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Realismo Inglés: La Era Victoriana La era de la reina Victoria (1837-1901) abarca la literatura realista, durante esta época, en Inglaterra la novela se convirtió en la forma principal de literatura. La mayoría de los escritores eran contratados para resolver el gusto de un público grande de la lectura de la clase media y se hacían las obras por favores a la aristocracia. Los trabajos más conocidos de la era incluyen trabajos emocionalmente de gran alcance con un sentimiento nacionalista. La escritora inglesa Virginia Woolf (1882-1941) llamó a su colega George Eliot "Uno de los pocos novelistas ingleses para la gente adulta", este comentario resume la situación de la literatura inglesa antes del Realismo, es una justa crítica al exceso de la ficción del Romanticismo en la Era Victoriana, ya que se vivían nuevas épocas en las cuales la idealización ya no concordaba con las vivencias de la Edad Moderna. Pero aún la audiencia Victoriana colmada de triunfos, vivía un mundo ideal y conforme. De tal manera el progreso del Realismo en Inglaterra tuvo un panorama espeso y difuso, en el cual sería difícil entrar. Los precursores del Realismo George Eliot: Se esforzó en traer el realismo bajo fórmulas románticas, e intentó hacer obras costumbristas y pintorescas. Elizabeth Gaskell: Escribió libros más severos, describiendo una cruda realidad acerca de los pobres en el norte de Inglaterra, pero aún éstos tenían generalmente conclusiones de estilo romántico. El Realismo entra en escena Charles Dickens emergió en la escena literaria en el año 1830, confirmando la tendencia para la publicación seria y sin favores políticos. Dickens revolucionó el medio, pero póstumamente, es a partir de 1870 (el año de su muerte) que las conclusiones y pinceladas románticas en la literatura realista inglesa desaparecen definitivamente. Su obra dictó la dirección y tendencia de toda la literatura de la era, no más, ni menos posible porque él corrigió todo la literatura de su tiempo. Su cariño para un conclusión feliz con todos los extremos flojos atados cuidadosamente es claro y aunque él escribió con precisión sus visiones sobre la vida de Londres y las luchas de los pobres, las hizo de una manera humorística que era aceptable a los lectores de todas las clases. Es decir "ser dado de una sacudida eléctrica, pero no ser disgustado". El mundo terrenal más desagradable de la vida de la ciudad de Victoria fue revelado por Henry Mayhew en su libro de artículos "el trabajo en Londres y los pobres de Londres". Nace también un interés en materias rurales y en cambiar la situación social y económica del campo.

Este cambio en estilo en la ficción de la Era Victoriana estaba por venir aunque lentamente antes de fin de siglo, con los libros entre los años 1880 y 1890 más realistas y a menudo más severos. Incluso censuraron a los escritores de la alta edad de Victoriana por sus expresiones que escandalizaban las convenciones de la época. Los escritores realistas de la época entonces tomaron características similares: tratamiento franco de la sexualidad, la vanidad de la religión y la indiferencia y rompimiento de las reglas de la época. Diferentes realidades, escritores olvidados Mientras que muchos grandes escritores estaban en el trabajo en ese entonces, otra realidad significaron los escritores pobres, que produciendo novelas espeluznantes o cuentos, encontraron a audiencias impacientes. Muchas de las averías comunes a escritores mucho mejores fueron utilizadas abundantemente por los escritores ahora olvidados: sobre-sentimentalismo, pensamientos poco realistas y el moralismo, obscureciendo la historia. Literatura infantil La literatura de la era Victoriana se destaca a veces en la invención de la literatura infantil, en parte vía de sus esfuerzos por parar el trabajo de niño y la introducción de la educación obligatoria. Mientras que los niños comenzaron a poder leer, la literatura para la gente joven se convirtió en una industria de crecimiento, de tal manera la literatura infantil resultó ser rentable, grato ejemplo es el libro: “Historia de un Niño” de Dickens La literatura infantil de la Era Victoriana ha llegado a ser una obra global bien conocida, por ejemplo el trabajo de Lewis Carroll que era un autor del verso del absurdo, al igual que Edward Lear.