Dmt La Molecula Del Espiritu

Ciencia UANL Universidad Autónoma de Nuevo León [email protected] ISSN (Versión impresa): 1405-9177 MÉXICO 2003 Ama

Views 252 Downloads 90 File size 61KB

Report DMCA / Copyright

DOWNLOAD FILE

Recommend stories

Citation preview

Ciencia UANL Universidad Autónoma de Nuevo León [email protected] ISSN (Versión impresa): 1405-9177 MÉXICO

2003 Amaro S. Reyes Garza RESEÑA DE "DMT THE SPIRIT MOLECULE" DE RICK STRASSMAN Ciencia UANL, abril-junio, año/vol. VI, número 002 Universidad Autónoma de Nuevo León Monterrey, México pp. 257-259

Psicodélicos y experiencias místicas: un abordaje científico Rick Strassman, DMT The Spirit Molecule Park Street Press, Rochester, Vermont, 2000 Amaro S. Reyes Garza El Dr. Rick Strassman, profesor clínico asociado de psiquiatría en la Escuela de Medicina de la Universidad de Nuevo México ha escrito un libro por demás original y fascinante. Se

trata de su experiencia al administrar una sustancia psicodélica, dimetiltriptamina (DMT), a 60 voluntarios psiquiátricamente normales entre 1990 y 1995, y de las vivencias que estas personas reportaron mientras estaban bajo los efectos de la droga. Su relato es tan absorbente y sorprendente como una buena novela de aventuras. La gran diferencia entre una novela y el recuento del Dr. Strassman es que el hace una reseña para el público en general de lo que es trabajar científicamente dentro del modelo biomédico con sustancias que se han considerado peligrosas y que continúan siendo un tema tabú en la medicina y la sociedad actuales. Recuerdo haber escuchado al Dr. Strassman hablar de su trabajo en la reunión anual de la Asociación Psiquiátrica Americana en San Francisco California en mayo de 1993. Me impresionó tanto su sencillez y modestia como la trascendencia e importancia de su labor. Existe una extensa bibliografía médica y científica sobre los alucinógenos o psicodélicos, que data principalmente de la década de los años cincuenta y principio de los sesenta, que es prácticamente desconocida por los psiquiatras en la actualidad. Los psicodélicos, entre los que se encuentran el LSD, la mezcalina y la psilocibina, fueron usados en ese entonces como tratamientos psiquiátricos experimentales, en ocasiones con resultados sorprendentes.

CIENCIA UANL / VOL. VI, No. 2, ABRIL-JUNIO 2003

Sin embargo, el amplio uso de estas sustancias entre la juventud en la década de los sesenta, principalmente en Estados Unidos e Inglaterra, con las inevitables tragedias y accidentes que esto produjo, llevó al gobierno de los Estados Unidos y de otros países a declararlas sustancias peligrosas, ilegales y de nula utilidad médica. Esto condujo a la total interrupción de la actividad científica con psicodélicos y a ser relegados al museo de las curiosidades médicas. Sin embargo, el trabajo del Dr. Strassman hace pensar que los psicodélicos quizá tengan un lugar importante en la investigación del funcionamiento psicológico. La DMT es una triptamina con una estructura molecular parecida a la de la serotonina y que se deriva del triptófano, que es un aminoácido que forma parte de la dieta humana. Es el más sencillo de los psicodélicos. El LSD, el «abuelo» de los psicodélicos, contiene un núcleo de triptamina. La DMT existe como un compuesto natural en el cuerpo humano, así como en distintas plantas. Esta sustancia fue utilizada por el público durante la ola de experimentación masiva con psicodélicos durante los años sesenta. Su modo de administración fue principalmente por inhalación oral, o sea fumada. El uso intravenoso se dio de manera esporádica en ese tiempo. El Dr. Strassman y su equipo hi257

cieron mediciones de parámetros fisiológicos como temperatura, presión arterial y diámetro pupilar antes de administrar la DMT intravenosamente y a intervalos de varios minutos después de hacerlo. También midieron concentraciones sanguíneas de hormonas como vasopresina, prolactina, hormona del crecimiento, betaendorfina, corticoesteroides y de la misma DMT. El proyecto involucraba el uso de diversas dosis de DMT con cada voluntario en distintos momentos, así como la administración de sustancias como ciproheptadina, pindolol y naltrexona para estudiar el posible bloqueo de receptores celulares en un intento de entender cuál es el mecanismo de acción de la DMT. El libro se divide en seis secciones y un prólogo. En la primera parte el autor diserta acerca de las sustancias alucinógenas y presenta a la DMT como un posible alucinógeno natural que existe en el cuerpo humano. También expone su teoría de que la glándula pineal secreta este compuesto durante estados místicos y cercanos a la muerte que ocurren de manera espontánea en humanos. En la segunda parte, el autor relata las dificultades burocráticas y administrativas que enfrentó para lograr que las autoridades federales de salud de los Estados Unidos y el Comité de Investigación con Humanos de su universidad aprobaran el proyecto de administrar la droga a volunta258

rios adultos normales que habían tenido experiencia previa con sustancias psicodélicas como el LSD o la psilocibina. Algunas de estas personas habían tenido cientos de «viajes» psicodélicos durante sus vidas antes de ser sujetos en el estudio del Dr. Strassman, pero solamente algunos de ellos habían probado DMT en el pasado. La tercera sección trata del proceso de obtener voluntarios para el estudio, de la manufactura y elaboración de la DMT, y de los efectos físicos y psicológicos de la sustancia. La cuarta sección del libro es probablemente la más interesante, ya que relata casos particulares de las personas que participaron en los estudios, describiendo de manera clara y sencilla muchas de las vivencias que ellos experimentaron. El efecto de la DMT administrado de manera intravenosa es muy breve. La parte más intensa dura sólo algunos minutos y el sujeto se recobra totalmente después de aproximadamente 30 minutos. Inicialmente se vive un estado ansioso que rápidamente lleva a una pérdida de la percepción del cuerpo, haciendo sentir a algunos sujetos que habían muerto. Los voluntarios reportaron una sensación de que eran conciencia pura, sin percepción de sensaciones corporales. Los efectos visuales eran muy prominentes, de vivos colores, con descripción de patrones geométricos «mayas», «islámicos» y «aztecas»,

según palabras utilizadas por los sujetos. También se menciona pérdida de la percepción espacial con imposibilidad de saber lo que estaba por delante y atrás del sujeto. Otras descripciones de efectos visuales relatan formas como túneles, escaleras, ductos, un pájaro fantástico, el interior de una computadora, el árbol de la vida y el conocimiento, la doble hélice del ADN o el diafragma anatómico pulsando. Los sujetos trataban de mantener los ojos cerrados o bien los mantenían cubiertos con viseras oscuras durante el experimento. Sin embargo, si los abrían o se quitaban las viseras veían los efectos visuales sobreimpuestos en la imagen de los objetos reales o tenían distorsiones visuales. Había también una alteración del tiempo, distorsiones auditivas, así como miedo y ansiedad, aunque muchos voluntarios experimentaron placer y euforia. Lo más sorprendente fue el reporte de la aparición de «entidades no materiales» descritas de manera variada como insectos, reptiles o cactus que interactuaban con los sujetos, en ocasiones realizando exámenes de tipo médico en ellos o incluso teniendo contacto sexual con algunos. Los sujetos reportaron en su mayoría este tipo de vivencias sin tener conocimiento de que otros habían tenido las mismas experiencias. Strassman menciona que estos fenómenos tienen similitudes con lo reportado por

CIENCIA UANL / VOL. VI, No. 2, ABRIL-JUNIO 2003

personas que alegan haber sido secuestrados por extraterrestres. Él observó movimientos oculares rápidos en los sujetos mientras tenían estas experiencias, similares a los movimientos oculares que se observan mientras soñamos, y piensa que lo reportado por sus sujetos experimentales serían sueños vigiles similares al sueño MOR (movimientos oculares rápidos). El autor desarrolla la hipótesis de que la DMT interviene fisiológicamente durante estos estados de «secuestro por extraterrestres», así como en estados naturales y espontáneos de tipo místico y cercanos a la muerte, dada las semejanzas entre lo que vivieron sus sujetos bajo los efectos de la DMT y lo que las personas que han vivido estos estados reportan haber sentido. Otra de las ideas del Dr. Strassman es que la DMT también se secreta por la pineal durante la agonía, dándole a la persona que está muriendo una experiencia psicodélica natural. Estas hipótesis suenan muy interesantes, pero quizá sean muy difíciles de comprobar empíricamente. La quinta y sexta secciones son básicamente una elaboración de los resultados de su estudio, así como un extenso comentario de las posibilidades y obstáculos para hacer investigación en psiquiatría con estas sustancias, y de qué tan factible sería utilizarlas en el tratamiento de pacientes con trastornos psiquiátricos.

Ninguno de los sujetos experimentales sufrió daños o complicaciones médicas o psiquiátricas como resultado de haber participado en el estudio. El autor concluye que la DMT no es terapéutica por sí misma, aunque algunos de los sujetos reportaron menos miedo a la muerte, más apreciación por la vida, más habilidad para relajarse, un sentimiento más fuerte del sentimiento del sí mismo, y algunos tomaron menos alcohol que antes como consecuencia de haber participado en el estudio. Strassman especula que la DMT es necesaria para el funcionamiento cerebral normal, actuando como un «termostato de la realidad»: si hay demasiada en el cerebro aparecen programas inusitados e inusuales en la pantalla mental; si hay muy poca, nuestra visión del mundo se aplana y oscurece. De acuerdo al autor la DMT, que es producida normalmente en la glándula pineal del ser humano, permitiría la entrada y salida del alma al cuerpo, e intervendría en el proceso de nacimiento y muerte, e incluso en los estados más altos de meditación y trascendencia sexual. Una teoría más del Dr. Strassman es que la DMT nos permite tener acceso a otras realidades distintas de la cotidiana. Estas ideas estimulan la discusión y la controversia y son, en mi opinión, un ejemplo del fermento intelectual que hoy en día es tan necesario en una psiquiatría hundida

CIENCIA UANL / VOL. VI, No. 2, ABRIL-JUNIO 2003

en el reduccionismo biológico y psicoanalítico. La obra está escrita en un lenguaje común, accesible a todo público y utilizando mínima terminología técnica. Ojalá y pronto tengamos una traducción al español de este interesante libro.

Importancia de la pediatría Manual de pediatría Gilberto Treviño Martínez Ed. McGraw Hill/ Universidad de Monterrey/ Facultad de Medicina (UANL)/ Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey Monterrey, N. L, 2003 Vanessa Herrera Manual de pediatría es un trabajo realizado por el doctor Gilberto Treviño Martínez, donde muestra toda una gama de temas especializados en pediatría. La recopilación asombra por la cantidad de colaboradores que participaron en el proyecto, pues cada uno de ellos escribe un tema en el que son especialistas. En las primeras páginas el apartado Figuras en color, las imágenes muestran a menores de edad con diversas enfermedades como el Síndrome de Down, el Síndrome de Edwards o trisomía 18, el Síndrome de Patau 259