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A LA HORA DE COMER

Los buenos modales en la mesa son tan importante como hablar y escribir correctamente, dicen mucho de quien eres como persona y es en estos aspectos donde se debe hacer el mayor esfuerzo por ser lo que se quiere parecer. La mesa es el lugar donde tradicionalmente se reúnen las personas a departir y en muchas culturas la hora de comer es un ritual sagrado y las exigencias de comportamiento en la mesa da muestra de la importancia que tiene el ritual. En una sociedad más moderna y menos tradicional, las buenas maneras en la mesa son de las pocas reglas de comportamiento que aún se conservan y a las que se les da mucha relevancia sobretodo en el mundo de los negocios, restaurantes, industrias hoteleras y para personas en general para las cuales la etiqueta y el protocolo son primordiales.

Desde el momento en que se sienta a la mesa, en el sitio que le han indicado, y desdobla la servilleta, se empieza a demostrar los buenos modales en la mesa. Hay que saber seguir el ritmo de la comida y ser lo más sociable posible con los compañeros de mesa. Este "buen comportamiento" es el resultado de haber tenido una buena educación, un buen ejemplo y poner todo lo aprendido en práctica.

Existen muchos pasos a seguir para lograr el comportamiento adecuado y que permiten disfrutar de una mesa agradable, los fundamentales y que se deben practicar cada día sin importar lugar, momento u ocasión; son tan sencillos como comprender que los alimentos no se tocan y si se tocan, deben servirse para la misma persona o desecharse, pero no dejarse para otras personas; las manos siempre limpias tanto para tomar los cubiertos como las copas. Los labios siempre limpios antes y después de beber, no se pasan alimentos de un plato a otro, ni bebidas de una copa a otra.

También existen reglas más elaboradas y que quizá requieran de un tiempo de práctica y de la disposición del comensal para manejarlas de manera adecuada, como es el caso del manejo de los cubiertos, su orden de uso es fácil, se empieza por los cubiertos más alejados del plato. Los cubiertos de postre se colocan en la parte superior del plato. Si hemos terminado el plato, dejaremos los cubiertos juntos en paralelo, sobre el plato, en la posición de las cuatro y veinte ó las seis treinta.

El uso de la servilleta es otro factor importante, ya que no es común usarlas en el diario vivir, y muchas veces no se entiende muy bien el porqué de la misma, sin embargo es muy práctica ya que solo sirve para limpiarse los labios y los

dedos, pero no debe dársele otro uso (pañuelo, paño para limpiar un plato, un cubierto o un vaso, para limpiarse el sudor o las gafas, etc.).

Existen costumbres muy comunes en el medio donde se desenvuelve la mayor parte de las personas que para el común suelen ser aceptadas, pero a la hora de emplear las buenas maneras en la mesa son errores trascendentales que pueden generar que muchas veces se juzgue a alguien por sus modales en la mesa, de ahí la importancia de conocer ciertas reglas básicas que nos evitarán un mal trago frente al resto de comensales. En este orden de ideas se pueden mencionar el hecho que muchas mujeres se maquillan o se peinan en la mesa, Invitados que empiezan e a comer hasta que el anfitrión lo haga, personas que fuman durante la comida, tratar de enfriar una sopa o bebida caliente soplando encima de ella, compartir comida utilizando el plato propio y por último y quizá la más común usar palillos de dientes en la mesa, las uñas o servilletas para desalojar comida.

La oportunidad de aprender, practicar y usar como rutina diaria las buenas maneras en la mesa está al alcance de todos, hoy, hay muchas posibilidades que van desde cursos presenciales hasta clases vía internet o sencillos tips colgados en la red, así que no hay excusa, todo lo que se necesita es la disposición y entender que los modales hablan de ti.

Mayrin Yiseth Jimenez Martínez A la hora de comer Comercio Internacional Relaciones Públicas y protocolo, Las buenas maneras en la mesa