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• Melany Macedo

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En particular, el Au ha sido reconocido como un importante subproducto (y, en algunos casos, como producto) de la minería de pórfidos cupríferos, El incentivo económico para obtener un mejor conocimiento sobre el papel del oro en pórfidos cupríferos es, por lo tanto, considerable. La producción de oro como subproducto de la minería de pórfidos cupríferos Los pórfidos cupríferos constituyen un grupo muy variado de depósitos minerales y con una amplia diversidad de características. La presente contribución comienza con una evaluación de los pórfidos cupríferos ricos en oro, y en importancia pórfidos de Cu y Au tipo maricunga, continuando con una síntesis de sus características geológicas. Pórfidos adyacentes pueden tener contenidos de oro muy diferentes, pero hay una tendencia a estar concentrados en cinturones geográficamente restringidos. (Ej: Cinturón de Cajamarca, Cinturón de Maricunga, etc.). En Chile existen también pórfidos de Cu-Au en la zona de Maricunga (Alta Cordillera de Copiapó), los que son de edad Miocena (Ej. Cerro Casale). Algunos de ellos como Lobo y Marte son ricos en Au (1.43 y 1.6 g/t Au) y pobres en Cu (0.05 y 0.12% Cu) y Mo (46 y ~10 ppm) y han sido denominados pórfidos auríferos (Vila y Sillitoe, 1991) En el presente trabajo se analiza, exclusivamente, las características de oro dentro del sistema porfídico tipo maricunga

Si bien es el cobre el que se lleva los aplausos en la actividad minera en Chile, en los últimos años se ha iniciado una serie de proyectos de oro, que buscan aprovechar esta riqueza aún poco explotada en el país, los que se han concentrado en la región de Atacama. Es allí donde se ubica el llamado “cinturón de oro” de Maricunga, cercano al salar de mismo nombre, a unos 100 kilómetros al este de Copiapó, y en el que existen proyectos de inversión anunciados por US$12.400 millones. Las iniciativas son lideradas por firmas del tamaño de Kinross y Barrick, dos de los principales productores mundiales. Se trata de una zona que, según expertos, posee una riqueza única y que por sí sola podría más que duplicar la producción de oro en Chile, la que pasará, a fines de la década, desde las actuales 40 toneladas por año a casi 160 toneladas. Tanto es así, que según la junior canadiense Andina Minerals, que invertirá US$800 millones en el subsuelo de Maricunga sólo en el cordón Maricunga existen 70 mil millones de onzas (dos millones de toneladas) de oro en reservas sin explotar. A modo de comparación, de acuerdo con una medición del US Geological Service de 2009, las reservas totales de Chile para este metal alcanzaban entonces las mismas 2 millones de toneladas métricas. Esto, sin conocerse aún los resultados finales de las campañas exploratorias de Caspiche y Cerro Casale, los proyectos más grandes de la zona. Es decir, sólo Maricunga permitirá que se dupliquen los recursos cuantificados en Chile. Actualmente, Chile es un actor menor, con casi el 2% de la producción global. “En Maricunga se encuentran muchas operaciones y proyectos como La Coipa, Maricunga (Refugio), Lobo-Marte, El Peñón, Cerro Casale y otros. Es fundamentalmente una zona con mineralización de plata y, además, con oro e incluso cobre. “En relación a la capacidad de producción de oro en Chile, es destacable que los proyectos de oro (a futuro) llegarían a aportar unas 108 toneladas por año de oro y 1.215 toneladas por año de plata, cuando estén todas en operación hacia fines de esta década.

Son yacimientos formados por circulación de fluidos hidrotermales ligados a la última etapa de intrusión de stocks subvolcánicos de composición tonalítica, granodiorítica, monzogranítica o andesitica de naturaleza calco-alcalina.

3.1 Ubicación habitual   

Los depósitos de tipo pórfido se encuentran en áreas orogénicas tales como: Los Andes de Chile y Perú ○ la Cordillera de Canadá (British Columbia) Las regiones del Pacífico suroeste (e.g. Filipinas, Indonesia y Papua Nueva Guinea)

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Formación en arcos magmáticos (Batolito de la Costa, Batolito de Pomahuaca, Batolito de Abancay). Mineralización de cobre localizada en rocas ígneas intrusivas, porfiríticas intermedias a félsicas. En chimeneas brechosas, zonas con intenso fallamiento y fracturamiento. - Baja ley, gran tonelaje, forma irregular.

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3.2 Características generales de los pórfidos 

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En general, los pórfidos ricos en Cu u Au se asocian a intrusivos derivados por cristalización fraccionada de magmas máficos originados en fusión parcial del manto. En los Pórfidos el Au se introdujo por fluidos de alta salinidad y temperatura. Estancamiento del fluido magmático puede ser un requisito para el desarrollo de pórfidos ricos en Au. Rocas de caja impermeables ayudan al estancamiento pues minimizan disipación lateral y vertical de los fluidos Formación de diatremas evento típicamente tardío en la evolución del cuerpo.

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Formación de depósitos ricos en Au requiere que el Cu y Au particionen eficientemente al fluido magmático → fluido debe ser liberado antes que los elementos calcófilos sean secuestrados por el fundido. Este proceso se ve favorecido por: Alto contenido de agua Estado de alta oxidación del magma. Magma empobrecido en sulfuros.

3.3 Exploración      

Ya que estos modelos genéticos son muy estudiados y por ende muy conocidos se utilizan con mayor frecuencia en la exploración. Exploración de pórfidos ricos en oro en zonas de arco volcanoplutónicos, típicamente en cinturones. Búsqueda de rocas alteradas o zonaciones de alteración. Enriquecimiento en magnetita es un signo de que el sistema es rico en Au. Telescoping. Geoquímica y geofísica.

3.4 Marco tectónico • • 

Márgenes convergentes de placas y arcos magmáticos ligados a zonas de subducción. Asociados a estructuras regionales que controlan el emplazamiento de los cuerpos porfiríticos. Generalmente en marcos tectónicos compresivos. Se verifica que estos depósitos no están estrictamente restringidos a una época geológica o determinado ambiente geotectónico (arcos de islas versus márgenes continentales), como tampoco presentan una asociación exclusiva con algún tipo especial de intrusivo ni roca de caja. En forma similar, aunque ciertas asociaciones de alteración hidrotermal son características, quedan en evidencia algunas excepciones.

3.5 Origen • • •

Están relacionados a la circulación de fluidos hidrotermales en la última etapa de intrusión de cuerpos de naturaleza calco-alcalina. Niveles de emplazamiento de aproximadamente 2 km. El nivel donde se emplazan hace que las intrusiones estén saturadas en agua y se produzca una separación de fases del fluido con respecto al magma, y que los concentrados de metales se presenten en vapores o soluciones cloruradas luego son transportadas y cuando cambian las condiciones de P y T, precipitan y forman minerales con contenido de Cu y Au.

3.6 Características petrológicas • •

Rocas ígneas de texturas porfiríticas de composición tonalítica, granodiorítica , monzogranítica y andesitico Asociados a magmatismo calco-alcalino a alcalino

3.7 Transporte del oro •

Baja solubilidad en agua.

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Bajo condiciones ácidas el oro se transporta en el complejo [AuCl2]-.

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Bajo las condiciones alcalinas los complejos de oros [Au(S2O3)]- y [Au(CN)2]son móviles.

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En los Pórfidos el Au se introdujo por fluidos de alta salinidad y temperatura

Norte de Chile: Provincia Metalogénica (Au, Ag, Cu)  MIOCENO 270 y 280 S => Z. de Transición Litologia:  

Cadena de Volcanes de composición andesítica a dacítica (N-NE) => Arco volcanoplutonico

de margen continental => Franja Maricunga

Maricunga se encuentra a unos 700 km al norte de Santiago, la capital de Chile, ya unos 140 km por carretera al noreste de la ciudad minera y agrícola de Copiapó. Maricunga se encuentra a unos 20 km al sur de la mina de Kinross La Coipa Au-Ag, a unos 60 km al norte de la Mina de Oro de Kinross Maricunga (anteriormente llamada Refugio) ya 40 km al norte del Proyecto de Oro Volcánico de Andina. El Salar de Maricunga se encuentra a 9 km al noreste de Maricunga y el Parque Nacional Nevado de Tres Cruces se encuentra aproximadamente a 1,5 km de los límites sur y este de las concesiones Maricunga. Las concesiones de Maricunga están aproximadamente centradas en 27 ° 01 'de latitud sur y 69 ° 13' de longitud oeste. La propiedad se accede desde Copiapó por una combinación de 10 autopistas pavimentadas, 2 carriles carretera asfaltada a aproximadamente la mina de La Coipa, y luego por caminos de tierra de una sola vía de mantenimiento variable y sin mantenimiento.

Figura 1: Ubicación del Cinturón de Maricunga

Las reservas geológicas totales son 420 toneladas métricas de oro y alrededor de 14.000 toneladas métricas de plata divididas entre depósitos tipo pórfido alojados por intrusión y depósitos epitermales alojados en volcán de alto sulfidación, tipo sulfato ácido. La mineralización de metales preciosos está relacionada con un cinturón de rocas volcánicas del Mioceno, la mayoría de las cuales constituyen una serie de grandes estratovolcanes compuestos de composición calcoalcalina. Las rocas volcánicas se superponen de manera inconformada y en gran medida ocultan un sótano ígneo y sedimentario de edad paleozoica y mesozoica. Las rocas volcánicas y la alteración y la mineralización contenidas se subdividen sobre la base de K-Ar que data en subciclos parcialmente ocultos, Mioceno temprano occidental (24-20 Ma) y Mioceno medio oriental (14-13 Ma). Se produjo un fallo inverso de ángulo alto entre estas dos épocas en respuesta a la compresión regional inducida por el aplanamiento de la zona de subducción. Una alineación noroeste también es prominente en el cinturón como se refleja en la huelga de varios componentes de las zonas de alteración y mineralización. Se han descubierto nueve zonas de mineralización de tipo pórfido en el cinturón de Maricunga, donde están presentes tanto en subcortes occidentales como orientales. La mineralización del tipo pórfido se generó por debajo de los estratovolcones andesíticos (dácticos), que se diseccionaron más extensamente en el sub-cinturón occidental que en el este. Las rocas volcánicas fueron invadidas por poblaciones de pórfidos aislados y compuestos, que son dioríticas en el subcabezo oriental, pero incluyen fases dioríticas de cuarzo en el subbelt occidental. La microdiorita débilmente porfídica y las brechas de intrusión asociadas son componentes prominentes del stock. Las pequeñas brechas hidrotermales de mineralización inter-tardía están comúnmente presentes. Se cree que la mineralización de oro y cobre se ha introducido con la alteración del silicato de K, que está bien conservada sólo en las perspectivas de Amalia, Refugio y Casale Hill (Aldebaran). La alteración del silicato de K se sobreimprime y se borra comúnmente por conjuntos sericita-arcilla-clorita de tipo argílico intermedio. Gran parte del oro está presente en las existencias de cuarzo. Los óxidos de hierro, tanto de magnetita temprana como de hematita tardía, constituyen de 5 a 10 por ciento en volumen de zonas mineralizadas.

El cinturón de Maricunga en el norte de Chile es una de las provincias más importantes detectadas hasta la fecha y actualmente posee una reserva geológica agregada de 420 toneladas métricas (13,5 millones de oz) de oro y unas 14.000 toneladas métricas de plata. El nombre "Cinturón de Maricunga" ha sido empleado informalmente por exploradores en el área durante los últimos cinco años o así para denotar una unidad metalogénica geográficamente restringida. El cinturón de Maricunga se formaliza aquí como una zona de extensión norte-sur, de aproximadamente 200 X 50 km de extensión, entre las latitudes 26°00' y 28°00'S y entre 4.000 y 6.000 m sobre el nivel del mar. Morfológicamente, el cinturón de Maricunga cubre una cadena de tendencias al norte-noreste de al menos seis volcanes compuestos del Mioceno a lo largo de la Cordillera Occidental, los dos más grandes, Copiapó y Jotabeche. La cadena volcánica y su sótano están limitados por un sistema de fallas inversas, lo que provocó el desarrollo de una serie de grabens. Los grabens controlan una serie de cuencas cerradas, como el Salar de Maricunga y la Laguna del Negro Francisco, que son sitios de lagos salados (salares) en los que se siguen precipitando depósitos de evaporitos.

Figura 2: Localización del Cinturón de Maricunga con respecto al volcanismo cenozoico tardío en el norte de Chile

El Salar de Maricunga presta su nombre al cinturón metalogénico en discusión. El centro volcánico más grande de la cadena Miocena es el macizo del Volcán Copiapó (6.052 m), que comprende un área de 25 X 15 km. El cinturón de Maricunga alberga numerosas zonas de alteración marcadas por anomalías de color prominentes, de las cuales al menos 14 están asociadas con una apreciable mineralización de metales preciosos. La mineralización de oro y plata en la parte noroccidental del cinturón (Esperanza, La Coipa), mientras que la más al sur, como se ha explicado por Marte, Lobo y Aldebarán, depósitos de pórfido ricos en oro (> 0,3 ppm de Au) asociadas con los volcanes andesíticos erosionados. Los depósitos de pórfido ricos en oro eran desconocidos antes en la Cordillera Andina de Chile.

Debido al descubrimiento del yacimiento de alto grado Indio oro-plata-cobre (enargita-oro) de 1976 a 1978, se ha llevado a cabo una exploración intensiva de depósitos epitermales de metales preciosos durante los últimos 10 años en. La Cordillera Andina de Chile central por la cual la producción del metal precioso en Chile pasará de 40 toneladas anuales a unas 160 toneladas. La exploración geológica preliminar de la Cordillera Andina del norte de Chile se inició a fines de 1980 y 1981 por Minera Anglo American Chile y Minerales Sierra Morena (filial Gold Fields 'Mining Corporation desde 1981). En la exploración se utilizó aviones de ala fija y rotativa para buscar anomalías de color y afloramientos silicificados asociados de los cuales aproximadamente 200 fueron identificados por BT Exploraciones. La exploración en ese momento se orientó a definir áreas prospectivas para los depósitos de oro-plata, el cinturón de Maricunga se destacó como de alto potencial.

Figura 3: “cinturón de oro” de Maricunga, cercano al salar de mismo nombre, a unos

100 kilómetros al este de Copiapó, La exploración continuó a finales de 1982 y 1983 e incluyó la exploración subterránea en Esperanza y Marte y la perforación en marea baja (80 m) en Marte y Lobo. El esfuerzo de exploración se centró en el prospecto plata-oro en Esperanza durante 1984-1985, con la perforación con diamante y el desarrollo subterráneo que condujo a la definición En 1986 del cuerpo de plata de Chimberos. Chimberos es una brecha hidrotérmica altamente siliciada estructuralmente localizada que contiene 4,3 millones de toneladas métricas, con un promedio de 340 g / ton de Ag en mineral oxidado (haluro de plata). En este momento, se había desarrollado una comprensión razonable de los sistemas auríferos en el cinturón de Maricunga, con mucha información valiosa derivada de la perspectiva de Aldebaran, donde un perfil vertical de 1.000 m de subvolcánico a superficial se reconocen los niveles epitermales. Ahora estaba claro que la mineralización de oro más importante en la parte sur de la cinta no es de tipo veta epitermal sino de tipo pórfido de bajo grado. Con este nuevo enfoque de exploración, en Marte se llevó a cabo una circulación inversa más profunda y perforación de diamantes, durante 1986-1987, lo que llevó a la delineación de 46 millones de toneladas métricas. El yacimiento entró en producción a fines de 1989 como una operación de lixiviación en pilas a cielo abierto. Alentados por estos resultados, en 19881989 se completó una campaña de perforación de diamantes en la perspectiva de Lobo. Las reservas geológicas se calculan en 80 millones de toneladas métricas con un promedio de 1,6 g / tonelada métrica Au.

Figura 4: Mina marte La perforación inicial de Anglo American en el prospecto Refugio fue continuada por la Bema Gold Corporation, que anunció recientemente 200 millones de toneladas métricas de 0,96 g / tonelada métrica Au en el sector Verde. La empresa conjunta Anglo AmericanCominco no exploró las perspectivas de oro La Coipa oro y plata de La Pepa.

La Coipa, cerca del sitio de una mina de plata de vena abandonada hace mucho tiempo, fue descubierta en 1981 por Amax de Chile y fue explorada posteriormente por Exploraciones y Minerales Sierra Morena, 1988. El depósito, que comprende un total de 90 millones de toneladas métricas con un promedio de 1,2 g / tonelada métrica Au y 133 g / tonelada métrica Ag, entró en funcionamiento en 1989 con Cia. Minera Mantos de Oro (Placer Dome-TVX Gold) como operadores.

Figura 5: Minería la coipa La Pepa fue descubierta en 1983 y explorada por Exploraciones y Minerales de Sierra Morena, que probó 440.000 toneladas métricas con un promedio de 23,7g/tonelada métrica de Au más 3,2 millones de toneladas métricas por tonelada métrica de Au. La zona de alto grado ha sido explotada en pequeña escala, actualmente por Minera Horus Ltda. (Filial de Bridger Mining Co.), que también se dedica a una mayor exploración.

Figura 6: mapa del norte central de Chile mostrando depósitos de oro/plata y cobre

Los últimos Andes Cenozoicos del norte y centro de Chile comprenden dos segmentos fundamentales: la zona volcánica central volcánicamente activa y, al sur de aproximadamente 28 ° S, una zona no volcánica. Se produce una disminución gradual de la inmersión de la placa de Nazca subducida, de 30° a 10°, cuando se aproxima la latitud 28°S y el ángulo extremadamente bajo se cree que causa la ausencia de volcanismo. Sobre la base de las signaturas de elementos traza de rocas volcánicas, Kay et al. (1988, en prensa) propuso que el proceso de aplanamiento de la losa comenzó alrededor de 18 Ma y aceleró entre 11 y 7 Ma. El cinturón de metal precioso de Maricunga se localiza en la zona suroccidental de la zona volcánica central y se generó inmediatamente antes y después del inicio del aplanamiento. Las secuencias volcánicas neogénicas se acumulan sobre las rocas ígneas y sedimentarias de las edades paleozoicas y mesozoicas, y en gran parte plegaron y fallaron. Sin embargo, las fallas inversas de mediados a finales del Cretácico y mediados del Mioceno unieron franjas del norte-noreste de las rocas preandina (Paleozoico tardío-Triásico temprano) y Triásico tardío hasta Cretácico, especialmente a lo largo de la frontera occidental de El cinturón de Maricunga. Las fallas inversas han documentado desplazamientos de hasta 700 m. Aunque el sistema de fallas inversas y la orientación norte-noreste de las unidades de roca en el cinturón de Maricunga son paralelos al grano estructural general de la Cordillera Andina en el norte de Chile, un subordinado pero distintivo Noroeste está presente en todas las zonas de alteración donde se refleja por las orientaciones de fallas, vetas, existencias, diques de brecha y / o anomalías geoquímicas del suelo. Las rocas más antiguas que se encuentran en el cinturón de Maricunga son secuencias sedimentarias clásicas del Devónico al Carbonífero, secuencia sedimentaria de granitoides del último Carbonífero a Pérmico, que constituyen el núcleo de la Cordillera Andina en esta latitud. Los granitoides paleozoicos tardíos más tardíos y las secuencias volcanicas riolíticas comagmáticas son productos de fusión crustal en un entorno extensional preandino. Tales riolitas constituyen las rocas de la pared de Amalia, son cortadas en profundidad por las vetas auríferas en La Pepa, y crecen al oeste de Refugio. Las rocas mesozoicas más expuestas están representadas por gruesas secuencias continentales del Triásico tardío que comprenden lava andesítica, arenisca, conglomerado y pizarra negra, que en parte actúan como rocas hospedantes para los depósitos de La Coipa y Esperanza. Las rocas volcánicas y sedimentarias estratificadas del Jurásico y del Cretácico superan de manera inconformada la secuencia del Triásico Tardío. El Cenozoico en la Cordillera Andina del norte de Chile estuvo dominado por el volcanismo temprano del Mioceno al Pleistoceno, que se caracterizó por dos grupos de rocas temporalmente y espacialmente superpuestos: los estratovolcanes compuestos de composición andesítica a dácitas, asociados localmente con poblaciones y Domos; Y láminas de ignimbrita rioliticas a dácitas . Las rocas volcánicas del Mioceno temprano a mediano, de composición andésitica a dácitica, especialmente brechas, tobas y lavas, están más extendidas en el cinturón de Maricunga, aunque se

produjeron erupciones locales de ignimbritas félsicas durante el colapso de la caldera de estratovolcanes del Mioceno. Las rocas sedimentarias volcánicas del último oligocieno a la temprana edad del Mioceno son facies distal de las secuencias volcánicas dacíticas incluidas en la unidad volcánica de Miococeno temprana. Al sureste del cinturón de Maricunga, donde se apoyan en el sector de la colina de Casale de la perspectiva Aldebaran. Los volcanes, complejos de cúpulas, conos y cráteres de explosión del final del Mioceno al Pleistoceno, con productos que van desde la andesita basáltica hasta la riólita, están expuestos al este del cinturón de Maricunga y constituyen los picos más altos de esta parte de la Cordillera Andina.

Figura 7: Geología regional y depósitos del cinturón de Maricunga

Los yacimientos hidrotermales de Chile y Argentina entre las latitudes 26° y 28° S están dominados por hierro, cobre, oro y plata y están relacionados con las invasiones epizonales, incluidas las subvolcánicas y las volcánicas contemporáneas generadas durante la subducción hacia el este. Las intrusiones, volcanicas y depósitos de mineral son productos de una serie de épocas magmato-

metalogénicas discretas durante el período Jurásico Temprano hasta Mioceno Temprano, cada una de las cuales dio origen a una subprovincia alargada, norte-noreste-tendencial.

Figura 8. Imagen de escáner multispectral de color falso de Landsat del cinturón de Maricunga, norte de Chile, suministrado por la NASA. La imagen se introduce en el esquema geológico, siesta en la figura 3. Las rocas volcánicas, las poblaciones de alto nivel y la mineralización de cobre, oro y plata definen una subproducción excepcionalmente amplia (aproximadamente 250 km) al este del arco magmático terciario temprano. Esta ruptura hacia el este del magmatismo es atribuible al aplanamiento de la zona de subducción descrito anteriormente. Sin embargo, en el Plio-Pleistoceno, el lugar de la actividad volcánica se contrajo de nuevo para producir un arco mucho más estrecho superpuesto sobre una parte de la subprovincia del Mioceno y situado a lo largo de la frontera Chile-Argentina.El cinturón de Maricunga constituye la parte más occidental de esta extensa subprovincia magmática-metalogénica miocena, donde el volumen de productos volcánicos es mayor.

Figura. 9. Mapa esquemático del cinturón de Maricunga, norte de Chile, para ilustrar características geológicas seleccionadas observables en la Figura 8. Extraído de Davidson y Mpodozis (1991) con edades de alteración de Sillitoe ß et al. (1991). LNF = Laguna del Negro Franeiso, SM = Salar de Maricunga. A mediados del Mioceno (13,9-12,9 Ma). Davidson y Mpodozis (1991) confirmaron cadenas volcánicas comparables y parcialmente solapadas en todo el cinturón de Maricunga. Un tercer episodio del Mioceno tardío (8,8 - 6,1 Ma) generó el Grupo Volcánico, a unos 20 km al este de la parte norte de la Maricunga cinturón. Nuevos datos geocronológicos para nueve depósitos de metales preciosos y nuevas perspectivas en el cinturón de Maricunga (Sillitoe et al., 1991). Características de los relieves volcánicos asociados, permitiendo la definición de dos épocas metalogénicas representadas como dos subcinturas superpuestas a lo largo del cinturón Maricunga; coinciden bien con las dos cadenas volcánicas de González-Ferrón y

col. (1985). La subcabeza metalogénica occidental, que en su mayoría data de 24 a 20 Ma pero que incluye una edad de 17,3 Ma en La Coipa (Sillitoe et al., 1991).

Figura. 10. Esbozo geológico del sistema de pórfidos de Refugio y alrededores, cinturón de Maricunga, norte de Chile. Las limitaciones de escala impiden la delimitación de existencias de pórfido de diorita de cuarzo y apófisis en las áreas de stock de cuarzo.

Depósitos de oro de alta sulfuración, tipo sulfato ácido asociado a los complejos en Esperanza y La Coipa, mientras que en su parte sur hay un predominio de mineralización porfídica rica en oro en poblaciones subvolcánicas, con o sin venas epitermales de alta sulfuración, como en La Pepa, Refugio y Santa Cecilia. La mineralización del tipo pórfido en este subbelt occidental se asocia con centros volcánicos degradados y se ha visto afectada por la falla inversa a mediados del Mioceno (aproximadamente 18 Ma) para revelar rocas relativamente profundas alteradas con silicato de K en algunos bloques levantados. El cinturón metalogénico oriental está fechado entre los 14 y 13 Ma y es reconocido a lo largo del lado oriental del macizo Volcán Copiapo por 25 km, donde abarca depósitos de pórfido ricos en oro bien documentados en Marte y Lobo y el geológicamente similar Valy y Escondido perspectivas. El sub-cinturón puede extenderse 50 km más hacia el sur para incluir el depósito de pórfido rico en oro de Aldebarán y las

vetas epitermales de alta sulfuración. La mineralización de tipo pórfido rica en oro está asociada con estrato-volcanes compuestos que son relativamente poco erosionados, como Volefin Copiapo, Jotabeche y Cadillal.

10.1. Franja Metalogénica del Neógeno Esta es la Franja Metalogénica más oriental de Chile y se extiende por la Alta Cordillera en el sector adyacente al límite con Bolivia y Argentina, extendiéndose hacia el oriente en el territorio de dichos países. Esta Franja incluye otro grupo de pórfidos cupríferos de gran importancia económica para el país, estos son: Los Pelambres (y su vecino El Pachón en Argentina; Sillitoe, 1979b; Atkinson, et al., 1996), Río Blanco - Los Bronces (Waarnars et al., 1985; Serrano et al., 1996) y El Teniente (Howell y Molloy, 1960; Clark et al., 1983; Camus, 1975; Cuadra, 1986). Estos yacimientos son del Mioceno Superior y Plioceno Inferior de acuerdo a los datos geocronológicos existentes. En la Alta Cordillera entre los 26º y 33º S, se incluye a las previamente conocidas Fajas de Maricunga y El Indio con depósitos epitermales de metales preciosos mayormente de tipo sulfato ácido como Esperanza (Vila, 1991; Moscoso et al. 1993), La Coipa (Oviedo, et al., 1991), La Pepa, Pascua (Nevada), El Indio, El Tambo en Chile y Veladero en Argentina, además de numerosos prospectos como Sancarrón, Pantanillos, Coipa, Coipita (Maksaev et al., 1984; Siddeley y Araneda, 1989) y Pimentón. Fig.11. Franja Metalogénica del Neógeno. Incorpora las previas Fajas del Indio y Maricunga.

Además están en esta franja los Pórfidos de Au de Refugio, Marte, Lobo (Vila y Sillitoe, 1991), Cerro Casale, La Pepa y Santa Cecilia. En detalle existen depósitos del Mioceno Inferior (Esperanza, La Coipa, La Pepa, Refugio, Santa Cecilia) y del Mioceno Superior (Marte, Lobo, Aldebarán, Pascua, Veladero, Sancarrón, El Indio, El Tambo, Pimentón) (Sillitoe, et al., 1991; McKee et al., 1994). Los depósitos epitermales de la franja de El Indio tienen una edad comparable a la de pórfidos cupríferos del Mioceno Superior de la zona central de Chile y la misma posición geográfica en la Alta Cordillera traslapándose con los pórfidos cupríferos (Ej. Prospecto Pimentón en la V Región). Consecuentemente, algunos de los sistemas epitermales de tipo Fig. 7. Franja Metalogénica del Neógeno. Incorpora las previas Fajas del Indio y Maricunga. 40 sulfato-ácido representan niveles superiores de sistemas de tipo pórfido a profundidad. En el extremo norte esto es obvio por la existencia de pórfidos auríferos con sobreimposición de alteración de tipo ácido-sulfato (Ej. Marte, Sillitoe, 1994) y por la existencia de alteración/ mineralización de tipo ácidosulfato en el prospecto Aldebarán sobre el pórfido de Cu-Au de Cerro Casale (Vila y Sillitoe, 1991).

8.1 Distribución En el cinturón de Maricunga, se han reconocido hasta la fecha nueve ejemplos de mineralización bien desarrollada de tipo pórfido que lleva oro y cantidades variables de cobre: Marte, Lobo, Valy, Escondido, Aldebaran (sector de Casale Hill), La Pepa, Refugio, Amalia y Santa Cecilia. En las zonas de alteración de Esperanza, La Coipa y Pantanillos se observó un trabajo de cuarzo débilmente desarrollado similar al estilo de la mineralización de tipo pórfido y anómalo en oro, pero no está lo suficientemente desarrollado como para ser considerado aquí. Como se ha descrito anteriormente, la mineralización del tipo de pórfido está presente tanto en las subcintas metalogénicas del Mioceno occidental como en él Mioceno medio.

8.2 Rocas de la pared volcánica Las poblaciones de pórfido en el cinturón de Maricunga transectan principalmente rocas volcánicas a niveles observados. Como se ha establecido anteriormente, las rocas volcánicas son ampliamente covalentes con la alteración-mineralización asociada espacialmente, ya sea de edad temprana o media del Mioceno. Las rocas volcánicas del Mioceno Temprano, que albergan mineralización porfítica en La Pepa, Refugio y Santa Cecilia en el subbelt occidental, alcanzan espesores de 500 m y comprenden principalmente tobas y brechas dáciticas de color pálido a andesítico, incluyendo lahares, Intercalaciones de ignimbrita félsica mal soldada (como en Santa Cecilia) y sedimentos lacustres. Estas secuencias se desplazaron apreciablemente por la falla inversa a mitad de Mioceno y

comúnmente deben su conservación a depresiones controladas tectonicamente (por ejemplo, Refugio,) dentro de las cuales están subyacentes de manera inconforme por el sótano paleozoico-mesozoico. Las secuencias volcánicas del Mioceno medio en el subbelt oriental son más gruesas, hasta 1.000m, y contienen proporciones importantes de lavas andesíticas a dáciticas de color oscuro y menos material piroclástico. Los volcanes del Mioceno Medio son comúnmente partes de estratovolcanes reconocibles, como en Marte, Lobo y Aldebarán. Las rocas volcánicas del Mioceno Medio cubrieron parcialmente y ayudaron a proteger las zonas de alteración-mineralización del Mioceno temprano.

8.3 Complejos intrusivos Los complejos intrusivos porfídicos subvolcánicos son reconocidos localmente en el cinturón de Maricunga y parecen estar localizados principalmente en los núcleos de volcanes compuestos erosionados, exclusivamente en asociación con áreas de alteración hidrotérmica. Las intrusiones en el subbelt oriental son todas las poblaciones de pórfido de color oscuro y diques de composición predominantemente diorítica. Las texturas de las rocas menos alteradas son porfíricas de grano fino a mediano, localmente con características de flujo alrededor de grandes fenocristales seriados de plagioclasa zonal. La cartografía de las superficies y el registro central de los sistemas de Lobo y Marte revelan una evolución intrusiva sorprendentemente similar, con fases de mineralización previas y tardías distinguibles. Las secuencias comienzan con pórfido de diorita de grano grueso seguido por al menos un pórfido de grano fino de composición similar, y finalmente por microdiorita de grano fino y débilmente porfídica que muestra cavidades miarolíticas. Al menos tres fases microdioritales que atraviesan el intervalo de mineralización se reconocen en el depósito de Lobo. Las poblaciones de Santa Cecilia, en el subbelt occidental, parecen estar compuestas de pórfido de diorita y microdioritas similares a los del subbelt oriental. En Amalia y La Pepa, sin embargo, los pórfidos son dioríticos de cuarzo. Los pórfidos de diorita de cuarzo son comúnmente de color verde oscuro y, debido a sus matrices de grano fino, podrían denominarse pórfidos de dacita. Las poblaciones de fenocristales están dominadas por oligoclasa-andesina acompañadas sólo por márgenes escasos (3-4% en volumen), que comprenden biotita, hornblenda, Piroxeno.

8.4 Alteración hidrotermal y mineralización La mineralización de oro del tipo pórfido en el cinturón Maricunga acompaña dos tipos amplios de alteración: el silicato de K y el argílico intermedio, o mezclas entre ellos. Otros tipos de alteraciones reconocidos más allá de las zonas principales de oro son propilíticos marginales, sericíticos espacialmente restringidos (phyllic) y argílicos avanzados de bajo nivel. K se desarrolla mejor en pórfidos de diorita de cuarzo de Amalia, Refugio y Casale Hill, donde la biotita como diseminaciones, vetas y pseudomorfos máficos, y el feldespato alcalino en las vetas y como inundación matriz, se desarrollan de forma generalizada. El

feldespato alcalino es albita en Casale Hill. El yeso después de la anhidrita también se produce a niveles más profundos (aproximadamente 300 m) en Casale Hill, donde escapó a la disolución del supergén. La alteración argílica intermedia es el término empleado para describir los asentamientos de cuarzo-clorito-sericita-arcilla que acompañan a la mayoría de las existencias de oro en otras partes del cinturón de Maricunga; se estudian mejor en pórfidos de diorita en Marte y Lobo. La arcilla ha sido sometida a un análisis limitado de difracción de rayos X y, por tanto, es poco conocida. Sin embargo, gran parte de ella en roca oxidada se sospecha que es caolinita de origen supergénico. Los fenocristales de plagioclasa se sometieron a conversión en arcilla, sericita y clorita menor, marcos a clorita y sericita y arcilla subordinadas, y silicatos de masa molida a mezclas de arcilla-sericita-clorita. El yeso es omnipresente, especialmente en Marte, como vetas transversales e impregnaciones y se cree que resulta en parte de la hidratación de la anhidrita. Tanto la silicita K como la alteración argílica intermedia transportan granos diseminados de sulfuros hipogénicos y óxidos de hierro y son transeccionados por las existencias de vetas de cuarzo que también contienen los mismos sulfuros y óxidos de hierro. Los óxidos de hierro comprenden la magnetita y la hematita. Los sulfuros están dominados completamente por la pirita, pero también incluyen chalcopirita menor, trazas de bornita y molibdenita, Alteración argílica intermedia, trazas de esfalerita, y en Marte, enargita y tennantita también. En Aldebaran y Refugio, se introdujeron granos diseminados y vetas de magnetita como parte del ensamblaje de silicato de K, pero gran parte del mismo fue sometido a martirización parcial durante la sobreimpresión por las existencias de cuarzo especulares que aparentemente mantenían la estabilidad del silicato de K. En la alteración argílica intermedia, predominan la magnetita y la especularita predomina y sólo queda magnetita en menor cantidad. Los óxidos de hierro varían en volumen entre 5 y 10 por ciento en volumen y los sulfuros entre 1 y 5 por ciento. Las zonas de alteración del silicato de K tienden a ser más bajas en el contenido total de sulfuro (1-3% en volumen) y contienen más cobre (pirita / calcopirita = 3; 0.1- 0.3% Cu) que las zonas con asentamientos argílicos intermedios. Por ejemplo, el contenido de cobre sólo promedio 0.12 por ciento en Lobo y 0.05 por ciento en Marte. Poco se sabe de la residencia mineralógica de oro en la mineralización de tipo pórfido Maricunga, aunque se han observado granos de oro nativos de 5 a 50 # m en dimensiones máximas expuestas en cuarzo y como inclusiones en pirita y magnetita. Sin embargo, la estrecha correlación entre los grados de oro y la intensidad de stockwork sugiere que la mayor parte del oro está presente en las vetas de cuarzo. Los contenidos promedio de oro de los viveros acompañados de alteraciones dominadas por silicato de K en Refugio y Casale Hill son aproximadamente 1.0 y 0.6 ppm, respectivamente, pero alcanzan 1.6 y 1.43 ppm, respectivamente, en las zonas argílicas intermedias de Lobo y Marte.

Las existencias están compuestas por varias generaciones de vetas de cuarzo multidireccionales que varían en anchura de 1 mm a 3 cm. Las vetas están compuestas de variedades de cuarzo translúcidas, blancas, grises y negras que, sobre todo en Marte, se entrelazan dentro de vetas individuales. Las existencias de cuarzo en Marte, Lobo, Valy y Refugio son cortadas por una o más generaciones posteriores de vetas calcedonia blancas y opacas, que transportan pirita pero no óxidos de hierro. Estas vetas de calcedonia en Marte y Valy son las más abundantes inmediatamente debajo de las capas argílicas avanzadas. Todas las existencias llevan una preponderancia de vetas de inclinación pronunciada, orientadas hacia el noroeste, que se producen comúnmente como haces estrechamente espaciados rastreables durante varios metros a lo largo de la huelga. La alineación noroeste de las vetas es más marcada en Marte, Valy y Escondido, donde las existencias siguen la huelga de 300 a 400 m, pero varían en anchura desde sólo 30 m en Valy hasta 150 m en Marte. Por el contrario, en Lobo un cuerpo escarpado y anular de trabajo de stock multidireccional, dominado por vetas estrechas en el noroeste y el noreste, lleva la mineralización del oro y rodea a un núcleo de bajo grado ( 200 ppb Au. La anomalía con los valores de oro más altos (> 400 ppb) y mayor extensión del área (800 X 450 m) rodea Cerro Puntiagudo y posteriormente se demostró que coincidir con el depósito mineral (Fig. 4). Partes de la veta también están cubierta por suelos que produjeron una moderada anomalía de cobre (> 100 ppm), junto con valores anómalos aislados de arsénico y plomo. No se detectaron anomalías de zinc o plata (véase más

adelante).La geoquímica del suelo fue seguido por la construcción de > De 5 km de trincheras niveladora, que se sometieron a mapeo geológico detallado. A finales de 1982, la extensión hacia abajo de mineralización oro debajo de la anomalía Cerro Puntiagudo se investigó por medio de alrededor de 400 m de bajo desarrollo de tierra, que expuestos parcialmente o en pórfido oxidado llevan valores de oro neos relativamente homogeneo Roca con> 1 ppm Au se demostró que era muy extendida y para llevar sólo valores bajos y de forma errática distribuidos cobre, molibdeno, y plata. Columna y a escala piloto de pruebas de lixiviación en pilas de muestras socavón confirmó que el oro es potencialmente recuperable usando cianuración.

Figura 2 Volcánico configuración del depósito de oro de Marte, el cinturón de Maricunga, el norte de Chile. Aluvión cuaternario a lo largo del lado derecho de la figura es el margen occidental del valle Ciénaga Redonda.

LA GEOLOGÍA LOCAL Las rocas volcánicas El depósito de oro Marte y sus zonas hipógeno y supergénico alteración asociadas se encuentran en el flanco sureste del volcán Pastillitos y están expuestos como resultado de la incisión valle en esta parte del edificio.La acción asociada y mineralización de oro en Marte están rodeados por una mineralización previa se- cuencia de lavas de andesita porfídica, la cual tiene una argilización isometidos y generalizada pero débil-ritización, al menos en parte de origen supergénico fenocristales de plagioclasa (Abso-6o), 0,2 a 8 mm de longitud, y horblenda subordinado, biotita, y / o piroxeno están presentes en una matriz afanítica y comúnmente se fluye alineados. Un remanente de erosión de la cubierta volcánica de la acción fue conservada antes a min ing cerca de la cumbre del Cerro Puntiagudo ,y aunque intensamente alterado, se cree que es parte de la misma unidad.

Figura 3 Geológica sección transversal del depósito de oro Marte, el norte de Chile.

La superficie superior de esta unidad se cree que es un remanente de la superficie de la construcción original de la parte basal del cono Pastillitos y a la aproximación de la superficie paleo en el momento de la intrusión y mineralización de oro- horblenda A partir de este lava era andesita. Fechado por el método K-Ar a 13,6 ± 0,4 Ma, una edad que podría ser interpretado a ser muy poco mayor que la mineralización en Marte.

16.3.4 ROCAS INTRUSIVAS Y BRECHA RESPECTIVAS La acción esencialmente es diorítica en la composición y se subdivide en tres unidades: de grano grueso pórfido diorita, pórfido diorita de grano fino, y diorita micro. pórfido diorita de grano grueso se observa más comúnmente y se compone de aproximadamente 40 vol por ciento de euhedral, hermanada, y divide en zonas fenocristales de plagioclasa (AB46-52) acompañado por hornblenda subordinada euhedral, biotita euhedral menor y magnetita, y trazas de piroxeno en una de grano fino (100 j, Lm) masa de tierra de microlitos de plagioclasa y cuarzo. Plagioclasa y fenotipos hornblenda cristalizan 10 mm de tamaño, pero son más comúnmente