Jeffrey Alexander_La Centralidad de Los Clasicos_La Teoria Social Hoy

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a teoria social, hoy Anthony Giddens, Jonathan Turner y otros version espanola: Jesus Albon~s LOS NOVENTA

pone al alcance de los lectores una coleccion con los mas variados ternas de las ciencias sociales. Mediante la publicacion de un libro semanal, esta serie proporciona un amplio espectro del pensarnien­ to critico de nuestro tiernpo.

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CORuia Nacional par.la

Cul'ur, y las Aries

MEXICO. D. F.

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INDICE

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LA TEORiA SOCIAL, HOY Titulo original en ingles: Social Theory Today Primera edicion: 1987 Primera edicion en idioma espanol: 1990. Alianza editorial, S.A., Madrid

© 1987, Polity Press © Ed. cast: 1990, Alianza Editorial, S.A., Madrid D.R. © 1991. Editorial Patria, S.A. de c.v . bajo el sello de Alianza Editorial San Lorenzo 160, lzt apalapa Mexico, D.F., CP 09860 Primera edicion en la coleccion Los Noverua Coedicion: Direccion General de Publicaciones del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes/ Editorial Patria , S.A. de C. Y. La presentacion y dis posicion en conjuruo y de cad a pagina de LA TEORiA SOCIAL, HOY, son propiedad del editor. Queda est rictarneru e prohibida la reproduccion parcial 0 total de esra obra por cualquier sistema 0 rnerodo electronico, incluso el fotocopiado. sin autorizacion escrit a del editor.



!

I

Introduccion, por Anthony Giddens y Jonathan H. Turner. La centralidad de los clasicos, por Jeffrey

c. Alexander ....

El conductisrno y despues del conductismo, por George C. Homans . I



Interaccionismo sirnbolico, por Hans Joas

9

22 ","

81

.

112

Teoria parsoniana actual: en busca de una nueva sinresis, por Richard M linch .

155

Teorizar analitico, por Jonathan H. Turner

205

..

El estructuralisrno, el post-estructuralisrno y la produccion de la cultura, por Anthony Giddens .

254 /

Etnometodologia, por John C. Heritage

..

290

Teoria de la esrructuracion y Praxis social, por Ira J. Cohen

351

Analisis de los sistemas mundiales, por Immanuel Wallers­ tein .

398

ISBN 968·39·0450-5 l\lPRESO EN ,1E"deo

7

8

J

Analisis de clases, por Ralph Miliband

j,

Teoria critica, por Axel Honneth

La teo ria social, hoy

. ..

445

La sociologia y el rnetodo maternatico, por Thomas P. Wil­ son . ..

489

Indice analitico

515

__

INTRODUCCION

418

Anthony Giddens y Jonathan H. Turner (0.,

Este libro ofrece una guia sistematica de las tradiciones y ten­ dencias mas importantes en historia social. No consideramos que la teoria social sea propiedad de una disciplina concreta, pues las cues­ tiones relativas a 13. vida social y a los productos culturales de la accion social se extienden a todas las disciplinas cientificas y hurna­ nisticas. Entre otros problemas, los teoricos de la sociedad abordan los siguientes temas: el status de las ciencias sociales, especialmente en relacion a la logica de las ciencias naturales; la naturaleza de las leyes y generalizaciones que pueden establecerse; la interpretacion de la agencia hurnana y el modo de distinguirla de los objetos y acontecimientos naturales; y el caracter 0 forma de las instituciones humanas. Naturalrnente, un bosquejo tan escueto encubre multitud de problemas y temas mas especificos; toda definicion de la teoria social esta abocada a suscitar controversias. Por tanto, el lector que busque un consen so acerca de las rnetas de la teoria social se sentira decepcionado. Pues est a falta de consenso, como implican muchas de las contribuciones a este libro, puede ser inherente a la naturaleza de la ciencia social. En ultimo extremo, la cuestion de si puede haber un marco unificado para la teo ria social, 0 siquiera un acucrdo sobre sus intereses basicos, esta ella misma sujeta a discusion. Uno de los motivos que nos han Ilevado a publicar este volumen es que cada vez somos mas conscientes de los irnportantes cam bios que se han venido produciendo en la teoria social en aiios recientes. 9

10

La teo ria social, hoy

EI analisis teo rico en las ciencias sociales siempre ha sido una em­ presa diversificada, pero en un determinado momento posterior a la II Guerra Mundial cierto conjunto de puntos de vista tendieron a prevalecer sobre el resto, imponiendo cierto grado de aceptacion general. Estes puntos de vista generalmente estaban influidos por el empirismo logico-filosMlco. Diversos autores a los que suele asociar­ se con esta pe-rspedivadesarrollaron determinadas interpretaciones del caracter de la ciencia que, a pesar de la imprecision de esa eti­ queta, tenian algunos elementos comunes: todos ellos sospechaban de la metafisica, deseaban definir con nitidez que era 10 que habia que considerar cientifico, insisuan en la verificabilidad de los con­ ceptos y proposiciones, y ten ian cierra inclinacion a construir teorias de corte hipotetico-deductivo. Formaba parte esencial de esta perspectiva la idea de 10 que Neu­ rath denominaba «ciencia unificada»; de acuerdo con dicha idea, no habia diferencias logicas fundamentales entre las ciencias naturales y las ciencias sociales. Este punto de vista contribuy6 a fomentar cierta falta de disposicion a observar de forma directa la logica de las pro­ pias ciencias sociales. Pues si la ciencia en general se guia por un unico cuerpo de principios, los cientfficos sociales no tienen mas que examinar los fundamentos logicos de la ciencia natural para explicar la naturaleza de su propia empresa. Considerandol., asi, no es sor­ prendente que muchos de quienes trabajaban en las ciencias sociales adoptaran acriticamente la filosofia de la ciencia natural relacionada con el empirismo logico para c1arificar sus propias tareas, Por 10 general, el empirisrno logico no era considerado una particular filo­ sofia de la ciencia con hipotesis potencialmente cuestionables, sino un modele incontrovertible de la ciencia. Las cuestiones relativas a la «interpretacion» se reprimieron en dos aspectos. Por un lado, la ciencia natural no se consideraba una empresa interpretativa en nin­ gun sentido fundamental, pues se suponia que su obJetivo primordial era la formulacion de leyes 0 sistemas de leyes; por otro, el signifi­ cado de las teorias y conceptos se consideraba directamenr- vincu­ lado a las observaciones empiricas. Desde este punro de vista " las ciencias sociales eran esencialmente no interpretativss, incluso f aunque'su objero gire en torno a procesos interpretativos de la cultura y la comunicacioj-, En consecuencia, la nocion de Verstehen -comprension del significado- recibio escasa atencion, tanto por parte de autores que escribian con una inspiracion c1aramente filosOfica Como parte de la mayorfa de los cientificos socia1es. En los casos en que se consideraba relevante eI Verstehen, solo 10 era en la medida en que se utilizaba para generar teodas 0 hip6tesis contrastables. La comprension empatica de los PUntos de vista 0 sentimientos de los demas, se pensaba, puede ayudar a1

Inrroduccion

11

observador sociologico a explicar sus conductas, pero estas explica­ ciones siempre tenian que formularse en rerminos «operacionales», o al menos en terrninos de descripciones de rasgos observables de.

conductas contrastables..: £1 Verstehen se entendia simplemente

como un fenorneno «psicologico» que depende de una compren­

sion necesariamente inruitiva y no fiable de la conciencia de los

demas,

Sin embargo, a 10 largo de las ultirnas dos decadas ha tenido lugar i un carnbio espectacular. Dentro de la filosofia de la ciencia natural,

'i el dominio del empirismo logico ha declinado ante los ataques de

i escritores tales como Kuhn, Toulmin, Lakatos y Hesse. En su lugar

hasurgido una «nueva filosofia de la ciencia- que desecha muchos

I~-supuestos de los puntos de vista precedentes. Resumiendo decidida­

! mente esta nueva concepcion, en ella se rechaza la idea de que puede

I haber observaciones teoricarnente neutrales; ya no se canonizan como

ideal supremo de la investigacion cientifica los sistemas de leyes c.o.­

nectadas de forma deductiva: pero 10 mas importante es que la cien J

I cia Sf considera una _empresa interpretanva, de modo que los pro:"

I de -significado,comunicacion y traduccion adquieren una re­

levancia inmediata para las teorias cientificas. Estos desarrollos de la

! filosofia de la ciencia natural han influido inevitablernente en eI pen­ sarniento de la ciencia social, al tiempo que han acentuado el ere­

ciente desencanto respecto a las teorias dorninanres en la «corriente

principal» de la ciencia social.

EI resultado de tales cambios ha sido la proliferacion de enfoques

del pensamiento teorico. Tradiciones de pensamiento anteriorrnente

ignoradas 0 mal conocidas han adquirido mucha mayor importancia:

la fenomenologia, en particular la relacionada con los escritos de

Alfred Schutz; la herrneneutica, tal como se ha desarrollado en la

obra de autores como Gadamer y Ricoeur; y la teoria critica, repre­

sentada recienternente por las obras de Habermas. Adernas, se han

revitalizado y examinado con renovado in teres tradiciones de pen­

sarniento anteriores, como el interaccionismo sirnbolico en los Esta­

I' dos Unidos y eI esrructuralisrno 0 post-estructuralismo en Europa. i A estas hay que aiiadir npos de pensamiento de desarrollo mas re­ entre los que se cuentan la etnometodologia, la teoria de la cienre, I estructuracion y la «teoria de la praxis», relacionada, sobre todo, con 1 Bordieu. Aunque esta diversidad de tradiciones y escuelas de pen­ : samiento surgida en la teoria social parezca asombrosa, sigue habien­ do algo semejante a una «corriente principal», aunque' ya no sea tan pujante. EI funcionalismo estructural parsoniano, por ejemplo, con­ tinua ejerciendo un poderoso atractivo y, de hecho, ha recibido re­ cientemente un considerable relanzamiento en los escritos de Luh­ mann, Munch, Alexander. Hayes y otros. Vemos, pues, que la teoria

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I blem-as·

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12

La teoria social, hoy

social ha llegado a comprender una gam a de enfoques variada y, con [recuencia, confusa. Han sido diversas las respuestas a esta variedad de enfoques. En un extrerno, para muchos de quienes estan fundamentalmente inte­ resados en la investigacion ernpfrica, el espectro de escuelas y tradi­ ciones en disputa representa una confirrnacion de 10 que siempre habian creido: los debates teoricos son de escaso interes 0 relevancia para los que realizan un trabajo empirico. Si los teoricos sociales no pueden ponerse de acuerdo entre sf acerca de las cuestiones mas basicas, (que relevancia pueden tener las cuestiones referentes a la teoria social para quienes se ocupan sobre todo de la investigacion empfrica? En consecuencia, se ha originado una division bastante considerable entre «investigadores», que a menudo contimian con­ siderandose -positivistas», y teoricos, que ahora se consideran de formas muy diversas. EI desaliento de los investigadores, sin embar­ go, no es compartido por todos. En el otro extremo, muchos han acogido con entusiasrno la diversificacion de la teoria social, en la opinion de que la competencia entre tradiciones de pensamiento es sumamente deseable. Desde este punto de vista, en ocasiones influ i­ do por la filosoffa de la ciencia natural de Feyerabend, la prolifera­ cion de tradiciones teoricas es una forma de evitar el dogmatismo fomentado por e1 cornprorniso dominante con un solo marco de pensamiento, A veces se sefiala tam bien que el estudio de la con­ ducta humana es necesariamente un asunto controvertido; solo den­ tro de una sociedad totalitaria existiria un unico marco incuestiona­ ble para e1 analisis de la conducta social hum ana. Es probable que sea cierto que la mayoria de quienes trabajan en las ciencias sociales se encuentran en algun punto situado entre am­ bos extremos".Comominimo, la mayoria afirmaria que la eleccion entre las diversas propuestas hechasjor diversas tradiciones teoricas no es en modo alguno una activida esteril; tal es sin duda la posi­ cion de los editores de este volumen, incluso aunque sus opiniones difieren respecto a cual es el mejor modo de llevar a cabo una ten­ tativa sernejante. Seiialariamos tarnbien que la aparente explosion de versiones rivales de la teoria social oculta una mayor coherencia e integracion entre esos puntos de vista divergentes de 10 que puede parecer a primera vista. Consideramos necesario aclarar este extremo. En primer lugar, puede haber un mayor solapamiento entre me­ todos diferentes de 10 que se suele pensar. EI desarrollo de la etno­ metodologfa nos proporciona un buen ejernplo. En las primeras fa­ ses de su Iormacion, detractores y criticos de la etnometodologfa consideraban que esta discrepaba de forma radical de otros paradig­ mas de pensamiento de la ciencia social, y hasta hace poco no se ha puesto de manifiesto que los escritos de los partidarios de la etno-

Introducci6n

IJ

metodologia tienen algo que aportar a problemas que ocupan prac­ ticamente a todos los que trabajan en la teoria social. Tambien se ha evidenciado que hay afinidades estrechas entre los problemas con que se enfrenta la etnometodologia y los que examinan otras tradi­ ciones teoricas, Asi, por ejemplo, el enfasis en la naturaleza «meto­ dologica» del uso del lenguaje en el contexte de la vida social puede muy bien considerarse relevante con respecto a cuestiones que tienen un amplio alcance enla teoria social. EI!..segundo lugar, se han destacado a 10 largo de las ultimas decadas ciertas lineas de desarrollo comunes compartidas por un amplio conjunto de enfoques teoricos. Ha existido la preocupacion, pongamos por caso, por reconceptualizar la naturaleza de la accion, En efecto, numerosos enfoques han mostrado tal inclinacion a con­ centrarse en esta cuestion que en cierto momento parecia que una oleada de subjetivismo estaba a punto de anegar las ciencias sociales. Sin embargo, ahora, podemos ver que una reelaboracion de cuestio­ nes relativas a la accion humana no tiene necesariamente que llevar­ nos a enfatizar de forma exagerada la subjetividad, sino que, al con­ trario, puede vincular una elaborada «teoria del sujeto» a analisis de tipo mas «insritucional-. En tercer lugar, seria dificil negar que ha existido algun tipo de progreso' en la resolucion de cuestiones que previamente parecian inabordables 0 no se' analizaban de forma directa, Asi, durante largo tiernpo existio una division entre los metodos naturalistas y aquellos .que destacaban la importancia del Verstehen, no obstante el predo­ minio que los primeros tenian sobre estos ultirnos. Como conse­ 'cuenci-a de desarrollos convergentes en un conjunto de tradiciones de pensamiento, se ha evidenciado que la division entre Erkldren (0 explicacion en Iuncion de leyes causales) y Verstehen respondia a un planteamiento erroneo. El Verstehen no es primariamente, como sub­ rayan los ernpiristas logicos, una cuestion -psicologica»; antes bien, el Verstehen forma parte constitutiva de todas las cuestiones relativas a la interpretacion del significado, y esta implicado en todas ellas. En la literatura reciente estas cuestiones se han investigado con am­ plitud, tanto en el ambito de la ciencia natural como cn el de la ciencia social; como consecuencia, se han clarificado de forma defi­ nitiva problemas que antes eran bastante oscuros. En este libro hemos tratado de abarcar una gran variedad de plantearnientos, aunque no sehan podido evitar algunas omisiones. No obstante, creemos que el presente volumen trata mas 0 menos 'sisrematicarnente la mayoria de las tradiciones influyentes de la teo­ ria social actual. En una breve introduccion seria imposible analizar con detalle los puntos Iuertes 0 las debilidades de todos los enfo­ ques. En lugar de esto, sefialarernos algunos de los temas y preten­

14

1

t. teoria ,,,,,I, hoy

Introducci6n

siones mas destacados de varios autores para dar una Idea de la! naturaleza pragmatica,.situ.a,cional. y cons~n~ida d~ la interaccion (y, diversidad y vitalidad de la teo ria social. par tanto, de' la orgaruzacion SOCial) haria imposibles las -Ieyes- y «generalizaciones» atemporales del positivismo. Por otra parte, sin embargo, muchos interaccionistas --entre los que quiza podriamos (Cual es la naturaleza de la ciencia social? contar al propio Mead- han tratado de descubrir las propiedades bisicas de la interacci6n y de desarrollar leyes universales acerca de La practica totalidad de los capitulos que siguen abordan esta l su forma de operar. cuestion. Como se pondra de manifiesto, hay un extendido desa­ En su lucido analisis de Garfinkel y la emometodologia, John cuerdo acerca de que clase de ciencia, si es que 10 es, es y puede ser Heritage procuraevitar la.cuestion de la «ciencia» en la ciencia so­ li.~ ciencia social. ,.£1 examen de «El conductismoy despues del con­ , cial. Pues iii la accion es indexica, contextual y reflexiva, 0, en palabras de Kuhn (1970), dedicarse a la resolucion de rompecabezas y a so­ lucionar problemas especificos. Urilizando la ciencia normal como referencia para caracterizar la ciencia natural como tal, tam bien Ha­ bermas ha senalado que el consenso es aquello que diferencia la actividad «cientifica» de la «no cientitica».

i

,

,,

Denominamos cientifica a una informacion si y solo si puede obtenerse un

consenso espontaneo y permanente respecto a su validez... EI verdadero

logro de la ciencia mo?erna no con~l~te, Iundarnenralmente. en la produc­

cion de verdad, es decir, de proposrciones correcras y convmcentes acerca

de 10 que llamamos realidad.. ,La c~~~~~_~_?~e~~a se distinglJ.c:._.~~te­

gorias tradicionales de conOClmlentO por un metodo para lleg~La..un__con­

senso espontaneo y permanente acerca de nuestros puntos d_e..vl~ta. (Haber­

mas: 1972, p. 91).

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I

se refiere a ejemplos concretes de trabajo empirico exitoso: ejemplos de la capacidad para resolver problemas que define los campos pa­ radigmaticos. Si bien los modelos ejernplares incorporan compromi­ sos metafisicos y no empiricos de varios tipos, son en si mismos una pauta para la explicacion especifica del universo. Incluyen necesaria­ mente definiciones y conceptos, pero orientan hacia cuestiones de operacionalizacion y tecnica a quienes los estudian. Sin embargo, a pesar de su especificidad, los mismos modelos ejemplares funcionan aprioristicamente. Seaprenden. en los libros de textos.yen Iqs)ab.: ratorios antes de ,que .los neofitos sean cap aces de examinar por si 0 no realmente verdaderos. En otras palabras, son :nrilmos si. interiorizados por razon de su posicion de privilegio en eI proceso de socializacion mas que en virtud de su validez cientifica. Los pro­ cesos de aprendizaje son identicos en la ciencia social; la diferencia estriba en que los cientificos sociales interiorizan clasicos adernas de modelos ejernplares,

son:

La defensa post-positivista de los clasicos La proporcion entre modelos y clasicos es tan diferente en la ciencia socia.Lp..