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• Ileana Peña

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Muerte y vida de las grandes Ciudades Jane Jacobs Desde la fundación de las ciudades se desarrollan una serie de problemáticas que no permiten que la calidad de vida de las personas sea lo mejor posible. Es común ver como las metrópolis se han convertido en ciudades fantasmas, debido a que los espacios públicos no dan a las personas ese sentido de pertenencia, de este modo, las grandes urbes son una estación temporal, donde los individuos transitan en sus aceras y calles sin detenerse a observar su alrededor, sin disfrutar de las vistas, los sonidos, lo olores que esta les ofrece. Jane Jacobs presenta temas reales, que se pueden palpar en la actualidad, además realiza una crítica acerca de cómo están distribuidas las ciudades y busca que se realice un análisis acerca del urbanismo y ofrece algunas tácticas para mejorar las ciudades. Es interesante ver como plantea que las calles deben de ser seguras, hay que tener en cuenta que las calles y las aceras son los principales lugares públicos de la ciudad. Las calles de las ciudades deben de ser interesantes y de este modo serán atrayentes para las personas. Es bien acertado cuando Jacobs dice “Cuando presenta una aspecto triste, toda la ciudad parece triste”, a nadie le gusta estar en un lugar que su aspecto no sea agradable, y por consecuencia se convierta en un lugar inseguro, se debe buscar que las calles ya aceras de la ciudad sean atrayentes así como seguras. Un método que plantea es que todos se conviertan en auto vigilantes de modo que las aceras estén mayor iluminadas, además de que los comercios que se encuentren en las acercas sus escaparates esten bien iluminados y dando hacia las aceras, otras de las opciones es que los bares y los restaurantes usen las aceras como espacio para que los clientes se sienten a compartir allí, así mismo hacer que en las vecindades que todos participen en la auto vigilancia, utilizando las aceras para recrearse. “Somos los afortunados poseedores de un orden urbano que nos hace relativamente fácil mantener la paz porque hay muchos ojos en la calle”. Si se posee una acera y todos los usuarios se convierten en vigilantes entonces se procederá a darle a las aceras el uso correctamente. Lo primero que la autora explica es que debe de existir un contacto entre los usuarios, que poco a poco se cree un vínculo de “confianza”, o sea, lo que se busca es que así como, dos mujeres que se encuentran en la lavandería entablan una conversación, que de este mismo modo en un vecindario los vecinos tengan la capacidad de crear un vínculo. También se plantea el hecho de incorporar a los niños en las aceras pero para esto las aceras, espacios urbanos, parque deben de ser seguros, de tener vitalidad y estabilidad en las calles de las ciudades. Las ciudades están compuestas de una serie de espacios que permiten el desarrollo de la vida en sociedad, una de estas son los parques, los cuales aportan un atractivo a los vecindarios, espacios donde se pueden mezclar las personas, recrearse y dejar a un lado la cotidianidad de la vida. De

esta manera Jane Jacobs va desarrollando los diferentes componentes de la ciudad y de sus habitantes, plasmando las problemáticas y posibles soluciones. Analiza las ideas de los personajes que han influido en el desarrollo del urbanismo de las ciudades, como por ejemplo Ebenezer Howard, quien realizo la Ciudad Jardín, luego de analizar la vida de las personas pobres del Siglo XIX, en Londres. Otro de los análisis que Jacobs realizo son los de la ciudad vertical de Le Corbusier, por su alta densidad urbana. Otro de los puntos interesantes es cuando habla hacer de la diversidad, donde realiza una reflexión acerca de los factores que dan a la diversidad. Plantea que es un error analizar la ciudad de una manera aislada, esta asegura que se debe realizar el análisis a través de las combinaciones de sus usos. Explica que debe de existir una combinación de los usos primario, afirma que: “El distrito ha de garantizar la presencia de personas fuera de sus hogares en circunstancias y por motivos diferentes pero dispuestas a usar en común una amplia gama de servicios”, esto explica que la calles deben de traer personas a diferentes horas, de modo que esto va a contribuir a la sociabilización y a la seguridad. Por lo tanto las ciudades deben de poseer lugares diferentes, novedosos que ofrezcan diferentes servicios para los ciudadanos. La diversidad es de mucha importancia en las ciudades, debe ofrecer distintos lugares, los cuales mantengan activa a la ciudad y reciba a gran cantidad de personas, como museos, bibliotecas, exposiciones de arte, oficinas, lugares de descanso, viviendas, oficinas, entre otros y esto dará como resultado que en distintas horas habrá personas en las calles. En las ciudades se encuentran edificios antiguos, es una necesidad que estos edificios que estén allí, Jacobs afirmó que “El distrito ha de entremezclar edificios que varíen en edad y en condición, con una buena proporción de casas antiguas”. Se refiere que a pequeñas casas, edificaciones pequeñas de un valor bajo, con un pasado, habla de que estas edificaciones pueden ser utilizadas como establecimientos comerciales y que para las empresas sería más económico que si fuera un lugar completamente nuevo. Se puede ver como en las ciudades estas edificaciones antiguas se deberían ya que los habitantes no quieren rehabilitarlas o se construyen cosas nuevas. Es importante que estos edificios antiguos permanezcan en las zonas urbanas ya que proporcionan una gran diversidad y hablan hacer de la identidad de las mismas. En una de las partes del libro sobre “Descomposición y rehabilitación de enclaves urbanos”, toca el tema de los barrios que distorsionen el funcionamiento de la ciudad, los barrios bajos, la problemática de estos barrios es que necesitan una mayor implantación de dinero para la realización de los servicios públicos, debido a que sus necesidades son mayores y la inversión en los servicios públicos menores. En ocasiones se ve como los planes urbanísticos tratan de romper la relación de las ciudades con estos barrios y es algo que plantea Jacobs, de cómo los planes que se plantean son de realizar grandes bloques de vivienda, que a la larga generan mayor gasto económico y que los habitantes no se sientan cómodos. Lo cual genera una dispersión por el desplazamiento de los barrios a otros lugares así como injusticia y degradación.

Luego de contemplar, analizar las diversas problemáticas que se presentan en las grandes ciudades así como sus causas, finaliza exponiendo “Tácticas diferentes” en donde se explican un conjunto intervenciones y como puede surgir un cambio en las ciudades, en cuanto al transporte y el diseño de estas. Además plantea como existe una confusión de lo que son viviendas sociales y como deben de ser destinados los subsidios para las viviendas. Esta problemática la resuelve a través de un “método”, el cual consiste en que se construyan diferentes edificaciones de forma gradual y que esté basado en la diversidad y no en la uniformidad. Estos deben de ser de diferentes tamaños, clases dependiendo el lugar donde se diseñen. Se presenta otro problema actual de las ciudades y es el tránsito y los automóviles, donde la problemática no solamente se resuelve ampliando las calles, sino que se debe de buscar otros medios de transportes alternativos. Como ciudadanos y arquitectos se debe de conocer la esencia misma de la ciudad y es lo que busca Jane Jacobs en su libro, dando a conocer que esta esencia se encuentra en el interior de la misma, lo hace de una manera clara y con ejemplos cotidianos, en busca de una solución para que las grandes ciudades cumplan con el ambiente necesario para que la calidad de vida de las personas sea lo mejor posible. No es fácil tratar de solucionar todos estos problemas a la vez pero reconociéndolos, analizándolos se puede llegar a solucionarlos y así alcanzar de algún modo la utopía deseada por cada ciudadano.