Arquitectura escrita

Publicación del Consejo Profesional de Arquitectura y Urbanismo Revista NOTAS CPAU Nº 14 · ISSN 1852-9135 · Año IV · Jun

Views 134 Downloads 2 File size 5MB

Report DMCA / Copyright

DOWNLOAD FILE

Recommend stories

Citation preview

Publicación del Consejo Profesional de Arquitectura y Urbanismo Revista NOTAS CPAU Nº 14 · ISSN 1852-9135 · Año IV · Junio 2011

Arquitectura Escrita

© F.L.C. / Adagp, Sava Paris, 2011

14

Servicios

CPAU

CPAU 2.0

Propietario

Los invitamos a sumarse a nuestra

Consejo Profesional de Arquitectura

CPAU • 25 de Mayo 482/486 • CABA

comunidad en internet.

y Urbanismo

NOTAS CPAU Nº 14 • ISSN 1852-9135 •

Editorial - Revista Notas CPAU

Presidente

Año IV • Junio 2011

Facebook

Arq. Jorge Horacio Lestard

Dirección

Vicepresidente 1º

Arq. Ricardo M. Blinder (director)

Twitter

Arq. Carlos Federico del Franco

Arq. Marta García Falcó

Vicepresidente 2º

Esteban López

Linkedin

Arq. Mario Néstor Boscoboinik

Redacción

Secretario

Arq. Diego R. Armando

Picasa

Arq. Cristina Beatriz Fernández

Arq. Vera Blitstein

Prosecretario

Curador de este número

Flickr

Arq. Margarita Mirta Charrière

Arq. Gustavo Nielsen

Tesorero

Colaboran en este número

Vimeo

Arq. Carlos Alberto Marchetto

Arq. Néstor Magariños

Protesorero

Arq. Gabriela Orsini

Youtube

Arq. Marta García Falcó

David Paleo

Consejeros Titulares

Diseño y Diagramación

Revista Digital

Arq. Sergio Antonini

Bouzón | Comunicación y Diseño

Versión online de NOTAS CPAU

Arq. Eduardo Bekinschtein

http://www.bouzon.com.ar

www.revistanotas.org

Arq. Ricardo Blinder

Revista Digital

Arq. Tristán Diéguez

www.revistanotas.org

Servicios en la Sede

Arq. Emilio Gómez Luengo

Impresión

[email protected]

Arq. Edgardo Minond

Gráfica Pinter S.A.

Arq. Graciela L. Novoa

Publicidad

Arq. Graciela B. Runge

Arq. Mariana Jeckeln

Arq. Juan Martín Urgell

Tel: (15) 4023-0433 - [email protected]

Consejeros suplentes

Noemí González | Javier D. Larretape

Arq. Hernán Maldonado Aguiar

Tel: 5239-9443 | Fax: 5239-9447

Arq. Daniel H. Silberfaden

[email protected]

1. Asesoramiento y Atención de Consultas Solicite turno a [email protected] 2. Biblioteca [email protected] 3. Oferta de Servicios Profesionales a la Comunidad 4. Registro de Encomiendas 5. Certificaciones, Registro y Certificación de Firmas de Estado Matricular 6. Página Web y Correo Electrónico Gratuito 7. Ediciones CPAU

Arq. Guillermo C. Tella

Distribución

Arq. Esteban R. Urruty

Inter Kartas y Md Correo

Gerente General

Los textos de esta publicación fueron ex-

Esteban López

traídos de las siguientes obras y artículos:

Gerente Técnico

Le Corbusier. Le poème de l'angle droit

Arq. Irene Kalnins

Vargas Llosa, Mario. Murió Le Corbusier

Servicios al Matriculado

Maldonado, Tomás. ¿Es la arquitectura un

D.M. Federico Carrasco

texto? y otros escritos.

Directora de Biblioteca

Nielsen, Gustavo. Cómo se dibuja una historia

Lic. Julieta M. Stramschak

Koolhaas, Rem. Nueva York delirante

Asesor Legal

Calvino, Ítalo. Las ciudades invisibles

Dr. Eduardo Padilla Fox

Jan, Enrique. Texto manuscrito.

Asesor Contable

Mumford, Lewis. Lewis Mumford.Textos escogidos.

Ctdor. Fernando E. Tozzi

Erbin, Jorge. QUEJAs, IDeAS, rECUERDOS.

Tirada: 11.000 ejemplares La dirección no se hace cargo de los conceptos vertidos en los artículos firmados, que son de exclusiva responsabilidad de sus autores.

02

NOTAS CPAU 14

Arquitectura y Literatura

14

Al principio fue el dibujo y después las letras. Hubo una época en que los narradores se

ARQUITECTURA ESCRITA

ponían al servicio de prestigiosos dibujantes; primero, entregaban éstos sus ilustraciones,

04

Para saber de arquitectura hay que leer

y después venían los narradores y se acoplaban a los dibujos. Luego se invirtió, y el texto

07

"And the raven said: never more"

no tardó en imponerse a la ilustración.

07

El poema del ángulo recto

08 Murió Le Corbusier Hoy, inmersos en la época de la pirotecnia visual, a cada momento surgen nuevos medios

10

Escribir con otros signos

para desplegar esta pasión desorbitada de VER, ligada no con toda justicia al CONOCER,

10

¿Es la arquitectura un texto?

nuestra real motivación. Una pasión que, como consecuencia, nos lleva a entrometernos

15

Cómo se dibuja una historia

en ese gran reino que es la literatura y que, por desgracia, cada vez parece tener menos

16

lugar en este mundo. Así, asumiendo el reto de ser productores visuales, creamos imágenes que debemos

20

hacer emerger a partir de procesos de reflexión, análisis y crítica; porque la literatura es

La tierra y el agua 16

El cuento de la piscina

19

Las ciudades y los muertos

Un plan etéreo para el Planetario 20 Claves para entender el Planetario

eso: un proceso que nos hace reflexionar y pensar.

22 24

Las razones de un proyectista

El road movie de una línea recta

Los libros, al igual que muchas arquitecturas, pueden ser un pasatiempo, algo para diver-

24

La carretera y la ciudad

tirse, pero también, a través del pensamiento que provocan, pueden producir ese otro

27

Recta

efecto, el de detener el tiempo. Como esos espacios que te dejan petrificado. 28

BENEFICIOS CPAU

A veces los arquitectos en sus obras, como los escritores en sus libros, buscan simplicidad, quitando los adjetivos; pero, como decía Gabriel García Márquez “La escritura es un acto

ACTUALIDAD

hipnótico, uno trata de hipnotizar al lector para que no piense sino en el cuento que tú

30

Plano Único

estás contando y eso requiere una enorme cantidad de clavos y tornillos y bisagras para

32

Un desfasaje preocupante e injusto

que no despierte”… tal vez ambos, escritores y arquitectos, buscan a través del pensa-

34

El incierto futuro del arquitecto como

miento la simplicidad de la intensidad.

profesional independiente EDICIONES CPAU 36

Costos de Producción de las Obras de Arquitectura ARQUITECTURA + ARTE

38

Testigo silencioso: El obelisco cumplió 75 años

40 Jorge Sarsale 41

HUMOR SERVICIOS EN LA SEDE

42

La Dirección de Obra

Arq. Ricardo Blinder

44

Biblioteca

Comisión Prensa y Difusión

46

Desayunando con GT

J UN IO 2011

03

ARQUITECTURA ESCRITA

Para saber de arquitectura hay que leer Por Gustavo Nielsen, arquitecto y escritor. Esa fue la primera frase que le escuché decir a Miguel Ángel Roca cuando apareció, a principios de la democracia, a enseñar en la UBA. Vino con una lista de libros. Yo, que me consideraba un gran lector de todos los temas, no conocía casi ninguno de sus títulos. En mi único año de cursada en dictadura había tratado de averiguar por mis propios medios qué autores se debían consultar

Para explicarlo mejor: arquitectos contando ficción y escritores haciendo arquitectura. Todos hermanos.

para aprender a diseñar. Las únicas respuestas me las dieron los de las técnicas: Somaruga, Sobrevila, Díaz Dorado, Primiano. Los

mismo fogón, en la noche del campamento universal.

compré, los leí. Llegué a suponer, por entonces, que la arquitec-

La idea de este número de NOTAS CPAU es recrear ese intento de

tura era la cosa más aburrida del mundo.

lectura complejo y entramado, combinando letras de arquitectos

Roca vino a abrirme los ojos. La arquitectura era fundamental-

con edificios de escritores. Para explicarlo mejor: arquitectos con-

mente lo que yo había intuido en el colegio secundario, lo que yo

tando ficción y escritores haciendo arquitectura. Todos hermanos.

bien deseaba: la más grande y completa de las artes. Algo genial,

Por eso tenemos a Le Corbusier y a Erbin recitando poesías, a

divertidísimo, de esas cosas para no envejecer. Una especie de

Koolhaas viajando en una pileta llena de agua; a un Calvino urba-

tónico para la vida eterna.

nista, a Jan, el del Planetario, transfigurado en místico para evocar

La lista de Roca era corta. Por un lado estaban los libros específi-

lo triangular y a Bradbury rompiéndole a pedazos el edificio.

cos de la profesión: Forma y diseño, El espacio urbano, Compleji-

A Vargas Llosa, a Maldonado, a Mumford.

dad y contradicción, El sentido del orden, Breve historia del urba-

Quedaron afuera muchos. Borges hablando sobre la eternidad, el

nismo, Imagen e idea, La arquitectura de la ciudad, La poética del

cuento completo de Carver que recomiendo buscar en Internet,

espacio, De lo rural a lo urbano. Pero también había novelas y

una conferencia de Baudrillard que quizás tendremos más adelante, sobre la ausencia que dejan las torres que se fueron. Algo de

La arquitectura era fundamentalmente lo que yo había intuido en el colegio secundario, lo que yo bien deseaba: la más grande y completa de las artes.

Merlau-Ponty, de Focault, de Berger, de Barthes. Textos extensos, imposibles de cortar para encajarlos en este número. Así que va una selección reducida y simpática. Siempre quedan cosas afuera de las enumeraciones, por más largas o precisas que sean. Es como hacer una lista de deseos, de regalos, de gente que uno quiere. Mejor no hacerlas, mejor seguir deseando y queriendo. Porque se corre el riesgo que me pasó a mí un día, siendo aún estudiante, al agotar la lista de Roca, que era finita y clara. Y quedarme sin nada. Cómo sigo, Miguel, recomendame más, qué me falta leer. - El resto –dijo él. - ¿Qué resto? - Todos los demás libros de la historia.

cuentos, algunos que ya había leído. Ficciones, La invención de Morel, Las ciudades invisibles. Y otros que no, igual de extraños:

En eso estoy.

El cine según Hitchcock, El elogio de la sombra, Sobre la fotografía, Arte y percepción visual, Madame Bovary, Crimen y castigo.

Las imágenes que ilustran las notas de Arquitectura escrita pertene-

Teoría mezclada con historias. Poetas, críticos, pensadores, inven-

cen en su mayoría a la Convocatoria y Muestra Arquitectura + Arte:

tores, cineastas, dibujantes y urbanistas reunidos alrededor de un

desdibujando límites, realizada en la sede CPAU en agosto de 2010.

Gustavo Nielsen nació en Buenos Aires, en 1962. Es arquitecto y escritor. Como arquitecto ha realizado obras en Capital, Buenos Aires, Córdoba, San Luis y Montevideo. Desde 2008 comparte el GALPONESTUDIO junto a los arquitectos Ramiro Gallardo y Max Zolkwer. Como escritor publicó, entre otros títulos, El corazón de Doli y La otra playa. Ha sido galardonado tanto en arquitectura como en literatura.

04

NOTAS CPAU 14

Julián Cheula. Urbe 5.

© F.L.C. / Adagp, Sava Paris, 2011

"And the raven said: nevermore" * 1. El poema del ángulo recto. B.2 Mente

Poner en la punta de los dedos y además en la cabeza una herramienta ágil capaz de hacer crecer la cosecha de la invención librando el camino de espinas y haciendo la limpieza dará libertad a vuestra libertad. Chispa robada del trípode que alimentan los dioses para asegurar los juegos del mundo... ¡Matemática! He aquí el hecho: el reencuentro afortunado milagroso quizá de un número entre los números ha provisto esta herramienta propia de hombres. Apreciándola el filósofo ha dicho: "El mal se hará difícil

el bien fácil..." Su valor se halla en esto: el cuerpo humano elegido como apoyo admisible de los números... ... ¡He ahí la proporción! la proporción que pone orden en nuestras relaciones con lo circundante. ¿Por qué no? Poco nos importa en esta materia la opinión de la ballena del águila de las rocas o de la abeja.

Le Corbusier

Jeanneret-Gris, Charles Édouard. (2006). Le poème de l'angle droit, Fragmento. Madrid: Círculo de Bellas Artes; Fondation Le Corbusier. *"Y el Cuervo dijo: nunca más". Extraída del poema "El Cuervo" de Edgar Allan Poe.

J UN IO 2011

07

ARQUITECTURA ESCRITA

2. Murió Le Corbusier Por Mario Vargas Llosa. El periodista maldijo una vez más contra su oficio, se subió las so-

decía una frase en su incomparable francés, o en inglés, y luego se

lapas del saco para protegerse de la absurda lluvia que nublaba el

olvidaba y volvía al portugués: "En el Brasil, como en tantos otros

cielo de París y empapaba sus calles como en invierno (y era un

países, nosotros estudiamos con los libros de Le Corbusier. Desde

caluroso día de agosto), entró en el lujoso y vasto hotel y preguntó

la Escuela, nos sentíamos atraídos por su obra, por su orgullo, por

en la recepción por el arquitecto Oscar Niemeyer. Luego de hacer

su tenacidad, por su voluntad férrea para hacer obras bellas, ven-

una consulta por teléfono, una bonita muchacha de uniforme le

ciendo los enormes obstáculos. Sí, sí, yo tuve la suerte de trabajar

dijo que podía subir: lo estaban esperando. Subió, pasó a una bella

con él en el proyecto de la Ciudad Universitaria del Brasil. También

habitación alfombrada y alcanzó a divisar por una ventana los te-

en el del Palacio de Educación y, en Nueva York, en el proyecto del

chos húmedos de París.

Palacio de las Naciones Unidas. ¿Si Le Corbusier ha dejado planos

Saludó al hombre amable y tímido que lo invitaba a tomar asiento

por realizar en el Brasil? Sí, felizmente, eso es casi un consuelo.

y, mientras insistía, hablando despacio para hacerse entender,

Hace dos años, nosotros pedimos al gobierno de Francia que en-

para que su interlocutor accediera a concederle una entrevista, se

comendara a Le Corbusier el proyecto de la Embajada francesa y

decía a sí mismo que el arquitecto era mucho más joven de lo que

así se hizo. El plano está hecho ya y pronto comenzará a llevarse a

él creía y también que era extraño que, siendo brasileño y tan bri-

cabo. Será un recuerdo más de ese hombre extraordinario entre

llante, fuera tan poco dotado para los idiomas. Porque el arquitecto

nosotros". El arquitecto joven estaba tan conmovido que a veces

joven no hablaba ni entendía el español y su francés era diabóli-

perdía la voz y, aunque se apresuraba a responder a las preguntas

camente lento, inseguro y personal.

que le hacía el periodista, cuando sus silencios se prolongaban

Discutían cortésmente, cada cual firme en su posición: el periodista

demasiado y parecían a punto de culminar en una crisis, éste

empeñado en obtener alguna declaración, el arquitecto joven

tenía la certeza de que aquél olvidaba a cada momento su pre-

negándose, alegando compromisos, modestia, terror a la improvi-

sencia. Afuera, seguía la maldita lluvia.

sación, cuando sonó el teléfono. El arquitecto joven levantó el auricular, escuchó, balbuceó unas palabras, colgó y se desplomó sobre un asiento, pálido. Ha muerto Le Corbusier, dijo. A mil kilómetros de allí, en la Costa Azul, hacía un tiempo magnífico y, unas tres o cuatro horas antes, el viejo arquitecto —CharlesÈdouard Jeanneret, llamado Le Corbusier, nacido en Suiza, el 6 de octubre de 1887—, había bajado, como todas las mañanas de este verano, a la minúscula playa de Roquebrune - Cap Martin, en ropa de baño, con un gorrito y una toalla al hombro. Hacía calor, el sol incendiaba el cielo purísimo y, hacia la izquierda, se divisaba claramente la playa de Menton, las casitas blancas de techos rojizos del Malecón y, más lejos, el vago perfil de las colinas de la Riviera italiana. La playa estaba casi desierta y el viejo arquitecto

Desde la Escuela, nos sentíamos atraídos por su obra, por su orgullo, por su tenacidad, por su voluntad férrea para hacer obras bellas, venciendo los enormes obstáculos.

debió sonreír, feliz, porque era huraño y detestaba el tumulto. Pero a unos pasos de allí, asoleándose en lo alto de una roca, había

La pequeña playa soleada de Roquebrune-Cap Martin se había

un veraneante que contó después: "Lo vi sentarse a la orilla y

convertido en un agitado hormiguero. Dos hombres habían subido

tomar un rato el sol, cabeza arriba, con los ojos cerrados. Luego se

ya la cuesta y, jadeando, trepaban a un automóvil y arrancaban

paró y, ágilmente, se zambulló como un joven. Se alejó nadando y

velozmente hacia Menton. Abajo, a pocos metros de la orilla, en

yo pensaba que era imprudente que un anciano así se metiera

medio de un círculo apretado de curiosos —turistas alemanes de

tan adentro, cuando, de repente, me di cuenta que le ocurría algo.

blancas carnes irritadas por el sol, pescadores británicos largos y

Estaba a unos cincuenta metros de la orilla, flotando, y agitaba las

huesudos— el viejo arquitecto yacía inmóvil, amoratado, y así pa-

manos con angustia. Incluso me pareció oír un grito mientras ba-

saron varios segundos antes que alguien se animara a romper la

jaba de prisa de la roca, gritando yo también, para que la gente

inmovilidad perpleja del grupo y, arrodillado junto al anciano, co-

que estaba en la playa comprendiera que el anciano se estaba

menzara a hacerle la respiración artificial.

ahogando. Cuando llegué a la playa, dos bañistas lo sacaban ya,

Media hora después se oyó una sirena y llegó de Mentón un carro

tomado de los pies y de las manos".

de bomberos y una ambulancia con un médico. El viejo arquitecto

El arquitecto joven se había puesto a hablar en portugués, pero a

no había reaccionado, y tampoco reaccionó con la bomba de oxí-

ratos parecía acordarse que tenía al periodista escuchándolo, y

geno que le aplicó el médico, ni con las inyecciones. El médico indicó,

Vargas Llosa, Mario. (1965). Murió Le Corbusier. En: Revista Primera Plana. Consultado en: http://www.magicasruinas.com.ar/revistero/ internacional/internacional-la-muerte-arquitecto-lecorbusier

08

NOTAS CPAU 14

por fin, que era inútil insistir. Los bomberos, entonces —absurdos con sus botas y sus cascos entre los bañistas—, pusieron al viejo arquitecto en una camilla, subieron con él la cuesta, y regresaron a Mentón. Dejaron al viejo arquitecto en la Morgue del lugar y, al salir, vieron sorprendidos que comenzaban a llegar periodistas, policías, curiosos. Poco después, el Consejo Municipal en pleno. El médico había permanecido junto al cadáver del viejo arquitecto y explicaba que había sucumbido víctima de una crisis cardíaca. Era el mediodía ya. "¿Qué pienso de Le Corbusier?", repitió el arquitecto joven y miró al periodista como a un infame intruso. Pero al instante hizo un esfuerzo y sonrió sin ganas: "Lo que todo el mundo sabe —murmuró—. Que era un hombre extraordinario, el verdadero genio de la arquitectura contemporánea." Quedó callado un momento, adoptó nuevamente ese curioso rostro de ausencia melancólica y añadió en portugués-inglés-francés: "Es un ejemplo para todos los arquitectos del mundo. Me siento apenado, como debe estarlo Francia, como deben estarlo todos los arquitectos, por esta pérdida irreparable. Sí, Le Corbusier fue a Brasilia. Yo lo acompañé y me sentí feliz guiándolo por la ciudad. Hizo críticas generosas, se mostró contento con lo que vio, y nosotros recordamos siempre lo que nos dijo en aquella ocasión. Por supuesto que su influencia fue muy grande en el Brasil, como en todo el resto del mundo. El sentó las bases de la arquitectura contemporánea. No, en este momento no podría decirle qué es lo que me parece lo más importante de su obra. Pero espere, tal vez sí su imaginación, su formidable inventiva, su asombroso poder de creación. Ha sido tino de los artistas más grandes ¿no es cierto?" El periodista comprendió que el arquitecto joven ya no hablaría más y se despidió. En la calle, tomó un taxi y, al llegar al Arco de Triunfo, el chofer encendió la radio. Se oyó el final de una canción del siniestro Johnny Hallyday que hacía pensar en esquizofrenia y en la jaula de los monos del Zoológico de Vincennes, y después un locutor de voz untuosa se puso a contar que el viejo arquitecto había muerto, que había nacido 78 años atrás en Suiza y que, antes de dedicarse a la arquitectura, fue grabador y relojero. Cuando el taxi estaba cruzando el Louvre, se escuchó una declaración de André Malraux ("Fue el más grande arquitecto del mundo") y, después, otra del Director del Museo de Arte Moderno, Jean Cassou: "Fue uno de los mayores inspiradores de nuestro tiempo, en su espíritu, en su régimen, en su vida colectiva e individual". De pronto, el periodista dejó de escuchar la radio y se puso a recordar la única vez que oyó al viejo arquitecto. Su voz era firme, nerviosa, y sobre todo rebelde: tronaba contra la Escuela de Bellas Artes, contra las Academias, negaba a viejos y jóvenes, decía que ya se había olvidado si alguna vez tuvo maestros y que, en todo caso, no quería tener discípulos porque le devorarían los ojos y, con amargura, se lamentaba de que ningún Estado europeo hubiera tenido la confianza que tuvo en él Nehru, al encomendarle la proyección de una ciudad. ¿Había dicho algo más el viejo arquitecto? Sí; que su sueño hubiera sido rehacer París. Pero ya habían llegado al Barrio Latino, y el periodista pagó el taxi y salió. Había dejado de llover. Gustavo Navone. Casa Curutchet.

ARQUITECTURA ESCRITA

Escribir con otros signos

1. ¿Es la arquitectura un texto? Por Tomás Maldonado.

Decimos entonces que el acercamiento entre arquitectura y texto,

Detengamos a un transeúnte cualquiera por las calles de Nueva

arquitectura y escritura, arquitectura y lectura, arquitectura y

York, Frankfürt o Milán y hagámosle a quemarropa la siguiente

lenguaje, no es particularmente nuevo. Ha sido, en efecto, un

pregunta: ¿Usted cree que un edificio es un texto? El transe-

tema recurrente en la tradición de la semiología de inspiración

únte nos mirará asombrado y, en el mejor de los casos, buscará

estructuralista de los años sesenta y setenta. La arquitectura era

individualizar la cámara con la que se quiere, a escondidas, do-

entonces entendida como un sistema de signos visibles. Todo el

cumentar, frente a un público televisivo divertido, su embarazo

discurso arquitectónico se presentaba como un discurso sobre

y su estupor. En cambio, si le hacemos esta misma pregunta a un arquitecto de estas mismas ciudades, ya sea a un cultivador dichoso de los modos culturales o a un asiduo frecuentador de los maestros del prêt-à-penser, la respuesta será seguramente un “sí” entusiasta. Un edificio, -responderá sin vacilar el hipotético arquitecto-, no es otra cosa que un texto, o sea, una suerte de escritura que, en cuanto tal,

¿qué significa hoy sostener, como se sigue haciendo, que la arquitectura es un texto?

puede ser objeto de lectura. Lo que, en sentido metafórico, puede ser sostenible. Al fin de cuentas, frente a un edificio se está en con-

signos, y no faltaba quien anduviera, fuera del concepto semioló-

diciones de elegir un particular itinerario perceptivo. Y donde hay

gico del signo, aventurando, en nombre de un neopopulismo, la

un itinerario, o sucesiones de experiencias perceptivas, es lícito,

sugestiva propuesta de una arquitectura que debería aprender de

siempre en sentido metafórico, hablar de lectura. Lo es también,

los verdaderos y propios signs que desbordan la main street de Las

con ciertos límites, teorizar la arquitectura como lenguaje, aun sa-

Vegas. En Italia, Francia y Alemania hubo en aquel período un

biendo que para los estudiosos de la lingüística, la arquitectura no

gran número de publicaciones (y debates) sobre el tema. Algunos

puede ser considerada en sentido estricto, un lenguaje.

estudiosos proclamaban directamente el nacimiento de una

Maldonado, Tomás. (2004). ¿Es la arquitectura un texto? y otros escritos. Buenos Aires: Infinito.

10

NOTAS CPAU 14

Cristina Caronni. Generaciones.

nueva disciplina: “la semiología de la arquitectura”.

reconocida consistencia y credibilidad científica, filosófica o sim-

Sin embargo, si la apuesta teórica en juego era alta, los resultados

plemente cultural. En efecto, la semiología recibía la influencia de

fueron bastante modestos. En resumidas cuentas, se trató sola-

todos aquellos pensadores que, cada uno en su campo específico,

mente de un cambio léxico: una terminología sustituyó a otra

habían procurado proveer una coherente teoría del significado:

terminología. La semiología de la arquitectura no nos ha ofrecido

Peirce, Frege y Saussure.

mejores descripciones (e interpretaciones) de los edificios, que

En el último decenio las excogitaciones relativas al significado

aquellas propuestas por el suizo Heinrich Wölfflin en el año 1915,

cambiaron radicalmente de dirección. Me refiero a las aventuras

valiéndose de un medio conceptual seguramente menos sofisti-

teóricas que intentan probar la escritura volviéndola autónoma

cado. Y eso no es todo. Entre el método utilizado por Wölfflin para

en relación a cualquier contenido referencial, que anticipan la

examinar, por ejemplo, una fachada, y el de un semiólogo, el pri-

propuesta de una “deconstrucción” radical que les pertenece.

mero resulta, en última instancia, más eficaz, más pertinente al

Deconstrucción que apunta a corroer, remover y anular la virtuali-

objeto examinado. Esto no quita que ambos métodos estén debi-

dad comunicativa del texto.

litados por el mismo error de partida: creer que la arquitectura es

A la luz de desarrollos de este tipo ¿qué significa hoy sostener,

un fenómeno exclusivamente visual.

como se sigue haciendo, que la arquitectura es un texto? Compren-

La semiología de la arquitectura, a pesar de sus explícitas refe-

derlo no es del todo fácil, sobre todo si se tiene conocimiento de

rencias terminológicas a la teoría de los signos y a la lingüística

la teoría de la “deconstrucción”.

estructuralista, permanece prisionera de la estética de la “visua-

Sobre el particular, las posibilidades interpretativas son dos:

lidad pura” de la cual Wölfflin, siguiendo los pasos de Fiedler fue

1. La arquitectura es entendida como un texto deconstruído, un

uno de los más importantes exponentes.

texto abierto, un texto al que se le puede atribuir un número infi-

Pero cuando nuestro hipotético arquitecto responde con absoluta

nito de referentes;

certeza que, efectivamente, la arquitectura es un texto, compren-

2. La arquitectura es entendida como acto proyectual desti-

der el significado de tal aserción es hoy mucho menos fácil de lo

nado a anticipar o a predeterminar su propia deconstrucción

que fue en los años sesenta y setenta, en que la misma aserción

como texto.

era enunciada por los semiólogos. No hay duda de que entonces,

Debo confesar que estas dos posibilidades tienen para mí

las teorías de los semiólogos de la arquitectura eran más accesi-

–nobody is perfect– un grado de opacidad exasperante. A veces

bles. Y esto por el hecho de que aquellas se declaraban continua-

estoy tentado de creer que hay en este acto algo similar a un pe-

doras de una tradición del pensamiento muy notoria y de una

queño demonio que, por todos los medios trata de oscurecer

J UN IO 2011

11

Fenili-Pérez-Faerman. Konsum.

todo lo que debería ser claro para cualquier persona de buen cri-

tanto la obra de Tschumi o Eisenman, arquitectos que yo estimo,

terio. ¿Pero, por qué este diablillo puede actuar tan impunemente,

sino lo que Derrida teoriza en torno a la obra (y a las ideas) de

qué es lo que facilita su trabajo? La respuesta debemos buscarla

Tschumi y de Eisenman.

en aquella intrincada madeja parafilosófica y paraliteraria que es

Hay que admitir que Derrida se mueve con extrema cautela

el Deconstruccionismo del que, como es notorio, Jacques Derrida

frente a la arquitectura. En realidad, su posición, en particular

fue el promotor. (...) Sus textos más recientes sobre la arquitec-

en el texto de Tschumi, no se distingue sustancialmente de la expuesta por Heidegger en su ensayo Bauen, Wohnen, Denken,

La posición (de Derrida) no se distingue sustancialmente de la expuesta por Heidegger en su ensayo Bauen, Wohnen, Denken, (…) escritura sagrada para los arquitectos inclinados a filosofar…”

ensayo que, como es sabido, se convirtió casi en una escritura sagrada para los arquitectos inclinados a filosofar. El último de los textos de Derrida –se trata de cincuenta y dos exquisitos aforismos sobre arquitectura– es tal vez el más estimulante. A pesar de la coquetería hermética que caracteriza siempre a su escritura, en este texto logran capturarse algunas aserciones que tienen sentido. También en este caso la cautela de Derrida se manifiesta particularmente en su ambigua aproximación a la posibilidad de aplicar la idea de deconstrucción a la arquitectura. A veces él confirma esta posibilidad, otras veces la niega, y otras la confirma y la niega al mismo tiempo. Algunos ejemplos, elegidos entre los cincuenta y dos aforismos: “No hay diseño deconstructivo, diseño para la deconstrucción… Contrariamente a las apariencias, deconstrucción no es una metáfora arquitectónica… Una deconstrucción debería deconstruir antes que nada, como su nombre lo

12

tura son tres: uno de 1986 sobre Bernardo Tschumi, otro de 1987

indica, la construcción misma… Pero (debería) deconstruir también

sobre Peter Eisenman, y un tercero del mismo año a modo de

la construcción arquitectónica en sentido estricto, la construcción

prólogo de las actas de una conferencia sobre la relación arqui-

filosófica del concepto de arquitectura…”

tectura-filosofía. Los tres vuelven a publicarse en su libro Psyché

Para comprender mejor estas aserciones, deben recordarse algunos

de 1987. De los primeros dos textos, lo que interesa aquí no es

de los presupuestos del deconstruccionismo de Derrida. Derrida

NOTAS CPAU 14

Fenili-Pérez-Faerman. El grito.

opone su “arquiescritura” o sea la escritura entendida como forma

Y luego está la cuestión relevante de la materialidad corpórea

primigenia y como configuración “irreductiblemente gráfica”, a la

tanto del construir como de las construcciones. Las palabras, dice

tiranía y a un terrorismo del logos, del pensamiento que se vale de la

un proverbio italiano, son piedras, aludiendo al hecho de que las

palabra dicha, que privilegia los sonidos articulados de la lengua.

palabras tienen un peso subjetivo y que, una vez pronunciadas,

En síntesis: la escritura como alternativa del “logocentrismo”. Es la

producen efectos no siempre reversibles. Pero si las palabras son

tesis portante de su “gramatología”. Desde esta óptica, la tenta-

piedras, no es verdad que las piedras sean palabras. Las piedras

ción de considerar la arquitectura como escritura es explicable. Según Derrida la escritura no sería (o no debería ser) como quería Rousseau, un “suplemento de la palabra” o como quería Voltaire, “una pintura de la voz”. Lo mismo vale según él para la arquitectura, que debería ser un hecho visual, autónomo de cada discurso desarrollado oralmente. El problema es que el método de deconstrucción que debería consentir a la escritura liberarse de la tiranía del logos no se deja aplicar tan fácilmente a la arquitectura. Y Derrida lo sabe. En un cierto punto, en el ensayo sobre Tschumi, él se pregunta: “¿El hecho de que las estrategias deconstructivas comiencen o terminen desestabilizándose, no es precisamente el principio estructural de la arquitectura?” Y agrega: “Las deconstrucciones serían

Los efectos benéficos o negativos de las piedras son generalmente aún menos reversibles que los de las palabras. A veces los arquitectos olvidan que se construye con piedras. No con palabras.

débiles si fuesen negativas, si no fuesen capaces de construir, pero especialmente si no fuesen capaces de competir con las ins-

obviamente tienen un peso mayor que las palabras, ya que el

tituciones, particularmente considerando sus aspectos sólidos,

peso de las piedras, es sabido, no es subjetivo, sino objetivo. Por lo

su punto de mayor resistencia…”

tanto su inercia, o sea su grado de persistencia, es siempre más

Y esto no es todo. Una dificultad ulterior está implícita en el hecho

elevado que el de la palabra. Y los efectos benéficos o negativos

de que la intervención deconstructiva en cuestión, asume, para-

de las piedras son generalmente aún menos reversibles que los

dójicamente, la forma de un discurso sobre la deconstrucción y

de las palabras. A veces los arquitectos olvidan que se construye

termina de esta manera por rendir tributo a la tradición del logos.

con piedras. No con palabras.

J UN IO 2011

13

2. Cómo se dibuja una historia Por Gustavo Nielsen, Arquitecto.

Mis borradores proyectuales son entusiastas. Hago modelos en plas-

“Un ciego, antiguo amigo de mi mujer, iba a venir a pasar la noche

tilina, en telgopor. Cuanto más imperfectos, mejor. Normalmente

en casa. Su esposa había muerto. De modo que estaba visitando a

diseño con plumines, pinceles o crayones. Otros pasan mis garabatos

los parientes de ella en Connecticut. Llamó a mi mujer desde lo de

en Autocad y yo termino corrigiendo en pantalla. La tecnología me

sus suegros. Se pusieron de acuerdo. Vendría en tren; tras cinco

interesa solamente aplicada a esta práctica chancha. Con los libros

horas de viaje, mi mujer lo recibiría en la estación. Ella no lo había

me pasa igual: las primeras líneas son unos rayones casi ilegibles a

visto desde hacía diez años. Igualmente habían estado en comuni-

los que parecen poder caberles otras historias, otros formatos.

cación. Grababan cintas magnetofónicas y se las enviaban. Su

Prefiero los híbridos a las exactitudes. Normalmente me alineo con

visita no me entusiasmaba. Yo no lo conocía. Y me inquietaba el

procesos más que con resultados, elijo croquis a renders, maque-

hecho de que fuera ciego.…” Así empieza Catedral, mi cuento prefe-

tas de estudio a maquetas de presentación. Me gusta el cartón

rido de Raymond Carver. El ciego finalmente llega a la casa en el

corrugado, el papel craft, el calco de cuarenta gramos y los table-

pico de la discusión entre el marido y su mujer. El marido está fasti-

ros de MDF. Me gusta dibujar con lápices de mina blanda y aplicar

diado. Durante la visita ignora al ciego lo más que puede; su mujer

pintura acrílica directamente con los dedos.

lleva todo el trabajo de atenderlo. Llega la noche y los tres se ubican

En el campo de las ideas prefiero comunicar con indefinición, aun-

delante de la tele encendida a beber y a fumar marihuana. Ella está

que sepa lo que quiero, porque todos ven más en algo indefinido y

muy cansada; decide ponerse el piya-ma y finalmente irse a la

salvaje. Yo veo más. Me encanta ese momento de la creación donde

cama. Los deja solos. El ciego, después de un silencio incómodo,

nada está asegurado. Un borrador nunca tiene miedo, y sin em-

pregunta qué hay en la pantalla. El marido responde: una Cate-

bargo convive con el miedo del que mira. Un borrador puede ser el

dral. Como el ciego no sabe qué es y el marido tampoco sabe expli-

mismo miedo. La imaginación está ahí.

carle, decide dibujársela en un papel. El ciego le sostiene la mano

La arquitectura es una profesión útil, que soluciona problemas reales

con la lapicera, en un intento por comprender los trazos.

a la gente. La literatura también soluciona problemas, pero imagina-

El marido dibuja arbotantes, pináculos, vitraux. Dibuja arcos góti-

rios. Y los tiene que inventar primero. En eso consiste su inutilidad.

cos, terminados en punta. Dibuja el altar, a la gente congregada.

Suelo surfear entre la profesión y el oficio, lo mejor que puedo para

Dibuja todo cuanto puede para poder explicar una Catedral. El

no ahogarme. El dibujo es la tabla sobre la que siempre me paro.

ciego ha seguido los movimientos aferrado a su mano. El con-

En La República, Platón consideraba que la música era el campo

tacto lo hizo saber. Ha podido fabricarse una catedral propia en su

por excelencia para educar a la gente, porque hacía que los seres

cabeza. Y no es el único que cambió. Como un buen docente, el

humanos participaran sin saberlo de la matemática y del orden

marido también aprendió algo de su alumno. El cuento deja en

del cosmos. El dibujo, para Platón, era una de las artes más dudo-

claro el éxtasis de la comunicación. Al final, el ciego dice: “– Creo

sas por la imprecisión y por la sumisión del trazado a los valores

que ya está. Me parece que lo conseguiste. Échale una mirada.

subjetivos del dibujante. ¡Pero qué mejor que esa duda subjetiva

¿Cómo quedó? Pero yo tenía los ojos cerrados. Pensé mantenerlos

al servicio de la creación! El dibujo no servirá para fabricar un

así un poco más. Creí que era algo que debía hacer.

héroe, pero sí para fabricar otras cosas.

– ¿Y bien? –preguntó–. ¿Estás mirándolo? Yo seguía con los ojos

Con el lápiz medimos distancias, tomamos proporciones. Damos

cerrados. Estaba en mi casa. Lo sabía. Pero no tenía la impresión

forma a conceptos. Nos divertimos. Contamos qué vemos en nues-

de estar dentro de nada.

tros viajes hacia adentro, y qué vemos de la realidad. Elaboramos

– Es verdaderamente extraordinario –dije.”

planos para no perdernos. Diseñamos cosas que sirven y a veces que

Desde que existe, la arquitectura se la pasa preguntándose si es

no sirven. Nos manejamos en la utilidad y perdemos el tiempo. Mos-

una de las bellas artes. La mejor definición al respecto se la escuché

tramos lo que dibujamos o lo guardamos para poder pensarlo.

al arquitecto Lelé, de Curitiba: “La diferencia entre arquitectura y

Del dibujo salen ciudades, edificios, diagramas, cuadros, ilustracio-

arte reside en que la arquitectura está para simplificarnos la vida,

nes. Del dibujo salen las tapas de los libros pero también, muchas

y el arte para complicarla”. La utilidad manifiesta del dibujo de

veces, los libros. Dibujar me sirve tanto para describir un despiece

arquitectura reduce su valor artístico, dicen los galeristas. Para

como para contar una historia.

mí lo ennoblece.

En un acto de magia se dice que la mano es más rápida que la

La mitad del tiempo trabajo con palabras, la mitad con imágenes.

vista. Si pudiéramos congelar cada momento del acto en un dibujo,

Siempre empiezo las tareas de arquitecto a mano. Con la escri-

nadie nos podría engañar jamás. Y así con cada situación de nues-

tura me pasa igual: escribo sin compu. Y siempre espero que las

tra vida. Dibujar es entender qué hay y qué falta, toda la realidad y

frases y dibujos de un inicio me manipulen, me deformen, me

toda la ficción. Dibujar es la alegría de estar continuamente atento

alteren desde su inexactitud de mamarrachos.

a lo que nos rodea, a lo que somos y a lo que podemos ser.

Nielsen, Gustavo. (2011). Cómo se dibuja una historia. En: Revista Ñ. Buenos Aires: Clarín. Consultado en http://www.revistaenie.clarin.com Raúl Fernández. Gaudí a fondo.

JUN IO 2011

15

ARQUITECTURA ESCRITA

La tierra y el agua 1. El Cuento de la piscina (1977) Por Rem Koolhaas.

se volvió subversivo. En una reunión secreta, los arquitectos o socorristas decidieron

MOSCÚ, 1923

usar la piscina como vehículo para su huida hacia la libertad. Gra-

Un día, en la escuela de Arquitectura, un estudiante diseñó una

cias al por entonces bien conocido método de la autopropulsión,

piscina flotante. Nadie recordaba quién había sido. La idea se

podían ir a cualquier parte del mundo donde hubiese agua.

respiraba en el ambiente. Otros estaban diseñando ciudades vo-

Era lógico que quisieran ir a América, en especial a Nueva York. En

ladoras, teatros esféricos y planetas artificiales enteros. Alguien

cierto modo, la piscina era una manzana de Manhattan realizada

tenía que inventar la piscina flotante.

en Moscú, que así alcanzaría su destino natural.

La piscina flotante –un enclave de pureza en un entorno contami-

Una mañana temprano, en plena década estalinista de 1930, los

nado– parecía un primer paso, modesto pero radical, dentro de un

arquitectos se alejaron de Moscú, nadando incesantemente por

programa gradual para mejorar el mundo gracias a la arquitectura.

tandas en la dirección de los bulbos dorados del Kremlin.

Para demostrar la fuerza de la idea, los estudiantes de arquitectura decidieron construir un prototipo en su tiempo libre. La piscina

NUEVA YORK, 1976

era un largo rectángulo de planchas metálicas atornilladas a una

Un programa rotatorio asignaba a cada socorrista o arquitecto un

estructura de acero. Dos vestuarios lineales, aparentemente inter-

turno en el mando de la “nave” (una oportunidad rechazada por

minables, formaban los lados más largos: uno para hombres y el

algunos anarquistas a ultranza, que anteponían a esas responsa-

otro para mujeres. En cada uno de los extremos había un vestí-

bilidades la integridad anónima de nadar continuamente).

bulo acristalado con dos paredes transparentes; una de ellas

Tras cuatro décadas de travesía por el Atlántico, sus bañadores (el

mostraba las actividades subacuáticas, saludables y a veces exci-

frente y la espalda eran exactamente iguales, una normalización

tantes, de la piscina; y la otra los peces que agonizaban en el agua

derivada de un edicto de 1922 para simplificar y acelerar la produc-

contaminada. Así pues, se trataba de una sala verdaderamente

ción) casi se habían desintegrado.

dialéctica, usada para hacer ejercicio físico, broncearse de manera

A lo largo de los años habían convertido algunos sectores del

artificial y mantener contactos sociales con los nadadores casi

vestuario o pasillo en “habitaciones” con improvisadas hamacas,

desnudos. El prototipo se convirtió en la construcción más popu-

etcétera. Resultaba sorprendente cómo, tras 40 años en el mar,

lar de la historia de la arquitectura moderna. Debido a la escasez

las relaciones entre las personas no se habían estabilizado, sino

crónica de mano de obra soviética, los arquitectos o constructores

que seguían presentando esa volatilidad tan familiar en las novelas

hacían también de socorristas. Un día descubrieron que si nadaban

rusas; justo antes de llegar a Nueva York, había habido un estallido

al unísono –en tandas regulares y sincronizadas de un extremo a

de histeria que los arquitectos o nadadores habían sido incapaces

otro de la piscina– todo el conjunto empezaba a moverse lenta-

de explicar, salvo como una reacción retardada a su madurez colec-

mente en sentido opuesto. Se quedaron atónitos ante esta loco-

tiva. Cocinaban en una estufa primitiva, alimentándose de las pro-

moción involuntaria; en realidad se explicaba por una sencilla ley

visiones de repollo y tomates en conserva, y de los peces que en-

de la física: acción = reacción.

contraban cada amanecer, arrastrados hasta la piscina por las olas

A principios de la década de 1930, la situación política –que en su

del Atlántico (aunque estaban cautivos, estos peces eran difíciles

momento había fomentado proyectos como el de la piscina– se

de capturar debido a la inmensidad de la piscina).

vuelve inflexible, incluso amenazadora. Unos cuantos años des-

Cuando finalmente llegaron, casi no se dieron cuenta, pues tenían

pués, la ideología que representaba la piscina –que por entonces

que nadar en dirección opuesta a donde querían ir, es decir, hacia

estaba bastante oxidada, pero era un acontecimiento popular–

lo que querían dejar atrás.

llegó a considerarse sospechosa. Una idea como esta piscina, su

Era extraño lo familiar que les resultaba Manhattan. Siempre habían

carácter furtivo, su presencia física casi invisible, la cualidad como

soñado con Chryslers de acero inoxidable y Empire States volado-

de iceberg de su actividad social sumergida: de repente todo ello

res. En la escuela, incluso habían tenido visiones más audaces, de

Koolhaas, Rem. (2004). El cuento de la piscina. En: Delirio de Nueva York. Barcelona: GG.

16

NOTAS CPAU 14

Marina Del Punta. Paisaje en NY.

ARQUITECTURA ESCRITA

las cuales, curiosamente, la piscina (casi invisible: prácticamente

de fláccidas mansiones campestres, del mustio suspense de sus

sumergida en la contaminación del East River) era una prueba:

manidas complejidades, del gusto seco de su poesía inventada y de

con las nubes reflejándose en su superficie, era algo más que un

los padecimientos de su sofisticación irrelevante, se quejaban de

rascacielos: era un pedazo de cielo ahí en la tierra.

que la piscina era anodina, rectilínea, poco audaz y aburrida; que no

Sólo faltaban los zepelines que habían visto 40 años antes cruzan-

había alusiones históricas; que no había decoración; que no había…

do el Atlántico a una velocidad exasperante. Suponían que estarían

nada de ruptura, de tensión, de ingenio, sino tan sólo líneas rectas,

flotando por encima de la metrópolis como una densa masa nu-

ángulos de 90 grados y el color apagado de la herrumbre.

bosa de ballenas ingrávidas.

(En su implacable sencillez, la piscina era para ellos una amenaza:

Cuando la piscina atracó cerca de Wall Street, los arquitectos o na-

como un termómetro que pudiese insertarse en sus proyectos

dadores o socorristas se quedaron atónitos ante la uniformidad (en

para tomar la temperatura de su decadencia).

el vestido y el comportamiento) de sus visitantes, que invadieron la

Sin embargo, para acabar con el constructivismo, los neoyorkinos

embarcación en una desbandada brutal por los vestuarios y las

decidieron conceder a sus supuestos colegas una medalla colec-

duchas, desoyendo completamente las instrucciones de los supe-

tiva en una discreta ceremonia a orillas del río. Contra el fondo de

rintendentes. ¿Había llegado el comunismo a los Estados Unidos

la silueta de la ciudad, el apuesto portavoz de los arquitectos de

mientras ellos estaban cruzando el Atlántico?, se preguntaron horrori-

Nueva York pronunció un amable discurso. La medalla llevaba una

zados. Habían nadado todo este tiempo para evitar exactamente

antigua inscripción de la década de 1930, según recordó a los

eso: esa tosquedad, esa falta de individualidad, que no desapare-

nadadores. Ya no resultaba relevante –dijo–, pero ninguno de los

cieron ni siquiera cuando todos los hombres de negocios se des-

arquitectos actuales de Manhattan había sabido encontrar un

pojaron de sus trajes de marca (las inesperadas circuncisiones

nuevo lema…

contribuyeron a acentuar esta impresión en los provincianos rusos).

Los rusos lo leyeron. Decía así: “No hay un camino fácil para ir de la

Escandalizados, zarparon de nuevo llevando la piscina corriente

tierra a las estrellas”. Mirando el cielo estrellado que se reflejaba en el

arriba: ¿un salmón oxidado, a punto –finalmente– de desovar?

estrecho rectángulo de la piscina, un arquitecto o socorrista –todavía

TRES MESES MÁS TARDE

sólo hemos venido de Moscú a Nueva York”.

Los arquitectos de Nueva York estaban inquietos por el repentino

Y luego todos se tiraron al agua para retomar su conocida formación.

chorreando tras su último largo– contestó por todos ellos: “Tan

influjo de los constructivistas (algunos bastante famosos, y otros a los que se creía hace tiempo deportados a Siberia –si no ejecuta-

CINCO MINUTOS MÁS TARDE

dos– después de que Frank Lloyd Wright visitase la URSS en 1937 y

Frente al hotel Welfare Palace, la balsa de los constructivistas coli-

traicionase a sus colegas modernos en nombre de la arquitectura).

siona con la balsa de la Medusa: el optimismo contra el pesimismo.

Los neoyorkinos no dudaron en criticar el diseño de la piscina; por

El acero de la piscina se hunde en el plástico de la escultura como

entonces todos estaban en contra del movimiento moderno; ha-

un cuchillo en la mantequilla.

ciendo caso omiso de la decadencia de su profesión, de su propia irrelevancia cada vez más patética, de su producción desesperada

Leonardo Enea Spilimbergo. Venecia.

2. Las ciudades y los muertos Por Italo Calvino.

Argia Lo que hace a Argia diferente de las otras ciuda-

fisuras por las que se insinúan las raíces, no lo

des es que en vez de aire tiene tierra. La tierra

sabemos: la humedad demuele los cuerpos y les

cubre completamente las calles, las habitaciones

deja pocas fuerzas; conviene que se queden quie-

están llenas de arcilla hasta el cielo raso, sobre

tos y tendidos, tan oscuro está.

las escaleras se apoya otra escalera en negativo,

De Argia, desde aquí arriba, no se ve nada; hay

encima de los techos de las casas pesan estratos

quien dice: “Está allá abajo” y no queda sino

de terreno rocoso como cielos con nubes. Si los

creerlo: los lugares están desiertos. De noche,

habitantes pueden dar vueltas por la ciudad

apoyando la oreja en el suelo, a veces se oye una

ensanchando las galerías de los gusanos y las

puerta que golpea.

Calvino, Ítalo. (1970). Las ciudades y los muertos. Argia. En: Las ciudades invisibles. Buenos Aires: Minotauro. Leonardo Enea Spilimbergo. San Sebastiano Curone.

ARQUITECTURA ESCRITA

Un plan etéreo para el Planetario 1. Claves para entender el planetario de Buenos Aires Por Enrique Jan.

la misma forma que la capacidad de “contener” surge en dos

El planetario y su concepción fueron una combinación de un

dimensiones con la operación de intersección de tres líneas

proceso interno propio de síntesis y la sensación de estar parti-

elementales, en tres dimensiones utilizando cuatro triángulos

cipando como brazo ejecutor de una fuerza expresiva que tras-

elementales vuelve a surgir la capacidad de contención: el te-

cendía la persona. Una revista bimestral, Planeta, que había

traedro, que además es la imagen química de la molécula de

empezado a publicarse por 1964, tuvo gran influencia en la

carbono, elemento sobre el que se construye la química de lo

ampliación de mis horizontes cognitivos y en la forma de ver las

vivo, lo que evoluciona.

cosas que me rodeaban. Coincidió esta época con cierto interés por lo oriental, especialmente la capacidad sintética de su arte y

El objetivo del edificio era albergar en su interior el planetario

de su idioma escrito, los ideogramas. “La información está ahí

propiamente dicho, este es un instrumento que proyecta sobre

para el que sabe interpretarla”.

una bóveda semiesférica un cielo virtual y permite simular el avance o el retroceso del tiempo para llevar la representación de

El planetario es un ideograma arquitectónico

la bóveda celeste al momento deseado.

El visitante que llega se aproxima al edificio por una calzada construida con triángulos, que hace las veces de puente entre

Retomando el ideograma arquitectónico, veremos que la natura-

el afuera y el adentro, ahí tiene la clave. El triángulo es el primer

leza del tiempo es circular, se percibe en los cambios de estaciones

poliedro, es la primera forma geométrica elemental capaz de

que siempre regresan, en los ciclos de nacimiento, duración y

encerrar un contenido en dos dimensiones; dos líneas no bas-

muerte de lo vivo, y la percepción de tiempo se halla asociada a un aspecto más elevado que nos permite ver en extensión y luego de hacer un recorrido circular, volver a reconocer los mismos

En el plano de dos dimensiones de la calzada, el concepto se presenta al transeúnte.

sobreelevada busca transmitir esta idea.

tan para contener, tan solo delimitan; una tercera línea define

El ser humano, como cúspide de la evolución conocida, está tam-

una frontera entre un adentro y un afuera. Así, en el plano de

bién ahí. El eje central del planetario es un ascensor hidráulico

lugares, a pesar del trayecto recorrido; esto marca los años, los siglos, los eones, cómo volvemos año tras año al límite arbitrario del 31 de diciembre en el que un año es viejo y el que sigue es el año nuevo. La galería circular que rodea al planetario y que está

dos dimensiones de la calzada, el concepto se presenta al tran-

que une y conecta lo más profundo con lo más elevado, al igual

seúnte. Al cruzar el puente el triángulo, como elemento cons-

que la columna vertebral del ser humano une el sacro (un hueso

tructivo, salta del plano al espacio tridimensional formando

triangular curiosamente llamado “sagrado”) y la bóveda craneal,

dos tetraedros invertidos, uno apoya su base en la tierra y eleva

en cuyo interior tienen lugar las representaciones virtuales del

su cúspide al cielo, y el otro baja del cielo hacia la tierra interpe-

mundo perceptivo que nos rodea.

netrándose. La dialéctica de oposición complementaria se rompe cuando “uno” y “otro” no son dos sino tres, ahí comienza

Una vez me contactaron unos masones intrigados sobre si perte-

la creación; de la relación dinámica entre dos surge el tres, dos

necía a alguna de sus corrientes ya que ellos habían llegado a

líneas paralelas no se intersectan, y la repetición de este meca-

percibir una parte de esta simbología en el edificio. Yo no era

nismo no construye, separa. En cambio, cuando dos líneas se in-

masón, sino que simplemente creía que un edifico público que

tersectan, la repetición del proceso crea el triangulo y ya co-

tenía una función debía expresar a quien supiera leerlo las ideas

mienza a surgir la evolución en la estructura que se perfila. De

que había detrás de la función que cumpliría.

Jan, Enrique. Extraído del texto manuscrito por Nielsen, Gustavo. Consultado en www.milanesasconpapas.blogspot.com

20

NOTAS CPAU 14

NASA (National Aeronautics and Space Administration). Voyager Mission. The Uranus System.

ARQUITECTURA ESCRITA

2. Las razones de un proyectista Por Gustavo Nielsen, Arquitecto.

de todo el edificio –“a lo Wright”, dicen que decía–, y toda la ingenie-

Creo que esta anécdota me la contó el arquitecto Manuel Net,

ría argentina se le oponía por osado, él siempre apelaba a que tenía

director de la biblioteca de la Facultad de Arquitectura y Urba-

algo que lo iba a salvar en caso de riesgo. Cuando le pedían que

nismo de la UBA. A Net se la contó, si la memoria no me falla, el

fuera más explícito, Jan se quedaba en silencio, mirando el cielo.

ingeniero Konstatin Jemzow de la Revista de Arquitectura. Involucra al arquitecto Enrique Jan, autor del Planetario Municipal –hoy

El amuleto

Galileo Galilei– y al libro Crónicas Marcianas de Ray Bradbury.

Jan había leído The Martian Chronicles en inglés, en el verano del

Cuando Jan diseñó el Planetario, tenía un cómodo puesto en la

‘59, en una primera edición del libro que una amiga le había traído

Municipalidad, en la parte de Obras Públicas. El caso es que la

desde Estados Unidos. El mismo Bradbury había dicho, en un viejo

anécdota es verdadera, aunque parezca rara.

reportaje de radio, que la primera edición de Crónicas poseía cier-

La historia

edición fuera un libro mágico. El libro de Jan databa del año 1946.

tos poderes especiales. Divinos, protectores. Como si esa primera Jan era un hombre corpulento, de mandíbula cuadrada. Había

Era un ejemplar ajado y marrón, del que no se hubiera desprendido

soñado con el encargo del Planetario y lo había conseguido. Los

por nada del mundo, salvo para evitar una posible tragedia. Nadie

primeros dibujos armaban una semiesfera montada sobre un

entendió nunca lo que Bradbury quiso decir. Nadie, excepto Jan.

solo pilar cilíndrico central, rigidizado por el núcleo de escaleras y

El problema central del Planetario fue la pelea entre Jan y la Com-

el ascensor. Los ingenieros que vieron ese esquema le dijeron que

pañía de Construcciones Civiles SAIyC por el excesivo espesor y

estaba loco. De ahí pasó a apoyarlo sobre una mesa de cuatro

forma estructural del casquete de hormigón que la empresa que-

patas de hormigón, y finalmente sobre las tres grandes patas que

ría darle, y el arquitecto no. Esos nuevos espesores no eran los que

hoy conocemos. Era una estructura arriesgada pero a la vez senci-

había calculado su amigo Laucher. Los espesores de hormigón de

lla; interesante, aunque simple.

Laucher son los que vemos hoy: hacen del Planetario un edificio

El arquitecto Jan era, por aquellos tiempos de 1960, un joven de

liviano y efectivo, como una nave espacial apenas posada sobre el

una superstición tan sutil como su sonrisa. Tenía predilección

pasto. Pero a Jan le costó que la empresa constructora los aceptara.

estática por las cáscaras de hormigón armado y los triángulos es-

Para ellos, un casquete tan fino desafiaba las leyes de la gravedad

féricos que compartía con su amigo el ingeniero Carlos Laucher,

más de lo que debería permitirse un arquitecto precavido de la

el primero que le puso números a la estructura del Planetario.

Municipalidad. Y Laucher, en medio de la discusión, decidió abando-

Eran, a su modo, modernos.

nar la firma de su propio cálculo estructural, lo que dejó a Jan sin

Cuando le preguntaron a Jan, luego de muchos años, por qué había

opciones. Para que el edificio saliera tan esbelto como lo había dibu-

utilizado la figura del triángulo equilátero como módulo para dise-

jado, debía correr personalmente con todos los riesgos del asunto.

ñar todo su edificio, él no dio la respuesta racional, sino la mística.

Entonces Jan se jugó por los delgados números de su amigo. Nadie

Laucher hubiera contestado: “El triángulo representa la estática”.

que hubiera visto el porte de Jan, hombre confiado a la geometría y

Jan dijo: “El triángulo encierra en sí mismo un principio simbólico

a la matemática, habría adivinado que, por esos días, llevaba los

de unidad primigenia, sugiriendo lo ocurrido desde la partícula ele-

dedos cruzados adentro del bolsillo de su chaqueta de tweed.

mental hasta ese desarrollo cósmico en el cual estamos inmersos”.

Desde el comienzo de la excavación del Planetario, en julio de 1962,

La sala de proyección del Planetario, ésa que todos conocemos, está

hasta la terminación del hormigonado de la cúpula, en diciembre

directamente apoyada sobre el casquete esférico de las tres patas.

de 1964, transcurrieron unos treinta meses. La anécdota de Net dice

El techo de la sala es una cúpula de ocho centímetros de espesor

que Jan cortó en tres partes el libro milagroso y puso cada parte en

por once metros y medio de radio. Está recubierto por afuera por

una cajita metálica a la que les hizo soldar las tapas. Después, las

960 paneles prefabricados, que son los que le dan al techo la gra-

perdió en el hormigón armado, una caja por pata. Varios obreros lo

ciosa característica de una cesta de paja puesta como sombrero. Por

vieron hacerlo. A Jan no le importó. Su edificio estaba “protegido”.

adentro, la misma cúpula está revestida por una estructura semies-

Para cortarlo, otro cuento dice que no lo hizo dividiendo el libro por

férica de aluminio perforado pintado de blanco, sobre el que se pro-

capítulos, como si fueran fascículos, sino que el corte fue hecho

yectan los cielos de las exhibiciones. Revestida es un decir, porque la

con una guillotina, perpendicular al lomo. Supongo que era más

cúpula interior se despega más de un metro de la superficie de la

importante que las tres partes fueran iguales, a que se pudieran

cáscara de hormigón, dejando un espacio considerable para instala-

leer. Adentro del hormigón iba a ser imposible que alguien bus-

ciones de sonido, materiales aislantes y cables. Este es un detalle

cara una historia entre sus páginas veladas. La oscuridad total le

importante: entre ambas cúpulas, la interna y la externa, hay un

iba a dar inmunidad al acto de cortar un libro.

pasillo circunvalador por el que puede caminar una persona. Es un

Particularmente, no creo que lo haya cortado. Tal vez yo pienso

lugar oscuro y húmedo, reservado a los técnicos.

como escritor, y un escritor no rompería jamás un libro que ama.

Cuando Jan insistía, al principio, con un solo tallo central de sostén

Yo, de haber apelado a esa protección supersticiosa, simplemente

Extraído de RADAR, 17 de septiembre, 2006.

22

NOTAS CPAU 14

lo hubiera escondido entre las dos cúpulas, adentro de un parlante

Ya casi habíamos llegado a la esquina de avenida Sarmiento y

falso. Eso debe haber creído también Ray Bradbury, el día que le

Alcorta, cuando advertí que me había olvidado la campera. El

contaron esta anécdota, y es por eso que allí lo fue a buscar. Ha-

cielo estaba oscuro como un pozo, con nubes que amenazaban

bían pasado más de treinta años y el Planetario seguía en pie. Y a

una lluvia pronta. Le dije a la venezolana que me acompañara;

Ray no le quedaba ya ningún ejemplar de su primera edición.

eran apenas cien metros, aunque a ella le pareció una distancia enorme. Al final aceptó. La puerta del Planetario estaba abierta.

La cena

Subimos la escalera recta y la escalera curva. Mi campera era un

El 26 de abril de 1997, Bradbury vino a la Argentina. En un acto que

bollo sobre la madera de la mesa, junto al cadáver magro de la

duró cuarenta y cinco minutos fue designado Visitante Ilustre de

cena. Mori fue quien primero escuchó el ruido.

la Ciudad de Buenos Aires, reconocimiento recibido en el Planeta-

Eran como unos golpes adentro de un túnel, sumados a una voz

rio con el cielo austral, que no conocía. Le enseñaron la forma de

que venía desde otro lugar. La voz era de ruego. Salimos al pasillo

orientarse mirando la Cruz del Sur. De ahí lo llevaron hasta Marte.

circular que rodea la sala de proyección; la segunda puerta estaba

Ray parecía encantado, aunque miraba hacia todos lados, como

cerrada. “Hay otras hacia allá”, dijo Mori, y comenzamos a cami-

buscando algo. Preguntó a la gente de maestranza por el espacio

nar por el anillo vidriado de Saturno. Uno a uno, probamos todos

entre las dos cúpulas, y le dijeron que estaba restringido a los téc-

los picaportes. El ruido y la voz, a cada minuto más acalorada,

nicos. La idea de visitar el Planetario había surgido de él mismo, en

venían desde adentro mismo de la cúpula. Arrimé un cubo de ba-

una carta dirigida al director, profesor don Antonio Cornejo. El di-

sura a la pared y me subí, para espiar por una rendija entreabierta

rector reenvió sus deseos al jefe de Gobierno de la ciudad, y las

de los revestimientos.

cosas se complicaron para Ray. La verdad era que no quería tanta

En la penumbra interior del espacio entre cúpulas estaba Ray,

pompa: hubiera preferido una reunión menor. Por eso se le ocurrió

calzado con sus botas de montar y su sombrero de cowboy. Ame-

lo de la cena con jóvenes escritores locales. Llamaron desde el

nazaba al empleado con un rebenque, desde lo alto de una esca-

mismo Planetario a Alfaguara, Planeta y Sudamericana. A las tres

lera de gato. El empleado, desde abajo, le rogaba que bajara de

de la tarde yo era uno de los destinatarios de esa convocatoria. Me

ahí. Bradbury hizo palanca con el mango del rebenque en uno de

sorprendió la urgencia: era para esa misma noche. Después me

los paneles de aluminio y metió la mano. Tiró con fuerza. El panel

enteré de que, antes de ubicarme, habían pasado por otros varios

fue a parar con otro que ya estaba en el piso.

escritores jóvenes –en el año ‘97 yo era realmente joven–, que des-

“Pum, pum, pum”, hicieron los tres puñetazos de Mori contra el

istieron por tener otros programas. Y aunque yo también tenía

revestimiento de madera. Ella había estado espiando por el ojo de

otro programa para esa noche, lo cambié: una cena con Ray Brad-

una cerradura. “Qué bolas las de este musiú: está rompiendo la

bury era lo que más quería, y todavía hoy es la invitación que más

pantalla a coñazo limpio”, dijo, enojadísima. Y, luego: “¡Ey, Bradbury:

agradezco a los de Alfaguara. Un lujo.

deja ya de hacer esa vaina!”. Volví a mirar: Ray se bajaba de la esca-

Para la cena desatornillaron veinte butacas de la sala, y armaron

lera iracundo, enarbolando su rebenque. Iba hacia ella. El empleado

una mesa sobre caballetes. Sirvieron un catering modesto, de

se había guarecido en un rincón.

carne y papas al horno, con flan de postre. No hubo traductor, por

Salimos corriendo. Llegamos a la misma esquina empapados en

lo que los que quisimos hablar con Bradbury y no sabíamos inglés,

transpiración. Con ese frío. Apoyé una mano en el hombro de Mori,

nos quedamos casi en ascuas. Además, el rápido rejunte de escri-

para moderar mi respiración. Ray Bradbury no nos seguía. Ella tenía

tores nos había reunido en un grupo dispar. Había una periodista

los ojos cerrados. La despertó un golpe muy leve en la frente.

venezolana, Mori, y una poeta autoeditada de bajo rango de nom-

El agua le corrió por la nariz hasta los labios. Una gota le cayó en

bre María, más dos o tres estrellitas locales, y yo.

un ojo, nublándolo. Otra le estalló en el mentón. La lluvia.

El buen final de una noche tonta

Fresca, dulce y tranquila, caía desde lo alto del cielo como un elixir má-

María se fue temprano con las estrellas, no bien terminamos el

gico que sabía a encantamientos, estrellas y aire, arrastraba un polvo

café. Con la venezolana andábamos con ganas de seguir la noche.

de especias, y se le movía en la lengua como un raro jerez liviano. *

Había onda, y el espectáculo de comer a la luz de unas velas al

Cuando dejamos de besarnos, Mori levantó la vista al cielo.

lado del gran proyector había resultado romántico. A fin de cuen-

– ¿Adónde estará Marte? –preguntó.

tas fue una cena improvisada e incómoda, pero allí estaba nues-

Tomé aire para contestarle que no sabía. ¿Qué le habrían dicho a

tro escritor preferido, aunque se le notara que quería quedarse

Bradbury para que se mostrara tan seguro de que su libro estaba

solo. Estaba vestido con un traje celeste a rayas finitas, camisa y

en el interior de la cúpula del Planetario? ¿Era tan supersticioso

corbata azul. Le pedí un autógrafo en un inglés achaparrado y se

como para no tolerar que esa primera edición hiciera de talismán

sintió molesto. Entonces nos fuimos de allí.

a un arquitecto habitante de una tierra remota? ¿No le bastaba

Cuando toda la ingeniería argentina se le oponía por osado, Jan

con el orgullo de saber que alguien había creído en su libro como

siempre decía que tenía algo que lo iba a salvar en caso de riesgo.

estabilizador de un edificio maravilloso, por sobre todo cálculo

Cuando le pedían que fuera más explícito, él se quedaba en silen-

matemático?

cio, mirando el cielo.

–Con vos iría a Marte, Mori –le dije.

* Párrafo extraído de La mañana verde. En: Ray Bradbury, Crónicas Marcianas, Minotauro.

J UN IO 2011

23

ARQUITECTURA ESCRITA

El road movie de una línea recta 1. La carretera y la ciudad Por Lewis Mumford.

diaria y el dinero que cuesta mantener en movimiento todo el sis-

Cuando el pueblo norteamericano, a través del Congreso, votó

tema se resuelve en escuelas vergonzosamente recargadas de im-

hace poco (1957) un programa de veintiséis mil millones de dóla-

puestos, policía inadecuada, hospitales con poco personal, áreas de

res para carreteras, lo más caritativo que puede pensarse de esa

recreo demasiado concurridas, y bibliotecas mal sostenidas.

resolución es que no tienen la menor idea de lo que están ha-

Abreviando, han sacrificado su vida integral al automóvil, como

ciendo. Dentro de los próximos quince años sin duda alguna lo

alguien que enloquecido de pasión destruye su casa para dilapi-

habrán descubierto; pero entonces será demasiado tarde para

dar sus entradas en una amante caprichosa que promete goces

corregir todo el daño causado a nuestras ciudades y nuestras

de los que muy de vez en cuando puede disfrutar. Para la mayor

campiñas, no menos que a la eficiente organización de la industria

parte de los norteamericanos el progreso significa aceptar lo que

del transporte, por este programa mal concebido y tan absurdo

es nuevo porque es nuevo, y descartar lo que es viejo porque es

por lo desequilibrado. Sin embargo, si alguien hubiera predicho estas consecuencias antes de que esta vasta suma de dinero se votara en el Congreso, bajo la especiosa, en realidad flagrante deshonestidad disfrazada como medida de defensa nacional, dudo que nuestros compatriotas hubieran prestado oídos o comprendido; o que hubieran podido cambiar su manera de pensar si hubieran comprendido. Porque el modo de vida norteamericano corriente está fundado no sólo en el transporte motorizado, sino en la religión del automóvil,

Hemos mutilado el automóvil al poner en este único medio de transporte el peso de todas las maneras de viajar.

y los sacrificios que la gente está dispuesta a hacer en aras de esta religión están fuera del reino de la crítica racional. Tal vez lo

viejo. Esto puede ser bueno para una rápida evolución en los ne-

único que pueda volver el buen sentido a los norteamericanos

gocios, pero es malo para la continuidad y estabilidad en la vida.

será una clara demostración del hecho de que su programa de

El progreso, en un sentido orgánico, debiera ser acumulativo, y

carreteras barrerá tal vez la misma área de libertad que el auto-

aún cuando una cierta cantidad de limpieza de cosas inútiles es

móvil privado promete conservarles.

siempre necesaria, perdemos parte de los beneficios ofrecidos por

Mientras los automóviles eran pocos, el que lo tenía era un rey:

una nueva invención si descartamos, de manera automática, todo

podía ir a donde le placiera y detenerse cuando quisiera; y hasta la

el valor que aún tienen las invenciones que la precedieron.

misma máquina parecía una invención compensatoria para la in-

Por desgracia, en cuanto al transporte, la anticuada idea lineal de

flación de un ego que había sido disminuido por el éxito de la me-

progreso prevalece. Ahora que los automóviles se están haciendo

canización. Esa sensación de libertad y poder sigue siendo un

universales, muchas personas dan por sentado que los peatones

hecho sólo en áreas poco pobladas, en el campo abierto; la popula-

desaparecerán y que con el tiempo el sistema de ferrocarriles será

ridad de ese método de escape ha defraudado las esperanzas que

abandonado; en verdad, muchos de los proponentes de la construc-

una vez alentó. Al usar el automóvil para huir de la metrópoli, el

ción de carreteras hablan como si ya sucediera eso, o si no, tienen

automovilista siente que sólo ha transferido la congestión a la ca-

toda la intención de que sea un hecho a breve plazo. El resultado es

rretera, y por ende la ha duplicado. Cuando llega a su destino en

que hemos mutilado el automóvil al poner en este único medio de

un suburbio distante, encuentra que la campiña que buscó ha

transporte el peso de todas las maneras de viajar. Ni nuestros auto-

desaparecido; más allá de él, gracias a los caminos para automóvi-

móviles, ni nuestras carreteras pueden soportar semejante carga.

les, sólo hay otro suburbio, tan triste como el suyo. Para tener un

Esta superconcentración, además, está destruyendo nuestras ciuda-

mínimo de comunicación y sociabilidad en esta vida dispersa, su

des sin dejar nada que se le aproxime a su reemplazo.

esposa tiene que convertirse en un chofer de taxi como ocupación

¿Para qué sirve el transporte? Esta es una pregunta que, en

Mumford, Lewis. (2009). La carretera y la ciudad. (Fragmento). En: Lewis Mumford. Textos escogidos. Buenos Aires: Ediciones Godot.

24

NOTAS CPAU 14

Flavio Janches. Paisaje.

ARQUITECTURA ESCRITA

apariencia, nunca se formulan los ingenieros viales; quizás por-

ellas, como el Taconic State Parkway en New York, está a la par de

que dan por seguro que el transporte existe con el propósito de

las más grandes creaciones en otros campos. Es verdad que no

proveer adecuadas salidas para la industria del automóvil. Au-

todas las carreteras corren a través de un paisaje que ofrece tan

mentar el número de automóviles, hacer posible que el motorista

soberbias oportunidades a un ingeniero vial imaginativo como

recorra distancias mayores, vaya a más lugares a mayor veloci-

ésta; pero también no todos los ingenieros se elevan a la altura

dad, se ha convertido en un fin en sí mismo. ¿Acaso este super-

de sus oportunidades como hicieron los planificadores de esta

empleo del automóvil no consume cada vez mayores cantidades

carretera, trazando los caminos bien separados a lo largo de las

de nafta, aceite, hormigón, goma, y acero, y de esta manera pro-

colinas, siguiendo los contornos, y así por esta simple estrata-

vee una base real de trabajo para una economía de expansión? Es

gema, evitando las ciudades y las aldeas y abriendo una gran

cierto, pero nada de eso compensa el propósito esencial del trans-

perspectiva a través del campo, realzado por las profusas plan-

porte. El propósito del transporte es traer gente o mercancías a

taciones de arbustos florales en los bordes. Si este patrón de en-

lugares donde se las necesita, y concretar la mayor variedad de

canto y belleza se tuviera presente en forma más general, los in-

bienes y de gente dentro de un área limitada, para ampliar la po-

genieros viales no caerían con tanta frecuencia en los brutales asaltos contra el panorama y contra el orden urbano a que dan

Un buen sistema de transporte disminuye el transporte innecesario; y en cualquier caso ofrece un cambio de velocidad y de modalidad, a fin de ajustarse a la diversidad de los propósitos humanos.

origen cuando sólo se preocupan de la velocidad y el volumen de tránsito, y aplanan y dinamitan su camino a través del campo para acortar una ruta unos cuantos kilómetros, sin hacer el total del viaje menos depresivo. Tal vez nuestra época para el futuro historiador sea conocida como la época del bulldozer y del exterminador; y en muchas partes del país la construcción de una carretera tiene más o menos el mismo resultado sobre la vegetación y las estructuras humanas como el pasaje de un tornado o la explosión de una bomba atómica. En ninguna parte este hábito mental del bulldozer es tan desastroso como en el acceso a la ciudad. Desde que el ingeniero considera su propio trabajo más importante que las otras funciones humanas a quienes sirve, no vacila en destruir bosques, arroyos, parques y vecindarios humanos a fin de llevar sus caminos directamente a su supuesto destino.

26

sibilidad de elección, sin que sea necesario viajar. Un buen sis-

El error fatal que hemos estado cometiendo es sacrificar toda otra

tema de transporte disminuye el transporte innecesario; y en

forma de transporte al automóvil privado y ofrecer, como única

cualquier caso ofrece un cambio de velocidad y de modalidad, a

alternativa de larga distancia, el aeroplano. Pero el hecho es que

fin de ajustarse a la diversidad de los propósitos humanos.

cada tipo de vehículo tiene su uso especial; y una buena práctica

La difusión y la concentración son los dos polos del transporte: la

transportista debe buscar mejorar cada tipo para sacarle el mejor

primera exige una red de caminos bien articulados, que vayan

provecho. Esto no puede lograrse teniendo como finalidad única

desde el sendero para peatones hasta la carretera de seis trochas

la velocidad o la afluencia continua. Si desea oportunidades for-

y un sistema de ferrocarriles transcontinentales. La segunda

tuitas para encontrar a sus vecinos, y para sacar provecho de

exige una ciudad. Nuestros sistemas de carreteras principales

contactos casuales con conocidos y colegas, un viaje de tres kiló-

están concebidos en el interés de la velocidad, como organizacio-

metros por hora en un área concentrada, libre de vehículos inútiles,

nes lineales, es decir como arterias. Ese concepto estaría bien

le dará la ocasión. Pero si desea llevar con rapidez un cirujano a un

siempre que las arterias principales no estuvieran superdesarro-

paciente que está a mil quinientos kilómetros de distancia, la ca-

lladas como para excluir todos los elementos menores de trans-

rretera de tránsito más veloz es demasiado lenta. Y si desea asistir

porte. Los planificadores de las carreteras todavía tienen que

a una conferencia en invierno, el traslado por ferrocarril le ofrece

comprender que estas arterias no pueden ser arrojadas dentro

una velocidad más exacta y una mayor seguridad de no quedar

del delicado tejido de nuestras ciudades; la sangre que hacen

detenido que el avión. No hay una forma o velocidad ideal: el pro-

circular debe entrar más bien a través de una elaborada red de

pósito humano debería determinar la elección de los medios de

vasos capilares sanguíneos menores. Ya en 1929 Benton MacKaye

movilidad. Es por eso que necesitamos un sistema mejor condicio-

resolvió el desarrollo sensato y racional de las carreteras, en su

nado y no sólo más carreteras. Es evidente que los proyectistas de

concepción del Townless Highway (Carretera sin ciudad); y esto

nuestros programas de carreteras nacionales, tuvieron poco inte-

tuvo como corolario la Highwayless Town (Ciudad sin carreteras).

rés en el transporte. En su fanático celo para expandir nuestras ca-

Un cuarto de siglo después, todos los elementos de la concepción

rreteras, la misma asignación de fondos indica que están dispues-

de MacKaye se han llevado a cabo, excepto el último que por

tos a liquidar toda otra forma de transporte por tierra y agua. El

cierto no es el de menor importancia.

resultado es un método demasiado simplificado e ineficiente de

En muchos aspectos, nuestras carreteras no son sólo obras de

monotransporte: una regresión del complejo y múltiple sistema

arte de ingeniería, sino consumadas obras de arte: algunas de

de transporte del que una vez nos vanagloriamos.

NOTAS CPAU 14

2. Recta

Si de algo estoy seguro es que no hay nada en esta vida tan bello como una línea recta que atraviesa el espacio de la nada sin tener existencia sin origen ni final inmortal perfecta belleza de la abstracción instersticio de la mente producto de la razón imagen de sol poniente estoy seguro de que no hay nada en esta vida tan bello como una recta... insurRecta.

Jorge Erbin

Erbin, Jorge. (1995) Recta. En: QUEJAs, IDeAS, rECUERDOS. Buenos Aires: Edición de autor.

J UN IO 2011

27

BENEFICIOS CPAU

Beneficios CPAU El Consejo te ofrece descuentos de todo tipo: viajes, librerías, hoteles, clubes, y muchos más. Para ver todos los beneficios, ingresá en http://beneficios.cpau.org

STANDARD BANK

VIAJES ALL CLERC

Pagando la matrícula en 12 cuotas

Descuentos para matriculados acti-

con la tarjeta VISA del Banco (tra-

vos y vitalicios en viajes, excursiones

mitada por medio del convenio) se

y traslados regulares en Argentina y

le reintegra el importe de $ 400.-

al exterior. Beneficios para viajes

en 12 cuotas.

corporativos y Asesoramiento y Organización de Congresos y Eventos.

AMERIAN HOTELES

GUILLERMO PADILLA

La cadena de hoteles AMERIAN

Distribuid ora d e Grand es M arcas

ofrece un beneficio del 25% de

de B e b i da s

descuento sobre la tarifa rack en

40% de Descuento sobre precios de

cualquiera de sus 8 hoteles en

mercado por caja cerrada. Promoción

Buenos Aires, Mar del Plata, Cór-

válida para todos nuestros matricu-

doba, Catamarca, Chaco, Villa

lados activos y vitalicios. Vinos,

Mercedes, Iguazú y San Luis.

champagnes, spirits de más de 150 Bodegas. Regalos empresariales.

FAIRFAXS

CONCENTRA

Descuentos en ploteos, copias de

La librería Concentra realiza un des-

planos, facturas monotributistas,

cuento del 10% en las compras en

plastificados y anillados.

efectivo de nuestros matriculados.

OSDIC

SOMMIER CENTER

Desregulando y optando por OSDIC

35% y 50% en beneficios en la compra

su aporte va directo a esta obra

de Sommiers & colchones. Benefi-

social pudiendo obtener Galeno y

cio válido para las 3 sucursales.

no abonar el IVA.

3208

NOTAS CPAU 14

J UN IO 2011

29

ACTUALIDAD

Obras de hasta 1500 m2 de FOT de Uso Residencial

Plano Único Se modificó el trámite administrativo para el registro de los planos, que entró en vigencia el 25 de abril de 2011 y es aplicable para obras nuevas, demoliciones y modificaciones.

Con la Resolución 679-SSPLAN-2010, se modificó el trámite admi-

Les recordamos que:

nistrativo para el registro de los planos de los permisos de obra de Obra nueva, Demolición total y Obra nueva, y Modificación y/o

• La exigencia de gestionar las factibilidades ante las empresas

Ampliación de edificios existentes (con final de obra otorgado).

prestadoras de servicios (luz, agua, gas), previo a la conforma-

La normativa se aplica para edificios cuyo destino principal sea el

ción del expediente, sigue vigente.

uso residencial y para proyectos de hasta 1500 m2 de superficie computable para el FOT. En una segunda etapa se hará extensible a proyectos de 5000 m2 de FOT, aunque la DGROC igualmente aceptará las presentaciones de estos proyectos que decidan hacerlo en el nuevo formato. En el Anexo I de la normativa de referencia se establece el formato de los planos, la información que debe consignarse en los mismos, etc.

• Los modelos de planos y planillas exigidos para el Plano Único están disponibles en el sitio web de la Subsecretaría de Planeamiento del GCABA: http://www.ssplan.buenosaires.gov.ar/ • Los formularios de certificaciones y solicitudes no fueron modificados por Resolución 679 SSPLAN GCABA 10. • Las Encomiendas Profesionales por Proyecto y Dirección registradas en el CPAU no se dan de baja. • La presentación del Plano Único con la documentación completa se realiza en la Mesa de Entradas General, piso 3, del edificio del Plata, Carlos Pellegrini 291 de la DGROC. • Los trámites para solicitar el permiso de demolición total, regis-

Las modificaciones más significativas

tro de ajuste de obras ejecutadas sin permiso, reglamentarias

• Se presentará un plano completo por cada planta de nivel que

ción y ampliación cuyo no sea el residencial, se seguirán pre-

y/o antirreglamentarias, permisos de obra nueva o modifica-

deberán contener el proyecto de arquitectura, las instalaciones

sentando en el formato que establece el Código de la Edifica-

eléctricas, las instalaciones sanitarias y condiciones de preven-

ción de la CABA en la Sección 2, De las tramitaciones.

ción contra incendio. • Todo el resto de la documentación necesaria será presentada

• La responsabilidad profesional es indelegable. • Los responsables de la ejecución de las instalaciones sanitarias,

en forma de planillas anilladas en tamaño A4 o múltiplos,

eléctricas y de prevención contra incendio deberán incluirse en

como ser planillas de estructuras, cálculos de circuitos de insta-

el espacio para firmas para otros profesionales, tal como figura

laciones eléctricas, iluminación y ventilación, etc.

en los planos modelo publicados por la SSPLAN GCABA.

• Con el Plano Único, se exige la presentación en formato digital

• Si el profesional que firmó la presentación de los planos no va a

(PDF) de toda la documentación entregada en formato papel.

participar de la ejecución de la obra, debe desvincularse, con-

• La carátula deberá contener las siguientes leyendas:

forme lo establecido en el Código de la Edificación. La desvincu-

- PLANO ÚNICO RESOLUCIÓN Nº 679 SSPLAN 2010

lación se presenta en la Mesa de Entradas de la DGROC del

- EL PRESENTE PERMISO NO EXIME DE POSEER PERMISO DE USO

GCABA. No es necesario realizar presentaciones ante el CPAU.

• Se agrega un espacio de firmas para otros profesionales como

• La Resolución 554 GCABA/SSPLAN/2009, que en su momento

por ejemplo: proyectista, director y/o ejecutor de las instalacio-

también modificó el procedimiento administrativo del trámite,

nes sanitarias, eléctricas o de prevención contra incendio.

sigue vigente.

Puede encontrar toda esta información extendida y detallada en el sitio web del SSPLAN GCABA: http://www.ssplan.buenosaires.gov.ar/

30

NOTAS CPAU 14

REQUISITOS EXCLUYENTES QU E DEBEN CONTENER LOS PLANOS A PRESENTAR ANTE LA DGROC

Arquitectura

Instalaciones Eléctricas

• Distrito.

• Definir en planos ubicación del medidor, tablero general,

• Uso. • Línea de Frente interno, Línea interna de basamento (cálculo analítico y croquis de manzana). • Perfil edificable: altura máxima sobre Línea oficial, retiros, plano límite, construcciones permitidas sobre plano límite.

y tableros seccionales; • Verificar la potencia, si es mayor o igual a la liquidación; • Graficar bocas, tomas y llaves (sin trazado, ni sección de cañerías), máximo 15 bocas por circuito, detallando cualquier otra instalación que correspondiera.

• Patios Interiores, Áreas y Tangentes. • Estacionamiento. • Portería y auxiliar. • FOT. • Consulta al Código De Planeamiento Urbano, Estudio de Impacto ambiental, si correspondiera, con demás requisitos exigidos en el Código De Planeamiento Urbano. • Leyenda en carátula, "El present e permiso n o exime de p oseer p ermi so d e uso", en recuadro y negrita. • Línea particularizada. • Viabilidad del proyecto.

Prevención contra Incendio

Instalaciones Sanitarias

• Verificación de los medios de salida.

• Definir radio antiguo y radio nuevo.

• Sistema de evacuación de humos y gases. • Indicar características y resistencia al fuego de puertas. • Dotaciones de matafuegos.

Rad io anti gu o: Pluvial + cloacal = todo a cloaca. Rad io nuevo: Pluvial, y cloacal, desagües por separados. • Zona de línea de máxima creciente (Núñez a Riachuelo). Dentro de esta zona las instalaciones de desagües en planta baja deberán obligatoriamente ser de hierro fundido, y deberá verificarse el nivel en la parcela correspondiente a la obra, para que ningún artefacto en planta baja sea proyectado bajo esa línea de máxima creciente.

Ante el CPAU: qué se debe cumplir En un solo trámite, realizar los siguientes pasos: • Registro de la Encomienda de Obra e Instalaciones complementarias, debidamente completada y firmada por profesional y propietario; • Se certificará en el juego de planos completo que sale con el sello de revisado de la División Contable de la DGROC, la

firma del/los arquitectos que asumen los roles profesionales exigidos por GCABA en la carátula de los planos. • Visado del modelo de cartel de obra. • Certificación de firma del Profesional en el Certificado del Uso conforme

J UN IO 2011

31

ACTUALIDAD

Profesionales Verificadores

Un desfasaje preocupante e injusto Desde la instauración, hace más de 10 años, del sistema de Profesionales Verificadores se ha producido un desfasaje notable entre el aumento de la tasa de la construcción, y los honorarios que perciben estos peritos verificadores.

Por Diego Armando, Arq.

dido que resulta oportuno y conveniente recurrir al concurso de

El sistema de Profesionales Verificadores sufre, desde su instaura-

profesionales idóneos en la temática de tal modo que, colaborando

ción, un desfasaje notable entre el aumento de la tasa de la cons-

los mismos con la Dirección General F iscalización de Obras y Ca-

trucción y los honorarios que perciben estos peritos verificadores.

tastro, realicen en la oportunidad en que les sea requerido, y con la exclusiva finalidad de establecer la correspondencia entre la obra

Luego de más de una década de aplicación – mayo del año 2000-

efectuada y los planos registrados, una serie de verificaciones espe-

el sistema de Profesionales Verificadores se ve afectado por una

ciales con una visión objetiva y responsable”.

serie de circunstancias que parecen haber deformado el espíritu original con el que fue creado, dando lugar a una crisis difícil de

La idea de ejercer el poder de policía sobre las obras a través de

superar. Es así que el CPAU hace un fuerte llamado de atención a

verificaciones e inspecciones realizadas por profesionales inde-

quienes han implementado el sistema para producir los necesarios

pendientes, ofrece muchas ventajas para todos los involucrados:

cambios que se requieren aplicar a la brevedad. Particularmente,

por un lado, el GCBA consigue una excelente calidad en el control

en lo que atañe a actualización de honorarios profesionales.

comunal, mientras que los profesionales verificadores obtienen una forma de encomienda periódica a la que tienen acceso me-

Comencemos recordando que el sistema de Profesionales Verifi-

diante un sorteo que iguala las oportunidades laborales de todos

cadores de Obra fue creado por el Decreto 733/2000, para mejo-

los inscriptos en el registro.

rar, en varios aspectos, el sistema de control y verificación de las obras de la ciudad de Buenos Aires.

Tal ha sido el éxito de la iniciativa, que pronto se sumaron PVH (Habilitaciones) PVF (Fachadas), PVA (Ascensores), con la plena

El CPAU, la Sociedad Central de Arquitectos (SCA), y la Facultad de

adhesión de las respectivas entidades profesionales y académicas.

Arquitectura, Diseño y Urbanismo (FADU) –por los arquitectos- el Consejo Profesional de Ingeniería Civil (CPIC), el Centro Argentino

El problema principal

de Ingenieros (CAI) y la Facultad de Ingeniería (FI) fueron las enti-

32

dades originales que propiciaron el sistema.

El problema principal radica en que no parece haber correlato

Entre sus considerandos el Decreto destacaba que “se ha enten-

entre la tasa de construcción que se debe abonar en la Agencia

NOTAS CPAU 14

Gubernamental de Control (antes DGROC) y los honorarios de los PVO, siendo los verificadores piezas fundamentales en el sistema de control comunal. Para ilustrar este desfasaje, se publica un cuadro muy ilustrativo: mientras que en el lapso comprendido entre los años 2000 y 2011 la tasa de construcción que cobra el GCBA aumentó un 167%, los honorarios de los profesionales sólo se actualizó en un 50%. Los PV que trabajan regularmente se han agrupado en la Asociación de Peritos Verificadores, que dirige el Arq. Alberto Argüelles. Para solucionar parcialmente la cuestión, el titular de la Agencia Gubernamental de Control (AGC), Ing. Javier Ibáñez, anunció recientemente un aumento del 25% , pero el desfasaje aún sigue siendo grande. Uno de los justos reclamos que hacen los Verificadores, es que sus honorarios queden regulados en la Tarifaria que todos los años vota la Legislatura porteña. Allí, en el capítulo referido “Contribuciones que inciden sobre los inmuebles” están contemplados los aumentos de los Derechos de delineación/tasa de verificación de obras, las Contribuciones por mejoras, etc. Actualizar honorarios de esa manera resultaría justo y equitativo. Pero también existen otro tipo de problemas a solucionar. Deberían facilitarse y aceitarse los mecanismos referidos a la facturación, y cobro de los honorarios: los pagos están permanentemente atrasados; las cuentas bancarias obligatorias que deben abrir los verificadores en el Banco Ciudad para que les acrediten los pagos son onerosas, y la actividad de estos profesionales es de por sí, de dedicación parcial. Por lo tanto, a veces pasan meses sin que se registren movimientos bancarios en estas cuentas, lo cual genera costos de mantenimiento que a la larga atentan con la rentabilidad de los magros honorarios. Asimismo, debería agilizarse el sistema de ingreso y egreso de facturas que presentan los profesionales inscriptos por las verificaciones realizadas. En la actualidad, suelen considerarse por “paquete” de profesionales, y ante la menor duda en alguna factura que integra el “lote”, todo el grupo vuelve a fojas cero, con el consiguiente perjuicio para aquellas inscripciones correctamente formuladas. La baja remuneración elevó la tendencia al “rebote”: esto significa que hay encomiendas de verificación que son rechazadas por los profesionales, lo cual demora la concreción de la verificación propiamente dicha. A modo de conclusión El sistema de Profesionales Verificadores trae grandes ventajas para todos, pero especialmente para el GCBA. Es hora que las autoridades competentes tomen cartas en el asunto y resuelvan los problemas aquí planteados para que el control comunal de obras funcione correctamente y los profesionales verificadores obtengan una remuneración digna, acorde con la importancia de las tareas que asumen.

J UN IO 2011

33

El devenir de la profesión ACTUALIDAD

El incierto futuro del arquitecto como profesional independiente 1 Según el autor, los cambios en la forma de ejercer la profesión, producto de la concentración de capitales, la diversificación del conocimiento y el costo del ejercicio profesional, revierte la imagen del arquitecto como profesional independiente. Aquí, cómo nos afecta en los costos este cambio de paradigma.

Por Néstor Magariños.

consecuente especialización. Hoy, aún y cuando en nuestro país la

Cuando hablamos de la profesión de Arquitecto, normalmente

construcción sigue siendo mano de obra intensiva, es imposible

nuestro imaginario se despliega sobre una manera de actuarla

abarcar todas las especialidades y debemos recurrir con mayor

conocida como el ejercicio liberal de la profesión. Un trabajador

frecuencia a un mayor número de asesores.

independiente que organiza solo o asociado una oficina propia (el Estudio) en la que atiende diversos clientes en relación con los

Un aspecto quizás menos reflexionado pero que indudablemente

proyectos de diferentes tipos edilicios. Esta imagen, además de

condiciona el ejercicio independiente de la profesión, esta referido

ser la forma histórica y la más difundida de ejercerla hasta un pa-

al costo de ejercerla.

sado reciente, está reforzada por el proceso formativo universita-

Hay rubros simples de incluir en una planilla de cálculo de costos,

rio que minimiza o ignora otras posibilidades.

y otros que requieren más atención. Es más difícil ponderar cuánto tiempo, del tiempo laboral, dedica uno a actividades sin

En términos económicos ese arquitecto es el organizador y pro-

renta inmediata o sin renta en absoluto, capacitaciones, biblioteca,

pietario de una PYME.

herramientas de la profesión, tareas de difusión, concursos fallidos, presentaciones, proyectos que no prosperan, etc.

La realidad es que el ejercicio de la profesión ha sufrido enormes cambios y lo que hace 30 años eran tareas poco frecuentes para arquitectos, hoy aparecen como muy importantes dentro las posibilidades y capacidades de la profesión. Actividades que van desde el gerenciamiento empresario en la construcción, la actividad inmobiliaria, la actuación en oficinas públicas, en áreas de comercialización de productos, en el urbanismo, en la logística, la investigación, el patrimonio, la planificación, la seguridad industrial, la auditoría, el diseño gráfico, de objetos, de muebles, el interiorismo, la gestoría, etc… Asimismo es cada vez más importante la cantidad de arquitectos que trabaja en relación de dependencia en alguna de estas ramas de actividad dentro de la profesión.

En nuestra profesión y en otras que sufren procesos similares, estos cambios son entendidos como el resultado de procesos económicos de concentración del capital.

En nuestra profesión y en otras que sufren procesos similares, estos cambios son entendidos como el resultado de procesos eco-

También es difícil ponderar el valor de los tiempos de descanso y

nómicos de concentración del capital, que también se verifica en

vacaciones y prácticamente imposible ponderar la flexibilidad

la nuestra, en la que un pequeño número de estudios ha evolu-

económica necesaria en una industria que a lo largo de los últi-

cionado como empresa y concentran muchos de los trabajos más

mos 30 años ha tenido sucesivos picos y valles de actividad. Asi-

importantes del mercado local.

mismo es difícil estimar el impacto del aumento de la litigiosidad en nuestro medio, donde cada vez es más común que demandas

Otro aspecto que define los cambios es el crecimiento y la diversi-

laborales y civiles involucren al Director de Obra, la más de las

ficación del conocimiento y las tecnologías disponibles con la

veces injustificadamente.

1

34

El artículo completo se encuentra en nuestro sitio online www.revistanotas.org, extendido con las planillas de cálculo correspondientes.

NOTAS CPAU 14

Algunos dirán que son propietarios de su estudio: no hay diferen-

entre 2 y 3 viviendas unifamiliares por año para cubrirlos.

cia, lo que no pagan de alquiler es igual que lo que no perciben por alquilar la propiedad a terceros. Otros dirán que su situación

Debemos concluir que el margen para el ejercicio independiente

impositiva es diferente, puede ser, pero si tienen trabajo como

también está muy acotado por los costos y que con este marco

profesionales independientes existe la carga impositiva.

económico, sostener un estudio necesita de un flujo permanente de 2 ó 3 obras medianas (o su equivalente) por año. Es así que la

¿qué monto de honorarios tenemos que percibir para pagar estos costos fijos? O planteado de manera optimista, ¿qué volumen de obras deberíamos tener para pagar estos costos fijos?

continuidad de los estudios pequeños estará siempre pendiente de probables y cercanas dificultades económicas. Espero que estas líneas ayuden a los colegas a enfrentar mejor los desafíos de la profesión. Los cambios en el ejercicio de la misma seguirán sucediendo. La diversificación de roles de actuación seguirá creciendo, al tiempo que disminuirá la proporción de arquitectos que actúen como trabajadores independientes o pequeños empresarios exclusivamente. Ya hoy, una importante mayoría de colegas son trabajadores en relación de dependencia. Las instituciones que forman arquitectos deben profundizar estas líneas de análisis y proponerse nuevos contenidos y nuevas líneas de acción si quieren formar profesionales con mejor inserción en el mercado de trabajo.

En este sentido actuar como monotributista puede ser una disminución significativa en los costos, pero siempre y cuando el volumen

También las que regulan nuestro ejercicio profesional deben pre-

de trabajo a encarar sea prácticamente cubierto por su propio es-

guntarse sobre el real estado de la práctica de la profesión. Si

fuerzo o con un mínimo colaboradores en relación de dependencia.

bien los Aranceles de honorarios de los colegios provinciales y el

El volumen tope de facturación prácticamente se agota si se de-

MEPA se han extendido sobre otros roles distintos del proyecto y

cide encarar el proyecto de una obra grande o incluso ante dos

la dirección de obras, queda mucho por hacer para ponerse al día

obras pequeñas pero simultáneas. El costo de la movilidad, de la electrónica (con la permanente renovación) y de las comunicaciones ha aumentado significativamente en el combo del gasto profesional. Al finalizar, la cuenta completa interroga: ¿qué monto de honorarios tenemos que percibir para pagar estos costos fijos? O planteado de manera optimista, ¿qué volumen de obras deberíamos tener para pagar estos costos fijos?

La continuidad de los estudios pequeños estará siempre pendiente de probables y cercanas dificultades económicas.

En una planilla confeccionada según mi propia experiencia y la

con los cambios y ser útiles a la realidad de una mayor cantidad

consulta a un buen número de colegas1, y usando los valores de

de colegas, cuyas prácticas profesionales y sus problemas están

publicaciones especializadas necesitamos proyectar y dirigir

débilmente contemplados.

J UN IO 2011

35

EDICIONES CPAU

Ediciones CPAU

Costos de Producción de las Obras de Arquitectura Resultado del trabajo de investigación del Arq. Fernando Herrmann y Patricia Mezzadra, la nueva publicación determina estándares en los costos de producción de una obra de arquitectura.

Con el objetivo de poder determinar estándares horarios de producción de cada una de las etapas de las obras de arquitectura, y cuáles son sus componentes mínimos para cumplir con los requisitos de desempeño del Consejo Profesional de Arquitectura y Urbanismo, la institución encomendó al Arq. Fernando Herrmann y a Patricia Mezzadra el estudio y el análisis de diferentes obras provistas por distintos estudios. La investigación se dividió en dos partes:

“¿Cuántas horas de trabajo insume desarrollar un proyecto y construirlo? ¿Qué duración en el tiempo debe tener ese proyecto?”

• La primera estuvo dedicada a la búsqueda de información, relevándose diferentes documentaciones de proyecto buscando

obras del mismo tipo para ayudar al profesional a establecer

unificar los criterios mínimos de producción de las mismas;

parámetros sobre:

• La segunda parte se abocó al análisis de la documentación y de

• ¿Cuántas horas de trabajo insume desarrollar un proyecto y

los costos horarios de producción, de manera tal que se puedan

construirlo? ¿Qué duración en el tiempo debe tener ese pro-

comparar los consumos de horas en cada una de las etapas, y a

yecto? ¿Qué costo tiene ese volumen de trabajo en tiempo en

su vez dividirlos en costos por procedencias: recursos profesionales (RRHH), asesores, especialidades e ingenierías, gastos generales, impuestos.

un estudio? • ¿Cómo debe distribuirse ese trabajo (o carga horaria) entre los distintos profesionales que conforman un estudio de arquitectura? • ¿Cuáles son los otros gastos directos (Operativos) e indirectos

Se analizaron los prototipos más comunes en el ejercicio profe-

(No operativos) que lleva realizar una obra?

sional, elaborándose un minucioso estudio de varias obras de

• ¿Cuál es el volumen y calidad de la documentación a entregar?

diversa índole agrupadas por tipo y categoría de construcción:

• Y por último ¿qué incidencia tienen los gastos efectuados por el

• Casas o viviendas unifamiliares,

estudio sobre el monto final de obra, monto sobre el que los

• edificios residenciales de propiedad horizontal, entre mediane-

profesionales solemos fijar nuestros honorarios?

ras y de perímetro libre, • edificios administrativos, en altura y suburbanos,

En conclusión, y como afirma el Arq. Fernando Serra, entrevistado

• edificios para la salud.

en la publicación: “(…) Lo importante es dejar en claro que si no se

Se revelan así información sobre cuáles son los costos de un estu-

sultado económico sea negativo. O peor aún, que a la postre no

sigue alguna metodología de cálculo, es muy probable que el redio al momento de realizar cada obra, deduciendo las horas de

sepamos si hemos ganado o perdido dinero.” Y en esto reside la

trabajo empleadas para ejecutarlas o desarrollarlas (Anteproyecto,

importancia de esta publicación.

Proyecto, Dirección de Obra y Gerenciamiento o Administración de Obra) así como la distribución de la carga horaria dentro del staff profesional (Junior, Senior y Socios), además de los gastos directos

La publicación de Costos de Producción de las Obras d e Ar-

(operativos) e indirectos (no operativos) generados por la misma

quitectura, está a disposición del público en la Sede CPAU, y

obra y su relación con el monto que conlleva realizarla.

se encuentra en promoción exclusiva para matriculados activos y vitalicios a un valor de $40.

De esta manera se busca encontrar relaciones y similitudes en

36

NOTAS CPAU 14

1

2

3

4

5

1. Hospital Thompson, primera etapa / 2. Casa en Lobos / 3. Palermo Polo Suites

4. Las Lomas Way Oficinas, frente / 5. Las Lomas Way Oficinas, contrafrente

J UN IO 2011

37

ARQUITECTURA + ARTE

Arquitectura + Arte A+A es el espacio del CPAU dedicado al arte producido por los arquitectos. Un espacio donde todos los interesados pueden acercarse a colaborar.

1936 - 2011

Testigo silencioso: El obelisco cumplió 75 años En el marco de A+A, el nuevo espacio del Consejo dedicado al Arte, se inauguró la muestra homenaje al Obelisco, en la que se convocaron arquitectos y artistas para que le rindieran tributo a través de sus obras.

“Punto central en el mapa cuya vertical presencia en la Pampa es signo de Buenos Aires. Postal grabada en el imaginario de los porteños y referencia de los visitantes. Centro de convergencias del trajín cotidiano y también centro de

La Muestra en el CPAU del Obelisco, obra del Arquitecto Prebisch,

multitudinarias manifestaciones sociales, políticas y culturales en

reunió obras producidas especialmente para la ocasión, trabaja-

nuestro devenir histórico.

das en función de lo que significa este Hito en la ciudad, en su

Señala el centro de nuestro centro imaginario y es referencia inevitable

historia y en nuestro propio imaginario urbano.

de ese hito –vacío-piso– que, hoy inundado de tráfico, espera nuestro

La inauguración del 24 de mayo contó con la presencia de la fami-

diseño para reelaborarse como espacio tridimensional, desarrollando

lia Prebisch, además de numerosas personalidades del arte, con-

todo su potencial como lugar de encuentro e intercambio.

sejeros y ex consejeros del CPAU.

Cuánto estás en nuestro recuerdo y cuánto podemos imaginar en

Jorge Lestard, el presidente del Consejo, se expresó de la siguiente manera:

nuestro futuro.”

Idea y realización: Arq. Néstor Julio Otero

Los autores participantes fueron los siguientes: • Víctor Abdala

• Alejandrina

• Juan Fontana

• Jorge Sarsale

Cappadoro

• Jorge Pieretti

• Leo Tavella

• Liliana Antonow

• Julián Cheula

• Roque Frangella

• Edgardo Minond

• Ariel Pradelli

• Clorindo Testa

• Miguel Baudizzone

• Aída Daitch

• Mariana Gabor

• Miguel Minond

• Isaac Rasdolsky

• Arnaldo Trenchi

• Julián Benedit

• Elsie Díaz Foix

• Julio Hilguer

• Gustavo Navone

• Josefina Robirosa

• Jaly Vázquez

• Jacques Bedel

• Luis Díaz

• Pablo Iglesias

• Carlos Negrore

• Susana Romero

• Vilma Villaverde

• Alejandra Bourda

• Teresa Dürmuller

• Jorge Sábato

• Damián Vinson

• Loretta Brass

• Elena Elizalde

• Alejandra Jones

• Leandro Niro

• Horacio Sardin

• Verónica

• Miguel Cámpora

• Leonardo Enea

• Miguel Jurado

• Lorena Obiol

• Rolando Schere

Yacovino

• Alejandro Leveratto

• Néstor Julio

• Beatriz Sobuá

Spilimbergo

• Manuel Cancel

• Alicia Esquivel

Molli

• Blanca Medda

Miguens

• Christian Perello

• Federico Alonso

• Marcela Camu

• Roberto Frangella

• José Ignacio

Scire

Otero

• Justo Solsona

• Yoshino Yoshitaka

1. Blanca Medda. / 2. Miguel Baudizzone. / 3. Luis Díaz. / 4. Andrés González (Rubito) / 5. Teresa Dürmuller. / 6. Beatriz Sobuá. / 7. Jaly Vázquez. / 8. Vilma Villaverde. / 9. Miguel Cámpora. / 10. Manuel Cancel. / 11. Julián Cheula.

38

NOTAS CPAU 14

2

3

4

5

6

7

8

9

10

11

1

ARQUITECTURA + ARTE

Arquitectura + Arte JORGE SARSALE. Pinturas 2005-2011 Hace más de 20 años que el Arq. Jorge Sarsale expone en diferentes ámbitos nacionales e internacionales. Su obra, recientemente premiada por la ADC Contemporary Art Gallery de Los Ángeles, nos introduce en la profundidad de nuestra propia alma.

“Lejos de la ilusión óptica, Sarsale es de aquellos que practican la des-ilusión al provocar estratégicamente la ruptura de quien mira con el acto reflejo, o la mitología, de la respuesta inmediata frente a la obra. Mediante la adhesión fanática a una consigna constructiva que lleva hasta sus últimas consecuencias con morosa, refinada aplicación, Sarsale elabora su obra como si al hacerlo estuviera mol-

Eduardo Stupía, reconocido artista, escribió lo siguiente sobre la

deando a la vez un específico modo de ver en el espectador. La ma-

obra de Sarsale:

teria prima con la que trabaja Sarsale es el tiempo, propio y ajeno.”

Curador de la muestra: Arq. Néstor Julio Otero

Jorge Sarsale. Sin título. Papel sobre cartón.

40

NOTAS CPAU 14

HUMOR

Por. David Paleo

J UN IO 2011

41

SERVICIOS EN LA SEDE

10 tips de Gerencia Técnica

La Dirección de Obra Un resumen de recomendaciones desde el CPAU para todos los Directores de Obra.

1

3

5

7

9

Director de obra Es el consejero y guardián de los intereses del comitente y debe controlar que lo construido coincida con lo proyectado. No es el encargado de la conducción de los trabajos para materializar el proyecto: dicha tarea es del constructor.

Habilidades y honorarios adicionales Reflexionar si se cuenta con la experiencia para responsabilizarse por la ejecución de la obra, pues se requieren habilidades adicionales a la dirección de obra; se debe tener claras las obligaciones y responsabilidades que implica el rol y convenir los honorarios adicionales, tomando como referencia las retribuciones del representante técnico de una empresa constructora.

Representantes de la dirección de obra El director de obra puede designar uno o varios representantes como jefes de obra para que lo secunden en el control de los trabajos. Se recomienda limitar sus atribuciones dado que la responsabilidad por las acciones, errores u omisiones de estos auxiliares recaen exclusivamente en la dirección de obra.

Comunicaciones con el comitente Efectuar comunicaciones al comitente por escrito e intentar que este haga los pedidos de igual manera. Redactar y remitir al comitente informes periódicos sobre la marcha de los trabajos, junto con fotografías sobre los avances y copia de las órdenes de servicio preferentemente acompañando las liquidaciones y certificaciones mensuales.

Reuniones y puntos acordados Redactar minutas con información de las reuniones mantenidas con contratistas, y/o comitentes, incluyendo presentes, lugar y fecha, puntos tratados, puntos acordados y remitir copias a todos los participantes.

2

4

6

8

10

Firma de planos como constructor Recordar que se asumen importantes responsabilidades cuando se firman los planos municipales como constructor, en las obras que se realizan por contratos separados -sin que exista contratista asumiendo dichas responsabilidades-, o por administración directa del profesional.

Cambio de constructor Si se ha firmado como constructor solamente a los efectos de iniciar los trámites ante el GCBA, realizar el cambio de constructor en el expediente antes de comenzar la obra, para evitar responsabilidades que no competen al director de obra. Obligar a los contratistas, en los pliegos de condiciones de los contratos de construcción, a designar los profesionales que los representen y que suscriban los planos municipales.

Comunicaciones con el contratista Realizar mediante el cuaderno de órdenes de servicios las comunicaciones al contratista, tales como entrega de documentación, órdenes, interpretaciones, constancias, autorizaciones, aprobaciones, denegaciones o rechazos.

Obligaciones del comitente Recordar al comitente que no debe solicitar tareas, ni efectuar pago alguno, ni producir o permitir modificaciones a la obra, sin intervención del director de obra.

Rutinas Para no incurrir en corresponsabilidad con el constructor por la mala ejecución de los trabajos, ajustar su tarea a las disposiciones de los pliegos de condiciones de los contratos de construcción y al cumplimientos de procedimientos y rutinas preestablecidas.

Nota: Estas recomendaciones responden a los contenidos del Documento C09. La Dirección de las Obras del MEPA (Manual del Ejercicio Profesional del Arquitecto) y se sugiere la lectura completa de la misma.

42

NOTAS CPAU 14

J UN IO 2011

43

SERVICIOS EN LA SEDE

Desde la Biblioteca del CPAU

Arquitectura y Literatura LIBROS PARA CONSULTA O PRÉSTAMO A DOMICILIO Caffarini, Luis. Los habitantes del paraíso: toda gente sencilla: Relatos, Perfiles, 1a ed. Barcelona: Styria, 2007. Crónicas de viaje. 1ª ed. Buenos Aires: Ambientado en la Asociación Amigos Francia del siglo XIX, el del Museo Nacional protagonista narra el de Arte Oriental, arte de crear vitrales 2003. Arquitecto de para las iglesias y profesión, estudioso del Arte abadías y sus simbologías, aprendiendo el oficio de su padre Primitivo y narrador de historias por vocación. Reúne relatos, y de amigos de éste. Su espíritu vanguardista y sus creaciones en personajes, anécdotas y crónicas las que juega un papel preponde- de viajes del autor por los rincones más exóticos. rante la intensidad del color, son rechazadas por juzgarse "demasiado modernas" pero su tenacidad y maestría jugará a su favor.

Morales, Bruno. Bolivia construcciones. 1a ed. Buenos Aires: Sudamericana, 2006. Novela que relata la historia de vida de un inmigrante boliviano en la Argentina que trabaja como obrero en una empresa constructora de la ciudad de Buenos Aires.

Pérgolis, Juan Carlos. Ciudad express: Arquitectura, literatura, ciudad. 1a ed. Buenos Aires: Nobuko, 2006. En los usos cotidianos de la palabra "express" se evidencia un carácter emergente en el gusto de la época: la agilidad y la rapidez logradas por la simplificación de los aparatos operativos y el juego arbitrario de partes o fragmentos sobre estructuras leves, inestables. Este texto señala aspectos del espacio arquitectónico y del espacio urbano.

Piñeiro, Claudia. Las grietas de Jara.

Stone, Irving. La agonía y el éxtasis: Vida de Miguel Angel. 1a ed. Buenos Aires: Booket, 2010.

Vázquez Rial, Horacio. Buenos Aires 1880-1930: La capital de un imperio imaginario. Madrid: Alianza, 1996. Presenta los momentos de esplendor o convulsión de la ciudad de Buenos Aires, relacionando el lugar preciso con el momento histórico y con la idea que los caracteriza. Aborda la vida política, los elementos de la vida cotidiana, la cultura, el imaginario urbano y el sueño de modernidad.

Anquetil, Jacques. El alquimista de la luz.

Buenos Aires: Alfaguara, 2009. "...Aunque Pablo Simó quiere construir la torre de sus sueños, se limita a dibujarla: hace veinte años que trabaja en un estudio de arquitectura que no puedo o no quiere dejar...". Mientras, nos lleva en un recorrido por Buenos Aires y sus edificios.

Sarlo, Beatriz. La ciudad vista: Mercancías y cultura urbana. 1a ed. -- Buenos Aires: Siglo Veintiuno, 2009. Vida urbana de la Ciudad de Buenos Aires y sus transformaciones.

Nuevo Título: Revista P L O T Arquitectura Recientemente incorporamos a la Colección permanente de la Biblioteca CPAU el título PLOT: Revista de arquitectura contemporánea, que plantea desde su primer número la necesidad de una "renovación teórico crítica" de la disciplina y propone enriquecer el debate a partir del aporte de "conversaciones, ensayos y dibujos". Sus artículos se encuentran divididos en tres secciones: Revista, Práctica y Teoría. Esta joven revista nacida en el año del Bicentenario, lleva 3 números publicados que encontrará a su disposición en la Biblioteca como destacada del mes. ¡Los invitamos a conocerla!!!

Para más información: [email protected] - 5239 9423 /21

44

NOTAS CPAU 14

Novela que narra, en la Italia del Renacimiento -época de turbulencia política y religiosa- la vida de un niño que entra como aprendiz en el taller de Ghirlandaio y va creando su obra monumental convirtiéndose en uno de los más destacados artistas de todos los tiempos: Miguel Angel Buonarroti.

BIBLIOGRAFÍAS TEMÁTICAS PARA PCP Para acompañar los contenidos de los cursos brindados por el Programa de Capacitación Profesional del CPAU, la Biblioteca elabora bibliografías para el préstamo de libros sobre: - Área Metropolitana - Arquitectura y Desarrollo Sustentable - Ergonomía - Finanzas para Arquitectos - Gerenciamiento de Proyectos y Obras - Hacer Arquitectura - Rentabilidad - Hormigón - Índices y Real State

- Medianería - Normativa - Patologías - Peritajes - Planes de Contingencia y Evacuación - Residuos Sólidos Urbanos - Responsabilidad - Suelos - Tasaciones

SERVICIOS EN LA SEDE

El ABC del ejercicio profesional

Desayunando con GT La Gerencia Técnica del CPAU brinda desayunos informativos, informales y gratuitos, con el objetivo de mantener actualizada a la matrícula en los temas técnicos de su interés.

En el mes de abril comenzó el ciclo de encuentros gratuitos e informales con matriculados del CPAU con el objetivo de aportar información simple y concisa sobre los distintos aspectos del ejercicio profesional, basándose en el MEPA y la doctrina del CPAU. El formato de un desayuno de trabajo con la Gerente Técnico, Arq. Irene Kalnins, y el hecho de ser grupos reducidos de no más de 20 arquitectos, permite mantener un fluido diálogo con los asistentes sobre los temas en análisis, más allá de la información doctrinaria aportada. Los temas tratados hasta la fecha fueron Honora ri os y El P royecto d e las Obras, y cada uno de ellos requirió de tres encuentros. En función de la excelente recepción del ciclo por parte de los matriculados, los encuentros continuarán a lo largo del año, tratándose diversos temas referentes todos al ejercicio profesional. Los desayunos son también una oportunidad de conocer en profundidad las herramientas disponibles elaboradas por el CPAU, tales como la Encomienda en Línea, el MEPA (Manual del Ejercicio Profesional del Arquitecto) y el GPI (Programa de Gestión Integrada de Proyectos), entre otros servicios del Consejo. Enric Miralles, Eva Prats. Imagen publicada por primera vez en Revista El Croquis 49/50, España, 1991

El ABC del ejercicio profesional - Desayunos informativos del CPAU Las charlas matutinas son gratuitas para todos los matricu-

Requiere inscripción previa, que puede realizarse desde la Web

lados activos y se realizan en la sede CPAU en 25 de Mayo

CPAU, en la sección noticias.

482, CABA.

www.cpau.org

46

NOTAS CPAU 14

J UN IO 2011

47

Cursos de Julio y Agosto 1. Seguridad e higiene en la construcción. 2. Mantenimiento de edificios. 3. Sustentabilidad 4. Habilitaciones comerciales 5. Experiencia asistida de práctica profesional

28 de julio a 18 de agosto 1 de agosto al 26 de septiembre 2 de agosto a 23 de agosto 3 de agosto a 21 de septiembre 3 de agosto al 21 de octubre

Para más información de éstos y otros cursos, visítenos en http://pcp.cpau.org o comuníquese al 5239-9413, de 10 a 17hs.

48

NOTAS CPAU 14