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• Pamela Martínez

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LOS REINOS DE PAN Octavio paz nos dice que el erotismo en una necesidad existencial como la ficción, que la imaginación es el refugio que permite crear el erotismo y la ficción para así podernos proteger de la soledad. La sexualidad, erotismo y amor son tres cosas importantes de la realidad donde el sexo es la fuente primordial. El erotismo es un fenómeno dialectico capaz de brindarnos vida o muerte. Cuando escuchamos decir a alguien la palabra “erotismo” se nos viene a lamente sexo y amor, esto se debe gracias a los medios de comunicación, han comercializado tanto el sexo y la sexualidad que nos hace pensar eso. Sin embargo, hay gente que todavía piensa que es ofensivo hablar sobre la práctica sexual. Cuando buscamos la definición de erotismo es poca la información que se tiene sobre el tema, Odette y Sawan tenían diferentes definiciones, para ella era cierto placer erótico con cierta persona y para él un sentimiento terrible y doloroso. La definición más completa se define como comunicación y actividad en pareja o individual, donde intervienen distintas emociones, sentimientos y actitudes que conllevan a la estimulación genital y el orgasmo en búsqueda del placer sexual. Su origen es del griego eros hace referencia a eros dios de la sensualidad, el deseo y placer sexual, el concepto si se refiere a las conductas que incitan a la actividad sexual, tales como besos, abrazos, masturbación, etc. Yo considero que el erotismo es una necesidad humana, un placer que puede limitarse solo a la estimulación física y mecánica o extenderse según los límites de nuestra imaginación.

Hay miles de religiones con diferentes conceptos sobre el erotismo y la represión sexual. Cada día aparece una nueva practica y desaparece otra, sin embargo, todas están compuestas por dos términos, la abstinencia y la licencia. Al hablar de abstinencia nos referimos a la renuncia voluntaria de complacer un deseo de ciertas actividades corporales placenteras. El budismo y el cristianismo están de acuerdo con lo mismo, la unión de lo sagrado y la sexualidad. Los movimientos eróticoreligioso inspirados por sueños unieron la religión, el erotismo y la política. La religión que más me llamo la atención fue la de los gnósticos, que ven el semen y la menstruación para su consumo para reintegrarlos al gran todo, ya que creían que este mundo era para la creación de algo perverso. El erotismo religioso en cualquier religión se invierte radicalmente en el proceso sexual. El erotismo se puede presentar en dos figuras, la del religioso solitario y la del libertino. Ambos niegan la reproducción y son tentativas de salvación o liberación personal frente a un mundo caído, perverso o irreal. Sin embargo, en el judaísmo no aparece el desprecio al cuerpo ya que en su primer mandamiento bíblico dice: creced y multiplicaos. Tal vez se debe a que es la religión de la reencarnación de dios en un cuerpo humano. En el oriente el culto a la castidad comenzó como método para alcanzar la longevidad, para ellos ahorrar semen era ahorrar vida, de igual manera sucedía con los fluidos sexuales de la mujer, cada descarga seminal y cada orgasmo era una pérdida de vitalidad.

En el antiguo testamento existen muchas historias eróticas, la mayoría son trágicas, algunas han inspirado textos memorables, un ejemplo podría ser la historia de Ruth que le sirvió de ayuda a Víctor Hugo para escribir Booz endormi un poema francés. Booz se había acostado, rendido de fatiga; Todo el día había trabajado sus tierras y luego preparado su lecho en el lugar de siempre; Booz dormía junto a los celemines llenos de trigo. Ese anciano poseía campos de trigo y de cebada; Y, aunque rico, era justo; No había lodo en el agua de su molino; Ni infierno en el fuego de su fragua. Su barba era plateada como arroyo de abril. Su gavilla no era avara ni tenía odio; Cuando veía pasar alguna pobre espigadora: “Dejar caer a propósito espigas” -decía.

Esta colección de poemas de amor profano, una de las obras eróticas más hermosas que ha creado la palabra poética que no para de alimentar la imaginación y la sensualidad de los humanos hace miles de años.