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• Mariel Sarabia

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UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE BAJA CALIFORNIA ESCUELA DE CIENCIAS DE LA SALUD UNIDAD VALLE DE LAS PALMAS

ENSAYO: “MIRAR AL SOL”

SARABIA ALANIS MARIEL, 1210790

GRUPO 141

NOVIEMBRE 23, 2015

DESARROLLO Este libro es un compendio sobre distintas perspectivas acerca de la muerte que al inicio maneja un concepto generalizado sobre la muerte que habla por todos nosotros: el temor a la muerte y lo que genera este terror hacia la propia vida, sentimientos de ansiedad, miedo o depresión, pero todo es parte de; se acostumbra ver el final de la vida como un hecho trágico en lugar de verse como el momento de trascender y dejar un legado. El autor habla de la muerte como el hecho de mirar al sol de frente: solo se puede soportar un rato, al igual que la idea de contemplar nuestra propia mortalidad, no podemos vivir paradójicamente muertos de miedo acerca de nuestra muerte, por ello hay que crear métodos para suavizar el terror que nos produce la muerte propia, sin embargo, ¿qué hay de la muerte de los demás? ¿A caso no nos causa terror pensar que alguien íntimo a nosotros puede dejarnos de esa manera? La ansiedad que nos genera la muerte siempre está presente en nuestras vidas de diferentes maneras en situaciones tan cotidianas como la probabilidad de algún accidente de camino al trabajo o a la escuela, o alguna enfermedad silenciosa como algún cáncer o alguna enfermedad venérea, mas sin embargo, buscando la ayuda adecuada, ese miedo queda empequeñecido y controlado. Ese es el papel de un terapeuta; brindar ayuda y soporte a una persona con ansiedad a la muerte, que busca alivio y paz ante la idea inminente de que no puede controlar su muerte. En el diálogo "Enfrentar la muerte no significa desesperar y despojar a la vida de todo sentido. Por el contrario, puede ser una experiencia que nos haga despertar a una vida más plena. La tesis central es que aunque el hecho físico de la muerte nos destruye, la idea de la muerte nos salva" el autor explica que aunque la muerte como tal si significa el fin de uno mismo es la idea de la muerte que tiene cada uno es lo que permite a uno morir en paz y de manera pacífica aceptando el destino final, que es el mismo para todos nosotros. Quien no se mantiene sereno a la hora de su muerte no muere con dignidad. Cuando se mira a la muerte con respeto se le acepta y se reconoce su omnipresencia. La muerte es omnipresente porque todo lo que sigue un proceso fisiológico muere; las plantas mueren, nuestras mascotas mueren, nuestros abuelos mueren, nuestros padres mueren, el amor de nuestras vidas muere, nuestros órganos mueren. Yalom expresa que cada persona tienen una fantasía sobre cómo se presenta la muerte; como ya mencioné antes, para muchos está presente como la probabilidad de que en cualquier momento tenga lugar alguna fatalidad, la imagen de una pistola apuntándoles en la cabeza, el ataque de una fiera, o algo tan silencioso como un envenenamiento. En mi opinión, estas son formas de hacerse a la idea de la importancia de la muerte, no solamente de su espera, al tener una imagen concreta del final de la vida significa tenerla en cuenta y de alguna manera implica tener ya estructurado un plan para cuando se deje este mundo. Muchas personas tienen la idea de que nada de lo que puedan hacer en vida tendrá sentido si al final todo se desvanecerá con la extinción de uno mismo; la vida antes de la muerte es como un lienzo en el que se pintan experiencias, sentimientos, sufrimientos, no importa cuánto pinte la persona en el lienzo de su vida, todo ello se desvanecerá al morir, no obstante, lo único que tiene importancia es el disfrute y presencia que tuvo el pintar todos esos acontecimientos; así lo dicen las palabras de la madre de la paciente de Yalom: «Tienes una larga vida por delante, así que no tiene sentido que pienses en eso ahora. Cuando seas muy vieja y

te acerques a la muerte, estarás en paz contigo misma o enferma, y, en cualquiera de los dos casos, no tendrás nada que temer de la muerte». Aunque la muerte es inminente, se le debe esperar y no tantear con artimañas que la presionen a venir prematuramente por uno. Es aquí en donde cito a los estoicos que ya mencionó el autor: “Vivir bien es aprender a morir bien, y que, en forma recíproca, aprender a morir bien es aprender a vivir bien.” Destellos de la muerte siempre nos visitan en vida, como puede ser la muerte de un familiar o amigo, la presencia de una enfermedad o la propia hipocondría en muchas personas. El caso de nuestro fallecido compañero Luis Barona es un ejemplo de ello; al ser alguien muy cercano a muchas de las personas que yo aprecio pude percibir como cada quien hizo un espacio para la muerte en sus vidas y, aún a pesar de que él no fuera un persona precisamente cercana a mí, me hizo reflexionar que aun en el momento más simple de la vida, la muerte simplemente decidirá pasar por uno y que mientras más tranquilo y con la menos resistencia posible, morir será una experiencia serena. Hacer conciencia sobre la muerte muchas veces, como dice el autor y como muchas veces lo leí en mis textos de clase con palabras de Kathleen Dowling Singh en “La Gracia Divina de La Muerte”, curiosamente es una forma de hacer cambios en la vida de uno, yo creo que por que es un anticipo a la muerte misma; la sabiduría popular “Aprende a valorar lo que tienes, antes de que el tiempo te enseñe a valorar lo que tuviste” nos hace pensar que anticipar la propia vida antes de que la llegue muerte es como aprender a valorar las cosas que ya tenemos sin perderlas, por eso, un acercamiento a la muerte siempre es una lección que nos impulsa a hacer una serie de modificaciones en nuestra manera de seguir viviendo, como ejemplifica Yalom con el personaje de Dickens, Ebeneezer Scrooge. La anticipación a la muerte hace que vivamos de cierta manera las etapas del duelo puesto que iniciamos con una negación terca de no querer morir nunca y al final esta negación se evapora y se convierte en la aceptación a la muerte. El autor menciona en el caso de Alice que “muchas posesiones eran preciosas, pero los recuerdos las volvían pesadas”, esto quiere decir que previo a la muerte debemos desapegarnos de bienes materiales así como dejar ir recuerdos aun a pesar de lo doloroso que esto sea, es parte del duelo que se vive ante la muerte, citando a Cabodevilla: “El envejecimiento, la enfermedad, el sufrimiento, la proximidad de la muerte son experiencias de separación. Todo lo que significa ruptura o separación entraña tristeza.” Aun cuando se deslinde de todos los recuerdos, cuando uno está a punto de morir sólo se arrepiente de todo lo que no hizo, ¿en qué momento lo podrá hacer? Así somos los seres humanos, sólo lloramos las oportunidades que tuvimos cuando las vemos perdidas. Creo que por eso la importancia de trascender de alguna manera después de la muerte; es normal que las personas que se encuentran a punto de morir preparen rigurosamente su testamento o comiencen a hacer cambios importantes en su vida en consideración del poco tiempo que les queda para así poder partir tranquilos. Se puede trascender después de la muerte de varias maneras, como puede ser el legado que se deja; una obra, los hijos o creencias. No importa lo que se haya hecho, si no que uno sea recordado, ya que en algún pasaje del libro se menciona que la muerte propiamente dicha es el final de las posibilidades, lo que conlleva al olvido; el olvido es una manera de darle muerte a algo o alguien.

CONCLUSIÓN La muerte es una promesa en la vida de todo ser humano, y es lo único que se tiene asegurado, sin embargo el sentido de la vida es acumular los pocos arrepentimientos que nos sean posibles para tener una buena muerte. Hay quienes dicen que nadie nos enseña a vivir, pero yo creo que al menos, a lo largo de la vida aprendemos a vivir y a morir, y esto de muchas maneras; en acontecimientos que nos hacen despertar, como el duelo mismo. Ese desgaste de energía emocional le da un nuevo cauce a la vida que estamos viviendo y no es hasta que decidimos vivir de otra manera que cada vez podemos sentirnos más preparados para morir. Pienso que al leer este libro queda sustentada la percepción que yo misma tengo sobre la muerte; la muerte no es nuestra enemiga y viene cuando hemos cumplido con nuestras ondas concéntricas. Que no importan las circunstancias en las que se nos presente la muerte, pero que cuando ésta llega todo está bien porque significa que ya es el final. Cuando la muerte es vista como una amenaza siempre se le tiene un terror inminente a morir, pero cuando se está en paz con la vida de uno mismo, la muerte es vista como algo pacifico y la oportunidad para descansar, por eso es importante hacer en vida todo cuanto nos haga trascender y disfrutar, como en un bucket list, sin importar qué tan lejos o qué tan cerca nos encontremos de la muerte. Concluyo este ensayo con el extracto de un popular libro de J.K Rowling, que en su tiempo me hiciera reflexionar acerca de la muerte y de cómo yo debo prepararme para mi propia muerte: “Aunque la Muerte buscó al tercer hermano durante muchos años, nunca fue capaz de encontrarlo. Sólo cuando había alcanzado una edad avanzada, el hermano más joven finalmente se quitó la Capa de Invisibilidad y se la dio a su hijo. Y luego saludó a la Muerte como un viejo amigo, y se fue con él de buena gana, y como iguales, partieron de esta vida.” Cuando uno está listo para recibir a la muerte deja atrás fracasos, alegrías, pertenencias, peleas, planes y a mucha gente. Sólo cuando dejamos algo por lo cual se nos pueda recordar es que vivimos para siempre, ya que uno nunca muere mientras alguien lo recuerde y atesore su recuerdo como si aun viviese. Creo que a la muerte se le recibe como un viejo amigo al momento de partir cuando se cumplieron los propósitos en vida; siempre que se logra vivir la vida plenamente, después de alcanzar metas y construir su legado para las generaciones venideras.

BIBLIOGRAFÍA 

Cabodevilla, Iosu (2007) “La espiritualidad en el final de la vida.” Desclée De Browuer: Bilbao, España.

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Dickens, Charles (1843) “Canción de Navidad.” Chapman & Hall: Reino Unido.

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Dowling Singh, Kathleen (1998) “La Gracia Divina en la Muerte: Como nos transformamos espiritualmente cuando vamos a morir.” Harper Collins: Nueva York, USA.

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Kübler Ross, Elisabeth (1969) “Sobre la muerte y los moribundos.” Grijalbo.

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Rowling, J.K. (2008) “Harry Potter y las Reliquias de la Muerte.” Editorial Salamandra: Barcelona, España.

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Yalom, Irvin (2009) “Mirar al Sol” Editorial Booket: España.