De Los Medios (Tic) A Las Mediaciones (Tac y Tep), Tres Letras de Difernecia

DE LOS MEDIOS (TIC) A LAS MEDIACIONES (TAC Y TEP), TRES LETRAS DE DIFERNECIA ¿Más información significa más conocimient

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DE LOS MEDIOS (TIC) A LAS MEDIACIONES (TAC Y TEP), TRES LETRAS DE DIFERNECIA

¿Más información significa más conocimiento? **Por el Mgs. José Alvaro Díaz Peña

“No hay otra madre de la invención que la necesidad” Tomas Friedman “La gente no cambia cuando dices que hay una opción mejor. Cambia cuando llegan a la conclusión de que no les queda otra opción”. Michel Mandelbam “Los desarrollos cada vez más elaborados, de los soportes físicos y lógicos de las tecnologías multimedia y las redes telemáticas han vuelto a dejar obsoletos los equipos con los que cuentan las Escuelas”. Juana María Sancho Gil “Disponer de equipos y de aplicaciones en la escuela no es garantía de utilización, ni de que el uso que se haga sea ni el óptimo ni siquiera el más adecuado para el aprendizaje de los estudiantes”. Negarse al cambio es abrirse a la obsolescencia. Juana María Sancho Gil “La ignorancia sobre nosotros mismos, sobre nuestro origen, nuestro devenir histórico, nuestra geografía, nuestros recursos naturales, entre otros, más pronto que tarde nos llevara a convertirnos en el gran mercado de los productos y tecnologías de los países poderosos y sin que no lo propongamos, en promotores de la economía del consumo”. Orlando Fals Borda 2002. El fin último de las TIC no es que cada uno tenga un dispositivo y creer ingenuamente que las personas con un dispositivo tienen un fin educativo y de apropiación de conocimiento al acceder a estas herramientas. Juana María Sancho Gil. La sociedad aumentada compagina la tecnología como parte del proceso de humanización y por ende como punta de lanza de las TIC y TEP, como parte de recuperar la interacción con la información, el conocimiento, el aprendizaje pero con una visión participativa y por ende una comunidad en el sentido utópico en un ambiente virtual. Dolors Reig

A propósito de la pandemia del coronavirus ‘Covid-19’, las escuelas y colegios cerraron sus aulas de clase, al tiempo que el gobierno informaba a la opinión pública que el ‘remedio’ para confrontar la situación o crisis escolar generada por la cuarentena o el aislamiento social, es abordar la enseñanza, los aprendizajes y la evaluación de los estudiantes a través de ambientes virtuales utilizando las TIC dentro de los procesos formativos convirtiéndose en un reto pedagógico para los maestros(as). El término ‘remedio’ no deja de ser una expresión consoladora e incluso sorprendente. Se sabe que las instituciones educativas carecen de recursos informáticos y la gran mayoría de los maestros no cuentan con la formación necesaria y pedagógica para transformar rutinas académicas tradicionales y expositivas en interacciones educativas online utilizando las TIC/TAC/TEC.

En la actualidad, los contextos en que se desenvuelven la educación son cambiantes, por esta razón la formación de los maestros es clave, máxime cuando el proceso formativo de los estudiantes se desarrolla inmerso en la era digital, es necesario que los maestros(as) adquieran habilidades y destrezas en el uso e incorporación de las TIC/TAC/TEP, con sentido pedagógico. Hay que partir de la realidad, las escuelas poseedoras del conocimiento, han dejado de ser las únicas fuentes del saber. Muchos saberes que eran propiedad exclusiva de las escuelas se pueden encontrar en diversos lugares. Las TIC/TAC/TEP están ofreciendo a los maestros y estudiantes acceso a fuentes de conocimiento ilimitados, a herramientas multimedia que permiten ampliar estos conocimientos de información (Rodríguez, 2018). Aunque la tecnología no es de tiempos actuales, se ha convertido en el móvil del conocimiento desde los orígenes del hombre, el rápido desarrollo de éstas, a generando transformaciones dentro del entorno educativo, jugando un papel fundamental en los procesos de enseñanza–aprendizaje-evaluación. En correspondencia con lo anterior, surge una pregunta ¿Por qué los maestros(as) deben movilizar su pensamiento hacia otros posibles pensares críticos y emancipatorios en una sociedad neoliberal, donde se impone la forma al sujeto, se toma por asalto las escuelas, universidades, y las convierten en fábricas y controlan sus cuerpos? Consecuente con lo anterior, retomando una de las afirmaciones que hiciera Hannah Arendt en su texto la condición humana, donde esboza que los hombres se potencian y se dinamizan a partir de la acción como sujetos, posibilitándose así mismo la transformación y la transformación de otros sujetos. En coherencia con lo anterior Pablo Freire ya lo expresaba que el maestro debería ser un esteta para que facilite a que otros se creen así mismo. En esta coyuntura, es indispensable que los maestros(as) asuman la crítica con base en lo planteado por Kant, el pasar los límites y sujetar al discurso. Es decir que es una labor que genera límites y va más allá del pensar, reconoce al otro en un lugar estético de la creación, donde el maestro acompañe el ejercicio de la libertad en el otro(estudiantes), se podría decir que es una actitud de habitar y habitarme yo mismo. De igual manera, asumir la crítica como lo expresó Michel Foucault, como un movimiento por el cual el sujeto (Maestro) se atribuye el derecho de interrogar a la verdad acerca de sus efectos de poder y el poder acercar sus discursos de verdad. Es el arte de la inservidumbre voluntaria y de la indocilidad reflexiva y tiene como función la desujecion en el juego de lo que se podría llamar la política de verdad. Lo anterior conlleva a derivar que el pensamiento crítico debe permanecer abierto a los vacíos, no debe ser dogmático, que reconozca los disensos y

consensos, es de uso público y privado, es una actitud del afuera y el adentro en el ejercicio de la vida, establece límites al ver el mundo y evalúa los discursos que llegan a diario, en términos de Heidegger el pensar es pensar lo no pensado. Aunque generalmente en las escuelas se continúa con actos de sumisión y domesticación, hay que posibilitar la crítica como el espacio de la creación del pensar de una manera concreta y puntual frente a los nuevos discursos, las nuevas subjetividades y reconocer la historia de la crítica. Para corroborar lo anterior, Boaventura De Soussa Santos afirma, que los epistemicidios aún son latentes en el aula de clase, en los hogares, los manuales de convivencia y la cotidianidad, esto implica que la escuela y la sociedad reafirman uno de los principios de la modernidad donde se evidencia que existe una manera de pensar y la aniquilación o destrucción de los conocimientos propios de los pueblos causada por el colonialismo Europeo que a su vez generan un colonialismo cultural y la perdida de experiencias cognitivas que es lo que denomina Soussa un epistemicidio. En consonancia con lo anterior, el pensamiento crítico no se enseña porque es una práctica cotidiana, hay que llevar a que los individuos (maestros/estudiantes) se vuelvan críticos y poner en tela de juicio lo dicho. Más allá, de repensar la educación en un contexto tecnológico significa observar y analizar cómo se percibe y se identifican. De allí que los desafíos de las escuelas no se debe circunscribir solo a mantener la desidia hacia las prácticas educativas tradicionales y optar por una posición complaciente ante las nuevas tecnologías Aunque cada día, la toma de conciencia va en aumento en los maestros(as), de que ya no es posible seguir consolidando formas de enseñanza-aprendizajeEvaluacion sostenidos en la idea del conocimiento como algo ‘hecho’, cosificado y fragmentado, cuya autoridad se permite mediante la realización de deberes rutinarios, determinados en un libro de texto físico o digital, y bajo la amenaza de que pueden ‘entrar o no en el examen’. Congruente con lo antepuesto, se hace inevitable retomar el concepto de formación, como ese proceso que implica deconstruir por parte de los maestros(as), las teorías asumidas como universales y ser capaces en el proceso de deconstrucción social de posibilitar la transformación retomando los contextos, ya que viven en la era digital que es una realidad y se va a mantener durante muchos años en el futuro. De lo anterior afirmación surge un interrogante ¿Qué tipo de formación concierne brindar a los niños, adolescentes y jóvenes en los actuales tiempos de la pandemia? Para iniciar la deconstrucción de los referentes situacionales de la comunidad educativa e iniciar a abordar la pregunta anterior, lo primero que se debe realizar es un ejercicio crítico y reflexivo situado con la participación activa de todos los

actores de la comunidad educativa, donde se posibilite abordar el inventario de los recursos TIC y la conectividad y la relación que existe entre la educación y las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (TIC), las implicaciones que tienen las nuevas interacciones entre los maestros, estudiantes y padres de familia(TAC) y la actitud adaptativa, sumisa y/o triunfalista de los maestros frente a la integración social de las tecnología a los procesos educativos(TEP). Lo anterior facilita develar las implicaciones que tienen las TIC/TAC/TEP, en las ciencias de la educación y la actual coyuntura que vive el mundo y el país frente a la pandemia del Covid 19. En términos concretos se lograría concertar las reconfiguraciones que son indispensables en el nuevo rol de la escuela y los maestros(as) en ambientes virtuales y tecnológicos. Es de reconocer, que se ha pasado de una sociedad industrial a la del conocimiento sin un tiempo adecuado para su procesamiento, y esta se caracteriza por el cambio, la comunicación, el conocimiento y la tecnología, por lo que requiere de personas especialmente convenientes que contribuyan al desarrollo de las Tres “C” imprescindibles en la educación del siglo XXI: Crear, Compartir, Cooperar. Distintos autores han insistido sobre el poder de la tecnología para transformar la enseñanza. Sin embargo, esta perspectiva siempre coincide con un aspecto que glorifica las tecnologías de la información y la comunicación y minimiza los aspectos institucionales de la enseñanza, el aprendizaje y la evaluación y su papel de control y regulación social. Además, que el tema de por sí es amplio y complejo, desde una opción personal, se enmarca en el asunto de sí la tecnología, y concretamente las tecnologías de la información y la comunicación (TIC), son lo que quienes las promueven o atacan dicen que son. Hay quienes exaltan el rol de la tecnología y quienes la descalifican. Todos los extremos son viciosos, como lo expresara Aristóteles. En este sentido, se entiende por las TIC como aquellas tecnologías que se asocian con la informática, el manejo de la información y la comunicación, que replantea la necesidad de incorporar dispositivos tecnológicos (computadora, el video-proyector, la pizarra digital, así como dispositivos móviles, entre otros) dentro del Proceso Enseñanza/Aprendizaje/Evaluación, haciendo uso de la internet como un espacio virtual (Espinosa & Rodríguez, 2017). En estos desarrollos del proceso de la Enseñanza/Aprendizaje/Evaluación mediados por las TIC, se tienen que afrontar con dificultades en lo que a la representación del conocimiento (no sólo de la información) se refiere. Lo primero es el peligro de contribuir a disminuir la importancia del conocimiento, por la tendencia excesiva del conocimiento factual o aquel que se puede evaluar por la memorización y esta dado por hechos, fechas, formulas, esto dificulta llevar a cabo tareas de aprendizaje de alta demanda cognitiva. El segundo aspecto está en relación con el uso de las imágenes. Distintos estudios han mostrado que las

imágenes pueden trasferir prejuicios que los textos y esto favorece un tipo de representación e impide a los estudiantes desarrollar otros tipos representaciones mentales. Consecuente con lo anterior, Silvia Casiblanca plantea que las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), las Tecnologías del Aprendizaje para el conocimiento TAC) y las Tecnologías para el Empoderamiento y la participación (TEP) son procesos que posibilitan el intercambio de conocimiento sin barreras de la distancia, para compartir nociones conceptuales y experiencias. En términos de Casiblanca solo es posible perdiendo el rumbo, como lo expresara Aníbal Quijano indisciplinar las ciencias sociales para que sean posibles nuevas perspectivas de en el ámbito educativo. Siguiendo este orden de ideas, para que las TIC-TAC-TEP, posibiliten la cualificación de los procesos de Enseñanza/Aprendizaje/Evaluación, se hace indispensable contar con la voluntad de los directivos docentes, los maestros, los estudiantes, el estado, la familia y la ciudadanía. Estas deben estar cimentadas en una teoría educativa o pedagógica por la estrecha y marcada relación entre estas y la pedagogía; porque lo que pretenden los entornos virtuales es implementar nuevas estrategias de Enseñanza/Aprendizaje/Evaluación, para movilizar a los estudiantes hacia los aprendizajes. En consecuencia con lo expresado anteriormente, y en palabras de José Bernardo Toro, de lo que se requiere con relación a los ambientes virtuales es "Movilizar y convocar voluntades para actuar en la búsqueda de un propósito común, bajo una interpretación con sentido también compartido. Toda movilización tiene objetivos predefinidos, un propósito común, por eso es un acto de razón”. De allí, surge la necesidad cambiar el locus de enunciación frente al sistema educativo tradicional y como lo expresara Grosfoguel (2007). El éxito del sistema educativo tradicional obedece a que los que están socialmente abajo piensan epistemológicamente como los que están arriba. En términos concretos, lo que se requiere es asumir una nueva postura o locus de enunciación en el trabajo pedagógico con ambientes virtuales, como lo planteara Falls Borda, hay que comprender lo racional, lo emocional, la disposición, las pasiones, los sentimientos, es decir un sujeto sentí-pensante que desarrolle mejores procesos de desarrollo y aprendizaje; donde los aprendizajes y autoaprendizajes de los estudiantes sea el foco de una manera autónoma. Los sistemas educativos tienen un gran compromiso en el uso y manejo de las TIC/TAC/TEP, como herramientas necesarias para que los maestros(as) enfrenten la formación de los estudiantes en el siglo XXI. Su aplicación en los procesos de aula y práctica pedagógica será de forma gradual, no tienen vuelta atrás. Estas deben tener un respaldo teórico, son transversales, fortalecen la interdisciplinariedad, hay que enmarcarlas dentro de modelos pedagógicos

emancipadores y dinámicos. Son potenciadoras y facilitadoras de otras pedagogías y configuran formas de ver el conocimiento y los modelos curriculares congruentes con la realidad y el contexto. Por esta situación, es indiscutible y necesario que las escuelas realicen un proceso pedagógico para ir más allá de las TIC no solo en el manejo de las herramientas, sino pasara a utilizar las TAC/TEP, como herramientas para la construcción del conocimiento y la participación social, mediante el pensamiento crítico de directivos, maestros y estudiantes frente a las tecnologías. De allí, es imprescindible que los maestros(as) trabajen con un currículo ajustado al contexto educativo, no solo a las TIC sino ajustado a las TAC/TEP, en que las herramientas audiovisuales digitales sean transversales al quehacer dentro y fuera del aula, donde el estudiante no solo reciba información de un contenido, sino que aprenda elementos socio-críticos para asumir una participación ciudadana mediante los medios digitales. En esta dirección, las humanidades digitales (HD), definidas por Galina (2011) como el término que engloba un nuevo campo interdisciplinario que busca entender el impacto y la relación de las tecnologías de cómputo en el quehacer de los investigadores en las Humanidades (…) buscan hacer que las tecnologías se conviertan en una herramienta de culturización y acercamiento de las sociedades dentro de su contexto y realidad diaria. Las (HD) se han vuelto cada vez más importantes en el ámbito académico y ofrece nuevas posibilidades para el desarrollo de la investigación y la Enseñanza/Aprendizaje/Evaluación en las humanidades. (p. 3) Entonces es importante tener en cuenta investigaciones de diferentes didácticas mediadas (HD) que repercutirán en los maestros(as) y estudiantes. Las TAC (Tecnologías del Aprendizaje y del Conocimiento), deben ir más allá de aprender a usar las TIC y explorar las herramientas tecnológicas para ponerlas al servicio del aprendizaje y la adquisición del conocimiento; lo cual no tendría éxito si dentro de este proceso no se incorporan las Tecnologías para el Empoderamiento y la Participación (TEP) que fomentan la interacción de todos los personas involucradas en el proceso. En concordancia con lo escrito anteriormente, las TAC es una concepción que sirve para identificar las tecnologías que fortalecen el proceso de Enseñanza/Aprendizaje/Evaluación. Con ello, se pretende que a partir de estas mediaciones tecnológicas la escuela promueva en los estudiantes una postura crítica del análisis y la reflexión y sean socializadas mediante las TEP, por ser estas la última instancia del proceso educativo que se proyecta del aula de clase al entorno social y que logra la construcción de un conocimiento colectivo de alto impacto.

Finalmente con la aparición de las TEP (Tecnologías de Empoderamiento y Participación), se busca la colaboración en un marco de interacción, reflexión y construcción conjunta de aprendizajes que permiten no solamente aterrizar en el conocimiento de un contenido sino contextualizarlo y situarlo con base a las necesidades de formación que cada estudiante. En este ámbito la autogestión y el autoaprendizaje deben estar en un proceso de desarrollo continuo, de tal manera que sea el elemento importante para ubicar y participar, en estos ambientes colaborativos. En este proceso de incorporación de las TIC/TAC/TEP al ámbito educativo se hace indispensable tener presente la evaluación como parte esencial en los procesos de Enseñanza/Aprendizaje/Evaluación. Las actividades y estrategias de evaluación más usadas en esta modalidad a menudo incluyen autoevaluaciones, foros, portafolios, blog, chat, diarios reflexivos y trabajos colaborativos. Coherente con lo anterior Quesada (2006) hace una serie de valoraciones con respecto a la evaluación del aprendizaje en línea. Finiquita que la evaluación formativa es en sí misma una más de las actividades de enseñanza, aprendizaje y que estas las realizan los estudiantes y se convierten en actividades de evaluación, que esta se individualiza y que cada evaluación conlleva un proceso de retroalimentación. Otros estudios, señalan que el uso de estos modelos de evaluación virtual, comparados con los modelos tradicionales, requiere un mayor trabajo previo del maestro, pues tiene que darle un formato virtual a la asignatura o el área. De todo lado lo expresado sobre las TIC/TAC/TEP anteriormente, se colige que es fácil predecir que el regreso a las escuelas no va a ser una simple continuidad, indiscutible que exige otras acciones diferentes a las ya determinadas en las escuelas, ya que al encontrar un entramado de usos sociales complejos, más interconectados y preocupados por el conocimiento y la gestión de la información, este nuevo contexto de la participación, el control de las escuelas, el análisis sistémico de la realidad y el sentimiento de la ciudadanía global van a estar muy presentes. Ojala que cuando se produzca este ‘Regreso’ a las escuelas, sería muy conveniente que los maestros(as) estén ‘formados’ y aprovechen así el actual estado de confinamiento para preparar otros comportamientos docentes, aunque esto suponga ‘elaborar el duelo’ por la pérdida voluntaria de algunos estilos de Enseñanza/Aprendizaje/Evaluación que han llevado a nuestro sistema educativo al actual desajuste. Por tanto, ahora tenemos ahora una gran posibilidad de desplegar otras interacciones de Enseñanza/Aprendizaje/Evaluación, utilizando las experiencias de algunos maestros(as)(virtuales) que vienen construyendo, desde hace años, en busca de una escuela más democrática, comprometida y justa, preocupada por la

formación de estudiantes libres, autónomos, con conciencia ética, rigurosos y responsables en sus aprendizajes. Atendiendo a todo lo dicho anteriormente se deduce que el nuevo rol de los maestros(as) en trabajo pedagógico en entornos virtuales conlleva a, que: Planear y proveer recursos para los aprendizajes para los estudiantes, organizar y facilitar equipos de trabajo, promover experiencias compartidas del uso de las TIC, actualizar las temáticas, crear los hábitos de búsqueda y manejo de la información en los estudiantes. Las TIC/TAC/TEP seguirán transformado el entorno de aprendizaje actual, pasando de uno tradicional centrado en el docente centrado en el estudiante. Las TAC, tienen la finalidad de cambiar la metodología en cuanto al uso de la tecnología, para conocer, explorar los posibles usos didácticos que las TIC tienen en la Enseñanza/Aprendizaje/Evaluación para ponerlas al servicio del aprendizaje y la adquisición del conocimiento (Palacios, 2019). La incorporación de las tecnologías de comunicación e información dentro del contexto escolar, pretende romper con la cultura de la educación bancaria caracterizada por un corte personalista o individualista. El nivel de conocimientos que les corresponde tener los maestros(as) en el manejo, uso e inserción de las TIC/TAC/TEP, para afrontar los procesos educativos virtuales de manera pedagógica, deben se adecuados y pertinentes. Las TIC/TAC/TEP, contribuye a la motivación de los estudiantes, el desarrollo de la creatividad, genera aprendizajes significativos, problematizadores y autónomos.. Las TIC se definen como los mecanismos de ayuda, procesamiento de información y aprendizajes donde se comprometen a seguir observando el aula de clase como un marco idóneo donde las relaciones humanas seguirán presentes. Los maestros deben reconocer que los avances los obligan a realizar cambios sustanciales en su rol tradicional y esto conlleva obligatoriamente a desarrollar procesos independientes y autónomos de actualización y formación frente a los nuevos modelos de interaccionen el aula y la práctica pedagógica. (Guía, tutor, mentor y acompañante). Las TIC sirven para aprovechar y mejorar los procesos de desarrollo y aprendizaje de los estudiantes y maestros(as) y disminuir las desigualdades existentes en la sociedad (brecha social). Se requiere que los maestros(as) promuevan ambientes pedagógicos virtuales habilitadores donde se integren las TIC/TAC/TEP a las prácticas sociales y utilizarlas con una visión estratégica de la comunicación y promuevan la participación social en el marco ético de la solidaridad.

Estén vigilantes para minimizar las amenazas y consecuencias del uso de las TIC, para evitar la ampliación de las desigualdades sociales, la homogenización de la cultura y la praxis de los individuos como producto de la saturación de la información y los aislamientos de los individuos del mundo real. De la concepción que tengan de la tecnología va a influye en su modelo pedagógico y desde luego en los procesos formativos de los estudiantes. Fortalecer el uso de las TIC como herramientas de Enseñanza, aprendizaje, y Evaluacion es una necesidad imperante y acorde a lo que esta generación demanda. Un ciudadano formado en el uso pedagógico de las TIC/TAC/TEP puede hacer uso del pleno derecho de incidir y transformar su entorno social. Se hace indispensable integración las TIC/TAC/TEP al currículo, a los proyectos educativos institucionales, a las prácticas pedagógicas, a los procesos evaluativos y a los demás agentes que hacen parte del contexto educativo. Los investigadores señalan que las TIC/TAC/TEP se utilizan de forma indiscriminada en la mayoría de las escuelas, carente de un sentido pedagógico. De allí cobra importancia integrar al currículo las nuevas tecnologías para aproximar a los estudiantes a los conocimientos esperados, a las metas formativas y a las transformaciones en el contexto escolar. La sociedad aumentada según Reig (2016), plantea establecer la tecnología como parte del proceso de humanización, y por ende, como eje, las TIC/TAC/TEP, para recuperar la interacción humana con la información, el conocimiento y el aprendizaje con una perspectiva participativa. Las Tecnologías de Aprendizaje y Conocimiento (TAC) se establecen como una reorientación de las TIC atendiendo más a la formación que a la información, al conocimiento como resultado de un proceso de gestión colaborativa, en ambientes de aprendizaje virtuales. Bibliografía Área, M., Gutiérrez, A., & Vidal, F. (2017). Alfabetización digital y competencias informacionales. Fundación Telefónica, 14-27 Dolors, R. (2016). Cuadernos de pedagogía, ISSN 0210-0630, N.º 473, 2016. Ejemplar dedicado a: La escuela es la vida. Acercar los aprendizajes al mundo real. 24-27 Espinosa, R., & Rodríguez, R. (2017). El uso de las TIC, TAC, TEP para desarrollar competencias empresariales y comunicativas en los estudiantes universitarios. Revista TECSISTECATL.

Mayorga, M. (2020). Conocimiento, aplicación e integración de las TIC – TAC y TEP por los docentes universitarios de la ciudad de Ambato. Revista TecnológicaEducativa Docentes 2.0, 9(1), 5-11. https://doi.org/10.37843/rted.v9i1.1 SANCHO, J. Mª (1993): Aprendizaje y ordenador: metáforas y mitos. Tarragona: Asociación Si... entonces. VII Seminario de Psicología. Sancho, J. Mª (1993): Aprendizaje y ordenador: metáforas y mitos. Tarragona: Asociación Si... entonces. VII Seminario de Psicología. Sancho, J. Mª (1994a): La tecnología: un modo de transformar el mundo cargado de ambivalencia. J. Mª En Sancho (Coor.) Para una tecnología educativa. Barcelona: Horsori. Sancho, J. Mª (1994b): Dalton: la escuela del futuro-presente. Cuadernos de Pedagogía, 221, pp. 60-66. Sancho, J. Mª; GUITERT, M. (1991): Informática y enseñanza. De lo 'ideal' a lo real. III Congreso sobre el pensamiento del profesor y el desarrollo profesional. Toro A. José Bernardo; RODRIGUEZ, Martha. La comunicación y la movilización social en la construcción de bienes públicos. Bogotá, Colombia. Enero 2001.