Relaciones Que Hay Entre Fe y Razon

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INSTITUTO TELOGICO PARA LAICOS INCORPORADO A LA UNIVERSIDAD LA SALLE, A.C. (“SISTEMA ABIERTO”)

TRABAJO RELACIONES QUE HAY ENTRE FE Y RAZON MATERIA: INTRODUCCION A LA TEOLOGIA PROFR. P. CESAR BARRERA ALUMNO: RAFAEL ESPINOZA LOPEZ

IZCALLI CUAUHTEMOC, METEPEC MEX., 23 DE NOVIEMBRE DE 1999.0

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INTRODUCCION Este tema viene a reforzar la fe ya que se puede distinguir entre fideísmo y racionalismo, dos tendencias que resultan perniciosas ya que llevan a los extremos del pensamiento; por un lado conducen a algunos pensadores a posiciones radicalistas rechazando (racionalismo) todo valor de fe y el valor de la revelación, así como otras verdades del cristianismo creyéndose autónomos; y por otro lado el exagerado fideísmo que niega toda posición religiosa y la ayuda de la razón despreciando el apoyo de esta. Se puede demostrar a través de algunas posturas reflexivas la colaboración de la fe y de la razón procedentes de una misma fuente divina donde no solo no hay contradicción sino que más bien se complementan para comprender los misterios de la Iglesia. En lo personal me doy cuenta que tengo ahora después de conocer este tema motivos para acrecentar mi fe basándome en las escrituras, así como en las razones expuestas por la jerarquía de la Iglesia.

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RELACIONES QUE HAY ENTRE FE Y RAZON “La Fe y la razón convergen en un una sola verdad” perspectivas del Vaticano Segundo

nociones y

Concepción teológica de la razón. Admite un cierto oscurecimiento de la razón (torcida y defectuosa inclinación de la voluntad) por consecuencia del pecado original. Debido a esto la razón encontrará dificultad en las cuestiones morales, y en las relacionadas con el fin último. La Iglesia también ha mantenido que la razón humana apoyada en los datos de la experiencia, puede llegar a descubrir la existencia de un Dios Creador, así como el núcleo de deberes éticos que vinculan la conciencia, enseña también que la razón puede demostrar los fundamentos o prolegómenos de la fe, y alcanzar con ayuda de la fe una cierta inteligencia verdadera de los misterios. Tres razones históricas de articular la razón y la fe: a) Opción tradicional: armonía o equilibrio entre razón y fe. b) Primacia de la fe sobre la razón (Protestantismo) c) Primacía de la razón sobre la fe (Racionalismo) a) Opción tradicional: equilibrio entre razón y fe: No significa que sean simétricas o iguales. Son dos órdenes diferentes de conocimiento (natural y sobrenatural). Pueden vivir juntos y en armonía dentro del mismo sujeto. San Agustín asoció conscientemente la idea de fe, y conocimiento y saber. Los Padres de la Iglesia superaron el abismo entre el Dios Vivo de la Revelación y los principios últimos de la filosofía, es decir fe y razón. No era una nivelación o reducción de ambas al mismo plano, sino una asociación que las vinculaba sin confundirlas, sin ignorar sus derechos. Santo Tomas considera la fe entre el saber y la opinión, pero a diferencia de ésta que carece de evidencia exclusiva respecto a la proposición creída, el acto de fe es un acto de libre voluntad. Dos grupos de verdades religiosas: Verdades que pueden demostrarse por la razón humana, y la que esta razón no puede conocer por sí misma: “Dios es bueno”, “Dios ha creado el mundo”. Verdades que exceden las capacidades ordinarias de la razón humana: se aceptan en base a la fe, el creyente las recibe libremente en base a su fe, 3

El tratamiento cristiano clásico de razón y fe excluye que la razón pueda demostrar el misterio Trinitario. Repudio de la doble verdad: No es posible que haya una verdad según la fe y otra verdad según la razón. b) Primacía de la fe sobre la Razón (Protestante): la razón es un elemento contaminante de la fe. La fe desnuda no necesita de ningún tipo de apoyo racional o histórico. sostienen una noción de fe donde se desprecia a la razón. Postura fideísta: la creencias religiosas son enteramente razonables y plenamente justificadas. Según Barth resulta impropio y deshonesto probar la existencia de Dios. “el teólogo que trata de demostrar que Dios existe se coloca así mismo en un dilema.” Plantinga desaprueba el repudio de Barth a la teología natural: adoptar por necesidades de método la postura del no-creyente, no implica rechazar la fe en Dios, mantener la fe en Dios es racionalmente permisible si la persona tiene un buen motivo o argumento para hacerlo. c) Primacía de la razón sobre la fe (Racionalismo): Se intenta encerrar a la fe dentro de los límites de la razón, desequilibrio más o menos espontáneo que ha podido contaminar la reflexión de teólogos cristianos, ha pretendido descartar a la fe como medio verdadero de conocimiento de la realidad. Idea de autonomía del propio saber. Fundamentamiento de la verdad en algo no distinto al pensamiento mismo. La fe se ve frente a los a los tribunales de la razón, es considerada como única con título suficiente para aprobar o desaprobar la legitimidad de las creencias, vistas en sí mismas . DECLARACIONES DE LA IGLESIA SOBRE LAS RELACIONES ENTRE FE Y RAZON Aceptan el uso de la razón y de la filosofía para comprender mejor y exponer la doctrina cristiana; advierten el peligro del racionalismo. Se han celebrado concilios para combatir herejías como las de Arrio y otros, se acepta el término filosófico de omousios para adoptar la el misterio de fe de la Santísima Trinidad. El Vaticano emite Bulas para contrarrestar las doctrinas aristotélicas el Concilio de Letrán emite un documento censurando excesos de filosofías aplicadas a la fe cristiana. Se pide que las universidades y formadores de teólogos aclaren los puntos discordantes a la luz del Evangelio.

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Aún cuando la fe esta por encima de la razón no puede darse entre ellas ninguna disensión o conflicto moral, ya que ambas proceden de la misma fuente eterna e inmutable que es Dios. Se prestan mutua ayuda. EJERCICIO DE LA RAZON EN TEOLOGIA Corrige las actitudes fideístas que confunden lo sobrenatural con lo incoherente, lo misterioso con lo fantástico y lo tradicional con lo legendario. La teología analiza datos, comprueba su valor, descubre relaciones y define objetos. PUNTOS DE VISTA FILOSOFICOS (Sanabria, José Rubén., Introducción a la Filosofía. pp. 67-69) La filosofía es una tendencia reflexiva hacia el Absoluto. Fe es el acto por el que una persona asiente, acepta la palabra de Dios como verdad, precisamente porque viene de Dios, es el acto del entendimiento que asiente a la verdad divina bajo el imperio de la voluntad movida por Dios mediante la gracia. El creyente no podrá para filosofar, despojarse de su fe y usar exclusivamente la razón. “Incluso el que niega la religión y la fe está, sin quererlo, realizando un acto de fe, puesto que el objeto de la religión es indemostrable y, por lo mismo, más allá de la ciencia”. La creencia es una actitud vital que compromete a la persona entera. Ciertamente las verdades cristianas de fe -apunta certeramente J. Pieperson primeramente una doctrina de salvación y no ideas de la realidad, como tampoco interpretaciones de la existencia, sin embargo se tiene que tomar en cuenta la verdad revelada y que la persona acepta por la fe, tomando en cuenta la razón; brevemente: no se oponen razón y revelación.

RAZON Y FE EN EL TRABAJO TEOLOGICO La fe en busca de la inteligencia: En el origen de toda teología nos encontramos con un doble don de Dios: el don de la palabra de Dios y el don de la fe para adherirse a esa palabra con certeza absoluta. Vivimos en una en una economía de palabra y de audición, de testimonio y de fe. No tenemos acceso a Dios sino a través de los signos, dos aspectos de la fe son el apetito de visión y el deseo de conocer y de ver. La fe suscita la búsqueda del Espíritu, no por simple curiosidad sino porque la verdad que El revela se presenta como el valor supremo para la vida humana. 5

La inteligencia teológica bajo la luz de la fe. El teólogo tiene como absolutamente ciertas unas verdades que no puede conocer, ni por su experiencia ni por su reflexión. Su fe le asegura que esas proposiciones designan la misma realidad que hay en Cristo. Cuando el teólogo afirma que hay en Cristo dos naturalezas y una persona, tiene como absolutamente cierto que esas palabras corresponden a la realidad, por eso intenta comprender esa realidad. La certeza de su fe es el motivo y la garantía de su reflexión. Dios imprime, en la inteligencia humana, una inclinación hacia El, verdad personal subsistente, y atrae al hombre para que conforme su conocimiento con el conocimiento mismo de Dios. La teología es, por tanto, obra conjunta de la actividad del Espíritu y de la luz de la fe, de la razón sobreelevada animada por la fe: ambas constituyen un dinamismo de conocimiento humano-divino y absolutamente único. La razón humana, por su parte se sirve de todas las leyes del conocimiento y de la técnica humanos, con todas las exigencias de la ciencia, concretamente en materia de método de sistematización y de unidad. La razón: a) Establece el hecho de la revelación o de la palabra de Dios en la historia y el hecho de la Iglesia como depositaria y mediadora de esta palabra a través de los siglos. a) Defiende la verdad revelada demostrando que no es ni imposible, ni desprovista de sentido, sino soberanamente inteligible. c) Prosigue esa inteligencia fructuosa de los misterios que define el Concilio Vaticano I en estos términos: Cuando la raíz, iluminada por la fe, busca con diligencia, piedad y prudencia, llega, con la gracia de Dios, a cierta inteligencia de los misterios, que es sumamente fructuosa, y esto bien por los caminos de la analogía con los conocimientos naturales, bien por la revelación de los misterios entre sí y con el último fin del hombre.

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CONCLUSIONES La fe y la razón no se oponen, nos ayudan a comprender el misterio de Dios, así tenemos una fe fortalecida por la razón. La Iglesia afirma certeramente que hay que sondear en los misterios con inteligencia mediante la razón a la luz de la fe. A comprender la revelación como fuente misma viva comunicada por Dios mismo en su infinito amor, y a aceptar voluntariamente, libremente en una respuesta amorosa a la invitación amorosísima del Padre por medio de su Hijo, junto con su Espíritu. Gloria a Dios por mostrarse y permitirnos creer humildad para gloria de Dios Eterno uno y Trino.

sus misterios con

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BIBLIOGRAFIA Morales, José, Introducción a la Teología Eunsa., Navarra España., 1997 p. 51-61 Sanabria, José Rubén, Introducción a la Filosofía., Porrúa., México., 1983. P 67- 77 Latourrelle, René, Teología Ciencia de la Salvación., Sígueme., Salamanca, España 1968. P 50-60.

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