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PROSA MODERNISTA Nombre: Pulido Ayala Julio César ‘’Japonería’’ de Julian del Casal y ‘’Las máscaras’’ de Amado Nervo AMADO NERVO. (1870- 1919)

El poeta Amado Nervo (Juan Crisóstomo Ruiz de Nervo) nació el 27 de agosto de 1870 en la ciudad mexicana de Tepic, Nayarit. Amado Nervo fue un poeta romántico, autor también de novela y ensayo, al que se encasilla habitualmente como modernista por su estilo y su época, clasificación frecuentemente matizada por incompatible con el misticismo y tristeza del poeta, sobre todo en sus últimas obras, donde intentan reflejar sentimiento religioso y melancolía, progresivo abandono de artificios técnicos, incluso de la rima, y elegancia en ritmos y cadencias como atributos del estilo de Nervo. JULIÁN DEL CASAL (1863-1893)

Julián del Casal nació en La Habana, en 1863. Era el escapista, dedicado a la lectura, la meditación y la contemplación de lo exótico, y pudo crearse un mundo de ensueños, que expresó en musicales kakemonos y sourimonos de encanto japonés, en sonetos de deslumbrantes coloridos y sobria intensidad lírica, y en rondeles y rimas de hondo simbolismo y primorosos diseños. Vivió en su torre de marfil, entre sombras, sin otro afán que el de crear. Junto con Gutiérrez Nájera y José Asunción Silva fue uno de los iniciadores del movimiento Modernista. Tradujo poemas en prosa de Baudelaire. Parte de su prosa fue traducida al inglés. Utilizó los pseudónimos El Conde de Camors, Hernani y Alceste. COMPARACIÓN DE SUS DOS OBRAS

Existe una gran característica común entre estas dos obras escritas en prosa. ‘’Japonería’’ es una obra escrita en 1890 al estilo de poema en prosa y nos canaliza el amor que tiene un hombre a una mujer, describiéndolo con el objeto un búcaro japonés el cual el quisiera colocar dentro de su alcoba blanca (un búcaro es una decoración de cerámica encontrada en forma de jarrón) ‘’ he visto esta mañana, al salir de paseo, un búcaro japonés, digno de figurar en tu alcoba blanca ¡Oh, espiritual María! donde no se han oído nunca las pisadas de tus admiradores o el eco sonoro de los besos sensuales.’’ (Japonería) Mientras que en ‘’Las máscaras’’ publicado en 1918 siendo igual un poema escrito en prosa, nos describe esa faceta que tenemos todos los seres humanos ante la sociedad, esa faceta que nos cubre lo que realmente ‘’somos’’ describiendo aquello como una máscara, es decir, también logra canalizar ese aspecto dentro de un objeto.

Al igual que esta característica, las dos obras llevan a cabo una selección esmerada de las palabras, adjetivos y formas. Éste, alegre, áquel, indiferente, el otro, triste, el venidero, acaso gesticulante y ridícula. (Las Máscaras) cabellera rubia destrenzada, por las espaldas; de alas de pedrería, ansiosas de remontarse, y de dedos de uñas largas, enrojecidas de carmín (Japonería) Esto es algo esencial en el modernismo, ya que viene acompañado de la musicalidad que tienen estas obras. En las dos es común encontrar la sinestesia; es decir, la percepción de la realidad no mediante el sentido que le corresponde, sino por medio de una traslación sensitiva o intercambio de sentidos. En el caso de ‘’Japonería’’ busca, como en muchas obras modernistas, lo raro y precioso en épocas históricas fastuosas, en culturas igualmente lejanas y prestigiosas, como la India y la China de las antiguas dinastías, y el Oriente en general, a pesar de solo concentrarse en un simple búcaro japonés, al igual que la mención de la ‘’quimera’’ el cual era una criatura dentro de la mitología griega, junto con la descripción de ‘’ brazaletes de oro, esmaltados de zafiros y rubies, que fulguraban en sus estuches de terciopelo azul; de rosarios de coral engerzados en plata, que se enroscaban en sus conchas nacaradas’’ dando alusión a esa cultura, y constante alusión a los colores y a los sonidos, a diferencia de la obra de Amado Nervo, que no contiene tales características culturales (al menos, en su obra ‘’Las Máscaras’’) Una cualidad importante en la obra de Nervo, es que se da una expresión de lo íntimo y personal: junto a la fantasía, rasgo unificador de todo el Modernismo, predomina un sentimiento de lánguida tristeza impregnada de vagos anhelos (a menudo más literaria que auténtica) Al igual que el cosmopolitismo: para aplacar la insatisfacción o melancolía de finales de siglo XIX, el deseo de evasión y de goce del olvido de la propia realidad cotidiana, ya que su obra nos da alusión a eso que existe dentro de nosotros, que solo los dioses pueden ver, que cubrimos con máscaras cotidianas, todos los días de nuestras vidas.

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Referencias: Javier Morales C. y Olivio Jimenez J. (1998) La prosa modernista hispanoamericana: introducción crítica y antología. México. Alianza Editorial.

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