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• JubentinoVázquezV

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¡La copa de la ira! Andrew Bonar (1810-1892) "En la mano del SEÑOR, un vaso lleno de vino tinto mezclado con especias, él lo derrama, y todos los impíos de la tierra lo beben hasta sus mismas heces". Salmo 75: 8 Ayudará enormemente a la aprehensión correcta de este tema solemne, notar que Cristo es el que habla estas verdades sobrias. No pueden, entonces, haber sido pronunciados con dureza; deben haber sido pronunciados con toda ternura . Esto será el día cuando regrese a juzgar la tierra. Mientras tanto, es Él quien sostiene todo por la palabra de Su poder; Él evita que el mundo caiga en la ruina; Él es quien sostiene ese firmamento azul, así como los cimientos de la tierra, "yo levanto sus columnas" - y si tuviera que retener mi mano, todos caerían en la ruina. ¡Oh, eso lo consideraría un mundo irreflexivo! Oh, los necios aprenderían sabiduría, y los orgullosos caerían ante su Señor. Porque el Juez ciertamente vendrá, con la copa de vino tinto en su mano, una copa de ira, de la cual todo rebelde debe beber hasta las heces. Los cuernos de los malvados pronto serán humillados, y solo los justos serán exaltados (Salmo 75: 9-10). Es de esta copa , que este día deseamos hablarte. Da una visión alarmante y despierta de nuestro Dios y Salvador. No es "Dios en Cristo reconciliando al mundo consigo mismo", sino Dios el Juez , Cristo el Juez. No es el Rey con el cetro de oro, invitando a todos a acercarse - es el Rey levantado en ira, en la tarde del día de gracia, para "juzgar a todos los impíos de la tierra". ¡Oh, hay un Infierno, un Infierno sin fin, esperando al impío! ¡El juez nos lo advierte, para que ninguno de nosotros caiga en ese tremendo infortunio! No digan en sus corazones: "Dios es tan amoroso y misericordioso como para condenar a un alma a tal desgracia". Si continúas en pecado, sabrás demasiado tarde que el juez condena; no porque Él no sea infinitamente amoroso, sino porque tu pecado lo obliga a hacerlo. Escuche lo que está escrito, y todos los incrédulos beberán de este vino de la indignación de Dios.

I. La copa de la ira

La idea general del versículo es que hay ira contra el pecado que se manifiesta por Dios, terrible más allá de la concepción. Como está escrito en Ezequiel 18: 4, "El alma que pecare, morirá"; y Salmo 7: 11-12, "Dios está enojado"con los malvados todos los días. Si él no se vuelve, Él afilará Su espada; Él ha doblado su arco y lo ha preparado. Él preparó para él los instrumentos de la muerte ". En el Salmo 11: 6-7," Sobre los malvados llorará lazos, fuego y azufre, y una tempestad horrible: esta es la porción de su copa ". Porque el justo Señor ama la justicia ". En el Salmo 21: 9," los harás como horno de fuego en el tiempo de tu ira ". En Job 36:18," Porque hay ira, guardaos, no sea que os quite con Su golpe; entonces un gran rescate no puede librarte ". En Romanos 2: 5 leemos:" Atesoras para ti mismo ira para el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios ", y en Apocalipsis 14: 9-10," Si cualquier hombre adora a la bestia, el mismo beberá del vino de la ira de Dios, que se derramará sin mezcla en el cáliz de su indignación; y será atormentado con fuego y azufre en la presencia de sus santos ángeles, y en la presencia del Cordero. "¿Pueden las palabras ser más enfáticas para expresar?¿La indignación de Dios ante el pecado del hombre? "A CUP" se habla de. Una porción medida . (Salmo 11: 6 y Salmo 16: 5, "El Señor es la porción de mi copa"). Se usa con frecuencia para expresar una cantidad completa ; como cuando el cumplimiento de la maldición se llama "copa de temblor" (Isaías 51:22); y en Ezequiel 23: 31-33, la ira sobre Samaria es "la copa de Samaria". La ira de Dios se dará en una porción medida , deliberada y justamente considerada. No habrá nada de capricho, nada arbitrario, en el juicio de Dios sobre el pecado; todo se ajustará bastante. Aquí están los pecados : allí está la copa , de un tamaño proporcionado al pecado, y llena . Las perfecciones de Dios dirigen y dictan el llenado de ella. Es "una taza de vino tinto". En otro lado lo llama "El vino de mi furia"; y Apocalipsis 16:19, es "el vino del furor de su ira". En Oriente, el vino tinto era generalmente el más fuerte; pero además, la naturaleza ígnea de los contenidos está indicada por el color. Este "vino tinto" es expulsado de las uvas por los atributos divinos. Debe ser la esencia concentrada de la ira ; ninguna poción débil, pero una como la de Jeremías 25:16, donde "beben, se conmueven y enloquecen"; o que en Ezequiel 23:32, 33, "una copa profunda y grande, que contiene mucho, una copa de asombro y desolación, lleno de embriaguez y tristeza". Está "mezclado con especias". Esto significa que la calidad natural del vino se ha fortalecido; su fuerza se ha intensificado por varios ingredientes arrojados en ella. Tal es el sentido de "vino mezclado" en Isaías 5:22, y en Proverbios 9: 5, "Ven ... bebe del vino que he mezclado". Debemos distinguir esto de la expresión

"sin mezcla" en Apocalipsis 14:10, donde el hablante quiere decir que no hay infusión de agua para debilitar la fuerza del vino. Aquí, en el Salmo 95, hay todo lo que puede realzar la amargura de la copa; y preguntémonos: ¿Cuáles pueden ser estos diversos ingredientes? De cada lado de la naturaleza del pecador perdido, surgirán formas de miseria. El cuerpo , así como el alma , estarán impregnados de una angustia interminable, en medio de la incesante miseria del exilio eterno y la prisión solitaria. Además, ¡cada atributo de Dios arroja algo en la copa! La justicia está allí, de modo que el hombre rico en el infierno (Lucas 16) no se atreva a insinuar que su tormento es demasiado grande. La Misericordia y el Amor están de pie y le dan sus ingredientes, testificando que el pecador fue tratado con paciencia y que la salvación estuvo a su alcance. Oh la agravación que este pensamiento dará a la miseria. La omnipotencia contribuye a ello; ¡El hombre perdido en las manos del Todopoderoso está completamente indefenso, tan débil como un gusano! La eternidad es un ingrediente, y dice que esta ira durará mientras Dios viva. Y la verdadestá allí, declarando que todo esto es lo que Dios habló, y por lo tanto no puede ser alterado sin derrocar su trono. ¡Aún más! Mientras que la vergüenza y el desprecio, y la conciencia de ser repudiado por cada ser santo, arden ferozmente en el alma, el mismo pecador tiene ingredientes . Su conciencia afirma y atestigua que este infortunio es todo merecido , y el hombre se aborrece a sí mismo. La memoria recuerda oportunidades pasadas y momentos de esperanza despreciados. El pecado continúa creciendo y las pasiones se enfurecen; ¡los antojos roen al alma insatisfecha con hambre eterna! Puede ser que cada pecado en particularcontribuirá a la mezcla - un ay de las concupiscencias gratificadas; un ay por cada acto de embriaguez, y cada falsedad y deshonestidad; un ay por cada invitación rechazada, y cada amenaza descartada. ¿Quién puede decir qué más puede significar con las palabras: "mezclado con especias"? Tiene "heces" en él. Las heces se encuentran en la parte inferior, fuera de la vista, pero son las más amargas . ¿Significan estos males ocultos aún no concebidos por nadie? Tal como se puede insinuar en las palabras: "¡Es mejor que nunca haya nacido!" ¿De qué parecen hablar los infortunios de Cristo? ¡Estos serán los reveses de las alegrías del hombre salvado, "que nunca han entrado en el corazón" para imaginarse! Los reincidentes parecen haber comenzado a saborear estas heces. Los apóstatas, como Spira, han mostrado un poco de lo que pueden ser. Pero ¡oh, la realidad en las edades por venir! Porque será la ira de Aquel cuyo aliento hace que las

montañas humean y la tierra en su centro. ¡Oh, la asombrosa locura de la eterna desesperación! Dios "derrama de lo mismo". "¡Los malvados lo beberán hasta sus mismas heces!" No están destinados a ser simplemente mostrados; esto no es una taza cuyo contenido solo se exhibirá y luego se retirará. No, los malvados deben "beberlo" y no pueden negarse. Cuando Sócrates, el sabio ateniense, fue declarado culpable de beber la copa de veneno, pudo protestar por su inocencia y, por lo tanto, disminuir la amargura del borrador, aunque lo consideró como otorgado por las leyes de su país. ¡Aquí, sin embargo, no habrá nada como la protesta, nada y tal alivio del terrible calado que el pecador debe beber! "Dios derrama", y el alma culpable "¡la beberá hasta sus mismas heces!" Job 27:22 dice "con mucho gusto huirían de su mano", pero no pueden, porque está escrito: "Dios le arrojará sobre él, y no perdonará". En Jeremías 25: 15-16, tenemos al Señor al mando de manera perentoria: "Toma de mi mano esta copa llena del vino de mi ira, y haz que todas las naciones a quienes yo te envíe la beban. Cuando la beben, tambalearse y volverse loco ". Y además, insiste, en el versículo 28, "Pero si rehúsan tomar la copa de tu mano y beber, diles: 'Así dice el Señor Todopoderoso: ¡ Debesbeberla!" "Ellos deben beber de la ira del Todopoderoso" (Job 21:20). ¿Y qué significan esas palabras ya citadas en Apocalipsis 14:10? "Él también, beberá del vino de la furia de Dios, que ha sido derramado con toda su fuerza en la copa de su ira. ¡Será atormentado con ardor de azufre en presencia de los santos ángeles y del Cordero!" No será, por parte de Dios, un mero sentimiento silencioso de indignación ante el pecado; debe haber inflicción de maldición. No hay truenos mientras la electricidad duerme en la nube. Los siete sellos no mostraron liberación para la tierra, mientras no se rompieron; las siete trompetas no convocaron a los vengadores, hasta que sonaron; las siete copas no hicieron ningún juicio, mientras que solo se sostuvieron en las manos de los ángeles. ¡Ah sí, la pena debe ser exigida , y requerirá la eternidad para exigirlo todo! Oh, compañero-pecador, hemos tratado de decir algo de esta condena; pero, ¿qué son las palabras del hombre? Usted ha visto un recipiente poroso, en el que se licor de sabor fino. Afuera, usted probó la humedad y le dio una ligera idea de lo que había dentro; pero ligero de hecho. Entonces nuestras palabras hoy. Y recuerda que cada nuevo pecado tuyo arrojará más ingredientes en la mezcla. Es el mismo Misericordioso, quien habla en Ezequiel 22:14: "¿Podrán tus manos ser fuertes en los días que yo trataré contigo? Yo, el Señor, lo he dicho , y

lo haré ". Es terrible leer y escuchar esta proclamaciónde ira; pero todo está dado para obligarnos a huir de él. Como canta uno de nuestros poetas (Montgomery): "La misericordia ha escrito las líneas del juicio aquí: nadie que desde la tierra pueda leerlas, necesita desesperación". II. ¡La historia de Uno que bebió esta copa hasta las heces! No te dejaríamos simplemente contemplando los terrores de esa ira. Proseguimos, en relación con esto, para hablar de alguien cuya historia tiene una influencia extraña en nuestro caso. ¡Solo ha habido Uno que haya "bebido esta copa hasta sus últimas heces!" Cain lo ha estado bebiendo durante 5.000 años y encuentra que su castigo es mayor de lo que puede soportar, pero no ha llegado a la hez . Judas había estado bebiéndolo durante unos 2000 años, a menudo gritando con un gemido que sacude el Infierno, "¡Oh, que nunca hubiera nacido! ¡Oh, que nunca hubiera visto o escuchado del Señor Jesucristo!" Pero él no ha llegado a las heces. Los ángeles caídos no se han acercado a la escoria, porque no han llegado al juicio del Gran Día. El Único que ha tomado, probado, bebido y exprimido el amargo más amargo, ha sido el Juez mismo , ¡el Señor Jesús! Usted sabe con qué frecuencia, cuando en la tierra, habló de eso. "¿Puedes beber la copa de la que beberé?" (Mateo 20:22). "La copa que mi Padre me ha dado, ¿no la beberé?" (Juan 18:11). El universo lo vio con él en sus labios. Fue nuestra taza de temblor; la copa en la que se mezcló la ira debida a la "multitud que nadie puede contar" . ¡Qué ira, qué pena! A unas gotas le hizo llorar, "Ahora mi alma está profundamente preocupado!" En el jardín, al verlo, se retorcían las extrañas y misteriosas palabras: "¡Mi alma está extremadamente triste, hasta la muerte!" aunque Dios-hombre, se tambaleóen lo que vio, y siguió temblando. Al día siguiente, en el Calvario , ¡se lo bebió todo! Supongo que las tres horas de oscuridad pueden haber sido el momento en que "estaba bebiendo las heces"; porque luego se levantó de su corazón quebrantado el gemido que tanto

atraía al corazón del Padre: "Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?" Cuando terminó la última gota , gritó: "¡Todo está terminado!" podemos creer que los ángeles sintieron un alivio inconcebible, ¡e incluso el Padre mismo! ¡Tan tremenda fue la ira y la maldición! - la ira y la maldición debido a nuestro pecado! En todo esto, no había nada demasiado . El amor protestaría contra una gota demasiado ; y nunca encuentras que Dios excede. ¿No se apresuró a detener la mano de Abraham cuando se hizo lo suficiente con Moriah? y en ese mismo lugar otra vez, el día de David, cuando la Justicia declaró suficientemente la filo de su espada de dos filos, ¿acaso no se apresuró a entregar, llorando, "¡Es suficiente!" ¡Cuánto más entonces, cuando fue Su Hijo amado! Él buscó de Él, todo lo que necesitaba la justicia . Y así encontramos en esta transacción , lo que bien pueden ser buenas noticias para nosotros. Porque Jesús bebió esa copa como el sustituto de "la gran multitud", Su innumerable gente, se la dio del Padre; y por lo tanto liberado a partir de haber probado siquiera una gota de ese ardor de la ira, que "copa de vino tinto, mezclada con especias", con sus heces - sus terrores desconocidos. Ahora, este, este solo, que bebió tanto, presenta a los pecadores de nuestro mundo, la copa vacía , su propia copa vacía. Él lo envía alrededor del mundo, llamando a la humanidad, los pecadores a tomarlo y ofrecerlo al Padre como satisfacción por sus pecados. ¡Ven, oh compañero, pecador, agárralo y sostenlo ante Dios! ¡Lo suplica, y eres absuelto! Sí, si estás ansioso por ser salvo y bendecido, toma esta copa vacía . Sin importar qué frío tengas en el corazón, por más aburridos que te sientas, por leve que sea tu pesar por el pecado, tómate esta copa vacía . Su apelación a esta copa vacía detiene el juicio de una vez. No piense que necesita soportar una angustia de alma, un gran dolor: tomar algunos sorbos del vino tinto, mucho menos para probar sus heces- antes de que puedas ser aceptado. ¡Qué presunción irreflexiva: imitar a Cristo en su obra expiatoria! Si Uzías, el rey, presentaba incienso cuando debería haber dejado que el sacerdote lo hiciera por él, se enamoró de su presunción: ten cuidado de no ser expulsado, si presumes traer el incienso imaginado de tu dolor y tus amargas lágrimas. Es la copa vacía que se nos ofrece, no la copa mojada con nuestras lágrimas , ni su pureza oscurecida por el aliento de nuestras oraciones . ¡Los sentimientos nuestros, gracias nuestras, no pueden hacer nada más que ensombrecer los méritos perfectos de Cristo! Hijos de Dios que han usado esta copa, sigan suplicándola siempre. Alguna vez lo conviertes en el motivo de tu seguridad de aceptación. Examínelo a menudo y

bien: vea cómo Dios fue glorificado aquí, y cuán abundantemente ilustra y honra los reclamos de la justicia de Dios. El pago total de todas las reclamaciones presentadas por Justice está aquí; y entonces, al usarlo, dar una buena medida, presionar y atropellar! Lo que queda entonces es que das gracias y tomas esta salvación, a menudo cantando "Una vez fue mía, esa copa de ira, ¡ y Jesús la bebió seca!" ¿Qué debería obstaculizar tu alegría triunfante? Estar lleno de gratitud; y deja que esta gratitud aparezca al dejar que otros sepan lo que ha hecho por ti y puede hacer por ellos . Porque nuevamente te decimos, compañero pecador, si no lo aceptas, pronto no tendrás oportunidad de elegir. ¡Que nunca vea a una de mis personas bebiendo esta taza horrible! ¡Que nunca lo vea puesto en sus manos! El gemido de un alma, morir en el pecado, a veces se escucha en este lado del velo, y es la más triste y más inquietante de todas las escenas solemnes y horribles. Pero, ¿qué es eso, en comparación con el consumo real de la taza y exprimiendo la misma porquería? ¡Nunca puede Satanás tener en su poder reprocharle haber tenido una vez la oferta de la salvación, una oferta nunca hecha a él! Me parece que cada día de reposo, especialmente el Señor, lleva a los que escuchan el Evangelio a un rincón apartado y aislado, y allí coloca delante de ellos la "copa de vino tinto, mezclado con especias", y luego la copa vacía de Jesús: fervientemente, de la manera más sincera, sincera y compasiva, presionándoles para que decidan y sean bendecidos. Hombres y hermanos, nunca descanse hasta que el Espíritu Santo tenga en su ojo a Cristo glorificado que bebió la copa, que vea en Él su salvación y la gloria de Dios asegurada más allá de la controversia, ¡más allá del poder de Satanás para cuestionar o atacar!