Ensayo Sobre La Ceguera

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Ensayo sobre la ceguera. Empezaré este análisis aportando en primer lugar una crítica personal acerca del libro “Ensayo sobre la ceguera” del premio Nobel de literatura de 1998 José Saramago el cual me pareció muy impactante y crudo, fue un tipo de lectura que nunca me había tocado leer y es un excelente libro que hace una crítica sociológica muy fuerte, partiendo de un evento ficticio en el cual toda la humanidad va padeciendo de una ceguera blanca a la cual denominan “el mal blanco” por lo cual se procede a crear una cuarentena dentro de un manicomio en el cual se encuentra solo gente que padece del “mal blanco” y todos los problemas que de ahí desencadenan sociológicamente hablando ya que como el autor propone el ser humano tiende a jerarquizarse y a hacer notar la diferencia entre quien tiene poder y quien no lo tiene, y todos los sucesos e injusticias que de ahí desencadenan “la mentalidad que forzosamente habrá de determinar comportamientos sociales de este tipo, ni se improvisa, ni nace por generación espontanea” una sociedad, privada de un sentido tan elemental como es la vista, orillado por el miedo y el desastre “ya éramos ciegos en el momento en el que perdimos nuestra vista, el miedo nos cegó, el miedo nos mantendrá ciegos” pierde los valores más esenciales que conforman a un ser humano, la solidaridad, la rectitud, la honestidad, la empatía, el respeto por los seres humanos, la decencia, la capacidad de sentir vergüenza y el más importante y afectado la dignidad humana, convirtiéndose cada vez más en una sociedad de bestias impulsadas por sus instintos primordiales, el alimento y el sexo. “durante el tiempo en que estuvimos internados, bajamos todos los escalones de la indignidad, todos, hasta la abyección”. José Saramago (1922) - Es uno de los novelistas portugueses modernos más conocidos y apreciados en el mundo entero. En España la publicación en 1985 de El año de la muerte de Ricardo Reís es el inicio de un éxito que ha ido creciendo con cada novela. Otros títulos importantes son: Manual de pintura y caligrafía (1977), Alzado del suelo (1980), Memorial del convento (1982), La balsa de piedra (1986), Historia del cerco de Lisboa (1989), El evangelio según Jesucristo (1991). Vive actualmente -en Lanzarote, desde donde participa activamente en la vida cultural española. Un hombre parado ante un semáforo en rojo se queda ciego súbitamente. Es el primer casó de una «ceguera blanca» que se expande de manera fulminante. Internados en cuarentena o perdidos en la ciudad, los ciegos tendrán que enfrentarse con lo que existe de más primitivo en la naturaleza humana: la voluntad de sobrevivir a cualquier precio. Ensayo sobre la ceguera es la ficción de un autor que nos alerta sobre «la responsabilidad de tener ojos cuando otros los perdieron». José Saramago traza en este libro una imagen aterradora -y conmovedora- de los tiempos sombríos que

estamos viviendo, a la vera de un nuevo milenio. En un mundo así, ¿cabrá alguna esperanza? El lector conocerá una experiencia imaginativa única. En un punto donde se cruzan literatura y sabiduría, José Saramago nos obliga a parar, cerrar los ojos y ver. Recuperar la lucidez y rescatar el afecto son dos propuestas fundamentales de una novela que es, también, una reflexión sobre la ética del amor y la solidaridad. « Hay en nosotros una cosa que no tiene nombre, esa cosa es lo que somos», declara uno de los personajes. Dicho con otras palabras: tal vez el deseó más profundo del ser humano sea poder darse a sí mismo, un día, el nombre que le falta.

Ensayo sobre la ceguera. José Saramago.

El libro trata acerca de una enfermedad que afecta a la población, es una enfermedad de los ojos, es la “ceguera blanca”, no negra como habría de esperarse, este virus de la ceguera se propaga por todos lados dejando a las masas afectadas por la enfermedad, la epidemia fallidamente es contraatacada por los gobernantes al intentar aislarla en un simple manicomio, pero nada es efectivo pues las calles se llenan de invidentes y éstos para sobrevivir utilizan sus instintos primitivos para poder imponerse unos contra otros lo que provoca un caos generalizado, se vive bajo unas terribles condiciones; el pánico de estos ciegos se debe a su propia debilidad, que los vuelve desesperadamente irreflexivos, que los convierte en animales que luchan encarnizadamente por sobrevivir sin importarles la vida de sus semejantes. El hombre, cuando la ceguera los ha atacado a todos, está viviendo un nuevo y bizarro Estado de Naturaleza, en donde no hay otra cosa que la imposición del más fuerte – o hábil - con la trágica característica de sacar a la luz los peores instintos humanos. La mujer, la esposa del oftalmólogo es la única que ve todo el caos generado por la ceguera, considero que ella representa a la conciencia de una inteligencia que se sabe responsable de analizar lo que los otros por su ceguera son incapaces de percibir; esta

mujer observa cómo el mundo se va desvirtuando, va perdiendo su esencia pues los enfermos cambian sus actitudes radicalmente, he aquí la brillantez de la historia pues nos sacude y nos hace reflexionar sobre la esencia del ser humano, nos hace ver que en situaciones extremas el hombre responde egoístamente pues busca sólo su beneficio y también me hace pensar en la responsabilidad que tiene esta persona que si ve todas las barbaridades que se dan en el manicomio y en las calles. Creo que el bienestar y las comodidades que actualmente disfrutamos en estas sociedades industrializadas nos mantienen ciegos socialmente, evitamos participar directamente en las decisiones políticas, por ejemplo, y como ya tenemos a un diputado, a un senador, a un delegado que nos representen para decidir en las votaciones para crear leyes, para decidir de tantas cosas tan importantes que nos afectan día a día, es por esto que nosotros estamos cegados por tantos distractores que paulatinamente nos volvemos más egoístas y ensimismados, creo que es un proceso deshumanizante. Este libro es muy atrayente porque al principio parece una simple historia, pero conforme avanza nos va mostrando la crudeza de las actitudes humanas, esto es lo más significativo. Es muy interesante y fuera de lo común en varios aspectos: por la forma en que escribe Saramago, por los personajes que carecen de nombre, además me resultó muy sugestivo el retrato de una sociedad actual desarrollada y muy acomodada que no ofrece resistencia a los mandatos de quienes los dirigen – que en este caso actúan por puro miedo al contagio -; el texto nos ilustra acerca de las formas en que los políticos utilizan a los medios de comunicación para publicitar unas iniciativas que a muy pocos benefician, en la historia del libro los dirigentes del país toman la decisión de meter a los ciegos en un manicomio encargado al cuidado de soldados, en el interior del manicomio comienza a vivirse una situación terrible e indigna: la falta de comida y de aseo, de abusos de todo

tipo. Lo principal, me parece, es el diálogo entre cada personaje y no tanto el discurrir de la historia, que sí resulta impactante en algunas partes pero que al final tiene una situación casi enigmática, porque la gente en las calles comienza a ver nuevamente. La mujer del oftalmólogo – quien es un elemento extraño, quizás mutado, a quien no le afecta el virus de la ceguera - se hace pasar por ciega para poder estar junto a su esposo, finalmente logran salir del manicomio porque los guardias también quedan ciegos, al llegar a la calle, la mujer ve claramente la situación gravísima: hay personas y animales muertos por donde quiera, la gente deambula desesperada buscando comida. El sentido del texto es amigable y muy sencillo, a través de la ceguera se intenta explicar cuáles son las jerarquías que caracterizan a la sociedad y el efecto de la ceguera para homogeneizar a las personas, lo que sirve para idealizar una analogía de la masa social como si fuese un organismo que cambia y se adapta según las circunstancias, volviéndose civilizada o salvaje. El manicomio representa una especie de cárcel, es una alegoría de un mundo oprimido por los que gobiernan y tienen el poder, que tienen la capacidad de hacer grandes cosas o por el contrario, como en este caso, de someter, de constreñir a los ciegos en un lugar inmundo. En este texto, en su estilo, se conjugan con un buen balance tanto la forma como el contenido: porque es un texto de fácil lectura y es difícil perderle el hilo a la narración. En cuanto a los temas que toca, el libro es una alusión a lo subjetivo de nuestras frágiles y arbitrarias normas morales que son reconfiguradas por completo en este interesante ejercicio de abstracción por parte del autor, porque nos muestra lo brutales que podríamos comportarnos en situaciones como las que menciona a lo largo de la historia, también podemos apreciar lo valioso de un sentido como nuestra vista y lo arbitrario que pueden llegar a ser nuestras costumbres. Es delirante pensar en una situación en la que todos son ciegos y no hay reglas ni leyes, imaginarse un lugar en donde cualquier crimen pueda quedar impune, aquí se ve

la manera tan burda en la que aflora el ser de cada persona, con todas sus características: crueldad, corrupción, abuso, necedad, egoísmo, ingratitud, etc.; vemos la manera en la que todo nuestro mundo se podría derrumbar en un abrir y cerrar de ojos – literalmente - y cómo al mismo tiempo nuestros instintos están prestos a surgir y convertirnos en seres primitivos. Esta historia sorprendente procura describir con lujo de detalles el comportamiento humano en las circunstancias más extremas; después de reflexionar acerca de todo esto, dudo que seamos tan civilizados como pregonamos, nos convertimos en fieras que no tienen en mente más que la supervivencia, en ese momento no valen títulos universitarios, abolengos, sofisticaciones, no, lo que prevalece es la desnudez de la necesidad vital de aguantar un día más en la competencia; claro está que siempre aparecen los vivales que intentan aprovecharse de la situación para dominar a los otros y de este modo sacar provecho de la desgracia; esta es una historia que narra pasajes aterradores. Pienso que la ceguera representa la pérdida de lucidez, de perder la conciencia de si mismo, que la lección es procurar mantener el sentido de la vista, procurar estar siempre con una visión crítica que nos inmunice contra esta “enfermedad”. Con televisión por cable, televisión satelital, computadoras, internet, teléfonos celulares, videoconferencias, el trabajo, las escuelas y con tantos distractores la gente vive problemas superficiales, vivimos muchas experiencias superfluas, la sociedad consumista nos absorbe, al final del día podemos calcular qué cantidad de tiempo le dedicamos a cosas trascendentes, relevantes para nuestras cosas preciadas y veremos que es un porcentaje muy bajo; también vemos cómo se suceden convulsivamente las tragedias y las injusticias por doquier y parece que ni nos inmutamos, parece que vemos una película, una ficción que nunca envolverá nuestro espacio de vida cotidiano, ésta es la ceguera: la pérdida de valores, la deshumanización. El mundo, la gente se está

enfermando de la ceguera saramagosista. El realismo descriptivo de la narración es una bofetada que nos llama a despertar del sueño cegador. Este es un libro lleno de significados, hay que reflexionar para descifrar algunas de las ideas que el autor ha dejado ancladas en muchos de sus párrafos. La ceguera crea en los hombres una sensación de inseguridad y desesperanza, cuestión clave para explicar sus actitudes tan radicalmente primitivas, el sobrevivir implica competir, y hay veces que la competencia nos conduce a utilizar métodos no muy correctos o limpios, puesto que las ganas de vencer al contrincante a veces nos hacen utilizar cualquier medio. La miseria humana se detecta en todos lados, está más cerca de nosotros de lo que pensamos. Al final hay una esperanza, porque la gente comienza a ver nuevamente. El detalle que me pareció repugnante fue el pasaje en el que las mujeres son violadas, ahí vemos cómo los valores se han perdido pues es un hecho que se da en la realidad, de distintas formas, tal vez, pero podríamos decir que son equiparables; aquí habría que considerar hasta qué grado se trata de una obra de ciencia ficción, de una narrativa, de un drama o un cuento. La ceguera a la que se refiere el autor tiene remedio, es el cambio de actitud ante la vida y todos los retos que nos invita a to