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Enfoque por Proyectos El enfoque por proyectos surgió a principios del siglo XX en lo que se llamó Escuela Nueva. Se fundamenta en los trabajos de William Kilpatrick, quien recibió la influencia de John Dewey y sobre las bases de las investigaciones de Jean Piaget, Lev Vygotsky y Jerome Bruner. Es un método centrado en el alumno, cuyo rol es el de planificar, implementar y evaluar los proyectos. El docente es asesor del aprendizaje, coordinador y apoyo; guía en el autoaprendizaje. El enfoque por proyectos es de carácter interdisciplinario y contempla formas de aprendizaje autónomo. Involucra el trabajo en equipos y la asistencia de medios. Se toma en consideración las experiencias e intereses, las necesidades y características individuales de los alumnos. Se promueve la participación de todos los alumnos y se estimula la motivación, contribuyendo a hacer más productivo el proceso de aprendizaje. Los proyectos tienen un inicio, un desarrollo y un cierre. Se desarrollan en seis fases: 1. Información: Los alumnos recopilan las informaciones necesarias para la resolución de un problema a resolver. 2. Planificación: Se elabora un plan de trabajo con especificación del propósito, los objetivos, procedimientos y recursos para el trabajo. Se forman grupos de trabajo. Se dividen las tareas. 3. Decisión: Los integrantes de los grupos deciden conjuntamente cuál de las estrategias de solución seguirán. Luego se conversa con el docente para llegar a una decisión final. 4. Realización: Cada grupo realiza su tarea según lo planificado. Se comparan los resultados parciales con el plan y se hacen las correcciones que hicieran falta. El trabajo es autónomo con el asesoramiento del docente. 5. Control: Los alumnos hacen un autocontrol del propio trabajo. El docente es asesor y sólo interviene en caso de desacuerdos de los alumnos con respecto a los resultados obtenidos. 6. Valoración reflexión (evaluación): Una vez finalizado el proyecto, se realiza una discusión final. En ella, docente y alumnos comentan los resultados obtenidos. El docente facilita la retroalimentación sobre todo el proceso y sobre el producto final: se comentan los errores y aciertos, el rendimiento personal, las vivencias y experiencias, sobre la dinámica grupal y los procesos grupales. Los beneficios de trabajar con este enfoque son:  Motiva a los alumnos a aprender a aprender  Promueve el aprendizaje significativo.  Aumenta la motivación.  Conecta el aprendizaje en la escuela y la realidad.  Estimula el aprendizaje cooperativo.  Aumenta las habilidades sociales y de comunicación.  Desarrolla las capacidades de resolución de problemas.  Aumenta la autoestima.

Tanto el enfoque por tareas como el enfoque por proyectos hace hincapié en cómo se enseña, qué se sabe hacer y se trabaja con la actuación comunicativa. Todo proyecto tiene una intención, se refiere a una idea concreta, designa el qué y el cómo se va a hacer y necesita su realización mediante la acción. El proyecto comienza con la gestación de la idea, su teorización, proyección, representación y comunicación. El objetivo es que los estudiantes sean capaces de crear sus propios proyectos, que definan su relevancia y objetivo. La información seleccionada debe ser válida, confiable, vigente y pertinente. El estudiante es responsable de lo que produce, creativo e innovador, ya que planean, implementan y evalúan proyectos que tienen aplicación en el mundo real más allá del aula de clase. De esta manera, este enfoque construye sobre las fortalezas individuales de los estudiantes y les

Hernán Guastalegnanne – Octubre 2011

permite explorar sus áreas de interés dentro del marco de un currículo establecido. Por su parte, el docente es guía, ayudante, orientador y asesor. Analiza y evalúa los procesos del trabajo. Se recomiendan actividades de enseñanza interdisciplinarias, de largo plazo y centradas en el estudiante, en lugar de lecciones cortas y aisladas. Los proyectos tienen en común los siguientes elementos específicos: están centrados en el estudiante, dirigidos por el estudiante, claramente definidos (poseen un inicio, un desarrollo y un final). El contenido debe es significativo. Debe plantear problemas del mundo real, ser sensible a la cultura local y culturalmente apropiado. Debe tener objetivos específicos y ser un producto tangible y objetivo que se pueda compartir con la audiencia. Debe haber una conexión entre lo académico, la vida y las competencias laborales. Se deben generar oportunidades de retroalimentación, reflexión y de autoevaluación por parte del estudiante. Finalmente todo proyecto áulico debe tener su evaluación. Este enfoque motiva a los estudiantes a participar y a realizar tareas porque les permite seleccionar temas que les interesan y que son importantes para sus vidas, de esta manera, se logra un alto nivel de compromiso. Tanto la motivación como el compromiso posibilitan el alcance de logros importantes. A su vez, prepara a los estudiantes para los puestos de trabajo, ya que se ponen en juego una gran variedad de habilidades y de competencias tales como colaboración, planeación de proyectos, toma de decisiones y manejo del tiempo. Conecta el aprendizaje en la escuela y la realidad. Mediante los proyectos, los estudiantes hacen uso de habilidades mentales de orden superior en lugar de memorizar datos en contextos aislados sin conexión con cuándo y dónde se pueden utilizar en el mundo real. Ofrecen oportunidades de colaboración para construir conocimiento. El aprendizaje colaborativo permite a los estudiantes compartir ideas entre ellos o servir de caja de resonancia a las ideas de otros, expresar sus propias opiniones y negociar soluciones, habilidades todas, necesarias en los futuros puestos de trabajo. Aumentan las habilidades sociales y de comunicación. Incrementan las habilidades para la solución de problemas. Aumentan la autoestima. Los estudiantes se enorgullecen de lograr algo que tenga valor fuera del aula de clase. Permiten que los estudiantes hagan uso de sus fortalezas individuales de aprendizaje y de sus diferentes enfoques hacia este. Posibilitan una forma práctica, del mundo real, para aprender a usar la Tecnología. Los proyectos provienen de diferentes fuentes y se desarrollan de distintas maneras. No existe pues una forma única y correcta para implementar un proyecto, pero si se deben tener en cuenta algunas preguntas y aspectos importantes a la hora de diseñar proyectos efectivos. Los objetivos deben ser claros para que el proyecto se planee y complete de manera efectiva. Tanto el docente, como el estudiante, deben hacer un planteamiento que explique los elementos esenciales del proyecto y las expectativas respecto a este. El planteo debe contener los siguientes elementos: situación o problema, descripción y propósito del proyecto, especificaciones de desempeño, reglas (guías o instrucciones) para desarrollar el proyecto, una lista con el nombre de los participantes y sus roles.

Bibliografía básica www.eduteka.org/AprendizajePorProyectos.php www.slideshare.net/.../aprendizaje-por-proyectos - Estados Unidos ceupromed.ucol.mx/revista/PdfArt/1/27.pdf – www.halinco.de/html/doces/Met-proy-APREMAT092001.pdf -

Hernán Guastalegnanne – Octubre 2011