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RIESGOS TÓXICOS EN EL HOGAR

TOXICOLOGÍA ANALÍTICA Y QUÍMICA LEGAL 2017 Magdalena Cuello Victoria Olivera María Noel Zugarramurdi INTRODUCCIÓN En una casa se pueden guardar muchos productos químicos que pueden resultar peligrosos tanto para la salud de la familia y de las mascotas, como dañinos para el medio ambiente. Muchas veces asociamos la contaminación química con la industria, que vierte grandes cantidades de residuos al ambiente, pero estas industrias producen cosas que acaban en nuestros hogares. Muchas de las sustancias tóxicas no solo salen por las chimeneas o se vierten en los ríos sino que forman parte de los productos finales que se ponen a la venta: pinturas, productos de limpieza, plásticos, tejidos, muebles. El polvo doméstico de cualquier casa contiene centenares de sustancias químicas tóxicas y considerando que una persona respira diariamente entre 15.000 y 20.000 litros de aire, se retienen en nuestros pulmones muchas de las sustancias respiradas pudiendo pasar así a nuestra sangre.

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También se puede dar el ingreso de sustancias químicas tóxicas al organismo por otras vías como ser a través de la piel o por ingestión. Al fin y al cabo, una parte de lo que hay en nuestra casa, acaba formando parte de nosotros mismos, ya que no importa donde estuviesen inicialmente, aunque no lo veamos, desde los más diversos objetos o productos, siempre se desprenden pequeñas cantidades de sustancias. Estas sustancias a partir de determinadas concentraciones comienzan a interferir en los procesos químicos naturales de nuestro organismo, afectando nuestra salud. Los más diversos organismos internacionales, como la propia OMS, reconoce que la contaminación química en el hogar es un grave problema de salud pública ante el que es necesario actuar. Sobre todo si tenemos en cuenta que la población occidental pasa de media cerca de un 90% de su tiempo en espacios cerrados, mucho del cual es en el propio domicilio. Por ejemplo, unos 3.000 millones de personas siguen cocinando y calentando sus hogares con combustibles sólidos (es decir, madera, residuos agrícolas, carbón vegetal y mineral y excrementos de animales), en fuegos abiertos y en cocinas con fugas (en su mayoría son personas pobres que viven en países de ingresos bajos y medianos). Estos combustibles y tecnologías ineficientes para cocinar producen elevados niveles de contaminación del aire de interiores dado que liberan elementos nocivos para la salud, tales como pequeñas partículas de hollín que penetran profundamente en los pulmones. Por ejemplo en Uruguay el 80% de las partículas (principal contaminante físico de este país) provienen del sector residencial debido a la calefacción a leña. Anualmente, 4,3 millones de personas mueren en el mundo prematuramente por enfermedades atribuibles a la contaminación del aire interior causada por el uso de combustibles sólidos ineficientes (datos de 2012) para cocinar y calefaccionar. Las sustancias tóxicas en el hogar pueden afectar potencialmente a cualquier persona. Sin embargo hay grupos especialmente vulnerables, entre los que cabe destacar a los niños y las mujeres embarazadas. Durante el embarazo, niveles muy bajos de concentración de una sustancia contaminante pueden causar grandes daños al niño por nacer. La exposición a productos químicos durante esos momentos de nuestro desarrollo, puede causar los más diversos problemas. Entre ellos se cuentan abortos, nacimientos prematuros o defectos de nacimiento. También problemas que se manifestarán luego, en la infancia, tales como daños en el desarrollo neurológico o los cánceres infantiles. E incluso enfermedades que se manifestarán décadas después en el estado adulto, tales como cánceres y enfermedades cardiovasculares. Los niños son más susceptibles ante los efectos de las sustancias tóxicas. Las acumulan más y son más sensibles a ellas. Los niños respiran más que los adultos y además están más cerca del suelo, de modo que se exponen más a inhalar sustancias preocupantes tales como compuestos orgánicos volátiles o las más diversas sustancias presentes en el polvo, además de las que puedan ingerir directamente por llevarse las manos a la boca. Su piel es más permeable, y comen y beben más en relación a los adultos, lo que hace que sus cuerpos puedan incorporar más contaminantes. Además, sus sistemas orgánicos de eliminación de tóxicos aún no han madurado. La habitación de los niños suele ser uno de los lugares en los que se concentran más sustancias perjudiciales en una casa, no solo por los productos que hay en esa dependencia sino porque, además, suelen ser Página 2 de 19

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espacios más reducidos. La creciente contaminación química a la que se exponen los infantes, puede ser causa de problemas de creciente incidencia entre esta población como enfermedades respiratorias, asma, alergias, cánceres, problemas cognitivos y alteraciones hormonales. Debido a que esta última población de riesgo presenta prevalencia de accidentes de intoxicación a nivel doméstico, esta monografía incluirá una evaluación de los tóxicos a los que la población infantil se encuentra expuesta en el hogar.

OBJETIVO Conocer los principales productos tóxicos a los que se está expuesto a nivel doméstico. Realizar un sondeo acerca de cuáles son los riesgos toxicológicos a los que los niños uruguayos están expuestos en sus hogares.

METODOLOGÍA Se realiza una búsqueda bibliográfica de los tóxicos comúnmente encontrados en el hogar, la prevalencia de estos y cuáles son sus efectos sobre la salud humana. A través de una encuesta realizada a padres de niños de hasta 10 años, se evalúa a cuáles de estos riesgos están mayormente expuestos los niños y bajo qué circunstancias. La elección de niños de hasta diez años se debe a que se pretende evaluar la situación actual debido a que los productos y materiales responsables de las intoxicaciones están en constante cambio.

RESULTADOS Y DISCUSIÓN Entre los productos o elementos que más preocupan por contribuir a la contaminación del ambiente interior del hogar se encuentran: ● los que incrementan la presencia de compuestos volátiles ● Los que generan aerosoles o partículas susceptibles de ser inhaladas ● Los elementos desde los que pueden desprenderse o migrar sustancias. En base a la bibliografía consultada, se agruparon los productos tóxicos, posiblemente encontrados en el hogar, en las siguientes categorías: ● Productos de limpieza ● Pinturas y disolventes ● Producto de higiene personal ● Baterías y pilas ● Combustibles y aceites de motor ● Insecticidas Página 3 de 19

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Las actividades realizadas para limpiar el hogar pueden provocar problemas de calidad de aire al liberarse durante las mismas, compuestos químicos que la mayoría de productos de limpieza, ambientadores e insecticidas utilizados emiten. Las afecciones causadas por la exposición a estos productos puede ser tanto por inhalación como por vía dérmica. La utilización de productos en forma de aerosol puede ser especialmente delicada ya que las finas partículas formadas pueden ser fácilmente inhaladas. Estos productos también pueden seguir afectando a los integrantes del hogar luego de su utilización, ya que los compuestos volátiles pueden persistir en el ambiente durante tiempo y llegar a todas las zonas del hogar dependiendo de la mayor o menor renovación del aire. La contaminación existente en nuestro hogar puede cambiar en función de: ● La habitación de la casa en la que se esté ● Los materiales presentes en la misma ● Los productos que se empleen en ella ● El tiempo transcurrido desde su empleo ● La mayor o menor renovación del aire ● El tamaño de habitación

A continuación se resumen las emisiones más significativas de los productos más utilizados en el mantenimiento y limpieza del hogar:

TIPO DE PRODUCTO

COMPUESTOS QUÍMICOS EMITIDOS

PRODUCTOS DE LIMPIEZA Sulfato de alquil aril poliéter, alquil fenol Jabones y poliglicol éter, detergentes polietilenglicol alquil aril éter, alcoholes, alquil sodio isotianatos, formaldehído

Limpiadores

Amoníaco, acetato de

EFECTOS SOBRE LA SALUD

Fuerte dolor o ardor de garganta, en nariz, ojos, oídos, labios o lengua, Pérdida de la visión, Quemaduras y posibles orificios en el esófago, Dolor abdominal fuerte, Vómitos y heces con sangre, Desmayo, Hipotensión, Dificultad respiratoria. Irritación de las vías respiratorias, Quemaduras en la piel, ojos, boca, garganta y estómago, Sensación de Página 4 de 19

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multiuso

Desinfectantes

Limpiacristales

Quita manchas y limpia textiles

Limpiadores para aluminio

TIPO DE PRODUCTO Desengrasantes

Limpiadores

monobutil etilenglicol, hipoclorito sódico

ardor, Tos, Dolor de garganta, Dificultad al respirar, Náusea, Vómito, Dolor abdominal intenso, Confusión, Dificultad para caminar, Mareos, Falta de coordinación, Fiebre, Coma y Muerte. Fenol, cresol, hipoclorito Quemaduras en ojos, piel y tracto sódico, sales de amonio respiratorio, Convulsiones, Alteraciones cuaternario, amoníaco, Cardíacas, Fallos respiratorios, Náusea, formaldehído Vómito, Dolor abdominal intenso, Coma y Muerte. Fuerte dolor o ardor en nariz, ojos, oídos, labios, lengua y garganta, Pérdida de la Hidróxido amónico, visión, Quemadura en el esófago, Dolor amoníaco, isopropanol abdominal fuerte, Vómitos y heces con sangre, Desmayo, Hipotensión, Dificultad respiratoria, Vértigo, Dificultades para caminar, Daño cerebral severo, Coma y Muerte. Tetracloroetileno, Irritación en piel, ojos, tracto respiratorio tricloroetileno, metanol, superior, Dolor de cabeza, Náuseas, disolventes derivados del Vómitos, Paro respiratorio, Daño hepático petróleo, benceno, y renal, Mareos, Desmayos, tricloroetano Convulsiones, Pérdida del conocimiento y Muerte. Graves quemaduras de piel y mucosas, Irritación ocular, Ulceración de córnea, Ácido fluorhídrico, Fenol Náuseas, Vómitos, Disfagia, Dolor abdominal y retroesternal, Gastritis hemorrágica, Pancreatitis, Tos, Disnea, Cianosis, Edema pulmonar, Fallo respiratorio y Muerte.

COMPUESTOS QUÍMICOS EMITIDOS

EFECTOS SOBRE LA SALUD

Tetracloruro de carbono, tolueno, xileno, tricloroetileno, acetato de monobutil etilenglicol, etilenglicol monobutil éter

Irritación y quemaduras en piel, Fuerte dolor de garganta, nariz, ojos, oídos, labios o lengua, Pérdida de la visión, Dificultad respiratoria, Dolor abdominal fuerte, Quemaduras y posibles orificios en el esófago, Vómitos y heces con sangre, Desmayo, Hipotensión, Cambio grave del nivel ácido de la sangre que provoca daño en los órganos y Muerte.

Amoníaco, nafta, nitrobenceno, destilados

Irritación y quemaduras de la piel, Dolor intenso en garganta, boca, nariz y ojos, Pérdida de la visión, Confusión, Mareo, Hipotensión, Dolor de estómago intenso, Página 5 de 19

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para muebles

de petróleo, fenol

Pulidores de suelos

Nitrobenceno

Limpiadores de baño

Hipoclorito sódico, sulfato ácido de sodio

Aerosoles varios (propelente)

Propano, óxido nitroso, cloruro de metileno

Vómitos y heces con sangre, Fiebre, Dolor de cabeza, Problemas de coordinación, Inflamación de los pulmones, Colapso pulmonar, Asfixia, Ataques epilépticos, Coma y Muerte Irritación en piel y ojos, Náusea, Vómitos, Daño hepático, Dificultad respiratoria, Labios, uñas o piel azulada, Dolor de cabeza, Irritabilidad, Mareos, Vértigos, Debilidad, Convulsiones, Pérdida del conocimiento, Coma y Muerte. Quemaduras en piel y ojos, Dificultad para respirar, Ardor en la boca, Quemaduras en el esófago, Diarrea, Babeo, Náuseas, Vómitos con sangre, Hipotensión, Debilidad, Confusión, Dificultad para caminar, Mareos, Falta de coordinación, Fiebre, Coma y Muerte. Sensación de ardor, Irritación de la piel, Diarrea, Náuseas, Vómitos, Debilidad general, Fiebre, Dolor y entumecimiento en brazos y piernas, Nerviosismo, Dolor de cabeza, Vértigo, Mareo, Convulsiones, Coma o Inconsciencia, Tos, Respiración superficial y lenta, Latidos cardíacos irregulares y acelerados, Hipertensión, Asfixia y Muerte.

AMBIENTADORES Y DESODORIZANTES

Sólidos

Naftaleno, pdiclorobenceno

Con perfume a limón

Limoneno

TIPO DE PRODUCTO

COMPUESTOS QUÍMICOS EMITIDOS

Con perfume a pino

α-Pineno

Dolor de cabeza, Debilidad, Náuseas, Vómitos, Sudoración, Confusión mental, Ictericia, Orina oscura, Dolor abdominal. Diarrea. Convulsiones. Pérdida del conocimiento, Hemólisis, Muerte. Irritación moderada a severa de ojos, piel, nariz, garganta y tracto respiratorio, Tos, Dolor de cabeza, Vómitos.

EFECTOS SOBRE LA SALUD Náuseas y Vómitos, Erupción, Picor, Hinchazón, Dificultad para respirar, Sensación de hormigueo en las manos y los pies, Cefalea, Mareos, Aturdimiento, Dolor de pecho, Dolor muscular, Enrojecimiento.

PLAGUICIDAS Insecticidas, matapulgas

Clorpirifós, Diazinón, Propoxur, Lindano, Diclorvós, Bendiocarb, Piretroides

MANTENIMIENTO DEL HOGAR Benceno, tolueno, xileno, etanol, metanol, octano,

Irritación, enrojecimiento o hinchazón de la piel, Dificultad respiratoria, Silbilancias, Frecuencia cardíaca lenta, Ansiedad, Mareo, Dolor de cabeza, Debilidad, Convulsiones, Coma y Muerte. Visión borrosa o disminuida, Dificultad para deglutir, Irritación en nariz y ojos Página 6 de 19

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Pinturas (látex y base acuosa)

decano, undecano, éteres de glicol, policlorobifenilo, dibutil fltalato

Barnices para muebles

Trimetipentano, dimetilhexano, trimetilhexano, trimetilheptano, etilbenceno, limoneno

Espuma de poliuretano

Toluendiisocianato (TDI)

Adhesivos a base de agua

Benceno, tolueno, cloruro de metileno, acetona, hexano, xilenos, acetato de etilo, 2-butanona, acetato de butilo

TIPO DE PRODUCTO

COMPUESTOS QUÍMICOS EMITIDOS

Colas

4-Cloro-m-cresol, polímero de acrilamida, poliacrilamida aniónica, carboximetilcelulosa, destilados de petróleo, pcloro-m-cresol, poliacrilamida, urea PRODUCTOS DE ASEO Y COSMÉTICA Jabón y Laurilsulfato sódico, shampoo Ftalatos, Metilisotiazolinona, Parabenos, Diazolidinil urea, Formaldehido, Trietanolamina, 1,4-Dioxano, Triclosán

(ardor, lagrimeo, enrojecimiento o goteo nasal), Tos, Respiración superficial, Latidos cardíacos rápidos, Confusión, Vértigo, Dolor de cabeza, Mareos, Nerviosismo, Estupor, Pérdida de conocimiento, Coma y Muerte. Fuerte dolor de garganta, nariz, ojos, oídos, labios o lengua, Pérdida de la visión, Necrosis de la piel, Dificultad respiratoria, Respiración rápida y superficial, Líquido en los pulmones, Sangre en los pulmones, Paro respiratorio, Dolor abdominal fuerte, Sangre en las heces y en el vómito, Quemaduras en el esófago, Desmayo, Hipotensión, Cambio severo en el nivel de acidez en la sangre, Confusión, Mareo, Euforia, Falta de coordinación, Inestabilidad, Convulsiones, Coma y Muerte. Irritación de la piel y vías respiratorias, Sequedad de la faringe, Opresión del pecho, dificultad respiratoria y Tos nocturna, Dermatitis por contacto, Lagrimeo y escozor de la vista, Conjuntivitis química, Irritación del esófago, Espasmos a nivel de estómago, Vómitos. Ardor en la nariz, los labios, la garganta o los ojos, Pérdida de la visión, Dificultad respiratoria, Cambio en el equilibrio ácido de la sangre, Desmayo, Hipotensión, Dolor abdominal, Náuseas, Vómitos, Convulsiones, Mareos, Dolor de cabeza, Espasmos musculares, Problemas nerviosos, Pérdida del conocimiento, Marcha inestable.

EFECTOS SOBRE LA SALUD Irritantes en piel y mucosas, Nariz enrojecida y con secreción, Pérdida de visión, Ulceración de córnea, Daño hepático y renal, Dolor abdominal, Ansiedad, Convulsiones, Apariencia ebria, mareada o aturdida, Excitabilidad, Dolor de cabeza, Inapetencia, Náuseas. Irritación de ojos, nariz y garganta, Ulceración de córnea, Enrojecimiento, comezón o inflamación de la piel, Vómitos y diarrea, Dolor abdominal, Daño hepático y renal.

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Cremas

Tinta para el cabello

Benzofenonas, Ftalatos, Hidroquinonas, Parafinas, Parabenos, Cloruro estearalconio, Acetato de plomo. Parafenilendiamina, Peróxido de Hidrógeno, Amoníaco, Dimetilol dimetil hidantoína, Parabenos, Acetato de plomo, Resorcinol

Esmalte de uñas

Formaldehido, Ftalatos, Tolueno, Alcanfor, Parabenos.

Quitaesmaltes

Acetona, Aceite de ricino, Acetato de etilo, Aceites minerales

Espuma de afeitar

1,3-Butadieno, Trietanolamina, Polioxietileno

Irritación de la piel, ojos y mucosas, Conjuntivitis química, Vómitos, Diarrea, Calambres abdominales, Convulsiones, Dolor de cabeza,Tos, Inflamación de los bronquios, Insuficiencia respiratoria. Dolor y cólicos abdominales, Vómitos con sangre, Quemaduras en ojos, boca y garganta, Tos, Dolor torácico, Opresión en el pecho, Dificultad respiratoria, Respiración acelerada, Sibilancias, Fiebre, Pulso débil y rápido, Desmayo, Convulsiones, Confusión, Dificultad para caminar, Mareos, Falta de coordinación, Inquietud, Estupor, Coma y Muerte. Irritación en piel, ojos, boca, garganta y vías respiratorias, Dolor abdominal, Ansiedad, agitación, excitación, alucinaciones, Temblores, espasmo de los músculos faciales, convulsiones, Sed excesiva, Espasmos musculares, rigidez muscular, Náuseas, Vómitos, Pulso rápido, Tos, Dificultad respiratoria, Respiración lenta, Somnolencia, Pérdida del conocimiento, Coma y Muerte. Irritación en piel, ojos, boca, garganta y vías respiratorias, Presión arterial baja, Náuseas, Vómitos, Diarrea, Dolor abdominal, Dificultad respiratoria, Frecuencia respiratoria lenta, Aumento de la necesidad de orinar, Sensación de ebriedad, Alucinaciones, Somnolencia, Estupor, Falta de coordinación, Coma y Muerte. Irritación en piel, ojos, boca, garganta y vías respiratorias, Pérdida de visión, Tos, Dificultad respiratoria, Náuseas, Vómitos, Dolor abdomina.

A continuación se destacan características de algunos productos químicos emitidos: Ftalatos Es un grupo de sustancias que contaminan más frecuentemente los hogares. Son sustancias de atención prioritaria si se quiere prevenir problemas de salud en el hogar. Pueden, integrar una parte notable del peso de plásticos como el PVC, como reblandecedores o plastificantes del mismo y por lo tanto, ser liberados desde las superficies cubiertas con este plástico (ampliamente usados en muchos hogares). Pero pueden estar en muchas cosas más: pegamentos y adhesivos, aparatos electrónicos, materiales de construcción, productos de limpieza, productos de aseo personal (geles, champús, jabones, lociones, cosméticos), perfumes, envases (tales como botellas de agua), pinturas, barnices, juguetes, arcilla para Página 8 de 19

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modelar, ceras, tintas de impresión, ropas y tejidos, ambientadores, pesticidas. Diferentes investigaciones muestran cómo estas sustancias se miden abundantemente en el polvo doméstico. O como pasan al torrente circulatorio sea por inhalarlos u otras vías, como por ejemplo cuando se aplican sobre la piel determinados productos que los contienen. Existen infinidad de investigaciones científicas que asocian sustancias de este grupo a problemas de salud, fundamentalmente por sus efectos como disruptores hormonales. Por ejemplo, la Unión Europa prohibió su uso en cosas como chupetes, tetinas y mordedores infantiles. Si pensamos en los efectos de una exposición crónica, se han estudiado alteraciones producidas por exposición prenatal, en la infancia y en adultos. Entre los efectos asociados se citan: asma y alergia infantil, limitación de la función pulmonar en hombres adultos, daños en el esperma, anomalías en el desarrollo genital masculino (como la criptorquidia), alteración de los niveles de testosterona, ginecomastia en adolescentes varones, acortamiento de la distancia anogenital en varones recién nacidos (síntoma de feminización), alteraciones del comportamiento (como feminización de la conducta infantil), telarquia precoz (desarrollo prematuro de las mamas en las niñas), endometriosis, cáncer de mama, alteración de la formación de los folículos ováricos, partos prematuros, bajo peso al nacer (que puede traer aparejado mayor mortalidad infantil y mayor riesgo de problemas cardiovasculares y metabólicos en el estado adulto), trastorno de déficit de atención e hiperactividad, problemas de desarrollo cognitivo y motor en los niños, obesidad, resistencia a la insulina (ligada a la diabetes). Tricloroetileno (TCE) Se puede estar expuesto a través de la utilización de tintes para madera, barnices, acabados, lubricantes, adhesivos, líquido corrector blanco, removedores de pintura y ciertos limpiadores, donde TCE se utiliza como disolvente. Aunque la mayor vía de exposición humana es la inhalación, la ingestión de agua contaminada puede ser importante en algunas ocasiones y lugares. Existen estudios científicos que han asociado esta sustancia a problemas sanitarios tales como: lesión hepatocelular aguda, necrosis tubular aguda, arritmias, anticuerpos de autoinmunidad, malformaciones congénitas cardíacas, leucemias infantiles, cirrosis, deterioro cognitivo, retraso en el desarrollo, disminución de la coordinación, fetotoxicidad, pérdida de audición, cáncer de hígado, linfoma no Hodgkin, trastornos psiquiátricos, cáncer de riñón, esclerodermia y neuropatía del trigémino. También trastorno de déficit de atención e hiperactividad, leucemias de adulto, cáncer cerebral, cáncer de mama, cáncer cervical, malformaciones genito-urinarias, linfoma de Hodgkin, inmunosupresión, bajo peso al nacer, cáncer de pulmón, mieloma múltiple, síndrome nefrótico, defectos del tubo neural , labio leporino, cáncer de páncreas, pancreatitis, neuropatía periférica, cáncer de próstata, lupus eritematoso sistémico, cáncer de testículos. Disolventes Pueden estar presentes en cosas tales como pinturas, pesticidas, ambientadores, productos de limpieza, productos para el cuidado personal, quitaesmaltes para las uñas, quitamanchas, gomas, pegamentos, adhesivos, resinas artificiales, ropas con limpieza en seco (percloroetileno), etc. Página 9 de 19

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Algunos ejemplos son metil-etil cetona, acetona, acetonitrilo, benceno, dioxano, estireno, tolueno, xileno, tetracloruro de carbono, clorofluorocarbonos (CFC), clorobenceno, cloroformo, cloruro de metileno, percloroetileno (tetracloroetileno), 1,1,1-tricloroetano (metil cloroformo), tricloroetileno, hidrocarburos alifáticos (n-hexano, n-heptano, n-octano) y éteres de glicol (como el 2-butoxietanol). Algunas de estas sustancias han sido asociadas a problemas sanitarios, como el cáncer (benceno, tetracloruro de carbono, cloroformo, 1-4-dioxano, percloroetileno, estireno, tricloroetileno). Los éteres de glicol a daños en el esperma, fetotoxicidad, reducción de la fertilidad femenina, necrosis tubular aguda, malformaciones congénitas , malformaciones cráneo-faciales. Además muchos disolventes son fuertes neurotóxicos y, entre otras cosas, pueden disparar el asma.

Compuestos orgánicos volátiles Son un grupo amplio de sustancias. Algunas de ellas figuran entre los más problemáticos contaminantes del aire de los hogares: -

Formaldehído: Este compuesto volátil es uno de los contaminantes más importantes que se pueden encontrar en el aire del hogar (especialmente en dependencias mal ventiladas). Puede estar presente en, ser liberado desde u originarse a consecuencia de la presencia o uso en el hogar de cosas tales como tableros de fibras (que es una de las principales fuentes de emisión de esta sustancia en espacios cerrados), resinas, espumas aislantes, productos de limpieza, alfombras, relleno de colchones, tejidos anti-arrugas, ordenadores, televisores, impresoras, videoconsolas, hornos, lámparas decorativas, secadores de pelo, maderas, pegamentos (como algunos que adhieren las moquetas), papeles pintados, pinturas, barnices, lacas, antisépticos, champús, geles, cosméticos, plásticos, insecticidas. Entre los síntomas más evidentes de la exposición al formaldehído figuran: irritación de los ojos, la nariz, la garganta y lagrimeo. También visión borrosa, cefalea y náuseas.

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Benceno: es uno de los contaminantes relevantes en ambientes interiores. Puede proceder de los materiales utilizados en la construcción, remodelación y decoración. Así, por ejemplo pueden liberarlo algunos materiales de decoración y materiales poliméricos tales como vinilo, PVC y pisos de goma, así como alfombras de nylon y moquetas con sustrato de SBR-látex (látex estireno-butadieno), también los muebles de aglomerado, el contrachapado, la fibra de vidrio, adhesivos para pisos, pinturas, revestimientos de madera y removedor de pintura. También lo pueden emitir el incienso, pegamentos, cera para muebles, detergentes, productos de limpieza, disolventes, lacas y pesticidas. Puede ser también un contaminante del agua. El uso de combustibles (en estufas, por ejemplo) puede incrementar mucho su presencia. Incluso el humo del tabaco contiene pequeñas cantidades. Estudios científicos asocian la exposición al benceno, al menos con los siguientes problemas de salud: leucemia aguda no linfocítica, anemia, anemia aplásica, supresión del sistema inmune, pre-leucemia y trombocitopenia. También con arritmias, anticuerpos de autoinmunidad, pérdida de audición, desórdenes de la menstruación, parto prematuro, cáncer renal o esclerodermia. E incluso algunas investigaciones asocian Página 10 de 19

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la sustancia con leucemia linfocítica aguda, asma irritante, cáncer de huesos (sarcoma de Ewing), cáncer cerebral en adultos, cáncer de mama, malformaciones cardiacas congénitas, leucemia linfocítica crónica , cáncer de vesícula, cáncer hepático, cáncer de pulmón , mieloma múltiple, cáncer nasofaríngeo, defectos del tubo neural (como espina bífida), linfoma no Hogkiniano o neuropatía periférica. Exposiciones a niveles más o menos altos pueden hacer que se muestren síntomas como excitación, problemas del habla, dolor de cabeza, mareos, insomnio, náuseas, parestesias en manos y pies, fatiga, desmayos. -

Tolueno: disolvente en pinturas, revestimientos, caucho, resinas, diluyente en lacas nitrocelulósicas y en adhesivos. También se ha detectado su presencia en diversos ambientadores y otros productos en aerosol, como pinturas en spray. Puede llegar a casa también como contaminante del agua. El tolueno ha sido asociado por estudios científicos a los siguientes problemas sanitarios: malformaciones cráneo faciales, síndrome fetal del disolvente, necrosis tubular aguda, arritmias, deterioro cognitivo, retraso mental, retraso en el desarrollo, retraso en el crecimiento, fetotoxicidad, pérdida de oído, alteraciones hormonales , bajo peso al nacer, trastornos menstruales, infertilidad y subfertilidad femenina, esclerodermia, anomalías en el esperma, daño agudo en las células hepáticas, asma , cáncer cerebral , cáncer de colon, alteraciones visuales, pérdida de coordinación, malformaciones genito-urinarias, supresión inmune, defectos del tubo neural, neuropatía periférica, cáncer de estómago.

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Estireno: Puede estar presente o ser liberado desde materiales de construcción, humo de tabaco, fotocopiadoras, plásticos como el poliestireno, aislantes, fibra de vidrio, cañerías de plástico, zapatos, envases para bebida y comida, reverso de alfombras, computadoras, televisores, hornos, secadores, lámparas. Diferentes investigaciones científicas han asociado el estireno a: deterioro cognitivo, pérdida de audición, infarto de miocardio, hígado graso, anomalías espermáticas, daño agudo en las células del hígado, leucemias del adulto, asma , sensibilización, cáncer de mama, alteraciones de la visión, pérdida de coordinación, alteraciones hormonales, cáncer de pulmón, alteraciones en la menstruación, cáncer de páncreas, neuropatía periférica, subfertilidad femenina.

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Xileno: Puede estar presente y/o ser liberado desde cosas como computadoras, cargadores, videoconsolas, hornos, secadores, aparatos de televisión, tintas, sprays, ambientadores. Algunos problemas de salud que los estudios científicos han asociado a esta sustancia son: arritmias, problemas de memoria, aprendizaje y déficit de atención, retraso mental, retraso en el desarrollo, fetotoxicidad, pérdida de oído, alteraciones hormonales, desórdenes en la menstruación o esclerodermia. También algunos estudios asocian la exposición a la sustancia con daño agudo en las células hepáticas, cáncer cerebral de adulto, cáncer de colon, cáncer de estómago, retraso en el crecimiento o neuropatía periférica.

Alquilfenoles Página 11 de 19

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Son sustancias como propilfenol, butilfenol, amilfenol, heptilfenol, octilfenol, nonilfenol, dodecilfenol. Los alquilfenoles se emplean para producir agentes tensioactivos o detergentes, dispersantes, emulsionantes o humectantes, también como plastificantes, y algunos derivados se han usado como aditivos en plásticos (como el PVC o el poliestireno modificado). Se incorporan en resinas fenólicas (y epoxi-fenólicas) muy empleadas en numerosos hogares, en cosas tales como conducciones de agua potable, recubrimientos, etc. También en adhesivos, gomas, recubrimientos, productos de aseo personal y cosméticos, pinturas, pesticidas, detergentes, productos de limpieza, productos textiles. Por ello, son muy comunes contaminantes del hogar. Son importantes contaminantes del medio natural, por ejemplo de las aguas. Preocupa tanto su toxicidad sobre los organismos acuáticos (se ha llegado a constatar hasta la creación de hermafroditismo en peces), como el que se afecte con ello a las aguas de abastecimiento. También han sido detectados como contaminantes alimentarios. Pero también preocupa el hecho de que sean frecuentes contaminantes del ambiente doméstico a consecuencia del uso de ellos en diversos materiales y productos que los contienen. Compuestos como los nonilfenoles, han sido identificados como importantes alteradores hormonales por numerosas investigaciones, que los asociaban a efectos tóxicos sobre la fertilidad y el desarrollo. Este hecho hizo que algunas autoridades, como la Unión Europea, adoptase algunas medidas para reducir su uso en algunos productos (como los cosméticos), pero pese a ello siguen representando un problema. Diferentes investigaciones asocian los alquilfenoles a problemas como la leucoderma o a la mala calidad seminal, como es el caso del octilfenol, también ligado por estudios científicos a cambios hormonales, alteraciones del tiempo de maduración sexual.

Almizcles sintéticos La química sintética ha hecho posible producir, a bajo costo, grandes cantidades de fragancias y utilizarlas en infinidad de productos. No solo en perfumes y aguas de colonia, sino también productos de limpieza, detergentes, productos de aseo personal, cosméticos, cremas, ambientadores, pesticidas. A consecuencia de ello, la exposición a las sustancias usadas en las fragancias es virtualmente universal en el mundo desarrollado. Son contaminantes de la Naturaleza (algunos de ellos han mostrado tener gran persistencia y se integran en la cadena alimentaria). Se han consignado diversos efectos en la fauna. También aparecen como contaminantes muy comunes en el cuerpo de los occidentales (en la sangre, la grasa, la leche humana, en adultos, en recién nacido) donde pueden haber llegado a través de múltiples vías, algunas de las más importantes de las cuales pueden ocurrir en el propio hogar. Se ha constatado, por ejemplo, cómo después del uso de Página 12 de 19

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detergentes y cosméticos aparecían sustancias como el galaxolide y el tonalide en la grasa y leche maternas. También el uso de perfumes durante el embarazo se vinculó a la aparición de mucho galaxolide en la leche. Se ha asociado a almizcles sintéticos con diferentes efectos biológicos, tales como alteraciones hormonales, problemas ginecológicos o incluso el de poder acentuar los daños de otros contaminantes. Hay científicos que consideran que la reducción general del uso de fragancias en tantos productos como hoy las llevan podría tener unas consecuencias muy positivas para la ecología y la salud de las personas. Impacto de los tóxicos domésticos sobre los niños Enfermedades respiratorias, asma, alergias, cánceres, problemas cognitivos, alteraciones hormonales, tienen gran incidencia entre la población infantil. Según muchos estudios científicos la creciente contaminación química a la que se exponen los infantes, con frecuencia en sus propias casas, puede ser causa de esos problemas. Entre esos problemas está, por ejemplo, el asma infantil que diferentes estudios asocian a la exposición a sustancias tan omnipresentes en los modernas casas como los ftalatos liberados desde fuentes como el PVC. Varias investigaciones alertan de que la exposición doméstica, por ejemplo, a compuestos orgánicos volátiles, por debajo de los límites que se tienen como "seguros" pueden aumentar notablemente el riesgo de asma infantil. Esos compuestos pueden proceder de cosas tales como disolventes, adhesivos para suelos, pinturas, productos de limpieza, muebles, ceras abrillantadoras o ambientadores. Otros estudios ligan la leucemia infantil con la exposición a cosas tales como los pesticidas domésticos. También se han descrito efectos de algunas sustancias sobre el desarrollo cerebral de los niños. Especialmente conocidos son los efectos de metales pesados como el plomo. El plomo, que antaño estaba tan presente en pinturas o tuberías de agua potable, ha sido ligado a muchos casos de retraso mental infantil leve, problemas renales y de desarrollo, déficit de atención, hiperactividad e irritabilidad en los niños. E incluso, por alterar zonas del cerebro asociadas al control de los impulsos, ha sido asociado a un incremento muy notable de la agresividad y las conductas violentas, e incluso posteriormente delictivas de los niños con ciertos niveles de plomo en sus cuerpos. Pero los contaminantes que pueden afectar al desarrollo neuronal infantil son más. Por ejemplo, los de algunos contaminantes que pueden llegar a los niños a través de la alimentación.

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Diversos estudios muestran que los residuos de pesticidas existentes en los alimentos, como los organofosforados, aún a muy bajas concentraciones (como las que se suelen encontrar en los productos a la venta y consideradas muchas veces por debajo de los límites "legales"), pueden causar efectos sobre el cerebro infantil que es muy sensible a estos tóxicos y los acumula más. No es de extrañar que haya estudios que muestran una asociación de estas sustancias con problemas conductuales, de retención (memoria), de desarrollo motor o de menos rapidez de reacción. Otras investigaciones han asociado muy contundentemente ese tipo de exposiciones, aún a niveles muy bajos de concentración, con un mayor riesgo (hasta el doble) de padecer trastorno de déficit de atención e hiperactividad. Problemas semejantes han sido asociados a otros contaminantes diferentes de los pesticidas y que también pueden llegar a los niños a través de la dieta, como es el caso de las dioxinas y furanos, contaminantes industriales que pueden estar presentes en carne, pescado y productos lácteos. Entre los contaminantes que pueden estar asociados, por ejemplo, al trastorno de déficit de atención e hiperactividad se cuentan: plomo, manganeso, disolventes, bifenilos policlorados, cadmio, piretroides y piretrinas, cipermetrina, deltametrina, organofosforados, diazinon, tricloroetileno.

Sondeo sobre accidentes domésticos infantiles en el hogar La encuesta realizada no abarcó una muestra significativa de la población ya que solo 93 personas accedieron a responderla. Igualmente los resultados sirven para conocer la experiencia de los padres ante estas situaciones y su conocimiento sobre productos tóxicos que se encuentran en el hogar. Se consultó acerca de si sus hijos sufrieron alguna vez un accidente vinculado a sustancias tóxicas y a cuáles, y si este accidente requirió hospitalización. Por otra parte, también se consultó si consideraban que en sus hogares hay productos tóxicos y si conocen cómo almacenarlos y descartarlos. En cuanto al conocimiento de la existencia de productos tóxicos en el hogar, se obtuvieron los siguientes resultados:

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Del total de encuestados, el 97,8 % considera que en su casa sí hay productos tóxicos. Esto indica que las personas tienen conciencia de la peligrosidad de los productos de uso cotidiano en el hogar. A continuación se consultó cuáles de los productos listados en la encuesta se encontraban presentes a fin de identificar cuáles de ellos son reconocidos como tóxicos por estas personas.

El grupo de productos mayormente reconocidos como tóxicos son los productos de limpieza, con un 96.7%. Le siguen los medicamentos y los insecticidas con porcentajes de 81.5% y 77.2% respectivamente. Por otra parte, llama la atención que solo un poco más de la mitad (62%) de las personas reconocieron a los productos de higiene personal como tóxicos, así como solo el 41.3% lo hizo con los cosméticos. Esta percepción puede deberse a que como se trata de productos destinados a la aplicación directa sobre el cuerpo, no se visualizaron los potenciales peligros asociados a otras vías de ingreso al organismo. Al consultar sobre medidas tomadas al momento de almacenar los productos tóxicos en el hogar, se obtuvieron los siguientes resultados:

Un amplio porcentaje (89.9%) declaró tomar precauciones en este aspecto. Página 15 de 19

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Con la intención de medir el impacto ambiental se incluyó en la encuesta la siguiente pregunta:

Vemos que, si bien las personas identifican la presencia de productos tóxicos de uso doméstico, existe un desconocimiento acerca de su correcto descarte. Más de la mitad (54.8%) declaran no conocer como descartarlos. Una razón para esto puede ser la falta de información brindada al consumidor del producto por parte de los fabricantes. Pasando a la incidencia de accidentes en niños, se obtuvieron los siguientes resultados:

De 93 respuestas totales, 13 de ellas informan la ocurrencia de accidentes, siendo el principal tipo, por ingestión.

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Analizando los datos, se observa una discrepancia entre la cantidad de accidentes reportados y la cantidad de respuestas para el tipo de accidente (14 respuestas). Igualmente esta diferencia no afecta el resultado ya que el tipo de accidente por ingesta es mucho mayor al resto. A pesar de que la muestra es pequeña, se visualizan experiencias con todos los tipos de accidentes preguntados (ingesta, inhalación, contacto con la piel, contacto con los ojos). Los productos con los que declaran haber sufrido accidentes son: ● Aguarrás (disolvente de pintura y barniz): 2 casos ● Medicamentos: 1 caso ● Jabones: 3 casos ● Crema hidratante: 1 caso ● Producto de limpieza: 2 caso ● Insecticida: 2 casos ● Hipoclorito de sodio: 2 casos Del total de niños que sufrieron accidentes con estos productos, 4 requirieron hospitalización. Las edades a las cuales ocurrieron estos accidentes van desde los 10 meses hasta los 5 años, registrándose la mayoría de ellos entre los 3 y 4 años. En cuanto a los motivos por los cuales ocurrieron los accidentes, la respuesta mayoritaria es que el producto se encontraba accesible al niño, seguido del motivo de descuido por parte de los padres. CONCLUSIONES Basándose en lo expuesto anteriormente, la gama de productos tóxicos que se encuentra en nuestras casas es considerablemente amplia en comparación con lo que habitualmente se cree. Los hogares son un eje central del consumo, y por lo tanto, eliminar la entrada de tóxicos en el hogar puede tener un importante peso en la reducción general del problema de la contaminación ambiental. A veces puede ser difícil eliminar todos los tóxicos que pueda haber en una casa, pero siempre tendrá un efecto muy positivo conseguir cualquier grado de reducción de la carga tóxica del hogar. Lograrlo ayudaría a reducir la agresión que recibe nuestro organismo e incrementar su capacidad de mantener la salud. La exposición crónica a estos productos pasa desapercibida a pesar de ser cotidiana ya que los efectos se manifiestan a largo plazo. Al igual que los adultos los niños son susceptibles de esta exposición crónica pero además son las principales víctimas de accidentes por exposición aguda. Del sondeo realizado se destaca una importante incidencia de accidentes de niños con productos tóxicos, algunos de los cuales revistieron gravedad que requirió hospitalización. Todos estos accidentes ocurrieron con productos que se encontraban al alcance del niño, lo cual refleja un mal manejo de los mismos. Los resultados muestran que la población identifica la existencia de productos tóxicos en el hogar, aunque no reconoce la totalidad de ellos.

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Una posible vía para reducir la probabilidad de accidentes infantiles relacionados a tóxicos en el hogar sería mejorar la información de seguridad y manejo que llega a la población consumidora de estos productos. Con esta medida también se reducirían los impactos sobre el ambiente producido a partir del inadecuado descarte.

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