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• Adan Mtz Garcia

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LA MAESTRIA DEL AMOR. Este libro es muy interesante porque nos enseña a poder comprender la vida para llegar a ser felices, porque en ocasiones las personas son las que influyen mucho en nuestras vidas, o llegamos a creer cosas que no somos. Desde que inicie a leer el libro me hizo reflexionar mucho, porque siempre estamos en espera de algo importante pero sin darnos cuenta llega antes de que nosotros tengamos noción de que en realidad llego, y es totalmente inesperado. El doctor Miguel Ruiz autor de este libro nos da enseñanzas de que cada persona tiene creencias y que nadie las puede cambiar, que somos tan diferentes a los demás y que cada uno tenemos el poder de hacer lo que creamos que es conveniente; aunque a veces el modo en que pensamos, el modo en que sentimos y el modo en que actuamos se vuelve algo muy rutinario que dejamos de prestar atención a todo lo que hacemos. En ocasiones suele pasar que tenemos heridas tan graves que nadie sabe y que las ocultamos, pero debemos afrontarlas y no aparentar que no nos encontramos en esa situación, es necesario resolver de manera que nos sintamos de nuevo como los niños que éramos, sin preocuparnos, solo jugar, bailar y vivir la vida de una manera que no nos importe el futuro si no el presente. Por eso los momentos más felices de nuestras vidas son aquellos en los que jugamos como si fuéramos niños, cuando cantamos y bailamos, cuando exploramos y creamos con un solo propósito el divertirnos. El miedo siempre suele hacerse presente en nuestras vidas y nos impide a crecer y ser las personas que en realidad somos. El autor nos pone casos de la vida, que cuando perdemos esa inocencia de cuando éramos niños es porque nos bloquean los padres y no dejan fluir el amor que sentimos a pesar de sentirlo aunque no lo comprendamos, regularmente reaccionamos de un modo determinado, una forma particular y guardamos nuestras emociones haciendo que cambie nuestra forma de vivir. Hay miedos que tenemos desde pequeños pero se debe a que fuimos experimentando injusticias, haciendo que nuestro miedo aumentara, pero debemos saber que la vida nos trae exactamente lo que necesitamos y debemos decir que el sufrimiento es como un regalo, pero necesitamos abrir los ojos para limpiar el veneno que tenemos para sanar nuestras heridas y aceptarnos a nosotros mismos. Nunca debemos dar la felicidad de nosotros y ponerla en manos de otra persona, porque esa felicidad nosotros la creamos y si la ponemos en otro lugar que no sea el de nosotros no resultara. La felicidad proviene de nuestro interior y es resultado de nuestro amor, cada uno de nosotros es responsable de nuestra felicidad. Hay veces que cometemos el error de hacer promesas cuando estamos conscientes de que somos incapaces de cumplir y entonces nos preparamos a fallar. Primero

hay que ser felices con nosotros mismos, y debemos de dar felicidad a otros sin que nosotros seamos felices. En si se trata de que aprendamos a que la felicidad solo proviene de nuestro interior, de ninguna cosa o persona te la puede dar, son varias historias que cuenta el doctor y que sin duda alguna te enseñan a mejorar como persona o saber que necesitas para encontrar tu felicidad, como en la historia que está en el capítulo III del libro del hombre que no creía en el amor y que duro mucho tiempo para que en realidad creyera en él, pero sin darse cuenta el obtuvo la felicidad que necesitaba pero le dio la felicidad de el a otra persona, sabiendo que cada uno es responsable de la felicidad y jamás debemos responsabilizar a otra persona de nuestra propia felicidad. Podemos mejorar nuestras relaciones con las personas que nos rodean, porque hay creencias que se basan tanto en el miedo que hacen que el amor no prevalezca en nosotros, sino que origine conflictos y sufrimiento en nuestras relaciones. La felicidad solo la creamos desde nuestro interior y es el resultado del amor, pero cuando estemos conscientes de que ninguna otra persona nos puede hacer feliz más que nosotros mismos habremos conseguido una maestría como lo hablo el autor. El libro nos da algunas enseñanzas para sanar las heridas que hemos acumulado con el paso del tiempo, principalmente las emocionales, pero nos enseña que debemos recuperar la libertar que nos pertenece para reencontrar la alegría como la parte esencial de nuestras relaciones amorosas. La domesticación que se menciona desde el inicio nos da a la idea de rechazarnos a nosotros mismos, o sea la educación que percibimos cuando somos unos niños y nos impiden cosas que queremos hacer, y que regularmente buscamos el amor en otras personas aunque no debe ser así si no encontrarlo en uno mismo y nos dice como perdonarnos a nosotros mismos y a los demás. Esta maestría que nos enseña el doctor Miguel Ruiz es la única vía para lograr la felicidad, aunque no puede resultar fácil acercarnos a ella pero siempre y cuando nos propongamos a hacerlo sin buscarlo en otra parte. La mayoría no estamos conscientes de que estamos llenos de tantos sentimientos negativos que nos causan tantos miedos, manifestándose en reacciones y sensaciones que nos alejan del amor. Nos menciona que la vida no es otra cosa más que un sueño, y vivimos en algo que pensamos que todo lo que sabemos es verdad para uno mismo, no para los otros, ya que no todos tenemos las mismas opiniones. Se trata de comprender, y asumir cada uno de las cosas que menciona, para controlar emociones, desechar el veneno emocional, encontrar la paz internamente, aprender a sanar heridas que nos hayan lastimado, perdonarnos así

mismo para luego perdonar a los demás, ligarnos a todo lo positivo que se encuentra a nuestro alrededor, valorar y dar importancia a lo más importante del gran sueño de la vida para encontrar la maestría del amor que nos ayudara a ser felices.

Ensayo sobre el libro: LA MAESTRÍA DEL AMOR.

Introducción:

Este ensayo está elaborado con base en el libro original del Dr. Miguel Ruiz. Escogí el tema de este libro ya que me ayudo a resolver problemas emocionales; encontré en el, las alternativas para sanar las heridas emocionales, recuperar la libertad y reencontrar la alegría como parte esencial de las relaciones amorosas.

La lectura de esta obra nos hará comprender:

° Por qué nuestra falsa idea de “perfección” nos daña y nos lleva a rechazarnos a nosotros mismos. ° Como la guerra por tener el control destruye las relaciones. ° La manera de dejar de buscar el amor en otras personas y cómo debemos encontrarlo dentro de nosotros. ° Aprender a dar amor sin esperar recibir nada a cambio. ° Cómo perdonarnos a nosotros mismos y a los demás nos dará paz.

Para mí este libro significa más que una bonita lectura, es como un manual que en el momento que lo lees y comprendes, decides dejarlo a un lado y comenzar a practicarlo. Hay momentos en mi vida en el que parece que olvido lo que este libro me enseño, así que lo tomo de nuevo y comienzo a leerlo y cada vez que lo hago aprendo algo nuevo; comprendí que no se trata de aprender más si no de comenzar a practicar lo que comenzaba a olvidar. Recomiendo a los lectores que lean este libro con mucha calma, detenerse cuando se encuentren con alguna palabra que desconozcan e investiguen su significado, para lograr comprender así el mensaje del autor.

Desarrollo: Para mi es una guía práctica para conocerse uno mismo, aceptarse, amarse, valorarse, perdonarse y vivir felizmente con el único propósito de acercarte al verdadero amor, Dios.

Vivimos una era de peligro y de maldad, hacia donde uno voltee hay inseguridad, injusticia, odio y mucha falta de amor. Las guerras, el narco tráfico, el secuestro, la extorción, hoy por hoy son el pan nuestro de cada día, son el producto de toda la maldad que hay en las personas del veneno que llevan dentro, y del cual no encuentran otra forma de deshacerse de el, más que arrojándolo hacia afuera, y, ¿adivina a quien?, pues a quienes están o estamos, lo más cerca de ellos. Uno solo da lo tiene, y lo que tienes dentro, es lo que sale a relucir afuera, no hay mas, no es ciencia, es una práctica que hacemos y esta ciento por ciento comprobada. Eres lo que crees que eres; o más bien, lo que has aprendido ser, con el paso del tiempo, por enseñanza de los demás. Desde el momento en que nacimos, no elegimos venir a este mundo, no elegimos a nuestros padres, ni a nuestros hermanos, ni nuestro nombre, país,religión,sociedad en la que vivimos; nada. Tampoco elegimos crecer con miedo, que es una enfermedad mental que se manifiesta a través del enfado, del odio, de la tristeza, de la envidia y de la hipocresía. En general de todas las emociones que provocan el sufrimiento del ser humano. Pero no somos culpables de adquirir esta enfermedad, fueron los adultos quienes nos la contagiaron y de esta manera la vamos trasmitiendo a nuestros hijos. Las personas vivimos con miedo a ser heridas y por lo tanto debemos protegernos formando una “barrera” o “escudo protector”, para evitar el dolor; este escudo es un gran sistema de negación. En este sistema mentimos y aprendemos a hacerlo tan bien que hasta nos mentimos a nosotros mismos, e incluso nos creemos nuestras propias mentiras. Llevamos una “mascara social” porque resulta demasiado doloroso vernos a nosotros mismos o permitir que otros que otros nos vean tal como somos en realidad. El miedo a no ser bastante buenos para otra persona es lo que hace crear una imagen falsa para ser “aceptado”. De pequeños aprendemos que la opinión de los demás es importante, y estas tienen gran poder sobre el comportamiento de las personas, por ese motivo crecemos con la necesidad de ser alagados constantemente. En nuestra mente hay una una parte, creada por nosotros, que siempre está juzgando. El juez juzga todo lo que hacemos, lo que sentimos, lo que no sentimos. Nos juzgamos a nosotros mismos de manera continua y juzgamos a los demás basándonos en nuestras creencias y en nuestro sentido de justicia y de la injusticia. La otra parte de la mente, que es la juzgada, es la víctima. Esa parte de nosotros dice:” Pobre de mí”. En nuestra mente se forma una especie de programa, basado en todas las falsas creencias que aprendimos de los demás. De todas las mentiras que nos creemos de nosotros mismos, esta es la más grande: perfección, a fin de aceptarnos, porque, nunca seremos perfectos.

Debido a esta imagen nos sometemos a un alto nivel de maltrato personal, o buscamos a alguien que nos maltrate ya que no nos perdonamos por no ser lo bastante buenos. Y aun que la cantidad de maltrato que estas dispuesto a aceptar tiene un límite, debes saber que no hay nadie en el mundo entero que te maltrate más que tú mismo. El límite de maltrato que toleras de otras personas es exactamente el mismo al que te sometes tú. Si alguien te maltrata más de lo que tú mismo te maltratas, te alejas, corres y te escapas de él. La felicidad nunca proviene del exterior; si tomas tu felicidad y la pones en manos de alguien, mas tarde o más temprano, la romperá. Si le das tu felicidad a otra persona, siempre, siempre podrá llevársela con ella. Y como la felicidad solo puede provenir del interior y es resultado de tu amor, solo tú eres responsable de tu felicidad. No importa cuánto ames a alguien, nunca serás lo que esa persona quiere que seas. Todo ser humano tiene un sueño personal de la vida y ese sueño es completamente diferente al de otra persona. En una relación podemos fingir, que somos iguales, que pensamos de la misma manera, que sentimos lo mismo, pero es del todo imposible. Hay dos soñadores con un sueño. Cada soñador soñara a su manera. De la misma manera que el cuerpo está compuesto de células, tus sueños se componen de emociones. Existen dos fuentes: el miedo y el amor. En el amor no existen obligaciones. El miedo está lleno de obligaciones. El amor no tiene expectativas. El miedo está lleno de expectativas. Cuando teneos miedo esperamos que al dar algo, recibiremos algo a cambio. Esa es la razón por la que el miedo provoca dolor y el amor no. El amor se basa en el respeto. El miedo no respeta nada. El amor es generoso, el miedo es egoísta. El amor es incondicional; y el miedo está lleno de condiciones. En toda relación hay dos mitades. Tú eres una mitad y la otra mitad es tu pareja. De esas mitades, eres responsable solo de tu parte; no eres responsable de la otra mitad. Intentar responsabilizarte, de cualquier manera de la mitad de la otra persona te lleva a fracasar en una relación. Si la otra persona no es lo que tú quieres, no estás obligado a permanecer ahí, si lo haces no te estás respetando a ti mismo ni a la otra persona. No podemos cambiar a nadie, si uno cambia, es porque quiere ser feliz y dejar de sufrir. Con la otra mitad podemos compartir, disfrutar, crear juntos el sueño más maravilloso sin tener expectativas. Para comenzar a cambiar necesitamos cobrar conciencia de lo que estamos viviendo. Así te digo que el amor no es un concepto; el amor son las acciones. El amor en acción solo genera felicidad. El miedo en acción solo provoca sufrimiento.

Yo creo que el único camino para vivir el amor es practicarlo. No necesitas justificar tu amor, no necesitas explicar tu amor; solo necesitas practicarlo. Creo también que lo más difícil para una relación es encontrar a la persona correcta; y para encontrarla debemos de explorar y de arriesgarnos. Encontrar a la persona correcta, implica a la vez que nosotros también lo seamos para ella. No puedes culpar a otra persona de no ser lo que tú quieres que sea, simplemente no debes estar con ella. Para tener una relación maravillosa, primeramente, debes saber qué es lo que quieres, como lo quieres, y cuando lo quieres. Tienes que saber exactamente, cuales son las necesidades de tu cuerpo, de tu mente, y que se adapta bien a ti. Es posible amar a cualquiera; pero para tratar con una persona a diario necesitaras a alguien cuya forma de entender la vida sea la más próxima a la tuya. Esa persona no necesita ser exactamente como tú; bastara con que ambos sean como una llave en la cerradura: una unión que funciona. Necesitas ser sincero contigo mismo y sincero con todas las personas. Proyecta lo que sientes que eres verdaderamente y no finjas ser lo que no eres. Tampoco inventes en la gente lo que no tiene, no trates de engañarte a ti mismo. Mira lo que tienes ante ti; no te siegues ni finjas ver lo que no esta ahí. No niegues lo que ves solo por conseguirlo si es que no se adapta a tus necesidades. Conclusión: Concluyo invitándote a leer este libro que logro hacer en mi un cambio, no te sigo hablando de el, porque en este momento me pongo de pie para empezar a practicar lo que de nueva cuenta aprendí. Olvida lo que dije, solo ve, y ama…

http://conzuchinita.blogspot.mx/2011/12/ensayo-sobre-el-libro-la-maestria-del.html

¿QUE OPINO DE ESTE LIBRO? Creo que ya sabemos todo lo que podemos leer aquí, pero no está de más que nos recuerden ciertas cosas.

Cuando llegó a mis manos la relación de pareja no es algo que me preocupara en absoluto, yo lo enfoqué hacia otras relaciones, con mi hija , mis hermanos o mis amigos, y tengo que reconocer que me ayudó bastante. No es un libro para leer de un tirón, ni para guardarlo después de leído, es una guía una forma de aprender o recordar lo que olvidamos casi a diario, amarnos y respetarnos más. No es nada fácil llevar a la práctica los consejos del libro, yo casi diría que es imposible, pero solo con intentarlo ya habremos conseguido mucho. Es cierto que un libro no te abre los ojos, pero una vez que los has abierto sea por el motivo que fuera si que puedes encontrar ayuda en él. Yo he seguido las reglas, he abierto todas las heridas, desde la más antigua, casi me ha costado la salud, las he revestido de una verdad que nunca había querido ver, lo he perdonado todo, lo más difícil es perdonarse a sí mismo y estoy llenando cada espacio de mi vida y de mi mente de amor, hacia todo y todos y me siento más feliz y mejor persona. Es un libro que recomiendo para las personas que se sientan inseguras o estén sufriendo, para quienes sientan que su vida no funciona como debiera o que sus relaciones con sus parejas, padres, hijos o amigos son susceptibles de mejorar.

http://www.ciao.es/La_Maestria_del_Amor_Miguel_Ruiz__Opinion_2011999

No nos resulta difí,cil imaginar que todas y cada una de nuestras relaciones interpersonales podrí,an mejorar. Porque son muchos los supuestos y las creencias que, basados en el miedo, socavan el amor y originan conflictos y sufrimiento en nuestras relaciones. "La felicidad solo puede provenir de tu interior y es el resultado de tu amor. Cuando te des cuenta de que ninguna otra persona puede hacerte feliz y que la felicidad es el resultado de tu amor, habrá,s conseguido la má,s importante de las maestrí,as." La maestria del amor nos proporciona alternativas para sanar nuestras heridas emocionales, recuperar la libertad que nos pertenece por derecho y reencontrar la alegrí,a como parte esencial de las relaciones amorosas. La lectura de esta obra nos hará, comprender --por qué, la "domesticació,n" y nuestra idea de la perfecció,n nos llevan a rechazarnos a nosotros mismos --por qué, la guerra por mantener el control destruye lentamente la mayorí,a de las relaciones --por qué, buscamos el amor en otras personas y có,mo debemos encontrarlo dentro de nosotros --y, finalmente, có,mo perdonarnos a nosotros mismos y a los demá,s. La maestrí,a del amor es la má,s alta de todas las maestrí,as y la ú,nica ví,a para lograr la paz y la felicidad, pero no siempre es fá,cil acercarse e ella. El Dr. Ruiz nos indica el camino.

http://www.quelibroleo.com/la-maestria-del-amor Solo tu eres el responsable de tu felicidad. jamas podemos responsabilizar a otra persona de nuestra propia felicidad. leelo no te arrepentiras.