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• miguel

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ESTO ES GESTALT Gestalt es una filosofía, una forma de ser y de vivir, en la terapia es la práctica de esta filosofía, basándose en incrementar el potencial humano a través del proceso de integración y otras técnicas. El conflicto que surge en las personas, debido a los DEBERÍAS que la sociedad introyecta – mecaniza conductas, ello limita la espontaneidad

de la persona

generando discrepancias entre lo que piensa (super yo - Deberías) y lo que siente (ello – Evadir SÍ, pero…). Construyendo un ideal imaginario de cómo DEBERÍA ser, y no de cómo es realmente. La T. Gestalt confronta las dos fuerzas, cuando la persona logra reconocer e identificarse con una de estas fuerzas, logra integrarse, poniendo énfasis en el AQUÍ Y AHORA, asimismo la importancia de Darse Cuenta, enfoque experiencial – se centra en la realidad. Trae el pasado al presente para ser trabajado y completar la experiencia que genera conflicto. De allí que las cosas son percibidas de acuerdo a las necesidades de cada uno (Figura - Fondo). Lo que busca la Terapia Gestalt, es maduración del individuo, esto se logra mediante la disminución del apoyo del ambiente, aumento de la tolerancia a la frustración, disminución en representar roles que no corresponden así como romper resistencias que la persona presenta cuando se ingresa en un área de su vida que no quiere que sea explorada. La importancia del Presente – Aquí y Ahora; logra que la persona se percate de las sensaciones que su cuerpo manifiesta, reconociendo e identificando conflictos. La T. Gestalt se basa en: el proceso de madurez – crecimiento personal, así como transformar el apoyo ambiental en autoapoyo, haciendo que la persona use sus propios

recursos

para

identificar

y

solucionar

conflictos,

logrando

su

independencia. En el proceso surge primero que la persona representa roles que no le corresponden, luego logra Darse cuenta de situaciones que no quiere que sean exploradas de su vida, pasando a una etapa implosiva donde las emociones son reprimidas, aquí el rol del terapeuta en relación a generar que la persona llegue a expresar sus emociones, sentimientos que han sido guardado por mucho

tiempo a lo que se llama etapa de explosión, beneficiando a la persona puesto que esa energía de la experiencia inconclusa es liberada, se hace responsable de lo que siente, piensa y actúa; logrando sentirse más libre y con sensaciones agradables. El terapeuta juega un papel importante porque a través de una serie de técnicas que surgen en el momento de la terapia, logra la integración de la persona, buscando que esta funcione congruentemente. Desmoronar la doble moralidad que perturba a la persona, que lo único que hace es que el individuo no se responsabilice de sus cosas, sino más bien responsabilice a los demás. Tenemos la moralidad introyectada, esta se da cuando la persona asume las cosas, sin evaluar ni cuestionar su contenido. Esto se percibe de generación en generación. Tarea del terapeuta des estructurar y reestructurar esos hábitos, cosas que han sido tragadas enteras sin un proceso adecuado de digestión (morder, masticar) tornándose en una digestión incompleta de los modelos de padres, profesores y sociedad, no asimilando su contenido muchas veces son perjudiciales y agresivas para la salud mental. Se dice que la agresión en sí no es buena ni mala, sino que es nuestro malestar e incomodidad que provoca nuestra agresión. Cambiando de perspectiva a través de diversas técnicas de autoexpresión, asimilación, Darse cuenta de lo surge en su propio cuerpo, explorando vacíos como medio de encontrar nuevas experiencias y cambio terapéutico, proceso de despedida como medio de liberarse de toda emoción reprimida, reconociendo sus emociones de aquella situación conflictiva. A través de juegos – proyectivos, se logra identificar y reconocer el conflicto, así como también prestar atención a las sensaciones que nuestro cuerpo manifiesta en el Aquí y Ahora. Trabajo de los sueños para identificarse con alguna situación que este causando conflicto. En esta Terapia hace que la persona intervenga en todo momento así se responsabilice de su cambio. Ayuda también a diferenciar emociones que son producidas en el pasado, presente y futuro. Técnica de la silla vacía para situaciones inconclusas, para cerrar la experiencia.

Énfasis en el lenguaje en primera persona, logra que la persona se haga responsable de lo que siente, permitiéndose pensar lo que en ese momento surja. Evitando en todo momento que se responsabilice a los demás. El trabajo con personas esquizofrénicas, se dice: “Para cruzar las arenas movedizas, lo mejor es lanzarse cara al suelo y arrastrarse”. El terapeuta debe comportarse como ellos – Terapeuta más loco que el paciente para logra significativos y verdaderos cambios.