TERCERA-ENTREGA-METODOS-CUALITATIVOS-docx.docx

1 INVESTIGACIÓN CUALITATIVA SOBRE SALUD MENTAL Mónica Patricia Salas Higuera Lizeth Carolina Hortúa Moreno Juan Carlos

Views 315 Downloads 8 File size 1MB

Report DMCA / Copyright

DOWNLOAD FILE

Citation preview

1

INVESTIGACIÓN CUALITATIVA SOBRE SALUD MENTAL

Mónica Patricia Salas Higuera Lizeth Carolina Hortúa Moreno Juan Carlos Martínez Gutiérrez

Tutor: HÉCTOR RAMÍREZ

Grupo: 5A

Quinto Semestre de Psicología Politécnico Grancolombiano Métodos Cuantitativos en Ciencias Sociales Bogotá D.C 2018

2

CONTENIDO

1. INTRODUCCION………………………………………………………………………..3 2. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA………………………………………………..5 3. OBJETIVOS………………………………………………………………………………5 4. MARCO TEORICO……………………………………………………………………...7 5. METODO………………………………………………………………………………...18 6. RESULTADOS…………………………………………………………………………..19 7. DISCUSIONES Y CONCLUSIONES………………………………………………….21 8. ANEXOS…………………………………………………………………………………23 9. REFERENCIAS…………………………………………………………………………39

3

1. INTRODUCCIÓN

Los humanos somos seres sociales por naturaleza que necesitamos estar rodeados de otros humanos para el correcto desarrollo de nuestras capacidades mismas, así mismo como necesitamos de esa sociabilidad igualmente requerimos nuestro espacio personal, donde hablamos con nosotros mismos y hacemos catarsis de todo aquello que no impide sacar lo mejor de nosotros y poder convertirnos en instrumentos y vehículos prósperos y útiles, para ello debemos cuidar de nuestra salud, no solo física sino mental, pues si existe un correcto equilibrio entre las mismas, podemos ser personas objetivas en la toma de nuestras propias decisiones y en aquellas que afectan a la colectividad. La salud mental en Colombia cada vez se ve más afectada en la población en general, pero sobretodo en la población infantil dependiendo de los determinantes socioeconómicos y el entorno en el cual se encuentran.

¿Porque existen tendencias suicidas entre los adolescentes? ¿Se está convirtiendo esto en un problema de índole social y mundial? Por tales interrogantes decidimos abordar el tema de salud mental desde la perfectiva de la finalidad de la vida del sur humano del “Buen Vivir” , como lo denominaba Aristóteles, por este motivo y teniendo la posibilidad de acceder a la Fundación Santiago Apóstol de la Diócesis de Fontibón, ya que una de nuestras compañeras trabaja allí, decidimos abordar el tema presentándoles el planteamiento del problema donde ampliaremos un poco más la situación general de la Fundación, pasando luego por nuestra pregunta de investigación y los objetivos de desea alcanzar a través de esta investigación formativa. Según la OMS, “la depresión es un trastorno mental frecuente que se caracteriza por la presencia de tristeza, pérdida de interés o placer, sentimientos de culpa o falta de autoestima, trastornos del sueño o del apetito, sensación de cansancio y falta de concentración”. Cuando una persona está triste, no necesariamente se encuentra deprimida; “la depresión es distinta de las variaciones habituales del estado de ánimo y de las respuestas emocionales breves a los problemas de la vida cotidiana” Es muy difícil saber cuándo se está ante esta enfermedad, su manifestación es muy diversa, cada persona puede padecerla de una forma diferente, la depresión puede ser una respuesta normal

4

a distintos tipo de situaciones: desarraigo, enfermedad limitante, tensión o estrés prolongado. Estalovski, B. G. (2004)

Es una enfermedad que puede volverse crónica y disminuir la capacidad de las personas de trabajar, estudiar, socializar o ejecutar algunas de sus actividades cotidianas; dependiendo del número y de la intensidad de los síntomas, los episodios depresivos pueden clasificarse como leves, moderados o graves. Las personas que sufren de depresión grave necesitan tratamiento; ellas pueden pensar, intentar o lograr suicidarse. Si la depresión es leve, se puede tratar sin necesidad de medicamentos.

La depresión se ha convertido en un problema de salud pública por la carga de enfermedad que genera (la mayor carga es por la discapacidad que produce). Se calcula que en el mundo hay 350 millones de personas que se encuentran afectadas por la depresión; el peor desenlace de la enfermedad es el suicidio. Se estima que cada año se suicidan 800.000 personas en todo el mundo y el grupo de edad más afectado es el de las personas entre 15 y 29 años.

La guía de práctica clínica de depresión emplea el término depresión para referirse al episodio depresivo o trastorno depresivo recurrente (CIE-10) o a sus equivalentes: episodio depresivo mayor y trastorno depresivo mayor (DSM-IV).

En este contexto, los expertos han definido que en personas de 18 años y más, quienes tienen mayor riesgo de sufrir depresión son: personas con historia previa de episodio depresivo; personas con historia familiar de depresión; personas con problemas psicosociales (pérdida del empleo, separación conyugal, privación de la libertad, ser habitante de calle); eventos vitales estresantes; abuso y dependencia de sustancias incluidos alcohol y cigarrillo; personas que consultan a menudo al sistema de salud; quienes tengan enfermedades médicas crónicas, especialmente, cuando hay compromiso de la funcionalidad (enfermedad cardiovascular, diabetes, las que involucran dolor crónico y trastornos neurológicos); personas con otros trastornos psiquiátricos (trastornos de ansiedad, trastornos de personalidad); quienes pasan por cambios hormonales (embarazo, postparto y menopausia); personas con historia de intentos de suicidio y quienes son sedentarias.

5

2. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA 2.1 Pregunta Problema

¿Cuáles son las principales causas de depresión en los estudiantes del Colegio Parroquial San Pedro Claver?

3. OBJETIVOS 3.1 Objetivo General

Diseñar una herramienta que permita a los estudiantes de 10 y 11, del Colegio Parroquial San Pedro Claver, definir cuál será su proyecto de vida para los próximos cinco años y cómo llevarlo a cabo. 3.3 Objetivos específicos

-

Realizar 15 entrevistas a estudiantes del grado décimo y 11 del Colegio Parroquial San Pedro Claver.

-

Identificar los principales determinantes socioeconómicos y culturales dentro del cual están los estudiantes del grado 10 y 11 del Colegio Parroquial San Pedro Claver.

3.3 Justificación

El presente trabajo de investigación se enfocará en la profundización de las causas de la depresión en los estudiantes de los grados 10 y 11 del colegio parroquial San Pedro Claver, teniendo como base que la población más afectada en salud mental en Colombia y en el mundo, es la infancia y la adolescencia, una población vulnerable y expuesta a bajos rendimientos y en casos más graves, al suicidio.

6

Se pretende a partir de encuestas identificar los principales determinantes socioeconómicos y culturales que afectan esta población, y se busca diseñar un modelo en el cual se le permita a los estudiantes definir un proyecto de vida a corto plazo y como llevarlo a cabo.

7

4. MARCO TEÓRICO

“Dos de los principales supuestos de la ética Aristotélica que nos permita superar la disyunción entre un fin exclusivo y un fin inclusivo: (1) El supuesto Teológico Genérico, según el cual todas nuestras actividades son realizadas con una finalidad; (2) El supuesto Teleólogico específico, según el cual la Felicidad es, a su vez, una actividad, pero que no se persigue con una finalidad distinta de sí misma. Ambos supuestos han sido interpretados de manera distinta, tanto por inclusivistas como por exclusivistas, así, la aclaración de la relación entre aclaración y fines permitirá comprender mejor como Aristóteles propone la consecución de la Felicidad, en la medida en que la actividad de la felicidad es la única, a la que tienden todas las demás actividades humanas. Guariglia, O. (1997).

Lo que intentaremos mostrar es que ninguna de las dos propuestas interpretativas, ni la inclusivista, ni la exclusivista- hace justicia al propósito que Aristóteles traza en el libro 1 de la Ética Nicomaquea, en el cual, por su carácter programático, no se quiere exponer de manera acabada y en detalle en que consiste el `bien buscado´ . El propósito de este capítulo es dejar clara la existencia del sujeto de investigación-i.e., “el bien buscado por el hombre”- y dar algunas pistas y lineamientos importantes acerca de cómo establecerlo y como alcanzarlo, pero, sin la discusión posterior, es imposible tener clara cuál es la posición clara de Aristóteles al respecto, de esta manera, aun cuando sea posible hacer lecturas tanto inclusivistas como exclusivistas de este primer libro, por el carácter pragmático que tiene, se torna imposible determinar cuál de las dos lecturas es la correcta, pues Aristóteles posiblemente está contemplando y examinando ambas posibilidades. Lo que intentaremos mostrar que no comprometerse o no interpretar este libro introductorio según alguna de las dos posiciones en disputa da una perspectiva mucho más amplia del proyecto investigativo que Aristóteles pretende llevar a cabo en toda la ética Nicomaquea: Buscar cual es el “Bien Humano”, realizable mediante la acción.

También nos ocuparemos en tres momentos distintos de la argumentación Aristotélica, a cada uno de los cuales se dedicará una sección. La primera. (2,1) estará dedicada a analizar el problema que plantea Aristóteles con respecto al fin último o, como él lo llamara, el “Bien

8

Buscado”. Allí aclararemos los primeros supuestos del protecto Aristotélico, y estableceremos en más detalle uno de los principales problemas que requieren solución para una interpretación consistente de la ética Aristotélica. Pasar de “todo tiende a lago bueno” a “todo tiende a lo bueno”.

Posteriormente, reconstruiremos uno de los argumentos iniciales y más discutidos de la ética Nicomaquea, argumento con el cual se ha considerado comúnmente que Aristóteles quiere pasar de “todo tiende a lago bueno” “todo tiende a lo bueno”. Aristóteles, X. (2013). Ética nicomaquea; Política. Editorial Porrúa. Según algunas posturas, en este texto Aristóteles está cometiendo alguna falacia, al pasar sin más de una expresión a la otra, pero, según otras, se ha afirmado que el argumento es solamente hipotético, pero de facto no está aprobando nada. Como intentaremos mostrar en más detalle, en dicho argumento lo único que se está probando es la existencia del objeto de investigación en toda la ética Nicomaquea, i.e. La existencia de lo bueno. Así, aunque haya un argumento completo en este pasaje, el argumento es meramente programático y no prueba nada con respecto a las características de lo bueno.

En la última sección analizaremos el argumento de la sección, en el que Aristóteles analiza las características esenciales de lo bueno- como el fin buscado-, con la definición de Felicidad, se establece, por tanto, la unidad del objeto de investigación; mostraremos que solamente en la medida que haya tal unidad, es posible salvar a Aristóteles de pasar falsamente de la afirmación “todo tiende a lago bueno” a “todo tiende a lo bueno”. Sin embargo, como veremos, aun cuando se de este salto, en el libro 1 de la ética Nicomaquea, no da un veredicto definitivo con respecto a si el tipo de unidad es inclusivo o exclusivo, por dos razones: La primera, por el carácter puramente programático de este libro y la segunda, por el carácter esquemático y poco preciso de la ética Aristotélica. Páginas 83 y 84

No es fácil tratar de reconstruir como Aristóteles se enfrenta y le da tratamiento al problema de cómo se ha de vivir, tal como es enunciado por Williams ((1997 (1985) 18)). Y no es fácil por una larga serie de razones, una de las más acuciantes es la dificultad que en general, suele llevar la reconstrucción histórica de las ideas, sobre todo de las ideas morales, tal como lo ha señalado

9

ya Maclntyre, la reconstrucción literal o siquiera cercana es imposible, y no sólo por el tiempo trascurrido entre los tiempos de Aristóteles y los nuestros, sino porque ni siquiera sabemos exactamente qué es lo que se ha perdido por el camino ( 1984)(1987, 13-18). A esto hay que sumarle lo poco que sabemos de la vida misma de Aristóteles, pues un ejercicio detallado de la Filosofía como forma de vida, en Aristóteles habría pasado también por la vida misma del ESTAGIRITA. Sin embargo, tal como lo muestra Barnes, podemos concluir que también para Aristóteles, la escena pública y la amistad ligada al que hacer filosófico resultaron sumamente importantes en su propia vida. Tal como hemos querido mostrar a lo largo de este libro, está vida pública, no riñe con la vida filosófica, sino que, al contrario, es un aspecto necesario de esta. Es clara la influencia que tuvo en la filosofía Aristotélica, la posición de sus antecesores, en particular la de Platón, como la de los Sofistas. Y como señalamos desde el comienzo, Aristóteles parece sentar su posición en medio del debate entre estos, pero al mismo tiempo tratando de superarlo. De aquí que el ESTAGIRITA, inicie sus reflexiones sobre el modo de vida partiendo de la discusión, sobre los tres modos de vida más particulares en su época. El modo de vida placentero, el político y el filosófico. Sin embargo, como que hemos querido mostrar a lo largo de todo el libro, Aristóteles intenta hacer una síntesis de los tres; síntesis que se presenta difícil, porque, como mostramos al final del último capítulo, parece haber una preferencia por la contemplación y la sabiduría. Pero esta preferencia por la sabiduría no excluye la posibilidad de la actividad propia de la vida política, y menos aún de la placentera. Más bien, al contrario, alcanzar una vida Filosófica presupone, a su vez, que de lleve también una vida política y placentera. Este quizás ha sido uno de los puntos pasados por alto en la discusión sobre “la vida buena” en algunos de los intérpretes contemporáneos más influyentes, tal como hemos expuesto en el capítulo 1. Cómo hemos mostrado allí, poner la discusión entre un bien inclusivo” – que sea la conjunción de todos los bienes que se quieren por si mismos- y un “bien exclusivo” – que sea superior a todos los demás – es simplificar en exceso las posibilidades de interpretación de la ética Aristotélica. No podemos menospreciar el papel que le da Aristóteles al Intelecto, y lo llamativa de la posición exclusivista, para dar cuenta de la superioridad de la Sabiduría y de la vida filosófica con respecto a los demás modos de vida. Pero como hemos mostrado posteriormente, la sabiduría es solo una de las virtudes intelectuales y por sí misma no puede determinar un modo de vida. Por

10

esto, desde el primer capítulo, hemos defendido la idea de que la ética Aristotélica es sin duda, intelectualista, pero su intelectualismo no es tal que excluya al mismo tiempo, la posibilidad de otro tipo de actividades, pues hay también otras virtudes que son requeridas para llevar una “ vida buena”.” Página 281-282 “Así Aristóteles rompe con la idea de que el sabio y el prudente son, en sí mismos, modos de vida que se deben seguir; son solamente representaciones conceptuales que en la vida misma no se pueden diferenciar de manera tajante. La distinción conceptual le permite comprender cual es el aporte de ambas virtudes, intelectuales- sabiduría y prudencia, pero no se trata de dos modos de vida en competencia, aquí es donde el Intelecto mismo, adquiere un papel preponderante para la vida, pues no solamente tiene un doble aspecto, uno teórico y uno práctico, sino que además, es el intelecto mismo el que permite guiar en la vida misma que tanta actividad contemplativa o que tanta actividad práctica hay que llevar a cabo. Pues el intelecto no solamente aporta los principios del conocimiento científico, sino que también aporta los principios de la acción. En este sentido, el modo de vida filosófico consiste en vivir, bajo el intelecto como un principio vital. Pero este sentido vital tiene un doble aspecto que solamente el intelecto mismo puede autorregular a llevar a cabo su propia actividad. Así, el intelecto se activa en modo teórico en ciertas circunstancias o se activa en modo práctico en otras. Pero es el mismo intelecto el que decide si en ciertas circunstancias es preciso activarse en un modo o en otro. Sea cual sea la manera en la que se “active el intelecto”, está ejerciendo su actividad propia con respecto a la vida misma: Está interfiriendo sobre la vida misma y la manera de alcanzar su propio “bien”, y alcanzar la “vida buena” “ “De aquí que la figura del prudente emerge cómo quien es capaz de alcanzar “la vida buena”, pero no sólo para sí, sino para todos los demás seres Humanos que lo rodean. Así, al responder Aristóteles a la pregunta con respecto de ¿cómo hay que vivir?, su respuesta es una sola: Hay que vivir de acuerdo con el intelecto. Pero esta vida de acuerdo con el Intelecto es mucho más compleja que la mera vida teórico-contemplativa, porque es una vida realizable, es decir, una vida alcanzable mediante la acción. Y aunque haya una cantidad indeterminada de maneras de alcanzar esta vida buena, para cualquiera de ellas se requiere que actúe el intelecto. Así, si bien el intelecto es

11

presentado por Aristóteles en conexión con los primeros principios del conocimiento científico, y este conocimiento tiene un valor en sí mismo, también tiene un valor para la vida misma del ser humano. En ese sentido, la filosofía teórica, que es considerada generalmente por Aristóteles como la cúspide del Intelecto Humano y que tiene un valor en sí misma por ser autosuficiente, también adquiere un valor importante en función de la vida de los seres humanos. Y en este mismo sentido, el conocimiento científico, cuyos principios son determinados por el Intelecto, adquiere también su valor por la vida del ser humano, y no solamente por el conocimiento científico, pues le brinda herramientas al ser humano para alcanzar su felicidad. Si bien no determina como alcanzar la felicidad, pues esta es tarea del intelecto- y de este en concordancia también con el deseo, dado que se trata del intelecto práctico, que mueve a la acción en búsqueda del bien, hace valioso el conocimiento científico también para la vida misma. Y es en esta función de articulación y armonización del intelecto tanto con los deseos como del conocimiento científico que se puede alcanzar la vida filosófica como una unidad, pero no una unidad del individuo, sino como una unidad que también requiere de una comunidad para ser alcanzada. Sin ese entorno comunitario en el que se da la felicidad, también el conocimiento científico y el intelecto puramente teórico pierde su propio sentido, como “el principio gobernante” de la buena vida, de la vida filosófica.” Alejandro

Fadieta

Barrera,

Colección

Humanidades

y

Ciencias

Sociales,

UNIAGUSTINIANA, (2018). Es muy interesante como el autor hace un análisis sobre la investigación Aristotélica sobre la “buena vida”, y es que en mi concepto todos los seres humanos buscamos la Felicidad, pero estamos de acuerdo con mis compañeros que la buena vida, solamente es posible conseguirla dejando huella en cada paso que damos, en el compartir, en el instruir, en el aportar y poder contribuir a la comunidad, en el luchar por nuestra infancia, que finalmente son el futuro del mundo entero. Ayer precisamente les comparto, mi hijo me llamó muy preocupado y me mencionó lo siguiente “Mami hoy fue un día muy confuso, porque hoy nos tomaron la foto para el grado, pero una compañera se intentó cortar las venas luego de un episodio de Bullyng por parte de otra compañera, se encerró en el baño del Colegio, rompió un vidrio y luego tomó una de estas piezas y se cortó, nosotros supimos porque quinto A, gritaban mientras ella estaba encerrada en el baño”. JF. Mónica Salas.

12

Mi hijo es un niño, sano, atento, noble y eso le genero un shock nervioso ayer, su entorno Psicosocial a pesar de estudiar en el mismo colegio donde yo estudié, Católico de Monjas, es una realidad nefasta que me hace pensar en el cómo promover un sentido de vida a los niños; en el cual mostrarles que la vida no es Hollywood, ni los Súper Héroes de la Televisión, sino que los súper héroes son ellos mismos, de su propia vida, que hay que amarse primero a sí mismo para poder amar a los demás, evitar herirlos, dañarles lo más valioso que tiene un Ser Humano, su corazón, su espíritu y su alma.

Por esto a continuación en este Marco Teórico, encontrarán un artículo de investigación de una Psicóloga con una amplia trayectoria Científica.

“El mes pasado recibí la llamada de una profesora. No sabía cómo actuar. Una de sus alumnas se autolesionaba desde hacía más de año y medio: mediante una cuchilla de afeitar se producía cortes en el antebrazo con regularidad. Durante mucho tiempo, Pía*, de 15 años, había logrado ocultar sus heridas bajo la manga larga de sus jerséis o camisetas. Pero una compañera de clase descubrió las marcas en el vestuario, después de la clase gimnasia. Preocupada por su amiga, se lo explicó a la tutora. La profesora buscó de inmediato a la alumna para hablar con ella. Le pidió que le mostrara las heridas y le preguntó el motivo de las lesiones. Pía explicó que cuando se hacía daño conseguía manejar sus sentimientos negativos y tensiones internas. No quiso explicar nada más. La tutora temió por la vida de la adolescente. En muchos aspectos, esta situación no resulta infrecuente. Según estudios efectuados a escala internacional, gran parte de los educadores y trabajadores sociales en el ámbito educativo se sienten inseguros cuando deben tratar con adolescentes que se autolesionan. Por lo general, reaccionan con espanto, a menudo con compasión y, en parte, con rechazo, repugnancia e incomprensión. Muchos se preguntan si las autolesiones pueden indicar un riesgo de suicidio. Según afirman, habitualmente no saben cómo afrontar la conversación con esos adolescentes y ofrecerles apoyo. Rara vez, los profesionales del mundo de la enseñanza han recibido formación específica

13

para el manejo de estos casos. Sin embargo, casi todos deben enfrentarse a estas situaciones en algún momento. Las conductas auto-lesivas durante la adolescencia constituyen un fenómeno común. Un 18 por ciento de los menores de 19 años de todo el mundo, es decir, casi uno de cada cinco, afirma haberse producido conscientemente lesiones físicas durante el último año. Con todo, el porcentaje de los jóvenes que acostumbran a hacerlo con regularidad es mucho menor. Para lastimarse suelen emplear cuchillas de afeitar o cigarrillos, o se aplican desodorante en espray a una distancia mínima de la piel, de modo que se producen quemaduras por el frío. Algunos chicos explican que golpean la pared con la mano hasta que les sangra y sienten alivio. Por lo general, tras estas conductas no subyace la intención de quitarse la vida. Este trastorno se conoce como conducta auto-lesiva no suicida. La conducta auto-lesiva y la ideación suicida constituyen síntomas de riesgo de suicidio en la adolescencia. Conocer su prevalencia y características asociadas es fundamental para prevenir y tratar estas conductas adecuadamente. Participan, M. (2011). Actas Esp Psiquiatr, 39(4), 226-35.

Pensamientos recurrentes durante la adolescencia La posibilidad de que Pía pueda suicidarse, como teme la profesora, tampoco resulta tan remota. El peligro es real: los adolescentes piensan en el suicidio con mayor frecuencia de lo que, en principio, parece. De hecho, el suicidio representa la segunda causa de muerte entre los adolescentes, con una incidencia unas cuatro veces superior en el sexo masculino respecto al femenino. Pero ¿qué relación existe entre la conducta de autolesión y el suicidio? Según los estudios, la mayoría de los jóvenes que se autolesionan no son suicidas. Sin embargo, cuando la conducta auto-lesiva se manifiesta de forma repetida se convierte en un factor de riesgo para el intento de suicidio. Los expertos consideran que se trata de una estrategia de afrontamiento que les facilita el manejo de las emociones negativas, entre ellas el estrés y las tensiones internas. Solo una parte de estos jóvenes afirma que autolesionarse le ayuda a apartar las ideaciones suicidas de su mente. En el caso de los adolescentes que se producen lesiones profundas con frecuencia y en partes del cuerpo poco habituales, el riesgo de suicidio aumenta. Las lesiones frecuentes incrementan el umbral del dolor de forma paulatina y, con ello, el peligro de producirse un daño que pueda suponer la muerte.

14

Estos jóvenes necesitan ayuda psicológica. ¿Cómo pueden los docentes reconocerlos? Por lo general, la conducta auto-lesiva se inicia entre los 13 o 14 años. Aproximadamente a los 17 años, la tendencia a autolesionarse disminuye, hallaron en 2015 investigadores dirigidos por Paul Plener, de la Clínica Universitaria de Ulm. Los arañazos y las heridas inexplicables o una vestimenta inapropiada para la época del año (manga larga en pleno verano) pueden revelar la situación. En ocasiones, los profesores descubren, por casualidad, la posesión de objetos cortantes (hojas de afeitar o navajas), o se dan cuenta de que el estudiante desaparece a menudo de las clases para ir al servicio. Algunos adolescentes dibujan motivos o escriben redacciones reveladoras. Tampoco resulta extraño que la conducta auto-lesiva no suicida se propague como una epidemia en el círculo de amistades. En 2016, un equipo dirigido por Plener, observó que estos jóvenes obtienen muchos «me gusta» en su sitio de Internet y despiertan gran interés por las imágenes de cortes que cuelgan en las redes sociales, lo cual puede agravar aún más su comportamiento. La mayoría de los docentes se escandalizan y se sienten impotentes cuando ven las heridas de las autolesiones por primera vez. Algunos piensan que los cortes se deben a un intento de suicidio. Por el contrario, la conducta auto-lesiva no suicida constituye para los adolescentes una manera de aliviar sus tensiones internas. Ante estas situaciones, es importante no mostrar asombro o pánico, sino atender al adolescente con calma y empatía; con una especie de «curiosidad respetuosa» El alumno debe sentirse valorado como persona, a pesar de que no se apruebe su conducta. Durante la conversación, el docente puede adoptar la manera de expresarse y el registro léxico de los adolescentes. « ¿Cómo te ayuda hacerte daño?», podría preguntar la profesora a Pía.

Motivar sin presionar Es importante hacer ver al alumno que otras personas se preocupan por él. Como la compañera de clase de Pía, por ejemplo. Sin ponerla bajo presión, la profesora debe hacer hincapié en que puede obtener apoyo de otras personas: «Quizá no soy con quien más te apetezca hablar, pero puedo ayudarte a encontrar a alguien para ello». En el caso de que la alumna rechace conversar con un psicoterapeuta, la tutora puede consultar la situación con un psicólogo escolar o un trabajador social con formación en asesoramiento terapéutico. Se trata de técnicas de

15

conversación especializadas, por un lado, para conocer si existe la necesidad de intervenir y, por otro, ayudar a que los afectados accedan a participar en una terapia. Además, se aconseja no dar mucha importancia a las heridas, ya que ello podría reforzar la conducta de autolesión. La profesora también debe pedir a Pía que mantenga sus heridas tapadas y que no hable al respecto con otros compañeros de la escuela. No resulta sencillo valorar el peligro real de suicidio. Numerosos adolescentes que se autolesionan informan sobre dificultades familiares (la separación de los padres), riñas en el círculo de amistades, acoso escolar, desengaños amorosos o problemas escolares. El malestar psicológico desencadena emociones intensas (tristeza, ira y agitación). La conducta auto-lesiva les ayuda a neutralizar estos sentimientos negativos. Algunos tratan de imponerse un castigo o desean que otros vean su situación de necesidad y les apoyen. Unos más explican que el dolor les permite sentirse a sí mismos o conocer sus límites. Menos usual es que busquen un «subidón» de adrenalina, motivación que suele reflejar un intento de escapar de un sentimiento de vacío interno o entumecimiento. Al comparar los estudios llevados a cabo en torno a la conducta auto-lesiva no suicida con los datos sobre el riesgo de suicidio en adolescentes, se constatan ciertos paralelismos. Los alumnos «cansados de vivir» se sienten confrontados con mayor frecuencia e intensidad con numerosas sobrecargas que no pueden superar por sí mismos.

La mayoría de los adolescentes que se autolesionan no piensan en suicidarse, según los estudios, alrededor del 90 por ciento de los jóvenes que acaban suicidándose habían recibido un diagnóstico de trastorno psiquiátrico con anterioridad. El riesgo de suicidio aumenta cuando el adolescente, además, se siente socialmente aislado porque no tiene amigos u otras personas de confianza o cuando padece un acontecimiento vital estresante (la muerte de un ser querido). Del mismo modo, parece que los antecedentes familiares de suicidio o enfermedades mentales representan factores de riesgo. La tutora escolar de Pía podría preguntarle en la próxima conversación: «Me contaste que arañarte te ayuda a manejar los sentimientos negativos. ¿Sabes qué puede estar causándolos?». Descubrió que Pía discutía más con su madre desde que el padre se había mudado hacía más de dos años. Además, pensaba que no tenía ninguna amiga «de verdad»; por esa razón, a menudo se sentía muy sola. La profesora le aconsejó que confiara en una psicoterapeuta, ya que podría

16

proporcionarle mejores consejos para afrontar las relaciones con los compañeros de clase, los profesores y sus padres. Los adolescentes que, según explican, apenas pueden controlar los pensamientos de producirse daños y manifiestan un deseo intenso de morir son los que presentan un mayor riesgo de suicidio, indican los estudios. También si ya lo han intentado antes o han forjado esa idea con anterioridad y todavía persiste. En ese caso, el terapeuta debe preguntar sin rodeos si aún piensa en suicidarse. Madelyn Gould y sus colaboradores de la Universidad Columbia comprobaron en un estudio con más de 2300 estudiantes que los jóvenes a los que habían preguntado sobre si habían tenido pensamientos suicidas no se mostraban más preocupados sobre el tema dos días después. Por el contrario, los adolescentes con sín- tomas depresivas o ideaciones suicidas, considerados sujetos de alto riesgo, se sentían psicológicamente más aliviados tras esa charla.

¿Cuán grande es el riesgo? « ¿Te sientes en ocasiones tan abrumada que has pensado que sería mejor no continuar viviendo?» En caso de que la respuesta de la alumna sea afirmativa, la terapeuta debe insistir: « ¿En algún momento has pensado cómo lo harías?» o « ¿Has intentado quitarte la vida alguna vez?». Al preguntar abiertamente, con calma y de manera clara por esos aspectos, se favorece que la persona responda con sinceridad y se abra. Muchos adolescentes explican que después de esas preguntas se han sentido más aliviados. Vázquez, C., Hernangómez, L., Hervás, G., & Nieto, M. (2005).

Estos factores ayudan a determinar si el riesgo de suicidio es bajo, moderado o elevado. Con todo, la valoración debe realizarla un experto, por ejemplo, un psicólogo. Si el riesgo de suicidio es elevado, suelen concurrir factores de estrés grave, así como un trastorno psicológico que requiere tratamiento. En ese supuesto, la terapia debe llevarse a cabo con el ingreso en una clínica de salud mental infantil y juvenil. Si, por el contrario, el adolescente asegura que no tiene intención de suicidarse, puede optarse por un tratamiento en un centro de psicoterapia o de salud mental de atención ambulatoria. La tutora consiguió convencer a Pía de que necesitaba el apoyo de los demás, en particular, de sus padres.

17

Con el consentimiento de la alumna, la profesora conversó con ellos. Les expuso que la hija todavía se sentía muy afectada por su separación y que, sobre todo, le dolía verles discutir por ella. Pía acordó con su madre que asistiría a una sesión con una psicoterapeuta para probar si le gustaba. La primera visita resultó exitosa. Desde hace unos meses acude a la consulta una vez a la semana. La disposición de Pía para participar en la terapia no es un caso extraordinario. Según las encuestas, alrededor de la mitad de los adolescentes que se autolesionan desean abandonar esa conducta. Ofrecerles ayuda resulta beneficioso. En la terapia se indagan y valoran los desencadenantes de ese comportamiento de manera individual. Si un escolar explica que padece acoso escolar, se afronta el problema junto con los profesores. Pero debe evitarse tratar el tema de la conducta autolesiva no suicida ante toda la clase, puesto que eso podría desencadenar el efecto «peligro de contagio». En el aula es preferible explicar aspectos más generales, por ejemplo, cómo deben manejarse los problemas y el estrés. El siguiente paso consiste en reflexionar junto con el adolescente sobre qué habilidades puede emplear para sustituir la conducta de autolesión. Se buscan actividades con efectos a corto plazo. Entre ellas se encuentran los ejercicios de meditación, las técnicas de relajación (el entrenamiento autógeno), la capacidad de desconectar (con música, ejercicio físico o videojuegos) o, incluso, morder una guindilla si se siente la necesidad de un estímulo intenso. Puesto que cada persona responde de manera diferente a las diversas habilidades, es usual tener que probar algunas alternativas hasta lograr encontrar la óptima. Sobre todo cuando se atraviesan etapas conflictivas aparecen recaídas; pero ello no debe desmotivar ni al terapeuta o co-terapeuta ni al afectado. Es más, se recomienda analizar conjuntamente y de manera detallada los desencadenantes, reflexionar sobre una manera alternativa de reaccionar y las estrategias de afrontamiento que podría poner en práctica el adolescente la próxima vez. A Pía no se le dan bien los ejercicios de relajación, pero no por ello debe rendirse a sus pensamientos negativos. Como le gusta practicar deporte, la terapeuta le aconseja que si ha habido una discusión fuerte en casa, se calce las zapatillas deportivas y saque la rabia de su mente mientras corre. El ejercicio no solo beneficia la salud física, también mejora el estado de ánimo”.

18

5. METODO El método usado en la investigación realizada es la observación no participativa, la cual se define como “Un método de estudio que tiene diversas aplicaciones en diferentes ciencias, aunque, históricamente, ha destacado en las ciencias sociales y, especialmente, en sociología y antropología. La observación no participante se caracteriza por llevar a cabo el estudio de la materia u objeto estudiado sin participar con él. De este modo, se busca conseguir la mayor objetividad posible, ya que al no participar de forma activa con lo que se estudia, se puede observar en su estado natural sin que el investigador pueda alterar su naturaleza mediante el simple hecho de estudiarlo”. (UNIVERSIDAD INTERNACIONAL DE VALENCIA, s.f) Una encuesta es una técnica cuantitativa y cualitativa que consiste en una investigación realizada sobre una muestra de sujetos, representativa de un colectivo más amplio, que se lleva a cabo en el contexto de la vida cotidiana, utilizando procedimientos estandarizados de interrogación con el fin de conseguir mediciones cuantitativas y cualitativa sobre una gran cantidad de características objetivas y subjetivas de la población. (GESTIOPOLIS, 2002) A partir de la observación no participativa se escogieron 8 estudiantes de undécimo grado y 7 estudiantes del grado decimo, con la intención de reconocer a los alumnos más influyentes, más estudiosos y los más silenciosos dentro del aula de clase, para después, con los estudiantes seleccionados, realizar una serie de preguntas para determinar las posibles causas de depresión que puedan llevar al suicidio. MUESTRA: 15 estudiantes de décimo y undécimo grado del Colegio Parroquial San Pedro Claver. CONSTRUCCIÓN DEL CUESTIONARIO 1. ¿Te has sentido deprimido? 2. ¿Has pensado en el suicidio alguna vez? 3. ¿Crees que el suicidio se da por sentirse solo? 4. ¿Crees que la familia y la escuela influyen en la decisión de suicidarse? 5. ¿Piensas que es posible prevenir el suicidio?

19

6. RESULTADOS En los 15 estudiantes pudimos detectar que presentan grandes falencias emocionales que pueden ser surgidas por falta de interés de los padres en lo que sienten y piensan, y esto puede conllevar a que centren sus emociones a sus relaciones interpersonales: amigos, vecinos, novios y hasta desconocidos en redes sociales. Cabe mencionar que las calificaciones son uno de los factores más estresantes en los estudiantes, ya que afecta en gran parte la estabilidad emocional. A través de la encuesta pudimos denotar posibles respuestas que podrían solucionar sus conflictos emocionales propios y en el entorno en el que se desenvuelven.

TABLA DE FRECUENTA ENCUESTA PREGUNTA #1 ¿Te has sentido deprimido? FRECUENCIA ABSOLUTA VARIABLES SI

FRECUENCIA

FRECUENCIA RELATIVA

F ACUMULADA

FRACCION

DECIMAL

%

14

14

14/15

0,93333333

93,3333333

NO

1

15

1/15

0,06666667

6,66666667

NO RESPONDE

0

15

0/15

0

0

15/15

1

100

TOTAL

15

TABLA DE FRECUENTA ENCUESTA PREGUNTA #2 ¿Has pensado en el suicidio alguna vez? FRECUENCIA ABSOLUTA VARIABLES SI NO NO RESPONDE TOTAL

FRECUENCIA

FRECUENCIA RELATIVA

F ACUMULADA

FRACCION

DECIMAL

%

3

3

1/5

0,2

20

10

13

2/3

0,66666667

66,6666667

2

15

2/15

0,13333333

13,3333333

1

100

15

20

TABLA DE FRECUENTA ENCUESTA PREGUNTA #3 ¿Crees que el suicidio se da por sentirse solo? FRECUENCIA ABSOLUTA VARIABLES

FRECUENCIA

FRECUENCIA RELATIVA

F ACUMULADA

FRACCION

DECIMAL

%

SI

8

8

8/15

0,53333333

53,3333333

NO

7

15

7/15

0,46666667

46,6666667

NO RESPONDE

0

15

0

0

1

100

TOTAL

0/15

15

TABLA DE FRECUENTA ENCUESTA PREGUNTA #4 1. ¿Crees que la familia y la escuela influyen en la decisión de suicidarse? FRECUENCIA ABSOLUTA VARIABLES SI

FRECUENCIA

FRECUENCIA RELATIVA

F ACUMULADA

FRACCION

DECIMAL

%

10

10

2/3

0,66666667

66,6666667

NO

5

15

1/3

0,33333333

33,3333333

NO RESPONDE

0

15

0/15

0

0

1

100

TOTAL

15

TABLA DE FRECUENTA ENCUESTA PREGUNTA #5 ¿Piensas que es posible prevenir el suicidio? FRECUENCIA ABSOLUTA VARIABLES SI

FRECUENCIA

FRECUENCIA RELATIVA

F ACUMULADA

FRACCION

DECIMAL

%

13

13

13/15

0,86666667

86,6666667

NO

2

15

2/15

0,13333333

13,3333333

NO RESPONDE

0

15

0/15

0

0

1

100

TOTAL

15

21

7. DISCUSIONES Y CONCLUSIONES

Discusión

La depresión es un problema que día a día se hace más común en nuestra población y hace necesario investigarla. Durante la recolección de datos usados en el presente trabajo encontramos que: El 66% de la población evaluada afirma que la familia y la escolaridad influye mucho en la salud mental de los estudiantes, esto podría argumentarse de acuerdo con las investigaciones de (Monica Alvarez, 2009) la cual afirma: “Con respecto a la relación entre depresión y conflictos familiares en la población evaluada, es posible señalar que existe una relación inversamente proporcional entre la puntuación obtenida por los adolescentes en la Escala de Depresión de Beck y la Escala de Cohesión Familiar de Moos. Estos resultados coinciden con los obtenidos por Rice, Harold, Shelton y Thapar (2006), quienes encontraron una relación estadísticamente significativa entre los síntomas depresivos y los conflictos familiares, por lo cual podemos comprobar nuestra segunda hipótesis pues los adolescentes que presentan mayores puntuaciones en la BDI, perciben mayores conflictos familiares, lo cual representa menor cohesión familiar. Asimismo, apoyan lo hallado por Aydin y Öztücüncü (2004),autores que emplearon los mismos instrumentos utilizados en el presente estudio, y demostraron la existencia de una relación inversa entre el humor depresivo y la cohesión familiar en un grupo de adolescentes, resultados ya informados por González Forteza y Andrade (1995)” Y la investigación de (EL PAIS, s.f) la cual afirma: “Las tentativas de suicidio por motivos escolares no son muy frecuentes, pero tampoco son extrañas. No hace mucho se divulgó la noticia de que en la República Federal de Alemania el suicidio en edad escolar alcanzaba cifras de significación preocupante. Sólo en el estado de Baviera, a finales del curso 1975, doce escolares acabaron con su vida”

22

Además a partir de los resultados el 53% de los estudiantes afirma que la soledad es un factor influyente en la salud mental, lo cual podría re-afirmarse a través Andrés Losada Baltar, profesor titular del Área de Psicología Clínica de la Universidad Rey Juan Carlos y coordinador del grupo de investigación Cuid-Emos, “la soledad puede verse incrementada a lo largo del ciclo vital por factores asociados a los estilos cognitivos o a la personalidad de las personas o a la ocurrencia de sucesos vitales significativos como, por ejemplo, la jubilación, enfermedades o asumir la tarea de cuidar de un familiar dependiente. Estas circunstancias pueden favorecer la ocurrencia de cambios significativos en las vidas de las personas que, finalmente, pueden provocar la emergencia de sentimientos de soledad”. (GERIATRICAREA, 2015) Los resultados nos permiten entender la importancia de los factores familiares y escolares en los estudiantes, que son claves para afrontar o evitar problemas de salud mental a esa cierta edad.

Conclusiones Considerando los resultados obtenidos, podemos establecer los siguientes puntos: 

Los adolescentes están en el día a día sometidos a factores que pueden afectar su salud mental, tales como el ambiente familiar, el cual puede de cierta manera afectar el rendimiento de los estudiantes en el colegio.



Otro factor importante en la salud mental de los estudiantes de grado décimo y undécimo, son las calificaciones, ya que pueden originarse perdida de años, lo cual implica que sus amistades y compañeros no estén presentes con él el próximo año. Puede ser un factor secundario como consecuencia de conflictos familiares o externos o puede ser un factor principal que afecte su ambiente familiar.



Un porcentaje de estudiantes ha llegado a sentirse deprimido o en suicidarse, lo cual es un dato muy crítico, ya que ningún estudiante o persona está preparado para afrontar la depresión. Necesita acompañamiento o tratamiento psicológico lo cual enfrente y mejore la salud mental.



Aunque muchas veces la depresión o el suicidio se vean como problemas silenciosos, existe la posibilidad de prevenirlos, datos afirmados en mayor proporción por estudiantes que se han sentido deprimidos en su etapa de adolescencia.

23

8. ANEXOS Por normas de la institución por problemas en la privacidad de estudiantes anteriormente, se PROHIBIERON la posibilidad de fotografías a estudiantes y la toma de datos. De igual manera se le agradece al Colegio Parroquial San Pedro Claver el proceso de investigación en su institución de manera prudente y se realizará el anexo de las encuestas sin violar las normas de la institución.

CUADROS DE RESULTADOS

¿Has pensado en el suicidio alguna vez?

¿Alguna vez te has sentido deprimido?

SI

NO

¿Crees que el suicidio se da por sentirse solo?

SI

NO

NO RESPONDE

NO RESPONDE

SI

¿Crees que la familia y la escuela influyen en la decisión de suicidarse?

SI

NO

NO RESPONDE

NO

NO RESPONDE

¿Piensas que es posible prevenir el suicidio?

SI

NO

NO RESPONDE

24

25

26

27

28

29

30

31

32

33

34

35

36

37

38

39

9. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

APIR (2016). Manual APIR Psicopatología 2.ª edición - Mayo 2016 ISBN Depósito Legal M (p.11). Recuperado de: https://docplayer.es/42382660-Manual-apir-psicopatologia-2-aedicion-mayo-2016-isbn-deposito-legal-m.html Arrillaga Arizagaa M. , Sarasqueta Eizaguirreb C., Ruiz Feliuc M. y Sánchez Etxeberriad A. (2004). Artículo “Actitudes del personal sanitario de atención primaria hacia el enfermo mental, la psiquiatría y el equipo de salud mental”. Recuperada de: https://ac.elscdn.com/S0212656704708203/1-s2.0-S0212656704708203-main.pdf?_tid=67545448de0b-473a-8135b65740704855&acdnat=1540771616_36c935dfa7aa756b08521dbaf97681ed Marcelino López, Margarita Laviana, Luis Fernández, Andrés López, Ana María Rodríguez y Almudena Aparicio (2008). La lucha contra el estigma y la discriminación en salud mental. Una estrategia compleja basada en la información disponible Revista de la Asociación Española de Neuropsiquiatría versión On-line ISSN 2340-2733versión impresa ISSN 0211-5735. Recuperado de: http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0211-57352008000100004 Ministerio de Salud y Protección Social, Colciencias, Pontificia Universidad Javeriana, Datos, Procesos y Tecnología SAS, Bogotá, septiembre de (2015). Estudio observacional descriptivo de corte transversal a nivel Nacional. Representatividad nacional y regional.(Regiones: Central, Oriental, Atlántica, Pacífica y Bogotá). Recuperado de: https://www.minsalud.gov.co/sites/rid/Lists/BibliotecaDigital/RIDE/DE/presentacionencuesta-nacional-salud-mental-2015.pdf Posada-Villa, José A. Aguilar-Gaxiola, Sergio A. Magaña, Cristina G. Gómez, Luis Carlos (2007). Artículo “Prevalencia de trastornos mentales y uso de servicios: resultados

40

preliminares del Estudio nacional de salud mental”. Colombia. Recuperado de: http://bdigital.ces.edu.co:8080/repositorio/handle/10946/3886 Robert KohnI, *; Itzhak LevavII; José Miguel Caldas de AlmeidaIII; Benjamín VicenteIV; Laura AndradeV; Jorge J. Caraveo-AnduagaVI; Shekhar SaxenaVII; Benedetto SaracenoVII. (s.f.). Los trastornos mentales en América Latina y el Caribe: asunto prioritario para la salud pública. Mental disorders in Latin America and the Caribbean: a public health priority. Recuperado de: https://www.scielosp.org/scielo.php?pid=S102049892005000900002&script=sci_arttext&tlng=es Romero Mendoza Martha P. & Galván Reyes Jorge (2008). “La metodología cualitativa en el área de la salud mental pública: programa, temas y retos”. Volumen 9, No. 1, Art. 39 – Enero. FQS. Recuperado de: http://www.qualitativeresearch.net/index.php/fqs/article/view/343/747 Spadini Luciene Simões, Conceição Maria & de Mello e Souza Bernardo (2011). SMAD, Rev. Eletrônica Saúde Mental Álcool Drog. (Ed. port.) Original Article 7(3):[06 screens] Sept.-Dec. Recuperado de: http://citeseerx.ist.psu.edu/viewdoc/download?doi=10.1.1.459.8452&rep=rep1&type=pdf https://www.minsalud.gov.co/sites/rid/Lists/BibliotecaDigital/RIDE/VS/PP/ENT/boletindepresion-marzo-2017.pdf Alejandro Fadieta Barrera, Colección Humanidades y Ciencias Sociales, UNIAGUSTINIANA, (2018). Evaluating iatrogenic risk of youth suicide screening programs: A randomized controlle d trial. M. S. Gould et al. en JAMA, vol. 293, págs. 1635-1643, 2005. Ratgeber: Selbstverletzendes Verhalten: Informationen für Betroffene, Eltern, Lehrer und Erz ieher. T. In-Albon et al. Hogrefe, Gotinga, 2015. Suizidales Verhalten und Nichtsuizidale Selbstverletzungen. P. L. Plener. Springer, Heidelberg 2015.

41

Leitfaden Kinder und Jugendpsychotherapie. Selbstverletzendes Verhalten. T. InAlbon et al. Hogrefe, Gotinga, 2015. #cutting: Non-suicidal selfinjury (NSSI) on Instagram. R. C. Brown et al. en Psychological Medicine 10.1017/S0033291717 001751, 2017. Strong schools against suicidality and selfinjury: Evaluation of a workshop for school staff. R. Groschwitz et al. en School Psychology Quarterly, vol. 32, págs. 188-198, 2017.

EL PAIS. (s.f). Obtenido de https://elpais.com/diario/1977/07/06/ultima/236988001_850215.html GERIATRICAREA. (2015). Obtenido de http://geriatricarea.com/la-soledad-es-un-factor-deriesgo-para-la-depresion-y-el-deterioro-cognitivo/ GESTIOPOLIS. (2002). GESTIOPOLIS. Obtenido de https://www.gestiopolis.com/encuestacuestionario-y-tipos-de-preguntas/ Monica Alvarez, B. R. (2009). Red de Revistas Científicas de América Latina y el Caribe, España y Portugal. Obtenido de https://www.redalyc.org/html/560/56012878005/ UNIVERSIDAD INTERNACIONAL DE VALENCIA. (s.f). VIU. Obtenido de https://www.universidadviu.com/la-observacion-no-participante-usos/