Esquema de Adoracion Al Santisimo para El Santisimo

En el nombre del Padre, Del Hijo, Y del Espíritu Santo, Amén. “Los que mueren en la gracia y la amistad de Dios, pero im

Views 102 Downloads 1 File size 84KB

Report DMCA / Copyright

DOWNLOAD FILE

Recommend stories

Citation preview

En el nombre del Padre, Del Hijo, Y del Espíritu Santo, Amén. “Los que mueren en la gracia y la amistad de Dios, pero imperfectamente purificados, sufren después de su muerte una purificación a fin de obtener la santidad necesaria para entrar en la alegría del cielo” (CIC 1030). Los cristianos podemos abreviar esta purificación de nuestros herma nos difuntos ofreciendo el sacrificio eucarístico y la adoración al Santísimo Sacramento. Oh Dios, que has iluminado los corazones de tus hijos con la luz del Espíritu Santo: haznos dóciles a tu Espíritu, para gustar siempre el bien, y gozar de su consuelo. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén. Creemos, Señor, que estás aquí presente. Aunque nuestros ojos no te vean, te siente nuestra fe. Aparta de nosotros los pensamientos extraños. Haz que comprendamos las verdades que en esta hora santa quieres enseñarnos, que nos decidamos a practicarlas. Tus siervos te escuchan; habla, Señor, a nuestra alma. Santa María, Medianera de todas las gracias, concédenos que escuchemos y sigamos la voz del Señor. CANTO ENTRE TUS MANOS SEÑOR QUEREMOS OFRECERTE UNA ROSA POR CADA ORACION ELEVADA ( se pasan a 8 niños con una flor cada uno) 

“El máximo enigma de la vida humana es la muerte. Por este misterio, te adoramos, Señor. (Se pasa, se hace reverencia y se deja la flor)



“El hombre sufre con dolor la disolución progresiva del cuerpo, y su máximo tormento es el temor por la desaparición perpetua. Por este misterio, te adoramos, Señor. (Se pasa, se hace reverencia y se deja la flor)



El hombre se resiste con instinto a aceptar la perspectiva de la ruina total y del adiós definitivo. Por este misterio, te adoramos, Señor. (Se pasa, se hace reverencia y se deja la flor)



“Sin embargo, surge en el corazón humano el deseo del más allá y el ansia de una felicidad eterna. Por este deseo del hombre, te bendecimos, Señor. (Se pasa, se hace reverencia y se deja la flor)



“La Iglesia, aleccionada por la revelación divina, afirma que el hombre ha sido creado por Dios para un destino feliz, situado más allá de las fronteras de la miseria terrestre. Por este destino feliz, te bendecimos, Señor. (Se pasa, se hace reverencia y se deja la flor)



“La fe cristiana enseña que la muerte corporal, que entró en la historia a consecuencia del pecado, será vencida por Jesucristo, nuestro Señor. Por esta victoria, te bendecimos, Señor. (Se pasa, se hace reverencia y se deja la flor)



“Ha sido Cristo Resucitado el que ha logrado esta victoria para el hombre. Liberándolo de la muerte con su propia muerte’’. (GS 1 8) Por esta victoria te bendecimos, Señor. (Se pasa, se hace reverencia y se deja la flor)

CANTO NADIE TE AMA COMO YO Ahora los invito a escuchar con mucha atención y respeto la palabra de Dios Lectura del libro del profeta Isaías: 25,6.7-9 El Señor todopoderoso está preparando sobre este monte para todos los pueblos un banquete con manjares sustanciosos y vinos generosos, un banquete de sabrosos alimentos y deliciosos vinos. Él arrancará en este monte el velo que cubre el rostro de todos los pueblos, el paño que oscurece a todas las naciones. Destruirá la muerte para siempre; el Señor Dios enjugará las lágrimas de todos los rostros y borrará de toda la tierra la pena de su pueblo. Así lo ha dicho el Señor. En aquel día se dirá: “Aquí esta nuestro Dios de quien esperábamos que nos salvará alegrémonos y gocemos con la salvación que nos trae”. Palabra de Dios. (Al terminar alguien hace la reflexión y meditación de la palabra de Dios) A las sig. Oraciones responderemos: Padre y Dios nuestro, te alabamos y te damos

gracias       

Porque en Cristo Jesús brilla la esperanza de nuestra feliz resurrección oremos al Señor Porque tu Hijo Jesús es la vida de los hombres y la resurrección de los muertos oremos al Señor Porque Jesús, tu Hijo, entregó su vida para que todos tuviéramos vida eterna oremos al Señor Porque la vida de los creyentes no termina, sino se transforma; y al deshacerse nuestra morada terrenal, Tú nos preparas una mansión eterna en el cielo oremos al Señor Porque Tú enjugarás toda lágrima de los ojos de los santos y no habrá ya muerte ni desdichas, ni lamentos ni aflicciones oremos al Señor Porque las almas de tus hijos, una vez purificadas, brillarán como el sol en tu reino bendito oremos al Señor Porque las almas de los justos están en tus manos y no les alcanzará tormento alguno.

Ahora los invito a que nos pongamos de pie y alabemos a nuestro Señor en honor a nuestros difuntos (Se hacen diferentes alabanzas o dinámicas) Ahora en reparación por las faltas cometidas responderemos a cada oración: Perdónales, Señor. 

Oremos por fieles difuntos, que han muerto en Cristo y todavía no están plenamente purificados, para que puedan entrar en la luz y en la paz de Cristo roguemos al, Señor.



Ten misericordia, Señor, de las almas de nuestros parientes, amigos y bienhechores y llévalas pronto al Paraíso. roguemos al, Señor.



Haz, Señor, que las almas del Purgatorio purificadas sus penas, reciban pronto de tus manos la recompensa que siempre esperaron en la fe. roguemos al, Señor. Por los que se quitaron la vida por calumnias, fracasos económicos, depresión y abandono. roguemos al, Señor.





Por los sacerdotes que están en el Purgatorio por haber descuidado sus deberes pastorales y su oración. roguemos al, Señor.



Por los religiosos y religiosas que abandonaron su vida consagrada. roguemos al, Señor.



Por los padres de familia que sufren en el Purgatorio por haber prohibido a sus hijos hacerse sacerdotes o entrar en la vida consagrada. roguemos al, Señor.



Por todas las almas de los no creyentes o de otras religiones, pero que vivieron honestamente. roguemos al, Señor.

Ahora responderemos: Escúchanos, Padre 

Nuestra fe cristiana es una propuesta que enriquece la mirada tanto de este mundo como del más allá. Oremos. R. Escúchanos, Padre.



Para que, a ejemplo de las almas del Purgatorio, aceptemos con paciencia las purificaciones que Dios nos envía por nuestro bien. Oremos R. Escúchanos, Padre.



Para que, a ejemplo de las almas del Purgatorio que aún en medio de las penas sienten gozo y esperanza de estar con Dios, aceptemos con amor los sufrimientos en la tierra. Oremos R. Escúchanos, Padre.



Para que a ejemplo de las almas del Purgatorio, tengamos un gran deseo de estar con Dios. Oremos R. Escúchanos, Padre.



Para que tu Corazón misericordioso de Padre se conmueva por nuestras plegarias y abra a las almas del Purgatorio las puertas del cielo. Oremos R. Escúchanos, Padre.



Para que envíes, Señor, a tu Madre Santísima, Madre de misericordia, a liberarlas de esos tormentos. Oremos R. Escúchanos, Padre.



Para que el coro de los ángeles las lleve al cielo y que a su llegada las reciban los santos y las introduzcan en el Paraíso. Oremos R. Escúchanos, Padre.

CANTO: PERDONA A TU PUEBLO SEÑOR OREMOS Dios nuestro, que tienes misericordia, por todas las criaturas del universo, porque de todas eres Creador y Padre, vuelve tu mirada de compasión sobre las almas del Purgatorio que te aman y sufren por estar separadas de ti. Recuerda, Padre, que ellas son la obra de tus manos y el precio de las fatigas, dolores y muerte de tu divino Hijo Jesús. Te ofrecemos, a favor de estas almas, la Sangre divina que Jesús derramó por ellas, el sacrificio de la Víctima por excelencia, la mediación poderosa de María y de los Santos, las humildes súplicas de tu iglesia y las oraciones y obras meritorias de sus hijos. Apoyados en esto, esperamos mucho de tu misericordia, oh Dios, por aquellas almas que te son queridas y con las que tenemos todavía deber de amar y socorrer. Que tu paternal ternura desarme al fin tu justicia; ábreles tus entrañas de misericordia, manifiéstales tu gloria y muéstrales lo que Tú eres.

Derrama en sus corazones el torrente de tus inefables delicias porque Tú eres para tus elegidos una fuente sobreabundante y eterna de perdón y misericordia. CANTO: DIOS ESTA AQUÍ AHORA PEDIREMOS LA BENDITA INTERSECION DE NUESTRA MADRE POR LAS ALMAS DEL PURGATORIO Y A CADA ORACION RESPONDEREMOS: Intercede por las benditas almas del

Purgatorio 

Santa María, que permaneciste junto a la cruz, viendo morir a tu divino Hijo R/. Intercede por las benditas almas del Purgatorio



Santísima Virgen María Reina del Purgatorio, te rogamos por aquellas almas con las cuales tenemos alguna obligación de justicia o de caridad. R. Intercede por las benditas almas del Purgatorio



Santísima Virgen María, Reina del Purgatorio, te rogamos por las almas más abandonadas y olvidadas y a las cuales nadie recuerda. R. Intercede por las benditas almas del Purgatorio



Santísima Virgen María, Reina del Purgatorio, te rogamos por aquellas almas que han de salir más pronto de aquel lugar de sufrimiento. R Intercede por las benditas almas del Purgatorio



Santísima Virgen María, Reina del Purgatorio, te rogamos por aquellas almas que han de estar más tiempo padeciendo y satisfaciendo la Divina Justicia. R. Intercede por las benditas almas del Purgatorio



Santísima Virgen María, Reina del Purgatorio, te rogamos por aquellas almas que más padecen en aquel lugar de sufrimiento. R. Intercede por las benditas almas del Purgatorio

Dios omnipotente y misericordioso, abre mis ojos para que descubra el mal que he hecho; toca mi corazón, para que, con sinceridad, me convierta a ti. Restaura en mí tu amor, para que resplandezca en mi vida la imagen de tu Hijo Padre misericordioso y consolador, Tú, que dijiste: «Yo quiero la conversión del pecador y no su muerte», ayúdame a escuchar tu palabra, confesar mis pecados, darte gracias por el perdón que me otorgas. Ayúdame a comportarme con sinceridad

en el camino del amor, y a crecer en Cristo a través de todos los acontecimientos.

CANTO: ALABARE ¡Jesús amado!, que cada latido de nuestro corazón se una oración de alabanza para ti. Gozosos nos despedimos este día y, antes que tomemos grato reposo, te pedimos que nos envíes tu bendición ¡Amor Divino Sacramentado! Siento al mirarte mi pecho arder, a tal Grandeza la frente inclino, te adoro y juro tu esclava ser. ¡Me voy! Mas, antes, Dueño Adorado, Dejarte quiero mi corazón: dentro del tuyo tenlo guardado y allí se abrase por Ti mi amor. Gracias te damos señor, por tan bendecido día, no permitas que nada malo nos pase y siempre se nuestro guía. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amen