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¡Este mundo está cabrón para que lo sepas! Es un mundo donde todo tiene una etiqueta, un nombre, como las medicinas: ésta sirve para el cáncer, la otra para la tos, la otra para la impotencia. ¡Estamos jodíos! En el afán de etiquetarlo todo hasta la gente letrada como tú, se equivoca, porque fíjate: ¿Quién debe ser una amante? Una mujer amada ¡digo yo! ¿Y quién debe ser una querida? Pues la mujer que se quiere ¿no es verdad? Sin embargo ambas son tipas que están con un hombre, metidas en tremendo baund, como se dice, en una relación que está fuera del matrimonio. Son la pareja alternativa; sin que nadie repare que gracias a esas mujeres la gente sigue casada, porque ellas aportan el equilibrio ¡son la balanza, tú! Dando lo que la tipa que está por plantilla legal, y entiéndase que estamos hablando ahora de la esposa, ya no ofrece. ¡Te lo digo, estamos jodíos! Se dice que putas son las que son como yo. ¡Eso también es un tremendísimo error! Porque hay muchos hombres que tienen dentro una puta, para que te enteres. La puta masculina sale cada vez que un hombre se pone en venta para obtener un empleo, ascender a un puesto, ganar grados; muchos de ellos venden hasta su alma, su integridad, su ética, su moral, sus principios y conocimientos. Todo por lograr un status económico, una solidez financiera, un ascenso; pisotean hasta su autoestima para tratar de mantenerse al lado del jefe y se agarran de eso como si fuera la cola de un cometa. Aquí dicen que son "quita polvo" o "lambones" en Cuba se les llama "lame botas" "tracatanes" "guatacones" a fin de cuentas son unos arrastraos tanto aquí como allá. Son tipos que se prostituyen, aunque la diferencia está en que no dan el culo, aparentemente. ¿Acaso eso no es caer bajo? Para mí es peor que templar por dinero. Porque no es lo mismo vender tu poder personal que tu cuerpo, hay cosas que se quitan con agua y jabón ¡pero otras no, chica! Mientras una puta finge un orgasmo, un hombre con talento se hace el comemierda ante otro que no sabe un carajo ¿y todo por qué? Pues por mantenerse a su servicio. El hombre compromete su inteligencia ante un mediocre con posición, el hombre simula, seduce alabando al otro, lo conquista y se deja seducir, y te lo repito, todo es por dinero, poder o bienes. Manipula y se deja manipular; cae en el juego de la prostitución buscando la misma meta, la misma finalidad ¡igual que una de nosotras! En esos momentos la puta que llevan dentro se les activa, uno los ve actuar y piensa: ¡Coño, que malas sooooon! Porque si fueran mujeres también por fuera nadie les pagaría ni una Coca Cola por su teatro. ¡Y después son los primeros que hablan mal de nosotras! Es como la canción de La Lupe: Fíjense no más, Fíjense quién me difama, Ya de mí se aprovecho, Y a mi lado se ganó Más del brillo que reclama... Fíjate que la palabra puta tiene una fuerza del carajo, eso debe ser porque eso de prostitución o prostituta suena muy largo. Puta es una palabra más precisa. Tiene más poder, más empuje. ¿Acaso no has visto a un hombre ofender a otro? ¿Qué es lo primero que le grita? Pues: "hijo de puta" Y si es cubano el tipo luego se caga en la madre del otro, y para cerrar con broche de oro lo acusa de maricón. ¡Pero lo de puta es lo primero que encabeza la oración! ¿Tú no has oído esa expresión de "la puta verdad"? ¿Por qué tú crees que la gente la dice? Pues porque la verdad se compra, chica ¡y se paga por ella! De la misma manera en que se le paga a una puta. Incluso cuando tú eres sincera y dices la verdad, no todo el mundo la acepta, más bien la rechaza aunque la deseen ¡como si fuera una de nosotras! ¡Este mundo está cabrón! Aquí todo lo han puesto al revés y de eso no le podemos echar la culpa a Dios, porque ese está metido allá arriba y aquí abajo hay tremendo despelote, con una cantidad inmensa de tipos jodiéndose entre ellos y el pobre Dios intentando controlar la situación. ¿Por qué surgen las guerras, vamos a ver? Si haces esa pregunta en la calle cualquiera te responde: Porque hay un "hijo de puta" que no se quiere entender con el otro, se jode la comunicación y se van a tiros a ver quién acaba con quién. ¡Pues así mismitico es! Se dice que las putas son unas desalmadas, tipas planas y sin sentimientos, sin sentido de la fidelidad y yo te digo que no siempre es

así. Mira en la misma Biblia; cuando todo el que estaba al pie de la Cruz donde estaba Jesús crucificado, fue echando ¿Quién se quedó llorando junto a María? Pues la Magdalena, que no era ni Santa ni miembro de un Partido, ni de la Federación de Mujeres Cubanas. Hay putas con sentimientos, mujeres buenas aunque parezcan malas; como los hombres, hay tipos honrados y nobles, y otros son puras ratas. ¡Y para ser una tipa mala no necesariamente tiene que ser una puta! A mí siempre me gustó escuchar a La Lupe. En mi casa la gente es fanática de la mulata con esos gritos de: ay, ay, ayyyy. Todos los domingos se ponía en un tocadiscos canciones viejas, mientras se jugaba dominó y las mujeres estaban metidas en la cocina preparando el almuerzo ¡tú sabes que eso es muy de campo! El disco de La Lupe era de esos de pasta y ya estaba rayado, si no te andabas rápido te podías meter media hora oyéndola gritar sin cantar una sola nota. Siempre había una de nosotras pendientes para saltar la aguja antes de que mi tío protestara, que era el dueño del tocadiscos. La Lupe es de esas tipas auténticas que no se repiten en la vida; y si existe de verdad un paraíso ahora debe de estar en la fila de las gozadoras, porque esa si que supo vivir como le dio la gana o la maldita gana, como dicen los dominicanos. La mulata en lo suyo y sin buscarle la quinta pata al gato. ¿Te acuerdas de aquello que cantaba? Igual que en un escenario, Finges tu dolor barato queda el papel

Tu drama no es necesario Ya conozco ese teatro

Mintiendo

Que bien te

Después de todo parece Que esa es tu forma de ser...

¡Que clara estaba, tú! Te pones a ver su historia y te das cuenta de cuánto conoció a los hombres, digamos que los estudió y sabía todo lo que hay que saber de ellos, hasta su teatro. Cuando lees lo que se ha escrito de La Lupe, sabes hasta dónde puede llegar el poder de una mujer: la fuerza, la determinación, el empuje. ¿Y de dónde salió la mulata? Pues esa fue la misma mujer que un día llenó el Madison Square Garden, agotó la boletería y fue la primera artista latina en figurar en la cartelera del famoso coliseo. Y para que no haya dudas, antes y después de eso, canto en el Carnegie Hall. ¿Qué te parece? Perdóname que te haya metido esta muela, quizás tú venias para hacerme preguntas más directas y yo te cogí para descargar lo que pienso; pero me gusta hablar, y eso es algo que no puedes hacer aquí con cualquiera porque la mayoría tiene un tapón de cerumen en los oídos que les llega al cerebro. Además ¿quien le va a prestar oídos a una puta? Sólo alguien que, como en tu caso, desea saber de verdad qué lo es que pasa por nuestras cabezas ¡que otros opinan que piensan tanto como una vagina! Por eso yo tengo mi propia filosofía. En primera: Yo soy una tipa que ha jugado alegremente con su vida. Soy de las que piensa que una mujer mayor de edad tiene todo el derecho del mundo de hacer con su cuerpo lo que le dé la gana, como en Holanda, donde hay un Comité Internacional por los Derechos de las Prostitutas y hay una Carta Mundial por los Derechos de las Putas ¿Y que intentan esa gente con eso? Pues buscar sensibilidad para que se nos respete. Los holandeses que son tan desarrolladitos, regularon hasta la práctica de la prostitución y la ven más que nada, como una decisión individual. Una prostituta debería ser una mujer que tenga derechos humanos, condiciones laborales, de salud, de asistencia ¡así es como debería ser! Te aclaro que yo no me metí en éste negocio por eso de muchachita con problemas de conducta, traumatizada en la niñez o descarriada por un trauma familiar, ni siquiera por analfabeta, porque tengo hasta un título universitario. ¡De eso nada, querida! Yo soy puta por vocación, porque me da la gana, punto y final. En segunda: No me gusta la política, porque en política lo que hoy es rojo mañana fácilmente puede ser azul, blanco o morado, y yo no entro en eso. No soy discurso de nadie. No permito que me quieran coger las nalgas con carácter político ¡por el amor de Dios! Y en tercera: Me gusta ser cubana, chica. Y doy gracias a Dios por haber nacido allí, porque Cuba me dio el sabor, la fuerza, el empuje, como mismo se lo dio a La Lupe, por eso digo como ella: Cada cual en este mundo

cuenta el cuento a su manera

¡Este mundo está cabrón, para que lo sepas! Bueno, me llamo Magalys... pregúntame ahora lo que quieras.

y lo hace ver de otro modo

en la mente de cualquiera...