El Despert Ar Del Dragon

" - Maldito pordiosero ¡quitaos de en medio si no queréis acabar aplastado por mi caballo! - la reluciente armadura con

Views 101 Downloads 2 File size 60KB

Report DMCA / Copyright

DOWNLOAD FILE

Recommend stories

Citation preview

" - Maldito pordiosero ¡quitaos de en medio si no queréis acabar aplastado por mi caballo! - la reluciente armadura con tiznes purpuras presentaba su casa antes que su propia palabra. Sin duda la casa Unicornio contaba con bravos guerreros y aun más valerosas bestias. - Abre paso, o lo lamentarás. El harapiento mendigo colocó su mano sobre el hocico del equino y este, más tranquilo de lo que su amo esperara, agachó la cabeza a modo de saludo - Él no tiene culpa de que vos seáis un impertinente - la voz del vestido a jirones se iba haciendo cada vez más fuerte y clara - Si vos queréis arreglar algún problema, dejad al animal a un lado... y ¡desmontad! - grito imbuido de una fuerza hasta el momento no apreciada, ya que su lento andar lo demostraba más achacoso y enfermo que firme. - Ja ja, bastardo, hasta las heces de mi caballo huelen mejor que tú, mi katana dará fin a esta estúpida intromisión. Mi destino necesita premura y tu desbocada provocación tendrá su justo pago. - Contestó el jinete, posando su mano sobre el daiso. Lo único que aquel peculiar viajero había hecho, había sido acercarse a preguntar el destino de tan bravos guerreros, motivo al parecer más que suficiente para jugar a señores y esclavos. También era de esperar que los samurais se sintieran ofendidos cuando una vez relatada le evidencia de su viaje, aquel extraño hombre les impidiera el paso. No os darán dinero, dijo el bastardo, no tienen nada, repetía una y otra vez, no permitiré que les hagáis daño para financiar la guerra de un falso emperador. Frase que terminó con la paciencia del Shinjo que lideraba la caravana. La hoja se deslizo tan suave como si la vaina fuese de hielo, ni siquiera sonó... El movimiento fue veloz como la picadura del escorpión y exacto con las cuentas de ábaco... pero no notó el calor de la sangre en su rostro... Por un solo instante pensó que el mundo se terminaba, el peso del pecho era nuevo para él. Jamás le estorbó su armadura... pero era incapaz de tomar aire, llegó incluso a nublar la vista al tiempo que el sol terminaba de arrebatársela... y luego la tierra. Al instante volvió a recibir sustento de la atmósfera y centrar sus visiones en donde estaba. Se encontraba tirado en el suelo, casi asfixiado por el tremendo impacto y enfrente un maloliente hombre dejaba su posición de combate recogiendo su palma hacia si para adoptar la tranquila posición del Loto. - ¿Quien sois perro entrometido? - logró articular con dificultad - ¿Quien sois vos que apabulláis a viajeros que defienden su imperio? - contestó, de manera quizás demasiado solemne, el vestido a jirones. - No responderé ante un hombre inferior que se ha sentenciado a muerte el solo. Los harapos llegaron a más de cinco metros de distancia una vez lanzados y arrastrados por el viento que se alió con el viajero. - Entonces, responded ante un hermano de Togashi..." El que domina a los otros es fuerte; el que se domina a sí mismo es poderoso. (Lao Tse)

Así comienzan las enseñanzas de un sensei que pide a su discípulo autocontrol y crecimiento personal. Los valores del Clan Dragón siempre me llamaron la atención no solo por el tema de los monjes y su conocidisimas artes marciales, si no por su filosofía de observación y meditación a la par que su intento por evitar el belicismo. Como meditador he intentado mantenerme a un lado de esta nueva guerra que se esta fomentando en los territorios de Tokage Shiro (Es como

llamamos a la ciudad de Almería en el mundo L5R). Poco a poco samurais de toda la zona afilan sus katanas para ponerse al servicio del emperador. Muchas son las cosas que han cambiado en esta nueva era, pero sin duda el que más ha llamado mi atención ha sido que engendros de la oscuridad y la corrupción más pura hayan sido convertidos en clan. La locura hecha Onis, la perdición hecha insecto. Los Araña. Los kihos, artes milenarios, secretos guardados entre cascadas y riscos nevados, la fuerza y esencia del Dragón... han pasado a ser dominio de otros... develados a los Araña, ¿que poder nos queda?Solo el control sobre los elementos podrán darnos la ventaja para llevar de nuevo el equilibrio a este tablero de GO, del cual formo parte como pieza blanca. Al menos, así lo pensaba. Tenia claro que los Dragón contarían de nuevo con mi esfuerzo entre sus filas hasta que Togashi Kemo ha vuelto para ver... Nadie podía haber avisado de tal debacle. Ni un mensajero, ni un sensei, ni siquiera el mismo Oráculo podría haber vislumbrado lo que el futuro deparaba a los Guerreros. Las fuerzas han sido descompensadas, los combates ridiculizados y las provincias... son simples maderos podridos ante un ariete tan pesado como un trueno. La suerte es poco precisa en estos días, y Tokage Shiro asediada de peludas de ocho patas, deberá contar con un aliado menos. El retiro de Kemo Sama es anuncio de ello, aunque será un retiro cercano pues su búsqueda ha concluido. Entrará en combate, incluso enseñara sus artes... pero más dando un apoyo táctico que real.