Ecuador Patria de Orquídeas tomo 1(2005)

EPO 1-99 10/17/05 16:24 Page II © Tulio Bustos Ecuador Patria de Orquídeas Loja y Zamora Chinchipe Noviembre 2005 U

Views 35 Downloads 0 File size 11MB

Report DMCA / Copyright

DOWNLOAD FILE

Recommend stories

Citation preview

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page II

© Tulio Bustos

Ecuador Patria de Orquídeas Loja y Zamora Chinchipe Noviembre 2005 Universidad Té cnica Particular de Loja Dr. P. Luis Miguel Romero Ferná ndez M. id. Rector – Canciller Mg. Fanny Aguirre de Moreira Directora General de Relaciones Interinstitucionales CITTES de Gestió n Cultural Reservados todos los derechos. El contenido de esta obra está protegido por la Ley de Propiedad Intelectual. Edició n limitada, preparada en la Editorial de la Universidad Té cnica Particular de Loja. Derecho del Autor: Depó sito legal: ISBN: UTPL Impresió n offset © Editorial de la Universidad Té cnica Particular de loja Impreso en Loja-Ecuador / Printed in Loja-Ecuador Loja, 2005

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page III

Introducció n “[…] La vida, no es la vida que vivimos, no es el sueñ o que el Supremo nos legó , ni su ejemplo, el camino que transitamos… Porque vivir, es amar la naturaleza, es respirar el aroma de las flores, que vivifica el alma y mitiga la tristeza… El fulgor de una orquídea en primavera es un verso que aflora de la tierra, es la luz que irradia una quimera. […]”

En este paraíso llamado “Tierra”, cohabita una triada de actores naturales: el hombre, las plantas y los animales. Las plantas se sirven del agua, del dió xido de carbono y de la luz solar para convertir sus materias primas en carbohidratos por medio de la fotosíntesis; la vida animal, a su vez, depende de las plantas en una secuencia de vínculos interconectados conocida como red tró fica, y el hombre, se sirve de las dos, para construir un há bitat donde florezca la vida …por medio del amor. La historia de la tierra es tan antigua como la vida misma, y en su evolució n, se han dado cambios muy trascendentales, en é stos, ha intervenido la mano del hombre, convirtié ndose en algunos casos, en el ente generador de una nueva forma de vida, pero en otros, en la mano depredadora de su proceso evolutivo. El má s reciente de los acontecimientos medioambientales importantes en la historia de la Tierra, se produjo en el cuaternario, durante el pleistoceno (entre 1,64 millones y 10 000 añ os atrá s), llamado tambié n periodo glacial. El clima subtropical desapareció y cambió la faz del hemisferio norte. Grandes capas de hielo avanzaron y se retiraron cuatro veces en Amé rica del Norte y tres en Europa, haciendo oscilar el clima de frío a templado, influyendo en la vida vegetal y animal y, en ú ltima instancia, dando lugar al clima que hoy disfrutamos. El Medio Ambiente es la obra má s grande de la creació n, es por eso que debemos cuidarla y conservarla, para bien de nosotros mismos y de todos los seres vivos que habitamos el planeta. Causas como la destrucció n de la capa de ozono, la contaminació n del agua, el dió xido de carbono, la erosió n del suelo, el derramamiento de petró leo y el hombre mismo, son las principales que inciden en su deterioro. Por ello, todo trabajo que nos recree las maravillas que posee la naturaleza, y que nos impetre a conservarla y amarla, siempre será digno de encomio y de difusió n colectiva, pues con ello contribuimos a fortalecer la rica biodiversidad que poseemos. Las orquídeas se han constituido en una de las plantas má s admiradas y apreciadas desde hace muchos siglos por diversas civilizaciones. Los Chinos, muchos añ os antes de Cristo, cultivaron algunas especies del gé nero Cymbidium; y en igual forma, tambié n los Griegos las conocían, pues fue Teofrasto, discípulo de Aristó teles quien les dio el nombre de Orquídeas (orchis=testículo) debido a la forma de sus pseudobulbos. En Amé rica precolombina, tambié n las orquídeas fueron apreciadas por algunas culturas preincaicas y la civilizació n inca, segú n antiguos registros de nuestra historia. III

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page IV

Las orquídeas son plantas enigmá ticas, llenas de frescor, dueñ as de un color celestial y un perfume original; la belleza sutil que se desborda en cada una de sus especies, nos invita a develar un enigma o a descubrir un camino lleno de esperanzas e ilusiones. Al penetrar en su maravilloso mundo de inquietudes, encontramos un paraíso terrenal, en ellas se dibuja el origen de la vida, de la sensibilidad, de la pureza, de la fragilidad de las caricias o de la simiente del amor. Las orquídeas son las má s avanzadas en cuanto a la evolució n, y las de mayor cantidad y diversidad. Es evidente que lo fascinante de las orquídeas son sus flores, caracterizadas por las má s sorprendentes formas, tamañ os y colores. Por su apariencia, encontramos semejanzas con humanos, animales, aves, insectos y otros. Por su tamañ o, es posible hallar flores que van desde los dos milímetros (como Trizeuxis falcata), hasta los 70 centímetros (como Phragmipedium caudatum, la flor má s grande). La polinizació n la llevan a cabo generalmente insectos, como algunas abejas, moscas, mariposas, y ciertas aves como un colibrí determinado. Algunos buscan né ctar, otros van por alimento só lido, y otros buscan aceites y perfumes. El entorno de ellas -las orquídeas- está rodeado de una má gica diversidad bió tica, en ella, encontraremos cuentos y relatos, fá bulas y ensayos, poemas y canciones que aú n no hemos empezado a tararear. Es por ello que, Tulio Bustos, un enamorado de la naturaleza, de la mú sica y de la belleza que contagian estas plantas enigmá ticas, nos invita con su obra Ecuador Patria de Orquídeas, a ser parte de este sueñ o sideral. Esta magistral obra, ú nica en su gé nero, nos ilustra con claridad meridiana la rica biodiversidad que poseen las provincias de Loja y Zamora. Su documentada investigació n de campo, nos transporta a los míticos parajes de las altas cumbres en la cordillera de los Andes; allá en los pajonales, en las sombras que dibujan los picos má s altos de las colinas, se descubren los sinuosos movimientos de sus pé talos, que nos invitan a vivir este maravilloso mundo de colores, formas y caprichos, propios de su diversa riqueza natural. La situació n geográ fica, el suelo, los bosques y el clima en el que se desarrollan cada una de las especies, propias de cada una de estas zonas, ocupa el primer capítulo, el primer sorbo de este perfumado mundo de má gicos colores, el primer hechizo que nos mantendrá expectantes en cada una de sus exclusivas ilustraciones y de la perfecta estructura orgá nica que nos recrea a lo largo de esta descripció n de la regió n sur de nuestra patria. Su dedicació n está presente en la evolució n de las orquídeas, en su forma de vitalizar su existencia, en preservar su há bitat, en prologar su vida y sus especies; ese ha sido su norte, su horizonte, su pasió n; su mundo gira alrededor de la siembra, de la té cnica y el amor que hay que entregar para cultivar esta maravilla de la naturaleza. A esto y otros detalles científicos y té cnicos propios de la concepció n científica que estamos presentado, dedica su segundo sorbo, su segundo capítulo de este contagioso mundo de ilusiones y esperanzas. El crecimiento y la floració n de sus plantas, así como la diversidad de sus especies y la clasificació n té cnica en funció n de la zona y há bitat que ha servido para su investigació n de campo, son los temas que nos refiere en su tercer capítulo, en su tercer suspiro de una maduració n creciente, del paso indeciso de la timidez a la esbeltez, …al bello escenario de la expresió n má s pura de la belleza, de la inocencia, de la pureza, del resplandor …de una flor en primavera. Se desborda este embriagante sorbo de caricias extrañ as e ilusiones postergadas, cuando nos habla con sorprendente lenguaje de poeta, de hombre culto y mente brillante, de valores infinitos y sueñ os truncados, de pinceladas de artista y rasgos de alquimista; del hombre sabio que le intere- sa la vida, la luz, la temperatura, la humedad y la maceta de barro que será el há bitat de esta hermosa expresió n de la naturaleza. Con este delicado lenguaje de inventor y perfeccionista, nos entrega en los capítulos siguientes, un estudio amplio sobre la diversidad y la belleza de nuestras orquídeas, todo esto, desde la má s alta expresió n del amor. Las variedades y los sugestivos nombres

IV

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page V

como: “Flor de Cristo”, “La Mosca”, “Las Morlaquitas”, el “Niñ o de Cuna”, para señ alar algunos, así como aquellas especies que su historia nos devela ritos y fá bulas, costumbres y ané cdotas, cuentos y secretos propios de una comunidad o de una regió n en particular, que se constituyen en la identidad de nuestro diario vivir. Concluye este ilustrativo trabajo con las recomendaciones y consideraciones que, con conocimiento de causa y una acrecentada probidad, realiza en favor de esta planta milenaria. Promueve un debate propositivo, de elevado contenido científico, orientado al rescate de políticas y estrategias que converjan en favor de preservar cada una de las especies estudiadas, y nos invita, a ser actores principales de esta preciosa pasió n por la naturaleza. Este generoso aporte se complementa con el esfuerzo valioso que realiza la Universidad Té cnica Particular de Loja -la cató lica de Loja- en promover los valores culturales y fortalecer la investigació n y la extensió n científica, pues al igual que el autor, nuestro Centro de Educació n Superior, ha promovido desde hace algunos añ os, el proyecto de “Conservació n de especies nativas de Orquídeas”, a travé s de un estudios sobre su biología reproductiva, desarrollando procesos operativos de manejo in vitro y en invernadero, trabajo que en la actualidad supera los setenta gé neros y cerca de trescientas especies, que son la admiració n y el regocijo de propios y extrañ os. Todo esfuerzo por descubrir, preservar y estudiar la naturaleza en cada una de sus manifesta- ciones, siempre será bien venido, como lo es la primavera para el á lamo triste, o las finas olas para el mar perdido; que la suma de golondrinas y la multiplicació n de las aves nos anuncien un vera- no con frondosos arupos y bellos saucedales; que nos ilumine el alma y nos señ ale el camino …que nos devuelve a la vida. Lenin Paladines Salvador

V

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page VI

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page VII

Presentació n La naturaleza es fuente de vida donde la humanidad guarda el recurso má s valioso para su crecimiento y desarrollo, siendo el sustento para que la belleza de su entorno pueda ser inspiradora de los má s nobles sentimientos del espíritu. Los bosques son el resguardo de la inagotable cantera de la pureza ambiental, graficando la má gica hermosura que guarda en su interior la inmensa diversidad bió tica de sus ancestrales secretos no revelados. Todo este entorno nos da la fuerza para cuidar una vida y protegerla, sabiendo que en cada segundo es amenazada y no queremos su extinció n. Mientras exista un bosque surgirá la vida que se convierte en el gran refugio de las especies que, como ellas, las orquídeas, siendo los especímenes vegetales con las flores má s singulares y hechiceras del planeta, reparten sus encantos a quienes las descubren y las admiran. Desde hace cerca de 3 000 añ os ya se tienen referencias de ellas, porque no solamente las guerras fraticidas entre pueblos hermanos, las conflagraciones ató micas provocadas por los imperios, la invenció n de armas para acelerar la muerte o el husmear del cosmos, de la vía lá ctea, descubrien- do nuevos mundos o navegando a vela suelta por mares encabritados, deslumbrá ndose en paisajes desconocidos y habitados por razas diversas ¡No!. Tambié n son noticia, comentarios globalizados, rumor del mundo, coherente razó n de vivir, ¡las flores!, en lo eterno y en lo natural. La especie humana siempre ha conservado su referente basá ndose en la armonía, en el color, en los aromas que emergen con el despertar del día, en la ló gica de la brú jula imantada, en la delicada suavidad de la mansedumbre del verde natural; por eso, ¡ahí está n!, en todas las formas, en todos los aromas y en todos los colores: ¡LAS ORQUÍDEAS!. ARISTÓ TELES en el siglo IV antes de Cristo ya las describió con lujo de detalles, anotando que los bulbos que se desarrollan como base, son dos pelotitas arrugadas parecidas a testículos. TEOFRASTO, discípulo preferido de Aristó teles, tambié n se ocupó de ellas en su obra “HISTORIA DE LAS PLANTAS”. Alejandro III (El Magno), Rey de Macedonia en el siglo III antes de Cristo, uno de los capitanes má s relievantes de la antigü edad, en alguna de sus guerras má s importantes, logró conquistar a una de las mujeres má s hermosas y poderosas de esa é poca. Ella cayó a sus pies, cuando le ofreció un manojo de flores de orquídeas que las consiguió allende los mares. MARCO POLO, el intré pido navegante veneciano en el siglo XIII despué s de Cristo, en uno de sus viajes, quedó hechizado ante la hermosura deslumbrante de un ramo de orquídeas que el emperador KUBILAIKAN le ofreció como muestra de amistad y admiració n. MOCTEZUMA, Guerrero insobornable, emperador de Mé xico en el siglo XVI, las cultivaba con esmero en los jardines de su palacio en CHAPULTEPEC. ATAHUALLPA, el Soberano Inca dueñ o del Tahuantinsuyo, “amo del universo”, las veía florecer en sus palacios de Quito y del Cuzco porque las consideraba LAS FLORES DIOSAS DEL PLANETA. Estas plantas y sus flores empapadas de leyendas romá nticas, aureoladas de magia y de elegancia condicionada a su belleza, dominan los jardines, los parques, los invernaderos privados o pú blicos.

VII

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page VIII

• Se las encuentra en los bosques tropicales o alpinos; en las estribaciones de la cordillera de los Andes, de los Alpes o del Himalaya; en las faldas de los montes y en las llanuras centroamericanas y Sudamericanas; en las montañ as de Mé xico y Estados Unidos. Florecen en las copas má s altas de los á rboles o en los pantanos recó nditos y peligrosos de la Amazonía, a orillas de los ríos majestuosos de Amé rica: del Orinoco al Paraná , del río de la Plata al Biobio, del Coca al Amazonas, del Napo al Pastaza y del Pastaza al Zamora; en los bordes de los abismos de las cataratas de Iguazú , para competir con la belleza salvaje del agua que se desborda en cascadas multicolores creadas en el origen de la vida; a los pies de las nieves del kilimanjaro o en los cenegozos vados del río Congo en el continente Africano. • Innumerables hombres de ciencia se han ocupado de ellas, tanto nacionales como extranjeros, a travé s de centurias. • Ellas viven en los troncos y en las rocas, en la tierra o en el fango. • Algunas se las encuentra en las cavernas bajo extremas condiciones de luz, otras perdidas bajo tierra como en Australia. • Muchas son habitantes de la lluvia sempiterna, otras viven bajo soles que se desploman en á reas semidesé rticas. • Pero la gran diversidad de especies, en nú mero de ellas, se las ubica en la Zona Tó rrida Ecuatorial. • Estos vegetales de flores privilegiadas, por su embrujo y hermosura, necesitan ciertos factores de medio ambiente para su crecimiento y desarrollo a saber: luz, temperatura, humedad y ventilació n. 1. 2. 3. 4.

Así mismo se deben a 4 tipos de crecimiento: Terrestre. Semiterrestre. Rupestre (roca). Epifitas (sobre los á rboles).

Curiosidades de las Plantas • Las hay INSECTÍVORAS Y CARNÍVORAS. Antiguamente su historia se basaba en mitos y leyendas como que “son monstruos vegetales que se comen a la gente”. ¡No!, estas plantas apenas sobrepasan el metro de altura. Las glá ndulas de estas plantas segregan una sustancia que sirve a los pelos para atraer y atrapar a los insectos, por su olor, los mismos que despué s de acercarse quedan adheridos. • El Pino produce la Trementina o Aguarras y el Alquitrá n que sirve para la preparació n de pinturas y desodorizantes. • La planta de Daguilla posee fibras con una resistencia igual al acero y es utilizada en textilería, y para la confecció n de: pañ uelos, delantales, sogas, cuerdas, etc. • Existen variados gé neros y especies cuyos frutos son subterrá neos. • Hay plantas Pará sitas que carecen de tallo, hojas y raíces; só lo poseen una serie de filamentos incoloros muy largos que penetran hasta el interior de las raíces y troncos leñ osos de donde extraen su alimento. • Hay plantas Venenosas en cuyas flores poseen el Á cido cianhídrico y á cido prú sico que son elementos muy volá tiles y quien se pone en contacto con é stos, sufre serias y complicadas formas de envenenamiento en su cuerpo, pudiendo, como consecuencia, morir.

VIII

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page IX

• El Tabaco es un alcaloide altamente tó xico por poseer una sustancia llamada Nicotina. • En cuanto a las orquídeas, existen variados gé neros y especies que tienen mucho significado en la existencia humana. Para anotar algunas de ellas: LA VAINILLA: Orquídea con una sustancia aromá tica que se extrae de su fruto. Los Aztecas ya la usaban hace algunos siglos para aromatizar el chocolate, que era su bebida preferida. Esta sustan- cia ademá s: • Facilita la digestió n. • Da una mayor secreció n a las cé lulas SUDORÍPARAS. • Es una bebida tonificante. • Aumenta la energía muscular. • Es utilizada en medicina como estimulante, en perfumería para aromatizar. (Reyes, M.D., 1989). LA CATTLEYA: Naturalistas ecuatorianos está n en proceso de validació n para comprobar que las flores de esta orquídea, a má s de adornar los balcones y los jardines de las casas en particular, tienen un poder excepcional de sanació n para el tratamiento de enfermedades cancerígenas, como lo han demostrado en algunas comunidades y poblaciones lojanas. OTRAS ESPECIES DE ORQUÍDEAS: Sus bulbos tienen diferentes poderes curativos para varias enfermedades. Esta aseveració n la defienden de manera especial los nativos y aborígenes de la regió n amazó nica de nuestro país. En concreto, las flores de las orquídeas para quienes las cultivamos, “sirven para recuperar el equilibrio emocional de las personas; que significa alcanzar la má s sutil de las revelaciones del ser humano”. (Sotomayor Herná n) Comunicació n personal. Por eso sigamos cultivá ndolas y defendié ndolas para que no desaparezcan las flores má s ange- licales que viven en este planeta.

IX

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page X

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page XI

Pró logo Cada vez habrá menor nú mero de personas que asignen segunda o tercera prioridad a los problemas del ambiente. Estos han llegado a tomar tales proporciones en el mundo, que nadie, con un mínimo de informació n ecoló gica, dudará de asignarles una preocupació n preferente. Todo el planeta “globalizado”, dominado por la especie humana, de una u otra manera, está siendo afectado en sus distintas latitudes. Los procesos industriales de los países desarrollados dejan una secue- la de contaminació n y desechos que, al no caber ya en los continentes, empiezan a infestar pavorosamente los mares. La explotació n intensiva de los recursos naturales en los países no industrializados para servir al propio consumo y a la voraz industria externa, ha empobrecido el suelo y está agotando las fuentes de energía. De esa manera el hombre está dañ ando su propia morada sobre la tierra. Se puede reconocer fá cilmente que, entre las motivaciones esenciales que han conducido al mal uso de los recursos de la naturaleza está n el ciego incentivo de las ganancias que no tiene Dios ni ley, la falsa idea del desarrollo econó mico ilimitado, la concepció n del bienestar referido exclusivamente al consumo de bienes materiales. Las prá cticas derivadas de estas concepciones está n conformando o han conformado ya un desastre ecoló gico de proporciones planetarias. A la vez, nos advierten de las raíces políticas del problema: se trata de un modelo de desarrollo econó mico y social basado en la veneració n al capital, que ha ignorado o ha pasado por encima de una equitativa relació n entre el hombre, la socie- dad y la naturaleza y que requiere ser superado para evitar la destrucció n del sustento natural de la vida sobre el planeta. Nuestro país no es ajeno a los problemas ambientales. El Primer Congreso Ecuatoriano del Medio Ambiente, organizado por la Fundació n Natura en febrero de 1987 señ aló , con mucha objetividad, los peligros que acechan a buena parte del suelo territorial, a su cubierta vegetal, a los recursos hídricos y demá s recursos naturales, al aire, la flora, la fauna y directa o indirectamente al hombre ecuatoriano. El problema ecoló gico del país recrudece en algunos sectores. Es lo que acontece en la regió n austral del Ecuador (Loja, Zamora Chinchipe) donde a los factores mencionados se unen condiciones telú ricas adversas, como la presencia y avance de la sequía. Se podría concordar en la existencia de una crisis ecoló gica universal en la que estamos inmersos con nuestros propios y particulares problemas; ademá s que está comprometida nuestra vida y la de las generaciones futuras. La solució n bá sica de la crisis es ciertamente política, de vastas proporciones. Sin embargo, hay tambié n un espacio que le corresponde a la conciencia, al reconocimiento de la necesidad de una conciencia generalizada sobre la situació n actual del hombre y la naturaleza, como factor primario en el enfrentamiento de la crisis. Al ser un problema conciencial es, en consecuencia, algo que se conecta con la educació n, con la informació n que requieren las personas sobre la naturaleza y sus bienes. Este es el á mbito en el que se inscribe substancialmente el presente trabajo, sin perjuicio de otras significaciones vitales. Es un trabajo con diverso tipo de informació n sobre las orquídeas, particularmente de las que habitan la regió n austral del Ecuador. Está ampliamente aceptado que la orquídea es la flor má s seductora que existe sobre la faz de la tierra. Considerada como é mulo del hombre por ocupar la cú spide del reino vegetal; así como aquel ocupa la cú spide del reino animal, la orquídea acusa sobrados merecimientos y calidades intrínsecos para ser objeto de estudio e investigació n. Basta mencionar su poder de adaptació n para vivir en todas las latitudes y ambientes; sus variados, extraordinarios y hasta extrañ os há bitos de nutrició n, fecundació n y reproducció n; su capacidad de producir olores embriagadores y su presencia altamente ornamental, como un acabado regalo para la vista y el olfato XI

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page XII

Esta rara y bella flor, cuya finura y refinamiento han fascinado al hombre, ha provocado por ello mismo, la codicia humana, ha sido objeto de conquista y depredació n. Es por tanto un bien, claramen- te discernible en la catá strofe ecoló gica, al que hay que preservar y aú n má s, valorar y enaltecer. Con esta visió n y con la forma de sentir y conceptualizar la realidad, Tulio Bustos, se propone la ingente tarea de organizar un libro sobre las orquídeas de las provincias má s australes del Ecuador: Loja y Zamora Chinchipe, sin que escapen sus observaciones sobre el contexto de la zona alta de la provin- cia de El Oro, cuyas variedades entran en juego de las descripciones de su labor de estudioso de nues- tra naturaleza, en un campo específico que le es de su exclusivo interé s. Por esta razó n, su obra se construye sobre una arquitectura muy orgá nica y funcional. Parte de la descripció n, de una descripció n físico-geográ fica de la regió n sur, dando preferencia a los escenarios y há bitat de las familias vegetales que le importa estudiar ahora: las provincias de Loja y Zamora Chinchipe. Este libro está dedicado al objeto mismo de su estudio, al de las orquídeas. Plantea descripciones sincró nicas y diacró nicas de esta familia, las ubica en su contexto. Importa especial atenció n, de Tulio Bustos, la descripció n morfobo- tá nica de los gé neros y especies; su cuidado: siembra, reproducció n y mantenimiento, materia indispensable que deben conocer iniciados y no iniciados en la especializació n de las orquídeas. Su obra la dedica, con el mayor de los fundamentos y apoyos científicos, a la taxonomía de la familia, sus características, su ubicació n en la zona, naturaleza del há bitat y las realidades nuestras, con cuya descripció n amplía un horizonte del conocimiento de la regió n, integrá ndola al contexto nacional, como zona rica en variedades “orquideoló gicas”, cuya importancia de competició n no se discute ni a nivel nacional o a nivel internacional, porque la atenció n, aunque primaria que se ha dado a este recurso florístico renovable de la regió n, ha hecho que estudiosos nacionales y extranjeros recurran a esta zona en procura de conocer nuevas realidades que presumiblemente no se las conocen en otras partes del mundo. Hay una parte especial que merece destacá rsela en esta obra: las observaciones y recomendaciones que plantea a todos los organismos pú blicos o privados respecto del cuidado, atenció n, asistencia; defensa de la ecología, del medio, del há bitat, como de las variedades mismas de orquídeas, porque logrando un respeto dentro de estos ó rdenes podríamos alcanzar adecuada preservació n de nuestros valores naturales. En otras palabras, estos son los tá citos o manifiestos propó sitos de este trabajo, a cuyo objeto concurren sus secciones conformadas por: una breve descripció n del medio físico de la regió n meridional del Ecuador integrada por las provincias de Loja y Zamora Chinchipe, residencia referencial de la fami- lia botá nica, materia del estudio, regió n caracterizada por la variedad de formaciones ecoló gicas y su consecuente riqueza de especies orquidearias; un estudio general sobre las orquídeas, su estructura y características bá sicas, sus formas de vida, su há bitat y particularmente sus formas de cultivo y preservació n; una descripció n de los principales gé neros de orquídeas de la regió n delimitada, de los sitios típicos o habituales en los que pueden ser encontrados y se mencionan los jardines y orquidearios má s notables localizados en la regió n; un registro de recomendaciones orientadas a la defensa de este valio- so recurso natural, a la promoció n de su cultivo, todo ello como parte de una posició n má s amplia de defensa de la naturaleza. Las ideas y la informació n propuestas está n fundamentadas, primero en un conocimiento directo de la regió n; luego, hay paciente investigació n, experiencia ajena y propia y toda una vida dedicada al cultivo de las orquídeas, de todo lo cual resultan vivencias que vale rescatarlas del silencio. A travé s de este trabajo se perfila, tambié n, otra aspiració n al identificar vocaciones y recursos regionales, al hacer conocer sus potencias y virtualidades, es: que nos pronunciamos por un país má s integrado y unitario que el que tenemos ahora, donde no existan regiones postergadas o ignoradas. He aquí un libro bien elaborado sobre una bella parcela de la biodiversidad regional. Finalmente exigiendo un á nimo muy especial, este trabajo incluye el trasunto ló gico de la fascinació n ejercida por esas flores, asunto del que no ha podido escapar un espíritu que se ha dejado seducir, sin la menor resistencia, por el embrujo poé tico de esas “cascadas de flores multicolores”, de esas embriagantes y cromá ticas mariposas que han detenido su vuelo para que las veamos desplegar las mayores galas posibles en la naturaleza. Dr. Marco Placencia Espinosa. XII

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page XIII

Mis reconocimientos Al té rmino de una jornada de esfuerzo intelectual, como en estos casos, cuando uno pretende presentar sus productos, sus criaturas, sus ensayos, como un hijo má s, traído a este mundo con el á nimo de crear un valor al servicio de la comunidad, para la complacencia de muchos, o para la satisfac- ció n de tros tantos, por dedicar horas preciosas de un tiempo siempre esquivo para revisar y obser- var esta entrega en todas sus circunstancias. Empero, las gracias no se deben hacer esperar sin que ello signifique la trascendencia de la atenció n para todas aquellas personas que de una u otra mane- ra han contribuido en la preparació n de esta obra para darle su estado actual. Los nombres de varios amigos, intelectuales, científicos, artistas, deberían figurar dentro de un marco especial de este trabajo. Sin embargo me limitare a mencionar los nombres de Marco Plasencia Espinosa y Fausto Aguirre Tirado por su dedicació n paciente a revisar y corregir la escritura de este trabajo. A Dennis D’ Alessandro por su valiosa ayuda en la clasificació n de los gé neros y especies de orquídeas encontradas. Al Ing. Leopoldo Palacios, sapiente investigador, cantor incorregible, maestro y amigo entra- ñ able por su desinteresada colaboració n en la verificació n de este trabajo, quien, a pesar de su deseo, no pudo ver plasmada esta publicació n debido a su inesperado y lamentable fallecimiento. Al Dr. Callaway Dodson, científico de reconocido prestigio mundial, por examinar profunda- mente la clasificació n de gé neros y especies de las orquídeas y al total ordenamiento de la obra cuyos cuadros se los incluye en este modesto aporte que pretende un acercamiento al conocimiento de la flora que se describe en é l. No podemos olvidar el nombre del Ing. Nelson Gutié rrez que, como conocedor de las entrañ as de nuestro Oriente, con su guía ayudó a la identificació n de especies en el trajinar por esas tierras. Al Ing. Gorky Larrea, catedrá tico y relievante investigador de la Universidad Nacional de Loja, quien colaboró paciente y desinteresadamente en la correcció n general y bibliográ fica de este traba- jo y que con su extraordinario aporte en la redacció n té cnica del mismo, se pudo concluir esta obra. A los colegas Jacinto Vé lez Q., Jorge Isaac Valarezo G. y Bolívar Merino, por su aporte invalorable en la consecució n de este documento. Al Ing. Leonardo Bustamante por su contribució n en la ayuda de la clasificació n de varios gé neros y especies, y la facilitació n de las tomas fotográ ficas de los especímenes orquidearios de su colecció n particular, ya que muchas de ellas estan impresas en este trabajo. De manera muy especial, a mi hija María Soledad, que con enorme esfuerzo, sacrificando su tiempo hermoso, pudo ayudarme en el levantamiento del texto, en la revisió n y edició n de este trabajo. Al Ing. Alex Hirtz profesional de prestigio internacional en el cultivo de orquídeas y otras ciencias, quié n sugirió varios elementos que enriquecieron el texto de esta obra y el inmenso aporte de sus maravillosas fotografías de varias especies orquidearias que en este trabajo se las identifica. A la meritísima Universidad Té cnica Particular de Loja, orgullo educacional del Ecuador y a sus profesores, en las personas: del Dr. Lenin Paladines por la presentació n requerida al trabajo en XIII

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page XIV

menció n y a la ayuda té cnica y didá ctica que supo ofrecer el Ing. Guido Benavides para la conclusió n de este libro, y, en forma particular, por el apoyo incondicional para: la edició n, impresió n y publicació n de esta producció n, a su personero má ximo el Sr. Dr. Luís Miguel Romero Ferná ndez, ilustre Rector-Canciller del ameritado centro de estudios lojano y nacional; que cuando le propuse el patrocinio para la publicació n, supo acoger de inmediato mi pedido y darle el soporte correspondiente. ¡Gracias señ or Canciller¡ Y a la centenaria Universidad Nacional de Loja, semillero invalorable del pensamiento ecuatoriano en la persona de su Rector, Dr. Max Gonzales Merizalde, por su meritorio aporte econó mi- co al financiamiento de la obra. Forman parte de nuestra gratitud los nombres de: Jovita de los Á ngeles, María Encarnació n, Juan Alberto, pobladores y campesinos de la regió n que viven por su tierra y sus á rboles, con su fauna y su flora.

Tulio Bustos C.

XIV

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page XV

La naturaleza hace al hombre y el hombre rehace la naturaleza: incesantemente amasa de nuevo a su antigua creadora y le da una figura que no tenía. Anatole France

XV

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page XVI

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page XVII

Dedicatoria A Raquel, mi esposa; a mis hijos: Tulio Camilo, Pablo Ernesto y María Soledad, con quienes comparto en cada amanecer la fragancia inagotable de las flores; y, a mi madre, esencia de mi ser, que me enseñ ó a conocer el universo maravilloso de las orquídeas.

XVII

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page XVIII

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page XIX

El viaje De a poco la fiesta concluía. Grillos y cigarras proclamaban su descanso. Miles de insectos en enjambres y en equilibrio bioló gico formalizado quedaban en silencio. El ú ltimo bú ho montañ ero extraviado de sueñ o avisó que preparaba apacible su rutina, mientras las mariposas lentamente despertaban de su fiesta de colores, hermoseando la mañ ana. Las libé lulas ensayaban su danza y el río en su largo caminar, dejaba que transcurra el tiempo hasta entonces, como entonces y como siempre. La humedad, contagiada del calor, ascendía, ofrecié ndonos manchones algodonosos, para luego descender por las aristas de los cerros. En la noche anterior el aguacero refrescó el ambiente. Desde Tunanza inauguramos la caminata arribando a la quebrada, de la quebrada a San Francisco (un pueblito que se sostiene con el vuelo de palomas) y desde ahí rumbo al bosque de la cordillera. Por los taludes cubiertos de helechos empapados con el aroma de sobralias (flor de un día). En los á rboles y arbustos trepa la vainilla, reconocida por el aroma que se entromete en la hierba crecida en el suelo buscando los recodos. Porque estas largas enredaderas de hojas carnosas y flores sensitivas quedan vibrando en el espacio que envuelve el paisaje. El sendero se anuda, y el nudo se agiganta haciendo má s escabroso y difícil el viaje. Cá rcavas profundas, producidas por el paso de las mulas en su diario trajinar y conducidas por campesinos o colonos de la regió n, se dejaban notar. En estos parajes el aire es má s puro y limpio, convergiendo con la suave brisa de su altura. Jadeantes y sudorosos quedamos absortos con la belleza y el olor penetrante que nos ofrecen los toritos en flor (Stanhopeas), en este rincó n del bosque, junto al encanto de Chaubardias y Chaubardielas que de vez en vez las ubicamos florecidas. Solitarios papagayos quiebran el rubor del medio día cruzando el espacio cual saetas có smicas. Sombras generadas por la majestuosidad de cauchos y romerillos blancos que enaltecen las lianas y bejucos entrelazados por donde fluye su luz angelical: Trichophilias y Odontoglossum, Restrepias y Xillobium, Masdevallias y Peristerias (estas ú ltimas con perfume de miel y semejando un panal de abejas), porque cada uno de estos hermosos gé neros orquidearios le dan una aureola de sin igual mansedumbre al entorno natural, conociendo que, en este universo má gico y deslumbrante, la vida y los seres se engrandecen. Llega la tarde vestida de encantos para alucinarnos con las flores que brindan su belleza desde siempre y para siempre. Hasta cuando el sol empieza a recostarse sobre el lecho azul de la montañ a, para hacernos má s fá cil el descenso. A lo lejos se escucha, el rubor delicado, en el viaje de las aguas mansas del río Zamora que nos esperan para refrescarnos en ellas en cuerpo y alma. Despué s nos queda eterna la imagen de la fiesta vivida: en el color, en el aroma y en las formas sensuales que las flores anfitrionas, enternecidas de hermosura, nos ofrecieron en estas nuestras tierras de Loja y Zamora que son patria de orquídeas y de ensueñ os. El autor

XIX

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page 20

Los Andes no poseen aquí la misma estructura ya conocida en el centro y norte del país, la cordillera Occidental se estrecha y diverge bajando hacia el suroeste mientras que la cordillera Oriental mantiene su aspecto y dirección norte-sur, al igual que en la parte central del Ecuador; es, sin embargo, menos ancha y menos alta que en otros lugares. Al este de la ciudad de Loja y al sur de Yangana no alcanza los tres mil metros sobre el nivel del mar.

Pierre Gondard

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page 21

CAPÍTULO I

Descripció n Físico–Geográ fica de la Regió n Sur

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page 22

al mal manejo del suelo, a la quema y tala de los bosques, estos recursos naturales renovables está n en peligro de extinció n, al igual de lo que ocurre con los animales de la regió n. La provincia de Loja cuenta con una superficie aproximada de 10 600 km2 que equivalen a 1 060 000 hectá reas. El 4,2 % de la superficie provincial tiene problemas hídricos y los faltantes pluviomé tricos mensuales abarcan, en ocasiones, los 12 meses del añ o, es el caso por ejemplo del extremo occidental de la provincia (Zapotillo, Macará , Sozoranga). Otros cantones semiá ridos como Calvas, Espíndola, Celica, Puyango, Paltas abarcan períodos de 6 meses de secos veranos donde la pluviosidad llega a cero (Carrió n, 1976). La zona geográ fica de la provincia de Loja se ubica en plena cordillera de los Andes cuyos rangos de altitud varían de 300 a 3 500 msnm.1 La mayor parte de la superficie está ocupada por montañ as escarpadas que se interceptan. Existen, por lo tanto, pocas y limitadas á reas planas. Las tierras altas de la provincia en su mayor extensió n, son accesibles al desarrollo forestal (BCE, 1982). El clima de la provincia de Loja se identifica por su irregularidad derivada de la interacció n de la zona intertropical de convergencia con la accidentada topografía. Esto da como resultado un ré gimen de precipitació n muy variable, con fuerte incidencia de lluvias en períodos relativamente cortos en algunos sectores y deficiente precipitació n en otros, configurando condiciones semiá ridas en muchas á reas de la provincia (DRI Sur Loja, 1983). En cuestió n de estadísticas no má s del 4 % de la superficie de la provincia (42 000 hectá reas aproximadamente) tienen posibilidades de riego; notorio suponer que la agricultura tropieza con graves problemas, sujetá ndose a las é pocas de invierno que tampoco son normales.

Fig. 1. Ubicació n geográ fica de la Regió n en el contexto Sudamericano

1.1. Generalidades La situació n geográ fica de la regió n sur-oriental del Ecuador, hace que en ella se encuentren los factores físicos (ecoló gicos, climá ticos, hídricos, etc.) má s extremos y de cambios continuos, cuyas dos zonas de estudio son marcadas con características especiales cada una de ellas (Fig. 1). “La estructura topográ fica ha originado la formació n de pequeñ os valles en medio de grandes encañ onamientos, produciendo la formació n de microclimas de mú ltiple variació n” (DRI Sur Loja, 1983). En la regió n oriental, uno de los factores característicos, es la humedad constante; en cambio en la regió n andina, la escasez de lluvias modifican la estructura física de la provincia de Loja. Se sabe que existen zonas que sufren períodos muy largos de sequía, como son los cantones fronterizos con el Perú , donde la pluviosidad, en algunos añ os, a veces, no llega a los 200 mm. Asimismo, en la zona oriental, la humedad constante determina regiones donde se encuentra vegetació n y, por ende, especies florísticas con una gama impresionante de variedades de orquídeas. Pero debido 1

1.2. Distribució n zonal de la provincia de Loja Se la ubica de la siguiente manera:

Bosque Primario

Con 120 000 hectá reas ubicadas en las estribaciones de la cordillera. Es el bosque virgen que no ha sido tocado, el cual sirve de protecció n y que debería protegé rselo a toda costa (11,32 %).

msnm significa metros sobre el nivel del mar.

22

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page 23

Bosque primario en la cordillera lojana.

Cubierta Vegetal

selva que alberga las especies florísticas má s excepcionales; de ellas un elevado porcentaje son orquídeas. Corresponde al 70 % de la superficie provincial.

Con 390 000 hectá reas, cuya altitud de la vegetació n no va má s allá de los 3 m. Se trata de zonas consideradas aptas forestalmente y manejables como tales (36,8 %).

Cubierta Vegetal

Tierras Marginales

Ocupa 120 000 hectá reas y corresponde al 6 % de la superficie provincial. Pertenece a la vegetació n secundaria.

Con 180 000 hectá reas de superficie. Zonas de excesiva erosió n que resulta imposible integrarlas a la producció n, cuya pendiente va má s allá del 50 % (estas tierras, anteriormente, estaban dedicadas a la agricultura).

Cubierta Vegetal Baja

Esta zona abarca aproximadamente 480 000 hectá reas que de cualquier manera se hallan integradas a la agricultura (pastos naturales y pastos adaptados al medio, cultivos permanentes y temporales). Abarca el 24 % de la superficie total (MAG, 1980).

Pastos Artificiales y Naturales

Con 300 000 hectá reas equivalentes al 28 % del total provincial (MAG, 1980).

Cultivos Permanentes y Temporales

Provincia de Loja De acuerdo al diagnó stico del programa forestal, en gran parte de los suelos de la provincia se encuentran bosques naturales y plantaciones (“cubierta forestal”).

Con 65 000 hectá reas, representa el 6,6 % del total de la superficie de la provincia.

1.3. Distribució n Zonal de la provincia de Zamora Chinchipe

1.4. Localizació n Geográ fica y Astronó mica de la Regió n

De los 20 000 km2 de superficie (2 000 000 de hectá reas) se caracterizan tres zonas:

La regió n sur oriental, formada por las provincias de Loja y Zamora Chinchipe, comparte los territorios de la regió n interandina y la regió n amazó nica.

Bosque Primario

Ocupa aproximadamente 1 400 000 hectá reas. Este es el bosque virgen, exuberante vegetació n,

23

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page 24

Fig. 2. Ubicació n geográ fica de la zona en estudio en el Ecuador.

Cuadro 1. Distribució n zonal de la provincia de Loja. MAG, 1980. Bosque primario: 120 000 ha. Cubierta vegetal: 390 000 ha. Pastos adaptados, naturales: 300 000 ha.

MAG, 2002. Monte y bosques: 337 787 ha. Pá ramo: 29 346 ha. Pastos cultivados: 140 583 ha. Pastos naturales: 324 082 ha. Á reas en descanso: 14 520 ha.

Tierras marginales: 180 000 ha Otros usos: 23 942 ha. Cultivos permanentes y temporales: 65 000 ha.

Cultivos permanentes: 44 438 ha. Transitorios: 80 155 ha. TOTAL 994 853 ha.

TOTAL 1 055 000 ha.

Fuente: MAG, Proyecto de generación de información básica y temática para planes de desarrollo provinciales, unidades de Producción Agropecuaria por categorías de uso de suelo, DINAREM, noviembre 2002.

Localizació n

Del cuadro se desprende que la superficie planimé trica es de aproximadamente 30 000 km2, algo má s del 9 % de la superficie nacional.

Se encuentra entre los 3° y 5° de latitud sur y de 78° y 80° de longitud oeste. Limita al norte con las provincias del Azuay y Morona Santiago; al sur y al oriente con el Perú ; y, al occidente con la provincia de El Oro y el Perú .

Datos actualizados a la fecha: Abril 2004: Superficie: 250 000 km2 aproximadamente, compilado por varias instituciones: CDC (Centro de Datos para la Conservació n); Ecociencia IGM (Instituto Geográ fico Militar); FUNDACIÓ N NATURA. (Figs. 2 y 3)

Superficie

La regió n no tiene una superficie bien definida, como se puede apreciar en el siguiente cuadro:

24

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page 25

Cuadro 2. Uso actual y potencial del suelo de la Provincia de Loja

Cuadro 3. Uso actual y potencial del suelo de la Provincia de Zamora Chinchipe Provincia de Zamora Chinchipe

Provincia de Loja Superficie/has Bosques Bosque natural 57.722 Bosque intervenido 64.553 Bosque seco 138.276 Plantació n de pino 5.728 Plantació n de eucalipto 3.679 Matorral 114.952 Subtotal 386.190 Pastos Silvo pasturas 127.909 Pasto natural 185.538 Pasto cultivado 28.195 Subtotal 341.642 Agricultura Agrosilvicultura 27.216 Arroz 2.628 Maíz 25.562 Cañ a de azucar 3.347 Café arbolado 29.154 Cultivos anuales (suelos no erosionados) 35.537 Cultivos anuales suelos erosionados 56.680 Subtotal 180.194 Á reas erosionadas Subtotal 123.198 Pá ramos Subtotal Zona de exclusió n Subtotal Area urbana Subtotal Lagunas Subtotal TOTAL

Superficie/%

Vegetació n y bosques protectores Bosque natural hú medo 67.67 Vegetació n de pá ramo 4.11 Matorral hú medo 5.89 Pasto natural- bosque natural 0.97 Subtotal 77.64 Antró pico Bosque natural – pasto cultivado 0.10 Cultivos – pasto cultivado 0.35 Pasto cultivado 15.62 Pasto cultivado – bosque natural 5.10 Pasto cultivado- cultivos 1.15 Á rea urbana 0.04 Subtotal 22.36 TOTAL 100.00 Fuente: ECORAE, 2001.

dando lugar, en trá nsito, al aparecimiento de mesetas y colinas, con predominancia de las primeras; las llanuras y valles son raros y de escasa extensió n, sobre todo en la parte oriental y central de la provincia; solamente hacia la parte má s occidental (cantones de Zapotillo y Macará ) cuando el relieve ha descendido cerca de los 100 msnm asoma una topografía de planos inclinados muy moderados.

35.141 10.025 2.897 193 1079.480

Provincia de Zamora Chinchipe La parte oriental de la regió n, en lo que se refiere a las zonas de Zamora, Nangaritza, Zumba y Yacuambi, está constituida por una serie accidentada de colinas que corresponden a las estribaciones de la cordillera Oriental de los Andes y la cordillera de El Có ndor. En la zona de Yacuambi se señ alan las cordilleras de Mangaurco y Campanaurco; en la zona de Zamora, la cordillera de Zamora; en la zona de Nangaritza, la cordillera de El Có ndor; y en la zona de Zumba, se hallan las cordilleras de Paredones y Numbala.

Fuente: Ilustre Consejo Provincial de Loja, 2004.

Orografía

Provincia de Loja Forma parte del volcanismo antiguo. Está atravesada de norte a sur por la cordillera Oriental o Real de los Andes, la misma que entrecruzando densamente sus estribaciones, nudos, portetes y mesetas, hace de esta regió n, la de má s accidentado relieve del país, un relieve volcá nico que forma cadenas intrínsecas de montañ as cuya altitud va disminuyendo de oriente a occidente,

Nudo de Sabanilla Representa el punto má s meridional del Ecuador. Existen alturas de má s de 4 000 m. Este

25

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page 26

Cuadro 4. Superficie planimé trica de la regió n INSTITUCIÓ N JUNAPLA PREDESUR BANCO CENTRAL I.G.M.

P. LOJA 9 926 km2 11 476 km2 11 600 km2 12 196 km2

P. ZAMORA CH. 20 000 km2 20 000 km2 20 000 km2 20 000 km2

TOTAL 29 926 km2 31 476 km2 31 600 km2 32 192 km2

Fuente: PREDESUR, 1984.

nudo da origen a las cordilleras de Numbala y Loyola al oriente y a las cordilleras de Ayabaca al sur, en el Perú .

• El tipo costa o Pacífico, con un só lo má ximo a principios del añ o. • El tipo sierra, específico para Los Andes ecuatorianos, con dos má ximos: uno al final y otro a principios del añ o. • El tipo oriente o amazó nico con un má ximo a mediados del añ o.

Nudo de Numbala En la parte norte tiene altitudes que rebasan los 2 000 msnm. Posee, como característica especial, un bosque con predominio de la especie Podocarpus, localizado entre terrenos extremadamente agrestes, hecho excepcional en el Ecuador, por lo que se lo puede considerar como parque nacional.2

Termina el pá rrafo diciendo “toda la provincia constituye el á rea de pulsació n de los dos conjuntos climá ticos”. En cualquier zona las lluvias medias mensuales dependen de la altitud.

Clima

Maldonado (1984) en su estudio sobre el clima de la provincia de Loja y Zamora Chinchipe, anota que las observaciones realizadas dejan entrever que en la regió n sur oriente se encuentran los tres tipos pluviomé tricos:

Consideraciones sobre clima y ecología en la regió n En la regió n sur oriental se definen dos zonas climatoló gicas: la interandina o mixta y la oriental

Fig. 3. Orografía de la Regió n Sur Oriental. 2

PREDESUR, 1984.

26

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page 27

o baja, a má s de una serie de microclimas diseminados en su territorio. Clima de la zona Interandina: la desaparició n de la cordillera Occidental deja a la regió n bajo la influencia de la zona costanera, con alternancia de una estació n lluviosa muy importante y una sequía total, la regulació n de las precipitaciones es progresiva hacia el este, donde empieza a sentirse la influencia amazó nica, pero las altitudes que rodean la zona producen un refrescamiento. Clima de la zona Amazó nica Baja: presen- ta variaciones muy marcadas en su temperatura y pluviosidad. Las lluvias se reparten equitativamente todo el añ o. Microclimas: en la Amazonía se presentan los siguientes microclimas: Templado subhú medo: en las estribaciones de la cordillera Occidental. Tropical cá lido seco: en los encañ onados valles meridionales que alcanzan hasta los 1 500 m de altitud y temperaturas entre los 19 y los 25°C. El subtropical: con altitudes que van desde los 1 500 hasta los 2 200 msnm y con temperaturas que fluctú an entre los 17 y 19°C (Maldonado, 1985)

Cuenca Hidrográ fica del Río Catamayo, prov. de Loja. 850 msnm.

Hidrografía. Cuencas, microcuencas y subcuencas hidrográ ficas de la regió n sur oriental

La regió n cuenta con una amplia red hidrográ fica cuyas aguas desembocan hacia el oriente en los afluentes del río Amazonas y hacia el occidente en el océ ano Pacífico. Las cuencas hidrográ ficas, es decir las á reas de drenaje de los ríos, toman el nombre del cauce principal. (Fig. 4). Cuenca hidrográ fica del río Puyango El río Puyango tiene su origen en los pá ramos de Arcos, Corredores y Chiguango, a 3 800 msnm. El curso del río recorre de este a oeste, hasta unirse con la quebrada de Cazaderos a par- tir de la cual toma el nombre de Tú mbez. La longitud del río es de 120 km. El á rea irrigada es aproximadamente de 10 935 hectá reas (PREDESUR, 1984). Cuenca hidrográ fica del río Catamayo Nace en la cordillera de Sabanilla, parroquia de Yangana. La longitud del río es de 183 km hasta la unió n con el río Macará .

Río Vinuyacu, 2300mnsm

27

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page 28

Fig. 4. Hidrografía de la Regió n Sur Oriental.

Los drenajes mayores de esta cuenca forman valles o terrazas cercanas a los cauces de una superficie relativamente grande, que es en donde se asienta buena parte de la població n de la provincia de Loja. El á rea irrigada abarca una superficie aproximada de 18 134 hectá reas.

Finalmente el Espíndola y Pindo con aguas del río Sabiango y del Calvas forman el río Macará , é ste, desde sus orígenes hasta unirse con el Catamayo tiene una extensió n de 116 Km de recorrido para luego tomar el nombre de Chira en la Repú blica del Perú . (CINFA – UNL Loja, 2004).

Micro cuenca del río Playas Pertenece a la cuenca del Catamayo. El principal recurso hídrico lo constituye el río Playas, sector de Catacocha. Tiene una longitud de 40 km y sigue su curso de norte a sur hasta la confluencia con el río Catamayo.

Micro cuenca del río Alamor Pertenece a la cuenca del río Catamayo y está localizada en el extremo sur-occidental de la provincia de Loja. El río Alamor nace en las estribaciones de la cordillera de Celica y sigue su curso transversalmente hacia la zona de Zapotillo de nor-oeste a sur-oeste, tiene una longitud de 87 km (PREDESUR, 1984).

Micro cuenca del río Pindo-Calvas Pertenece a la cuenca del río Catamayo y se encuentra localizada en la parte sur este de la provincia de Loja. Se extiende desde Gonzanamá , 40 km hacia el sur, hasta la proximidad con la frontera peruana.

Cuenca hidrográ fica del río Zamora El río Zamora nace en la hoya de Loja, en el nudo de Cajanuma, localizado en la cordillera de los Andes. En su origen tiene un recorrido de sur a norte, cruza la ciudad de Loja recibiendo las aguas de varios afluentes, siendo los principales ríos el San Francisco y el Sabanilla. Al llegar a la altura de la ciudad de Zamora cambia su recorrido con direcció n nor-este, recibiendo en este sector las aguas de los ríos Bombuscaro y Jamboe. A la altura de la població n de La Saquea recibe las aguas del Yacuambi que baja de la cordillera oriental de los Andes. Un poco má s al norte desemboca el

Cuenca hidrográ fica del río Macará Se origina en la regió n lacustre del cantó n Espíndola. Recoge las aguas formadas en las microcuencas del río Sanambay, Amaluza y Chiriyacu, ríos del mismo cantó n que se unen en la cabecera cantonal Amaluza. Como afluentes del río Macará señ alamos el Chiriyacu y Guayacu, que forman el río Pindo.

28

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page 29

Río Yacuambi en la provincia de Zamora Chinchipe.

río Chicañ a. En Los Encuentros recibe las aguas del má s caudaloso de los tributarios, el río Nangaritza y otros menores como el Padmi y El Machinaza. La longitud del río Zamora, dentro del á rea cantonal, se estima en 150 km de recorrido. El ancho del cauce es variable, siendo el curso mayor de 100 m. Las formaciones boscosas se encuentran localizadas en la periferia del valle del río Zamora, así como de sus afluentes en zonas situadas en las estribaciones de las cadenas montañ osas que conforman la cordillera de El Có ndor hacia el oriente, las cordilleras de Mangahurco, Pan de Azú car, Campanazo y Paredones en la parte central y al oeste de la cordillera oriental de Los Andes. Los terrenos boscosos van desde alturas de 800 m en el fondo del valle y a má s de 2 000 m en las cordilleras cubiertas con bosques de diferentes especies vegetales. (PREDESUR, 1984).

la confluencia de los ríos Zabala y Shincata. Recibe varios tributarios como El Ingenio, El Quimi y otros. Constituye uno de los mayores afluentes del río Zamora. Subcuenca del río Nangaritza Esta micro cuenca está determinada por el río Nangaritza que recorre de sur a norte. Se ha estimado má s o menos una superficie de 100 000 hectá reas en las que la micro cuenca tiene su influencia. La altitud que oscila el valle es de 800 a 1 200 msnm. Las condiciones climá ticas son: temperatura media anual de 22°C y una precipitació n que va de 2 000 a 3 000 mm/añ o, perteneciendo a la formació n ecoló gica bosque muy hú medo Pre Montano. La zona es selvá tica poblada por diferentes variedades de á rboles de madera muy fina. Cuenca hidrográ fica del río Chinchipe Es un cuenca poco estudiada. Su principal afluente es el río Mayo que atraviesa una de las zonas má s antiguas de colonizació n del país, que a su vez recibe las aguas de los ríos Numbala, Loyola, Vergel, Palanda, Palanuma, Isimanchi y

Subcuenca del río Yacuambi El río Yacuambi es el principal que conforma esta micro cuenca. Toma esta denominació n en

29

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page 30

minantemente irregular, dando origen a una serie de pisos altitudinales y a la presencia de una gran diversidad de microclimas, suelos y especies vegetales. La fertilidad o grado de nutrientes disponibles de la mayoría de los suelos presentan una elevada reserva mineral, consecuentemente, tiene una fertilidad potencial alta. La irregularidad de la topografía, con predominio de fuertes pendientes (terrenos laderosos), es la que en mayor grado determina la aptitud de los suelos y constituye la principal limitante del desarrollo agropecuario de la provincia. En tales circunstancias, pese a contar con recursos hídricos, no hay posibilidad de emprender en grandes proyectos de riego, excepto el á rea Sur-Occidental ya que el resto de los terrenos no son mecanizables y son muy susceptibles a la erosió n. El desgaste acelerado que sufren los suelos en las fuertes pendientes, determina la presencia en gran parte de ellas de Entisoles e Inceptisoles que representan suelos jó venes carentes de características pedogené ticas, pero que no son del todo malos. La profundidad del suelo está asociada con la erosió n acelerada que es comú n en los terrenos laderosos desprovistos de una vegetació n protectora. Los suelos de la provincia de Loja de una manera general tienen las siguientes características:

El Sangola Las características climá ticas son: temperatura entre los 24 y 26°C y una precipitació n promedio anual de 1 000 mm. Las formaciones ecoló gicas que predominan en la zona de influencia son: bosque seco tropical y bosque hú medo Pre Montano.

Aspectos Geoló gicos: Breve Descripció n En el estudio de las investigaciones realizadas por PREDESUR se señ ala que la provincia de Loja cubre toda la parte meridional de la sierra ecuatoriana, en donde desaparecen los recubrimientos volcá nicos cuaternarios que afectan la mayor parte de la sierra. Esto permite el afloramiento de formaciones antiguas susceptibles de contener yacimientos metá licos. Posteriormente a los depó sitos y origen de algunas formaciones, viene una fase de intrusiones batolíticas que trae consigo un complejo de mineralizaciones metá licas como: oro, cobre, plata, plomo, zinc, hierro y antimonio (PREDESUR, 1984). Suelos

La topografía predominante en la regió n sur es tremendamente irregular. Los ramales de los Andes son má s bajos que en el resto del país, ellos se bifurcan dando lugar a una serie de pisos altitudinales y a la presencia de gran diversidad de climas, suelos y especies vegetales. Las precipitaciones, en té rminos generales, disminuyen de este a suroeste, lo cual influye enormemente en la intensidad de meteorizació n de los materiales parentales, en el grado de desarrollo de los suelos, de sus propiedades físicoquímicas y su estado de fertilidad. En las sierras volcá nicas predominan las rocas metamó rficas, avanzando la intensidad de metamorfismo de oeste a este. La topografía de esta á rea es muy irregular, constituyendo un ecosistema frá gil, por cuanto sus suelos está n amenazados por la erosió n. Los ríos que van al océ ano Pacífico corren por cañ ones profundos, disectados y no forman valles. Los ríos que van hacia el oriente, en sus primeras etapas, forman cascadas y cañ ones profundos y luego se abren en dos valles relativamente estrechos que son el Zamora y el Nangaritza (Valarezo, 1984).

• Hay una significativa á rea de suelos aluviales bien desarrollados. • Se encuentra predominio de la fracció n arcilla en los horizontes (30 - 50 %). • El pH de los suelos oscila entre neutro a alcalino (7-8). • La disponibilidad de materia orgá nica y nitró geno es media, el contenido de fó sforo es bajo generalmente y la provisió n de potasio es alta especialmente en á reas secas y tropicales. • Topográ ficamente varían entre plano a inclinado con pendientes entre 0-30 % las á reas susceptibles de riego. • El aprovechamiento de á reas inclinadas es factible por ser pendientes uniformes y suelos medianamente profundos en ciertos casos. • Con un buen diseñ o de riego y buen manejo del recurso suelo, pueden aprovecharse mejor.

Suelos de la provincia de Loja La topografía de la provincia de Loja es predo-

30

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page 31

Los suelos aptos para cultivos anuales bajo riego con pendientes menores de 14 % corresponden al 13,4 % del á rea provincial equivalente a 148 000 ha, alrededor de 286 200 ha, 26 %, tienen pendientes entre 14-30 % y se pueden establecer cultivos preferentemente perennes, ademá s 443 500 ha (40 %) de la provincia tienen pendientes de hasta el 58 % en donde se deberían aplicar prá cticas de conservació n y manejo de suelos adecuadamente implementadas y aprovechar su vocació n forestal y, finalmente, el á rea restante 227 300 ha, que es el 20,6 %, se debe mantener como bosque natural y á rea de vida silvestre (Valarezo, 1994).

En tal virtud los paisajes que presenta la zona oriental, en la provincia de Zamora cuyos suelos se encuentran formando valles estrechos y alargados con altitudes de 800 a 900 msnm en terrazas recientes ALUVIALES constituidos por ENTISOLES (suelos jó venes) entre otros, los má s generalizados son los FLUVENTS (FLUVIALES) cuyas características los hace ser los mejores con fines agropecuarios. Tambié n está n presentes en las bajas y medias estribaciones los INCEPTISOLES, suelos con menos profundidad efectiva. En á reas colinadas de pie de monte con pendientes mayores al 15 % y materiales COLUVIALES, encontramos ULTISOLES, suelos má s á cidos y de coloraciones rojizoamarillentas. Finalmente en las á reas montañ osas con relieve fuertemente socavado e inclinado, con pendientes mayores al 40 %, se encuentra OXISOLES, suelos maduros con alto contenido de arcilla, muy á cidos y de baja fertilidad. En á reas boscosas como é stas, se encuentran los nutrientes del suelo en la capa superficial, por lo que son susceptibles a ser erosionados y degradados, constituyendo un ecosistema frá gil, de manejo y conservació n especial, por lo que debe conservarse el bosque primario (Valarezo, 1994).

Suelos de la provincia de Zamora Chinchipe El suelo se forma por la acció n de factores como el relieve, vegetació n y fundamentalmen- te el clima que actú an en un tiempo mayor o menor sobre el material primario (roca madre). Esto determina que por los diferentes tipos de climas, relieves y vegetaciones tambié n haya diversidad en los suelos, con diferentes características físicas como textura, color, grado de desarrollo y características químicas como su fertilidad, acidez, alcalinidad, etc.

31

EPO 1-99

10/17/05

16:24

Page 32

Si bien ya Aristóteles, y con él otros muchos filósofos griegos, estudiaron y describieron un sinnúmero de fenómenos que hoy denominaríamos ecológicos, la ecología como disciplina científica, tal y como hoy la entendemos, no aparece en el marco de las distintas ciencias naturales hasta el siglo XIX

Jordi Camp S.

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 33

CAPÍTULO II

Formaciones ecoló gicas de la Regió n Sur

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 34

2.1. Formaciones Ecoló gicas en la provincia de Loja

• Algarrobo Prosopis pallida. (Humbold. Bonpl. Ex Willd) Kunth • Pasallo Eriotheca ruizii. (K. Schum) A. Robyns • Ceibo Ceiba trichistandra (A. Gray) Bakh. • Guayacá n Tabebuia chrysantha. (Jacq.)G. Nicholson • Faique Acacia macracantha. (Humb. Bonpl) ex. Willd. • Ebano Ziziphus thyrsiflora Benth. • Palo de vaca Alseis eggersii. Standl • Ferná n Sá nchez Triplaris cumingiana. Fisch. y C.A. • Balsa Ochroma pyramidale. (CAV. Ex Lam.) • Petrino Cavanillesia platanifolia (Bonpl.) Kunth. • Laurel Cordia alliodora 26-27 (Ruiz y Pav) Oken. • Bá lsamo Myroxylon balsamum. (L.) Harms

El conocimiento exacto de la disponibilidad de recursos naturales de una regió n, la forma de utilizació n actual y su potencialidad, en funció n del clima, suelo, hombre, vegetació n, fauna y otros factores, constituyen elementos esenciales para lograr el manejo adecuado de dichos recursos. El mapa ecoló gico del Ecuador, realizado sobre la base del sistema de formaciones vegetales o “Zonas de vida naturales en el mundo” del científico Dr. Leslie R. Holdridge, ha sido preparado con la esperanza de que pueda constituir una guía en el planteamiento del mejor uso de la tierra. La clasificació n se basa en el principio de que, en té rminos generales, distintas especies de plantas tienen diferentes y a la vez definidas necesidades edá ficas y climá ticas y da una guía en la determinació n de los mejores tipos de uso de la tierra y lo que debe mantenerse en la forma actual. Al referirse de manera concreta a la regió n sur, cuya extensió n está cerca a los 30 000 km2 de superficie, las dos provincias, equivalente a una novena parte de la superficie total del país, se encuentra una diversidad de zonas ecoló gicas y microclimas, diferentes tipos de suelos, de vegetació n y de fauna silvestre. Estos factores inciden directamente en el desenvolvimiento socioeconó mico de la regió n y despiertan profundo interé s de quienes caminan queriendo conocer estas latitudes. Para mejor informació n se identifica algú n orden de características.

Monte epinoso Tropical meT

Se localiza en el extremo sur oriental de Zapotillo. La vegetació n crece entre los 150 a 300 msnm. Climatología: temperaturas medias anuales entre 24-26°C y precipitaciones entre 300 y 500 mm. El paisaje es de topografía plana, lo cruzan pequeñ as quebradas, resecas en el verano,que aumentan su caudal en el invierno. Son zonas que no se pueden regar fá cilmente, se requieren bombas para poder hacerlo. Especies: • Ceibo Ceiba trichistandra.(A. Gray) Bakh • Pasallo Eriotheca ruizii.(K. Schum) A. Robyns • Guayacá n Tabebuia chrysantha. (Jacq.)G. Nicholson

Bosque seco Tropical bs-T

Se ubica en el cono sur de la provincia de Loja en una franja que bordea este cono, en el cantó n Zapotillo. Se ensancha al Sur y al Este del mismo cantó n. Se ubica entre los 100 - 300 msnm con una temperatura entre los 24-26°C y con una precipitació n superior a los 500 mm. Es una zona de topografía plana, atravesada por el río Catamayo. En estos sitios se encuentra en proceso de construcció n el canal de riego Zapotillo que irrigará gran parte de esta zona. Son terrenos de inclinada formació n y hoy en día sirven para cultivos de ciclo corto. La vegetació n existente está constituida por las siguientes especies:

Bosque seco Pre Montano bs-PM Ubicació

n: Parte del cantó n Saraguro, Sur este del cantó n Catamayo, El Limo y Sabanilla, can- tó n Loja. Al Sur en sitios como: Vilcambaba, Malacatos, Quinara y en gran parte del cantó n Catamayo. Altitud: de 1 000 a 2 000 msnm. Clima: Temperaturas que oscilan entre los 20 y 24°C, con precipitaciones entre los 500 y 1 000 mm.

34

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 35

• Niguito Muntingia calabura. L. • Balsa Ochroma pyramidale. (Cav. Ex Lam)

Bosque seco Montano Bajo bs MB

Se ubica en los pequeñ os Valles de los cantones: Calvas, Paltas, Gonzanamá y Loja. La altura promedio se encuentra entre los 1 800 a 2 500 msnm. La temperatura oscila entre los 12 y 18°C con precipitaciones de 500 a 1 000 mm. Son suelos de pendientes pronunciadas, el mal manejo de los mismos, acelera la erosió n (Plan Hidrá ulico, 1994). Especies: • Faique Acacia macracantha. (Humb. Bonpl.)ex Wild • Aliso Alnus acuminata. Kunth • Arabisco Jacaranda mimosifolia. D. Don • Cucharillo Oreocallis grandiflora. (Lam.) R. Br. • Duco Clussia pallida. Engl. • Arupo Chionanthus pubescens. Kunth. • Cedrillo Trichilia tomentosa. Kunth • Laurel Cordia alliodora. (Ruiz y Pav) Oken • Nogal Juglans neotropica. Diels • Saco Myrcia fallax.(Rices DC)

Monte epinoso Tropical Zapotillo.

Son suelos erosionados, de textura arcillosa unos y otros arenosos, pudiendo cultivarse: fré jol, tomate, maíz. Es una zona erosionada por la quema y la tala de los bosques, se hace necesario incorporar estas tierras a cultivos y pasturas (Cañ adas, 1983).

Bosque hú medo Montano bh-M

En la provincia de Loja este bosque se encuentra ubicado en la cordillera de Sabanilla, lagunas de Yacurí y lagunas de El Compadre (nudo de Numbala). Altitud: llega a los 3 000 msnm. El clima oscila con temperaturas entre los 6 y 12°C y precipitaciones de 500 -1 000 mm. Se trata de suelos que no tienen uso agrícola; la acció n eó lica, en parte, los ha erosionado. La vegetació n está compuesta de pajonal, chaparral, helechos, lianas, musgos, líquenes y muy pocas orquídeas (Cañ adas, 1983). En esta zona ecoló gica, cabe destacar bien la importancia que representan para la ciudad y la provincia las lagunas de El Compadre y el Parque Nacional Podocarpus. Zonas ubicadas al sur-oriente de la ciudad de Loja, a 3 000 m de altura en la cordillera central de Los Andes (nudo de Numbala). Estas lagunas dan origen a la mayor parte de los ríos meridionales de la regió n.

Especies: • Faique Acacia macrocantha Humb. y Bonpl. Ex Wild • Nogal Junglans neotropica. Diels • Chamana Dodonaea viscosa Jacq. • Vainillo Caesalpinia spinosa. (Molina) Kuntze • Moshquera Crotón wagneri.Muh. Arg. • Gualtaco Loxopterygium huasango.Spruce ex Engl. • Laritaco Vernonanthura Patens. (Kunth) H. Rob. • Papelillo Bougainvillea spectabilis. Willd. • Pasallo Eriotheca ruizii. (K. Schum) A. Robyns • Guá simo Guazuma ulmifolia Lam. • Seique Cedrelinga cateniformis.(Ducke)

35

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 36

Vegetació n del Parque Nacional Podocarpus (bh.M), 2 800 m.s.n.m.

Vegetació n del bh M., Provincia de Zamora. 900 msnm.

La belleza incomparable, el paisaje singular que presentan es digno de mencionar como uno de los recursos turísticos sobresalientes de la regió n, que deben ser explotados racionalmente. En cuanto al Parque Nacional Podocarpus, señ ala PREDESUR en la Guía Turística (1984), que es “uno de los reductos que la naturaleza atesora y que, en parte, por esto se la llama a la provincia de Loja como EL JARDÍN BOTÁ NICO DEL ECUADOR, situado desde la meseta de las Lagunas de El Compadre hacia el oriente. Ahí se encuentran intocados inmensos bosques de Podocarpus conocidos con el nombre de romerillos, á rboles milenarios de hasta dos y tres metros de diá metro”.

• Macrocarpaea sodiroana. Gilg (Revista de difusió n té cnica y científica. UNL 2002).

Bosque muy seco Tropical bms-T

Se extiende en poblaciones de Pindal, Larama, Chaquinal, Macará , zonas bajas del río Catamayo y partes del cantó n Zapotillo. Se encuentra entre los 500 y 1 200 m. El clima de la zona comprende entre los 24 y 26°C, con precipitaciones entre los 500 y 1 000 mm. La vegetació n original se ha modificado como consecuencia de las actividades agrícolas y ganaderas. En á reas considerables se ha cambiado el bosque por la sabana, existen á rboles dispersos. La quema de los bosques y el desmonte juega un papel importante (Cañ adas, 1983).

Especies: • Gaiadendron Punctatum. (Ruiz y Pavon) G.Don • Macleania rupestris.(Kunth)A.C. Sm • Viburnum tryphyllum. Benth.. • Clethra fimbriata. Kunth.

Especies: • Ceibo Ceiba trichistandra. (A. Gray) Backh. • Laurel Cordia alliodora. (Ruiz y Pavon) Oken

36

EPO 1-99

10/17/05

• • • • • •

16:25

Page 37

• Laritaco Vernonanthura patens.(Kunth) H. Rob. Algarrobo Prosopis juliflora. (SW.) DC. Higueró n Ficus obtusifolia.Kunth Cordoncillo Piper aduncum L. Faique Acacia macracantha. Humb. Bonpl. Guadú a Guadúa angustifolia.Kunth Pasto janeiro Eriochloa polystacha.Kunth

• • • • • • • • • • • •

Bosque hú medo Pre Montano bh-PM

Esta vegetació n se ubica en poblaciones del can- tó n Puyango como: Mercadillo, Celica, 12 de Diciembre y en otros cantones en lugares como: Chaguarpamba, Olmedo, El Rosario. Altitud: de 800 a 1 400 m. El clima varía entre los 18 y 24°C, con precipitaciones entre los 1 000 y 2 000 mm. Esta zona se caracteriza por estar integrada a cultivos de temporal. Todavía queda vegeta- ció n arbó rea, de topografía ondulada, en partes erosionada (Cañ adas, 1983).

Palton Persea americana. Mill. Arupo Chionanthus pubescens. Kunth. Almendro Geoffroea spinosa. Jack. Paja toquilla Carludovica palmata. (Ruiz y Pav). Porotillo Erythrina smithiana. Krukoff Guabo Inga insignes. Kunth. Palo santo Bursera graveolens. Kunth. Chilena Panicum maximum. Jack. Yuca Manihot esculenta. Crantz. Frejol Phaseolus vulgaris. L. Maíz Zea mays. L. Arroz Oryza sativa. L.

Bosque muy hú medo Montano bmh-M

Se extiende desde el cerro de los Alisos hasta El Tabló n incluyendo la zona de Santa Rosa, entre los cantones de Saraguro y los límites de Zamora Chinchipe, al Norte. Tambié n abarca territorio del Parque Nacional Podocarpus. Altitud: Superiores a 2 600 msnm Temperatura de 7 a 12°C, con precipitaciones de 1 500 a 2 000 mm. Zonas caracterizadas por fuertes vientos y humedad constante. Vegetació n: Las familias má s importantes son: ASTERACEAE, ERICACEAE, MELASTOMATACEAE Y POACEAE, especies HERBACEAS como: CALAMAGROSTIS INTERMEDIA, NEUROLEPIS NANA, CORTADERIA BÍFIDA, VALERIANA MICROPHYLLA, TILLANDSIA ORBICULARIS.

Especies: • Nogal Juglans neotropica.(Diels) • Laurel Cordia alliodora. (Ruiz y Pavon) Oken • Pastos. • Guato Erytrina edulis Triana. Ex Micheli • Ferná n Sá nchez Triplaris cumingiana. Fisch y C.A. • Higueró n Ficus obtusifolia. Kunth • Matapalo Coussapea villosa. Poepp y Endl • Castilleja Castilleja arvensis. Schlt Dl. Y Cham • Amarillo Centrolobium paraense. Tul. • Laritaco Vernonia patens. (Kunth) H. Rob • Chilca Baccharis latifolia (Ruiz y Pavon) Pers.. • Penco Agave americana. L. • Cabuya Furcraea andina. Trel. • Flor de reyna Yucca guatemalencis. Backer • Abrojo Triumfetta althaeoiides.Lam • Higuerilla Ricinus communis. L. • Saguilamo Styrax subargentea. • Yaragua Melinis minutiflora. P. Beauv.

Bosque hú medo Montano Bajo bh-MB

Altitud: entre 1 500 a 2 000 msnm. Clima: Temperaturas de 12-18°C Precipitació n: 1 000-2 000 mm. Ubicació n geográ fica: cantones Quilanga, Gonzanamá , Cariamanga, Espíndola. Especies: • Aliso Alnus acuminata. Kunth. • Cedro Cedrela montana. Moritz exturez. • Papelillo Bouganvillea spectabilis. Willd. • Arabisco Jacaranda mimosifolia. D. Don. • Arupo Chionanthus pubescens. Kunth • Nogal Juglans neotropica. Diels.

37

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 38

Pá ramo pluvial Sub Alpino pp-SA Formació n

• Aguacatillo Persea. Cacyulea (Ruiz y Pavon) Mez. • Cedro Cedrela montana. Moritz exturez • Laurel Cordia alliodora. (Ruiz y Pavon) Oken. • Chanul Nectandra sp. • Canelon Ocotea. Aciphylla (Nees) Mez.

ecoló gica ubicada al Este del cantó n Saraguro cubre una Superficie de 4,5 km2, se extiende a travé s de los cerros Pajas Blancas, Collingora hasta la laguna Canutal en el límite de la provincia de Zamora. El pá ramo se ubica entre los 3 500 a los 3 800 msnm. Con temperaturas entre los 6 y 8°C, pluviosidad de 1 500 a 2 000 mm. Es un plano ondulado con fuertes pendientes, zona intocada, virgen, natural, libre de la influencia del hombre.

Ubicada esta formació n ecoló gica a lo largo de la estribació n de la cordillera oriental, en los límites de la provincia de Loja.

Especies: • Una gramínea típica robusta olco Holcus lanatus (PREDESUR, 1984).

Bosque hú medo Montano Bajo bh-MB Esta formació n se puede apreciar en zonas del cantó n Yacuambi, curso medio del río Nangaritza, río Palanda y río Isimanchi. A una altura de 2 000 a 2 200 msnm. Temperatura entre 12 y 18°C y precipitaciones de 1 500 a 2 200 mm.

“Estos suelos lojanos –nos dice Carrió n (1976)-, profundos y atormentados, está n sin embargo cubiertos por tierra pró diga en maderas finas, preciosas y raras. La vegetació n natural es singular. Esta es la patria del ceibo, el guayacá n, el payaso, el barbasco, el algarrobo, el guarumo, el bá lsamo, la tagua, la palma real, el palo santo, la matasarna, el guabo, el faique, el jorupe, la sota, el higueró n, el guarango, el molle, el arabisco, la cucharilla, el arupo, el encinillo, el cedro, la bella maría, el duco y la cascarilla y, desde luego, de esas hermosas maderas que son el nogal y el romerillo” En la mayoría de estas especies arbó reas nombradas y aquellas vivientes de nuestra exó tica selva oriental, se yerguen extrañ as unas, delicadas otras, perfumando el ambiente la mayoría y todas, sin lugar a dudas, hermoseando el paisaje: las orquídeas sobre los á rboles del bosque.

Especies: • Aliso Alnus acuminata. Kunth • Romerillo Prumnopitys montana. • Arrayá n Myrciantnes rhopaloides. (Kunth) Me Vaugh. • Floripondio Brugmansia x candida. Pers. • Encinillo Weinmannia elliptica. Kunth. • Duco Clusia pallida. Engl. • Guarumo plateado Cecropia telenitida. Luatrec. • Cascarilla Cinchona oficinales. L. • Cedro Cedrela odorata. L. • Helecho arbó reo Cyathea caracasana. (Klotzsch) Domin. • Variadas y bellísimas orquídeas.

2.2. Formaciones ecoló gicas en la provincia de Zamora Chinchipe

Bosque hú medo Pre Montano bh-PM

Se sitú a en la subcuenca del río Yacuambi, siendo uno de los afluentes del río Zamora y que abarca unas 110 000 ha. La vegetació n se encuentra entre los 1 300 y 1 800 msnm, con una precipitació n anual de 1 000 a 2 000 mm. Las pendientes fuertes y lo escarpado del terreno han hecho que la vegetació n quede intacta. La limitante es el exceso de humedad por falta de mayor drenaje (PREDESUR, 1984).

Bosque muy hú medo Montano Bajo bmh MB

Se encuentra a una altura entre 1 6002 000 msnm. Buena parte de la vegetació n primaria ha sido eliminada, hoy está cubierta por la regeneració n del bosque secundario. Vegetació n: • Llashipa Pteridium arachnoideum. (Kaulf) Maxon. • Higo silvestre.

Especies: • Chonta Bactris gasipaes. Kunth.

38

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 39

Fig. 5. Mapa político y ecoló gico de la Regió n Sur Oriental.

maderas finas que sirven para la explotació n y la industria. Sus especies arbó reas son FORÓ FITOS, hospederos de una gran variedad de epífitas, entre las que sobresalen las orquídeas.

• Palma de ramos Ceroxylon parvifrons. (Engel) H. Wendl. Existen algunas especies de la familia LAURACEA gé nero OCOTEA y NECTANDRA, CORDONCILLO Piper aduncum.

Especies: • La chonta Bactris gasipaes. Kunth. • Palma real Attalea colenda. (O. F. Cook) Balslev. An Hend. • Peine de mono Apeiba menbranaceae. Spruce Ex Benth. • Laurel Cordia alliodora. (Ruiz y Pav) Oken • Balsa Ochroma pyramidale. (Cav. Ex Lam.) • Pituca Clarisia racemosa. Ruiz y Pav. • Copal Protium macrophyllum. [(Kunth) Engel.] • Caucho Castilla elástica. Sessé . • Tutumbe Cordia lantanoides. Spreng. • Caneló n Ocotea aciphilla. (Nees) Mez. • Bella María Otoba glycicarpa. (Ducke) W. A. Rodríguez. • Seique Cedrelinga catanaeiformes. (Ducke). • Cedro Cedrela odorata. L.

Bosque muy hú medo Pre Montano bmh PM

Ubicació n: En las cuencas de los ríos Zamora, Cenepa, Nangaritza, Vergel y Coangos, població n de Zumba. Abarca, este bosque, una gran extensió n. Al Sur: las confluencias de los ríos Nangaritza y Numbatakaime, por el Norte la desembocadura del río Nangaritza en el Zamora; por el este la cordillera del Có ndor y por el oeste la prolongació n de la cordillera de Zamora. Ocupa má s o menos 100 000 ha. Altitud: entre 800 - 2 000 msnm. Temperatura media de 20 a 24°C y una precipitació n de 2 000 a cerca de 4 000 mm. En el añ o, la regió n tiene por lo menos 10 meses de lluvia y solo 2 de verano, su limitante es el manejo de los suelos y su excesiva humedad, en las pendientes de la cordillera encontramos suelos negros. La inaccesibilidad del terreno ha hecho que el bosque se mantenga virgen. La zona selvá tica es poblada de

39

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 40

Cubierta Vegetal. Bosque Protector de altura.

2.3. Flora de la regió n sur, cubierta vegetal

El campesino, el agricultor, prefiere perder el bosque natural, el bosque virgen, para incorporar estas tierras a cultivos de supervivencia, a pastizales para alimentar el ganado, sin ninguna té cnica ni orientació n, ignorando el dañ o que comete al talar los bosques o quemar los mismos; desprotege el suelo y quienes pagan las consecuencias son las generaciones futuras. Mas, el hombre del campo no es el ú nico depredador. La llamada “civilizació n” acelera o ejerce igual influencia, por ejemplo, al abrir caminos y carreteras, la explotació n de los bosques de maderas finas para la industrializació n, hace que las fronteras del bosque natural se vayan alejando cada vez má s (Encalada, 1983). La destrucció n del bosque-selva va en pro- gresió n geomé trica a la regeneració n aritmé tica del mismo, sea é sta en forma tecnificada o de la manera simple y sencilla de reforestar las zonas devastadas. Se asegura que despué s de pocos añ os, en la provincia de Loja, no quedará ni el 10 % de los bosques actuales si no se toman medidas serias para resguardar estos recursos. Cuando se habla de cubierta vegetal en sectores ubicados al occidente, sur occidente y central de la cuenca del río Chira-Catamayo, pertenecientes al Ecuador, donde crece una vegetación típica de estepa seca y en las abruptas laderas de Paltas, Celica y Sozoranga, aparecen extensos territorios severamente erosionados. Ú nicamente en la alta y hú meda sierra de la

La extensa gama de climas y microclimas que corresponden a la diversidad de pisos altitudinales, propios de la singular topografía de la regió n, configuran las condiciones ecoló gicas necesarias para que se desarrolle una flora variada, no obstante de los serios problemas ecoló gicos de erosió n y desertificació n que se trata en este subcapítulo.

Cubierta vegetal

La regió n, añ o tras añ o, sufre considerables pé rdidas de su cubierta vegetal como consecuencia del fenó meno de erosió n y desertificació n de los suelos motivada por la acció n destructiva del hombre. Para graficar mejor este hecho, el bosque actú a como protector del suelo realizando la acció n de una inmensa esponja que acumula el agua y luego la vierte, poco a poco, para alimentar las lagunas, lagos, ríos, quebradas, etc. El ciclo que cumple el agua es el de regar el suelo, de humedecer la vegetació n y por ende, el bosque protector; luego llena las quebradas y baja por ellas para alimentar los cauces má s grandes de los ríos y lagunas. Este mismo líquido sirve para el uso de la gente y de los animales, para nuevamen- te volver a la atmó sfera y convertirse en lluvia, hasta que se repite el ciclo (Encalada, 1983).

40

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 41

provincia y hacia el margen izquierdo del río Puyango, que lindera con los cantones Zapotillo, Puyango y Paltas, existen aú n muestras geobotá nicas importantes y bien conservadas que dicen de la variedad y riqueza de la flora lojana tan apreciada mundialmente (Cañ adas, 1983). Por estas consideraciones generales, no es exagerado afirmar que cerca de las dos terceras partes de la provincia (unas 700 000 hectá reas) yacen al día de hoy sin cubierta vegetal importante. Este hecho incide sobre la formació n del clima y microclima porque en los lugares donde no existe vegetació n se acentú an los contrastes té rmicos modificá ndose los ecosistemas. En los sitios donde se ha conservado el bosque natural (Alamor, parte alta del cantó n Loja, Saraguro, Yangana) es notorio el incremento de humedad atmosfé rica y la tendencia a una distribució n má s homogé nea de las precipitaciones a lo largo del añ o; pero, sobre todo, disminuyendo el agua desbordada del cauce, salta a la vista el invalorable trabajo de protecció n del suelo que realizan los á rboles (Maldonado, 1985).

• Llashin Cyathea caracasana. (Klotzsch) Domin. Existen valles como los de Catamayo, Vilcabamba, Yangana y Cazanga que no superan los 1 800 msnm. Se dan tierras bajas como las de Macará y Zapotillo; mesetas como las de la hoya de Loja, Catacocha, Cariamanga, Gonzanamá ; tierras altas como las de Loja o Saraguro, que definen una vegetació n totalmente variada y distinta de otras, cuyas variaciones de temperaturas van desde los 4 hasta los 26°C (Cañ adas, 1983). A má s de las especies anotadas, se encuentran las siguientes: • Romerillo. Prumnopytis. montana • Acacia Acacia riparia. Kunth. • Ceibo Ceiba trichistandra. (A. Gray) Bakh. • Gualtaco Loxopterigium huasango. Espruce Ex Engl. • Sauce salix humboldtiana. Willd. • Pasallo Eriioheca ruizii. (K. Schum) A. Robyns. • Pretino Cavallinesia platanifolia. (Bonpl) Kunth. • Ferná n Sá nchez Triplaris cumingiana. Fishyca. • Paico Chenopodium ambrosioides. L. • Faique Acacia macracantha. Humb Bonpl. • Algarrobo Prosopis juliflora. (Humbold Bonp Ex Willd) Kunth. • Porotillo Cochlospermum vitifolium. • Moshquera Crotón wagneri. Mijh Arg. • Guabo Inga spectabilis. (Vahl) Willd. • Niguito Montingia calabura. Jacq G. • Guá simo Guazuma ulmifolia. Lam. • Arupo Chionantus pubescens. Kunth. • Yumbingue Terminalia amazonica. • Guayacá n Tabebuia chrysantha. (Jacq) G. Nicholson. • Higueró n Ficus optusifolia. Kunth. • Ebano Ziziphyz thyrsiflora. • Balsa Ochroma pyramidale. (Cav. Ex Lam.)

Flora

Pese a los problemas anotados de tipo ecoló gico (erosió n, desertificació n, sequía, tala y quema de los bosques), aú n quedan zonas boscosas de inconmesurable valor para la regió n y para la supervivencia del habitante de la regió n, así como del mantenimiento de la extensa variedad de especies botá nicas y zooló gicas. En la provincia de Loja se encuentran especies vegetales típicas de la serranía de climas templados y fríos sabiendo que su altitud apenas supera los 3 600 msnm, como: • Cashco Weimannia elliptica. Kunth. • Chachacomo Escallonia paniculada. (Ruiz y Pav). • Chuquiragua Chuquiragua jussieui. J. F. Gmel. • Laurel Cordia alliodora. (Ruiz y Pav) Oken. • Chincha Chusquea scandens. Kunth. • Romerillo. Prumnopytis montana. • Pumamaqui Oreopanax rosei. Harms. • Maco maco Myrsine sodiroana. (Mez) Pipoly. • Llashipa Pteridium arachnoideum. (Kaulf).

En las mesetas y valles observamos la chonta, capulí (Prunus serotina) y á rboles frutales de clima frío en las partes altas. El sabio alemá n Teodoro Wolf en su obra Viajes por el Ecuador destaca lo privilegiado de la

41

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 42

provincia en cuanto se refiere a su flora. De esto nace la denominació n de LOJA, JARDÍN BOTÁ NICO DEL ECUADOR. Igualmente se destaca la gran variedad á rboles frutales, como:

• Caucho Castilla Elástica. Sessé . • Macairo Tapirira guianensis. Aubl. • Bellamaría Otoba glysicarpa. (Ducke) W. A. Rodríguez. • Laurel Cordia alliodora. (Ruiz y Pav) Oken. • Cedro Cedrela montana. Moritz Ex Turez. • Sangre Compsoneura sprucci. (A. Dc.) Warb. • Yumbingue Terminalia amazonica. (J. F. Gmel) Exell. • Seique Cedrelinga cateniformis. (Ducke). • Palma Ceroxylon parvifrons. (Engel) H. Wendl. • Almendro Geoffroea spinosa. Jacq. • Cedrillo Trichilia tomentosa. Kunth. • Guabo Inga spectabilis. Kunth. • Pituca Clarisia racemosa. Ruiz y Pav. • Aguacatillo Persea caerulea. (Ruiz Pavó n) Mez.

• Tumbo o badea Pasiflora quadrangularis. L. • Chirimoya Annona cherimola. Mill. • Quique Hesperomeles obtusifolia. (Pers.) Lindp. • Pomarrosa Sizygium jambos. (L.) Alston. • Languapo Coccoloba ruiziana. Lindau. • Luma o lucma Pouteria lucuma. (Ruiz y Pav.) Kuntze. • Joyapa Macleania rupestres. (Kunth) A. C. Sn. • Salapa Cavendishia bracteata. En su condició n de frutas silvestres típicas de la provincia de Loja. (Ruiz y Pav.) Ex. Sc. Hi. • Mango Mangifera indica. L. • Cañ a de azú car Sccharum officinarum. L. • Papaya Carica papaya. L. • Limó n Citrus limon. L. • Naranjo Citrus sinensis. L. • Tuna Opuntia ficus indica. L. Mill. • Zapote Matisia cordata. Bonpl. • Ciruelo Spondias purpurea. L. • Aguacate Persea americana. Mill. • Pomarosa Zyzygium jamboe. • Guayabo Psidium guajava. L. • Guineo Musa sapientum. L. • Plá tano Musa paradisiaca. L. • Café Coffea arabica. L. • Níspero Eriobotrya japonica. (Thunb) Lindl. • Guaná bana Annona muricata. L. • Guaba machetona Inga spectabilis. (Vahl) Willd. • Granadilla Passiflora ligularis. Juss. • Maracuyá Pasiflora edulis. Sims

Existen, ademá s, pastos, extrañ as y bellas flores especialmente orquídeas, distinguié ndose má s de 1 000 especies en la regió n (Loja y Zamora Chinchipe). La extraordinaria variació n de la vegetació n hace, como queda dicho, que sea de interé s mundial y que muchos investigadores de diferentes nacionalidades e instituciones internacionales hayan venido a estudiar la flora de la regió n Sur, por estas características tan propias (Cañ adas, 1983). NOTA: Clasificació n de las especies arbó reas está basada en: Moller, J.P. y Leons, S., 1999.

Ecosistemas frá giles y estraté gicos.

Desde una perspectiva nacional, en la política y estrategia de biodiversidad se han determinado varios ecosistemas frá giles y amenazados, como los que describen en los pará grafos subsiguientes.

Al oriente, provincia de Zamora Chinchipe, en el ambiente cá lido hú medo de la selva, alberga una importantísima riqueza en especies ornamentales, vegetales, maderables y forestales, tales como:

Los humedales Se encuentran representados dentro del parque Nacional Podocarpus, en el complejo sistema lacustre de las Lagunas del Compadre (má s de 200). En el bosque protector Colambo Yacurí, encontramos las lagunas de Jimbura y las de Yacurí. En la parte alta de Saraguro, se observan lagunas en los pá ramos

• Guayacá n Tabebuia chrysantha. (Jacq) G. Nicholson. • Romerillo Prumnopitys montana. (Humb. Y Bonpl Ex Willd) De Land. • Nogal Juglans neotropica. Diels.

42

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 43

de Surihuiñ a entre Celen y Manú . Tambié n encontramos humedales en la cuenca del Nangaritza, en las zonas bajas, a lo largo del río donde el agua se estanca por una capa impenetrable del subsuelo y se forman humedales há bito preferido del caimá n que aú n quedan en el Nangaritza. Existen otros humedales cerca de Guaysimi, provincia de Zamora, denominados las Brisas.

sostenible para el pá ramo, una de ellas es el Ecoturismo. Zonas á ridas y secas Se ubican en los cantones del sur occidente de la provincia de Loja, entre las cotas de 360 a l500 m.s.n.m. Es un bosque latifoliado xerofítico caducifolio de copas de todo tamañ o. La expansió n demográ fica, el consumo de leñ a, la tala indiscriminada de bosques para ampliar la frontera agropecuaria, ha causado un fuerte deterioro del recurso suelo. Actualmente existe 138 276 ha de bosque seco (PFL, HCPL, 2004). En el bosque seco la cabra es la gran depredadora que aprovecha toda clase de vegetació n, especialmente los retoñ os de especies forestales. El cañ ó n del río Catamayo permite el paso durante la mayor parte del añ o del aire cá lido y seco desde el desierto del sur, provocando el fenó meno de la desertificació n. La Amazonía es determinada como zona de atenció n especial por que es la principal fuente de agua dulce. Contiene la mayor parte de los bosques del Ecuador y es un enorme reservorio de biodiversidad, pues congrega casi el 80% de la biodiversidad nacional. Tiene significativa importancia é tnica y cultural. En su interior está n las mayores reservas petroleras y mineras del país (HCPL, 2004, Plan Forestal Provincial de Loja, Diagnó stico forestal).

Los pá ramos andinos Los pá ramos del sur del Ecuador se distinguen de los pá ramos de los Andes del norte por sus características especiales, debido a la ausencia de cenizas volcá nicas, las altitudes relativamente bajas, los fuertes vientos y la extrema humedad, que los convierten en pá ramos arbustivos, aunque tambié n existen pá ramos herbá ceos. Los pá ramos del sur tienen menos de 50 000 ha (incluye Ecuador y Perú ) y van desde Jimbilla, Jipiro, Parque Podocarpus, cordillera de Sabanilla en Espindola y Palanda hasta las huaringas (Huancabamba) en el Perú . La extensió n en el Ecuador es de unas 40 000 ha. De las cuales 11000 se encuentran protegidas dentro del Parque Nacional Podocarpus. Estudios realizados en el Parque reportan la presencia de 221 especies. Algunas organizaciones campesinas está n buscando alternativas para el aprovechamiento

43

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 44

“La flora del Ecuador, según estimación hecha por botánicos sistemáticos, sobrepasa las veinte mil especies, dentro de esta cantidad, existen más de dos mil especies arbóreas, más de tres mil orquídeas, entre las cuales solamente en la cuenca del Guayas hay más de doscientas especies exclusivas, no existen en otras partes del país. La vegetación del Amazonas es mucho más antigua que la del Ecuador Central, porque existe desde hace unos diez millones de años, mientras que la flora de la sierra se formó posteriormente al levantamiento geológico de los Andes”.

Erwin Patzelt

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 45

CAPÍTULO III

Las Orquídeas

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 46

3.1. Visió n histó rica

rios de lo que ahora se constituye la repú blica de Colombia hasta la parte media de lo que en la actualidad es Chile?. Los cronistas de Indias dan testimonio y muestras de una gran visió n para mitificar las cosas naturales en algunos casos y, en otros, al describir, por ejemplo, la campiñ a lojana y hablar con mucho interé s del Valle sagrado de Piscobamba (hoy Vilcabamba), de los caprichosos cerros que rodean la població n, del Mandango y del Guarango. Se cuenta que el cacique indio de la regió n hizo una verdadera maravilla florística en las faldas de estos montes en las que instaló un hermoso parque donde cultivaba exó ticas plantas que daban bellísimas flores que tenían parecidos con pá jaros, insectos, zapatillas, mariposas y de variadas figuras; de colores extraordinariamente llamativos y que habían sido recogidas de las montañ as vecinas que albergaban bosques lluviosos, frondosos y soleados, en las estaciones de verano que el valle encierra (Gallardo, 1978). En el siglo XVII el Rey de Españ a, Carlos III, por intermedio de las cortes españ olas, fue entusiasmado para que organizara expediciones

Desde tiempos remotos se tiene noticias de estas plantas. Los griegos y romanos ya las conocían. Estas plantas fueron mencionados en escritos chinos, varios siglos antes de Cristo. Uno de los primeros que las estudió fue el filó sofo y naturista griego Teofrasto (374-287) a.C. quien, refirié ndose a ellas, dijo “en la base de la planta donde nacen las hojas se encuentran dos pelotitas arrugadas que semejan los testículos de los perros”. En griego, testículo se dice “orchis”, de ahí orquídea, aunque la descripció n de Teofrasto se limita a las especies indígenas europeas (Caneva, 1984). La realeza incá sica cultivó estas flores con una visió n có smica, jerarquizá ndolas como plantas divinas, ya sea en sus residencias, en sus campos, en sus palacios señ oriales, donde lo hacían con mucha propiedad dado que nadie lograba importunarlas. Para ese entonces su entorno natural, la selva, el bosque, permanecían intocados. ¿Podría imaginarse el paisaje deslumbrante donde floreció la era de los amos y señ ores del TAHUANTINSUYO que ocuparon los territo-

Cerro “El Mandango”, Vilcabamba, Loja.

46

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 47

e hiciese inventario de las riquezas de la Colonia. Así se forma la “Real Expedició n Botá nica del Nuevo Reyno de Granada” con la direcció n del sabio José Celestino Mutis. La correspondencia de este sabio con el padre de la botá nica, Linneus, así como las narraciones y otros escritos de Humboldt y por los relatos de otros viajeros, hicieron que los jardineros y horticultores europeos se interesaran por nuestras plantas (Ospina, 1978). Pelham contribuye notablemente al conocimiento de las orquídeas y su historia, desde la Repú blica mexicana, cuando dice: “La historia de las orquídeas de Mé xico difiere só lo en un aspecto de sus hermanas de Amé rica Latina. En general, han sido clasificadas y descritas por primera vez por instituciones europeas, durante la primera mitad del siglo XIX. Antes de 1800 pocas de ellas habían sido vistas en Europa. Entre 1840 y 1850 se publicaron las primeras descripciones de la mayoría de estas plantas y se las incorporó al sistema de nomenclatura linneana (Pelham, 1958). Lo que distingue al pasado de las orquídeas del de todas las demá s, es el hecho de que, mucho tiempo antes de que los españ oles llegaran a Mé xico y antes de Linneus, gran nú mero de estas flores habían sido ya cultivadas en los palacios y residencias de los príncipes indios, en Tecnochtitlá n, ahora ciudad de Mé xico. El siglo XIX es el SIGLO DE LAS ORQUÍDEAS. Los ingleses, que para esa é poca habían conquistado grandes territorios y eran dueñ os allende los mares, por tierras de Amé rica, Asia, Á frica, Oceanía, enviaron grandes expediciones a los lugares má s apartados de la jungla. Al regreso de estas expediciones los acaudalados LORES no tenían ningú n inconveniente en pagar grandes sumas de dinero por las orquídeas traídas ya sean Cattleyas del Brasil, Brassias del Perú o Vandas o Cipripedyum de Birmania. Desde Europa se envió , al tró pico, gente preparada para la recolecció n de orquídeas, sin importarles de aquellos que se quedaban perdidos en la selva del Darié n en Centro Amé rica o contagiados por la fiebre amarilla en el Orinoco o devorados por peces carnívoros en el gran río de las Amazonas. Lo cierto es que hubo una fie- bre increíble por las orquídeas. La atenció n se extendió desde fines del siglo XVIII hasta mediados del siglo XIX (Wright, 1977).

Estos depredadores, recolectores o saqueadores, como quiera llamá rselos, con el ú nico fin de poseer una determinada especie destruían o quemaban el bosque con el resto de las especies, ese era el precio que la naturaleza pagaba por la codicia insospechada de los aventureros. Luego apareció Federick Sander estudioso de las orquídeas de la é poca Victoriana (Aldret Aldrey, 1977). A partir de la Primera Guerra Mundial, terminó la fiebre por la “caza de orquídeas”, ya que Lewis Knudson, científico americano descubrió có mo hacer crecer estas especies a partir de semillas en frascos esté riles de jalea nutritiva. Empezó la comercializació n internacional de las plantas con el nuevo mé todo para obtener preciosas y robustas muestras que luego se llamó la reproducció n de las orquídeas. A raíz de la Segunda Guerra Mundial, George Morel, científico francé s, descubrió el modo de propagar cientos de plantas a partir de un pequeñ o esqueje tomado de la punta de una rama recié n brotada. Este mé todo de propagació n a travé s del “meristema” permitía multiplicar una cantidad ilimitada de plantas y propagar bellísimos híbridos, mucho má s que los antiguos mé todos basados en la divisió n de las plantas por entero. La preferencia por estas plantas hizo que sus “cazadores” adoptaren especiales medidas queriendo impresionar al resto de recolectores. Esto ocurrió en Europa. Alguna vez el Orquideó logo Sander ofreció 40 000 especímenes de Paphiopedilum spicerianum (Ardley N, 1977). Las flores de las orquídeas tienen una gama asombrosa de colores y apariencias que van desde lo sublime hasta lo fantá stico, unas han desarrollado sus mecanismos de polinizació n tan complicados que sus flores se asemejan a moscas, abejas, otras son tan excitantes que compiten en belleza por su policromía y otras como queriendo acompañ ar en vuelo a las mariposas. Tienen una historia fascinante, repleta de fá bulas, historias verdaderas, otras trá gicas, otras convertidas en leyendas y en mitos vivientes, unidas eso sí con una sola advertencia: “El mundo de las orquídeas es una aventura que una vez que se la emprende nunca má s se la quiere dejar, porque de su hechizo no se saldrá jamá s” (AOS, 1976). Las orquídeas no son pará sitas sino epífítas. Quiere decir que viven en rocas y en los á rboles que les sirve de apoyo. Las raíces de las orquídeas corren por la superficie absorbiendo alimento, y humedad del musgo y escombros que las rode-

47

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 48

an. Algunas crecen en tierra. En definitiva las orquídeas son plantas independientes; necesitan solamente un apoyo o soporte, condiciones normales de luz, cantidad razonable de agua y humedad. Las orquídeas pueden vivir en casi todos los climas, a excepció n de los desiertos y nieves perpetuas. Las orquídeas son las plantas má s bellas del mundo que durante má s de 250 añ os han florecido sobre las mesas y los escaparates y ventanas de las casas y en los invernaderos de las personas de todos los confines de la tierra, empero siguen siendo un misterio para muchos (AOS, 1976).

De todas las plantas que florecen y pueden crecer y cultivarse en el hogar o en un invernadero, ninguna tiene la aureola má gica de las orquídeas. Desde el siglo pasado cuando algunos aficionados llegaron a pagar desorbitantes sumas de dinero por especímenes que los trajeron de las montañ as y de la jungla de países lejanos, ha constituido un lujo para el horticultor, por eso hasta hoy en día al visitar las salas de exposició n y los invernaderos de los jardines botá nicos,

estos producen temor y admiració n para muchísimas personas (Ospina, 1978). Considerando que esta familia vegetal acoge a la sé ptima parte de todas las especies vegetales con flores que pueblan la tierra, no podemos sorprendernos de que é stas tengan ejemplares fascinantes. Hay diminutos brotes que deben ser estudiados con lentes de aumento y otras flores hasta de 40 cm de anchura. Algunas tienen un solo tallo floral, otras muchos brotes y racimos de flores, algunas viven a miles de metros sobre el nivel del mar, otras habitan zonas pantanosas. Existen tipos salvajes de orquídeas; otras, como las del tipo australiano, viven bajo tierra. Hay capullos que despiden la má s exquisita fragancia; de otras su olor es repugnante. La parte má s diferenciada de estas plantas es la flor (AOS, 1976). Por la facilidad de su polinizació n, las orquídeas son las plantas que se hibridan natural y espontá neamente. El mercado internacional de estas plantas ha hecho que mucha gente se especialice en la obtenció n de especimenes en cantidades fabulosas con características muy especiales de vivencia, flores de variadísimos colores, tamañ os má s grandes que las normales, o duració n de la flor cortada arrancada por mayor tiempo que las originales.

Orquídea en su estado natural del gé nero shomburgkia splendida. 750 msnm.

Orquídea en su estado natural del gé nero Cyrtochilum alboroseum. 3400 msnm.

3.2. Importancia

48

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 49

Fig. 6. Descripció n botá nica de una orquídea

Cultivar las orquídeas y verlas florecer es un encanto. A estas plantas todo el mundo quie- re cultivarlas. Las sociedades de Orquideó logos y las exposiciones de orquídeas deparan momen- tos agradables y satisfacciones inesperadas. Si en casa se tiene un raro espé cimen y é ste florece, la satisfacció n aumenta, pero para ello se necesita aplicar reglas bá sicas de cultivo; de no ser así, se las pierde fá cilmente. Existen varias razones para pertenecer a una sociedad de orquideó logos. No solamente se tiene el placer de comunicar los logros obtenidos y dar-

los a conocer a varias personas, se comparte los conocimientos y experiencias de otros. Estas sociedades tienen reuniones perió dicas en las cuales los socios muestran sus plantas en flor; conferencistas exponen sus trabajos y experiencias; como asistentes escuchan sugerencias o aprenden tal o cual medio de cultivo. De todas maneras estas sociedades y las exposiciones que realizan tienen mucho de positivo (Ospina, 1978). Otro de los factores fundamentales que da importancia al cultivo y al conocimiento de estos vegetales, es la atracció n que la gente va

49

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 50

adquiriendo por la naturaleza, aprendiendo a amarla, preservarla y defenderla. En un recorrido por los cerros y las montañ as frías o por la selva hú meda de la Amazonía, se encuentra tal satisfacció n que es imposible describir las emociones, al descubrir paisajes perdidos, para impregnarlos en la pupila nuestra y llevarlos metidos dentro del corazó n por toda la vida. Enseñ ar a nuestros hijos, nuestros parientes, amigos y allegados las riquezas naturales que guardan, en su interior, nuestros paisajes.

tallo. Luego vienen las hojas, producié ndose las flores y a base de este crecimiento se desarrolla un nuevo retoñ o. Los capullos está n protegidos por una vaina o funda. Los tallos de las orquídeas simpodiales se convierten, a menudo, en ó rganos llamados pseudobulbos. Todas las flores de las orquídeas tienen una capa externa de cé lulas aconchadas llamadas velamen, las cuales protegen la fina corteza viviente (AOS, 1977).

3.4. Las Orquídeas y su residencia en el mundo

3.3. Descripció n Botá nica, Descripció n Morfoló gica

En el mundo. Se considera ú nicamente que en los desiertos y en las zonas glaciales no se encuentran estas plantas. Crecen en los lugares má s abruptos, en los climas má s adversos, en suelos y bosques de características variadas. Está n distribuidas en los cinco continentes. Las primeras clasificaciones de esta familia fueron hechas por Carlos Linneus en 1752, luego por el Dr. John Lindley desde 1830 a 1855. El profesor alemá n Schlechter, en 1921, incluyó 15 000, entre gé neros y especies, en su sistema de clasificació n. Varios botá nicos siguen estudiando la clasificació n y con mayor acierto lo publica el Dr. Robert Dressler en 1981. Recientemente, có mputos botá nicos que no pueden considerarse como definitivos, hablan de 13 000 a 35 000 especies de orquídeas; la mayoría de los botá nicos aceptan 25 000, pero la selva y el bosque, en sus entrañ as, todavía albergan muchas especies desconocidas que necesitan ser descubiertas (Ospina, 1978; Dodson, 1988). Varias especies en el sub-tró pico pierden el follaje en otoñ o y en la primavera se cubren de hojas. Al alejarse del tró pico menos orquídeas epífitas se encuentran, en cambio las terrestres aparecen porque prefieren zonas templadas frescas y frías. Cada continente posee su propia flora en orquídeas, con muy pocos casos del mismo gé nero en dos continentes. Se presenta una distribució n caracterizada por continente. ASIA: Orquídeas que no tienen bulbos pronunciados como los gé neros Vanda, Phalaenopsis, Dendrobium y Bulbophyllum. OCEANÍ A: Paphiopedilum, Cymbidium, Coelogyne.

Cuadro 5. Clasificació n de la familia Categoría Reino: n: Clase: Orden: Familia:

Terminació n Plantae Divisió Magnoliophyta Liliopsida Orchidales Orchidaceae

Fuente: Fanfani, Rossi, 1990.

Las flores de las orquídeas tienen una estructura bá sica. Hacia fuera existen tres segmentos má s o menos similares llamados sé palos. Dentro de é stos hay una segunda serie de tres segmentos, dos de los cuales son idé nticos y se llaman pé talos; el tercero llamado labio o labellum, es el má s complejo. En el centro de la flor se encuentra el ó rgano de reproducció n llamado la columna, compuesto de la unió n de las anteras (elemento masculino), y el pistilo (elemento femenino). La columna es la característica má s importante por la que se determina una especie de la familia de las orquídeas. Por supuesto todas estas partes varían considerablemente de acuerdo con la clase de orquídea. Las orquídeas se dividen en dos tipos de crecimiento: MONOPODIAL Y SIMPODIAL (AOS, 1976).

Monopodial

La planta tiene un tallo cuya extremidad crece continuamente. Las flores se producen del tallo entre las hojas, usualmente alternando lados.

Simpodial

Como las cattleyas, que tienen un rizoma del cual brota un retoñ o, é ste se desarrolla en un

50

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 51

Fig. 8. Grá fico de una orquídea de crecimiento simpodial con flores y semillas.

Fig. 7. Grá fico de la estructura de una orquídea de crecimiento monopodial y simpodial.

los estudios botá nicos realizados, señ alando que en el Ecuador existen dos zonas identificadas como nudos montañ osos: el de Pasto al norte y de Sabanilla al sur, en este ú ltimo converge el sistema de la cordillera de El Có ndor, de Numbala, de Jaé n y Mainas y de Palanda, con características muy especiales que le dan una condició n ecoló gica de privilegio en el mundo al encontrar en é sta la má s variada dispersió n de especies vegetales con una alta viabilidad gené tica. El libro en referencia cobra inusitado interé s para nuestro país, y en particular a nuestra regió n sur, cuando nos dice que: varios hombres de ciencia fueron enviados por el rey de Españ a a Sur Amé rica para que organizaran la expedició n al Perú en el añ o de 1805, entre los que se cuenta a José Caldas y Juan Tafalla, para luego sumarse el sabio alemá n Alexander Humboldt, quienes se encontraban de visita a la provincia de Loja. Todos estos famosos personajes tienen mucho que ver con los trabajos científicos de la é poca y la gran promoció n a nivel internacional de la regió n en cuanto a la inmensa riqueza

EUROPA: Ophrys y Orchis, Habenaria. Á FRICA: Este inmenso continente, de forma y colorido excepcionales, es pobre en orquídeas; tiene pocos gé neros representativos: Eulophia y Disa con excepció n de la Isla de Madagascar que tiene una flora orquidearia extraordinaria. AMÉ RICA: Es uno de los continentes má s ricos en cuanto a gé neros, tanto en el tró pico como el sub-tró pico. Los gé neros má s extendidos son: Cattleya, Epidendrum, Preurothallis y Stelis. ECUADOR: Cuando el sabio Humboldt, en el siglo XIX, recorrió las tierras de Amé rica y al adentrarse en el Ecuador escribió en sus anotaciones particulares: “La hermosura, brillo y fragancia de sus flores, en la lozanía de su follaje y viveza del colorido, no hay regió n que pueda competir con las montañ as de Mé xico, Los Andes Granadinos, Quiteñ os y Peruanos” (Arango, 1978). En el siglo pasado se escribió un libro con el título de: “FLORES PARA EL REY” de la autoría de Artur Steel y traducido al españ ol por Antonio Reguero, en é l se dan a conocer

51

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 52

botá nica que ella alberga, capaz de apasionar a eminentes estudiosos y sabios. Hoy todavía sigue vigente el interé s y el entusiasmo por recorrer estos sitios, en particular sus cordilleras; muchas expediciones científicas provenientes de todo el mundo viajan a conocer estas latitudes y se quedan maravillados de las características excepcionales de su vegetació n, coincidiendo que es una de las zonas botá nicas má s ricas del planeta. Si en el territorio americano se cuenta con má s de 300 gé neros, se estima que en el Ecuador existen 206, es decir, proporcionalmente, 2/3 de lo que existe en el continente (Dodson, 1996). La zona selvá tica del oriente guarda, en sus bosques, grandes cantidades de especies y varie- dades increíbles de orquídeas, siendo una de las zonas má s ricas del país. Las orquídeas constitu- yen la familia má s importante y numerosa del territorio ecuatoriano. Estas plantas viven desde el nivel del mar hasta los 4 000 msnm. Su modo de vida es muy variado. Las epífitas en su mayor parte, son libres tanto en tierra suelta como en rocas; de igual manera su tamañ o y su morfolo- gía varían: unas son microscó picas (desde un dé cimo de pulgada el tamañ o de sus flores), en cambio otras llegan hasta 40 cm su diá metro flo- ral. Entre las 3 000 especies de orquídeas que se estiman existentes en el Ecuador, hay una muy particular de fruto comestible y aromá tico que es la Vainilla (Patzelt, 1985). La regió n interandina y sierra ecuatoriana, caracterizada por su deforestació n desde hace muchos añ os debido al mal uso del suelo, ha dado lugar para que se presenten grandes á reas erosionadas desde el río Chota al norte, hasta la provincia de Loja al Sur. En esta regió n existen varias hoyas separadas por nudos; en ellas existen valles má s profundos y abrigados, debido a la menor altitud, pero que son secos y xerofíticos (Patzelt, 1985). La regió n costera, en sus zonas de bosques, guarda muchísimas variedades de orquídeas. A pesar de la erosió n causada por el hombre, ha dado lugar a que se hayan perdido los bosques frondosos que antiguamente hubo, ante la arremetida del habitante del agro por tratar de incorporar má s suelo que le sirva para sus cultivos de sustentació n (Encalada, 1978). La regió n sur, con una capacidad extraordinaria por albergar a gé neros y especies de orquídeas, en una extensió n aproximada a los 30 000 km2, con má s del 60 % de gé neros del total exis-

tente en el país, incluye la zona oriental que guarda en su suelo las orquídeas má s excitantes y otras que todavía está n por descubrirse. Favorece, a esta preservació n, la extensió n de su territorio, la falta de vías de comunicació n a muchos sitios de esta provincia y su difícil penetració n. En el numeral siguiente se detallan los gé neros y especies má s sobresalientes de la regió n sur-oriental, que es parte de este estudio. Con esto no se quiere decir que se ha codificado las especies vivientes de la regió n. Se trata de incentivar a la gente para que llegue a apreciar y amar a esta familia botá nica y, en sí, a los vegetales; que se logre hacer un buen manejo de los recursos naturales que amenazan con extinguirse. Habrá muchísimas variedades que falten, otras que involuntariamente se quedará n sin ser nombradas porque aú n no han sido descubiertas, no se tiene suficiente tiempo, el vasto territorio existente, el orden y el trabajo difícil para estudiar la colecció n natural de las orquídeas de la regió n. Por esto queda campo abierto para seguir investigando: usted, yo o cualquier persona que sienta este vivo interé s.

3.5. Gé neros comunes de Orquídeas en los Cantones de la regió n Sur De las investigaciones realizadas, se ha determinado que los gé neros má s comunes en los diferentes cantones de las provincias en estudio son:

Provincia de Loja CANTÓ N LOJA: Odontoglossum, Oncidium, Barbosella, Masdevallia, Telipogon, Epidendrum, Lycaste (zonas altas y frías del cantó n). Cattleya, Oncidium, Epidendrum (zonas bajas, valles sub-tropicales). Pleurothallis, Stelis y Porroglossum. CANTÓ N SARAGURO: Oncidium (má s de 9 especies), Kefersteinia, Odontoglossum, Masdevallia, Restrepia, Epidendrum, Pleurothallis, Stelis y Fernandezia. CANTÓ N CATAMAYO: Es una zona á rida y en partes erosionada (zona alta). Las zonas má s bajas del valle está n total-

52

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 53

Fig. 9. Cabeceras cantonales de la Regió n Sur Oriental.

mente integradas a la agricultura. En orquídeas, hay muy pocas especies, má s bien hay una variedad abundante de Xeró fitas y Cactus. Especialmente en los sitios pertenecientes al cantó n como: Zambi, El Porvenir, Guayquichuma, existen pocos gé neros: Helsia, Lycaste, Xllobium, Oncidium, Catasetum.

CANTÓ N MACARÁ : Trichocentrum, Brassia, Oncidium, Cattleya, Encyclia. CANTÓ N SOZORANGA: Lycaste, Helcia, Oncidium, Masdevallia. CANTÓ N CELICA: Oncidium, Barbosella, Stanhopea, Encyclia, Maxillaria, Trichopillia, Odontoglossum, Masdevallias.

CANTÓ N PALTAS: Trichocentrum, Oncidium, Encyclia, Brassia, Trichopilia, Helcia, Lycaste, Epidendrum. CANTÓ N GONZANAMÁ : Eminentemente agropecuario. Lo poco que hay de bosques no guarda orquídeas significativas. Existe un bosque secundario con especies exó ticas de Eucaliptus sp. y Pinus sp. pero, en ciertos sitios se puede encontrar: Oncidium, Lycaste, Stellis, Pleurothallis, Odontoglossum.

CANTÓ N PUYANGO: Stanhopea, Oncidium, Trichocentrum, Maxillaria, Helcia, Cattleya, Lycaste, Catasetum, Brassia, Epidendrum. CANTÓ N CHAGUARPAMBA: Las condiciones de clima subtropical hace que sea uno de los má s ricos en orquídeas de la provincia de Loja, pese a la deforestació n y a la tala de los bosques. En el cantó n se observa: Gó ngora, Stanhopea, Cattleya, Encyclia, Trichocentrum, Catasetum, Lycaste, Epidendrum, Brassia, Xyllobium, Trichopillia, Oncidium.

CANTÓ N CALVAS: Cattleya, Oncidium, Catasetum, Encyclia. CANTÓ N ESPÍNDOLA: Cattleya, Encyclia, Catasetum, Oncidium, Epidendrum, Masdevallia (zona alta).

53

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 54

• Algo má s de 130 gé neros y má s de 1 100 especies en la regió n sur del Ecuador. • Una cá psula de orquídea puede tener hasta 3 000 000 de semillas (AOS, 1976). • La semilla de orquídeas no contiene nutrientes para germinar en la naturaleza. Depende de la intervenció n de hongos que proveen la nutrició n necesaria para que germine y crezca la plá ntula. • La mayoría de las orquídeas está n estructuradas de tal manera que dependen de insectos para polinizar sus flores y producir semillas. Los insectos polinizadores son abejas, moscas, avispas, mosquitos, mariposas; aves como el colibrí realizan la autofecundació n. • La primera orquídea que se cultivó en Europa data de 1731 y floreció en 1732. • El primer libro sobre cultivo de orquídeas fue publicado en Europa en 1843. Se lo distribuyó entre amigos y se titula Apuntes sobre el manejo de orquídeas. • Varios países latinoamericanos han adoptado a la orquídea como flor nacional: Guatemala: Lycaste virginalis; Costa Rica: Cattleya skinneri; Panamá : Peristeria elata; Minnesota, en los Estados Unidos: Cypripedium acaule. • Las flores de algunas orquídeas como Stelis storkis miden só lo 2 milímetros, mientras que la Phragmipedium wallisi mide como 30 centímetros de diá metro. • Las plantas de las orquídeas varían mucho en su tamañ o, como: Bulbophyllum minutissium mide menos de medio centímetro, mientras que la Grammatophyllum speciosum tiene pseudobulbos de má s de siete metros de largo. • La orquídea negra es imaginaria, é sta todavía no ha sido encontrada, es un mito, una fantasía. Existen algunos tipos de orquídeas miniaturas cuyas flores son de color marró n pú rpura, casi de color negro. Existe una orquídea de nombre científico Cologyne pandurata de flores grandes, con ciertas á reas negras, en la India. Las orquídeas rojas y azules no abundan pero existen en muchos gé neros (AOS, 1976). • El continente asiá tico alberga, en sus bosques y sus selvas, los gé neros y especies má s abundantes de la tierra.

CANTÓ N ZAPOTILLO: Trichocentrum, Catasetum, Epidendrum, Encyclia, Oncidium, Brassia.

Provincia de Zamora Chinchipe

Es una provincia cuyas características climatoló gicas difieren y contrastan mucho con la sierra y el sub-tró pico lojano. En la provincia de Loja, la limitante es la falta de humedad; en cambio, en Zamora una de las limitantes, paradó jicamente, es el drenaje y la excesiva humedad, con temperaturas que oscilan entre 17 y 30°C. Esto hace que sus bosques sean feraces y exuberantes. Sus formaciones ecoló gicas se enmarcan dentro del bosque muy hú medo Montano Alto y muy hú medo Montano Bajo hasta las zonas de pantano, cuyas altitudes varían desde los 700 hasta los 2 500 msnm en las regiones montañ osas de lluvia sempiterna. La vegetació n arbó rea, preferentemente, de maderas finas y de elevada estatura hace que la regió n tenga características especiales. Entre los gé neros de orquídeas má s representativos, sin especificar cantones, localidades, ni sitios, se tiene: Anguloa, Barbosella, Brassia, Comparettia, Catasetum, Galiotia, Mormodes, Masdevallia, Epidendrum, Trichocentrum, Lycaste, Maxillaria, Miltoniopsis, Telipogon, Oncidium, Odontoglossum, Rodriguezia, Phagmipedium, Scuticaria, Sobralia, Stanhopea, Zootrophion, Phragmipedium, Embrea, etc. (Fig. 9).

3.6. Realidades y Fantasías de las Orquídeas • Los griegos y los romanos ya conocieron estas plantas. • Los Incas las cultivaron en sus campos y en sus palacios. • Las orquídeas está n distribuidas en todo el globo terrestre desde las zonas á ridas hasta el extremo sur de Amé rica. • Existen sobre 800 gé neros en el mundo. • Se cree que hay entre 15 000 a 35 000 especies diferentes. • Existen má s de 100 000 híbridos. • Existen muy pocos híbridos naturales conocidos. • Cerca de 300 gé neros se da en Amé rica. • Má s de 206 gé neros en el Ecuador.

54

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 55

• La primera referencia que se tiene de las orquídeas, en la historia, la hace Confucio (551-479 a.C). • Theofrastes, filó sofo griego (350 – 283 a.C.) fue quien bautizó la familia Orquidá cea del latín “Orchis” y é ste del griego “OPXIS” que significa testículo, por su semejanza con los tubé rculos. • En 1551 aparece publicado el famoso manuscrito AZTECA, “El “Badiano”, en el cual se presenta la orquídea VAINI- LLA con descripció n y dibujos. • En 1753 el famoso botá nico sueco Linneus publicó su obra SPECIES PLANTARUM, en el cual describe ocho gé neros de orquídeas. • En 1818 el inglé s William Cattley recibe un material botá nico del Brasil, donde llegan unas plantas desconocidas para ellos cuyas flores hacen furor en Londres, las cuales son clasificadas por el botá nico inglé s Lindley como orquídeas (AOS, 1976). • En el Ecuador se han escrito textos sobre la flora, llenos de ilustraciones, con tinta, plumilla o carboncillo (colores blanco y negro) que no son fotogé nicas como los trabajos publicados por el Dr. Reinaldo Espinosa en su obra Estudios botá nicos en el Sur del Ecuador, 1949, o las publicaciones realizadas por el Dr. C.H. Dodson y A.H. Gentry, titulada FLORA OF THE PALENQUE SCIENCE CENTER LOS RIOS, ECUADOR 1978 y sobre FLORA DE JAUNECHE por Dodson, Gentry y Valverde, 1987, y sobre ORQUÍDEAS EN EL ECUADOR, 800 lá minas con texto en ICONES PLANTARUM TROPICARUM por C.H. Dodson y Piedad Má rmol de Dodson. Contribució n al conocimiento de la flora ecuatoriana de Ludwing Diels, traducció n hecha por el Dr. Reinaldo Espinosa, 1938. Y una ú ltima publicació n realizada por el Banco Central del Ecuador, a colores, sobre la flora ecuatoriana que al referirse a las orquídeas las nombra gené ricamente a no má s de 20 especies.1 Una obra, si se quiere, muy antigua es la del padre jesuita Sodiro que publicó en el añ o de 1870 Setulae ecuadoriensis, allí se dedican 10 pá ginas al cultivo y a la flora orquidearia. 1

• Existe muchos “faltantes” que corresponden a plantas que podríamos llamarlas “humildes” pero son poco fotogé nicas, microscó picas, sin mayor representatividad. • En la regió n sur del Ecuador no se ha realizado hasta la presente fecha una publicació n seria sobre las orquídeas de la zona, tampoco existe una clasificació n botá nica que muestre con exactitud el nú mero de gé neros existentes en el sur del Ecuador. En la revista N° 5, añ o 7-1986, editada por el Departamento de Botá nica del Museo Ecuatoriano de Ciencias Naturales, el Dr. Callaway Dodson, director honorario de dicha entidad, nos dice: “La situació n en el Ecuador es quizá s má s difícil que en cualquier otra á rea geográ fica. Actualmente, reconozco 227 gé neros de orquídeas que existen en el Ecuador, pero el nú mero total de especies conocidas no he resuelto todavía. Hasta ahora tengo compilada una lista de 2 623 especies que han sido encontradas en el país (eliminando nombres, sinó nimos). Sin duda se encontrará n má s de 3 000 especies en el Ecuador, esto hace que la flora orquidá cea ecuatoriana sea una de las má s ricas”. El Dr. Dodson presenta una lista de “Gé neros de orquídeas y nú mero de especies correspondientes conocidas del Ecuador”. Uno de los ú ltimos trabajos de reconocido prestigio mundial es el publicado por el Dr. Callaway Dodson, en cinco volú menes, cuyo título es el de ORQUÍDEAS NATIVAS DEL ECUADOR, a todo color, con 220 gé neros descritos en orden alfabé tico, algo má s de 3000 especies y la ilustració n de má s de 1000 fotografías. Obra de consulta tanto para principiantes como para expertos que ha concitado el interé s mundial, conociendo a la flora orquidearia ecuatoriana, que en esta obra se la estudia se la describe y se la descubre.

3.7. Personajes en la historia de la recolecció n de Orquídeas en el Ecuador y la provincia de Loja En 1790. Thadauss Haenke, recolectó orquídeas en la costa ecuatoriana y luego se adentró a Quito. Muestras que reposan en el museo Ná rodni de la ciudad de Praga.

Patzelt, Flora del Ecuador.

55

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 56

1801 – 1803. Alexander Von Humbolt y Aimé Bonpland visitaron la Audiencia de Quito, recolectaron y describieron unas 20 especies. 1801 – 1805. Francisco José de Caldas coleccionó plantas desde Tulcá n hasta Loja y cerca de la frontera con el Perú . 1804. Jú an Tafalla, Botá nico peruano, recogió especies de Quinina en Loja, despué s fue a Quito y a la frontera con Colombia, posteriormemnte llegó a Guayaquil y recolectó orquídeas para l 809. 1822 – l825. William Jameson, Mé dico ingles, vivió en Guayaquil, luego en Quito. Acumuló una considerable colecció n de orquídeas. 183l – 1832. 1841 – 1842. Teodore Hartweg recolectó orquídeas en la provincia de Loja y luego fueron enviadas a Inglaterra al Jardín Botá nico de Kew. 1854. Joseph Warscewicz, recorrió el sur del Ecuador y recolectó una muestra muy respetable de orquídeas. 1872 – 1890. Friedrich C. Lehmann, Có nsul alemá n en Popayá n, hizo varios viajes al Ecuador en donde recolectó e identificó una gran colecció n de orquídeas. 1870 – 1908. Luis Sodiro, Sacerdote que acumuló una gran colecció n de orquídeas que fueron llevadas al herbario de Berlín, colecció n que se perdió en los bombardeos. Los botá nicos ecuatorianos que estudiaron la flora del país a mediados del siglo XIX y XX recolectaron algunas orquídeas, tales como: Luis Cordero, Augusto Martinez, Marco Varea y Misael Acosta solis. En Loja el Dr. Reynaldo Espinosa. 1921. Rudolf Schlechter, quié n publicó una relació n de orquídeas en el Ecuador señ alando 93 gé neros y 746 especies. 1952. Gunnar Harling y Benkt Sparre, Botá nicos suecos, basados en colecciones antiguas, pusieron en marcha el proyecto Flora del Ecuador. 1968 – 1973. Luritz Holm – Nielsen del instituto botá nico de la Universidad de Aarhus de Dinamarca. 1976 – l977. Bern Lojtnat, del mismo instituto Dané s, publicó 4 trabajos sobre las orquídeas recolectadas. 1978. Leslie A Garay publicació n del primer volumen sobre orquídeas de especies terrestres: subfamilias Cypripedioideae, Orchidoideae, y Neottioideae. (Dodson, C y Escobar, R., 1996). En la provincia y particularmente en la ciudad de Loja podemos anotar los nombres de: Luis Figueroa, quié n descubrió algunas orquídeas, entre ellas del gé nero Masdevallia, y una de

las especies lleva su apellido (Figueroa). Recolectó y acumuló una gran colecció n orquidearia. Alfonso Paguay, Guardiá n de las instalaciones del Jardín Botá nico “Reynaldo Espinosa” de la Universidad Nacional de Loja por varios añ os, fue propietario de una extensa y bien dotada colecció n de orquídeas. Guillermo Herrera: Profesor de la Universidad Té cnica Particular de Loja, artista consagrado (pintor y escultor), orquideó logo y coleccionista de la flora lojana. Francisco Vivar C., Profesor de la Universidad Nacional de Loja por varios añ os y Director del Jardín Botá nico de la misma Universidad, estudioso de la flora lojana y en particular de las orquídeas.

3.8. Polinizació n y Propagació n de las Orquídeas Uno de los procesos má s interesantes en la vida y cultivo de las orquídeas es su polinizació n, que la llevan a cabo diversos tipos de insectos que visitan sus flores. Desde la é poca del famoso sabio Charles Darwin, hasta nuestros días, muchos investigadores se han interesado por la polinizació n de las orquídeas, por eso es muy importante que los taxó nomos reconozcan el valor de adaptació n de los caracteres morfoló gicos. La mayoría de las familias de plantas florecientes tienen menos de 100 especies. Las orquídeas tienen de veinte mil a treinta mil y constituye el 10 % de todas las plantas florecientes. ¿Qué tiene la familia de las orquídeas que ha llevado al desarrollo de tantas especies?, es la interrogante que se hace Callaway H. Dodson, en ese entonces Profesor de la Universidad de Miami, en la obra La sé ptima conferencia mundial de orquideología. Las flores de las orquídeas son instrumentos de precisió n para efectos de polinizació n, fá cilmente adaptables a la atracció n y utilizació n de tipos de polinizació n. Elevadas cantidades de polen se unen para formar “paquetes” polinios que son transportados por el polinizador y depositados en el estigma de otra flor mediante una sola visita. Esto permite la fertilizació n de inmensas cantidades de ó vulos y la producció n de semillas. Las semillas de orquídeas, que son diminutas o ultrafinas, se dejan llevar fá cilmente

56

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 57

Vanda hibrido

Paphiopedilum hibrido

Miltoniopsis hibrido

57

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 58

Cattleya hibrido

Cattleya hibrido

Phaleonopsis hibrido

58

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 59

Cattleya hibrido

Paphiopedilum hibrido

Tolumnia hibrido

59

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 60

Phaleanopsis hibrido por el viento para luego asegurar su perpetuidad. Estas tienen su propio tegumento alimentario para iniciar su primer crecimiento, empero son cuidadas por un hongo que se pone en contacto directo; sin esta ayuda la orquídea perecería. Analizando todo este procedimiento se valora la acció n de los insectos frente al hecho cierto de la polinizació n con el concepto de que SI UNA AVISPA PUEDE DISTINGUIR ENTRE LAS ESPECIES, ¿POR QUÉ NO PUEDE EL TAXÓ NOMO ACEPTAR EL CRITERIO DE LA AVISPA? (Dodson, 1978). Se ha dicho que elevadas cantidades de polen se unen para formar “paquetes” polinios para ser transportados por el polinizador y depositados en el estigma de otra flor en una sola visita. Darwin estimó en má s de 3 000 000 de semillas en una sola cá psula de Catasetum. La semilla de la orquídea es liviana, fá cilmente transportable por el viento. Esto no solo que ayuda a la dispersió n distante de la semilla sino que hace posible que las plantas se establezcan en habitá culos específicos, en lugares precisos y á rboles determinados. La falta de endospermo en la semilla evita ciertas barreras de esterilidad (Hartman 1972).

El ser epífitas en á reas tropicales les permite penetrar en nuevos ambientes; así como los á rboles compiten por un lugar bajo el sol, algunas especies de orquídeas no solamente son restringidas en el tipo de á rbol en el que viven sino en el mismo sitio del á rbol que ocupan. Por ejemplo, en la provincia oriental de Zamora Chinchipe, el á rbol del copal, Protium macrophillum, es el hospedero de un gé nero muy singular y hermoso de orquídea que es la Scuticaria saleciana. Esta epífita se sostiene y se aferra con sus raíces abrazando el tronco del á rbol, se ubica en su parte superior y, a diferencia de otras especies, ella crece en forma aé rea y sus hojas son unos largos bejucos que cuelgan sobre el tronco del á rbol, los tallos florales nacen exactamente en la parte superior de la planta emitiendo sus brotes contiguos a las raíces. El transporte masivo de semillas hace que en un mismo á rbol exista varias especies de orquídeas. Esa característica es má s acentuada en zonas cá lidas y hú medas. En la provincia de Loja, en el valle de Lucero perteneciente al cantó n Calvas, las Cattleyas, han encontrado su hospedero principal en el higueró n, Ficus obtusifolia, en donde esta especie hace verdaderas poblaciones de

60

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 61

matas y, cuando el invierno ha llegado, sus flores pintan delicadamente el paisaje. Otros gé neros de orquídeas crecen igual, sin problemas, en tierra como en las ramas de los á rboles o sus troncos. Ejemplo: Oncidium, Odonttoglosum, Anguloa, Bifrenaria, etc.

do, en parte, detener la eliminació n de muchas variedades y especies tanto orquidearias como forestales. Sin embargo, el programa de reforestació n que se lleva a cabo en la provincia y en el país, relativamente, es insignificante frente al deterioro constante del bosque. Pues, es mayor la explotació n irracional de las grandes compañ ías que tratando de utilizar la madera, el caucho, la palma africana, el petró leo y el oro, comprometen seriamente miles de hectá reas de nuestras riquezas naturales. Brennam señ ala, con mucha propiedad, que “los á rboles son parte de la lluvia”. Los desiertos diremos son el castigo que nos infligen los á rboles que matamos. Un desierto, dice Brennam, no es necesariamente un arenal esté ril y sin vida; hay muchos tipos de zonas á ridas y no son necesariamente el factor geográ fico determinante. Es verdad que muchos desiertos han surgido debido a la falta de precipitaciones atmosfé ricas y a otros factores climá ticos, pero hay otros que son consecuencia del maltrato que el hombre viene dispensando desde hace mucho tiempo a su medio ambiente (Vivar, 1980).

3.9. Destrucció n de los recursos naturales y la incidencia en el há bitat de las Orquídeas Los Bosques Desaparecen

Los bosques constituyen los pulmones del medio ambiente, son el equilibrio ecoló gico en todas las latitudes de la tierra; por lo tanto, contribuyen al control de la luminosidad, temperatura ambiental y humedad atmosfé rica. En las regiones tropicales aceleran la formació n del suelo, evitan la erosió n, regulan el caudal de los ríos y acumulan los nutrientes necesarios para los cultivos agrícolas. Al desaparecer el bosque, el ecosistema sufre drá sticas alteraciones que influyen directamente en el crecimiento y desarrollo de otras especies. En nuestro país, la depredació n má s absurda ocurre en el bosque primario, en la selva virgen y el pantano, que son los medios naturales para el crecimiento y desarrollo de estas raras especies, las orquídeas. El Ecuador cada vez dispone de menos á reas boscosas por la acció n de varios factores destructivos: la tala indiscriminada, contaminació n y quema de los bosques. Este problema se agrava aú n má s, debido al crecimiento poblacional, a la colonizació n y a la intensa actividad de la industria maderera. Los deslaves que frecuentemente se producen en é pocas de lluvia, tambié n contribuyen a la destrucció n y erosió n de muchas extensiones de terreno boscoso. En la provincia de Loja el fenó meno de la sequía, el uso inadecuado del suelo, el pastoreo intensivo de cabras, ganado, se suman a los factores destructivos antes indicados (Encalada, 1983). En la regió n occidental fronteriza de la pro- vincia de Loja, la industria maderera constante- mente ha venido arrastrando á reas boscosas de inmejorables especies de maderas finas, a tal punto que muchas de ellas se encuentran en proceso de extinció n. Frente a este proceso destructivo, el Ministerio de Agricultura y Ganadería ha podi-

Crecimiento Poblacional y Colonizació n

El crecimiento poblacional es un elemento que directa o indirectamente constituye el desgaste de los recursos naturales dada la necesidad de conseguir mayor cantidad de alimentos por medio del incremento de los terrenos a labores de cultivo. Otro de los factores es el avance de caminos, construcció n de carreteras y otras obras de infraestructura que han dado lugar para que el hombre invada nuevas á reas de terreno y siga devastando bosques y zonas vírgenes con lo que desaparecen las orquídeas. Su destrucció n compromete seriamente la pé rdida de los recursos naturales (Encalada 1988). Las normas de política colonizadora han fijado, en forma arbitraria, la extensió n de los predios, sin tomar en consideració n la topografía ni la capacidad de uso del suelo; esto, unido a la ansia desmesurada del colono por obtener ganancias a corto plazo, ha dado origen para que el hombre se vuelva un factor negativo y destructivo del suelo y de los recursos forestales del oriente ecuatoriano. Con esta agricultura migratoria ha agotado el suelo, ha destruido la selva y ha eliminado gran parte de las especies silvestres, entre ellas las orquídeas (Encalada, 1988).

61

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 62

Dichoso el labrador, que al arado vuelve a su casa con la blanca luna!”.

Lope de Vega

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 63

CAPÍTULO IV

Cultivo de las Orquídeas

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 64

Las Orquídeas: Su Vida

El organismo de esta familia extraordinaria y diferente de otros vegetales es capaz de vivir sobre un pedazo de madera o tabla muerta, mientras nosotros les proporcionemos la suficiente humedad (Hartman, 1977). El proceso de có mo y en qué forma se alimentan las orquídeas se llama GUTACIÓ N, del latín “gutta” o gota.

La batalla por la supervivencia que los vegetales deben librar en la selva y en el monte, es una lucha que está prá cticamente organizada en pisos donde primero se encuentran los musgos, helechos y otras plantas que requieren de la sombra y frescura de los á rboles que los rodean; despué s se ubican los arbustos y lianas, luchando por los rayos solares, apretá ndose a los troncos y en lo má s alto; por ú ltimo, se hallan las orquídeas. Naturalmente que algunas especies se encuentran habitando en los espacios intermedios de los pisos, pero al requerimiento de condiciones de luz, ventilació n, humedad, etc., hacen que ellas busquen el há bitat má s adecuado. No se sugiere mover las plantas de un lugar a otro, se ha comprobado que estos movimientos producen desequilibrios fisioló gicos propios de la delicadeza de las mismas (Hartman, 1961). Los ó rganos superiores de estas plantas poseen ciertas características, entre otras: En algunos gé neros, se han desarrollado largos pseudobulbos similares a cañ as donde guardan el agua para el verano.

4.1. La vida de las Orquídeas y las formas de cultivo Las orquídeas son vegetales que requieren cuidados propios. En el planeta habitan miles de especies y para cada una de ellas habrá que aplicar mé todos diferentes y especiales, dadas las condiciones climá ticas en que viven. Por eso, como regla general, se recomienda no cultivarlas todas ni de muchos gé neros ya que se hace difícil adecuarlas a los sitios donde vive el aficionado. En el invernadero las plantas será n identificadas por los cuidados que necesitan cada una de ellas, trabajo que se lo debe realizar, por ejemplo, con etiquetas de colores donde se anotará n: lugar, fecha, altitud y sitio de donde proviene cada ejemplar. Y llevar un libro o registro que es de inapreciable valor para el cultivador serio. Las reglas principales para el cultivo de las orquídeas se refieren a la luz, temperatura, humedad requerida, ventilació n o aireació n, materiales y equipos, vitaminas, forma de propagació n, construcció n del invernadero, plagas y enfermedades que afectan a las orquídeas (Hartman, 1972).

• Algunas plantas han evolucionado sus tallos para convertirlos en reservorio de agua y de sustancias alimenticias. • En las hojas es donde se elaboran los alimentos de los vegetales, utilizando la luz solar, por lo tanto un buen follaje es bá sico para la vida de la planta. • La flor es el ó rgano de mayor especializació n, aquí se facilita a la fecundació n; los Catasetum disparan el polen, las Coryathes acumulan una bolsa de miel en su interior para atraer a los insectos polinizadores, los Trichoceros tienen sus flores un asombroso parecido a las moscas para atraer a los insectos polinizadores (Sociedad Colombiana de Orquideología, Medellín); las raíces tienen un fino velamen que le dan el aspecto de lombrices, ó rgano que le sirve para asirse a los á rboles, a las piedras o a cualquier madero.

Luz

Las orquídeas requieren la cantidad de luz má s amplia que se les pueda dar, pero tratando de no lesionarla, esta cantidad varía de acuerdo a sus há bitos de crecimiento; algunas prosperan en luz intensa, lo que no podrían tolerar otras de estructura simpodial. La cantidad de luz se logra determinar por lo siguiente: cuando hay demasiada luz se destruye la clorofila (pigmento verde) que se manifiesta por la coloració n amarilla; que poco a poco se va marchitando la hoja y muere, con poca luz las plantas adquieren un color verde obscuro que impide su desarrollo y se hacen má s propensas a enfermedades fungosas. Se reduce la floració n, la cantidad de luz adecuada se manifiesta en la coloració n verde clara

Las raíces de las orquídeas se presentan en la corteza del á rbol con la misma proximidad que en las ramas de los mismos. Su color verde limó n es signo de buena salud, las raíces de color negro parduzco u obscuro revelan una deficien- cia de oxígeno y nitratos.

64

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 65

de las hojas de superficie brillosa y en que las plantas florecen normalmente (AOS, 1976).

Para suministrarles agua natural de lluvia, se recomienda un pequeñ o y sencillo artificio: colocar un barril o tanque en el boquete principal donde desemboca el agua que se recoge por los canales de lató n de la casa. Estos recipientes deberá n ser coloreados con pintura anticorrosiva, y, luego adecuar el recipiente en la parte alta de la casa para regar las plantas. El proceso de alimentació n de las orquídeas ocurre durante el día, por la noche la planta descansa; el aire y la brisa contribuyen a este descanso. Por regla general, se debe aumentar la humedad al aumentar la luz y la temperatura y viceversa; restar la luz y la temperatura cuando disminuye la humedad (Hartman, 1971).

Temperatura

Crecen en variados climas de distintas regiones del planeta. Soportan temperaturas mínimas y extremas, que varían de acuerdo al há bitat de cada especie; regularmente se ubican dentro de tres categorías: 1) temperaturas frías; 2) temperaturas templadas; c) temperaturas cá lidas, dependiendo de la regió n donde crecen y el microclima donde se ubican. 1. Orquídeas de temperaturas frías: son aquellas que se desarrollan en sitios de temperaturas que oscilan entre 12-17°C durante el día y de 8-12°C por la noche. 2. Orquídeas de temperaturas medias: son aquellas que pertenecen a lugares de temperaturas que van de 15-19°C durante el día y de 8-12°C durante la noche. 3. Orquídeas de temperaturas cá lidas: son aquellas que viven en sitios de temperaturas que van de 20-26°C durante el día y de 15-19°C por la noche. Existen orquídeas que en temperaturas de 2-9°C no sufren ni se lastiman. Existe una constante que por cada 187 m de altura, la temperatura media disminuye un grado centígrado (Ortiz, 1982).

Ventilació n

Las orquídeas requieren una renovació n constante de aire a su alrededor. En la naturaleza una brisa continua las rodea, contrarrestando el calor intenso del sol que en ciertas horas del día lo hay. Este movimiento de aire elimina las enfermedades fungosas y el bió xido de carbono (CO2) utilizado por las plantas en su proceso de la fotosíntesis. El invernadero no debe ser un lugar cerrado. Siempre necesita un movimiento constante de aire para el desarrollo de las plantas a travé s de suficientes ventanas y ventoleras que permitan la entrada y salida del aire. Tanto en invierno como en verano las ventanas tienen que abrirse para que haya una constante renovació n del aire. En verano para que las plantas no se sofoquen y en invierno para que despué s de un aguacero reciban un aire fresco y vigoroso.

Humedad Requerida

La calidad del agua es importante. Hay quienes mantienen que las orquídeas reciben el agua lluvia sin esfuerzo; otros opinan que el agua para riego debe ser tratada llevando sales propias, porque en convivencia con otras plantas y al contacto que tienen con la corteza y el follaje de los á rboles, cuando son epífitas, tienen suficiente alimento. Las orquídeas requieren de humedad. Para quien empieza a cultivar estas plantas, la administració n de agua es el aspecto má s importante. Necesitan humedad pero administrá ndoles adecuadamente. Las orquídeas en su ambiente natural son refrescadas por la lluvia y las seca la brisa. En cualquier lugar que se encuentran estas plantas; ya sea en el campo, el invernadero, o macetas, el exceso de agua produce defecciones mortales que podrían manifestarse con la pudrició n de las raíces, enfermedades fungosas en los tallos, las hojas o las raíces y marchitamiento precoz de la planta y de las flores.

Materiales y Equipos

En razó n de la rapidez con que crecen las orquídeas, se debe utilizar ciertos materiales como: soportes de hierro o de madera y sostenes para que les llegue el agua y los nutrientes necesarios para evitar el dañ o de las raíces. Al sembrar la planta en una maceta o trasto se deberá proveer de un medio de siembra para asegurar la ventilació n de las raíces y que facilite un buen drenaje que evitará la pudrició n de la raíz. Con la experiencia de cultivadores de orquídeas que por largos añ os han venido trabajando, se acepta la recomienda de los siguientes materiales de siembra:

65

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 66

sus tallos florales aé reos, o sea cuelgan frondosos y floridos como: Sthanopeas, Gó ngoras, Peristerias, Drá culas, etc. No es conveniente apretar las plantas porque detienen su desarrollo. Es necesario dejar suficiente espacio para que crezcan los bulbos por varios añ os; ademá s el constante cambio de envase reduce la salud de la planta. Los cuchillos de corte deben estar limpios y desinfectados (AOS, 1977).

Macetas de barro y de plá stico Con perforaciones de por lo menos 2 centímetros de radio hacia los lados y en la base de la misma.

Material requerido

Una capa inferior de material poroso que sirva de drenaje en unos 5 centímetros de altura que puede ser piedra pó mez. La siguiente capa de carbó n de piedra será entre 2 y 3 centímetros. Una tercera capa de helecho arbó reo picado (llashin) que actú a como sosté n de la planta en unos 2 ó 3 centímetros, todos estos materiales mezclados. Para asegurar la planta, y que guarde humedad, rodearla de musgo blanco o SPHAGNUM. Por ú ltimo, se utiliza una capa con pedazos de corteza de pino seco en un espesor de 2 centímetros. Esta recomienda es utilizada, de manera especial para orquídeas de tipo aé reo como: Cattleya, Maxillaria, Trichocentrum, Oncidium, Encyclia. En particular, el medio de cultivo y de siembra depende de las necesidades de la planta. Se sabe que la aplicació n constante de abonos artificiales debilita a las plantas. Un buen medio de cultivo es la corteza de pino que esté bien seca. Otro medio adecuado es el material de á rboles de savia dulce como el ceibo Ceiba trichistandra. Las raíces de los helechos son muy ú tiles. En los bosques fríos de nuestra cordillera andina vive un helecho arbó reo (LLASHIN es el nombre indígena) que al tomar el tallo y labrarlo resulta una maceta viva muy vistosa, los pedazos o trozos del “llashin” sirven de soporte y a su vez de material vegetativo para las orquídeas. Para orquídeas de crecimiento terrestre se recomienda el HUMUS mezclado con trozos de carbó n y helecho arbó reo. Es necesario canastillas para las plantas con la finalidad de que les proporcionen sosté n, aire- ació n, ventilació n y drenaje. Las macetas de plá stico y de barro cocido con perforaciones contribuyen al mejor mantenimiento y cultivo; ademá s sirven para que las plantas emitan sus tallos florales y que les dé suficiente drenaje. Es aconsejable, siempre, que a las plantas recié n llegadas se les dé un bañ o con soluciones de compuestos fó sforo-clorados en una proporció n de una cucharada sopera por bomba de 15 litros o algú n otro insecticida que sirve para matar ciertos bichos que vienen desde la selva. Los recipientes deben estar en íntima relació n con la capacidad de la planta. Existen ciertos gé neros que emiten

Conservar y Coleccionar

Junto a la afició n que se tiene por esta hermosa y extensa familia vegetal, se encuentra implícita la responsabilidad para la protecció n de sus variedades tanto las de clima tropical, subtropical y andino. Pues, “segú n crecen las ciudades y las naciones, retrocede las fronteras de la naturaleza”. Con el impetuoso avance de la “civilizació n” se pierden muchas especies de orquídeas (AOS, 1976). La experiencia de coleccionar y cuidar, cuando se realiza con responsabilidad, ha ayudado a muchas personas a estar conscientes del problema de la conservació n. Esto ha determinado algunas reglas de interé s que es necesario tenerlas presente: 1. Es de poco valor coleccionar al azar. 2. Las á reas donde existen especies raras de orquídeas; estú dielas, gó celas y dé jelas que se propaguen naturalmente. 3. Cuando un á rea va ser talada, recolecte las orquídeas, conserve y propá guelas en su casa. 4. Si las orquídeas que usted quiere coleccionar pertenecen a un á rea donde el clima, la temperatura y la humedad son diferentes a las de ese lugar, es preferible dejarlas donde está n, a menos que su invernadero les proporcione esas condiciones (AOS, 1976).

Fertilizació n

La gente especializada en el cultivo de orquídeas recomienda que las plantas recié n sacadas de la selva no necesitan ningú n tipo de abono mientras el follaje esté sano y se utilice agua lluvia. La planta absorbe todo lo que recibe pero en pequeñ as cantidades. La altitud es un factor importante en el cultivo. Es má s fá cil adaptar las plantas de tró pico a subtró pico que las plantas de subtró pico a los valles cá lidos. Cuando una planta carece de algú n nutrimento, su cambio se refleja inmediatamente: se 66

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 67

Fig. 10. Medio de cultivo para orquídeas

deterioran las raíces tomando una coloració n negruzca por la falta de nitró geno o cuando la planta ha recibido demasiada humedad, las raíces asoman con una textura muy blanda. En cualquiera de estos casos se aconseja cambiar el envase y el material. No es recomendable utilizar abono orgá nico fresco, por los á cidos que secretan. En clima fresco es conveniente aplicar cualquier tipo de abono. Demasiado nitró geno produce en la planta textura blanda y flores malas. En cambio, demasiado calcio y fó sforo resultan flores peque- ñ as y abundante follaje (AOS, 1976). Una formulació n de 7-15-15, baja en nitró geno mejora la fertilizació n, en cambio fó rmulas de 30-30-10 sirven para el desarrollo de la planta y, por ú ltimo, la dosificació n de 10-30-30 o ú rea al 25 % da como resultado una gran floració n, que es lo que se busca (Dodson, 1996).

• • •



25-15-12 combinaciones con MACROELEMENTOS (PRONTOPLUS). Para floració n, fó rmula rica en P, NUTRIGOL, 12-48-15. O para flores de corte como CIMBIDIUM-CATTLEYA, 11-16-44, MAXIFOL. Puede aplicarse bioestimulantes que tengan Á CIDO FÓ LICO O Á CIDO GUIBERELICO para el desarrollo de la planta. Las diferencias nutricionales se las puede mejorar con abono foliar.

Propagació n

Lograr dividir una planta es una operació n difícil. La divisió n se la puede realizar con una daga o un cuchillo filudo. Antes de dividirla es necesario darse cuenta de su estado de salud; para proceder a la divisió n, la planta debe estar en las mejores condiciones y cuando se vea que el tiesto o la maceta sea lo suficientemente gran-

• Para crecimiento y desarrollo se recomienda formulaciones ricas en N como

67

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 68

de. Se aconseja que los “hijuelos” o renuevos tengan una dimensió n entre 2 a 5 centímetros y que la planta tenga má s de 10 bulbos enteramente fuertes, só lo allí se debe estar seguros de estos pasos. La planta con una divisió n mal hecha tarda añ os en recuperarse. Cuando se toma a las orquídeas de la naturaleza, es importante sembrarlas tal como se las encontró y no dividirlas. Es mejor dejarlas con abundante floració n y follaje. El transplante es un paso importante para la planta y, má s aú n, el corte de raíces e hijuelos. De hacerlo mal, significa, por lo menos, un añ o de retraso para el desarrollo de la planta. Se hace necesario que la divisió n en una planta se la realice con extremo cuidado capaz de no herir las á reas ni los vasos capilares ni las “arterias vegetales”. Separando uno con otro, los instrumentos con que se efectú a esta operació n deben estar bien desinfectados. PODAS: perió dicamente se recomienda hacer podas para extirpar bulbos secos, raíces dañ adas, hojas marchitas, vainas maltratadas, etc. Si se deja, la floració n es tardía. La propagació n de las orquídeas tambié n se la hace por semillas. Una cá psula de orquídea puede contener hasta 3 000 000 de semillas y que de ellas apenas 50 germinan si encuentran las mejores condiciones para su desarrollo. Las orquídeas híbridas tienen una vivencia muy larga. Su primera floració n puede darse entre los 5 a 6 añ os ello explica por qué son caras, dependiendo con el cruce de una variedad precoz. Las cé lulas meristales son la base para la divisió n y reproducció n de estas plantas (AOS 1976).

má s allá de los 3,00 m a dos aguas (o al criterio personal del dueñ o). La mejor ubicació n de norte a sur. Al interior Columnas de hormigó n o madera labrada, paredes a un metro desde el suelo, de ladrillo, con buenos ventanales de vidrio, para invernaderos ubicados en las casas en el segundo o tercer piso, y si fuera construido en los patios resulta menos costoso, recomendá ndose tapados de plá stico doble en armazó n de hierro y envigado de madera. La cubierta Hoy se utiliza planchas de plá stico que dejan filtrar suficiente luz. Si la economía lo permite, vidrio, o de una vez planchas de policarbonato que es uno de los mejores materiales actuales para invernaderos. Recomendable usar plá stico doble y debajo de esta cubierta SARAN que es una malla que no permite el paso de la luz directa del sol. El piso Se puede usar lajas de piedra o grava (trozos pequeñ os de piedra) tanto por su ornamentació n como para su comodidad. En el resto del piso se puede colocar una capa de por lo menos 6 y 7 cm de alto de arena gruesa, o de grava fina (caminos) y debajo de las galerias una capa de humus y materia orgá nica (musgo, corteza de á rboles y helechos). Las ventanas Que se abran y se cierren con toda facilidad para que haya la suficiente aireació n. Tanque de agua Lo ideal es construir un tanque de agua para é pocas de escasez, que por diferentes razones pueda, sin dificultad, regar las plantas del invernadero. Este tanque podría estar ubicado en la parte má s alta de la cubierta con suficiente caída que, a la vez, haya podido almacenar agua que baje por los canales de desagü e. La manguera para el riego es otro instrumento necesario en la vida del invernadero.

El Invernadero de Casa

Cuando se construye la casa de habitació n, ¡qué decisió n má s difícil hacerlo con el invernadero!. Empero, la satisfacció n es enorme cuando crece la colecció n y empiezan a florecer en el sitio las primeras variedades. Esta satisfacció n se la encuentra con la labor cotidiana del esfuerzo, que las plantas crezcan y que nada les falte. Esto nos permite encontrar tranquilidad y que este ejemplo sirva para toda la gente que empiece o quiera cultivar estas flores. A continuació n se detalla el tipo de construcció n:

Disposició n El invernadero debe tener asientos alrededor, dejando un espacio abierto entre los dos lados para poder caminar y hacer las adecuaciones necesarias. Con estas especificaciones puede entrar en funcionamiento.

Tamañ o Una superficie de 4 x 6 m que da 24 m2, es suficiente para empezar; con una altura que no va

68

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 69

Fig. 11 Modelo de Invernadero

Recomendaciones al construir el invernadero En primer lugar, la disposició n de las plantas requiere espacio, aireació n y prodigarle mejores cuidados, ademá s de la preservació n de plagas y enfermedades, entre otros. La manera ordenada de colocar las macetas facilita el reconocimiento de los tipos de orquídeas que se coleccionan, sus gé neros, especies, variedades y la atenció n debida para todas y cada una. El debido uso del piso tambié n contribuye a aprovechar el espacio disponible en el invernadero. El sistema de banco y estantes donde van a colocar las plantas es muy importante. Los bancos siempre se deterioran. Algunos duran má s tiempo segú n el material de que esté n confeccionados, sean de madera o de hierro, debe- rá n ser pintados para evitar la corrosió n por contacto con la humedad. Dejar en el invernadero un camino ancho, es importante para poder desplazarse a cualquier lado dentro de é l, sea hacia los lados o por el medio. La parte baja del invernadero sirve para sembrar orquídeas de tierra, helechos y bromelias que ademá s de darles el há bitat requerido, el ordenamiento y la decoració n, son impresionantes.

Hacia la parte siguiente del piso, pero dejando luz suficiente para las plantas del estrato inferior, se acostumbra colocar macetas colgantes utilizando las vigas vistas del techo; a las macetas se las ata con alambre para dar la aireació n requerida a gé neros que vienen de regiones tropicales; la utilizació n de macetas de madera o troncos, que se colocan con un pequeñ o amarre (con alambre o soguilla), le da mayor naturalidad a la instalació n. Lo ideal sería, si es que se cuenta con recursos monetarios suficientes, una fuente de agua para que se produzca buena humedad y darle realce a la estructura; alrededor podrían sembrarse varios tipos de bromelias, helechos, como adecuado há bitat de las orquídeas. En las esquinas y en los rincones del invernadero es recomendable sembrar enredaderas que definen una arquitectura llamativa del paisaje (Hartman, 1972). Los errores siempre está n presentes, pero hay que evitarlos. No llene el invernadero con todo lo que se trae de la montañ a; hay que hacer una clasificació n previa. Este desorden provoca la muerte de numerosas especies que pueden ser muy valiosas porque resulta imposible administrarles cuidados necesarios a cada una de ellas.

69

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 70

El cultivo se ha generalizado, por la misma razó n se hace necesario la preservació n de los gé neros y especies en peligro de extinció n (Hartman, 1972). Dada la popularidad que ha adquirido y sigue adquiriendo el cultivo de las orquídeas, se recomienda un tipo de construcció n que abarate los costos (Fig. 11).

nado principiante o para el experto, pero los síntomas que presentan son indicios del problema. Las molestias son causadas generalmente por un ambiente malsano, presencia de hongos, virus y ataques de insectos. Las plantas, a veces, ya vienen infectadas desde que se las trae de la selva. Es necesario prevenir antes de que ellas vayan a ser las nuevas “hué spedes” de casa, fumigá ndolas o bañ á ndolas con una solució n de insecticida y fungicida juntos. Si se quiere gozar del cultivo y su floració n, siempre se debe estar en constante vigilancia:

Material necesario para los invernaderos en la siembra de plantas. • MEDIO DE SIEMBRA: fibra osmunda, corteza de pino (seco), raíz de helecho desmenuzada, carbó n de piedra o de leñ a. Piedra pó mez. • MACETAS: de barro o de plá stico, que dependen del tamañ o y tipo de orquídea. • ABONO: las proporciones ideales del fertilizante sería: 7-15-15, 30-30-10, 10-3030 (nitró geno-fó sforo y potasio). • INSUMOS AGRÍCOLAS: Insecticida, fungicida y fertilizantes, para eliminar insectos o enfermedades propias de las plantas y abono de suelo o foliar para robustecer los vegetales. • PALITO PARA SEMBRAR: puede ser de aluminio o de madera, que posteriormente servirá de sosté n a los tallos florales y colgantes. • HERRAMIENTAS PEQUEÑ AS DE LABRANZA: para remover la tierra, para sembrarlas y para adecuarlas correctamente en las macetas, como binadora y el rastrillo de mano. • LOS COLGANTES: soporte de alambre que cuelga a las macetas del techo del invernadero para proporcionarles má s luz y má s aireació n. • ETIQUETAS: Donde se anota gé nero, especie, variedad, sitio, fecha, lugar. Se utilizará cinta plá stica para amarrar la etiqueta. • CORDÓ N PARAFINADO O PLÁ STICO: Para amarrar las etiquetas o para colgar las macetas (AOS, 1976).

• Desinfecció n en base de Cobrethane para controlar musgos y líquenes. • HOJAS AMARILLENTAS: Las hojas viejas generalmente se vuelven amarillentas; pero hay riesgos: si ellas son jó venes, pueden tener las siguientes causas: 1. Exceso de luz. 2. Deficiencia de nitró geno. 3. Pé rdida de raíces por exceso de agua. 4. Seudobulbos deshidratados. 5. Falta de agua. 6. Baja humedad relativa. 7. Pé rdida de raíces. • HOJAS CON RALLAS PARDAS O NEGRAS: ataque de virus. • PÉ RDIDA DE RAÍCES: exceso de agua o ataque de algú n hongo o insecto. Para contrarrestar los hongos se recomienda sumergir las raíces en una solució n de fungicida (Benlate), cambiar el material vegetativo y la maceta. • ESCAMA ALGODONOSA: es producida por insectos; se manifiesta en el revé s de las brá cteas de los pedú nculos, forma una masa algodonosa. • Aplicació n de fungicida cuprico. • LAS COCHINILLAS: é stas devoran las raíces y son insectos que má s dañ o causan a las plantas. Ademá s está n extendidos porque se ubican al pie de los bulbos y en los botones florales. Se recomienda aplicar fungicida (Balear). • LAS BABOSAS: al oscurecer aparecen estos animales, son los má s comunes y generalizados que comen los brotes de los tallos florales y las raíces frescas y delicadas. • Como un cebo para eliminar babosas consiste en colocar cortezas de papa en los luga-

Plagas y Enfermedades de las Orquídeas Como cualquiera otra de las plantas que pueblan este planeta, las orquídeas tienen sus enemigos que, a veces, se vuelven mortales si no se los controla a tiempo. Los problemas son mú ltiples y las molestias son grandes, ya sea para el aficio-

70

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 71

res por donde pasean los bichos ya que é stas dejan una estela brillante; ahí se las encuentra y es fá cil atacarlas. Se aconseja tambié n poner una media cucharada de sal en polvo por donde se detecta que se arrastran. Aplicació n de piretrinos o carbamatos. El control bioló gico puede hacerse empleando lagartijas y ranas, ellas viven en cualquier rincó n del invernadero y en determinado momento van a la caza de los bichos. Excelente prá ctica para prevenir el ataque de é stos y otros insectos es la de fumigar el orquideario o el invernadero una vez al mes con piretrinos (Hartman, 1972).

Enfermedades

Mosaico y Botritis Enfermedades viró ticas evidenciadas por la aparició n de rayas o puntos verdes o amarillos en las hojas de los brotes nuevos. Los insectos se encargan de llevar las enfermedades de una parte a otra. Aplicar fungicida sisté mico (Proplant- Fostonic). Tizó n Las bacterias que producen esta enfermedad proliferan cuando en el medio de cultivo hay exceso de humedad. Las hojas, por el ataque de esta Invernadero de la Universidad Té cnica Particular de Loja.

enfermedad, ennegrecen y mueren. La mejor manera de prevenirlas es la de dar una buena circulació n de aire a las plantas y proporcionarles luz en abundancia. Para antracnosis combatir con mirage (fungicida de ú ltima generació n). Enfermedades producidas por hongos Son temibles enemigos de las orquídeas que aprovechan, para penetrar, las vías de acceso que les abren las picaduras de insectos. Se delatan por los puntos de color pardo que forman ondas concé ntricas, cuando el ambiente es muy hú medo y el medio de cultivo en que se crían las plantas es muy viejo. Se encuentran hongos tambié n en las raíces. Para combatirlos es necesario dosificar productos a base de cobre o dithiocarbamatos (Hartman, 1972). Resumiendo, el control de plagas y enfermedades empieza tratá ndolas desde que las plantas se las toma en la selva o el bosque y se las lleva a casa, una solució n de BENLATE o LANNATE en una proporció n de 20 cm3 en 20 litros de agua (1 centímetro cú bico por cada litro de agua) es lo indicado para contrarrestar hongos y bacterias. Cuando en el invernadero se tiene una INFESTACIÓ N, se puede duplicar la dosis: 2 centímetros cú bicos por cada litro de agua (Jaramillo, 1996).

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 72

“Apenas empecé a escribir, solté la pluma con gran júbilo, la impostura era la misma, pero yo he dicho que para mí las palabras eran la quinta esencia de las cosas,

Anguloa uniflora

nada me turbará más que ver cómo mis patas de moscas perdían poco a poco su brillo...”

Paú l Sartre

Drá cula sp.

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 73

Cyrtochilum macranthum

Telypó gon sp.

CAPÍTULO V

Cultura popular y las Orquídeas

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 74

5.1. Nombres populares de las Orquídeas en la regió n

mente, dentro de sus pé talos, que son circulares y cerrados, existe un parecido de los ó rganos sexuales de la flor a un niñ o en una canastilla. Orquídea habitante de las cordilleras orientales. Otros la llaman Cartucho porque el labio de la flor es tubular. Las “Orquídeas arañ as”, que son las flores del gé nero Brassia, llamadas tambié n “danzantes en movimiento”, es una flor de orquídea de la regió n cá lido-seca de la provincia de Loja y de la regió n cá lido-hú meda de Zamora Chinchipe. Se le da este nombre porque el polinizador es una avispa que viene en busca de arañ as como presa. Hay orquídeas que en ambas regiones del estudio llevan nombres comunes como el de “La malcriada”, que es un Catasetum para el caso de la provincia de Loja, cuya flor tiene un parecido extraordinario al ó rgano sexual femenino. Existe una especie del gé nero Cignoches de la regió n oriental cuya flor es de forma exacta al ó rgano sexual masculino. Otra especie es la “calavera”. Pertenece al gé nero Drá cula, es una orquídea de Zamora Chinchipe. Las flores “Los Zancudos”, son orquídeas pertenecientes a varias especies del gé nero Epidendrum. Las flores “Los pericos”, son orquídeas del gé nero Lycaste. La “Orquídea pensamiento”, del gé nero Miltoniopsis, es semejante a la flor del pensamiento. La flor “El panal de abejas”, es una orquídea del gé nero Peristeria cuyas flores forman un verdadero panal por su disposició n y su estructura y, es má s, su aroma es inconfundible y exquisito. Las flores los “zapatos”, las “zapatillas”, los “zuecos”, son orquídeas del gé nero Phragmipedium; unas llevan cordones largos, otras cortos, otras no lo llevan. “Los toritos” constituyen una flor similar a los cuernos de vacuno. Pertenecen al gé nero Stanhopea, de ahí su nombre; ademá s emanan un perfume embriagador. “La Bandada de palomas” es el nombre con el que se conoce a algunas especies de orquídeas del gé nero Gó ngora. “Estrella de 5 puntas”, es el nombre dado a las orquídeas del gé nero Huntleya. Con el nombre de “Abejas volando”, se conoce a las orquídeas del gé nero Encyclia que comprende algunas especies.

Algunas especies de orquídeas que habitan la regió n de estudio, como la llamada “Flor de Cristo” perteneciente al gé nero Epidendrum, se desarrollan espontá neamente sobre algunos tipos de á rboles y arbustos. Tambié n las hay de crecimiento terrestre. Su semilla se esparce alrededor, cayendo sobre las rocas y adhirié ndose a los peñ ascos, asegurando de una manera fá cil su adaptació n al há bitat propuesto. “En los parajes má s recó nditos de la geografía lojana germinan lo mismo las flores má s hermosas en ese “Jardín Botá nico del Ecuador”, que dijera Wolf, como los má s finos maderos y los frutos extrañ os de corazó n” (Carrió n, 1976). Estudiosos de estos vegetales ubican una especie del gé nero Epidendrum, en algunos cantones de la provincia, llamada la “Flor de Calavera”, nombre que se deriva por el asombroso parecido a la parte superior del cuerpo humano. Es una orquí- dea de color verde limó n, no tiene olor, es peque- ñ a y se la encuentra con preferencia en la cordillera de Ramos, ubicada en la provincia de Loja, límite con la provincia de El Oro. La “Mosca” o el “Mosquito”, Trichoceros antennifera, en nuestra provincia, ciudad y can- tó n de Loja, se le ha dado este nombre comú n a una orquídea cuya flor es parecida tanto en su color como en su anatomía a una mosca en vuelo. Su belleza es singular y su figura llamati- va la convierte en una flor característica de la regió n. Crece en lugares altos y fríos. Las “Morlaquitas”, Cyrtochilum macranthum. Su flor se asemeja a una campesina azuaya con su vestimenta típica compuesta de blusa y folló n de vivísimos colores. Esta especie crece a má s de 2 000 metros de altura, se la encuentra formando grandes manchones vegetales de manera singular en las zonas montañ osas de los cantones de Loja y Saraguro. Las orquídeas del gé nero Oncidium comú nmente denominadas muñ ecas y a otras “Las bailarinas”, como muchas especies diseminadas tanto en la provincia de Loja como la de Zamora Chinchipe, despiertan interé s y curiosidad para quienes está n cercanos a ellas. La gente les encuentra un sinnú mero de parecidos y similitudes por lo que las llama de diferente manera. Dentro de este inventario de nombres con- viene recordar los de “El niñ o de cuna”, nombre dado al gé nero Anguloa. Si se mira detenida-

74

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 75

Las Bailarinas “Las mariposas”, se llama a las flores del gé nero Telipogon, las mismas que puede ser amarillas con manchas café s, amarillas sin manchas, rosadas, celestes o moradas. En otras regiones se las llama mariposas a las orquídeas del gé nero Psychopsis. Los “monos” es el nombre con el que se conoce a varias especies del gé nero Drá cula.

lugar logró un invernadero que lo condujo al reconocimiento internacional por haber descubierto algunas especies que hoy llevan su nombre. Sin embargo, la que le dio fama es la Scuticaria Saleciana, especie bautizada universalmente en honor a la orden religiosa a la que pertenece su descubridor. • Colonos de la regió n sur oriente, relatan, entre sus ané cdotas por el correr de sus viajes, que los nativos que habitan en las orillas de los ríos Cuyes y Bomboiza, tienen la costumbre y la vieja tradició n de dejar como recuerdo a los difuntos un manojo de flores de orquídeas por la fragancia que despiden, por su belleza y por la figura singular que ellas tienen. Con esto dicen lograban que el cadá ver permanezca expuesto por varios días, y la gente homenajeá ndolo, ya que no se percibía la descomposició n del mismo, por ello a esta orquídea la llaman “la flor del muerto” (Gallardo, 1978). • Nuestros campesinos acostumbran a regalar un manojo de flores de orquídeas a los forasteros y a los viajantes que transitan

5.2. Las Orquídeas: Ané cdotas, Ritos y Costmbres Contemplar las orquídeas, cultivarlas, coleccionarlas, fotografiarlas, etc., son algunos de los pasatiempos o trabajo de mucha gente. Ello ha dado lugar para que, en este apartado, se pueda presentar las siguientes referencias culturales con exó ticas flores: • El padre Andretta, de la orden de los salecianos, que vivió por muchos añ os en el Oriente de la regió n sur, en la selva circundante del río Bomboiza, por los añ os de 1955 a 1975, es un religioso que laboró y llevó con mucha seriedad sus estudios y trabajos sobre orquídeas. En aquel

75

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 76

El niñ o de cuna

La Bandada de palomas

La malcriada

Los Pericos 76

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 77

Orquidea Pensamiento

Los Zapatos o Zapatilla de la Virgen

El panal de abejas

Abejas volando 77

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 78

Los toritos

Las Morlaquitas

La mariposa

Los Monos 78

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 79

Estrella de cinco puntas por sus tierras, sus campos y a quienes visitan sus hogares. • Otra de las costumbres y tradiciones practicadas y conocidas por los pueblos de la provincia, se refiere a los arreglos florales elaborados para adornar “los nacimientos”, en el mes de diciembre, para lo cual recogen plantas del bosque como: bromelias, líquenes, musgos y orquídeas. Sin embargo, es de anotar que este há bito en la actualidad está comercializado; y las especies perecen en manos de quienes las compran y quienes las llevan, porque no lo hacen con apego o afició n a la naturaleza sino por vanidad, generá ndose, así, una de las formas de exterminar la flora de la regió n. • Comunidades indígenas tanto de la sierra lojana como en la zona selvá tica de la Amazonía, conservan hasta hoy la particularidad de reconocer a las orquídeas por sus nombres primitivos, ello tiene un valor extraordinario porque al nombrarlas, en sus lenguas indígenas, y en el vocabulario original de sus regiones, las grafican hermosas y reales. • Quié n no se ha dejado hechizar por la belleza y el aroma alucinante que derraman

los amancay, Cattleya má xima, cuando florecen en octubre, en noviembre o en diciembre?. En nuestros pueblos, en nuestras ciudades, en nuestros campos, un manojo de amancay que ofrecen los habitantes de estas latitudes a sus amigos, a sus viajantes, a sus mujeres, es uno de los regalos má s emocionados y sentidos porque con estas flores se regala ternura, cariñ o y amistad. ¡Ah! y si es un manojo de amancay blanco, la emoció n crece y el afecto se multiplica. No hay precio para tanta dicha.

Carrleya maxima alba 79

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 80

“Cien décadas atrás estuvo en el Paraguay y vuelve hoy, no puede menos que sorprenderse, ya desde su entrada al país. Si lo hace por su capital, Asunción, encuentra que las románticas casas con aleros y jardines al frente fueron desplazadas por altos edificios, modernos centros comerciales y suntuosas residencias”.

Víctor E. Carugati

Cascada del Parque Nacional Podocarpus

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 81

Jardin Botá nico de la Universidad Nacional de Loja

Orquidiario Municipal de Loja “Romelia María”

CAPÍTULO VI

Parque Nacional, Jardín Botá nico y Orquidearios de la regió n sur oriental del Ecuador

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 82

Creemos en la gente que se integra con la lluvia, con la flora de sus bosques, con la brisa del mar, con el viento del pá ramo que a veces compite con el vuelo y el canto de los pá jaros; que recoge los colores de los cristales hú medos que forma el ARCO IRIS despué s del aguacero y se cobijan con el manto que borda la niebla de los cerros que visten á vidos de invierno. Los á rboles se nutren en ese ciclo maravilloso, hermanados con las orquídeas, compañ eras eternas de estos gigantes vegetales que hacen un ensueñ o del paisaje. ¡A ellas!, si, a ellas hay que cuidarlas y preservarlas. Así empezó la vida en este planeta y así tiene que seguir, porque la vida es todo, no dejemos que la vida muera y se extinga para siempre. No seamos egoístas con las futuras generaciones. Las que nos han antecedido no han sido tanto; quizá han fallado por falta de visió n y cultura de la que muchos fueron relegados. Por eso, en los jardines, en los invernaderos, en los parques naturales, sigamos cultivá ndolas y amá ndolas.

(siglo XVIII), la colonizació n de Zamora (dé cada de los cuarenta y cincuenta), la explotació n de los romerillos (Prumnopitys montana) de Numbala y Jimbilla (desde 1970) y el redescubrimiento y explotació n artesanal de las minas de oro de Nambija, Chinapintza, Guaysimi, La Pangui y San Luis (desde 1983), son los hitos má s importantes de este proceso. Corrían los tiempos de “El Dorado” durante la segunda mitad del siglo XVI y los territorios que hoy forman el Parque Nacional Podocarpus y su Zona de Amortiguamiento estaban cubiertos por bosques naturales. En el subsuelo de estos territorios se descubren ricos yacimientos de oro como en Nambija y Cangaza, entre otros, que fueron explotados por los españ oles con altos costos en vidas de los nativos Shuar y Bracamoros que habitaban los territorios adyacentes. Durante el siglo XVII, los yacimientos de oro de Nambija y Cangaza se habían olvidado, luego de las distancias el clima inhó spito y la sublevació n de los Shuar acabará n con las ciudades fundadas. Hoy só lo se especula sobre la ubicació n de las ciudades antiguas, cuyas ruinas está n descubrié ndose entre la espesura del bosque tropical en el valle del río Nangaritza (Ciudad Perdida). Para ese entonces se había iniciado otro gran proceso de extracció n, el de la Cinchona, fuente de la quina y á rbol localmente conocido como “cascarilla”, de la cual la má s famosa fue cosechada de las montañ as de Uritusinga en el Valle de Malacatos (Petitjean y Saint-Geours 1983). La corteza del á rbol de cascarilla, ú nica medicina conocida para combatir la malaria no podía faltar en la botica real de Españ a y de Europa en general. Mientras que entre 1600 y 1890, al este de los Andes, se sanaban las heridas ecoló gicas que dejo la explotació n españ ola de las minas de oro, al oeste, en Uritusinga y otras montañ as (Hoyas de Malacatos y Vilcabamba) se iniciaba un lento proceso de degradació n de los bosques y suelos como producto de las actividades agropecuarias. La explotació n de cascarilla fue de tal naturaleza que Ignacio Checa, corregidor de Loja, indica que: “Este específico (cascarilla) va cada día a menos especialmente en los cerros de Cajanuma y Uritusinga inmediatos a esta ciudad (Loja) de donde se abastece la real botica de su majestad y si no se pone alguna prohibició n o coto en este trá fico o se toma el arbitrio de obligar a los que la sacan de que críen nuevos á rboles, se extinguirá este precioso febrífugo”. Caldas, por su parte, da cuenta de

6.1. El Parque Nacional Podocarpus: Perspectivas de conservació n y desarrollo Walter Apolo B. El Parque Nacional Podocarpus y su zona de amortiguamiento es el espacio geográ fico en el que ha evolucionado una propuesta de conservació n y desarrollo regional, partiendo de una historia de explotació n colonial de minas de oro y otros recursos naturales renovables. La propuesta actual de conservació n y gestió n local participativa del Parque Nacional Podocarpus (PNP) y su Zona de Amortiguamiento (ZA), permiten visualizar la direcció n futura del manejo del mismo y del desarrollo econó mico y social de la gestió n, en la cual la conservació n del PNP como á rea necesaria para la producció n de bienes y servicios, constituye una propuesta importante en la construcció n social del concepto de desarrollo sustentable, que busca incorporar equilibradamente la conservació n de recursos como elemento indispensable para un mejoramiento equitativo de las condiciones de vida de la població n.

Una regió n de conquistas y leyendas

La explotació n del oro de Nambija y Cangaza (segunda mitad del siglo XVI), la extracció n de la cascarilla de Loja, Malacatos y sus montañ as

82

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 83

que: “Los dueñ os de haciendas hacen terribles perjuicios a los bosques de quina en los meses de agos- to y septiembre, ponen fuego a todas las faldas de las montañ as para renovar los pastos. Muchas veces se apodera este de los bosques inmediatos y reduce a cenizas una, dos y muchas má s leguas. En 1803 se encendió de ese modo un espacio que a juicio de un experimentado cascarillero podía haber dado muchos quintales de la má s bella y sazonada quina” (Petitjean y Saint-Geours 1983). El proceso de colonizació n se aceleró con la construcció n de carreteras, que siempre han dirigido la colonizació n en el Ecuador (Rudel 1983) y han permitido, adicionalmente, una actividad que no es posible sin ellas: la explotació n de las maderas valiosas. Este proceso se consolida en la dé cadas del 40 y 50 con la construcció n de la carretera Loja-Zamora. Los colonos pioneros se exiliaron en un territorio poco productivo para la agricultura, en el cual debieron enfrentarse a “la inhó spita selva a la que hay que dominar” para sobrevivir y trajeron a la nueva tierra una tradició n de exterminio de la vegetació n natural y una cultura poco conservadora de recursos que ya en el pasado había devastado su antiguo hogar. La regió n permaneció relativamente aislada de la actividad política y del desarrollo del resto del país hasta la dé cada de los noventa. El apoyo gubernamental se dio mediante algunos proyectos de Desarrollo Rural Integral, financiados con pré stamos internacionales (ZamoraNangaritza, Sur Occidente de Loja, SaraguroYacuambi, etc.). Só lo en la dé cada de los 90 la regió n es “descubierta” por la cooperació n internacional y se inician proyectos de apoyo para desarrollos de alguna magnitud como el Programa Podocarpus (Países Bajos), Desarrollo Forestal Comunitario (FAO), Proyecto Bosque Seco (Países Bajos), Servicio Holandé s para la Cooperació n (SNV), Manejo de la Cuenca Catamayo-Chira cooperació n españ ola), Programa Sur (cooperació n de Estados Unidos) y todo el apoyo canalizado a la regió n luego de la solució n del conflicto limítrofe y cierre de fronteras entre Ecuador y Perú .

los 70. En 1975 se formula la primera estrategia para la conservació n de Á reas Protegidas Sobresalientes del Ecuador (Putney 1978), como un componente de un proyecto internacional para promover el aprovechamiento de la madera de los bosques naturales de la Zona nor-occidental, en la provincia de Esmeraldas. El proceso inicial se consolida en 1979 con la emisió n de un decreto ejecutivo que delimita nueve á reas continentales como elementos de un sistema nacional mínimo de conservació n. Al mismo tiempo nacen varias organizaciones conservacionistas no gubernamentales y con ellas se inicia tambié n el aná lisis de la problemá tica ambiental en el país; así, en 1981 se publica un estudio denominado Problemas Ambientales en el Ecuador (Fundació n Natura 1981), el primer documento amplio de sistematizació n de conocimientos sobre el medio ambiente del país. En la regió n sur del Ecuador, la vegetació n y fauna de la zona de Loja y Zamora ha promovido el interé s y admiració n de investigadores nacionales e internacionales desde hace mucho tiempo. La visita de naturalistas como Humboldt (1802), Caldas (1801-1805), (Chapman 1926) y el trabajo de naturalistas ecuatorianos como Espinosa ([1948-1949] 1997), revelaron la especial diversidad y endemismo de la biología regional. Los indicios Y primeras evidencias de la existencia de una muy alta biodiversidad y endemismo de la Cordillera de Sabanilla, que resultó de la visita de famosos bió logos a la regió n, asociada a la necesidad de conservar recursos para el desarrollo regional y ampliar el sistema inicial de á reas protegidas del país, motiva que el 15 de diciembre de 1982 se cree legalmente el Parque Nacional Podocarpus (PNP), ubicado en la “garganta de los Andes”, el sector má s bajo de los Andes, donde las mayores alturas alcanzan los 3600 msnm y donde confluyen climas cá lidos y fríos, secos y hú medos, entrando en contacto culturas y ecosistemas amazó nicos y pacíficos Hasta el presente es la ú nica á rea del Sistema Nacional de Á reas Protegidas en el sur del Ecuador. Conforme el PNP se fue conociendo internacionalmente, se incrementó el interé s por protegerlo y generar investigaciones sobre sus recursos. En 1997, la Fundació n Alemana para la Investigació n decide instalar en San Francisco (Zona de Amortiguamiento del PNP) un proyecto de investigaciones. Al mismo tiempo, el gobierno de los Países Bajos inicia un pro-

El nacimiento y crecimiento del Parque Nacional Podocarpus

Aunque Galá pagos fue declarado Parque Nacional en 1959 (MAG 1977), la conservació n de á reas protegidas en el territorio continental só lo se intensifica en el Ecuador en la dé cada de

83

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 84

yecto de apoyo a la conservació n del Parque y desarrollo social de la població n asentada en su ZA que impulsa un proceso participativo de gestió n interinstitucional para su conservació n, cambiando el enfoque tradicional centrado en la protecció n hacia el interior de los límites, hacia un enfoque de manejo de y desde la ZA, en donde está n los actores sociales que realizan acciones de desarrollo que afectan o promueven el Parque.

la producció n agrícola bajo riego, la pesca y la navegació n, bases del desarrollo econó mico. En la vertiente del Pacífico del territorio ecuatoriano, se estima que má s del 90% del agua para la ciudad de Loja y para riego en los valles de Malacatos, Vilcabamba y Yangana, se genera en el á rea del PNP, en donde se originan gran cantidad de riachuelos que luego forman el río Catamayo (Yangana, Yambala, San Pedro, Yamburara, Campana, etc.). Má s adelante, en su recorrido hacia el Pacífico, el río Catamayo abastece de agua a innumerables pequeñ os sistemas de riego y, cerca de la frontera con el Perú , alimenta al sistema de riego de Zapotillo (10.000 ha), el cual está en construcció n y es de gran importancia para la economía de la regió n fronteriza. Ya en territorio peruano, el agua del río Catamayo es almacenada en la gran represa de Poechos, de la cual depende en gran medida la economía de la regió n de Sullana y Piura. Hacia la parte oriental, en la provincia de Zamora Chinchipe, el PNP/ZA protege las partes altas de1as cuencas de los ríos Zamora, Nangaritza y Chinchipe, todos ellos afluentes del Amazonas, en cuyas riveras se desarrolla una importante actividad econó mica que incluye la recreació n, navegació n y pesca. Cada vez se evidencia con mayor claridad la importancia internacional de la protecció n del agua en el PNP/ZA, puesto que el sector occidental del mismo forma parte de la cuenca binacional Catamayo-Chira que produce agua para la represa de Poechos en el norte peruano. Esta represa es la base del desarrollo agropecuario en la costa norte del Perú (Sullana-Piura) y depende en un 70 % del aporte del agua de la cuenca del río Catamayo y, particularmente, de la zona de amortiguamiento del PNP, en la cual existe una mayor precipitació n anual que permite un caudal base del río durante la é poca seca en la parte baja de la cuenca. Este interé s ha hecho que, a raíz de la firma del acuerdo de paz entre Ecuador y Perú , organizaciones peruanas iniciará n conversaciones con organizaciones ecuatorianas para establecer n manejo compartido de la cuenca (CECC 2000) y a futuro, los diferentes grupos de interé s deberá n negociar el uso equitativo y sostenible de este recurso. Entre otros interesados se pueden identificar en la actualidad a las organizaciones cuya agricultura depende de la represa de Poechos en el Perú , el sistema de riego de Zapotillo y las comunidades que usan pequeñ os sistemas de riego a lo largo de la cuenca, entre otros.

El aporte del Parque Nacional Podocarpus al desarrollo

La permanencia y buen manejo del parque han sido promovidos principalmente por los interesados en la conservació n de la biodiversidad y, de alguna manera, rechazados por los que producen bienes para el consumo local. Hay polé mica sobre los beneficios que el PNP produce puesto que no han sido cuantificados y no son evidentes sus aportes a la sociedad, sin embargo existe un acelerado proceso de interiorizació n de su valor y aporte a la regió n. Se habla entonces, en primer lugar, de una integració n entre el Parque y su Zona de Amortiguamiento y, luego, de un desarrollo sustentable de la microregió n má s amplia que el PNP/ZA, cuya consecuencia es la integració n de las actividades de conservació n de la biodiversidad y otros recursos y las actividades de desarrollo agrícola, pecuario, industrial y de minería, la colaboració n entre organizaciones de conservació n y de desarrollo y la solució n al viejo conflicto entre estos dos tradicionales rivales. Ejemplos concretos son la producció n de café bajo bosque, manteniendo en gran medida la biodiversidad y las funciones de regulació n hidroló gica comparables con las de los ecosistemas naturales, la producció n pecuaria en predios en donde los bosques y los pastizales se complementan para mantener la producció n y las funciones de regulació n hidroló gica, la producció n forestal de los bosques naturales de tal manera que permita mantener las funciones del bosque y su biodiversidad, etc.

El PNP una torre de agua para la regió n La regió n PNP/ZA constituye un reservorio que almacena y distribuye agua a la regió n sur del Ecuador y norte del Perú , tanto hacia la cuenca del Amazonas como a la del Pacífico. Es por lo tanto un á rea estraté gica para la producció n de agua de buena calidad para satisfacer las demandas de las actividades humanas en las ciudades, 84

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 85

Cuadro 6. Potencial actual de producció n de bienes y servicios del Parque Nacional Podocarpus (PNP) y su zona de amortiguamiento Bienes y servicios que ofrece el PNP Sector del Parque San Francisco

Provisió n de agua para diferentes usos Planta Elé ctrica San Ramó n Planta Elé ctrica FENOSA.

Turismo/ Recreació n Turismo científico en Estació n Científica San Francisco y Quebrada de San Francisco.

Investigació n Estació n Científica San Francisco.

Investigació n sobre aves.

Bombuscaro

Posible fuente de agua potable para Zamora.

Recreació n acuá tica Observació n de aves.

Romerillos

Protecció n de vertientes altas del río Jamboé .

Acceso a la cuenca del Chumbiritaza.

Quebrada Honda Numbala

Protecció n de cuenca Observació n de aves y Ecosistema afluente del Numbala. romerillales y romerillal e excursionismo. investigació n de aves (Jocotoco).

Cerro Toledo

Conservació n de agua Observació n del pá para uso huma- no y ramo y bosques riego en Yangana. nublados. Protecció n cuenca alta Catamayo Chira.

Lagunas del Compadre

Observació n de paisajes de origen glaciar y ecosistemas de pá ramo. Trekking.

Cajanuma

Producció n de agua para riego en sector occidental.

Río Yamburara

Agua para riego y consumo humano en Vilcabamba y sectores aledañ os.

Río Campana

Agua de riego y uso humano para el valle de Malacatos.

Educació n ambiental Centro de Educació n ambiental San Francisco Centro de educació n ambiental para la salud de Zamora.

Investigaciones sobre mamíferos (osos, dantas, venados) y pá ramos.

Caminatas y observa- Investigació n Centro de torios. Visita al pá ra- sobre aves, bos- educació n mo y bosque andino. ques nublados. ambiental para Loja. Turismo de naturaleza. Acceso al PNP desde Vilcabamba. Acceso al bosque nublado y a las Lagunas del Compadre.

85

Investigació n sobre aves y costo/beneficio conservació n del agua.

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 86

Fig. 12. Una propuesta mínima de Á reas Protegidas para un futuro sistema bioregional de conservació n y desarrollo.

El interé s por el turismo

tas nacionales e internacionales, formando así un importante ingrediente para alentar el desarrollo de proyectos turísticos que dinamicen la economía regional en el futuro.

Basá ndose en las tasas de crecimiento actuales del turismo, se prevé que esta actividad se incrementará en el futuro en la regió n sur y particularmente en la microregió n PNP/ZA. Esto será factible solamente si la infraestructura se ha mejorado substancialmente, si se descubren nuevos recursos turísticos, como los vestigios arqueoló gicos, en una regió n inexplorada en este sentido y se valora la presencia de grupos humanos con tradiciones y costumbres tambié n diferentes a los del norte (Chazo Lojano, Saraguro, Shuar) así como tambié n la oportunidad de conocer Vilcabamba, conocido como la “isla de la longevidad”. Los paisajes diferentes a los del norte y nororiente, como las mesetas de areniscas o tapuyes y su particular vegetació n en la cuenca del río Nangaritza, la existencia de sitios especiales para observar aves tropicales, incluyendo especies como los guá charos (Steatornis caripensis) y el pá jaro paraguas (Cephalopterus ornatus), así como reptiles y plantas, muchas endé micas del sur del Ecuador, y los paisajes muy quebrados de la regió n sur del Ecuador (“geografía de papel arrugado”), pueden convertirse en un gran atractivo que el PNP y su ZA pueden brindar a los turis-

Los problemas a resolver en el futuro

Partiendo de los problemas actuales de uso y manejo de recursos y las tendencias del desarrollo, es posible suponer que los problemas principales que deberá enfrentar en el futuro la conservació n del PNP/ZA será n, entre otros, las dificultades para una coordinació n interinstitucional efectiva, los impactos negativos de la minería y los impactos negativos de la producció n agropecuaria y forestal que la hacen no sustentable, ademá s de otros problemas administrativos de monitoreo y control de del turismo. El Parque Nacional Podocarpus, ocupa una pequeñ a extensió n de la Regió n Interandina en la provincia de Loja; y, en un mayor porcentaje, los territorios asentados en las irregularidades montañ osas de la regió n Oriental de la Provincia de Zamora Chinchipe. El nombre dado a este Parque Nacional de “Podocarpus” es en honor al á rbol de Romerillo (Prumnopitys montana), que anteriormente fue 86

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 87

Ingreso al Parque Nacional Podocarpus cerca a la ciudad de Loja.

clasificado como gé nero Podocarpus, siendo la ú nica conífera nativa del Ecuador que habita en el territorio del Parque. Otra de las características que le da un elevado prestigio en cuanto a su biodiversidad al Parque Nacional Podocarpus es la de haber descubierto en su territorio la Cascarilla (Cinchona oficinales), planta utilizada desde mediados del siglo XVIII y que fue nombrado ARBOL NACIONAL por haber combatido al Paludismo o Malaria, que fue una enfermedad endé mica incontrolable para la é poca y que costo miles de vidas. Linneaus dio en 1742 el nombre de Cinchona al gé nero de la planta cuya corteza cura el Paludismo o Malaria. Para efectos de estudios, se ha considerado los límites del Parque Nacional Podocarpus y es el á rea territorial ocupada por las poblaciones de Zumba al sur este, al noreste la ciudad de Loja, Paquisha en el noroeste, avanzado al sur por el río Nangaritza. La superficie aproximada es de 146 280 ha.

1. 2. 3. 4.

Cuenca alta del río Catamayo. Al oriente, la cuenca del río Chinchipe. La cuenca del río Zamora. Cuenca del río Nangaritza.

A excepció n del río Catamayo que desemboca en el Pacífico, los otros lo hacen en el Atlá ntico.

Turismo Ecoló gico en el Parque Nacional Podocarpus

La belleza natural que representa el Parque Nacional Podocarpus es la verdadera materia prima para la industria turística. El parque enfoca diversos y variados paisajes así como ambientes esté ticos palpables en los ríos de aguas cristalinas y torrentosas, cortadas de trecho en trecho por cascadas y cañ ones profundos que forman los cauces de agua, y lagunas en lechos rocosos. Todas estas riquezas bioló gicas y ecoló gicas presentan oportunidades inigualables para los turistas y excursionistas.

Las lagunas del Compadre

Hidrología

Está n ubicadas en los pá ramos de la cordillera central de los Andes, concretamente en el nudo de Sabanilla, é stas son en un nú mero superior a 100, con superficies que van desde los 30 m2

Existen cuatro cuencas hidrográ ficas en la regió n, las mismas que se han definido de la siguiente manera: 87

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 88

hasta de 20 ha. Se encuentran a diferentes niveles en depresiones rocosas, vestigios de un antiguo paisaje glaciar. Estudiosos de esta zona lacustre afirman que el agua de estas lagunas es consecuencia de las transpiraciones de la cordillera y que la vegetació n nacida en sus alrededores actú a como una esponja que retiene el agua con destilaciones lentas por el subsuelo rocoso e impermeable. En esta á rea existen varias especies raras de fauna: el rató n marsupial, el rató n topo, sapos de los gé neros Telmotabius y Gastrotheca. Otras especies que constan en el Libro Rojo de la Fauna (Unió n Internacional para la Conservació n de la Naturaleza y Fondo Mundial para la Vida Silvestre) y que está n en peligro de extinció n son: el oso de anteojos, la cervicabra y el pudú . El impacto humano ya se deja sentir, el ecosistema se encuentra amenazado por actividades antropogé nicas, como: cacería, trá fico de especies, agricultura, deforestació n, y lo que es mas grave en sectores de gran biodiversidad, y la provocació n de incendios forestales, que han causado impactos negativos al ambiente. En los recorridos realizados por los guardabosques a las lagunas observaron huellas, excrementos y senderos de dantas. En las partes altas de las estribaciones existen poblaciones de pumas y osos chupalleros. Entre los 1 800 y 2 000 m de altura en el bosque hú medo habitan los gallos de roca y colibríes de cola azul, aves muy hermosas y en gran nú mero. Existen otras clases de aves vistosas como: loros, tucanes, carpinteros, sigchas, oropé ndolas, colibríes, etc. Las lagunas del Compadre situadas en los pá ramos de la cordillera está n relativamente cercanas a la ciudad de Loja. Se puede llegar a ellas por una carretera asfaltada hasta el nudo de Cajanuma (12 km) en donde existe una bifurcació n de la vía construida hace pocos añ os hacia la montañ a espesa en una longitud de 9 km. El Ministerio del Medio Ambiente, en convenio con fundaciones ecoló gicas, ha levantado un refugio que sirve de alojamiento para los guardabosques, funcionarios y visitantes y una sala de uso mú ltiple para la proyecció n de películas y la sustentació n de charlas educacionales sobre medio ambiente y conservació n, a las personas e instituciones que allí recurren en busca de naturaleza libre y pura. Por un sendero abierto para los caminantes, se puede llegar a la cresta de la cordillera en una

Paisaje del Parque Nacional Podocarpus.

Cascada del Parque Nacional Podocarpus.

Paisaje lacustre Parque Nacional Podocarpus.

88

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 89

hora, desde donde ya se divisan los espejos de agua de las lagunas y, al caminar entre cuatro y cinco horas se llega definitivamente a estos parajes. Ademá s existen: Monimiá seas, Rubiá ceas, Laurá ceas, Gutíferas, Mirtá ceas y arbustos de menor tamañ o como: Ericá ceas, Rubiá ceas, Rosá ceas, Piperá ceas, Melastomá ceas.

bre. Se vislumbraba un futuro promisorio al servicio de los objetivos reales para los que había sido destinado este “laboratorio vivo”, esencial para los estudiantes de la Universidad Nacional de Loja.

Origen e historia

El Jardín Botá nico Reinaldo Espinosa de la Universidad Nacional de Loja, es el jardín má s botá nico antiguo del Ecuador. Fue fundado en 1949 por el botá nico Reinaldo Espinosa (18991952) estudioso y conocedor de la flora del sur del Ecuador y en la actualidad ocupa un á rea de cuatro hectá reas, localizadas a cinco kiló metros de la ciudad de Loja en la vía a Vilcabamba (Aguirre 1992. Este jardín botá nico es el ú nico existente en la regió n interandina del Ecuador y se encuentra ubicado en el nudo de convergencia de las corrientes climá ticas cá lidas y hú medas de la Amazonía y las cá lidas y secas de las vertientes del Pacífico. Seguramente el fundador se inspiró en la idea de encontrar un lugar donde recopilar la riqueza florística de Loja, llamada por el sabio Alexander von Humboldt “jardín botá nico del Ecuador”, que al miso tiempo presentase similitud con el lugar de origen de las plantas y con condiciones favorables para que las especies ahí cultivadas pudieran adaptarse, crecer y sobrevivir para el deleite, educació n y aprendizaje de los estudiantes y pú blico en general (Aguirre 1992). El doctor Reinaldo Espinosa administró el Jardín Botá nico desde 1949 hasta 1951, fecha en la cual se vió obligado a dejar el país. El vacío que deja Reinaldo Espinosa vino a ser llenado por el ingeniero Francisco Vivar (1931-2000), quien desde muy joven empezó su fructífera labor de cuidado y enriquecimiento científico. Francisco Vivar dedicó casi toda su vida al engrandecimiento del Jardín, mantenié ndose al frente de la administració n durante 42 añ os, desde 1955 hasta 1997. Es durante este período que el Jardín Botá nico es inscrito dentro de la Red Internacional de Jardines Botá nicos (Vivar 1985). (Cuadro 7). En 1997 el ingeniero Vivar se jubila y empieza una nueva administració n, la cual enfoca sus acciones hacia el mejoramiento de la infraestructura y así abrirlo al pú blico lojano. Por esta razó n se firma un convenio con FUNDATIERRA, mediante el cual se implementan nuevas cabañ as, rotulació n de las principales secciones y adecuació n de los senderos. Desde

Gé neros de orquídeas en el Parque Nacional Podocarpus:

En el Parque Nacional Podocarpus se encuentra los siguientes tipos de orquídeas: En la parte baja de la provincia de Zamora Chinchipe: Ada, Anguloa, Brassia, Catasetum, Cycnoches Chaubardia, Chaubardiela, Chondrorhyncha Drá cula, Encyclia, Epidendrum, Gó ngora, Lycaste Maxillaria, Mormolyca, Ondicium, Peristeria Sobralia, Stanhopea, Trigonidium, Xillobium, Embrea. En la parte alta de la provincia de Loja: Dimerandra, Epidendrum, Fernandezia, Kefersteinia, Lepanthes, Lycaste, Masdevallia, Cyrtochilum, Odontoglossum, Pleurotallis, Restrepia, Oncidium, Stelis, Telipogon. Aquí, con el fin de concienciar a la colectividad de la necesidad de preservar y conservar este hermoso Parque Nacional, son pertinentes las siguientes recomendaciones: 1. Conservar la vegetació n protectora y el medio de las cuencas hidrográ ficas que se encuentran dentro del Parque. 2. Conservar y aprovechar para el esparcimiento y la recreació n las á reas de pá ramo y lagunas. 3. Desarrollar má s oportunidades para la recreació n al aire libre y la educació n ambiental. 4. Mantener intacta la flora y la fauna que está n dentro del á rea del Parque (Apolo, 1984).

6.2. El Jardín Botá nico “Reinaldo Espinoza” de la Universidad Té nica Particular de Loja Zhofre Aguirre M. y Byron Maza R. En 1949 el Dr. Reinaldo Espinoza, emé rito profesor de la desaparecida Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional de Loja, fundó el jardín Botá nico que luego de pocos añ os llevaría su nom-

89

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 90

Cuadro 7. Datos geográ ficos y climá ticos del Jardín Botá nico Reinaldo Espinosa. Coordenadas geográ ficas

79°12’24”W; 04°02’01”S

Altitud sobre el nivel del mar

2135m

Superficie

4 ha

Zona de vida

bosque seco montano bajo (bs-MB)

Precipitació n anual

900 mm

Temperatura media.

15,3°C

1998 el Jardín Botá nico abre al pú blico diariamente, constituyé ndose en un atractivo turístico y un espacio de recreació n y educació n ambiental para escuelas, colegios y para la ciudadanía lojana en general. El Jardín Botá nico Reinaldo Espinosa forma parte, desde el 26 de octubre del 2000, de la Pre-Red de Jardines Botá nicos del Ecuador, con lo cual pasa a ser parte de la Red Latinoamericana de Jardines Botá nicos. Pese a las limitaciones econó micas, la Universidad Nacional de Loja ha dado apoyo constante al Jardín, el cual, con los pocos recursos econó micos asignados, ha dado significativos aportes a la investigació n, conservació n y educació n ambiental. En la actualidad el Jardín está declarado como unidad de producció n y debe generar los recursos para su mantenimiento, situació n que se ha conseguido con relativo é xito, demostrando la factibilidad de trabajar con propia autogestió n. El jardín es visitado por muchos turistas y científicos del mundo, pues algunos datos así lo demuestran. En los ú ltimos seis meses lo han visitado 30 personas por mes. Los visitantes nacionales y extranjeros siempre tienen frases de apoyo y admiració n para este centro de conservació n bio- ló gica, situació n que hemos tomado como un compromiso y reto para seguir mejorando.

Loja, Zamora-Chinchipe y El Oro, pero tambié n está n representadas algunas especies procedentes de otras latitudes. La mayoría de los á rboles en el Jardín sobrepasan los 50 añ os de edad. Lamentablemente no se ha llevado un registro de entradas ni de procedencia de las especies. La mayoría de las plantas está n etiquetadas indicando el nombre científico, el nombre comú n y lugar de procedencia de las especies. La red de senderos facilitan el acceso y circulació n por las diferentes secciones y brindan oportunidades de recreació n e interpretació n ambiental. Tambié n cuenta con la plazoleta del obelisco que enmarca la roseta de vientos, la glorieta ubicada en la parte sur del jardín, varios puentes ornamentales de paso, las cabañ as de paja y el laberinto. Existen dos cabañ as para el esparcimiento de los visitantes y dispersos en el á rea se encuentran algunos parasoles, construidos con material de la zona, que constituyen otros de los atractivos del Jardín. El Jardín Botá nico cuenta con cinco secciones, cuyas plantas má s representativas se presentan en el cuadro 8.

Arboretum

Esta secció n alberga especies arbó reas nativas. El objetivo es desarrollar una muestra representativa de los principales á rboles que crecen en los ecosistemas andinos, secos y amazó nicos de la regió n sur del Ecuador. Debido a su lento crecimiento, muchas de las especies de esta secció n aú n no han alcanzado su desarrollo ó ptimo.

Recursos existentes

Dentro de las cuatro hectá reas del Jardín se encuentran especies vegetales representativas de las zonas de vegetació n del sur del Ecuador, es decir, bosque andino, bosque amazó nico y bosque seco. Se ha logrado establecer una representació n florística de cada una de estas zonas, incluyendo especies endé micas y en estado de amenaza. Ademá s se ha tratado de no descuidar la presencia de una representació n de especies cultivadas en los agro-ecosistemas má s comunes, especialmente en la provincia de Loja.

Plantas andinas

Debido a que muchas de las tradiciones precolombinas de cultivo se han ido perdiendo lentamente, se decidió crear esta secció n donde se han agrupado los cultivos presentes en las chacras de los campesinos. Es lamentable que muchas de estas especies se encuentren en peligro de erosió n gené tica pues muchas tienen 90

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 91

importancia econó mica y representan recursos alimenticios bá sicos para las comunidades.

el Jardín Botá nico se ha creado esta secció n con el fin de tratar de agrupar una colecció n de estas plantas con valor medicinal de uso comú n en el sur de Ecuador.

Medicinales

En la provincia de Loja existe una importante tradició n de utilizar plantas en la medicina casera. Es notoria una bebida típica con atributos curativos denominada “horchata”, cuyo uso se ha difundido incluso en el extranjero. En casi todas las poblaciones andinas se encuentran los huertos o huertas, donde por lo general se cultivan muchas especies de plantas medicinales. En

Orquideario natural y umbrá culos

En esta secció n se ha tratado de replicar las condiciones naturales y ambientales del há bitat de las especies de orquídeas y plantas de zonas hú medas. En los inverná culos y estanques ornamentales se cultivan plantas de sombra como: begonias, bromelias, helechos, anturios y orquídeas.

Cuadro 8. Principales plantas que se encuentran en las diferentes secciones del Jardín Botá nico Reinaldo Espinosa. Arboretum arabisco arupo cedro coco negro chirimoya fresno o cholá n guararo guato guayacá n luma nanume pumamaqui roble andino romerillo azuceno romerillo colorado saco

Orquideario y ornamentales anturio calavera camaró n cartucho blanco costilla de Adá n heliconia hoja de la moneda orquídea orquídea orquídea orquídea

Jacaranda mimosifolia Chionanthus pubescens Cedrela montana Parajubaea cocoides Annona cherimola Tecoma stans Lafoensia acuminata Erythrina edulis Tabebuia chrysantha Pouteria lucuma Mimosa townsendii Oreopanax rosei Roupala obovata Podocarpus oleifolius Prumnopitys montana Myrcianthes allii

Plantas andinas camote chocho jícama kiwicha melloco oca papa quinua tomate de á rbol uvilla zanahoria blanca

Plantas medicinales ajenjo amapola borraja cascarilla congona guabiduca hierba luisa marco romero ruda tilo toronjil

Artemisia sodiroi Papaver somniferum Borago officinalis Cinchona officinalis Peperomia spp. Piper crassinervium Cymbopogon citratus Ambrosia artemisioides Rosmarinus officinalis Ruta graveolens Sambucus nigra Melissa officinalis

Plantas xerofíticas joyapa mortiñ o zalapa mote pelado paja tuna salvias San Pedro moshquera

Fuente: Aguirre (1992); Aguirre et al. (2000); Vivar y Merino (1998).

91

Anthurium sp. Brunfelsia grandiflora Beloperone guttata Zantedeschia aethiopica Monstera deliciosa Heliconia sp. Crassula arborescens Cyrtochilum macranthum Epidendrum spp. Cattleya maxima Stanhopea sp. Ipomoea batatas Lupinus mutabilis Smallanthus sonchifolius Amaranthus caudatus Ullucus tuberosus Oxalis tuberosa Solanum tuberosum Chenopodium quinua Cyphomandra betacea Physalis peruviana Arracacia xanthorrhiza Macleania rupestris Vaccinium floribundum Cavendishia bracteata Gaultheria erecta Calamagrotis intermedia Opuntia ficus-indica Salvia spp. Echinopsis pachanoi Croton wagneri.

EPO 1-99

10/17/05

16:25

Page 92

estudiantes, a los científicos y a los conservacionistas interesados en ellas. En algunos casos, a travé s de este programa se ha facilitado semilla y material vegetativo para la masificació n, principalmente en comunidades. Tambié n se ejecutan investigaciones que permitan documentar la diversidad y comportamiento silvicultural de especies prioritarias. Entre estos estudios se pueden citar: El inventario de las plantas del Jardín Botá nico Reinaldo Espinosa, donde se registraron todas las especies que crecen en el Jardín y en el bosque de ladera, contabilizá ndose 196 familias, 642 gé neros y 882 especies (Vivar y Merino 1998). Estudio de propagació n por acodadura de ocho especies vulnerables en el Jardín Botá nico Reinaldo Espinosa como son el romerillo (Prumnopitys montana), la cascarilla (Cinchona officinalis), el roble andino (Roupala obovata), el cedro (Cedrela montana), el caneló n (Nectandra laurel), el guaylo (Delostoma integrifolia), el arrayá n (Myrcianthes hallii) y la joyapa (Macleania rupestris) (Solano 2001). Estudio de la propagació n de zanahoria blanca (Arracacia xanthorrhiza) (Cuje y Estrella 1993). Ademá s se mantiene en observació n el banco de germoplasma de Carica spp., con especies de diversas procedencias denominados chamburos y toronches, las cuales son plantas nativas muy importantes en la alimentació n de los pobladores campesinos de toda la regió n sur del Ecuador. Tambié n se facilitan las instalaciones a fundaciones ecoló gicas, clubes ecoló gicos, escuelas, colegios y grupos de personas amantes de la naturaleza de la ciudad de Loja y poblaciones vecinas del norte del Perú , para que realicen eventos recreativos y de educació n ambiental. El turismo ecoló gico es otra de las actividades en la cual se ha incursionado en los ú ltimos meses, habié ndose realizado contactos con empresas ecoturísticas de la ciudad de Loja.

Piedra labrada en la entrada al Jardín Botá nico de la UNL.

Plantas xerofíticas

Para disponer de representació n de dos ecosistemas comunes de la provincia de Loja, como son los pá ramos y las zonas secas, se ha adecuado esta secció n. En un á rea se han creado las condiciones para que se desarrollen plantas de altura, las cuales necesitan suelos á cidos, y en otra á rea se han creado las condiciones para plantas de zonas á ridas que requieren suelos alcalinos.

Actividades y funciones actuales

El Jardín Botá nico es una secció n universitaria que presta un apoyo importante en la complementació n de la enseñ anza acadé mica a los estudiantes de Ingeniería Forestal, Agrícola, Agronó mica y Manejo y Conservació n del Ambiente en las á reas de taxonomía pura y aplicada, conservació n, ecología y biodiversidad. Una de las actividades importantes es la conservació n ex situ que se lleva a cabo con especies cultivadas que actualmente han caído en desuso y está n, por ende, amenazadas de erosionarse gené ticamente. Estas especies se han colectado, sembrado y se mantienen para conservar el conocimiento y transmitirlo a los

Conservació n

Al ser parte de la Pre-Red de Jardines Botá nicos del Ecuador, se busca aprovechar nuevas coyunturas para gestionar, ante organismos internacionales, apoyo para futuras investigaciones, capacitació n de personas e intercambio y para el mejoramiento de la infraestructura y la señ alizació n.

92

EPO 1-99

10/17/05

16:26

Page 93

En base al plan de acció n de los jardines botá nicos citado en Botanic Gardens Conservation News 1998, que actualmente tiene como objetivo principal el procurar la conservació n de la biodiversidad, el jardín Botá nico Reinaldo Espinosa tiene las siguientes perspectivas.

cernientes a la biodiversidad y su conservació n. • Defender pú blicamente la conservació n de la diversidad bioló gica y en especial de la flora. • Coordinar actividades en el desarrollo de políticas y defensa pú blica de la conservació n de la biodiversidad con otros jardines y organizaciones relacionadas con la botá nica.

Conservació n de ecosistemas

• Convertirse en un centro que genere y maneje la informació n de los ecosistemas naturales a nivel regional. • Ayudar a implementar la protecció n y manejo de ecosistemas naturales regionales. • Fortalecer a nivel nacional la red de jardines botá nicos para la conservació n de ecosistemas naturales. • Conservació n de la diversidad de las especies de plantas de la regió n sur del Ecuador. • Convertirse en un centro clave para la investigació n de especies de la flora regional. • Promover, desarrollar e implementar el manejo y conservació n de especies amenazadas de la flora local y regional. • Impulsar intercambios y de ser posible una red de colaboració n de jardines botá nicos para compartir facilidades té c- nicas y capacidad en la conservació n de las especies de plantas. • Desarrollar programas de investigació n para la conservació n y uso sustentable de plantas econó micamente importan- tes (etnobotá nica) en la medicina y alimentació n. • Participar activamente en el diseñ o de té cnicas de educació n y programas de entrenamiento en conservació n de la biodiversidad. • Procurar la cooperació n internacional entre la Red Latinoamericana de Jardines Botá nicos en programas de educa- ció n concernientes a la biodiversidad. • Apoyo al uso sustentable de los bosques, mediante la aplicació n del ecoturismo y el aprovechamiento de los recursos gené ticos de las plantas en la agricultura.

¿Qué podríamos mejorar? - ¿Cuá les son nuestras necesidades?

Posiblemente los siguientes son algunos de los aspectos que llevarían a que el Jardín Botá nico mejore en infraestructura y servicios:

Plantas econó micas y domesticables.

Políticas pú blicas

• Participar activamente en la formulació n de políticas gubernamentales con-

Á rboles varios.

93

EPO 1-99

10/17/05

16:26

Page 94

• Crear una zona ecoló gica didá ctica, donde se realice la producció n de especies vegetales promisorias, se recreen ecosistemas, sistemas y há bitats con algunas interrelaciones, etc. • Documentar las especies a travé s de una base de datos automatizada, para facilitar informació n tal como procedencia, fenología, ciclos reproductivos, etc. • Implementar una pequeñ a biblioteca adjunta a un centro administrativo para apoyo en la educació n e investigació n. • El crecimiento y desarrollo del Jardín Botá nico se incrementará a travé s del apoyo externo, no só lo en los aspectos econó micos, sino de capacitació n mediante intercambio de informació n, personal té cnico, administrativo, jardineros, etc. • Lograr convenios nacionales e internacionales que faciliten la capacitació n de personal, acceso a literatura e informació n actualizada, aspectos que posibiliten un desarrollo integral del Jardín Botá nico. • Implementar la tecnificació n de las diferentes actividades que se realizan en el Jardín.

El Jardín Botá nico, desde los trabajos iniciales de su gestor, tiene ya má s de medio siglo desde su inauguració n oficial. Siempre ha constituido el mejor de los materiales para la objetivizació n del proceso enseñ anzaaprendizaje.

6.3. Orquideario de Yamburara (Vilcabamba) En 1976, la Subcomisió n Ecuatoriana para el Aprovechamiento de las Cuencas Hidrográ ficas de los ríos Tumbes y Catamayo, decide organizar un complejo turístico en una de las poblaciones má s promocionadas para esa é poca en el Ecuador, el gran VALLE DE LA LONGEVIDAD, Vilcabamba. Se lo hace en un barrio cercano a la misma, Yamburara, en una extensió n de dos hectá reas y media. En dicho centro turístico, hoy se encuentran los viveros forestales, piscinas, canchas deportivas, estanques piscícolas, jardines, un zooló gico con animales de la regió n sur oriental, campo abierto para la distracció n y recreació n de la gente que lo visita y, naturalmente, el orquideario.

Orquideario YAMBURARA, en Vilcabamba, Provincia de Loja.

94

EPO 1-99

10/17/05

16:26

Page 95

Para la organizació n del orquideario y la recolecció n de plantas, los ejecutivos de la institució n contrataron los servicios profesionales de un especialista, para que haga un invernadero y coleccione las muestras de orquídeas de toda la regió n. En 1979, los responsables del orquideario de Yamburara, con la asesoría de los té cnicos de PREDESUR, logran reunir e incrementar el orquideario con valiosas muestras tomadas de las zonas de la regió n. Este trabajo deviene en incentivo que se revierte aceleradamente en el espíritu vivencial de la gente y hace que estas raras y hermosas plantas empiecen a ser reconocidas y apreciadas, por lo que se generaliza su cultivo. Entre 1980 y 1984 el orquideó logo y naturalista norteamericano Dennis D’ Alessandro, dirige el orquideario. Desarrolla ampliamente el plan de trabajo anterior y es é l quien inicia las hibridaciones con las especies nativas de la regió n y logra extraordinarios é xitos. Los gé neros, especies y variedades está n distribuidas en dos galpones en donde se las clasificó para especímenes de há bitat de temperaturas medias y otras para especímenes de temperaturas cá lidas.

La actual administració n está empeñ ada en mejorar la infraestructura de los invernaderos, para lo cual se está n modernizando sus diseñ os y dá ndole mejor naturalidad al paisaje en donde se van a cultivar las orquídeas.

6.4. Orquideario de la Universidad té cnica Particular de Loja Para ampliar los conocimientos científicos de los educandos de tan prestigiosa entidad educativa e incentivarlos en la preservació n del medio ambiente y de sus recursos naturales, el Directivo má ximo de la UTPL y Canciller de la misma, Padre Dr. Luis Miguel Romero, quien con su dinamia, gestió n ejecutiva y visió n futurista, en el añ o 2000 adquirió para la institució n un gran lote de especies orquidearias en la provincia de Zamora Chinchipe. Con esta base gené tica se originó una colecció n muy interesante con fines didá cticos en MICROPROPAGACIÓ N y con el fin de asegurar futuros proyectos sociales. Los invernaderos se encuentran a 2 150 msnm y ocupan la parte oriental de la Universidad. La investigació n gené tica de las

Orquideario de la Universidad Particular de Loja.

95

EPO 1-99

10/17/05

16:26

Page 96

especies que ahí se cultivan, está encaminada a crear conciencia en los estudiantes, turistas, visitantes y amigos de la UTPL, con la finalidad de preservar el ecosistema de la regió n. Se cuenta con un administrador del proyecto, un asesor té cnico en el á rea de: a) Aclimatació n de plá ntulas de laboratorio y b) En el manejo del banco de HERMOPLASMA (Té cnico capacitado con cursos nacionales e internacionales en materia de TAXONOMÍA y cultivo de orquídeas). Este orden didá ctico está repercutiendo en el crecimiento educacional de las generaciones que en este centro de estudios superiores se educan. Se cuenta con un Banco de epifitas (orquídeas, helechos, bromelias, gesnerías, bomarias, araceas, etc.) con predominio de las orquídeas. INFRAESTRUCTURA: El Banco de epifitas consta de 2 Á REAS: INVERNADERO Y UMBRÁ CULO.

Por la noche de 15 a 18 °C; y, Durante el día de 20 – 36 °C. El armazó n del invernadero es de METAL, la cubierta es de plá stico agrícola y una POLISOMBRA (MALLA SARAN) al 75 %. Dentro del invernadero existen alrededor de 2 500 plá ntulas provenientes del laboratorio en fase de aclimatació n, producto de la micropropagació n, 400 híbridos de excelente material gené tico; y, unos 2 000 individuos pertenecientes a 80 especies orquidearias. EL UMBRÁ CULO: Características: Estructura de madera, cubierta con Malla Saran al 75 % TRASLAPADA. Temperatura: 9 – 14 °C Noche 18 – 24 °C Día El umbrá culo generalmente está ocupado con el 70 % de especies orquidearias de la regió n sur oriental del Ecuador, un 15 % con especies de varias zonas del planeta y el 15 % restante de HÍBRIDOS.

INVERNADERO: Se encuentran las especies de clima cá lido hú medo con un rango de temperatura que fluctú a:

Orquideario del Pangui.

96

EPO 1-99

10/17/05

16:26

Page 97

Resumiendo, existen, en estas instalaciones, 95 gé neros y 5 familias de plantas vasculares.

oriental, su material vegetal, su material gené tico, es transplantado, sembrado y adaptado al laboratorio y su medio ambiente. Conviene aclarar que el laboratorio con sus instalaciones, otros invernaderos y un conjunto residencial, se encuentra localizado en la població n de Gualaceo, provincia del Azuay, a 250 kiló metros del cantó n El Pangui. Aquí se realizan todos los tratamientos y trabajos de laboratorio para la obtenció n de miles de plá ntulas que luego de los respectivos cuidados y su cultivo, cuando está n en tamañ o y edad convenientes, son exportados y comercializados en el exterior. Existen cinco instancias en la actividad y desarrollo de esta empresa:

6.5. Orquideario de El Pangui Ubicació

n: Cabecera cantonal del cantó n El Pangui, provincia de Zamora Chinchipe. Altitud: 900 m. Situado a 1 500 metros de la població n y en direcció n occidental. Sin lugar a dudas, este centro botá nico constituye el má s grande, vistoso y ornamental del país que alberga el mayor nú mero de especímenes orquidearios. Este orquideario es un trabajo, un esfuerzo, y representa un patrimonio familiar a má s de constituirse en un patrimonio nacional, en el cual se han alojado orquídeas recolectadas de las monta- ñ as, bosques y selvas del territorio nacional las mismas que constituyen un material gené tico de invalorable riqueza en el correr de muchos añ os. Sus propietarios han dedicado sus esfuerzos al cultivo y a la micropropagació n, teniendo en cuenta que en estos invernaderos ubicados en la regió n

1. 2. 3. 4. 5.

Identificació n. Conservació n. Turístico. Educacional. Comercial.

Los invernaderos en el cantó n El Pangui abarcan una superficie de 2 500 m2, con instalaciones de primer orden.

Interiores del Orquideario municipal Romelia María, cascada.

97

EPO 1-99

10/17/05

16:26

Page 98

pudo entregar una obra que es admirada y aplaudida por propios y extrañ os. Estas instalaciones se encuentran ubicadas al Norte de la ciudad a 2 000 metros de altitud, en el parque “La Banda”, junto al Vivero y Zooló gico Municipal. La Ilustre Municipalidad permitió que esta obra turística y de preservació n de especies vegetales y ornamentales, llevara el nombre de la madre del constructor administrador de este orquideario “Romelia María”. Así el I. Municipio de Loja demuestra a la provincia, al Ecuador y al mundo, que Loja sigue siendo “Jardín Botá nico del Ecuador”, tal como lo señ aló tres siglos atrá s el Sabio Naturalista VON HUMBOLT. El orquideario se encuentra dividido en 3 invernaderos:

La producció n promedio anual es de 50 000 plantas de orquídeas. Existen cerca de 2 500 y 3 200 especies orquidearias nacionales e internacionales y algo má s de 90 gé neros. Sin lugar a dudas, quienes visiten estas instalaciones de invernaderos y orquidearios, tanto en El Pangui provincia de Zamora, como en Gualaceo provincia del Azuay, dará n fe y queda- rá n admirados y maravillados de las especies florísticas que se cultivan.

6.6. Orquideario municipal “Romelia María” de la ciudad de Loja La administració n de la I. Municipalidad, comprendida en el período del añ o 2.000 = 2.004 tomó como meta convertir a la ciudad de Loja en una capital ecoló gica, para ello, sin escatimar esfuerzos, emprendió en un ambicioso proyecto el cual dió sus mejores frutos ya que la ciudad fué galardonada con 3 premios internacionales: 1. Primer premio a la participació n ciudadana: Bronce EWARDS como ciudad ecoló gica 2001. Ciudad ZHENZHENCHINA. 2. Organizació n Mundial y Panamericana de la Salud: Ciudad Saludable. 3. Primer Premio Continental Ciudad de las Amé ricas OMS/OPS 2002.

1. Invernadero Norte: Alberga Bromelias y Orquídeas de clima tropical hú medo, cuya temperatura oscila entre 20 – 36 °C. 2. Invernadero Central: Para Bromelias y Orquídeas de temperaturas de 16 – 30 °C. 3. Invernadero Sur: Para Bromelias y Orquídeas de clima cá lido hú medo y cá lido seco. En los 3 invernaderos se ha construido cascadas, fuente y pileta, destacá ndose la arquitectura paisajista de la cascada del invernadero Sur que le da armonía al conjunto florístico y el agua se precipita, para caer y producirse un remanso en donde se ha instalado una vistosa y llamativa pecera. Completando estas instalaciones tenemos un AVIARIO en el cual conviven varias razas de aves canoras, dá ndole a este centro turístico y ecoló gico un toque má gico de singular belleza. Instituciones de desarrollo, educacionales y de promoció n turística de la regió n, motivadas por este esfuerzo en la selectividad florística, ya han logrado construir otros invernaderos que está n abriendo sus puertas al pú blico para mostrar el bagaje natural de la vegetació n que guardan los bosques y la selva de la regió n Sur, y procurando salvaguardar las especies que tienden a desaparecer. Nuestras especies florísticas son MONUMENTOS vivos de la naturaleza, que sirven para el sano esparcimiento y el libre aprendizaje de las generaciones presentes y futuras.

La belleza del paisaje citadino se lo implementó con la construcció n de bellísimos parques de amplias á reas verdes, recreativos y con jardines aromados de imponderable hermosura, pero hay que añ adir algo má s: se logró la descontaminació n de sus dos ríos, acopian- do todas las galas para que sea adornada esta “Pequeñ ita ciudad”, que vivía un caos permanente de desaseo y desorganizació n, para en ese período constituirse en atracció n turística de niveles internacionales, lo cual salió de boca de los viajeros y turistas que la visitaron y que la siguen visitando. Con estos antecedentes, el Sr. Alcalde de la ciudad de ese entonces, Dr. José Bolívar Castillo, encargó la construcció n de un orquideario al autor de este libro, quien con apego inmenso y una querencia absoluta a su tierra,

98

EPO 1-99

10/17/05

16:26

Page 99

6.7. Orquídeas Mendoza

nal e internacional de las cuales es un asiduo concurrente, en el transcurso de varios añ os de giras y visitas. Hay que señ alar que el propietario de este centro florístico ha logrado, con esfuerzo y acierto en el estudio, adentrarse seriamente en la propagació n de especies, ya sea por frascos con plá ntulas de laboratorio, obtenció n de semillas de laboratorio o material vegetativo. El orden que lleva en sus invernaderos hace que la exposició n permanente de sus orquídeas, bromelias y plantas florísticas sean de una ponderable belleza, al gusto de propios y extranjeros de manera particular, quienes visitan el Valle de la Longevidad como es llamado Vilcabamba. Estos invernaderos está n bien distribuidos en su manejo particular, lo que los hace má s interesantes toda vez que su propietario ha emprendido en cruzamientos de todo el material vegetativo que ha podido recolectar: orquídeas, bromelias y plantas florísticas, lo que hace que la visita de quienes les interesa el mundo vegetal sea obligada.

UBICACIÓ N: Població n de Vilcabamba. ALTITUD: 1 580 m. TEMPERATURA: 16 – 22 °C. Es un nuevo centro florístico ubicado en la població n de Vilcabamba, a 45 km del sur de la ciudad de Loja. Comprende orquideario, viveros e invernaderos conseguidos gracias al esfuerzo renovado y a la dedicació n de un joven orquideó logo, Luis Mendoza, quien a travé s de su formació n naturalista y con el amor a las flores que le inculcó su padre, Hartman Mendoza, descubridor de algunas especies orquidearias que llevan su nombre (ya fallecido). Herencia saludable que le dejó su progenitor. Cabe destacar que este joven investigador es autodidacta de una verdadera y clara formació n ambientalista y que ha podido conseguir gé neros y especies florísticas, en su mayoría orquídeas; muchas de ellas originarias de varias zonas de la regió n sur, del Ecuador y de algunos países, gracias al intercambio que realiza en las diferentes y diversas exposiciones de tipo nacio-

Orquídeas Mendoza, ubicado en la població n de Vilcabamba.

99

EPO 100-288

10/25/05

17:40

Page 100

“El empleo de un modelo como un artificio útil queda particularmente ilustrado por aquellas analogías que específicamente se renuncia a considerar como representaciones de la estructura última de la naturaleza, por ejemplo, al investigar las gotas se hace constantemente uso de la idea de

Huntleya meliagris

un globo, como si la gota tuviese una piel definida, y se han realizado experimentos para averiguar hasta dónde puede extenderse el paralelismo”.

R. Harré

Phragmipedium pearcei

Helcia brevis

EPO 100-288

10/25/05

17:40

Page 101

Stanhopea impressa

Trichocenros antennifera

Maxillaria nutans

CAPÍTULO VII

Descripción de géneros de Orquídeas de las Provincias de Loja y Zamora Chinchipe

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 103

Descripción En el capítulo “Hábitat de las orquídeas, realidades y fantasías”, se señala la riqueza de la región sur del Ecuador en cuanto a población de orquídeas, al punto que se han identificado alrededor de 140 géneros y más de 1 000 especies valiosas. Si esta realidad se la presenta por regiones, se tiene que Loja y Zamora Chinchipe, a pesar del desequilibrio ecológico causado por el hombre, alberga aún muchísimas especies y variedades excitantes de orquídeas de las cuales, en un elevado porcentaje, no han sido identificadas. La provincia de Zamora Chinchipe, cuyas condiciones climatológicas la identifican como una zona tropical húmeda con características especiales para el desarrollo de este tipo de plantas epífitas, todavía guarda en sus feraces y exuberantes bosques una variedad infinita de bellos y valiosos especímenes. Bajo este esquema general se presenta, a nivel de detalle, la clasificación botánica de 55 géneros localizados en la región sur oriental del Ecuador.

103

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 104

ADA Lindley

Altura: 1 300 – 2 300 msnm. Temperatura: 12 – 24°C. Especies: Es un género de l7 especies. Se cuenta ocho para el Ecuador.

Dedicado a Ada, hermana de la reina Artemisa de Caria. Personaje histórico. Género caracterizado por poseer pseudobulbos y un buen desarrollo foliar. Inflorescencia racimosa, con brácteas en las flores. Los sépalos y

pétalos alongados. Tiene dos vigorosos polinios. Se las encuentra en bosque húmedo y en elevaciones de 1 300 a 2 300 m. Viven en temperaturas intermedias (Pridgeon, 2001) (Dodson – Escobar, l996).

104

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Ada ocanensis

Page 105

(Loja)

(Lindl.) N. H. Williams

Ada glumacea (Loja y Zamora) Lindl N.H. Williams

105

Ada glumacea (Loja y Zamora) N.H. Williams

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 106

ANGULOA Ruíz & Pavón

Altura: 1 400 – 2 000 msnm. Temperatura: 12 - 24°C. Especies: Hay 10 especies, 3 en el Ecuador; Loja y Zamora 2 especies.

Dedicada, en 1794 por los botánicos españoles Ruiz y Pavón, a don Francisco de Angulo, Director de las Minas Reales del Perú (Caneva, 1984). De este género, en nuestra América, se conocen diez especies, todas originarias de Los Andes. En el Ecuador se encuentran tres especies y en la zona de estudio se cuenta con dos, que son: la Anguloa uniflora y la Anguloa virginalis. Género que se caracteriza por tener flores carnosas de color blanco puro para la especie A. uniflora y de color rosa pálido puntiado para la especie A. virginales. Las flores tienen forma de copa y el labelo articulado en la base de la columna hace que oscile con el mínimo movimiento de la flor (Caneva, 1984).

Es un género terrestre y pocas veces se lo encuentra en los árboles. Se alimenta de las hojas y de los musgos que se acumulan contra sus raíces por lo que no se puede considerar como epífitas, aunque fácilmente se aclimatan a temperaturas menores o mayores. Las plantas de todas las especies son similares; se las distingue por la flor (Arango, 1978). Los pseudobulbos son grandes; alcan- zan los 18 cm de largo, desde ovoides a cónicos; ligeramente comprimidos, surcados longitudinalmente. Cuando están jóvenes se revisten de vainas y luego éstas se transforman en hojas. Hojas grandes de 60 a 80 cm de largo, anchas, lanceoladas. Por la forma muy original de la flor se la conoce como la CUNA DE VENUS (Restrepo, 1978). Tamaño de la flor entre 6 a 10 cm de diámetro.

106

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 107

OM. Anguloa uniflora

Anguloa virginalis

(Loja y Zamora)

(Loja y Zamora)

Ruiz y Pavon

Linden ex B.S. Williams

107

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 108

BOLLEA Reichb. f.

Altura: 1 200 – 1 800 msnm. Temperatura: 16 – 22°C. Especies: Existen tres especies en el Ecuador, dos en la región, 11 especies en los Andes sudamericanos.

Dedicado al doctor Kart Boll mecenas alemán de la horticultura. Género que se caracteriza por falta de pseudobulbos y de vainas discontinuas, la inflorescencia es axilar que llega hasta la hoja envainada. Tiene cuatro polinios. Plantas epífitas de bosques húmedos nublados, viven entre 1 200 a 1 800 m (Pridgeon, 2001). Muchas personas se confunden con las flores del género Pescatorea. Su dife-

rencia es que el género Pescatorea tiene la columna angosta. Su envoltura o vaina forma una planta semejante a un abanico, las hojas son angostas y ligeramente veteadas. La inflorescencia es uniflora. Tiene lóbulos anchos y crecidos. En tiempo muy húmedo florece en elevaciones de 1 200 a 1 800 m, Bollea ecuadoriana.

108

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 109

Bollea ecuadorana (Loja y Zamora)

Bollea coelestis

(Loja y Zamora)

Rchb.f.

109

Dodson

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 110

BRASSIA R. Br.

Altura: 200 – 1 400 msnm. Temperatura: 16 – 24°C. Especies: Existen 29 especies, 7 especies en el Ecuador.

Dedicado a William Brass, explorador británico (Caneva, 1984). Incluye, este género, 29 especies y siete conocidas en el Ecuador. Es semejante a las bailarinas en movimiento. Tiene espigas de flores laterales. Los sépalos comúnmente son largos y delgados que varían de longitud. Son especies que se las encuentra desde los Estados Unidos hasta Sud América. Es una típica orquídea tropical. En nuestra región está diseminada

en cantones como: Macará, Paltas, Puyango, parte baja de Celica y en variadas especies en el Oriente. Son flores de color amarillo naranja, amarillo verdoso, con sépalos hasta de 15 centímetros de largo. Género de América tropical. Las inflorescencias se producen en la vaina y en la base del pseudobulbo; tiene sépalos libres con dos fuertes polinios, son epífitas de bosques húmedos (Pridgeon, 2001).

110

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 111

Brassia acuigera

Brassia lawrenceana

(Loja y Zamora)

(Loja)

Rchb.f.

Lindl.

Brassia lanceana

111

(Loja)

Lindl.

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 112

CATASETUM L.C. Richard ex Kunth

Altura: 0 – 1 200 msnm. Temperatura: 12 – 24°C. Especies: 9 especies en el Ecuador y 8 en la zona de estudio.

De kata = sobre y seto = seda. ll3 especies en América (Caneva, l984). Tiene pseudobulbos gruesos, carnosos, revestidos de escamas truncadas; hojas amplias con nervaduras marcadas; uniflorescencias basilares en racimos. Labelo muy pesado cuya forma varía también según el sexo. Se las cultiva en canastas o cestas.

Género de orquídeas epífitas, ocasionalmente semiterrestres. Se las encuentra en América central y América del sur. Las flores son grandes y atractivas. Las flores masculinas de algunas especies expelen o tiran el polen con bastante fuerza (Caneva, 1984). El tamaño de la flor varía según la especie. Puede tener de 2 a 8 cm de diámetro.

112

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 113

Catasetum macroglossum

(Loja)

Rchb.f.

Catasetum macroglossum

(Loja)

Rchb.f.

113

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 114

Catasetum saccatum

flor femenina

Catasetum saccatum

(Zamora)

(Zamora)

114

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 115

Catasetum stevensonii (Zamora)

Dodson

Catasetum samaniegoi

(Loja)

Dodson

115

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 116

CATTLEYA Lindley

Altura: 300 – 1 700 msnm. Temperatura: 12 – 24°C. Especies: Hay cuatro especies en el Ecuador. Es un género de 53 especies en el Neotrópico continental.

Dedicado a W. Cattley, célebre coleccionista inglés (Caneva, 1984). Son plantas epífitas y semiepífitas, provistas de pseudobulbos; la mayoría de las veces claviforme en cuyo extremo se insertan uno o dos hojas coriáceas más o menos largas y verdes. Cada año emiten un brote y las hojas. La inflorescencia se despliega holgadamente en ramos de dos a cinco flores con el perfume inigualable que derrama en el ambiente. Las regiones donde más abundan las Cattleyas se hallan ubicadas entre los 600 y 1 500 mnsm. En nuestra región este género ocupa las depresiones de la cordillera de los Andes, en los valles fructificadores de la provincia como los de Lucero, Quinara, Las Limas, Jibiruche, El Airo y El Castillo, Chaguarpamba, Pindal, Alamor, Casanga, limitando con las vertientes de los ríos y paralelo a éstos. Siempre se las observa en ramas altas donde la luz del sol apenas se ve quebrada por las hojas de los árboles o

sobre rocas; en lugares donde la vegetación que las circunda es poco densa y permite luminosidad. El mes de octubre es el mes de los amancayes. Cuando se abren las flores, el ambiente se mezcla con el intenso olor que emanan. Las Cattleyas se siguen cultivando como plantas caseras ya sea en los árboles o en los doseles de las ventanas, en algún sitio que las provea de calor y sombra, en las clásicas canastas colgadas en los aleros de los corredores y a veces en los muros de las casas, en las piedras y a pleno sol (Arango, 1978). Cattleya má xima del Ecuador y Perú: pseudobulbo cilíndrico coronado por una sola hoja. Inflorescencias de tres a ocho flores muy grandes (15 a 20 cm de diámetro de color rosado vivo). Labelo rojo liliáceo (Caneva, 1984). Cattleya iricolor: planta con pseudobulbos, hojas pequeñas y duras, inflorescencia de 10 o más flores, de unos 12 cm de diámetro, de color amarillo y rosado (Arango, 1978).

116

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Cattleya tricolor

Page 117

(Zamora)

Rchb.f.

117

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 118

Cattleya máxima alba

(Loja)

Cattleya máxima semialba

(Loja)

Lindl

Lindl.

118

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Cattleya máxima

Page 119

(Loja)

Lindl.

119

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 120

COCHLIODA Lindley

Altura: 2 200 – 3 200 msnm. Temperatura: 6 – 15°C. Especies: Hay 6 especies en América, dos en el Ecuador.

Nombre que viene del griego Kochliodes (Espiral: caparazón de caracol) por la forma del callo labelar de la especie tipo (Dodson C. y Escobar R., 2000). Es un género de altitudes elevadas. Se las encuentra en Perú, Ecuador y Bolivia. Planta de pseudobulbos cortos, flores de colores brillantes y peque-

ñas. Los sépalos y pétalos de color rojo brillante. Pseudobulbos unifoliares y bifoliares, la inflorescencia es producida en las partes axilares de las hojas. Los lóbulos del labio son anchos. Tiene un callo color amarillo a veces y otras de color blanco.

120

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Cochlioda rosea

Page 121

(Zamora)

Cochlioda vulcanica

(Lindl.) Benth

(Zamora)

(Rchb.f.) Benth. & Hook.F. ex B.D. Jacks.

121

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 122

COMPARETTIA Poepp. & Endl

Altura: 800 – 1 500 msnm. Temperatura: 14 – 24°C. Especies: Se conocen cinco especies en el Ecuador. 25 especies en América tropical. Dos en la región.

las flores. La Comparettia speciosa se la encuentra en Valladolid y Zamora, es de color anaranjado y la Comparettia falcata tiene flores de color rosado escarlata. Las flores tienen una dimensión de hasta tres centímetros de diámetro. En la parte anterior de la flor llevan una especie de aguijón curvado. Los órganos reproductivos son de color blanco amarillento. Tiene 2 polinios duros unidos a un estípite, a su vez adherido a un viscidio. (Dodson – Escobar, l996)

Dedicada al profesor italiano A. Comparetti (Caneva, 1984); 10 especies desde México hasta América tropical. Género caracterizado porque en sus flores tienen una especie de aguijón. Pseudobulbos aplanados bifoliados, las hojas no tienen vainas. La inflorescencia se produce en la base del pseudobulbo, son plantas epífitas, se las encuentra predominantemente en árboles de guabo y guayaba. Necesitan bastante agua (Pridgeon, 2001). Las especies de Comparettia se diferencian únicamente por el color de

122

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 123

Comparettia falcata (Loja) Fotografía: Alexander Hirtz

Comparetttia speciosa

Poepp. & Ende.

(Zamora)

123

Rchb.f.

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 124

CYCNOCHES Lindley

Altura: 400 – 800 msnm. Temperatura: 24 – 30°C. Especies: Hay 25 especies en América tropical, cinco especies en el Ecuador.

Del griego kiknos (cisne) y auchen (cuello), por tener la flor masculina la columna arqueada, como el cuello del cisne. Género descrito por: Lindley en 1832 (Dodson C. y Escobar R., 2000) Plantas de pseudobulbos agrupados, ahusados, con vainas blanquecinas, cada uno con varias hojas dispersas y caducas. Inflorescencias: laterales, pendientes, con pocas o muchas flores. Flores: de dos tipos: las femeninas con sépalos y pétalos carnosos, desplega-

dos; el labelo carnoso, ovoide o acorazonado; columna corta. Las flores masculinas con sépalos y pétalos delgados, desplegados; el labelo con callo basal grueso. Columna delgada y arqueada; dos polinios esferoides. Se las encuentra desde México hasta el Perú, en la Amazonía y Las Guayanas. Su hábitat: epífitas, usualmente sobre troncos secos en zonas húmedas (Ospina, Dressler, 1974).

124

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Cycnoches sp

Page 125

(Zamora

Cycnoches peruviana

(Zamora)

125

Rolfe

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 126

CYRTOCHILUM H.B.K. Altura: 1 500 – 3 000 mts. Temperatura: 12- 20°C. Av. Humbold, a. Bonpland y K. Kunth establecieron este género con base en una planta que habían descubierto al sur de Colombia y a la que dieron el nombre de Cyrtochilum undularum. El nombre, derivado del griego, hace alusión a uno de los rasgos característicos del género: kyrtos “curvo”; kheilos “labio, labelo”. El “labelo curvo” es de tal consistencia que resulta imposible aplanarlo y siempre tiene forma triangular, de manera que los ángulos basales se doblan hacia abajo y aparecen como lóbulos laterales. Otras características propias del género es que las plantas tienen rizomas alargados, quedando los seudobulbos separados unos de otros; estos aparecen envueltos por 3-4 pares de hojas cuyas láminas tienen 40-80 cm de longitud y las vainas son más largas que los seudobulbos. La inflorescencia es voluble, de varios metros de longitud, y produce flores grandes. Los sépalos son unguiculados y con bordes ondulados. La columna es erecta, a veces sigmoidea y soldada por su base con el labelo. El callo del labelo consta de varios tubérculos dispuestos unos en frente de otros. Los polinios tienen un estípite ancho, rectangular hasta transversalmente ovalado. Esta descripción corresponde a la concepción actual del género en sentido estricto. Desde su publicación en el año de 1815, este género ha tenido una historia poco afortunada. Aunque K. Kunth había reconocido bien la originalidad de las flores y consiguientemente las razones para la creación de un nuevo género, sin embargo en su diagnosis no señaló claramente las diferencias con

otros géneros conocidos y cometió además un error importante al describir el estípite del polinario como “filiforme” y no se dio cuenta de que el estípite definidamente ancho es un distintivo importante del género, indispensable para su delimitación respecto de otros géneros como Oncidium. Kranzlin reconoció esta situación anómala. Amplió la definición del género y transfirió cerca de 40 especies del género Oncidium al género Cyrtochilum. Pero fue más allá y añadió dos secciones más al género Cyrtochilum. Todas las especies auténticas de Cyrtochilum son nativas de las zonas altas de los Andes de Sudamérica, desde Venezuela, pasando por Colombia y Ecuador, hasta Perú. Se encuentran en localidades altas con frecuente niebla entre 1 500 y 3 000 m. Las plantas son predominantemente terrestres, en laderas y en las orillas de los bosques, y trepan con sus largos rizomas por los matorrales y los árboles vecinos. Las inflorescencias, que pueden alcanzar varios metros, llevan en ramos laterales cortos, con ordinariamente 4-5 flores cada uno, un total de hasta cien flores, que pueden tener hasta 10 cm de diámetro. En las flores predominan los colores marrón y amarillo, aunque también aparecen el fondo blanco y el violeta; este último sólo en pocas especies. Para su cultivo requieren temperatura fresca de noche y abundante luz, pero deben estar protegidas de los rayos directos del sol a mediodía. Las largas raíces deben tener la posibilidad de crecer en un sustrato siempre un poco húmedo (BOCKEMUHL, Leonore, Orquídeas nativas de Colombia, 1991).

126

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 127

Cyrtochylum cumandae

(Loja)

Cyrtochylum loxense

(Loja)

Koniger

Cyrtochylum cumandae

(Lindl.) Kraenzl.

127

(Loja)

Koniger

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 128

Cyrtochylum macranthum

Cyrtochylum pastazae

(Loja) Kraenzl

(Zamora)

Cyrtochylum serratum (Loja) (Lindl.) Kraenzl

(Rchb.f.) Kraenzl

128

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 129

Cyrtochylum trifurcatum

(Loja)

Cyrtochylum Sp.

(Lindl.) Kraenzl

(Loja)

(Lindl.) Kraenzl

129

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 130

CHAUBARDIA Reichb. F.

Altura: 200 – 1 600 msnm. Temperatura: 18 – 24°C. Especies: Existen dos especies en el Ecuador y en la provincia de Zamora Chinchipe.

Tienen una larga duración. (Caneva, 1984). Los costados del labio de la partícula en forma de bolsa. Su prominente callo brilla, la columna es angosta, no circunda al callo, cuatro polinios duros superpuestos, unidos a un pequeño estípite (Dodson – Escobar, l996).

Dedicado por Reichenbach a L. A. Chaubard, Botánico francés. Género sudamericano, con dos especies. Se las encuentra desde los Andes de Colombia hasta Bolivia. Su inflorescencia se produce en la parte axilar de las hojas. Con un callo radiado. Plantas epífitas de zonas bajas.

130

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 131

Chaubardia heteroclita

(Zamora)

(Poepp.&

131

Ende.) Dodson & D.E. Benn.

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 132

CHAUBARDIELA Garay

Altura: 1 200 – 1 600 msnm. Temperatura: 18 – 24°C.

Es un género de ocho especies en Sudamérica. Se conocen cuatro especies en el Ecuador. Su nombre ha sido dado por su íntimo parentesco con la orquídea del género Chaubardia. Se encuentra distribuida a lo largo de los Andes, incluso desde Surinam al

Perú, incluyendo Centroamérica. Planta que se caracteriza por la falta de pseudobulbos. La base es cóncava en el labio con un delgado ápice. Es una planta epífita pequeña, vive en bosques nublados y húmedos. Tiene floración permanente (Pridgeon, 2001).

132

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 133

Chaubardiela dalessandroi m

(Zamora)

Dodson & Dalström

Chaubardiela dalessandroi

(Zamora)

Dodson & Dalström

133

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 134

CHONDRORHYNCHA Lindley

Altura: 600 – 1 800 msnm. Temperatura: 16 – 24°C. Especies: Hay 15 especies en el Ecuador. 2 en Zamora Chinchipe. 35 especies distribuidas desde México hasta Bolivia.

Género descubierto por Lindley en 1846. Su nombre se conforma del griego Chondros (cartílago) y Rhynchos (pico) debido a la forma de su membrana. La membrana se llama rostela. Este género se encuentra desde el sur de México pasando por Centro y Sudamérica hasta Bolivia. Es una planta epífita de bosques húmedos y nublados (Caneva, 1984).

El escapo floral es largo y delgado, de flores delicadas y llamativas; los pétalos son más anchos que los sépalos. El labelo es articulado al pie de la columna y forma un mentón. Florece por tiempo prolongado. Sus flores se abren sucesivamente. Planta sin pseudobulbos, hojas alargadas en forma de abanicos. Inflorescencia uniflora (de una sola flor). Tiene cuatro polinios (Dodson – Escobar, l996).

134

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 135

Chondroscaphe merana

(Zamora)

(Dodson & Neudecker) Dressler

135

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 136

DICHAEA Lindley

Altura: 100 – 2 800 m. Temperatura: 12 – 24°C. Especies: Existen 114 especies distribuidas en América Tropical, para el Ecuador se citan 43 especies de 4 grupos. 7 especies en la región.

HÁBITAT: Son plantas epífitas que habitan en bosque húmedo, en elevaciones comprendidas entre los 100 y los 2 800 metros. En los parajes especialmente favorables se han encontrado hasta trece especies creciendo juntas. ETIMOLOGÍA: Del griego dichaio (dividir en dos), por la disposición de las hojas en dos filas. DESCRIPCIÓN: Se caracteriza por la carencia de seudobulbos; los tallos alargados, seudomonopodiales, con hojas aproximadas, rigurosamente dísticas, dehiscentes o no en la base de la lámina; las inflorescencias unifloras, nacen, cada una, de un punto frente a la axila foliar; los sépalos y pétalos libres; el labelo en forma de ancla; la columna con lígula

debajo del estigma; cuatro polinios duros, adheridos a un estípite unido a un visicidio; el ovario liso o equinado. POLINIZACIÓN: Al parecer, todas las especies son polinizadas por los zánganos del género Euglossa o se autopolinizan. Lo cierto es que algunas de las especies producen flores de fragancia muy potente. El polinario queda adherido en el ápice de la cabeza del polinizador. CULTIVO: Pueden cultivarse en condiciones medias, sin dejar nunca que se sequen excesivamente. Las especies péndulas deben colocarse sobre placas de helecho arborescente, pero las de tallo erecto se pueden sembrar en materas (Dodson, 1999).

136

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 137

Dichaea hystricina

Dichaea trulla

(Zamora)

( Zamora)

Rchb.f.

Rchb.f.

137

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 138

Dichaea panamensis

(Zamora)

Dichaea ecuadorensis

(Zamora)

Lindl

Schltr.

138

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 139

Dichaea sp. (Zamora) Fotografía: Alexander Hirtz

139

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 140

DRÁCULA Luer

Altura: 6 00 – 2 400 msnm. Temperatura: 16 – 24°C. Especies: Hay 95 especies, 40 en el país.

Su nombre viene del latín drácula (dragoncito) por la imagen que evocan las flores de muchas especies (Dodson, Escobar, l996). Es un género descubierto en 1978 y separado del género Masdevallia. Hay 95 especies reconocidas y distribuidas en los bosques que van desde México al Perú; la mayoría de las especies se dan en Colombia y Ecuador; muchas especies son raras. El género se caracteriza por tener hojas finas, flores de colores llamativos, producidas por tallos alongados que emergen desde la parte baja. Sus flo-

res tienen tres sépalos. Su siembra necesita un buen drenaje (Pridgeon, 2001). Es una planta sin pseudobulbos y hojas delgadas. Las flores tienen sépalos anchos con antenas en los extremos de los pétalos. El labio se encuentra dividido en dos partes. Tiene dos polinios. En la especie Drá cula woolwardiaie los sépalos son grandes y peludos, se asemejan a colas, éstas cuelgan de sus tallos desde la base donde nace la planta. El nombre del género deriva de la apariencia de la flor. Existe una gama extensa de colores.

140

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Drácula gigas

Page 141

(Zamora)

Drácula chestertonii

(Luer) Luer

(Zamora)

Drácula cordobae

Luer

141

(Loja)

Luer

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Drácula mopsus

Drácula simia

Page 142

(Zamora)

(Zamora)

(F. Lehm. & Kraenzl.) Luer

(Luer) Luer.

142

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 143

Drácula vespertilio (Zamora) Fotografía: Alexander Hirtz

(Rchb.f.) Luer

Drácula woolwardiae (Loja) (F.Lehm.ex Kraenzl) Luer Fotografía:Alexander Hirtz 143

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 144

DRYADELLA Luer

Altura: 1 600 – 1 800 m. Temperatura: 12 – 22°C. Especies: Hay 9 especies en el Ecuador. 2 en la zona.

De este género las dos primeras especies en describirse fueron importadas de Brasil en 1866. Reichenbach las asignó a Pleurothallis en 1871 pero en 1881 las transfirió a Masdevallia. Todas las especies descritas posteriormente se incluyeron en Masdevallia hasta 1978, cuando se propuso para ellas el género Dryadella. Fueron separadas de Masdevallia 24 especies. En la actualidad se conocen unas 40 especies, distribuidas desde México hasta el sur de Brasil. (Rchb.f., Luer). Típicamente las plantas son pequeñas con ramicaules abreviados y fasciculados, y con pequeñas flores en escapos cortos. Las flores se distinguen por sépalos, a menudo provistos de caudas, uni-

dos en la base para formar una copa baja pero profunda y demarcada en la parte anterior por un callo transversal en cada sépalo lateral. Los pétalos son cortos y anchos, o multiangulados, a menudo en forma de hacha. La lámina del labelo tiene en su base una larga uña flanqueada por un par de lóbulos basales de la lámina. La columna lleva aletas en el ápice, y hay dos polinios. Aunque Dryadella en general nunca ha tenido gran acogida entre los aficionados y cultivadores, unas pocas de sus plantas se toleran frecuentemente por los apretados manojos de hojas en las que anidan las flores minúsculas (Dodson, 1999). CARLYLE A. LUER (DODSON, 1999)

144

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 145

Dryadella albicans (Loja) (Luer) Luer Fotografía: Alexander Hirtz

Dryadella simula

(Loja)

Dryadella aurea (Zamora) Luer & Hirtz Fotografía: Alexander Hirtz

(Rchb.f.) Luer

145

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 146

ENCYCLIA Hook

Altura: 1 000 – 1 800 msnm. Temperatura: 12 – 24°C. Especies: Se conoce, 242 especies, 26 en el Ecuador.

Es una orquídea caracterizada por la presencia de pseudobulbos largos, inflorescencia apical, flores que usualmente no exceden 6 cm de diámetro, el labio libre desde la columna que se alarga. Tiene 4 polinios. Su nombre viene del griego ENKYKLEIN, que significa alrededor. En referencia al labio cerrado de la columna. Son plantas, que en la mayoría de las especies, tienen pseudobulbos pronunciados de hojas largas y delgadas. Se las ubica en la zona subtropical seca en la provincia de Loja, formando grandes matas, aferradas a los árboles de la zona, en ceibos e higuerones; son de

crecimiento aéreo. De flores pequeñas pero abundantes. Algunas especies guardan un aroma exquisito. En la zona tropical húmeda del oriente, este tipo de orquídeas, en una gran cantidad de casos, carecen de pseudobulbos y son de crecimiento terrestre. Las flores de color verde limón, café atigradas, forman verdaderos enjambres. Otras especies son de color púrpura pálido, otras color café obscuro cuyo centro de la flor (labelo) es de color blanco. Las flores, por lo general, son pequeñas en todas las especies, no van más allá de los 6 centímetros de diámetro. (Caneva 1984)

146

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 147

Encyclia naranjapatensis (Loja) Dodson Fotografía : Alexander Hirtz

Encyclia angustíloba

Encyclia aff. oncidioides (Zamora)

Encyclia sp. (Zamora)

147

(Loja) Schltr.

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 148

EPIDENDRUM L.

Altura: 200 – 3 500 msnm. Temperatura: 8 – 26°C. Especies: Se conocen 950 especies, 324 en el Ecuador.

Su nombre se deriva de las voces griegas epi que significa encima, dendron, árbol, y es una planta que vive sobre los árboles (Caneva, 1984). Tiene sus estambres no superpuestos, hojas planas y no rugosas, inflorescencia terminal (rara vez lateral). El labio único de la columna está hacia arriba. Tiene 4 polinios. Las flores están agrupadas muy juntas, de 15 a 20, producidas a lo largo de la inflorescencia (Dodson, Escobar, 2002). Estas plantas, de tallo en forma de caña, se conocen en todo el trópico como plantas de jardín o como elementos familiares del paisaje situadas en los bordes de las carreteras. En otras latitudes ha aparecido este género y lo han cruzado obteniendo híbridos. Tienden a crecer en áreas abiertas, expuestas en vertientes rocosas y empinadas. En los taludes de las carreteras existen verdaderas poblaciones de Epidendrums que, muchísimas veces, producen híbridos naturales de variados colores y gran belleza. Por la similitud de sus características botánicas, y de la flor, es difícil diferenciarlos. Existen gamas asombrosas de colores. En nuestra región forma grandes

masas vegetales. Se las encuentra en variedad de climas y niveles. La dimensión de la planta varía enormemente según su especie. El Epidendrum secundum (flor de Cristo), con tallo en forma de caña, alcanza hasta los 3 m de altura, mientras existen otras especies enanas cuyo tallo no va más allá de los 3 cm. Sus flores también varían de tamaño siendo unas microscópicas, otras diminutas, otras medianas y otras gigantes. Algunas flores de Epidendrum no tienen 2 cm de diámetro, mientras que otras especies como la Epidendrum nocturnum tiene un diámetro de 15 cm, de punta a punta, entre sus pétalos. El cultivo se ha generalizado. En muchas casas se las encuentra adornando los grandes y pequeños patios y en los antepechos de las ventanas. Epidendrum nocturnum: esta variedad se encuentra desde los Estados Unidos hasta la América tropical. Los tallos crecen hasta 1 m de largo, usualmente más cortos y con bastantes hojas. En la parte superior las flores son blancas y crecen hasta 3 o 4 centímetros de ancho y son fragantes por la noche. La parte central del labio es largo como una lengua (Shutteworth, 1970).

148

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 149

Epidendrum macrocarpum

(Zamora)

Rich

Epidendrum ciliare (Zamora)

149

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 150

Epidendrum coronatum (Zamora)

Epidendrum lacustre (Zamora)

Epidendrum nannodes medusae (Loja) ( Rchb.f.) Pfitzer

Epidendrum longiflorum Kunth 150

Lindl.

(Loja y Zamora)

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 151

Epidendrum schistochilum (Zamora)

Epidendrum sp. B. (Zamora)

Epidendrum sp. (Zamora)

151

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 152

FERNANDEZIA Ruíz & Pavón

Altura: 2 000 – 3 000 msnm. Temperatura: 8 – 14°C. Especies: Hay 10 especies, 7 en el Ecuador.

Su nombre es dado en honor del botánico español Dr. Gregorio García Fernández. Es una planta monopodial, pequeña, sin pseudobubos, hojas dísticas, flores brillantes de color anaranjado, rosado o rojo, que estas salen desde las axilas de las hojas. Los sépalos y pétalos libres. Labio delicado, frágil, fino. Tiene 2 polinios (Dodson, 2001). Vive en América, en los Andes, pertenece a las micro orquídeas. Se la encuentra en los bosques de altura, fríos y húmedos de la provincia y particularmente del cantón Loja.

Permanentemente renueva sus flores que son de un color tomate encendido, con un diámetro floral de un centímetro, siendo la particularidad que el tamaño de la planta no va más allá de los 6 cm. Tiene tallo pequeño de hojas dísticas, trenzadas; habita en las ramas superiores de los árboles en contacto con el musgo que les proporciona humedad constante. La flor tiene un labelo pronunciado que contrasta con el tamaño de la misma (Caneva, 1984).

152

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 153

Fernandezia subbiflora (Loja) Fotografía: Alexander Hirtz

Ruiz & Pavon

153

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 154

GÓNGORA Ruíz & Pavón

Altura: 1 000 – 1 800 msnm. Temperatura: 14 – 24°C. Especies: Existen 56 especies; 15 en el Ecuador.

El nombre se debe a don Antonio Caballero y Góngora, obispo de Córdova (Caneva, 1984). Son plantas distribuidas desde México hasta Bolivia, con dos o tres hojas apicales, recubren pesadas vainas sobre las hojas. Tiene sépalos dorsales y pétalos pequeños. Son plantas epífitas que crecen en bosques húmedos. Tiene

pseudobulbos ovoidales acanalados, hermosas flores de curioso aspecto y de variados colores según las especies. La inflorescencia se desarrolla con numerosas flores en cada pedúnculo. Sus ramos florales pueden alcanzar hasta un metro veinte centímetros de largo y tener de 80 a 100 flores que, muchas de ellas, emanan exquisito aroma. (Pridgeon, 2001)

154

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 155

Góngora ecornuta (Zamora)

Jenny

Gongora rufescens (Zamora) Jenny

Góngora scapephorus (Zamora)Rchb.f .& Warsz

Góngora Sp. (Zamora)

155

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 156

HELCIA Lindl.

Altura: 1 200 – 1 800 msnm. Temperatura: 12 – 18°C. Especies: En el Ecuador existen dos especies.

El nombre viene del nombre del latín helcium (collar de caballo) en referencia a la aparición de una porción basal en el labio, antera y columna. Se caracteriza por la presencia de largos, cilíndricos y unifoliados pseudobulbos. Es de inflorescencia axilar. Sus flores con pétalos color amarillo con manchas rojas y labio blanco rodeando la columna. Tiene dos polinios. Es una orquídea de pequeño tamaño, pequeño cuya altura no va más de los 12 cm. Es de pseudobulbos alargados

en punta. Las hojas nacen desde el extremo superior de los pseudobulbos, son de forma lanceolada y de textura gruesa. Los pseudobulbos se encuentran apelotonados. Los tallos florales nacen desde los internudos de los pseudobulbos. El labelo es calloso formando un ángulo recto en relación a sus pétalos de forma estrellada. (Pridgeon, 2001) En la provincia de Loja se la encuentra en las elevaciones medias de Sozoranga, Las Chinchas y Celica. El diámetro de la flor no alcanza más de 5 cm.

156

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 157

Helcia brevis (Loja)

Helcia sanguinolenta

(Loja)

Lindl.

157

EPO 100-288

10/25/05

16:33

Page 158

HUNTLEYA Batem. Ex Lindl.

Altura: 500 – 1 200 msnm. Temperatura: 16 – 25°C. Especies: En general hay 10 especies. 6 en el Ecuador.

Es un género descrito por Lindley en 1834. Fue dedicado a J.T. Huntley, orquideólogo francés. La planta tiene unos 30 cm de altura y sus rizomas tienden a ser trepadores. La flor tiene pétalos y sépalos semejantes, colocadas en un mismo plano, son agudos y por eso la flor parece una estrella de cinco puntas. Es una planta sin pseudobulbos, de hojas en forma de abanicos y delgadas. Su inflorescencia es uniflora. Los lados

de la columna no son circundantes. Tiene cuatro polinios. El labelo es angosto con callo longitudinal poco prominente, termina en pico y está articulado a la columna. La textura de la flor es lisa y brillante, tanto que parece laqueada; es carnosa y duradera. Huntleya wallisii: flor de color chocolate rojizo, los pétalos y sépalos en la parte inferior son de color amarillo, mide unos 10 cm de diámetro. (Caneva, 1984)

158

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 159

Huntleya meleagris (Zamora)

Huntleya lucida (Zamora) (Rolfe) Rolfe

Huntleya wallisi (Zamora) (Rchb.f.) Rolfe Fotografía: Alexander Hirtz 159

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 160

KEFERSTEINIA Rechb. f.

Altura: 500 – 2 500 msnm. Temperatura: 8 – 14°C. Especies: Hay en total 39 especies. 15 en el Ecuador

Su nombre es dado en honor de Herr Keferstein, orquideólogo alemán que apareció en el siglo XIX. Es un genero caracterizado por la ausencia de pseudobulbos con hojas de delicadas vainas, inflorescencia axilar, los lados del labio usualmente rodean la columna. Cuenta con la presencia de un pedestal calloso en la base del labio. Tiene 4 delgados polinios. Son plantas de climas fríos, ubicadas a más de 2 000 metros de altura. Son pequeñas, tienen hojas lanceoladas, no

sobrepasan los 15 centímetros de altura. Flores de pétalos delicados, sutiles. La forma de la flor es especial, tiene color de sangre de ahí el nombre de la especie Kefersteinia sanguinolenta (Luer, 1983). Son plantas que se caracterizan por la ausencia de pseudobulbos. Las hojas se asemejan a vainas con inflorescencia en la parte axilar de la hoja. Se nota la presencia de un bonito pedestal calloso en la base del labio. Plantas epífitas, habitan entre los 700 a 2 300 m (Pridgeon, 1992).

160

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 161

Kefersteinia lojae (Zamora) Fotografía: Alexander Hirtz

Schltr.

Kefersteinia laminate (Zamora (Rchb.f.) Schltr.

Kefersteinia pellita (Zamora) Rchb.f. ex Dodson & D.E. Benn 161

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 162

LEPANTHES Sw.

Altura: 1 500 – 2000 msnm. Temperatura: 10– 22°C. Especies: Hay en total 712 especies, 314 especies en el Ecuador reportadas por Luer.

Su nombre proviene del griego Lepis (a escala) y Anthos (flor), refiriéndose a la relación del tamaño de la flor. Es un género con ausencia de pseudobulbos; los pétalos y el labio son transversales; el labio en la mitad forma un apéndice; no tiene pie en la columna. Tiene 2 polinios. Este género está distribuido desde México al Brasil, contiene sobre 800 especies. Las especies están caracterizadas por un rápido desarrollo aéreo. Tiene nervaduras envainadas y dilatadas. La inflorescencia se desarrolla simultáneamente en racimos de flores sueltas, no

muy largos. Sus hojas de forma elíptica. Son plantas difíciles de cultivar, requieren frío y humedad (Pridgeon, 1992). Poseen flores abiertas en una brác- tea y son agrupadas en el tallo. La altura de la planta alcanza hasta 50 centíme- tros. Abundan en climas fríos húmedos. También se las ubica en el subtrópico húmedo. Algunas de estas orquídeas son de flores diminutas de hasta 3 mm de diámetro y las hay, otras de hasta 5 centímetros de diámetro. (Luer, 1984).

162

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 163

Lepanthes auriculata

(Loja)

Luer

Lepanthes auriculata (Zamora) Fotografía: Alexander Hirtz

Luer

163

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 164

Lepanthes avicularia (Loja y Zamora) Luer & Hirtz Fotografía: Alexander Hirtz

Lepanthes d’allessandroi (Loja)

Lepanthes dodsonii (Loja) Luer Fotografía: Alexander Hirtz

Lepanthes elegantula (Loja)

164

Luer

Schltr

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 165

Lepanthes polystricha (Loja) Fotografía: Alexander Hirtz

Lepanthes portillae (Zamora) Fotografía: Alexander Hirtz

Lepanthes sp. (Loja)

Lepanthes jimenienses (Loja)

165

Luer & Hirtz

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 166

LYCASTE Lindl.

Altura: 600 – 2 600 m. Temperatura: 12 – 24°C. Especies: Hay en total 48 especies. 15 en el Ecuador.

Es parte de la mitología griega, dedicada a la bella hija de Príamo (Caneva, 1984). Se encuentra en Latinoamérica desde México al Perú, las hay también en las islas Caribeñas. Se desarrolla en sitios de entre los 600 a 2 400 msnm. Son plantas epífitas, de hojas que crecen en la base de los bulbos. Es un género caracterizado por tener flores grandes y atractivas. Los sépalos son mucho más grandes que los pétalos. Los pseudobulbos son ovoides y producen de una a tres hojas decifoliadas. En algunas especies, después de la caída de las hojas, queda una protube-

rancia parecida a espina; mientras se forman los nuevos pseudobulbos crecen los tallos florales con una flor unitaria. El labelo es trilobado. Las flores varían de tamaño según la especie y las dimensiones van desde los 4 hasta los 15 cm de diámetro como es el Lycaste longipetala. Lycaste longipetala, antes conocido como Lycaste gigantea, los pseudobulbos tienen de 3 a 12 centímetros de altura, con dos hojas; las flores son grandes, producidas unitariamente con un tallo floral de color rojo (Ortiz, Martínez, Misas, 1982).

166

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 167

Ida portillae (Zamora)

Ida gigantea (Loja)

( Lindl ) A. Ryan & Oakeley

167

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 168

Ida ciliata (Loja) (Ruiz & Pav.) A. Ryan & Oakeley

Ida cobbiana & Oakeley

(Loja)

(hort.ex.J.H.Veitch) A. Ryan

168

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 169

Lycaste macrophylla

Lycaste xitriophora

(Loja)

(Poepp & Ende.) Lindl.

(Loja) Linden & Rchb.f.

169

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 170

MASDEVALLIA Ruiz & Pavón

Altura: 600 – 3 000 msnm. Temperatura: 8 – 24°C. Especies: Hay en total, 500 especies. 226 en el Ecuador.

Su nombre fue dado en honor de José Masdevall, médico y botánico español (Caneva, 1924). Es un género de plantas epífitas, de rizoma corto y rastrero, sin pseudobulbos; tiene hojas erectas ovales, lanceoladas, atenuadas en largos pedúnculos; su tallo floral es erguido. Porta, en el extremo, una sola flor y raramente más. Las flores tienen sépalos soldados entre sí; a veces tienen pétalos y labelos pequeños (Suttleworth, 1970). Pertenece al grupo de las Pleurothallidinae que incluye Pleurothallis, Stelis, Restrepia. Las partes vistosas de sus flores tienen sépalos que forman en la mayoría de las especies, una “TAZA” o tubo sepalino. Los sépalos son alargados; forman “colas” de diversos colores y diferentes

longitudes; los pétalos son diminutos, escondidos entre la “taza”. El labelo es pequeño como los pétalos. Todavía se descubren nuevas especies. Casi todas las Masdevallias provienen de alturas elevadas, algunas veces mayores de 3 500 m. Por regla general, prefieren altos grados de humedad y ambiente fresco. La gama de variedades, especialmente de micro-orquídeas, es muy amplia a partir de los 2 300 hasta los 3 300 m, de morfologías muy llamativas que semejan mariposas, colibríes, insectos, pájaros, que hacen de ellas una singularidad manifiesta, a más de sus colores tan llamativos. Por regla general NUNCA DEBEN ESTAR COMPLETAMENTE SECAS (Richardson, 1978).

170

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 171

Masdevallia carruthersiana (Zamora) Lehm & Kraenzl

Masdevallia fractiflexa

Masdevallia don quijote (Zamora) Luer & Andreetta

(Zamora) F. Lehm. & Krezl

171

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 172

Masdevallia guttulata

(Zamora)

Masdevallia histrix (Loja)

Rchb.f.

Luer & Hirtz

172

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 173

Masdevallia hirtzii

(Zamora) Luer & Andreetta

Masdevallia instar (Loja) Luer & Andreetta

173

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 174

Masdevallia leucantha (Zamora)

Masdevallia panguiense

F. Lehm & Kraenzl.

(Zamora) Luer

174

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 175

Masdevallia polisticta (Loja y Zamora) Rchb.f.

Masdevallia strobelli (Zamora) H. R. Sweet & Garay

Masdevallia caudata (Zamora) Lindl.

Masdevallia trochilus (Zamora) Linden & André

175

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 176

Masdevallia sp. (Zamora)

Masdevallia whiteana (Zamora) Luer

176

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 177

Masdevallia colossus. (Loja)

Luer

Masdevallia xanthina

Rchb.f.

(Loja)

177

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 178

MAXILLARIA Ruiz & Pavón

Altura: 500 – 2 500 msnm. Temperatura: 6– 24°C. Especies: Se conoce en total 650 especies. 200 especies en el Ecuador

Su nombre proviene del vocablo maxillas que significa mandíbula, por el aspecto de la columna y el labelo. Son plantas de formas muy diversas, de pseudbubos desde casi esféricos hasta fusiformes algo aplanados, con una o pocas hojas apicales y tallos alargados con numerosas hojas alternantes. Su inflorescencia es lateral; cada flor posee escapo individual, sépalos y pétalos desplegados; el labelo generalmente articulado a la base, éste es entero o trilobado, columna recta o arqueada. Tiene 4 polinios.

Es un género que tiene más de 473 especies, que varían tremendamente de apariencia. Los pseudobulbos son estrechos y los hay hasta trepadores. Existen especies miniaturas que son esencialmente de altura y baja temperatura, hay otras bastante desarrolladas y pueden crecer hasta algunos metros. Los colores predominantes son el café obscuro, crema, púrpura; la dimensión de la flor va desde medio hasta 15 centímetros de diámetro. La mayoría de las especies son epí- fitas. En varias especies las flores son solitarias; en otras forman grupos (Pelham, 1958).

178

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 179

Maxillaria callichroma

(Zamora) Rchb.f.

Maxillaria portillae (Loja) Christenson & Mcmurray

Maxillaria flletcheriana (Zamora) Rolfe

179

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 180

Maxillaria grandiflora

Maxillaria lepidota

(Loja)

(Loja)

(Kunth) Lindl.

Lindl.

180

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 181

Maxillaria nasuta (Zamora)

Rchb.f.

Maxillaria nutans (Zamora)

Lindl.

Maxillaria perryae (Zamora)

181

Dodson

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 182

Maxillaria sanderiana (Zamora)

Maxillaria striata (Zamora)

Rchb.f. ex Sander

Maxillaria sp. (Zamora)

Rolfe

182

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 183

Maxillaria ochroleuca

Maxillaria suarezorum (Zamora)

Lood. Ex Lindl (Loja)

Dodson

Maxillaria luteo-alba

183

Lindl

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 184

MILTONIOPSIS Gog.-Leb.

Altura: 600 – 2 000 m. Temperatura: 12 – 18°C. Especies: Hay cinco especies en total y dos en el Ecuador.

Su nombre es dado por la similitud con el género Miltonia. Es un género distribuido desde México hasta el Perú. Existen cinco especies. La inflorescencia se produce desde las vainas aparentemente de las hojas, las flores tienen sépalos y pétalos libres. Son plantas de ambiente húmedo. Son plantas epífitas, con pseudobulbo débil y corto que soporta una o dos hojas largas y estrechas. Tiene inflorescencia simple basilar, formada por unas pocas flores con sépalos y pétalos extendidos, todos, sobre un mismo plano. El labelo es amplio y se extiende

sobre el plano de los otros segmentos. Las Miltoniopsis –dice Alberto Echevarría- son plantas de climas medios y fríos que habitan regiones que van de 800 a 2.000 metros. Las Miltoniopsis se ensanchan de tal manera que dan la apariencia de un pensamiento, por lo que se las conoce también con el nombre de las orquídeas pensamiento. Se las encuentra en las zonas terminales de la cordillera oriental hacia el sur, empezando desde Colombia hasta el Perú, pasando por Ecuador. Ocupa diversos niveles térmicos (Echevarría, Robledo, 1978).

184

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 185

Miltoniopsis vexillaria (Loja)

(Rchb.f.) God-Leb

Miltoniopsis vexillaria (Zamora) (Rchb.f.) God-Leb

185

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 186

MORMODES Lindl.

Altura: 300 – 1 300 msnm. Temperatura: 16 – 26°C. Especies: En general hay 71 especies. 7 especies en el Ecuador.

(Del griego = grotesca criatura. Género distribuido desde México hasta Brasil y Bolivia. Tiene hojas desiduas y la inflorescencia se produce en los nudos medios. Es una flor bisexual, el labio usualmente tiene tres lóbulos. Son plantas epífitas, de bosques húmedos. Habitan esencialmente en troncos muertos. Es un género compuesto de muchas especies semiterrestres y epífitas con

pseudobulbos fusiformes, hojas largas, lanceoladas, comprimidas y aún estriadas. Las flores poseen labelo y una columna retorcida. Las flores se recojen en racimos erectos. También se las conoce con el nombre de la “orquídea del pájaro volando”, como se aprecia en las siguientes ilustraciones. Incluye 67 especies (Caneva, 1984).

186

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 187

Mormodes andreettae (Zamora)

Dodson

Mormodes andreettae (Zamora)

Dodson

187

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 188

Mormodes rolfeanum (Zamora)

Mormodes andrettae (Zamora)

Linden

Dodson

188

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 189

Mormodes variabilis (Zamora)

Rchb.f.

Mormodes variabilis (Zamora)

189

Rchb.f.

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 190

MORMOLYCA Fenzl.

Altura: 700 – 1 800 msnm. Temperatura: 18– 26°C. Especies: 6 en total, 2 especies en el Ecuador.

Se conoce con el nombre griego MORMOLYCA, en referencia a la naturaleza fuerte de estas flores. Es epífita, con pseudobulbos hinchados y varios nudos, tiene hojas delgadas deciduas, con venas gruesas. La inflorescencia empieza desde los nudos de la mitad; contiene flores erectas y tallos más largos que los pseudobulbos, en un número de 8 a 11, en colores que van desde el café obscuro, amarillo y rojo vino (Dodson; C y Mármol; P l980). Es una planta procedente de la región oriental de clima cálido húmedo. La forma de la flor se asemeja a una corbata de lazo (partes sexuales de la flor).

Los pétalos son de color amarillo, con rayas rojo púrpura. Las flores de estructura muy llamativa, carecen de pseudobulbos; tiene hojas alargadas y son lanceoladas. Este género fue clasificado antes, en el género Cyrtoglottis. Estas especies se las encuentra desde México al sudeste de Brasil, pero más frecuentemente desde Venezuela hasta Bolivia, en bosques de alturas comprendidas entre 700 a 1.800 m. La polinización se presenta en todas estas especies. Las flores usualmente son de color amarillo y café amarillento de tamaño medio. Requieren luz brillante y temperaturas intermedias.

190

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 191

Mormolyca polyphylla (Zamora)

Garay

&

191

Wirth

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 192

ODONTOGLOSSUM Kunth

Altura: 1 200 – 2 300 msnm. Temperatura: 10 – 22°C. Especies: 175 especies, 83 en el Ecuador.

Su nombre proviene de las voces griegas odous, odontos que significa diente y glossa, lengua, aludiendo a los apéndices del labelo (Caneva, 1984). Son plantas epífitas con pseudobulbos más o menos ovoides, a menudo chatos, coronados por una o dos hojas estrechas, acuminadas y resistentes. Los pseudobulbos están, casi siempre, juntos, unos vecinos de otros en número considerable, poseen inflorescencia basilar simple o ramosa que porta una o más flores. Los sépalos son abiertos, todos iguales; sus pétalos abiertos, poco o sensiblemente más grandes que los sépalos.

En su totalidad, las orquídeas de este género pertenecen al continente americano y se hallan localizadas en las vertientes de la cordillera de los Andes. En el Ecuador sucede exactamente igual, encontrándose este género en toda la región Interandina. En la zona de estudio se encuentran en las regiones más altas, con regímenes pluviométricos elevados, a alturas que van desde 1 800 hasta 2 500 msnm, con lluvias que pasan los 2 500 mm. Se conocen 175 especies que abarcan a 83 en el país (Echevarría, 1978).

192

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 193

Odontoglossum alboroseum (Loja) (Dalstrom) Dalstrom

Odontoglossum astranthum (Loja) Linden & Rchb.f.

Odontoglossum cristattum (Zamora)Lindl

Odontoglossum cristatellum Rchb.f.. (Zamora)

193

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 194

Odontoglossum cruentum (Loja)

Rchb.f.

Odontoglossum harryanum (Zamora)

Rchb.f.

Odontoglossum epidendroides (Zamora) Kunth.

194

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 195

Odontoglossum praestans (Loja)

Odontoglossum sp. (Loja)

Odontoglossum lindleyanum. (Zamora) Rchb.f. & Warsz 195

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 196

ONCIDIUM Sw.

Altura: 200 – 2 400 msnm. Temperatura: 8 – 26°C. Especies: 600 en total, 120 en el Ecuador.

Su nombre se deriva de las voces griegas Onkos que significa tumor, aludiendo a las verrugas del labelo (Caneva, 1984). Son plantas epífitas con hojas directamente insertas sobre el rizoma, en las especies provistas de pseudobulbos. Su Tallo floral es casi siempre muy ramoso y llevan un gran número de flores. Los sépalos y pétalos son de disposición variable, con labelo trilobado (Shuttleworth, 1970). Existen 600 especies. La mayoría de ellas se encuentran en América del Sur, también las hay en América Central y

en el Caribe, unas pocas en la Florida; sus flores son blancas, rosadas, o de color café oscuro y van desde las micro o miniaturas hasta las grandes o macro. El tamaño varía desde medio centímetro hasta 10 centímetros de diámetro. La flor se parece a una mujer con vestido ancho, por lo que se la conoce como: La “orquídea de las damas bailando” (Caneva, 1984). Las especies de tallo erecto crecen mejor en macetas, las de inflorescencia ramificada, en cestas o sobre troncos.

196

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 197

Oncydium excavatun (Loja)

Lindl

Chamaeleorchis warscewiczii (Zamora) Rchb.f.

Zelenkoa onusta (Loja) (Lindl ) M.W. Chase & N.H.Williams 197

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 198

Caucaea phaleanopsis (Loja)

(Linden & Rchb.f.) N. H. Williams & M.W.Chase

Oncidium hypaematicum (Loja)

Oncydium tipuloides (Loja)

198

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 199

Oncydium sp. (Loja)

Oncydium klotzcheana (Loja)

Oncydium sp. (Loja)

Rchb.f.

Oncydium hypaematicum. (Loja)

199

Rchb.f.

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 200

OTOGLOSSUM Garay &

Altura: 2 000 – 3 000 msnm. Temperatura: 6 – 12°C. Especies: 8 en total, 3 especies en el Ecuador.

Se trata de un género proveniente de climas fríos, en altitudes superiores a los 2 000 m en la provincia y cantón Loja. Son de pétalos y sépalos soldados; los pseudobulbos son largos y aplanados, sus raíces son aéreas, estas orquídeas se aferran a los árboles, lateralmente. Las flores son de color café oscuro; púrpura sus pétalos, el labelo de color amarillo. Tienen una prominencia o callosidad, pareciéndose mucho al género Odontoglossum. El tamaño de sus flores varía desde los 3 hasta los 6 centímetros.

El grupo está formado por ocho especies del género Odontoglossum, pero recientemente separadas en el género Otoglossum y están distribuidas desde Costa Rica hasta el Perú. Son plantas de pseudobulbos ovoides; aplanados; su inflorescencia es recta y racimosa, con flores en la parte apical. Tiene flores con diámetros entre 4 y 6 cm, los pétalos y sépalos ondulados, el labio diverge filosamente desde la columna. Son plantas epífitas y terrestres (Pridgeon, 1992).

200

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 201

Otoglossum brevifolium (Loja)

(Lindl.) Garay & Dunst.

201

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 202

PAPHINIA Dodson.

Altura: 800 – 1 100 msnm. Temperatura: 16 – 24°C.

Es una planta epífita. Los pseudobulbos son cespitosos, con una quilla poco profunda en cada lado, rodeados por dos o tres vainas foliaceas. Tiene hojas finas, inflorescencia desde la base del pseudobulbo, pendiente, que contiene de tres a 7 flores de color blanco, blanco rosáceo con man-

chas rosadas, labio rosado con franjas blancas. Los sépalos y pétalos son pendientes. El labio con la base cuneiforme, ligeramente sagitada. Los lobos laterales falcados. El epiquilo oblongo, redondeado en el ápice. Columna alargada, con dos polinios amarillos. (de Dodson Marmol P, 1984)

202

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 203

Paphinia neudeckeri (Zamora)

Paphinia Herrerae (Zamora)

Jenny

Dodson

Paphinia Herrerae (Zamora)

203

Dodson

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 204

PERISTERIA Hook.

Altura: 800 – 1 400 msnm. Temperatura: 18 – 26°C. Especies: 11 en total y 4 en el Ecuador.

Su nombre deriva de las voces griegas peristera que significa paloma y hace alusión al aspecto de la columna. Los pseudobulbos son ovoides, carentes de acanaladuras; indumento terso y brillante. Las flores son globosas; de sépalos cóncavos los cuales se abren sólo parcialmente. Algunas especies son terrestres, de suelos ricos en humus. También las hay epífitas de bosque húmedo y mucha sombra. En el inicio del cultivo se debe tomar muy en cuenta el factor temperatura ya que ellas son muy sensibles. En nuestra región las encontramos predominantemente en la zona húmeda del Oriente, en sitios como el Pangui, cerca de las orillas de río Zamora, en los

Encuentros, en las zonas húmedas de Valladolid, entre los 900 y los 1 700 m. Sus flores se encuentran en racimos, en número de 30 y 40. Es una planta de pseudobulbos alargados y gruesos que terminan en largas hojas lanceoladas. Tienen flores grandes, carnosas y olorosas; sus lóbulos están junto al gimnosperma; dan la idea de un pájaro con las alas abiertas (Caneva, 1984). Es un género distribuido desde Centroamérica hasta el Brasil. Posee pesadas vainas en las hojas delgadas, los sépalos laterales van unidos a la columna del pie. Son plantas terrestres, crecen en bosques húmedos. Se cultivan mejor en cestas y necesitan abundante agua todo el año.

204

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 205

Peristeria lindennii (Zamora)

Rolfe

205

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 206

PHRAGMIPEDIUM Rolfe

Altura: 500 a 2 000 m. Temperatura: 12– 22°C. Especies: Existen 21 especies, 10 en el Ecuador.

Su nombre proviene del griego phragnos, aludiendo a las divisiones del ovario (Caneva, 1984). Es un género de crecimiento terrestre, con hojas basales en grupos. Tiene inflorescencia terminal alargada con flores producidas en secuencia, el labio en forma de zapatilla. Posee dos anteras, una a cada lado de la columna. Es la tropical zapatilla con estrechas y encrespadas hojas. Muchas flores pueden aparecer en sucesión en una sola variedad. Es una orquídea terrestre con un falso bulbo. Existen como una docena de especies que se encuentran desde México hasta el Brasil. La belleza extraordinaria de la flor hace que sea muy diferente a otras. La flor en forma de zapatilla varía en su presentación, unas tienen cordones lar-

gos, otras cordones cortos y algunas no los tienen. Su color va desde el amarillo claro hasta el café marrón. En la región oriental se encontró una especie de color tomate encendido, casi rojo, que pertenece a la especie Phragmipedium besseae. El tamaño de sus flores depende de la especie, las hay pequeñas como la P. pearcei de no más de 5 centímetros. Otras como la P. besseae de 6 a 10 centímetros de diámetro o la P. wallisii cuyas colas o cordones de zapato llegan a medir hasta 30 centímetros de punta a punta. Son plantas epífitas que carecen de pseudobulbos, en la región de estudio crecen en tierra. Se dan en regiones cuya altura oscila entre los 500 y los 2 000 m. Se requiere bastante agua para su cultivo (Caneva, 1984).

206

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 207

Phagmipedium dalessandroi (Zamora)

Phragmipedium reticulatum

Dodson & O. Gruss.

(Zamora)

(Rchb.f.) Garay

207

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 208

Phragmipedium longifolium (Zamora)

( Rchb.f. & Warzs) Rolfe

Phragmipedium Sp (Zamora)

208

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 209

Phragmipedium pearcei (Zamora) Senghas

Phragmipedium wallisii (Zamora)

209

(Rchb.f.) Rauh &

(Rchb.f.) Garay

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 210

PORROGLOSSUM Schltr. Altura: 1 600 – 2 800 m. Temperatura: 12 – 22°C. Especies: Hay 23 especies en el Ecuador, 3 en la zona.

como en Masdevallia, tienen los sépalos soldados entre sí y terminados por lo general en caudas delgadas. Los pétalos también son parecidos a los de Masdevallia, pero el labelo es bien diferente y es el rasgo más importante para reconocer el género. Este es un labelo sensitivo, con un callo irritable en la base, el cual es estimulado por la presencia del insecto, lo que pone en funcionamiento el mecanismo de unión entre el labelo y el pie de la columna, haciendo que el labelo se cierre con el insecto posado en él, el cual es lanzado contra la columna para efectuar la polinización. Pasado un rato, el labelo regresa a su posición normal. Se presentan dos polinios piriformes con viscidio. El fenómeno de la sensibilidad del labelo de Porroglossum fue observado por W. Bean desde el año de 1888 en plantas cultivadas en el Jardín Botánico de Kew. Reichenbach F. Schlechter y Kranzlin, quienes trabajaron casi exclusivamente con material herborizado, no se dieron cuenta de esta rara peculiaridad. Una nueva revisión del género fue publicada por el Dr. Carlyle A. Luer en Monographs in Systematic Botany, Missouri Botanical Garden, Vol. 24, Icones Pleurothallidinarum IV, Nov. 1987. (ESCOBAR, Rodrigo, Orquídeas nativas de Colombia, 1991)

Este género ha sido sucesivamente mal interpretado por los botánicos a través de los años. Las primeras especies que se descubrieron fueron descritas por el profesor H.G. Reichenbach F. quien las incluyó en Masdevallia. Rudolf Schlechter describió el género en 1920, pero incluyó en él únicamente a P. mordaz y a P. muscosum (Rchb.F. Schltr.), dejando en Masdevallia o transfiriendo a Scaphosepalum las otras especies que ya habían sido descritas. Porroglossum está distribuido en la zona andina de Sur América, desde Venezuela hasta Bolivia, con una mayor concentración de especies en el Ecuador. Es propio de zonas húmedas entre los 1 600 y 2 800 metros de altura, creciendo en asociación de varias especies de Masdevallia, Restrepia, Stelis y Pleurothallis. Las especies son de fácil cultivo, florecen profusamente y han llegado a ser muy populares entre los coleccionistas de miniaturas, pues teniendo inflorescencia sucesiva, casi todo el tiempo están en flor. Las plantas son pequeñas, de hojas coriáceas, con frecuencia verrucosas y con reticulaciones transversales. La inflorescencia es sucesiva, implantada en pedúnculos mucho más largos que las hojas, los que pueden ser hirsutos, verrucosos o glabros. Las pequeñas flores,

210

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 211

Porroglossum hirtzii (Zamora) Fotografía: Alexander Hirtz

Porroglossum schramii

(Loja)

Porroglossum hystrix (Loja)

Luer

Luer

211

Luer

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 212

Porroglossum portillae (Loja)

Luer

Porroglossum hystrix (Loja)

Luer

212

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 213

Porroglosum mordax (Loja)

Porroglossum schramii (Zamora) Fotografía: Alexander Hirtz 213

Luer

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 214

PROSTHECHEA Knowles y westc.

Altura: 0 – 2 800 m Temperatura: 10 – 26°C Especies: Este género cuenta con alrededor de 50 especies que se las encuentra desde Florida y México, hasta Bolivia. 20 especies reportadas para el Ecuador.

ETIMOLOGÍA: Su nombre deriva del griego PROSTO y ECHEA en referencia al diente medio en la columna como una especie de aguijón erecto y manchado. Se caracteriza por la presencia de SEUDOBULBOS rectangulares, tiene inflorescencia apical, las flores no exeden los 6 cm de diámetro, el labio es libre desde la columna que es más o menos alargada, sin pie, usualmente auriculada y con 4 fuertes polinios. El género PROSTHECHEA fue propuesto por KNOWELS y WESTCOTT en 1830, el género no fue aceptado por los taxónomos de orquídeas contemporáneos y las especies han sido descritas años después, habiéndoselas colocado en le género epidendrum.

Durante las últimas 3 décadas se las ha ubicado en el género ENCICLYA. Se puede decir que no se las ha acoplado bien y que aparentemente han sido excluidas y separadas. Recientemente el trabajo realizado por W.E. HIGGINS (1998), usando secuencia de DNA, ha reconocido que se han separado desde ENCICLYA y el antiguo nombre genérico fue válido. La mayoría de las especies de este género son fáciles de cultivar, siendo su cultivo parecido al de las cattleyas en macetas y regándolas frecuentemente. Pocas especies viven en las alturas, pero pueden ser beneficiadas en condiciones climáticas frías. (Dodson, 2002).

214

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 215

Dsyglossum edwardii (Loja)

(Rchb.f.) coger & Schildhauer

Prostechea fragans (Loja y Zamora)

(Sw) W.E. Higgins

215

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 216

Prostecheae grammatoglossum (Zamora) Fotografía: Alexander Hirtz (Rchb.f.)W.E. Higgin

Prostecheae pulcherrima (Loja y Zamora) Fotografía: Alexander Hirtz (Klotzsch) W.E. Higg

Prostecheae vespa. (Zamora)

216

(vell) W.E. Higgins

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 217

Prostecheae vespa (Zamora)

(Vell.) W.E. Higgins.

Prostecheae vespa (Zamora)

217

(Vell.) W.E. Higgins.

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 218

RESTREPIA Humbolt.

Altura: 2 000 – 2 400 msnm. Temperatura: 8 – 16°C. Especies: Hay en total 35 especies, 7 en el Ecuador.

Nombre dado en honor a José Manuel Restrepo, estudioso colombiano de la naturaleza de los trópicos (Caneva, 1984). Es un género que comprende unas 35 especies ordinarias de América tropical y subtropical. Tiene tallos delgados articulados, con una sola hoja. Usualmente produce flores solitarias que varían en su tamaño, son de color rojo encendido del tipo de los Pleurothallis,

los pétalos y sépalos son como delgados hilos y los sépalos inferiores son más grandes y van juntos (Caneva, 1984). Sus flores pueden llegar a medir, tomando en cuenta los extremos de las puntas de sus antenas, hasta 8 centímetros de diámetro R. antennifera. Las hojas y tallos están cubiertas por una serie de vainas. Los pétalos son membranosos en la base. La columna es delgada y arqueada con cuatro polinios.

218

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 219

Restrepia sp (Loja)

Restrepia contorta (Loja)

(Ruiz & Pav.) Luer

219

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 220

Restrepia contorta. (Loja–Zamora) (Ruiz & Pav.) Luer

Restrepia sp (Loja)

220

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 221

Restrepia contorta. (Loja)

(Ruiz & Pav.) Luer

Restrepia brachypus (Loja y Zamora)

221

Rchb.f.

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 222

RODRIGUEZIA Ruiz & Pavón

Altura: 500 – 1 500 msnm. Temperatura: 16 – 24°C. Especies: Existen 40 especies, 9 en el Ecuador.

Dedicada a Manuel Rodríguez, botánico y farmacéutico español (Caneva, 1984). Se la encuentra en zonas de Centro y Sud América. Incluye 40 especies. Es una planta epífita; tiene pequeños pseudobulbos, siempre tienen hojas simples, unas o más espigas arqueadas que portan muchas flores en columnas y de variados colores, delicadas y vistosas. Estas flores nacen debajo de los pseudobulbos. (Caneva, 1984).

Las flores son de color rojo, pequeñas, no sobrepasan los 2 centímetros de diámetro. Estas son las características de la especie de la región. Se nota la presencia de unifoliados o bifoliados pseudobulbos, con hojas parecidas a vainas. Las flores se producen desde las axilas de las vainas. Todas las especies son epífitas, de bosques húmedos.

222

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 223

Rodriguezia leeana

(Zamora)

Rodriguezia lanceolata (Zamora)

Rchb.f.

Ruiz y Pavón

223

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 224

Rodriguezia lehmannii. (Zamora)

Rchb.f.

224

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 225

Rodriguezia venusta (Zamora)

Rchb.f.

225

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 226

SCAPHOSEPALUM Pfitz.

Altura: 1 500 – 2 500 m. Temperatura: 14 – 22°C. Especies: Hoy pueden contabilizarse un poco más de 30 especies en el género. 24 especies en el Ecuador. 4 en la zona.

La primera especie de este género fue descubierta por Funck y Schlim en la mina de oro de La Baja, provincia de Pamplona (hoy Departamento de Santander). Fue descrita por el profesor Reichenbach en 1849 e incluida en Masdevallia, quizás por el parecido de las plantas y las caudas de los sépalos con las de este género. Otras siete descripciones fueron publicadas por el ilustre profesor entre 1855 y 1884. En 1888 Pfitzer estableció el género Scaphosepalum basado en las dos primeras descripciones de Reichenbach. En la década del 70 comenzó el Dr. Caryle A. Luer su febril e infatigable estudio de la subtribu Pleurothallidinae y sus continuos viajes al campo en busca de plantas han dado como resultado el descubrimiento de muchísimas especies nuevas. Las plantas de Scaphosepalum son muy similares a las de Masdevallia y variables en su tamaño, pues las hay desde unos cinco hasta unos treinta y cinco centímetros de altura. La inflorescencia es erecta o descendiente y siem-

pre sucesiva, produciendo innumerables flores (se han contado hasta 60) en un período que puede ser desde varios meses hasta dos o tres años según la especie. Las pequeñas flores no son resupinadas y los sépalos laterales hacia arriba, terminados por lo general en caudas delgadas, semejan las antenas de un insecto. Los pequeñísimos pétalos son carnosos y la columna es alada, fuertemente curvada, con un largo pie, y con el labelo articulado en la base de éste. El carácter más importante y distintivo del género es un callo prominente en forma de cojín en la superficie interior de los sépalos laterales hacia el ápice. Se presentan dos polinios piriformes con caudícula. La mayor concentración de estas especies está entre 1 800 y 2 200 metros. Son de facilísimo cultivo, crecen profusamente y, como se ha dicho, siempre están en flor. A pesar de que las flores son pequeñas, su forma exótica y extraña las ha hecho populares en los últimos años. (ESCOBAR, Rodrigo, Orquídeas nativas de Colombia, 1991).

226

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 227

Scaphosepalum triceratops

(Loja)

Scaphocepalum sp

Scaphosepalum swertifolium (Loja) Rchb.f. - Rolfe

Scaphosepalum sp. (Loja)

227

(Loja)

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 228

SCUTICARIA Lindley.

Altura: 1 200 – 1 500 m. Temperatura: 14 – 24°C. Especies: Hay una sola especie en el país.

Género descrito por Lindley en 1843. Su nombre proviene de la palabra griega Scuttia que significa látigo. Con una hoja terminal cilíndrica muy larga y un surco central. Tiene inflorescencias laterales cortas, con una o pocas flores. Las flores son de sépalos y pétalos desplegados. Su labelo es ligeramente trilobado, con callo notorio en la base y cuatro polinios. (Ospina, 1974). De pseudobulbos cortos, casi pasan por desapercibidos. Sus hojas tienen forma de látigo, son largas y colgantes. Existen especies conocidas en Venezuela, Brasil y las Guayanas.

En nuestra región oriental tenemos la especie cuyo nombre es el de Scuticaria salesiana. A esta orquídea se la encuentra en los bosques de la cordillera baja, en los sitios de Los Encuentros y en El Pangui, en la provincia de Zamora Chinchipe. Tiene hojas largas y surcadas de hasta un metro y medio de largo y de una a tres flores por mata. Son flores cerosas, de larga duración de alrededor de 5 a 10 centímetros de ancho, de color amarillo y café atigrado.

228

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 229

Scuticaria salesiana

(Zamora) Dressler

229

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 230

SCHOMBURGKIA Lindley.

Altura: 100 – 1 000 m. Temperatura: 16 – 26°C. Especies: Existe 17 especies; 3 tres en el Ecuador.

Dedicado al Dr. Schomburgk, geógrafo y naturalista que exploró la Guayana inglesa (Caneva, 1984). A este género de orquídea se lo ubica desde México hasta Sudamérica. Son plantas epífitas vigorosas, se presentan en dos tipos, algunos tienen dos hojas en forma cilíndrica y otras tienen pseudobulbos con tres o cuatro hojas. El tallo floral puede crecer hasta 2 metros de largo, son flores elegantes, pediceladas, dispuestas y fusiformes (Shuttleworth, 1970).

Las flores tienen hasta 12 centímetros de diámetro. Este género abarca 17 especies de orquídeas que se caracterizan por tener una larga nervadura, pseudobulbos en el tallo y varios internudos. La inflorescencia tiene forma de racimo con muchas flores en el ápice, los sépalos y pétalos libres con el labio conectado a la columna del pie. Las plantas son epífitas. Crecen en zonas húmedas entre los 100 y los 1 000 m.

230

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 231

Schomburgkia gloriosa(Zamora)

Rchb.f.

Schomburgkia splendida (Zamora)

231

Schltr.

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 232

SOBRALIA Ruiz & Pavón

Altura: 500 – 2 000 msnm. Temperatura: 12 – 24°C. Especies: Existen en total 95 especies, 30 en el país, 15 en Loja y Zamora.

Dedicado a Martín Sobral, botánico español (Caneva, 1984). Es un género con 95 especies terrestres, de tallos altos, con las hojas alternas y opuestas. Las flores son grandes y tienen sépalos y pétalos iguales; labelo bilobado, alargado en el ápice. Es un género nativo de América tropical. Los tallos son parecidos a una caña de bambú, las hojas tienen venas pronunciadas y alternadas; las flores son solita-

rias o en secuencia, usualmente grandes y bellas, pero la mayoría solamente duran 24 horas; en compensación, nuevas flores aparecen en períodos largos. Los colores son variables y van desde crema pálido al marrón, pasando por el rosado fuerte y por el rosado claro (Shuttleworth, 1970). El tamaño de las flores varía de acuerdo a la especie, fluctúa entre los 8 y 25 centímetros de diámetro.

232

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 233

Sobralia atropubescens (Zamora)

Ames & C. Schweinf.

Sobralia rosea (Zamora)Poepp. & Ende.

233

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 234

Sobralia klotzchea (Loja)

Rchb.f.

Sobralia klotzscheana (Zamora)

Rchb.f.

Sobralia sp (Zamora).

234

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 235

Sobralia ecuadorana (Zamora)

Sobralia powellii (Zamora)

Dodson

Schltr.

235

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 236

STANHOPEA Frost ex Hook.

Altura: 500 – 1 800 msnm. Temperatura: 18 – 24°C. Especies: Hay 60 especies en total; 15 en el Ecuador.

Dedicada a Philip, señor de Stanhope, presidente de la sociedad Médico Botánica de Londres (Caneva, 1984). Es un género compuesto por 60 especies; tienen pseudobulbos ovoidales, agrupados, que terminan en una gran hoja lanceolada y plegada, de consistencia cartilaginosa (de pergamino). De color verde más o menos oscuro y brillante, las flores son carnosas. Se presentan siempre con hojas unifoliadas de tamaño muy variable. Según las distintas, especies su longitud varía entre 40 y 80 centímetros; los pseudobulbos son mas bien pequeños, ovoides y surcados, la inflores-

cencia se desarrolla verticalmente, pocas veces es lateral (Mejía, 1978). Las flores son notables por su tamaño y por sus tonos de colores muy acentuados. Lamentablemente la vida de estas flores es efímera, dura de 2 a 3 días. Tienen sépalos anchos y cóncavos, sus pétalos son retrorsos. En el mesoquillo se desarrollan dos grandes “cuernos”. Comúnmente estas plantas crecen en las partes bajas de los árboles con relativa sombra, donde se escudan de las fuertes corrientes de aire. Son de medio ambiente húmedo. (Shuttleworth, 1970).

236

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 237

Stanhopea connata (Zamora)

Stanhopea florida (Zamora)

Klotzsch

Rchb.f.

237

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 238

Stanhopea sp (Zamora)

Stanhopea pozoi (Loja)

Dodson & D.E Benn.

Stanhopea sp. (Loja)

238

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 239

Stanhopea florida (Zamora)

Rchb.f.

Stanhopea jenishiana (Loja)

Kramer ex Rchb.f.

239

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 240

STELIS Sw. Altura: 500 – 3 400 msnm. Temperatura: 6 – 24°C. Especies: Existen 366 especies en América, 126 en el Ecuador y quizás 75 especies en Loja y Zamora.

Es de flores cortas, gruesas, pétalos transversos y labios en forma de columnas. Este género está caracterizado por la carencia de falsos bulbos, el ramal tiene envolturas lisas, en el ápice del ramal se nota la presencia de una unión entre el pétalo y el ovario. Los sépalos frecuentemente aplastan los pétalos que son muy cortos, truncando el labio menor. La columna es

muy corta, frecuentemente con estigmas de dos lóbulos circundando la antera. Muchas de las especies son epífitas, encontrándose a elevaciones de hasta 3 600 metros sobre el nivel del mar, pero son más comunes entre 500 y 2 500 mnsm. De estos largos y dificultosos géneros probablemente hay más de 600 especies en el mundo (Luer, 1983).

240

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 241

Stelis stupenda (Loja)

Stelis concinus (Zamora) Lindl Fotografía: Alexander Hirtz

Stelis guzanensis (Zamora) Fotografía: Alexander Hirtz 241

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Stelis argentata

Page 242

(Loja)

Lindl

Stelis cuencana (Loja)

Stelis sp. (Loja)

Stelis sp. (Loja)

242

Schltr.

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 243

Stelis sp. (Loja)

Stelis sp. (Loja)

Stelis ximenae (Loja) Luer & Hirtz Fotografía: Alexander Hirtz 243

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 244

TELIPOGON H.B.K.

Altura: 1 600 – 3 500 msnm. Temperatura: 8 – 22°C. Especies: Hay 105 especies en total y 100 en el país.

Es un género que se lo encuentra en Costa Rica, de Venezuela hasta Bolivia. Algunas especies son de tallos largos, otras de tallos cortos; su flor se parece a las moscas y a las mariposas; varía en color desde amarillo con rayas cafés en sus pétalos, hasta los sépalos de colores muy oscuros, con un labio color rojo púrpura, a veces afelpado (Shuttleworth, 1970).

En la provincia de Loja la encontramos en sitios como el cerro Villonaco, parroquia de Santiago, cantón Saraguro y en las cordilleras húmedas de la provincia de Zamora Chinchipe. El diámetro de sus flores varía según la especie y va desde los 4 a los 8 centímetros.

244

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 245

Telipogon penningtonii (Loja) Dodson & R. Escobar

Telipogon papillo

(Loja)

Telipogon andicola (Loja)

Rchb.f.

Telipogon pennigtonii (Loja) Dodson y R. Escobar

Rchb.f. & Warsz

245

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 246

TRICHOCENTRUM Poeppig & Endl.

Altura: 300 – 1 400 msnm. Temperatura: 14 – 24°C. Especies: Hay 30 especies, 4 en el Ecuador.

Es un género con 30 especies en la América tropical. Tiene hojas cortas, con pseudobulbos pequeños y usualmente solitarios. Sus flores son muy vistosas las mismas que se abren en sucesión y dan, por mata, hasta cinco o seis. Lo atractivo de esta orquídea, a más de sus colores, es el tamaño tan pequeño y diferenciado de la planta con relación a la estructura y tamaño de la flor, con un labio grande sobresalido que se extiende (Shuttleworth, 1970). Trichocentrum pulchrum. Es una planta pequeña, con flores de hasta una pulgada y media de diámetro. Los pétalos y sépalos están separados irregularmente.

Su color es un rojo amarillento, a veces crema amarillento con puntos rojo púrpura grandes. Crece preferentemente en zonas húmedas y cálidas. Trichocentrumm tigrinum. Es una especie de hojas moteadas, con manchas rojas. Los pétalos de las flores son de color amarillo verdoso con manchas moteadas color café (de ahí su denominación “tigrinum”). El labio es grande y de color blanco; la parte interna es de color roja, con una especie de aguijón muy corto (Shuttleworth, 1970). Sus hojas son aplanadas y carnosas, con inflorescencia en las axilas de las hojas. Son plantas de bosques secos y húmedos.

246

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 247

Trichocentrum pulchcrum (Zamora)

Poepp & Rchb.f.

Trichocentrum tigrinum (Loja)

247

Linden & Rchb.f.

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 248

TRICHOCEROS H.B.K.

Altura: 1 900 – 2 400 msnm. Temperatura: 8 – 14°C. Especies: Hay en total, cinco especies. Tres en el Ecuador

Es un género descrito por Kunth en 1845. Son plantas de hojas dísticas conduplicadas. Tiene inflorescencias terminales o laterales erguidas, con varias flores que abren en sucesión. En este género hay cinco especies, caracterizados por alargados rizomas, hojas planas; la inflorescencia lateral es alargada, tiene pétalos y sépalos libres. El labio es lobulado. Son plantas terrestres. A esta planta se la encuentra en las zonas frías. Es de tamaño pequeño, sus

flores hermosamente llamativas que se asemejan a moscas o abejas en vuelo. El labio tiene dos lóbulos, como una especie de antena. Su crecimiento es de tierra, es de colores café pálidos, café oscuros, hasta el sanguinolento. Hojas alternas. Desde su tallo largo nacen las raíces aéreas. Labelo y columna pilosos con cuatro polinios delgados (Ospina, 1974). El tamaño de sus flores no sobrepasa los 3 centímetros de diámetro incluyendo sus antenas, T. antennifera.

248

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 249

Trichoceros antennifera (Loja) (Humb. & Bonpl.) Kunth

Trichoceros platyceros (Loja) Fotografía: Alexander Hirtz 249

Rchb.f.

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 250

TRICHOPILIA Lindley

Altura: 1 300 – 2 200 msnm. Temperatura: 14 – 24°C. Especies: Hay 25 especies, 6 especies en el Ecuador.

rostrata de color crema amarillento. Trichopilia fragans. La especie de flores blancas es más pequeña que la especie de flores crema. Su tamaño varía entre los 3 y 5 centímetros de diámetro. A este género pertenecen 25 espe- cies distribuidas desde México hasta Brasil. Son plantas caracterizadas de unifolios, pseudobulbos aplanados, inflorescencia axilar, con flores sin espuelas, sépalos y pétalos libres; el labio está alrededor de la columna. Tiene dos duros polinios (Pridgeon, 2001).

Proviene de las voces griegas Trichos que significa pelo y Pilión, bonete o cofia, aludiendo a la posición de los estambres. Son plantas epífitas con pseudobulbos aplanados, coronados por una sola hoja erecta, formada de una o pocas flores. Los sépalos y pétalos libres y largos, ondulados, labelo enrollado en forma de corneta (Caneva, 1984). En la región se conoce dos especies de Trichopilia: una de color blanco que es la Trichopillia fragans y Trichopilia

250

EPO 100-288

10/25/05

16:34

Page 251

Trichopillia fragans (Loja)

(Lindl. ) Rchb.f.

Trichopillia occidentales (Loja) Christenson

Trichopillia albida. (Zamora)

251

Wendl.

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 252

TRICHOSALPINX Luer Altura: 1 000 – 2 500. Temperatura: 12 – 24°C.

ción a un género afín, Lepanthopsis, con tallos revestidos de vainas lepantiformes. El género Trichosalpinx se propuso en 1983 para las especies con vainas lepantiformes que se solían tratar en Pleurothallis. Trichosalpinx es uno de los tres géneros de las Pleurothallidinae que se distinguen por vainas lepantiformes en los ramicaules. Lepanthes se diferencia por los pétalos casi siempre transversalmente bilobulados; el labelo normalmente bilobulado, con el lóbulo central modificado en un apéndice; y, la columna sin pie. Lepanthopsis se diferencia por los pétalos simples, el labelo normalmente simple, y la columna corta, con antena apical y estigma comúnmente apical y bilobulado, o sea una columna parecida a la de Stelis, la que también es común en Platystele y en Pleurothallis subgénero Pleurothallis. En las especies hoy atribuidas a Trichosalpinx, el labelo y la columna varían, pero se pueden distinguir dos tipos generales que sirven además, de base para la división del género en dos subgéneros. En síntesis, las especies robustas, con la inflorescencia corta, y la columna longitudinalmente alada y más o menos dentada en el ápice cuculado, constituyen el subgénero Trichosalpinx; y, las delgadas, con inflorescencia alargada y columna delgada, el subgénero Tubella (LUER, Carlyle A., Orquídeas nativas de Colombia, Vol. IV, 1991).

Se conocen unas 100 especies, de amplia distribución en los bosques tropicales húmedos, desde el sur de México hasta el sur de Brasil, inclusive en las Antillas Mayores y Menores. Hay 41 especies en el Ecuador, 31 en la región. Entre las especies del género Trichosalpinx, la primera en describirse lo fue con el nombre de Dendrobium pussillum en 1816 por Kunth, tomando como base un ejemplar recolectado por Humboldt y Bonpland por el año 1802 cerca de Loja, Ecuador, donde la planta aún se da. Lindley la transfirió a Specklinia en 1836 y a Pleurothallis en 1842. Las especies del futuro género Trichosalpinx fueron reconocidas por Lindley al segregar las especies de Pleurothallis con “tallo lepantiforme” en sendas “subsecciones” llamadas Lepanthiformes, en tres de las “secciones” de su obra Folia Orchidacea pleurothallis en 1859. Estas especies fueron identificadas por el ramicaule revestido de varias vainas tubulares, nervadas e imbricadas, que se dilatan en la parte superior hasta una abertura oblicua, y tienen las nervaduras, así como los bordes engrosados de la boca, más o menos ciliados o escabrosos. En 1896 Cogniaux trató las especies de Trichosalpinx en la sección Lepanthiformes de las Orchidaceae en la Flora Brasiliensis de Martius. Reconoció también como otra sec252

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 253

Trichosalpinx sp. (Zamora)

Trichosalpinx berlineri (Zamora)

Trichosalpinx sp. (Zamora)

253

(luer) Luer

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 254

TRIGONIDIUM Lindley.

Altura: 800 – 1 200 msnm. Temperatura: 22 – 28°C. Especies: Hay 20 especies reconocidas en América Tropical y se las encuentra desde México hasta el Brasil.

Es un género descrito por Lindley en 1837. Son plantas con rizoma corto, seudobulbos ovoides surcados, con una o dos hojas terminales conduplicadas. Posee inflorescencias laterales. Cada flor dispone de un escapo individual largo y delgado, con sépalos acampanados en la base, desplegados y

retrorsos en el ápice; los pétalos miden sólo la mitad del largo de los sépalos. Usualmente tienen un punto brillante azuloso; labelo trilobado, pequeño; columna recta con cuatro polinios. Son plantas epífitas de bosques cálido-húmedos. (Ortiz Martinez Misas, 1982).

254

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 255

Trigonidium eggertonianum (Zamora)

Trigonidium grande (Zamora)

Bateman ex Lindl.

Garay

255

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 256

TRISETELLA Luer Altura: 1 000 – 2 000 m. Temperatura: 12 –24°C. Especies: 17 especies en el Ecuador. 6 en la zona. El número total de las especies reconocidas asciende hoy a veinte. 17 especies en el Ecuador. 6 en la zona. La primera especie de este género fue descrita en 1876 como Masdevallia triaristella por Reichenbach, quien estableció a la vez la nueva subdivisión Triaristellae. En total, cinco de las especies del género fueron descritas por Reichenbach en Masdevallia. En 1976 Brieger convirtió esta sección de Masdevallia en género, pero el nombre que le dio, Triaristella, ya había sido empleado para una espora fósil. El género se rabautizó Trisetella en 1980. Existe íntima afinidad entre las especies del género, las cuales al parecer se derivan todas de un complejo específico-común, variado y de amplia distribución-denominado Trisetella triglochin. Este complejo específico se encuentra en toda la zona de distribución del género, que abarca la América Central, los Andes, y las bajas tierras amazónicas de Venezuela, Brasil y Bolivia. En lo vegetativo, las plantas de todas las especies son pequeñas hasta diminutas. La inflorescencia es un racimo denso de pocas flores sucesivas. El sépalo dorsal está unido en la base de los laterales y tiene el ápice alargado en una cauda. Salvo en una especie ecuatoriana, los sépalos laterales están totalmente fusionados en un sinsépalo más o

menos cóncavo. En la mayoría de las especies las caudas de los sépalos laterales salen de los bordes laterales, de un punto cercano al ápice o debajo de él; Reinchenbach vio en estas caudas la forma de los cuernos del jabalí. En otras especies las caudas salen del ápice. En ciertas poblaciones del complejo T. triglochin se producen desde el ápice o bien de un punto más abajo. En algunas poblaciones de caudas aparecen más o menos engrosadas desde el centro para arriba, y a veces incluso claviformes. Los pétalos son membranosos y pequeños, aproximadamente del mismo tamaño que la columna, colocada entre ellos. Los labelos de todas las especies se parecen básicamente y tienen la lámina adornada de un par de quillas longitudinales, poco resaltadas. La base del labelo está hendida, con los lóbulos basales extendidos hacia atrás a los dos lados del pie de la columna, el cual se presenta en forma de quilla aplanada. La articulación, membranosa y delicada, se halla entre la punta de la superficie anterior del pie de la columna, y la base del labelo en la hendidura entre los lóbulos basales. La columna es semiterete, con la antera ventral y acapuchada. Hay un par de polinios. Entero y grande, el estigma ocupa la mayor parte de la superficie ventral de la columna (LUER, Carlyle A. Orquídeas nativas de Colombia. Vol. IV, 1991).

256

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 257

Trisetella pantex (Zamora)

(Luer) Luer

Trisetella didyma (Zamora)

Trisetella pantex (Zamora)

257

(Luer) Luer

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 258

XYLLOBIUM Lindley.

Altura: 1 000 – 2 400 msnm. Temperatura: 16 – 24°C. Especies: Hay 25 especies, 11 en el Ecuador.

café obscuro (Caneva, 1984). Este tipo de orquídeas se encuentran en las regiones que van desde México hasta el sur del Brasil. Tiene pseudobulbos cilíndricos y cortos, con racimos multiflorales. Los racimos se levantan desde la base de los pseudobulbos. Son plantas que necesitan bastante luz. Las especies son vigorosas y fácilmente cultivables.

Su nombre deriva de las voces griegas xilon que significa madera y bios, vida Es un género integrado por 25 especies oriundas de América tropical. Tiene pseudobulbos pequeños y alargados. El tallo floral es erecto y sale de la base del pseudobulbo con bastantes flores; las hojas son grandes y plegadas. Las flores son fragantes y de colores que van desde el blanco, crema, hasta el café rosado y

258

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 259

Xillobium leontoglossum (Zamora)

(Rchb.f.)Rolfe

259

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 260

Xillobium ornatum (Loja)

260

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 261

Xillobium sp. (Loja)

Xillobium variegatum (Zamora)

(Ruiz & Pav.) Garay & Dunst

261

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 262

ZOOTROPHION Luer

Altura: 1 000 – 1 500 m. Temperatura: 16 – 22°C. Especies: Hay 10 especies en el Ecuador, 3 en la región.

El género Cryptophoranthus fue creado en 1882 por Barbosa Rodríguez. Entre las especies posteriormente atribuidas a este género figuraban plantas, emparentadas o no, que presentan diversos grados de fusión entre los sépalos. Había allí especies con las puntas de los sépalos fusionados en algún grado para formar ventanillas laterales que dejan ver el interior de la flor, así como especies varias hoy incluidas en Pleurothallis, con o sin fusión o concrescencia entre las puntas de los sépalos. La adherencia o concrescencia de los ápices sepalinos ha evolucionado independientemente en varias especies, o grupos de especies, sin parentesco entre ellos. Un ejemplo es la bien conocida Pleurothallis tribuloides (Sw.) Lindley. Una ventanilla lateral se forma a cada lado de la flor para permitirle el ingreso al polinizador. En algunos casos la apertura es bien amplia, y en otros apenas una mirilla reducidísima. Dotadas de las características que exige el tipo, existen unas 28 especies con las puntas sepalinas connatas y el

labelo sagital; se parecen mucho en lo floral, pero forman dos grupos diferentes en lo vegetativo. Las especies de un grupo, entre ella P. fenestrata, tienen íntima afinidad con el subgénero Acianthera de Pleurothallis. Los ramicaules son cortos, con holgadas vainas tubulares en la base, y la inflorescencia nace del ramicaule, sin anillo. En 1982 las especies vegetativamente parecidas a Cryptophoranthus atropurpureus de Jamaica se segregaron en el género Zootrophion. En este grupo los ramicaudales suelen ser alargados, con varias vainas anchas y aplanadas, como las de Restrepia. La inflorescencia nace del ramicaule, con anillo. El nombre significa jardín zoológico o agrupación de animales, por la impresión de ferocidad que dan las flores con sus ojos tenebrosos y hambrientos. Se encuentran unas quince especies de Zootrophion, dispersas en el trópico americano, desde la América Central y las Antillas hasta el sur de Brasil. (LUER, Carlyle A., Orquídeas nativas de Colombia, Vol. IV, 1991).

262

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 263

Zootrophion griffin (Zamora)

Luer

Zootrophion ablonngifolium (Zamora) (Rolfe) Luer

Zootrophion oblongifo oblogifolium (Loja) (Rolfe) Luer 263

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 264

Géneros descritos de las Orquídeas de las Provincias de Loja y Zamora Chinchipe Ada Anguloa Bollea Brasia Catasetum Catleya Cochlioda Comparettia Cycnoches Cyrtochilum Chaubardia Chaubardiela Chondrorhyncha Dichaea Drácula Dryadella Encyclia Epidendrum Fernandezia Góngora Helcia Huntleya Kefersteinia Lepanthes Lyacaste Masdevallia Maxillaria Miltoniopsis

Mormodes Mormolyca Odontoglossum Oncidium Otoglossum Paphinia Peristeria Phragmipedium Porroglossum Prostecheae Restrepia Rodriguezia Scaphocepalum Scuticaria Shomburgkia Sobralia Stanhopea Stelis Telipogon Trichocentrum Trichoceros Trichopilia Trichosalpinx Trigonidium Trisetella Xylobium Zootrophion

264

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 265

265

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 267

Recomendaciones •

Mantener el recurso bosque como patrimonio nacional, mediante técnicas adecuadas de conservación acordes con la realidad nacional.



Incrementar el área silvícola del país mediante procedimientos adecuados de recuperación y sistemas de manejo y explotación racional de los bosques.



Concienciar al campesino, en particular al hombre de la ciudad y a los industriales sobre la necesidad de recuperar el recurso bosque.



Formular una legislación apropiada de conservación y de recuperación de este recurso.



Incentivar a los organismos oficiales y del sector público para que otorguen mayor atención y cuidado a los recursos naturales.



Observar la justa interrelación entre la teoría y la práctica para colaborar en la preservación del medio ambiente.



Hacer de la naturaleza el medio propicio para que los ecuatorianos tomen conciencia conservacionista, de apego a la naturaleza y al cuidado permanente de sus bosques.



Teniendo en cuenta que la región Interandina está destruida en su cubierta vegetal y la erosión avanza, es aconsejable, en la zona de estudio, restablecer su ecología, vegetalizar y reforestar, según sea el caso, dando preferencia a las especies nativas y aquellas que viven en su propio medio.



Que las instituciones encargadas de velar por el desarrollo provincial coordinen sus esfuerzos para encontrar soluciones y aplicarlas para la protección de los recursos renovables.



Que los sectores público y privado consigan mayores superficies destinadas a espacios verdes que sirvan de pulmones de la ciudad.



Que se empleen mayores esfuerzos y recursos económicos en instruir, concienciar y educar a los campesinos y agricultores de la región en el uso indebido del fuego, sembrando la idea de desechar esta práctica desastrosa para los intereses ecológicos.



Desarrollar planes, programas y proyectos destinados a desarrollar alternativas sustentables para el manejo de los recursos naturales como: realizar tala selectiva, quema controlada, sistemas agrosilvopastoriles, para evitar el avance de la desertificación.



Proteger la vegetación para que con ella no desaparezcan las orquídeas del planeta.



Aprovechar el vasto potencial de los recursos naturales ecológicos para usos turísticos y recreativos que hoy apenas empiezan a desarrollarse (Ministerio de Agricultura y Ganadería, 1980).

267

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 268



Realizar estudios bromatológicos de géneros de orquídeas, tales como: Cattleya para determinar su uso potencial como anticancerígeno.



Existe información insuficiente acerca de las orquídeas de las provincias de Loja y Zamora Chinchipe, por lo que se recomienda realizar estudios sobre la ecología de estas especies y su importancia en el medio.



Las autoridades competentes con el manejo del PNP deberían establecer medidas más estrictas para el control de desechos que los visitantes dejan durante su estadía en el Parque, así como concienciar a la comunidad sobre los problemas e importancia del PNP.

268

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 269

Apéndices Géneros y número de especies Orquidearias en el Ecuador Géneros y número de especies orquidearias en Loja y Zamora Chinchipe * Aa 9 especies, 1 L* * Acineta 2 especies, 1 L–Z. * Ackermania 3 especies, 2 Z. Ackersteinia 1 especie. Acostaea 3 especies. * Ada 9 especies, 5 L-Z. * Altensteinia 3 especies, 2 Z. * Anguloa 2 especies, 2 L-Z. * Aspasia 1 especie, 1 L. * Barbosella 4 especies, 2 L-Z. * Baskervilla 4 especies, 3 L-Z. * Batemannia 2 especies, 1 L. * Beloglottis 1 especie, 1 Z. Benzingia 2 especies. * Bifrenaria 1 especie, 1 L. Bletia 3 especies. * Bollea 3 especies, 1 Z. * Brachionidium 30 especies, 10 L-Z. Brachtia 2 especies. Braemia 1 especie. Brassavola 2 especies. * Brassia 7 especies, 4 L-Z. Buchtienia 1 especie. * Bulbophyllum 5 especies, 1 L. Caluera 1 especie. * Campylocentrum 16 especies, 3 L-Z. * Catasetum 12 especies, 7 L-Z. * Cattleya 3 especies, 2 L. Caucaea 1 especie. Caularthron 1 especie. * Chaubardia 3 especies, 1 Z. * Chaubardiella 4 especies, 2 Z. * Chondrorhyncha 14 especies, 4 Z. * Chrysocycnis 3 especies, 2 Z. Chysis 1 especie.

Cischweinfia 5 especies. * Cleistes 3 especies, 1 L-Z. Clowesia 1 especie. * Cochleanthes 3 especies, 1 Z. * Cochlioda 2 especies, 2 L-Z. Coeliopsis 1 especie. * Comparettia 3 especies, 3 Z. Coryanthes 5 especies. * Corymborkis 1 especie, 1 Z. * Cranichis 23 especies, 13 L-Z. * Crossoglossa 13 especies, 4 L-Z. * Cryptarrhena 2 especies, 1 Z. * Cryptocentrum 11 especies, 4 L-Z. Cybebus 1 especie. * Cyclopogon 26 especies, 6 L-Z. * Cycnoches 6 especies, 2 Z. Cypholoron 1 especie. * Cyrtidiorchis 2 especies, 1 L. Cyrtopodium 2 especies. Diadenium 2 especies. * Dichaea 42 especies, 7 Z. * Dimerandra 2 especies, 1 L. Dipteranthus 2 especies. * Dodsonia 2 especies, 2 Z. * Draconanthes 2 especies, 2 L. * Drácula 46 especies, 10 Z. * Dresslerella 2 especies, 2 Z. * Dressleria 2 especies, 1 Z. * Dryadella 9 especies, 2 L-Z. Dunstervillea 1 especie. * Elleanthus 56 especies, 33 L-Z. Eloyella 3 especies. Eltroplectris 4 especies. * Embreea 1 especie, 1 Z. * Encyclia 6 especies, 3 L-Z.

269

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 270

* Epidendrum 295 especies, 107 L-Z. * Epilyna 3 especies, 2 – Z. Epistephium 3 especies. * Eriopsis 3 especies, 1 L. * Erythrodes 28 especies, 7 L-Z. Eulophia 1 especie. * Eurystyles 4 especies, 2 Z. * Fernandezia 7 especies, 3 L-Z. Frondaria 1 especie. Galeandra 2 especies. * Galeottia 1 especie, 1 L-Z. * Gomphichis 10 especies, 5 L-Z. * Góngora 14 especies, 7 L-Z. * Govenia 4 especies, 2 L. Grobya 1 especie. * Habenaria 18 especies, 11 L. Hapalorchis 1 especie. * Helcia 1 especie, 1 L. Hirtzia 1 especie. * Hofmeisterella 1 especie, 1 L-Z. Homalopetalum 1 especie. Horvatia 1 especie. * Houlletia 4 especies, 2 Z. * Huntleya 6 especies, 3 Z. * Ionopsis 2 especies, 1 Z. Isochilus 1 especie. Jacquiniella 1 especie. * Kefersteinia 16 especies, 7 L-Z. * Koellensteinia 2 especies, 1 L. Konantzia 1 especie. * Lankesterella 1 especie, 1 L-Z. Leochilus 2 especies. * Lepanthes 288 especies, 85 L-Z. * Lepanthopsis 11 especies, 11 L-Z. Leucohyle 1 especie. * Liparis 11 especies, 7 L-Z. * Lockhartia 6 especies, 3 L-Z. * Lueddemannia 1 especie, 1 Z. * Lycaste 17 especies, 9 L-Z. * Lycomormium 3 especies, 1 Z. Macradenia 2 especies. * Macroclinium 7 especies, 1 Z. * Malaxis 20 especies, 8 L-Z. * Masdevallia 191 especies, 95 L-Z. * Maxillaria 185 especies, 83 L-Z. Mesadenella 2 especies. * Mesospinidium 4 especies, 1 Z. Microthelys 1 especie. * Miltoniopsis 2 especies, 1 Z. Monophyllorchis 2 especies.

* Mormodes 9 especies, 4 L – Z. * Mormolyca 2 especies, 1 Z. * Myoxanthus 27 especies, 12 L – Z. Myrosmodes 3 especies. Nidema 1 especie. * Notylia 8 especies, 4 L – Z. * Octomeria 8 especies, 2 L – Z. * Odontoglossum 47 especies, 33 L – Z. Oeceoclades 1 especie. Oerstedella 2 especies. * Oliveriana 2 especies, 2 L – Z. * Ocidium 131 especies, 30 L – Z. * Ophidion 2 especies, 1 Z. Orleanesia 2 especies. * Ornithocephalus 9 especies, 1 Z. Osmoglossum 1 especie. * Otoglossum 3 especies, 1 L – Z. * Pachyphyllum 14 especies, 11 L – Z. Palmorchis 6 especies. Paphinia 6 especies, 1 Z. Pelexia 7 especies. * Peristeria 4 especies, 1 Z. Pescatorea 7 especies. Pityphyllum 3 especies. * Platystele 50 especies, 9 L – Z. * Plectrophora 3 especies, 1 L – Z. * Pleurothallis 408 especies, 167 L – Z. * Polycycnis 6 especies, 2 Z. * Polystachya 5 especies, 4 Z. Ponera 1 especie. * Ponthieva 23 especies, 6 L – Z. Porphyrostachys 1 especie. * Porroglossum 23 especies, 3 Z. * Phragmipedium 8 especies, 5 L-Z. * Prescottia 6 especies, 5 L – Z. * Prosthechea 20 especies, 6 L – Z. Pseudocentrum 3 especies. * Psilochilus 1 especie, 1 Z. Psychopsis 2 especies. * Psygmorchis 4 especies, 4 Z. * Pterichis 9 especies, 6 L – Z. * Raycadenco 1 especie, 1 Z. Reichenbachanthus 1 especie. * Restrepia 16 especies, 5 L – Z. * Restrepiopsis 8 especies, 4 L – Z. * Rodriguezia 9 especies, 3 Z. * Rudolfiella 3 especies, 1 Z. * Rusbyelle 1 especie, 1 L – Z. * Salpistele 2 especies, 1 L. * Sarcoglottis 2 especies, 1 Z.

270

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 271

Sauroglossum 3 especies . * Scaphosepalum 24 especies, 4 L – Z. * Scaphyglottis 22 especies, 10 L – Z. Scelochilus 16 especies. * Schlimmia 4 especies, 1 Z. * Schomburgkia 2 especies, 1 Z. * Scuticaria 1 especie, - 1 Z. Selenipedium. Sertifera 4 especies. * Sievekingia 6 especies, 1 Z. * Sigmatostalix 17 especies, 2 Z. * Sobralia 39 especies, 2 L – Z. Solenidium 2 especies. Solenocentrum 1 especie. Soterosanthus 1 especie. * Sphyrastylis 2 especies, 1 Z. * Stanhopea 14 especies, 5 L – Z. * Stelis 118 especies, 8 L – Z. * Stellilabium 9 especies, 4 L – Z. * Stenia 4 especies, 2 L – Z. * Stenoptera 2 especies, 1 L. * Stenorrhynchos 6 especies, 4 L – Z. Stictophyllorchis 1 especie. Saurezia 1 especie. * Symphyglossum 1 especie, 1 L. Teagueia 3 especies. * Telipogon 40 especies, 16 L – Z. Teuscheria 5 especies. Trevoria 3 especies.

* Trichocentrum 6 especies, 4 L – Z. * Trichoceros 3 especies, 3 L. * Trichopilia 7 especies, 2 L. * Trichosalpinx 41 especies, 31 L – Z. * Trigonidium 5 especies, 1 L – Z. Trigonochilum 1 especie. * Triphora 3 especies, 1 Z. * Trisetella 17 especies, 6 L – Z . * Trizeuxis 1 especie, 1 Z. Tropidia 1 especie. Uleiorchis 1 especie. * Vanilla 7 especies, 1 Z. * Warmingia 1 especie, 1 Z. Warrea 1 especie. Warreopsis 2 especies. Wullschlaegelia 2 especies. Xerorchis 2 especies. * Xylobium 12 especies, 6 L – Z. * Zootrophion 10 especies, 3 Z. Zygosepalum 1 especie. 142 géneros Ecuador: 219 géneros, 3 041 especies. Loja y Zamora: 142 géneros,

1 119 especies.

JORGENSEN, P. M.; y León, S., 1999.

* L significa Loja; Z, Zamora y la cifra indica el número de especies existentes de cada variedad de orquídea.

271

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 273

Glosario ACICULAR

En forma de aguja.

ACUMINADO

Que termina en punta.

ADNATO

La unión de estructuras no semejantes, por ejemplo, pétalos con sépalos o estambres con pétalos.

AÉREO

Órgano que se desarrolla en el aire.

ALONGADO

Prolongado. Más largo que ancho

ANTENA

En ciertas orquídeas cada uno de las dos delicadas prolongaciones del ginostemo sensibles a un estímulo mecánico.

ÁPICE

Extremo o vértice superior. Lo opuesto a la base.

AXIAL

Relativo o situado en el eje.

BACILAR

Que tiene forma de bacilo (Bacilo = microbio en forma de bastoncillo).

BASILARES

Perteneciente o relativo a la base.

BILOBADO

Que tiene dos lóbulos (ver lóbulo).

BRÁCTEAS

Hoja pequeña que nace en el pedúnculo de algunas flores. Llámase así a los órganos foliáceos situados en la proximidad de las flores.

CALLO

Prominencia dura o protuberancia, muchas veces en engrosamiento de tejidos en la base del labio.

CARNOSO

Que tiene carne o la consistencia de la misma.

CARTILAGINOSO

Dícese de cualquier órgano o parte orgánica de consistencia semejante a la de los cartílagos de los animales.

CAUDÍCOLO

Porción del polinario el cual es usualmente delgado y fino y compuesto de visión con granos de polen que en muchos casos conecta el polinio al viscidio o estípite.

273

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 274

CESPITOSA

Con apariencia de césped, en orquídeas cuando los tallos o pseudobulbos se aproximan en su base.

CILIAR

Relativo a los cilios.

CILIO

Pelo muy fino.

CLASIFICAR

Disponer las plantas en grupos de acuerdo a un método.

CLAVIFORME

Derivado de CLAVA, de forma de clava o porra, a modo de palo grueso ensanchando hacia el ápice.

CLINANDRO

Una extensión de tejido de la columna en forma de capote que envuelve parcialmente la antera.

COLUMNA

Cuerpo formado por la unión de estambres y pistilos en las orquídeas también llamado ginostemo.

CONCRESCENCIA

Congénita. Partes orgánicas que pudiéndose hallarse separadas, están congénitamente unidas, como los pétalos de las corolas gamopétalas

CONNATO

Unión de estructuras semejantes, por ejemplo, pétalos con pétalos o estambres con estambres.

CORIACEO

De consistencia recia, aunque flexible como el cuero

CUCULADO

Forma De capuz o de cogulla, acapuchonados, órganos en forma de capuzete (acapuchonados=en en forma de capucha)

CUNEIFORME

De figura de cuña, o parecido a la sección longitudinal de una cuña.

DECIFOLIADA DECIDUA

Que se caen las hojas o pierden las hojas en determinados períodos.

DEHICENTE

Abrirse. Fenómeno a favor del cual un órgano cualquiera se abre espontáneamente llegando la oportunidad.

DENTADO

Se aplica a los órganos que tienen prominencias a manera de dientes.

DESERTIFICACIÓN O Transformar en desierto. DESERTIZACIÓN DISTICA

Dícese de las hojas, flores y espigas en dos hileras (dos filas).

ECOLOGÍA

Parte de la Biología que estudia la relación existente entre los organismos y el medio en que viven.

ENVÉS

Refiriéndose a las hojas. La cara inferior de ésta.

EPIDENDRUM

Aplicase a cualesquier vegetal que se cría sobre los árboles.

EPIQUILO

Parte apical del labio de ciertas orquídeas que es separada del mesoquilo o hipoquilo.

274

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 275

ERECTO

Que crece en posición vertical.

EROSIÓN

Desgaste del suelo, destrucción lenta producida por un agente físico. Deterioro lento y continuo.

ESCAPO

Tallo desprovisto de hojas que tiene las flores en su extremo.

ESPECIE

Conjunto de individuos que presentan una serie de caracteres idénticos dentro de una sola especie .Se pueden presentar variaciones de color, tamaño, forma.

ESPOLÓN

Una proyección tubular o en forma de saco en una flor, producido de la base del labio o sépalos, que generalmente contiene una glándula secretora de néctar.

ESTIGMA

Órgano de la flor que es adecuado para retener el polen y para que germine en él.

ESTÍPITE

Una conexión generalmente en forma de pedicelo, que une los polinios con el viscidio, da origen al rostelo, y no a la antera.

ESTRIADO

(De estría) cada una de las rayas en hueco que pueden tener algunos cuerpos.

FAMILIA

Unidad sistemática de las clasificaciones por categorías taxonómicas que comprenden un conjunto de géneros que tiene en común diversos caracteres importantes.

FASCICULADO

Haz o manojo agrupado formando a modo de un hacecillo

FLORA

Conjunto de las plantas de un país, región o zona cualquiera.

FOLIAR

Propio o relativo a las hojas.

FUSIFORMES

De figura de uso (Huso = instrumento que sirve para hilar, largo y estrecho).

GÉNERO

Unidad taxonómica compuesta por especies.

GIMNOSPERMA

Plantas que tienen las semillas al descubierto o por lo menos sin la protección de un verdadero pericarpio.

GLABROS

(Pelado, sin pelo) Desprovisto absolutamente de pelo o vello.

HABITAT

Características particulares del lugar de origen de una especie.

HÍBRIDO

Vegetal procreado por dos individuos de distinta especie o género.

HIPOQUILO

Parte del labelo, separado de la porción media del mismo, en mesoquilo, por una ceñidura más o menos marcada, y de consistencia carnosa.

IMBRICADA

(Figura de teje, y este del vervo imbricarse, cubrir con tejes)Dicese de las hojas y de los órganos foliáceos que estando muy próximos llegan a cubrirse por los bordes.

275

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 276

INDUMENTO

(Vestir) Conjunto de pelos, glándulas, escamas que recubren los diversos órganos de las plantas.

INFLORESCENCIA

Es el sistema de ramificación floral.

LABELO

El pétalo medio en las flores de orquídeas el cual es generalmente expandido como plataforma para el polinizador y generalmente de tamaño, forma y color muy distintos de los pétalos laterales.

LABIO

Ver labelo.

LEPANTIFORME

Vainas de los ramicaulos que son tubulares, apostillados, más o menos imbricantes, con la ostia oblicua y marginada.

LISO, SA

Sinónimo de glabro al referirse a una superficie sin pelos y sinónimo de entero al referirse a los bordes completamente uniformes.

LÓBULO

Parte redondeada y recortada de ciertos órganos vegetales, en las orquídeas las hojas.

LLASHIN

Helecho arbóreo Cyathea sp.

MEDIO

Elemento en el que vive un vegetal.

MERISTEMA

Tejido cuyas células crecen y se multiplican. El tejido meristemático es un tejido embrional del que se forman otros tejidos adultos.

MICROCLIMA

Desviación o variación del clima general de una región, debido a la topografía, la localización y los vientos.

MESOQUILO

Parte media del labelo, separada de la superior el epiquilo y la inferior, el hipoquilo, por ceñiduras más o menos pronunciadas.

MONOCOTILEDÓNEO Con un solo cotiledón, uno de los tres grupos en que se dividió el reino vegetal y al cual pertenecen las orquídeas. MONOPODIAL

Tipo de ramificación que se compone de un eje principal, en el ápice se encuentra el punto vegetativo y de cuyos lados nacen ramificaciones secundarias.

MULTIPLICACIÓN

En Botánica acción y efecto de multiplicar las plantas sin el concurso de los sexos. Equivale a reproducción.

NATIVO

Autóctono, indígena.

NÉCTAR

Jugo azucarado que segregan las plantas en determinados puntos de su organismo.

NERVADURA

Moldura saliente.

PARÁSITO

Organismo que se nutre a expensas de otro organismo vivo.

276

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 277

PEDÍCULO

Un soporte en forma de cabillo o rabillo que no sea pedúnculo, pedicelo o pecíolo.

PEDÚNCULO

Cabillo de las flores. Conjunto de los nervios de una planta.

PÉTALO

Cada una de las hojas que componen la corola de la flor.

PIE DE LA COLUMNA Extensión de la base de la columna con el labio conectado. PIRIFORME

(Forma de pera) Forma parecida a la de una pera.

PISO

Término empleado para indicar cada uno de los grupos de vegetación que se escalonan con relación a la altitud, humedad, etc.

POLEN

Polvo contenido en la antera ,el cual fecunda los óvulos a través del estigma para producir la semilla. En las orquídeas el polvo no se encuentra como polvo suelto sino en unas masas que constituyen los polinios.

POLINIO

Masa de granos de polen que comprende la totalidad de los de cada teca de la antera.

POLINIZAR

El hacer que el polen llegue al estigma.

POLINIZACIÓN

Fecundación por el polen.

PRECIPITACIÓN

Lluvia, acción y efecto de precipitar.

PROTOTIPO

Ejemplar auténtico.

PSEUDOBULBO

Engrosamiento bulbiforme de los internudos de la base del tallo

QUILLA

En las valvas de las diatomeas, expansión que sale del borde de las mismas.

RAMICAULES

(Ramícola) De ramo o ramas y cola = que se cría en las ramas.

REPRODUCCIÓN

Multiplicación.

RESUPINADO

Cualquier órgano invertido respecto a la posición que se considera normal, aplicado a las flores de orquídeas cuando el labio por torción del pedículo se halla orientada en posición inferior.

RETICULACIONES

Hecho a modo de red. Aplícase a las nervaduras.

RETRORSO

Del latín = hacia atrás. Dícese con respecto a las hojas, hablando de su posición, encorvándose al revés. Que vira hacia la parte basal.

RIZOMA

Tallo modificado subterráneo con apariencia de raíz, posee yemas y produce vástagos de hojas y flores y hecha raíces.

ROSTELO

Órgano de origen estigmático ,de tejidos estériles que sostiene en muchos casos, el viscidio de la antera.

SACO

Cavidad orgánica.

277

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 278

SÉPALOS

Nombre dado a las divisiones del cáliz de la flor.

SERPENTEADO

Ondulado.

SIGMOIDEA

Curvado dos veces sobre si misma, de forma parecida a una S.

SIMPODIAL

Tipo de ramificación que consiste en una serie de brotes desde la base y en que el eje está constituido por crecimiento sucesivo de meristemos laterales que cesan en su crecimiento apical.

SINSÉPALO

Unión de los dos sépalos laterales para formar un solo órgano.

SOLDADO, DA

Concrescente, unido.

SURCADO

Provisto de surcos.

TALLO

Pie sobre el cual estriban las partes que salen de la raíz.

TOXICO

Veneno.

TRILOBADO

Tres lóbulos (ver lóbulo).

UNGUICULADOS

Provisto de uña. Uña muy corta como la de los pétalos de rosa.

UNI

Prefijo que indica una sola unidad, ejemplo, Unifloro: con una sola flor; unifoliado: con una sola hoja.

UNIFOLIADAS

Que tiene una sola hoja.

BIFOLIADAS

Que tiene dos hojas.

VAINA

Base de las hojas más o menos ensanchadas que abraza total o parcialmente el órgano en que se inserta.

VENTRAL

(Vientre) Aplícase al lado que corresponde al vientre.

VERRUCOSA

Dicese de ciertas superficies orgánicas ornadas de menudisimas prominencias a modo de verruguillas microscópicas.

VISCIDIO

El órgano que forma una pequeña masa viscosa unida a los polinios mediante una caudícula o un estípite. La masa viscosa pega al agente polinizador.

VISCIN

Material estéril que une los granos de polen y forma los caudículos.

VITAL

Propio o relativo a la vida.

XERÓFITA

(SERÓFILO) se aplica a las plantas que viven en el medio seco.

ZONA

Región o parte de un órgano. Área geográfica (Fontquer, 1975).

278

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 279

Bibliografía AGUIRRE., Z. 2000. Análisis preliminar de la biodiversidad del Parque Nacional Podocarpus, Revista de difusión técnica y científica (Ec.), Jun., 24-31. AMERICAN ORCHID SOCIETY (AOS) 1971-1976-1977. Hand book on Orchid Culture, Cambridge, Massachussets, USA., American Orchid Society. 80 p. ,1977. American Orchid Society, Cambridge, Massachussets, USA., V. 46, p.1-12. APOLO, W. 1984. Plan de manejo Parque Nacional Podocarpus; Programa Nacional Forestal, Loja Ec., Ministerio de Agricultura y Ganadería, 38 p. ARANGO, A., 1978. El género Anguloa, Medellín, Col., In. Séptima Conferencia Mundial de Orquídeas, Editorial Colina, 19 p. ARANGO, C., 1978. Cattleyas colombianas, Medellín, Col., In. Séptima Conferencia Mundial de Orquídeas, Editorial Colina, 19 p. ARANGO, M., 1978. Antecedentes del cultivo de orquídeas en Colombia, In Séptima Conferencia Mundial de Orquídeas, Editorial Colina, 80 p. ARDLEY N., GROMAN J., VARLEY H 1977. El Jardín en casa Barcelona, Esp., Edit. Blume, 92-99p. BANCO CENTRAL DEL ECUADOR (BCE), 1978. Atlas del Ecuador, Quito, Ec., Editorial Banco Central del Ecuador, 80 p. CANEVA, S., 1984. Orquídeas principales géneros y especies: Su cultivo, Colombia, Editorial Albatros, 206 p. CAÑADAS, C., L., 1983. El mapa bioclimático y ecológico del Ecuador, Quito, Ec., Editores Asociados, 210 p. CARRIÓN, G. 1976. Nuestro Ecuador: Loja en Sol mayor, al este de la quimera. Vistazo (Ec.) 5, (3), 40-47. DODSON, C.H., 1978. Significado sobre los estudios sobre polinización de las orquídeas, Medellín, Col., Editorial Colina, In Séptima Conferencia Mundial de Orquídeas, 19 p. ________ DE DODSON, MARMOL, P., 1984. ICONES PLANTARUM TROPICARUM Orchids of Ecuador, Edit. Callaway Dodson, Sarasota Florida EEUU, Fascículo 1 – 2 – 3- 4- 5 – 6, 600 p.

279

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 280

________ ,1986. Los géneros de las orquídeas ecuatorianas, Publicación Museo Ecuatoriano de Ciencias Naturales, Quito Ec., Revista No. 5 año 7, 36 p. ________ ,ESCOBAR, R.R, 2 000. Orquídeas Nativas del Ecuador. Editorial Colina, Medellín Col., V.1, 207 p. ________ 2 001. Native Ecuadorian Orchids Editor, Soluciones gráficas, Quito Ec., V. 2., 4l9 p. ________, 2 002. Native Ecuadorian Orchids, Editorial Soluciones gráficas, Quito, Ec., V. 3., 651 p. ______ ECUADOR, MINISTERIO DE AGRICULTURA Y GANADERÍA (MAG), 1980. Áreas forestales, Informativo, 18 p. ECUADOR, PROYECTO DE DESARROLLO RURAL INTEGRAL SUR DE LOJA (DRI SUR LOJA), 1983, 8 p. ECHEVARRÍA, A.R.O., 1978. Variación del género Miltonia en Colombia, In Séptima Conferencia Mundial de Orquídeas, Editorial Colina, 19 p. ENCALADA R., M.A., 1983. Medio ambiente y desarrollo en el Ecuador: Reflexiones sobre un diagnóstico, Quito, Ec., Salvat Editores Ecuatorianos, 127 p. ESCOBAR R., R., 1983. Búsqueda en la cordillera Oriental de Colombia de dos especies perdidas, en orquideología, Medellín, Col., Editorial Sociedad Colombiana de Orquideología, V. 16., 63-125 p. FANFANI, A., ROSSI, W., 1990. Guía de orquídeas, España, Editorial Grijalva, p 23-24. FONQUER., 1975. Diccionario de botánica, Barcelona, Esp., Editorial Labor, 1244 p. GALLARDO, M.H., 1978. Presencia de Loja y su provincia, Loja, Ec., Editorial Casa de la Cultura Ecuatoriana Núcleo de Loja, 42 p. HAGSATER, E., 1984. Oerstedella viridiflora, una nueva especie colombiana, Medellín, Col., Editorial Sociedad Colombiana de Orquideología, V. 16, p. 191-196. HARTMAN, W., L., 1972. Introducción al cultivo de las orquídeas, México, Editorial Fournier, 109 p. HONORABLE CONSEJO PROVINCIAL DE LOJA. 2004. Plan Forestal Provincial de Loja. Diagnóstico Forestal, Ec, 28pp. JORGENSEN, P. M.; y LEÖN, S., 1999. Catalogue of the vascular plants of Ecuador, Botanical Garden Press Missouri Editors ll82 p LUER, C. A.; ESCOBAR, R., 1984. Especies del género Lepanthes en Colombia, Medellín Col., Sociedad Colombiana de Orquideología, Editorial Colina, V. 16, 129-153 p. ,1983. Dos Kefersteinia de Panamá en orquideología, Medellín, Col., Editorial Sociedad Colombiana de Orquideología, V. 16, 47 – 62 p.

280

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 281

,1984. Nuevas especies en las Pleurothallidinae en Colombia, Medellín, Col., Editorial Sociedad Colombiana de Orquideología, V. 16, 1-46 p. ,1984. Nuevas especies en las Pleurothallidinaes de Colombia, Medellín, Col., Editorial Sociedad Colombiana de Orquideología, V. 16, 154-190 p. LUER, C. A., y Otros, 1984. Orquideología. Medellín, Col., Editorial Sociedad Colombiana de Orquideología, V. 16 2, 129 – 196 p. MALDONADO, A. N., 1985. Contribución al estudio del clima de la provincia de Loja. Estudios Universitarios (Ec.), 1 (7-9), 11-40 p. MEJÍA, A. y ESCOBAR, R., 1978. Stanhopeas, Medellín, Col., In Séptima Conferencia Mundial de Orquídeas, Editorial Colina, 63 p. ORQUÍDEAS NATIVAS DE COLOMBIA, 1991, Coordinación y Supervisión: Rodrigo Escobar, Medellín, Col., Compañía litográfica Nacional, 4 uv. 609 p. ORTIZ V., P.; MARTÍNEZ M., A; MISAS V., G., 1982. Orquídeas ornamentales de Colombia, Bogotá, Col., Carlos Valencia Editores, 171 p. OSPINA, M., 1978. Introducción, Medellín, Col., Séptima Conferencia Mundial de Orquídeas, Editorial Colina, 7 p. OSPINA, M.; DRESSLER, R. Y. 1974. Orquídeas de las Américas, 124–127 p.

Bogotá, Col., Editorial ARCO,

PATZELT, E., 1985. Flora del Ecuador, Quito, Ec., Banco Central del Ecuador, 192 p. PELHAM, W. N., 1958. Orquídeas de México, México, Editorial Fournier, 107 p. PREDESUR, SUBCOMISIÓN ECUATORIANA, 1984. Guía comercial y turística de la Región Sur del Ecuador, Quito, Ec., Ed. Cosmopolita, 226 p. PRIDGEON, A., 2001. THE ILUSTRATED ENCICLOPEDIA OF ORCHIDS, Edit. By Foreword by Alsdair Morrison, OVER 1 100 SPECIES ILUSTRATED AND IDENTIFIED, 304 p. RESTREPO, J., 1978. El género Anguloa, In Séptima Conferencia Mundial sobre orquídeas, Medellín, Col., Editorial Sociedad Colombiana de Orquideología, 93 p. REYES, M. D., 1990. Curiosidades de las Plantas Santiago de Cuba, Editorial Oriente, 60p. RICHARDSON, D., 1978. Masdevallias, In Séptima Conferencia Mundial, Medellín, Col., Editorial Sociedad Colombiana de Orquideología, 63 p. ROMERO, F., 1983. Orquideología, Medellín, Col., Editorial, Sociedad Colombiana de Orquideología, V. 16, 125 p. SHEPPARD, G., 1985. La república del Ecuador, un estudio de geografía, geología y clima, Cuenca, Ec., Editorial Imprenta Gráficas Molina-Hernández, 234 p.

281

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 282

SHUTTLEWORTH, F.; HERBERT, S. Z.; GORDON W. D., 1970. ORCHIDS, A Golden Nature Guide Winsconsin, New York, USA, Ed. Western Publishing Company, 160 p. SOCIEDAD COLOMBIANA DE ORQUIDEOLOGÍA, s.f., Cultivo de orquídeas, Medellín, Col., Mundigráficas, 138 p. SUÁREZ, E., 1981. Programa nacional de conservación de suelos, Quito, Ec., Ministerio de Agricultura y Ganadería, 18 p. TEAGUE, W., 1977. A Natural Oncidiuym Hirbrid from Ecuador, Orchid Society Bulletin American, V. 46, 832 – 835 p. VALAREZO G., J. I., 1994. Mapa de suelos de la provincia de Loja, Plan hidráulico de Loja, Informe Sección Edafológica, 230 p. VALAREZO M., C., 1984. El recurso suelo en la región sur del Ecuador; Plan de Desarrollo de la Región Sur, PREDESUR, Tomo I y II, 232 p. VIVAR, F., 1983-1984. El Parque Universitario de Loja; Conmemoración del día del árbol, Universidad Nacional de Loja, Facultad de Ciencias Agrícolas, Escuela de Ingeniería Forestal, Departamento de Botánica, 22 p. WRIGHT, M., 1977. El jardín en casa, Barcelona, Esp., Editorial Blume, 256 p.

282

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 283

Índice CAPITULO I Descripción físico-geográfica de la región sur ...................................................................... 1.1. Generalidades .......................................................................................................................... 1.2. Distribución zonal de la provincia de Loja ............................................................................. Bosque primario ....................................................................................................................... Cubierta vegetal ...................................................................................................................... Tierras marginales ................................................................................................................... Pastos artificiales y naturales .................................................................................................. Cultivos permanentes y temporales ........................................................................................ 1.3. Distribución zonal de la provincia de Zamora Chinchipe ..................................................... Bosque primario ...................................................................................................................... Cubierta vegetal ...................................................................................................................... Cubierta vegetal baja .............................................................................................................. Uso actual y potencial del suelo ............................................................................................. Provincia de Loja .................................................................................................................... 1.4. Localización geográfica y astronómica de la región ............................................................... Localización ............................................................................................................................. Superficie ................................................................................................................................. Orografía ................................................................................................................................. Nudo de Sabanilla ................................................................................................................... Nudo de Numbala ................................................................................................................... Clima ....................................................................................................................................... Consideraciones sobre clima y ecología en la región ............................................................. Hidrografía – Cuencas, micro cuencas y subcuencas hidrográficas de la región sur oriental . Cuenca hidrográfica del río Puyango ..................................................................................... Cuenca hidrográfica del río Catamayo ................................................................................... Micro cuenca del río Playas ....................................................................................................

20 22 22 22 22 22 22 22 23 23 23 23 23 23 23 24 24 25 25 26 26 26 27 27 27 28

Micro cuenca hidrográfica del río Pindo-Calvas .................................................................... Cuenca hidrográfica del río Macará ....................................................................................... Microcuenca hidrográfica del río Alamor .............................................................................. Cuenca hidrográfica del río Zamora ....................................................................................... Subcuenca del río Yacuambi ................................................................................................... Subcuenca del río Nangaritza ................................................................................................. Cuenca hidrográfica del río Chinchipe .................................................................................. Aspectos geológicos. Breve descripción ................................................................................. Suelos ...................................................................................................................................... Suelos de la provincia de Loja ................................................................................................ Suelos de la provincia de Zamora Chinchipe ........................................................................

28 28 28 28 29 29 29 30 30 30 31

283

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 284

CAPÍTULO II Formaciones ecológicas de la región sur .............................................................................. 2.1 Formaciones ecológicas en la provincia de Loja .................................................................... Bosque Seco Tropical (b.ST) .................................................................................................. Monte espinoso Tropical (m.e.T) ........................................................................................... Bosque seco Pre Montano (bs-PM) ........................................................................................ Bosque seco Montano Bajo (b.s.MB) ..................................................................................... Bosque húmedo Montano (b.h.M) ......................................................................................... Bosque muy Seco Tropical (bms-T) ....................................................................................... Bosque húmedo Pre Montano (bh-PM) ................................................................................. Bosque muy húmedo Montano (bmh-M) .............................................................................. Bosque húmedo Montano Bajo (bh-MB) ............................................................................... Páramo pluvial Sub Alpino (p.p-SA) .................................................................................... 2.2 Formaciones ecológicas en la provincia de Zamora Chinchipe ............................................. Bosque muy húmedo Montano Bajo (bmh-MB) ................................................................... Bosque húmedo Montano Bajo (bh-MB) ............................................................................... Bosque bajo húmedo Pre Montano (bh-PM) ......................................................................... Bosque Muy Húmedo Pre Montano (bmh-PM) .................................................................... 2.3 Flora de la región sur cubierta vegetal .................................................................................... Cubierta vegetal ...................................................................................................................... Flora ......................................................................................................................................... Ecosistemas frágiles y estratégicas ........................................................................................... Los humedales ......................................................................................................................... Los páramos andinos ............................................................................................................... Zona áridas y secas .................................................................................................................. CAPÍTULO III Las Orquídeas .................................................................................................................... 3.1. Visión Histórica ...................................................................................................................... 3.2. Importancia ............................................................................................................................. 3.3. Descripción Botánica. Descripción ........................................................................................ Morfológica ............................................................................................................................ Monopodial ............................................................................................................................ Simpodial ............................................................................................................................... 3.4. Las Orquídeas y su residencia en el mundo ............................................................................ 3.5. Géneros comunes de orquídeas en los cantones de la región sur .......................................... Provincia de Loja .................................................................................................................... Provincia de Zamora Chinchipe ............................................................................................. 3.6. Realidades y fantasías de las orquídeas ................................................................................... 3.7. Personajes en la historia de la recolección de orquídeas en el Ecuador y la provincia de Loja ............................................................................................................. 3.8. Polinización y propagación de las orquídeas .......................................................................... 3.9. Destrucción de los recursos naturales y la incidencia en el hábitat de las orquídeas ............ Los bosques desaparecen ......................................................................................................... Crecimiento poblacional y colonización ................................................................................ CAPÍTULO IV Cultivo de las orquídeas ..................................................................................................... 4.1. La vida de las orquídeas y las formas de cultivo ..................................................................... Luz ........................................................................................................................................... Temperatura ............................................................................................................................

284

32 34 34 34 34 35 35 36 37 37 37 37 38 38 38 38 39 40 40 41 42 42 43 43

44 46 48 50 50 50 50 50 52 52 54 54 55 56 61 61 61

62 64 64 65

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 285

Humedad requerida ................................................................................................................. Ventilación .............................................................................................................................. Materiales y equipos ................................................................................................................ Macetas de barro ..................................................................................................................... Material requerido ................................................................................................................... Conservar y coleccionar ......................................................................................................... Fertilización ............................................................................................................................. Propagación ............................................................................................................................. El invernadero de casa ............................................................................................................ Tamaño .................................................................................................................................... Al interior ............................................................................................................................... La cubierta ............................................................................................................................... El piso ...................................................................................................................................... Las ventanas ............................................................................................................................ Tanque de agua ....................................................................................................................... Disposición .............................................................................................................................. Recomendaciones al construir el invernadero ....................................................................... Material necesario para los invernaderos en la siembra de plantas ....................................... Plagas y enfermedades de las orquídeas .................................................................................. Enfermedades .......................................................................................................................... Enfermedades producidas por hongos .....................................................................................

65 65 65 66 66 66 66 67 68 68 68 68 68 68 68 68 69 70 70 71 71

CAPÍTULO V Cultura popular y las orquídeas .......................................................................................... 5.1. Nombres populares de las orquídeas en la región ................................................................... 5.2. Las orquídeas: anécdotas, ritos y costumbres ..........................................................................

72 74 75

CAPÍTULO VI Parque nacional, jardín botánico y orquidearios de la región sur oriental ............................. 80 6.1. El Parque Nacional de Podocarpus ......................................................................................... 82 6.2. El Jardín Botánico “Reinaldo Espinoza” de la universidad Nacional de Loja ....................... 89 6.3. Orquideario de Yamburara (Vilcambaba) ............................................................................... 94 6.4. Orquideario de la Universidad Técnica Particular de Loja ................................................... 95 6.5. Orquideario del Pangui ........................................................................................................... 97 6.6. Orquideario municipal “Romelia María” ............................................................................... 98 6.7. Orquídeas Mendoza ................................................................................................................. 99 CAPÍTULO VII Descripción de géneros de orquídeas de las provincias de Loja y Zamora Chinchipe ............ 100 Ada .......................................................................................................................................... 104 Anguloa ................................................................................................................................... 105 Bollea ....................................................................................................................................... 108 Brassia ...................................................................................................................................... 110 Catasetum ............................................................................................................................... 112 Cattleya ................................................................................................................................... 116 Cochlioda ................................................................................................................................ 120 Comparettia ............................................................................................................................ 122 Cycnoches ............................................................................................................................... 124 Cyrtochilum ............................................................................................................................ 126 Chaubardia .............................................................................................................................. 130

285

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 286

Chaubardiela ........................................................................................................................... 132 Chondrorhyncha ..................................................................................................................... 134 Dichaea ................................................................................................................................... 136 Drácula .................................................................................................................................... 140 Dryadella ................................................................................................................................. 144 Encyclia ................................................................................................................................... 146 Epidendrum ............................................................................................................................. 148 Fernandezia ............................................................................................................................. 152 Góngora ................................................................................................................................... 154 Helcia ...................................................................................................................................... 156 Huntleya .................................................................................................................................. 158 Kefersteinia ............................................................................................................................. 160 Lepanthes ................................................................................................................................ 162 Lycaste ..................................................................................................................................... 166 Masdevallia ............................................................................................................................. 170 Maxillaria ................................................................................................................................ 178 Miltoniopsis ............................................................................................................................. 184 Mormodes ................................................................................................................................ 186 Mormolyca .............................................................................................................................. 190 Odontoglossum ....................................................................................................................... 192 Oncidium ................................................................................................................................ 196 Otoglossum .............................................................................................................................. 200 Paphinia .................................................................................................................................. 202 Peristeria .................................................................................................................................. 204 Phragmipedium ....................................................................................................................... 206 Porroglosum ............................................................................................................................. 210 Prostecheae ............................................................................................................................. 214 Restrepia .................................................................................................................................. 218 Rodriguezia .............................................................................................................................. 222 Scaphosepalum ........................................................................................................................ 226 Scuticaria ................................................................................................................................. 228 Schomburgkia ......................................................................................................................... 230 Sobralia ................................................................................................................................... 232 Stanhopea ............................................................................................................................... 236 Stelis ........................................................................................................................................ 240 Telipogon ................................................................................................................................. 244 Trichocentrum ......................................................................................................................... 246 Trichoceros .............................................................................................................................. 248 Trichopilia ............................................................................................................................... 250 Trichosalpinx ........................................................................................................................... 252 Trigonidium ............................................................................................................................. 254 Trisetella .................................................................................................................................. 256 Xylobium ................................................................................................................................. 258 Zootrophion ............................................................................................................................ 262 Recomendaciones ............................................................................................................... 267 Apéndices .......................................................................................................................... 269 Glosario ............................................................................................................................. 273 Bibliografía ........................................................................................................................ 279

286

EPO 100-288

10/25/05

16:35

Page 288

La Universidad Nacional de Loja, consecuente con su misión institucional, apoya la publicación de esta importante obra como contribución al conocimiento de las maravillas de nuestro país y de nuestra región, como forma de construir una propia identidad.

Max Gonzáles M. RECTOR - UNL