Analisis Literario de La Obra La Iliada

ANALISIS LITERARIO DE LA OBRA “LA ILIADA” I. CONTEXTO HISTORICO SOCIAL 1.1 PERIODO LITERARIO: El Período Literario de l

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ANALISIS LITERARIO DE LA OBRA “LA ILIADA”

I. CONTEXTO HISTORICO SOCIAL 1.1 PERIODO LITERARIO: El Período Literario de la obra es característico por la escritura de obras o cantos que relataban sucesos, ya sea de Guerras, de ritos funerarios o cosechas, donde La Ilíada, es una de las obras más conocidas para apoyar esta afirmación; también porque en esta época se destacaron las escrituras de este tipo, y sobre todo las escrituras griegas.

1.2 HECHOS POLÍTICOS, ECONÓMICOS, SOCIALES Y CULTURALES RESTANTES: Entre los hechos más destacados están: a) b) c) d)

Los griegos se inician como cultura denominada “Helénica” alrededor del 800 a.C. En el siglo VI a.C. el legislador Solón fijó las bases de la democracia. Grecia fue conquistada por Roma en el año 168 a.C. Destrucción de la ciudad de Troya aproximadamente en el año 1250 a.C.

1.3 DOCTRINAS O FILOSOFÍAS INFLUYENTES a) Los griegos resaltaron un profundo sentir antropocentrista, es decir fijó al ser humano como centro de todo, pero a su vez era un ser que se preocupaba por el destino que imponían las deidades o dioses que estaban más allá de su entendimiento y comprensión.

II. DATOS BIOGRÁFICOS, REFERENTES HISTÓRICOS DEL AUTOR. 2.1 BIOGRAFÍA Homero (Siglo VIII a.C.) Poeta griego al que se atribuye la autoría de la Ilíada y la Odisea, los dos grandes poemas épicos de la antigua Grecia. En palabras de Hegel, Homero es «el elemento en el que vive el mundo griego como el hombre vive en el aire». Admirado, imitado y citado por todos los poetas, filósofos y artistas griegos que le siguieron, es el poeta por antonomasia de la literatura clásica, a pesar de lo cual la biografía de Homero aparece rodeada del más profundo misterio, hasta el punto de que su propia existencia histórica ha sido puesta en tela de juicio.

Las más antiguas noticias sobre Homero sitúan su nacimiento en Quíos, aunque ya desde la Antigüedad fueron siete las ciudades que se disputaron ser su patria: Colofón, Cumas, Pilos, Ítaca, Argos, Atenas, Esmirna y la ya mencionada Quíos. Para Simónides de Amorgos y Píndaro, sólo las dos últimas podían reclamar el honor de ser su cuna. Aunque son varias las vidas de Homero que han llegado hasta nosotros, su contenido, incluida la famosa ceguera del poeta, es legendario y novelesco. La más antigua, atribuida sin fundamento a Herodoto, data del siglo V a.C. En ella, Homero es presentado como el hijo de una huérfana seducida, de nombre Creteidas, que le dio a luz en Esmirna. Conocido como Melesígenes, pronto destacó por sus cualidades artísticas, iniciando una vida bohemia. Una enfermedad lo dejó ciego, y desde entonces pasó a llamarse Homero. La muerte, siempre según el seudo Herodoto, sorprendió a Homero en Íos, en el curso de un viaje a Atenas. Los problemas que plantea Homero cristalizaron a partir del siglo XVII en la llamada «cuestión homérica», iniciada por François Hédelin, abate de Aubignac, quien sostenía que los dos grandes poemas a él atribuidos, la Ilíada y la Odisea, eran fruto del ensamblaje de obras de distinta procedencia, lo que explicaría las numerosas incongruencias que contienen. Sus tesis fueron seguidas por filólogos como Friedrich August Wolf. El debate entre los partidarios de la corriente analítica y los unitaristas, que defienden la paternidad homérica de los poemas, sigue en la actualidad abierto. 2.2 CONTROVERSIAS O HECHOS RELACIONADOS AL AUTOR Debate en la Antigüedad Este debate tuvo sus raíces en la antigüedad; se conservan siete vidas o biografías de Homero, todas posiblemente legendarias, diferentes y algunas bastante remotas, aunque tiene especial crédito una que le hace natural de Quíos y ciego; se le atribuyeron muchas obras, no sólo esas dos: Calino hizo suya La Tebaida, sobre el tema de Los siete contra Tebas, que posteriormente dramatizó Esquilo; Arquíloco y Aristóteles le asignaron la composición del Margites y Píndaro la Cipriada, un poema sobre los hechos anteriores a la Guerra de Troya; el historiador Tucídides, por su parte, le creía autor del Himno a Apolo Delio y también hay otros himnos que le han sido atribuidos. En el periodo helenístico, los filólogos alejandrinos Jenón y Helánico llegaron a la conclusión, a partir de las diferencias y contradicciones de todo tipo que hallaron entre la Ilíada y la Odisea, que sólo la primera de estas epopeyas fue compuesta por Homero, por lo que fueron llamados corizontes o "separadores". Su opinión fue rechazada por más afamados filólogos alejandrinos como Aristarco de Samotracia, Zenódoto de Éfeso y Aristófanes de Bizancio.

Debate en los siglos XVIII y XIX Precedidos por las especulaciones del abad François Hédelin d'Aubignac en su obra póstuma Conjeturas académicas (1715) así como de Giambattista Vico en ese mismo siglo, el debate volvió con fuerza a comienzos del siglo XIX, cuando el filólogo Friedrich August Wolf cuestionó la unidad de los poemas homéricos al entender, a partir del estudio de la forma y fondo de estas epopeyas y sus contradicciones internas en su obra Prolegomena ad Homerum, "Introducción a Homero", (1795), que ambos se habían formado a partir de poemas orales menores compuestos en épocas diferentes por distintos rapsodas y aedos y que fueron refundidos en un solo texto alrededor del siglo VI a. C., cuando el tirano Pisístrato designó una comisión de personas instruidas para reunir los poemas de Homero y fijar un texto único definido. Esta teoría se avenía bien con la creencia del Romanticismo en un volkgeist, "genio o espíritu del pueblo", autor colectivo y anónimo de una poesía nacional. Karl Lachmann acreditó la teoría de los cantos autónomos en sus Consideraciones sobre la Ilíada de Homero (1837), y la teoría siguió desarrollándose con las aportaciones fundamentales de Adolf Kirchhoff (Sobre la Odisea de Homero y su formación, 1859; 2. ª ed. 1879) y de Ulrich von WilamowitzMoellendorff en sus Investigaciones homéricas, 1884. Así pues, surgieron dos posturas enfrentadas respecto a la unidad en la autoría de los poemas homéricos que, con matices, sobreviven en la actualidad: Los analistas defienden la intervención de varias manos distintas en la elaboración de cada uno de los poemas homéricos, que además serían producto de la recopilación de pequeñas composiciones populares preexistentes. Frente a ellos se halla un punto de vista unitario que sostiene que cada uno de los poemas homéricos tiene una concepción global y una inspiración creativa que impide que puedan ser resultado de una compilación de poemas menores. Algunos de los defensores del punto de vista unitario, sin embargo, señalan que las diferencias existentes entre ambos poemas sugieren la presencia de un autor distinto para cada uno de los dos poemas. 2.3 ESTILO LITERARIO EL ESTILO HOMÉRICO La construcción de las epopeyas homéricas ofrece un notable carácter dramático. Cuando un personaje toma la palabra, su parlamento ocupa versos enteros siempre, sin incisos narrativos ni inserción de verba dicendi y su intervención es anunciada previamente con fórmulas fijas. Ello ha hecho suponer que previamente tanto la Ilíada

como la Odisea habían sido recitadas de forma parecida a la dramática, por medio de un lector para los pasajes objetivos y otros varios que representaran los diferentes papeles. Homero hace siempre descripciones minuciosas y detalladas, tanto de objetos menudos como de los diversos pueblos que componen un ejército. La claridad y la plasticidad de sus relatos es ejemplar, y las fórmulas fijas y los abundantes epítetos con que se califica a los personajes no tan sólo responden a un recurso necesario a los recitantes, sino que se convierten en elementos característicos, presentes en la epopeya de todos los tiempos. La humanidad y el refinamiento artístico de Homero aparecen en su más personal dimensión en las frecuentísimas comparaciones que se hallan en los dos poemas, a veces bastante extensas y no raramente encadenadas unas con otras. Hay otros pasajes de Homero que hemos de atribuir a su arte de escritor, porque no parece lógico que sean tomados de tradiciones. Conocidos son los emotivos versos en que Odiseo, tras veinte años de ausencia, llega a su patria disfrazado de mendigo y nadie lo que reconoce a excepción de su perro Argo. Y cuando el viejo perro ha vuelto a ver a su amo, muere. El hexámetro empleado en la poesía homérica es perfecto. Nada en él revela primitivismo ni balbuceos de un recurso literario que empieza a abrirse paso, lo que indica bien a las claras que en tiempos anteriores a la poesía homérica existió una epopeya similar, de la que no quedan rastros. Sus textos no se someten a ninguno de los dialectos griegos hablados de su tiempo, sino que se componen en una artificial mezcla de jonio y eolio, en la que entran evidentes arcaísmos y elementos léxicos micénicos. Se trata, pues, de una lengua esencialmente literaria y culta. Pero tal fusión de elementos procedentes de diferentes dialectos del griego se debe también a la necesidad de expresarse en una lengua que sea bien aceptada en todas las regiones lingüísticas de Grecia. EL CANTO ÉPICO La poesía homérica, como la lírica auténtica, se divulgaba mediante el recitado, canto de profesionales que, naturalmente, exponían la materia de memoria ante un auditorio; a veces el auditorio refinado de una corte y otras el popular de una plaza. La épica genuina no está concebida para ser leída en soledad. Esta característica es común a la épica de todos los tiempos y de todos los países, y se ha llegado a comprender mejor la epopeya homérica cuando los investigadores la han situado en el panorama general de la canción narrativa tradicional de los demás pueblos.

La misma Odisea, en el canto VIII, nos da una clara idea de lo que es el canto épico. Odiseo ha llegado al país de los feacios y el rey Alcínoo, que no sabe quién es su huésped, lo agasaja y hace que comparezca su aedo Demódoco. Demódoco era ciego, pues la musa "le privó de la vista, pero le concedió el dulce canto". El aedo, en honor de Odiseo, canta un poema de tema mitológico, los amores entre Ares y Afrodita, y otro de tema muy reciente y que afecta al huésped que lo está escuchando: una disputa entre Odiseo y Aquiles ante Agamenón. Más tarde Odiseo pide a Demódoco que cante cómo Troya fue destruida gracias al ardid del caballo de madera. El aedo lo hace con unos versos que se pondera al propio Odiseo como astuto guerrero, y éste lo escucha con lágrimas en los ojos. Este pasaje es muy ilustrador. Nos revela, en primer lugar, que acontecimientos muy próximos en el tiempo eran susceptibles de ser narrados en verso, como la destrucción de Troya pocos años después de haber tenido lugar. Y esto es fundamental, pues deja entrever que, al lado de temas mitológicos, en el repertorio de los aedos figuraba la narración de hechos contemporáneos y de gran interés y transcendencia. Que la realidad actual se puede convertir en canto informativo, tanto en tono de alabanza como de vituperio, se advierte en el canto VI de la Ilíada, cuando Helena se lamenta de su muerte y teme que sus amores con Paris servirán a las generaciones venideras de "asunto para sus cantos". No hay de ello prueba alguna, pero nada puede negar la posibilidad de que, en su origen, la Ilíada fuera una especie de crónica contemporánea de los últimos meses de la guerra de Troya, y la Odisea un reportaje sobre las navegaciones de Odiseo. 2.4 OBRAS: Se destacan las siguientes: a. La Ilíada Poema y épica b. La Odisea Poema épico c. La Batracomiomaquia Épica cómica

III. OBRA DE ANÁLISIS 3.1 ORIGEN DEL TITULO Y AÑO DE PUBLICACIÓN

La palabra Ilíada proviene del termino Ilión, que en griego significa “Los domadores de caballo” su fecha de publicación escrita se data en el S. VII a.C. Está basada en los mitos griegos más tradicionales como: 

Mito de Tetis y Peleo Tetis era una de las cincuenta ninfas del mar llamadas Nereidas por ser hijas del antiguo señor de los mares, Nereo. Tetis es la que consiguió que dos dioses del Olimpo (Zeus y Júpiter) disputaran por su amor. Ésta terminó celebrando su boda al lado de Peleo, un mortal discípulo de Quirón el centauro.



El mito de Paris y Afrodita Es una historia de la mitología griega en la cual se encuentra el origen mítico de la guerra de Troya. Paris es el príncipe troyano que raptó a Helena.



El mito del caballo de Troya El caballo de Troya es un artilugio con forma de enorme caballo de madera que se menciona en la historia de la Guerra de Troya y es usado por los griegos como una estrategia para introducirse en la ciudad fortificada de Troya.



El mito Eneas Eneas era hijo de Afrodita (Venus) y el mortal Anquises. Después de la destrucción de su ciudad, Troya, a manos de los griegos, Eneas viajó a Italia, donde fundó el reino a partir del cual emergería Roma. Fue precisamente a Eneas al que el gran poeta romano, Virgilio, le dedicó su famoso poema épico, la Eneida, inspirada en la obra de Homero. 3.2 GÉNERO Y SUB ESPECIE LITERARIA Poema épico Está escrito en versos hexasílabos. Está considerado dentro del género Épico (narrativo) y clasificado como Epopeya; ya que destacan acciones heroicas y bélicas de dos ciudades: griegos y troyanos. 3.3 ESTRUCTURA a) División interna: capítulos, cantos, rapsodias, escenas, actos, composiciones poéticas, etc. La obra presenta 24 cantos o rapsodias  Canto I: La peste y la cólera

                      

Canto II: El sueño de Agamenón y la Beocia Canto III: Los juramentos y Helena en la muralla Canto IV: Violación de los juramentos y revista de las tropas Canto V: Principalia de Diomedes Canto VI: Coloquio de Héctor y Andrómaca Canto VII: Combate singular de Héctor y Áyax Canto VIII: Batalla interrumpida Canto IX: Embajada a Aquiles Canto X: Gesta de Dolón Canto XI: Gesta de Agamenón Canto XII: Combate en la muralla Canto XIII: Batalla junto a las naves Canto XIV: Engaño de Zeus Canto XV: Nueva ofensiva desde las naves Canto XVI: Gesta de Patroclo Canto XVII: Gesta de Menelao Canto XVIII: Fabricación de armas Canto XIX: Aquiles depone la ira Canto XX: Combate de los dioses Canto XXI: Batalla junto al río Canto XXII: Muerte de Héctor Canto XXIII: Juegos en honor de Patroclo Canto XXIV: Rescate de Héctor

b) División externa: volumen, libro, etc No presenta continuaciones. La obra es única. 3.4 TEMA Manifiesta la cólera del pélida y joven mirmidón Aquiles. El tema central es la cólera de Aquiles producida por Agamenón cuando este le roba su botín de guerra (Briseida). La guerra de Troya solo es el telón de fondo y únicamente se narra el último año de los más de 10 que duro la guerra. 3.5 DESCRIPCIÓN DE PERSONAJES a) Principales/protagonistas – antagonistas Aquiles Aquiles fue el más importante de los héroes griegos de la guerra de Troya un joven ardoroso fuerte, Aquiles personifica el ímpetu y la audacia espontánea, hijo de Peleo

y de la ninfa Tetis. Para hacerlo invulnerable, su madre decidió ungirlo de ambrosía y sumergirlo en la Laguna Estigia agarrándolo por el talón derecho, su única parte vulnerable. Como caudillo de los mirmidones participó en la guerra, enfrentándose en numerosas ocasiones a su jefe Agamenón y dando muerte a Héctor y a Mennón. Tras rechazar a los troyanos ante las murallas de la ciudad, Paris le disparó una flecha que acertó en su punto vulnerable gracias a la ayuda de Apolo. Héctor Héctor era el hijo mayor del rey Príamo y la reina Hécuba de Troya, y esposo de Andrómaca. En la Ilíada Héctor es el mejor guerrero troyano. Como comandante de las fuerzas de la ciudad, su contribución a la resistencia frente al ejército griego durante nueve años es decisiva, y casi al final obliga a los griegos a huir en sus barcos. Sin embargo, durante la batalla mata a Patroclo, el amigo amado de Aquiles, el héroe de los griegos. Aquiles, que se había retirado de la lucha por una disputa con el rey Agamenón, líder de las fuerzas griegas, vuelve al campo de batalla para vengar la muerte de su amigo. Desconsolado y frenético, persigue a Héctor tres veces alrededor de las murallas de Troya, lo mata y después ata el cadáver a su carro y lo arrastra por el exterior de las murallas de la ciudad. Héctor era el baluarte y la defensa de Troya; alma grande, valerosa, y esforzada; de cuerpo bien formado y arrogante, alto y de gran apostura, el propio Aquiles tembló al acercarse a él. A pesar de tener Héctor el presentimiento de la ruina de su patria, perseveró en su heroica actitud, prefiriendo la muerte a la esclavitud y a la vergüenza. 3.6 ARGUMENTO IV. APRECIACIONES Y CONCLUSIONES 4.1 CRÍTICA Y APRECIACIONES NACIONALES E INTERNACIONALES DE OTROS ESCRITORES 4.2. CONCLUSIONES V. ANEXOS BIBLIOGRAFIA