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Universidad Nacional del Nordeste Departamento de Letras Literatura Infantil y Juvenil Segundo examen parcial Profesora

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Universidad Nacional del Nordeste Departamento de Letras Literatura Infantil y Juvenil

Segundo examen parcial Profesora Patricia Pujalte Alumnos Juan Manuel González Breard Delia López María Elizabeth Paré Fecha de presentación: Viernes, 30 de octubre de 2015

1) Los cuentos elegidos por el grupo son: La sirenita de Hans Christian Andersen (1837), Alicia en el País de las Maravillas de Lewis Carroll (1865) y Sapo en Buenos Aires de Gustavo Roldán (1989). La sirenita - Hans Christian Andersen (1805-1875). En: ANDERSEN, H. C. La sirenita y otros cuentos. Editorial Letras Universales, Argentina, 2005. Este cuento de origen danés fue publicado por primera vez el 7 de abril de 1837. Su autor, Hans Christian Andersen, nace en Dinamarca bajo el régimen absolutista, en el seno de una familia humilde. Este país flaqueaba tras los ataques ingleses y se vió afectado por las revoluciones napoleónicas que se despertaron luego de la Revolución Francesa. Esto generó revoluciones desde los estratos de la sociedad agrarios y burgueses, hasta lograr una democracia parlamentaria en 1848.

En este espacio donde eran evidentes las desigualdades sociales, se abre paso la obra de Andersen, recopilador de tradiciones y creador de una auténtica literatura para niños. Así, prestará principal atención en sus protagonistas: los seres marginados por la sociedad o los simplemente diferentes. Es el caso de La sirenita, donde el tema central es el deseo de pertenencia a un mundo que no es el suyo y donde tampoco encaja, además de la decepción del amor no correspondido que atraviesa la princesa marina. El cuento gira en torno a la personalidad y los deseos de la sirenita, la menor de cinco hermanas, hijas del rey del mar. Ella ansiaba conocer la superficie, el día que lo logró presenció el naufragio del barco donde navegaba un bello príncipe de quien se enamora y lo rescata. A partir de ese día, nada fue igual para ella, ya que vivía pensando en él y en cómo lograr estar a su lado. Hasta que descubre la manera de conseguir estar cerca suyo y a su vez, adquirir un alma inmortal, de la cual los seres marinos carecen, Debía lograr enamorarlo de tal forma que la quisiera más que a sus padres, pero ella debía sacrificar sus trescientos años de vida y, además, cambiar su cola de pez por humanas piernas. Para ello, decide pedir ayuda a la bruja del mar, quien se lo concede a cambio de su voz (la más bella del mar). Así logra convertirse en humana y estar cerca del príncipe. Sin embargo, resulta ser un amor no correspondido y a la princesa le es concedido otro destino. Esta obra pertenece al género narrativo y principalmente al cuento de hadas, ya que contiene los elementos correspondientes como define Nobile: “Se designa con la expresión “cuento de hadas” un relato fantástico de origen popular, de trasmisión oral, con abundancia de elementos maravillosos, y protagonizado por seres sobrenaturales (hadas, brujas, ogros, gigantes, duendes…) que se mueven, junto con otros personajes de la narración, en una esfera de atemporalidad, en un mundo abstracto, de sueño, y que tienen como dotes fundamentales la gracia primitiva y la ingenua frescura. En esta parte de la narrativa infantil se incluyen tanto los cuentos de hadas de origen étnico-popular, como los Märchen alemanes, cuentos de hadas por antonomasia que tienen su más típica expresión poética en los Kinder-und Hasmärchen de los hermanos Grimm, como los cuentos de hadas de arte o de autor literario, como los de Hoffmann, Hauff, Perrault o Andersen, cuyas creaciones son originales, marcadas por el sello del arte, o personalísimas versiones de la temática popular.”1

Este cuento en su origen estaba destinado tanto para adultos como para niños. Lo conveniente sería pensar en un receptor de a partir de los nueve años, donde son más afines a los relatos maravillosos y amorosos. También podría pensarse para un público adolescente, porque la sirenita atraviesa las mismas pasiones que puede pasar un chico o una chica, cuando siente a esa edad haber encontrado “el verdadero amor”, y se propone hacer lo imposible para estar con esa persona. Es decir, podríamos lograr una identificación del personaje con el público lector. 1 NOBILE,Angelo. Literatura infantil y juvenil. La infancia y sus libros en la civilización tecnológica. Ediciones Morata, S.A. Madrid, 1992. Pág.50-60.

Reseña: La Sirenita cuenta la historia de una princesa marina, muy distinta a sus hermanas, que ansía fervientemente tomar la forma de su amor, un hermoso príncipe humano. La satisfacción de su amor y el deseo de un alma inmortal la llevarán a tomar decisiones que cambiarán su destino para siempre. Es un cuento ricamente literario, escrito para grandes y chicos, que fue retomado y reinterpretado por toda la cultura occidental y así logró perpetuarse a través de los siglos, para ser leído una y otra vez. Alicia en el país de las Maravillas- Lewis Carroll (1832-1898). Ilustraciones: Gustavo Roldán. Traducción: Graciela Montes. Editorial: Colihue. Buenos Aires 2007.Idioma original: inglés. Esta obra Corresponde al período victoriano, el cual se desarrolla en una Inglaterra del siglo XIX (1837-1901). La obra fue publicada en 1865 y su autor -Charles Dodgson (1832-1898)- ocupó un seudónimo para hacerlo. En Alicia se puede identificar una crítica a la educación inglesa de esa época, además se satirizan muchos aspectos de esa sociedad en la cual el autor estaba inmerso. En la Inglaterra victoriana rige la monarquía, se producen avances de todo tipo (tecnológicos, científicos, sociales, económicos, etc.) y se desarrolla un espíritu moralizante, didáctico y lúdico. En la obra se pone en tela de juicio esa moral (la tan aclamada “moral victoriana”) y otras cuestiones que rigen el mundo de los adultos. El tema principal son las aventuras de una niña en un mundo maravilloso soñado por ella. La historia comienza cuando, tras el paseo rutinario de la tarde, una pequeña niña llamada Alicia empieza a perseguir a un conejo blanco, el cual la llevará a la entrada de un mundo desconocido -onírico- donde experimentará situaciones increíbles y conocerá a seres muy particulares. Está destinada a niños a partir de los 10 u 11 años, con un alto grado de imaginación, capaz de recrear y comprender ese mundo ficcional que se construye en Alicia. Al mismo tiempo, debería tener una edad considerable para interesarse por la cantidad de páginas y el contexto histórico, el cual es muy importante para su posterior interpretación pues el horizonte de producción de la obra es esa Inglaterra victoriana. Se trata de un cuento maravilloso ya que además de presentar los tres momentos claves en su estructura (comienzo, nudo y desenlace) contiene elementos de las dos clases de motivos propios de este género según Ana Pelegrín2 (basada en la clasificación de Aerne Thompson): los personajes son animales extraordinarios y criaturas fantásticas y otros más comunes pero con características especiales como la mujer mala, representada en la reina. A su vez, presenta elementos con características poco comunes o irreales: objetos mágicos, aquello que Alicia ingiere para cambiar de tamaño, costumbres extrañas e insólitas como volver a tomar el té luego de terminarlo ya que siempre es el mismo horario, jugar al croquet utilizando animales como elementos e incluso 2 AAVV. Promoción de la lectura en la biblioteca y en el aula. Aique, Bs. As., 1994, pp. 202-209.

comunicarse con ellos. El tiempo de la narración se corresponde con el tiempo que dura el sueño de Alicia. El espacio construido a través de la narración no es estable. Reseña: Alicia en el país de las maravillas, escrito por Lewis Carroll, es una obra revolucionaria para su época pues surge de una combinación de lógica y fantasía, en principio destinada a entretener a los niños pero con temáticas que pueden interesar a personas de todas las edades. El nonsense -el sin sentido- de una Inglaterra victoriana nos atrapa en su ruptura con el lenguaje habitual para introducirnos en el placer estético de una obra única. Sapo en Buenos Aires - Gustavo Roldán (1935-2012). Fecha de publicación: 1989. Editorial Colihue, Gustavo Roldán nació el 16 de agosto de 1935 en Sáenz Peña, provincia de Chaco. Escribe desde 1984, en un momento histórico muy particular de nuestro país, posterior a la última dictadura militar (1976-1982). Durante este tiempo en Argentina, muchos libros, incluida la literatura destinada a niños, fueron censurados por el poder por ser considerados “peligrosos”: por suscitar ilimitadamente la fantasía (como La torre de los cubos de Laura Devetach, 1978), por no contribuir al logro de los objetivos fijados por el Proceso o por contener comentarios e ideologías contrarios al “ser nacional”. Roldán vivió y se formó en la época del proceso, de la censura a la fantasía. Será por eso que su literatura invita a reflexionar y a cuestionar la verdad que nos imponen. Sapo en Buenos Aires, como otros cuentos del mismo autor y de otros escritores contemporáneos a él, no son libros inocentes. Atienden a la realidad sin descuidar la fantasía, despiertan la curiosidad invitando a los niños a resignificar el mundo que los rodea, a imaginar otros mundos posibles, en suma, a soñar con la libertad. De acuerdo con Teresa Colomer3, las historias de animales derivan directamente de las fábulas y siempre han tenido presencia en la literatura infantil. Sin embargo, desde el siglo XIX se diversificaron los propósitos de su utilización, como sátira de las costumbres humanas o bien como descripción de los modelos de convivencia entre personas y animales. Las tramas incluyen animales humanizados que sustituyen a la sociedad humana y permite, de este modo, criticarla. El argumento es simple. Un sapo de monte visita Buenos Aires y a su regreso relata a sus compañeros sus vivencias en la gran ciudad. Ante el asombro de los demás animales montesinos, el sapo cuenta las extrañas costumbres de las personas de la capital, las modas, las construcciones, su apuro, sus “juegos” y sus relatos. Roldán crea literatura para todas las edades. Si bien reconocemos que es conveniente no aplicar pautas rígidas respecto de los intereses adecuados para cada edad, proponemos este libro para 3 COLOMER, T. Introducción a la literatura infantil y juvenil. Síntesis, Madrid, 1999. Capítulo 2: La evolución histórica de la Literatura infantil y juvenil. p. 89.

lectores a partir de los 7 u 8 años. Los niños y niñas de esta edad prefieren temas relacionados a la naturaleza, las costumbres y culturas, las historias de viajes y las relaciones interpersonales, además de su ávido interés por los animales. Este texto pertenece al género narrativo, más precisamente al cuento. Aunque está dividido en capítulos, Juan Cervera Borrás4 asevera que el cuento se caracteriza, entre otras cosas, por su carácter unitario, es decir, que contiene una sola historia, un solo tema y todos los elementos están al servicio de un solo núcleo, sin atender a su duración temporal. Reseña: Esta es la historia de un sapo que visitó la capital, anduvo con patas de sapo, vió con ojos de sapo, olió con nariz de sapo y sintió con piel y corazón de sapo. De vuelta a sus pagos, contó con boca de sapo a sus compañeros del monte acerca de sus vivencias en la gran ciudad y sus cómicas percepciones sobre sus habitantes y costumbres extrañas. 2) Una visión optimista del cuento de hadas- La sirenita de Andersen Un 2 de abril de 1805, nace en Dinamarca, Hans Christian Andersen, considerado el padre de la literatura infantil pues es el primer escritor que produce su obra teniendo presente como receptor a los niños. En principio reproduce algunos formatos de la oralidad -propios de los cuentos de hadaspero los hace literarios, ya que en ellos se reflejan profundos conflictos existenciales (como es el caso de La Sirenita). Revoluciona, entonces, este tipo de textos dirigidos a la infancia trabajando literariamente diferentes tópicos que aparecían en los cuentos tradicionales. La Sirenita (Den lille Havfrue) es un cuento escrito por este autor, publicado en 1836, presenta un narrador heterodiegético de focalización cero, omnisciente, y narra las aventuras de una “mermaid” de la tradición clásica de la literatura oral europea septentrional, que luego fue traducida para su difusión en la Europa meridional con el término “sirena”5, el cual ha persistido hasta la actualidad. El tópico representado en la obra es el del “amor imposible o no correspondido”, así como se pueden apreciar otros como “el morir de amor o por amor”; y en cuanto a tópicos clásicos en el desarrollo de la trama se pueden identificar: Improve amor, quid mortalia pectora cogis! (“amor cruel, a qué no obligas a los corazones mortales!”) de La Eneida de Virgilio, proferida en referencia a Dido, y Nil ego, quod nullo tempore laedat, amo! (“amo lo que es capaz de ocasionarme un tormento”) del libro Amores de Ovidio. Toda obra literaria satisface diversas necesidades en los lectores: leemos por curiosidad, para informarnos, conocer y comprender el mundo que nos rodea, resolver dudas y conflictos, encontrar el sentido de la vida o simplemente por placer. Al respecto, Esther Jacob 6 propone ciertos niveles 4 CERVERA BORRÁS, J. La creación literaria para niños. Ediciones Mensajero, España, 1997. p.199. 5 Los seres denominados “sirenas” para la mitología griega eran de cuerpo mitad ave, mitad mujer. Sin embargo, la tradición posterior fue asociando a esta denominación a los seres mitológicos de cuerpo mitad mujer, mitad pez. 6 JACOB, Esther. ¿Cómo formar lectores? Troquel Educación, Bs. As. 1994, pp. 18-54.

que el docente debe tener en cuenta a la hora de seleccionar textos literarios para niños o adolescentes. Éstos son el estético, el psicológico y el ideológico, principalmente. En cuanto al aspecto gráfico, las ediciones consultadas no presentan ilustraciones en el interior del libro. Sí la tapa de la editorial Letras Universales7. La misma es llamativa, de un cálido color naranja, el título en el extremo superior de la misma es claramente visible en letras blancas de imprenta mayúscula. En el centro, hay un dibujo de colores vivos, con un mar turquesa y azul con suaves olas y un cielo rosa de nubes despejadas, donde se destaca una bella sirena con una escamada cola de pez morada, torso desnudo, piel clara y cabellera larga, ondulada y rubia. En el texto se hace uso de un lenguaje claro, sencillo y simple, la letra es legible. Como ya hemos mencionado, se trata de un texto trabajado literariamente. Jacob 8 sostiene que el valor de la literatura infantil reside precisamente en el encuentro placentero del lector con la palabra poética, que es arte, que gusta y provoca emociones. Como la mayoría de los cuentos de Andersen, aquí no se persigue un afán didáctico moralizador. El vocabulario es rico, dinámico y original. Si bien la historia no presenta complicaciones en la trama, exige competencias comunicativas básicas como comprender las relaciones de causa-consecuencia (por ejemplo, cuando la sirenita debe sacrificar su voz a cambio de piernas humanas o sus trescientos años de vida marítima por una como humana). Por lo demás, se trata de un texto sin desperdicios para receptores de cualquier edad. A partir de los trece años, afirma Jacob 9, los niños que entran en la pubertad y la adolescencia prefieren este tipo de historias de romance. Sin embargo, dada la situación del niño contemporáneo que tiene acceso a distintas versiones de este cuento, será posible presentarlo a niños a partir de los 9 o 10 años, pues estos empiezan a interesarse por el mundo exterior y la sociedad en la cual están inmersos. Los cuentos de hadas trascienden los tiempos porque encierran significados profundos en cuanto a la moral y a la existencia del hombre, y les brinda tanto a grandes y chicos, aunque sea temporariamente, una solución. A través de seres maravillosos y un estado atemporal, como ocurre con la joven sirenita y su profundo deseo de encajar en un mundo que no es el suyo, aun así emprende arduamente el recorrido para lograrlo, aunque ello implique perder algo. Siempre, en el camino de la vida, nos vemos obligados a tomar decisiones (aun si esto provoca desprendernos de lo que más queremos) para lograr ciertos objetivos que creemos son los indicados en ese momento. Sirenita acepta perder su voz, su vida longeva, su rango en el reino de su padre, su hogar, su familia, hasta su cola de pez, a cambio de alcanzar al menos la incierta posibilidad de encontrarse con su príncipe.

7 ANDERSEN, H. C. La sirenita y otros cuentos. Letras Universales, Argentina, 2005. 8 JACOB. Op. cit., p. 18. 9 Op. cit., p. 33.

El conflicto existencial al cual se enfrenta la sirenita, el miedo a no ser correspondida amorosamente y el temor a ser despreciada, es algo totalmente presente en el niño y también en el adulto, por lo que impacta psicológicamente en el mente humana. “(...) el mensaje que los cuentos de hadas transmiten a los niños, de diversas maneras: que la lucha contra las serias dificultades de la vida es inevitable, es parte intrínseca de la existencia humana; pero si uno no huye, sino que se enfrenta a las privaciones inesperadas y a menudo injustas, llega a dominar todos los obstáculos alzándose, al fin, victorioso.” 10

Como sabemos, la sirenita no logra conseguir el amor del príncipe y se enfrenta, inevitablemente, a la muerte. Sin embargo, alcanza un bien mayor: la posibilidad de ganar un alma inmortal como profundamente anhelaba. Si consideramos que toda literatura es reflejo de una cosmovisión y un sistema de creencias, el texto se ve necesariamente condicionado por el contexto de producción en el que su escritor está inmerso. Una obra literaria de calidad colabora a desarrollar una actitud reflexiva, crítica y transformadora, ya que presenta otras posibilidades de interpretación de la realidad con las que el receptor debe dialogar, siempre que sea capaz y esté dispuesto a hacerlo. Toda obra transmite ciertos mensajes valorados por el autor, quien a su vez está atravesado por los valores de su época y comunidad. En cuanto a la obra analizada, considerada un clásico de la literatura infantil universal, existe un debate serio sobre la persistencia de los modelos que presenta. La sirenita es reflejo de una sociedad aristocrática, donde son valorados la apariencia física, el lujo, las reuniones sociales, etc. Además, se evidencia claramente la condición de la mujer. Al cumplir quince años, la joven es adornada con joyas incrustadas en su cuerpo para lucirlas en la gala real: “-Bien, ya eres mayor -le dijo la abuela, la anciana reina viuda-. Ven, que te ataviaré, como a tus hermanas. -Y le puso en el cabello una corona de lirios blancos; pero cada pétalo era la mitad de una perla, y la anciana mandó adherir ocho grandes ostras a la cola de la princesa como distintivo de su alto rango. -¡Duele! -exclamaba la doncella. -Hay que sufrir para ser hermosa -contestó la anciana.” (Andersen, 2005: 14)

Luego, la sirenita decide cambiar su aspecto físico con el fin de conseguir el amor del hombre que ama, incluso se somete a procesos que le provoca un intenso sufrimiento: “(...) La sirena ingirió el ardiente y acre filtro y sintió como si una espada de doble filo le atravesara todo el cuerpo; cayó desmayada y quedó tendida en el suelo como muerta. Al salir el sol volvió en sí; el dolor era intensísimo, pero ante sí tenía al hermoso y joven príncipe (...)” (Andersen, 2005: 29)

No obstante, podemos destacar otros aspectos positivos como el valor la vida, el amor fraternal, el amor a la naturaleza, la valentía y la determinación de la protagonista al perseguir sus ideales, la bondad de aceptar el bienestar de la persona amada aun sin estar a su lado e, incluso, procurar otros caminos y llegar a un fin que trascienda la vida terrenal sujeta al tiempo y el espacio. Es así que, 10 BETTELHEIM, Bruno. Psicoanálisis de los cuentos de hadas. Editorial Crítica, Barcelona, 1994, p. 12.

hacia el final, a pesar de convertirse en espuma, la sirenita pasa a formar parte de las hijas del aire, precisamente por su buen obrar; y aunque perdió el amor, sigue en la búsqueda de su alma inmortal. Así, podemos apreciar que, aunque exista una visión retrógrada en cuanto a los cuentos de Hadas, por su estilo de vida aristocrático y monárquico, se considera un clásico que trasciende épocas y edades, justamente porque hay algo más que el aspecto superfluo que se le critica. Tiene que ver con las angustias existenciales y los valores que nombramos anteriormente. Su función debe ser la de ofrecer al niño un escape de la realidad y transmitirle la certeza de que al final todo acabará bien. Los clásicos infantiles, y los clásicos en general, siguen vigentes porque aún tienen algo que decir a cada generación.

Bibliografía: ANDERSEN, H. C. (2005) La sirenita y otros cuentos. Letras Universales, Argentina. AAVV (1994). Promoción de la lectura en la biblioteca y en el aula. Editorial Aique, Bs. As. BETTELHEIM, B, (1994). Psicoanálisis de los cuentos de hadas. Editorial Crítica, Barcelona. CERVERA BORRÁS, J. (1997) La creación literaria para niños. Ediciones Mensajero, España. COLOMER, T. (1999) Introducción a la literatura infantil y juvenil. Síntesis, Madrid. JACOB, E. (1994). ¿Cómo formar lectores? Editorial Troquel, Bs. As. NOBILE, A. (1992). Literatura infantil y juvenil. La infancia y sus libros en la civilización tecnológica. Traducción: Inés Marichalar. Edición Morata, Madrid. http://www.bibliotecaspublicas.es/cuenca/publicaciones/publicacion245.pdf