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• Yolanda sanz

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HOMEOPATIA EN CUENTOS Prólogo Un cuento es una narración ficticia, que debe ser breve y sencilla. Edgar Alian Poe, que escribió cuentos fantásticos perfectos, sentó las normas a las que debía ajustarse un relato breve: debían ser pocas páginas, condensadas, que el lector no pudiera abandonar hasta concluir su lectura. En otras palabras: debía atrapar al lector y no liberarlo hasta el punto final. Por esta razón es el cuento un género literario difícil: exige una capacidad de síntesis combinada con "algo más" que deje en la mente del lector una impresión estética perdurable. Sus orígenes se pierden en La historia. Antes de ser un relato escrito, fue una relación oral. Es probable que haya nacido cuando el hombre dio forma expresiva a sus supersticiones, al intentar una explicación del mundo que lo rodeaba. Los mitos y leyendas nacieron así, para luego encadenarse y formar los relatos de epopeyas nacionales o poemas épicos. Al occidente, los primeros cuentos llegaron en la Edad Media. Llegaron de Egipto, cuentos de tres milenios de antigüedad, de la India (el Ramayana y el Mahabharata, por ejemplo). En los Jatacas se relatan más de quinientas historias sobre Buda. El Pantchatantra es otro ejemplo de conjunto de cuentos que "invadió" Europa en la Edad Media. En esa época, además de los cuentos escritos circulaban las narraciones orales de los viajeros que llegaban de Oriente y de los cruzados. En España, Mosé Sefardí, médico de Alfonso el Sabio, recopiló la mayor cantidad de cuentos orientales. Europa comienza también a producir sus propios cuentos: Bocaccio con su Decamerón que publica en el 1471 con los que solo intenta distraer, no instruir (una clasificación reduccionista clasifica los cuentos en ejemplificadores morales y de entretenimiento). Contemporáneos de Bocaccio son Chaucer y Juan Manuel con los Cuentos de Canterbury y El Conde Lucanor. En el 1600 aparece Cervantes con las Novelas ejemplares y Perrault que da forma escrita a cuentos infantiles tradicionales. En el 1700 La Fontaine con sus fábulas. En el siglo pasado, los hermanos Grimm y Hoffmann en Alemania, Walter Scott en Inglaterra. Imposible nombrar a todos los grandes cuentistas (Balzac, Stendhal, Flaubert, Maupassant, Puschkin, Gogol, Chejov, Dickens, etc. etc.). ¿Podríamos dejar de mencionar a nuestro Jorge Luis Borges, a Horacio Quiroga, a Onetti, a Filiberto Hernández, a Bioy Casares, a Ricardo Guiraldes, a Miguel Angel Asturias?. Sí, podemos mencionarlos cometiendo el pecado de dejar fuera de esta lista a muchos otros brillantes cuentistas. Hoy aparece Nora. Aranovich. Sus cuentos son absolutamente originales. Cumplen ante todo con el reclamo de Goethe quien exigía que los cuentos fuesen interesantes. Nora Aranovich es médica homeópata con sólida formación pediátrica, que además de curar, intenta enseñar a curar. Este es el motor de estos cuentos, que son breves, son interesantes, atrapan al lector hasta su final, entretienen y dejan una enseñanza. No una enseñanza moral como los cuentos de esa clasificación mencionada. Enseñan Materia Médica Homeopática, y esto es algo completamente novedoso. Enseñar homeopatía contando cuentos. Erickson curaba a sus pacientes cantándoles cuentos. Los cuentos de Las Mil y una Noche permitieron salvar la vida de Sherezade. Las Fábulas de La Fontaine o Esopo dejaban moralejas. Los cuentos de Nora Aranovich enseñan a curar a los enfermos ¿Podrá haber sobre la Tierra mayor mérito de

un cuentista? Dr. Zalman Bronfman Introducción Como todos ustedes saben, el estudio de la Materia Médica Homeopática es a veces una ardua tarea. Podemos leer un medicamento de varias Materias Médicas diferentes, de la Materia Médica Pura, estudiarlo con la ayuda del Repertorio y a veces hasta de la computadora y nos cuesta mucho llegar a comprenderlo y a captar la esencia y el sentimiento profundo que lo mueve. Como dice el Dr. Bronfman "de qué sufre dicho medicamento" Un día, preparando una clase sobre Belladona (según Alien tiene 2543 síntomas, posee 150 Síntomas Mentales, 105 ilusiones diferentes, 43 de las cuales son Exclusivas de este medicamento), creí enloquecer. Frente a este "infierno", sentí "ganas de escapar", pero como no podía hacerlo, decidí tomar el toro por las astas y fue así como nació mi primer cuento, " Atropino, ángel o demonio", donde traté de darle vida a un personaje infantil eligiendo los síntomas que creí más representativos y tratando de dar la imagen del medicamento. Al finalizar la clase, les leí a los alumnos del curso el cuento de Atropino y no saben cuál fue mi sorpresa al ver sus caras de asombro y alegría!!. Comenzaron a despavilarse, pues ya eran casi las nueve de la noche, después de un largo día de trabajo, y hasta rieron a carcajadas. Esto me alentó a seguir escribiendo. Este libro está basado en algunas de mis historias clínicas, en síntomas del repertorio, de las distintas materias médicas, y su fin es lograr que el estudio de esta hermosa disciplina se haga más fácil y llevadero. Dedico este pequeño libro a todos los amantes de la homeopatía, pacientes, médicos homeópatas, pediatras homeópatas, alumnos de homeopatía y también a aquellos médicos alópatas libres de prejuicios que quieran acercarse a la Homeopatía unicista. A continuación de cada cuento, salvo los últimos dos que tienen muchos personajes, figura una lista de los síntomas por orden de aparición. Les aconsejo como ejercicio traten de extraer los síntomas de los cuentos y ubicar os en el repertorio sin mirar la lista y utilizarla luego solo como control del trabajo realizado Finalmente, los dejo con los personajes de mis cuentos para que los disfruten y puedan vivir junto a eüos ésta hermosa experiencia Voy a citar nuevamente al Dr. Bronfman: "escribir sobre homeopatía no representa ningún esfuerzo". Es puro placer. Acónita y Aconino Acónita era una mujer hermosa de cabellos oscuros y grandes ojos negros que brillaban como carbones encendidos. Era sumamente sensible, muy temerosa; solía tener sueños clarividentes. Era dulce, afectuosa, muy compasiva, nostálgica y sentimental. Bastante parecida a su hermanito menor Phosphy. Su temor más profundo era a la muerte y ésto se vio acrecentado cuando quedó embara2ada. Aconino fue concebido en una fría noche de invierno (soplaba un viento huracanado frío y seco y ésto marcó definitivamente a nuestro pequeño amigo). Fue un embarazo tormentoso, lleno de temor, angustia y presentimientos. Todas las noches Acónita tenía sueños clarividentes que la ponían muy tensa. A los siete meses de embarada presenció un accidente y se llevó un susto tremendo. Temblaba de arriba a abajo, su corazón latía a mil por hora y tuvieron que internarla para que no perdiera a su hijo. A partir de ese momento se acrecentó su temor a la muerte y al parto. Su obstetra que era muy bueno, pero no era homeópata, intentaba tranquilizarla con palabras de aliento e incluso la mandó al psicólogo. Pero el miedo no cedía. Tanto miedo tenía que, por supuesto su parto se complicó, duró muchas horas y terminó con un fórceps bastante traumático. Pobre Aconino, no comenzó muy bien su vida extrauterina. Además del stress y el susto, nació en pleno verano (recuerden que fue concebido a principios del invierno) y en la sala de partos con el revuelo del fórceps se olvidaron de apagar el aire acondicionado. Qué frío hacía! La primera consecuencia fue que la nurse se dio cuenta que Aconino no orinaba y a las pocas horas se puso amarillo como un limón. Qué lío!. Llamaron a un neonatólogo que había leído algo de homeopatía (solamente los cinco primeros remedios en orden alfabético de un viejo libro de materia médica homeopática que había sido de su abuelo). Vio éstos dos síntomas, le dió unos globulitos y rápidamente solucionaron el problema. Aconino creció fuerte y vigoroso hasta que un día tuvo su primera fiebre. Una mejilla roja, la otra pálida, luego todo colorado, pero empalidecía al sentarse. Inquieto, angustiado, asustado, con expresión de terror, deliraba didendo que se iba a morir a las doce de la noche, les ojos brillosos, la garganta dolorida. De golpe, bien de golpe hizo un falso crup justo a la medianoche y todos se asustaron muchísimo pues temieron que en realidad se

cumpliera su premonición. Corrieron a internarlo mientras él imploraba que quería volver a su casa (igualito que su primo Bryonio cuando tuvo tanta fiebre). Tenía una sed terrible. ' Tomaba muchísima agua que era lo único que podía soportar. Deda que todo lo demás tenía gusto amargo. En el hospital lo revisaron de arriba a abajo y no le encontraron nada. No transpiraba, no tenía secredones, ni pus, ni focalizadón, ni nada. Sólo una fiebredta y una laringitis. Por qué tanto escándalo, tanto temor, tanta corrida?! No entendían porqué tenía un cuadro mental tan florido y angustiante cuando en realidad no había patología. Lo mandaron a casa como él quería pues, necesitaban la cama para un niñíto Llamado Arsenio, que también estaba inquieto, temeroso y ansioso y había llegado a la misma hora que Aconino pero que realmente estaba muy enfermo. Aconino volvió a su casa, se curó, y pensó que todo lo sucedido había sido un sueño. Pero la cosa no quedó ahí; todos los inviernos se enfermaba: un año tuvo neumonía en el vértice superior derecho, al invierno siguiente una parálisis fadal por frío; laringitis con falso crup casi todos los inviernos. En verano tenía diarrea y sufría mucho el calor intenso. Tuvo dos veces golpe de calor. Era demasiado sensible a todo, a la música, al ruido, a los dolores. Era muy miedoso, sentimental, compasivo y afectuoso como su madre y su tío Phosphy. Cuando sus padres se fueron de viaje enfermó por nostalgia y los tuvieron que hacer volver pues como siempre que Aconino se enfermaba parecía que se acababa el mundo. Cuando murió su perrita no había quien lo consolara y esta situación duró varios meses. Un día les dijo a sus padres que tenía tanto miedo a la muerte que temía volverse loco. Ahí sus padres recordaron al neonatólogo que lo había curado tan milagrosamente con sus glóbulos homeopáticos y lo fueron a ver con Aconino. Habían pasado ya diez años y el neonatólogo (después del éxito obtenido con Aconino en la nursery) se leyó todo el libro hasta Zincum; comenzó con la A de nuevo hasta la Z y por fin decidió hacer el curso completo de medicina homeopática. Fue un excelente alumno y se había transformado en un muy buen homeópata. Hizo la historia completa de Aconino y para gran sorpresa suya, al repertorizarlo, apareció el mismo medicamento que le curó la ictericia cuando era recién nacido. Qué cosas tiene la homeopatía! Síntomas • Ojos brillantes (durante la fiebre) AG • Hipersensible • Sueños clarividentes • Dulzura • Afectuosa • Compasiva • Nostalgia • Sentimental • Temor a la muerte durante el embarazo (E) • Tiempo frío y seco, agrava • Tiempo venioso y tormentoso, agrava • Presentimiento o premonición (agregar el rubro) • Trastornos por susto • Temor con temblores • Temor a la muerte • Temor al parto • Retención de orina en recién nacidos • Piel, decoloración amarilla en el recién nacido • Cara, decoloración roja, un lado pálido, el otro rojo • Cara, decoloración roja, palidece al levantarse • Inquietud durante el calor febril • Angustia • Cara, expresión aterrorizada • Delirio, durante la fiebre 2

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Delirio, habla sobre la muerte Predice el momento de su muerte Ojos brillantes durante la fiebre Garganta interna dolor Laringismo (falso crup) Casa, desea irse a Sed durante la fiebre Boca, gusto amargo a todo excepto al agua Transpiración ausente Medianoche, después se agrava Ilusión que lo sucedido ha sido un sueño Pecho inflamación de pulmón en el vértice superior lado derecho. Parálisis facial por frío (AG) Laringismo Diarrea en tiempo caluroso Sensible a la música Sensible al ruido Sensible a los dolores Nostalgia Inconsolable Temor a la muerte Temor a la locura

Anacardia, el bien y el mal Anacardia era una adolescente bastante "rara". Muchos atribuían sus "rarezas" a que había tenido una infancia tormentosa. Sus padres se habían separado siendo ella muy pequeña y esto la hizo sentir "dividida" en dos. Para colmo su papá no la quiso ver nunca más y este abandono la marcó en lo más íntimo de su corazón. Su padre había sido muy violento, cruel, insultaba a su esposa, aún delante de su hija y blasfemaba continuamente. Era grosero como ninguno, hosco y descontento de todo. Vivir en ese clima era insoportable y esto por supuesto, desencadenó la separación. Sus tías maternas decían que desgraciadamente Anacardia había heredado muchas cosas de su padre y que su madre era realmente un santa, pues toleraba sus desplantes. Lo que sucedía era que Anacardita cuando estaba bien era un "pimpollo". Era "dulce" como la miel, afectuosa a tal extremo que en la escuela besaba las manos de sus compañeras. Pero cuando estaba mal... ¡Agárrate Catalina!!. Ahí sí que la cosa se ponía bien fea !!... Insultaba, blasfemaba, decía que estaba poseída por el diablo, se descontrolaba totalmente y hablaba todo el tiempo. Tenía celos enfermizos, era cruel, muy rencorosa y decía que tenía ganas de matar. (Fíjense qué parecida que era a su prima Lachesiaü) Buenos Lachesia no se sentía poseída por el demonio ni era "tan" insultante, pero ambas sentían que tenían dos voluntades y que estaban bajo un poder sobrehumano. Un buen día le dijo a su santa madre. - "Nosotras tres tenemos hambre"- ¡¡¿Qué ... ?? preguntó su progenitura al borde del infarto. - ¡Sí mamá! ¡Nosotras tres tenemos mucha hambre! - ¡Ay mi Dios, esto no me lo esperaba! suspiró la buena señora. ¡Ay Dios mío, qué hice yo para tener que soportar estas locuras!. - "Es la última vez que te lo digo!! ..., Ana, Naca y Cardia tenemos hambre!! y servinos la comida a las tres antes que hagamos un escándalo triple"!! Bueno, la santa madre sirvió tres platos de comida con tres juegos de cubiertos y tres vasos y Anacardia se sentó a comer tranquilamente y uno por uno se devoró los tres platos de comida. En el interin su madre pidió un turno urgente con el mejor psiquiatra de la ciudad, un tal Silico Terroso de quien le habían contado maravillas. No se imaginan cuál fue su sorpresa cuando volvió al comedor y vio a Anacardia totalmente transformada, dulcificada y contenta quien le comentó tranquilamente que iba a salir a pasear'.'. ¡¿Con quién vas?! Preguntó su madre aterrada. -Solita, contestó Anacardia tan tranquilamente. Susana, que así se llamaba su madre, suspiró aliviada y atando cabos recordó que Anacardia desde muy pequeña mejoraba después de comer. Todo mejoraba!! Hasta la locura!! Dudó si suspendía o no el turno con el profesor Silico Terroso, pero luego de meditarlo un buen rato decidió conservar la cita. No fue fácil arrastrar a Anacardia al consultorio del facultativo ... Maldecía como nunca, se resistía, decía que ella no estaba loca para ir a un psiquiatra, estaba fuera de sí, fastidiosa e insoportable. En la sala de espera se relajó, cambió su postura y parecía un pollo mojado en una actitud desvalida y entregada. Ya en la consulta con Don Silico Terroso terminó de relajarse y habló con fluidez. Le contó de su gran irresolución, de esa sensación tan extraña que sentía que tenía el diablo

sobre un hombro que la incitaba a obrar mal y un ángel en el otro hombro que le susurraba que obraba bien. Le contó de qué forma ella luchaba entre estas dos fuerzas del bien y el mal, no pudiendo resolver qué actitud tomar; le contó del antagonismo hacia ella misma y de su gran falta de confianza. (Silico Terroso asentía con la cabeza ... ¡¡a él le iban a contar de la falta de confianza!! ... de eso sabía muchísimo pues lo había padecido en carne propia y ahora que era todo un profesor y un profesional de éxito a duras penas podía soportar esta sensación, cuando esporádicamente lo invadía). Anacardia siguió hablando y hablando. Contó que por momentos su entorno le parecía extraño, que estaba poseía por dos voluntades y que estaba confusa y que por momentos tenía la ilusión de ser doble. "Bueno, bueno, querida"-dijo el profesor Silico Terroso mirando el reloj pues ya se había pasado el tiempo de la consulta. Quédate tranquila que en la próxima entrevista este tema de sentirse doble lo solucionamos entre "los cuatro". Anacardia que era loca pero no estúpida, lo miró consternada, no dijo nada peero decidió que allí no volvía nunca más. Y así siguieron las cosas cada vez peor. Anacardia estaba tan mareada que confundía el pasado con el futuro, el presente con el pasado y el futuro con el presente. Además comenzó a tener ataques de clarividencia y lo peor de todo es que sus videncias se confirmaban. Harta ya Susana y sumamente preocupada fue a consultar a un Homeópata. Fue sola, pues Anacardia luego de ¡a entrevista con Siiico no quiso saber nada de volver a ver un médico (de ninguna raza ... ni alópata, ni homeópata, ni psiquiatra, ni curandero,ni nada.) Fue así como Susana relató los síntomas con lujo de detalles y el homeópata le indicó un polvito, que fue disuelto en agua y Anacardia lo tomó sin darse cuenta, pues para colmo se había vuelto sumamente desconfiada. No quería tomar remedios por temor a ser envenenada. Saben una cosa?? El polvito le hizo muy bien. Síntomas • Abandono • Cólera violenta • Crueldad • Blasfema • Insulta a su esposa delante de sus hijos • Grosería • Hosco • Descontento de todo • Dulzura • Afectuosa • Besa las manos de sus compañeros • Ilusión de estar poseída por el diablo • Locuaz • Celos • Cruel • Maliciosa (rencorosa) • Matar, deseos de • Voluntad, dos voluntades siente como si tuviera • Ilusión que está bajo un control sobrehumano • Ilusión que él es tres personas • Delirio, mejora comiendo • Maldice • Fuera de sí • Fastidiosa • Desvalido • Irresoluta •Un diablo le habla en un oído y un ángel en el otro, sugiriéndole asesinar o actos benevolentes • Antagonismo, consigo misma

• Confianza, falta de • Ilusión que todo es extraño • Coafusión, sensación de dualidad • Ilusión, que es doble • Errores, confunde futuro con pasado confundé presente con futuro confunde presente con pasado • Clarividencia • Suspicaz • Temor a ser envenenada. Apisinia, la celosa Apisinia tuvo problemas desde siempre. Su madre casi la pierde al cuerto mes. Sólo Dios y su obstetra saben cómo no se produjo el aborto. Milagrosamente salió a flote y nació fuerte y vigorosa. Eso sí, estaba bastante edematizada, pero eso fue cediendo poco a poco. Desde beba fue irritable, e inquieta sobre todo de noche y ya gritaba en sueños desde los seis meses. A los diez meses tuvo una diarrea feroz; tan fuerte era, que su ano permanecía abierto y al más mínimo movimiento tenía una deposición involuntaria. Hubo que internarla y ponerle suero endovenoso pues a pesar de todos los esfuerzos de su madre, se negaba a tomar agua. Cómo podía ser que una beba con esa fiebre y esa diarrea no tuviera sed!! Era increíble. Bueno a su primita Pulsatia le pasó lo mismo pero tenía ya dos años; no era tan chiquita. A los dos años se sentó en un hormiguero!!. Por Dios, qué susto!!. Se hinchó toda. Era toda una masa homogénea, ojos, boca, brazos, piernas, tórax, toda hinchada!. Porsu-puesto gritaba como loca que le picaba, que tenía pinchazos y pedía que le pusieran agua fría. La metieron en la banadera con agua bien fría) con algunos cubitos de hielo mientras llegaba el pediatra. - "Hola Apisinia, cómo estás?" preguntó el médico. - "Bien" dijo Apisinia con un hilito de voz pues estaba ya comenzando a nacer un edema de glotis. A pesar del agua fría que la mejoró estaba desastrosa, pero ella contestaba "bien” Ahí mismo recibió un decadrón endovenoso y asunto terminado. Cuando nació su hermanita, Apisinia se enfermó de celos. Tuvo fiebre altísima, se hinchó toda y le diagnosticaron una enfermedad renal. Algo así como un síndrome nefrótico, dijo el médico. Le restringieron la sal y el líquido. No hubo ningún problema pues Apisinia no deseaba sal y detestaba el agua. Como dije era muy celosa. Y además muy suspicaz, no aceptaba los remedios. Sería por temor a ser envenenada? Su madre Lachesia también era suspicaz y celosa y tenía ese mismo temor al envenenamiento. Su padre Nuxo era simplemente suspicaz y celoso. Tenía tanto miedo a las enfermedades naturales, que el envenenamiento quedaba de Lado. Por las noches Apisinia soñaba que volaba. Por qué le sucedería ésto no? Tenía dos amiguitos, Atropino y Lycopio a quienes les sucedía lo mismo y siempre se contaban sus sueños. Además acontecía algo curioso: soñaba con una "niña". Una niña muy dulce, vestida de rosa con puntillas y volados, con ojitos celestes, rubia, los Labios bien rojos y un ramito de anémonas en una mano y una muñequita en la otra. Era La imagen de su primita Pulsarla (la misma que tampoco quería tomar agua cuando tenía fiebre). Un día le contó a su primita su sueño con lujo de detalles. La respuesta de Pulsaría fue muy breve. Yo sueño con Abejas!! Qué Tal?! Apisinia fue creciendo y llegó a la adolescencia; era muy laboriosa, siempre estaba haciendo algo. Pero tenía un defecto; el médico deda que era porque había crecido muy rápido y tenía confuso su esquema corporal. Lo cierto es que vivía rompiendo vasos, platos, jarrones, jarras, y hasta sifones; se le caían los objetos de la mano, era bastante torpe hablando mal y pronto. Un buen día comenzó a tener dolores en ei ovario derecho. Unos dolores terribles, punzantes, quemantes y taladrantes. El ginecólogo diagnosticó un quiste de ovario y ordenó la intervención quirúrgica. Su madre horrorizada recordó que ella había tenido el mismo problema en el ovario Izquierdo y que la había curado un homeópata sin necesidad de operarla. "Volando" La llevó a Apisinia al mismo homeópata que a pesar de tener algunos años más, se mantenía muy bien gracias a que estaba con su similimun y con la ayuda de la computadora, pues era un homeópata moderno, computarizado, le dio Apis y La curó. Síntomas • Genitales femeninos, aborto en los primeros meses, segundo, tercero, cuarto, (3 puntos) • Irritabilidad • Inquietud de noche • Gritos, en niños durmiendo • Recto, sensación de ano abierto • Defecación involuntaria en movimiento • Sed ausente durante el calor febril • Calor agrava • Bien, dice que esta, cuando esta seriamente enfermo. • Celos • Trastornos por celos 3

• Flatos ruidosos • Caminar rápidamente por ansiedad. Prisa caminando • Temor a pasar por ciertas esquinas • Temor a que caigan paredes altas y edificios sobre él • Temor a estar solo • Temor a la muerte estando solo • Confianza, falta de • Timidez • Temor a fracasar • Irritabilidad • Temor a perder el autocontrol • Impulso de tirarse desde un puente Argie, el apurado • Temor a las multitudes Argie era un chico flaquito, pálido y debilucho, muy desvalori- • Prisa zado . Tan anticipado él, que nació antes de tiempo. Pesó dos • Sueña con peces kilogramos al nacer y tardó mucho en recuperar peso, a Arnicco, el montañés pesar que su madre le daba el pecho concienzudamente y Había una vez, en las regiones montañosas del norte de Italia un viejo solitario, hosco, con mucho amor. chinchudo y rencoroso llamado Arnicco. Argie vivía con diarrea verde y nadie se explicaba el motivo. Al pobre Arnicco la vida lo había tratado "duramente" y fue por eso que decidió refugiarse en Su abuela Rosaura criticaba a su hija porque comía una cabana en la cima de las montañas viviendo como un ermitaño. demasiados dulces y ella sostenía que ésto provocaba la Bajaba al pueblo una vez por mes, para cobrar su pensión por invalidez, (pues lo había diarrea del pobre Aigie. Consultado el pediatra, éste último atropellado un auto hacía ya muchos años), pero fundamentalmente para comprar whisky y decretó que los dulces no tenían nada que ver y le echó la vinagre. culpa a una extraña enzima digestiva que faltaba en el Todas las noches se tomaba varias medidas de whisky para olvidar su triste historia, y el intestino de nuestro amiguito. Claro está, que no sabía vinagre lo usaba para todo; para la ensalada, para la sopa, para hacerse "friegas'' cuando homeopatía pues en ese caso hubiera suspendido los dulces recibía algún "golpe", o en sus doloridas articulaciones, pero la mayoría de las veces se lo a la madre y Argie hubiera curado en forma casi instantánea. tomaba directamente de la botella como si fuera vino; no por nada decían en el pueblo que Desde chiquito fue muy vertiginoso, se mareaba al mirar tenía un carácter tan avinagrado. hacia arriba o hacia abajo. Era muy temeroso. También tenía Los problemas de Arnicco comenzaron ya en el vientre de su madre, quien tuvo una fuerte muchísimos gases, le costaba trabajo eructar y eliminaba el caída durante el embarazo y recibió un duro "golpe". Casi pierde a su bebé, pero gracias al aire por el otro extremo de su intestino con unos ruidos destino y al reposo absoluto, el embarazo siguió adelante. A partir de esta caída, la espantosos. gestación fue muy "dura" para ella, pues cada vez que el niño se movía le producía unos Cuando viajaban en auto y el tráfico se estancaba pegaba dolores intolerables. unos gritos tan tremendos que su madre debía bajarse del El parto fue muy difícil y tuvieron que hacerle un fórceps que fue muy "traumático". auto y caminar y cuanto más rápido caminase era mejor. Era De "golpe" a los siete meses Arnicco tuvo una meningitis. Comenzó con grandes la única forma de calmarlo. escalofríos, cuanto más tiritaba, más colorada se ponía su carita. Su cabeza hervía A medida que fue creciendo se acrecentaron sus miedos, mientras todo su cuerpito y su pequeña nariz estaban heladas. tenía temor a que los edificios altos se le cayeran encima, El destino nuevamente quiso que Arnicco se salvara, pero solamente para recibir un temor a pasar por ciertas esquinas (una esquina es una nuevo golpe pocos años más tarde. bisagra) sería que en el fondo Argie no quería crecer o Fue durante un bombardeo en la Segunda Guerra Mundial que destruyó totalmente el madurar o sería simplemente miedo a lo desconocido? Tenia pequeño pueblo montañés. Los padres de Arnicco murieron instantáneamente y el niño miedo a quedarse solo y sentía temor a morirse estando quedó aplastado parcialmente debajo de un gran bloque de cemento. Fue rescatado con gran solo, cosa que también le pasaba a su primo Phosphy y a su dificultad y salvó su vida de milagro. amiguito Arsenio. No es de extrañar que se transformara en un niño triste, con aversión y miedo a que lo tocaran, Tenía mucha anticipación, salía de su casa tres horas antes que no quería que le hablaran (es más, se ponía sumamente irritable si le preguntaban algo y de lo necesario pero daba tantas vueltas para no pasar por por supuesto, él se negaba a contestar). No quería ni siquiera que se le acercaran por miedo a ciertas esquinas que al final casi llegaba tarde. ser tocado. Era un inseguro, tímido, débil y tembloroso pareciéndose a su - Pobre Arnicco!! Qué vida tan "dura" y miserable!!! Por las noches despertaba llorando, pues amiguito Gelsemio, del cual hablaremos en otro momento. soñaba repetidamente que un rayo caía sobre él y lo fulminaba. Esta falta de confianza, este temor a fracasar le provocaban Así a los "golpes" Amicco fue creciendo y se transformó en un hombre. gran irritabilidad y tenía un carácter bastante "repodrido", tan Esta fue la mejor época de su vida, (en realidad la única más o menos agradable). Conoció a repodrido que sentía temor a perder el autocontrol. María, una jovencita hermosa, cariñosa y compasiva que sintió lástima por él (pero no se lo dijo Al llegar a la adolescencia sus padres se asustaron mucho nunca, pues Arnicco no se lo hubiera perdonado) y se enamoraron, se casaron, fueron felices y pues sentía el impulso repentino de tirarse desde un puente. comieron perdices (solamente perdices, pues Amicco odiaba la carne). Consultaron a un homeópata que le dio Argentum Nitricum y Arnicco "adulaba" a María y conseguía de ella cualquier cosa (vayan tomando los síntomas de Argie hizo unos cambios mentales fantásticos. Perdió sus María para ponerle un segundo nombre. Yo la llamaría María Pulsatia). temores, adquirió seguridad, desapareció su vértigo, su temor A pesar de su carácter "repodrido", Arnicco era muy dulce y con ésto compensaba su falta de a las multitudes, su anticipación, su temor al fracaso, su afecto y su dictatorialidad. temor a la muerte estando solo, su prisa y porque no decirlo Pobre Arnicco, siempre "esperando lo inesperado que viene de golpe": también sus diarreas y sus úlceras mucosas. Además nunca La vida volvió a golpearlo, pues María Pulsatia lo abandonó de un día para otro y se fugó con el más soñó con peces que era un sueño que se repetía desde carnicero del pueblo.- Qué ironía!! Justo con el carnicero!! su más tierna infancia. Arnicco quedó atontado, somnoliente e indiferente y frente a los comentarios del pueblo entero Síntomas que se compadecían de él, se volvió totalmente hosco; empacó sus escasas pertenencias y se • Débil (Postración) fue a vivir a la cima de la montaña. • Anticipación, trastornos por Allí vivió durante años con sus cabras, su whisky y su vinagre, hasta que un día hubo • Diarrea, materia fecal verde • Diarrea por azúcar una avalancha terrible en la montaña y su pequeña cabana quedó "aplastada" bajo el • Vértigo mirando hacia arriba peso de las enormes piedras. • Vértigo mirando hacia abajo Un grupo de alpinistas que pasaba por allí alertó a las autoridades del pueblo que • Eructos ruidosos mandaran a los socorristas con sus perros adiestrados y pudieron encontrar el cuerpo • • • • • • • • • • •

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Aversión al agua Suspicaz Temor a ser envenenado Sueña que vuela Sueña que él es una niña Laborioso Extremidades, torpeza, manos, deja caer cosas Genitales femeninos, dolor de ovario derecho Dolor de ovario punzante Dolor de ovario ardiente Dolor de ovario taladrante

del pobre Arnicco. - "¡¿Cómo estás Arnicco??!! preguntaba el médico del pueblo. - "Bene, Bene!!", -contestaba Arnicco-. - "¡¡Ritorna a casa!!, lo sonó bene!!", -respondía saliendo del estupor por unos instantes y volviendo a caer en estado comatoso. - "¡¡Non mi toccare!!, -gritaba-. No era para menos, pues estaba todo magullado, todo lleno de hematomas, lleno de golpes. Realmente se le había venido el mundo encima. Para colmo tenía un aliento espantoso, unos eructos con olor a huevos corrompidos y eliminaba flatos horrendos con olor similar a los eructos. No se le podían acercar. Por fin lograron ponerlo en una camilla. - "¡¡Qué duro es esto!!, -gritaba Amicco hasta quedarse afónico-.Su cabeza estaba hirviendo y su cuerpo helado. - "¡¡Dottore!!, Me voy a morir!!", -gritaba-. - "No te vas a morir nada!!, -contestaba el médico del pueblo-, mientras le ponía unos globulitos en la boca cada cinco minutos, sin que él se diera cuenta, pues no quería tomar el medicamento. Así, a los "tumbos", pudieron bajarlo al pueblo. Lo internaron en el Hospital y siguieron dándole globulitos y más globulitos. Y se produjo un cambio asombroso!! Arnicco salió del coma profundo, curó sus hematomas, se le fue el humor "podrido" y el aliento "podrido", se enamoró de La enfermera que lo cuidaba, se volvió más dócil, menos huraño, menos hosco, se le fue el rencor y se quedó a vivir para siempre en el simpático pueblito del norte de Italia con su nueva mujer, que lo cuidó con mucho amor por el resto de sus días, que por cierto fueron muchos y muy hermosos. Síntomas • Compañía, aversión a la • Hosco • Humor repulsivo • Malicioso (rencoroso) • Deseo: whisky • Deseo: vinagre • Aborto después del traumatismo • Abdomen, movimientos del feto dolorosos • Cara, decoloración roja tiritando (e) • Cabeza calor: con frialdad del cuerpo • Tristeza • Tocado, aversión a ser • Temor a ser tocado • Temor a ser golpeado por los que se le acerquen « Hablen, aversión a que le • Irritable cuando le preguntan • Contesta: aversión a contestar • Llanto al despertar • Sueña: que un rayo lo parte (e) • Compasión, aversión a La • Aversión a la carne • Adulador • Dulzura • Dictatorial • Temor a que algo ocurra • Embotamiento con somnolencia • Indiferente a todo • Bien contesta aunque este gravemente enfermo • Irritable, manda al doctor a su casas dice que no esta enfermo • Contesta correctamente cuando se le habla pero el delirio y La inconsciencia vuelven inmediatamente • Aversión a ser tocado • Boca, olor pútrido • Eructos como huevos podridos • Flatos como huevos podridos

• Ilusión que la cama es dura • Afonía por gritar • Muerte, presentimiento de • Rehusa tomar el remedio Atropino, ángel o demonio Esta no es una historia clínica real sino un cuento producto de mi fantasía. Me pareció una forma amena de estudiar materia médica, ridiculizando por momentos a los personajes o exagerando las situaciones . con fines didácticos. Atropino nació fuerte y vigoroso, sus padres, Juana y Pedro se amaban tiernamente y recibieron con profunda emoción y alegría el nacimiento de su primer hijo. Nadie sabía porqué le pusieron un nombre tan extraño, Atropino, pero como ustedes saben nada es casualidad en este mundo. Fue un bebé buenísimo (todo colorado él, sobre todo, su carita). Tenía un único inconveniente; desde el mismísimo día de su nacimiento nunca, pero nunca durmió una noche de corrido. De más está aclarar que sus padres tampoco. Pero ¡Qué importancia tenía ésto comparado con su dulzura y benevolencia!. Fue un bebé precoz, un genio, gateó antes de los 6 meses, caminó a los 8 y decía palabras sueltas a los 9. "Una maravilla", decían sus abuelos. A los 15 meses estrenó su primera fiebre ¡Qué susto! 41° C. Deliraba, se quejaba, al tocarlo quemaba; sin embargo tenía los pies y las manos heladas, su corazón latía a mil, tenía muchísima sed y pedía limonada a gritos; imagínense que hasta hizo una convulsión!. Según su abuela materna que de eso sabía mucho, fue porque estaba cortando las muelas. Qué loco se puso cuando estuvo enfermo! Se irritaba por cualquier cosa; se ponía colorado, se le hinchaban las venas del cuello, no quería que lo tocasen, pegaba, pateaba y revoleaba sus juguetes con una puntería fantástica hacia sus progenitores o cualquier otra persona que estuviera cerca. Imagínense que hasta cantaba cuando tuvo tanta fiebre!. ¡Qué lejos estábamos de aquel bebé dulce y dócil!. Por suerte la fiebre pasó, pero ya nunca fue el mismo de antes. No sólo continuó el insomnio sino que comenzaron a notar que dormía, (cuando dormía) con sus ojitos entreabiertos, crujiendo los dientes con un ruido atroz, llorando, pateando, riéndose a carcajadas, quejándose y gritando. En realidad hacía tantos ruidos durmiendo que sus resignados padres ya no discernían si era mejor que durmiera o que estuviera despierto. "Ese chico debe tener parásitos" decretó la abuela paterna. A esta, altura del partido nos preguntamos cómo toleraban Juana y Pedro semejante manicomio. La respuesta es sencilla; seguía siendo un niño muy dulce, benevolente y tranquilo; un verdadero "angelito". Este "angelito" fue creciendo y llegó el momento de comenzar jardín de infantes. La maestra quedó encantada con él; dibujaba, reconocía los colores, y hasta las letras y los números. Seguía llamando la atención por su precocidad, "hasta que mostró la hilacha". En un sólo día mordió a cinco compañeritos, pateó a la directora.y arrojó varios objetos a cuanta persona intentó acercarse. Parecía un perro rabioso. Cuando Juana, harta ya de esta situación, lo retó simplemente, se largó a llorar con tanto sentimiento que su madre decidió no repetir más la admonición por un tiempo prudencial. Atropino, ofendido se sentó calladito en un rincón y se dedicó a romper en pequeños trozos una caja entera de escarbadientes que robó de la cocina. Y así fue pasando el tiempo y nuestro pequeño "ángel" comenzó primer grado ¡Qué- drama con las cuentas! Las matemáticas definitivamente no eran para él. No sabemos que fue peor; si las matemáticas o tener que usar camisa y corbata (no soportaba los cuellos). Fue el primero en introducir en el grado los cantitos obscenos, principalmente dirigidos a la maestra. Tuvo dos frustrados intentos de incendiar el laboratorio de ciencias naturales, pero como la tercera es, la vencida, prendió fuego a la cortina de la cocina de su casa y por poco termina aquí su historia. Quisiera consignar que seguía siendo hijo único, no porque sus padres fueran estériles, sino que simplemente no soportaban la idea de tener un Atropino BIS. Atropino tenía otra serie de "virtudes". Calumniaba a sus compañeros de clase, se traía cosas "prestadas" de la escuela o de casa de sus amigos. Una vez en pleno ataque de cólera amenazó con matar a un compañero e intentó ahorcarlo. Lo increíble es que a pesar de toda esta agresión era él quien se quejaba permanentemente que él era injuriado. Eso sí, en la escuela actuaba en todas las fiestas pues tenía una capacidad de imitación fabulosa: un mimo casi perfecto. Además seguía siendo buenazo. Podía quedarse sin comer por darle su sandwich a un chico pobre o regalar su campera o sus zapatillas. Era sumamente compasivo. A pesar de su carácter imbancable era bastante miedoso; no podía ver un perro a menos de 100 metros sin que le causara pánico. Al mar no se metía por nada en el mundo. Tenía miedo hasta de cruzar la calle. Despertaba aterrorizado e imaginaba que había algo debajo de su 5

cama. Sentía ganas de escapar y temor a los fantasmas y a los ladrones. Cuando les contó a sus padres que soñaba que volaba, la situación se tornó intolerable. Pedro volvía a casa cada vez más tarde con diferentes excusas y Juana vivía en pleno ataque de histeria, hasta que un día Doña Rosa, su vecina, comentó tímidamente: ¿Por qué no lo llevan al Atropino a un homeopático?. Atropino estaba por cumplir 9 años, llevaba tres años de psicoterapia sin grandes resultados y sus padres aceptaron el consejo. Gracias a Doña Rosa, al homeópata que le dio Belladona y a Hahnemann que nos legó la homeopatía, Atropino se curó en forma mágica y milagrosa. A continuación presento una lista de los síntomas llevado a lenguaje repertorial por orden de aparición. Síntomas • Insomnio: en recién nacidos • Insomnio: en niños • Dulzura • Benevolencia • Precoz (agregado) • Quejidos durante el calor febril • Delirio durante la fiebre • Fiebre ardiente • Manos frías durante la fiebre • Pies fríos durante la fiebre • Sed: durante la fiebre • Deseo: Limonada. • Convulsiones: en niños • Convulsiones: calor febril (Agregado) • Convulsiones: por dentición • Irritable por bagatelas • Cara roja por colera • Aversión a ser tocado • Canta durante la fiebre • Pega • Patea • Arroja objetos a personas • Ojos: entreabiertos durante el sueño • Bruxismo: durmiendo • Ríe: durmiendo • Patea durmiendo • Grita: durmiendo • Morder en niños (E) • Llanto por admonición • Inepto para las matemáticas • Ropa ajustada, en cuello, agrava • Incendiario • Callado • Rompe alfileres o palitos • • Compasivo • Imitación: mímica • Deseo de matar • Cantos obscenos (agregar) • Cleptomanía. • Ilusión que es injuriado • Temor a los perros • Temor al agua • Temor a cruzar la calle (ag.) • Temor al despertar • Temor a que haya algo bajo su cama • Temor fantasmas • Temor ladrones • Escapar: deseo de • Sueña que vuela Baryto, el retardado Baryto nació muy chiquito y tardó mucho en crecer. Su abuela 6

Rita decía que era tan pequeño porque su madre se había pasado el embarazo hablando permanentemente y toda la energía se le había escapado por la boca.-Qué ignorante la señora!!!! Pero en algo tenía razón, su mamá no era muy locuaz, salvo en los embarazos o durante la menstruación, donde la confundían con su cuñada Lachesia. Esta última hablaba siempre, con o sin embarazo y también peor cuando estaba menstruando. Además, de chiquito Baryto parecía un viejito, todo arrugadito, siempre con los ganglios del cuello agrandados, la nariz tapada, la boca abierta, respirando con dificultad. Su odontólogo decía que nunca habla visto un "paladar ojival" como el suyo. Baryto tardó en caminar, dio sus primeros pasitos después de los dos años, habló tardísimo y parecía medio tonto. Claro que si lo comparaban con Boraxio o Natrumia, sus primitos, eran todos más o menos parejos. En realidad eran retardados los tres. Era sumamente tímido y vergonzoso (seria por eso que tenía aversión a jugar con otros chicos?), se escondía detrás de los muebles cuando venían visitas o escondía su carita detrás de sus manos con los dedos entreabiertos y espiaba entre ellos. Era tan tonto que se creía que con esta maniobra no lo veían. Siempre tenía miedo a que algo ocurriese, como Causticia, Phos-phy y Nuxo, y era el chico más miedoso del repertorio junto con Calcárea, Causticia y nuestro buen amigo Lycopio, infaltable en casi todos lados. Bueno, por supuesto era reinseguro, tan inseguro que iba transpirando mientras caminaba por la calle. Un día, cuando fue más grandecito, su madre lo mandó a comprar fruta. -"...Señor, señor... déme medio kilogramo de uvas... a ver, a ver ... no, mejor un kilogramo de duraznos. Estarán maduros los duraznos??? ... mejor déme un kilogramo de ciruelitas ..." "Nene!!!", -le dijo el verdulero-, "porque no te decidís de una vez por todas!!! Te crees que tengo toda la tarde para atenderte a vos? ... Sos tonto o te haces?". Baryto se tapó la carita con sus manitos abiertas como protegiéndose y volvió a casa con las manos vacías. - "!Si serás tarado!!", -le dijo su madre que de psicología sabía bien poco. Es lógico que con toda esta historia se sintiera abandonado como si no tuviera amigos. Quién se iba a juntar con semejante tonto. Como consecuencia de ésto, desconfiaba de todo y de todos, y volcaba toda su energía en armar prototipos de autos y aviones, pues era muy prolijito y trabajador. Solía juntarse con su amiguito Silicio (el único que tenía) a quien también le encantaba armar autos, barquitos y aviones, pero en cuanto terminaban Silicio escapaba, pues a pesar de ser tímido como Baryto, era brillante, inteligente, vivaz y se aburría horrores en su compañía. Baryto vivía resfriado, con mocos, las amígdalas enormes, su voz era nasal, gangosa. Comía poco, pues la comida casi no podía pasar entre sus grandes amígdalas hipertrofiadas. Se empeoraba con el frío y el menor cambio de tiempo; tenía otitis a repetición por obstrucción de la Trompa de Eustaquio, hasta que un día sus padres lo llevaron a un otorrinolaringólogo que le sacó las adenoides, le extrajo las amígdalas y le colocó un par de diábolos en los oídos. Y saben una cosa? Baryto se curó!! Claro que siguió siendo un tarado toda su vida y se murió de viejito de un aneurisma disecante de aorta. Síntomas • Locuaz durante el embarazo (E) • Locuaz durante la menstruación • Cara expresión envejecida • Garganta externa, hinchazón de ganglios Cervicales • Nariz, obstrucción nasal • Extremidades, caminar aprendizaje tardío • Hablar, lento para aprender a • Timidez vergonzosa • Jugar, aversión a, en los niños • Esconderse, niño piensa que todas las visitas se ríen de él y se esconde detrás de los muebles (E) • Niños, que se cubren la cara con las manos, pero miran a través de los dedos (E) • Temor a que algo ocurra • Temor en los niños • Confianza, falta de • Transpiración caminando (ag) • Irresolución por bagatelas • Abandono, siente que no tiene amigos (Ag) • Suspicaz • Concienzudo • Garganta interna, agrandamiento de amígdalas • Frio agrava • Cambio de tiempo agrava (Ag)

• Pecho aneurisma de grandes arterias Carcinino, el saltarín El pobre Carcinino tuvo problemas a partir del momento de su concepción. Tuvo un embarazo complicado. Sus padres corrían de aquí para allá, estaban tristes y preocupados pues OH! casualidad sus dos abuelas, la paterna y la materna enfermaron de cáncer. Ambas tenían cáncer mamario igual que la bisabuela paterna y la tía abuela materna. Se ve que eso les venía de familia. Como dije antes, su madre estaba triste y preocupada y dejó de poner música alegre. Por eso Carcinino no bailó en la panza de su madre. De haber sido una situación menos angustiante hubiera bailado de lo lindo. Pero ya se desquitaría más adelante. Carcinino era muy anticipado. No sabemos si fue por eso o por las corridas de su madre, pero lo cierto es que nació antes de tiempo. Fue un bebé menudo, inquieto, vivaracho'con unos ojos enormes de color celeste intenso que parecían aún más grandes pues sus escleróticas también eran azules. Tenía algunas manchas color café con leche y muchísimos lunares. Por suerte y gracias a Dios sus abuelas mejoraron y volvieron a escuchar música en casa. Ya a los tres meses seguía el ritmo de la música con su piecito. A los cinco meses se sentó y se hamacaba al compás del lavarropas y a los siete meses bailaba hasta con la sirena de las ambulancias. Caminó a los nueve meses y hablaba muchísimo al año. Fue un niño precoz. Adoptaba para dormir la posición genupectoral con su colita parada y esto lo hizo hasta ya pasados los tres años. Bueno, dormir, dormir no durmió nunca bien. Sus pobres padres nunca durmieron una noche entera desde el mismísimo día en que nació. Pero era un "dulce de leche", alegre, afectuoso, regalón, mimoso y saltarín. Siempre dando pasitos de baile y moviéndose rítmicamente al son de cualquier ruido. También por momentos se ponía fastidioso; cuando se empacaba ni Cristo lo hacía cambiar de idea, se ofendía fácilmente y lloraba si lo retaban. Era sumamente inquieto, le encantaba salir a pasear y viajar en cualquier medio de locomoción igual que su primo Teky. En realidad se parecía bastante a Teky en otras cosas; en su posición para dormir, en su obstinación, en su compasivídad. Ya desde chiquitos mostraban sensibilidad frente al dolor ajeno, aunque a Teky lo agregaron después. A los dos les gustaba muchísimo ir a veranear a la playa. Los padres de Carcinino decían que el aire de mar les hada bárbaro y los padres de Teky decían que los chicos se volvían locos e histéricos. Nunca se ponían de acuerdo. En realidad ambos tenían razón pues podían mejorarse o agravarse a orillas del mar. Ambos sentían el mar. Cardnino podía sentir miedo a las tormentas pero a su vez le traían júbilo y alegría. Bailaba al compás de los truenos . A lo que sí temían era a los perros y otros animales y a La oscuridad. Sentía miedo en el estómago (Vijnosky) igual que Phosphy, Nuxo, Lycopio y algunos otros de sus amigos. A Cardnino le gustaba la sal, los huevos, las frutas pero sobre todo el azúcar. Cuando agarraba la azucarera no había forma de desprenderlo y se ponía como loco; era bastante caprichoso. Un día sus progenitores se pelearon: discutieron muchísimo y pareda que se separaban. Carcinino escuchó todo y esa misma noche levanto 40° de temperatura; deliraba y tuvo un broncoespasmo refuerte, como dicen los adolescentes. Llamaron a su pediatra, un tal Doctor Foubister que por suerte era homeópata y "zafó" del antibiótico pues con una dosis de Carcinosinum 200 en plus se curó rápidamente. Además después de tremendo susto sus padres no pelearon más y colorín colorado este cuento se ha acabado.

Cardnino igual ya sabía que su cuento iba a tener un final feliz pues era darividente. Síntomas • Antecedentes familiares de cáncer, TBC, Anemia Pemidosa, Diabetes (Ag. El Rubro) • Movimientos del feto siguiendo el ritmo de la música (Ag) • Antiápadón, transtornos por • Inquietud en niños (Ag) • Ojos, azul coloradón de conjuntivas • Piel, decoloradón manchas marrones (Ag) • Piel, lunares (Ag) • Baile en niños (Agregar Rubro) • Precoz • Sueño posición genupectoral, (este síntoma debe tomarse en cuenta si persiste después del tercer año de vida) • Insomnio en niños • Dulzura (Ag) • Alegría • Afectuoso (Ag) • Fastidioso • Obstinación en niños (Ag) • Compasivo • Oféndese fácilmente • Llanto por admonición • Viajar, deseo de • Mejora a orillas del mar • Empeora a orillas del mar (Ag) • Temor a las tormentas • Alegre cuando truena y relampaguea • Temor a los perros • Temor a la oscuridad (Ag) • Temor que surge del estómago (Ag) • Deseo de sal • Deseo de huevos • Deseo de frutas • Deseo de a2Úcar • Transtornos por situaciones familiares conflictivas o por presión familiar (Agregar Rubro) • Clarividencia (Ag) Chamomio, el imbancable Chamomio nació gritando. Todavía no habían salido sus hombritos del canal del parto pero él ya gritaba y gritaba. El personal de sala de partos se asomaba a mirar, pues pensaban que habían nacido quintillizos por el escándalo que había. Su madre tuvo un parto difícil, con muchísima sed durante los dolores y una hipercontractibilidad uterina, con rigidez del cuello y contracciones en reloj de arena. Sufrió muchísimo. Chamomio era un bebé muy sensible; ya desde chiquito le molestaba que lo miraran, que le hablaran y que lo tocaran y sólo se calmaba, a veces, si era paseado en brazos. Otras veces había que pasarlo de los brazos de su madre a los de su padre, a los de sus abuelos, su tía, la mucama, etc Cuando quería algo lloraba y lloraba. Se ponía colorado como un tomate y transpiraba horrores con un sudor caliente. Si no le daban lo que quería al instante se ponía cada vez más irritable y finalmente, aunque le dieran lo que pedía, no lo aceptaba y lo revoleaba por el aire. Chamomio temía al viento, que además le hacía daño. Siempre le ponían gorritos que le taparan las orejas pues el viento frío le producía otitis muy dolorosas. Su madre ya sabía que estaba por enfermarse pues se le ponía un cachetito colorado, mientras el otro permanecía pálido. Chamomio con fiebre daba mucha pena; suspiraba, se quejaba, se ponía sumamente irritable, y nadie le tenía paciencia. La pena se transformaba en bronca y ganas de tirarlo por la ventana. Una tarde estaba tan imbancable que su padre le gritó, perdió los estribos y le dio un chirlo. Para qué! Se puso como loco y le agarró una convulsión. Qué susto se dieron! Desde ese día prefirieron aguantar al "dictador" pero no volvieron a pegarle. A ese chico le hace falta un tecito de manzanilla (decía su abuela). No seas antigua mamá! respondía su madre que estaba al borde de un ataque de nervios. Cada vez que cortaba un diente empeoraba su carácter y solía tener unas diarreas terribles de color verde como espinacas picadas o amarillas como huevos revueltos. Cuando cortó sus muelitas estuvo muy mal, figúrense que hasta repitió una convulsión. Todos decían que Chamomio era tan Imbancable pues su madre había sufrido tanto durante el parto, pues había estado muy irritable, dolorida e insoportable y no estaban demasiado equivocados. Es probable que si la hubieran medicado homeopáticamente en ese momento, el parto hubiese sido fantástico y la medicación hubiera pasado por la placenta a Chamomio y hubiera estado más equilibrado desde su nacimiento. Qué medicamento le hubieran dado ustedes? Síntomas 7

• Gritos en niños • Sed con los dolores • Parto demasiado doloroso • Contracciones uterinas en reloj de arena • Sensible (Hipersensible) • Miren, no puede tolerar que lo • Hablen, aversión a que le • Tocado, aversión a ser • Alzado, llevado en brazos desea • Cara, decoloración roja • Cólera con rostro rojo • Cabeza, transpiración de cuero cabelludo, caliente • Caprichoso," desea cosas que rechaza cuando se las ofrecen • Arroja cosas • Temor al viento • Dolor de oído por viento frío (Ag) • Cara, decoloración un lado pálido el otro rojo • Suspiros durante el calor febril • Quejidos durante el calor febril • Irritabilidad durante el calor febril • Convulsiones después del castigo • Dictatorial • Irritable durante la dentición • Diarrea durante la dentición • Materia fecal entrecortada como espinacas • Materia fecal entrecortada como huevos • Convulsiones durante la dentición • Irritable durante el parto Chan-Chi-Chuan y el malhumor Había una vez hace muchos muchos años en un país muy lejano llamado China una niñita llamada Chan-Chi-Chuan. Su historia era muy triste pues su madre luego de un parto muy difícil (pues tuvo convulsiones y una hemorragia muy profusa) se volvió loca. Así fue como Chan quedó definitivamente "abandonada" a su suerte. Fue criada por su tía paterna llamada Chun-Chi quien la amamantó hasta los dos años de edad pues acababa de tener un bebé y los crió como mellizos, con mucho amor y dedicación. A pesar de su cariño Chun notaba que la conducta de los niños era totalmente diferente; mientras su hijito aceptaba sus caricias con verdadero éxtasis, Chan desde muy pequeña las recha2aba. En realidad era mucho más que un rechazo: montaba en cólera, lloraba como enloquecida y cuanto más la intentaban calmar peor se ponía (consuelo agrava *y acariciado agrava su malhumor). Agotada por este comportamiento Chun-Chi decidió destetarla. Para qué lo habrá hecho! Chan-Chi tuvo una diarrea tan espantosa que casi se muere. Tuvieron que hidratarla con agua de arroz, ya que en esa época no existían los "sueros de rehidratación oral y mucho menos la hidratación parenteral". Gracias a Dios superó este trance, pero a partir de ese momento su carácter se agravo más todavía. Era muy malhumorada, mandona, resentida y echaba la culpa de lo que le sucedía a quienes la rodeaban. Ella nunca era culpable de nada. Siempre los responsables eran los "otros". Se sentía perseguida; decía: "a mí me ponen trabas"; "a mi no me dejan"; pero si intentaban ayudarla no lo permitía pues era sumamente altanera y para colmo despreciativa. - "Yo no necesito ayuda, yo lo hago mejor solita, vos no sabes nada". Para colmo vivía reprochando a todos y rumiaba su triste historia diciendo: - "Claro, mi mamita se volvió loca y me abandonó y ustedes no saben nada y nadie me quiere y todos tienen la culpa de lo que me pasa. "No me dejan vivir en paz". 8

Como estaba tan desequilibrada un buen día se enfermó. Escalofríos, fiebre altísima y luego una transpiración profusa que empapó su camita y hasta pasó el colchón, que la dejo débil como un trapito. Ya parecía que había pasado todo cuando a las 48 horas repitió el mismo cuadro. Lo llamativo era que no tuviese sed. Claro que con tanta transpiración estaba nuevamente a punto de deshidratarse (igual que cuando la destetaron). A Chun le llamó mucho la atención que su transpiración manchaba de amarillo las sábanas, cosa que sucedió nuevamente 48 horas después. Alarmados llamaron al médico de la familia quien diagnosticó una enfermedad muy grave, con un nombre en chino muy complicado, pero que yo intuyo debe haber sido algo muy parecido al paludismo. Chan estaba muy, muy débil, había perdido mucho líquido, su carita estaba de color negro, estaba indiferente a todo, sobre todo durante la fiebre, que llamativamente mejoraba comiendo. Los ojos le pinchaban y tenía la sensación de tener arena dentro de ellos y si se los restregaba le salían unos lagrimones ardientes que le lastimaban las mejillas. Pobrecita daba lástima. Se fue recuperando muy lentamente, pues no tenía apetito. Esto estaba agravado por el hecho que estaban en temporada de lluvias y nieblas y Chan siempre comía menos cuando había neblinas. Pero a la noche sí que tenía hambre. Se despertaba y sigilosa como un gato se dirigía a la cocina y se comía todo el chop-suei que había sobrado del día anterior, pero eso sí; le agregaba muchísimo condimento bien picante, de ese que preparaba su abuelo Tao-Chi. Lo preparaba especialmente pues decía que no solamente curaba la anemia crónica que padecía toda su familia, sino que también la prevenía. Chan por las noches también robaba dulces, que le encantaban, a pesar que le manchaban de negro sus dientitos. Chan era muy miedosa; sobre todo temía a los perros y a los fantasmas. Tenía temor a ser tocada y seguía odiando las caricias o que le tuvieran lástima. Se sentía muy infortunada, y su única alegría consistía en esperar que terminaran de cenar y poder acostarse, sola en su camita, donde daba rienda suelta a su imaginación. Fabricaba castillos en el aire y hacia grandes planes para el futuro, extravagantes y fantasiosos. Claro que por la mañana todo desaparecía como por encanto y volvía a ser la misma niña triste, taciturna, rencorosa, malhumorada, codiciosa y envidiosa. En sus momentos de mayor fastidio decía que la habían "vampirizado". Una tarde, de la bronca que tenia, se dio un atracón de fruta. Para qué!!! La diarrea fue infernal, peor que la del destete y ya no funcionó el agua de arroz. Llamaron a un famoso médico hindú que mandó preparar unos polvitos, producto de una planta muy exótica Proveniente de América que fue llevada a Asia por los jesuitas, que se llamaba Cinchona officinalis y saben ustedes una cosa? Chan se curó rápidamente y hasta mejoró su mal humor. Síntomas • Convulsiones con hemorragia • Insania después de hemorragia • Abandono • Cólera por caricias (Ag) • Llanto por caricias (Ag) • Malhumor agrava por caricias (Ag) • Caricias agravan (Ag) • Consuelo agrava • Diarrea después del destete • Irritable • Dictatorial • Malicioso • Altiva • Despreciativa • Reprocha a otros • Transpiración profusa-debilitante • Fiebre sin sed • Periodicidad cada dos días • Transpiración manchando de amarillo • Cara decoloración negra • Indiferencia durante la fiebre • Fiebre, mejora comiendo • Ojos, sensación de arena • Ojos, lágrimas ardientes • Apetito disminuido en tiempo neblinoso • Apetito aumentado de noche • Deseo de condimento • Anemia (por pérdida de líquidos vitales) • Deseo de dulces • Dientes, decoloración negra • Temor a los perros

Temor a los fantasmas Temor a ser tocada Infortunada Planes hace muchos Planes hace muchos de noche (E) Tristeza Melancolía Envidia y codicia Diarrea por fruta Cyclalia, la solitaria Había una vez una niña muy hermosa. Se llamaba Cyclalia. Tenía dos hermanas, la mayor Pulsatia y la menor, Seria. Fueron abandonadas por su madre siendo las tres muy pequeñas. Las tres niñas sufrían el abandono cada una a su manera. Pulsatia y Cyclalia tenían !a sensación de estar solas en el. mundo, igual que su prima Platina, la orgullosa y despreciativa que andaba por ahí mirando a todos desde arriba, con su aire de superioridad y soberbia. Setia en cambio se quejaba que su padre no la quería, que sus amigos no la querían y menos la quería su madre pues la había abandonado. Ya desde chiquita Setia sentía que no cumplía ninguna función en este mundo y eso la .ponía muy triste. Se pasaba el día limpiando y fregando, rezongando, refunfuñando y limpiando sobre lo que estaba limpio. Pulsatia tan afectuosa ella, reemplazó rápidamente asu madre con su tía Eulalia, y se pasaba los días con sus tíos y primos; pero como era bastante egoísta no se preocupaba mucho por sus hermanas menores. Cyclalia como ya dije era hermosa, pero tenía sus defectos. Tenía un ojito desviado; el izquierdo se le iba para adentro y los chicos en la escuela se burlaban. Para colmo esto le provocaba visión doble y mucho vértigo. Veía halos de colores alrededor de la luz y alguna que otra vez veía solo la mitad izquierda de los objetos, pero nunca se lo contó a nadie por miedo a que la tomaran por loca. Ademas era muy friolenta y no quería salir de su casa. Su hermanita Setia también era friolenta pero decía que tenía miedo a salir de casa. Las tres hermanas eran muy dulces, y además compasivas. Pulsatia fue compasiva desde siempre, a Setia y a Cyclalia las agregaron después. Eso sí, había una marcada diferencia entre las tres. A Pulsatia le encantaba que la consolaran cuando estaba triste, mientras Cyclalia y Setia rechazaban el consuelo. Las tres le tenían miedo a la pobreza. Pulsatia y Setia eran bastante avaras ( e n esto se parecían también a la prima Platina, esa que se creía una gran persona). Siempre pedían descuento en la verdulería, en la carnicería, en la tienda. Cyclalia no hacia esto, pero se sentaba solita en un rincón y cavilaba hundida en profundos pensamientos. Siempre prefería estar sola, todo lo contrario de Setia y Pulsatia que tenían miedo de quedarse solas en casa. Pulsatia y Cyclalia compartían unsueño, soñaban con monedas de oro. Tendría esto relación con su miedo a la pobreza?. Cuando llegaban las navidades toda la familia, incluida la tía Eulalia y los primos se reunían y comer lechón.iqué pataletas se agarraban Cyclalia y Pulsatia!. Lo único que las curaba y les hacia bien era tomar limonada, cosa que por otro lado les encantaba. Dentro de todo era una costumbre bastante aceptable, no como la locura de Setia que podía tomarse una botella de vinagre si se descuidaban y La dejaban a su alcance. ¡Con razón tenía un carácter tan avinagrado!. Cyclalia tampoco era una maravilla: era terca como una muía, criticona e irritable, hosca y malhumorada y siempre se • • • • • • • • •

aislaba quejándose que la perseguían. Cuando llegó a la adolescencia, ahí sí que empezaron sus problemas!!, comenzó a salirle leche por el pezón y cuando esto desapareció empezó a tener la sensación que le salía aire por los pezones. Esto tampoco se lo contó a nadie pues tenía miedo que la llevaran directo al manicomio. Sentía que tenía algo vivo en su abdomen, cosa que le dio un pánico terrible, pero no se lo contó a nadie pues era sumamente reservada (en esto de lo reservada era bastante parecida a Pulsatia). Sus menstruaciones eran normales de día y cesaban totalmente durate la noche. Cuando se lo comentó a Pulsatia ésta le contestó: Eso es "completamente normal". A mi también me pasa. En la escuela le iba bastante bien salvo cuando tenía que pasar al frente y leer en voz alta: le agarraban unos ataques de hipo terribles y tenían que mandarla de vuelta a su asiento. Era muy insegura y sufría muchísimo de anticipación antes de las pruebas. Además estaba siempre triste y sentía que no había cumplido con su deber. Un día Cyclalia se puso de novia y La cosa iba en serio. El novio fue invitado a cenar y se apareció con una hermosa planta de regalo. Tal fue la alegría y el gozo de Cyclalia que casi se descompone, le dio un dolor de cabeza terrible. Su novio le había traído su planta preferida, una hermosa violeta de los Alpes. Síntomas • Abandono • Ilusión que esta sola en el mundo • Ojos, estrabismo convergente de ojo Izquierdo • Ojos, diplopía • Vértigo transparente (Margaret Tyler) • Visión, círculos de colores alrededor de La luz • Visión, hemiopía, pérdida de la mitad derecha • Salir de su casa, aversión a • Dulzura • Compasiva (Ag) • Consuelo agrava (Ag) • Temor a la pobreza (Ag) • Cavila, hundida en profundos pensamientos • Compañía, aversión a, solo mejora • Sueña con dinero (monedas de oro) • Generalidades, comida, cerdo agrava • Deseo de Limonada • Obstinada • Censor • Irritable • Humor alternante extremo • Ilusión que es perseguida (Ag) • Pecho, leche en mujeres no embarazadas • Pecho, aire brotando de los pezones, sensación de • Abdomen, vivo, sensación de algo • Reservado • Genitales femeninos, menstruación solamente de día • Estómago, hipo leyendo en voz alta • Confianza falta de (Ag) • Anticipación trastornos por (Ag) • Tristeza • Ilusión que ha descuidado su deber • Cabeza, dolor por gozo excesivo Gelsemio, el tembloroso Gelsemio era un niño flacucho y débil, tímido y anticipado. Tan anticipado él que al igual que suprimo Argie, nació antes de tiempo. Su abuela sostenía que el parto se adelantó debido a un susto muy grande sufrido por su madre. Fue por recibir una mala noticia. A las veinticuatro horas de vida Gelsemio comenzó a temblar. Le temblaba el mentón, los brazos, las piernas; era todo un gran temblor. El neonatólogo ordenó un dosaje de calcio que fue normal y Gelsemio seguía temblando. Por suerte su tío que era homeópata le puso un globulito en la boca y asunto superado. Rápidamente se recuperó, aumentó de peso y fue creciendo bien. Tenía diarrea cada vez que cortaba un diente y cuando fue creciendo sus diarreas se repetían frecuentemente ante cualquier situación nueva. Antes de actuar en el colegio (cosa que además detestaba) antes de un examen, antes de salir de vacaciones, antes de ir al médico. En una palabra tenia diarrea por anticipación. Fue un chico muy vertiginoso. Ya desde bebé si lo movían bruscamente se sobresaltaba, lloraba y lo notaban aterrado. Cuando fue un poquito mayor no había forma de subirlo a una patineta. A los seis años sus padres lo llevaron a Las Leñas a esquiar. Fue un drama total; subir 9

en la aerosilla vaya y pase, pero para bajar era un griterío total; ni en trineo, ni con los esquíes, ni en aerosilla, ni caminando, ni alzado, ni nada. El movimiento de descenso lo aterraba. Tampoco le gustaba el ascensor y en la clase de gimnasia no daba una "vuelta carnero" por nada del mundo. En Las Leñas había un instructor de sky que se llamaba Boraxio. Era excelente, pero confesó que de chico le pasaba lo mismo que a Gelsemio, con el agravante que tampoco soportaba el movimiento de ascenso. Contaba que tenía tanto pánico para bajar las escaleras que tenía que hacerlo sentado, bajando escalón por escalón. Así quedaban sus pantalones!!! Cuentan que sus padres lo llevaron a un famoso homeópata que le dio un "polvito" y santo remedio. Gelsemio era además un chico temeroso. Temía a las tormentas, costó muchísimo trabajo que aprendiera a nadar, tenía terror al agua, a los lugares altos ni que hablar, no se subía a un tobogán aunque lo amenazaran de muerte. Ya dijimos que tenía miedo de aparecer en público y que hada diarreas por anticipación, miedo a caerse y desde chiquito se aferraba a su madre con terror. No podía quedarse solo ni un instante y temía que algo malo ocurriese en cualquier momento. Era muy nervioso y temía perder el autocontrol (igualito que su primo Argie). Sentía miedo antes de dormirse y el miedo le daba disnea. Se estremecía de miedo, tenía miedo a los exámenes y por supuesto a fracasar. Pero lo peor que le sucedía era que sentía ganas de llorar y no podía. Un buen día, cuando tenía cinco años Gelsemio se enfermó. Comenzó con un escalofrío tremendo (él decía que sentía como un cubito de hielo que subía por su espalda), estaba muy débil, tembloroso, con mucha fiebre y su carita tan colorada que parecía de color bordeaux. Tenía una locuacidad llamativa: hablaba, hablaba y hablaba. Su amiguito Bryonio también se contagió. Los médicos dijeron que era una "gripe virósica" y hablaban de influenza. Había algo que la madre de Gelsemio "no entendía, porque el mismo virus que había atacado a los dos amigos daba dos cuadros tan diferentes. Tanto Gelsemio como Bryonio estaban quietitos en su cama; bien quietitos. Bryonio decía que si se movía le dolía muchísimo la cabeza; imagínense que ni podía mover sus ojitos de lado a lado pues le aumentaba el dolor. Gelsemio estaba tan débil que no se movía porque le pesaban las piernas y además si se movía comenzaba a temblar como una hoja. Cuando el pediatra le hizo abrir la boca y sacar la lengua, ésta temblaba y vibraba como las lenguas de las víboras. Su saliva era amarillenta y la lengua estaba cubierta por una espesa capa de ese mismo color. Pero aparte de estar quietos los dos amigos manifestaban síntomas casi opuestos. Bryonio tomaba agua permanentemente, tenía una sed espantosa y casi no orinaba, su orina era oscura concentrada y escasa. Gelsemio no quería tomar nada de líquido con gran desesperación de su madre que tenía miedo a la des hidratación y cuando comenzó a mejorar, orinaba tanta cantidad de orina clara que nadie entendía de dónde había salido tanto líquido ya que casi no lo tomaba. Luego de su gripe, Gelsemio quedó débil, tembloroso y por momentos se quejaba que veía doble; se le cenaban, los ojitos de debilidad. Un día dijo que había "dos Gelsemios" y sus padres se asustaron mucho; veía doble o tenía sensación de ser doble? Tal vez le sucedían ambas cosas. No sabían si pedir tumo para el oftalmólogo o para el psiquiatra. Por suerte justo ese día vino de visita su tío Eulalio que vivía en el interior y que era homeópata. Era el mismo que cuando vino a conocerlo de recién nacido le había puesto un globulito mágico en la boca y había curado sus temblores. 10

Volvió a darle el mismo medicamento en potencia más elevada y Gelsemio cambió radicalmente. Aumentó su autoconfiarvza, desapareció el vértigo, la diplopía, las diarreas, el temor al público, la debilidad con tendencia paralítica y mejoraron notablemente sus miedos. A que no adivinan que tomó? Síntomas • Débil • Timidez • Trastornos por anticipación • Trastornos por susto • Trastornos por malas noticias • Temblor • Diarrea por dentición • Dianea por anticipación • Trastornos por anticipación, antes de ir al médico, dentista • Trastornos por anticipación antes de examen • Anticipación por miedo al público en el escenario • Vértigo por movimiento • Vértigo descendiendo • Temor a las tormentas • Temor al agua • Temor a los lugares altos • Temor a tener que aparecer en público • Temor a caerse • Aferrase a personas o muebles • Aferrase, asido quiere estar • Temor a estar solo • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • •

Temor a que algo ocurra Temor a perder el autocontrol Temor antes de dormir Diarrea por temor Temor a los exámenes Temor al fracaso Estremecimientos por temor (e) Pena, llorar no puede Escalofrío comenzando en la espalda Escalofrío frialdad Cara, decoloración rojo oscuro Locuaz durante la fiebre Pesadez en miembros inferiores Temblor durante la fiebre (ag) Boca, temblor de lengua al sacarla Saliva, amarillenta Lengua, decoloración amarilla Sed ausente durante el calor febril Visión, diplopía Ojo, abertura difícil de los párpados Ilusión de ser doble

Graphita, la irresoluta Graphita era una niñita negra como el carbón. Sus padres la querían muchísimo, la mimaban y le hacían todos los gustos, por eso Graphita nunca se sintió abandonada pero a pesar de esto estaba siempre triste. Era bastante gordita, muy friolenta y muy constipada. En estas tres cosas se parecía mucho a su prima Calcarita. También era muy miedosa como Calcarita y hasta tenían miedos parecidos; miedo a la locura, miedo a la mala suerte, mucho miedo a la muerte, miedo a que algo malo sucediera, miedo a la pobreza (agregado). Ambas temblaban de miedo. A Graphita le sucedía algo muy extraño. Repentinamente comenzaba a pensar en la posibilidad de ahogarse, cosa que le daba pánico. Le daba una angustia terrible y se sentaba" a comer y se le pasaba enseguida. Esto le sucedía solamente a ella y a nadie más. La música la hacía llorar. Cosa curiosa, no temblaba por escuchar música como su amiguita Ambra, pero sí la hacía llorar. En realidad Graphita fue siempre muy llorona. Lloraba si vela algún chico pobre pidiendo comida, pues era muy solidaria y ayudaba a todos; lloraba durmiendo, lloraba durante la transpiración, lloraba durante la fiebre. Y cuando fue más grande lloraba durante la menstruación, que dicho sea de paso comenzó bastante tarde.

Pero había una constante en su llanto; siempre la mejoraba. Era una negrita afectuosa y franelera. Su papá decía que era como un "carbonato encendido". Pero tenía un gran defecto; cuando tenía que tomar una decisión se angustiaba muchísimo, se ponía terriblemente ansiosa y por supuesto lloraba. - Por qué Horas Graphita?, preguntaba su madre. - Sniff, sniff, lloriqueaba Graphita... no se si ponerme el vestido blanco o el vestido colorado... snif...snif... Pero por Dios!!, la retaba su madre..., cómo puede ser que te pongas ansiosa por no poder tomar una decisión tan tonta; siempre indecisa por tonterías!!, reprochaba su mamá. Inmediatamente Graphita estallaba en carcajadas. Siempre sucedía esto cuando la reprendían o le reprochaban. Era casi tan contradictoria como su amiguita Ignatia. Eso sí, nunca se golpeaba ni se lastimaba pues era muy cautelosa como su primita Causticia. Graphita tenía irresolución ansiosa Causticia tenía cautela ansiosa. Un día Graphita se pegó un susto tremendo y a partir de ese momento se agravó su tristeza, su llanto y su melancolía. Le apareció una enfermedad en la piel, se llenó de costras escamosas, debajo de las cuales aparecía un líquido amarillo, pegajoso y espeso como la miel. Cuando la vio su médico, le llamó la atención al mirarle la lengua, que tenía un aliento horroroso. No podía creer lo que sentía pues Graphita tenia aliento con olor a orina!!! - ¡¡Esto no existe!! decía el Dr. Palumbo, mientras buscaba preocupado en su repertorio, pero no imaginan ustedes su sorpresa cuando vio no sólo que existía el síntoma, sino que estaba cubierto por un solo medicamento. - ¡¡Yo me juego!! dijo Palumbo; y por suerte le fue muy bien. La mamá de Graphita para festejar le compró un precioso vestido blanco que hacía resaltar aún más su negra piel de terciopelo totalmente curada. "Toda vestida de blanco" "Almidonada y compuesta" "En la puerta de su casa" "Estaba la niña negra..." Síntomas • Tristeza crónica (E) • Temor a la locura • Temor ai infortunio • Temor a la Muerte • Temor a que algo ocurra • Temor a la pobreza (Ag) • Tiembla de miedo • Temor a la asfixia que mejora comiendo (E) • Llanto por música • Compasiva • Llanto durmiendo • Llanto durante La transpiración • Llanto durante la fiebre • Llanto durante la menstruación • Menstruación retardada en niñas. (Primeras menstruaciones) • Llanto mejora • Afectuosa • Irresolución ansiosa (E) • Risa por reprimendas (E) • Risa por reproches (E) • Transtomos por susto • Erupciones costrosas húmedas • Boca, olor como orina (E). Kalito Bromato, el abombado

Kalito fue un bebé norma!. Su primer trastorno apareció con la dentición. Se puso muy ansioso. Su abuela comentaba que nunca había visto un bebé dentando, que tuviera tanta ansiedad. Para ella era el "único". Lo cierto es que tenía razón, esto solamente le sucedía a Kalito. Su primito Chamomio se ponía imbancable. pero no ansioso. Cuando fue un poco mayor, esta "ansiedad'' se acrecentó. Comenzó a gritar mientras dormía. Estaba sumamente irritable y tenía insomnio. Se despertaba gritando, aterrado, se sentaba en la cama con sus ojitos abiertos y hasta alguna vez se levantaba y caminaba dormido por toda la casa; un verdadero sonámbulo. Además crujía los dientes como un roedor. Hacía un ruido espantoso. Por las mañanas cuando sus padres le preguntaban a que le tenía miedo, respondía en su media lengua "a los fantasmas" y "Kalito no quiere estar solo". - Kalito, ¿queres la leche? preguntaba.su mamá - Ka-li-to- que-rés la le-che?, respondía Kalito lentamente. Su madre harta de que contestara repitiendo sus preguntas le gritó: - Querés o no querés la leche?! - "No" -respondía Kalito. - Kalito, querés un alfajor? - "No" -respondía Kalito. - Kalito vamos a pasear? - "No" -respondía Kalito Cuando fue más grandecito aprendió a atender el teléfono. Era una verdadera calamidad. - Hola! Quién habla? -preguntaban. - "No se\ contestaba Kalito que estaba tan confundido que no sabía ni siquiera quien era él. Por supuesto todos sus interlocutores cortaban. Un día llamó su tío Apolonio. - Hola?! Hablo con el 741-5892? La familia Bromato? - "No", contestó Kaüto como siempre. Vuelta a llamar; - Hola?! Con quién hablo? Quién habla? Otilak, contestó Kalito y su tío, quién reconoció la voz, pensó que su sobrino estaba burlándose de él. Se enfureció y colgó el teléfono. No sabía que el pobre Kalito de abombado y confundido, solía invertir las palabras sin darse cuenta. Otro día se le acercó una nenita en el parque; una regordeta y traspirada niña de ojitos azules con hoyuelos en las manos. - Cómo te llamas? -preguntó - "qué có-mo te lla-más? -repreguntó Kalito, quién sentía cierto temor cuando le dirigían la palabra. - Sí, cómo te llamas? dijo Calcarita. - "No se", "me olvidé" -contestó Kalito pues había olvidado su propio nombre. Por las tardes su madre le servía el té con leche y era un drama total; se lo servían caliente como para pelar gallinas y Kalito decía que no lo quería tomar, porque estaba frío. Cuanto más se lo calentaban más frió decía que estaba, hasta que un día Kalito tardó en tomarlo y se enfrió, lo tomó perfectamente y sonriendo le dijo a su mamá que la leche calentita estaba muy rica. Ahí se dieron cuenta que decía frío por caliente y viceversa. ¡¡Hasta en eso se confundía!!. A los seis años comenzó primer grado. Sus amiguítos Causticia y Silicio no lograban aprender a escribir. El sí que escribía, pero con unos errores garrafales: salteaba letras, salteaba sílabas, repetía palabras. Se parecía bastante a Lycopio, su compañerito de banco. Tan es así que la maestra los separó pues pensó que se copiaban. Esta separación afectó mucho a Kalito, que se sintió sólo y abandonado. Estaba inconsolable, lloraba todo el día por su amiguito perdido y la maestra resignada los volvió a juntar y los mandó a los dos a la psicopedagoga. Para colmo los dos tartamudeaban, pero Lycopio se trababa solamente al finalizar la oración. Kalito fue creciendo y llegó a la adolescencia. "Kalito" dónde estás? Silencio................................. Kalito hada lo mismo que su primo Staphy. Se encerraba horas en su habitación imagínense ustedes haciendo qué cosas! Kalito, Dios te va a castigar!! -gritaba su madre. Tenía razón. Dios lo castigó!! Se llenó la cara y la espalda de granos! Pero qué granos!!. Uno al lado del otro. Sus compañeros de colegio se burlaban de él y lo llamaban "choclito". Se ponía tan furioso que un día en pleno ataque de cólera le dio una convulsión. Todos se asustaron muchísimo, tuvieron que llamar a la ambulancia y nunca más se burlaron de sus granos. Kalito estaba cada vez más abombado, cada vez más desmemoriado, tenía miedo de volverse loco, decía que Dios ¡o había castigado, que lo había "elegido para la venganza divina", se estrujaba las manos desesperadamente, hurgaba en sus bobillos y decía que tenía miles de dólares cosidos en el interior de su saco, y que sentía que todo lo que lo rodeaba iba a ser destruido. Tenía el mismo miedo que Argie, el novio de su hermana; no quería pasar por ciertas esquinas pues temía que los edificios se derrumbaran y lo aplastaran. Realmente estaba muy mal, pobre Kalito, cada vez peor!!. Un día hablando con Argie de sus problemas, este le contó que había ido a ver a un homeópata 11

unicista y que con un "polvito mágico" lo había curado. Kalito lo fue a ver y el homeópata le dio otro polvito que se llamaba Kali Bromatum y Kalito recuperó su equilibrio y su paz interior. Ah! olvidaba contarles que también se curó su acné. Síntomas • Ansiedad durante la dentición (E) • Gritas durmiendo • Irritabilidad con insomnio • Insomnio en niños • Gritos al despertar • Terrores nocturnos • Sonámbulo • Rechina dientes durante el sueño • Temor a los fantasmas • Temor a estar solo • Contesta lentamente • Contesta repitiendo la pregunta • Contesta "no" a todas las preguntas • Confusión sobre su identidad • Errores hablando, invierte las palabras • Contesta repitiendo la pregunta • Temor cuando le dirigen la palabra • Olvidadizo, olvida su propio nombre • Errores hablando, opuestos frío por caliente • Errores escribiendo, saltea lerras • Errores escribiendo, saltea silabas • Errores escribiendo, repite palabras • Abandono • Inconsolable • Boca, hablar tartamudeando • Masturbación, disposición a la • Cara, erupciones, acné • Convulsiones por cólera • Embotamiento • Memoria, debilidad de la • Temor a la locura • Ilusión que ha sido elegido para venganza divina • Gestos estrujándose las manos • Ilusión que tiene dinero cosido en su ropa • Ilusión de Destrucción inminente de todo lo que lo rodea (E) • Temor, esquinas de pasar por ciertas Lachesia, la charlatana Lachesia nació hablando. Bueno en realidad no fue "tan así" pero casi casi... Al año balbuceaba permanentemente; hablaba, hablaba y hablaba y no paró nunca más. "Hola mami, cómo estás, cómo te fue, ... a mi me fue muy bien ... me peleé con Fulanita y Menganita y luego me amigué y seguí jugando... Sabes que le pasó a Santiaguito? Ah! me olvidaba que mi maestra quiere hablar con vos!!.... Cuándo nos vamos de vacaciones? ... Ah! me olvidaba de contarte lo que soñé anoche... Sabes una cosa? La tía María es muy mala no me quiere. Es más, lo quiere más a Ramirito que a mí.... le compra más juguetes y a mi ni me mira..., vive diciendo que me calle la boca, que no me soporta... Por qué será mamita que a mí nadie me quiere?... y así seguía hasta quedarse afónica. Siempre conseguía lo que quería, era muy mandona y si no conseguía las cosas mandoneando, vuelteaba y vuelteaba hasta el cansancio, esquivando los obstáculos hasta lograr su cometido. Su madre decía que era muy "vueltera" y terminaba mareándola. 12

Afectuosa en extremo, sentimental, compasiva, inconsolable y nostálgica se parecía mucho a Pulsatia hasta que "mostraba las uñas ". Podía también ser criticona y cruel; resentida como nadie. Era capaz de odiar y se ofendía de nada. - "Fíjate que mal vestida está la tía Ana" criticaba - "Viste mami...!! los vecinos se van a Disneylandia, como los envidio!!. Mira que son unos piojosos que nunca tienen plata y se van a Disneylandia y nosotros no podemos irnos! y se largaba a llorar desconsoladamente. Su madre le secaba las lágrimas y le llamaba la atención que éstas fueran tan frías. Qué raro!!! También cuando tenía mucha fiebre tenía las orejas heladas pero su madre se daba cuenta que la temperatura iba a subirle pues le agarraban unos ataques de locuacidad terribles. Cuando Lachesita se enfermaba, cosa que sucedía todas las primaveras se agarraba unas anginas terribles. Su garganta era roja azulada, llena de pequeños trayectos de venitas rejas que parecían "vivoritas". Siempre comenzaba el dolor del lado izquierdo y luego pasaba al lado derecho, justito al revés que su primito Lycopio. Ambos tenían una amiguita que se llamaba "Lacanita" que les "mataba el punto" a ambos. Su dolor pasaba de un lado a otro y volvía a su lugar de origen. Bueno, a Lachesita el dolor se le corría al oído y se agravaba por tomar líquidos calientes (a Lycopio las bebidas calientes lo mejoraban. Siempre pedía tecito caliente). Su abuela Mirina siempre quería ponerle un pañuelito de seda en el cuello para aliviarla y Lachesita a los gritos se lo arrancaba y lo revoleaba por el aire, sofocada con la sola idea de que algo le tocara el cuello. Tampoco quería nada ajustado en la cintura. Un día cuando era muy chiquita se despertó llorando ansiosamente y gritaba "avión cae"!!! "avión cae"!!! avión cae"!!! Su madre no lograba consolarla mientras secaba sus "lágrimas heladas". - "Habrá tenido una pesadilla" acotó su padre preocupado. Ese mediodía anunciaba la radio: "Terrible catástrofe aérea. Cae un avión con doscientos cincuenta pasajeros. No hay sobrevivientes". Lachesita al escuchar esta noticia vuelve a llorar desconsoladamente y sus padres se miraron consternados. Habrá sido un sueño clarividente? Esto le sucedía a Aconino, a Sulphurio y a Phosphy. Pero a Lachesita no. No, no eran sueños clarividentes, era clarividencia pura y ésto se fue acentuando a medida que Lachesia crecía. Cuando cumplió quince años sus vecinos le regalaron un turbante y una bola de cristal junto con media docena de pulseras y ocho pares de aros bien grandes y extravagantes. Todo esto a expreso pedido de la interesada. Un día, a los trece, sus amigas notaron que estaba anormalmente locuaz. Realmente no paraba de hablar y lo peor es que no deda nada. Hablaba y hablaba. Esa noche descubrió que había comenzado su primera menstruación. De ahí en más su madre no necesitaba controlar su fecha menstrual. Cada vez que la notaba especialmente locuaz sabía que estaba menstruando. Era enredadora al máximo. Hablaba mal a su amiga Lola de su amiguita Rosa y a Rosita mal de Lola. Celosa hasta la locura no permitía que Rosa y Lola se vieran sin que ella estuviera presente. Embrollona, intrigante e invasora, cuando quería algo "zigzagueaba" hasta conseguirlo. Sumamente desconfiada, nunca quería tomar medicamentos cuando enfermaba. - "Me quieren envenenar"!!! gritaba como enloquecida. Tampoco quería que la tocaran, como a Chamomio y a Tarentulina. Era bastante miedosa. Tenía miedo al agua, a la asfixia, a los lugares altos (fue agregada), a la apoplejía (ella decía tener un ataque pues no sabía el significado de la palabra apoplejía), mucho miedo al despertar (a veces se despertaba sofocada y asustada). Temía ser envenenada como dije anteriormente, miedo al infortunio, a los ladrones y a la locura. Si había truenos y relámpagos se metía debajo de su cama. Era muy supersticiosa (aunque se olvidaron de ponerla en el repertorio, hay que agregarla). Nunca pasaba bajo una escalera; si se le cruzaba un gato negro de izquierda a derecha espantaba La mala suerte haciendo cuernitos con los dedos. Siempre usaba un cuernito de coral contra el mal de ojo y los martes y viernes (el día de las brujas) se vestía de colorado. Vivía "ojeada" porque sus vecinitas la "envidiaban". Quemaba incienso y ruda y ponía ajos detrás de tas puertas. Como ustedes pueden apreciar no era una niñita fácil. Era bastante complicada, embrollona, invasora, criticona, envidiosa, celosa y supersticiosa. Para colmo un día descubrieron que era sonámbula y se paseaba dormida por toda la casa hablando sin parar y no dejaba dormir a nadie. Bueno, por fin la llevaron a un homeópata que le dio Natrum Muriaticum y la curó. No, no puede ser, debe haberle dado otro medicamento, debo de haberme confundido. Qué piensan ustedes que le dieron? Síntomas • Locuaz • Locuaz, cambiando rápidamente de un tema a otro • Celos con locuacidad • Abandono • Locuaz, solo se detiene por ronquera

• Dictadora • Afectuosa • Sentimental • Compasiva • Inconsolable • Nostalgia • Crítica • Cruel • Maliciosa • Odio • Oféndese fácilmente • Envidia • Despreciativa • Lágrimas frías • Frialdad de oído durante el calor febril • Locuaz durante la fiebre • Periodicidad anual • Primavera agrava • Garganta interna, decoloración rojo oscura • Garganta interna, varicosis • Lateralidad, de izquierda a derecha • Garganta interna, dolor irradia al oído • Garganta interna, líquidos calientes agrava • Garganta externa, ropa agrava • Abdomen, vestidos sensible a • Clarividencia • Locuaz durante la menstruación • Celos • Invasora (agregar el rubro) • Suspicaz • Temor a ser envenenada • Tocada, aversión a ser • Temor al agua • Temor a la asfixia • Temor a los lugares altos (Ag) • Temor a la apoplejía • Temor al despertar • Temor al infortunio • Temor a los ladrones • Temor a la locura • Temor a las tormentas • Supersticiosa (Ag) • Sonámbula • Habla durante el sueño Doña Magnesia, la extraviada Doña Magnesia era una mujer mayor, soltera; bueno, en realidad una solterona; que vivía con su hermana mayor, Doña Calcárea, también solterona ella. Se llevaban bastante bien, pues eran muy parecidas, pero cada tanto tenían sus buenas trifulcas, pues ambas tenían un carácter bastante fuerte y repodrido. El apellido de Magnesia y Calcárea era Carbone y como todos los de su familia eran muy friolentas, sumamente miedosas y abandónicas. - "A mi nadie me quiere" -decía Calcárea-. - "A mi nunca me quiso nadie, ni mamá, ni papá, ni nuestro hermano Kalito, ni siquiera ese novio que tuve cuando era jovencita" -contestaba Magnesia-. Y a continuación se enganchaba con el mismo lamento nostálgico de siempre. - "Te acordás Calcárea cuando éramos chicas, la casita de Córdoba, las tardes en la laguna, los atardeceres en el jardín de los jazmines" -rememoraba con lágrimas en los ojos. Su hermana Calcárea la miraba impávida. Ella no sentía nada de nostalgia, ella estaba bien plantada sobre sus pies en el presente. Lo que sí le preocupaba un poco era el futuro, no tener para comer, por eso la alacena estaba siempre llena, por las dudas.

Los miedos sí los compartían. Siempre con miedo a que algo malo ocurriese. Si una de ellas salía, la que quedaba en casa esperaba aterrada hasta que su hermana volviera a aparecer. Ambas tenían miedo a la locura, a perder la razón, pero eso ni siquiera se lo contaban entre ellas. Ambas tenían temor y anticipación antes de ir al dentista. Esto creían ellas, que se debía a que Calcárea de chiquita tuvo muchísimas caries y Magnesia sufrió horrores cuando le salieron las muelas de juicio. Según ella sus muelas fueron las culpables de que no se casara, pues había estado tan enferma y malhumorada que había espantado a su novio. Desde ese día, cada tanto, soñaba con bodas. Magnesia tenía terror a los accidentes y Calcárea a la muerte Magnesia cerraba la puerta con tres cerrojos pues temía a los ladrones En Las noches de invierno se morían de frío y en todas las reuniones de consorcio protestaban para que pusieran más calefacción A pesar de eso, Calcárea transpiraba profusamente su cabeza cuando dormía y Magnesia sentía calor, se destapaba y sentía frío y luego vuelta a taparse. Era muy inquieta. Cuando era chiquita Magnesia era flaquita y reinquieta y siempre tenía olor ácido en su cuerpito. Solía tener unas diarreas horriblemente ácidas, verdes corno agua de estanque de ranas, sobre todo cuando tomaba leche. Esta diarrea le ocasionaba dolores y se doblaba en dos igualito que su primo Colocynthio. Además era muy inquieta e irritable. Cuando se enojaba era capaz de golpear su cabeza contra la pared igualito que su primito Teky. Cuando le agarraban estos berrinches sus padres tenían que sacarla a pasear en auto pues "viajando" era la única forma de tranquilizarla. Más adelante, cuando fue mayor y tuvo los recursos necesarios se dedicó a viajar por todo el mundo y había adquirido una gran cultura. "Qué mal dormí anoche"-dijo una mañana Magnesia-. "Soñé que estaba perdida en el bosque, que no encontraba el camino a casa y una vez en casa no encontraba mi habitación. Estaba totalmente perdida". Calcárea ni la escuchaba, pues se sentía enferma y cuanto más pensaba en ello peor se sentía. Esto le causaba un fastidio terrible, pues su hermana Magnesia cuando estaba enferma mejoraba pensando en sus males. ¡Qué envidia! Una tarde cuando Calcárea se había recuperado de su enfermedad le dijo a Magnesia que iba a salir a tomar el te con su prima Eulogia. - "Cómo??!!!... Vas á salir con Eulogia?... Y a mí no me invitaron? ... Les parece justo? ... Claro, a ella la queras más que a mí. Yo estoy para cuidarte cuando estás enferma, pero cuando se trata de pasear, te vas con esa bruja!!!" - "Bruja!! bruja!! bruja!!", -gritaba Magnesia en pleno ataque de celos-, y cuanto más celosa estaba más rápido hablaba y hablaba. Cuando estaba celosa le daba por hablar, hablar y hablar y no había quien la parara. - "Bah.!! Qué tontería!!!" -se limitaba a contestar Calcárea-, quien se vestía y se arreglaba y salía igual, pues cuando ella se proponía algo lo cumplía. Era terca como una mula terca. Cuando volvió esa noche, se sintió culpable y La invitó a su hermana al cine. Al no aceptar Magnesia la invitación, insistió con el teatro, la ópera, ir a cenar a/uera, pero Magnesia contestaba que no. "Lo que sucede es que eres indiferente al placer!!", -gritaba Calcárea encolerizada, toda colorada ella y con los puños cerrados. Dio un portazo y se encerró en su habitación hasta el día siguiente. Vieron que yo tenía razón al principio de este cuento cuando dije que se llevaban bien pero que cada tanto tenían una trifulca de aquellas!! Esa noche, Magnesia tuvo dolor de muelas y se La pasó caminando de aquí para allá y de allí para acá. Al día siguiente fueron al supermercado y Calcárea llenó el carrito hasta el tope, como siempre; pues temía morirse de hambre. Pero pasó un papelón espantoso!!! Cuando llegaron a la caja registradora llegó un empleado de la vigilancia y le pidió a Magnesia que abriera su cartera pues las cámaras ocultas habían detectado un robo. - "Un robo??!!! -gritaba Calcárea-. "Qué necesidad tiene mi hermana de robar con todo este carrito lleno de comida!!! Magnesia estaba aterrada y "temblaba" de miedo. El vigilante sintió compasión por ella y la dejó pasar sin insistir más. Al fin y al cabo sólo se trataba de un paquete de caramelos!!! Síntomas Magnesia • Frío agrava • Abandono, querido por sus padres, esposa, amigos, no se siente • Nostalgia • Temor a que algo ocurra • Temor a la locura 13

• Anticipación antes de ir al médico, al dentista • Dientes, juicio muelas de, trastornos por erupción de • Sueña con casamiento • Temor a los accidentes • Temor a los Ladrones • Inquietud • Materia fecal verde como escoria en una charca de ranas • Diarrea después de leche • Abdomen, dolor debe doblarse en dos mejora • Irritabilidad • Golpéase la cabeza contra la pared y las cosas • Viajar, deseo de • Sueña que está, perdida en un bosque • Pensar en sus males mejora • Celos (Ag) • Celos con locuacidad • Indiferencia al placer • Dientes, dolor, movimiento mejora • Temor con temblores • Cleptomanía, roba golosinas Calcarea • Abandono • Ansiedad por el futuro • Temor de pasar hambre • Temor a que algo ocurra • Temor a la locura • Anticipación antes de ir al médico, al dentista • Caries precoces en niños • Temor a la muerte • Cabeza, transpiración de cuero cabelludo durante el sueño • Pensar en sus males agrava • Envidia • Obstinación • Ansiedad de conciencia • Cara roja durante la cólera • Puños, como si estuviera furioso, cierra Mercurito, el temerario Mercurito era un desastre. Sus padres estaban muy preocupados pues a pesar de ser un niñito muy inteligente y sumamente "precoz", los volvía locos. Su "Inquietud" era espantosa, realmente no se podía quedar quieto. Su pediatra deda que era hiperkinético.y en realidad. tenía razón. Corría, saltaba, trepaba a todos lados. Tocaba todo y todo lo rompía. No sólo su ropa y sus juguetes se desintegraban, también los pocos adornos que habían quedado en casa. Además era muy audaz y no tenía noción del peligro. Corría al gato y le retorría la cola aunque no por crueldad sino de puro inquieto. Escupía como un guanaco y a veces hasta lamía el piso como queriendo recuperar su saliva. Mandón como el mejor, no toleraba la contradiedón y hasta llegó a amenazar de muerte a quien lo contradijera. Yo mato! !!yo mato!!! decía en su media lengua. Contrastando con todo lo anterior era un niñito nostalgioso, que buscaba compañía, abandónico y aíeduoso (fue agregado en éste rubro a instancias de su abuelo que deda que era un dulce de leche). Cuando nadie lo veía se metía en la heladera y robaba manteca (podía comerse medio pan de manteca como si fuera un helado). Robaba sal y los cubitos de sopa concentrada que se comía con papel y todo. Por supuesto después tenía unas diarreas espantosas. Su madre decía qué sus deposiciones parecían un muestrario de colores. A veces verdes, a veces amarillas, a veces negras, o blancas, o con hilos de sangre. Pero había una constante, siempre tenían mucosidad, muchísimo moco. Un día Mercurito se enfermó. Le hicieron el diagnóstico de 14

"estomatitis herpética". No saben como tenía su boquita!! Aftas grandes y chiquitas, sangrantes amarillas muy dolorosas, con un aliento metálico atroz, la lengua hinchada, con las impresiones de los dientes marcadas, lengua blanca siempre húmeda y llena de zonas depapiladas. Una verdadera "lengua mapeada". Su pediatra vino a verlo y en cuanto entró le llamó la atención el olor metálico que había en la habitación y preguntó: Mercurito cómo estás? - "Bien" contestó Mercurito casi sin voz. Contestaba "bien" aunque estuviera muy enfermo, igual que su primita Apisinia quien al borde del edema de glotis seguía contestando que estaba "bien". Se acuerdan de Apisinia la celosa, la que se sentó en un hormiguero? Por la noche Mercurito se agravó (como buen syphilítico). Tenía mucha fiebre, transpiraba muchísimo, con un sudor grasoso y maloliente. Por más que transpiraba y transpiraba esto no le producía ningún alivio. Se quejaba muchísimo mientras transpiraba. Su amiguita Pulsatia se quejaba mucho con la fiebre, igual que Atropino, Nuxo, Veratrina y algunos otros. Pero éstos quejidos durante la transpiración que tenía Mercurito eran terribles y preocupaban a todos. Al día siguiente su madre encontró las sábanas manchadas de amarillo por esta transpiración tan copiosa y le costó muchísimo quitarles las manchas. Puso la ropa enjabonada al sol y finalmente hasta lavandina tuvo que usar. Para colmo Mercurito babeaba durmiendo y esta saliva era maloliente y también manchaba de amarillo y a veces con estrías de sangre. Mercurito dormía mal, tenía muchas pesadillas. Soñaba con asesinatos, con caballos, con cadáveres, con jabalíes y que era mordido por animales, con ladrones y perros (a quienes temía), con viajes (que añoraba). Un buen día se enojo muchísimo y agarró un cuchillo y corrió por toda la casa amenazando matar a cuanta persona se le cruzaba. Esto fue el colmo. Sus padres asustados lo llevaron a un médico amigo que era homeópata, quien obviamente le dio Mercurius y lo curó. Síntomas • Precoz • Inquietud en niños • Toca todo • Audacia • Escupe • Escupe en el suelo y lo lame • Dictador • Intolerante a la contradicción • Matar, deseo de a la persona que lo contradice • Nostalgia • Compañía, deseo de • Abandono • Afectuoso (Ag) • Deseo de manteca • Deseo de sal • Diarrea, materia fecal verde • Materia fecal amarilla • Materia fecal blanca • Materia fecal sanguinolenta • Materia fecal mucosa • Boca, aftas en niños • Lengua, hinchazón • Dentada, lengua • Lengua, decoloración blanca • Boca, lengua mapeada • Boca, olor ofensivo • Bien, contesta aunque este seriamente enfermo • Transpiración aceitosa • Transpiración olor ofensivo • Síntomas agravan al transpirar • Quejidos durante la transpiración • Transpiración manchando de amarillo • Transpiración, manchando, difícil de lavar • Boca, salivación durmiendo • Saliva maloliente • Saliva amarilla • Saliva sanguinolenta • Sueña con asesinatos • Sueña con caballos

Sueña con cadáveres Suena con jabalíes (E) Sueña que es mordido por animales Sueña con ladrones Sueña con perros Sueña con viajes Temor a los perros Deseo de viajar Matar con cuchillo Naja, la niña hindú Había una vez, en la lejana India, una niña muy triste que se llamaba Naja. Su padre era encantador de serpientes y vivían humildemente en un pueblito bastante alejado de todo. Naja tenía absolutamente prohibido acercarse a los canastos donde descansaban las cobras, pues su padre le había dicho que éstas no sólo podían morder sino que podían escupir el veneno a dos o tres metros de distancia y si este veneno tocaba los ojos podía dejarla ciega. Además la cobra apuntaba con su veneno directamente a los ojos. Como dije, Najita era muy triste. Se sentaba por las noches al lado del fuego, pues era muy friolenta, y cavilaba melancólicamente pensando en sus desgracias. Además era bastante miedosa; le tenía terror a la lluvia igual que su tía Elapsia (se ve que eso le venía de familia). También tenía miedo de morirse cuando empeoraban sus trastornos cardíacos y mucho miedo al infortunio. A pesar de ser pequeña sentía que había hecho todo mal, que no había cumplido con su deber y sentía que había fracasado. Se sentía triste y superflua. Se sentía muy culpable como si hubiera desobedecido a una voz interna que le indicara aquello que debía hacer. Ella escuchaba otra voz que le decía que desobedeciera y ahí estaba Naja en el medio sin saber que hacer. Najita sufría del corazón. Se había enfermado por pena cuando murió su perrita, que era a la única a quien revelaba sus secretos. Sentía una gran necesidad de estar acompañada. Debía ir una vez por mes al cardiólogo, que vivía en una ciudad importante a dos horas de viaje en ómnibus. Tres días antes del control mensual, Najita se ponía nerviosa; le transpiraban las manos y los pies terriblemente, le dolía la cabeza y tenía palpitaciones. Precisamente el dolor de cabeza y las palpitaciones se empeoraban durante el viaje. Siempre tenía ese problema. Nunca podía dormir sobre su izquierda, pues empeoraban las palpitaciones, se despertaba ahogada y sobresaltada como de una pesadilla. Incluso una noche, soñó que se suicidaba partiéndose en dos La cabeza con un hacha. A veces tenía tantas palpitaciones que no podía ni hablar y sus padres y hermanitos se asustaban, pues los miraba con los ojos bien abiertos, la mirada fija y las pupilas dilatadas. Su papá decía que en esa actitud se parecía a sus cobras. Cuando fue un poco más grande, entrando en 1a adolescencia, le dijo a su médico que tenía una sensación de vado en el corazón y que sentía como si su ovario izquierdo y el corazón estuvieran unidos por un hilo que tironeara de ambos, el uno hacia el otro. El cardiólogo, que no sabía nada de homeopatía, la mandó al ginecólogo y luego a un psiquiatra pues pensó que estaba rematadamente loca. El psiquiatra La escuchó atentamente, captó el antagonismo consigo misma que tenía Naja, captó la sensación de tener dos voluntades, la contradicción de la voluntad, la tristeza irresoluta y como era muy amigo de un médico homeópata, pues como ustedes saben, en la India hay muy buenos homeópatas, la mandó en consulta y la pobre Najita curó totalmente sus síntomas mentales y cardíacos, pues de no ser así, hubiese terminado en el suicidio. • • • • • • • • •

Síntomas • Tristeza • Cavila • Infortunado se siente (Ag) • Temor a. la lluvia • Temor a la muerte durante los síntomas cardíacos • Temor al infortunio • Tristeza como si hubiera hecho todo mal • Ilusión que ha descuidado su deber • Confianza falta de, se siente fracasado • Voluntad, contradicción de la • Dos voluntades siente como si tuviera • Irresolución • Trastornos por pena • Compañía, deseo de • Anticipación (Ag) • Transpiración profusa de pies • Transpiración profusa de manos • Cefalea viajando en carruaje • Palpitaciones viajando en carruaje (Ag) • Palpitaciones lado izquierdo, acostado sobre • Palpitaciones al despertar • Sueña con suicidios (E) • Suicidio con hacha • Palpitaciones, hablar no puede • Ojos, mira fijamente • Pupilas dilatadas insensibles a la luz • Pecho, vacío sensación de en corazón • Ilusión que su ovario izquierdo y el corazón están unidos por un hilo que tironea e! uno hacia el otro • Antagonismo consigo misma • Dos voluntades siente como si tuviera • Contradicción de la voluntad • Tristeza irresoluta • Tristeza con disposición suicida Phosphy, el compasivo Phosphyto era un hermoso niño pelirrojo de grandes ojos negros, con mirada de terciopelo y largas pestañas sedosas que parecían dos enormes abanicos. Muy sensible a la música, muy emotivo, sumamente afectuoso, desinteresado y sociable. Nació de parto normal y era flacucho y largo, con unas manos enormes con dedos larguísimos y piecitos también grandes. Era peludo como un monito, igual que su primo Teky. Luego perdió su pelito negro y comenzó a crecerle una pelusita francamente rojiza. Lo llamaban "el Colo". Caminó pronto y habló clarísimo antes de caminar. Era muy precoz. Una de sus primeras frases fue "Phosphy tiene miedo" y esto lo iba a marcar el resto de su vida. Era muy miedoso. Cuando decía "Phosphy tiene miedo" se agarraba la boca del estómago. Cuando fue más grande pudo verbalizar que el miedo lo sentía allí, igual que Lycopio, Nuxo, y algunos otros de sus amigos. Por las noches no quería quedarse sólo para dormir. Había que "dormirlo" con la luz prendida agarrándolo de la manito y franeleándole su cabecita pelirroja. Quedaba extasiado con ésta caricia. Parecía magnetizado. El a su vez enrulaba con sus deditos el cabello de su madre. Dormirse era toda una ceremonia. Phosphy era muy sensible a los olores. Un día su madre entró con él a una florería (no un kiosco de flores de la calle sino una florería cerrada donde había mucho perfume). - "Dónde estás Phosphyto?! llamaba su mamá, y Phosphy no contestaba pues se había desmayado y estaba tirado en el piso; Qué susto!!. Cuando fue grande no podía ir a los velorios donde había muchas flores pues perdía el conocimiento. Además tenía muchísimo temor a la muerte y a las enfermedades y como era muy compasivo, lloraba a mares y quedaba destruido, pálido, exhausto, sin fuerzas, con una mirada triste e indiferente. Parecía que lo hubieran "vaciado". Phosphyto era inquieto (hay que agregarlo), tocaba todo, alegre, vivaz, inteligente, sensible y maduro. Todo le llegaba, todo lo percibía y lo adivinaba. A veces hasta parecía clarividente. No se quedaba solo ni un minuto. Se mudaba con todos sus juguetes a la cocina o al living o a la pieza de sus padres y cuando fue más grande sólo podía estar solo si encendía la radio o la televisión que le servían de compañía. Cuando se aproximaba una tormenta lo sentía en el aire (su papá decía que era un barómetro viviente). Estaba inquieto, hipersensible, irritable y angustiado y cuando la tormenta se desencadenaba 15

sentía verdadero terror por los truenos y relámpagos. Decía que lo peor que podía sucederle era estar sólo en el medio del campo, de noche y bajo una tormenta. Esto expresaba su profundo desvalimiento, esa sensación de desprotección, de falta de techo que él sentía y que lo llevaba a ayudar a los demás. Regalaba todos sus juguetes a los chicos pobres. Le daba comida y monedas a los viejitos jubilados a quienes miraba con compasión. - "Pobrecitos, se van a morir", pensaba Phosphy mientras los acariciaba y los besaba. Era bastante parecido a Aconino. Se acuerdan del hijito de Acónita, tan sensible, nostalgioso, compasivo, temeroso de la muerte, clarividente, con ese permanente temor a que algo ocurra? (agregarlo a Aconino en éste último rubro). Ambos eran sonámbulos, inconsolables y miraban todo con asombro, con esos enormes ojazos negros (aterciopelados los de Phosphy y como brazas encendidas los de Aconino). Aconino era morochito y Phosphy colorado como un incendio, con su brillante naricita cubierta de pecas. Era un bombón. Un día Phosphy se enfermó. Tenía mucha fiebre, pedía agua bien fría, que vomitaba en cuanto se calentaba en su estómago. Estaba más sensible que nunca, su madre tenía que estar permanentemente a su lado teniéndole la manito, decía que tenía miedo a morirse si lo dejaban sólito. Parecía un trapito. Se le llenó la piel de unos puntitos violetas y algunos más grandes azulados y negros. Su pediatra diagnosticó una "Púrpura trombocito-pénica idiopática"; por suerte, pues habían pensado algo mucho peor, que ni nombrarlo quiero" Sangraban sus encías y tenía epistaxis. Estaba realmente muy grave y pensaron internarlo pero gracias a unos globulitos muy chiquitos que le dio el homeópata de la familia se mejoro rápidamente y curó totalmente su enfermedad. Síntomas • Sensible a la música • Sensible a impresiones externas • Afectuoso • Lanugo en recién nacidos (agregar rubro) • Precoz • Temor que surge del estómago • Temor de estar solo • Temor a la oscuridad • Magnetizado, deseo de ser • Sensible a olores • Inconsciencia por olores • Temor a la muerte • Temor a las enfermedades • Compasivo • Indiferencia a personas amadas • Inquietud en niños (ag) • Tocar todo, impulsado a (ag) • Alegre • Clarividente • Temor a estar solo • Generalidades tormenta proximidad de • Inquietud durante tormenta • Inquietud durante tormenta eléctrica • Ansiedad antes de tormenta eléctrica • Ansiedad durante la tormenta eléctrica • Temor a las tormentas • Desvalido • Compasivo • Besa • Devuelve las caricias (ag) • Sonambulismo • Inconsolable • Nariz brillante 16

• Nariz, pecas • Sed durante fiebre • Deseo de bebidas frías • Estómago, vómitos después de beber apenas el agua se entibia en el estómago • Temor a la muerte estando solo • Piel, decoloradón azulada en manchas • Boca, hemorragia de endas fádlmeníe • Epistaxis en niños • Epistaxis persistente Platina y Paladia, las hermanitas soberbias Había una vez dos hermanas insoportables, Platina era la mayor; Palladia la menor. Fueron abandonadas por sus padres siendo muy pequeñas y malcriadas por sus abuelos. Parece que las consintieron demasiado y los resultados fueron catastróficos. Platina se sentía superior a todos, llena de orgullo, amor propio y altanería. Tan alto volaba que no había nadie a su nivel y ésto la haría sentirse sola en el mundo igual que sus primitas Pulsatia y Cyclaiia. Sentía que no era apta para este mundo y que no tenía lugar en este planeta. Era toda grandeza y soledad. Pero ésto no era todo; mandoneaba a sus muñecas a los gritos les decía que ella era grande y las muñecas chiquititas, era cruel con ellas, les arrancaba los brazos y las piernas y si alguien dejaba por descuido un cuchillo a la vista era capaz de cortarles la cabeza. Sus abuelos decidieron no tener mascotas en la casa por el bien de los pobres animalitos pues sabían que Platina era capaz de matarlos. Siempre criticaba a sus amiguitas porque no usaban ropa cara; o porque el auto del padre era un Citroen viejo y destartalado; o porque la casa no era lujosa, porque la madre no estaba bien vestida, etc.. Era despreciativa y arrogante y hablaba de ella todo el tiempo dándose aires de nobleza. Su pedantería era insoportable (en ésto también se parecía a Pulsatia y a sus otros primos paternos Lycopio y Silicio). Cuando cumplió ocho años sus abuelos la llevaron a cenar al Salón Dorado del Plaza Hotel a pedido de ella y cuando llegó, protestó porque la habían llevado a un lugar tan chiquito y poco importante. Realmente daban ganas de matarla!! Sin embargo, era muy miedosa; siempre temía que algo malo ocurriese y a veces se pasaba a la cama de su hermana por temor a los fantasmas. Esto le encantaba a Palladia que deseaba compañía. Platina no necesitaba a nadie y tenía amenazada de muerte a su hermana si le contaba a alguien sus debilidades. Si su hermanita por casualidad no estaba, se arrodillaba en su cama y rezaba en voz alta para ahuyentarlos. También la tristeza la hacía rezar. Era bastante contradictoria como su amiguita Ignatia, podía reírse de cosas serias o tristes o en su defecto llorar de alegría. Podía ahorrar durante años y despilfarrar todo lo ahorrado en un abrir y cerrar de ojos. Sumamente ambiciosa, nada le alcanzaba y era capaz de hacer cualquier cosa para conseguir lo que quería. Y si por casualidad no lo lograba era capaz de enfermarse. Así como mandoneaba y maltrataba a sus muñecas podía ser amable con la maestra o la directora de su escuela pudiendo llegar a adularla, siempre y cuando consiguiese algún beneficio con ésta actitud. Una mañana fatídica su abuela fue a despertarla para ir al colegio y la encontró como siempre durmiendo en esa posición tan extraña y peculiar como incómoda, pero que a ella le encantaba; boca arriba y con las piernas flexionadas. Ese día amaneció loca; bailaba, silbaba y cantaba como si estuviese poseída. Decía que veía diablos, que conversaba con los fantasmas y que todo su entorno era extraño y además pequeñito; que estaba en un país extraño. Por suerte ésto duró muy poco pues a las dos horas desapareció este.cuadro de locura y comenzó con fiebre, vómitos, dolor abdominal e hizo un cuadro de apendicitis. Siempre le pasaba lo mismo, alternaban sus síntomas mentales con sus síntomas físicos. Cuando volvió a casa luego de la intervención quirúrgica volvió a estar loca como una cabra. Palladia en cambio quería "brillar", llamar la atención, sentía una gran necesidad de sentirse aprobada. Le encantaba que la adularan y admiraran. Le importaba muchísimo lo que pensaran de ella (como a su primita Pulsatia y a sus amigos Nuxo y Staphy). Bueno, Nuxo, Staphy e Ignatia, los tres justicieros tenían transtornos por honor herido. En cambio Palladia se enfermaba por orgullo herido. Era muy orgullosa, altanera y tenía un arnor propio terrible igual que su hermana. Todo andaba bien si se sentía, aprobada, apreciada y adulada, pero si no lo lograba se ofendía enseguida, se sentía abandonada, desatendida, menospreciada e insultada. A su vez insultaba y como era muy insegura se fabricaba una coraza protectora volviéndose despreciativa como su hermana. Su delirio de grandeza era tan Fuerte que tenía la ilusión que crecía mientras caminaba. Cuando llegó a la adolescencia solía tener dolor en su ovario derecho lo cual no le impedía ir a bailar hasta las cinco de la madrugada. Lo pasaba bárbaro y se olvidaba del dolor mientras estaba divertida y en compañía, pero al día siguiente se sentía peor.

Las dos hermanas se llevaban bastante bien pues como eran bastantes parecidas se soportaban mutuamente. A quienes resultaban insoportables eran a quienes las rodeaban, por su altanería, su ambición, su desprecio. Platina, conociendo la debilidad de su hermana, la adulaba y conseguía de ella todo lo que quería. Palladia no era cruel ni sentía deseos de matar. De chiquita decía que soñaba con muchas casas, con infinidad de escaleras que ella subía y subía en su afán de llegar cada vez más alto. Con el tiempo fallecieron los abuelos que las habían criado, bueno en realidad "malcriado". Murieron sin el menor agradecimiento de sus nietas, sobre todo de Platina que era sumamente desagradecida (desagradecida con mayúscula). Por supuesto que con semejante carácter altanero ninguna de las dos se casó y siguieron viviendo juntas, compartiendo su abandono, su desprecio y su orgullo. Por desgracia no se les cruzó ningún homeópata en el camino como para cambiar el curso de sus vidas y permitirles a cada una de ellas lograr los más altos fines de sus existencia. Síntomas Platina • Abandono • Altiva • Egolatría • Ilusión que esta sola en el mundo • Ilusión que no tiene lugar en este mundo (ag) • Dictadora • Ilusión que es grande • Ilusión que los objetos son pequeños • Cruel • Matar, deseo de • Despreciativa • Ilusión, piensa que es un noble • Pedante • Temor a que algo ocurra • Temor a los fantasmas • Reza • Reza en voz alta cuando esta triste • Ríese por asuntos serios • Llanto por gozo • Avaricia • Despilfarra por falta de orden • Ambición por todos los medios posibles • Trastornos por ambición frustrada • Aduladora • Sueño posición sobre la espalda, muslos levantados, miembros inferiores descubiertos • Insania • Bailar • Silba • Canta • Ilusión de estar poseída • Ilusión que ve diablos • Ilusión que cosas familiares le parecen extrañas • Ilusión como en un país extraño • Alterna síntomas mentales con físicos • Ingrata Palladia • Ilusión que no es apreciada • Adulado, deseo de ser (e) • Temor a la opinión de otros • Altiva • Egolatría • Oféndese fácilmente • Abandono • Ilusión que la desatienden

• Ilusión que es menospreciada • Ilusión que es insultada • Insultante • Despectiva • Ilusión que crece mientras camina • Genitales femeninos, dolor de ovario derecho, música y excitación mejora y agrava al día siguiente, dolor de ovario conversación animada mejora (e) • Sueña con casas • Sueña con escaleras Rhusticio, el agotado Rhusticio era un niñito sumamente inquieto. Eran dos los más inquietos de su clase, él y Mercurito, pero había otros que seguían detrás; Teky, Chamomio, Silicio, Carcinino y otros más. Siempre estaba enfermo, resfriado, lleno de mocos y tos. Le hada muy mal el frío húmedo igual que a su amiguita Dulcamara y podía enfermarse solamente por acostarse sobre el pasto húmedo cuando refrescaba al atardecer. Rhusticio enfermo era un verdadero problema, pues no aceptaba los remedios. Tenía miedo que lo envenenaran. Era muy suspicaz. Fíjense que interesante!! Tenía varios amiguitos a quienes les pasaba lo mismo; Anacardio, Apisinia, Baptisio (ese loco que tenía la ilusión que sus dedos pulgares hablaban entre si... de qué iban a hablar dos pulgares de la misma persona!!), Atropino, Bryonio, Ignatia, La-chesita y hasta Phosphy, tan dulce y compasivo. Había unos cuantos más, pero búsquenlos ustedes porque ya me estoy saliendo del tema. Rhusticio se sentía muy sólito y abandonado. Tal era su grado de abandono que sentía que todo estaba quieto y muerto a su alrededor. Gracias a Dios que esta sensación horrible mejoraba al aire libre, así que en cuanto Rhusticio comenzaba a sentirse mal salía al jardín y chau, santo remedio. Rhusticio solía soñar mucho. Una noche tuvo una pesadilla horrible. Soñó que remaba, remaba, y remaba contra la corriente y no podía avanzar. Despertó a los gritos y su madre estuvo un largo rato consolándolo hasta que pudo conciliar el sueño. A los tres días otra pesadilla!! que trepaba, trepaba, y trepaba. Otra vez los gritos. La tercera vez fue una semana más tarde. Soñó que hada un esfuerzo físico enorme y se despertó todo contracturado con una tortí-colis dolorosísima que duró varios días y se curó con pañitos calentados con la plancha (recuerden que le hacía mal el frío húmedo y por su-puesto lo curaba el calor seco). "Si será movedizo este crío", -decía su abuela Romualda- "que ni en sueños se queda quieto". Pero Rhusticio vivía diciendo "Estoy cansado" "Estoy agotado" "No doy más" Pobre Rhusticio, era un niñito triste y vivía pensando en las cosas desagradables que le habían sucedido. Esto le ocurría frecuentemente después de la medianoche. Ya dijimos que Rhusticio vivía enfermito pero nunca tenía nada grave; resfríos y gripes. Pero "una vez al año" siempre para la misma fechase enfermaba "en serio". Tenía lo que los médicos llaman "parotiditis recidivante". Se le hinchaba e inflamaba la parótida Izquierda, exactamente una vez por año. La primera vez dijeron que eran paperas... La segunda vez ... Y bueno, las paperas pueden repetirse La tercera ve?: dijeron que era un pequeño calculito en el conducto de la glándula y lo tuvieron una semana masticando caramelos ácidos de limón. La cuarta vez le diagnosticaron parotiditis periódica recidivante y no le dieron nada. Pero Rhusticio estaba muy mal. Tenía mucha fiebre y se agravaba a la hora del crepúsculo. Inquietísimo, no paraba de moverse, pobrecito no tenía consuelo. Tenía muchísima sed. Se acercaba la tormenta de Santa Rosa y parecía que la proximidad del temporal lo ponía peor. Llamaron urgente a un eminente homeópata (cuyo nombre me reservo) que se sentó y registró concienzudamente sus síntomas homeopáticos. - "Rhusticio, saca la lengua"... - "Qué suerte!! Rhusticio tenía la lengua blanca. Toda blanca, menos un pequeño triángulo rojo en la puntita. Fue realmente una suerte!! - "O una casualidad??" Síntomas • Inquietud en niños • Frío agTava • Lluvioso tiempo (ag) • Tendencia a tomar frío • Crepúsculo agrava • Temor a ser envenenado • Suspicaz • Abandono, sensación que todo esta muerto y quieto (ag el rubro) • Abandono, aire libre mejora ( e ) • Sueña que rema (e) • Sueña que trepa 17

• Sueña con esfuerzos físicos • Garganta externa, tortícolis • Postración • Tristeza en niños • Dwels, vive pensando en acontecimientos pasados desagradables después de medianoche (e) • Periodicidad, anualmente • Cara, inflamación de parótida izquierda • Crepúsculo agrava • Inquietud durante el calor febril • Estómago, sed durante la fiebre • Generalidades, tormenta proximidad agrava • Boca, lengua decoloración blanca • Boca, lengua decoloración roja en punta triangular (e) Staphy, el contenido Staphy era un niño serio, muy dócil, asustadizo y nostálgico. Era muy prolijito, pero sobre todo muy sensible. Todo le molestaba y se ofendía muy fácilmente. Su hipersensibilidad se manifestaba con los olores, no toleraba ruidos, la música le hacía mal, todo lo hería, era muy impresionable; no toleraba la grosería. Pero contrastando con esto, por momentos se ponía muy irritable, colérico, insultaba y arrojaba objetos contundentes a quienes lo ofendían. Cuando se enojaba mucho temblaba de pies a cabeza, se ponía colorado como un tomate y parecía a punto de estallar. Su tía Estefanía, la mamá de Chamo mío que era su primito decía que se parecían mucho, pues su hijo hacía casi las mismas cosas. Chamomio también era un hipersensible pero !Q que menos podía tolerar era el dolor de dientes. Que mal la pasó cuando cortó sus primeros dientitos; berreaba, lloraba y había que acarrearlo en brazos. Si pedía algo y se lo daban, lo revoleaba por el aire. Traspiraba su cabecita con un sudor tan caliente, que casi quemaba. Para colmo, con la cortada de dientes tenía unas diarreas espantosas, verdes como espinaca picada y amarillas como el huevo. Staphy no sufrió al cortar los dientes pero sufrió poco tiempo después en el consultorio del dentista. Al año y medio tenía tres caries y a los cinco años su boca era un verdadero desastre. José Luis su odontólogo decía que parecía un partido de football; la mitad de sus dientes eran blancos, la otra mitad tenían camisetas a rayas blancas y negras y siempre había dos o tres árbitros todos vestidos de negro dando vueltas por ahí. Pobre Staphy, como sufría con su boca!!. Desde muy chiquito demostró gran sensibilidad ante las injusticias al igual que sus primitos Nuxo e Ignatia, pero a diferencia de lo que sucedía con ellos solo le importaban las injusticias que se cometieran con él y no con el resto del mundo. Como ven nuestro amigo era bastante egoísta. Como dijimos antes era asustadizo; asustadizo y miedoso; imagínense que le tenía miedo a su propia sombra!!. Además temía a los lugares altos, a la asfixia, sentía terror de salir solo a la calle y de caminar rápidamente pues sentía que alguien lo seguía y daba vuelta su cabeza permanentemente para cerciorarse que no hubiera nadie detrás de él, pero casi siempre estaba allí su sombra siguiéndolo y cuanto más corría más miedo tenía, pues su inseparable sombra no se despegaba nunca de él. Temía a la gente, a las enfermedades y a la muerte. El tiempo fue pasando y Staphy llegó a la adolescencia. "Staphy! ¿Dónde te has metido?" llamaba su madre. Desaparecía horas enteras y su progenitora lo sorprendía en su habitación, imagínense ustedes "haciendo qué cosa". - "Staphy otra vez!!!". - "Yo no hacía nada mamá!!". - "Encima mentiroso!". 18

Ya no lloraba más cuando lo retaban como cuando era chiquito, pero como tenía mucho orgullo y amor propio, no le gustaba nada que lo humillaran. Después de estos episodios quedaba pálido, ojeroso, irritable al máximo, embotado y callado. Por fin un día se enamoró de una vecinita. Era enamoradizo y sentimental. Imagínense que se pasaba el día escribiendo versos!. El drama sucedió cuando vio a su novia con otro chico. Sintió unos celos terribles, una bronca espantosa-, estaba indignado, exasperado, furioso, sintió ganas de matarla, pero su orgullo fue más fuerte. No dijo absolutamente nada y se tragó absolutamente todo. Por supuesto se enfermó. Levantó 40°C de temperatura y se puso tristísimo. Nadie sabía lo que pasaba, no hadan más que preguntarle qué había ocurrido y era cada vez peor, estaba irritable, su pena era silenciosa, su pena era reprimida, lo habían decepcionado, estaba indignado, su honor había sido herido, lo habían mortificado. El era superior a los demás y no iba a rebajarse frente asemejante bajeza así que se tragaba todo aunque estuviera a punto de estallar. Por un momento tuvo temor a perder el autocontrol pero por suerte llamaron a un médico que estaba terminando el curso de Homeopatía y rápidamente le dio Staphy-sagria, curó su cuadro agudo, se arregló con su novia, más adelante se casaron, fueron felices, comieron perdices y tuvieron muchos hijos. Eso sí, antes del casamiento tuvo que tomar una nueva dosis de Staphysagria. Síntomas • Serio • Dócil • Asustadizo • Nostalgia • Concienzudo • Hipersensible • Oféndese fácilmente • Hipersensible a olores • Hipersensible a ruidos • Hipersensible a grosería • Música.agrava • Impresionable (agregado) • Cólera violenta • Insulta • Arroja objetos a personas que lo ofenden • Cólera con temblores • Cólera con cara roja • Caries precoces en niños • Dientes: decoloración: negra. decoloración: negra en franjas (E) • Injusticias: no puede tolerar • Egoísmo • Temor a su sombra (Ag) • Temor a los lugares altos • Temor a la asfixia • Temor a salir solo a la calle • Temor a caminar rápidamente • Ilusión que es perseguido • Mira hacia y atrás como si lo siguieran • Temor a la gente • Temor a la enfermedad inminente • Temor a la muerte • Masturbación disposición a • Mentiroso • Llanto por admonición • Altivo • Egolatría • Irritable después de masturbación • Embotado después de masturbación • Callado luego de excesos sexuales • Enamoradizo • Sentimental • Versos, hace • Cólera violenta • Indignación • Rabia • Matar, deseos de • Cólera, paroxismos de fiebre producidos por • Tristeza durante la fiebre

• Irritabilidad durante el calor febril • Trastornos por pena silenciosa' • Trastornos por pena reprimida • Trastornos por decepción • Trastornos por indignación • Trastornos por honor herido • Trastornos por mortificación • Ilusión de humildad y bajeza de los demás mientras el es grande • Temor a perder el autocontrol • Casamiento: la idea le parece intolerable • Irresoluto para casarse. NOTA: El parágrafo correspondiente a Chamomio no se tradujo al lenguaje del repertorio para evitar confusiones. Tarentulina, la hispánica Como ustedes se imaginarán Tarentulina nació en España, pero debe haber tenido algún abuelo italiano, pues le encantaba bailar La tarantela. Era una niñita muy alegre; locuaz y dicharachera, muy juguetona; siempre tenía ganas de jugar. Tarentulina tenía su lado malo. Una vez al año, siempre para La misma fecha se enfermaba. Se ponía loca, furiosa, desgarraba su ropa, pegaba, pateaba, daba unos alaridos terribles; - "No me toquen !!!"... - uNo me miren !!!" ... - "No me hablen !!!" .... -gritaba en pleno ataque de histeria-. - "Déjenme sólita!!!", -chillaba como loca-, pero como tenía miedo de estar sola al ratito nomás pedía compañía. Era contraria como el mejor; siempre llevando la contra, desobediente, se negaba a contestar si le hadan alguna pregunta. Se escondía debajo de la cama como si alguien fuera a atacarla. Parecía un bicho asustado. Terca como una mula, era capaz de golpear su cabeza contra la pared y tirarse de los pelos. Arañaba a quien se le acercara y amenazaba de muerte a quien tuviera a su alcance. Revoleaba cuanto objeto llegaba a sus manos. Sus padres sabían que la única forma de calmarla era haciéndole escuchar música, que primero la excitaba pero luego de bailar un buen rato comenzaba a calmarla. Era una histérica de aquellas!!! Siempre necesitaba público para actuar. Podía simular una enfermedad y se agravaba cuando tenía gente a su alrededor. Su inquietud era espantosa, sentía un terrible impulso por correr (igualita que su primo Teky al cual se pareda bastante). Saltaba de un lado a otro como si fuera una langosta haciendo gestos disparatados y riéndose como loca. Siempre apurada; caminaba rapidito, rapidito. Se movía rapidito, rapidito, pero lo peor de todo es que vivía apurando a todo el mundo. Por las noches tenía pesadillas, soñaba con agua, con animales y con cadáveres y era tan inquieta que dormida caminaba rapidito, rapidito por toda la casa. Un buen día casi mata al gato tratando de ahogarlo en la pileta. Su padre furioso la castigó. Tarentulina se ofendió terriblemente, se negó a hablar por una semana, se encerró en su pieza a oscuras y no quiso comer nada por varios días. Con una tijera cortó en tiritas casi toda su ropa pero sobre todo la que era azul, verde, amarilla o negra pues odiaba esos colores. Como se imaginarán la vida familiar en estas condiciones era un infierno. Sus padres estaban muy agotados y al borde del ataque de nervios. La llevaron a un homeópata que le dio Tuberculina 200, 1 papel. Se calmó un poquito pero volvió a agravarse; probó con Mercurius, luego Stramonium, Sulphur por supuesto y nada...

Un día en la consulta Tarentulina pidió un papel y un lápiz para dibujar. Fue una liberación, pues cuando estaba ocupada y concentrada podía estar "un ratito" quieta. Lleno la hoja de arañas, grandes, chiquitas, peludas algunas, de patas largas otras. Todo esto mientras pateaba "concienzudamente'' el escritorio. - "Pero cómo no se me ocurrió antes!!", -exclamó el homeópata que ya estaba al borde del shock emocional. - "Por fin!! Gracias a Dios!!", -exclamó aliviado, pues Tarentulina se había convertido en su obsesión!!! Le hizo la receta y Tarentulina mejoró rápidamente luego de tomar el medicamento. - "No se habrá enfermado por aquella picadura de araña que tuvo cuando era chiquitita??", -preguntó la abuela-, cuando se estaban yendo del consultorio. - "Todo es posible", -contestó el homeópata-. - "Todo es posible". Síntomas • Bailar • Baile en niños • Alegre • Locuaz • Juguetona • Jugar deseo de • Periodicidad anual • Delirio maníaco • Delirio rabioso • Destructividad • Pega • Patea • Grita • Toquen, aversión a ser • Temor a ser tocado • Miren, no puede tolerar que lo • Hablen, aversión a que le • Histeria • Compañía, aversión a, pero teme estar solo • Contraria • Desobediente • Contesta, aversión a contestar • Esconderse, deseo de, por temor a ser atacado • Obstinada • Golpea su cabeza contra la pared • Arrancar, deseo de, el pelo de uno • Araña • Matar amenaza • Arroja cosas • Música agrava • Música mejora • Baile salvaje • Simula enfermedad • Extraños, presencia de, agrava • Inquietud • Impulso de correr • Salta • Gestos disparatados • Risa excesiva • Prisa • Prisa caminando • Prisa en movimientos • Prisa, todos deben apilarse • Sueños con agua • Sueños con animales • Sueños con cadáveres • Sonambulismo • Cruel • Trastornos por castigo • Maliciosa (rencorosa) • Aversión a la luz • Huye de la luz • Comer rehusa • Colores, aversión al azul, verde, amarillo, negro 19

Teky, el inquieto Cuando Teky nació lo primero que dijo La nurse cuando lo vio fue: "Que peludo es, parece un monito". Y realmente era cierto, sus hombros, su espalda, sus bracitos y su frente estaban recubiertos de un vello negro bastante espeso. Lo bañaron, le lavaron La cabecita que estaba recubierta de un pelo renegrido bastante largo, lo vistieron primorosamente y se lo llevaron a su madre. Como estaba vestido nadie se impresionó. Eso sí, tenía unos hermosos ojazos negros y unas pestañas también negras, tupidas y arqueadas. Tenía ojos de terciopelo. Su tía Felisa dijo que era muy parecido a su primita Phosphy cuando era recién nacido. Sus abuelos estaban felices. Sin embargo, a su padre algo le preocupaba. - "Todo bien Doctor?" le preguntaba al neonatólogo. -"Le revisó bien los pulmoncitos?" - "Por qué tanta preocupación?" "Hay algún antecedente en la familia?" - "Si", admitió su progenitor. “Mi padre tuvo tuberculosis y estuvo internado en el Hospital Muñiz varios años. Mi mamá y dos de mis hermanitos se contagiaron. Es una enfermedad terrible y me dijeron que es hereditaria!" - "Déjese de tonterías", contestó el neonatólogo. Además en tres días le damos la BCG y queda "inmunizado para siempre". Dicho y hecho; a los tres días le dieron la BCG...Pero solo Dios sabe porqué, la vacuna le hizo mal. Lloró tres días seguidos, estaba irritable, vomitaba, tuvo fiebre y al mes comenzó a supurarle y ésto persistió durante todo su primer año de vida. Pobre Teky, no solo reaccionó con la BCG sino que cada vacuna que recibía le traía problemas. Era un niño inquieto. Mientras fue un bebé y no podía movilizarse por sí mismo era necesario acarrearlo en brazos y pasearlo. Más de una noche sus padres desesperados porque no dormía, sacaban el auto de la cochera y lo llevaban a pasear. Ya desde chiquitito le encantaba viajar. Eso sí, cuando estaba bien dormido y llegaban a casa, bastaba con apoyarlo en su cuna para que recomenzaran los gritos. Era infernal!!!. Para colmo, si se dormía también gritaba en sueños. Parecía que tenía pesadillas pues tenía verdaderos terrores nocturnos. Fue un niño precoz en todo lo que fuese motricidad. Caminó a los diez meses, se trepaba a todos lados, no le tenía miedo a nada, era audaz, digamos que casi temerario. Podía caminar por el borde de una comiza si se descuidaban. Eso si, que no se le acercara un perro o un gato porque huía despavorido. Tampoco le gustaba estar solo, y tenía miedo al despertar. Sería por esto último que despertaba tan irritable? Yo diría que hasta era más irritable que su primo Lycopio, y eso que Lycopio a la mañana era realmente imbancable. Sin embargo, a pesar de su precocidad motora, habló bastante tarde, pero cuando se largó a hablar no lo paraba nadie, era sumamente locuaz; saltaba de un tema a otro como Lachesia y Lycopio y su madre sabía que estaba con

Cuando tuvo varicela le quedaron las marcas por muchísimo tiempo pues, a pesar de todos los cuidados, nadie pudo evitar que se arráncala, las cascaritas. Teky era muy variable, siempre quería cambiar, le encantaba la calle, salir a pasear y vagabundear. Siempre estaba con tos, lleno de mocos y tenía un ganglio en el cuello que no desaparecía nunca. Una vez por mes levantaba fiebre, agravaba su tos, sus mocos, y el pediatra de daba antibióticos. Luego comenzó a enfermarse más seguido; cada tres semanas y luego todas las semanas, exactamente cada siete días. La única vez que estuvo bárbaro fue un verano en que sus padres se fueron dos meses a Mar del Plata; el aire de mar le hada bárbaro!!!. Pero bastó que subieran al auto y recorrieran veintidneo kilómetros de la ruta dos para que aparedera el primer moco; grande, espeso, verde y pegajoso. - "Este chico se va a volver anémico con tanto antibiótico", protestaba su abuela materna y sembraba cizaña contra su familia política. - "En nuestra familia no hay ningún tuberculoso". - "Mira nena", le decía a su hija, "para mi que ésto es una herencia de tu suegro No me gusta nada esa tosecita seca que tiene toda la noche". "Además, oíste cómo rechina los dientes? Seguro tiene parásitos!!! Qué barbaridad!!. Su madre harta de los antibióticos, las toses y los mocos, su marido ansioso y su madre invasora, decidió llevarlo al homeópata. No fue muy convencida pues era bastante suspicaz pero tuvo que convencerse pues Teky mejoró muchísimo con la medicación. Le dieron T.K 200, una dosis de microgránulos y otros que se llamaban TKP para todos los días. Qué nombre raro!!! Más pareda una marca de rulemanes que un remedio, pero que bien le hizo!! Al principio eliminó tanta mucosidad, que pareda una verdadera fábrica de mocos. Para gran sorpresa de sus padres, Teky comenzó a dormir bien, no se despertó más aterrorizado, calmó su inquietud, mejoró su carácter, perdió el miedo a los animales y hasta desaparedó el sarro de los dientes para gran sorpresa de su odontólogo. Síntomas • Piel, lanugo en reden nacidos (ag) • Ojos, pestañas tupidas (ag) • Trastornos porvacunación (ag) • Irritabilidad en niños • Inquietud en niños • Alzado en brazos desea ser (ag) • Viajar, deseo de • Grita durante el sueño • Terrores nocturnos en niños (ag) mc. repertory • Precoz (ag) • Audada (ag) • Temerario (ag) • Temor a los perros • Temor a los gatos • Temor a estar solo (ag) • Temor al despertar • Irritabilidad al despertar • Hablar, lento para aprender a (ag) • Locuaz cambiando rápidamente de un tema a otro • Locuaz durante el calor febril • Insultante • Insulta • Arroja cosas (ag)

fiebre, aún sin tocarlo, pues hablaba más que nunca. Qué boquita tenía Teky!! Nadie sabía donde, pero aprendía cada palabrota que horrorizaba a sus padres. Cuando se enojaba no solo insultaba sino que arrojaba cosas como Staphy y Chamomio. Arañaba, gritaba y era capaz de darse cabezazos contra la pared. Era terco como una mula terca, se ofendía de nada y era bastante rencoroso.

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Rasga (araña) (ag) Golpéase la cabeza contra La pared y las cosas Obstinación en niños Oféndese fácilmente Malicioso Arranca las cascaritas de sus lesiones de piel (autoagresión) agregar el rubro Variable (agregar el rubro) Cambiar, deseo de

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Viajar, deseo de Periodicidad, vigésimo octavo día Periodicidad, vigésimo primer día Periodicidad, séptimo día Aire, mejora a orillas del mar (ag) Rechina dientes durante el sueno Dientes, sarro

Veratrina, la orgullosa Veratrina fue desde que nació una niñita muy enferma. Nació con una enfermedad de Hirshsprung (aganglionosis del intestino grueso) y fue operada a los diez días de vida. Lesacaiontodo su intestino grueso. Fue su primera gran pérdida. Tuvo muchas internaciones, (como veinte) por diarreas y deshidratación, y se ve que todo este sufrimiento la alteró bastante. Era una niñita soberbia y altanera; cuando quería algo lo conseguía siempre, a veces por las buenas, a veces por las malas, en realidad, era capaz de hacer cualquier cosa por conseguir lo que se le había metido en su cabecita. "Mamita querida, cómo te quiero!!!", decía besuqueando a su madre. Besaba a sus muñecas, a sus ositos de peluche, a su perro Joa quín a quien adoraba, lo mismo que a su gata Almendra. Afectuosa, dulce, nostálgica, vivía quejándose que no la querían. Un día, después de una discusión con su hermanita, su madre la encontró preparando su valija. Había puesto sus mejores ropas, sus pulseritas de oro, su biblia infantil, siete pepinos, un melón y una heladerita portátil llena de cubitos de hielo. - "Me voy de casa!!!", dijo muy resuelta, pues estaba segura de llevar "todo lo necesario para subsistir". - "No nos vas a extrañar??", preguntó su madre, pues conocía los puntos vulnerables de la personalidad de su hijíta. Esto dio resultado, pues sólo de pensar en la nostalgia decidió quedarse en casa. El próximo paso fue comenzar a robar dinero que no le duraba ni un momento, pues lo derrochaba a diestra y siniestra. Compraba cosas extravagantes; coronitas doradas y disfraces de reina. Se creía una gran persona. Su abuelo Gerórimo era un jubilado que había conocido tiempos mejores y que "a gatas" mantenía un Citroen viejo y destartalado. Veratrina no se subía a "eso" ni que la acuchillasen y despreciaba a su abuelo porque no tenía dinero. Era realmente cruel. Despreciaba a sus amiguitas si no tenían ropa buena o si sus casas no eran lujosas. Un día su padre llegó preocupado pues sus negocios no iban bien. Veratrina escuchó que sus padres hacían planes para reducir gastos. Inmediatamente enfrentó a su padre y le dijo: - "Si llegas a vender el "Mercedes" me voy de casa!!!. "Y que no se les ocurra mudarse a un barrio pobre!!... Allí debe estar lleno de ladrones!!! Las casas no tienen vigilancia privada, ni grandes rejas, ni perros adiestrados!!! Tengo miedo a perder todo y que nadie me quiera!!!, lloraba sin consuelo. Por suerte la crisis económica fue superada y ella pudo volver a "caminar con la cabeza en alto". Nadie la aguantaba, mandoneaba a todo el mundo, siempre quería ganar y muchas veces no jugaba para no correr el riesgo de perder. Otras veces competía con alma y vida y hasta llegó a morder

a un compañerito de jardín porque le ganó una carrera. A Veratrina le encantaban las cucurbitáceas. Qué será eso? Bueno, cucurbitáceas son los pepinos, el melón, la sandía, etc.. La volvían loca los helados, robaba hielo y lo masticaba todo el día y cuando había asadiío, se comía la grasa y dejaba la carne (le daba asco). ' Un día Veratrina se enfermó. Tuvo fiebre altísima, precedida de escalofríos y cuando la pusieron en agua fría para bajarle la fiebre se puso toda azul, sobre todo sus manos y uñas. Casi pierde el conocimiento. Tenía mucha diarrea como siempre que se enfermaba, con el agravante que se había comido media docena de pepinos en vinagre... Cuando llegó su médico a verla, notó inmediatamente que su frente estaba bañada en una transpiración fría como el hielo; que estaba pálida y desencajada, levemente deshidratada. ... Mambrú se fue a la guerra Chiribín... chiribín... chin chin Mambrú se fue a la guerra Y no se cuando vendrá!!!

- "Esta chica está completamente loca", dijo el pediatra. "Espero que no esté haciendo una encefalitis!!" - "Siempre canta cuando tiene fiebre", dijo su madre con gran naturalidad. - "¡¡Siempre canta cuando tiene fiebre??!! Por qué no me lo dijeron antes!! será posi ble!!! - "No creímos que fuera tan importante", se defendieron sus padres con mirada culposa. - "¡¡Pero claro que es importante!! Es importantísimo!!! Anotó en su libretita: 1 - transpiración fría en frente 2 - decoloración azulada de manos durante el escalofrío 3 - canta durante !a fiebre Y sacó unos globulitos de su botiquín y santo remedio. Síntomas • Altiva • Ambición por todos los medios posibles • Afectuosa • Besa a todos • Besa incluso objetos inanimados • Dulzura • Nostálgica • Abandono • Religiosas afecciones • Deseo de pepinos • Deseo de hielo • Amenaza irse de su casa (agregar el rubro) (Dr. Detinis) • Despilfarra dinero • Extravagancia • Ilusión que es un gran personaje • Despreciativo • Crueldad • Trastornos por pérdida de dinero • Temor a los ladrones • Camina con la cabeza en alto (agregar el rubro: plat.- lyc-verat.) (Dr. Detinis) • Dictatorial • Competitivo (agregar el rubro: lyc. - lach. verat. - nux. v.) • Deseo de fruta • Deseo de helados • Deseo de hielo • Deseo de grasas (Ag) • Aversión a la carne (Ag) • Decoloración azul de manos durante el escalofrío • Decoloración azul de uñas durante el escalofrío • Comida, verduras agravan • Deseo de comidas agrias • Recto, diarrea después de pepinos (e) • Cara, transpiración fría • Cabeza, transpiración fría en frente • Cabeza, transpiración en frente durante la fiebre • Cara, decoloración pálida durante la fiebre • Cara, expresión demacrada • Canta durante la fiebre 21

Las comadres de Vivoratá Había una vez, hace muchos muchos años, en un hermoso pueblo de la provincia de Buenos Aires un grupo de comadres que se reunían todos los jueves a tomar mate amargo y jugar a las cartas, pero fundamentalmente a chismosear. Eran Las viejas más chusmas en cien kilómetros a la redonda y no dejaban títere con cabeza. Los vecinos comentaban que dormían "enroscadas". Lachesia comandaba el grupo; siempre pintarrajeada con sus pulseras y aros extravagantes, mandoneando a diestra y siniestra, hablando hasta quedarse sin voz. No dejaba a nadie terminar una frase, debía terminarla ella, eso que las otras no se quedaban atrás. Cascabella era siempre la primera en llegar y la última en irse, pues tenía terror a estar sola. Esto también le sucedía a Bapsia que vivía diciendo que quería que pasaran un día en el campo en lugar de estar siempre encerradas. Cascabellase las tiraba de clarividente (compitiendo con Lachesia) y decía que veía a la muerte como un esqueleto grande y negro. Sentía cosas extrañas... como si un hilo de te tirara de la nariz hacía la nuca o como si dos hilos tiraran hacía atrás de ambos lados de su cuello. Un frío día de invierno salió en los diarios que había nevado en Mar del Plata y se puso como loca, pues quería que sus amigas la acompañaran a esa ciudad (por nada del mundo hubiese ido sola). Quería ver la nieve y sobre todo comérsela. Nadie le hizo caso por supuesto, y tuvo que contentarse con raspar el fondo del congelador (nadie tenía freezer en el pueblo en esos tiempos). Cuando le preguntaban algo siempre respondía que "no" a todas las preguntas (como Kalito ... se acuerdan?) Otro día enloqueció a todas diciendo que en la casa había olor a víbora y finalmente cuando terminaron de revisar todas las habitaciones dijo que ya no había olor a víbora, sino olor a hospital. - "¡¡A1 hospital te vamos a mandar nosotras si no nos dejas en paz!!", -gritaron todas a coro-. Porque gritar, gritaban todas, pues eran bastante sordas. A pesar de la sordera muchas veces se quejaban que oían voces Se "quejaban" de otras cosas también. Eran bastante quejosas, sobre todo Lachesia, Cascabella, Crotalia y Naja. Bueno, ya que hablamos de Crotalia, siempre decía que sentía la lengua atada y que eso le impedía hablar. Siempre se quejaba que le apretaba la ropa en el cuello y que ésto la asfixiaba y no la dejaba respirar. Sus amigas se burlaban de ella, pues tenía muy mala memoria; podía entrar a un negocio y salía con las manos vacías, pues no lograba recordar para que había entrado. Era muy llorona y no podía leer sin ponerse a llorar. Tenía la costumbre de crujir tanto los dientes cuando dormía, que los tenía totalmente gastados y el dentista del pueblo tuvo que hacerle • un aparato para usar mientras descansaba, para que su familia pudiese dormir tranquila y para que ella pudiera seguir masticando. Crotalia se quejaba que el aparato le lastimaba la boca, y que amanecía con la lengua hinchada al doble de su tamaño y que al sacarla se le desviaba hacía la derecha. Era sumamente desconfiada, al igual que Lachesia y Cenchria. Tan desconfiada era Cenchria que tenía la iiusión que había alguien detrás de ella. Era insensible y cruel, envidiosa como ninguna (la única que podía competir con ella era Lachesia). Sumamente celosa, no soportaba que alguna de las comadres tuviera amistades fuera del grupo o que se encontraran entre ellas sin su presencia. Siempre vivía con miedo a que la encerraran en un asilo. También estaba Elapsia, la que quería ir a pasear al campo, pero que en cuanto se nublaba un poquito decía que mejor se quedaban en casa, pues le tenía terror a la lluvia. Esto 22

también le sucedía a Najita, que era la más joven del grupo. Elapsia era muy nostalgiosa y vivía hablando de cuando era chiquita y vivía en una hermosa casa llena de flores en las afueras del pueblo. De ahí le vendría su deseo de pasear por los campos? Era muy temerosa, siempre pensando que algo malo podía ocurrir, miedo a la enfermedad inminente y mucho miedo a la soledad. Najita, como dije, era la más joven, siempre triste, cavilando sentadita al lado del fuego, con esa ilusión de estar muerta de hambre, con esa irresolución que la enloquecía; ese antagonismo con ella misma que a veces le hacía pensar en el suicidio. Finalmente estaba Viperina, que venía pocas veces, pues sufría muchísimo con sus piernas. Tenía unas varices terribles, sentía que las piernas estaban por estallar, sobre todo si éstas estaban colgando. Tenía un gran complejo de interioridad, pues sus piernas eran realmente horribles; verdes, azules, negras, amarillas ...Todas moteadas como cuero de víbora. Los vecinos de Vivoratá no olvidaron nunca aquel 21 de septiembre de mil novecientos cincuenta y algo ... aquella primavera nefasta en que todas las comadres se enfermaron. Todo el pueblo se conmocionó y corrían de aquí para allá para atenderlas. La que estaba realmente grave fue Crotalia. Se agarró una hepatitis gravísima, en realidad una necrosis hepática. De tan amarilla estaba verde, tenía vómitos negros, deposiciones negras y orinaba una gelatina sanguinolenta. Todo esto al mismo tiempo. Sangraba por todos lados, hasta por debajo de las uñas y por los poros de su piel. Estuvo gravísima, la aislaron pensando que tenía la "fiebre negra" y se salvó de milagro. Esa misma primavera Najita sé enfermó del corazón y estuvo tan grave que ni hablar podía. Sentía que había hecho todo mal, había una voz que le indicaba lo que debía hacer y otra que le mandaba desobedecer. Se sentía que estaba bajo un poder sobrehumano y cuando se lo contó a Lachesia, ésta última la miró impávida y le dijo: - " Eso a mí me pasó toda la vida y no le doy ninguna importancia". Lachesia se agarró una angina terrible* que comenzó del lado izquierdo y luego pasó al derecho. Hablaba, hablaba y hablaba durante la fiebre y sólo mejoraba con bebidas heladas. En cuanto mejoró su angina le diagnosticaron un quiste en el ovario izquierdo. Bueno, esa primavera fue nefasta; Viperina estaba peor que nunca de sus várices, Cenchria también enfermó del corazón y Cascabelia se pasó soñando con arañas, cadáveres y fantasmas y muerte. No podía quedarse sola ni un instante, y tenía permanentemente "ataques" de clarividencia. Fue por esa época que apareció un homeópata en el pueblo. Venía de la Capital con su traje oscuro, su sombrero de fieltro negro, sus enormes libracos y un maletín lleno de frasquitos con glóbulos. Se enteró que las comadres estaban tan enfermas y como era muy compasivo las visitó sin cobrarles ni un peso, les dio a cada unasu medicamento constitucional y el resultado fue tan asombroso que cuentan en el pueblo que no chismosearon más, que se desenroscaron, que se dedicaron a hacer obras de bien, que pudieron abrocharse nuevamente el último botón de la camisa y usar pañuelitos en el cuello y nunca pero nunca más volvieron a enfermarse en primavera. Síntomas • Dictatorial: Lachesis • Locuaz: Lach. - Crot. h. • Locuaz solo se detiene por ronquera: Lach. (E) • Temor a estar sola: Crot. c. - Elaps. • Clarividencia: Crot. c. - Lach. • Ilusión que La muerte aparece como un esqueleto gigante y negro: Crot. c. • Deseo nieve: Crot. c. • Contesta "no" a todas las preguntas: Crot. c. • Olor a víbora (ag) Cot. c. • Olor a hospital (ag) Crot. c. • Gritos: Crot. c. - Crot. H. - Cench. - Eiaps. - Lach. - Vip. • Audición, pérdida: Elaps. - Lach. - Vip. • Sordera nocturna: Elaps. (agregar rubro) • Quejidos: Lach. - Crot. h. - Crot. c. - Naja • Ilusión que tiene la lengua atada: Crot. h. - Garganta externa, ropa ajustada agrava: Cench.- Crot. h. Elaps. - Lach. - Naja • Memoria, d2bilidad: Cench. - Crot. c. - Crot. h. Lach. • Llanto leyendo: Crot. h. - Lach. • Bruxisrno durmiendo: Crot. h. • Boca, lengua agrandada: Crot. h . • Boca, lengua se desvia a la derecha (ag): Crot. h. • Suspicaz: Lach. -Cench. - Crot. h. • Ilusión que hay alguien detrás de ella: Cench. • Cruel: Lach. - Cench. • Envidia: Lach. -Cench.

• Celos: Lach. - Cench • Ilusión que la enviaran a un asilo: Cench. • Temor a la Lluvia: Elaps - Naja • Nostalgia: Lach. - Elaps. • Temor a que algo ocurra: Elaps. • Temor a la enfermedad inminente: Elaps. -Lach. • Temor a la soledad: Daps. • Temor a estar sola: Cort. C. - Elaps. • Cavila sentada al lado del fuego: Naja • Tristeza como si hubiera hecho todo mal: Naja (e) • Ilusión que esta muerta de hambre: Naja (e) • Irresolución: Crot. h.- Lach.- Naja • Antagonismo hacía sí mismo: Naja (ag) • Suicidio, disposición: Crot. h. - Lach. - Naja • Extremidades, várices miembros inf.: Crot. h. - Lach. - Vip. • Extremidades, decoloración: amarillenta en zonas: Vip. moteada: Lach. negrura: Vip. color oscuro: Vip. rojo azulado: Vip verdoso amarillo: Vip. • Primavera agrava: Cench. - Lach. - Crot. h. • Piel decoloración amarilla: Crot. h. - Lach. - Vip. • Vómitos negros: Crot. h. - Lach. • Vómitos de sangre: Crot. h. - Lach. • Materia fecal negra: Crot. h. - Elaps. - Lach. • Orina gelatinosa. Crot. h. • Orina sanguinolenta: Crot. c. - Crot. h. - Lach. • Transpiración manchando sanguinolenta: Crot. h. - Lach. • Palpitaciones, hablar no puede: Naja (e) • Voluntad, contradicción de: Naja • Dos voluntades siente como si tuviera: Lach. Naja • Ilusión que esta bajo un poder sobrehumano: Lach. - Naja • Garganta interna dolor izquierda: Crot. h. - Lach. Naja • Garganta interna, dolor mejora bebidas frías: Lach. • Locuaz durante la fiebre: Lach. • Genitales femeninos induración ovario izq.: Lach. • Sueños con arañas: Crot. c. • Sueños con cadáveres: Crot. c. - Crot. h. - Elaps. • Sueños con fantasmas: Crot. c. - Lach. • Sueños con muerte: Crot. c. - Crot. h. - Lach. • Temor a estar sola. Crot. c. • Clarividencia: Crot. c. - Lach. La familia Tacañuzzy Codillo, una familia muy particular Los Tacañuzzy Codillo era gente muy adinerada. Ya veremos durante el transcurso de esta historia cómo llegaron a una situación tan. acomodada. Vivían en el mejor barrio de la ciudad, sobre una colina en una casa señorial de tres plantas, con un hermosísimo jardín Lleno de árboles frondosos. La familia estaba constituida por Sulphurio Tacañuzzy y su mujer Causticia Codillo. Tenían tres hijos varones. Arsenio de dieciocho, Nuxo de dieciséis y el benjamín Lycopio, de diez. La familia ocupaba las dos primeras plantas de la vivienda junto a su gata Alumina y al personal doméstico: el jardinero, un viejito a quien llamaban Don Calcáreo y la mucama Veratrina. Veratrina era la única que no encajaba en este cuadro familiar y ya veremos las discusiones y enredos que generaba, pero la soportaban porque era muy eficiente, muy afectuosa con los niños, además de ser excesivamente limpia, ordenada y prolija. La tercera planta tenía dos alas. El ala derecha con orientación al sudoeste que era más fresca y el ala izquierda con orientación al noreste que era la más cálida. En el ala izquierda vivían los abuelos matemos los Codillo: Don Silicio Codillo y su mujer Setia. Eligieron esta orientación por ser ambos friolentos y sentir cierta inclinación hacia la izquierda (Dejo bien claro que no se trataba de política). Por supuesto que Don Bryonio Tacañuzzy y su mujer

Pulsatia eligieron el ala derecha por razones obvias. Vivían así en "casi perfecta armonía" once personas y una gata en esta hermosa y lujosa mansión. Don Calcáreo, el jardinero, había trabajado con los Codillo desde muy joven y estaba tan acostumbrado a la familia que la tomaba como propia y no protestaba por lo escaso de su sueldo. Además, él casi no gastaba nada, tenía la comida asegurada, un buen techo para guarecerse de las tormentas, los truenos y los relámpagos. Tenía un servicio médico pago que le cubría las consultas odontológicas, a las que nunca acudía por tener temor al dentista, pero se sentía seguro y protegido. Veratrina sí que protestaba y cómo protestaba!! Ella lavaba, acomodaba, limpiaba, ponía la cara cuando el carnicero, el verdulero o el almacenero pretendían cobrar sus cuentas y a ella, justamente a ella le pagaban ese sueldo miserable. Por supuesto que no llegaba al día cinco del mes y ya se había gastado todo en pilchas, joyas y perfumes, porque cuando Veratrina salía, (solamente si la venían a buscar en un buen auto) se empilonaba mucho mejor que su patrona. Bueno, en realidad Causticia nunca se caracterizó por tener buen gusto en el vestir. Causticia era una buena persona, cautelosa y temerosa y como todos los de la familia ("anque il Jardinieri") avara como ella sola. Administraba el dinero a las mil maravillas y con lo poco que le daba su marido Don Sulphurio, ella se las arreglaba. No bajes corriendo las escaleras Arsenio! Mira que si te rompes una pierna no vas a poder ir a la facultad en colectivo, y yo no pienso pagarte un taxi! Cuidado con la patineta Lycopio. Mira si te vas a la calle y te atropella un auto! Nuxo! No salgas si hay tormenta. Te Duede caer un rayo encima! Pobre la vecina de en frente Doña Lucia!; decía Causticia con los ojos llenos de lágrimas. Se le murió el marido tan "de repente" y se le fue una fortuna en terapia intensiva. Pobre Doña Lucía, va a tener que vivir con una miserable pensión. Su marido Sulphurio se "sulfuraba"; ¡cuando vas a dejar de compadecerte de los demás!! Siempre pensando en los demás!!. Deberías pensar en tu pobre marido que tiene que trabajar día y noche para mantener a estos tres vagos, la mucama, el jardinero y la gata. Y pensar que cuando yo veo un perrito abandonado por la calle no soy dueño de traerlo a esta casa, porque todos le tienen miedo a los perros, desde mi mujer, hasta el jardinero, pasando por la mucama, mis queridos suegros y mi madre! Un día de estos me voy a ir, no como amenaza Veratrina que amenaza y amenaza, pero se queda porque no quiere perder el empleo. Me voy y chau. Me salvo yo y no me importa nada ni nadie!. ¡Flor de egoísta! le gritaba Causticia. Qué clase de padre sos?! inmediatamente Sulphurio se arrepentía y lleno de culpa pedía disculpas a su mujer. ¡Qué linda que estas hoy Causticia! La adulaba. Sos un mentiroso. Lo decís para que no me enoje porque anoche dejaste toda tu ropa tirada. Estaba toda manchada de grasa. A quién se le ocurre arreglar el auto vestido con su mejor traje, camisa y corbata?! Solamente a vos! No te alcanza con mancharte la camisa con salsa, sopa, compota, mostaza, etc. etc.. Siempre me entero de lo que comiste sin preguntártelo, solo por las manchas de la ropa. Eran un matrimonio realmente feliz!! Los hijos, Arsenio, Nuxo y Lycopio se parecían bastante entre sí, eran friolentos, sobre todo los dos mayores, muy ordenados (en eso ninguno sacó los genes paternos) y hadendo honor a la tradidón familiar bastante tacaños. Arsenio pedía plata para libros que no compraba y pedía prestados. Pedía plata para viáticos y era capaz de caminar viente a treinta cuadras para guardarse el dinero. Nuxo no gastaba en los demás, pero para él compraba lo mejor, lo más caro. Siempre estaba impecable. A Lycopio tampoco le gustaba gastar pero tenía una gran debilidad: los kioscos de golosinas. Cómo le gustaban los dulces! Los abuelos maternos y paternos vivían en forma independiente pero, una vez a la semana, se juntaban los nueve a cenar y Veratrina servía la mesa. Sulphurio preparaba "asaditos medio grasosos" con bastante chimichurri y bien salados. A su madre Pubatia le caía mal la grasa, Arsenio ni lo probaba, Bryonio, su padre protestaba como loco y disecaba hasta el último pedazo de grasa. A Lycopio y a Setia tampoco les gustaba. Nuxo si se comía todo, la grasa y el condimento pero protestaba un poco por la sal. Veratrina en la cocina se comía todo acompañado de una maravillosa ensalada de pepinos con mucha sal y limón. La gatita Alúmina odiaba la carne y se contentaba con arañar las paredes y comerse el revoque. Hada unos agujeros increíbles. El veterinario decía que tenían que darle calcio, pero como no le pagaban la consulta dejó de venir. Alguna que otra vez había pescado y ese día Sulphurio se ingeniaba y encontraba alguna excusa para no venir a cenar. En realidad a nadie le gustaba demasiado el pescado, pero lo hadan para salvarse un día del pesado de Sulphurio, siempre teorizando. Pulsatia de vez en cuando preparaba unas buenas pizzas que en general eran aceptadas de buen grado por todos. 23

Veratrina protestaba porque nunca compraban helado. Claro! Era demasiado caro. Pero ella se vengaba. En verano, en la época del melón y la sandia, se compraba dos o tres sandias las escondía en su pieza, y por las noches las ponía un rato en el freezer y se las comía ella sola bien heladitas. Pasaremos ahora a hablar de los abuelos. Los del ala izquierda Setia y Silicio Codillo eran muy especiales. Prolijos e impecables. Los chicos casi no conocían la casa de sus abuelos maternos pues Setia no quería que subieran pues desacomodaban todo y ella se pasaba el día limpiando. Tenía un carácter medio avinagrado (Veratrina se quejaba que cada dos por tres, le desaparecía la botella de vinagre de la cocina y decían las malas lenguas que Setia se la tomaba). Silicio era más afectuoso con sus nietos, pero era tan tímido que bajaba poco para "no molestar". Sin embargo, estaba siempre pronto a darles una caricia, un consejo, o recomendarles un buen libro porque era un gran lector. Cuando eran más chicos solían reunirse los cuatro para armar aviones, tanques; rompecabezas, ya que Silicio era muy hábil. Los tres chicos Arsenio, Nuxo y Lycopio eran muy afectuosos y por eso tenían muy "buena onda" con Silicio, el abuelo materno y Pulsatia, la abuela paterna. Bryonio y Setia quedaban afueja. En el ala derecha como dijimos vivían los Tacañuzzy; Bryonio y Pulsatia. Bryonio siempre estaba en casa, muchas veces quietito en su cama, pues sufría de artrosís en su rodilla derecha. Siempre con un vaso de agua en la mano y acordándose de épocas pasadas con un tinte de nostalgia. En cambio Pulsatia era la abuela ideal, cariñosa, afectuosa: en realidad hada un poco de madre pues Causticia era medio frígida (en todo sentido). Su casa estaba abierta a todos! hablamos de Pulsatia. A pesar de ser muy ordenada y limpia no le molestaba que desacomodaran sus volados y puntillas, pues la casa estaba llena de muñequitas, florecitas, voladitos y puntillitas, casi todo de color rosa. Tenía varios cajones de la cómoda con sus recuerdos más preciados: fotos, moñitos, regalitos. Guardaba el primer rulo de todos sus nietos, el primer diente que perdieron, los primeros escarpines de cada uno etc. etc.. Era buena, dulce, comprensiva y se sometía al mal humor reumático de su marido. De vez en cuando Pulsatia salía de compras y traía una pavadita para todos; claro que tardaba mucho pues regateaba el precio en todos lados. Si alguna vez Bryonio se levantaba de la cama y la acompañaba era un suplicio, pues el regateo era infernal. Los abuelos maternos Silicio y Setia también eran regateadores al máximo. Causticia no regateaba por orgullo y en eso sus hijos salieron a ella sobre todo Nuxo y Lycopio. Pero Sulphurio sí que regateaba, lo llevaba en la sangre heredado por vía materna y paterna. Todo esto explica que gastarán poco a pesar de que daban la sensación de vivir en la opulencia. La empresa familiar marchaba bien, vivían tres familias en una sola casa con lo cual ahorraban en impuestos, luz, gas y teléfono (tenían una sola línea telefónica y le habían puesto candado por Veratrina). Pagaban sueldos bajos, retrasaban los pagos a los proveedores y Causticia administraba con mano de hierro. No es casual que se llamasen Tacañuzzy Codillo. La Reunión de Consorcio Quién de ustedes no vive o ha vivido alguna vez en un edificio de departamentos? Nunca fueron a una de esas reuniones interminables donde nadie se pone de acuerdo, donde se hacen propuestas increíbles, o donde a veces terminan a las trompadas? Esto es una pequeña historia del consorcio de la calle Tacuarí 24

al 900. Les anticipo que cualquier semejanza o parecido con hechos reales es mera coincidencia. Primero procederé a presentarles a los consorcistas. En el 1o "A" vive Sulphurio hombre de mediana edad, separado (su mujer lo abandonó pues no lo aguantaba más). Vive con su perro llamado Mugroso, por razones obvias, su gata Alúmina y una lorita de nombre Pepa. La casa es un verdadero chiquero; platos con restos de comida, los muebles y las paredes manchadas de grasa, los cuadros torcidos, las alfombras raídas. Un verdadero desastre, pero Sulphurio "Vive en su mundo" y esta feliz. Justito enfrente, en el Io "B" viven Setia y Silicio, matrimonio también de mediana edad, sumamente prolijos y ordenados. Nadie sabe porqué tienen cuatro cerraduras en cada puerta de entrada, tanto en la principal como en la de servicio. Será por temor a los ladrones? Odian profundamente a su vecino de piso, pues dicen que el olor del perro es insoportable, y además cada vez que Silicio se topa con Alúmina, que por supuesto anda suelta por todo el edificio, arma unos escándalos brutales. - "Cómo dejan ese gato suelto; es un peligro para los chicos!!!, un animal tan peligroso!!!" En realidad son todas excusas, pues es él. Silicio, quien le tiene terror. Verdadero terror. Lachesia, tercer personaje de esta historia, vive en el 2 o "A", justito arriba de Sulphurio y también se queja de las emanaciones del departamento de abajo. Lachesia quedó viuda hace unos años y no tiene consuelo. Medio bruja, vieja pintarrajeada, criticona y chismosa, se viste en forma ridicula, con colores chillones que no están de acuerdo con su edad aros largos con bananas, manzanas y peras, enormes, vistosos y pesados; pulseras de colores hasta el codo y un anillo de serpiente en cada dedo. Sofocada y despechugada, anda mandoneando a todo el mundo, envidia a sus vecinas y siente celos hasta del felpudo de la puerta de entrada. En el 2o "B" viven Cyclalia y Lycopio. Lycopio es un ejecutivo prolijo y emprendedor, de tez amarillenta y aspecto enfermizo. Se queja que el edificio esta sucio, es ruidoso y tiene "poco nivel". Su mujer Cyclalia está siempre triste y callada, muy pálida, con un ojo que mira para un lado y el otro sólo Dios sabe para donde. Nunca pudo tener hijos, pues siempre tuvo problemas con su menstruación. Algunas malas lenguas le echan la culpa a Lycopio porque dicen que es impotente (como verán, en un Consorcio de propietarios se sabe todo..., todo..., todísimo...). Bueno, lo cierto y lo real es que cada tanto éste matrimonio tiene unas trifulcas terribles, pues ambos tienen bastante mal carácter. Cyclalia llora a gritos y dice que nadie (a quiere y que está sola en este mundo. Se entera todo el edificio y todos participan. Platina y Pulsatia son las que mejor la comprenden (ya las presentaré en su momento, pues vamos subiendo piso por piso). En el 3o "A" viven Argie e Ignatia, siempre apurados. Ignatia es prima de Pulsatia, se parecen mucho, sobre todo en los afectos y en la variabilidad de su carácter. Solo que Ignatia a pesar de ser dócil, tiene sus buenos ataques de bronca. Hay que verla revolear los platos y gritar como una histérica!!. Después de la bronca queda suspirando dos o tres días seguidos. 3o "B". Dueño de casa: Psorino. Siempre tiene frío y se queja que hay poca calefacción. Vive sólo y abandonado. Es triste, pesimista y desesperanzado. Vive con excemas y se rasca todo el tiempo. Algunos dicen que huele como Mugroso. 4o "A". Este sí que es un personaje de Hollywood. Se llama Veratrina, vive sola, pues nadie la aguanta, con su soberbia y sus aires de princesa. Su casa se parece a la de la serie "Dinastía", con muebles rimbombantes, bañados en oro y plata, estatuas soberbias y arañas de cristal. Ya se separó tres veces y solo viven con ella (en las dependencias de servicio, por supuesto), sus cuatro mucamas, el chofer y el jardinero (para las plantas del balcón). Ningún balcón del edificio está tan cuidado como el suyo. Junto con Lycopio y Platina viven quejándose que el edificio "no tiene nivel". En el 4o "B" vive una parejita joven, Phosphita y Nuxo con su bebito Chamomio, un encanto de bebé!! Qué preciosura!! Pero que molesto!! Phosphita es una pelirroja espectacular, alta y delgada, muy fina y elegante, con sus grandes ojos negros pestañudos que acarician el mirar (como en el tango). Muy sensible, muy sociable, siempre de reunión en reunión. Todos se enteran que está sola, pues pone la radio y la televisión a todo lo que da para sentirse acompañada. Adora a su hijo Chamomito que es realmente imbancable. Llora y grita todo el día y ahora que le están saliendo las muelas, está peor que nunca. Nuxo, joven refinado, es un abogado exitoso, se enloquece por no poder dormir de noche. Toma mucho café, es friolento, compasivo y muy afectuoso. Tanto a Phosphita como a Nuxo le gustan las cosas finas y caras. Se llevan muy bien salvo cuando Chamomito los saca de las casillas. En el 5o "A" viven dos hermanas solteronas, Platina y Palladia; altivas, soberbias, despreciativas, desagradecidas, que no se juntan con nadie. 5o "B". Don Bryonio y su mujer Pulsatia; dulce, dócil, condescendiente y sumisa. Medio gordita, coloradota con ojos azules y manos llenas de sabañones. Ella lava, plancha y cocina todo el día para esos dos insoportables hijos, Teky y Merky, que corren por todos lados, tocan todo, se tiran de los pelos y se arañan mutuamente.

Bryonio, con su rodilla derecha inflamada se queja permanentemente de su reumatismo. En el 6o "A" vive Arsenio, un viejo reseco, enjuto y flaco, todo gris (ojos grises, pelo gris, bigote gris, cara gris, traje gris, corbata gris. Hasta su bastón de empuñadura de plata es gris). Es un viudo amargado, también se queja que a su departamento no llega la calefacción. Tiene un hijo y una hija casados que no lo visitan nunca, pues lo odian y están esperando que este viejo avaro se muera, para heredarlo. En el 6o "B" vive Calcáreo, un señor bajito y cabezón, transpirado y friolento, siempre con problemas en su dentadura. Su mujer Causticia es una avara compasiva, siempre mal vestida y con miedo a todo. Siempre esconde las manos, pues las tiene llenas de verrugas, sobre todo en las puntas de los dedos y alrededor de las uñas. Tienen un hijito medio tonto que se llama Baryto, que vive escondiéndose, detrás de ellos, o detrás de los muebles, o detrás de sus manos y espiando entre sus deditos. Ya lo operaron tres veces de adenoides y está cada vez peor. Vive resfriado, con su voz gangosa, lleno de ganglios y por las noches ronca tanto que despierta a todo el edificio. Una vez presentados los personajes vamos directamente al Hall de entrada del edificio, donde se desarrolla la escena. Jueves 27 de abril de mil novecientos noventa y pico,... fines del Siglo XX. Son las 20 hs., se escuchan ocho campanadas de la Iglesia de San Agustín. En escena, el "Administrador" del edificio, personaje nefasto que aparece del uno al diez para cobrar, a quien jamás se lo encuentra cuando se lo necesita. Coimero, negador y mentiroso; salamero y servicial. Un verdadero desastre. Tan malo es, que no conseguí nombre para él. Simplemente es el Administrador. Llega Argie apuradísimo. - "¿Llego tarde? ¿Llego tarde??" - "Como corrí!!!. Salí hace tres horas de la oficina, pero di tantas vueltas que casi llego tarde!!! Pensé que todos los edificios se me venían encima!! - "Había tanto tráfico y el taxi iba tan despacio que me baje y vine corriendo!! - "Que agitado estoy!!. Me siento a punto de explotar, como si fuera una botella de soda!!. Llego tarde? ... Llego tarde? ... - "No Argie", -contesta el Administrador-..., la reunión es recién dentro de media hora!! Llegó demasiado temprano". A los diez minutos llega Ignatia, su mujer, puntualísima e impecable. "Hola mi amor, cómo te fue en el trabajo?, -pregunta entre sus piro y suspiro. El tercero en llegar es Lycopio con su maletín de ejecutivo, quien por el portero eléctrico le avisa a Cyclalia que baje y le traiga su pildorita para el hígado, pues se siente muy mal, todo lleno de eructos y gases. "A mi me pasa lo mismo que a usted", -lo consuela Argie-, mientras camina inquieto de una punta a la otra del Hall. Llega Cyclalia con la pildorita, con un ojo mirando a Lycopio y el otro para el lado contrario. Está muy pálida y se queja de vértigo. Poco a poco van llegando todos; las hermanas solteronas, Veratrina la soberbia, Phosphita con Chamomio (Nuxo no puede venir, pues tiene una reunión en el estudio). Bryonio tampoco baja, pues está de muy mal humor y Pulsatia aparece con sus dos traviesos hijos, pues Bryonio no

quiso saber nada de quedarse con ellos. Calcáreo viene con su h i j i t o Baryto, pues Causticia todavía no regresó del trabajo. Por último llega Sulphurio, quien baja por las escaleras con sus tres mascotas, la lora Pepita a los gritos. - "Báñate roñoso!!" "Báñate roñoso!!", que es lo último que llegó a enseñarle la ex de Sulphurio antes de "tomarse las de Villa Diego". - "Qué olor tiene ese animal!!!", -se queja Silicio-, como siempre refiriéndose a Mugroso. - "Por favor, saquen a esa gata de aquí!!!", -grita Setia enfurecida "Se está comiendo todo el revoque de la pared y están apareciendo los ladrillos!!" A las 8.40 hs. hace su entrada triunfal Lachesia, que no para de hablar desde que subió al ascensor. - "Callate bruja!!", -grita Pepa la lora- ésto se lo enseñó Sulphurio para mortificar a su vecina de arriba. - "Bueno Señores", -dice el Administrador tratando de poner orden-. Siendo las 20.50 hs. se nombran tres copropietarios para firmar el acta y se pone en conocimiento de los presentes el motivo de la reunión. 1 - horario de calefacción 2 - seguridad del edificio 3 - compra de una alfombra nueva para Hall de entrada . 4 - arreglo del jardín de Planta Baja 5 - portero Pide la palabra Silicio. "Propongo que haya calefacción desde las siete de la mañana hasta las doce de la noche, desde abril hasta octubre. Mi mujer y yo nos morimos de frío. Claro, tambiénsi mi vecino Sulphurio vive con las ven tanas abiertas, no hay calefacción que aguante!!! Sopla un viento bárbaro y trae todo el olor de Mugroso para nuestro departamento!!" A todo ésto, Mugroso está rodeado de moscas y "meta" rascarse todo el tiempo. "Si su perro se rasca se rasca Volfo Volfo de Bayer ..." "Si su perro se rasca se rasca Volfo Volfo de Bayer ..."

Canturrean alegremente Merky y Teky mientras le tiran de la cola al pobre Mugroso que los mira resignado. - "Quédense quietos chicos", -dice Pulsatia-, "Ay, yo no se qué voy a hacer con estos chiquitos!! Son tan traviesos!!!". - "Matarlos!!, -grita Arsenio-, que nunca los soportó!! matarlos es poco". "Pero volviendo al tema de la calefacción yo también estoy de acuerdo con el horario de Silicio", -agrega Arsenio-. "Será que aquí arriba sopla mucho viento y hace más frío, verdad Calcáreo?". "Sí, es verdad", -contesta Calcáreo-, que está todo transpirado. Psorino, Phosphita y Nuxo también están de acuerdo. Sulphurio, Pulsatia y Lachesia se niegan. Si fuera por ellos, ni pondrían la calefacción. Es un gasto inútil. Se pone a votación y por supuesto gana la mayoría. "Seguiré abriendo la ventana", -dice Sulphurio-. "Yo no la puedo abrir", -dice, Pulsatia- "porque Teky vive resfriado". Lachesia hace un gesto de ofendida mientras se acomoda los aros y las pulseras. Punto 2. Puerta de entrada Pide la palabra Arsenio. - "Propongo poner cinco cerraduras en la puerta de acceso al edificio y que no se pueda abrir con el portero eléctrico. Cada vez hay más robos, más atracos y más ladrones!!!" -exclama exaltado-. - "Estoy de acuerdo!!", -agrega Argie-. - "Mi marido Nuxo y yo también estamos de acuerdo", -agrega Phosphita-. - "La verdad es que si se robaran esa criatura gritona y chillona nos harían un gran favor!", -dice por lo bajo Veratrina-, "pero quien se lo va a llevar!!! ... si se lo roban lo devuelven a los diez minutos". - "Mejor poner las cinco cerraduras", -agrega Veratrina-, "yo tengo muchas cosas buenas y caras y no me gustaría perderlas... yo suelo sufrir mucho con las pérdidas". Sulphurio, que en realidad no tenía mucho que perder y estaba custodiado por Mugroso, también estuvo de acuerdo. Lachesia agregó, -"pero sobre todo hay que tener cerrado ""a la noche"" Silicio también dijo que sí, y Calcáreo agregó que a él mucho no le importaba pero que su mujer Causticia le había pedido que votara a favor, pues a eila la habían agregado hacía 25

poquito en "miedo a ¡os ladrones". Punto 3. Cambio de alfombra en el Hall. - "La alfombra está, perfecta", -dijo Sulphurio-. "Además es un gasto inútil, igual que la calefacción". - "Está horrible y sucia!!", -gritaron ai unísono Setia, Silicio, Lycopio, Ignatia, Arsenio y todos los pulcros-. - "Hay temas más importantes!!", -se queja Lachesia-. - "Yo propongo que no se puedan tener animales en el edificio", dijo Silicio-. - "Yo propongo que no se puedan tener criaturas insoportables en el edificio", -dijo Platina-, con soberbia. "Son unos pequeñuelos chiquitos, despreciables y molestos". - "Estoy de acuerdo!!", -gritó Arsenio-, mientras se le agrandaban las ojeras de sus párpados inferiores y se le ponían cada vez más azules. - "Cómo pueden decir eso!!..., insensibles", -gritó_ Phosphira horrorizada-. "Es que no tienen compasión???" - "Yo quiero hacer una acusación . . . , -dijo muy serio Psorino- que hasta el momento no había abierto la boca. - "Acuso a la señora Veratrina, esa que se hace la refinada, que tiene tanto personal doméstico, tantas alhajas y autos caros con chofer y todo". - "La acuso formalmente de haberse robado los limones de la planta del jardín del fondo!!, -gritó horrorizado-. - "Y bueno", -contestó Veratrina muy oronda-, fue el domingo pasado; estaban todos los negocios cerrados y yo me ataque y me los comí todos. En realidad, ya mi amigo Arsenio había robado dos o tres, no porque los negocios estuviesen cerrados, sino de puro amarrete, para no gastar". Ya a esta altura se habían levantado todos de sus asientos, gritaban y vociferaban; MUGROSO ladraba. Alumina maullaba, Pepa no paraba de decir malas palabras, Teky y Merky revoleaban cosas por el aire, Lachesia no paraba de hablar, Chamomito comenzó a gritar y su madre cansada de sacudirlo se lo pasó a Pulsaría, Pulsada se lo pasó a Lachesia, Lachesia se lo pasó de nuevo a Phosphyta y Phosphyta se lo revoleó al Administrador, quien al borde del ataque de nervios comenzó a gritar. - "Yo renuncio, no aguanto más!!. Están todos desequilibrados!!" - "Quién me enchufó este crío!!!" - "Maldito edificio, con razón el portero se suicidó!" - "Yo me voy" - "Arréglense solos", y pegó un portazo y nunca más lo vieron Poco a poco se fueron calmando los ánimos y cada uno volvió a su casa, con sus problemas, sus conflictos y sus desequilibrios. El Administrador al día siguiente recapacitó y se dio cuenta que tenía más para perder que para ganar, retiró su renuncia y las cosas volvieron a ser como siempre: un verdadero desastre. Pero la vida continúa y este cuento se esta terminando. Las que no se han acabado son las miles de reuniones de consorcio que se seguirán haciendo, donde la gente se seguirá peleando, seguirá discutiendo temas de convivencia, y se seguirán sacando los trapitos al sol, hasta que Llegará el tan ansiado día en que la humanidad entera estará equilibrada y no habrá más discusiones, ni peleas, ni injusticias, ni guerras... y viviremos tos unidos en paz y armonía. Fin. Sinonimia Acónito..........................................Acónitum Aconina.........................................Acónitum Alúmina.........................................Alumina Ambra...........................................Ambra Grisea 26

Anacardia......................................Anacardium Orientalis Apisinia.........................................Apis Melificas Argie..............................................Argentum Nitricum Arnicco..........................................Árnica Arsenio..........................................Arsenicum Álbum Atroptno........................................Belladona Baptisio.........................................Baptisia Baryto...........................................Baryta Carbónica Boraxio..........................................Bórax Bryonio..........................................Bryonia Calcáreo.......................................Calcárea Carbónica Carcinino.......................................Carcinosinum Cascabela.....................................Crotalus Cascabelia Causticia.......................................Causticum Cenchria.......................................Cenchris Chamomio.....................................Chamomilla Chan-Chi-Chuan...........................China Colocynthio...................................Colocynthis Crotalia.........................................Crotalus Horridus Cyclalia.........................................Cyclamen Europcum Elapsia..........................................Haps Gelsemio.......................................Gelsemiun Graphita........................................Graphites Kalito (Primo de Magnesia)...........Kali Carbonicum Kalito Bromato..............................Kali Bromatum Lacanita........................................Lac.Caninum Lachesia.......................................Lachesis Las Hermanitas soberbias.............Platina y Palladium Lycopio..........................................Lycopodium Magnesia......................................Magnesia Carbónica Mercurito.......................................Mercurius Merky.............................................Mercurius Naja..............................................Naja Tripudians Natrumia.......................................Natrum. Muriaticum Nuxo.............................................Nux Vómica Phosphy........................................Phosphorus Psorino..........................................Psorinum Pulsaría.........................................Pulsatilla Rhustirio........................................Rhus-Tox Setia.............................................Sepia Silicio............................................Silícea Silíco Terroso................................Silicia Staphy...........................................Staphisagria Sulphurio.......................................Sulphur Tarentulina....................................Tarentua Hispánica Teky..............................................T.K. Tuberculina Veratrina.......................................Veratmm Álbum Viperina.........................................Vípera torva Bibliografía Men: Materia Médica Bronfman, Z. J.: La identidad y el doble en la Materia Médica Homeopática. Bronfman, Z.J.: El dinero en la Materia Médica Homeopática Candegabc, E.: Materia Médica Comparada Clarke: Materia Médica Eizayaga, Kent. Fx.: Nuevo Repertorio E.M.H.A.: Actas E.M.H.A.: Clases Teóricas E.M.H.A.: Ateneos Grandgeorge, Dr. D.: El Remedio Homeopático Hering: Materia Médica. Herscu, Paul: The Homeopathic Treatment oj Children Kent, J.T.: Materia Médica. Paschero, T. P.: Homeopatía Pierce: Materia Médica Tyler, M.: Materia Médica Vijnousky, B.: Materia Médica