Gran diosa

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Noviembre – Hécate Diosa de los cruces de caminos

¡Bienvenida a Noviembre, el mes de Hécate!

Éste es el dossier que vamos a utilizar para trabajar este mes. Verás que se divide en varios temas. Puedes leerlos a tu ritmo, y tienes los audios para acompañar. Recuerda que dispones de una tutoría vía Skype, concertando cita previa en [email protected] , y también estoy disponible en esa misma dirección mail para tus dudas.

¡Qué disfrutes del curso!

1. ¿Quién es Hécate?

Hécate es una diosa con origen arcaico y muy compleja y misteriosa puesto que sus atributos fueron cambiando con el tiempo, siendo asimilada con otras diosas. Hesíodo la presenta como descendiente directa de los Titanes e independiente del panteón Olímpico. Con el tiempo, la anterior Hécate se difumina y aparece una Hécate oscura e inquietante vinculada al mundo de las sombras. A diferencia de Artemis, que representaba la luz lunar y el esplendor de la noche, Hécate representaba su oscuridad y sus terrores. Hécate se considera actualmente la diosa de la hechicería y lo arcano. Los romanos la identificaron con Trivia, cuya efigie presidía las encrucijadas de los caminos, lugares vinculados con la magia. Se creía que Hécate y su jauría de perros aparecían en esos espacios apartados, que eran para los viajeros lugares demoníacos y espectrales. Allí se levantaban estatuas en forma de una mujer de triple cuerpo o bien tricéfala. Eran muy abundantes, antiguamente, en los campos, y a su pie se depositaban ofrendas. También se ponían figuras de Hécate en los hogares griegos y romanos mirando hacia la puerta para proteger la casa. Asimilada a Artemisa, se la representa como una joven con peplo y llevando sobre la frente el creciente lunar (o la diadema cilíndrica denominada polos) y una o dos antorchas en las manos. La serpiente, la espada y las llaves son también símbolos asignados a Hécate. El arte representa también a Hécate a menudo con tres cuerpos o tres cabezas y con serpientes entrelazadas alrededor de su cuello ya que es una divinidad triforme: lunar, infernal y marina. La mitología también nos habla a veces de Hécate como una de las diosas menos conocidas, hija menor de Zeus, que había sido diosa de la Luna. En el Hades gozaba de gran autoridad, porque era conocida como la reina invencible y presidía las ceremonias de expiación y purificación de las sombras a las que se les permitía reparar las malas acciones de su vida pasada. Ferea era un sobrenombre de Hécate. Tuvo su importancia en el mito de Perséfone, pues se dice que acompañó a Deméter por el Inframundo con su antorcha para buscarla. Hécate ha sido descrita como la consorte de Hermes en los cultos antiguos. Ambos eran los líderes de las sombras de la muerte, y se asociaban con el retorno oficial de la primavera a través del mito de Perséfone (que vimos en octubre).

Trabajando los sueños con Hécate: Lleva durante todo el mes (como mínimo, luego puedes seguir con el ejercicio) una libreta de sueños. En ella apuntarás todos los sueños que tengas. Cada vez que sueñes, escribe la fecha, la fase lunar y en qué fase menstrual estás, si tienes el período. Si no, solamente la fase lunar. Hécate es una Diosa que “trabaja” mucho en los sueños. Antiguamente, y también con otros dioses, las personas podían pedir un sueño e incluso quedarse a dormir en el templo junto a la estatua o imagen del Dios/Diosa a quien se lo pedían. Busca el simbolismo de lo que has soñado, no te quedes en lo típico que te dicen los libros tipo “El significado de los sueños”. Es decir, si sueñas con un limón, busca qué simbología tiene y apunta en el libro si ello tiene que ver con tu situación actual. O bien cuando pase el tiempo puedes repasar tu libreta de sueños y ver qué tiene que ver con el transcurrir de tu vida. Soñar forma parte de trabajar la intuición, que es lo que vamos a ver durante este mes de Hécate.

2. Las Diosas oscuras. Nuestra propia oscuridad.

La luz y la oscuridad son las dos partes de un todo. Sin oscuridad, no podrías percatarte de que existe la luz. ¿Cómo notas lo cálido si solo conoces lo frío? ¿Cómo percibes el silencio si tan solo conoces el sonido? Ambas partes son igual de importantes, sin una de ellas se perdería el equilibrio. Es cierto que no siempre la balanza está equilibrada... y justamente, ése es nuestro trabajo. Encontrar el equilibrio adecuado entre luz y oscuridad. Cuando trabajas a tu Diosa Oscura, ha llegado el momento de encarar a tu propia sombra. Esa parte de ti misma que niegas, que escondes, que no te gusta, que repruebas, que los demás reprueban (o tú misma crees que reprueban). La mujer que está en paz y armonía con su Diosa Oscura, se acepta tal cual es. Al enfrentar todos tus miedos, demonios y fantasmas, sabes internamente que saldrás fortalecida, que después de ganar esta batalla ya nada podrá derrotarte. Recuerda el trabajo con Perséfone, ella supo enfrentar luz y oscuridad, aceptando e integrando las dos, acabando por reinar en su propia vida. Cuando aprendes a decir “no”, cuando sueltas cosas, situaciones o personas que ya no necesitas o que son un lastre para ti, aunque ellos intenten “atraparte” porque creen que te necesitan (ahí el problema ya es de otro, no tuyo), y sin sentirte culpable, estás trabajando tu diosa oscura. Recuerda siempre que tu decisión no es malvada, sino que justa y llena de respeto hacia ti misma. Atrévete a transmutar tu tristeza. Permítele salir de tu interior, deja que fluya como un río. Es una emoción tan válida e importante como todas las demás, ¿por qué habrías de opacarla? Dejemos de “esconder” las emociones catalogadas como “negativas”, simplemente porque nos han educado para estar siempre bien de cara a los demás. No calles las verdades. Atrévete a decir las cosas por su nombre. Así, percibirás las ventajas de ser una mujer autosuficiente y llena de fortaleza, sin sentir miedo ni vergüenza por mostrar nuestra inteligencia y poder interno. “Cuando una mujer decide trabajar con sus Diosas Oscuras está efectuando un acto de Poder, Belleza y Coraje. Realiza un acto de Poder porque confía en sí misma y sabe que enfrentar sus miedos y convertir sus monstruos en aliados le devolverá una gran cantidad de energía. Crea un acto de Belleza porque una mujer poderosa es naturalmente bella y jamás se avergüenza de sí misma. Concreta un acto de coraje porque sabe que, una vez despiertas, las Diosas Oscuras

le exigirán que llegue hasta el fondo, que se zambulla hacia la raíz misma de sus problemas y limitaciones, para sanarlas y convertirlas en las semillas de su propio poder. Es importante cultivar nuestra relación con ellas, acostumbrarnos a su presencia, escucharlas,

comprender

su

dolor,

cicatrizar

sus

heridas.

Nuestros verdaderos enemigos en este viaje hacia la re-unión de todas nuestras partes, hacia nuestra sanación, no son estos arquetipos poderosos sino nuestros miedos a vivirlos en plenitud. Nuestro miedo a hacernos cargo de nuestro propio Poder. Trabajar la diosa oscura es prepararnos para la muerte de nuestras viejas formas, sin autocompasiones y prejuicios, de modo que este viaje te lleve nuevamente al renacimiento, a nuestra propia curación, hay que recordar que al fin y al cabo somos uno con la misma sombra a la que tememos, he de aquí los prejuicios relacionados con esta cara de la diosa….. Aceptar a nuestra sombra, la construida con lo peor de nosotras, la que en general proyectamos en los demás, esa que siempre enfrentamos, la que debemos amar pues le damos vida, como diosas creadoras que somos. Así que en lugar de enfrentarla, debemos reconocerla como nuestra creación. Estar con ella es salir de la victima.” Autor/a desconocido/a

3. Arquetipo de la Bruja/Anciana Sabia. Concepto.

La Anciana ha cultivado el don del silencio, la escucha, y el desapego. Sabe que en el vacío y en la muerte está la semilla de un renacimiento. Es sabia y visionaria. Con la comprensión cíclica de la vida y la muerte, entendemos que sin desintegración no hay renovación. Su fase del ciclo menstrual es la menstruación: fase de introspección, de descanso y de conexión con lo más profundo en nosotras, el lugar en donde las visiones creativas se gestan. En la etapa vital, corresponde a la madurez-ancianidad (a partir de 65 años). Ya se hace mayor, con toda su sabiduría y su experiencia de vida. Si esta etapa está positiva en ella, deja ir los momentos que ya fueron sin apegos. A veces estos apegos de "antes era todo mejor" causan en muchas mujeres depresiones. Si está positiva, sabe escuchar, incluso el silencio, y vive en paz, con ella y con los demás. Normalmente, ya no hay aquella inquietud del "qué quiero hacer en la vida". Muchas se dedican entonces al voluntariado, trabajando estos aspectos de la escucha, y compartir lo que ellas ya saben. Muchas mujeres que conozco en esta etapa, también se dedican a cosas muy creativas. En el aspecto negativo, pueden sentirse que como han envejecido, ya no sirven para nada, se secan, creen que ya no tienen nada más que hacer en la vida. Si está positivo este arquetipo, acepta que es el ciclo, que esto es así y no tiene problemas en fluir. Hay mujeres que no aceptan, y hacen mil y una cosas para no envejecer, según ellas, lo cual les crea ansiedad y desarmonía. En otras etapas vitales, una mujer puede sentir este arquetipo en los momentos en que se siente contemplativa, trabajando su espiritualidad y sabiduría. En negativo, puede que haya tenido una pérdida (de la pareja, de un hijo...) y se deje secar, no se sienta con fuerzas de salir adelante, por ejemplo. También una mujer utiliza este arquetipo en los momentos en que necesita y está utilizando su sabiduría interior para tomar decisiones, o simplemente para conocerse y estar mejor con ella misma. Para ello previamente deberá haber aprendido a apreciar el silencio, que también es una característica de este arquetipo.

4. El 6º Chackra. Viendo más allá. El sexto chakra, tiene su ubicación entre los ojos, por encima de la raíz de la nariz. La intuición, la comprensión de nuestros sueños y el reconocimiento de nuestros temas vitales, así como las visiones de la vida, son aspectos de este chakra. Asimismo, a este chakra se le asignan las vivencias que superan la percepción física y la unión con el mundo espiritual. Si nos abrimos a la experiencia de la meditación, los elementos del sexto chakra pueden adquirir mayor importancia a nuestra vida. También se le llama “el tercer ojo” por su relación con la cualidad de la intuición. Gobierna la glándula pituitaria, que también se asocia a la intuición, ya que es el nexo entre mente y cuerpo. El aspecto más significativo de la intuición es la capacidad de ver desde el alma, en lugar de ver desde el yo, de ahí lo de “ver más allá”. Esto nos permite tomar el camino del alma, en vez de el del yo, basado en estrechas preocupaciones, supervivencia básica y la posición. Tomamos entonces decisiones que te permiten estar en paz. Además, disminuye la distancia entre el “yo” y nuestra parte divina ¿no te has sentido a veces que tu parte espiritual (sea cual sea) y tu parte material no están en paz? A la mayoría se nos ha educado para que busquemos en el exterior las respuestas a nuestras preguntas. Cuando el sexto chackra se abre, vemos ante nosotras caminos que antes permanecían ocultos, se desplega la mente intuitiva, vemos más allá de lo obvio. Y con esta nueva visión, podemos hacer nuevas elecciones, y así, crear nuestra nueva propia realidad. El sexto Chakra nos da el “Derecho a ver”. Este derecho se ve agredido cuando quieren convencernos de que no es cierto lo que hemos visto, se nos oculta deliberadamente las cosas o se pone en duda nuestra visión de las cosas. Debemos hacer valer nuestro derecho a VER, porque nos ayudará a Recuperar nuestras facultades intuitivas. Tu intuición se puede comunicar contigo de diferentes formas. Puedes recibir un mensaje en forma de visión mientras meditas o sueñas. Puede ser en forma de sensación corporal, de pensamiento, o de voz. Confía en ella.

Ejercicio para la intuición: Las mejores formas de trabajar nuestra intuición son: 1) Meditar diariamente. El silencio interno es la mejor herramienta para aprender a escucharnos realmente. Si quieres mejorar tu intuición, o reconectarte con ella, debes comprometerte a meditar cada día. Puedes empezar con 5 minutos al levantarte y 5 antes de acostarte. Busca un lugar en casa donde no te vayan a interrumpir, puedes arreglarlo a tu gusto: poner cojines, incienso, música relajante…luego vas aumentando los tiempos hasta donde tú quieras. Explicaré la forma correcta de respiración y de centrarse en la semana 2. 2) Simplemente reconectándose con ella, haciéndole caso. Puede ser a través de sensaciones corporales. Un sistema que a mí me funciona es “escuchar a mi cuerpo”. Cuando tengo alguna pregunta, por ejemplo, “me han hecho dos propuestas este fin de semana: una es ir al cine con una amiga a ver la película X y cenar, y la otra es asistir a una fiesta”. Me imagino en las dos situaciones y observo cómo reacciona mi cuerpo. Parece simple, pero funciona. Otro sistema puede ser cuando “la vocecita” te diga algo, pero no la mente, tienes que aprender a ver cuándo es realmente la intuición quien te habla. Esto me lleva al punto nº1. Meditar es una muy buena herramienta para aprender a silenciar la voz mental y escuchar a la voz de la intuición. Puedes ir escribiendo durante éste mes tus experiencias con la intuición, porque así podrás ver cómo va funcionando. Y recuerda…es cuestión de práctica!

5. Los cruces de caminos y nuestra intuición para guiarnos. Cómo nos ayuda Hécate en este sentido. Vimos en octubre cómo Perséfone avanzaba en su camino, como se renovó y consiguió ser Reina. Y hemos visto en este mes cómo una vez volvemos a conectar con nuestra intuición, vemos nuevos caminos. Y a su vez en muchas ocasiones, tendremos que pasar por algún cruce de caminos y decidir. “Guardando los cruces de caminos, Hécate es quien te encuentra, la triple Diosa que lleva el poder de la Transformación y la Renovación. Es la Diosa de la Luna, del Inframundo y lo Mágico. Es la protectora de las manadas, los navegantes y las brujas. Es la Diosa de los cruces de caminos, el lugar de la elección – un lugar límite dónde podemos cambiar nuestro rumbo y, por tanto, el destino de nuestras vidas (pero no es una manifestación del Destino). Hécate nos enseña el concepto de eternidad: ha sido la Doncella, y recuerda esa alegría, ha sido la Madre, y disfrutó de ese placer. Ha sido guiada hacia la Muerte, y se siente confortada en el camino. Ha vivido muchas edades y muchas épocas y ha aprendido que la Rueda siempre está girando – la Rueda que es la Vida, Muerte y Renacimiento; nos recuerda que todo es cíclico. Es una maestra que anuncia los inevitables cambios. Estos giros en nuestra vida nos dan la oportunidad para ser más conscientes de nuestra Divinidad.” Hekate, Her Sacred Fires, Sorita d’Este En los nuevos cruces de caminos que se nos van a presentar, y después de haber trabajado (o estar trabajando) nuestra intuición, también debemos tener en cuenta otros factores. Cuando hayamos decidido cuál es nuestro objetivo vital (comenzamos a trabajar en ello en octubre – Perséfone, y será una constante durante todo el curso, pues es algo sobre lo que debemos trabajar durante toda la vida), también debemos decidir qué queremos hacer, ser y tener. En cualquiera de los aspectos de nuestra vida. Piensa que en tu interior, hay una minúscula semilla del “tú” que debías ser. Desgraciadamente, puede que esa semilla esté enterrada, debida a la educación, a tus miedos, a tus experiencias de vida… Puede que acabaras perdiendo el contacto con las necesidades de tu cuerpo, corazón y alma y quedaras bloqueada, y ahora haces un montón de cosas que no quieres hacer, pero que gusta a otra gente (recuerda que tu diosa oscura te pide que seas tú

misma). Ahora es el momento en que debes permitir que tu Hécate te guíe con su antorcha hacia donde quieres ir.

Ejercicio para las decisiones: No tener claro lo que quieres y dar mayor importancia a las necesidades y deseos de los demás es simplemente un hábito. Puedes romperlo practicando el hábito opuesto. Comenzaremos poco a poco. Durante este mes, reconoce tus preferencias en cada situación, por grandes o pequeñas que sean. Cuando salga cualquier situación en la que debas decidir, no digas “lo que prefieras” o elijas algo pensando en los demás. Imagínate que es una decisión a vida o muerte. No hay decisiones acertadas o no, sino que decides lo que tú quieras. Tanto da que sea elegir qué película ir a ver al cine como decir sí o no a una oferta de trabajo. Esto te dará práctica para ejercer tus propias decisiones y además podrás comprobar que cuando eliges algo prescindiendo de la preferencia de los demás, no es para tanto la reacción del resto. Te estarás mostrando respeto a ti misma y te sentirás empoderada.