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• Wilfredo Mauricio Benavides Caceres

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EL LIDERAZGO CRISTIANO DESARROLLO 1.1. Definición de liderazgo 1.1.1. Punto de vista secular Según el diccionario de la lengua española, la palabra líder proviene de una voz inglesa “leader” que significa dirigente o jefe. Por tanto esta es la connotación que se usa en nuestra cultura. Es alguien que dirige, coordina, toma iniciativas. Para Roberto A. Orr, “el líder es una persona que se constituye en un ejemplo y que posee una visión influenciadora y que transfiere tal visión; influenciando, equipando, entrenando, instruyendo, animando, capacitando, facilitando, fortaleciendo, confiando, desafiando, inspirando, motivando, edificando, desenvolviendo a otra persona o grupos de personas, e intenta lograr la visión el propósito, el objetivo y las metas establecidas” Para Eugene Habecker “Un líder es una persona que sirve como modelo y posee una visión precisa y que transfiere esa visión al influenciar, desafiando, motivando, transmitiendo energía o facultando o entrenando a otra persona o grupo de personas para lograr el propósito establecido de tal manera que se haga a esta persona o grupos de personas a ser exitoso y realizado como miembros importantes del equipo” Para John Maxwell “el liderazgo es influencia…nada más, nada menos” 1.1.2. Punto de vista cristiano Guillermo Brown destaca el uso de la palabra ministro (siervo) que usaron los no conformistas del siglo XVIII en Inglaterra para diferenciar entre sus líderes y el clero de la Iglesia Anglicana lo cual perdura hasta hoy en muchos lugares todo en su esfuerzo de destacar el verdadero carácter del liderazgo cristiano.

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Para Eugene B. Habecker “El líder es primeramente el siervo de Jesús que rechaza creer en la filosofía idólatra de las metas y necesidades de la organización que requieren poner a un lado los mandamientos bíblicos para el discipulado”. Para la Sociedad Bíblica Boliviana, “el líder es aquella persona humana, con limitaciones, con necesidades, con problemas y traumas; que Dios llamó para acompañar a otros, para animar a cumplir el propósito del Reino de Dios en esta tierra. Este líder conoce las limitaciones de otros, porque también él tiene limitaciones familiares, de trabajo y ministerio. Sus prioridades principales son buscar primeramente el Reino de Dios, llevar el evangelio primeramente en su casa y después colaborar en la iglesia sin creerse mayor ni menor que otros” Desde todo punto de vista el liderazgo cristiano tiene una connotación de siervo donde los valores de superación están por encima del servicio y bienestar de otros.

1.2. Estilos de liderazgo Guillermo I. Catalan y otros autores identifican seis estilos o tipos de líderes que a continuación describimos cada una de ellas. 1.2.1. Líderes Pacotilleros Juan Pérez es un ejemplo clásico de este tipo de líder. No tiene nada planificado. Todo es resultado de unas cuantas ideas locas que surgieron como inspiración a causa de la presión del tiempo ya que la reunión estaba casi encima, no tuvo tiempo para planear la actividad que se realizaría ese fin de semana. De manera que como las 4:00 p.m. se acordó que tenía una actividad juvenil dentro de las próximas tres horas. Se sentó, pensó qué hacer, vinieron algunas ideas

se podía

entre ellas una actividad musical recreativa. Hubo mucha

música, bastantes juegos y todos quedaron contentos.

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Este es un tipo de liderazgo que con relativa frecuencia encontramos entre las comunidades. Tristemente, no se logra mucho, por no decir, no se logra nada. 1.2.2. Líderes Parloteros Alejandro René fue elegido líder porque tenía muchas ideas que siempre estaba sugiriendo cosas para realizar. Por cierto cuando los programas no eran tan buenos comienza a parlar con otros e incluso en sesiones administrativas comienza a criticar la poca creatividad de los líderes en la planificación de las actividades. Sin embargo cuando llegó a ser líder de pronto se dio cuenta que las ideas estaban, pero no sabía como ejecutarlas. Quiso transmitir a otros, e incluso daba ideas de cómo hacerlo, pero no resultaba. Esto lo desmoralizó y como resultado de ello abandonó su carrera a mitad de camino. 1.2.3. Líderes globos Sergio Choque era un líder inflado. Sus amigos siempre pensaban que él sería un buen líder. Tenía una personalidad atractiva, se expresaba bien, era de buena presencia, también tenía buenas ideas. Sus amigos le empujaban a que fuera líder. Y lo hizo pero fue un fracaso. Porque siempre tenía que luchar con la imagen que los demás tenían de él. Sus fuerzas no fueron suficientes para mantener la imagen que se esperaba, y terminó por quebrarse. Este tipo de líderes, que de vez en cuando surgen en nuestro medio, tampoco son de mucho beneficio, porque en el liderazgo debe haber vocación y no sólo el entusiasmo. 1.2.4. Líderes Mesiánicos Francisco Javier era el hombre que podía salvar el ministerio. Era tan talentoso que en su sola persona él podía “ser todo”. Solo lo que él hacía era bueno. Este líder si se metía en la música la música era buena, si se metía en el área de evangelismo entonces había visitas, si se metía en la recreación, entonces los sociales eran excelentes. Cualquier cosa en que él intervenía producía resultados maravillosos.

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Cuando un líder que puede hacerlo todo, está metido en todo, no da la oportunidad a que otros se desarrollen en sus capacidades, ni da lugar a que otros sean colaboradores. 1.2.5. Líderes Inciertos Rodrigo Alberto es un líder bonachón, es decir, aquel que da la impresión de estar dispuesto para cualquier cosa que se le solicite, pero cuando llega la hora del vamos, entonces es el gran ausente. Este tipo de líderes están dispuestos, pero no disponibles, tienen la mejor disposición para servir, pero no tienen la disposición para invertir tiempo en ese servicio. Cuando uno se enfrenta a este tipo de liderazgo, uno no sabe si puede contar o no con ellos.

1.2.6. Líderes Siervos Este líder tiene un claro concepto de si mismo, como de su tarea. Reconoce que Dios le ha capacitado con done, talentos y habilidades para desarrollar su ministerio. Siente el compromiso de haber sido elegido como un llamado de Dios a servir. Además, por sentir esa vocación, se siente responsable ante Dios por lo que ha de realizar, y por lo tanto, reconoce que su llamado es sobre todo, para servir. Bajo esta visión asume la responsabilidad como líder con el compromiso de ser un mayordomo integral, que va inspirando a otros a servir. Busca que su liderazgo sea transparente ante los demás, y procura con mucho discernimiento, envolver a otros en la tarea que se han propuesto. Es el líder que está dispuesto para aconsejar, orientar, apoyar y guiar a otros en las tareas encomendadas. Es el líder que sin ser superman muestra su calidad a partir de lo que está haciendo. Es el líder que tiene autoridad en el grupo porque la ha logrado a causa de su vocación de servicio. 1.3. Modelo bíblico de liderazgo

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El modelo bíblico de liderazgo es el trabajo de siervo inspirado en el modelo de las enseñanzas y acciones de Jesús.

1.3.1. Servicio a los demás El líder siervo tiene una vocación y su propio valor de un servidor, un agente de cambio no uno más del montón. Esta consciencia de servidor hará reconocer a la persona la fidelidad de las exigencias espirituales que deben marcar su vida de líder. En el servicio cristiano el mismo maestro es el siervo aunque en el mundo en todas las culturas el maestro y el siervo están separados por un enorme golfo. En el Reino de Dios el maestro y el siervo son uno. Los líderes cristianos sirven, no a sus propios intereses sino a los intereses de los demás, y finalmente a los intereses de Dios (Fil. 2:4). Este principio debiera liberar al líder de un individualismo excesivo y un aislamiento en extremo. Cuando miramos de cerca las enseñanzas de Jesús acerca del liderazgo de siervo, debemos examinar el conocido pasaje Juan 13:3-5. Aquí vemos a Jesús lavando los pies de los discípulos que dicho trabajo era tarea de los sirvientes. Cuando Jesús, el jefe se inclinó para lavar los pies de sus discípulos, él les estaba diciendo que deberían estar dispuestos a ser humildes en su servicio hacia otros. El aspecto de siervo en el liderazgo implica tener un corazón de compasión, sensibilidad y bondad hacia otros. En el corazón de un siervo no hay lugar para la ambición egoísta, auto gratificación, abuso de poder, falta de respeto, degradación ni manipulación. Un buen líder cristiano usará el poder sabiamente no abusará de él, para el líder cristiano no hay poder legítimo a menos que sea delegado por Cristo. 1.3.2. Mayordomía de bienes La figura de mayordomo en el liderazgo en las escrituras se relaciona al tipo de liderazgo orientado hacia el resultado (Luc. 12: 35-48). Esto significa que él está básicamente comprometido a dar cuenta justa del trabajo confiado a su cuidado por su Maestro. El líder mayordomo usa la autoridad y los recursos delegados para producir resultados que

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beneficien a otros. Debe ser un buen mayordomo de sí mismo, tanto como de los dones espirituales, talentos, habilidades y destrezas de los seguidores.

Todo líder debe reunir ciertas cualidades indispensables en cuanto a uno mismo, a los demás y en cuanto a Dios, que a continuación describimos algunas de ellas. 1.4.1. En cuanto a uno mismo Debe tener: - Visión Es una de las cualidades indispensables del liderazgo, “donde no hay visión, el pueblo perece” (Pr. 29: 18). La visión consiste en establecer una imagen mental de un estado futuro posible y deseable de una organización, equipo o individuo. Como resultado preparamos planes de acción que nosotros creemos que están en búsqueda de ese futuro creado. Esta visión es importante en el liderazgo porque permite capturar la imaginación, proporciona energía y estimula el espíritu de los participantes en todos los niveles de la organización. Una visión de liderazgo dentro de una comunidad debe sintetizar, integrar, articular y transformar todas las visiones separadas en una visión general de modo que las personas con interés se hacen dueños de ella y se unen alrededor para cooperar efectivamente. Un buen líder se asegura de que esta visión es una realidad en todos los niveles de la organización. Es como el aire que la organización respira. Si el aire de la visión se contamina, los pulmones de la organización no pueden bombear aire limpio y saludable. - Autodisciplina

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La autodisciplina es la decisión de lograr lo que realmente se quiere, haciendo las cosas que uno en realidad no quiere hacer. Los grandes hombres la primera victoria que ganaron fue la victoria sobre sí mismos… la autodisciplina fue lo primero en todos ellos. Ellos entendieron que su responsabilidad número uno era su propia disciplina y desarrollo personal si no hubieran dirigido a sí mismos no hubieran podido dirigir a los demás. Una gran persona dirigira una gran organización, pero el crecimiento solo es posible cuando el líder está dispuesto a “pagar el precio” por ello. Muchos líderes potencialmente talentosos se han rehusado “pagar el precio” y como resultado encontraron que los métodos cortos no dan resultado a largo plazo.Esto es lo que Edwin Markham tiene que decirnos con respecto al valor humano. Somos ciegos hasta que vemos Que en el plan humano Nada es digno de hacerse Si aquello no hace al hombre ¿Porqué construir ciudades gloriosas Si el hombre anda sin construirse? En vano construimos el mundo, Si el constructor no es construido. La auto disciplina cubre varias áreas incluyendo la relación de uno mismo con Dios a través de la oración, estudio de la Biblia etc. Jesús fue un líder muy disciplinado de modo que podía apartarse de las presiones de la vida pública y pasar un tiempo de más calidad a solas con su padre para refrescarse a sí mismo, para restaurar sus fuerzas, para renovar sus reservas a fin de continuar su ministerio. El líder cristiano genuino debe someterse a una autodisciplina organizando bien su vida y su tiempo para cada actividad. - Actitud positiva El liderazgo es influencia, desde esta premisa la actitud del líder es más importante que los hechos. La gente se contagia de las actitudes como se contagia de los resfriados acercándose. Una actitud motivada y entusiasta hará prosperar o hará quebrar a una

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compañía, a una iglesia o a un hogar. Lo más importante es que cada día podemos escoger la actitud que vamos a tener ese día. La disposición de un líder es importante porque influirá en la manera como los seguidores piensan y sienten, los grandes líderes saben que una actitud correcta creará la atmósfera adecuada para que los demás respondan bien. Es improbable que un líder con una mala actitud pueda tener éxito continuamente. - Agente de cambio El cambio es una prueba esencial del liderazgo, cambia el líder cambia la organización. Todo se levanta o se viene abajo a causa del liderazgo. Por tanto desde esta perspectiva los líderes son agentes de cambio. Ellos logran el cambio con el fin de cumplir las visiones y propósitos de una organización. Un líder efectivo no estará satisfecho con el estilo de vida tradicional o “statu quo” para él el cambio es vital. Como resultado uno puede ser calificado como un rebelde cortés pero en la realidad puede ser que aquellos que se resisten al cambio sean los verdaderos rebeldes. - Persistencia Los líderes exitosos continuamente están enfrentados por las dificultades, desde una perspectiva cristiana Satanás no desea ver un líder cristiano efectivo y exitoso. Hará todo lo posible para prevenir e impedir tal éxito. Sin embargo, ante todo obstáculo la persistencia prevalece cuando todo lo demás fracasa. Un líder verdadero y genuino tiene la tenacidad, perseverancia y flexibilidad para vencer las contrariedades, la fatiga, el desánimo y otros obstáculos, y tiene la habilidad de cambiar

los obstáculos en escalones de oportunidad

para seguir escalando.

1.4.2 En cuanto a los demás Debe ser:

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- Influyente La influencia es un tipo de poder y el poder puede ser descrito como legítimo, compensador, coactivo, experto y referente. Los líderes pueden usar cada de estas formas para influir a que la gente llegue a ciertas metas. El líder ejerce su influencia en muchas situaciones diferentes y debe escoger una actitud de acercamiento diferente para cada circunstancia. Tan solo un momento es necesario para influir negativa o positivamente a una persona. Algunas veces estos momentos de encuentro dejan un impacto para toda la vida o eternidad.

No

importa

cuanto

intentemos

negarlo,

cada

uno

de

nosotros

deja

continuamente una impresión, un impacto, una influencia sobre otra persona- una influencia puede sanar, bendecir, animar, edificar, herir, lastimar o destruir. Un verdadero líder conoce la diferencia entre ser un jefe y ser un líder, como se ilustra por lo que sigue: El jefe maneja sus hombres. El líder guía sus hombres El jefe depende de la autoridad. El líder de la buena voluntad El jefe inspira miedo. El líder inspira entusiasmo El jefe dice lleguen a tiempo. El líder llega antes de tiempo El jefe sabe a quién echarle la culpa. El líder sabe como arreglar los errores El jefe sabe como se hacen las cosas. El líder sugiere como se podrían hacer El jefe dice vayan. El líder dice vamos El jefe dice Yo. El líder dice nosotros - Integro La palabra integridad implica totalidad y coherencia. Cuando el líder tiene integridad sus palabras y sus obras coinciden. La integridad también sugiere rectitud un sentido de pureza moral. El líder con integridad se identifica por tener una sola manera de pensar. Las personas con integridad no tienen nada que esconder ni nada que temer porque sus vidas son como libros abiertos. Por todo esto la integridad no es tanto lo que hacemos sino lo que

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somos. Y lo que somos, a su vez, determina lo que hacemos. Según John Maxwell la integridad en el líder es muy importante por las siguientes razones: - La integridad produce confianza, - La integridad tiene un valor de mucha influencia - La integridad forja patrones elevados - La integridad da como resultado una reputación sólida, no solamente una imagen - Integridad significa vivirla uno mismo antes de dirigir a otros - La integridad ayuda a un líder a tener credibilidad y no sólo a ser listo - La integridad es un logro muy difícil Por todo lo dicho hasta ahora la integridad es un elemento muy importante en el liderazgo ya que todo se levanta o se viene abajo a causa del liderazgo. El secreto para levantarse y no caer es la integridad. - Paciente Un líder necesita ser paciente con sus seguidores y otras personas con quienes trabaja y tiene contacto (Ec. 7:8; Luc 21: 19; Rom. 12: 12; Heb. 10:36; Sant 1: 4).La paciencia es una virtud que necesita ser constantemente perfeccionada en el liderazgo. - Elogioso y alentador El líder genuino demuestra siempre el reconocimiento. El demostrar reconocimiento es más efectivo para conseguir que otros trabajen con usted. El líder que infunde confianza a las personas será mucho más efectivo. El es conocido por afirmaciones como “se que vas a ponerte al día” “hiciste una buena decisión”, “cometiste un error, pero todos lo hacemos, intenta otra vez”. Esta clase de afirmaciones acelera el motor de la persona. - Comunicativo

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La comunicación es un proceso continuo de interacción basada en el envío y recibo de mensajes y señales. La habilidad de comunicar hacia arriba, hacia abajo y lateralmente dentro de la organización, depende de la habilidad de saber escuchar. El líder tiene que ser capaz de compartir conocimientos e ideas para transmitir un sentido de urgencia y entusiasmo a otros. También el buen humor ayuda en la comunicación, porque recalca la accesibilidad y humanidad del líder. Otro factor en la comunicación efectiva es el lenguaje corporal. Las personas pueden comunicar dos diferentes mensajes (1) lo que dicen y (2) lo que hacen o como actúan. - Transvisionario Un líder efectivo no solo es visionario, él es transvisionario. Esto significa que motiva alas personas de tal manera que les transfiere la visión y ellas la poseen como propia. Las personas tienden a ser más entusiastas y motivadas si es que la visión, propósito, ideas, etc., nacen en ellos mismos. Se necesita una habilidad especial para tomar nuestra propia visión e implantarla en el alma de otras personas. 1.4.3. En cuanto a Dios Debe tener: - Conocimiento de Dios El líder cristiano necesita estar de continuo “en sintonía” y “a tono” con la dirección del Espíritu Santo a cada momento. Este proceso debiera ser tan natural como nuestra respiración. Conscientemente no nos ordenamos a nosotros mismos a respirar, al contrario, respiramos sin pensar de ello. De la misma manera, el líder necesita tener una estrecha relación con Dios, de modo que la suave y tranquila voz interna, pueda hablar en él

y

escuchando pueda obedecer. Un líder no puede ser efectivo si ha aprendido a seguir la dirección de Dios en su diario vivir. Esto implica una fe que supera los altibajos emocionales, las dudas y los desalientos. Consideremos la vida de José (Gn. 39-50) El fue bendecido por

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Dios, era un hombre limpio en una sociedad corrupta. Era marcadamente diferente Dios estaba con él. - El llamado por Dios Un líder cristiano debe ser llamado por Dios para un propósito, misión y tarea particulares. Este llamado será su ancla cuando la turbulenta tempestad de la vida intente agobiarlo. Si un líder no ama su trabajo, es que mal ha interpretado su llamado. Uno no puede amar algo que es dificultoso, costoso, desafiante, doloroso, exigente, pesado y algunas veces poco razonable. Esa es la razón por la que Jesús dijo que su yugo es fácil y su carga ligera. El da el amor para ese llamado y responsabilidad. Bibliografía HABECKER, Eugene B. S. f.

Redescubra el alma del liderazgo. Ed. Alfalit, Miami Florida

ORR, Roberto A. 1998 Liderazgo que realiza. Ed. El Verbo, Cochabamba COVEY, Stephen R. 1996 Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva. Ed. Paidós, México MAXWELL, John C. 1996 Desarrolle el líder que está en usted. Ed. Caribe-Betania, EE. UU. MAXWELL, John C. 1996 Desarrolle los líderes que están alrededor de usted. Ed. Caribe-Betania, EE. UU. MAXWELL, John C. 2000 Las 21 cualidades indispensables de un líder. Ed. Caribe-Betania, EE. UU.

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FAJARDO, David (Comp.) 1995 El líder juvenil: sus características y su capacitación. Casa Bautista de Publicaciones, El Paso Texas SOCIEDAD BÍBLICA BOLIVIANA 2001 “El proyecto de Dios”. En curso de educación cristiana y moral. Imprenta bíblica, Cochabamba

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