MAYO, 2018 NUM. 1 LA BELLA INDIFERENCIA Ensayos sobre psicología y psicoanálisis EN ESTE NÚMERO La institución, el p
Views 131 Downloads 4 File size 5MB
MAYO, 2018
NUM. 1
LA BELLA INDIFERENCIA Ensayos sobre psicología y psicoanálisis
EN ESTE NÚMERO
La institución, el psicólogo y el psicoanálisis Aflojar la tuerca: locura y psicoanálisis Una selfie, dos selfies, tres selfies, otra más y ya La locura como portadora de sentido
CARTA DE LOS EDITORES El acto de escribir es una convocación, una forma de organizar y elaborar experiencias; dar otro orden a la realidad. En la presente revista, escribimos porque hay una necedad de todo lo anterior. Escribir sobre psicoanálisis, o cualquier otro tema, por otro lado, tiene la ventaja y el añadido de quedar expuesto. Esto mismo permite el debate, las nuevas teorizaciones y el crecimiento de nuestra labor en la clínica.
Por tal razón, queremos presentarles cada tetramestre a nuestros lectores una serie de artículos, ensayos, investigaciones y entrevistas sobre diversos temas. Aunque no es una revista especializada en psicoanálisis, lo tomamos como bandera porque es nuestra influencia.
Nombramos a esta revista La bella indiferencia como analogía a la expresión freudiana. Freud lo utilizó para referirse a la manera en que las histéricas trataban a sus síntomas y había un momento de la cura en el cual no querían avanzar más en la comprensión de su enfermedad. Por ese camino él descubrió las resistencias que las aquejaban y lo ingenuo de querer derribarlas sin descender a las profundidades de la psique. Sin esta expresión de sus pacientes, Freud no hubiera encontrado el estímulo para
La bella indiferencia se terminó de imprimir el 6 de mayo del 2018 en las instalaciones de la Universidad de Nueva Extremadura, Santa Catarina, Nuevo León.
hacer un cambio en ellas. Pero, ¿cómo una indiferencia puede ser bella? Como estudiantes —nosotros los editores lo somos— nos motiva esa bella indiferencia de la comunidad psi ante la enseñanza y
aprendizaje de la psicología. Pensamos que esta comunidad hace caso omiso de las grietas que tiene la estructura de la transmisión y oficio de la psicología; y que muchas veces ni siquiera las reconoce. Por el contrario, premia el desconocimiento y la memorización de textos que no provocan el cuestionamiento ante las certezas establecidas. El alumno en su proceso de formación es inmune a ser tocado por las grietas y los puntos conflictivos de “la psicología”. Nos gustaría que esta revista pueda ser un camino en donde el lector no encontrará silencio ni complicidad, si no cuestionamiento, incluso cuestionamiento sobre nosotros mismos. Es probable que nuestro defecto sea tomarnos muy en serio las cosas, pero conscientes de la situación, asumimos una postura reflexiva que alude al psicoanálisis.
A nuestro lector le pedimos que pueda retroalimentarnos a través de la crítica de nuestros trabajos u opiniones. Estaremos muy agradecidos de escucharlos. Esperamos que La bella indiferencia sea de su agrado. Enhorabuena, gracias por leernos.
Editores: Jaime A. Reyes Diego García Ovalle Brenda Trejo Juan Antonio Cortes Diseño: Brenda Trejo / En la portada, una pintura de El Bosco. Contacto: [email protected]
Mtra. Danahé Cortez
la psicosis otra de las formas en que se le conoce a la locura, pero llegado este punto de inflexión en el escrito, el lector
La institución, el psicólogo y el psicoanálisis
posiblemente se cuestione si entonces existe o no la locura como tal, y de ser así, cuál es el tipo de abordaje pertinente realizar; si será factible el trabajo interdisciplinario o qué intervención es lo más recomendable.
POR JAIME A. REYES
“I guess that’s how it’s meant to be but heaven only knows” Emmylou Harris
Un asunto que nos puede brindar mayor claridad al respecto es el aspecto epistemológico que conlleva esta coyuntura
Desearía empezar a modo de justificación explicando la
que nos permita desarrollar un criterio más amplio acerca
motivación personal de este ensayo, hablar de institución
del tema de la locura y diferenciarla como condición o
tiene que ver con la poca o mucha –por ahora no
enfermedad por alteración orgánica, llámese cerebral,
discutiremos esto- experiencia que profesionalmente he
neuronal o en el sentido estricto de los criterios marcados
vivido como “psicólogo” (explicaré en la medida de lo
por el contexto social que se ha limitado a normalizar y a
posible las comillas). En general el rol del psicólogo es
utilizar mecanismos de exclusión o medicalización como
ambiguo así que debería especificar más sobre mi práctica
medios de intervención. Dar a la tarea de dar cuenta de que
que está marcada por “mi transferencia” hacia el
la locura puede portar su propio sentido, un sentido distinto
psicoanálisis tal como lo explica brevemente Tomasa San
al resto y no al de un estándar marcado. Recordar que es en
Miguel y donde me apoyo para diferenciar plenamente el
eso que pareciera no tener sentido donde un sentido distinto
rol del psicólogo del ejercicio de un analista y más aún en
nos habla.
el contexto de una institución. He aquí los tres engranes que articular este ensayo. Deseo también enfatizar lo
Bibliografía
siguiente, el psicoanálisis en su práctica privilegia la
* Armando Suárez, Et. Al. (1978). “Razón, Locura y
subjetividad (el inconsciente), aquello que hace diferente a
Sociedad. México,” D. F. : Siglo XXI Editores.
cada uno de los individuos, si bien en la teoría podemos
* Freud, Sigmund, (1923) ”Obras Completas, El Yo y el
aprender a ubicar modos de funcionamiento mental, si no
Ello y otras obras” Ed. Amorrortu, Argentina,
se aterriza a la subjetividad del paciente, volvemos a la
* O. M. S (2018). “Salud Mental”. 2018, Recuperado de
teoría una herramienta estéril. Si el psicoanálisis trabaja
Organización Mundial de la Salud, Sitio web:
con las particularidades de cada individuo aquello que
http://www.who.int/topics/mental_health/es/
Freud nombró “el deseo”, ¿que roces, cruces, efectos tiene el ejercicio analítico en un lugar institucional donde la
norma es lo contrario a las particularidades, es decir la regla
–como la locura-, de lógica, de orden, pero que Freud
por la homogeneización, la estandarización y las
planteaba que eran producto derivado del inconsciente y que
generalidades? y si -insisto- distinguimos que no es lo
a través de esas vías se realizaban los deseos de forma
mismo un psicólogo que un psicoanalista ¿cómo reacciona
sustitutiva, sumado a que su apariencia ajena al sujeto no
el psicólogo cuando se encuentra entre la espada y la pared?
representaba ninguna amenaza por lo que bajaba la resistencia, pudiendo así llegar a ser más tolerables para el sujeto a diferencia del deseo inconsciente. El vienés dio voz
I. La institución.
a todos estos actos, pues para él había un deseo en el
Empezaré por el primer actor. En afán de conservar la
síntoma que contenía un sentido para el propio sujeto que
neutralidad y objetividad del ensayo, diré algunas
nadie se había permitido escuchar, el aspecto subjetivo
obviedades (según yo) de una institución, la considero un
había cobrado un valor muy importante. El síntoma no sólo
lugar privilegiado para el ejercicio profesional, donde se
como un rasgo de carácter ni como indicador médico, sino
ofrece al “joven” recién egresado un trabajo con la
dotado de un sentido particular que lo diferenciaba de la
posibilidad de ejercer. Veo a mi generación y con cierto
terminología médica.
desazón pregunto: ¿Cuántos estamos realmente ejerciendo para lo que nos preparamos?. De ese modo la institución
Freud sumó a los conceptos desarrollados su segunda tópica
aparece como un buen lugar para iniciar a los estudiantes a
donde agregaba al yo, ello y superyó, aunque se enfocó
quienes dicho sea de paso deseo puedan llegar estas letras.
principalmente en el estudio de las neurosis, también
Quisiera advertirles lo siguiente: si encuentran trabajo “de
contribuyó al estudio de la psicosis la cual concibió como
lo suyo” muy probablemente será en una institución. He
una pérdida de la realidad para el yo, diferenciándola de la
aquí otra justificación para este ensayo.
neurosis ya que “La neurosis es el resultado de un conflicto entre el yo y su ello, en tanto que la psicosis es el desenlace
Ahora bien, una institución, la que quieran, está definida en
análogo de una similar perturbación en los vínculos entre el
términos de objetivos, es decir posee un plan (por lo menos
yo y el mundo exterior.” Es decir, que la psicosis es de
las más serias), una misión, una visión, tiene por decirlo de
constitución interna quedando a merced de la vida pulsional
alguna manera, una razón de ser, persigue un objetivo, tiene
en donde el yo estando al servicio del ello se retira de un
un funcionamiento determinado, posee principios e ideas
fragmento de la realidad creando una nueva, sui generis y
preestablecidas las que muchas veces no está dispuesta a
sustitutiva en el delirio.
negociar, a esto lo llamaré resistencia institucional, peor aún en otras ocasiones ni individuos ni
Es el delirio, la paranoia, y las diversas manifestaciones de
comprender al atender: las histéricas. Aunque era un neurólogo, le inquietaba que a estas histéricas alegaban contar con malestares de características idénticas a las de alguien con una repercusión orgánica como, por ejemplo, las cegueras, pero que no respondían a una afectación meramente orgánica sino de otra índole, psíquica, asumiendo así un rol de pacientes. Estos casos lo fueron llevando a desarrollar sus teorías partiendo principalmente de su postura como médico, para después incursionar en el hipnotismo, la abreacción, hasta ir descubriendo lo que hoy conocemos como psicoanálisis. Fue observando que no todo recuerdo era susceptible de conciencia y que había algunos que parecían resistirse a ser descargados, por lo que fue desarrollando la primer tópica en la que indicaba que había actividad psíquica de carácter consciente, preconsciente e inconsciente llegando de a poco a lo que se le conoce hasta ahora como la tercer herida narcisista para la humanidad, en la que Freud contrapuso a la psicología de ese tiempo aseverando que los humanos no somos dueños ni de nosotros mismos; que hay impulsos, pensamientos y deseos que se escapan del control de la propia conciencia, porque son de otra naturaleza, haciendo referencia al material inconsciente el cual operaba con mecanismos hasta ese momento desconocidos para la humanidad.
Esta aseveración dio pie a que se comenzara a dar importancia a todo aquello que hasta ese momento nadie había prestado atención por su condición de nimiedad como lo eran los sueños, los chistes, los actos fallidos, que eran manifestaciones que parecían carecer de sentido
la institución tienen conciencia de sus normatividades, no reflexionan lo que hacen o para que lo hacen, y cuando uno llega a laborar en ellas estos lineamientos operan pero de manera implícita. decía hace un momento, las más serias lo hacen explícitamente, otras, en cambio tienen objetivos tan vagos como “ayudar a las personas”, “integrar a la familia” “velar por los derechos de las personas con discapacidad” “formar profesionales en el ¿área? de psicología”. Cada institución, para conseguir su finalidad, tiene una organización básica inter-grupal. Existen en ella distintos grupos (técnicos, administrativos, usuarios, etc.) con tareas diversa, que organizan una red de relaciones, las que constituyen la trama institucional.
Por mencionar algunos ejemplos, sólo me detendré para decir que personalmente en las instituciones donde he laborado, la mayoría tiene sus objetivos de manera implícita, no dichas, uno supone ciertas cosas (demandas pedidos, funciones como las que acabo de nombrar), son al mismo tiempo esas instituciones las más burocratizadas y las más paralizadas en términos de productividad. Podríamos llamar a esto, junto con Pichon Riviere, síntomas institucionales, pienso también en otros problemas institucionales como por ejemplo en la dificultad de llenar una vacante, en este caso el síntoma sería la deserción del puesto. Pero sobre todo en instituciones estatales, la cosa empeora, pues están sujetas al partido que en ese periodo gobierne y al calendario electoral, que al acercarse literalmente los trabajadores tiemblan por perder su empleo, empieza el momento de afiliarse en bandos, los ¿rojos o los azules? También de acarrear gente
y banderas, ridiculización que sufrí en algún lugar de trabajo
posterior, que otrora fueron de relegación, internamiento y
donde colaboré.
exclusión como formas de tratamiento, tal como lo fue con los leprosos y convictos.
“Institución es organización, reglas que constituyen un instrumento destinado a promover el orden de una
¿Será que toda conducta aparentemente sinsentido y
práctica.”
disparate fuera de la campana de Gauss alejan de lo socialmente correcto y aceptable? ¿Será que estas
Reglas que ordenan la práctica como las “preconsultas”, el
condiciones y su aparición llevan a los sujetos a los terrenos
cruce con otros departamentos como por ejemplo los
de la locura? ¿Estas manifestaciones solo aparecen en
trabajadores sociales y los abogados con sus pedidos y
personas enfermas o son condiciones propias del alma
recomendaciones “terapéuticas” a sus asesorados que son
humana? ¿Es la falla al estándar en turno lo que se considera
enviados a psicología, recuerdo una institución que en su
patológico obligando a ser atendido por el régimen de la
organigrama tenía un departamento de jurídico y otro de
salud?
psicología, los psicólogos que trabajaban en el departamento de jurídico ¿que hacían? ¿terapia o una suerte de mediación
Con ello no se intenta prescindir de los tratamientos de la
en un conflicto entre particulares? si había un caso de
medicina o psiquiatría con relación a la locura ya que
maltrato infantil, la institución se regía por la regla de poner
pueden llegar a existir casos en particular donde permitirlo
la denuncia sin excepciones, decisiones sin un mínimo
sería un error grave, pues sin duda la psique y el cuerpo no
sentido de crítico, siempre donde intervenía la institución
son entes que deban atenderse ni entenderse por separado,
terminaba complicando los casos. Si se retiraba a los
pues de hecho, es la pulsión la que se apuntala en el mismo
menores ya no se sabía qué hacer con ellos, todo visto desde
cuerpo, pero sí considerar el señalamiento que en
el ángulo de la violencia y siempre queriendo encontrar en
ocasiones se intenta excluir o erradicar todo lo sin sentido
todo al agresor y a la víctima, se perseguía el ideal de
del psiquismo humano, lo raro, lo ilógico, lo inentendible, la
“protección de los niños, niñas y adolescentes” entonces el
voz subjetiva del propio sujeto puesta en juego en un solo
trabajo consiste en una persecución incesante, una cacería
común denominador a modo de enfermedad.
contra los que “atentan” por los derechos, una violencia institucional. Yo institución te digo quien eres, cual es tu
Freud con el psicoanálisis vino a hacer aportaciones
problema y qué debes hacer para resolverlo, un problema
fundamentales sobre el estudio del psiquismo y analizar las
que muchas veces yo generé pero te hago creer
condiciones de carácter psíquico y orgánico con personas que en su tiempo, la mayoría de los médicos no lograban
se puede decir, que lo hace enfermo, pero no paciente, al no
que es tuyo, y si no continuas los protocolos te he de llamar
someterse a ningún régimen de atención especializada.
cómplice y sancionar.
* En la tercera, se contempla a esas personas que identifican
Si, el panorama que describo fluctúa entre la represión y el
un malestar orgánico, pero que al solicitar atención
acatamiento, entre lo instituido y lo instituyente como lo
especializada no se les hallan anomalías biológicas, y aun
formula Castoriadis y Federico Suárez. “Las instituciones
así asumen el rol de enfermo, por lo tanto al solicitar algún
reproducen en su interior mismo, las relaciones de poder, de
tipo de asistencia médica se conciben como pacientes, pero
dominio y de hegemonía que están presentes en las
biológicamente están sanos. Según el psiquiatra húngaro
relaciones sociales. Por lo tanto, aquello que tiende a
Szasz, el claro ejemplo son aquellas personas aquejadas y
repetirse y a reproducirse de un ámbito a otro es una
atendidas en el área de la mente, (psicoanálisis, psicología,
situación de tensión, de juego de fuerzas, un equilibrio
etc.) tales como las histéricas, hipocondriacas, neuróticas,
alcanzado en un momento histórico, es decir, una situación
etc.
dinámica".
* Ya en la cuarta categoría, contempla a esas personas que
Si, las instituciones terminan por convertirse en una
no se consideran enfermas ni biológica ni mentalmente y
contradicción y la manera en que los trabajadores
que no pretenden asumirse como tal, pero que aun así, se les
sobreviven a esas tensiones es generalmente aislándose y
considera desde una perspectiva médica de forma categórica
paralizándose en términos de productividad, desviando la
como enfermo y se les trata como si lo estuvieran, aun sin su
atención en fricciones entre ellos, generando una atmósfera
consentimiento ni petición. Es esto precisamente el
de un negativo “ambiente laboral”.
señalamiento y crítica que se le hace a las intervenciones producidas en el campo de la psiquiatría hacia algunos
II. El psicólogo.
sujetos el basar su intervención meramente en la lectura de
Cruces entre ambos departamentos eran frecuentes, sobre
los síntomas como suele hacer la medicina asignando
todo los abogados pedían al psicólogo que le diera “terapia”
por correspondencia un trastorno clasificatorio que oriente
a determinada persona pues creía conveniente la abogada
un tipo de atención en especial en el campo de la psiquiatría,
por tal o cual situación.
el lugar de enfermo le es asignado al sujeto tal
Tomemos otro ejemplo y extendamos a cada uno de nuestros
como lo menciona el cuarto punto del que nos habla Szasz, a
tres actores pensemos el criterio de alta y baja hacia un
través de una clasificación dependiendo los síntomas
paciente, se considera que el psicólogo debe darlo de alta a
manifestados que condicionarán los modos de intervención
los 3 meses, y darse de baja cuando falta dos sesiones
por lo que puede llegar a variar según el contexto en el que seguidas. otra medida es la referente a la preconsulta pues priva al psicólogo de este momento ideal de contacto con las ansiedades del paciente, ansiedades que se expresan con mayor fuerza durante la primera entrevista pero que en el
se desarrolla, dando lugar a que todo síntoma le corresponde una categoría y a toda categoría un tratamiento, prescindiendo la mayoría de las veces del lado subjetivo del malestar.
departamento de preconsulta esta entrevista la realiza otro personal. Bien llegado a este punto pudiéramos orientar el ensayo hacia ese lado del análisis, es decir, de los “problemas”. Pongo comillas porque estas situaciones relatadas muchas veces no son vistas así, como problemas, pudiera seguir por ahí pero me interesa realmente enfocar las consecuencias que esto tiene en el ejercicio de un “psicólogo”. Voy aclarando las comillas, al llegar a un trabajo se espera del psicólogo determinadas cosas, por ejemplo iniciando con una demanda tan vaga como, “dar pláticas de sexualidad a los adolescentes” “dar tratamiento a las mujeres víctimas de violencia” en el primer ejemplo de plática los adolescentes no necesitan nada, son más bien ellos los que –si se hace un buen trabajo- nos terminan enseñando. Y en el segundo caso ocurre un efecto paradójico, se re victimiza a la mujer, pues debería vivir la violencia de manera pasiva, debería estar afectada y
Entonces, estamos hablando de la locura interpretada como una patología desde un enfoque médico, concepción que dista de la connotación estadística que alguna vez se le acuñó en la psiquiatría y en la psicología, que aludía a que toda persona con comportamientos fuera de lo considerado normal por el contexto, la padece, independientemente de si existía algún daño neuronal o no, pues salir de la norma se consideraba portarla, por lo tanto, podemos aseverar que la locura tiene varios caminos, entonces, ¿de qué forma se relacionan la locura, la enfermedad y el sujeto? ¿Es acaso que el loco está enfermo o, que al loco se le considera enfermo? Ya Thomas Szasz, consideraba que estas condiciones son diferentes la una de la otra, pero guardan relación, por lo que procuraba clarificar los diversos roles que juega el sujeto, entre ellos el del enfermo, que desglosa en cuatro posibles escenarios:
traumatizada, debe poner la denuncia y someterse a todos los protocolos que “por su bien” necesita acatar, es decir, ahora una violencia institucional y que en la mayoría de los casos con la complicidad del psicólogo en puesto, orientando a las personas a seguir los lineamientos, el
* La primera es el de la persona enferma en su orden biológico que va y busca de forma voluntaria ayuda y atención médica, es decir, identifica una enfermedad demostrada y asumida, que le da su condición de paciente.
psicólogo como agente represivo hablando socialmente, ¿van tomando forma las comillas? Eres psicólogo y debes pensar y hacer esto y aquello, de lo contrario no eres buen psicólogo. ¿Cómo sostener un trabajo que tome en cuenta cuestiones
* La segunda, el sujeto que se sabe enfermo biológicamente, pero no solicita atención médica, ni de ningún tipo, lo cual,
La locura como portadora de su propio sentido
subjetivas, particularidades de cada caso, cuando la institución ya fluye a manera de un río y lleva consigo en la corriente a los trabajadores? Este es el punto de vista que quiero seguir desarrollando en estas líneas. Demandas
POR JUAN ANTONIO CORTES
institucionales hasta el punto por ejemplo de usar al psicólogo para determinar en un caso cuál de los dos está
La locura ha sido concebida como una condición desviada
mintiendo. También recuerdo una consigna institucional, “el
del comportamiento humano a tratar a lo largo de la
psicoanálisis no debe utilizarse en la institución” y toda una
historia. Considerada como aquello que no entra en la
cacería en contra de los psicólogos que se identifiquen con
normativa social e intervenida con fines adaptativos.
el psicoanálisis, en este caso acusados sobre mitos contra el
Actualmente se le determina de forma ambigua y confusa,
psicoanálisis, mitos que muchas veces los mismos
pero con formas muy concretas de abordarse.
psicólogos fomentaban y se escondían acatando y encerrándose en el clóset.
La psiquiatría ha sido una de las encargadas de su estudio elaborando formas de intervención de manera
III. El psicoanálisis.
contemporánea desde una perspectiva médica, haciendo
Partamos ahora de una base, el inconsciente como objeto de
uso de la taxonomía, pues a través de la clasificación y
estudio del psicoanálisis, no lo es la conducta ni la
categorización de sus características y síntomas es como la
conciencia, es decir no lo es la memoria, ni la atención ni el
ha ido delimitando, con base a eso, ha ido desarrollando e
aprendizaje, ni mucho menos “la personalidad” por
implementado tratamientos diversos. El encontrar rasgos
mencionar algunos aspectos más estudiados en las facultades
particulares de comportamiento y variaciones en la
de psicología y más deseosos de ser trabajados en las
actividad cerebral ha permitido que se le considere como
instituciones pero, aquí viene el meollo del asunto, el modo
una enfermedad a tratar, como una patología a curar dentro
de abordarlos derivan linealmente de la idea de conciencia,
del ámbito médico a modo de padecimiento. Por lo tanto, su
de la idea de mente como algo fijo, lo que el psicoanálisis
intervención apunta con dirección a la salud mental, que la
plantea no es la negación de estas dimensiones, pero si lo
Organización Mundial de la Salud define como “un estado
sujetas que están a procesos inconscientes, si se me permite
completo de bienestar físico, mental y social, y no
una metáfora: Es re-conocer como un edificio fue construido
solamente la ausencia de afecciones o enfermedades”. Es
sobre un suelo movedizo. Ahora bien si el psicoanalista,
decir, tiende a buscar un equilibrio entre sus distintas
eventualmente el psicólogo podría también ser consciente de
esferas, sumado a la adaptabilidad con el entorno. Este
ello, es decir: sensibles a los procesos psíquicos primarios
enfoque se centra en una normativa estándar,
(desplazamiento, condensación, desfiguración) reconocerá
Y aquí llegamos a otra pregunta encadenada y casi por
las limitaciones y los inconvenientes de fiarse totalmente del
antonomasia: ¿tomarte una, dos, tres, cientos, miles de
discurso consciente del paciente, y en este caso dejarse
selfies es signo de psicopatología? Es arriesgado pensarlo
llevar plenamente por la visión y la misión de una
así tan fácil, pero sí podemos decir que es una forma más del
institución, aquí deseo empezar a avanzar con cuidado, esto
narcisismo reinventado del siglo XXI. Factores como el
que acabo de decir no significa que debamos tachar de
valor de la imagen, del cuerpo, la estima, el reconocimiento,
mentira el discurso de nuestros pacientes, ni los discursos
entre otras cosas están presentes en esta práctica tan solitaria
institucionales, ambos funcionan a modo de formaciones de
y paradójicamente social y pública, a la cual podemos
compromiso, son creaciones discursivas, como los síntomas
interrogarnos a nosotros mismos a quién y qué estamos
neuróticos, es muy diferente y hay un mundo de distancia en
retratando con tanta frecuencia.
decir “lo que usted me dice es mentira, lo que ustedes instituciones hacen es falso” a decir “han terminado por
Se dice que una imagen dice más de mil palabras. Hay
hacer exactamente lo contrario a lo que deseaban” en dado
quienes preferimos leerlas.
caso en ambos ejemplos como diría Althusser se trata de hacer una lectura sintomal en oposición a una lectura literal.
“En efecto institución e inconsciente se excluyen por su naturaleza misma, mientras la primera intenta ligar y encadenar mediante regulaciones y decretos, lo inconsciente por el contrario es el dominio de la no-ligazón, de los procesos psíquicos primarios, de la no-valoración ni ordenamiento, de la no-jerarquización de nada respecto a nada”
Hasta aquí voy totalmente de acuerdo al planteamiento y la cita que el profesor Flores nos regala, lo vivimos a diario, que alguien se acerque a una institución a solicitar determinado servicio no significa que ipso-facto su demanda sea tomada como su deseo, el psicoanalista lo sabe, una cosa
¿reivindicación de autoestima?, ¿se busca uno mismo ad-
es el motivo manifiesto de consulta y otra es el motivo latente
mirarse?, ¿ser visto por los otros? Muchas preguntas pueden
de consulta, vengo por que “mi” síntoma es insoportable pero
abrirse en esta práctica, que en muchos se ha vuelto ritual-
no vengo por el conflicto de mi deseo inconsciente, ahí existe
ceremonia. Por el momento podríamos decir que eso que
un desnivel, un punto conflictivo, un punto en tensión, en la
retratamos, no somos nosotros y sí a la vez.
institución es parecido, nos adherimos plenamente a su misión y visión pero las dificultades ¿son siempre de los usuarios? si
No lo somos en el uso de filtros: es decir, solo una parte queda
los alumnos no aprenden es por culpa de los padres, si la
de nosotros. Un resto o remanente de uno mismo. Un filtro
familia no se acerca es por problema de ellos en ambos casos
muestra un pedazo de nosotros mientras otro lo deja fuera.
yo como maestro, psicólogo, trabajador estoy bien, replicando la misión institucional, ¿o nos sorprendería descubrir que en
No lo somos porque “salimos” en la foto: el lenguaje nos
instituciones lo inconsciente se puede expresar en ataques hacia
permite decir que estamos “saliendo” en una foto para
el mismo trabajo? Eso que los “psicólogos laborales” llaman
referirnos a que entramos en un marco donde solo una parte de
clima organizacional.
nosotros se plasma ahí. Aunque sea una foto de cuerpo completo, nunca nos veremos completamente (esquivando la
El proceso de escuchar, convocar a los yoes en situaciones de
pregunta si nosotros somos sólo cuerpo). Dentro de los
masa o de grupo y a la institución es algo que genera ansiedad,
significados de la palabra salir, está el de pasar de dentro
en gran medida dependerá si los yoes en la institución logran
afuera, como también el de aparecer o manifestarse. Es decir,
identificarse en estos problemas como participantes, tomemos
que la única manera de salir o aparecer en una foto y
otro ejemplo: digamos si el grupo que yo dirijo tiene problemas
reconocerme a mí mismo, es sabiendo que soy otro. El inter-
de conducta ¿tendrá que ver con algo de mi manera de
juego de interno-externo es claro.
dirigirme a ellos? si recibo alumnos que en si no son agresivos ¿tendré que ver en algo yo? como me decía un maestro “van
No lo somos porque para una foto regularmente posamos: es
entre 7 y 12 alumnos que me golpean” es cierto que la
decir tenemos ciertas posturas que no hacemos en la
presencia de un psicoanalista genera ansiedad, así como quien
cotidianidad. Tenemos ciertas posturas en la selfie. Es un
está dispuestos a escucharnos sin tapujos, nos presta el máximo
fragmento o un marco que pretendemos exhibir.
de su atención y nos cede la palabra provoca angustia, que “las plumas se caigan” que se contagie uno de risa inmotivada, pero
Y sí lo somos porque en parte sí somos imágenes, recuerdos,
cuando se logran hilar y analizar los discursos de los yoes en la
reminiscencias: necesitamos una imagen de nosotros mismos
institución - y he aquí lo que yo agregaría a la cita del profesor
para guiarnos espacialmente, para integrarla a un cuerpo, para
Flores- el saber sobre el inconsciente posibilita que los
vernos al espejo e identificarnos con eso que está enfrente y
individuos enfoquen su tarea de manera nueva, si yo
aprender cierto control sobre él. Es por eso que muchas
“psicólogo” la institución “me delega la tarea” de armar una
psicopatologías del cuerpo están asociadas a la imagen que uno
capacitación para el personal, tengo creo yo dos opciones:
tiene de sí mismo.
armar un temario y una suerte de módulos que de manera “didáctica” yo les presente al personal o tengo la opción de invitarlos a hablar y decirles “yo aquí no soy el que sabe,
de aquí en adelante el conocimiento que adquiramos lo
Por otro lado, esto nos hace suponer que el valor que le
construiremos juntos. No estoy yo aquí para decirles cómo
damos a la fotografía ha cambiado en muy poco tiempo. Si
hacer con su trabajo porque ni siquiera estoy yo en su
antes era un lujo tener una cámara, ahora asequible tener una
puesto, pero si puedo ayudar a que enriquezcan,
al alcance haciéndose una práctica muy cotidiana en la
perfeccionen su práctica a partir del saber del inconsciente,
población en general. El paso de la foto impresa a la digital
si empezamos a compartir experiencias”. Un enfoque así es
terminó por cambiar también la forma y el contenido de las
muy distinto y puede ser aceptado por la institución bajo el
fotografías. Tenemos la oportunidad de almacenar miles y
rubro de “capacitación” pero es un modelo analítico, donde
miles de fotos en múltiples plataformas, por lo cual, es
la escucha y el saber del inconsciente aportan y no solo nos
probable que entre tantas, muchas de ellas no tengan un
quedamos en el cuestionamiento de los “buenos y
valor realmente significativo para nosotros, pero tampoco
samaritanos” propósitos institucionales.
queremos “deshacernos” de ellas.
Bibliografía
Una selfie, dos selfies, una más y ya
* Bauleo, Armando – Note di psicología e psichiatria
No es sorprendente que la imagen reine más que nunca. Un
sociale– Pitagora Ed., Bologna 1993.
celular prácticamente no tiene razón de ser sino tiene una
* Flores, David C. “Formar psicoanalistas, advenir
cámara integrada. Y ¿qué hacemos con ella? Nos
psicoanalista” en ¿Psicoanalizar? ed. privada, Monterrey,
autorretratamos. Un portal de internet nos dice “La palabra
N.L., 2011
retrato viene del latín “retractus”, de “retrahere” (hacer
* Freud, Sigmund. Obras Completas, 3 ts.,Biblioteca Nueva,
volver atrás), también viene de reducir y abreviar, convertir
Madrid, 1973.
algo en otra cosa, sacar de nuevo a la luz, hacer revivir
* Suárez, Federico (2010) Introducción al concepto de
algo”. Es curioso pensar que retratar está asociada con la
institución.
palabra reducir y abreviar, y que en ese sentido cargamos
* Centro de estudios e investigaciones José Bleger. Rimini,
con cientos de “miniaturas” de nosotros mismos en nuestro
Italia. Psicología Grupal. https://psicologiagrupal.cl/?p=532
celular. Fotos y más fotos. Abreviaturas de uno mismo.
* Veli, Monica. El psicoanálisis en las instituciones relacionadas con la salud. Revista Imago, Argentina.
El autorretrato o selfie se ha vuelto una tendencia importante
http://www.imagoagenda.com/seccion.asp?IdSeccion=11
en los últimos años. Pero ¿qué realmente retratamos?, ¿es una vuelta egoísta y narcisista?,
Una selfie, dos selfies, tres selfies, otra más y ya
Aflojar la tuerca: locura y psicoanálisis
POR DIEGO GARCÍA OVALLE
POR BRENDA TREJO
Lo dijeron y lo repitieron esclarecidos portavoces de Algo: “Se acabó la escritura. La literatura está condenada a morir. De ahora en adelante sólo existirá la Cultura del Ruido y de la Imagen” Mario Benedetti
Mientras que Descartes no duda en comprender a los humanos como máquinas, Freud apuesta por aflojar los tornillos. Algunos racionalistas afirman, entre otros argumentos, que la razón y las matemáticas son el motor para acceder al conocimiento. Para ellos, somos dueños de
Con el pasar del tiempo, es observable que no solo el hombre crea la tecnología, sino que también la tecnología transforma al hombre. Aparece como desfile y sin parar: internet, la comida rápida, los mensajes instantáneos, sopa instantánea, armas biológicas, los mejores limpiadores, antivirus, las videollamadas, hiper-conectividad y con esto la sensación de estar en todos lados: conectado en Facebook, Whatssap, ver Netflix, mandar un correo electrónico, subir una foto en Instagram de la captura de pantalla de una conversación de Whatssap que viste en Facebook mientras veías Netflix. ¿En dónde estamos entonces? La omnipresencia que antes solo podías acceder literalmente en sueños (y es raro decir literalidad hablando de los sueños), ahora puedes alcanzarla de manera imaginaria.
nuestro pensamiento y organizamos el mundo con el intelecto. La ciencia moderna se gobierna bajo estas características. Ante la imposibilidad de definir con exactitud a la naturaleza, los animales y los humanos, todas las disciplinas científicas buscan clasificar los objetos cognoscibles: especies y razas, normales o anormales, sanos o enfermos. Es verdad que las ciencias han producido luminosos hallazgos que contribuyen a nuestro entendimiento de las cosas, pero también es cierto que nos dan sólo un par de engranes de la verdad. Esto es una metáfora. El racionalismo también teorizó que el mundo podría ser una máquina gigante, cuyo mecanismo es posible analizar cuantitativamente. Todo es cuestión de movimiento en la materia. No sorprende que la psiquiatría y la psicología utilicen esta lógica para comprender los
Hoy en día podemos ver el espacio exterior por internet, podemos ver las calles de Pekín en Google maps, podemos ver a un feto en 4D, podemos ver nuestros intestinos, nuestras células. ¿Eso somos? Tenemos, entonces, la posibilidad de conocer otras “interioridades” y otras “exterioridades”. Podemos ver más.
fenómenos humanos. El cerebro es una máquina gris con conexiones neuronales. El problema es justificar que las emociones, conductas y pensamientos sean producidos sólo por el artefacto. Para descomponer esta maquinaria científica, Freud usó una llave inglesa: el psicoanálisis. Su principal maniobra la usó en la locura.
Una primera vuelta de tuerca es afirmar que el Yo —la conciencia — además de ser la base del intelecto y la voluntad, es también un espacio para el sinsentido. El Yo es excéntrico. Si la locura ha sido excluida desde tiempos clásicos, incluso geográficamente como ilustra La nave de los locos y lo confirma la existencia de manicomios y hospitales, los especialistas de la mente insisten en aislarla con el uso del lenguaje. Los sinónimos de la locura son desorden, des-equilibrio, sin-razón, des-varío, a-normalidad, in-consciente. Aunque la forma más objetiva que han logrado para describir a la locura sea enfermedad mental. Otra vuelta de tuerca es cuestionar este concepto.
En contraposición de la enfermedad está la salud. Esta dupla teórica es producto del pensamiento médico para referirse a una afección del cuerpo. La problematización del concepto de enfermedad para referirse a la mente radica en la noción de normalidad. Los estándares acostumbrados y permitidos por una sociedad determinada deciden si hay enfermedad en un individuo. Dentro de este sistema, estar sano supone estar adaptado. La locura sucede cuando alguien no se comporta ni siente, mucho menos cuando no piensa como la mayoría. De este modo, la enfermedad se vuelve otro sinónimo de la locura.
En su ensayo La locura y el psicoanálisis en los tiempos modernos, Leticia Flores explora la definición de salud que propone la OMS. La salud es "un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades". Para Leticia, esta definición
El Bosco (1503). La nave de los locos. [Óleo sobre tela]. Museo del Louvre, París, Francia
Bibliografía
es un enlace para recordar una propuesta freudiana. El bienestar se refiere a la disminución de tensión en el
* Ensayo escrito para una reseña del texto La locura y el psicoanálisis en los tiempos modernos de Leticia Flores. * La pintura de El Bosco La nave de los locos es mencionada por Foucault en su libro Historia de la locura en la época clásica para afirmar que la pintura es un símbolo muy notable de la experiencia renacentista de la locura porque aparecen los locos en una barca que los expulsará al mar. * Breton, André (2003). Diccionario de surrealismo. Editorial Siruela. * Obras completas de Freud. Tomo XXI. Editorial Amorrortu.
organismo. Freud nombró a este estado el principio de placer. Se vuelve importante recordar otro concepto que se vincula con el bienestar freudiano: el apuntalamiento. El principio de placer es tanto físico como psíquico. El psiquismo se apoya en el cuerpo para equilibrar las tensiones que el propio organismo tiene y el exterior provoca. Lo de afuera es el principio de realidad. Es una relación recíproca en donde las funciones vitales del cuerpo apoyan la satisfacción psíquica. En un principio, las mismas fuentes y los mismos objetos: la satisfacción de la pulsión oral se apuntala en la satisfacción alimentaria ligada a las necesidades de la nutrición. La metáfora de la máquina fracasa en este encuentro. El bienestar y la patología médica se trataría de una relación entre cuerpo-psique.
Como plantea la definición clásica de salud, el bienestar no es solamente físico y mental, también es social. Freud gira la tuerca otra vez en su ensayo El malestar de la cultura. Si lo normal es aquello que la sociedad espera que los individuos realicen, hay una dimensión ética y moral: las acciones humanas se plantean en función de un bien, de la búsqueda de un bien, y en consecuencia, de la eliminación del mal. Esta aseveración tiene una semejanza con el objetivo de las psicoterapias que actualmente se proponen como solución a la locura, a la enfermedad mental. Lo absurdo es que la búsqueda de la felicidad individual se contrapone con la social porque la colectividad ha instaurado un bien moral que ordena las pasiones humanas:
"la cultura exige, para su progreso, que el sujeto renuncie a
Los surrealistas que fueron coetáneos a Freud lo
su bienestar, a la satisfacción de sus pulsiones", concluye
confirmaron con su simpatía por la fantasía y cualquier
Freud. "No se puede tener seguridad alguna en alcanzar un
método que produzca disparates en nuestra realidad
bienestar posible. Al estar sujeto a esa regla moral, el
acostumbrada. André Breton, por ejemplo, remarca que "los
desasosiego que resulta de la renuncia del placer organiza y
locos son, en cierta medida, víctimas de su imaginación, en
define la vida misma", infiere Flores. A grandes rasgos, el
el sentido que ésta les induce a quebrantar ciertas reglas,
síntoma freudiano es un conflicto de intereses respecto al
reglas cuya transgresión define la calidad de loco". Es
placer interior.
interesante que el artista considere que la violación de un precepto social precise la condición de la locura. La
La relación de las personas consigo mismas y entre ellas,
densidad de la conmoción que provoque un loco en la
produce continuamente infelicidad, culpa, agresión y
sociedad será determinante para encerrarlo o elogiarlo;
reacciones que, en ocasiones, se desvían de la norma.
considerarlo un demente o un genio. Cuando Scott
Siempre estamos a punto de cruzar la frontera hacia la
Fitzgerald escribió su ensayo Crack Up, consideraba que
locura. En verdad lo hacemos con pequeños deslices que
grandes golpes internos le ocurren a una mente que
Freud reconoció como sueños y actos fallidos. Hay locura
funciona con aparente perfección. Precisa el escritor: “la
en la psicopatología de la vida cotidiana. Lo que para la
prueba de una inteligencia de primera clase es la capacidad
mayoría son errores de la memoria, descuidos del
para retener dos ideas opuestas en la mente al mismo
pensamiento que no tienen importancia, para Freud es un
tiempo, y seguir conservando la capacidad de funcionar”.
valioso mecanismo universal en el interior de las personas.
Acaso esta una aproximación al psiquismo freudiano. En la
El descubrimiento que propone el psicoanálisis —el
conciencia hay partes inconscientes. En la locura
inconsciente— desarma la maquinaria de la psiquiatría y de
hay cuando descubre que en cada padecimiento se encubre
la medicina. La salida fácil siempre ha sido concebir al
un sentido vinculado a una historia personal. Aflojar la
sinsentido como un error de la razón que no sucede todos
tuerca de una ideología para formular que la locura no es
los días ni a nosotros. La vergüenza impuesta por el
producida sólo por consecuencia de un cortocircuito
bienestar social se ha convertido en uno de los clichés que
neuronal.
reprimen aceptar que la locura es intrínseca al bienestar. En cierta medida, estos resbalones del intelecto son invenciones originales de una psique.