Manejo de Plagas en Paltos y Citricos

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS EDITORES RENATO RIPA • PILAR LARRAL COLE

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MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS EDITORES

RENATO RIPA • PILAR LARRAL

COLECCIÓN LIBROS INIA - Nº 23



Manejo de Plagas en Paltos y Cítricos



Renato Ripa • Pilar Larral [email protected][email protected]

© Instituto de Investigaciones Agropecuarias, INIA, 2008 Ministerio de Agricultura

Centro Regional de Investigación La Cruz



Chorrillos 86 Fono/Fax (56-33) 47 03 90 Casilla 3 La Cruz, Región de Valparaíso (V) Chile



Registro de Propiedad Intelectual: 171.257 ISBN: 978-956-7016-32-7 ISSN: 0717-4713



Permitida la reproducción parcial o total de esta obra sólo con permiso previo y por escrito del Instituto de Investigaciones Agropecuarias, INIA.



Dirección de arte: Salvador Verdejo V.



Diseño e Impresión: Versión | producciones gráficas Ltda. [email protected] (56-2) 269 84 89



Impreso en Chile | Printed in Chile

Advertencia: INIA y los autores no se responsabilizan por los resultados que se obtengan del uso o aplicación de productos genéricos o comerciales que son mencionados. El texto es una guía de apoyo a los agricultores y profesionales, quienes deberán determinar los procedimientos y productos más adecuados a su situación particular.

5

Autores

Antonieta Cardemil O. Técnico de laboratorio Centro Regional de Investigación La Cruz Instituto de Investigaciones Agropecuarias La Cruz, Región de Valparaíso Chile Email: [email protected]

José Montenegro M. Técnico de Campo Centro Regional de Investigación La Cruz Instituto de Investigaciones Agropecuarias La Cruz, Región de Valparaíso Chile Email: [email protected]

Francisco Gardiazabal I. Ing. Agrónomo Sociedad Gardiazabal y Magdahl Ltda. Quillota, Región de Valparaíso Chile Email: [email protected]

Elizabeth Núñez S. M Sc Especialista en Manejo Integrado de Plagas Sub Dirección de Control Biológico Dirección de Sanidad Vegetal Servicio Nacional de Sanidad Agraria Lima Perú Email: [email protected]

Viviana Guajardo T. Técnico de laboratorio Centro Regional de Investigación La Cruz Instituto de Investigaciones Agropecuarias La Cruz, Región de Valparaíso Chile Mark S. Hoddle Ph D Department of Entomology University of California Riverside, California USA Email: [email protected] Pilar Larral D. Ing. Agrónomo Investigadora Centro Regional de Investigación La Cruz Instituto de Investigaciones Agropecuarias La Cruz, Región de Valparaíso Chile Email [email protected] Paola Luppichini B. Ing. Agrónomo Investigadora Centro Regional de Investigación La Cruz Instituto de Investigaciones Agropecuarias La Cruz, Región de Valparaíso Chile Email: [email protected]

Natalia Olivares P. Ing. Agrónomo Investigadora Centro Regional de Investigación La Cruz Instituto de Investigaciones Agropecuarias La Cruz, Región de Valparaíso Chile Email: [email protected] Jorge Peña Ph D Entomology and Nematology Department University of Florida Homestead, Florida USA Email: [email protected] Renato Ripa S. Ph D Investigador Entomólogo Centro Regional de Investigación La Cruz Instituto de Investigaciones Agropecuarias La Cruz, Región de Valparaíso Chile Email: [email protected]

6 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Fernando Rodríguez A. M Sc Subdirector de Investigación y Desarrollo Centro Regional de Investigación La Cruz Instituto de Investigaciones Agropecuarias La Cruz, Región de Valparaíso Chile Email: [email protected]

Robinson Vargas M. Ing. Agrónomo Ph D Investigador Entomólogo Centro Regional de Investigación La Cruz Instituto de Investigaciones Agropecuarias La Cruz, Región de Valparaíso Chile Email: [email protected]

Sharon Rodríguez S. M Sc Investigadora Centro Regional de Investigación La Cruz Instituto de Investigaciones Agropecuarias La Cruz, Región de Valparaíso Chile Email: [email protected]

Patricia Véliz R. Técnico de laboratorio Centro Regional de Investigación La Cruz Instituto de Investigaciones Agropecuarias La Cruz, Región de Valparaíso Chile

Sergio Rojas P. Ing. Agrónomo Entomólogo Investigador Emérito Centro Regional de Investigación La Cruz Instituto de Investigaciones Agropecuarias La Cruz, Región de Valparaíso Chile Paola Tepper M. Ing. Agrónomo Gerente de Certificación CMi Latinamerica Santiago, Región Metropolitana Chile Email: [email protected] Alejandrina Ubillo F. Técnico de laboratorio Centro Regional de Investigación La Cruz Instituto de Investigaciones Agropecuarias La Cruz, Región de Valparaíso Chile Email: [email protected]

Rodrigo Villaseñor C. M Sc. Botánico Facultad de Ciencias Universidad de Playa Ancha Valparaíso, Región de Valparaíso Chile E mail [email protected] Manes Wysoki Ph D Department of Entomology Institute of Plant Protection Agriculture Research Organization The Volcani Center, Bet Dagan Israel Email: [email protected]

7

Índice

5

Autores

7

Índice de contenidos

11

Agradecimientos

13

Prólogo

Capítulo 1 Palto y cítricos: Generalidades del cultivo

15 15 17 18 20 20 21 22 23 23 24 24 25 27 27 28 28 29 31 32 33 33 34 34 36 37 38

Palto Superficie Mercados Clima Suelo Agua Fenología del palto Variedades Propagación Plantación Polinizantes Riego Fertilización Cítricos Superficie Mercados Mandarinas Naranjas Limones Clima Suelo Agua Fenología en cítricos Portainjertos Variedades Distancias de plantación Fertirriego

Capítulo 2 Manejo Integrado de Plagas (MIP)

42 46 46 47 49

Reconocimiento de plagas, enemigos naturales y daño Monitoreo Nivel de daño económico NDE Toma de decisiones Acciones de control

Capítulo 3 Monitoreo de plagas y registros

52 54 55 55 56 56

Métodos de monitoreo Que estructura monitorear Tamaño de la muestra Frecuencia del monitoreo Registros y planillas Procesamiento de la información

Capítulo 4 Control biológico 62 64 66

66 66 67 68 68

Agentes de control biológico Crianzas de enemigos naturales Factores que afectan la abundancia de enemigos naturales Selectividad de los plaguicidas Fuentes de alimento de los enemigos naturales Hospederos de los enemigos naturales Presencia de hormigas Polvo en las hojas

Capítulo 5 Control químico

69 70 71 73 74

Uso de plaguicidas Calidad de la aplicación Factores que influyen en el éxito del control Uso de aceites minerales Uso de detergentes

8 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

75 78 80

80 81 81 82 82 83 85 85 85

90

Tipos de maquinaria Normas básicas de seguridad en el manejo de los plaguicidas Manejo Integrado de Resistencia (MIR) y selectividad de plaguicidas Resistencia Mecanismos de resistencia Resistencia cruzada Resistencia múltiple Pérdida de susceptibilidad Manejo Integrado de Resistencia (MIR) Selectividad Tipos de selectividad Selectividad sobre los principales enemigos naturales en Chile Manejo de selectividad para el uso de enemigos naturales en palto y cítricos

Capítulo 6 Manejo de hábitat 93 93 94

95 95 95 96

Control biológico de conservación Incremento de la diversidad Efecto del manejo del hábitat sobre las poblaciones de enemigos naturales Flora acompañante de huertos de palto Enemigos naturales dentro y fuera del huerto Estimación de la diversidad en huertos de palto Manejo del hábitat en huertos de palto

Capítulo 7 Dinámica de poblaciones 99 100 100 101 101 102

102

103 103

Distribución espacial de las poblaciones Cuantificación de poblaciones Factores externos actuando sobre la dinámica poblacional Tablas de vida y factores clave de mortalidad Parámetros de tabla de vida Parámetros de tabla de vida de la Escama blanca del palto, Hemiberlesia lataniae, y su parasitoide Aphytis diaspidis Parametros de tabla de vida de la Arañita roja del palto, Oligonychus yothersi, y su depredador Cydnodrus picanus Modelos poblacionales aplicados en Control Biológico Interacciones multitróficas

Capítulo 8 Plagas del palto y cítricos en Chile 107 111 111 119

Plagas asociadas a paltos y/o citricos en Chile Mosquitas Blancas Mosquita blanca algodonosa de los cítricos Aleurothrixus floccosus Mosquita blanca filamentosa Paraleyrodes spp

120 121 123 123 129 132 135 135 143 145 147 149 150 155 155 158 163 163 171 173 177 180 180 192 198 203 206 206 207 220 220 221 223 223 224 227 227 231 232 234 235 236 237 239 239 239 246 251 252 252 259 259

Mosquita blanca de los invernaderos Trialeurodes vaporariorum Mosquita del fresno Siphoninus phillyreae Áfidos Pulgón de la espírea Aphis spiraecola Pulgón negro de los cítricos Toxoptera aurantii Pulgón del melón, pulgón del algodonero Aphis gossypii Conchuelas Conchuela Negra del Olivo Saissetia oleae Conchuela Hemisférica Saissetia coffeae Conchuela Blanda Coccus hesperidum Conchuela Piriforme Protopulvinaria pyriformis Conchuela Cerosa Ceroplastes cirripediformis Conchuela Acanalada Icerya purchasi Burritos y Capachitos Burrito de la vid Naupactus xanthographus Capachito de los frutales Pantomorus cervinus Escamas Escama blanca del palto, Hemiberlesia lataniae Escama blanca de la hiedra Aspidiotus nerii Escama roja Aonidiella aurantii Escama morada de los cítricos Lepidosaphes beckii Chanchitos blancos Chanchito Blanco de Cola Larga Pseudococcus longispinus Chanchito Blanco de los Cítricos Planococcus citri Chanchito Blanco Pseudococcus calceolariae Chanchito Blanco de la Vid Pseudococcus viburni Trips Trips Californiano Frankliniella occidentalis Trips del Palto Heliothrips haemorrhoidalis Katididos y Grillos Katídido de los Cítricos Cosmophyllum pallidulum Grillo de Campo Gryllus fulvipennis Termitas Termita chilena, termita de madera seca Neotermes chilensis Termita subterránea Reticulitermes flavipes Polillas y mariposas Enrollador de hojas Proeulia auraria Minador de los Cítricos Phyllocnistis citrella Polilla del algarrobo Ectomyelois ceratoniae Nóctuidos Mariposa del cachito Arctopoda maculosa Bicho del cesto Thanatopsyche chilensis Gusano del tronco del palto y gusano del tebo Chilecomadia valdiviana C. moorei Arañitas Familia Tetranychidae Arañita roja del palto Oligonychus yothersi Arañita roja de los Cítricos Panonychus citri Arañita Bimaculada Tetranychus urticae Familia Tenuilpalpidade Falsa arañita roja de la vid Brevipalpus chilensis Familia Eriophydae Ácaro de la yema Eriophyes sheldoni

9 Índice

263 263 267 267 269 270 271

Familia Tarsonemidae Ácaro Ancho Polyphagotarsonemus latus Caracoles y Babosas Caracol de las Viñas Helix aspersa Babosa chica Gris Deroceras reticulatum Psocidos Insectos y ácaros poco frecuentes en paltos y/o cítricos en chile

Capítulo 9 Importancia y Manejo de hormigas en el MIP 273 274 274 274 281

Las hormigas y la mielecilla producida por los insectos Efecto del control de hormigas sobre el control biológico Hormigas de importancia agrícola Hormiga Argentina. Linepithema humile Hormiga roja. Solenopsis gayi

Capítulo 10 Buenas Prácticas Agrícolas (BPA) y Manejo Integrado de Plagas (MIP) 283 284 284 284 285 285 286 286 286 286 288 289 289 290

Introducción Evolución de las Buenas Prácticas Agrícolas BPA’s en Europa Acta de Inocuidad Alimentaria (1990) Casos de Crisis de Inocuidad Alimentaria Publicación del Reglamento 178/2002 y creación de la EFSA Publicación del Reglamento 396/2005 Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos (RASFF) Desarrollo de Protocolos Específicos GlobalGap Tesco Nature’s Choice BPA’s en Estados Unidos Iniciativa Global de Inocuidad Alimentaria (GFSI) Buenas Prácticas Agrícolas y Certificación

Capítulo 11 Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú 293 293 295 296 297 299 300 303 303 303

Plagas del palto en Israel Trips de la Orquídea Chaetanaphothrips orchidii Trips negro de la vid Retithrips syriacus Mosca blanca del laurel japonés Parabemisia myricae Medidor gigante Boarmia selenaria Enrollador de la hoja del clavel Cacoecimorpha pronubana Polilla del naranjo Cryptoblabes gnidiella Plagas del palto en México Araña roja Oligonychus punicae Escama del palto Fiorinia fioriniae

304 304 304 304 304 305 305 306 306 307 308 309 310 310 311 311 313 313 314 314 315 316 317 317 319 320 321 324 324 324 324 325 326 327 329 330 331 333 334 335 336 337 338 338 341 343 344 345 346 346

Chicharrita Idona minuenda Agalla de la hoja Trioza anceps Hormiga arriera Atta mejicana Trips Scirtothrips aguacatae y S. kupae Trips del bandeado rojo Frankliniella chamulae y F. bruneri Enrollador occidental del palto Amorbia cuneana Minador de las Hojas Gracilaria persea Barrenadores de la semilla del aguacate Barrenador de la semilla del aguacate Conotrachelus perseae Barrenador de las ramas Copturus aguacatae Barrenador grande del hueso del aguacate, picudo del aguacate Heilipus lauri Escolito Cucarroncitos de ambrosia Corthylus spp Plagas del palto en Florida Medidores del follaje Epimeces detexta, E. matronaria, Anacamptodes matronaria, Oxydia vesulia transponens Miridos Chinche del palto Pseudacysta perseae Escamas Arañitas Oligonychus yothersi El ácaro de la yema del palto Tegolophus perseaflorae Trips Selenothrips rubrocinctus (Giard) Trips de las Flores Frankliniella kelliae y F. bispinosa Cucarroncitos Ambrosia Plagas del palto en California, México y Centro América Trips del Palto Scirtothrips perseae Cryptaspasma spp Mosquita blanca de bandas rojas Tetraleurodes perseae Ácaro del aguacate Oligonychus perseae Plagas de paltos y cítricos en Perú Queresas o escamas Queresa latania Hemiberlesia lataniae Queresa de las palmeras Hemiberlesia palmae Queresa arriñonada Abgrallaspis cyanophylli Queresa coma menor Insulaspis gloverii Queresa coma Cornuaspis beckii Piojo blanco de los cítricos Pinnaspis aspidistrae Piojo blanco del algodonero Pinnaspis strachani Queresa redonda de los cítricos Selenaspidus articulatus Escama pequeña del palto Fiorinia fioriniae Queresa del ficus Chrysomphalus aonidum Queresa aplanada Chrysomphalus dictyospermi Escama chata Parlatoria pergandii Queresa negra del chirimoyo Parasaissetia nigra Mosquitas blancas Mosquita blanca del espiral Aleurodicus sp cercana a A. cocois Mosca pequeña del palto Aleurotrachelus sp Mosquita blanca del cocotero Aleurodicus coccolobae Mosquita desordenada o mosquita anidadora Palareyrodes sp Mosca blanca del hollín Dialeurodes citri Moscas Mosquilla de los brotes Prodiplosis longifila

10 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

348 348 351 352 354 355 357 358 361 363 363 363

Lepidópteros Gusano pegador de las hojas y perforador de los frutos Argyrotaenia sphaleropa Falso medidor, Chrysodeixis includens El perro del naranjo Heraclides paeon paeon Bicho del cesto, Oiketicus kirbyi Defoliador Oxydia vesulia Oruga minadora de la hoja del palto Phyllocnistis sp Minador de la hoja de los cítricos Phyllocnistis citrella Barrrenador del fruto del palto Stenoma catenifer Ácaros Ácaro del tostado Phyllocoptruta oleivora Hongos entomopatógenos utilizados en control biológico en Perú

Capítulo 12 Galería de Imágenes 365 371 373 376 378 383 387

Lesiones en frutos y hojas de paltos no asociadas a plagas Insectos poco frecuentes y roedores asociados a paltos Lesiones en frutos y hojas de cítricos no asociadas a plagas Insectos poco frecuentes y pájaros asociados a cítricos Insectos y ácaros Glosario de términos Bibliografía

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Agradecimientos

A FONTAGRO y FONDEF que hicieron posible el desarrollo de la investigación y con ello el mejoramiento de la tecnología MIP. A cada una de las familias de los autores, por el tiempo, la paciencia y el apoyo a la labor realizada. A todos aquellos que colaboraron directa e indirectamente en este desafío, especialmente al personal del INIA La Cruz. A la colega Andrea Torres que en forma desinteresada colaboró en la elaboración de esta obra. Al personal de las empresas y predios involucrados en la investigación. A los estudiantes que realizaron su trabajo de tesis aportando con ello información incluida en este libro. Por su constante apoyo y estimulo al Sr. Ronald Bown, Presidente de ASOEX; al Sr. Ricardo Waissbluth, Gerente de Operaciones Comité de Palta y al Sr. Germán Errázuriz, Agricultor de Mallarauco. Especial mención cabe para el “Comité de Paltas Hass de Chile A.G.”. A las empresas de agroquímicos que facilitaron la ejecución de muchos de los ensayos. A los investigadores Sr. J. Funderburk, Entomólogo de la Universidad de Florida; al Sr. L. Caltagirone, profesor emérito de la Universidad de California; a los profesores de la Universidad de California J. Morse, R. Luck, M. Rust, M. Parrella y D. Ullman y al profesor de la Universidad Texas A&M, K. Heinz, quienes nos entregaron su basta experiencia en el manejo de plagas. A la Sra. Carmen Tobar de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, por la elaboración de los dibujos de artrópodos. A los asesores, Srs. Eduardo Bozzolo y Juan Ortuzar, por su desinteresada colaboración. Colaboradores: Empresas que a través de su apoyo contribuyeron a la investigación que originó este libro: Comité de Paltas Hass de Chile A.G. ASOEX Exportadora Propal Exportadora Subsole Exportadora Santa Cruz Exportadora Cabilfrut

Xilema Biocontrol Desarrollo Agrario Agrícola Chalaco Agrícola San Ignacio FDF

12 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Personas y empresas agrícolas que aportaron sus huertos para la ejecución de ensayos: Gabriel Raffo (adm) Inversiones Quintil

Juan Pablo Cerda Santa María de Vitahue

José Barros El Resguardo

Osvaldo Jünemann Los Graneros

Oscar Godoy Las Chacras

Pedro Valenzuela Santa Laura Agrícola y Forestal

Pedro Schüler Agrícola La Fortuna

Edith Acuña Parcela Don Luis

Cristián Hargous La Ensenada

Roberto Mayol (gerente) Soc. Lomas de Pocochay

Juan Hargous Santa Julia

Luis Lobos Vista Hermosa

Niels Krarup La Vega

Francisco Schanz Parcela 12 A La Ligua

Fernando Santa Cruz Santa Laura

Lisardo Álvarez Agrícola Cerrillos de Tamaya

Juan Alberto Decombe Agrícola La Puntilla

José Luis Benito Agrícola El Naranjal

Cesar Ángel Viveros San José

José Ortega Fundo La Granja

Juan Freres Parcela 29 La Ligua

13

Prólogo

Los temas de inocuidad alimentaria, salud de las personas y preocupación por el ambiente adquieren cada vez más fuerza en los países importadores de fruta. Esto exige a la producción frutícola, destinada principalmente al mercado externo, no sólo cumplir con parámetros de calidad estética, sino ofrecer fruta libre de residuos y producida bajo normas que respetan la calidad ambiental, aspectos que forman parte de los protocolos de Buenas Prácticas Agrícolas y otras normativas internacionales. En consideración a la experiencia de los autores con agricultores, empresas exportadoras y profesionales del área durante más de dos décadas, uno de los aspectos más complejos para aplicar el MIP es tomar la decisión de iniciar su implementación. La postergación de esta decisión tiene relación con la escasa información disponible sobre MIP, el restringido apoyo profesional especializado, la incertidumbre que genera dicho cambio, especialmente en cuanto al éxito de los resultados finales. Durante la aplicación del MIP, tanto en cítricos como en paltos, por lo general surgen muchos desafíos relacionados con los obstáculos que se enfrentan al tratar de armonizar la tecnología MIP con los aspectos prácticos detectados en terreno. Las soluciones surgen por lo general durante el análisis consensuado de las opciones disponibles, entregadas en este texto. Ejemplos comunes de problemas que surgen son: podas que requieren de la eliminación de follaje en contacto con el suelo, escasez de maquinaria disponible para aplicación en grandes superficie, limitar las unidades de nitrógeno, mejorar la calidad de la aplicación de pesticidas, dificultad de tratamientos en laderas, manejo de la vegetación herbácea en el huerto, etc. Todos estos aspectos deben ser abordados holísticamente, incorporando especialistas de otras disciplinas. La exigencia de los procesos de certificación en la producción de exportación, que incorporan el MIP, ha incentivado la implementación de este método de manejo de plagas. Una de los aspectos relevantes que los editores han observado es que la puesta en marcha del MIP es un proceso progresivo, que logra avances graduales a través de las temporadas. Una vez establecido el proceso, genera un aprendizaje continuo que perfecciona, le otorga solidez y sustentabilidad a esta estrategia y finalmente mayores beneficios al agricultor. La presente obra se ha proyectado como una ayuda y consulta en la transición hacia el MIP de Cítricos y Paltos. Los Editores

15

Capítulo 1

Palto y cítricos: Generalidades del cultivo F. Gardiazabal

La industria de la palta en Chile ha mostrado una dinámica y crecimiento en los últimos años que la ha llevado a convertirse en el segundo frutal con mayor superficie plantada después de Uva de Mesa y en exportaciones la palta corresponde al cuarto producto en importancia nacional en volumen y al tercero en valor. Es importante el entender las características de esta industria y los factores que la afectan para entender su potencial y necesidades en el largo plazo. Un factor clave para el desarrollo del largo plazo de nuestra industria es el contar con investigación y experiencias que se basen en las condiciones de cultivo de cada una de las diferentes zonas de cultivo y que estén enfocadas a resolver las limitantes particulares que tiene este cultivo en nuestro país.

Superficie La superficie total del país ha subido más del 130% en la última década, de 17.047 ha informadas según el Censo del año 1997 ha pasado a 39.303 ha en el Censo del año 2007 (Cuadro 1-1), ocupando nuestro país el segundo lugar a nivel mundial en la superficie de paltos del tipo “californiano” (razas guatemaltecas e híbridos), después de México y desplazando a Estados Unidos al tercer lugar. Este fuerte crecimiento se debió principalmente a la rentabilidad del cultivo, debido a los buenos precios tanto en la exportación como del mercado interno, y a sus bajos costos de producción. Sin embargo, este auspicioso panorama ha cambiado en los últimos dos años por la gran oferta nacional y a nivel mundial, problemas climáticos (heladas y sequía), alzas en los costos de producción (mano de obra, electricidad, fertilizantes y combustibles) y a una fuerte reevaluación del peso.

F. Gardiazabal

Paltos

Figura 1-1 Plantación de paltos a muy alta densidad (3 x 3 m) en ladera en la Región de Valparaíso.

Las Regiones de Coquimbo, Valparaíso y el Área Metropolitana abarcan el 91% de las plantaciones del país. Es interesante hacer notar que la Región de Valparaíso reúne más del 56% de las plantaciones nacionales, destacándose dentro de esta Región las superficies de los valles regados por el río Aconcagua (Los Andes, San Felipe y Quillota) que alcanzan a las 12.861 ha, seguido de las plantaciones de los valles regados por los ríos Petorca y Ligua con 8.347 ha (Figura 1-1). Descripción General de Zonas de Producción Las condiciones climáticas varían mucho en las distintas zonas de producción de paltas y se pueden clasificar como se muestra en el Cuadro 1-2.

16 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Cuadro 1-1 Superficie de paltos en las distintas regiones de Chile.

Región

En formación

I Tarapacá

0

II Antofagasta III Atacama

En producción

Total (ha)

1

Porcentaje

1

0 0

1

1

2

98

361

459

1,17

IV Coquimbo

2.197

4.651

6.848

17,42

V Valparaíso

4.181

17.842

22.023

56,03

Región Metropolitana

1.305

5.590

6.895

17,54

553

2.355

2.908

7,4

VII Maule

30

55

85

0

VIII Bío-Bío

24

12

36

0

0

2

2

0

Otras

44

VI O’Higgins

IX Araucanía

8.389

30.870

39.303

100

Fuente: ODEPA-CIREN. Catastro Frutícola 2007.

Cuadro 1-2 Descripción general de zonas de producción de paltas en Chile.

Zonas

Acumulación horas grado

Potencial de calibre

Condiciones para cuaja

Inicio de cosecha

Mayor a 1.800

Medio a grande

Buenas a variables

Junio y julio

Muy tempranas

IV Región: Vicuña, El Palqui, Salamanca V Región: Petorca, San Felipe, Los Andes

Tempranas

IV Región: Ovalle, 1.400 a 1.700 Grande Muy buenas Tamaya V Región: Cabildo, Panquehue, Llay-Llay Región Metropolitana: Curacaví, María Pinto, Aparición de Paine

Media temporada a tardías

IV Región: El Tambo, Paloma, Illapel V Región: Longotoma, La Ligua, Quillota, Limache Región Metropolitana: Mallarauco, Melipilla VI Región: Rapel, Peumo

Muy tardías

IV Región: La Serena 900 a 1.000 Medio a chico V Región: Santo Domingo

1.100 a 1.300

Mediano

Mitad de julio y agosto

Regulares y variables

Fines de agosto

Limitantes, bajas producciones

Fines de octubre

17 Palto y cítricos: Generalidades del cultivo

Mercados En el mercado nacional la palta es un producto conocido y apetecido, teniendo nuestro país el tercer consumo per cápita más alto del mundo con sobre 3,5 kilos, después de México que tiene sobre 8,5 kilos, Israel con 4 y luego Nueva Zelanda y Estados Unidos con 1,3 kilos, más atrás Australia y Sudáfrica con alrededor de 1 kilo. En los últimos años en nuestro país la fruta de la variedad Hass se ha transformado en la más importante, pudiéndose encontrar en el mercado prácticamente todo el año ya que se cosecha temprano (entre los meses de junio y julio en los huertos plantados en la precordillera) y se termina con una cosecha muy tardía en la zona central con huertos ubicados en zonas costeras. Esto ha hecho que otras variedades que tenían su nicho en invierno, como cultivares verdes de buena calidad (Fuerte) y otras de inferior calidad, como Bacon y Zutano, se vean fuertemente restringidas en su comercialización, con bajos precios y tienden a desaparecer. Una variedad de primavera y de color verde que ha incrementado los volúmenes de cosecha debido a que se usa preferentemente como variedad polinizante de Hass es Edranol, cuya fruta es de excelente calidad. El fuerte desarrollo de la industria de la palta Hass en Chile se ha sustentado, entre otras cosas, en las exportaciones. Si bien el consumo per capita en Chile es alto, por el tamaño de la población el mercado es limitado. Se estima que el consumo nacional ha bordeado en los últimos años los 50 millones de kilos, lo que correspon-

dería aproximadamente al 30% de la producción nacional. Este volumen y los precios que se alcanzan en Chile están directamente relacionados a los volúmenes de producción y a las exportaciones que, a su vez dependen de la situación de mercado, principalmente en EE.UU. y Europa. Si se analizan las exportaciones nacionales (Gráfico 1-1) se pueden reconocer distintas características. En primer lugar se ve un claro crecimiento de los volúmenes exportados en general, el que refleja el fuerte crecimiento en plantaciones de los últimos 20 años. También se reconoce la alternancia natural de la producción, lo que se refleja en fuertes crecimientos de los volúmenes exportados cada dos años, con una tendencia a mantener estos volúmenes con diferencias menores en los años siguientes, considerados bajos. También se reflejan en las exportaciones problemas climáticos que afectan la producción, tales como las heladas del 2007 que significaron una reducción importante en la producción y exportaciones. En lo comercial se puede ver una tendencia a la diversificación de mercados, con el claro crecimiento que han tenido las exportaciones hacia diferentes países de Europa, principalmente el Reino Unido, Francia y España. En las décadas del 80 y 90 el mercado de EE.UU. concentraba más del 97% de las exportaciones. Influía en estos el tamaño del mercado, su fuerte crecimiento, la falta de competidores relevantes en el período de cosecha chileno (salvo California en años de muy alta producción), los sistemas de transporte a EE.UU. que presentan tiempos de tránsito más cortos y, en algunos casos, incentivos

Gráfico 1-1 Exportaciones de paltas y valor FOB entre los años 1997/98 y 2007/08. Miles Ton 200

Millones US$

150

100

50

0

1997/98 1998/99 1999/00 2000/01 2001/02 2002/03 2003/04 2004/05 2005/06 2006/07 2007/08*

[ * Hasta enero 2008. Fuente: ODEPA 2008.

EE.UU.

Europa

Latinoamérica

Japón

Valor FOB

]

18 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

que van más allá de situaciones de mercado. Sin embargo, en los últimos seis años se empieza a ver un sostenido crecimiento de los envíos a Europa. Desde la temporada 2002-03 Europa ha pasado del 3% de los envíos (2,2 millones de kilos) al 25% en la temporada 2007-08, alcanzando 26,3 millones de kilos. Lo anterior implica un aumento de los volúmenes enviados a Europa en 6 años de casi 12 veces. Esto se explica por condiciones del mercado europeo tales como el fuerte aumento del consumo y el reemplazo de variedades de piel verde por la variedad Hass que, proveniente de distintas zonas de producción del mundo permite un abastecimiento a lo largo de todo el año. También ha influido el contar con sistemas de transporte a Europa más rápidos y eficientes y factores económicos tales como, en los últimos años, el fortalecimiento de las monedas de Europa en comparación con el Dólar americano. También se ha visto en los últimos años un aumento en los envíos a América Latina, principalmente Argentina, que de ser insignificantes en la temporada 2003-04, llegaron al 2% en la temporada 2007-08, lo que en volumen significa un aumento de más de 30 veces. Si bien su participación es todavía mínima, Argentina es un mercado que por el tamaño de su población y los bajos consumos per capita actuales muestra un gran potencial de crecimiento futuro para Chile. Por otro lado, factores que han influido en EE.UU. han sido la entrada con menores o sin restricciones de fruta mexicana y altas producciones en California, junto con el fuerte crecimiento y concentración en este mercado de la oferta chilena. México se ha transformado en los últimos años en un muy importante y fuerte competidor para nuestra fruta en EE.UU. A pesar de que los retornos a productores han disminuido, particularmente en años de alta producción, la fruta chilena sigue siendo muy competitiva a nivel mundial debido a su costo, calidad, confiabilidad, fechas de cosecha y volúmenes. Otro factor relevante, de gran importancia para el futuro de la industria, es el fuerte crecimiento del consumo en todos los mercados, esto se ha visto influenciado, entre otras cosas, por el abastecimiento estable a lo largo del año, la preferencia de los consumidores y distribuidores por la variedad Hass, los menores precios, la percepción de ser un producto sano, los programas de premaduración y la confiabilidad y calidad del producto relacionado a sistemas de transporte y distribución más eficientes, etcétera. Debido a todo lo anterior el futuro de la industria de la palta en Chile se ve muy auspicioso, siendo el gran potencial de crecimiento del consumo en todos los mercados un factor muy potente para sustentar la actividad e incluso permitir un crecimiento sostenido de largo plazo.

Clima El clima representa el factor más importante, y en último grado, determinante en la producción de paltos, tanto en la calidad como en el rendimiento a obtener por las distintas variedades. Botánicamente el palto es clasificado en tres subespecies o variedades botánicas: americana, guatemalensis, y drimifolia. Estas tres variedades botánicas son razas ecológicas, que se desarrollaron en distintas áreas y que por décadas han sido conocidas como las razas hortícolas Antillana, Guatemalteca y Mexicana respectivamente. La temperatura es el factor climático más importante en la producción de paltas al afectar la cuaja y por ende su producción y al poder producir daños y pérdidas por heladas.

Temperaturas bajas Por ser un árbol de hoja persistente, que no entra en un receso profundo en invierno, el palto es sensible a heladas no sólo las temperaturas que se alcanzan, sino que también la duración de éstas. La tolerancia al frío según las razas de paltos se indica en el Cuadro 1-3, se puede ver que las variedades más tolerantes son las de raza mejicana. Además, existen diferencias muy importantes en la sensibilidad de la fruta al frío dependiendo de la variedad, que se muestra en el Cuadro 1-4.

Temperaturas en floración Los paltos son muy exigentes en cuanto a las temperaturas durante la época de floración y cuaja. Éstas influyen sobre el proceso de fructificación de diferentes formas: Los paltos presentan naturalmente una dicogamia protogínea que significa que la flor abre 2 veces, primero en estado femenino, luego cierra, para, posteriormente abrir al estado masculino. Las variedades se clasifican según su dicogamia en variedades tipo A, que abren en la mañana en estado femenino, luego cierran y abren nuevamente en la tarde del día siguiente al estado masculino; Hass, Mexícola, Gwen, Esther, son algunas de las variedades que pertenecen a este grupo. Las del tipo B abren al estado femenino en la tarde, cierran en la noche y abren nuevamente al estado masculino en la mañana siguiente; Edranol, Zutano, Bacon, Negra La Cruz, son del tipo B. Cuando el clima de primavera es fresco e irregular, estos ciclos se desordenan, encontrándose flores masculinas y femeninas al mismo tiempo en el mismo árbol y cambiando su patrón de floración, que muchas veces favorece la polinización y cuaja. Esto es lo que ocurre en la zona de Quillota y en otras áreas de clima primaveral frío e inestable.

19 Palto y cítricos: Generalidades del cultivo

Cuadro 1-3 Resistencia al frío de árboles de las tres razas de palto.

Tipo de planta

Raza

Antillana

Guatemalteca

Mejicana

Planta joven

–1 °C a –2 °C

–2 °C a –4 °C

–3 °C a –4 °C

Planta adulta

–1 °C a –4 °C

–3 °C a –5 °C

–4 °C a –7 °C

Fuente: Álvarez de la Peña - El Aguacate.

Cuadro 1-4 Tolerancia al frío de diferentes variedades de palto.



Variedad

Raza



Hass

Mayormente Guatemalteca

T° mínimas –1,1 °C



Fuerte

Mejicana x Guatemalteca

–2,7 °C



Zutano

Mayormente Mejicana

–3,3 °C



Edranol

Guatemalteca x Mejicana

–3,3 °C*



Bacon

Mayormente Mejicana

–4,4 °C



Negra La Cruz

Mayormente Mejicana**

–4,4 °C***

* Resistencia similar a Zutano en condiciones de campo. ** Híbrido natural descubierto en Chile. *** Resistencia similar a Bacon en condiciones de campo.

Finalmente, bajas temperaturas durante la noche (menores a 10 °C), reducen la germinación del polen, decrece la viabilidad del óvulo y aumenta el período de crecimiento del tubo polínico, el que no alcanza a desarrollarse para fecundar el óvulo, provocando una fuerte caída del frutitos en los primeros estados de desarrollo o a la producción de fruta sin semillas o “paltines” que pueden desarrollarse en mayores cantidades en algunas variedades como Fuerte. Las temperaturas mínimas para tener fecundación son, para cultivares del tipo B, de 25 °C de día seguidas de noches con temperaturas superiores a 10 °C. En el caso de cultivares del grupo A, los requerimientos no son tan altos, bastando temperaturas diurnas sobre 20 °C, seguidas de noches con más de 10 °C (Figura 1-2).

F. Gardiazabal

Otro efecto de temperaturas frías en floración (cuando estas temperaturas diurnas son inferiores a 17 °C), es que hay un porcentaje de flores que no abren nunca al estado femenino, otras que abren en este estado, pero parte de ellas lo hace en la noche donde no hay insectos polinizadores y las temperaturas son bajas, no habiendo cuaja en estas flores. Por otro lado, con temperaturas diurnas inferiores a 14 °C, la actividad de las abejas es mínima, lo que dificulta la polinización.

Figura 1-2 Paltos en plena flor.

Humedad relativa La humedad relativa afecta la viabilidad de los granos de polen y a la receptividad de los estigmas (parte femenina de la flor). En condiciones de humedad relativa inferior al 50%, el tiempo en que se mantiene receptivo el estigma se reduce considerablemente, con lo que la poli-

20 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

nización debe ocurrir en un tiempo más limitado. Por otro lado la viabilidad de los granos de polen también se reduce considerablemente con una humedad relativa inferior al 50%.

con abundante agua, pero con un excelente drenaje. Estos suelos no están presentes en las zonas productoras de paltas en nuestro país, pero si lo vemos muy a gusto donde predominan las arenas o cascajos, que suelen ser suelos menos fértiles pero con un muy buen drenaje.

Viento

Los contenidos de materia orgánica son importantes debido a su efecto sobre la estructura del suelo y, por lo tanto, sobre la aireación, que tiene a su vez consecuencia sobre la sanidad de las raíces ya que se observa un mejor desarrollo de estas en suelos con altos contenidos de materia orgánica y menores incidencias de enfermedades como Phytophthora. Debido a que el desarrollo de las raíces es muy superficial (en forma natural más del 50% de las raíces se concentran en los primeros 30 cm de suelo) los paltos pueden aprovechar la materia orgánica que se encuentra en la superficie del suelo y, desde este punto de vista, la capa de hojarasca que en forma natural se forma bajo los árboles es de vital importancia para el desarrollo radicular. Esto hace que aplicaciones superficiales de materia orgánica o en forma de mulch puedan favorecer el desarrollo radicular sin tener que incorporarlas en profundidad como en otros cultivos, con los problemas de rotura de raíces que esto conllevaría.

El efecto del viento es tanto sobre el desarrollo de las plantas, especialmente nuevas y más expuestas (puede disminuir su desarrollo y deformar su estructura), como sobre la calidad de la fruta produciendo cicatrices y russet en la piel, sin embargo, no se ha visto mayor daño sobre la productividad.

Suelo El suelo es un importante factor que puede limitar el crecimiento y producción de paltos debido a la sensibilidad de este frutal a la asfixia radicular, siendo el factor más importante del suelo su drenaje. Los suelos más adecuados para paltos son suelos francos a arenosos, con estructuras que permitan el buen drenaje y aireación a nivel de raíces. En suelos franco-arcillosos o pesados es importante poder controlar los excesos de agua y regular muy bien los riegos para no afectar el estado de las raíces. Gran parte de las plantaciones de Paltos en Chile están ubicadas en suelos de textura fina (arcillosos), con densidades aparentes entre 1,3 y 1,5 g/cm3 y con una capacidad de aire, entre el 15% y el 20% (Ferreira, 2005). El palto crece en muy buenas condiciones y produce grandes cosechas con frutos de buenos calibres en Chile, cuando la capacidad de aire del suelo es igual o superior al 27%. Los suelos de los Paltos cultivados en México tienen una densidad aparente de 0,5 a 0,8 g/cm3 y una porosidad cercana al 45%. Además de la falta de porosidad de los suelos, el manejo de riego y otras prácticas culturales han provocado el decaimiento de numerosas plantaciones, bajando el rendimiento y el calibre de las frutas. A pesar que el sistema radicular puede extenderse hasta los 120-150 cm de profundidad, la mayor cantidad de raíces absorbentes están ubicadas entre los 0 a 60 cm dependiendo del tipo de suelo en que se esté cultivando; las raíces se dividen en ramificaciones las cuales van asumiendo posiciones laterales. Estas laterales primarias se dividen en su mayoría bifurcándose en laterales secundarias, las cuales, a su vez, se vuelven a dividir, pero en ángulos más abiertos. Este sistema de ramificación desarrolla gran abundancia de raicillas. El color de las nuevas raíces activas es blanco. El palto crece y produce considerables cosechas en suelos con altos contenidos de materia orgánica, no hay que olvidar que esta especie proviene de climas tropicales,

Por otra parte, en suelos donde predominan las arcillas y que suelen tener un drenaje interno deficiente, los paltos toman un aspecto “cansado”, es decir, tienen poco vigor y cuando tienen una abundante cuaja, estas frutas son de tamaño reducido, si además no se cuida el riego, los árboles decaen. Hay varias formas de solucionar en parte este problema, haciendo camellones o montículos o plantando en laderas de cerro (Figura 1-3). En cuanto a condiciones fisicoquímicas se deben considerar la salinidad (medida como conductividad eléctrica y concentración de sales) y el pH como los principales factores. En salinidad, se observan reducciones de cosecha del 10% cuando la conductividad eléctrica del suelo (medida en es extracto de saturación) alcanza 2 dS/cm. En cuanto a cloruros, principal ion que afecta la salinidad en Chile, las variedades de las razas mejicana toleran hasta 150 ppm de Cl– mientras que la raza antillana tiene una tolerancia de 250 ppm. El pH ideal para los paltos es de 5,5 a 6,5 con pH superior a 8 empieza a mostrar problemas, especialmente de deficiencias de hierro por la presencia de carbonatos en el suelo. Los problemas de carbonatos empiezan a partir de valores aproximadamente del 2% de caliza activa.

Agua Los períodos más importantes de necesidades de agua para no afectar la producción son durante los procesos de floración y cuaja en primavera y durante el verano en que la fruta está en los primeros estados de desarrollo y la demanda atmosférica es máxima.

21

F. Gardiazabal

Palto y cítricos: Generalidades del cultivo

Figura 1-3 Plantación de paltos en camellones en ladera de cerro, Región de Valparaíso.

En cuanto a la calidad del agua los paltos presentan problemas a partir de niveles de salinidad (conductividad eléctrica) superiores a 0,75 mmhos/cm y con niveles de Cloruros en el agua superiores a 3,3 meq/l o 120 ppm y niveles de Boro superiores a 0,2 meq/l. Los niveles de salinidad son un problema en Chile, en los valles regados con aguas del Maipo y Mapocho, donde los niveles de salinidad fluctúan entre 1,2 hasta 2,0 mmhos/cm, dependiendo de la zona, época del año y temporada. La cantidad de agua que se aplica en un huerto de Hass adulto depende de la zona de cultivo, es así que en el valle de Quillota la cantidad fluctúa entre 8.000 y 9.000 m3 por há y por año, mientras que en la zona de Panquehue oscila entre 10.500 y 11.500 m3.

Fenología del palto La fenología corresponde a la descripción de los ciclos de crecimiento de los paltos y puede ser usada como una poderosa herramienta de manejo. El crecimiento de un palto sigue un patrón en su ciclo estacional, el que se repite cada año, aunque no necesariamente en la misma escala de tiempo o con la misma intensidad de crecimiento para cada estado, estos distintos ciclos compiten entre si y pueden tener un fuerte impacto sobre la productividad del cultivo. Hay 3 tipos de creci-

miento fácilmente reconocibles en el palto, el sistema radicular, los brotes vegetativos y los brotes reproductivos, estos últimos comienzan con la floración, seguido por la cuaja, desarrollo y maduración del fruto. En el Gráfico 1-2 se muestra el ciclo fenológico para la zona de Quillota. Los paltos tienen dos crecimientos vegetativos en una temporada completa, cada brotación es seguida por un período de crecimiento radicular. La primera brotación comienza en la primavera durante la floración, mientras que la segunda lo hace a fines de verano comienzos de otoño. El crecimiento reproductivo comienza después de un corto período de inactividad invernal del árbol, con el desarrollo de la yema floral seguido de la floración y fructificación. Inmediatamente después de la cuaja, hay una caída de frutos que han sido pobremente polinizados junto con una alta proporción de fruta que parece bastante normal. Esta caída de frutas coincide con el crecimiento vegetativo de primavera, cuando ambos están compitiendo por la fuente limitada de recursos, ya reducidos por la floración. El hecho más importante de crecimiento reproductivo, es la segunda caída de frutas que se produce a fines del verano e igualmente, está asociado con el mayor crecimiento vegetativo que ocurre en esta época donde ambos compiten por los recursos del árbol.

22 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Gráfico 1-2 Ciclo fenológico - Palto Hass. 12

Crecimiento relativo

10 8 6 4 2 0 Ago

Sep

[

Oct

Nov

Dic

Ene

Feb

Mar

Abr

May

C. reproductivo

Floración

C. vegetativo

C. radicular

Caída frutos

Crecimiento frutos

Jun

]

Fuente: UCV Quillota.

El modelo fenológico no es distinto en otras zonas climáticas de paltos en nuestro país, sin embargo, sus ciclos pueden estar más adelantados en las zonas más calurosas del interior o más atrasados en zonas frías costeras.

Variedades La principal variedad tanto en Chile como a nivel mundial es Hass. Se caracteriza por ser una fruta de muy buena calidad, negra cuando madura, de calibre medio a pequeño, de piel gruesa y rugosa con semilla relativamente pequeña. Es de una cosecha muy amplia, encontrándose

casi todo el año en el mercado. En el Cuadro siguiente se pueden ver los períodos de cosecha de diferentes variedades cultivadas en Chile (Cuadro 1-5). La otra variedad de piel negra es Negra La Cruz, una variedad mayormente de raza mejicana de piel lisa, brillante y delgada. Esta variedad tiene un mercado interno atractivo por la fecha de cosecha pero no es de calidad comparable a Hass. El resto de las variedades indicadas son de fruta de color verde, que las hace normalmente tener menores precios, siendo Fuerte y Edranol, de muy buena calidad y Bacon y Zutano de pobre calidad organoléptica.

Cuadro 1-5 Distribución de cosecha para diferentes variedades de paltas en Chile.

Variedad Hass Fuerte Bacon Zutano Edranol N. de La Cruz Máxima cosecha. Menor cosecha.

Ene

Feb

Mar

Abr

May

Jun

Jul

Ago

Sep

Oct

Nov

Dic

23 Palto y cítricos: Generalidades del cultivo

Propagación Los paltos en Chile se propagan en patrones de semilla (francos) y sólo en forma restringida y, normalmente a nivel de ensayo, se usan portainjertos clonales. Esto debido al alto costo y dificultad de la propagación clonal y al hecho de que hasta ahora las condiciones de cultivo en Chile no han requerido su uso de forma evidente. Otros países como Sudáfrica y EE.UU. (California) se vieron obligados a desarrollar portainjertos clonales, debido a la Tristeza del Palto provocado por Phytophthora, que bajo sus condiciones es tan severa y agresiva que no permite tener buenos resultados con portainjertos de semilla. En Chile, si bien este hongo está presente, esta enfermedad no es un problema importante y sólo bajo condiciones de mal manejo o suelos con problema de drenaje es una limitante. En la actualidad se están estudiando nuevos portainjertos clonales que han sido seleccionados por su productividad, además de su tolerancia a Phytophthora, que deben ser probados para determinar si los costos iniciales mayores que implica el uso de portainjertos clonales se justifica con mejores resultados productivos. Entre los portainjertos de semilla usados en Chile dominan Mexícola y Nabal. Mexícola ha sido el portainjerto tradicional y, en general, presenta buenas condiciones de cultivo y producción. En los últimos años se ha empezado a usar Nabal por ser más tolerante a la salinidad, para zonas con problemas. En los pocos ensayos en que se han comparado Mexícola y Nabal en condiciones de cultivo normales, sin salinidad, pareciera ser que no habría ventajas o diferencias importantes entre ellos. Sin embargo, estas experiencias son iniciales y se requerirían más años de comparación para tener mejores datos de comparación. Se están probando también otros portainjertos de semilla que podrían presentar algunas ventajas, pero están recién en etapa de ensayo y evaluación.

Plantación En cuanto a distancias de plantación se ha pasado por muchos cambios en los últimos años, con una clara tendencia a aumentar las densidades de plantación y a reducir el tamaño de los árboles para facilitar su manejo. Una de las bases para el manejo de árboles tan grandes y vigorosos como los paltos en marcos de plantación menores, es el desarrollo de técnicas de poda efectivas y el hecho de que, en plantaciones que están a tres metros o menos de distancia entre los árboles, la competencia a nivel de raíces hace que las plantas vegeten menos y sean más pequeñas y productivas. Debido a lo anterior hay dos esquemas que se están recomendando en la actualidad, uno de alta densidad ya más probado, con distancias que van de 5 a 6 metros entre hileras y 2 a

3 metros sobre la hilera, y otro de muy alta densidad que implica marcos de plantación de 3 por 3 o incluso menores. Los marcos de plantación de alta densidad en un esquema rectangular implica tener distancias de plantación menores o iguales a tres metros en la sobre hilera para reducir el vigor de las plantas y una distancia de 5 a 6 metros entre hileras que permita la entrada de luz y la circulación de maquinaria, si esto es posible por la topografía. La formación de los árboles es en forma piramidal y en seto con alturas de 3,5 a 4,5 metros. La poda se hace de manera lateral y requiere cada cierto tiempo (3 a 4 años) el realizar podas más fuertes para controlar el tamaño de los árboles y asegurar la iluminación de la canopia. Sistemas de este tipo se han mostrado altamente productivos y fáciles de manejar. Si bien tiene la ventaja de poder usar maquinaria tienen el inconveniente, especialmente en cerro, que la altura de los árboles sigue siendo considerable. Un nuevo sistema de plantación, que en Chile no tiene más de cuatro años de experiencia, es el de muy alta densidad. Este sistema, desarrollado inicialmente en California, tuvo como objetivo inicial el reducir los costos de manejo, particularmente de mano de obra en cosecha, que es una limitante importante en EE.UU. Para esto se tiene que contar con un árbol pequeño, de no más de 2 metros de altura que permita alcanzar cualquier parte de la canopia desde el suelo. Para usar eficientemente el espacio disponible y lograr la mejor intercepción de luz de parte de la canopia la altura del árbol no debe superar, en general, el 70% de la distancia entre árboles, por lo que al usar este criterio de manera inversa se llega a que la distancia entre plantas debiera ser no superior a 3 metros. Esto concuerda con el otro criterio antes descrito que indica que el vigor de los árboles se puede reducir por la competencia de los sistemas radiculares cuando los árboles están plantados a distancias menores o iguales a tres metros. El otro concepto que este sistema considera es que árboles individuales, bien iluminados por todas sus caras tienen una intercepción de luz más eficiente y una mayor superficie productiva que un huerto formado en seto. Es así que se llega a una distancia de plantación de 3 por 3 metros, formando los árboles en eje con ramas laterales horizontales productivas y un sistema de poda de formación y productiva con intervenciones más seguidas pero menos severas. Las primeras experiencias con este sistema es que se aumenta de manera significativa la precocidad de los huertos y su productividad potencial, reduciéndose los costos de mano de obra y facilitando las aplicaciones foliares si es que son necesarias. El sistema de poda también es más simple de entender y realizar y el manejar árboles cuya canopia es alcanzable en su totalidad desde el suelo permite hacer otras labores que en árboles más grandes simplemente no se

24 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

puede ni siquiera considerar. Una restricción importante de los huertos de ultra alta densidad es que no permiten la circulación con maquinaria por la entre hilera. Debido a esto es importante contar con un diseño de caminos más cercanos y, generalmente, se recomiendan en huertos donde, por sus pendientes y topografía, de por si no se puede usar maquinaria.

Además del uso de polinizantes es importante el contar con abejas para que haya una buena polinización y cuaja. Lo ideal es contar a lo menos con 10 colmenas de buena calidad por hectárea durante los meses de floración (septiembre a noviembre). También sería interesante ensayar en Chile la polinización con abejas nativas (Figuras 1-4 y 1-5).

Polinizantes

Riego

Un factor importante en el momento de plantar un huerto, es el incorporar variedades polinizantes ya que se ha observado que al combinar variedades tipo A con B se logran mejores producciones, que estaría relacionado a la calidad y cantidad de polen disponible en el momento de la cuaja. Desde este punto de vista, se ha comprobado que la variedad Hass es un débil autopolinizante, posiblemente debido a un problema de calidad de polen. En estudios hechos en Chile se ha verificado que variedades tales como: Edranol, Zutano y Bacon tendrían una mejor capacidad de cuajar y producir fruta en Hass. Los polinizantes se ponen al 11% cuya distribución es la siguiente:

Los paltos son muy sensibles a la asfixia radicular y poseen un sistema radicular muy superficial. Estos factores, junto con el estado fenológico y la demanda atmosférica, son muy importantes de considerar al definir el sistema y programa de riego que se use. Debido a que no se puede controlar bien la cantidad de agua que se aplica y que es fácil producir asfixia radicular, aunque sea por períodos reducidos, los sistemas de riego por inundación no son muy efectivos para maximizar la producción en paltos. Por su sistema radicular extensivo y superficial es necesario mojar una proporción importante de la superficie del suelo en los huertos de palto. En ensayos realizados en Israel se mostraron efectos positivos sobre el estatus hídrico del palto durante períodos de alta demanda evapotranspirativa, al ampliar la zona humedecida del suelo del 25% al 76%.

xxxxxxxxxxx xoxxoxxoxxo x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x x xoxxoxxoxxo xxxxxxxxxxx

x Hass o Polinizante

El sistema de riego tecnificado mas utilizado en paltos es el microaspersor mientras que los sistemas de riego por goteo presentan algunas limitantes. Esto debido a las carac-

Figura 1-4 La abeja es el principal agente polinizador en paltos.

R. Ripa

F. Gardiazabal



Figura 1-5 Abeja nativa (Colletes seminitidus), polinizador de palto.

25 Palto y cítricos: Generalidades del cultivo

Cuadro 1-6 Coeficiente de Bandeja (Kb) y Coeficiente de Cultivo (Kc) para paltos.



Ago

Sep

Oct

Nov

Dic

Ene

Feb

Mar

Abr

May

Jun

Jul



Kb

1,10

1,00

0,80

0,75

0,75

0,75

0,80

0,85

0,95

0,95

1,10

1,20



Kc

0,72

0,72

0,72

0,72

0,72

0,72

0,72

0,72

0,72

0,72

0,72

0,72

Nota: En zonas calurosas el Kc de noviembre a marzo es de 0,75. Fuente: Aproximación a los Requerimientos Hídricos del Palto. Sociedad Gardiazabal y Magdahl Ltda.

terísticas ya descritas del sistema radicular de los paltos y porque los goteros son difíciles de revisar bajo la hojarasca que se forma bajo los árboles y porque tienden a producir excesos de agua (para raíces tan sensibles a la asfixia como las de los paltos) directamente bajo el punto de goteo. Sin embargo, un sistema de riego por goteo bien diseñado y manejado puede dar buenos resultados en paltos. Para la programación y control del riego, se usan idealmente combinados, calicatas, tensiómetros o sondas de capacitancia y bandejas evaporimétricas Clase A o Estaciones Metereológicas. Las calicatas, los tensiómetros y las sondas permiten controlar las condiciones de humedad en el suelo y se puede programar el riego de acuerdo a los niveles de agotamiento de agua en las estratas donde está la mayor cantidad de raíces absorbentes (generalmente se riega cuando se ha agotado un tercio de la humedad disponible). Es importante que las calicatas y los tensiómetros o sondas se realicen o estén instalados en zonas donde haya raíces activas y del lado norte de árboles sanos. La programación del riego usando una bandeja evaporimétrica o estación metereológica, presenta una serie de ventajas: permite adaptarse directamente a las demandas atmosféricas diarias de una zona haciendo más preciso el programa de riego pudiéndose programar mejor tanto las frecuencias como los tiempos de cada riego. Para usar este sistema de programación se usa una bandeja evaporimétrica clase A o una estación metereológica que determina la evaporación (ETo) según el método de Penman-Monteith. Con este valor se calculan las necesidades de riego según la formula anterior. Los Kb y Kc utilizados en Chile están basados en trabajos realizados en la zona de Quillota (los que debieran ser estudiados y adaptados para otras zonas productoras) y se presentan en el Cuadro1-6. Es importante que, en la programación de riego se trate de mantener la duración de los riegos uniforme, de tal manera de mojar siempre una profundidad de suelo similar, y ajustar la frecuencia a las variaciones en la demanda. Además es importante el permitir una buena aireación del suelo, distanciando los riegos lo suficiente como para que esto ocurra, especialmente donde existe arcilla.

Fertilización El palto se caracteriza por tener una baja demanda de nutrientes en general y la estrategia de fertilización del palto Hass en Chile está en base al uso de Nitrógeno, Boro y Zinc aplicado al suelo. En el caso del nitrógeno es importante el controlar muy bien las aplicaciones, ya que tanto la falta como el exceso, tienen efectos directos sobre la producción. En el caso de excesos de N se produce una competencia entre crecimientos vegetativos y frutitos en desarrollo, que disminuye la cuaja. Debido a esto, además del uso de análisis foliares, cuyos estándares se muestran en el Cuadro 1-7, es importante observar el vigor del huerto, los niveles de floración y la producción esperada. Dependiendo de esto se recomiendan fertilizaciones medias de 180 unidades de nitrógeno por hectárea, pudiendo fluctuar entre 120 unidades o menos, en caso de árboles con exceso de vigor y baja producción, hasta 240 unidades o más, en el caso de árboles débiles y/o con alta producción. Las fechas de aplicación también se deben ajustar de acuerdo a la floración, vigor, condiciones de cuaja, etc. En general se aporta el 30% al 40% del nitrógeno a fines del verano comienzos de otoño, otro 30% al 40% en plena floración y el 20% al 30% en el mes de enero. Whiley y Lahav en el año 2002, publican Estándares Nutricionales para el palto y que se detallan en el Cuadro 1-7. En el caso de la deficiencia de Cinc se reconoce por presentar fruta más pequeña, lisa y redondeada, además de hojas más pequeñas y con clorosis intervenal difusa y brotes cortos. Se presenta especialmente en zonas con falta de cinc en el suelo o por encontrarse bloqueado, o después de heladas o pérdidas importantes de follaje. Se corrige con aplicaciones al suelo de Sulfato o quelato de Zinc. En el caso del Boro su deficiencia se muestra como una deformación de la fruta que presenta un cuello torcido o curvo y la inserción del pedúnculo es lateral. Pareciera que no habría efectos sobre la producción con niveles inferiores a 30 ppm. Su corrección se hace con aplicaciones de ácido bórico, localizadas en el suelo (Figura 1-6).

26 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Cuadro 1-7 Guía de Análisis Foliar, para diagnosticar el nivel de nutrientes en paltos.

Nutriente

Deficiente (menos de)

Rango Comercial

Exceso (más de)

N (%)

1,60

1,6-2,8

3,0

P (%)

0,14

0,14-0,25

0,3

K (%)

0,90

0,9-2,0

3,0

Ca (%)

0,50

1,0-3,0

4,0

Mg(%)

0,15

0,25-0,80

1,0

S (%)

0,05

0,20-0,60

1,0

Mn (mg kg–1)

10-15

30-500

1.000

Fe (mg kg–1)

20-40

50-200

?

Zn (mg kg–1)

10-20

40-80

100

B (mg kg–1)

10-20

40-60

100

Cu (mg kg–1)

2-3

5-15

25

Cl– (%)

?



0,25-0,50

Na (%)

?



0,25-0,50

F. Gardiazabal

Fuente: Whiley, A., Schaffer, B. y Wolstenholme, B. El Palto. Botánica, producción y usos.

Figura 1-6 Rama de la variedad Hass con gran cuaja de frutitos y brotes vegetativos vigorosos.

27 Palto y cítricos: Generalidades del cultivo

Cítricos

Superficie

Si bien en Chile se han cultivado cítricos durante mucho tiempo, a nivel mundial no tenemos una posición o presencia muy importante, especialmente en comparación con otras industrias como la de EE.UU., España, Brasil, Argentina, Sudáfrica, Australia, etc., que por tamaño son muy superiores a la nuestra. Sin embargo, Chile tiene oportunidades de desarrollo de su citricultura a nivel mundial en la medida de que se enfoque en nichos y ventanas de mercado específicas. Al estar situados en el hemisferio sur, Chile puede ofrecer fruta de contra estación en el hemisferio norte, que corresponde a un mercado enorme en consumo de cítricos, teniendo ventajas competitivas y comparativas importantes comparado con otros países competidores del hemisferio sur.

La superficie de plantación de cítricos en Chile se puede apreciar en el Cuadro 1-8. Hasta hace algunos años la industria citrícola nacional se había orientado principalmente al mercado interno, presentando sólo una exportación relevante para limones. Sin embargo, en los últimos 10 años el interés por exportar otros cítricos ha crecido al verse oportunidades de contra-estación en el hemisferio norte y por los bajos precios que ha mostrado el mercado nacional que, por su tamaño, se ve saturado fácilmente. Es el caso de Mandarinas y Naranjas que han pasado de 1.245 y 7.294 ha respectivamente en el Censo de 1997 a 3.448 y 9.231 ha en el Censo de 2007 (Cuadro 1-9).

Cuadro 1-8 Superficie de cítricos en Chile.

Especie

En formación

En producción

Naranjo

1.788

7.443

Total ha 9.231

Limonero

872

6.984

7.856

Mandarino

852

2.596

3.448

Pomelo

45

310

355

Lima

26

120

146

Total

21.036

Fuente: ODEPA-CIREN. Catastro Frutícola 2007.

Cuadro 1-9 Plantación de cítricos por región.

Región I Tarapacá II Antofagasta

Naranjo 96

Limonero 28

Mandarino

Pomelo

Lima

23

21

66

Total Región

%

234

1,11 0,04

4

4

1

0

0

9

129

185

87

5

0

406

1,93

IV Coquimbo

1.028

1.444

2.061

94

72

4.699

22,34

V Valparaíso

1.813

2.053

540

107

4

4.517

21,47

Región Metropolitana

2.354

2.997

364

53

3

5.771

27,43

VI O’Higgins

3.611

888

365

74

0

4.938

23,47

140

180

2

0

0

322

1,53

24

39

0

0

0

63

0,30

2

37

0

0

0

39

0,19

III Atacama

VII Maule VIII Bío-Bío IX Araucanía

Fuente: ODEPA-CIREN. Catastro Frutícola 2007.

28 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Cerca del 95% de las plantaciones están entre la IV y la VI Regiones, destacándose las plantaciones de Mandarinas en la IV Región, los Limoneros en la V, Limoneros y Naranjos en el Área Metropolitana y los Naranjos en la VI Región.

Mercados Mandarinas En el Gráfico 1-3 se puede ver el fuerte crecimiento en las exportaciones de mandarinas chilenas, pasando de 1.400 toneladas en el año 1997 a 27.000 toneladas en el año 2007. El interés de producir y exportar mandarinas en Chile nace de la posibilidad de abastecer a mercados del hemisferio norte en la contra-estación ya que, a diferencia del caso de limones y naranjas, en el caso de mandarinas no hay producción local en el hemisferio norte entre marzo y octubre. Sin embargo, durante el período de exportación de Chile, que puede ir de fines de abril hasta septiembre, el consumo en el hemisferio norte es menor al que presenta durante su otoño e invierno tanto por razones de clima y costumbre como por la presencia y competencia de fruta propia de verano. Considerando lo anterior se puede reconocer que en general el consumo es bajo y poco atractivo desde fines de junio y hasta julio y, por lo tanto, las alternativas más atractivas para Chile es la producción más temprana (fines de abril y mayo) o definitivamente la producción tardía que se cosecha a partir de mediados de julio y hasta septiembre. También se ven algunas diferencias entre los distintos mercados.

Europa. El mercado está dominado tanto por volúmenes como por precio por Sudáfrica entre abril y julio. Sólo se abre una oportunidad para Chile a continuación de Sudáfrica, entre agosto y septiembre. Sólo Inglaterra ha mostrado interés por fruta chilena al ser un mercado más sofisticado y que puede pagar más por fruta chilena que el resto de Europa. Hasta ahora esta ventana se ha tratado de llenar con mandarinas que se cosechan en junio y hasta la primera semana de julio en Chile y que entran en un programa de guarda en destino, particularmente en Inglaterra, para tratar de prolongar la temporada del hemisferio sur. El hecho de que la fruta chilena se pueda cosechar más tarde y guardar más tiempo que la sudafricana se debe a que nuestras condiciones de cultivo son más frías y menos lluviosas que las de Sudáfrica. Sin embargo, los programas de guarda son costosos y de alto riesgo, lo que afecta los retornos en Chile. El período de agosto hasta octubre, que es cuando empieza la producción en España y el Mediterráneo, es uno de los más atractivos tanto para naranjas como para mandarinas. Esto debido a que el consumidor ya esta cansado de consumir fruta de verano y el clima empieza a refrescar, lo que hace el consumo de frutas más ácidas más atractivo. Hasta ahora no había variedades de buena calidad que pudiesen cubrir este período satisfactoriamente, el contar con nuevas variedades como W Murcott (Figura 1-7) que permitiría cosechar en Chile entre mediados de julio hasta septiembre, cubriendo esta ventana en el mercado. Sin embargo, muchas de las nuevas variedades de mandarinas son variedades protegidas y normalmente, tienen restricciones comerciales que se deben entender y manejar. Posiblemente Sudáfrica tam-

Gráfico 1-3 Exportación de mandarinas (1997-2007). Miles Ton 30

Millones US$

25 20 15 10 5 0

[

1997 Europa

1998

1999

Latinoamérica

Fuente: ODEPA 2008.

2000

2001

Oriente

2002 Canadá

2003

2004

EE.UU.

2005 Rusia

2006

2007

Valor FOB

]

29 Palto y cítricos: Generalidades del cultivo

F. Gardiazabal

En el caso de Canadá no han existido restricciones fitosanitarias y Chile ya tiene una posición clara en este mercado. Ha desplazado, por calidad y confiabilidad a la fruta sudafricana de los supermercados, ya que Sudáfrica usa este mercado para deshacerse de fruta con problemas o fruta que no logró cumplir con el tratamiento cuarentenario de frío para entrar a EE.UU. Las características de consumo de Canadá serían similares a las de EE.UU., prefiriéndose la fruta temprana y tardía y reconociéndose el período de menor consumo entre el 15 de junio al 15 de agosto.

Figura 1-7 Árboles de mandarinos W Murcott antes de la cosecha en su segundo año de plantación.

bién podrá extender más su temporada con esta variedad, sin embargo, Chile por sus condiciones de cultivo siempre podrá llegar más tarde a Europa. EE.UU. y Canadá. La temporada 2005 fue la primera en que se autorizó la entrada de mandarinas chilenas a EE.UU. Esto debido a restricciones fitosanitarias por Falsa Arañita Roja de la Vid (Brevipalpus chilensis) que fueron superadas al aprobarse un sistema de certificación e inspección de huertos y fruta por parte del USDA. Las primeras temporadas han tenido resultados positivos desde el punto de vista de volúmenes y precios mostrando los mejores efectos al inicio de la temporada (mayo e inicios de junio) tendiendo a bajar hacia fines de junio y julio, en que el consumo claramente se deprime. Esto es similar a lo descrito para Europa y también en este caso hay interés por contar con fruta nuevamente a partir de mediados de agosto en adelante, lo que calzaría con la temporada de W Murcott. La competencia en EE.UU. es también con fruta sudafricana, sin embargo, para poder entrar a EE.UU, Sudáfrica debe realizar un proceso de tratamiento cuarentenario de frío (por mosca de la fruta) que retrasa su ingreso y afecta negativamente su calidad y presentación. Desde este punto de vista junto con costos más bajos y tiempos de tránsito más cortos, Chile tiene ventajas competitivas evidentes. Una clara ventaja del mercado norteamericano con respecto a Europa y Japón son los tiempos de tránsito más cortos (18 días en comparación con 28 a 32 días), lo que disminuye el riesgo de arribos con problemas, y costos más bajos. Sin embargo se requiere más experiencia para poder saber qué volúmenes podrá absorber este mercado y cuándo.

Japón. Hasta ahora no habido un claro posicionamiento de las mandarinas chilenas (clementinas) en este mercado. El principal problema es que este es un mercado muy sofisticado en el consumo de mandarinas, acostumbrado a contar con fruta grande y muy dulce (sobre 12°B) lo que es difícil de alcanzar con clementinas en Chile. Si se analizan los embarques de Chile a este mercado se puede reconocer que no ha crecido en volumen como lo han hecho los otros mercados y cada vez los embarques se reducen y concentran más temprano en la temporada. A partir de fines de junio el consumo se frena fuertemente y, a diferencia de los otros mercados, no habría interés en fruta tardía (de agosto y septiembre) ya que en esa época cuenta con fruta de producción local de gran calibre y dulzor con la que difícilmente se podría competir. Al ser un mercado muy sofisticado, que exige alta calidad, y en que los costos de manipulación de fruta son altos, cualquier problema de arribo después de un tiempo de tránsito superior a 28 días es de alto costo y un gran riesgo.

Naranjas Hasta hace algunos años la producción de naranjas estaba orientada al mercado nacional, en la Figura 3 se puede ver como ha crecido la exportación a mercados del hemisferio norte, principalmente a Japón e Inglaterra. Esto se debe a que en la actualidad la fruta producida en Chile ha mejorado su calidad por el uso de nuevas variedades, portainjertos, el desarrollo de nuevas zonas y sistemas de producción. También ha influido el fuerte deterioro que han tenido los precios en el mercado local, especialmente entre mediados de junio y fines de agosto. Esto último no sólo por la mayor oferta de naranjas sino que también por el creciente volumen de mandarinas producidas que compiten directamente con el consumo de naranjas. Esta competencia no es menor y ha sido un hecho en todos los mercados donde se ha desarrollado el consumo de mandarinas, ha afectado y reducido el consumo de naranjas per cápita en esos mercados. Los cambios en la situación del mercado local y el interés por exportar han significado un cambio en el diseño y objetivos de los huertos, quedando en muchos casos

30 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

huertos antiguos, incluso de 5 ó 6 años edad, obsoletos o con problemas de rentabilidad importantes. Esto se debe principalmente por el recambio en el uso de portainjertos, que junto con el clima juegan en Chile un papel más importante que la variedad en la calidad interna de la fruta, y también por el requerimiento de contar con altas producciones y, especialmente altos porcentajes de exportación para lo que se requiere un diseño de plantación diferente al tradicional, con densidades de plantación mayores. La situación de consumo de naranjas de ombligo en el hemisferio norte es similar a lo descrito para mandarinas. Es así que el consumo es menor desde fines de junio hasta inicios de agosto, lo que hace que en Chile, dependiendo de los mercados objetivo, un proyecto de plantación de naranjas debiera estar orientado a la producción de fruta de buena calidad o muy temprana (cosecha antes de fines de mayo) o tardía (cosechada desde fines de julio) (Gráfico 1-4). Europa. Al igual que en el caso de las mandarinas nuestro principal competidor es Sudáfrica, cuya temporada es al menos un mes más temprana que la chilena y que disminuye su oferta en agosto (tanto por razones de cosecha como por razones de condición de fruta). Debido a esto Europa, y particularmente Inglaterra, están interesados en naranjas de ombligo que puedan cubrir el período posterior a la temporada sudafricana, a partir de fines de agosto. EE.UU. y Canadá. En el caso de las naranjas no esta autorizada su entrada a EE.UU. por el problema de Bre-

vipalpus chilensis. No existe un protocolo de certificación e inspección como para el caso de mandarinas si bien se está trabajando en lograr el ingreso de las naranjas a EE.UU. La diferencia con mandarinas es que las naranjas presentan un ombligo que es difícil de inspeccionar. Una alternativa a esto es el uso de fumigación con Bromuro de Metilo, que en el caso de naranjas no necesariamente presenta grandes problemas, pero debe pasar por un sistema de aprobación de parte del USDA para poder usarse. Por otro lado, debido a normativas de SAG en Chile, la presencia de este ácaro, independiente del destino de la fruta, es motivo de rechazo para la exportación, lo que se ha transformado en un problema importante en las últimas temporadas. En el caso de EE.UU., el principal competidor sería Australia, sin embargo, por costo, cercanía y calidad la fruta chilena debiera tener ventajas. Debido a lo anterior sólo Canadá es una alternativa en Norteamérica y por ser un mercado reducido y tener competencia de mandarinas tanto chilenas como sudafricanas sólo se pueden enviar volúmenes restringidos, tarde en la temporada. Japón. Ha sido junto con Europa, el principal destino de exportación de la naranja chilena con retornos hasta ahora atractivos. Se compite principalmente con naranjas Valencia de California que se venden a menores precios y que, en años de alta producción, tienden a afectar a las naranjas de ombligo. Nuevamente se da el caso que el mercado es atractivo temprano y mientras más tarde en la temporada menor es el consumo y mayor la competencia por lo que los precios pueden bajar de manera importante.

Gráfico 1-4 Exportación de naranjas (1997-2007). Miles Ton

Millones US$

30 25 20 15 10 5 0 1997

[

1998

1999

Europa

Fuente: ODEPA 2008.

2000

2001

Latinoamérica

2002 Oriente

2003

2004 Canadá

2005

2006

Valor FOB

2007

]

31 Palto y cítricos: Generalidades del cultivo

Gráfico 1-5 Exportación de limones (1997-2007). Miles Ton

Millones US$

50 40 30 20 10 0 1997

[

1998 Europa

1999

2000

2001

Latinoamérica

2002

2003

Oriente

2004 EE.UU.

2005

2006 Valor FOB

2007

]

Fuente: ODEPA 2008.

Limones Si se analizan las tendencias de muy largo plazo de la plantación, oferta y precios del limón se pueden reconocer ciclos a lo largo de los años. En general, lo huertos de limoneros dejan de ser buenos productores después de 15 a 20 años. Cuando la oferta baja, los precios suben y se retoma la plantación de nuevos huertos, aumentando nuevamente la oferta, bajando los precios y disminuyendo las plantaciones hasta que por el envejecimiento natural se entre nuevamente en un ciclo de plantación. En los últimos años el negocio del limón a cambiado tanto a nivel del mercado interno como en exportación. En el mercado nacional tradicionalmente los precios eran atractivos entre enero y fines de mayo, pudiendo alcanzar más de US$ 1 por kilo en años en que, por heladas en la temporada anterior, había una menor oferta. Posteriormente los precios bajaban fuertemente, entre junio y enero, debido a la mayor oferta de fruta en invierno. Esto hacía que los productores se orientaran al mercado nacional lo más posible y sólo empezaban a exportar cuando el precio en Chile bajaba a fines de mayo. En la actualidad los precios de verano y otoño son relativamente bajos si no hay heladas, en promedio no superiores a US$ 0,30 por kilo, debido a que durante los años 90 se hicieron muchas plantaciones nuevas, tanto por los resultados en el mercado nacional como por las expectativas de exportación, asociadas a la apertura de Japón como mercado. Lo anterior hizo aumentar los volúmenes producidos por Chile, que ha significado una reducción de precios no sólo en nuestro mercado nacional, sino que también en exportación. Esto ha hecho que en los últimos cinco años haya una fuerte reducción de la plantación de limoneros (Gráfico 1-5).

En los años 90 uno de los factores que impulsó la plantación de limoneros fue la apertura de Japón como mercado. Esto hizo que los retornos de la exportación –hasta ese momento concentrada en EE.UU.– subieran fuertemente con valores para Japón de entre US$ 0,5 a 1,1 por kilo libre a productor y, para el caso de EE.UU., con valores para un CAT 2 de entre US$ 0,2 a 0,4 por kilo. Sin embargo, en los últimos años el aumento de los envíos nacionales a Japón (al que se envía principalmente el CAT 1), particularmente a partir de fines de junio, más la oferta de fruta de guarda de California y fruta de Sudáfrica y Argentina, que entran con tratamientos cuarentenarios de frío, han hecho que los retornos de Japón se muevan entre US$ 0,15 a 0,6 por kilo. Por otro lado, en la actualidad el mercado en EE.UU. muestra resultados para fruta CAT 2 de entre US$ 0,1 a 0,4 por kilo. Europa nunca ha sido una alternativa de mercado atractiva para Chile ya que durante nuestra temporada está dominada por Argentina y Sudáfrica con fruta de buena calidad y bajos precios. Durante la temporada chilena, que va de abril a agosto, el mercado de EE.UU. y Japón está abastecido principalmente por fruta de la zona costera de California. Esta fruta corresponde a programas de guarda que, si bien tiene fruta de buena calidad en general, es fruta menos confiable ya que está al límite de su vida de poscosecha y presenta comúnmente problemas de pudriciones. Además es fruta de alto costo, comparada con la fruta que se produce en otras zonas de California y Arizona entre agosto y marzo. La fruta de Chile compite principalmente por costo y por ser fruta considerada más “fresca” y confiable que la de California. En EE.UU. la temporada chilena termina con el inicio de cosecha en las zonas des-

32 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

que presenta acumulaciones térmicas que van de 1.300 a 1.600 horas de acumulación térmica, cosecha normalmente a partir de la primera semana de mayo alcanzando también niveles sobre 11 °B en su temporada. Finalmente la zona costera entre la 4ª y 6ª región, que poseen acumulaciones térmicas de entre 1.000 a 1.200 horas por año, empiezan su cosecha a partir del 20 de mayo y promedian entre 9,5 y 10,5 °B. Sin embargo, para producir fruta tardía, posiblemente las zonas interiores del norte sean demasiado tempranas.

F. Gardiazabal

érticas de California y Arizona en agosto y con la entrada de fruta del norte de México a fines de julio. En Japón, son principalmente los volúmenes de fruta chilena que se acumula en inventario, más la entrada tardía de Sudáfrica y Argentina lo que hace bajar los precios y hace terminar nuestra temporada a partir de fines de julio. Esto ha sido muy consistente en las últimas temporadas, haciendo que sea la fruta más temprana, cosechada en Chile a partir de abril, la que logra los mejores precios, manteniéndose precios atractivos hasta los embarque de mediados de junio, a partir de los cuales los precios bajan fuertemente (Figura 1-8).

Figura 1-8 Limones de exportación en la mesa de selección del packing.

Clima Para el caso de Mandarinas y Naranjas, el mercado internacional exige tener altos niveles de sólidos solubles, que están dados por una parte por la condición climática y por otra la utilización de distintos portainjertos.

En el caso del limón los atributos de calidad más importantes son el calibre, color, aspecto externo y contenido de jugo. El sabor y el contenido de sólidos solubles no son un problema o factor a considerar. Esto hace que a nivel de portainjerto se use casi exclusivamente Citrus macrophylla, que favorece los parámetros antes descritos además de ser altamente productor pero con una muy baja acumulación de sólidos solubles y acidez en la fruta. Este portainjerto hace al árbol más sensible al frío y es susceptible a nemátodos (Tylenchulus semipenetrans) y tiene una vida productiva con fruta de buena calidad y calibre de alrededor de 15 años. Esto último hace que no se recomiende usar Macrophylla en replantes y que se puedan reconocer ciclos en el negocio y precios que se han presentado históricamente cada 15 años aproximadamente. Otro factor que tiene un efecto directo sobre la calidad y condición de la fruta es la incidencia de lluvia. En zonas lluviosas los riesgos de pudriciones de fruta en poscosecha son mayores, sin embargo también afecta los niveles de sólidos solubles de la fruta, diluyéndolos, acelera la pérdida de acidez y afecta a la piel de la fruta que puede presentar decaimientos y un envejecimiento acelerado. Con respecto a temperaturas limitantes, se puede visualizar a las distintas temperaturas que se dañan los frutos cítricos, dependiendo del portainjerto que estén implantados (Fuente: The Citrus Industry, Volumen III): • Limoneros:

En Chile se podrían reconocer tres zonas de producción desde el punto de vista de clima para estas dos especies:

– Frutos recién cuajados < 1,2 cm diámetro (-0,9 a -1,4 °C).

• La zona interior del Norte (El Palqui y Vicuña).

– Frutos amarillos listos para cosecha (-0,9 a -1,4 °C).

• La zona interior de la zona Central. • Zonas con influencia costera de la 4ª a la 6ª Región.

– Frutos sobre 1,2 cm diámetro y frutos verdes (-1,4 a -2,0 °C).

La principal influencia que tienen estas condiciones climáticas es sobre la fecha de cosecha y la calidad interna de la fruta. La zona interior del norte (en general a más de 800 m de altura y con más de 1.700 horas de acumulación térmica base 12,5 °C) pueden cosechar mandarinas y naranjas tempranas a partir de abril, deverdizando parte de la fruta, y alcanzando fácilmente sobre 12 °B en plena temporada. La zona interior de la zona central,

– Yemas y botones florales (< -2,8°C). • Naranjos Mandarinos y Pomelos: – Fruta verde (-1,4 a -1,9 °C). – Fruta semimadura (-1,8 a -2,2 °C). – Fruta madura (-2,2 a -2,8 °C).

33 Palto y cítricos: Generalidades del cultivo

El portainjerto que da mayor resistencia al frío es el Poncirus trifoliata (en Chile se utiliza principalmente la selección Rubidoux), tienen buena resistencia el Naranjo Agrio, Mandarina Cleopatra y Citranges (C-35, Carrizo y Troyer), resistencia media para Citrumelo CPB 4475, Naranjo Dulce y Citrus volkameriana, siendo el más sensible el Citrus macrophylla. Con respecto al viento los cítricos en general son más sensibles que los paltos y en zonas ventosas el porcentaje de exportación puede disminuir drásticamente por efecto del “russet” en la fruta, siendo necesario y recomendable el uso de cortinas cortaviento.

Suelo En general, los cítricos se adaptan bien a una amplia gama de suelos, especialmente al poder disponer de distintos portainjertos, dentro de las características de los suelos, podemos distinguir: • Profundidad efectiva: En general suelos con más de 1 m de profundidad no presentan limitaciones para esta especie, cuando se usa riego por goteo y no existe riesgo de anegamientos o asfixia radicular los cítricos requieren al menos profundidades de 80 cm. Si el suelo tiene menor profundidad se puede hacer camellones para paliar en parte este defecto. • Textura: En suelos arcillosos los árboles tienden a tener menor desarrollo, tienen una recuperación más lenta a los daños de heladas, las frutas se cosechan más tarde, son de menor tamaño, con piel más gruesa y por ende menor cantidad de jugo. En cuanto a la asfixia radicular, los portainjertos más resistentes son el Poncirus trifoliata y Citrumelo CPB 4475. Buena resistencia presentan Naranjo Agrio y Mandarino

Común, siendo sensibles Naranjo Dulce, Citranges, Citrus volkameriana, Citrus macrophylla y Mandarino Cleopatra. • Salinidad (CE mmhos/cm en el extracto de saturación del suelo): Hasta 1,7 dS/cm no hay reducción de cosecha. Con 2,3 se reduce el 10%, con 3,3 el 25% y con 4,8 el 50% de reducción. La máxima resistencia la tienen el Mandarino Cleopatra, Citrus volkameriana y Citrus macrophylla. Resistencia media el Citrumelo y Naranjo agrio, siendo sensibles Poncirus trifoliata, los Citranges Troyer y Carrizo y el Naranjo dulce • Carbonatos: Los excesos de Carbonatos en el suelo acarrean deficiencias de hierro en los cítricos, con niveles menores al 4% de Cal Activa y menos del 10% de Carbonatos Totales los distintos portainjertos de cítricos no presentan problemas. La máxima resistencia la tienen el Naranjo Agrio, Mandarino Cleopatra, Mandarino Común, Citrus macrophylla, Citrus volkameriana y Limón Rugoso. Son sensibles el Troyer, Carrizo y C-35. Muy sensibles el Citrumelo Swingle CPB 4475, Poncirus trifoliata y Naranjo Dulce.

Agua Los cítricos son más tolerantes a la salinidad en el agua que los paltos, empezando a presentar problemas con riego tecnificado con conductividades superiores a 1,1 mmhos/cm. En general, en los ríos Mapocho y Maipo, que presentan problemas de salinidad que afecta a paltos, no hay problemas para el cultivo de cítricos. Los efectos de la salinidad sobre la producción son una disminución de la cosecha, baja el calibre de la fruta, disminuye el número de frutos, hay menor grosor en la cáscara, aumentan los sólidos solubles totales y aumenta la cantidad de jugo de los frutos (Cuadro 1-10).

Cuadro 1-10 Calidad de agua para cítricos.

CE (dS/cm)

Calidad

Restricciones

0 a 1

Excelente



Fracción de lavado

1 a 2

Buena



10%

2 a 3

Regular

< 10% pérdida de cosecha

15%

3 a 4

Mediocre

Pérdidas de cosecha hasta el 20%

25%

4 a 5

Mala

Pérdidas mayores al 30%

Uso esporádico de esa agua

> 5

Muy mala

Pérdidas (?) No usar

Casos extremos

34 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Fenología en cítricos

Las interacciones entre los distintos ciclos de crecimientos son muy fuertes y es muy importante relacionarlo con estímulos externos (clima, fertilización, riego, aplicación de agroquímicos, etc.) con el fin de reducir los impactos que estos tengan sobre la producción comercial.

Los distintos ciclos vegetativos, radiculares y reproductivos no son eventos aislados dentro de las plantas sino que se relacionan estrechamente entre ellos. En el caso de los cítricos, además de lo anterior hay que considerar que hay distintas especies cultivadas comercialmente como limoneros, naranjos, mandarinos y pomelos, estos a su vez tienen distintas variedades y diferentes portainjertos, esto conlleva que las correlaciones entre ellos se hace mucho más dificultosa.

Portainjertos La influencia que ejerce el portainjerto sobre la variedad injertada en cítricos es muy importante, ya se han nombrado algunas anteriormente en la sección de suelos, pero, además poseen otras características fundamentales que se describen en el Cuadro 1-11 para Naranjas y Limoneros.

En el Gráfico 1-6 se muestra a modo de ejemplo el ciclo fenológico del limonero Eureka sobre el portainjerto Citrus macrophylla para la zona de Quillota. Se puede observar dos crecimientos vegetativos importantes, el primero a comienzos de la primavera y el segundo a comienzos del otoño, seguidos cada uno de ellos por un crecimiento radicular, además un crecimiento de menor envergadura en verano característico de climas subtropicales mediterráneos. La reflorescencia de los limoneros y especialmente de la variedad Eureka se ve claramente en el gráfico, donde hay una floración principal que se inicia cuando está disminuyendo la tasa de crecimiento vegetativa del primer ciclo de crecimiento, presentando un máximo de floración a comienzos de noviembre y luego una segunda floración más reducida terminando el segundo flash de crecimiento vegetativo, en el mes de abril y que se prolonga en bajas tasas hasta junio. El crecimiento del fruto proveniente de la floración de primavera corresponde a una curva sigmoidea simple.

Se han resaltado las características positivas con color azul y las negativas con colores rojos. El signo “?” indica que en la literatura los muestran como resistentes a esta enfermedad, sin embargo en Chile parecieran sólo tolerantes. Para Mandarinos se emplea la misma tabla, pero, hay algunas otras consideraciones que es importante considerar: en Mandarinas el Calibre es fundamental para una buena comercialización, Rubidoux da un bajo calibre y por lo tanto no se recomienda esta combinación. Lo mismo sucede en Naranjas Valencias (Frost, Delta, Midnight), variedades que por la baja acumulación térmica donde están plantados en Chile dan de por sí un bajo calibre, con Rubidoux es peor, tampoco se recomienda esta combinación. Para replantes (plantación sobre otra plantación anterior de cítricos), tanto Rubidoux como Citrumelo son los más recomendados.

Gráfico 1-6 Ciclo fenológico limoneros Eureka sobre Citrus macrophylla. 5 4 3 2 1

[

Crec. vegetativo

Crec. radicular

Caída flores

Crec. frutos primavera

Floración

1 jun

4 ay

6 abr

2 mar

3 feb

6 ene

2 dic

4 nov

7 oct

3 sep

7 ago

0

]

35 Palto y cítricos: Generalidades del cultivo

Cuadro 1-11 Características de los portainjertos para naranjos.

Característica Crecimiento inicial Tamaño final Productividad Calidad de la fruta Fecha cosecha Salinidad Phytophthora spp Compatibilidad Asfixia radicular Tristeza Psorosis Exocortis Xyloporosis Nemátodos Frío Adaptación suelo

Troyer y carrizo Moderado Medio-Grande Alta Regular Adelanta Media – Tolerante Buena Sensible Tolerante Tolerante Susceptible Tolerante Tolerancia media Resistente Mayoría

Citrumelo 4475 Moderado Grande Alta Muy buena Normal Media – Resistente? Buena Resistente Tolerante Tolerante Tolerante Tolerante Resistente Resistente Todos

Rubidoux Bajo Medio-Bajo Muy alta Muy buena Normal Media – Resistente? Buena Muy resistente Tolerante Tolerante Susceptible Tolerante Resistente Muy resistente No arenosos

C-35 Vigoroso Medio Muy alta Buena Normal s/i Tolerante Buena s/i Tolerante s/i s/i s/i Tolerante s/i Mayoría

Fuente: Adaptado de California Citrus Rootstocks. University of California.

Carrizo, que es el portainjerto más usado hasta ahora, incluso a nivel mundial, tiene la característica de acumular menos sólidos solubles que el C-35 y el Citrumelo, y hace que se pierda más rápidamente la acidez. Debido a esto ya no recomendamos el uso de Carrizo, a menos que sea en una zona de una alta acumulación de grados día y baja incidencia de lluvia, y sólo para variedades muy tempranas. En el caso del C-35, este portainjerto presenta en promedio entre el 0,3% y el 0,5% más de só-

lidos solubles que en el caso del Carrizo y pierde menos la acidez que este, adicionalmente está descrito como un árbol de menor vigor o tamaño que el Citrumelo y con una mejor eficiencia productiva. El Citrumelo Swingle es un árbol más vigoroso que el C-35 pero presenta niveles de sólidos solubles y acidez más altos que el C-35 por lo que se le recomienda para variedades y estrategias de cosecha más tardías (Cuadro 1-12).

Cuadro 1-12 Características de los portainjertos para limoneros.

Característica Crecimiento inicial Tamaño final Productividad Calibre de la fruta Salinidad Phytophthora spp Comp. Lisboa Comp. Eureka Asfixia radicular Xyloporosis Nemátodos Frío Adaptación suelo Longevidad

C. macrophylla Vigoroso Grande Muy buena Media Resistente Resistente Buena Buena? Sensible Sensible Sensible Débil Todos Media –

Citrumelo 4475 Moderado Grande Buena + Pequeña Media Tolerante Buena Incompatible Resistente Tolerante Resistente Resistente Todos Alta

Limón rugoso Vigoroso Grande Muy buena Media Media Muy susceptible Buena Buena Sensible Tolerante Sensible Débil No arcillosos Media –

C. volkameriana Vigoroso Grande Muy buena Media Media Muy susceptible Buena Buena Sensible Sensible Sensible Débil Todos Media –

36 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Se han resaltado las características positivas con color azul y las negativas con colores rojos. El signo “?” indica que este portainjerto en California es susceptible a NVC (Necrosis de los Vasos Conductores) que significa muerte de plantas entre el tercer y décimo año, sin embargo en Chile pareciera que no es afectado por la NVC.

etc.) marginal y con poca calidad para la exportación. En el caso de naranjas de ombligo se cuenta con un buen número de variedades disponibles que pueden cubrir toda la temporada con fruta de buena calidad. Las principales variedades usadas en la actualidad y que presentan una calidad buena para exportación son las siguientes:

Se puede ver en este cuadro que el mejor portainjerto pareciera el Citrumelo, sin embargo la incompatibilidad con Eureka (aparentemente compatible con Fino 49 y Messina, hay plantaciones con árboles de 14 años sin problemas) y el bajo calibre de la fruta son características suficientes para descartarlo como portainjerto en la mayoría de los casos. Otro punto importante es que Citrus macrophylla –el portainjerto más utilizado en Chile para limoneros– hace al árbol más sensible al frío y es susceptible a nemátodos (Tylenchulus semipenetrans) y tiene una vida productiva con fruta de buena calidad y calibre de alrededor de 15 años. Esto último hace que no se recomiende usar en replantes, actualmente se prueba el X-639, portainjerto de origen sudafricano que se podría usar para replantes.

• Tempranas:

Variedades

Bajo el nombre de mandarinas se agrupan varias especies como clementinas, satsumas, tangerinas e híbridos de características similares. Hasta ahora el desarrollo de mandarinas en Chile se había centrado en clementinas (Citrus clementina Blanco) y particularmente en una variedad, Clemenules, que corresponde a más del 75% de la superficie nacional. En los últimos años ha aumentado

Por razones de producción y de mercado Chile produce principalmente naranjas de ombligo (Navel), siendo la producción de naranjas comunes (Valencia, Salustiana,

Figura 1-9 Naranjas de la variedad Fukumoto, su principal característica es el gran color que alcanza a la cosecha.

• Media Temporada: Washington Parent Atwood • Tardías:

Lane Late (dos clones diferentes) Barnfield

Adicionalmente se están probando nuevas variedades de ombligo, principalmente tardías, que podrían estar disponibles en los próximos años. Sin embargo, con las variedades antes mencionadas y usando distintos portainjertos, que también afectan la fecha de cosecha, se puede cubrir toda la temporada de manera satisfactoria.

Mandarinas

F. Gardiazabal

Naranjas

Fukumoto (Figura 1-9)

37 Palto y cítricos: Generalidades del cultivo

Figura 1-10 Mandarinas de la variedad W Murcott.

F. Gardiazabal

proviene de una floración de otoño, que si no es afectada por heladas de invierno, se cosecha entre febrero y mayo del año siguiente.

F. Gardiazabal

nuevamente el interés por la plantación de mandarinas debido a la apertura del mercado de EE.UU. y a la disponibilidad de una nueva variedad de cosecha tardía y muy buenas características de consumo como la W Murcott (que no es clementina, si bien se comercializa en ese grupo) (Figura 1-10).

Figura 1-11 Rama con gran cuaja de limones Fino 49.

Distancias de plantación Naranjas

Limoneros Desde el punto de vista de la producción, las variedades de limoneros se pueden dividir en tres grupos: • Variedades de invierno (tardías): Génova Lisboa • Variedades tempranas (otoño):

Fino 49 (Figura 1-11) Fino 95 Messina

• Variedades reflorecientes:

Eureka

En el caso de lo limoneros la variedad tiene más importancia que el clima en las fechas de cosecha, si bien las zonas más cálidas tenderán a producir fruta más temprano. Las variedades de invierno son aquellas en que su producción proviene en más del 70% de la fruta de su floración de primavera, que se cosecha en invierno. En el caso de las variedades tempranas, su producción se concentra en fruta de la floración de primavera que puede madurar (por calibre y contenido de jugo) a partir de fines de febrero. En el caso de Eureka, la única variedad claramente refloreciente, aproximadamente el 60% al 70% de su producción proviene de su floración de primavera y se cosecha en invierno y el otro 30% al 40%

El diseño de plantación en naranjas está orientado a lograr altas productividades, altos porcentajes de exportación y rápidas entrada en producción. Por otro lado es importante asegurar una fácil circulación y entrada con maquinaria para facilitar la cosecha y las aplicaciones foliares. Para esto, y dependiendo del portainjerto a usar, se trabaja con altas densidades en plantaciones rectangulares que se resumen en el Cuadro 1-13. Este esquema permite la circulación con maquinaria compacta en los huertos y logra que los árboles entren rápidamente en producción, cubriendo rápidamente la superficie y protegiendo prontamente la fruta. También implica trabajar a partir del 5° a 6° año con poda, que favorece la producción de fruta de mejor calibre.

Mandarinas La distancia de plantación típica recomendada para mandarinas es de 5 x 2 m en un diseño en hileras. Debido a la cosecha y a la necesidad de hacer varias aplicaciones foliares durante la temporada es necesario contar con un espacio en la entrehilera que permita el fácil paso de maquinaria. De acuerdo al tipo de maquinaria que se use y en el caso de usar C-35 como portainjerto, la distancia entrehilera se puede reducir hasta 4,5 m.

38 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Cuadro 1-13 Densidades de plantaciones rectangulares en naranjas.

Portainjerto

Distancia de plantación (m)

Densidad

Citrumelo Swingle

5 x 2

1.000 Plantas / ha

Carrizo

5 x 2

1.000 Plantas / ha

C-35

5 x 2

1.000 Plantas / ha

4,5 x 2

1.111 Plantas / ha

Rubidoux

4 x 1,5

1.666 Plantas / ha

4,5 x 1,5

1.480 Plantas / ha

Limoneros

localizado, se sabe con exactitud donde se encuentran las raíces, se dispone de un vehículo rápido y directo de acceso a ellas y por lo tanto, es fácil de localizar los fertilizantes, especialmente aquellos menos móviles como el fósforo y el potasio, obteniéndose en general un mejor aprovechamiento de estos.

Por el gran vigor de los árboles y su hábito de crecer en base a chupones, los limoneros requieren distancias amplias en la entrehilera, de entre 6 a 7 m dependiendo de las condiciones de cultivo y la variedad, siendo los Fino 49 y 95 los más grandes y el Eureka el más compacto. En la distancia en la sobre hilera se recomiendan distancias de entre 2 a 3 metros.

Necesidades de agua para árboles adultos El coeficiente del cultivo no está determinado para Chile y está en permanente corrección en los países que lo utilizan desde hace muchos años, hasta el momento nos hemos guiado con muy buenos resultado por los Kc utilizados en España y que se reproducen en el Cuadro 1-14.

Fertirriego Lo más usado en nuestro país es el riego por goteo ya que es el sistema donde se alcanza la mayor eficacia tanto en la fertirrigación como en el uso del agua. Con el riego

Cuadro 1-14 Coeficiente de cultivo (Kc), para distintos grupos de cítricos.



Mes

Grupo General

Clementinas

Lim. Eureka



Julio

1,00

1,00

1,00

Lim. Fino 49 1,00



Agosto

1,00

1,00

0,90

0,90



Septiembre

0,60

0,70

0,70

0,80



Octubre

0,60

0,70

0,60

0,65



Noviembre

0,60

0,70

0,60

0,60



Diciembre

0,60

0,70

0,60

0,60



Enero

0,60

0,60

0,60

0,60



Febrero

0,60

0,60

0,60

0,60



Marzo

0,60

0,60

0,60

0,60



Abril

0,60

0,60

0,60

0,60



Mayo

0,60

0,60

0,60

0,70



Junio

0,60

0,60

0,80

0,90

39 Palto y cítricos: Generalidades del cultivo

Necesidades de agua para árboles en desarrollo Así como es relativamente fácil el determinar las necesidades de agua de una plantación adulta, es realmente más complicado hacerlo en una plantación en desarrollo, ya que no sólo dependerá de la edad que tenga, sino que del tamaño de sus árboles, de la especie, la combinación portainjerto-variedad, de la distancia de plantación, etc. En una forma simplista y tomando como ejemplo el limonero Eureka, podríamos decir que tarda más o menos 7 años en copar su distancia de plantación y por lo tanto debiéramos regarlo con 1/7 del agua cada año, sin embargo, es un cálculo peligroso ya que no sabemos exactamente el tiempo que tarde en lograr su pleno crecimiento y producción. Se ha ideado otros sistemas para el cálculo de las necesidades de agua para un árbol, dentro de estos, el saber el volumen de la copa de los árboles, o sea, su tamaño, por que de esto depende la mayor o menor cantidad de hojas que son las que transpiran y las que dan lugar a una mayor o menor cosecha.

No sólo la cantidad de sales disueltas en el agua (salinidad), puede ser nociva, hay determinados iones como los cloruros, sodio, litio, boro, etc., que cuando se acumulan en cantidades pequeñas, pueden resultar tóxicos para las plantas. • Cloruros: Los cítricos, a diferencia de otros frutales no presentan quemaduras típicas debidas a la toxicidad de cloruros. Los síntomas de esta toxicidad, están relacionados a un amarillamiento o clorosis de la lámina de las hojas, producido por la desaparición de la clorofila y acompañada, generalmente, por una intensa defoliación de los árboles. La tolerancia a los cloruros de los portainjertos de cítricos está estrechamente relacionada con la mayor o menor aptitud de éstos para absorber cloruros, siendo más tolerantes los que absorben cloruros más lentamente. Los Citranges como Troyer y Carrizo y el Naranjo Dulce son los más afectados cuando el contenido de cloruros es superior a 10 meq/litro en el extracto de saturación. Mandarino Cleopatra y Lima Rangpur resultan afectados sólo cuando la concentración de cloruros

Porcentaje de Sombra

10

20

30

40

50

60

70

P. de Sombra Corregida

23

36

49

62

75

88

100

Para lo anterior, se mide el diámetro medio de la copa de los árboles (D) del huerto que vamos a regar, eliminando los extremos (árboles muy chicos o muy grandes), una vez determinado este diámetro (D), sacamos la superficie sombreada (S.S.) que le corresponde y el porcentaje de sombra (P.S.), respecto a su distancia de plantación. Sin embargo la realidad ha demostrado que si regamos con este Porcentaje de Sombra, ese árbol sufriría de falta de agua, y por lo tanto hay que hacer algunas correcciones a esto cálculos. Considerando el mismo ejemplo anterior, nunca dejaremos que ese árbol ocupe el 100% de los 6 x 3 m, ya que necesitamos como mínimo 1,5 m entre las líneas de los árboles para permitir el paso de maquinaria para pulverizar y cosechar, esto significa que no sería 6 x 3 m el máximo potencial de la superficie sombreada, sino de 4,5 x 3 m = 13,5 m2. Esto daría como resultado que alrededor del 70% de sombra corregida, equivaldría al 100% de sombra. Desarrollando esta fórmula, nos da un Porcentaje de Sombra Corregida, que se copia a continuación:

Calidad del agua de riego La calidad del agua de riego es un factor de gran importancia tanto en la viabilidad como en la eficacia del mismo. En el acápite de agua se vio la calidad del agua en cuanto a la salinidad.

es superior a 25 meq/litro. La existencia de toxicidad de cloruros se pueden confirmar mediante los análisis foliares, cuando las concentraciones de cloruros en las hojas superan el 0,4% comienzan los indicios de toxicidad y cuando las concentraciones superan el 0,7%, aparece una clara toxicidad provocada por cloruros. • Sodio: La toxicidad de sodio produce quemaduras típicas tanto en el ápice como en los bordes de las láminas de las hojas. Para los cítricos el nivel crítico de sodio en el extracto de saturación del suelo es de 15 meq/litro y en las hojas, contenidos superiores al 0,25% son indicativos de toxicidad por este elemento. El índice de adsorción de sodio (SAR) del agua, nos da una medida aproximada de su acumulación de sodio en el suelo. Este índice es la cantidad de sodio, dividido por la raíz cuadrada de la cantidad de calcio más magnesio, dividido por 2. Porcentajes de 0,5 g de cloruro de sodio por litro y de 0,05 g de magnesio por litro, representan el máximo utilizable. El sodio puede encontrarse además en el agua de riego como carbonato sódico o sulfato sódico. • Boro: La acumulación de boro produce una clorosis intervenal, así como quemaduras del ápice y márgenes de las hojas. Esta toxicidad se presenta cuando la concentración de boro en el extracto de saturación

40 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

del suelo está entre 0,5 y 1 mg/litro. Niveles de boro en las hojas superiores a 260 ppm, son indicativos de toxicidad por boro. • Litio: Puede ser importante en algunas zonas del Norte de Chile, la toxicidad de este elemento se manifiesta por quemaduras tanto del ápice como en los bordes de las láminas de las hojas. El nivel crítico de este elemento en el agua es de 0,1 mg/litro.

Cantidades de fertilizantes a usar Para una adecuada fertilización se deben considerar los siguientes aspectos: • Análisis de suelo y agua: Aportan valiosa información sobre los nutrientes que se encuentran en el suelo (aunque no siempre asimilables), así como los aportados por el agua de riego. Dan información sobre las características fisicoquímicas del suelo y además lo hacen sobre el pH y la conductividad eléctrica de ambos, que inciden en el comportamiento de los fertilizantes.

• Análisis foliar: Entrega información sobre la absorción real de los nutrientes por parte de la planta. Muestra la presencia de estados carenciales e indica la existencia de antagonismos entre distintos nutrientes. Además, permite evaluar la disponibilidad de reservas en las plantas. • Características de la plantación: La especie, variedad, portainjerto utilizado, la edad de las plantas, su desarrollo vegetativo, cantidades de fruta cosechada, etc., permiten evaluar las necesidades nutritivas de la plantación. • En general las cantidades de nitrógeno que se utilizan en Chile para plantaciones adultas, son: – Naranjos:

140 a 180 kilos por ha.

– Mandarinos: 140 a 160 kilos por ha. – Limoneros:

250 a 300 kilos por ha.

41

Capítulo 2

Manejo Integrado de Plagas (MIP) R. Ripa • P. Larral • S. Rodríguez

El Manejo Integrado de Plagas, MIP, surge como una alternativa sustentable al manejo tradicional de plagas y se funda en el uso racional de los métodos químico, biológico y cultural para el control de insectos y ácaros que dañan los cultivos. Se define como una estrategia económicamente viable en la que se combinan varios métodos de control para reducir las poblaciones de las plagas a niveles tolerables, minimizando los efectos adversos a la salud de las personas y al ambiente. Ciertas labores de manejo influyen en la sucesión y diversidad de las plagas en el tiempo, evento principalmente asociado a la transición de manejo tradicional a MIP, donde algunas plagas que estaban siendo controladas por plaguicidas, incrementan su población y se constituyen en un problema no observado previamente como respuesta del sistema al cambio de manejo. Una de las cualidades más relevantes en el MIP es la flexibilidad y adaptabilidad a las condiciones de cada huerto, factores como el clima, suelo, condiciones de plantación, variedad, riego, aplicación de plaguicidas y poda, entre otros, configuran un ambiente particular. La implementación del MIP exige reconocer las plagas y enemigos naturales, entender su biología y comportamiento, desarrollar técnicas de monitoreo e incorporar el concepto de umbral de daño económico en las decisiones de manejo. Asociado a lo anterior, se han definido ciertos objetivos del MIP, entre los que destacan: 1. Minimizar el daño de las plagas en la producción, mejorando su calidad.

2. Disminuir el uso de plaguicidas y su impacto negativo sobre la salud de las personas y el ambiente. 3. Contribuir a la sustentabilidad de la producción. 4. Mantener la rentabilidad del cultivo. El manejo integrado de plagas se basa en el conocimiento del agroecosistema que se compone de las interrelaciones que ocurren entre plantas, plagas, enemigos naturales y ambiente. Para facilitar su entendimiento y aplicación se plantea un esquema que grafica las etapas que componen el MIP (Figura 2-1).

6

MIP

5

Acciones de control

4

Toma de decisiones

3

Umbral de daño económico

2

Monitoreo

1

Reconocimiento de plagas, enemigos naturales y daño Figura 2-1 Componentes del MIP.

42 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Reconocimiento de plagas, enemigos naturales y daño Características de los artrópodos El grupo taxonómico de los artrópodos, que incluye insectos y ácaros, se caracteriza por presentar apéndices articulados y un exoesqueleto que les confiere forma y protección. En el caso de los insectos, cada orden posee características específicas que permite diferenciar a sus integrantes, como la forma y función de su organismo y el tipo de metamorfosis (metabolía) que presenta. En los insectos, la principal estructura morfológica que permite distinguir entre los distintos órdenes son las alas: los dípteros (moscas) presentan un par de alas funcionales que les permite el vuelo, además de otro par atrofiado llamado halterios; los coleópteros (chinitas, pololos, burritos) se caracterizan por que el primer par de alas está endurecido (élitros) y en algunas ocasiones protege un segundo par membranoso que puede ser utilizado para volar. A veces, los élitros se han fusionado, lo que impide el vuelo. Las alas de lepidópteros (mariposas y polillas) presentan un diseño característico ya que son membranosas y están protegidas por escamas. Los himenópteros, en cambio, presentan dos pares de alas membranosas transparentes. La metamorfosis es el proceso de transformación que sufren insectos y ácaros durante su desarrollo. Cuando la metamorfosis es completa, insectos holometábolos (Figura 2-3) los estados juveniles son distintos al adulto y el desarrollo comprende los estados de huevo, larva,

6

MIP

5

Acciones de control

4

Toma de decisiones

3

Umbral de daño económico

2

Monitoreo

1

Reconocimiento de plagas, enemigos naturales y daño

pupa y adulto. A partir de los huevos emerge una larva que generalmente posee aparato bucal masticador y que se clasifica según su forma y la presencia o ausencia de cabeza y patas: en el caso de los dípteros, las larvas son ápodas y acéfalas; las larvas de lepidópteros poseen una cabeza bien desarrollada y 3 pares de patas torácicas y 3 a 5 pares de falsas patas. La pupa es un estado de quiescencia, es decir, no se alimenta, pero sufre una serie de transformaciones para dar origen al adulto, cuyo cuerpo está formado por cabeza, tórax y abdomen. En la cabeza se encuentran las antenas, que son su órgano sensorial y olfativo, los ojos y el aparato bucal. En el tórax se ubican los dos pares de alas y 3 pares de patas, como por ejemplo, chinitas, polillas y microavispas parasitoides. En insectos que presentan metamorfosis incompleta, esto es, hemimetábolos (Figura 2-4), los estados inmaduros o ninfas son similares al adulto, pero no poseen alas ni genitalia desarrollada como es el caso de trips, pulgones, katídidos y termitas. En algunos casos, el adulto tampoco posee alas y la única diferencia con las ninfas es el tamaño y la capacidad de reproducción, como en conchuelas, escamas y chanchitos blancos hembras. Los ácaros presentan cabeza y tórax unidos en una estructura denominada prosoma. La zona equivalente al abdomen es llamada opistosoma. En el prosoma se encuentran los quelíceros, pedipalpos y las patas. En los ácaros se reconocen tres estados inmaduros: larva, con 3 pares de patas, protoninfa y deutoninfa, con 4 pares de patas, similares al adulto en apariencia pero sin la capacidad de reproducción. En su estado adulto presentan cuatro pares de patas a diferencia de los insectos que poseen sólo tres pares (Figura 2-6).

• Morfología de insectos y ácaros • Ciclo de vida • Daño – Directo – Indirecto

Figura 2-2 Primer componente del MIP.

43 Manejo Integrado de Plagas (MIP)

Huevo

Adulto

R. Ripa

Larva

Figura 2-5 Áfido en proceso de muda lo que le permite crecer.

C. Tobar

Pupa

ticas de género y especie, aspecto relevante si se considera realizar liberaciones de enemigos naturales, que en el caso de parasitoides suelen ser específicos.

Figura 2-3 Ejemplo de metabolía completa, ciclo de vida de Naupactus xanthographus. Huevo

Hembra

Macho

Larva

Ninfa I Adultos

Deutoninfa

Ninfa II Hembra alada

C. Tobar

Protoninfa

Ninfa III

C. Tobar

Hembra aptera

Figura 2-4 Ejemplo de metabolía incompleta, ciclo de vida de áfidos.

Además de reconocer las características generales de los órdenes y familias presentes como plagas en paltos y cítricos, es necesario para su manejo identificar caracterís-

Figura 2-6 Ejemplo de metabolía incompleta de ácaros, ciclo Panonychus citri.

Tipos de daño Los insectos y ácaros plaga causan daño directo a la planta producto de su alimentación e indirecto por la transmisión de enfermedades, la producción de mielecilla, y su presencia en la fruta cuando poseen carácter cuarentenario.

44 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

El daño directo incrementa paulatinamente junto con la densidad de la plaga, la cual es difícil de detectar al inicio de la infestación, sin embargo, es relevante reconocer tempranamente el daño provocado y asociarlo a la plaga con el fin de prevenirlo, adoptando las medidas de manejo más apropiadas.

• Masticadores, como larvas de curculiónidos que causan daño al sistema radical y larvas de lepidópteros, que consumen trozos de tejido y tienen la capacidad de deformar los frutos cuando el daño se produce en la etapa de crecimiento (Figuras 2-7 a 2-9).

R. Ripa

Figura 2-9 Galería superficial en naranja causada por Eulia utilizando su aparato bucal masticador.

Figura 2-8 Daño provocado por el aparato masticador del grillo en la corteza del palto.

R. Ripa

Figura 2-7 Aparato bucal masticador de la larva de Naupactus xanthographus.

R. Ripa

• Succionadores (escamas, pulgones y chanchitos blancos, entre otros), que extraen fluidos de los tejidos, y que eventualmente introducen en el tejido saliva fitotóxica produciendo deformaciones y otros síntomas (Figuras 2-10 a 2-12).

En general, el daño producido por la alimentación de la plaga se encuentra estrechamente asociado al tipo de aparato bucal que presenta, generando un patrón de daño característico:

45

R. Ripa

Figura 2-11 Aparato bucal chupador (flecha: estilete maxilar) de Saissetia oleae.

R. Ripa

Figura 2-10 Áfido con su aparato bucal succionador inserto en el tejido de la hoja de cítrico.

R. Ripa

R. Ripa

Manejo Integrado de Plagas (MIP)

Figura 2-12 Enrrollamiento de hoja de cítrico por el efecto de la saliva de áfidos inyectada con su aparato bucal picador succionador.

Figura 2-13 Bronceado causado por la microperforación del tejido òr trips del palto.

• Perforadores/picadores como arañitas y trips, que producen microperforaciones en el tejido superficial de la hoja, sorbiendo su contenido y provocando el tipico daño denominado bronceado (Figura 2-13).

la planta manchando los frutos y otras estructuras. Sobre este sustrato azucarado se desarrolla un complejo de hongos denominado fumagina (Cladosporium spp y otras especies), de color oscuro y difícil remoción (Figura 2-14). Al respecto, uno de los escasos beneficios de la hormiga argentina Linepithema humile, es remover la mielecilla al alimentarse de ella, disminuyendo la formación de fumagina.

Algunos insectos son vectores de enfermedades, como el caso de áfidos, en particular Toxoptera citricidus (no presente en Chile), que transmite el virus de la tristeza en cítricos. La mielecilla producida por insectos succionadores tales como chanchitos blancos, mosquitas blancas, conchuelas y pulgones (excepto escamas), se distribuye sobre

Otro daño indirecto de gran importancia económica es el rechazo de partidas de fruta por la presencia de alguna especie de insecto o ácaro que posee una connotación cuarentenaria para el país importador, lo que constitu-

46 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

ye una restricción a la exportación. En algunos casos se producen rechazos ante la detección de cierto estado o estadio de una plaga que no se puede identificar y por lo tanto no se puede descartar que se trate de una especie cuarentenaria, como es el caso de huevos o ninfas de chanchitos blancos.

Monitoreo El monitoreo es una actividad clave en el Manejo Integrado de Plagas, destinado a determinar la abundancia, distribución y el daño de las plagas y por otra parte la abundancia y efecto de los enemigos naturales presentes en el huerto. Por lo tanto, indica la necesidad de aplicar una medida de control, la cual es evaluada en cuanto a su efectividad para reducir las poblaciones y efecto sobre la fauna benéfica a través del monitoreo. Dada la trascendencia de este tema en el MIP, se trata con mayor profundidad en el Capítulo 3: Monitoreo de plagas y registros.

Nivel de daño económico NDE El concepto de nivel de daño económico se refiere a la densidad poblacional de la plaga que comienza a causar daño de importancia económica y que por lo tanto justifica el costo de las medidas de control, sin embargo, las acciones de manejo se toman, por lo general, en densidades inferiores a ésta con el fin de impedir que el crecimiento poblacional de la plaga alcance el nivel de daño económico, lo que se denomina Umbral Económico (UE o en inglés Economic Threshold ET) (Gráfico 2-1).

R. Ripa

Figura 2-14 Fumagina producto de la acumulación de mielecilla producida por conchuela negra del olivo.

Matemáticamente el cálculo del NDE tiene como variables el costo del manejo, el valor de la produción, el daño producido por la plaga y la reducción de la producción causado por ese daño. Cada una de estas variables, depende a su vez de múltiples factores, lo que dificulta la determinación de este umbral en la práctica. Un factor determinante y quizás el más complejo de estimar es la relación entre la densidad de la plaga, determinada mediante el monitoreo (por ejemplo, número de ácaros/hoja) y el efecto sobre la producción y/o calidad. Cuando los insectos y ácaros que afectan el cultivo se alimentan succionando savia del follaje, como es el caso de pulgones, conchuelas, chanchitos, arañitas y mosquitas, la complejidad es aún mayor. Por otra parte la disminución del ingreso por ventas dependerá del precio del producto asociado al mercado de destino (interno o exportación) y a la condición cuarentenaria de la plaga. Adicionalmente la densidad de la plaga está asociada a la presencia y actividad de los enemigos naturales, la fenología de la plaga y su hospedero, que están estrechamente ligadas a las condiciones ambientales (Figura 2-15). Considerando las dificultades de la estimación del NDE y la escasa información disponible sobre umbrales determinados técnicamente, se propone establecer niveles poblacionales provisionales basados en la experiencia práctica del análisis de la información del monitoreo en tiempo real y los registros históricos de niveles de daño, abundancia poblacional y efectividad de las medidas de control. Una vez establecidos los umbrales de acción y aplicadas las decisiones de manejo, estas deben validarse con esti-

47 Manejo Integrado de Plagas (MIP)

Acción de manejo Nivel de daño económico Umbral económico o de acción N° de insectos/acaros

Tiempo Gráfico 2-1 Esquema de la fluctuación de la densidad de plagas y el nivel de daño económico.

6

MIP

5

Acciones de control • Tipos de daño

4

Toma de decisiones

3

Umbral de daño económico

2

Monitoreo

1

Reconocimiento de plagas, enemigos naturales y daño

• Valor de la producción • Costo de la medida de control • Efectividad medida control • Condiciones ambientales • Densidad y evolución de la plaga

Figura 2-15 Tercer componente del MIP.

maciones de su efecto en la densidad de la plaga y sobre la producción, con el objetivo de comparar el beneficio económico obtenido por efecto del control versus el costo de las medidas de manejo sobre una o mas plagas. El resultado de la comparación debe evidenciar un beneficio, justificando la acción de control. En otras palabras, debe realizarse una estimación de la relación costo/beneficio del manejo de la plaga. El uso de registros periódicos de la densidad de plaga, el efecto de las medidas de control, los costos de aplicación y volúmenes de producción, aportará experiencia en la estimación de umbrales económicos o niveles de daño. La incorporación permanente de este concepto, por lo general, disminuye el número de aplicaciones y por consiguiente el uso de plaguicidas, sustentando los beneficios del MIP.

Toma de decisiones La toma de decisiones es un proceso que consiste en seleccionar una o más soluciones idóneas para una determinada situación, para lo cual es necesario incorporar la identificación y análisis del problema y su entorno (monitoreo), la evolución de la plaga, la evaluación de las alternativas de control disponibles y, finalmente, la selección y aplicación de una o más de ellas. El proceso de toma de decisiones incorpora las etapas que aparecen en la Figura 2-17.

Identificación del problema Realizado por medio del monitoreo sistemático de las especies plagas presentes en el huerto y sus alrededo-

48 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

res, determinando su densidad y la intensidad del daño provocado. Adicionalmente requiere estimar la presencia, abundancia y eficacia de los enemigos naturales y determinar la distribución de la plaga en el huerto (ver Capítulo 3: Monitoreo de plagas y registros).

Análisis de antecedentes adicionales

Antecedentes adicionales

Permitirá tomar una decisión más informada. Los antecedentes, que serán utilizados en los pasos posteriores del proceso de toma de decisiones, provienen: • Del entorno: vegetación circundante (incluyendo otros huertos) y condiciones climáticas. • Del manejo del huerto: régimen de fertilización, poda e historial del huerto. • De la planta: estructura afectada, fenología, vigor, tipo de poda, fecha cosecha.

Evolución de la plaga

Monitoreo continuo

MIP Aplicado

Toma de decisiones

Umbral económico

Opciones de manejo

• De la plaga: tasa reproductiva y número de generaciones al año. • Información comercial: destino de la fruta y estimación de su valor. • De información proporcionada por monitores y/o encargados que conocen el huerto.

Inferir la evolución que experimentará la plaga A partir de los datos recogidos a través del monitoreo, la abundancia y efectividad de los enemigos naturales, la biología de la plaga y los antecedentes adicionales indicados anteriormente, se debe inferir la evolución que experimenterá la plaga en el futuro y determinar si causará daño. Como ejemplo se puede indicar que los ataques de áfidos en cítricos, por lo general se presentan sólo durante el período de activa brotación. Por lo tanto si se observan enemigos naturales y el crecimiento está pronto a detenerse, se concluirá que es muy probable que la plaga disminuya significativamente en el futuro cercano.

Estimación del nivel de daño económico (NDE) Determinar si la densidad de la plaga cuantificada a través del monitoreo ha alcanzado el nivel de daño económico (NDE). Este parámetro cuantitativo descrito anteriormente, se refiere a la densidad más baja de la población de la plaga que causa una magnitud de daño que justifica el costo de la medida de control a adoptar. Alcanzando este nivel es necesario aplicar una medida

Figura 2-16 Etapas del proceso de toma de decisiones.

de manejo para evitar pérdidas económicas ocasionadas por la plaga, incluyendo aquellas de connotación cuarentenaria.

Evaluar estrategias de manejo Para resolver el problema, que forman parte del MIP: control biológico, control químico y control cultural, incluyendo cada una de estas opciones variadas modalidades y alternativas. El proceso de toma de decisiones tiene por objeto decidir informadamente, considerando todos los puntos antes indicados, sobre una o más acciones que, integradas, lograrán minimizar o controlar la plaga. Sin embargo, es posible que bajo ciertas circunstancias, el proceso culmine en la decisión de no implementar alguna acción, es decir, que se concluya que debido a las densidades de la plaga, las condiciones climáticas, el mercado de la fruta o la abundancia de enemigos naturales, entre otras circunstancias, la situación no amerita ejecutar una acción de manejo o control. Una vez finalizado el proceso de toma de decisiones se debe continuar con el monitoreo para realizar seguimiento de la plaga y demás variables que poseen influencia en su evolución, es decir, volver a la etapa 1, conformándose un proceso cíclico de toma de decisiones. La información proveniente de este seguimiento será de gran utilidad en el futuro para enfrentar situaciones similares, gene-

49 Manejo Integrado de Plagas (MIP)

rándose una retroalimentación positiva constante que perfecciona año a año el manejo de las plagas.

• Valor de la Producción: valor estimado de venta $230/ kilo.

Ejemplo: Toma de decisiones

• Daño indirecto causado por la mielecilla exudada por la plaga y la fumagina que cubre hojas y frutos: difícil de estimar.

Paso 1. Identificar el problema: • Especie presente: En naranjo var. New Hall, Mosquita Blanca Algodonosa. Fecha del monitoreo: 15 diciembre 2007.

• Perdidas eventuales por efecto de la plaga sin efectuar medidas de control (equivalente a 2.000 kg fruta/ha) = $460.000.

• Intensidad del Ataque de acuerdo a monitoreo: 25% de presencia en hojas, 50% de los brotes atacados.

Paso 5. Evaluar alternativas y aplicación de la solución:

• Presencia de enemigos naturales: 15% de las hojas con presencia de la plaga poseen ninfas parasitadas.

• Químico. Utilización aceite 200 cc/Hl 7.000 L/ha = $125.000/ha.

• Estado de la plaga: Huevos y adultos en brotes y ninfas 1° y 2° estado en hojas.

• Cultural. Poda de brotes = $25.000/ha.

• Distribución de la plaga: la intensidad indicada corresponde a 2 cuarteles (5 hectáreas) en la parte alta de una ladera. Paso 2. Antecedentes adicionales: • Del entorno. Monitoreo realizado en Diciembre (inicio del verano), T° media 18,5°C. • Del Manejo del Huerto. Fertilización nitrogenada vía riego. Poda de faldas efectuada en septiembre. Aplicaciones de clorpirifos 48% en concentración de 100 cc del producto comercial por hectolitro (100 litros) de agua, utilizando 5500 litros de la mezcla por hectárea para el control de chanchitos blancos en noviembre del mismo año. • De la planta: Hojas y brotes con mielecilla, en algunas partes del árbol presencia de fumagina. Brotes vigorosos. Plantas de 6 años de edad a 6 x 3 m. • De la plaga: En esta época la plaga puede desarrollarse desde ninfa migratoria a adulto en 35 días. • Comerciales: Fruta para exportación. Paso 3. Evolución de la plaga: Debido a la presencia de brotes vigorosos, adultos de la plaga, la época del año y una presencia escasa de enemigos naturales, se estima que la población de la plaga incrementará su densidad en el futuro cercano. Paso 4. Umbral económico: • Costo de aplicación: – 1 lavado con detergente 200 cc/HL, en un volumen de 7.000 L = $110.000/ha. – Aplicación de aceite al 0,5% en un volumen de 7.000 = $125.000/ha.

• C. Biológico. Por condiciones de clima, se puede esperar un incremento de la actividad de los enemigos naturales Amitus spiniferus y Cales noacki. • Valor del manejo = $150.000 Conclusión del proceso de toma de decisiones: las medidas de manejo se justifican.

Acciones de control Dentro de las alternativas o métodos de control de plagas que utiliza el MIP se encuentra el Control Biológico, Control Cultural y Control Químico.

Control biológico El control natural que producen depredadores, parasitoides y entomófagos actúa sobre las poblaciones de insectos y ácaros plaga manteniendo una densidad que se ajusta de manera natural al funcionamiento del sistema agrícola (Gallo et al. 1988). Cuando esta acción incluye la manipulación de los agentes naturales de control por parte del hombre, para reducir las pérdidas en agricultura, forestales o productos comerciales, el control biológico es una táctica dentro del manejo integrado de plagas que consiste en la reducción del número de insectos perjudiciales por la acción de los enemigos naturales a un nivel tal que el organismo perjudicial no ocasione pérdidas económicas (Flint y Van den Bosch 1983). El Control Biológico es un método barato, efectivo y que no interfiere con otros elementos del ecosistema, aunque es muy sensible a la acción de productos químicos tradicionales (Stehr 1990). El Control Biológico está libre de los efectos secundarios indeseables asociados a los insecticidas de amplio espectro y es uno de los métodos de mejor relación entre costo y efectividad. Cuando es aplicado por especialistas, bajo principios establecidos,

50 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

6

MIP

5

Acciones de control

• Control Biológico

• Control Químico

4

Toma de decisiones

3

Umbral de daño económico

2

Monitoreo

1

Reconocimiento de plagas, enemigos naturales y daño

• Control Cultural

Figura 2-17 Quinto componente del MIP.

el Control Biológico es seguro y no tiene efectos adversos sobre el ecosistema (ver Capítulo 4: Control biológico).

Control cultural Esta labor tiene por objeto generar condiciones adversas a determinadas plagas reduciendo su incidencia en el cultivo. Algunas medidas culturales incorporadas en una estrategia MIP son: • Eliminación de ramas bajas que tocan el suelo: los frutos cercanos al suelo son más atacados por algunas especies de chanchitos blancos, escamas, babosas y caracoles. Esta labor además facilita el control de hormigas. • Realizar podas de abertura para favorecer la entrada de luz y la circulación de aire al interior del árbol provocando un aumento de la mortalidad de estadios pequeños de diversas plagas como escamas y conchuelas. Esta acción favorece la mejor distribución de los plaguicidas en el interior del árbol. • Eliminar malezas infestadas con plagas para limitar la dispersión del inóculo (por ejemplo, chanchitos blancos en malva y correhuela). • Conservar vegetación herbácea en el huerto como fuente de alimento y refugio físico de insectos y ácaros benéficos, estudiar previamente las asociaciones de plagas con dichas especies, de modo que no se conviertan en inóculo de la plaga, como lo indicado en el punto anterior.

• Limitar la fertilización nitrogenada dado que altas dosis favorecen el ataque de áfidos, chanchitos blancos y otras plagas. Dada la importancia del manejo del hábitat en la regulación de las poblaciones de las plagas, serán revisados en detalles algunos aspectos relevantes al MIP en el capítulo respectivo.

Control químico Una de las tácticas más utilizadas en el manejo tradicional de plagas es el control químico o uso de plaguicidas para la regulación de las plagas, sin embargo, en MIP, es sólo una opción dentro de las medidas factibles de ejecutar, la que se debe evaluar considerando todos los aspectos mencionados en el proceso de toma de decisiones. Otro aspecto que debe considerarse en el ámbito práctico cuando se opta por una medida de control químico es la elección de un plaguicida que además de satisfacer requerimientos de efectividad, selectividad, y bajo impacto ambiental, disponga de registro en el nuestro país y en el de destino del producto, si éste se exportará. Por otra parte, la disponibilidad de la maquinaria adecuada al tipo producto y el número de ellas en relación a la superficie a manejar. En muchos casos no es posible aumentar el número de estos implementos o realizar modificaciones en el corto plazo por lo que se debe maximizar su uso. Dada la importancia de la calidad de la aplicación química, estos aspectos se analizarán en el Capítulo 5: Control químico.

51

Capítulo 3

Monitoreo de plagas y registros P. Larral • R. Ripa

El monitoreo es la labor destinada a estimar la abundancia y distribución de las plagas y sus enemigos naturales en el huerto a través de muestreos periódicos. El objetivo principal del monitoreo es obtener umbrales de acción, es decir, determinar el momento de realizar medidas de control, ya sea aplicación de pesticidas, liberación de enemigos naturales u otras. A través de este manejo se intenta minimizar el daño de las plagas en la cosecha, por lo tanto es relevante asociar la densidad del insecto y/o ácaro plaga con el daño producido. El monitoreo, por otra parte es una de las herramientas que permite aplicar el concepto de Nivel de Daño Econó-

6

MIP

5

Acciones de control

4

Toma de decisiones

3

Umbral de daño económico

2

Monitoreo

1

Reconocimiento de plagas, enemigos naturales y daño

mico (NDE o EIL), al establecer la densidad de la plaga a la cual la reducción del ingreso económico o pérdida, debido al daño provocado por la plaga es equivalente al costo de controlarla. Cabe destacar que Binns et al (2000) define “daño” (damage), como la reducción de la cantidad o calidad del producto cosechable (por ejemplo, kilos de fruta por hectárea) y lo diferencia de la “lesión” (injury) fisiológica que provoca la presencia de la plaga en la planta, afectan el área fotosintética. Por otra parte, hace la diferencia con el daño económico o “pérdidas” (loss), que serían expresadas en unidades monetarias. Por medio del monitoreo es factible determinar el daño y estimar indirectamente la lesión y las pérdidas. Estas

• Muestreo en el campo: – Densidad – Distribución – Estimación de daño • Registro y procesamiento de datos • Seguimiento

Figura 3-1 Segundo componente del MIP.

52 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

huerto como por ejemplo, control de riego, supervisión de poda, cosecha, o embalaje, entre otras actividades que se solicitan al personal asignado y capacitado en monitoreo, circunstancia que va relegando su labor de monitoreo de plagas y enemigos naturales a un segundo plano y no permite que adquiera la experiencia que otorga la práctica y observación directa (Figura 3-2).

R. Ripa

Métodos de monitoreo

Figura 3-2 Monitoreo de plagas en cítricos.

últimas a través de evaluaciones a la cosecha, comparando sectores del predio afectado y libres de la plaga. Esta comparación realizada a través del tiempo genera información invaluable para tomar decisiones de manejo. Existen alteraciones en los frutos y el árbol originadas por factores abióticos (estrés hídrico, deficiencia de minerales, entre otros) y bióticos (bacterias, virus, vertebrados, entre otros), ajenos a los artrópodos (insectos y ácaros), que podrían confundirse con las causadas por las plagas, por ello es importante que el monitor se familiarice con los daños causado por insectos y ácaros, expuestos en el capítulo 8 de esta publicación y los distinga de aquellos que no lo son (Capítulo 12: Galería de imágenes). El monitoreo sistemático del huerto también permite conocer y realizar seguimiento de la biología de las plagas, sus generaciones y apariencia de sus estadios, establecer la presencia y efectividad de los enemigos naturales y, paralelamente, evaluar la eficacia de las medidas de control. Es considerado, además, como un instrumento que valida el uso de productos fitosanitarios en el cumplimiento de normativas internacionales como EurepGAP y otras. La implementación del monitoreo en el predio requiere la capacitación especializada del personal asignado a esta labor, basada en el correcto reconocimiento de las plagas y enemigos naturales, sus ciclos de vida y una metodología de muestreo y entrenamiento en el huerto. El personal, una vez capacitado, es designado como monitor, debiendo estar provisto de implementos básicos como lupa de bolsillo (10 aumentos como mínimo), planillas de registro, apuntador y envases para colecta de muestras, entre otros. En la práctica la mayor dificultad que enfrenta el monitor para realizar su labor es la priorización que se le asigne al monitoreo en la empresa, ya que suele suceder que “compite” con otras labores del

El principal objetivo del monitoreo es determinar la abundancia de las plagas, sin embargo, una determinación del número total de insectos o ácaros presentes sería en la gran mayoría de los casos impracticable. Con el fin de obtener mayor precisión en el muestreo se ha estudiado la distribución de las plagas en el huerto y desarrollado modelos matemáticos que se ajusten a ella (ver “Tipos de distribución” en Capítulo 7: Dinámica de poblaciones). Una parte importante de los insectos y acáros, tales como chanchitos, mosquitas y pulgones, de acuerdo a su biología desarrollan colonias que son agrupadas (Yano, 2004; Jones 1994), este tipo de distribución ha sido descrito a través de diversas ecuaciones matemáticas, la más conocida es la binomial negativa, que resulta ser útil cuando la plaga causa daño directo, (pérdidas medibles de cantidad o calidad del producto). En cambio cuando la plaga posee un efecto sobre la fisiología de la planta (como succión de savia), se requiere relacionar una proporción de unidades infestadas (presencia/ ausencia) con la densidad de la población presente, ya que se estima que este parámetro está relacionado con el daño (Jones, 1994). El estudio de la distribución de la población de la plaga, entre otros factores, permite establecer tamaños muestreales con un grado de confianza adecuado, que permita tomar decisiones de manejo. Uno de los programas de monitoreo implementado a partir de la distribución binomial negativa es el muestro secuencial que tiene la ventaja de ser menos costoso, ya que no establece un tamaño de muestra con antelación, si no que la decisión de seguir monitoreando, se realiza después de que se inspecciona cada unidad de muestreo. Si se sobrepasa un nivel definido de unidades infestadas/ unidades muestreadas, se debe implementar una acción, por el contrario si esa proporción está por debajo de un umbral se detiene el monitoreo, sin embargo, si el porcentaje de infestación, permanece entre ambos rangos, se debe seguir monitoreando. En la práctica muy pocos estudios al respecto se han desarrollado en Chile, en parte por la dificultad de establecer umbrales de acción o líneas de decisión con adecuados niveles de confianza, ya que se requiere establecer a priori el nivel de daño aceptado, que en el caso de plagas que causan daño fisiológico son difíciles de determinar (Gráfico 3-1).

53 Monitoreo de plagas y registros

Southwood y Henderson (2000), por su parte, plantean métodos de monitoreo relativos, absolutos y por indicios de la población. La estimación relativa de la densidad es aquella que no tiene relación directa con una estructura de la planta o área afectada. Se refiere a monitoreo en trampas, capturas o contéo de individuos en un tiempo dado. En general este tipo de monitoreo es menos costoso y más fácil de usar que la mayoría de las estimaciones absolutas, sin embargo de acuerdo a Yano (2004), no provee de una estimación real de la cuantificación de la plaga y tiende a ser menos exacto. Este muestreo puede estar influenciado por factores adicionales a la densidad de la plaga presente, como el lugar donde se han colocado las trampas o las condiciones ambientales, como la velocidad y dirección del viento, entre otras. Ejemplo de estimación relativa: número de trips pegados en una trampa, el número de chinitas Cryptolaemus contados por minuto en una planta y número de insectos colectados en una red. La estimación absoluta de la densidad considera el muestreo de individuos en una unidad de área o hábitat. Se realiza observando el número de individuos de un insecto o ácaro (frecuencia de la plaga), en una estructura (hojas, frutos, yemas, flores, ramillas), o a través de la observación de la presencia o ausencia de los individuos (ocurrencia de la plaga).

Número acumulado de muestras infectadas

Ejemplo de muestro por frecuencia: número de individuos de arañita roja por hoja, en contraste con el de ocurrencia: porcentaje o proporción de hojas con presencia de la arañita roja. El método de ocurrencia, aun cuando no posee la misma exactitud que el conteo de insectos o

ácaros, alcanza un grado de precisión apropiado y utiliza un tiempo razonable como para ser aplicado en huertos comerciales. En general para la gran mayoría de las plagas que atacan paltos y cítricos en Chile, se recomienda en este libro el muestreo presencia/ausencia. Algunas excepciones son: Conteo de las larvas de burritos y capachitos por calicata, determinación de la abundancia de Brevipalpus en frutos cítricos, cuando se desea exportar al mercado de EE.UU. (System Approach), determinación de la abundancia de Chanchitos blancos y sus enemigos naturales a través de trampas de agregación, entre otros, para conocer el detalle de estos muestreos consultar le sección “monitoreo” de cada plaga. Los indicios de la población, están referidos al daño físico, presencia de exuvias, “momias” (chanchitos parasitados), mielecilla u otros efectos causados por los insectos y ácaros que podrían servir para estimar a través de regresión (relación entre dos factores), la abundancia de la población. Sin embargo, en general no es un método preciso y en muchos casos puede inducir a errores, como por ejemplo tratar de estimar la intensidad del ataque de áfidos a través del enrollamiento de los brotes, ya que a pesar de ser un indicio de la plaga, es probable que no se encuentren vivos o estén siendo controlados por sus enemigos naturales. Los indicios de la población son útiles sin embargo cuando se utilizan para determinar el daño de una plaga o el efecto de los enemigos naturales, teniendo especial cuidado de no confundir el daño realizado por un artrópodo del síntoma de un efecto mecánico, deficiencia u otro. Ejemplos de indicios de población: limones deformados por ácaro de la yema (Eriophyes sheldoni) y paltas con russet causado por trips del palto (Heliothrips haemhorroidalis).

Emplear medida de manejo

Continuar monitoreando

No emplear medida de manejo

Número acumulado de muestras inspeccionadas Gráfico 3-1 Clasificación de una proporción utilizando el test de relación de probabilidad secuencial, que muestra las bandas para: aplicar medidas, seguir monitoreando y no realizar tratamiento. (Adaptado de Yano, 2004).

54 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Por otra parte el monitoreo puede enfocarse en el huerto de dos formas, no excluyentes entre si, que permiten al agricultor de acuerdo a los resultados tomar decisiones de manejo: • Monitoreo en estaciones o grupos de plantas marcadas y homogéneamente distribuidas en el cuartel (por lo general de 2 a 4 hectáreas), lo que permitirá realizar un seguimiento de la fluctuación de las plagas a través del tiempo y detectar la respuesta de las plagas y sus enemigos naturales a un determinado manejo, evento climático y fenología de la planta. • Monitoreos al azar, con el fin de detectar tempranamente la presencia de una nueva zona de ataque (foco) dentro de la unidad productiva. En el caso de localizar un foco de plaga, se debe monitorear por separado y analizar los datos en forma independiente. La densidad de la plaga observada tanto en el foco, como en las estaciones refleja sólo cada situación en particular, afectando la toma de decisiones. De la misma forma, las medidas de manejo aplicadas se evalúan separadamente permitiendo seguir con mayor precisión la evolución de la plaga. Es necesario continuar con el monitoreo focalizado hasta que los valores medios obtenidos en el foco se asemejen a los del resto del cuartel, especialmente si fueron tomadas medidas de manejo diferentes. En predios de gran magnitud, y con el objetivo de realizar un seguimiento de aquellos sectores en los cuales se han producido aumentos excesivos de una plaga, es recomendable registrar la ubicación geográfica mediante un sistema de posicionamiento global (GPS). Otros antecedentes relevantes al momento de determinar métodos o momentos críticos de control, además de la estimación de la abundancia de la plaga y otros artrópodos asociados, son el estado y distribución de la plaga en el árbol, observaciones que se deben consignar a través del monitoreo. Es el caso de la conchuela negra donde a través de la determinación del estadio predominante se establecerá el periodo oportuno de aplicación o en escamas donde la ubicación de la plaga en la planta ayudará a dirigir correctamente la aplicación en el árbol.

Que estructura monitorear En las plantas monitoreadas se deben observar las estructuras infestadas por la plaga, de modo de tener una estimación por estructura y no sólo por árbol, ya que cuando se monitorean estructuras pequeñas, como hojas, yemas, frutos o ramillas, ejemplo el 5% de frutos infestados con chanchitos, el grado de exactitud del muestreo es mayor comparado a establecer la presencia de la plaga o los enemigos naturales en grandes estructuras,

como por ejemplo, presencia de chanchito en el 10% de los árboles. La estructura atacada por el insecto puede variar a través del año, dependiendo de la biología y movilidad de cada especie, por lo tanto el conocimiento de estos procesos, es necesario para llevar a cabo el monitoreo. El monitoreo de los enemigos naturales puede realizarse de forma similar al monitoreo de plagas, ya que son individuos que están asociados y, en general, se encontrarán en las mismas estructuras. Un protocolo de muestreo que considera observar la presencia de la plaga en el fruto debe considerar también la búsqueda de los enemigos naturales en él, siendo más fácil observar aquellos enemigos naturales de menor movilidad, ya sea por ser una característica intrínseca (ejemplo larva de Cryptolaemus) o por su estado (como parasitoides en estado larvario al interior de su hospedero). De acuerdo a lo anterior, la dificultad del monitoreo de enemigos naturales está estrechamente relacionada a la dificultad de monitoreo de la plaga, ya sea por estar asociada a muchas estructuras de la planta o bien a la diversidad de enemigos naturales que presente. La arañita roja de los cítricos y la arañita del palto son ejemplos de monitoreo de menor dificultad, ya que atacan casi exclusivamente las hojas y sus depredadores también se encuentran en esa estructura, alimentándose de su presa. Por lo tanto, el monitoreo puede considerar el registro presencia/ausencia de la plaga y de sus enemigos naturales simultáneamente. El monitoreo de enemigos naturales es más complejo cuando las plagas asociadas presentan hábitos crípticos, es decir que tiende a ocultarse, o atacan más de una estructura de la planta, como ocurre con los chanchitos blancos. Ellos se refugian en frutos (ombligo, roseta, pedúnculo), brotes, ramillas, hojas, corteza e incluso en el cuello de la planta, lugares donde es posible detectar parasitoides y depredadores que requieren ser monitoreados. Para establecer la presencia y diversidad de este tipo de plaga y sus enemigos naturales se propone el uso de cartón corrugado amarrado en el tronco, sin embargo, se debe tener en cuenta que no es un método para la evaluación de la densidad de la plaga y la efectividad del control biológico, por lo tanto no es excluyente del monitoreo de otras estructuras como frutos o brotes. Frecuentemente, la densidad y efecto de algunos enemigos naturales es subestimada debido a la dificultad de: (1) identificar los individuos que han sido parasitados recientemente y aún no muestran los signos; (2) distinguir la acción de depredadores que actuaron sin dejar evidencias de su acción; (3) determinar la mortalidad de la plaga producida por un parasitoide que se alimenta de su hospedero (host feeding); (4) estimar el efecto aditivo

55 Monitoreo de plagas y registros

sobre la mortalidad en una generación completa, producto de la acción de los enemigos naturales que actúan en los diferentes estados o estadios de una plaga, lo que se presenta en especies con traslape de generaciones. Existen algunas plagas que bajo ciertas condiciones son eficientemente controladas por los enemigos naturales asociados a ellas. Ejemplos son la conchuela blanca acanalada, la conchuela blanda y la mosquita blanca de los cítricos. En estos casos, determinar la presencia de los enemigos naturales es aun más relevante, ya que se puede evitar del todo el uso de agroquímicos.

• Frutos: 10 unidades por planta en el caso de Chanchitos blancos, escamas, Trips del palto y otros insectos que atacan esta estructura en la época que está presente. • Hojas: 10 unidades por planta para ácaros, mosquitas blancas, conchuela piriforme, entre otras. • Ramillas: 5 unidades por planta para conchuelas y escamas.

La adecuada identificación de la acción de los enemigos naturales por medio de técnicas de monitoreo permite asignarles el verdadero rol en la regulación de la densidad de las plagas y, por consecuencia, la necesidad de protegerlos mediante métodos racionales de manejo, en el que los insecticidas desempeñan un papel importante, teniendo en cuenta que no son la única opción.

• Brotes: 10 unidades por planta en pulgones y 2 a 4 brotes para adultos y huevos de Mosquita blanca algodonosa.

Tamaño de la muestra

• Trampas de agregación (bandas de 10 cm de cartón corrugado): 10 por cuartel instaladas en el tronco o las ramas madres en árboles de gran tamaño, útil para determinar presencia de enemigos naturales en huertos con ataque de chanchitos blancos.

Un programa de monitoreo debe considerar un tamaño de muestra que, refleje adecuadamente las densidades reales de plagas y sus enemigos naturales, presentes en el huerto. En general, mientras mayor es el tamaño de la muestra (mayor número de estructuras observadas), la estimación refleja mejor la densidad real de la plaga presente en el huerto. En el caso de plagas que tienen hábitos gregarios (se concentran en algunos sectores), el tamaño de la muestra, para poder detectar los focos debe ser mayor que en el caso de las especies que se distribuyen más uniformemente, sin embargo, cuando los focos han sido definidos estos sectores pueden ser monitoreados con una menor intensidad. En general, se recomienda monitorear, al menos, el 1% de las plantas de un cuartel (con un mínimo de 10 plantas) y evaluar en terreno la efectividad de esta medición, aumentando la muestra en la medida que se detecte variabilidad o carencia en la precisión. Por otra parte se debe considerar el costo y disponibilidad de personal capacitado.

• Ramas madres: todas para Conchuela Acanalada, chanchitos blancos e insectos xilófagos. • Calicatas: 10 por cuartel en caso de burritos y capachitos.

Frecuencia del monitoreo La frecuencia y el momento en que se realiza el monitoreo dependen del largo del ciclo de vida de la plaga (asociado a la capacidad reproductiva de ésta) y al tiempo que requiere para alcanzar niveles de daño económico: por ejemplo, la Arañita roja de los cítricos posee un ciclo corto, desde primavera a otoño, además de un alto potencial reproductivo, por ello, se debe monitorear con más frecuencia en este período. En cambio la conchuela negra que en la mayoría de la zona frutícola en Chile posee una generación al año, los monitoreos pueden ser más distanciados.

Tanto los árboles como las estructuras a monitorear deben ser escogidas al azar de modo de estimar en la forma más exacta posible la población real de la plaga, un monitoreo sesgado (escoger aquellas plantas que se sabe tienen mayor densidad), puede inducir a tomar medidas de manejo, cuando aún no se ha alcanzado el umbral económico y por lo tanto generar, por una parte, pérdidas económicas y por otra, eliminar la fauna benéfica.

En general, se debe mantener un monitoreo sistemático de la planta, aumentando su frecuencia en las siguientes situaciones:

Según la plaga que se trate, se sugiere muestrear las siguientes estructuras y número de unidades:

• Durante períodos de mayor temperatura dado que el ciclo de vida se acorta.

• Cuando la estructura afectada por la plaga es el fruto. • En períodos críticos como brotación y cercanía a la cosecha.

56 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

• Posterior a las medidas de control (químico, biológico o cultural) con el fin de establecer su efectividad. Como norma se debe implementar un monitoreo general del predio al menos una vez al mes, de manera de detectar nuevos focos de plagas, realizar un seguimiento de la abundancia y estado de las especies detectadas en monitoreos anteriores, determinar el estatus del control biológico y la efectividad de medidas aplicadas con anterioridad. En períodos críticos, que en paltos y cítricos de la zona central, para la mayoría de las plagas se presenta en los meses de diciembre y enero se recomienda monitorear quincenalmente. De acuerdo a la especie frutal y las plagas presentes en el predio se establecerán localmente otros períodos críticos de monitoreo como por ejemplo: análisis de yema en limoneros con antecedentes de ácaro de la yema en los meses de mayo a junio, monitoreo de arañita roja en palto a inicios de otoño o determinación de presencia de B. chilensis en cítricos destinados a EE.UU.

Registros y planillas Los valores que se obtienen del monitoreo de las plantas seleccionadas son consignados en planillas de registro de monitoreo que deben incluir: • Número o nombre del cuartel. • Especie frutal y variedad. • Especie plaga a monitorear.

se utilizan los símbolos 1 y 0 para denotar presencia o ausencia de la plaga o de parasitoides, respectivamente. A través de la evaluación presencia-ausencia del insecto o ácaro y sus enemigos naturales, se obtiene un porcentaje de ocurrencia de dichas especies en una fecha determinada. Una vez que la persona adquiere mayor práctica y destreza, puede utilizar una planilla para monitorear todas las plagas a la vez. Para ello, una columna en el cuadro representa una plaga o enemigo natural y las filas los árboles: en un casillero se consignará el valor que represente el número de estructuras del árbol con la especie, por ejemplo 8, esto es, de 10 hojas monitoreadas en un árbol, 8 presentan la plaga (Cuadros 3-2 y 3-3). Considerando lo anterior múltiples planillas pueden ser válidas al momento de monitorear, siempre y cuando exista un conocimiento integral del sistema y se consignen en ellas los antecedentes básicos planteados anteriormente, que permiten identificar acertadamente los componentes del entorno. Debido a que las decisiones de manejo se basarán en las observaciones registradas, el monitoreo debe reflejar, de la forma mas precisa posible, la densidad poblacional de la plaga, el daño asociado a esa plaga y los enemigos naturales presentes en un cuartel en un período determinado. En este sentido, el tamaño de la muestra es fundamental: a mayor tamaño, más preciso y representativo es el valor obtenido. Sin embargo, es necesario considerar el costo que ello implica (tiempo requerido y mano de obra necesaria).

• Estructura de la planta monitoreada. • Nombre de quien realiza el monitoreo. • Fecha del registro. • Abundancia de la plaga y sus enemigos naturales. • Presencia de daño. • Observaciones: especies de enemigos naturales y hormigas presentes, estado fenológico de la planta, presencia de fumagina, tratamientos químicos efectuados, etcétera. El monitoreo registrado en forma ordenada y sistemática en planillas, debe almacenarse como respaldo de la información obtenida. Idealmente estos datos deben ser procesados generando gráficos de densidad o abundancia promedio de la plaga en una estructura del árbol a lo largo del tiempo y en un cuartel determinado. El diseño de las planillas debe facilitar la toma de los datos y su posterior procesamiento en el computador, motivo por el cual se muestra un ejemplo de planilla en el Cuadro 3-1, en el que un casillero representa lo observado en una estructura de la planta (por ejemplo, hojas), para lo cual

Procesamiento de la información Inmediatamente después del monitoreo, los datos deben ser, de preferencia, digitalizados para la elaboración de gráficos (Gráfico 3-2), indicando en el eje Y los promedios de la abundancia de la plaga, enemigos naturales y daño, y en el eje X las fechas de muestreo. La curva generada en base a varias fechas sucesivas de monitoreo indicará la fluctuación poblacional de la plaga, la incidencia de daño y los enemigos naturales presentes en un cuartel, la que se asocia al efecto de aplicaciones químicas u otras prácticas de manejo, eventos climáticos y fenología del árbol, por lo que resulta práctico e ilustrativo incorporarlos en el gráfico. El análisis en tiempo real de esta información generará una sólida plataforma para la toma oportuna de decisiones. Durante la cosecha se debe estimar el daño en las partidas de frutos al igual que durante el procesamiento de ésta en el packing, con el fin de cotejar esta información

57 Monitoreo de plagas y registros

Cuadro 3-1 Ejemplo de planilla para el monitoreo de Mosquita blanca en cítricos. Cuartel/N° has:

Fecha:

Especie/variedad:

Monitor: Mosquita Blanca

Presencia en las hojas

Árbol

Filas: Árboles seleccionados/ Marcados en cada cuartel

Porcentaje de hojas con presencia de la plaga

Parasitismo Total

Brotes

Total

Presencia en hojas

Total

1

1

0

0

1

1

1

0

0

0

0

4

0

1

1

0

0

1

1

0

1

0

0

1

1

5

2

1

1

0

0

0

1

0

0

0

1

4

0

1

1

0

1

0

0

0

1

1

1

1

0

5

3

1

0

0

0

0

0

0

0

1

0

2

0

1

1

0

1

1

0

0

0

0

1

0

1

4

4

1

0

0

0

0

1

0

0

0

1

3

1

1

2

0

0

1

1

1

0

1

0

1

1

6

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0

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1

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0

0

1

2

1

0

1

0

1

1

1

1

0

0

0

0

0

4

6

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0

1

0

0

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0

0

0

0

1

0

1

1

0

0

1

1

1

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0

0

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0

4

7

1

0

0

0

0

0

1

0

0

0

2

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0

1

0

1

0

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0

0

0

0

0

0

1

8

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1

1

1

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0

1

0

0

5

0

0

0

0

0

0

0

0

1

0

0

1

0

2

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1

1

0

1

1

1

0

7

1

0

1

0

1

0

0

0

0

0

0

0

0

1

10

0

1

1

1

0

0

0

1

0

1

5

1

0

1

0

1

0

0

0

0

1

0

1

0

3

11

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0

0

0

1

0

1

1

0

0

3

1

1

2

0

0

0

0

0

0

1

0

0

0

1

12

1

0

0

0

0

0

1

1

0

0

3

1

1

2

0

1

0

0

0

0

1

0

1

0

3

13

1

0

0

1

1

1

0

1

0

0

5

0

1

1

0

0

0

0

0

0

0

0

1

0

1

14

1

0

0

1

0

1

1

1

1

0

6

0

1

1

0

1

1

0

0

0

0

0

0

0

2

15

1

0

0

0

1

0

0

1

0

0

3

1

0

1

0

0

0

1

0

0

0

0

0

0

1

16

0

0

0

1

0

1

1

1

0

1

5

1

0

1

0

1

0

0

0

0

1

0

0

0

2

17

0

1

0

0

0

1

1

1

0

0

4

1

0

1

0

0

1

0

0

0

0

1

0

0

2

18

0

1

0

1

0

1

0

1

1

0

5

0

0

0

0

0

0

0

0

0

1

1

0

0

2

19

0

1

1

1

0

1

0

1

0

0

5

0

0

0

0

1

0

0

0

0

0

1

0

0

2

20

1

1

0

1

0

1

0

0

0

0

4

1

0

1

0

1

0

1

0

0

1

0

0

1

4

Total hojas atascadas

78

Brotes

20

Total hojas con parasitismo

55

Porcentaje de hojas atascadas

39%

% brotes atascados

50%

Porcentaje de hojas con presencia parasitismo

71%

Porcentaje de hojas atacadas =

total de hojas atacadas x 100 total de hojas muestreadas

Porcentaje de brotes atacadas =

total de brotes atacados x 100 total de brotes muestreados

Porcentaje de hojas con presencia de parasitismo =

con la obtenida en los monitoreos durante la temporada en los diferentes cuarteles. En síntesis, el monitoreo entrega información fundamental para tomar las decisiones de manejo: la observación periódica y sistemática consignada en planillas de registro y luego graficada, muestra la evolución de la plaga, ayuda a evaluar la interacción con sus enemigos naturales, con hormigas y otros hospederos, permite apreciar el efecto de las aplicaciones químicas y realizar comparaciones del manejo año tras año.

Cada casillero representa una estructura (hoja). Presencia = 1 Ausencia = 0 de la plaga o enemigo natural en la estructura

Suma de las hojas con presencia de parasitismo

total de hojas con presencia de parasitismo x 100 total de hojas atacadas por la plaga

En la descripción de cada una de las plagas más importantes en este libro se entrega una pauta de cómo realizar el muestreo. El Cuadro 3-4 muestra los períodos críticos de monitoreo de las principales plagas de paltos y cítricos.

58 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Cuadro 3-2 Ejemplo planilla de monitoreo para plagas del palto.

42,5% de los frutos infectados con la plaga

59 Monitoreo de plagas y registros

Cuadro 3-3 Ejemplo planilla de monitoreo para plagas de cítricos.

60 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Presencia de Chanchito blanco y enemigos naturales en frutos Palto, Hass. Predio La Fortuna Cuartel B, Quillota 50,00

1,6

% presencia plaga

% presencia enemigos naturales

1,4 40,00

1,2 1,0

30,00

0,8 20,00

0,6 0,4

10,00

0,2 0,00

0,0 Jun 2006

Jul 2006

Ago 2006

Sep 2006

Oct 2006

Nov 2006

Dic 2006

Ene 2007

Feb 2007

Mar 2007

Abr 2007

May 2007

Jun 2007

Monitoreo realizado el 6 de febrero (Cuadro 3-2) graficado para realizar seguimiento en el tiempo

Fecha monitoreo Aplicación de aceite 1%

[

Frutos

Brotes

Enemigos naturales

]

Gráfico 3-2 Ejemplo de gráfico construido a partir de monitoreos presencia-ausencia de Chanchito blanco.

Cuadro 3-4 Periodos críticos de monitoreo de las principales plagas presentes en paltos y cítricos para la zona central de Chile*.

Plaga

Ene

Feb

Mar

Abr

May

Jun

Jul

Ago

Sep

Oct

Nov

Dic

PALTOS Chanchitos blancos

+++

++

Escamas

+++

+++

Arañitas

++

+++

Trips

+++

+++

Chanchitos blancos

+++

+++

++

+

+

+

+

+

+

+

+

++

++

+

+

+

+

+

+

+

++

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++

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+

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+

+

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CÍTRICOS +

Escamas

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++

++

+

+

++

+++

Arañita roja

++

+++

+++

++

+

+

+

+

+

++

++

++

Ácaro de la yema

+

+

+

++

+++

+++

++

+

+

+

+

+

Falsa arañita roja de la vid

+

++

+++

+++

++

+

+

+

+

+

+

+

+++

++

+

+

+

+

+

+

+

+

++

+++

Conchuelas Áfidos Mosquita blanca Capachito de los frutales

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+

+

+

+

+

+

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++

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+++

+++

+++

++

++

+

+

+

+

+

* Adicionalmente a los períodos indicados en el cuadro, considerar la evaluación del daño a cosecha.

61

Capítulo 4

Control biológico R. Ripa • P. Larral • S. Rodríguez

Entre los componentes primarios del MIP se encuentra el Control Biológico, implementado progresivamente durante décadas en la citricultura y en la producción de paltas en Chile (Rojas 2005), estableciendo una excelente condición fitosanitaria del país que requiere ser preservada y explotada en beneficio del prestigio de los productos exportados, protegiendo el ambiente, la salud humana y manteniendo la rentabilidad del cultivo. El Control Biológico es definido por Van Driesche, et al (2007) como el uso de enemigos naturales para reducir poblaciones de plagas a densidades menores, ya sea temporal o permanentemente.

6

MIP

5

Acciones de control

En el manejo de las plagas de paltos y cítricos es importante considerar que en Chile existen situaciones que favorecen el control biológico, entre las que destacan: • Una amplia variedad de enemigos naturales que regulan las plagas en cítricos y paltos, muchos de ellos introducidos progresiva y exitosamente a Chile. • Un aporte importante de enemigos naturales provenientes de los hospederos que se encuentran en malezas y otras especies vegetales del entorno. • Un moderado a escaso uso de productos fitosanitarios, especialmente en paltos, situación que es importante preservar y promover como ventaja de marketing.

• Control Biológico

• Enemigos naturales

• Control Químico

4

Toma de decisiones

3

Umbral de daño económico

2

Monitoreo

1

Reconocimiento de plagas, enemigos naturales y daño

• Control Cultural

• Selectividad de insecticidas • Alimento • Hospederos alternativos • Control de hormigas • Polvo

Figura 4-1 Aspectos relevantes del Control Biológico en el esquema MIP.

62 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Agentes de control biológico Entre los agentes de control biológico de insectos y ácaros plaga se distinguen parasitoides, depredadores y entomopatógenos. Los insectos parasitoides de mayor importancia económica pertenecen a los órdenes Hymenoptera y Diptera, y se caracterizan por vivir a expensas de otro organismo al menos en un estado de su ciclo de vida. Generalmente los parasitoides matan a su hospedero antes de alcanzar la madurez o al madurar, diferenciándose así de los parásitos. Sólo los estados inmaduros se desarrollan a expensas de los hospederos, mientras que los adultos son de vida libre y frecuentemente se alimentan de mielecilla y néctar. Algunos himenópteros presentan un comportamiento que agrega mortalidad a la acción del parasitismo propiamente tal: la alimentación del hospedero o host feeding. La magnitud de la mortalidad debida a la alimentación sobre el hospedero puede ser similar o incluso mayor que la causada por el parasitismo (Amalin et al 2002; Bernardo et al 2006), sin embargo, su efecto (funcionalmente equiparable a depredación) es frecuentemente ignorado, subestimando notablemente los niveles de mortalidad causados por los parasitoides. Las hembras parasitoides deben periódicamente encontrar alimento para obtener la energía que haga sustentable su locomoción, como así también para aumentar su longevidad y fertilidad, obteniendo nutrientes desde sus hospederos en la forma de vitelo, hemolinfa y/o tejido.

R. Ripa

Figura 4-2 Hembra de Encarsia formosa alimentandose de la hemolinfa de Trialeurodes vaporariorum (host feeding).

El host feeding ha sido observado en más de 150 especies, pertenecientes a 17 familias de himenópteros parasitoides, con registro para ecto y endoparasitoides, koino e idiobiontes, solitarios y gregarios, monófagos y polífagos, así como primarios y secundarios (Virla 2007). Durante este comportamiento alimenticio, las avispas adultas se alimentan de la hemolinfa de los individuos plaga, lo cual puede o no, ser condición previa imprescindible para la oviposición (Jervis y Kidd 1986). Algunos parasitoides utilizan hospederos de distinto tamaño, según sea para oviponer o para alimentarse (Duncan y Peña 2000). Esta conducta ha sido observada principalmente en parasitoides de la familia Aphelinidae (Tellez et al 2003), sin embargo también se ha registrado en especies de otras familias de parasitoides (Syngenta 2008). En particular se ha descrito para individuos del género Aphytis, actuando sobre la Escama blanca del palto en el caso de A. diaspidis y sobre la Escama de San José, parasitada por A. aonidiae y A. diaspidis, comportándose como eficientes depredadores, aumentando su potencial como agentes de control biológico, ya que las plagas registran una mortalidad total (parasitismo + host feeding) mayor que la alcanzada sólo por efecto del parasitismo. En el caso del afelínido Eretmocerus mundus, hasta el 40% de la mortalidad que se produce se atribuye al host feeding, lo cual es una ventaja adicional que se asocia al parasitoide (Syngenta 2008). Lo mismo ocurre con el parasitoide Encarsia formosa, que también se alimenta de los fluidos

63 Control biológico

Enemigo natural

Herbívoro plaga

Ecología de poblaciones

R. Ripa

Planta

Figura 4-3 Esquematización de la interacción tritrófica: planta - artrópodo plaga - enemigo natural (adaptado de Hoddle 2003).

corporales de ninfas de la mosca blanca Trialeurodes vaporariorum, matándolas sin parasitarlas (Figura 4-2). Los parasitoides, según el estado de la plaga en que actúan, se clasifican en parasitoides de huevo, larva, ninfa, pupa y adulto. El lugar de oviposición varía con la especie de parasitoide: aquellos que insertan sus huevos dentro del hospedero se denominan endoparasitoides, mientras que en los ectoparasitoides, el adulto primero inmoviliza al hospedero y luego ovipone sobre éste o en la cercanía, desarrollándose las larvas externamente. Si de cada hospedero se desarrolla un solo individuo parasitoide, éste es solitario. El parasitismo gregario se da siempre que se desarrolle y sobreviva más de un parasitoide de la misma especie en o sobre un hospedero. Los hiperparasitoides o parasitoides secundarios se desarrollan en otras especies de parasitoides. La existencia de hiperparasitismo se considera, generalmente, desfavorable para el éxito del control biológico. La depredación es una estrategia de alimentación que se encuentra ampliamente difundida en los insectos y arácnidos. En comparación con los parasitoides, los depredadores son generalmente más grandes que su presa. Los órdenes de insectos depredadores más representados son Hemiptera, Coleoptera, Diptera y Neuroptera. Entre las especies de ácaros, la familia Phytoseiidae contiene un gran número de especies depredadoras. Los insectos y ácaros depredadores capturan y matan a su presa para alimentarse y, a diferencia de los parasitoides, generalmente consumen varias presas para completar su desarrollo.

Los entomopatógenos agrupan a virus, bacterias, protozoos, hongos y nemátodos, los cuales causan enfermedades en insectos y ácaros. El Control Biológico puede representarse como una interacción tritrófica en la que interviene la planta, el artrópodo plaga y el enemigo natural (Figura 4-3), y en la que se conjugan factores asociados principalmente al manejo del huerto y su entorno. La comprensión de esta interacción tiende a maximizar el potencial de los enemigos naturales. Los enemigos naturales se encuentran formando parte de las poblaciones presentes en los huertos y sus alrededores, siendo la densidad de éstos muy variable, por tal motivo se han desarrollado tres estrategias de Control Biológico que se aplican en la agricultura para el manejo de plagas: El Control Biológico Clásico que consiste en la introducción de nuevas especies de enemigos naturales para plagas recientemente ingresadas o registradas en un territorio, labor realizada desde hace mas de 70 años por INIA La Cruz. El Control Biológico Aumentativo o Inundativo es el aumento de las poblaciones de enemigos naturales a través de liberaciones al medio, provenientes de crianzas en laboratorios o centros especializados. Las liberaciones se justifican cuando se estima que la densidad de una determinada plaga generará daños económicos por ausencia o escasez del enemigo natural y éstos poseen probada eficacia sobre la plaga. La liberación de enemigos naturales criados en insectarios (Control Biológico Au-

64 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

mentativo) y el Control Biológico por Conservación son observados por Van Driesche et al (2007) como métodos que no han sido satisfactoriamente comprobados y de principal interés para la investigación y su aplicación en programas de MIP. El Control Biológico Conservativo consiste en la modificación de las prácticas culturales para favorecer el desarrollo de los agentes de control biológico. El manejo y conservación del hábitat que aumente la abundancia y la eficiencia de insectos y ácaros benéficos en el huerto es uno de los aspectos relevantes en el MIP ya que se lleva a cabo a través de la regulación de las interacciones de los componentes del sistema agrícola para potenciar la eficacia de los enemigos naturales nativos o introducidos y así prevenir o mitigar el daño económico producido por las plagas. En general, la conservación de un ambiente propicio para el buen desempeño de los enemigos naturales involucra reducir los factores que los afectan y/o suministrar los recursos que éstos requieren en su hábitat. El control biológico por conservación permite la integración de los enemigos naturales en sistemas de manejo de plagas de cultivos dominados por plaguicidas y estrechamente asociados a la agricultura orgánica, aunque no están limitados a ésta, tales como los cultivos de cobertura, cultivos intercalados, refugios y las plantas en hileras como recurso para los enemigos naturales (Van Driesche et al 2007). Aumentar la eficacia de depredadores y parasitoides requiere de un programa de manejo del hábitat que brinde a los enemigos naturales hospederos alternativos, un suministro constante de alimento suplementario como néctar y polen, y disponer de refugio físico (ver Capítulo 6: Manejo del hábitat).

Crianza de enemigos naturales Considerando que la condición de los enemigos naturales es un factor relevante para maximizar su labor, lo que requiere que hayan sido producidos bajo un esquema que incluya control de calidad de la crianza (Ripa 2006). La crianza o reproducción de enemigos naturales en condiciones confinadas se realiza con fines comerciales o de investigación para aumentar la efectividad del control biológico de plagas, incorporar nuevas especies en un ecosistema determinado para combatir plagas invasoras o evaluar el efecto de especies benéficas. Durante la fase inicial de la crianza ocurre una importante mortalidad, denominada “crash”, debido a que los individuos que se traen desde el campo no poseen una adaptación adecuada a las condiciones artificiales de crianza. Esta condición provoca una pérdida sustancial de genotipos, y por ende, de variabilidad, por lo que se han elabora-

do una serie de recomendaciones para evitar o disminuir la pérdida de fitness en la producción comercial: 1. Iniciar la crianza con mil individuos como mínimo. 2. Introducir periódicamente individuos del campo, desde el inicio de la producción o crianza. 3. Obtener poblaciones de diferentes regiones geográficas y mantenerlas en crianzas separadas o subunidades (preferentemente cerca de 100) que actúan como reservorios genéticos aumentando la variabilidad. 4. Mantener las subunidades en diferentes condiciones ambientales. 5. Realizar cruzamientos entre poblaciones de diferentes áreas geográficas, generando híbridos que serán comercializados y liberados. 6. Criar una o más generaciones en jaulas en condiciones de campo. 7. Capturar individuos que sobrevivieron y se multiplicaron después de liberados, e introducirlos en las crianzas, incorporando así genotipos capaces de sobrevivir en el campo. Un ejemplo clásico de la pérdida de fitness a través de las generaciones es Trichograma brassicae: Van Bergeijk et al (1989) observaron disminución del tamaño de los adultos, pérdida de vigor de los individuos, cambios en la estructura genética y conducta de no aceptación o rechazo de huevos de la plaga.

Control de calidad de enemigos naturales El control de calidad es un procedimiento mediante el cual se verifica y uniformiza la condición del producto para sostener su producción y uso eficiente en el tiempo, sin embargo, en condiciones de laboratorio o semiartificiales, se ha observado un deterioro de la calidad o vigor de las crianzas masivas de enemigos naturales durante varias generaciones, lo que disminuye las probabilidades de éxito en el desempeño de insectos y ácaros benéficos cuando son utilizados comercialmente en el control de plagas. La calidad se estima a través de un número delimitado de parámetros cuantificables que permiten comparar individuos criados artificialmente y los individuos de campo, asociado en gran medida, con el nivel de vigor o fitness, definido como el éxito reproductivo de los insectos. La disminución del fitness de insectos en crianza en ambientes artificiales es causada por la mantención de condiciones ambientales constantes (humedad, temperatura, alimento, etc.) no apropiadas para generar selección y por la ausencia de competencia interespecífica.

65 Control biológico

En la crianza de parasitoides se observa con frecuencia una modificación de la proporción de sexos con una marcada abundancia de machos explicada por el uso de estadios no adecuados para la reproducción del parasitoide. El tamaño del adulto o pupa es otro indicador de problemas en la crianza: en Trichogramma spp, un mayor tamaño del adulto aumenta la fecundidad, longevidad, rapidez de la ovipostura, capacidad de búsqueda y vuelo, y proporción de hospederos parasitados, por lo tanto, un mayor número de individuos pequeños incrementaría las probabilidades de una reducción en su eficacia. Metaphycus spp criados en hospederos de mayor tamaño origina individuos más grandes, con una mayor carga de huevos y más longevos. El costo de realizar control de calidad presenta beneficios asociados tanto para el agricultor, a través de un aumento de la efectividad de los enemigos naturales, como para el productor de los mismos, mediante la comercialización de insectos y ácaros de prestigio y calidad, además de una notable disminución de la variabilidad de los resultados, que estabiliza la producción. Los puntos claves del control de calidad se resumen de la siguiente forma: • Cuanto mayor es el número de generaciones desde el inicio de la crianza, mayor es el riesgo de cambios genéticos y disminución del fitness. • Las condiciones de crianza deben, en lo posible, simular lo que ocurre en el campo, generando además señales para el aprendizaje asociativo de la plaga y la planta relacionado con olores, colores y formas. • La mantención de la diversidad genética aumenta la plasticidad de la población en crianza permitiendo una mayor interacción bajo variadas condiciones ambientales, logrando mejores resultados. • El control de calidad detecta problemas, evita la pérdida de fitness y aumenta la efectividad de los enemigos naturales, disminuyendo la variabilidad de los resultados. • La crianza masiva comercial es un compromiso entre cantidad y calidad de organismos producidos en términos de la efectividad en el campo. • Los usuarios deben consultar a los proveedores de enemigos naturales si se realizan procedimientos de control de calidad en su producción.

Cambios que ocurren en la crianza La principal causa de la disminución del fitness de insectos producidos comercialmente son las condiciones a que se someten las crianzas, ya que los insectos se encuentran aislados en ambientes uniformes durantes varias

generaciones lo que deriva en una notable disminución de la variabilidad genética en la población, estableciéndose, por lo general, genotipos de regular calidad. Esta disminución del fitness en los insectos utilizados en control biológico se refleja en una disminución de su efectividad en el campo a través de: • Disminución de la capacidad de vuelo de los adultos, afectando su dispersión. • Deterioro de la capacidad de búsqueda de la plaga. • Aumento del tiempo de manipulación de la plaga. • Disminución de la fecundidad. • Disminución de la sobrevivencia (longevidad). • Disminución de probabilidades de interacción con la plaga (depredación, ovipostura, alimentación, etc.). El uso de hospederos alternativos puede causar cambios en la calidad y en el reconocimiento de las señales o semioquímicos de la plaga (olores, por lo general) a través de las cuales los enemigos naturales reconocen a su presa. Los componentes del fitness apropiados en la crianza masiva son distintos de los requeridos en el campo, por ejemplo, en la crianza de Trichogramma se utiliza huevos de la polilla de la harina, en circunstancias que para cumplir su rol benéfico en terreno, esta avispita debe reproducirse sobre huevos de otras plagas en cultivos de tomate, maíz u otros. En crianzas confinadas, el cruzamiento entre animales emparentados origina lo que se conoce como depresión de la endogamia, es decir una alta tasa de homocigosis, en que el número de pares de genes iguales con mutaciones aumenta, causando una marcada disminución del fitness. Estos cambios suceden rápidamente durante la domesticación, donde se ha observado que se adelanta el apareamiento y oviposición, acortándose el ciclo a partir de la 5ª a 9ª generación en condiciones de crianza. En general, la crianza comercial de una especie constituye una “población cerrada” donde no ingresa nuevo material genético y los cambios ocurren sobre un limitado conjunto inicial de genes. Estos cambios causan mayores problemas sobre el Control Biológico Inundativo y menos en el Inoculativo, ya que en este último los enemigos naturales se reproducen activamente dando lugar a una selección de genotipos que se adaptan a las condiciones de campo.

Riesgos de la introducción de material de campo La introducción a la crianza de enemigos naturales colectados en el campo presenta el riesgo de incorporar patógenos, ya que pueden contener microorganismos

66 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

como virus, bacterias, protozoos, hongos y nemátodos, y afectar a los enemigos naturales producidos masivamente, disminuyendo la efectividad y la reproducción. La susceptibilidad a estas enfermedades aumenta con la falta de alimento, la aglomeración y el estrés. La eliminación de patógenos se realiza a través del uso de calor, antibióticos, sanitización, cambios en métodos de crianza y prevención (selección del material de campo) tanto de los hospederos como de los enemigos naturales. De la misma forma pueden ser introducidos parasitoides secundarios y otros organismos no deseados. Por ejemplo, en la colecta de pupas parasitadas de mosca doméstica, además de emerger Spalangia y Muscidifurax, puede desarrollarse Nasonia, un parasitoide que se adapta muy bien a condiciones de crianza masiva desplazando a las demás especies, pero es inefectivo en condiciones de campo. En el caso de enemigos naturales de chanchito blanco, se debe evitar la introducción de otros enemigos naturales en las crianzas, como Leucopis y Sympherobius, y el ingreso de ácaros que contaminan la producción.

Nivel de calidad de la crianza Reconociendo que los procesos de crianza masiva modifican a los enemigos naturales, se ha llegado a demandar una calidad aceptable con la cual se logra el control de la plaga, ya que frecuentemente surgen preguntas acerca de cuál es el nivel de calidad que se debe exigir y si es razonable esperar un estándar igual al de los individuos de campo.

Factores que afectan la abundancia de enemigos naturales Selectividad de los plaguicidas La aplicación de plaguicidas tradicionales, junto con controlar las plagas, causa mortalidad de los enemigos naturales, por lo general más elevada que la de la plaga, aspecto relacionado con el nivel de selectividad de los productos químicos hacia la fauna benéfica. Como consecuencia, la población residual de la plaga que sobrevive después de una aplicación de pesticida, se reproduce en ausencia de la acción reguladora de sus enemigos naturales (Figura 4-3). La elevada mortalidad de los enemigos naturales por efecto de los plaguicidas se debe a sus características fisiológicas y de comportamiento. La gran mayoría de los enemigos naturales se desplazan activamente sobre la superficie del vegetal con el fin de buscar a su presa

u hospedero, por lo que colectan y acumulan una gran cantidad del producto, mayor que aquellos artrópodos menos móviles (como escamas y conchuelas). Además, carecen de los complejos mecanismos de detoxificación que poseen muchos de los artrópodos fitófagos que se alimentan de plantas que contienen compuestos tóxicos como protección contra los herbívoros. En este ámbito, el manejo de las plagas debe tender al uso de productos más selectivos, es decir, que causen menor mortalidad de los enemigos naturales. Por otra parte, cuanto más tiempo perduren activos los residuos del pesticida sobre el vegetal, mayor será el período requerido para que los enemigos naturales se recuperen en el huerto. Ejemplo de esto son algunos insecticidas piretroides, los cuales son nocivos para los enemigos naturales por un largo período, muy superior que para la plaga. Dentro de los productos que presentan menor toxicidad se encuentran los detergentes agrícolas y aceites minerales en sus dosis menores.

Fuentes de alimento de los enemigos naturales Muchos de los insectos benéficos en estado adulto requieren de una dieta alimenticia diferente que la de sus estados en desarrollo, principalmente compuesta de hidratos de carbono y proteínas. Los hidratos de carbono provienen de azúcares excretados por los insectos chupadores (mielecilla) como mosquitas blancas, chanchitos y conchuelas entre otros, y de nectarios florales y extraflorales, sobre los cuales las hormigas forrajean activamente. Las proteínas, por su parte, las obtienen del polen, que sirve de alimento para fitoseídos y de la hemolinfa de los hospederos (host feeding), que surge de una herida en el cuerpo de éste cuando la hembra del parasitoide inserta y luego retira su ovipositor. Fuente importante de néctar y polen lo constituyen flores de umbelíferas, como zanahorias silvestres y cilantro, las que pueden establecerse estratégicamente en las orillas y al interior de los huertos para que los enemigos naturales dispongan de alimento suplementario. La disponibilidad y accesibilidad a suficiente cantidad y calidad de alimento para los adultos incrementa, su capacidad de traslado, búsqueda de presas, fecundidad y extensión del período de vida, con efecto directo sobre la eficiencia del Control Biológico. Thripobius semiluteus, parasitoide de trips del palto, alimentado con miel, duplicó su longevidad y parasitó en promedio el 36% más larvas de trips.

67 Control biológico

Hospederos alternativos

Incremento

Alimento para adultos de EN

Multiplicación de EN sobre fitófagos que no afectan el cultivo

Hidratos de carbono en flores y otros

Incremento de la capacidad búsqueda Energía y nutrientes

Aumento N° descendientes (fertilidad)

Host feeding

Aumento longevidad

Enemigo natural EN Clima desfavorable

Mortalidad por baja humedad y temperaturas extremas

Polvo en hojas

Tiempo de limpieza afecta parasitoidismo

Hormigas

Protección de la plaga/exclusión de enemigos naturales

Pesticidas

Mortalidad directa y efecto sobre la reproducción

Disminución

Figura 4-3 Factores que afectan la abundancia de los enemigos naturales.

Hospederos alternativos de los enemigos naturales Varios enemigos naturales se reproducen en más de una especie de artrópodo, pudiendo desarrollarse sobre otras plantas, dentro o fuera del huerto, por tal motivo, la presencia de vegetación herbácea en el huerto, árboles y arbustos en la periferia y el uso moderado de plaguicidas, contribuye a mantener un mayor número de especies y densidad de enemigos naturales en el huerto. La abundancia de los enemigos naturales disminuye en los cultivos, presumiblemente debido a las siguientes causas: • Reducción natural de la población plaga por efecto del clima o la fenología de la planta • Por efecto de las aplicaciones de pesticidas. • Por el efecto directo del clima sobre los enemigos naturales.

• Por la acción directa de las hormigas. • Por la asociación de enemigos naturales a estadios específicos de la plaga, los cuales en algunos casos no están disponibles en parte del año. Es el caso de los parasitoides Metaphycus helvolus y M. flavus de la conchuela negra del olivo, los que sólo disponen del estadio adecuado desde enero a julio, declinando durante el resto del año. Lo anterior puede mitigarse en cierta medida a través de la incorporación de plantas hospederas de insectos plaga que permitan la multiplicación de sus enemigos naturales clave. Es el caso del laurel de flor (Nerium oleander), planta hospedera de la conchuela negra del olivo (Saissetia oleae), la que dispuesta en las cercanías del huerto es capaz de sostener una población de parasitoides del género Metaphycus que controlan a la plaga que afecta cítricos, olivos y paltos, entre otros cultivos. Idealmente se debe lograr dos generaciones de la conchuela en el laurel

68 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

de flor con el fin de extender la permanencia de todos los estadios y sus enemigos naturales durante el año. Las plantas hospederas producidas en macetas, infestadas con un insecto fitófago y luego con el enemigo natural, reciben el nombre de “banker plants”, producidas y utilizadas especialmente en invernaderos de tomate y pimentones en distintos países. Se ha observado, además, que el establecimiento y mantención de una cobertura vegetal entre hileras de frutales, tiende a disminuir el ataque de áfidos a partir de la brotación y, posteriormente, regula la población de arañitas gracias al aporte de enemigos naturales y la disminución de polvo sobre las hojas.

Presencia de hormigas Las hormigas establecen una relación mutualista con las plagas que producen mielecilla, ya que se alimentan de ese excretado y protegen a las plagas de la acción de los enemigos naturales. Este comportamiento crea lo que se ha denominado “vacío de enemigo naturales” causado por la continua interferencia de las hormigas, razón por la que deben ser excluidas de la planta. También se ha observado que árboles con plagas que no producen mielecilla, como arañitas fitófagas y escamas, tienden a aumentar la densidad y disminuir el Control Biológico en presencia de hormigas. El control de hormigas es un aspecto que aún requiere de investigación y desarrollo (ver capitulo Importancia y Manejo de Hormigas en el MIP).

Polvo en las hojas A medida que las hojas y otros órganos vegetales envejecen, acumulan pequeñas partículas sobre su superficie provenientes del tránsito de vehículos sobre caminos no pavimentados, del uso de pesticidas cuya formulación contiene arcilla y/o limo, de la contaminación atmosférica causada por operaciones mineras e industriales y por la actividad humana urbana. Estas partículas se adhieren al cuerpo de los enemigos naturales durante la búsqueda de su hospedero, obligándolos a desarrollar actividades de limpieza corporal, en especial de patas, alas y antenas, a las cuales asignan un tiempo que va en desmedro del parasitoidismo, en directa relación a la cantidad de partículas acumuladas. Por lo general, plantas cercanas a los caminos registran densidades mayores de plagas y en casos extremos, los enemigos naturales abandonan las áreas del huerto que presentan mayor acumulación de polvo. Es recomendable evitar la generación de polvo y mantener la planta limpia mediante la protección de caminos (aspersión de agua en períodos críticos, aplicación de sales inorgánicas, productos orgánicos, desechos del procesamiento de nueces, almendras y uvas), y la disminución de la velocidad de los vehículos que transitan por el sector. Además, en situaciones de elevado depósito de polvo, se aconseja lavar las plantas con agua limpia cada cierto tiempo utilizando detergentes o surfactantes agrícolas.

69

Capítulo 5

Control químico

Uso de plaguicidas R. Ripa • P. Larral • J. Montenegro

El control químico es la regulación o el manejo de una especie plaga mediante el uso de sustancias químicas, denominadas plaguicidas, definidas por el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), como “compuesto químico, orgánico o inorgánico, o sustancia natural que se utilice para combatir malezas o enfermedades o plagas potencialmente capaces de causar perjuicios en organismos u objetos”. El control químico es la herramienta más utilizada para el manejo de plagas agrícolas y es considerado como un método relevante en el Manejo Integrado de Plagas, siendo en ocasiones la única medida eficaz para evitar pérdidas económicas. Sin embargo, con frecuencia las aplicaciones de pesticidas no consiguen el efecto deseado, debido a la defectuosa calidad de las aplicaciones, por lo que en ocasiones se repiten hasta obtener un resultado satisfactorio o bien se utilizan productos de elevada toxicidad. Este uso inadecuado de los plaguicidas puede, entre otros problemas, provocar: • resistencia de plagas, la aplicación repetida de un producto, ejerce una presión de selección sobre una plaga, eliminando los individuos más susceptibles y los más resistentes se convierten en los progenitores de las próximas generaciones; • disminuir la acción de los enemigos naturales;

• efectos negativos sobre el ambiente; • dejar residuos en la fruta; y • incrementar el costo de producción. La tendencia mundial incorporada en las normativas de certificación de la producción agrícola, apuntan hacia la protección del medio ambiente, de las personas y la inocuidad de los alimentos. En este sentido, el manejo integrado de cultivos es una herramienta incorporada por estos protocolos, debida a que involucra un uso racional de plaguicidas y utiliza conceptos de umbrales de daño económico, aplicaciones dirigidas y localizadas y el reemplazo de productos de amplio espectro de acción por productos selectivos y menos disruptivos para el medio ambiente y los agentes de control biológico, aspectos que contribuyen a una disminución en el número y toxicidad de las aplicaciones de plaguicidas por temporada. Por otra parte, muchos de los insecticidas que actualmente se usan en la fruticultura de exportación y que cuentan con registro en los países de destino están siendo sometidos a un continuo análisis. Esto implica que productos con registro actual pueden cancelarse, obligando a los productores a buscar y adoptar nuevas alternativas de control.

70 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Calidad de la aplicación

los aplicadores y aplicar nuevamente 5 árboles. Repetir pasos 3 y 4 hasta que la aplicación sea satisfactoria y se verifique que se ha realizado un buen cubrimiento del árbol, especialmente aquellas zonas afectadas por la plaga.

La efectividad de los plaguicidas para controlar la población de una plaga está estrechamente asociada a la calidad de la aplicación. El costo asociado al uso de pesticidas y las pérdidas potenciales que puede causar una plaga producto de una aplicación deficiente, justifican ampliamente la inversión en optimizar el sistema, estableciendo una metodología de trabajo que asegure una alta calidad de la aplicación.

5. Determinar el volumen de mezcla utilizado en una correcta aplicación, utilizando uno de los siguientes métodos: a. Se llena el estanque hasta un nivel conocido y se aplican 10 árboles. Posteriormente se mide el volumen de agua usado a través de la reposición del agua en el estanque hasta el nivel predeterminado. Este volumen dividido por 10 (árboles) indica la cantidad de mezcla requerido por unidad, y multiplicado por el número de árboles por hectárea, indica el volumen demezcla requerido.

Para ello previa a la aplicación de los plaguicidas, se deberá calcular el volumen de mezcla requerido por hectárea en un cuartel y con una determinada maquinaria, utilizando el siguiente método: 1. Llenar el estanque del equipo con agua (sin plaguicida), con aproximadamente 300 L, agregar un indicador del patrón de aspersión (colorante) para uso agrícola, por lo general un colorante rojo o azul intenso (por ejemplo Hi-Lite) que permita visualizar fácilmente las estructuras que recibieron la aspersión (Figura 5-1 y 5-2).

Volumen

a utilizar = Gasto en 10 árboles (L) x N° árboles/ha por hectárea 10 (L)

2. Aplicar 5 árboles de tamaño homogéneo y promedio del huerto 3. Revisar los árboles desde el interior para determinar las estructuras y áreas no cubiertas por el colorante. En el caso que se usan pitones, los aplicadores deben también incorporarse a la revisión.

R. Ripa

4. Realizar los ajustes o modificaciones necesarios a la maquinaria y resolver las deficiencias detectadas con

Figura 5-1 Aspecto de la fruta y follaje después de la aplicación con colorante.

R. Ripa

b. Se mide el tiempo requerido para aplicar los 10 árboles, luego se afora el pitón en un recipiente graduado durante 1 minuto. El tiempo utilizado en 10 árboles se multiplica por los litros aforados en 1 minuto, esto entrega el gasto utilizado en la muestra de 10 árboles, luego del mismo modo que en el método a., se calcula el gasto por hectárea. Este procedimiento de cálculo tiene la ventaja de incorporar un elemento de control de calidad so-

Figura 5-2 Observación de la cara interna de la fruta después de la aplicación con nebulizadora mostrando carencia de colorante.

71 Control químico

R. Ripa

hacia arriba. Ello se consigue modificando el pitón mediante la incorporación un codo de 45° previo a la boquilla, dirigiendo así la aspersión hacia arriba, logrando un adecuado mojamiento del envés de las hojas y penetrar el ombligo en naranjas Navel (Figura 5-4).

Figura 5-3 Uso de colorante en la aspersión con equipo de nebulizadora.

La experiencia muestra que con este tipo de ajustes se logra un considerable incremento en el control de plagas, especialmente con productos que actúan por contacto, como son los aceites, organo-fosforados y carbamatos. Las plagas de difícil control, como chanchitos blancos, muestran una importante disminución de densidad al mejorar la calidad de las aplicaciones. Los monitores de plagas deben integrarse a este procedimiento con el fin de orientar a los aplicadores en la ubicación de la plagas en el árbol, conocer los volúmenes a aplicar y determinar las áreas de difícil cubrimiento en el árbol con el fin de monitorearlas posteriormente.

Factores que influyen en el éxito del control Localización de la plaga El conocimiento de la localización y distribución de la plaga en el árbol es esencial para realizar un control dirigido. Ciertas plagas se ubican en el interior de la canopia, en ramas y ramillas, como es el caso de escamas, conchuelas y chanchitos blancos, sin embargo otras se sitúan preferentemente en la periferia como por ejemplo katídidos y áfidos estas últimas pueden ser controladas con menores volúmenes de mezcla que las anteriores. En el caso de plagas que se ubican en el envés de las hojas, como mosquitas blancas y aquellas que se introducen en el ombligo de naranjas Navel, como chanchitos blancos, requieren una aplicación dirigida desde abajo

R. Ripa

bre el desgaste de las boquillas, las cuales deberán ser cambiadas cuando el gasto supere en el 10% el volumen indicado por los fabricantes. Figura 5-4 Empleo de codo entre la boquilla y pitón.

Características del pesticida La efectividad de los productos sobre las plagas está asociada al modo de acción, formulación, efecto fumigante, espectro de acción, translocación o movilidad dentro de la planta (translaminar a sistémico), efecto residual, compatibilidad con otros productos, restricciones de uso bajo determinadas condiciones ambientales, dosis y preparación de la mezcla entre otros. Estas características deben ser consideradas durante la elección y aplicación de los productos.

Equipos de aplicación El resultado que se obtenga en el control químico con un determinado plaguicida, dependerá en gran medida de la distribución que se logre del producto sobre la planta, razón por la que la elección del tipo y características del equipo de aplicación, boquillas y presión de trabajo, son esenciales. De gran importancia es la mantención de los equipos, en especial de las boquillas, dado que sufren desgaste especialmente por el efecto abrasivo de las partículas de arcilla en el agua y plaguicidas formulados como polvo mojable (PM o WP). Lo anterior aumenta el diámetro y altera la forma del orificio, modificando el tamaño de las gotas y el caudal de entrega. Por lo general aumenta la proporción de gotas de gran tamaño las que impactan la superficie de la estructura del vegetal y luego

72 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

caen al suelo aumentando la perdida del producto. Para detectar este desgaste, se debe comparar el volumen de agua que arroja la boquilla nueva contra las que están en uso, utilizando una determinada presión y tiempo. Esta evaluación se debe realizar periódicamente y reemplazar la boquilla o disco cuando el caudal aumente en el 10% en comparación al de la boquilla nueva.

Capacitación y protección del personal que realiza la aplicación El personal que realiza las aplicaciones de plaguicidas debe estar capacitado adecuadamente, debiendo aprobar el curso “Uso y Manejo de Plaguicidas”, reconocido por el SAG, el cual le otorga la calidad de aplicador de pesticida reconocido. Por otra parte la exigencia física a la que son sometidos, en especial los pitoneros, da origen a que el cansancio incida en la calidad de la aplicación. Para evitar situaciones extenuantes se deber programar turnos o rotación del personal cada cierto número de horas. A su vez los aplicadores deben utilizar elementos de protección efectivos y cómodos (trajes livianos y de color blanco), con el fin de protegerse del eventual contacto con los plaguicidas y aplicar en condiciones confortables. De gran importancia es evitar los elementos de color oscuro o negro en especial en verano, dadas las altas temperaturas que alcanzan y la incomodidad que genera su uso. Las máscaras deben poseer elementos que impidan la entrada de las sustancias tóxicas, razón por la cual poseen filtros de carbón activado. Estos filtros se saturan gradualmente por lo que deben reemplazarse antes de que el aplicador pueda percibir los olores del plaguicida a través de la máscara. Las mascarillas de tela no protegen a los aplicadores, dado que no son una barrera real para estas sustancias químicas.

mienda realizar las aplicaciones temprano en la mañana o en la tarde, evitando temperaturas extremas, dado la ocurrencia de eventuales problemas de fitotoxicidad en las plantas. Las aplicaciones no deben realizarse con viento para evitar deriva y pérdidas por excesiva evaporación del producto. Se sugiere conocer los pronósticos de clima para tener certeza que no se presentarán lluvias durante o inmediatamente después de la aplicación, lo que provocaría el lavado del plaguicida antes de ejercer su acción.

Oportunidad y tiempo requerido para la aplicación Un elemento fundamental para el éxito en el manejo de plagas en frutales se basa en la oportunidad asociada al tiempo requerido para completar esta labor. Dado que las aplicaciones deben realizarse en una “ventana” precisa de tiempo, relacionada tanto con el ciclo de la plaga, como con la fenología del cultivo, el período de tiempo disponible por lo general es restringuido. Este factor es especialmente relevante en huertos de mayor extensión, que no disponen de un número adecuado de equipos, lo que deriva en períodos de aplicación muy largos, observándose fallas de control en aquellos sectores que no fueron tratados oportunamente. Las alternativas para solucionar este aspecto están dadas por: arriendo de maquinaria, incremento de los turnos de aplicación, incremento del número de boquillas al extremo del pitón (tridente), evitar las aplicaciones generalizadas, concentrándose en los focos de la plaga delimitados por un monitoreo acucioso, entre otras medidas que permiten superar estos problemas (Figura 5-5).

Tamaño y estructura de los árboles Un importante incremento en la eficiencia de las aplicaciones se logra manteniendo los árboles con un tamaño y arquitectura adecuada. Esto se puede lograr con manejo de poda apropiada a su fisiología, abriendo el árbol al eliminar ramas del interior, ramas en contacto con el suelo y malezas. Este manejo favorece además el control natural de las plagas, el control de hormigas y la cosecha.

Las condiciones ambientales de temperatura y humedad relativa presentes al momento de realizar las aplicaciones son un elemento importante que debe ser considerado y estar de acuerdo con las recomendaciones especificadas en la etiqueta de cada producto. Por lo general, se reco-

R. Ripa

Condiciones ambientales

Figura 5-5 Empleo de equipo de pitón con tridente y manómetro.

73 Control químico

Calidad del agua Dado que el agua se utiliza como vehículo para depositar los plaguicidas en los vegetales, la eventual interacción entre estos puede afectar la efectividad biológica. Por esta razón es importante realizar un análisis preliminar del agua para determinar el pH, la pureza química y biológica. Parte de los plaguicidas usados en agricultura son susceptibles a sufrir reacciones de hidrólisis de tipo alcalina, las que pueden provocar la gradual inactivación del producto o bien reducir su efectividad. Por otra parte ciertos pesticidas actúan mejor a un determinado pH, por lo que en ocasiones es necesario ajustarlo.

Uso de aceites minerales Los aceites minerales presentan características favorables para su uso en Manejo Integrado de Plagas, entre las que se encuentran: • Baja toxicidad para animales de sangre caliente. • Amplio rango de acción sobre plagas. • Toxicidad moderada sobre los enemigos naturales. • Corto periodo de carencia. • Aceptados en la mayoría de los países. Dado que los aceites causan mortalidad por contacto directo, únicamente controlan insectos y ácaros que han sido cubiertos con el producto, se requiere que la aplicación sea de alta calidad. La aplicación debe crear una película de aceite sobre el insecto. La falla más recurrente en el uso de aceites es una inadecuada o escasa cobertura de las estructuras en el árbol debido, principalmente al empleo de un volumen reducido de mezcla por hectárea. Ensayos realizados en Chile y otros países muestran que es factible reducir la concentración del aceite, aumentando el volumen aplicado, con buenos resultados de control, lo que permite disminuir, tanto el volumen de aceite por hectárea, como el riesgo de fitotoxicidad. El uso de aceite al 1% de concentración y un volumen de mezcla adecuado es efectivo para el control de escamas, conchuelas y mosquitas blancas. Otra modificación evaluada fue parcializar la aplicación, usando la mitad del volumen de mezcla en una oportunidad y la segunda mitad alrededor de una semana después. Esta práctica mejora los resultados, sin embargo, implica un aumento en los costos de aplicación. Otra falencia en el uso de los aceites es la inadecuada oportunidad de aplicación, en relación al ciclo de la pla-

ga. La susceptibilidad a los insecticidas y en particular a los aceites es mayor cuanto más juvenil el estado de la plaga. Por ello en especial en plagas cuyo ciclo es sincronizado, la aplicación se debe realizar cuando ésta se encuentra en el primer estadío. Los volúmenes de mezcla por hectárea en aplicaciones de aceite al 1% o menores pueden superar 8.000 L en huertos adultos y plantas de gran tamaño, para un cálculo preciso de los volúmenes de aplicación seguir metodología descrita en el capítulo “calidad de la aplicación”.

Precauciones en el uso de aceite mineral Los aceites no están libres de algunos riesgos, principalmente el de fitotoxicidad, observado en algunos casos en cítricos y paltos. En general, este problema es causado por ciertas características fisicoquímicas de los aceites entre las que se pueden mencionar: • El contenido de compuestos aromáticos no saturados en los aceites, el cual se expresa como residuo sulfonado, no debe ser alto en aceites de buena calidad. • Una mayor viscosidad del aceite disminuye su volatibilidad permaneciendo por mayor tiempo sobre la superficie del vegetal. Los de menor viscosidad, también llamados “tipo superior”, tienen un mayor contenido parafínico y presentan un menor riesgo de fitotoxicidad. Esto también se relaciona con el rango de la temperatura de destilación, que para los aceites debe ser estrecho. • La presencia de moléculas no sulfonadas residuales se oxidan en presencia de luz ultravioleta formando ácidos fitotóxicos. • Los aceites de uso agrícola se clasifican en miscibles y emulsibles, de acuerdo a la cantidad de emulsificantes o emulgantes que contengan. En general, la diferencia entre ambos tiene relación con la velocidad de separación entre las diferentes fases de la emulsión que se forma al mezclarlos con agua, siendo los miscibles más estables. Al usar aceite emulsible o de quiebre rápido, el aceite se separa del agua con más facilidad, razón por la que el equipo debe estar provisto de un sistema de agitación eficiente que mantenga la mezcla emulsionada. De ocurrir la separación de fases durante la aplicación, el aceite flota en el estanque, de modo que se asperja agua con bajo contenido de aceite y al final se asperja el aceite concentrado, causando serios daños a la planta, por lo general en las últimas plantas aplicadas. Con el objetivo de minimizar el riesgo de fitotoxicidad, se recomienda:

74 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

• Preferir la formulación miscible si el equipo no dispone de un sistema de agitación confiable.

curos. Esta condición es reversible y desaparece en una a dos semanas.

• Evitar la aplicación en mandarinas y naranjas navel desde la floración hasta que el fruto alcanza al menos 2,5 cm de diámetro. Se han observado daños tipo russet en frutos pequeños en ambos cítricos que perduran hasta la madurez (Figuras 5-6 y 5-7).

Uso de detergentes Se ha agrupado bajo detergentes a los productos que se denominan: surfactantes, coadyuvantes, adherentes, dispersantes, humectantes, extensores y detergente agrícola, entre otros que poseen la capacidad de mejorar la distribución del agua en la planta.

• No aplicar en naranjas de ombligo durante el periodo previo a la coloración de frutos. En ocasiones, frutos aplicados con aceite adquieren una coloración irregular con áreas verdosas, las que tardan en alcanzar su coloración normal.

La aplicación de detergentes de uso agrícola es una labor de gran utilidad, remueve el polvo, fumagina, mielecilla y produce un importante control de algunas plagas, presentando un efecto menos detrimental sobre los enemigos naturales, que los plaguicidas tradicionales. La efectividad de esta operación depende de la prolijidad con la que se efectúe, por lo que se recalca la importancia que tiene el dirigir la aplicación hacia el lugar donde se encuentra la plaga objetivo, por ejemplo: la Mosquita blanca se ubica en el envés de las hojas, los áfidos sólo en la periferia del árbol, las arañitas en ambas caras de la hoja y la fumagina, sobre el haz de las hojas y en especial en la fruta.

• Evitar las aplicaciones en las horas de mayor calor, en especial en plantas con estrés hídrico y / o carencia de magnesio de acuerdo a información procedente de España. • No mezclar el aceite con compuestos a base de cobre, Azufre o estaño y dejar de aplicarlo hasta dos meses después de la aplicación de estos productos. Su compatibilidad con otros productos debe ser verificada previamente. No mezclarlos con microelementos. • Limitar el uso de aceite a no más del 3% al año, realizando la suma simple de las concentraciones de cada una de las aplicaciones, de acuerdo a información proveniente desde Australia. • No aplicar en períodos de activa brotación, especialmente en paltos

R. Ripa

Ocasionalmente, después de una aplicación de aceite en limoneros con fruto semi desarrollado, se observa una decoloración del epicarpio en forma de manchas irregulares, donde se alternan sectores claros con otros más os-

Figura 5-6 Daño en naranjas Lane Late causado por la aplicación de aceite en poscuaja.

R. Ripa

El efecto de los detergentes sobre la plaga se debe en gran medida al arrastre directo producto de la disminución de la tensión superficial de la mezcla que facilita el desprendimiento de los organismos de la superficie sumado a la presión en la boquilla que impulsa las gotas a la superficie de las estructuras de la planta. Los mejores resultados se obtienen con el equipo de pitón, empleando alrededor de 350 libras de presión y adecuados volúmenes por hectárea. El costo de la aplicación deriva fundamentalmente de la mano de obra empleada, por

Figura 5-7 Daño en limón causado por la aplicación de aceite en poscuaja.

75 Control químico

R. Ripa

de la boquilla del pitón de acuerdo a las necesidades, empleando preferentemente discos de cerámica, dada su resistencia al desgaste. A menor diámetro de abertura del orificio del disco, las gotas son más pequeñas y su alcance menor, requiriéndose mayor diámetro de abertura del disco y gotas de mayor tamaño para aplicar en árboles más altos. En la práctica, se emplean boquillas con un diámetro de 0,8 a 1,5 mm para árboles pequeños y diámetros de hasta 3 mm para árboles de gran tamaño. La presión que se utiliza varía de 200 a 450 libras por pulgada cuadrada.

Figura 5-8 Daño por aplicación de sobredosis de detergente.

lo que se sugiere disminuir el tiempo de aplicación por árbol o por hectárea, adaptando al extremo del pitón un aditamento (tridente) con tres boquillas provistas de difusor (Figura 5-5). Las concentraciones de detergente deben ser las indicadas por el fabricante, ya que concentraciones muy altas pueden producir fitotoxicidad sobre hojas y frutos. Se ha observado que el palto es susceptible durante la brotación a estos productos (Figura 5-8).

Tipos de maquinaria Pitón Por lo general, esta maquinaria consta de un estanque de almacenamiento de 500 a 2000 litros de capacidad, con una bomba hidráulica que impulsa el líquido, generando presiones de hasta 800 libras por pulgada cuadrada. La aplicación se realiza con uno a dos pitones o pistolas pulverizadoras unidos a la bomba mediante mangueras. El volumen de mezcla aplicado por minuto está en función del diámetro del orificio de la boquilla, la presión de trabajo y el tiempo de aplicación requerido por árbol (ver abajo importancia de mangueras). En frutales de hoja persistente, que poseen un follaje abundante y en los cuales las plagas por lo general se encuentran al interior del árbol, se considera que un escurrimiento moderado es indicativo de una aplicación adecuada. Es necesario utilizar un diámetro del orificio

La determinación del volumen requerido por hectárea se indicó en el acápite “Calidad de la aplicación” y depende de la densidad del follaje, número de árboles por hectárea y tipo de plaga. Ciertas plagas como chanchitos blancos y conchuelas requieren de elevados volúmenes de mezcla por superficie con el fin de asegurar una excelente distribución de la mezcla en todas las estructuras del árbol. En aplicaciones con pitón la mezcla debe ser dirigida a la estructura de la planta donde se localiza la plaga, en algunos casos esto exigirá realizar modificaciones del pitón como en le caso de plagas localizadas en el envés de las hojas, las que requieren que la aspersión sea dirigida desde abajo hacia arriba (ver “Localización de la plaga”). De igual forma, la utilización de un pitón con tres boquillas en su extremo mejora la aplicación de detergentes, disminuyendo el tiempo requerido para la aplicación (ver “Uso de detergentes”). El constante movimiento que realiza el operario durante la aplicación y la fuerza que éste debe soportar producto de la presión y peso del pitón, producen cansancio y fatiga. Esto afecta la calidad del trabajo y se traduce en aplicaciones con resultados defectuosos. La elección de pitones livianos de aluminio y la rotación de los aplicadores, permite superar en cierta medida este tipo de deficiencias. En general, el uso de pitones tiene la desventaja de ser un sistema lento de aplicación, que requiere de al menos tres operarios, lo que incide en el costo. Actualmente se observa en el país una superficie muy importante de plantaciones de paltos y cítricos ubicada en terrenos con una pendiente pronunciada. Las aplicaciones de plaguicidas al follaje, cuando son factibles de practicar, se realizan con pitón provistos de manguera de gran longitud para alcanzar aquellas plantas relativamente distantes de los caminos. Producto de fallas en el control de plagas, bajo estas condiciones, se midió la presión en el pitón comparando con la registrada en el manómetro de la maquinaria y el caudal, utilizando diferentes largos de manguera de 3/8 de pulgada de diámetro, detectándose pérdidas de presión y caudal a medida que aumenta el largo de la manguera (Gráfico 5-1).

76 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Pitón 1 / boquilla 2,5

16,5

300

16,0

200

15,5

100

15,0

0

L/min

Presión lb/pulg2

400

14,5 0

5

10

15

20

25

30

35

Largo manguera metros

[

Presión manómetro

Caudal litros por minuto

]

Gráfico 5-1 Efecto del largo de la manguera sobre la presión y caudal en equipo de pitón.

diámetro, en la medida de lo posible. Por otra parte, es muy útil disponer de un manómetro acondicionado de forma que pueda ser intercalado entre el extremo del pitón y la boquilla con el fin de revisar la presión de aplicación en la boquilla (Figuras 5-9 y 5-10).

R. Ripa

Se observó además que mangueras de mayor grosor mostraban una menor perdida de presión y caudal. Por lo tanto, con el fin de evitar pérdidas de presión es relevante reducir el largo de las mangueras y aumentar su

R. Ripa

Figura 5-10 Utilización de manómetro entre boquilla y pitón.

Figura 5-9 Pérdida de presión y caudal por largo de la manguera.

A mayor presión en las boquillas se genera una mayor velocidad de las gotas que al chocar con las estructuras del árbol, arrastran y limpian la superficie, removiendo plagas (mosquitas blancas adultas, ácaros, estadíos juveniles de plagas) y polvo acumulado. A su vez esta mayor presión genera mayor turbulencia alrededor de las estructuras del árbol mejorando la distribución de mezcla e incrementando el control de la plaga. Es importante considerar que la producción frutícola será probablemente auditada en términos de la producción de CO2 por tonelada de fruta, siendo el uso energía

77 Control químico

proveniente de fuentes fósiles uno de los mayores contribuyentes. Es así como una parte muy importante de la fuerza automotriz generada por el tractor se utiliza en el impulso de mezcla a través de la manguera razón por la que se debe poner especial atención a este elemento de la maquinaria de aplicación.

Nebulizador Los nebulizadores se basan en la producción de un fuerte flujo de aire que arrastra pequeñas gotas de mezcla hacia el árbol. El aire es impulsado por una turbina accionada al toma-fuerza del tractor y mientras es deflectado hacia el árbol una serie de boquillas le incorporan a la masa de aire pequeñas gotas. El volumen de esta corriente debe ser suficiente para reemplazar todo el aire contenido en el follaje o canopia y lograr una buena cobertura del árbol. Estos equipos generan sobre 50.000 metros cúbicos de aire por hora, los que se dirigen por lo general a una sola hilera de árboles. Uno de los inconvenientes de este equipo es la deriva de pesticida que ocurre durante la aplicación, razón por la que es importante calibrar adecuadamente el equipo para evitar que la aspersión sobrepase la altura de los árboles y aplicar en condiciones adecuadas de clima. Por otra parte es frecuente detectar problemas de cobertura debido a la excesiva velocidad de desplazamiento del tractor. Por el contrario, velocidades muy bajas causan pérdidas del producto y aumento del costo. En relación al tamaño de las gotas, éstas deberán ser de 50 a 120 micrones de diámetro (1 mm = 1.000 micrones o 1 micrón equivale a 0,001 mm) para optimizar la cobertura y penetración del follaje (Vock et al 2001). La humedad del aire también juega un papel importante ya que ocurre deshidratación de la gota a medida que se desplaza. Gotas pequeñas pueden perder el agua antes de que alcancen el objetivo. En estos casos es preferible aplicar temprano en la mañana o en el atardecer para reducir la evaporación. Previo a la adquisición de este tipo de equipos se deben considerar entre otros factores, el tamaño de los árboles y el crecimiento potencial de estos, con el fin de elegir el equipo adecuado, junto con las necesidades de potencia requerida desde el toma fuerza y la disponibilidad de un tractor que cumpla con las necesidades de potencia del equipo. En general, la efectividad de las aplicaciones con equipos nebulizadores tradicionales en cítricos ha sido menor que con equipos de pitón, en especial en el control de plagas como conchuelas, escamas y chanchitos blancos con productos de contacto. En Australia se logró mejorar la efectividad de estos equipos colocando en el extremo anterior una barra con boquillas ubicada sobre el

árbol, para asperjar la parte superior de éste. Con esta adaptación se logró un aumento del volumen de mezcla por hectárea y mayor cubrimiento, mejorando ostensiblemente el control sobre plagas sésiles como escamas y conchuelas, empleando volúmenes de 10.000 litros por hectárea. Equipos con un diseño ligeramente diferente consistente en la implementación de un conducto vertical con salidas de aire y boquillas a diferentes alturas, con el cual se obtiene un cubrimiento adecuado de manera relativamente rápida y con un reducido empleo de mano de obra.

Barras oscilantes Es un equipo provisto de boquillas distribuidas en barras verticales, que oscilan alrededor de 45° durante la aplicación, de modo que el chorro penetra el árbol en diferentes ángulos a medida que se desplaza el equipo. La altura de la barra es igual o mayor que la altura del árbol. Este equipo requiere de volúmenes de 7.000 a 15.000 litros de mezcla por hectárea, ocurriendo una importante pérdida por escurrimiento al suelo. El uso de barras oscilantes requiere de un solo operador y ha demostrado ser uno de los equipos con mejores resultados en California y Australia al compararlos con nebulizadoras, no obstante son lentos y elevado costo inicial.

Aplicaciones aéreas La dificultad de aplicar en huertos ubicados en laderas, en especial con una pendiente pronunciada, hacen que la aplicación por avión sea una alternativa oportuna. Últimamente las aplicaciones para arañitas en paltos y en cierta medida en cítricos están siendo realizadas en forma creciente, utilizando azufre con aire en polvo. Los aviones por lo general poseen una capacidad de 600 a 700 kg y se aplican 25 kg por hectárea, por lo tanto un vuelo posee una autonomía para tratar 26 hectáreas. La altura de vuelo utilizada sobre el árbol fluctúa entre uno a 10 metros, no obstante ello depende en gran medida de las condiciones topográficas del huerto. Cuanto más cerca la aplicación mejores son los resultados ya que la turbulencia de vértice generada por el paso del avión ayuda a la penetración del polvo en el follaje. La aplicación se realiza desde el amanecer hasta aproximadamente las 10 am dado que más tarde las corrientes de aire ascendentes afectan la deposición del azufre generando acarreos (drift) no deseados. La experiencia muestra que aquellos sectores de huertos situados en quebradas muy profundas no permiten que el avión alcance las zonas más protegidas, sin embargo la saturación del aire con

78 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

azufre en los sectores circundantes generan control de la plaga en estos sectores (comunicación personal con Rafael Reyes 2008).

R. Ripa

Figura 5-11 Aplicación de azufre por avión en paltos.

1 mm

Las aplicaciones aéreas tienen la ventaja realizarse en un período muy corto, lo que mejora la oportunidad de tratamiento y un costo inferior a la aplicación terrestre.

Normas básicas de seguridad en el manejo de los plaguicidas • Leer cuidadosamente la etiqueta de los pesticidas, conocer previamente la toxicidad del producto y su grupo químico, con el fin de estimar el riesgo de la aplicación y tomar las medidas preventivas. • Preferir envases cuyo contenido se ajuste a la cantidad requerida. • Realizar triple lavado, es decir, enjuagar al menos tres veces el envase con agua limpia y verter el contenido en el estanque.

R. Ripa

Información de California indicaría que aplicaciones de azufre en períodos de altas temperaturas pueden causar daño en el cultivo (Anónimo 2008 y Anónimo. 2008b), no obstante esto no se ha observado en nuestro país, incluso aplicando con temperaturas de 35°C. Sin embargo con bajas temperaturas, inferiores a 20°C el control de la arañita es inadecuado (comunicación personal con F. Gardiazabal) (Figuras 5-11 y 5-12). Figura 5-12 Partículas de azufre depositadas sobre la hoja de palto aplicado por avión.

• Al preparar la mezcla seleccionar un lugar adecuado y específico para realizar esta labor. Disponer de utensilios de uso exclusivo para pesticidas (balanza, dosificador, revolvedor, entre otros) y usar guantes y mascarilla para las mediciones • Mantener alejadas a personas y animales del sitio de preparación de la mezcla y el lugar de aplicación.

79 Control químico

• Señalizar el área tratada e indicar fecha de reingreso. • Realizar las aplicaciones sólo con personal entrenado en uso y manejo de plaguicidas. • No realizar aplicaciones en contra del viento • No comer, fumar o beber durante la aplicación • Utilizar los implementos protectores durante la preparación y aplicación de pesticidas, tales como mascarilla con filtros de carbón activado, impermeable, botas, guantes, anteojos, gorro de color blanco o claro. Verificar su estado antes de cada aplicación • Verificar que el equipo de aplicación no presente filtraciones o pérdidas de producto y que esté correctamente calibrado • Lavar el equipo de aplicación, diluyendo el remanente del estanque en 10 veces su volumen con agua y

aplicar en sitio eriazo, donde no circulen personas o animales y lejos de cursos de agua. Posteriormente lavar el estanque con agua y detergente • Después de las aplicaciones, lavarse con jabón las manos, cara y partes del cuerpo que pudieran haber tenido contacto con el pesticida. • Lavar el atuendo utilizado en la aplicación separadamente de otras vestimentas. • Mantener los productos en los envases originales y guardarlos en un lugar seguro • Convenir con los distribuidores, si es posible, el retiro de envases vacíos del predio para su reutilización. Si no es posible, perforar los envases con el fin de inutilizarlos y convenir con los vertederos municipales locales o con AFIPA su adecuada eliminación.

80 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Manejo Integrado de Resistencia (MIR) y selectividad de plaguicidas R. Vargas • N. Olivares • A. Ubillo

Resistencia Introducción En la producción agrícola es importante manejar la densidad poblacional de las plagas, manteniéndolas a niveles ínfimos. El uso de productos químicos ha llevado al desarrollo de resistencia como una consecuencia natural de los procesos evolutivos relacionados con la selección natural de las especies. Este fenómeno corresponde a una condición heredable que poseen ciertos individuos en una población, lo que le confiere una menor susceptibilidad a los métodos utilizados para su control. El o los genes que permiten a un individuo sobrevivir puede existir en una población o aparecer por mutaciones. Estos individuos, en condiciones normales, representan un pequeño porcentaje de la población, debido a su baja competitividad con otros individuos de su especie. Sin embargo bajo una presión de selección, como lo es el control químico, dicha condición genética lo hace sobrevivir, lo que trae como consecuencia el desbalance de la población, es decir, el pequeño porcentaje de individuos resistentes comienza a desarrollarse y multiplicarse, debido a la poca competencia que encontrará poscontrol con los organismos más susceptibles. Actualmente la condición de los organismos resistentes esta siendo predominante en las poblaciones de plagas, con la capacidad de ser resistentes a uno o más plaguicidas. Además, la pérdida de susceptibilidad genera, un aumento en la frecuencia de las aplicaciones y en la concentración de los plaguicidas utilizados, lo que determina una mayor contaminación ambiental (agua-aire-suelo), implicando mayores riesgos para la salud humana. El problema de resistencia comenzó a difundirse a partir de 1940, tiempo en el cual los plaguicidas fueron utilizados en forma masiva por los agricultores de Estados Unidos. Las primeras referencias aportadas sobre la resistencia a los plaguicidas se detectaron en 1914 en EE.UU. para escama de San José, Quadraspidiotus perniciosus. En 1938 se conocían 7 especies entre insectos y ácaros que presentaban resistencia a DDT. Posteriormente, en 1970 la FAO reportó casos de resistencia en 392 especies de insectos y ácaros. Luego, en 1984 se conocieron 447 especies de insectos y ácaros resistentes a DDT, 100 especies de plantas patógenas, 55 especies de malezas, 2 especies de nemátodos y 5 especies de roedores. Actual-

mente hay más de 500 casos de resistencia a insecticidas y acaricidas (IRAC 2007). La resistencia ha sido uno de los problemas más importantes que enfrenta la producción agrícola a nivel mundial, tanto así que las Naciones Unidas en 1989, consideró la resistencia a los plaguicidas, entre los cuatro problemas de mayor importancia para el medio ambiente, por lo que dispuso una cantidad importante de recursos orientados a la solución de este problema. Uno de los casos más estudiados de resistencia corresponde al escarabajo colorado de la papa Leptinotarsa decemlineata S., plaga que por su extrema habilidad para desarrollar resistencia a los insecticidas y la falta de factores de mortalidad natural, lo han hecho poseedor de una larga historia de exposición a los plaguicidas, llegándose a reportar 1200 veces más resistente comparado con poblaciones susceptibles. En China el gusano del algodón, Helicoverpa armigera, constituyó un problema desde 1984 por su rápido desarrollo de resistencia a los cuatro plaguicidas de mayor uso en el Norte de este país, provocando enormes pérdidas económicas. En la India, en 1968 se reportó la primera detección de resistencia en la polilla de la col, Plutella xylostella, para DDT y Parathion, demostrando una extraordinaria habilidad para crear resistencia a varios insecticidas sistémicos, lo que ha causado una pérdida de eficiencia de los métodos de control en los cultivos de crucíferas de ese país. En Chile, existen antecedentes sobre el nivel de resistencia de plagas agrícolas a los plaguicidas y se han mencionado algunos casos en polilla del tomate T. absoluta, gusanos cortadores, Spodoptera spp, polilla de la col, Plutella xylostella, moscas de la cebolla, Delia antiqua y Delia platura, arañita carmín Tetranychus cinnabarinus y trips de California Frankliniella occidentalis.

Definición Para entender el concepto de resistencia es necesario diferenciarlo con el término tolerancia, el cual está referido a insectos y ácaros que poseen la habilidad de sobrevivir bajo ciertos niveles de exposición a los plaguicidas. La resistencia corresponde a “la reducción en la susceptibi-

81 Control químico

lidad de una población y se evidencia mediante repetidas fallas en la efectividad de un producto, disminuyendo las expectativas de control al ser usado a la dosis recomendada para la plaga y donde las fallas por almacenamiento del producto, aplicación y factores climáticos poco frecuentes pueden ser eliminados” IRAC (Insecticide Resistance Action Committee).

Condiciones para la ocurrencia de resistencia Se ha mencionado que el fenómeno de la resistencia a plaguicidas, está vinculado a la coevolución de las especies, donde los organismos resistentes sobrevivieron a través del tiempo a la acción de sustancias químicas que defienden a las plantas contra los herbívoros. Esto indica que existe una capacidad intrínseca de las especies de adaptarse a los factores de selección promotores de resistencia.

troides y carbamatos. El primer caso de resistencia metabólica reportado correspondió al detectado en mosca doméstica con el uso de DDT. Otros ejemplos corresponden a la polilla del repollo, polilla de la manzana y arañitas. • Resistencia al lugar de acción. Corresponde al segundo mecanismo más común de resistencia y está referida al cambio en la estructura del sitio o al número de sitios donde el plaguicida causa toxicidad sobre el insecto.

Generalmente, los insecticidas actúan en un sitio específico del insecto, habitualmente en el sistema nervioso del insecto (piretroides, organofosforados y carbamatos). El sitio de acción puede ser modificado por razas resistentes impidiendo la acción del insecticida. Como resultado, el insecto no será controlado mediante la aplicación de un plaguicida o sólo se afectarán los insectos más susceptibles.

Todas las estrategias del control de plagas utilizadas por el hombre han ejercido presiones de selección de resistencia, eliminando los individuos susceptibles. Es posible que la disrupción del apareamiento por feromonas y las plantas transgénicas sean probablemente las próximas estrategias que sufran del proceso de selección de resistencia y su expresión dependerá de la intensidad seleccionadora que ejerzan sobre las poblaciones.

• Resistencia a la penetración. Este mecanismo de resistencia se produce en un amplio rango de insecticidas. Consiste en una baja absorción del plaguicida debido a la modificación en la cutícula o en el tracto digestivo del insecto. Esta reducción en la penetración del insecticida se traduce en una menor absorción de la toxina en el cuerpo del insecto comparado con las poblaciones susceptibles. Generalmente, se presenta identificado en mosca doméstica.

Como todo proceso evolutivo de selección, la resistencia requiere de cuatro componentes para expresarse. Primero, la población debe exhibir variación de respuesta al factor de selección, esta variación puede ocurrir como resultado de mutaciones, flujo genético o recombinación sexual. Segundo, una proporción de la población debe morir por causa de la selección (susceptibles). Tercero, los sobrevivientes deben adaptarse al factor de selección (resistentes). Cuarto, debe ocurrir la reproducción de los sobrevivientes, para permitir el paso de este factor genético a las próximas generaciones y aumentar la frecuencia del gen portador de la resistencia en las siguientes generaciones.

• Resistencia de comportamiento. Consiste en la pérdida de susceptibilidad por cambio en el comportamiento del insecto frente a los repetitivos programas de control. No es un mecanismo tan importante, sin embargo contribuye en la disminución de la efectividad de la dosis letal del plaguicida. Esta habilidad puede producirse mediante un estímulo dependiente o independiente. El primero se evidencia cuando una plaga evita el contacto con la zona tratada con plaguicida (repelencia) y el estímulo independiente ocurre cuando la plaga abandona la zona tratada con el plaguicida hacia un área sin residuos (irritancia).

Mecanismos de resistencia Existen diferentes mecanismos en que las plagas pueden llegar a ser resistente a los plaguicidas: • Resistencia metabólica. Corresponde al mecanismo típico expresado por los insectos, rompiendo la estructura de los plaguicidas mediante el sistema enzimático pudiendo degradar un amplio espectro de plaguicidas. Es decir, las enzimas detoxificadoras son utilizadas para romper la invasión del plaguicida (toxina) en el cuerpo del insecto. Este mecanismo de resistencia puede manifestarse en plaguicidas pire-

Resistencia cruzada Sucede cuando un mecanismo de resistencia, además de permitir pérdida de susceptibilidad de un insecto a un plaguicida, confiere resistencia contra plaguicidas con el mismo modo de acción. El caso típico corresponde al DDT y a los piretroides que a pesar de pertenecer a diferentes grupos químicos comparten el mismo modo de acción, pues ambos actúan sobre la velocidad de los canales iónicos quedando la membrana nerviosa alterada (efecto Knock Down o volteo). El desarrollo de la resistencia al volteo se produce por la expresión del gen Kdr.

82 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Resistencia múltiple Los diferentes mecanismos de resistencia pueden combinarse proveyendo de resistencia a plaguicidas de diferentes grupos químicos o modos de acción. Un ejemplo corresponde a la mosca doméstica que es resistente a plaguicidas organofosforados, carbamatos y piretroides.

Pérdida de susceptibilidad a insecticidas y acaricidas Un modo de expresar la pérdida de susceptibilidad es mediante el factor o nivel de resistencia (FR) que está definido por la relación entre la concentración letal media de una población de campo y la concentración letal media de una población susceptible o de laboratorio. CL50 Población resistente CL50 población susceptible

FR =

En el Cuadro 5-1 se indica el factor de resistencia detectado en poblaciones de ácaros e insectos de importancia agrícola a diferentes grupos químicos evaluados en INIA LA Cruz. Así por ejemplo, un alto nivel de resistencia fue encontrado en poblaciones de adultos de la arañita

Carmín, Tetranychus cinnabarinus al acaricida Cyhexatin, en claveles cultivados en invernadero. Este índice fue el resultado del uso repetitivo del acaricida para el control de la arañita, aumentando 51 veces su concentración letal media. Asimismo, niveles de resistencia han sido encontrados en poblaciones del trips de California, Frankliniella occidentalis a los insecticidas dimetoato, metamidofos y spinosad. En EE.UU., ha sido señalada la resistencia del trips del palto, Scirtothrips perseae al insecticida de sabadilla después de 2 años de uso repetido (Humeres y Morse, 2006). Asimismo, para este tisanóptero se han señalado fallas en control de campo utilizando abamectina, siendo confundidas con resistencia. También, se menciona el potencial desarrollo de resistencia sobre abamectina debido a la larga persistencia del producto en el follaje exponiendo así las generaciones de ácaros y trips (Morse, 2007). En cítricos, se mencionan casos de resistencia para el ácaro del plateado, Phyllocoptruta oleivora al acaricida dicofol (Rogers et. Al., 2008). En general, son muchos los casos detectados de pérdida de susceptibilidad de ácaros e insectos a diferentes plaguicidas tales como: abamectina, acrinatrina, dicofol, imidacloprid y thiametoxam.

Cuadro 5-1 Pérdida de susceptibilidad de ácaros e insectos a diferentes plaguicidas.

Plaga

Plaguicidas (ingrediente activo)

Factor de resistencia

Cyhexatin

2,0



Clofentezine

1,7



Propargite

1,0

Clofentezine

2,1

Cyhexatin

51,0

Arañita bimaculada [Tetranyhus urticae]

Arañita carmín [Tetranychus cinnabarinus] (huevos) Arañita carmín [Tetranychus cinnabarinus] (adulto) Polilla del Tomate [Tuta absoluta] (larva)

Metamidofos

1,7

Permetrina

22,9

Metamidofos

2,5

Escama de San José [Quadraspidiotus perniciosus]

Parathion

2,9

Mosquita blanca [Trialeurodes vaporariorum]

Metomilo

2,1

Deltametrina

61,0

Cipermetrina

47,6

Polilla de las crucíferas [Plutella xylostella]

Hormiga argentina [Linepithema humile] Mosca doméstica [Musca domestica]

Lambdacihalotrina

2,1

Deltametrina

16,9

Ciflutrin

13,9

Dimetoato

7,4

Metamidofos*

4,2



Metomilo

2,0



Spinosad

1,5

Trips californiano [Frankliniella occidentalis]

* Producto sin tolerancia para el mercado de EE.UU., China, Taiwán, Argentina, Brasil, Australia y México en uva de mesa. Fuente: Laboratorio de Toxicología, INIA La Cruz.

83 Control químico

En Chile se ha observado algunos casos de fallas en el control de plagas en palto y cítricos, sin embargo aun no existen evidencias que indiquen índice de resistencia.

Manejo Integrado de Resistencia (MIR) La resistencia a los plaguicidas es un fenómeno natural, que puede controlarse mediante diferentes acciones dentro de un manejo holístico de plagas. Debe centrarse en el mantenimiento de la susceptibilidad de las plagas a los plaguicidas de manera de prolongar la efectividad de ellos. Existen factores que influyen en la velocidad de desarrollo de resistencia en una plaga, ellos son: • Bióticos: – Número de generaciones por año: usualmente a mayor número de generaciones mayor será el riesgo de aumentar la velocidad de desarrollo de resistencia. – Descendencia por generación: generalmente a mayor número de individuos por generación aumentarán las probabilidades de resistencia. • Genéticos: – Entre los muchos individuos que componen la población de una plaga, algunos poseen genes que hacen que el plaguicida sea menos tóxico para ellos y estos individuos soportan la acción del plaguicida sin morir. Son precisamente estos que no han muerto los que tienen descendencia y forman las nuevas poblaciones de la plaga que heredan el gen de resistencia. • Químicos: – Plaguicidas: principalmente cómo funciona el plaguicida, grupo químico y modo de acción. – Persistencia de los residuos: Plaguicidas con alta persistencia en el medio ambiente, implican una prolongada exposición, fomentando una rápida resistencia de las plagas. – A mayor dosis, frecuencia y superficie tratada mayor será la rapidez de desarrollo de resistencia. • Ecológicos: – Migración: existe un menor riesgo de desarrollo de resistencia si la plaga presenta un mínimo movimiento. – Alimentación: las plagas polífagas pueden cambiar de hospedero reduciendo la exposición al plaguicida, aumentando así el riesgo de desarrollo de resistencia.

Estrategia de Manejo Integrado de Resistencia 1. Realizar aplicación química sólo si se justifica: mediante la implementación de las herramientas del MIP (ver Capítulo 2: Manejo integrado de plagas), se debe determinar la necesidad de controlar una población plaga mediante el uso de químicos. Para ello, considerar la densidad de la plaga, época, presencia y acción de los enemigos naturales, umbral económico y época oportuna de aplicación. 2. En programas de control de plagas, se debe alternar los modos de acción de los productos: en el Cuadro 5-2 se indican los diferentes modos de acción por grupos químicos. 3. Los plaguicidas deben utilizarse a la dosis exacta recomendada en la etiqueta. Dosis subletales (menores) contribuyen a la selección de individuos medianamente tolerantes, favorecido la resistencia. 4. Todas las aplicaciones químicas deben realizarse con equipos previamente calibrados. Se debe considerar el uso de un adecuado volumen, presión y velocidad de aplicación, de manera de asegurar una apropiada cobertura del vegetal. 5. Monitoreo de resistencia: debe considerarse la detección temprana de la aparición de resistencia, mediante un seguimiento de los índices de pérdida de susceptibilidad.

Manejo Integrado de Resistencia en paltos y cítricos Mediante el manejo convencional de plagas en los cultivos de paltos y cítricos destinados a la exportación, se manifiesta el riesgo de desarrollar resistencia en el control químico de todas las plagas. En el Palto los plaguicidas aceptados en el Mercado de EE.UU., para el manejo de escamas, arañita, trips y chanchito blanco comprenden diferentes grupos químicos. Sin embargo, se presentan 2 situaciones de alto riesgo: la primera corresponde al manejo químico de ácaros que se encuentra limitado al uso exclusivo de abamectinas y azufre y la segunda corresponde al uso repetido de insecticidas de un mismo grupo químico, como neonicotinoides y organofosforados para el control de insectos, lo que hace muy frágil el manejo de resistencia de esas plagas, dado que la exposición de esas poblaciones a un solo plaguicida, acelera la selección de poblaciones resistentes a esos ingredientes activos. Respecto a cítricos (limones y mandarinas) para el mercado estadounidense, la gama de grupos químicos de acaricidas e insecticidas es mayor. Sin embargo, existe

84 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Cuadro 5-2 Clasificación IRAC 2007, según modo de acción de insecticidas y acaricidas.

Subgrupo químico o materia activa representativa

Lugar de acción

Carbamatos

Inhibidores de colinesterasa

Organofosorados Fenilpirazoles

Antagonistas receptor GABA

Piretroides

Moduladores del canal sodio

Piretrinas Neonicotinoides

Antagonista receptor nicotínico de acetilcolina

Spinosines

Agonistas/antagonistas receptor del nicotínico acetilcolina

Abamectinas

Activador canal cloro

Fenoxicarb

Miméticos de hormonas juveniles

Piriproxifen Clofentezin

Compuestos de modo de acción desconocido o no específico (inhibidores del crecimiento de ácaros)

B.t. var aizawai

Toxinas disrruptoras de las membranas digestivas de origen microbiano (incluye cultivos

B.t. var kurstaki

transgénicos que expresan toxinas de B. t)

B.t. var tenebrionensis Buprofezin

Inhibidores de la síntesis de quitina tipo 1, homópteros

Acequinocyl

Inhibidores de electrones punto II

Acaricidas METI (inhibidores del transporte de electrones a las mitocondrias)

Inhibidores del transporte de electrones punto 1

Dicofol

Compuestos de modo de acción desconocido a la fecha

Derivados del ácido tetrónico

Inhibidor de síntesis de lípidos

un alto riesgo de resistencia cruzada mediante el uso de carbamatos y organofosforados para el manejo de escamas y chanchito blanco.

d. Aplicación alternadas de organofosforados, neonicotinoides, buprofezin y carbamatos, permitirán mantener la susceptibilidad de chanchitos y escamas.

Recomendaciones básicas para el manejo de plagas en paltos y cítricos

e. Evitar realizar una aplicación de organofosforado seguida de una de carbamato y viceversa.

1. Desarrollo de una estrategia de manejo de la resistencia, que considere la aplicación de plaguicidas de diferentes modos de acción:

f. Aplicación alternadas de neonicotinoides, abamectina, spinosines y carbamatos permitirán mantener la susceptibilidad de trips.

a. Aplicación de aceites y neonicotinoides permitirán mantener la susceptibilidad de escamas.

2. Desarrollo de una estrategia de MIP (ver Capítulo 2: Manejo Integrado de Plagas):

b. Aplicación alternadas de aceites, abamectinas, acequinocyl y spirodiclofen permitirán mantener la susceptibilidad de arañitas.

a. Calibrar equipos de aplicación química asegurando una alta calidad la aplicación y control y así disminuir frecuencia de aplicaciones.

c. De acuerdo a fenología de las plagas manejar simultáneamente más de una plaga, por ejemplo aplicación de aceite mineral para el manejo de escamas y arañitas (llamada dos en una).

b. Usar enemigos naturales en momento oportuno. c. Mantenimiento de hospederos alternativos para proveer refugio a EN.

85 Control químico

Selectividad

minimizando la de los enemigos naturales, para conseguir una relación plaga/enemigo natural favorable a este último, además de minimizar el daño al medio ambiente y salud humana.

Introducción La mayoría de los plaguicidas utilizados en control de plagas afectan negativamente a los enemigos naturales. Generalmente, por razones de rentabilidad la industria de plaguicidas no considera el desarrollo de productos con selectividad fisiológica sobre los enemigos naturales. Para hacer rentable el desarrollo de productos selectivos, estos deberían tener un amplio espectro de acción sobre plagas y mostrar inocuidad sobre los enemigos naturales, características que solo pueden incorporarse utilizando un conocimiento profundo de los procesos fisiológicosbioquímicos de las plagas y enemigos naturales. La selectividad fisiológica se diferencia de la ecológica debido a que la primera es una característica del producto y la última depende del manejo de las plagas y de la comprensión de las características de un compuesto de amplio espectro de acción.

Tipos de selectividad Fisiológica Selectividad fisiológica, es la propiedad que tiene un compuesto de causar diferentes niveles de mortalidad en dos taxas distintas cuando es aplicado en concentraciones y condiciones comparables. La diferencia de toxicidad se fundamenta en la capacidad de metabolización de los xenobióticos y el lugar donde el producto químico, basado en una selección crítica del ingrediente activo, dosis, formulación, lugar y momento de aplicación de un plaguicida de amplio espectro interactúa con los procesos bioquímicos del organismo.

Ecológica La Selectividad ecológica, es el uso racional de los productos químicos, basado en una selección crítica del ingrediente activo, oportunidad de uso, dosis, formulación y lugar de aplicación del plaguicida de amplio espectro. El objetivo, es el maximizar la mortalidad de la plaga

Cuadro 5-3 Clasificación de toxicidad en pruebas de campo y semicampo.

Clasificación

Mortalidad (%)

A pesar de las ventajas que ofrecen los plaguicidas con selectividad fisiológica, estos son escasos principalmente por la dificultad de su creación, lo que hace que la mayoría de los plaguicidas disponibles en la agricultura sean de amplio espectro. La permanencia de ellos se relaciona con el rápido, económico y confiable control de plagas que ofrecen. Ello requiere una cuidadosa utilización para no generar resistencia ni eliminar los enemigos naturales, empleando la selectividad ecológica.

Selectividad sobre los principales enemigos naturales en Chile De acuerdo a la clasificación de toxicidad de los plaguicidas sobre los enemigos naturales entregada por IOBC (Internacional Organisation for Biological Control), se observan diferencias en el nivel de toxicidad de los ingredientes activos entre evaluaciones realizadas en laboratorio, semicampo y campo (Cuadros 5-3 y 5-4).

Selectividad de plaguicidas en parasitoides En el Cuadro 5-5 se indican los nombres comerciales de los plaguicidas utilizados en las pruebas de selectividad de laboratorio y semicampo, sobre enemigos naturales.

Thripobius semiluteus Los insecticidas metomil, abamectina+citroliv, detergente agrícola e imidacloprid son muy dañinos, pudiendo éstos afectar la emergencia de las pupas de Thripobius. La toxicidad de thiametoxam, azadiractina, surfactante siliconado, aceite mineral y abamectina son moderadamente dañinos para el parasitoide, mientras que la aplicación de spinosad es inocua de acuerdo la clasificación de la IOBC (Gráfico 5-2).

Cuadro 5-4 Clasificación de toxicidad en pruebas de laboratorio.

Clasificación

Mortalidad (%)

Sin daño (inocuo) o ligeramente dañino

0 a 50

Sin daño (inocuo) o ligeramente dañino

0 a 30

Moderadamente dañino

51 a 75

Moderadamente dañino

30 a 79

Dañino

80 a 99

Muy dañino

> 75

Muy dañino

> 99

86 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Cuadro 5-5 Plaguicidas usados en pruebas de selectividad sobre enemigos naturales.



Ingrediente activo

Nombre comercial



Aceite mineral

Citroliv miscible

Grupo químico Aceite mineral



Detergente agrícola

TS 2035

Surfactantes y otros



Surfactante siliconado

Silwet L-77

Siliconas-polieter copolímero



Abamectina A

Vertimec 018 EC

Abamectinas



Abamectina B

Fast 1.8 EC

Abamectinas



Spinosad

Success 48

Spinosines



Thiametoxam

Actara 25 WG

Neonicotinoides



Imidacloprid

Confidor Forte 200 SL

Neonicotinoides



Clorpirifos

Lorsban 4E

Organofosforado



Metomil

Lannate 90

Carbamato



Azadirachtina A

Neemix

Limonoides



Azadirachtina B

Trilogy

Limonoides



Buprofezin

Applaud 25 WP

Tiadizinas



Acetamiprid

Mospilan

Cloronicotinil



Extracto quillay

QL Agri

Saponinas



Extracto de canela

Valero

Cinamite



Bifentrin

Talstar 10 EC

Piretroide



Acrinatrina

Rufast 75 EW

Piretroide

120

Mortalidad (%)

90

60

30

0

Metomil

Abamectina A + aceite

Detergente agrícola

Imidacloprid

Thiametoxam Azadirachtina B

Surfactante siliconado

Aceite

Abamectina A

Spinosad

Gráfico 5-2 Toxicidad de 9 insecticidas sobre pupas de Thripobius semiluteus, en aplicación directa de laboratorio.

Considerando que spinosad y abamectinas son efectivos sobre trips del palto e inocuo y moderadamente dañino respectivamente para pupas del parasitoide, su uso deberá alternarse con productos con otros modos de acción para evitar el desarrollo de resistencia.

Anagyrus pseudococci En general, los plaguicidas utilizados en cítricos, aplicados sobre momias de A. pseudococci, ocasionan mortalidad

en la emergencia del parasitoide menores al 20% (Gráfico 5-3). Se evaluó plaguicidas en contacto directo con las momias recién formadas, contabilizando los adultos que emergieron 10 días después. El estado adulto de A. pseudococci expuesto a residuos de plaguicidas recién aplicados (1 hora) en placas de Petri, muestran que los neonicotinoides, organofosforado, carbamato y cloronicotinilo son altamente tóxicos (Gráfico 5-4) en cambio buprofezin, aceite, detergente agrícola y

87 Control químico

100

Mortalidad (%)

80 60 40 20 0

Thiametoxam

Metomil

Clorpirifos

Clorpirifos + aceite

Imidacloprid

Acetamiprid

Detergente agrícola

Aceite

Buprofezin

Surfactante siliconado

Gráfico 5-3 Toxicidad de insecticidas sobre momias de Anagyrus pseudococci, en aplicación directa de laboratorio.

120

Mortalidad (%)

100 80 60 40 20 0

Thiametoxam

Metomil

Clorpirifos

Clorpirifos + aceite

Imidacloprid

Acetamiprid

Detergente agrícola

Aceite

Buprofezin

Surfactante siliconado

Gráfico 5-4 Toxicidad de insecticidas sobre adultos de Anagyrus pseudococci, en aplicación residual de laboratorio.

surfactante siliconado son ligeramente dañinos. Respecto a buprofezin, existen pruebas realizadas indicando su inocuidad sobre el parasitoide Leptomastix dactylopii utilizando una dosis 4 veces mayor a la recomendada (Cloyd y Dickinson, 2006).

Selectividad de plaguicidas en depredadores

En conclusión para favorecer la sobrevivencia de A. pseudococci bajo un programa de manejo integrado de plagas, debe sincronizarse las liberaciones del parasitoide con las aplicaciones químicas, respetando los períodos de pre o postaplicación, considerando el efecto ligeramente dañino sobre momias y dañino sobre los adultos.

Los insecticidas del grupo neonicotinoide thiametoxam e imidacloprid en aplicación directa en laboratorio son altamente tóxicos para adultos de C. montrouzieri alcanzando mortalidad mayores al 80% durante las primeras 48 horas de aplicación (Gráfico 5-6).

Aphytis diaspidis Los adultos de A. diaspidis son altamente sensibles a neonicotinoides, carbamatos y spinosines al exponerlos a residuos en placa de Petri 1 hora después de haber realizado la aplicación (Gráfico 5-5).

Cryptolaemus montrouzieri

Por otra parte pruebas de semi campo en plantas de paltos mostraron que los neonicotinoides, thiametoxam e imidacloprid fueron inocuos para C. montrouzieri 1 día postaplicación. La abamectina, organosiliconado, detergentes y aceite son productos no dañinos sobre C. montrouzieri en cambio el carbamato, causa una alta mortalidad durante el primer día postaplicación, disminuyendo después de 7 días postaplicación (Gráfico 5-7).

88 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

120

Mortalidad (%)

100 80 60 40 20 0

Thiametoxam Abamectina A + aceite

Aceite

Imidacloprid

Spinosad

Metomil

Azadirachtina B

Surfactante siliconado

Extracto de quillay

Detergente

Gráfico 5-5 Toxicidad de plaguicidas sobre adultos de Aphytis diaspidis, en aplicación residual de laboratorio.

120

Mortalidad (%)

100 80 60 40 20 0 1 día

[

2 días Imidacloprid

Thiametoxam

Clorpirifos

]

Mortalidad de C. Montrouzieri

Gráfico 5-6 Toxicidad de insecticidas sobre adultos de Cryptolaemus montrouzieri, en aplicación directa de laboratorio.

40

Larvas

0

7

1

Adultos

14

21

1

7

14

21

Días de degradación de residuos de plaguicidas y estado de C. montrouzieri

[

Imidacloprid

Metomil

Abamectina A + aceite

Thiametoxam

Spinosad

Surfactante silicona

Aceite

Azadirachtina B

]

Detergente agrícola

Gráfico 5-7 Toxicidad residual de insecticidas evaluados en semicampo (palto) sobre larvas y adultos de Cryptolaemus montrouzieri.

89 Control químico

Ello indica que la liberación de C. montrouzieri se debe realizar en un periodo superior a 7 días postaplicación cuando se aplique carbamato.

tinoides, carbamato, neem 2%, aceite 2% y abamectinas, en cambio aceite y neem en menores concentraciones fueron ligeramente dañinos (Gráfico 5-10).

Los productos, abamectina, azadirachtina, aceite mineral y detergente agrícola son inocuos, en cambio el azufre en polvo es ligeramente dañino para C. montrouzieri (Gráfico 5-8).

La exposición de adultos y larvas de R. lophanthae a residuos de spinosad, aceite, detergente agrícola y saponinas mostraron una baja mortalidad, clasificándose como ligeramente dañino (Gráfico 5-11).

Los acaricidas bifentrin, acrinatrina y abamectina fueron ligeramente dañinos sobre C. momtrouzieri (Gráfico 5-9).

Imidacloprid se clasifica como producto moderadamente dañino, causando mortalidad sobre Phytoseiulus persimilis, Trichogramma cacoeciae, Orius laevigatus, Aphydius rhopalosiphi. En el caso del depredador Typhlodromus pyri, el neonicotinoide es escasamente dañino en pruebas de campo.

Rhyzobius lophanthae Los insecticidas metomilo, metidation e imidacloprid en pruebas de laboratorio, son altamente tóxicos (100% de mortalidad) para adultos del depredador R. lophanthae. Esta toxicidad se mantiene hasta 7 días después de aplicado los plaguicidas. Una alta mortalidad también mostraron larvas de R. lophanthae expuestas sobre residuos frescos de neonico-

Cynodromus picanus El depredador C. picanus es altamente sensibles a productos químicos utilizados en el control de arañita roja, al liberarlo 1 hora después de haber realizado la aplicación (Gráfico 5-12). Sin embargo, el nulo efecto residual de

100

Mortalidad (%)

85 70 55 40 25 0

Aceite 1,2%

Detergente agrícola

Azufre

Azadirachtina A

Cinamite

Abamectina B

Azadirachtina B

Gráfico 5-8 Toxicidad residual de plaguicidas en laboratorio sobre adultos de Cryptolaemus montrouzieri a los 7 días postaplicación.

100

Mortalidad (%)

80 60 40 20 0

[

2 días

3 días

Bifentrin

Acrinatina

7 días Abamectina 3

]

Gráfico 5-9 Toxicidad residual de acaricidas sobre adultos de Cryptolaemus montrouzieri en ensayos de semicampo en viñas.

90 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

120

Mortalidad (%)

100 80 60 40 20 0

Metomil

Imidacloprid

Abamectina A + aceite

Abamectina A

Surfactante siliconado

Thiametoxam

Aceite 2%

Azadirachtina Azadirachtina B 2% B 1%

Aceite 1%

Spinosad

Saponinas

Detergente agrícola

Gráfico 5-10 Toxicidad de plaguicidas sobre larvas de Rhyzobius lophanthae en residuos frescos.

Mortalidad de P. Iophanthae (%)

100 80 60 40 20 0 Adultos

[

Detergente agrícola

Estado de desarrollo Saponinas

Aceite

Larvas Spinosad

]

Gráfico 5-11 Toxicidad de plaguicidas sobre larvas y adultos de Rhyzobius lophanthae en residuos frescos.

ellos permite la sobrevivencia de los depredadores. En el caso del depredador Typhlodromus pyri, el aceite no causa mortalidad una vez secos los residuos. Respecto a aceite y azadirachtina ocurre un efecto de adherencia que es propia de los productos oleosos sobre estos diminutos parasitoides, impidiendo su sobrevivencia. Azadirachtina corresponde a un producto inocuo para la mayoría de los enemigos naturales a excepción del depredador Phytoseiulus persimilis y el parasitoide Trichogramma cacoeciae. En el Cuadro 5-6 se indica el resumen de la toxicidad de los plaguicidas utilizados en el manejo fitosanitarios de paltos y cítricos sonre los principales depredadores y parasitoides.

Manejo de selectividad para el uso de enemigos naturales en palto y cítricos 1. Conocer la toxicidad sobre los enemigos naturales de los plaguicidas de contacto y residuales usados en cítricos y palto 2. Conocer los períodos de degradación del plaguicida o perdida de toxicidad residual de los plaguicidas sobre los EN 3. Realizar liberaciones de los EN después del periodo tóxico del plaguicida (selectividad ecológica) 4. Seleccionar razas resistentes de enemigos naturales a plaguicidas (de acuerdo a prospecciones realizadas en campo en lugares con aplicaciones frecuentes de plaguicidas).

91 Control químico

100

Mortalidad (%)

80 60 40 20 0

Azadirachtina B

Aceite

Abamectina A + aceite

Gráfico 5-12 Toxicidad residual de plaguicidas sobre adultos de Cydnodromus picanus en laboratorio.

Cuadro 5-6 Toxicidad de plaguicidas sobre enemigos naturales presentes en paltos y cítricos.

Plaguicida C. montrouzieri R. lophanthae A. pseudococci A. diaspidis T. semiluteus

Stethorus histrio

Ingrediente activo aceite mineral detergente agrícola

Nombre comercial

Larvas

Adultos

Larvas[2]

Adultos[1]

Momias[1]

Adultos[2]

Adultos[2]

Pupas[1]

Adulto[2]

Citroliv miscible

C

C-L

L

L

L

L

LLLL

LL

LL

TS 2035

C

C-L

L

L

L

L

L

LLLL



Silwet L-77

C

C

LLL



L

L

LLL

LL



abamectina A

Vertimec 018 EC

C

C

LLL









LL



abamectina B

Fast 1.8 EC



C-L















spinosad

Success 48



L

L





LLLL

L



surfactante siliconado

thiametoxam

Actara 25 WG

C

C-LLLL

LLL



L

LLLL

LLLL

LL

LLLL

imidacloprid

Confidor Forte 200 SL

C

C-LLLL

LLLL



L

LLL

LLLL

LLL

LLLL

clorpirifos

Lorsban 4E

metomil

Lannate 90

CCC

L





L

LLLL







CCC

LLLL



L

LLLL

LLL

LLLL

LLLL

azadirachtina A

Neemix



L















azadirachtina B

Trilogy

C

C-L

L







LLLL

LL

LL

buprofezin

Applaud 25 WP







L

L







acetamiprid

Mospilan







L

LLL







extracto quillay

QL Agri



L

L





L





extracto de canela

Valero

L















C











bifentrin azufre acrinatrina

Talstar 10 EC Azufre Rufast 75 EW





LL



C



[1] Aplicación directa. [2] Aplicación residual. Porcentaje de Mortalidad sobre enemigos naturales en pruebas de semi campo (C): C = 0 al 50% CC = 51 al 75% CCC = > 75% Porcentaje de Mortalidad sobre enemigos naturales pruebas de laboratorio (L): L = 0 al 30% LL = 30 al 79% LLL = 80 al 99% LLLL = > 99%









93

Capítulo 6

Manejo del hábitat R. Vargas • S. Rodríguez • R. Villaseñor

Control Biológico de Conservación El Control Biológico implica el uso de enemigos naturales para disminuir la densidad de la población de una plaga a niveles de daño no perjudiciales para el cultivo (Van Driesche y Bellows 1996), reconociendo en ellos un importante factor regulador de la dinámica de las poblaciones de insectos y ácaros plaga (Morse y Hoddle 2006; González y Volosky 2006), dependiendo de los parámetros de vida del depredador o parasitoide (Bernardo et al 2005; Swirski et al, 2002; Logan y Thomson 2002; Lo Pinto et al 2002; Stathas 2000) y de la eficiencia de su desempeño como agente regulador, factores que a su vez se asocian a la provisión de refugio físico y alimento (Hausmann et al, 2005; Norris y Kogan 2005). Existen tres métodos para el uso de insectos y ácaros benéficos: introducción de especies exóticas y su establecimiento en nuevos ambientes; aumento de especies ya establecidas por manipulación directa de sus poblaciones, y conservación de los enemigos naturales (ver Capítulo 4: Control Biológico).

La conservación de la vegetación natural en áreas perimetrales a los agroecosistemas, la creación de bordes e introducción de franjas con diversas mezclas de especies de plantas herbáceas para proveer polen y néctar (Carmona y Landis 1999) son prácticas que han demostrado favorecer la conservación de los enemigos naturales en zonas adyacentes a las áreas cultivadas y con potencial presencia de plagas. Esta estrategia incluye la mantención de áreas de compensación ecológica cruciales para aumentar la diversidad y favorecer la supresión de plagas (Rossing et al, 2003). Más aún, con el desarrollo de la biología de la conservación, el estudio de la diversidad pasa a ser interés de investigación asociada al manejo de plagas (Samways 1994).

Incremento de la diversidad

El Control Biológico de Conservación incluye el manejo del ambiente en el sistema agrícola para aumentar la fecundidad y longevidad de enemigos naturales, modificando su conducta y proveyendo refugio ante condiciones ambientales adversas (Wratten et al. 2003; Landis et al. 2000b), prácticas que se concentran en reducir su mortalidad, ofreciendo fuentes secundarias de alimentación y áreas de refugio (Landis et al, 2000a).

Las consecuencias de la reducción de la biodiversidad son particularmente evidentes en el campo del manejo de plagas agrícolas. La inestabilidad de los agroecosistemas se manifiesta a través del empeoramiento de la mayoría de los problemas de plagas y está ligada con la expansión de monocultivos a expensas de la vegetación natural (Altieri y Letourneau 1984; Flint y Roberts 1988), por lo tanto, desde un punto de vista práctico, la diversificación del huerto busca alcanzar un ecosistema que tienda a la estabilidad y en el cual los ácaros e insectos fitófagos sean regulados por los enemigos naturales que coexisten con ellos (Vandermeer y Perfecto 2000).

A diferencia de la introducción y el aumento de enemigos naturales, la vía de conservación es la más práctica y aplicable, ya que la manipulación del hábitat está directamente relacionada con las prácticas agrícolas en los diferentes sistemas de manejo.

En el contexto de una producción sustentable se promueve, entre otros factores, el aumento de diversidad vegetal tendiente a la conservación e incremento de especies biológicamente activas en la regulación de los herbívoros plaga (Andow 1991; Altieri y Letourneau

94 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

1982), mediante el manejo del paisaje más próximo al huerto con el objetivo de brindar óptimas condiciones a los agentes controladores aumentando su diversidad y abundancia. Ante nuevas fuentes de energía y refugio los depredadores y pararasitoides de plagas responden aumentando sus poblaciones y por ende la eficiencia de la regulación natural, siendo atraídos por los herbívoros plaga, quienes se convierten en presas u hospederos de los enemigos naturales (Mc Murtry y Scriven 1965; Doutt et al, 1976; Ragusa y Swirski 1977; Bakker y Klein 1992). El aumento de la diversidad botánica dentro del huerto y en sus proximidades, induce la liberación de compuestos vegetales volátiles que actúan como atractivo para estos enemigos naturales (Tentelier y Fauvergue 2007). Dichos compuestos, junto a la distribución agregada de los herbívoros en la planta, concentra aún más esta atracción química de los reguladores biológicos (Colazza et al 2003), potenciando el rol fundamental de esta asociación en el mecanismo de “defensa indirecta” de la planta, mecanismo citado en más de 15 especies pertenecientes a las familias de las Fabáceas, Brasicáceas, Cucurbitáceas, Rosáceas, Malváceas y Poáceas (Dicke et al 1990). Lo anterior ha desarrollado un creciente interés por investigar biodiversidad en paisajes agrícolas, con un detallado conocimiento de las relaciones tritróficas (plantaplaga-enemigo natural), particularmente de las especies de plantas que registran un potencial como hospederos alternativos y son más probables de aumentar tanto la abundancia como la eficiencia de la fauna benéfica asociada a plagas, registrando un alto grado de atracción de los enemigos naturales por franjas de hierbas en entrehileras y por arbustos nativos asociados al huerto, situación que estaría asociada a la mayor diversidad vegetal, un alto número de hospederos/presa alternativos, más alimento disponible en forma de polen, néctar y mielecilla, y un sitio de refugio ante perturbaciones climáticas o producto del manejo del huerto.

Efecto del manejo del hábitat sobre las poblaciones de enemigos naturales El manejo del hábitat es importante en orden a prevenir el daño de artrópodos plaga sobre el cultivo a través del establecimiento de asociaciones que tiendan a favorecer el desempeño de los enemigos naturales, como fitoseidos, estafilínidos, carábidos, coccinélidos, dípteros y parasitoides, facilitando una rápida colonización e incremento poblacional por una mayor ovipostura y prolongación

del período reproductivo de dichos organismos benéficos (Delucchi 1997; Ferrari y Boriani 2000; Altieri et al, 2003; McMurtry 1982; Walde et al, 1989; Lys y Nentwig 1994; Iperti 1999; Leather et al, 1999; Irving et al, 1999; Colley y Luna 2000; Landis et al, 2000ª; Zangger 1994). Por otro lado, con el manejo de la cubierta del suelo en entrehileras y la conservación de flora nativa periférica al huerto, se pretende en general, minimizar el uso de herbicidas y evitar la erosión del suelo, con el mínimo aporte de fertilizantes, ya que los grandes cambios ocasionados sobre el complejo de malezas mediante su control, pueden causar desequilibrios que promueven variación en las poblaciones de insectos (plagas o benéficos) (IOBC 2003). Por otro lado, el manejo de la cubierta del suelo tiene especial relevancia en huertos ubicados en pendientes, debido al daño potencial de erosión. Ejemplos del efecto del manejo del hábitat sobre las poblaciones de enemigos naturales son posibles de encontrar en numerosos trabajos, como el de Syme (1975), quien recomienda el establecimiento de hierbas abundantes dentro de los pinares ya que parasitoides de la polilla del pino, Rhyacionia buoliana (Lepidoptera: Tortricidae) incrementan significativamente la longevidad y la fecundidad al alimentarse del néctar de las flores. Tizado Morales et al (1992) describen plantas silvestres de los géneros Rubus y Verbascum y las especies Urtica dioica y Cichorium intybus, frecuentemente asociadas a huertos de palto, como reservorios de los insectos Lysiphlebus spp, Trioxys acalephae y Aphidius matricariae (Hymenoptera: Aphidiidae), parasitoides de Aphis spp (Homoptera: Aphididae). De la misma forma, Ammi majus (apio cimarrón), Foeniculum vulgare (hinojo), Carduus nutans (cardo), Sonchus oleraceus (ñilhue) y Brassica campestres (yuyo), son especies vegetales consideradas malezas (Marzocca 1976), comunes en entrehileras de palto y descritas como hospederos de depredadores y parasitoides (Delfino 1982; Salto et al, 1993). Estos antecedentes ponen énfasis en una mejor regulación de las plagas en ambientes más diversos en composición vegetal, ya que cumplen los siguientes requisitos (Altieri 1992; Gurr et al, 2004): 1. Proveer de hospederos/presas alternativas en momentos de escasez de la plaga. 2. Proveer de alimentación (polen y néctar) a los parasitoides y depredadores adultos. 3. Proveer de refugios para la invernación y ovipostura de enemigos naturales. 4. Mantener poblaciones aceptables de la plaga por períodos extendidos de manera de asegurar la sobrevivencia continua de los insectos benéficos.

95 Manejo del hábitat

Flora acompañante de huertos de palto Las perturbaciones producidas por el hombre han derivado en una degradación del ambiente con pérdida de cobertura vegetal y aumento de la erosión, cambio en la fisonomía de la comunidad (paso de bosque a matorral) e invasión de elementos de matorrales espinosos y esclerófilos como Retamilla trinervia (tevo), Muenhlenbeckia hastulata (quilo) y Baccharis linearis (romerillo), distribuidos en zonas bajas de la vertiente occidental de la cordillera de la costa. Sin embargo, estos “nuevos” elementos de la flora de la zona central resultan de gran utilidad al considerar su desempeño como hospederos de enemigos naturales (Ragusa 2007, com. pers, U. de Palermo, Italia). Uno de los objetivos del manejo del hábitat es conocer el papel de la vegetación adyacente al huerto para establecer y potenciar las asociaciones con los enemigos naturales que incrementen su abundancia y eficiencia como reguladores de las poblaciones plaga. Este objetivo fue desarrollado en huertos de palto de las localidades de La Cruz y Cabildo de la Región de Valparaíso, agroclimáticamente distintas y representativas del paisaje rural de la zona central, monitoreando la presencia de insectos y ácaros en flora nativa e introducida asociada a huertos de palto (proyecto FONDEF D03I1077).

Enemigos naturales dentro y fuera del huerto La diversidad biológica abarca toda la escala de organización de los seres vivos, sin embargo, cuando nos referimos a ella en un contexto conservacionista, estamos hablando de diversidad de especies, de variación intraespecífica e intrapoblacional, y en última instancia de variación genética. Solbrig (1991) define la diversidad biológica o biodiversidad como la propiedad de las distintas entidades vivas de ser variadas. Así cada clase de entidad (gen, célula, individuo, comunidad o ecosistema), tiene más de una manifestación, siendo la diversidad una característica fundamental de todos los sistemas biológicos manifestándose en todos los niveles jerárquicos. La biodiversidad es quizá el principal parámetro para medir el efecto directo o indirecto de las actividades humanas en los ecosistemas. La más llamativa transformación provocada por el hombre es la simplificación de la estructura biótica y la mejor manera de medirla es a través del análisis de la biodiversidad. En un sentido estricto, la diversidad (un concepto derivado de la teoría de sistemas), es una medida de la heterogeneidad biológica, es decir, de la cantidad y proporción de los diferentes elementos que contiene. Es también un parámetro útil

en la descripción y comparación de las comunidades ecológicas. A medida que aumenta el tamaño poblacional de una plaga, el número de depredadores y parasitoides que actúan sobre ésta aumenta proporcionalmente, estableciéndose una relación dependiente de la densidad, en cambio, en un sistema estable, la amplitud de las oscilaciones poblacionales es mínima, lo que significa que las especies potencialmente dañinas nunca son suficientemente abundantes para convertirse en plagas de importancia económica. El Gráfico 6-1 muestra la estructura de la población de parasitoides y depredadores colectados sobre flora acompañante de huertos de paltos, estableciéndose un mayor número de depredadores fuera del huerto, esto es, en ladera de cerro y sobre matorral de pequeña altura como Flourensia thurifera (incienso, maravilla del campo) y Acacia caven (espino); a diferencia de lo que ocurre dentro del huerto, en que son relativamente más abundantes los parasitoides por su mayor asociación a hierbas en entrehileras del huerto, las que no fueron intervenidas químicamente.

Estimación de la diversidad en huertos de palto La biodiversidad a escala de una comunidad depende tanto del número de especies presentes (riqueza específica) como de las abundancias relativas (equitatividad). El requisito para el análisis de diversidad es la comprensión de estos factores, que se definen como: • Riqueza de especies (número de especies presentes en una comunidad: S). • Diversidad (Índice de Shannon-Wienner: H’). • Uniformidad o equitatividad (Índice de Pielou: E). La aplicación de este concepto sobre los datos colectados en las zonas de estudio arrojó resultados que tienden a indicar cierta dependencia entre la presencia de especies herbáceas y de enemigos naturales para el interior del huerto, obteniendo un H’ para Cabildo huerto de 1,42, mayor valor que el registrado en Cabildo ladera (0,33). Esta diferencia estaría asociada, principalmente, a una mayor diversidad de plantas dentro del huerto (7,29) que en ladera de cerro (4,49) en la misma localidad. El análisis sugiere una diversidad moderada de enemigos naturales asociada a la flora de ladera de cerro en La Cruz, la que se observa estable durante el año, principalmente debido a la abundancia y permanencia de incienso y espino como componentes arbustivos importantes de la zona, sin embargo, esta situación contrasta con lo registrado en la zona de Cabildo, en que la población de

96 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Fuera del huerto (ladera)

N° enemigos naturales

25 20 15 10 5 0 ene

feb

[

mar

abr

may

jun

jul

Parasitoides

ago

sep

Depredadores

oct

nov

dic

nov

dic

]

Dentro del huerto (entrehilera)

N° enemigos naturales

10 8 6 4 2 0 ene

feb

[

mar

abr

may

Parasitoides

jun

jul

ago

sep

Depredadores

oct

]

Gráfico 6-1 Enemigos naturales fuera y dentro de huertos de palto.

enemigos naturales y de flora acompañante disminuye durante la temporada de verano, descenso debido a factores principalmente climáticos. Al interior del huerto de paltos, en entrehileras y al no controlar las malezas o hierbas, se registró un aumento de los enemigos naturales asociados en los meses de primavera. Las plantas nativas e introducidas permanecieron presentes a lo largo del año, con un leve descenso en su población en los meses de verano (Gráfico 6-2), que no alcanzó a impactar a las poblaciones de enemigos naturales.

de enemigos naturales. Se observó que los parasitoides adultos y los depredadores se beneficiaron significativamente de fuentes de néctar y la protección ofrecida por el refugio (bordes con arbustos nativos, entrehileras con abundancia de malezas). Los enemigos naturales ocurren en todos los sistemas de producción desde los jardines caseros hasta los cultivos comerciales. Están adaptados a las condiciones ambientales locales y a la plaga objetivo y la conservación de un ambiente apropiado usualmente es simple y muy efectiva desde el punto de vista costo beneficio.

Manejo del hábitat en huertos de palto

El estudio sistemático del complejo de hierbas y arbustos asociados a las plantaciones de palto permitió conocer las especies de plantas asociadas a la presencia de enemigos naturales en el cultivo durante todo un estudio realizado entre los años 2005 y 2007 (Cuadro 6-1).

Las manipulaciones del hábitat o del ambiente han demostrado ser otra forma de conservación o incremento

Entre los arbustos frecuentes de ladera de cerro, Senna candolleana (quebracho), Flourensia thurifera (incienso o

97

1,8

9

1,6

8

1,4

7

1,2

6

1

5

0,8

4

0,6

3

0,4

2

0,2

1

0

sep

[

oct

nov

dic

ene

mar

abr

H’ enemigos naturales

may

jun

ago

H’ flora acompañantes

sep

H’ flora acompañantes

H’ enemigos naturales

Manejo del hábitat

0

]

Gráfico 6-2 Diversidad de enemigos naturales y flora acompañante al interior del huerto de paltos, sin intervención (índice Shannon-Wienner) (Cabildo, 2005-2006).

maravilla del campo) y Acacia caven (espino), mostraron el más alto número de especies de depredadores asociados, siendo la familia Phytoseiidae la más abundante. Estos arbustos, entre otros componentes del matorral de la zona central, podrían constituir un refugio para los depredadores de arañitas principalmente hacia fines de verano, en que aumenta la población de O. yothersi, aunque en general mostraron alguna variabilidad en la

abundancia relativa entre las plantas muestreadas en diferentes sitios, probablemente reflejando diferencias locales debido a microclima, composición de presas y ambiente físico. Cuatro malezas crecieron en la entrehilera del huerto no intervenido, albergando principalmente parasitoides: Hirshfeldia incana (mostacilla), Melilotus indica (meliloto), Geranium spp (alfilerillo) y Verónica persica (verónica)

Cuadro 6-1 Enemigos naturales colectados en la flora acompañante de huertos de palto, La Cruz-Cabildo 2005-2007*. Flora Quebracho Quilo

Depredadores

Parasitoides

Amblyseius globosus

Chileseus camposi

Cydnodromus californicus

Amblyseius spp

Cydnodromus spp

Amblyseius graminis

Hymenoptera

6











1





5



2



3

Incienso

10







Espino

4

Malva





4

1

Relojito











Meliloto









4

Correhuela

1

1









5

Mostacilla





1

12





10

Conyza





1

Quinguilla













1

Veronica











1

9

Polygonum

1



2







1

Ñilhue

2











5

* Total de individuos colectados en muestreos mensuales durante el período de estudio.

98 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Cuadro 6-2 Especies de plantas registradas asociadas a enemigos naturales en huertos de palto.



Ladera de cerro

Dentro del huerto

Fitoseidos

Quebracho

Hirschfeldia incana (Brassicaceae)



Incienso (maravilla del campo)

Meliloto



Espino

Parasitoides

Quebracho

Hirschfeldia incana (Brassicaceae)



Incienso (maravilla del campo)

Verónica



Melitoto



Alfilerillo

(Cuadro 6-2). La presencia de hierbas en entrehileras y arbustos en la periferia de los huertos de palto favorece la abundancia de los enemigos naturales locales para el control de ácaros e insectos plaga.

Más del 60% de los parasitoides registrados sobre estas plantas pertenecen a las familias Encyrtidae, Pteromalidae, Eupelmidae y Eucharitidae, identificándose representantes de los géneros Conura (Chalcididae) y Cotesia (Braconidae). Paoletti y Lorenzoni (1989) identificaron 3 beneficios que aporta la vegetación entre las hileras y los bordes del huerto, sobre la dinámica de invertebrados, considerando que: 1. Durante primavera y otoño pueden mantener algunos depredadores especializados de ácaros plaga tales como Oligota spp y Stethorus spp, los cuales en verano deprimen las poblaciones de ácaros plaga. 2. Depredadores polífagos como carábidos y sírfidos son también favorecidos por la vecindad de estas entrehileras. 3. Migración de depredadores tales como Orius spp y fitoseidos hacia el huerto es más frecuente cuando existe un borde de plantas en la cercanía. El conocimiento del papel de las plantas sobre las poblaciones benéficas puede ser también útil en seleccionar especies de arbustos y hierbas en la cercanía y al interior de los huertos. Por tal motivo, posteriores estudios son necesarios para implementar el conocimiento de la relación de hábitats de cultivo con zonas de no-cultivo, esto es, estimar la influencia mutua entre asociación vegetal y cultivos, determinar el papel de las entrehileras y bordes como sitio de invernación de insectos y ácaros

benéficos, y el manejo racional de malezas y asociaciones vegetales para hacer posible reducir pesticidas. A partir de los antecedentes recopilados y de los resultados de la investigación desarrollada en torno al manejo del hábitat en huertos de palto en la zona central, se recomienda: • Considerar la presencia e incorporación de hierbas y arbustos asociados al huerto del palto y su manejo en el contexto del MIP, permitiendo el desarrollo de algunas plantas silvestres que resultan atractivas y favorecen la presencia de insectos benéficos: mostacilla dentro del huerto como hospedero de ácaros depredadores y parasitoides de plagas, y un número importante de plantas de espino e incienso en ladera de cerro para sostener las poblaciones de depredadores asociados. • Implementar medidas de protección de las especies vegetales registradas asociadas a enemigos naturales, ya que cada una de ellas favorece el control de las plagas de palto, por lo tanto, al momento de efectuar el control de malezas es indispensable evitar su eliminación. • Mantener altas densidades de depredadores en primavera, efectivos en el control de plagas antes del período de rápido incremento de su población en meses de verano. Los resultados del estudio muestran una alta asociación de enemigos naturales y ciertos componentes botánicos de ladera de cerro y huertos de palto, sin embargo, es necesario, como siguiente paso, estudiar el efecto del manejo del ambiente sobre el control de plagas y su impacto económico en el costo de producción.

99

Capítulo 7

Dinámica de poblaciones R. Vargas • S. Rodríguez

La dinámica de poblaciones es el estudio de los cambios que sufren las comunidades biológicas así como los factores y mecanismos que los regulan. El estudio de las fluctuaciones en el tamaño y/o densidad de las poblaciones naturales se basa en tres pilares fundamentales: una serie de principios teóricos generales que subyacen al cambio poblacional, la formalización e interpretación de estos principios a través de modelos matemáticos, y por último, la interpretación de estos principios y modelos en términos de mecanismos biológicos.

La importancia del estudio y aplicación de la dinámica de poblaciones en los programas de Control Biológico se resume en los siguientes aspectos:

El papel que juegan los parasitoides y depredadores en la dinámica de poblaciones naturales ha sido uno de los aspectos menos entendidos y por lo mismo, subestimado y subutilizado dentro de la ecología de poblaciones. Aunque se han registrado muchos casos exitosos de Control Biológico, en la mayoría de ellos no existe información sobre las propiedades biológicas y ecológicas de los enemigos naturales antes de su liberación para conocer su potencialidad como regulador de las poblaciones de la plaga objetivo y a la vez predecir el grado de éxito obtenido en condiciones de campo. Además, no se desarrollan estudios posteriores para explicar los mecanismos involucrados en el desempeño del enemigo natural. Por otro lado, se plantean criterios y umbrales poco rigurosos para estimar el grado de eficiencia alcanzado por un agente de control biológico.

3. Es posible predecir con mayor grado de seguridad los resultados de nuevas introducciones de enemigos naturales.

El desconocimiento de las bases teóricas en las que se desarrollan las interacciones entre parasitoides o depredadores y hospederos o presas en la mayoría de los programas de control biológico, disminuye las posibilidades de predicción y por ende las probabilidades de éxito de dichos programas.

1. Es fundamental para comprender los procesos de regulación de poblaciones de plagas a través del uso de enemigos naturales. 2. Permite conocer y jerarquizar los atributos de los enemigos naturales y su impacto en el éxito de los programas de control biológico.

4. Establece teorías robustas que sirven de base para la generación de nuevos programas de control. Esta teoría ecológica presenta aspectos fundamentales para el estudio y entendimiento de la dinámica de las poblaciones animales, en particular, las interacciones tritróficas, esto es, planteadas a nivel del sistema plantaplaga-enemigo natural, en que los siguientes aspectos son relevantes:

Distribución espacial de las poblaciones La distribución responde a un conjunto de influencias: búsqueda de nutrientes, condiciones físicas desfavorables, reacciones de competencia, entre otras. El modelo o distribución espacial se considera un atributo fundamental de los seres vivos y su conocimiento incide en la eficiencia de los planes de muestreo y en el análisis e in-

100 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

(A)

(B)

(C)

Figura 7-1 Distribución espacial: (A) uniforme; (B) al azar; y (C) agregada.

terpretación de los datos. Existen 3 tipos de distribución espacial: uniforme, al azar y agregada (Figura 7-1). a. Distribución uniforme: en que los individuos se disponen a una cierta distancia unos de otros; se produce cuando el ambiente no es el idóneo por lo que aparecen fuertes relaciones intraespecíficas. b. Distribución al azar: se observa en especies que tienen amplios límites de tolerancia por lo que no se tienden a reunir en grupos. c. Distribución agregada: cuando los individuos se disponen en grupos muy densos pero separados de otros grupos también densos. Esta distribución es la más frecuente en plagas agrícolas, pues permite una mayor protección, reproducción y dispersión de la especie.

Cuantificación de poblaciones El uso de los modelos clásicos de Umbral Económico y Nivel de Daño Económico se basa en la estimación de la densidad de la plaga por medio de técnicas de muestreo establecidas específicamente para insectos y ácaros que son objeto del estudio. La abundancia de las poblaciones generalmente se expresa en términos de número de individuos por unidad de superficie (larvas por metro, pulgones por tallo, etc.). El recuento total de los individuos de una población, es decir un censo, arroja el conocimiento exacto de la densidad poblacional, sin embargo, es impracticable a nivel de huerto de modo que se debe recurrir al muestreo. El muestreo es una actividad cuyo objetivo es estimar la densidad poblacional. Toda estimación de un parámetro poblacional tiene un determinado nivel de error que podría derivar en decisiones erróneas, por lo tanto, es necesario incrementar la precisión en las estimaciones de densidad poblacional (ver Capítulo 3: Monitoreo de plagas y registro). Diversos factores determinan el nivel de precisión de una estimación de densidad poblacional, siendo uno de ellos el tamaño de la muestra (número de unidades muestrales): a mayor tamaño de muestra, menor variabilidad

y por consiguiente mayor precisión (Pedigo y Buntin, 1994). Además, es necesario implementar un programa de muestreos de una determinada plaga a lo largo de varias temporadas, manteniendo constante la técnica de muestreo, el mismo cultivo y el tamaño de la unidad muestral. Un método de muestreo para artrópodos exige como prerrequisito el conocimiento de la distribución estadística que interprete su disposición espacial, siendo una de las distribuciones más usada la denominada Binomial Negativa que ha demostrado en muchos casos ser aplicable al estudio de la distribución en poblaciones de insectos, asociando la proporción de hojas ocupadas y la media poblacional (Vargas 1988). En un plan de manejo integrado se considera fundamental establecer un programa de muestreo que genere información rápida, económica y con un nivel de precisión conocido, objetivo alcanzado, entre otros métodos, por un muestreo secuencial, cuya principal característica es un tamaño de muestra flexible, que depende de la densidad poblacional de la plaga, y que aporta información necesaria para tomar una decisión de control (Vargas y Rodríguez 1990) (ver Capítulo 3: Monitoreo de plagas y registro).

Factores externos actuando sobre la dinámica poblacional Los principales factores externos asociados a estudios de dinámica poblacional en plagas y enemigos naturales son los siguientes: • Temperatura. Fundamentalmente en relación al tiempo de desarrollo de los estadios juveniles, longevidad de los adultos, y producción de huevos en la hembra. – Grados día (GD) y Grados Día de Desarrollo (GDD). Uso de la temperatura para predecir la emergencia de los insectos y su actividad, a través del cálculo del calor acumulado, expresado como grados día. Este concepto térmico parte de la base

101 Dinámica de poblaciones

que el crecimiento de un insecto es dependiente de la cantidad total de calor a la cual estuvo expuesto durante sus fases fenológicas.

Al conocer el valor de los grados día para el desarrollo de un insecto particular, se puede establecer un calendario de las actividades del insecto asociadas a la temperatura, información relevante en términos de control.

• Humedad Relativa. Considerada en relación a que el nivel higrométrico puede actuar directamente como factor limitante sobre huevos y estadios juveniles y en la determinación de la actividad y longevidad de los adultos. • Fotoperíodo. Desde el punto de vista que una mayor duración de la fotofase puede incrementar la fecundidad de la hembra. Considera, además, la intensidad luminosa y la longitud de onda como importantes factores reguladores de la fecundidad.

Tablas de vida y factores clave de mortalidad Es importante el conocimiento de los parámetros bioecológicos que permitan evaluar las características intrínsecas de las poblaciones de plagas y enemigos naturales. La construcción de tablas de vida es una manera sinóptica y sintética de plasmar en forma cualitativa y numérica las principales características de estas poblaciones. Determinar la duración del ciclo de vida, proporción sexual, longevidad, fecundidad y construir una tabla de vida, sirve como base teórica para la aplicación adecuada de técnicas de manejo integrado de plagas. Los objetivos de la elaboración y análisis de tablas de vida son: 1. Estimar la distribución de la mortalidad en las diferentes edades de un organismo 2. Predecir el tamaño potencial de las poblaciones (rm), a través de un muestreo adecuado Para alcanzar tales objetivos es necesario estimar parámetros de vida de plagas y enemigos naturales, como parámetros específicos de edad, tasas de mortalidad y fecundidad, sobrevivencia, esperanza de vida, tasa neta de reproducción, tasa intrínseca de reproducción, tasa finita de incremento y tiempo generacional.

Parámetros de tabla de vida Los estudios que evalúan a los depredadores en base a tasas de consumo o fecundidad de hembras, no logran determinar el potencial de control que posee el enemi-

go natural sobre la plaga, proporcionando información incompleta, es decir, altas tasas de consumo no implica una alta fecundidad y fertilidad, por tal motivo es necesario determinar los parámetros biológicos que resultan claves en condiciones de laboratorio para estimar el potencial biótico que presenta la especie de interés en el campo. La confección de tablas de vida y fertilidad de depredadores y presas son fundamentales para evaluar la eficiencia y potencialidad de un enemigo natural sobre una determinada plaga (Bellows et al, 1992; Naranjo 2001; Busato et al, 2004; Gabre et al, 2005; Vantornhout et al, 2005; Vargas et al, 2005; Ozman-Sullivan 2006; Collier et al, 2007; Reis et al, 2007; Ferrero et al, 2007; Broufas et al, 2007), información que unida a registros de consumo genera supuestos de eficiencia de los potenciales depredadores en el huerto (Chi y Yang 2003; Kishimoto 2003; Gotoh et al, 2006; O’Neil et al, 1998). La tasa intrínseca de crecimiento de una población, cuyo valor máximo se denomina potencial biótico (Birch 1948), es característico de cada especie y expresa la facultad privativa de una población para aumentar el número de individuos bajo condiciones ambientales óptimas. El parámetro tasa intrínseca de crecimiento (rm) obtenido en condiciones de laboratorio es un indicador del potencial de control que tienen los enemigos naturales sobre su presa u hospedero, y permite suponer que en condiciones de campo el patrón de reducción de la población plaga podría mantenerse, representando un factor significativo de regulación. La estimación de este parámetro sobre depredadores y presas permite generar relaciones numéricas entre ambas poblaciones, útiles al momento de establecer las proporciones de liberación de enemigos naturales en el huerto. Es así como fueron estimados los parámetros de tabla de vida de la Falsa arañita de la vid Brevipalpus chilensis (Acari: Tenuipalpidae) y el fitoseido Typhlodromus pyri (Acari: Phytoseiidae) (Vargas et al 2005), determinándose que una proporción depredador: arañita en campo de 1:6, resulta apropiada para mantener una población de baja incidencia de B. chilensis en viñedos var. Sauvignon Blanc (Olivares, 2007). La aproximación teórica realizada sobre la Arañita roja del palto, Oligonychus yothersi (Acari: Tetranichidae) y el fitoseido Cydnodromus picanus (Acari: Phytoseiidae), indicó que una proporción depredador: presa de 1:10, otorgaría una regulación de la plaga a niveles tolerables, dicha relación que está siendo evaluada en campo durante la presente temporada (2008). Fundamentalmente, la estimación del crecimiento de poblaciones de depredadores y presas es una herramienta que permite establecer con base teórica la planificación de las liberaciones en el campo (Vargas y Rodríguez 2007).

102 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Cuadro 7-1 Parámetros de tabla de vida y estadísticos relacionados de H. lataniae sobre zapallo cacho y de A. diaspidis sobre la escama, en condiciones de laboratorio (T°26 ± 2°C, HR 65 ± 5%, L:O 14:10).

La capacidad de multiplicación de una población durante una generación (rm) asocia la tasa neta de reproducción (R0) y el tiempo generacional (T) (Rabinovich 1980), señalando el potencial control de un enemigo natural en el tiempo sobre una determinada plaga (Persad y Khan 2002; Kontodimas et al, 2005). Para visualizar la utilidad y aplicación de las tablas de vida a los programas de Control Biológico, se presenta a continuación una síntesis de 2 tesis de postgrado desarrolladas en el INIA La Cruz durante los años 2006 y 2007.

Parámetros de tabla de vida de la Escama blanca del palto, Hemiberlesia lataniae, y su parasitoide Aphytis diaspidis El estudio de los parámetros de tabla de vida de la escama latania y su parasitoide Aphytis diaspidis, arrojó los resultados presentados en el Cuadro 7-1, en que la población del enemigo natural crece 5,2 veces en 16,8 días, es decir, por cada hembra de la generación actual, habrán 5,2 hembras en la generación siguiente. Además, por cada hembra presente en un día habrá 1.1 hembras al día siguiente. Por lo tanto, en cualquier instante el número de hembras de la población de A. diaspidis se incrementará a una tasa tal, que se espera un crecimiento poblacional cercano al 10% diario (Cuadro 7-1). La tasa neta de reproducción (R0), definida como el número de hembras por cada hembra en una generación, fue mayor para la escama latania que para A. diaspidis, indicando con ello su alta capacidad reproductiva cuando es alimentada sobre zapallo cacho. La tasa intrínseca de crecimiento (rm), definida como la capacidad de multiplicación de una población, fue estadísticamente más alta para A. diaspidis que para la escama latania, resultados que confirman la potencialidad de control que ofrece este parasitoide sobre la plaga. El valor marcadamente superior de la tasa intrínseca de crecimiento poblacional del enemigo natural permite suponer que, utilizándolo en un programa de control biológico, podría mantener en un bajo nivel la población de la plaga. La tasa finita de crecimiento, definida como el número de individuos que se agregan a una población por día, fue para A. diaspidis 1.1, valor que es considerado como indicador de un buen candidato para control biológico de especies fitófagas (Sabelis y Bakker 1992). Además, este valor fue mayor al obtenido por la escama latania, lo que refuerza la idea que el parasitoide podría ayudar a mantener en un bajo nivel la población de la plaga. El tiempo generacional, el cual indica el tiempo promedio entre dos generaciones sucesivas, resultó ser notoria-

Parámetros biológicos

Plaga Hemiberlesia lataniae

Parasitoide Aphytis diaspidis



rm (tasa intrínseca de crecimiento)

0,06

0,09



R0 (tasa neta de reproducción)

139,8

5,2



T (tiempo generacional)

72,3

16,8



λ (tasa finita de crecimiento)

1,07

1,1

Fuente: Navea, 2008.

mente mayor en la escama latania, lo que se interpreta como una ventaja para el incremento poblacional del parasitoide (La Rossa et al, 2002). Según los antecedentes anteriores, A. diaspidis podría considerarse como un importante agente de control biológico de la escama latania dentro de un programa de manejo integrado (Navea, 2007).

Parámetros de tabla de vida de la Arañita roja del palto, Oligonychus yothersi, y su depredador Cydnodromus picanus Los parámetros biológicos de C. picanus muestran que su población crece 31,1 veces (R0) en 13,9 días (T), es decir, por cada hembra en la generación actual, habrán 31,1 hembras en la generación siguiente; además, por cada hembra presente en un día habrán casi 1,27 (λ) hembras al día siguiente, por lo tanto, en cualquier instante el número de hembras de la población de este fitoseido se incrementará a una tasa tal que se espera un crecimiento del 24% (rm) de la población de un día al siguiente (Cuadro 7-2). El depredador obtuvo, en general, mayores valores para los parámetros de tabla de vida en comparación a la plaga, en condiciones de laboratorio. Principalmente, un mayor valor de rm del fitoseido, indica su capacidad para actuar como enemigo natural de la arañita roja del palto.

103 Dinámica de poblaciones

Cuadro 7-2 Parámetros de tabla de vida de la arañita roja del palto y su depredador C. picanus (T°27 ± 2°C, HR 87,4%, L:O 16: 8).

predador. Aunque los supuestos son simples, la importancia del modelo radica en que se incorpora la noción de densodependencia entre dos especies. En función de los valores de los parámetros, el modelo permite la coexistencia de las dos especies o la eliminación de una de ellas.



Parámetros biológicos

Plaga O. yothersi

Depredador C. picanus



R0 (tasa neta de reproducción)

39,66

31,13



rm (tasa intrínseca de crecimiento)

0,22

0,24

• que los cambios en las densidades del parasitoide y hospedero no influyen en la tasa de ataque del parasitoide;



λ (tasa finita de crecimiento)

1,25

1,27

• que la fecundidad y mortalidad (por otros factores diferentes al parasitismo) son constantes; y



T (tiempo generacional)

16,36

13,91



DT (doble tiempo generacional)

3,08

2,80

El modelo Nicholson-Bailey asume:

Fuente: Rioja, 2008.

Modelos poblacionales aplicados en Control Biológico Los modelos poblacionales asociados al Control Biológico resultan altamente complejos, sin embargo, se ajustan a la realidad, de manera que son capaces de predecir y describir los cambios en la densidad de los individuos en una población en un tiempo y espacio determinados, los cuales serían de gran utilidad en la aplicación de estrategias de manejo de plagas. Un modelo predictivo describe los cambios que ocurrirían en una población de acuerdo con una serie de condiciones ambientales y datos poblacionales iniciales. Huffaker et al, (1977) analizan y discuten los principales modelos de interacción parasitoide/hospedero o depredador/presa, principalmente en función de su estabilidad. El modelo exponencial y logístico utilizan por primera vez representaciones matemáticas para predecir cambios poblacionales. Aunque pueden representar el crecimiento poblacional en situaciones simples (particularmente en las etapas iniciales), su aplicación es limitada ya que se ignoran propiedades biológicas fundamentales, como estructura de edades y sobrevivencia, asumiendo reproducción continua. Mientras que en el modelo exponencial, las poblaciones crecen hasta el infinito, el modelo logístico fue el primero en reconocer que las poblaciones crecen hasta alcanzar un límite máximo. El modelo de Lotka-Volterra es el primer modelo que describe las interacciones entre dos especies: presa y de-

• que los parasitoides buscan al azar a los hospederos;

• que los parasitoides no tienen limitaciones en su dotación de huevos. El modelo de Varley et al, (1973), incorpora los conceptos de respuesta funcional, tiempo de manipulación (Holling 1966) e interferencia mutua (IM) (Hassell y Varley 1969), los cuales aportan estabilidad en las interacciones parasitoide/hospedero. Al analizar la estabilidad de los modelos relacionados con el Control Biológico, Hassell y May (1973) identificaron tres factores importantes en la interacción parasitoide/hospedero, todos relacionados con respuestas de los parasitoides: a. La respuesta funcional a cambios en la densidad del hospedero. b. La respuesta a su propia densidad (interferencia mutua). c. La respuesta a la distribución del hospedero. En base a varios modelos predictivos desarrollados se sugiere que la utilización de enemigos naturales en programas de control biológico debe estar fundada en aquellos atributos que aumentan las probabilidades de alcanzar cierta estabilidad con su hospedero o presa a bajas densidades, como una alta eficiencia en su capacidad intrínseca de búsqueda, particularmente a bajas densidades del hospedero/presa, el menor tiempo de manipulación de la plaga en relación con el tiempo total de búsqueda, una menor interferencia mutua que contribuya a la estabilidad de la interacción (entendiendo por IM el resultado detrimental del aumento de la densidad de enemigos naturales sobre la tasa de parasitismo o depredación) y una alto grado de agregación de los enemigos naturales con respecto a la distribución del hospedero. Aunque estos atributos de los enemigos naturales se enmarcan en un contexto teórico sólido, ha resultado difícil predecir el grado de éxito de los programas de Control Biológico y estimar la eficiencia en base a dichos atri-

104 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

butos (DeBach 1974). Un enemigo natural efectivo es aquel capaz de regular la densidad de la población plaga y mantenerla en niveles bajo el umbral económico establecido para un determinado cultivo. Esta efectividad está estrechamente asociada a las siguientes características (DeBach 1991): 1. Adaptabilidad a los cambios en las condiciones físicas del medio ambiente. 2. Alto grado de especificidad a un determinado hospedero/presa. 3. Alta capacidad de crecimiento poblacional con respecto a su hospedero/presa. 4. Sincronización con la fenología del hospedero/presa y capacidad de sobrevivir períodos en los que éste se encuentra ausente. 5. Capaz de modificar su acción en función de su propia densidad y la del hospedero/presa, es decir ser densodependiente. La capacidad de búsqueda ha sido señalada como el atributo individual más importante, debido a que esta habilidad permite que el enemigo natural sea capaz de sobrevivir incluso a bajas densidades de su hospedero/ presa. Sin embargo, un enemigo natural no tendría una capacidad de búsqueda sobresaliente si no posee varias de las características mencionadas. Por lo tanto, el enemigo natural ideal debe poseer una buena combinación del mayor número de atributos posibles.

Interacciones multitróficas La interacción entre planta, plaga y enemigo natural en el sistema agrícola representa cierto grado de estabilidad poblacional por lo que el conocimiento de las características y la dinámica de cada nivel aporta información relevante al nivel siguiente y finalmente, a las estrategias de manejo de la plaga. El estudio de dichas interacciones ofrece también la oportunidad de establecer los efectos de un componente dietario sobre la condición del hospedero y su influencia en el fitness del enemigo natural. Se entiende por fitness la aptitud de un organismo para transmitir su información genética a las siguientes generaciones. Por ejemplo, un animal que tiene una cría tendrá (probablemente) un fitness menor que otro que tenga 10 crías. De igual manera, un animal que tiene 10 crías, de las cuales sólo tres sobreviven para reproducirse, tendrá un menor fitness que uno que tiene siete crías, todos los cuales alcanzan la edad reproductiva. En otras palabras, el fitness es la cantidad de descendencia que un individuo deja para las siguientes generaciones. Algunos componentes del fitness como longevidad, fe-

cundidad y proporción de sexos resultan útiles aplicados a programas de Control Biológico de plagas. El fitness de un individuo está estrechamente asociado con la condición de su hospedero o presa (Urrutia et al 2007; Thompson 1999), en cambio, la condición del hospedero es dependiente de la cantidad y calidad del alimento que tenga disponible (Godfray 1993), por ejemplo, la longevidad y fecundidad están positivamente correlacionadas con la calidad de la planta hospedera. El polen es consumido por distintas especies de insectos depredadores (Irvin et al. 1999), parasitoides (Zhang et al. 2004), polinizadores (Pontin et al. 2006) y herbívoros (Jones et al. 1993), siendo rico en proteínas (Thompson 1999) que aporta al desarrollo reproductivo (Annis y O’Keeffe 1984; Jones et al. 1993), sin embargo, es sorprendente la escasa literatura que existe sobre las consecuencias ecológicas de su consumo por parte de depredadores que participan en programas de control biológico (Evans y Barratt 1995), contando con abundantes registros para otros grupos de insectos como por ejemplo sírfidos (Wratten et al 1995; Irvin et al 1999; Pontin et al. 2006). De la misma forma, el néctar de las plantas es utilizado como sustrato alimenticio por parasitoides adultos, cuyo estado nutricional puede influir sobre el éxito de programas de control biológico. Una limitación nutricional afecta la capacidad de localización del enemigo natural como así también su longevidad y capacidad de dispersión. La hipótesis de provisión de néctar en parasitoides (Parasitoids Nectar Provision Hipotesis, PNPH) propone un mejoramiento del control biológico mediante la utilización de néctar como alimento para los himenópteros adultos. La influencia de la disponibilidad de azúcar (como componente del néctar floral en el campo) tiene un efecto directo sobre la longevidad del parasitoide, estudiada mediante curvas de supervivencia (ver Capítulo 4: Control biológico). Muchos himenópteros se alimentan principalmente del néctar de especies de plantas pertenecientes a la familia Apiaceae y Brassicaceae, otorgando un alto grado de importancia a la flora acompañante en la alimentación de los enemigos naturales, la que se traduce en un importante factor en el establecimiento de parasitoides introducidos (Ide y Lanfranco 2001) y de efecto en su longevidad y fecundidad (Leius 1960, 1961a, 1961b, 1963, 1967) (ver Capítulo 6: Manejo del hábitat). El bajo impacto de los parasitoides en los niveles poblacionales de plagas se explica por la escasa o inexistente presencia de flores (Syme 1966, 1975, 1977), en casos que se trate de especies proovigénicas, las que no requieren de fuente de alimento para la maduración de los huevos, sin embargo, el suministro de alimento le resulta necesario para aumentar su longevidad. Los indicado-

105 Dinámica de poblaciones

res del fitness de parasitoides asociados a alimentación y frecuentemente utilizados en literatura son: 1. Tiempo de desarrollo del parasitoide. 2. El número de emergencias exitosas. 3. Longitud de la tibia en adultos. 4. Patrón de maduración de huevos: especies sin-ovigénicas y proovigénicas. Este patrón de maduración de los huevos durante la vida de un parasitoide afecta la manera potencial en que el parasitoide puede ser usado en control biológico, ya que las especies proovigénicas emergen con el suministro de huevos para toda su vida permitiendo un ataque rápido de muchos hospederos (Gurr et al, 2004). Por el contrario, los huevos de las especies sinovigénicas se desarrollan gradualmente durante la vida de la hembra requiriendo proteína para la maduración de sus huevos por lo que algunas especies se alimentan de néctar, mielecilla o bien consumen la hemolinfa del hospedero obtenida al pinchar el integumento con el ovipositor y consumiendo la hemolinfa conforme sale de la herida (host feeding), comportamiento presente en muchos parasitoides himenópteros (ejemplo, Aphytis diaspidis sobre la escama blanca del palto), y que causa una mortalidad de la plaga casi tan elevada como la propia actividad de parasitismo (Van Driesche 2007). La interacciones tróficas se ven afectadas por la presencia de metabolitos secundarios que actúan como mecanismos de “defensa indirecta” de las plantas hacia los

herbívoros (semioquímicos). Ante agresiones mecánicas provocadas por éstos, son liberados compuestos vegetales volátiles que actúan como atractivo para los enemigos naturales (Tentelier y Fauvergue 2007). Dichos compuestos junto a la distribución agregada de las plagas en el huerto, concentran aún más la atracción química de los reguladores biológicos (Colazza et al 2003), potenciando el rol fundamental de esta asociación como sistema de defensa natural de la planta. Este mecanismo ha sido citado en más de 15 especies pertenecientes a las familias de las Fabáceas, Brasicáceas, Cucurbitáceas, Rosáceas, Malváceas y Poáceas (Dicke et al 1990). Las diferencias en la naturaleza química, concentración e intensidad de dichos volátiles, proporciona la información necesaria para que el enemigo natural diferencie los volátiles asociados a su presa, de los demás compuestos emitidos por las plantas (De Moraes et al 1998). Además, durante la oviposición de los herbívoros se producen liberaciones de sustancias atractivas a parasitoides y depredadores. Colazza et al (2003) determinaron que la alimentación y oviposición del chinche verde Nezara viridula induce la emisión de volátiles que atraen al parasitoide de huevos Trissolcus basalis, por un efecto sinérgico de los volátiles emitidos por las hojas dañadas y de aquellas expuestas a la ovipostura. La presencia de compuestos químicos volátiles favorece las interacciones entre distintos niveles tróficos a través del aumento de la eficiencia de los enemigos naturales y por lo tanto del control biológico de plagas, pudiendo integrar esta información con otras estrategias de manejo tendiente a una producción sustentable.

107

Capítulo 8

Manejo de plagas en paltos y cítricos

Plagas asociadas a paltos y/o cítricos en Chile Plaga

Nombre común

Hospederos

Página Libro

Clase insecta Aleyrodidae

Mosquitas blancas

Aleurothrixus Mosquita blanca algodonosa floccosus

Naranjo, limonero, pomelo, lima, lúcumo y guayabo

111

Paraleyrodes sp

Mosquita blanca filamentosa

Limonero, naranjo y pomelo. lúcumo

119

Trialeurodes vaporariorum

Mosquita blanca de los invernaderos

Polífago, ataca plantas de palto en vivero

120

Fresno, granado, olivo, peumo europeo (Crataegus spp) y cítricos

121

Aphis spiraecola Pulgón de la espírea

Naranjo, limonero, mandarino, pomelo, chirimoyo, ciruelo, kiwi, mango, manzano, membrillo, níspero, peral, vid, frambueso y macadamia

123

Toxoptera aurantii Pulgón negro de los cítricos

Naranjo, mandarino, palto, pomelo y limonero. Ornamentales como pitosporo y camelia

129

Aphis gossypii Pulgón del melón

Palto, arándano, chirimoyo, guayabo, limonero, naranjo y níspero. En hortalizas: alcachofa, alcayota, arveja, coliflor, repollo, espárrago, poroto, papa, melón, sandía, tomate, zapallo y otras

132

Saissetia oleae Conchuela negra

Palto, cítricos, lúcumo, chirimoyo, olivo, damasco, caqui, kiwi, almendro, cerezo y duraznero. Ornamentales: laurel de flor, abutilón y fresno. Nativos: maitén, molle y arrayán, entre otros

135

Saissetia coffeae Conchuela hemisférica

Naranjo, limonero, olivo, lúcumo, mango y guayabo. Árboles nativos como el molle y en ornamentales como helechos

143

Siphoninus Mosquita blanca del fresno phillyreae Aphididae

Coccidae

Áfidos

Conchuelas

108 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Coccus Conchuela blanda hesperidum

Naranjo, limonero, mandarino, pomelo, frambueso, arándano y guayabo. Helechos y Aralia

145

Protopulvinaria Conchuela piriforme pyriformis

Palto, lúcumo, guayabo y naranjo. En ornamentales hiedra, laurel de olor, lingue (Persea lingue) y Robinia

147

Ceroplastes Conchuela cerosa cirripediformis

Naranjo, limonero, mandarino y pomelo. Cerezo, ciruelo y lúcumo. Piretro y diamelo

149

Margarodidae Icerya purchasi Conchuela acanalada Curculionidae

Naranjo, limonero, mandarino y pomelo. Además lúcumo, acacia, rosales y malezas como: alfilerillo, falso té y amor seco

150

BURRITOS Y CAPACHITOS

Naupactus Burrito de la vid xanthographus

Chirimoyo, ciruelo, duraznero, guindo, limonero, naranjo, palto, níspero, nogal, palto, peral, vid, kiwi, caqui, frambueso, remolacha, papa, poroto y alfalfa. Malezas: maicillo, hinojo, lechugilla, cicuta, llantén y romasa

155

Pantomorus Capachito de los frutales cervinus

Duraznero, damasco, manzano, banano, limonero, naranjo, palto, frambueso, frutilla, grosellero y zarzaparrilla. Hortalizas papa, maíz, remolacha, poroto y Feijoa. Forrajeras, trébol rosado, blanco y alfalfa. Ornamentales, común en rosal

158

Hemiberlesia Escama blanca del palto lataniae

Duraznero, kiwi, manzano, martacuyá, níspero, olivo, palto, peral, vid

163

Aspidiotus nerii Escama blanca de la hiedra

Vid, níspero, ciruela, durazno, kiwi, caqui, mango, palto, papayo, olivo, limonero, mandarino, palmeras y algarrobo

171

Aonidiella aurantii Escama roja

Limonero, mandarino, naranjo y pomelo. Ha sido encontrada en rosales

173

Lepidosaphes Escama morada beckii

Exclusivamente en cítricos como limonero, mandarino, naranjo y pomelo

177

Diaspididae

Formicidae

ESCAMAS

HORMIGAS

Linepithema humile Hormiga Argentina

Generalmente presente en plantas atacadas por insectos que producen mielecilla

Solenopsis gayi

Hormiga roja

Mandarino, palto, chirimoyo y pepino dulce

Pseudococcidae

CHANCHITOS BLANCOS

Ver Capítulo 9

Pseudococcus Chanchito blanco cola larga longispinus

Paltos, cítricos, peral, manzano, guindo, vid, níspero, caqui, lúcumo, olivo, mango, guayabo, maracuyá, higo y una amplia variedad de plantas ornamentales y especies forestales

180

Planococcus citri Chanchito blanco de los cítricos

Naranjo, limonero, mandarino y pomelo, caqui, granado, chirimoyo, guayabo y mango. Plantas ornamentales: Bougainvillea, Gardenia y Nerium

192

Pseudococcus Chanchito blanco calceolariae

Paltos y cítricos (limonero, mandarino, naranjo y pomelo). Arándano, caqui, frambueso, membrillo, chirimoyo, ciruelo, duraznero, peral, zarzaparrilla, Maqui (Aristotelia chilensis) y diversas plantas ornamentales

198

Pseudococcus Chanchito blanco de la vid viburni

Vid, manzano, peral, nectarino, ciruelo, cítricos, cerezo, frambueso, mora, zarzaparrilla, níspero, pepino dulce, caqui, lenteja, garbanzo, papa, rábano y alfalfa.

203

109 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Thripidae

Malezas: correhuela, malva, amor seco, hinojo y cardo, entre otras. En paltos fue mencionada por López y Bermúdez (2007)

TRIPS

Frankliniella Trips californiano occidentalis

Ajo, cebolla, alfalfa, pimentón, tomate, vid, berenjena, lechuga, manzano, cerezo, kiwi, ciruelo, limonero, damasco, duraznero, guindo, clavel, crisantemo, gladiolo, rosa

206

Heliothrips Trips del palto haemorrhoidalis

Palto, chirimoyo, caqui, ciruelo, duraznero, guindo, limonero, naranjo, mandarinas, kiwi, vid y peral. Ornamentales y forestales: palqui, boldo, eucaliptus, canelo, arrayán, maqui, entre otros

207

Katídido de los cítricos

Sólo se ha observado en naranjos navel

220

Gryllus fulvipennis

Grillo del campo

Polífago. Paltos, cítricos y vides

221



TERMITAS Hábitat natural: madera seca. Eventualmente vid, palto y ciruelo

223

Frutales en huertos caseros como: Cítricos, damasco, ciruelo, manzano, vid, níspero, higuera, palto y chirimoyo

224

Naranjo, ciruelo, damasco, duraznero, kiwi, manzano, níspero, vid, peral

227

Limonero, naranjo, pomelo y mandarino

231

Naranjo, limonero, nogal, almendro, castaño y fruta seca, algarrobo Prosopis chilensis, P. flexuosa y tamarugo Prosopis tamarugo

232

Especies polífagas, ocasionalmente cítricos

234

Palto, murta, coigüe, peumo, boldo y quillay

235

Ciruelo, damasco, frambuesa, manzano, membrillo, palto y ciprés

236

Cerezo, manzano, membrillo, níspero, olivo, palto, peral y tebo

237



KATIDIDOS Y GRILLOS

Tettigonidae Cosmophyllum pallidulum Gryllidae

Kalotermitidae Neotermes Temita chilena chilensis Rhinotermitidae Reticulitermes Termita subterránea flavipes

POLILLAS Y MARIPOSAS

Tortricidae Proeulia auraria Enrollador de hojas Gracillariidae Phyllocnistis citrella

Minador de los cítricos

Pyralidae Ectomyelois Polilla del algarrobo ceratoniae Noctuidae Spodoptera frugiperda

Cuncunilla cogollera del maíz

Helicoverpa zea

Gusano del choclo

Peridroma saucia

Cuncunilla veteada

Helicoverpa armigera Oecophoridae Arctopoda maculosa

Mariposa del cachito

Psychidae Thanatopsyche Bicho del cesto chilensis Cossidae Chilecomadia Gusano del tebo valdiviana

110 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

CLASE ARAÑITAS ARACHNIDA Tetranychidae Oligonychus yothersi

Arañita roja del palto

Chirimoyo, manzano, membrillo, palto, peral

Panonychus citri

Arañita roja de los cítricos

Naranjo, mandarino, pomelo y limonero

246

Limoneros, carozos, pomáceas, kiwi, arándano y frambueso. También se encuentra asociada a diferentes hortalizas, forrajeras, cucurbitáceas, plantas ornamentales y malezas como la correhuela

251

Limonero, mandarino, naranjo, vides, kiwi y otros frutales de importancia económica, malezas, ornamentales como ligustrino y lobelia

252

Limonero, tangelos y naranjo

259

Limonero, naranjo, mandarino y pomelo. En Chile, ha sido observado en pepino de fruta, camote y plantas de jardín como las Alegrías del hogar

263

Tetranychus urticae Arañita bimaculada

239

Tenuipapidae Brevipalpus Falsa arañita de la vid chilensis Eriophydae Eriophyes sheldoni

Ácaro de la yema

Tarsonemidae Polyfagotarsonemus Ácaro ancho latus

Tydeidae Presentes en paltos y cítricos

Ver Capítulo 12: Galería de imágenes

Stigmaeidae CLASE CARACOLES Y BABOSAS GASTROPODA Helicidae Helix aspersa Caracoles

Polífaga. Cítricos, guindo, kiwi, vid y hortalizas como lechuga, repollo, acelga y alcachofa

267

Deroceras spp Babosas

Polifago. Cítricos, guindo, kiwi y vid. Hortalizas: lechuga, repollo, acelga y alcachofa

269

Psocidos

Palto y cítricos

270

Agrolimacidae

111 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Mosquitas blancas Orden: Hemiptera • Familia: Aleyrodidae Las mosquitas blancas son insectos alados de tamaño cercano a 2 mm de largo. Los adultos presentan una coloración blanca debido a que su cuerpo se encuentra cubierto de finas partículas de cera. La hembra es ligeramente más grande que el macho. Se alimentan de savia de las hojas a través de un aparato bucal adaptado para esta función. Debido al tipo de alimento y las características de su aparato digestivo, son insectos que al estado de ninfas excretan importantes volúmenes de mielecilla que expulsan al ambiente, lo cual favorece el desarrollo de fumagina, hongos saprófitos que se observan sobre las hojas como una cubierta negra. Normalmente, las mosquitas adultas se encuentran posadas sobre las hojas tiernas, ya que allí realizan su ovipostura. Cuando son perturbadas, se alejan volando rápidamente para posarse en otras hojas. Las ninfas o estadios juveniles son de forma plana y ovalada. Los estados inmaduros más desarrollados están cubiertos de finos filamentos cerosos que le dan un aspecto característico dependiendo de la especie. Entre las especies de mosquita blanca presentes en Chile, Aleurothrixus floccosus (Maskell) es la especie más importante y una de las plagas más dañina en la citricultura nacional. Las otras especies Aleurodicus spp (Curtis) Aleurothrixus porteri, Dialeurodes citri (Ashmead), Paraleyrodes (Bondar 1931) y Trialeurodes vaporarium (Westwood), presentan una escasa importancia económica dentro de este rubro. Sin embargo, T. vaporarium constituye plaga primaria en tomates bajo plástico y ha sido encontrada infestando paltos de vivero en la V Región.

Mosquita blanca algodonosa de los cítricos, mosca blanca lanuda de los cítricos (Perú) Woolly whitefly / Woolly citrus whitefly Aleurothrixus floccosus (Maskell) P. Luppichini, R. Ripa, P. Larral, E. Núñez y F. Rodríguez

Distribución e importancia La mosquita blanca algodonosa, Aleurothrixus floccosus, se encuentra presente desde la Región de Arica y Parinacota (I) a la Región del Libertador Bernando O’Higgins (VI) y es una plaga de importancia económica en gran parte de la zona citrícola, especialmente en los sectores

más cálidos. En el Perú fue citada por primera vez en 1954 por Cisneros y Fukuda, causando daños en cítricos en el valle de Palpa. A partir de ese año, la infestación fue extendiéndose y acentuándose en todas las zonas citrícolas del país.

Daño Las hojas presentan en el área donde se alimentan las ninfas ocurriendo además una reducción de la capacidad de fotosintética, producto de la mielecilla, fumagina y abundante lanosidad. En los frutos se pueden observar manchas de mielecilla y formación de fumagina. En situaciones de ataque intenso, se observa además inhibición del crecimiento en ramillas, pérdida de vigor y disminución de la producción (Figuras 8-1 y 8-2).

Descripción morfológica Las hembras y machos adultos son insectos cuyo cuerpo y dos pares de alas membranosas están cubiertas de una sustancia cerosa de color blanco. La hembra adulta tiene aproximadamente 1,1 mm de longitud desde el ápice de la cabeza hasta el extremo de las alas, siendo el macho de tamaño ligeramente menor. El huevo tiene forma ovoidal alargada de 0,17 mm de largo y es de color blanco, este da origen a una ninfa casi transparente de forma elíptica y aplanada dorsoventralmente y de tamaño inferior a 0,5 mm. Es característico de los estadios ninfales la presencia de un orificio vasiforme ubicado en el dorso en el extremo del abdomen, cuya función es expeler la mielecilla del cuerpo de las ninfas. Cuando emergen los adultos, sobre los exuvios de la ninfa queda una abertura en forma de T.

Biología Los adultos se ubican preferentemente en el envés de las hojas tiernas, donde las hembras depositan sus huevos ordenadamente en arcos o semicírculo, ya que la hembra se mantiene fija a un punto de la lámina mediante el estilete de su aparato bucal, girando en torno a éste mientras se alimenta y ovipone. Un fino polvo ceroso blanco secretado por el adulto cubre los huevos y el área adyacente al sitio de postura. Los huevos dan origen a

112 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

ninfas que, luego de caminar una corta distancia, insertan su estilete en el mesófilo de la hoja. El desarrollo se divide en cuatro estadios ninfales, durantes los cuales secreta delgados filamentos cerosos que van cubriendo progresivamente su cuerpo.

ninfas y mielecilla que atrae a las hormigas y otros insectos como abejas, moscas y avispas. Esta lanosidad actúa como un aislante para las ninfas y adultos que emergen, lo que evita que se ahoguen en sus propias excreciones.

R. Ripa

R. Ripa

La lanosidad que recubre las colonias tiene un efecto negativo sobre los pequeños parasitoides, ya que emplean mucho tiempo limpiando la cera que se adhiere a sus extremidades y antenas, lo que probablemente afecta su efectividad. Por otra parte, la mielecilla también dificulta la acción de los parasitoides que quedan atrapados y mueren adheridos a ésta sustancia de alta viscosidad.

Las mosquitas blancas se alimentan y oviponen preferentemente en el envés de las hojas tiernas que brotan en las épocas de crecimiento activo del árbol (“flushes”) y en los llamados chupones. Una vez maduras estas hojas, se observan densas colonias con abundante lanosidad blanquecina cerosa que recubre los cuerpos de las

R. Ripa

Figura 8-3 Adulto de Aleurothrixus floccosus en hoja de limonero.

R. Ripa

Figura 8-2 Lanosidad y mielecilla producidas por las ninfas de Aleurothrixus floccosus en hoja de clementina.

Figura 8-1 Ninfas y lanosidad de Aleurothrixus floccosus en hoja de clementina.

Figura 8-4 Adultos y huevos de Aleurothrixus floccosus.

113

R. Ripa

Manejo de plagas en paltos y cítricos

R. Ripa

Figura 8-5 Huevos de Aleurothrixus floccosus recién ovipuestos (blancos) y maduros.

Figura 8-6 Ninfas de primer y huevos de Aleurothrixus floccosus en hoja de limonero.

La mosquita blanca algodonosa es un insecto que tiene más de dos generaciones durante el año, dependiendo de las condiciones climáticas. Ensayos realizados en limoneros, en la provincia de Quillota, muestran que el ciclo de esta plaga en campo, demora aproximadamente 60 días en primavera y 50 días en verano, desde el estado de huevo hasta que emerge el adulto, mientras que los huevos requieren 18 y 15 días respectivamente (Cuadro 8-1). En la Zona Central, durante el invierno, ocurre una alta mortalidad de los estadíos juveniles y en los más desarrollados detención de su evolución, lo que sumado al efecto de las lluvias reducen notablemente la densidad de la plaga en este período. Lo anterior concuerda con los resultados obtenidos durante el estudio de la abundancia estacional de la mosquita blanca algodonosa, realizado en Ovalle durante la temporada 1997-1998, donde se observó que cada estado y estadio de la mosquita tienen una distinta distribución de la abundancia, de esta forma, los huevos son más abundantes en verano y primavera, las ninfas se encuentran todo el año (Gráfico 8-1). Además, las ninfas corresponderían a las formas de hibernación de la plaga en la zona Centro Norte, mientras que en la Zona Central, ocurre una alta mortalidad de las ninfas I-III, en especial en inviernos fríos, logrando sobrevivir una fracción de las ninfas IV. Si las condiciones invernales son más templadas y de escasa pluviosidad, pueden registrarse elevadas poblaciones en pleno invierno, con el consiguiente daño durante la principal época de cosecha, especialmente en sectores donde la temperatura es mayor como ocurre en las laderas de cerros de exposición norte. En el Perú, la mosca blanca presenta tres generaciones al año, totalizando su desarrollo de huevo a adulto en 48 días bajo condiciones de verano (30°C y 70% HR), con una duración de huevo, ninfa I, ninfa II ninfa III y ninfa IV, de 10, 07, 10, 11 y 10 días respectivamente (Núñez, 1995). Desde la I a la III Región hay una reproducción continua de la Mosquita Blanca durante todo el año, constituyéndose en uno de los principales problemas del cultivo de cítricos.

Hospederos Cítricos: naranjo, limonero, pomelo y lima. Además se ha observado su presencia en lúcumo y guayabo.

R. Ripa

Enemigos naturales

Figura 8-7 Ninfas de segundo estadía y huevos de Aleurothrixus floccosus en hoja de limonero.

Los enemigos naturales asociados a esta plaga son los parasitoides. Cales noacki Howard (Hymenoptera: Aphelinidade), avispa endémica de color amarillo limón y tamaño cercano a 0,8 mm.

114 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Cuadro 8-1 Duración de los estadios de Aleurothrixus floccosus en dos épocas del año. Limonero var. Eureka. Región de Valparaíso, Nogales (2007-08).

Estado o estadio

Duración (días) ± DS

Ciclo iniciado en diciembre

Ciclo iniciado en octubre

Huevo

14,6 ± 1,6

17,8 ± 3,3

Ninfa 1

9,4 ± 3,9

11,8 ± 3,0

Ninfa 2

9,3 ± 2,9

10,8 ± 2,0

Ninfa 3

10,2 ± 0,6

11,1 ± 1,2

Ninfa 4

5,7 ± 1,6

6,5 ± 1,2

Total (huevo a adulto)

49,2 ± 4,9

58,0 ± 5,6

FECUNDIDAD (huevos/individuo*)

49,1

53,4

NATALIDAD (% huevos eclosionados)

36,1

45,5

MORTALIDAD (% reducción población)

55,2

62,5

* Considera promedio de huevos puestos por un grupo de adultos (machos y hembras). Fuente: Tesis de grado Biologo PUCV, María José Molina 2008.

Abundancia estacional de ninfas IV sanas

Abundancia estacional de ninfas I-III

4 3 2 1 21 may

21 sep

21 ene

6 Ln (N° individuos / cm2)

5

0 21 ene

Abundancia estacional de huevos

6 Ln (N° individuos / cm2)

Ln (N° individuos / cm2)

6

5 4 3 2 1 0 21 ene

21 may

1997-1998

21 sep 1997-1998

21 ene

5 4 3 2 1 0 21 ene

21 may

21 sep

21 ene

1997-1998

Gráfico 8-1 Abundancia estacional de los estadios inmaduros de Aleurothrixus floccosus encontrados en hojas de clementinas. El Palqui, Ovalle, IV Región, 1998.

Amitus spiniferus Brèthes (Hymenoptera: Plastygasteridae), avispita color negro, de una longitud cercana a 1 mm, introducida al país desde el Perú a fines de la década de los sesenta. La microavispa C. noacki, parasita ninfas pequeñas, es decir, ninfas de los dos primeros estados de desarrollo (ninfas I y II) las cuales cambian de forma volviéndose más convexas y manteniendo su color ámbar a blanco cremoso A. spiniferus, en tanto, aun cuando parasitaría los mismos estadios, el adulto emerge del último estadio ninfal, dejando una exuvia de mayor tamaño que C. noacki. Las ninfas parasitadas adquieren una coloración negra y una forma algo más aplanada que las ninfas sanas. En ambas especies se observa un orificio circular por el cual emergen los adultos. Tanto A. spiniferus como C. noacki se complementan en forma adecuada en el país, observándose una actividad similar de ambas especies en sectores cercanos a la costa, predominando en zonas más secas A. spiniferus. A fines de la década del 90, en las principales zonas citrícolas del país se comenzó a detec-

tar el hiperparasitoide o parasitoide secundario Signiphora spp, que se desarrolla sobre ninfas parasitadas por A. spiniferus y C. noacki. Esta avispita muestra una notable capacidad para desplazarse entre los filamentos de cera que cubren a las ninfas de mosquita. Sin embargo, aún no se ha detectado una disminución importante del parasitismo por efecto de Signiphora spp. En ocasiones se observa asociados a esta plaga los sírfidos Allograpta pulchra (Shannon) y A. hortensis (Phil) y el neuróptero Crysoperla spp, cuyas larvas son depredadoras de ninfas de la mosquita. INIA La Cruz, introdujo el año 1995 el Coccinelido, Clitostethus arcuatus, para el control de la mosquita del fresno, Siphoninus phillyreae. C. arcuatus mide 1,3 a 1,5 mm, es de color gris amarillento, con una típica mancha oscura en forma de pera sobre los élitros (González, 2006). En cítricos ha sido encontrado ocasionalmente, en plantas atacadas por Aleurothrixus floccosus.

115 Manejo de plagas en paltos y cítricos

En el Perú, también es muy efectivo Amitus spiniferus alcanzando el 90% de parasitismo en determinadas épocas del año. En 1976, se introdujo de EE.UU., Cales noacki Howard, la cual se adaptó rápidamente, ejerciendo un control del 94% en verano y otoño, en la costa y A. spiniferus alcanza el 45% en otoño e inicios de invierno, en la costa y el 75% en la sierra (Aguilar 1980, Beingolea 1984 y Núñez 1986) (Gráfico 8-2).

Otros enemigos naturales observados en Perú son: Encarsia porteri Mercet, Eretmocerus paulistus Hempel y Signiphora aleyrodes. Este último actúa también como hiperparasitoide de C. noacki, sin ocasionar severas perturbaciones. Asimismo es frecuente encontrar en campo al predador Ceraeochrysa cincta (Neuroptera Chrysopidae) y al hongo patógeno Aschersonia aleyrodis (Coelomycetes: Sphaeropsidales).

Aleurothrixus floccosus

Parasitoidismo %

120

80

40

0

ago 07

[

sep 07

Signiphora aleyrodes

oct 07

nov 07

Amitus spiniferus

dic 07 Cales noacki

ene 08

]

Figura 8-8 Ninfas de Aleurothrixus floccosus parasitados por Amitus spiniferus (negras) y Cales noaki (amarillentas y globosas).

R. Ripa

R. Ripa

Gráfico 8-2 Incidencia porcentual de los controladores C. noacki, A spiniferus y el hiperparasitoide S. aleyrodes en la localidad de Sayán, Lima norte, 2007-2008 (Núñez E., J. Garcia, 2008).

Figura 8-9 Adulto de Cales noaki parasitoidede Aleurothrixus floccosus.

116

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

R. Ripa

Figura 8-11 Adulto macho de Amitus spiniferus parasitoide de Aleurothrixus floccosus.

R. Ripa

Figura 8-10 Adulto hembra de Amitus spiniferus parasitoide de Aleurothrixus floccosus.

Figura 8-13 Larva de crisopa depredadora de Aleurothrixus floccosus.

Figura 8-12 Larva de sírfido depredadora de Aleurothrixus floccosus.

R. Ripa

Manejo

Figura 8-14 Adulto de Sgnifora sp hiperparasitoide de ninfas de Aleurothrixus floccosus.

Monitoreo. Realizar monitoreo de la plaga durante todo el año, en especial desde primavera a otoño. Para ello se requiere colectar 10 hojas por árbol del 1% de las plantas de cada cuartel. Observar y registrar la presencia de la plaga e individuos parasitados, registrando sólo los insectos vivos, ya que las exuvias podrían no indican el ataque o la acción de parasitoides actual, La observación se facilita lavando previamente las hojas con un asperjador manual para retirar la lanilla y mielecilla. Las ninfas parasitadas por A. spiniferus adquieren un color negro. Las parasitadas por C. noacki, son más pequeñas, no cambian de color y se engloban ligeramente. Seleccionar al azar un mínimo de 20 brotes en activo crecimiento por cuartel, y determinar la proporción de brotes con adultos y/o huevos de la plaga.

117 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Poner especial atención en sectores específicos del huerto, como orillas de caminos, sectores altos de laderas u otros con historial de ataques más intensos.

Control. Se recomienda como alternativa a los insecticidas tradicionales el uso de aceites minerales y detergentes agrícolas disponibles en el mercado, con el objetivo de no eliminar y dejar actuar la fauna benéfica. Los detergentes remueven los filamentos de cera en las ninfas. Adicionalmente, reducen la tensión superficial del agua facilitando, el desprendimiento de los adultos de su hospedero y posteriormente su arrastre físico. El control de la mosquita blanca algodonosa mediante lavados con agua y detergente agrícola se recomienda ante el 10% o más de las hojas con insectos vivos y en ausencia o baja presencia de enemigos naturales. Si el nivel de parasitismo es mayor, puede tolerarse hasta alrededor del 25% de las hojas con individuos vivos. El lavado elimina los adultos, ninfas recién eclosionadas, mielecilla y parte de los filamentos de las ninfas, facilitando la acción de los enemigos naturales y en consecuencia aumentando el control biológico. Lo anterior se observó en un ensayo realizado por Ripa et al (2006), sobre mandarinos infestados con mosquita blanca, donde el tratamiento con detergente aumentó el parasitismo, producto de la remoción de lanosidad y mielecilla

en comparación a árboles no tratados. La proporción de ninfas parasitadas en los árboles lavados fue del 89,6% y del 57,1% en las plantas sin lavar (Gráfico 8-3). La observación directa del efecto del lavado mostró un desprendimiento mecánico de los adultos que se encontraban en las hojas jóvenes, así como de la mielecilla y filamentos cerosos de las hojas maduras, lo que habría permitido una mayor actividad de los enemigos naturales y una reducción de la plaga con la consiguiente disminución de fumagina sobre los frutos. Los lavados deben repetirse, dependiendo de la intensidad del ataque, cada 15 días en verano y mensualmente en primavera u otoño. Como mínimo, deben realizarse dos lavados consecutivos. Durante el invierno, las lluvias causan una alta mortalidad, en especial de los adultos en las hojas tiernas, por lo tanto no se recomienda la aplicación de lavados. La aplicación de aceite mineral, con equipo de pitón, en dosis del 0,5% y el 1,0%, sobre limoneros que registraban más del 60% de hojas con presencia de la plaga en otoño, mostró un adecuado nivel de control (Gráfico 8-4). Cabe destacar, que la efectividad fue similar utilizando ambas concentraciones de aceite, por lo que se recomienda el uso de la menor concentración, disminuyendo los costos de aplicación.

140

140

120

120

100

100

80

80

60

60

40

40

20

20

0

[

3 mar

24 mar

14 abr

6 may

27 may

17 jun

8 jul

29 jul

18 ago

% hojas con presencia, lavado

% hojas con presencia, sin lavar

Ninfas IV parasitadas, lavado

Ninfas IV parasitadas, sin lavar

% ninfas IV parasitadas

% hojas con presencia

Aplicación

0

]

Gráfico 8-3 Efecto de la aplicación de detergente sobre el nivel de parasitismo de ninfas IV estado y la proporción de hojas con presencia de Aleurothrixus floccosus en mandarinos. El Palqui, IV Región, 1998.

118

% hojas infestadas

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

100 90 80 70 60 50 40 30 20 10 0

Aceite A 0,5%

[

Aceite A 1,0%

Aceite B 1%

Previo

12 días

Aceite C 1%

Aceite D 1%

30 días

Agua 60 días

Testigo

]

Productos comerciales utilizados: Aceite A = Ultraspray Aceite B = Winspray Aceite C = Winspray miscible Aceite D = Citroliv miscible Fuente: Resultados Convenio INIA-ANASAC.

Gráfico 8-4 Efecto de la aplicación de dos dosis de aceite mineral sobre la proporción (%) de hojas de limoneros infestados con Aleurothrixus floccosus. Nogales, V Región, 2006.

En situaciones de ataque que comprometen más del 25% de las hojas con ninfas vivas con escasa presencia de parasitoidismo, se sugiere aplicar aceite mineral al 0,5% seguido de lavados con detergente (Figura 8-15).

Control cultural. Uno de los factores de mayor relevancia en el ataque de esta plaga es la presencia de brotes tiernos dado que los adultos requieren de este substrato para la oviposición. De acuerdo a estudios realizados en la Zona Central, los limoneros presentan tres períodos de crecimiento de brotes, los cuales se distribuyen primavera (septiembre a diciembre), verano (enero y febrero) y otoño (abril a junio) (Razeto, 2005). La exagerada brotación que generan dosis altas de fertilizante, en especial los nitrogenados, incrementan el ataque. De igual forma, las podas fuertes que generan brotaciones y chupones en períodos de gran abundancia de adultos originan un incremento de los ataques. Por lo tanto, en zonas propensas al ataque de esta plaga, se recomienda manejar los factores que influyen en el desarrollo de los brotes en la planta.

R. Ripa

En general se recomienda evitar el uso de insecticidas poco selectivos y/o aplicaciones reiteradas de insecticidas, ya que eliminan los enemigos naturales, ocasionando posteriormente ataques intensos de la plaga. Los insecticidas disponibles en la actualidad muestran una eficacia moderada a baja frente a este insecto. En general, los enemigos naturales son los que mantienen esta plaga bajo control, por lo que sólo se deberá emplear un control selectivo de la plaga que no afecte mayormente a sus parasitoides. Figura 8-15 Aspecto de los huevos de Aleurothrixus floccosus afectados (deshidratados) por la aplicación de aceite mineral 10 días postaplicación.

Control biológico. En ausencia de enemigos naturales o cuando éstos hayan sido eliminados por la aplicación reiterada de insecticidas, se debe inocular con C. noacki y A. spiniferus colectando hojas con ninfas parasitadas presentes en otro huerto y disponerlas en bolsas de papel con orificios de 2 a 4 mm al interior de los árboles más afectados.

119 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Producción orgánica. Las estrategias MIP recomendadas para huertos orgánicos son: uso de control biológico, lavado con aceite orgánico o detergente autorizado.

Mosquita blanca filamentosa Filamentosus whitefly Paraleyrodes spp (Bondar 1931) R. Ripa, P. Larral y P. Luppichini

Especie presente en las regiones de Valparaíso (V) y del Libertador Bernardo O’Higgins (VI). Prácticamente no produce daño sobre la planta. Las infestaciones en los huertos de cítricos son de muy baja intensidad, por lo que no se considera una plaga de importancia económica.

Daño Frutos: Manchas producidas por fumagina. Hojas: Produce mielecilla que origina la formación de fumagina, cubriendo la lámina foliar. Se ubican en especial en el envés de las hojas más cercanas al suelo.

Descripción morfológica Los adultos tienen las alas y el cuerpo recubiertos por una sustancia cerosa blanca, presentan dos pares de alas ovaladas y anchas. Desde el ápice de la cabez hasta el extremo de la ala mide 1,4 mm (Figura 8-16). El huevo está unido a la hoja mediante un fino pedicelo y utilizando una lupa se puede distinguir pequeñas manchas rojizas en su interior. Las ninfas de tercer estado poseen 7 pares de largos filamentos de cera más rígidos, de alrededor de 6 a 8 veces el largo del cuerpo de la ninfa (Figura 8-16).

Biología Los estados de desarrollo son similares a A. floccosus, aunque se observa que la tasa de incremento poblacional es menor. A diferencia de A. floccosus, los adultos se ubican en hojas maduras, preferentemente en hojas cóncavas en la parte baja del árbol, y por lo general, donde ya existen colonias de ninfas. Es muy característico que cerca de la hembra se observen acumulaciones de un polvo ceroso blanco. El primer estado ninfal es móvil y se fija a la hoja cerca del lugar donde se produce la eclosión.

R. Ripa

Distribución e importancia

Figura 8-16 Adulto, huevos y filamentos de la ninfa de Paraleyrodes sp.

Esta especie de mosquita sólo se presenta en densidades muy discretas, ocasionalmente en hojas donde también existen colonias de A. floccosus.

Hospederos Limonero, naranjo y pomelo. Lúcumo.

Enemigos naturales Se asocia a esta especie el parasitoide, de la familia aphelinidae, Encarsia sp, el adulto es un insecto de color amarillo y de aproximadamente 1 mm de largo. Las mosquitas parasitadas se ven ligeramente globosas y por transparencia es posible observar bordes más oscuros en su interior.

Manejo Monitoreo. Se debe estimar la proporción de hojas colonizadas por esta especie tomando una muestra al azar de 100 hojas por cuartel, en ellas se determina la presencia de la plaga y su enemigo natural. Los datos se registran en una planilla diseñada para este fin y se determina el porcentaje de hojas con infestadas con la plaga y se anota si existe parasitismo. Control. Esta mosquita tiene una muy baja incidencia en los huertos de cítricos, por lo que no se ha requerido una acción específica de control. En general el control natural y acciones como los lavados y eventuales aplicaciones de aceite para el control de otras plagas mantienen esta plaga controlada.

120 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Mosquita blanca de los invernaderos Greenhouse whitefly Trialeurodes vaporariorum (Westwood) R. Ripa, P. Larral y P. Luppichini

En Chile se encuentra presente entre la región de Arica y Parinacota (XV) y la región de Los Lagos (X), y en la Isla de Pascua. Esta especie tiene importancia económica hortalizas, especialmente en cultivos bajo invernadero. En el cultivo del palto se ha visto sólo en vivero, lo que podría significar dificultades en la comercialización de las plantas, si el ataque es muy intenso.

Daño

R. Ripa

Distribución e importancia

Figura 8-17 Adultos de Trialeurodes vaporariorum en hojas de Cucurbita moschata.

El daño directo es producido por la succión de savia, lo que en altas infestaciones puede causar pérdida de vigor de las plantas. En palto el daño se ha manifestado principalmente en vivero, donde la mosquita ataca los brotes tiernos y produce abundante mielecilla, favoreciendo el desarrollo de fumagina sobre las hojas.

Descripción morfológica

Los huevos son de forma oval y alargada, cuyo extremo posterior termina en una punta, con un fino pedicelo que los fija a la hoja, su coloración es blanco amarillenta cuando están recién ovipuestos, luego se tornan color gris, se pueden observar en el envés de las hojas. Presenta cuatro estados ninfales. Las ninfas son aplastadas y ovaladas, presentan filamentos en el borde superior. Poseen varias espinas dorsales dispuestas en la región cefálica, dos en el tórax y dos en el abdomen (Figura 8-18). La ninfa IV es elíptica, provista de una serie de papilas cónicas submarginales en ambas caras del cuerpo.

Biología Los adultos se ubican en el envés de las hojas, con las alas dispuestas en forma de tejado sobre el dorso del

R. Ripa

Los adultos poseen el cuerpo, patas y antenas color amarillo, recubiertos de cera blanca, miden entre 1,5 a 3 mm de largo (Figura 8-17). Los machos suelen ser un poco más pequeños que las hembras. Las antenas presentan el tercer segmento de igual largo que el cuarto y quinto juntos. Figura 8-18 Ninfas de Trialeurodes vaporariorum.

cuerpo, dejando al descubierto la cabeza y el tórax. Cada hembra ovipone, alrededor de 150 huevos, pudiendo llegar a 350, los cuales son colocados preferentemente en el envés de las hojas apicales dispuestos en forma circular. La mosquita al oviponer inserta su aparato bucal y luego gira, dejando una fina capa de cera sobre los huevos, característica que permite reconocer su presencia. Las ninfas de primer estadio son las únicas móviles; se mueven muy pocos milímetros desde su lugar de eclosión. Cuando la ninfa se fija en la hoja, se atrofian las patas y las antenas. En los siguientes estadios su apariencia es oval y presenta un color blanco amarillento, transformándose finalmente en pupa, la cual es de color blanco opaco con los ojos rojos.

121 Manejo de plagas en paltos y cítricos

El largo del ciclo de vida de la mosquita blanca de los invernaderos depende de las temperaturas, y puede durar desde 130 días a 8 °C a 26 días a 24 °C.

invernaderos, estos sectores son los con mayor riesgo de infestación, debido a la presencia de malezas en las cercanías. Realizar un monitoreo sistemático para detectar la presencia de adultos en los brotes y ninfas en el envés de las hojas. Considerar durante el monitoreo la presencia de hormigas y fumagina como indicadores de la presencia de esta u otras plagas productoras de mielecilla.

Hospederos Especie polífaga, entre sus hospederos se encuentran: ají, alfalfa, trébol, guayabo, kiwi, nogal, melón, palto, pepino de ensalada, pimentón, sandía, tomate, zapallo italiano, tabaco, frejol y plantas ornamentales (Euphorbia, Begonia y Chrysantemum) ciruelo, vid y eucalipto. Además se encuentra presente en varias malezas de las familias Brasicaceae, Asteraceae, Solaneceae, Urticaceae, Chenopodaceae, Malvaceae, Amarantaceae, entre otras.

Control. La conservación de los enemigos naturales, provee de un control biológico moderado a bueno de la mayoría de las especies de moquita blanca, siempre que no sean afectados por agentes externos como las hormigas, polvo o aplicación de insecticida. Por otra parte, se debe realizar un control de malezas en las cercanías de los invernaderos, para reducir, la presencia de estados invernantes.

Enemigos naturales Entre los parasitoides de ninfas, se encuentran los aphelinidos: Encarsia formosa, E. haitiensis, E. luteola, E. lycopersici, E. porteri y Eretmocerus corni.

Mosquita del fresno, mosquita blanca del granado (Venezuela)

Se han observado chinches, de las familias Anthocoridae y Miridae, depredando huevos de mosquita blanca y de lepidópteros (Figura 8-19).

Ash whitefly Siphoninus phillyreae (Haliday)

Manejo

R. Ripa y F. Rodríguez

Monitoreo. Esta plaga ha sido detectada en palto sólo en viveros, el monitoreo se debe comenzar en las plantas que se encuentran en las entradas o cabezales de los

Distribución e importancia Presente en Chile desde la Región de Valparaíso (V) a la del Maule (VII). Se encuentra también en Perú, Argentina, Venezuela, Europa, Marruecos, India, África Central, Siria, Irán, Arabia Saudita, Egipto, Libia, Camerún, Etiopía, Sudán, Pakistán, Suecia, Israel y EE.UU.

Daño Succiona la savia en hojas lo cual causa disminución del vigor en la planta y debido a la abundante producción de mielecilla genera fumagina.

Descripción morfológica El adulto es similar a otras mosquitas blancas.

R. Ripa

Las ninfas poseen en la orilla del area dorsal 40 a 50 tubérculos que terminan en una gota de aspecto vidrioso (Figuras 8-20 y 8-21). En el zona central del dorso se observa cera blanquecina y el área anal de color marrón oscuro con un pequeño mechón de cera a cada lado.

Figura 8-19 Adulto de chinche Macrolophus spp depredador de Trialeurodes vaporariorum.

Biología Las mosquitas adultas se posan preferentemente en cara inferior de las hojas tiernas en las que depositan los huevos. Las ninfas que nacen de ellos se fijan de inmediato y

122

Figura 8-20 Adulto de Siphoninus phillyreae.

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 8-21 Ninfas de Siphoninus phillyreae.

succionan la savia. A medida que crecen, van formando una lanosidad espesa y excretando una gran cantidad de mielecilla. En cítricos el ataque es muy ocasional y únicamente en el período invernal.

Hospederos El hospedero en el cual se registra poblaciones más altas es el Fresno. También ataca Granado, Olivo, peumo europeo (Crataegus spp) y cítricos.

Enemigos naturales

El parasitoide E. inaron fue muy efectivo, disminuyendo la densidad de la plaga en todas las especies vegetales atacadas. El depredador C. arcuatus no fue recuperado sino hasta el año 2007, siendo muy abundante en el verano de 2008 (Figura 8-22).

Manejo Se debe considerar que los enemigos naturales son muy efectivos y por otra parte que el el efecto de los insecticidas es moderado. Ensayos efectuados por Becerra et al (2005) en la Estación Experimental Mendoza empleando 2 aplicaciones de 6 insecticidas diferentes, mostraron entre el 60% y el 85% de mortalidad.

R. Ripa

Inia La Cruz introdujo Encarsia inaron (Walker) (Hymenoptera: Aphelinidae) y Clitostethus arcuatus (Rossi) (Coleoptera: Coccinelidae), desde California en 1995. Figura 8-22 Adulto de Clitostethus arcuatus depredando ninfa de Siphoninus phillyreae.

123 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Áfidos Orden: Hemiptera • Familia: Aphididae Los áfidos o pulgones se caracterizan por tener el cuerpo pequeño, globoso y blando. Aunque presentan una amplia diversidad de color, la mayoría de las especies son verdes. En el extremo dorsal de su cuerpo presentan prolongaciones llamadas cornículos y cauda que difieren entre las especies. En una misma especie pueden existir individuos alados o ápteros, condición que varía de acuerdo al nivel de hacinamiento y probablemente a otros factores ambientales que modifican su comportamiento. Cuando están presentes las alas, son tanto o más largas que su cuerpo.

Pulgón de la espírea, pulgón verde de los cítricos, pulgón verde del manzano

Los áfidos normalmente se localizan en grupos sobre hojas y brotes nuevos, formando en algunos casos densas colonias.

Distribuido en Chile desde la Región de Arica y Parinacota (XV) a la Región de los Lagos (X). Es una de las especies de áfidos más frecuentes que atacan cítricos.

Como ocurre en otros grupos de insectos que se alimentan de savia, los áfidos también excretan mielecilla que expelen al ambiente. Esta sustancia tiene una gran diversidad de componentes entre los que destacan carbohidratos como glucosa, fructosa y sácarosa que atrae a numerosos insectos, en especial a hormigas. Los ciclos de vida de los áfidos son complejos. Por lo general, las hembras son vivíparas y se reproducen por partenogénesis. Ocasionalmente, algunas especies tienen una fase sexuada y oviponen. Una de las especies de áfidos más importantes en los cítricos de Chile es el pulgón de la espírea o verde de los cítricos. Este áfido produce un notorio enrollamiento de hojas y brotes tiernos al inyectar saliva que afecta los tejidos, sin embargo, este daño no reduce la producción frutal de árboles desarrollados. También se le considera un transmisor débil del virus de la tristeza, enfermedad que en Chile no tiene la importancia que se le asigna en otros países, probablemente debido a que en nuestro país es muy limitado el uso de patrón agrio que es más susceptible al patógeno y probablemente también por la baja virulencia de las cepas del virus presentes en Chile (Besoain et al 2003).

Aphis spiraecola Patch R. Ripa, P. Larral y S. Rojas

Distribución e importancia

Daño Frutos: La presencia de fumagina reduce su calidad y disminuye la producción exportable. Hojas: Deformación y enrollamiento de las hojas nuevas producen un problema estético de las plantas desarrolladas (Figura 8-23). Ramillas: Se ve afectado su desarrollo en ataques severos. Este daño es importante en ataques intensos a plantas en formación que tienen un activo crecimiento durante un extenso período. En plantas desarrolladas, el daño es de menor importancia debido a que generalmente el agricultor, para regular el crecimiento de los árboles realiza cada temporada poda de mantención.

R. Ripa

Los áfidos succionan savia con un aparato bucal en forma de estilete. Algunas especies de este grupo de insectos inyectan saliva en los tejidos vegetales pudiendo transmitir virosis y/o producir la deformación de hojas y brotes.

Spirea aphid

Figura 8-23 Enrollamiento de hojas causado por Aphis spiraecola.

124 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Descripción morfológica El cuerpo de la hembra adulta áptera tiene forma ovoidal, de color verde y tamaño que varía entre 1 a 2 mm de largo. Los cornículos, cauda y antenas son de color pardo oscuro, aunque estas últimas tienen algunos segmentos de color beige. Las ninfas pequeñas durante el verano pueden tener una coloración verde limón.

Ninfa I

Los individuos alados tienen la cabeza y tórax pardo a negro y abdomen verde con pequeñas manchas pardas en los costados. Las antenas alcanzan la mitad del tamaño del cuerpo y son de color pardo en toda su extensión. Cuando comienzan a desarrollarse las alas, el tórax es de color rosado pálido y se torna negro cuando las alas han completado su desarrollo (Figura 8-25).

Ninfa II Hembra alada

Ninfa III

C. Tobar

Hembra aptera

Figura 8-25 Ciclo de vida de Aphis spiraecola.

Hospederos Los cítricos: naranjo, limonero, mandarino y pomelo. También se encuentra en frutales como: chirimoyo, ciruelo, kiwi, mango, manzano, membrillo, níspero, peral, vid, frambueso y macadamia. El nombre específico deriva de su asociación a plantas del género Spiraea.

R. Ripa

Enemigos naturales

Figura 8-24 Aphis spiraecola en brote.

Biología Cada hembra áptera origina aproximadamente 60 ninfas que va depositando en las hojas de brotes tiernos, principalmente desde el comienzo de la primavera en la Zona Central. Las hembras aladas producen un menor número de descendientes. En condiciones de alta temperatura y presencia de tejidos nuevos, la reproducción de los áfidos es muy rápida formando colonias densas en pocas semanas. Esta población aumenta con el desarrollo de los brotes, los que crecen muy deformados. Cuando la población es muy alta, tienden a desarrollarse individuos alados que migran hacia otras plantas. Durante el verano disminuye su número a medida que se detiene la brotación.

Parasitoides. El bracónido Lysiphlebus testaceipes (Cresson) parasita esta especie. La hembra ovipone en el interior del áfido y allí comienza a desarrollarse la larva del parasitoide que finalmente le causa la muerte. Sin embargo, este parasitoide se desarrolla en forma incompleta sobre A. spiraecola no alcanzando a emerger como adulto. L. testaceipes utiliza otras especies de áfidos en las que logra reproducirse. Depredadores. Los coccinélidos Adalia deficiens Mulsant, Eriopis connexa (Germ.), Hippodamia convergens Guerin, H. variegata (Goeze), Neda patula (Erichson) y Scymnus bicolor (Germ.), se alimentan de A. spiraecola y otras especies de áfidos. Estas “chinitas” pertenecen al orden de los coleópteros y la mayoría de ellas tienen cuatro estados de desarrollo: huevo, larva, pupa y adulto, éste último generalmente de colores y diseños muy llamativos que, en general, son útiles para identificar la especie. Los huevos de los coccinélidos son ovalados y alargados, normalmente de color amarillo o anaranjado, son depositados en grupos o individualmente. Los coccinélidos que

125 Manejo de plagas en paltos y cítricos

A. deficiens es un coccinélido endémico de Chile, es un depredador de diferentes especies de áfidos presentes en cítricos (Aphis spiraecola, Toxoptera aurantii, Aphis gossypii y Macrosiphum euphorbiae). Ocasionalmente, cuando el alimento es escaso se alimenta de chanchitos blancos y arañitas. El adulto es una chinita de cabeza oscura y antenas cortas, los élitros pueden ser completamente rojos o bien presentar manchas negras. Entre los coccinélidos es normal que exista una gran variabilidad en el diseño de colores, lo que se debe a factores genéticos y ambientales. Los huevos tienen forma de huso, de color amarillo o anaranjado y son un poco más grandes que los de otras especies de coccinélidos. Son depositados en pequeños grupos de 6 a 13 unidades. Eriopis connexa es depredador de pulgones y ocasionalmente de arañitas. Mayoritariamente actúa a nivel del suelo o a poca altura, asociada típicamente a pulgones presentes en malezas, chacarería y alfalfa. El adulto es de forma oval alargada y mide 6 mm de largo por 3,5 de ancho. Su forma difiere de los otros coccinélidos y pude ser reconocido por 16 manchas blancas y rosadas que presenta sobre el dorso. El color rosado va palideciendo a medida que el insecto envejece. La cabeza es negra con escasas manchas blancas. El tórax es de color negro y presenta una pequeña mancha blanca en la parte anterior, otra de mayor tamaño en la parte posterior y dos bandas laterales. Tiene patas de color negro. El adulto es buen volador. Los huevos son ovalados y alargados, de color amarillento y depositados en grupos. La larva es muy activa, de color negro con manchas blancas y anaranjadas. La pupa es de color negro y permanece unida a la última piel larval (Figuras 8-30 y 8-31). H. convergens es un depredador importado desde Perú, Estados Unidos y Argentina. El adulto tiene un cuerpo ovalado, alargado y convexo y mide 7 mm de largo por 4 mm de ancho. La cabeza es de color negro y presenta una mancha blanco amarillenta en la parte anterior. El tórax es de color negro y en la parte anterior y lateral está bor-

Huevo

Larvas Adulto

Pupa

C. Tobar

S. bicolor probablemente es el coccinélido de mayor efectividad en el control de áfidos. El adulto es una chinita de color oscuro, con el protórax y la cabeza marrón claro, cuyo cuerpo alcanza un tamaño de 2 mm. Los huevos son ovalados y alargados, de color levemente oscuro y son depositados en forma individual, por lo general en lugares protegidos. Las larvas son de color blanquecino y por ende las mudas se aprecian de este mismo color.

deado por una banda blanco amarillenta. Los élitros son de color rojo con puntos negros. En el dorso presenta dos manchas ovales alargadas blanco amarillentas, que convergen hacia atrás. Los huevos son ovalados y alargados (forma de huso) de color amarillento y tamaño inferior a 1 mm. Son depositados en pequeños grupos cerca de la presa. La larva es alargada con su extremo posterior aguzado. La cabeza es redondeada, de color castaño oscuro, su tórax es rugoso y el cuerpo en general es castaño claro con manchas negras. Los adultos hibernan en lugares protegidos y en la cúspide de cerros. Allí pueden vivir desde semanas hasta meses, dependiendo de la zona, disponibilidad de presas y época del año (Figura 8-27).

Figura 8-26 Ciclo de vida de las chinitas (coccinélidos).

R. Ripa

se alimentan de áfidos consumen sus líquidos internos y otras estructuras del cuerpo como patas y antenas. Las larvas pequeñas principalmente succionan el contenido de los áfidos, mientras que las larvas más desarrolladas y los adultos pueden consumen áfidos pequeños enteros. Cuando su fuente alimenticia escasea, desarrollan un comportamiento de canibalismo, alimentándose de huevos y larvas pequeñas de su misma especie.

Figura 8-27 Adulto de Hippodamia convergens.

126

Figura 8-28 Adulto de Hippodamia variegata.

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

R. Ripa

R. Ripa

Figura 8-29 Larva de Hippodamia variegata.

R. Ripa

Figura 8-32 Adulto de Adalia bipunctata.

R. Ripa

Figura 8-31 Larva de Eriopis connexa.

Figura 8-30 Adulto de Eriopis connexa.

Figura 8-33 Larva de Adalia bipunctata depredando un áfido.

127 Manejo de plagas en paltos y cítricos

H. variegata es un coccinélido importado desde Sudáfrica en 1975. El adulto es una chinita de color marrón con un diseño negruzco sobre los élitros. Los huevos son amarillentos, con forma de huso y son colocados en grupos mayores a 30 unidades cerca de la presa. Las larvas son pequeñas, de color negruzco y forma de caimán. Esta es la especie más frecuente en el país (Figuras 8-28 a 8-29).

El insecto adulto es de color verde claro, con grandes alas membranosas que poseen una venación muy marcada, ojos sobresalientes y antenas largas y filamentosas. El cuerpo del adulto puede alcanzar un tamaño de 20 mm. La hembra usualmente pone los huevos aislados y ocasionalmente en grupos, hileras o al azar sobre las hojas, cada huevo permanece alejado de la superficie foliar, sostenido por un delgado pedicelo. Los huevos son ovoidales y de tamaño menor a 1 mm. Inicialmente son de color verde pálido que se torna blanco grisáceo con el tiempo. La larva es alargada y presenta un engrosamiento en la parte central del cuerpo y patas bien desarrolladas. Su tamaño va desde 1 mm hasta 6 a 8 mm y su coloración varía de gris a pardo,. Apenas eclosa es capaz de alimentarse inmediatamente, llegando a consumirse entre ellas si no hay otras presas disponibles. Durante su último estadio larval teje un capullo esférico y compacto de seda blanquecina en lugares protegidos de la planta y procede a pupar (Figura 8-35). Los adultos son activos voladores, sobre todo al atardecer y durante la noche. Se ha reportado dificultad por parte de este depredador en encontrar sus presas en cultivos con presencia de pilosidades y sustancias pegajosas. Los adultos requieren de una fuente de polen, néctar o mielecilla para estimular la ovipostura. Por ello es posible favorecer el incremento de esta especie mediante la aspersión de proteínas hidrolizadas sobre el follaje.

Figura 8-34 Larva de Chrysoperla sp depredando áfidos.

Huevo

Larvas

Adulto

Capullo

C. Tobar

El neuróptero Chrysoperla sp, llamado comúnmente crisopa, es un depredador generalista, que muestra mayor actividad sobre áfidos. Todos los estados larvales de esta especie son voraces depredadores, poseen mandíbulas curvadas muy desarrolladas para perforar, inyectar un veneno paralizante y succionar el contenido de sus presas (Figura 8-34).

R. Ripa

Los dípteros Aphidoletes aphidimyza (Rond.), Allograpta pulchra Shanon y Syrphus octomaculatus Walter depredan distintas especies de áfidos. A. aphidimiza es la especie más común en Chile. Los adultos de este díptero son insectos de apariencia frágil, de patas largas y delgadas, su tamaño es cercano a los 2,5 mm. Las larvas de estas “moscas” que succionan el contenido de los áfidos hasta producir su muerte son de color anaranjado. Por lo general, el estado de pupa se encuentra bajo los primeros centímetros del suelo, en el interior de un capullo de seda de aproximadamente 2 mm de largo (Figuras 8-36 a 8-39).

Figura 8-35 Ciclo de vida de Chrysoperla sp.

128

Figura 8-36 Huevos de Aphidoletes aphidimyza.

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 8-38 Adulto de Aphidoletes aphidimiza depredador de áfidos.

Manejo Monitoreo. En las épocas de brotación se debe iniciar tempranamente la observación de primordios de hojas para realizar el seguimiento de los brotes afectados y la presencia de enemigos naturales en ellos. Se debe observar y registrar los insectos vivos, ya que es común encontrar brotes con la deformación típica de la plaga, pero sólo con presencia de mudas (exuvias de pulgones) y momias (pulgones que han sido parasitados). Control. Aplicar pirimicarb si el 25% de los brotes están atacados y se observa una escasa presencia de enemigos naturales. Esta aplicación debe realizarse fundamentalmente sobre el contorno del árbol, donde se encuentran los brotes atacados. Si hay abundantes enemigos natu-

R. Ripa

R. Ripa

Figura 8-37 Larva de Aphidoletes aphidimiza depredando un áfido.

Figura 8-39 Larva de sírfido.

rales no es recomendable aplicar insecticidas, en especial si el período de brotación activo está próximo a finalizar En ocasiones, se ha observado un control deficiente con el uso de pirimicarb. Aplicar aceite mineral al 0,5% al 1% ante ataques incipientes y ausencia de enemigos naturales. Dado que el enrollamiento de las hojas protege a la plaga, debe utilizarse un volumen y presión que permita la entrada del aceite a las hojas deformadas. Controlar la hormiga argentina (ver Capítulo 9). Se debe favorecer el desarrollo de vegetación que hospeda especies de áfidos como umbelíferas espontáneas y/o cultivadas como zanahoria, cilantro, etc., para incrementar las poblaciones de enemigos naturales.

129 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Descripción morfológica

R. Ripa

El cuerpo de la hembra adulta áptera tiene forma ovoidal de color pardo oscuro y tamaño que varía entre 1,5 a 2 mm de largo. Los cornículos y cauda son negros y pequeños. Las antenas son de color crema con sus extremos pardo oscuro (Figura 8-41). Las hembras aladas tienen el cuerpo completamente negro. En las alas anteriores es posible observar una mancha en su borde anterior y su nervadura media se encuentra bifurcada sólo una vez.

Figura 8-40 Obrera de Linepithema humile colectando mielecilla de áfidos.

R. Ripa

Producción orgánica. Control biológico, mantención de vegetación con flores (especialmente umbelíferas) y lavados con detergentes.

Pulgón negro de los cítricos

Figura 8-41 Toxoptera aurantii en hoja.

Black citrus aphid Toxoptera aurantii (Boy. de Fons.) R. Ripa, P. Larral y S. Rojas

Distribución e importancia Distribuido en Chile desde la Región de Arica y Parinacota (XV) a la del Bío Bío (VIII) e Isla de Pascua. Es una de las especies más frecuentes de áfidos que atacan cítricos

Daño Flores: Ataques muy intensos pueden causar su caída. Frutos: La presencia de mielecilla y fumagina disminuye su calidad. Hojas: La alimentación de los áfidos les produce deformaciones leves y contamina con mielecilla lo que posteriormente origina la fumagina. Ramillas: En las más tiernas produce una detención de su crecimiento.

Biología El pulgón negro es una especie vivípara, que solamente se reproduce por partenogénesis. La duración del ciclo desde ninfa a hembra adulta, bajo condiciones óptimas para su desarrollo (de 22°C a 25°C), es de alrededor de una semana, lo que puede originar varias generaciones durante el año. Este áfido se encuentra activo desde los 7°C a los 32° C. El pulgón negro ataca de preferencia brotes tiernos, causando un enrollamiento leve, menos pronunciado si se compara al que produce A. spiraecola.

Hospederos Los cítricos: naranjo, mandarino pomelo y limonero. También se encuentra en palto y ornamentales como pitosporo y camelia.

Enemigos naturales Parasitoides. Los bracónidos L. testaceipes, Aphidius matricariae Hal. y Aphidius colemani Vier. Los áfidos parasitados adquieren una forma globosa de color pardo. Cuando el

130 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

parasitoide emerge de la “momia”, en la exuvia queda un orificio circular. De los parasitoides indicados, L. testaceipes es el más importante y efectivo. Esta especie es un parasitoide solitario de Toxoptera aurantii, Aphis spiraecola y A. gossypii. Fue importado desde Checoslovaquia en 1984 a través de un programa de control biológico para el pulgón verde del trigo.

R. Ripa

L. testaceipes es una pequeña avispa de cuerpo negruzco. Los individuos en su estado adulto miden entre 2,5 y 3 mm de largo. Por lo general parasitan ninfas de tamaño medio. La hembra ovipone al interior del cuerpo del áfido. La larva del parasitoide se alimenta del contenido interno del áfido hasta causarle la muerte. Como se explicó anteriormente, cuando parasita a A. spiraecola, no logra desarrollarse completamente hasta el estadio de pupa que precede al adulto, lo que sí logra con otras especies de áfidos. El áfido parasitado o momia adquiere una forma globosa, causada por los movimientos de la larva y una coloración parda suave a dorada. Cuando el parasitoide adulto emerge de la momia, deja un orificio circular en la superficie.

Figura 8-43 L. testaceipes parasitoide de Toxoptera aurantii y otras especies de áfidos.

Las hembras presentan una elevada capacidad de búsqueda. Este parasitoide se dispersa por medio del vuelo propio y al ser llevado en el interior de pulgones alados cuando estos migran, aunque es una situación poco frecuente. La actividad de control se produce por dos vías: mortalidad directa causada por el parasitismo y por reducción de la tasa de reproducción de áfidos parasitados.

R. Ripa

El parasitoide hiberna como larva o pupa al interior de un áfido. Este parasitoide presenta hiperparasitoides de cuatro géneros distintos: Dendrocerus, Asaphes, Alloxysta y Pachyneuron que afectan su densidad poblacional (Figuras 8-42 a 8-44). Figura 8-44 L. testaceipes parasitando Toxoptera aurantii.

R. Ripa

Depredadores. Los coccinélidos A. bipunctata, A. deficiens y E. connexa. De estos depredadores, A. bipunctata es el coccinélido que se encuentra con mayor frecuencia asociado a T. aurantii.

Figura 8-42 Toxoptera aurantii en brote con individuos parasitados de color dorado (momias).

A. bipunctata fue importada desde Estados Unidos en 1984. Esta chinita presenta una alta variabilidad de colores en su cuerpo, predominando los individuos que tienen una mancha negra sobre el fondo rojo en cada élitro. Existen factores genéticos y ambientales como temperatura, humedad, altitud, entre otros que influyen en la variabilidad de diseños y colores de las chinitas. A. bipunctata es muy común encontrarla en los árboles para lo cual su estado larval presenta adaptaciones que le permiten adherirse a las hojas sin caer.

131

(B)

R. Ripa

Figura 8-46 (A) Sírfido adulto (B) alimentándose de mielecilla.

R. Ripa

Figura 8-45 Larva de sírfido depredando Toxoptera aurantii.

(A)

Figura 8-47 Larva Scymnus bicolor de depredando un áfido.

Scymnus bicolor es un pequeño coccinélido cuya larva posee una cubierta de de penachos blanquecinos (Figuras 8-47 y 8-48). Los dípteros Aphidoletes cucumeris (Lint.), Allograpta hortensis (Phil.), A. pulchra y S. octomaculatus (Figuras 8-45 y 8-46). El neuróptero Chrysoperla sp depreda ninfas y adultos de áfidos.

Patógenos. Hongos del género Entomophthora y otros afectan los áfidos, cambiando su apariencia en cuanto a forma y coloración

R. Ripa

R. Ripa

Manejo de plagas en paltos y cítricos

Figura 8-48 Adulto de Scymnus bicolor.

Manejo Monitoreo. Utilizar metodología indicada para A. spiraecola. Control. Aplicar pirimicarb si el 30% o más de los brotes están atacados y hay menos de un depredador por brote o menos del 10% de los brotes con pulgones momificados. Si el nivel de enemigos naturales es superior a esta cantidad el ataque puede disminuir en una a dos semanas. Lavar con agua y detergente si el ataque es del 10% al 30% de las ramillas y se observan enemigos naturales como en el punto anterior.

132 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Controlar la hormiga argentina (ver Capítulo 9). Favorecer la presencia de plantas hospederas de otros áfidos y sus enemigos naturales como las umbelíferas.

Pulgón del melón, pulgón del algodonero Melon aphid, Cotton aphid

R. Ripa

Producción orgánica. Control biológico, mantención de vegetación con flores (especialmente umbelíferas) y lavados con detergente.

Figura 8-49 Brote de palto en vivero infestado con Aphis gossypii.

Aphis gossypii Glover R. Ripa, P. Larral y S. Rojas

Distribución e importancia En Chile se encuentra en cítricos, paltos y otros cultivos desde la Región de Arica y Parinacota (XV) a la Región de los Lagos(X) e Isla de Pascua.

Los individuos alados tienen la cabeza, tórax, antenas, cornículos y cauda de color negro. Las patas son amarillentas y los fémures intermedios y posteriores, ápices de las tibias y tarsos más oscuros que el resto de la extremidad. Las alas tienen el estigma amarillo a pardo grisáceo con venas de color pardo claro a negruzco. La vena media del ala anterior se encuentra ramificada dos veces (Figuras 8-50 y 8-51).

Daño

Biología

En cítricos muestra una capacidad moderada de transmisión del Virus de la Tristeza.

Durante el inicio de la infestación, esta especie se reproduce habitualmente por partenogénesis telitóquica, esto es, da lugar sólo a hembras. Cada una de ellas da origen a aproximadamente 60 descendientes y el incremento de la población es muy rápida, debido a que una generación puede ser completada en 8 días.

Puede provocar caída de flores ante ataques intensos. Al igual que otras especies de pulgones, ataca brotes tiernos reduciendo se crecimiento, produciendo abundante mielecilla que promueve el desarrollo de fumagina en hojas y frutos. En cítricos en plena producción, se debe considerar que el ataque puede no tener un efecto negativo, pues de todos modos, una parte importante de la brotación debe ser eliminada a través de la poda. En paltos se ha observado esporádicamente en los primeros años de plantación, en períodos de brotación muy activa. También se ha observado en viveros dañando las hojas tiernas (Figura 8-49).

Descripción morfológica El cuerpo de la hembra adulta áptera tiene forma ovoidal de color pardo ocre a verde oscuro con manchas, también se observan individuos con matices azules. Su tamaño varía entre 1 a 2 mm de largo. Los cornículos y la cauda son de color pardo a negro y las antenas son pardas con el segmento medio beige.

La colonización se inicia con hembras aladas durante el periodo de brotación de primavera. Estos áfidos tienen un marcado hábito gregario y forman densas colonias en el envés de las hojas. Cuando la población es excesiva, se observa una tendencia a la aparición de individuos alados que se reconocen por el desarrollo gradual de las pterotecas, que se observan como muñones de alas. Estos individuos emigran hacia otras plantas generando nuevas colonias

Hospederos En cítricos se asocia a limonero y naranjo. También se encuentra en otros frutales como: palto, arándano, chirimoyo, guayabo y níspero. En hortalizas coloniza: alcachofa, alcayota, arveja, coliflor, repollo, espárrago, poroto, papa, melón, sandía, tomate, zapallo y otras especies cultivadas como: maravilla, alfalfa y tréboles.

Enemigos naturales Parasitoides. Los himenópteros L. testaceipes, A. colemani y A. matricariae, descritos anteriormente para T. aurantii,

133

R. Ripa

R. Ripa

Manejo de plagas en paltos y cítricos

Figura 8-50 Hembras en diferentes niveles de desarrollo de Aphis gossypii y momia en hoja de palto en vivero.

Figura 8-51 Hembras de Aphis gossypii en proceso de desarrollo de alas y exuvia en extremo izquierdo.

también afectan a esta especie. Cuando los áfidos son parasitados su cuerpo se hace más globoso y comienza a adquirir una coloración beige a dorada, estado que se conoce como momia, la que al emerger el adulto del parasitoide, queda vacía y con un característico orificio circular.

controladores biológicos del Pulgón del Melón, ya que larvas y adultos se alimentan de ellos. Los dípteros A. aphidimyza, A. hortensis y A. pulchra. En este caso, son las larvas las que depredan el áfido. Las de A. aphidimyza son de color anaranjado y las de A. hortensis y A. pulchra son amarillas a ámbar con el abdomen negro.

Depredadores. Los coccinélidos A. bipunctata, A. deficiens, Coccinellina reflexa (Germ.) (=Cycloneda sanguinea), E. connexa, H. convergens, H. variegata, Hyperaspis sphaeridioides Mulsant y S. bicolor. Estos coleópteros son importantes

Figura 8-52A Huevos de Coccinélido en hoja de palto.

R. Ripa

R. Ripa

El neuróptero Chrysoperla sp, descrito como depredador del Pulgón de la espírea también depreda A. gossypii.

Figura 8-52B Eclosión de larvas de Hippodamia variegata.

134 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Manejo Monitoreo. Utilizar metodología indicada para A. spiraecola.

R. Ripa

Control. Aplicar Pirimicarb cuando el 30% o más de los brotes están infestados y casi no se observen enemigos naturales. Se debe asperjar solo el contorno del árbol, ya que es allí donde se encuentran los áfidos. Alternativamente, se puede aplicar aceite mineral al 0,5% al 1% al inicio del ataque.

Figura 8-53 Adultos de Hippodamia variegata apareándose.

Lavar con agua y detergente si el ataque es moderado a bajo, con una escasa presencia de enemigos naturales, ya que si éstos son abundantes, el ataque disminuye en una a dos semanas.

Controlar la hormiga argentina. Ver Capitulo 9: Importancia y manejo de hormigas en el MIP. Promover la reproducción de enemigos naturales manteniendo plantas con flores como las umbelíferas.

R. Ripa

Producción orgánica. Control biológico, mantención de vegetación con flores (especialmente umbelíferas), aplicaciones de aceite mineral y lavados con detergente.

Figura 8-54 Áfido atacado por Entomophthora sp.

135 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Conchuelas Orden Hemiptera • Familia Coccidae La característica morfológica más importante de los coccidos es la presencia de un caparazón rígido que resulta del endurecimiento del exoesqueleto en su parte dorsal, especialmente en las hembras adultas. Esta estructura les confiere una forma externa y un color distintivo que puede ser útil para identificar algunas especies de esta familia. Las conchuelas inmaduras poseen patas que les permiten un desplazamiento limitado, capacidad que posteriormente pierden cuando son preadultas o adultas, aún cuando conservan estos apéndices locomotores durante toda su vida. En general, existe una notable predominancia de hembras sobre machos, siendo su reproducción fundamentalmente partenogenética. A diferencia de la hembra, el macho adulto es un diminuto insecto alado. Las conchuelas se alimentan de savia extraída del floema de la planta que los hospeda, utilizando un especializado aparato bucal del tipo picador chupador dotado de un estilete. Este tipo de alimentación origina la excreción de una sustancia azucarada o mielecilla que los insectos expelen hacia el entorno en que se encuentran, lo que permite el desarrollo, sobre el tejido de la planta, de un complejo de hongos saprófitos denominado fumagina. Este grupo de insectos se establece preferentemente en hojas y ramillas y muy ocasionalmente en frutos. De los cóccidos presentes en Chile, la Conchuela Negra del Olivo es la especie de mayor importancia económica en paltos y cítricos. En este capítulo se incluye la Conchuela Blanca Acanalada que pertenece a la familia Margarodidae.

Conchuela Negra del Olivo Black Scale, Olive Black Scale Saissetia oleae (Olivier) R. Ripa, P. Larral, S. Rojas y F. Rodríguez

Distribución e importancia La Conchuela negra es una especie que se encuentra con mayor frecuencia asociada a cítricos que a paltos, sin embargo bajo ciertas condiciones puede llegar a ser un problema económico en estos últimos. Su distribución en Chile abarca la mayor parte de la zona frutícola desde la Región de Arica y Parinacota (XV) a la Región de Los Lagos (X).

Daño Frutos: Las manchas de fumagina sobre su superficie reducen su calidad y afectan el volumen exportable del huerto. En el mercado nacional, su valor comercial es menor. El lavado en poscosecha aumenta el costo de producción y por lo general, no elimina completamente la fumagina. Hojas: La fumagina que cubre las hojas impide un adecuado proceso de fotosíntesis, por lo tanto disminuye la síntesis de hidratos de carbono, lo que afecta a la planta completa. Ramillas: Disminuye su crecimiento y en ataques intensos produce su muerte y una importante pérdida del vigor del árbol.

Descripción morfológica La hembra adulta tiene forma de una semiesfera, de color pardo oscuro a negro y tamaño que varía entre 3,5 y 4,5 mm en su diámetro mayor. La coloración de los individuos inmaduros varía de amarillo pálido a distintas tonalidades de pardo, de acuerdo a su desarrollo. Los huevos son ovalados y de color amarillo que va cambiando a rosado con el desarrollo progresivo del embrión. La ninfa de primer estadio o migratoria es muy aplanada dorsoventralmente, con ojos, antenas y patas visibles con claridad. Previo a su alimentación conserva la coloración rosada del huevo, no obstante una vez iniciada la alimentarción de savia, adquiere un color ámbar, el que conserva a medida que muda. La ninfa de segundo estadio tiene una coloración variable que puede ser parda, gris y en ocasiones con matices rojizos. Además, tiene una consistencia blanda, lo que ha originado que esa etapa sea conocida como “estado gomoso”. Luego, en el estado adulto se oscurece adquiriendo un color pardo oscuro a negro, etapa en que comienza la ovipostura. La característica morfológica más sobresaliente de esta especie, es la presencia de una rugosidad en su cubierta que tiene forma de H y que se manifiesta a partir de la segunda muda. Esta característica ocasionalmente tiende a ser menos notoria durante el período de ovipostura o cuando el insecto es afectado por algunas especies de parasitoides que se desarrollan bajo su caparazón (Figuras 8-55 a 8-57).

136

Figura 8-55 Estados de desarrollo de Saissetia oleae. Escala en milímetros.

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

R. Ripa

R. Ripa

Figura 8-56 Ninfa migratoria, primer estadio fijado a la hoja y huevos de Saissetia oleae, de izquierda a derecha respectivamente.

Figura 8-57 Hembras adultas y ninfas migratorias de Saissetia oleae en ramilla de palto.

Figura 8-58 Macho de Saissetia oleae.

Los machos muy escasos se originan a partir de conchuelas muy alargadas de las cuales emerge un pequeño individuo alado (Figura 8-58).

y se prolonga hasta diciembre o enero, época en la que se puede observar una alta población de la plaga en los árboles (Gráfico 8-5).

Biología Desde que comienza la ovipostura, el cuerpo de la hembra se retrae paulatinamente hacia el dorso de su caparazón, quedando bajo ésta los huevos y las ninfas migratorias o “crawlers” que gradualmente salen de la caparazón y comienzan a movilizarse hacia las hojas u otros lugares de la ramilla. Se ha estimado que cada hembra ovipone aproximadamente 2.000 huevos en promedio, lo que depende entre otros factores de su tamaño y hospedero. La ovipostura ocurre principalmente a partir de noviembre

La Conchuela Negra del Olivo presenta los estados de huevo, ninfa (tres estadios ninfales) y adulto, constituyendo sólo una generación al año en la mayor parte de la zona donde la plaga posee importancia económica (Figura 8-59). La duración del ciclo depende en gran parte de la temperatura, humedad ambiental, manejo fitosanitario del huerto y estado nutricional o vigor de los árboles. En algunos sectores de la Región Metropolitana y la VI Región se ha observado un traslape muy marcado de generaciones, con presencia de adultos y ninfas en diferentes estadios durante el otoño, observándose que

137 Manejo de plagas en paltos y cítricos

C. Tobar

aunque existe una alta mortalidad, algunos individuos sobreviven y generan una segunda generación, en los meses de mayo y junio debido a la eclosión de ninfas migratorias. Este traslape tiene implicancias favorables, ya que genera una disponibilidad de hospederos, de distintos estadios, para el complejo de enemigos naturales presentes.

350 300 250 200 150 100 50 dic 97

ene 98

feb 98

ene 98

feb 98

Hoja

dic 97

oct 97

sep 97

jul 97

Ramilla

]

350 300 250 200 150 100 50

[

Ramilla

oct 97

sep 97

jul 97

may 97

abr 97

mar 97

0 feb 97

(B)

Conchuelas / estructura

[

may 97

abr 97

mar 97

0 feb 97

(A)

Conchuelas / estructura

Figura 8-59 Ciclo de vida de Saissetia oleae.

Las ninfas migratorias se fijan preferentemente a lo largo de la nervadura de las hojas y en ramillas tiernas. Durante esta fase de dispersión, se produce una elevada mortalidad de la población que depende de las características ambientales, medidas de manejo y formación del hospedero. Durante la época más fría que ocurre desde mayo a julio, la población se encuentra constituida casi en su totalidad por ninfas de segundo estadio, las que se ubican en hojas y mayoritariamente en ramillas. Las ninfas que se fijaron inicialmente en las hojas, se trasladan paulatinamente a ramillas, probablemente estimuladas por señales que provienen de la planta. Durante esta migración también ocurre una alta mortalidad (Gráfico 8-5).

Hoja

]

Gráfico 8-5 Fluctuación de la abundancia poblacional de Saissetia oleae sobre hojas y ramillas de naranjo en dos regiones de Chile (1997-1998). (A) Melipilla, Región Metropolitana. (B) Peumo Región del Libertador B. O’Higgins (VI).

138 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

La Conchuela Negra del Olivo, como otros insectos que se alimentan de savia elaborada, secretan abundante mielecilla de la que se alimentan hormigas y que cae manchando frutos, follaje y tronco. Posteriormente, sobre estas secreciones azucaradas se desarrolla un complejo de hongos denominado fumagina que tiñe de color negro estos tejidos y órganos de la planta.

Hospederos Palto y cítricos (naranjo, limonero, mandarino, y pomelo). Además, ataca otras especies frutales entre los que se encuentran: lúcumo, chirimoyo, olivo, damasco, caqui, kivi, almendro, cerezo y duraznero. También se asocia a especies ornamentales como: laurel de flor, abutilón y fresno. En arbustos nativos se encuentra en: maitén, molle y arrayán, entre otros.

Enemigos naturales Parasitoides. Los encírtidos Metaphycus helvolus (Compere), Metaphycus flavus Howard y Metaphycus stanleyi Compere parasitan ninfas de primer y segundo estadio. M. flavus es una especie endémica, asociada a todas las especies de conchuela que atacan los cítricos en Chile, Conchuela Negra, Café o Hemisférica, Blanda, Cerosa y Piriforme. Este parasitoide es similar a M. helvolus en cuanto a tamaño, color y modo de acción. Tanto las hembras como los machos son de color anaranjado, siendo estos últimos de menor tamaño que las hembras. M. helvolus es originario de Sudáfrica, importado a Chile desde California el año 1946 y posteriormente en 1951. Las hembras, pequeñas avispas de tamaño cercano a 1 mm son de color anaranjado, mientras que los machos de menor tamaño son de un color negro pizarra. Las hembras no fecundadas dan origen a una descendencia constituida sólo por machos. M. helvolus es un parasitoide solitario de las conchuelas negra, café, hemisférica blanda, cerosa y piriforme, posee una notable capacidad de búsqueda, fácil dispersión y el importante hábito de alimentarse de la hemolinfa de su hospedero, al insertar su aguijón en estadios jóvenes, a esta conducta se le denomina en inglés host feeding. Esta acción produce la muerte de las ninfas afectadas aunque el parásito no oviponga en ellas. Las hembras de M. helvolus pueden llegar a vivir tres a cuatro meses de acuerdo a observaciones de laboratorio, período en que oviponen aproximadamente 400 huevos. La parasitación de ninfas de conchuela se ve muy afectada por la presencia de hormigas que acuden a los focos de la plaga para alimentarse de la mielecilla que secretan.

Este parasitoide muestra hasta ahora el mejor control de S. oleae y S. coffeae, especies muy frecuentes en cítricos, recomendándose su liberación entre los meses de marzo y julio. Metaphycus stanleyi fue importado desde California al Valle de Azapa (Chile) el año 1950, con motivo de los intensos ataques de S. oleae en olivos. Desde entonces se ha dispersado por medios propios hacia las regiones IV y V. La hembra de M. stanleyi tiene la cabeza amarilla, escutelo amarillo anaranjado y parte del tórax blanco grisáceo. La antena tiene el escapo oscuro y su extremo blanco. M. stanleyi la mayoría de las veces se comporta como un parasitoide solitario (originando un individuo por hospedero parasitado) sobre ninfas de segundo y tercer estadio de Conchuela Negra, Café y Blanda y desde segundo estadio hasta adultas sobre Conchuela Piriforme. Es difícil diferenciarlo a simple vista de M. helvolus y M. flavus a los que se asemeja en tamaño y color. Esta especie ha desplazado la acción de M. helvolus y M. flavus sobre las Conchuelas Café y Blanda. Metaphycus lounsburyi (Howard) (=M. bartletti Anneke y Mynhardt según Guerrieri y Noyes (2000)), es un encírtido importado desde Estados Unidos en 1931 y 1933 y desde Perú en 1941. Es un parasitoide gregario, esto es, cada conchuela permite el desarrollo de varios individuos, tiene bandas oscuras transversales en sus patas y antenas. Se reproducen sobre ninfas de tercer estadio hasta hembras adultas que comienzan a oviponer. Las ninfas parasitadas adquieren un color amarillo oscuro a pardo, haciéndose menos manifiesta la H sobre su dorso. Metaphycus anneckei Guerrieri and Noyes. Es un encirtido muy parecido en su morfología y comportamiento a M. lounsburyi, fue introducida a Chile por INIA La Cruz proveniente de California en 1997 y fueron liberados cerca de 46.300 individuos en la zona comprendida entre las regiones de Valparaíso (V) y del Maule (VII). Posee la cabeza de color naranja (Guerrieri y Noyes (2000) y tamaño cercano a los 1,7 mm. Presentan bandas oscuras transversales en sus patas y antenas, generalmente se comporta como parasitoide gregario, generando 2 a 3 parasitoides por hospedero, pero se ha observado hasta 16 individuos emergiendo de una misma conchuela (multiparasistismo). Parasita conchuelas de tercer estadio y adultas en período de preoviposición. Las ninfas parasitadas adquieren un color pardo a pardo oscuro, modificándose la estructura dorsal en conchuelas con diseño sobre el dorso. Existe una nueva especie de Metaphycus que aún no ha sido identificada y que parasita ninfas de primer hasta tercer estadio (Figuras 8-60 y 8-61).

139

(C. Negra, Hemisférica y Cerosa), que han comenzado a oviponer. Después de 5 a 7 días es posible observar la pequeña larva del depredador alimentándose de los huevos de la conchuela. Al no disponer de huevos, la larva de esta avispita se alimenta del cuerpo de la conchuela. Por lo tanto, se comporta como un depredador o un ectoparásito facultativo. El estado larvario dura aproximadamente 20 días en primavera verano, luego se desarrolla la pupa de color negro azulado y posteriormente el adulto emerge a través de un orificio que hace en el caparazón de la conchuela, este orificio es de mayor tamaño que el que realizan los parasitoides antes mencionados para emerger. Tanto la hembra como el macho adulto son de color negro con visos azulados (Figuras 8-63 a 8-67).

Coccophagus caridei Brethes es un afelínido endémico, asociado al control de Conchuela Negra, Hemisférica, Blanda, Cerosa y Piriforme. Esta especie se comporta generalmente como parasitoide solitario, de ninfas de segundo y tercer estadio. Es de color negro y mide aproximadamente 1,5 mm de largo. Los ojos son de un color rojizo, las antenas, pardo amarillentas y las patas de color pardo negruzco, con manchas amarillas en sus extremos (Figura 8-62).

R. Ripa

Depredadores. Scutellista caerulea (Fonscolombe) es un pteromálido importado desde Estados Unidos en 1931, 1933 y 1941. La hembra deposita sus huevos de color blanco perlado bajo el caparazón de conchuelas adultas

Figura 8-62 Ninfas de Saissetia oleae parasitadas por Coccophagus caridei de color oscuro.

Figura 8-61 Metaphycus lounsburyi adulto.

R. Ripa

Figura 8-60 Metaphycus sp adulto.

R. Ripa

R. Ripa

Manejo de plagas en paltos y cítricos

Figura 8-63 Scutellista caerulea oviponiendo bajo Saissetia oleae.

140

(B)

Figura 8-66 Pupa de Scutellista caerulea en caparazón de Saissetia oleae.

Normalmente es un insecto solitario, aunque en casos puntuales pueden desarrollarse dos o más individuos bajo el caparazón de una conchuela. El coccinélido Cryptolaemus montrouzieri Mulsant es observado ocasionalmente depredando ninfas de la S. oleae, sin embargo, esta “chinita” se encuentra más asociada al control de chanchitos blancos que al de conchuelas. El estadio adulto de C. montrouzieri mide alrededor de 2 a 3 mm, tiene los élitros azul oscuro a negro y su protórax es rojizo (Cuadro 8-2).

R. Ripa

Figura 8-65 Larva de Scutellista caerulea. (A) Depredando un huevo de S. olea. (B) Al bajo el caparazón de S. oleae.

R. Ripa

Figura 8-64 Huevos de Scutellista caerulea depositados bajo Saissetia oleae.

(A)

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 8-67 Orificios de emergencia (de gran tamaño) de Scutellista caerulea en caparazón de Saissetia oleae.

Manejo Monitoreo. Muestrear la plaga al menos cuatro veces al año, para determinar abundancia y estadios presentes. Intensificar monitoreo en primavera y comienzo de verano, con el fin de establecer el momento y necesidad de realizar medidas de control. Con una lupa de bolsillo de 6 a 10x se pueden observar los huevos bajo el caparazón, las ninfas migratorias y aquellas que se han fijado, la presencia de enemigos naturales y eventualmente la identificación de algunas especies de ellos, con el fin de evaluar una eventual liberación de especies no presentes.

141 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Cuadro 8-2 Asociación de parasitoides y depredadores con las distintas especies de Coccidos presentes en paltos y cítricos

Plagas

Parasitoides Coccophagus caridei

Coccophagus lycimnia

Metaphycus flavus

Metaphycus helvolus

Saissetia oleae Ninfas II y III Ninfas II y III Ninfas II y III Conchuela Negra del Olivo

Depredadores

Metaphycus lounsburyi

Metaphycus stanleyi

Cyptochaetum iceryae

Scutellista caerulea

Hembra adulta preoviposición

Huevos event hembras

Saissetia coffeae Ninfas II y III Ninfas II y III Ninfas II y III Ninfas II y III Conchuela Hemisférica

Huevos event hembras

Coccus hespedirum Conchuela Blanda de los Cítricos

Ninfas II y III

Ninfas II adultos

Ninfas II y III

Hembra Ninfas II y III adulta preoviposición

Metaphycus anneckei

Ninfas II y III

Ninfas II y III

Ceroplastes Ninfas II y III Ninfas I y II Ninfas I y II cirripediformis Conchuela Cerosa de los Cítricos Protopulvinaria Ninfas II y III Ninfas II Ninfas II pyriformis Conchuela Piriforme

Las hembras adultas en un avanzado estado de parasitación se reconocen por tener el aparato bucal recogido o retraído y el integumento ventral rígido. En cada cuartel se sugiere muestrear al menos 20 árboles. En cada uno de ellos extraer al azar 5 ramillas de aproximadamente 25 cm de largo y revisar la presencia de conchuelas vivas en hojas y madera de la ramilla, determinando el estadio predominante, estos antecedentes registrarlos en la planilla respectiva.

Control químico. Aplicar aceite mineral al 1% con muy buen cubrimiento cuando más del 10% de las ramillas se encuentran infestadas con conchuelas vivas. Esta aplicación debe realizarse cuando la conchuela adulta haya completado la ovipostura, esto es, cuando no se encuentre huevos ni ninfas migratorias vivas bajo la caparazón de la hembra adulta. En el campo, esta actividad puede realizarse apretando las conchuelas con el dedo, de las cuales no deberá salir líquido o quedar mojada, salvo en algunos ejemplares parasitados por M. lounsburyi, M. bart-

Hembras con huevos

Ninfas II a adultos

Icerya purchasi Conchuela Blanca Acanalada

La fumagina y la presencia de hormigas son indicadores de un ataque de conchuelas.

Rodolia cardinalis

Ninfas II a adultos

Huevos hasta adultos

letti, C. caridei o S. caerulea. En la Zona Central de Chile, esta época ocurre generalmente entre diciembre y enero. Si la infestación de conchuelas es mayor al 50% de las ramillas atacadas, realizar la misma operación indicada anteriormente, repitiendo la aplicación 30 días después. Ante ataques más intensos, se debe tratar con aceite mineral durante dos temporadas para reducir la infestación. En focos muy infestados aplicar un neonicotinoide registrado para el control de la plaga La efectividad relativa de los productos evaluados por INIA La Cruz sobre cocidos se muestra en el Cuadro 8-3.

Control biológico. Los niveles de control de la plaga por los enemigos naturales presentes en los huertos es relativamente baja (Gráfico 8-6), en seguimiento realizado en 2 zonas citrícolas del país se determinó que no supera el 30%. Sin embargo, ensayos realizados en la Región Metropolitana demuestran que al controlar la Hormiga Argentina el nivel de parasitismo aumenta a más del doble.

142 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Cuadro 8-3 Efectividad relativa de los insecticidas evaluados por INIA La Cruz para el control de conchuelas y selectividad a los enemigos naturales*

Ingrediente activo

Productos comerciales

Efectividad**

Susceptibilidad de enemigos naturales al producto

Aceite mineral

Citroliv miscible Ultraspray Winspray

++++

++

Metomilo

Balazo Lannate Metomil Methomex

+++

++++

Clorpirifos

Clorpirifos Fantom Lentrek Lorsban Master Pointer Pyrinex Troya

++

++++

Diazinon

Diazinon

Diazol

++

Thiametoxam riego

Actara

+++++

+++++

Thiametoxam follaje

Actara

+++++

Imidacloprid riego Imidacloprid follaje

Confidor Imaxi Punto

+++++ +++++

* La mención de ingredientes activos y/o productos comerciales no constituye una recomendación, sólo corresponde a una ponderación de su efectividad sobre conchuelas. El uso de estos y otros productos es responsabilidad del agricultor quien deberá verificar el registro de los productos en el SAG y en el mercado de destino de la fruta. ** +++++ = muy efectivo; + = escasa efectividad.

(A) % parasitismo

25 20 15 10 5

feb 98

]

feb 98

Hoja

ene 98

]

ene 98

dic 97

Hoja

dic 97

sep 97

jul 97

oct 97

(B)

Ramilla

oct 97

[

may 97

abr 97

mar 97

feb 97

0

30 % parasitismo

25 20 15 10 5

[

Ramilla

sep 97

jul 97

may 97

abr 97

mar 97

feb 97

0

Gráfico 8-6 Fluctuación de la abundancia de individuos parasitados de Saissetia oleae sobre hojas y ramillas de naranjo en dos regiones de Chile (19971998). (A) Melipilla, Región Metropolitana. (B) Peumo Región del Libertador B. O’Higgins (VI).

143 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Si a través del monitoreo se determina la ausencia o escasez de enemigos naturales en el huerto se recomienda, además de realizar control de Hormiga Argentina, realizar liberaciones en la época que se presente el estadio susceptible a la especie de parasitoide y/o depredador disponible comercialmente, En las zonas donde la S. oleae presenta una generación al año, sus enemigos naturales tienen problemas de supervivencia dado que las diferentes especies de parasitoides están adaptadas a un determinado estadio del insecto. Durante los períodos en que no están presentes estos estadios específicos de la conchuela, los parasitoides se reproducen sobre otras especies de este mismo grupo. Si no existe disponibilidad de estos hospederos “alternativos”, la población de parasitoides disminuye considerablemente, afectando los niveles de parasitismo, lo que origina infestaciones recurrentes. Por ello, con el objeto de mantener los enemigos naturales en el huerto o sus cercanías, se recomienda la plantación de: Laurel de olor Nerium nobilis L. infestado con Conchuela blanda y/o Laurel de flor Nerium oleander infestado con Conchuela negra. Hiedra infestada con Protopulvinaria pyriformis (Cockerell). Esta conchuela ataca cítricos muy ocasionalmente y tiene la ventaja de presentar varias generaciones en la temporada, lo que originaría una fuente continua de diferentes especies de Metaphycus. La plantación de laurel de flor debe realizarse a más de 10 metros del huerto, con el fin de evitar que las ninfas migratorias de la S. oleae puedan desplazarse hacia los cítricos. Las plantas infestadas deberán contar con riego y fertilización adecuada para que toleren de buena forma el ataque y favorezcan el traslape de generaciones, para asegurar una presencia relativamente continua de parasitoides en las cercanías del huerto. Las plantas deberán podarse con el fin de estimular el crecimiento de brotes y mantenerla a baja altura impidiendo con ello el transporte de las ninfas migratorias por el viento. En el mismo sentido, la existencia de ramas aisladas con presencia de la Conchuela Blanda de los Cítricos y Conchuela Hemisférica puede ser beneficiosa, dado que comparten enemigos naturales con S. oleae (Cuadro 8-2).

Control cultural. Abrir la copa del árbol en especial si ésta es densa, mejorando la ventilación y la iluminación lo que aumenta la mortalidad natural de las ninfas migratorias. En California, fueron realizados estudios que muestran que plantas con abundante follaje en su copa, presentaban un ambiente de mayor humedad que favorecía la sobrevivencia de ninfas pequeñas de S. oleae. Además, esta medida permite una mejor distribución de los insecticidas u otros productos asperjados sobre el follaje.

Producción orgánica. Control biológico, aplicaciones de aceite mineral y jabones potásicos, control de hormigas y poda.

Conchuela Hemisférica Hemispherical scale Saissetia coffeae (Walker) R. Ripa y S. Rojas

Distribución e importancia Plaga que ocasionalmente provoca problemas económicos en cítricos, en sus estadios inmaduros se suele confundir con S. oleae, encontrándose algunas veces asociadas en un mismo hospedero. En Chile se presenta desde la Región de Arica y Parinacota (XV) a la Región del Libertador Bernando O’Higgins (VI).

Daño Frutos: La mielecilla y fumagina sobre su superficie reducen su calidad. Hojas: La fumagina que cubre las hojas impide un adecuado proceso de fotosíntesis.

Descripción morfológica La hembra adulta tiene forma hemisférica. Su caparazón es de color pardo rojizo oscuro de textura lisa y apariencia brillante. Su tamaño varía entre 2,5 y 3,5 mm en su diámetro mayor, dependiendo de su propia densidad poblacional y la calidad del hospedero en que se encuentra. Bajo este caparazón pueden encontrarse los huevos de color rosado pálido. Los estadios inmaduros o ninfas son muy similares en forma y color a los de S. oleae, aunque la rugosidad característica en el dorso en forma de H desaparece al alcanzar el estadio adulto. Ello difiere de lo que ocurre en la S. oleae, ya que esta característica se conserva durante el estadio adulto.

Biología Cada hembra ovipone aproximadamente 1.000 huevos que va acumulando bajo el caparazón. Las pequeñas ninfas migratorias que eclosionan se movilizan hacia diferentes sectores de la planta donde se fijan para alimentarse y crecer. En la Zona Central de Chile, S. coffeae presenta una generación anual (Figuras 8-68 y 8-69).

144

Figura 8-68 Ramilla de cítrico atacada por Saissetia coffeae.

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 8-69 Individuos juveniles de Saissetia coffeae.

En forma muy similar a S. oleae, las ninfas migratorias se fijan tanto en hojas como en ramillas tiernas. En general, esta plaga ataca sólo algunas ramas del árbol, concentrándose en áreas reducidas del árbol, de preferencia hacia los extremos de las ramillas.

Hospederos

R. Ripa

Los cítricos naranjo, limonero, pomelo y mandarino. Otras especies frutales hospederas son: olivo, lúcumo, mango y guayabo. Es común encontrarla en árboles nativos como el molle y en ornamentales como helechos.

Enemigos naturales Esta especie comparte gran parte de los enemigos naturales con la Conchuela Negra del olivo ver descripción de cada uno de ellos en el capítulo respectivo y su asociación en Cuadro 8-2.

Figura 8-70 Ninfas de Saissetia coffeae, con la pupa de parasitoide en el interior (izquierda) y sano.

Parasitoides. Los encírtidos M. flavus, M. helvolus, M. stanleyi y Metaphycus sp. y el afelínido C. caridei se encuentran asociados a esta plaga, ver características en S. oleae y asociaciones con otras conchuelas en el Cuadro 8-2 (Figura 8-70).

Observar y registrar la presencia de fumagina y hormigas, ya que como ha sido mencionado, son indicadores de un posible ataque de insectos que se alimentan de savia elaborada y pueden a la vez determinar la necesidad de realizar alguna acción como lavado o control de hormigas.

Depredadores. El pteromálido S. caerulea, actúa en forma similar para S. coffeae y S. oleae.

Control químico. Controlar la Hormiga Argentina (ver capítulo de hormiga).

Manejo Monitoreo. Utilizar el muestreo que se realice para determinar el nivel de S. oleae. Aunque es una plaga menos frecuente, ocasionalmente puede originar un daño económico importante.

Aplicar aceite mineral como fue descrito para S. oleae. Las aplicaciones de insecticidas, especialmente de aceite mineral, requieren una muy buena cobertura del árbol. Si postaplicación, a través del monitoreo, se detecta una mortalidad parcial de la plaga se debe recurrir a una segunda aplicación de aceite mineral.

145 Manejo de plagas en paltos y cítricos

La efectividad relativa de los productos evaluados por INIA La Cruz sobre cocidos se muestra en el Cuadro 8-3.

Producción orgánica. Control biológico, aplicaciones de aceite mineral orgánico y jabones potásicos, controlar las hormigas.

pardo moteado, cuando el insecto alcanza el estadio de hembra adulta. En los individuos preadultos se puede distinguir una quilla longitudinal en el dorso (Figuras 8-71 y 8-72).

Conchuela Blanda, Conchuela Blanda Café, Conchuela Blanda de los citrus Soft Brown Scale Coccus hesperidum (Linnaeus) R. Ripa

R. Ripa, P. Larral, S. Rojas y F. Rodríguez

Distribución e importancia C. hesperidum es una plaga que generalmente se encuentra en muy baja densidad en ausencia de hormigas debido a la acción de los insectos benéficos asociados. Contrariamente ante la presencia de hormiga argentina y/o el uso indiscriminado de insecticidas de amplio espectro, puede aumentar su población hasta ocasionar problemas económicos. Estos son mas graves cuando la planta está en periodo de formación debido a que puede causar la muerte de ramillas.

Figura 8-71 Hembras adultas y ninfas migratorias de Coccus hesperidum.

C. hesperidum se presenta en Chile desde la Región de Aríca y Parinacota (XV) a la Región de la Araucanía (IX), incluyendo la Isla de Pascua

Frutos: Manchas debido a la mielecilla y/o fumagina que disminuye su calidad. Existe la alternativa de lavar la fruta lo que implica un aumento en el costo de producción y no elimina totalmente las manchas de fumagina. Follaje: La fumagina cubre las hojas y disminuye el proceso de la fotosíntesis, lo que puede afectar el rendimiento. Ataques intensos pueden producir caída prematura de las hojas y menor crecimiento en plantas jóvenes e incluso muerte de ramillas.

Descripción morfológica La hembra adulta tiene forma ovalada y ligeramente convexa. Su tamaño varía entre 3 a 4 mm en su diámetro mayor. La coloración de los individuos inmaduros varía con su desarrollo y va desde casi transparente recién eclosionados, para luego tornarse ámbar hasta

R. Ripa

Daño Figura 8-72 Individuos juveniles de Coccus hesperidum.

Biología Es una especie ovovivípara, donde cada hembra coloca aproximadamente 200 huevos con sus embriones muy desarrollados. En pocos minutos, de estos huevos eclosionan ninfas migratorias que salen de la cubierta protectora de su madre para fijarse en las cercanías (hojas y ramillas). En condiciones de alta temperatura, el ciclo biológico es muy corto (aproximadamente 60 días) y durante el invierno se extiende considerablemente, de tal modo que anualmente se originan tres o más generaciones, dependiendo de las condiciones climáticas. Durante todo el año se observa un traslape de diferentes estadios de desarrollo.

146 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

20

0

0 feb 97

[

Paratisismo adulto

Paratisismo ninfas

Adultos

abr 98

2

mar 98

40

feb 98

4

dic 97

60

nov 97

6

oct 97

80

ago 97

8

jun 97

100

abr 97

10

mar 97

120

% parasitismo

12

Ninfas

]

Gráfico 8-7 Fluctuación de la abundancia poblacional de Coccus hesperidum sobre ramillas de naranjo. Melipilla, Región Metropolitana (1997-1998).

En general, C. hesperidum se presenta en poblaciones densas concentradas en algunas ramas del árbol, eventualmente un ataque severo puede comprometer muchas ramas. Una de las características importantes de esta especie, es su capacidad de movilizarse aún en los estadios más desarrollados (Gráfico 8-7). La Conchuela Blanda es un insecto que produce una gran cantidad de mielecilla que atrae a las obreras de la Hormiga Argentina, estableciéndose las características relaciones de mutualismo que se indican en el capítulo sobre la Hormiga Argentina.

Hospederos Los cítricos naranjo, limonero, mandarino y pomelo. Preferentemente ataca naranjas con ombligo o “navel” en los primeros años de su establecimiento y plantas con poca penetración de luz. Otras especies frutales hospederas son: frambueso, arándano y guayabo. También se encuentra en helechos y Aralia.

Enemigos naturales Parasitoides. Los encírtidos M. stanleyi, M flavus y M. helvolus y el afelínido C. caridei parasitan segundo y tercer estadio ninfal. Metaphycus sp parasita ninfas de primer a tercer estadio ninfal. La descripción de estos insectos se encuentra en el capítulo de Conchuela Negra del Olivo. Coccophagus lycimnia (Walker es un afelínido endémico de Chile, asociado al control de ninfas de segundo estadio hasta hembras adultas de C. hesperidum (L). Mide aproximadamente 1,2 mm de longitud, con el cuerpo de

color negro y algunos sectores de color amarillo, ojos y ocelos rojizos, alas hialinas y antenas completamente negras en la hembra y con el flagelo amarillo en el macho. La hembra parasita ninfas desde el segundo estadio hasta adultos de la conchuela. Cuando no está fecundada hiperparasita encírtidos del género Methaphycus, con producción exclusiva de machos (Figuras 8-73 y 8-74).

Depredadores. No se conocen depredadores específicos de esta especie, sin embargo, se ha observado avispas del género Polystes depredando conchuelas en naranjos.

Manejo Monitoreo. En el monitoreo habitual de ramillas (una vez al mes) detectar la presencia de esta plaga y definir focos de infestación. La fumagina y la presencia de hormigas son indicadores del ataque de ésta y otras plagas que se alimentan de savia. En las ramillas atacadas determinar la existencia de parasitismo, el que se puede reconocer por observación directa de la pupa del parasitoide por transparencia en el interior de la conchuela o por cambios en la coloración del caparazón el que se torna más oscuro.

Control químico. Controlar la Hormiga Argentina (ver capitulo respectivo). Esta acción aumenta la efectividad de los parasitoides que pueden reducir la densidad de la plaga en un plazo de 4 a 6 meses. Este control puede ser mantenido indefinidamente, mientras se excluya el acceso de las hormigas a los árboles. Aplicar dos veces aceite mineral al 1% cuando más del 70% de las plantas se encuentren con al menos el 50% de

147

R. Ripa

R. Ripa

Manejo de plagas en paltos y cítricos

Figura 8-74 Coccophagus caridei parasitoide de Coccus hesperidum.

Figura 8-73 Coccus hesperidum con orifício de emergencia de parasitoide.

La efectividad relativa de los productos evaluados por INIA La Cruz sobre cocidos se muestra en el Cuadro 8-3.

Control biológico. Si se han eliminado los enemigos naturales por la acción de insecticidas, reintroducir las especies antes mencionadas desde insectarios comerciales o bien a través de ramillas infestadas con la plaga parasitada provenientes de otros sectores del huertos o de otros predios. Se debe controlar la hormiga para permitir el establecimiento de las especies benéficas. Otra alternativa es colocar la planta doca, Carpobrotus chilensis en sectores del huerto e infestarla con la conchuela de la doca Pulvinariella mesembryanthemi (Vallot) que también es parasitada por Coccophagus lycimnia. Ello tiene la ventaja de que la conchuela de la doca no ataca cítricos o paltos (Figura 8-75). El uso de insecticidas fosforados o piretroides elimina la fauna benéfica y afecta el establecimiento de nuevas poblaciones de insectos benéficos.

Producción orgánica. Control biológico, control de hormigas con polibuteno, aplicaciones de jabones potásicos y aceite mineral orgánico, poda de ramas atacadas.

R. Ripa

sus ramillas infestadas. Las aplicaciones deben realizarse separadas una de otra por un lapso de tres semanas. Ello para eliminar la parte de las poblaciones que escapan a la primera aplicación, dada la variedad de estadios de desarrollo de C. hesperidum. El control químico solo se justifica ante ataques muy severos en ausencia de enemigos naturales. Cabe destacar que esta especie es resistente a insecticidas fosforados.

Figura 8-75 Adulto de Coccophagus lycimnia.

Conchuela Piriforme, Conchuela Algodonosa del Palto, Conchuela Corazón Pyriform scale Protopulvinaria pyriformis (Cockerell) R. Ripa P. Larral y S. Rojas

Distribución e importancia Especie presente en paltos, pero que muy ocasionalmente alcanza densidades que justifiquen aplicaciones de plaguicidas, en cítricos posee menor relevancia. Se ubica en el envés de las hojas y secreta abundante mielecilla, que cae en el haz de hojas inferiores lo que favorece la proliferación de fumagina. Se presenta desde la Región de Coquimbo (IV) a la Región del Libertador Bernardo O’Higgins (VI) e Isla de Pascua.

148 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Daño Hojas: La mielecilla y fumagina mancha el follaje. Puede producirse una caída prematura de hojas muy infestadas, lo que en cierta medida disminuye la infestación.

R. Ripa

Frutos: La plaga no se establece en los frutos, sin embargo la mielecilla se acumula sobre los frutos, favoreciendo el desarrollo de fumagina en ellos.

Descripción de la plaga La hembra adulta tiene forma triangular a piriforme y es aplanada dorso ventralmente. Su cuerpo es pardo amarillento y cuando comienza su ovipostura, por los bordes se observa una secreción cerosa blanca, al tiempo que su coloración se torna pardo oscuro. Su tamaño varía entre 2,5 y 3,5 mm en su diámetro mayor. Los huevos son de color blanco y cuando están maduros adquieren una coloración amarillenta. Las ninfas son muy aplanadas y casi transparentes (Figuras 8-76 y 8-77).

Figura 8-76 Hembra con huevos de Protopulvinaria pyriformis.

Biología Es una especie partenogenética que ovipone en forma escalonada hasta 500 huevos. Presenta tres estadios ninfales. Se producen dos generaciones anuales.

Hospederos En los cítricos, ocasionalmente se encuentra en naranjo. Sus hospederos más comunes son: palto, lúcumo y guayabo. En ornamentales es frecuente en hiedra, laurel de olor, lingue (Persea lingue) y Robinia.

R. Ripa

Las ninfas migratorias se ubican de preferencia en el envés de las hojas cercanas a la nervadura y son móviles en todos sus estadios de desarrollo. Las ninfas pequeñas se diseminan principalmente por el viento. Figura 8-77 Cuerpo levantado de Protopulvinaria pyriformis (izquierda) mostrando los huevos acumulados.

En estudios realizados sobre paltos en Israel se evidenció una mayor susceptibilidad de los cultivares Nabal, Hass y Fuerte (De Meijer1989).

Enemigos naturales

R. Ripa

Parasitoide. El afelínido C. caridei que parasita ninfas de segundo estadio. Los encírtidos M. flavus y M. helvolus parasitan el segundo estadio de la conchuela y M. stanleyi desde ninfa II a hembra adulta. La descripción de estos insectos se encuentra en el capítulo de conchuela Negra del Olivo y su asociación con otras conchuelas en el Cuadro 8-2 (Figura 8-78). Figura 8-78 Individuos juveniles de Protopulvinaria pyriformis junto a la nervadura y parasitados con orificios.

149 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Manejo Monitoreo. Efectuar muestreos sistemáticos de las hojas (una vez al mes) para detectar esta plaga y estimar su abundancia mediante el método presencia/ausencia, del mismo modo determinar el nivel de parasitismo, con la ayuda de una lupa de 10 aumentos.

Los estadios inmaduros poseen penachos blancos en el dorso y alrededor del cuerpo en forma estrellada (Figura 8-79).

La efectividad relativa de los productos evaluados por INIA La Cruz sobre cocidos se muestra en el Cuadro 8-3.

R. Ripa

Control químico. Ante ataques que comprometan la fotosíntesis del follaje y/o la limpieza de la fruta por la abundancia de fumagina, una alternativa de bajo impacto para los enemigos naturales es lavar la planta con detergente o surfactantes. La aplicación de insecticida sólo se justificaría ante un ataque de magnitud excepcional y la ausencia de enemigos naturales. La aplicación de productos debe realizarse teniendo en cuenta la ubicación de la plaga en el envés de las hojas, la que se facilita utilizando un codo en la boquilla del pitón como ha sido explicado en el capítulo de aplicación química.

Figura 8-79 Juveniles de Ceroplastes cirripediformis en ramilla.

Conchuela Cerosa Barnacle Scale, Barnacle Wax Scale

Biología

Ceroplastes cirripediformis (Comstock)

Es una especie ovípara que se reproduce por partenogénesis. Los estadios juveniles se establecen en el haz y envés de hojas y luego se trasladan a las ramillas. Las ninfas se fijan sobre las ramillas en forma relativamente dispersa. En general, es un insecto que se presenta en poblaciones muy reducidas. Aparentemente presenta una sola generación al año.

R. Ripa y S. Rojas

Distribución e importancia Esta especie se encuentra presente en la I, III, IV, V y VI Regiones. Las poblaciones que presenta no alcanzan densidades importantes, por lo que no es considerada una plaga de importancia económica. Se encuentra más frecuentemente en huertos caseros con poco o ningún manejo.

Daño Observado principalmente en hojas y ramillas, potencialmente pudiera producir daño al alimentarse de savia.

Descripción morfológica La hembra adulta tiene forma ovalada y hemisférica cubierta por una gruesa capa cerosa gris, observándose que el cuerpo bajo esta cubierta es de color pardo rojizo. Su tamaño varía entre 3 y 5 mm en su diámetro mayor. En la cubierta cerosa presenta abultamientos casi simétricos en cuyo centro se observa una mancha circular más oscura.

Hospederos Los cítricos naranjo, limonero, mandarino y pomelo. Además, se encuentra en otros frutales como cerezo, ciruelo y lúcumo. También se observa en el piretro y diamelo.

Enemigos naturales Los parasitoides de la familia Encirtidae Metaphycus flavus y M. helvolus, los cuales parasitan estadios pequeños. El afelínido Coccophagus caridei. Las larvas del pteromálido Scutellista caerulea, son activas depredadoras de los huevos de esta conchuela (Figura 8-80).

Manejo Monitoreo. Observar la presencia de esta conchuela en muestreo rutinario de ramillas, con lupa de 10x determinar el nivel de parasitismo.

150

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 8-80 Orificio de emergencia de parasitoide en Ceroplastes cirripediformis.

Control. En general no se recomienda el uso de plaguicidas a menos que exista un ataque de magnitud excepcional. La efectividad relativa de los productos evaluados por INIA La Cruz sobre cocidos se muestra en el Cuadro 8-3.

Conchuela Acanalada Cotton Cushion Scale Icerya purchasi (Maskell) (Hemiptera: Margarodidae) R. Ripa, P. Larral y S. Rojas

Distribución e importancia Se encuentra presente desde la Región de Arica y Parinacota (XV) a la Región de Los Lagos (X) con una escasa a moderada importancia, excepto entre las Regiones de Tarapacá y Coquimbo, donde se encuentra con mayor frecuencia y ha sido considerada una plaga de importancia (Klein y Waterhouse 2000).

Daño Frutos: El principal daño en frutos es cosmético, ya que la mielecilla excretada por estos insectos da origen al desarrollo de fumagina (hongo saprófito) el cual mancha estas estructuras disminuyendo su valor comercial. Hojas y ramillas: Ataques intensos reducen el vigor del árbol y pueden originar una caída prematura de hojas y muerte de ramillas (Figura 8-81).

Figura 8-81 Aspecto del tronco producto de excresiones solidificadas de Icerya purchasi.

Descripción morfológica La hembra adulta tiene forma convexa. Su cuerpo es de color pardo rojizo moteado, generalmente está cubierto de una secreción cerosa como polvo de color blanquecino lo que origina una coloración beige. Su tamaño varía entre 4 y 5 mm y aumenta hasta 10 mm cuando la hembra ha formado su saco ovígero de color blanco con estrías longitudinales. Esta estructura protectora de los huevos es su característica morfológica más notoria y ha originado su nombre común. Los huevos son de color anaranjado a rojo y se encuentran en este voluminoso saco. Las ninfas recién eclosadas son de color similar a los huevos, éstas poseen patas y antenas más obscuras. Los estadios ninfales más desarrollados van adquiriendo la tonalidad pardo rojiza de los adultos, a la vez que secretan unos filamentos translúcidos y excretan abundante mielecilla cristalina, que en condiciones ambientales de muy baja humedad pueden solidificarse en forma similar a azúcar adherida a las ramas de los árboles. Los machos son pequeños insectos alados que deambulan entre las grandes hembras sésiles (no aladas) (Figuras 8-82 a 8-84).

Biología Las hembras adultas oviponen aproximadamente 800 huevos, los cuales son acumulados en el interior del saco algodonoso. Por entre los filamentos de este compacto saco ovígero, salen las ninfas migratorias hacia las diferentes estructuras de la planta para establecerse e iniciar su alimentación de savia. El ciclo de vida puede durar dos meses durante el verano. Las ninfas migratorias se fijan preferentemente

151 Manejo de plagas en paltos y cítricos

en la nervadura de las hojas, en tanto los estadios más desarrollados lo hacen principalmente sobre las ramas y ramillas. Una fracción de la población puede movilizarse hasta la base del tronco principal, localizándose en la zona del cuello algunos centímetros bajo el nivel del suelo (Figuras 8-85 y 8-86).

R. Ripa

En el área de distribución norte en Chile, se ha observado dos a tres generaciones anuales con aparición de altas poblaciones provenientes de individuos refugiados en la base del tronco, bajo el nivel del suelo.

Huevo

Figura 8-82 Hembras con saco ovigero de Icerya purchasi.

Adulto

R. Ripa

C. Tobar

Ninfas

R. Ripa

R. Ripa

Figura 8-85 Ciclo de vida de Icerya purchasi.

Figura 8-83 Hembra de Icerya purchasi con huevos expuestos.

Figura 8-84 Hembras preadultas de Icerya purchasi.

Figura 8-86 Individuos de Icerya purchasi bajo el nivel de suelo en tronco de cítrico.

152 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Depredadores. El coccinélido Rodolia cardinalis (Mulsant) importado desde Estados Unidos en 1931, es un depredador que deposita sus huevos en o bajo el saco ovígero de las hembras de la conchuela, de tal modo que en cuanto sus pequeñas larvas eclosionan, inmediatamente disponen de huevos y ninfas de la plaga como alimento.

Estos individuos dan origen a ninfas que suben a la copa del árbol, iniciándose una reinfestación, que en presencia de una muy baja densidad de enemigos naturales origina un incremento de la plaga. Esta condición ha sido observada en el norte del país, en ambientes casi desérticos, donde prácticamente no existen otros hospederos de la plaga que permitan una reproducción contínua de los enemigos naturales.

Es muy frecuente observar pupas de R. cardinalis adheridas sobre las hojas, ramillas y tronco principal del árbol. El adulto tiene el cuerpo ovalado, mide 3,5 mm de largo, 2,5 de ancho y es de perfil elevado. La cabeza es de color castaño rojizo oscuro. El tórax es de color negro con el borde anterior y lateral color rojizo claro. Las patas son cortas de color castaño rojizo. Las alas anteriores son de color rojo apagado, con tres manchas negras cada una. Una ovalada en la parte anterior, otra en la mitad posterior y una que bordea el extremo posterior y la línea de unión entre un ala y la otra. En algunos ejemplares no hay una clara separación entre las últimas dos manchas.

Hospederos Los cítricos naranjo, limonero, mandarino y pomelo. Además de lúcumo, acacia, rosales, aromo, retamo y malezas como: alfilerillo, falso té y amor seco.

Enemigos naturales Parasitoides. El parasitoide Cryptochaetum iceryae (Willinston), de la familia Chamaemyiidae, es un pequeño díptero importado desde Estados Unidos de color gris a negro y alas transparentes que ovipone en el interior del cuerpo de conchuelas (Icerya purchasi), desde segundo estadio ninfal hasta adultas. Actúa como parasitoide solitario en ninfas y como gregario (originando más de un individuo por hospedero parasitado) en conchuelas adultas. Probablemente es el enemigo natural que contribuye en mayor grado en el control de la plaga.

La hembra coloca cerca de 200 huevos. La larva es roja ovalada y a medida que se desarrolla el color va cambiando a pardo. La larva madura se fija a las hojas y pupa durante una semana, al cabo de la cual emerge el adulto. El ciclo de vida de este depredador se completa en aproximadamente 35 días, mientras que el del hospedero lo hace en aproximadamente 90 días, dependiendo de la época del año. Rodolia presenta cuatro a cinco generaciones al año. La acción depredadora la ejercen las larvas y en menor grado los adultos. Cuando el hospedero escasea las larvas pueden comerse entre ellas (Figuras 8-89 a 8-92).

120

20 18 16 14 12 10 8 6 4 2 0

80 60 40

% parasitismo

100

20

[

Icerya purchasi

Parasitadas

jul 98

may 98

mar 98

feb 98

dic 97

nov 97

sep 97

0 jul 97

may 97

Conchuelas / ramilla

El Gráfico 8-8 muestra un seguimiento de la población de I. purchasi y el efecto del parasitoide C. iceryae en un huerto de la Región de Coquimbo (IV), donde se puede apreciar que la acción del parasitoide prácticamente elimina la plaga, sin embargo frente a la escasez de la conchuela, el parasitoide muere, lo que eventualmente provoca “brotes” de la plaga (Figuras 8-87 y 8-88).

]

Gráfico 8-8 Fluctuación de la abundancia Icerya purchasi e individuos parasitados por Cryptochaetum iceryae sobre ramillas de mandarino clemenules. Monte Patria, Región de Coquimbo (1997-1998).

153

R. Ripa

R. Ripa

Manejo de plagas en paltos y cítricos

R. Ripa

Figura 8-88 Orificios de emergencia de Cryptochaetum iceryae.

R. Ripa

Figura 8-87 Adulto de Cryptochaetum iceryae.

Figura 8-91 Larva de Rodolia cardinales mudando.

R. Ripa

Figura 8-90 Larva de Rodolia cardinales.

R. Ripa

Figura 8-89 Huevos de Rodolia cardinales colocado bajo el cuerpo Icerya purchasi.

Figura 8-92 Adulto y pupa de Rodolia cardinalis.

154 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Manejo Monitoreo. El monitoreo de esta plaga se debe acentuar cuando existan frutos pequeños y previo a la floración y cosecha. Este insecto prefiere establecerse en el interior del árbol en la zona cercana a la bifurcación de las ramas principales. Un signo característico de un ataque intenso de esta conchuela se observa en el tronco principal, el cual muestra el aspecto de estar mojado. Otro indicador de la presencia de esta plaga es la presencia de hormigas y de fumagina en ramillas, hojas y frutos. Monitorear al menos 20 árboles por cuartel, observando 5 ramillas escogidas al azar para determinar la presencia de la plaga y sus enemigos naturales. En la Zona Norte del país, revisar la zona del cuello de la planta y los primeros centímetros bajo el nivel de suelo.

Control. La acción de los enemigos naturales sobre esta plaga es muy efectiva, por lo que antes de efectuar cualquier labor de control químico, determinar a través del monitoreo la presencia de enemigos naturales, si están presentes, darles un tiempo para se reproduzcan y ejerzan su acción reguladora sobre las poblaciones de la plaga. Si se determina la ausencia de enemigos naturales, colectar en otro sector o región y liberar en el huerto.

No se recomienda usar insecticidas. El control químico de esta plaga no es efectivo y solo se obtiene un resultado parcial que a la postre agrava el problema. Las aplicaciones de insecticidas poco selectivos en forma reiterada eliminan a las dos especies de enemigos naturales, originando un incremento de las poblaciones de la plaga. Por otra parte, mantener en el huerto mínimos focos de la plaga es beneficioso, ya que permite que los enemigos naturales residan o permanezcan en el huerto y controlen eventuales incrementos de la población de la plaga. Con el fin de manejar esto, cuando no existen otros hospederos que permitan la sobrevivencia de la plaga y sus enemigos naturales, se sugiere la aplicación de un insecticida (ejemplo, clorpirifos en la dosis menor recomendada en la etiqueta) en algunos grupos de 3 a 4 plantas infestadas, para mantener pequeños focos de la conchuela que permitan la subsistencia de los enemigos naturales. Cada tres meses iniciar este tratamiento en un grupo diferente de árboles, infestándolos previamente con ramas de los árboles tratados anteriormente. Un aspecto importante para la efectividad de los enemigos naturales es controlar la Hormiga Argentina (ver capítulo).

155 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Burritos y Capachitos Orden: Coleoptera • Familia: Curculionidae Los burritos o capachitos pertenecen al orden Coleoptera, familia Curculionidae, grupo con el mayor número de especies entre los insectos. Su característica más distintiva es que sus alas anteriores, llamada élitros, tienen una consistencia dura y cubren a un segundo par que es membranoso y que en muchos casos les sirve para volar. En Chile, hasta el momento, solo existen dos especies de este grupo que tienen una importancia relativa como insectos asociados a los cítricos y paltos, donde sus larvas se alimentan de raíces bajo el suelo y los adultos de follaje. Ambas especies no tienen la capacidad de volar.

Burrito de la vid, Burrito de los frutales, Mulita de los frutales (Argentina) Fruit tree weevil Naupactus xanthographus (Germar) R. Ripa

Descripción morfológica Son insectos de tamaño grande que pueden alcanzar entre 11 y 14 mm, el cuerpo tiene forma alargada y es de color pardo a gris. Los adultos recién emergidos son de color pardo rojizo. Los élitros soldados que cubren el abdomen son más anchos en la hembra y más angostos en el macho, con bordes laterales ampliamente redondeados. Es característico de la especie poseer élitros con hombros realzados. Posee dos líneas amarillentas dorsales y una lateral en el pronoto y en los élitros producto de escamas que poseen color amarillento. La cabeza presenta un surco medial ancho que continúa en la frente y rostro, presenta escamas en gran parte del cuerpo, algunas concentradas alrededor de los ojos hemisféricos y sobresalientes, en los bordes laterales del pronoto y en la parte latero medial de los élitros formando una curva característica. Las antenas presentan escapos largos. Los huevos de aproximadamente 1mm de largo y amarillos son colocados en grupos (Figuras 8-93 a 8-98).

Distribución e importancia Arica a la Región de la Araucanía (IX), Isla de Pascua, Brasil, Argentina, Paraguay, Uruguay. Los ataques más intensos se registran en cítricos y paltos plantados en sectores donde existían, vides, duraznero, alfalfa, etc. infestadas y las larvas aún permanecen viables bajo el suelo.

Daño Es una plaga de importancia agrícola primaria debido al daño que causa en el sistema radicular de diferentes especies frutales. Además, es una especie cuarentenaria para Japón y Estados Unidos. Frutos: Contaminación con fecas de adultos. Hojas: Mordeduras en el margen y pérdida de área foliar.

Raíces: Pérdida de las raicillas y daño en raíces por la alimentación de larvas lo que afecta la absorción de agua y nutrientes

R. Ripa

Ramillas: Disminución de vigor y crecimiento ante ataques muy intensos al sistema radicular. Figura 8-93 Dos grupos de huevos de Naupactus xanthographus.

156

Figura 8-98 Extremo del abdomen de la larva de Naupactus xanthographus.

R. Ripa

Figura 8-97 Cápsula cefálica de larva desarrollada de Naupactus xanthographus.

R. Ripa

Figura 8-96 Larvas de Naupactus xanthographus.

R. Ripa

Figura 8-95 Larvas neonatas de Naupactus xanthographus.

R. Ripa

Figura 8-94 Hembra de Naupactus xanthographus.

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 8-99 Capsula cefálica de larva desarrollada de Pantomorus cervinus.

157 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Huevo

Adulto

R. Ripa

Larva

Pupa

Biología Las larvas se alimentan de las raíces y raicillas ubicadas entre los 20 y 50 centímetros de profundidad. Una vez que la larva completa su desarrollo, construye una celdilla pupal en el suelo, normalmente entre 30 a 40 centímetros de profundidad. A inicios de primavera ascienden los adultos desde el suelo aumentando hasta mediados de octubre y disminuyendo en noviembre. Posteriormente, hay un incremento en la emergencia de adultos que se concentra entre finales de diciembre y comienzos de enero. El adulto puede permanecer cerca de 25 a 30 días bajo el suelo antes de emerger. Una vez ocurrida la cópula con el macho y un período de maduración la hembra ovipone en el extremo de hojas secas enrrolladas, en las grietas de los cortes de poda, ramas quebradas y bajo materiales utilizados para sujetar el árbol a tutores. Las larvas eclosionan en aproximadamente 35 días en verano, las que se dejan caer al suelo en busca de raicillas para alimentarse. Es necesario destacar la presencia de larvas en el suelo durante todo el año, por otra parte la presencia de pupas solamente se observa desde noviembre a abril. Cuando los adultos emergen del suelo, muestran una notable habilidad para caminar en la dirección en que se encuentra el tronco del árbol más cercano. Generalmente, suben a los sectores más altos del árbol durante la mañana, alimentándose del margen de las hojas tiernas. Durante el día tienden a protegerse del sol bajo las hojas y en la parte inferior de las ramas, siendo difícil ubicarlos. Existe una estrecha influencia de la temperatura del suelo sobre la emergencia de adultos de burrito desde este sustrato, iniciándose este proceso con una temperatura

C. Tobar

Figura 8-100 Extremo del abdomen de la larva de Pantomorus cervinus.

Figura 8-101 Ciclo de vida de Naupactus xanthographus.

de 13,5°C en septiembre. Con las temperaturas inferiores de otoño la emergencia desde el suelo se detiene (Ripa 1992) (Figura 8-101).

Hospederos Naranjo, limonero, palto. La vid es el hospedero primario del burrito, además, se encuentra en otras especies como: chirimoyo, ciruelo, duraznero, guindo, níspero, nogal, peral, kiwi, caqui, frambueso, remolacha, papa, poroto y alfalfa. También en malezas como: maicillo, hinojo, lechugilla, cicuta, llantén y romasa, además de encontrarse asociado a numerosas plantas ornamentales (Ripa 1986).

Enemigos naturales Parasitoides. Los himenópteros Centistes spp, parasitoide de adultos y Fidiobia asina, parasitoide de huevos (Figura 8-102). Depredadores. Entre los depredadores de huevos del burrito se encuentran diferentes especies omnívoras entre las que destacan las larvas de un derméstido del género Megatoma spp. Los adultos del burrito son depredados por el Grillo de Campo, Gryllus fulvipennis, especie omnívora que durante el día se oculta bajo la hojarasca, rastrojos y grietas en el suelo. Este grillo consume principalmente el contenido del abdomen, dejando de lado las partes más esclerosa-

158 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

das como: tórax, élitros y cabeza. Muy ocasionalmente este grillo daña la corteza de cítricos y paltos muy jóvenes (ver Katídidos y grillos). También diferentes especies de aves se alimentan vorazmente de los burritos adultos.

• Revisar las hojas tiernas, los daños son muy característicos y visibles. Mordeduras recientes muestran los bordes frescos mientras las más antiguas tienen los bordes pardos y secos. En las hojas dañadas se observan las fecas características, similares a bastones de dos a tres mm de largo. • Muestrear larvas que se encuentran en el suelo cercanas a las raíces. Se sugiere realizar 10 hoyos de 35 x 35 cm por cada 4 a 5 hectáreas.

R. Ripa

Control. Aplicar Azinfosmetil cuando se encuentre más de una larva promedio por hoyo y/o tres adultos por árbol, una vez que los adultos iniciaron la emergencia del suelo. La aspersión debe realizarse sobre la periferia del árbol, ya que los adultos se alimentan de las hojas tiernas. La acción del plaguicida es de corta duración dada la constante producción de hojas nuevas durante el período de emergencia de la plaga. Las aplicaciones reiteradas originan como efecto secundario ataques intensos de arañitas por la eliminación de los enemigos naturales.

Figura 8-102 Centistes sp parasitoide de adultos de Naupactus xanthographus.

Patógenos. La efectividad de los patógenos Beauveria bassiana y el nematodo Steinernema spp producidos por el Centro Regional Quilamapu, del INIA, fueron evaluados sobre N. xanthographus en vides en Casablanca, Región de Valparaíso. Los patógenos aplicados al suelo mostraron un escaso efecto sobre larvas centinela, colocadas en mallas de acero inoxidable en el suelo y la captura de adultos posterior no mostró diferencias con el testigo. Por otra parte Mejías (2003), evaluó Beauveria bassiana, Metarhizium anisopliae y Steinernema spp, sobre N. xanthographus, en la Viña Cono Sur S.A. Comuna de Chimbarongo, observando una importante disminución de la densidad de larvas y adultos especialmente con Beauveria bassiana (B 323) y Metarhizium anisopliae var. anisopliae (M 430).

Manejo Monitoreo: • Identificar los sectores infestados por la plaga. Los adultos se presentan desde septiembre en adelante mientras que las larvas están presentes todo el año en el suelo. Los adultos son difíciles de encontrar, aunque se pueden colectar colocando una lámina de plástico bajo el árbol y golpear o agitar fuertemente las ramas para que caigan los insectos.

Otra forma de control es colocar una barrera tóxica en el tronco para impedir el ascenso de adultos. Para ello se sugiere utilizar una lámina de polietileno que tiene vesículas de aire (ejemplo, Empol) para evitar la condensación de agua y eventual ataque de hongos bajo la lámina. Se sugiere usar una faja de 15 a 20 cm de ancho que debe ser enrollada una vez y media en el tronco con las vesículas en contacto con la corteza, amarrar en su centro con una cinta plástica y luego untar la mitad superior con la pasta insecticida INIA 82.4. Esta barrera solo es efectiva en árboles cuyas ramas no topen el suelo y las malezas no entren en contacto con el follaje. La barrera permanece activa por un período de varios meses, perdiendo gradualmente su efectividad especialmente por la adherencia de polvo.

Producción orgánica. La banda de polietileno descrita en párrafo anterior untada con polibuteno y el uso de aves domésticas.

Capachito de los frutales Fuller rose weevil Pantomorus cervinus (Boheman) R. Ripa y P. Luppichini

Distribución e importancia En Chile se encuentra presente entre la Región de Atacama (III) y la Región del Maule (VII), asociado a varios hospederos, entre los que se destacan paltos y cítricos. En el último tiempo, este insecto plaga ha cobrado una importancia principalmente en cítricos dada la presencia de huevos bajo los sépalos del fruto lo cual es causal de

159 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Crecimiento frutos Floración Brotación Brotación

Crecimiento frutos Floración Brotación

% Frutos con huevos

1,60

1,20

0,80

Inicio cosecha

0,40

[

III Región

IV Región

V Región

R. Metropolitana

dic 07

nov 07

oct 07

sep 07

ago 07

jul 07

jun 07

may 07

abr 07

mar 07

feb 07

ene 07

0,00

]

Gráfico 8-9 Detección de huevos de curculionidos bajo los sépalos en limones poscosecha (Gentileza AGRICOM).

rechazo en la fruta de exportación, ya que es considerada plaga cuarentenaria en los países en los cuales no se encuentra registrada esta plaga. De acuerdo a antecedentes de exportaciones de limones de la temporada 2007, se han registrado hallazgos de huevos de este curculionido en frutos proveniente desde la III a la RM. Es entre los meses de marzo y junio donde ocurre la mayor cantidad de hallazgos y las Regiones más afectadas son la V y RM (comunicación personal con J. Ortuzar, AGRICOM, 2007) (Gráfico 8-9).

Daño Hojas: Mordeduras en los bordes (Figuras 8-103 a 8-105).

des presentan franjas oblicuas cortas de escamas blancas. Son característicos sus ojos ovales y sobresalientes, la cabeza posee un surco medial profundo y el dorso del rostro con una notoria concavidad. Las antenas son acodadas y poseen largos escapos (Figura 8-106). Los huevos de aproximadamente 0,9 mm de largo, son ovoidales, aplanados y de color blanco, dispuestos en placas o masas de aproximadamente 30 unidades (Figura 8-108). Las larvas son ápodas y tiene forma curvada. Las de menor desarrollo son blancas, luego se tornan amarillas y una vez que alcanzan mayor desarrollo son de color beige, llegando a medir hasta 1 cm de largo. Las larvas poseen un aparato bucal masticador prominente (Figuras 8-99 y 8-107).

Raíces: Reducción del volumen de raíces lo que ocasiona problemas de absorción de agua y nutrientes, lo que puede manifestarse en un menor crecimiento y vigor de la planta. Frutos: La presencia de huevos bajo los sépalos del fruto causal de rechazo en la fruta de exportación (Figuras 8-104 y 8-105).

El adulto es de tamaño mediano con una longitud entre 5,5 y 7,5 mm. El cuerpo tiene forma ovalada de color pardo grisáceo, élitros soldados y con estrías cuyos bor-

R. Ripa

Descripción morfológica Figura 8-103 Daño de Pantomorus cervinus en hojas de palto Hass.

160

Figura 8-106 Pantomorus cervinus adulto.

R. Ripa

Figura 8-105 Huevos de Pantomorus cervinus expuestos después de retirar los sépalos en un limón.

R. Ripa

Figura 8-104 Huevos de Pantomorus cervinus expuestos después de seccionar parcialmente los sépalos en una naranja.

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 8-107 Larva de Pantomorus cervinus, escala en milímetros.

R. Ripa

Biología

Figura 8-108 Huevos de Pantomorus cervinus.

Es una especie univoltina con reproducción partenogenética. Los huevos son puestos en masas principalmente en hojas secas enrolladas, grietas de corteza en los troncos, bajo amarras y bajo los sépalos de los frutos. Las larvas que eclosionan penetran al suelo para alimentarse de raíces en los diferentes estratos donde estas se encuentran hasta 25 cm bajo el nivel del suelo. Posteriormente, pasan al estado de pupa y luego emergen los adultos, estos salen desde el suelo, y como no tiene la capacidad de volar suben por el tronco para poder alimentarse del follaje y oviponer (Figura 8-106). Durante el día, los adultos se refugian en las hojas secas enrolladas que quedan en el interior de la planta o bajo ella. Estos refugios son utilizados para realizar su

161 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Crecimiento frutos primavera y otoño Floración Floración Brotación Brotación

Crecimiento frutos Floración Brotación 18,0

4,0 3,5

Adyulto / trampa

Inicio cosecha

2,5

12,0 9,0

2,0 1,5

6,0

Larvas / cono

15,0

3,0

1,0 3,0

0,5

[

N° adultos / trampa

N° larvas / cono

feb 08

ene 08

dic 07

nov 07

oct 07

sep 07

ago 07

jul 07

jun 07

may 07

abr 07

mar 07

feb 07

ene 07

dic 06

0,0 nov 06

0,0

]

Gráfico 8-10 Abundancia estacional de adultos y larvas de P. cervinus en limoneros. Ocoa 2006-2007. (P. Baratini, 2008).

ovipostura. Otro sitio común de ovipostura es el espacio bajo los sépalos de los frutos, entre frutos y bajo las amarras de plástico usadas para sujetar los tutores (Figura 8-110).

Huevo

Adulto

De acuerdo en al muestreo de limones en poscosecha realizado en cuatro áreas del país, la mayor frecuencia de detección de huevos bajo los sépalos ocurrió en abril a mayo 2007 (Gráfico 8-9). Esto concuerda con, el período en que se registra el máximo de la captura de adultos en trampas de emergencia y posteriormente con el período de eclosión de las larvas que ocurre a partir de fines de mayo con el máximo en octubre disminuyendo en diciembre indicado en la Gráfico 8-10 (Baratini, 2008).

Larva

Figura 8-109 Ciclo de vida de Pantomorus cervinus.

R. Ripa

C. Tobar

Pupa

Figura 8-110 Huevos de Pantomorus cervinus bajo amarra plástica.

162 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Hospederos Naranjo, limonero, palto. Otros frutales: duraznero, damasco, manzano, banano, frambueso, frutilla, grosellero y zarzaparrilla. En hortalizas papa, maíz, remolacha, poroto y feijoa, en forrajeras, trébol rosado, blanco y alfalfa. Entre los ornamentales, es común en rosal.

Enemigos naturales Se conocen dos parasitoides que controlan esta plaga, el himenóptero, de la familia Braconidae, Centistes spp, avispa de tamaño cercano a 5 mm, que parasita los adultos, es de escasa ocurrencia. El segundo parasitoide, Fidiobia asina (Loiacono) (Hymenoptera: Platygastridae), es más frecuente e importante, éste ovipone en los huevos, cambiando su coloración de amarilla a parda cuando se desarrolla el embrión del parasitoide.

Manejo Monitoreo. El monitoreo para detectar la presencia de P. cervinus, se debe realizar, muestreando las hojas secas y enrolladas en el interior de la planta para determinar la presencia de adultos y huevos. Además es recomendable realizar un muestreo de frutos al azar en los árboles sospechosos de la presencia de esta plaga, y revisar bajo los sépalos para descartar la presencia de masas de huevo. En los huertos se debe observar la presencia de hojas con mordeduras en sus bordes y fecas oscuras con forma de bastón, ambas características son indicadoras de la presencia de la plaga. Realizar pequeñas calicatas para detección de larvas.

Control. Utilizar estrategia indicada para N. xanthographus.

R. Ripa

Actuando como depredadores de esta especie se encuentra el grillo Gryllus fulvipennis (Blanchard) (Orthoptera: Gryllidae) insecto polífago, algunos arácnidos, larvas de derméstidos y aves. Figura 8-111 Capuyo de la larva de Centistes spp (flecha) parasitoide del adulto de Pantomorus cervinus.

163 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Escamas Orden: Hemiptera • Familia: Diaspididae Las escamas son insectos que pertenecen a la familia Diaspididae, ampliamente distribuida en el mundo, y constituyen el grupo más numeroso de Coccoidea con alrededor de 400 géneros y 2.650 especies, de las cuales cerca de 200 son consideradas plagas. Para Chile se registran 25 especies de diaspídidos, la mayoría exóticas e introducidas accidentalmente. Descritas para cítricos se encuentran 8 especies reconocidas como especies de importancia económica., entre ellas Aonidiella aurantii, A. citrina, Chrysomphalus dictyospermi, Lepidosaphes beckii y Aspidiotus nerii, esta última comúnmente denominada escama blanca de la hiedra, es una especie frecuente en plantaciones de paltos y citrícolas del país. Estrechamente asociadas al cultivo del palto se describen 8 diaspídidos, entre los que destacan tres especies de escamas blancas de las cuales Hemiberlesia lataniae (escama latania) es la especie que alcanza los mayores niveles de infestación. Otras escamas blancas presentes en Chile y asociadas a palto son Abgrallaspis (Hemiberlesia) latastei (Cockerell) (Claps et al 1999), Chrysomphalus dictyospermi, Diaspidiotus ancylus, Fiorinia fioriniae, Hemiberlesia palmae y Pinnaspis aspidistrae (Prado 1991). Las escamas son insectos muy pequeños, de forma redondeada, ovalada o alargada, característica determinada por la presencia de un caparazón que recubre su cuerpo. Cuando existen machos participando en la reproducción, la forma de la escama que lo origina es más alargada y pequeña, de la cual emerge un individuo alado, evidenciando un marcado dimorfismo sexual. El daño de las escamas se produce principalmente sobre la planta debido a la extracción de savia desde el parénquima, lo que causa defoliación y muerte de ramillas. A través de su saliva, las escamas pueden inyectar toxinas en los tejidos vegetales que causan muerte de ramas y árboles en casos de elevada densidad poblacional de la plaga. Dado que también se fijan en los frutos, ocasionan daños en éstos reduciendo su calidad, debido a la presencia de estos insectos o bien a la formación de pequeñas depresiones en la superficie o decoloración del fruto. A diferencia de las conchuelas las escamas no secretan mielecilla.

Escama latania Lataniae scale Hemiberlesia lataniae (Signoret) R. Vargas y S. Rodríguez

Distribución e importancia Hemiberlesia lataniae (Signoret) es una especie cosmopolita y altamente polífaga presente en diversos hospederos de importancia económica tanto frutales como ornamentales y forestales, nativos e introducidos. En muestreos prospectivos realizados en los últimos años en la zona productora de paltas del país, la escama latania fue el diaspídido más frecuente asociado a este cultivo. El traslado del estado migratorio mediante el viento favorece considerablemente su dispersión, alcanzando niveles poblacionales críticos en huertos de la zona central. H. lataniae se extende entre la Región de Arica y Parinacota (XV) y la Región del Maule (VII) e Isla de Pascua (Prado, 1991 y Klein y Waterhouse, 2000).

Daño La escama latania es una plaga frecuente y de gran importancia económica en cultivos de palto. El principal daño es su presencia en el fruto, estableciéndose de preferencia en la zona peduncular, sitio de difícil remoción durante el proceso de poscosecha. La presencia de escamas en la fruta es un factor que aumenta significativamente el costo del proceso de packing dado que obliga a su remoción, debiendo incorporar gasto por mano de obra y tiempo de proceso para limpiar el fruto. Esta condición genera un trabajo de remoción mediante escobillado manual y mecánico que incrementa los costos de producción.. Las escamas se distribuyen en todos los estratos aéreos (frutos, hojas, ramas y ramillas), sin embargo se localizan de preferencia en zonas bajas e internas del árbol, en que existe mayor humedad y menor luminosidad. Estos insectos se alimentan a través de la inserción de su aparato bucal en el tejido parenquimático del vegetal, dentro de las células, provocando puntuación o manchas en las hojas y eventualmente su caída. Los frutos atacados cambian ligeramente de color, ocurre una depresión en el área de inserción de la escama y

164 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Estos daños son directos y ocasionados por los efectos acumulados de la alimentación de la escama que provocan la destrucción de las células y la exposición del tejido vascular a la desecación y a patógenos. Es probable además, que durante este proceso, la saliva de la escama presente un efecto tóxico y dañe otras células al difundir por los espacios intracelulares. Sin embargo y aún en infestaciones menos intensas, el daño surge de manera indirecta por la propia presencia de la escama sobre los frutos, lo que disminuye su valor comercial (Figuras 8-112 y 8-113).

R. Ripa

en infestaciones intensas, caen prematuramente. Infestaciones severas de H. lataniae pueden debilitar los árboles, llegando a producir la muerte de las estructuras atacadas.

Figura 8-112 Hemiberlesia lataniae en zona peduncular del fruto.

Descripción morfológica

La hembra adulta de H. lataniae presenta este caparazón de forma circular, aplanado a levemente convexo, de coloración grisácea, de 1,5 a 2,0 mm de diámetro, con un área apical redondeada de color anaranjado, generalmente subcentral, que contiene las mudas (exuvios). Bajo esta cubierta protectora se encuentra el cuerpo de la hembra, de color amarillo brillante, aplanado dorsoventralmente y de apariencia piriforme, carente de alas, patas y ojos (Figuras 8-114 a 8-116 y 8-118).

R. Ripa

Una de las características más notorias de los diaspídidos es la presencia de un caparazón circular blanquecino alojado principalmente en frutos, ramas y ramillas del árbol y en ocasiones en hojas, sin embargo, cuando la población es elevada, la forma de la cubierta de la escama es irregular. Esta estructura actúa como cubierta protectora contra las agresiones físicas y químicas del ambiente, cuyas propiedades de dureza e impermeabilidad constituyen una barrera efectiva para el control químico.

Figura 8-113 Hemiberlesia lataniae en ramillas y frutos.

Esta especie es próxima a H. rapax (Comstock), pero difiere fundamentalmente porque presenta poros perivulvares, los peines glandulares son más ramificados y los macroconductos son delicados y poco numerosos.

En el Cuadro 8-4 se presentan algunas características morfológicas registradas para las 3 especies de escamas presentes en palto, útiles en la identificación de cada especie.

R. Ripa

Se ha observado otra especie de escama, Aspidiotus nerii Bouché, la escama blanca de la hiedra, que ataca al palto, pero con menor frecuencia que la anterior. Sus hábitos de desarrollo y daño son similares a H. lataniae, sin embargo se diferencia de ésta principalmente por presentar un caparazón con coloración blanquecina y por la ubicación central del exuvio.

Figura 8-114 Hembras adultas e instar I de Hemiberlesia lataniae en fruto.

165

R. Ripa

R. Ripa

Manejo de plagas en paltos y cítricos

Figura 8-115 Pupoide macho, hembra de Aspidiotus nerii y hembra de Hemiberlesia lataniae (de izquierda a derecha).

Figura 8-116 Hemiberlesia lataniae en ramilla.

Cuadro 8-4 Criterios de diferenciación de especies del complejo de Escamas blancas asociadas a palto.

Especie de Escama

Posición exuvio N° lóbulos (1ª muda)

N° poros perivulvares

Ø apertura anal

Distancia apertura anal y base de lóbulos (Ø apertura anal)

A. nerii Central 3 pares 4 grupos

Pequeño largo de 1 lóbulo principal

= 3 diámetros de apertura anal de distancia al extremo

H. lataniae Excéntrico 1 par Pocos poros

Mediano largo de lóbulos

≥ 1 diámetro de apertura anal de distancia al extremo

H. rapax Excéntrico 1 par Sin poros

Grande suma de lóbulos

= apertura anal y lóbulos adyacentes

Biología La reproducción de las especies del género Hemiberlesia es partenogenética, a diferencia de la escama blanca de la hiedra, en que existe participación de machos en el proceso reproductivo. Se estudió el ciclo de vida de H. lataniae en laboratorio, a través de infestaciones dirigidas y observaciones periódicas, identificando la duración de cada estadio de desarrollo y el ciclo completo de vida sobre zapallo cacho (Cucurbita moschata) utilizado como sustrato. El desarrollo en laboratorio, que se inicia con la eclosión de la ninfa I y seguidos de los estados juveniles, al igual que en otras especies de la familia Diaspididae, consiste de tres estadios demarcados por la presencia de 2 mudas (Cuadro 8-5), con una duración del ciclo de vida de aproximadamente 168 días (26 ± 2 °C, 65 ± 5% HR, 14: 10h L: O). La escama latania alimentada con zapallo cacho completó su desarrollo desde el primer al tercer instar con el

Cuadro 8-5 Ciclo de vida de H. lataniae en condiciones de laboratorio.



Estadio

Días



Instar 1

12



Instar 2

12



Instar 3

144

84% de supervivencia. Las hembras de H. lataniae presentaron una mortalidad gradual en el tiempo, concentrada en individuos de edad avanzada. La fecundidad registrada para la escama latania presenta valores máximos los días 46 y 58. H. lataniae es una especie ovípara, que deposita los huevos bajo la cubierta protectora (Figuras 8-117). A partir de su eclosión surgen las ninfas migratorias o crawlers, único estado móvil de la plaga, de color amarillo, de cuerpo ovalado y con ojos y patas bien desarrolladas.

166

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 8-117 Hembra de Hemiberlesia lataniae con el caparazón retirado mostrando huevos y ninfa migratoria (flecha).

Figura 8-118 Cuerpo y cubierta protectora de Hemiberlesia lataniae.

Los estados ninfales pasan por una fase migratoria y una sésil, caracterizada por la presencia del caparazón o armadura dorsal: las larvas permanecen bajo el caparazón de la hembra desde unas pocas horas hasta uno o dos días dependiendo de las condiciones ambientales, en particular de la temperatura, para emerger por una apertura en el extremo caudal de la escama madre.

• Permanente desarrollo de ninfas migratorias a través de la temporada.

Las ninfas migratorias caminan buscando un lugar adecuado en el árbol para alimentarse, fijándose sobre ramas, ramillas, hojas y frutos, principalmente aquellos que se encuentran en contacto con las ramas infestadas. Esta migración puede ocurrir entre unas pocas horas a cuatro o cinco días de la emergencia, dispersando incluso hasta árboles vecinos transportadas por el viento.

Hospederos

En el momento del establecimiento forman un caparazón ceroso de color blanco que protege el cuerpo del insecto. El desarrollo posterior ocurre con la escama firmemente adherida al tejido de la planta. La fluctuación poblacional de H. lataniae en un huerto de paltos de la comuna de Hijuelas, registró (Gráfico 8-11): • La presencia de 2 generaciones anuales en huertos de palto de la zona central. • Mayor presencia de estadios inmaduros (los más susceptibles a las alternativas biológicas y químicas de manejo de la plaga) en el mes de diciembre. • Traslape de generaciones durante toda la temporada. • Permanencia en el tiempo de las hembras adultas (densidad promedio por ramilla de 60 individuos), lo que se traduce en una prolongada ovipostura que incrementa la abundancia de la plaga.

• Colonización y establecimiento de ninfas migratorias en el fruto entre diciembre y enero, en los que completa una generación y parte de la segunda si éstos permanecen un período prolongado en el árbol.

H. lataniae se presenta sobre un gran número de plantas hospederas, afectando a diversas especies especialmente frutales, como kiwi, duraznero, manzano, palto, peral, maracuyá, níspero, olivo y vid. Entre las especies forestales infesta acacias, olivo, ombú, sauces, laurel de olor, entre otros.

Enemigos naturales Entre los enemigos naturales asociados a la Escama blanca del palto se encuentran, principalmente, los coccinélidos depredadores Rhizobius lophanthae y Coccidophilus citricola, y parasitoides del género Aphytis (Hymenoptera: Aphelinidae). Las hembras de Aphytis parasitan preferentemente estadios inmaduros de la plaga, mientras que larvas y adultos de R. lophanthae y de C. citricola depredan sobre todos los estadios de la escama.

Parasitoides. Varias especies de parasitoides han sido usadas con éxito en el control biológico de escamas, destacándose el género Aphytis (Hymenoptera: Aphelinidae) a nivel mundial. El género Aphytis incluye avispas pequeñas muy diversas en su apariencia, biología y hospedantes, parasitando preferentemente estadios inmaduros de la plaga.

167 Manejo de plagas en paltos y cítricos

70,0

Escamas / ramilla

60,0 50,0 40,0 30,0 20,0 10,0

[

Ninfa migr.

Inmaduros

Adultos

dic

nov

oct

sep

ago

jul

jun

may

abr

mar

feb

ene

0,0

]

Gráfico 8-11 Fluctuación poblacional de H. lataniae en ramillas, palto var Hass. Hijuelas, Región de Valparaíso (2006).

La mayoría de las especies de Aphytis en estado adulto requieren de néctar como alimento suplementario o bien se alimentan de la hemolinfa de su hospedero en un proceso conocido como host feeding, en que insertan el ovipositor en el cuerpo de la escama o conchuela y consumen el fluido al salir de la herida, comportamiento presente en muchos parasitoides himenópteros y que causa mortalidad de los hospederos casi tan elevada como la propia actividad de parasitismo (Van Driesche 2007) (ver Capítulo 4: Control biológico). En los monitoreos realizados sobre la plaga en huertos de palto, se registró la presencia de individuos del género asociados a estadios inmaduros en época invernal pero en muy bajas densidades, determinándose la incorporación de A. diaspidis Craw (Hymenoptera: Aphelinidae) como parasitoide de H. lataniae al estudio (Navea, 2007). Esta avispa es un ectoparasitoide facultativo gregario que presenta una reproducción estrictamente partenogenética, asociado a varias especies de escamas pertenecientes a los géneros Aonidiella, Aulacaspis, Lepidosaphes, Parlatoria, Quadraspidiotus y Hemiberlesia.

la potencialidad de control que ofrece el parasitoide en un contexto de MIP. La hembra de A. diaspidis tiene el cuerpo amarillo, al igual que sus patas. En la base del ala anterior tiene una pequeña mancha negra. Mide aproximadamente 1 mm de largo. El cuerpo de la pupa es de color negro brillante, destacándose esta coloración en la región torácica y abdominal, mientras que su cabeza es amarilla como sus apéndices. Su ciclo de vida alcanza desde 10 días hasta 4 semanas aproximadamente a mediados del verano (Figura 8-119). Fue estudiado el desempeño como parasitoide de A. diaspidis sobre H. lataniae en laboratorio enfrentado a distintos instares de la escama latania, registrando una tasa de parasitismo más alta cuando se le ofreció ejemplares del tercer instar de la plaga. Sobre individuos del primer estadio no se registró parasitismo.

La especie A. diaspidis fue estudiada en condiciones de laboratorio, observando: • Que se reproduce de preferencia sobre estadios inmaduros de la escama blanca del palto, sugiriendo que su liberación en el campo debe estar sincronizada con la presencia de este estadio de la plaga. • Una tasa de mortalidad de escamas cercana al 60%, causada por la ovipostura del parasitoide en laboratorio.

• Una capacidad de multiplicación de su población significativamente superior a la de la plaga, verificando

R. Ripa

• Se estima que su hábito de alimentación (host feeding), causa el 10% de mortalidad. Figura 8-119 Adulto de Aphitis spp, parasitoide de escamas.

168 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

La mortalidad registrada del 8% en el primer instar de la escama latania se asumió causada por alimentación sobre el hospedero (host feeding), observándose signos de succionamiento del cuerpo de la escama.

encuentran atacando las escamas en los huertos frutales de Chile permitirá determinar el mejor ajuste entre el parasitoide y su hospedero, para posteriormente, introducir, producir y liberar las mejores razas de enemigos naturales.

A. diaspidis alimentado con el tercer instar de la escama latania completó su desarrollo entre larva y adulto con el 56% de sobrevivencia. Sin embargo, este parasitoide no completó su desarrollo cuando se alimentó con individuos del primer instar de desarrollo de la plaga. Además, A. diaspidis completó su ciclo de desarrollo significativamente más rápido al ser alimentado con el tercer instar de la escama latania.

Depredadores. Asociados a este complejo de escamas destacan los coleópteros depredadores de la familia Coccinellidae, Rhizobius lophanthae y Coccidophilus citricola. Larvas y adultos se alimentan de escamas, caracterizándose por presentar una relación densodependiente con la población de la plaga y ser generalistas en sus hábitos alimenticios.

Las hembras de A. diaspidis presentaron una mortalidad gradual en el tiempo, con, mortalidades concentradas en individuos de edad avanzada.

Estos coleópteros depredan H. lataniae y otras especies de escamas una vez que aumenta el tamaño de la población de la plaga, contribuyendo de forma complementaria con los parasitoides, de acción controladora mas específica.

La fecundidad del parasitoide registró los mayores valores los días 20 y 21 del ciclo de vida

El coccinélido R. lophanthae se reconoce como uno de los enemigos naturales de mayor frecuencia asociado al complejo de escamas blancas (Figura 8-138). El individuo adulto es una chinita de tórax rojizo y élitros negros cubiertos de pelos muy finos, que se diferencia del adulto de C. citricola principalmente en su coloración completamente negra y brillante, y por ausencia de pelos (Figuras 8-120 y 8-121). Las larvas de esta última son grisáceas y tanto o más voraces como depredadores que el adulto (Figura 8-137).

Asociados a los estudios de desarrollo, sobrevivencia y fecundidad de la Escama blanca del palto y su parasitoide A. diaspidis, se obtuvieron y analizaron los parámetros de tabla de vida para ambas especies con el fin establecer el potencial de control de la plaga. En este contexto, la tasa intrínseca de crecimiento (rm) que indica el potencial de desarrollo de una población, fue estadísticamente más alta para A. diaspidis que para la escama latania, indicador fundamental del potencial de control que tiene sobre su hospedero (ver Capítulo 7: Dinámica de poblaciones).

Manejo

Considerando que los parámetros de tabla de vida varían entre razas de especies (Stenseng et al. 2003; Liu 2007), es necesario caracterizar molecularmente, a nivel específico y de raza, los diaspídidos (Morse y Normark 2006) y parasitoides asociados (Stouthamer et al. 1999; Pinto et al. 2002) con el fin de lograr una correcta identificación. La diferenciación genética de razas de A. diaspidis que se

Figura 8-120 Adulto de Coccidophilus citricola.

R. Ripa

R. Ripa

Monitoreo. La infestación por H. lataniae se presenta principalmente en la zona inferior del árbol, en las ramillas más bajas y ocultas y cercanas al tronco. En las hojas, su establecimiento sigue un patrón característico, alojándose en la parte basal y alrededor del nervio medio, en ambos lados de la hoja. La escama se presenta

Figura 8-121 Adultos de Coccidophilus citricola.

169

R. Ripa

R. Ripa

Manejo de plagas en paltos y cítricos

Figura 8-122 Orificio realizado por depredador en la caparazón de Hemiberlesia lataniae.

Figura 8-123 Huevos de Coccidophilus citricola bajo la caparazón de Hemiberlesia lataniae.

sobre toda la superficie del fruto, sin embargo se observa frecuentemente alrededor del pedúnculo.

el 80% de mortalidad a los 15 días después de la aplicación y el 100% a partir de los 30 días (Gráfico 8-12).

Los focos de la plaga en el huerto, debido a su distribución agregada, son identificados a través del monitoreo. En estos focos, se debe marcar los árboles y observar frutos y ramillas registrando la presencia de escamas, depredadores y parasitoides, además de observar su presencia sobre hospederos secundarios cercanos.

Por otro lado, sobre individuos adultos, Imidacloprid registró casi el 70% de mortalidad, a los 15 y 30 días después de la aplicación del producto, incrementando luego hasta el 95% en comparación a los otros productos evaluados (Gráfico 8-13).

Se requiere establecer un registro mensual de la presencia, abundancia y estadios predominantes de la plaga observando 5 ramillas de 20 cm y 10 frutos por árbol sobre 10 árboles, por cuartel, cuantificando además, la presencia de enemigos naturales de la escama en los focos detectados. Estudios de la fenología de la plaga registran en el mes de diciembre una mayor presencia de estadios inmaduros, los más susceptibles a las alternativas de manejo. A partir de la cuaja, debe examinarse cuidadosamente los espacios cercanos al pedúnculo del fruto, lugar de colonización y establecimiento de ninfas migratorias. Los estados pequeños en el fruto son difíciles de distinguir, por lo tanto se debe usar una lupa de mano de 10x.

Control químico. Se evaluó distintos ingredientes activos, en particular aquellos productos registrados para su uso en paltos. Los ingredientes activos Imidacloprid y Metomilo, y el aceite mineral fueron evaluados obteniendo una alta mortalidad de la plaga al ser aplicados en el mes de diciembre, cuando los estadios inmaduros eran predominantes, minimizando además el desplazamiento de las ninfas migratorias al fruto en crecimiento. El ingrediente activo Imidacloprid fue altamente efectivo sobre individuos inmaduros de la plaga, alcanzando

El producto Jasmonato fue evaluado registrando una mortalidad cercana al 70% sobre todos los estadios de la plaga evaluados, a los 45 días después de realizada la aplicación. Es importante destacar la calidad de la aplicación química en el caso del control químico de escamas, ya que es sumamente importante lograr un mojamiento abundante y uniforme al interior del árbol para aumentar las probabilidades de lograr un control efectivo de la plaga (ver Capítulo 5: Control químico). Aunque los ingredientes activos evaluados resultaron ser efectivos sobre la escama latania, bioensayos de laboratorio realizados por el INIA La Cruz sobre el parasitoide A. diaspidis y el depredador R. lophanthae, registraron una alta susceptibilidad a los productos mencionados y en general a los utilizados en el control químico de escamas, lo que debe ser considerado al momento de su aplicación y la liberación de estos enemigos naturales en el huerto (ver Capítulos 5: Control químico). Un componente importante del manejo de H. lataniae es el control de las ninfas migratorias con el fin de evitar su desplazamiento hacia el fruto y su colonización, dado que la presencia del insecto obliga a su remoción manual o descarte de fruta una vez cosechada. Se recomienda aplicar Imidacloprid, otro neonicotinoide o aceite mineral con muy buen cubrimiento de preferen-

170 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

120

% mortalidad inmaduros

100 80 60 40 20 0

Confidor forte

Lannate

Productos utilizados:

[

15 días

Citroliv 2%

Imidacloprid Metomilo Aceite mineral

30 días

= = =

Testigo

Confidor forte 350 Lannate 90 Citroliv miscible

45 días

60 días

]

Gráfico 8-12 Efectividad de plaguicidas sobre estadios inmaduros de H. lataniae. Hijuelas (diciembre 2006).

% mortalidad adultos

100 80 60 40

20 0

Confidor forte

Lannate

Productos utilizados:

[

15 días

Citroliv 2%

Imidacloprid Metomilo Aceite mineral

30 días

= = =

Testigo

Confidor forte 200 SL Lannate 90 Citroliv miscible

45 días

60 días

]

Gráfico 8-13 Efectividad de plaguicidas sobre adultos de H. lataniae. Hijuelas (diciembre 2006).

cia en diciembre, de manera de evitar que el fruto sea colonizado por las ninfas migratorias El Gráfico 8-14 muestra el momento óptimo de control, tanto químico como biológico, identificando los momentos de mayor susceptibilidad de la escama a los productos químicos utilizados, tradicionales y noveles y a los enemigos naturales presentes.

Control cultural: • Poda de ramas o ramillas cercanas al suelo y en el interior del árbol, con el fin de eliminar la plaga e impedir que continúe multiplicándose sobre estas estructuras. • Eliminar malezas reconocidas como hospederas de la plaga.

171 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Liberación en. naturales

Liberación en. naturales

Aplicación química

oct

nov

dic

ene

[

feb

mar

Ninfa migr.

abr

may

Inmaduros

jun

jul Adultos

ago

sep

]

Gráfico 8-14 Esquema de la fluctuación poblacional de H. lataniae asociada al manejo de paltos.

Escama blanca de la hiedra Oleander scale Aspidiotus nerii (Bouché) (Hemiptera: Diaspididae) R. Vargas, R. Ripa y S. Rodríguez

Distribución en Chile e importancia Aspidiotus nerii es una especie cosmopolita y altamente polífaga presente en diversos hospederos de importancia económica tanto frutales como ornamentales y forestales, nativos e introducidos. Se encuentra asociada a cítricos y paltos junto a Hemiberlesia lataniae, en bajas densidades. Se extiende entre la Región de Arica y Parinacota (XV) y la Región del Maule (VII) e Isla de Pascua (Prado 1991).

Daño La escama blanca de la hiedra es una plaga frecuente y de gran importancia económica en cítricos y palto, siendo el principal daño su presencia en el fruto, encontrándose principalmente en la zona peduncular, sitio de difícil remoción durante el proceso de poscosecha. Los daños más graves los produce en el fruto ya que, por la inyección de saliva, alrededor del escudo se produce una aureola verdosa. Además, y quizás más relevante en términos económicos, se produce descarte del fruto por la presencia de la

escama en él. Estos daños, al igual que en el caso de H. lataniae, son directos y ocasionados por los efectos acumulados de la alimentación de la escama que provocan la destrucción de las células y la exposición del tejido vascular a la desecación y a patógenos. Sin embargo, el daño surge de manera indirecta por la propia presencia de la escama sobre los frutos, lo que disminuye su valor comercial (Figuras 8-124 y 8-125).

Descripción morfológica La hembra adulta de A. nerii presenta un caparazón blanquecino circular levemente convexo, con mudas o exuvios de ubicación central. Este caparazón sirve como cubierta protectora del cuerpo de la hembra, aplanado dorsoventralmente, de apariencia piriforme y de color amarillo brillante, constituyendo además una barrera efectiva para el control químico. Las escamas ubicadas sobre limones adquieren un color amarillo anaranjado (Figura 8-125).

Biología La reproducción de A. nerii es sexual, con participación de machos en el proceso. El ciclo de vida de esta escama en laboratorio, utilizando zapallo cacho como sustrato (Cucurbita moschata), registró la presencia de tres estadios limitados por 2 mudas, con una duración del ciclo de vida de aproximadamente 100 días. A. nerii, al igual que H. lataniae, es una especie ovípara, cuya escama madura deposita los huevos bajo la cubier-

172

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 8-124 Aspidiotus nerii en ramilla de palto var Fuerte.

Figura 8-125 Aspidiotus nerii sobre limón.

Enemigos naturales

ta protectora. A partir de su eclosión surgen las ninfas migratorias o crawlers, único estado móvil de la plaga, de color amarillo, de cuerpo ovalado y con ojos y patas bien desarrolladas, por una apertura en el extremo caudal de la escama madre. Los crawlers caminan buscando un lugar en ramillas, hojas y frutos donde establecerse y comenzar su alimentación.

Entre los enemigos naturales asociados a la Escama blanca de la hiedra se encuentran, al igual que para H. latania, los coccinélidos depredadores Rhizobius lophanthae y Coccidophilus citricola, y parasitoides del género Aphytis (Hymenoptera: Aphelinidae).

Parasitoides. Parasitoides del género Aphytis (Hymenoptera: Aphelinidae) se encuentran estrechamente asociados al complejo de escamas blancas que se encuentra en palto, destacando la especie A. melinus que parasita estadios inmaduros de la plaga. A. melinus es un ectoparasitoide facultativo gregario de reproducción partenogenética (Cuadro 8-6). Cuerpo y patas de la hembra son de color amarillo, con alas casi transparentes, y mide aproximadamente 1 mm de largo (Figura 8-127).

R. Ripa

La mortalidad total de la escama se registra a través del parasitismo que realiza A. melinus asociado a su acción de alimentación (host feeding), obteniéndose en laboratorio, un mayor porcentaje de mortalidad de escamas inmaduras que de adultas.

Figura 8-126 Pupoide macho de Aspidiotus nerii con el caparazón retirado.

Hospederos A. nerii se presenta sobre un gran número de plantas hospederas, afectando a diversas especies de frutales, entre ellos kiwi, duraznero, manzano, palto, peral, maracuyá, níspero, olivo y vid.

Depredadores. Asociados a este complejo de escamas destacan los coleópteros de la familia Coccinellidae, Rhizobius lophanthae y Coccidophilus citricola. Larvas y adultos de estos depredadores se alimentan de adultas y estados inmaduros de escamas, sin embargo, se observó una mayor depredación de adultas sobre la escama blanca de la hiedra (Cuadro 8-7).

Monitoreo El monitoreo sugerido es similar al realizado con H. lataniae, observando 5 ramillas y 10 frutos de 20 árboles

173 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Cuadro 8-6 Características biológicas de A. melinus. Tipo de reproducción

Arrenotoquia (macho por partenogénesis)

Ciclo de vida (días)

12 a 13 (26,7°C)

T° de desarrollo óptimo

26,7°C - 50%

Longevidad de la hembra (días)

29,8 (25°C)

Progenie (N° huevos por hembra)

67,4 (25°C)

Umbral teórico de desarrollo Observaciones

rales para determinar el momento óptimo de control. Se debe identificar los focos de la plaga en el huerto, marcar los árboles, observar frutos y ramillas registrando la presencia de la plaga, de depredadores y parasitoides, y observar la presencia de la plaga e insectos benéficos sobre hospederos secundarios cercanos al huerto. Es importante en el manejo de A. nerii, como sobre H. lataniae, el control de las ninfas migratorias para evitar su desplazamiento al fruto y posterior colonización, considerando que la presencia de la plaga obliga a su remoción manual o descarte de fruta en poscosecha. Seguir las recomendaciones de manejo entregadas para H. lataniae.

11°C Tolerante a calor extremo, pero no a bajas temperaturas

Escama roja Red Scale / California red scale Aonidiella aurantii (Maskell) (Hemiptera: Diaspididae) R. Ripa, F. Rodriguez, P. Larral y S. Rojas

R. Ripa

Distribución en Chile e importancia

Figura 8-127 Adulto de Aphytis melinus.

por cuartel, para establecer presencia o ausencia de la plaga en estas estructuras. Se requiere, además, conocer la abundancia de enemigos naturales asociados a la escama.

Manejo. La estrategia de manejo debe incorporar monitoreo de la densidad de la plaga y de sus enemigos natu-

Cuadro 8-7 Depredación diaria de Rhizobius lophanthae sobre A. nerii.

R. lophanthae

Promedio de escamas depredadas



Larvas

9,9



Adultas

17,8

La Escama roja se encuentra presente en las Regiones I, III, IV, V, VI y RM, con un grado de importancia medio en estas tres últimas regiones. Por lo general, en Chile los huertos comerciales no presentan ataques de esta escama, presentándose ocasionalmente en árboles aislados en huertos con manejo de plagas inadecuado y de preferencia en sectores donde se acumula el polvo en el follaje debido a la cercanía de caminos.

Daño Su presencia altera la coloración y produce deformaciones en el fruto, reduciendo su calidad y valor comercial. En las hojas ocasiona clorosis y caída prematura. En ataques intensos de la plaga, se produce muerte de ramillas, en las que se pueden observar costras de escamas. El daño que produce A. aurantii a nivel del árbol es la pérdida de vigor, disminuyendo su crecimiento y la producción de frutos (Figura 8-128).

Descripción morfológica La hembra adulta de la Escama roja tiene una forma circular y ligeramente convexa, similar a un escudo aplanado. Es de color pardo rojizo y de un tamaño de 1,3 a 2 mm de diámetro. Al levantar el caparazón, se puede observar un cuerpo piriforme de color amarillo.

174

Figura 8-128 (A) Fruto y (B) hoja de limón infestado con Aonidiella aurantii.

Cuando la hembra ha sido fecundada y comienza a originar ninfas migratorias, su cuerpo se adhiere al caparazón y se produce una retracción del pigidio, formándose dos prominentes lóbulos a sus costados (Figuras 8-130 y 8-131). Las ninfas de la escama macho presentan una forma alargada, de tonalidades más claras y menor tamaño que las hembras (Figura 8-129). El macho adulto es un pequeño insecto alado, con antenas plumosas y una línea transversal característica en el tórax.

R. Ripa

R. Ripa

(B)

(A)

R. Ripa

(A)

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

(B) Figura 8-129 (A) Macho (flecha) y (B) juveniles alrededor de hembra de Aonidiella aurantii.

La Escama roja es un insecto vivíparo cuyas hembras paren entre 100 a 150 ninfas migratorias que salen del caparazón y dispersan hasta que se establecen en alguna parte de la hoja, ramilla o fruto. Generalmente escogen pequeñas depresiones donde insertan un delgado aparato bucal en los tejidos para succionar savia de la planta. Luego comienzan a secretar una cubierta cerosa blanquecina, lo que constituye el inicio de la formación del caparazón. En este estadio de desarrollo, el insecto es conocido como “gorrita blanca”. En las siguientes mu-

R. Ripa

Biología

Figura 8-130 Cuerpos de Aspidiotus nerii (izquierda) y Aonidiella aurantii (derecha).

175

R. Ripa

Manejo de plagas en paltos y cítricos

Figura 8-131 Preparación microscópica del cuerpo de Aonidiella aurantii mostrando detalle del pigidio a la derecha (preparación A. Cardemil).

Las mayores poblaciones de la Escama Roja se encuentran generalmente en la parte alta de los árboles, donde llegan las ninfas migratorias diseminadas principalmente por el viento y por los operarios durante la cosecha y otras labores en el huerto. La presencia de hormigas recolectando mielecilla de otras plagas en las plantas, afecta el control biológico de la Escama roja.

R. Ripa

En Chile, ocurren alrededor de 3 a 5 generaciones en el año las que se encuentran traslapadas.

Figura 8-132 Hembra adulta con ninfa migratoria emergiendo bajo el escudo de Aonidiella aurantii.

das se va originando el color rojizo anaranjado que las caracteriza. La hembra presenta tres estadios de desarrollo ninfal y durante el último de ellos queda preparada morfológicamente para la reproducción, con el pigidio en el borde del caparazón, lo que permite la cópula con el macho alado. Posteriormente, la hembra retrae el pigidio con lo que evita que otros machos puedan inseminarla nuevamente. La hembra continúa su desarrollo solo si ha sido inseminada por el macho, tardando alrededor de 12 días para iniciar la producción de ninfas migratorias.

Hospederos Se encuentra casi exclusivamente asociada a cítricos: limonero, mandarino, naranjo y pomelo. Ha sido registrada también en rosales.

Enemigos naturales Para el control biológico de esta plaga fueron introducidos, hace más de cuatro décadas, 2 parasitoides de la familia Aphelinidae, Aphytis melinus De Bach y Aphytis lingnanensis Compere, los cuales han logrado disminuir las poblaciones de esta plaga. El parasitoide más frecuente es A. melinus (ver descripción asociada a la “Escama blanca de la hiedra”, A. nerii). Las escamas en estado de parasitismo avanzado, se tornan más oscuras y al levantar su caparazón se observa la pupa del parasitoide de color negro, rodeada de meconio, excremento que la larva desarrollada evacua antes de pupar (Figuras 8-133 y 8-134).

176 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

cer la abundancia de enemigos naturales asociados a la escama.

Larvas y adultos de los coccinélidos Coccidophilus citricola Bretes y Rhizobius lophanthae (Blaisd.) depredan sobre todos los estadios de la Escama roja (Ver descripción asociada a Escama blanca del palto, Hemiberlesia lataniae) (Figuras 8-120 a 8-123, 8-137 y 8-138).

La estrategia de manejo debe incorporar, como en los casos de escamas anteriores, monitoreo de la densidad de la plaga y de sus enemigos naturales para determinar el momento óptimo de control. Se debe identificar los focos de la plaga en el huerto, marcar los árboles, observar frutos y ramillas registrando la presencia de la plaga, de depredadores y parasitoides.

Figura 8-135 Adulto de Aphytis spp parasitoide de Aonidiella aurantii.

R. Ripa

Figura 8-134 Pupas de Aphytis spp rodeadas de pellets de meconio y cuerpo vaciado de Aonidiella aurantii (flecha).

R. Ripa

Figura 8-133 Larva de Aphytis spp sobre cuerpo de Aonidiella aurantii.

R. Ripa

En caso de observarse la presencia de esta plaga en el huerto, se debe muestrear frutos y ramillas después de la cuaja y luego en tres intervalos regulares hasta la cosecha. El monitoreo sugerido es similar al realizado con H. lataniae, observando 5 ramillas y 10 frutos de 20 árboles por cuartel, para establecer presencia o ausencia de la plaga en estas estructuras. Se requiere, además, cono-

R. Ripa

Monitoreo

Manejo. En general, esta plaga se ubica preferentemente en valles con influencia costera, asociándose a jardines, huertos abandonados o caseros y aquellos donde la calidad de las aplicaciones químicas es deficiente.

Figura 8-136 Huevo de Coccidophilus citricota (flecha) bajo la escama depredada de Aonidiella aurantii.

177

R. Ripa

R. Ripa

Manejo de plagas en paltos y cítricos

Figura 8-137 Larva de Rhizobius lophanthae.

Figura 8-138 Adulto de Rhizobius lophanthae.

Control. Lavar los árboles que se encuentran con polvo en las hojas, especialmente en sectores cercanos a caminos. Aparentemente, el polvo disminuye la efectividad de los parasitoides.

Parinacota, donde se encuentra ampliamente distribuida (Klein 2000).

Si la infestación afecta al 2% de los frutos se recomienda aplicar aceite mineral al 1%. Esta aplicación requiere una muy buena cobertura del árbol (ver Capítulo 5: Control químico). Evitar las aplicaciones reiteradas de insecticidas fosforados y carbamatos los que eliminan a los enemigos naturales. Es importante controlar hormigas, ya que aún cuando la Escama roja no excreta mielecilla y no existe una relación mutualista como con otros insectos chupadores, la presencia de hormigas en la planta interfiere la acción controladora de los enemigos naturales de la escama (ver Capítulo 9: Importancia y manejo de hormigas en el MIP). Previo a la plantación de un huerto examinar las plantas en el vivero con el fin de asegurar que están libres de esta y otras escamas. En la eventualidad que presenten escamas utilizar un insecticida neonicotinoide.

Escama morada de los cítricos Purple scale Lepidosaphes beckii (Newman) (Hemiptera: Diaspididae) R. Ripa, F. Rodriguez, P. Larral y S. Rojas

Distribución en Chile e importancia Se encuentra presente asociada a cítricos de la I, III, IV, V, VI y RM, de preferencia en zonas con influencia costera. Es económicamente importante en la Región de Arica y

La presencia de esta especie en huertos indica una inadecuada aplicación de insecticidas en el árbol.

Daño La escama causa clorosis en el área donde se alimenta. Esta especie se adhiere fuertemente a los frutos, dificultando su limpieza en la planta de embalaje. Ataques intensos causan marchitez y finalmente su caída, dependiendo del grado de infestación. En ramillas se produce deshidratación y muerte, llegando a la muerte de ramas e incluso de árboles completos.

Descripción morfológica La hembra posee un caparazón alargado y curvado en forma de coma de 2 a 4 mm de largo y de color castaño claro a pardo oscuro con tintes rojizos (Figura 8-139). En su parte ventral, se observa una membrana blanca que queda adherida al caparazón y cubre esta parte del cuerpo cuando el insecto es desprendido de su substrato. Este es de forma alargada y de color blanco con el pigidio amarillo. Sus bordes son serrados. El estadio ninfal que origina al macho es alargado, de lados casi paralelos, más pequeño que la hembra y de coloración similar. El macho adulto es un insecto con alas membranosas, tres pares de patas, un par de antenas. Su cuerpo es de color ligeramente púrpura con el extremo caudal alargado como un fino punzón. No se alimenta y no sobrevive más de dos días, siendo su única función fecundar a la hembra (Figura 8-140).

178 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Biología

Hospederos Esta escama se tiene como hospederos exclusivamente en cítricos como limonero, mandarino, naranjo y pomelo.

R. Ripa

L. beckii es una especie ovípara y bivoltina. Las hembras ponen entre 40 a 80 huevos de color blanco perlado y forma alargada (Figura 8-141). De éstos, emergen ninfas migratorias de color blanco que se ubican de preferencia cerca de la hembra que los originó, hábito que favorece la concentración de escamas como costras, a veces de bastante espesor. Allí introducen su aparato bucal en los tejidos de la planta para alimentarse tras lo cual comienza a formarse el caparazón y desarrollarse los estadios que siguen hasta adulto. Ocasionalmente se alojan debajo de los sépalos que se encuentran adheridos al fruto.

Figura 8-139 Lepidosaphes beckii sobre fruto, al centro escama con orificio emergencia de parasitoide adulto.

Enemigos naturales Aphytis lepidosaphes Compere (Hymenoptera: Aphelinidae) es el parasitoide más efectivo sobre la escama morada, desarrollándose externamente sobre el cuerpo de escamas inmaduras (Figura 8-142). Dentro de los depredadores asociados a esta escama se encuentran los coccinélidos Coccidophilus citricola y Rhyzobius lophanthae (ver descripción asociada a H. lataniae) (Figura 8-143).

Muestrear la escama y sus enemigos naturales desde la cuaja hasta la cosecha en ramillas y frutos, principalmente. Es importante la observación del interior del árbol, y como en las otras escamas, se debe realizar monitoreo sobre L. beckii es similar al realizado sobre H. lataniae, observando 5 ramillas y 10 frutos de 20 árboles por cuartel, para establecer presencia o ausencia de la plaga en estas estructuras. Se requiere, además, conocer la abundancia de enemigos naturales asociados a la escama.

R. Ripa

Monitoreo Figura 8-140 Macho alado de Lepidosaphes beckii.

Se recomienda aplicar aceite mineral al 1% ante ataques que comprometan el 2% de los frutos del árbol. La aplicación es más efectiva cuando las hembras no tienen huevos bajo el caparazón y la población esta constituida mayoritariamente por estados inmaduros.

R. Ripa

Manejo. La estrategia de manejo debe incorporar monitoreo de la abundancia de la plaga y de sus enemigos naturales para determinar el momento óptimo de control e identificar los focos de la plaga en el huerto, marcando los árboles y/o focos infestados. El monitoreo debe considerar frutos y ramillas registrando la presencia de la plaga, de depredadores y parasitoides.

Figura 8-141 Huevos y cuerpo de Lepidosaphes beckii.

179

R. Ripa

Manejo de plagas en paltos y cítricos

Figura 8-142 Larva, pupa y adulto de Aphytis lepidosaphes en Lepidosaphes beckii.

Se recomienda controlar la Hormiga Argentina (ya que interfiere en la acción controladora de los enemigos naturales de la escama), eliminar las ramas infestadas y podar el árbol para abrirlo.

R. Ripa

Previo a la plantación de un huerto examinar las plantas en el vivero con el fin de asegurar que están libres de esta y otras escamas. En la eventualidad que presenten escamas utilizar un insecticida neonicotinoide.

Figura 8-143 Coccidophilus citricola apareádose.

180 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Chanchitos blancos Orden Hemiptera • Familia Pseudococcidae Los chanchitos blancos son insectos que se caracterizan por tener el cuerpo blando de forma ovalada, aplanados dorso ventralmente, patas pequeñas y de tamaño que varía entre 3 y 4 mm de largo. No poseen una división marcada entre los segmentos del cuerpo que se encuentra cubierto por una especie de polvo ceroso de color blanco. Posiblemente la función de la cera es separar de su cuerpo la mielecilla que expelen. En sus bordes laterales, la mayoría de las especies de chanchitos blancos presentes en Chile tienen filamentos cerosos que se proyectan horizontalmente. Estas proyecciones tienen una forma y longitud característica en las diferentes especies, lo que permite en ocasiones su identificación en el campo. Los chanchitos blancos normalmente se agrupan en sectores protegidos de las plantas, en los frutos, grietas, al interior de hojas secas y los brotes, en la base de los árboles y algunas especies en las raíces de las plantas. Como otros insectos que se alimentan de savia, los chanchitos poseen un aparato bucal picador chupador especializado y en su sistema digestivo un órgano que filtra el contenido de lo que succionan, excretando hidratos de carbono en forma de mielecilla que expelen al entorno. Al igual que otras plagas que excretan mielecilla, los chanchitos blancos se asocian con hormigas, en especial la hormiga argentina, Linepithema humile, la cual se alimenta de esta sustancia azucarada, protegiéndolos de la acción de los enemigos naturales. Entre los daños principales que ocasionan los chanchitos blancos se encuentra la depreciación de la fruta por la mielecilla y fumagina asociada y el rechazo cuarentenario por su presencia en la fruta de exportación. Una de las especies de chanchitos blancos más dañino a la citricultura de Chile es el Chanchito Blanco de los Cítricos Planococcus citri, sin embargo, en paltos se ha detectado con similar frecuencia el chanchito blanco de cola larga Pseudococcus longispinus y el chanchito blanco P. calceolariae.

Chanchito Blanco de Cola Larga, Cochinilla harinosa de los invernáculos, Cochinilla algodonosa de los invernáculos Long-tailed mealybug Pseudococcus longispinus (Targioni y Tozzetti) R. Ripa, P. Larral, P. Luppichini, V. Guajardo y S. Rojas

Distribución e importancia Plaga presente en paltos y cítricos, generalmente asociada a otras especies de pseudococcidos. Especie de importancia económica y cuarentenaria para algunos países en específico como es el caso de Corea (Gonzalez y Volosky, 2006), también causa rechazos cuarentenarios cuando se presentan estadios ninfales y huevos y no se puede determinar la especie por lo tanto impide descartar que se trate de otra especie que sí es cuarentenaria. En Chile se distribuye entre las regiones de Arica y Parinacota (XV) y la Región de la Araucanía (IX).

Daño El daño de mayor importancia es el indirecto causado por la presencia en fruta de exportación que puede provocar el rechazo sanitario. En paltos, se detecta la presencia de la plaga en los frutos a partir de la tercera semana de diciembre, es decir en frutitos recién cuajados, la infestación aumenta a medida que el fruto crece, sin embargo, disminuye su presencia a medida que se acerca la cosecha (Gráfico 8-15). En frutos se presentan insectos vivos y muertos, mielecilla y fumagina que afectan su calidad. En cítricos se produce decoloración en las zonas donde el insecto se alimenta. En hojas la fumagina cubre la lámina foliar y afecta la fotosíntesis, pudiendo debilitar árboles en formación cuando las densidades son altas. En paltos, se ha observado que el desarrollo de la fumagina se presenta en los frutos con un desfase con respecto a la infestación (Gráfico 8-15).

181 Manejo de plagas en paltos y cítricos

% frutos infestados o dañados

120 100 80 60 40 20

[

Chanchito blanco

Fumagina

Cosecha

oct 07

ago 07

jun 07

abr 07

feb 07

dic 06

oct 06

ago 06

jun 06

abr 06

feb 06

dic 05

oct 05

ago 05

jun 05

0

]

Gráfico 8-15 Fluctuación del porcentaje de frutos atacados por Pseudococcus longispinus y la presencia de fumagina en paltos var. Hass. La Ligua, Región de Valparaíso (2005-2007).

R. Ripa

Descripción morfológica

Figura 8-144 Pseudococcus longispinus en hoja de palto.

La hembra adulta tiene el cuerpo ovalado con una cubierta de polvo ceroso blanco y mide aproximadamente 4 mm de longitud. Presenta una franja longitudinal en el dorso, más o menos ancha, con menos cera, la que se observa grisácea. Posee filamentos marginales finos y tan largos como la mitad del ancho del cuerpo a excepción de los filamentos caudales que pueden ser tanto o más largos que su cuerpo, característica que permite su rápida identificación a simple vista. Los filamentos subcaudales (segundo par de cerarios), son paralelos a los caudales y de menor tamaño, aunque mas largos que los laterales. Las ninfas son de aspecto similar a la adulta, sin embargo es común que no se observen los filamentos caudales prominentes, debido a una muda reciente o a que se han removidos por una acción mecánica (Figuras 8-144 y 8-145)

R. Ripa

R. Ripa

El macho de esta especie es un insecto alado de aspecto frágil.

Figura 8-145 Pseudococcus longispinus en fruto de mandarina.

Figura 8-146 Prepupoide macho de Pseudococcus longispinus.

182 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Cuadro 8-8 Tiempo generacional de hembras y machos de P. longispinus en 2 épocas del año y distintas estructuras de palto var. Hass en huerto comercial. Quillota, Región de Valparaíso (2007-2008).

Época*

Estructura

Días promedio que demora cada estadio en desarrollarse



Hembra**

Macho**

Otoño

Hoja

156

98

Primavera

Hoja

89

67

Otoño

Ramilla

161

104

Primavera

Brote terminal

75

62

Primavera

Pedúnculo de fruto

112

65

* Inicio ensayo: Otoño 05 de marzo, Primavera: 06 septiembre. ** Hembra: desde ninfa neonata hasta que la hembra coloca la primera ninfa migratoria. Macho: desde ninfa neonata hasta que el macho adulto muere. Fuente: Gonzalo Ibáñez, datos no publicados, tesis de biólogo PUCV, 2008.

Las hembras son vivíparas, es decir, las ninfas migratorias nacen directamente de la hembra, por lo tanto no genera saco ovígero. De acuerdo a (Ibañez, 2008), cada hembra produce entre 90 y 220 ninfas migratorias dependiendo de la época del año y la estructura del árbol sobre la cual se alimentan, la mayor fecundidad se presenta en época de verano sobre brotes de palto. De acuerdo al estudio de tiempo generacional de la plaga realizado por Ibañez (2008), que se presentan en el Cuadro 8-8, el ciclo de P. longispinus desde Ninfa migratoria neonata, hasta que la adulta pare su primera ninfa migratoria, es dependiente entre otros factores del sustrato u órgano de la planta en el que se desarrolla y de las condiciones ambientales. Se observó que el ciclo de la hembra demora entre 75 días sobre brotes en primavera a 161 días sobre ramillas en otoño, asimismo el tiempo generacional del macho neonato bajo las condiciones del ensayo (celdillas de confinación colocadas en cada estructura de la planta en huerto comercial), demoró entre 62 a 104 días en brote de primavera y ramilla de otoño respectivamente. Los estadios ninfales de la plaga se dispersan en el árbol alcanzando estructuras expuestas como son brotes, frutos y en menor medida hojas, mientras que las ninfas de tercer estadio y adultas buscan lugares protegidos para depositar la descendencia. La fluctuación de la abundancia de la población de Pseudococcidos con predominancia de P. longispinus en brotes y frutos de un huerto de paltos ubicado en la comuna de La Ligua, se muestra en el Gráfico 8-16. En frutos la población de la plaga aumenta en el período de crecimiento de los mismos y disminuye su abundancia a medida que se acerca la cosecha, comportamiento que puede estar relacionado con la mayor concentración y/o composición de asimilados (Sink) al

fruto en desarrollo, lo que explicaría también la mayor abundancia de la plaga en brotes en crecimiento a inicios de primavera (Figura 8-147). En general se ha observado que de las dos especies de chanchito presentes en paltos, P. calceolariae predomina en frutos y P. longispinus en brotes. En lugares protegidos de la planta se refugian depredadores, chanchitos momificados, hembras y sus ninfas migratorias recién depositadas. A través de trampas de agregación (cartón corrugado), en los troncos o ramas

Hembra adulta

Ninfa migratoria

Ninfa I

Macho adulto Ninfa II

Pupoide

Ninfa III Hembra preadulta

C. Tobar

Biología

Figura 8-147 Ciclo de vida de Pseudococcus longispinus.

183 Manejo de plagas en paltos y cítricos

(B)

25,0 20,0 15,0 10,0 5,0

[

P. Longispinus fruto

P. Longispinus brote

P. Calceolariae fruto

P. Calceolariae brote

ene 08

oct 07

nov 07

jul 07

ago 07

abr 07

may 07

dic 06

ene 07

oct 06

jul 06

sep 06

jun 06

abr 06

mar 06

dic 05

feb 06

nov 05

jul 05

sep 05

jun 05

may 05

0,0

]

30

600

25

500

20

400

15

300

10

200

5

100

0

0 jun 05 jul 05 ago 05 oct 05 dic 05 ene 06 feb 06 abr 06 may 06 jul 06 ago 06 sep 06 nov 06 ene 07 mar 07 may 07 jun 07 ago 07 sep 07 oct 07 dic 07

Chanchitos parasitados depredadores / trampa

Chanchitos / Estructura

30,0

Chanchitos blancos / trampa

(A)

[

Chanchitos blancos Chanchitos parasitados

Depredadores

]

Gráfico 8-16 Fluctuación de la densidad de Pseudococcidos y sus enemigos naturales en (A) brotes y frutos. (B) Trampas de agregación, de palto var. Hass. La Ligua, Región de Valparaíso (2005-2007).

madres, que simula los refugios de la planta, se pueden monitorear dichas especies, determinar los períodos de oviposición y estimar la abundancia de la plaga en la parte aerea, ya que a través de varios muestreos llevados a cabo en la Región de Valparaíso se observó que existe similitud en la fluctuación de la plaga en frutos y en las trampas de agregación (Gráfico 8-16A comparado con Gráfico 8-16B). Se estima que P. longispinus en paltos y cítricos completa 3 generaciones al año en la zona central del país.

Hospederos Especie común en huertos de Paltos y cítricos, en estos últimos es más frecuente en mandarinos y naranjos. También se reproduce en frutales como: peral, manzano, guindo, vid, níspero, caqui, lúcumo, olivo, mango, guayabo, maracuyá, higo y una amplia variedad de plantas ornamentales y especies forestales.

Enemigos naturales Parasitoides. Los parasitoides de chanchitos blancos oviponen y se desarrollan en el interior de su hospedero causándole la muerte. Durante este periodo, ocurren algunos cambios en la forma del insecto parasitado el cual pasa a denominarse “momia” y contiene en su interior la o las larvas o pupas del parasitoide. La forma y color que adquiere la momia depende de la especie del enemigo natural que se encuentra en su interior. Estos individuos tienden a ocultarse. Las trampas de agregación, por lo general cartón corrugado colocado en las ramas madres como refugio artificial, constituyen un adecuado índice de la actividad de los enemigos naturales en el huerto. El Gráfico 8-16B muestra la abundancia de parasitoides y depredadores detectados en un huerto ubicado en La Ligua, Región de Valparaíso, donde la especie de pseu-

dococcido predominante es P. longispinus. Las especies de parasitoides detectadas fueron Cocophagus gurneyi (90%), Pseudaphycus spp nr. Angelicus (7%) y Tetracnemoidea brevicornis (3%). En junio de 2007 INIA La Cruz internó desde Holanda al país el Anagyrus fusciventris (Girault) encírtido endoparasitoide de ninfas de tercer estadio de P. longispinus, con el fin de mejorar el control biológico de los estadios avanzados de la plaga, que en muestreos sistemáticos previos a través de la temporada habían mostrado una baja proporción de individuos parasitados. La efectividad de esta especie y su adaptación al medio se encuentra actualmente en período de evaluación en el campo. El desarrollo de A. fusciventris desde huevo a adulto demora alrededor de 3 semanas a un temperatura de 25°C. El parasitoide adulto ovipone preferentemente en estadios avanzados del hospedero, depositando 1 huevo por individuo. Posee además la capacidad de alimentarse de la hemolinfa de su hospedero (host feeding), hábito que aumenta la vida del parasitoide y a su vez puede provocar la muerte de ninfas pequeñas de chanchito. Los adultos muestran dimorfismo sexual, las hembras son gris-pardo y tienen ojos azul brillante, la parte proximal de sus antenas son ensanchadas. Los machos son negros. Ambos sexos miden aproximadamente 3 mm. Los chanchitos parasitados son “momificados” y se tornan de una coloración levemente más oscura que los individuos sanos. Los parasitoides desarrollados al interior del chancho momificado, emergen a través de un orificio en la parte distal del capullo, dejando una especie de tapa (Figuras 8-148 y 8-149). El Cuadro 8-9 muestra como se asocian los parasitoides a las distintas especies de pseudococcidos, es decir su capacidad para parasitarlos y sobre que estadios actúan.

184

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 8-148 Hembra adulta de Anagyrus fusciventris.

Figura 8-149 Macho adulto de Anagyrus fusciventris.

Cuadro 8-9 Asociación de parasitoides con las distintas especies de Pseudococcidos presentes en paltos y cítricos.

Plagas

Parasitoides Coccophagus gumeyi

Aenaslus punctatus

Planococcus citri Chanchito blanco de los cítricos

Coccidoxenoides Leptomastídea peregrina abnormis Ninfa I

Ninfa I

Leptomastix dactylopii

Leptomastix epona

Pseudaphycus flavidulus

Pseudaphycus angelicus

Tetracnemoidea brevicomis

Ninfa II

Pseudococcus calceolariae Ninfa II Chanchito blanco

Ninfa I

Pseudococcus longispinus Ninfa II Ninfa III Chanchito blanco de cola larga

Ninfa I

Pseudococcus vibumi Ninfa II Chanchito blanco de la vid

Coccophagus gurneyi Compere. Afelínido importado desde Estados Unidos en 1936. Destacado parasitoide de Pseudococcus calceolariae y de P. longispinus. La hembra es de color negro con una banda amarillenta transversal al comienzo del abdomen, el cuerpo en el estado adulto mide alrededor de 1 mm de largo. El macho es completamente negro y algo más pequeño que la hembra. Las hembras oviponen en ninfas de segundo estadio. El chanchito parasitado se transforma en una momia de forma aguzada con un leve color oscuro o verde petróleo. Se encuentra muy bien establecido a lo largo de todo el país (Figuras 8-151 y 8-152). Tetracnemoidea brevicornis (Girault) (= Tetracnemus pretiosus Timberlake). Encírtido importado desde Estados Unidos en 1944. Parasitoide de P. longispinus y de P. calceolariae presente a lo largo de todo el país, sin embargo en seguimiento realizado en La Ligua no se presentó en densidades significativas asociado a P. longispinus. Las hembras son pequeñas avispas de color negro azulado, cuyo tamaño bordea 1 mm. Los machos son de color negro,

Ninfa II a preadulta

Ninfa I a hembra adulta

ligeramente más grandes que las hembras y con antenas ramificadas en cuatro prolongaciones. Las hembras parasitan ninfas pequeñas, dando origen a momias pequeñas con forma de barril de un color blanquecino con una mancha negruzca en uno de sus extremos (Figura 8-153). Aenasius punctatus (Compere) Encírtido, parasitoide de escasa acción controladora sobre P. longispinus. Tanto las hembras como los machos son de un color negruzco, el cuerpo del adulto es de tamaño algo mayor a 1 mm. Las hembras parasitan ninfas de tercer estadio cuya momia es de color amarillento, fácilmente distinguibles por su tamaño, y da lugar a una momia de mayor tamaño que la originada por T. brevicornis y C. gurneyi. Pseudaphycus spp nr. angelicus. Encírtido parasitoide de P. longispinus. Su presencia es escasa al igual que su acción de control sobre chanchito

Depredadores. En general se puede observar que la abundancia de los depredadores de la plaga esta estre-

185

(A)

R. Ripa

Manejo de plagas en paltos y cítricos

(B)

Figura 8-151 Hembra de Coccophagus gurneyi parasitando P. longispinus en interior de ombligo de naranja.

R. Ripa

R. Ripa

Figura 8-150 Trampa de agregación de cartón corrugado: (A) Chanchitos blancos en trampa colocada por tres semanas en campo; (B) Trampa colocada en tronco de limonero.

Figura 8-152 Macho de Coccophagus gurneyi.

chamente ligada a la abundancia de los chanchitos blancos en los lugares protegidos donde se refugia (Gráfico 8-16B). Las especies mas abundantes detectadas en monitoreos en la Región de Valparaíso son Cyptolaemus monstrouzieri, Mimoscymnus macula (Germain), Sympherobius spp y Chysoperla spp.

R. Ripa

El Cuadro 8-10 muestra la actividad de los depredadores sobre las distintas especies de pseudococcidos.

Figura 8-153 Momia de Tetracnemoidea brevicornis.

Cryptolaemus montrouzieri. Coccinélido importado desde Estados Unidos entre el año 1931 y 1946. En 1995 se importó desde California un strain colectado desde una zona templada en Australia, y en 1996 un strain que se alimentaba también los estados juveniles de Conchuela negra Saissetia oleae. Es una de las primeras especies de coccinélidos introducidos al país que mostró una efectividad notable en el control de chanchitos blancos, oca-

186 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Cuadro 8-10 Asociación de depredadores con las distintas especies de Pseudococcidos presentes en paltos y cítricos.



Depredadores



Coleopteros



Coccinélidos

Neuropteros

Dípteros

Hemeróbido

Crisópodo

Sírfido

Chamamido

Adalia deficiens

Cryptolaemus montrouzieri

Hyperaspis funesta

Mimoscymnus macula

Sympherobius maculipennis

Chrysoperla spp (Crisopa)

Ocyptamus confusus

Leucopis spp

Pseudococcus calceolariae Chanchito blanco

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Planococcus citri Chanchito Blanco de los cítricos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Huevos, ninfas y adultos

Plagas

Pseudococcus longispinus Chanchito blanco de cola larga

Pseudococcus vibummi Chanchito blanco de la vid

sionalmente se encuentra depredando ninfas de la Saissetia oleae, sin embargo su reproducción es mejor sobre chanchitos. Al provenir de regiones más cálidas tiene dificultades de aclimatación durante el invierno desde la Región Metropolitana al sur, por lo que debe ser permanentemente liberado. Las internaciones más recientes de individuos provenientes de zonas más templadas han mostrado una mejor adaptación a las condiciones invernales que se presentan en el área citrícola de la Zona Central. El adulto de Cryptolaemus es una “chinita” que mide entre 2,5 y 3 mm, tiene los élitros de un color azul oscuro a negro con una franja rojizo anaranjada en el borde posterior, cabeza y protórax. La larva se encuentra cubierta de penachos de cera blanca, es de forma similar al chanchito blanco, aunque de mayor tamaño y desplazamiento más rápido. Tanto las larvas como los adultos son depredadores de huevos, ninfas migratorias, ninfas y adultos de diferentes especies de Pseudococcidos, en especial de las especies ovíparas. Las hembras adultas oviponen principalmente en las masas algodonosas de huevos de chanchito. Los huevos son de color blanquecino, de un tamaño entre 0,3 y 0,4 mm. Una vez que la larva completa su desarrollo pupa en grietas, hojas secas enrolladas en la parte aérea y sobre el suelo. Se considera el depredador más importante de chanchito blanco en el país dado que muestra una elevada capacidad de depredación y control de la plaga.

presenta un tamaño de 1,8 a 2 mm de largo por 1mm de ancho, es de color café claro, con antenas y patas cortas. Cada élitro presenta dos manchas más claras de forma redondeada. Las larvas son de color blanquecino y presentan el cuerpo completamente cubierto por vellosidades (Figura 8-154). Sympherobius maculipennis Kimm. Neuróptero, Hemerobiidae, endémico de Chile, depredador de chanchitos blancos (P. citri, P. calceolariae, P. longispinus, P. viburni). Los adultos poseen grandes alas membranosas con una venación muy marcada, ojos sobresalientes y antenas largas y filamentosas. El cuerpo tiene una coloración parda. Las hembras ponen alrededor de 120 huevos (Comunicación personal con Lidia Lizarde). Las larvas de estos depredadores son alargadas con un engrosamiento en la parte central del cuerpo. Poseen un aparato bucal adaptado para perforar y succionar el contenido de sus presas. La

Mimoscymnus macula (Germain) Coccinélido endémico depredador de numerosas especies de chanchito blanco en cítricos, paltos y otros vegetales. El cuerpo del adulto

R. Ripa

Se ha observado que tanto larvas como adultos permanecen mayor tiempo buscando chanchito en hojas con mielecilla que sin ella. Una vez que la plaga desaparece deben existir hospederos alternativos para que este depredador no muera, como por ejemplo el acacio bola, utilizado frecuentemente como árbol urbano. Figura 8-154 Mimoscymnus macula adulto depredador de Chanchitos blancos.

187

R. Ripa

Figura 8-156 Capullo de Sympherobius maculipennis.

R. Ripa

Figura 8-155 Larva de Sympherobius maculipennis depredando pseudoccocidos.

R. Ripa

R. Ripa

Manejo de plagas en paltos y cítricos

Figura 8-157 Adulto de Sympherobius maculipennis depredando pseudoccocidos.

Figura 8-158 Parasitoide adulto de la larva de Sympherobius maculipennis.

larva en su último estadio teje un capullo alargado de seda poco compacto, mediante una sección del extremo de su abdomen. Este depredador es hiperparasitado por Solenofigitis lautus De Santi de alrededor de 3 mm de largo. El tejido del capullo de Sympherobius permite observar el hiperparasitoide (Figuras 8-155 a 8-158).

superficie y son algo difíciles de observar, pues frecuentemente se encuentran cubiertas por restos de la colonia de chanchitos (Figuras 8-179 a 8-181).

Leucopis spp. Díptero de la familia Chamaemyiidae depredador endémico de P. longispinus, P. citri, P. calceolariae, P. viburni y Phenacoccus spp. Los adultos son de un típico color gris y tamaño aproximado de 2 mm. Las hembras colocan pequeños huevos de un color blanco entre las colonias de chanchitos. Las larvas, carecen de patas y son de un color blanquecino y 3 mm de tamaño. Se mueven activamente entre los individuos de la colonia de chanchitos alimentándose de huevos y ninfas. Cuando alcanzan su máximo desarrollo se transforman en pupas de una característica coloración pardo a castaño oscuro y tamaño cercano a 2,5 mm, éstas permanecen adheridas a la

Ocyptamus confusus Goot. (= Baccha valdiviana Phil.). Sírfido depredador endémico de P. longispinus, Planococcus citri, Pseudococcus calceolariae y P. viburni. La larva da origen a una pupa piriforme, blanquecina con manchas circulares de color pizarra, que adquiere un color pardo oscuro, piriforme y de tamaño cercano a 3 mm (Figura 8-159 A y B). Hyperaspis funesta Germ., Coccinélido depredador endémico de chanchito blanco (P. citri, P. calceolariae, P. longispinus, P. viburni). Adultos pequeños de tamaño no mayor a 2 mm, con alas negras con manchas rojizas más o menos redondeadas. Cuando las larvas alcanzan un tamaño medio de 4 a 5 mm se asemejan a las larvas de Cryptolaemus, aunque de menor tamaño y mayor abundancia

188

(A)

(B)

Figura 8-159 Sírfido depredador de chanchitos blancos. (A) adulto y (B) pupa.

de penachos de cera blanca, de preferencia se alimentan de huevos de chanchito. La poca abundancia que se observa de larvas de Hyperaspis, se debe probablemente a la existencia de un hiperparasitoide que causa la mortalidad de las pupas. Cuando el alimento es escaso los coccinélidos en general pueden alimentarse de huevos y larvas pequeñas de lepidópteros, arañitas, trips e incluso presentar canibalismo, alimentándose de huevos y larvas pequeñas de su misma especie. Los depredadores generalistas, el coccinélido Adalia deficiens y el neuroptero Chrysoperla spp, también se alimentan de Chanchitos blancos, sin embargo es más común encontrarlos depredando afidos, capitulo en el cual son descritos con mayor detalle.

Manejo Monitoreo. Muestrear mensualmente frutos, brotes, grietas y hojas secas en el árbol y cercanas al tronco. En cítricos examinar además bajo los sépalos y el ombligo en naranjas, ya que allí se encuentran individuos pequeños. Al igual que en otras plagas se recomienda determinar la presencia de la plaga y sus enemigos naturales en la estructura monitoreada y calcular el porcentaje o proporción que se encuentra infestada. Inspeccionar las malezas y otros arbustos para determinar la presencia de la plaga y sus enemigos naturales y determinar la pertinencia de mantenerlos, eliminarlos o realizar acciones destinadas al control de la plaga. Colocar 10 bandas de cartón corrugado por cuartel de 2 a 4 ha con el fin de determinar la abundancia y diversidad de enemigos naturales y comparar la cantidad de chanchitos presentes con el resultado del muestreo en frutos. Instalar los cartones en el tronco principal en cítricos y ramas madres en paltos.

Control químico. El control de los chanchitos blancos se dificulta por la cubierta cerosa de su cuerpo y su hábito de ocultarse de la luz, impidiendo el contacto de los plaguicidas con el insecto, dificultad que incrementa al localizarse en el ombligo de naranjas. Por otra parte se ha establecido el efecto de la asociación de la hormiga argentina con los chanchitos sobre la efectividad del control biológico, razón por la que se debe excluir la hormiga argentina del árbol (ver Capítulo 9: Importancia y manejo de las hormigas en el MIP). De acuerdo a los estudios realizados por INIA La Cruz y observaciones de campo, se indican en el Cuadro 8-12 el nivel de efectividad relativa de insecticidas para pseudococcidos. El período crítico para el manejo del complejo de pseudococcidos es el comprendido entre los meses diciembre y enero. En la producción para exportación, se debe intervenir en cuanto se detecten los primeros individuos en los frutos, aplicando un insecticida de acuerdo a efectividad, registro en los países de destino, cercanía a la cosecha (período de carencia), modo de acción, susceptibilidad del fruto a fitotoxicidad (aceites minerales, detergentes), selectividad a enemigos naturales, entre otros factores a considerar. En la aplicación con aceite debe lograrse un muy buen cubrimiento utilizando el volumen requerido de acuerdo al tamaño del árbol, equipo y presión recomendada por el fabricante (ver capítulo “uso de plaguicidas”). En naranjos navel utilizar pitón y codo aplicando desde abajo hacia arriba para obtener penetración del caldo en la cavidad del ombligo que aloja la plaga. Cuando la densidad de la plaga es baja se recomienda aplicar aceite mineral al 1,5%. Un incremento en la eficacia se obtiene al parcializar la aplicación de aceite mine-

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

189 Manejo de plagas en paltos y cítricos

80,0

% frutos infestados

70,0 60,0 50,0 40,0 30,0 20,0 10,0 0,0

Buprofezin Buprofezin Metomilo Metomilo Clorpirifos Clorpirifos +surfactante +surfactante +surfactante

[

30 días

45 días

60 días

Testigo

]

* Productos comerciales utilizados: Buprofezin = Applaud 25 WP Surfactante = Silwet L77 AG Metomilo = Lannate 90 Clorpirifos = Lorsban 4E

Gráfico 8-17 Efecto de insecticidas en la proporción (%) de frutos infestados con Pseudoccocidos en naranjo var. Lane late. Quillota, aplicación diciembre de 2007 (dosis recomendadas por el fabricante*).

(B) 6,0 Depredadores / trampa

% frutos infestados

120 100 80 60 40 20 0

Thiametoxam

[

Thiamet. Riego

Previo

Buprofezin

15 días

Buprofezin+surf

Imidacloprid

30 días

Imida. Riego

60 días

4,0 3,0 2,0 1,0 0,0

Testigo

]

5,0

[

Thiame- Thiamet. Bupro- Bupro- ImidaRiego fezin fezin+surf cloprid toxam

Imida. Riego

Testigo

9 8 7 6 5 4 3 2 1 0

Cnachitos momificados/trampa

(A)

Momias 15 días

Momias 30 días

Momias 60 días

Depredadores 15 días

Depredadores 30 días

Depredadores 60 días

]

* Productos comerciales utilizados: Thiametoxam = Actara 25 WG Imidacloprid = Confidor Forte 200 SL Imidacloprid Riego = Confidor 350 SC Buprofezin = Applaud 25 WP Surfactante = Silwet L77 AG

Gráfico 8-18 Efecto de plaguicidas en el control de chanchitos blancos y abundancia de parasitoides y depredadores. Paltos var. Hass. La Cruz, Región de Valparaíso, aplicación 14 de febrero de 2007. (A) Frutos de paltos infestados; (B) Enemigos naturales en trampas de agregación.

ral al 1% en dos oportunidades separadas una de la otra por 20 días, mejorando así el cubrimiento. El ingrediente activo clorpirifos es menos selectivo que el aceite mineral, sin embargo, es más efectivo, protege el fruto por un período mayor de tiempo que el aceite y se deberá preferir ante ataques más intensos en cítricos. Buprofezin es un efectivo insecticida inhibidor de la quitina que actúa durante la muda del insecto. Este pro-

ducto tiene la ventaja de ser moderadamente tóxico para enemigos naturales. Requiere ser aplicado con anterioridad en comparación a otros insecticidas, mezclándolo con humectantes (ejemplo un surfactante organosiliconado). El uso de los humectantes mejora también la efectividad de otros productos, como el clorpirfos y metomilo (Gráfico 8-17 y Figura 8-160).

190 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

120,0

% frutos infestados

100,0 80,0 60,0 40,0 20,0 0,0

Aceite 2%

[

Aceite 1% (doble vol)

Ac1% + Ac1%

Clorpirifos + Ac1%

4 días

Previo

12 días

Clorpirifos 25 días

Testigo

]

* Productos comerciales utilizados: Clorpirifos = Lorsban 4E Aceite mineral = Citroliv miscible

Gráfico 8-19 Efectividad del uso de aceite mineral y clorpirifos en el control de chanchitos blancos en naranjas var. Atwood. Región Metropolitana, Melipilla 1998 (dosis recomendadas por el fabricante*).

(A)

(B)

60,0

% frutos infestados

% frutos infestados

70,0 50,0 40,0 30,0 20,0 10,0 0,0

Thiametoxam

[

Clorpirifos

Previo

Aceite Mineral 10 días

Imidactoprid

Buprofezin

30 días

Metomilo 60 días

Testigo

]

* Productos comerciales utilizados: Clorpirifos = Lorsban 4E Aceite mineral = Citroliv miscible Imidacloprid = Confidor Forte 200 SL Thiametoxam = Actara 25 WG Buprofezin = Applaud 25 WP Metomilo = Lannate 90

80,0 70,0 60,0 50,0 40,0 30,0 20,0 10,0 0,0

[

Thiametoxam

Clorpirifos

Aceite Mineral

30 días postaplicación

Imidactoprid

Buprofezin

Metomilo

60 días postaplicación

Testigo

]

* Productos comerciales utilizados: Thiametoxam = Actara 25 WG Clorpirifos = Lorsban 4E Aceite mineral = Citroliv miscible Imidacloprid = Confidor Forte 200 SL Buprofezin = Applaud 25 WP Metomilo = Lannate 90

Gráfico 8-20 Efectividad de plaguicidas en el control de chanchitos blancos. (A) Frutos de paltos; (B) En brotes de paltos var. Hass. Quillota, Región de Valparaíso, aplicación 29 de abril de 2007 (dosis recomendada por el fabricante*).

Los neonicotinoides, como, imidacloprid, thiametoxam y acetamiprid son efectivos en el control de pseudoccocidos, y tienen la ventaja de ser sistémicos, pudiendo ser aplicados al riego, método a través del cual muestran un efecto más lento que la aplicación foliar (Gráfico 8-18). Es importante considerar que estos productos son poco selectivos para enemigos naturales y pueden aumentar la fecundidad de arañitas fitófagas. En paltos de acuerdo a la fenología de la plaga y el cultivo, el control químico debe ser efectuado cuando co-

mienza el aumento de la población y las ninfas se dispersan en el árbol, que corresponde aproximadamente al mes de enero (zona central de Chile), adecuando la oportunidad de acuerdo al monitoreo y el producto a utilizar (Gráfico 8-21). En general, se recomienda para los sectores más infestados, aplicar clorpirifos, metomilo, imidacloprid o thiametoxam en los meses ya indicados, corroborados por los datos proporcionados por el monitoreo. La efectividad de estos productos fue estudiada por Ripa y Larral

191 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Monitoreo Aplicación química

Liberación de enemigos naturales

Cosecha

Liberación de enemigos naturales

oct

nov

dic

ene

feb

mar

[

Fruto

abr

may Brote

jun

jul

ago

sep

]

R. Ripa

(A)

R. Ripa

Gráfico 8-21 Esquematización de la fluctuación poblacional de Pseudococcidos en brotes y frutos de palto y oportunidad de control.

(B)

Control cultural. La mantención de un árbol equilibrado nutricional y arquitectónicamente ayuda a minimizar el impacto de las plagas, ya que aumenta los factores de mortalidad. En este sentido es importante evitar que las ramas tomen contacto con el suelo, mantener un árbol aireado y evitar la presencia de “chupones” o brotes con exceso de vigor. Producción orgánica. Control biológico, control de hormigas, aplicaciones de aceite mineral orgánico y lavados con detergente.

R. Ripa

(2007), y los resultados de dichos ensayos se observan en los Gráficos 8-19 y 8-20. Cuando la plaga es detectada tempranamente, el producto buprofezin (Gráfico 8-18), ha mostrado alta efectividad, pero lenta acción. Para el control de chanchitos blancos la aplicación con maquinaria provista de pitón es más efectiva que la efectuada con nebulizadora.

(C) Figura 8-160 Aspecto de Planococcus citri: (A) Sin aspersión; (B) Agua con colorante; (C) Con colorante y adherente siliconado (Silwet).

192 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Chanchito Blanco de los Cítricos o Cochinilla algodonosa Citrus mealybug, Cotonet Planococcus citri (Risso) R. Ripa, P. Luppichini, P. Larral, V. Guajardo y S. Rojas

Distribución e importancia Plaga de importancia primaria en cítricos, en los que puede encontrarse asociada a otros especies de pseudococcidos. Se distribuye entre las regiones de Arica y Parinacota (XV) y la del Libertador Bernando O’Higgins (VI).

Daño Frutos: La mielecilla mancha los frutos, permitiendo el desarrollo de fumagina que junto a los restos de insectos muertos y lanosidad disminuye su calidad. Además, la alimentación de los insectos causa cambios de coloración. Ataques intensos pueden provocar la caída de frutos. La presencia de la plaga bajo los sépalos (roseta) o en otro sector del fruto, en producción destinada a la exportación, origina problemas cuarentenarios dada la dificultad para identificar los estados ninfales.

eclosionan son de tamaño y coloración similar al huevo, pero más aplanadas y con pequeñas antenas, éstas se distribuyen a frutos y brotes. Las hembras posee tres estadios ninfales, su coloración varía de amarillo los más pequeños a grisáceo a medida que mudan. Los machos, poseen el primer y segundo estadio ninfal similar a la hembra, aunque de menor tamaño, luego se desarrolla un prepupoide y pupoide (Figura 8-161 y 8-164), que se observa como un capullo algodonoso alargado del cual emergen, en aproximadamente once días un adulto alado, de aspecto frágil (Figura 8-166).

Biología Presenta entre tres y cuatro generaciones anuales que se superponen, por lo que en cualquier época del año se pueden encontrar todos los estados. Durante el invierno disminuye su densidad y es más frecuente encontrar masas de huevos. En el verano y otoño se observa la mayor cantidad de machos en las trampas de feromona, éstos se aparean con las hembras, sin embargo, este no es requisito para producir descendencia. Las hembras adultas se localizan preferentemente en frutos que están en contacto entre sí, entre hojas o ramas, grietas y en el ombligo de naranjas, donde realizan la ovipostura.

Hojas: La fumagina disminuye la absorción de luz e interfiere con la fotosíntesis. Ramillas: Al alimentarse de la savia, afectan el crecimiento del follaje y en general, reducen el vigor del árbol.

Huevos

Ninfa I

Descripción morfológica

La hembra deposita los huevos de 0,4 mm, forma ovalada y color amarillo en un saco ovígero algodonoso de forma irregular (Figura 8-163). Las ninfas migratorias que

Hembra adulta

Macho adulto Ninfa II

Pupoide

Preadulta Ninfa III

Figura 8-161 Ciclo de vida de Planococcus citri.

C. Tobar

La hembra adulta tiene el cuerpo ovalado y cubierto con finas partículas de cera de color blanco. Sobre su parte dorsal media, desde el mesotórax hasta el antepenúltimo segmento abdominal se extiende una banda casi desprovista de cera, mostrando el cuerpo un color blanco grisáceo. En sus bordes se aprecian gruesos filamentos laterales de forma cónica que corresponde a proyecciones de cera. Estos filamentos son cortos y robustos, algo más largos hacia el extremo posterior del cuerpo. El par caudal, de un tamaño aproximado a 1/4 del largo del cuerpo, diverge ligeramente hacia el exterior del eje longitudinal.

193 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Hospederos

La población de la plaga es más abundante en frutos durante los meses de verano, en brotes en cambio la población es mayor durante el crecimiento vegetativo de principios de otoño y en menor medida durante la brotación de primavera, lo que dependerá en cierta medida de la mortalidad provocada por las condiciones climáticas del invierno (Gráfico 8-22).

[

Chanchito fruto

Chanchito brotes

25,0 20,0 15,0 10,0 5,0

Cnachitos/fruto o brote

30,0

Frutos infestados

oct 07

sep 07

jun 07

ago 07

0,0 may 07

sep 06

% frutos infestados

nov 06

0,0 sep 06

0,0 ago 06

2,0

jun 06

20,0

may 06

4,0

abr 06

40,0

mar 06

6,0

feb 06

60,0

ene 06

8,0

dic 05

80,0

80,0 70,0 60,0 50,0 40,0 30,0 20,0 10,0 0,0 mar 07

10,0 Cnachitos/fruto o brote

100,0

]

Gráfico 8-22 Abundancia poblacional de Pseudococcidos en frutos (90% P. citri) y brotes de limonero y proporción de frutos infestados en: (A) Nogales var Eureka; y (B) La Ligua var.

Figura 8-163 Hembra de Planococcus citri y saco ovigero.

R. Ripa

R. Ripa

Figura 8-162 Hembras de Planococcus citri en ramilla de limonero.

R. Ripa

% frutos infestados

(B)

CREC.FR. FLORACION CREC. VEGETATIVO

ene 07

COSECHA

nov 06

CRECIMIENTO FLORACION CREC. VEGETATIVO

oct 06

(A)

Los cítricos naranjo, limonero, mandarino y pomelo. La plaga afecta además caqui, granado, chirimoyo, guayabo y mango. Se le encuentra también en plantas ornamentales como Bougainvillea, Gardenia, Amaryllis, Dieffenbachia, Philodendron y Nerium, entre otras.

Figura 8-164 Prepupoide macho de Planococcus citri.

194

Figura 8-165 Hembras de Planococcus citri y hormiga argentina sobre limón.

Enemigos naturales Parasitoides. Anagyrus pseudococci (Girault) encírtido endoparasitoide de P. citri fue internado al país por INIA La Cruz en Enero de 2007 desde Israel. Tras su liberación ha sido recuperado de muestras de campo y se encuentra actualmente en etapa de evaluación de su efectividad. A. pseudococci es una especie arrhenotoquica, es decir, los huevos fertilizados producen hembras y los no fertilizados producen machos. El parasitoide prefiere 3er estadio de la plaga, pero también parasita 2° estadio y hembras jóvenes. A. pseudococci posee 5 estadios, pupa en el chanchito momificado y emerge a través de un orificio de la parte posterior de la momia. Desde huevo a adulto el ciclo dura 14 días a 26°C. Los machos se desarrollan levemente más rápido que las hembras. El umbral mínimo de desarrollo es 13°C y el superior 38°C. Una hembra de A. pseudococci pone 15 huevos por día cuando cuenta con hospedero en exceso. Se atrae fuertemente a la luz y es inactivo en la oscuridad. Los adultos muestran dimorfismo sexual, las hembras son pardas doradas de 1,5 a 2,0 mm y antenas negras en su base y blancas en su extremo. El macho es mas pequeño (0,8 a 0,9 mm de largo) y de color negro (Figuras 8-167 y 8-168). Coccidoxenoides peregrina (Timberlake) (= Pauridia peregrina), encírtido nativo del sur de China, importada desde

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 8-166 Macho adulto alado de Planococcus citri.

Estados Unidos en 1954 y desde Israel en 1986. Parasitoide solitario de Planococcus citri. El adulto es una pequeña avispita negruzca, de un tamaño que varía entre 0,5 y 0,7 mm, con antenas cortas. Normalmente es partenogenético y rara vez se observan machos. Las hembras adultas, rápidamente después de su emergencia, oviponen en los primeros estadios ninfales de chanchito. El parasitoide se desarrolla en el interior del chanchito provocando finalmente su muerte. El chanchito parasitado sufre cambios en la forma de su cuerpo y pasa a denominarse “momia”, ésta contiene en su interior la larva o pupa del parasitoide. La momia es de forma ovoidal, de color blanquecino con una mancha oscura en uno de sus extremos y de tamaño inferior a 1 mm, ésta se mantiene entre los individuos de la colonia de chanchitos. Esta especie se produce comercialmente en otros países para el control de P. citri, gracias a su reducido tamaño es capaz de ubicar y alcanzar aquellos chanchitos que se encuentran en lugares muy protegidos (Figuras 8-169 y 8-170). El Cuadro 8-9 muestra como se asocian los parasitoides a las distintas especies de pseudococcidos. Leptomastidea abnormis (Girault) Encírtido importado desde Estados Unidos entre los años 1931 y 1939, se ha establecido muy bien dentro del país. Endoparasitoide solitario de Planococcus citri. Los individuos de esta especie son pequeñas avispas de color pardo, el cuerpo del adulto mide alrededor de 0,75 mm, con antenas largas. Las delicadas alas presentan bandas transversales de color negruzco, los individuos en reposo colocan las alas en

195

Figura 8-168 Adulto hembra de Anagyrus pseudococci.

R. Ripa

F. Rodríguez

Figura 8-167 Adulto hembra de Anagyrus pseudococci.

R. Ripa

R. Ripa

Manejo de plagas en paltos y cítricos

Figura 8-169 Adulto de Coccidoxenoides peregrina.

Figura 8-170 Momia de Coccidoxenoides peregrina.

forma perpendicular al cuerpo. Las hembras adultas oviponen en los estadios primarios de chanchito, los huevos son depositados libres en la hemolinfa. Los huevos fertilizados dan origen a hembras y los no fertilizados a machos. Una vez que nace la larva comienza a alimentarse de la hemolinfa del chanchito y en sus últimos estadios termina por consumir totalmente el contenido del cuerpo ocasionando su muerte. La momia de Leptomastidea es de color anaranjado con forma de barril de 1,2 mm de largo, similar a la de C. peregrina, y se mantiene entre los individuos de la colonia, o bien separada de estos (Figuras 8-171 y 8-172).

hembras son más grandes que los machos y tienen antenas largas rectas y sin setas, mientras que en los machos son muy pilosas y ligeramente torcidas (Figura 8-173). Las hembras adultas son atraídas por el olor de plantas hospederas infestadas. Pueden discriminar entre chanchitos no parasitados y parasitados evitando oviponer en estos últimos, el hospedero parasitado es rechazado por simple contacto de antenas, por comportamientos defensivos del hospedero o por la detección de un conducto que se prolonga desde el huevo colocado por el parasitoide anterior que emerge por la superficie del hospedero. Si no lo rechaza de inmediato, lo hace después de insertar el ovipositor. Las hembras oviponen de preferencia en ninfas de tercer estadio y hembras preadultas, pero no en aquellas en oviposición.

Leptomastix dactylopii How. Encírtido nativo de Brasil, importado desde Estados Unidos entre los años 1936 y 1958. Endoparasitoide solitario específico de Planococcus citri, no se reproduce bien en otras especies. El adulto es una pequeña avispa de color pardo amarillo, el cuerpo del adulto mide aproximadamente 3 mm de largo. Las

La hembra del parasitoide coloca huevos que darán origen a machos en chanchitos de menor tamaño y los que originarán hembras en individuos de mayor tamaño. La

196

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

% frutos infestados

Figura 8-171 Hembra de Leptomastidea abnormis.

100 90 80 70 60 50 40 30 20 10 0

Aceite A 1%

[

Figura 8-172 Momias de Leptomastidea abnormis.

Aceite A 1,5%

Previo

Aceite B 1% 12 días

Aceite C 1% 30 días

Aceite D 1% 60 días

Testigo

]

Productos comerciales utilizados: Aceite A = Ultraspray Aceite B = Winspray Aceite C = Winspray miscible Aceite D = Citroliv miscible

Gráfico 8-23 Efecto de aceites minerales sobre Pseudoccocidos (predomina P. citri) en limonero var. Eureka. Comuna de Nogales, aplicación diciembre de 2007 (Fuente: Resultados Convenio INIA-ANASAC).

larva en desarrollo transforma al chanchito parasitado en una momia de color ámbar a amarillo verdoso, con forma de barril, de un tamaño que varía entre 1,5 y 2 mm y se encuentra expuesta con respecto a la colonia de chanchitos. El adulto del parasitoide abandona la momia abriendo un orificio en uno de sus extremos. Una vez que ha emergido se alimenta de la mielecilla producida por los chanchitos, la que actúa como fuente de hidratos de carbono suplementaria, sin embargo no se alimenta de la hemolinfa de su hospedero como lo hacen otros parasitoides. Los adultos de este parasitoide presentan una excelente capacidad de búsqueda, pudiendo detectar individuos aislados.

Pese a las repetidas liberaciones efectuadas del parasitoide en la Región de Valparaíso (V) y del Libertador Bernardo O’Higgins (VI), no ha logrado establecerse debido a las bajas temperaturas invernales que no permiten su sobrevivencia, pudiendo encontrarse sólo en la Zona Norte del país e Isla de Pascua. Esta especie se produce comercialmente en otros países para controlar Planococcus citri.

Depredadores. Las especies descritas en P. longispinus, Leucopis spp, O. confusus, C. montrouzieri, H. funesta, Mimoscymnus macula, S. maculipennis y Chrysoperla spp depredan esta especie (Figuras 8-174 y 8-175).

197

Figura 8-173 Adulto de Leptomastix dactylopii.

R. Ripa

R. Ripa

Manejo de plagas en paltos y cítricos

Figura 8-174 Larvas de Cryptolaemus montrouzieri depredando ninfas de Planococcus citri.

Manejo Monitoreo. Muestrear mensualmente el 1% de las plantas del huerto, observando la presencia y abundancia de enemigos naturales en 10 frutos, 10 brotes, grietas y hojas secas enrolladas en el árbol o sobre el suelo cercanas al tronco. Enfatizar muestreos en la primera etapa del crecimiento de frutos para determinar la necesidad de control químico. Examinar la presencia de individuos pequeños bajo el los sépalos de los frutos que son destinados a la exportación y en el área del ombligo de las naranjas. Una forma de estimar mejor la presencia y abundancia de enemigos naturales es colocando cartones corrugados amarrados alrededor del tronco, a modo de refugio artificial, en el cual se protegen, hembras en período de oviposición, chanchitos parasitados y estados juveniles de depredadores.

Control químico. Seguir la indicaciones para P. longispinus. Los resultados de dos ensayos realizados en cítricos, en los que P. citri predominaba sobre otras especies de pseudococcidos, se indican en los Gráficos 8-17 y 8-23. En estos ensayos se confirma la efectividad de buprofezin, metomilo y clorpirifos y el beneficio de añadir un surfactante a estos productos para el control de pseudococcidos. El Cuadro 8-12 muestra la efectividad relativa de los plaguicidas evaluados por INIA La Cruz sobre pseudococcidos.

R. Ripa

Monitorear la presencia y abundancia de hormigas.

Figura 8-175 Adulto de Cryptolaemus montrouzieri.

Control biológico. Liberar el depredador C. montrouzieri, o parasitoides disponibles comercialmente en nuestro país en primavera y verano y potenciar la acción de los enemigos naturales presentes e introducidos controlando el ascenso de hormigas a la planta. Producción orgánica. Control biológico, aplicaciones de aceite mineral orgánico, control de hormigas y lavados frecuentes con detergente a alta presión.

198 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Chanchito Blanco, cochinilla harinosa, cochinilla algodonosa Citrophilus mealybug Pseudococcus calceolariae (Maskell) R. Ripa, P. Larral, P. Luppichini, V. Guajardo y S. Rojas

Esta especie suele encontrarse en árboles con presencia de otros pseudococcidos como P. longispinus en palto y P. citri y P. longispinus en cítricos. Solos o en conjunto conforman un problema de importancia económica en paltos y cítricos, en mayor medida por sus daños indirectos, como es el desarrollo de fumagina sobre hojas y frutos y la connotación cuarentenaria para algunos países de destino. En Chile se presenta entre las regiones de Arica y Parinacota (XV) y de La Araucanía (IX).

R. Ripa

Distribución e importancia

Figura 8-176 Pseudococcus calceolariae en ramilla de palto.

Daño Es una plaga cuarentenaria para los mercados de Corea, Bolivia, Perú, Panamá y Costa Rica, así su presencia en la fruta de exportación a Japón causa rechazo por no permitir insectos fitófagos vivos (González y Volosky, 2006). Por otra parte estadios inmaduros o huevos pueden provocar descarte por la dificultad de diferenciarlos de otras especies. Frutos: Decoloración y manchas con mielecilla y fumagina.

Ramillas: Al alimentarse de la savia, afectan el crecimiento del follaje y en general, reducen el vigor del árbol.

Descripción morfológica La hembra adulta tiene el cuerpo ovalado, color rojizo y cubierto con un polvo ceroso blanco. Sobre ambos costados de la línea media dorsal presenta depresiones más oscuras que el resto del cuerpo las que dan a los dos tercios posteriores del dorso un aspecto reticulado. Posee 17 pares de filamentos laterales en el borde del cuerpo, siendo los caudales más largos que el resto y de aspecto grueso, forma cónica y una longitud equivalente al ancho de su cuerpo. Se diferencia de P. citri por el grosor y tamaño de los filamentos caudales, la coloración más oscura de su cuerpo y la mayor separación entre segmentos (Figuras 8-176 y 8-177).

R. Ripa

Hojas: La fumagina disminuye la absorción de luz e interfiere con la fotosíntesis.

Figura 8-177 Hembras de Pseudococcus calceolariae en la unión del pedúnculo con fruto de palta y fumagina.

Los machos, al igual que otras especies de pseudococcidos son alados en su estado adulto. Las hembras desarrolladas al ser tocadas expelen una gota de líquido en el último segmento abdominal, de color morado. Esta sustancia se solidifica rápidamente (Figura 8-178).

Biología Esta especie tiende a ser gregaria formando colonias compuestas por individuos en diferentes estados de de-

199 Manejo de plagas en paltos y cítricos

sarrollo. La hembra es ovípara y deposita los huevos en masas algodonosas espesas e irregulares en forma y tamaño. De acuerdo a Nuñez (2008), la fecundidad de las hembras de P. calceolariae varía de acuerdo a la época del año, al sustrato en que se alimentan (frutos, brotes, pedúnculo) y a la disponibilidad de machos, oviponiendo en paltos alrededor de 500 huevos al alimentarse en brotes en verano y en frutos en crecimiento, mientras que en hojas o pedúnculos disminuye a 400 huevos por hembra. La fertilidad de estos huevos es decir la proporción de ellos que eclosiona, no sobrepasa el 55%, en condiciones de campo. Según Nuñez (2008) (Cuadro 8-11), en frutos en la etapa de crecimiento (otoño) la plaga se desarrolla desde huevo a adulto en 146 días, sin embargo en primavera, cuando las hembras fueron colocadas sobre frutos en período cercano a la cosecha, las ninfas eclosionadas de esta especie no sobreviven. Esto concuerda con la gradual disminución de la densidad que se observa al acercarse el periodo de cosecha en primavera, disminución que puede estar relacionada con el deterioro de la calidad nutricional o dificultad de acceder al alimento debido a cambios en el tejido. Cabe destacar el acortamiento del ciclo de vida de la hembra en brotes primaverales, las que comparativamente con hojas y pedúnculos de la misma época, demoran el 13% y el 28% más respectivamente, esto probablemente por las diferencias en la calidad nutricional en estos tejidos.

R. Ripa

Figura 8-178 Hembra de Pseudococcus calceolariae con gota que expele en último segmento abdominal.

En el caso de los machos de P. calceolariae, el tiempo generacional en primavera es significativamente menor que el de las hembras, tanto en brotes, hojas como en pedúnculos de paltas. Los hábitos de P. calceolariae son similares a los indicados para otros pseudococcidos, los estadios juveniles colonizan los brotes y paniculas florales, localizándose también en frutos en desarrollo, preferentemente bajo la roseta en cítricos y en la inserción del pedúnculo en paltos (Figura 8-177). En brotes o terminales de paltos la mayor densidad de la plaga se registra desde mayo a septiembre en la Región de Valparaíso, población representada principalmente por ninfas de primer y segundo estadio, en frutos, también predominan los estadios inmaduros de la plaga, registrándose máximos poblacionales entre febrero y julio de cada año (Gráfico 8-24 (B)). En los lugares más protegidos, emuladas por las trampas de agregación colocadas en las ramas madres (Gráfico 8-24), se observa una mayor abundancia de individuos, principalmente masas de huevos y adultos, en al menos tres oportunidades en el año, verano (enero-feberero), otoño (abril) y primavera (septiembre-octubre).

Hospederos Paltos y cítricos (limonero, mandarino, naranjo y pomelo). Otras especies frutales como arándano, caqui, frambueso, membrillo, chirimoyo, ciruelo, duraznero, peral, zarzaparrilla y diversas plantas ornamentales.

200 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Cuadro 8-11 Tiempo generacional de hembras y machos de P. caceolariae bajo condiciones de campo (Quillota, Región de Valparaíso, 2007-2008) sobre palto var. Hass y laboratorio sobre Cucurbita moschata.



Época Estructura del árbol o condición ambiental*

Duración del tiempo generacional (días) Huevo a adulto fértil



Hembra**

Macho**



Otoño

Frutos

146

sin información



Primavera

Frutos

Muere como ninfa I

Muere como ninfa I



Otoño

Pedúnculos

172

sin información



Primavera

Pedúnculos

124

68



Primavera

Brotes

90

62



Primavera

Hojas

104

61



25 ± 5°C

Laboratorio

45

31

* Inicio ensayo: Otoño 26 de febrero, Primavera: 28 septiembre ** Hembra: desde el inicio del período embrionario hasta que la hembra coloca el primer huevo. Macho: desde el inicio del período embrionario hasta que el macho adulto muere. Fuente: Nuñez (2008).

16,0

6,0

P. Longispinus fruto

P. Longispinus brote

P. Calceolariae fruto

P. Calceolariae brote

]

[

Chanchito fruto

Chanchito brotes

nov 07

sep 07

jul 07

abr 07

nov 06

jun 05

dic 07

oct 07

jul 07

may 07

dic 06

mar 07

oct 06

jul 06

mar 06

may 06

ene 06

jul 05

[

nov 05

0,0 sept 05

2,0

0,0

ene 07

4,0

2,0

sep 06

4,0

8,0

jul 06

6,0

10,0

feb 06

8,0

12,0

may 06

10,0

14,0

dic 05

12,0

oct 05

14,0

50 45 40 35 30 25 20 15 10 5 0 ago 05

Cnachitos parasitados depredadores / trampa

18,0

16,0

Cnachitos / trampa

(B)

may 05

Chanchitos / estructura

(A) 18,0

Frutos infestados

]

Gráfico 8-24 Fluctuación de la abundancia poblacional de Pseudococcidos (predomina P. calceolariae) y sus enemigos naturales en: (A) Brotes y frutos; y (B) Trampas de agregación, de palto var. Hass. Quillota, Región de Valparaíso (2005-2007).

Enemigos naturales Los Cuadros 8-9 y 8-10 muestran resumidamente como se asocian los parasitoides y depredadores respectivamente, a las distintas especies de pseudococcidos.

Parasitoides. Los himenópteros C. gurneyi Compere y T. brevicornis (Girault) (= Tetracnemus pretiosus Timberlake), descritos en P. longispinus chanchito blanco de cola larga, parasitan P. calceolariae. Los que se detectan en campo mayormente entre los meses de primavera y verano, en las trampas de agregación, cuando la densidad de chanchitos en estos lugares es mayor (Gráfico 8-24B). C. gur-

neyi es mas abundante en el campo tanto parasitando a P. calceolarieae como a P. longispinus. Cabe destacar que en muestreos realizados durante largos periodos (2 a 3 años), en lugares sin aplicación de plaguicidas, la abundancia y actividad de los parasitoides aumenta, lo que se ha verificado en otras asociaciones como Trips del palto y Thripobius semiluteus.

Depredadores. Las especies descritas en P. longispinus, Leucopis sp (Figuras 8-179 a 8-181) O. confusus, C. montrouzieri, H. funesta, M. macula, S. maculipennis y Chrysoperla spp depredan esta especie. El Gráfico 8-24B muestra

201

80,0

10 9 8 7 6 5 4 3 2 1 0

% frutos infestados

70,0 60,0 50,0 40,0 30,0 20,0 10,0

[

Frutos infestados

Densidad de chanchito

dic 07

oct 07

ago 07

jun 07

abr 07

feb 07

dic 06

oct 06

ago 06

jun 06

abr 06

feb 06

dic 05

oct 05

ago 05

jun 05

0,0

chanchitos/fruto

Manejo de plagas en paltos y cítricos

]

R. Ripa

Gráfico 8-25 Fluctuación de la abundancia de chanchitos blancos en frutos comparado con la proporción de frutos infestados (monitoreo presencia/ausencia). Palto var. Hass. Quillota, Región de Valparaíso (2005-2007).

Figura 8-179 Adulto de Leucopis sp.

la fluctuación de la abundancia poblacional de depredadores de chanchitos blancos, en un huerto de paltos ubicado en Quillota, con presencia de P. calceolariae y P. longispinus para los años 2005-2007. Las especies más abundantes en dicho huero son C. montrouzieri, M. macula y S. maculipennis, cuya abundancia varía en función de la disponibilidad de alimento.

Monitoreo. Monitorear mensualmente frutos, brotes, grietas y hojas secas presentes en el árbol y cercanas al tronco, al igual que en P. citri. Eventualmente revisar la porción del follaje apoyada en el suelo y cubierta por la hojarasca. Para fruta de exportación examinar, bajo los sépalos en cítricos y en la inserción del pedúnculo en paltas, ya que allí se encuentran individuos pequeños.

R. Ripa

Manejo

Figura 8-180 Larva de Leucopis sp.

202 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

120

% frutos infestados

100 80 60 40 20 0

Aceite A 1%

[

Aceite A 1,5%

Previo

Aceite B 1% 12 días

Aceite C 1% 30 días

Aceite D 1% 60 días

Testigo

]

* Productos comerciales utilizados: Aceite A 1,0% = Ultraspray Aceite A 1,5% = Ultraspray Aceite B 1,0% = Winspray Aceite C 1,0% = Winspray miscible Aceite D 1,0% = Citroliv miscible

Gráfico 8-26 Efecto de aceites minerales sobre Pseudoccocidos (predomina P. calcelariae) en palto var. Hass. Comuna de La Cruz, aplicación 30 enero 2008 (Fuente: Resultados Convenio INIA-ANASAC).

Estimar la abundancia de enemigos naturales en las mismas estructuras y en trampas de agregación de cartón corrugado. La evaluación de la población de la plaga a través de un muestreo de presencia/ausencia está fundamentado en el conocimiento de la relación existente entre dicho parámetro y la abundancia de la plaga en el huerto, el Gráfico 8-25 muestra la estrecha relación.

Se ha observado esta plaga en ramas, hojas y frutos parcialmente cubiertas con hojarasca en árboles cuyo follaje se apoya en el suelo. En estos casos las hormigas son muy abundantes evitando totalmente la acción de los enemigos naturales. Se recomiendo eliminar las ramas que están en esta situación en poscosecha, dado que el control químico es también deficiente y los individuos que permanecen son un inóculo para la siguiente temporada (Gráfico 8-26). El Cuadro 8-12 indica la efectividad de los productos evaluados por INIA sobre pseudococcidos.

Producción orgánica. Control biológico, control de hormigas, aplicaciones de aceite mineral orgánico, control de hormigas y lavados frecuentes.

R. Ripa

Control. Dependiendo de la plaga relacionada y el cultivo, seguir las recomendaciones mencionadas para P. citri o P. longispinus, en cuanto al control de hormigas y una eventual aplicación de insecticidas.

Figura 8-181 Pupas de Leucopis sp con orificio de emergencia.

203 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Chanchito Blanco de la Vid

Hospederos

Obscure mealybug

En los cítricos se encuentra principalmente en naranjo y pomelo. Esta especie es muy polífaga y entre sus hospederos se incluyen: vid, manzano, peral, nectarino, ciruelo, cerezo, frambueso, mora, zarzaparrilla, níspero, pepino dulce, caqui, lenteja, garbanzo, papa, rábano y alfalfa. En malezas, se encuentra en correhuela, malva, amor seco, hinojo y cardo, entre otras. En paltos fue mencionada por López y Bermúdez (2007).

Pseudococcus viburni (Maskell) R. Ripa y S. Rojas

Generalidades e importancia Plaga muy poco frecuente en cítricos y aun más escasa en paltos. Muy común en vides donde se distribuye desde la Región de Arica y Parinacota a la región del Bio Bio (VIII).

Daño Su presencia en frutos puede ocasionar rechazos cuarentenarios para algunos mercados como México Corea y Japón, o para otros países al detectar individuos juveniles difíciles de identificar. Frutos: Decoloración de la zona en la que forman colonias. En hojas y ramillas: Presencia de mielecilla y fumagina.

Descripción morfológica La hembra adulta es de cuerpo ovalado, de color blanquecino debido a una delgada capa de cera que le cubre y que permite distinguir la coloración gris bajo esta capa cerosa. Su tamaño varía de 3 a 4 mm de largo. Sus filamentos laterales son delgados y de longitud menor que los filamentos caudales, los cuales a su vez son más cortos que el largo de su cuerpo. Los huevos son amarillos y con el desarrollo van adquiriendo un tinte morado.

Biología Previo a comenzar la ovipostura, la hembra emite filamentos delgados que van formando un saco ovígero laxo, en cuyo interior acumulan los huevos. Prácticamente durante todo el año P. viburni se encuentra presente en sus diferentes estados de desarrollo. Durante el invierno, se encuentra protegido en grietas del tronco y zona del cuello y raíces de malezas, especialmente de correhuela y malva. En vides se producirían tres a cuatro generaciones en el año, sin embargo se desconoce si también ello ocurre en cítricos y paltos. Los chanchitos blancos se concentran en lugares muy protegidos como frutos que se topan entre sí o que están en contacto con el suelo. También es común encontrarlos en las ramas interiores de los árboles. En las naranjas los individuos se introducen en el ombligo, lo que dificulta su detección y control.

Enemigos naturales Parasitoides. Los Cuadros 8-9 y 8-10 muestran resumidamente como se asocian los parasitoides y depredadores respectivamente, a las distintas especies de pseudococcidos. Los encírtidos Pseudaphycus flavidulus (Brethes), Pseudaphycus nr angelicus y Leptomastix epona Noyse parasitan a P. viburni. P. flavidulus es una avispita de color gris de aproximadamente 1,5 mm que ovipone sobre individuos de casi todos los tamaños de P. viburni y es producida comercialmente en Chile. Los chanchitos parasitados pierden movilidad y adquieren una tonalidad amarillenta. De cada momia emergen desde uno hasta 30 parasitoides a través de pequeños orificios circulares en el cuerpo, quedando una estructura vacía de color amarillo y muy frágil al tacto (Figuras 8-182 y 8-183).

Depredadores. Las especies descritas en P. longispinus: Leucopis spp, O. confusus, C. montrouzieri, H. funesta, M. macula, S. maculipennis y Chrysoperla spp depredan esta especie (Figuras 8-184 y 8-187).

Manejo Monitoreo. Monitorear mensualmente frutos, brotes, grietas y hojas secas presentes en el árbol y cercanas al tronco, al igual que en P. citri. Muestrear además el cuello de la planta y raíces de malezas. Algunas variedades son más atacadas que otras, por ejemplo, el pomelo Star Ruby que fructifica en racimos, es una de las variedades que presenta un mayor ataque. Determinar la presencia y abundancia de hormigas en la planta. Control. Seguir las indicaciones mencionadas para las otras especies de chanchito blanco. El Cuadro 8-12 indica la efectividad de los productos evaluados por INIA sobre pseudococcidos. Producción orgánica. Control biológico, control de hormigas con barrera de polibuteno, aplicaciones de aceite mineral y lavados frecuentes.

204

Figura 8-184 Hembra de Chrysoperla sp.

R. Ripa

Figura 8-183 Adulto de Leptomastix epona.

R. Ripa

Figura 8-182 Hembra de Pseudaphycus flavidulus parasitando Pseudococcus viburni.

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 8-186 Huevo de Chrysoperla sp.

R. Ripa

R. Ripa

Figura 8-185 Macho de Chrysoperla sp.

Figura 8-187 Larva de Chrysoperla sp.

205 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Cuadro 8-12 Efectividad relativa de los insecticidas evaluados por INIA La Cruz para el control de Chanchitos blancos*.

Ingrediente activo Aceite mineral Metomilo Imidacloprid Imidacloprid riego Clorpirifos

Productos comerciales

Efectividad

Susceptibilidad de enemigos naturales al producto

Citroliv miscible Ultraspray Winspray

++

++

Balazo Lannate Metomil Methomex

++++

++++

Confidor Imaxi Punto

+++++

+++++

Clorpirifos Fantom Lentrek Lorsban Master Pointer Pyrinex Troya

++++

++++

++++ +++++ (acción lenta)

++

+++++ +++++

+++++

Buprofezin Applaud Buprofezin+Adherente Applaud + silwet Thiametoxam Actara Thiametoxam riego Acetamiprid

Mospilan

++++

–––

Thiacloprid

Calypso

++++

–––

* La mención a ingredientes activos y/o productos comerciales no constituye una recomendación, sólo corresponde a una ponderación de su efectividad sobre Pseudococcidos. El uso de estos y otros productos es responsabilidad del agricultor quien deberá verificar el registro de los productos en el SAG y en el mercado de destino de la fruta. +++++ = muy efectivo. + = escasa efectividad.

206 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Trips Orden: Thysanoptera • Familia: Thripidae En general, los trips fitófagos son insectos alados de tamaño muy pequeño, variable entre 1 a 2 mm en su estado adulto. De apariencia frágil, su cuerpo es alargado y presentan una cabeza, tórax y abdomen bien definidos. Sus dos pares de alas presentan setas ordenadas similares a finas plumas. El aparato bucal se ubica por debajo de la cabeza, consiste de una sola mandíbula con la que perforan el tejido y dos estiletes maxilares unidos formando un canal, los que son insertados absorbiendo el contenido (Mound y Marullo, 1996). De esta familia de insectos sólo dos especies se asocian a paltos y cítricos, Heliothrips haemorrhoidalis, que en Chile es una plaga importante en palto, pero marginal en cítricos, ya que sólo se han reportado un par de ataques de esta especie y Frankliniella occidentales, insecto polífago que causa daño económico en varias especies cultivadas, sin embargo, sólo se han detectado casos puntuales de daño en cítricos y no se ha evidenciado daño en palto, a pesar de encontrarse presente eventualmente durante la floración.

Descripción morfológica Los adultos de F. occidentalis poseen antenas con ocho artejos, los dos últimos más pequeños. El primer artejo es más claro que el segundo, mientras que el tercero y cuarto también son claros pero en los individuos oscuros pueden tener sombreada la parte apical; el quinto es oscuro con la base clara y los tres últimos son oscuros por completo. Posee setas alargadas y oscuras sobre la cabeza y el pronoto. Las patas son claras y los tarsos están formados por dos segmentos. Las hembras invernales de F. occidentalis son de color marrón oscuro con el protórax y la cabeza más claros que el

Trips Californiano Western flower thrips Frankliniella occidentales (Pergande) R. Ripa

R. Ripa

Distribución e importancia Plaga cosmopolita introducida al país al comienzo de la década del 90. Se distribuye en Chile desde la Región de Atacama (III) a la Región del Maule (VII). En paltos y cítricos no reviste, por el momento, mayor relevancia, ya que sólo se ha detectado puntualmente dañando naranjos en un huerto.

Figura 8-188 Adulto hembra de Frankliniella occidentales.

Daño

En un huerto en Chile se ha observado durante dos años el ataque de F. occidentalis en naranjos var. Navelate en Ovalle, durante la época de floración, causando un intenso russet producto de la alimentación de larvas y adultos en los frutos durante e inmediatamente posterior a la cuaja de naranjos.

R. Ripa

Es frecuente observar la presencia de esta especie en la flor de cítricos y eventualmente paltos, frutos que luego no muestran daño.

Figura 8-189 Adulto macho de Frankliniella occidentales.

207 Manejo de plagas en paltos y cítricos

abdomen. Mientras que los individuos de generaciones estivales son claros y presentan el abdomen marrón. Las hembras miden 1,2 a 1,6 mm, mientras que los machos son más pequeños (0,8 a 0,9 mm) y más claros a excepción de algunos artejos antenales (Figuras 8-188 y 8-189). Las larvas son de color amarillo y se asemejan a los adultos, pero no poseen alas.

Biología Los adultos se reproducen sexualmente y además por partenogénesis arrenotóquica, es decir, las hembras no fertilizadas ponen huevos que dan origen a machos, mientras que la mayoría de los huevos de las hembras fertilizadas dan origen a hembras Los estadios juveniles se ubican al interior de estructuras como flores, brotes o yemas. La larva pasa por dos estadios al cabo de los cuales se dirige al suelo donde muda dando origen a la prepupa y luego a la pupa que no se alimentan. Después de 4 a 6 días emerge el adulto. Tanto la larva como el adulto se alimentan microperforando con una maxila modificada, los tejidos tiernos, sorbiendo su contenido a través de su estilete. También se alimentan de polen, en especial los adultos.

Hospederos F. occidentalis se alimenta de una gran cantidad de especies vegetales dentro de las cuales se encuentran especies de las familias: fabáceas, asteráceas, solanáceas, brasicáceas, rosáceas y hortalizas, frutales de hueso y pepita, vides, algunos frutales tropicales y cítricos, gran parte de los cultivos florales y algunos ornamentales, cultivos industriales y forrajeros. A pesar que se ha observado la plaga en flores y pequeños frutos de palto, no se ha comprobado que produzca daño.

Enemigos naturales F. occidentales posee varios enemigos naturales (Ripa et al, 2001), no obstante la corta extensión del período de floración, dificulta la acción de éstos. La infestación en este período se inicia a partir de los adultos que invaden el cultivo transportados por el viento.

Manejo Aplicación de insecticidas durante la floración, que eviten mortalidad de abejas y posean registro en los países de destino. Spinosad (Success y Entrust) es un insecticida selectivo y de una adecuada efectividad para el control de esta plaga.

Trips del Palto, Trips de los invernaderos Greenhouse thrips Heliothrips haemorrhoidalis (Bouché) P. Larral, R. Ripa, J. Montenegro y P. Véliz

Distribución e importancia El trips del palto, Heliothrips haemorrhoidalis, es una especie originaria de Brasil (Mound 1976) y se encuentra presente en Chile hace más de 90 años. Causa graves daños en la producción debido al cuerudo o russet que provoca su alimentación en la fruta, este daño estético restringe su exportación y reduce su valor comercial en el mercado interno. En los últimos años ha adquirido mayor relevancia en nuestro país especialmente en la Región de Valparaíso, involucrando actualmente grandes extensiones generando importantes pérdidas económicas, siendo de muy difícil erradicación. Por otra parte en la Región de Coquimbo, donde el cultivo del palto es más reciente se han detectado focos que han crecido en forma sostenida. En Chile se distribuye entre la Región de Arica y Parinacota (XV) y la Región de Los Lagos (X). Esta plaga está presente en Argentina, Brazil, Estados Unidos, Nueva Zelanda, Israel, Sudáfrica y México, entre otros países.

Daño Las larvas y adultos del trips causan daño al alimentarse en hojas y frutos, micro perforando los tejidos con su aparato bucal, que posee una mandíbula modificada, y succionando el contenido celular con su estilete, de esta manera el tejido celular se deteriora y se produce una decoloración en la superficie afectada (Stevens et al, 1999a). En los frutos el daño toma un aspecto de russet o cuerudo. La dimensión del área dañada por trips está en directa relación con el número de ejemplares y el tiempo que éstos permanecen en el fruto. De acuerdo a trabajos realizados en Nueva Zelanda (Stevens, 1999 a), el promedio del área dañada por un adulto de trips por semana es de 0,22 cm2. Se indica además que el daño provocado por los adultos es mayor que el de las larvas, alcanzando estos últimos un área de sólo 0,04 cm2 por larva a la semana. En California los frutos con un área dañada superior a 2 cm de diámetro son bajadas de categoría (Universidad de California, 2007). Se estima que

208 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

este daño lo producen 25 trips alimentándose durante una semana o 5 trips alimentándose por 5 semanas. En nuestro país se acepta en la exportación un daño aproximado de hasta 1 cm2 en los frutos. El Gráfico 8-27 muestra un seguimiento realizado en palto Hass de la dimensión del daño y la proporción de frutos dañados y se puede observar el rápido incremento de la infestación a inicio del desarrollo del fruto. Cuando la densidad de la plaga es mayor este aumento es más abrupto, condición observada en enero de 2006, oportunidad en la presencia de daño aumentó del 0% al 20% en sólo tres semanas en los frutos.

R. Ripa

Adicionalmente la plaga produce una excreción negruzca que mancha hojas y frutos. Esta excreción la utilizan las larvas como defensa contra sus enemigos naturales, al mantener la gota adherida al extremo del abdomen (Figura 8-190).

Figura 8-190 Larva de Heliothrips haemorrhoidalis con gota de feca en el extremo del abdomen.

(A)

R. Ripa

El trips se localiza y daña preferentemente las áreas entre frutos que se encuentran en contacto. En hojas de palto se alimenta principalmente en el haz, prefiriendo hojas maduras de la parte media y baja del árbol, a través de un muestreo se determinó que en el mes de mayo cuando se presenta la mayor abundancia de la plaga en el árbol el 93,2% de la población se encontraba alimentándose en hojas maduras de la parte media y baja del árbol, esta población estaba representada principalmente por larvas, mientras que en el mes de agosto, sólo el 76,6% de la población de la plaga se encontraba en este segmento del árbol y predominaban las pupas y adultos (Figura 8-191b).

(B)

R. Ripa

Aún cuando la lesión causada por la plaga no afecta la calidad de la pulpa de la fruta, el daño estético puede motivar el descarte del proceso de exportación (Figura 8-191a).

El ataque se acentúa en árboles con mayor densidad de hojas y frutos, y en sectores con alta humedad ambiental como quebradas o en las orillas de canales, en especial cercano a eucaliptos. Las variedades más susceptibles son las mejicanas y Hass, mientras que en Bacon y Sutano el trips se alimenta principalmente del follaje (Universidad de California, 2007).

Figura 8-191 Daño de Heliothrips haemorrhoidalis en (A) frutos y (B) hojas y comparación con estructura sana.

209

[

Tamaño del daño

Frutos infestados

%

oct 07

sep 07

jul 07

may 07

abr 07

ene 07

0 dic 06

10

0,0 oct 06

20

0,5 ago 06

30

1,0

jul 06

40

1,5

may 06

2,0

abr 06

50

feb 06

60

2,5

ene 06

70

3,0

nov 05

80

3,5

oct 05

90

4,0

sep 05

4,5

jul 05

Superficie dañada cm2

Manejo de plagas en paltos y cítricos

]

Gráfico 8-27 Fluctuación del daño ocasionado por H. haemorrhoidalis en frutos y el porcentaje de frutos de palto cv Hass dañados. Nogales, Región de Valparaíso (2005-2007).

Descripción morfológica Es una especie uniparental es decir todos los individuos de una generación son hembras, producidas partenogeneticamente sin la fertilización del macho. Estos últimos han sido rara vez detectados en el mundo (Mound 1976).

De los huevos eclosan pequeñas larvas prácticamente traslucidas y difíciles de detectar, a medida que aumentan en tamaño y se alimentan de los tejidos vegetales, se puede observar por transparencia el aparato digestivo (Figuras 8-196 y 8-197). Las larvas de segundo estadio alcanzan un tamaño aproximado de 1 mm de largo y un aspecto semi transparente. Las prepupas se caracterizan por la aparición de esbozos alares, mientras que en las

C. Tobar

Los adultos del trips del palto tienen la cabeza, tórax y abdomen negro, sin embargo adultos recién emergidos son de color amarillento, oscureciendo gradualmente primero el tórax y luego el abdomen que adquiere un color anaranjado y finalmente negro. Sus patas, antenas y alas son de color amarillo pálido. Posee alas plumosas pero no son buenos voladores. Los adultos miden 1,2 mm de largo, presentan un esculpido característico en la cabeza, torax y abdomen. Los huevos de apariencia traslúcida, son insertados en el tejido de la lámina de la hoja y en el fruto, causando un ligero abultamiento, que en ocasiones es ocultado por las fecas de la hembra. La eclosión de la larva se aprecia como una pequeña rasgadura en el tejido que cubre el huevo, sin embargo, si éste fue parasitado por Megaphragma mymaripenne se evidencia un orificio circular de emergencia al centro de la prominencia del huevo (Figuras 8-192 a 8-194).

Figura 8-192 Ciclo de vida de Heliothrips haemorrhoidalis.

210

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

R. Ripa

Figura 8-195 Larvas y prepupa de Heliothrips haemorrhoidalis en hoja de palto.

R. Ripa

Figura 8-194 Adulto de Heliothrips haemorrhoidalis de mayor edad.

Figura 8-193 Adulto de Heliothrips haemorrhoidalis con abdomen anaranjado.

Figura 8-196 Larvas neonatas de Heliothrips haemorrhoidalis.

pupas se puede apreciar un mayor crecimiento de estas estructuras y la apariencia curvada de las antenas, poseen una coloración amarillenta y es común encontrarlas formando grupos de varios individuos en hojas y frutos. Tanto las pupas como las prepupas no se alimentan.

Biología

R. Ripa

Heliothrips haemorrhoidalis sobre paltos posee varias generaciones al año, traslapadas entre si, por lo que es común detectar todos los estadios de la plaga sobre la planta.

Figura 8-197 Larva y adulto de Heliothrips haemorrhoidalis en acacio capense.

En hojas, la época de mayor abundancia del trips es entre los meses de marzo a junio, coincidente con la madurez de las hojas de la brotación primaveral, donde se desarrolla una colonia que alcanza su mayor densidad en otoño. En invierno y primavera la densidad de la plaga disminuye (Gráfico 8-28).

211 Manejo de plagas en paltos y cítricos

disminuir el inóculo presente en el árbol previo a la cuaja de la fruta de la siguiente cosecha (Gráfico 8-29). El ciclo de vida del trips del palto comprende huevo, larva I, larva II, prepupa, pupa y adulto. El desarrollo de cada uno de ellos y de su principal parasitoide, Thripobius semiluteus fue estudiado en condiciones de laboratorio por Froud y Stevens (1997), determinado que el tiempo generacional del trips (huevo a adulto) demora alrededor de 38 días, siendo el estado mas largo el huevo, que demora 20,5 días en eclosionar. Se ha observado que, en condiciones de campo este proceso demora alrededor de 4 a 5 semanas en verano (Dreistadt, 2008).

80,0

20,0 18,0 16,0 14,0 12,0 10,0 8,0 6,0 4,0 2,0 0,0

60,0 50,0 40,0 30,0 20,0

% hojas infestadas

70,0

10,0

[

Pupas

Larvas

Adultos

dic 06

nov 06

oct 06

sep 06

ago 06

jul 06

jun 06

may 06

abr 06

mar 06

feb 06

0,0 ene 06

N° de individuos / hoja

El inicio de la infestación en los frutos ocurre en verano cuando estos poseen aproximadamente 1,5 a 2,0 cm de diámetro ecuatorial. La hembra adulta coloniza el fruto, donde se alimenta y provoca daño al cabo de pocos días, tal como se observa en el Gráfico 8-27, tanto el tamaño del daño, como el porcentaje de frutos infestados incrementa rápidamente, en tanto que la densidad de la plaga aumenta progresivamente en el tiempo, alcanzando su máximo a la cosecha. Si los frutos no son cosechados, estos se constituyen en un reservorio de la plaga en una época en la cual en las hojas la población disminuye en forma natural, por lo que se aconseja cosechar tempranamente la fruta, una vez que esta obtiene índices de aceite adecuados, removiendo el total de la fruta de modo de

Hojas infestadas

]

60 Cosecha

50 40 30 20

% frutos infestados

20,0 18,0 16,0 14,0 12,0 10,0 8,0 6,0 4,0 2,0 0,0

10

[

Adultos

Pupas

Larvas

% Frutos infestados

dic 06

nov 06

oct 06

sep 06

ago 06

jul 06

jun 06

may 06

abr 06

mar 06

feb 06

0 ene 06

Trips / fruto

Gráfico 8-28 Fluctuación de la abundancia de H. haemorrhoidalis en hojas de palto cv Hass extraídas al azar. La Cruz, Región de Valparaíso, 2006.

]

Gráfico 8-29 Fluctuación de la abundancia de H. haemorrhoidalis en frutos de palto cv Hass marcados (escogidas al azar). Nogales, Región de Valparaíso, 2006.

212 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Hospederos Puede atacar una amplia gama de frutales como: palto, chirimoyo, caqui, ciruelo, duraznero, guindo, limonero, naranjo, mandarinas, kiwi, vid y peral. También se ha detectado en plantas ornamentales y forestales como: palqui, boldo, eucaliptus, canelo, arrayán, maqui, entre otros (Figura 8-198).

Figura 8-198 Daño de Heliothrips haemorrhoidalis sobre mandarinas.

En el año 2003, INIA La Cruz importó desde Nueva Zelanda, el parasitoide Thripobius semiluteus, eulófido que mide aproximadamente 0,6 mm y tiene la cabeza y torax negro, mientras que el abdomen, patas y antenas son de coloración amarillo pálido (Figura 8-204). T. semiluteus es una avispita que deposita sus huevos en las larvas de primer y segundo estadio del trips del palto causándoles la muerte. El parasitoide se alimenta internamente de la larva, para finalmente pupar en su interior, ocupando enteramente el cuerpo de la larva de trips, la que adquiere una coloración negruzca (Figuras 8-202 y 8-203). El proceso de desarrollo desde huevo hasta que

20,0 18,0 16,0 14,0 12,0 10,0 8,0 6,0 4,0 2,0 0,0

70

50 40 30 20

% parasitismo

60

10

[

Huevos trips

Parasitismo megaphragma

sep 07

jun 07

mar 06

nov 06

ago 06

may 06

0 feb 06

Huevos / cm2

El número de especies benéficas asociadas al trips del palto en el país es escaso. Se ha registrado muy ocasionalmente la presencia del depredador Chrysoperla sp en el campo, estimándose que su acción es marginal (Figura 8-199). En cuanto a parasitoides se ha confirmado la presencia de la diminuta microavispa Megaphragma mymaripenne Timberlake (Hymenoptera: Trichogrammatidae), de solo 0,2 mm de largo, que se desarrolla en los huevos de trips del palto, los cuales se encuentran encastrados en el tejido de hojas y frutos. A través de muestreos en distintos huertos de la Región de Valparaíso se ha confirmado que sólo se presenta en huertos de nula o escasa intervención con plaguicidas. La presencia de este parasitoide se puede detectar, observando con una lupa de 20 aumentos los orificios de emergencia del adulto del parasitoide, desde los huevos del trips. En muestreos realizados en La Cruz e Hijuelas (Región de Valparaíso), en huertos poco intervenidos y con un importante ataque de trips, se observó que los niveles de parasitismo de huevos fueron en promedio de aproximadamente del 5% para La Cruz y del 35% en Hijuelas sobre hojas y frutos (Gráficos 8-30 y 8-31). Estos niveles de parasitismo no lograron disminuir la densidad del trips a niveles económicamente aceptables de daño en huertos comerciales.

R. Ripa

Enemigos naturales

]

Gráfico 8-30 Densidad de huevos de trips del palto y nivel de parasitismo de Megaphragma mymaripenne en hojas de palto var. Hass. Hijuelas, Región de Valparaíso, 2005-2007.

213

0,5

10

0,0

0

[

Parasitismo megaphragma

Huevos trips

% parasitismo

20

ago 07

1,0

jun 07

30

abr 07

1,5

ene 07

40

nov 06

2,0

sep 06

50

jul 06

2,5

may 06

60

mar 06

3,0

dic 05

Huevos / cm2

Manejo de plagas en paltos y cítricos

]

Figura 8-199 Larva de Chrysoperla sp depredando larva de Heliothrips haemorrhoidalis.

R. Ripa

R. Ripa

Gráfico 8-31 Densidad de huevos de trips del palto y nivel de parasitismo de Megaphragma mymaripenne en frutos de palto var. Hass. Hijuelas, Región de Valparaíso, 2005-2007

Figura 8-200 Adulto de Megaphragma mymaripenne.

emerge el adulto en condiciones de laboratorio demora aproximadamente 3 semanas (Froud and Stevens, 1997).

R. Ripa

Se realizaron varios ensayos para determinar la efectividad de T. semiluteus en el control de H. haemorrhoidalis en la Región de Valparaíso. los resultados indican que T. semiluteus es un agente que reduce las poblaciones de la plaga, en un horizonte de evaluación del mediano plazo comprobado además su establecimiento en los huertos en que se liberó.

Figura 8-201 Orificio de emergencia de Megaphragma mymaripenne de huevos de Heliothrips haemorrhoidalis.

Los resultados del seguimiento en uno de los sitios de liberación del parasitoide, muestran una mayor densidad de T. semiluteus en otoño, período que coincide con las más altas densidades de trips en la planta. Durante la primavera y el verano de la temporada 2006/07 no se observó el parasitoide, volviéndose a detectar en los muestreos de

214

Figura 8-202 Larva de H. haemorrhoidalis parasitada por Thripobius semiluteus.

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 8-203 Pupas de Thripobius semiluteus.

El Gráfico 8-33 muestra el porcentaje de parasitismo de T. semiluteus detectado al momento del recuento en laboratorio de hojas colectadas en el sitio de liberación (pupas de Thripobius), sin embargo con el objetivo de determinar el parasitismo total de la muestra se almacenaron en tres oportunidades las larvas aparentemente sanas de trips, lo que evidenció el parasitismo adicional que sumado al registrado en el campo indica el total (triángulos rojos), con lo cual se demuestra que el parasitismo basado en la observación de pupas en el campo es menor al parasitismo real alcanzado. En el Gráfico 8-34, se observa similar situación para los individuos detectados en el mismo lugar en frutos. En liberaciones realizadas en eucaliptos muy infestados con trips del palto, no mostraron el establecimiento del parasitoide, razón por la cual este árbol no sería un reservorio para T. semiluteus. No obstante los huevos del trips sí son parasitados por M. mymaripennis, en este hospedero

Manejo Monitoreo. En palto, monitorear al menos una vez al mes hojas y frutos durante todo el año, considerando presencia/ausencia de la plaga. A través de esta labor

R. Ripa

abril de 2007. Cabe destacar que las densidades de la plaga disminuyeron progresivamente, para llegar a niveles muy bajos en el otoño de la segunda temporada, época en la que se esperaba un aumento de la densidad del trips del palto, en ausencia de T. semiluteus, de acuerdo a la fluctuación poblacional observada durante las temporadas anteriores. El Gráfico 8-32 muestra los resultados de un muestreo al azar tipo presencia/ausencia, mientras que los Gráficos 8-33 y 8-34 presentan la proporción de larvas sanas y parasitadas basada en un análisis realizado en laboratorio, de las hojas y frutos con presencia de la plaga colectados en las mismas oportunidades.

Figura 8-204 Adulto de Thripobius semiluteus.

identificar y marcar los sectores del huerto afectados por la plaga. Monitorear aproximadamente el 1% de los árboles, en cada uno de ellos observar 10 hojas y 10 frutos, indicando en planilla de registro el número de estructuras con presencia del insecto, en el caso de frutos indicar además la presencia de daño. El tamaño mínimo de la muestra debe ser 100 hojas maduras y 100 frutos por cuartel. Desde fines de diciembre a marzo, cuando el trips coloniza el fruto, realizar monitoreos cada 15 días con el fin de tomar oportunamente las medidas de manejo y evitar que se produzca el daño. Una vez que se tome una decisión de manejo (liberaciones de enemigos naturales, aplicaciones químicas, podas, etc.) se debe monitorear para determinar la efectividad de las mismas, el intervalo de tiempo dependerá del tipo de manejo, por ejemplo aplicaciones de insecticidas de contacto evaluar en una

215 Manejo de plagas en paltos y cítricos

120

70

100

60

80

50 40

60

30

40

20

% parasitismo*

% frutos y hojas infestadas

80

20

10

Trips fruto % parasitismo hojas

[

Trips hoja % parasitismo frutos

nov 07

oct 07

sep 07

ago 07

jul 07

jun 07

may 07

abr 07

mar 07

ene 07

dic 06

oct 06

ago 06

jul 06

jun 06

may 06

abr 06

0 mar 06

0

]

* Parasitismo corresponde al porcentaje de estructuras (hojas o frutos) que están infestados por la plaga y que además presentan pupas de Thripobius.

60

50 45 40 35 30 25 20 15 10 5 0

Larvas / hoja

50 40 30 20 10

[

Larvas

% parasitismo

% parasitismo total

nov 07

sep 07

jul 07

may 07

mar 07

dic 06

oct 06

ago 06

jun 06

abr 06

ene 06

dic 05

0

% parasitismo

Gráfico 8-32 Fluctuación de la infestación de la plaga y actividad de su parasitoide T. semiluteus, posterior a su liberación (Dic. 2005), expresado en porcentaje de hojas y frutos con presencia del insecto. La Cruz, Región de Valparaíso, 2006-2007.

]

Gráfico 8-33 Fluctuación de la densidad de larvas de trips del palto y nivel de parasitismo de Thripobius semiluteus en hojas, posterior a su liberación (Dic. 2005). La Cruz, Región de Valparaíso, 2005-2007.

semana, en cambio el efecto de las liberaciones puede requerir de más tiempo para realizar una primera evaluación. Adicionalmente, es imprescindible observar plantas aledañas al huerto, en especial las que ya fueron mencionadas como hospederas, haciendo hincapié en las hojas juveniles (filodios) de eucaliptos, para detectar la presencia de fuentes de infestación de la plaga o bien de reservorio de enemigos naturales.

En Cítricos, se han detectado casos puntuales de la infestación de esta plaga, es el caso observado sobre mandarinos en las cercanías de Ovalle y sobre naranjos en la comuna de Nogales. En ambas especies el daño fue observado en fruta cercana a la madurez o totalmente madura (Figuras 8-205 y 8-206).

Control químico. La necesidad de control químico estará dada por la densidad de la plaga, estado de desarrollo

216

100 90 80 70 60 50 40 30 20 10 0

9 8 Larvas / fruto

7 6 5 4 3 2 1

% parasitismo

% parasitismo total

oct 07

ago 07

jun 07

abr 07

dic 06

Larvas

oct 06

jun 06

[

ago 06

abr 06

feb 06

0

% parasitismo

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

]

Figura 8-205 Larva de Heliothrips haemorrhoidalis sobre naranja.

del fruto y distribución de la plaga en el huerto, detectada a través del monitoreo Los insecticidas pyretrum/piperonyl y sabadilla han sido probados y recomendados para el control de esta plaga en otros paises (Blank y Gill, 1995, Goodall et al, 1987, California Avocado Comission, 1999), sin embargo en Chile actualmente no se encontrarían disponibles. Los insecticidas evaluados por INIA La Cruz, se indican a continuación de mayor a menor efectividad: • Los neonicotinoides (thiamethoxam, imidacloprid y thiacloprid) ejercen un eficiente control de la plaga, alcanzando en ocasiones niveles de no detección

R. Ripa

R. Ripa

Gráfico 8-34 Fluctuación de la densidad de larvas de trips del palto y nivel de parasitismo de Thripobius semiluteus en Frutos. Región de Valparaíso, 2006-2007.

Figura 8-206 Heliothrips haemorrhoidalis sobre naranja.

(Cuadro 8-13 y Gráfico 8-35). Thiametoxam es igualmente efectivo en aplicación foliar y a través del riego, sin embargo, esta última es de acción más lenta.

• Abamectina reduce significativamente las poblaciones de la plaga por un período prolongado, manifestando un largo efecto residual no obstante trabajos en EE.UU. advierten el riesgo de generar resistencia a este ingrediente activo por lo cual recomiendan restringir su uso (Morse et al, 2005) (Gráfico 8-36). • Metomilo y Aceite mineral, mostraron un buen efecto contra las poblaciones de trips del palto. Sin embargo se debe tener en cuenta, su corto efecto residual

217 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Cuadro 8-13 Efectividad relativa de los insecticidas evaluados por INIA La Cruz*.

Ingrediente activo

Producto comercial evaluado

Efectividad

Selectividad

Citroliv miscible

++

+++

Metomilo

Lannate

++++

++

Abamectina+aceite

Vertimec

++++

+++

Spinosad

Success

+++

++++

Thiametoxam (riego)

Actara

+++++

++

Thametoxam

Actara

+++++

+

Calypso

+++++

+

Imidacloprid

Confidor

+++++

+

Ext. Quillay 1

Repelin Q

+

++++

Aceite mineral

Thiacloprid

Adhe. Siliconado Ext. Quillay 2 Methil jasmonato

Silwet

+

+++

QL Agri

+

++++



++

+++

Jabón potásico

Ecolimp

+

+++

Extracto de ají

Capsay

+

+++

Trips / hoja

* La mención de ingredientes activos y/o productos comerciales no constituye una recomendación, sólo corresponde a una ponderación de su efectividad sobre H. haemorrhoidalis. El uso de estos y otros productos es responsabilidad del agricultor quien deberá verificar el registro de los productos en el SAG y en el mercado de destino de la fruta +++++ = muy efectivo. + = escasa efectividad.

20,0 18,0 16,0 14,0 12,0 10,0 8,0 6,0 4,0 2,0 0,0

[

10,9

0,1

Testrigo Pre aplicación

Imidacloprid 10 días post

0,0

Thiacloprid 30 días post

0,0

Thiametoxam 70 días post

]

Gráfico 8-35 Efecto de la aplicación de insecticidas neonicotinoides al follaje sobre la densidad de H. haemorrhoidalis en hojas de paltos. Aplicación 31 de marzo de 2006. La Cruz, Región de Valparaíso, 2006.

Productos comerciales utilizados: Imadacloprid=Confidor Forte 200SL; Clorpirifos=Lorsban 4E; Thiacloprid=Calypso 480 SC; Thiametoxam=Actara25 WG.

y, el hecho de que no controlan los huevos insertos en el tejido, requiriendo en ocasiones una segunda aplicación, aproximadamente 30 días después de la primera, en función de las densidades detectadas a través del monitoreo postaplicación. • El ingrediente activo Spinosad, posee un adecuado efecto sobre las poblaciones de trips del palto, no controlan los huevos insertos en el tejido y muestra una baja toxicidad para insectos benéficos y el ambiente.

• Los detergentes y adherentes o coadyuvantes tienen un efecto menor sobre la plaga. El uso de los insecticidas debe estar condicionado a los registros y tolerancias establecidos por Chile y los países de destino para el frutal en cuestión. Un aspecto importante a considerar es el eventual ataque de arañitas que ocurre con la aplicación de Neonicoinoides y metomilo. Los factores que determinarían este ataque está dado por el efecto del consumo de presas

218 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

(A)

(B)

20,0 15,0 10,8

10,0 5,0

1,5

1,3

1,0

0,0 Aceite mineral

[

Metomilo

Abamectina

Previo

2,5 0,0 Spinosad Thiametoxam riego

7 días 60 días

% frutos infestados

% hojas infestadas

25,0

30 días 90 días

18,0 16,0 14,0 12,0 10,0 8,0 6,0 4,0 2,0 0,0

16,3

3,8 1,3 Aceite mineral

Testigo

]

1,3

0,0 Metomilo

[

Abamectina

60 días

0,0 Spinosad Thiametoxam riego

90 días

Testigo

]

Gráfico 8-36 Efecto de cinco insecticidas sobre H. haemorrhoidalis en palto var Hass utilizando muestreo al azar. Aplicación 13 enero 2006. La Cruz, Región de Valparaíso. (A) Hojas; y (B) Frutos.

Productos comerciales utilizados:Aceite mineral=Citroliv miscible; Metomilo=Lannate 90; Abamectina=Vertimec 018 EC; Spinosad=Success 48; Thiametoxam=Actara 25 WG.

intoxicadas que causan mortalidad a los enemigos naturales de arañitas (Walker et al, 2007), por el consumo de nectar con neonicotinoides por los enemigos naturales (Rogers et al, 2007), por la mortalidad directa de los mismos y por el efecto que poseerían algunos neonicotinoides que a través de dosis subletales incrementan la fecundidad de las arañitas (Szczepaniec and Raupp, 2007). Cabe destacar la relevancia de la detección temprana de esta plaga para su manejo, debido a su evolución cuando el fruto es pequeño. Esto se vio reflejado en el ensayo realizado en la comuna La Cruz, donde a pesar de que la aplicación se llevó a cabo a inicios de temporada (13 de enero de 2006), con frutos de 2,6 cm de diámetro aproximadamente y la ausencia de trips en el fruto en ese momento, se registró daño de la plaga en evaluación realizada 90 días después, incluso en aquellos tratamientos que el control de la plaga llegó a niveles de cero detección a los 60 días, tanto en frutos como en hojas, es el caso de Thiametoxan al riego (Gráfico 8-36 y Cuadro 8-14), donde el efecto no fue inmediato, lo que habría posibilitado la colonización del fruto y la alimentación por parte de la plaga por un corto período, lo que incidió en el porcentaje de fruta con daño (1,3%). En resumen, ante la ausencia de enemigos naturales, se recomienda realizar aplicación de plaguicidas al detectarse los primeros individuos en la fruta nueva. Las aplicaciones químicas requieren un muy buen mojamiento, con el fin de que todas las estructuras del árbol estén cubiertas con el insecticida. Debido a la distribución agregada del trips, las aplicaciones deberán realizarse preferentemente en los sectores afectados por la plaga previamente determinados por un exhaustivo monitoreo.

Cuadro 8-14 Fruta dañada por H. haemorrhoidalis 90 días postaplicación. Palto var. Hass, La Cruz, Región de Valparaíso, 2006.



Tratamiento

% fruta dañada*



T1 Aceite mineral

16,3 ab



T2 Metomilo

5,0 bc



T3 Abamectina

2,5 bc



T4 Spinosad

10,0 ab



T5 Thiametoxam

1,3 c



T6 Testigo

18,8 a

* Valores en la columna seguidas de una misma letra no presentan diferencias de acuerdo al prueba de comparación LSD con p = 0,05.

Control biológico. Ante la ausencia de enemigos naturales, realizar liberaciones de T. semiluteus en primavera, verificar su establecimiento y control a través del monitoreo, considerando presencia/ausencia de estructuras con la plaga y pupas del parásito. Debido a la sensibilidad de T. semiluteus a los insecticidas, se recomienda en general, aplicar productos con baja toxicidad para el control de esta u otras plagas o bien dejar árboles sin aplicar como reservorio del parasitoide.

Control cultural. Cuando no se dispone de enemigos naturales se debe evitar la presencia de hospederos alternativos de la plaga alrededor del huerto, ya sea eliminándolos o bien controlando la plaga en ellos, por ejemplo, en las hojas jóvenes de eucaliptos con presencia de trips (Figura 8-207). Adicionalmente prácticas de poda para mantener la planta con buena aireación y evitar el exceso de hume-

219 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Monitoreo Liberación de enemigos naturales

Cosecha

Aplicación química

oct

nov

dic

ene

feb

[

mar Fruto

abr

may Hojas

jun

jul

ago

sep

]

Gráfico 8-37 Esquematización de la fluctuación poblacional de H. haemorrhoidalis en hojas y frutos de palto y oportunidad de control.

dad entregan condiciones adversas al desarrollo de esta y otras plagas. Se recomienda cosechar la fruta temprano en la temporada, de ese modo de acuerdo a estudios realizados en California (Phillips et al, 1992), se disminuye la severidad del daño en la siguiente temporada, ya que disminuye el inóculo de la plaga. Con el fin comenzar una plantación libre de la plaga, inspeccionar cuidadosamente las plantas en el vivero.

R. Ripa

El Gráfico 8-37 entrega una visión general de la evolución de la plaga en ausencia de plaguicidas y los momentos críticos de manejo químico y biológico.

Figura 8-207 Filodios de eucaliptos dañados por Heliothrips haemorrhoidalis.

220 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Katídidos y Grillos Orden: Orthoptera En general, los individuos adultos de este grupo sistemático son de tamaño mediano a grande y entre las características morfológicas más importantes destacan la gran longitud de sus extremidades posteriores, antenas y fuertes mandíbulas que le permiten masticar. Sobre diversas especies de malezas se encuentra una especie de katídido que, en algunas zonas de Chile se asocia a cítricos, reproduciéndose y alimentándose del follaje y frutos. Los adultos presentan dos pares de alas de las cuales el par anterior es coriáceo y el posterior delgado, brillante y con numerosas venas. Aunque es difícil de observarlo por su coloración verde similar a las hojas, se puede escuchar un sonido característico que produce frotando las alas. Su metamorfosis es gradual, es decir, las ninfas desde muy pequeñas son muy similares a los adultos en forma y color, aunque no presentan alas.

do se encuentran sobre las hojas. Los estados juveniles son similares a los adultos pero sin alas.

Biología Los individuos juveniles o ninfas se presentan a partir de septiembre, observándose los adultos de enero en adelante. Aparentemente existe una sola generación que ataca los cítricos. La hembra deposita los huevos en hilera insertándolos en el mesófilo cercano al margen de la hoja. Las ninfas se alimentan de brotes, flores, frutos recién cuajados y hojas tiernas. Los adultos producen una notoria estridulación frotando las alas, que permite la comunicación entre individuos de la misma especie. La mayor parte de los insectos se encuentran sobre malezas (Figuras 8-208 y 8-209).

Katídido de los Cítricos Citrus katidid Cosmophyllum pallidulum (Blanchard) (Orthoptera: Tettigoniidae) R. Ripa y M. Montenegro

Distribución e importancia

Daño

R. Ripa

Este insecto alcanza el carácter de plaga sólo algunos años. Es una plaga que ataca casi únicamente en Peumo. Es un insecto nativo. Figura 8-208 Ninfa hembra de Cosmophyllum pallidulum.

Frutos: La mordedura sobre la superficie de los frutos pequeños origina cicatrices profundas de color pardo que se mantienen y aumentan de tamaño con el crecimiento. Lesiones más intensas producen su deformación. Se alimenta de hojas, daño de escasa importancia.

Los adultos son insectos de color verde con alas grandes que mantienen plegadas sobre su cuerpo en forma de techo. Su tamaño alcanza aproximadamente a 30 mm de largo. Sus largas y delgadas antenas superan la longitud de su cuerpo. Presentan un alto grado de homocromía con el follaje, y por lo tanto es difícil distinguirlos cuan-

R. Ripa

Descripción morfológica de la plaga

Figura 8-209 Adulto de Cosmophyllum pallidulum.

221 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Hospederos

Se ha observado que la avispa Sphex latreillei depreda sobre ninfas y adultos de katídidos y otros ortópteros.

de menor tamaño que las hembras. Cabeza subesférica castaño oscura casi negra, las mandíbulas ligeramente rojizas, ocelos amarillos. Antenas del largo del cuerpo. Ultimo par de patas de gran tamaño adaptadas para el salto. Alas triangulares de color amarillo castaño claro. Machos y hembras poseen un par de cercos en el extremo del abdomen casi tan largos como la tibia posterior. El ovipositor es largo y delgado (Artigas 1994) (Figura 8-211).

Manejo

Biología

Monitoreo. Examinar hojas, flores y frutos pequeños en al menos 10 árboles escogidos al azar por cuartel semanalmente a partir de septiembre, especialmente en cultivares de naranjos tipo navel.

Los huevos son colocados sobre el suelo hasta 2 cm de profundidad. Los individuos viven en lugares protegidos y se desplazan en la noche en busca de alimento. Los machos estridulan (canto) antes del apareamiento. El ciclo de huevo a adulto requiere un año (Artigas 1994).

En cítricos, solo se ha observado en naranjos navel en las variedades Thompson y Golden. Su presencia es escasa en Valencia y casi no se encuentra en otros cítricos.

Enemigos naturales

Identificar la(s) zona(s) en que ocurre el ataque ya que este insecto se presenta en focos, principalmente cercano a sectores con vegetación nativa y bordes de cerros.

Se alimenta además de otros insectos vivos, como por ejemplo de Naupactus xanthographus (Ripa, 1992).

Control. Aplicar Endosulfan en dosis mínimas en los sectores afectados si se encuentra al insecto durante la floración. Aplicar Clorpirifos en dosis mínimas en los sectores afectados sobre la parte exterior de las plantas, si se observa el insecto después de la floración.

GRILLOS Grillo de Campo R. Ripa

Field brown cricket Gryllus fulvipennis (Blanchard) (Orthoptera: Gryllidae) R. Ripa

Figura 8-210 Adulto de Grillo de Campo macho y daño en la corteza de cítrico.

Distribución e importancia Está presente desde la Región de Atacama (III) a la Región del Bio Bio (VIII). Muy ocasionalmente causa daño en paltos, cítricos y vides. Por otra parte esta especie es benéfica dado que depreda adultos de burrito de la vid.

Daño

R. Ripa

Se alimenta de la corteza de árboles recientemente plantados (Figura 8-210).

Descripción morfológica Grillo de tamaño mediano a grande, los adultos miden entre 19 y 27 mm siendo los machos ligeramente

Figura 8-211 Hembra adulta de Gryllus fulvipennis.

222 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Hospederos Paltos, cítricos y vides. Es un insecto polífago.

Enemigos naturales Prado 1991, menciona a Gordius sp un gusano parásito que pertenece al Phylum Nematomorpha, Orden: Gordioidea y Familia Gordiidae. También las aves como el tiuque, queltehue, etc. se alimentan de grillos.

Manejo

Control. Monitorear la densidad de grillos en el área previo y durante la plantación, si se observan altas densidades de grillos disminuir gradualmente la vegetación. Una vez iniciado el daño aplicar insecticida residual al tronco del árbol.

R. Ripa

El daño ocurre casi únicamente al eliminar la vegetación herbácea presente durante la plantación de cítricos y paltos en ambientes con presencia de adultos de G. fulvipennis. Ante la repentina eliminación de su fuente de alimento los grillos comienzan a dañar la corteza de los árboles. El daño aumenta cuando se utiliza cartón corrugado alrededor del tronco de los árboles, situación en la que los grillos se refugian y alimentan (Figuras 8-212). Figura 8-212 Daño de Grillo de Campo en la corteza de cítrico bajo cartón corrugado.

223 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Termitas Orden: Isoptera

Termita chilena, termita de madera seca Chilean termite, Drywood termite

color pardo castaño (Figura 8-214). Las obreras son las encargadas de la alimentación, sanidad y cuidados de la colonia, son de color blanco amarillento y miden entre 10 y 12 mm.

Neotermes chilensis (Blanchard) Familia: Kalotermitidae P. Luppichini y R. Ripa

Especie endémica de Chile continental, se encuentra presente entre la Región de Atacama (III) y la Región de Valparaíso (V). En el ámbito agrícola Neotermes chilensis es cuarentenaria para Estados Unidos. Su presencia ha sido detectada en embarques de cebollas, duraznos, melones, peras y uvas, de exportación. Los alados, son atraídos por la luz artificial, por lo que pueden contaminar embarques durante las faenas de embalaje.

R. Ripa

Distribución e importancia

Figura 8-213 Daño de Neotermes chilensis en palto.

En el rubro del palto, ha sido detectada infestando árboles vivos en huertos de más de 20 años, especialmente en variedades Chilenas y Negra de La Cruz, entre otras.

El principal daño que causa esta especie es en árboles de considerable edad, en la parte basal del tronco y eventualmente a mayor altura en ramas de mayor diámetro. Especialmente vulnerables son los troncos de árboles de gran diámetro que han sido cortados y reinjertados. La porción de la madera expuesta, también afectada por la humedad es infestada por termitas. El daño de esta especie se detecta gracias a la presencia de galerías amplias, paralelas al sentido longitudinal de la madera, las que se encuentran parcialmente llenas de fecas (pellets). Ocasionalmente se observa en la base del tronco la acumulación de fecas que son expulsadas desde las galerías hacia el exterior (Figura 8-213).

R. Ripa

Daño

Figura 8-214 Soldado de Neotermes chilensis.

Se distinguen tres castas, los adultos alados o reproductores que miden de 17 a 22 mm de largo, son de color pardo claro (Figura 8-215). Los soldados, que cumplen funciones de defensa dentro de la colonia, poseen una cabeza grande, abultada y aplanada en la región frontal,

R. Ripa

Descripción morfológica

Figura 8-215 Reproductor alado de Neotermes chilensis.

224 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Biología

Termita subterránea

Las termitas son insectos sociales, que se caracterizan por formar colonias estructuradas en castas diferenciadas con distribución de funciones, en la cual los individuos trabajan como grupo para lograr el éxito biológico y ecológico de la colonia. El inicio de una colonia es a través de una pareja fundadora alada (rey y reina) que durante la enjambrazón (vuelo) abandona la colonia, estableciéndose en grietas de la madera en las que construyen galerías. El período de vuelo ocurre desde mediados de diciembre hasta abril, especialmente en las horas crepusculares.

Subterranean termite

Hospederos Frutales: Vid, palto y Ciruelo. Su hábitat natural es madera seca y también raíces de: espino, Acacia cavens; molle, Schinus latifolius, tallos florales secos de chagual, Puya chilensis; quillay, Quillaja saponaria; Romerillo; Ñipa, Escallonia illinita; quisco, Trichocerus chilensis, cactus (Eulyghnia breviflora), Olivillo (Aectoxicum punctatum), Eucaliptos (Eucalyptus globulus) y Acacio (Acacia sp). Esta especie de termita ataca varias especies de madera en servicio, como pino insigne, álamo y roble, empleada en vigas, tapacanes, aleros, dinteles, puertas, marcos de ventanas y puertas.

Enemigos naturales Se ha observado que la termita de madera seca Neotermes chilensis es depredada por la hormiga arborícola Pseudomyrmex lynseus, varias especies de arañas, aves, etcétera.

Manejo Las termitas penetran en la madera expuesta, que generalmente carece de corteza. Por lo tanto los cortes de poda en especial de ramas de mayor grosor, deben protegerse adecuadamente para impedir que se inicie la descomposición y a su vez favorecer el sellado a través de la cicatrización natural en que la corteza cubre gradualmente el área. Es más frecuente el ingreso en troncos de árboles de mayor tamaño que han sido reinjertados. Por lo general queda expuesta una gran área que es difícil de proteger con pinturas u otros productos.

Control químico. Una vez detectadas las colonias, se deberá inyectar en las galerías un insecticida formulado con un espumante. Se deberá elegir aquellos productos que posean registro SAG para su uso en árboles afectados con termitas.

Reticulitermes flavipes (Kollar) Familia: Rhinotermitidae R. Ripa y P. Luppichini

Distribución e importancia Especie cosmopolita, distribuida en los 5 continentes. En Chile, se encuentra presente, en la Región de Valparaíso (V), Región Metropolitana y en una localidad de la Región del Libertador Bernardo O’Higgins (VI). Esta especie, se encuentra especialmente asociada al área urbana, sin embargo ha sido detectada causando daño en árboles frutales, especies forestales y ornamentales, por lo que se considera una plaga ocasional para estos rubros.

Daño Debido al hábito subterráneo de esta especie, el principal daño, se ha observado en árboles a la altura del cuello de la planta, donde se alimenta de la corteza y cambium, impidiendo el transporte de savia a las raíces. También ha sido observada dañando el xilema del tronco de árboles vivos de paltos y cítricos, construyendo galerías, en las cuales depositan suelo, característico de este grupo de especies. Otra particularidad de esta especie de termita es la construcción de galerías de barro y fecas sobre superficies, a través de las cuales se trasladan en busca de alimento. En cítricos, se ha observado mortalidad de árboles jóvenes (2 y 3 años) debido a que se alimenta en la corteza a la altura del cuello de la planta impidiendo el flujo de savia, causando una clorosis generalizada en el árbol y posteriormente su muerte (Figura 8-216).

Descripción morfológica Al igual que en otras especies de termitas, se distinguen tres castas de individuos con características morfológicas distintas. Las obreras son insectos de tamaño pequeño (4 a 5 mm), presentan el cuerpo blando alargado, color blanco cremoso. Los soldados miden alrededor de 5 mm, poseen una cabeza alargada y mandíbulas esclerotizadas. Los reproductores alados, son de color marrón oscuro a negro, miden 10 a 12 mm de longitud. Cada una de las castas tiene funciones diferenciadas dentro de

225 Manejo de plagas en paltos y cítricos

R. Ripa

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Figura 8-216 Amarillamiento en naranjo causado por el daño de Reticulitermes flavipes en la base del tronco.

Figura 8- 217 Soldado de Reticulitermes flavipes.

Figura 8-218 Reproductor alado de Reticulitermes flavipes.

la colonia como, alimentación, sanidad y construcción de galerías (obreras), defensa (soldados) y reproducción (alados) (Figuras 8-217 y 8-218).

cavan una pequeña cámara donde se aparean, luego la hembra deposita los huevos. Al parecer esta forma de iniciación de colonias tiene poca importancia en nuestro país. Por lo general las colonias se inician por yemación, esto es una parte de los individuos es separada de la colonia, por lo general por acción del hombre, trasladada a un nuevo sector dando inicio así a una nueva colonia.

Biología La reproducción la realizan principalmente los individuos neoténicos, muy frecuentes en colonias vigorosas. El período de vuelo ocurre durante la segunda quincena de agosto hasta fines de septiembre, en la Región de Valparaíso y Metropolitana, en los días de mayor calor, a media tarde. Estos reproductores alados (rey y reina) pierden sus alas, al encontrar un ambiente propicio,

Hospederos Frutales como: Cítricos, Damasco, Ciruelo, Manzano, Vides, Nísperos, Higuera, Palto y Chirimoyo, principalmente en huertos caseros, en sectores donde se han detectado colonias de termita subterránea. Ha sido en-

226 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

contrada atacando varias especies de árboles y arbustos ornamentales. Sin embargo, los mayores daños se encuentran asociados a madera en servicio como marcos de puertas y ventanas, pisos, zócalos, etcétera.

Enemigos naturales Eventualmente, se ha observado depredación de la hormiga Argentina Lineptema humile Mayr., especialmente de adultos alados.

Manejo Control. La termita subterránea se controla a través de aplicaciones de insecticidas residuales al suelo y uso de cebos.

Los insecticidas residuales deben localizarse en el suelo al nivel en el cual éstas se desplazan y donde se ubican las raíces de los árboles. Esta aplicación requiere, una importante cantidad de insecticida por unidad de superficie y disponer de maquinaria especializada. El ataque en árboles jóvenes en que dañan la corteza en la zona del cuello, puede controlarse con la aplicación localizada de insecticidas vía líquida. En el uso de cebos, las obreras se alimentan de una matriz que contiene un insecticida de acción muy lenta, por ejemplo un inhibidor de la síntesis de quitina, el cual transportan a la colonia. Por lo general se requiere un período de 8 a 12 meses para la extinción de la o las colonias. En todos los métodos de control se debe disponer de insecticidas y sus formulaciones que posean registro SAG para este uso.

227 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Polillas y Mariposas Orden: Lepidoptera • Familias: Tortricidae, Gracillariidae, Pyralidae, Noctuidae, Psychidae, Oecophoridae, Cossidae Las polillas y mariposas pertenecen a los lepidópteros grupo que incluye a plagas de gran importancia económica. La característica más sobresaliente de estos insectos es que sus alas se encuentran cubiertas por diminutas escamas que dan el diseño y colorido a cada una de las especies. En general, se tiene la idea que los individuos adultos son de gran tamaño, sin embargo, existe un número muy importante de especies de tamaño pequeño o microlepidópteros. El adulto presenta un aparato bucal muy especializado que se denomina espiritrompa y que mantiene enrollado cuando no se está alimentando de sustancias líquidas. La larva posee fuertes mandíbulas que le permiten alimentarse de hojas y frutos y en algunas especies cavar galerías en hojas y frutos. Por lo tanto, es la larva la que tiene la capacidad de producir daño a las plantas.

Enrollador de hojas, Enrollador del naranjo, Enrollador de los frutales, Enrollador de la Vid Chilean fruit tree leafroller, Fruit leaf folder, Orange Leaf roller Proeulia auraria (Clarke) (Lepidoptera: Tortricidae) R. Ripa

Distribución e importancia Por lo general este insecto presenta una muy baja densidad en huertos de cítricos. No obstante en algunos casos, en especial en la Región de Coquimbo (IV), se han observado ataques muy intensos que dañan una proporción importante de fruta en especial de naranjas del grupo navel. Se distribuye entre las regiones de Coquimbo (IV) y del Maule (VII)

Daño En los frutos realiza galerías superficiales en el exocarpio y penetra en el mesocarpio. En naranjas navel se ubica y excava en el ombligo observando una tenue tela blanca. Las heridas permiten la entrada de organismos patógenos ocasionando pudriciones. Es un insecto cuarentenario, por lo

tanto su presencia origina rechazos de las partidas en la inspección al embarque. En hojas se alimenta de la lámina, plegándola mediante hilos de seda.

Descripción morfológica Los adultos en reposo pliegan las alas en forma de techo, alcanzando una longitud de 11 a 14 mm entre el ápice de la cabeza al extremo de las alas. La hembra presenta tanto en la cabeza como en el pronoto y el margen basal anterior de las alas hasta la altura del primer par de patas una banda frontal de escamas gris oscuro mezcladas con blancas, la cual se separa del resto del ala por una angosta franja, observable en la vista lateral del cuerpo. El resto de las alas puede ser color ocre con o sin matices de trazos paralelos y oblicuos (González, 2003). Esta especie presenta además gran variabilidad de color. Los huevos de 0,7 mm de diámetro son de color amarillo, aplanados y se encuentran en grupos de hasta 40 unidades sobre la lámina foliar. La larva desarrollada de Proeulia auraria alcanza hasta 22 mm de largo, es de color verde y cabeza de color verde amarillento. En cambio los estados en desarrollo poseen la cabeza de color negro. La larva de Proeulia auraria se caracteriza por una banda negra que recorre la mejilla, lo que no presenta la larva de P. chrysopteris (Figuras 8-219 a 8-224).

Biología De las masas de huevos eclosionan pequeñas larvas que se desplazan hacia los brotes, hojas o frutos para alimentarse. En los frutos producen perforaciones y penetran algunos milímetros al interior. En las hojas, las larvas segregan hilos de seda mediante los cuales pliegan la lámina, en cuyo interior se protegen, mudan y pupan. Las larvas al ser perturbadas se dejan caer al suelo, comportamiento característico de esta plaga. En naranjas con ombligo se introducen en la concavidad, distinguiéndose una tenue tela de seda blanca en la entrada de la galería en el fruto.

228

Figura 8-223 Grupo de huevos de Proeulia auraria en hoja naranjo.

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Figura 8-222 Adulto de Proeulia auraria.

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Figura 8-221 Pupa de Proeulia auraria.

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Figura 8-220 Larva desarrollada de Proeulia auraria.

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Figura 8-219 Larva desarrollada de Proeulia auraria mostrando la banda negra en la cabeza.

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MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 8-224 Larvas neonatas y corion de huevos de Proeulia auraria en hoja naranjo.

229 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Presenta dos generaciones al año en árboles caducifolios, en la primera colocan los huevos en otoño y las larvas se alimentan escasamente para luego pasar el invierno en oquedades en la corteza y salir a alimentarse a fines de invierno. En cítricos continúa alimentándose en invierno cumpliendo tres generaciones (González, 2003) (Figuras 8-223 y 8-224).

En los cítricos, se encuentra en naranjo preferentemente. También está presente en frutales como: vid, peral, manzano, kiwi y ciruelo. De acuerdo a González (2003) ha sido colectada además en oreja de zorro, Aristolochia chilensis, plátano oriental, acacia, arrayán, quillay, maqui, peumo y canelo.

Enemigos naturales

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Hospederos

Figura 8-225 Parasitoide de la larva de Proeulia auraria.

Prado 1991 menciona a los siguientes enemigos naturales: • Parasitoides de huevos: – Encarsia porteri, Aphelinidae. • Parasitoide de larvas: – Ollacheryphe aenea, Tachinidae. – Lissonota sp, Ichneumonidae. – Apanteles sp y Bracon sp, Braconidae.

En general los parasitoides afectan una proporción importante de las larvas de Eulia. Muestreos de larvas realizados en naranjos Navel en Ovalle y posteriormente mantenidas en laboratorio mostraron entre el 20% y el 35% de larvas parasitadas. Si a ello se suma el efecto de parasitoides de huevo y el menoscabo producto del retiro de la muestra del campo, restringiendo la acción de estos agentes, es probable que el efecto total de los parasitoides sea muy superior en el campo.

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– Elachertus sp, Eulophidae.

Figura 8-226 Pupa de Taquinido parasitoide de la larva de Proeulia auraria.

Se muestran a continuación fotos de varias especies de enemigos naturales obtenidos de larvas (Figuras 8-225 a 8-230).

Manejo

Empleo de trampas de feromona para Eulias, Trampa Pherocon® TBM modelo Wing. De acuerdo al fabricante, la densidad de trampas a utilizar por superficie es:

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Monitoreo. Examinar al menos 10 hojas y 10 frutos pequeños de 20 árboles escogidos al azar por cuartel quincenalmente a partir de abril, en cultivares de naranjos navel y clementinas.

Figura 8-227 Taquinido parasitoide de la larva de Proeulia auraria.

230

Figura 8-228 Parasitoide de la larva de Proeulia auraria.



Superficie en hectáreas

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MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 8-229 Larva de Proeulia auraria, con larvas de extoparasitoide.

Número de trampas

• Menos de 12 hectáreas

Mínimo 3

• De 12 a 32 hectáreas

1 cada 4 hectáreas

• Más de 32 hectáreas

1 cada 6 hectáreas

Control. En general los ataques de Eulia en cítricos son muy ocasionales, aumentando su incidencia ligeramente en la Región de Coquimbo (IV). Dado que los enemigos naturales participan en la mantención de una baja densidad de esta especie, es muy importante mantenerlos activos, evitando los insecticidas no selectivos. Esta plaga se presenta en una temporada y posteriormente se mantiene en niveles muy bajos como se observa en el Gráfico 8-38. • Ataques de baja densidad, esto es alrededor de un 2 a 3 larvas vivas detectadas por árbol, aplicar productos en base a Bacillus thuringiensis, en dosis recomendada por el fabricante. Se sugiere realizar dos aspersiones con una diferencia de 10 días. La aplicación de B. thu-

R. Ripa

Revisar cada 3 a 4 días la captura de machos, anotando en una planilla o registro el número de individuos capturados por trampa. Confeccionar una curva de captura con el promedio del huerto (Gráfico 8-38). Reemplazar la fuente de feromona cada 6 semanas y mantener activo el pegamento de la base revolviéndolo y cambiándolo cuando pierde la adherencia (consultar instrucciones del fabricante). Figura 8-230 Parasitoide de la larva de Proeulia auraria.

ringiensis se deberá iniciar cuando las larvas están comenzando su desarrollo, oportunidad que debe ser determinada por monitoreos. Dirigir la aplicación desde abajo hacia arriba utilizando un codo en el pitón para mojar la zona del ombligo de la fruta. • Ataques de mayor intensidad deberán ser manejados con insecticidas de síntesis.

Producción orgánica. Control biológico y aplicaciones de productos en base a B. thuringiensis (BT).

231

20 19 18 17 16 15 14 13 12 11 10 9 8 7 6 5 4 3 2 1 0

Aplicación insecticida

01-01-2008

17-12-2007

02-12-2007

17-11-2007

02-11-2007

18-10-2007

03-10-2007

18-09-2007

03-09-2007

19-08-2007

04-08-2007

20-07-2007

05-07-2007

20-06-2007

05-06-2007

21-05-2007

06-05-2007

21-04-2007

06-04-2007

22-03-2007

07-03-2007

20-02-2007

05-02-2007

21-01-2007

06-01-2007

22-12-2006

07-12-2006

22-11-2006

07-11-2006

23-10-2006

08-10-2006

23-09-2006

08-09-2006

Aplicación insecticida

24-08-2006

Adultos / trampa

Manejo de plagas en paltos y cítricos

Fecha de monitoreo

Fuente. Gentileza de Agrícola Tamaya, Región de Coquimbo.

Gráfico 8-38 Captura promedio de machos de Proeulia auraria en trampas de feromona en cítricos (Ovalle 2006-2008).

Minador de los Cítricos

Descripción morfológica

Citrus Leafminer

La hembra es una polilla de color gris amarillento, manchas oscuras sobre su dorso, expansión alar de 4 mm y tamaño cercano a 2 mm de longitud. Sobre el borde de sus alas posteriores se observa abundante pilosidad. El huevo tiene forma ovoide, hemisférica aplanada y transparente. El primer estado larval es amarillento, casi transparente y presenta un ligero ensanchamiento en los primeros segmentos de su región anterior. Puede ser observado principalmente por el brillo que origina la cubierta de la galería que comienza a construir.

Phyllocnistis citrella Stainton (Lepidoptera: Gracillariidae) R. Ripa y F. Rodríguez

Distribución e importancia Esta es una plaga de reciente introducción a Chile con una distribución restringida a sectores aledaños a la ciudad de Arica en la Región de Arica y Parinacota (XV). Dada la gravedad de los daños que produce este insecto en la citricultura a nivel mundial, se ha incluido en esta revisión. Básicamente, los antecedentes que se dan a conocer a continuación corresponden principalmente a una revisión de la literatura, por lo tanto, en particular, lo que se relaciona con su manejo debe ser entendido como lo recomendado en el extranjero.

Daño Frutos: Muy ocasionalmente se observan galerías bajo la epidermis. Hojas: Galerías subepidérmicas que producen una deformación severa. Ramillas: Galerías bajo la epidermis y retardo del crecimiento en plantas jóvenes.

Biología La hembra deposita un huevo sobre hojas muy tiernas, del cual eclosiona una pequeña larva que penetra inmediatamente al mesófilo de la hoja, quedando cubierta por la epidermis. Luego de alimentarse avanzando siempre por la galería, la larva va mudando hasta alcanzar el tercer estado larval, luego deja de alimentarse dando origen a una prepupa, para luego pupar en una especie de cámara, adquiriendo el característico color pardo. Posteriormente emerge la polilla adulta que se aparea, repitiéndo el ciclo que, bajo condiciones de verano u otoño puede ser completado entre dos a tres semanas. Probablemente lo más característico es que la ovipostura se realiza en sitios cercanos a la nervadura de las hojas muy nuevas y desde ese lugar, la larva comienza su alimentación originándo una galería serpenteante en la lá-

232 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

mina de la hoja que se deforma y adquiere una tonalidad plateada (Figura 8-231).

b. fertilizar a fines de invierno para promover la brotación en primavera cuando la plaga es escasa o está ausente; y

Hospederos

c. evitar la proliferación de chupones.

Los cítricos limonero, naranjo, pomelo y mandarino.

Polilla del algarrobo o Polilla de las nueces, Barreneta de los cítricos

Enemigos naturales Parasitoides. En la Región de Arica y Parinacota se observan diferentes especies endémicas que se desarrollan principalmente sobre las larvas de la polilla. En Estados Unidos y Australia, el encírtido Ageniaspis citricola Logvinovskaya es un parasitoide de huevos y larvas pequeñas de alta efectividad en la reducción de la plaga.

Carob bean moth Ectomyelois ceratoniae (Zeller) (Lepidoptera: Pyralidae)

Manejo

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Monitoreo. En árboles menores de cinco años, muestrear 30 brotes con hojas de no más de 20 mm de largo por cuartel. Realizar esta labor cuanto exista el 25% de plantas comenzando a brotar a fines de verano y otoño. Examinar la presencia de galerías en las pequeñas hojas y repetir el muestreo cuando exista el 50% de brotación.

Distribución e importancia Es una plaga cosmopolita distribuida en Chile desde la Región de Coquimbo (IV) a la Región del Libertador Bernando O’Higgins (VI). Sólo se ha observado daño económico en un par de huertos en Carén y Monte Patria, Región de Coquimbo, en naranjas var Fukumoto (Comunicación personal Lorena Rojas).

Daño

R. Ripa

La larva daña el exocarpio, mesocarpio y el endocarpio del fruto, en el cual hace galerías donde se observan abundantes fecas. Por lo general, este daño se asocia posteriormente a un hongo que comienza a afectar el endocarpio.

Figura 8-231 Hoja de naranjo con daño de P. citrella.

Control. Aplicar aceite mineral al 0,5% si se detecta ovipostura en el 10% de los brotes muestreados. Esta aplicación es de carácter preventivo, ya que la hembra evita oviponer en superficies tratadas con aceite. Se recomienda repetir la aplicación cada 6 a 10 días hasta que la mayoría de los brotes sean mayores a 40 mm. La acción de los enemigos naturales de esta plaga debe ser preservada, evitando el uso de insecticidas. La literatura señala ciertas prácticas de manejo como: a. reducir la brotación de fines de verano a otoño, restringiendo la fertilización y el riego durante esta época a lo estrictamente necesario para un crecimiento normal;

Descripción morfológica El adulto es una polilla de color gris de 12 milímetros de extensión desde la cabeza al extremo de las alas plegadas. La larva desarrollada posee un escudete toráxico poco notorio en comparación a la larva de la polilla de la manzana, Cydia pomonella. La pupa se caracteriza por tener una costilla dorso-transversal más oscura en el tórax y dos pequeñas espinas en el dorso de cada segmento abdominal

Biología La larva comienza a horadar el exocarpio en la zona del ombligo de la fruta, tejiendo una suave tela en el lugar. Penetra en la fruta y se alimenta de la pulpa, acumulando fecas en ella. Muestras examinadas de frutos dañados mostraron un hongo de color oscuro en la zona de la galería.

233 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Manejo

Una vez desarrollada la larva teje un capullo de seda al interior del fruto en el cual pupa (Figuras 8-232 a 8-235).

La plaga puede ser controlada con aplicaciones de insecticidas, dirigidas en especial al ombligo de la fruta, aplicación que mejora con el uso del codo en el pitón (ver capítulo Uso de Plaguicidas). La aplicación de Bacillus thuringiensis, previo a la penetración de la larva en el fruto ha mostrado resultados satisfactorios (comunicación personal Lorena Rojas).

Hospederos Naranjo, limonero, nogal, almendro, castaño y fruta seca, algarrobo Prosopis chilensis M. y P. flexuosa M. y tamarugo Prosopis tamarugo Ph. (Klein-Koch y Waterhouse, 2000).

Enemigos naturales

Figura 8-234 Pupa de polilla de las nueces.

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Figura 8-233 Seda de la larva de Ectomyelois ceratoniae en ombligo de naranja Fukumoto.

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Figura 8-232 Daño y larvas de Ectomyelois ceratoniae en naranja Fukumoto.

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R. Ripa

No se conocen en nuestro país.

Figura 8-235 Adulto de polilla de las nueces.

234 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

NOCTUIDOS Especies mencinadas por Angulo et al, (2006):

Algunas pupan en el follaje, construyendo un capullo de seda y otras bajan al suelo elaboran una celdilla a 4 a 6 cm de profundidad.

• Spodoptera frugiperda (Abbot y Smith), cuncunilla cogollera del maiz, fall army worm.

Manejo Monitoreo. Los años o épocas en que la abundancia de estas mariposillas es alta, los adultos se pueden observar en las primeras horas de la noche en las luminarias fluorescentes de mercurio.

• Helicoverpa zea (Boddie) Gusano del choclo, Corn ear worm. • Peridroma saucia (Hübner) cuncunilla veteada, black variegated cutworm.

Los huevos que colocan en las hojas pueden reconocerse a simple vista al igual que el daño incipiente de larvas en los primeros estadios (Figura 8-236).

• Helicoverpa armigera (Huebner).

(Lepidoptera: Noctuidae)

En ocasiones de alta abundancia las larvas se desarrollan en la vegetación herbácea presente en el huerto, bajo esta situación se debe evitar la aplicación de herbicidas, dado que las larvas en ausencia de esta vegetación pueden subir al árbol y alimentarse del follaje (Figuras 8-238 y 8-239).

R. Ripa

Generalidades e importancia Las cuncunillas son plagas de marginal importancia en el cultivo de paltos y cítricos, ocasionalmente en árboles jóvenes se observa daño y la presencia de larvas alimentándose de hojas. Algunas especies de larvas poseen una variada coloración.

Figura 8-238 Larva de noctuido en brote clementina.

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Figura 8-237 Adulto de Helicoverpa armigera.

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Figura 8-236 Huevos de noctuidos.

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Control. Larvas pequeñas son susceptibles a la aplicación de Bacillus thuringiensis y Spinosad.

Figura 8-239 Larva noctuido Helicoverpa armigera en brote de clementina.

235 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Mariposa del cachito Arctopoda maculosa Butler (Lepidoptera: Oecophoridae) R. Ripa

Distribución e importancia Especie nativa, presente desde la Región de Valparaíso (V) a la Región de Los Lagos (X) (Prado 1991).

Daño Plaga que ataca preferentemente palto Chileno, Mexicola y Champion (comunicación personal Roberto Díaz).

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En los últimos años esta plaga ha disminuido gradualmente en importancia en las variedades que son dañadas. Figura 8-240 Cono con la larva de Arctopoda maculosa y daño en la lámina de la hoja.

En las hojas realiza perforaciones de diferentes diámetros en la lámina. Esta especie no daña frutos. Actualmente las densidades registradas son muy bajas y no alcanzan importancia económica, situación que al parecer también se observaba a comienzos de 1900 de acuerdo a Silva (1936).

Los adultos son pequeñas mariposas de 13 mm de largo desde el extremo de la cabeza hasta el extremo de las alas plegadas sobre el cuerpo Las alas son de color grisáceo con una pequeña mancha de color anaranjado en el borde terminal siendo de color naranja intenso por el envés.

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Descripción morfológica

Figura 8-241 Adulto de Arctopoda maculosa.

La larva mide cerca de 2 cm de longitud y está protegida al interior de un cono, su cabeza es marrón oscuro a negro, el tórax marrón anaranjado y abdomen gris. El cono es de paredes rígidas, de mayor tamaño que la larva y de color grisáceo, éste se mantiene adherido a la planta después que emerge el adulto (Figuras 8-240 a 8-243).

La larva se alimenta de la lámina de las hojas y a medida que crece utiliza los excrementos secos que une con hilos de seda, generando una especie de espiral muy simétrica, que conforma el cono, de donde proviene su nombre común. Esta espira o cono aumenta gradualmente en diámetro a medida que la larva se desarrolla siendo una estructura sorprendentemente sólida.

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Biología

Figura 8-242 Larva de Arctopoda maculosa al interior del cono abierto lateralmente.

236 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Bicho del cesto Bag Worm Thanatopsyche chilensis (Phil.) (Lepidoptera: Psychidae) R. Ripa

Distribución e importancia En Chile está presente entre las regiones de Atacama (III) y de Los Lagos (X) (Prado 1991), en Argentina se encuentra en Neuquén y Río Negro (Dapoto et al, 2003).

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Por lo general solo se observan individuos aislados en algunos árboles.

Figura 8-243 Cabeza de la larva de Arctopoda maculosa en el extremo del cono.

La cabeza de la larva tiene forma que asimila una tapa con la cual cubre la entrada al cono, posiblemente como una protección hacia parasitoides y depredadores. Mientras se alimenta mantiene unido el cono al tejido vegetal mediante hilos de seda. Previo a pupar, une el cono al soporte vegetal con un cordón de seda más robusto, arquea ligeramente el extremo más ancho del cono, teje una suave tela en el extremo abierto y pupa al interior. Los adultos emergen entre enero y febrero (Silva, 1936).

Hospederos Palto, Murta (Aguilera et al, 2008), Coigüe, Peumo, Boldo y Quillay (Klein and Waterhouse, 2000).

Enemigos naturales Dado que no se dispone de estudios sobre este insecto se desconoce el impacto de los enemigos naturales en la densidad de población de esta especie.

Manejo En los últimos años no se han registrado daños de esta especie. No obstante los insecticidas residuales controlan la larva.

Daño La larva se alimenta de la lámina foliar, dejando orificios, en palto Chileno y Champion.

Descripción morfológica La larva se protege en un capullo de seda, al cual exteriormente adhiere pequeños trozos de hojas, los capullos miden 6 cm de largo por 16 a 18 mm de diámetro. La larva tiene la cabeza y los tres segmentos del tórax de color amarillo anaranjado con pequeñas manchas negruscas, el abdomen es de color negro (Figuras 8-244 y 8-245). Las hembras son ápteras. El macho posee alas transparentes con escamas negras y una expansión alar entre 29 a 36 mm (Davis, 1964).

Biología La hembra coloca los huevos en el interior del capullo, lugar del que no sale durante su vida. Las larvas eclosionan en primavera y se dispersan por medio de hilos de seda. Comienzan a alimentarse de hojas e inician la construcción del capullo protector. Poseen una sóla generación al año.

Hospederos Palto, damasco, ciruelo, frambuesa, manzano, membrillo, maqui, pimiento del Perú (Schinus molle), Pinos del genero Cupresus, avellano europeo.

Enemigos naturales De acuerdo a Prado 1991, esta especie posee los siguientes enemigos naturales: El taquínido Lespesia robusta (Aldr.), los eulófidos Bellerus halidayi De Santis, B. angitis (Walk.) Cirrospilus sp, Elachertus sp, Horismenus sp y el torymido Perissocentrus chilensis Cwfd.

237

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Manejo de plagas en paltos y cítricos

Figura 8-244 Capullo de la larva de Thanatopsyche chilensis.

Manejo

Figura 8-245 Larva de Thanatopsyche chilensis.

En los últimos años no se han registrado daños de esta especie. No obstante los insecticidas residuales controlan la larva.

Gusano del tronco del palto y gusano del tebo Chilecomadia valdiviana (Phil.) C. moorei (Silva) (Lepidoptera: Cossidae) R. Ripa

Ambas especies han sido mencionadas dañando palto. Se distribuye desde la Región de Coquimbo (IV) a la Región de Magallanes (XII) (Prado 1991), se encuentra también en Argentina.

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Distribución e importancia Figura 8-246 Hembra adulta de Chilecomadia valdiviana.

Daño

Las variedades más atacadas son Mayapan, Bacon, Zutano, en menor intensidad Champion, Fuerte y Ryan y recientemente Hass (comunicación personal con José Ortega y Roberto Díaz) (Figuras 8-248 a 8-250).

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La larva se alimenta realizando galerías en el floema y xilema de ramas y tronco de palto. Las galerías son de forma ovalada de hasta 1 cm de diámetro. El daño ocurre de preferencia en sectores en los que se bifurcan las ramas. De las heridas fluye savia que al secarse muestra una excrecencia blanca y aserrín producto de la horadación de galerías. Producto de este daño y al peso de la fruta las ramas tienden a quebrarse.

Figura 8-247 Macho adulto de Chilecomadia valdiviana.

238 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Descripción morfológica La larva de C. valdiviana es de color rosado de aproximadamente 5 cm de largo, con una placa quitinizada color castaño oscuro en el primer segmento del tórax. De acuerdo a Olivares y Angulo (1992) y Parra et al, (1985), la larva de Chilecomadia moorei es de color blanco amarillento y el adulto es de color gris con manchas más oscuras.

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Biología

Figura 8-248 Daño de la larva Chilecomadia valdiviana en rama de palto Zutano.

Las hembras adultas vuelan de noche y por lo general colocan los huevos en heridas del árbol, en ocasiones producidas por la larva de la misma especie. La larva se desarrolla en el floema y también ingresa en el xilema, una vez desarrollada, forma una crisálida en una celda cercana a la superficie, que al emerger el adulto permanece semi expuesto.

Hospederos Cerezo, manzano, membrillo níspero, olivo, palto, peral (Prado 1991). Eucalyptus nitens (Lanfranco y Dungey 2001), acacio, lila, sauce mimbre, (Olivares y Angulo 1992), lenga (Peterson 1988), matico Buddleja globosa, tebo Trevoa trinervis, Myoporum sp.

R. Ripa

Enemigos naturales

Figura 8-249 Larva Chilecomadia valdiviana en rama de palto Zutano.

Manejo No se conocen métodos de control efectivos, la remoción de madera dañada es una alternativa.

R. Ripa

Figura 8-250 Pupa de Chilecomadia valdiviana en galería de tronco.

Ambas especies de Chilecomadia son parasitadas por el Taquinido Aldrichiopoda coracilla (Aldrich) y Chilecomadia valdiviana además por Callotroxis edwarsi Aldrich (Prado 1991).

239 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Arañitas Orden: Acarina Se describen a continuación las familias y especies de ácaros plaga que revisten importancia económica en los cultivos de paltos y cítricos, principalmente por el daño producido en la planta al alcanzar altas poblaciones o bien por la condición de plaga cuarentenaria que limitaría las exportaciones hacia importantes mercados.

Arañita roja del palto

Dada esta relevancia, los ácaros plaga deben ser monitoreados y controlados, razón por la que se incluyen en esta publicación.

R. Vargas y S. Rodríguez

Familia Tetranychidae Los ácaros fitófagos que pertenecen a la familia Tetranychidae presentan una amplia distribución a nivel mundial y constituyen el grupo más numeroso del orden Acarina. Para Chile se registran 13 especies de Tetraníquidos asociadas a plantas cultivadas (Prado 1991), la mayoría de ellas exóticas. Descritas para cítricos se encuentran las especies Eotetranychus lewisi, Tetranychus urticae y Panonychus citri y asociada al cultivo del palto una única especie de tetraníquido, Oligonychus yothersi. Miembros de esta familia se caracterizan por poseer un cuerpo pequeño, globoso. La hembra es de forma redondeada y el macho, de menor tamaño, de forma alargada y de menor longitud, ambos con número y longitud de setas dorsales variable entre especies. En términos generales, paltos y cítricos no requieren de tratamientos químicos intensos contra plagas, sin embargo, se ha aumentado la frecuencia de las aplicaciones de plaguicidas con el fin de satisfacer las condiciones de exportación, algunas veces excesivas, las que han favorecido el desarrollo poblacional de ácaros fitófagos, al quedar éstos libres de competidores por el sustrato alimenticio y con escasos controladores biológicos (Ripa y Caltagirone 1990) lo que se suma a la facilidad que presentan estas arañitas para desarrollar resistencia a los plaguicidas comúnmente usados por el agricultor (Doreste 1984).

Avocado red mite Oligonychus yothersi (Mc Gregor) (Tetranychidae: Acarina)

Distribución en Chile e importancia La distribución geográfica de O. yothersi se extiende entre la Región de Atacama (III) y la Región del Maule (VII) (Prado 1991). La arañita roja del palto es una especie cosmopolita, altamente polífaga con un rango de hospederos muy amplio. En palto se comporta como una especie polivoltina con traslape generacional, presentando un aumento poblacional en los meses de verano.

Daño La Arañita roja del palto es una plaga de importancia económica que ha adquirido relevancia principalmente debido a la escasez y eventualmente la eliminación de las poblaciones de enemigos naturales por el uso de plaguicidas y al aumento de la superficie de plantaciones en ladera favoreciendo su reproducción. Este ácaro se desarrolla en la cara superior de hojas maduras de palto junto a las nervaduras, alimentándose, tanto estadios inmaduros como adultos, del contenido de las células superficiales de la hoja. El área de alimentación donde se desarrollan los diferentes estados móviles se torna progresivamente marrón a bronceada (FIgura 8-251). Ocasionalmente provoca la caída temprana de las hojas afectadas por la plaga y defoliación parcial en el árbol cuando el ataque es intenso. Además, en altas densidades, invade el follaje nuevo en expansión (brotes de otoño) lo cual determina un bajo calibre de la fruta y caída del fruto joven recién formado. Es la plaga más importante a nivel foliar del palto, siendo la variedad Hass más susceptible al ataque de este tetraníquido (León, 2003). O. yothersi provoca una disminución de la tasa fotosintética, de la conductancia estomática y de la transpiración, afectando negativamente la fisiología de las hojas del palto (Schaffer, 1986) con consecuencia directa sobre la calidad de la fruta y rendimientos del cultivo (Palevsky et al. 2007).

240

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 8-251 Daño de Oligonychus yothersi en hojas de palto var. Hass.

Figura 8-252 Hembras, machos, juveniles y huevos de Oligonychus yothersi.

Descripción morfológica

R. Ripa

La arañita roja del palto es un ácaro fitófago de cuerpo ovalado, de aproximadamente 0,5 mm de largo, de color anaranjado en el tercio anterior y rojo negruzco en el resto del cuerpo. La hembra, por lo general es más robusta y redondeada que el macho, el que presenta una forma corporal más ovoidea. Los huevos de O. yothersi son globosos, color ámbar, dispuestos inicialmente a lo largo de la nervadura central y luego sobre toda la superficie foliar, tornando a rojo oscuro a medida que el embrión avanza en su desarrollo (Figura 8-252). La ovipostura se inicia en el mes de octubre, intensificándose en febrero y marzo, donde es posible encontrar los mayores niveles poblacionales (Figura 8-253).

Biología Figura 8-253 Juveniles y huevos de Oligonychus yothersi.

O. yothersi es un ácaro fitófago de hábito agregado, polivoltina y que presenta los estados de desarrollo de huevo, larva, ninfa y adulto, participando ambos sexos en el proceso reproductivo. El ciclo de vida de O. yothersi tiene una duración de 27 días promedio, en condiciones de laboratorio (Cuadro 8-15). Bajo condiciones de laboratorio, las hembras de O. yothersi, representaron el 92,3% del total de individuos adultos. La población de la arañita roja en palto registra máxima ocurrencia entre enero y mayo formando colonias abundantes (Gráfico 8-39). Se estima la presencia de 4 a 5 generaciones en el período de ataque con un alto número de hospederos secundarios, dispersando a los huertos de paltos cercanos a través del arrastre de los estadios móviles de la arañita por el viento, sobreviviendo de una temporada a otra principalmente como adulto sobre diferentes hierbas.

Cuadro 8-15 Ciclo biológico de O. yothersi en condiciones de laboratorio a 25 °C.



Estadio

Duración (días)



Huevo

5



Larva

3



Protoninfa

3



Deutoninfa

2



Adulto

14



Total ciclo

27

241 Manejo de plagas en paltos y cítricos

40 35

Individuos / hojas

30 25 20 15 10 5 0 Oct

Nov

Dic

Ene

Feb

[

Mar

Abr

May

Jun

Jul

Ago

Sep

]

AdultosGráfico 8-39 Inmaduros Huevos Fluctuación poblacional de Oligonychus yothersi en palto Hass en la comuna de La Cruz.

O. yothersi presenta un traslapo generacional bajo las condiciones climáticas de la zona central del país, coexistiendo los estados de huevo, larva, protoninfa, deutoninfa y adulto, con diferencias en la abundancia relativa entre los estados a través de la temporada. El estado adulto se registró a través de todas las fechas de muestreo, siendo en el mes de mayo, el único estado observado de la arañita roja. A partir de marzo, el número de individuos descendió bruscamente, coincidiendo con un progresivo incremento de enemigos naturales. El estudio de la fluctuación poblacional de O. yothersi en un huerto de paltos de la comuna de La Cruz, registró mayor presencia de individuos móviles (los más susceptibles a los métodos biológicos y químicos de manejo de la plaga) en meses de verano y otoño, y traslape de generaciones durante toda la temporada.

tos cercanos a través del viento, arrastrando los estadios móviles de la plaga.

Enemigos naturales Los enemigos naturales de O. yothersi asociados a paltos en la zona central del país son Stethorus histrio Chazeau (Coleoptera: Coccinellidae) y Oligota pygmaea Solier (Coleoptera: Staphylinidae), depredadores densodependientes y asociados a ácaros. Ambos coleópteros disminuyen las poblaciones de la plaga cuando ésta alcanza densidades medias a altas, depredando los diferentes estadios del ácaro, siendo uno de los factores de mortalidad con mayor incidencia sobre la población de la plaga (Figuras 8-254 a 8-260).

Se registró dominancia de la arañita roja dentro de las especies de ácaros fitófagos. Otros representantes de Acari con menor presencia fueron Euseius fructicolus (Acari: Phytoseiidae) y representantes de la familia Tydeidae, en particular Tydeus sp.

O. yothersi se presenta sobre un gran número de plantas hospederas, afectando a diversas especies frutales, especialmente chirimoyo, manzano, membrillo, palto y peral. Entre los hospederos secundarios del ácaro se encuentra el sauce, eucaliptos y con frecuencia sobre el arbusto ornamental Crataegus sp. Durante la época invernal, se asocia a hierbas como correhuela y malva, hospederos desde los cuales la plaga dispersa a los huertos de pal-

R. Ripa

Hospederos

Figura 8-254 Adulto de Stethorus histrio depredador de tetraniquidos.

242

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

(A)

R. Ripa

Figura 8-256 Larva de Stethorus histrio.

R. Ripa

Figura 8-255 Huevo y exuvia de larva de Stethorus histrio.

(B)

Figura 8-258 Adulto de Oligota pygmaea.

R. Ripa

R. Ripa

Figura 8-257 (A) Pupas de Stethorus histrio; (B) recién formada.

Figura 8-259 Larva de Oligota pygmaea.

243

R. Ripa

R. Ripa

Manejo de plagas en paltos y cítricos

Figura 8-260 Pupas de Oligota pygmaea.

Figura 8-261 Adulto de Cydnodromus picanus.

Estos depredadores colonizan el huerto de forma natural, en momentos en que la plaga ha aumentado considerablemente su población (Obrycki y Kring 1998; Kishimoto 2003) sin lograr en algunos casos evitar los daños que produce la arañita roja a nivel fisiológico en el árbol.

dría mantenerse, representando un factor significativo de regulación (ver Capítulo 7: Dinámica de poblaciones).

La colonización “tardía” de los huertos de palto de estos insectos benéficos determinó la necesidad de incorporar nuevos depredadores al sistema arañita-palto, que interactúen con bajas densidades poblacionales de O. yothersi. Fue seleccionado para el estudio el depredador Cydnodromus picanus Ragusa (Parasitiformes: Phytoseiidae) potencial depredador de la arañita roja del palto ya que, como especie generalista, no requiere grandes densidades poblacionales de ácaros plaga para establecerse en el huerto, pudiendo utilizar alimentos alternativos como granos de polen, esporas de hongos, estadios inmaduros de insectos, néctar y exudados de plantas en ausencia o escasez de la presa (Croft et al. 2004; Nomikou et al. 2005; Bouras y Papadoulis 2005) (Figura 8-261). El desarrollo de C. picanus fue de 5,46 días al ser alimentado con inmaduros de O. yothersi, registrándose además una supervivencia del 100%. Al suministrarle polen de palto var. Hass y polen de la hierba Hirschfeldia incana (Brassicaceae), frecuente en entrehileras de huertos de palto, éste registró una supervivencia de inmaduros del 60%, lo cual permitiría realizar liberaciones de C. picanus utilizando polen de H. incana como alimento alternativo (Bermúdez et al. 2007). El estudio de los parámetros biológicos de C. picanus en condiciones de laboratorio, indica que posee una capacidad de multiplicación de la población mayor que la plaga, señalando el potencial de control que tiene como depredador de O. yothersi. Los resultados de este estudio (Rioja, 2008) permiten suponer que en condiciones de campo el patrón de reducción poblacional de la plaga po-

Manejo Monitoreo. El monitoreo de O. yothersi debe iniciarse en los meses de verano y extenderse durante el otoño. La frecuencia de monitoreo debiera realizarse semanal y quincenalmente en zonas calurosas y frías respectivamente. En focos y sobre 30 árboles, se recomienda muestrear la presencia de estados móviles y huevos de la arañita roja y enemigos naturales en 10 hojas por árbol, obteniendo el porcentaje de hojas infestadas por árbol, lo que permite estimar la población de arañita presente y adoptar una medida de control si se requiere. Control químico. Los meses de abril y mayo comienza a aumentar la densidad de O. yothersi, por lo que se puede considerar una aplicación química sobre los focos de la plaga cuando se registra el 20% o más de hojas infestadas de acuerdo al monitoreo. Las evaluaciones realizadas por el INIA La Cruz sobre la Arañita roja del palto mostraron un mayor control de individuos móviles de O. yothersi que de huevos, observándose una efectividad decreciente entre los productos jasmonato, abamectina, aceite mineral miscible y extracto de neem (Gráficos 8-40 y 8-41), probablemente debido al origen biológico de los productos evaluados, permitiendo una mayor sobrevivencia de los enemigos naturales y por ende una mayor disminución de la población de la plaga. El aceite mineral mostró ser muy efectivo sobre estadios móviles y huevos de O. yothersi a los 15 días (Gráficos 8-42 y 8-43), favoreciendo su utilización en programas de manejo integrado de la plaga. Sin embargo, la población del fitoseido C. picanus resultó altamente susceptible a la aplicación del aceite mineral.

244 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Promedio huevos / hoja

25 20 15 10 5 0 Abamectina 0,18 EC

[

Jasmonato 224 ppm

15 días

Abamectina 0,18 Azadirachtina 1% EC + Aceite Mineral 0,25

30 días

45 días

Testigo

]

Productos utilizados: Vertimec 0.18 EC = Abamectina • Citroliv = Aceite Mineral • Trilogy= Azadirachtina

Gráfico 8-40 Efectividad de productos noveles sobre huevos de Oligonychus yothersi. La Cruz, 16 enero 2006.

7

Promedio móviles / hoja

6 5 4 3 2 1 0 Abamectina 0,18 EC

[

Jasmonato 224 ppm

15 días

Abamectina 0,18 Azadirachtina 1% EC + Aceite Mineral 0,25

30 días

45 días

Testigo

]

Productos utilizados: Vertimec 0.18 EC = Abamectina • Citroliv = Aceite Mineral • Trilogy= Azadirachtina

Gráfico 8-41 Efectividad de productos noveles sobre móviles de Oligonychus yothersi. La Cruz, 16 enero 2006.

Bioensayos de laboratorio realizados por el INIA La Cruz sobre adultos del depredador C. picanus, registraron una alta susceptibilidad del fitoseido, con promedios cercanos al 100% de mortalidad ante los productos estudiados (ver Capítulo 5: Control químico).

El manejo de O. yothersi debe realizarse en relación a la fenología de la plaga en el cultivo observada con el monitoreo. Se debe considerar la aplicación de aceite, y detergentes cuando la plaga se presenta en al menos el 20% de las hojas. Complementario a las aplicaciones quí-

245 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Promedio huevos / hoja

400

300

200

100

0

Testigo

[

Aceite mineral 1% 15 días

30 días

Aceite mineral 2% 45 días

]

Productos utilizados: Citroliv = Aceite Mineral

Gráfico 8-42 Efectividad de aceite mineral sobre huevos de Oligonychus yothersi. Hijuelas, mayo 2006.

120

Promedio móviles / hoja

100 80 60 40 20 0

Testigo

[

Aceite mineral 1% 15 días

30 días

Aceite mineral 2% 45 días

]

Productos utilizados: Citroliv = Aceite Mineral

Gráfico 8-43 Efectividad de aceite mineral sobre móviles de Oligonychus yothersi. Hijuelas, mayo 2006.

micas pueden realizarse liberaciones de C. picanus en el mes de abril, con lo cual se limitaría el incremento de la población de la plaga (Gráfico 8-44). Las liberaciones de enemigos naturales combinadas con el uso de abamectina o aceite mineral deben contemplar el período residual de los acaricidas.

El monitoreo debe incorporar la observación de hospederos alternativos cercanos al huerto, ya que la arañita roja sobrevive durante los meses de invierno sobre ellos. A su vez, mantener las poblaciones de S. histrio, O. pygmaea y C. picanus en el huerto y en la flora vecina, conservando plantas y arbustos que sirvan de alimento a los depredadores, especialmente polen de Brasicáceas.

246 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Liberación en. naturales

Aplicación química

oct

nov

dic

[

ene

feb

mar

Adultos

abr

may

Inmaduros

jun

jul

Huevos

ago

sep

]

Gráfico 8-44 Manejo de de Oligonychus yothersi en paltos.

En producción orgánica el manejo debe contemplar el uso de aceites, detergentes y acaricidas orgánicos en las mismas épocas recomendadas anteriormente.

Arañita Roja de los Cítricos Citrus red mite Panonychus citri (Mc Gregor) (Tetranychidae: Acarina) R. Ripa, P. Larral, R. Vargas, N. Olivares y E. Nuñez

Distribución e importancia Esta plaga se distribuye en casi todo del mundo y en Sudamérica está presente en Argentina, Brasil, Chile, Colombia y Perú. En nuestro país se encuentra desde la Región de Arica y Parinacota (I), hasta la Región de la Araucanía (IX). Considerada plaga de importancia económica primaria, causando daño directo a la producción de cítricos.

sobre la cara superior de las hojas, ocasionando el vaciado de las células epidérmicas del tejido vegetal, al alimentarse directamente a través de un estilete curvo y alargado que posee. Consecuentemente ocasiona la decoloración, amarillamiento y caída de las hojas. Se ubica preferentemente sobre hojas que alcanzan la madurez y también sobre hojas tiernas, frutos y ramillas. Las hojas dañadas toman un aspecto plateado y dependiendo de la magnitud del ataque se aprecia caída prematura de las hojas. Las ramillas tiernas pueden también presentar decoloración. En frutos, se observa inicialmente un plateado que posteriormente adquiere una coloración parda (Figura 8-262).

En el Perú, es una de las plagas importantes en todas las áreas citrícolas, tanto en clementinas, mandarinas malváceas, naranjos dulces, pomelos. Considerada como nociva y persistente por Procitrus SENASA, 2007.

Altas densidades de P. citri se aprecian después de aplicaciones reiteradas de plaguicidas no selectivos y/o presencia de abundante polvo en las hojas. La Arañita roja se alimenta casi exclusivamente

R. Ripa

Daño

Figura 8-262 Daño de la microperforación causada por Panonychus citri en un fruto de naranjo.

247

R. Ripa

Manejo de plagas en paltos y cítricos

R. Ripa

Figura 8-263 Hembra (izquierda), macho (derecha) y huevos de Panonychus citri.

Descripción morfológica La hembra joven o teliocrisálida, emite una feromona atrayendo al macho que se ubica en la parte ventral de la hembra.

Figura 8-264 Machos esperando la ecdisis para aparearse con la hembra de Panonychus citri.

La hembra adulta vive de 15 a 20 días, durante los cuales oviposita de 2 a 3 huevos por día, totalizando entre 20 a 50 huevos. El ciclo biológico de huevo a huevo es de 9 a 12 días en verano y 50 en invierno. Se ha observado en Perú que las primeras ninfas no soportan temperaturas de 35 a 40° C y humedades bajas reducen la fecundidad de las hembras.

adultas son fecundadas inmediatamente después de la muda, comenzando a oviponer luego de dos a tres días. Las hembras no fecundadas también pueden poner huevos que dan origen a machos (Figura 8-264).

La hembra adulta posee una forma globosa y tiene un tamaño aproximado de 0,4 mm de longitud, es de color rojo oscuro y sobre su dorso se proyectan largas setas blancas que nacen a partir de tubérculos rojizos. Las patas son de color más claro que el abdomen. El macho posee el extremo posterior del abdomen más angosto, es de menor tamaño y coloración más clara que las hembras, Los huevos son esféricos, de color rojo brillante y de aproximadamente 0,12 mm de diámetro. Tienen un pedicelo central de color blanco (Figura 8-263).

Biología Los estados de desarrollo son: huevo, larva, protoninfa, deutoninfa y adulto. La hembra deposita los huevos preferentemente a lo largo de la nervadura principal de la cara superior de la hoja. Cuando eclosiona la larva mide aproximadamente 0,2 mm y posee 3 pares de patas. Después de dos a tres días da origen a la protoninfa que tiene una longitud cercana a 0,25 mm y cuatro pares de patas, al igual que el estado que le sigue. Las hembras

En el seguimiento de la abundancia poblacional realizada del ácaro y sus depredadores entre los años 1997 y 1998, en dos localidades del país, se observó una mayor abundancia de la plaga en los meses de otoño. Cabe destacar que este muestreo se realizó en huertos mantenidos libre de aplicación de plaguicidas, observándose una disminución progresiva de la plaga, e incluso un ataque de mucho menor envergadura el segundo año en un predio y la prácticamente ausencia de la plaga en el segundo (Gráficos 8-45 y 8-46).

Hospederos Los cítricos: naranjo, mandarino, pomelo y limonero.

Enemigos naturales Entre ellos se encuentran los depredadores Oligota pygmaea Sol (Coleoptera: Staphylinidae). Estafilínido endémico de Chile, Stethorus histrio Chazeau (Coleoptera: Coccinellidae). Tanto larvas como adultos se alimentan activamente de los diferentes estados de P. citri.

248 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

0,20

5,00 4,50

Arañitas / hoja

3,50 0,12

3,00 2,50 2,00

0,08

1,50

Depredadores / hoja

0,16

4,00

0,04

1,00 0,50

[

P. citri móviles

P. citri huevos

oct 98

sep 98

jul 98

jun 98

abr 98

mar 98

ene 98

dic 97

oct 97

sep 97

jul 97

jun 97

may 97

0,00 mar 97

0,00

S. histrio

Fitoseidos

]

Gráfico 8-45 Fluctuación poblacional de individuos móviles y huevos de Panonychus citri y sus depredadores en Peumo, Región del Libertador Bernardo O’Higgins (1997-1998).

1,20

0,040 0,036

1,00

0,028

Arañitas / hoja

0,80

0,024 0,60

0,020 0,016

0,40

0,012

Depredadores / hoja

0,032

0,008

0,20

0,004

[

P. citri móviles

P. citri huevos

Fitoseidos

oct 98

sep 98

jul 98

jun 98

abr 98

mar 98

ene 98

dic 97

oct 97

sep 97

jul 97

jun 97

0,000 may 97

mar 97

0,00

S. histrio

]

Gráfico 8-46 Fluctuación poblacional de individuos móviles y huevos de Panonychus citri y sus depredadores en El Palqui, Región de Coquimbo (1997-1998).

249 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Los fitoseidos Euseius fructicolus Gonzalez y Schuster (Acarina: Phytoseiidae) y Cydnodromus picanus Dosse (Acarina: Phytoseiidae). Estos ácaros fitoseidos E. fructicolus y C. picanus son de forma piriforme, brillantes, con setas largas y de caminar rápido en comparación a los ácaros fitófagos. Su coloración varía desde casi translúcidos a rojizos, dependiendo de su alimentación. Al parecer la efectividad de los fitoseidos sobre P. citri es escasa. Por otra parte O. pygmaea y S. histrio comienzan a establecerse y reproducirse con altas densidades de ácaros fitófagos, como se observa en los gráficos de la fluctuación poblacional de estas especies. En Perú, se observan un extenso número de especies benéficas nativas o naturalizadas. Desde el año 2005 Guanilo reportó las siguientes especies: Aeolothrips sp, Amblyselus chungas, Ceraeochrysa cincta, Chrysoperla externa, Mexechelus sp, Neoseilus califonicus, Oligota sp, Phytoseiulus persimilis, Scirulinae, Stethorus sp, Stethorus tridens, Typholomdrous tropica, Typholodromus (A) evectus, Typholodromus (A) travalensis. Desde abril del 2007, se introdujo al Perú el ácaro predador Eiuseius stipulatus (Athias-Henriot) desde España y en noviembre de 2007 se introdujo la especie Amblyseius largoensis (Muma) desde Cuba. Ambas especies están en proceso de implantación. Además, el uso del hongo entomopatógeno Lecanicilium lecanii ocasiona mortalidades considerables, sin embargo se debe restringir las aplicaciones cuando se están liberando ácaros predadores.

Manejo Monitoreo. Muestrear la presencia de estados móviles, huevos y enemigos naturales en 10 hojas tomadas al azar de cada árbol, en 30 árboles por sector quincenalmente desde noviembre a mayo en la zonas templadas y aumentar la frecuencia y la extensión del período en zonas más cálidas y poco lluviosas. Control químico. Eliminar el polvo del follaje con agua y detergente agrícola (ej. TS2035 en dosis recomendada en la etiqueta) para disminuir la densidad de la arañita roja y la presencia de polvo, en especial cerca de caminos.

Evitar el uso de acaricidas de amplio espectro dado que eliminan los enemigos naturales. Además, se debe evitar la aplicación de insecticidas fosforados y carbamatos en más de una oportunidad en forma consecutiva. Ocasionalmente se ha observado ataques de arañita después de la aplicación de insecticidas neonicotinoides. De acuerdo a los ensayos realizados, en orden de menor a mayor efectividad sobre P. citri, están los detergentes, aceites minerales y acaricidas (Gráficos 8-47 y 8-48). Aplicar detergente agrícola al follaje si se registra entre el 5% y el 10% de hojas con presencia de la plaga. Cuando se observe abundante ovipostura, repetir la aplicación de detergente al cabo de 10 días en verano y 20 días en invierno. En evaluaciones realizadas en el laboratorio de toxicología de INIA La Cruz se determinó que el detergente agrícola (TS 2035) posee una moderada capacidad de barrido mientras que plaguicidas de origen vegetal (Quinoa, extracto de Quillay y Neem) poseen una capacidad menor, similar al agua. En cuanto a la mortalidad solo el extracto de Neem fue efectivo. Usar aceite mineral entre el 0,5% y el 1% si la plaga se presenta en más del 10% de las hojas, evitando hacerlo en horas de calor excesivo. Se recomienda controlar la Hormiga Argentina, ya que se ha observado que su presencia interfiere con el control biológico de esta plaga. En el Cuadro 8-16 se indican la efectividad relativa de diferentes acaricidas sobre ácaros y su incidencia sobre depredadores presentes en cítricos. En producción orgánica debe favorecerse el control biológico mediante la presencia de higuerilla (Ricinus communis) que albergan a los depredadores O. pigmea y S. histrio. La reducción de la población de P. citri debe realizarse utilizando detergentes y acaricidas orgánicos en dosis comercial. Deben realizarse aplicaciones de acaricidas orgánicos en la misma época sugerida anteriormente.

250 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

25

40 35

20

30

15

10

Huevos / hoja

20

10 5

5

0

Control absoluto

Control agua

Aceite 0,5 A

[

Aceite 1% B Móviles

Huevos

45 días

25 días

Inicial

Aceite 1% D

10 días

45 días

25 días

Inicial

Aceite 1% C

10 días

45 días

25 días

10 días

Inicial

45 días

25 días

10 días

Inicial

45 días

25 días

10 días

Inicial

45 días

25 días

10 días

Inicial

45 días

25 días

-5 10 días

0

Aceite 1% E

]

Productos utilizados: Aceite A: Ultraspray • Aceite B: Winspray • Aceite C: Winspray miscible • Aceite D:Citroliv miscible

Gráfico 8-47 Efecto de aceites sobre la densidad de huevos y móviles de Panonychus citri en Mandarinos var Fortuna. Aplicación 28 de abril, 2006 (Fuente: Convenio INIA-ANASAC).

6 5

Móviles / hoja

Inicial

Móviles / hoja

25 15

4 3 2 1 0

Chinomethionate

[

Aceite 0,5%

Inicial

3 días

Detergente 2 aplicac. 10 días

Agua 17 días

Testigo 35 días

]

Productos utilizados: Chinomethinate = Morestan • Aceite mineral = Citroliv miscible • Detergente = SU120

Gráfico 8-48 Efectividad de plaguicidas en el control de individuos móviles de Panonychus citri en naranjo, var. New hall. Hijuelas, 1998.

251 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Cuadro 8-16 Efectividad de acaricidas evaluados por INIA La Cruz para el control de ácaros*

Ingrediente activo Productos comerciales Efectividad** Aceite mineral

Citroliv miscible

Susceptibilidad de enemigos naturales al producto

++++

+



Ultraspray

++++



Winspray

++++

Acaban

+++++

Fast

++++

+++

Numectin

++++

+++



Vertimec

++++

+++

Acequinocyl

Kanemite

++++

++++

Dicofol

Kelthane

+++++

++++

Fenazaquin

Magister

++++

+++++

Fenperoximato Abamectina

++++

* La mención a ingredientes activos y/o productos comerciales no constituye una recomendación, sólo corresponde a una ponderación de su efectividad sobre arañitas. El uso de estos y otros productos es responsabilidad del agricultor quien deberá verificar el registro de los productos en el SAG y en el mercado de destino de la fruta +++++ = muy efectivo. + = escasa efectividad.

Arañita Bimaculada

Descripción morfológica

Two-spotted mite

La hembra adulta tiene forma globosa de tamaño cercano a 0,5 mm (Figura 8-265). Su cuerpo es blanquecino a verde claro. Presenta dos manchas de color verde oscuro a negras en la región dorsolateral que originan su nombre común. A diferencia de P. citri, las setas dorsales no salen de tubérculos. Los huevos son esféricos, blancos y brillantes.

Tetranychus urticae (Tetranychidae: Acarina) R. Ripa, P. Larral, R. Vargas y N. Olivares

Distribución e importancia La arañita bimaculada es una especie cosmopolita y en Chile se encuentra presente desde la Región de Tarapacá (I) hasta la Región de Magallanes (XII). En cítricos es de gran relevancia en las regiones de Atacama y Coquimbo. En las demás regiones en que se cultivan cítricos es de escasísima importancia. Corresponde a una plaga de importancia económica primaria en otros cultivos.

Normalmente se alimentan del follaje cercano al tronco o suelo, asociado a malezas con presencia de arañita. Produce áreas cloróticas que se ven en ambas caras de la lámina y con densidades altas se aprecian bronceadas. Cuando las colonias son numerosas, se observa una densa tela protegiendo los individuos

R. Ripa

Daño

Figura 8-265 Hembra y juveniles de Tetranychus urticae en hoja de cítrico.

252 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Biología

Manejo

El ciclo de la arañita incluye los estados de huevo, larva, protoninfa, deutoninfa y adulto. Al término del estado de larva y de cada instar ninfal hay un período de inactividad en el cual la arañita muda al estado siguiente. Por lo general, pasan el invierno como adultos en malezas o en el suelo si el invierno es frío. En esas condiciones, las hembras invernantes son de color anaranjado.

Monitoreo. Se debe observar durante diciembre a enero la proporción de hojas colonizadas por esta especie, determinando la presencia de enemigos naturales. Control. No se requiere acciones específicas de control. De observarse un posible incremento, realizar lavado con detergente o aplicaciones de aceite mineral como se indicó para P. citri. En producción orgánica se debe favorecer el control biológico y realizar lavado con detergente agrícola.

Hospederos En cítricos se ha encontrado en limoneros. Es una plaga muy polífaga que se puede encontrar en especies de: carozos, pomáceas, kiwi, arándano y frambueso, entre otros. También se encuentra asociada a diferentes hortalizas, forrajeras, plantas ornamentales y malezas como la correhuela.

Familia Tenuilpalpidade Corresponen a ácaros fitófagos que se caracterizan por poseer un cuerpo pequeño muy aplanado, generalmente ovalado y de setas dorsales cortas. En chile el principal género de importancia agrícola corresponde a Brevipalpus, el cual posee un palpo sin garra terminal con cuatro segmentos pequeñísimos. La principal especie de éste genero corresponde a Brevipalpus chilensis, nativo que afecta a frutales, ornamentales y malezas. Otros géneros presentes en Chile corresponden a Tenuipalpus y Cenopalpus (González, 1989).

Enemigos naturales Corresponden a los depredadores, ácaros fitoseidos Euseius fructicolus González y Schuster (Acarina: Phytoseiidae), Cydnodromus picanus Dosse (Acarina: Phytoseiidae), Galendromus occidentalis Nesbitt (Acarina: Phytoseiidae) y Phytoseius decoratus González y Schuster (Acarina: Phytoseiidae), los coccinélidos Stethorus histrio Chazeau (Coleoptera: Coccinellidae) y Oligota pygmaea Sol (Coleoptera: Staphylinidae), el díptero Aphidoletes sp (Diptera: Cecidomyiidae) y el trips depredador Scolothrips sp (Thysanoptera: Thripidae), cuyas ninfas y adultos depredan huevos y/o estados juveniles de arañitas (Figura 8-266).

Falsa arañita roja de la vid Chilean grape flat mite Brevipalpus chilensis (Baker)

A diferencia de P. citri, T. urticae es depredada activamente por fitoseidos.

(Tenuipalpidae: Acarina) R. Ripa, P. Larral, N. Olivares y R. Vargas

R. Ripa

Distribución e importancia

Figura 8-266 Larva de Aphidoletes sp depredando arañita roja.

B. chilenis se distribuye desde la Región de Atacama (III) hasta la Región de los Lagos (X). A pesar de que las densidades registradas de B. chilensis en huertos comerciales de cítricos no causan un daño directo, su connotación de plaga cuarentenaria, provoca rechazos en la exportación. Asimismo, para el mercado de Estados Unidos, surge la necesidad de realizar un manejo específico tendiente a la mitigación de este ácaro. Con este fin el Servicio Agrícola y Ganadero SAG de Chile y el de Sanidad Agropecuaria de Estados Unidos APHIS firmaron un acuerdo inserto en el esquema del System Approach el que al ser aplicado correctamente permite el ingreso de la fruta bajo condiciones menos restrictivas, evitando la fumigación con Bromuro de Metilo. Así, se autoriza la exportación de mandarinas que cumplan con un conjunto de medidas destinadas a mitigar el riesgo de ingreso de la plaga al país de destino. En la práctica este proceso requiere de la inscripción y certificación de los huertos denominados de baja prevalencia, lo que implica que ningún ejemplar

253 Manejo de plagas en paltos y cítricos

del ácaro debe ser detectado en la muestra, en una inspección oficial protocolizado y autorizado por el Servicio Agrícola y Ganadero.

El principal daño económico provocado por la plaga es el indirecto, por su condición cuarentenaria, lo que provoca rechazo de la fruta ante su presencia en frutos en el proceso de exportación. En forma excepcional elevadas poblaciones del ácaro pueden producir un plateado y textura áspera de la superficie de frutos de cítricos. En mandarinas, se observan pequeñas manchas amarillas sobre frutos verdes que prácticamente desaparecen con la coloración del fruto maduro.

R. Ripa

Daño

Figura 8-267 Hembra, macho, huevos y exuvios (blanco trasparentes) Brevipalpus chilensis.

Huevos

Hembra

Descripción morfológica

Macho

La hembra adulta tiene un cuerpo de forma ovalada y muy aplanada dorsoventralmente, de tamaño cercano a 0,5 mm de longitud. Es de color rojo oscuro con manchas negras. Los huevos son ovoides, brillantes y de color rojo (Figura 8-269). El macho es de menor tamaño que la hembra y su cuerpo es algo más triangular (Figura 8-267).

El ciclo B. chilensis incluye los estados de huevo, larva, protoninfa, deutoninfa y adulto (Figura 8-268). La duración del desarrollo está en directa relación con la temperatura ambiente y en condiciones de laboratorio a una temperatura constante de 25°C completa su desarrollo en 19 días (Olivares, 2007). En condiciones de laboratorio, la mayor mortalidad de B. chilensis se expresa al estado de larvas, alcanzando una supervivencia mayor a 45 días desde huevo a adulto (Gráfico 8-49).

Deutoninfas

Protoninfas

C. Tobar

Biología

Larvas

Figura 8-268 Ciclo biológico de Brevipalpus chilensis.

La densidad de B. chilensis aumenta en los frutos junto con el desarrollo de estos, llegando a niveles máximos durante el período de cosecha (Gráfico 8-50). En cítricos, en la Región de Coquimbo (IV) y la Región de Valparaíso (V) se ha observado la presencia de todos los estados de desarrollo del ácaro durante el año, con una moderada

R. Ripa

En los cítricos el tenuipálpido se encuentra preferentemente sobre la superficie del fruto, con menor frecuencia bajo los sépalos, denominados “roseta”, siguiendo en orden decreciente, hojas, ramas y ramillas. En estos últimos permanece en los períodos de ausencia de frutos. En general, es un ácaro de movimientos lentos. Del huevo eclosiona una larva cuya característica más notoria es la presencia de solo tres pares de patas, luego le suceden dos estados ninfales y posteriormente los adultos.

Figura 8-269 Huevos de Brevipalpus chilensis.

254 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

disminución de la densidad de huevos en período de invierno (Gráficos 8-50 a 8-54). Esto contrasta con lo que ocurre en vides, donde el ácaro no se desarrolla en el período invernal.

tima que éstas y la flora espontánea presente en los alrededores del huerto podrían representar un inóculo a los árboles recién transplantados. La planta arbustiva, tupa o tabaco del diablo, Lobelia sp, presenta altas densidades, muy superiores a otros vegetales, por lo que se recomienda monitorear su presencia y eliminarla del huerto.

En muestreos realizados en malezas se ha detectado la presencia de B. chilensis en muy bajas densidades. Se es-

1,2

1

Ix

0,8

0,6

0,4

0,2

0

0

5

10

15

20

25

30

35

40

45

Edad (días) Gráfico 8-49 Curva de supervivencia de Brevipalpus chilensis en condiciones de laboratorio (Olivares, 2007).

4 3,5

Individuos / frutos

3 2,5 2 1,5 1 0,5 0 06 ene 16 ene 26 ene 20 feb 09 mar 18 mar 10 abr 16 abr 26 abr 04 may 11 may 31 may

[

Moviles

Huevos

]

Gráfico 8-50 Fluctuación poblacional de Brevipalpus chilensis en frutos de mandarino, Hijuelas, 2006.

255 Manejo de plagas en paltos y cítricos

7,225 6,89 7,085

1,2

5,73

5,925

8,026

8,16 8,13 8,34

7,5

6,28

5,5

0,9

3,5 2,85

0,6

[

Ninfas

Aultos

Muertos

Huevos

30 ago

06 ago

08 jul

10 jun

10 may

10 abr

14 feb

14 mar

1,5

15 ene

19 nov

0,0

1,735

2

0,3

19 dic

Individuos / hoja

1,5

7,6

Huevos / hoja

1,8

Medida frutos (cm)

-0,5

]

4,0

1,0

2,0

0,0

0,0

[

Adultos

14 mar

14 feb Ninfas

Muertos

Huevos / fruto

6,0

2,0

13 sep

3,0

16 ago

8,0

08 jul

4,0

10 jun

10,0

10 may

12,0

5,0

10 abr

6,0

15 ene

14,0

0 ene

7,0

23 nov

16,0

26 oct

8,0

24 sep

Individuos / hoja

Gráfico 8-51 Fluctuación poblacional de Brevipalpus chilensis en frutos de naranjas, Variedad Thompson. Quillota, La Palma.

]

Huevos

Gráfico 8-52 Fluctuación poblacional de Brevipalpus chilensis en frutos de limones, variedad Genova. Limache.

2,5

1,8 1,6 Individuos / hoja

1,2

1,5

1,0 0,8

1,0

0,6 0,4

Huevos / hoja

2,0

1,4

0,5

0,2

[

Adultos

Ninfas

Muertos

Huevos

13 sep

16 ago

08 jul

10 jun

10 may

10 abr

14 mar

14 feb

15 ene

19 dic

23 nov

0,0 27 oct

0,0

]

Gráfico 8-53 Fluctuación poblacional de Brevipalpus chilensis en hojas de Limones, variedad Genova. Limache.

256 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

30,0

12,0 9,87

7,26

15,0

[

8,0 6,0

6,21

4,0

2,415

2,0

Ninfas

Aultos

Muertos

Huevos

14 oct

13 sep

16 ago

21 jun

10 may

10 abr

14 mar

14 feb

02 ene

1,195

06 dic

0,0

10,0

5,045

4,7

10,0 5,0

8,72 7,895

9,01

9,565

Huevos / hoja

20,0

31 oct

Individuos / hoja

25,0

Medida frutos (cm)

0,0

]

Gráfico 8-54 Fluctuación poblacional de Brevipalpus chilensis en frutos de Pomelos, variedad Star Ruby. Quillota, sector Boco (2001-2002).

Hospederos

Manejo

Los cítricos limonero, mandarino, naranjo y pomelo. También se encuentra presente en vides, kiwi, caqui, chirimoyos, higuera, malezas y ornamentales como ligustrino, Myoporum sp, sauce y especies nativas como palqui, Cestrum parqui y Lobelia sp (Figura 8-270).

Para cumplir con la certificación de huertos de baja prevalencia en la exportación de mandarinas a Estados Unidos se debe controlar la plaga hasta lograr cero detección de B. chilensis vivo, lo que requiere de medidas específicas de control, las cuales deben estar basadas en el monitoreo de la plaga.

En cítricos, no se han observado enemigos naturales asociados a B. chilensis que contribuyan a la disminución de la densidad de ellos. Sin embargo, el principal regulador de las poblaciones del tenuilpalpido en viñas corresponde al ácaro depredador Typhlodromus pyri Scheuten, enemigo natural que posee características de crecimiento y reproducción notables para la regulación de esta plaga, potencial controlador en cítricos.

Figura 8-270 Brevipalpus chilensis en hojas de lobelia.

Monitoreo. En el caso de exportación a Estados Unidos el proceso de monitoreo debe realizarse en forma similar a la inspección oficial del SAG, es decir colectar 100 frutos por huerto inscrito y determinar la abundancia de huevos e individuos móviles a través de lavado por arrastre.

R. Ripa

Enemigos naturales

257 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Eventuales aplicaciones de dertergentes

Control

Estado Fenológico (Días a cosecha)

Monitoreo

Aplic. Aceite o Acaricida

Postcosecha

Aplic. Aceite 1 %

Floración

Muestreo / Análisis

Cuaja

Desarrollo del fruto

Aplic. Acaricida

Precosecha 45 días

Muestreo / Análisis

Cosecha

Muestreo / Análisis

Manejo de Brevipalpus Chilensis en cítricos

Figura 8-271 Esquema recomendado para el manejo de Brevipalpus chilensis en cítricos.

Durante el período de poscosecha se debe monitorear malezas, ramillas y hojas, para determinar el inoculo de ácaros presente en el predio. De acuerdo a la magnitud de la población tomar medidas de control químico. Luego, monitorear cuando el fruto posee aproximadamente 2,5 cm de diámetro, es decir, a mediados de verano y nuevamente tomar una decisión acorde a las densidades detectadas. Finalmente, monitorear 45 a 60 días previo a la cosecha para determinar el nivel de la plaga previo al proceso de inspección y evaluar el efecto de los tratamientos realizados anteriormente e implementar las acciones necesarias para cumplir con la cero detección. Establecer este sistema de monitoreo aumenta las probabilidades de éxito en el proceso de exportación y evita aplicaciones innecesarias, lo que implica un ahorro y la protección de la fauna benéfica presente en el huerto que mantienen controladas otras plagas

Control químico. La Figura 8-271 muestra una recomendación de manejo de la plaga, que incluye las oportunidades de monitoreo y control asociada a los eventos fenológicos de la planta. Aplicaciones destinadas a controlar chanchito blanco, conchuelas y otras plagas en cítricos, generalmente tienen un efecto de control sobre B. chilensis. En orden creciente de efectividad se pueden mencionar: detergentes o surfactantes tradicionales, coadyuvantes siliconados, aceites minerales al 1% al 1,5% (Gráfico 8-55), poseen un efecto prolongado de control durante

45 a 60 días postaplicación (Gráfico 8-56). Asimismo, la aplicación de acaricidas como dicofol, abamectina, pyridaben, fenpyroximate, numectin y acequinocyl (Gráfico 8-57). Una medida de manejo cultural relevante es remover en la cosecha todos los frutos del árbol, dado que en ellos permanece y se reproduce preferentemente el ácaro. Uno de los factores de mayor incidencia en la efectividad del control de B. chilensis es la calidad de la aspersión de los árboles, para ello es altamente recomendable utilizar equipo con pitón, emplear una presión de trabajo cercana a las 300 lbs/pul2. y disponer de mangueras cortas para evitar la pérdida de presión a través de ellas, utilizando un volumen de caldo por hectárea acorde al tamaño y follaje de los árboles. En naranjas navel se mejora la efectividad de la aplicación, si se inserta un codo entre la boquilla y el pitón, con el fin de dirigir la aspersión desde abajo hacia arriba para mojar el ombligo, dado que una proporción importante de los ácaros se puede localizar en esta estructura. La aplicación de detergentes o surfactantes es más expedita mediante el uso de un pitón modificado, con tres boquillas “tridente”, disminuyendo el costo de la aplicación. En producción orgánica se deben realizar aplicaciones de acaricidas orgánicos y detergentes en la misma época sugerida anteriormente, desmalezado en torno al tronco.

258 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

20,0

Acaros / fruto

16,0 12,0 8,0 4,0 0,0

[

Trisilozano polieter

Aceite 3 días

Inicial

10 días

Detergente 23 días

Testigo 59 días

Aceite A 123 días

]

Productos utilizados: Aceite: Texaco • Aceite A: Citroliv miscible • Su 120 • Break

Gráfico 8-55 Efectividad de plaguicidas sobre el control de móviles de Brevipalpus. chilensis. Limonero, Región de Coquimbo (IV), marzo 2002.

6,0

N° Acaros / fruto

5,0 4,0 3,0 2,0 1,0 0,0

Cyhexatin

[

Inicial

Dicofol 4 días

Pyridaben 11 días

Testigo 22 días

47 días

Aceite

]

Productos utilizados: Cyhexatin = Cyhexatin60 SC • Dicofol = Kelthane 50W • Pyridaben = Sunmite • Aceite mineral =Texaco

Gráfico 8-56 Efectividad de acaricidas y aceite sobre el control de móviles de Brevipalpus chilensis. ‘ Limonero, Región de Valparaíso (V), agosto 2002.

259 Manejo de plagas en paltos y cítricos

1,6

1,6

1,4

1,4 1,2 1

1

0,8 0,8 0,6 0,6

Huevos / fruto

Móviles / fruto

1,2

0,4

0,4

0,2

0,2

0

0

Acequinocyl

Surfactante siliconado

Acequinocyl + surfactante siliconado [

Móviles

Aceite

Huevos

Control agua

21 días

14 días

7 días

Inicial

21 días

14 días

7 días

Inicial

21 días

14 días

7 días

Inicial

21 días

14 días

7 días

Inicial

21 días

14 días

7 días

Inicial

21 días

14 días

7 días

Inicial

-0,2

Control absoluta

]

Productos utilizados: Acequinocyl = Kanemite 15 SC • Surfactante siliconado = Silwet S-77 • Aceite mineral = Winspray miscible

Gráfico 8-57 Efecto de acaricidas sobre poblaciones de móviles y huevos de Brevipalpus chilensis. Fundo La Rotunda, Hijuelas. Fecha aplicación abril 2007 (Fuente: Convenio INIA-Arysta Lifescience).

Familia Eriophydae Corresponden a minúsculos ácaros de cuerpo con forma de huso, de color blanco a amarillo transparente. A diferencia de otras familias de ácaros su desarrollo contiene huevos, ninfas y adultos. Posee un desarrollo postembrionario muy corto. La principal característica de este grupo es que tanto estados inmaduros como adultos poseen 2 pares de patas. Son muchas las especies de esta familia que constituyen plagas, sin embargo en cítricos la principal corresponde a Eriophyes sheldoni.

Ácaro de la yema Citrus bud mite Eriophyes sheldoni (Ewing) (Eriophyidae: Acarina) N. Olivares, R. Vargas, R. Ripa, y A. Cardemil

Distribución e importancia Plaga distribuida en todo el mundo y en Chile se encuentra desde la Región de Tarapacá (I) hasta la Región del Libertador General Bernardo O’Higgins (VI). Su importancia está referida al daño en las yemas, originando frutos severamente dañados, provocando perdidas económicas.

260 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

La alimentación del ácaro causa, frutos con deformaciones ligeras como un engrosamiento de la cubierta hasta frutos muy deformados o digitados, además de abscisión o caída de frutos muy pequeños. Las hojas presentan una deformación característica que muestra una hendidura en el ápice de la hoja, encarrujamiento y disminución del crecimiento. En ramillas se encuentran brotes de crecimiento en roseta, entrenudos más cortos, grosor anormal o aplanamiento y enrollamiento. Además caída de flores y deformación de ellas. En las yemas se distingue necrosis parcial o total de tejidos a nivel de brácteas y primordios que originarán daños en flores y hojas (Figuras 8-272 a 8-274).

R. Ripa

Daño

Figura 8-272 Daño en el fruto de limonero causado por Eriophyes sheldoni.

En naranjas del grupo Navel el ombligo protuberante (Figuras 8-275 y 8-276) ha sido relacionado con el ataque de Eriophyes sheldoni. No obstante en nuestro país la presencia de frutos con estos ombligos también se presenta en huertos libres de ácaro de la yema. La presencia de frutos afectados también estaría relacionada a la variedad y vigor de los árboles. En huertos en que estos frutos son relativamente frecuentes se recomienda considerar: evitar el exceso de vigor de los árboles, uso de auxinas que mitigan la formación del ombligo, y monitoreo y control del ácaro de la yema tempranamente. Se ha observado que con ello se obtiene una fruta de mejor presentación, se aumentan los porcentajes de embalaje y exportación (comunicación personal con Lisardo Álvarez).

R. Ripa

En naranjo variedad Lanelate sin aplicaciones de plaguicidas se observó hasta un 50% de yemas dañadas (Gráfico 8-58).

Figura 8-273 Daño en la flor de limonero causado por Eriophyes sheldoni.

Descripción morfológica

R. Ripa

La hembra adulta es de forma alargada o cuneiforme de color beige, de una longitud cercana a 0,16 mm. Posee dos pares de patas pequeñas en el extremo anterior del cuerpo que es más ensanchada. Los huevos son de color blanco perlado y forma casi esférica, visibles solo bajo un estereoscopio. La larva es muy pequeña, de forma triangular alargada y color blanquecino. La ninfa es similar al adulto aunque de menor tamaño. En general, ninfas y adultos de esta especie poseen un lento movimiento y sólo pueden ser visualizados utilizando una lupa de aumento superior a 20x. Figura 8-274 Frutos de tangelo dañados por Eriophyes sheldoni.

261

R. Ripa

R. Ripa

Manejo de plagas en paltos y cítricos

Figura 8-275 Eriophyes sheldoni al interior de una yema de limonero.

Figura 8-276 Huevos y adultos de Eriophyes sheldoni al interior de una yema de limonero.

100%

0,6 0,5

80%

0,4

70%

Móviles / yema

Porcentaje de yemas dañadas

90%

60%

0,3

50%

0,2

40% 30%

0,1

20%

0

10%

-0,1

[

% Yemas dañadas en Ramilla verano 07

Móviles

27 sep

06 sep

23 ago

08 ago

31 jul

27 jun

06 jun

24 may

09 may

24 abr

05 abr

20 mar

16 feb

16 ene

0%

]

Gráfico 8-58 Asociación entre densidad de Eriophyes sheldoni y presencia de yemas dañadas en ramillas de verano en naranjo var Lane Late La Ligua, 2007.

Biología Las hembras que se encuentran en las yemas depositan huevos que dan origen a estados juveniles muy similares a los adultos. Su reproducción puede ser sexuada o partenogenética. Cada hembra coloca cerca de 50 huevos en forma aislada o en grupos, preferentemente bajo las escamas de las yemas que originan el crecimiento anual. Se alimenta y reproduce en el interior de la yema, de

las brácteas y primordios que darán origen a hojas, flores y frutos. La mayor población del ácaro se produce en período de desarrollo de los frutos, completándose una generación entre 10 a 15 días durante el verano y en 30 días en el invierno. Las condiciones óptimas de desarrollo corresponden a una humedad relativa cercana al 100%. Ocasionalmente se les observa fuera de estas estructuras que en su interior presentan un alto porcentaje de humedad.

262 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Cuando un brote infestado empieza a crecer y desarrollarse, es posible observar los ácaros en las hojuelas que rodean el meristema apical del nuevo vástago. Ataque severo puede contribuir a una pérdida de agua en la fruta, reduciendo su tamaño y provocar una caída de los frutos. El ácaro de la yema puede dispersarse fácilmente dentro y entre árboles mediante el viento, herramientas y trabajadores agrícolas.

Manejo

Hospederos

Control químico. Se sugiere aplicar aceite mineral al 1% si existe presencia del ácaro en más del 10% de las yemas muestreadas o abamectina en la eventualidad de coincidir con la floración. El Gráfico 8-59 indica la efectividad de diferentes acaricidas aplicados en primavera en limonero sobre E. sheldoni. La oportunidad de aplicación es durante la primera quincena del mes de junio en la Zona Central, para controlar los ácaros, previo al inicio de la brotación. Muy importante realizar un correcto cubrimiento de todo el follaje de la planta, utilizando una presión mínima de 300lb.

El ácaro de la yema muestra una marcada preferencia por el limonero. Sin embargo, también ha sido encontrando en naranjos y en la Zona Norte del país, se han observado ataques muy intensos sobre tangelos ubicados cerca de limoneros.

Enemigos naturales No se han observado enemigos naturales regulando las poblaciones de E. sheldoni.

Monitoreo. Se deben seleccionar 20 árboles por cuartel de 4 a 5 ha, de los cuales se deberán sacar al azar 3 ramillas de un año por árbol y determinar la presencia de los ácaros y el daño en dos yemas por ramilla. Siempre mantener el registro de los frutos y hojas deformadas, brotaciones y flores arrosetadas.

En producción orgánica deben realizarse aplicaciones de acaricidas orgánicos.

25

Móviles / yema

20

15

10

5

0

[

Aceite 2% (30hL) Aceite 1% (60hL) Aceite 1% (30hL) 0 dpa

7 dpa

15 dpa

28 dpa

42 dpa

Bromopropilato 56 dpa

91 dpa

Testigo 119 dpa

]

Productos utilizados: Aceite mineral = Citroliv miscible • Bromopropilato = Ácarol

Gráfico 8-59 Efectividad de acaricidas sobre móviles de Eriophyes sheldoni en limones, Quillota. Aplicación 6 de octubre 1998.

263 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Familia Tarsonemidae

Ácaro Ancho, Ácaro blancoÁcaro hialino

R. Ripa

Son ácaros muy pequeños, menor a 0.3 mm de longitud, elípticos, transparentes, brillosos y relativamente glabros. Estos ácaros son muy abundantes en bajos regimenes de ambiente cálido y húmedo. Los tarsonémidos infestan las hojas juveniles y el epicarpio de los frutos. Inyectan una saliva tóxica en los tejidos deformándolos y dejando marcas bronceadas. En Chile, asociado a cítricos se encuentra presente el ácaro Poliphagotarsonemus latus.

(A)

Broad mite Polyphagotarsonemus latus (Banks) (Tarsonemidae: Acarina) N. Olivares, R. Vargas, R. Ripa, E. Núñez y A. Cardemil

Distribución e importancia Se encuentra presente en todo el mundo y en nuestro país desde la Región de Coquimbo (IV) a la Región Metropolitana (RM). En ataques severos afecta la calidad de los frutos, disminuyendo el rendimiento del cultivo. En Perú, constituye un problema cuando existen desequilibrios por manejo irracional de plaguicidas.

Se inicia sobre frutos de 1,5 a 3,5 cm de diámetro observándose un plateado tenue que aumenta en intensidad en la medida que aumenta el tamaño, llegando a frutos pardos-plateados, con textura áspera, dependiendo de la densidad de la población cuando fueron infestados. En hojas se visualiza deformación y disminución del tamaño, como también cicatrices en la lámina. El ataque de este ácaro estimula el crecimiento de la yemas apicales, produciéndose hojas alargadas en forma de roseta Existe una proliferación de brotes y cicatrices alargadas de color pardo en ramillas. También se ha observado daño muy ocasional en brote apical en paltos en vivero. Ello causa la detención del crecimiento, hojas acucharadas y coloración más pálida de las hojas afectadas (Figuras 8-277 a 8-278).

R. Ripa

Daño (B) Figura 8-277 Polyphagotarsonemus latus en palto, vivero, (A) daño en brote; (B) adultos y huevos sobre la hoja.

Descripción morfológica La hembra tiene el cuerpo ovalado y es de color blanquecino brillante con tonalidades amarillas. Tiene una longitud aproximada a 0,2 mm de largo, por lo tanto casi no puede ser visto a simple vista. De sus cuatro pares de patas, dos se encuentran desplazadas hacia la región anterior, otro par en la región media y un último par en la región posterior muy delgadas que no las utiliza para caminar. El huevo es de forma hemisférica menor a 0,1 mm con pequeños círculos de color blanco sobre su superficie dispuestos en hileras. Las ninfas son blanquecinas, brillantes y casi transparentes, con características

264

(A)

(B)

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

(A)

(B)

Figura 8-279 (A) Polyphagotarsonemus latus hembras juveniles y huevos. (B) Macho trasladando a la hembra inmadura.

manchas blancas en el interior de su cuerpo. El macho es más pequeño que la hembra y de coloración similar. Sus cuatro pares de patas tienen abundante pilosidad, presentando el último par una curvatura en forma de gancho (Figura 8-279).

Biología Los estados de desarrollo comprenden huevo, larva, dos estados ninfales y adulto (Figura 8-280). Cada hembra puede depositar 40 huevos de forma aislada en las depresiones de frutos pequeños y en brotes. Su desarrollo principalmente ocurre en otoño e invierno y el ciclo biológico lo completa en 7 a 12 días. En limones ubicados en la zona central del país ha sido encontrado durante todo el año, alcanzando su máxima población

durante el otoño. El Gráfico 8-60 indica el crecimiento poblacional del ácaro en brotes y frutos durante una temporada, evidenciando un aumento de estadios móviles y de huevos en brotes de cítrico durante los meses de otoño. Seguido, una mayor presencia de ellos en frutos de diámetro no superior a 3,5 cm durante los meses de junio y julio. El Ácaro Ancho se encuentra principalmente en el interior del árbol, en focos pequeños que progresivamente se expanden en las sucesivas temporadas. Los machos utilizan un par de ganchos para trasladar sobre su cuerpo la ninfa hembra con la que posteriormente se aparearán. Un mecanismo de dispersión del ácaro ancho corresponde a la foresis que realiza junto a la mosquita blanca, relación interespecífica que permite el transporte del tarsonémido. Además, se transporta mediante el viento y los operarios agrícolas.

R. Ripa

R. Ripa

Figura 8-278 (A) Daño de Polyphagotarsonemus latus en limones. (B) Patrón del daño en el fruto muy aumentado.

265 Manejo de plagas en paltos y cítricos

Hospederos En cítricos, hasta ahora ha sido observado solo en limonero, aunque la literatura señala que ataca naranjo, mandarino y pomelo. En Chile, ha sido también encontrado en paltos en vivero, pepino de fruta, pimentón, camote y plantas de jardín como las Alegrías del hogar.

Huevo

Macho

Enemigos naturales Larva

Hembra

Se mencionan en la literatura varias especies de fitoseidos que se alimentan de este ácaro, no obstante se desconoce en nuestro país si estos tienen un efecto sobre la densidad de P. latus en limoneros. En el Perú se están realizando pruebas con el hongo Lecanicillium lecanii.

C. Tobar

Manejo

Estados ninfales

Figura 8-280 Ciclo de vida de Polyphagotarsonemus latus.

Monitoreo. Seleccionar 20 árboles por cuartel de 4 a 5 ha, y colectar frutos pequeños de tamaño entre 1,5 y 3,2 cm de diámetro. En la zona central el monitoreo debe realizarse desde marzo en adelante, dado que la densidad comienza luego a incrementarse. De ese modo se conocerá el porcentaje de frutos dañados por la alimentación del ácaro. Frutos de mayor tamaño no muestran ácaros. Es importante identificar el o los sectores atacados, durante el seguimiento de la plaga.

35

Individuos promedio

30 25 20 15 10 5 0

feb 07

mar 07 [

abr 07

may 07 may 07

Móviles en fruto

jun 07

jul 07

ago 07

Huevos en fruto

ago 07

sep 07

]

Gráfico 8-60 Fluctuación poblacional de Polyphagotarsonemus latus en frutos de limón, var Eureka. Nogales, 2007.

266 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Aplicaciones químicas

Aplic. Acaricida

Control

Estado Fenológico

Postcosecha

Floración

Cuaja

Aplic. Aceite o Acaricida

Desarrollo del fruto

Cosecha

Monitoreo Frutos pequeños 100 a 500 por hoja) pueden causar defoliación parcial o total, lo que aumenta el riesgo de fruta y ramas quemadas por el sol. La susceptibilidad al daño de la alimentación del ácaro fue clasificada en diferentes cultivares de palto. Basados en el porcentaje de área de hoja dañada por la alimentación, se indica en orden de creciente susceptibilidad a Fuerte (el 13,3% del área de la hoja dañada), Lamb Hass (16,9%) = Reed (16,9%) < Esther (29,7%) < Pinkerton (30,2%) < Gwen (37,4%) < Hass (38,4%).

Descripción morfológica O. perseae se alimenta en colonias bajo una tela protectora a lo largo de las venas principales en el envés de la hoja, causando manchas necróticas circulares características (Figura 11-53). Oligonychus punicae en cambio, se alimenta en el haz de las hojas causando un bronceado, situándose también en el envés de la hoja, con altas poblaciones (Figuras 11-54 y 11-55). Eotetranychus sexmaculatus, es muy similar en apariencia a O. perseae y también se alimenta cercano a las venas principales en el envés de la hojas, en cambio E. sexmaculatus no causa manchas circulares y no presenta tela (Figuras 11-56 y 11-57).

Biología Los individuos de O. perseae se encuentran predominantemente en colonias en los que se alimentan, aparean, reproducen y desarrollan. La proporción de sexos es dos hembras por un macho. El ciclo desde huevo a adulto lo completan en 17, 14, 9 días a 20°C, 25°C y 30°C, respectivamente.

322 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Hospederos Además de paltos se ha observado en hojas de vides, damascos, duraznos, ciruelas, nectarinos, kakis, rosas, malezas como Asclepias fuscicularis, Sonchus sp, Chenopodium album y Ceratonia siliqua, y en árboles como alcanfor (Camphora officinalis), Sauce (Salix spp), Bixa orellana y Acacia spp.

Enemigos naturales Stethorus picipes (Coleoptera: Coccinellidae) es un depredador muy importante en el control de este ácaro, los adultos encuentran con facilidad en las poblaciones de ácaros y se reproducen rápidamente.

M. Hoddle

Scolothrips sexmaculatus (Thysanoptera: Thripidae), trips de seis manchas, es un depredador especializado de ácaros que se encuentra frecuentemente a fines de verano depredando O. perseae.

Manejo Muchas plantas actúan como reservorios de este ácaro, por lo que medidas de sanitización deben ser realizadas. En algunos casos, O. perseae puede alcanzar densidades que requieren control químico para evitar defoliación.

Figura 11-52 Móviles O. perseae.

Ensayos de efectividad de distintos productos en el control de O. perseae mostraron que Agri-Mek (acaricida no registrado para paltos en California), el aceite NR 435 y el agua, fueron los productos más efectivos, reduciendo el 75% de la población del ácaro. Agua aplicada con pitón con una presión de 150 a 200 libras por pulgada cuadrada, causaron disrupción de las colonias de ácaros, aumentando la vulnerabilidad a enemigos naturales y a las condiciones ambientales. Con el fin de reducir la posibilidad de resurgencia y ataques de otras plagas es necesario emplear plaguicidas con un mínimo efecto sobre los enemigos naturales (Figuras 11-52 a 11-57).

www.biocontrol.ucr.edu http://www.biocontrol.ucr.edu/avocadothrips.html http://www.biocontrol.ucr.edu/Stenoma/Stenoma.html http://www.biocontrol.ucr.edu/Cryptaspasma/Cryptaspasma. html http://www.biocontrol.ucr.edu/RBW.html http://www.biocontrol.ucr.edu/mite1.html http://www.biocontrol.ucr.edu/hoddle/index.html

M. Hoddle

Sitios web de interés

Figura 11-53 Daños necróticos circulares causados por O. perseae.

323

Figura 11-56 Eotetranychus sexmaculatus.

M. Hoddle

Figura 11-55 Daño de Oligonychus punicae en hojas.

M. Hoddle

Figura 11-54 Oligonychus punicae.

M. Hoddle

M. Hoddle

Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú

Figura 11-57 Daño de Eotetranychus sexmaculatus.

324 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Plagas de paltos y cítricos en Perú E. Núñez

QUERESAS O ESCAMAS Orden: Hemiptera • Familia: Diaspididae

Queresa latania Latania scale Hemiberlesia lataniae (Signoret) Distribución e importancia

SCB - Senasa

Probablemente es una de las especies más cosmopolita. A menudo es interceptada en inspecciones cuarentenarias de material botánico procedente de la región del Pacifico Sur. Es una plaga con control biológico eficiente, por lo que no constituye un serio problema.

Descripción morfológica Figura 11-59 Signiphora sp, parasitoide de Hemiberlesia spp.

La escama de la hembra es circular o algo ovalada, convexa gruesa y está bien adherida a la planta. La escama es de color blanco algo rosada, diferenciado de las exuvias sub centrales que son oscuras a casi negras. El macho no está presente en nuestro país (Figura 11-58).

Queresa de las palmeras Hemiberlesia palmae

Los hospederos en Perú son Citrus sp, Mangifera indica, Olea europea, Persea americana y palmeras.

Distribución e importancia

Enemigos naturales

La especie es muy similar a las otras especies de Hemiberlesia, en la importancia de sus infestaciones. No ocasiona severos daños.

Se encuentran en Hemiberlesia lataniae los parasitoides primarios Aphytis sp y Signiphora y los predadores comunes al grupo de queresas diaspinas (Figura 11-59).

Daño

SCB - Senasa

Se presentan en el envés de las hojas ocasionalmente aglomeradas. En el haz de la hoja, a la altura en donde las queresas tienen insertos sus estiletes se desarrollan puntos blancos pequeños. Probablemente las enzimas salivares son muy tóxicas que originan la reacción de la planta (Figura 11-60).

Figura 11-58 Características de la escama de la hembra.

Descripción morfológica Escama de la hembra redondeada a oval algo convexa y blanca con un tono rosado por el cuerpo de la hembra con las exuvias sub centrales. Las exuvias son algo oscuras cuando se las ve por debajo de la escama (Figura 11-61).

325 Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú

Los hospederos en Perú son Citrus sp y Cocos sp.

Queresa arriñonada

Comparten con Hemiberlesia lataniae los mismos parasitoides y predadores. Aphytis y Signiphora.

Abgrallaspis cyanophylli (Signoret) (Sinonimia: Hemiberlesia cyanophylli (Signoret)) Distribución e importancia En Perú, la presencia continua de la queresa en el envés de hojas de palto no ocasiona severos daños excepto cuando se aplican químicos tóxicos que eliminan los controladores biológicos que disminuyen la plaga.

SCB - Senasa

Figura 11-60 Individuos de Hemiberlesia palmae ubicados en el envés de la hoja de cítrico.

Los individuos se ubican exclusivamente sobre el envés de las hojas a lo largo de las nervaduras, dispersándose luego sobre todo el área foliar, impidiendo la fotosíntesis, provocando el amarillamiento y caída de las hojas. No causa mucha secreción de mielecilla ni de fumagina (Figura 11-62).

SCB - Senasa

SCB - Senasa

Daño

Figura 11-61 Hembra joven y adultas de Hemiberlesia palmae.

Monitoreo Es necesario evaluar la acción de los enemigos naturales para su posterior utilización.

SCB - Senasa

Manejo. Recuperación y liberación de enemigos naturales. El uso de lavados con agua o con agua más jabones de potasio mantienen poblaciones bajas.

Figura 11-62 Infestación en hoja y fruto por Abgrallaspis cyanophylli.

326 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Descripción morfológica Escama de la hembra alargado a oval, de 2,5 mm de longitud, color blanco parduzco translúcido, aparenta un color verdusco por el color de la hoja. Escama del macho pequeño alargado, exuvia parduzca.

color castaño amarillento y exuvias en el extremo inicial amarillas (Figura 11-64). El hospedero en Perú es Citrus sp.

Los hospederos en Perú son, Olea europea y Persea americana.

Enemigos naturales Las especies que controlan a Hemiberlesia spp, controla también a Abgrallaspis, es decir el complejo de Aphytis y Signiphora y los predadores comunes.

Monitoreo, manejo y control La evaluación orientada a la determinación del periodo de reproducción es un buen índice para la exacta fecha de los lavados.

Queresa coma menor

SCB - Senasa

Las medidas orientadas a la conservación de los enemigos naturales de la queresa mantendrán el equilibrio del agroecosistema. Figura 11-63 Infestación de Insulaspis gloverii, en fruto.

Insulaspis gloverii (Packard) (Sinonimia: Lepidosaphes gloverii (Packard)) Distribución e importancia

Daño Los individuos presenta una fuerte adherencia a la superficie e invaden fácilmente la superficie de los frutos tallos y hojas de la planta, impidiendo la fotosíntesis provocando el amarillamiento y caída de las hojas (Figura 11-63).

Descripción morfológica Escama de la hembra semejante a la escama de Cornuaspis beckii, diferenciándose porque I. gloverii es más delgado y alargado, de bordes rectos, mide 3 mm. de longitud, de

SCB - Senasa

La especie ha sido registrada de numerosas plantas hospederas en la Región Pacifico Sur, sin embargo parece tener preferencia por los cítricos. De acuerdo a la literatura la especie es una de las mayores plagas de los cítricos. En el Perú solamente está focalizada en las zonas más cálidas y secas de la costa norte, en donde no efectúa ataques de importancia económica. Figura 11-64 Características de la escama de la hembra de Insulaspis gloverii.

Enemigos naturales Un endoparasitoide Aphelinidae del género Encarsia es la especie predominante, ejerciendo un buen control. Además de los predadores comunes a este complejo grupo de queresas.

Monitoreo, manejo y control La determinación del periodo de reproducción es un buen índice para la fecha de los lavados.

327 Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú

Las medidas orientadas a la conservación de los enemigos naturales de la queresa mantendrán baja la población de Insulaspis gloverii.

Queresa coma, Purple Scale Cornuaspis beckii SCB - Senasa

Distribución e importancia Es una de las plagas más importantes en los cítricos de Perú. Se encuentra principalmente en la Costa, causando mayores infestaciones en los valles de Huaral, Cañete y Chincha, infestaciones medias en Sayán e Ica y con bajas infestaciones en la Costa norte, departamentos de Lambayeque y Piura, zonas caracterizadas por climas completamente diferentes (PROCITRUS SENASA 2007).

Figura 11-65 Tallos y fruto infestado por Cornuaspis beckii.

Es una plaga cosmopolita y polífaga, sin embargo su preferencia es marcada hacia los cítricos. Requiere de climas temperados y de alta humedad relativa.

Se presenta cubriendo tronco, ramas, ramillas y frutos, prefiriendo la parte interna del tercio superior de la planta, con follaje denso, en muchos casos, cuando no es controlada puede llegar a matar ramas internas y la totalidad de la planta (Figura 11-65).

(A)

SCB - Senasa

Daño

La escama de la hembra tiene forma de coma, convexa, marrón grisáceo. Mide de 2,5 a 3,0 mm de longitud. Presenta una membrana ventral, blanca, como una continuación de la escama visible que es la que le confiere mayor adherencia a la planta. La escama del macho es delgada pequeña (1,5 mm), marrón oscuro a negro. En ambos casos presentan las dos exuvias en el extremo anterior y son amarillos dorados. El cuerpo de la hembra es blanco con el pigidio amarillo. El macho es alado con tonos púrpura (Figura 11-66).

Biología La hembra completa el ciclo biológico de huevo a huevo en 40 a 70 días, el macho completa su ciclo aproximadamente en 50 días y vive solamente 12 días cumpliendo un papel reproductor, pudiendo presentarse 4 generaciones en un año.

(B) Figura 11-66 Escama de (A) hembra y (B) macho de Cornuaspis beckii, cuerpo de hembra joven.

La hembra madura y fecundada oviposita una masa de 40 a 80 huevos de forma ovalada y de 0,25 mm de longitud, de color blanco perlado, colocados de manera alineada. Eclosionan a los 7 días en verano y 15 días en invierno, emergiendo primero los huevos situados en la parte posterior que son los más maduros.

SCB - Senasa

Descripción morfológica

328 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Enemigos naturales

Las ninfas recién emergidas son móviles durante unas horas, fijándose a continuación. Al inicio de su alimentación comienza a segregar dos filamentos largos y gruesos que cubren la ninfa completamente en su entorno, dichos filamentos le sirven de protección hasta que el insecto comienza a secretar la escama permanente. La hembra durante su desarrollo presenta 2 mudas, las que realiza a intervalos de 3 a 4 semanas (Figura 11-67). El macho realiza 4 mudas con el estadío pupal.

Aphytis diaspidis y Aspidiotiphagus citrinus son reportados por Wille en el Perú en 1958. En el mismo año W. Ebeling realiza la introducción al país de Aphytis lepidosaphes Compere desde Florida y California EE.UU., en donde ejercían muy buenos controles y en donde obtuvieron ahorros sustanciales por la exclusión de insecticidas comúnmente usados contra la queresa coma. A través de los años se ha colectado muy esporádicamente el endoparasitoide Encarsia citrina (= Aspidiotiphagus citrinus), aparentemente como controlador ocasional en la gran mayoría de las queresas diaspinas, invadiendo muchas veces las crianzas de Aphytis spp (Figura 11-68).

El hospedero en Perú es Citrus spp.

SCB - Senasa

Manejo En el Perú, los lavados a alta presión son indispensables para optimizar la acción del parasitoide Aphytis lepidosaphes porque bajo las condiciones de Costa eliminan las escamas de generaciones anteriores generalmente superpuestas, además de eliminar el polvo que dificulta la actividad de la avispita.

SCB - Senasa

Figura 11-67 Hembra oviplena de Cornuaspis beckii.

Figura 11-68 Aphytis lepidosaphes, ectoparasitoide gregario de Cornuaspis beckii.

329 Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú

Piojo blanco de los cítricos Citrus snow scale, Fern scale Pinnaspis aspidistrae (Signoret) Distribución e importancia

SCB - Senasa

Originalmente descrita sobre Aspidistra sp. Es una especie cosmopolita y polífaga. Solamente se le indica como una seria plaga que provocó el amarillamiento, caída de hojas y muerte de ramas por los años de 1970. Posteriormente a la actualidad, esta presente en campo sin ocasionar explosiones poblacionales que requieran aplicaciones de insecticidas.

Daño

Figura 11-69 Fruto de naranjo infestado con densa colonia de Pinnaspis aspidistrae.

El daño directo es producido por la succión de la savia de las plantas, decolorando y marchitando las hojas. Cuando existen poblaciones muy densas pueden producir defoliación y muerte de ramas. El daño indirecto es provocado por las secreciones dulces que forman un medio de cultivo para la multiplicación de hongos con efecto de fumagina (micelio negro), que además evita la actividad de fotosíntesis (Figura 11-69).

La hembra adulta presenta una escama alargada formada por la primera exuvia de la ninfa migrante al extremo anterior que es pequeño y delgado, es continuado por la segunda exuvia, algo mas ensanchada, para terminar en la fase de crecimiento formada por las secreciones de seda cera y laca, dispuestas a modo de estrias que van de un lado al otro de la segunda exuvia, ensanchada al extremo posterior. Es de color castaño rojizo y mide 0,96 de largo por 0,40 mm. de ancho. El cuerpo de la hembra es alargado de lados paralelos hasta el inicio del postsoma que presenta cuatro pares de lóbulos laterales, termina en el pigidio redondeado, que es la fusión de los últimos segmentos abdominales

SCB - Senasa

Descripción morfológica

(A)

El macho juvenil se desarrolla dentro de un cocón alargado, blanco, afieltrado y tricarinado longitudinalmente. El adulto es rojizo (Figura 11-70).

La duración del ciclo biológico de hembras desde huevo a adulta, incluyendo el periodo de oviposición, es de 75 días a 16 C y 85% HR y de 55 días a 25° C y 60% HR.

SCB - Senasa

Biología (B) Figura 11-70 (A) Hembras maduras y (B) machos en diversos estados de desarrollo de Pinnaspis aspidistrae.

330 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

0,2 Pinnaspis aspidistrae

Individuos / hoja

0,15

0,1

0,05

0 06-08-07

20-09-07

04-11-07

19-12-07

02-02-08

Fecha

[

Hembra

Macho

]

Gráfico 11-1 Fluctuación poblacional de Pinnaspis aspidistrae en Sayán Lima, fundo sin aplicación de insecticidas.

El ciclo biológico en machos, de huevo a adulto es de 45 y 34 días en iguales condiciones que para las hembras. En ambos casos se utilizó a Citrullus vulgaris como planta hospedera (Gráfico 11-1). Los hospederos en Perú son: Citrus spp, Annona cherimolia, Persea americana, Cocos nucifera, Ficus carica, Mangifera indica, Psidium guayaba, helechos y orquídeas.

Enemigos naturales Se encuentran bien establecidos sus controladores, como los ectoparasitoides de hembras: Aphytis mitilaspidis, A. diaspidis, los endoparasitoides de machos: Encarsia citrina y Arrhenophagus chionaspidis y los predadores: Lindorus lophantae, Scymnus sp, Coccidophilus citricola y Chrysopodes sp.

Manejo, monitoreo y control Evaluación en gabinete de la séptima hoja de la muestra de siete hojas por árbol en total. Determinación de época de reproducción y emergencia de migrantes. Lavados a presión al finalizar la campaña y en época de producción de migrantes. Recuperación y liberación de controladores biológicos.

Piojo blanco del algodonero Snow scale Pinnaspis strachani (Colley) Distribución e importancia Al igual que P. aspidistrae, es una especie cosmopolita y polífaga. En Perú se reporta como plaga importante en 1904 oportunidad en que Dr. Towsend decide la importación de controladores biológicos desde Estados Unidos. Es frecuente encontrarla con altos índices de endo parasitoidismo en individuos machos de la queresa. El daño es similar a P. aspidistrae.

Descripción morfológica La escama de la hembra adulta es muy parecida a la de P. aspidistrae, diferenciándose por el color blanco, por el menor tamaño, (1,07 mm de longitud) y porque las estrías de crecimiento son mas anchas. El cuerpo es amarillo blancuzco con pigidio amarillo. El cocón del macho no se diferencia del macho de P. aspidistrae salvo por el color mas claro del individuo adulto.

Biología El ciclo biológico total de hembras desde huevo a adulta, incluyendo el periodo de oviposición, es de 76 días a 16° C y 85% HR y de 55 días a 25° C y 60% HR.

331 Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú

El ciclo biológico total en machos, de huevo a adulto, es de 49 y 34 días en iguales condiciones que para las hembras. En ambos casos del estudio se utilizó a Citrullus vulgaris como planta hospedera

SCB - Senasa

Los hospederos en Perú son: Gossypium spp, Annona cherimolia, Ricinus communis, Oleae europea.

Enemigos naturales Entre las microavispas introducidas por primera vez al Perú, para el control de P. strachani, se encuentra Arrhenophagus chionaspidis (Chalcidoidea Encyrtidae) especie que predomina como endoparasitoide de machos en el 90% y el 10% sobre hembras. También se encuentran los controladores citados para P. aspidistrae. El manejo, monitoreo y control es similar a P. aspidistrae.

Queresa redonda de los cítricos Selenaspidus articulatus Morgan Distribución e importancia En Perú se encuentranen el género Citrus.

Daño Se alimenta de la savia produciendo decoloración y marchitez en las hojas y disminución de la superficie fotosintética en las plantas.

Descripción morfológica La escama protectora de la hembra es de forma circular de 1,5 mm de diámetro, aplanada y transparente, observándose la silueta del cuerpo muy característico, por presentar un prosoma (parte anterior) casi semicircular, separado por una profunda constricción del postsoma (parte posterior). La escama del macho de 1,0 mm. de longitud es oval, blanquecino, con exuvia subcentral. El adulto es alado, anaranjado, carece de aparato bucal, tiene cuatro ojos rudimentarios, antenas y estructura copuladora bien desarrolladas (Figuras 11-72 y 11-73).

Biología El desarrollo total de la hembra desde migrante hasta hembra sexualmente madura es de 32 días en verano y 47 días en invierno. El periodo de preoviposición o incubación del huevo, de la hembra ovovivípara dura en promedio 16 días en verano y 20 en invierno, desde la cópula hasta la eclosión del huevo.

SCB - Senasa

Causa un daño cosmético por la presencia de individuos en frutos de exportación (Figura 11-71).

Figura 11-72 Selenaspidus articulatus en hoja de cítrico.

Figura 11-71 Hoja y fruto (daño cosmético) infestado con Selenaspidus articulatus.

332

(A)

(B)

(A)

(B)

Figura 11-73 (A) Escama y (B) cuerpo de hembra madura de Selenaspidus articulatus.

Figura 11-74 Larva segmentada de (A) cuarto estado y (B) adulta de Aphytis roseni.

El número de descendientes por hembra varía de acuerdo al hospedador, sobre Citrullus se produjeron 124 migrantes, en tubérculos de papa 26 y en cítricos 109.

Encarsia citrina es un endoparasitoide de hembras y machos de varias especies de queresas diaspinas. Se observa otros predadores comunes a queresas.

Los hospederos en Perú son, Citrus spp y Lucuma abovata.

Manejo

Enemigos naturales En Agosto de 1971, se introdujo al Perú, Aphytis roseni desde Sud Africa, cuya exitosa acción generó un ahorro sustancial en el uso de insecticidas. Es la especie mas grande de Aphytis, mide 1,8 mm desde la cabeza al ápice del abdomen, de color amarillo intenso y ojos compuestos claros, ectoparasitoide de hembras jóvenes, de preferencia vírgenes. En los 15 días de longevidad la hembra se reproduce en un promedio de 80 queresas (Figura 1174). Aphytis chrysomphali es otro ectoparasitoide que actúa principalmente sobre los machos de la queresa redonda.

La poda sanitaria, recuperación y liberación de controladores biológicos es importante para la conservación de Aphytis roseni y su permanencia en campo.

Monitoreo. Evaluación en gabinete de las siete hojas por árbol, determinar porcentaje de migrantes vivos, hembras vírgenes y hembras en reproducción para recomendar alternancia de lavados. Control. Lavados a inicio de campaña y cuando la plaga esté en etapa de reproducción. Podas de limpieza al término de cosecha.

0,21

Individuos / hoja

Selenaspidos articulatos

0,14

0,07

0,00 27-07-07

25-09-07

[

Hembra virgen

Fecha

24-11-07 Aphytis roseni

23-01-08

]

Gráfico 11-2 Fluctuación poblacional de Selenaspidus articulatus y el ectoparasitoide Aphytis roseni, en Sayán Lima, sin aplicación de insecticidas.

SCB - Senasa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

333 Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú

Escama pequeña del palto Fiorinia fioriniae (Targioni Tozzetti) Distribución e importancia En el Perú se reportó por primera vez en hojas de Palma cocotera, posteriormente en olivo sin ocasionar daños severos. En los últimos 10 años es ubicada en palto (Salazar 1999, Núñez 1998) en dos localidades causando serias infestaciones.

El daño es particularmente cosmético cuando las poblaciones se localizan sobre los frutos, sin embargo al formar poblaciones que cubren casi la totalidad de las hojas provocan el secamiento y defoliación (Figura 11-75).

SCB - Senasa

Daño

Figura 11-75 Ubicación de los individuos de Fiorinia fioriniae en las nervaduras de las hojas en infestaciones cercanas a severas.

Descripción morfológica La hembra adulta presenta una escama alongada, formada solamente por las dos exuvias. A diferencia de las otras especies no desarrolla una fase de crecimiento con las secreciones del insecto, por lo que es considerada que tiene la “forma pupilarial”. Es de tamaño pequeño y de color marrón amarillento. Presenta un pliegue al centro, llamado carina longitudinal (Figura 11-76A).

(A)

SCB - Senasa

La escama del macho es algo más pequeña, de color blancuzco con la primera exuvia amarillo dorada (Figura 11-76B). Los hospederos en Perú son: Cocos nucifera, Olea europea y Persea americana.

Enemigos naturales

(B)

Sólo se ha reportado los parasitoides Encarsia lounsburyi y los predadores comunes a queresas diaspinas (Figura 11-77).

Manejo La identificación correcta de la especie de Encarsia y su proceso de crianza en huertos con la queresa es la principal acción a realizar.

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La evaluación, recuperación y liberación de controladores biológicos con la finalidad de incrementar la entomofauna benéfica en campo. La aplicación de productos biorracionales no tóxicos cuando los controladores no estén presentes en campo. Figura 11-76 Escamas de (A) hembras y (B) machos de Fiorinia fioriniae.

334 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Los hospederos en Perú son: Citrus sp, Cocos nucifera, Ficus macrophylla y Persea americana.

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Biología

Figura 11-77 Encarsia lounsburyi, parasitoide interno de Fiorinia fioriniae.

Monitoreo. Determinar el momento antes de la segunda muda para la liberación de A. holoxanthus. Determinar la época de reproducción para lavados y la poblacional por cm2 para la aplicación de jabones de potasio o aceites.

Control. Lavados con jabones potásicos en bajas poblaciones, y aplicaciones de con aceite de origen vegetal cuando las poblaciones son más elevadas.

Queresa del ficus Chrysomphalus aonidum (Linnaeus) Distribución e importancia En el Perú no tiene relevancia económica, ocasionalmente incrementa sus poblaciones en Ficus sp.

Daño Está presente en hojas y puede infestar los frutos si no se le brinda una atención adecuada. El daño por succión directa de savia causa amarillamiento y marchitez de las hojas, en pocas oportunidades hay formación de mielecilla y fumagina (Figura 11-78).

Descripción morfológica La escama de la hembra adulta es redonda, de 2,0 mm. de diámetro, color castaño oscuro, con exuvias centrales ligeramente mas claras. La primera exuvia se caracteriza por presentar un doblez circular central y pequeño, a modo de un cráter. Los machos son ovalados, casi circulares, con exuvias excéntricas (Figura 11-79).

La hembra ovipone grupos de 10 a 15 huevos (total 155) debajo de la escama, estos eclosionan en uno o dos días. La hembra va retrayendo el pigidio hasta que se rompen los estiletes suctorios y muere. A las pocas horas los migrantes se fijan al hospedero y mueven constantemente en forma circular dando lugar a la estructura central ya descrita. La hembra pasa por dos estados ninfales y los machos pasan por cuatro mudas antes de emerger de la escama. El desarrollo biológico de migrante a migrante es de aproximadamente de 45 a 60 días, en verano e invierno respectivamente.

Enemigos naturales Aphytis holoxanthus De Bach, oriunda de Hong Kong, fue introducida exitosamente al Perú, desde California en 1965. A nivel de Costa se encuentran presentes las avispitas Encarsia citrina y E. lounsburyii, que muestran un bajo porcentaje de control. Sin embargo en 1992, bajo condiciones de Sierra (3.000 m.s.n.m.) en Carhuaz, Departamento de Ancash, la misma especie E. citrina fue encontrada ejerciendo el 86% de control de la queresa en plantas de palto. Es frecuente localizar sus predadores en campo (Figuras 11-80 y 11-81).

Manejo Actualmente, gracias a su controlador A. holoxanthus, la queresa no causa daño. Las acciones de manejo deben estar conducidas a mantener las poblaciones de enemigos naturales.

Monitoreo. En este caso es conveniente determinar la mayor incidencia de hembras jóvenes para adelantar la acción de Aphytis holoxanthus. Control biológico. La microavispa Aphytis holoxanthus es una especie gregaria (se desarrollan hasta 3 avispas por queresa) que controla C. aonidum.

335

(A)

Figura 11-80 Aphytis holoxanthus, ectoparasitoide, introducido para el control de la queresa C. aonidum.

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Figura 11-79 Individuos de Chrysomphalus aonidium: (A) hembras y (B) machos sobre fruto de naranjo.

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Figura 11-78 Presencia de Chrysomphalus aonidium en hoja y fruto de cítrico y las manchas cloróticas que ocasiona.

(B)

Figura 11-81 Encarsia citrina, endoparasitoide de C. aonidum.

Queresa aplanada

Descripción morfológica

Chrysomphalus dictyospermi (Morgan)

Las escamas de los adultos son muy similares a los de Chrysomphalus aonidum. Las escamas de las hembras de Chrysomphalus dictyospermi se diferencian solamente por la coloración anaranjada o castaño claro. Los machos son ovalados y de color castaño claro (Figura 11-83).

Distribución e importancia En 1955 Cohic cita a la queresa sobre Eugenia malaccensis, Mangifera indica, Citrus paradisi y C. sinensis, cubriendo los árboles, con hojas muy cloróticas, secando las ramas afectadas, ocasionando severas pérdidas económicas. En Perú, se han presentado dos casos de infestaciones intensas en la costa norte y sur del país en cultivo de cítrico y palto respectivamente.

Daño Ataca hojas y frutos en colonias muy densas, cuando las infestaciones son severas, observándose la decoloración en las áreas donde están concentrados. Determinar la cantidad poblacional por cm2 para los lavados de los individuos (Figura 11-82).

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Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú

La biología es similar a C. aonidum. Los hospederos en Perú son: Citrus spp y Persea americana.

Enemigos naturales Se observa un parasitoidismo parcial ejercido por la avispita Aphytis holoxanthus, Encarsia citrina y E. lounsburyi. En el 2005 se introduce al país la especie Aphytis la cual ha ejercido un adecuado control en palto del Departamento de Moquegua, al sur del país.

Manejo, monitoreo, control Similar que para C. aonidum.

336

Figura 11-82 Escamas de hembras de Chrysomphalus dictyospermi.

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MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 11-83 Escamas de machos de Chrysomphalus dictyospermi.

Escama chata Parlatoria pergandii Comstock Distribución e importancia

Daño

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Se encuentra ampliamente distribuida en la región del Pacífico, se le ubica en todas las áreas donde se cultiva cítricos y donde se ha introducido el cultivo. En los últimos 14 años, la queresa aparece en forma esporádica como un problema creado por la aplicación de insecticidas que eliminan los controladores biológicos que en condiciones normales se encuentran ejerciendo un control sustancial. Figura 11-84 Daño en fruto por infestación de Parlatoria pergandii.

Ataca el tronco, tallo y ramas, más que a hojas y frutos. Muchas veces está asociada con la secreción de goma y resquebrajaduras del tronco. Llega a matar las ramas y a veces los árboles. De acuerdo a Bodenheimer 1951 los árboles de más de 10 años de edad son susceptibles de ser atacados por este insecto, que tiene preferencia por los escondrijos y la sombra (Figura 11-84).

Escama de la hembra ovalado de 2,5 mm. de longitud, color blanco grisáceo con exuvias doradas acéntricas (Figura 11-85). Cuerpo de la hembra adulta redondo de color blanco rosado en las formas jóvenes y violeta en las maduras. Escama del macho es oblongo.

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Descripción morfológica

Figura 11-85 Escama de la hembra de Parlatoria pergandii mostrando las exuvias acéntricas.

337 Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú

Biología

(A)

La hembra oviposita dentro de la escama. Los huevos son alargados de color púrpura. La tasa de reproducción de la queresa es muy baja y el ciclo es largo a comparación con otras queresas, por ello para formar densas colonias deben pasar varias generaciones. Hospederos en Perú: Citrus spp. SCB - Senasa

Enemigos naturales Especies del género Aphytis y Encarsia citrina parasitoides externos e interno respectivamente además de los predadores comunes a las queresas diaspinas.

Manejo, monitoreo y control

(B)

Los mismos que para queresas diaspinas.

Queresa negra del chirimoyo Scale, Black Scale Parasaissetia nigra (Nietner) SCB - Senasa

(Hemiptera: Coccidae)

Distribución e importancia Es común en Texas, Florida, Hawai y la mayoría de áreas tropicales del mundo, incluyendo Perú. Es una especie cosmopolita. Usualmente se ubica en ramillas jóvenes en forma individual en el borde o sobre las nervaduras de las hojas en frutales y plantas ornamentales, no se le ha visto formar colonias, por lo que económicamente no es relevante.

Daño El daño ejercido es mínimo por que no se presenta en forma masiva.

Descripción morfológica Superficie dorsal de la hembra fuertemente esclerotizada, con gran cantidad de reticulaciones poligonales, de forma oval, color negro azulado o marrón negrusco lustroso con numerosos poros en todo el cuerpo. Es casi aplanada, mide 3,0 a 4,0 mm. de longitud. Machos no conocidos (Figura 11-86).

Biología Bajo condiciones de 22°C y 70% HR, en confinamiento la queresa cumple su ciclo en 70 días sobre Citrullus vulgaris

Figura 11-86 (A) Hembras maduras y (B) hembra joven de Parasaisseti.

o sandia silvestre y 29 días en chirimoya. La capacidad de oviposición fue de 1700 huevos por hembra en C. vulgaris y 150 huevos en chirimoya. (Marín y Cisneros, 1982) Presenta tres estados ninfales, de los que el primero es móvil amarillento y demora hasta 03 días antes de fijarse al hospedero vegetal. Pasa por un periodo de hembra adulta joven y la hembra adulta madura (Gráfico 11-3). Los hospederos en Perú son: Annona cherimolia, Persea americana, Cydonia vulgaris, Lucuma abovata, Pyrus malus, Psidium guayaba, Vitis vinifera, Bouganvilea peruviana, Croton tiglium, Diphenbackia sp, Hibiscus rosa sinensis, Ficus sp, Nerium oleander, Malvastrum sp, Malvaviscus arbórea. (Marín y Cisneros, 1982 y Salazar 1999).

Enemigos naturales Las especies de controladores biológicos que predominan en el agroecosistema peruano son los parasitoides: Metaphycus luteolus (Encyrtidae). Metaphycus helvolus (Compere) (Encyrtidae), Coccophagus caridei (Brethes) (Aphelinidae) y Scutellista cyanea Motschulsky (Pteromalidae).

338 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

100 90 80 % de hembras

70 60 50 40 30 20 10 0 ene

feb

mar

abr

may

jun

jul

ago

sep

oct

nov

Fecha

[

% hembras en preoviposición

% hembras en reproducción

% hembras muertas

]

Gráfico 11-3 Fluctuación poblacional de los estados susceptibles a lavado de Parasaissetia nigra, en la Costa central de Perú.

Manejo

Mosquita blanca del espiral

Es necesario evaluar la acción de los enemigos naturales y recuperar y liberar para potenciar su acción en campo.

Citrus whitefly

Monitoreo. Recuperación y liberación de enemigos naturales. Lavados a presión cuando hay presencia de migrantes. Control. No son necesarios. Biológico. La incidencia del parasitoidismo total varia durante el año registrándose los picos mas altos en verano. Metaphycus spp es abundante de febrero a abril, Coccophagus caridei de diciembre a mayo y Scutellista de septiembre a noviembre.

MOSQUITAS BLANCAS Orden: Hemiptera • Familia: Aleyrodidae Las especies de moscas blancas registradas en los cultivos de cítricos en el Perú, son Aleurodicus sp cercana a A. cocois, Aleurodicus coccolobae, Palareyrodes sp y Aleurotrachelus sp. En cítricos, de acuerdo al orden de importancia son Aleurothrixus floccosus (ver en capítulo Plagas de Paltos y Cítricos en Chile), Dialeurodes citri y Paraleyrodes sp.

Aleurodicus sp cercana a A. cocois (Curtis) Distribución e importancia Desde 1994, en Perú, las poblaciones de la “mosca blanca del espiral” fueron incrementándose al igual que la lista de sus hospedadores. En 1995 sus daños se intensificaron en Palpa, departamento de Ica, al sur de Lima, en donde se encontró atacando frutales como pecano, chirimoyo, palto, plátano, higuera y vid.

Daño La cobertura de cera sobre las hojas en ataques intensos es muy acentuada y la especie secreta una menor cantidad de melaza en comparación a otras especies de mosquitas.

Descripción morfológica Es característico observar, en el envés de las hojas, grandes espirales de secreciones céreas que anidan a los huevos alargados dispuestos en forma desordenada (Figura 11-88). Los adultos son fácilmente visibles por su tamaño y por la mancha triangular en el medio del borde externo de las alas anteriores (Figura 11-89). Los machos se diferencian de las hembras por presentar un par de lar-

339 Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú

gas proyecciones o claspers que sobresalen del extremo inferior de las alas, a modo de pinzas, cuando el adulto está en reposo (Figura 11-87).

La duración del ciclo biológico, desde huevo a emergencia del adulto, en plantas de “morera” Morus nigra fue de 56 días, bajo condiciones de confinamiento en invernadero a 22.1°C y 67% HR, durante los meses de verano del año 2000. Presentaron una proporción sexual de 3 hembras por macho y 93 a 195 huevos por hembra.

La duración en días de los estados biológicos de Aleurodicus sp, bajo condiciones de 22,1 °C de temperatura y 67% HR son: huevos 9, ninfa uno 10, ninfa dos 8, ninfa tres 10, ninfa cuatro 14 (Taquiri K., E. Núñez 2003).

(B)

Figura 11-87 Dimorfismo sexual en Aleurodicus cocois: (A) macho con clasper y (B) hembra.

(B) Figura 11-88 (A) Nidos de cera en espiral y (B) huevos desordenados de Aleurodicus sp.

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(A)

(A)

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Se determinó una mortalidad acumulada, equivalente al 79%, especialmente a nivel de los dos primeros estados ninfales.

Figura 11-89 Hembra adulta y ninfa IV de Aleurodicus sp.

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Biología

340 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

(B)

(D)

(C)

(E)

Figura 11-90 Controladores biológicos de mosca blanca. (A) Adulto de Encarsia sp, (B) emergida de ninfa de la mosca blanca. (C) Ninfa de la mosca blanca controlada por Encarsiella sp. Predadores de la Mosca blanca del Espiral: (D) Adultos de Delphastus catalinae y (E) larva de Ocyptamus sp, predando juveniles de la mosca blanca.

Enemigos naturales

Manejo

Actualmente la mosca blanca se encuentra infestando árboles frutales, forestales y ornamentales tanto en la costa como en la selva, sin ocasionar severos daños, principalmente por la presencia de sus biocontroladores. De muestras obtenidas de diversas partes del país, se han recuperado tres parasitoides del género Encarsia y dos especies del género Encarsiella: E. aleurodici (Girault) y E. noyesi Hayat; los predadores Delphastus sp, Ocyptamus sp, Ceraeochrysa cincta y la espacie introducida Delphastus catalinae (Figuras 11-90 y 11-91).

El Manejo Aleurodicus sp se realiza previa evaluación, liberando controladores relacionados con los estados susceptibles de control. Mejores resultados se reportan con liberaciones de adultos de Ceraeochrysa cincta. Los entomopatógenos, en este caso Lecanicillium lecanii para el control de ninfas, requieren para su preparación aguas blandas, con pH de 5 a 6. Igualmente la aplicación estará restringida a horas de baja o sin radiación solar y después de un riego o lavado. Los lavados a presión, con agua, antes de las liberaciones, favorecen notablemente la acción de los parasitoides, predadores y entomopatógenos. Después de 15 días del lavado se puede observar el incremento de la emer-

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(A)

341

(A)

(B)

(C)

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Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú

Figura 11-91 Controladores biológicos de mosca blanca. Ceraeochrysa cincta: (A) Adulta, (B) huevos y (C) larva.

gencia de Encarsia spp y de la mortalidad por desecación de las ninfas de la mosca blanca. El uso de aceites o jabones agrícolas, bajo la forma de aplicación o lavados se realiza cuando las plantas están afectadas con fumagina, usando de preferencia aceites de origen vegetal que afecta levemente a los controladores biológicos.

las manchas crecen alcanzando las nervaduras originando en casos extremos la marchitez y caída de las hojas. No se ha comprobado si se trata de la fototoxicidad por la saliva de las ninfas o de una virosis transmitida por la mosquita blanca (Figura 11-92).

La masificación de trampas pegantes amarillas en forma de panel o bandas colgantes contribuye a la reducción de las poblaciones mediante la captura de los adultos.

Mosca pequeña del palto Aleurotrachelus sp Distribución e importancia

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Se encuentra en la Costa Central del Perú, exclusivamente en cultivo de palto, conjuntamente con Aleurodicus cocois, A. coccolobae y Paraleyrodes sp. Ocupa el segundo lugar en importancia después de A. cocois, en referencia a las moscas blancas.

Daño Inicialmente se observan en las hojas, pequeñas manchas cloróticas en la ubicación de las ninfas, visibles en el haz cuando se les observa a trasluz,

Figura 11-92 Clorosis en el haz de hoja de palto, por presencia de ninfas de Aleurotrachelus sp en el envés.

342

Figura 11-93 Adulto de Aleurotrachelus sp.

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MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 11-94 Ninfas de Aleurotrachelus sp en el envés de hoja de palto.

Descripción morfológica Los adultos son amarillentos sin cubierta cérea son las mas pequeñas de las moscas blancas que hay en el país, miden aproximadamente de 0,7 a 1,0 mm. de largo (Figura 11-93). Los huevos son ovoides algo oscuros.

Biología Presenta varias generaciones al año. El ciclo tiene una duración de 28 a 32 días en verano a 24 a 30°C. ovipone en hojas maduras, el proporción sexual en verano es de 2: 1. La longevidad de adultos es de 3 días para machos y 4 para hembras (E. Núñez, T. Moncada, P. Ríos, 1999).

Enemigos naturales Se ha colectado un parasitoide de la Familia Platygasteridae aún no identificado, predadores como Stethorus sp (Coleptera Coccinellidae), Hemerobius hageni (Neuroptera Hemerobiidae) y Nabis sp (Hemiptera Nabidae).

Manejo Monitoreo. Es necesario evaluar el número de ninfas por hoja y la intensidad de las manchas cloróticas. Se ha registrado de 90 a 130 ninfas por hoja cuando las hojas están por caer. Se está desarrollando una metodología de evaluación y manejo.

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Las ninfas, ubicadas en el envés de las hojas, son muy pequeñas, ovales, de color negro, con un halo de cera blanca en el borde. Cuando se las cría protegidas del viento se ven los hilos largos de cera que bordean el cuerpo, a veces cubriéndola (Figura 11-94). Figura 11-95 Adulto de mosquita blanca atacada por el hongo P. fumosoroseus.

La instalación de cintas o paneles pegantes de color amarillo para el monitoreo y captura de poblaciones adultas es imprescindible en este caso. Igualmente para el control de adultos podemos utilizar el hongo Paecilomyces fumosoroseus. El control de ninfas mediante aplicaciones de Lecanicillium lecanii. Los controladores biológicos citados están al servicio del agricultor en el Centro de Control Biológico del SENASA Perú (Figura 11-95). De no haber enemigos naturales en campo se puede aplicar jabones potásicos. En investigaciones realizadas para el manejo de virus en diversos cultivos se obtuvieron resultados positivos utilizando leche cortada. En este caso se trató de reducir las manchas cloróticas ocasionadas por la mosquita Aleurotrachelus utilizando 3 aplicaciones del mismo producto al 3%. Las reducciones del área clorótica fueron significativas.

343 Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú

Mosquita blanca del cocotero, mosca blanca de cola Whitefly Aleurodicus coccolobae Quaintance y Baker

Desde que la “mosca blanca del espiral” fue incrementándose, aparecieron ninfas y adultos con características morfológicas diferentes, especie que posteriormente fue identificada como A. coccolobae. No se han registrado explosiones poblacionales, debido principalmente por el excelente control que realizan sus enemigos naturales. Se les ubica con frecuencia en morera, plátano y en forma ocasional en palto.

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Distribución e importancia

Figura 11-96 Adultos hembra y macho de Aleurodicus coccolobae.

Originalmente fue descrita de la Begonia Coccoloba uvifera, cocotero, Ceiba y de molle de costa Schinus terebinthefolius, de Yucatán México

Descripción morfológica Los nidos para la postura de sus huevos son también espirales circulares de menor tamaño que los de A. cocois. Los huevos alargados también están dispuestos en forma desordenada. Los adultos son grandes y presentan manchas irregulares que le confieren una apariencia de suciedad. Los machos también presentan un par de claspers fácilmente visibles (Figura 11-96).

El ciclo biológico, de huevo a emergencia del adulto, en plantas de “morera” Morus indica fue de 49 días, bajo condiciones de confinamiento a 24 °C y 70% HR, durante los meses de verano del año 2000. Presentaron una proporción sexual de 2 hembras por macho y una capacidad de oviposición de 76 a 110 huevos por hembra. Al igual que la mayoría de especies de mosca blanca, la mayor mortalidad se produce en los dos primeros estados ninfales.

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Biología

Figura 11-97 Ninfa III de Aleurodicus coccolobae, con inicio de las proyecciones posteriores a manera de cola.

Enemigos naturales

SCB - Senasa

Se han recuperado los siguientes parasitoides, en orden de prioridad: Encarsiella noyesi, E. aleurodici y Encarsia sp y los predadores comunes al Genero Aleurodicus: Delphastus sp, Delphastus catalinae, Ocyptamus sp y Ceraeochrysa cincta (Figura 11-98).

Figura 11-98 Encarsiella noyesi, controlador eficiente de Aleurodicus cocois.

344 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Manejo Al momento no hemos tenido infestaciones severas que considere tomar medidas de manejo de algún tipo. Sin embargo en el caso de ocurrir un problema la evaluación, los lavados simples con agua, la recuperación y liberación de sus controladores biológicos serian la clave del éxito en su manejo. Considerar que naturalmente la acción de los parasitoides alcanza controles del 85%.

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La alta especificidad hacia A. coccolobae, que muestra el parasitoide E. noyesi, hizo que fracasaran los intentos de su colonización para el control de A. cocois.

Mosquita desordenada o mosquita anidadora

Figura 11-99 Presencia de pequeñas colonias de Paraleyrodes sp en el envés de hojas de palto.

Palareyrodes sp Distribución e importancia La especie que infesta hojas de palto se distribuye en la costa central del Perú y es diferente a la que infesta cítricos en la costa norte. No son plagas de importancia económica, salvo por la apariencia pulverulenta de las hojas.

Daño SCB - Senasa

La presencia de un polvillo blanco en el envés de las hojas, como manchas de talco hace que sea muy fácil su detección. En cada mancha blanca se encuentra una pequeña colonia una hembra con sus huevos y cría, por ello que en nuestro medio se la conozca como Mosca anidadora. Cuando encontramos más de 50 colonias las hojas pierden su turgencia, se secan y caen (Figura 11-99).

Figura 11-100 Adulto y huevos de Paraleyrodes sp en palto.

Descripción morfológica

Las ninfas de primer estado se movilizan durante uno a tres días, son muy pequeñas y presentan un par de formaciones de cera sobre el cuerpo y un borde de fina cera parecida a una gasa muy delicada, el cual en la parte posterior se alarga como un velo de novia. Los últimos estados son aplanados, elipsoidales, amarillentos, con filamentos céreos, muy largos cristalinos y dorsales (Figura 11-101).

(A)

(B) Figura 11-101 (A) Primer y (B) cuarto estado ninfal de Paraleyrodes sp.

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Los adultos son amarillentos con cubierta de cera hasta en las antenas. Pueden medir de 1,0 a 1,5 mm. de largo. Los huevos son elipsoidales con un pequeño filamento en el centro, por donde la hembra los fija a la planta hospedera (Figura 11-100).

345 Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú

Enemigos naturales

Biología

Se ha colectado un parasitoide de la Familia Aphelinidae, que se encuentra en proceso de identificación, además de los controladores para las otras especies de mosca blanca.

El ciclo biológico de huevo a adulto dura 14 días bajo condiciones de verano (30 °C y 67% de HR).

Manejo Recuperación y liberación de enemigos naturales. El uso de lavados con agua o con agua mas jabones potásico mantienen las poblaciones muy bajas y el control de ninfas mediante aplicaciones de Lecanicillium lecanii.

Mosca blanca del hollín Woolly whitefly, Woolly citrus whitefly Dialeurodes citri (Ashmead) Distribución e importancia En 1992, Dialeurodes citri (Ashmead) fue registrada en el Perú en árboles de Tangelo en Pisco-Ica, posteriormente naranjo valencia y mandarino, procedentes de Chancay, Lurín, Huaral, en el departamento de Lima y en costa norte, sin afectar seriamente los cultivos.

Hospederos Tangelo, naranjo y mandarino.

Enemigos naturales Existen dos especies del género Encarsia sp o de color amarillo y que ejercen el 70% al 90% de control natural de las ninfas siempre que no se efectúen aplicaciones de insecticidas de síntesis (Figura 11-104).

Manejo Monitoreo. Se debe estimar la proporción de hojas colonizadas por esta especie y la presencia de su enemigo natural. Control. Esta mosquita tiene una muy baja incidencia en los huertos de cítricos, por lo que no se ha requerido una acción específica de control. En general el control natural y acciones como los lavados y eventuales aplicaciones de aceites y jabones agrícolas

Daño

Las ninfas son desnudas ovoides y completamente aplanadas, de color verde transparente. La longitud de las ninfas varía de 0,28 mm. (ninfa I) a 1,40 mm. (ninfa IV). Se diferencian por presentar restos de cera interna que marcan los espiráculos. y el orificio vasiforme dibujando una T (Figuras 11-102 y 11-103B). Los adultos presentan el primer par de alas anchas con una mancha de color humo en cada extremo posterior. En comparación, el segundo par son más delgadas. La cabeza, antenas, cuerpo y alas están densamente cubiertos con polvo de cera. El extremo libre del abdomen de la hembra termina en punta por el ovipositor, se diferencia del macho por terminar en dos estructuras alargadas, a manera de pinzas, denominados claspers (Figuras 11102 y 11-103A).

(A)

SCB - Senasa

Descripción morfológica

SCB - Senasa

A diferencia de la especie anterior, sus ninfas carecen de filamentos cerosos, sin embargo producen abundante mielecilla que sirve de sustrato al hongo que produce la fumagina. Sobre el fruto engrosa el albelo debajo del pedúnculo reduciendo la pulpa del cítrico.

(B) Figura 11-102 (A) Huevos y (B) ninfa IV de Dialeurodes citri.

346

(A)

SCB - Senasa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

(B)

(A)

SCB - Senasa

Figura 11-103 (A) Adulta y (B) ninfa de Dialeurodes citri.

(B) Figura 11-104 (A) Ninfas de Dialeurodes citri parasitadas por Encarsia sp y (B) adulto del parasitoide.

Moscas Orden: Diptera • Familia: Cecidomjiidae

Mosquilla de los brotes Prodiplosis longifila (Gagné, 1934) Distribución e importancia Especie Neotropical, reportada en cítricos, en Florida EE.UU., Ecuador, Colombia y el extremo Oeste de la India. En el Perú se encuentra ampliamente distribuida en cultivos hortícolas, en los valles de la costa, aunque casi nunca se ha reportado en frutales con excepción del reporte de Díaz W. (2001) para palto muy esporádicamente.

Daño Su presencia es escasa en frutales en Perú. Las larvas destruyen los ovarios de las flores pudiendo causar caída prematura de las mismas. Las hembras oviponen sobre brotes, y especialmente en la base del pistilo de las flores. Las larvas se localizan en los brotes tiernos, y en las flores, alimentándose del estilo, ovario y filamentos, causando síntomas de infección fúngica causadas por necrosis del ovario y el cáliz (Peña J. Branowski M. McMillan R. 1987).

347 Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú

Descripción morfológica Los Adultos son moscas diminutas y de aspecto frágil. Las hembras, miden 1.68 mm. y los machos 1.4 mm. aproximadamente. Presentan tórax, abdomen y patas de color amarillo plomizo. El dimorfismo sexual es notable en las antenas. Los machos poseen 26 segmentos y las hembras 14. Esta especie presenta antenas de artejos cilindroides con una ligera estrangulación media. La Larva es algo achatada dorso-ventralmente y de cabeza muy reducida, provista de apéndices bucales modificados para la succión (Figura 11-105).

Biología Los huevos son transparentes, alargados y ovoides, de 0,3 mm y son depositados en los estambres o estilos. La larva eclosiona en 1.4 días. Recién eclosionadas, las larvas son casi transparentes. Un día después se tornan blancas para posteriormente adoptar tonos amarillentos a anaranjadas cuando han alcanzado su mayor tamaño, finalizando el tercer estadio después de 7 días de la eclosión.

Hospederos Ají, alcachofa, alfalfa, arveja, brócoli, espinaca, fríjol, haba, kiwicha, pallar, papa, perejil, tomate, zapallo, malezas y quenopodiáceas silvestres.

Enemigos naturales Predadores como Chrysoperla asoralis (1), Nabis capsiformis, Methacantus tenellus, larvas y adultos de coccinélidos. Parasitoides de huevos como Synopeas sp (Hymenoptera: Platygasteridae), que emerge después de 14 a 16 días y entomopatógenos como Beauveria bassiana y Lecanicillium lecanii (Figuras 11-106 y 11-107).

Manejo Control biológico. Predadores como Chrysoperla asoralis (1), Nabis capsiformis, Methacantus tenellus, larvas y adultos de coccinélidos; parasitoide Synopeas sp (2) y los entomopatógenos Beauveria bassiana y Lecanicillium lecanii (Figura 11-108). Control etológico. Uso de trampa pegante blanca con iluminación (Figura 11-109). Control físico mecánico. Aspersión de agua con detergente agrícola. Control químico. Azufre en el tercio inferior de la planta, en las dosis recomendables; lavados con aceites y jabón líquido.

SCB - Senasa

Todas las larvas tienen una pequeña cápsula cefálica con una antena cónica unisegmentada, cada segmento con una papila característica de los Cecidomyiini en número y posición (Gagné in press). Los espiráculos del octavo segmento abdominal están situados posteriormente. La cápsula cefálica en larvas de cecidómidos notoriamente más grande mientras mayor es el estadío, pero en P. longifila la cápsula cefálica del segundo estadío es casi tan ancha como la del tercero. La pupa es larga y amarillo pálida cuando recién ha mudado. La cabeza y el tórax se tornan negros días después. Los adultos, que emergen después de alrededor de 4 días, miden cerca de 1.5 mm. de largo y 1,42+-0,04mm. en machos y 1,53+-0,02 mm.

en las hembras. En campo, la duración total del ciclo es de 10 a 14 días dependiendo de las condiciones climáticas.

Figura 11-105 Adulto, prepula y pupa de Prodiplosis longifila.

348

SCB - Senasa

SCB - Senasa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 11-107 Endoparasitoide Synopeas sp, predador Chrysoperla asoralis.

Figura 11-108 Adulto de Prodiplosis longifila, muerto por hongo entomopatógeno.

Lepidópteros Gusano pegador de las hojas y perforador de los frutos Orange tortrix Argyrotaenia sphaleropa (Meyrick, 1909) (Lepidoptera: Tortricidae)

Distribución e importancia Argyrotaenia sphaleropa es una especie ampliamente distribuida en los trópicos del Nuevo Mundo. En Brasil las larvas se alimentan de Cucarda o Hibiscus rosa sinensis y atacan fuertemente a vid. En la Costa Peruana ocasiona fuertes infestaciones a las plantas de cítricos.

SCB - Senasa

SCB - Senasa

Figura 11-106 Synopeas sp, parasitoide Platygasteridae de Prodiplosis longifila.

Figura 11-109 Modalidad de trampa para la captura de Prodiplosis longifila.

Daño Este insecto incrementa sus poblaciones ocasionalmente, debido al uso de los pesticidas que afectan al complejo parasitoides de esta plaga. Las larvas de la primera generación enrollan las hojas tiernas y se alimentan del parénquima. La segunda generación se traslada a los frutos jóvenes y se alimenta del tejido superficial de la base del pedúnculo, provocando la caída de los frutos a pesar de no perforar profundamente la zona. Este daño incrementa las probabilidades de penetración de microorganismos fitopatógenos, provocando la caída de frutos pequeños (Figura 11-110).

349

SCB - Senasa

Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú

Figura 11-110 Daño en brote y frutos pequeños, producido por Argyrotaenia sphaleropa.

Argyrotaenia sphaleropa: en su estado adulto puede alcanzar hasta 10 mm de longitud y 14 a 16 mm. de expansión alar. Sus imagos se caracterizan por poseer las alas anteriores oscuras (de un color beige sucio con manchas marrones), decoradas con un patrón relativamente complejo. Las alas despliegan, por lo general una vena costa bastante sinuosa y cuando en reposo, presentan una mancha en “V” sobre la superficie dorsal y un triángulo cerca al margen frontal, añadiéndose dos manchas paralelas justo en los extremos de los brazos de la marca en V que resulta bastante notoria al final de las alas. En el macho, la genitalia presenta el uncus expandido y la valva corta mientras que la genitalia de la hembra posee un sterigma corto con un buen desarrollo de la parte anteostial. Los machos son más pequeños (Figura 11-111).

Biología Argyrotaenia sphaleropa es una especie multivoltina (normalmente de 3 a 4 generaciones superpuestas y hasta 6 generaciones por año) cuya hembra oviposita siempre sobre hojas tiernas o frutos verdes, depositando sus huevos en grupos como si se tratara de tejas superpuestas parcialmente que varían en color: cremas cuando recién ovipuestas y rojo ladrillo cuando maduras. Después del período de incubación, una pequeña larva amarillenta, de 1.5 mm. de longitud, emergerá por uno de los extremos del corion y conforme se alimente ira adoptando un color verde brillante que difiere de los tonos oscuros que adquieren la cabeza y el escudo toráxico. Inicialmente, las larvas (por lo general muy activas) se localizan en los brotes terminales, donde juntan las hojas mediante unos hilos de seda, tejiendo una cubierta protectora alrededor de la base del fruto o del órgano atacado, desde donde se alimenta hasta desarrollar la pupa, de color pardo claro, 8 mm. y cremas-

(A)

(B)

Figura 11-111 Adultos de Argyrotaenia sphaleropa: (A) macho y (B) hembra.

ter con 8 ganchos. Esta especie esta muy bien adaptada a la costa, aunque son las condiciones de primavera-verano las que permiten el incremento de sus densidades, logrando los picos más altos durante el verano. La hembra deposita de 50 a 150 huevos (Figura 11-112).

Hospederos Citrus spp, Gossypium barbadense.

Enemigos naturales Varios biocontroladores atacan a esta plaga, en sus diversos estadíos, los que utilizados oportunamente ejercen un buen control (Cuadro 11-2). T. exiguum (Hymenoptera: Trichogrammatidae) es una avispa de 0.5 mm. de longitud parasitoide de huevos del gusano pegador de la hoja. Presenta el cuerpo de color anaranjado a negruzco combinado con amarillo, con un marcado dimorfismo donde las hembras presentan antenas simples de forma clavada y los machos antenas plumosas (Figuras 11-113 y 11-114).

Trematerra, P. Brown

Descripción morfológica

350

SCB - Senasa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

(A)

Universidad Nacional de Trujillo

Figura 11-112 Adulto, postura y larva de Argyrotaenia sphaleropa.

(B)

(B)

(C) Figura 11-114 Chrysoperla externa: (A) huevo, (B) larva y (C) adulto.

(A)

SCB - Senasa

Figura 11-113 (A) Adulta y (B) posturas parasitadas por Trichogramma exiguum.

351 Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú

Cuadro 11-2 Controladores biológicos de Argyrotaenia sphaleropa.

Biocontroladores

Estado suceptible

Parasitoides Apanteles sp

Larva

Cotesia sp

Larva

Exochus sp

Larva

Trichogramma exiguum

Huevo

T. pintoi

Huevo

Falso medidor, defoliador Chrysodeixis includens (Walker) (Lepidoptera: Noctuidae)

Distribución e importancia Esta es una larva polífaga que ataca varios cultivos vegetales, encontrándose en todo el Norte, Centro y Sudamérica. En el Perú se distribuye con mediana infestación, sobre todo en la zona del norte chico y en el sur.

Predadores Chrysoperla externa

Huevos-larvas

Nabis sp

Huevos-larvas

Hemerobius sp

Larvas

Entomopatogenos Bacillus thuringiensis

Larvas

Manejo Monitoreo. Evaluar especialmente al inicio de primavera, registrando huevos, adultos y estados parasitados, además de la presencia de predadores. Control etológico. Las trampas de luz o mecheros son bastante utilizadas, capturan un gran número de ejemplares de la plaga y sirve para monitorear adultos. Control cultural. Recolección de frutos dañados y caídos. Control biológico. Recuperación de biocontroladores y devolución al campo; colocando los frutos sobre fuentes llenas de arena dentro de la caja de recuperación provista con papel corrugado para proporcionar refugio a las pupas. Las avispitas Trichogramma pueden liberarse desde las primeras capturas de los adultos, al inicio de la fructificación a razón de 100 pulgadas2/ha. Las especies de Apanteles y Cotesia parasitan larvas jóvenes o maduras y empupan dentro de cocones blancos, fuera de la larva. Exochus sp empupa dentro de la larva y emerge de la pupa por un orificio circular que pudiera confundirse con la apertura de salida de la polilla, la cual es más bien, una especie de rasgadura que nunca adopta formas circulares.

Daño El daño realizado por esta plaga se dirige básicamente sobre las hojas y el follaje. Cualquier daño causado por esta especie es “indirecto” debido a la defoliación prematura. Los niveles bajos de defoliación (menos del 20%) no causan ningún efecto nocivo.

Descripción morfológica El adulto es una mariposa de color marrón grisáceo, de unos 15 a 20 mm., con puntos de color plateado en la parte media de las alas anteriores. Posee ocelos, las antenas del macho son filiformes y carecen de cilios, el rostro redondeado levemente, palpos labiales curvos y hacia arriba, longitud promedio de 16 a 30 milímetros, parte dorsal del tórax-abdomen con penachos escalados (Figura 11-115).

Biología Los huevos son semiesféricos y de color verde claro. Ubicados siempre hacia el borde de las hojas, se les encuentra tanto individual como en grupos de 3 a 5 huevos. Las larvas atraviesan por 5 estadíos, el primero de los cuales presenta una coloración verde clara, semitransparente. Conforme se van desarrollando, las larvas adquieren un color verde manzana con bandas longitudinales blanquecinas, alcanzando unos 3 a 4 cm. de longitud hacia el último instar. Al comienzo, estas roen la superficie, pero luego devoran las hojas haciendo huecos de bordes irregulares. Las larvas son muy voraces, pudiendo defoliar rápidamente los cultivos. Empupan en las hojas inferiores, tejiendo un capullo blanquecino. El huevo eclosiona en 3 días, la duración total de los estadíos larvales es de 19 días y la pupa 8 días. El adulto tiene una longevidad de 14 días aproximadamente, siendo las hembras copuladas más longevas que las hembras vírgenes y que los machos. En promedio, la hembra ovipone de 543 huevos y un período de preoviposición de 3 días.

352

F. Díaz

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 11-115 Adulto y larva de Chrysodeixis includens.

Enemigos naturales Adulto: 14 días

Posee un gran número de especies de predadores y de parasitoides Podisus nigrispinus, Calosoma sp, Eriopsis conexa, Trichogramma sp, Copidosoma floridanum, Cotesia marginiventris, Campoletis sp, Apanteles sp, tachínidos, etc.

Pupa: 8 días

Manejo Evaluar y conservar la entomofauna benéfica. Huevo: 3 días

Monitoreo. Definir población en estado los primeros estados larvales. Control cultural. Podas, recuperación y liberación de enemigos naturales

Larva: 19 días

Figura 11-116 Esquematización del ciclo biológico de Chrysodeixis includens.

Los estadíos biológicos de Chrysodeixis includens bajo condiciones de temperatura de 23°C y 76% HR mostraron una duración de huevo, larva, pupa y adulto, de 2, 18,7 13 días respectivamente (Figura 11-116).

Control biológico. Liberaciones de Trichogramma pintoi para el control de huevos Uso de Bacillus turinghiensis para larvas de primeros estados.

Control etológico. Uso de trampas de alimentación u oviposición para la captura de adultos.

El perro del naranjo

Hospederos

Citrus butterfly

Brassica oleracea, Brassica oleracea var italica, Brassica oleracea var botrytis, Campomanesia lineatifoliia, Cucumis melo, Cucumis sativus, Geranium sp, Lactuca sativa, Lycopersicum esculentum, Medicago sativa, Nicotiana sp.

Heraclides paeon paeon (Guilding, 1827) (Lepidoptera: Papilionidae)

Distribución e importancia Distribuido por todo el territorio nacional y siempre por debajo de los 2500 m.

353 Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú

Daño Se alimenta de hojas por lo que daña las plantas al defoliarlas, especialmente si son jóvenes. Si las poblaciones son altas en un solo árbol puede reducir drásticamente la copa, limitando así el crecimiento. Raramente causan daño económico.

cuelgan de un hilo a una rama o al tronco del árbol para empupar. Los adultos son de actividad diurna y ovipositan aisladamente en las hojas más tiernas de las plantas. El insecto se muestra muy activo en la primavera y el verano. En otoño empupa para emerger como adulto durante la primavera.

Hospederos Arracacia xanthorrhiza, Citrus spp, Psoralea glandulosa, Ruta graveolens.

Descripción morfológica Los adultos son mariposas muy llamativas y grandes de 8 cm. de longitud y 12 cm. De expansión alar de color marrón oscuro y amarillo intenso a manera de manchas redondeadas que se suceden unos a otras formando una banda paralela al margen anterior del ala expandida y otra banda mas delgada paralela al borde posterior del ala posterior que se continúa hacia el ala anterior uniéndose con la banda inicialmente descrita. El ala posterior termina en una prolongación a manera de cola en forma espatulada (Figura 11-117).

Enemigos naturales Presenta un efectivo control biológico natural por parte de parasitoides, predadores y entomopatógenos (Cuadro 11-3).

(A)

(B)

(C)

Figura 11-117 Patrón de coloración de Heraclides paeon paeon.

(D)

Figura 11-118 Heraclides paeon paeon: (A) huevo, (B) larva, (C) pupa y (D) adulto.

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Presentan de 3 a 4 generaciones anuales, las hembras depositan alrededor de 80 huevos subesféricos blanco azulados tornándose gris oscuro cuando se aproxima la eclosión. Las larvas recién eclosionadas permanecen reunidas en enjambres. Los tres últimos estados comen vorazmente, viven aislados caminando sobre las hojas. Las orugas presentan un color grisáceo con puntos negros y presentan dos cuernos retráctiles en el primer segmento torácico (osmeterio) que en realidad son glándulas que segregan una sustancia de olor penetrante (ácido butírico) (Figura 11-118). Al llegar a su máximo tamaño se

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Biología

354 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Control biológico. En casos necesarios puede usarse también una forma comercial de B. thuringiensis que generalmente ejerce un buen control.

Cuadro 11-3 Controladores biológicos de Heraclides paeon paeon.

Biocontroladores

Estado suceptible

Parasitoides Aves

Bicho del cesto, defoliador

Larva

Oiketicus kirbyi (Guilding, 1827)

Predadores Hypososter sp

larvas

Pteromalus sp

Pupas

Thrichogramma sp

huevo

(Lepidoptera: Psychidae)

Distribución e importancia

Entomopatogenos Bacillus thuringiensis

La especie fue reportada en el oeste de la India. Actualmente se encuentra distribuida en América Central, Sudamérica y Las Antillas. Puede llegar a ocasionar severas defoliaciones en plantas cultivadas, forestales y ornamentales entre ellos palto.

Larvas recién emergidas

Manejo Evaluación y conservación de los enemigos naturales en campo, utilización de productos no tóxicos.

Daño La oruga destruye hojas, ramas, brotes, flores y frutos. Los daños son muy característicos, ya que son causados por larvas individuales que devoran el parénquima en zonas circulares. Tiene apariciones generalmente esporádicas, aunque se han observado defoliaciones espectaculares en otros países (Figura 11-119).

Monitoreo. Es necesario determinar la presencia en campo de estadios susceptibles de control y si hay presencia de biocontroladores en el campo. Control etológico. Se hace uso de plantas trampa por las cuales la plaga tenga predilección y que alberguen fauna benéfica siempre teniendo en consideración que no sean atrayentes para el resto de plagas del agroecosistema.

Descripción morfológica De los adultos, el macho es alado con 32 a 52 mm. de envergadura alar y es de color pardo con zonas claras y oscuras mientras que la hembra, de color grisáceo, es áptera, vermiforme y mide 45 a 50 mm. La larva es característica de la Familia Psychidae, de color grisáceo, con manchas oscuras, cuando son recién nacidas son de color amarillo cápsula movible, las larvas pueden alcanzar hasta 60 mm. de largo, las hembras son más oscuras que los machos, con manchas negras y de tamaño irregular en el tórax y la cabeza. La cabeza es quitinosa, con mandíbulas fuertes; tórax con tres pares de patas fuertes; abdomen con 8 segmentos, cuatro pares de propatas. La parte anal es un segmento de color café oscuro, un poco quitinoso y también con un par de propatas.

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Biología

Figura 11-119 Cesto formado por la hembra de Oiketicus kirbyi, dentro de los cuales pasa toda su vida.

La hembra vermiforme vive dentro de un estuche larval, donde deposita de 5.000 a 10.000 huevos. Las larvas jóvenes salen de la cápsula suspendiéndose por un hilo de seda y se diseminan con el viento. Luego confeccionan una cápsula cónica muy robusta de seda, sobre la cual están dispuestos transversalmente pequeños pedazos de

355 Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú

hojas y nervaduras. Esta cápsula puede alcanzar de 40 a 70 mm al final del desarrollo. El huevo, de forma cilíndrica con aristas redondeadas (0,34 x 0,53 mm), al inicio es de color blanco amarillento, luego anaranjados y cuando están próximos a la eclosión se tornan oscuros. Durante la oviposición son depositados dentro de la última exuvia pupal. El período promedio de incubación es de 43 días (27 a 47). La viabilidad es normalmente muy alta y el número de huevos varía de 3.500 a 6.000 unidades.

Hospederos

Al nacer las larvas salen por una abertura en el extremo inferior de la canasta, secretan un hilo de seda y se dispersan con ayuda del viento (foresia). Al descender en la vegetación de inmediato inician el raspado de la epidermis del follaje usando los restos, los cuales pegan con secreciones salivares, para formar la canasta cónica.

Entre sus enemigos naturales, los parasitoides son los más importantes como reguladores: Digonogastra sp (= Iphiaulax sp) (Braconidae), Conura sp, Brachymeria sp (Chalcididae). Entre los dípteros parasitoides destacan las familias Sarcophagidae y Tachinidae.

A medida que desarrolla la larva va ampliando la canasta con pedazos de follaje, ramitas y nervaduras. Al nacer mide 1.5 mm. y al finalizar la etapa larval mide 39 mm. en el macho y 55 mm. en la hembra. La canasta del macho es color café claro o gris, y mide de 40 a 65 mm., y en la hembra es de color café oscuro y mide de 58 a 85 mm. La ninfosis se produce dentro del cesto, donde tiene lugar el acoplamiento. Durante la cópula, el macho rompe el extremo del cesto de la hembra con unos ganchos que tiene en el extremo del abdomen y penetra la abertura genital extendiendo su abdomen hasta 70 mm. Los machos nocturnos son atraídos por la luz. Hacen su aparición en los meses de octubre y noviembre al abandonar el cesto de la madre; desde ese momento se dedican a fabricar su propio cesto el cual es trasladando a cuestas. La longevidad promedio es de 3,9 días para las hembras y de 3,0 días para el macho. El ciclo de vida ha sido estudiado por varios autores y existen diferencias en la duración de las etapas de desarrollo informadas por ellos. Esto se puede explicar por diferencias en el procedimiento de cria, condiciones climáticas, substrato de alimentación utilizado y sobretodo por la dificultad que representa estudiar a un insecto que permanece encerrado en una canastan por un período de tiempo prolongado (Cuadro 11-4).

Cuadro 11-4 Duración en días de los estados de Oiketicus kirbyi.

Huevo 12 a 15 estados larvales

25 a 30 d. 200 a 250 d.

Larva macho

10 a 20 d.

Larva hembra

30 a 40 d.

Hasta 1978 los Psychidae no eran conocidos en América del Sur. Se les conocía como plaga de la palma africana y sólo habían sido reportados unos ataques en banano. Actualmente en el Perú ataca diferentes especies vegetales, forestales, frutales incluido el palto, excepto en cítricos y ornamentales, a nivel de costa y selva.

Enemigos naturales

Manejo Recuperación de enemigos naturales de podas sanitarias y liberación en campo.

Monitoreo. Determinación de los estados susceptibles de control, esto es los primeros estados larvales. Control cultural. Podas sanitarias, eliminación de rastrojos. Control biológico. Las aplicaciones de Bacillus turinghiensis var kurstaki son muy efectivas, siempre que sean dirigidas a larvas de primeros estados.

Defoliador Oxydia vesulia (Cramer, 1782) (Lepidoptera: Geometridae)

Distribución e importancia Es una plaga muy importante en áreas forestales del Brasil, atacando al eucalipto (Eucaliptus grandis). En el Perú, es plaga potencial en palto y en campo sus densidades son controladas eficazmente por el controlador Telenomus alsophilae.

Daño La oruga daña hojas, ramitas, brotes, flores y frutos. Los daños son muy característicos, ya que son causados por larvas individuales que devoran el parénquima en zonas circulares. Tiene apariciones generalmente esporádicas, aunque se han observadointensas defoliaciones en otros países.

356 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Descripción morfológica El adulto presenta una expansión alar de 46 a 60 mm. Cabeza con una mancha blanca desde las bases de las antenas hasta el vertex. El macho posee una antena ciliada-setosa a diferencia de la antena de la hembra que es simple y filiforme. Tórax grueso. Alas anteriores con el ápice doblado hasta abajo observándose una línea diagonal de color blanco cremoso que se extiende desde el ápice hasta un tercio de la longitud total del ala antes del margen externo; en el margen costal cerca al ápice se inicia y termina una pequeña línea curva de color blanco cremoso. Alas posteriores con el mismo color de fondo que las anteriores, presentan la línea diagonal que se inicia en este caso en la parte media del margen costal y se extiende hasta el punto medio del margen interno. Además se nota en el área costal cerca de la línea diagonal una mancha gris oscuro a gris claro.

Biología

Adulto: 5-10 días

Huevo: 7 días

Pupa: 13 días

Prepupa: 2 días

Larva: 31 días

Figura 11-120 Ciclo biológico de Oxidia vesulia.

Los huevos son de forma ovalada, blanco cremoso recién ovipositados, luego toman un tono verdusco hasta adquirir una tonalidad granate. Son ovipositados uno tras otro a lo largo del tallo o en el fruto de este cultivo, cuando la infestación es alta. La larva madura llega a medir de 55 a 60 mm. de longitud, marrón claro, con espiráculos y crochets de propatas marrón oscuro. Se observa un par de propatas abdominales ubicadas en el sexto segmento y un par de propatas anales, típica de una verdadera larva medidora.

Los estadíos biológicos de Oxidia vesulia mostraron una duración de, larva, prepupa, pupa y adulto, de 28, 2, 11 y 10 días respectivamente (Figuras 11-120 y 11-121). Hospederos: Asparagus officinalis, Eucaliptus sp, Persea americana, Ricinus communis, Vitis vinifera,

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La pupa presenta un color marrón claro con el segmento portador del cremáster color marrón café.

Figura 11-121 Posturas de Oxydia versulia en ramillas y fruto de espárrago.

Enemigos naturales

La crianza de Telenomus, que es sencilla, debe proveer la cantidad suficiente del controlador.

Telenomus alsophilae (Viereck) (Hymenoptera: Scelionidae) es una microavispa con gran preferencia por las especies del Género Oxydia y Chrysomima. Otros parasitoides de la Familia Trichogrammatidae, Eulophydae, Braconidae, Ichneumonidae, Tachinidae y predadores varios.

Control cultural. Eliminación de restos de poda o cosecha, tanto del campo en desarrollo como de los campos vecinos.

Manejo La crianza, recuperación y conservación de los controladores biológicos es fundamental en el manejo.

Monitoreo. La determinación del periódo de oviposición en campo, será de utilidad para las liberaciones del parasitoide Telenomus alsophilae.

Control etológico. El uso de trampas de alimentación, oviposición o de luz, colocados de modo que intercepten el arribo a los cultivos que deseamos proteger desde cultivos vecinos infestados con la plaga. Control biológico. La crianza de T. alsophilae se ve simplificada debido a la prolongada longevidad que alcanza en cautiverio y a la gran capacidad de adaptación a condiciones de laboratorio que posee. Estudios realizados en

357 Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú

Colombia han observado la gran capacidad de parasitismo (98,1%) que desarrolla sobre Oxydia trychiata (Madrigal, 2001). En la costa norte del territorio peruano, la acción del controlador alcanza niveles elevados de control y mantiene la densidad de Oxidia vesulia en niveles muy bajos, manteniendo las poblaciones de la plaga, casi siempre por debajo del umbral del acción.

Oruga minadora de la hoja del palto Phyllocnistis sp

Descripción morfológica Los adultos son microlepidópteros de 2,5 mm. de longitud, todo el cuerpo y las alas están cubiertos por escamas blancas, destacándose las del borde posterior por ser alargadas formando una hilera como un fleco.

Enemigos naturales Posee el mismo complejo de parasitoides, predadores y patógenos que el minador de la hoja de los cítricos a excepción de Ageniaspis citrella (Figura 11-125).

Manejo Al momento no se ha tenido infestaciones severas que requieran tomar medidas de manejo.

(Lepidoptera: Gracilariidae)

Distribución e importancia Wille en 1952 reporta por primera vez a la plaga en el Perú sobre chirimoya y palto Actualmente no es un problema serio.

En el caso de ocurrir infestación una interrupción de las aplicaciones de químicos de síntesis y hacer lavados a presión para romper la epidermis desgastada de las minas y provocar la muerte de las larvas de la plaga por exposición a la luz y desecación. De poder adquirir los controladores, como los ectoparasitoides efectuar liberaciones.

Daño

(A)

(B)

(C)

(D)

Figura 11-122 Huevo: (A) larva, (B) pupa de ectoparasitoides. Adultos: (C) Zagrammosoma multilinetum y (D) Cirrospilus sp, controladores del minador de la hoja del palto.

SCB - Senasa

Las larvas son minadoras, realizan galerías serpenteantes que en hojas maduras que son de su preferencia solo se secan dejando la huella como cicatrices. El problema surge cuando se elimina los enemigos naturales, al no poder alimentarse van a los brotes atacando a las hojas tiernas que se distorsionan y encarrujan, daño igual al producido en cítricos por P. citrella.

358

Figura 11-123 Adultos de Phyllocnistis citrella.

SCB - Senasa

SCB - Senasa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 11-124 Hoja de naranjo con daño de Phyllocnistis citrella.

Minador de la hoja de los cítricos Phyllocnistis citrella Stainton

Biología

(Lepidoptera: Gracilariidae)

La hembra deposita un huevo sobre hojas muy tiernas, del cual eclosiona una pequeña larva que penetra inmediatamente al mesófilo de la hoja, quedando cubierta por la epidermis. Luego de alimentarse avanzando siempre por la galería, la larva va mudando hasta alcanzar el tercer estado larval, luego deja de alimentarse dando origen a una prepupa, para luego pupar en una especie de cámara, adquiriendo el característico color pardo. Posteriormente emerge la polilla adulta que se aparea, repitiéndose el ciclo que, bajo condiciones de verano u otoño puede ser completado entre dos a tres semanas.

E. Núñez y R. Ripa

Distribución e importancia Está presente en Perú y Chile posee distribución restringida a sectores aledaños a la ciudad de Arica en la Región de Arica y Parinacota (XV). Dada la gravedad de los daños que produce este insecto en la citricultura a nivel mundial, se ha incluido en esta revisión.

Daño Frutos: Muy ocasionalmente se observan galerías bajo la epidermis. Hojas. Galerías subepidérmicas que producen una deformación severa. Ramillas: Galerías bajo la epidermis y retardo del crecimiento en plantas jóvenes (Figuras 11-123 y 11-124).

Probablemente lo más característico es que la ovipostura se realiza en sitios cercanos a la nervadura de las hojas muy nuevas y desde ese lugar, la larva comienza su alimentación originándose una galería serpenteante en la lámina de la hoja que se deforma y adquiere una tonalidad plateada.

Hospederos Los cítricos limonero, naranjo, pomelo y mandarino

Descripción morfológica

Enemigos naturales e introducidos

La hembra es una polilla de color gris amarillento, manchas oscuras sobre su dorso, expansión alar de 4 mm y tamaño cercano a 2 mm de longitud. Sobre el borde de sus alas posteriores se observa abundante pilosidad. El huevo tiene forma ovoide, hemisférica aplanada y transparente. El primer estado larval es amarillento, casi transparente y presenta un ligero ensanchamiento en los primeros segmentos de su región anterior. Puede ser observado principalmente por el brillo que origina la cubierta de la galería que comienza a construir.

En 1996 y 1997 se realizan las introducciones del encírtido Ageniaspis citricola Logvinovskaya al Perú con excelentes resultados. Es un parasitoide de huevos y larvas pequeñas que también está presente en la Región de Arica y Parinacota, Chile donde también ha mostrado una alta efectividad en la reducción de la plaga. Las actividades culturales en este caso, además de estar dirigidas al manejo del cultivo, deben considerar la conservación del controlador en campo (Figura 11-125 y Gráfico 11-5).

359 Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú

0,4

Individuos / hoja

Phyllocnistis citrella 0,2

0,1

0,0 28-01-07

29-03-07

28-05-07

27-07-07

25-09-07

24-11-07

23-01-08

Fecha

[

Huevo

Larva I

Larva II

Larva III

Prepupa

Pupa

]

Gráfico 11-4 Sucesión poblacional de los diversos estados biológicos de Phyllocnistis citrella, en Sayán Lima, sin aplicación de insecticidas.

0,21

Individuos / hoja

Phyllocnistis citrella 0,14

0,07

0,00 18-01-07

19-03-07

18-05-07

17-07-07

15-09-07

14-01-07

13-01-08

13-03-08

Fecha

[

Huevo

Ageniaspis citricola

]

Gráfico 11-5 Población de Ageniaspis citricola en comparación del estado susceptible de control del minador de la hoja de los cítricos.

En el 2006 se realizó la introducción a Perú de Citrostichus phillocnistoides, ectoparasitoide promocionado por los buenos antecedentes en España, aún se encuentra en proceso de observación (Figura 11-126).

Manejo Monitoreo. En árboles menores de cinco años, muestrear 30 brotes de no más de 20 mm largo por cuartel. Realizar esta labor cuanto exista el 25% de plantas comenzando a brotar a fines de verano y otoño. Examinar la presencia de galerías en las pequeñas hojas y repetir el muestreo cuando exista el 50% de brotación.

360

Figura 11-125 Adulto de Ageniaspis citricola y larva del minador momificado con las cámaras pupales del controlador.

SCB - Senasa

SCB - Senasa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 11-126 Citrostichus phyllocnistoides, estoparasitoide del minador de la hoja de los cítricos.

Control. Aplicar aceite mineral al 0,5% si se detecta ovipostura en el 10% de los brotes muestreados. Esta aplicación es de carácter preventivo, ya que la hembra evita oviponer en superficies tratadas con aceite. Se recomienda repetir la aplicación cada 6 a 10 días hasta que la mayoría de los brotes sean mayores a 40 mm. La acción de los enemigos naturales de esta plaga debe ser preservada, evitando el uso de insecticidas (Figura 11-127). La literatura señala ciertas prácticas de manejo como:

b. fertilizar a fines de invierno para promover la brotación en primavera cuando la plaga es escasa o está ausente; y c. evitar la proliferación de chupones.

SCB - Senasa

a. reducir la brotación de fines de verano a otoño, restringiendo la fertilización y el riego durante esta época a lo estrictamente necesario para un crecimiento normal;

Figura 11-127 Liberación y evaluación de la permanencia de los controladores en campo de cítricos en Perú.

361 Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú

Barrrenador del fruto del palto Stenoma catenifer Walshingam (Lepidoptera: Oecophoridae)

Distribución e importancia Esta especie tiene una distribución restringida en México, América Central y el Caribe: Belice, Panamá; tiene distribución restringida en Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua y América del Sur: Colombia y Brasil. En Perú está restringida a las zonas tropicales de Junín y Pasco siempre sobre palto.

Stenoma catenifer, comúnmente deja rastros de su alimentación expulsando sus desechos a través del orificio de entrada y quedan adheridos a la epidermis del fruto. Las larvas se alimentan vorazmente de diferentes partes del fruto de palto, destruyendo inicialmente la epidermis para penetrar en la pulpa que utilizan como alimento. En el interior del fruto, el excremento y las exuvias dejadas por las larvas producen la pudrición del fruto. Las larvas se alimentan preferentemente de la semilla, llegando a convertir los frutos pequeños en desechos alimenticios. En cultivares muy susceptibles, los frutos pueden caer antes de que ocurra alguna infección fungosa secundaria. En ausencia de frutos, las larvas pueden barrenar ramas y matar árboles pequeños. Las infestaciones tempranas causan la caída prematura de frutos debido al daño producido en la base de los frutos. Así mismo se presentan daños indirectos en los frutos por la exudación de savia y por patógenos secundarios a consecuencia de las lesiones causadas por las heridas de alimentación. La dispersión natural es baja debido a que la plaga no es capaz de realizar vuelos a grandes distancias. También puede ser dispersada pasivamente a través del movimiento de frutos infestados (SENASA/DSV/SARVF) (Figura 11-128).

Descripción morfológica Los adultos presentan una cabeza provista de un penacho con abundantes escamas erizadas de color café rojizo. El color de los ojos es negro brillante; sin embargo, se pueden encontrar individuos con los ojos de color gris claro. Antenas filiformes de color amarillo o gris pajizo con 54 segmentos en los machos y 52 en las hembras. Palpo labial largo y extendido hacia arriba, constituido

SCB - Senasa

Daño

Figura 11-128 Daño en fruto de palto causado por S. catenifer.

por tres segmentos cubiertos de escamas de color pálido. El adulto carece de ocelos. El tórax está cubierto por escamas de color marrón claro. En las alas anteriores muestra 25 manchas de color negro con cada una dispuestas en forma de “S” acostada. El frenulum de las alas consta de tres espinas largas y esclerotizadas en la hembra y de una sola espina en el macho. Arellano (1998) señala que la extensión alar es de 3 cm (Figura 11-129).

Biología En regiones tropicales la plaga puede presentarse durante todo el año debido a la disponibilidad de hospederos con diversos periodos de floración. Las poblaciones se incrementan durante el crecimiento vegetativo, alcanzando el nivel más alto antes de la cosecha (CABI, 2005). Acevedo (1972) obtuvo estado adulto a partir de larvas en frutos de palto barrenados. Estos adultos fueron alimentados, mostrando hábitos nocturnos, una longevidad de entre 5 a 7 días, se aparearon 1 a 2 días después de emerger y un periodo de preoviposición de 2 a 3 días. Los huevos son colocados individualmente, en grietas de la epidermis del fruto y en menor grado sobre el pedúnculo. Poco antes de la eclosión, muestra un área de color café, la cual se torna más oscura. La larva neonata es de color blanco cremoso, con la cabeza y el escudo cervical gris claro. La cabeza y el protórax

362 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

(A)

(B)

M. Haddle

(C)

Figura 11-129 Stenoma catenifer: (A) Huevos, (B) larva y (C) adulto.

son más anchos que el resto del cuerpo. A los dos días, se pueden observar manchas de color gris claro en la base de cada seta y puntos pequeños café en todo el cuerpo de la larva. Las patas toráxicas son de color gris claro y bien desarrolladas. Las pseudopatas son cortas. El segundo estadio larval presenta la cabeza y el escudo cervical de color pardo claro. La placa anal del décimo segmento abdominal es de color gris oscuro. Posteriormente, se torna de un color rosado, el cual se hace más notorio en el tercer estadío. La placa anal se esclerotiza totalmente y se torna de color pardo oscuro. El quinto estadio muestra una coloración violeta en el dorso y azul verdosa en el vientre. La larva desarrollada alcanza a medir entre 16.5 y 20 mm. de longitud. La pupa es de tipo obtecta y tiene forma ovalada. Inicialmente presenta una coloración azul verdosa en la parte antero-ventral, la cual se torna de color marrón brillante con el paso del tiempo. Presenta ocho pares de espiráculos abdominales, siete de los cuales son visibles. Presenta una incisión dorsal y transversal entre el cuarto y quinto segmento abdominal. El noveno y décimo se encuentran fusionados. En la parte ventral del quinto y sexto segmento, se observa un par de poros en cada uno. Arellano (1998) señala que la pupa tiene aproximadamente 2 cm. de longitud.

Hospederos Esta especie está restringida a hospederos de la familia Lauraceae. El único hospedero de importancia económica es el palto o aguacate en el estado de fructificación. Esta especie también ha sido reportada en otros hospederos menores como Persea schiedeana, Beilschmedia sp y Chlorocardium rodiedi; sin embargo, no hay estudios de biología del insecto en esos hospederos.

Enemigos naturales Entre las avispas que parasitan a Stenoma catenifer a nivel de huevo se tiene a Trichogramma pretiosum y Trichogrammatoidea annulata. Sin embargo, no hay reportes sobre la eficiencia de estos parasitoides. Arellano (1998) señala que bajo condiciones de la selva central peruana la plaga tiene un eficiente control biológico por un complejo de cinco especies de parasitoides Hymenoptera en larvas y dos especies parasitoides Tachinidae en pupa, siendo los de mayor importancia dos especies del género Apanteles.

363 Plagas en Israel, México, Estados Unidos, Centroamérica y Perú

Manejo

Daño

Control etológico. Uso de feromonas y trampas de luz violeta.

Los acaros succionan con su estilete el tejido de la epidermis de las hojas y frutos tiernos ocasionando una decoloración inicial y bronceado posteriormente llegando a veces a formarse manchas negras. Cuando el limón es atacado, la superficie adquiere un color plateado y apariencia escamosa (Figura 11-130).

Control físico mecánico. Recolectar y enterrar los frutos infestados caídos, a una profundidad no menor de 1 metro. Control químico. Se recomienda para el control químico deltametrina, permetrina y fenvalerato.

En infestaciones severas los brotes tiernos y hojas se tornan cloróticas. Se produce una pérdida fuerte de agua, el fruto se seca, deteniéndose el crecimiento especialmente en los en los frutos en desarrollo.

También se ha propuesto triclorfon (CABI, 2005). Es importante estudiar los efectos negativos a la fauna benéfica.

Moscas Descripción morfológica

Orden: Acarina • Familia: Eryophidae

El adulto es alargado ahusado, de atrás hacia delante, de color amarillento, de 0,1 mm. Presenta solo dos pares de patas cortas, en la parte posterior del abdomen posee dos lóbulos que las utiliza como falsas patas para movilizarse.

Acaro del tostado Phyllocoptruta oleivora (Ashmead) Distribución e importancia Es una de las plagas de mayor importancia económica en el Perú y en muchos lugares del mundo en donde se cultivan cítricos.

6

Índice de incidencia

Phyllocoptrupta oleivora

3

0 06-08-07

05-09-07

05-10-07

04-11-07

04-12-07

03-01-08

02-02-08

Fecha

[

Adulto

]

Gráfico 11-6 Fluctuación poblacional estacional del ácaro del tostado Phyllocoptruta oleivora, en Sayán Lima, sin aplicación de acaricidas.

364 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Biología Presenta dos estados inmaduros similares al adulto. Los huevos son ovipuestos en las hendiduras o depresiones de las hojas y frutos. Una hembra puede ovipositar hasta 30 huevos, los que eclosionan en 4 a 7 días. La primera muda la realiza en 3 a 6 días y completa el ciclo en 7 a 8 días, resultando una rápida multiplicación. Presenta dos elevaciones de sus poblaciones en los meses de septiembre y enero en el 2007 y 2008 respectivamente (Gráfico 11-6).

Hospederos R. Ripa

Citrus spp.

Manejo Control biológico. Se está evaluando el hongo entomopatógeno Hirsutella thompsoni, en el centro de Control Biológico del SENASA Perú (Figura 11-130 y Cuadro 11-5).

Figura 11-130 Fruto naranjo dañado por Phyllocoptruta oleivora (izquierda) y sano (derecha).

Hongos entomopatógenos utilizados en control biológico en Perú. Especie

Plaga que controla

Beauveria bassiana*

Aphis spp



Toxoptera spp

Lecanicillium lecanii*

Aleurodicus spp



Aphis spp



Panonychus citri



Tetranychus urticae



Frankliniella occidentalis



Thrips tabaci



Acaros

Paecilomyces fumosoroseus*

Aleurotrachelus sp

Pochonia chlamydosporia*

Meloidogyne incognita

Pochonia chlamydosporia*

Meloidogyne incognita

Aschersonia aleyrodis***

Dialeurodes citri

* Producción masiva. *** Conservación en su hospedante. (Información 2008: Hilda Gomez Ramirez, CCB, SENASA Perú).

365

Capítulo 12

Galería de imágenes

Figura 12-1 Daño provocado por roce producto del viento en fruto Hass.

F. Gardiazabal

R. Ripa

Lesiones en frutos y hojas de paltos no asociadas a plagas

366

R. Ripa

F. Gardiazabal

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

F. Gardiazabal

Figura 12-2 Daño de heladas en frutos Hass.

F. Gardiazabal

Figura 12-4 Daño de exceso de calor y falta de agua en fruto en crecimiento de Hass.

Figura 12-3 Daño moderado de frió en hoja de palto Hass.

367

F. Gardiazabal

F. Gardiazabal

Galería de imágenes

R. Ripa

R. Ripa

Figura 12-5 Daño provocado por golpe de sol en fruto Hass.

Figura 12-6 Aspecto de los frutos que se desarrollan en contacto con el suelo.

368

F. Gardiazabal

F. Gardiazabal

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

F. Gardiazabal

Figura 12-8 Deformación conocida como “Palta de Palo” en ramilla de palto Hass.

F. Gardiazabal

Figura 12-7 Sobre madurez en frutos var. Zutano, también ocurre en var Bacon, Fuerte y Ettinger.

(A)

Figura 12-10 Fruto con cicatriz de fruto doble abortado.

(B)

(C)

Figura 12-11 Síntomas de deficiencia de Zinc en brote (A) y frutos de Hass (B) muy severa (C).

F. Gardiazabal

Figura 12-9 Fruto con mutación “Quimera”.

369

Figura 12-16 Árbol Hass con toxicidad de cloruro de magnesio aplicado al suelo.

F. Gardiazabal

Figura 12-15 Síntoma de toxicidad de cloruro en hojas de palto Hass.

F. Gardiazabal

Figura 12-14 Síntoma de toxicidad de boro en hoja de palto Hass.

F. Gardiazabal

Figura 12-13 Síntoma de toxicidad de manganeso en hoja de palto Hass.

F. Gardiazabal

Figura 12-12 Síntomas de deficiencia de hierro en las hojas de un brote Hass.

F. Gardiazabal

F. Gardiazabal

Galería de imágenes

Figura 12-17 Daño por fosfito de potasio en follaje de palto. En palto no se ha observado daño en frutos.

370

Figura 12-19 Daño del herbicida Glifosato en tronco de palto joven, mostrando exudación de Floroglucinol.

F. Gardiazabal

R. Ripa

Figura 12-18 Brote dañado por aplicación del herbicida MCPA.

F. Gardiazabal

F. Gardiazabal

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 12-20 Frutos de Hass afectados por el virus del Sun blotch.

Figura 12-21 Daño de Pseudomonas en rama de palto.

371 Galería de imágenes

Figura 12-23 Daño causado por la oviposición de chicharra en ramilla de palto.

R. Ripa

Figura 12-22 Larva de escarabeido que se alimenta ocasionalmente de raíces de palto en vivero.

R. Ripa

R. Ripa

Insectos poco frecuentes y roedores asociados a paltos

F. Gardiazabal

Figura 12-24 Adulto de Chicharra.

Figura 12-25 Daño de roedor en frutos de palto Hass.

372

(A)

(B)

R. Ripa

R. Ripa

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

R. Ripa

R. Ripa

Figura 12-26 Capullo de la pupa A, y pupa B de “Dusty Wing”, en fruto Hass (Orden: Neuroptera, Familia: Coniopterygidae). Las larvas de “Dusty Wing” son depredadoras.

Figura 12-27 Curculiónido adulto, Platyaspistes glaucus, se alimenta muy ocasionalmente de hojas de palto. Ovipone en el extremo de hojas de Chilca y Culen.

373 Galería de imágenes

R. Ripa

Figura 12-29 Manchas amarillentas causadas por golpe de sol en frutos de mandarinos.

R. Ripa

Figura 12-28 Daño provocado por viento que genera roce en naranja Lane Late.

F. Gardiazabal

F. Gardiazabal

Lesiones en frutos y hojas de cítricos no asociadas a plagas

Figura 12-30 Daño por impacto de gotas asperjadas a exceso de presión sobre hojas muy tiernas.

374

Figura 12-35 Daño provocado por herbicida Aminotriazol en Mandarino.

F. Gardiazabal

Figura 12-34 Mutaciones en las dos filas superiores en limones var. Verna.

F. Gardiazabal

Figura 12-33 Fruto naranja Lane Late normal y con mutación denominada “Quimera”.

F. Gardiazabal

Figura 12-32 Manchas y depresiones denominadas “Pata de Rata” en naranja Navelate.

F. Gardiazabal

Figura 12-31 Efecto de frío en la piel de naranja que causa depresiones y posteriormente pudriciones localizadas.

F. Gardiazabal

F. Gardiazabal

MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Figura 12-36 Daño de Clorpirifos aplicado en cuaja en naranja var Spring Navel.

375

F. Gardiazabal

F. Gardiazabal

Galería de imágenes

F. Gardiazabal

Figura 12-38 Síntoma de deficiencia de magnesio en hojas de limonero.

F. Gardiazabal

Figura 12-37 Daño por fosfito de potasio en limón.

(A)

Figura 12-40 Síntoma de deficiencia de hierro en hojas de naranjo.

(B)

Figura 12-41 Frutos de mandarina Fortuna con daño de Alternaria (A) y Pitting (B).

F. Gardiazabal

Figura 12-39 Síntoma de deficiencia de Zinc en mandarino.

376 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

R. Ripa

Insectos poco frecuentes y pájaros asociados a cítricos

(A)

(B)

R. Ripa

1 mm

Figura 12-42 Langostino, Homoptera, familia Cicadellidae. (A) Adulto succionando fruto de naranja. (B) Decoloración observada ocasionalmente en frutos cítricos que podría asociarse a langostino.

377

R. Ripa

F. Gardiazabal

Galería de imágenes

Figura 12-45 Ácaro de la familia Stigmaidae depredando arañita tarsonemidae.

R. Ripa

Figura 12-44 Daño de pájaro en fruto de mandarina.

R. Ripa

Figura 12-43 Daño de roedor en la corteza de limoneros.

Figura 12-46 Ácaros de la familia Tydeidae, no fitófagos, se alimentan de detritus, polen hongos, etcétera.

378 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Insectos y ácaros

Dibujos de Carmen Tobar

Especies de Chanchitos blancos presentes en palto y/o cítricos 1. Phenacoccus sp

2. Planococcus citri

3. Pseudococcus calceolariae

Especies de escamas presentes en palto y/o cítricos 1. Aonidiella aurantii

2. Hemiberlesia lataniae

3. Aspidiotus nerii

379 Galería de imágenes

4. Pseudococcus viburni

4. Hemiberlesia rapax

5. Pseudococcus longispinus

5. Lepidosaphes beckii

380 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Trips del Palto Heliothrips haemorrhoidalis 1. Huevo

2. Larva I

3. Larva II

4. Prepupa

Ácaros presentes en palto y/o cítricos 1. Oligonychus yothersi

2. Panonychus citri

3. Tetranychus urticae

4. Tydeidae

381 Galería de imágenes

5. Pupa

5. Stigmeidae

6. Adulto

6. Phytoseiidae

8. Eriophyes sheldoni

7. Brevipalpus chilensis

382 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Acaro ancho Polyphagotarsonemus latus 1. Huevo

2. Estadio juvenil

4. Macho

3. Hebra

5. Macho transportando a la hembra

387

Bibliografía

Para facilitar el acceso a las referencias bibliográficas, se ha incluido en aquellas que se dispone de dichos documentos “on line”, las direcciones WEB.

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383

Glosario

Áfidos: Insectos pertenecientes a la familia Aphididae del orden Hemíptera, también conocidos como pulgones o piojillos. Afelínido: Diminuta avispita perteneciente a la familia Aphelinidae del orden Himenóptera, normalmente parasitoides de pulgones, chanchitos blancos, mosquitas blancas o escamas. Albedo: Sección de color blanquecino de la epidermis de los frutos del genero Citrus, la que está constituida por una masa gruesa, esponjosa y blanquecina. Áptera: Sin alas. Arrenotóquico: Reproducción asexual (partenogénesis) donde la progenie son todos machos. Artejos: Cualquier pieza o segmento que forme parte de un segmento. Baja toxicidad: Tener un efecto tóxico mínimo sobre organismos no objetivos Bioracional: Tener una influencia negativa mínima sobre el ambiente y sus habitantes (ejemplo, un insecticida bioracional). Amplio-espectro (insecticida): Activo contra una amplia gama de insectos. Bivoltina: Insectos que en un año presentan dos generaciones. Bracónido: Los Bracónidos (Braconidae) son la segunda familia más grande de Himenóptera (perteneciente a la superfamilia Ichneumonoidea) con al menos 40.000 especies; tiene distribución mundial y es diversa en todas las áreas. Son avispas principalmente de hábitos parásitos, el estado larval se desarrolla sobre o dentro del cuerpo de sus presas (otros insectos). Canopia: La “parte verde” de la planta, el “dosel” del árbol.

Capullo: Funda de seda formada por una larva de insecto para la pupación. Carina: Pliegue central que posee una escama (queresa). Casta: Formas en las que se dividen los individuos de las colonias en los insectos sociales. Por ejemplo, la reina, las obreras, soldados, etcétera. Cauda: Cola, cualquier proceso semejante a una cola, últimos segmentos abdominales. Cercos: Son apéndices pares, a menudo sensoriales, en el extremo posterior de muchos insectos; las pinzas de las tijeretas (dermápteros) son cercos modificados. Clasper: Es una estructura (órgano modificado o parte de éste) que utilizan los machos para sostener a la hembra durante el copulación. Coccinélido: Insecto de la familia Coccinelidae del orden Coleóptera, cuyas larvas y adultos son eficientes depredadores de diversas plagas como áfidos y chanchitos blancos. Coleóptero/Coleoptera (español/latín): Orden de insectos que poseen aparato bucal masticador y un par de alas gruesas coriáceas llamadas élitros, que cubren un par de de alas membranosas que permanecen plegadas, bajo las anteriores. La mayoría de los coleópteros son fitófagos, y muchas especies pueden constituir plagas de los cultivos, siendo las larvas las que causan la mayor parte de los daños agrícolas y forestales. Control biológico: El uso de organismos vivos, tales como depredadores, de parasitoides, y de patógenos, para controlar insectos plaga, malas hierbas, o enfermedades. Típicamente involucra una cierta actividad humana. Control biológico clásico: La importación de enemigos naturales extranjeros para el control de plagas introducidas previamente, o nativas.

384 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Control biológico aumentativo o inundativo: Consiste en liberaciones a gran escala de enemigos naturales durante el desarrollo del cultivo con el fin de controlar plagas. Control biológico inoculativo: Consiste en la liberación de una cantidad moderada de enemigos naturales, generalmente temprano en la temporada con el fin que se reproduzcan. Se utiliza frecuentemente en el control de plagas en invernaderos.

Endoparasitoides: Parasito que vive en el interior de su huésped. Endosimbiontes: Individuos de una especie que residen dentro de las células de otra especie, en una asociación estrecha. Entomofauna: Conjunto de todas las clases de insecto de una región. Escapo: Segmento basal o primer artejo de antenas.

Cornículos: Túbulos o proyecciones melíferos erectos o semierectos en cantidad de dos presentes en la parte abdominal dorsal de los áfidos o pulgones.

Escutelo: Escudo de forma triangular de los insectos del orden Hemíptera, dispuesto generalmente en el dorso entre las alas.

Crash: Disminución dramática de la densidad de una especie.

Espiráculos: Las aberturas externas del sistema (traqueal) de respiración del insecto.

Cremaster: El ápice del último segmento del abdomen de la pupa; las espinas terminales del abdomen, que ayuda a la pupa –cuando es subterránea– a desplazarse en la tierra o en pupas arbóreas para suspenderse.

Estadio (etapa de vida): Etapa de un insecto entre mudas sucesivas, por ejemplo, primer estadio es la etapa entre eclosión del huevo a la primera muda. Se utiliza para las etapas en larvas y ninfas de insectos.

Crochets: Cada uno de los elementos cuniculares esclerosados, en forma de gancho y dispuesto en filas o círculo en los espuripedios (falsas patas) de la larva de lepidópteros.

Estafilínido: Insecto de la familia Staphylinidae del orden Coleóptera que incluye especies saprófagas, fitófagas y depredadoras.

Cuarentenario: Cualquier insecto que presente restricciones de ingreso en un país, afectando a los productos hortofrutícolas de exportación, los cuales son rechazados durante las inspecciones fitosanitarias. Depresión de la endogamia (inbreeding depression): La cruza entre individuos emparentados produce disminución de viabilidad y fertilidad en la descendencia. Depredador: Organismo que se alimenta de otro causándole daños totales que pueden acarrear la muerte. Depredador generalista: Enemigo natural que puede depredar un amplio rango de especies. Deutoninfa: Segundo estado ninfal de la metamorfosis de algunos ácaros. Dimorfismo: Diferencia entre individuos de la misma especie, puede ser estacional, sexual o geográfica. Drench: Tratamiento de poscosecha que consiste en sumergir en cera y/o pesticida la fruta. Ectoparasitoides: Parásito que vive sobre su huésped. Edeago: Órgano copulador del macho. Elitros: Son las alas anteriores, modificadas por endurecimiento (esclerotización), de ciertos órdenes de insectos (Coleóptero y Hemíptero). Sirven como protección para las alas posteriores que están inmediatamente debajo y que sirven para ejecutar el vuelo. Encírtido: Insecto del orden Himenóptera en su mayoría parasitoides de áfidos, escamas y mosquitas blancas. Endémico: Se dice de la planta o animal, originaria de un país o región.

Estridulación: Ruido producido por algunos insectos al frotar partes de su cuerpo como alas o patas, ejemplo, grillos. Exocarpio: Capa más externa de la pared del ovario o fruto. Exoesqueleto: Recubrimiento formado por la cutícula, generalmente duro, que envuelve el cuerpo de los artrópodos y que proporciona sostén al cuerpo actuando como un esqueleto. Exuvio: Tegumento abandonado de un estado juvenil en la metamorfosis. Fitness: Éxito reproductivo relativo de un genotipo medido como sobrevivencia, fecundidad u otros parámetros del ciclo de vida. Fitoseídos: Ácaros de la familia Phytoseiidae, orden Acariformes algunas especies son depredadores de huevos, larvas y adultos de insectos y ácaros fitófagos. Foresia: Tipo de relación entre organismos, parecida al mutualismo en la que un individuo transporta a otro o una espora o semilla de otro. Es una relación de beneficio unilateral, pues solo una especie obtiene una ganancia. En este caso la ganancia es el desplazamiento. Gáster: En Himenóptera segmentos abdominales ubicados a continuación del pedicelo. Generación: Periodo desde cualquier estado en el ciclo de vida al mismo estado de vida en la descendencia. Típicamente de huevo a huevo. Genotipo: Conjunto de genes que posee un organismo. Gregarios: Tendencia de los animales a vivir juntos.

385 Glosario

Hemolinfa: Término usado para referirse a la sangre de los insectos, corresponde a un plasma claro, debido que en la mayoría de los casos no posee hemoglobina, que es la que da el color a la sangre de los animales. Hermafrodita: Un organismo que presenta ambos órganos reproductores, femenino y masculino. Himenóptero/Himenoptera (español/latín): Orden de insectos que se caracteriza por poseer dos pares de alas membranosas, con escasas nervaduras y grandes celdillas en éstas, ejemplo, avispas. Hiperparásito: Un parásito cuyo hospedero es otro parásito. Homocigosis: Depresión del vigor debido a consanguinidad producto de una alta tasa de endogamia. Homocromía: Homogeneidad de color. Homóptera: Suborden del Orden Hemíptera que se incluye insectos que se caracteriza por tener un aparato bucal picador chupador y las alas homogéneas, ejemplo, áfidos, conchuelas, escamas y chanchitos blancos. Hospederos: Organismo en el cual otro organismo pasa parte o toda su vida y del que obtiene alimento o protección. Host feeding: Alimentarse de los fluidos corporales de insectos que son parasitados o no parasitadas. Idiobiontes: Parasitoide que se desarrolla dentro del hospedador, encontrándose éste muerto o paralizado. Imagos: El último estado o adulto, en la metamorfosis del insecto, en insecto perfecto. Larva, larvas (pl.): Estado inmaduro entre el huevo y pupa de los insectos teniendo una completa metamorfosis donde adonde los inmaduros difieren radicalmente del adulto (ejemplo, orugas, gusanos). Lepidóptero/Lepidoptera (español/latín): Orden de insectos que en estado adulto poseen alas cubiertas de pequeñas escamas. Ligamaza (= Mielecilla): La descarga líquida azucarada del ano de ciertos insectos (Homóptera) por ejemplo áfidos y escamas. Mesocarpio: Estrata intermedia de la pared del ovario o fruto, ubicada entre el epicarpio y endocarpio.

Ninfa: En la metamorfosis incompleta, el insecto que nace con una forma similar a la adulta. Obtecta: Pupa o crisálida que poseen los lepidópteros en la cual las alas y los apéndices están comprimidos sobre el cuerpo y con casi la mayoría de los segmentos abdominales son inmóviles. Ocelo: Ojos simples de algunos insectos adultos y estados larvales, son estructuras fotoreceptoras (para los estímulos luminosos), que funcionan como órganos de la visión en artrópodos Típicamente hay tres, que forman un triángulo invertido dorsal. Ortóptera/Ortoptera (español/latín): Orden que agrupa a insectos cuyas alas anteriores cubren longitudinalmente el segundo par de alas que se encuentra protegido y doblado, tiene el aparato bucal con mandíbulas y metamorfosis incompleta, ejemplo, saltamontes y katídidos. Osmeterio: Órgano de defensa de las larvas de los papiliónidos, ubicada en el dorso del protórax, este órgano se evierte cuando la larva es perturbada emitiendo un fuerte olor que contiene ácido isobutírico, esta sustancia podría estar dirigida contra moscas y avispas parasitoideas, recientemente se ha sugerido que las secreciones del osmeterio, emiten feromonas de alarma que atraen a las hormigas, estas ayudan a la oruga cuando es amenazada. Ovipositor u ovopositor: En la hembra de los insectos el órgano por el cual los huevos son depositados; son prolongaciones articuladas de los últimos segmentos abdominales. Ovipostura: Todos los huevos que una hembra coloca de una sola vez. Ovovivíparas: cuando los huevos permanecen dentro del cuerpo de la hembra hasta su eclosión. Ésta puede producirse inmediatamente antes de la puesta. Parasitoide: Organismo dependiente de otro durante su vida juvenil, provocándole generalmente la muerte, siendo el adulto de vida libre. Los parasitoides se diferencian de los verdaderos parásitos en que matan a su huésped. Parasitoide secundario: organismo que vive a expensas de un parasitoide y su hospedero. Parénquima: Tejido vegetativo no especializado.

Mesófilo: Tejido parenquimatoso situado entre las epidermis superior e inferior de la hoja.

Partenogénesis: Desarrollo de un insecto, de huevo a adulto, sin la fertilización.

Muda: Cambio periódico del exoesqueleto en los artrópodos.

Pigidio: Últimos segmentos abdominales fusionados del cuerpo de las hembras de la familia Diaspididae.

Multivoltina: Tener más de una generación por la temporada.

Plasticidad (de una población): Es la capacidad de cambio (adaptación) de una población determinada por el genotipo de esta.

Neuroptero/Neuroptera (español/latín): Orden de insectos con cuatro alas reticuladas, aparato bucal con mandíbulas, cabeza libre, tórax escasamente aglutinado y metamorfosis completa.

Polífaga: Que se alimenta de varias especies de organismos.

386 MANEJO DE PLAGAS EN PALTOS Y CÍTRICOS

Postoma: = Cefalotórax (en arácnidos). Pronoto: Pared superior endurecida del cuerpo, a menudo similar a una placa, situada apenas detrás de la cabeza de un insecto. Propatas: Falsas patas presentes en las larvas de lepidópteros y de algunos himenópteros. Prosota: = Cefalotórax (en arácnidos). Protoninfa: Primer estadio ninfal de cuatro pares de patas en la metamorfosis de algunos ácaros, estadio posterior al denominado larva. Protórax: Primer segmento del tórax en el que van insertas el primer par de patas. Pseudopatas: Patas no son articuladas, no son verdaderas patas (en orugas). Pteromálido: Insectos de la familia Pteromalidae del orden Himenóptera, muchos de ellos parasitoides de coleópteros, lepidópteros y dípteros o depredadores de huevos de escamas y conchuelas. Pterotecas: Estructura que darán origen a las alas. Pupa: Estado juvenil de diferenciación generalmente inmóvil, en el que el insecto no se alimenta y que sigue al estado larvario y precede al estado adulto. Rábula: Estructura en la boca de los caracoles que sirve para raspar los alimentos. Queresa (= Escama): Insecto de la familia Diaspididae del orden Hemíptera, que se caracteriza por poseer una cubierta o caparazón. Saco ovígero: Cavidad o estructura en el ovario que contiene o en el cual se depositan los huevos, común en insectos de algunas familias del orden Hemíptera.

Semioquímicos: Sustancias químicas que transmiten informaciones entre organismos, produciendo una respuesta de comportamiento o fisiológica, la cual puede ser ventajosa o desventajosa. Sésil: Estructura que se prolonga sin una base o pedicelo. Setas: Estructura hueca, delgada como pelo; o gruesa “como cerda, movible en la base. Se desarrollan a partir de la epidermis. Sírfido: Insectos de la familia Syrphidae del orden Díptera, cuyas larvas son depredadora de chanchitos blancos y áfidos. Taquínido: Insectos de la familia Tachinidae del orden Díptera, las larvas son parasitoide de diversas especies de insectos de importancia agrícola. Telitóquica: Tipo de reproducción por partenogénesis donde todos los descendientes son hembras. Trofalaxis: Esto es una alimentación de boca en boca, en el cual los aparatos bucales de los insectos entran en contacto y traspasan entre ellas nutrientes o sustancias de reconocimiento como las feromonas. Puede tener lugar entre dos adultos o entre adulto y larva. Umbral económico: Densidad de una plaga a partir de la cual los daños que se ocasiona son superiores al costo de las medidas de control que los evitaría. Uncus: Estructura en forma de gancho curvado, que forma parte de la genitales externa de machos del orden Lepidóptera. Univoltina: Especie con una sola generación anual. Vivípara(o): Especie que se multiplica por medio de crías vivas y cuyos embriones se forman en el interior del cuerpo materno pudiendo nutrirse en éste.