Ensayo Los Juicios Morales

LOS JUICIOS MORALES La conciencia es el acto psíquico mediante el cual las personas se perciben así mismas en la socieda

Views 117 Downloads 0 File size 81KB

Report DMCA / Copyright

DOWNLOAD FILE

Recommend stories

Citation preview

LOS JUICIOS MORALES La conciencia es el acto psíquico mediante el cual las personas se perciben así mismas en la sociedad, por consiguiente, la conciencia es una característica del espíritu humano que permite reconocer caracteres particulares. Los filósofos consideran que esas características de la conciencia es una facultad humana que no es concebida en ninguna otra especie, solo a través de ella las personas son responsable de sus acciones, de esta forma, se puede decir que el concepto de moral pertenece al ámbito de la ética, por lo tanto, se puede decir que una persona es estable cuando su actuación es aprobada o rechazada por los demás, por el contrario, los individuos con ausencia de conciencia o trastornos traumáticos causan desajustes en su entorno. Constantemente emitimos juicios en base a los actos de los demás convirtiéndonos en jueces y emitimos opiniones sobre la honestidad o deshonestidad del comportamiento ajeno. Antes de entrar en el tema se debe entender que los juicios morales y de valor son diferentes aunque en algunas cosas tienen sus coincidencias, los juicios de valor es: un tipo de análisis, encargado de la gestión y análisis de ciertos temas o problemas sociales, dependiendo de la gravedad de los mismos. En filosofía se les consideran con la finalidad de dar una explicación a ciertos temas sociales. Sus características son: a) se forjan en las experiencia vividas de cada persona a través de tiempo que van enseñando lo que es correcto en la sociedad en que se desarrolla, b) intervienen en las decisiones tomadas por los individuos individual como colectivas en el ambiente que nos rodea, c) los principios de la moral se basan en los valores para determinar lo que es bueno y lo que no lo es, d) Son actos mentales que afirman o niegan el valor moral frente a una situación o comportamiento, e) por medio de los valores se pretende la búsqueda de la verdad. Los juicios morales, se basan en el análisis de ciertos problemas teniendo como finalidad diferenciar lo que es bueno de lo malo, en el estudio se utilizan ciertas ramas de la filosofía como complemento que ayudan a considerar la decisión correcta. En los juicios de la moral se tienen las siguientes particularidades; a) 2

Capacidad para analizar la moral, b) la conciencia ética es la conciencia moral o la autoconciencia que influye en la conducta de una sola persona, desde sí misma, c) Involucra a la conciencia y la voluntad de cada individuo de forma independiente, d) es la decisión de una acción si es correcta o incorrecta (depende quién evalué), e) Analiza las acciones probables en las circunstancias y la evaluación de que la acción realizada sea la más ética. Teniendo claro que la conciencia se encarga de juzgar lo que es bueno y malo se puede decir que los juicios morales son actos por los cuales valoramos una acción concreta sobre las bases de un principio moral, asumido con o sin reflexión previa, si los valores de verdad o falsedad son la base principal de la moral. David Home gran conocedor del humanismo dice: Se ha observado que la razón, en un sentido estricto filosófico, puede tener una influencia sobre nuestra conducta solamente de dos modos: cuando excita una pasión, informándonos de la existencia de algo que es un objeto propio de ella o descubriendo el enlace de causas y efectos de tal forma que nos proporcione los medios para ejercer una pasión. (Home, 2001, p.334).

Para Home los problemas de la moral son netamente empíricos, no expone como debería ser la moral sino como realizamos los juicios morales sus argumentos se basan en incrementar el bienestar y su utilidad en el bien del individuo, los humanos tienen para cada conducta un decisión a realizar y está puede ser modificada dependiendo de las circunstancias encontradas. Home declara que nuestros juicios se realizan considerando nuestro propio interés y los intereses de aquellos individuos que nos rodea, Home defiende su teoría que el individuo nunca realiza juicios morales sostenido únicamente en la razón, el razonamiento analiza los hechos y extrae conclusiones a partir de ellos, pero al elegir opciones solo los sentimientos pueden hacerlo. Hume no niega que la razón intervenga a la hora de crear el juicio moral, lo que niega es que sea la única que interviene, e incluso, niega que sea el elemento más importante, pero sin llegar a negar que la razón esté fuera de la elaboración del juicio moral. Thomas Hobbes nos habla de la ética y la moral el su obra el Leviatán, en este autor encontramos una moral formada en las leyes de la naturaleza las que dicen “en

3

virtudes morales, como la justicia, la equidad y todos los hábitos del intelecto que llevan a la paz” (Hobbes, 2003), de esta manera Hobbes busca el bien de los hombres en sociedad, pero que el género humanos no siempre está dispuesto al razonamiento y actúa conforme a su dictamen, confundiendo la razón con las pasiones en la idea del bien y el mal o el amor y el odio, con ese subjetivismo viven los hombres en su estado natural. En estos dos filósofos encontramos que hay diferencias muy significativas en lo que a moral se refieren, por una parte, Home defiende su postura de de unos juicios morales fundado en el racionalismo sostenido en la necesidad humana, los mismos pueden ser modificados dependiendo de las carencias del hombre. Por otro lado, se encuentra la tesis de Hobbes que sostiene en los juicios morales formados en la naturaleza cuyo propósito es el bien del hombre en sociedad, es bien claro que ambos autores tienen su versión de lo que se entiende por juicios morales, el racionalismo y el empirismo son dos corrientes opuestas, en relación a esto se hace necesario conocer la opinión de otros autores con la finalidad de obtener una visión de lo que son juicios morales. Otro autor que trabaja los juicios morales es Bertrand Russel, para este autor, los juicios morales corresponden a la conectividad entre el empirismo y el racionalismo como lo dicen sus antecesores. En su ensayo “Ciencia y Ética” Russell toma una postura afirmando que los juicios morales no pueden ser solo cognitivistas que debe haber una conexión entre lo bueno y lo deseado, pensamiento que lo lleva a lo que se conoce como emotivismo adentrándose a lo que se conoce como la metaética, en estas dos posiciones existen diferencias de opinión entre los defensores del cognitivismo y los no cognitivistas, en este dilema existe desigualdad de opinión, los primeros sostienen que los juicios morales no describen nada no hay verdaderos o falsos, los segundos dicen que los juicios de valor no afirma nada sobre algún objeto de valor, tampoco lo hace sobre el estado psicológico de las personas. Russell se desmarca del cognitivismo utilizando su postura u otro nivel de emociones: “Cuestiones como `los valores’ -es decir, lo que es bueno o malo por sí mismo, independientemente de sus efectos- se encuentran fuera del dominio de la ciencia, como

4

los defensores de la religión lo aseguran enfáticamente. Pienso que están en lo cierto, pero saco la siguiente conclusión que ellos no sacan, a saber: que cuestiones tales como `los valores’ están enteramente fuera del dominio del conocimiento. Es decir, cuando afirmamos que esto o aquello tiene “valor”, estamos dando expresión a nuestras propias emociones, no a un hecho que seguiría siendo cierto, aunque nuestros sentimientos personales fueran diferentes.” (Russel, 1957)

La mayoría de los pensadores anteriores a Russell han considerado que el fundamento básico de la ética ha sido siempre la razón, a diferencia de Home quién considera que la razón no puede ser el único fundamento básico para las cuestiones de tipo ético y son los juicios morales los que determinan nuestra vida cotidiana, porque siempre estamos formulando juicios de valor, los cuales expresan principios, normas y valores propios que hemos interiorizado desde nuestra cultura. Los valores dicen mucho de nuestros gustos, de nuestras maneras de pensar, de nuestras preferencias, y pueden adoptar la forma de juicios morales, éticos, estéticos, políticos, religiosos, etc.; sin embargo, es muy importante distinguirlos de los juicios de hecho. Por último tenemos Adolfo Sánchez Vázquez, para este autor los juicios pueden darse a los actos realizados como a objetos inexistentes, él sostiene que los juicios de forma imperativa “debes hacer” ó “haz”, es un mandato de lo que no existe, por consiguiente, es una exhortación con la finalidad de que se cumpla algo. Vázquez dice que los juicios deben verse desde la lógica en su forma normativa he imperativa pero para distinguirlos lo que hay de específicos deben ser examinados en su naturaleza, significado y su función. Vázquez admite que los juicios nominativos o imperativos se deben ver desde la metaética y en este punto coincide con la propuesta de Russell. Vázquez refiriéndose a los autores anteriores dice: Así los juicios morales no pueden surgir de un estado emocional del sujeto, o movido por el interés subjetivo de influir en otra persona, sino que responde a determinadas necesidades y finalidades, y a unas condiciones sociales dadas, al margen de la cuales no podrían darse o carecerían por completo de sentido. Los juicios nominativos “respeta los bienes del otro”, que presupone la propiedad privada como una institución social valiosa, sólo puede darse en cierta fase del desarrollo de la humanidad y en una comunidad donde aparece y se mantiene dicha institución. (Vázquez, 1984)

El autor determina que los juicios de la moral no vienen por azar, sino que en ellos intervienen factores humanos y ambientales que influyen en las decisiones a considerar, a diferencia de las posturas de los anteriores autores la tesis de Vázquez se

5

orienta más hacia los grupos sociales que al individuo como tal, en este orden de ideas, el autor considera que los juicios morales son intuitivos y por lo tanto se pueden considerar verdaderos sin la necesidad de recurrir a ninguna prueba empírica o razonamiento alguno. Por consiguiente, la propuesta de Vázquez se aproxima más a la realidad que los autores anteriores, porque en su tesis se consideran mayor cantidad de elementos en estudio que en las anteriores propuestas, también se debe considerar que los tiempos de cada supuesto son muy distanciadas una de la otra, por consiguiente la propuesta de Vázquez se ajusta más a la realidad contemporánea. Los juicios morales se dan dependiendo del sentido moral de cada individuo, y en ese sentido la moral es el resultado de los esquemas, normas y reglas que las personas adquieren y aprende en su vida. Con los juicios morales se pueden establecer si las acciones están o no dentro de la ética, los generadores de esos principios los tenemos en la familia como parte fundamental del desarrollo que son los primeros en transmitirnos esos valores, en el segundo caso, las instituciones educativas como forjadoras del pensamiento y en última instancia la sociedad en que nos encontramos, las cuales nos indicará con sus leyes y normas lo que está bien y lo que está mal. Otro de los medios de importancia que tiene que ver con los juicios morales son las comunicaciones como formadores de opinión y de juicios morales, son muchas las personas que dramatizan las valorizaciones que por esos medios se emiten haciéndose eco de las mismas. La emisión de un juicio moral se debe obtener todo un beneficio de la experiencia del individuo que pondrá toda la experiencia acumulada de lo que es bueno y lo malo, de hecho a través de los juicios de la moral se pretende llegar a la verdad, así se puede llegar a una definición de lo que se concibe como moralmente bueno o como malo. La moral se basa en el fundamento de la razón que a su vez constituye la naturaleza, es decir, la esencia del ser humano. Ser racional significa conducirse y expresarse según el logo o el sentido humano, todos los individuos buscan lo bueno que los conduce al bien supremo el cual corresponde a la felicidad, lograr ese objetivo se

6

hace a través de la práctica de las virtudes, siendo la más importante la prudencia identificada con la racionalidad. Esta teoría está representada en la filosofía clásica de Aristóteles en su obra clásica Ética para Nicomaco. En conclusión, los juicios morales son tan importantes para el individuo en sociedad que sin ellos sería muy difícil la convivencia, una persona sin juicio es casi comparable a un animal en estado salvaje, y es este estado reflexivo quien hace la diferencia entre uno y el otro, el estudio de los juicios no es solo competencia de la filosofía, en ello interviene la psicología la psiquiatría, la ética, la neurociencia y otras ramas del saber que hacen de la sociedad un sistema más humano de convivencia.

7

BIBLIOGRAFÍA Hobbes, T. (2003). El Leviatán. Buenos aires: Losada. Hume, D. (2005). Tratado de la naturaleza humana. Madrid: Tecnus. Russel, B. (1957). Ética y política en la sociedad humana. Buenos Aires: Hermes. Vázquez, A. S. (1984). Ética. Barcelona: Crítica.

8