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LA RADIOTERAPIA 1. OBJETIVOS: Objetivo general Analizar a la radioterapia y su tratamiento para las patologías del cuerp

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LA RADIOTERAPIA 1. OBJETIVOS: Objetivo general Analizar a la radioterapia y su tratamiento para las patologías del cuerpo humano mediante el conocimiento de las diferentes tipos de radioterapia existentes, tanto como el avance que ha tenido la radioterapia y los mejores tratamientos hoy en día sirviendo de base como una terapia utilizada mucho hoy en día, compartiendo una estrecha realción con la imagenología, facilitando el diagnóstico adecuado y tratamiento acertado de ciertas patologías. Objetivos específicos -Explicar en qué ramas principales se divide la radioterapia, señalando las características principales de cada rama. -Identificar los requerimientos que se deben tomar en cuenta para que se realice una radioterapia efectiva, con pocos efectos secundarios adversos. 2. INTRODUCCIÓN ¿Qué es la radioterapia? La radioterapia es uno de los principales y más efectivos tratamientos contra el cáncer. Se estima que más de 50% de los pacientes recibirán radioterapia en algún momento de su evolución. Se divide en la radioterapia externa (teleterapia) y la braquiterapia; en la radioterapia externa, la radiación se administra desde equipos alejados del organismo mediante haces dirigidos a volúmenes definidos en el paciente, en contraste, la braquiterapia es una variante en la que las fuentes de radiación están en contacto con el tejido a irradiar o dentro de una cavidad o lumen de un órgano del cuerpo. La radioterapia con intensidad modulada (IMRT) es la forma más sofisticada actualmente disponible para realizar tratamientos radioterápicos con técnicas de planificación conformada en 3 dimensiones (3D-CRT), mediante la utilización de incidencias de campos con intensidad de dosis no uniformes en el volumen blanco. Su utilidad se justifica partiendo de las tres premisas clásicas en radioterapia que nos indican que las dosis más altas de irradiación se traducen en mejor control locorregional de la enfermedad, que el mayor control local se correlaciona con

ganancias en supervivencia y que la 3D-CRT nos permitiría aumentar la dosis de irradiación sobre el volumen tumoral con menores efectos secundarios. 3. DESARROLLO Tipos de radioterapia externa La radioterapia conformada en 3D (3D-CRT) suministra haces de radiación desde diferentes direcciones que han sido diseñados para igualar la forma del tumor. Esto ayuda a limitar el daño ocasionado por la radiación en los tejidos sanos y eliminar mejor el cáncer al enfocar la dosis de radiación en el tumor. La radioterapia guiada por imagen es una forma de 3D-CRT, en la que se realizan estudios por imágenes (como una CT) antes de cada tratamiento. Esto permite al oncólogo especialista en radiación ajustar la posición del paciente o reenfocar la radiación tanto como sea necesario para atacar el tumor y limitar otros daños. La radioterapia de intensidad modulada (IMRT) es similar a la 3D-CRT, pero también cambia la potencia de algunos de los haces en ciertas áreas. Esto hace que se administren potentes dosis a ciertas partes del tumor y ayuda a reducir el daño a los tejidos corporales normales adyacentes. Una forma de IMRT, conocida como tomoterapia helicoidal,suministra radiación dentro de una gran “rosca”. Para este tratamiento, usted se acuesta en una camilla que se desliza por la rosca a medida que el equipo gira en forma de espiral alrededor de usted. Este equipo emite muchos rayos pequeños de radiación hacia el tumor desde diferentes ángulos alrededor del cuerpo, lo que permite dirigir la radiación con una precisión aún mayor. La radioterapia con haz de protones utiliza haces de protones en lugar de electrones o rayos x. Los protones son partes de los átomos que causan poco daño a los tejidos que atraviesan, pero que son muy efectivos en eliminar a las células que se encuentran al final de su trayectoria. Esto significa que la radiación con rayos de protones es capaz de suministrar más radiación al tumor, a la vez que reduce los efectos secundarios en el tejido normal. Los protones sólo se pueden poner en una máquina especial llamada ciclotrón o sincrotrón.

La radiocirugía estereotáctica no es realmente cirugía sino un tipo de tratamiento con radiación que suministra una gran dosis de radiación a un área pequeña de tumor generalmente en una sola sesión. Se emplea para los tumores encefálicos y otros tumores dentro de la cabeza. En algunos casos, puede que se utilice una cubierta o caparazón para la cabeza para ayudar al paciente a que no mueva su cabeza. Una vez determinada la región exacta del tumor mediante gammagrafía cerebral, la radiación se aplica desde muchos ángulos diferentes hacia dicha región. La radiación se dirige de forma muy precisa para afectar a los tejidos adyacentes lo menos posible. Radioterapia de intensidad modulada (IMRT) Desde los inicios de la radioterapia hasta hoy en día los mayores avances en los tratamientos se han vinculado a una mejor definición del área de irradiación tumoral con lo que se consigue una reducción de la dosis en los tejidos sanos. Además en las dos últimas décadas se han introducido dos nuevos grupos de avances que nos han permitido dar un paso más en la sofisticación de los tratamientos radioterápicos. En primer lugar la aparición de nuevas técnicas de imagen, que nos permiten delimitar con mayor precisión la localización del tumor, sus áreas potenciales de expansión de enfermedad subclínica y los órganos a riesgo dentro los campos de tratamiento radioterápico, y en segundo lugar el desarrollo de mejores sistemas de planificación de tratamiento en las tres dimensiones del espacio (3D) basados en complejos sistemas informáticos de cálculo, todo ello unido a la disponibilidad de nuevas tecnologías más precisas en la administración de los haces de irradiación. Este conjunto de nuevas aportaciones nos permite, en definitiva, administrar una mayor dosis total de irradiación con una distribución espacial ajustada (conformada) de forma muy precisa al volumen tumoral, respetando los órganos sanos en la vecindad. Con los tratamientos 3D-CRT en muchas ocasiones se aprecia que el grado de conformación de la dosis al volumen diana tumoral y la capacidad de excluir los órganos de riesgo no es la óptima, salvo en casos de tumores pequeños y con formas relativamente sencillas, pero que además requieren ser tratados con múltiples campos17. Por ello, e incluso antes de que esta forma de tratamiento con radioterapia conformada en 3D (que denominaremos 3D-CRT clásica) haya sido completamente introducida de forma generalizada en los servicios de Oncología Radioterápica, empieza a surgir un nuevo tipo de planificación y administración de tratamiento con radioterapia conformada, la denominada radioterapia de intensidad modulada (IMRT).

Radioterapia interna (braquiterapia) La radioterapia interna (braquiterapia) permite una mayor dosis de radiación en un área más pequeña que lo que pudiera ser posible con el tratamiento de radiación externa. Esta utiliza una fuente de radiación que usualmente está sellada en un pequeño contenedor llamado implante. Los diferentes tipos de implantes pueden llamarse píldoras, semillas, cintas, alambres, agujas, cápsulas, globos o tubos con radiación. Independientemente del tipo de implante que se utilice, este se coloca en su cuerpo, muy cerca o dentro del tumor. De esta manera, la radiación afecta al menor número de células normales que sea posible. 

Durante la radiación intracavitaria, se coloca la fuente de radiación en una cavidad (espacio) en el cuerpo, como el recto o el útero.



Con la radiación intersticial, los implantes son colocados dentro o cerca del tumor, pero no en una cavidad del cuerpo.

Efectos biológicos de la radioterapia Los efectos de la radioterapia se observan tanto en el tumor como en los tejidos sanos dentro o cerca del volumen de tratamiento. Ocurren varios procesos en diferentes momentos, por último la energía incidente de la radiación se transforma en daño térmico y químico que desencadenan eventos que producen un daño biológico. La radiación causa dos tipos de daño celular, directo o indirecto, el primero se caracteriza por varios tipos de lesiones al DNA. a) Fase física. Durante esta fase el electrón desencadena ionización y excitación; si cuenta con suficiente energía se produce una cascada de ionizaciones. b) Fase química. La ionización-excitación de la fase anterior lleva al rompimiento de enlaces químicos y formación de radicales libres, que son muy reactivos y se enlazan en una sucesión de eventos que llevan a la restauración del equilibrio de la carga eléctrica. Durante esta fase tienen lugar reacciones de inactivación de los radicales libres y de fijación para estabilizar la molécula. c) Fase biológica. Después de la fase química las reacciones enzimáticas intentan reparar el daño al DNA, cuando esto no ocurre se produce la muerte celular, pero antes pueden ocurrir algunas mitosis (división), si este daño ocurre en células tallo ocurre pérdida celular, que es

la manifestación inicial de la radiación en mucosas, piel, intestino y células hematopoyéticas, entre otras. Puede ocurrir un mecanismo compensatorio de proliferación en tejido sano o tumoral. Tiempo después se presentan los efectos tardíos, manifestados según los tejidos con fibrosis, telangiectasias e incluso segundos primarios. Respuesta tisular a la radiación Incluye la respuesta celular del estroma y del tumor. Dentro del tumor, la respuesta produce retraso en el crecimiento. Estos parámetros se pueden graficar y cuantificar en una curva de dosis-respuesta, reflejando el retardo en crecimiento. Para obtener el control local, todas las células con capacidad proliferativa (células tumorales tallo) deben destruirse. Por lo general son llamados radiorresistentes o radiosensibles aquellos tumores que responden lento o rápido a la radioterapia, pero no de forma necesaria esto se relaciona con la posibilidad de cura. Efectos secundarios Cáncer radioinducido Es uno de los efectos a largo plazo después de radiación terapéutica; sin embargo, su frecuencia puede estar sobreestimada. En estudios comparativos se ha encontrado un riesgo de 0.3% y puede ser de dos tipos: en tejidos sensibles que reciben dosis bajas, como el caso del pulmón y cuyo riesgo resulta semejante al observado entre los sobrevivientes de un accidente nuclear; el otro tipo es en zonas de alta exposición, considerando que se deben cumplir los siguientes criterios: 1. Haber recibido radioterapia. 2. Estar dentro de la zona tratada. 3. Dentro de un tiempo compatible. 4. Ser de tipo histológico diferente al observado en el tumor inicial. Este proceso de carcinogénesis se divide en iniciación, promoción y progresión, y puede ocurrir después de mucho tiempo, a veces hasta 40 años, cada paso se puede asociar con mutaciones específicas, en particular la inactivación de genes supresores tumorales y la activación de oncogenes.

DISCUSIÓN Tanto los sistemas de planificación como la forma de administración de los tratamientos radioterápicos han cambiado radicalmente a través del tiempo por el desarrollo de la tecnología en imágenes además de la identificación de nuevas clases de tumores y sus características, sin embargo la radioterapia sigue siendo una ciencia en rápido desarrollo donde se debe enfatizar, por la demanda que tiene hoy en día. Se debe intentar controlar los efectos secundarios mediante la elección de técnicas radiológicas que no produzcan tanto daño a los tejidos adyacentes, además de prestar atención a la dosis y su fraccionamiento, como también el tamaño del tumor y su extensión, el volumen de tejido normal irradiado, y tratamientos concomitantes y variables individuales del paciente. Mientras sigue avanzando esta forma de terapia se observa que los efectos secundarios disminuyen y se espera llegar a una técnica donde que no hagamos daño a los tejidos adyacentes. CONCLUSIONES 

Podemos concluir que la radioterapia se divide en dos ramas principales, la cual son la radioterapia externa o teleterapia, donde se administra la radiación desde equipos alejados del organismo y la radioterapia interna o braquiterapia, donde que las fuentes de radiación entran en contacto con el tejido o cavidad de un órgano del cuerpo a irradiar.



Para concluir, la realización de una radioterapia efectiva tiene que ver con: La disponibilidad de una mayor precisión en la delimitación de los volúmenes diana, para lo cual se debe conocer y tener en cuenta las características clínicas y biológicas específicas de cada tumor, sus vías de diseminación y las áreas ganglionares de riesgo. Los avances en sistemas de inmovilización y sistemas de adquisición de imágenes de simulación en los que se tengan en cuenta los movimientos de órganos en la planificación del tratamiento. La disponibilidad de nuevas técnicas de imagen para verificación y control de calidad durante los tratamientos, etc.

Por lo tanto, debemos mantenernos actualizados sobre nuestros conocimientos médicos, además de los equipos tecnológicos que puedan ayudarnos a mejorar el tratamiento con radioterapia. BIBLIOGRAFÍA 1. Granados García M, Martín AR, Hinojosa Gómez J. Tratamiento del cáncer: oncología médica, quirúrgica y radioterapia. Ciudad de México: Editorial El Manual Moderno; 2016. 2. American Cancer Society. Radioterapia con rayo externo [Internet]. 2019. Disponible en: https://www.cancer.org/es/tratamiento/tratamientos-y-efectos-secundarios/tipos-detratamiento/radioterapia/radioterapia-externa.html 3. American Cancer Society. Radioterapia Interna (Braquiterapia) [Internet]. 2019. Disponible desde el sitio web: https://www.cancer.org/es/tratamiento/tratamientos-yefectos-secundarios/tipos-de-tratamiento/radioterapia/radioterapia-interna.html 4. Domínguez MA, Rico M, Vila MT. Papel de la radioterapia en el siglo XXI. Anales del Sistema Sanitario de Navarra. 2009;32:5–12. 5. Contreras Martínez J, Herruzo Cabrera I. Radioterapia conformada en tres dimensiones

con intensidad modulada (IMRT): Nuevas estrategias en tumores de cabeza y cuello. Oncología (Barcelona). 2004 Jan;27(1):16–24.