Manual Cultivo de Lentejas

UNIVERSIDAD DE CONCEPCIÓN FACULTAD DE AGRONOMÍA CAMPUS CHILLAN MANUAL CULTIVO DE LENTEJAS POR MACARENA LANDAIDA CIFUE

Views 182 Downloads 26 File size 618KB

Report DMCA / Copyright

DOWNLOAD FILE

Recommend stories

Citation preview

UNIVERSIDAD DE CONCEPCIÓN FACULTAD DE AGRONOMÍA CAMPUS CHILLAN

MANUAL CULTIVO DE LENTEJAS

POR

MACARENA LANDAIDA CIFUENTES PRACTICA NIVEL II HUMBERTO SERRI

CHILLAN – CHILE LUNES 28 DE SEPTIEMBRE 2015 INTRODUCCIÓN

El establecimiento de un cultivo, ya sea de lentejas u otro cualquiera, abarca todas las prácticas agronómicas que se encuentran relacionadas con la siembra y que están enfocadas a lograr que la especie sembrada exprese todo o gran parte de su potencial en un ambiente determinado, sembrado en época optima y en un suelo que cumpla con ciertas condiciones. Estos cuatro factores están interrelacionados, de manera que, el desconocimiento de alguno pueda limitar la expresión de aquellos manejados adecuadamente. El cultivo de la lenteja se realiza tanto para el autoconsumo como para la venta. Generalmente se usan variedades locales cuya principal característica es tener granos pequeños y ser susceptible a la roya.

GENERALIDADES 1

Clasificación taxonómica Reino:

Plantae

División:

Magnoliophyta

Clase:

Magnoliopsida

Orden:

Fabales

Familia:

Fabaceae

Subfamilia: Faboidae Tribu:

Fabae

Género:

Lens

Especie:

L. culinaris

ORIGEN El cultivo de la lenteja se considera como uno de los más antiguos con unos 8.000 a 9.000 años de antigüedad. Sus orígenes se centran en Irak donde se extendió a los países limítrofes como Grecia, Bulgaria etc. Más tarde fue introducida en Europa donde se difundió al resto de los países y como cultivo reciente en América. Se piensa que en Egipto allá por el año 2.200 A.C. se utilizaba ya la lenteja como cultivo y también su uso para preparaciones alimenticias. En definitiva Egipto fue el foco de expansión para el resto de los países. VALOR NUTRICIONAL El cultivo de las lentejas va destinado sobre todo para alimentación humana aunque también se utiliza como planta forrajera para alimentación de ganado. El consumo de la lenteja aumenta cada vez más en el mundo de ahí viene el incremento de su tasa alimenticia de 2.8 - 3.5 Kg/persona. En cuanto a la composición nutritiva de la semilla de lenteja se presenta en el siguiente recuadro las características de sus aportes nutricionales por cada 100 gramos de materia seca. La lenteja se consume básicamente por su alto contenido proteico.

2

Hidratos de Carbono Grasas (triglicéridos)

65 % 0.8 mg / kg VITAMINAS

Riboflamina Tiamina Niacina

0.33 mg 0.46 mg 1.3 mg PROTEÍNAS

Globulinas Gluteínas Albúminas

70 % 10 – 20 % 10 – 20 %

EL SUELO Y SU PREPARACIÓN El cultivo de la lenteja se puede establecer en una amplia gama de suelos, desde arenosos a arcillosos siempre y cuando tengan un adecuado drenaje y que su profundidad permita un normal desarrollo del sistema radical. Esto debido a que es muy sensible a los excesos de humedad del suelo, principalmente durante los primeros estados de crecimiento. La planta de lenteja es de lento crecimiento inicial, por lo tanto, tiene escaza competencia a las malezas, desventaja que debe reducirse tanto como sea posible con la preparación de suelo. El primer objetivo en la preparación del suelo consiste en eliminar la biomasa vegetal que se ha logrado establecer, lo que usualmente se logra con una rotura anticipada seguida de sucesivos rastrajes. Debido a esto es que la preparación del suelo debe comenzar lo más temprano posible para que los residuos del cultivo anterior se descompongan completamente durante el barbecho. Además, estas labores deben cumplir con el objetivo de lograr un suelo libre de terrones y malezas y alcanzar la humedad adecuada al momento de la siembra. La alternativa al rastraje consiste en la utilización de herbicidas de amplio espectro, como por ejemplo Glifosato, que dan la ventaja de eliminar los barbechos y sus efectos nocivos sobre la humedad del suelo y pérdida de suelo por erosión, destruir totalmente y en forma rápida la biomasa vegetal, la labor se puede realizar solo algunos días antes de la siembra. Una vez eliminada la 3

cubierta vegetal se puede preparar el suelo en forma convencional o inmediatamente proceder a la siembra directa. En suelos con escasa profundidad, la presencia de barreras físicas, como por ejemplo, el pie de arado o desequilibrios nutricionales pueden traducirse en una limitante del crecimiento. Debido a esto es que se deben realizar estudios mediante calicatas o análisis químico del suelo los que entregarán una importante información sobre sus características. Cuando el cultivo se realiza en suelos con altos contenidos de materia orgánica, de nitrógeno, o de alta fertilidad, normalmente se favorece el crecimiento vegetativo, en desmedro de la producción de grano. El hábito de crecimiento indeterminado de la especie contribuye a este desbalance, que se traduce en altas producciones de fitomasa, con índices de cosecha que, en estas condiciones, pueden no superar el 10%. Desde un punto de vista sanitario, la elección de un suelo para lenteja debe considerar su secuencia de cultivos. En este sentido, siembras reiteradas de lenteja, u otra leguminosa, puede aumentar la incidencia de enfermedades radicales o foliares, en la que el rastrojo es la principal fuente de inoculo. CONDICIONES CLIMÁTICAS Como ambiente de producción se entienden las características climáticas de una determinada área de cultivo, principalmente precipitaciones, nubosidad (baja luminosidad), y temperaturas. Estas pueden influir significativamente sobre el crecimiento

y desarrollo de la lenteja, en función a los requerimientos de la

especie por factores del ambiente. Considerado

como

cultivo

de

secano,

las

precipitaciones

deben

estar

adecuadamente distribuidas a través de todo el período vegetativo, y en aproximadamente dos tercios del período reproductivo. Lluvias posteriores se traducirán en reactivación del crecimiento de la planta, incrementando su fitomasa y su susceptibilidad a tendedura, así como, eventualmente, en deterioro de la calidad comercial del grano. 4

No obstante la importancia de las precipitaciones durante la fase reproductiva, períodos de nubosidad prolongados se han encontrado asociados a incrementos significativos en el porcentaje de vainas improductivas, principalmente cuando ellos ocurren durante la formación del grano, reduciendo el potencial de rendimiento del cultivo. Aun cuando la planta puede tolerar temperaturas inferiores a 0ºC durante su crecimiento, éstas son perjudiciales cuando ocurren en floración, o formación de vainas. Del mismo modo, temperaturas promedio superiores a 15ºC durante la fase reproductiva comienzan a ser limitantes del rendimiento, en tanto que temperaturas máximas diarias superiores a 26 – 28ºC provocan aborto floral y, en granos formados, pueden afectar su calidad comercial al producir deshidratación abrupta de la vaina, fenómeno conocido como “golpe de sol”. ÉPOCA DE SIEMBRA Considerando los requerimientos climáticos de la lenteja, los ambientes de producción se han tratado de optimizar ajustando épocas de siembra de acuerdo a las características edafoclimáticas de cada zona en particular. La mejor época es sembrar a partir de la primera o segunda semana de mayo hasta la primera semana de junio para aprovechar la humedad del suelo durante la primavera y tener un adecuado tamaño del grano. Siembras más tardías producen bajos rendimientos, especialmente cuando las lluvias de primavera son escasas, afectando también el tamaño de los granos. CALIDAD DE LA SEMILLA La primera condición para un adecuado establecimiento necesariamente requiere conocer la calidad de la semilla, medida en términos de su porcentaje de germinación, de la presencia de patógenos contaminantes, y del tamaño del grano. Aun cuando el porcentaje de germinación permite ajustar las densidades de siembra a utilizar, por sí solo no garantiza el establecimiento de una determinada 5

densidad de plantas, debido a la influencia de las características del suelo sobre la emergencia del cultivo. Pérdidas en el porcentaje de germinación y emergencia son aditivas y, por lo tanto, necesariamente deben ser consideradas para determinar con mayor precisión las dosis de semilla. VARIEDADES -

SUPER ARAUCANA INIA La planta tiene una altura entre 30 a 35 cm con un follaje verde claro y hojas de gran tamaño, flores blancas que se producen de 2 a 4 por racimo. Las vainas son ovaladas de color amarillo claro y contienen un solo grano de color amarillo-verdoso de gran tamaño; ésta es su principal característica donde sobre el 76% de ellos es de 7 mm. La debilidad es que es atacada por roya. Sembrada en mayo florece a los 126 días, o sea a mediados de septiembre y madura a los 202 días lo que ocurre a mediados de noviembre.

-

CALPUN INIA Es la primera variedad chilena de lenteja obtenida a través de cruzamientos que es resistente la roya. Tiene un período vegetativo similar a la Super Araucana INIA. Tiene una altura entre 30 y 35 cm, flores blancas que se producen de 2 a 4 por racimo, vainas ovaladas de color amarillo claro, con un solo grano en su interior de color café claro, de gran tamaño, aunque algo menor que Super Araucana INIA, puesto que sobre el 74% de ellos es de 7 mm.

DENSIDAD DE SIEMBRA Diversos estudios realizados han permitido definir la densidad óptima de plantas a cosecha como aquella fluctuante entre 70 a 80 plantas/m 2, uniformemente distribuida en el espacio. Expresadas en función de dosis de semilla, en promedio éstas corresponden aproximadamente al rango entre 58 y 82 kg/ha, dependiendo del calibre de grano utilizado. 6

Una mayor precisión en el ajuste de las dosis de semilla se puede obtener conociendo el peso promedio del grano para cada calibre en particular. La semilla debe ser desinfectada con thiuram en dosis de 200 gramos para 100 kilos de semilla. MODO DE SIEMBRA Un buen método de siembra debe procurar el rápido cubrimiento del suelo por el cultivo de modo de evitar la pérdida de humedad, favorecer la competencia con malezas y aprovechar en mejor forma la luz incidente sobre las plantas. Una distribución adecuada de plantas se logra en siembras a chorro continuo, en hileras distanciadas a 15 – 18 m. este método de siembra, sin embargo, está condicionado a la disponibilidad de maquinaria, o sembradoras artesanales de tracción animal, y su éxito depende de la utilización y eficacia de los herbicidas. Siembras mateadas, en tanto, pueden ser tan adecuadas como aquellas a chorro continuo, siempre y cuando se depositan entre 8 a 10 semillas por mateado, con distancia entre mateados que no deben superar los 30 a 35 cm.

Como alternativa a métodos convencionales, la siembra directa puede utilizarse en lenteja, si se dispone de sembradoras para este propósito. Independientemente del método que se utilice, la profundidad de siembra no debe ser superior a 4 a 6 cm, particularmente en siembras tempranas, o en suelos con altos contenidos de humedad. Cuando se utiliza la tracción animal, la profundidad de los surcos normalmente supera los 10 cm, aspecto que debiera considerarse

7

en la determinación de la dosis de la dosis de semilla, debido a su efecto sobre la emergencia de plantas. FERTILIZACIÓN -

Nitrógeno Se debe

asegurar

una

adecuada

nodulación para la fijación simbiótica del nitrógeno. Además de comprobar que las plantas estén bien noduladas, hay que verificar que los nódulos estén activos, lo que se hace a través de la observación de las raíces. Si la siembra se realiza sobre suelos que han tenido lentejas los años anteriores, no es necesario inocular la semilla; si no es así, debe ser inoculada a través del uso de inoculantes comerciales específicos. -

Fósforo La dosis de fósforo a utilizar dependerá fundamentalmente del contenido de P disponible y del tipo de suelo. por ejemplo en suelos de vega, debido a su buena disponibilidad de fósforo, la respuesta a su aplicación es menor debiendo aplicarse dosis menores. Por otra parte, en los suelos rojo arcilloso y oscuros con características de “trumaos” deberían aplicarse dosis mayores, debido a una menor disponibilidad de P en el suelo y a que estos tipos de suelo son fijadores de P. Para determinar la dosis, idealmente debiera utilizarse el análisis de suelo, de no ser posible se recomienda una dosis de 160 kg/ha de superfosfato triple en suelos “trumaos” y de 120 kg/ha en suelos rojos arcillosos, aplicados en su totalidad al momento de sembrar en el surco junto a la semilla, debido a su escasa movilidad en el suelo.

8

-

Potasio Si el suelo es deficiente en potasio, se debe aplicar 100 kg/ha de muriato de potasio revuelto con el superfosfato triple, según dosis mencionada en párrafo anterior.

COSECHA La cosecha se realiza generalmente en forma manual, cortando las plantas con echona o guadaña, dejando secar las plantas por 3 a 4 días. No debe arrancarse las plantas con las raíces, ya que tienen un alto porcentaje de nitrógeno que queda disponible para el cultivo siguiente. Posteriormente se trasladan a una era, donde la trilla se hace con una máquina estacionaria. También se puede realizar una cosecha más mecanizada que consiste en la corta e hilerado mecánico, para después pasar a una automotriz con aditamento recolector. La cosecha mecanizada es la más empleada, por su rapidez y limpieza.

CONTROL DE MALEZAS Las malezas afectan a los cultivos a través de un proceso denominado “interferencia”, que engloba los fenómenos de competencia y alelopatía. La competencia es el fenómeno a través del cual la maleza compite con el cultivo por luz, agua y nutrientes, preferentemente. Se dice que la competencia se inicia desde el momento en que dos plantas luchan por un mismo espacio físico o ecológico. La alelopatía ocurre por la exudación se sustancias que inhiben o afectan el desarrollo de las plantas vecinas a las que las emite.

9

El efecto que producen las malezas se mide en el Período Crítico de Interferencia (PCI), que se sitúa entre los 10 y 40 días después de emergencia del cultivo por lo que es en ese período en que se debe mantener el cultivo limpio de malezas, sin interferencia de otra planta, para obtener plantas vigorosas y que compitan en buena forma por los nutrientes. Este control se debe ir realizando durante todas las etapas del cultivo. Si la siembra fue realizada en cero labranza, se debe aplicar herbicida de pre-siembra. Terminada la siembra y antes que el cultivo emerja se debe aplicar simazina (Simazina 500 F, Simanex 50 Sc, etc) en dosis de 2 L/ha o linuron (Afalon, Lorox, Linurex) en dosis de 1 a 2 kg/ha para el control de malezas de hoja ancha. Después de emergida la lenteja se puede aplicar algún graminicida como quizalofp-etil (Assure), haloxyfopmetil (Galant), clethodim (Centurion) en dosis de 1 L/ha. No es posible aplicar herbicida para el control de malezas de hoja ancha una vez emergidas las lentejas.

ENFERMEDADES Las principales enfermedades que atacan la lenteja son los siguientes, siendo la roya la más importante. Nombre de la

Agente causal

Sintomatología

Control

enfermedad Usar variedades Uromyces fabae Roya

Manchas de color rojo

resistentes, sembrar

ladrillo en hojas, tallos y

temprano. Aplicar 10

vainas.

etc No repetir año tras

Fusarium solani,

Pudrición radicular

maneb, oxycarboxina,

Rhizoctonia

Amarillez y se secan

año en el mismo

solani, Sclerotinia

hojas y tallos, raíces

potrero. Sembrar

spp., Phytium

café oscuro y

semilla sana en

spp.

decoloración interna.

suelos con buen drenaje. Desinfectar semilla con captan o metalaxil. Evitar exceso de

Pudrición del cuello

Tallo de color blanco y

humedad, orientar las

Sclerotinia

marchite antes de

hileras en el sentido

sclerotiorum

tiempo de tallos y toda

del viento. Aplicar

la planta.

benomyl, captan o dicloran. Usar semilla sana,

Antracnosis

Ascochyta fabae

Manchas redondas de

eliminar residuos de

olor negro en las hojas y

años anteriores.

tallos. Pérdida de hojas.

Desinfectar semilla con benomyl o captan. Aplicaciones con benomyl o

Marea negra

Manchas café oscuro a

carbendazim. Aplicar salitre o urea

negro en hojas. Pérdida

a la siembra.

Problema

de hojas y coloración

nutricional

azul de grano.

PLAGAS Las plagas de mayor importancia son las babosas y los pulgones. Las babosas causan bastante daño al establecimiento del cultivo pues provocan un raspado del 11

tallo el que luego cortan, provocando la muerte de la planta. Como el daño lo hacen de noche, es difícil verlas y solo se puede saber de su existencia por el rastro o baba que dejan. La mejor forma de controlarlas es utilizando cebos en base a carbamatos y metaldehídos. Puede repetirse su aplicación unos 15 días después si su presencia persiste. En el caso de un ataque fuerte de pulgones que se ubican en todo el tallo de la planta, pudiendo afectar el brote principal y las vainas, se puede aplicar algún insecticida como fenvalerato, diazinon o dimetoato. PRODUCCIÓN MUNDIAL Según antecedentes disponibles de la FAO sobre producción mundial de lentejas, tanto las siembras totales como el volumen de las cosechas de los últimos tres años se han mantenido en niveles elevados en relación con la década precedente. En 2012 (último año con cifras disponibles), hubo un incremento de 1,5% en la superficie cultivada que se cosechó y de 3,0% en la producción obtenida, ambas cifras comparadas con las del año anterior. Los totales correspondientes fueron de 4,2 millones de hectáreas, en lo que se refiere a área de cultivo, y de 4,6 millones de toneladas, en cuanto al volumen cosechado. El comportamiento del período 2010-2012, en que se mantuvo el alto nivel productivo ya comentado, parecería responder a un proceso de ajuste de la producción mundial, luego de un largo período de contracción productiva observado anteriormente, en especial entre los años 2006 y 2009. En consecuencia, en estos últimos años, a nivel mundial, se habría entrado a una etapa de recuperación productiva que permitiría reponer los inventarios, los que se estima que se redujeron fuertemente en los tres a cinco años anteriores. Tal situación se habría expresado especialmente a través de un aumento sustancial de los precios, los que se mantuvieron en niveles elevados, especialmente entre los años 2008 y 2010. Además, serían estos mismos precios los que habrían contribuido a estimular la recuperación de la producción en estos últimos años.

12

Paralelamente, el comercio internacional de lentejas ha evidenciado una trayectoria de crecimiento casi constante a lo largo del presente siglo. El volumen de las exportaciones mundiales de lentejas prácticamente se duplicó entre 2002 y 2012, al pasar en este lapso desde 1 millón a 2 millones de toneladas, en cifras aproximadas. Adicionalmente, se aprecia que esta variable vuelve a presentar un salto muy significativo en 2013, de más de 500 mil toneladas en relación con el año anterior, lo que corresponde a una variación de más de 25%. Al respecto cabe señalar que los datos de 2013 son de carácter provisorio, puesto que todavía falta que algunos países, que normalmente son de menor relevancia, informen sus datos correspondientes al último año. Así, es previsible que el incremento definitivo sea aún de mayor magnitud. De cualquier modo, el año 2013 es significativamente el año de mayores transacciones internacionales de esta leguminosa. Esto podría deberse a un cambio relativamente importante en los patrones de consumo en ciertos países, como India o China, que se ha manifestado en un aumento sustantivo de la demanda mundial por este producto, generándose así una baja oferta para el consumo en otras partes del mundo. PRODUCCIÓN EN CHILE Desde comienzos del presente milenio, el consumo aparente de lentejas en Chile ha fluctuado entre 12.980 y 20.500 toneladas, aproximadamente, sin observar una tendencia clara en ningún sentido. En el año 2013 se alcanzó un nivel de 17.630 toneladas, presentando una disminución de 6,3% respecto al año anterior. En dicho contexto, la producción nacional ha fluctuado entre 564 y 1.062 toneladas, lo que normalmente ha equivalido a menos de 7% del consumo aparente. En consecuencia, las importaciones han pasado a jugar un rol fundamental para cubrir los requerimientos de la demanda nacional, alcanzando volúmenes que fluctúan entre 12.800 y 19.800 toneladas, aproximadamente El valor total de estas importaciones ha variado desde USD 5,6 a USD 17,6 millones, en tanto que el precio promedio, siguiendo de cerca la trayectoria de los precios internacionales, ha evolucionado desde USD 342 a USD 977 por tonelada. 13

Expresado en el equivalente a pesos chilenos, conforme al tipo de cambio vigente en cada período, los precios CIF medios se han ubicado entre $ 181 y $ 483 por kilo, alcanzando (2013) un promedio de $ 370 por kilo, aproximadamente. Para tener una referencia de los valores con los que ha competido la producción doméstica de características y calidades equivalentes, se tendría que adicionar el costo de internación correspondiente (gastos de aduana) y el costo de transporte interno hasta los centros de consumo. En todo caso, considerando a Santiago como el principal centro de consumo de esta legumbre, se ha estimado que la suma de estos costos llegaría a alrededor de $ 10 por kilo. En consecuencia, el precio que representa la competencia para la producción nacional en el último año habría sido del orden de $ 380 por kilo, base Santiago. Por otro lado, cabe tener presente que a nivel de mayoristas, de acuerdo a información recopilada por Odepa, se observan precios bastante más altos, ya que en el último año han alcanzado promedios entre $ 750 y $ 900 por kilo, según el tipo de envase (sacos de 1, 5 o 50 kilos), apreciándose un amplio margen entre el costo de importación y este precio mayorista. Lo mismo ocurre entre el precio al consumidor, que en el último año alcanzó un promedio superior a $ 1.400 por kilo, en relación con el precio mayorista y el precio equivalente al costo de importación. De cualquier forma, considerando al costo de importación del último año ($ 380 por kilo) como una referencia del valor de la competencia que ha tenido el productor nacional en este período y teniendo en cuenta que los costos operacionales en diversas situaciones productivas del cultivo de lentejas en el país fluctúan entre $ 393.000 y $ 673.000 por hectárea1, se advierte que sería necesario obtener un rendimiento superior a 10 quintales por hectárea para lograr cubrir al menos los costos operacionales más bajos registrados en la producción de lentejas en Chile, esto para un producto de calidad equivalente a la del producto importado. Para la situación de costos operacionales más elevados, el rendimiento mínimo requerido sería del orden de 20 quintales por hectárea. En consecuencia, si el precio recibido por el productor no es sustancialmente más alto que el valor de competencia representado por el costo de importación del 14

producto foráneo, el margen esperado de este cultivo sería extremadamente estrecho o definitivamente negativo en la mayoría de los casos, a menos que se obtengan rendimientos bastante más altos que 10 quintales por hectárea, situación que como promedio nacional es poco probable en Chile (5,9 quintales por hectárea en 2012/13). Esta situación contribuye a explicar el aletargamiento que presenta este cultivo en nuestro país. Las pequeñas áreas donde sigue desarrollándose corresponden a sectores bastante específicos que permiten obtener producciones de mayor calidad, las que se venden en mercados de nicho con precios sustancialmente mayores a los de la competencia.

COSTO DE PRODUCCIÓN DE LA LENTEJA REGIÓN DEL BÍOBÍO Se entrega a continuación, según tipo de tecnología, una estimación del costo por hectárea del proceso productivo de la lenteja (2013): lenteja – Costos por hectárea Ítem Región del Bíobío (Secano) Labores 409.500 Insumos 245.200 1 Otros costos 62.197 Total 716.897 1 Costo financiero de los insumos e imprevistos.

15

REFERENCIAS -

E. Peñaloza. 1995. Establecimiento del cultivo de la lenteja. pp: 53 – 66. En: S. Ferrada (Ed.). Manejo y fertilización en leguminosas de grano. Programa de capacitación de agentes de extensión del programa de transferencia

-

tecnológica. INDAP Carillanca. Chile. Tay, J. y F. Fernández. 2003. Leguminosas de grano. pp: 62 -70.En: F. Fernández y C. Ruiz (Eds.). Producción moderna de cultivos y praderas en el secano interior. Instituto de Investigaciones Agropecuarias Boletín INIA Nº

-

98. Chillán, Chile. Tay, J., A. France, M. Gerding, V. Kramm y R. Velasco. 2000. Manual de producción de leguminosas de grano y hortícolas para el secano costero de la región del Maule. Instituto de Investigaciones Agropecuarias Quilamapu.

-

Chillán, Chile. Banfi, S. 2014. Evolución del mercado de las lentejas [en línea]. Oficina de Estudios

y

Políticas

Agrarias.

http://www.odepa.cl/wp-

16

content/files_mf/1398432934Lentejas2014_04.pdf>. -

[Consulta:

23

septiembre 2015]. http://www.infoagro.com/herbaceos/legumbres/lenteja2.htm

17