Diciembre 2012 Informe final del proyecto “Reflexión pedagógica en base a casos y dominio de lenguaje académico en
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Diciembre
2012
Informe final del proyecto “Reflexión pedagógica en base a casos y dominio de lenguaje académico en la formación inicial docente: una propuesta de medición para informar a las trayectorias formativas” Soledad Concha Carolina Hernández Francisca del Río Francisca Romo Lorena Andrade
Facultad de Educación, UDP
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INDICE DE CONTENIDOS I. Introducción .......................................................................................................................................... 3 II. Resumen del proyecto ..................................................................................................................... 3 III. Marco teórico ..................................................................................................................................... 4 3.1 La reflexión pedagógica en base a casos ..................................................................... 4 3.2 Alfabetización pedagógica ................................................................................................. 6 3.3 Reflexión pedagógica y escritura: los géneros escritos de la formación inicial docente ................................................................................................................................. 7 3. 4 La evaluación de la reflexión pedagógica escrita .................................................... 8 3.5 Lenguaje académico ........................................................................................................... 10 IV. Objetivos específicos: ................................................................................................................... 11 V. Encuesta a formadores de profesores .................................................................................... 11 VI. Marco metodológico del estudio ............................................................................................. 14 6. 1 Procedimientos de construcción del instrumento y de las rúbricas ........... 14 6.1.1 Resumen de la construcción del instrumento RPEC y de su rúbrica ........ 14 6.1.2 Procedimientos de construcción y validación de la rúbrica Lenguaje Académico ..................................................................................................................................... 23 7. Estudio Final ..................................................................................................................................... 35 7.1 Procedimientos de selección de la muestra ............................................................... 35 7.2 Procedimientos de toma de datos ............................................................................... 36 7.3 Procedimientos de análisis de datos ............................................................................. 36 7.5 Resultados del estudio principal .............................................................................................. 37 7.5.1 Análisis comparativos entre Universidades ............................................................ 37 Análisis de relación entre variables ..................................................................................... 42 7. Conclusiones ...................................................................................................................................... 42 8. Discusión .............................................................................................................................................. 45 Anexo 1: prueba de reflexión pedagógica en base a casos ................................................. 51 Anexo 2: rúbrica de lenguaje académico (LA)…………………………………………………..52 Anexo 3: rúbrica de reflexión pedagógica en base a casos………………………………...54 Anexo 4: resumen del proceso de juicio de expertos para la revisión y validación de la rúbrica RPEC……………………………………………………………………………………………55 Anexo 5: Manual de Aplicación del instrumento………………………………………………..56
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I. Introducción El informe que se presenta contiene los resultados finales del proyecto “Reflexión pedagógica en base a casos y dominio de lenguaje académico en la formación inicial docente: una propuesta de medición para informar a las trayectorias formativas”, financiado por el Consejo Nacional de Educación. En este estudio se entiende la reflexión pedagógica en base a casos, como la capacidad para analizar los fundamentos teóricos de las decisiones pedagógicas observadas en una clase dictada por otro profesor, usando para ello ‐‐de manera articulada‐‐ los distintos saberes relevantes a la pedagogía: disciplinarios, de didáctica general, de didáctica específica, del desarrollo de los niños, de los contextos de la enseñanza. Como se discutirá en este informe, el concepto de reflexión pedagógica ha recibido extensa atención en la literatura especializada y ha sido abordado desde encuadres teóricos diversos. Este trabajo se funda particularmente en la evidencia recogida en estudios que comparan la cognición de los profesores novatos y la de los expertos, según los cuales una de las características diferenciadoras clave de ambos grupos es la capacidad de analizar una sala de clases en base a conocimientos especializados, particulares a la profesión docente. Así también, el estudio se basa en trabajos que proponen que la escritura es un medio privilegiado para evaluar y para enseñar a los estudiantes a reflexionar pedagógicamente durante su formación. Respecto de su contenido, el Informe incluye una descripción de las actividades realizadas durante el segundo semestre del año 2012, así como la respuesta a las observaciones al primer informe realizadas por la contraparte: construcción de rúbrica de lenguaje académico, marco teórico revisado, toma de muestra principal, codificación, análisis de resultados y construcción de manual de aplicación del instrumento. II. Resumen del proyecto En este estudio se diseñó y aplicó un instrumento para evaluar el desempeño en reflexión pedagógica en base a casos y lenguaje académico de estudiantes de último año de la carrera de Pedagogía en Educación Básica. En el estudio principal, 82 estudiantes, provenientes de tres universidades diferentes de Santiago, analizaron por escrito una clase de Lenguaje y Comunicación, presentada en un video de aula. Los productos fueron codificados para determinar la calidad de la reflexión pedagógica en base a casos que realizaron los estudiantes, así como el dominio que poseen de los recursos lingüísticos propios del lenguaje académico. Por último, se analizó una posible relación entre ambas medidas.
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Un estudio piloto antecede a la investigación aquí descrita, que tuvo el objeto de explorar y validar los procedimientos metodológicos. Parte clave del piloto lo constituyó la consulta a formadores de profesores nacionales e internacionales y docentes de reconocida trayectoria, para fijar una expectativa de desempeño de los estudiantes en estudio, la cual se recoge en la rúbrica de Reflexión pedagógica en base a casos elaborada por las investigadoras. Los datos del estudio principal se analizaron para determinar el comportamiento de los instrumentos, para dilucidar niveles de desempeño y para explorar la hipótesis de que el dominio de lenguaje académico pudiera explicar los desempeños en reflexión pedagógica en base a casos. Un objetivo clave que se proyecta para este trabajo es que el instrumento diseñado pueda ser utilizado en distintas instituciones formadoras de profesores, para evaluar la capacidad de sus estudiantes para reflexionar pedagógicamente en base a casos. En ese sentido, sin embargo, es importante destacar que el presente es un estudio aún exploratorio, pues si bien se ha construido un instrumento válido y confiable, resta su aplicación en otros contextos y por otros actores para determinar su replicabilidad en condiciones distintas a la de esta investigación. III. Marco teórico La reflexión pedagógica ha recibido gran atención en la literatura durante décadas, por su asociación con la enseñanza efectiva. Los estudios, sin embargo, son diversos respecto de la manera en que conceptualizan esta noción, lo que pone en cuestionamiento su valor, tanto como la posibilidad de identificar métodos sistemáticos para desarrollar este tipo particular de razonamiento entre los futuros profesores. Un cuerpo reducido de estudios ha explorado la idea de que la escritura es un buen medio para desarrollar la reflexión pedagógica en programas de pedagogía. Esta propuesta se basa en la noción de que escribir no es meramente un medio de comunicación, sino también una oportunidad para construir y transformar nuestros conocimientos. Se ofrece aquí una revisión de trabajos teóricos y empíricos que sustentan la propuesta de que la escritura puede ser un medio para aprender a reflexionar pedagógicamente, tanto como para evaluar y monitorear el desarrollo de esta capacidad en los profesores en formación. Esta revisión incluye asimismo una descripción de la noción de lenguaje académico, para dar sustento teórico a la exploración de una relación entre la capacidad para reflexionar pedagógicamente por escrito y el dominio de recursos sofisticados de la lengua y del discurso. 3.1 La reflexión pedagógica en base a casos Una revisión de la teoría disponible sobre reflexión pedagógica revela que se trata de una preocupación central en el área de Educación. Los estudios que exploran la idea de que los futuros profesores deben aprender a pensar reflexivamente sobre
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la enseñanza se basan en distintas conceptualizaciones: reflexión crítica pedagógica (Harrington et. Al. 1996), reflexión práctica (Luk, 2008), habilidad reflexiva (Braun & Cumpler, 2004), pensamiento pedagógico reflexivo (Lee, 2005), razonamiento pedagógico (Youngs & Bird, 2010; Herman, 1998) y enseñanza reflexiva (Silcock, 1994). Esta heterogeneidad teórica ha sido discutida por distintos autores, quienes sostienen que, a pesar de la relevancia de su objeto de estudio, el concepto se ha vuelto un tanto confuso en la literatura disponible (Mclellan, 2008; Silcock, 1994; Lee, 2005; Braun & Crumpler, 2004). La mayoría de los artículos relacionados con reflexión pedagógica hacen referencia al razonamiento pedagógico de Shulman (1987) y a las reflexiones en la práctica y sobre la práctica de Schön (1983). Los dos autores estudian la noción de reflexión en relación con la práctica profesional y comparten la idea de que los profesores pueden reflexionar sobre sus decisiones instruccionales, lo que a su vez les permite mejorar su práctica. Shön (1983) es en general referido por su propuesta de que los expertos pueden reflexionar sobre su conocimiento especializado durante la práctica y fuera de ella. Mientras que en el primer caso la reflexión da sustento a una práctica experta, en el segundo, permite revisar las decisiones y mejorar la práctica en el futuro. El razonamiento pedagógico de Shulman (1987) es específico de la enseñanza y ocurre cuando los profesores razonan sobre cómo transformar su conocimiento disciplinario de modo que pueda ser comprendido por los estudiantes. Para sustentar la toma de decisión y el desarrollo profesional, los profesores deben apoyarse en una base sólida de conocimiento (Darling Hammond & Bransford, 2005; Berliner, 1986; Ben‐Peretz, 2011). La propuesta es que los eventos del aula pueden ser entendidos y analizados por referencia a distintas fuentes de conocimiento especializado, las que deberían estar disponibles para la reflexión. Darling Hammond & Bransford (2005) proponen que la reflexión durante la enseñanza requiere que los conocimientos característicos de la enseñanza estén representados en dos niveles: esquemas que sustentan acciones rutinarias y eficientes y conocimiento profundo que sustenta la innovación y el pensamiento creativo, cuando los esquemas no sean suficientes para lidiar con las preguntas de los estudiantes u otras conductas inesperadas. Los profesores novatos no serían tan capaces de reflexionar en la acción, como sí lo son los expertos. Esto se debería a una base precaria de conocimiento, a la falta de habilidades metacognitivas, o al hecho de que las complejidades de la enseñanza no dejarían espacio de atención disponible para la reflexión (Darling Hammond & Bransford, 2005; Berliner, 1986; Schemp & Woorons, 2006; Carter & Richardson, 1989; Davis, 2006; Borko & Livingston, 1989). Berliner (1986) encontró siete rasgos que caracterizan a los profesores expertos y que los distinguen con claridad de los novatos: infieren en base a su observación de eventos y objetos del aula, categorizan los problemas (categorización de orden superior), rápidamente identifican patrones de conducta, se demoran más en examinar los problemas del aula, son sensibles a los cambios en el contexto de la enseñanza, son flexibles (planean sobre la marcha, lo que se opone a la fijación funcional de los novatos) y autorregulan su conducta.
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No obstante la capacidad limitada de realizar este tipo de razonamiento durante la enseñanza, los expertos coinciden en que los profesores novatos deberían ser capaces de reflexionar sobre eventos del aula, como parte de su proceso de convertirse en profesores expertos (Berliner, 1986; Darling Hammond y Bransford, 2005; Carter & Richardson, 1989; Schemp and Woorons, 2006; Davis, 2006). Se trataría de la capacidad de analizar situaciones de aula en base a distintos saberes, un ejercicio que exige revisar de qué manera se presentan estos saberes a los futuros profesores durante su formación, de modo que estén disponibles para este tipo de análisis. Siguiendo esta idea es que Carter y Richardson (1989) proponen un método de enseñanza para la formación inicial docente que denominan “conocimiento estructurado en torno a eventos”. Este método, muy similar a la propuesta de “conocimiento situado basado en casos” de Kim y Hannafin (2008), propone que se presente a los profesores en formación articuladamente distintas fuentes de conocimiento, en torno a eventos del aula. Los estudiantes de pedagogía serían luego enfrentados a casos de aula que deben analizar desde distintas perspectivas (manejo de aula, tipos de preguntas, organización del espacio, evaluación, entre otros), considerando no solo qué y cómo se enseña en una sala en particular, sino también las explicaciones que sustentan las decisiones de un profesor, tanto como qué podría cambiar para mejorar la enseñanza. Además del análisis de caso, otras experiencias de aprendizaje como la observación de aulas, los talleres de enseñanza con expertos, el análisis de protocolos de pensamiento en voz alta de profesores expertos, son experiencias que pueden favorecer que los futuros profesores visualicen la enseñanza como un proceso de toma de decisión y aprendan a inferir estas decisiones por referencia a distintos dominios de conocimiento que adquieren durante su formación (Schemp & Woorons, 2006). 3.2 Alfabetización pedagógica Mclellan (2008) introduce el concepto de alfabetización pedagógica para referirse a la capacidad de comprender y producir discurso al interior de la comunidad académica de la Educación. Su descripción del concepto se basa en los principios de la escritura como medio para aprender y considera la alfabetización como una herramienta cognitiva que puede promover el desarrollo del conocimiento pedagógico. En sus palabras: “Pedagogical literacy is, therefore, the fundamental competence of being able to read, understand and criticize the documents that make up the professional knowledge base of teaching and learning. Furthermore, because reading material is better understood when it requires to be manipulated through situated writing tasks (Langer & Applebee, 1987) the construction of written representations about teaching and learning can be powerful catalysts for teacher education students’ own learning” (p.1987) De acuerdo con la autora, en orden a aprender cómo enseñar, un estudiante de pedagogía debe atravesar un proceso que incluye leer y escribir. Un profesor que
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ha tenido la oportunidad de leer sobre la teoría y la práctica de la enseñanza y el aprendizaje puede acceder al conocimiento contenido en esos textos, para razonar con ellos sobre su práctica. Sin la representación de ese conocimiento, la enseñanza se limita a la ejecución automática y los profesores no pueden ser flexibles (adaptarse a lo inesperado) o mejorar sus prácticas. Escribir en la formación de profesores es visto por la autora como una oportunidad de construir el conocimiento pedagógico discursivamente. Por ejemplo, en relación con el conocimiento pedagógico del contenido de Shulman (1987), esa manera única de pensar que permite a los profesores transformar el conocimiento disciplinario en formas que el aprendiz puede comprender (Mclellan, 2008, p.1988), la autora declara que se puede representar simbólicamente tanto como en acciones pedagógicas. Si se representa simbólicamente a través de la escritura, el conocimiento pedagógico del contenido puede ser transformado por los estudiantes a la vez que observado por sus instructores. Al representar su conocimiento teórico y práctico por escrito, los futuros profesores tienen también la oportunidad de hacer de este conocimiento un objeto de reflexión; pueden manipularlo, integrarlo, reestructurarlo, controlarlo y transformarlo. Así, en el contexto específico de la formación de profesores, escribir es una oportunidad para transformar el conocimiento, las creencias y las percepciones sobre la enseñanza. Asimismo, permite dejar un testimonio escrito de este proceso constructivo, que entrega información a los formadores de profesores respecto del proceso de aprendizaje de sus estudiantes. 3.3 Reflexión pedagógica y escritura: los géneros escritos de la formación inicial docente Hay disponibles algunos estudios que han explorado el uso de la escritura como medio para desarrollar hábitos de una reflexión pedagógica basada en fuentes relevantes de conocimiento (Davis, 2006; Barksdale‐Ladd et al., 2001; Le Fevre, 2011; Braun & Cumpler,2003; Lee, 2005; Luk, 2008). Como explica Davis (2006), distintas tareas de escritura que se utilizan en la formación inicial docente tienen el potencial de promover la integración de distintos conocimientos y la reflexión en base a ellos. Entre otras, el diálogo, la investigación‐acción, la investigación realizada por profesores, la escritura reflexiva y el análisis de casos. Todas estas tareas involucran la reflexión articulada de aspectos clave sobre los aprendices y el aprendizaje, sobre el conocimiento disciplinario, sobre la evaluación y la enseñanza, sobre los contextos de la enseñanza. En su propio trabajo con diarios reflexivos en la formación inicial docente, Davis (2006) sugiere que el lenguaje es un mediador en el proceso de aprendizaje de lo que ella llama reflexión productiva. En este tipo de escritura, los estudiantes entregan evidencias para secundar sus afirmaciones, hacen propuestas alternativas, cuestionan supuestos, identifican los resultados de la enseñanza, evalúan y juzgan la enseñanza. Por su parte, la reflexión improductiva se caracteriza por una escritura centrada en la descripción de situaciones de enseñanza, listas de ideas sin relación y una perspectiva crítica y de juicios sin fundamento empírico.
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Muy similar es el trabajo de Luk (2008), quien ofrece una exploración más detallada de las características discursivas de diaros reflexivos evaluados como de alta calidad por formadores de profesores: nexos contrastivos (sin embargo, por el contrario, etc.) que reflejan la consideración de distintas perspectivas, discusiones o posturas; marcadores de modalización (verbos en condicional, o expresiones como podría ser, sería posible) que reflejan que el escritor asume que hay distintas maneras de enseñar y no soluciones únicas y verdaderas; movidas discursivas de evaluación y sugerencias, en lugar de solo secuencias descriptivas; presentación de evidencias para sustentar afirmaciones. Se puede encontrar también otro cuerpo de investigaciones que exploran tareas escritas como medios para desarrollar la reflexión pedagógica, pero que conceptualizan la reflexión de forma diferente; por ejemplo, como una oportunidad para relacionar el ámbito personal con el profesional (Barksdale‐ Ladd et al, 2001; Braun & Cumpler, 2004; Le Fevre, 2011), como cuando se recuperan experiencias previas de aprendizaje, de modo que los futuros profesores recuerden cómo era ser estudiantes y qué estrategias de enseñanza les ayudaban más. Las memorias sociales, las narraciones de niños, las autobiografías, entre otros géneros más narrativos, se presentan en la literatura especializada en relación con la noción de que el conocimiento pedagógico se puede representar narrativamente, lo que afecta la percepción y las decisiones de los docentes (Le Fevre, 2011). En este marco, se promueve que los estudiantes de pedagogía escriban para dar voz y reflexionar sobre sus teorías implícitas, sus actitudes y su conocimiento sobre la enseñanza. 3. 4 La evaluación de la reflexión pedagógica escrita Hay disponibles pocos estudios que reporten la construcción de instrumentos válidos y confiables para evaluar la reflexión pedagógica (Youngs y Birds, 2010; Fund, Court y Kramarski, 2002). Es posible encontrar, también, algunos trabajos que reportan estudios de casos de reflexión pedagógica (Luk, 2008; Lee, 2005; Davis, 2006), junto con detalles de los procedimientos de análisis. No obstante escasas, es interesante la coincidencia que existe entre estas investigaciones. En primer lugar, respecto de la funcionalidad que atribuyen al ejercicio de evaluar la reflexión pedagógica por escrito, todos ellos sostienen que la escritura es un medio privilegiado para evaluar y para enseñar a los futuros profesores a reflexionar pedagógicamente durante su formación. Hay incluso evidencia de que la aplicación sistemática de ejercicios de reflexión pedagógica escrita logra, gradualmente, mejorar las capacidades de los estudiantes en esta tarea (Fund et al., 2002). Lo anterior incluye retroalimentaciones recursivas a los estudiantes respecto de su nivel de logro, en base a un modelo y criterios de evaluación determinados. En segundo lugar, los autores coinciden en su diagnóstico de la amplitud y vaguedad del concepto de reflexión pedagógica y de la necesidad de modelos y procedimientos para sistematizarlo, de manera que sea posible transferirlo a los estudiantes. Se argumenta sobre la importancia de familiarizar a los estudiantes no
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solo con los criterios de evaluación, sino que también con las características discursivas de la reflexión pedagógica, para promover una comprensión más profunda de lo que constituye este ejercicio y cómo se construye con palabras (Luk, 2008). En tercer lugar, llama la atención que la totalidad de los autores gradúa la calidad de la reflexión pedagógica en polos que van desde la mera descripción de lo observado o realizado y los juicios sin fundamentos, hasta una reflexión profunda o crítica que involucra afirmaciones con fundamentos, distintas perspectivas de análisis y articulación entre distintos conceptos. Dos elementos diferenciales de los trabajos referidos merecen ser resaltados. Por una parte, Youngs y Birds (2010) agregan a estos criterios de evaluación la necesidad de que los estudiantes demuestren un sólido dominio de los conceptos teóricos que utilizan para realizar su análisis. En esta lógica se considera de bajo nivel no solo que se cometan errores conceptuales, sino también que se utilicen los conceptos de manera vaga o imprecisa, o que se nombren solamente en lugar de usarlos para realizar el análisis. Por otra parte, Fund et al. (2002) relevan la capacidad de los estudiantes para situarse, en el más alto nivel de la rúbrica, en un marco conceptual más amplio, ofreciendo generalizaciones conceptuales. Si bien hay diferencias en la manera en que los distintos autores abordan el problema de la escritura en relación con la reflexión pedagógica escrita, hay también coincidencias en sus propuestas de un uso sofisticado de la lengua necesario para realizar este ejercicio. Luk (2008) y Davis (2006) optan por realizar análisis discursivos de las muestras recogidas, para derivar características constantes en los trabajos de mayor nivel. De estos estudios es posible concluir que el ejercicio reflexivo requiere de un dominio sofisticado de recursos de la lengua, que permita a los estudiantes establecer relaciones entre las ideas presentadas, como los conectores, las relaciones lógicas y los marcadores discursivos. De hecho, Luk (2008) sostiene que el dominio discursivo es una variable que necesariamente se entrecruza en el desempeño de los estudiantes, lo que justifica la necesidad de una enseñanza explícita. Recurriendo al trabajo de Bereiter y Scardamalia (1987), Fund et al (2002) involucran en su modelo de evaluación la noción de que en los niveles más altos de reflexión pedagógica, los estudiantes deben poder coordinar una mayor cantidad de ideas (conocimientos teóricos, experiencia, creencias) y transformarlas en su conjunto para construir conocimiento nuevo por escrito. Este plano “formal”, según proponen, es el que se gradúa a lo largo de la rúbrica, de modo que el nivel más alto se alcanza no solo incluyendo información sobre qué se enseña y cómo, sino que siendo capaz de reflexionar coordinadamente con todos los conceptos relevantes para ese análisis. Por último, es importante destacar las propuestas de Youngs y Birds (2010) y Fund et al. (2002) respecto de que es posible aspirar a la construcción de instrumentos para ser usados al interior de la formación inicial docente (embedded assessments) con niveles de confiabilidad y validez adecuados. Según proponen Youngs y Birds (2010), es de la mayor importancia que los formadores de profesores trabajen colectivamente en la aplicación de estos instrumentos y que éstos puedan coincidir con sus creencias y concepciones respecto de la Educación.
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3.5 Lenguaje académico
Siguiendo el trabajo de Snow y Ucelli (2008), entendemos el lenguaje académico como un registro de la escritura que es común en la cultura escrita del mundo académico. En términos de sus características, se trata de un dominio léxico, gramatical y discursivo que permite “empaquetar” ideas complejas y abstractas al escribir, tanto como comprender los textos de la escuela y de las comunidades académicas. Se utiliza este registro escrito en diversas comunidades académicas, de tal manera que es posible distinguir particularidades lingüísticas en cada una de ellas, tanto como elementos comunes. Quienes producen géneros escritos académicos al interior de comunidades particulares, no solo poseen dominio lingüístico, sino también saberes disciplinarios, de modo que logran construir discursivamente el conocimiento de su comunidad. Inspirados en el trabajo de Halliday y Matthiesen (2004), estudios como el de Schleppegrel y Oliveira (2006) asumen que las formas lingüísticas son inseparables de los contenidos. En otras palabras, los escritores expertos de una disciplina particular construyen sus teorías, argumentos y opiniones en forma discursiva en un texto, usando los recursos del lenguaje académico. Así, para poder acceder a ese conocimiento en la lectura o para poder construir conocimiento nuevo por escrito, los universitarios que ingresan a una comunidad académica deben poder dominar gradualmente los géneros de dicha comunidad y sus convenciones discursivas. Adicional al uso de lenguaje técnico, infrecuente y abstracto, una cuestión clave del lenguaje académico es que permite relacionar varias ideas en una misma porción del texto (una oración, un párrafo), por medio de relaciones de dependencia gramatical (cláusulas anidadas) y de conectores lógicos, entre otros recursos. Esta tarea requiere ser capaz de gestionar grandes porciones de información simultáneamente y de organizarlas lógicamente, un ejercicio muy propio de la escritura académica y escasamente necesario en la comunicación oral coloquial (Durst, 1987; Crowhurst, 1981; Concha, Aravena, Coloma y Romero, 2010; Concha y Paratore, 2011). Respecto de la organización de ideas a un nivel más global, los textos escritos en este registro presentan evidencia de que se ha planificado la entrega de información, pues esta se presenta en un orden lógico y se introduce y cierra con afirmaciones que la abordan de manera general. Lo anterior da cuenta de una consideración del lector potencial del texto, tanto como de las maneras convencionales en que se marca en el texto esta interacción con otro u otros que leerán. Este orden lógico suele estar acompañado de marcadores discursivos (en primer lugar, respecto de lo anterior, etc.) u otras formas lingüísticas que encabezan secciones del texto, reflejando la función que cumplen estas últimas en un esquema de organización mayor.
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Justamente en relación con el dominio disciplinario, es característico del lenguaje académico el uso de conceptos abstractos o procesos como sujetos oracionales (metáforas gramaticales). Un escritor que domina una disciplina particular pone en posición de sujeto gramatical una noción abstracta como la migración campo‐ ciudad, la didáctica de la lengua, el manejo del aula, para poder predicar respecto de ellas. Lo hace también cuando recoge una serie de elementos ya mencionados en categorías abstractas (este fenómeno recién descrito, este proceso, esta jerarquía), reflejando su comprensión profunda del conocimiento respecto del cual escribe. Asimismo, dado que comprende que escribe en el marco de una comunidad de personas que contribuyen a la construcción de un conocimiento teórico que aspira a la objetividad, el escritor asume una postura despersonalizada respecto de sus dichos, que se marca en el texto con formas lingüísticas como el “se” impersonal (se dice, se sabe que, etc.) (Snow y Ucelli, 2008). En su conjunto, todas estas convenciones que caracterizan al lenguaje académico resultan ser selecciones que un escritor realiza cuando adecua su participación a contextos comunicativos reales, dentro de los cuales reconoce determinadas convenciones que son valoradas por una comunidad, tanto como medios para construir y acceder al conocimiento experto de dicha comunidad . Estas convenciones son clave para la participación en las comunidades discursivas (Carlino, 2007; Tapia, Burdiles y Arancibia, 2003) y son también herramientas que dan forma al conocimiento (Soto, 2005). IV. Objetivos específicos: Los siguientes son los objetivos específicos propuestos para este estudio: 1. Definir, en conjunto con formadores de profesores y con docentes de reconocida trayectoria, una expectativa de desempeño de los estudiantes de último año, respecto de su habilidad para reflexionar pedagógicamente en base a casos y de su dominio de lenguaje académico. 2. Diseñar y validar un instrumento para medir la reflexión pedagógica en baso a casos y el dominio de lenguaje académico de estudiantes de último año de la carrera de Pedagogía en Educación Básica. 3. Determinar qué ámbitos de conocimiento utilizan los estudiantes en estudio para analizar la práctica en aula y de qué manera articulan dichos saberes al reflexionar pedagógicamente en base a casos. 4. Determinar en qué medida el dominio de lenguaje académico podría explicar la capacidad de reflexionar pedagógicamente por escrito de los estudiantes en estudio. V. Encuesta a formadores de profesores Una cuestión clave de los instrumentos de medición es que puedan evaluar constructos que sean valiosos para la comunidad en la que se espera utilizarlos.
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Con el objeto de verificar la relevancia de la tarea análisis de caso en la formación inicial docente, se procedió a aplicar una encuesta a los académicos de las universidades que participaron del estudio principal. Los resultados de esta encuesta revelan que se trata de una tarea frecuente entre los encuestados y que sus características son homólogas a las condiciones de evaluación que plantea el instrumento construido en este estudio. Los resultados de esta encuesta confirman, además, la tendencia de una encuesta previa recogida durante el estudio piloto, entre formadores de profesores de otras universidades. A los profesores de las universidades participantes en el estudio principal se les pidió contestar, voluntariamente, una breve encuesta online sobre las tareas que les solicitan realizar a sus estudiantes. Específicamente, se les consultó por la realización de análisis de casos en sus clases y las características de este. Participaron en la encuesta online 24 profesores de la Universidad de Los Andes, 12 de la Universidad del Pacífico y 16 de la Universidad Diego Portales. La gran parte de los profesores que contestaron la encuesta (43,1%) realizan clases de didáctica específica, seguido por los docentes de práctica profesional (29,4%).
De los 52 profesores que contestaron la encuesta, un 76,5% (39) respondió que sí solicitaba a sus estudiantes realizar análisis de casos de enseñanza. Este resultado estaría señalando que el ejercicio que se les pidió resolver a los estudiantes participantes del estudio es una tarea relevante en su formación y valorada por sus profesores.
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Con respecto al tipo de análisis de caso que los profesores piden realizar a los estudiantes, casi la totalidad señala que los estudiantes deben describir el aula observada (94%), analizarla (97%), aplicar conceptos revisados en clases al análisis (97%) y realizar recomendaciones para la mejora de la enseñanza y el aprendizaje (91%). Estos resultados confirman la coincidencia que existe entre las características de la tarea que suelen solicitar los formadores de profesores encuestados y los ámbitos de evaluación del instrumento que aquí se describe y que se ha denominado Reflexión pedagógica en base a casos. Con respecto al producto que deben entregar de sus análisis, un 73% de los encuestados respondió que los estudiantes deben entregar un producto escrito. En menor medida (61%) señalan que los estudiantes deben entregar un “Producto oral” (por ejemplo: una presentación oral). En el caso de que se entregue un producto escrito, la longitud solicitada es entre tres carillas (34,5%) y más de 3 carillas (44,8%).
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Finalmente, con respecto al caso que se presenta a los estudiantes, los profesores respondieron que este se deriva de una observación directa (92%) y en forma escrita (88,5%). En menor medida, pero aún de forma frecuente, el caso se presenta en la forma de un video (68% señaló que sí y un 32% que no). Como en los resultados recogidos en la encuesta previa descrita en el informe preliminar del estudio, estos últimos confirman también la coincidencia entre las tareas solicitadas por los formadores encuestados a sus estudiantes y las características del instrumento construido en el estudio que se reporta. VI. Marco metodológico del estudio 6. 1 Procedimientos de construcción del instrumento y de las rúbricas En el estudio que se reporta, se construyó un instrumento denominado Reflexión Pedagógica en Base a Casos (RPEC), una rúbrica de RPEC y una rúbrica de Lenguaje Académico. Dado que en el informe preliminar entregado a la contraparte se ofreció un análisis detallado del proceso de construcción del instrumento RPEC, se presenta en este documento un resumen de dicho proceso. Respecto de su rúbrica, sin embargo, se incluye acá el detalle del último proceso de revisión derivado del análisis de los datos recogidos en la muestra piloto. Por último, se ofrece un detalle de los pasos seguidos para construir la rúbrica de Lenguaje Académico (LA). 6.1.1 Resumen de la construcción del instrumento RPEC y de su rúbrica El instrumento construido durante el estudio piloto, RPEC, consta de dos partes: • Un video de 15 minutos que presenta fragmentos que representan los distintos momentos de una clase, editados y etiquetados según su función, además de una diapositiva inicial que presenta el objetivo de la clase y un esquema de su estructura. • Un reactivo que invita a escribir un análisis de caso a partir del video, utilizando para ello los distintos saberes adquiridos a lo largo de la formación inicial: disciplinarios, de didáctica general, de didáctica específica, de los contextos de la enseñanza, entre otros. Respecto del video, durante el estudio piloto se utilizó un fragmento de 15 min. del inicio de una clase de Lenguaje y Comunicación en un cuarto básico de un colegio particular subvencionado. En las muestras recogidas, sin embargo, fue posible constatar que los estudiantes expresaban la necesidad de conocer la totalidad de la clase para poder juzgar respecto de la función de la sección observada, tanto como el objetivo de la clase para poder compararlo con lo efectivamente logrado. Por lo mismo, se optó por mantener el mismo video para el estudio principal, pero editado de modo que fuera posible ver una porción de cada una de las partes de la clase, a las que se agregó además una diapositiva inicial que presenta la estructura de la clase y su objetivo, además de diapositivas inmediatamente previas a cada
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sección, que la anuncian (ej: comienza la lectura, comienza la discusión, cierre, etc.). Asimismo, se observó en los dos momentos del estudio piloto (pre piloto y piloto) que el fragmento seleccionado podía afectar la capacidad de los estudiantes de atraer su conocimiento teórico al análisis, dada la diferencia en la densidad de saberes que subyacen a la toma de decisiones pedagógica en distintos momentos de una clase (es mayor, por ejemplo, mientras se dan las instrucciones o se presenta un contenido y menor, por ejemplo, cuando los estudiantes realizan un trabajo de aplicación individual y el profesor solo circula por la sala para mantener el orden). Este segundo problema se resuelve también con la modalidad de video editado que representa la totalidad de la clase y explicita su objetivo y estructura. Respecto del reactivo, se optó por solicitar a los estudiantes que escribieran el análisis de una clase, considerando la enseñanza como un ejercicio de toma de decisiones basado en conocimientos expertos. De modo de provocar este tipo de análisis, se solicita a los estudiantes que se refieran a lo que hace la profesora (qué hace), a la manera en que lo hace (cómo lo hace) y a los principios que subyacen al qué y el cómo enseña (por qué enseña de esta manera). Para esto, se les pide que utilicen los distintos saberes adquiridos a lo largo de su formación, los que se listan para ellos en el reactivo. Adicionalmente, se sugiere que propongan vías para mejorar la enseñanza. El diseño de la tarea se basa principalmente en los trabajos de Carter y Richardson (1989), Kim y Hanafin (2008), Schemp y Woorons, (2006), Fund et al. (2002) y Luk (2008)1. Respecto de la rúbrica RPEC, se trata de una escala basada en los principios derivados de la revisión bibliográfica incluida en este informe, tanto como en la opinión de formadoras de profesores convocadas a un proceso de juicio de expertos. De esta forma, las investigadoras han contrastado los principios ofrecidos en la literatura relevante, con aquellos que valoran formadoras de la comunidad académica nacional, un procedimiento que agrega validez al instrumento.
1 Ver en anexo el instrumento prueba de RPEC
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Tabla 1. Criterios de Evaluación de Reflexión Pedagógica en Base a Casos y fuentes Es importante destacar, además, que los procedimientos de validación de la rúbrica permitieron que sus niveles fueran ajustados en relación con las muestras recogidas en el piloto. De esta manera, no solo se favorece la consistencia entre codificadores, por la vía de asegurar la productividad de los niveles de la rúbrica, sino que se logra un instrumento sensible al desempeño de estudiantes nacionales. La siguiente tabla resume los criterios de evaluación de la rúbrica y su procedencia: CRITERIOS DE EVALUACIÓN DE REFLEXIÓN PEDAGÓGICA EN BASE A CASOS A. Inferir razones o explicaciones que subyacen a las decisiones pedagógicas de un profesor o profesora observado B. Articular distintos dominios de conocimiento relevantes a la enseñanza y el aprendizaje, en una reflexión escrita.
C. Sólido dominio de conceptos teóricos utilizados para analizar y comprender la toma de decisiones pedagógicas.
D. Un tipo de análisis en el que se entregan fundamentos para las afirmaciones, se consideran distintas perspectivas (por ejemplo, distintas explicaciones para un fenómeno observado, o distintos dominios de conocimiento relevantes), se evalúa y se ofrecen vías alternativas de solución. En el nivel bajo, se trata de descripciones de eventos y conductas, no se analiza la toma de decisiones, se entregan opiniones sin fundamentos.
FUENTES Panel de expertos Davis, 2006 Schemp & Woorons, 2006 Carter & Richardson, 1989 Panel de expertos Davis, 2006 Carter & Richardson, 1989 Silcock, 1994 Luk (2008) Lee (2005) Panel de expertos Darling Hammond & Bransford, 2005 Berliner, 1986 Ben‐Peretz, 2011 Youngs and Bird, 2010 Panel de expertos Davis, 2006 Lee, 2005 Luk, 2008 Youngs and Bird, 2010
Respecto de los denominados “dominios de conocimiento relevantes a la enseñanza y el aprendizaje” (punto B de la tabla precedente), la rúbrica considera y adapta la propuesta de Davis (2006). A continuación se presentan dos tablas: una de ellas presenta una traducción de los dominios propuestos por la autora y, la otra, la adaptación que hicieron las investigadoras de su propuesta, agregando una nuevo dominio de didáctica específica. En la tabla, la nueva propuesta se ilustra con los contenidos relativos a cada dominio derivados del video que se utilizó en este estudio. Dominios de conocimiento relevantes para la enseñanza y el aprendizaje, Davis (2006) traducción. Tabla 2. Dominios de conocimiento relevantes para la enseñanza y el aprendizaje
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Aprendices y aprendizaje Ideas alternativas o ideas de los estudiantes Conocimiento previo y experiencias Involucramiento y motivación Colaboración Resultados de aprendizaje Estudiantes individuales Similitudes entre estudiantes Procesos de desarrollo cognitivo y social Contexto social de la enseñanza
Conocimiento sobre la asignatura Naturaleza de la ciencia Naturaleza del conocimiento científico Investigación científica Contenidos de la ciencia Conexiones entre conceptos, hechos, teorías, etc.
Evaluación/calificación
Instrucción
Métodos Tiempo asignado Metas de evaluación Distintos enfoques y usos Alineación entre evaluación y metas de enseñanza, ideas de los estudiantes y actividades Efectividad de la evaluación
Introducción a la clase Cierre de la clase Conexiones con actividades previas o futuras Manejo de (grupo, materials, actividades) Materiales, guías de trabajo Construcción de la clase, uso de propuestas existentes Representaciones instruccionales Actividades Metas de enseñanza Preguntas guía Tiempo instruccional Seguridad de la profesora o profesor Secuencia de enseñanza y su relación con las metas
Adaptación de Davis (2006): ejemplificado con contenidos observados en el video utilizado en este estudio Tabla 3. Adaptación Dominios de conocimiento relevantes para la enseñanza y el aprendizaje
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Aprendices y aprendizaje
Conocimiento sobre la asignatura Conocimiento Cuentos de previo de los tradición oral, estudiantes su definición y sobre la forma de sus ser de los adultos características mayores y cómo estructurales este (estribillo) conocimiento se usa para Puntuación: comprender el signos de cuento narrado interrogación en clases, en especial al Ortografía personaje (tilde en principal esdrújulas) Involucramiento de los estudiantes en la actividad su interés y motivación para participar de las discusiones que propone la profesora, para responder a sus preguntas Preguntas de los estudiantes y comentarios Cómo revelan su comprensión de la clase, de los contenidos tratados; su interés, su motivación. Vocabulario de los niños “vinadre”, “cargocito”: qué revelan estos usos respecto de su dominio de vocabulario.
Evaluación/calificación
Instrucción: general
Instrucción: específica
Procedimientos de Evaluación formativa: Demostrar comprensión global, identificando idea principal, usando mapas conceptuales (idea principal y detalles), escogiendo el mejor título para la historia. Demostrar comprensión de conceptos presentados en clases: responder preguntas de definiciones (qué significa idea principal), parafraseando.
Manejo de grupo: explicitación de las reglas, aplicación asistemática de las reglas, estilo proactivo o reactivo Clima positivo: llamar a los niños por su nombre, no alzar la voz, sonreír, participar activamente de la conversación. Estructura de la clase (inicio, desarollo, cierre) Objetivo de la clase: determinar idea principal de un cuento Toma de turnos (interacciones de aula): predominio de la profesora en la toma de turnos, oportunidades de los estudiantes de proponer temas o tomar la palabra; tiempo para responder a las preguntas, retroalimentación específica. Refuerzo positivo (ej: me gusta la manera en que Roberto se está portando) Premios (tiempo extra de recreo por terminar el trabajo)
Momentos de la lectura (antes, durante y después) Lectura en voz alta (entonación, pausas, etc.) Preguntas abiertas y su relación con la comprensión y el desarrollo del lenguaje oral (ej: qué creen que pasará a continuación) Descripción de personaje principal Enseñanza de vocabulario (palabras en contexto, pobre discusión de su significado, falta de oportunidades para usarlas) Estrategias de lectura (predicciones, conexiones) Enseñanza de comunicación oral (modelaje de discurso extendido y descontextualizado; oportunidades de los estudiantes para producer ese tipo de discurso: oraciones completas, parafraseo Enfoque comunicativo functional para la enseñanza de la lengua (se enseña vocabulario y ortografía en el contexto de un cuento leído y comprendido)
Se resume a continuación las etapas del proceso de construcción de la rúbrica RPEC, las que fueron detalladas en el informe preliminar:
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a) Revisión bibliográfica b) Elaboración de la versión 1 del instrumento c) Expertas en formación de profesores y en didáctica de la lengua, de tres universidades (Viviana Galdames, Universidad Alberto Hurtado; Beatriz Figueroa, Universidad de Concepción; Soledad Aravena, Pontificia Universidad Católica) responden al instrumento y opinan respecto de sus contenidos y su redacción. Este ejercicio contribuye a fijar un nivel de desempeño sobresaliente en la rúbrica, además de una revisión de sus contenidos. d) Aplicación de prepiloto de la versión 1 del instrumento a 10 estudiantes e) Análisis de las muestras f) Expertas internacionales, Jeanne Paratore (Boston University) y Paola Ucelli (Harvard University) analizan la versión 1 g) Revisión del instrumento, construcción de la versión 2 h) Aplicación de la versión 2 del instrumento a 8 profesoras de Lenguaje y Comunicación de Santiago, que habían obtenido la Asignación de Excelencia Pedagógica (AEP). Este ejercicio contribuye a fijar niveles de desempeño de la rúbrica. i) Análisis de las muestras obtenidas j) Decisión de volver a la versión 1, ajuste del instrumento
Distintos mecanismos fueron utilizados para revisar y validar los contenidos y procedimientos de codificación de la rúbrica RPEC. El proceso involucró la consulta de expertos y tres rondas de codificación, una con muestras recogidas en el pre‐piloto y dos con las muestras del piloto. Cada etapa fue seguida de jornadas internas de revisión del señalado esquema. Se reproducen resumidamente las etapas del proceso de revisión y validación de la rúbrica RPEB (descritas en el informe preliminar) y se ofrece, en mayor detalle, una descripción de la última revisión posterior a la aplicación piloto: a) Tres formadoras de profesores, especialistas en didáctica de la lengua (Marcela Guajardo, Universidad Andrés Bello; Rosa Miranda, UDP y Soledad Aravena, Universidad Católica), analizaron una selección de muestras producidas por formadores de profesores, profesores AEP y por estudiantes del estudio piloto. Las expertas clasificaron las muestras en tres niveles de desempeño (bajo, medio, alto) y justificaron oralmente las razones que subyacían a sus decisiones. Así también, analizaron la primera versión de la rúbrica de evaluación de reflexión pedagógica y aportaron con sugerencias sobre sus contenidos y niveles de logro2. b) Revisión de la rúbrica, en base a comentarios de las expertas. c) Codificación de muestras recogidas en una aplicación pre piloto (5 muestras de estudiantes de cuarto año de pedagogía de la Universidad Alberto Hurtado y 5 muestras de estudiantes homólogos de la Pontificia Universidad Católica de Chile). 2 Ver en anexo el resumen de los comentarios de las expertas.
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d) Análisis de resultados de la codificación y transformación de la rúbrica en un primer esquema de codificación, en formato excel. e) Codificación de muestras piloto con primer esquema de codificación. f) Análisis de resultados y revisión del primer esquema de codificación. Construcción del esquema 2 de codificación. g) Segunda codificación de muestras piloto con segundo esquema. Respecto de los procedimientos de codificación, este esquema se aplicó a las muestras por secuencias, entendidas estas como porciones de texto dedicadas a un ámbito o momento de la clase. Cada una de las dos codificadoras segmentó en secuencias las muestras antes de aplicar los criterios de codificación. Respecto de cada secuencia se codificó: • Qué se hace con palabras: describir un evento instruccional, evaluar la instrucción, sugerir cómo mejorar la instrucción. • Qué tipo de conocimiento se usa para reflexionar: conocimiento sobre el lenguaje, sobre enseñar y aprender, sobre didáctica de la lengua, sobre contextos de la enseñanza, sobre el desarrollo de los niños, sobre la práctica (adquirido en la práctica, no involucra teoría); conocimiento de sentido común (no demuestra experticia en la enseñanza). • Cómo se presenta el conocimiento: con o sin lenguaje técnico, correctamente o con errores, por referencia a marcos teóricos o métodos de enseñanza, por referencia a autores. • Qué profundidad presenta la reflexión: una afirmación categórica sin fundamentos, una afirmación expresada en primera persona, una afirmación fundamentada con razones, una afirmación fundamentada con razones, evidencias y/o ejemplos. • Qué recursos discursivos se usan para reflexionar: conectores o nexos que expresan adversatividad, causalidad, consecuencia, adición, distribución o propósito3. De los resultados de la aplicación piloto, derivaron conclusiones relativas a la funcionalidad del esquema utilizado y su comportamiento psicométrico, que se detallaron en el informe preliminar. Se reproduce aquí el detalle de aquellas conclusiones que dieron origen a la última revisión del esquema de codificación. • No resulta operativo ni justo analizar las muestras por secuencias: la codificación se hace engorrosa, extensa y dependiente de que los codificadores tengan conocimientos sobre lingüística, todo lo cual obstaculiza la potencial replicabilidad de la rúbrica. En muchas ocasiones los estudiantes amplían una temática presentada en una secuencia, en otra secuencia más adelante en el texto; dicho de otro modo, el análisis de un ámbito del aula observada puede presentarse distribuido a lo largo del texto, por lo que solo luego de leer la totalidad del texto se puede juzgar la 3 Ver en anexo esquema de codificación aplicado en el piloto
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calidad con la que se analizó dicho ámbito. Adicionalmente, el criterio utilizado por los codificadores para fragmentar los textos en secuencias no resulta del todo objetivo, lo que afecta la consistencia entre codificadores. • Es necesario revisar los niveles de logro para avanzar en su productividad: los análisis no permiten encontrar ejemplos de todos los niveles de logro al interior de cada una de las modalidades discursivas (describir, evaluar, sugerir), como mostraron los gráficos de frecuencia por nivel de logro. De esto se deduce que, si bien las tres modalidades discursivas ocurren en las muestras, estas no describen niveles de desempeño independientes entre sí. En atención a esta conclusión, se opta por retomar la idea claramente expresada en la teoría de que en la actividad de reflexión pedagógica, la predominancia de la descripción es el polo de baja calidad y el análisis en base a distintos conocimientos y desde distintas perspectivas es el polo de alta calidad.
• El esquema de codificación no produce resultados que respondan claramente respecto del dominio que demuestran los estudiantes del conocimiento que utilizan para analizar: la codificación tiende enfocarse en los conceptos utilizados, en el uso de palabras técnicas, en la mención de autores o enfoques, sin lograr una mirada más amplia de cómo esas ocurrencias revelan, en su conjunto, un dominio teórico que sirva a los estudiantes para analizar el aula (si es confuso, muy general o inespecífico, además de correcto o incorrecto; si recurre a modelos o enfoques para analizar las decisiones pedagógicas). • La mecánica de codificación con el esquema privilegia ocurrencia de conceptos a la aplicación de dichos conceptos en el contexto de distintas perspectivas, alternativas, ámbitos de análisis: los estudios que proponen maneras de evaluar la reflexión pedagógica reconocen que los análisis de mejor calidad pueden “ver” en las decisiones de un profesor distintas consideraciones relativas a la enseñanza, la evaluación, el desarrollo de los niños, etc., tanto como distintas posibilidades para explicar el logro o fracaso de estas decisiones y para resolver los errores en el futuro. Esta multidimensionalidad es una expresión concreta de la diversidad de conocimientos que se activan en el análisis, tanto como de la capacidad de atraerlos articuladamente a la tarea. No obstante este criterio está contenido en la rúbrica, en la mecánica de codificación las codificadoras lo asimilaban a cantidad de contenidos, por lo que no resultaba tan relevante que estos fueran diversos respecto de los dominios de la pedagogía que abordaban.
Por todo lo anterior, las investigadoras construyeron una última versión de rúbrica RPEC que conserva los criterios de evaluación de la anterior, pero los reordena en una lógica de desarrollo que va desde la mera descripción hasta el análisis desde distintas dimensiones y con fuerte dominio teórico. Se puede decir que conserva los mismos criterios, pero evita que sean codificados de manera fragmentaria, pues analiza cómo son funcionales unos a otros. Por esta razón es
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que la nueva versión opta por una escala holística: se considera que permite evaluar los distintos criterios en relación, en lugar de darles un trato de elementos aislados que ocurren o no. Por ejemplo, sigue considerando la presencia de autores o la mención de enfoques, pero resguarda que estos sean parte de una explicación respecto de un determinado ámbito de la enseñanza. Así también, permite con justicia evaluar la profundidad del análisis ofrecido respecto de cada uno de estos ámbitos, pues no exige que esta se complete en una sola secuencia sino a lo largo del texto. La siguiente tabla resume los resultados promedio obtenidos por la totalidad de los participantes del estudio principal, al aplicar la rúbrica RPEC: Tabla 4. Resultados promedio obtenidos para la rúbrica RPEC Participantes Resultados Válidos 82 Media 2,6 Perdidos 0 Desv, típ. ,81 Respecto de la distribución de los resultados obtenidos de la aplicación de la rúbrica RPEC, se observa que esta tiene un comportamiento similar a lo normal, como se observa en el siguiente gráfico. Gráfico 1. Histograma Rúbrica Reflexión Pedagógica
Por su parte, se obtuvieron buenos niveles de confiabilidad entre codificadores durante su aplicación. Los cálculos se realizaron como se detalla a continuación: a) Al comienzo del proceso de codificación, una primera ronda con 15 muestras (18% de la muestra total) que se codificaron de manera independiente con un 100% de doble codificación. Con este procedimiento se obtuvo un coeficiente Kappa de 0,61 (p