o psicólogos y ni siquiera nos imaginamos que una enfermedad puede ser causada por el alejamiento del ajayu.

¿QUE ES EL AJAYU? El termino aymara ajayu podría traducirse en castellano por “espíritu” o “alma”. Sin embargo, en aymara podemos señalar otros términos que están relacionados con el ajayu como: jach’a ajayu (el ajayu mayor), jisk’a ajayu (ajayu menor) qamasa (coraje o fuerza), chi’wi (sombra), jañayu (el animo que refleja en el rostro). De hecho estos términos hacen alusión a la dimensión espiritual de la persona. Es decir, en el mundo aymara, la persona no solo es lo corporal, sino el jaqi es también un ser espiritual, y tiene espíritu. No solo se puede hablar del ajayu personal, sino también del ajayu de la familia y del ajayu de la comunidad. El termino castellano “espíritu santo” se le a traducido en aymara como qollan ajayu y esto indicaría en aymara espíritu de vida. En el mundo andino el ajayu es muy importante y tiene mucho que ver con jaqaña o con jakawi (vida) del jaqi. Mientras el ajayu este junto al cuerpo, el jaqi tiene vida, por eso janiwa usuntkiti (no se enferma). Pero, sin embargo, por alguna razón el ajayu puede ser separado del cuerpo, lo cual es grave, porque la salud y vida del jaqi se verá afectada de forma negativa y esto no es bueno. El ajayu puede ser separado de la persona. Por ejemplo, kimapachatix majaqix sustjasi ukha (cuando una persona a tenido un un susto fuerte), ukhmaraki kunapachatixjani Wali tuqinakansa sarnaqi (asi también cuando ha ido y pisado lugares poseídos por el mal o donde habita el maligno),yakha markanakarusa sari (cuando va o visita otros pueblos), wali llakisitas sarnaqi ukha (o cuando la pena ,tristeza o angustiado va consumiendo poco a poco); esto puede ser cuando algún ser querido nayrt’awayxi (ha fallecido), ukxamarakijach’a llakinakasapuri (o cuando la desgracia llega), jani

Prof.: Gloria Choquetarqui

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walt’awinakarusa puri (o cuando los problemas mayores se presentan o agobian a uno. En el caso de la persona que a hido a lugares lejanos o visitado otros pueblos, se recomi9enda que al salir o al dejar dicho lugar y al regreso debe, siempre, llamar su ajayu con su ch’ullu (prenda para cubrir la cabeza) o con su sombrero, con mucha más razón cuando esta persona no ha sido bien recibida. Si la persona se enferma es porque “su” ajayu ha sido separado o apartado de su cuerpo. ahora, como se puede separar el ajayu de la persona , también se lo puede recuperar.

¿QUIÉN PUEDE CURAR DEL AJAYU?       

Preferentemente son las mamas que llaman, por estar junto a sus niños Todo hombre o mujer puede llamar el animo a la persona recién asustada Los abuelos o abuelitas señalados desde arriba con designio de sanación. Los y las jóvenes ya señalados para sanar desde la temprana edad Los yatiris (sabios) menores, sean hombre o mujer Los yatiris mayores, sean hombre o mujer de mucho espíritu y coraje Los que tienen don de llamar los espíritus y corajes, desde su nacimiento tienen señales en el cuerpo

¿CUANCO SE ROMPE ESA ARMONIA Y SE AUSENTA NUESTRO AJAYU? Pueden ser diversos los momentos y lugares donde se pierde o hacemos que se ausente esta fuerza vital de la persona, Calixto Quispe menciona algunos lugares que es bueno resaltarlos y poder complementarlos con alguna experiencia o acontecimientos que causaron el desequilibrio:          

Cuando no le damos importancia a un susto y seguimos como si nada hubiese pasado. Cuando no respetamos la pachamama o los lugares sagrados Cuando hacemos el mal a otra persona, porque ese mal puede volverse contra ti Cuando no vivimos en armonía y reprocacidad con la naturaleza Cuando caminamos sin respeto, sin hacer valer a nadie, solo por orgullo humano Cuando caminamos fatigados o renegados maldiciendo al prójimo Cuando estamos pensativos, tristes, desanimados y decaídos, sin valor Cuando nos encontramos entre miedos, perdidos en la amenaza de la oscuridad Cuando pasamos llorando entre llantos y consumidos por la grave depresión Cuando estamos en graves problemas, entre llantos y soledad por el abandono

PERDEMOS EL AJAYU POR NO DAR IMPORTANCIA A UN SUSTO Cuando sucede un susto la persona se enferma cual si fuese una enfermedad natural pero los médicos no suelen dar con la enfermedad, los medicamentos no curan y si lo hacen es por poco tiempo y vuelve la enfermedad con mayor fuerza. Los yatiris son las únicas personas que pueden curar, primero ven la coca y el cigarro para poder detectar la causa de la enfermedad.

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Un día, en un caso particular, que nos reunió a toda la familia para que lo acompañemos. Después de un momento nos dijo que la enfermedad era muy grave, que ya tenía mucho tiempo que su ajayu había sido agarrado. Era necesario un rito para llamar su ajayu de forma inmediata porque podría empeorar e incluso morir. Esa misma persona fue quien hizo el rito del llamamiento de su ajayu, y mi hermano pudo salvarse de esa enfermedad mortal. Los aymara toman muy en cuenta los sustos que una persona tiene ya que en ese momento es donde pierden su ajayu (su alma) y un hombre no puede vivir sin su ajayu por estas consecuencias un hombre aymara tiene que vivir en paz y en armonía sin tratar de asustarse.

PERDEMOS EL AJAYU POR NO RESPETAR LOS LUGARES SAGRADOS Normalmente estos lugares para nosotros son muy respetados, pero por inconsciencia o desconocimiento, muchas personas ya dejaron de creer y respetar estos lugares sagrados donde el ajayu puede ser atrapado por la pachamama. Uno de los lugares donde habita la pachamama es el fogón (cocina rustica hecha con paja brava). Si no se hace el rito del llamamiento de su ajayu, puede que el niño se enferme y llegue a un estado crítico, si no se le atiende inmediatamente, en este caso la madre misma lo puede hacer llamándole por su nombre. Otro de los lugares sagrados que merece mucho respeto son los nidos de las hormigas, por ser la naturaleza parte conjunta de la creación. Cuando uno juega en estos lugares y los pisa, peor aun si van matando hormigas sin consideración, sin perder tiempo los pies aparecerán con una hinchazón llegando a consecuencias graves. Por eso es muy importante conocer y respetar a la naturaleza y sus lugares sagrados, para no causar desequilibrio con los seres que nos protegen.

PERDEMOS EL AJAYU POR HACER MAL A OTRA PERSONA En todo momento nuestros padres nos enseñan que no debemos hacer mal a nadie, que vivamos en armonía con todos. Por más que nuestros padres nos inculcaran estos valores, siempre vivimos desobedeciendo y vamos incurriendo en el mal. Para ellos buscan maneras, y así como existen yatiris que pueden curar los males, también existen los layqas (personas que se prestan para hacer el mal). Estas personas juntamente con el solicitante se valen de los malos espíritus para dañar a las personas, aquí el yatiri juega un papel muy importante, para descubrir las causas de esa enfermedad y poder curarlo, en estas circunstancias lo más frecuente es que ni médicos ni psicólogos puedan hacer algo. En estas circunstancias, los aymaras dejan todo en manos de dios ya que ellos saben muy bien que esa enfermedad los llevaría a la muerte. Esas personas que se dedican hacer el mal al prójimo siempre terminan en situaciones críticas, ya que nunca les irá bien tanto en el trabajo como en la familia. Por estas repercusiones lo que recomiendan los ancestros aymaras a todas las generaciones es el de vivir en paz y no hacer mal a nadie.

PERDEMOS EL AJAYU POR NO VIVIR EN ARMONÍA Y RECIPROCIDAD CON DIOS Y LA NATURALEZA

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El ajayu es comprendido en el mundo andino como la fuerza que contiene a los sentimientos y la razón, también es entendido como el centro de un ser que siente y piensa; es la energía cósmica que genera y otorga el movimiento de la vida. La consolidación de esa energía proveniente del ser humano o jaqiwarmi (hombre-mujer) depende fundamentalmente de la armonía que se logra con el universo, respetando a los demás seres y la vida que nos rodea. El ajayu también puede compararse con el aura o chakra, términos usuales en la cosmovisión y los rituales asiáticos, que son concebidos como las ‘ondas’ vibratorias que fluyen en todo el universo. Cada ser y cada elemento del cosmos percibe estas vibraciones que existen en el universo, este hecho necesariamente recarga y alimenta al ajayu; la percepción es recíproca, tanto de las vibraciones positivas como de las negativas. El amauta (sabio aymara) Manuel Alvarado sostiene que los seres que no logran obtener el equilibrio en armonía y que no respetan la vida ni a los demás, “poco a poco van perdiendo la energía vital, es decir su propio ajayu”. En su obra Cómo superar el miedo con el ajayu, el investigador originario diferencia dos clases de energías en el ser humano: el menor o jisk’a ajayu, que lo describe como la energía que algunas personas pierden en la vida, ante el desequilibrio de sus energías positivas y negativas, y el mayor o jach’a ajayu, que es la energía vital de un ser, ésta se pierde sólo con la muerte, pero el autor menciona que la energía es trascendente y permanece en otra dimensión. En las ciudades se estudia la psicología humana en centros de formación superior, a los que acceden sólo los interesados en la especialidad. Las demás personas que necesitan ayuda acuden usualmente a los servicios de orientación psicológica y en casos extremos al psiquiatra. Pero desde el punto de vista del mundo andino, aún se mantienen importantes tradiciones para la formación del jaqi o del individuo que debe encontrar el equilibrio de su ajayu.

Prof.: Gloria Choquetarqui

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