El arte de amar

El arte de amar. En este libro Erich Fromm inicia con una pregunta: ¿Es el amor un arte?, algunas personas consideran el

Views 252 Downloads 1 File size 35KB

Report DMCA / Copyright

DOWNLOAD FILE

Recommend stories

Citation preview

El arte de amar. En este libro Erich Fromm inicia con una pregunta: ¿Es el amor un arte?, algunas personas consideran el amor como una sensación placentera que se da al azar o es con lo que uno tropieza si tiene suerte. La mayoría de personas está más centrada en ser amado, mas no en amar, es por ello que los hombres buscan riqueza y poder; mientras que por otro lado las mujeres buscan la belleza estética. Por otro lado, las personas creen que lo difícil es encontrar un objeto para amar y que amar es sencillo. Esto tiene distintas causas, una de ellas es que tiempo atrás el matrimonio era un acuerdo entre familias, y se creía que el amor venia después de contraer matrimonio. Actualmente, las personas se creen estar enamoradas cuando sienten que han encontrado el “mejor objeto disponible en el mercado”. Al final del primer capítulo, Fromm sostiene que para aprender cualquier arte, incluso el amor, hay que seguir dos pasos: Inicialmente tener dominio de la teoría y posteriormente, el dominio de la práctica. En la segunda parte del libro, Fromm habla acerca de la necesidad del hombre por superar su separatidad, de abandonar la prisión de su soledad. Para ello usa como ejemplo el caso de Adán y Eva, quienes al comer la manzana y desobedecer ordenes, perdieron su estado de unidad con la naturaleza, y al verse diferentes, sintieron vergüenza y sentimientos de culpa. A este estado de separación se llama “separatidad”. Para ello, el hombre busca encontrar nuevas formas de escapar del estado de separación: drogas, orgias, etc. A estos se les llama estados orgiásticos, Por ejemplo, si estas son una práctica común en un pueblo, no producen angustia o culpa, por el contrario, se considera correcto, debido a que constituyen una forma compartida por todos, son estos los motivos para no sentirse culpable o avergonzado. Normalmente las personas rompen con su estado de separatividad, siendo gregario y asimilando costumbres de otros. Posterior a esto, Fromm nos habla sobre el amor entre padres e hijos, en la que menciona que, para el niño la madre representa seguridad y satisfacción, debido a que el amor materno es entendido como incondicional, es decir que no hace falta realizar méritos o esforzarse para recibir amor, sucede lo contrario con el amor de padre debido que este es condicional, depende de cuan obediente sea el niño para

conseguirlo, por lo tanto este amor puede ser ganado o perdido. El amor del padre no está fuera de su control, como en el de la madre.

En la tercera parte del libro, Fromm habla acerca de los objetos amorosos, en la que especifica que si una persona ama sólo a la otra y es indiferente al resto, su amor no puede ser considerado amor, sino más bien, una relación simbiótica. Fromm menciona que existen cinco tipos de amor, entre ellos el amor fraternal, en el cual uno debe amar a su prójimo como a sí mismo, de tal modo que se pueda amar incluso a quienes no necesitamos para algún fin personal (amor hacia personas que no conocemos), luego está el amor materno, en la cual debe inculcarse en el niño el amor a la vida, no solo el deseo por conservarla. Además de esto la madre debe permitir que el niño crezca, y por tal este debe convertirse en un ser humano totalmente separado , la verdadera prueba del amor de una madre, está en la voluntad de aceptar la separación. Después de esto, habla del amor erótico, el cual lo considera como exclusivo, debido a que es la unión con una sola persona, con quien fundirse plena e intensamente. Este amor, excluye el amor por los demás sólo en el sentido de la fusión erótica. Luego encontramos el amor a sí mismo, en la que se entiende que el amor tiende al crecimiento y la felicidad de la persona amada. Con libertades propias. Si solo ama a los demás, no ama en absoluto, cabe recalcar que el egoísmo no es igual a amor a sí mismo. Uno no puede amar a otra persona menos que a sí mismo, si es así no lograra realmente a amar. Por último, está el amor a Dios, esta es una forma religiosa del amor. Amar a Dios significa entonces anhelar el logro de la plena capacidad de amar, para

la

realización

de

lo

que

¨Dios¨

representa

en

uno

mismo.

Finalmente, en el último capítulo se habla acerca de la práctica del amor, la cual es una experiencia personal, en la que si uno pretende llegar a esta meta, los pasos solo los puede realizar él. El arte se puede conseguir en base a distintos factores como: La disciplina, concentración, paciencia, dedicación y práctica. Las personas deben aprender a entregarse de lleno a todas las actividades que realicen.