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NUESTRO GOBIERNO MUNDIAL ENTRANTE... EL REINO DE DIOS

Una mirada al futuro cercano bajo la luz cada vez más clara de profecías bíblicas que están a punto de cumplirse en la única forma de gobernación que satisfará todas nuestras necesidades y deseos “Dios es Rey de toda la tierra; produzcan melodía, obrando con discreción. Dios ha llegado a ser rey sobre las naciones. Dios mismo ha tomado su asiento sobre su santo trono.”—Salmo 47:7, 8. DEDICADO al Dios cuyo feliz tiempo ha venido para reemplazar la desastrosa gobernación que el hombre ha ejercido sobre sí mismo con el justo gobierno que han anhelado las personas desconsoladas de todas las razas.

ÍNDICE CAPÍTULO

PÁGINA

1 La próxima gobernación para toda la Tierra

5

2 El Gobernador que conoce el fin desde el principio

17

3 Cambios mundiales predichos hasta la llegada del reino de Dios

37

4 Cómo se convierte en gobierno mundial el reino de Dios

64

5 Prediciendo el tiempo para la gobernación mundial

71

6 El Agente Principal de Dios en el gobierno mundial

90

7 Se entresaca a los que participarán en el regir mundial

108

8 Días marcados durante el “tiempo del fin”

121

9 La “señal” de la inminencia del gobierno mundial

148

10 Una “grande muchedumbre” aclama al gobierno mundial entrante 11 Pasa un mundo dividido

160 175

12 Cómo podemos disfrutar para siempre del gobierno mundial

183

A menos que se indique lo contrario, todas las citas de la Biblia y referencias a ella en este libro siguen la Traducción del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras (NM), edición de 1974. Con relación a las fechas, la abreviatura a. de la E.C. significa “antes de la era común,” y E.C. significa “de la era común.”

Capítulo 1 La próxima gobernación para toda la Tierra LOS que aman la gobernación justa se estremecen de emoción al solo pensarlo. El día del gobierno mundial que desde hace tanto tiempo se prometió va amaneciendo. Dentro de nuestra generación favorecida ese gobierno ascenderá como el Sol en un cielo despejado e inundará la Tierra con su agradable y bien acogida luz, introduciendo un tiempo en que todo el género humano disfrutará de una vida esplendorosa. Lo que sale a la luz debe deleitar nuestros ojos. Ante nuestros ojos se va aclarando una escena transformada. Hubo el tiempo en que las relaciones humanas eran sumamente difíciles. ¡Pero mire! ¿Qué sucede bajo el muy necesitado gobierno mundial cuando éste dirige las cosas? Por todas partes se reconoce y sostiene con toda honradez y dicha la unidad de la familia humana. Cada individuo es amigo de todos los demás. Los lazos de la relación familiar se sienten hasta lo más profundo del alma de cada uno. Junto con este agradable compañerismo, hay un excelente espíritu de prestar ayuda con sincero interés en el bienestar de los demás. Ya no cunde el divisivo racismo. Todas las personas componen una sola raza humana, con los enlaces del parentesco común, pues todas tienen el mismo origen. 2

¡Escuche! Todos los súbditos del gobierno mundial se entienden unos a otros. ¡Hablan un idioma mundial común! ¡Si es como volver al patrón o arreglo original de habla de la familia humana! Si nos remontáramos unos cuarenta y un siglos en el pasado, hallaríamos que todos los seres humanos hablaban el mismo idioma. Todos los hombres tenían un mismo y único vocabulario, lo cual hacía posible que se entendieran unos a otros al hablar. Esto les facilitaba el trabajar juntos en todo proyecto común. Entonces, súbitamente, vino una confusión del idioma. ¡Surgieron muchas lenguas! Se desarrollaron dialectos locales. ¡Oh, qué división trajo esto! Los idiomas nacionales se convirtieron en un tesoro celosamente protegido y se insistió en ellos para conservarlos. Este es un asunto que solo el gobierno mundial puede manejar con buen éxito. ¡Lo hará! 3

El gobierno mundial remueve todas las barreras lingüísticas que separan a sus súbditos. Se elimina el orgullo nacional relativo al lenguaje. ¡Las distinciones nacionales desaparecen! Nadie es ciudadano de una nación o de otra. Todos son ciudadanos del mundo, sí, ciudadanos de un solo nuevo mundo. El un solo idioma que todos hablan para entenderse mutuamente es el lenguaje que el gobierno mundial reconoce y usa, el idioma oficial. Es el lenguaje original de la humanidad, que todo el mundo en la Tierra habló durante los primeros mil ochocientos años de la existencia humana. Ese idioma original fue desarrollado a un grado elevado y nunca realmente se desvaneció, porque una pequeña minoría de 4

personas persistió en usarlo, y además fue conservado por el más grande libro de la Tierra. El que haya un solo idioma facilita el viajar al extranjero. ¿Tiene uno que viajar a partes de la Tierra que estén lejos de su hogar, debido a la ocupación o profesión de uno? ¡Qué maravilloso es, qué fácil para uno, el que ya no se necesiten pasaportes! Uno no necesita un certificado de salud, no tiene que cruzar fronteras internacionales ni pasar por lugares donde se le investigue como inmigrante ni tenga que pasar inspecciones aduanales. No hay impuestos sobre las importaciones. No hay que preocuparse por el tipo de cambio internacional ni calcularlo, pues no se están usando diferentes monedas en los territorios que anteriormente estuvieron bajo gobernaciones nacionales. Anteriormente, para que alguien escapara de pasar por las formalidades de entrada o salida junto con visados de permiso, hubiera tenido que salirse de la Tierra. Pero ¿quién quiere hacer eso? Sin embargo, el gobierno mundial trae un cambio a este respecto. 5

Pero de seguro tiene que haber diferentes leyes y reglamentos para las diferentes localidades de la Tierra. ¡No, de ninguna manera! Así sucedía cuando había cuerpos legislativos de la ciudad, el condado, el estado o la provincia y la nación. En aquel tiempo la venta pública y el consumo de bebidas alcohólicas eran ilegales en un condado, mientras que en el condado contiguo no había prohibición. En un país se prohibía estrictamente importar ciertas drogas perjudiciales, pero en otro el cultivo de plantas y la producción de drogas perjudiciales y la venta y exportación de tales drogas eran operaciones legales y le producían ingresos financieros al gobierno que legalizaba tales cosas. En un país dominado por cierta fe religiosa estaba perfectamente bien el que un hombre tuviera dos o más esposas, pero en otro país se podía llevar a los tribunales y castigar a un hombre por ser simplemente bígamo. Las leyes diferían de país en país, y abundaban la profesión jurídica, los abogados, los juristas, los consejeros legales. Pero ahora en el nuevo orden bajo el gobierno mundial hay un solo conjunto de leyes para toda la Tierra. 6

Hay otra cosa que se nota fácilmente bajo el nuevo gobierno mundial. La salud general de la gente parece estar mejorando continuamente. No hay equivocación en cuanto a ello. La salud de los súbditos obedientes del gobierno mundial realmente está mejorando. ¡Mire! los dolores y sufrimientos se están desvaneciendo, las arrugas van desapareciendo de los rostros que antiguamente lucían preocupados o envejecidos. Hasta las personas a quienes la debilidad y la edad avanzada habían encorvado están gradualmente enderezándose y andando con grácil erguimiento. Por todas partes hay señales de que las personas de mucha edad están volviendo a los días de su juventud. Evidentemente toda persona está disfrutando del privilegio de vivir, y acoge cada nuevo día con agradecimiento por el día de vida que se le ha añadido. La debilidad 7

corporal no va aumentando a medida que el tiempo pasa. Las fuerzas físicas se van edificando, y los cuerpos no se van gastando. Sea cual sea la “medicina” que el gobierno mundial esté administrando, su ayuda médica está produciendo maravillas. Finalmente traerá la perfección humana. Hasta el ambiente natural de la humanidad va haciéndose cada vez mejor. Toda la naturaleza está siendo rejuvenecida. La Tierra entera está convirtiéndose en un solo lugar mundial de hermosura. El gobierno mundial tiene una agencia meteorológica perita que nunca se equivoca. Realmente tiene control completo de las condiciones del tiempo. De ninguna parte de la Tierra viene ningún informe de sequía, ni de lluvia que caiga en cantidades arruinadoras, ni de ciclones, huracanes ni tifones. Todas las fuerzas de la naturaleza están siendo puestas en perfecto equilibrio para que toda la Tierra sea un lugar exquisito en el cual vivir. El alimento no escasea en ningún sitio, porque el terreno está produciendo a plenitud. Se están satisfaciendo ampliamente las necesidades humanas en cuanto a alimento, y todo esto está contribuyendo a mejorar la salud de la gente. No hay temor de escaseces. El espíritu de interés en el prójimo mueve a todos a ser liberales, a ayudarse mutuamente y a compartir las cosas. Puesto que todos hablan el mismo idioma, todos sienten los enlaces estrechos de la relación familiar, todos son conciudadanos sujetos al gobierno mundial, todos se están combinando para hacer de su hogar terrestre el lugar de la mayor belleza posible en el cual vivir juntos para siempre. 8

SALUD PERFECTA PARA DISFRUTAR DE LA VIDA Para traer a todos sus súbditos una igualdad que les permita disfrutar físicamente de la vida, el gobierno mundial se ocupa en una obra de reparar los cuerpos y la mente de todos sus súbditos leales. ¿Quién hay de nosotros en el cual no haya algo que esté funcionando mal? En cuanto a cuerpo y mente, algunos estamos en peor condición que otros. Piense en los que han perdido una o más extremidades de su cuerpo. Piense en los que tienen sus extremidades, pero que por parálisis no derivan placer del uso de ellas. Piense en aquellos cuyos órganos internos han sido afectados adversamente de tal manera que sus cuerpos no funcionan con normalidad. Cuando el gobierno mundial tome el manejo completo de los asuntos humanos quizás haya individuos que todavía estén afligidos de horribles enfermedades. Algunos tienen ojos sin vista, literalmente; otros tienen oídos, pero viven en un medio desprovisto de sonido, otros tienen los órganos del habla, pero no pueden usarlos para comunicarse con otras personas que pueden oír el habla articulada. ¡Imagínese todas las inigualdades corporales que indudablemente existirán al principio con relación a que todos puedan participar a plenitud de todos los gozos y bendiciones de vivir bajo el gobierno mundial establecido! 9

¡Con cuánta aptitud muestra esta nueva gobernación que puede suplir lo que se necesita en esta situación! ¡Qué magnífica contribución 10

hace a la perfección humana que conduce a que todos sus súbditos devotos vivan una vida perfecta! El cojo anda, sí, salta alrededor de gozo. Brazos y piernas que se habían perdido son restaurados milagrosamente. El ciego ve, el sordo oye, el mudo habla y canta de puro gozo. Desaparece la fealdad relacionada con la forma y figura humana. En cuanto a apariencia personal, ésta es una generación de la humanidad de la cual el gobierno puede correctamente sentirse orgulloso. ¡Qué maravilla, entonces, el hecho de que allí no haya hospitales, ni asilos para dementes, ni colonias en cuarentena donde se aísle a personas a quienes aflijan horribles enfermedades contagiosas! Ah, ¡ciertamente valdría la pena vivir la vida entonces! Pero ¿por qué debería ser tan favorecida con la preciosa oportunidad de vivir en perfección humana en un ambiente de perfección terrestre una generación de la humanidad que simplemente estuviera viviendo en cierto tiempo de la historia humana? ¿Qué hay de las generaciones anteriores? ¿Qué hay de los parientes cercanos que hubieran muerto por causas naturales u otras circunstancias, sí, de los antecesores de todos estos súbditos vivientes del gobierno mundial? Ellos todavía viven en la memoria de estos que comparten en vida las bendiciones del justo nuevo orden. A no menor grado que ellos tiene presente el gobierno mundial a los que han regresado al polvo del suelo del cual fue tomado originalmente el primer hombre. 11

El gobierno mundial no necesita lápidas sepulcrales, mausoleos ni otros indicadores de lugares de entierro que le recuerden a los que se llevó consigo inexorablemente la Muerte, ese enemigo común de la humanidad. Este gobierno no es solo para el beneficio de los súbditos vivientes, sino también para el de la cantidad innumerable de muertos humanos, en comparación con la cual el número de los que todavía están vivos es una fracción pequeña. Tiene magníficos propósitos para los muertos también. Ha inculcado en el corazón de los vivos la esperanza de acoger de regreso a la vida bajo el gobierno mundial a los que duermen el sueño de la muerte en el polvo del suelo. Está preparado para dar a sus súbditos vivientes instrucciones de hacer preparaciones y provisiones afectuosas, amorosas, para el regreso de los muertos. El gobierno mundial desea que toda la Tierra llegue a estar cómodamente llena de súbditos, y la resurrección de los muertos humanos es la manera principal de llevar a cabo este maravilloso proyecto gubernamental. En vista de su poder sobrehumano, al gobierno no le presenta ningún problema una cosa como la resurrección de todas las víctimas de la muerte. 12

Pero, ¿qué hay de todas las creencias, ideas y tendencias religiosas que han de traer consigo los resucitados al volver? Durante la vida anterior de ellos en la Tierra, la religión había sido la más pronunciada fuerza divisiva entre las que plagaban a la humanidad. Considerando los antecedentes religiosos de los resucitados, ¿no resultará el restaurarlos a 13

la vida en que haya un mundo terriblemente dividido, al revivificarse prejuicios, odios y hostilidades religiosos de índole violenta? Bueno, mientras se despliega ante nuestra vista la escena terrestre bajo el gobierno mundial, nos preguntamos: ‘¿Dónde están los edificios religiosos con campanarios o altas cúpulas, las catedrales, basílicas, mezquitas, capillas, las imponentes imágenes y estatuas religiosas?’ ¡Se han ido! Miembros de la generación de hoy que todavía están vivos se están llevando en unidad sin ninguno de esos accesorios religiosos. Su forma de adoración se amolda a la verdad de la realidad. Su fe y práctica son lo que el gobierno mundial aprueba, porque no contienen ninguna fábula ni mito ni leyenda fantástica de hechura humana ni engaño. En cuanto a los muertos resucitados, ¡oh, cómo quedarán desilusionados, especialmente los que al morir esperaban que llegarían a ser ángeles en el cielo o que serían almas conscientes en las llamas de un purgatorio o un infierno de tormento eterno, o que experimentarían una transmigración o se hallarían en un estado de nirvana! La resurrección a la vida en la Tierra ciertamente será una experiencia poderosamente correctiva para su pensamiento y su entendimiento religiosos. 14

Los resucitados aprenderán que el gobierno mundial es un gobierno caracterizado por la verdad, que no tolera el error religioso. Por eso, ahora se les enseñará la verdad y solamente la verdad. En unión, toda la raza humana podrá adorar con verdad así como con toda sinceridad. 15

Ya hemos notado la ausencia de edificios del tipo anterior que estaban dedicados a la religión que no armonizaba con la verdad. Así, también, ahora no vemos ni a hombres ni mujeres que anden vestidos de manera extraña como una clase sacerdotal o clero, exigiendo trato especial y favores y reverencia. A los que se resucita de entre los muertos no se les va a devolver a sus posiciones religiosas anteriores, de modo que se fuera a renovar la confusión y la lucha religiosas. Sus puestos privilegiados que los exaltaban sobre la gente común para la cual oficiaban en edificios religiosos palaciales se habrán ido. Se solía pensar que la salvación del hombre, la mujer y los niños ordinarios dependía de los servicios de tales dignatarios. Pero ahora el gobierno mundial tiene la encomienda de encargarse de la salvación eterna de sus súbditos terrestres en salud y felicidad perfectas sobre una Tierra paradisíaca. El hecho de que el gobierno puede remover las debilidades corporales y hasta levantar los muertos a la vida prueba esa realidad. Está en la naturaleza humana el adorar algo, y el gobierno mundial está satisfaciendo esa necesidad por medio de enseñar a sus súbditos la adoración pura que sostiene la vida. 16

UBICACIÓN DEL GOBIERNO MUNDIAL Para este tiempo quizás nos estemos preguntando: ¿Dónde está la ciudad capital de este gobierno mundial, que no la vemos en la Tierra? Busquemos donde busquemos en la Tierra, no la encontramos. Tiene que 17

estar en algún sitio. Sí, pero no aquí en la Tierra. ¡Y eso es razonable! Un gobierno mundial que pueda hacer cosas tan magníficas de beneficio duradero a sus súbditos ciertamente es de categoría más elevada que todo tipo de gobierno humano que haya gobernado alguna vez en la Tierra. Esta comparación es verdadera hasta en nuestra era de ciencia moderna, tecnología, medicina adelantada, agricultura mecanizada y energía nuclear. Un gobierno mundial al que puedan atribuirse todos los logros maravillosos que ya hemos considerado despliega que tiene poder sobrehumano, sí, aptitudes sobrenaturales. Prueba que es más que un gobierno de hechura humana. Por lo tanto, no es aquí en la Tierra, entre los hombres, que debemos buscar su ubicación. Tiene que estar en un lugar más alto que en la Tierra. Tiene que estar más arriba de nosotros, arriba en el cielo. Por eso es invisible para nosotros los que estamos aquí en la Tierra. ¡Pero por todo el bien que hace a sus súbditos terrestres, demuestra que es real, existente! El hecho de que el gobierno mundial esté tan altamente elevado sobre sus súbditos terrestres sirve para aumentar el respeto del hombre a él. El hombre terrestre toma más en serio sus disposiciones. Lo correcto y apropiado de la soberanía de este gobierno sobre toda la Tierra se aprecia, y por eso se le rinde sumisión con humildad. Se ve que su sabiduría es muy superior a la de toda gobernación terrestre de la historia humana. Tiene interés altruista en sus súbditos terrestres. Por eso dirige los asuntos humanos de mejor manera que todo gobierno terrestre que hubo durante los anteriores seis milenios de la historia del hombre. 18

Pues bien, ¿debe parecer extraño que el gobierno mundial sea celestial? No; porque debemos tener presente que el hombre no es el monarca de todo lo que él examina. El centro del universo no es este planeta del hombre, la Tierra, sino el Hacedor celestial invisible de este planeta. Como planeta, la Tierra gira alrededor de un centro visible, a saber, el Sol, a unos ciento cincuenta millones de kilómetros de distancia. Nuestra Tierra y su Sol son parte de la Vía Láctea y, como tal, están girando lentamente alrededor del eje de esta misma magnífica galaxia compuesta de miles de millones de soles brillantes. Necesariamente, pues, nosotros los que vivimos en la Tierra nos encontramos también girando alrededor del Hacedor celestial de nuestra Tierra, de nuestro sistema solar, de nuestra galaxia la Vía Láctea, sí, de todas las galaxias que los astrónomos modernos conocen por medio de los más poderosos telescopios. Hasta en un sentido físico nosotros los que habitamos esta diminuta Tierra estamos dirigidos, gobernados, por leyes físicas del universo. ¿Por qué debería alguien dudar, entonces, de que el Hacedor de todas esas leyes físicas que mantienen en tan tremendamente imponente armonía y unidad al enorme universo pueda establecer un gobierno perfecto para todo el mundo de la humanidad? 19

A menos que la próxima gobernación para toda la Tierra fuera el gobierno establecido por el Hacedor de todas las galaxias celestiales y de nosotros en la Tierra, la familia humana estaría condenada a la extinción eterna. La próxima gobernación para toda la Tierra por necesidad debe ser, ciertamente tiene que ser, la del Creador de todo el universo, pues si no, todo está perdido para nosotros. ¡Cuánto podemos alegrarnos de que esa gobernación resultará ser el Gobierno que tanto tiempo atrás se prometió y que viene de Él! Todo gobierno que ha habido en existencia se ha establecido y ha funcionado con algún propósito. El gobierno mundial entrante tiene propósito también, el más glorioso de todos los propósitos. Ante todo, le probará al hombre en la Tierra que hay un Dios perfectamente amoroso, inteligente, omnisapiente, todopoderoso, completamente justo, el Creador y Soberano de todo el universo. La prueba de eso, la verificación de eso, es de primera importancia, porque todas las cosas por todas partes, animadas e inanimadas, vistas y no vistas, dependen de Él; existen y son mantenidas por Él. 20

El propósito secundario de este gobierno mundial entrante es rescatar a la raza humana del resultado final de todo el mal que se ha cometido, a saber, de la muerte, sí, la destrucción sin fin. No es que nosotras las insignificantes criaturas humanas seamos tan importantes para Dios, no es que él no pudiera arreglárselas sin nosotros en la Tierra. Él pudiera hacer eso fácilmente, pero no desea hacer eso. ¿Por qué? Todo debido a que nos ama a todos como criaturas de él, la obra de sus manos, y él nos hizo para que fuéramos perfectamente felices con él como nuestro Padre celestial y para que fuéramos un honor para él. 21

¿No debería eso hacer que deseáramos que el gobierno mundial de Dios fuera la próxima gobernación para toda la Tierra? Todos nosotros los que no tenemos el corazón endurecido y amargado por toda la maldad de la sociedad humana caída deberíamos alentarnos hasta el punto de decir: ¡Sí! Nosotros los que tenemos un corazón que todavía puede responder a las expresiones inmerecidas del amor divino estaremos profundamente interesados en saber qué seguridades tenemos de Él para esperar que él introduzca este gobierno mundial justo. También, ¿por qué hará Él esto dentro de nuestra propia generación? Es muy cierto que el que adquiramos este conocimiento acerca de Él y su propósito generoso contribuirá a que adquiramos vida eterna en relación bendita con el gobierno mundial entrante. 22

[Preguntas del estudio] 1. Los que aman la gobernación justa se estremecen de emoción al pensar en ¿qué? ¿por qué? 2. ¿Qué deleita nuestros ojos en cuanto a la condición de las relaciones humanas? 3. ¿A qué se debe el que todos se entiendan unos a otros al hablar?

4. ¿De qué son ciudadanos, y qué idioma hablan? 5. ¿Qué cambios hay para los que tienen que viajar hasta lejos de su hogar? 6. ¿Qué hay en cuanto a gobierno mundial y a que haya leyes en conflicto en un lugar y otro? 7. ¿Qué se puede decir acerca de la “medicina” que entonces se administra? 8. ¿Qué muestra acerca del control de las condiciones del tiempo el cambio que va aconteciendo en la apariencia de la Tierra? 9. ¿Qué inigualdades corporales existirán al principio con relación a disfrutar uno de la vida? 10. ¿Cómo se demuestra que se puede suplir lo que todos necesitan en cuanto a salud? 11. ¿Cómo fue favorecida por el tiempo la generación que así disfruta de estas cosas? 12. ¿Cómo mostrará el gobierno mundial que toma en consideración a los muertos? 13. ¿Qué pregunta agita en cuanto a religión la resurrección? 14. ¿Por qué corregirá la resurrección el pensar religioso de las personas que sean levantadas de entre los muertos? 15. ¿Cómo se capacitará a los resucitados a adorar correctamente? 16. ¿Por qué no vemos a nadie ostentándose a la manera de sacerdotes o clérigos? 17. A pesar de su ubicación, ¿cómo demuestra su realidad el gobierno? 18. ¿Qué efecto tiene en sus súbditos el que el gobierno sea celestial? 19. (a) ¿Por qué giramos nosotros los terrícolas alrededor del Creador del universo? (b) ¿Por qué puede él establecer un gobierno mundial para nosotros? 20. (a) ¿Por qué es necesario que la próxima gobernación para el hombre sea ese gobierno mundial? (b) ¿Qué propósito principal tiene? 21. ¿Cuál es el propósito secundario de este gobierno, y por qué? 22. Por eso, ¿qué nos interesamos en saber, con qué provecho? [Ilustración de la página 4] EGIPTO ASIRIA BABILONIA

MEDO-PERSIA GRECIA ROMA G. BRETAÑA Y E.U.A. LAS NACIONES UNIDAS EL REINO DE DIOS

Capítulo 2 El Gobernador que conoce el fin desde el principio EN EL transcurso de todas las edades desde los días de la antigua Babilonia hasta ahora, los gobernantes políticos han consultado a astrólogos y clarividentes o médium espiritistas para averiguar lo que el futuro encierra. Han buscado presciencia sobrenatural que los ayude a gobernar a sus pueblos con buen éxito. La historia política hasta la misma última cuarta parte del siglo veinte prueba que toda la información que así adquirieron les ha fallado. Por eso la política mundana se encuentra en condición de embrollo. Los gobernadores de los asuntos humanos no saben qué camino tomar. Las naciones están en angustia y están recurriendo a medidas despóticas, y la gente tiene toda razón para temer lo peor. No pueden volverse a nadie en la Tierra en busca de verdadero remedio. La única dirección de buen éxito en la cual volverse es en retirada de los astrólogos, médium espiritistas y la fuente oculta de su información extraviadora y acudir al Gobernador Supremo de todas las cosas, ¡el Dios Altísimo de quien viene el gobierno mundial entrante! Ningún historiador, ninguna persona bien informada, puede negar que desde los tiempos más primitivos las naciones del mundo han tenido sus dioses, visibles e invisibles. Pues, poco después de terminar la II Guerra Mundial en 1945 el emperador del Japón renunció a la alegación de que él era un dios, descendiente de Amaterasu, la diosa japonesa del Sol, y sin embargo, hasta este día, muchos religiosos apegados a la tradición siguen adhiriéndose a la adoración del emperador en la Tierra del Sol Naciente. Estos llamados “dioses” de las naciones han tenido sus profetas en la Tierra. Por ejemplo, en el siglo décimo antes de nuestra era común los profetas del dios Baal eran cuatrocientos cincuenta en la nación de Israel, en el Oriente Medio, durante el reinado del rey Acab y la reina Jezabel, según se informa en el libro de 1 de Reyes, capítulo dieciocho, versículo veintidós. Aquellos profetas hacían predicciones del futuro en el nombre de su dios. Si la profecía que se hacía en el nombre de un dios no se realizaba, aquello probaba que aquel dios era falso, un no-dios. De hecho, ¡la prueba de un dios verdadero estaba en que pudiera cumplir su profecía! 2

Bajo esta prueba crítica de la profecía, ¿quién probó que era el Dios real, el Dios vivo y verdadero? Los profetas de los dioses de las naciones estaban como testigos para presentar los hechos acerca de sus dioses y señalar a las profecías que sus dioses habían hecho que se realizaran. ¿Han hecho cualesquiera de estos dioses nacionales profecías que sean de valor hoy, que se estén realizando en nuestros tiempos modernos? ¿Puede alguien, puede alguna autoridad histórica, ofrecer como evidencia una profecía tal? ¡Nadie hoy puede hacer eso! Y sin embargo hay un solo Dios que se ofrece como quien está dispuesto a someterse voluntariamente a la prueba de la profecía, a probar que él es el único Dios vivo y verdadero que 3

tiene presencia y puede predecir el futuro y cuyas profecías se han realizado desde el principio. Él puede producir sus testigos con prueba histórica en apoyo de que él es un Dios de profecía verdadera. ¿Quién es Él? ¿Qué nombre tiene? Uno de sus profetas que vivió en el siglo octavo antes de nuestra era común fue Isaías el hijo de Amoz, un súbdito del reino de Judá, en el Oriente Medio. El espíritu de inspiración le vino y así fue usado como vocero para expedir el siguiente desafío a todos los dioses de las naciones, diciendo: 4

“Que todas las naciones se junten en un solo lugar, y que los grupos nacionales se reúnan. ¿Quién hay entre ellos [los dioses de las naciones y pueblos] que pueda anunciar esto? ¿O pueden ellos hacernos oír siquiera las cosas primeras? Suministren [como dioses] sus testigos, para que [como dioses] sean declarados justos, o que [las naciones y grupos nacionales] oigan y digan: ‘¡Es la verdad!’”—Isaías 43:9. 5

En esas palabras, a los dioses de las naciones y de los grupos nacionales se les desafía en cuanto a sus poderes proféticos. ¿Quién de entre esos dioses nacionales puede declarar proféticamente lo que se ha predicho en los versículos precedentes de este capítulo de la profecía de Isaías? ¿Quién de entre esos dioses nacionales puede hacer que oigamos de antemano las mismísimas primeras cosas que han de suceder en el futuro inmediato, sin mencionar las cosas finales del futuro? 6

Que estos dioses nacionales suministren sus testigos en la Tierra para que ellos testifiquen que estos dioses han hecho estas cosas de índole profética con exactitud, de modo que prueben por medio de estos testigos que son dioses verdaderos, confiables, y merecen que se les declare correctos, justos, plenamente justificados en ser adorados como dioses que pueden predecir el futuro infaliblemente. O que las naciones y grupos nacionales puestos juntos oigan a esos testigos de los dioses y juzguen el testimonio de esos testigos y digan que lo que están testificando es correcto, es verdad, es hecho histórico. Los dioses nacionales desafiados no han podido producir tales testigos. No hay testigos suyos de cuyo testimonio podamos decir: “¡Es la verdad!” 7

Y ahora viene la declaración del que desafía. Según la Versión Reina Valera Revisada (RVR) de la Biblia, el desafiador se identifica por nombre, diciendo: “Vosotros sois mis testigos, dice Jehová, y mi siervo que yo escogí; para que me conozcáis y creáis, y entendáis que yo mismo soy; antes de mí no fue formado dios, ni lo será después de mí. Yo, yo Jehová, y fuera de mí no hay quien salve. Yo anuncié, y salvé, e hice oír, y no hubo entre vosotros dios ajeno. Vosotros, pues, sois mis testigos, dice Jehová, que yo soy Dios. Aun antes que hubiera día, yo era; y no hay quien de mi mano libre. Lo que hago yo, ¿quién lo estorbará?”—Isaías 43:10-13; vea también la Traducción del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras. 8

Denodadamente, Aquel que presentó las preguntas del desafío se identifica llamándose Jehová. Mientras que los dioses desafiados no pueden producir sus testigos que suministren evidencia de que ellos sean dioses, Jehová puede producir Sus testigos. Sus testigos están en el escenario. Él los ha suministrado, y se dirige a ellos y les recuerda cómo llegaron a ser Sus testigos. ¿Quiénes son éstos? Jehová se refiere a ellos como unidad, y los llama como grupo: “Mi siervo que yo escogí.” Ellos están en contraste con las naciones y grupos nacionales cuyos muchos dioses son desafiados por Jehová. Los testigos de Jehová son el propio siervo de él, su propia nación escogida. Para que esta nación fuera testigos unánimes de él, Jehová la ha hecho su clase del siervo para que se familiarizaran con él: para que ellos lo conocieran y le creyeran, que tuvieran fe en él, y por lo tanto entendieran que él es el Mismo, el Dios que no ha cambiado, eterno. De esta manera ellos podrían estar equipados para servir de testigos suyos ante todas las naciones idólatras del mundo. 9

Antes de este Dios, Jehová, no fue formada ninguna tal persona o cosa como un dios. No que Jehová Dios mismo hubiera sido formado por alguien. Si nosotros, como los ateos modernos, fuéramos a insistir en que Jehová Dios hubiera sido formado, tendríamos lógicamente que preguntar: ¿Quién formó a Jehová Dios? Esto llevaría a la pregunta: ¿Quién, entonces, formó al que formó a Jehová Dios? Además: ¿Quién formó al que formó al formador de Jehová Dios? De hecho, nunca llegaríamos al fin de hacer la misma pregunta vez tras vez. Así, el misterio acerca de Deidad solo se intensificaría, se haría más complicado y no conduciría a la satisfacción de una mente inteligente. La pregunta en cuanto a formación solo podría dejar de hacerse cuando llegara a un Formador no formado que siempre hubiera existido, un Formador sin principio. El profeta Moisés, que fue uno de los testigos que formó parte de la clase de “siervo” de Jehová, resuelve el asunto de una manera muy sencilla y que ahorra tiempo, al decirle al Señor Jehová, el Creador de cielo y Tierra: “Desde la eternidad hasta la eternidad, tú eres Dios.”—Salmo 90:1, 2, Versión Moderna (Mod). 10

Entonces, ¿por qué dijo Jehová: “Antes de mí no fue formado Dios alguno”? (Isaías 43:10) Esto se debió a que las naciones idólatras del mundo habían formado sus propios dioses falsos, pero no habían formado a Jehová como Dios. No se habían adelantado a la existencia de Jehová con la formación de ninguno de los dioses falsos de ellas. Jehová, como Creador de la Tierra y sus habitantes, les llevó la delantera a todas y cada una de las naciones. Por esa razón, no hubo dios formado por las naciones idólatras antes de Jehová. 11

No solo eso, sino que, dice Jehová, “ni lo será después de mí.” (RVR) Puesto que Jehová es Dios “desde la eternidad hasta la eternidad,” (Mod) nunca pasará del escenario de los acontecimientos. Las naciones idólatras, puesto que no existen para siempre, pasarán del escenario terrestre 12

durante la más grande dificultad del mundo, que ya está por sobrevenir, mientras que el eterno Jehová sobrevivirá para siempre. Por eso, las naciones no estarán aquí después de Jehová, sino que Él estará después de ellas. Por lo tanto, es imposible que las naciones idólatras continúen formando sus dioses falsos después de Jehová. Sus dioses formados o de hechura humana perecerán con ellas. (Isaías 2:18-21) Pero Jehová el Dios verdadero de la profecía sigue viviendo por la eternidad. También, sus testigos fieles seguirán viviendo por la eternidad, siempre estarán presentes para testificar vocalmente en apoyo de Jehová como Dios. Muchas de las naciones antiguas, Babilonia, Asiria, Medo-Persia, Edom (Idumea), Moab, Amón y otras, han dejado de existir desde hace mucho tiempo, y sus dioses fabricados pasaron junto con ellas. En cuanto a estos dioses nacionales, Jehová Dios puede decir: “Después de mí continuó sin que lo hubiese. Yo... yo soy Jehová y fuera de mí no hay salvador.”—Isaías 43:10, 11, NM. 13

LA CREACIÓN DE TESTIGOS Para tener testigos, este Dios sin principio que no tuvo quién lo formara tendría que hacer, decir o profetizar algo, y esto delante de observadores o enfrente de los que se benefician de ello. Él sí creó testigos por medio de hacer algo para ellos, de modo que ellos pudieran verídicamente decir algo acerca de él. De hecho, él salvó a estos testigos, como había anunciado que lo haría. Esto lo hizo sin la ayuda de ningún llamado “dios.” De esta manera demostró visiblemente que era Dios, el único Dios vivo y verdadero. Esto fue lo que pasó a llamar a nuestra atención en las palabras adicionales del profeta Isaías: 14

“‘Yo mismo he anunciado y he salvado y he hecho que sea oído, cuando no había entre ustedes dios extraño. De modo que ustedes son mis testigos,’ es la expresión de Jehová, ‘y yo soy Dios. También, todo el tiempo yo soy el Mismo; y no hay nadie que efectúe liberación de mi propia mano. Me pondré activo, y ¿quién puede hacerlo volver atrás [o: volver atrás mi acción]?’”—Isaías 43:12, 13, NM. 15

Los salvados no podían atribuir su salvación a nadie sino a Aquel que había dicho de antemano que lo haría. Él hizo que en otros lugares se oyera de su acto de salvación. Por eso sus salvados estaban bajo la obligación de ser sus testigos, para verificar lo que otros simplemente habían oído. Él había probado que era Dios, y por eso no era un dios sin testigos válidos de esta verdad. 16

Además, él era Dios Todopoderoso, porque nadie podía librarse a sí mismo o librar a ninguna otra persona de la mano de Jehová. Cuando Jehová actúa, nadie puede volver eso atrás o cambiarlo a lo contrario. Lo que él predice o profetiza, él tiene suficiente poder para hacer que se realice. 17

Jehová salvó a su clase del “siervo” de testigos una vez antes, en 1513 a. de la E.C., y puede hacerlo de nuevo, hasta en escala mayor. Él había salvado a Israel del Imperio Egipcio, cuando éste era una potencia mundial, la Primera Potencia Mundial del registro bíblico. Ni siquiera el Imperio Babilonio posterior, la Tercera Potencia Mundial de la historia bíblica, sería lo suficientemente fuerte como para impedir una segunda salvación del siervo de Jehová. Mirando al futuro a tal salvación en el sexto siglo antes de nuestra era común, el Dios Todopoderoso pasó a decir por medio de su profeta Isaías con dos siglos de anticipación: “Esto es lo que ha dicho Jehová, el Recomprador de ustedes, el Santo de Israel: ‘Por amor de ustedes ciertamente enviaré a Babilonia y haré que desciendan las barras de las prisiones, y los caldeos en las naves con gritos quejumbrosos por su parte. Yo soy Jehová el Santo de ustedes, el Creador de Israel, su Rey.’”—Isaías 43:14, 15. 18

Así, como si la salvación de su pueblo cautivo Israel ya hubiera acontecido, el Dios que era responsable de la creación de aquella nación se llama el Recomprador, el Rescatador de ella de manos de la Potencia Mundial Babilónica. Por amor de ellos enviaría las fuerzas militares combinadas de los medos y los persas, bajo Ciro el Grande, para derribar el Imperio Babilonio en el año 539 a. de la E.C. Ninguno de los barcos de Babilonia en el río Éufrates, fueran militares o comerciales, podría detener la caída de Babilonia. En vez de gritos de triunfo, los marineros lanzarían gritos quejumbrosos. ¿Por qué no debería ser así, cuando sus barcos se embarrancaron cuando el estratega militar Ciro hizo que las aguas del río Éufrates fueran desviadas de su conducto regular para que sus tropas, chapoteando por el lecho del río, penetraran así en la ciudad por medio de las puertas que daban a los muelles? 19

La antigua Babilonia como potencia mundial política había rehusado abrir su sistema de prisiones por medio del cual mantenía en destierro o exilio a los israelitas deportados, aislados a más de mil seiscientos kilómetros de su país desolado, Jerusalén y la tierra del reino de Judá. Pero, al desempeñar el papel que se había predicho para él según la profecía de Isaías (44:28–45:4), Ciro el conquistador se sintió impelido a obrar en el sentido de quebrantar las barras de la prisión y, en 537 a. de la E.C., dejar que los israelitas desterrados que amaban la libertad regresaran a su país desolado. Jehová Dios, el Cumplidor de la profecía, dejó que su deuda a Ciro el Emancipador fuera cargada a Su cuenta. Como Recomprador de Israel él recompensó debidamente a Ciro.—Isaías 43:3, 4. 20

En la desgarradora destrucción de Jerusalén y su templo por los babilonios en 607 a. de la E.C., los reyes israelitas cesaron de sentarse en el “trono de Jehová” en aquella ciudad capital. (1 Crónicas 29:23) Pero ahora, al librar de Babilonia en 537 a. de la E.C a su pueblo desterrado, Jehová Dios probó que todavía era el Rey celestial de ellos. (Isaías 52:7; 21

Mateo 5:35) Su Dios, no ninguna criatura humana, era el Rey de ellos. Ellos eran, ante todo, Sus súbditos. Le debían lealtad a Él, tal como le debían el que se les hubiera soltado de Babilonia a Él, y no a su agente terrestre, Ciro el persa. Él había predicho que los recompraría de Babilonia la carcelera, y nunca podía violar su palabra dada. Por eso, ahora, los testigos de Él no eran solo los antepasados antiguos de ellos, sino ellos mismos también. Si con todo esto no quedaba probado que Él era el único Dios vivo y verdadero, ¿qué más pudiera requerirse de él? Desde lo primero hasta lo último, desde la infinidad del pasado hasta la infinidad del futuro, solo él domina el campo de la Deidad. En la Tierra no faltan testigos de su Deidad. Desde su posición suprema de Deidad, con confianza él puede presentar su otra declaración desafiadora ante los dioses de todas las naciones: 22

“Esto es lo que ha dicho Jehová el Rey de Israel y el Recomprador de él, Jehová de los ejércitos: ‘Yo soy el primero y yo soy el último, y fuera de mí no hay Dios. ¿Y quién hay como yo? Que clame, para que lo anuncie y me lo presente. Desde que asigné al pueblo de hace mucho tiempo, tanto las cosas que vienen como las cosas que entrarán anuncien ellos [estos dioses] por parte suya. No estén ustedes en pavor, y no se atolondren. ¿No he hecho yo que desde aquel tiempo en adelante tú individualmente oigas y no lo he anunciado? Ustedes son mis testigos. ¿Existe Dios fuera de mí? No, no hay Roca. No he reconocido a ninguno.’”—Isaías 44:6-8. 23

¿Qué pensamos nosotros hoy acerca de este asunto? ¿Se sentiría honrado cualquiera de nosotros si el Dios de la Santa Biblia, Jehová, nos dijera: “Ustedes son mis testigos”? Tendríamos razón para sentirnos honrados, porque esto nos colocaría en una clase altamente honrada. 24

El profeta Isaías mismo fue testigo de Jehová, ¿verdad? Ciertamente el libro profético de Isaías, que se extiende por sesenta y seis capítulos, y las muchas citas de él como se encuentran en las Escrituras inspiradas, cristianas, desde Mateo hasta Revelación, prueban en conjunto que Isaías fue sobresaliente como testigo de Jehová. ¿Y qué hay de Jesucristo mismo? ¿Puede alguien en el cielo o en la Tierra negar que él, también, fue testigo de Jehová? Nadie en ningún lugar y de ningún tiempo fue superior a él como tal testigo. Como judío o israelita por nacimiento, Jesucristo era parte de la nación a la cual se dirigieron las palabras de Isaías 43:10: “‘Ustedes son mis testigos,’ es la expresión de Jehová, ‘aun mi siervo a quien he escogido.’” Si no hay otro hombre que lo haga, el apóstol Juan sí lo llama “Jesucristo, ‘el Testigo Fiel.’” Además, el Resucitado Jesús dijo, según una cita de Juan: “Estas son las cosas que dice el Amén, el testigo fiel y verdadero, el principio de la creación por Dios.”—Revelación 1:5; 3:14. 25

LOS TESTIGOS DE JEHOVÁ DE LA ACTUALIDAD

Puesto que Jesucristo era y confesó ser testigo de Jehová, ¿está fuera de orden de alguna manera el que discípulos fieles de Cristo hoy se reconozcan como testigos de Jehová y confiesen que son tal cosa? ¡Por supuesto que no! Estos imitadores fieles de Jesucristo se esfuerzan por cumplir con su profesión de ser testigos de Jehová por medio de dar testimonio de Él y Su reino por todo el mundo, cumpliendo con las palabras de profecía de Jesús en Mateo 24:14. Jehová, del cual son testigos, es el Ser a quien adoran como el único Dios vivo y verdadero. Lo reconocen a Él como Aquel que los libró de una organización políticoreligiosa más poderosa que la antigua Babilonia sobre el río Éufrates, a saber, de lo que el último libro de la Biblia llama Babilonia la Grande. 26

Muchos estudiantes de la Biblia han pensado que Babilonia la Grande simbolizaba a la Iglesia Católica Romana con su capital en la ciudad de siete colinas de Roma. Otros han pensado que simboliza a la ensangrentada cristiandad con su babel de sectas religiosas. Pero la Biblia identifica a Babilonia como el imperio mundial de la religión falsa, que abarca a la cristiandad.—Revelación 14:8; 17:3 a 18:4 inclusive. 27

El cristianismo de la Biblia, no la cristiandad, se mantiene absolutamente separado y distinto de Babilonia la Grande. Hay verdaderos cristianos hoy que pueden dar testimonio de que Jehová los ha librado del imperio mundial religioso de Babilonia la Grande. Conocen, por las profecías bíblicas, que Jehová predijo esta liberación moderna, tal como también la prefiguró por medio de librar de la antigua Babilonia en 537 a. de la E.C. al resto arrepentido de israelitas. Saben que para librarlos Jehová ha usado a alguien más poderoso que el antiguo Ciro el Grande, quien vino del oriente de Babilonia para derribarla como potencia mundial. Jehová usó como libertador de Sus testigos de la actualidad a aquel a quien Él ungió con Su espíritu santo cuando éste se bautizó en el río Jordán, a Jesucristo. Este ungido es el Ciro antitípico, y él se apresura como un águila al acto de liberar de Babilonia la Grande a los testigos modernos de Jehová. Los testigos libertados agradecen a Jehová el que él haya llamado a este Ciro Mayor para que se precipitara como ave de presa sobre Babilonia la Grande y los librara de la prisión religiosa de ella. 28

La fe que estos testigos librados tienen en Jehová como Dios ha sido fortalecida. Para sí conocen como hecho real que él predijo su liberación desde mucho tiempo atrás y que de hecho la ha realizado. Les fortalece la fe saber que el consejo que él se aconsejó a sí mismo efectuar desde mucho tiempo atrás ciertamente lo ha seguido hasta cumplirlo brillantemente hoy. Pregúnteles, y ellos darán testimonio de lo veraz que ha resultado ser su Dios con relación a su declaración profética de Isaías 46:8-11, donde leemos: 29

“Acuérdense de esto, para que ustedes cobren ánimo. Pónganlo en el corazón, transgresores. Acuérdense de las primeras cosas de mucho tiempo atrás, que yo soy el Divino y no hay otro Dios, ni nadie semejante a 30

mí; Aquel que declara desde el principio el final, y desde hace mucho las cosas que no se han hecho; Aquel que dice: ‘Mi propio consejo subsistirá, y todo lo que es mi deleite haré’; Aquel que llama desde el naciente a un ave de rapiña, desde un país distante al hombre que ha de ejecutar mi consejo. Hasta lo he hablado; también lo haré venir. Lo he formado, también lo haré.” AQUEL QUE CONOCE EL FIN DESDE EL PRINCIPIO Esta es la clase de Dios invencible con el cual tienen que tratar todas las naciones de la Tierra hoy. Porque es el Dios de consejo infalible, él es el Divino que “declara desde el principio el final, y desde hace mucho las cosas que no se han hecho.” (Isaías 46:10) Ya es tiempo de que las naciones terrestres tomen en serio a este Dios Jehová y consideren su consejo que tiene propósito y que está claramente escrito en la Santa Biblia. Él puede aceptar como opositor en combate a cualquier potencia mundial que exista hoy, sin importar lo poderosamente armada que pueda estar con armas nucleares. En el siglo sexto a. de la E.C. peleó contra la Potencia Mundial Babilónica, que estaba oprimiendo sin misericordia a sus testigos. Antes de eso peleó contra otro atacante de sus testigos, a saber, la Potencia Mundial Asiria, y envió tambaleando de regreso a su ciudad capital de Nínive, en deshonra militar, a lo que quedó de sus ejércitos invasores. En las palabras registradas en Isaías 14:24-27, predijo lo que le haría a la belicosa Asiria, diciendo: 31

“Jehová de los ejércitos ha jurado, diciendo: ‘Seguramente tal como he calculado, así tiene que suceder; y tal como he aconsejado, eso es lo que se realizará, a fin de quebrar al asirio en mi tierra y para que lo pisotee en mis propias montañas; y para que su yugo realmente se aparte de sobre ellos y para que su mismísima carga se aparte de sobre el hombro de ellos.’ Este es el consejo que está aconsejado contra toda la tierra, y ésta es la mano que está extendida contra todas las naciones. Porque Jehová de los ejércitos mismo ha aconsejado, y ¿quién puede desbaratarlo? Y su mano es la que está extendida y ¿quién puede volverla atrás?” 32

Hoy, más de 2.700 años después, tenemos el derecho y privilegio de preguntar: ¿Sucedieron las cosas tal como Jehová había pensado y se realizaron tal como él se había aconsejado? ¿Quebró Jehová de los ejércitos al invasor asirio en la propia Tierra Prometida de Jehová y lo pisoteó en las montañas de aquel país? Para respuesta, todo lo que tenemos que hacer es remontarnos a aquella noche del año 732 a. de la E.C. La delegación del rey Senaquerib le había presentado la proposición final de éste a Jerusalén. Jehová por su profeta Isaías envió entonces su propia respuesta escarnecedora a Senaquerib, quien entonces estaba sitiando a Libna, a unos 32 kilómetros al oeste de Jerusalén. Entonces ciento ochenta y cinco mil de los guerreros de Senaquerib se retiraron aquella noche para hundirse en un sueño tan profundo que nunca despertaron. Con un silencioso golpe mortífero el ángel de Jehová los hirió. 33

Al despertarse por la mañana, el jactancioso Senaquerib tiene que haberse aterrorizado ante la vista que le presentó su campamento militar. Aplastado, finalmente se dio cuenta de que no podía salir triunfante en su contienda contra un Dios como Jehová. Por eso, con los soldados que quedaron vivos después de aquella horrenda noche se escabulló de la tierra de Judá y regresó a la capital asiria, Nínive. Si Jehová pudo efectuar un degüello tal de las tropas de Senaquerib a una distancia de treinta o más kilómetros de Jerusalén, ¿qué podría hacerle este Dios desde cerca al ejército asirio en un asedio en Jerusalén misma? Aquello era demasiado horrible para que Senaquerib pensara en ello. Nunca trató de amenazar la ciudad del Gran Rey Jehová de nuevo.—Isaías 36:1 a 37:38 inclusive; 2 Crónicas 32:20-22. 34

Aquí en este suceso real de la historia antigua hay mucha materia para consideración por la moderna Potencia Mundial Angloamericana, sí, por el bloque comunista de naciones, y también por todas las naciones de hoy prescindiendo del tipo de aspecto político que presenten. Están tratando con el mismo Dios que cumplió su propio consejo para con el rey Senaquerib, el gobernante de la Potencia Mundial Asiria, que dominó al mundo durante los siglos octavo y séptimo a. de la E.C. Este mismo Dios, Jehová, ha dado a conocer sus pensamientos acerca de todas las naciones que ahora están activas en este escenario mundial del siglo veinte, y lo que él ha pensado acerca de ellas es lo que nosotros los de esta generación con certeza veremos suceder en nuestro tiempo. Él nos ha revelado su propio consejo privado. Lo encontramos registrado en las páginas de la Biblia, ¿y quién hay en la Tierra hoy apto para desbaratar Su consejo? Su mano todopoderosa está siendo extendida para la ejecución de su consejo judicial, y ni siquiera todas las naciones combinadas pueden volverle la mano atrás y resguardarse de la destrucción. 35

SUS BUENAS PROMESAS SON SEGURAS Hoy la humanidad se encara a ser destruida por una Tercera Guerra Mundial con armas nucleares y ver arruinado el ambiente natural del hombre. Por eso, ¿qué hay del consejo de Jehová acerca de un gobierno mundial? Desde el mismo tiempo en que el hombre hizo lo incorrecto y se puso a seguir un proceder de gobernarse a sí mismo en independencia de su Padre celestial, Jehová Dios ha pensado acerca de un gobierno mundial como la única solución a las crecientes dificultades y problemas de la humanidad. Inmediatamente aconsejó a favor de tal gobierno para todo el globo terráqueo, con él mismo como el Gobernador Supremo. Su pensamiento y consejo no son ideas vanas de su mente. Él sabe exactamente cómo hacer que lo que ha pensado y aconsejado se convierta en realidad. Sabe cómo se hará que se efectúe su pensamiento y consejo, y sabe qué será el fin. Tiene todo el poder y la energía dinámica por medio de los cuales alcanzar ese glorioso fin. Por lo tanto él es “aquel que declara desde el principio el final.” Es el Gobernador que conoce el fin desde el 36

principio. (Isaías 46:10) Debido a su presciencia exacta de lo que va a hacer, él es “Jehová, que está haciendo estas cosas, conocidas desde la antigüedad.”—Hechos 15:17, 18; Amós 9:12. En el mismo libro con el cual la Biblia comienza, en Génesis 3:15, el Gobernador Todopoderoso de toda la creación dio a saber su pensamiento fundamental en cuanto al gobierno mundial que sería la necesidad vital de todos los habitantes de la Tierra. En el mismo libro con el cual termina la Biblia, en Revelación 11:15-18, el Gobernador legítimo y propio sobre toda la humanidad da descripción profética de su toma de la gobernación suya por mucho tiempo suspendida y dice: 37

“Y el séptimo ángel tocó su trompeta. Y ocurrieron voces fuertes en el cielo, diciendo: ‘El reino del mundo sí llegó a ser el reino de nuestro Señor y de su Cristo [la “descendencia” de la mujer según se predijo en Génesis 3:15], y él gobernará como rey para siempre jamás.’ Y los veinticuatro ancianos que estaban sentados sobre sus tronos delante de Dios cayeron sobre sus rostros y adoraron a Dios, diciendo: ‘Te damos gracias, Jehová Dios, el Todopoderoso, El que eres y que eras, porque has tomado tu gran poder y has empezado a gobernar como rey. Pero las naciones se airaron, y vino tu propia ira, y el tiempo señalado para que los muertos fuesen juzgados, y para dar su galardón a tus esclavos los profetas y a los santos y a los que temen tu nombre, a los pequeños y a los grandes, y para causar la ruina de los que están arruinando la tierra.’” 38

Al examinar las condiciones mundiales hoy, ¿no pensamos que es tiempo ya de que el Señor Dios Todopoderoso cause la ruina de los que están arruinando la Tierra? ¡No queremos que se le arruine hasta tal condición que nosotras las personas ya no podamos vivir en ella! Es absolutamente necesario que “el reino del mundo” llegue a ser el reino del Señor Dios Todopoderoso, con “su Cristo” como asociado en el gobierno. Él tiene que gobernar como rey para siempre jamás, y tiene que manifestar su condición de rey a todos nosotros los que estamos en la Tierra por medio de arruinar a los que arruinan su propiedad, la Tierra. Revelación 11:15 presenta esto como cosa absolutamente segura, como si ya hubiera ocurrido. Esa declaración es una promesa divina que no puede ser retirada. ¡Jamás fracasará! 39

Es una promesa de origen divino que anuncia bien para todos los de nuestra generación que anhelan un mundo unido de la humanidad bajo un gobierno mundial dirigido por uno que cumple su palabra fielmente. Es verdad que él promete cosas que son casi increíbles. Ahora promete cosas mucho mayores que las cosas que se le prometieron a Israel el pueblo de Jehová, más de quince siglos antes de nuestra era común. Sin embargo, Jehová tiene suficiente poder como para cumplir estas cosas de mayor grandeza. 40

Para poner en libertad a su pueblo esclavizado, Israel, se requirió que Jehová rompiera el agarro de la Potencia Mundial Egipcia. Entonces tuvo que dividir las aguas del mar Rojo para que su pueblo liberado cruzara sobre tierra seca. Entonces tuvo que dejar que las aguas arroparan a los hombres de la caballería egipcia y los carros que venían en persecución y a su orgulloso Faraón. Cuarenta años después, Jehová tuvo que represar las aguas en inundación del río Jordán para que su pueblo cruzara a la Tierra Prometida. Entonces, por seis años tuvo que pelear a favor de ellos, derribando los muros de Jericó y subyugando la mayor parte del país para repartirlo entre las doce tribus de Israel. A pesar de todos los formidables obstáculos, Dios, que no miente, cumplió la promesa que le había dado a su pueblo. En testimonio de ese hecho histórico, el juez Josué, el sucesor del profeta Moisés, registró las siguientes palabras memorables: 41

“Todos sus enemigos los dio Jehová en manos de ellos. No falló ni una promesa de toda la buena promesa que le había hecho Jehová a la casa de Israel; todo se realizó.”—Josué 21:44, 45; 23:10. 42

Ahora se acerca el magnífico día en el cual los miembros de nuestra generación que entonces estén vivos podrán dar testimonio de que ni una sola promesa de toda la buena promesa de Dios acerca de un gobierno mundial justo ha fallado. Él habrá hecho que todo se haya realizado. Por eso, con plena confianza en Él podemos ponernos a examinar sus maravillosas promesas que tienen que ver con el gobierno mundial. Felices seremos si finalmente podemos llegar a ser sus testigos y decir acerca de su promesa: “¡Es la verdad!”—Isaías 43:9, 10. 43

[Preguntas del estudio] 1. A diferencia de los políticos, ¿a dónde debemos dirigirnos a aprender acerca del futuro? 2. La prueba de deidad tiene como base que se pueda hacer ¿qué, en cuanto a la profecía? 3. ¿En qué respecto deben ser testigos para sus dioses los profetas? 4-6. ¿Qué desafío les presenta a los dioses nacionales Isaías 43:9? 7. ¿Quiénes deberían servir de testigos de ellos y quiénes deberían oír a éstos? 8. Según la identificación que da el desafiador, ¿quién es él? 9. ¿A quiénes ha hecho Jehová sus testigos, y cómo? 10. ¿De qué manera es que no fue formado dios alguno antes de Jehová? 11. ¿Por qué no fue formado dios alguno antes de Jehová? 12. ¿Por qué no será formado ningún dios después de Jehová?

13. ¿En qué casos han continuado sin ser después de Jehová ciertos dioses? 14, 15. ¿Cómo creó Jehová a sus testigos, y sin que nadie lo ayudara? 16. ¿A quién se vieron obligados a atribuir la salvación los salvados? 17. Cuando Él actúa, ¿por qué no puede nadie más volver atrás lo que Él hace? 18. ¿Cómo repitió Jehová la salvación, pero en escala mayor? 19. ¿Cómo hizo Jehová el Recomprador que los marineros caldeos lanzaran gritos quejumbrosos? 20. ¿Para quiénes quebró Ciro el Grande las barras de la prisión, y cómo? 21. ¿Quién demostró así que era el Rey del Israel liberado? 22, 23. (a) ¿En qué sentido puede Jehová correctamente decir: “Yo soy el primero y yo soy el último”? (b) ¿Dónde están sus testigos que verifican este hecho? 24, 25. ¿Por qué es un honor que se nos llame Sus testigos? 26, 27. (a) ¿Por qué deberían ser también testigos de Jehová los cristianos verdaderos? (b) ¿De qué organización imperial las ha libertado él? 28. ¿Quién es el Ciro Mayor, y cómo ha sido éste como un águila? 29, 30. En cuanto a Su consejo, ¿qué testimonio pueden dar los testigos de Jehová? 31, 32. ¿Cómo se apegó Jehová a su consejo contra Asiria? 33, 34. ¿Cómo afectó a Senaquerib el que Jehová ejecutara Su consejo? 35. Su mano está ahora extendida para ejecutar ¿qué consejo? 36. ¿Por qué no son ideas vanas Su pensamiento y consejo acerca de gobierno? 37, 38. ¿Qué muestran Génesis 3:15 y Revelación 11:15-18 acerca del conocimiento de Jehová en cuanto a gobierno? 39. ¿De qué manera tiene que manifestarnos Jehová su reino? 40. ¿Por qué son seguras sus promesas, que son mayores que las que se le hicieron a Israel? 41, 42. Para que se registrara lo que está en Josué 21:44, 45, ¿qué hazañas hizo Jehová? 43. ¿Qué tiempo se acerca en el cual testificaremos: “¡Es la verdad!”?

Capítulo 3 Cambios mundiales predichos hasta la llegada del reino de Dios “TIEMPOS DE CAMBIO”... esas palabras describen lo que esta generación ha experimentado desde el importantísimo año de 1914 E.C. Como lo que se observaría en un viejo calidoscopio al que se diera vueltas, las formas de las cosas han cambiado. Los cambios... ¿a cuántos de nosotros han agradado? No todos hemos quedado complacidos. Se nos hace poco placentero el oponernos a nuestras mejores inclinaciones para ajustarnos a los cambios no deseados. ¡Se ha acercado el tiempo en que ha de acontecer el mayor cambio de toda la experiencia humana! Ese tiempo es un tiempo ya fijo en un horario, y afortunadamente el cambio tremendo que acontecerá estará bajo control, para los mejores intereses eternos de todos los que aman tiempos buenos y estables. ¿Cómo podemos estar seguros de esto? Hoy vemos poderosas fuerzas políticas que están adquiriendo fortaleza de año en año, y que se inclinan a cambiar la faz del mundo, por decirlo así. Están convencidas de que el futuro de la humanidad está en sus manos. A estas fuerzas radicales que cambian el mundo no les interesa lo que nosotros, los individuos de término medio, quisiéramos tener. Una considerable cantidad de personas prefieren la vieja manera de hacer las cosas, de dirigir las cosas, una manera que permite amplia selección personal. Las fuerzas políticas que se apegan a la manera de gobernar los asuntos humanos que ha sido la práctica de mucho tiempo son fuertes todavía, y ofrecen resistencia, aunque resistencia que se va debilitando, a las fuerzas crecientes que tienen como objeto desarraigar y derribar los viejos estilos de manejar los intereses de la humanidad. 2

Así resulta que tenemos los dos grupos de mayor tamaño en el escenario terrestre hoy. Del primer grupo que está a favor de cambio revolucionario rápido y sin reparar en obstáculos por lo común se dice que es el partido radical. Al otro grupo, que mantiene un fuerte enlace con el pasado y sus estructuras y formas, muy apropiadamente se le llama el partido conservador. Extraño como parezca, puede suceder que el gobierno de una nación que haya sido establecido por una revolución violenta se haga conservador después de un considerable espacio de tiempo. Se une a las filas de los conservadores. Parece que se va acercando rápidamente una contienda final de careo definitivo entre los radicales y los conservadores. En la actualidad los dos grupos políticos están tratando de sobrellevarse entre sí. Exteriormente, tratan de parecer cordiales recíprocamente. Pero siempre guardan reservas en el corazón cuando se comunican formalmente entre sí. Fundamentalmente, en el fondo de las cosas, son diferentes. Sencillamente no se mezclan... tal como el hierro fuerte no se mezcla con el barro del alfarero.—Daniel 2:43. 3

Esta situación es nueva para la historia humana. Especialmente ha adquirido forma en nuestro siglo veinte. Antes de la guerra mundial de 1914-1918, la situación que hoy es general por todo el mundo ciertamente no se esperaba, no había sido predicha. Ni siquiera los políticos que consultan a clarividentes y astrólogos recibieron indicio de esto en aquel tiempo antes de que la primera guerra mundial sacudiera su complacencia. Ciertamente el hombre miope no vio de antemano a la sociedad humana tan profundamente dividida en sentido político como lo está hoy, y como lo ha estado desde la I Guerra Mundial. Pero ¿estamos nosotros al tanto de que este estado político de los asuntos humanos fue ilustrado proféticamente hace más de 2.580 años, o aproximadamente en el año 605 antes de nuestra era común? 4

Esa fecha antigua nos haría retroceder hasta el tiempo en que Babilonia era la potencia mundial. Como expresión de su imperialismo mundial, esta Potencia Mundial Babilónica había destruido a la ciudad de fama mundial de Jerusalén y su templo que estaba dedicado a la adoración del Dios de los hebreos, Jehová. En tiempo tan distante en el pasado hubiera sido imposible para un clarividente, un astrólogo o cualquier otro simple hombre predecir la condición política de nuestro día. 5

6

¡Todos tenemos que admitir eso!

Pues bien, ¿qué prueba tenemos de que alguien en el cielo o en la Tierra haya predicho esto? Aunque casi parezca increíble, tenemos esa prueba. Viene de Aquel que trazó el curso que seguiría el gobierno humano desde el día de Babilonia hasta nuestro mismo día. Existe la prueba que muestra que el curso de esas potencias mundiales fue trazado y que el curso que se trazó para ellas hasta ahora mismo fue seguido en la historia humana. Todo esto tuvo que tomar en consideración cambios en tiempos y sazones para cosas de importancia mayúscula, además de la remoción de una dinastía de gobernantes mundiales a favor de un nuevo conjunto de gobernantes mundiales, hasta de una raza diferente. También tomó en cuenta el más grande cambio y transferencia de potencia mundial que acontece en toda la historia humana, el cambio que está en el futuro cercano para esta generación de la humanidad. Para un trazado tan exacto del curso del gobierno humano para la humanidad se exige alguien sobrehumano, que conozca el gran final desde el principio. Se exige a Dios, no al llamado “dios de este sistema de cosas,” sino al Dios Todopoderoso, el Dios Omnisapiente, el Creador del hombre.—2 Corintios 4:4; Romanos 11:33. 7

Su trazado del curso o el bosquejo de la historia humana tenía que ser revelado a alguien en la Tierra, para que éste lo pusiera por escrito e hiciera de él un registro que todos pudiéramos consultar. Ese alguien fue un joven hebreo llamado Daniel. Si él no hubiera sido adorador del Dios Todopoderoso, Omnisapiente, esta revelación nunca se le hubiera hecho. Él captó el sentido y valor de la revelación que se le hizo. Por eso Daniel, 8

en su libro de profecía, escribió estas palabras de aprecio y agradecimiento a la Fuente Divina de su información: “Que el nombre de Dios llegue a ser bendito de tiempo indefinido aun a tiempo indefinido, porque la sabiduría y el poderío... porque pertenecen a él. Y él está cambiando tiempos y sazones, removiendo reyes y estableciendo reyes, dando sabiduría a los sabios y conocimiento a los que conocen el discernimiento. Está revelando las cosas profundas y las cosas ocultas, sabiendo lo que está en la oscuridad, y con él de veras mora la luz. A ti, oh Dios de mis antepasados, doy alabanza y encomio, porque sabiduría y poderío me has dado. Y ahora me has hecho saber lo que solicitamos de ti, porque nos has hecho saber el asunto mismo del rey.”— Daniel 2:20-23. 9

Cuando el profeta Daniel le reveló al olvidadizo gobernante de Babilonia el olvidado “asunto del rey,” este político, el más encumbrado de su tiempo, Nabucodonosor, fue lo suficientemente honrado como para admitir que solo el Dios Altísimo pudiera hacer tal revelación acerca del futuro entonces oscuro y escondido. Con profundo respeto le dijo a Daniel: 10

“Verdaderamente el Dios de ustedes es un Dios de dioses y un Señor de reyes y un Revelador de secretos, porque pudiste revelar este secreto.”— Daniel 2:47. 11

¿Qué gobernante político hoy, después de leer el relato de Daniel sobre el secreto revelado y entonces comparar esto con el curso o derrotero del gobierno mundial hasta ahora, reconocería tal cosa acerca del Dios de Daniel y de sus tres compañeros hebreos? En vano buscamos un gobernante político tan honrado y dispuesto a humillarse a sí mismo que muestre que está dejando que el secreto que se le reveló a Daniel guíe su propio derrotero. Por lo tanto, el cambio mundial que pronto producirá el Divino Cambiador de tiempos y sazones les sobrevendrá a todos ellos con fuerza trituradora. 12

¿Qué fue lo que convenció al profeta Daniel así como al político principal de aquel día, el rey Nabucodonosor de Babilonia, de que Aquel que podía dar tal vista anticipada de miles de años de la historia humana y así estar ‘declarando el fin desde el principio’ tenía que ser Dios Todopoderoso? (Isaías 46:10, Versión Moderna [Mod]) Eran los requisitos humanamente imposibles que estorbaban una revelación de aquella índole. En el segundo año de su reinado como conquistador de Jerusalén con su templo de la adoración de Jehová, Nabucodonosor tuvo un sueño. Al despertar del sueño, no pudo recordarlo. Este asunto lo agitó profundamente, porque el sueño olvidado parecía comunicarle un mensaje de importancia suprema. Sometió a sus astrólogos y sus sacerdotes practicantes de magia a una prueba anormal al exigir que no solo interpretaran el sueño, sino que, primero, se lo hicieran recordar al rey. Porque ellos dijeron que aquello que se exigía de ellos era completamente 13

irrazonable, el rey Nabucodonosor ordenó que se les diera muerte como farsantes en su profesión profética. Pero hasta el más prominente psicólogo de hoy día pudiera concordar en que al tomar aquella decisión el rey estaba mentalmente desequilibrado. La extrema emergencia que ahora se había presentado afectaba al profeta Daniel, porque a él se le consideraba preeminente entre los sabios de Babilonia. Él le preguntó al funcionario de la guardia de corps del rey por qué había venido a matarlos a él y sus tres compañeros hebreos, Hananías, Misael y Azarías. Cuando se le informó la razón, Daniel pidió que se extendiera por un solo día el tiempo que se daba antes de que fueran ejecutados los sabios de Babilonia. Confiaba en que nada le era imposible a su Dios, Jehová. Las oraciones combinadas de Daniel y sus tres compañeros hebreos no resultaron dirigidas a un dios falso, mítico. Tanto el sueño de Nabucodonosor como su significado de importancia mundial les fueron revelados a Daniel en una profética “visión de la noche” que le envió su Dios, Jehová. (Daniel 2:19) Después de bendecir al Hacedor de cosas humanamente imposibles y de atribuirle la honra a Él, Daniel le pidió a Arioc el jefe de la guardia de corps del rey Nabucodonosor que lo llevara ante el perplejo emperador del Imperio Babilonio. 14

La vida de Daniel y de sus tres compañeros hebreos estaba en juego. Si él no le recordaba al emperador el sueño olvidado y entonces, con ese fundamento, daba una explicación satisfactoria, tendrían que ser ejecutados con todos los sabios de Babilonia. Esto le imponía una prueba, no a un hombre, sino al Dios verdadero del universo, porque los astrólogos y sacerdotes practicantes de magia de Babilonia ya habían fracasado. En lo que Daniel ahora le reveló al gobernante de la Potencia Mundial Babilónica él llegó a ser sobresalientemente un testigo de Jehová, uno de los testigos de Jehová de antes del cristianismo. (Isaías 43:10-12; 44:8) Como excelente ejemplo para todos los testigos de Jehová de la actualidad, Daniel no se atribuyó lo que ahora estaba por revelarle al político más prominente del mundo, sino que dio la gloria al verdadero “Dios en los cielos” al decir: 15

“El secreto que el rey mismo pide, los sabios, los sortílegos, los sacerdotes practicantes de magia y los astrólogos mismos no pueden mostrarlo al rey. No obstante, existe un Dios en los cielos que es un Revelador de secretos, y él ha hecho saber al rey Nabucodonosor lo que ha de ocurrir en la parte final de los días. Tu sueño y las visiones de tu cabeza sobre tu cama... esto es.”—Daniel 2:27, 28. 16

Si el sueño de Nabucodonosor hubiera sido un simple sueño sin propósito, sin significado, como el sueño que pudiera venirle a cualquiera, nunca hubiera sido registrado en la Palabra de Jehová, la Biblia. Fue un sueño con propósito enviado por el Divino “Revelador de secretos,” pero carecería de significado si no pudiera ser explicado. Y sin embargo, el Dios Todopoderoso de los cielos borró de la mente de Nabucodonosor todo 17

recuerdo del sueño. ¿No estaba Jehová derrotando su propósito al hacer esto, al hacer que la memoria del rey quedara en blanco? De ninguna manera. Más bien, estaba colocando la base para magnificar su propio poder sobrehumano. Estaba presentando un problema que solo un dios, solo el Dios verdadero, podría resolver. Por su manera de encargarse de aquel asunto de tanta importancia mundial, Jehová hizo necesario dar el testimonio del poder divino al “rey de reyes” terrestre de aquel día antiguo. El rey se vio impelido a usar su autoridad absoluta y pedir que se le hiciera recordar el sueño y se le diera la interpretación. Pidió esto, y tuvo que aceptarlo cuando se le dio milagrosamente. Gustárale o no a Nabucodonosor, consiguió lo que exigió. ¡Así, al principio de la gobernación sin opositores de la Potencia Mundial Babilónica, a este político de prominencia se le probó que hay un Dios, que Dios existe!—Daniel 2:1, 28. 18

EL SUEÑO DE CAMBIOS EN POTENCIAS MUNDIALES Un viejo adagio dice: “El hombre propone, pero Dios dispone.” Esto es cierto con relación a los asuntos mundiales. El Creador del cielo y la Tierra realmente se interesa en los asuntos mundiales de nuestra Tierra. Él se interesa en lo que sucede aquí, porque la Tierra sobre la cual vivimos es de Él, no el dominio apropiado del comunismo mundial ni de la democracia poseedora de capital. El hecho de que Sus intereses en la Tierra vienen en primer lugar y de que finalmente serán reclamados y atendidos, Jehová lo ilustró en el sueño que su profeta Daniel le reveló de nuevo al rey Nabucodonosor de Babilonia en el auge del poder de éste, cuando Babilonia se inclinaba a reclamar que podía conquistar toda la Tierra. Con la mayor atención, el rey escuchó la Palabra de Dios y la tomó en serio, a medida que Daniel el profeta de Jehová pasó a decir: 19

“Tú, oh rey, estabas contemplando, y, ¡mira! cierta imagen inmensa. Esa imagen, que era grande y cuyo resplandor era extraordinario, estaba de pie enfrente de ti, y su apariencia era pavorosa. En lo que respecta a aquella imagen, su cabeza era de buen oro, sus pechos y sus brazos eran de plata, su vientre y sus muslos eran de cobre, sus piernas eran de hierro, sus pies eran en parte de hierro y en parte de barro moldeado. Seguiste mirando hasta que una piedra fue cortada, no por manos, y dio contra la imagen en sus pies de hierro y de barro moldeado y los trituró. En aquel tiempo el hierro, el barro moldeado, el cobre, la plata y el oro fueron, todos juntos, triturados y llegaron a ser como el tamo de la era del verano, y el viento se los llevó de modo que no se halló ningún rastro de ellos. Y en cuanto a la piedra que dio contra la imagen, llegó a ser una gran montaña y llenó toda la tierra.”—Daniel 2:31-35. 20

Podemos imaginarnos lo pasmado de asombro que quedó el rey Nabucodonosor al oír esta descripción inspirada. ¡Encajaba con exactitud con el sueño como él lo había visto! Esta gran imagen que tenía tan 21

deslumbrante resplandor era una que inspiraba temor, pavor, y era terrible por lo impresionante. ¿Cómo pudiera haber sido posible que la hubiera olvidado? ¡Pero así había sido! Si el sueño acerca de ella nunca le hubiera sido recordado, el mensaje que éste tenía el propósito de comunicar se hubiera perdido para siempre. Puesto que el sueño evidentemente fue enviado por poder divino, al que entonces era el “rey de reyes” del mundo, tiene que tener algún mensaje oportuno de consecuencia mundial. Solo Dios pudiera haber reproducido en una visión nocturna a Daniel lo que se había desvanecido por completo de la mente de Nabucodonosor. Pero ¿podía el mismo Dios explicar el significado del sueño olvidado? De seguro el Dios que fraguó y envió el sueño debería saber lo que quería decir con él. Podía decir lo que significaba la imagen de semejanza humana, desde la cabeza hasta los dedos de los pies. Al dar un sueño completo, que revelaba cómo se dispuso de la significativa imagen, demostró que Él conocía y estaba ‘declarando el fin desde el principio.’ ¡Por eso, ‘adelante,’ oh Daniel! No bastaba con meramente revelar el sueño profético. Lo que salvaría de la muerte a Daniel y todos los demás sabios de Babilonia sería el explicarlo también. Daniel tenía una explicación de la imagen del sueño, pero ¿satisfaría su interpretación como la interpretación correcta al rey Nabucodonosor, un gobernante pagano que había destruido el templo de Jehová en Jerusalén? ¿Es una interpretación que nos satisfaga a nosotros hoy, no solo como razonable y lógica, sino también como en armonía con todo el resto de la Palabra revelada de Dios, la Biblia inspirada? Hoy nosotros, que evidentemente estamos viviendo en el tiempo del “fin” del cumplimiento del sueño, deberíamos estar más interesados que Nabucodonosor, quien estaba viviendo al tiempo del “principio” de la realización del sueño. Él no estaba amenazado por la trituración mundial que todavía está por acontecer. ¡Nosotros lo estamos! 22

Arioc, el jefe de la guardia de corps de Nabucodonosor, quizás haya aflojado el agarro de su espada a medida que Daniel pasó a decirle a su comandante en jefe militar: “Este es el sueño, y su interpretación la diremos delante del rey. Tú, oh rey, el rey de reyes, tú a quien el Dios del cielo ha dado el reino, la potencia, y la fuerza y la dignidad, y en cuya mano ha dado, dondequiera que están morando los hijos de la humanidad, las bestias del campo y las criaturas aladas de los cielos, y a quien él ha hecho gobernante sobre todos ellos, tú mismo eres la cabeza de oro.”— Daniel 2:36-38. 23

El que a Nabucodonosor se le dijera al principio de la explicación de la imagen que ésta tenía que ver con él y realmente empezaba con él debería haber aumentado su interés en la interpretación del sueño entero. El que se le dijera que él estaba simbolizado por una cabeza hecha del metal más precioso que se conocía entonces difícilmente pudiera haber resultado en lo que no fuera agradarle y hacerle pensar que se le estaba 24

otorgando la dignidad debida. La cabeza dorada apropiadamente representaba a un emperador, el “rey de reyes” a quien el Dios del cielo le había permitido llegar a ser la figura mundial dominante, el gobernante de la Potencia Mundial Babilónica. Así, lo que fue representado por la imagen de cuatro diferentes metales no comenzó con Nemrod el cusita de la raza camítica, quien había fundado la Babel o Babilonia original más de 1.500 años antes.—Génesis 10:8-10; 1 Crónicas 1:10. Además, la imagen simbólica no comenzó con la Potencia Mundial Egipcia, un imperio camítico que fue la Primera Potencia Mundial de la cual se toma nota en el registro bíblico. (Génesis 10:6, 13, 14; 12:11 a 13:1 inclusive; Salmos 78:51; 105:23, 27; 106:21, 22) Adicionalmente, la imagen simbólica no comenzó con la Potencia Mundial Asiria, un imperio semítico que llegó a ser la Segunda Potencia Mundial del registro bíblico. (Génesis 10:21, 22; 2:14; 25:18; 2 Reyes 15:19-29) En 632 a. de la E.C. Nabucodonosor participó en derribar a la Potencia Mundial Asiria y de esa manera establecer el Imperio Neobabilonio, que alcanzó la categoría de Tercera Potencia Mundial del registro bíblico.—Nahúm 2:8 a 3:18 inclusive; Sofonías 2:13. 25

Unos veinticinco años más tarde, después que el emperador Nabucodonosor fue usado como el instrumento de Jehová para destruir a la Jerusalén infiel, aplicaron estas palabras del profeta Daniel: “En [tu] mano [el Dios del cielo] ha dado, dondequiera que están morando los hijos de la humanidad, las bestias del campo y las criaturas aladas de los cielos, y a [ti] él ha hecho gobernante sobre todos ellos.” (Daniel 2:38) Así fue, porque, con la destrucción de Jerusalén por los babilonios en 607 a. de la E.C., un reino típico de Jehová Dios cesó de existir en la Tierra.— 1 Crónicas 29:23; 2 Crónicas 36:17-21. 26

Puesto que Daniel le dijo a Nabucodonosor: “Tú mismo eres la cabeza de oro,” la imagen metálica como un todo representó una serie de emperadores o gobernantes mundiales. En realidad, la “cabeza de oro” abarcaba más que a Nabucodonosor mismo en lo que representaba. Representó a la dinastía gobernante que fue establecida en él. Así, la cabeza de oro representó, en su plenitud, a Nabucodonosor mismo, entonces a su hijo mayor Evil-merodac, y entonces a Nabonido el yerno de Nabucodonosor, y finalmente a Belsasar (Baltasar) el nieto de Nabucodonosor. (2 Reyes 25:27-30; Jeremías 52:31-34; Daniel 5:10, 11, 18, 22) Esta dinastía estuvo como representante de la Potencia Mundial Babilónica. Por consiguiente, la serie de cuatro metales en la imagen del sueño de Nabucodonosor representa una serie de potencias mundiales que han ejercido dominación mundial sin que interviniera en ello el reino de Dios (ni el reino terrestre típico ni el reino celestial antitípico). La interpretación que Daniel dio del sueño prueba este punto. 27

Señalando a la dominación mundial que ejercerían los sucesores de la Potencia Mundial Babilónica, Daniel siguió con su interpretación y le 28

dijo a Nabucodonosor, el “rey de reyes”: “Y después de ti se levantará otro reino inferior a ti; y otro reino, uno tercero, de cobre, que gobernará sobre toda la tierra.”—Daniel 2:39. Daniel no dio el nombre de aquel reino, “inferior” a Nabucodonosor, que vendría inmediatamente después de la Potencia Mundial Babilónica. El haber dado su nombre hubiera puesto en guardia a la Potencia Mundial Babilónica contra la aspirante futura a la dominación mundial. Pero por las profecías anteriores de Isaías (13:1-17; 21:2-9) Daniel pudo haber sabido que los medos, los aliados de los persas, estarían envueltos en derribar a Babilonia de su encumbrada posición de potencia mundial. 29

Daniel pudo haber sabido también, por Isaías 44:24 a 45:7 inclusive, que Jehová usaría a un hombre llamado Ciro, quien resultó ser persa, para traer la venganza divina sobre la Potencia Mundial Babilónica por haber destruido ésta a Jerusalén y su templo de la adoración de Jehová. (Isaías 46:11) Como estudiante de la profecía de Jeremías también, Daniel sabía que los medos serían prominentes en el sitio final de Babilonia y participarían en derribar a esta perseguidora de su pueblo. (Jeremías 51:28; Daniel 9:2) Pero Daniel no le reveló entonces esta información a Nabucodonosor, quien no viviría para ver aquel derribo. ¿Para qué preocuparlo? 30

El profeta Daniel tuvo el privilegio de, por decirlo así, presentar al “reino” o potencia mundial que fue simbolizada por la plata de la imagen del sueño. Esto fue en aquella noche de otoño de 539 a. de la E.C. cuando el nieto de Nabucodonosor, el rey Belsasar, estuvo celebrando un banquete real con mil de sus grandes dentro de la ciudad sitiada de Babilonia. En el auge de su banquete, una mano milagrosa escribió en la pared las palabras enigmáticas “Mene, Mene, Tekel y Parsín.” Como último recurso, el aterrorizado rey Belsasar tuvo que llamar a Daniel para que interpretara esta escritura a mano en la pared. Al explicar la última palabra, “Parsín,” que es el plural de la palabra “Peres,” Daniel le dijo a Belsasar: “PERES, tu reino ha sido dividido y dado a los medos y los persas.” Aquella misma noche los sitiadores obtuvieron entrada en Babilonia, el rey Belsasar fue muerto, y se estableció la Potencia Mundial Medopersa. Puesto que los medos y los persas eran arios, el poder mundial ahora pasó de la raza semítica a la raza jafética.—Daniel 5:1-31; 6:12; Ester 1:19. 31

Tal como la plata es inferior al oro, así la Potencia Mundial Medopersa fue inferior a la Babilónica. ¿De qué manera? Porque no se ensalzó a posición tan alta como lo hizo el Imperio Babilonio, que destruyó a la ciudad de Jerusalén y su templo para la adoración de Jehová. Así, el rey de Babilonia, Nabucodonosor, pareció ensalzarse sobre Jehová Dios, cuyo nombre se llamaba sobre la ciudad de Jerusalén donde los reyes de la línea real de David se sentaban sobre el “trono de Jehová.” (1 Crónicas 29:23; Isaías 14:4-14) Además, con aquel derribo del reino típico de Jehová en el año 607 a. de la E.C. comenzó el período de 2.520 años 32

conocido como “los tiempos de los gentiles” o “tiempos señalados de las naciones.” (Luc. 21:24, Mod, NM) En vez de tratar de ‘parecerse al Altísimo,’ el rey Ciro, el conquistador de Babilonia, reconoció la Deidad de Jehová. En reconocimiento de la voluntad expresada de Jehová, el rey Ciro trató de armonizar su curso con lo que Jehová había profetizado acerca de él en los capítulos cuarenta y cuatro y cuarenta y cinco de Isaías. Por eso, en 537 a. de la E.C., dejó que un bando de voluntarios israelitas y los servidores de éstos salieran de su prisión babilónica y regresaran a su país, para reedificar la ciudad de Jerusalén y su santo templo. Pero el reino típico de Jehová no fue restablecido allí, con un descendiente real del rey David que se sentara sobre el “trono de Jehová” en Jerusalén.— 2 Crónicas 36:20-23; Esdras 1:1 a 2:2 inclusive. 33

LA POTENCIA MUNDIAL GRIEGA (MACEDÓNICA) A pesar de sus consideraciones en sentido de misericordia al pueblo escogido de Jehová, la Potencia Mundial Persa no había de durar hasta nuestro mismo siglo veinte. Acerca de la sucesora inmediata de la Potencia Mundial Medopersa, el profeta Daniel pasó a decirle a Nabucodonosor: “Y otro reino, uno tercero, de cobre, que gobernará sobre toda la tierra.”— Daniel 2:39. 34

Esas palabras indicarían que el “tercero,” el “reino” o potencia mundial semejante a cobre, sería más extenso que la Potencia Mundial Medopersa y la Potencia Mundial Babilónica. Puesto que el cobre es un metal semiprecioso, inferior a la plata, esta potencia mundial en ascenso sería inferior a la Potencia Mundial Medopersa. Respecto a esto, no fue honrada con ningún privilegio como el de librar al pueblo desterrado de Jehová de su condición de prisioneros en Babilonia. En los días del nieto de Nabucodonosor, el rey Belsasar, Daniel el intérprete de sueños aprendió precisamente quién establecería aquella potencia mundial ‘tercera’ semejante a cobre. Sería un conquistador helénico o griego. No hay evidencia de que Daniel le revelara esta información acerca de días del futuro lejano al rey Belsasar. 35

Al explicar el sueño profético que se le envió a Daniel en el cual éste vio un carnero de dos cuernos que fue vencido por una cabra peluda de un solo cuerno, el santo ángel de Jehová dijo: “El carnero que tú viste que poseía los dos cuernos representa a los reyes de Media y Persia. Y el macho cabrío peludo representa al rey de Grecia [o Hélade]; y en cuanto al gran cuerno que estaba entre sus ojos, representa al primer rey. Y puesto que ése fue quebrado, de modo que hubo cuatro que finalmente se levantaron en lugar de él, hay cuatro reinos de su nación que se pondrán de pie, pero no con su poder.”—Daniel 8:20-22. 36

Así, con más de doscientos años de anticipación, se predijo que el “reino” que fue simbolizado por el vientre y los muslos de cobre de la 37

imagen del sueño sería la Potencia Mundial Griega. Su “primer rey” resultó ser el conquistador mundial Alejandro III de Macedonia, quien emprendió la conquista del Imperio Persa. En 334 a. de la E.C. él le infligió una decisiva y aplastadora derrota al emperador persa de entonces y estableció la Potencia Mundial Griega (Macedónica). En 332 a. de la E.C. Alejandro Magno puso bajo su dominio a la provincia de Judea, y con ella a Jerusalén. Después de eso Egipto cayó ante él, y allí se fundó la ciudad de Alejandría para conmemorar su nombre. Este nuevo puerto de mar egipcio alcanzó gran prosperidad, y llegó a tener una población judía de buen tamaño. Debido a las conquistas que efectuó hasta el mismo río Indo de la India y hacia abajo en Egipto, y a que estableció guarniciones militares en los países conquistados, el griego común que hablaban los soldados de Alejandro Magno llegó a ser el lenguaje internacional del día. Sirvió de medio para la comunicación internacional, y en el siglo tercero a. de la E.C. los judíos de habla griega de Alejandría, Egipto, empezaron a traducir al griego común las Escrituras Hebreas inspiradas. Este ejemplo fue seguido por los escritores inspirados que produjeron los veintisiete libros de las Escrituras Cristianas, desde Mateo hasta Revelación. De esta manera, a los que hablaban y leían el griego común se les hizo posible leer universalmente el total de la Biblia inspirada. 38

En el año 323 a. de la E.C., Alejandro Magno, que fue simbolizado por el “gran cuerno” del macho cabrío peludo, murió en Babilonia, la que fue capital del Imperio Babilonio. Con el transcurso del tiempo su vasto imperio fue dividido entre cuatro de sus generales griegos. Esto resultó en cuatro reinos helénicos o grecizados. Judea y Jerusalén con el tiempo llegaron a ser parte del reino que empezó el general Seleuco I Nicátor. Por supuesto, ninguno de estos cuatro reinos helénicos podía compararse con el gran imperio de Alejandro Magno. De manera maravillosa, ciertamente, se cumplió la profecía de que del “gran cuerno” (Alejandro Magno) saldrían ‘cuatro cuernos’ (cuatro reinos helénicos), pero ninguno de estos cuatro con el poder y la magnitud del imperio de Alejandro. No obstante, estos cuatro reinos menores juntos mantuvieron la dominación de la Potencia Mundial Griega, simbolizada por la parte de cobre de la imagen. 39

EL REINO SEMEJANTE A HIERRO El tiempo pasó hasta penetrar en el primer siglo antes de nuestra era común. Llegó el tiempo para que el “Dios del cielo,” Jehová, cambiara tiempos y sazones y removiera reyes y estableciera reyes para la introducción de una nueva potencia mundial. (Daniel 2:19, 21) Roma, Italia, era ahora la potencia política en ascenso a la cual tener en cuenta. En el año 63 a. de la E.C. el general romano Pompeyo capturó a Jerusalén y extendió sobre Judea el control romano. En el año 30 a. de la E.C. el último de los cuatro reinos helénicos sufrió una derrota decisiva, y Egipto se convirtió en provincia romana. Esto marcó el establecimiento de la 40

Potencia Mundial Romana en el año quinientos setenta y siete de los “tiempos de los gentiles” o “tiempos señalados de las naciones.” Jerusalén seguía estando sin rey de la línea real de David de la tribu de Judá. “El trono de Jehová” ya no subsistía en la capital judía, Jerusalén.— 1 Crónicas 29:23. Aquí vemos el cumplimiento de lo que el profeta Daniel le había dicho al rey Nabucodonosor cuando estuvo interpretando el sueño olvidado de la imagen que estaba compuesta de cuatro metales. Al interpretar el significado del cuarto metal, el hierro, del cual estaban hechas las piernas de la imagen, Daniel dijo: “Y en cuanto al cuarto reino, resultará ser fuerte como el hierro. Puesto que el hierro está triturando y moliendo todo lo demás, así, como el hierro que desbarata, triturará y desbaratará aun a todos éstos.”—Daniel 2:40. 41

La Potencia Mundial Romana trituró a la Potencia Mundial Griega y se tragó los restos de las anteriores Potencias Mundiales Medopersa y Babilónica. No mostró respeto al “reino de los cielos,” “el reino de Dios,” que proclamaron Jesucristo y sus discípulos del primer siglo. En el año 33 E.C. profanó el Día de la Pascua judía al dar muerte a Jesucristo en un madero de tormento fuera de los muros de Jerusalén. Además, en el año 64 E.C., después de la quema de parte de la ciudad de Roma, comenzó a perseguir a los discípulos fieles de Jesucristo, tratando de triturar y desbaratar así al cristianismo verdadero. 42

En el año 70 E.C., en su esfuerzo por sofocar la revuelta de los judíos rebeldes, a Roma se le hizo necesario triturar y desbaratar a Jerusalén, y convirtió en ruinas la ciudad y su magnífico templo. Los 97.000 judíos no cristianizados que se las arreglaron para salir con vida de aquella horrible destrucción de su ciudad santa fueron distribuidos como esclavos cautivos a las partes ampliamente dispersas del Imperio Romano. Esto ocurrió en el año número seiscientos setenta y seis de los “tiempos de los gentiles,” y dejó 1.844 años todavía por transcurrir hasta el fin de los Tiempos de los Gentiles. 43

Jesucristo, al predecir la destrucción de Jerusalén por los romanos bajo el general Tito, hijo del emperador Vespasiano, dijo: “Y caerán [los judíos que estarían en la provincia romana de Judea] a filo de espada y serán llevados cautivos a todas las naciones; y Jerusalén será pisoteada por las naciones, hasta que se cumplan los tiempos señalados de las naciones.” (Lucas 21:20-24) Por esas palabras Jesucristo no quiso decir el pisoteo de simplemente el lugar de la ciudad por las naciones no judías, o gentiles. Allá en aquel tiempo la ciudad de Jerusalén representaba más de lo que representa la Jerusalén de hoy, la capital de la República de Israel, con su presidente elegido democráticamente y su Knesset (parlamento). Allá en el día de Cristo, Jerusalén con su templo representaba “la ciudad del gran Rey,” Jehová. (Mateo 5:35; 4:5) Esta ciudad que había sido la 44

ciudad del trono del reino típico de Jehová en la Tierra era símbolo del reino de Dios bajo el regir de su rey ungido de la familia real de David. Y así el reino mesiánico, al cual tenían derecho los descendientes reales de David, es la cosa que había de seguir siendo pisoteada por los gentiles hasta que terminaran los “tiempos señalados de la naciones” para que ocurriera este pisoteo sin la intervención de Dios. ¡Es al fin de los Tiempos de los Gentiles que nuestro siglo veinte entra en la consideración! 45

SE INCLUYE OTRA POTENCIA MUNDIAL Al dar una mirada retrospectiva desde nuestro siglo veinte, preguntamos: ¿Se cumple completamente en solo el Imperio Romano o la Potencia Mundial Romana ese “cuarto reino” representado por las piernas de hierro de la imagen del sueño de Nabucodonosor? La Biblia misma indica que no sería así. ¿Cómo? En los días del emperador Constantino en el siglo cuarto, el Imperio Romano se hizo “cristiano,” pero esto fue simplemente por decreto imperial y en nombre solamente. Este cambio de faz religiosa no creó una nueva potencia mundial, una potencia mundial cristiana; no trajo el reino de Dios como lo predicó Jesucristo. Sin embargo, una nueva potencia mundial sí vino después de pasar muchos siglos... de manera realmente política. Esto se indicó en el último libro de la Biblia, en Revelación 17:9, 10. 46

Allí, con referencia al hecho de que la ramera religiosa, Babilonia la Grande, monta una bestia salvaje de siete cabezas y diez cuernos, leemos: “Aquí es donde entra la inteligencia que tiene sabiduría: Las siete cabezas significan siete montañas, sobre las cuales se sienta la mujer. Y hay siete reyes: cinco han caído, uno es, el otro todavía no ha llegado, pero cuando sí llegue tiene que permanecer un corto tiempo.” Según esta explicación de los símbolos que se encuentran aquí en el libro de Revelación, la bestia salvaje representa un sistema político en la Tierra. Las siete cabezas de la bestia salvaje representan jefatura de cabeza sobre el sistema político, no jefatura de cabeza por las siete a la misma vez, sino jefatura por una sola cabeza simbólica tras la otra hasta la séptima y última cabeza. Apropiadamente las siete cabezas representan “siete montañas,” que dominan la tierra que está debajo. Muy apropiadamente, también, las siete cabezas representan “siete reyes,” porque los reyes son los cabezas de Estado y ejercen jefatura de cabeza o dominación. Como en la imagen del sueño de Nabucodonosor, los reyes representan reinos o potencias mundiales. 47

En cuanto a los “siete reyes,” el apóstol cristiano Juan escribió a fines del primer siglo E.C.: “Cinco han caído, uno es.” (Revelación 17:10) Cuando Juan escribió la Revelación lo tenían prisionero en la isla penal de Patmos por ser cristiano. (Revelación 1:1, 2, 9) Por eso, al escribir: “Cinco han caído, uno es,” Juan señala a un sexto “rey.” Ese era en el día de Juan. Por lo tanto, ¿cuál potencia mundial es la que Juan designa con la 48

expresión: “Uno es”? Ninguna sino la Potencia Mundial Romana. Aquí se le pone en la categoría de Sexta Potencia Mundial según la profecía bíblica. Entonces, ¿quiénes fueron los cinco “reyes” que habían caído antes de la Potencia Mundial Romana, uno por uno? Primero, la Potencia Mundial Egipcia; segundo, la Potencia Mundial Asiria; tercero, la Potencia Mundial Babilónica; cuarto, la Potencia Mundial Medopersa; y, quinto, la Potencia Mundial Griega. Sin embargo, la Sexta Potencia Mundial también había de caer, porque el ángel le dijo al apóstol Juan: “Uno es, el otro todavía no ha llegado.” (Revelación 17:10) Esto significaba que todavía vendría una séptima potencia mundial, que correspondería con la séptima cabeza de la bestia salvaje. En el día del apóstol Juan esa ‘séptima cabeza,’ o ‘séptima montaña,’ o ‘séptimo rey’ era un misterio. Pero siglos de historia mundial desde el día de Juan han aclarado el misterio. Entonces, ¿cuál es la Séptima Potencia Mundial de la profecía bíblica? Se presentó en el año 1763 E.C., en la forma del Imperio Británico, la Britania que regía los siete mares. 49

Doce años después, en 1775, las trece colonias americanas se separaron del Imperio Británico y establecieron la República Americana, los Estados Unidos de América. Con el transcurso del tiempo la República Americana de habla inglesa consideró aconsejable trabajar en unión con el Imperio Británico de habla inglesa, tanto en tiempos de paz como en tiempos de guerra, una cosa que fue enfatizada durante las Guerras Mundiales I y II. En realidad, pues, ha habido una Potencia Mundial Binaria de Gran Bretaña y los Estados Unidos. Por eso, por muchos años ya desde la Revolución Americana de 1775-1783 esta combinación política angloamericana ha sido la Séptima Potencia Mundial. Obra como una bestia de dos cuernos.—Revelación 13:11. 50

La Séptima Potencia Mundial ‘llegó’ al tiempo de Jehová para un cambio antes del establecimiento de su propio reino mesiánico. Acerca de la Séptima Potencia Mundial, Revelación 17:10 dice: “Pero cuando sí llegue tiene que permanecer un corto tiempo.” La sección americana de la Séptima Potencia Mundial acaba de celebrar su aniversario número doscientos. Esto es relativamente “un corto tiempo” en comparación con lo que duró la Potencia Mundial Romana, casi mil ochocientos años. Para ahora ese “corto tiempo” debe estar casi terminado, según el horario de Jehová. Una cosa es segura según la profecía bíblica: El reino mesiánico de Dios no estaba asignado a venir sino hasta que primero se hubiera presentado aquella Séptima Potencia Mundial en el escenario mundial. (Revelación 17:11-14) En vista de todo esto, queda muy claro que las piernas de hierro de la imagen del sueño de Nabucodonosor representan más que la Potencia Mundial Romana. Representan también el brote político resultante que surgió de ese Imperio Romano, a saber, la Potencia Mundial Angloamericana, la Séptima Potencia Mundial, que ha resultado 51

ser la más grande potencia mundial de todas desde un punto de vista humano. ¡Esta también ha sido como hierro, acero! PIES EN PARTE DE HIERRO Y EN PARTE DE BARRO Ahora a los rasgos finales del sueño profético que soñó, pero olvidó, el rey de Babilonia. El rey Nabucodonosor quiso saber lo que significaba la culminación del sueño, y nosotros deseamos lo mismo hoy día. Gracias a Jehová Dios, se inspiró a Daniel para que diera más explicación de los asuntos, y él dijo: “Y como contemplaste que los pies y los dedos de los pies eran en parte de barro moldeado de un alfarero y en parte de hierro, el reino mismo resultará dividido, pero algo de la dureza del hierro resultará haber en él, puesto que contemplaste al hierro mezclado con barro húmedo. Y en cuanto a que los dedos de los pies sean en parte de hierro y en parte de barro moldeado, el reino en parte resultará fuerte y en parte resultará frágil. Como contemplaste el hierro mezclado con barro húmedo, llegarán a estar mezclados con la prole de la humanidad; pero no resultará que se mantengan pegados, éste a aquél, tal como el hierro no se mezcla con barro moldeado.”—Daniel 2:41-43. 52

Con esas palabras proféticas se nos da la ilustración de un reino dividido. Puesto que así es como termina la imagen simbólica de potencias mundiales sucesivas, este estado de poderío mundial dividido es lo que debería existir hoy, en nuestro propio siglo veinte. ¡Así es! Por esta razón válida deberíamos estar cerca de la desaparición, del dejar de ser, de esta simbólica imagen de poderío mundial que por tanto tiempo ha subsistido. Cuando finalmente la imagen simbólica sí deje de ser, ¿qué sucede entonces? Según los “sabios” de este mundo, esta desaparición sería lo peor que pudiera suceder. Como ellos ven las cosas, eso significaría anarquía, caos. Por eso tratan de mantener en pie la imagen. 53

El escenario mundial todavía está bajo la sombra de la Séptima Potencia Mundial, ambas secciones de la cual están poderosamente armadas con bombas nucleares y proyectiles para transportarlas. Por eso todavía permanece en el sistema dominante de gobernación la fortaleza del hierro con su poder de triturar y desbaratar. Pero esta Potencia Mundial Angloamericana, junto con sus aliados, tiene que vérselas con otro factor, un factor más moderno. Este factor fue representado por el barro moldeado húmedo en la imagen del sueño de Nabucodonosor. ¿Qué representa éste a la luz de nuestro día actual? La explicación de Daniel dice para iluminación nuestra: “Llegarán a estar mezclados con la prole de la humanidad; pero no resultará que se mantengan pegados, éste a aquél, tal como el hierro no se mezcla con barro moldeado.” Por consiguiente, el barro moldeado simboliza “la prole de la humanidad,” o, literalmente, ‘la simiente de los hombres.’—Daniel 2:43. 54

El barro es muy apropiado símbolo de la ‘simiente de los hombres,’ porque Job 4:19 llama a los seres humanos “los que moran en casas de 55

barro, cuyo fundamento está en el polvo.” Y el muy afligido hombre Job le dijo a Jehová Dios: “Recuerda, por favor, que del barro me has hecho y a polvo me harás volver.” (Job 10:9) A pesar de la frágil naturaleza del “barro” del cual están hechos los que son “prole de la humanidad,” la tendencia de la gobernación humana en estas últimas décadas de su existencia ha sido ¿en qué dirección? No, no en dirección a Dios el Creador del “barro” animado, sino a las criaturas de barro, a la gente común, el “proletariado” como llamaban los antiguos romanos a la clase más baja o pobre de personas que lo único que contribuían al Estado político era prole (proles). La vieja gobernación tradicional se ha visto obligada a prestar cada vez más atención al clamor de la gente común que pide participar en los gobiernos que tienen sobre ellos. Sin embargo, no puede haber casamiento entre el viejo estilo de gobierno aristocrático, autoritario, y la gente común que favorece cambios radicales y pronunciados en el gobierno. ¡Tal como no puede haber una amalgama de hierro y barro! El hacer gobiernos democráticos por revoluciones u otros medios ha conducido a formas radicales de gobierno del proletariado. Y estas últimas están en oposición intransigente a la Séptima Potencia Mundial, la Potencia Mundial Binaria Angloamericana semejante a hierro. Hasta ahora las dos formas de gobernación se las han arreglado para vivir una al lado de la otra, pero no ha habido verdadero casamiento entre ellas. Los gobiernos y bloques radicales y del proletariado pudieran presentar la apariencia de ser muy fuertes y aparentemente aventajar en fortaleza por sus maniobras a la Potencia Mundial Angloamericana. Pero son precisamente tan frágiles como criaturas humanas de barro, que apoyan a los gobiernos radicales. No pueden fortalecer la imagen simbólica de gobernación mundial de modo que resista el siguiente cambio mundial. 56

[Preguntas del estudio] 1. ¿A qué cambio, el mayor de todos, van llevando nuestros tiempos? 2. ¿A qué fuerzas, que tienen la intención de causar cambios, todavía se ofrece resistencia? 3. ¿Cómo se tratan el uno al otro los dos grandes grupos políticos? 4. Antes de la I Guerra Mundial, ¿qué situación mundial no se esperaba? 5, 6. Allá en 605 a. de la E.C., ¿quiénes no podrían haber predicho la situación de hoy? 7. El trazar el curso del gobierno mundial pertenece ¿a quién? 8, 9. (a) ¿A quién se le reveló este bosquejo de la historia humana? (b) ¿Qué dijo él en aprecio a su Fuente de información? 10, 11. Cuando se le dijo el sueño que había tenido, ¿qué dijo Nabucodonosor acerca de Dios?

12. ¿Cómo difieren de Nabucodonosor los políticos de hoy día? 13. ¿A quiénes acudió Nabucodonosor con relación al sueño que había olvidado? 14. ¿Cómo obtuvo Daniel la información salvadora de vidas que necesitaba? 15, 16. Esto le imponía una prueba ¿a quién? y ¿a quién da la honra Daniel? 17. ¿Cómo magnificó Jehová su poder como “Revelador de secretos”? 18. ¿Cómo se vio obligado el rey a actuar de manera que se probara que Dios existe? 19. ¿Qué les mostrará Jehová a los políticos sobre reclamaciones en cuanto a la Tierra? 20. ¿En qué consistió el sueño que Daniel le recordó al rey? 21. ¿Cómo mostró así Dios que él conocía “el fin” desde el “principio”? 22. ¿Por qué razón nos interesa más a nosotros el sueño de lo que le interesaba al rey? 23. Según dijo Daniel, ¿a quién representaba la cabeza de oro de la imagen? ¿Por qué? 24. Entonces ¿comenzó la “imagen” con el fundador de Babilonia? 25. ¿Comenzó con la Primera Potencia Mundial, o la segunda? 26. ¿Por qué aplicaba la “imagen” desde la destrucción de Jerusalén en adelante? 27. ¿Qué representa, políticamente, cada metal de la “imagen”? 28, 29. ¿Por qué no se dio el nombre del reino siguiente, que sería inferior a Babilonia? 30. ¿De qué manera le era posible a Daniel saber quién derribaría a Babilonia? 31. ¿De qué manera tuvo Daniel el privilegio de presentar a la potencia que sucedería a Babilonia? 32. ¿De qué manera fue Medo-Persia “inferior” a Babilonia? 33. ¿Cómo armonizó Ciro su curso con la profecía de Isaías? 34. ¿Qué dijo Daniel el intérprete acerca de la sucesora de Medo-Persia? 35. ¿Cuándo aprendió Daniel quién sucedería a Medo-Persia? 36. ¿Cómo se le ilustró el derribo de Medo-Persia a Daniel?

37. ¿Qué hazañas ejecutó el “primer rey” del Imperio Griego? 38. ¿Cómo se hizo posible leer la Biblia entera en griego? 39. ¿Cómo surgieron cuatro reinos de estilo griego, según se había profetizado? 40. ¿Cómo se estableció la Potencia Mundial Romana para 30 a. de la E.C.? 41. Según la explicación de Daniel, ¿qué significado tenía el cuarto metal, hierro? 42. ¿Cómo se ve que el Imperio Romano no mostró respeto a los predicadores del Reino? 43. ¿Cuándo y por qué destruyó el Imperio Romano a Jerusalén? 44, 45. ¿Qué significó realmente el pisoteo de Jerusalén por los gentiles? 46. ¿Fue introducido el reino de Dios por el emperador romano Constantino? 47. ¿Qué representan las siete cabezas de la “bestia salvaje”? 48. ¿Quiénes fueron los cinco “reyes” que cayeron antes de Roma? 49. ¿A manos de quién cayó el sexto “rey” y cuándo? 50. ¿Cómo llegó a existir la Potencia Mundial Binaria Angloamericana? 51. ¿Por qué se abarcó más que el Imperio Romano en lo que representaron las piernas de hierro? 52. ¿Qué dijo Daniel acerca de los pies que en parte eran de hierro y en parte de barro? 53. ¿Qué estado de los asuntos políticos representaron aquellos pies? ¿Cuándo? 54. ¿Qué indica Daniel que representa el barro moldeado? 55. ¿Cómo ha habido un mezclarse con la “prole de la humanidad”? 56. ¿Por qué no hay casamiento entre el hierro y el barro?

Capítulo 4 Cómo se convierte en gobierno mundial el reino de Dios ¡LA “IMAGEN” simbólica de gobernación mundial por la política humana —su oro, su plata, su cobre, su hierro y su barro— está condenada a destrucción en conjunto! Jehová Dios, quien predijo el fin desde el principio, dice eso en su Palabra profética. Notemos, por lo que esa Palabra dice, que no es la condición de división de los pies y dedos lo que causa la caída de la “imagen.” No es ninguna guerra nuclear mundial entre el “hierro” simbólico y el “barro” simbólico lo que produce la destrucción de la “imagen” de pies a cabeza. El sueño profético, según Daniel el profeta de Jehová hizo que lo recordara la mente de Nabucodonosor, muestra claramente que la destrucción no viene de dentro de la “imagen,” sino que viene de fuera de ella. ¿De dónde, entonces? Daniel lo indicó cuando terminó su interpretación, al decirle al rey Nabucodonosor: “Y en los días de aquellos reyes el Dios del cielo establecerá un reino que nunca será reducido a ruinas. Y el reino mismo no será pasado a ningún otro pueblo. Triturará y pondrá fin a todos estos reinos, y él mismo subsistirá hasta tiempos indefinidos; puesto que contemplaste que de la montaña una piedra fue cortada, no por manos, y que trituró el hierro, el cobre, el barro moldeado, la plata y el oro. El gran Dios mismo ha hecho saber al rey lo que ha de ocurrir después de esto. Y el sueño es confiable, y la interpretación de él es digna de confianza.”—Daniel 2:44, 45. 2

Hoy nosotros, que podemos mirar atrás a los más de 2.580 años de tiempo que han pasado desde el sueño de Nabucodonosor, tenemos mucha más razón de la que jamás tuvo Nabucodonosor para creer que el sueño es confiable en significado y que la interpretación que Daniel dio de él es digna de confianza. Eso nos lleva a creer la palabra del “gran Dios.” Y por eso, ¿de dónde viene la destrucción de la “imagen” simbólica? Del “Dios del cielo,” Aquel que cambia los tiempos y sazones y abate reyes y establece a otros reyes según su propia voluntad. El tiempo fijo en el cual él va a hacer esto tiene que estar muy cercano. ¿Por qué? Porque allá a principios del otoño del año 1914 E.C. terminó el último año de los Tiempos de los Gentiles, “los tiempos señalados de las naciones.” Según las palabras de Cristo en Lucas 21:20-24, esto significó que había llegado el tiempo en el cual Dios haría que cesara el pisoteo por las naciones de lo que Jerusalén simbolizaba. ¿Cómo? 3

En el verano de 1914 estalló la guerra mundial entre la Séptima Potencia Mundial y las principales partes remanentes de la anterior Sexta Potencia Mundial, que por algún tiempo habían sido conocidas como el Sacro Imperio Romano de la Nación Germana. La cuestión principal en disputa era la dominación mundial aquí en la Tierra, una cuarta parte de la cual estaba entonces bajo el control del Imperio Británico. El reino 4

mesiánico de Dios no les interesaba ni importaba a los disputantes que se hallaban en guerra. Y sin embargo estaban peleando por aquello a lo cual el reino mesiánico de Dios (como estaba representado por la Jerusalén de los tiempos bíblicos) tenía el derecho, a saber, la gobernación mundial. El clero de la cristiandad oró a favor de los dos lados envueltos en el conflicto mundial. Pero ¿prestó atención Jehová Dios a las oraciones patrióticas, nacionalistas, del clero? ¡Ni por un momento! Según el cuadro profético que se da en Revelación 12:1-10, al cierre de los Tiempos de los Gentiles en 1914 Jehová Dios hizo que naciera arriba en los cielos su prometido reino mesiánico en las manos de Jesucristo, su Hijo entronizado. Así es como la “piedra” del sueño de Nabucodonosor fue cortada de la montaña sin la ayuda de manos humanas. El reino mesiánico en las manos del glorificado Jesucristo es la “piedra” del sueño. Ese reino prometido mucho tiempo atrás podría venir solo del “Dios del cielo,” Jehová, el Señor Soberano. 5

Por eso, la “montaña” de la cual se corta milagrosamente la piedra no es una de las “siete montañas” sobre las cuales ha estado sentada como una emperatriz la ramera religiosa, Babilonia la Grande. (Revelación 17:9, 10) La “montaña” simbólica no es una montaña de gobernación terrestre. Es una “montaña” de gobernación universal, porque es la soberanía universal del Creador del cielo y la Tierra, a saber, Jehová, “el gran Dios.” (Salmo 121:1, 2; Daniel 2:45) La “piedra” real fue cortada por poder divino de la “montaña” universal al fin de los Tiempos de los Gentiles en 1914 E.C. Desde entonces el reino mesiánico de Dios tiene derecho a intervenir en los asuntos de las naciones y hacer que “estas buenas nuevas del reino” se prediquen en toda la Tierra habitada “para testimonio a todas las naciones” antes de que les venga el fin. (Mateo 24:314) ¡Ahora el Reino está en acción! 6

En aquel año de la sacudida bélica de 1914 había más gobernantes sentados en tronos como reyes que en la actualidad. Allí existían las circunstancias para que se realizaran estas palabras de Daniel 2:44: “En los días de aquellos reyes el Dios del cielo establecerá un reino que nunca será reducido a ruinas.” Aquellos “reyes,” o cualesquier gobernantes políticos que desde entonces hayan llegado al poder en la Tierra, han rehusado prestar atención a las “buenas nuevas del reino” que ahora han recibido publicación de alcance mundial. Ellos, o sus gobiernos, se han opuesto o hasta han perseguido violentamente a los predicadores cristianos de las “buenas nuevas” del reino mesiánico establecido de Jehová. Esos “reyes” han hecho esto como expresión de que están resueltos a apegarse a sus soberanías terrestres. Entonces, ¿qué tiene que hacerse en cuanto a esos gobernantes que rehúsan ceder sus soberanías al reino mesiánico que Dios ha puesto en el poder? Daniel 2:44 nos da la respuesta: 7

“Y el reino mismo no será pasado a ningún otro pueblo. Triturará y pondrá fin a todos estos reinos, y él mismo subsistirá hasta tiempos indefinidos.” Una cosa como ésta significará el fin total de este sistema de cosas. Significará la desaparición eterna de la “imagen” simbólica de potencias mundiales políticas hechas por el hombre. Esto está en el futuro cercano, más cerca ahora que nunca antes desde 1914 E.C. La remoción de la “imagen” idolatrada de la gobernación humana no será pacífica. Se le triturará y molerá hasta que quede convertida en polvo. Cuando, por decirlo así, la “piedra” del Reino Mesiánico penetre en la atmósfera de nuestra Tierra en la misión que Dios le ha dado, no explotará como algún meteorito del espacio sideral. Con la plena fuerza de todo el impulso que ha acumulado desde 1914, esta “piedra” indestructible de dureza diamantina llegará a su objetivo con un golpe aplastador. ¿Dónde? 8

En los “pies” de la “imagen” simbólica, los “pies” de hierro y barro húmedo que todavía están en su lugar hoy. Nosotros, esta generación de la humanidad, estamos viviendo “en los días de aquellos reyes,” en los días de estos “pies” que en parte son hierro y en parte barro. Nosotros, esta generación de después de los Tiempos de los Gentiles, estamos por ser testigos de la colisión o choque de la “piedra” del Reino contra la Séptima Potencia Mundial y todos los demás gobiernos políticos dentro o fuera de la organización de las Naciones Unidas. Así, en un choque final sobre la cuestión suprema de soberanía universal, la “piedra” del Reino pondrá fin para siempre a “todos estos reinos.” ¿Qué significará eso para nosotros los que somos de esta generación que será sorprendida en medio mismo de este choque? ¿Hemos pensado alguna vez en eso? 9

La violenta manera en que se pone fin a este sistema de gobernación política de hechura humana que se extiende por toda la Tierra no dejará aquí un vacío en lo que se refiere a gobierno para la humanidad. El sueño profético de Nabucodonosor no muestra que en la Tierra haya de empezar un vacío sin gobierno en el cual todo habitante humano haya de hacer precisamente como le plazca sin sumisión a ningún gobierno. Más bien, el gobierno más magnífico y más poderoso de toda la historia humana tomará control completo de los sobrevivientes que habrá de entre esta generación. 10

Altamente favorecidos serán los de esta generación que tengan el privilegio de ver el cumplimiento de lo que el profeta Daniel vio en visión, de lo cual nos dio ésta descripción: “Seguiste mirando hasta que una piedra fue cortada, no por manos, y dio contra la imagen en sus pies de hierro y de barro moldeado y los trituró. En aquel tiempo el hierro, el barro moldeado, el cobre, la plata y el oro fueron, todos juntos, triturados y llegaron a ser como el tamo de la era del verano, y el viento se los llevó de modo que no se halló ningún rastro de ellos. Y en cuanto a la piedra que dio contra la imagen, llegó a ser una gran montaña y llenó toda la tierra.”—Daniel 2:34, 35. 11

¿Qué significa eso? Nada menos que esto: el reino mesiánico de Dios simbolizado por la “piedra” llenará la Tierra entera, todo lugar donde moran los hijos de los hombres. 12

La sede gubernamental estará en los cielos, donde a la diestra de Dios está sentado Jesucristo, en su trono y coronado, pero extenderá su poder sobrehumano hacia la Tierra, esta vez no con propósitos de destrucción, sino para dar gobernación perfecta y bendición a todos los habitantes obedientes de “toda la tierra.” Este será un gobierno estable, inmune a todo derribo por levantamientos revolucionarios. “Nunca será reducido a ruinas,” ni tendrá un sucesor humano. “No será pasado a ningún otro pueblo.” A diferencia de los reinos de gobernantes humanos moribundos desde el día de la Babilonia de Nemrod en adelante, “él mismo subsistirá hasta tiempos indefinidos,” para siempre. (Daniel 2:44, 45) Su Gobernante celestial, el Rey Mesiánico Jesucristo, a quien Jehová Dios ha conferido inmortalidad, no dejará que su gobierno muera y desaparezca. Él mismo vivirá “hasta tiempos indefinidos” para sostener ese reino para la realización plena de la voluntad de Dios y para la bendición interminable de toda la humanidad obediente en una Tierra perfectamente regida. 13

Y así es como el reino de Dios se convierte en gobierno mundial. Felices son todos los de esta generación de hoy que sobrevivan para verlo convertirse en tal cosa. ¡Quizás lleguen a ser sus súbditos amorosos y obedientes para siempre! 14

[Preguntas del estudio] 1, 2. ¿Cómo viene la destrucción de la “imagen”?... ¿de dentro o de fuera? 3. ¿Por qué tiene que estar cerca el tiempo en que Dios va a hacer cambios? 4. ¿Cómo reaccionó Dios a las oraciones del clero en cuanto a la I Guerra Mundial? 5, 6. ¿De qué montaña fue cortada la “piedra”? ¿Cuándo, y cómo? 7. ¿Cómo han mostrado “aquellos reyes” que están resueltos a seguir gobernando? 8. ¿Qué significa para nuestro sistema lo que se le hizo a la “imagen”? 9. ¿De qué colisión o choque será testigo esta generación de después de los Tiempos de los Gentiles? 10. ¿Por qué no quedará un vacío gubernamental cuando termine el regir humano? 11. Daniel vio que la “imagen” pulverizada fue reemplazada por ¿qué? 12. ¿Qué significa el que la montaña llene la Tierra? 13. ¿De qué manera será estable este gobierno, y por qué?

14. ¿Quiénes serán los felices de entre la generación de hoy?

Capítulo 5 Prediciendo el tiempo para la gobernación mundial DEMOS una mirada ahora a un mapa del mundo y localicemos los países de Irak, la Turquía asiática, Siria, el Líbano, Jordania e Israel. Si los gobernantes de esos países hubieran estado viviendo cerca del principio del siglo sexto antes de nuestra era común, hubieran estado bajo la dominación de la Tercera Potencia Mundial y éste es el mensaje que hubieran recibido oficialmente desde Babilonia: “Nabucodonosor el rey, a todos los pueblos, grupos nacionales y lenguajes que están morando en toda la tierra: Que se haga grande su paz. Las señales y maravillas que el Dios Altísimo ha ejecutado conmigo, me ha parecido bueno declararlas. ¡Cuán grandes son sus señales, y cuán poderosas son sus maravillas! Su reino es un reino hasta tiempo indefinido, y su gobernación es para generación tras generación.”—Daniel 4:1-3. 2

Con esas palabras trascendentales el que entonces era rey de Babilonia llamó atención, no a su propio Imperio Babilonio, la Tercera Potencia Mundial de la historia bíblica, sino al reino y gobernación del Dios Altísimo. Contando desde la participación del rey Nabucodonosor en la destrucción de la capital asiria, Nínive, en 632 a. de la E.C. hasta el derribo de Babilonia por Ciro el Persa en 539 a. de la E.C., el Imperio Babilonio de Nabucodonosor y su dinastía duró más o menos noventa y tres años, menos de un siglo. Pero el reino y gobernación del Dios Altísimo son para tiempo indefinido, de generación en generación, es decir, para siempre, hasta tiempo sin fin. El reino y la gobernación de Jehová son más extensos, no solo en cuanto a tiempo, sino también en cuanto a la zona bajo control. El imperio de Nabucodonosor abarcó solo una parte del sudoeste de Asia, el Oriente Medio y finalmente Egipto, pero la zona bajo el control del Dios Altísimo es universal, pues abarca tanto los cielos como la Tierra. ¡El Dios Altísimo es el Soberano Universal, y eso para siempre! 3

La India y otras naciones y tribus modernas tienen sus dioses nacionales o tribuales, y la antigua Babilonia tuvo sus dioses. Pero Nabucodonosor, un adorador del dios babilonio Marduc, se vio obligado a proclamar por todo el mundo que hay un Dios Altísimo, que ejecuta señales y maravillas que son grandes y maravillosas, en prueba de su verdadera existencia. La proclamación de Nabucodonosor habla acerca de esto. 4

EL SUEÑO DEL ÁRBOL VOLUMINOSO DE NABUCODONOSOR A todos nosotros hoy nos interesan los árboles. Podemos plantar árboles, pero todos tenemos que admitir que los árboles no son creación del hombre. Estaban aquí en la Tierra miles de años antes de la llegada del hombre en 4026 a. de la E.C. Algunos árboles son maravillosos tanto por 5

su altura como por su mucha edad, como las secoyas gigantescas del estado norteamericano de California. El rey Nabucodonosor nos cuenta acerca de un árbol más alto que la secoya gigantesca de mayor altura, el sempervirens, de 112 metros de altura. ¡Qué estrépito tiene que haber habido cuando aquel árbol fue cortado y dio contra la tierra! El tocón y su vasto sistema de raíces fueron dejados en el suelo. Ahora representémonos en la mente que a ese tocón o tronco basal se le han ajustado estrechamente alrededor ataduras de hierro y cobre para asegurarse de que nada crezca desde él. ¿Para siempre? No, sino por dos mil quinientos veinte años. ¿Pudiera el tocón de un árbol ser mantenido vivo por tanto tiempo? Este tocón de árbol que consideramos sí. Y, contando desde el tiempo en que Nabucodonosor hizo su proclamación acerca de este tocón en particular, esos dos mil quinientos veinte años terminarían en algún punto en el tiempo en nuestro propio siglo veinte. Pues bien, ¿se le han removido las ataduras a ese tocón en nuestro tiempo? ¿Significaría eso algo para nosotros hoy? ¡Podemos averiguarlo! 6

EL PROPIO RELATO DEL EMPERADOR COMO SE HA CONSERVADO Averigüemos primero cómo este tocón de árbol vino a la atención del gobernante del Imperio Babilonio, la Tercera Potencia Mundial de la profecía bíblica. En su proclamación imperial se nos dice: “Yo, Nabucodonosor, me hallaba tranquilo en mi casa y floreciendo en mi palacio. Hubo un sueño que contemplé, y empezó a darme miedo. Y hubo imágenes mentales sobre mi cama y visiones de mi cabeza que empezaron a asustarme. Y de mí se emitía una orden de traer delante de mí a todos los sabios de Babilonia, para que me hicieran saber la interpretación misma del sueño.” Entonces ¿qué? 7

“En aquel tiempo los sacerdotes practicantes de magia, los sortílegos, los caldeos y los astrólogos estuvieron entrando; y yo estaba diciendo delante de ellos lo que era el sueño, pero su interpretación no me la estaban haciendo saber. Y al fin llegó a estar delante de mí Daniel, cuyo nombre es Beltsasar según el nombre de mi dios y en quien hay el espíritu de los santos dioses; y delante de él dije lo que era el sueño.”—Daniel 4:48. 8

La experiencia de Nabucodonosor muestra lo vano e inútil que es el que los gobernantes nacionales y políticos en general recurran a los astrólogos y clarividentes y otros practicantes del ocultismo para tratar de averiguar con exactitud lo que el futuro encierra. Los gobernantes no tienen con ellos hoy al profeta Daniel al cual ir, pero nosotros sí tenemos el libro profético de Daniel. De él podemos aprender acerca de cosas que ya han marcado a nuestro siglo veinte y lo que el futuro inminente encierra para esta generación. El sueño de Nabucodonosor y la interpretación de éste por Daniel y cómo se cumplió a manera de 9

ilustración como sello o garantía de su valor profético, todo esto nos interesa a nosotros ahora. Por eso, prestemos atención ahora mientras Nabucodonosor le cuenta a Daniel su sueño de importancia mundial. Dijo: “Ahora bien, sucedió que las visiones de mi cabeza sobre mi cama estuve contemplando, y, ¡mira! un árbol en medio de la tierra, la altura del cual era inmensa. El árbol creció y se hizo fuerte, y su altura misma finalmente alcanzó a los cielos, y era visible hasta la extremidad de toda la tierra. Su follaje era hermoso, y su fruto era abundante, y había alimento para todos en él. Bajo él las bestias del campo buscaban sombra, y en sus ramas mayores los pájaros de los cielos moraban, y de él toda carne se alimentaba. 10

“Continué contemplando [yo, el rey Nabucodonosor,] en las visiones de mi cabeza sobre mi cama, y, ¡mira! un vigilante, aun un santo, que venía bajando de los cielos mismos. Estaba clamando fuertemente, y esto es lo que estaba diciendo: ‘Corten el árbol, y desmochen sus ramas mayores. Sacudan su follaje, y esparzan su fruto. Que la bestia huya de debajo de él, y los pájaros de sus ramas mayores. No obstante, dejen su tronco mismo con las raíces en la tierra, aun con una atadura de hierro y de cobre, entre la hierba del campo; y con el rocío de los cielos sea mojado, y con la bestia sea su porción entre la vegetación de la tierra. Sea cambiado su corazón del de la humanidad, y que se le dé el corazón de una bestia, y pasen siete tiempos sobre él. Por el decreto de vigilantes es la cosa, y por el dicho de santos la solicitud es, con la intención de que sepan los vivientes que el Altísimo es Gobernante en el reino de la humanidad y que a quien él quiere dárselo se lo da, y coloca sobre él aun al de más humilde condición de la humanidad.’”—Daniel 4:10-17. 11

Según esta descripción del sueño como se la dio el rey Nabucodonosor a Daniel, el árbol sobresalía entre todos los demás árboles. Era visible a todos los habitantes de la Tierra, de modo que nadie podía pasarlo por alto. Era un buen árbol. Aunque no se le llamó “el árbol de la vida,” era un árbol que sostenía la vida, porque llevaba fruto en abundancia, suficiente para alimentar a toda carne en la Tierra. ¿Por qué, pues, había de ser como el árbol prominente que se describe en la profecía de Ezequiel, capítulo treinta y uno, versículos tres a catorce inclusive, por el hecho de que se le cortaría? ¿Cómo podría el tronco del árbol cortado haber tenido el “corazón” de la humanidad y esto haber sido cambiado al “corazón de una bestia”? ¿Cómo podría probar el que se cortara el árbol y se dejara que su tronco caído yaciera por “siete tiempos” sobre la tierra herbosa que “el Altísimo es Gobernante en el reino de la humanidad y que a quien él quiere dárselo se lo da, y coloca sobre él aun al de más humilde condición de la humanidad”? Según el “vigilante” o centinela o guardián angélico, ése era el propósito de la acción que se pintó en el sueño del rey. 12

INTERPRETACIÓN DEL SUEÑO

¿Puede el Altísimo como Gobernante Supremo emitir órdenes de que un reino, un imperio, una potencia mundial, sea cortado como un árbol que llegara al cielo, y puede él colocar o establecer a otro rey y dar a ése la dignidad de rey, aunque venga de la condición más humilde de la humanidad? 13

Estas eran las principales preguntas que en realidad estaban ante Daniel para que las contestara, cuando el rey Nabucodonosor ahora le pidió la interpretación del sueño acerca del árbol. (Daniel 4:18) Pero ¿por qué se perturbó Daniel cuando el Dios Altísimo le reveló el significado del sueño del rey, y por qué tuvo que animar Nabucodonosor a Daniel para que no temiera explicar el sueño? Fue porque, en primer lugar, el derribo del árbol inmenso tenía una aplicación directa a Nabucodonosor mismo. Por lo tanto Daniel deseó que este sueño portentoso pudiera cumplirse igualmente en alguna otra persona, en adversarios que odiaran al rey. (Daniel 4:19) Daniel contesta nuestras propias preguntas cuando le oímos decir: 14

“El árbol que contemplaste, que se hizo grande y llegó a ser fuerte y la altura del cual finalmente alcanzó a los cielos y que era visible a toda la tierra, . . . eres tú, oh rey, porque te has hecho grande y has llegado a ser fuerte, y tu grandeza se ha hecho grande y ha alcanzado a los cielos, y tu gobernación hasta la extremidad de la tierra.”—Daniel 4:20-22. 15

Así vemos que aquel árbol cuya altura llegaba al cielo representaba gobernación, una gobernación por todo el mundo investida en alguien como gobernante. Era este gobernante quien tenía un “corazón” que podía ser cambiado del de la humanidad al de una bestia. Tal cambio significaría una caída, un rebajamiento, ¿verdad? Este rebajamiento era según la voluntad y propósito del Dios Altísimo, el “Gobernante en el reino de la humanidad,” porque Daniel pasó a decirle a Nabucodonosor: 16

“Y porque el rey contempló a un vigilante, aun a un santo, que venía bajando de los cielos, que también decía: ‘Corten el árbol, y arruínenlo. No obstante, dejen su tronco mismo con las raíces en la tierra, pero con una atadura de hierro y de cobre, entre la hierba del campo, y con el rocío de los cielos sea mojado, y con las bestias del campo sea su porción hasta que siete tiempos mismos pasen sobre él,’ ésta es la interpretación, oh rey, y el decreto del Altísimo es lo que tiene que sucederle a mi señor el rey. Y te echarán de entre los hombres, y con las bestias del campo tu morada llegará a ser, y la vegetación es lo que te darán aun a ti a comer tal como a toros; y con el rocío de los cielos tú mismo estarás mojándote, y siete tiempos mismos pasarán sobre ti, hasta que sepas que el Altísimo es Gobernante en el reino de la humanidad, y que a quien él quiere dárselo se lo da.”—Daniel 4:23-25. 17

Sin embargo, después de pasar “siete tiempos” sobre el rey en aquella condición rebajada, ¿qué? El sueño de Nabucodonosor no dio una 18

respuesta directa a esta pregunta, pero la interpretación de Daniel sí. Mostrando el lado bueno del sueño, Daniel le dijo al rey: “Y porque dijeron que se dejara el tronco con las raíces del árbol, tu reino te será seguro después que sepas que los cielos están gobernando. Por lo tanto, oh rey, que te parezca bueno mi consejo, y remueve tus propios pecados por justicia, y tu iniquidad por medio de mostrar misericordia a los pobres. Quizás ocurra un alargamiento de tu prosperidad.”—Daniel 4:26, 27. A pesar del consejo valeroso de Daniel, Nabucodonosor continuó siendo orgulloso por ser el monarca absoluto de la Potencia Mundial Babilónica, la Tercera Potencia Mundial de la profecía bíblica. Así, un año lunar después se hallaba andando sobre el techo del palacio real en Babilonia. Entonces, como Daniel mismo nos dice, “el rey estaba respondiendo y diciendo: ‘¿No es ésta Babilonia la Grande, la cual yo mismo he construido para la casa real con la fortaleza de mi poder y para la dignidad de mi majestad?’ Mientras la palabra todavía estaba en la boca del rey, hubo una voz que cayó de los cielos: ‘A ti se te dice, oh Nabucodonosor el rey: “El reino mismo se ha ido de ti, y de la humanidad te están echando, sí, y con las bestias del campo tu morada será. Vegetación te darán aun a ti para comer tal como a toros, y siete tiempos mismos pasarán sobre ti, hasta que sepas que el Altísimo es Gobernante en el reino de la humanidad, y que a quien él quiere dárselo se lo da.”’”— Daniel 4:28-32. 19

UNA ILUSTRACIÓN PROFÉTICA DE LA REALIDAD Lo que ahora sucedió fue una ilustración profética de una realidad de proporciones mucho mayores. De modo que el sueño de Nabucodonosor comenzó a cumplirse en la persona de un hombre que tenía gobernación de alcance mundial. 20

Es decir, el simbólico “árbol” inmenso fue cortado y se estrelló ruidosamente cuan largo era contra la tierra. Solo el tocón o tronco basal, el “tronco con las raíces,” quedó en pie, pero fue cercado o atado con círculos de hierro y cobre para detener todo crecimiento hacia arriba desde él por la duración de los “siete tiempos” decretados. En realidad, abajo vino el poderoso Nabucodonosor desde su trono imperial. El “Gobernante en el reino de la humanidad” impuso esto forzosamente al herir de demencia al rey de Babilonia, cambiando su corazón del de un hombre poderoso en gobernación al de una bestia, un toro que se alimenta de vegetación afuera en el campo. Probablemente los funcionarios de la corte de Nabucodonosor recordaron el sueño y la interpretación de Daniel y temieron reemplazarlo con otra persona en el trono. Pero fue especialmente el Dios Altísimo quien estuvo reservando el trono imperial para que Nabucodonosor fuera restaurado a él al fin de los “siete tiempos” señalados.—Daniel 5:18-21. 21

Los asuntos progresaron tal como le había dicho la voz que cayó de los cielos al jactancioso gobernante mundial: “En aquel momento la palabra misma se cumplió en Nabucodonosor, y de entre la humanidad fue echado, y vegetación empezó a comer tal como los toros, y con el rocío de los cielos su propio cuerpo se mojaba, hasta que su cabello mismo le creció largo como plumas de águilas y sus uñas como garras de pájaros.”— Daniel 4:33; compare con Hechos 12:21-23. 22

¿Significó esta degradación del rey Nabucodonosor la caída del Imperio Babilonio? ¡De ninguna manera! Según el decreto del Dios Altísimo este imperio había de continuar por algunas décadas todavía como la Tercera Potencia Mundial, que ahora correspondía con el tronco basal o tronco con las raíces del inmenso árbol que se vio en el sueño de Nabucodonosor. El profeta Daniel continuó como siervo del rey demente, sirviendo de “gobernante sobre todo el distrito jurisdiccional de Babilonia y el prefecto principal sobre todos los sabios de Babilonia.” También, los tres compañeros hebreos de Daniel: Hananías, Misael y Azarías, continuaron participando en la administración de los asuntos de aquel distrito jurisdiccional. (Daniel 1:11-19; 2:48, 49; 3:30) Ciertamente estos cuatro prominentes desterrados judíos en Babilonia estaban midiendo el tiempo de la enfermedad del rey y estaban esperando el tiempo en que lo recibirían de nuevo en su juicio a su trono imperial como monarca gentil que había aprendido bien la lección de que “el Altísimo es Gobernante en el reino de la humanidad, y que a quien él quiere dárselo se lo da.” Al fin de los “siete tiempos” esto sucedió. 23

El rey mismo nos dice lo que pasó: “Y al fin de los días yo, Nabucodonosor, alcé a los cielos mis ojos, y mi propio entendimiento empezó a volverme; y bendije al Altísimo mismo, y a Aquel que vive hasta tiempo indefinido alabé y glorifiqué, porque su gobernación es una gobernación hasta tiempo indefinido y su reino es para generación tras generación. Y a todos los habitantes de la tierra se les está considerando como meramente nada, y él está haciendo conforme a su propia voluntad entre el ejército de los cielos y los habitantes de la tierra. Y no existe nadie que pueda detener su mano o que pueda decirle: ‘¿Qué has estado haciendo?’”—Daniel 4:34, 35. 24

En aquel tiempo, hasta donde el sueño profético se aplica a Nabucodonosor mismo, las ataduras de hierro y cobre alrededor del tronco basal del árbol inmenso fueron abiertas y removidas. Los “siete tiempos” literales se habían vencido, y el rey en su juicio había de ser restaurado al poder. Nabucodonosor hace un registro de esto, pues pasa a decir: “Al mismo tiempo mi entendimiento mismo empezó a volver a mí, y para la dignidad de mi reino mi majestad y mi resplandor mismos empezaron a volver a mí; y aun mis encumbrados funcionarios reales y mis grandes me empezaron a buscar ansiosamente, y fui restablecido sobre mi propio 25

reino, y grandeza extraordinaria me fue añadida.” (Daniel 4:36) ¡Qué “señal de curación” ejecutó así el Dios Altísimo!—Daniel 4:2; Hechos 4:22. Parecería muy apropiado que Daniel, Hananías, Misael, y Azarías como “encumbrados funcionarios reales” estuvieran entre los que buscaron al rey restaurado como señal de su lealtad a él y de haber salvaguardado sus intereses imperiales durante la enfermedad mental de éste. (Compare con 2 Samuel 19:11-15.) Estos cuatro adoradores de Jehová Dios estarían particularmente interesados en el efecto que tendría en el rey la experiencia humillante que tuvo a manos del Dios de ellos. A mayor grado que toda otra persona en el servicio real del rey, apreciaron el que Nabucodonosor confesará la Soberanía Universal del “Gobernante” Altísimo, a quien Nabucodonosor llamó “el Rey de los cielos,” que reina para siempre. Vieron que este Rey celestial le devolvió la gobernación real a un hombre que por “siete tiempos” fue “aun [el] de más humilde condición de la humanidad” por haber sido degradado a un nivel inferior al humano, el de una bestia del campo. (Daniel 4:17) ¡Entendían lo que Jehová había estado haciendo! 26

“SIETE TIEMPOS” ¿Precisamente cuánto duraron aquellos “siete tiempos” durante los cuales Nabucodonosor estuvo mentalmente desequilibrado e incapacitado para la gobernación real? En la obra histórica intitulada “Las antigüedades de los judíos,” producida en el griego del primer siglo por el judío Flavio Josefo, él trata estos “siete tiempos” como “siete años.” (Libro X, Capítulo X, párrafo 6) En el siglo siguiente el traductor griego del libro de Daniel, a saber, Teodocio, de Ponto, Asia Menor, entre los años 180 y 182 E.C., tradujo la expresión hebrea como “siete años” (heptá ete). Otros comentadores judíos entienden que “tiempos” aquí significa “años.” De hecho, varios traductores modernos lo vierten así. La Sagrada Biblia, Versión Bover-Cantera (católica romana), dice: “Transcurran sobre él [ti] siete años.” (Daniel 4:13, 20, 22, 29) La traducción de Torres Amat (también católica romana) dice: “siete tiempos, o años.” 27

Por eso, el significado sería de siete años lunares bíblicos, puesto que el tiempo que se decretó provenía del Autor de la Santa Biblia, Jehová Dios. Hay informes de que hay inscripciones antiguas que muestran que hubo varios años en los cuales Nabucodonosor no hizo nada. Estos años bien pudieran coincidir con los “siete tiempos” en los cuales estuvo incapacitado como hombre en desequilibrio mental. 28

Sin embargo, ¿es eso todo lo que está encerrado en este asunto? No hay fundamento para dudar de que el sueño de Nabucodonosor acerca del árbol cuya altura llegaba hasta el cielo haya sido profético, cuando se considera que fue inspirado por Jehová Dios. Pero ¿está limitado el cumplimiento del sueño a aquel cumplimiento antiguo en la persona de un solo hombre, el rey Nabucodonosor, para que él aprendiera una lección en 29

cuanto a gobernación? ¿Es por medio de su experiencia personal que el significado del trato de Jehová con él se logra, a saber, “que sepan los vivientes que el Altísimo es Gobernante en el reino de la humanidad y que a quien él quiere dárselo se lo da, y coloca sobre él aun al de más humilde condición de la humanidad”? (Daniel 4:17) Al colocar sobre el reino de la humanidad “aun al de más humilde condición de la humanidad” ¿coloca el Dios Altísimo sobre la humanidad el más bajo grado de gobernación? ¡Evidentemente no! (Daniel 4:36, 37) Para los “vivientes” en nuestro importante siglo veinte, el sueño de Nabucodonosor tiene que tener otro cumplimiento, y uno de mayor trascendencia. ¡Así es! Hechos de la antigüedad certifican el primer cumplimiento del sueño del rey de Babilonia. ¿Cómo establecen los hechos posteriores el cumplimiento mayor y completo de ese mismo sueño? Bueno, Nabucodonosor, quien allá fue por el momento representado por el árbol voluminoso e imponente, era gobernante del Imperio Babilonio. Por eso él simbolizaba gobernación en escala mundial, que recibía reconocimiento por todo el mundo. De manera semejante, el “árbol” del cual él fue ilustración representó gobernación en escala mayor a la que tenía el rey de Babilonia. En aquel tiempo, ¿qué gobernación o dominio era mayor que la del emperador Nabucodonosor, que no tenía rival en la Tierra? Solo la gobernación de aquel a quien Nabucodonosor reconoció como “el Altísimo,” “el Rey de los cielos.” (Daniel 4:34, 37) Por esa razón, el árbol del sueño, un árbol cuya altura llegaba al cielo y que servía para sostener la vida, simbolizó la SOBERANÍA UNIVERSAL del Altísimo, Jehová Dios, particularmente en su relación con nuestra Tierra. Esta soberanía universal es eterna, “hasta tiempo indefinido,” para todas las generaciones. 30

El que se dé ese significado a ese “árbol” hace que surjan preguntas en nuestra mente ¿verdad? Sí. Por ejemplo: ¿cómo pudiera alguna vez ser cortado tal “árbol”? ¿Y esto por mandato del Soberano Universal, el Dios Altísimo mismo? ¿Cómo se coloca o establece de nuevo? La propia Palabra escrita de Dios, la Santa Biblia, explica. 31

Por largo espacio de tiempo la Soberanía Universal de Jehová estuvo representada aquí en la Tierra. ¿Cómo? ¿Dónde? ¿Cuándo? Esto fue por medio del reino que él estableció sobre su pueblo escogido, las doce tribus de Israel. Esto fue particularmente cierto cuando el ungido de Jehová, el rey David, fue hecho rey sobre las doce tribus de Israel en conjunto, después de lo cual él mudó su ciudad capital a Jerusalén, que había capturado de los jebuseos paganos. Eso fue en 1070 a. de la E.C. 32

En aquel mismo año el rey David hizo que la sagrada Arca del Pacto de Jehová fuera introducida en la ciudad y colocada en una tienda de campaña levantada cerca de su palacio real. De ese modo Jehová empezó a reinar, por decirlo así, en Jerusalén la capital de Israel, y del rey israelita se decía que se sentaba en “el trono de Jehová.” (1 Crónicas 29:23; 16:131) Repetidamente el rey David reconoció que Jehová era su Rey celestial, 33

el verdadero Gobernante de Israel. (Salmo 5:2; 24:7-10; 68:24; 145:1) Ciertamente, pues, el reino que tenía su centro en Jerusalén, donde David y sus descendientes reales se sentaban en “el trono de Jehová,” representaba la Soberanía Universal de Jehová con referencia a nuestra Tierra.—2 Crónicas 13:5, 8. Lógicamente aquella expresión de la Soberanía Universal de Jehová según era ejercida por medio del rey David y sus sucesores reales en Jerusalén fue lo que representó el árbol inmenso que se vio en el sueño de Nabucodonosor. En el sueño, aquel árbol que dominaba sobre todo fue derribado, cortado. En fidelidad a ese sueño, la Soberanía Divina según era ejercida por medio de la línea de reyes davídicos en Jerusalén fue cortada, derribada, puesta fuera de función. ¿Cuándo? En 607 a. de la E.C., cuando Nabucodonosor de Babilonia destruyó a Jerusalén y su templo y se llevó al exilio, para morir allí, a su último rey entronizado, Sedequías de la familia de David. Jehová mismo hizo que el árbol simbólico de soberanía fuera cortado, porque él mismo usó a Nabucodonosor como su “siervo” para producir este derribo. Jehová mismo tomó la responsabilidad por derrocar esta expresión visible de su soberanía con relación a nuestra Tierra.—Jeremías 25:8-11, 17-29; Ezequiel 21:22-27. 34

En aquel tiempo las ataduras de restricción divina representadas por las ataduras de hierro y cobre fueron colocadas alrededor del tronco basal restante de la soberanía divina según se ejercía por medio de un descendiente real del rey David. Ningún renuevo o vástago real podía salir de este tronco basal para que de nuevo creciera la soberanía divina ejercida por medio de un rey davídico. ¿Por cuánto tiempo había de continuar esta apariencia de rebajamiento de la Soberanía Universal de Jehová? Por “siete tiempos,” que fueron ilustrados proféticamente por los “siete años” durante los cuales Nabucodonosor estuvo sin trono y viviendo como una bestia del campo. Por eso, ¿cuánto tiempo abarcan “siete tiempos”? 35

Un “tiempo” o “año” lunar usado con relación a la profecía bíblica tenía como término medio 360 días, es decir, doce meses lunares con un promedio de 30 días cada uno. (Compare con Génesis 7:11 a 8:4 inclusive.) Los “siete tiempos” o “siete años” por lo tanto ascenderían a 7 veces 360 días, o 2.520 días. ¿Se han de entender literalmente esos 2.520 días en este caso? Bueno, siete años lunares o 2.520 días después de la destrucción de Jerusalén en 607 a. de la E.C. y de quedar desolada su región de dominio en la tierra de Judá no se restableció la Soberanía Universal de Jehová respecto a nuestra Tierra, ¿verdad? ¡No! En el año 600 a. de la E.C. los israelitas sobrevivientes eran todavía desterrados en Babilonia, Jerusalén y la tierra de Judá todavía yacían desoladas, y el Imperio Babilonio todavía era la potencia mundial del día. No fue sino hasta sesenta y tres años después, o en 537 a. de la E.C., que los israelitas 36

exiliados recibieron del conquistador de Babilonia libertad para partir de allí, y ocupar de nuevo su amado país de origen. Pero, aun entonces, no se estableció de nuevo en Jerusalén el reino teocrático de la casa de David. El Imperio Medopersa había tomado ahora el control mundial como la Cuarta Potencia Mundial de la profecía bíblica, y Ciro el Grande, el persa, era emperador. Por eso Zorobabel, un heredero legal y natural del trono de David, fue hecho simplemente gobernador de la provincia persa de Judá. Medo-Persia correspondía con los pechos y los brazos de plata de la imagen metálica que se vio en el sueño inspirado que el profeta Daniel tuvo que recordarle e interpretarle a Nabucodonosor. (Daniel 2:31, 32, 39) Según ese mismo sueño y su interpretación, el control mundial por los gentiles había de ser ejercido después por la Potencia Mundial Griega semejante a cobre y entonces por el Imperio Romano semejante a hierro, del cual brotaría otra potencia en la forma de la Potencia Mundial Binaria de Gran Bretaña y los Estados Unidos de los siglos modernos. Sería por primera vez después de eso que la Soberanía Universal de Jehová (representada por la montaña) y el reino (representado por la piedra cortada) intervendrían con relación a la línea de potencias mundiales gentiles. (Daniel 2:32-35, 44, 45) ¡Esto nos trae a nuestro propio siglo veinte! 37

Por lo tanto queda muy manifiesto que los “siete tiempos” de 2.520 días, al medirse contra la “imagen” de potencias mundiales, desde la cabeza hasta los pies, tienen que representar algo más largo que los siete años literales en los cuales Nabucodonosor se comportó como una bestia, afuera en el campo. Por eso cada uno de esos 2.520 días tiene que ser tratado según la regla bíblica que dice: “Un día por un año, un día por un año, es lo que te he dado.” (Ezequiel 4:6; compare con Números 14:34.) Esto significaría que los “siete tiempos” de dominación de la Tierra por potencias mundiales gentiles sin la intervención del reino de Dios se extenderían por 2.520 años desde que la tierra de Judá, (y Jerusalén con ella) fue desolada por los babilonios. Esa cantidad de años desde la mitad del séptimo mes lunar (o 15 de Tisri) de 607 a. de la E.C. nos lleva a ¿cuándo? Al 15 de Tisri, o 4/5 de octubre de 1914 E.C. 38

En aquel tiempo, Jehová Dios el Todopoderoso soltaría las ataduras de hierro y cobre de alrededor del simbólico tronco basal de la Soberanía Universal. Así, él permitiría que un “renuevo” real creciera desde el tronco basal para establecer de nuevo Su Soberanía Universal con relación a toda la Tierra. (Job 14:7-9; Isaías 11:1, 2) Esto aconteció al nacer el gobierno representado por el “hijo varón,” predicho en Revelación (Apocalipsis) 12:510 (RVR; NM), un gobierno que había de ‘pastorear a todas las naciones con vara de hierro.’ En el sueño de Nabucodonosor de la “imagen” de potencias mundiales, este acontecimiento fue representado por el cortar de la montaña la “piedra” con el fin de destruir con ella la “imagen” de potencias mundiales. (Daniel 2:34, 35) ¡Qué manera significativa de 39

marcar el fin de los “tiempos señalados de las naciones,” el fin de los “tiempos de los gentiles,” como los predijo Jesucristo en Lucas 21:24!— NM; RVR. Desde entonces en adelante, el gobierno real que fue representado por la antigua Jerusalén bajo miembros de la familia real de David como reyes ya no sería ‘pisoteado’ u ‘hollado’ por la potencias mundiales gentiles. ¡Este las pisotearía a ellas! 40

En vista de todo lo anterior, el Gobernador Universal, que conoce el fin desde el principio, predijo más que solo el tiempo en que Nabucodonosor sería restaurado al trono de la Potencia Mundial Babilónica. Jehová Dios predijo, simultáneamente, el tiempo en que pondría en vigor su propia gobernación mundial por medio de hacer valer de nuevo su legítima y propia Soberanía Universal con relación a nuestra Tierra. Habiendo determinado el tiempo para esto, ahora estamos listos para considerar al Agente Principal que el Soberano Universal Jehová usa con este fin. ¿Pasamos a hacerlo? 41

[Preguntas del estudio] 1, 2. Para 600 a. de la E.C. ¿qué proclamó Nabucodonosor acerca de Dios? 3. En comparación, ¿cómo quedaba la gobernación de Nabucodonosor ante la de Dios? 4. ¿Proclamó así Nabucodonosor un dios más alto que Marduc? 5, 6. ¿En qué tocón o tronco basal de árbol de mucha edad nos interesamos ahora? 7, 8. ¿Por qué se vio obligado Nabucodonosor a contar su sueño a Daniel? 9. En vez de a Daniel, ¿qué tenemos para ayudarnos en sentido profético? 10, 11. ¿Qué le sucedió al árbol que el rey vio en su sueño? 12. ¿Qué preguntas surgen en cuanto al derribo de aquel árbol? 13, 14. (a) ¿Qué preguntas hay que contestar en cuanto a Dios como el Cortador del árbol? (b) ¿A quién representó el árbol alto, y por qué? 15-17. (a) ¿El corazón de quién podía ser cambiado de humano a bestial? (b) ¿Cómo sufriría tal rebajamiento Nabucodonosor? 18. ¿Qué aspecto bueno le impartió Daniel al sueño? 19. (a) ¿Cómo y cuándo empezó a cumplirse el sueño en el rey? (b) ¿Por qué se le mantuvo en reserva el trono para que lo volviera a ocupar? 20-22. ¿Cómo cambió de humano a bestial el gobernante mundial? 23. ¿Por qué no resultó en la caída de Babilonia la enfermedad del rey?

24. Al recuperarse, ¿qué dijo el rey acerca del Altísimo? 25. Por esto, ¿qué desatadura del tocón del árbol hubo en aquel tiempo? 26. ¿Qué hebreos, probablemente, se pusieron a buscar junto con los demás al rey, y por qué? 27. Por mucho tiempo se ha considerado que los “siete tiempos” son ¿qué espacio de tiempo? 28. En el caso del rey, ¿quién contaba los años? 29. ¿Se cumplió en el caso del rey el propósito completo del sueño? 30. ¿Cómo representa el árbol la soberanía universal de Jehová? 31. El dar ese significado al árbol hace surgir ¿qué preguntas? 32, 33. ¿Cómo representó el reino de David la soberanía de Dios? 34. ¿Cuándo fue cortado aquel árbol simbólico, y cómo? 35. ¿Con qué propósito fue mantenido en ataduras de metal el tocón del árbol? 36. ¿Por qué no podía ser que los “siete tiempos” significaran 2.520 días literales? 37. ¿Qué sucesión de potencias mundiales tenía que preceder al reino de Dios? 38. ¿Cuándo terminarían esos 2.520 días, vistos simbólicamente? 39. ¿Qué sucedió después de habrá sido removidas del tocón las ataduras? 40. ¿Qué pisoteo por potencias mundiales gentiles había de cesar entonces? 41. ¿Qué cosa que iba más allá de la restauración de Nabucodonosor predijo Dios?

Capítulo 6 El Agente Principal de Dios en el gobierno mundial FUE un año maldito, fue un año bendito, aquel año de 1914 E.C. “Maldito,” porque entonces estalló la I Guerra Mundial, introduciendo una Era de Violencia que ha ido empeorando constantemente hasta nuestro mismo día. “Bendito,” porque, sin que lo vieran ojos humanos, arriba en los santos cielos, un poderoso gobierno fue producido por el Creador de cielo y Tierra para que funcionara a favor de la paz duradera del hombre. Como anunciaron con décadas de anticipación los “embajadores” de Dios a todas las naciones, los “tiempos de los gentiles” para la dominación mundial por las potencias mundiales gentiles sin la intervención del reino de Dios terminaron. (2 Corintios 5:20; Efesios 6:20) Las naciones gentiles rehusaron reconocer ese hecho y rabiaron en guerra mundial para mantener la dominación mundial política. Sin embargo, exactamente a tiempo, en 1914 E.C., al fin de los “siete tiempos” (2.520 años) de dominación mundial gentil, Dios produjo su gobierno celestial, que dentro de poco tiempo pondrá fin total a esas naciones gentiles atizadoras de la guerra que ahora son simplemente intrusos en el “banquillo de los pies” de Dios, la Tierra. (Daniel 2:44; 4:16, 23, 25, 32; Lucas 21:24; Salmo 2:1-9) En ese reino celestial el Agente Principal de Dios para el gobierno mundial reina, a la espera del tiempo de Dios en que todas estas hostiles naciones gentiles hayan de ser puestas bajo sus pies en ruina eterna. (Salmo 110:16; Hebreos 10:12, 13) Entonces la paz permanente, como si fuera un arco iris, hermoseará la Tierra. 2

En la Tierra, allá en 1914, no había ningún hombre que calificara para agente principal de Dios para un gobierno mundial que trajera la paz. No, ni uno solo, ni siquiera en la Jerusalén terrestre del Oriente Medio, ni en Belén. En aquel año crítico esas famosas ciudades estaban en las manos de turcos mahometanos, como parte del Imperio Turco, que se envolvió en la I Guerra Mundial el 30 de octubre de 1914. En diciembre de 1917 la posesión de Jerusalén pasó a otras manos, cuando tropas británicas bajo el mariscal de campo Allenby capturaron la ciudad. En aquellos días un súbdito británico, el famoso químico judío llamado Chaim Weizmann, hizo una contribución vital al esfuerzo de guerra británico. Esto sirvió de incentivo para la emisión de la Declaración de Balfour, según la cual el gobierno británico favoreció el establecimiento de una patria judía en Palestina. Años más tarde, en mayo de 1948, después de guerra entre árabes y judíos, se estableció la República de Israel. El distinguido Chaim Weizmann llegó a ser su primer presidente, pero no su rey davídico. No calificaba para Agente Principal de Dios. 3

Hubo una destrucción de reinos como resultado de la I Guerra Mundial. En conformidad con esta tendencia destructiva, ningún reino nuevo nació en la Tierra en 1914, al fin de los “tiempos señalados de las 4

naciones,” o “los tiempos de los gentiles.” Más tarde, la Liga de Naciones asignó a la Gran Bretaña un mandato sobre Jerusalén y territorios del Oriente Medio capturados por los soldados británicos. Este mandato caducó el 15 de mayo de 1948. Entonces surgió la República de Israel. Sin embargo, ningún reino de Dios visible había sido establecido en la Tierra para servir de agencia de la soberanía universal de Jehová con relación a nuestra Tierra. No se había encontrado a ningún hombre de descendencia judía que calificara como Su Agente Principal en Su gobierno mundial prometido. No hubo ningún judío circuncidado que pudiera presentar credenciales válidas que probaran que era descendiente real del rey David, con o derecho natural o derecho legal al trono del rey David en Jerusalén. Por eso, ¿dónde, al tiempo crítico, se hallaba el verdadero heredero del rey David, el que se necesitaba y al cual Jehová pudiera instalar como su Agente Principal en el gobierno mundial predicho? En medio de aquellas circunstancias, ¿a qué otro lugar podríamos posiblemente dirigir la atención sino a la región invisible de los espíritus, los cielos donde reina el mismo Soberano Universal? A ese lugar fue adonde señaló el profeta antiguo Daniel para la presentación del Agente Principal de Jehová. Es allí donde hay que buscar al individuo calificado y que tiene la aprobación divina. Es allí, también, donde el galileo Juan el hijo de Zebedeo, en el último libro de la Biblia, Revelación, reveló que se haría una búsqueda para hallar a un individuo digno que ejecutara los deberes de Agente Principal de Jehová.—Revelación 5:3-12. 5

Ahora, con los ojos de la profecía, miremos hacia el cielo con el profeta Daniel y observemos el cuadro del muy deseado Agente Principal que él pinta. Daniel muestra que fue hacia el fin del largo destierro de los judíos en Babilonia cuando Dios lo favoreció con la visión acerca de Su Agente Principal. Daniel fecha la visión al escribir: “En el primer año de Belsasar [nieto de Nabucodonosor] el rey de Babilonia, Daniel mismo contempló un sueño y visiones de su cabeza sobre su cama. En aquel tiempo puso por escrito el sueño mismo. La narración completa de los asuntos informó. Daniel estaba expresándose y diciendo: 6

“‘Sucedió que estuve contemplando en mis visiones durante la noche, y, ¡pues vea! los cuatro vientos de los cielos estaban agitando el vasto mar. Y cuatro enormes bestias estaban saliendo del mar, cada una siendo diferente de las otras. La primera era como un león, y tenía las alas de un águila. Seguí contemplando hasta que sus alas fueron arrancadas, y fue alzada de la tierra y se le hizo pararse en dos pies justamente como un hombre, y se le dio el corazón de un hombre. Y, ¡pues vea! otra bestia, una segunda, siendo ésta como un oso. Y de un lado estaba levantada, y había tres costillas en su boca entre sus dientes; y esto es lo que estaban diciéndole: “Levántate, come mucha carne.” Después de esto seguí contemplando, y, ¡pues vea! otra bestia, una como un leopardo, pero tenía 7

cuatro alas de una criatura volátil en su espalda. Y la bestia tenía cuatro cabezas, y se le dio gobernación en realidad.’”—Daniel 7:1-6. Aquellas tres enormes bestias que salieron del mar agitado por el viento representaban tres gobernaciones. Representaron las mismas gobernaciones que fueron representadas por la cabeza de oro, los pechos y brazos de plata, el vientre y los muslos de cobre de la imagen del sueño de Nabucodonosor, a saber, la Potencia Mundial Babilónica, la Potencia Mundial Medopersa y la Potencia Mundial Griega. Estas potencias mundiales ocuparon el espacio de tiempo de los “tiempos de los gentiles” desde la desolación de Jerusalén y la tierra de Judá en 607 a. de la E.C. y hasta 30 a. de la E.C. El año anterior el último de los cuatro reinos helénicos que resultaron del Imperio Griego de Alejandro Magno sufrió una derrota decisiva ante las fuerzas navales de la antigua Roma pagana. 8

Al llegar a este punto, sin embargo, Daniel no ha terminado de contarnos su sueño profético. Añade: “Después de esto seguí contemplando en las visiones de la noche, y, ¡pues vea! una cuarta bestia, espantosa y terrible y extraordinariamente fuerte. Y tenía dientes de hierro, grandes. Estaba devorando y triturando, y lo que quedaba lo estaba pisoteando con sus pies. Y era una cosa diferente de todas las otras bestias que fueron antes de ella, y tenía diez cuernos. Seguí considerando los cuernos, y, ¡mire! otro cuerno, uno pequeño, salió entre ellos, y hubo tres de los primeros cuernos que fueron arrancados de delante de él. Y, ¡mire! había ojos como los ojos de un hombre en este cuerno, y había una boca que estaba hablando cosas grandiosas.”—Daniel 7:7, 8. 9

Aquí tenemos lo que corresponde con las piernas de hierro de la “imagen” de potencias mundiales que se vio en el sueño de Nabucodonosor. La cuarta bestia representaba más que solo el Imperio Romano o Sexta Potencia Mundial de la profecía bíblica. Aprendemos esto por la conversación que Daniel tuvo con el intérprete angélico, quien le dijo a Daniel: “En cuanto a estas enormes bestias, porque son cuatro, hay cuatro reyes que se pondrán de pie de la tierra. Pero los santos del Supremo recibirán el reino, y ellos tomarán posesión del reino para tiempo indefinido, aun para tiempo indefinido sobre tiempos indefinidos.” (Daniel 7:17, 18) A pesar de esta información, todavía quedaba un misterio para Daniel en cuanto a la cuarta bestia. 10

“Entonces fue que deseé asegurarme en cuanto a la cuarta bestia, . . . y acerca de los diez cuernos que estaban en su cabeza, y el otro cuerno que subió y delante del cual tres cayeron, aun aquel cuerno que tenía ojos y una boca que estaba hablando cosas grandiosas y cuya apariencia era mayor que la de sus compañeros. Seguí contemplando cuando aquel mismo cuerno hizo guerra contra los santos, y estaba prevaleciendo contra ellos, hasta que vino el Anciano de Días y juicio mismo se dio a favor de los santos del Supremo, y llegó el tiempo definido en que los santos tomaron posesión del reino mismo.”—Daniel 7:19-22. 11

Como Daniel, nosotros hoy quisiéramos saber qué representó aquel cuernezuelo que tenía ojos y una boca. Debemos llegar a comprender su significado bajo la guía del espíritu santo de Dios, especialmente puesto que hemos vivido hasta ver el cumplimiento del sueño profético de Daniel. Por consiguiente, ahora hacemos bien en prestar atención a lo que el intérprete angélico le dijo a Daniel en explicación: 12

“Esto es lo que dijo: ‘En cuanto a la cuarta bestia, hay un cuarto reino que llegará a existir en la tierra, que será diferente de todos los otros reinos; y devorará toda la tierra y la hollará y triturará. Y en cuanto a los diez cuernos, de ese [cuarto] reino hay diez reyes que se levantarán; y aun otro se levantará después de ellos, y él mismo será diferente de los primeros, y a tres reyes humillará. Y hablará aun palabras contra el Altísimo, y hostigará continuamente a los santos mismos del Supremo. Y tendrá intención de cambiar tiempos y ley, y serán dados en su mano por un tiempo, y tiempos y la mitad de un tiempo. Y el Tribunal mismo procedió a sentarse, y su propia gobernación finalmente quitaron, para aniquilarlo y destruirlo totalmente.’”—Daniel 7:23-26. 13

En el versículo veinticinco, donde aparece la expresión “un tiempo, y tiempos y la mitad de un tiempo,” la Sagrada Biblia, Versión BoverCantera (católica romana), dice: “Serán entregados [los santos] en su poder por un año, dos años y medio año.” La traducción de Torres Amat (también versión católica romana) dice: “serán dejadas a su arbitrio todas las cosas por un tiempo, o año, y dos tiempos, y la mitad de un tiempo.” Históricamente, ¿qué años fueron ésos? 14

LA POTENCIA MUNDIAL BINARIA ANGLOAMERICANA El “cuarto reino,” el Imperio Romano, se dividió en varias naciones y un brote sobresaliente que vino de aquel imperio fue la Gran Bretaña. Para establecerse como ama de los siete mares, la Gran Bretaña con sus colonias tuvo que demostrar que era superior a las potencias navales española, holandesa y francesa. Esto se logró para el año 1763 E.C., de modo que entonces el Imperio Británico llegó a ser la predicha Séptima Potencia Mundial de la profecía bíblica. El 4 de julio de 1776, colonias que habían sido británicas en la América del Norte se declararon independientes y llegaron a ser los Estados Unidos de América. Por cooperación posterior juntos en varios campos de importancia internacional, el Imperio Británico y los Estados Unidos de América llegaron a ser, en realidad, la Potencia Mundial Binaria Angloamericana. Hasta 1914 E.C. esta Séptima Potencia Mundial controló más de la cuarta parte de la superficie y población de la Tierra. Es el cuerno “pequeño” que arrancó otros tres cuernos (las potencias navales española, holandesa y francesa) y que tenía ojos de hombre y una boca que hablaba cosas grandiosas.—Daniel 7:8. 15

Fue durante la I Guerra Mundial, desde el 28 de julio de 1914 hasta el 11 de noviembre de 1918, que los “santos” fueron entregados a esta Séptima Potencia Mundial para que hiciera con ellos lo que quisiera. Fue el 6 de abril de 1917 que los Estados Unidos de América se vieron envueltos en aquel conflicto mundial del lado del Imperio Británico. La profecía de Daniel se especializa en tres años lunares y medio durante esta I Guerra Mundial como el tiempo en que la Séptima Potencia Mundial, el simbólico cuerno “pequeño,” trituró a los “santos” del Dios Altísimo, Jehová. La culminación de esto fue que se sentenció bajo falsa acusación a muchos años de aprisionamiento en la penitenciaría federal de Atlanta, Georgia, a siete hombres cristianos que estaban participando prominentemente en publicar por todo el mundo, tanto verbalmente como por la página impresa, las buenas nuevas del reino establecido de Dios. 16

Esta sentencia fue dictada el 21 de junio de 1918, y el 4 de julio de 1918 estos siete prominentes fomentadores del estudio bíblico fueron llevados por tren desde Brooklyn, Nueva York, a Atlanta, Georgia. Esto sirvió de golpe espiritual triturador a los Estudiantes Internacionales de la Biblia, que entonces sufrían persecución y a los cuales ahora, desde el año 1931, se les conoce como testigos de Jehová. 17

La profecía de Daniel no muestra que los “santos mismos del Supremo” fueran aniquilados por el hostigamiento procedente del cuerno “pequeño” simbólico, la Potencia Mundial Binaria Angloamericana. El Dios Altísimo, a cuya soberanía universal se apegan y la cual proclaman, está de parte de ellos. Él se encargará de que se les haga justicia divina. (Lucas 18:7, 8) Sin embargo, ni la Séptima Potencia Mundial ni todas las demás naciones de la Tierra toman en serio la notificación que les dan los testigos de Jehová. Esta notificación señala que, desde el fin de los Tiempos de los Gentiles en 1914, ellas han estado en juicio delante del Altísimo. El sueño de Daniel acerca de las cuatro bestias y el cuerno “pequeño” es un cuadro profético de este hecho solemne. 18

TOMA ASIENTO EL TRIBUNAL DIVINO Refiriéndose a un tiempo que viene después de haber llegado a la existencia el cuerno “pequeño” y hablado cosas grandiosas, Daniel continúa describiendo su sueño profético: “Seguí contemplando hasta que se colocaron tronos y el Anciano de Días se sentó. Su ropa era blanca justamente como la nieve, y el cabello de su cabeza era como lana limpia. Su trono era llamas de fuego; sus ruedas eran un fuego ardiente. Había una corriente de fuego que fluía y salía de delante de él. Había mil millares que seguían ministrándole, y diez mil veces diez mil que seguían de pie directamente delante de él. El Tribunal tomó asiento, y hubo libros que se abrieron. Seguí contemplando en aquel tiempo debido al sonido de las palabras grandiosas que el cuerno estaba hablando; seguí contemplando hasta que la [cuarta] bestia fue muerta y su cuerpo fue destruido y fue dado al fuego ardiente. Pero en cuanto a las demás bestias, sus 19

gobernaciones fueron quitadas, y hubo un alargamiento de vida que se les dio por un tiempo y sazón.”—Daniel 7:9-12. Es solo aquí en esta visión a Daniel que al Dios inmortal que no tiene principio se le llama “el Anciano de Días.” Él tiene prioridad sobre toda persona y todo lo demás, pues es su Creador. (Salmo 90:2) Como Aquel que es omnisapiente y totalmente justo y que ha precedido a todas sus creaciones, él correctamente se sienta como Juez de todas las cosas, entre ellas nuestra Tierra. Puesto que los días de él se extienden al pasado antiguo, él conoce toda la historia humana pasada como si estuviera escrita en un libro. Así, ha observado a las cuatro potencias mundiales semejantes a bestias en el proceder que han seguido. Él las juzga, no teniendo como fundamento lo que otros testificaran, sino según lo que él sabe de ellas directamente. Él no tiene que consultar un registro escrito, que contenga relatos escritos por ángeles. En los tribunales humanos terrestres habría que consultar libros de derecho y libros de consulta. Pero no sucede así en lo que se refiere a Jehová, “el Anciano de Días.” 20

Como lo muestran los libros de historia, las cuatro “bestias” imperiales pasaron del escenario mundial una tras otra, en el orden de los cuatro metales que se vieron en el sueño de Nabucodonosor acerca de la imagen de potencias mundiales. Primero la Potencia Mundial Babilónica salió del escenario, después de ella la Potencia Mundial Medopersa, entonces la Potencia Mundial Griega y finalmente la Potencia Mundial Romana. Aunque aquellas potencias mundiales perdieron su gobernación una tras otra, sus territorios imperiales y los habitantes de ellos continuaron subsistiendo, y algunos restos de éstos existen hasta este mismo día. Por eso Daniel 7:12 dice: “Pero en cuanto a las demás bestias, sus gobernaciones fueron quitadas, y hubo un alargamiento de vida que se les dio por un tiempo y sazón.” 21

La cuarta “bestia” simbólica, con su agresivo cuerno “pequeño,” sufre destrucción debido a su violento proceder de opresión en la Tierra, debido a sus palabras de blasfemia contra el Dios Altísimo, y debido a que continuamente ha hostigado a los “santos” de Dios. Últimamente, el cuerno angloamericano sobre la cabeza de esta cuarta bestia es quien ha hecho estas obras impías. 22

Por eso, se pinta el cuadro de que a la cuarta bestia simbólica se le destruye junto con el cuerno “pequeño.” Sin embargo, en la realidad histórica a la cuarta bestia simbólica, a saber, la Potencia Mundial Romana, se le quita su poder imperial, para hacer espacio para la Potencia Mundial Binaria Angloamericana. Varios “reyes,” o “cuernos” simbólicos, que habían estado abarcados dentro de la Potencia Mundial Romana, siguieron gobernando como “cuernos” inferiores, dominados por el astuto cuerno “pequeño” que tenía los ojos de un hombre y una boca habladora. Por eso, cuando la Potencia Mundial Binaria Angloamericana baja a la destrucción bajo los juicios ardientes del Anciano de Días, esos “reyes” 23

parecidos a cuernos, como restos de la Potencia Mundial Romana, perecen con ella. (Daniel 7:23-26) Pero ¿qué hay acerca de esos imperios, reinos, repúblicas, y cuerpos políticos que nunca fueron parte del Imperio Romano ni de la Potencia Mundial Binaria Angloamericana, incluso la Comunidad Británica de Naciones? Todos éstos, también, tienen que ser destruidos cuando el Anciano de Días ejecute juicio ardiente sobre este mundo.—Revelación 16:13 a 19:21 inclusive. SE PRESENTA AL AGENTE PRINCIPAL DE DIOS ¿Quedarán los asuntos humanos en estado caótico, sujetos a anarquía, desafuero, y sin gobierno cuando venga esa destrucción de todos los gobiernos y gobernaciones humanos terrestres? No temamos la destrucción ardiente que a paso rápido se le acerca a este sistema de cosas mundano. El Juez Supremo, el Anciano de Días, está a cargo de nuestra Tierra. Él tiene que eliminar los gobiernos políticos de hechura humana que despliegan mala gobernación y opresión, con el fin de hacer espacio para el más excelente gobierno que alguna vez pudiera tener la humanidad. Este será una expresión de su propia Soberanía Universal con relación al hogar terrestre de la humanidad. Será un Gobierno Mundial indivisible que ejercerá su poder y autoridad desde el cielo, una ubicación superior a Londres, Washington, Moscú, Pekín, Tokio, o cualquier otra capital nacional de la Tierra. Jehová nos presenta a su Agente Principal en ese Gobierno Mundial en el sueño profético que hizo que por inspiración Daniel tuviera. Daniel señala en dirección al cielo al escribir ahora: 24

“Seguí contemplando en las visiones de la noche, y, ¡pues vea! con las nubes de los cielos sucedía que venía alguien como un hijo del hombre; y al Anciano de Días obtuvo acceso, y lo presentaron cerca, aun delante, de Aquél. Y a él fueron dados gobernación y dignidad y reino, para que los pueblos, grupos nacionales y lenguajes todos le sirvieran aun a él. Su gobernación es una gobernación indefinidamente duradera que no pasará, y su reino uno que no será reducido a ruinas.”—Daniel 7:13, 14. 25

¿Quién es ese “alguien como un hijo del hombre” que viene, no en ascenso desde la Tierra, sino desde los cielos “con las nubes” y obtiene acceso al Anciano de Días que está entronizado en la corte judicial? Algunos, en vista de que después de esto no se menciona a este “alguien como un hijo del hombre” en la profecía, sino que se dice que los “santos del Supremo” obtienen gobernación del reino, piensan que se está haciendo referencia a una persona compuesta, la “nación santa” de Dios como cuerpo. Pero hay una autoridad confiable que señala quién es realmente ese “alguien como un hijo del hombre.” ¿Cómo sucede esto? 26

Más de mil novecientos años atrás, en la noche de la Pascua (14 de Nisán) del año 33 E.C., un descendiente natural del rey David estuvo en juicio por su vida ante el Sanedrín judicial de Jerusalén. Después que este hombre rehusó contestar a los testimonios acusadores que se ofrecían 27

contra él, el sumo sacerdote que presidía le dijo: “¡Por el Dios vivo te pongo bajo juramento de que nos digas si tú eres el Cristo el Hijo de Dios!” ¿Reconoció ahora el acusado que estaba bajo juramento ante el Dios vivo de decir la verdad acerca de sí mismo? ¡Sí! Reconoció la autoridad judicial del sumo sacerdote para colocarlo bajo juramento de declarar la realidad, aunque sabía que el decir la verdad le daría ante el Sanedrín Supremo la apariencia de ser un espantoso blasfemador. El registro del proceso judicial nos dice: “Jesús le dijo: ‘Tú mismo lo dijiste. Sin embargo, les digo a ustedes: De aquí en adelante verán al Hijo del hombre sentado a la diestra de poder y viniendo sobre las nubes del cielo.’ Entonces el sumo sacerdote rasgó sus prendas exteriores de vestir, diciendo: ‘¡Ha blasfemado! ¿Qué más necesidad tenemos de testigos? ¡Miren! Ahora han oído la blasfemia. ¿Qué opinan?’ Dijeron en respuesta: ‘Expuesto está a muerte.’ Entonces le escupieron en el rostro y le dieron de puñetazos. Otros le dieron de bofetadas, diciendo: ‘Profetízanos, Cristo. ¿Quién es el que te hirió?’”—Mateo 26:63-68. 28

Allí estaba, pues, el único hombre en la Tierra que podía con confiabilidad referirse a la profecía de Daniel, capítulo siete, versículo trece, e identificar correctamente a aquel “alguien como un hijo del hombre.” Sesenta y tres años después, Jesucristo, resucitado de entre los muertos y glorificado en el cielo, le transmitió una revelación a su apóstol Juan en la Tierra, y por inspiración Juan escribió lo siguiente acerca de él: “¡Miren! Viene con las nubes, y todo ojo le verá, y los que lo traspasaron; y todas las tribus de la tierra se golpearán en desconsuelo a causa de él. Sí, amén.” (Revelación 1:7) Tanto esta declaración de la Biblia como otras prueban que ese “alguien como un hijo del hombre” visto en la visión de Daniel es Jesucristo el Descendiente del rey David. En Salmo 8:4 (RVR) Daniel lo llamó proféticamente “el hijo del hombre.” (Hebreos 2:5-8, RVR) Repetidamente Jesús se llamó “el Hijo del hombre.” El individuo al cual se representa en Daniel 7:13 viniendo “con las nubes de los cielos” no es la compañía de los “santos mismos del Supremo,” sino el Descendiente real de David.—Mateo 24:30. 29

¿Cuándo acontece esta venida particular? Según los versículos que preceden a Daniel 7:13 ésta acontecería después que creciera el cuerno “pequeño” que arranca a otros tres cuernos que estaban en la cabeza de la cuarta bestia, lo cual sucedió en la última mitad del siglo dieciocho de la era común. De manera que la venida del Hijo del hombre “con las nubes de los cielos” no aconteció antes de ese tiempo, ni siquiera en 70 E.C., cuando se realizó esta profecía de él: “Caerán [los judíos rebeldes] a filo de espada, y serán llevados cautivos a todas las naciones; y Jerusalén será hollada por los gentiles [las naciones no judías], hasta que los tiempos de los gentiles se cumplan.” (Lucas 21:24, RVR) Esos “tiempos de los gentiles” habían empezado cuando Jerusalén fue desolada por los babilonios en 607 a. de la E.C. Durante esos Tiempos de los Gentiles a las naciones 30

no judías se les permitió dominar la Tierra sin intervención procedente del reino davídico de Dios. Al fin de esos Tiempos de los Gentiles, en 1914 E.C., el Heredero real de David podía con derecho solicitarle a Dios el mando del Reino. 31

Los acontecimientos que han cumplido profecías bíblicas desde 1914 E.C. hasta ahora mismo prueban que la venida del Hijo del hombre aconteció ese año. Por supuesto, ninguno de nosotros vio tal venida con sus ojos literales. No pudiéramos haberla visto, porque Daniel 7:13, 14 dice que el Hijo del hombre viene, no a la Tierra, sino al Anciano de Días, el Juez en el cielo que “está cambiando tiempos y sazones, removiendo reyes y estableciendo reyes.” (Daniel 2:21) Vino por invitación del Anciano de Días, según se registra en Salmo 2:8, 9: “Pídeme, para que yo dé naciones por herencia tuya y los cabos de la tierra por posesión tuya propia. Las quebrarás con cetro de hierro, como si fueran vaso de alfarero las harás añicos.” Entonces, sin adelantarse a su horario judicial, el Anciano de Días podría hacer lo que predijo en Ezequiel 21:25-27. Allí, después de mandar la remoción del turbante y la corona de la gobernación real davídica, dijo: 32

“Póngase en alto aun lo que está bajo, y póngase bajo aun al alto [el ocupante del trono del rey David]. Ruina, ruina, ruina la haré. En cuanto a ésta también, ciertamente no llegará a ser de nadie hasta que venga aquel que tiene el derecho legal, y tengo que dar esto a él.” 33

Toda la evidencia hasta la fecha muestra que al fin de los Tiempos de los Gentiles en 1914 el Anciano de Días sí dio el reino mesiánico al Heredero davídico que tenía el “derecho legal.” Como lo predijo Daniel 7:14: “A él fueron dados gobernación y dignidad y reino, para que los pueblos, grupos nacionales y lenguajes todos le sirvieran aun a él. Su gobernación es una gobernación indefinidamente duradera que no pasará, y su reino uno que no será reducido a ruinas.” Ese fue, precisamente, el tiempo para remover las simbólicas ataduras de hierro y cobre de alrededor del “tronco con las raíces” de la Soberanía Universal Divina ahora que habían terminado los “siete tiempos” proféticos de 2.520 años. Entonces era el tiempo marcado para que se hiciera sentir una vez más la Soberanía Universal de Jehová con relación a nuestra Tierra. ¿Cómo? Al hacer que un “renuevo” o vástago creciera de aquel “tronco con las raíces” que por mucho tiempo había estado latente, y probar así que “el Altísimo es Gobernante en el reino de la humanidad y que a quien él quiere dárselo se lo da, y coloca sobre él aun al de más humilde condición de la humanidad.”—Daniel 4:17, 23, 32; Isaías 11:1; Zacarías 3:8; 6:12. 34

Ese fue, también, el tiempo para que la “piedra” simbólica fuera cortada de la “montaña” de la Soberanía Universal de Dios y entonces fuera arrojada contra la “imagen” de poderío mundial político en la Tierra. Va apuntada a herir los “pies” de hierro y barro moldeado. Entonces tiene 35

que moler a la entera imagen idolátrica y convertirla en polvo. Finalmente tiene que crecer hasta convertirse en una montaña, y llenar toda la Tierra.—Daniel 2:34, 45. Correspondientemente, en 1914 el reino mesiánico salió del vientre de la organización semejante a esposa de Jehová en el cielo, y se realizaron las palabras de Revelación 12:5: “Ella dio a luz un hijo, un varón, que ha de pastorear a todas las naciones con vara de hierro. Y su hijo fue arrebatado a Dios y a su trono.” Indudablemente fue entonces cuando los mil millares de ángeles que le ministraban al Anciano de Días y los diez mil veces diez mil que están de pie directamente delante de él unieron sus voces en anunciar por todo el universo: “El reino del mundo sí llegó a ser el reino de nuestro Señor y de su Cristo, y él gobernará como rey para siempre jamás.”—Revelación 11:15; Daniel 7:10. 36

A la luz de todo lo que ya se ha considerado, ¿quién es, pues, el Agente Principal de Dios para nuestro gobierno mundial entrante? Jesucristo, el ahora glorificado Heredero Permanente del rey David. Como hombre perfecto en la línea real de David, él “ofreció un solo sacrificio por los pecados perpetuamente y se sentó a la diestra de Dios [en 33 E.C.], esperando desde entonces hasta que sus enemigos fuesen colocados como banquillo para sus pies.”—Hebreos 10:12, 13; 1:3, 4; Salmo 110:1-6. 37

En el regir mundial venidero habrá partícipes con el Agente Principal de Dios, porque Daniel 7:27, 28 declara: “‘Y el reino y la gobernación y la grandeza de los reinos bajo todos los cielos fueron dados al pueblo que son los santos del Supremo. Su reino es un reino indefinidamente duradero, y todas las gobernaciones servirán y obedecerán aun a ellos.’ Hasta este punto es el final del asunto.” Por eso surge ahora la pregunta: ¿Era el “pueblo que son los santos del Supremo” el propio pueblo carnal del profeta Daniel, la nación de judíos o israelitas naturales, circuncisos? ¿Habían de llegar a ser las doce tribus de Israel que eran descendientes de carne y sangre de Abrahán, Isaac y Jacob el pueblo más encumbrado durante el reinado indefinidamente duradero del Mesías (Cristo), y llegarían a ser todas las naciones gentiles súbditos de ellos como gobernantes mundiales? Gente de todas las razas se han hecho esta pregunta. ¿Por qué no la consideramos ahora juntos? 38

[Preguntas del estudio] 1. ¿Por qué fue 1914 E.C. tanto un año bendito como un año maldito? 2. ¿De qué está a la espera el Agente Principal de Dios para el gobierno mundial? 3. En 1914 o más tarde, ¿calificó algún ser humano para ser Gobernador Mundial? 4. ¿Por qué no nació ningún reino nuevo en Jerusalén en 1914 E.C.?

5. ¿Dónde, pues, había que buscar al Agente Principal de Dios? 6, 7. ¿Qué tres bestias vio Daniel primero en una visión? 8. ¿Qué simbolizaron aquellas tres bestias, y por cuánto tiempo? 9. ¿Qué cuarta bestia con cuernos vio Daniel en esta visión? 10. Esta bestia corresponde con ¿qué, en la “imagen” con la cual se había soñado? 11. ¿Qué otro rasgo de la visión quiso Daniel que se le explicara? 12, 13. ¿Cómo nos explicó el ángel lo que es el cuerno pequeño? 14. ¿Cuánto duran el “tiempo y tiempos y la mitad de un tiempo”? 15. ¿Cómo llegó a existir el cuerno “pequeño” que tenía ojos y una boca? 16, 17. ¿Qué culminación tuvieron aquellos tres años y medio en 1918? 18. ¿Se muestra que los “santos” sean aniquilados por el cuerno “pequeño”? 19. ¿Qué hizo el Tribunal Celestial con las cuatro “bestias”? 20. ¿Por qué no necesita libros para consultarlos el “Anciano de Días”? 21. ¿Cómo fueron alargadas las vidas de las “demás bestias”? 22. ¿Por qué se destruye a la cuarta bestia con su cuerno “pequeño”? 23. ¿Qué les sucede a las gobernaciones que no son representadas por las cuatro bestias? 24. ¿Queda la Tierra sin gobierno por la destrucción del regir humano? 25. ¿Cómo se presenta al Agente Principal de Dios en Daniel 7:13, 14? 26. Hay hombres que alegan que “alguien como un hijo del hombre” representa ¿a quién? 27, 28. (a) ¿Cómo se vio obligada una autoridad a identificar al que es “alguien como un hijo del hombre”? (b) ¿Cómo se trató entonces a éste? 29. ¿Qué otra cosa muestra que Daniel 7:13 no significa un cuerpo compuesto? 30, 31. Daniel 7:13 se cumplió, pero ¿por qué no en 70 E.C.? 32, 33. ¿Por qué no vimos la venida del que tenía el derecho legal? 34. Por eso, ¿cómo desplegó Dios soberanía universal en 1914? 35. ¿Qué “piedra” real fue puesta en moción entonces, y contra qué? 36. ¿Qué nacimiento real aconteció entonces, y también qué anuncio?

37. Por lo tanto, ¿quién tiene que ser el Agente Principal de Dios en la gobernación? 38. ¿Qué preguntas surgen acerca de los “santos” que participan en gobernar?

Capítulo 7 Se entresaca a los que participarán en el regir mundial ¿QUIÉNES serán los que participarán con el glorificado Heredero Permanente del rey David en el Gobierno Mundial prometido? ¿Cuántos partícipes habrá? Y ¿dónde?... ¿aquí en la Tierra, o arriba en el cielo? Hubo un tiempo en que esas preguntas eran un misterio. ¡Pero ya no es así! Hacia fines del primer siglo de nuestra era común, el Heredero Permanente del rey David en el reino mesiánico, a saber, Jesucristo, reveló las respuestas deseadas. Por revelación milagrosa transmitió desde el cielo la información a un hombre que estaba aquí en la Tierra, no en Jerusalén, sino en una isla que se usaba como prisión, la isla de Patmos en el mar Egeo, no lejos de la antigua Éfeso, en Asia Menor. Sí, aquel hombre era un judío natural, circunciso. ¿Estaba aquel judío allí en aquella isla penal romana porque se hubiera unido a la revuelta judía que hubo en el año 66 E.C., que condujo a la destrucción de aquella nación por las legiones romanas en 70 E.C.? Bueno, dejemos que este prisionero judío nos diga: 2

“Yo Juan, hermano de ustedes y partícipe con ustedes en la tribulación y reino y perseverancia en compañía con Jesús, vine a estar en la isla que se llama Patmos [¿por qué?] por hablar acerca de Dios y por dar testimonio de Jesús. Por inspiración vine a estar en el día del Señor, y oí detrás de mí una voz poderosa como la de trompeta, que decía: ‘Lo que ves escríbelo en un rollo y envíalo a las siete congregaciones, en Éfeso y en Esmirna y en Pérgamo y en Tiatira y en Sardis y en Filadelfia y en Laodicea.’”—Revelación 1:9-11. 3

Este Juan, el hijo de Zebedeo, había sido pescador en el mar de Galilea, pero había dejado su profesión de pesca para hacerse ‘pescador de hombres,’ uno de los doce apóstoles del Mesías Jesús. (Mateo 4:18-22; Lucas 5:1-11) De modo que Juan era un judío cristianizado, un fiel discípulo de Jesús como el Mesías, el Cristo, el que había sido “ungido” con el espíritu de Dios para que fuera el Rey Mesiánico. Juan había sido testigo ocular de la ocasión en que se fijó en un madero a este Jesucristo en el Calvario, y al tercer día después de eso había visto a Jesús ya resucitado. En el día cuadragésimo después de aquello él y sus compañeros apóstoles habían visto al resucitado Jesucristo ascender al cielo, para sentarse a la diestra de Dios, su Padre celestial. 4

Además, Juan el apóstol estuvo allí en Jerusalén el día del Pentecostés de 33 E.C., cuando Jehová Dios usó a Jesús como su Agente Principal para derramar espíritu santo sobre unos ciento veinte discípulos reunidos. (Hechos 1:1 a 2:36 inclusive) De modo que para cuando Juan puso por escrito la Revelación en 96 E.C. había aguantado tribulación y sufrimiento como cristiano por sesenta y tres años. Juan se llamó un 5

“partícipe” en el reino con sus compañeros discípulos de Cristo. ¿Cuántos partícipes habría en ese gobierno mundial del Reino? Juan se llama “el discípulo a quien Jesús amaba,” y a él se le favoreció con esta información.—Juan 13:23; 21:20. El apóstol Juan podía recordar que, allá en 29 E.C., Juan el Bautizante había señalado a Jesús ya ungido con espíritu y había dicho: “¡Miren, el Cordero de Dios!” Y Juan el hijo de Zebedeo siguió a Jesús por esta razón. (Juan 1:36-39) Por consiguiente, sesenta y siete años después, cuando Juan vio y oyó que en una visión inspirada al glorificado Jesucristo se le llamó “el Cordero,” entendió a quién se refería aquello... a nadie sino a Jesucristo, quien, en la Tierra, había sido sacrificado como un cordero inocente sobre el altar de Dios. (Juan 1:29; 1 Pedro 1:18, 19) Muchas veces durante los años 30-33 E.C., Juan había estado de pie con este Cordero simbólico, Jesucristo, en el monte Sión terrestre, la montaña sobre la cual había estado la Jerusalén original. Pero aquella montaña terrestre llegó a ser usada como símbolo de un lugar en el cielo donde tendría su sede o asiento el gobierno mundial mesiánico. ¿Quiénes estarán allí como partícipes con el Cordero Jesucristo en el gobierno mundial celestial? Juan observó el número y dijo: 6

“Y vi, y, ¡miren! el Cordero de pie sobre el monte Sión, y con él ciento cuarenta y cuatro mil que tienen escrito en sus frentes el nombre de él y el nombre de su Padre. Y están cantando como si fuera una canción nueva delante del trono y delante de las cuatro criaturas vivientes y de los ancianos; y nadie pudo aprender esa canción sino los ciento cuarenta y cuatro mil, que han sido comprados de la tierra. Estos son los que no se contaminaron con mujeres; de hecho, son vírgenes. Estos son los que van siguiendo al Cordero no importa adónde vaya. Estos fueron comprados de entre la humanidad como primicias para Dios y para el Cordero, y no se halló en su boca falsedad; son sin tacha.”—Revelación 14:1, 3-5. 7

Ah, entonces solo ciento cuarenta y cuatro mil personas fueron ‘compradas de la tierra,’ ‘compradas de entre la humanidad como primicias para Dios y para el Cordero,’ para tener un lugar en el monte Sión gubernamental en los cielos. ¿Qué? ¿Solo 144.000 de entre los miles de millones de personas que han vivido y muerto durante los pasados diecinueve siglos desde los días de los apóstoles de Cristo? ¿Un número tan pequeño, comparativamente, como el de 144.000? ¡Cómo difiere este hecho bíblico de la idea que hay en la cristiandad de que los centenares de millones de miembros de sus iglesias irán al cielo al morir! Recordemos aquí que las “primicias” de una cosecha no son la siembra entera, sino simplemente una pequeña selección de muestra tomada de la siembra entera. Jesús insinuó que habría pocos miembros del Reino cuando dijo a sus discípulos: “No teman, rebaño pequeño, porque su Padre ha aprobado darles el reino. Vendan las cosas que les pertenecen y den dones de 8

misericordia. Háganse bolsas que no se gastan, tesoro en los cielos que nunca falla.”—Lucas 12:32, 33. ISRAELITAS ESPIRITUALES Ese número comparativamente pequeño, 144.000, no es un cálculo equivocado. Juan lo presentó antes también, en Revelación 7:1-8. Allí se aclara que uno de los requisitos para ser del “rebaño pequeño” de partícipes del Reino es el de ser marcados en la frente con el identificador “sello del Dios vivo,” además de tener escritos en la frente, por decirlo así, el nombre del Cordero y el nombre de su Padre, Jehová Dios. ¿Cuántos satisfacen este requisito, y de qué nación o raza son? El apóstol Juan no nos deja en dudas en cuanto a esto, pues dice: 9

“Y oí el número de los que fueron sellados, ciento cuarenta y cuatro mil, sellados de toda tribu de los hijos de Israel: De la tribu de Judá, doce mil sellados; de la tribu de Rubén, doce mil; de la tribu de Gad, doce mil; de la tribu de Aser, doce mil; de la tribu de Neftalí, doce mil; de la tribu de Manasés, doce mil; de la tribu de Simeón, doce mil; de la tribu de Leví, doce mil; de la tribu de Isacar, doce mil; de la tribu de Zabulón, doce mil; de la tribu de José, doce mil; de la tribu de Benjamín, doce mil sellados.”— Revelación 7:4-8. 10

Los nombres de estas doce tribus difieren de los nombres alistados de las doce tribus originales del Israel natural, según se dan en Génesis 49:3-28. Y correctamente, porque Revelación 7:4-8 presenta los nombres de las tribus del Israel espiritual. Tienen que ser israelitas espirituales si han de estar de pie con el Cordero Jesucristo en el monte Sión celestial. (Revelación 14:1-3; Hebreos 12:22) Aquí tenemos que tomar en consideración las palabras que se dirigen al Cordero Jesucristo, en Revelación 5:9, 10: “Fuiste degollado y con tu sangre compraste para Dios personas de [¿quiénes? ¿Del Israel natural, circunciso? No, sino de] toda tribu y lengua y pueblo y nación, e hiciste que fuesen un reino y sacerdotes para nuestro Dios, y han de gobernar como reyes sobre la tierra.” La historia bíblica muestra que hubo solo un “resto” de judíos según la carne que llegaron a ser cristianos. Fue tal como dijo el apóstol Pablo, un judío cristianizado: 11

“A menos que Jehová de los ejércitos nos hubiese dejado descendencia, hubiéramos venido a ser justamente como Sodoma, y hubiéramos sido hechos justamente como Gomorra.” También: “De esta manera, por lo tanto, también en la época presente ha llegado a haber un resto según una selección que se debe a bondad inmerecida [y no según la descendencia carnal israelita].”—Romanos 9:29; 11:5. 12

Para que a 144.000 personas “de toda tribu y lengua y pueblo y nación” se les clasificara como “israelitas” tendrían que serlo en sentido figurado, es decir, ser israelitas internamente. Como nos recuerda 13

Romanos 2:29: “Es judío el que lo es por dentro, y su circuncisión es la del corazón por espíritu.” Además, hay otra cosa indispensable que exige que los que participan con Jesucristo en el mando o regir mundial sean israelitas de clase espiritual. Este rasgo indispensable es lo que Jesús llamó a la atención del gobernante judío Nicodemo, al decir: “A menos que uno nazca otra vez, no puede ver el reino de Dios. . . . A menos que uno nazca del agua y del espíritu, no puede entrar en el reino de Dios. Lo que ha nacido de la carne, carne es, y lo que ha nacido del espíritu, espíritu es. . . . Así es todo el que ha nacido del espíritu.” (Juan 3:3-8) Por consiguiente, a los judíos naturales así como a los no judíos que llegan a ser los discípulos dedicados y bautizados de Cristo y a quienes Dios entresaca para que participen con Cristo en el regir mundial Dios los engendra con su espíritu. Todos éstos llegan a ser israelitas espirituales. 14

Por lo tanto podemos comprender que esos cristianos engendrados por espíritu (sacados tanto de entre los judíos como de entre los gentiles) son una “nueva creación.” Estos se comportan según esta “regla” divina, y no según el código de la Ley dado por medio de Moisés en el monte Sinaí, Arabia. Es respecto a esos que pertenecen a esta “nueva creación” que el judío cristianizado Pablo escribe: “Todos los que hayan de andar ordenadamente por esta regla de conducta, sobre ellos sea paz y misericordia, sí, sobre el Israel de Dios.”—Gálatas 6:15, 16. 15

Por consiguiente, es incorrecto, no bíblico, el que alguien alegue que los judíos naturales, circuncisos, “aquello que es Israel según la carne,” han de llegar a ser los gobernantes mundiales en la Tierra con la Jerusalén de la República de Israel como su capital. (1 Corintios 10:18) La gente que ahora pertenece a las naciones gentiles no llegará a estar bajo ningún mando o regir mundial de esos israelitas naturales, circuncisos. Más bien, todas la nacionalidades, incluso los judíos carnales, llegarán a estar bajo el mando mundial de las celestiales “doce tribus” del Israel espiritual, junto con su Rey Jesucristo, al tiempo debido de Dios, dentro de poco. 16

RESURRECCIÓN PARA EJERCER GOBERNACIÓN EN EL GOBIERNO MUNDIAL Jehová Dios, el Soberano Universal, predestinó o predeterminó la cantidad de los que participarían con Cristo en el mando del Reino sobre toda la Tierra. También predeterminó los requisitos y calificaciones personales para los que son dignos de participar en el regir mundial. Por eso habrá solo 144.000 personas que participen con Jesucristo en el gobierno mundial. Tienen que ser israelitas espirituales. A excepción de su Hijo Jesucristo, Jehová no predestinó o predeterminó a individuos. Más bien, expuso de antemano los requisitos y calificaciones personales para los herederos del Reino. A la luz de esto entendemos Romanos 8:29, 30: 17

“A los que dio su primer reconocimiento también los predeterminó para que fuesen hechos conforme a la imagen de su Hijo, para que él fuese el primogénito entre muchos hermanos. Además, los que él predeterminó son los que él también llamó; y los que llamó son los que él también declaró ser justos [o, los que justificó]. Finalmente los que él declaró justos son los que él también glorificó.” 18

Según los requisitos predeterminados, los que son “hechos conforme a la imagen” del Hijo de Dios tienen que sufrir con él ahora, tal como lo indicó el apóstol Juan en la isla de Patmos. Se requiere que aguanten y perseveren hasta la muerte. Pero para su consuelo el apóstol Pablo escribió: “Fiel es el dicho: Ciertamente si morimos juntos, también viviremos juntos; si seguimos aguantando, también gobernaremos juntos como reyes.” (2 Timoteo 2:11, 12) Y al apóstol Juan en prisión se le instruyó que escribiera lo siguiente a la congregación de Esmirna: “No tengas miedo de las cosas que estás para sufrir. ¡Mira! El Diablo seguirá echando a algunos de ustedes en la prisión para que sean puestos a prueba plenamente, y para que tengan tribulación diez días. Pruébate fiel hasta la misma muerte, y yo te daré la corona de la vida.”—Revelación 2:10. 19

Puesto que los 144.000 israelitas espirituales son los “que han sido comprados de la tierra” y “comprados de entre la humanidad,” su futuro ya no es en la Tierra ni entre la humanidad. Como “primicias para Dios y para el Cordero,” tienen que ser presentados a éstos en el cielo. Por eso la resurrección que los saca de la muerte, hasta la cual han demostrado su fidelidad, tiene que ser a la vida de espíritus en el cielo. De ellos es la resurrección espiritual que se describe en 1 Corintios 15:42-55. (Revelación 14:3, 4) Por sufrir en asociación con Cristo y probar su fidelidad a Dios hasta la muerte, los 144.000 israelitas espirituales son muy altamente recompensados por el Dios que puede resucitar a los muertos. La recompensa o galardón que se ofrece a estos fieles se nos muestra en visión en Revelación 20:4-6. Allí el apóstol Juan, uno que esperaba la misma recompensa celestial, escribe: 20

“Y vi tronos, y hubo quienes se sentaron sobre ellos, y se les dio poder para juzgar. Sí, vi las almas de los que fueron ejecutados con el hacha [¿por qué?] por el testimonio que dieron de Jesús y por hablar acerca de Dios, y a los que no habían adorado ni a la bestia salvaje ni a su imagen y que no habían recibido la marca sobre su frente y sobre su mano. Y llegaron a vivir y gobernaron como reyes con el Cristo por mil años. . . . Esta es la primera resurrección. Feliz y santo es cualquiera que tiene parte en la primera resurrección; sobre éstos no tiene autoridad la muerte segunda, sino que serán sacerdotes de Dios y de Cristo, y gobernarán como reyes con él por los mil años.” 21

Desde el primer siglo E.C. en adelante hasta ahora, los 144.000 israelitas espirituales, a los cuales se selecciona para regir desde 22

los cielos como reyes con Jesucristo, han rehusado adorar a la “bestia salvaje” simbólica, es decir, la organización política para la gobernación de toda la Tierra por medio de gobiernos humanos. Durante el tiempo de la vida de los israelitas espirituales desde los tiempos apostólicos hasta ahora la Potencia Mundial Romana y la Potencia Mundial Binaria Angloamericana han sido los miembros dominantes de la “bestia salvaje” política, como las últimas dos “cabezas” sobre esta bestia salvaje de siete cabezas. La Potencia Mundial Binaria Angloamericana, la Séptima Potencia Mundial de la profecía bíblica, ha sido la principal en proponer y mantener la “imagen” de la “bestia salvaje.” Esta “imagen” de mando mundial por gobiernos hechos por el hombre fue, primero, la Liga de Naciones o Sociedad de Naciones, y, ahora, es la Organización de las Naciones Unidas, para mantener la paz y seguridad mundial. La Potencia Mundial Binaria Angloamericana fue representada, como recordamos, por el cuerno “pequeño” que tenía ojos y una boca y que estaba sobre la cabeza de la “cuarta bestia” que se vio en la visión de Daniel acerca de las cuatro bestias. 23

El resto fiel de los 144.000 israelitas espirituales ha rehusado adorar a la “bestia salvaje” política por medio de participar en adorar al Estado o cualquiera de sus símbolos. Han rehusado adorar hasta a la “cabeza” más sobresaliente de la “bestia salvaje,” a saber, la Potencia Mundial de Gran Bretaña y los Estados Unidos. Y puesto que rehúsan adorar a la “bestia salvaje” simbólica misma, consistentemente rehúsan adorar su “imagen” como la propuso la Séptima Potencia Mundial, el cuerno “pequeño” que tiene ojos y boca.—Revelación 13:1-17. 24

Porque ellos rehusaron adorar al Estado político patrióticamente, el cuerno “pequeño” simbólico, la Potencia Mundial Angloamericana, tomó acción. Hostigó a este resto de “los santos mismos del Supremo,” como lo había predicho Daniel 7:25. Para que se sometiera a prueba la devoción de ellos a Su reino mesiánico que se estableció al fin de los Tiempos de los Gentiles en 1914, el Supremo dio a sus “santos” en las manos del cuerno “pequeño” simbólico “por un tiempo, y tiempos y la mitad de un tiempo,” o tres años y medio, durante la I Guerra Mundial. Pero los sufrimientos que aguantaron entonces y desde ese tiempo los “santos” no han podido obligarlos a transigir. 25

Los “santos mismos del Supremo” saben que, aun si los hombres les dan muerte por vivir en fidelidad al testimonio que dan del reino mesiánico de Dios, tendrán una resurrección. Su muerte no es “la muerte segunda” de la cual no hay resurrección. (Revelación 2:10, 11; 20:6; 21:8) Cristianos engendrados por espíritu que despliegan tal devoción completa son los que el Dios Altísimo entresaca para que participen con su Hijo Jesucristo en el gobierno mundial que se acerca. ¿Pudieran estar en manos más seguras 26

los intereses de la humanidad que en las de los que son entresacados por Dios? ¡No! Por esa poderosa razón todos los que aman la justicia y la incorruptibilidad en el gobierno pueden esperar con placer el regir de mil años del rey Jesucristo y sus 144.000 asociados. Jehová Dios como Soberano Universal se ha propuesto dar a toda la humanidad el mejor gobierno posible para ésta. Será un gobierno mundial sobrehumano, con plenos poderes para deshacer todos los malos efectos de los pasados miles de años de desgobierno e impotencia humanos. Delante de este invencible gobierno mundial la poderosa Séptima Potencia Mundial y todas las demás naciones mundanas dentro de la Organización de las Naciones Unidas y fuera de ella tendrán que inclinarse en derrota y desvanecerse durante la “grande tribulación” tan cercana ahora. Hasta Satanás el Diablo y sus demonios, el poder invisible detrás de la “bestia salvaje” de siete cabezas de gobernación política, hallarán que toda resistencia es inútil. Serán despojados de todo su control mundial invisible y serán aprisionados en un abismo sellado por los mil años del reinado de Cristo y los 144.000 que con él son reyes y sacerdotes.—Revelación 20:1-3. 27

Con gran deseo y oración solícita al Señor Soberano Jehová esperamos con placer el cumplimiento de las palabras inspiradoras de confianza del ángel a Daniel: “Y el reino y la gobernación y la grandeza de los reinos bajo todos los cielos fueron dados al pueblo que son los santos del Supremo. Su reino es un reino indefinidamente duradero, y todas las gobernaciones servirán y obedecerán aun a ellos.” (Daniel 7:27) Ahora tiene que estar muy cerca el tiempo en que Jehová dará la gobernación mundial a Jesucristo y a todos Sus otros “santos.” Por más de mil novecientos cuarenta años desde el Pentecostés de 33 E.C., Jehová ha estado entresacando a los 144.000 que estarán asociados con su Santo Hijo Jesús el Mesías en el regir del Reino sobre toda la Tierra. Para ahora tenemos que estar viviendo en los días del resto final de ese cuerpo selecto de 144.000 “santos.” También han pasado más de sesenta años desde que terminaron los Tiempos de los Gentiles en octubre de 1914. Por lo tanto debe estar cerca el tiempo en el cual el Rey celestial instalado, Jesucristo, ha de hacer añicos a las naciones en el mayor tiempo de angustia de la humanidad.—Salmo 2:5-9. 28

¡Ya está por terminar el “tiempo del fin” para las naciones! Que eso jamás signifique el fin de nosotros personalmente junto con esas naciones mundanas. (Revelación 19:11-21) Que diariamente cumplamos con nuestras obligaciones al Señor Soberano Jehová Dios para que, si él lo desea, podamos sobrevivir para entrar en el milenio del regir mundial de Cristo. 29

[Preguntas del estudio]

1. ¿Qué puntos acerca de los que participarán en el regir mundial eran un misterio? 2, 3. ¿Dónde estaba Juan cuando recibió la Revelación, y por qué? 4, 5. (a) ¿Cómo había entrado Juan en relación con Jesucristo? (b) ¿En qué era partícipe Juan entonces con aquellos a quienes escribió? 6, 7. (a) ¿En qué montaña había estado de pie Juan frecuentemente con el Cordero Jesucristo? (b) ¿A cuántos vio Juan de pie con Él sobre el monte Sión celestial? 8. ¿Qué indicó que los que participarían en el Reino serían pocos? 9, 10. (a) ¿Con qué tenían que ser sellados los 144.000? (b) ¿De qué nación fueron sellados, y cuántos había en cada división? 11, 12. (a) ¿De qué clase de Israel tienen que ser los 144,000? (b) Según Romanos 9:29 y 11:5, ¿cuántos judíos naturales calificaron? 13, 14. (a) ¿Tienen que ser israelitas carnales los 144.000? (b) ¿Hasta qué grado tienen que ser israelitas espirituales? 15. ¿Quiénes componen ahora el “Israel de Dios”? 16. ¿Llegarán a estar los gentiles bajo el mando o regir de un judío en la Jerusalén terrestre? 17, 18. ¿Qué predeterminó Dios en cuanto a los que participarán en el regir mundial? 19. ¿Qué sufrimientos están predeterminados para los que participarán en el regir mundial? 20, 21. ¿Qué clase de resurrección tiene que ser la de ellos? ¿Por qué? 22-24. ¿Cómo es que éstos no adoran a la bestia salvaje ni su imagen? 25. Por rehusar rendir tal adoración, ¿cómo sufrieron en la I Guerra Mundial? 26. ¿Qué clase de muerte experimentan estos que han de participar en el regir mundial? 27. ¿Por qué será el gobierno de Dios el mejor que le es posible tener a la humanidad? 28. ¿Por qué esperamos con gran deseo y con deleite ese reino como algo muy cercano? 29. ¿Por qué deseamos pasar con vida a través del “tiempo del fin” de las naciones?

Capítulo 8 Días marcados durante el “tiempo del fin” EL “TIEMPO DEL FIN” tiene su propio fin o cierre. Tiene su gran final en un “tiempo de angustia” sin precedente en la experiencia de las naciones y como el cual jamás experimentarán otro. Durante dicho “tiempo del fin” hay días marcados. Estos son espacios de tiempo que afectan directamente a los “santos mismos del Supremo,” los últimos que quedan de los discípulos engendrados por espíritu de Cristo que han sido designados para tener participación con Jesucristo en los cielos. Estos “días” eran de tanta importancia como para merecer que se le mencionaran al anciano profeta Daniel de la antigüedad.—Daniel 7:25. En la última parte del capítulo once de su profecía, Daniel señala proféticamente a nuestro siglo veinte actual y a la rivalidad incesante entre el grupo de naciones democráticas, liberales, capitalistas, y las naciones de tipo comunista, totalitario. Ambos bloques de naciones han sido perseguidores de los que quedan de los “santos” engendrados por espíritu de Jehová Dios, ahora conocidos como sus testigos cristianos. (Isaías 43:10-12; 44:8) Daniel cierra el capítulo once con un cuadro profético del asedio final por el “rey del norte” totalitario contra el resto de Testigos engendrados por espíritu, y entonces dice: “Tendrá que llegar hasta su mismo fin, y no habrá ayudante para él.” Su rival político en la lucha por la dominación mundial, el democrático “rey del sur,” también será acabado sin que nadie pueda ayudarlo ni salvarlo.—Daniel 11:45. 2

¿Cómo se producirá la destrucción tan absoluta del “rey del norte” y “el rey del sur”? El ángel profético de Jehová le explicó esto a Daniel, diciendo: “Y durante aquel tiempo se pondrá de pie Miguel, el gran príncipe que está plantado a favor de los hijos de tu pueblo. Y ciertamente ocurrirá un tiempo de angustia como el cual no se ha hecho que ocurra uno desde que hubo nación hasta aquel tiempo. Y durante aquel tiempo tu pueblo escapará, todo el que se halle escrito en el libro.”—Daniel 12:1. 3

En otras publicaciones de la Sociedad Watch Tower se ha establecido que Miguel, el gran príncipe celestial que estaba plantado a favor de los hijos del pueblo de Daniel allá en el siglo sexto a. de la E.C., es el Hijo de Dios que llegó a ser el Señor Jesucristo. (Daniel 10:13, 21; Judas 9; Revelación 12:7) Los hijos del pueblo de Daniel en aquel tiempo eran el resto fiel de israelitas que salió de Babilonia y reedificó a Jerusalén y el templo de Jehová allí. 4

Hoy el pueblo de Daniel sería, no los israelitas circuncisos carnales que rechazan al Mesías cuyo aparecimiento Daniel (9:24, 25) predijo, sino el resto de israelitas espirituales de hoy, los que son testigos cristianos de Jehová engendrados por espíritu durante este siglo veinte. A favor de estos israelitas espirituales está plantado el Mesías glorificado, Jesús, de nuevo como ‘Miguel el gran príncipe’ en el cielo, y él ejerce su poder y autoridad a 5

favor de este resto espiritual. Esta acción es lo que precipita el “tiempo de angustia como el cual no se ha hecho que ocurra uno desde que hubo nación hasta aquel tiempo.” Este “tiempo de angustia” sin precedente es la “grande tribulación” de la cual la Revelación por medio de Jesús habla y que fue ilustrada por la destrucción de Jerusalén en 70 E.C. como la predijo Jesucristo. (Revelación 7:14; Mateo 24:21, 22) ¡Es con esta “grande tribulación” que este “tiempo del fin” que ya está terminando alcanza su gran final! Durante esa “grande tribulación” o “tiempo de angustia” sin paralelo, el simbólico “rey del norte” y “el rey del sur” no escaparán de la destrucción, pero habrá otros que escaparán. ¿Quiénes? El pueblo de Daniel de hoy, el resto de israelitas espirituales, “todo el que se halle escrito en el libro.” (Note Malaquías 3:16 y Hebreos 12:23.) También, Revelación 7:9-17 nos da la seguridad de que una “grande muchedumbre” de adoradores del Dios de Daniel y creyentes en el Mesías Jesús sobrevivirán junto con el resto espiritual. Dios mantiene un registro de sus adoradores fieles. 6

¡Qué magnífica expectativa tenemos! Después de ese “tiempo de angustia” que no conoce igual en la historia humana comenzará la resurrección de los muertos, bajo el gobierno mundial de Dios en las manos de su Mesías Jesús, o ‘Miguel el gran príncipe.’ Este es el orden de acontecimientos según lo que el ángel le dijo a Daniel, quien ahora pasa a decir lo que el ángel dijo: “Y habrá muchos de los que están dormidos en el suelo de polvo que despertarán, éstos a vida indefinidamente duradera y aquéllos a oprobios y a aborrecimiento indefinidamente duradero.”—Daniel 12:2. 7

Por supuesto, la manera en que estos anteriores habitantes de la Tierra se hayan comportado durante esta vida afectará su condición inicial en la Tierra bajo el gobierno mundial mesiánico. Pero la manera en que desde entonces en adelante pongan orden en su vida bajo este gobierno mundial milenario determinará si finalmente se les juzgará dignos de vida eterna en una Tierra paradisíaca o merecedores de destrucción eterna como personas que se ganan oprobio y aborrecimiento sin fin. Jesucristo habló de esas posibilidades para los muertos a quienes se resucita, en Juan 5:28, 29. 8

Entonces serán gloriosos la posición y los privilegios de los “santos mismos del Supremo” a quienes se les han de dar el reino y la gobernación celestiales junto con el Mesías Jesús, ‘Miguel el gran príncipe.’ Acerca de esto el ángel pasó a decirle a Daniel: “Y los que tienen perspicacia brillarán como el brillo de la expansión; y los que estén trayendo a los muchos a la justicia, como las estrellas hasta tiempo indefinido, aun para siempre.” (Daniel 12:3) Los que sean llevados a la condición de justicia bajo el gobierno mundial mesiánico serán personas que alcanzarán “vida indefinidamente duradera” en la Tierra paradisíaca. Pero aun ahora, durante este “tiempo del fin,” el resto de los “santos mismos del Supremo” 9

están mostrando perspicacia y por lo tanto están ocupados afanosamente en hacer que la “grande muchedumbre” se vuelva a la justicia con vida eterna en la Tierra paradisíaca en mira.—Mateo 25:46. NO ES LIBRO SELLADO AHORA ¿Estamos nosotros hoy entre los que están volviendo a los muchos a la justicia o entre los que están siendo vueltos a una justicia que da promesa de adquirir vida eterna? Si así es, entonces podemos comprender que estamos viviendo en un tiempo favorecido. Desde el fin de los Tiempos de los Gentiles en 1914 hemos estado viviendo en el “tiempo del fin.” Es el tiempo para un esclarecimiento espiritual aumentado, para que muchas de las profecías no explicadas de la Santa Biblia, entre ellas la profecía de Daniel, sean abiertas al entendimiento de nuestra mente y corazón. Nuestro es el tiempo al cual señaló el ángel cuando le dijo a Daniel: “Y en cuanto a ti, oh Daniel, haz secretas las palabras y sella el libro, hasta el tiempo del fin. Muchos discurrirán, y el verdadero conocimiento se hará abundante.”—Daniel 12:4. 10

Hoy miles de millones de individuos están muy en movimiento acelerado por medio de todas las formas modernas de la transportación rápida. Sin embargo, éstos no son los “muchos” que se predicen en Daniel 12:4. Pero después del fin de la I Guerra Mundial en 1918, “muchos” fueron los Estudiantes Internacionales de la Biblia que empezaron a ‘discurrir,’ ¿cómo? Mentalmente, en un estudio profundo de las profecías bíblicas, entre ellas la profecía de Daniel. Había llegado el tiempo para la revelación de secretos de la Palabra de Dios que por mucho tiempo habían estado ocultos. Por eso, para estos ‘discurridores’ espirituales el “verdadero conocimiento” del Libro ahora no sellado de la Palabra de Dios ‘se hizo abundante.’ Con altruismo, por todas partes ellos están esparciendo verbalmente y por la página impresa este “verdadero conocimiento” para que todos los que desean vida eterna bajo el gobierno mundial de Dios obren en armonía con este conocimiento y así sean vueltos hacia la justicia.—Revelación 22:17. 11

Con el profeta Daniel escuchemos a medida que uno de los ángeles de su visión hace la pregunta que también nos interesa a nosotros: “¿Cuánto pasará hasta el fin de las cosas maravillosas?” Es decir: ¿Cuánto pasará antes de que estas cosas portentosas que Daniel vio alcancen el fin de su cumplimiento? La respuesta a la pregunta la da otro ángel, quien, con ambas manos levantadas, jura que su respuesta es verdadera y confiable. Daniel dice: 12

“Él procedió a levantar su mano derecha y su mano izquierda a los cielos y a jurar por Aquel que está vivo para tiempo indefinido: ‘Será por un tiempo señalado, tiempos señalados y medio. Y tan pronto como haya habido un fin del hacer añicos el poder del pueblo santo, todas estas cosas llegarán a su fin.’”—Daniel 12:5-7. 13

Es razonable pensar que esos tres “tiempos señalados” y medio aplican al mismo período que los tres “tiempos” y medio mencionados en Daniel 7:25, durante los cuales “tiempos” o “años” se entrega a los hostigados “santos mismos del Supremo” en mano de la Séptima Potencia Mundial, simbolizada por el cuerno “pequeño” que tiene ojos y una boca y que está sobre la cabeza de la cuarta ‘bestia salvaje.’ El propósito de que el Supremo diera a sus “santos” en la mano de la Séptima Potencia Mundial por ese espacio de tiempo era que hubiera un “hacer añicos el poder del pueblo santo.” Esta acción permitida por el Supremo demostraría definitivamente la actitud hostil del cuerno “pequeño” simbólico (sí, y además la de la entera “cuarta bestia”) para con los “santos” que se apegan a la Soberanía Universal del Supremo. 14

LOS TRES “TIEMPOS SEÑALADOS” Y MEDIO El fin de los tres “tiempos [o años lunares] señalados” y medio había de ser marcado por el “fin del hacer añicos el poder del pueblo santo.” (Daniel 12:7) Por supuesto, esto significaría también que el poder de efectuación del agente político que hace añicos el poder del “pueblo santo” de Jehová habrá llegado a su fin; su poder de efectuar tal cosa ya no tendrá su eficacia o potencia. Como lo vierte la traducción bíblica en inglés por el Dr. James Moffatt: “Sería tres años y medio, y que cuando el poder del que estrelló al pueblo sagrado terminara, entonces el fin de todas [las cosas] llegaría.” (También, An American Translation [Una Traducción Americana]; The New American Bible [La Nueva Biblia Americana]) Así, el agente político que efectuó el estrellar durante los tres años y medio siguió viviendo después, pero su poder de efectuación en cuanto a estrellar de nuevo el poder de los santos de Jehová había llegado a su fin. El “pueblo santo” estrellado o dispersado se juntaría de nuevo y se reorganizaría y nunca jamás se sometería a la remoción de su “poder.” 15

El “fin del hacer añicos el poder del pueblo santo” evidentemente aconteció el 21 de junio de 1918. En aquel día el tribunal federal de los Estados Unidos sentenció al presidente y al secretario-tesorero de la Sociedad Watch Tower Bible and Tract y a cinco de sus asociados de sus oficinas centrales a largos términos de prisión, que sumaban, en total, 140 años. Es verdad que fue el 7 de mayo de 1918 que estos oficiales de la Sociedad y sus prominentes compañeros fueron arrestados por agentes federales, pero todavía no habían sido sometidos a juicio ni sentenciados, sin el beneficio de una fianza. De manera que cuando vino el fin de la I Guerra Mundial el 11 de noviembre de 1918 estos siete representantes prominentes de los Estudiantes Internacionales de la Biblia, y un colaborador estrecho, estaban en la penitenciaría federal de Atlanta, Georgia, E.U.A., adonde habían sido enviados desde Brooklyn, Nueva York, el 4 de julio de 1918. Así, el 21 de junio de 1918 un alto tribunal de la Potencia Mundial Binaria Angloamericana le asestó un golpe con poder de estrellar al “pueblo santo” de Jehová. 16

Por eso, ¿cuándo empezaron los tres años y medio, que habían de tener como culminación ese acto de estrellar efectuado contra cristianos dedicados y bautizados? ¿Cómo fue marcado aquel principio? 17

Bueno, el 21 de junio de 1918 cayó, según el calendario lunar bíblico, el 11 de Tamuz de 1918. Tres años lunares hacia atrás desde eso, o el 1 de Tamuz de 1915, cayó en la fecha del 23 de junio de 1915. Entonces la mitad de un año lunar, o seis meses lunares, hacia atrás desde esa fecha sería el 11 de Tebet de 1914, que coincidió con el 28 de diciembre de 1914.—Vea The Universal Jewish Encyclopedia (La enciclopedia universal judía), bajo el encabezamiento “Jewish Calendar for 200 Years” (Calendario judío para 200 años), páginas 634-639. 18

Esa fecha, el 28 de diciembre de 1914, era muy apropiada. Durante aquel año desde principios de enero la Sociedad Watch Tower Bible and Tract había estado exhibiendo el famoso Foto-Drama de la Creación. En esa presentación bíblica, que estaba en cuatro secciones que duraban dos horas cada sección, se llamó atención al sueño de Nabucodonosor sobre la “imagen” de potencias mundiales y también al sueño de las cuatro “bestias” políticas que Daniel vio surgir del mar. Por consiguiente, a las naciones se les notificó acerca del fin de los Tiempos de los Gentiles, después de lo cual les vendría catástrofe a todas las naciones mundanas. Además, se dio advertencia acerca de la batalla de Armagedón, la cual sería seguida por “Nuevos cielos y una nueva tierra.” (Vea las páginas 50, 51, 92, 94 del Escenario del Foto-Drama de la Creación.) Para el mes de octubre, el mes en que terminaron los Tiempos de los Gentiles y ya rabiaba la I Guerra Mundial, el Drama se había exhibido a grandes auditorios en los Estados Unidos, la Gran Bretaña, Alemania, Suiza, Dinamarca, Suecia, Finlandia, Australia y Nueva Zelanda.—The Watch Tower, número del 15 de diciembre de 1914, páginas 371, 372. 19

En el número del 1 de enero de 1915, al presentar la sección “La vista desde la Torre del Vigía,” la revista Watch Tower (que hoy es en español La Atalaya) comenzó con las siguientes expresiones: “Cuando nuestro digno presidente [Thomas Woodrow Wilson] y también su santidad el papa solicitaron que la gente cristiana orara a Dios por el cese de la guerra europea, declaramos que esa oración no estaba en armonía con el arreglo Divino y no sería contestada. Señalamos que según las Escrituras los 2520 años de dominación gentil terminaron en septiembre de 1914; y que la guerra es una que se predice en las Escrituras en asociación con el Gran Día de Dios Todopoderoso... ‘el Día de la Venganza de nuestro Dios.’ Señalamos a la Palabra del Señor por medio del profeta Joel respecto a juntar a todas las naciones al valle de Josafat... el valle de la muerte.—Joel 3:1-12.” En armonía con esta manera de pensar, el primer artículo de estudio de aquel mismo número de la revista se intitulaba “La primera batalla de Armagedón.”—Página 7. 20

Se esperaba persecución entonces para las congregaciones de los Estudiantes Internacionales de la Biblia, porque, bajo el encabezamiento “1915—Nuestro Texto del Año—1915,” el mismo número de The Watch Tower tuvo estas palabras de apertura: “Hemos escogido como texto para el año las palabras que poco antes de Su crucifixión el Maestro expresó a dos de Sus amados discípulos, quienes le habían pedido sentarse con Él en Su Trono. Hemos seleccionado la respuesta del Maestro como el texto para este año: ‘¿Pueden ustedes beber de Mi copa?’—Mateo 20:20-23.” (Página 11) Para entonces diez naciones e imperios estaban en la guerra y más entrarían en ella durante 1915 y después de eso hasta que finalmente habría veintiocho naciones e imperios envueltos en la I Guerra Mundial. Por eso el “pueblo santo” de Jehová, entonces conocido como Estudiantes Internacionales de la Biblia, no podía escapar de persecuciones y sufrimientos como los que se incluyen en ‘beber de la copa’ de su Amo, Jesucristo. 21

Desde el año 1876 los que llegaron a estar asociados con la Sociedad Watch Tower Bible and Tract y la Asociación Internacional de Estudiantes de la Biblia habían estado declarando públicamente que los Tiempos de los Gentiles terminarían a principios del otoño de 1914. Por consiguiente, le advirtieron al mundo entero acerca de la destrucción de aquellas naciones gentiles para abrir paso para el reino milenario de Dios en las manos de su Hijo glorificado Jesucristo. Puesto que estos cristianos dedicados, bautizados y ungidos por el espíritu habían proclamado que se acercaba la destrucción de todas las naciones mundanas, entre ellas el Imperio Británico y los Estados Unidos de Norteamérica, estas naciones dieron pasos para destruir a estos proclamadores del reino de Dios por Cristo. Para hacerlo usaron la situación creada por la I Guerra Mundial.—Note Revelación 11:3-10; 13:1, 2, 5, 7. 22

El 17 de julio de 1917, la Sociedad Watch Tower Bible and Tract presentó para distribución pública el libro intitulado “The Finished Mystery” (El misterio terminado). Este libro trataba acerca de Revelación y la profecía de Ezequiel y daba énfasis, inevitablemente, a la destrucción de la religiosa Babilonia la Grande y sus amigos políticos, militares, judiciales y comerciales. (Santiago 4:4) Esto suministró más fundamento para que las autoridades políticas, incitadas por el clero de Babilonia la Grande, ‘hiciera añicos el poder del pueblo santo de Jehová.’ Lograron esto para el fin de los predichos tres años y medio el 21 de junio de 1918. Así, este espacio de tiempo empezó el 28 de diciembre de 1914, en el primer invierno septentrional de la I Guerra Mundial. Para entonces, en el Imperio Británico en guerra, el Imperio Alemán, el Imperio de Austria-Hungría, el Imperio Francés, Bélgica, y las otras cinco naciones que en aquel tiempo estaban envueltas en el conflicto mundial que se esparcía, los Estudiantes Internacionales de la Biblia, que eran objetantes de conciencia a la guerra carnal, sentían la presión creciente que se ejercía en ellos con el intento de que transigieran. El texto bíblico que escogieron para 1915 indicaba ese 23

hecho. ¡De manera que el período de tres “tiempos” y medio está bien marcado! Por supuesto, el profeta Daniel no podía visualizar cómo se desarrollarían en la historia moderna todas las cosas portentosas que se le habían revelado. Él mismo dijo: “Ahora bien, en cuanto a mí, oí, pero no pude entender, así es que dije: ‘Oh mi señor, ¿qué será la parte final de estas cosas?’ Y él pasó a decir: ‘Anda, Daniel, porque las palabras quedan secretas y selladas hasta el tiempo del fin. Muchos se limpiarán y se emblanquecerán y serán refinados. Y los inicuos ciertamente actuarán inicuamente, y absolutamente ningún inicuo entenderá; pero los que tengan perspicacia entenderán.’”—Daniel 12:8-10. 24

Daniel ‘no pudo entender’ lo que oyó, en su día. Pero nosotros, en este día, en este “tiempo del fin” desde 1914, podemos entender. Pero no si ‘actuamos inicuamente.’ Entonces, ¿cómo estamos actuando? ¿Inicuamente, o con perspicacia espiritual? ¡Los resultados son diferentes en cada caso! 25

Pensemos seriamente en cuanto a lo que el ángel le dijo a Daniel acerca del inminente “tiempo de angustia,” a saber, que el “pueblo [de Daniel] escapará, todo el que se halle escrito en el libro.” (Daniel 12:1) ¿Deseamos estar asociados con el “pueblo” de Daniel? Entonces tenemos que evitar que se nos halle entre los que actúan inicuamente en este tiempo del fin. Queremos que nuestros nombres ‘se hallen escritos en el libro’ de Dios. Con este fin, es necesario que ejerzamos “perspicacia” por medio de consultar la Palabra de Dios, aprender su mensaje instructivo para nuestro día crítico y entonces actuar de acuerdo con la voluntad de Dios. ¡Que abunde para nosotros el “verdadero conocimiento”! 26

LOS 1.290 DÍAS Y LOS 1.335 DÍAS Acerca de la información profética que se le dio a Daniel, el ángel dijo: “Las palabras quedan secretas y selladas hasta el tiempo del fin.” (Daniel 12:9) El hecho de que las “palabras” que en un tiempo fueron secretas y estaban selladas ahora estén sin sello y hayan sido sacadas de lo secreto añade a la abundancia de la prueba de que, desde el fin de los Tiempos de los Gentiles en 1914, hemos estado en el excitante “tiempo del fin.” Vemos cómo los “tiempo señalado, tiempos señalados y medio” de Daniel 12:7 han encajado en este “tiempo del fin.” Aunque ahora esos tres años y medio se encuentran tan lejos en el pasado, sin embargo marcaron un punto de viraje en el derrotero del “pueblo” de Daniel de hoy día, de modo que esto ha afectado a los testigos cristianos de Jehová que viven hoy. Pero hay otros espacios de tiempo que Jehová asigna a este interesante “tiempo del fin,” y Daniel 12:11, 12 ahora nos los llama a la atención: 27

“Y desde el tiempo en que el rasgo constante haya sido removido y haya habido una colocación de la cosa repugnante que está causando desolación, habrá mil doscientos noventa días. 28

“¡Feliz es el que se mantiene en expectativa y que llega a los mil trescientos treinta y cinco días!” 29

Aquí, como guía para que entendamos los asuntos, tenemos que tener presente que la religiosa Babilonia la Grande no coloca o establece a la “cosa repugnante que está causando desolación.” Esto lo hacen los elementos políticos de este sistema de cosas. Para que comiencen los “mil doscientos noventa días,” ambos requisitos tienen que ser satisfechos, a saber, el “rasgo constante” tiene que ser removido y la “cosa repugnante que está causando desolación” tiene que ser colocada. La remoción del “rasgo constante” aconteció durante los “un tiempo señalado, tiempos señalados y medio” que transcurrieron durante la I Guerra Mundial, desde el 28 de diciembre de 1914 hasta la puesta de sol del 21 de junio de 1918. El “rasgo constante” tenía que ver con el “pueblo santo” de Jehová, el “poder” espiritual de los cuales fue hecho añicos en aquel tiempo. 30

En 537 a. de la E.C. el conquistador Ciro el Persa libró de la antigua Babilonia al pueblo del profeta Daniel, y ellos regresaron a la tierra de Judá para restablecer la adoración de Jehová en Jerusalén. Allí, al fin de los setenta años de desolación de su país nativo, procedieron a “edificar el altar del Dios de Israel, para ofrecer sacrificios quemados sobre él, conforme a lo que está escrito en la ley de Moisés el hombre del Dios verdadero.” (Esdras 3:1, 2) Desde entonces en adelante los sacerdotes ofrecieron el “rasgo constante” de cada día, con la excepción de una interrupción temporánea que causaron los sirios durante los días de los Macabeos levitas en el siglo segundo a. de la E.C. (Éxodo 29:38, 39) Pero ¿qué era el “rasgo constante” de cada día que estaban ofreciendo a Dios los israelitas espirituales al principio del “tiempo del fin” en 1914? 31

No consistía en sacrificios animales ofrecidos sobre un altar en Jerusalén en el Oriente Medio. Aquellos sacrificios cesaron de ofrecerse allí en el año 70 E.C. cuando las legiones romanas destruyeron a Jerusalén y su hermoso templo. Años antes de aquello, el apóstol cristiano Pedro escribió que los israelitas espirituales ungidos “están siendo edificados en casa espiritual para el propósito de un sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptos a Dios por medio de Jesucristo.” (1 Pedro 2:5, 9) Estos “sacrificios espirituales” incluyen un “sacrificio de alabanza, es decir, el fruto de labios que hacen declaración pública de su nombre.” (Hebreos 13:15) Después del fin de los Tiempos de los Gentiles en 1914 y del nacimiento del reino mesiánico de Dios en los cielos, el “sacrificio de alabanza” como parte del “rasgo constante” que ofrecían los israelitas espirituales consistía particularmente en dar testimonio acerca del reino celestial establecido en las manos de Jesucristo.—Mateo 24:3, 14. 32

Por medio de hostigar a los testigos ungidos del Reino y finalmente hacer añicos su “poder” espiritual para la proclamación del reino de Dios que tiene que reemplazar a todos los gobiernos de hechura humana que hay en la Tierra, las naciones en guerra suprimieron a los testigos del 33

Reino y así removieron el “rasgo constante.” Esto se logró para el 21 de junio de 1918. Por nueve meses y cuatro días después de eso los oficiales sentenciados de la Sociedad Watch Tower Bible and Tract y sus colaboradores permanecieron en aprisionamiento federal, esperando que se les pusiera en libertad bajo fianza para un nuevo juicio y ser exonerados de todas las acusaciones falsas. El que ellos estuvieran injustamente en prisión por tanto tiempo fue un factor que retrajo grandemente a los testigos del Reino de ofrecer el “rasgo constante.” Pero ¿qué hay de la “cosa repugnante” que causa desolación? La “cosa repugnante que está causando desolación” es la organización internacional para la paz y seguridad mundial. Esta fue originalmente diseñada por la conferencia de paz que se reunió en Versalles, Francia, el 18 de enero de 1919. Los aliados que habían resultado victoriosos en la guerra redactaron el tratado de paz que fue sometido a los delegados alemanes el 7 de mayo de 1919. El 28 de junio de 1919 los delegados alemanes y los Aliados firmaron este tratado de paz en Versalles. La organización internacional para la paz y seguridad mundial, conocida entonces como la Liga de Naciones, fue una parte integrante de aquel tratado de paz, y cuando los gobiernos que estuvieron implicados en aquello ratificaron el tratado de paz que se había firmado, la Liga o Sociedad de Naciones entró en vigor. 34

Antes de eso, cuando la conferencia de la paz que preparó el camino para la Liga de Naciones se reunió el 18 de enero de 1919, el clero de la Iglesia de Inglaterra y el Concilio Federal de las Iglesias de Cristo en América se había expresado a favor de la Liga propuesta y había apoyado la creación de ésta. El clero la aclamó como “la expresión política del Reino de Dios en la Tierra.” 35

Pues bien, si medimos ahora 1.290 días desde esa fecha marcada, el 18 de enero de 1919, cuando los ocho representantes de la Sociedad Watch Tower Bible and Tract todavía estaban bajo restricción en la penitenciaría federal de Atlanta, ¿a dónde nos lleva esto? Según la Biblia, aquellos 1.290 días son el equivalente de tres años lunares y siete meses lunares. En conformidad con el calendario lunar, el 18 de enero de 1919 cayó el 17 de Sebat de 1919. Tres años lunares desde entonces llevarían al 17 de Sebat de 1922, o 15 de febrero de 1922. Siete meses lunares contados desde esa fecha terminarían en el 16 de Elul de 1922, o a la puesta de sol del 9 de septiembre de 1922. Por eso ¿terminaron los 1.290 días o tres años y siete meses lunares en un tiempo significativo? ¡Los hechos históricos responden: Sí! 36

El día siguiente, el 10 de septiembre de 1922, un domingo, resultó ser el sexto día de una asamblea internacional de nueve días de la Asociación Internacional de Estudiantes de la Biblia en Cedar Point, Ohio, E.U.A. En el programa aquel día se intitulaba “Día de Actividad.” El rasgo principal del día fue el discurso público a un auditorio 37

de 18.000 personas, por el presidente de la Sociedad Watch Tower Bible and Tract. Al fin de su argumento verbal, el orador le presentó a su auditorio una resolución llamada “Una proclamación,” en la cual se presentaba un desafío a todos los gobernantes mundiales. Esta proclamación no era para solamente las personas que estaban en aquella asamblea, sino para todo el mundo, y después de la asamblea de Cedar Point fue publicada en forma de tratado y distribuida en decenas de millones de ejemplares en muchos idiomas. El día anterior, el sábado 9 de septiembre, tuvo como título “Día de la Consagración” y estuvo caracterizado por el bautismo en masa de 361 hombres y mujeres en símbolo de que se habían dedicado a Dios por medio de Cristo. Sin embargo, el viernes 8 de septiembre tuvo el título de “El Día,” y tuvo como rasgo principal el discurso del presidente de la Sociedad sobre el tema que se halla en Mateo 4:17: “El reino de los cielos se ha acercado.” Dirigiendo los pensamientos hacia la culminación de su discurso, el orador (citando de la Versión Autorizada, en inglés) dijo: 38

“¿Por qué, pues, entregar el mensaje a los que no entienden? ¿Escuchará alguien? El Profeta del Señor responde: ‘Sacado al pueblo ciego que tiene ojos, y a los sordos que tienen oídos. Júntense todas las naciones, y congréguese el pueblo: ¿quién de ellos puede declarar esto, y mostrarnos cosas anteriores? que presenten sus testigos, para justificarse; o que oigan, y digan: Es la verdad. Vosotros sois mis testigos, dice el Señor, y mi siervo que he escogido; para que sepáis y me creáis, y entendáis que yo soy él: antes de mí no fue formado Dios alguno, ni después de mí habrá otro. Yo, aun yo, soy el Señor; y fuera de mí no hay salvador. Yo lo he declarado, y yo he salvado, y yo he mostrado, cuando no había dios extraño entre vosotros; por lo tanto, vosotros sois mis testigos, dice el Señor, de que yo soy Dios.’—Isaías 43:8-12. “Así vemos que los de la clase del templo son designados claramente en este tiempo los testigos del Señor, para llevar un mensaje de consuelo a la gente, que el reino de los cielos ha llegado, . . . ” Por eso, con toda debida propiedad, el presidente de la Sociedad pudo cerrar su electrizante discurso con esta exhortación: “Anuncien, anuncien, anuncien, al Rey y su reino.” El día después del discurso público se ofreció oportunidad inmediata de anunciar y todos los que participaban en la asamblea adoptaron la desafiadora resolución. Aquel lunes, 11 de septiembre de 1922, llevó el título de “Día de Servicio,” y los celebrantes de la asamblea salieron al servicio del campo, con más profunda conciencia que nunca de que eran agentes publicitarios adelantados del glorioso reino de Dios. 39

Más tarde, se discernió que el mensaje público y la resolución que se adoptaron con relación a aquel mensaje público fue el principio del cumplimiento de lo que se predijo en los capítulos ocho a dieciséis inclusive de Revelación. ¿Qué fue eso? El toque de las siete trompetas y el derramamiento de las siete últimas plagas de la ira de Jehová sobre este sistema de cosas condenado a la destrucción. 40

Al calcular los 1.290 días de Daniel 12:11 de esta manera que se da aquí, ¿descubrimos que hayan terminado en un tiempo muy significativo? Todo nos indica que así es. Poca duda puede haber de que los 1.290 días así calculados marcan una época para el “pueblo santo” de Jehová en este tiempo del fin. Estaba haciéndose prominente entonces la cuestión suprema que está ante todo el universo, a saber, la de la Soberanía Universal de Jehová. 41

FELICIDAD DESPUÉS DE 1.335 DÍAS Pero ¿qué hay de los mil trescientos treinta y cinco días que se marcan en Daniel 12:12? El ángel no dijo nada acerca de cuándo habían de empezar estos días; simplemente indicó que al fin de ellos los que estuvieran a la expectativa entrarían en una felicidad de grado notable: “¡Feliz es el que se mantiene en expectativa y que llega a los mil trescientos treinta y cinco días!” Evidentemente estos 1.335 días son un alargamiento de tiempo más allá de los 1.290 días que se acaban de mencionar, que habían terminado en medio de la asamblea de la Asociación Internacional de Estudiantes de la Biblia en Cedar Point, Ohio, en 1922. Ese alargamiento de tiempo —por 1.335 días más— exigía más aguante por parte del resto del “pueblo santo” de Jehová que había pasado con vida a través de la I Guerra Mundial. Ellos tenían poca idea entonces de la felicidad que se les otorgaría por aguantar con perseverancia y llegar al fin de aquellos 1.335 días. Por eso... ¿cuándo empezaron y terminaron aquellos días? 42

La segunda asamblea de Cedar Point terminó el 13 de septiembre de 1922. Pues bien, si contamos desde el día siguiente, el 14 de septiembre, o el 21 de Elul de 1922, según el calendario de tiempo bíblico, ¿cuándo terminarían los 1.335 días? Así como los 1.290 días ascendieron a tres años lunares y siete meses, los 1.335 días ascenderían a tres años lunares, ocho meses y quince días. Contando ahora desde el 21 de Elul (o 14 de septiembre) de 1922, hallamos que tres años lunares desde esa fecha terminarían el 20 de Elul (o 9 de septiembre) de 1925. A esto añadimos ocho meses lunares y quince días y llegamos a la fecha de 6 de Siván (o 19 de mayo) de 1926. Ese día fue el aniversario número 1.893 del día feliz del Pentecostés de 33 E.C., cuando el espíritu santo fue derramado sobre los discípulos de Jesús en Jerusalén. 43

Precisamente antes de esto, del 13 al 16 de mayo de 1926, en Magdeburgo, Alemania, se había celebrado una asamblea general en la 44

cual el presidente de la Sociedad Watch Tower había hablado a un auditorio público de 25.000 personas sobre el tema de “Consuelo para los pueblos.” Ahora, el 19 de mayo, seguían las preparaciones para la celebración de la sobresaliente asamblea internacional de 1926, la que se celebró en el local llamado Alexandra Palace, en Londres, Inglaterra, del 25 al 31 de mayo. Muchos delegados felices vinieron de países lejanos. Esta asamblea de Londres hizo una contribución tremenda a la felicidad del pueblo del profeta Daniel, el resto de los israelitas espirituales. En aquel tiempo, no muchas personas estaban verdaderamente felices por el hecho de que los fascistas hubieran tomado el mando de Italia. El progreso del movimiento nazi (Partido Nacional Socialista de los Obreros Alemanes) en Alemania agitaba temores. Pero la Liga o Sociedad de Naciones, de seis años de edad, seguía fuerte y estaba por admitir como miembro a la Alemania de la posguerra... el 8 de septiembre de 1926. A pesar de esto la Asociación Internacional de Estudiantes de la Biblia (I.B.S.A.) continuó desenmascarando a la Liga como un sustituto político de hechura humana para el reino de Dios, el reino que había entrado en el poder en los cielos desde el fin de los Tiempos de los Gentiles en 1914. Estos Estudiantes de la Biblia cristianos habían respondido a la pregunta: “¿Quién quiere honrar a Jehová?” que había planteado ante sus lectores el número de la Watch Tower del 1 de enero de 1926, y habían optado por honrar a Jehová y su reino. 45

El viernes 28 de mayo, J. F. Rutherford como presidente de la Sociedad Watch Tower Bible and Tract presentó a los que celebraban la asamblea en Londres la resolución intitulada “Un testimonio a los gobernantes del mundo.” Esta fue la quinta de una serie de resoluciones adoptadas en asambleas anuales de la I.B.S.A. Esta resolución de Londres, junto con su mensaje de apoyo, resultó ser el principio del derramamiento de la quinta “plaga” como se predijo en Revelación 16:10, 11. Muy significativo es el hecho de que esa quinta plaga empezara a derramarse en Londres, Inglaterra, la capital del Imperio Británico, que era el miembro británico de la Séptima Potencia Mundial de la profecía bíblica, la Potencia Mundial Binaria Angloamericana, la más poderosa de todas las potencias mundiales de la historia. Las oficinas de la corporación de la I.B.S.A. estaba ubicadas en Londres. 46

El sábado 29 de mayo, el día entero fue dedicado al servicio de predicar en el campo. Dijo el programa impreso de la asamblea: “Este día está apartado para servicio en el campo. Todo consagrado que asiste a la asamblea está invitado a participar en dar anuncio al Rey y el Reino. Llegue al Alexandra Palace tan pronto como le sea posible, y preséntese para servicio en el Departamento de Servicio. Se están haciendo arreglos para ir en automóvil a lugares más lejanos en el campo.” 47

Los que vivimos todavía de los que asistimos a aquella asamblea en Londres recordamos que subimos en grupos a autobuses de la ciudad y 48

que se nos llevó a los lugares designados para nosotros en toda la ciudad para ofrecer un nuevo folleto en las aceras y en las entradas a los trenes subterráneos. De esta manera se colocaron 120.000 ejemplares del folleto El estandarte para los pueblos en las manos de los transeúntes. En un informe sobre esta manera de anunciar al Rey y el Reino, una manera que para aquel tiempo era poco usual, The Watch Tower del 15 de julio de 1926 dijo: “Nunca antes se ha visto nada semejante a esto en el Día de Servicio en una asamblea. Los hermanos estaban sumamente entusiasmados. Les parecía que habían hecho su mejor esfuerzo por obedecer el mandato de Jehová: ‘Vosotros sois mis testigos de que yo soy Dios.’” El domingo 30 de mayo coronó la felicidad y bendición de esta asamblea de importancia histórica, con una concurrencia de unas 4.000 personas. A las 2 de la tarde, hubo un servicio de bautismo en el Alexandra Palace, después del cual hubo un bautismo en agua de 184 personas como testigos dedicados del Dios Altísimo. Aquella noche, los concurrentes se trasladaron a la sala que entonces era el más grande auditorio de la Gran Bretaña, el Royal Albert Hall, para el discurso público que presentaría el presidente de la I.B.S.A., J. F. Rutherford, sobre el tema “Por qué tambalean las potencias mundiales... el remedio.” Aquel salón estuvo atestado hasta más de su capacidad, con una concurrencia de más de 10.000 personas. Después de leer la Resolución “Un testimonio a los gobernantes del mundo,” el presidente Rutherford pasó a pronunciar su discurso. Llevó su consideración hasta tratar de la Octava Potencia Mundial como se predecía en la profecía bíblica, entonces la Liga de Naciones, y señaló al futuro indicando que aquella organización internacional para la paz y seguridad mundial fracasaría. El mando o regir humano de la humanidad terminaría en la más grande catástrofe del mundo, y entonces vendría El Remedio, el reino de Dios por Cristo, y habría paz, prosperidad, salud, vida y felicidad para toda la humanidad. En conclusión, el discursante dijo: 49

“Que los reyes y gobernantes de la Tierra ahora den su lealtad jurada y devoción al Señor. Que reconozcan a Jehová como Dios, y a Cristo Jesús como el Rey que él ha ungido; y al hacer esto prestarán un verdadero servicio a la gente y se pondrán en dirección a recibir las bendiciones eternas de Jehová.” El día siguiente uno de los periódicos de Londres publicó un informe completo de toda una plana de esta conferencia, de manera que la cantidad de individuos que leyó este mensaje desafiador acerca del Reino sobrepasó por muchos miles la cantidad que lo había oído en el Royal Albert Hall. ¡De modo que ciertamente estaba derramándose la predicha quinta “plaga”! 50

El día final de la asamblea, el lunes 31 de mayo de 1926, los participantes en la asamblea salieron al campo para colocar en las manos de la población judía de Londres un libro en rústica escrito especialmente 51

para estas personas. Aquella noche los concurrentes a la asamblea de nuevo se trasladaron al Royal Albert Hall para asistir a lo que resultó ser una súplica final en gran escala y pública a los judíos para que se volvieran al Mesías de Jehová, su Hijo ahora reinante, Jesucristo. Allí miles de judíos respondieron al anuncio público y escucharon al presidente de la Sociedad pronunciarles un electrizante mensaje que debería de haberles servido de consuelo. Su única esperanza estaba en el Mesías de Jehová. ¡Ahora a los israelitas naturales circuncisos les tocaba seleccionar! Entre los rasgos notables de esta asamblea tan feliz del resto de israelitas espirituales de Jehová estuvo el que se presentara para distribución el viernes 28 de mayo la nueva publicación de la Sociedad intitulada “Liberación.” Por el esclarecimiento bíblico que este libro dio, fue muy emocionante para el pueblo de Jehová. Como no lo había hecho ninguna publicación anterior, dio prominencia a la organización de Dios, simbolizada por la mujer del capítulo doce de Revelación, y trazó un agudo contraste entre la organización de Dios y la organización de Satanás. Este libro fue el primero de una serie de libros que reemplazó a los siete tomos de Estudios de las Escrituras (de 1886-1917), que habían servido de norma de instrucción bíblica hasta entonces. El año siguiente salió el libro Creación (1927), después de eso Reconciliación (1928), Gobierno (1928), Vida (1929), Luz (en dos tomos, 1930), Vindicación (en tres tomos, 1931, 1932), Preservación (1932), Preparación (1933), Jehová (1934), y así por el estilo, hasta este mismo año. 52

Además, en la asamblea de 1926 que se celebró en la capital del Imperio Británico, el presidente de la Sociedad Watch Tower asignó a hombres de experiencia a puestos de servicio en campos extranjeros, entre ellos a dos que habían de abrir una nueva sucursal en Bombay, en la India, entonces una colonia británica. (Vea Year Book I.B.S.A., propiedad literaria registrada en 1926, página 90.) También, promovió arreglos para publicar el informe anual de la Sociedad en forma de libro. Por eso, al debido tiempo, para que hubiera un registro de las actividades del pueblo de Jehová con relación al Reino para el año significativo de 1926, salió el “Year Book of the International Bible Students Association with Daily Texts and Comments” (Anuario de la Asociación Internacional de Estudiantes de la Biblia con textos diarios y comentarios, de 320 páginas). El “Daily Heavenly Manna and Birthday Records” (Maná celestial diario y Registros de cumpleaños), que se había usado en la adoración cristiana diaria desde su publicación en 1907, ahora dejó de usarse, a medida que nuevos textos diarios y comentarios aparecieron en cada Year Book (Anuario) sucesivo publicado por la Sociedad Watch Tower and Tract hasta esta misma fecha. 53

Durante el pasado medio siglo no ha faltado ni un Year Book (Anuario) cada año que ha pasado, y en esta publicación se explican con lujo de detalles las actividades mundiales de los testigos cristianos de 54

Jehová en su predicación de estas buenas nuevas del Reino.—Mateo 24:14. Otra cosa importante que hizo más feliz la perspectiva del pueblo de Jehová al tiempo de la asamblea internacional de Londres fue ésta: Se estaban considerando planes según los cuales la Sociedad Watch Tower Bible and Tract construiría su propia fábrica de ocho pisos en Brooklyn, Nueva York, para satisfacer los requisitos de la obra de testificación que se iba extendiendo por todo el mundo. El 23 de julio de 1926 finalmente se compraron los bienes raíces para esto. A pesar del invierno subsiguiente, la construcción de esta fábrica que sería propiedad de la Sociedad progresó. 55

Grande fue el gozo de los miembros del personal de la oficina central de Brooklyn cuando, en febrero de 1927, se trasladaron a este espacioso edificio de fábrica y oficinas especialmente diseñado. Por eso en la página del publicador del número del 1 de febrero de 1927 de la revista Watch Tower (hoy La Atalaya en español), y del número de la revista The Golden Age (hoy ¡Despertad! en español) del 9 de febrero de 1927, apareció la dirección del Publicador: 117 Adams Street, Brooklyn, New York. Este edificio tuvo que ser ampliado más tarde, y llegó a ser el núcleo de una expansión a treinta y dos imprentas relacionadas con la Sociedad Watch Tower Bible and Tract alrededor del mundo. La cantidad de literatura para el estudio de la Biblia que esta cadena mundial de imprentas ha producido hasta ahora ha sido enorme. ¡Por este medio se ha esparcido un Paraíso espiritual! 56

Verdaderamente el año 1926 merecía ser marcado como la feliz culminación del cierre de los 1.335 días. Los del “pueblo” de Daniel que se mantuvieron en expectativa y llegaron al fin de los 1.335 días fueron introducidos en una felicidad que no ha disminuido, sino que, a pesar de persecución en aumento y la II Guerra Mundial (1939-1945) y dificultades mundiales subsiguientes, ha persistido y aumentado. Particularmente desde aquel año marcado de 1926 los adoradores dedicados y bautizados del Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo han entrado en la felicidad paradisíaca que expresó el salmista inspirado, cuando dijo: “Feliz es la nación cuyo Dios es Jehová, el pueblo a quien él ha escogido como herencia suya.”—Salmo 33:12; 144:15b. 57

El profeta Daniel no tuvo el privilegio de ver esta felicidad de los testigos cristianos de su Dios, Jehová, ni entrar en ella. A él se le dijo que no esperara hacer eso, porque el ángel de Dios le dijo: “Y en cuanto a ti mismo, ve hacia el fin; y descansarás, pero te pondrás de pie para tu porción al fin de los días.” (Daniel 12:13) Ya por más de 2.500 años Daniel ha descansado en el sepulcro, en el sueño de la muerte. Al tiempo debido se pondrá de pie en la resurrección para recibir su porción bajo el reino mesiánico de Jehová Dios, acerca del cual recibió inspiración para profetizar tan maravillosamente. (Hebreos 11:33-40) Además, se va 58

acercando el tiempo debido de Dios en el cual, no solo Daniel, sino también Abrahán, Isaac, Jacob, Moisés y todos los demás profetas fieles de la antigüedad se pondrán de pie para su “porción,” y despertarán del sueño de la muerte “a vida indefinidamente duradera” y a la oportunidad de servir de “príncipes en toda la tierra” bajo nuestro gobierno mundial entrante.—Salmo 45:16; Daniel 12:2. [Preguntas del estudio] 1. ¿Qué espacios de tiempo marcan el “tiempo del fin”? 2. ¿Cómo les irá finalmente a las naciones que persiguen a los “santos”? 3, 4. ¿Quiénes eran Miguel y los “hijos [del] pueblo [de Daniel]”? 5. ¿A favor de quiénes está plantado ‘Miguel el gran príncipe’ ahora? 6. ¿Quiénes pasarán con vida a través del “tiempo de angustia” venidero? 7, 8. ¿Cómo será que los muertos despertarán a vida eterna o a oprobio? 9. ¿Qué individuos brillantes llevarán a muchos a la justicia? ¿Cuándo? 10. ¿Por qué es nuestro tiempo el tiempo para adquirir esclarecimiento acerca de la profecía bíblica? 11. ¿Quiénes son los ‘muchos discurridores’ predichos en Daniel 12:4? 12, 13. ¿Por cuántos “tiempos” juró el ángel que la profecía se extendería? 14. ¿Por qué fueron dados los “santos” en la mano del cuerno “pequeño”? 15. ¿Cuándo resulta ineficaz el poder del cuerno para estrellar? 16. ¿Cuándo fue aplastado el “poder del pueblo santo,” y cómo? 17, 18. Por eso, ¿cuándo empezaron los tres años lunares y medio? 19. ¿Qué notificación dio a las naciones el Foto-Drama de la Creación? 20. ¿Qué dijo el número de la Watch Tower (ahora en español La Atalaya) que vino después del 28 de diciembre de 1914 acerca de las oraciones que se solicitaron en petición de que terminara la I Guerra Mundial? 21. ¿Cómo mostró el Texto del Año para 1915 que se esperaban sufrimientos? 22. Desde 1876 ¿qué advertencia les habían dado a las naciones acerca de 1914? 23. En 1917, ¿qué libro suministró más fundamento para recibir persecución? 24. ¿Entendió Daniel la visión? ¿Qué razón se dio?

25, 26. Por lo tanto, ¿en qué clase mencionada queremos que se nos halle? 27-29. ¿Qué otros espacios de tiempo fueron predichos para el “tiempo del fin”? 30. ¿Quién establece o coloca la “cosa repugnante” que causa desolación? 31. ¿Qué era el “rasgo constante” que ofrecía el pueblo de Daniel? 32. ¿En qué consistió el “rasgo constante” desde 1914 E.C.? 33. ¿Cuándo se logró la remoción del “rasgo constante”? 34. ¿Cómo se dio existencia a la “cosa repugnante”? 35. ¿Cómo apoyó a la Liga de Naciones el clero de la cristiandad? 36. Por eso, ¿cuándo empezaron y terminaron los 1.290 días? 37. ¿Qué marcó al día siguiente, el 10 de septiembre de 1922? 38. ¿Qué caracterizó al 9 de septiembre de 1922 mismo, y al 8 de septiembre? 39. ¿Qué marcó al lunes 11 de septiembre de 1922? 40. ¿Qué expresión de la ira de Dios recibió comienzo así públicamente? 41. ¿Qué cuestión suprema estaba por lo tanto haciéndose prominente universalmente? 42. ¿Con qué sería marcado el fin de los 1.335 días? 43. Según el calendario bíblico, ¿cuándo terminaron los 1.335 días? 44. ¿Qué aconteció poco tiempo antes de ese día, y qué sucedió poco después de él? 45. Para entonces, ¿a quién habían optado por honrar los Estudiantes de la Biblia cristianos? 46. ¿Qué marcó al viernes 28 de mayo de la asamblea que se celebró en Londres en 1926? 47, 48. ¿Qué actividad extraordinaria marcó al sábado 29 de mayo de 1926? 49. ¿Qué sucesos marcaron el domingo 30 de mayo de 1926, en Londres? 50. En conclusión, ¿qué dijo el orador público en llamamiento? 51. ¿Qué marcó al día final de la asamblea, el 31 de mayo? 52. ¿Qué emocionante libro se presentó para distribución el viernes 28 de mayo de 1926?

53, 54. (a) ¿Para qué expansión se hicieron arreglos en la asamblea de Londres en 1926? (b) Además, ¿qué publicación anual recibió promoción? 55. ¿Qué programa de construcción hizo más feliz al resto? 56. ¿De qué resultó ser el núcleo aquella fábrica? 57. ¿Cuánto duraría la felicidad en la cual entró el resto? 58. Después de todos aquellos “días,” ¿en qué porción entrará Daniel?

Capítulo 9 La “señal” de la inminencia del gobierno mundial ¡QUÉ FELICES podemos sentirnos por el hecho de que el mando que los gobiernos políticos de hombres imperfectos han ejercido por toda la Tierra esté por terminar! Al mismo tiempo el gobierno mundial perfecto que Dios ha prometido es inminente. Hoy tenemos disponible la prueba de esto. Desde el año 1914 hemos discernido la “señal” infalible de ello a medida que se ha ido desenvolviendo. Hace diecinueve siglos un profeta mayor que Daniel describió detalladamente esa “señal.” Ahora podemos leer su significado si queremos. El Descriptor de esta oportuna “señal” aludió a cosas predichas en el capítulo doce de Daniel. Por ejemplo, habiendo entrado ya en su gran profecía, dijo a sus doce apóstoles en el monte de los Olivos: “Y estas buenas nuevas del reino se predicarán en toda la tierra habitada para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin. Por lo tanto, cuando alcancen a ver la cosa repugnante que causa desolación, como se habló de ella por medio de Daniel el profeta, de pie en un lugar santo, (use discernimiento el lector,) entonces los que estén en Judea echen a huir a las montañas. El que esté sobre la azotea no baje para sacar los efectos de su casa; y el que esté en el campo no vuelva a la casa a tomar su prenda exterior de vestir. ¡Ay de las mujeres que estén encintas y de las que den de mamar en aquellos días! Sigan orando que su huida no ocurra en tiempo de invierno, ni en día de sábado; porque habrá entonces grande tribulación como la cual no ha sucedido una desde el principio del mundo hasta ahora, no, ni volverá a suceder. De hecho, a menos que se acortaran aquellos días, ninguna carne se salvaría; mas por causa de los escogidos serán acortados aquellos días.”—Mateo 24:14-22; Marcos 13:14-20. 2

Allá en los días de los apóstoles de Jesucristo el “lugar santo” era la ciudad de Jerusalén con su hermoso templo para la adoración de Jehová como Dios. Judea era una provincia romana, de la cual Jerusalén era la capital religiosa. La “cosa repugnante que causa desolación,” mencionada en Daniel 12:11, era las legiones militares del Imperio Romano, la Sexta Potencia Mundial de la profecía bíblica. Por un violento ataque militar la “cosa repugnante” de aquel día estuvo “de pie” por un tiempo en el “lugar santo” en el otoño del año 66 E.C. Aquello fue una señal de advertencia a los judíos cristianizados que todavía residían en Jerusalén. Por eso, después que la “cosa repugnante” se retiró temporáneamente de Jerusalén, los cristianos ahora debidamente advertidos huyeron obedientemente del “lugar santo” que estaba condenado a destrucción. Muchos de estos fugitivos huyeron a las “montañas” de la provincia romana de Perea al otro lado del río Jordán. 3

Fue bueno que aquellos judíos convertidos al cristianismo hicieran aquello, porque, cuatro años después, la “cosa repugnante” regresó. Desoló toda la provincia de Judea y completó la desolación por medio de destruir tanto a Jerusalén como su santo templo en una “grande tribulación” que fue una tremenda sacudida para los judíos dentro y fuera del Imperio Romano. Los judíos cristianizados que estaban en lugares de refugio seguros fuera de Judea se salvaron de la destrucción de Jerusalén en 70 E.C. Alguna “carne” judía que había permanecido dentro de la ciudad rebelde también sobrevivió, pero solo para ser llevada al cautiverio por los romanos. De modo que aquella generación de judíos no cristianizados no obró en armonía con la “señal” que Jesucristo había predicho. Para aquella generación él había predicho guerras, hambres, pestes, terremotos, persecución de cristianos, desafuero, predicación del Reino por todo el mundo, y que la “cosa repugnante” estaría de pie en el “lugar santo.” Todas estas cosas tenían que sobrevenirle a aquella generación de judíos como “señal” a ellos de que se acercaba rápidamente la destrucción del sistema de cosas judío.—Mateo 24:3-22; Lucas 21:10-23. 4

INMINENTE LA CULMINACIÓN DE LA “SEÑAL” DE NUESTRO DÍA Sin embargo, ¿fue seguida la destrucción de Jerusalén en 70 E.C. por el gobierno mundial de Dios en las manos de Jesucristo, el digno Descendiente del rey David? ¡No! El Imperio Romano siguió existiendo como la Sexta Potencia Mundial y siguió aumentando hasta lograr su mayor dominio en el reinado del emperador Trajano. De modo que los Tiempos de los Gentiles que duraban 2.520 años siguieron adelante hacia su terminación en 1914 E.C. La historia se desenvolvió precisamente como Jesús lo había predicho: “Jerusalén será pisoteada por las naciones [gentiles], hasta que se cumplan los tiempos señalados de las naciones.” (Lucas 21:24) Todavía no había surgido la Séptima Potencia Mundial gentil en la forma de la Potencia Mundial Binaria Angloamericana, la cual comenzaría en 1763 E.C. Esta todavía funciona, y el miembro americano de esa Potencia Mundial Binaria celebró su aniversario número doscientos, su bicentenario, el 4 de julio de 1976. Esa celebración vino casi sesenta y dos años después del fin de los Tiempos de los Gentiles en el año 1914. 5

No solo los Estados Unidos de América y la Comunidad Británica de Naciones, sino todas las demás naciones gentiles rehúsan reconocer el reino mesiánico de Dios, aunque repetidamente se les ha llamado atención al nacimiento de éste.—Revelación 12:1-5. 6

¡La “presencia” o parusía (del griego: parousía) del Mesías glorificado Jesús en autoridad del Reino es un hecho cumplido desde 1914! ¿Por cuánto tiempo más tolerará el Rey Mesiánico de Jehová ya entronizado y coronado la resistencia combinada de gobiernos políticos terrestres ahora que ha caducado su “arrendamiento” de la dominación mundial sin la intervención de Dios? No por mucho más tiempo, si vamos a juzgar por los 7

detalles de la predicha ‘señal de la presencia [parousía] de Cristo y de la conclusión del sistema de cosas.’—Mateo 24:3. Jesucristo tenía presente nuestra generación así como la generación judía de su día, cuando dijo: “En verdad les digo que de ningún modo pasará esta generación hasta que sucedan todas estas cosas. El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras de ningún modo pasarán.”—Mateo 24:34, 35. 8

Pues bien, ¿qué estamos esperando todavía nosotros los de “esta generación”? Hemos visto, oído y experimentado las guerras internacionales, hambres, pestes, terremotos, persecución mundial de los testigos cristianos de Jehová, aumento del desafuero, disminución en el amor a Dios por la mayoría de las personas, y la predicación de “estas buenas nuevas del reino” por los testigos cristianos de Jehová desde 1914 E.C. Hemos pasado por estas cosas en medida más plena que la “generación” judía de hace mil novecientos años. Hemos sido testigos de la remoción del “rasgo constante” de la adoración de Jehová durante la I Guerra Mundial por las persecuciones que las naciones en guerra amontonaron sobre los adoradores de Jehová. También hemos observado la “colocación de la cosa repugnante que está causando desolación” en el ‘establecimiento’ de un sustituto de hechura humana para el reino mesiánico de Dios, a saber, la Liga de Naciones, en 1919, y su sucesora, la Organización de las Naciones Unidas, en 1945. (Mateo 24:4-15; Daniel 12:11) Por eso, ¿qué debe esperar para dentro de poco “esta generación”? 9

“CONOZCAN QUE ÉL ESTÁ CERCA, A LAS PUERTAS” Saltando rápidamente siglos de nuestra era común que estuvieron entre una cosa y la otra, Jesucristo pasó desde la “grande tribulación” que resultó en la destrucción de Jerusalén en 70 E.C. hasta nuestro mismo período crítico, “el tiempo del fin.” (Daniel 12:4) Dijo: 10

“Entonces si alguien les dice: ‘¡Miren! Aquí está el Cristo,’ o, ‘¡Allá!’ no lo crean. Porque se levantarán falsos Cristos y falsos profetas y darán grandes señales y prodigios para extraviar, si fuera posible, aun a los escogidos. ¡Miren! Les he avisado de antemano. Por eso, si les dicen a ustedes: ‘¡Miren! Está en el desierto,’ no salgan; ‘¡Miren! Está en los aposentos interiores,’ no lo crean. Porque así como el relámpago sale de las partes orientales y resplandece hasta las partes occidentales, así será la presencia [parousía] del Hijo del hombre. Dondequiera que esté el cadáver, allí se juntarán las águilas. 11

“Inmediatamente después de la tribulación de aquellos días el sol será oscurecido, y la luna no dará su luz, y las estrellas caerán del cielo, y los poderes de los cielos serán sacudidos. Y entonces aparecerá la señal del Hijo del hombre en el cielo, y entonces todas las tribus de la tierra se golpearán en lamento, y verán al Hijo del hombre viniendo sobre las nubes del cielo con poder y gran gloria. Y enviará sus ángeles con un gran sonido 12

de trompeta, y juntarán a sus escogidos desde los cuatro vientos, desde un extremo de los cielos hasta su otro extremo.”—Mateo 24:23-31; Marcos 13:21-27. Como un “gran sonido de trompeta,” desde el año 1919 el mensaje que se predijo en Mateo 24:14, “estas buenas nuevas del reino,” ha sido proclamado mundialmente con amplitud cada vez mayor por el resto actual de “sus escogidos.” Mientras más de estos “escogidos” han sido juntados desde los cuatro puntos cardinales (“los cuatro vientos”), mayor o más amplio en su alcance ha sido el sonido de trompeta de las “buenas nuevas.” Por esa razón sabemos que los “escogidos” que están encaminados a un lugar en el reino celestial están con nosotros en este “tiempo del fin.” No hemos observado visiblemente a ángeles de espíritu juntándolos, pero sí vemos el efecto de esas actividades angélicas según la voluntad del glorificado Hijo del hombre. Por su trabajo de predicar públicamente y de casa en casa, el resto de “escogidos” juntados se ha dejado ver y oír. 13

No, no han sido juntados bajo guía angélica a un solo lugar en algún país por sí solo. Más bien, han sido juntados a unidad de pensamiento y actividad por todo el mundo según el entendimiento cada vez mayor de las Santas Escrituras, y con regularidad se reúnen en sus congregaciones, en hogares o en Salones del Reino. Hasta cuando gobiernos mundanos hostiles los han proscrito, persisten en reunirse, “clandestinamente,” como si fuera, para edificarse unos a otros en la fe cristiana y para organizar sus esfuerzos de predicar. En su celebración anual de la Cena del Señor, la conmemoración de la muerte de Cristo el 14 de Nisán (calendario bíblico), participan del pan y el vino emblemáticos. El 14 de abril (14 de Nisán), del año 1976, 10.187 de esos “escogidos” celebraron así y participaron de los emblemas. 14

Estos “escogidos” fieles están esperando la” señal del Hijo del hombre” en los cielos cuando él venga en el papel de Ejecutor procedente de Dios para destruir a todas las naciones que continúan en oposición a su reino mesiánico sobre toda la Tierra. No sorprende el que, cuando él haga que se sienta Su presencia por las operaciones destructivas que ha de ejecutar, haya de ser como si de veras lo vieran “viniendo sobre las nubes del cielo con poder y gran gloria.” Toda buena razón para que ‘se golpeen en lamento.’—Mateo 24:30; Revelación 1:7. 15

EL PUNTO QUE DEBEMOS APRENDER AHORA Estamos interesados, o todos por lo menos deberíamos estarlo, en saber si la gran culminación de estos desenvolvimientos vendrá en nuestro tiempo. ¿Cómo podemos saber qué posibilidad hay de esto y guiarnos por ello? Como guía para nosotros los que vivimos hoy, Jesús como el Profeta que trató de la “conclusión del sistema de cosas” pasó a decir a sus doce apóstoles: “Ahora bien, aprendan de la higuera como ilustración este 16

punto: Luego que su rama nueva se pone tierna y brota hojas, conocen que se acerca el verano. Así mismo también ustedes, cuando vean todas estas cosas, conozcan que él está cerca, a las puertas. En verdad les digo que de ningún modo pasará esta generación hasta que sucedan todas estas cosas. El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras de ningún modo pasarán.”—Mateo 24:32-35; compare con Lucas 21:27-33. Los de los “escogidos” que vivimos hoy y que fuimos testigos del estallido de la I Guerra Mundial en 1914 podemos recordar que todos nos regocijamos porque vimos “comenzar a suceder estas cosas.” Sabíamos que el Cristo recién entronizado estaba “cerca, a las puertas” para su obra de ejecutor contra este inicuo “sistema de cosas.” Nos regocijamos muchísimo porque “está cerca el reino de Dios” para tomar pleno control mundial y funcionar como gobierno mundial. No nos hemos cansado de que vez tras vez durante estos pasados sesenta años y más se nos haya recordado que el reino mesiánico de Dios está “cerca, a las puertas.” Esta recordación que hemos recibido no ha perdido su vigor ni su potencia ni su fuerza movedora del alma para con nosotros. Sabemos que somos de la “generación” que vio el principio de estas cosas en 1914 al fin de los Tiempos de los Gentiles, y creemos lo que Jesús aseguró de que esta misma “generación” nuestra verá el fin de estas cosas significativas, y que todo esto culminará en la toma total de la dirección de todos los asuntos humanos por el Reino triunfante. 17

Una catástrofe global que afectará a más personas e instituciones que las que fueron afectadas por el diluvio del día de Noé está por estallar sobre este “mundo de gente impía.” (2 Pedro 2:5) Hay que repetir esto para que penetre —y merece que se le repita— en los oídos de los “escogidos” y de toda otra persona que esté interesada en un gobierno mundial perfecto y justo. Este no es un caso de asustar a la gente con un susto falso como el de la doctrina difamatoria para Dios de un “tormento eterno en un infierno de fuego y azufre literales” para obligar a la gente a convertirse y a concurrir a alguna iglesia. Lo que está en peligro no es solamente la vida, sino la vida eterna, de la gente que está bajo riesgo, y, como los ‘atalayas’ nombrados por Dios, nosotros tenemos la obligación de dar la advertencia a las personas de corazón honrado y de buena disposición hacia lo justo. (Ezequiel 3:17-21; 33:6-20) No deseamos dejar sin cumplir nuestras responsabilidades para con Dios. No estamos asustándonos para cumplir nuestro deber cuando tomamos este asunto con seriedad. Nuestro objeto es desplegar amor a Dios y a nuestros congéneres humanos, especialmente nuestros hermanos cristianos. 18

Jesucristo mismo no quiso predicar y profetizar en vano. No quiso que su advertencia fuera en vano para con sus discípulos, cuando les dijo: “Respecto a aquel día y hora nadie sabe, ni los ángeles de los cielos, ni el Hijo, sino solo el Padre. Porque así como eran los días de Noé, así será la presencia [parousía] del Hijo del hombre. Porque como en aquellos días 19

antes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, los hombres casándose y las mujeres dándose en matrimonio, hasta el día [!] en que Noé entró en el arca; y no hicieron caso hasta que vino el diluvio y los barrió a todos, así será la presencia del Hijo del hombre. Entonces estarán dos hombres en el campo: uno será tomado y el otro será abandonado; dos mujeres estarán moliendo en el molino de mano: una será tomada y la otra será abandonada. Manténganse alerta, pues, porque no saben en qué día viene su Señor. “Más sepan una cosa, que si el amo de casa hubiese sabido en qué vigilia habría de venir el ladrón, se habría quedado despierto y no habría permitido que forzaran su casa. Por este motivo, ustedes también demuestren estar listos, porque a una hora que no piensan que es, viene el Hijo del hombre.”—Mateo 24:36-44. 20

¿Significó la ilustración de Jesús acerca del amo de casa que, si él nos dejara saber de antemano a nosotros los discípulos de hoy el día y la hora en que él viene a saldar las cuentas, se aseguraría de hallarnos a todos despiertos y alerta? Por eso, ¿no se nos debería dar noticia, con anticipación, del día y la hora exactos? Así sería como hacemos las cosas hoy: damos notificación de antemano a los que nos van a recibir para no tomarlos por sorpresa, sino que tengan todas las cosas listas y no experimenten una vergüenza. 21

Con Jesucristo el asunto es diferente, porque sus discípulos son en realidad sus esclavos comprados. A todo tiempo él desea que ellos estén interesados en Su venida para los procedimientos de juicio y por eso estén en condición de rendir servicio a todo tiempo, por amor a él. Él no desea que ellos sean personas hipócritas de las que solo trabajan cuando se les vigila, de modo que al último momento antes de la llegada de él presenten la apariencia de siempre haber estado activos en su servicio. Porque no se les notifica de antemano precisamente cuándo él llega, el amor y la obediencia de los discípulos a él están bajo prueba constantemente. ¿Están ellos sinceramente interesados en su reino y están siempre preparados para participar en ese gobierno mundial? ¿O sacan tiempo para meterse en asuntos mundanos, digamos, en política mundana? El Rey Jesucristo detesta el servicio tibio, la atención que no se da con todo el corazón. No quiere hipócritas en su reino. 22

Jesucristo da énfasis a este punto importante en las ilustraciones del “esclavo fiel y discreto” y “aquel esclavo malo,” las ilustraciones que dio inmediatamente después de instar a sus discípulos a ‘demostrar que estaban listos’ en todo tiempo. (Mateo 24:45-51) Una magnífica recompensa les está guardada a los discípulos de Cristo que demuestren que son esclavos fieles, discretos y amorosos de él, que sin transigir están dedicados al manejo del prometido gobierno mundial por él. No le servimos solo por una recompensa. No obstante, él promete una magnífica recompensa debido a Su aprecio. ¿Deseamos tal recompensa? Es lo que 23

queda para recibir, aparte de un castigo por infidelidad. (Lucas 12:35-46) Por amor al Rey ungido de Jehová queremos la recompensa de la fidelidad, ¿verdad? Puesto que nuestra respuesta es: ¡Sí! entonces hagamos lo que nos dice el Rey Jesucristo: “Lo que les digo a ustedes, a todos lo digo: Manténganse alerta.”— Marcos 13:32-37; Lucas 21:36. 24

Que todos nosotros los que estamos alerta mantengamos los ojos fijos en la “señal” que se ha podido leer desde 1914 E.C. (Mateo 24:3) ¡Que ella nos estimule siempre a mantenernos alerta, porque el gobierno mundial mesiánico es inminente! 25

[Preguntas del estudio] 1, 2. (a) ¿En qué se suministra prueba de la inminencia del gobierno mundial de Dios? (b) ¿Qué tiene que hacerse antes de la “grande tribulación”? 3. ¿Cuándo huyeron del “lugar santo” los judíos cristianizados? ¿Por qué? 4. ¿Qué cosas le sobrevinieron a aquella generación judía como se había predicho? 5. ¿Por qué no vino el gobierno mundial de Dios después de ser convertida en ruinas Jerusalén? 6. ¿Qué naciones rehúsan reconocer el reino recién nacido de Dios? 7. ¿Por cuánto tiempo más tolerará Cristo a las naciones resistidoras? 8. ¿A quiénes aplica la palabra “generación” en Mateo 24:34? 9. ¿Qué ha visto cumplido ya “esta generación” desde 1914? 10-12. Para “esta generación” de hoy, ¿qué dice Mateo 24:23-31? 13. ¿Cómo sabemos que el resto de “escogidos” está con nosotros? 14. ¿A qué han juntado a los “escogidos” los ángeles? 15. El resto juntado espera ahora la aparición de ¿qué “señal”? 16. ¿Qué nos ilustra la manera en que podemos saber que él está cerca, a las puertas? 17. Nosotros los que vimos comenzar estas cosas, ¿qué hacemos y qué sabemos? 18. ¿Es la advertencia que damos a la gente solo asustarla para que haga lo correcto? 19, 20. ¿Quería Jesús que su advertencia se perdiera con relación a sus apóstoles?

21. ¿Qué preguntas y argumento surgen debido a la ilustración de Jesús? 22. ¿Por qué no da Jesús de antemano notificación del tiempo de su venida? 23, 24. ¿Por medio de qué ilustraciones dio énfasis Jesús al punto ya mencionado? 25. Por eso, ¿en qué deberíamos mantener fijos los ojos, y por qué?

Capítulo 10 Una “grande muchedumbre” aclama al gobierno mundial entrante TODAS las naciones de la Tierra, las que están dentro de la Organización de las Naciones Unidas y las que todavía están fuera de esa organización mundial, están juntas ahora delante del Rey entronizado de Dios, su Hijo Jesucristo. Esto es precisamente como lo predijo el Hijo de Dios cuando estuvo en la Tierra hace diecinueve siglos. En la ilustración final que se da en su profecía que detalla “la señal de [su] presencia [parousía] y de la conclusión del sistema de cosas,” Jesucristo dijo: “Cuando el Hijo del hombre llegue en su gloria, y todos los ángeles con él, entonces se sentará sobre su glorioso trono. Y todas las naciones serán juntadas delante de él.”—Mateo 25:31, 32. 2

Muchos impugnarán el que esa profecía inspirada esté cumplida hoy, y presentarán el argumento de que no ven a los más de cuatro mil millones de personas de todas las nacionalidades, tribus y razas reunidas en algún lugar espacioso delante de un trono celestial visible ni al Hijo del hombre, Jesucristo, sentado allí, atendido por “todos los ángeles” del cielo. Concordamos con estos objetores en que ellos no ven tal grupo internacional de personas junto. Para empezar, ¿cómo llegarían los cuatro mil millones de habitantes de la Tierra a tal lugar de reunión, aunque todos los medios de transportación que están disponibles hoy se les hicieran disponibles? Tal cosa no hay que considerarla siquiera, por supuesto. 3

Sin embargo, los astronautas humanos que se posaron seis veces sobre la Luna en los últimos años pudieron ver la salida de la Tierra y la puesta de la Tierra desde la superficie de la Luna y también ver todo el globo terrestre en rotación mientras viajaban en su astronave entre la Luna y la Tierra. ¡Cuánto más puede el sobrehumano y glorificado Jesucristo observar toda la escena terrestre desde su trono que está muy por encima de la Luna! Desde que fue ensalzado a la diestra de su Padre celestial en 33 E.C., él siempre ha podido hacer esto. Entonces, ¿en qué sentido es que todas las naciones son juntadas delante de él desde que fue entronizado en el cielo al fin de los Tiempos de los Gentiles en 1914? 4

Bueno, la situación ha cambiado para las naciones desde que se venció en 1914 su “arriendo” de la dominación mundial sin la intervención de la soberanía universal de Dios. (Lucas 21:24; Salmo 110:1, 2) Cuando Jesucristo dirigió su atención a las naciones desde entonces en adelante, lo hizo como Rey Mesiánico reinante. (Revelación 11:15; 12:10) Él ahora se encara a ellas y las inspecciona en cuanto a su actitud con relación a mostrar sumisión al propio y legitimó mando mesiánico. A todas se les trata como si fueran un solo sistema político mundial, como un grupo incorporado, y, juntas, ellas se encaran a él y han de habérselas con él en cuanto a la cuestión de principal importancia de la dominación mundial. 5

Ahora tienen que decidir entre la soberanía nacional y la soberanía universal de Dios por su reino mesiánico. Debido a la “autoridad de su Cristo,” el Hijo entronizado de Dios ahora tiene autoridad para “pastorear a todas las naciones con vara de hierro” y hacerlas añicos al tiempo debido. (Revelación 12:5; 19:15; Salmo 2:8, 9) Las naciones condenadas a destrucción ahora se han juntado bajo la Organización de las Naciones Unidas, pero no para ceder al mando de Cristo. A todas las naciones se les ha notificado del cambio en su posición delante de Jehová Dios, el Señalador de los Tiempos de los Gentiles o “tiempos señalados de las naciones.” (Daniel 4:16, 23, 25, 32; Lucas 21:24) ¿De qué manera? Porque Jehová ha enviado sus “embajadores” del Reino a las naciones, a predicar ‘estas buenas nuevas del reino en toda la tierra habitada para testimonio a todas las naciones,’ tal como Jesucristo predijo en Mateo 24:14. Estos “embajadores” del Reino son los “escogidos” de Dios, los “hermanos” espirituales de Jesucristo. (2 Corintios 5:20; Efesios 6:20; Juan 20:17; Hebreos 2:11, 12) Por ese servicio de embajadores y la proclamación del Reino a todas las naciones, se junta a éstas delante del Rey ungido de Dios, Jesucristo, quien tiene el cetro de hierro. Ya los testigos cristianos de Jehová han introducido el mensaje del Reino en doscientos diez países, y, como resultado de esto, hay discípulos activos del Rey Jesucristo en todos esos países. (Mateo 28:19, 20) De esta manera se ha juntado a todas las naciones delante del Rey entronizado como naciones a las cuales se les ha dado notificación, que se hallan en la misma situación, bajo responsabilidad similar.—Compare con Mateo 24:31; Isaías 43:9. 6

DIVIDIENDO ENTRE LOS QUE APOYAN EL REINO Y LOS QUE NO ¿Cómo trata “el Hijo del hombre” sentado en su glorioso trono celestial con las naciones juntadas así delante de él? En su ilustración Jesucristo pasa a decir: “Y separará a la gente unos de otros, así como el pastor separa las ovejas de las cabras. Y pondrá las ovejas a su derecha, pero las cabras a su izquierda.”—Mateo 25:31-33. 7

Debemos notar que el Rey Jesucristo no separa a las naciones en dos clases, una clase contra otra clase en diferencias políticas. Más bien, divide a la gente que vive en esas naciones, permitiendo así que cada persona tome su propia decisión individual prescindiendo de lo que haga el gobierno nacional que tiene sobre sí. Esta obra de separación acontece durante la “presencia” invisible de Cristo en el poder del Reino y gran gloria. (Mateo 24:3, 37, 39, 40) ¿En qué se funda esta obra de separación? Se funda en si apoyan el reino de Cristo o lo rechazan. Entonces, ¿qué clase de animal representa a los que apoyan al Reino, y qué clase a los que no lo apoyan? Notemos: 8

“Entonces dirá el rey a los de su derecha: ‘Vengan, ustedes que han sido bendecidos por mi Padre, hereden el reino preparado para ustedes 9

desde la fundación del mundo. Porque me dio hambre y ustedes me dieron de comer; me dio sed y me dieron de beber. Fui extraño y me recibieron hospitalariamente; desnudo estuve, y me vistieron. Enfermé y me cuidaron. Estuve en prisión y vinieron a mí.’”—Mateo 25:34-36. Así las “ovejas” representan a los apoyadores del reino mesiánico que fue preparado para personas como ellos desde la fundación del mundo de la humanidad. Pero puesto que el Rey Jesucristo no ha sido visible en la carne durante su “presencia” actual en el poder y la gloria del Reino, ¿cómo le han hecho estos individuos semejantes a ovejas esas cosas a él? Su ilustración sigue diciendo: 10

“Entonces los justos le contestarán con las palabras: ‘Señor, ¿cuándo te vimos con hambre y te alimentamos, o con sed, y te dimos de beber? ¿Cuándo te vimos extraño y te recibimos hospitalariamente, o desnudo, y te vestimos? ¿Cuándo te vimos enfermo, o en prisión, y fuimos a ti?’ Y en respuesta el rey les dirá: ‘En verdad les digo: Al grado que lo hicieron a uno de los más pequeños de estos mis hermanos, a mí me lo hicieron.’”— Mateo 25:37-40. 11

Por la referencia “mis hermanos,” el Rey Jesucristo quiere decir “sus escogidos,” los que son “herederos por cierto de Dios, mas coherederos con Cristo.” (Mateo 24:31; Romanos 8:17) De estos hermanos espirituales, todavía queda un resto pequeño en la Tierra. Todos éstos han estado diligentemente ocupados en cumplir la profecía de Jesús que dice: “Estas buenas nuevas del reino se predicarán en toda la tierra habitada para testimonio a todas las naciones,” porque por la “señal” de la “presencia” invisible o parusía de Cristo saben que el reino de Dios está cerca, a las puertas. Por haber hecho esto desde que terminaron los Tiempos de los Gentiles en 1914, ellos han sido los que han experimentado hambre, sed, desnudez, enfermedad, ausencia del hogar o falta de hogar, y hasta aprisionamiento, simplemente por predicar “estas buenas nuevas del reino.” (Mateo 24:14, 32, 33; Marcos 13:9, 10; Lucas 21:29-31) Los “justos” semejantes a ovejas acuden en ayuda de los “hermanos” espirituales de Cristo porque están a favor del Reino que estos “embajadores” cristianos están predicándoles. Aclaman ese reino como la gobernación legítima y apropiada para toda la humanidad. 12

A sabiendas dan ayuda para promover la proclamación del Reino, porque oran por ese gobierno mundial y están a favor de él. Por eso la ayuda que dan a los “hermanos” espirituales del Rey Jesucristo cuenta ante él. Estas personas fueron prefiguradas mucho tiempo atrás por las personas no judías que acudieron en ayuda de los judíos en peligro en los días de la reina Ester y el primer ministro Mardoqueo durante el reinado de Asuero, emperador de Persia.—Ester 8:17; 9:3. 13

Por consiguiente, a éstos aplica esta promesa del Rey: “Cualquiera que les dé un vaso de agua de beber debido a que pertenecen a Cristo, 14

verdaderamente les digo, de ninguna manera perderá su galardón.” (Marcos 9:41) De modo que ahora se recompensa a los justos suministradores de socorro parecidos a ovejas con el privilegio de unirse al resto de los “hermanos” de Cristo en predicar “estas buenas nuevas del reino” por todo el mundo y participar con el resto en los sufrimientos que éstos experimentan por esta causa. En realidad llegan a ser “discípulos” de Cristo el Rey que se dedican al Padre celestial del Rey, Jehová Dios, y se bautizan en agua como símbolo de tal dedicación.—Mateo 28:19, 20. Por este proceder de dedicación, a los justos semejantes a ovejas se les hace emisarios del reino mesiánico de Dios, con una comisión plena de predicar este gobierno mundial teocrático a personas de todas las tribus, naciones, razas y lenguas. Verdaderamente llegan a ser los “que han sido bendecidos por [el] Padre [de Cristo].” 15

Por su fidelidad a la soberanía universal del Padre del Rey se les recompensará —no con una herencia en el reino celestial con Jesucristo y sus “hermanos” espirituales— sino con una herencia en la región o dominio terrestre del reino mesiánico. La palabra “reino” con frecuencia se usa para significar la región sobre la cual manda un reino. Esta región del Reino será el Paraíso terrestre del cual habló Jesucristo hace más de mil novecientos años, poco antes de morir colgando del madero, cuando le dijo al simpatizador moribundo: “Verdaderamente te digo hoy [el Día de la Pascua, 33 E.C.]: Estarás conmigo en el Paraíso.” (Lucas 23:43) Pero cuando Dios echó a Adán y Eva del paraíso que había en Edén, pensaba en este Paraíso restaurado, según lo que dijo en Génesis 3:15, y eso fue en la “fundación del mundo.”—Mateo 25:34. 16

LOS QUE NO APOYAN AL GOBIERNO MUNDIAL ENTRANTE En contraste con la invitación del Rey de “hereden el reino [región] preparado para [las ovejas justas] desde la fundación del mundo,” está el juicio que se pronuncia contra las “cabras” simbólicas de la ilustración. En cuanto a éstas la parábola pasa a decir: 17

“Entonces dirá, a su vez, a los de su izquierda: ‘Váyanse de mí, ustedes que han sido maldecidos, al fuego eterno preparado para el Diablo y sus ángeles. Porque me dio hambre, pero ustedes no me dieron de comer, y me dio sed, pero no me dieron de beber. Fui extraño, pero no me recibieron hospitalariamente; desnudo estuve, pero no me vistieron; enfermo y en prisión, pero no me cuidaron.’ Entonces ellos también contestarán con las palabras: ‘Señor, ¿cuándo te vimos con hambre, o con sed, o extraño, o desnudo, o enfermo, o en prisión, y no te servimos?’ Entonces les contestará con las palabras: ‘En verdad les digo: Al grado que no lo hicieron a uno de estos más pequeños, no me lo hicieron a mí.’”— Mateo 25:41-45. 18

Bien pudiéramos preguntar aquí: ¿Considera el Rey este asunto como un simple descuido no deliberado por parte de la clase de las “cabras”? 19

¿Cuenta él la conducta de ellos como un proceder que sencillamente expresa descuido o negligencia por ignorancia por parte de ellos? Ciertamente que no, cuando vemos que llama “maldecidos” a estos negligentes y les ordena que se vayan al “fuego eterno preparado para el Diablo y sus ángeles.” El Rey debe clasificarlos o juzgarlos como inicuos, según la regla bíblica que dice: “La maldición de Jehová está sobre la casa del inicuo, pero él bendice el lugar de habitación de los justos.” (Proverbios 3:33) Pero ¿por qué debería maldecirse a la clase de las “cabras” por simplemente no acudir en ayuda y socorro de los “hermanos” de Cristo? Si decimos que las “cabras” simbólicas fueron ‘maldecidas’ y condenadas a destrucción con el Diablo y sus ángeles simplemente por descuidar por ignorancia a los “hermanos” de Cristo, entonces, lógicamente, tenemos que alegar que las “ovejas” simbólicas fueron bendecidas y recompensadas con un lugar en la región del Reino simplemente por hacer bien en ignorancia a los “hermanos” de Cristo. ¿Qué verdadero mérito habría, entonces, en el bien que las “ovejas” hubieran hecho a los “hermanos” de Cristo? ¿O qué demérito en el descuido o negligencia que las “cabras” no se hubieran dado cuenta de que estuvieran cometiendo? Entonces, ¿dónde hay justicia en recompensar a una clase ignorante y castigar a la otra clase ignorante? Aparentemente no hay justicia en ningún lugar en ese trato. 20

Concedamos que ambas clases ignoraran la regla de que lo que hicieran o no les hicieran a los “hermanos” espirituales de Cristo lo hacían o no lo hacían a Cristo mismo. ¡Todavía, no ignoraban el hecho de que estaban tratando con sus “hermanos”! ¿Por qué no? 21

Tenemos que tomar la parábola de las ovejas y las cabras que dio Jesús junto con lo que dijo antes en su profecía sobre “la señal de [su] presencia y de la conclusión del sistema de cosas.” (Mateo 24:3) Él habló acerca de la obra aprobada para sus “hermanos” espirituales cuando, en Mateo 24:14, les dijo: “Estas buenas nuevas del reino se predicarán en toda la tierra habitada para testimonio a todas las naciones.” No solo a las naciones llamadas cristianas o la cristiandad, sino a “todas las naciones” en “toda la tierra habitada.” Sin embargo Jesús también les dijo a sus “hermanos” espirituales: “Entonces los entregarán a ustedes a tribulación y los matarán, y serán objetos de odio por parte de todas las naciones por causa de mi nombre.”—Mateo 24:9. 22

El odio por causa de su nombre significa que los “hermanos” de Cristo se identificarían por su predicación de “estas buenas nuevas del reino” por todo el mundo y por hacer discípulos de él, bautizándolos. (Mateo 28:19, 20) En general, la gente o los gobiernos nacionales apoyados por esta gente rehúsan reconocer que estos predicadores de las “buenas nuevas” del Reino son los “hermanos” espirituales de Cristo. Pero ¿refuta esto realmente el que ellos sean en realidad los “hermanos” espirituales de Cristo? ¡No! 23

Este negarse general de la gente a reconocer a los “hermanos” espirituales de Cristo como tales, y este odio internacional a ellos debido a lo que están predicando acerca del Reino han influido en la manera en que la gente los trata. Es posible que donde una nación tenga una Declaración de Derechos en la cual se defienda la libertad de cultos los individuos no participen en perseguir violentamente a los “hermanos” de Cristo. Pero por temor a la opinión pública o porque concuerdan con ella, estos individuos que se abstienen de perseguir rehúsan voluntariamente ayudar, socorrer o apoyar a los “hermanos” de Cristo. Por eso, su actitud negativa, su negligencia, o descuido, no es excusable.—Proverbios 29:18. 24

La ilustración de Jesús acerca de las ovejas y las cabras toma todo esto en consideración. El no acudir en ayuda y socorro de los “hermanos” de Cristo lleva consigo un no ayudar ni apoyar el reino de Cristo, el gobierno mundial entrante. Esto es asunto serio, y no hay posición intermedia, no hay transigencia, no hay estar por ambas partes, respecto a la cuestión del gobierno mundial. Jesucristo el Rey odia la tibieza. (Revelación 3:16) Jesús también dijo: “El que no está de parte mía, contra mí está, y el que no recoge conmigo, desparrama.” (Mateo 12:30; Lucas 11:23) Con este fundamento no hay injusticia por parte de Jesús cuando declara que los que son como cabras y no apoyan su “trono” o reino son “maldecidos” y han de ser castigados con el Diablo y sus ángeles. El título “Diablo” significa “Calumniador,” y a estas “cabras” se les clasifica con el Diablo Principal porque escuchan las calumnias del Diablo y sus ángeles y abrigan prejuicios contra los “hermanos” de Cristo. (Revelación 12:10) Deben compartir su suerte. 25

Por eso, no seamos culpables de presentar excusas para las “cabras” y así poner en tela de juicio la justicia de Cristo el Rey. Sea que a alguien le guste o no la idea de ello, la ilustración de Jesús cierra con referencia al juicio que se ejecuta en las “cabras” que despliegan culpa y las “ovejas” justas, diciendo: “Y éstos [las cabras simbólicas] partirán al cortamiento eterno, pero los justos a la vida eterna.” (Mateo 25:46) ¿Cuándo les dirá Cristo el Rey a estas “cabras” malditas que se vayan al “fuego” simbólico, el “cortamiento” (griego: kólasis)? Después que sus “hermanos” espirituales hayan efectuado por toda la Tierra la predicación de las buenas nuevas del Reino y le venga “el fin” a este sistema de cosas que ahora está en su “conclusión.” (Mateo 24:3, 14) Entonces estallará por todo el mundo la “grande tribulación,” pero las “cabras” nunca saldrán con vida de ella.— Mateo 24:21, 22. 26

El “cortamiento” (kólasis) eterno de las “cabras” es lo opuesto de la “vida eterna” con la cual se recompensa a las “ovejas.” Es un castigo eterno, porque esta forma de castigo nunca será removido de estas “cabras” que son ejecutadas en la “grande tribulación.” Estas personas nunca serán resucitadas de entre los muertos. Experimentan aquella otra muerte de que habla la Biblia, “la muerte segunda,” que está simbolizada 27

por “el lago de fuego.” De este simbólico “lago de fuego” no serán sacadas, tal como no serán sacados de allí Satanás el Diablo y sus ángeles demoníacos. (Revelación 20:10-15; Génesis 3:15) Perecerán en la “grande tribulación” que culminará en la “guerra del gran día de Dios el Todopoderoso” en Har-Magedón.—Revelación 16:14, 16; 19:11-21. LOS QUE PASAN CON VIDA A TRAVÉS DE LA “GRANDE TRIBULACIÓN” No queremos que se nos ‘corte para siempre’ de la existencia junto con las “cabras” en la “grande tribulación” que se avecina, ¿verdad? No si queremos disfrutar del gobierno mundial entrante de Jehová Dios por medio de su Hijo Jesucristo. Nuestra opción sensata y que honra a Dios debería ser la de demostrar ahora que somos como las benditas “ovejas.” La clase compuesta de “ovejas” simbólicas pasará con vida a través de la “grande tribulación.” Esta supervivencia lleva a estas personas a su “vida eterna” bajo el gobierno mundial entrante. Habrá una “grande muchedumbre” sin cantidad específica de estas personas semejantes a ovejas que pasarán con vida a través de la “grande tribulación.” Se nos da seguridad de esto según lo que se declara en el diálogo entre un “anciano” especial y uno de los “hermanos” de Cristo, el apóstol Juan. Acerca de este diálogo leemos: 28

“Y en respuesta uno de los ancianos me dijo: ‘Estos que están vestidos de la larga ropa blanca, ¿quiénes son y de dónde vinieron?’ De modo que le dije inmediatamente: ‘Señor mío, tú eres el que lo sabes.’ Y me dijo: ‘Estos son los que salen de la grande tribulación, y han lavado sus ropas largas y las han emblanquecido en la sangre del Cordero. Por eso es que están delante del trono de Dios; y le están rindiendo servicio sagrado día y noche en su templo; y El que está sentado en el trono extenderá su tienda sobre ellos.’”—Revelación 7:13-15. 29

Dios extiende su “tienda” de protección sobre estas personas en largas ropas blancas. Esto explica por qué, aparte del resto de los “hermanos” espirituales de Cristo a quienes ellas han seguido haciéndoles el bien, estas personas son las únicas de entre toda la población de la Tierra en ese tiempo que “salen de la grande tribulación.” Durante esa “grande tribulación” todos los tronos de los gobernantes de las naciones han sido derribados y destruidos. (Ageo 2:22) Por esa razón en esta visión particular del apóstol Juan no se habla de ningún otro trono sino del “trono de Dios.” (Revelación 7:10-15) A nadie más se ve sentado en un trono sino a Dios. ¡Su posición de Soberano del universo, incluso nuestra Tierra, queda vindicada! 30

Esta visión muestra que estas personas en largas ropas blancas que pasan con vida a través de la “grande tribulación” han hecho más de lo que se ilustra en la parábola de las ovejas y las cabras dada por Jesús. “Han lavado sus ropas largas y las han emblanquecido en la sangre del Cordero.” Este hecho declarado da énfasis a que son personas que creen 31

en el Cordero de Dios, Jesucristo, y que han aceptado su sacrificio expiatorio, su sangre derramada. Este es uno de los factores que las mueve a ayudar, socorrer, y trabajar con los “hermanos” espirituales del Cordero. Sobre todo, han acudido al Padre celestial del Cordero, el Soberano Universal, para ser salvados de la “grande tribulación.” Los de la “grande muchedumbre” muestran que satisfacen el requisito fundamental para esa salvación por la actitud que adoptan con relación al trono de Dios y por lo que confiesan públicamente delante de éste. Este hecho se nos aclara cuando leemos: “Después de estas cosas [después de ser sellados los 144.000 israelitas espirituales, los hermanos espirituales del Cordero] vi, y, ¡miren! una grande muchedumbre, que ningún hombre podía contar, de todas las naciones y tribus y pueblos y lenguas, de pie delante del trono y delante del Cordero, vestidos de largas ropas blancas; y había palmas en sus manos. Y siguen clamando con voz fuerte, diciendo: ‘La salvación se la debemos a nuestro Dios, que está sentado en el trono, y al Cordero.’”—Revelación 7:9, 10. 32

Vestida apropiadamente, esta “grande muchedumbre,” entre la cual no hay ningún israelita espiritual, está de pie respetuosamente delante del trono de Dios, reconociendo a Dios como el Gobernante Mundial. (Revelación 11:15) Como con palmas, lo aclaman unidamente a Él como el Soberano Universal, Aquel que tiene derecho a ocupar un trono con gobernación universal. (Compare con Juan 12:12, 13.) También reconocen al “Agente Principal de la vida” usado por Jehová Dios, “el Cordero,” Jesucristo su Hijo. (Hechos 3:15; Juan 1:29, 36) Por eso, gozosamente confiesan ante cielo y tierra la Fuente de la salvación que alcanzan de la “grande tribulación” y también a su Agente Principal relacionado con eso. 33

Durante esta “conclusión del sistema de cosas,” notablemente desde el año 1935 E.C., esta “grande muchedumbre” ha sido congregada y unificada a pesar de sus extracciones nacionales, raciales y tribuales. Han oído la predicación mundial de “estas buenas nuevas del reino.” Obrando en armonía con la oportuna información que se publicó en la página 250 (párrafo 34) de The Watchtower del 15 de agosto de 1934 (En español, La Torre del Vigía de enero de 1935, página 12, párrafo 34), procedieron a dedicarse a Jehová Dios por medio de su Cordero Jesucristo. Simbolizaron su dedicación por medio de bautizarse en agua. Se han unido al resto de los “hermanos” espirituales de Cristo en predicar las “buenas nuevas” hasta los fines de la Tierra. ¡Qué bueno es a nuestros oídos el oírles aclamar así al gobierno mundo entrante de Jehová! 34

[Preguntas del estudio] 1, 2. ¿Delante de quién están juntas ahora todas las naciones terrestres? 3. ¿Qué argumento pudieran presentar algunos al objetar a esa declaración que hemos hecho?

4. ¿Por qué no le presenta ningún problema a Jesús ahora un juntar de esa clase? 5. ¿Cómo se ha juntado a todas las naciones delante de Cristo entronizado? 6. ¿Cómo se les ha notificado a todas las naciones del cambio que ha habido en su posición? 7, 8. (a) ¿Divide el Rey a las naciones como tales según diferencias políticas? (b) ¿En qué se funda la separación que se hace? 9, 10. Las personas semejantes a ovejas que son separadas a la derecha del rey hicieron ¿qué? 11. ¿Cómo contesta el Rey las preguntas de las “ovejas”? 12. ¿Cómo han hecho estas cosas las “ovejas” justas, y por qué? 13, 14. (a) ¿Como qué personas no judías de los días de la reina Ester han llegado a ser estas “ovejas”? (b) Llegan a ser los discípulos del Rey ¿cómo? 15. A las “ovejas” se les bendice con ¿qué comisión de servicio? 16. ¿Cómo heredarán las “ovejas” el Reino preparado desde hace mucho tiempo? 17, 18. ¿Qué juicio se pronuncia contra las “cabras,” y por qué? 19. ¿Considera el Rey la conducta de ellos como descuido o negligencia por ignorancia? 20, 21. Si no conocían ninguna regla, ¿qué sabían las “ovejas” y las “cabras”? 22. ¿A quiénes habían de predicar los “hermanos” de Cristo? ¿Qué reacción habría a esa predicación? 23. ¿Es el que no se les reconozca prueba de que los “hermanos” de Cristo no sean tal cosa? 24. ¿Cuándo se hace inexcusable el tratar con descuido o negligencia a los “hermanos” de Cristo? 25. ¿Por qué no puede haber indiferencia en cuanto a esta cuestión sin que haya castigo? 26. ¿Cuándo les dirá el Rey a las “cabras” que se vayan al “fuego”? 27. A las “cabras” se les ‘corta’ de ¿qué, y por cuánto tiempo? 28, 29. Las “ovejas” pasan con vida a través de ¿qué, según se muestra en Revelación 7:13-15?

30. ¿Bajo que protección sobreviven, para estar de pie delante de quién? 31. ¿Qué acción, que no se muestra en la parábola de Jesús, han adoptado? 32. ¿Cómo satisfacen el requisito básico para esa salvación? 33. ¿Qué reconocen ante Dios y su Hijo? ¿Cómo? 34. ¿Desde cuándo, particularmente, se les ha juntado?

Capítulo 11 Pasa un mundo dividido AHORA nos hallamos más de diecinueve siglos más cerca de ello. ¿De qué? De ese beneficioso cambio mundial que anunció el escritor bíblico del primer siglo E.C., al decir: “Pues pasa la configuración de este mundo.” (1 Corintios 7:31, Sagrada Biblia, Versión Bover-Cantera) La “grande muchedumbre” de personas que ahora están preparándose para el gobierno mundial entrante que Dios trae se regocijan por la inminencia de la desaparición del mundo dividido actual.—Revelación 7:9, 10. La Organización de las Naciones Unidas, aunque ahora tiene más de treinta años de existencia y cuenta con 147 naciones miembros, no ha sanado al mundo de su condición dividida. Hoy muchos delegados de la O.N.U. se dan cuenta de que la fuerza más divisiva de todas es la religión mundana. Las diferencias religiosas están profundamente arraigadas. Las sectas dividen hasta a los principales sistemas religiosos. Tan solo la cristiandad está dividida en mil maneras o más. A pesar de las diferencias entre estos grupos, la Palabra de Dios los agrupa a todos en un solo imperio mundial de religión falsa. Compara a este imperio religioso con una mujer, al decir: “La mujer que viste [tú, el apóstol Juan] significa la gran ciudad que tiene un reino sobre los reyes de la tierra.” (Revelación 17:18) Pues bien, ¿precisamente quién es esta “mujer” que es comparable a una ciudad imperial que ejerce influencia sobre gobernantes políticos? El apóstol Juan nos lo dice, así: 2

“Sobre su frente estaba escrito un nombre, un misterio: ‘Babilonia la Grande, la madre de las rameras y de las cosas repugnantes de la tierra.’ Y vi que la mujer estaba borracha con la sangre de los santos y con la sangre de los testigos de Jesús.” (Revelación 17:5, 6) “La gran ramera que se sienta sobre muchas aguas, con quien los reyes de la tierra cometieron fornicación, entre tanto que los que habitan la tierra fueron emborrachados con el vino de su fornicación.”—Revelación 17:1, 2. 3

El “reino” que Babilonia la Grande ha tenido sobre los reyes de la Tierra ha sido de ramerías, un proceder de “fornicación” religiosa. La gente ha sufrido por el hecho de que ella haya mezclado la religión con la política. Esto ha sido un brebaje amargo que la gente ha bebido de manos de ella Ha hecho que anden tambaleando como si estuvieran borrachos. 4

La “ramera” madre ha producido en abundancia muchas otras “rameras” religiosas y las ha hecho miembros de su casa de rameras mundial. Hoy Babilonia la Grande aclama a las Naciones Unidas como anteriormente hizo con la Liga o Sociedad de Naciones. Ha puesto su confianza en ella en vez del reino mesiánico de Dios, el gobierno mundial entrante. De modo que cabalga sobre ella. Por popularidad y ventaja para sí misma se deja llevar por ella, para así mantener junto en cierta clase de “unidad con diversidad” su imperio señalado por la división religiosa. Pero 5

la montura sobre la cual va es peligrosa. No es sin propósito que la Biblia representa su montura con el símbolo de una “bestia salvaje” de color escarlata que tiene siete cabezas y diez cuernos. Esta bestia salvaje lleva “nombres blasfemos.” Lo que Babilonia la Grande llama a la bestia es blasfemia contra Dios.—Revelación 17:3. ¿Cómo vengará Dios la sangre inocente con la cual ella está “borracha”? Dejando que la organización de la “bestia salvaje” se vuelva contra ella con odio cuando Él deje que comience la “grande tribulación.” El resultado de esto es la destrucción de ella. (Revelación 17:15, 16; 19:13) Por eso ahora, durante esta “conclusión del sistema de cosas,” Jehová Dios ha hecho que por todo el mundo se proclame el urgente clamor: “Sálganse de ella, pueblo mío, si no quieren participar con ella en sus pecados, y si no quieren recibir parte de sus plagas. Porque sus pecados se han amontonado hasta llegar al cielo, y Dios ha recordado sus actos de injusticia.” (Revelación 18:4, 5) El resto de los “hermanos” espirituales de Cristo y también las “ovejas” que componen la “grande muchedumbre” han obedecido el mandato de Dios y han salido. Por consiguiente no perecerán con ella en la “grande tribulación.” 6

DESPUÉS DE LA DESTRUCCIÓN DE “BABILONIA LA GRANDE” Después de la destrucción del imperio de la religión falsa, no habrá cristiandad que continúe llamando a la Organización de las Naciones Unidas “la expresión política del Reino de Dios en la Tierra.” Los miembros de la O.N.U. y otras naciones que no son miembros de esa organización no pensarán que le han hecho a Dios un favor al destruir a la querida anterior de ellos que estaba borracha con la sangre inocente de los “santos” de Dios y de “los testigos de Jesús.” Las naciones no destruyen a la “ramera” religiosa a propósito para vengar a Dios y su pueblo perseguido. Lo hacen como acción antirreligiosa, sin intención de exceptuar a la religión verdadera, “la forma de adoración que es limpia e incontaminada desde el punto de vista de nuestro Dios y Padre,” como dice Santiago 1:27. Ya más de la mitad de los miembros de la O.N.U., que no pertenecen a la cristiandad, niegan que ella sea “la expresión política del Reino de Dios en la Tierra.” 7

Por eso, después de destruir a Babilonia la Grande (entre ella a la cristiandad), ¿qué harán las naciones que se adhieren a la O.N.U. o que cooperan con ella? El mismo capítulo que describe a la organización de la “bestia salvaje” diciendo que es una bestia de siete cabezas con diez cuernos nos dice esto, con estas palabras: “Estos tienen un solo pensamiento, y así es que dan su poder y autoridad a la bestia salvaje. Estos combatirán con el Cordero, pero, porque es Señor de señores y Rey de reyes, el Cordero los vencerá. También, los llamados y escogidos y fieles que con él están lo harán.” (Revelación 17:13, 14) Esta batalla se efectuará al mismo tiempo que lo que se describe en Revelación 19:11-21. Todo esto 8

es la “guerra del gran día de Dios el Todopoderoso” en Har-Magedón.— Revelación 16:14, 16. De esta manera dramática se realiza el sueño que el profeta Daniel le interpretó a Nabucodonosor el rey de la antigua Babilonia. El reino que el Dios del cielo establece en los días de los gobernantes finales de los gobiernos políticos actuales “triturará y pondrá fin a todos estos reinos.” (Daniel 2:44) Esta será la culminación sin precedente del “tiempo de angustia como el cual no se ha hecho que ocurra uno desde que hubo nación hasta aquel tiempo.” (Daniel 12:1; Mateo 24:21, 22; Marcos 13:19, 20) Acerca de ese tiempo de guerra universal, a Jesucristo el mariscal de campo de Jehová se le dice: “Jehová mismo a tu diestra ciertamente hará pedazos a reyes en el día de su cólera. Ejecutará juicio entre las naciones; causará una plenitud de cuerpos muertos. Ciertamente hará pedazos al que es cabeza sobre una tierra populosa.” (Salmo 110:5, 6) El “que es cabeza” de toda “tierra populosa” yacerá triturado entre una “plenitud de cuerpos muertos.” ¿Podemos abrigar duda alguna de que este “día de su cólera” haya de ser un tiempo de gran turbulencia? 9

El apóstol Pedro llama atención a lo ruidoso de ese tiempo de angustia mundial sin paralelo durante el cual las instituciones de la humanidad que tanto tiempo llevan de estar establecidas son disueltas como si fuera por el fuego de un horno nuclear. Escribiendo, no a mundanos, sino a cristianos que pueden esperar ser testigos de estas cosas y sobrevivir, Pedro dice: “Sin embargo el día de Jehová vendrá como ladrón, en el cual los cielos pasarán con un ruido de silbido, pero los elementos estando intensamente calientes serán disueltos, y la tierra y las obras que hay en ella serán descubiertas. Puesto que todas estas cosas así han de ser disueltas, ¡qué clase de personas deben ser ustedes en actos santos de conducta y hechos de devoción piadosa, esperando y teniendo muy presente la presencia del día de Jehová, por el cual los cielos estando encendidos serán disueltos y los elementos estando intensamente calientes se derretirán! Pero hay nuevos cielos y una nueva tierra que esperamos según su promesa, y en éstos la justicia habrá de morar.”—2 Pedro 3:1013. 10

¿Quién va a encender ese fuego que todo lo consume y que rabiará alrededor de todo este globo terráqueo? ¡No las seis o más naciones que poseen energía nuclear por medio de hacer estallar sus existencias sobreabundantes de bombas y mísiles en ataques de sorpresa unas contra otras! No, sino Jehová Dios, el Creador de todos los soles de todas las galaxias estelares por todas las profundidades del espacio. El tiempo de esa ardiente conflagración será “el día de Jehová.” Aunque nosotros los que investigamos la Biblia sabemos que estamos viviendo en el predicho “tiempo del fin,” la “conclusión del sistema de cosas,” sin embargo ese día en el cual las gobernaciones humanas serán removidas vendrá como ladrón. Los gobiernos políticos de hechura humana, que han dominado a 11

la humanidad tal como los cielos literales dominan la Tierra, no podrán mantenerse juntos, sino que se desintegrarán en desorganización caótica. Estos “cielos” simbólicos “pasarán,” según lo dice el apóstol Pedro, “con un ruido de silbido.” El sonido prolongado, como el de vapor que se escapara bajo presión, posiblemente se vaya convirtiendo en un rugido a medida que los “cielos” gubernamentales vayan desplomándose en ruinas. El calor de la cólera de Dios se expresará a tal grado de intensidad contra este sistema de cosas impío bajo el control de Satanás, que se pudiera decir que este sistema se convierte en líquido, pierde estabilidad, cohesión interna. Los “elementos,” ese espíritu ambiental circundante que envuelve a la Tierra y mueve a los habitantes de la Tierra en general, perderá cuanta fría serenidad y ecuanimidad haya tenido. Bajo la indignación ardiente del día de Jehová, ese espíritu elemental se calentará hasta la incandescencia y encenderá en la gente la disposición a actos desenfrenados de pensar confuso, a pelear violenta y desaforadamente unos con otros por la supervivencia propia. Ya no mantendrá junta a la gente como una comunidad autónoma. ¡Así se disolverán, derretirán, los “elementos” simbólicos! 12

Pues bien, ¿se da a entender nuestro globo terráqueo cuando se dice que la “tierra” ha de ser destruida? No, esa “tierra” representa la sociedad humana según la manera en que funciona bajo este sistema de cosas. La sociedad humana tiene muchas “obras” que exhibir como cosas que ha logrado. Tiene muchas instituciones, muchas organizaciones, muchas sectas religiosas, muchos ideales nacionalistas. 13

Por la “presencia del día de Jehová” ¿qué se mostrará que son esta forma de sociedad humana y sus “obras” egoístas? La “presencia” de ese día ardiente de juicio divino quitará de estas cosas toda cobertura. Serán descubiertas en la condición en que realmente son. Estas cosas quedarán manifestadas a la gente como cosas condenadas por el Dios de altruismo y justicia. Como en los días de Noé antes del diluvio global, Jehová verá “que [abunda] la maldad del hombre en la tierra y toda inclinación de los pensamientos de su corazón [es] solamente mala todo el tiempo.” (Génesis 6:5) De modo que en armonía con la manera en que juzga los asuntos terrestres, Jehová de nuevo acabará con un “mundo de gente impía,” la sociedad humana actual representada simbólicamente por la expresión “tierra.”—2 Pedro 2:5; 3:7. 14

Los que ‘no se han hecho parte del mundo,’ a saber, el resto de los “hermanos” espirituales de Cristo y la “grande muchedumbre” de las “otras ovejas” de Cristo, se encontrarán en medio este ardiente “día de Jehová.” ¿Qué harán en medio de esta “grande tribulación” que no se repetirá? (Juan 17:14, 16; 10:16) No serán disueltos con los “cielos” gubernamentales, los “elementos” temperamentales y la “tierra” social corrupta y sus “obras” mundanas. Bajo la “tienda” de la protección de Jehová, mirarán hacia fuera a las cosas estupendas que suceden y no se 15

desalentarán ante el pasar violento de este mundo dividido, los opositores de la soberanía de Jehová.—Salmo 37:34. Estos que tendrán la protección divina no se horrorizarán al pasar estos viejos “cielos” y la vieja “tierra.” Se regocijarán de que así se vindique la soberanía universal de Jehová. Llegarán a ser testigos oculares de las “actividades de Jehová, cómo ha establecido acontecimientos pasmosos en la tierra.” Se darán cuenta de que “está haciendo cesar las guerras hasta la extremidad de la tierra.” (Salmo 46:8, 9) Estarán anhelando el establecimiento de “nuevos cielos y una nueva tierra,” cosas que por mucho tiempo han esperado con aguante y perseverancia. En alborozo se regocijarán de que al fin en realidad haya llegado el tiempo en que Jehová Dios cumplirá su promesa de “nuevos cielos y una nueva tierra.” (2 Pedro 3:13) ¡Oh qué experiencia ahora indescriptible será para ellos pasar con vida a través de la “grande tribulación” y su “guerra del gran día de Dios el Todopoderoso” en Har-Magedón y ser preservados con vida para entrar en Su Nuevo Orden! 16

[Preguntas del estudio] 1. La “grande muchedumbre” se regocija por ¿qué cambio mundial inminente? 2, 3. (a) ¿Qué no ha hecho para el mundo la Organización de las Naciones Unidas? (b) ¿Cómo representa la Biblia al divisivo imperio religioso? 4. ¿Cómo ha afectado a la gente común la “fornicación” de Babilonia la Grande? 5. ¿De qué manera cabalga esta ramera sobre la “bestia salvaje”? ¿Por qué? 6. ¿Quiénes salen ahora de Babilonia la Grande y por qué? 7. ¿Tiene la “bestia salvaje” la intención de servir a Dios por medio de destruir a Babilonia la Grande? 8. Después de destruir a Babilonia la Grande, ¿qué hará la “bestia”? 9. ¿Qué les sucederá a esos “reyes” opuestos a Jehová y a Cristo? 10. ¿Cómo describe Pedro lo ruidoso del “día” de Jehová? 11. ¿Quién encenderá el fuego de ese “día”? ¿En qué tiempo? 12. ¿En qué sentido se derretirán los “elementos” en ese “día”? 13. ¿Qué son la “tierra y las obras que hay en ella” que se dan a entender aquí? 14. ¿En qué sentido serán descubiertas la “tierra y las obras que hay en ella”?

15. ¿Cómo les irá entonces al resto y la “grande muchedumbre”? 16. Estos llegan a ser ¿qué clase de testigos oculares de las actividades de Dios?

Capítulo 12 Cómo podemos disfrutar para siempre del gobierno mundial EL GOBIERNO MUNDIAL por el Creador del cielo y la Tierra será una cosa de la cual disfrutar para siempre. Permanecerá para todo tiempo y siempre se encargará de los asuntos de la humanidad con éxito perfecto. Después que hayan pasado las nubes tempestuosas del mayor “tiempo de angustia” de la humanidad, este gobierno mundial de Jehová Dios por Jesucristo será los “nuevos cielos” que se extenderán esplendorosamente como en arco sobre toda la Tierra. En la Tierra brotará una nueva y justa sociedad humana que responderá armoniosamente a los “nuevos cielos” gubernamentales. ¡Se abrirá el camino al Paraíso! Imagínese: Habrá testigos oculares directos del establecimiento de los “nuevos cielos” en los cuales ha de morar la justicia. ¿Estaremos nosotros entre estos testigos oculares? Correctamente podemos hacernos esa pregunta, porque la Biblia nos asegura que habrá sobrevivientes sin número especificado que estarán aquí en la Tierra para clamar con gozo la inauguración de los “nuevos cielos.” De ninguna manera se establecerán esos “nuevos cielos” sobre una Tierra sin población. Desde el mismo principio de su justo regir tendrán súbditos voluntarios aquí en la Tierra limpiada. Por la bondad inmerecida del Creador de los “nuevos cielos y una nueva tierra,” el resto de los “hermanos” espirituales de Cristo y la “grande muchedumbre” de cantidad desconocida de los que ayudaron y apoyaron a los “hermanos” de Cristo tendrán una experiencia como la del apóstol Juan. Los ojos de ellos experimentarán arrobamiento, como los de Juan, ante la visión acerca de la cual él dijo: “Y vi un nuevo cielo y una nueva tierra; porque el cielo anterior y la tierra anterior habían pasado, y el mar ya no existe.”—Revelación 21:1; Isaías 65:17. 2

¿Qué? ¿Se evaporarán los siete mares de nuestro globo terráqueo durante el ardiente “día de Jehová” y dejarán de existir? ¡Felizmente, no será así! Juan habla de un “mar” simbólico. Por consiguiente, cuando, al debido tiempo, el resto y la “grande muchedumbre” de sus compañeros sobrevivientes extiendan la mirada sobre la nueva escena, no verán en la Tierra limpiada en ningún lugar alguna sociedad inquieta, descontenta, turbulenta, que esté expresando oposición al gobierno mundial que Dios ha establecido. El “mundo de gente impía” habrá sido secado, eliminado, removido durante la “grande tribulación” que para ese tiempo habrá acabado de acontecer. Ese “mar” de agua contaminada y cargada de suciedad no pasará a través del día de juicio en el cual la cólera de Jehová se derrama como fuego.—Revelación 8:8, 9; 10:2; 13:1; 16:3; 17:15; 2 Pedro 2:5; Isaías 17:12; 57:20. 3

Ese alborotoso elemento que ha habido en la Tierra y que ha rugido contra el gobierno mundial de Dios por Cristo no será el único grupo opositor al que se pondrá fuera de acción. Otro grupo opositor, uno más 4

poderoso todavía, será removido de la vecindad de nuestra Tierra. ¿Quiénes son estos últimos? El Dragón simbólico, Satanás el Diablo, y todos sus ángeles demoníacos. Tras la guerra en el cielo que vino después de nacer el reino mesiánico de Dios al fin de los Tiempos de los Gentiles en 1914, ese “gobernante de los demonios,” junto con sus legiones de ángeles demoníacos, fue desalojado del cielo. Abajo a la vecindad de nuestra Tierra fueron arrojados, para ser restringidos allí por “un corto período de tiempo.” Muy encolerizado por haber sido desalojado del cielo y por tener prohibida la entrada allí eternamente, este Dragón sobrehumano, como un enorme Leviatán, ha agitado el “mar” de la humanidad inquieta contra el recién nacido reino de Dios por Cristo y su reinado de mil años.—Revelación 12:3-13; Job 41:1-32. Después que el Dragón, Satanás el Diablo, ve a sus siervos terrestres derrotados en la “guerra del gran día de Dios el Todopoderoso” en HarMagedón, él y sus legiones invisibles llegan al fin de su “corto período de tiempo.” Entonces ¿qué? En una vista profética por anticipado del período posbélico, el apóstol Juan vio que a todo ese bando demoníaco se le ha removido de la vecindad de nuestra Tierra y se le ha aprisionado, encadenado, en un abismo, bajo un sello que no habría de ser roto por mil años. De esta manera minuciosa se libra tanto al cielo como a la Tierra de todos los opositores inicuos del gobierno mundial de Jehová por su Cristo. (Revelación 16:14, 16; 19:19 a 20:3 inclusive) ¡Qué condición ideal reina ahora universalmente! ¡Qué placentera se nos hará la vida si demostramos que somos dignos de ser parte de la “grande muchedumbre” de los que pasan vivos a través de la “tribulación”! A Satanás el Diablo y todos los que lo imitan en desafiar la soberanía propia y legítima de Dios sobre el cielo y la Tierra habrá que imponerles silencio y removerlos. Desplegando apoyo de corazón a la soberanía de Jehová, la “grande muchedumbre” escogerá estar de pie delante de Su trono y clamará: 5

“La salvación se la debemos a nuestro Dios, que está sentado en el trono, y al Cordero.”—Revelación 7:9, 10, 14, 15. 6

UN GOBIERNO MUNDIAL DADOR DE VIDA El tener salvación de la “grande tribulación” es una cosa, ciertamente de grandeza sobrepujante, pero vida eterna en buena salud y felicidad es otra cosa, de grandeza sobresalientemente trascendental. Este beneficio posterior es lo que el gobierno mundial divino ofrecerá a los habitantes de la Tierra. En palabras de pura belleza, el apóstol Juan nos habla acerca de esto. Después de declarar que entonces “el mar ya no existe,” dice: “Vi también la santa ciudad, la Nueva Jerusalén, que descendía del cielo desde Dios y preparada como novia adornada para su esposo. Con eso oí una voz fuerte del trono [por eso, la voz de Dios] decir: ‘¡Mira! La tienda de Dios [no el trono de Dios] está con la humanidad, y él residirá con ellos, y ellos serán sus pueblos. Y Dios mismo estará con ellos. Y él limpiará toda lágrima de sus ojos, y la muerte no será más, ni existirá ya más lamento 7

ni clamor ni dolor. Las cosas anteriores [entre ellas los anteriores cielos y tierra] han pasado.’ Y El que estaba sentado sobre el trono [Dios] dijo: ‘¡Mira! Estoy haciendo nuevas todas las cosas.’”—Revelación 21:2-5. La expresión: “La santa ciudad, la Nueva Jerusalén,” denota un gobierno, tal como la antigua Jerusalén de los días del rey David y su hijo, el rey Salomón, denotaba un gobierno, y se decía de estos reyes que ellos se sentaban en “el trono de Jehová” como representantes Suyos. (1 Crónicas 29:23) ¿Ha podido dar cualquier gobierno hasta ahora a la gente de la Tierra lo que la Nueva Jerusalén traerá, borrar las lágrimas debidas a calamidades y congojas, remover la muerte, el lamento, el clamor y el dolor de corazón? Toda la lúgubre condición de la humanidad hasta ahora responde: ¡No! Pero la Nueva Jerusalén puede traer y traerá esas bendiciones porque es un gobierno procedente de Dios. Jesucristo, el Hijo amado de Dios, experimentó una muerte humana de sacrificio para toda la humanidad para quitar de nosotros para siempre la muerte heredada. Para realizar eso tiene que reinar por mil años.—1 Timoteo 2:5, 6; Hebreos 2:9; 1 Corintios 15:24-27. 8

Un gobierno no es un autómata, algo que se ponga en moción y funcione automáticamente. Para funcionar, exige gobernadores u oficiales. Entonces, ¿quiénes compondrán la Nueva Jerusalén que es dádiva de Dios? El ángel de Dios le explicó al apóstol Juan que la Nueva Jerusalén es “la novia, la esposa del Cordero.” Eso significa que es la congregación de los 144.000 discípulos y coherederos de Jesucristo el Cordero, todos israelitas espirituales. (Revelación 21:9-14; 7:4-8; 14:1-4; 19:7, 8; 2 Corintios 11:2) Sin embargo, porque se habla de la clase de la Nueva Jerusalén como de una novia, una esposa, no se dice aquí que esta clase esté reinando; es su Novio quien reina. 9

Tal como el “trono de Jehová” estaba ubicado en la antigua Jerusalén terrestre y el rey David y su sucesión de reyes se sentaban sobre aquel trono como representantes visibles de Jehová, así hay un caso similar aquí con relación a la Nueva Jerusalén. Leemos: “El trono de Dios y del Cordero estará en la ciudad.” Es desde este trono que fluye el “río de agua de vida” para la vida eterna de los súbditos del reino de Dios por Cristo. (Revelación 22:1, 3) Por consiguiente, en la Nueva Jerusalén el Cordero Jesucristo se sienta sobre el “trono de Jehová” como el Rey Mesiánico ungido por Él. Este descendiente real de los reyes David y Salomón es mayor que estos antepasados suyos, pues su reino es celestial y será un gobierno mundial: “Tendrá súbditos de mar a mar y desde el Río [Éufrates] hasta los cabos de la tierra.” (Salmo 72:8) Su gobernación se extenderá por todo el globo terráqueo.—Zacarías 9:9, 10; Salmo 110:1, 2. 10

A un tiempo que no se indica, los del resto de coherederos de Cristo pasarán del escenario terrestre y, por medio de la “primera resurrección,” se unirán a su Novio celestial, y así se completará toda la clase de la Novia que se compone de 144.000 coherederos. (Revelación 20:4, 6) Pero la 11

“grande muchedumbre” de sus compañeros semejantes a vírgenes continuarán aquí en la Tierra como súbditos del Gobernador Mundial, Jesucristo. (Salmo 45:14) Aunque es un gobernante mundial, él será un padre para ellos. Para sus súbditos fieles él llegará a ser su Padre Eterno, porque murió para todos ellos para ser su Dador de Vida. Como “el último Adán,” él fue hecho “un espíritu dador de vida” a favor de ellos.— 1 Corintios 15:45; Isaías 9:6. De la “grande muchedumbre” se dice que “han lavado sus ropas largas y las han emblanquecido en la sangre del Cordero.” Este “Cordero [de sacrificio] de Dios” por lo tanto obra como el Sumo Sacerdote de Dios en Su templo espiritual. Lógicamente, pues, ¿qué es lo primero que hacen los de la “grande muchedumbre” que llevan “largas ropas blancas” después que “salen de la grande tribulación”? Como Noé y su familia inmediatamente después del Diluvio, la “grande muchedumbre” se dirige a la adoración de Jehová. “Por eso es que están delante del trono de Dios; y le están rindiendo servicio sagrado día y noche en su templo.” (Revelación 7:9, 10, 14, 15; Juan 1:29, 36) Saben que, bajo el gobierno mundial de Dios por Cristo, jamás se permitirá una forma de adoración que no sea la única religión verdadera, la adoración pura del único Dios vivo y verdadero, Jehová. Esta será absolutamente la única religión de la “nueva tierra.” Será una fuente de unificación para todos. 12

¿Serán los de la “grande muchedumbre” de sobrevivientes las únicas personas a quienes se usará para transformar nuestro globo terráqueo en un Paraíso de hermosura sobresaliente? No; los muertos humanos redimidos, después de su resurrección, participarán en esta deleitable obra. Entre éstos estará el hombre que expresó simpatía por Jesús al morir a su lado.—Lucas 23:43. 13

Se usarán las “llaves de la muerte y del Hades [el sepulcro común de la humanidad].” Jesucristo las tiene desde su propia resurrección. ¡Qué gozo saber que las usará para resucitar a todos aquellos a quienes aplica su sacrificio de rescate! Las obras que hagan estos resucitados durante el reinado de mil años de él serán el fundamento que se usará para juzgarlos. Los que demuestren que son voluntariamente desobedientes e irreformables perderán todo título a la vida. Recibirán la pena de una muerte de la cual no habrá resurrección.—Revelación 1:18; 20:11-15; Hechos 24:15; Juan 5:28, 29. 14

La limpieza del universo será coronada finalmente por la destrucción de Satanás el Diablo y sus demonios, los promotores de la iniquidad. (Revelación 20:7-10; Génesis 3:15) ¡Qué bendición para nuestra Tierra! Entonces la estará hermoseando un solo mundo bajo un solo gobierno en lealtad amorosa a la soberanía legítima y propia de Dios. 15

¡Oh, qué bendita expectativa tenemos ante nosotros a la luz de la Palabra de Dios! No podemos resistir la atracción que presenta a nuestros 16

sentimientos. ¡Con brazos abiertos, pues, te damos la bienvenida, oh gobierno mundial que por tanto tiempo hemos esperado! La “señal” de tu inminencia ha aparecido delante de nuestros ojos y se hace cada vez más significativa. Está claramente al alcance nuestro la provisión amorosa que nos permitirá disfrutar de vida eterna en una Tierra paradisíaca bajo tu legítima y propia gobernación. Nuestros corazones, ardientes de aprecio, nos impulsan a abrazar tan preciosa oportunidad. Gracias a tu Creador, Jehová, el Hacedor de cielo y Tierra, ahora sabemos qué hacer en este “año de buena voluntad de parte de Jehová.” (Isaías 61:2; 49:8; 2 Corintios 6:1, 2) Nuestro es el privilegio de llegar a ser discípulos dedicados y bautizados del Agente Principal de Jehová para bendecir a la humanidad. (Mateo 28:19, 20) En sus pasos seguiremos adelante, proclamando gozosamente en todas partes “estas buenas nuevas del reino,” hasta que todos los enemigos se inclinen ante tu glorioso triunfo, oh tú nuestro gobierno mundial entrante, el reino de Dios. 17

[Preguntas del estudio] 1. Bajo los “nuevos cielos” ¿qué brotará en la Tierra? 2. ¿Qué pregunta pudiéramos hacernos acerca de ser testigos oculares? 3. ¿De qué manera será que ‘el mar ya no existirá’? 4. ¿Qué otro elemento ha de ser removido además del “mar”? 5, 6. (a) ¿Cuándo y cómo se impondrá silencio a Satanás y los ángeles demoníacos? (b) En apoyo de qué clamará la “grande muchedumbre”? 7. Revelación 21:2-5 muestra que el gobierno de Dios le da a la humanidad ¿qué? 8. La Nueva Jerusalén representa ¿qué? ¿y qué les trae a los hombres? 9. La Nueva Jerusalén consistirá en ¿qué? 10. ¿De qué manera ocupan Dios y Jesús el trono en “la ciudad”? 11. (a) ¿Cuándo y cómo se completa la clase de la Novia? (b) ¿Qué llega a ser para sus súbditos Jesús, el Gobernante Mundial, y con qué como fundamento? 12. ¿A qué se aplicarán los de la “grande muchedumbre”? ¿Dónde? 13. ¿Quiénes en la Tierra participarán en hacer de toda la Tierra un Paraíso? 14. ¿Quién usará las “llaves de la muerte y del Hades”? ¿Para quiénes? 15. ¿Cómo se coronará la limpieza del universo?

16, 17. El aprecio a la bondad inmerecida de Dios nos impulsa a hacer ¿qué?

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