Primer Mito

Espinoza Pacheco, Henrry Alejandro LEYENDA DEL MANCAPOZO DISTRITO DE AMARILIS DEPARTAMENTO DE HUÁNUCO El nombre de Manc

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Espinoza Pacheco, Henrry Alejandro

LEYENDA DEL MANCAPOZO DISTRITO DE AMARILIS DEPARTAMENTO DE HUÁNUCO El nombre de Mancapozo, deriva de vocablos del runashimi que significan “manka” = olla y “puusu” =agua empozada”; por lo que traducido vendría a ser “Laguna en forma de olla”. Este pozo gigante esta localizado a 28 Kms. de la ciudad de Huanuco a 1 hora y 30 minutos de viaje en carro, y a una altitud de 4,000 m.s.m.n. (Región Quechua). El acceso a la laguna es por la vía Huánuco – Tingo Maria hasta el poblado de La Esperanza. (Km 5) Desde este lugar se toma el desvió hacia la derecha por una ruta afirmada, pasando por los pueblos de Malconga y Cancalla, Paucar hasta llegar a Shismay. Este recurso hídrico posee unas vistas atractivas y a su paso se puede observar interesantes paisajes como la flora arbustiva característica de estas zonas a la entrada, un caída de agua que asemeja una pequeña catarata y la campiña de los alrededores. La extensión aproximada de la laguna es de 3 hectáreas. Entre las actividades que se puede realizar están el paseo en bote, la pesca, la observación, la fotografía, etc. La época aconsejable de visita, es entre los meses de mayo a noviembre. Esa laguna tiene un atractivo que interesa sobre todo a los jóvenes, con espíritu aventurero, por lo que se está convirtiendo en un circuito de caminata y aventura. Según la leyenda huanuqueña: Cuentan los pobladores de Malconga y Shismay que en esta laguna de aguas oscuras, vive una enorme y horrible serpiente que cuida los inmensos tesoros que se guardan en el fondo de la laguna. A este animal monstruoso que muchos afirman haberlo visto, lo llaman Huaracuy. Según el Dr. Javier Pulgar Vidal en su obra “Notas para un Diccionario de Huanuqueñismos” (1967), nos dice que es un “Ser mitológico que aparece vivo dentro de las rocas y bajo el suelo. Aprovecha las grandes lluvias, durante la presentación de los huaycos y avenidas para salir de su medio habitual y baja cual si presidiera el huayco”. Su presencia se hace visible sobre todo en las estaciones de invierno, cuando luego de una lluvia, el sol irrumpe en sus tenebrosas aguas, las olas se agitan y de entre el remolino surge la figura del temido Huaracuy que con una fuerza extraordinaria salta veloz cual rayo, se eleva amenazante por las aires y rapidamente clava sus dientes sobre el río Huallaga, transformándose con una enorme arco iris. En una ocasión, las aguas de Mancapozo se embravecieron luego de una torrencial lluvia se agitaron, tan fuerte, que el remolino surgido desde su interior produjo gigantes olas que remeció desde sus bases y se desbordó. Las aguas, cual inmensas corrientes, con las cabezas encrespadas, dando enormes saltos de tumbo en tumbo y arrasando todo cuanto encontraba a su paso, como viento huracanado llegó hasta el río Huallaga. En aquel tiempo la gente aseguró haber visto al Huaracuy que iba como volando, sobre la cresa del huayco, conduciendo con su enorme cola las aguas que corrían tras él. Ese mismo huayco, arrasó uno de los flancos del Cerro San Cristóbal que hasta hoy ha dejado sus huellas a la que se conoce con el nombre de quebrada de Llicua. Desde aquella fecha se decía que el Huaracuy era hijo del jirca en una mujer soltera. El jirca se había burlado de ella, dándole por hijos, enormes serpientes haladas, los cuales fueron llevados por el padre a los lugares donde tenía sus tesoros para que los cuidaran.

Espinoza Pacheco, Henrry Alejandro

LA GARJANCHAY En un pequeño pueblo de la serranía del Perú, del departamento de Junín, vivían dos pequeños huérfanos que decidieron buscar a sus padres por un campo, alejado del pueblo. La caminata fue larga y cansados llegaron a una pequeña casa vieja, cuya dueña era una anciana, quien los acogió para pasar la noche. Esa misma noche, uno de los niños el más pequeño fue asesinado por la malvada anciana; esta era una malvada bruja,por la mañana la hermanita del niño, se despertó al percatarse que su hermanito no se encontraba con ella, fue a la cocina y se encontró con la anciana cocinando en una caldera grande. Ésta le ordena que vaya al río a traer agua en una canasta, la niña obedeció y fue a traer agua; pero era imposible recoger agua en la canasta. Ella regresa a decirle a la bruja que no puede traer agua; esta se enfadó mucho y dicidió hacerlo ella misma, sin antes advertir a la niña que por nada del mundo destape la caldera ni vea lo que contiene. Más tarde al ver que la anciana se demoraba, la niña destapó la caldera y se encuentra con la más triste desgracia; en la caldera estaba la cabeza de su pequeño hermanito y sin pensarlo dos veces huye cogiendo la cabeza de su hermano aprovechando que la bruja no se encontraba. La bruja al regresar , se llena de cólera y persigue a la niña, quien había tomado una gran distancia pero que se hacía cada vez más corta, en eso la niña se encuentra con un animal y este le entrega un peine y un jabón, aconsejándole que cada vez que la vieja estuviera cerca, le lanzara uno de los objetos. Dicho esto la niña continua con su huida, al verse casi atrapada por las manos de la anciana se ve obligada a lanzar el primero objeto que es un jabón, transformando el camino de la bruja en charcos de barro, que le hacían resbalar. Cuando otra vez se ve amenazada por la bruja, quien le amenazaba con arrancharle y pellizcarle entre otras cosas más, la niña lanza el peine, que hace que el camino de la vieja se vuelva espinoso retrasando su carrera. Cuando la niña logra llegar a una cierta parte, se encontró con un zorro que le dice: cuando llegues hasta la cima, encontrarás dos sogas una es garahuasca y la otra soga chiquillo, tú subirás por la segunda ya que es la más fuerte. La niña hizo caso a las indicaciones; luego, mientras subía por la soga correcta, llegó la bruja y también comenzó a subir por la otra soga; la bruja al mirar hacia arriba, ve a un ratón que roía su soga, la bruja le dice al ratón, que no coma su soga; pero este le responde que solo come el maíz dejado por su mamá; cuando la bruja ya estuvo cerca de atrapar a la niña, se rompió su soga y cae al vacío. Al caerse, su cuerpo se revento y se hizo añicos, como un saco de semillas que cae por todas partes, el fruto de estas semillas comenzó a crecer una planta llamada “garganchay” (Zarzamora). La planta tiene muchos espinos, que jalan y punzan.