Citation preview

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

1

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

INDICE Manuel es un hombre Importante y Necesario ............................................................... 4 Manuel es un Hombre Libre ............................................................................................... 6 Manuel va al Paraíso........................................................................................................... 8 Historias sobre el Aprendizaje ......................................................................................... 10 El Guerrero de la luz y sus Contradicciones ................................................................. 12 Aceptar las Paradojas ....................................................................................................... 17 Al Final del Negro Túnel ................................................................................................... 19 De la Naturaleza Humana ................................................................................................ 21 El Ciego y el Everest ......................................................................................................... 23 Sobre la Inmortalidad ........................................................................................................ 25 Pequeñas Historias sobre Grandes Verdades.............................................................. 27 Yo No Soy Feliz ................................................................................................................. 31 De Igual a Igual .................................................................................................................. 33 Mi Tipo Inolvidable ............................................................................................................. 35 Siempre saben lo que es mejor para cada uno ............................................................ 37 Las Lenguas que habla Dios ........................................................................................... 40 Diálogos con el Maestro – Mirando Atrás ...................................................................... 43 Diálogos con el Maestro - Organizando la Búsqueda ................................................. 47 Tiros Certeros ..................................................................................................................... 51 Historias sobre la Arrogancia ........................................................................................... 53 El Guerrero de la luz y la Estrategia ............................................................................... 55 En el Camino de Santiago, 1986..................................................................................... 57 El Hombre que hacía caso de sus Sueños ................................................................... 59 Los Secretos del Sótano................................................................................................... 61 Más Historias de Amigos y Desconocidos..................................................................... 64 El camino del tiro con arco ............................................................................................... 67 El pecado y las religiones ................................................................................................. 69 Las Cuatro Fuerzas ........................................................................................................... 71 Las cosas tal y como son ................................................................................................. 73 La Montaña Mágica ........................................................................................................... 75 Persiguiendo los Sueños .................................................................................................. 77 Conviviendo con los Demás............................................................................................. 80 Las Dos Gotas de Aceite .................................................................................................. 83 Reflexiones sobre las Almas Gemelas........................................................................... 85 Manual para subir montañas ........................................................................................... 87 La nube y la duna .............................................................................................................. 89 El hombre que perdonaba ................................................................................................ 91 Dios y el amor del hombre ............................................................................................... 92 Cuidado con los recuerdos…........................................................................................... 93 Sobre el cambio ................................................................................................................. 94 La dificultad de recibir ....................................................................................................... 95 El dibujo ............................................................................................................................... 96 ¿De quién es la culpa? ..................................................................................................... 97 El problema de los otros ................................................................................................... 98 2

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

El llanto del desierto ........................................................................................................ 100 Transformar el tiempo ..................................................................................................... 102 No queda nada ................................................................................................................. 104 El pastor y el camello ...................................................................................................... 105 Las sandalias de José..................................................................................................... 107 Cuento de Navidad .......................................................................................................... 109 La virtud de la ruta menos transitada ........................................................................... 111 El valor de la palabra....................................................................................................... 113 El destino que eligió Hércules ....................................................................................... 115 El destino que eligió Hércules ....................................................................................... 117

3

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Manuel es un hombre Importante y Necesario Manuel necesita estar ocupado. de lo contrario, tiene la sensación de que su vida no tiene sentido, de que está perdiendo el tiempo, de que la sociedad no lo necesita, nadie lo ama, nadie lo quiere. Por eso, en cuanto se levanta, tiene una serie de tareas: ver las noticias en televisión (quizás sucedió algo durante la noche), leer el periódico (quizá sucedió algo ayer), pedir a su mujer que se encargue de que los niños no lleguen tarde a la escuela, coger el coche, un taxi, un autobús, el metro, pero siempre concentrado, mirando al vacío, mirando su reloj, si puede ser haciendo algunas llamadas en su teléfono móvil, y asegurándose de que la gente vea que es un hombre importante, útil al mundo. Manuel llega al trabajo, se inclina sobre los papeles que lo esperan. Si es funcionario, hará lo posible para que el jefe vea que ha llegado a la hora. Si es jefe, pondrá a todos a trabajar inmediatamente; si no existen tareas importantes, Manuel se encargará de desarrollarlas, crearlas, implementar un nuevo plan, establecer nuevas líneas de acción. Manuel va a almorzar, pero nunca solo. Si es jefe, se sentará con los amigos, discutirá nuevas estrategias, hablará mal de los competidores, se guardará siempre un as en la manga, se quejará (no sin cierto orgullo) del exceso de trabajo. Si Manuel es funcionario, también se sentará con los amigos, se quejará del jefe, dirá que está haciendo muchas horas extra, afirmará en un tono desesperado (y con mucho orgullo) que hay varias cosas en la empresa que dependen de él. Manuel, jefe o empleado, trabaja toda la tarde. De vez en cuando mira el reloj, se acerca la hora de volver a casa, pero queda aquí un detalle por resolver, allá un documento por firmar. Es un hombre honesto, quiere ganarse su sueldo, cumplir las expectativas de los demás, los sueños de sus padres, que tanto se esforzaron para proporcionarle la educación necesaria. Finalmente vuelve a casa. Toma un baño, se pone una ropa más cómoda, y se dispone a comer con su familia. Pregunta por los deberes de los hijos, las actividades de la mujer. De vez en cuando habla de su trabajo, sólo para servir de ejemplo, pues no acostumbra a traerse las preocupaciones a casa. Terminada la cena, los hijos, que no están para ejemplos, ni deberes, ni cosas por el estilo, se levantan de la mesa y se sientan delante del ordenador. Manuel, a su vez, se sienta también delante de aquel viejo aparato de su infancia, llamado televisión. De nuevo ve las noticias (quizás haya sucedido algo durante la tarde). Va a acostarse, siempre con un libro técnico en la mesa de cabecera. Tanto si es jefe como empleado, sabe que la competencia es grande y que el que no se

4

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

actualiza corre el riesgo de perder su empleo y tener que enfrentarse a la peor maldición posible: estar sin trabajo. Habla un poco con su mujer, a fin de cuentas, es un hombre agradable, trabajador, cariñoso, que cuida de su familia y está preparado para defenderla en cualquier circunstancia. El sueño viene enseguida, Manuel se duerme, sabiendo que al día siguiente estará muy ocupado y hay que reponer fuerzas. Esa noche, Manuel tiene un sueño. Un ángel le pregunta: “¿por qué haces esto?” Él responde que es un hombre responsable. El ángel continúa: “¿serías capaz de, al menos durante quince minutos al día, parar un poco, mirar el mundo, mirarte a ti mismo, y simplemente no hacer nada?” Manuel dice que le encantaría, pero no tiene tiempo para eso. “Lo que me dices no es verdad,” dice el ángel. “Todo el mundo tiene tiempo para eso, lo que falta es valor. Trabajar es una bendición cuando nos ayuda a pensar en lo que estamos haciendo. Pero se convierte en una maldición cuando su única utilidad es evitar que pensemos en el sentido de nuestra vida.” Manuel se despierta en mitad de la noche, envuelto en sudor frío. ¿Valor? ¿Cómo es posible que un hombre que se sacrifica por los suyos no tenga el valor de parar quince minutos? Más vale volver a dormirse, todo esto no es más que un sueño, estas preguntas no conducen a ninguna parte, y mañana voy a estar muy, muy ocupado.

5

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Manuel es un Hombre Libre Manuel trabaja durante 30 años sin parar, educa a sus hijos, da buen ejemplo, se dedica todo el tiempo a su trabajo, y nunca se pregunta: “tendrá sentido lo que estoy haciendo?” Su única preocupación es estar lo más ocupado posible, para parecer así más importante a los ojos de la sociedad. Sus hijos crecen y se van de casa, a él lo ascienden en el trabajo, un día gana un reloj o un bolígrafo en agradecimiento por todos estos años de dedicación, los amigos vierten unas lágrimas, y llega el momento tan esperado: está jubilado, ¡libre para hacer lo que le plazca! En los primeros meses, visita de vez en cuando el despacho donde trabajó, charla con sus antiguos compañeros, y se da el gusto de hacer algo con lo que siempre soñó: levantarse más tarde. Pasea por la playa o por la ciudad, disfruta de su casa de campo, que compró con tanto sudor, descubre la jardinería y poco a poco se va adentrando en el misterio de las plantas y las flores. Manuel tiene tiempo, todo el tiempo del mundo. Viaja, empleando parte del dinero que consiguió ahorrar. Visita museos, aprende en dos horas lo que pintores y escultores de diferentes épocas tardaron siglos en desarrollar, pero por lo menos se queda con la sensación de que está aumentando su cultura. Hace centenares, miles de fotos, y se las envía a los amigos. A fin de cuentas, tienen que saber lo feliz que es. Siguen pasando los meses. Manuel aprende que el jardín no sigue exactamente las mismas reglas que el hombre: aquello que plantó tardará en crecer, y de nada sirve ver si el rosal ya tiene brotes. En un momento de sincera reflexión, se da cuenta de que todo lo se trajo de sus viajes fue un paisaje visto desde un autobús turístico, monumentos que ahora tiene guardados en fotos de 6x9, pero descubre que en realidad nunca consiguió sentir una emoción especial. Estaba más preocupado por contárselo a los amigos que por vivir la mágica experiencia de estar en un país extranjero. Continúa viendo los noticiarios de televisión, lee más periódicos (porque tiene más tiempo), se considera una persona extremadamente bien informada, capaz de hablar de cosas que antes no tenía tiempo para estudiar. Busca alguien para compartir sus opiniones, pero todo el mundo está inmerso en el río de la vida, trabajando, haciendo algo, envidiando a Manuel su libertad, y al mismo tiempo contento de ser útil a la sociedad y estar “ocupado” en algo importante. Manuel busca consuelo en sus hijos. Ellos siempre lo trataron con gran cariño, pues fue un excelente padre, un ejemplo de honestidad y dedicación. Pero también ellos tienen otras preocupaciones, aunque todavía consideran su deber participar del almuerzo del domingo.

6

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Manuel es un hombre libre, con una situación financiera desahogada, bien informado, con un pasado impecable, pero ¿y ahora? ¿Qué hacer con esta libertad tan arduamente conquistada? Todos lo saludan, lo elogian, pero ninguno de ellos tiene tiempo para él. Poco a poco, Manuel comienza a sentirse triste, inútil, pese a los muchos años de servicio al mundo y a su familia. Una noche, un ángel se le aparece en sueños: “¿qué has hecho con tu vida? ¿Intentaste vivirla de acuerdo con tus sueños?” Manuel se levanta empapado en sudor frío. ¿Qué sueños? Su sueño era éste: conseguir un título, casarse, tener hijos, educarlos, jubilarse, viajar. ¿Por qué ese ángel le hace preguntas tan absurdas? Comienza un nuevo y largo día. Los periódicos. Las noticias de la tele. El jardín. El almuerzo. Dormir un poco. Hacer lo que le apetezca. En este momento, se da cuenta de que no le apetece hacer nada. Manuel es un hombre libre y triste, a un paso de la depresión, porque siempre estuvo demasiado ocupado para pensar en el sentido de su vida, mientras los años iban pasando bajo el puente. Recuerda los versos de un poeta: “pasó por la vida/ no vivió.” Pero como es demasiado tarde para aceptarlo, es mejor cambiar de tema. La libertad, tan duramente conseguida, no pasa de ser un exilio disfrazado.

7

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Manuel va al Paraíso Pues bien, un día, nuestro querido, honrado, abnegado Manuel muere, como les sucederá a todos los Manueles, Paulos, Marías, Mónicas de la vida. Y ahora cedo la palabra a Henry Drummond, en su brillante libro El Don Supremo, para describir lo que sucede a partir de ese momento: Todos nosotros, en algún momento, nos hemos hecho la misma pregunta que se hicieron todas las generaciones anteriores: ¿Qué es lo más importante de nuestra existencia? Queremos emplear nuestros días de la mejor manera posible, puesto que nadie puede vivir la vida por nosotros. Por ello necesitamos saber: ¿hacia dónde debemos dirigir nuestros esfuerzos, cuál es el objetivo supremo que hay que alcanzar? Estamos acostumbrados a oír que el tesoro más importante del mundo espiritual es la Fe. Sobre esta simple palabra se sostienen muchos siglos de religión. ¿Que consideramos la Fe lo más importante en el mundo? Pues estamos completamente equivocados. En su epístola a los Corintios, capitulo XIII, San Pablo nos conduce a los primeros tiempos del cristianismo. Y termina diciendo: “ahora subsisten la Fe , la Esperanza , y el Amor, estos tres. Pero el mayor de todos ellos es el Amor”. No se trata de una opinión superficial de San Pablo, autor de estas frases. A fin de cuentas, justo antes, en la misma epístola, hablaba de la Fe. Decía: “Aunque tenga plenitud de fe como para trasladar montañas, si no tengo Amor, nada soy.” San Pablo no eludió el asunto; antes al contrario, comparó la Fe con el Amor. Y concluyó: “(...) el mayor de todos ellos es el Amor.” San Mateo nos da una descripción clásica del Juicio Final: el Hijo del Hombre se sienta en un trono, y separa, cual pastor, las cabras de las ovejas. En ese momento, la gran pregunta del ser humano no será: “¿Cómo viví?” Será: “¿Cómo amé?”

8

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

La prueba final de toda búsqueda de la salvación, será el Amor. No se tendrá en cuenta lo que hicimos, aquello en lo que creímos, lo que conseguimos. Por nada de eso habremos de rendir cuentas. Habremos de rendir cuentas por el modo en que amamos al prójimo. Los errores que cometimos ni siquiera serán recordados. Seremos juzgados por el bien que dejamos de hacer. Pues mantener el Amor encerrado dentro de sí es ir contra el espíritu de Dios, es la prueba de que nunca Lo conocimos, de que Él nos amó en vano, de que su hijo murió inútilmente. En este caso, nuestro Manuel está a salvo en el momento de su muerte, porque a pesar de no haber dado jamás un sentido a su vida, fue capaz de amar, proveer a su familia, y ser digno en aquello que hacía. Sin embargo, aunque tenga un final feliz, el resto de sus días en la tierra fue muy complicado. Repitiendo una frase que oí de boca de Simon Peres en el Foro Mundial de Davos: “tanto el optimista como el pesimista terminan muriendo. Pero los dos aprovecharon la vida de manera completamente diferente.

9

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Historias sobre el Aprendizaje Aprende a cuidar de ti mismo Durante seis años busqué la iluminación – dijo el discípulo. – Siento que estoy cerca, y quiero saber cómo he de dar el siguiente paso. Un hombre que sabe buscar a Dios, sabe también cuidar de sí mismo. ¿Cómo te mantienes? – preguntó el maestro. Ése es un detalle sin importancia. Mis padres son ricos, y me ayudan en mi búsqueda espiritual. Gracias a ello puedo dedicarme por entero a las cosas sagradas. Muy bien – dijo el maestro. - Entonces te explicaré el siguiente paso: mira al sol durante medio minuto. El discípulo obedeció. A continuación, el maestro le pidió que describiese el paisaje a su alrededor. No puedo. El brillo del sol me ha deslumbrado. Un hombre que mantiene los ojos fijos en el sol, termina ciego. Un hombre que sólo busca la Luz y deja sus responsabilidades en manos de los demás, jamás encontrará lo que busca – fue el comentario del maestro. Hacer el campo fértil El maestro zen le encargó al discípulo que cuidara del campo de arroz. El primer año, el discípulo vigiló que nunca faltase el agua necesaria. El arroz creció fuerte y la cosecha fue buena. El segundo año, el discípulo tuvo la idea de añadir un poco de fertilizante. El arroz creció rápido y la cosecha fue mayor. El tercer año, colocó más fertilizante. La cosecha fue aún mayor, pero el arroz nació pequeño y sin brillo. Si sigues aumentando la cantidad de abono, la cosecha del año que viene no tendrá ningún valor – dijo el maestro. “Fortaleces a alguien cuando le ayudas un poco. Pero si le ayudas demasiado, lo debilitas”. El camino del tigre 10

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

El hombre caminaba por la selva cuando vio una raposa lisiada. “¿Cómo se alimentará?”, se preguntó. En aquel momento, se acercó un tigre con una presa en sus fauces. Sació su hambre y dejó luego lo que había sobrado para la raposa. “Si Dios ayuda a la raposa, también me ayudará a mí también”, pensó. Volvió a su casa, se encerró, y se puso a esperar a que Dios le diese de comer. Nada sucedió. Cuando ya se estaba quedando demasiado flaco para salir a trabajar, se le apareció un ángel. ¿Por qué decidiste imitar a la raposa lisiada? – preguntó el ángel. – ¡Levántate, coge tus herramientas y sigue el camino del tigre! Alguien sabría la diferencia Un padre llevó a sus pequeños a jugar a minigolf. En la taquilla, preguntó el precio. Son cinco monedas para los adultos y tres para los mayores de seis años. Para los menores de seis, la entrada es gratuita. Uno de ellos tiene tres, el otro siete. Pago la del mayor. Bobo – dijo el taquillero. – Podría haberse ahorrado tres monedas si hubiera dicho que el mayor tenía menos de seis. Yo no habría notado la diferencia. Puede, pero ellos sí la habrían notado. Y mi ejemplo quedaría grabado para siempre. El condenado a muerte El grupo pasó por la calle: los soldados llevaban a un condenado a la horca. -Este hombre no servía para nada –le comentó un discípulo a Awas-el Salam-. Una vez le di una moneda de plata para ayudarlo a salir de la miseria, y fue incapaz de hacer nada que valiera la pena. -Tal vez no sirva para nada, pero puede que ahora esté caminando hacia la horca por tu culpa. Es posible que haya utilizado el dinero que le diste para comprar un puñal, que terminó usando en el crimen cometido. Entonces, también tus manos están ensangrentadas. En lugar de intentar apoyarlo con amor y cariño, preferiste darle una limosna y librarte de tu obligación.

11

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

El Guerrero de la luz y sus Contradicciones Tomar la decisión de seguir la luz El guerrero de la luz empieza a pensar que es mejor seguir la luz. Él ya engañó, mintió, se desvió de su camino, cortejó las tinieblas. Y todo siguió saliendo bien, como si no hubiera pasado nada. Pero ahora quiere cambiar sus actitudes. Al tomar esta decisión, oye cuatro comentarios: “siempre has actuado de forma errada. Eres demasiado viejo para cambiar. No eres bueno. No lo mereces.” Entonces mira al cielo. Y una voz le dice: “bien, querido mío, todo el mundo ha cometido errores. Estás perdonado, pero yo no puedo forzar este perdón. Decídete.” El verdadero guerrero de la luz acepta el perdón, y empieza a tomar algunas precauciones. Un nuevo paso en falso Como nada cambia de la noche al día, el guerrero da un nuevo paso en falso y se lanza una vez más al abismo. Los fantasmas lo provocan, la soledad lo atormenta. Como ahora es más consciente de sus actos, no pensaba que pudiera volver a suceder esto. Pero sucedió. Envuelto en la oscuridad, se comunica con su maestro. "Maestro, he caído de nuevo en el abismo,” dice. “Las aguas son profundas y oscuras.” Recuerda una cosa,” responde el maestro. “Lo que ahoga no es la zambullida, sino el permanecer bajo el agua.” Y el guerrero emplea el resto de sus fuerzas para salir de la situación en la que se encuentra. Entender el sentido de la tregua. Un guerrero de la luz no se limita a repetir siempre la misma lucha. Si, después de algún tiempo, el combate sigue sin avances ni retrocesos, comprende que hay que sentarse con el enemigo y buscar una tregua. Ambos ya practicaron el arte de la espada, y ahora necesitan entenderse. Es un gesto de dignidad, no de cobardía. Es un equilibrio de fuerzas, y un cambio de estrategia.

12

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Trazados los planes de paz, los guerreros vuelven a sus casas. No necesitan demostrar nada a nadie. Libraron el buen Combate, y mantuvieron la fe. Cada uno cedió un poco, aprendiendo así el arte de la negociación. Tener cuidado con los comentarios Un guerrero sabe que las tinieblas utilizan una red invisible para extender su mal. Esta red atrapa cualquier información suelta en el aire, y la transforma en intriga. Todo lo que se dice de alguien acaba siempre llegando a los oídos de los enemigos de esa persona, aumentado por la tenebrosa carga del veneno y la maldad. Por eso el guerrero, cuando habla de las actitudes de su hermano, imagina que éste está presente, escuchando lo que dice. Así, desarrolla el arte de la prudencia y la dignidad. Y se acerca cada vez más a la luz que entró por su ventana, y que ahora ilumina toda su alma. Amor y combate El guerrero de la luz a veces lucha con aquél a quien ama. Aprendió que el silencio significa el equilibrio absoluto del cuerpo, del espíritu y del alma. El hombre que preserva su unidad, jamás será dominado por las tempestades de la existencia; tiene fuerzas para superar las dificultades y seguir adelante. Sin embargo, muchas veces se siente desafiado por aquéllos a quienes intenta enseñar el arte de la espada. Sus discípulos lo incitan al combate. Y el guerrero demuestra su capacidad: con unos golpes, tira por tierra las armas de los alumnos, y vuelve la armonía al lugar donde se reúnen. “¿Por qué haces esto, si eres tan superior?”, pregunta un viajero. “Porque, de esta forma, mantengo el diálogo”, responde el guerrero. Soledad y dependencia Un guerrero, cuando sufre una injusticia, generalmente busca la soledad, para no mostrar su dolor a los demás. Es un comportamiento bueno y malo a la vez.

13

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Una cosa es dejar que tu corazón cure lentamente sus heridas. Otra cosa es meditar profundamente todo el día, con miedo a parecer débil. Dentro de cada uno de nosotros existe un ángel y un demonio, y sus voces son muy parecidas. Ante la dificultad, el demonio alimenta esta conversación solitaria, intentando demostrarnos lo vulnerables que somos. El ángel necesita la boca de otra persona para manifestarse. Prisa y paciencia Un guerrero de la luz necesita al mismo tiempo paciencia y rapidez. Los dos mayores errores de la estrategia son: actuar antes de tiempo y dejar pasar la oportunidad. Para evitar esto, el guerrero trata cada situación como si fuese única, y no aplica fórmulas, recetas u opiniones ajenas. El califa Moauiyat preguntó a Omar Ben Al-Aas cuál era el secreto de su gran habilidad política: “Nunca me metí en ningún asunto sin haber estudiado previamente la retirada; por otra parte, nunca entré y quise salir corriendo enseguida”, fue la respuesta. Paz y actividad En el intervalo del combate, el guerrero descansa. Muchas veces pasa días sin hacer nada, pues su corazón así se lo exige. Pero su intuición permanece alerta. No comete el pecado capital de la Pereza , porque sabe a dónde lo puede conducir: a la floja sensación de las tardes de domingo, donde pasa el tiempo y nada más. Un guerrero descansa y ríe. Pero siempre estará atento. De la Gloria Pasajera Sic transit gloria mundi. De esta manera San Pablo define la condición humana en una de sus epístolas: la gloria del mundo es transitoria. Y, a pesar de saber esto, el hombre siempre parte en busca del reconocimiento por su trabajo. ¿Por qué? Uno de los mayores poetas brasileños, Vinícius de Moraes, dice en una de sus canciones: “ E no entanto é preciso cantarmais que nunca é preciso cantar (Y, no obstante, es preciso cantar más que nunca es preciso cantar Vinícius de Moraes está brillante

14

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

en esas frases. Recordando a Gertrude Stein en su poema “Una rosa es una rosa, es una rosa”, se limita a decir que es preciso cantar. No da explicaciones, no justifica, no usa metáforas. Cuando presenté mi candidatura a este Sillón, al cumplir el ritual de entrar en contacto con los miembros de la casa de Machado de Assis, escuché del académico Josué Montello algo semejante. Me dijo: “ Todo hombre tiene el deber de seguir el camino que pasa por su aldea”. ¿Por qué? ¿Qué es lo que hay en ese camino? ¿Qué fuerza es esa que nos empuja hacia delante, alejándonos del confortable ambiente que nos es familiar y nos lleva a enfrentar desafíos, aun sabiendo que la gloria del mundo es transitoria? Creo que ese impulso se llama “la búsqueda del sentido de la vida”. Durante muchos años busqué en los libros, en el arte, en la ciencia, en los caminos – peligrosos o cómodos – que recorrí, una respuesta definitiva para esa pregunta. Encontré muchas: algunas que me convencieron durante algunos años, otras que no resistieron un solo día de análisis. Sin embargo, ninguna de ellas fue lo suficientemente fuerte como para poder decir ahora: el sentido de la vida es éste. Hoy estoy convencido de que tal respuesta jamás nos será confiada en esta existencia aun cuando al final, en el momento en que volvamos a estar ante el Creador, comprenderemos cada oportunidad que nos fue ofrecida y entonces aceptada o rechazada. En un sermón de 1890, el pastor Henry Drummond hablando de ese encuentro, dice: “ En ese momento, la gran pregunta del ser humano no será “¿Cómo viví?” Será, esto sí, “¿Cómo amé?” La prueba final de toda búsqueda es la dimensión de nuestro Amor. No será tomado en cuenta lo que hicimos, en qué creímos, o lo que conseguimos. Nada de eso nos será reprochado, pero sí nuestra manera de amar al prójimo. Los errores que cometimos ni siquiera serán recordados. No seremos juzgados por el mal que hicimos, sino por el bien que dejamos de hacer. Pues mantener el Amor encerrado dentro de sí es ir en contra del espíritu de Dios, es prueba de que nunca lo conocimos, de que Él nos amó en vano.” La gloria del mundo es pasajera, y no es ella la que nos da la dimensión de nuestra vida, sino la elección que hacemos de seguir nuestra leyenda personal, creer en nuestras utopías, y luchar por ellas. Todos somos protagonistas de

15

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

nuestra existencia, y muchas veces son los héroes anónimos quienes dejan las huellas más duraderas. Cuenta una leyenda japonesa que cierto monje, entusiasmado por la belleza del libro chino Tao Te King, resolvió recolectar fondos para traducir y publicar aquellos versos en su lengua patria. Demoró diez años hasta conseguir lo suficiente. Mientras tanto, una peste asoló su país y el monje decidió usar el dinero para aliviar el sufrimiento de los enfermos. Pero en cuanto la situación se normalizó, nuevamente partió para recaudar la cantidad necesaria para la publicación del Tao; otros diez años pasaron, y cuando ya se preparaba para imprimir el libro, un maremoto dejó a centenares de personas sin hogar. El monje de nuevo gastó el dinero en la reconstrucción de casas para los que lo habían perdido todo. Pasaron otros diez años, él volvió a recoger el dinero y finalmente el pueblo japonés pudo leer el Tao Te King. Dicen los sabios que, en verdad, ese monje hizo tres ediciones del Tao: dos invisibles y una impresa. Él creyó en su utopía, libró el buen combate, mantuvo la fe en su objetivo, pero no dejó de prestar atención a sus semejantes. Que así sea con todos nosotros: a veces los libros invisibles, nacidos de la generosidad hacia el prójimo, son tan importantes como aquellos que ocupan nuestras bibliotecas.

16

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Aceptar las Paradojas Aceptar las paradojas "Es curioso", se dice a sí mismo el guerrero de la luz. “He conocido tanta gente que, a la primera oportunidad, intenta demostrar lo peor de sí misma. Esconde la fuerza interior detrás de la agresividad; disfraza el miedo a la soledad con aire de independencia. No cree en su propia capacidad, pero vive pregonando a los cuatro vientos sus virtudes.” El guerrero lee estos mensajes en muchos hombres y mujeres que conoce. Nunca se deja engañar por las apariencias, e insiste en permanecer en silencio cuando intentan impresionarlo. Pero aprovecha la ocasión para corregir sus faltas, ya que las personas son siempre un buen espejo. Un guerrero aprovecha cualquier oportunidad para enseñarse a sí mismo y admitir sus contradicciones. Paciencia y Rapidez Un guerrero de la luz precisa de paciencia y rapidez al mismo tiempo. Los dos mayores errores de una estrategia son: actuar antes de hora, o dejar pasar la oportunidad. Para evitar esto, el guerrero trata cada situación como si fuese única, y no aplica fórmulas, recetas, u opiniones ajenas. El califa Moauiyat preguntó a Omar Ben Al-Aas cuál era el secreto de su gran habilidad política: “Nunca me metí en ningún asunto sin haber estudiado previamente la retirada; por otra parte, nunca quise salir de un asunto al poco tiempo de haber entrado en él,” fue la respuesta. Perdonar y Aceptar Un guerrero de la luz siempre mantiene su corazón limpio de sentimientos de odio. Para conseguirlo, debe perdonar. Cuando camina hacia la lucha, no olvida las palabras de Cristo: “amad a vuestros enemigos.” Y el guerrero obedece, pero siempre recordando que Cristo no dijo: “gustad de vuestros enemigos”.

17

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

El acto de perdonar no te obliga a aceptarlo todo. Un guerrero no puede bajar la cabeza. De lo contrario, perderá de vista el horizonte de sus sueños. Descansar y Actuar Durante el intervalo del combate, el guerrero descansa. Muchas veces pasa días sin hacer nada, porque su corazón así se lo exige. Pero su intuición permanece alerta. No comete el pecado capital de la Pereza, porque sabe adónde lo puede llevar: a la sensación floja de las tardes de domingo, cuando el tiempo pasa, y nada más. El guerrero denomina esto “paz de cementerio.” Recuerda un fragmento del libro del Apocalipsis: te maldigo porque no eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueses frío o caliente! Pero, como eres tibio, te vomitaré de mi boca. Un guerrero descansa y ríe. Pero siempre está atento y dispuesto para la acción. Ángel y Demonio Un guerrero sabe que un ángel y un demonio se disputan la mano que ase la espada. Dice el demonio: "vas a flaquear. No sabrás el momento exacto. Tienes miedo”. Dice el ángel: "vas a flaquear. No sabrás el momento exacto. Tienes miedo.” El guerrero se sorprende. Ambos han dicho lo mismo. Entonces el demonio continúa: “deja que te ayude.” Y dice el ángel: “yo te ayudo.” En ese momento, el guerrero percibe la diferencia. Las palabras son las mismas, pero los aliados son diferentes. Entonces él dedica su victoria a Dios. Y, con la confianza de los valientes, escoge la mano de su ángel.

18

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Al Final del Negro Túnel Al final del negro túnel -Sólo vi un túnel. En el bar de Sibiu, en Transilvania, Sorin me mira a lo más profundo de los ojos. Continúa. -Vi un túnel negro con un hombre al fondo, que me hacía señales. Espero. Tenemos todo el tiempo del mundo y recuerdo que, cuando yo me encontraba en la misma situación, también vi un túnel, sólo que éste me llevaba a un hotel en Rio de Janeiro, el Hotel Gloria. Miré aquel hotel, esperé lo peor, y pensé: “no es justo: ¡sólo tengo 26 años!” Justo o no, en la madrugada del 27 de mayo de 1974, estaba a las puertas de la muerte, y no veía lo que sucedía a mi lado. Sólo el túnel y el hotel. Pero mi historia no viene al caso; sólo sirve para señalar que entiendo perfectamente lo que Sorin me está contando en este bar perdido en mitad de los Cárpatos. -Vi tan sólo un túnel negro, con un hombre que me apuntaba con un arma, y que me ordenaba que bajase del coche. El calvario de Sorin Miscoci comenzó el 28 de marzo de 2005, cerca de Bagdad. Una cadena de televisión rumana lo había enviado allí por una semana. Terminó secuestrado durante 55 días. -Más tarde, cuando me liberaron, los agentes de seguridad americanos me preguntaron cuántas personas había allí. Y yo les dije: una. Ellos se rieron y dijeron que no podía ser. Fue el psicólogo quien me ayudó, explicándome que en situaciones como aquélla, nada de lo que hay alrededor tiene importancia. Uno sólo ve el foco de la crisis, lo que le amenaza, y simplemente olvida el resto. Sorin acaba de casarse con Andrea, que le acaricia la mano. Hace tres días que viajamos juntos, y seguiremos una semana más cruzando los Cárpatos. Yo conocía su historia, pero esperé a que estuviese en su ciudad natal para preguntarle por los detalles. Cristina Topescu, una vieja amiga, periodista de la misma cadena de televisión para la que trabaja Sorin, también está sentada a la mesa. Cuenta que, a la hora de movilizar al país, pocos colegas se presentaron para ir a hablar con el presidente de la república, por miedo a perder su puesto de trabajo. -Lo peor fue cuando vi a Sorin con el mono naranja y la cabeza rapada, en un vídeo entregado al canal árabe Al Yazira –dice Cristina–. Era una señal de que la ejecución no tardaría.

19

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

-Sólo pedí una cosa a Dios: morir de un tiro al corazón. Había visto vídeos de prisioneros siendo decapitados; pedí, imploré que me fusilaran –añade Sorin. Andrea le da un beso. Él sonríe, me pregunta si quiero continuar en ese restaurante, o si prefiero ir al único karaoke de Sibiu. Prefiero cortar ahí la conversación, mejor cantar juntos. Nuestro grupo se levanta, intento pagar la cuenta, pero nos invita la casa, en homenaje al héroe local, aquél que, a pesar de todo, sobrevivió. Camino de la discoteca, pienso en el túnel negro: sin ánimo de teñir de romanticismo una situación dramática, entiendo que eso le pasa a todo el mundo. Cuando nos encontramos frente a algo que nos amenaza de veras, es imposible mirar alrededor, aunque ése sea el comportamiento más correcto y seguro. No somos capaces de ver con claridad, de usar la lógica, de conseguir información que pueda sernos de ayuda a nosotros y a los que intentan sacarnos de esa situación. En el amor y en la guerra somos humanos, gracias a Dios. Llegamos al karaoke, bebemos un poco más, cantamos canciones de Elvis, de Madonna, de Ray Charles. Nuestro grupo es interesante: Lacrima, que fue abandonada cuando tenía sólo dos meses. Leonardo, que ha salido de una depresión que duró dos años. Cristina Topescu, que ha pasado recientemente por momentos difíciles. Sorin, con sus 55 días de cautiverio, y Andrea, que estuvo a punto de perder a la persona que ama. Yo, con mis cicatrices en el cuerpo y en el alma. Y aun así bebemos, cantamos, celebramos la vida. Tener amigos como éstos me da algo más que esperanza; me hace entender que los verdaderos supervivientes jamás serán víctimas de sus verdugos, porque son capaces de mantener lo más importante que tiene el ser humano: la alegría. Y donde hay alegría después de la tragedia, habrá siempre un ejemplo a seguir.

20

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

De la Naturaleza Humana De la naturaleza humana Todos los días nos bombardean con noticias de actos de crueldad, y nos preguntamos: ¿cómo puede el hombre ser capaz de tanta perfidia? Los ejemplos van desde Rio de Janeiro, donde tenía un amigo periodista (Tim Lopes) que fue salvajemente torturado antes de ser asesinado, hasta la prisión de Abu Graib, en Iraq, donde chicos y chicas americanos, que siempre se han comportado de forma ejemplar en sus pequeñas comunidades provincianas, acaban convirtiéndose en monstruos. En 1971, profesores de la Universidad de Stanford, en los Estados Unidos, crearon una especie de prisión simulada, en los sótanos de la Facultad de Psicología. Escogieron a 12 estudiantes al azar, que actuarían como guardas, y a otros 12 que serían los prisioneros. Todos procedían del mismo medio social: clase media, educación rígida y sólidos valores morales. Durante dos semanas se otorgó a los “carceleros” una autoridad absoluta sobre los “presos.” La experiencia hubo de ser interrumpida al cabo de una semana, dado que, apenas transcurridos unos días, los “guardas” comenzaron a mostrar un comportamiento cada vez más sádico y anormal, y llegaron a ser capaces de barbaridades nunca vistas. Hasta hoy, cuando han pasado más de 30 años, los dos grupos todavía necesitan tratamiento psicológico. El creador de la experiencia de Stanford, Philip Zimbardo, cuenta al periódico Herald Tribune: -No me sorprendieron las fotos de la prisión iraquí de Abu Graib. No se trata de unas pocas manzanas podridas dentro de un cesto de fruta fresca, sino exactamente de lo contrario: gente de buenos sentimientos que, al verse con la posibilidad de ejercer un poder absoluto, pierde cualquier noción del límite y deja que se manifiesten sus instintos más primitivos. Otro estudio interesante fue el que realizó Stanley Milgram para la Universidad de Yale. Se seleccionó un grupo de alumnos para estudiar “técnicas de castigo.” Cada uno se ponía al mando de un aparato de descargas eléctricas, mientras, separado de él, al otro lado de una pantalla de cristal, se colocaba un estudiante que tenía que responder a una serie de preguntas. Cada vez que éste errase, el otro alumno tenía que administrarle una descarga, aumentando progresivamente el voltaje, aun sabiendo que, a partir de determinado momento, podría matar a su compañero. La máquina de descargas era falsa, y el “estudiante” era un actor, pero los alumnos no sabían nada de eso. Para sorpresa de todos, el 65% de los “interrogadores” llegó a lo que sería una descarga mortal. 21

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Es decir, que ante situaciones que nos permiten un control total y absoluto de otra persona, nadie puede estar seguro de que no traspasará el límite. Pero sólo quien ya ha vivido este tipo de experiencia (y yo, desgraciadamente, recuerdo ciertas actitudes en mi juventud que me incluyen en este grupo) sabe que llega un momento en que perdemos por completo el control, y vamos más allá de lo que dicta el sentido común. Si la naturaleza humana es así, ¿qué debemos hacer? Una antigua historia situada en los Pirineos, posiblemente una leyenda, cuenta que un monje, de nombre Savin, que venía de recoger donaciones en oro para la capilla que quería construir, pasó por la casa de uno de los bandidos más sanguinarios de la región. Como no tenía donde dormir, pidió que le dejaran pernoctar allí. El bandido, sorprendido del valor del monje, decidió ponerlo a prueba y le dijo: -Has venido aquí para provocarme. Quieres que te mate y te robe el dinero, para así convertirte en mártir. Si hoy entrase aquí la prostituta más bella que haya en la ciudad, ¿serías capaz de convencerte de que no es bella y seductora? -No. Pero me podría controlar. -Y si un monje entrase con oro para construir una capilla, ¿podrías mirar ese oro como si fuesen piedras? -No. Pero me podría controlar. Savin y el asesino tenían los mismos instintos, el bien y el mal se los disputaban, como se disputan todas las almas sobre la faz de la tierra. Cuando el malhechor vio que el monje era igual a él, también entendió que él era igual a Savin, y se convirtió. Tenemos el bien y el mal frente a nosotros, y todo es cuestión de control. Nada más que eso.

22

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

El Ciego y el Everest Parece que poco a poco la gente se va acostumbrando a las mismas metáforas de la vida. Hace algún tiempo, escribía en esta columna el “manual para subir montañas”, y de repente me encuentro con un lector en Hamburgo que decide compartir conmigo su experiencia respecto a las escaladas de la vida. Descubrió en qué hotel estoy alojado, tiene una serie de críticas sobre mi página de internet. Hace comentarios duros, y después pregunta: -¿Puede hacerse una foto con mi novia? Claro que puedo. Coge el teléfono móvil, aprieta un botón, no dice nada, y un minuto después aparece su novia. Nos hacemos la foto, pero la pregunta que sigue es más intrigante: -¿Puede un ciego escalar el monte Everest? -Creo que no –respondo. -¿Por qué no responde: tal vez? Ya estoy casi convencido de que tengo delante a un “optimista compulsivo.” Una cosa es que el universo entero conspire para que se cumplan nuestros sueños, otra cosa es colocarse frente a desafíos absolutamente innecesarios, que pueden acabar en accidentes fatales o en fracasos previsibles. Explico que tengo que salir por un compromiso, pero el lector no se rinde. -Los ciegos pueden escalar el Everest, la montaña más alta del mundo (8.848 metros ). No sólo pueden, sino que sé que por lo menos uno de ellos lo ha hecho. Su nombre es Erik Weihenmayer. ¿Su compromiso puede esperar? Si ha citado un nombre, puede que exista una historia interesante. Mi compromiso puede esperar, por supuesto. -En 2001, Weihenmayer lo consiguió. Y mientras tanto, la gente se queja por no tener un coche mejor, ropa más elegante, o un sueldo a la altura de sus necesidades. -¿Está usted seguro de que lo consiguió? -Busque en internet. Pero lo que me fascina es que Weihenmayer sabía exactamente lo que quería: transformó su vida en aquello que él pensaba que debía ser. Tuvo el valor de arriesgarlo todo para conseguir que el universo conspirase a su favor. 23

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Estoy de acuerdo. El lector continúa, como si mi actitud ya no le interesase más: -Si una persona sabe lo que quiere de la vida, reúne todas las condiciones para hacer que se cumpla su sueño. ¿No fue usted mismo quien lo dijo? Claro. Pero existen límites, como ciegos escalando la montaña más alta del planeta. -Y si las personas no tienen sueños, ¿qué tienen que hacer? -Pensar en algo que les gustaría estar realizando, y dar el primer paso –respondo. Sin miedo a errar. Sin miedo a herir a los que se “preocupan” por su comportamiento. -¡Eso! –dice el lector, identificando claramente por primera vez mis ideas-. En seguida nos damos cuenta de que para lograr lo que queremos es preciso correr riesgos. ¿No es eso lo que dice usted en sus libros? No sólo lo digo, sino que también procuro hacer honor a esas palabras. Pero nuestra conversación es interrumpida, ha llegado la hora de atender al compromiso que me trajo a Hamburgo. Agradezco su atención, le pido que me envíe sugerencias sobre mi página web, nos hacemos una foto más, y nos despedimos. A las tres de la mañana, regresando del evento, meto la mano en el bolso para sacar la llave de la habitación, y descubro el papel en el que había anotado el nombre. Pese a que dentro de unas horas tengo que viajar a El Cairo, enciendo el ordenador, y allí está: “El 25 de mayo de 2001, a los 32 años de edad, Erik Weihenmayer se convirtió en el primer invidente que alcanzó la cima de la montaña más alta del mundo. Este ex-monitor de gimnasio recibió el premio que otorgan ESPN e IDEA por su valor al ir más allá de los límites que su condición física permitía. Además del Everest, Erik Weihenmayer ha escalado las otras siete montañas más altas del planeta, entre ellas el Aconcagua (Argentina) y el Kilimanjaro (Tanzania)”. Si no lo creen, compruébenlo.

24

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Sobre la Inmortalidad ¿Cómo responde el ser humano a los cambios? Mal. Siempre muy mal. Uno de los mitos más difundidos en el mundo entero – el mito del vampiro – refleja esa idea. ¿Qué es un vampiro? Es alguien que, en determinado momento de su existencia, se volvió inmortal. O sea, que a partir de aquel momento su cuerpo no seguirá más el curso normal de la naturaleza; será joven para siempre, podrá vivir el tiempo que quiera, sin tener que lidiar con los problemas relacionados con la edad. Su único régimen es un poco de sangre todos los días y su único cuidado con la piel es evitar la luz del sol – pero al final, ese es un precio muy pequeño frente a todas las posibilidades de una vida eterna. Excepto por una cosa: él paró en el tiempo, pero el mundo continúa transformándose a su lado. Todo aquello a lo que estaba acostumbrado empieza a cambiar, él mismo teniendo todo el tiempo del mundo para adaptarse a esos cambios. El vampiro deseó la inmortalidad justamente porque estaba contento con el mundo en que vivía; él no tiene ningún interés en acompañar estos cambios. Imaginemos un ser humano que se hubiese transformado en vampiro al final de la Copa del Mundo de 1986. Podía fumar sin problemas en los aviones, no necesitaba quebrarse la cabeza para elegir qué canal de televisión ver – porque al final había poco para elegir. Tenía una actriz como su símbolo sexual, entendía de carburadores, luchaba por su ideal socialista, convencido que en poco tiempo la Unión Soviética tendría gobernantes más capacitados y los sueños del pueblo(llamado proletariado) serían finalmente respetados. Un buen día se enamora de una estudiante de 22 años. Admira su belleza, su entusiasmo, su idealismo. Sugiere transformarla en vampira, pero ella se recusa – vio muchas películas de terror. También está enamorada, no desea perderlo, pero le impone una única condición para seguir adelante con la relación: que él jamás chupe su sangre. El vampiro no tiene otra salida más que cumplir con su palabra. Se casa por lo civil, para evitar crucifijos mortales. Pasan veinte años – volando, pues ya tuvieron lugar otras cuatro Copas del Mundo. La antigua universitaria ahora tiene 42 años, trabaja en un banco (problemas de desempleo), o está escribiendo inútiles tesis de maestrado, doctorado, sólo para justificar su vida de estudiante. Los carburadores desaparecen de la faz de la tierra. Horrorizado, hojea una revista y ve a la actriz que era su símbolo sexual transformada en un producto híbrido, compuesto de plástica, botox, silicona, revestidos por toneladas de maquillaje en el rostro. Se siente culpable por tener 200 canales de televisión y ver apenas los mismos de siempre.

25

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

La Unión Soviética se desmoronó. Fue obligado a abandonar su amado cigarrillo, (aunque no afectase su salud y es bueno recordar que el vampiro es inmortal), porque se volvió imposible fumar, sea por causa de las leyes, sea por causa de las miradas de los vecinos en los restaurantes. Y lo que es peor: todo el mundo habla de chat, internet, iPod, rave, etc. El vampiro trata de actualizarse, pero todo parece absolutamente complicado, irritante, fuera de propósito. Mira para el ordenador como si mirase un diente de ajo – con horror e impotencia, jamás conseguirá manejar aquello, aunque lo haya intentado varias veces. Sus amigos están jubilados, pasan los días jugando a las cartas – ellos tampoco saben lidiar con el ordenador, pero no les importa, el grupo envejece junto, tienen los mismos intereses, pueden dividir experiencias. El vampiro continúa joven. Inmortal. Ahora tiene delante de sí la depresión eterna. Trata de suicidarse, saliendo a pleno sol o mirando los crucifijos, solo para descubrir que eran mitos creados por la iglesia y que no le causan ningún mal. Le resta apenas un consuelo: todavía hay una figura política sobre la cual sabe todo (porque todos los otros gobernantes del mundo entero cambiaron) Pero Fidel Castro también pasará. Y nada, absolutamente nada, restará del mundo que el vampiro tanto amó un día.

26

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Pequeñas Historias sobre Grandes Verdades En la taberna El rabino Wolf entró por casualidad en un bar. Algunas personas bebían, otras jugaban a cartas, y el ambiente parecía cargado. El rabino salió sin decir nada. Un joven fue tras él: “sé que no le ha gustado lo que ha visto,” dijo. “Allí viven los pecadores.” “Me ha gustado lo que he visto,”, respondió Wolf. “Son hombres que están aprendiendo a perderlo todo. Cuando hayan vivido la experiencia de la pérdida, sólo les quedará volverse hacia Dios. Y, a partir de ese momento, ¡qué excelentes siervos serán!”

Diez por ciento “Es muy sencillo llegar a ser como yo,” dijo el hombre más rico de Babilonia. “Basta con entender que una décima parte de lo que ganas es tuyo.” “Eso no tiene sentido,” respondió el muchacho. Es mío todo lo que gano.” “¿Acaso tú no pagas al sastre? ¿No pagas todos los días al panadero? ¿Puedes vivir siquiera un día sin gastar? Estás pagando a todo el mundo, menos a ti mismo. A partir de ahora, págate a ti mismo una décima parte de tu salario. No olvides que los caminos de la riqueza son mágicos y extraños; si cuidas bien de esa décima parte, un día tus esfuerzos serán recompensados.”

Allende el puerto Un eremita del monasterio de Sceta se acercó al abad Teodoro: “Sé cuál es el objetivo de la vida. Sé qué es lo que Dios quiere de los hombres, y conozco la mejor manera de servirle. Y, a pesar de ello, soy incapaz de hacer todo aquello que debería hacer para servir al Señor.” “Sabes que hay una ciudad al otro lado del océano,” respondió Teodoro. “Pero todavía no has encontrado el barco, no has subido tu equipaje a bordo, y no has cruzado el mar. ¿Para qué hablar de cómo es esa ciudad, y cómo debemos caminar por sus calles? Pon en práctica lo que estás diciendo, y el camino se te mostrará por sí mismo.”

27

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

A las puertas del cielo Cuando D. Enrique murió, fue derecho al cielo. Llamó con fuerza a la puerta y una voz preguntó: “¿Quién es?” “Soy D. Enrique Fernández de Valdivieso.” “Pues vete de aquí, aquí no hay lugar para dos,” dijo la voz. Y D. Enrique fue enviado al purgatorio. Pasado un tiempo, volvió, más tímido, al cielo. “¿Quién es?,” preguntó la voz. “Soy yo,” respondió D. Enrique. “Aquí no hay lugar para dos”, repitió la voz. D. Enrique volvió al purgatorio. Un día, volvió a llamar a la puerta del cielo. “¿Quién es?,” preguntó la voz. “Una pequeña parte de Dios”, respondió. Y la puerta del cielo se abrió.

Rigor y compasión En pleno invierno, el samurai llegó a presencia del maestro zen. “Me estoy muriendo de frío y de hambre, y no tengo cómo ganarme el sustento.” Compadecido, el maestro se dirigió a la estatua de Yakushi-Buda, retiró la cadena de oro que adornaba su cuello, y se la entregó al samurai. Los otros discípulos exclamaron: "¡sacrilegio!" "¿Por qué sacrilegio?", preguntó el maestro. “Habéis oído hablar de David, que comió el pan del tabernáculo cuando pasaba hambre. Cristo curaba en sábado, siempre que era necesario. Yo tan sólo puse en acción el espíritu de Buda: el amor y la misericordia pueden ahora hacer su trabajo.”

Lo que es la sabiduría Una historia sufí nos habla de un hombre que vivía en Turquía. Un día oyó hablar de un gran maestro que moraba en Persia, y que poseía el secreto de la sabiduría. 28

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Sin pensárselo dos veces, el hombre vendió sus cosas, se despidió de la familia, y se marchó en busca de aquel secreto. Después de años viajando, consiguió llegar a la cabaña donde vivía el gran maestro. Lleno de temor y respeto, se acercó y aguardó a que el sabio regresara de su paseo matutino. -Vengo de Turquía –dijo en cuanto hubo aparecido el sabio-. He venido hasta aquí sólo para hacerte una pregunta. -Bien. Puedes hacer sólo una pregunta. -Tengo que ser muy claro en lo que voy a preguntar. ¿puedo hacerlo en turco? -Puedes –dijo el sabio-. Y ya he respondido a tu única pregunta. Cualquier otra cosa que desees saber, pregunta a tu corazón; no hace falta viajar tanto para descubrir que ése es el mejor consejero que existe. Y cerró la puerta.

Por qué Dios no nos ayudó Maestro y discípulo caminan por los desiertos de Arabia. El Maestro aprovecha cada momento del viaje para enseñar al discípulo acerca de la fe. - Confía lo tuyo a Dios –decía-. Pues Él jamás abandona a sus hijos. De noche, al acampar, el Maestro le pidió al discípulo que atase los caballos a una roca cercana. El discípulo fue a la roca, pero entonces recordó lo que había aprendido aquella tarde. “El Maestro debe de estar poniéndome a prueba. En realidad, debo confiar los caballos a Dios.” Y dejó sueltos a los caballos. A la mañana siguiente, descubrió que los animales se habían escapado. Furioso, buscó al Maestro. -¡Tú no sabes nada de Dios! Ayer aprendí que debía confiar ciegamente en la Providencia , así que entregué los caballos a Dios para que los cuidara. ¡Pero han desaparecido! -Dios quería cuidar de los caballos –respondió el Maestro-. Pero, en aquel momento, necesitaba de tus manos para atarlos, y tú no se las prestaste.

29

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

¿Cómo voy a salir si está lloviendo? Cuenta una vieja historia budista que pasaba un hombre por una aldea, en pleno temporal, cuando de repente ve una casa ardiendo. Al acercarse, observa a otro hombre (la fábula utiliza una bella imagen: “con fuego hasta en las cejas”) sentado en la sala: -¡Su casa está ardiendo! –le grita. -Ya lo sé –responde el hombre desde la sala en llamas. -Entonces, ¿por qué no sale? -Porque está lloviendo. Mi madre siempre dice que la lluvia puede provocar neumonía. Zao Chi comenta sobre la fábula: "sabio es el hombre que sabe cambiar de situación cuando se ve obligado a ello. Tonto es aquél que no confía en la mano de Dios, sino sólo en las respuestas de sus semejantes.”

¿Cuál es el primer paso? Un hombre visitaba a un ermitaño que vivía cerca del monasterio de Sceta. -¿Cuál es el primer paso que debe dar quien quiere seguir el camino espiritual? – preguntó. El ermitaño lo llevó hasta un pozo y le dijo que mirase su reflejo en el agua. El hombre obedeció, pero el ermitaño empezó a tirar pequeñas piedras, haciendo que se moviese la superficie. -No podré ver claramente mi rostro si sigue tirando piedras. -Así como es imposible ver tu rostro en aguas turbulentas, es también imposible buscar a Dios si tu mente está ansiosa con la búsqueda –dijo el monje-. No hagas preguntas, simplemente sigue adelante con fe. Éste será siempre el primero y el más importante de todos los pasos.

30

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Yo No Soy Feliz Uno de los comentarios más frecuentes en cualquier entrevista es: -...y ahora que es usted una persona feliz... Lo cual provoca una inmediata reacción: -¿He dicho yo que soy feliz? No soy feliz, y la búsqueda de la felicidad, como objetivo principal, no forma parte de mi mundo. Evidentemente, como ser humano que soy, hago aquello que me gusta hacer. A causa de ello, me han internado tres veces en un hospital psiquiátrico, he pasado pocos pero terribles días en los sótanos de las dependencias militares durante la dictadura en Brasil, he perdido y he ganado amigos y amantes con la misma velocidad. En su día me metí por caminos que, si hoy pudiese volver atrás, tal vez evitaría, pero siempre había algo que me empujaba hacia delante, y desde luego no era la búsqueda de la felicidad. Lo que me interesa en la vida es la curiosidad, los desafíos, el buen combate con sus victorias y sus derrotas. Llevo encima muchas cicatrices, pero también momentos que jamás habría vivido si no me hubiese aventurado más allá; de mis límites. Me enfrento a mis temores y a mis momentos de soledad, y pienso que una persona feliz jamás pasa por eso. Pero todo ello no tiene la menor importancia: estoy contento. Y alegría no es sinónimo de felicidad (que para mí se parece más a una larga tarde de domingo, donde no existe ningún desafío), sino tan sólo el descanso que en unas pocas horas se convierte en tedio, los mismos programas de televisión al final de la tarde, la perspectiva del lunes esperándonos con su rutina. Digo todo esto porque me ha sorprendido el tema de portada de una revista americana de gran prestigio, generalmente dedicada a asuntos políticos. El tema era: “La ciencia de la felicidad: ¿está en su sistema genético?” Aparte de las cosas de siempre (tablas con estadísticas sobre países más felices o menos felices, estudios sociológicos sobre la búsqueda del sentido de la vida por parte del hombre, ocho pasos para encontrar la armonía), el artículo hacía algunas observaciones interesantes que me hicieron ver, por primera vez, que no soy el único en mi modo de pensar: Los países donde la renta per cápita está por debajo de 10.000 dólares al año, son países donde la mayoría de la gente no es feliz. Sin embargo, se descubre que, a partir de ahí, la diferencia económica ya no es tan importante. Un estudio científico realizado con las 400 personas más ricas de los Estados Unidos demuestra que estas son sólo ligeramente más felices que aquellas que ganan 20.000 dólares. Conclusión lógica: aunque es evidente que la pobreza es algo inaceptable, el viejo

31

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

dicho “el dinero no da la felicidad” es algo que se puede demostrar de modo científico en los laboratorios. La felicidad es sólo uno de los trucos que utiliza nuestro sistema genético con el fin de cumplir su único papel: la supervivencia de la especie. Así, para obligarnos a comer o a hacer el amor, es necesario asociar a ello un elemento llamado “placer.” Por mucho que la gente se declare feliz, nadie está nunca del todo satisfecho: siempre hay que conquistar a una mujer más bonita, comprar una casa más grande, cambiar de coche, desear aquello que no se tiene. También eso es una manifestación sutil del instinto de supervivencia: en el momento en que las personas se sintieran plenamente felices, nadie se atrevería a hacer nada diferente, y el mundo dejaría de evolucionar. Por eso, tanto en el plano físico (comer, hacer el amor) como en el emocional (desear siempre aquello que no se tiene), la evolución del ser humano ha dictado una regla importante y fundamental: la felicidad no puede durar. Siempre consistirá en momentos, de modo que jamás podamos acomodarnos en una poltrona y limitarnos a contemplar el mundo. Conclusión: es mejor olvidar esa idea de buscar la felicidad a toda costa, e ir en busca de cosas más interesantes, como los mares desconocidos, las personas extrañas, los pensamientos provocadores, las experiencias arriesgadas. Sólo de esa manera viviremos enteramente nuestra condición humana, contribuyendo a una civilización más armoniosa y más en paz con las otras culturas. Por supuesto, todo eso tiene un precio, pero vale la pena pagarlo.

32

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

De Igual a Igual Llegué a saber a través de mi sobrina que La Bruja de Portobello , mi último libro, ya circulaba integralmente en Internet incluso antes de estar impreso. Me quedé perplejo: ¿Cómo podía haber ocurrido algo semejante? El próximo paso, claro está, fue acudir a todos los motores de búsqueda para localizar el manuscrito, siempre sin resultado. A pesar de todo, mi sobrina me enseñó el original. Supuse que lo habría enviado una de las cinco personas a las que suelo mostrar mis textos antes de publicarlos, pero eso significaba sospechar de seres a los que quiero. Además, hace años que les envío mis manuscritos, y nunca se había dado este tipo de filtración al gran público. Tampoco era lógico responsabilizar a los editores, no teniendo éstos ningún interés en difundir gratuitamente lo que supone su fuente de ingresos. Decidí olvidarme del asunto: al fin y al cabo, Internet es verdaderamente un medio de democratizar la cultura. Pero, de todas maneras, seguí persiguiendo a mi sobrina, de 24 años, para que me contara dónde había conseguido el manuscrito. Tras mucho escabullirse, ella acabó descubriéndome un universo que yo, que llevo ya diez años navegando por la red, desconocía por completo, y que es absolutamente imposible de controlar (como explicaré al final, aunque piense que gran parte de las personas que leen este texto ya saben a qué me refiero). Y como no hay manera de luchar contra lo imposible, me limité a pedirle que me mostrara esta gigantesca telaraña. Y así fue cómo, durante cuatro horas, me metí en la piel de un “pirata” de mí mismo. Esta sobrina sostiene que no hay nada de malo en esto, que así es la cultura de Internet, que es justamente de esta manera como se está cambiando el mundo, y no con las manifestaciones antiglobalización en los foros mundiales. Pero, ¿qué es la cultura de Internet ? Según sus palabras, el acceso a la información y al placer forma parte de los derechos fundamentales de todo el mundo. Si se tiene dinero para comprar un libro, uno se lo compra y punto, ya que es mucho más agradable leer libros impresos en papel. Pero no por carecer de dinero uno tiene que renunciar a sus derechos: hay que encontrar la manera de ejercerlos. ¿De qué manera? Existe una zona extraña en la red conocida en inglés como “Peer 2 Peer”. Busqué una traducción (en un diccionario gratuito de Internet) y viene a significar, más o menos, “de igual a igual”, aunque también se conoce como “De punto a punto” o simplemente “P2P”. ¿Cómo se originó? Mi sobrina tiene la respuesta bien aprendida: Al principio la intención no era otra que satisfacer el deseo de comunicarse. Luego llegó la necesidad de conversar con varias personas a la vez. Pero conversar no bastaba: era necesario compartir la experiencia de escuchar cierta música, de leer 33

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

determinado libro, de ver la película que nos fascinó... En la época en la que ni siquiera existían leyes sobre el asunto, los bytes se intercambiaban con total libertad. Cuando finalmente la industria del entretenimiento supo de esto y se dio inicio a la represión, los jóvenes internautas se mantuvieron siempre un paso por delante. Así hasta hoy. También cambió el concepto: antes lo que interesaba era compartir con los amigos lo que se admiraba, mientras que, hoy en día, lo que se pretende es dejar a disposición de quien lo quiera algo que consideramos que debe ser compartido. Consiste más o menos en lo siguiente: yo compro un libro, me gusta, lo escaneo completo guardándolo en mi disco duro, y a la vez abro un túnel para que alguien pueda llegar hasta aquí y llevárselo. Yo, por mi parte, entro en este mismo túnel para dirigirme a ordenadores ajenos, y me llevo también todo lo que me interesa (normalmente canciones y películas). Poco a poco, este material acaba distribuido por todo el mundo, y ya no hay manera de evitar que se copie. Después de eso, mi sobrina me mostró que sólo en una de las muchas zonas de “Peer 2 Peer”, se pueden encontrar 325 obras mías, en diversas lenguas, grabadas en centenas o millares de ordenadores. Tengo que confesar que me sentí muy honrado con el descubrimiento: era la prueba de que los lectores son realmente la pieza clave en la divulgación de un trabajo, aunque esto se haga a través de medios poco convencionales. Está claro que no voy a contarle a nadie cómo se llega hasta ahí (implica toda una serie de procedimientos legales, y podría complicarme la vida). Tampoco será de utilidad escribir la expresión en los motores de búsqueda: éstos no facilitarán ningún ábrete sésamo . Pero si usted tiene en su casa alguien con menos de 18 años, sin duda esta persona ya atesora una colección de canciones que provienen de este lugar. Pregúntele a su hijo, a su nieto o a su sobrino. Pero, por favor, no le diga que yo acabo de enterarme de esto sólo ahora: le va a parecer que ya estoy demasiado viejo, y perderé un lector.

34

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Mi Tipo Inolvidable Cuando yo era niño acostumbraba leer una revista a la que mis padres estaban suscriptos; tenía una sección llamada “Mi tipo inolvidable” – donde personas comunes hablaban de otras personas comunes que habían tenido influencia en sus vidas. Claro que a aquella altura, con nueve o diez años, yo también había creado mi personaje marcante. Por otro lado, tenía seguridad de que en el decorrer de mis años este modelo iría a mudar, por lo tanto resolví no escribir a la tal revista sometiendo mi opinión (me quedo imaginando hoy, como ellos habrían recibido la colaboración de una persona con mi edad en esa época). Los tiempos pasaron. Conocí mucha gente interesante que me ayudó en momentos difíciles, que me inspiró, que me mostró caminos que eran necesarios andar. Mientras tanto, los grandes mitos de la infancia, los más poderosos; pasan por períodos de desvalorización, de polémicas, de olvido – pero permanecen, surgiendo en las ocasiones necesarias con sus valores, sus ejemplos, sus actitudes. Mi tipo inolvidable llamábase José, el hermano menor de mi abuelo. Nunca se casó, fue ingeniero durante mucho años y cuando se jubiló, resolvió vivir en Araruama, ciudad vecina de Río de Janeiro. Era allí que toda la familia iba a pasar las vacaciones con sus niños; tío José era soltero, no debía tener mucha paciencia para aquella invasión, pero era este el único momento en que podía dividir un poco de su propia soledad con los sobrinos-nietos. Era también inventor y para acomodarnos, resolvió construir una casa donde los cuartos solamente aparecían en el verano! Se apretaba un botón y del techo bajaban las paredes, de los muros salían las camas y los tocadores... y listo; cuatro dormitorios para acomodar a los recién llegados. Cuando terminaba el carnaval, las paredes subían, los muebles volvían a entrar en los muros y la casa volvía a ser un gran galpón vacío, donde acostumbraba guardar el material de su taller. Construía coches. No apenas eso, sino que hizo un vehículo especial para llevar a la familia a la Laguna de Araruama – una mezcla de jeep con tren sobre neumáticos. Íbamos al mar, convivíamos con la naturaleza, jugábamos todo el día y siempre me preguntaba: “Porqué él vive aquí solo? Tiene dinero, podría vivir en Río!”. Contaba historia sobre los Estados Unidos, donde trabajaba en minas de carbón y se aventuraba en lugares nunca antes visitados. La familia acostumbraba decir: “ Es todo mentira” Vivía vestido de mecánico, y los parientes comentaban: “Debería tener ropas mejores”. Cuando la televisión entró en Brasil, compró un aparato que colocaba en la vereda, de modo que la calle entera pudiese ver los programas. Me enseñó a amar lo que elegimos com el corazón.

35

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Me mostró la importancia de hacer lo que uno desea, independiente de lo que los otros comenten. Me acogió cuando, adolescente rebelde, tuve problemas com mis padres. Um dia él me dijo: - Inventé el hidraúlico (cambio automático de cambio de marchas en un auto). Fuí a Detroit, entré en contacto con la General Motors , me ofrecieron 10.000 dólares en la hora o 1 dólar por auto vendido con este nuevo sistema. Tomé los diez mil dólares y viví los años más fantásticos de mi vida. La familia decía: tío José vive inventando cosas, no le crean. Y, aún teniendo una gran admiración por sus aventuras, por su estilo de vida, por su generosidad, no creí en esta historia. Conté esto para el periodista Fernando Morais, apenas porque tío José era y es mi tipo inolvidable. Fernando resolvió conferir, y esto es lo que encontró (el texto está editado pues es parte de un gran artículo): “El primer cambio automático fue inventado por los hermanos Sturtevant de Boston en 1904. El sistema no funcionaba a contento porque los pesos frecuentemente se alejaban mucho. Pero fue la invención de los brasileños Fernando Iehly de Lemos e José Braz Araripe, vendida à GM en 1932, que contribuyó para el desenvolvimiento del sistema hidráulico lanzado pela GM en 1939.” Con millones de coches hidráulicos siendo producidos todos los años, la familia – que nunca acreditara en nada, y encontraba que tío José se vestía mal – hubiera quedado con una fortuna incalculable. Que bueno que él gastó sus diez mil dólares en años felices!

36

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Siempre saben lo que es mejor para cada uno Evite el reumatismo. El cienpiés decidió preguntar al sabio del bosque, un mono, cuál era el mejor remedio para el dolor de sus piernas. "Esto es reumatismo", dijo el mono, "Tienes demasiadas piernas. Necesitarías ser así como yo; con solo dos. Así raramente el reumatismo aparece”. "¿Y cómo hago para tener solo dos piernas?” "No me molestes con detalles”, respondió el mono.”Un sabio solamente da el mejor consejo, tú eres quien resolverá el problema”.

¿Puedo ayudar? En cuanto abrió la iglesia, el padre vio entrar a una mujer que se sentó en el banco de enfrente y colocó la cabeza entre las manos. Dos horas después, notó que la mujer todavía estaba allí, en la misma posición. Preocupado, decidió aproximarse: "¿Puedo hacer algo para ayudarla?”, preguntó. "No, gracias", respondió ella. “Yo ya estaba consiguiendo toda la ayuda que necesito, cuando Vd. Me interrumpió”. El jesuita Anthony Mello comenta: “En un monasterio no está escrito No hable. Está escrito: Hable sólo si puede mejorar el silencio.

Yo sé lo que es cierto. Un campesino volvía hacia su casa, cuando vio a un burro en el campo. "No soy sólo un burro”, dijo el animal. “Yo vi nacer al Mesías. Vivo desde hace dos mil años, y estoy vivo para dar este testimonio.

37

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Asustado, el campesino corrió hacia la iglesia y le contó al párroco. “Imposible”, dijo él. El campesino lo tomó por las manos y lo llevó hasta donde estaba el burro. El animal repitió todo lo que había dicho. “Repito: los animales no hablan” dijo el padre. “Pero Vd. Lo oyó!” - insistió el campesino. “¡Cómo eres de tonto! Prefieres creer en un burro que en un padre!”

Eso va a funcionar también con nosotros Una fábula del escritor libanés Mikail Naaimé puede ilustrar bien el peligro de seguir los métodos de los otros, por más nobles que parezcan ser: "Necesitamos liberarnos de la esclavitud en la que el hombre nos mantiene”, dijo un buey a sus compañeros. "Durante años hemos escuchado a los seres humanos diciendo que la puerta de la libertad está manchada con la sangre de los mártires. Vamos a descubrirla y entraremos allí con la fuerza de nuestros cuernos”. Caminaron durante días y noches por la carretera hasta que vieron una puerta toda manchada de sangre. "Esta de aquí es la puerta de la libertad” dijeron. Sabemos que nuestros hermanos fueron sacrificados aquí. Uno a uno, los bueyes fueron entrando. Y solamente allí adentro, cuando ya era demasiado tarde, fue que se dieron cuenta: era la puerta del matadero.

Decidiendo el destino ajeno Malba Tahan cuenta la historia de un hombre que encontró a un ángel en el desierto, y le dio agua. “Soy el ángel de la muerte y he venido buscarle”, dijo el ángel. “Pero como ha sido bueno, voy a prestarle el Libro Del Destino cinco minutos; podrá alterar lo que quiera"

38

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

El ángel le entregó el libro. Al hojear sus páginas, el hombre fue leyendo la vida de sus vecinos. Se quedó descontento: Estas personas no merecen cosas tan buenas, pen-só. De bolígrafo en puño, empezó a empeorar la vida de cada uno. Finalmente, llegó a la página de su destino. Vio su final trágico, pero cuando se preparaba para cambiarlo, el libro desapareció. Ya habían pasado los cinco minutos. Y el ángel, allí mismo, se llevó el alma del hombre.

39

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Las Lenguas que habla Dios Un misionero español visitaba una isla cuando se encontró con tres sacerdotes aztecas. –¿Cómo rezáis? – preguntó el sacerdote. –Sólo tenemos una oración –respondió uno de los aztecas-. Decimos: “Dios, Tú Eres tres, nosotros somos tres. Ten piedad de nosotros” –Hermosa oración –dijo el misionero-. Pero es una oración que Dios no va a oír. Os enseñaré una mucho mejor. El sacerdote les enseñó una oración católica, y siguió su camino de evangelización. Años más tarde, en el barco que lo llevaba de vuelta a España, tuvo que pasar de nuevo por aquella isla. Desde la cubierta, vio a los tres sacerdotes en la playa, e hizo un gesto de despedida. En ese momento, los tres comenzaron a caminar por el agua, en dirección a él. –¡Padre! Padre! –gritó uno de ellos, mientras se acercaba al barco–. ¡Enséñenos de nuevo la oración que Dios oye, que no la recordamos! –No importa –dijo el misionero al ver el milagro. Y entonces pidió perdón a Dios por no haber entendido antes que Él hablaba todas las lenguas. A continuación, algunas de estas oraciones:

Dhammapada (atribuida a Buda) Mejor que, en lugar de mil palabras Hubiese sólo una, pero que trajese Paz. Mejor que, en lugar de mil versos Hubiese sólo uno, pero que mostrase lo Bello. Mejor que, en lugar de mil canciones Hubiese sólo una, pero que esparciese alegría.

40

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Mevlana Jalaluddin Rumi, siglo XIII Allí afuera, además del acierto y la equivocación, existe un campo inmenso. Nos encontraremos allí.

Profeta Mahoma, siglo VII ¡Oh, Alá! Yo te consulto porque Tú lo sabes todo, y conoces incluso aquello que está escondido. Si lo que estoy haciendo es bueno para mí y para mi religión, para mi vida ahora y después, haz que el trabajo sea sencillo y bendito. Si lo que estoy haciendo ahora es malo para mí y para mi religión, para mi vida ahora y después, aléjame de ese trabajo.

Jesús de Nazaret, San Mateo 7;7-8 Pedid y se os dará; Buscad y hallaréis; Llamad y se os abrirá. Porque todo el que pide, recibe; el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá.

Plegaria judía para la Paz Vamos a la montaña del Señor, donde podremos caminar con Él. Transformemos nuestras espadas en arados, y nuestras lanzas en podaderas. Que ninguna nación levante su espada contra otra, y que jamás aprendamos el arte de la guerra. Y nadie debe temer a su vecino, porque así lo ordenó el Señor.

41

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Lao Tse, China - siglo VI a. de C. Para que haya paz en el mundo, es necesario que las naciones vivan en paz. Para que haya paz entre las naciones, las ciudades no deben levantarse una contra otra. Para que haya paz en las ciudades, los vecinos deben entenderse. Para que haya paz entre los vecinos, hace falta que reine la armonía en el hogar. Para que haya paz en casa, hay que encontrarla en el corazón de cada uno.

42

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Diálogos con el Maestro – Mirando Atrás Nunca he sido partidario de revisar el pasado; pienso que el presente es resultado de todo lo vivido, y que basta con fijarse en nuestra manera habitual de proceder para darnos cuenta de lo que nos hace agraciados y de lo que hay que evitar y corregir porque nos lleva a la desgracia. Sin embargo, ahora que el periodista Fernando Morais está escudriñando en mi vida, he decidido echar un vistazo yo también a mis anotaciones de otra época: las que tomé, en su mayoría, entre 1982 y 1986, a partir de mis conversaciones con J., mi amigo y maestro en la Tradición de RAM. Hace ya muchos años, publiqué algunos de nuestros diálogos en esta columna, y aunque tuvieron una excelente acogida por parte de los lectores, no continué, considerando que con lo publicado ya bastaba. No obstante, al releer algunos de estos cuadernos míos cubiertos de polvo (dejé hace tiempo esta costumbre de escribir notas y diarios) he descubierto cosas muy especiales. En las próximas cuatro columnas voy a transcribir los pasajes que me han parecido más interesantes. Cierta tarde, en una cafetería de Copacabana, tras toda una semana de prolongadas prácticas espirituales sin resultado alguno, le pregunto: -A menudo pienso que Dios me ignora, aunque sepa que Lo tengo a mi lado. ¿Por qué es tan difícil establecer un diálogo con la Divinidad ? -Por una parte, conocemos la importancia de buscar a Dios. Por otra, la vida nos aleja de Él, bien porque nos sentimos ignorados por la Divinidad , o bien porque estamos enfrascados en nuestro día a día. Esto genera además un gran sentimiento de culpa: podemos llegar a pensar que estamos dejando la vida demasiado de lado por causa de Dios, o creer que, por culpa de la vida, renunciamos a Dios más de lo que deberíamos. Pero esto que parece una alternativa inevitable, no es más que un espejismo: Dios está en la vida, y la vida está en Dios. Si conseguimos penetrar en la armonía sagrada de nuestra vida diaria, nos mantendremos en el buen camino, porque nuestras tareas cotidianas son también nuestras tareas divinas. -Pero, ¿no hay algún tipo de ejercicio práctico que pueda realizar para llegar a creer que es verdad lo que dices? -Procura tranquilizarte. Al comenzar nuestro camino espiritual, queremos hablar constantemente con Dios, y acabamos por no escuchar lo que Él nos tiene que decir. Por eso tranquilizarse siempre es bueno. No resulta fácil, porque tenemos una tendencia natural a querer actuar, y a actuar de la mejor manera posible, y pensamos que conseguiremos mejorar espiritualmente si trabajamos sin cesar. -¿Me estás diciendo que debo mantenerme pasivo y no intentar superarme?

43

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

-Depende de cómo entiendas tu trabajo. Nos puede parecer que todo lo que la vida nos ofrece es repetir mañana lo que hemos hecho hoy y lo que hicimos ayer. Pero, si prestamos atención, nos daremos cuenta de que ningún día es igual a otro. Cada mañana esconde una bendición, un regalo sólo para este día, que no se puede guardar ni reutilizar más adelante. Si no aprovechamos hoy este milagro, va a perderse sin remedio. -Pero, ¿no hay un método seguro para conseguir dialogar con la Divinidad , como, por ejemplo, la meditación? ¿O mediante el esfuerzo personal de intentar mejorar cada día? -Tu pregunta demuestra que eres una persona comprometida con una idea, y basta con mantener siempre presente la esencia de esta pregunta para que todo acabe encajando de manera natural. Las condiciones ideales que buscas no existen. Ciertos defectos nunca podrán eliminarse. El truco consiste en saber que, a pesar de todos tus defectos, existe una razón para que estés aquí, y tú tienes que estar a la altura. »Intenta ir más allá de los límites a los que estás acostumbrado. Sé, por diez minutos al día, la persona que siempre has querido ser. Si tu problema es la timidez, toma la iniciativa en la conversación. Si el problema es la culpa, considérate aceptado y comprendido. Si te parece que el mundo te ignora, procura conscientemente ser el centro de todas las miradas. Vas a pasar por alguna que otra situación complicada, pero al final merece la pena. »Quien, por diez minutos al día, consigue ser lo que soñó de sí mismo, ya está realizando un gran progreso. Decidí provocarlo citando un texto budista que habla sobre las seis dificultades de vivir en una casa: da trabajo construirla, aún más trabajo da pagarla, hay que repararla constantemente, el gobierno la puede confiscar, siempre está llena de visitas y huéspedes no deseados, y sirve de escondrijo para actos reprobables. Según el mismo escrito, existen seis ventajas de vivir bajo un puente: se puede encontrar fácilmente, el río nos enseña lo pasajera que es la vida, no nos despierta una sensación de codicia, no necesita cerca, siempre pasa por allí alguien nuevo para conversar, y no hace falta pagar alquiler. Acabé diciendo que se trataba de una bonita filosofía pero que, al menos en mi país, cuando vemos personas viviendo bajo los puentes o viaductos, llegamos a la conclusión clarísima de que este texto está equivocado. J. respondió: -Es verdad que el pensamiento es bonito, y también es cierto que, en nuestro contexto, está muy equivocado. Sin embargo, tampoco debemos por eso alimentar

44

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

nuestra culpa. Nos llegamos a sentir culpables por todo lo que somos, inclusive por nuestro salario. Todo sirve de excusa para sentir culpa: nuestras opiniones y experiencias, nuestros deseos ocultos y nuestra manera de hablar, y hasta el hecho de tener determinados padres y hermanos. »¿Y cuál es el resultado? La paralización. Nos da vergüenza hacer cualquier cosa diferente a lo que los otros esperan. No exponemos nuestras ideas, tampoco pedimos ayuda. Nos justificamos diciendo: “Jesús sufrió, y el sufrimiento es necesario”. »No obstante, aunque Jesús pasó por muchas situaciones de sufrimiento, nunca pretendió permanecer anclado a ellas. No se debe disculpar la cobardía con argumentos de este tipo, o el mundo entero se quedará bloqueado. Por eso mismo, si ves a alguien bajo un viaducto, ve a ayudarlo, porque forma parte de tu mundo. -¿Y qué se puede hacer para cambiar eso? -Ten fe. Cree que es posible, y empezará a cambiar toda la realidad que te rodea. -Nadie puede asumir esta tarea en solitario, y veo que la mayoría de las personas no tiene fe suficiente. -A veces criticamos la falta de fe de los otros. No somos capaces de entender las circunstancias en las que se perdió esta fe, ni intentamos aliviar la miseria de nuestro hermano, cuando justamente esta extrema pobreza genera a su vez cierta rebeldía contra Dios e incredulidad en el poder divino. »En el siglo XIX, el humanista Robert Owen recorría el interior de Inglaterra hablando de Dios. En aquella época era frecuente recurrir a la mano de obra infantil en trabajos pesados, y Owen se detuvo cierta tarde en una mina en la que un chaval de doce años, desnutrido, cargaba un pesado saco de carbón. »-Estoy aquí para ayudarte a hablar con Dios- le dijo Owen. »-Muchísimas gracias, pero no conozco a este señor. Debe de trabajar en otra mina- fue la respuesta del chico. ¿Cómo pretender que un niño, en estas condiciones, pudiese creer en Dios? -Devuelvo la pregunta: ¿Cómo podría ser esto posible? -Además de fe, debes tener paciencia. Comprende que no estás solo al desear que la Justicia Celeste se manifieste también en esta Tierra. En la Edad Media , las catedrales góticas eran construidas por varias generaciones. Este esfuerzo prolongado ayudaba a sus participantes a organizar el pensamiento, a agradecer y a soñar. Hoy el romanticismo ya no existe, pero el deseo de construir permanece

45

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

en muchos corazones. Es cuestión apenas de mantenerse abierto para acabar encontrándose con las personas adecuadas.

46

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Diálogos con el Maestro - Organizando la Búsqueda Prosigo aquí con la transcripción de unos cuantos trechos de las conversaciones que mantuve con J, mi amigo y maestro en la Tradición de RAM, y que recogí en algunos cuadernos entre 1982 y 1986. En esta época, recuerdo, pedía consejo continuamente sobre cualquier decisión que debiera tomar. J. normalmente callaba, hasta que un día me dijo: -Las personas que nos rodean en nuestro día a día nos pueden dar pistas muy importantes sobre los pasos que debemos dar. Pero para eso es preciso discernir aguzando la mirada y afinando el oído, porque los que responden demasiado aprisa no suelen ser muy de fiar. »Resulta peligroso pedir consejo. Dar uno es algo muy arriesgado, si tenemos un mínimo de sentido de la responsabilidad. Si alguien necesita ayuda, puede ser mejor que observe cómo otras personas han conseguido resolver (o no) sus propios problemas. A menudo nuestro ángel emplea los labios de alguien próximo para decirnos algo, pero esta respuesta suele llegar en un momento inesperado, cuando no estamos permitiendo que nuestras preocupaciones oscurezcan el milagro de la vida. »Dejemos que nuestro ángel hable como suele hacerlo: cuando lo juzgue oportuno. Los consejos no son más que teoría, mientras que vivir es algo bien diferente. A continuación me contó una sabrosa historia: El maestro Kais caminaba con sus discípulos por el desierto, cuando se encontró con un ermitaño que estaba allí hace años. Inmediatamente, los discípulos comenzaron a acribillarlo con preguntas sobre el universo, pero acabaron por descubrir que este hombre no era tan sabio como aparentaba. Comentando esto con Kais, el maestro respondió: -No vayáis nunca a consultar a un hombre preocupado, aunque normalmente sea un buen consejero. Tampoco pidáis nunca ayuda a un orgulloso, por muy inteligente que parezca. Tanto las preocupaciones como la vanidad turban el conocimiento. Pero ante todo, desconfiad del que vive en soledad: con frecuencia no está allí por haber renunciado a todo, sino por su incapacidad para vivir con los demás. ¿Qué tipo de sabiduría podemos esperar de alguien así? Después J. se fue al aeropuerto y yo me quedé pensando sobre nuestra charla. Yo necesitaba ayuda, pues estaba repitiendo los mismos errores una y otra vez.

47

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Mi vida giraba presa alrededor de viejos problemas. Cada cierto tiempo, me deparaba con situaciones ya conocidas, cruzándose una vez más en mi camino. Esto me deprimía. Me daba la sensación de que era incapaz de avanzar. Resolví entrar en una cafetería que aún hoy frecuento, y permanecer allí observando todo lo que ocurría a mi alrededor. No encontré nada, absolutamente nada nuevo, y empecé a sentirme abandonado. Finalmente, estiré la mano hacia un periódico que alguien se había dejado en la mesa de al lado, y me puse a hojearlo un poco al azar. Descubrí allí una reseña sobre un antiguo título de Gurdieff que acababa de ser relanzado. El crítico citaba un pasaje del libro: La fe consciente es libertad. La fe instintiva, esclavitud. Y la fe mecánica es locura. La esperanza consciente es fuerza. La esperanza emocional, cobardía. Y la esperanza mecánica es un mal. El amor consciente llama al amor. El amor emocional, lo inesperado. Y el amor mecánico llama al odio. Allí se encontraba la respuesta: los mismos temas (fe, esperanza, amor) cada uno con sus matices, comportando siempre distintas consecuencias. Comprendí finalmente que la repetición de las experiencias tenía una finalidad: enseñar al ser humano lo que aún no sabe. Desde este día, siempre busco una solución diferente para cada lucha repetida, y, de esta manera, poco a poco he ido hallando mi camino. Cuando volvimos a encontrarnos, le pregunté qué debía hacer para organizar un poco mi búsqueda espiritual, que parecía no llevar a ningún sitio. Esto es lo que me respondió : -No quieras ser siempre tan coherente. Descubre la alegría de sorprenderte a ti mismo. Ser coherente supone tener que llevar siempre una corbata conjuntada con los calcetines. También se deben mantener mañana las mismas opiniones que se tenían hoy... ¡Eso es ignorar el movimiento del mundo!

48

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

»Mientras no hagas mal a nadie, cambia de opinión de vez en cuando, y no te avergüences por contradecirte: estás en tu derecho. No importa lo que piensen los demás, porque lo pensarán de todas formas. -Pero estamos hablando de fe. -Exacto. Continúa con lo que haces, pero intenta poner amor en cada gesto: esto bastará para organizar tu búsqueda. No solemos dar valor a lo que hacemos todos los días, pero esto es lo que transforma el mundo que nos rodea. Pensamos que la fe es un trabajo de gigantes, pero si leemos algunas páginas de la biografía de cualquier santo, nos daremos cuenta de que era una persona absolutamente común, con la particularidad de que decidió firmemente dividir con los demás lo mejor de sí mismo. »Son muy diversas las emociones que pueden impulsar el corazón del hombre a emprender el camino de la espiritualidad. El motivo puede ser “noble” (como la fe, el amor al prójimo o la caridad), pero también puede reducirse a un capricho, como el miedo a la soledad, la curiosidad, o el temor a la muerte. »Nada de esto importa. El verdadero camino espiritual es más fuerte que las razones que nos condujeron a él, y poco a poco acaba imponiéndose, con amor, disciplina y dignidad. Llega un momento en el que miramos atrás, recordamos el inicio de nuestra jornada, y nos reímos de nosotros mismos en aquel entonces. En definitiva, fuimos capaces de crecer, a pesar de la banalidad de los motivos iniciales que nos llevaron al camino. -¿Pero cómo puedo saber si, por lo menos, estoy recorriendo este camino con amor y dignidad? -Dios suele emplear la soledad para enseñarnos algo acerca de la convivencia. A veces usa la rabia para que podamos comprender el infinito valor de la paz. En otras ocasiones, con el tedio quiere mostrarnos la importancia de dejarse llevar por la aventura. »Dios suele emplear el silencio para enseñarnos algo acerca de la responsabilidad de lo que decimos. A veces usa el cansancio para que podamos comprender el valor del despertar. En otras ocasiones, con la enfermedad quiere mostrarnos la importancia de tener buena salud. »Dios suele emplear el fuego para enseñarnos algo acerca del agua. A veces usa la tierra para que podamos comprender el valor del aire. En otras ocasiones, con la muerte quiere mostrarnos la importancia de la vida. -Pero, ¿qué hacer con la sensación de culpa que todos tenemos?

49

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

-En uno de los más trágicos momentos de la crucifixión, uno de los ladrones se da cuenta de que el hombre que muere a su lado es el Hijo de Dios. “Señor, acuérdate de mí cuando entres en el Reino de los Cielos”, dice el ladrón. “En verdad te digo, que hoy estarás conmigo en el Paraíso”, responde Jesús, haciendo del bandido el primer santo de la Iglesia Católica : San Dimas. »No sabemos por qué razón Dimas fue condenado a muerte. En la Biblia , él confiesa su culpa, reconociendo que lo crucifican por los crímenes cometidos. Podemos incluso suponer que había realizado algo cruel o tenebroso que justificase para los jueces semejante final. A pesar de todo esto, en los últimos minutos de su existencia, un acto de fe lo redime, y lo glorifica. »Acuérdate de este ejemplo cuando, por la razón que sea, te sientas incapaz de proseguir

50

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Tiros Certeros De una madre a su hija En todo el mundo no hay nadie como yo. Soy dueña de mi cuerpo, mis pensamientos, mis ideas; me pertenecen las imágenes que ven mis ojos, y tengo que saber escogerlas. Poseo mis propias fantasías, mis sueños, esperanzas y miedos. Dado que soy dueña de mí misma, tengo que conocerme íntimamente. Hay aspectos de mí que me confunden, otros que desconozco. Sin embargo, esté o no de acuerdo con todo lo que soy, esto es auténtico, y representa el momento en el que vivo. De un obispo anglicano Cuando era joven y libre, soñaba con cambiar el mundo. Al alcanzar la madurez, descubrí que el mundo no cambiaría, y decidí transformar mi país. Después de muchos esfuerzos, acabé dándome cuenta de que también esto era imposible. En los últimos años de mi vida, intenté cambiar a mi familia, pero ellos siguieron siendo como eran. Ahora, en mi lecho de muerte, descubro que mi verdadera misión consistía en cambiarme a mí mismo. Si lo hubiera hecho, sería capaz de haber cambiado a mi familia. Entonces, con un poco de suerte, este cambio habría afectado a mi país y, quién sabe, quizá al mundo entero. Midrach Rabba sobre el Eclesiastés Cuando el hombre viene al mundo, tiene las manos siempre cerradas, como si estuviera intentando decir: el mundo entero es mío, y conseguiré agarrarlo. Cuando el hombre se va del mundo, tiene las manos siempre abiertas, como si estuviera intentando decir: no tengo nada en mi poder, lo único que puedo llevarme son mis recuerdos, lo único que puedo dejar son mis ejemplos. Kahlil Gibran para Mary Haskell Los dos estamos intentando alcanzar los límites de nuestra existencia. Los grandes poetas del pasado siempre se entregaban a la vida. Ellos no buscaban algo en concreto, ni intentaban revelar secretos: simplemente dejaban que sus almas fuesen arrebatadas por las emociones. La gente siempre busca seguridad, y a veces la encuentra: pero la seguridad es un fin en sí mismo, y la Vida no tiene fin. Los poetas no son aquéllos que escriben poesía, sino todos los que tienen el corazón lleno del espíritu sagrado del Amor.

51

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Epicteto para sus discípulos Dos cosas pueden suceder cuando nos encontramos con alguien: o bien nos hacemos amigos, o bien intentamos convencer a esa persona para que acepte nuestras convicciones. Lo mismo sucede cuando la brasa encuentra otro trozo de carbón: o bien comparte su fuego con él, o bien es sofocada por su tamaño, y termina extinguiéndose. Como por lo general nos sentimos inseguros en el primer contacto, nos protegemos con la indiferencia, la arrogancia, o la excesiva humildad. El resultado es que dejamos de ser quienes somos, y las cosas pasan a estar orientadas a un extraño mundo que no nos pertenece. Kandinsky sobre sus cuadros Pintar es un arte. Es un arte y un poder que debe estar orientado al crecimiento del alma. Si el arte no cumple esta función, permanecerá sin puente el abismo que nos separa de Dios. El artista debe su talento a Dios, y tiene que saldar esa deuda. Para ello, tiene que trabajar duro, saber que es libre en su arte, pero no en su compromiso con la vida. Todo lo que siente y piensa forma parte de la materia prima con la que mejorará la atmósfera espiritual que lo envuelve. La belleza, sea en el arte, sea en una mujer, no puede ser vacía. Tiene que estar al servicio del hombre y del mundo.

52

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Historias sobre la Arrogancia La Arrogancia del Poder Maestro y discípulo conversaban en una esquina, cuando una anciana los abordó: "¡Apártense de delante de mi escaparate!,” gritó. “¡Están estorbando a mis clientes!” El maestro pidió disculpas, y cambió de acera. Continuaban la conversación, cuando se les acercó un policía. "Necesitamos que se aparte de esta acera,” dijo el policía. “El conde va a pasar por aquí dentro de poco”. "Que el conde pase por el otro lado de la calle,” respondió el maestro, sin moverse de su sitio. Después se giró a su discípulo: "No lo olvides: no seas nunca arrogante con los humildes, ni humilde con los arrogantes”.

La Arrogancia de la Santidad El monje zen había pasado diez años meditando en su cueva, intentado descubrir el camino de la Verdad. Una tarde, mientras oraba, se le acercó un mono. El monje intentó concentrarse. El mono, sin embargo, se le acercó despacito y le quitó la sandalia. -¡Maldito mono! – dijo el monje - ¿por qué has venido a perturbar mis oraciones? -Tengo hambre – dijo el mono. -¡Largo de aquí! ¡Estorbas mi comunicación con Dios! -¿Cómo quieres hablar con Dios, si no eres capaz de comunicarte con los más humildes, como yo? – dijo el mono. Y el monje, avergonzado, le pidió disculpas.

La Arrogancia de la Fuerza 53

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

La aldea estaba amenazada por una tribu de bárbaros. Los habitantes fueron abandonando sus casas, y huyeron hacia un lugar más seguro. Al final del año, todos habían partido, excepto un grupo de jesuitas. El ejército bárbaro entró en la ciudad sin encontrar resistencia e hizo una gran fiesta para celebrar la victoria. En mitad de la comida, apareció un padre jesuita. “Habéis entrado aquí y habéis echado fuera la paz. Os pido por favor que os vayáis sin demora”. "¿Por qué no has huido todavía?,” gritó el jefe bárbaro. “¿No ves que puedo atravesarte con mi espada sin siquiera pestañear?” El padre respondió con calma: "¿No ves que yo puedo ser atravesado por una espada sin siquiera pestañear?” Sorprendido por tan gran serenidad ante la muerte, el jefe bárbaro y su tribu abandonaron el lugar al día siguiente.

La Arrogancia de la Envidia En el desierto de Siria, decía Satanás a sus discípulos: “el ser humano siempre está más preocupado por desear el mal a los otros que en hacerse el bien a sí mismo”. Y para probar lo que decía, decidió tentar a dos hombres que descansaban allí cerca. "He venido para hacer realidad tus deseos,” le dijo a uno de ellos. “Puedes pedir lo que quieras, que te será dado. Tu amigo recibirá lo mismo que tú, pero el doble”. El hombre permaneció largo tiempo en silencio. Finalmente, dijo: "Mi amigo está contento, porque obtendrá el doble que yo, sea cual sea mi deseo. Pero he conseguido prepararle una trampa: mi deseo es que me dejes ciego de un ojo”.

54

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

El Guerrero de la luz y la Estrategia Una espada puede durar poco; pero un guerrero necesita durar mucho. Por eso no se deja engañar por su propia capacidad y evita ser tomado por sorpresa. Él le da a cada cosa el valor que ella merece tener. Muchas veces, frente a asuntos graves, el demonio sopla en su oído: “no te preocupes con esto, porque no es serio.” Otras veces, ante de cosas sin importancia, el demonio le dice: “tú necesitas dedicar toda tu energía para resolver esta situación” El guerrero no escucha lo que el demonio le está diciendo. Él es el maestro de su espada.

Atención con el aliado Un guerrero no anda con quien le quiere hacer mal y tampoco es visto en compañía de aquellos que le desean “consolar". Evita a quien está a su lado solamente en caso de derrota. Estos falsos amigos quieren probar que la debilidad compensa. Siempre traen malas noticias. Siempre tratan de destruir la confianza del guerrero – bajo el mando de la “solidaridad”. Cuando lo ven herido se deshacen en lágrimas, pero en el fondo de sus corazones, están contentos porque el guerrero perdió su batalla. No entienden que esto es parte del combate. Los verdaderos compañeros del guerrero están a su lado en todos los momentos, en las horas difíciles y en las horas fáciles.

Negociando con el enemigo Cuando el momento del combate se aproxima, el guerrero de la luz está preparado para todas las eventualidades. Analiza cada posibilidad y pregunta: Qué haría yo si tuviese que luchar conmigo mismo?” De esta manera descubre sus puntos flacos.

55

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

En este momento, el adversario se aproxima; trae la bolsa llena de promesas, tratados, negociaciones. Tiene propuestas tentadoras y alternativas fáciles. El guerrero analiza cada una de las propuestas; también busca un acuerdo, pero sin perder la dignidad. Si evita el combate no lo hará porque fue seducido – sino porque encontró que era la mejor estrategia. Un guerrero de la luz no acepta regalos de su enemigo.

En la defensa y en el ataque El guerrero toma cuidado con las personas que creen que pueden controlar el mundo, determinar sus propios pasos y están seguras de conocer el camino. Ellas están siempre tan confiadas en su propia capacidad de decidir que no perciben la ironía con la que el destino escribe la vida de cada uno. El guerrero de la luz tiene sueños. Sus sueños le llevan adelante pero él jamás comete el error de pensar que el camino es fácil y la puerta ancha. Sabe que en el Universo funciona como funciona la alquimia: solve et coagula, decían los maestros. ”Concentra y dispersa tus energías, de acuerdo con la situación.” Existen momentos de actuar, y momentos de aceptar .

Frente a la derrota El guerrero de la luz sabe perder. Él no trata la derrota como algo indiferente, usando frases como “bueno, esto no era tan importante”, o “la verdad, yo no quería esto mismo”. Acepta la derrota como uma derrota, y no trata de transformarla em victoria o experiencia. Le amarga el dolor de las heridas y la indiferencia de los amigos, la soledad de la pérdida. En estos momento se dice a si mismo: “luché por algo y no lo conseguí. Perdí mi primera batalla.” Esta frase le da fuerzas. Él sabe que nadie gana siempre – pero los valientes siempre ganan al final.

56

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

En el Camino de Santiago, 1986 “Esta nube tiene que acabar,” pensaba yo mientras me afanaba por descubrir las marcas amarillas en las piedras y en los árboles del Camino. Hacía casi una hora que apenas había visibilidad, y yo seguía cantando, para alejar el miedo, mientras esperaba que sucediera algo extraordinario. Envuelto en tinieblas, solo en aquel ambiente irreal, comencé una vez más a ver el Camino de Santiago como si fuese una película, en el momento en que se ve al héroe hacer lo que nadie más haría, mientras los espectadores piensan que esas cosas sólo pasan en el cine. Pero allí estaba yo, viviendo esa situación en la vida real. El bosque se tornaba más y más silencioso, y la oscuridad empezó a clarear. Podía ser que estuviera llegando al final, pero aquella luz confundía mis ojos y pintaba todo a mi alrededor de colores misteriosos y aterradores. De repente, como en un espectáculo de magia, la oscuridad se desvaneció por completo. Y frente a mí, clavada en lo alto de la montaña, estaba la Cruz. Mir é a mi alrededor, vi el mar de nubes del que había salido, y otro mar de nubes muy por encima de mi cabeza. Entre estos dos océanos, los picos de las montañas más altas y la montaña del Cebreiro, con la Cruz. Sentí un gran deseo de rezar. A pesar del deseo, no conseguí decir nada. A un centenar de metros más abajo, en una aldea de quince casas y una pequeña iglesia empezaron a encenderse las luces. Por lo menos tenía donde pasar la noche. Un cordero descarriado subió al monte y se puso entre la cruz y yo. Me miró, un poco asustado. Durante mucho tiempo seguí mirando al cielo casi negro, a la cruz, y al cordero blanco a sus pies. – Señor –dije, finalmente-. Yo no estoy clavado a esta cruz, y tampoco Te veo a Ti en ella. Esta cruz está vacía y así debe permanecer para siempre, porque el tiempo de la Muerte ya pasó. Esta cruz era el símbolo del Poder infinito que todos tenemos, clavado y muerto por el hombre. Ahora este Poder renace para la vida, porque he recorrido el camino de las personas comunes, y en ellas he encontrado Tu propio secreto. También Tú recorriste el camino de las personas comunes. Viniste a enseñarnos de cuánto éramos capaces, y nosotros no quisimos aceptarlo. Nos mostraste que el Poder y la Gloria estaban al alcance de todos, y esta súbita visión de nuestra capacidad fue demasiado para nosotros. Te crucificamos no por ingratitud para con el hijo de Dios, sino porque teníamos mucho miedo de aceptar nuestra propia capacidad. Con el tiempo y con la tradición, Tú volviste a ser sólo una distante divinidad, y nosotros volvimos a nuestro destino de hombres. “No hay pecado alguno en ser feliz. Media docena de ejercicios y un oído atento bastan para conseguir que un hombre haga realidad sus sueños más inalcanzables.”

57

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

El cordero se levantó y yo lo seguí. Ya sabía adónde me llevaba, y a pesar de las nubes, el mundo se había vuelto transparente para mí. Aunque no pudiese ver la Vía Láctea en el cielo, tenía la certeza de que existía y mostraba a todos el Camino de Santiago. Seguí al cordero, que caminó en dirección a aquella aldea, llamada también Cebreiro, como el monte. Allí, en cierta ocasión tuvo lugar un milagro, el milagro de transformar lo que uno hace en algo en lo que uno cree. El Secreto de mi espada y del Extraño Camino de Santiago. Mientras descendía la montaña, recordé la historia. En un día de gran tormenta, un campesino de un pueblo cercano subió al Cebreiro para oír misa. Celebraba esta misa un monje casi sin fe, que despreció interiormente el sacrificio del campesino. Pero en el momento de la consagración, la hostia se transformó en la carne de Cristo, y el vino en su sangre. Las reliquias siguen allí, guardadas en aquella pequeña capilla, un tesoro mayor que toda la riqueza del Vaticano. Fui a la pequeña capilla, construida por el campesino y por el monje, que había empezado a creer en lo que hacía. Nadie sabe quiénes eran. Dos lápidas sin nombre en el cementerio de al lado marcan el lugar donde están enterrados sus huesos. Pero es imposible saber cuál es la tumba del monje y cuál la del campesino. Porque, para que sucediera el milagro, era preciso que las dos fuerzas libraran el Buen Combate. Desde entonces, cada vez que me enfrento a un desafío importante, recuerdo la historia del milagro del Cebreiro. A la fe, a veces, hay que provocarla para que se pueda manifestar. Y este año estoy conmemorando los veinte años de la peregrinación que cambió mi vida. La próxima semana, el día 25 de julio, se celebra el día de Santiago de Compostela. Si pueden, eleven una plegaria por él.

58

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

El Hombre que hacía caso de sus Sueños Nací en la Casa de Salud São José, en Rio de Janeiro. Como fue un parto bastante complicado, mi madre me consagró al santo, pidiéndole que me ayudase a vivir. José se convirtió en un punto de referencia para mi vida, y desde 1987, el año siguiente a mi peregrinación a Santiago de Compostela, cada 19 de marzo doy una fiesta en su homenaje. Invito a amigos, personas trabajadoras y honestas, y, antes de comer, rezamos por todos aquellos que intentan mantener la dignidad en aquello que hacen. Rezamos también por los que se encuentran sin empleo, sin ninguna perspectiva de futuro. En la pequeña introducción que hago antes de la oración, suelo recordar que, de las cinco veces que la palabra “sueño” aparece en el Nuevo Testamento, cuatro se refieren a José, el carpintero. En todos estos casos, un ángel intenta convencerlo de que haga justo lo contrario de lo que pensaba hacer. El ángel le pide que no abandone a su mujer aunque ésta esté embarazada. Él podría haber dicho algo como “qué pensarán los vecinos.” Pero vuelve a casa y cree en la palabra revelada. El ángel lo envía a Egipto. Y su respuesta podría haber sido: “pero si estoy establecido aquí como carpintero, tengo mi clientela; no puedo dejarlo todo de lado ahora.” Sin embargo, coge sus cosas y parte en dirección a lo desconocido. El ángel le pide que vuelva de Egipto. Y de nuevo José podría haber pensado: “¿justo ahora que he conseguido estabilizar de nuevo mi vida, y que tengo una familia que mantener?" Al contrario de lo que manda el sentido común, José hace caso de sus sueños. Sabe que tiene un destino que cumplir, que es el destino de casi todos los hombres en este planeta: proteger y mantener a su familia. Como millones de Josés anónimos, procura hacer su trabajo lo mejor que sabe, aun teniendo que hacer cosas que están muy lejos de su comprensión. Más tarde, tanto la mujer como uno de los hijos se convierten en las grandes referencias del Cristianismo. El tercer pilar de la familia, el trabajador, es recordado sólo en los belenes de Navidad, o por aquéllos que tienen una devoción especial por él, como es mi caso, y como es el caso de Leonardo Boff, para quien escribí el prefacio de su libro sobre el carpintero. Reproduzco a continuación parte de un texto del escritor Carlos Heitor Cony (espero que sea suyo, porque lo encontré en internet): “Cada dos por tres la gente se extraña de que yo, que me declaro agnóstico y no acepto la idea de un Dios filosófico, moral o religioso, sea devoto de algunos santos de nuestro calendario tradicional. Dios es un concepto o una entidad demasiado distante para mis recursos e incluso para mis necesidades. Pero los santos, precisamente porque 59

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

fueron seres de carne y hueso, con los mismos cimientos de barro de los que yo fui hecho, merecen más que mi admiración. Merecen también mi devoción. “San José es uno de ellos. Los evangelios no registran ni una sola palabra suya, solamente gestos, y una referencia explícita: "vir justus". Un hombre justo. Como se trataba de un carpintero, y no de un juez, se deduce que José era, por encima de todo, bueno. Bueno como carpintero, bueno como esposo, bueno como padre de un niño que marcaría la historia del mundo.” Bellas palabras de Cony. Y yo, muchas veces, leo aberraciones del tipo: “Jesús fue a la India para aprender con los maestros del Himalaya.” Para mí, todo hombre puede transformar en sagrada la tarea que la vida le ha encomendado, y Jesús lo aprendió cuando José le enseñó a hacer mesas, sillas, camas. Me gusta imaginar que la mesa en la que Cristo consagró el pan y el vino la había hecho José, porque así estaría allí la mano de un carpintero anónimo, que se ganaba la vida con el sudor de su frente y, justo por eso, permitía que los milagros se manifestasen.

60

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Los Secretos del Sótano Una vez al año viajo a la abadía benedictina de Melk, en Austria, para participar en los Encuentros Waldzell, una iniciativa de Gundula Schatz y Andreas Salcher. Allí pasamos todo el fin de semana, en una especie de retiro, en compañía de premios Nobel, científicos, periodistas, dos decenas de jóvenes, y algunos invitados. Cocinamos, paseamos por los jardines del conjunto monumental (el cual inspiró El Nombre de la Rosa, de Umberto Eco), y conversamos de forma distendida sobre el presente y el futuro de nuestra civilización. Los hombres duermen en el monasterio, y las mujeres se hospedan en hoteles próximos. En el encuentro de 2005 hubo todo lo que cabía esperar, y destacaron los apasionados debates, con momentos de alegría y otros de confrontación. Casi todos los invitados volvieron a sus países la noche del domingo. Pero como al día siguiente los organizadores y yo teníamos que participar en la inauguración de la parte austríaca del Camino de Santiago, y teníamos que pernoctar en la abadía, el padre Martín nos invitó a comer en su “lugar secreto.” Descendimos, excitados, a los subterráneos del antiguo edificio. Se abrió una antigua puerta, y nos encontramos en un gigantesco salón, donde había de todo, o prácticamente todo lo que se había ido acumulando a lo largo de los siglos, y de lo cual el padre Martín se negaba a deshacerse. Viejas máquinas de escribir, esquíes, cascos de la Segunda Guerra Mundial, herramientas antiguas, libros fuera de circulación, y ¡botellas de vino! Decenas, cientos de botellas de vino cubiertas de polvo, de las que, a medida que transcurría la comida, el abad Burkhard, que nos acompañaba, iba seleccionando lo mejor. Considero a Burkhard uno de mis mentores espirituales, aunque jamás hayamos intercambiado más de dos frases (él sólo habla alemán). Sus ojos expresan bondad, su sonrisa demuestra una inmensa compasión. Recuerdo que en una ocasión fue el encargado de presentarme en una conferencia, y para espanto de todos, escogió una cita de mi libro Once Minutos (que trata de sexo y prostitución). Mientras comía, era plenamente consciente de que estaba viviendo un momento único, en un lugar único. De repente, me di cuenta de algo muy importante: Todas aquellas cosas que había en la bodega estaban en orden, tenían sentido, eran parte del pasado, pero completaban la historia del presente. Y me pregunté: ¿qué hay, en mi pasado, que esté en orden, y que yo ya no utilice? Mis experiencias forman parte de cada día, no están en la bodega, sino que siguen actuando y ayudándome. Entonces, hablar de experiencia sería errado. ¿Cuál es la respuesta correcta? Mis errores. 61

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Sí. Al mirar la bodega de la abadía de Melk, y comprender que no todo lo que ya no se usa debe ser descartado, me di cuenta de que en la bodega de mi alma estaban mis errores; un día me ayudaron a encontrar el camino, pero en cuanto hube tomado consciencia de ellos, dejaron de tener utilidad alguna. Sin embargo, deben acompañarme, de modo que no pueda olvidar que por causa de ellos resbalé, caí, y apenas tuve fuerzas para levantarme de nuevo. Aquella noche, al volver a mi celda de clausura, hice una relación. A continuación, dos ejemplos: A] La arrogancia de la juventud. Siempre que fui rebelde, busqué un nuevo camino, y eso era positivo. Pero cada vez que fui arrogante, pensando que los más viejos no sabían nada, dejé de aprender muchas cosas. B] Olvidar a los amigos. He tenido muchos altibajos. Pero en mi primer momento “alto”, creí que había cambiado de vida, y decidí rodearme de gente nueva. Claro, en la caída que siguió, los recién llegados desaparecieron, y ya no podía recurrir a los antiguos compañeros. Desde entonces, procuro conservar la amistad como algo que no cambia con el tiempo. La lista es inmensa, pero el espacio de la columna es limitado. Sin embargo, aunque mis errores ya me hayan enseñado todo lo necesitaba aprender de ellos, es importante que sigan en el sótano de mi alma. Así, cuando de vez en cuando bajo allí en busca del vino de la sabiduría, puedo contemplarlos, aceptar que son parte de mi historia, que son los cimientos de la persona que soy ahora, y que tengo que cargar con ellos, por muy bien ordenados (o resueltos) que estén. En caso contrario, corro el riesgo de repetir todo de nuevo. En lo más oscuro del corazón Días después de escribir el texto anterior y enviarlo a Austria, recibí una carta del abad Dr. Burkhard Ellegast, OSB. A continuación, algunas de sus reflexiones: Muchas veces nos preguntamos: ¿cómo pudo sucedernos eso? De repente, me vi rodeado de gente dispuesta a reflexionar sobre el significado de la vida. ¿Qué podría yo decirles a esas personas, si todo cuanto ha tenido lugar en mi existencia ha sido entrar en un convento siendo aún joven, y más tarde estar a cargo de la abadía durante 26 años? Pienso que la gente me miraba como si yo tuviera respuesta para todo. Pero lo único que hice fue hablar un poco de mí mismo. Dije que mi fe basta para mantenerme vivo y con entusiasmo por seguir adelante, a pesar de los momentos de pesimismo. Expliqué entonces mi lema: si diera un paso en falso y me viera arrastrado hacia el abismo, no me iría en silencio. Todos podrían verme gritando,

62

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

pataleando, agitando un trozo de tela, para que los que me vieran no cometieran el mismo error. Gracias a este lema, sé que difícilmente llevaré a otros a errar conmigo, por lo que puedo dominar el miedo y arriesgarme a dirigir mi nave a través de aguas desconocidas. Sé, claro está, que si empezara a ahogarme, a pesar del ruido que haría, todavía podría levantar mi mano y pedir: ¡Por favor, Señor, ayúdame! Sin lugar a dudas sería escuchado, y un nuevo camino se abriría ante mí. “En su artículo, Paulo Coelho comenta que se sorprendió al ver que yo lo presentaba con un fragmento de su libro Once Minutos. Se trataba de un fragmento perteneciente al diario de la protagonista, en el que esta cuenta la historia de un hermoso pájaro que tenía la costumbre de visitarla. Ella lo admiraba tanto que un día decidió enjaularlo, para poder así tener su canto y su belleza siempre presentes. Con el paso de los días, se acostumbró a su nueva compañía, y perdió el deslumbramiento que le producía esperar a aquella alma libre que la visitaba de vez en cuando, por su propia voluntad. El pájaro, por su parte, no era capaz de cantar en cautividad, y acabó muriendo. Sólo entonces comprendió ella que el amor necesitaba de la libertad para extraerle todo su encanto, aunque la libertad traiga consigo riesgos. Tenemos la tendencia a buscar la cautividad porque estamos acostumbrados a ver la libertad como algo que no tiene fronteras ni responsabilidades. Debido a ello, terminamos siempre intentando esclavizar todo aquello que amamos, como si el egoísmo fuese la única forma de mantener nuestro mundo en equilibrio. El amor no limita, sino que amplía nuestros horizontes; podemos ver claramente lo que hay afuera, y podemos ver más claramente aún los lugares oscuros de nuestro corazón. Pese a no hablar inglés, pude entender todo lo que decían los ojos y los gestos del señor Coelho. Aún recuerdo cuando me preguntó, por medio de uno de los presentes, qué debía hacer a continuación. Entonces le respondí: siga buscando. “Y aun cuando encuentre lo que busca, no deje de buscar, con entusiasmo y curiosidad. A pesar de los errores que eventualmente pueda cometer, el amor es más fuerte, permite que el pájaro vuele en libertad, y cada paso no será más que un movimiento hacia delante, pero llevará dentro de sí todo un camino nuevo.”

63

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Más Historias de Amigos y Desconocidos La holandesa en el club En 1982, aunque disfrutaba de un buen empleo en una discográfica y ganaba mucho dinero escribiendo letras de canciones, me sentía profundamente desgraciado. Peor aún: como la vida era generosa conmigo, me sentía también culpable. Así que decidí dejarlo todo y recorrer el mundo hasta encontrar un sentido a mi existencia. En mis andanzas, pasé una temporada en Amsterdam, en los Países Bajos, que era entonces símbolo de una completa y total libertad en todos los sentidos. Allí empecé a frecuentar el Kosmos, una especie de club donde se reunían personas con las que sentía cierta afinidad. Una noche, una holandesa me preguntó cómo era Brasil. Comencé a hablar de nuestros problemas: la dura represión del régimen militar, las desigualdades sociales, la miseria, la violencia. -Pero tú vives en el mejor lugar del mundo –añadí-. ¿Qué siente uno al levantarse todos los días en el paraíso? La holandesa permaneció mucho tiempo en silencio. A continuación respondió: -Es horrible. Aquí todo es perfecto, no queda ya ningún desafío, ninguna emoción. Ojalá tuviese yo tus problemas. Así volvería a sentirme parte de la humanidad.

Con los ojos del alma El escritor argentino Jorge Luis Borges, cuando tenía ya ochenta años, visitó México. Me cuenta su editor que, tras varios días de charlas, conferencias y homenajes, Borges pidió una tarde libre para visitar las pirámides aztecas del Yucatán. El editor le advirtió de que se trataba de un viaje agotador, que había que hacer en taxi, en avión, en todoterreno. Borges no se dejó amilanar, y acabó organizándose un viaje para que el escritor fuese a Uxmal. Llegó casi al atardecer, tras un duro viaje. Se sentó frente a una pirámide del siglo X, y se estuvo una hora sin decir nada. Por fin, se levantó y dio las gracias a sus acompañantes: “gracias por esta tarde y este paisaje inolvidable.”

64

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Como sabemos, Borges era ciego. Pero esto no impidió que su alma comprendiese lo que había a su alrededor.

Una ermita en los Pirineos Poco después del lanzamiento de El Alquimista , tuve que pasar una temporada fuera de Brasil. Pero como el libro acababa de salir, y mi editor en aquella época no parecía muy entusiasmado, no podía dejar de preocuparme por cómo iban las cosas en mi país. Un buen día, en una ermita en los Pirineos, encontré un texto grabado en una pared. Convencido de que aquel mensaje había sido escrito para mí, lo copié en mi cuaderno de viaje y empecé a repetir aquellas frases todas las mañanas. Poco a poco fue volviendo la paz a mi espíritu y pude finalmente disfrutar de mi viaje. He aquí lo que vi escrito en la pequeña capilla: "Si realmente fueses un niño, un auténtico niño, en lugar de preocuparte por lo que no puedes hacer, contemplarías la Creación en silencio. Te acostumbrarías a mirar con calma el mundo, la naturaleza, la historia, el cielo. "Si realmente fueses un niño, en este momento estarías cantando aleluya a las cosas que tienes delante. Entonces, libre de las tensiones, de los miedos, y de las preguntas inútiles, aprovecharías este tiempo para esperar, curioso y paciente, el resultado de las cosas en las que tanto amor pusiste" (Carlos Caretto, ermitaño italiano).

En un mercado de Rio Un padre de la Iglesia de Copacabana esperaba pacientemente su turno para comprar carne en el supermercado, cuando una mujer intentó colarse en la fila. Comenzó entonces un festival de agresiones verbales por parte de los otros parroquianos, a los que la mujer respondía con idéntica vehemencia. Cuando el clima se hizo insoportable, alguien gritó: "Eh, señora, Dios la ama.” "Fue impresionante,” cuenta el padre. “En un momento en el que a todos los movía el odio, alguien habló de amor. En ese mismo momento, la agitación

65

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

desapareció como por encanto. La mujer se dirigió a su lugar correcto en la fila, y los parroquianos se disculparon por haber reaccionado tan agresivamente.”

Nunca es tarde Joyce es una fotógrafa australiana, especializada en vida salvaje. "Cuando cumplí 60 años, pensé que la vida había terminado para mí,” cuenta. Mis hijos ya estaban crecidos, y mis nietos ya no me tenían en cuenta. Un día, decidí acompañar a mi hijo en un viaje al desierto central de Australia. Acampamos, y como no había nada que hacer, ni nadie cerca, decidí emborracharme por primera vez en mi vida. Después de la segunda copa, cogí una cámara de vídeo y me puse a filmar. Filmé el cielo, la tienda, todo lo que me apetecía. Pero estaba tan borracha, que me caí al suelo con la cámara. Me quedé allí unos instantes, y me fijé en una fila de hormigas caminando a mi lado. Era como si pudiese oír sus pasos, como si aquello fuese parte de un mundo en el que nunca había reparado. Filmé las hormigas caminando y descubrí mi vocación.” Cuando conversamos, hace ya algunos años, Joyce tenía 71 años.

66

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

El camino del tiro con arco La importancia de repetir lo mismo Una acción es un pensamiento que se manifiesta. Un pequeño gesto nos denuncia, de modo que tenemos que perfeccionar todo, pensar en los detalles, aprender la técnica de tal manera que se vuelva intuitiva. La intuición no tiene nada que ver con la rutina, sino con un estado espiritual que está más allá de la técnica. Así, tras mucho practicar, ya no tenemos que pensar en todos los movimientos necesarios, pues éstos pasan a formar parte de nuestra propia existencia. Pero para eso, hay que entrenar, repetir. Y por si no fuera suficiente, hay que repetir y entrenar. Observa a un buen herrero trabajando el acero. Para un observador profano en la materia, está repitiendo los mismos martillazos. Pero quien conoce la importancia de la práctica, sabe que cada vez que levanta el martillo y lo hace descender, la intensidad del golpe es diferente. La mano repite el mismo gesto, pero a medida que se acerca al hierro, sabe si debe golpearlo con más dureza o más suavidad. Observa el molino. Para quien ve sus aspas por primera vez, parecen girar con la misma velocidad, repitiendo siempre el mismo movimiento. Pero quien conoce los molinos sabe que están condicionados por el viento, y cambian de dirección siempre que es necesario. La mano del herrero fue educada tras haber repetido millares de veces el gesto de martillear. Las aspas del molino son capaces de moverse con velocidad después de que el viento haya soplado mucho, y haya hecho así que se pulan sus engranajes. El arquero permite que muchas flechas pasen lejos de su objetivo, porque sabe que sólo aprenderá la importancia del arco, de la postura, de la cuerda y del blanco tras haber repetido sus gestos miles de veces, sin miedo a errar. Hasta que por fin llega el momento en que ya no hace falta pensar en lo que se está haciendo. A partir de ese momento, el arquero se convierte en su arco, su flecha y su blanco. Cómo observar el vuelo de la flecha La flecha es la intención que se proyecta en el espacio.

67

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Una vez que ha sido disparada, ya no hay nada que el arquero pueda hacer, aparte de acompañar su recorrido en dirección al blanco. A partir de ese momento, la tensión necesaria para el tiro ya no tiene razón de ser. Por lo tanto, el arquero mantiene los ojos fijos en el vuelo de la flecha, pero su corazón reposa, y él sonríe. En este momento, si ha entrenado lo suficiente, si ha conseguido desarrollar su instinto, si ha mantenido la elegancia y la concentración durante todo el proceso del disparo, sentirá la presencia del universo y verá que su acción fue justa y merecida. La técnica hace que las dos manos estén dispuestas, que la respiración sea precisa, que los ojos puedan estar fijos en el blanco. El instinto hace que el momento del disparo sea perfecto. Quien pase cerca y vea al arquero de brazos abiertos, acompañando la flecha con la mirada, verá que está quieto. Pero los aliados saben que la mente de quien ha hecho el disparo ha cambiado de dimensión, está ahora en contacto con todo el universo: continúa trabajando, aprendiendo todo lo que aquel disparo trajo de positivo, corrigiendo los posibles errores, aceptando sus cualidades, esperando para ver cómo el blanco reacciona al ser alcanzado. Cuando el arquero estira la cuerda, puede ver el mundo entero dentro de su arco. Cuando acompaña el vuelo de la flecha, este mundo se le acerca, lo acaricia, y hace que tenga la sensación perfecta del deber cumplido. Un guerrero de la luz, después de cumplir con su deber y transformar su intención en gesto, no tiene nada que temer: ha hecho lo que debía. No se ha dejado paralizar por el miedo, y aunque la flecha no haya alcanzado el blanco, tendrá otra oportunidad, pues no ha sido cobarde.

68

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

El pecado y las religiones Cristianismo: La partida de ajedrez Dijo el joven al sacerdote zen: “Me gustaría entrar en el monasterio, pero nada de lo que he aprendido es importante. Todo lo que mi padre me enseñó es a jugar al ajedrez, algo que no sirve para alcanzar la iluminación.” El sacerdote pidió que le trajeran un tablero, llamó a un monje y le ordenó que jugara con el muchacho, añadiendo: “el que pierda, morirá.” El joven se dio cuenta de que estaba luchando por su vida, y el tablero se convirtió en el centro del mundo. Sin embargo, como conocía todas las estrategias, enseguida vio que el monje iba a perder. Se preparaba para el golpe final, cuando observó la miraba de santidad de su adversario. Comenzó a cometer errores a propósito; prefería morir, pues el monje podría ser más útil a la humanidad. De repente, el sacerdote tiró el tablero al suelo. "Has aprendido más de lo que te enseñaron”, dijo. “Sabes que el camino de la luz no está hecho sólo de concentración, sino también de compasión. Te acepto como mi discípulo.” Judaísmo: Perdonando con el mismo espíritu El rabino Nahum de Chernóbil vivía siendo ofendido constantemente por un comerciante. Un día los negocios de este último comenzaron a andar muy mal. “Debe de ser el rabino, que está pidiendo venganza a Dios”, pensó. Y fue a pedir disculpas a Nahum. Yo te perdono con el mismo espíritu que tú me has perdonado – respondió el rabino Pero las pérdidas de aquel hombre continuaron creciendo cada vez más, hasta quedar completamente arruinado. Los discípulos de Nahum, horrorizados, fueron a preguntarle sobre lo ocurrido. -Yo lo perdoné, pero él siguió odiándome desde el fondo de su corazón – dijo el rabino -. Por eso, su odio fue contaminando todo lo que hacía, y el castigo de Dios se hizo aún más duro de lo que ya era. Islam: dónde está Dios En una pequeña aldea de Marruecos, un imán contemplaba el único pozo de toda la región. Otro musulmán se aproximó: 69

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

– ¿Qué hay allí dentro? –Ahí está escondido Dios. – ¿Que Dios está escondido dentro de este pozo? ¡Eso es pecado! Lo que usted está viendo debe de ser una imagen que los infieles dejaron ahí. El imán le pidió al otro que se acercase y se asomase al borde. Reflejado en el agua, éste pudo ver su propio rostro. – ¡Pero si ése soy yo! – Exactamente. Ahora ya sabes dónde se esconde Dios.

70

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Las Cuatro Fuerzas Las cuatro fuerzas El religioso Alan Jones dice que, para construir nuestra alma, nos son necesarias las Cuatro Fuerzas Invisibles: el amor, la muerte, el poder, y el tiempo. Es necesario amar, porque somos amados por Dios. Es necesaria la conciencia de la muerte, para entender bien la vida. Es necesario luchar para crecer; pero sin caer en la trampa del poder que conseguimos con esto, porque sabemos que no vale nada. Por último, es necesario aceptar que nuestra alma, aun siendo eterna, se encuentra en este momento atrapada en la tela de araña del tiempo, con sus oportunidades y limitaciones. Primera fuerza: el amor La esposa del rabino Iaakov vivía rebuscando motivos para discutir con su marido. Iaakov nunca respondía a las provocaciones. Hasta que, durante una cena con unos amigos, el rabino terminó discutiendo ferozmente con su mujer, sorprendiendo a todos los comensales. - Pero, ¿que ha ocurrido? –le preguntaron - ¿Por qué no has seguido tu costumbre de no responder? - Porque por fin me he dado cuenta de que lo que más irritaba a mi mujer era que me quedara en silencio. Actuando de esta manera, me estaba manteniendo distante de sus emociones. »Mi reacción ha sido un acto de amor, y así he conseguido que entendiera que yo estaba escuchando sus palabras. Segunda fuerza: la muerte Nada más morir, Juan se vio en un bellísimo lugar, rodeado por las comodidades y por la belleza con las que siempre había soñado. Un individuo vestido de blanco se le aproximó: - Tiene usted derecho a todo lo que desee. Encantado, Juan hizo todo lo que había deseado en vida. Tras muchos años de placeres, buscó al tipo de blanco. Le dijo que ya lo había probado todo, y que ahora necesitaba trabajar un poco para sentirse útil. - Esa es la única cosa que no puedo conseguir – dijo el de blanco.

71

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

- ¡Voy a pasar la eternidad muriéndome de aburrimiento! ¡Preferiría mil veces estar en el infierno! - ¿Y dónde piensa usted que se encuentra? Tercera fuerza: el poder - He pasado la mayor parte del día pensando lo que no debería pensar, deseando lo que no debería desear, haciendo planes que no debería hacer. El maestro señaló a una planta y le preguntó al discípulo si sabía lo que era. - Belladona. Puede matar a quien se come sus hojas. - Pero no puede matar a quien simplemente la contempla. De la misma forma, los deseos negativos no pueden causar ningún mal, si no te dejas seducir por ellos. Cuarta fuerza: el tiempo Un carpintero y sus auxiliares viajaban por la provincia de Ki, en busca de material para construcciones, Vieron un árbol tan gigantesco que cinco hombres tomados de las manos no conseguían rodearlo, y su copa era tan alta que casi tocaba las nubes. - No perderemos nuestro tiempo con este árbol - dijo el maestro carpintero. Tardaríamos demasiado en cortarlo. Si quisiéramos hacer un barco, se hundiría por causa de lo pesado que es su tronco. Si quisiéramos usarlo para la estructura de un techo, las paredes tendrían que ser exageradamente resistentes. El grupo siguió adelante. Uno de los aprendices comentó: - ¡Es un árbol tan grande y no sirve para nada! - Estás equivocado - dijo el maestro carpintero. Él ha seguido su destino a su manera. Si fuese igual a los demás, nosotros ya lo habríamos cortado. Pero porque tuvo el coraje de ser diferente, permanecerá vivo y fuerte mucho tiempo.

72

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Las cosas tal y como son Por supuesto que las cosas no ocurren siempre como nos gustaría. Hay momentos en los que nos parece que perseguimos algo que no nos está destinado, que nos estamos dando de bruces una y otra vez contra puertas que no se abren, que esperamos milagros que no llegan a suceder. Menos mal que las cosas son así, pues si todo ocurriera como deseamos, en poco tiempo nos quedaríamos sin asunto para seguir escribiendo el guión de nuestra vida diaria. Dicho guión se nutre de nuestros sueños, pero, además, se impulsa con la energía de nuestra lucha. Y como sucede siempre con los guerreros que emplean su energía en el Buen Combate, hay ciertos momentos en los que es mejor relajarse, y creer que el Universo continúa trabajando por nosotros en secreto, aunque no lo lleguemos a entender. Dejemos, por tanto, que el Alma del Mundo cumpla su misión, y cuando no nos sea posible ayudarla, la mejor manera de colaborar con ella es prestar atención a las cosas sencillas de la vida, como las puestas de sol, la gente que pasa por la calle, o la lectura de un libro. De todas maneras, en muchos casos sigue pasando el tiempo y no termina de ocurrirnos nada excepcional. Pero el verdadero guerrero de la luz continúa creyendo. A la manera que tienen los niños de creer. Y, como cree en los milagros, los milagros empiezan a ocurrir. Como está seguro de que su pensamiento puede cambiar su vida, su vida empieza a cambiar. Como está seguro de que encontrará el amor, el amor termina apareciendo. De vez en cuando, se decepciona. A veces se hace daño. Y entonces escucha cómo comentan: “¡Pero qué ingenuo es!” Pero el guerrero sabe que merece la pena. Por cada derrota, cuenta con dos victorias a su favor. En un interesante y minúsculo libro, El breviario de la caballería medieval, hay un texto que debe ser recordado en estos momentos de espera: «La energía espiritual del Camino utiliza la justicia y la paciencia para preparar tu espíritu.

73

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Este es el Camino del Caballero. Un camino fácil y, al mismo tiempo, difícil, pues obliga a dejar de lado las cosas inútiles, y las amistades relativas. Por eso, al principio, se duda tanto para elegirlo. He aquí la primera enseñanza de la Caballería: borrarás lo que hayas escrito hasta el momento en el cuaderno de tu vida: inquietud, inseguridad, mentira. Y escribirás, en lugar de todo eso, la palabra coraje. Comenzando la jornada con esta palabra, y manteniendo la fe en Dios, llegarás adonde necesitas». A pesar de todo, a veces seguimos esperando – con paciencia, resignación, coraje – y las cosas que nos rodean no se mueven. Pero como éste fue el camino que elegimos, es imposible que las bendiciones de la vida no estén trabajando a nuestro favor. Cabe, por tanto, una profunda reflexión sobre lo que conocemos como “resultados”: nuestro destino se está manifestando de una manera que no llegamos a comprender totalmente - ¡pero se está manifestando! Jorge Luis Borges escribió un cuento magistral sobre este asunto. Describe el nacimiento de un leopardo que pasa gran parte de su vida en la selva africana, pero termina siendo capturado y llevado a un zoológico de Italia. A partir de entonces, el animal piensa que su vida ha perdido el sentido, y que ya no le resta sino esperar el día de su muerte. Cierta mañana, el poeta Dante Alighieri pasa por aquel zoológico, mira al leopardo, y el animal le inspira un verso. Un verso entre los miles que componen La Divina Comedia. Toda la lucha por la supervivencia que aquel leopardo trabó, fue para que pudiese estar aquella mañana en el zoológico e inspirase un verso inmortal, dice Borges. Al igual que este leopardo, todos nosotros tenemos una razón – una razón muy importante – para estar aquí, en este momento, esta mañana. Relajémonos, por tanto, y prestemos atención.

74

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

La Montaña Mágica Creo que una de las más bellas regiones del mundo es el Languedoc, una parte de los Pirineos que se encuentra al sudoeste de Francia. He estado allí algunas veces, y me han impresionado sus valles, montañas, vegetación y ríos. Sin embargo, como el ser humano es absolutamente imprevisible, fue precisamente en este magnífico lugar donde nació la primera gran “herejía” europea: el catarismo. Se han escrito muchos libros sobre el tema. No obstante, se puede resumir la filosofía cátara en una frase muy sencilla: el Universo fue creado por el demonio. Toda esta belleza aparente es una obra diabólica. Según la enciclopedia, los cátaros creían en la existencia de dos dioses, un dios del bien (Dios) y otro del mal (Satán), que había creado el mundo material. Eso les llevó a hacer votos de castidad, pues se negaban a procrear y dar más adeptos al diablo. Se llamaban a sí mismos “perfectos,” y estaban dispuestos al martirio para probar la importancia de su creencia. El final simbólico del movimiento, que desencadenó las primeras cruzadas de las que se tiene noticia, tuvo lugar el día 15 de marzo de 1244 en la fortaleza de Montségur: después de un prolongado asedio, durante el cual se les dio a elegir entre la conversión al catolicismo o la muerte, aproximadamente 250 “perfectos”, hombres, mujeres y niños, bajaron la montaña cantando y se tiraron a las llamas de la hoguera encendida con esa finalidad. Durante mucho tiempo me interesé por el catarismo. En 1989 conocí a Brida O'Fern (más tarde, personaje de uno de mis libros), que había sido cátara en una encarnación anterior. A comienzos de aquel mismo año había conocido a Mónica Antunes, en aquella época sólo amiga mía, y hoy todavía amiga mía y agente literaria. Como yo necesitaba, por razones espirituales, hacer el camino cátaro (una ruta que une los castillos/fortalezas de los “perfectos”), la invité a tomar parte en un trecho del recorrido. Mónica y yo llegamos al pie de la montaña de Montségur en una tarde de agosto: habíamos planeado subirla al día siguiente. Después de comer fuimos a charlar al lugar donde se había encendido la hoguera, casi 800 años antes (indicado por un insignificante monumento). El cielo estaba encapotado, con nubes tan bajas que ni siquiera podíamos ver las ruinas en lo alto del gigantesco peñasco. Para provocar a Mónica, dije que tal vez sería interesante subir aquella misma noche. Ella respondió que no, y yo me sentí aliviado: ¿y si hubiera dicho que sí? En ese momento, para un coche, de la misma marca y color que el mío. Sale de él un irlandés y pregunta, como si fuéramos de la región, por dónde se puede subir a 75

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

la roca. Le sugiero que lo haga con nosotros al día siguiente, pero él está decidido a subir esa misma noche: quiere ver la salida del sol allá en la cima, dice que tal vez él también fue cátaro en una vida anterior. ¿Podríamos prestarle una linterna? Y todo parece encajar: Brida, la obligación de hacer el camino cátaro, la broma minutos antes con Mónica, y ahora aquel hombre allí, con un coche igual al mío. Es una señal. Voy al hotel de la aldea donde estamos hospedados y consigo una linterna, la única que hay. Mónica parece asustada, pero yo le digo que debemos seguir adelante. Señales, son las señales, le digo. El recién llegado pregunta dónde está el camino. No importa, respondo, basta con subir. El camino es ir hacia la cima. Y durante un tiempo que no consigo recordar, los tres escalamos por la noche una montaña que no conocemos, y donde la nieve sólo nos permite ver unos palmos delante de nosotros. Finalmente, atravesamos las nubes, el cielo se llena de estrellas, hay luna llena, y, delante de nosotros, la puerta de la fortaleza de Montségur. Entramos, contemplamos las ruinas. Admiro la belleza del firmamento, me pregunto cómo llegamos allí sin ningún percance, pero pienso que es mejor dejarse de preguntas y tan sólo admirar el milagro. Los cátaros contemplaban este mismo cielo, y aun así pensaban que todas estas estrellas eran obra del demonio. Jamás entenderé a los cátaros, por mucho que respete la integridad con la que se entregaban a su fe. Volví a Montségur y subí la montaña en otras ocasiones, pero nunca más conseguí encontrar el camino que tomamos aquella noche de agosto de 1989. Los misterios existen.

76

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Persiguiendo los Sueños Persiguiendo los sueños Quien se atreve a tener un proyecto en su vida, quien tiene el valor de dejarlo todo para vivir su Leyenda Personal, acabará logrando sus objetivos. Lo importante es mantener el fuego en el corazón, y tener resistencia para superar los momentos difíciles. Recuerden: el deseo que está en nuestra alma no vino de la nada; Alguien lo puso allí. Y este Alguien, que es puro amor y sólo desea nuestra felicidad, sólo hizo eso porque nos dio, junto al deseo, las herramientas para hacerlo realidad. La subida arriesgada Durante una tempestad, el peregrino llega a un albergue, y el dueño le pregunta a dónde se dirige. -Voy a las montañas- responde. -Olvídelo – dice el dueño-. Es una subida peligrosa, y el tiempo no acompaña. -Iré de todas formas –responde el peregrino-. Si mi corazón ya ha llegado allí, no será difícil que este cuerpo lo siga. ¿Cuál es el precio? -¿El precio de vivir un sueño es mucho mayor que el de vivir sin arriesgarse a soñar? –preguntó el discípulo. El maestro lo llevó a una tienda de ropa. Allí, le pidió que se probase un traje que era exactamente de su talla. El discípulo obedeció, y se quedó maravillado con la calidad de la ropa. A continuación, el maestro le pidió que se probase el mismo traje, pero de una talla mucho mayor a la suya. Y el discípulo así lo hizo. -Éste no sirve. Me está demasiado grande. -¿Cuánto cuestan estos trajes? –le preguntó el maestro al vendedor. -Los dos tienen el mismo precio. Sólo se diferencian en la talla. A la salida de la tienda, el maestro le comentó a su discípulo:

77

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

-Vivir el sueño, y abandonar el sueño, también tienen el mismo precio, muy caro en ambos casos, generalmente. Pero la primera actitud nos lleva a comulgar con el milagro de la vida, mientras que la segunda no nos sirve para nada. La búsqueda del camino – Estoy dispuesto a dejarlo todo. Por favor, acépteme como su discípulo. – ¿Cómo escoge un hombre su camino? – A través del sacrificio. Un camino que exige sacrificio es un camino verdadero. El abad se tropezó con una estantería. Un jarrón rarísimo saltó de su lugar, y el joven se arrojó al suelo para agarrarlo. Cayó con una mala postura y se rompió el brazo, pero logró salvar el jarrón. – ¿Qué sacrificio es mayor: ver el jarrón hecho trizas, o romperse el brazo para salvarlo? – No lo sé. – En ese caso, no pretendas que el sacrificio determine tu elección. El camino se elige por nuestra capacidad de comprometernos con cada paso que damos mientras lo recorremos. El discípulo embriagado Un maestro zen tenía centenas de discípulos. Todos rezaban cuando había que hacerlo, excepto uno, que se pasaba el día borracho. El maestro fue envejeciendo. Algunos de los discípulos más virtuosos comenzaron a discutir quién sería el nuevo líder del grupo, quién acogería los importantes secretos de la Tradición. En la víspera de su muerte, sin embargo, el maestro llamó al discípulo borracho y le transmitió a él los secretos ocultos. Un auténtico sentimiento de rebelión se apoderó de todos los demás. -¡Qué vergüenza! – gritaban por las calles -. Todo este tiempo nos sacrificamos por un maestro equivocado, que no sabe valorar nuestras cualidades. Escuchando la algarabía que había fuera, el maestro agonizante comentó: -Yo necesitaba transmitir estos secretos a un hombre que conociese bien. Todos mis alumnos eran muy virtuosos, y sólo mostraban sus cualidades. Eso es

78

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

peligroso, pues la virtud en muchas ocasiones sirve para esconder la vanidad, el orgullo, o la intolerancia. Por eso elegí al único discípulo que conocía realmente bien, puesto que podía ver su debilidad: la bebida.

79

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Conviviendo con los Demás Continúe en el desierto -¿Por qué vive usted en el desierto? -Porque no consigo ser lo que deseo. Cuando empiezo a ser yo mismo, las personas me tratan con falsa reverencia. Cuando soy verdadero en lo que concierne a mi fe, entonces las mismas personas empiezan a desconfiar. Todos se creen más santos que yo, pero se fingen pecadores por miedo a insultar mi soledad. Procuran mostrar continuamente que me consideran un santo, y de esta manera se transforman en emisarios del demonio, tentándome con el Orgullo. -Su problema no es intentar ser quien realmente es, sino aceptar a los demás como son. Y si va a continuar actuando así, lo mejor será que continúe en el desierto –dijo el caballero, alejándose. Perdonando a los enemigos El abad le preguntó a su alumno preferido cómo andaba su progreso espiritual. El alumno respondió que estaba consiguiendo dedicarle a Dios todos los momentos del día. -Entonces, ya sólo te falta perdonar a tus enemigos. El muchacho se quedó desconcertado: -¡Pero si yo no odio a mis enemigos! -¿Tú crees que Dios está enfadado contigo? -¡Claro que no! -Y de todas maneras tú imploras Su perdón, ¿no es verdad? Pues haz lo mismo con tus enemigos, aunque no los odies. El que perdona está lavando y perfumando su propio corazón. Por qué dejar al hombre para el sexto día Un grupo de sabios se reunió para discutir la obra de Dios; querían saber por qué no había creado al hombre hasta el sexto día. -Él quería organizar bien el Universo antes, de manera que pudiésemos disponer de todas las maravillas de la creación – dijo uno.

80

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

-Él quiso primero hacer algunas pruebas con animales, para luego no cometer los mismos errores con nosotros – sostenía otro. En esos momentos llegó al encuentro un sabio judío, y se le comunicó el tema de la discusión: -Y en su opinión, ¿por qué Dios esperó al sexto día para crear al hombre? -Es muy sencillo – comentó el sabio – Para que, cuando nos asaltase la vanidad, pudiésemos pensar: hasta el insignificante mosquito tuvo prioridad en la labor Divina. El reino de este mundo Un viejo ermitaño fue invitado en cierta ocasión a ir a la corte del rey más poderoso de su tiempo. -Yo envidio a los hombres santos, que se conforman con tan poco – comentó en soberano. -Yo le envidió a Su Majestad, que se contenta con menos aún que yo. Yo tengo la música de las esferas celestes, tengo los ríos y las montañas del mundo entero, y tengo la luna y el sol, porque llevo a Dios en mi alma. Su Majestad, sin embargo, apenas tiene este reino. Cuál es el mejor camino Cuando preguntaron al abad Antonio si el camino del sacrificio conducía al cielo, respondió: - Existen dos caminos de sacrificio. El primero es el del hombre que mortifica la carne y hace penitencia porque piensa que estamos condenados. El hombre que sigue este camino se siente culpable y se juzga indigno de vivir feliz. “El segundo camino es el que recorre aquél que, aun sabiendo que el mundo no es perfecto como deseamos, reza, hace penitencia, ofrece su tiempo y su trabajo para mejorar lo que le rodea. Entiende que la palabra sacrificio viene de sacro oficio, el oficio sagrado. En este caso, la Presencia Divina le ayuda todo el tiempo, y él consigue resultados en el cielo”. El trabajo de la labranza El muchacho atravesó el desierto y llegó finalmente al monasterio de Sceta. Una vez allí, solicitó presenciar una de las charlas del abad, y obtuvo permiso para ello. Aquella tarde, el abad reflexionó sobre la importancia del trabajo de labranza.

81

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Al final de la charla, el muchacho le comentó a uno de los monjes. -Me he quedado muy impresionado. Pensé que escucharía un sermón iluminado sobre las virtudes y los pecados, y el abad sólo hablaba de tomates, irrigación y cosas por el estilo. En el lugar de donde vengo, todos creen que Dios es misericordia, que basta con rezar. El monje sonrió y respondió: - Aquí nosotros pensamos que Dios ya hizo su parte, y que ahora nos toca a nosotros continuar el proceso.

82

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Las Dos Gotas de Aceite Cierto mercader envió a su hijo a aprender el Secreto de la Felicidad con el más sabio de todos los hombres. El muchacho anduvo durante cuarenta días por el desierto, hasta llegar a un bello castillo, en lo alto de una montaña. Allí vivía el sabio que el muchacho buscaba. No obstante, en lugar de encontrar a un hombre santo, nuestro héroe entró en una sala en la que se deparó con una enorme actividad: mercaderes que entraban y salían, personas conversando por los rincones, una pequeña orquesta tocando suaves melodías, y una mesa muy bien servida con los más deliciosos platos de aquella región del mundo. El Sabio conversaba con todos, y el muchacho tuvo que esperar durante dos horas hasta que pudo ser atendido. Con mucha paciencia, el Sabio escuchó atentamente el motivo de la visita del chico, pero le dijo que en ese momento no tenía tiempo para explicarle el Secreto de la Felicidad. Le sugirió que diese un paseo por su palacio, y regresase al cabo de dos horas. -De todas maneras, voy a pedirte un favor –añadió, entregándole al muchacho una cucharita de té en la que dejó caer dos gotas de aceite-. Mientras estés caminando, lleva contigo esta cuchara sin derramar el aceite. El joven empezó a subir y a bajar las escalinatas del palacio sin apartar la mirada de las gotitas de aceite. Dos horas más tarde, regresó ante la presencia del Sabio. -Entonces – preguntó el sabio- ¿ya has visto los tapices de Persia que están en mi comedor, y el jardín que al Maestro de los Jardineros le llevó diez años concluir? ¿Y te has fijado en los hermosos pergaminos de mi biblioteca? El muchacho, avergonzado, confesó que no había visto nada de eso. Su única preocupación había sido no derramar las gotas de aceite que el Sabio le había confiado. -En ese caso vuelve y conoce las maravillas de mi mundo –dijo el Sabio-. No puedes confiar en alguien hasta que no conoces su casa. Ya más tranquilo, el joven muchacho tomó una vez más la cucharilla y volvió a pasear por el palacio, pero esta vez fijándose en todas las obras de arte que colgaban del techo y las paredes. Vio los jardines, las montañas de alrededor, la delicadeza de las flores, el refinamiento con que cada obra de arte había sido colocada en su lugar. Por fin, una vez más ante la presencia del Sabio, le contó pormenorizadamente todo lo que había visto. 83

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

-Pero, ¿dónde están las dos gotas de aceite que te confié?- preguntó el Sabio. Mirando a la cuchara, el joven se dio cuenta de que las había derramado. -Pues este es el único consejo que puedo darte – dijo el más Sabio de los Sabios-. El secreto de la felicidad está en saber mirar todas las maravillas del mundo, sin olvidarse nunca de las dos gotas de aceite de la cucharilla. en el libro “El Alquimista”

84

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Reflexiones sobre las Almas Gemelas "...En ciertas reencarnaciones, nos dividimos. Así como los cristales y las estrellas, así como las células y las plantas, también nuestras almas se dividen. Nuestra alma se transforma en dos, estas nuevas almas se transforman en otras dos, y así en algunas generaciones, estamos esparcidos por buena parte de la tierra. Hacemos parte de lo que los alquimistas llaman el ANIMA MUNDI, el Alma del Mundo. En verdad, si el ánima mundi se limitara a dividirse, estaría creciendo pero también quedándose cada vez más débil. Por eso, así como nos dividimos, también nos reencontramos. Y ese reencuentro, se llama Amor. Porque cuando un alma se divide, siempre se divide en una parte masculina y una femenina. ...En cada vida, tenemos una misteriosa obligación de reencontrar por lo menos, una de esas Otras Partes... ...- ¿Cómo es posible reconocer a la Otra Parte ? Es posible conocer a la Otra Parte por el brillo en los ojos: esa, es la tradición del sol; así, desde el inicio de los tiempos, las personas reconocían a su verdadero amor. Según la tradición de la luna, existe otro procedimiento: un tipo de visión que mostraba un punto luminoso situado encima del hombro izquierdo de la Otra Parte. Corriendo riesgos. Corriendo el riesgo del fracaso, de las decepciones, de las desilusiones, pero nunca dejando de buscar el Amor. Quién no desista de la búsqueda, vencerá. ...Somos responsables de reunir nuevamente, a la Otra Parte que se cruzará en nuestro camino. Aunque sea por unos instantes siquiera; porque esos instantes traen un amor tan intenso que justifica el resto de nuestros días. También podemos dejar que nuestra Otra Parte siga adelante, sin aceptarla o siquiera percibirla. 85

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Entonces necesitaremos más de una encarnación para encontrarnos con ella. Y, por causa de nuestro egoísmo, seremos condenados al peor suplicio que hemos inventado para nosotros mismos: ¡La soledad!

86

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Manual para subir montañas A] Escoge la montaña que deseas subir: no te dejes llevar por los comentarios de los demás, que dicen “ésa es más bonita”, o “aquélla es más fácil”. Vas a gastar mucha energía y entusiasmo en alcanzar tu objetivo, y por lo tanto eres tú el único responsable y debes estar seguro de lo que estás haciendo. B] Sabe cómo llegar frente a ella: muchas veces, vemos la montaña de lejos, hermosa, interesante, llena de desafíos. Pero cuando intentamos acercarnos, ¿qué ocurre? Que está rodeada de carreteras, que entre tú y tu meta se interponen bosques, que lo que parece claro en el mapa es difícil en la vida real. Por ello, intenta todos los caminos, todas las sendas, hasta que por fin un día te encuentres frente a la cima que pretendes alcanzar. C] Aprende de quien ya caminó por allí: por más que te consideres único, siempre habrá alguien que tuvo el mismo sueño antes que tú, y dejó marcas que te pueden facilitar el recorrido; lugares donde colocar la cuerda, picadas, ramas quebradas para facilitar la marcha. La caminata es tuya, la responsabilidad también, pero no olvides que la experiencia ajena ayuda mucho. D] Los peligros, vistos de cerca, se pueden controlar: cuando empieces a subir la montaña de tus sueños, presta atención a lo que te rodea. Hay despeñaderos, claro. Hay hendiduras casi imperceptibles. Hay piedras tan pulidas por las tormentas que se vuelven resbaladizas como el hielo. Pero si sabes dónde pones el pie, te darás cuenta de los peligros y sabrás evitarlos. E] El paisaje cambia, así que aprovéchalo: claro que hay que tener un objetivo en mente: llegar a lo alto. Pero a medida que se va subiendo, se pueden ver más cosas, y no cuesta nada detenerse de vez en cuando y disfrutar un poco del panorama alrededor. A cada metro conquistado, puedes ver un poco más lejos; aprovecha eso para descubrir cosas de las que hasta ahora no te habías dado cuenta. F] Respeta tu cuerpo: sólo consigue subir una montaña aquél que presta a su cuerpo la atención que merece. Tú tienes todo el tiempo que te da la vida, así que, al caminar, no te exijas más de lo que puedas dar. Si vas demasiado deprisa, te cansarás y abandonarás a la mitad. Si lo haces demasiado despacio, caerá la noche y estarás perdido. Aprovecha el paisaje, disfruta del agua fresca de los manantiales y de los frutos que la naturaleza generosamente te ofrece, pero sigue caminando. G] Respeta tu alma: no te repitas todo el rato “voy a conseguirlo.” Tu alma ya lo sabe. Lo que ella necesita es usar la larga caminata para poder crecer, extenderse por el horizonte, alcanzar el cielo. De nada sirve una obsesión para la búsqueda de un objetivo, y además termina por echar a perder el placer de la escalada. Pero

87

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

atención: tampoco te repitas “es más difícil de lo que pensaba”, pues eso te hará perder la fuerza interior. H] Prepárate para caminar un kilómetro más: el recorrido hasta la cima de la montaña es siempre mayor de lo que pensabas. No te engañes, ha de llegar el momento en que aquello que parecía cercano está aún muy lejos. Pero como estás dispuesto a llegar hasta allí, eso no ha de ser un problema. I] Alégrate cuando llegues a la cumbre: llora, bate palmas, grita a los cuatro vientos que lo has conseguido, deja que el viento allá en lo alto (porque allá en la cima siempre hace viento) purifique tu mente, refresca tus pies sudados y cansados, abre los ojos, limpia el polvo de tu corazón. Piensa que lo que antes era apenas un sueño, una visión lejana, es ahora parte de tu vida. Lo conseguiste. J] Haz una promesa: aprovecha que has descubierto una fuerza que ni siquiera conocías, y dite a ti mismo que a partir de ahora, y durante el resto de tus días, la vas a utilizar. Y, si es posible, promete también descubrir otra montaña, y parte en una nueva aventura. L] Cuenta tu historia: sí, cuenta tu historia. Ofrece tu ejemplo. Di a todos que es posible, y así otras personas sentirán el valor para enfrentarse a sus propias montañas.

88

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

La nube y la duna Una joven nube nació en medio de una gran tempestad en el mar Mediterráneo. Pero casi no tuvo tiempo de crecer allí, pues un fuerte viento empujó a todas las nubes en dirección a África. No bien llegaron al continente, el clima cambió: un sol generoso brillaba en el cielo y abajo se extendía la arena dorada del desierto del Sahara. El viento siguió empujándolas en dirección a los bosques del sur, ya que en el desierto casi no llueve. Entretanto la nuestra decidió desgarrarse de sus padres y de sus más viejos amigos para conocer el mundo. —¿Qué estás haciendo? —protestó el viento—. ¡El desierto es todo igual! ¡Regresa a la formación y vámonos hasta el centro de África, donde existen montañas y árboles deslumbrantes! Pero la joven nube, rebelde por Naturaleza, no obedeció. Poco a poco fue bajando de altitud hasta conseguir planear en una brisa suave, generosa, cerca de las arenas doradas. Después de pasear mucho, se dio cuenta de que una de las dunas le estaba sonriendo. Vio que ella también era joven, recién formada por el viento que acababa de pasar. Y al momento se enamoró de su cabellera dorada. —Buenos días —dijo—. ¿Cómo se vive allá abajo? —Tengo la compañía de las otras dunas, del sol, del viento y de las caravanas que de vez en cuando pasan por aquí. A veces hace mucho calor, pero se puede aguantar. ¿Y cómo se vive allí arriba? —También existen el viento y el sol, pero la ventaja es que puedo pasear por el cielo y conocer muchas cosas. —Para mí la vida es corta —dijo la duna—. Cuando el viento vuelva de las selvas, desapareceré. —¿Y esto te entristece? —Me da la impresión de que no sirvo para nada. —Yo también siento lo mismo. En cuanto pase un viento nuevo, iré hacia el sur y me transformaré en lluvia. Mientras tanto, este es mi destino. La duna vaciló un poco, pero terminó diciendo: 89

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

—¿Sabes que aquí en el desierto decimos que la lluvia es el Paraíso? —No sabía que podía transformarme en algo tan importante —dijo la nube, orgullosa. —Ya escuché varias leyendas contadas por viejas dunas. Ellas dicen que, después de la lluvia, quedamos cubiertas por hierbas y flores. Pero yo nunca sabré lo que es eso, porque en el desierto es muy difícil que llueva. Ahora fue la nube la que vaciló. Pero enseguida volvió a abrir su amplia sonrisa: —Si quieres, puedo cubrirte de lluvia. Aunque acabo de llegar, me he enamorado de ti y me gustaría quedarme aquí para siempre. —Cuando te vi por primera vez en el cielo también me enamoré —dijo la duna—. Pero si tú transformas tu linda cabellera blanca en lluvia, terminarás muriendo. —El amor nunca muere —dijo la nube—. Se transforma. Y yo quiero mostrarte el Paraíso. Y comenzó a acariciar a la duna con pequeñas gotas. Así permanecieron juntas mucho tiempo hasta que apareció un arco iris. Al día siguiente, la pequeña duna estaba cubierta de flores. Otras nubes que pasaban en dirección a África pensaban que allí estaba la parte del bosque que estaban buscando y soltaban más lluvia. Veinte años después, la duna se había transformado en un oasis, que refrescaba a los viajeros con la sombra de sus árboles. Todo porque, un día, una nube enamorada no había tenido miedo de dar su vida por amor.

90

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

El hombre que perdonaba Hace muchos años, vivía un hombre que era capaz de amar y perdonar a todos los que encontraba en su camino. Por esta razón, Dios envió a un ángel para que hablara con él. -Dios me pidió que viniera a visitarte y que te dijera que Él quiere recompensarte por tu bondad - dijo el ángel. Cualquier gracia que desees, te será concedida. ¿Te gustaría tener el don de curar? -De ninguna manera - respondió el hombre prefiero que el propio Dios elija a aquellos que deben ser curados. -¿Y qué te parecería atraer a los pecadores hacia el camino de la verdad? -Esa es una tarea para ángeles como tú. Yo no quiero que nadie me venere ni tener que dar el ejemplo todo el tiempo. -No puedo volver al cielo sin haberte concedido un milagro. Si no eliges, te verás obligado a aceptar uno. El hombre reflexionó un momento y terminó por responder: -Entonces, deseo que el Bien se haga por mi intermedio, pero sin que nadie se dé cuenta - ni yo mismo, que podría pecar de vanidoso. Y el ángel hizo que la sombra del hombre tuviera el poder de curar, pero sólo cuando el sol estuviese dándole en el rostro. De esta manera, por dondequiera que pasaba, los enfermos se curaban, la tierra volvía a ser fértil y las personas tristes recuperaban la alegría. El hombre caminó muchos años por la Tierra sin darse cuenta de los milagros que realizaba porque cuando estaba de frente al sol, tenía a su sombra atrás. De esta manera, pudo vivir y morir sin tener conciencia de su propia santidad.

91

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Dios y el amor del hombre Un hombre se acercó al filósofo Ramanuja y le pidió: — Muéstreme el camino hacia Dios. — ¿Alguna vez te has enamorado de alguien? — ¿Enamorarme? ¿Qué es lo que el gran maestro quiere decir con eso? Yo me prometí a mí mismo que nunca me aproximaría a una mujer; huyo de ellas como quien intenta escapar de una enfermedad. Ni siquiera las miro: cuando pasan, cierro los ojos para concentrarme mejor en mi búsqueda espiritual. — Procura regresar mentalmente al pasado e intenta descubrir si alguna vez, a lo largo de toda tu vida, hubo algún momento de pasión que dejase tu espíritu y tu cuerpo llenos de fuego. — He venido hasta aquí para aprender a rezar, no los procedimientos para enamorarse de una mujer. Ramanuja se quedó en silencio durante algunos minutos y, finalmente, dijo: — No puedo ayudarte. Si aún no has probado el amor, nunca conseguirás sentir la paz de una oración. Por tanto, regresa a tu ciudad, enamórate y ven a buscarme de nuevo sólo cuando tu alma esté colmada de momentos felices.

92

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Cuidado con los recuerdos… Llego a Madrid a las ocho de la mañana. Me voy a quedar apenas algunas horas, no tiene sentido telefonear a los amigos o arreglar algún encuentro. Resuelvo caminar solo por lugares que me gustan y termino fumando un cigarrillo en un banco del parque Retiro. -Usted parece que no está aquí –me dijo un anciano, sentándose a mi lado. -Estoy aquí –respondo. –Sólo que doce años atrás, en 1986. Sentado en este mismo banco con un amigo pintor, Anastasio Ranchal. Los dos estamos mirando a mi mujer, Christina, que bebió más de la cuenta y hace como que baila flamenco. -Aproveche –dijo el anciano. –Pero no se olvide de que el recuerdo es como la sal: en la cantidad adecuada le da sabor a la comida; pero si se exagera, estropea el alimento. Quien vive demasiado en el pasado, gasta su presente en recordar.

93

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Sobre el cambio El hombre santo reunió a sus amigos: - Estoy viejo -les dijo. - Y sabio -respondió uno de los amigos. - Durante todo este tiempo, siempre te vimos rezando. ¿De qué hablas con Dios? - Al principio, yo tenía el entusiasmo de la juventud. Le pedía a Dios que me diera fuerzas para cambiar la humanidad. Poco a poco empecé a darme cuenta de que esto era imposible y entonces empecé a pedirle a Dios que me diese fuerzas para cambiar a los que estaban a mi alrededor. Ahora que ya soy viejo, mi oración es mucho más sencilla. Le pido a Dios lo que debería haberle pedido desde el principio. - ¿Y qué es eso que le pides? -quiso saber el amigo. - Le pido ser capaz de cambiarme a mí mismo.

94

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

La dificultad de recibir Un leñador, acostumbrado al arduo trabajo de la tala de árboles, terminó casándose con una mujer que era exactamente su opuesto: delicada, suave, capaz de elaborar lindos bordados con sus dedos gentiles. Orgulloso de su esposa, él se pasaba todo el día en el bosque, realizando su trabajo, para que nada faltase en la casa. Vivieron juntos durante muchos años y tuvieron tres hijos, que crecieron, estudiaron, se casaron y fueron a vivir a lugares lejanos, como, por cierto, ocurre casi siempre. La pareja continuaba en la misma cabaña, pero, mientras el hombre se sentía cada vez más fuerte como consecuencia de su trabajo, la mujer empezaba a debilitarse. Su estado de salud empeoró de tal manera que ya no podía levantarse de la cama. El marido ya no sabía qué hacer. Y una noche se puso a llorar: –No me dejes –decía sollozando–. ¡Te necesito! El brillo de los ojos de la mujer pareció retornar: –¿Y sólo ahora me lo dices? En el momento en que nuestros hijos crecieron y partieron, yo sentí que mi vida había perdido su sentido. ¡Tú siempre fuiste tan independiente! –Me daba vergüenza recibir tu cariño. Siempre me pareció que no merecía todo lo que hacías por mí. A partir de ese día, la mujer se fue recuperando, volvió a caminar por el bosque y a realizar sus bordados. Su vida había vuelto a tener sentido porque alguien la necesitaba. Ella era capaz de recibir lo mejor que alguien le podía dar: su amor.

95

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

El dibujo Un gran sabio sufí dedicó largos años a meditar sobre la vida. Para compartir su conocimiento, realizó un dibujo en una hoja de papel y se lo mostró a sus discípulos. Los seguidores del sabio sufí se quedaron tan impresionados con la belleza del trabajo que mandaron grabar el dibujo en una placa de bronce. Muy pronto se difundió la noticia y comenzaron a llegar peregrinos de todo el mundo con el objetivo de descifrar todos y cada uno de los trazos del dibujo. En pocos años, las personas empezaron a adorar la placa de bronce, como si fuese sagrada. — ¡El dibujo era apenas una explicación, no un objeto de culto! –dijo el sabio, decepcionado. Inmediatamente ordenó fundir la placa y transformarla en un caldero. — Por lo menos, así el bronce permanece bello y no pierde su significado.

96

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

¿De quién es la culpa? Una pareja salió de vacaciones. Al regresar, se encontraron con que la puerta había sido forzada: los ladrones se habían llevado todo. El marido acusó a la mujer, diciéndole que no había echado los cerrojos. Ella afirmó, por su parte, que a él se le había olvidado cerrar la puerta con llave. Así dio inicio a una prolongada discusión, hasta que los vecinos llamaron a un religioso para intentar serenar los ánimos. — La culpa es de ella, que siempre ha sido muy descuidada —dijo el marido. — Ni hablar. Él es el que tiene la culpa, que nunca pone atención en lo que hace. —respondió la mujer. — Un momento —dijo el religioso. Nos pasamos la vida culpándonos los unos a los otros por cosas que no hemos hecho ya acabamos cargando un fardo que no nos pertenece. ¿Acaso no se os ha pasado por la cabeza que los ladrones son los verdaderos culpables del robo?

97

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

El problema de los otros Erase una vez un sabio muy conocido que vivía en una montaña Himalaya. Cansado de convivir con los hombres, había optado por una vida sencilla y pasaba la mayor parte de su tiempo meditando. Su fama, no obstante, era tan grande que las personas estaban dispuestas a caminar por estrechos senderos, subir colinas escarpadas o vadear caudalosos ríos sólo para conocer a aquel hombre santo, al que creían capaz de resolver cualquier angustia del corazón humano. Este sabio, como era un hombre muy compasivo, no dejaba de dar un consejo aquí y otro allá, pero procuraba librarse cuanto antes de los visitantes no deseados. A pesar de todo, éstos aparecían en grupos cada vez mayores y, en cierta ocasión, una multitud se agolpó a su puerta diciendo que en el periódico local se habían publicado bellas historias sobre él y que todos estaban seguros de que sabía cómo superar las dificultades de la vida. El sabio no dijo nada; les pidió a todos que se sentasen y esperasen. Pasaron tres días y no paraba de llegar gente. Cuando ya no quedaba espacio para nadie más, él se dirigió a la muchedumbre que esperaba frente a su puerta: –Os voy a dar la respuesta que todos queréis. Pero debéis prometerme que, a medida que vuestros problemas se solucionen, les diréis a los nuevos peregrinos que me fui de aquí, de manera que yo pueda continuar viviendo en la soledad que tanto anhelo. Los hombres y las mujeres presentes hicieron un juramento sagrado: si el sabio cumpliese lo prometido, ellos no dejarían que ningún otro peregrino subiese a la montaña. –Contadme vuestros problemas –pidió entonces el sabio. Alguien comenzó a hablar, pero fue inmediatamente interrumpido por otras personas, ya que sabían que aquélla era la última audiencia pública que el hombre santo daría y temían que no tuviera tiempo de escucharlos a todos. A los pocos minutos, la situación ya era caótica: multitud de voces gritando al mismo tiempo, gente llorando, hombres y mujeres arrancándose los cabellos de desesperación ante la imposibilidad de hacerse oír. El sabio dejó que la escena se prolongase un poco más y por fin gritó: –¡Silencio!

La multitud enmudeció inmediatamente. 98

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

–Escribid vuestros problemas y dejad los papeles aquí, frente a mí. Cuando todos terminaron, el sabio mezcló todos los papeles en una cesta, pidiendo a continuación: –Id pasando esta cesta de mano en mano y que cada uno saque un papel y lo lea. Entonces podréis cambiar vuestro problema por el que os ha tocado o pedir que os devuelvan el papel con el problema que escribisteis originalmente. Todos los presentes fueron tomando una de las hojas de papel, la leyeron y quedaron horrorizados. Sacaron como conclusión que aquello que habían escrito, por muy malo que fuese, no era tan serio como lo que afligía a sus vecinos. Dos horas después intercambiaron los papeles y cada uno volvió a meter en su bolsillo su problema personal, aliviado al saber que su aflicción no era tan dura como se imaginaba. Agradecieron la lección, bajaron la montaña con la seguridad de que eran más felices que los demás y, cumpliendo el juramento realizado, nunca más permitieron que nadie perturbase la paz de aquel hombre santo.

99

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

El llanto del desierto En cuanto llegó a Marrakech, el misionero decidió que todas las mañanas daría un paseo por el desierto que comenzaba tras los límites de la ciudad. En su primera caminata, vio a un hombre estirado sobre la arena, con la mano acariciando el suelo y el oído pegado a tierra. "Es un loco", pensó. Pero la escena se repitió todos los días, por lo que, pasado un mes, intrigado por aquella conducta extraña, resolvió dirigirse a él. Con mucha dificultad, ya que aún no hablaba árabe con fluidez, se arrodilló a su lado y le preguntó: - ¿Qué es lo que usted está haciendo?. - Hago compañía al desierto, y lo consuelo por su soledad y sus lágrimas. - No sabía que el desierto fuese capaz de llorar. - Llora todos los días, porque sueña con volverse útil para el hombre y transformarse en un inmenso jardín, donde se puedan cultivar las flores y toda clase de plantas y cereales. - Pues dígale al desierto que él cumple bien su misión -comentó el misionero. Cada vez que camino por aquí, comprendo mejor la verdadera dimensión del ser humano, pues su espacio abierto me permite ver lo pequeños que somos ante Dios. Cuando contemplo sus arenas, imagino a las millones de personas en el mundo que fueron criadas iguales, aunque no siempre el mundo sea justo con todas. Sus montañas me ayudan a meditar. Al ver el Sol naciendo en el horizonte, mi alma se llena de alegría, y me aproxima al Creador. El misionero dejó al hombre y volvió a sus quehaceres diarios. Cual no fue su sorpresa al encontrarlo a la mañana siguiente en el mismo lugar y en la misma posición. - ¿Ya transmitió al desierto todo lo que le dije?- preguntó. El hombre asintió con un movimiento de cabeza. - ¿Y aún así continúa llorando?

100

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

- Puedo escuchar cada uno de sus sollozos. Ahora él llora porque pasó miles de años pensando que era completamente inútil, desperdició todo ese tiempo blasfemando contra Dios y su destino. - Pues explíquele que, a pesar de que el ser humano tiene una vida mucho más corta, también pasa muchos de sus días pensando que es inútil. Rara vez descubre la razón de su destino, y casi siempre considera que Dios ha sido injusto con él. Cuando llega el momento en que, finalmente, algún acontecimiento le demuestra por qué y para qué ha nacido, considera que es demasiado tarde para cambiar de vida, y continúa sufriendo. Y, al igual que el desierto, se culpa por el tiempo que perdió. - No sé si el desierto me escuchará -dijo el hombre- El ya está acostumbrado al dolor, y no consigue ver las cosas de otra manera. - Entonces vamos a hacer lo que yo siempre hago cuando siento que las personas han perdido la esperanza. Vamos a rezar. Ambos se arrodillaron y rezaron; uno se giró en dirección a la Meca porque era musulmán, el otro juntó las manos en plegaria porque era católico. Cada uno rezó a su Dios, que siempre fue el mismo Dios, aunque las personas insistieran en llamarlo con nombres diferentes. Al día siguiente, cuando el misionero retornó de su caminata matinal, el hombre ya no estaba allí En el lugar donde acostumbraba a abrazar la arena, el suelo parecía mojado, ya que había nacido una pequeña fuente. En los meses subsiguientes, esta fuente creció y los habitantes de la ciudad construyeron un pozo en torno a ella. Los beduinos llaman al lugar "Pozo de las Lágrimas del Desierto". Dicen que todo aquel que beba su agua conseguirá tranformar el motivo de su sufrimiento en la razón de su alegría , y terminará encontrando su verdadero destino.

101

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Transformar el tiempo Mantengo una frecuente correspondencia electrónica con Stephan Rechtschaffen, médico fundador del Omega Institute en Nueva York. Me invitaron allí a dar una charla, pero tuve que cancelarla en el último momento. Poco después, nos pidieron a los dos que fuéramos juntos a Viena, Austria, y esta vez decidí cancelar la cita porque el precio que cobraban me parecía carísimo. El hecho es que tales contratiempos, en lugar de separarnos, terminaron acercándonos. En uno de sus mensajes electrónicos, Stephan me avisa que me va a enviar su libro. Para mi sorpresa, recibo un ejemplar de Timeshifting (El giro en el tiempo). Lo leo en una tarde, lo vuelvo a leer varias veces, ya que todos nosotros tenemos un problema relacionado con este asunto. En el texto, Stephan hace algunas observaciones detalladas a continuación: El tiempo no es una medida sino una cualidad: Cuando miramos al pasado, no estamos rebobinando una cinta, sino recordando un destello de nuestro paso por la tierra. No se mide el tiempo como se mide una carretera, ya que damos saltos enormes hacia atrás (recuerdos) y hacia adelante (proyectos). Gestionar no es vivir: La frase "el tiempo es oro" es una tontería. Tenemos que ser conscientes de cada minuto, saber aprovecharlo en aquello que estamos haciendo (con amor) o simplemente en la contemplación de la vida. El día comprende 24 horas y una infinidad de momentos. Si levantamos el pie del acelerador, todo dura mucho más. Claro, puede parecernos largo lavar los platos, pero ¿por qué no utilizar ese tiempo para pensar en cosas agradables, relajarnos, alegrarnos del hecho de estar vivos? Sintonía con la vida: Arthur Rubinstein (uno de los mayores pianistas del siglo XX) fue abordado en cierta ocasión por una fervorosa admiradora, que le preguntó: "¿cómo puede tocar las notas con tanta maestría?" El pianista respondió: "toco las notas igual que los otros, pero las pausas... ¡ah! Allí es donde está el arte". El proceso de mi divorcio fue extremadamente doloroso, y pensé que, ocupando mi tiempo al máximo, conseguiría superar los momentos difíciles; pero no ocurrió como lo había previsto, ya que no me atrevía a mirar el dolor, que había en mi alma. En un momento dado, "empecé a utilizar las pausas": me sentaba, dejaba que viniese el dolor, que me alcanzase y me pasase. Poco a poco, fui reestructurando mi vida, entendiendo mejor las razones de la separación, y hoy mi ex-mujer trabaja conmigo en el Omega Institute, pues fui capaz de hacer frente al dolor y no limitarme a ocultarlo por detrás de numerosos trabajos. Hacer frente a las experiencias utilizando más profundidad: Un estudio realizado sobre los visitantes del Zoológico Nacional de Washington reveló que el tiempo medio que pasan las personas mirando cualquier animal exhibido no pasa de 10 segundos. Entonces, ¿para qué ir al zoológico? ¿No sería mejor hojear un libro con ilustraciones? Un guía me explicó que la gente se queja de que los 102

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

hipopótamos siempre están sumergidos; de hecho, pasan bajo el agua períodos que van de 90 segundos a un máximo de cinco minutos. Sin embargo, la prisa por seguir adelante no deja al visitante aprovechar el motivo de su visita. Actuar frente a las emociones negativas: Cuando nos sentamos en un sofá, encendemos la televisión (lo cual, en realidad, es una forma de desconectarse del mundo). Entonces puede suceder que sintamos una gran ansiedad, que pensemos que estamos perdiendo el tiempo, que tenemos que llamar a alguien, hacer gimnasia, arreglar la casa. ¿Por qué? Porque si nos quedamos quietos, se nos vendrá encima toda la ola de emociones reprimidas, nos dejará tristes o con un sentimiento de culpa. Pero cuando más nos "ocupamos" en algo, más se acumulan estas emociones, hasta que un día corremos el riesgo de verlas estallar. Sí, todos tenemos nuestros problemas, a los que debemos hacer frente. ¿Por qué no hacerlo hoy? Parar. Pensar. De manera eventual, sufrir un poco. Pero al final, entender quiénes somos, qué sentimos, qué estamos haciendo aquí, en este momento, en lugar de intentar determinar la agenda de la vida.

103

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

No queda nada Un novicio estaba en la cocina, lavando las hojas de lechuga para el almuerzo, cuando un viejo monje –conocido por su rigidez excesiva, que obedecía más al deseo de autoridad que a la verdadera búsqueda espiritual– se aproximó. – ¿Puedes repetirme lo que el superior del convento ha dicho hoy en el sermón? – No consigo acordarme. Sólo sé que me gustó mucho. El monje se quedó estupefacto. – ¿Justamente tú, que tanto deseas servir a Dios, eres incapaz de prestar atención a las palabras y los consejos de aquellos que conocen mejor el camino? Es por eso que las generaciones actuales están tan corrompidas; ya no respetan las enseñanzas de sus mayores. – Mira bien lo que estoy haciendo –respondió el novicio–. Estoy lavando las hojas de lechuga, pero el agua que las deja limpias no queda prisionera de ellas, sino que termina siendo eliminada por la cañería del fregadero. Del mismo modo, las palabras que purifican son capaces de lavar mi alma, pero no siempre permanecen en la memoria. No voy a estar recordando todo lo que me dicen sólo para probar que soy culto y superior a los demás. Todo aquello que me aligera, como la música o las palabras de Dios, termina guardado en un rincón secreto de mi corazón. Y allí permanece para siempre, saliendo a la superficie solamente cuando necesito ayuda, alegría o consuelo.

104

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

El pastor y el camello Cuando el corazón señala una dirección, nada, ni el peso de todas las estrellas, puede borrar ese camino. El joven pastor Mahmad vivía con un sueño: expresar físicamente su amor por un camello (uno en concreto, que nadie piense que era un follacamellos). Pero no se atrevía a manifestar su deseo en público, a pesar de lo mucho que le amaba, ya que su sociedad era muy tradicional y practicar coito con criaturas con joroba estaba muy mal visto (razón por la cual el más rico de la aldea era Ahmed, el de la ortopedia). Por culpa de este amor secreto y prisionero, el joven pastor fue acumulando estrés, tanto que a veces se arrancaba mechones de pelo y se los comía. Aquello no se convirtió en un auténtico problema hasta que se le acabaron los pelos de la cabeza y empezó con los de la cabeza de otra gente. De modo que una noche el joven pastor acudió al viejo sabio de la aldea, que regentaba asimismo un club de putas (porque la sabiduría no le daba para mantener su tren de vida). El joven pastor le contó su trastorno, su amor hacia un camello en concreto y su ansia por manifestar este sentimiento de manera física. El sabio escuchó atentamente. Luego, apuró su pipa de crack, y se pronunció con la sabiduría que tanta fama le había dado en la comarca: -A veces, joven pastor, las estrellas se alinean con el corazón y nos colman el espíritu de deseos en apariencia irrealizables. Pero lo cierto es que no hay deseo irrealizable. El corazón es una brújula que marca la dirección de la felicidad. Sigue el camino que te trace y allí hallarás a un hombre esperándote. -Pero yo no busco a un hombre, yo busco a un camello -dijo el joven pastor. A lo que el sabio replicó: -Ese hombre, joven pastor, serás tú mismo. Y por favor, deja de comerte mi pelo. Al salir del "Club del Sabio, mamadas y consejos", el joven pastor comprendía por fin que cualquier cosa es posible si uno la desea sinceramente. Así que se dejó guiar por su corazón, y el corazón le llevó hasta el camello a quien tanto amaba, que en ese momento pululaba por el desierto nocturno, ajeno a los ojos que, con tanto amor, le observaban. El joven pastor se acercó al camello, extrajo su pene con suavidad y empezó a penetrar al animal por el sentimental orificio de la parte trasera. Y el camello, que desconocía que todas las cosas, grandes y pequeñas, están interrelacionadas, asestó una salvaje coz al joven pastor rompiéndole la espina dorsal por dos sitios diferentes. El joven pastor agonizó tumbado boca arriba en la arena, mientras un fluido negruzco manaba por su nariz y sus orejas. Era, sin duda, el flujo de la felicidad. Y allí, en mitad del desierto, mientras contemplaba las estrellas sobre su cabeza, el 105

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

joven pastor comprendió que la voluntad puede vencer cualquier obstáculo siempre y cuando drogues antes al camello.

106

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Las sandalias de José Hace muchos años, tantos que ya hemos olvidado la fecha exacta, vivía en una aldea del sur de Brasil un niño de siete años llamado José. Había perdido a sus padres muy pronto, y había sido adoptado por una avariciosa tía que, aunque tenía mucho dinero, apenas gastaba algo con su sobrino. José, que jamás había conocido el sentimiento del amor, creía que la vida era así y no se enfadaba por eso. Como vivían en un barrio de gente rica, su tía forzó al director del colegio a aceptar a su sobrino, pagando sólo una décima parte de la mensualidad, y amenazándolo con protestar ante el alcalde si no lo hacía. El director no tuvo elección, pero siempre que podía les decía a sus profesores que humillasen a José, esperando que, de esa manera, se portara mal y valerse, así, de un pretexto para expulsarlo. Sin embargo, José, que jamás había conocido el amor, creía que la vida era así y no se enfadaba por eso. Llegó la Nochebuena. Todos los alumnos fueron obligados a asistir a misa en una iglesia lejos del pueblo, ya que el sacerdote del lugar estaba de vacaciones. Por el camino, los niños y las niñas hablaron sobre lo que iban a encontrar en sus zapatos a la mañana siguiente ropa de moda, juguetes caros, chocolates, patinetas y bicicletas. Todos iban bien vestidos, como siempre en los días especiales, salvo José, que seguía vistiendo ropa zarrapastrosa y calzando unas sandalias gastadas y demasiado pequeñas para sus pies (su tía se las había dado cuando sólo tenía cuatro años y le dijo que no le daría otras hasta que cumpliese diez). Algunos niños le preguntaron por qué era tan miserable y le dijeron que se avergonzaban de tener un amigo que vestía y calzaba de aquella manera. Como José no conocía el amor, no se enfadaba por aquello. Sin embargo, cuando entró en la iglesia, escuchó el órgano y vio las luces encendidas, la gente bien vestida, las familias unidas y los padres abrazados a los hijos, José se sintió la más miserable de las criaturas. Después de la comunión, en vez de volver a casa con el grupo, se sentó a la entrada de la capilla y se puso a llorar; aunque no conocía el amor, ahora entendía lo que era estar solo, desamparado, abandonado por todos. En aquel momento vio a un niño a su lado, descalzo, que parecía tan miserable como él. Como nunca lo había visto, dedujo que debía haber caminado mucho para llegar hasta allí. “Deben dolerle mucho los pies a este chico”, pensó. “Voy a darle una de mis sandalias, así por lo menos alivio la mitad de su sufrimiento”. Porque, aunque no conocía bien el amor, José conocía el sufrimiento y no deseaba que los demás sintieran lo mismo. Le dejó una de sus sandalias al niño y volvió con la otra; de vez en cuando la cambiaba de pie, para no lastimarse mucho con las piedras del camino. En cuanto llegó a casa, la tía vio que su sobrino había perdido una de las sandalias y lo 107

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

amenazó si no conseguía recuperarla antes de la mañana siguiente, sería castigado severamente. José se fue a la cama sintiendo miedo, pues conocía los castigos que le solía aplicar su tía. Se pasó la noche temblando por el miedo, apenas pudo conciliar el sueño, y cuando ya estaba a punto de conseguir dormirse oyó muchas voces en la sala de estar. Su tía entró corriendo a la habitación, preguntándole qué había pasado. Todavía atontado, José fue hasta la sala y vio que la sandalia que le había dejado al niño estaba en medio de la sala, cubierta de todo tipo de juguetes, bicicletas, patinetas, ropa. Los vecinos gritaban, decían que a sus hijos les habían robado ya que no habían encontrado nada en sus zapatos cuando se despertaron. Entonces, apareció apresuradamente el sacerdote de la iglesia en la que habían celebrado la misa; a la entrada de la capilla había aparecido una estatua de un Niño Jesús vestido de oro, pero con una sola sandalia en los pies. Inmediatamente se hizo el silencio, la comunidad alabó a Dios y sus milagros, la tía lloró y pidió perdón. Y el corazón de José se llenó de energía y del significado del amor.

108

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Cuento de Navidad Cuenta una antigua y conocida leyenda que tres cedros habían nacido en lo que alguna vez fueron los hermosos bosques del Líbano. Como todos sabemos, los cedros demoran mucho tiempo en crecer y estos árboles pasaron siglos enteros pensando sobre la vida, la muerte, la naturaleza y los hombres. Presenciaron la llegada de una expedición de Israel, enviada por Salomón, y más tarde vieron la tierra cubierta de sangre durante las batallas con los asirios. Conocieron a Jezabel y al profeta Elías, enemigos mortales. Asistieron a la creación del alfabeto, y se deslumbraron con las caravanas que pasaban llenas de telas de colores. Un buen día decidieron conversar sobre el futuro. -Después de todo lo que he visto -dijo el primer árbol- quiero ser transformado en el trono del rey más poderoso de la tierra. -A mí me gustaría ser parte de algo que transformara para siempre el Mal en Bien - comentó el segundo. -Por mi parte querría que cada vez que me vieran pensaran en Dios -fue la respuesta del tercero. Pasó algún tiempo más y vinieron los leñadores. Los cedros fueron derribados y un barco los transportó lejos. Cada uno de aquellos árboles tenía un deseo, pero la realidad nunca pregunta qué hacer con los sueños; el primero sirvió para construir un refugio de animales, y las sobras se usaron para apoyar el heno. El segundo árbol se convirtió en una mesa muy simple, que pronto fue vendida a un comerciante de muebles. Como la madera del tercer árbol no encontró compradores, fue cortada y colocada en el almacén de una ciudad grande. Infelices, ellos se lamentaban: "Nuestra madera era buena, y nadie encontró algo hermoso donde utilizarla." Pasó algún tiempo más y, en una noche llena de estrellas, un matrimonio que no lograba encontrar refugio decidió pasar la noche en el establo que había sido construido con la madera del primer árbol. La mujer gritaba, con dolores de parto, y terminó dando a luz ahí mismo, y colocó a su hijo entre el heno y la madera que lo apoyaba. En aquel momento, el primer árbol entendió que su sueño se había cumplido: allí estaba el más importante de todos los reyes de la Tierra.

109

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Años después, en una casa modesta, varios hombres se sentaron a la mesa que había sido construida con la madera del segundo árbol. Uno de ellos, antes que todos comenzaran a comer, dijo algunas palabras sobre el pan y el vino que tenía frente a él. Y el segundo árbol entendió que, en aquel momento, sustentaba no sólo un cáliz y un pedazo de pan, sino la alianza entre el hombre y la Divinidad. Al día siguiente, retiraron dos pedazos del tercer cedro, y los colocaron en forma de cruz. Los dejaron botados en un rincón y horas después trajeron a un hombre brutalmente herido, a quién clavaron en aquellos leños. Horrorizado, el cedro lamentó la herencia bárbara que la vida le había dejado. Antes que tres días pasaran, sin embargo, el tercer árbol entendió su destino: el hombre que ahí estuvo clavado era la luz que todo iluminaba. La cruz hecha con su madera había dejado de ser un símbolo de tortura, para transformarse en señal de victoria. Como siempre ocurre con los sueños, los tres cedros del Líbano habían cumplido el destino que deseaban - pero no de la manera que imaginaron que sería.

110

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

La virtud de la ruta menos transitada Mi antiguo molino, en la pequeña aldea de los Pirineos, tiene una hilera de árboles que lo separa de la hacienda cercana. Un día apareció el vecino. Tendría unos setenta años. Lo veía trabajar con su mujer en la labranza, y me decía que ya era hora de que descansaran. El vecino, muy amable, dijo que las hojas secas de mis arboles caían en su tejado, y que yo tenía que talarlos. Me quedé muy sorprendido: ¿cómo es posible que una persona que se ha pasado la vida en contacto con la naturaleza quiere que destruya algo que tardó tanto en crecer, simplemente porque, dentro de diez años, eso puede causarle un problema a sus tejas? Lo invito a un café. Le digo que me hago responsable, que si algún día esas hojas secas (que serán barridas por el viento y el verano) le causan cualquier daño, yo me encargaré de mandar construir un tejado nuevo. El vecino responde que eso le da igual: él quiere que tale los árboles. Me enfado un poco; digo que prefiero comprarle la hacienda. -Mi tierra no está en venta –responde. -Pero si con ese dinero podría comprarse una casa excelente en la ciudad, vivir allí el resto de sus días con su mujer, sin enfrentarse a inviernos rigurosos y cosechas perdidas. -La hacienda no está en venta. Nací y crecí aquí, y estoy muy viejo para mudarme. Sugiere que venga un perito de la ciudad a evaluar el caso y que decida él. A fin de cuentas, somos vecinos. Cuando se va, mi primera reacción es acusarlo de insensibilidad y falta de respeto hacia la Madre Tierra. Después, me pica la curiosidad: ¿por qué no aceptó vender la tierra? Y antes de que termine el día, entiendo que su vida sólo tiene una historia y que no quiere cambiarla. Irse a la ciudad significa también sumergirse en un mundo desconocido, con otros valores, que tal vez mi vecino se considera demasiado viejo para aprender. ¿Le sucede eso sólo a mi vecino? No. Creo que le sucede a todo el mundo: a veces estamos tan apegados a nuestro modo de vida, que rechazamos una gran oportunidad porque no sabemos cómo utilizarla. En su caso, su hacienda y su aldea son los únicos lugares que conoce, y no le merece la pena arriesgarse. En el caso de la gente que vive en la ciudad, piensan que hay que obtener un título universitario, casarse, tener hijos, conseguir que los hijos obtengan también su

111

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

título universitario, y así en adelante. Nadie se pregunta: “¿puedo hacer algo diferente?” Recuerdo que mi barbero trabajaba día y noche para que su hija pudiese acabar el curso de sociología. Ella terminó sus estudios, y después de llamar a muchas puertas, consiguió un puesto de secretaria en una empresa de cemento. Aun así, mi barbero decía, orgulloso: “mi hija tiene un título.” La mayoría de mis amigos, y dos de los hijos de mis amigos, también tienen un diploma. Eso no quiere decir que consiguieran trabajar en lo que querían, sino al contrario. Entraron y salieron de una universidad porque alguien, en una época en que las universidades eran importantes, decía que para ascender en la vida hacía falta tener una carrera. Y así fue cómo el mundo dejó de tener excelentes jardineros, panaderos, anticuarios, escultores, escritores. Tal vez va siendo hora de revisar eso: son los médicos, ingenieros, científicos, abogados, quienes tienen que realizar un curso superior. Pero, ¿acaso todo el mundo tiene que hacerlo? Dejo que los versos de Robert Frost den la respuesta: “Dos caminos se bifurcaban en un bosque, y yo, yo tomé el menos transitado y eso hizo toda la diferencia." Para terminar la historia del vecino: vino el perito y, para mi sorpresa, mostró una ley francesa que obliga a que todo árbol esté plantado a un mínimo de tres metros de la propiedad ajena. Mis árboles estaban a dos metros, así que tuve que talarlos.

112

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

El valor de la palabra “En el principio existía la Palabra”: todos conocemos esta frase de la Biblia. Lo más interesante es que no se compara a Dios con una figura, con un efecto de la naturaleza, sino con una expresión gramatical. En mi oficio de escritor estoy obligado a concentrarme en la importancia de las palabras, pero creo que todo ser humano debe siempre prestar atención a lo que dice y a lo que oye. Tenemos que compartir. Aunque conozcamos la información, es importante no dejarse llevar por el pensamiento egoísta de llegar solo al fin de la jornada. Quien hace esto descubre un paraíso vacío, sin ningún interés especial, y pronto se morirá de aburrimiento. No podemos coger las luces que iluminan el camino y cargar con ellas a cuestas. Si actuamos así, llenaremos nuestras mochilas con linternas y tendremos que deshacernos del alimento que nos da fuerza para seguir adelante: el amor. Tenemos que recibir estímulo, consejos. Pero a veces, por inseguridad, interrumpimos una conversación en la mitad, por miedo de mostrar a nuestro interlocutor que desconocemos aquel asunto. ¿Cuál es el problema de aprender? ¿Por qué nos sentimos humillados cuando alguien toca un tema que desconocemos? Nadie tiene la obligación de saberlo todo. Dijo Albert Einstein: “Cien veces al día me acuerdo de que mi vida interior y la exterior dependen del trabajo que otros hombres están haciendo ahora. Por eso tengo que esforzarme para devolver por lo menos una parte de esta generosidad, y no puedo dejar ni un momento vacío”. Y mientras no se invente un nuevo proceso de comunicación más directo que la palabra, tendremos que contentarnos con ella, aunque a veces sea demasiado pobre para describir lo que sentimos. Dice el poeta brasileño Carlos Drummond de Andrade en una carta a su nieto: “Admito que amo de las plantas la carga de silencio, Luis Mauricio, / Pero hay que intentar el diálogo cuando la soledad es un vicio”. Conozco a personas que no dan importancia a las palabras. Sí, es verdad que a veces decimos: “¡Anda!, hace tiempo que no discuto con fulanito” o “nunca he tenido una gripe”. De repente, al día siguiente, cogemos una gripe o discutimos con fulanito. Entonces concluimos: trae mala suerte comentar las cosas buenas que nos suceden. Nada de eso. En verdad, antes de cualquier problema, el Alma del Mundo nos muestra cuánto tiempo estuvimos sin enojarnos con determinada cosa. Nos quiere decir lo generosa que ha sido la vida hasta ese momento, y lo seguirá siendo, si superamos con coraje el obstáculo. Habla. Dialoga. Participa. Nada hay más despreciable que el “observador” acomodado y cobarde. Tu valor al expresar opiniones te ayudará a crecer en cualquier dificultad. Habla de las cosas buenas 113

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

de tu vida a todo el que quiera oír: el Alma del Mundo necesita mucho de tu alegría, y Dios se alegrará al ver tu sonrisa. Habla de los momentos difíciles que puedes estar viviendo: da una oportunidad a los demás para que te den lo que necesitas, aunque sea tan solo una palabra de apoyo. La palabra es poder. Las palabras transforman el mundo y al hombre. Los vencedores hablan con orgullo de los milagros de sus vidas. Cuanta más energía positiva haya a tu alrededor, más energía positiva atraerás, y más se alegrarán los que bien te quieren. En cuanto a los envidiosos, a los derrotados, estos solo podrán hacerte daño si tú les das ese poder. “Mi baile, mi bebida y mi canto son el lecho donde reposará mi alma cuando vuelva al mundo de los espíritus”, dijo un sabio indonesio. Por lo tanto, usa verbos, sujetos, predicados, y canta tus alegrías y penas, pero canta todos los días de tu vida.

114

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

El destino que eligió Hércules Todos nosotros ya hemos oído hablar de Hércules, el famoso héroe de la antigua Grecia. El texto siguiente es una adaptación hecha por el escritor americano James Baldwin sobre uno de los episodios que marcaron la juventud de aquel que, según la mitología, realizaría doce trabajos en nombre de la justicia. Hércules era joven e inexperto; tenía una larga vida, pero su corazón vivía insatisfecho. Miraba a su alrededor y veía que la mayor parte de sus amigos pasaban casi todo el tiempo divirtiéndose, bebiendo y saliendo con chicas, mientras que él trabajaba. Un día su padrastro le pidió que comprara levadura de pan. Hércules obedeció. Al llegar a una encrucijada no supo qué dirección tomar. El camino de la derecha era accidentado y lleno de piedras, carente de cualquier belleza natural, pero Hércules notó que conducía hacia una hermosa cordillera de montañas azules en el horizonte. El camino de la izquierda era ancho y llano; estaba bordeado por un río de aguas claras, contorneaba una plantación de árboles frutales y había pájaros cantando en toda su extensión. Sin embargo, una bruma matinal no permitía ver a dónde iba a dar. Mientras el joven meditaba, procurando descubrir la mejor decisión para cumplir la misión encomendada, notó que dos bellas mujeres se aproximaban, cada una por un camino. La que venía por la vereda arbolada llegó primero, ya que el trayecto era más fácil de recorrer; Hércules notó que tenía el rostro dorado por el sol, los ojos brillantes, y se dirigió a él con voz dulce y persuasiva: -¡Hola, muchacho de inmensa fuerza y actitud correcta!, dijo. Sígueme y te conduciré por lugares amenos, donde no hay tormentas para castigar tu cuerpo, ni problemas para entristecer tu alma. Vivirás como tus amigos, en una ronda incesante de música y alegría, y nada te faltará: ni el vino que refresca, ni las camas confortables, ni las más bellas mozas de la región. Ven conmigo y tu vida será un sueño. A esta altura, la otra mujer –que venía por el sendero de la montaña– también había llegado a la encrucijada. Y dijo a Hércules: -No puedo prometerte nada de eso. Todo lo que encontrarás en mi camino es aquello que puedas conseguir con tu fuerza y tu voluntad. El sendero por donde te conduciré es irregular y asustador, a veces con subidas muy inclinadas, a veces con valles donde los rayos del sol nunca consiguen entrar. Los paisajes que verás pueden ser majestuosos e imponentes, o solitarios y aterradores.

115

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Sin embargo, este es el camino que conduce hasta las montañas azules de la fama y de la conquista, que puedes ver a distancia. No puedes llegar a ellas sin esfuerzo, y todo lo que desees debe ser fruto de tu trabajo. Si quieres comer, tendrás que plantar. Si quisieras amor, es preciso amar. Si quisieras el Cielo, debes ser digno de entrar por sus portones. Si quisieras ser recordado, debes estar preparado para luchar cada minuto de tu vida. -¿Cómo te llamas? –dijo Hércules. -Algunos me llaman Trabajo, respondió la mujer, pero otros me llaman Virtud, y yo prefiero este último nombre. Hércules entonces se dirigió hacia la otra mujer. -¿Y cuál es tu nombre? -Algunos me llaman Placer, dijo la que venía del camino florido, pero prefiero ser llamada Suerte. -Placer, no puedo ver hasta dónde conduce el sendero para el cual me convidas, comentó Hércules.-Por otro lado, la Virtud me muestra las montañas en el horizonte y donde puedo llegar con el resultado de mis esfuerzos. Y tomando a la Virtud de la mano, entró con ella en el camino que conducía hacia su propio destino.

116

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

El destino que eligió Hércules Todos nosotros ya hemos oído hablar de Hércules, el famoso héroe de la antigua Grecia. El texto siguiente es una adaptación hecha por el escritor americano James Baldwin sobre uno de los episodios que marcaron la juventud de aquel que, según la mitología, realizaría doce trabajos en nombre de la justicia. Hércules era joven e inexperto; tenía una larga vida, pero su corazón vivía insatisfecho. Miraba a su alrededor y veía que la mayor parte de sus amigos pasaban casi todo el tiempo divirtiéndose, bebiendo y saliendo con chicas, mientras que él trabajaba. Un día su padrastro le pidió que comprara levadura de pan. Hércules obedeció. Al llegar a una encrucijada no supo qué dirección tomar. El camino de la derecha era accidentado y lleno de piedras, carente de cualquier belleza natural, pero Hércules notó que conducía hacia una hermosa cordillera de montañas azules en el horizonte. El camino de la izquierda era ancho y llano; estaba bordeado por un río de aguas claras, contorneaba una plantación de árboles frutales y había pájaros cantando en toda su extensión. Sin embargo, una bruma matinal no permitía ver a dónde iba a dar. Mientras el joven meditaba, procurando descubrir la mejor decisión para cumplir la misión encomendada, notó que dos bellas mujeres se aproximaban, cada una por un camino. La que venía por la vereda arbolada llegó primero, ya que el trayecto era más fácil de recorrer; Hércules notó que tenía el rostro dorado por el sol, los ojos brillantes, y se dirigió a él con voz dulce y persuasiva: -¡Hola, muchacho de inmensa fuerza y actitud correcta!, dijo. Sígueme y te conduciré por lugares amenos, donde no hay tormentas para castigar tu cuerpo, ni problemas para entristecer tu alma. Vivirás como tus amigos, en una ronda incesante de música y alegría, y nada te faltará: ni el vino que refresca, ni las camas confortables, ni las más bellas mozas de la región. Ven conmigo y tu vida será un sueño. A esta altura, la otra mujer –que venía por el sendero de la montaña– también había llegado a la encrucijada. Y dijo a Hércules: -No puedo prometerte nada de eso. Todo lo que encontrarás en mi camino es aquello que puedas conseguir con tu fuerza y tu voluntad. El sendero por donde te conduciré es irregular y asustador, a veces con subidas muy inclinadas, a veces con valles donde los rayos del sol nunca consiguen entrar. Los paisajes que verás pueden ser majestuosos e imponentes, o solitarios y aterradores. Sin embargo, este es el camino que conduce hasta las montañas azules de la fama y de la conquista, que puedes ver a distancia. No puedes llegar a ellas sin esfuerzo, y todo lo que desees debe ser fruto de tu trabajo. Si quieres comer, 117

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

tendrás que plantar. Si quisieras amor, es preciso amar. Si quisieras el Cielo, debes ser digno de entrar por sus portones. Si quisieras ser recordado, debes estar preparado para luchar cada minuto de tu vida. -¿Cómo te llamas? –dijo Hércules. -Algunos me llaman Trabajo, respondió la mujer, pero otros me llaman Virtud, y yo prefiero este último nombre. Hércules entonces se dirigió hacia la otra mujer. -¿Y cuál es tu nombre? -Algunos me llaman Placer, dijo la que venía del camino florido, pero prefiero ser llamada Suerte. -Placer, no puedo ver hasta dónde conduce el sendero para el cual me convidas, comentó Hércules.-Por otro lado, la Virtud me muestra las montañas en el horizonte y donde puedo llegar con el resultado de mis esfuerzos. Y tomando a la Virtud de la mano, entró con ella en el camino que conducía hacia su propio destino.

118

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

Paulo Coelho Fundador del instituto Paulo Coelho, autor de las obras "El Diablo y la Señorita Prym", "El Alquimista", entre otras. “Paulo Coelho no es únicamente uno de los autores más leídos a nivel mundial, sino también uno de los autores con mayor influencia de hoy en día“, escribió el jurado de los Premios Bambi de Alemania.“ Sus libros tienen un gran impacto en la vida de millones de personas“, escribió The Times en el Reino Unido. Hasta la fecha, unas 277 traducciones en 54 idiomas han llegado a vender unos 47 millones de copias publicadas en 140 países. Paulo Coelho tuvo una vida extrema. La rebeldía definió su juventud. Además de ser hippie, escribió canciones líricas para famosas estrellas de la canción popular brasileña, incluyendo Elis Regina y Raúl Seixas. También trabajó como periodista. En 1986 Paulo Coelho realizó el Camino de Santiago, una ruta de peregrinaje medieval que se encuentra entre España y Francia. Él narraría después sus experiencias en 'El Peregrino de Compostela' (o 'Diário de un Mago') publicado en 1987. El año siguiente, su segundo libro ‘El Alquimista' estableció su fama mundial. Este libro se ha establecido como un clásico moderno, universalmente admirado. Considerado una historia intemporal, ‘El Alquimista' encantará y deleitará a todas las generaciones de lectores en el futuro. Otros títulos del autor son: Brida (1990), ‘Las Valquirias' (1992), ‘Maktub' (1994) – una recopilación de sus columnas diarias-, ‘A orillas del río Piedra me senté y lloré' (1994), ‘La quinta montaña' (1996), ‘Manual del Guerrero de la Luz' (1997), ‘Veronika decide morir (1998) y ‘El diablo y la Srta. Prym' (2000). Su más reciente novela es “Once Minutos“(2003), publicada en Brazil en abril del 2003. Ésta es su primera novela después de ser nombrado miembro de la Academia Brasileña de las Letras en julio del 2002. Durante los últimos diez años, varios de sus títulos suyos han

119

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

estado en las primeras posiciones de las listas de más vendido en todo el mundo. El autor fue nombrado el segundo autor más vendido en el mundo entero por la revista francesa "Lire" (Marzo 1999). Paulo Coelho ha recibido numerosos y prestigiosos premios internacionales. Los críticos han elogiado especialmente su estilo poético, realista y filosófico y su lenguaje simbólico que no sólo habla a nuestros cerebros sino también a nuestros corazones. Además de sus libros, él escribe una columna semanal que se sindicaliza en todo el mundo a notables organizaciones y ocasionalmente, también escribe artículos sobre temas actuales. Varias compañías de teatro y productoras de películas han visto el gran potencial poético y dramático de su trabajo. Coelho también ha aparecido en varios documentales acerca de su vida y de varios aspectos de la vida brasileña. Es fundador del Instituto Paulo Coelho, el cual provee ayuda y oportunidades las para personas menos privilegiadas de la sociedad brasileña - especialmente niños y ancianos-, ha sido designado consultor especial del programa de la UNESCO "Convergencias espirituales y diálogos interculturales" y recientemente fue nombrado miembro de a Fundación Schwab para el espíritu empresarial y social. Fue el primer autor no musulmán invitado, desde la revolución islámica en 1979, a un intercambio de ideas en Irán. El 25 de Julio del 2002, Paulo Coelho fue nombrado miembro de la prestigiosa Academia Brasileña de las Letras, la cual fue fundada hace 105 años. Sus 40 miembros son quienes hacen las reglas de cómo se lee y deletrea el portugués. Para más información acerca de Paulo Coelho, pueden visitar la web del autor: www.paulocoelho.com Premios y condecoraciones: "Best Fiction Corine International Award 2002" por El Alquimista (Alemania 2002) "Club of Budapest Planetary Arts Award 2002" como reconocimiento a su trabajo literario (Alemania 2002)

120

Recopilación - de Artículos

http://www.liderazgoymercadeo.com Cuentos Paulo Coelho – Volúmen 2

"Bambi 2001 Award" (Alemania 2001) "XXIII Premio Internazionale Fregene" (Italia 2001) "Crystal Mirror Award" (Polonia 2000) "Chevalier de l'Ordre National de la Légion d'Honneur" (Francia 1999) "Crystal Award" World Economic Forum (1999) "Golden Medal of Galicia" (España, 1999) Finalist for the "International IMPAC Literary Award" (Irlanda, 2000 and 1997) "Comendador de Ordem do Río Branco" (Brazil 1998) "Golden Book" (Yugoslavia '95, '96, '97, '98, '99 and 2000) "Super Grinzane Cavour Book Award" (Itala 1996) "Flaiano International Award" (Italia 1996) "Knight of Arts and Letters" (Francia 1996) "Prix Lectrices d'Elle" (Francia 1995) Cifras: Primer libro (1988): El Peregrino de Compostela. Número de obras publicadas hasta la fecha: 13 (9 novelas; 3 historias cortas; 2 adaptaciones) Número de copias vendidas Aprox. 47.000.000 Derechos vendidos en: 54 idiomas

121